Post on 24-Mar-2016
description
Señor y Dios nuestro
“Recurrimos a tu misericordia infinita
Y a tu infalible justicia, desde esta patria
Que lleva tu divino nombre
te imploramos el cese de toda manifestación
de violencia
Que tanta sangre inocente ha derramado so-
bre esta tierra bendita, consagrado a tu co-
razón, y al de nuestra Reina de la Paz.”
AMÉN
Imprimatur: † Mons. Romero Tovar Astorga,
Obispo de la Diócesis de Santa Ana,
Nov. 2010
CONTENIDO
A Q U Í E S T O Y D I O S
SUMARIO J U N I O 2 0 1 2 V O L U M E N 4 , N º 1
PUNTOS DE INTERÉS ESPECIAL :
1. Historia del viacrucis
2. Personajes principales del viacrucis
3. Viacrucis en el colegio “La Sagrada
Familia”
4. Lectura bíblica destacada del mes
5. Entrevistas
6. Entretenimiento
7. Calendario litúrgico
P Á G I N A 1
Consejo Nacional
para la Cultura y
el Arte
ConCultura
Búscanos en:
Estudiante no es joven,
joven es inmaduro,
inmaduro no es subversivo
subversivo no es drogadicto,
drogadicto no es violento,
violento no es revolucionario,
revolucionario no es criminal,
criminal no es guerrillero,
guerrillero no es rural,
rural no es campesino,
campesino no es ignorante.
WWW.CONCULTURA.COM
¿Qué es el viacrucis?
P Á G I N A 2 V O L U M E N 4 , N º 1
c o n o c i d o c o m o
"Estaciones de la
Cruz" y "Vía Dolorosa". Se
trata de un acto de piedad,
un camino de oración que
busca con la meditación de
la pasión y muerte
de Jesucristo en su
camino al Calvario. El
camino se representa
con una serie de ca-
torce imágenes de la Pa-
sión o "Estaciones" co-
rrespondientes a inciden-
tes particulares que,
según la tradición cristia-
na, Jesús sufrió por nues-
tra salvación basados en
los relatos evangélicos y la
tradición. También se lla-
ma Viacrucis al recorrido
de cruces que señalan un
camino o una ruta donde
se puede realizar este
ejercicio piadoso.
ta el siglo XV muchos lo
hacían comenzando en
el Monte Calvario y retro-
cediendo hasta la casa
de Pilato.
Todas las estaciones se le
consideran la pasión de
Cristo, desde el momento
en que fue apresado hasta
su crucifixión y sepultura.
se les comenzó a conce-
der indulgencias pero pro-
bablemente fueron los
Franciscanos los primeros
en establecer el Vía Crucis
ya que a ellos se les con-
cedió en 1342 la custodia
de los lugares más precia-
dos de Tierra Santa.
Tampoco está claro en
que dirección se recorrían
ya que, según parece, has-
desde los primeros siglos.
Hacer allí las Estaciones de
la Cruz se convirtió en la
meta de muchos peregri-
nos desde la época del em-
perador Constantino (siglo
IV).
Desde el siglo doce los
peregrinos escriben sobre
la "Vía Sacra", como una
ruta por la que pasaban
recordando la Pasión. No
sabemos cuando surgieron
las Estaciones según las
conocemos hoy, ni cuando
La costumbre de rezar las
Estaciones de la Cruz po-
siblemente comenzó en-
Jerusalén. Ciertos lugares
de la Vía Doloro-
sa (aunque no se llamó así
antes del siglo XVI) fueron
reverentemente marcados
La c
rucif
ixió
n
Historia del viacrucis
JESUS CAE POR SEGUNDA VEZ
Su significado
es «camino de
la cruz». se
refiere a las
diferentes
etapas o
momentos
vividos
por Jesús.
VII
E
S
T
A
C
I
Ó
N
P Á G I N A 3
Realización o costumbres
Las 14 estaciones del viacrucis
una oración en cada
una, una lectura de
algún pasaje del evan-
gelio y también un can-
to. Es una práctica que
fundamentalmente se
realiza el Viernes San-
L a costumbre es
hacer un recorri-
do grupal que puede
tener lugar dentro del
templo o por las calles,
deteniéndose en cada
estación y haciendo to. También es cos-
tumbre esta práctica
e n l o s v i e rn e s
de cuaresma, incluso
en toda ella.
J
E
S
Ú
S
CRUCIFICADO
Primera estación: Jesús es condenado a morir.
Segunda estación: Jesús acepta la cruz.
Tercera estación: Jesús cae por primera vez.
Cuarta estación: Jesús encuentra a su santísima Madre, la Virgen
María
Quinta estación: Jesús es ayudado por Simón el Cirineo a llevar la
cruz.
Sexta estación: Verónica limpia el rostro de Jesús.
Séptima estación: Jesús cae por segunda vez.
Octava estación: Jesús consuela a las mujeres de Jerusalén.
Novena estación: Jesús cae por tercera vez.
Décima estación: Jesús es despojado de sus vestiduras.
Undécima estación: Jesús es clavado en la cruz.
Duodécima estación: Jesús muere en la cruz en medio de
dos ladrones.
Decimotercera estación: Jesús es bajado de la cruz y
puesto en brazos de María, su madre.
Decimocuarta estación: Jesús es sepultado en el sepulcro.
Lucas 23 versiculo34:
“Padre, perdónalos porque no saben lo
que hacen”
P Á G I N A 7
El señor resucitado y María Magdalena
(30 sonetos de amor y el evangelio de San Juan)
Francisco Contreras Molina
V O L U M E N 4 , N º 1
Más de Un Millón de ejemplares
Vendidos en el mundo
Los sonetos mágicos que relatan las
maravillas que realizó el señor Jesús hacia
María Magdalena y a sus
Un libro que cambia las almas
seguidores.
EDITORIALES Búscalo también en:
P Á G I N A 8
La Verónica con el suda-
rio con el cual enjuagó
el rostro de Jesús.
Personajes importantes en el viacrucis
V erónica:
Se le reconoce
por se la mujer
que durante en el via-
crucis tendió a Cristo
con un paño para que
enjugara el sudor y la
sangre.
En la tela quedaron
milagrosamente impre-
sas las facciones del Re-
dentor.
Verónica participa en el
viacrucis en la sexta es-
tación, la cual es llama-
da La Verónica enjuga
el rostro de Jesús .
La oración de la Veróni-
ca:
“Protégenos de la oscuri-
dad del corazón que ve
solamente la superficie de
las cosas. Danos la senci-
llez y la pureza de “La
Verónica”, y que así esa
pureza y sencillez nos
permitan ver tu presencia
en el mundo ohh Señor”.
de Jesús en todas las
estaciones del viacru-
cis, lo apoyó, lloró por
el dolor que sentía su
hijo.
La virgen María es el
personaje más impor-
tante de todos los
V irgen María:
Es la madre de Je-
sucristo. Un ángel
llegó a anunciarle que sería
madre, y ella así fue conce-
bida por obra y gracia del
Espíritu Santo .
Ella siempre estuvo al lado
otros que participaron
en el viacrucis, ella era
la que sentía el verda-
dero dolor de ver co-
mo Jesucristo era gol-
peado, azotado y cruci-
ficado y ella lo sentía ya
que era su madre.
primeras en saber que
Jesús había resucitado.
Gracias a eso juega un
importante papel en el
viacrucis ya que es el
mejor ejemplo de la
renovación del alma.
M aría Magdalena:
Ella es considerada
Santa por la Iglesia
Ortodoxa, ya que le enjuagó
los pies a Jesús, mostrando su
humildad, su verdad y su arre-
pentimiento. Ella acompaño a
María en el camino de la muer-
te de su hijo Jesús y fue una las
S U M A R I O
Jesús es bajado de la
cruz y entregado a su
Madre.
“Por ser las que
más sufrieron
según la iglesia
son los perso-
najes más im-
portantes”
María Magdalena
Viacrucis en el Colegio “La Sagrada Familia”
P Á G I N A 9 V O L U M E N 4 , N º 1
E l Colegio “La Sagrada Familia” es una institución
católica localizada en el Paseo General Escalón
en el departamento de San Salvador (El Salvador). Se
muestran valores fundamentales de la religión Cristia-
na y donde el Amor de Dios es un regalo que cada
alumna demuestra con sus sonrisas y esfuerzos de ca-
da día en la institución.
Este colegio, como tradición fundamental desde sus
inicios como institución educativa, mantienen la con-
memoración de un viacrucis para celebrar la pasión,
muerte y resurrección de Jesús, el hijo de Dios, donde las alumnas, maestras y maestros de los diferentes
niveles mantienen una estrecha participación en esta celebración. Las alumnas son las que mas desta-
can en esta alegre actividad, pues todas están siempre muy felices de colaborar, apoyar en la preparación y
organización de esta actividad que es un tributo a Dios.
L as alumnas del área de preparato-
ria, fueron las primeras en abrir la
actividad con las primeras tres estaciones.
Las alumnas interpretaron una canción al
terminar cada estación en memoria a lo
que Jesús vivió en esos momentos.
El viacrucis escolar se celebra cada viernes a partir del miércoles de ceniza, donde empiezan a celebrar la
fiesta las pequeñas de parvularia hasta las mas grandes, las cuales son del nivel de Bachillerato, quienes parti-
cipan dramatizando las diferentes estaciones que conforman el viacrucis. (tres estaciones por nivel).
Viacrucis de parvularia
Las niñas no dramatizaron mucho en si, pero destellaron cuando pasaban al frente y leían las tres esta-
ciones que le tocaron. Ellas vestidas de Jesús, María y de otros discípulos del viacrucis nos deleitaron
rezando y cantando las múltiples oraciones.
P Á G I N A 1 0
La reina del convivio familiar
“Valeria Vásquez”
Viacrucis de primer y segundo ciclo
Viacrucis de tercer ciclo
.Nuestra pequeña Re-
ina del colegio “La Sa-
grada Familia” a nivel
de primaria, Valeria
Patricia Vásquez Pe-
ña, participó en la
realización del viacru-
cis, en la cual lució
muy “inocente” y her-
mosa vestida de angeli-
to. Ella junto a otras de
sus compañeras sostu-
vieron marcos con las esta-
ciones que presentaron.
Las alumnas de parvularia re-
presentaron la “primera (I),
segunda (II) y tercera (III)”
estación . Cabe destacar que
en el colegio se les enseña
religión a las pequeñas para
que ellas vayan creciendo con
la presencia de Jesús desde
sus inicios y que puedan
compartir con nosotros es-
tos momentos.
Las alumnas de noveno
grado dramatizaron
tres esplendidas esta-
ciones, ellas interpreta-
ron la “decima (X),
decimo decimoprimera
(XI) y la decimosegun-
L a coordinación
de III ciclo cola-
boró a la realización
del viacrucis, este es-
tuvo lleno de música
es decir hubo un am-
biente muy musical.
pesar de que hayan
sido estaciones muy
criticas en la pasión,
muerte y resurrección
de Jesús, ellas trataron
de presentarlas con
optimismo y misericor-
dia al Señor. Segundo
ciclo, interpretó la
“séptima (VII), octava
(VIII) y novena (IX) esta-
ción. L as alumnas de
primer ciclo tam-
bién representaron
con bastante ánimo y
devoción la “cuarta
(IV), quinta (V) y sexta
(VI) estación. Las
alumnas de II Ciclo lo
realizaron y dramatiza-
ron aun mas alegre a
S U M A R I O
Alumnas de noveno grado
Viacrucis de tercer ciclo
da (XII) estación hasta
terminar en la estación
donde estaban a punto
de crucificar a Jesu-
cristo.
Todo estaba muy bien
preparado y organiza-
do. Las alumnas sabían
sus líneas y todo esta-
ba bien dramatizado.
Estas alumnas habían
decorado la cancha
para la realización del
P Á G I N A 1 1 V O L U M E N 4 , N º 1
sente su viacrucis con un pequeño recuerdo de parte de ellas el cual
siempre nos hará llevarlas en nuestros corazones y saber que ellas
quieren nuestro bien así como Dios lo quiere.
P or ultimo, las alumnas
de la Promoción 2012
del Colegio “La Sagrada
Familia” celebraron las ulti-
mas estaciones, proclaman-
do que Jesús había resucita-
do. En el viacrucis de ellas
cabe destacar la hermosa y
angelical voz de la alumna
de Segundo Año “A” Mar-
ía José Mendoza que nos
deleitó con los cantos junto
al coro del colegio.
También las alumnas de
Segundo año hicieron pre-
Alumnas de noveno grado dramatizando la decima estación
Viacrucis de bachillerato
Las alum-
nas de
segundo
año dibu-
jando y
recortan-
do los
recuer-
dos que
dieron a
todo el
colegio.
P Á G I N A 1 2
Entrevistas del viacrucis
S U M A R I O
1. ¿Usted participo en el evento del viacrucis de las niñas de parvularia?
Si, yo participe
2. ¿Cómo se realizó la organización?
Ah., primero decidimos quienes iban a participar, les pedi-
mos a los padres que si nos podían colaborar con las dra-
matizaciones, y luego las niñas hicieron los ensayos gene-
rales, con todo el grupo, con las maestras y las coordina-
dora
3. ¿La presentación del viacrucis fue algo tedioso y
difícil de realizar?
Al principio fue difícil, pero una vez ellas ya conocen los
pasos y los lineamientos que deben de seguir, se les facilita
bastante y a ellas tienen bastante retentiva.
4. ¿Cómo fue el resultado final de esta celebración?
Estuvo bonito y los papas quedaron muy contentos con lo
que vieron, las maestras también estaban contentas al ver lo que las ni-
ñas podían lograr después de tanto ensayo y se logra el objetivo que es
lo principal, que ellas sean motivadas y que ellas entiendan que es lo que
significa la semana santa.
5. ¿Cuanto tiempo estuvieron ensayando para el evento?
Ensayábamos de once a once y media, media hora, toda la semana. Fue una sema-
na antes de celebrar el viacrucis,
6. ¿Qué es la semana Santa y que significa el viacrucis para usted?
Ah, la Semana Santa es como la época de reflexión, en la que debemos, quizás, re-
flexionar, sobre nuestros actos, tratar de cambiar lo negativo que hemos hecho el
año anterior y renovar lo que es el catolicismo en cada persona.
del Colegio “La Sagrada Familia”
Karla Jeannette Miranda Platero,
Maestra de Parvularia
P Á G I N A 1 3 V O L U M E N 4 , N º 1
por nosotros, porque al darse cuenta y leer lo que Jesucristo sufrió. Es como una manera de pensar y de
la forma que el nos llama a cambiar y aunque es difícil, es nuestro deber hacerlo
4. ¿usted participo en otro acto religioso fuera del colegio?
Si, también participe, además del viacrucis general, en el viacrucis de parvularia, me toco ser Jesucristo, un
gran papel.
1. ¿usted participo en el viacrucis general
que se celebro en la institución?
SI, participe
2. ¿para usted que significa la semana
santa?
Bueno, en primer lugar la semana santa la mis-
ma palabra lo dice, que tratemos de vivirla en
santidad sin embargo es de practicarlo de la
teoría a la practica es bastante difícil hacer ese
paso entonces es un momento de reflexión,
muy personal, es un momento de cambio y
oportunidad para todos.
Waldo Mena Medina,
Maestro de ingles de segundo ciclo a bachillerato
3. Para usted, ¿ cual cree que es el objetivo
del viacrucis para que se realice en el colegio?
Para demostrar de una forma, aunque sea muy
pequeña el gran sufrimiento que Jesucristo tuvo
5. ¿Que se sintió participar?
Uno siente mucho deseo de participar y trata de
sentirse lo mejor posible y hacerlo de la mejor
manera, como digo, es u momento de un gran
cambio y no es muy fácil, si a la vez es un com-
promiso que se tiene con las niñas, es de tratar
de no alejarse de Dios.
P Á G I N A 1 4
S U M A R I O
1. ¿Qué te parece el viacrucis del colegio “La Sagrada Familia”
Les digo la verdad, no me gusta mucho el viacrucis, en general.
Andrea Nicole Duque,
Alumna de primer año de bachillerato
2. ¿Por qué?
No me gusta mucho porque es que desde cierto punto de
vista me pone muy triste y viéndolo así, es como a veces,
cuando veo las escenas, me pongo demasiado triste y me aga-
rra esa “soledad” así, y me siento mal porque, por eso.
3. ¿y tu participaste en algún viacrucis o evento reli-
gioso afuera de la institución?
¿afuera de la institución? Mmm… no.
4. ¿Cómo vives la cuaresma?
La cuaresma, pues la vivo, siendo mas participativa, en las co-
sas religiosas.
5. ¿para ti, Que es la pascua?
Es celebrar que, supuestamente, he vuelto a nacer en alma.
1. ¿Qué te parece el viacrucis del colegio “La Sagrada Familia”
Les digo la verdad, no me gusta mucho el viacrucis, en general.
P Á G I N A 1 5 V O L U M E N 4 , N º 1
3. Para usted, ¿ cual cree que es el objetivo del
viacrucis para que se realice en el colegio?
Según el calendario de la iglesia, en ese tiempo se cree
que fue el momento del camino al calvario. Es una forma
de vivir con Jesucristo y es el momento, a demás de ser
4. ¿usted participo en otro acto religioso fuera
del colegio?
Si, también participé en la procesiones de semana Santa
en alguno “pueblos de El Salvador” y en los de mi pa-
rroquia y a demás en las actividades de mi comunidad
en el camino “Neocatecumenal”
1. ¿usted participo en el viacrucis gene-
ral que se celebro en la institución?
SI, participe
2. ¿para usted que significa la semana
santa?
La semana santa es, es una semana de re-
flexión para cada persona, el poder enterarse
y darse cuenta de la pasión de Cristo para lle-
gar a la cruz todo el sufrimiento que el tuvo y
el amor con el que Él lo hizo.
5. ¿Que se sintió participar?
Uno mucha emoción, si uno esta concentrado en
ese momento y esta en una profunda reflexión se
siente ese gozo y la presencia de Dios.
Luz María Hernández,
Alumna de primer año de bachillerato
un momento es de reflexión y gran devoción.
P Á G I N A 1 6
Lectura bíblica del mes El señor ha resucitado:
1. El primer día después del sábado, María Magdalena fue al sepulcro muy tempra-
no, cuando todavía estaba oscuro, y vio que la piedra que cerraba la entrada del
sepulcro había sido removida.
2. Fue corriendo en busca de Simón Pedro y del otro discípulo a quien Jesús ama-
ba y les dijo: «Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han
puesto.»
3. Pedro y el otro discípulo salieron para el sepulcro.
4. Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo corrió más que Pedro y llegó pri-
mero al sepulcro.
5. Como se inclinara, vio los lienzos tumbados, pero no entró.
6. Pedro llegó detrás, entró en el sepulcro y vio también los lienzos tumbados.
7. El sudario con que le habían cubierto la cabeza no se había caído como los lien-
zos, sino que se mantenía enrollado en su lugar.
8. Entonces entró también el otro discípulo, el que había llegado primero, vio y
creyó.
9. Pues no habían entendido todavía la Escritura: ¡él "debía" resucitar de entre los
muertos!
10. Después los dos discípulos se volvieron a casa.
11. María se quedaba llorando fuera, junto al sepulcro. Mientras lloraba se inclinó
para mirar dentro
12. y vio a dos ángeles vestidos de blanco, sentados donde había estado el cuerpo
de Jesús, uno a la cabecera y el otro a los pies.
13. Le dijeron: «Mujer, ¿por qué lloras?» Les respondió: «Porque se han llevado a
mi Señor y no sé dónde lo han puesto.»
14. Dicho esto, se dio vuelta y vio a Jesús allí, de pie, pero no sabía que era Jesús.
15. Jesús le dijo: «Mujer, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas?» Ella creyó que era el
cuidador del huerto y le contestó: «Señor, si tú lo has llevado, dime dónde lo
has puesto y yo me lo llevaré.» 16. Jesús le dijo: «María». Ella se dio la vuelta y le dijo: «Rabboní», que quiere decir
«Maestro».
17. Jesús le dijo: «Suéltame, pues aún no he subido al Padre. Pero vete donde mis
hermanos y diles: Subo a mi Padre, que es Padre de ustedes; a mi Dios, que es
Dios de ustedes.»
18. María Magdalena se fue y dijo a los discípulos: «He visto al Señor y me ha dicho
esto.»
19. Ese mismo día, el primero después del sábado, los discípulos estaban reunidos
por la tarde, con las puertas cerradas por miedo a los judíos. Llegó Jesús, se pu-
so de pie en medio de ellos y les dijo: «¡La paz esté con ustedes!»
20. Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Los discípulos se alegraron mu-
cho al ver al Señor.
S U M A R I O
El señor ha resu-
citado
P Á G I N A 1 7 V O L U M E N 4 , N º 1
21. Jesús les volvió a decir: «¡La paz esté con ustedes! Como el Padre me envío a mí, así los envío yo
también.»
22. Dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: «Reciban el Espíritu Santo:
23. a quienes descarguen de sus pecados, serán liberados, y a quienes se los retengan, les serán reteni-
dos.»
24. Tomás, uno de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús.
25. Los otros discípulos le dijeron: «Hemos visto al Señor.» Pero él contestó: «Hasta que no vea la marca de los clavos en sus manos, no meta mis dedos en el agujero de los clavos y no introduzca mi mano
en la herida de su costado, no creeré.»
26. Ocho días después, los discípulos de Jesús estaban otra vez en casa, y Tomás con ellos. Estando las
puertas cerradas, Jesús vino y se puso en medio de ellos. Les dijo: «La paz esté con ustedes.»
27. Después dijo a Tomás: «Pon aquí tu dedo y mira mis manos; extiende tu mano y métela en mi costa-
do. Deja de negar y cree.»
28. Tomás exclamó: «Tú eres mi Señor y mi Dios.»
29. Jesús replicó: «Crees porque me has visto. ¡Felices los que no han visto, pero creen!»
30. Muchas otras señales milagrosas hizo Jesús en presencia de sus discípulos que no están escritas en
este libro.
31. Estas han sido escritas para que crean que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios. Crean, y tendrán vida
por su Nombre.
volvernos a encontrar con la palabra,
hecha carta circular y en la Palabra, hecha
ca r ne , h i s t o r i a , “ v i d a”………. .
En medio de los comunes desafíos y
bajo una común Esperanza existirá
siempre el amor de DIOS.”
“Todos debemos ser herma-
nas, hermanos, compañeros
de camino, siempre nos po-
demos encontrar en dificul-
tades o en un mal paso, don-
de todos nuestros hermanos
y hermanas nos ayudarán a
pascuas de resurrección.
Hay que recordar que es-
te momento es uno muy
fortuito y de gozo para
toda la Santa Iglesia y es
una lectura que nos invita
a que al igual que Jesús
podamos resucitar de al-
ma, así poder cambiar las
mentes y purificarlas para
poder ser mejores personas
cada día y así, podernos
acercar cada vez más a Dios
como devotos Cristianos
que Dios invita a ser.
Esta lectura bíblica esta
tomada del libro de Juan,
el capitulo 20, del versí-
culo 1 al versículo 31
donde nos hace énfasis de
que Jesús, el hijo de Dios
ha resucitado y así es co-
mo comenzamos a vivir las
Reflexión
Pensamiento Padre
R
U
T
I
L
I
O
G
R
A
N
D
E
P Á G I N A 1 8
Cuento infantil,
para que los niños
se entretengan
leyendo a cerca
del viacrucis.
Entretenimiento Cuento: La abuela y la historia del viacrucis
La abuela le pide que la acompañen a la Iglesia.
¡Qué aburrido! –piensa Dalma, la nieta adolescente; pero, al recordar que están en
Semana Santa, decide ir.
–¡Vamos! –grita Matías, de ocho, que ve en la invitación una ocasión para atrapar palo-
mas en el campanario.
Es una tarde fría. El cielo está nublado.
Llegan a la Iglesia. Un candado avisa que está cerrada. La abuela les indica ir por el late-
ral; seguro que, la puerta estará abierta.
Entran por la parte trasera. No hay nadie adentro.
–¿Qué les parece si rezamos el Vía Crucis?
–¿Qué es eso? –pregunta Matías .
–Es recorrer, siguiendo estos cuadritos, el camino que hizo Jesús llevando la Cruz,
hasta su muerte –responde su hermana.
El niño se para frente al primer cuadro y lee: “Jesús es condenado”. Mira a las muje-
res y con picardía pide una explicación.
La nona hace un gesto de complicidad y comienza con el relato:
“Eso fue en la mañana del viernes. El gobernador sabía que era inocente. Y, buscando
excusas para liberarlo, les dio a elegir al gentío entre Cristo y Barrabás, un asesino que
nadie quería.
“La muchedumbre pidió a gritos que liberen al delincuente; y que crucifiquen a Jesús.
„¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!‟, gritaban enfurecidos.
S U M A R I O
P Á G I N A 1 9 V O L U M E N 1 , N º 1
–Pero... ¿no era bueno? –comentó Matías.
–Buenísimo. Él los había curado, les había dado de comer, les había enseñado las cosas de Dios,
como en la catequesis –dijo la mujer acariciando la cabecita del pequeño y prosiguió con el relato.
“Entonces, para que la gente se calmase, el gobernador mandó azotar al Nazareno.
–Eso es lo más impresionante de la película... –comentó Dalma– ...cuando le arrancan la carne a
latigazos.
“Después –continuó la abuela– lo abofetearon y le clavaron una corona de espinas.
“Pero aún faltaba lo peor: la humillación de llevar la cruz hasta la cima del monte Calvario, donde
sería crucificado.
“Jesús carga con la Cruz”. Apenas sale a la calle, la gente se amontona. Algunos aprovechan para
insultarlo y escupirlo. Otros, para demostrarles a los soldados que no estaban de su lado, le gritan
groserías.
Entre ellos está uno de los que había curado la lepra, está la madre de una niña que había resucita-
do... Cristo los reconoce. Podría llamarlos por su nombre. Los mira. Ellos prefieren bajar la cabe-
za.
Dalma se imagina entre la gente. Se siente parte del relato.
Se escuchan ruidos de metales. Son los soldados que vienen a exigirle que se apure. Al día siguien-
te es feriado y quieren terminar temprano. Uno le da un empujón. Jesús cae por primera vez.
–Acá está el dibujo –dice Matías, señalando la tercera estación.
–¿Alguna vez te caíste?
El niño recuerda cuando se cayó de la bicicleta. Le había sangrado el codo y se había raspado las
rodillas. Lo peor había sido cuando su mamá le lavó las heridas con agua y jabón.
–¡Ay! –exclamó al comprender. La nona siguió contando.
P Á G I N A 2 0
“Los soldados se enfurecieron porque demoraba en ponerse de pie”. Uno le tiraba de
los pelos, otro lo azotaba.
Gritó tan fuerte que María, que estaba lejos, lo escuchó.
Luego se abrió paso entre la multitud.
“Por fin, Jesús se encuentra con su Madre”. Pero está tan desfigurado que ella
no lo reconoce. Lo mira a los ojos y consigue ver en ellos, al pequeño que había creci-
do entre sus brazos.
“Se contemplan durante unos instantes. El ambiente se llena de ternura. La gente,
emocionada, los contempla sin hablar, hasta que otro latigazo obliga a Cristo a sepa-
rarse de su mamá.
“La Virgen se queda sola.”
Los niños sienten compasión por la Madre de Dios.
Caminan unos pasos y se detienen en la quinta estación.
–¿Quién es ese hombre?
–Simón de Cirene carga con la Cruz –lee la joven, a modo de respuesta.
Cristo no tiene más fuerzas para continuar. Entonces, los soldados buscan a un hom-
bre para que le ayude a cargar con los maderos.
Lleno de miedo, Simón se niega. Se siente poca cosa para estar al lado de Cristo. Éste
lo mira y le infunde confianza. El cirineo vence el miedo y le ayuda con la Cruz.
Es un aporte ínfimo entre tanto dolor, pero significa mucho para Cristo que recibe
agradecido el favor de su nuevo amigo.
–Cuando sea grande, yo le voy a ayudar –agrega el pequeño.
–No hace falta que crezcas. Ahora puedes hacerlo: siendo obediente, haciendo las
S U M A R I O
P Á G I N A 2 1 V O L U M E N 1 , N º 1
tareas, no peleando... Eso hace muy feliz a Jesús..
Se detienen en la sexta estación. La abuela se inclina hacia la nieta y en la intimidad le comenta:
Entre la muchedumbre hay una mujer que simpatizaba con su mensaje y con el grupo de mujeres
que lo seguía; pero, por tímida, no se había comprometido a seguirlo.
Obligan a Cristo a tomar un atajo y, sin esperarlo, pasa delante de ella. Al verlo tan cerca, la mujer
rompe con su timidez, arranca un lienzo de su vestido y, cuidadosamente, Verónica enjuaga el
rostro del Señor.
Dalma, recuerda cuando por “timidez”, no defendió el mensaje de la Iglesia entre sus compañe-
ras... y se avergüenza.
La abuela teme que la joven esté aburrida y quiera regresar a casa.
–Seguí contando –dijo el mocoso.
La joven toca el brazo de la abuela con gesto indeciso y también le pide que siga con el relato.
Miran hacia atrás. Las puertas estaban abiertas. Había muchas personas recorriendo el Vía Crucis.
Algunos rezaban el Rosario. Otros, en fila, esperaban para confesarse.
En la casa, no ha dejado de sonar el teléfono. Son las adolescentes que preguntan por su amiga.
“Salió con la abuela” –responde la mamá una y otra vez. Al pasar por la habitación del niño sonríe:
no está con los jueguitos de la computadora.
–Si quieren que sigamos, tenemos que cruzar del otro lado.
Los niños aceptan, buscan la séptima estación y se detienen frente a ella.
Estaba muy cansado, sus pasos eran cada vez más cortos y torpes. De pronto, topa con una piedra
y cae por segunda vez.
La abuela piensa en las caídas del alma que suelen ser más dolorosas que las otras. Recuerda las
veces que prometió no volver a caer y que igual tropezó con la misma piedra.
Admite que su carácter, sus caprichos y su egoísmo, terminan siendo las piedras con las que tro-
pieza Cristo. Obstáculos que traicionan el camino espiritual.
P Á G I N A 2 2
–Abuela: ¿quiénes son estas señoras? –la interrumpe en su reflexión, Matías.
–Son un grupo de mujeres que, afligidas por lo que está pasando, lloran sin consuelo.
Cristo se detiene ante ellas y les dice: “No lloren por mí, sino por sus pecados y por
sus hijos.
“Les explica que causan más sufrimiento las faltas de caridad y la indiferencia de su
hijos, que los latigazos de los romanos. Así, Jesús consuela a las mujeres de Jeru-
salén.
–Voy a pedirte una cosa, –le dijo a Matías que, como a todo niño, le gusta que le hagan
encargos importantes–. Quiero que en tus oraciones pidas perdón por las ofensas de
los hombres que no rezan, que no van a Misa y que blasfeman.
–Que rece por los ateos también –agrega Dalma.
–No solamente por ellos sino también por los bautizados que se han ido a otras igle-
sias, por los que sólo acuden a Dios en los momentos malos y después se olvidan...
Por las mujeres que abortan y por las que no transmiten la fe a sus hijos –concluye la
abuela y vuelve al Viacrucis:
Le duele más el corazón que el cuerpo. Es tanta la amargura de su alma, que no resiste
más... y cae por tercera vez.
Sabe que con su sacrificio está pagando el rescate de todos los hombres que somos
rehenes del pecado.
–Como los secuestros que aparecen en la tele.
–Algo parecido –responde la mujer con una leve sonrisa.
–Y acá... ¿qué pasó? –pregunta el niño.
Llegaron al lugar de la crucifixión. Los soldados le quitan la ropa y se la sortean.
Cristo, permanece en silencio, no se queja ni está enojado.
S U M A R I O
P Á G I N A 2 3 V O L U M E N 1 , N º 1
Lo acuestan encima del madero que está en el suelo. Toman sus brazos y, traspasándolos a golpe
de martillo, lo clavan en la Cruz. Toman sus pies y hacen lo mismo.
Una vez clavado, lo elevan junto a dos malhechores. Allí lo dejan: con las heridas, la sangre y los
brazos extendidos.
Todo es desolación y misterio. María no puede creer lo que han hecho con su hijo. Desde la Cruz,
Él la consuela con la mirada y le regala una tenue sonrisa.
Luego llama a su amigo Juan, que estaba junto a María, y le pide que en adelante cuide de su mamá,
que no la deje sola.
María también se acerca para escuchar de labios de su hijo la última petición: “quiero que seas la
Madre de todos”.
El cielo se oscurece. Tiembla la Tierra. Los ángeles lloran en el momento en que Cristo muere
en la Cruz.
Aquel niño nacido en un pesebre, aquel joven que había llorado y reído junto a sus amigos, aquel
mismo que había sanado a tantos... estaba muerto.
La reflexión ganó el corazón de todos. Al ver que habían clavado a un inocente, comenzaron a
marcharse. Algunos soldados sintieron el sabor amargo del arrepentimiento; otros, el de la culpa.
Hay dos seguidores: José de Arimatea y Nicodemo, que no habían participado de estos momentos
pero que estuvieron presente cuando el Señor más los necesitó.
Piden permiso a Pilatos y bajan su cuerpo de la Cruz.
Su madre lo toma entre sus brazos. Se renueva el dolor al comprobar que el cuerpo de su hijo
estaba muerto.
La tarde llega a su fin. Es de noche, cuando dan sepultura al cuerpo de Jesús. Lo ponen en una
cueva cavada en roca y dejan caer una gran piedra sobre el ingreso.
Todo hace pensar que sus enemigos tenían razón: Cristo no era más que un gran hombre, un
magnífico profeta... pero no era Dios.
P Á G I N A 2 4
El día sábado, ya muchos se habían olvidado del Maestro, ya nadie hablaba del Nazare-
no. Todos estaban ocupados en los preparativos de las fiestas.
La nona los invita a sentarse.
El domingo, antes de que amaneciera, un grupo de mujeres fue a llevarle flores y per-
fumes. Durante el camino se preguntaron quién movería la piedra. Ellas no tenían tanta
fuerza.
Cerca del lugar, observaron que la piedra estaba corrida. Corrieron y, al entrar al se-
pulcro, vieron que no estaba el cuerpo. Pensaron que lo habían robado. En su lugar,
había dos ángeles vestidos de blanco.
Uno de ellos les dice: „¿por qué buscan entre los muertos al que ha resucitado? ¡Cristo
está vivo y vivirá por siempre!‟, agrega con una amplia sonrisa entre los labios.
Es tanta la alegría de las mujeres que tiran las flores al suelo y salen corriendo para
contar a los discípulos lo que ha pasado.
Una vecina se acerca para saludar a la abuela, sin embargo, al ver a la adolescente re-
zando de rodillas, se detiene.
La abuela acomoda a Matías, que está dormido, en su falda. Con tiernas caricias sobre
su cabecita da por finalizado el relato.
Dalma mira la imagen del Cristo en la cruz y, emocionada, le anuncia que se anotará
en el grupo juvenil de la Parroquia.
Le brillan los ojos de sólo imaginarse enseñando la catequesis a los niños del barrio.
Sueña con el campamento de verano. Se imagina misionando, llevando la alegría cristia-
na a los más necesitados. Sonríe.
En tanto, Matías sueña con que defiende al Señor con su espada de juguete. Le asegura
a la Virgen que, en adelante, no estará más sola. Él será su protector.
Mientras los nietos imaginan ese porvenir, la abuela recuerda los viernes santos de su
época: cuando las mujeres iban vestidas de luto, cubriendo los rostros con mantillas
negras.
S U M A R I O
P Á G I N A 2 5 V O L U M E N 1 , N º 1
Recuerda a su abuela de tez blanca y ojos oscuros que, con la voz clara y temblorosa de las
mujeres valientes que hablan en público, decía:
–Te adoramos, Cristo, y te bendecimos.
A lo que los demás respondían:
–Que por tu Santa Cruz redimiste al mundo.
P Á G I N A 2 6
Crucigrama:
S U M A R I O
1. los tres días en que los católicos celebran la pasión,
muerte y resurrección de Jesucristo
2. acompañantes de Jesús
3. Hipótesis del origen de la semana de siete días
4. el primer día de la Semana Santa
5. Este día se conmemora la Muerte de Jesús de Naza-
ret
6. el segundo día del Triduo Pascual
7. Cuando un conejo reparte huevos de chocolate por
todo el mundo
8. el transcurso de la Semana Santa cristiana
9. traiciono a Jesús
10. es una semana___________
11. hijo de dios
12. Madre de Jesús
P Á G I N A 2 7 V O L U M E N 1 , N º 1
1. Triduo pascual
2. Viernes santo
3. Resurrección
4. Sábado santo
5. Jueves santo
6. Ultima cena
7. Cruz
Sopa de letras:
P Á G I N A 2 8
Respuestas
S U M A R I O
Crucigrama
Sopa de letras
Calendario litúrgico
P Á G I N A 2 9 V O L U M E N 1 , N º 1
Recuerda
todas las
celebraciones
que hay para
el señor. Hay
que estar
siempre
presentes
Recordando que nuestra santa Iglesia católica, nos invita como devotos católicos que entremos
al tiempo ordinario con e mismo gozo que vivimos en el pentecostés y conmemorando fiestas
de este mes. Entre las fiestas mas destacadas de este mes están:
Santísima trinidad
Corpus Cristi
Familia Salesiana, las obras
misioneras y la comunidad
en general.
El Boletín Salesiano:
Es un medio de comunica-
ción social escrito dentro
del género revista y es el
ó r g a n o o f i c i a l d e
la Congregación y de
la Familia Salesiana. Fue fun-
dado por Don Bos-
co en Turín en 1877 de ma-
nera mensual y dirigido a las
obras salesianas como una
manera de mantener la in-
formación acerca de los
acontecimientos más desta-
cados y del interés de los
salesianos, miembros de la
Colegio La Sagrada Familia:
Paseo general Escalón, San Salvador, El
Salvador
CRÉDITOS:
Correo: aqui.estoy.dios@.vatican.com
Ésta es una revista ideal para buscar y
conocer más detalladamente a cerca
del Viacrucis, cuales son sus personajes
destacados, desde cuando se celebra y
como se celebra. La revista esta hecha
con el fin de que ustedes lectores se
acerquen más a Dios y así tener una
vida sana y llena de amor hacia Dios.
ENTREVISTADAS/OS:
Profesora Karla Miranda Platero
Profesor Waldo Mena Medina
Alumnas: Andrea Nicolle Duque
Luz María Hernández
AQUÍ ESTOY DIOS
Boletín recomendado
ABC
“Aquí estoy Dios, la revista donde podrás
conocer íntimamente a Dios “
Claudia María Mejía Quintanilla
Beatriz Eugenia Morazán Merlos
Andrea Carolina Munguía Morales