Post on 03-Dec-2015
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Discurso del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los
Derechos Humanos (ACNUDH), en si visita a México el pasado 7 de
octubre 2015.
http://www.hchr.org.mx/index.php?
option=com_k2&view=item&id=767:declaracion-del-alto-comisionado-de-la-onu
-para-los-derechos-humanos-zeid-ra-ad-al-hussein-con-motivo-de-su-visita-a-
mexico&Itemid=265
Elaboración de:
Ala Sur CHIHUAHUA, CHIHUAHUA
Las tareas inmediatas serían garantizar más y mejor amparo para defensoras
y defensores de derechos humanos, lo mismo para quienes ejercen el perio-
dismo, pero principalmente para quienes han sufrido y siguen sufriendo la
terrible serie de asesinatos, amenazas, golpizas y otras formas de intimida-
ción por parte del Estado. Por otro lado, un buen número de colectivos políti-
cos y organismos sociales han puesto de relieve el tema de empresas involu-
cradas en los llamados “megaproyectos” en los cuales no se está consultando
de manera adecuada a los pueblos originarios cuyos territorios y recursos
naturales son y pretenden ser despojados.
En esta línea, el Alto Comisionado, dijo que entregara una lista de recomen-
daciones para el gobierno mexicano, mientras tanto, enfatizó en la necesidad
de llevar a cabo las siguientes medidas claves:
Fortalecer de manera urgente las procuradurías en el país para
asegurar que las violaciones de derechos humanos sean propia-
mente investigadas, conduciendo a resultados en tiempo.
Fortalecer de manera urgente la capacidad de la policía para
llevar a cabo sus funciones de seguridad pública en línea con las
obligaciones de derechos humanos, incluyendo el desarrollo de
un marco legal sobre el uso de la fuerza.
Adoptar un cronograma para el retiro de las fuerzas militares
de las funciones de seguridad pública.
Implementar las recomendaciones del GIEI y considerar meca-
nismos similares de seguimiento para otros casos graves.
¡NI UNA MÁS! ¡NI UNO MENOS!
¡FUERA EJÉRCITO DE LAS CALLES!
¡CULPABLES!
¡NI UNA MÁS! ¡NI UNO MENOS!
¡FUERA EJÉRCITO DE LAS CALLES!
ASAMBLEA CIUDADANA AYOTZINAPA + 43
JUSTICIA Y MEMORIA ASAMBLEA CIUDADANA AYOTZINAPA + 43
REFERENCIAS:
Jornada Mundial por Ayotzinapa
26 de octubre 2015
Asamblea Ciudadana Ayotzinapa + 43
¡Son culpables!
Las declaraciones sobre justicia e inseguridad en México, así como de los
casos particulares de Iguala y Ayotzinapa Guerrero, por parte de Zeid Ra'ad
Al Hussein, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos
Humanos (ACNUDH), quien visitó nuestro país el pasado 7 de octubre 2015,
ratifican lo que se ha venido gritando desde las calles y foros por parte de
familiares, madres y padres de los 43 normalistas desaparecidos desde el
pasado 26 de Septiembre 2014, el Estado Mexicano es culpable. Peña Nieto
es responsable.
¿Sabías que? …
Las escuelas normales rurales en México fueron fundadas a princi-pios del siglo XX (en 1922 la primera), por los gobiernos post-revolucionarios. Inicialmente existieron 36 planteles, a la fecha solo existen 17, más de quince de estos planteles desaparecieron durante el gobierno de Gustavo Díaz Ordaz. Cuentan con 5 ejes básicos en su preparación: académico, cultural, político, deportivo y modelos de producción. Actualmente estas escuelas se encuentran en condi-ciones de marginación. En la actualidad el 45% de las escuelas de nivel básico tienen condiciones de “rurales” mientras solo el 4% de los maestros egresan de una escuela normal rural. Las condiciones de trabajo en una escuela rural son difíciles y especiales, es por esto que hay necesidad de dar educación especial a los maestros que trabajan en el rural son difíciles y especiales, es por esto que hay necesidad de dar educación especial a los maestros que trabajan en ellas.
NI Perdón NI OLVIDO
JUSTICIA Y MEMORIA ASAMBLEA CIUDADANA AYOTZINAPA + 43
A raíz de su designación, trasciende ser la séptima persona en ocupar el
puesto de máxima responsabilidad de la oficina del ACNUDH, así
como ser el primer asiático, musulmán y árabe en hacerlo, y en relación
con su reciente visita, y con respecto al tema de los Derechos Humanos,
en donde México ha signado una serie de acuerdos y convenios en
materia humanitaria y de respeto a derechos y leyes internacionales que
no ha cumplido, el representante de la Organización de la Naciones
Unidas (ONU), recordó que sólo nosotros (el pueblo, la ciudadanía, las
y los de la calle), seremos los únicos capaces de juzgar el papel de las
autoridades.
(…) son las personas quienes juzgarán. No soy yo, ni
mi Oficina, ni la ONU ni los representantes del
Estado quienes podamos declarar que lo que se está
haciendo o se ha hecho, sea suficiente. Sólo la gente
puede hacer esto, especialmente aquellas personas
en mayor desventaja, las víctimas del delito o las
familias de éstas son quienes tienen la credibilidad
para emitir este juicio.
Miles y miles de personas ilustran una imagen desalentadora, un pueblo
mexicano roído por los impunes niveles de inseguridad, desapariciones
y asesinatos. El acoso, discriminación y ataques a personas defensoras
de los derechos humanos y periodistas, la violencia contra las mujeres
(feminicidios), así como los terroríficos abusos hacia migrantes y refu-
giados que transitan por el país en su camino al derruido sueño ameri-
cano. Estadísticas oficiales revelan que 98% de los crímenes en el país
se quedan sin remediar, así como la mayoría de ellos no son investiga-
dos, dijo el mismo Alto Comisionado.
(…) respaldo por completo sus hallazgos, que coinci-
den en gran parte con las opiniones de mi Oficina y
de varios expertos y órganos internacionales de
derechos humanos de la ONU que recientemente han
visitado o informado sobre la situación en México
(…) Las recomendaciones de la CIDH fueron tam-
bién respaldadas (…), ilustrando así que hay un
amplio consenso nacional, regional e internacional
sobre la gravedad de la situación actual de los dere-
chos humanos en México.
JUSTICIA Y MEMORIA JORNADA MUNDIAL X AYOTZINAPA
Ambos han terminado por derruir la confianza de la ciudadanía en las institu-
ciones federales y locales. Informes sugieren que la policía realizó violentos
ataques y la emboscada en contra de los estudiantes desarmados. Autorida-
des, Estado y Crimen Organizado trinomio puesto a prueba.
El 30 de junio de 2014, autoridades militares anunciaron
que durante un ataque en una bodega en el municipio de
Tlatlaya en el Estado de México, soldados mataron a 22
de los agresores, incluyendo a una niña de 15 años. Sólo
después de varios meses (…), emergió una historia por
completo diferente; dicha historia sugiere que la mayor
parte de esas 22 personas de hecho se habían rendido y
que luego fueron ejecutadas sumariamente, y que tres
mujeres sobrevivientes habían sido sujetas a detención
arbitraria y a tortura.
Si el gobierno mexicano pretende recuperar un poco de credibilidad, deberá
actuar con respecto a las recomendaciones del Grupo Interdisciplinario de
Expertos Independientes (GIEI) incluyendo su insistencia en que reviertan la
decisión de no permitir que expertos y familiares de los 43 normalistas desa-
parecidos se entrevisten con el Batallón no. 27, quienes presenciaron la esce-
na del crimen. El informe del (GIEI), fue designado por la Comisión Inter-
americana de Derechos Humanos el cual descartó la versión original
(declaración oficial; verdad histórica de Murillo Karam), sobre las investiga-
ciones de que los cuerpos de los estudiantes habían sido incinerados en un
basurero municipal. Se reveló, también, que las fuerzas de seguridad federa-
les tuvieron conocimiento de lo ocurrido y que no intervinieron. El informe
manifestó que a raíz de la complejidad de las operaciones de variadas y di-
versas policías involucradas en la emboscada, arrestos, tiroteos y desapari-
ción forzada de los estudiantes significa que hubo una coordinación centrali-
zada.
Tantos y cuantificables casos, crímenes equivalentemente alarmantes han
sido cometidos en México en los años recientes. El subsecuente descubri-
miento de numerosas fosas comunes con cuerpos que resultaron no corres-
ponder a los estudiantes desaparecidos sino que son otras víctimas, es una
especie de cloaca descubierta al público. Alcantarilla que abre una cantidad
enorme de problemas crónicos que subyacen a la violencia y ola de violacio-
nes de derechos humanos que está teniendo lugar a lo largo y ancho del país.
Sobresale la debilidad de las policías, ciñendo su frecuente y directo involu-
cramiento en la comisión de crímenes. En Iguala, de acuerdo a la investiga-
ción del GIEI, elementos de la policía municipal, estatal y federal – junto con
otros representantes del Estado y del Ejército – estuvieron involucrados, ya
sea en los crímenes o en el hecho de no proteger a las víctimas, o tomando
parte en el posterior encubrimiento. Como dice el dicho popular de últimos
tiempos: este es un país en el que si eres víctima de un crimen, a los últimos
a los que llamas es la policía.
México tiene al menos 26,000 casos de personas no locali-
zadas, y nuevos casos ocurren cada día. La miseria unida
a la estadística es imposible de comprender. El fracaso de
la policía, del sistema de justicia para esclarecer el para-
dero de las víctimas y lo que les sucedió, y sobre todo, de
los sucesivos gobiernos y del sistema político en su con-
junto para detener estos crímenes no sólo es lamentable,
es profundamente trágico. Trágico para las personas
involucradas, y trágico para el país entero.
México, un país que no se encontraba en medio de un conflicto bélico real,
generó uno; La Guerra vs el Crimen Organizado (iniciada por Calderón y
continuada por Peña Nieto), cuyas cifras resultantes sencillamente son
impactantes: 151,233 personas asesinadas entre diciembre de 2006 y agosto
de 2015, circunscribiendo migrantes en tránsito. Desde 2007, hay al menos
26,000 personas desaparecidas, la mayoría como resultado de desaparicio-
nes forzadas presumiblemente por policías y el propio Ejército Mexicano.
Miles de mujeres y niñas abusadas sexualmente, terminan siendo víctimas
de feminicidio. Autoridades y Estado, prácticamente, sin hacer mucho para
la condena de dichos crímenes.
(…) muchas desapariciones forzadas, actos de tortu-
ra y ejecuciones extrajudiciales presuntamente han
sido llevadas a cabo por autoridades federales, esta-
tales y municipales, incluyendo la policía y algunas
partes del Ejército, ya sea actuando por sus propios
intereses o en colusión con grupos del crimen orga-
nizado.
Una sucesión de casos y abusos específicos han llamado la atención y preo-
cupación internacional, antecede decir que el Código Militar en nuestro
país fue reformado previo a dichos incidentes, logrando que militares pue-
dan estar bajo la jurisdicción civil en caso de crímenes cometidos contra
civiles. El caso de Tlatlaya es uno de los primeros bajo este sistema. El
segundo, la desaparición de los 43 normalitas de la Escuela Isidro Burgos
en Ayotzinapa, Guerrero. NI Perdón NI OLVIDO