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EL MERCURIO COMO METAL PESADO PROVENIENTE DE LA MINERÍA EN CO LO MBIA, UN PASIVO AMBIENTAL Y UN PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA
SUBREGISTRADO
MARIA PAULA CASTILLO M.
UNIVERSIDAD DE LOS ANDES FACULTAD DE ING ENIERÍA
DEPARTAMENTO DE ING ENIERÍA CIVIL Y AMBIENTAL BOGO TÁ D.C. JUNIO 2008
FACULTAD DE ING ENIERÍA UNIVERSIDAD DE LOS ANDES
EL MERCURIO COMO METAL PESADO PROVENIENTE DE LA MINERÍA EN CO LO MBIA, UN PASIVO AMBIENTAL Y UN PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA
SUBREGISTRADO
MARIA PAULA CASTILLO M.
Proyecto de grado como requisito para optar por el t ítulo de INGENIERA AMBIENT AL
ASE SOR SERGIO BARRERA TAPIAS
Ingeniero Civil MSc.
BOGO TÁ D.C. 2008.
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ÍNDICE
1. INT RODUCCIÓN 2. OBJET IVOS
2.1. Objet ivo general 2.2. Objet ivos específicos
3. EL MERCURIO 3.1. Fuentes del mercurio 3.2. Ciclo del mercurio 3.3. Toxicidad del mercurio
3.3.1.Mercurio elemental 3.3.2.Mercurio inorgánico 3.3.3.Mercurio orgánico
3.4. Casos de contaminación por metil mercurio en el mundo 3.5. Estándares internacionales con respecto al mercurio 3.6. Normatividad colombiana con respecto al mercurio
4. EL MERCURIO EN COLOMBIA 4.1. La minería de oro en Colombia 4.2. Impactos de la minería 4.3. Proceso de extracción 4.4. Manejo del mercurio en la minería del país 4.5. Impacto de la contaminación por mercurio
4.5.1.Antioquia 4.5.2.Bolívar 4.5.3.Córdoba 4.5.4.Caldas 4.5.5.Santander
5. ESTADO DE LA VIGILANCIA EN SALUD PÚBLICA CON RESPECT O A LA INT OXICACIÓN POR MERCURIO 5.1. Encuestas sobre la incidencia de síntomas asociados a intoxicación mercurial, frecuencia
de los mismos y elementos de diagnóst ico 6. CONCLUSIONE S 7. BIBLIOGRAFÍA
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ÍNDICE DE TABLAS
TABLA 1. PORCENTAJE DE RETENCIÓN DE LOS DIFERENT ES EST ADOS DEL MERCURIO DE ACUERDO A LA VÍA DE ABSORCIÓN.
TABLA 2. PRODUCCIÓN DE ORO POR DEPART AMENT O (KG).
TABLA 3. RESULT ADOS DE CONCENT RACIONES DE MERCURIO EN CABELLO PARA LA MUEST RA.
TABLA 4. FRECUENCIA DE SÍNT OMAS ASOCIADOS A LA INT OXICACIÓN MERCURIAL
TABLA 5. CONCENTRACIONES DE MERCURIO OBT ENIDAS DE LAS DIFERENT ES MUESTRAS EVALUADAS.
TABLA 6. CONCENT RACIONES DE MERCURIO EN AGUA Y SEDIMENT OS EN LAS EST ACIONES DE MEDICIÓN (CÓRDOBA).
TABLA 7. CONCENT RACIONES DE MERCURIO EN ESPECIES DE PECES. FUENT E: HALLAZGO DE MERCURIO EN PECES DE LA CIÉNAGA DE AYAPEL. MARRUGO ET AL (2007).
TABLA 8. INCIDENCIA DE SÍNT OMAS ASOCIADOS A LA INT OXICACIÓN CON MERCURIO ELEMENTAL
TABLA 9. INCIDENCIA DE SÍNT OMAS ASOCIADOS A LA INT OXICACIÓN CON MERCURIO ELEMENTAL (ERETISMO MERCURIAL).
TABLA 10. INCIDENCIA DE SÍNT OMAS ASOCIADOS A LA INT OXICACIÓN CON MERCURIO INORGÁNICO
TABLA 11. INCIDENCIA DE SÍNT OMAS ASOCIADOS A LA INT OXICACIÓN CON MERCURIO ORGÁNICO
TABLA 12. INCIDENCIA DE SÍNT OMAS ASOCIADOS A LA INT OXICACIÓN CON MERCURIO ORGÁNICO EN NIÑOS
TABLA 13. FRECUENCIA DE CONSULT AS POR LOS SÍNT OMAS ASOCIADOS A LA INT OXICACIÓN MERCURIAL (GENERAL)
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ÍNDICE DE ILUSTRACIO NES
ILUST RACIÓN 1. BIOACUMULACIÓN DEL METIL MERCURIO EN LA CADENA TRÓFICA. ADAPTADO DE ROULPH, 1996.
ILUST RACIÓN 2. MOLÉCULA DE CIST EÍNA.
ILUST RACIÓN 3. UNIÓN DE MET IL MERCURIO Y CIST EÍNA. METIONINA.
ILUST RACIÓN 4. DISTRIBUCIÓN NACIONAL DE LA ACTIVIDAD MINERA (ORO) POR DEPARTAMENT O.
ILUST RACIÓN 5. REGIÓN MINERA DE ANTIOQUIA.
ILUST RACIÓN 6. REGIÓN MINERA DEL DEPART AMENTO DE BOLÍVAR
ILUST RACIÓN 7. REGIÓN MINERA DE CÓRDOBA
ILUST RACIÓN 8. REGIÓN MINERA DE CALDAS.
ILUST RACIÓN 9. REGIÓN MINERA DE SANT ANDER.
ÍNDICE DE GRÁFICAS
GRÁFICA 1. MONIT OREO DE LA CALIDAD DEL AGUA DEL RÍO SURAT Á EN LA ZONA MINERA DE VET AS Y CALIFORNIA.
ÍNDICE DE ANEXOS
ANEXO 1. EST ADÍST ICAS DE VIGILANCIA EN SALUD PÚBLICA DEL INST ITUTO NACIONAL DE SALUD (RECOPILACIÓN EVENT O MET ALES PESADOS AÑOS 2000-2008)
ANEXO 2. LISTADO DE ENCUEST ADOS EN MUNICIPIOS MINEROS.
ANEXO 3. FICHA DE ENCUEST AS REALIZADAS EN JUNIO DE 2008.
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1. INTRO DUCCIÓN
La minería en Colombia se caracteriza por ser en gran parte artesanal, ut ilizando métodos de
extracción que no consideran los impactos de la act ividad sobre el ambiente y sobre la salud
humana. Los porcentajes de recuperación del material son bajos y todavía predominan las
extracciones sin control de emisiones a la atmósfera y vert imientos a los cuerpos de agua que
alteran seriamente su calidad, así como generan otros problemas que finalmente se convierten en
problemas con directa incidencia sobre la salud de las personas que habitan cerca a dichas zonas.
Algunos pocos estudios revelan la existencia de concentraciones de mercurio elevadas en cuerpos
de agua, en sedimentos, en varias especies de peces e incluso en muestras de cabello y sangre en
personas de las regiones con más intensa act ividad minera.
Como es natural, la falta de control en la producción minera así como las práct icas informales de
la act ividad, originan vert imientos que al depositarse en los cuerpos de agua se acumulan en los
peces y sedimentos, alcanzando eventualmente niveles por encima de los recomendados. Este
problema naturalmente se extrapola a la población que consume el agua o los animales de los
ríos.
Sin embargo, en Colombia se han realizado pocos estudios relacionados con la alteración de la
salud de las personas expuestas al mercurio, por lo que el diagnóst ico de dichas afectaciones no
resulta claro para las entidades encargadas de la salud en los municipios afectados, o incluso en
ent idades encargadas de vigilar y diagnost icar factores de riesgo ambiental en el país, como el
Inst ituto Nacional de Salud. Se habla entonces de un problema de falta de diagnóst ico y registro
oportuno de las implicaciones en la salud del mercurio y sus compuestos.
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Dependiendo de la forma en que se encuentre y varios otros factores, el mercurio presenta
diferentes efectos en la salud que pueden ir desde la aparición de temblores hasta la alteración de
la percepción y otros síntomas neurológicos que suelen tener diagnósticos independientes, es
decir, no suelen asociarse a la ocupación o al consumo de peces y alimentos contaminados por
este metal pesado. Otro factor importante es la relat ividad en la medida de estas afectaciones,
pues la modificación de la capacidad motriz o las pérdidas de la visión o la capacidad audit iva
pueden no ser evidentes a priori incluso por el mismo paciente, o no pueden tener la relevancia
necesaria como para requerir una consulta médica.
De esta manera, se hace necesario que existan niveles de exposición crónica, con sus
consiguientes síntomas, para que los pacientes decidan acudir a un centro de atención médica. De
acuerdo a las entrevistas realizadas, muchos profesionales de la salud no sabrían decidir con
certeza cuándo existe una relación entre los síntomas neurológicos que presenta una persona y la
posibilidad de que esta haya consumido pescado contaminado, o haya inhalado vapores de
mercurio accidentalmente, aún sin ser minero. Queda en evidencia que pese a que existe la
posibilidad de afectación crónica y aguda por el mercurio en sus fases orgánica, inorgánica y
elemental, no existen herramientas suficientes ni en los municipios más afectados para determinar
la dimensión real del problema.
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2. OBJETIVOS
2.1 Objetivo general
El objet ivo principal de este documento es estudiar someramente la situación de las regiones del
país en donde se encuentran los mayores pasivos ambientales de la minería aurífera y comparar
este panorama con el diagnóstico general que se ha realizado en los últ imos años de la
problemática de la minería aurífera y su incidencia en la salud tanto de trabajadores como de los
habitantes de dichas regiones.
2.2 Objetivos Específicos
Establecer, mediante la encuesta a centros de salud y hospitales en los municipios de
Remedios, Segovia, Amalfi, Zaragoza y Caucasia (Antioquia); Santa Rosa del Sur (Bolívar);
Puerto Libertador (Córdoba); Marmato, Supía y Villamaría (Caldas) y Suratá, Vetas y
California (Santander), el grado de información acerca de las intoxicaciones por mercurio y
sus síntomas específicos del personal de salud capacitado para la atención médica en los
mencionados lugares del país.
Conocer más a fondo la problemática de la minería como pasivo ambiental en el país y las
regiones en donde sus impactos han sido mayores.
Estudiar las característ icas químicas y propiedades toxicológicas de los estados del mercurio.
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Evaluar, de acuerdo a la literatura, las concentraciones de mercurio en cuerpos de agua
cercanos a regiones afectadas por la minería intensiva, así como en sedimentos y organismos
acuáticos como peces y comparar estos valores con las normas internacionales de seguridad.
Revisar la literatura concerniente a la problemática del mercurio en el país y sus hallazgos
sobre manejo del pasivo a corto, mediano o largo plazo.
De acuerdo a lo anterior, establecer el estado de información sobre la intoxicación por
mercurio en el organismo público responsable de vigilar y diagnost icar factores de riesgo
para la salud pública en el país (INS) y en dado caso, determinar las causas que llevan a que
exista un subregistro de este problema.
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3. EL MERCURIO
El mercurio es un metal pesado (elementos metálicos que presentan una densidad alta, un peso
atómico alto y pueden presentar efectos tóxicos para los seres vivos, así como pueden acumularse
en las cadenas alimenticias1) de color plateado y apariencia líquida a temperatura ambiente. En la
química general se le clasifica como un metal de t ransición, ubicado en el grupo 12, con un
número atómico de 80. Su símbolo químico es Hg y t iene una gran densidad de 13579,04 kg/m3.
Fisicoquímicamente2, es un material que presenta un volumen de expansión uniforme, por lo que
resulta idóneo para la fabricación de termómetros y otros instrumentos de medición. También
presenta una alta conductividad térmica y eléctrica, una alta tensión superficial, estabilidad
química, y una elevada capacidad para alearse (mezclarse con otros materiales). Dadas estas
característ icas, resulta de gran ut ilidad en diversos oficios. Por ejemplo, se ha usado en la
producción de amalgamas dentales, baterías, instrumentos de medición, en sistemas de
iluminación y como componente de artefactos eléctricos y electrónicos.
Sin embargo, la estudiada toxicidad del elemento ha ocasionado que su uso se vea disminuido en
los últ imos años3, al menos en ciertos sectores industriales, principalmente en lo relacionado con
los elementos de medición en el sector de salud (termómetros, esfigmomanómetros). Estos
instrumentos, al salir desechados de hospitales o incluso de hogares, contribuyen a las emisiones
ambientales y de ser dispuestos de manera incorrecta pueden aumentar las intoxicaciones.
3.1 Fuentes del mercurio
1 Definición. Glosario de términos del ambiente de la EPA (2008). 2Español, Alba (Sin Fecha). Toxicología del mercurio, diapositiva 7. 3 RPA (2002). Risk to health and the environment related to the use of mercury products.
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El mercurio se encuentra en el planeta de manera natural, tanto en el aire, como en el agua y el
suelo en formas orgánicas, inorgánicas y como mercurio elemental. T iene como fuentes naturales
la evaporación de minerales, la erosión de la corteza terrestre y la actividad volcánica. Estas
fuentes geológicas contribuyen en emisiones a la atmósfera est imadas en miles de toneladas
anuales. En total, se est ima que las emisiones naturales pueden llegar hasta las 6.000 toneladas
anuales4.
Entre las fuentes antropogénicas se cuentan la quema de combustible de carbón, ya que el carbón
fósil posee algo de mercurio. Esta act ividad libera al ambiente emisiones de mercurio5, así como
la quema de carbón en plantas de producción de energía. Otras fuentes de este metal las aportan
las plantas de cloración y otras industrias químicas. En ellas, grandes cantidades (miles de
toneladas) son ut ilizadas, generando emisiones asociadas menores a 10 toneladas por año6. En
Colombia, la abandonada planta Álcalis de Colombia se encargaba de la producción de sal y cloro
para acueductos, produciendo vert imientos a la bahía de Cartagena de sales mercuriales. Por estos
vert imientos, la planta fue clausurada hace varias décadas como consecuencia de la reportada
contaminación del agua, la flora y la fauna.
Por su capacidad de amalgamación, el principal y más antiguo uso que ha tenido el mercurio en la
historia ha sido en la minería. T anto la extracción de materiales como la disposición de los
residuos generan emisiones, especialmente en la minería de oro. Esta act ividad utiliza en
promedio unas 10.000 toneladas de mercurio anuales, con una consecuente emisión a la
4 WHO, Regional Office for Europe (2000). Mercury. Página 1. 5 EPA (2008) Basic Information. Sources of mercury. 6 RPA (2002). Risk to health and the environment related to the use of mercury products.
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atmósfera de 250 toneladas7. En total, las act ividades humanas se encargan de emit ir entre 2.000
y 3.000 toneladas anuales de mercurio, según lo est imado8.
Los datos anteriormente expuestos enuncian que el aporte de mercurio por las act ividades
humanas es inferior al aportado por causas naturales. Sin embargo, esto no es un indicio de que el
riesgo de contaminación por mercurio sea inexistente. Al contrario, el riesgo existe para las
poblaciones que t ienen una mayor relación con estas act ividades y son más propensas a
desarrollar problemas en la salud por esta exposición.
3.2 Ciclo del mercurio
El mercurio se encuentra en la naturaleza en diversos estados. Las fuentes industriales
(manufactura de plást icos, generación de energía, industria de cloro-álcali, por mencionar
algunos) y las fuentes naturales, emiten mercurio a la atmósfera en formas elementales e
inorgánicas9: Hg0, Hg+. En la atmósfera, el mercurio se encuentra principalmente en su forma
elemental (Hg0), la cual es extremadamente volát il y poco react iva, por lo que el proceso de
oxidación a estados solubles (como el Hg++), que pueden depositarse por medio de la lluvia puede
demorar hasta varios años10.
Para que el mercurio llegue a los cuerpos de agua y/o a los alimentos de consumo humano, es
necesario que sea convert ido primero a una forma soluble. Como se mencionó, este proceso
ocurre muy lentamente. Aún cuando ocurre eventualmente, su baja tasa de conversión hace que
no sea una reacción significat iva en toda la atmósfera. Sin embargo, en la superficie de las gotas
de agua puede ser oxidado rápidamente gracias al ozono, dándose la siguiente reacción:
7 Íbid. 8 WHO, Regional Offi ce for Europe (2000). Mercury. Página 1. 9 Español, Alba (Sin Fecha). Toxicología del mercurio, diapositiva 10. 10 Ionescu et al (2004). Mercury Cycle.
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2-
230 O + 2OH +Hg OH + O + Hg ++⎯→⎯
De esta manera, el Hg++ es absorbido en las gotas de agua que caen en forma de lluvia. Este
puede combinarse con el cloro formando HgCl2 (cloruro de mercurio) que reacciona fácilmente
formando compuestos en fase acuosa, fácilmente depositables.
Una parte de la precipitación que contiene el material mercúrico alcanza las corrientes de agua
que finalmente llegan a los cuerpos acuosos. T ambién se deposita en los suelos, convirt iéndose a
otras formas orgánicas e inorgánicas. El mercurio, una vez en el agua o en el suelo, puede volver
a su forma elemental.
Una vez el mercurio en su forma soluble entra en el cuerpo de agua, puede sufrir varias
transformaciones. Cerca a la superficie, se pueden encontrar concentraciones relat ivamente altas
de mercurio elemental provenientes del aire adyacente al agua. En las profundidades intermedias,
el mercurio divalente (Hg++) suele gobernar las especies mercúricas, y finalmente cerca a la capa
de sedimentos, en las mayores profundidades, se encuentran las especies que han sido convert idas
a formas orgánicas por las bacterias de la base del cuerpo.
Las diferentes especies que pueden formarse dependen de varios factores, como el pH, la
concentración de cloro en el agua y el oxígeno disuelto. De esta manera, pueden formarse
hidróxidos de mercurio, compuestos de cloro e incluso puede unirse a algunos sulfuros.
Las especies orgánicas se forman mayoritariamente en cuerpos de agua anóxicos (con bajos
contenidos de oxígeno). Las bacterias anaerobias presentes en los sedimentos del fondo del lago
convierten el mercurio divalente a metil mercurio (CH3Hg+), que es la forma en donde t iene la
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capacidad de bioacumularse en las cadenas t róficas. Este proceso se conoce como metilación del
mercurio, y se da de manera más pronunciada en cuerpos de agua oligotróficos ácidos11.
El metil mercurio puede formarse naturalmente, es decir, sin la intervención de las bacterias
mencionadas. Consiste en la adición del radical metilo (CH3-) al mercurio, lo cual no es muy
propenso a ocurrir dado que este radical es inestable en el agua. T ambién puede formarse en la
presencia de acetatos si hay suficiente luz solar (reacciones fotoquímicas). Esta reacción es
fácilmente reversible, por lo que efect ivamente la tasa de conversión a metil mercurio no resulta
importante. Dadas estas condiciones, la única forma efect iva de biometilación es la que realizan
las bacterias sulfato reductoras en condiciones anaerobias.
El mercurio atraviesa la membrana de las bacterias o bien por difusión o con la intervención de
una proteína de transporte dependiendo de la concentración de este en el medio. Si el t ransporte
se da por difusión, las especies que pasan no deben estar cargadas, dado que la bicapa lipídica de
las membranas es no polar. Esta condición sólo deja una especie posible, dado que el mercurio
divalente (Hg++) t iene una carga doble posit iva y el dicloruro de mercurio (HgCl2) se presenta casi
exclusivamente en condiciones óxicas. Este compuesto es el Hg(HS)2.
Una vez en el interior de las bacterias, el mercurio es convert ido de su forma inorgánica a la
orgánica en un proceso que aún no se conoce del todo12. La siguiente reacción es una posibilidad:
HxHgCHHgS II +⎯→⎯ )()(3
11 Pak y Bartha (1998). Mercury Methylation and Demethylation in Anoxic Lake Sediments and by Strictly Anaerobi c Bacteria. Página 1013. 12 Estudios recientes revelan que no sólo la t rayectoria de Acetil CoA puede llevar a la metilación del mercurio, según Morel, F. (2003).
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La (x) corresponde a algún anión que posteriormente se disocia del compuesto (por ejemplo, el
término podría ser CH3HgCl). De esta manera el metil mercurio sin carga es liberado al cuerpo
acuático en donde ahora puede ser absorbido fácilmente por otros organismos.
De esta manera, se forman los compuestos capaces de ser retenidos por otros organismos. Los
autótrofos, por su parte, ret ienen en su interior formas no polares del mercurio que incluyen el
mercurio elemental (Hg0), dimetil mercurio (Me2Hg), y CH3HgCl. Sólo este últ imo es retenido en
el interior de las membranas de los autótrofos, ya que aún cuando los demás son también polares,
al ser poco reactivos la tasa de entrada y salida de los organismos es igual. Son estas las dos
característ icas que debe tener un compuesto del mercurio para ser retenido: no tener carga y ser
react ivo. En su forma orgánica, el metil mercurio (CH3Hg+) puede empezar a bioacumularse en
los organismos. Esta forma de mercurio es, de todas, la que mayores tasas de retención t iene en
las cadenas tróficas.
Los organismos heterótrofos consumen a los autótrofos, aumentando sus reservas de mercurio en
cada organismo autótrofo que consumen. Los peces acumulan metil mercurio en sus tejidos
musculares en grandes cantidades, y estos luego son consumidos por los seres humanos, que
consumirán cantidades muy superiores a las que se encuentran en el agua del cuerpo acuático,
como se muestra en el siguiente esquema:
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Ilustración 4. Bioacumulación del metil mercurio en la cadena trófica. Adaptado de ROULPH, 1996.
3.3 Toxicidad del mercurio
La toxicidad del mercurio y en general de cualquier sustancia potencialmente nociva para el
organismo depende de varios factores: La forma en la que se encuentre el compuesto (orgánico,
elemental, inorgánico); la exposición; la fuente de la exposición; la vía de absorción; la
concentración y la interacción con otras sustancias. Pero también existen factores que dependen
de las condiciones de la persona expuesta, como la predisposición genética a presentar reacción
adversa, el sexo, la edad, la const itución física, la alimentación, la existencia de enfermedades
previas, entre otros.
Las formas del mercurio a las que puede exponerse una persona son las siguientes: Orgánicas
(metil mercurio, et il mercurio); Inorgánicas (cloruro de mercurio, cloruro mercurioso o
calomelanos, sulfuro mercúrico o cinabrio, entre otros) y mercurio elemental.
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La siguiente tabla muestra la vía de absorción, la forma del compuesto y el porcentaje de
retención correspondiente:
Tabla 1. Porcentaje de retención de los diferentes estados del mercurio de acuerdo a la vía de absorción. Basado en: (1) Embolia pulmonar por mercurio elemental. (2)Toxicología del mercurio.
*N/A: No aplica.
3.3.1 Mercurio elemental
La exposición al mercurio elemental por vía gastrointestinal no representa un verdadero riesgo,
pues su absorción se realiza de manera lenta, mientras que por inhalación, la penetración es fácil
y llega a la sangre a t ravés de la membrana alveolar. La inhalación de mercurio elemental es una
forma conocida de envenenamiento por mercurio en la historia de la humanidad. Como se
mencionó anteriormente, los instrumentos de medición, las emisiones de las industrias y los otros
usos que se t ienen del mercurio por parte del hombre son de este en su forma elemental. De esta
manera, la inhalación de vapores de, por ejemplo, un termómetro roto o de la chimenea de una
planta de energía a base de carbón, ocasiona la absorción en los pulmones del metal. La
exposición puede ocurrir en casos donde objetos que contienen el elemento se rompan y este se
volat ilice hacia la atmósfera en lugares cerrados calurosos y/o que carecen de una ventilación
adecuada.
Vía de absorción
Forma del compuesto
Elemental Inorgánica Orgánica
Inhalación 80% N/A N/A Ingestión 0,01% ±7% (varía de 2% a 15%
según solubilidad) Metil mercurio:
95% Absorción cutánea < 0,01% N/A N/A
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Una vez el mercurio llega a la sangre, puede movilizarse y ser oxidado a su forma divalente en
varios lugares13. Incluso puede llegar al cerebro, donde se acumula luego de oxidarse y puede
afectar el sistema nervioso central como se mostrará más adelante.
Los síntomas de inhalación de mercurio elemental incluyen temblores, irritabilidad, nerviosismo,
insomnio, debilidad, atrofia muscular, espasmos, dolor de cabeza, alteración en las sensaciones,
cambios en las respuestas nerviosas y déficit en la función cognit iva. Si la exposición es muy
elevada, los efectos pueden incluso llegar al fallo respiratorio y posteriormente la muerte.
Inicialmente, se habla de una intoxicación aguda, y tras la inhalación viene acompañada de
fiebres, escalofríos, fat iga y dolores de cabeza. Pueden estar involucrados otros síntomas como
diarrea, espasmos y pérdida de la visión14. Como puede verse, estos síntomas no son demasiado
part iculares, por lo que no es usual que existan sospechas sobre su causa que lleven a pensar en
intoxicación mercurial, a menos que exista conciencia de su manipulación. Como se mencionó
anteriormente, a exposiciones elevadas los efectos pueden verse reflejados en enfermedades
respiratorias hasta llevar al ahogamiento. Sin embargo, esta exposición está reservada para
personas que trabajan en oficios como la minería y la dentistería. Dado que es una enfermedad
ocupacional, en las minas suele darse con frecuencia en sus t rabajadores, teniendo como primer
síntoma temblores que aumentan en intensidad con el t iempo. De acuerdo a estudios realizados15,
pacientes que cesaban su exposición al mercurio y habían presentado dichos temblores,
mejoraban en un lapso aproximado de tres meses.
La enfermedad ocupacional por exposición crónica es conocida como eret ismo mercurial, y se
caracteriza por tener síntomas propios de la locura. Las alteraciones psíquicas asociadas a la
13 Ionescu et al (2004). Health Effects. Esposure and Circulation. 14 Picazo y Fernández (Sin fecha). Toxicología de los mercuriales. Aspectos clínicos. Página 119. 15 Íbid. Página 120.
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intoxicación crónica incluyen depresión, pérdida del autocontrol en presencia de extraños,
retraimiento, crisis emocional profunda, fobias, desmotivación e irritabilidad. Estos síntomas
suelen llevar a diagnóst icos erróneos de esquizofrenia y otras psicosis.
Históricamente, el mercurio y sus compuestos han sido conocidos por sus efectos principalmente
en el sistema nervioso. La industria de sombreros ut ilizó el mercurio especialmente en el siglo
XIX para tratar las pieles de roedores con el fin de eliminar las bacterias de los sombreros de
fieltro y de piel. El proceso se realizaba con nitrato de mercurio16, y despedía vapores que eran
inhalados por los sombrereros de la época. Como resultado, estos se “volvían locos”, así como lo
narra Lewis Carroll en “Alicia en el país de las maravillas” con su personaje del Sombrerero
Loco. Probablemente, la locura de este personaje podría t ratarse de un caso de eret ismo
mercurial.
3.3.2 Mercurio inorgánico
Los compuestos inorgánicos del mercurio son combinaciones de este con otros elementos que no
incluyen el carbono, como el sulfuro de mercurio (HgS) o el cloruro de mercurio (HgCl2).
También en su forma elemental puede ser considerado inorgánico, y en sus formas cat iónica y
divalente, sin embargo, esta forma se toma como un estado separadamente.
El mercurio en su fase inorgánica t iene una absorción más rápida y fácil por vía gastrointest inal,
pero no se compara al grado de absorción que alcanzan los compuestos orgánicos.
Los efectos se perciben a altas exposiciones, y pueden resultar en daños al t racto gastrointest inal,
el sistema nervioso y los riñones. El principal medio de exposición es la ingest ión, y esta puede
ser aguda o crónica. En el primer caso, aparecen síntomas de malestar en la boca, dolor de
16 De la Torre, Antolin (2008). Metales pesados, el mercurio.
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garganta, náuseas, vómitos, dolor abdominal, cansancio, entre otros. La intoxicación crónica t iene
síntomas similares a la inhalación crónica con dermatit is, gingivit is, estomatitis y exceso de
salivación. Adicionalmente a los síntomas neuro-psiquiátricos, se presenta el fallo renal. En los
ojos puede aparecer un signo conocido como mercurialentis, que no es fácil de detectar. Los
cuadros presentados por intoxicación en plantas de compuestos inorgánicos y mercurio elemental
suelen tener implicaciones principalmente neurológicas.
Otros compuestos inorgánicos como el fulminato de mercurio, suelen tener característ icas más
corrosivas y sus síntomas se dan por exposición cutánea.
3.3.3 Mercurio orgánico
Los compuestos orgánicos del mercurio son aquellos que contienen enlaces covalentes entre el
carbono y el mercurio17. Entre ellos se incluyen los fenilmercuriales, metoxiet ilmercuriales y
metilmercuriales (incluyendo aquí el dimetil mercurio y el metil mercurio).
Estos compuestos afectan en general a la población y no únicamente a los trabajadores que t ienen
una exposición directa por su oficio. Pueden llegar al organismo por medio de la inhalación, la
absorción cutánea y la ingest ión directa. Por la inhalación, llegan los pulmones y finalmente
alcanzan la sangre. Por la absorción cutánea llegan también a la sangre a través de la piel, y la
ingest ión lleva el compuesto al tracto gastrointest inal. De los compuestos orgánicos, el más
conocido por su toxicidad y acumulación es el metil mercurio. Su fuente principal es la ingest ión
de peces contaminados.
17 Definición. GreenFacts (2008). Glossary.
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Los compuestos de metil mercurio poseen una gran afinidad con péptidos o proteínas celulares
que contienen cisteína. La cisteína es uno de los veinte aminoácidos de síntesis de proteínas que
posee un grupo sulfhidrilo (SH-), el cual tiene una alta afinidad con el metil mercurio (CH3Hg+).
Ilustración 5. Molécula de cisteína.
De esta manera, el metil mercurio se une a la cisteína formando un compuesto similar a la
metionina, el otro aminoácido, de los veinte, que posee azufre.
Ilustración 6. Izquierda: Unión de metil mercurio y cisteína. Derecha: Metionina.
Así, logra ser t ransportado a t ravés de la sangre cerebral por un transportador de aminoácidos. De
esta manera se acumula el metil mercurio en el cerebro. Allí, puede ser demetilado a formas
inorgánicas que no pueden salir del cerebro nuevamente, almacenándose allí y generando daños
también en su forma inorgánica18.
18 Ionescu et al (2004). Health Effects. Esposure and Circulation.
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Part icularmente afecta a fetos y niños, y su principal efecto sobre la salud se da en el sistema
neurológico de estos. La exposición en los fetos se da por el consumo de peces y organismos
acuáticos contaminados por la madre. Este consumo, de ser representat ivo, puede afectar
adversamente el desarrollo del cerebro y el sistema nervioso del bebé en la placenta19. Se han
reportado impactos en el pensamiento cognit ivo, la memoria, la atención, el procesamiento del
lenguaje, el desarrollo motriz y las habilidades para la percepción visual-espacial en niños
expuestos al metil mercurio en el útero. La intoxicación por metil mercurio t iene un periodo de
latencia muy prolongado, en el cual pueden ir acumulándose mayores cantidades del compuesto
en los tejidos grasos del organismo. Una vez allí, t ienden a viajar al sistema nervioso central,
ocasionando daños en regiones específicas donde se localizan20. Los primeros síntomas en
aparecer son las parestesias en los dedos de la mano. Luego aparecen también efectos en la visión
y en la coordinación oral y escrita. La destrucción de las células neuronales es progresiva e
irreversible. Se citan síntomas neuropsiquiátricos, igual que en la inhalación de vapores de
mercurio elemental, pero son más frecuentes las variaciones en el estado de ánimo que otros más
comunes en dicho caso. Los síntomas más graves pueden llegar a la pérdida definit iva de la
visión, la audición y otros sentidos.
3.4 Casos de contaminación por metil mercurio en el mundo
La neurotoxicidad del metil mercurio ha dejado a lo largo de la historia muchas víctimas en
varios lugares del mundo. El primer brote documentado de enfermedades ocasionadas por el
consumo de este compuesto ocurrió en el Japón en las ciudades de Niigata y Minamata a
mediados del siglo XX, y es, hasta el momento, el caso más reconocido de este t ipo de
envenenamiento. La enfermedad de Minamata, como se le conoce, cuenta con más de 2.000
19 EPA. (2008) Mercury Effects. 20 Español, Alba (Sin Fecha). Toxicología del mercurio, diapositiva 38.
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21
víct imas oficiales, sin contar muchas otras que no fueron registradas o tuvieron un diagnóst ico
erróneo. Años después del incidente, los análisis del contenido de mercurio en muestras de sangre
y cabello de las personas afectadas revelaron rangos entre 1,82 y 191 ppm en las madres y entre
5,25 y 110 ppm en su descendencia21.
Los nacimientos de niños con algún t ipo de parálisis o anormalidad en su desarrollo motriz
(principalmente) se prolongaron por varios años, y en los pueblos pesqueros la incidencia de
parálisis cerebral en los neonatos se incrementó hasta en un 8%22. Estadíst icamente, se observó
que las concentraciones de metil mercurio de los cordones umbilicales que fueron estudiados eran
mayores en niños que presentaban algún tipo de padecimiento neurológico.
Igualmente se realizaron encuestas a grupos de población que estaban expuestos al consumo de
pescado contaminado y a grupos que no estaban expuestos. Se encontró que en las personas
expuestas era más común la incidencia de síntomas neurológicos y motrices como temblores,
dolores musculares, alteraciones sensoriales y otros no específicos23.
En Niigata, la contaminación del río Agano con agua residual sin t ratamiento por parte de una
fábrica productora de acetaldehído tuvo como consecuencia la aparición de un segundo brote de
contaminación por metil mercurio en el Japón. En este caso hubo 325 víct imas, pero la
experiencia de Minamata previno a las madres en potencia, y se recomendó evitar el embarazó a
las mujeres con niveles superiores a 50 ppm en el cabello, lo cual redujo la ocurrencia de
exposición congénita24.
21 Íbid. 22 Íbid. 23 Íbid. 24 Íbid.
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22
Un segundo caso de este t ipo de intoxicación tuvo lugar en Iraq a finales del año 1971, luego de
la importación de semillas t ratadas con metil mercurio (utilizado en este caso como fungicida). Se
sabe que se importaron miles de toneladas de estas semillas, y que estas fueron distribuidas
libremente en todo el territorio iraquí. Este hecho impidió que pudiera establecerse qué t ipo de
población había consumido los granos, pero ciertamente hubo un número considerable de
víct imas, que incluían mujeres embarazadas. Como resultado, los niños nacieron con los síntomas
que se han enunciado anteriormente: parálisis, ceguera, sordera, retraso mental, entre otros.
En estudios realizados en años posteriores se relacionó la incidencia de convulsiones en niños con
las mayores exposiciones, y los resultados de concentración de metil mercurio en el cabello
materno llegaban a ser hasta de 674 ppm25.
Los estudios basados en modelos matemáticos diversos para determinar los umbrales de
concentraciones de metil mercurio que t ienen efectos negativos en el desarrollo motriz y
neurológico de los niños, para el caso iraquí, establecieron valores que variaban entre 10 y 255
ppm dependiendo del modelo utilizado y la delicada definición de desarrollo normal, la cual no
puede ser objet iva. Por ello, estos estudios no son concluyentes.
A part ir de estos casos de intoxicaciones masivas a cargo del metil mercurio en el agua y la
comida, se originó un interés en el estudio de la toxicidad y las concentraciones necesarias para
causar efectos perjudiciales a la salud de los seres humanos. Se han llevado a cabo numerosos
estudios en regiones del mundo que poseen un sector pesquero importante que condiciona una
dieta basada en mariscos como fuente principal de proteína.
En estos estudios se evalúan las concentraciones de mercurio en la sangre de los niños de
diferentes edades, así como en el cabello de las madres, intentando hallar relaciones relevantes
25 Íbid.
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23
con los resultados de tests neuropsicológicos que se aplican a dichos niños. También en adultos
que se ven expuestos a escenarios donde es posible que haya concentraciones elevadas de
compuestos de mercurio, como el caso del Amazonas, región altamente minera.
Por ejemplo, los estudios de Lebel et al (1996) revelaron que las concentraciones de mercurio en
el cabello de una muestra de personas que habitan poblaciones cercanas a lugares de extracción
de oro estaban entre 5,6 y 38,4 ppm. La mayor parte del mercurio estaba en forma de metil
mercurio, y había una evidente correlación entre ciertas deficiencias visuales y motrices y las más
altas concentraciones de mercurio en el cabello.
Estos, entre otros estudios de caso, revelan diferentes concentraciones de mercurio que t ienen
alguna incidencia en el sistema neurológico especialmente. Queda claro entonces que este
compuesto orgánico del mercurio t iene una incidencia en las capacidades motrices, visuales,
audit ivas y de aprendizaje en los individuos de varias edades, y que en tanto es mayor la
concentración de este en el organismo, los efectos se agravan. Exposiciones de larga duración
muestran degeneración neuronal severa en personas y animales, que pueden manifestarse en la
descendencia, sin embargo, no existe evidencia de que posea característ icas mutagénicas26.
3.5 Estándares internacionales con respecto al mercurio
La EPA (Environmental Protect ion Agency) de los Estados Unidos ha desarrollado una medida
que refiere la concentración máxima recomendada de metil mercurio en el agua, en peces
estuarinos y en los tejidos de los mariscos de manera que sean seguros para la población que los
consume o ut iliza (incluyendo a la población sensible). A medida que se encuentran mayores
evidencias sobre la toxicidad de este compuesto, la dosis segura es más estricta.
26 EPA (2001). Water Quality Criteria. Human Health Criteria. Methylmercury Fish Tissue Criterion. Draft Implementation Guidance. Chapter 4, 5.
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24
La dosis de referencia (RfD) actual es de 0,1 µg/kg/día, la cual se estableció en el año 1995
reemplazando a la de 1985 que era de 0,3 µg/kg/día. Esta decisión se basó en los estudios del
caso iraquí sobre los niños nonatos, puesto que anteriormente se había establecido esta dosis con
base en estudios de exposición en adultos, pero no se había contemplado el efecto en el desarrollo
de los niños en el útero materno. La dosis actual es el resultado de establecer una concentración
determinada en el cabello de la madre, la cual equivale a 0,1 µg de metil mercurio por kilogramo
por día.
Otras ent idades han hecho estas mismas evaluaciones para determinar las dosis seguras. Por su
parte, la FDA (Food and Drug Administrat ion) determinó una dosis de 0,47 µg/kg/día. Sin
embargo, recomienda a las mujeres embarazadas o en edad fért il limitar su consumo de peces que
puedan tener alto contenido de mercurio27.
La WHO (World Health Organizat ion) declaró en un documento que la dosis tolerable de metil
mercurio para proteger el feto en gestación era de 1,6 µg/kg/semana28, es decir; 0,23 µg/kg/día.
Finalmente, la AT SDR (Agency for Toxic Substances and Disease Registry) determinó un
mínimo nivel de riesgo con una dosis de 0,3 µg/kg/día.
En cuanto a los niveles de mercurio presentes en los peces para consumo humano, la legislación a
nivel mundial se mueve por rangos entre 0,3 - 1 mg/kg. La WHO/OMS establece este valor como
0,2 mg/kg29.
3.6 Normatividad colombiana con respecto al mercurio
27 Íbid. Establecido porla FDA Consumer (1994). 28 Íbid. Establecido por la JECFA (2004). 29 Íbid. Establecido por la WHO (1990).
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25
Siendo el mercurio una sustancia que ha generado los problemas ambientales y en salud pública
descritos anteriormente, el país cuenta con ciertos estándares en cuanto a concentraciones
máximas permitidas para el agua. De acuerdo a la legislación vigente, los vert imientos y
concentraciones de contaminantes máximas permit idas de acuerdo al uso que tenga el agua son
regidos por el Decreto 1594 de 1984. En este se habla del metal en los siguientes art ículos:
• Artículo 20: Considera el mercurio como una sustancia de interés sanitario.
• Artículo 38 y Art ículo 39: El criterio de calidad admisible para la dest inación del recurso
para consumo humano y doméstico es de 0,002 mg/l.
• Artículo 41: El criterio de calidad admisible para la dest inación del recurso para uso
pecuario es de 0, 01 mg/l.
• Artículo 45: El criterio de calidad admisible para la dest inación del recurso para
preservación de flora y fauna en aguas dulces y marinas o estuarias es de 0,01 mg/l.
• Artículo 74: La concentración para el control de la carga de mercurio total es de 0,02
mg/l. La concentración de mercurio orgánico no debe ser detectable.
• Artículo 91: No se admite ningún t ipo de vert imiento en las cabeceras de las fuentes de
agua, ni en un sector aguas arriba de las bocatomas para agua potable ni en cuerpos de
agua protegidos.
En cuanto al agua potable, el decreto 475 de 1998 refiere un valor de 0,001 mg/l de mercurio total
en el agua. En ningún caso se habla del metil mercurio como tal, pero en el art ículo 74 del
Decreto 1594 de 1984 se refiere una concentración no detectable de mercurio orgánico.
4. EL MERCURIO EN CO LO MBIA
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26
Habiendo establecido con anterioridad las fuentes más relevantes de mercurio, puede decirse que
la de mayor preocupación como posible causante de problemas en cuanto a salud pública es la
minería del oro, dado que esta act ividad es la que más contribuye a las emisiones y vert imientos
de este metal en el país30. Uno de los pasivos ambientales más importantes que existen en
Colombia son los residuos de la mala manipulación de los materiales utilizados en la minería.
4.1 La minería de oro en Colombia
A lo largo de la historia de Colombia, la minería de oro ha sido una act ividad muy importante, y
dado que resulta económicamente lucrat iva, se ha desarrollado en varios sectores del país.
Colombia fue un gran productor de oro. En el siglo XVI representaba el 18% de la producción
mundial total del recurso, llegando a ser incluso del 40% en el siglo XVIII, convirt iéndose así en
el primer productor de oro en el mundo para la época. En la actualidad, la producción supera las
30 toneladas anuales31. Se est ima entonces que más de 50.000 personas podrían estar vinculadas a
esta act ividad de manera directa, es decir, en la extracción y otros oficios en el interior del sector
minero32.
Se sabe que casi la totalidad de la producción en el país proviene del sector de las pequeñas y
medianas industrias. Este sector suele traer los peores pasivos ambientales, ya que hay poco
control de los impactos ambientales y de salud sobre los trabajadores y demás personas
involucradas geográficamente. Igualmente, las técnicas utilizadas t ienen bajos porcentajes de
recuperación, con lo que el costo total teniendo en cuenta las externalidades en el ambiente y en
la salud se eleva.
30 Olivero et al (2004). Mercury in the aquatic environm ent of the village o f C aimito in the Mojana region, north of Colombia. 31 Ministerio de Minas y Energía, UPME (1997). Plan Nacional de Desarrollo Minero. 32 Olivero et al (2002). Human exposure to mercury due to fish consumption in San Jorge river basin, Colombia (South America).
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27
Para el año 199633 la distribución en el país de la producción de oro era de la siguiente manera:
Ilustración 4. Distribución nacional de la actividad minera (oro) por departamento.
Como se puede observar, el listado lo encabezan las regiones noroccidentales del país. Es allí
donde se concentra la mayor parte de la act ividad minera. De acuerdo al Bolet ín Estadíst ico de
Minas y Energía 2002 -2007 el aporte por departamento a la producción nacional de oro lo
encabezan los departamentos de Antioquia, Córdoba, Bolívar, Caldas y Chocó. Departamentos
como Santander, Risaralda, Valle del Cauca, Cauca, T olima, Huila y Nariño, ubicados a lo largo
de la región occidental de país t ienen también un aporte, y finalmente los departamentos de
Guanía y Vaupés, ubicados en el sur-oriente del país contribuyen con una pequeña cifra a la
producción nacional de oro.
De acuerdo a las cifras, la producción nacional de los últ imos años oscila entre 15 y 46 toneladas
anuales.
33 Íbid.
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28
Tabla 2. Producción de oro por departamento (kg). Fuente: Boletín Estadístico de Minas y Energía 2000 - 2007.
Departamento 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 Antioquia 15.098,11 10.021,99 10.998,19 27.071,63 22.878,73 22.376,18 10.724,24 Bolívar 1.538,92 2.178,9 1.869,41 6.874,91 2.949,13 4.194 991,13 Caldas 605,23 644,92 795,65 1.099,21 1.331,26 2.013,33 1.416,57 Cauca 423,01 450,6 390,68 446,27 361,16 349,85 281,4 Chocó 1.000,91 854,67 605,89 1.204,04 851,17 1.882,35 1.192,29
Córdoba 17.266,55 6.741,66 5.485,86 8.211,74 7.226,6 3.720,74 462,02 Guanía 1,76 2,55 0,98 16,12 147,62 73,07 11,33 Huila 1,25 3,73 0,92 7,21 8,05 7,12 2,84
Nariño 574,5 253,22 163,27 686,3 299,79 203,53 122,06 Risaralda 57,74 60,87 67,29 73,8 60,64 35,41 29,95 Santander 281,1 23 22,58 93,88 650,82 520,92 139,61
Tolima 30,88 31,95 135,05 408,6 297,96 238,18 241,47 Valle del Cauca 73,52 349,59 191,71 264,3 106,79 113,54 62,55
Vaupés 30,7 13,06 6,73 8,44 12,02 4,14 0,79 Otros 34,21 181,85 89,19 48,14 556,8 51 5
Total Nacional 37.018,39 21.812,56 20.823,4 46.514,59 37.738,54 35.783,36 15.683,25
4.2 Impactos de la minería
La minería de oro es una act ividad que t iene diversos impactos en el medio ambiente. No sólo
origina vert imientos contaminados de metales pesados a los cuerpos de agua y t iene un factor de
riesgo para los t rabajadores que se encargan de la amalgamación por efecto de los vapores
mercuriales, sino que además deteriora los suelos, al tener que arrancar capas de cobertura vegetal
y al tener que disponer de residuos estériles. Todos estos problemas cobran verdadera importancia
a la luz de la informalidad en la explotación, aquella que carece de planificación y manejo
ambiental. Una mina abandonada puede ocasionar, por ejemplo, deslizamientos de porciones de
suelo contaminado que van a parar directamente a fuentes de agua que pueden ser usadas por el
hombre.
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29
Por su parte, la minería de aluvión (caracterizada por la extracción de las part ículas de oro que
arrastran las quebradas y los ríos) t iene como consecuencia el arrastre de sedimentos vert idos a
las corrientes de agua en el proceso de extracción, generando impactos como la reducción en el
oxígeno disuelto de las corrientes, obstrucción del flujo del agua y alteración de los ecosistemas
de fauna y flora acuáticos. El ingreso de sustancias ácidas, mercurio, cianuro, entre otras, altera la
calidad del agua y por consiguiente pone en peligro la salud de personas y animales en cercanía a
dichos cuerpos de agua.
La minería de veta (extracción del oro en túneles o socavones o también a cielo abierto en las
montañas, en estado granular) también t iene este impacto. Una vez que los materiales son
transportados a los entables se generan residuos sólidos y líquidos que pueden tener un manejo
inadecuado. Las minas tienen un drenaje ácido que contiene altas concentraciones de metales
pesados que es vert ido directamente a las corrientes cercanas sin ningún t ipo de tratamiento
preliminar, generando los mismos impactos que la minería de aluvión.
En cuanto a emisiones a la atmósfera, ambos t ipos de extracción generan gases indeseados que
contienen ácidos y metales pesados, principalmente mercurio, por efecto de la quema de las
amalgamas al aire libre.
4.3 Proceso de extracción
En la pequeña y mediana minería la extracción de oro t iene un proceso que ut iliza
alternat ivamente mano de obra y tecnologías mecánicas. Las etapas del proceso son: Prospección
y exploración; planeamiento y montaje; explotación; beneficio y t ransformación y finalmente
rehabilitación y cierre de la mina.
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30
En la etapa del beneficio es cuando se ut ilizan técnicas de separación del oro y el resto de
material extraído. Luego de haber separado el material estéril de los gránulos y de tener estos en
tamaños adecuados se procede a la separación química del oro.
El oro presente en los filones o aluviones se alea con el mercurio, logrando así su extracción. El
calentamiento a temperaturas por encima de los 600ºC separa la amalgama: el mercurio se
evapora y el oro queda ya que su punto de ebullición es mucho más alto.
En cuanto a la minería de aluvión, se dejan las pulpas minerales en contacto con el mercurio
sobre canalones. Se sabe que por este método se pierde hasta un 30% del mercurio ut ilizado, el
cual es arrastrado por la pulpa y finalmente se deposita en las corrientes de agua34.
La minería de veta requiere refinar el material mediante trituración antes de la amalgamación,
procesos que a veces se realizan simultáneamente. Un problema asociado a esta práct ica es que en
tanto se muelen los gránulos de material, el mercurio aplicado a la amalgamación es también
“triturado” convirt iéndose en pequeñas gotas volát iles que escapan a la atmósfera y alcanzan los
efluentes, generándose adicionalmente pérdidas de mercurio para el proceso de amalgamación.
Igualmente se puede dar un proceso de separación por medio de la lixiviación con cianuro.
4.4 Manejo del mercurio en la minería del país
De acuerdo a un documento publicado por el Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo
Territorial “Manejo de Mercurio en la Minería de Oro”, existe poca precaución en el uso del
metal por parte de los mineros. Según este documento “…Un buen número de los mineros que
usan mercurio no le temen. Piensan que entre más mercurio agreguen al proceso, más oro se
obtiene y consideran poco importante el uso de elementos de protección personal”. Igualmente,
34 Ministerio de Minas y Energía, UPME (Sin Fecha). La Minería del Oro (Aluvión y Filón), página 5.
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31
tampoco existe un manejo adecuado de los materiales de extracción (mercurio y cianuro) después
de su ut ilización, y en cuanto al proceso se menciona que “Casi todos los mineros en Colombia
separan el oro del mercurio presente en la amalgama por procesos de quema siempre al aire libre
contaminando el aire, generando vapores de mercurio que contaminan el ambiente, excepto
aquellos que usan la retorta”35.
Con respecto a los vert imientos de residuos, estos muchas veces se realizan en cuerpos de agua
sin contemplar t ratamientos o las normas existentes con respecto a las concentraciones de
contaminantes permit idas. Estas práct icas inadecuadas t ienen como consecuencia la introducción
de altas concentraciones de mercurio y cianuro en sistemas hídricos lént icos y lót icos. De esta
manera, y como se explicó anteriormente, el mercurio se convierte en una amenaza ambiental en
tanto que se acumula en los peces o llega a plantas y cult ivos de consumo humano.
4.5 Impacto de la contaminación por mercurio
En el país existen muy pocos estudios que revelen el impacto directo de la minería sobre la
población afectada más directamente. Existen monitoreos de calidad del agua que revelan
concentraciones de mercurio por encima de las que se establecen en la normatividad colombiana
y otros estándares internacionales, lo cual sugiere que existe falta de control y que posiblemente
haya una incidencia sobre la salud humana y el medio ambiente. Estudios por parte de
universidades y ent idades estatales demuestran que existen varios factores vinculados a la minería
descontrolada que afectan la salud de las personas, sin embargo, están limitados por la falta de
presupuesto y son estudios de caso que no están extendidos para todos los municipios que t ienen
act ividad minera.
35 MAVDT (2007), Resultados y experiencias exitosas de proyectos relacionados con el Manejo de Mercurio en la Minería de Oro en Colombia con fines preventivos.
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32
A continuación se presentan algunas de las principales regiones que han desarrollado la minería
como una act ividad de alta productividad, así como los municipios donde están ubicados los
focos de extracción. Igualmente se refieren estudios existentes en cada uno sobre los niveles de
mercurio en agua, en peces o en el organismo, los cuales demuestran en varios casos que existe
una problemática asociada al manejo inapropiado de la minería.
4.5.1 Antioquia
Desde la época de la colonia el territorio que hoy se conoce como Antioquia fue objet ivo de los
colonos como una región que podía explotarse para obtener metales preciosos como el oro y la
plata, principalmente. A finales del siglo XIX los t rabajadores de las minas explotaban oro en los
ríos Cauca, Nechí y Porce36. Dichas zonas son altamente reconocidas como zonas de explotación
aurífera en la actualidad. La región se ha caracterizado por la explotación de veta más que de
aluvión.
Antioquia es en la actualidad un departamento que ut iliza grandes cantidades de mercurio en el
proceso de extracción de oro. La Unidad de Planeación Minero Energét ica calculó la producción
de oro del departamento de Antioquia entre los años 2000 y 2006 en unas 120 toneladas37, y se se
calcula que por cada kg de oro, se liberan entre t res38 y cinco39 kilogramos de mercurio al
ambiente, con lo cual puede suponerse que los vert imientos de mercurio han sido del orden de
decenas de toneladas por cada año en los cuerpos de agua del norte del departamento.
36 Poveda, Gabriel. (1981). Minas y Mineros de Antioquia, páginas 13-27. 37 Ministerio de Minas y Energía, Unidad de Planeación Minero Energética. (2007) Boletín de Minas 2007. 38 Ministerio Del Medio Ambiente, Corponariño, Colciencias. (1997). El mercurio en la minería de oro: hacia una correcta gestión sanitaria y medio ambiental. 39 Cobaleda, Javier. (2005).Caracterización de la percepción y conocimientos de la población, acerca de los problemas de la salud humana relacionados con el uso y manejo de mercurio en la explotación de oro y el consumo de pescado proveniente de las fuentes hídricas, en el municipio de Caucasia-Antioquia.
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33
Los municipios donde hay mayor act ividad minera están ubicados al nordeste del departamento:
Remedios, Amalfi, Segovia, Zaragoza, El Bagre y Caucasia, entre otros.
Ilustración 5. Región minera de Antioquia.
En estos municipios se realiza la extracción, y el material obtenido es llevado a entables
localizados en centros urbanos, donde es manejado con poca precaución y la separación de la
amalgama se realiza en quemas a cielo abierto en el mismo lugar donde se establecen los puntos
de compra, lo cual resulta sumamente nocivo para la población que habita sectores aledaños a
dichos puntos o la que los visita en búsqueda del material.
Los mayores centros de explotación están en Segovia y en Remedios. Existen unas cuantas minas
legales, en propiedad de una Compañía extranjera, pero son pocas en comparación con el total de
minas informales a cargo de trabajadores no vinculados a dicha Compañía. Este hecho agudiza la
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34
problemática de la quema en espacios no adecuados para ello, como las viviendas de los
trabajadores.
La explotación minera del nordeste antioqueño se caracteriza por tener poca planificación en
cuanto a la operación, dada la cantidad de minas informales e ilegales la seguridad laboral es casi
nula para los explotadores, que además carecen de asesoramiento técnico para la explotación de
los minerales y de asesoramiento para la seguridad. Para el proceso de beneficio, del total de
minas registradas, son escasas las que ut ilizan la retorta en la recuperación de materiales40.
El proceso de extracción y recuperación de oro de la región ha originado vert imientos líquidos
con concentraciones de mercurio total entre 552 ppm y 6.118 ppm y sólidos con concentraciones
entre 1.065 ppm y 5.015 ppm, los cuales son, a todas luces, muy elevados y demuestran un alto
grado de contaminación41.
En el municipio de Segovia, en el nordeste del departamento, se realizó una campaña de muestreo
a finales del año 2005, basada en encuestas, exámenes médicos y muestras de cabello a un grupo
de 860 personas para determinar los niveles de mercurio.
Antecedentes:
En Segovia se ha desarrollado principalmente la minería de filón o de veta, aunque también existe
la de aluvión. La explotación se ha tecnificado, pero la minería informal que ut iliza mecanismos
atrasados persiste en gran medida. Como se había mencionado, el material extraído es llevado a
los entables en zonas urbanas en donde se realizan quemas a cielo abierto una vez se t iene el
material preseleccionado. Los lodos provenientes del aluvión y el material granular proveniente
40 MAVDT (2007). Resultados y experiencias exitosas de proyectos relacionados con el Manejo de Mercurio en la Minería de Oro en Colombia con fines preventivos. 41 UPME (2006). Formulación de una Iniciativa de Producción más Limpia para el Sector de los Metales Preciosos en Pequeña Escala en Colombia, página 83.
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35
de las vetas se vierten o arrastran a las laderas o a los cuerpos de agua cercanos. Las amalgamas
con mercurio se realizan especialmente por parte de los trabajadores informales, quienes trabajan
en entables que permiten la conservación de los vapores mercuriales en el recinto de trabajo.
Los abundantes recursos hídricos con los que cuenta la región incluyen quebradas, ríos y arroyos.
El río Bagre, eje hidrográfico del municipio, y el río Pocuné, reciben la mayor parte de las
descargas de las act ividades que se realizan en la zona urbana y otras zonas cercanas42. Las
cuencas de estos ríos y quebradas que abastecen de agua para consumo humano a las poblaciones
de Segovia y Remedios están altamente deterioradas, lo cual ha disminuido la actividad pesquera
en la región43. En cuanto al consumo de pescado, no es muy habitual debido al costo que
representa, pero sí se realiza y el pescado viene del Bajo Cauca u otros departamentos. Los
cult ivos propios son de especies de cachama y t ilapia44.
Resultados:
La muestra de 860 personas consist ió en 470 hombres (54,7%) y 390 mujeres (45,3%) con un
promedio de edad de 37,4 años; la cual se corresponde adecuadamente con las característ icas de
población del municipio. De las 860 personas, 853 viven en la zona urbana de Segovia, y de
estos un 75% ha vivido allí por lo menos hace 38 años, razón por la cual se consideran expuestos
crónicamente al vapor de mercurio. Se escogieron personas con potencial de alta exposición (no
vinculadas al oficio de la minería) y personas expuestas en forma directa.
Entre estas personas, un 15,2% presentó niveles de mercurio total por encima de 5 µg/g en el
cabello, adjudicados a la exposición a las emisiones no controladas de vapores y a los residuos
42 UPME, UNAL (2005). Alteraciones neurocomportamentales en personas expuestas a mercurio en la actividad minera del oro en el municipio de Segovia (Antioquia), página 1. 43 Íbid, página 2. 44 Íbid, página 29.
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líquidos en los entables que sirven también como puntos de compraventa de oro. Esta exposición
se da principalmente en trabajadores del entable, y las vías más relevantes en este t ipo de
población es la inhalación del vapor y la absorción dérmica del material (aún cuando el
porcentaje de retención por esta vía no es realmente significat ivo). Se menciona igualmente que
“La producción limpia no es tenida en cuenta en la región durante el proceso artesanal, esta
situación genera la continua contaminación ambiental. La quema de la amalgama en entables,
viviendas y compras de oro, está afectando el estado de salud de los t rabajadores pero además de
las personas expuestas de forma indirecta en toda la zona urbana del municipio de Segovia lo cual
es muy importante solucionar.”45 De estas personas con altos niveles de mercurio total se
extrajeron los resultados relacionales de neurocomportamiento, y sólo a esta fracción de la
muestra le fue evaluado el nivel de metil mercurio adicionalmente, dado que no había suficientes
recursos económicos para hacerlo a todas las muestras.
Los hallazgos muestran que la prevalencia de niveles elevados de mercurio en el cabello es mayor
en hombres que en mujeres e igual para todos los grupos de edad y para todos los habitantes del
casco urbano viviendo cerca y no tan cerca de los entables. Algunas ocupaciones están en mayor
medida relacionadas con niveles de mercurio, y estas act ividades son naturalmente las que
requieren exposición directa con el metal.
Por otra parte, el consumo de pescado fue evaluado como una variable de riesgo a la salud para
las personas que consumen especies provenientes de cuerpos de agua contaminados. Las
encuestas relevan que el 54,4% de las personas entrevistadas consumen pescado de río; 23,6 % no
consumen pescado y 19% de cult ivos. Solamente un 3% de la población encuestada consume
pescado de mar debido a su costo. Se establece entonces que el poder adquisit ivo es un factor
45 Íbid, páginas 70-71.
IAMB 200810 04
37
determinante para el consumo de pescado de ríos y otras fuentes cercanas que no eleven su costo.
Sin embargo, el consumo es muy esporádico; la mayor parte de las personas comen pescado
menos de una vez por semana (67,1%), y sólo 1,4% de ellas lo hace más de 4 veces a la semana.
De acuerdo a la muestra escogida, no se pudo establecer una relación estadíst icamente válida.
En cuanto al problema de salud presente en Segovia, el grupo de invest igación determinó que en
efecto, el mercurio presenta efectos de neurotoxicidad en la población expuesta crónicamente a
sus compuestos, y que esta exposición elevada es el resultado de la falta de precaución y manejo
adecuado de los mismos.
Luego de evaluar la correlación entre los diferentes síntomas evaluados y los elevados niveles de
mercurio, t res de ellos resultan inequívocamente correlacionados: irritación en nariz y garganta,
náuseas y presencia de temblor en los labios. A su vez, la aplicación de un cuest ionario sobre 16
alteraciones en el comportamiento neurológico se relacionó exitosamente con la presencia del
metal. Se afirma que “…La presentación de estos síntomas en poblaciones de riesgo hace
sospechar la presencia de intoxicación crónica por mercurio46”. Las preguntas que se incluyen en
el cuest ionario indagan sobre la prevalencia de los siguientes síntomas: pérdida de la memoria,
pérdida de la concentración, depresión, cambios en el estado de ánimo, falta de motivación,
cansancio, presión en el pecho, pérdida de la coordinación, adormecimiento de partes del cuerpo,
temblores, atrofia muscular en brazos y piernas, pérdida de la sensibilidad en brazos y piernas y
dificultad para conciliar el sueño.
De esta manera se diseñó un cuest ionario para poner en alerta al personal médico sobre la posible
presencia de intoxicación con mercurio. Se mencionan dos factores importantes a la hora de
diagnosticar este t ipo de intoxicaciones: Por una parte, la deficiente capacitación del personal
46 Íbid, página 69.
IAMB 200810 04
38
médico para el diagnóst ico y la falta de accesibilidad por parte de la población que no cuenta con
los recursos para acudir a los servicios médicos y no está afiliada a la seguridad social.
Este estudio revela que adicionalmente de evaluarse niveles de mercurio en poblaciones
expuestas crónicamente y hallar relación con síntomas neurológicos, es importante también
evaluar la conciencia de los t rabajadores que ignoran los efectos sobre la salud de manejar el
mercurio y otras sustancias inapropiadamente, así como el conocimiento del problema y su
diagnóstico por parte del personal médico de los centros de salud de los municipios donde hay
focos de esta act ividad.
4.5.2 Bolívar
La act ividad minera en el sur de Bolívar comenzó como pequeños proyectos de minería de veta
artesanal en el sector de Santa Rosa, ya a mediados del siglo XX. En esta región del país la
minería es completamente artesanal, o a muy pequeña escala, y es ejercida por miles de
trabajadores que realizan extracciones subterráneas ubicadas en su mayoría en la Serranía de San
Lucas y de aluvión en el piedemonte47. Los focos de extracción están localizados en el sur del
departamento: Santa Rosa del Sur, Montecristo, Tiquisio, San Mart ín de Loba, Río Viejo, Arenal,
Morales, Simit í, entre otros. T ambién en el departamento de Bolívar está ubicada una parte de la
región de la Mojana comprendida entre Magangué y Achí al occidente del departamento.
47 Íbid. Página 59.
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39
Ilustración 6. Región minera del departamento de Bolívar
La situación minera de Bolívar ha generado grandes impactos ambientales negativos por el hecho
de ser una minería artesanal o pequeña, que como se sabe no t iene planeación ni ut iliza las
mejores técnicas de extracción. Sumada con la minería del nordeste ant ioqueño, la minería de la
serranía en el sur de Bolívar y en el Bajo Cauca han generado un grave problema de
contaminación en la región de la Mojana.
Los impactos en la salud de los mineros de la región de Bolívar son indudables: “Los pobladores
de las zonas mineras t ienen en general deficiente estado de salud acentuado por los efectos
nocivos de los compuestos químicos empleados en la obtención del oro (acumulación en tejidos,
abortos, malformaciones congénitas, mutaciones, afecciones en la piel y otros)…”48Asimismo, el
impacto sobre los cuerpos de agua es fuerte, y así lo revelan los estudios y monitoreos que se han
realizado en los cuerpos de agua de la región.
48 Fonseca, et al. (2005). Cultivos de uso ilícito en el Sur de Bolívar. Página 55.
IAMB 200810 04
40
Un estudio sobre los niveles de mercurio en el cabello de personas que habitan en municipios
mineros del departamento fue desarrollado en el año 1995, recolectando información sobre los
hábitos alimenticios, ocupación y síntomas presentados que pudieran estar asociados a la
contaminación por compuestos del mercurio.
La muestra se tomó en los municipios de Achí, Río Viejo, San Mart ín de Loba, Barranco de Loba
y Pinillos, y adicionalmente un grupo de personas de la ciudad de Cartagena (al norte del
departamento) fue tomado como control. En total la muestra consist ió en 246 personas, de las
cuales 157 eran mineros; 23 pescadores; 39 eran habitantes de dichos municipios y los restantes
27 habitantes de Cartagena.
Resultados
Los resultados de acuerdo a la concentración de mercurio total en el cabello manifiestan una clara
relación de esta con la act ividad minera y el vert imiento de material residual a las corrientes de
agua. De esta manera, el grupo de personas dedicadas a la pesca fue el más afectado,
encontrándose en las muestras de cabello concentraciones hasta de 29,2 µg/g con una media de
5,32 µg/g.
Tabla 3. Resultados de concentraciones de mercurio en cabello para la muestra. Fuente:
Grupo Número de la muestra
Promedio Desviación estándar Valor
máximo Valor
mínimo (µg de mercurio/g)
Mineros 157 2,83 3,27 28,30 0,11 Pescadores 23 5,32 5,79 29,20 0,40
Otros 39 2,40 2,02 10,30 0,31 Control 27 1,33 0,74 3,00 0,30
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41
Ahora bien, la evaluación de una serie de síntomas propios de la intoxicación con mercurio arrojó
resultados similares, siendo esta vez los mineros los más afectados por estos. Síntomas como
temblores en las manos, náuseas e irritabilidad, no t ienen una incidencia relevante en el grupo
control mientras que se presentan en porcentajes importantes en mineros y en pescadores, y en
menor medida en los habitantes de los municipios afectados.
Tabla 4. Frecuencia de síntomas asociados a la intoxicación mercurial. Adaptado de:
Síntoma Grupos de población
(Frecuencia en porcentaje ) Mineros Pescadores Otros Control
Cefalea 52,2 43,5 46,2 18,5 Pérdida de memoria 49,0 43,5 43,6 22,2
Gusto metálico 42,0 43,5 20,5 7,4 Irritabilidad 42,0 30,4 17,9 3,7
Temblores en las manos 35,0 30,4 20,5 0,0
Náuseas 39,5 26,1 20,5 0,0
En cuanto a los hábitos de consumo de pescado, el estudio permitió comprobar que al aumento de
la frecuencia de consumo de pescado, aumenta también la concentración de mercurio en el
cabello. De esta manera, la más alta frecuencia de consumo (diario) encontrada en el grupo de
pescadores, coincidía con el valor más alto de mercurio en el cabello (29,2 µg/g).
Igualmente, se han hecho estudios más recientes que han evaluado niveles de mercurio en el
agua, en sedimentos, plancton, peces y en el organismo humano. Por ejemplo, en el municipio de
Montecristo (región de la Mojana) fueron analizadas diferentes muestras con el fin de evaluar
estas concentraciones. Se tomaron muestras de agua de la Ciénaga Grande en tres lugares de
muestreo, así como muestras de sedimentos y de fitoplancton y zooplancton. Los peces fueron
recolectados por pescadores de la región y se escogieron aquellos de mayor importancia
económicamente. Finalmente las muestras de cabello se tomaron de los pescadores y sus familias
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42
pertenecientes a la comunidad de La Raya. Estas muestras fueron tomadas entre el año 2003 y
2006, incluyendo temporadas seca y lluviosa.
Resultados
Tabla 5. Concentraciones de mercurio obtenidas de las diferentes muestras evaluadas. Basado en:
Tipo de muestra Rango de concentración Media Unidades
Agua 0,16 – 0,46 0,33 ± 0,03 µg/l Sedimentos 0,49 – 1,08 0,71 ± 0,03 µg/l
Part ículas en suspensión 1,077 – 1,319 1,20 µg/g peso seco Fitoplancton 0,459 – 0,573 0,52 µg/g peso seco Zooplancton 0,823 – 0,966 0,94 µg/g peso seco
Peces carnívoros - 0,534 ± 0,292 µg/g peso fresco Peces no carnívoros - 0,157 ± 0,067 µg/g peso fresco
Cabello humano 4,7 – 5,9 5,3 µg/g
La concentración encontrada se compara con la que existiría en cuerpos de agua contaminados de
manera severa por la cercanía a fuentes emisoras de mercurio. De los sit ios evaluados, el que
presenta los mayores valores de mercurio comparat ivamente, es el más cercano a la zona de alto
impacto de vertimientos y emisiones de mercurio. Los resultados encontrados evidencian el
proceso de bioacumulación que se había mencionado anteriormente, donde, a medida que se
avanza en la cadena trófica se aumenta la concentración presente en el organismo. Siendo así, el
consumo de pescado proveniente de cuerpos de agua cercanos a la act ividad minera es un peligro
para los pescadores y para otros consumidores de la región. Dado que allí se encuentra una fuente
de alimentación para la gente del sector, se hace necesaria la intervención en cuanto a producción
más limpia y educación a los grupos implicados.
4.5.3 Córdoba
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43
La zona minera de Córdoba está ubicada en el sureste del departamento, limitando con el norte de
Antioquia, y t iene su foco de extracción en cercanía al municipio de Puerto Libertador.
Igualmente aquí se realiza la quema para la separación, y se limpia primero con ácido nítrico. Los
residuos son arrojados finalmente a las fuentes hídricas49. En los municipios de San Marcos y
Ayapel se encuentra otra parte de la región de la Mojana.
Ilustración 7. Región minera de Córdoba
En el municipio de Puerto Libertador se da principalmente la minería de veta en socavones, y se
extrae también superficialmente. Los mecanismos de trituración son principalmente manuales,
pero también se da el uso de máquinas t rituradoras en menor medida. Del proceso de beneficio se
obtienen residuos en forma de agua y lodos que se vierten a las quebradas, así como colas, arenas
y los residuos del lavado con ácido nítrico que van a parar también a las fuentes hídricas. La
quema de las amalgamas se realiza también al aire libre, emit iendo vapores de mercurio al
ambiente. Estos vapores se condensan y llegan hasta las quebradas Valdés y El Salado, t ributarias
49 MAVDT (2007), Resultados y experiencias exitosas de proyectos relacionados con el Manejo de Mercurio en la Minería de Oro en Colombia con fines preventivos.
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44
del río San Pedro, de donde se obtiene el agua para el acueducto del municipio. Se calcula que la
recuperación de oro dadas las condiciones del proceso en la zona son inferiores al 50%50.
Con el fin de evaluar la situación de la minería y sus impactos en la región, se han realizado
estudios en la región de Puerto Libertador y en Ayapel. En el caso de Puerto Libertador, se
tomaron muestras de agua y de sedimentos antes y después de los vert imientos mineros.
Resultados
Tabla 6. Concentraciones de mercurio en agua y sedimentos en las estaciones de medición (Córdoba). Fuente: Resultados y experiencias exitosas de proyectos relacionados con el Manejo de Mercurio en la Minería de Oro en Colombia con fines preventivos, Estudio de caso, Córdoba. MAVDT (2007).
Estación Hg Agua ((µg/g)ml) Hg Sedimentos (µg/g) peso seco E1. Pica Pica ND 0,126 E2. San Juan ND 0,167 E3. Q. Valdez 0,001 0,378
E4. Puente San José 0,0004 0,238 E5. Puente Pica Pica ND 0,160 E6. Arriba Carbones ND 0,141 E7. Abajo Carbones 0,0004 0,198
E8. Puerto Libertador ND 0,148 *ND: No Detectado
Como puede observarse de la tabla, el mercurio total en las estaciones muestreadas no excede las
concentraciones máximas permitidas de acuerdo a la normatividad colombiana para el agua que
se dest ina para el consumo humano. Sin embargo, las concentraciones en los sedimentos son
bastante superiores. En las muestras de pescado evaluadas se encontraron concentraciones hasta
de 0,635 µg/g peso húmedo.
Por otro lado, en la Ciénaga de Ayapel, se realizaron cinco muestreos entre julio de 2004 y julio
de 2005. En esta campaña se recolectaron muestras de pescado que hacen parte de las especies
más importantes económicamente y también las más abundantes en la Ciénaga. El pescado
50 Íbid, página 50.
IAMB 200810 04
45
proveniente de este lugar se consume principalmente en el municipio de Ayapel, pero también se
comercializa en sectores vecinos e incluso llega a ciudades como Medellín y Bogotá51.
Resultados
De acuerdo a los muestreos realizados, para la totalidad de peces (tanto carnívoros como no
carnívoros) hubo un promedio de mercurio de 0,288 ± 0,145 mg/kg de peso fresco. El promedio
para las especies carnívoras fue de 0,346 ± 0,133 mg/kg de peso fresco, notablemente superior al
de las especies no carnívoras; 0,184 ± 0,102 mg/kg de peso fresco.
Tabla 7. Concentraciones de mercurio en especies de peces. Fuente: Hallazgo de mercurio en peces de la ciénaga de Ayapel. Marrugo et al (2007).
Nombre Hábito
Rango de concentración (mg/kg) peso
fresco
Media Tamaño de muestra %
Bagre pintao Carnívoro 0,218 – 0,581 0,423 ± 0,113 18 9,7 Blanquillo Carnívoro 0,268 – 0,435 0,330 ± 0,070 5 2,7
Mojarra Carnívoro 0,250 – 0,575 0,401 ± 0,109 17 9,2 Moncholo Carnívoro 0,123 – 0,583 0,315 ± 0,110 35 18,9
Pacora Carnívoro 0,119 – 0,650 0,277 ± 0,132 35 18,9 Doncella Carnívoro 0,267 – 0,602 0,504 ± 0,103 8 4,3
Bocachico No Carnívoro 0,035 – 0,234 0,130 ± 0,056 39 21,2 Liseta No Carnívoro 0,096 – 0,483 0,261 ± 0,104 28 15,1
Dentro de los hallazgos del estudio que confirman las hipótesis se encuentra el incremento de las
concentraciones de mercurio en los peces en la temporada seca y la concentración mayor en
especies carnívoras que en no carnívoras. En la mayoría de los casos las concentraciones llegan a
ser verdaderamente altas, tanto así que superan la concentración recomendada por la WHO de 0,2
mg/kg para poblaciones sensibles, y en algunos casos incluso la concentración para la población
en general de 0,5 mg/kg, en especies carnívoras. En general, los rangos de las concentraciones se
51 Marrugo et al (2007), Hallazgo de mercurio en peces de la ciénaga de Ayapel. Página 881.
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46
comportan de acuerdo a lo esperado para el nivel de contaminación por la minería de la región y
son similares a los encontrados en otras regiones del país.
4.5.4 Caldas
La región minera de Caldas está localizada en el occidente del departamento. Por una parte, en el
suroccidente se ubican Manizales y Villamaría, los cuales ut ilizan mercurio y queman la
amalgama al aire libre. Esta práctica genera vert imientos en una quebrada que es ut ilizada por una
industria y también como fuente de agua del acueducto de Manizales. El almacenamiento de los
residuos del proceso se almacena sin ningún t ipo de protección. Al noroccidente, en el municipio
de Marmato, se sabe que no se utiliza mercurio; únicamente cianuro52.
Ilustración 8. Región minera de Caldas.
En el departamento de Caldas se han hecho muy pocos estudios para evaluar la calidad del
recurso hídrico en los cuerpos de agua de la región. En otros aspectos no se han realizado estudios
que revelen alguna situación como la descrita en los departamentos anteriores.
52 MAVDT (2007), Resultados y experiencias exitosas de proyectos relacionados con el Manejo de Mercurio en la Minería de Oro en Colombia con fines preventivos.
IAMB 200810 04
47
En el año 1996 se realizó un estudio con el fin de determinar el impacto ambiental y los procesos
geoquímicos resultantes de la minería de oro y el procesamiento del material en el municipio de
Marmato, evaluando corrientes cercanas a la act ividad minera y otras más alejadas. Se
encontraron varios metales pesados en los sedimentos y las part ículas suspendidas en las
corrientes de agua del área de Marmato. Las concentraciones de mercurio oscilaron entre 95 y
370 µg/l53, concentraciones que superan ampliamente las mediciones reportadas en Bolívar,
siendo estas demasiado altas. Las mayores de estas fueron encontradas en la corriente de
Marmato, en tanto que las más bajas se encontraron en las corrientes de Arquía y Chirapotó.
4.5.5 Santander
En Santander, la zona minera está establecida principalmente en la región norte, en los
municipios de California y Vetas principalmente, pero también hay minas en cercanías a Suratá.
Como en otros lugares, se sabe que gran parte del mercurio utilizado en la amalgamación es
vert ido a los cuerpos hídricos de la región: quebradas y ríos, los cuales llegan al río Suratá que
abastece a una de las plantas del acueducto Metropolitano de Bucaramanga54. También existen
centenas de mineros informales que se encargan de la molienda, almagamación y cianuración en
sus propias viviendas o cerca de ellas, labor que realizan varias veces por semana.
La act ividad minera de estos municipios descarga alrededor de una tonelada de mercurio anual al
río Suratá55, lo cual es el resultado de la poca select ividad a la hora de preparar el material para
amalgamar, añadir demasiado mercurio al proceso y amalgamar al mismo t iempo que se realiza la
molienda, entre otros.
53 Prieto et al (1996). Página 263. 54 Contreras, Rodol fo y Pinzón, Juan M anuel. (2001). Propuesta de Manejo Integrado del M ercurio en el Proceso de Amalgamación en Vet as y California (Departam ento de Santander, Colombia), página 1. 55 Ministerio de Minas y Energí a, Unidad de Planeación Minero Energética. (Sin fecha.) Talleres con Comunidades e Instituciones Estat ales y Privadas en Distritos Mineros, Di ferentes a Capitales En Nariño, Santander, Choco, Sur de Bolívar y Antioquia. Página 104.
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48
Ilustración 9. Región minera de Santander.
La CDMB (Corporación autónoma regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga) se
encarga del monitoreo de la calidad del agua en numerosas corrientes de la región, incluyendo el
área de influencia de la zona minera en el río Suratá, el río Vetas y la quebrada La Baja, estos
últ imos son ríos t ributarios del primero. En esta zona se t ienen seis estaciones de monitoreo, dos
de las cuales presentan niveles de mercurio que superan las concentraciones admisibles
establecidas por la normatividad colombiana. Esta evaluación ha permit ido el desarrollo del
Proyecto Río Suratá, con el fin de reducir la contaminación originada por la pequeña minería de
los municipios de Vetas y California principalmente. De acuerdo al diagnóst ico realizado por la
CDMB y otras ent idades, los altos vert imientos anuales por la actividad minera han contaminado
las corrientes cercanas a los municipios mineros hasta sobrepasar las normas de concentración de
mercurio.
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49
Gráfica 1. Fuente: Monitoreo de la calidad del agua del río Suratá en la zona minera de Vetas y California.
Como se mencionó anteriormente, el Decreto 1594 reglamenta una concentración de 0,002 mg/l ó
2µg/l para la dest inación a consumo humano o doméstico, lo cual es superado ampliamente en la
estación LB-01 y la estación RV-02. Estas estaciones están ubicadas antes de la descarga al río
Suratá, en cercanía a los distritos mineros de Vetas (RV-02) y California (LB-01). De acuerdo al
comportamiento anual del mercurio en las dos estaciones donde se superan los valores
admisibles, puede observarse que la mayor parte del t iempo se ha estado superando la
concentración máxima. Igualmente puede verse que no existe un patrón de comportamiento
definido en las concentraciones del metal en las estaciones mostradas.
El proyecto, que aún se desarrolla en esta región, busca disminuir el consumo de mercurio y
aumentar la productividad del proceso de manera que se recupere un mayor porcentaje de oro con
menor cantidad de mercurio y de esta manera las emisiones sean menores.
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50
Como bien lo evidencian los estudios en los diferentes departamentos mineros del país, los altos
vert imientos en las corrientes y cuerpos de agua como ciénagas generan un problema de salud
pública. Esto se puede observar en las encuestas realizadas a los pobladores, pescadores y
mineros, siendo notoria la afectación en el sistema neurológico por los consecuentes síntomas
presentados que demuestran la relación entre la act ividad minera y la alteración de la salud.
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51
5. ES TADO DE LA VIGILANCIA EN SALUD PÚBLICA CON RESPECTO A LA
INTO XICACIÓN PO R MERCURIO
El panorama expuesto anteriormente con respecto a las emisiones y vertimientos de mercurio al
ambiente y a los cuerpos de agua de donde se obtienen peces como fuente de proteína para los
habitantes de las regiones afectadas, es un indicio innegable de que un problema de salud pública
se está presentando en varios de los lugares con alta producción de oro. Las dimensiones de este
problema, sin embargo, no están del todo establecidas. El carácter aislado, por decirlo de alguna
manera, de los estudios que se han realizado hasta el momento en algunos lugares, no permite
extrapolar esta situación a todas las regiones en donde existe explotación minera, dada la
heterogeneidad en las condiciones y el tamaño de la explotación en cada departamento o sector,
aún cuando por regla general en lo relat ivo a técnica y educación no existen las mejores
circunstancias.
Las campañas que se adelantan en varios municipios en pro de mejorar el porcentaje de
recuperación de oro (como el proyecto que se adelanta en el departamento de Santander con el fin
de mejorar la calidad del río Suratá), pueden incluir componentes educativas tanto para los
trabajadores de las minas como para los trabajadores del sector de la salud, lo cual es importante,
y es un paso hacia la reducción de las condiciones ambientales desfavorables para la salud
humana. Pese a esto, la inclusión de la tecnificación y la conciencia sobre la peligrosidad del
mercurio es un proceso que no se da de la noche a la mañana. Por ello cabe esperar que a la fecha
y en un t iempo a mediano plazo, por lo menos, prevalezcan condiciones de salud como las
mencionadas en el estudio Alteraciones Neurocomportamentales en Personas Expuestas a
IAMB 200810 04
52
Mercurio en la Actividad Minera del Oro en el municipio de Segovia (Antioquia) para el año
2005.
Como se recordará, en dicho estudio se relacionó exitosamente la ocurrencia de algunos síntomas
neuropsiquíatricos con los valores más altos de mercurio en el cabello. En especial, se determinó
que la presencia de irritación en nariz y garganta, náuseas y presencia de temblor en los labios
hacía sospechar la intoxicación crónica por mercurio.
Igualmente, una de las conclusiones encontradas reza de la siguiente manera: “Hay deficiente
capacitación por parte de las facultades de Ciencias de la Salud a los profesionales de la salud
respecto a los elementos diagnósticos y de tratamiento para la intoxicación mercurial y para otros
riesgos químicos encontrados en Segovia. Además de la dificultad para acceder a los servicios de
salud por parte de las poblaciones menos favorecidas no afiliadas a sistemas de seguridad social
lo que dificulta realizar el diagnóst ico de los casos de intoxicación mercurial y de otros problemas
de salud importantes de atender en el nordeste ant ioqueño.”56 Esto ilustra de manera clara que en
parte, la problemática de la intoxicación por compuestos mercuriales carece de diagnóst ico como
resultado de la disponibilidad limitada del servicio de salud en algunos lugares, así como también
hay una carencia de elementos de diagnóst ico y t ratamiento para estas intoxicaciones. Esta
afirmación, aún cuando está delimitada para el nordeste ant ioqueño puede representar la realidad
de más de una de las regiones mineras del país.
En el país se cuenta con el Inst ituto Nacional de Salud, ent idad encargada de la vigilancia
epidemiológica y de salud pública así como de los factores de riesgo para la población en todo el
territorio nacional. El INS viene desarrollando desde hace algunos años una serie de estadíst icas
56Ministerio de Minas y Energía, Unidad de Planeación Minero Energética; Universidad Nacional de Colombia.(2006). Alteraciones neurocomportal es en personas expuestas a mercurio en la actividad minera del oro en el municipio de Segovia (Antioquia) 2005. Página 70.
IAMB 200810 04
53
que forman parte del programa de vigilancia rutinaria de salud pública con respecto a los casos
sospechosos, probables y confirmados en cada uno de los eventos de salud pública. Entre ellos se
incluye la intoxicación por metales pesados, cuyos reportes en los primeros años de vigilancia
eran escasos, o simplemente no había ninguno. Al iniciar el año 2003 se empiezan a reportar
casos aislados en el departamento de Antioquia, y en los años posteriores aparecen algunos otros
en otras regiones del país como Boyacá; Barranquilla y Arauca. Ciertamente, una gran parte del
problema de intoxicación por metales pesados que se reportaba para el Inst ituto pertenecía al
departamento antioqueño57.
Para el año 2003, el 100% de los reportes pertenecía a Antioquia; en el 2004 casi el 98%; en el
2005 nuevamente el 100%; en el 2006 casi el 80% y finalmente en el año 2007 este porcentaje
desciende al 18% del total de intoxicaciones reportadas, que en las estadíst icas de estos años
continúan siendo escasas (el número mayor se reporta en el año 2007 y son 61 intoxicaciones).
Para el año 2007, por ejemplo, el departamento de Caldas, que hasta el momento nunca había
presentado ningún reporte de este t ipo, presenta 16 casos que corresponden al 26,2% de los
reportados en total. En lo que lleva del presente año (2008) se han reportado 8 casos de
intoxicación por metales pesados en Caldas hasta la semana veint it rés. Al analizar más en
profundidad los casos de este t ipo de intoxicación en lo que lleva del año los resultados no dejan
de ser curiosos.
La totalidad de los casos de intoxicación por metales pesados del departamento de Caldas se da
en el municipio de Marmato. En este municipio, como se había mencionado anteriormente, no se
ut iliza mercurio en la minería, únicamente cianuro. Sin embargo, la causa de la intoxicación es
reportada como “gases de mina”. En este aspecto es importante aclarar que algunos de los
57 Instituto Nacional de Salud (2000 – 2008).Estadísticas SISTEMA DE VIGILANCIA EN SALUD PÚBLICA – SIVIGILA.
IAMB 200810 04
54
productos a los que se adjudican intoxicaciones por metales pesados incluyen “clorox”, pintura de
agua, gasolina, y cloro gaseoso; siendo estos o bien poco específicos o incorrectos del todo.
Al entrevistar a uno de los mineros afectados por los “gases de mina” reportados, este afirma no
haber presentado ningún síntoma relevante, en el momento de su consulta temía que su salud
pudiera estar siendo afectada al igual que la de varios de sus compañeros de trabajo, quienes
padecían de severos problemas renales. Después de su consulta afirma no haber recibido ningún
tipo de tratamiento, y no haber presentado ningún síntoma negativo meses después de e sta, lo
cual lo llevó a concluir que realmente no presentaba un problema de salud ocupacional58.
El escenario expuesto anteriormente revela que el estado de información sobre la intoxicación por
mercurio y en general por metales pesados presenta fallas severas que no permiten evaluar
adecuadamente la situación epidemiológica en este ámbito. De esta manera, cabe esperar que los
reportes realizados sean poco precisos y carezcan de información contundente que permita
diagnosticar el impacto sobre la salud pública que t ienen diversas act ividades, incluida la minería
aurífera.
Igualmente se hace necesario evaluar la ocurrencia de los síntomas asociados a la intoxicación
por mercurio, teniendo en cuenta que algunos no son exclusivos de esta dolencia y por ende su
ocurrencia no es un indicat ivo de la presencia de una intoxicación mercurial. Algunos, sin
embargo, han sido relacionados con este t ipo de intoxicación y con niveles elevados de mercurio
en el organismo, y en una región minera suelen asociarse generalmente con el mercurio. A
continuación se expondrán los resultados de una serie de encuestas realizadas al personal médico
(jefes de enfermeros, encargados de historiales clínicos y estadíst icos, y coordinadores médicos)
58 Parra, César. Entrevista personal. (Junio de 2008)
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55
de los hospitales y centros médicos de varios municipios en los departamentos nombrados
anteriormente donde existe alta act ividad minera.
5.1 Encuestas sobre la incidencia de síntomas asociados a intoxicación mercurial , frecuencia
de los mismos y elementos de diagnóstico
Las encuestas se realizaron en la semana del 9 al 13 de junio de 2008. Se encuestaron en total
trece centros de salud y/o hospitales ubicados en regiones mineras. En el departamento de
Antioquia se encuestó el Hospital El Carmen de Amalfi, el Hospital San Juan de Dios de Segovia,
el Hospital César Uribe Piedrahíta de Caucasia, el Hospital San Rafael de Zaragoza y el Hospital
San Vicente de Paúl de Remedios. En el departamento de Bolívar se encuestó el Hospital Manuel
Élkin Patarrollo de Santa Rosa del Sur. En el departamento de Córdoba se encuestó el Hospital
San José de T ierralta de Puerto Libertador. En el departamento de Caldas se encuestó el Centro
de Salud San Antonio de Marmato, el Centro de Salud San Lorenzo de Supía y el Centro de Salud
San Antonio de Villamaría. Finalmente en el departamento de Santander se encuestó el Hospital
San Sebast ián de Suratá, el Centro de Salud San Antonio de California y el Centro de Salud
Nuestra Señora del Carmen de Vetas.
De los síntomas documentados anteriormente como propios de la intoxicación por mercurio en
sus diferentes estados, se realizó una encuesta consistente en una serie de preguntas sobre la
incidencia de dichos síntomas, divididos en cuadros sintomáticos de acuerdo al estado del
mercurio y los síntomas part iculares que se suelen presentar en cada uno. La pregunta abordaba la
presentación de los síntomas independientemente con el fin de establecer los síntomas de mayor
incidencia en los centros de salud y hospitales de los municipios mineros, pero también se
indagaba sobre la incidencia de varios de estos en un mismo paciente. A continuación se muestra
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la ocurrencia de los síntomas de acuerdo al cuadro sintomático correspondiente, como porcentaje
de acuerdo al total de municipios encuestados.
Mercurio elemental
Tabla 8. Incidencia de síntomas asociados a la intoxicación con mercurio elemental
Síntoma Porcentaje de ocurrencia
Temblores 53,8 Irritabilidad 84,6 Nerviosismo 76,9
Insomnio 69,2 Debilidad 61,5
Atrofia muscular 46,1 Espasmos 92,3
Dolor de cabeza 100,0 Alteración de la sensibilidad 15,4
Cambios en las respuestas nerviosas 23,1 Dificultad en la concentración 46,1
Fiebre 92,3 Escalofríos 76,9
Fat iga 61,5 Fallo respiratorio* 61,5
*El fallo respiratorio se evaluó como posterior aparición después de que el paciente reportara haber presentado uno o varios de los síntomas anteriores.
Tabla 9. Incidencia de síntomas asociados a la intoxicación con mercurio elemental (Eretismo mercurial).
Síntoma Porcentaje de ocurrencia
Depresión 61,5 Pérdida del autocontrol 23,1
Retraimiento 30,8 Crisis emocional 69,2
Fobias 23,1
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Desmotivación 46,1 Irritabilidad 53,8
Mercurio Inorgánico
Tabla 10. Incidencia de síntomas asociados a la intox icación con mercurio inorgánico
Síntoma Porcentaje de ocurrencia
Malestar en la boca 38,5 Dolor de garganta 84,6
Náuseas 84,6 Vómitos 76,9
Dolor abdominal 84,6 Cansancio 69,2 Gingivitis* 69,2
Estomatitis* 61,5 Exceso de salivación* 7,7
Fallo renal* 76,9
*Estos síntomas se evaluaron como posterior aparición después de que el paciente reportara haber presentado uno o varios de los síntomas anteriores.
Mercurio Orgánico
Tabla 11. Incidencia de síntomas asociados a la intox icación con mercurio orgánico
Síntoma Porcentaje de ocurrencia
Pérdida de sensibilidad en los dedos de la mano 7,7
Pérdida de las sensaciones 0,0 Variación en el estado de ánimo 69,2
Pérdida de la visión 38,5 Pérdida de la coordinación oral 7,7
Pérdida de la coordinación escrita 7,7
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Tabla 12. Incidencia de síntomas asociados a la intox icación con mercurio orgánico en niños
Síntoma Porcentaje de ocurrencia
Déficit de memoria 53,8 Déficit de atención 61,5 Déficit cognit ivo 38,5
Déficit en el lenguaje 53,8 Déficit en el desarrollo motriz 53,8
Déficit en la percepción visual-espacial 7,7
Tabla 13. Frecuencia de consultas por los síntomas anteriores
Municipio Frecuencia Marmato Semanal
Supía Mensual Villamaría Semanal
Suratá Mensual California Diaria
Vetas Mensual Puerto Libertador Mensual Santa Rosa del Sur Semanal
Amalfi Semanal Segovia Diaria
Caucasia Diaria Zaragoza Semanal Remedios Semanal
Las encuestas realizadas muestran muy altas incidencias (en todos o casi todos los municipios de
consulta) de algunos síntomas como: Dolor de cabeza, espasmos y fiebre; síntomas frecuentes en
numerosas patologías, de ahí que su ocurrencia sea alta en general. Lo mismo ocurre con varios
de los síntomas evaluados, aún cuando su ocurrencia no es tan alta, son síntomas que se presentan
en diferentes enfermedades lo cual ayuda a dificultar el diagnóst ico a priori de las intoxicaciones
químicas en general.
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Entre los síntomas mencionados anteriormente como indicio de intoxicación crónica por mercurio
se observa una ocurrencia de irritación de garganta y náuseas del 84,6% del total de consultas, es
decir, en once de los municipios, y una ocurrencia del 53,8% de temblores. Al evaluar la
ocurrencia de los t res síntomas juntos, estos se dan en varios municipios: Supía, Villamaría,
Suratá, Amalfi, Segovia, Zaragoza y Remedios. En algunos de los centros de salud consultados la
presencia de temblores por sí sola const ituía la clave para diagnost icar dicha intoxicación, los
cuales suelen presentarse en conjunto con los síntomas mencionados o con malestar en la boca y
los dientes y sabor metálico.
Los síntomas propios de la intoxicación con mercurio orgánico (como metil mercurio
principalmente) reportados ampliamente en episodios de intoxicaciones masivas en otras partes
del mundo, como: parestesias en los dedos de las manos; alteración de las sensaciones; pérdida de
la coordinación oral y escrita y pérdida de la visión no son muy frecuentes. Incluso, en el caso de
la pérdida de las sensaciones, esta no se da en ninguno de los municipios consultados. Sin
embargo, el síntoma más común para este t ipo de intoxicación es la variación en los estados de
ánimo, el cual se presenta en la mayoría de los centros de salud y hospitales de los municipios
mineros: Supía y Villamaría en Caldas; Suratá, California y Vetas en Santander; Santa Rosa del
Sur en Bolívar y Segovia, Amalfi y Caucasia en Antioquia.
En cuanto a los padecimientos de niños pequeños, estos se presentan en un mayor número de
municipios, pero los porcentajes de ocurrencia no son tan altos como los de los síntomas
característ icos de la intoxicación por mercurio elemental e inorgánico. En algunos municipios,
como Supía, por ejemplo, la mayoría de los síntomas enunciados se presentan, pero el
coordinador médico del centro de salud del municipio manifiesta que de manera poco frecuente.
Entre los síntomas más comunes se encuentran los déficit de atención, en el lenguaje y en el
desarrollo motriz, padecimientos que suelen detectarse en las act ividades escolares
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principalmente. Ninguno de estos síntomas deja de tener una alta componente relat iva, por lo que
establecer un cuadro sintomático con estos síntomas y su asociación con el consumo de alimentos
con metil mercurio suele darse en casos de intoxicaciones crónicas masivas.
Nuevamente el municipio de Marmato, en Caldas, es objeto de atención. De la totalidad de
síntomas sólo existen consultas por cuatro de los cuarentaicuatro consultados: Atrofia muscular,
espasmos, dolor de cabeza y cansancio, lo cual supone una baja incidencia de sintomatologías
asociadas al mercurio en general. De hecho, es el municipio en donde menos síntomas se
presentan comparat ivamente, lo cual no deja de resultar peculiar si se t iene en cuenta que en
Marmato no se ut iliza mercurio para el proceso de recuperación.
La últ ima pregunta de la encuesta indagaba sobre la diferenciación de las intoxicaciones de varias
sustancias químicas. Como se ha mencionado, las intoxicaciones en general presentan cuadros
sintomáticos muy similares entre sí, caracterizados por la presencia de dolor de cabeza, náuseas,
vómitos, otros síntomas digest ivos, respiratorios y neurológicos, dependiendo de la dosis, el
grado de toxicidad del producto en cuest ión y varios otros factores. Sergio Mejía, ingeniero
metalúrgico de la UPME afirma por ejemplo que es frecuente la confusión de la intoxicación por
compuestos mercuriales con intoxicaciones tan comunes como la intoxicación por alcohol et ílico.
Síntomas como la pérdida de memoria; la desorientación y la pérdida de la coordinación espacial
y oral puede llegar a confundirse con una dosis elevada de alcohol59.
A la pregunta ¿sabría usted diferenciar la intoxicación por mercurio de intoxicaciones con otros
metales pesados/plaguicidas/fármacos/otras sustancias químicas? se respondió en algunos casos
que la intoxicación por mercurio solía presentar temblores en los labios y malestar bucal
59 Mejía, Sergio. Entrevista personal. (Abril 2008)
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(concretamente, dientes flojos60), en otros, que no sabrían diferenciar esta intoxicación de ninguna
de las sustancias químicas mencionadas en tanto no se hubiera enviado una muestra de orina y/o
sangre a la capital, puesto que varios municipios los centros de salud no poseen herramientas de
análisis microbiológico y químico. Como lo mencionan médicos y enfermeros de los hospitales y
centros de salud, no existen elementos que permitan diagnost icar y diferenciar de manera precisa
las causas de las intoxicaciones de las personas que acuden a las consultas.
Como resultado, los reportes que se hacen en forma de estadíst icas pueden arrojar graves errores,
como incluir una intoxicación con pintura o cloro como parte de los casos de intoxicación por
metales pesados, o dejar de incluir casos que sí hacen parte de esta categoría por varias razones:
negligencia de los propios pacientes al no realizar consultas médicas una vez se han presentado
los primeros síntomas anormales; falta de acceso al servicio de salud; diagnóst icos erróneos por
parte de personal médico no capacitado; falta de recursos económicos para realizar análisis
detallados, entre otros.
60 Michelín Kreder. entrevista personal. (Junio 2008)
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6. CONCLUSIO NES
El uso del mercurio a lo largo de la historia ha confirmado su toxicidad para quienes lo manipulan
en su oficio y para quienes se ven afectados por las transformaciones que este sufre una vez es
liberado al ambiente.
En el país, desde épocas de antaño se ha venido explotando el oro del territorio de forma artesanal
y a pequeña escala, caracterizándose esta por tener planes de manejo ambiental práct icamente
inexistentes. De esta manera, las sustancias químicas ut ilizadas en el proceso de recuperación del
oro son liberadas a la atmósfera en forma de gases y a cuerpos de agua como residuos sólidos y
vert imientos.
La situación de las regiones mineras ha suscitado el interés de ent idades que han estudiado las
concentraciones de mercurio en el agua; sedimentos; partículas suspendidas; plancton y peces, así
como también en el organismo humano, encontrando patrones de bioacumulación en la cadena
trófica, y concentraciones que podrían esperarse de cuerpos de agua con problemas de
contaminación severa.
Los estudios realizados hasta el momento confirman la presencia de una serie de síntomas que se
dan en personas con presencia de altos niveles de mercurio en el organismo. Estos síntomas
incluyen temblores, náuseas, gingivit is mercurial, cambios en el estado de ánimo, cansancio,
entre otros similares.
También existen evidencias sobre la relación entre los síntomas mencionados, el nivel de
mercurio en el organismo y la ocupación de las personas. Por ejemplo, en mineros y pescadores
es mucho más común encontrar niveles altos de mercurio y síntomas neurológicos que en otros
tipos de población.
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Por medio de las encuestas al personal médico de los centros de salud y hospitales en los
municipios mineros, se observó que varios de los síntomas neurológicos característ icos de la
intoxicación mercurial en algunos de sus estados más comunes se presentan frecuentemente en
los pacientes que acuden a dichos centros.
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Anexo 1.
Centro Médico Municipio Encuestado/a Cargo San Antonio Marmato Juliana Vera Enfermera jefe
San Lorenzo Supía José Duván Londoño Coordinador médico San Antonio de Villamaría Villamaría Lina Marcel a Arango Enfermera jefe
Hospital San Sebastián Suratá Celmira Acevedo Enfermera jefe Centro de Salud San Antonio de California Californi a Sandra Lizcano Directora
Centro de Salud Nuestra Señora del Carmen Vetas Maria Helena Arias Jefe Historias y estadística Hospital San José de Tierralta Puerto Libertador Petra Robles Enfermera jefe
Hospital Manuel Élkin Patarrollo Santa Rosa del Sur Arelis Vargas Enfermera jefe Hospital El Carmen Amal fi Bibiana Cárdenas Jefe Historias y estadística
Hospital San Juan de Dios Segovia Yasmín Rodríguez Coordinadora de urgencias Hospital César Uribe Piedrahita Caucasia Leila Peña Enfermera jefe
Hospital San Rafael Zaragoza Michelín Kreder Coordinadora médica Hospital San Vicente de Paúl Remedios Carlos Alberto Salazar Enfermero jefe