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ESTILOS DE APRENDIZAJE Y MODELOS DIDÁCTICOS EN LAS CIENCIAS NATURALES Y EDUCACIÓN AMBIENTAL
NOEL ROLANDO DUQUE
SISTEMA DE UNIVERSIDADES ESTATALES DEL CARIBE
UNIVERSIDAD DE CARTAGENA
MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
CARTAGENA, D.T. Y C. 2014
2
ESTILOS DE APRENDIZAJE Y MODELOS DIDÁCTICOS EN LAS CIENCIAS
NATURALES Y EDUCACIÓN AMBIENTAL.
LINEA DE INVESTIGACIÓN: EDUCACIÓN, UNIVERSIDAD, SOCIEDAD
NOEL ROLANDO DUQUE
Trabajo de grado para optar el título de Magíster en Educación
ROBERTO FIGUEROA, Ed. D,
Director
SISTEMA DE UNIVERSIDADES ESTATALES DEL CARIBE
UNIVERSIDAD DE CARTAGENA
MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
CARTAGENA, D.T. Y C. 2014
3
Nota de aceptación.
_______________________________
_______________________________
_______________________________
_______________________________
_______________________________
_______________________________
_______________________________
Presidente del jurado
_______________________________
Jurado
_______________________________
Jurado
Cartagena de Indias, D.T. y C. Diciembre de 2014
4
DEDICATORIA
A mi
Sol……………………………Algunos
le llaman Dios
A mi
Luna………………………….Algunos
le llaman Madre
A mis
Estrellas………………………….Noel
David y Noelia Milé
Agracian mis días con sus
apretujosos amores.
A todos los sindicados de perturbar
mi mente con los interrogantes de la
existencia.
…A los constituidos, desde el
pasado, desde el presente y en el
futuro como celestinos de mis
correndillas en todas mis empresas
del saber.
5
AGRADECIMIENTOS
A la fémina
Baluarte de mis sueños.
Consorcio en mis días.
Proporcionadora de oportunidades.
A Carmen Duque
Esa, a quien por razones
inexplicables
Natura o Deidad,
Le encargo mi existencia.
Al Dr. Roberto Figueroa, director y
Paladín incansable, de sabias
Cinceladas, en esta, mí
Pintoresca travesía académica.
Henry Gonzales, gracias
A la U de C, a la U del A, mis dos
Alma Mater, al SUE Caribe y todo
Su idóneo personal.
6
CONTENIDO
Pág.
RESUMEN
INTRODUCCIÓN
1 DESCRIPCION DE LA SITUACION PROBLÉMICA 17
1.1 FORMULACION DEL PROBEMA 21
1.2 JUSTIFICACIÓN 21
1.3 OBJETIVOS 24
1.4 OBJETIVO GENERAL 24
1.5 OBJETIVOS ESPECÍFICOS 24
2 MARCO DE REFERENCIA 25
2.1 ANTECEDENTES INVESTIGATIVOS 25
2.1.1 Pretensión de recorrido del estado de la cuestión 26
2.2 España (Categoría Nº 1) 26
2.2.1 Subcategoría Nº 1 de España 27
2.2.2 Subcategoría Nº 2 de España 31
2.2.3 Subcategoría Nº 3 de España 41
2.3 Latinoamérica y el Caribe (Categoría Nº 2) 42
2.3.1 Subcategoría Nº 1 de Latinoamérica y el Caribe 42
2.3.2 Subcategoría Nº 2 de Latinoamérica y el Caribe 45
2.4 Colombia (Categoría Nº 3) 48
2.4.1 Subcategoría Nº 1 de Colombia 48
2.4.2 Subcategoría Nº 2 de Colombia 50
2.4.3 Subcategoría Nº 3 de Colombia 52
2.5 FUNDAMENTO TEÓRICO-CONCEPTUAL 53
7
2.5.1 Estilos de aprendizaje 53
2.5.2 Modelos pedagógicos 62
2.5.3 Modelos Heteroestructurantes: Modelo conductual y
Tradicional 69
2.5.4 Modelos Autoestructurantes: Constructivismo y por
Descubrimiento 72
2.5.4.2 Constructivismo 72
2.5.4.3 Por descubrimiento 74
2.6 Enseñanza de las ciencias naturales y la educación ambiental 76
2.6.1 Enseñanza de las ciencias desde un enfoque constructivista 78
2.6.2 Enseñanza de las ciencias desde un enfoque por Descubrimiento 80
2.8 Modelo didáctico y Estilos de Aprendizaje 82
3 METODOLOGÍA 85
3.1 DISEÑO DE INVESTIGACIÓN 85
3.2 ETAPAS DE LA INVESTIGACIÓN 86
3.4 POBLACION Y MUESTRA 88
3.5 TECNICAS E INSTRUMENTOS 89
4 PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS DE RESULTADOS 91
4.1 Caracterización de docentes y estudiantes 92
4.2 Caracterización de docentes y estudiantes en los estilos de
Aprendizaje 97
4.2.1 Contrastación de estilos de aprendizaje en estudiantes 104
4.3 Caracterización de docentes y estudiantes por modelos
Didácticos 106
4.4 Prueba de dependencia o verosimilitud de docentes y
8
estudiantes para estilos de aprendizaje y modelos didácticos 112
4.5 Correlaciones de Estilos de aprendizaje y modelos didácticos
para docentes y estudiantes 116
CONCLUSION 123
RECOMENDACIONES 128
BIBLIOGRAFÍA 130
9
LISTA DE TABLAS Pág. Tabla 1 Estado del Arte-Vista sinóptica del recorrido 26
Tabla 2 Primera subcategoría Española 31
Tabla 3 Segunda subcategoría Española 39
Tabla 4 Tercera subcategoría Española 41 Tabla 5 Primera subcategoría de Latinoamérica y el Caribe 45 Tabla 6 Segunda subcategoría de Latinoamérica y el Caribe 47 Tabla 7 Primera subcategoría Colombiana 49 Tabla 8 Segunda subcategoría Colombiana 51 Tabla 9 División cuadripartita del aprendizaje 57 Tabla 10 Características del estilo de aprendizaje según Kolb 59 Tabla 11 Construcción de la realidad educativa 78 Tabla 12 Enseñanza de las ciencias 80 Tabla 13 Localización de docentes por genero 92 Tabla 14 Localización de estudiantes por genero 93 Tabla 15 Decreto de nombramiento docente 94 Tabla 16 Nivel académico estudiantes 96 Tabla 17 Resultado CHAEA docentes 97 Tabla 18 Resultado CHAEA estudiantes 100 Tabla 19 Contrastación de estilos de aprendizaje en estudiantes 105 Tabla 20 Resultado de docentes y estudiantes por modelo didáctico 106 Tabla 21 Resultado de modelo didáctico estudiantes 109
10
Tabla 22 Dependencia de los estudiantes con respecto a los estilos de Aprendizaje 112
Tabla 23 Dependencia de los docentes con respecto a los estilos
de Aprendizaje 113 Tabla 24 Dependencia de los estudiantes con respecto a los
modelos didácticos por locación 114 Tabla 25 Dependencia de los docentes con respecto a los modelos didácticos por locación 115 Tabla 26 Correlación de Estilos de aprendizaje y Modelos didácticos
en Estudiantes 116 Tabla 27 Correlación de Estilos de aprendizaje y Modelos
didácticos en Docentes 121
11
LISTA DE GRÁFICOS
Gráfico 1 Convergencia de Modelos de estilos de aprendizaje 56 Gráfico 2 Ciclo experiencial de Kolb 58
12
LISTA DE ANEXOS
Nº 1 Aproximación a la concepción de Estilo. 137 Nº2 Aproximación al concepto de modelo 139 Nº 3 modelos pedagógicos y modelos didácticos 141 Nº4 Cuestionario sobre Modelos Didácticos para la enseñanza
de las ciencias naturales. 143 Nº 5 Tabla valorativa de los Modelos Didácticos 151 Nº 6 Transposición de preguntas del cuestionario de Modelos
Didácticos 152 Nº 7 Test CHAEA 153 Nº 8 Tabla valorativa de los Estilos de Aprendizaje 156 Nº 9 Cuestionario de preguntas abiertas sobre Estilos de Aprendizaje 157 Nº 10 Análisis de los Estilos de Aprendizaje en estudiantes a partir del cuestionario de preguntas abiertas 158 Nº 11 Población y muestra 160
Nº 12 Table for Determining the Random Sample Size from a
Determined Population 161
Nº 13 Mapa de los estilos de aprendizaje, generados en atlas.ti.5.2
(análisis del cuestionario de preguntas abiertas aplicado a
estudiantes). 162
Nº 14 Resultados Pruebas saber 11, Municipal en Química. 164
Nº 15 Resultados Pruebas saber 11, Municipal en Física. 165
Nº 16 Resultados Pruebas saber 11, Nacional en química. 166
Nº 17 Resultados Pruebas saber 11, Nacional en química. 167
Nº 18 Socialización de resultados de la investigación. 168
Nº 19 Socialización de resultados de la investigación 169
13
ESTILOS DE APRENDIZAJE Y MODELOS DIDÁCTICOS EN LAS CIENCIAS NATURALES Y EDUCACIÓN AMBIENTAL.
RESUMEN
La praxis de la enseñanza es moldeada en su desarrollo por el estilo de
aprendizaje preferente del docente, favoreciendo el estudiante que comparte su
estilo de aprender y desfavoreciendo a los diversos, por ello, es necesario que
las acciones planteadas en el marco del modelo didáctico se ajusten en las
particularidades del estudiantado y en su estilos de aprendizaje. La propuesta
de investigación busca evidenciar la congruencia en la correlación de los estilos
de aprendizaje (E.A.) y los modelos didácticos (M.D.) en ciencias naturales y
educación ambiental de docentes y estudiantes de la educación media del
municipio de Arjona-Bolívar. La investigación de naturaleza descriptiva-
Correlacional, utilizó una muestra de 324 estudiantes y 28 docentes, a quienes
se le aplicó el cuestionario CHAEA de (Honey y Alonso, 1999) para determinar
sus estilos de aprendizaje y la asociatividad o correlación con los resultados
que se obtienen del cuestionario de modelos didácticos en ciencias naturales
(Figueroa y Otros, 2007). Para el análisis de la información se recurrió a
estadísticas descriptivas, paramétricas y no paramétricas. Los resultados
muestran que en los estudiantes existe correspondencia baja entre los estilos
de aprendizaje y modelos autoestructurantes. En los docentes, no se presenta
correlación alguna. Por tanto, no se evidencia convergencia entre las
correlaciones de docentes y estudiantes en las ciencias naturales y educación
ambiental.
PALABRAS CLAVES
Estilos de aprendizaje, modelos didácticos, modelos pedagógicos, ciencias
naturales y educación ambiental.
14
LEARNING STYLES AND MODELS IN TEACHING SCIENCE AND
ENVIRONMENTAL EDUCATION.
ABSTRACT
The practice of teaching in their development is shaped by the preferred
learning style of the teacher, encouraging the student who shares his learning
style and disfavoring the diverse, it is therefore necessary that the actions
proposed under the didactic model fit the particularities of students and their
learning styles.
The proposed research aims to demonstrate consistency in the correlation of
learning styles (EA) and didactic models (MD) in natural science and
environmental education for teachers and students of the schools in the
municipality of Arjona, Bolivar.
The research is a descriptive-correlational used a sample of 324 students and
28 teachers, to whom the questionnaire was applied CHAEA of (Honey and
Alonso, 1999) to determine their learning styles and the association or
correlation with the results obtained from the questionnaire in science teaching
models (Figueroa et al 2007). For the analysis of the information was used
descriptive statistics, parametric and nonparametric.
The results show that students in low correspondence exist between learning
styles and models auto-estructurantes.
In teachers, no correlation is presented. Therefore, there is evidence of
convergence between correlations teachers and students in the natural
sciences and environmental education.
KEYWORDS
Learning styles, teaching models, teaching models, natural science and
environmental education.
15
INTRODUCCIÓN
El 4 de octubre de 1957 la Unión Soviética lanza el “Sputnik” primer satélite
artificial que orbitaria el planeta tierra. La hazaña demostró que el resultado
curricular Ruso en ciencias experimentales era superior al norteamericano y al
de occidente (Fundación Surtigas, 2007).
En respuesta a ello, las naciones rezagadas buscaron en materia educativa
distintos caminos al conductismo, que respondieran a los requerimientos de los
nuevos tiempos.
Esta necesidad de transformación trajo cambios sustanciales en el currículo.
Es decir, se avistaban nuevas concepciones teóricas y epistemológicas de la
enseñanza, el aprendizaje y la evaluación. Surgirían entonces los modelos
pedagógicos autoestructurante.
La dinámica del proceso en los modelos autoestructurantes, parte
fundamentalmente en las potencialidades del estudiante, de las cuales se
pueden citar las motivaciones, proyecciones, los ritmos, los enfoques y los
estilos de aprendizaje, entre otros.
Ya desde 1994 con el nacimiento de la Ley General de Educación, en
Colombia y con los Lineamientos Curriculares del Ministerio de Educación
Nacional (M.E.N., 1998, 2004) se plantean proposiciones metodológicas y
epistemológicas en el desarrollo curricular de las ciencias, semejante al trabajo
de los científicos, pensando científicamente, haciendo ciencia, y favoreciendo
las actividades de indagación. Igualmente, queda expreso el reconocimiento de
los estilos de aprendizaje de los estudiantes para valorar sus avances, M.E.N.
(Decreto 1290 del 2009).
Es de anotar, que aun cuando un número importante de países
iberoamericanos participan y organizan congresos internacionales sobre estilos
de aprendizaje. Colombia se constituye como el único país Latinoamericano
que hasta el momento ha reconocido de manera formal los estilos de
aprendizaje de los estudiantes (Falco, 2011).
16
En pertinencia de la presente investigación, se toma como objeto de estudio los
estilos de aprendizaje y los modelos didácticos de las ciencias naturales y
educación ambiental, para determinar las correlaciones de las anteriores
variables, en docentes y estudiantes, verificando la congruencia entre ellas,
para determinar si existe afinidad entre las practicas desarrolladas en ciencias
y las potencialidades y necesidades del alumnado.
Al rastrear investigaciones iberoamericanas para descubrir los aportes en
materia sustantiva, se colecta un número importante de trabajos, que se
organizan en tres subcategorías, una primera donde se realiza valoración y
categorización de E.A., una segunda donde se hace variado uso didáctico de
los estilos de aprendizaje, lo que hemos denominado bifuncionalidad en estilos
de aprendizaje, y una tercera donde los E.A. se utilizan en la orientación
vocacional del estudiantado.
La presente propuesta de investigación se encuentra dentro de la segunda
subcategoría, por su intento de orientar con los resultados obtenidos, las
prácticas educativas en torno a los E.A.
Es oportuno revisar las concepciones teóricas y epistemológicas que orientan
el proceso de enseñanza en el Municipio de Arjona, donde los resultados en
pruebas externas (Saber11) en ciencias naturales y educación ambiental están
en condición de igualdad o semejanza al bajo nivel nacional. Estos bajos
desempeños, de acuerdo al ICFES se muestran, por ejemplo, en los años
2007, 2008, 2009, y 2010 (ver anexo 13,14, 15 y 16).
Se requiere promover en nuestra localidad y en el país la construcción de una
cultura científica en el ciudadano, entendida como factor económico y cultural
de desarrollo, a través de la eficaz intervención en el acto educativo (Fundación
Promigas, 2007). Esa posibilidad de enseñar debe estar acompañada de la
posibilidad de aprender; si esta última no existe, queda desvirtuada la
enseñanza” (Fumagalli, 1997:22)
Evidentemente, el desempeño estudiantil se halla asociado al desempeño
docente, de tal forma que Lembo (1973) asevera que la reprobación estudiantil
puede interpretarse como el fracaso docente, entre otras cosas por una
17
directriz bajo una premisa de un proceso único en el aula, sin observación de
las particularidades del estudiantado que intervienen en el proceso de
aprendizaje.
En este orden de ideas, es válida la teoría planteada por Feuerstein y Kozulin
(2002 citado en Vaca, 2008) cuando bien soportan que en un proceso
acertado de mediación, la inteligencia que bien puede ser considerada como
baja, media o alta, puede mejorarse. En otras palabras, si la intervención
docente es la adecuada y pertinente, a través de modelos didácticos docentes
en sinergia con los estilos de aprendizaje de los estudiantes, se puede afectar
de manera positiva mejorando el desempeño escolar.
18
1. DESCRIPCION DE LA SITUACION PROBLÉMICA
La inter-afectación de lo mundial y local, conducen a conversar sobre una
sociedad glocal. Vivimos en un nuevo orden universal que plantea cambios
jamás antes formulados, a toda estructura y nivel, bien sea del orden
económico, social, político, y sin lugar a dudas el educativo.
De hecho, esos cambios en el mundo se gestan fundamentalmente por los
nuevos saberes, los mismos que introducen cambios en forma vertiginosa
Correa (2004:109).
El nivel de calidad educativa ofertada en una nación es determinante de su
economía. El banco mundial promueve desde 1963 la reducción de la pobreza
a través del aumento potencial en la educación terciaria, como impulsor del
desarrollo (Salmi, 2009).
Parte de la riqueza generada hoy, es producto de representaciones de objetos
y no de bienes materiales. La economía mundial ha evolucionado de la agrícola
e industrial a la economía de la información y del conocimiento, y con ello las
perspectivas de las formas de valor. Esa dualidad economía-conocimiento, ha
permitido apropiarnos de la frase sociedad de la información y del
conocimiento, utilizado a partir de los años 70, 80, difundido ampliamente con
Daniel Bell, Jhon Naisbitt y AlvinToffler (Giner, 2004:3).
Estos retos económicos propuestos por el nuevo orden a nivel universal, han
estimulado, entre otros, a la creación de un ranking mundial para
universidades, donde se enlistan las que oferten un alto nivel de calidad
educativa.
Aun, hoy en día, Colombia, se halla excluida de honorable reconocimiento. Sin
embargo, y en esfuerzos por introducir mejorías en materia de calidad
educativa, a partir del 2010, inicia con el proceso de acreditación de programas
y acreditación institucional. La ley General de Educación de 1994, introduce
lineamientos de reforma para todos los niveles educativos ofertados en el país.
19
En lo concerniente a las Ciencias Naturales y educación ambiental, se
establecen parámetros identificados como “logros” cuya finalidad propone
conducir al estudiante a un nivel de calidad, constituyéndose en parte integral
del Proyecto Educativo Institucional (P.E.I.), a lo que se le agrega el Decreto
No. 1743 del 3 de Agosto de 1994, instituyendo el Proyecto Ambiental Escolar
(PRAE), que debe ser “leído” en buena fe, como la práctica de la teoría en las
Ciencias Naturales, y espacio de articulación con otras áreas, escapando del
activismo ecológico, que no tiene soporte teórico y estrategia alguna.
La calidad educativa debe trascender de las leyes, decretos y resoluciones y
materializarse en el interior de las aulas, Montejo, Raposo y otros (2003)
opinan que conocer los E.A. supone una herramienta para el docente a fin de
comprender como aprenden sus alumnos, para modificar o reforzar su propio
estilo de enseñanza.
En una manera de realizar monitoreo a la materialización de las normas
establecidas, el estado se vale de las pruebas saber 11, las mismas que
registran, en términos generales, un bajo nivel en los resultados,
presentándose además de insatisfacción, una amplia desventaja para la
competitividad que propone el nuevo orden económico mundial.
Los resultados a nivel nacional en pruebas Saber 11, de ciencias naturales y
educación ambiental, no distan de la baja puntuación obtenida en el Municipio
de Arjona-Bolívar. Per se a ello, de los cuatrocientos sesenta docentes
Municipales presentes en todos los niveles, ciento cuarenta se han formado
como especialistas en lo transcurrido entre el 2005 y el 2010 (Villadiego,
Conversación personal, 10 de marzo del 2011)*, lo que representa un 30.4% de
la población docente, lo que permite inferir en dos sentidos que: Los esfuerzos
de preparación académica en posgrado deben incrementarse para visibilizar el
impacto, evitando la difuminación del efecto sobre los estudiantes y sus
* Villadiego Cesar, Director de Núcleo Educativo de Arjona. Gestionó con metodología a distancia la incursión de una prestigiosa universidad de la Región Caribe en el Municipio de Arjona-Bolívar, con especializaciones en pedagogía e investigación, durante los años comprendidos entre el 2005 y el 2010
20
resultados, como primero, y como segundo considerar que los cambios no se
establecen instantáneamente.
Los docentes de Ciencias Naturales y Educación Ambiental de la municipalidad
de Arjona-Bolívar, promulgan utilizar una práctica educativa donde subyace la
teoría constructivista, estimulando siempre desde los saberes previos de los
discentes la autoconstrucción del conocimiento, alejados del tradicionalismo al
asignar un rol participativo a sus estudiantes. En esta lógica, existe
identificación con la propuesta del M.E.N. (Ley 115 de Feb. 8 de 1994:50) que
invita a la participación activa del estudiante en su propia formación. Pero, los
resultados se alejan de este acuerdo.
Es menester inquirir sistemáticamente en la enseñanza aprendizaje, desde los
docentes y estudiantes, para evidenciar por un lado, como los primeros
conciben su ejercicio de enseñanza y cuáles son sus E.A., y por otro, como los
estudiantes entienden la práctica docente y cuáles son sus E.A.
En razón del presente estudio se circunscriben las indagaciones
específicamente a las ciencias naturales y educación ambiental en los grados
décimo y undécimo y con ello, determinar la compatibilidad de los dos
enfoques.
Esta oportuna información de compatibilidad, es vital, pues cuando la
mediación no es pertinente en el proceso educativo, como consecuencia, se
genera en el estudiantado funciones cognitivas deficientes (Feuerstein, 1980
citado en Vaca, 2008).
Reich (1993, citado en De Zubiría), Gimeno y Pérez (1992, citado en Martínez,
2008) apuntan que es frecuente el uso del modelo tradicional de enseñanza,
aunque cuente con pocos defensores. Contrastando estos testimonios con las
afirmaciones docentes de la municipalidad.
Para Monereo y Castelló (1997) quien guíe la enseñanza, debe estar
convencido de poder hacerlo en forma clara, estructurada y con bases teórico-
pedagógicas acentuadas, definidas y conscientes de ello. Discriminar cual
modelo o modelos didácticos en ciencias es preferente en Arjona-Bolívar, nos
21
ayuda a comprender el ejercicio de enseñanza. Gallego y Nevot (2007) también
apuntan a esa consciencia en las prácticas. Y Lucio (1989) agrega que ejercer
la docencia, implica el saber, y el saber enseñar, y hay que hacerlo
científicamente.
Cabe razonar entonces, sobre la conciencia, y postura pedagógica y
epistemológica que en la práctica de la enseñanza tienen los docentes, y
además, sobre la conciencia de las particularidades del sujeto intervenido,
llámese en nuestra intención E.A.
Desconocer y desaprovechar las capacidades, habilidades y/o virtudes
estudiantiles, en el desarrollo de la clase, es además de exclusión, por
desatención a la individualidad o diversidad (Gallego y Alonso, 2005), un error
grave en la construcción de sujetos y de sociedad. Necesitamos individuos
dinámicos, proponentes, críticos, transformadores -en la sociedad- y la
escuela es escenario propicio para levantarlos. La sociedad que está
constituida por la compleja suma de los sujetos y sus aportaciones, cambiará,
cuando sus elementos constitutivos efectivamente cambien.
Una oportunidad para promover cambios lo ofrece la educación. Ello implica la
auto-actividad del educando, para lo cual, se hace necesario el conocimiento y
el manejo de las técnicas de elaboración, selección y uso del recurso didáctico
(Fumagalli, 1997). Estas actividades constructivas hacen posible la superación
de una etapa sensorial con la operativa, la que sobredimensionan las imágenes
estáticas, porque son esquemas de la actividad (Piaget 1978, Citado En: Borda
y Páez, 1979).
Por otra parte, se evidencia en el estado de la cuestión a nivel de España, de
Latinoamérica y el Caribe, como también de Colombia, la inexistencia de
trabajos científicos teóricos o empíricos, que rindan cuenta del análisis de las
variables, E.A. y M.D. en docentes y estudiantes, así como la compatibilidad
entre ellos, en cualquier nivel de formación.
22
1.1. FORMULACION DEL PROBLEMA
¿Cuál es la congruencia o afinidad de la correlación de estilos de
aprendizaje y modelos didácticos concebidos por los estudiantes en la
enseñanza de las ciencias naturales y educación ambiental en la educación
media con la correlación de estilos de aprendizaje y modelos didácticos de los
docentes en las instituciones oficiales del municipio de Arjona-Bolívar?
23
1.2. JUSTIFICACION
El cuestionamiento sobre el ejercicio de la enseñanza ha superado
la antigua polémica de establecerlo como arte o ciencia. Al sistematizarse las
reflexiones que sustentan la práctica, originándose leyes, por ejemplo, queda
clara la connotación de cientificidad. Es por ello que el educador, debe moverse
en el saber disciplinar y el saber pedagógico, para saber y saber enseñar,
haciéndolo científicamente.
La práctica de la enseñanza puede pertenecer, en palabras de Not (1989), a
modelos heteroestructurante (Ej. tradicionalismo) o autoestructurante (Ej.
constructivismo), sin pretender afirmar que una sea mejor que otra,
simplemente los modelos heteroestructurantes, no corresponden con las
exigencias propias planteadas por la postmodernidad. De hecho, el
conductismo entro en crisis por la misma causa.
Un amplio porcentaje (57.14%) del cuerpo docente de ciencias en Arjona-
Bolívar, son licenciados en educación. Es común en la municipalidad escuchar
que la enseñanza es realizada desde modelos didácticos autoestructurante
(constructivismo), y contrario a lo que plantean, están algunos investigadores,
demostrando que el grueso de la enseñanza, se realiza por prácticas fundadas
en modelos tradicionales. Ante esta divergencia de pronunciamientos, se hace
necesario realizar una investigación, que evidencie como se está llevando a
cabo el desarrollo de las ciencias, si por construcción, descubrimiento o
transmisión del conocimiento científico, y su relación con los E.A. de los
estudiantes.
Los docentes deben identificar y trabajar en coherencia con la pertinencia del
modelo pedagógico institucional. Porque pueden estar haciéndolo fundado no
en el M.D., sino en su E.A. y al respecto, Gallego y Nevot (2007) afirman que el
estilo de aprendizaje preferente por el docente influye notoriamente sobre su
manera de enseñar, pues él lo hace como le gustaría que le enseñaran
(Gallego y Nevot, 2007). Pero además, puede ser que el E. A. de sus
estudiantes este siendo ignorado. Por esto, también se trata de visibilizar al
estudiante, que según el M.E.N. es el centro del proceso educativo y debe
24
participar activamente en su propia formación integral (Ley 115 de Feb. 8 de
1994:50). Es pertinente entonces, reconocer los rasgos propios del estudiante
que inciden en su aprendizaje desde la perspectiva de lo cognitivo, afectivo y
ambiental, recogidos en su estilo de aprender. Se trata de comprender en el
individuo con respecto a sus congéneres las diferencias o principio de unicidad,
en medio de las semejanzas o principio de universalidad. Somos seres
humanos con diferencias individuales (Gallego y Alonso, 2005), por lo que nos
distinguimos empírica, filosófica y neurobiológicamente (Salas, 2008). No
creemos que exista algún profesor que no reconozca las diferencias
individuales (ibíd.).
Por otra parte, en una revisión del estado de la cuestión, tras un recorrido
hispanoparlante, se da por establecido que no existen trabajos de investigación
teóricos o empíricos que conexionen los M.D. y los E.A. Por los que se
considera, necesario atender a esta necesidad científica.
En la exploración de investigaciones se observan nutridos trabajos tendientes a
utilizar didácticamente los E.A., es decir investigaciones que pertenecen a
nuestra segunda subcategoría. Allí encontramos:
Castillo y Guillen García (2006), Martínez (2007), Gallego y Luna (2007),
Gallego y Martínez (2003), Martínez (2002), Martínez (2007), Núñez (2008),
Hervás y Hernández (2006), realizados en España representando un del total
de estudios rastreados de este país el 41.17%, donde el grueso de los estudios
se realizó en el ámbito universitario. En cuanto a nivel de post grado es
equiparado con el de secundaria con un 14.2%.
En Latinoamérica y el Caribe se registra Aragón, y Jiménez (2009), Cabrera
(2005), Cruz (2001), representando un 42.87% desarrolladas todas a un nivel
universitario.
En cuanto a Colombia, citamos: Aguilar, y otros (2008), Gravini, y otros (2009)
El porcentaje de investigaciones no alcanza a superar el 40%, y solo se aplica
a nivel universitario.
25
De los tres párrafos anteriores concretamos que en España, los estudios son
básicamente a nivel universitario. En Latinoamérica y el caribe, se excluye el
nivel de básica secundaria y media en su totalidad, como también se excluye
Colombia.
De aquí se vislumbra la necesidad de incursionar en estudios que sean
desarrollados a nivel de la básica secundaria con respecto a la segunda
subcategoría, donde los E.A. se utilicen en las determinaciones didácticas.
26
1.3. OBJETIVOS
1.3.1. General
Describir la congruencia o afinidad de la correlación de Estilos de Aprendizaje y
Modelos Didácticos concebidos por los estudiantes en la Enseñanza de las
Ciencias Naturales y Educación Ambiental en la educación media con la
correlación de Estilos de Aprendizaje y Modelos Didácticos de los docentes en
las instituciones oficiales del Municipio de Arjona-Bolívar.
1.3.2. Objetivos Específicos.
Determinar cómo se distribuye en el municipio de Arjona-Bolívar la
población docente de ciencias naturales y educación ambiental en la
educación media oficial, por locación urbana o rural, con respecto al
género y decreto de nombramiento.
Identificar el estilo de aprendizaje y el modelo didáctico de los docentes
que desarrollan en la educación media de las instituciones oficiales del
municipio de Arjona para enseñar ciencias naturales y educación
ambiental y su relación con la locación.
Establecer cómo se distribuye en el municipio de Arjona-Bolívar la
población estudiantil de ciencias naturales y educación ambiental en la
educación media oficial, por locación urbana o rural, con respecto al
género y nivel académico cursado.
Caracterizar el estilo de aprendizaje y el modelo didáctico que conciben
los estudiantes a partir de la enseñanza docente en el desarrollo de las
ciencias naturales y educación ambiental de la educación media en las
instituciones oficiales del municipio de Arjona, con respecto a la locación.
Determinar cuál es la congruencia o afinidad de las correlaciones de
estilos de aprendizaje y los modelos didácticos en docentes y estudiantes
de la educación media en Arjona-Bolívar.
27
2. MARCO DE REFERENCIA
2.1. ANTECEDENTES INVESTIGATIVOS
El concepto de E.A. se maneja ampliamente hoy en los diferentes niveles
académicos. Son numerosos los estudios realizados en países de habla
hispana a nivel universitario y de educación básica primaria y secundaria,
incluyendo escuelas postgraduados.
Con esa diversidad organizamos tres categorías a saber: España, donde
surgen tres subcategorías, Latinoamérica y el caribe, donde surgen dos
subcategorías y Colombia, con dos subcategorías.
Como parte de las tres subcategorías que se logran construir en el estado de la
cuestión, una primera se refiere a la categorización de los estudiantes a partir
de sus E.A. Una segunda, donde se agrupan investigaciones que a partir de los
E.A. de una primera persona (estudiante), le permite a una tercera (mediador),
tomar decisiones de intervención educativa. Se verifica así que, la teoría de los
E.A. se constituye en una potente herramienta que provee de un grueso de
procederes adecuados para aprender -por un lado-, pero también para enseñar
-por otro-; es decir, permite el desempeño y afinamiento de dos funciones
totalmente diferentes, en dos personas de distintos roles y características muy
diversas, de tal suerte que es preciso conversar de bifuncionalidad de estilos
de aprendizaje y que se hace uso de ella, en el momento en que el docente, a
partir del E.A. de sus estudiante, toma frente a su labor académica decisiones
pedagógicas, tal como, el método de enseñanza, personalización de
contenidos, mejoramiento de la calidad educativa, comprensión cultural,
aprovechamiento de la memoria, mejoramiento de ambientes virtuales,
selección de estrategias, modelo didáctico empleado etc.
Una tercera subcategoría, que apunta al perfil vocacional del estudiante objeto
de aplicación de la teoría de E.A.
28
2.1.1 Pretensión de recorrido en la construcción del estado de la cuestión
En el intento de dilucidar el estado de la cuestión, se realiza un recorrido
Hispanoparlante, con una directriz eminentemente geográfica, para la
construcción de tres categorías: España, Latinoamérica y el Caribe, Colombia.
Las tres categorías mencionadas, bien podrían contener tres subcategorías,
las mismas que corresponden a diferentes niveles de complejidad en sus
constructos, como se evidencia en la siguiente tabla:
Tabla 1. Estado del Arte Vista sinóptica del recorrido
País o región
Categorías
España Latinoamérica y
el Caribe
Colombia
Subcategorías
1. Valoración de E.A. 1. Valoración de E.A. 1. Valoración de E.A.
2. E.A. y estrategias
de enseñanza.
2. E.A. y estrategias
de enseñanza.
2. E.A. y estrategias
de enseñanza.
3. E.A. y perfil
vocacional.
2.2 ESPAÑA (CATEGORÍA Nº 1)
Los estudios realizados en España sobre el tema son numerosos y diversos.
Incluso, han realizado innovaciones, a citar, el CHAEA adaptación para
contextos españoles del Learning Styles Questionnaire de Honey, edición 1988
(Alonso, 1992a), agregándole preguntas socio-académicas (Alonso y Gallego,
1994), Alonso y Gallego (2005). Instrumento que se ha utilizado en cuantiosos
trabajos dentro de ese y otros países y que hoy se constituye en herramienta
de incuestionable valor científico. Es necesario aclarar que se hallaron trabajos
apoyados en otros instrumentos como: Kolb, Honey y Mumford y Christine
O`Leary-Rockey, pero en menor proporción.
Como subcategoría de los trabajos Españoles encontramos:
1. Caracterización de E.A. de estudiantes e incluso docentes.
2. Los interesados en hacer uso de la bifuncionalidad de los E.A.
3. Aplicación de E.A. para orientación vocacional.
4.
29
2.2.1. Subcategoría Nº 1 de España
Martínez (2004) intenta determinar los E.A. en estudiantes y verificar su
relación con los E.A. del profesorado, en una investigación mixta (cualitativa-
cuantitativa).
Para los docentes considero como variables dependientes los E.A. activo,
reflexivo, teórico, pragmático e independientes la titulación, el sexo y los años
de experiencia, determinando en sus resultados que estas últimas variables no
influyen en sus E.A., prevaleciendo el reflexivo sobre el activo, y el teórico
sobre el pragmático.
La diferencia que se contrasta desde las hipótesis, es la referida al sexo, donde
no se encuentran diferencias para los E.A. y según Alonso (1994) existe
significatividad en los estilos Activo y Teórico.
Para los estudiantes, considero como variables dependientes los E.A. activo,
reflexivo, teórico y pragmático, e independiente, el sexo, tipo de centro y
ubicación.
El E.A. es influenciado por el sexo (las niñas son más reflexivas que los niños),
pero el tipo de institución no es determinante en ello. Así mismo, los
estudiantes urbanos son más pragmáticos que los rurales.
En la prueba de contraste, el estilo pragmático en estudiantes disminuye con el
ascenso en los grados, si mismo el E.A. activo, presentándose desfases en la
enseñanza, perdiéndose la creatividad, la espontaneidad y apertura a
situaciones nuevas. El E.A. teórico armoniza entre estudiantes y docentes. Se
que los concluye que los E.A. de los docentes moldean los E.A. de sus
estudiantes.
Igualmente, Martín y Rodríguez (2003), en su investigación “E. A. y grupos de
edad: comparación de dos muestras de estudiantes jóvenes y mayores”
Determina el E.A. con el instrumento Kolb (versión III, 1999) a estudiantes
universitarios generacionalmente diferentes, para corroborar la influencia de la
edad sobre los E.A.
30
De existir E.A. preferente según la edad, se plantearían estrategias de
enseñanza más ajustadas. De lo contrario, las mismas estrategias servirán
para uno y otro grupo.
Se parte de la hipótesis que según los individuos en sus inicios escolares
utilizan su E.A. preferente, y en edades mayores prefieren las combinaciones.
Lo que se desvirtúa con los hallazgos, aunque el E.A. divergente se aprecia en
mayores y en jóvenes el convergente preferencialmente.
De lo anterior, se deriva que las propuestas metodológicas para ambos grupos
pueden ser de tipo asimiladora, tales como el estudio de casos, lecturas
teóricas y ejercicios que estimulen el pensamiento reflexivo. Todo ello, sin
detrimento de la provocación al aprendizaje desde la vivencia experiencial de
todo el ciclo –acción a reflexión y conceptualización a la acción- para
proveernos de las destrezas propias de otros estilos.
En otro estudio de García (2002) denominado “Estilo de aprendizaje en la
vejez. Un estudio a la luz de la teoría del aprendizaje experiencial”, de la
facultad de educación de la Universidad de Salamanca, basados en el
cuestionario Kolb (1999), pretenden comprobar la existencia de un patrón de
E.A. en adultos mayores de 55 años.
Otros estudios muestran la no relación entre adultos mayores y sus E.A., pero
si diferentes preferencias entre varones abstractos y mujeres concretas
(Educational Gerontology, 1986).
Aunque no existe E.A. dominante, hay orientación hacia el estilo asimilador-
divergente. Tampoco hay relación con el género, estado civil o nivel de estudio
previo. Esto refuerza la idea de variabilidad interindividual en la vejez.
Gil, Contreras y otros (2007) en el estudio denominado “Estilo de aprendizaje
de los estudiantes de magisterio” Determinan el E.A. a estudiantes de
educación, con el cuestionario CHAEA, sin pretensiones de encasillar a los
docentes en usos de métodos de enseñanzas, sino dejarles en libertad de
utilizar todo su bagaje a partir de ellos.
31
El estilo reflexivo resultó el preferente con un 62% en diferentes especialidades
de magisterio de Castilla, La Mancha. Es decir, estudiantes analíticos,
minuciosos en sus decisiones, exhaustivo, receptivo y ponderado; continuando
con sujetos activos en un 22.51%, teórico 19.04, pragmático 13.88%. Dentro de
ello, las chicas son más reflexivas que los chicos, y los chicos, más teóricos
que las chicas. Entre tanto en los estilos activo y pragmático la diferencia está a
favor de los varones aunque no de manera significativa. De este estudio se
concluye que el E.A. es modificado o influenciado en la medida en que avanzan
en el semestre.
En lo que respecta a los estudio en los niveles secundarios Adán (2004) con su
propuesta denominada “Estilos de aprendizaje y rendimiento académico en las
modalidades de bachillerato”, Aplican el test CHAEA para determinar los E.A. y
tomar medidas didácticas al respecto. Dentro de los hallazgos, no se evidencia
tendencia a un perfil en las distintas modalidades de bachillerato. Sin embargo,
desde el punto de vista descriptivo y comparativo se establece un prototipo de
perfil en al menos tres modalidades:
Modalidad de bachillerato de las ciencias de la naturaleza, con un perfil definido
y significativamente superior en el estilo activo y ligeramente superior en el
estilo teórico. (Muestran gusto por la novedad y el riesgo que supone propio de
la edad y el creciente gusto por la observación y el análisis propio de la
investigación en que se forman).
Modalidad de bachillerato tecnológico, se corrobora planteamientos anteriores
donde la introducción a las tecnologías afinarían un estilo pragmático del
alumnado, además del reflexivo (caracterizado por la búsqueda de soluciones
prácticas a problemas comunes, guiados por criterios de rapidez y eficacia,
aunque le falle el método y la capacidad de abstracción para su resolución, lo
que es lógico par su etapa).
Modalidad de artes, con un estilo activo, mínimo en pragmático y teórico.
(Configuraciones propias de artistas).
32
Por otro lado, Canalejas, Martínez y otros (2002-2003) en estudio denominado
“Estilos de aprendizaje en los estudiantes de enfermería”, utiliza el CHAEA
para categorizar los E.A. de los estudiantes para utilizarles en los procesos
pedagógicos. Los resultados muestran que el perfil de aprendizaje del centro
universitario es diferente entre los estudiantes de los tres cursos, y en la
medida en que avanzan en su formación, se tornan más reflexivos y teóricos.
Estos hallazgos coinciden con los obtenidos por Highfield (1998), Alonso
(1994), Rakoczy (1995), Linares (1999), citado en Canalejas y otros (2002-
2003) el estudio propone como necesidad la posibilidad de modificar los estilos
de aprendizaje en este tipo de población estudiantil, observada en inicios
anteriores por Catalina Alonso (1994) en su pretensión de tesis doctoral, en
cuyo momento logra detectar que presentan estilos reflexivos de alta
preferencia y muy baja para el estilo activo.
Otra investigación en la misma línea Montejo, Raposo, y otros (2003) sobre el
“Análisis de los estilos de aprendizaje en los estudiantes de farmacia”, de dos
universidades españolas, la una publica, y la otra privada, pero en ambos
casos de primer y cuarto semestre, con el objeto de diagnosticar los estilos de
aprendizajes para su comparación y visibilizar posibles preferencias existentes
o no. Se parte de la premisa de que los estilos de aprendizajes de los sujetos,
no son inamovibles, evolucionan con la persona y pueden ser diferentes en
situaciones distintas.
En los hallazgos se observan estudiantes reflexivos en el primer y cuarto
semestre. Luego E.A. teóricos y pragmáticos son similar puntuación, y un estilo
activo pobre. El estilo reflexivos predominante en los estudiantes españoles sin
limitantes de la carrera estudiada, según Alonso y Gallego en el año 1990.
Algo que rescata el estudio es el incremento, aunque incipiente, del estilo
activo, sin la limitante de la carrera cursada, teniendo como referente el
estudio realizado por Alonso y Gallego (1990).
López (1996) en su estudio “Los estilos de aprendizaje y los estilos de
enseñanza. Un modelo de categorización de E.A. de los alumnos de
33
enseñanza secundaria desde el punto de vista del profesor”, los estilos de
aprendizaje de los estudiantes son “develados” por los docentes, quienes
vienen trabajando de tiempos atrás, y a quienes se les proponen pautas para la
maduración del proceso de enseñanza aprendizaje.
Tabla 2. Primera subcategoría Española
Sinopsis de la primera subcategoría española
(Valoración y categorización de estilos de aprendizajes)
consideraciones Valoración de los estilos de aprendizaje
*% de investigaciones de esta subcategoría
47.05
**Tipo de estudio Transversales-descriptivos
**Nivel de escolaridad de la muestra
Bachillerato (37.5%)
Universitario (62.5%)
**Test CHAEA (62.5%)
Kolb (25%)
Entwistle (12.5%)
Figura: 2. Visión parcial de la primera categoría. *Esta consideración esta porcentuada con respecto a la categoría. ** Estos aspectos se miden dentro de la misma subcategoría.
En síntesis, del anterior grupo (primera subcategoría) “Valoración y
categorización de estilos de aprendizaje” se puede decir que es equivalente a
un 44.44% de las investigaciones rastreadas en lo que a la categoría España
concierne, lo que indica el interés de los investigadores Ibéricos en estudios de
tipo descriptivos y transversales, con el fin de robustecer la teoría de E.A.
Los instrumentos utilizados para la identificación de estilos se contó con el
CHAEA en un 62.5%, Kolb 25% y Entwistle con un 12.5% Lo que evidencia la
preferencia del test CHAEA. Un número significativo de investigaciones
aplicaron a universitarios de diferentes disciplina (62.5%), y un número muy
inferior en bachillerato (37.5%). Este comportamiento puede obedecer a la
posibilidad de ser estudios realizados por docentes de IES.
34
2.2.2 Subcategoría Nº 2 de España
En lo referente a la segunda subcategoría “bifuncionalidad de E.A.” se
pueden presentar entre otros el estudio de:
Castillo y García (2006), sobre estudiantes de tres licenciaturas, aplicándoles el
CHAEA, para percibir la concordancia de los E.A. y los métodos de enseñanza,
y dilucidar motivos de la alta deserción escolar en educación (39%), psicología
(29%), ingeniería industrial (37%). Como resultado, se observó un 38% de
estudiantes con estilo activo con preferencia moderada, mientras un 60% son
reflexivos moderados, frente a un 43% de teóricos moderados y un 86% de
pragmáticos de preferencias moderada a muy alta. Esto es interpretado por los
autores como estudiantes con inclinaciones hacia el estilo pragmático con uso
más o menos constante, y por ende se sienten mejor en el aprendizaje que les
brinde la oportunidad de hacer y enlazar situaciones de hechos reales.
Cuando se realiza el análisis por licenciaturas, en el caso de educación,
prevalece el estilo teórico en mayor preferencia. En ingeniería industrial, es
notable la preferencia por el estilo pragmático y en psicología los estudiantes
manifiestan estilos pragmáticos y activos en sus combinaciones. En docentes
se aplica el modelo VARK de Neil Fleming. Se determina la existencia de
docentes con preferencias instruccionales: visual, auditiva, lectores/escritores y
Kinestésicos. Cuando se observaron los estilos de enseñanza de los docentes,
resultaron ser multimodales, aunque se encontraron maestros de estilo de
enseñanza puro como los auditivos y kinestésico. El multimodal más extendido
es el auditivo-lector/escritor con un 32% de la muestra. Pormenorizando desde
las licenciaturas, los docentes muestran un 57% de estilo auditivo-
lector/escritor. En ingeniería, los docentes se mostraron multimodal auditivo-
kinestésico, con un 29%. En psicología, el 40% de los maestros son
identificados como auditivo-lector/escritor.
Lo audaz de la investigación, consiste en buscar puntos de contactos entre los
E.A. y estilos de enseñanza, hecho que ellos mismos reconocen como
35
aventurado, sin embargo después de lograr exponer su propuesta, los
investigadores encuentran incongruencias entre dichas variables, lo que puede
indicar el alto grado de reprobación, aprendizajes deficientes, deserciones o
hasta desencanto de las licenciaturas. Pero además encontraron que los
estudiantes teóricos pragmáticos son poco satisfechos, contario a los estilos
activos. Se evidencia la necesidad de docentes multimodales, aunque también
debe decirse lo mismo con respecto a los estudiantes.
Martínez (2007) con un trabajo denominado “Estilos de aprendizaje. Pautas
metodológicas para trabajar en el aula”. Su primer trabajo en el 2004, tiene el
objeto de inventariar los estilos de aprendizaje de los estudiantes y la influencia
docente sobre estos. En palabras del mismo autor: “Los objetivos de esta
primera investigación son los referentes a averiguar algunas características de
los profesores desde la visión de los Estilos de Aprendizaje para
posteriormente contrastarla con los Estilos de Aprendizaje de sus alumnos” En
este segundo trabajo, aplica la bifuncionalidad de E.A. sugiriendo pautas
pedagógicas para que los docentes las tengan en cuenta en sus labores, con
miras a la atención de la diversidad de estilos, dentro de una clase
transmisionista o mediacional. Es importante destacar el hecho de la
aplicabilidad de la propuesta a cualquier nivel de educación formal. La primera
investigación es pragmática y la segunda teórica, pero en ambos casos
matriculado con la teoría de los estilos de aprendizaje CHAEA. Sugiere una
posterior IAP.
Gallego y Luna (2007) en el trabajo sobre “los estilos de aprendizaje y la
enseñanza de las matemáticas” en el nivel de bachillerato, utiliza el test
CHAEA. El trabajo categoriza E.A. discentes (buscando preferencias y
carencias), teniendo en cuenta la multivariedad de variables de tipo personal,
institucional o familiar, y el rendimiento en matemáticas, que pueden incidir en
un momento determinado en su estilo, pero además de ello, se proponen
pautas de actuación docente frente a posibles bloqueos de estudiantes al
momento de aprender matemáticas como sugerencias de mejora, lo que
36
adiciona valor a la investigación, por contribuir con pautas metodológicas para
instituciones educativas, una públicas y otra privadas.
Dentro de los hallazgos tenemos que los estudiantes de padres con niveles de
estudio medio o superior, tienden a ser más activos. Además que la mayoría
de los centros, la preferencia por el estilo activo disminuye de primero a
segundo grado. En tanto que el preferente es el reflexivo. Terminan con
propuestas para mejorar los estilos que en el enfoque como los autores las
citan, obedece además de orientaciones pedagógicas que sobredimensionan la
simplicidad de la sugerencia, a la utilidad del desbloqueo de los estudiantes
que transitan por este pedregoso camino, y que por considerar de vital
importancia, traemos al presente:
Proposiciones para el estilo activo:
Evitar el miedo al fracaso (Sternberg, 2000), Hacer algo nuevo, algo que nunca,
se ha hecho antes, al menos de vez en cuando (Guzmán, 1991), Activar la
curiosidad (Alonso, 1997), Day (2006) la rapidez como técnica. Cambiar de
actividad. Líder por un momento. Comunicación oral. Tender a la fluidez.
Proposiciones para el estilo reflexivo:
Precisión en la escritura, Salir a la pizarra, La falta de serenidad.
Recoger información mediante la observación, Elaborar protocolos, Dejar
tiempo para planificar y pensar, Captación matemática de un proceso, Buscar
alternativas y reflexionar, Interpretar, Activar los conocimientos previos, Usar un
discurso jerarquizado y cohesionado a un ritmo fácil de seguir, Utilizar
ilustraciones y ejemplos.
Proposiciones para el estilo teórico:
Desarrollar tareas estructuradas, La dependencia, Resumir teorías e hipótesis,
formular y comprobar conjeturas, Observar como imitación interior, Practicar la
manera de hacer preguntas (Guzmán, 1991, Adquirir experiencia, La
codificación selectiva, Formulación algebraica, Aprender de memoria y
automatizar.
37
Proposiciones para el Estilo pragmático
Puesta en práctica, Recabar ayuda de personas que tienen experiencia
(Guzmán, 1991, Aprender del maestro, Experimentar y observar, Consumir
matemáticas, Ejercitar, La imagen como medio, El resultado importa, Buscar
matemáticas en la calle.
Gallego y Martínez (2003) en la propuesta “Estilos de aprendizaje y e-learning.
Hacia un mayor rendimiento académico” donde aplican el cuestionario Honey y
Mumford 3DE que sigue una escala de Likert de cuatro puntos, a estudiantes
en línea de una escuela de postgrados, con el fin de realizar la valoración de
estilos y personalizar los contenidos, es decir, promover la bifuncionalidad.
Entre sus resultados los autores manifiestan que la educación e-learning es
más ergonómica a la hora de trabajar con herramientas para la atención a la
diversidad de estilos de aprender, que incluso la clase tradicional. De acuerdo a
la anterior afirmación –que no niega la posibilidad de trabajar con los E.A.
desde la tradicionalidad- evoco a Martínez (2007): “Cuando la metodología se
enmarca en una enseñanza transmisiva, tener en cuenta los Estilos se
convierte en una tarea añadida a la práctica habitual. Sin embargo, si la
enseñanza se desarrolla de acuerdo con el enfoque constructivista, el
desarrollo de los Etilos de Aprendizaje es un trabajo integrado en el quehacer
docente.
La educación virtual, a través del uso de las TIC’s, se perfila dentro del último
escaño de la educación a distancia, y con frecuencia los diseños curriculares
ignoran los E.A. de los estudiantes. Esta es una propuesta piloto que intenta
romper con la desatención a este tipo de diversidad de sujetos, aunque bajo
unos mismos conceptos.
En los hallazgos, se obtuvo que el 33% del alumnado afirman haber aprendido
igual que con los cursos tradicionales, mientras que el 66.6% afirma haber
aprendido más. Ninguno dice haber aprendido menos, y el 100% desea repetir
la experiencia, lo que confirma el alto grado de satisfacción al personalizar los
contenidos curriculares con respecto a los E.A.
38
Martínez (2002), en su estudio descriptivo sobre “interculturalidad desde la
perspectiva docente e investigadora: el E.A. del estudiante japonés de ELE”,
aplicando la teoría de estilos de aprendizaje de Honey-Alonso (1994), pretende
suministrar al docente la comprensión de toda la complejidad cultural que
envuelve al estudiante extranjero (caso particular de japoneses), en su clase de
español dimensionando la afectación sobre la metodología empleada. Ya los
ingleses hacen constar por vez primera el impacto necesariamente reflexivo y
englobante de la enseñabilidad de los idiomas, es decir, el énfasis en la cultura
del alumnado y no limitarse a la cultura del idioma, denominado proceso de
sensibilización cultural (Byram y Fleming, 2001).
Martínez (2007) en su estudio “Estilos de aprendizaje: pautas metodológicas
para trabajar en el aula”, acuña la frase de educador intercultural, para
referirse a los preceptores que conocen la cultura de los estudiantes
extranjeros y validos de ella, proponen pautas curriculares que favorezcan los
estilos de aprender. Es relevante la atención a la diversidad étnica que explica
comportamientos que pueden ser objetos de cismas entre docentes y
estudiantes como: aparente pasividad, no hablar por iniciativa propia, buenas
actitudes para la destreza escrita pero no para la oral, tiempo necesario y
requerido por el estudiante. Los estudiantes japoneses presentan preferencias
por el estilo reflexivo y teórico, lo que confirma que se sienten cómodos al
recoger datos, analizarlos detenidamente antes de concluir, consideran las
alternativas posibles antes de actuar y su intervención se limita hasta cuando
sientan dominar la situación. Y el hecho de que sean teóricos implica que
tiendan al perfeccionismo (lo que inhiben la participación en clases), y prefieren
analizar y sintetizar la gramática.
De ello, afirma Martínez (ibíd.) que los estilos de aprendizajes, están
determinados culturalmente y que se encuentran influidos por experiencias
anteriores de aprendizajes. Concluyendo en la sugerencia de la regulación
didáctica en función de la cultura y los estilos de aprendizaje de los
estudiantes. Núñez (2008) con su trabajo investigativo “Memoria y estilos de
aprendizaje en la enseñanza del francés como lengua extranjera”, subraya la
importancia de la teoría de los estilos de aprendizajes en estudiantes
39
españoles de una lengua extranjera (francés), como elementos integradores de
los procesos sicológicos-cognitivos del proceso pedagógico, considerando de
manera especial el rol que desempeña la memoria a largo plazo, el recuerdo y
el reconocimiento. En los estudiantes de la Universidad de Segovia se
determinó la correlación o no de las variables anteriores a partir de la teoría de
estilos de aprendizaje que emplea (Christine O`Leary-Rockey, 2000), al
categorizar al discente en “audial”, “visual”, “manual”. En este sentido, la teoría
de los estilos de aprendizaje que se aplicó, responde a preferencias de tipo
sensorial de los sujetos, mas no a preferencias de procesamiento de
información, que en todo caso se pretende buscar los posibles vínculos de
estas preferencias con el rendimiento académico del francés en términos de
memoria a largo plazo. Para ello realizan tres pruebas que conllevan a valorar
a los estudiantes en los términos de los tres estilos de aprendizajes (visual,
auditivo y táctil), en una primera fase. Seguidamente y valiéndose de los que
ellos denominan prueba de recuerdo (visual), y prueba de reconocimiento
abordan una segunda fase la muestra de 44 estudiantes.
Es para destacar a manera de comentario sobre los resultados la
predominancia del estilo visual a la hora del aprendizaje francés, además que
prevalece la memoria visual sobre la auditiva, aun cuando de estudio de
lenguas se refiere. Sin embargo, la correlación lineal hallada de los estilos de
aprendizajes visual y auditivo es débil, lo que dice no haber ninguna tendencia
funcional Hervás y Hernández (2006) en su investigación denominada
“diferentes formas de enseñar y aprender: Estilos y enfoques de aprendizaje y
su aplicación en contextos educativos” de la Universidad de Murcia. Los
autores plantean la concepción poliédrica de los estilos de aprendizaje, desde
una reflexión teórica. Vislumbran, diferentes cuerpos teóricos que convergen en
las preferencias estudiantiles en el momento de aprender y su aplicabilidad en
los diferentes contextos educativos. Se destaca el estudio por el sentido
reflexivo que contiene y al que conlleva. Si bien es cierto que el concepto es
poliédrico, también es cierto que existen esfuerzos por convergir las diferentes
miradas hacia la teoría de los estilos de aprendizaje. No existe actualmente
ningún modelo integrador, que recoja toda la aportación teórica desde las
diferentes miradas, no obstante si se han realizado decenas de intentos que
40
proponen integrar –básicamente- dos estilos. Con un intento ambicioso y
abarcador, se puede mencionar a Sternberg (1999, citado en Hervás y
Hernández) con su planteamiento del autogobierno mental, sin que se
pretenda haberlo logrado. Dentro de la diversidad encontramos confluencias
importantes como lo es el caso de Sternberg (Ibíd.), que considera a los estilos
de aprendizajes mutables, semejante a la opinión de Gardner (ibíd.) afirmando
además que estos son tendencias globales de los sujetos cuando se enfrentan
a tareas de situaciones concretas. En síntesis, en esta segunda subcategoría,
bifuncionalidad de E.A., un 38.8% de las investigaciones son españolas,
donde Los E.A. permean las metodologías de enseñanza. Se ha entrado en
una nueva etapa de la teoría de los estilos de aprendizaje, no solo los
inventariamos, también se usan al momento de planificar las clases. El mayor
número de trabajos se realizó en el nivel universitario. Se aplicaron: test
CHAEA en un amplio margen (57.1%), además Cristine O`Leary-Rockey en un
(14.2%), y dos investigaciones teóricas que obviamente no aplicaron test.
Tabla 3. Segunda subcategoría Española
Figura: 3. Visión parcial de la primera categoría. *Esta consideración esta
porcentuada con respecto a la categoría. ** Estos aspectos se miden dentro de la misma subcategoría.
Sinopsis de la segunda subcategoría española
(Concordancia entre estilos de aprendizaje y estilos de enseñanza)
consideraciones Valoración de los estilos de aprendizaje
*% de investigaciones de esta subcategoría
41.17
**Tipo de estudio Correlacionales, y estudios teóricos
**Nivel de escolaridad de la muestra Bachillerato (14.2%)
Universitario (42.8%)
Postgrado (14.2%)
Estudio teórico aplicado a cualquier nivel (28.5%)
**Test CHAEA (57.1%)
Cristine O`Leary-Rockey (14.2%)
No aplica a propuesta teórica (28.5%)
41
2.2.3 Subcategoría No. 3 de España Esta subcategoría se corresponde a un grupo de investigaciones que confluyen
en la utilidad práctica de los estilos de aprendizaje como plataforma de
sugerencia para el perfil vocacional, sobredimensionando a su utilidad práctica
en el diseño de currículos ajustados a la atención de la diversidad dentro del
aula. Ahora estamos frente a investigadores, que se aventuran en la tarea de la
orientar profesionalmente al sujeto partiendo de los E.A. Es una utilidad más
allá del comportamiento en ambientes pedagógicos. Se trata de predominios
que marcan una ruta en los proyectos de vida. De ellos citamos a:
Luengo y Gonzáles (2005) en su trabajo denominado “Relación entre los estilos
de aprendizaje, el rendimiento en matemáticas y la elección de asignaturas
optativas en alumnos de E.S.O.” donde emplea un diseño Cuasi-experimental,
fundamentado en la teoría Honey-Alonso. Igualmente, proponen establecer la
posible relación entre las predominancias de los estilos de aprendizaje del
alumnado y el rendimiento en matemáticas, y en segundo lugar analizar, de
manera crítica, si el proceso orientador en la elección del espacio de
optatividad en la E.S.O. se basa en una información objetiva y apropiada para
el alumno.
Las conclusiones exponen que la muestra de estudio presenta relaciones
significativas entre el rendimiento en matemáticas como medio-alto y la
predominancia del estilo teórico y reflexivo, lo que es congruente si miramos el
carácter abstracto de las matemáticas. Las chicas tienen inclinación al estilo
teórico y los chicos al reflexivo, sin existir diferencias de rendimiento con
respecto al sexo.
En respuesta al segundo objetivo, se concluye relación significativa entre el
rendimiento en matemáticas y la optativa. Los de alto rendimiento eligen
francés y los de rendimiento bajo o medio eligen taller de matemáticas y
procesos de comunicación.
El estudio culmina diciendo que: “todo esto demuestra la necesidad de cambio
en las metodologías de enseñanza, sistemas de evaluación, atención y
42
orientación, que hasta ahora no habían tenido en cuenta los estilos individuales
de aprendizajes”. Aunque vale decir, que la muestra no fue aleatoria, no por
criterio intencionado, sino por su accesibilidad. Esto conlleva a tomar con
reserva las inferencias de las conclusiones.
Adán (2004), en su propuesta “Los estilos de aprendizaje en la orientación y
tutoría de bachillerato” pretenden identificar posibles nexos de las modalidades
ofrecidas a nivel de bachillerato y estilos de aprendizajes para mejorar el
rendimiento académico. Este tipo de propuestas obedecen a una nueva
vertiente de investigación sobre E.A., y dentro de ellos citamos a Alonso
(1992), García, Muñoz y Abalde (2002), Camarero, Martin y Herrero (2000) y
Ruiz, Trillos y Morales (2006).
Tabla 4. Tercera subcategoría Española
Tabla: 4. Visión parcial de la primera categoría. *Esta consideración esta
porcentuada con respecto a la categoría. ** Estas consideraciones están porcentuada dentro de la misma subcategoría.
Si bien es cierto y así lo demuestra el consenso de trabajos investigativos, la
existencia de una estrecha relación entre estilos y perfil del estudiante,
no puede establecerse como fórmula estricta en la escogencia del futuro
profesional, más bien es una sugerencia. En este tipo de decisiones es
necesario guardar distancia, pero si tomar en serio las propensiones, por el
Sinopsis de la tercera subcategoría española
(estilo de aprendizaje y vocación profesional)
consideraciones Valoración de los estilos de aprendizaje
*% de investigaciones de esta subcategoría
11.76
**Tipo de estudio
**Nivel de escolaridad de la muestra Bachillerato (100%)
**Test CHAEA (100%)
43
hecho de ser diagnósticos y no pisar el terreno de los pronósticos (Albuerne,
1992) como se consideró en unos momentos iniciales. Pero es valedero que
desde la teoría de los estilos de aprendizaje, el estudiante tenga un
conocimiento explícito de sus capacidades, lo que es considerado como
elemento constructor de su conducta vocacional (Álvarez, 1991; Rodríguez,
1992; Fernández Sierra, 1993; García et al., 1995; Rivas, 1995; Lucas y
Carbonero, 2002).
Tras determinar que los estilos teórico y reflexivo eran dominantes y de mayor
rendimiento académico, se brindan pautas que desde su desarrollo les
refuercen y mediante otras actividades potencien la autonomía en la tarea
académica y laboral, así como fundamentación del estilo pragmático.
Recapitulando sobre la tercera categoría, se afirma que comprende un
porcentaje relativamente bajo dentro de las investigaciones españolas, donde
los trabajos rastreados corresponden al bachillerato, con utilización en ellas de
test CHAEA.
2.3 LATINOAMÉRICA Y EL CARIBE (CATEGORÍA NO. 2)
En esta categoría se observan trabajos que se ajustan a la primera y segunda
subcategoría española. Cabe destacar que en los estudios rastreados, no
podemos presumir de configurar con ellos una tercera categoría como la de
España, aunque no se puede afirmar tampoco la inexistencia de este tipo de
estudio, donde sea de utilidad los estilos de aprendizajes para la orientación
profesional.
2.3.1. Subcategoría No.1de Latinoamérica y el Caribe
O`Hara (2003-2004) con su investigación “Estilo de aprendizaje del niño andino
del sur del Perú: un instrumento para su aproximación” donde de manera
audaz categoriza a niños en un ambiente escolarizado, al que se suman
además uno comunitario y otro lúdico, a partir del test de Felder y Silverman
(1998). El estudio exploratorio de tipo descriptivo-transversal se realizó con una
muestra de 140 niños y niñas provincianos de segundo y tercer ciclo de
44
educación primaria. Como resultado, encontraron estilos combinados
predominantemente, y diferencias en las dimensiones del aprendizaje en
función al ambiente, género y grado. La relevancia de la investigación estriba
en la riqueza misma de las cualidades de los habitantes andinos del Perú que
representan un 35%, y en su diferencia con los que cohabitan en las urbes. Se
toma en cuenta estas particularidades sociales, culturales y ambientales como
factores determinantes en materia educativa y en estas lógicas, construir
currículo de pertinencia. En el mismo sentido apunta Vygotsky (1977 citado en
O’Hara, 2003-2004) sobre el moldeamiento que la cultura ejerce sobre el
individuo. Un aspecto más para destacar, es la construcción de un instrumento
que ellos denominarían Entrevista de estilos de aprendizaje andino, con base
en el modelo Felder y Silverman, y que responde a la medición de sus
necesidades propias del ambiente andino
Labatut (2000) en su propuesta de investigación “Evaluación de los estilos de
aprendizaje y metacognición en estudiantes universitarios”. En el estudio se
aplicó el test de estilos de aprendizaje (CHAEA) y un cuestionario sobre
metacognición, en una muestra de 492 alumnos de la Universidad Pontificia
Católica do Paraná., de derecho, arquitectura, farmacia y pedagogía. La
pretensión era verificar inicialmente los estilos y encontrar posibles vínculos
con procesos metacognitivos.La investigación argumenta que los E.A. y la
metacognición, potencian el proceso de aprendizaje, y la universidad debe
trabajar en ello. Como resultados no se destacan diferencias significativas de
estilos en cuanto a sexo y carrera estudiada, excepto en derecho, donde en el
último año utilizan más el reflexivo que los de primero, quienes prefieren el
estilo activo.
Se halló la acentuación de estrategias metacognitivas con el incremento de la
edad, siendo los estudiantes de pedagogía quienes más les utilizan con
respecto a los iniciantes.
Figueroa, Cataldi, y otros (2004) en el estudio “Los estilos de aprendizaje y el
desgranamiento universitario en carreras de informática” desarrollada con
estudiantes de ingeniería de la Universidad de Buenos Aires. Determinan el
E.A. de estudiantes de informática, quienes presentan estilo sensitivo, seguido
45
muy de cerca por el visual, y estudiantes denominados “no informática” con
preferencia visual, seguida de lejos del sensitivo. Al aplicarles el cuestionario
Felder (1998).
De todo ello, se hipotetiza que “Los estilos de aprendizaje son diferentes para
alumnos de diferentes especialidades de ingenierías” y se cumple para la
muestra de alumnos cuya especialidad es la de ingeniería en informática.
Galdamés, (2007) con su propuesta “Estilos de aprendizaje y su correlación
con el rendimiento académico en anatomía humana normal” de la Universidad
de Talca. Reconocen los múltiples factores que afectan en menor o mayor
grado el aprendizaje estudiantil. En una clasificación, que resulta valiosa y
donde se conjugan: Variables demográficas, familiares, sicológicas,
académicas, y dentro de esta última, se hallan contenido los E.A. Aun, desde
estas consideraciones, en la universidad se emplean diversas estrategias para
un aprendizaje significativo que pueden recogerse en teoría y práctica.
Se pretende diagnosticar los E.A. y determinar sus vínculos con el rendimiento
académico en estudiantes de quinesiología y fonoaudiología, que cursan
anatomía, a quienes se les aplico el test CHAEA.
Como resultado se observan sujetos con diversos estilos, pero de preferencia
en el teórico, mas no de predominancia. Al aplicar la prueba de hipótesis no
paramétrica de Friedman se evidencia que el teórico y el reflexivo difieren
significativamente en cuanto a su preferencia.
En cuanto al rendimiento de los grupos fue homogéneo. Entre esta variable y
los estilos, no se encontraron relaciones significativas, y en esto, -apuntan
ellos- tienen resultados similares a Alonso.
Una tendencia positiva observada fue entre el aumento de la preferencia por el
estilo teórico y los mejores resultados de rendimiento, pero esta correlación no
fue estadísticamente significativa
46
Tabla 5. Primera subcategoría de Latino América y el Caribe
Tabla: 5. Visión parcial de la Segunda Categoría.*Esta consideración esta
porcentuada con respecto a la categoría. ** Estas consideraciones están porcentuada
dentro de la misma subcategoría.
2.3.2. Subcategoría No. 2 de Latinoamérica y el Caribe
La segunda subcategoría Latinoamericana y del Caribe, recoge trabajos que
hacen uso de la bifuncionalidad de los E.A.
Aragón, y Jiménez (2009) con su investigación sobre “Diagnostico de los estilos
de aprendizaje en los estudiantes: Estrategia docente para elevar la calidad
educativa” en la Escuela Superior de Computo Instituto Politécnico Nacional, de
México. Plantea el urgir de procesos pedagógicos centrados en el estudiante.
Proponen determinar los E.A. discentes para luego proyectar estrategias
didácticas que nutran la diversidad de sujetos. Enfatizan en modelos
educativos contemporáneos como el constructivista, explicando el involucrar un
E.A. activo. Contrario a Geijo (2007), quien propone directrices didácticas para
las prácticas pedagógicas tradicionales y contemporáneas. En este sentido,
debe tenerse sumo cuidado, y afirmar que se posibilita mejor un trabajo, desde
Sinopsis de la primera subcategoría Latinoamericana y el Caribe
( Valoración y categorización de estilos de aprendizajes)
consideraciones Valoración de los estilos de aprendizaje
*% de investigaciones de esta subcategoría
57.14
**Tipo de estudio Descriptivo
**Nivel de escolaridad de la muestra Bachillerato (14.28%)
Universitario ( 42.87% )
**Test CHAEA (50%)
Felder, 1998. (50%)
47
las dinámicas mismas realizadas activamente por los sujetos en el proceso de
su aprender, para no generalizar y a la postre excluir, y en este caso a la
posibilidad de abordar la teoría de E.A. desde otros modelos educativos.
Se determina que el E.A. preferente por estudiantes de ingeniería de sistemas
es el reflexivo, sugiriendo acciones didácticas como presentar video y
proporcionar el tiempo suficiente. En segundo lugar está el E.A. pragmático a
quienes se les debe realizar actividades experimentales, proyectos, con
numerosos ejemplos y anécdotas. En tercer lugar estudiantes activo a quienes
les favorecen la dirección de debates, diálogos, presentaciones,
dramatizaciones, tareas novedosas, y tener en cuenta que se les dificulta
analizar e interpretar datos. En menor porcentaje los teóricos, lo que explica el
alto índice de reprobación de las asignaturas. En primer semestre las
asignaturas son un 83% teórica, cambiando hacia el séptimo semestre con un
17% de teóricas. Se halló, en contravía con la literatura científica disponible
que si hay estilos puros y en alto grado, representado en un 86%.
Cabrera (2005) en su propuesta “El papel de los estilos de aprendizaje en la
personalización de la enseñanza del inglés con fines específicos” de la
Universidad de Pinar del Rio en Cuba, con un estudio teórico, tras una
merecida reflexión educativa desde la disciplina del inglés en su país.
Argumenta como se vienen generando ambiente de cambio en la educación
cubana, en lo que a lenguas respecta, y en concreto con el inglés, desde
finales del siglo XX y comienzos del XXI. En el rigor de lo fraguado desde lo
conceptual, curricular, y metodológico, los resultados están esperándose, en la
disciplina de la lengua extranjera.
Es bueno destacar que considera relevante la teoría de los estilos para
docentes y estudiantes. Destaca el aporte de autores a esta teoría, la misma
que considera que arroja luz a docente y estudiantes. Al docente: brinda
orientación del aprendizaje del alumno, individualiza la instrucción, enseña a
aprender desde las preferencias. Para estudiantes: Controlan su aprendizaje,
optimizan sus métodos, reconocen y valoran sus fortalezas y debilidades,
conocen sus condiciones de aprendizaje, superan obstáculos en su proceso.
48
Cruz (2001) en su propuesta “Enseñanza y aprendizaje en la educación
superior: un reto para el siglo XXI”. Desde un enfoque teórico, aborda la
temática de la teoría de estilos de aprendizaje y su vitalidad en la construcción
metodológica para el despliegue de la programación curricular, proponiendo
pautas conducentes a una concordancia y afinamiento. Apunta a la
problemática del proceso de enseñanza aprendizaje desde el punto de vista de
Keefe (1998), donde se dilucida las dificultades en el aprendizaje no con los
contenidos en sí, sino al tipo y nivel de proceso cognoscitivo que se requiere
para aprender en el dominio del contenido curricular y metodológico.
Tabla 6. Segunda subcategoría de Latino américa y el Caribe
Tabla: 6. Visión parcial de la Segunda categoría. *Esta consideración esta porcentuada con respecto a la categoría.** Estas consideraciones están porcentuada dentro de la misma subcategoría.
Es por esta lógica, que el estudio se propone presentar un marco conceptual
de los estilos de aprender y enseñar. Además, aboca a la teoría del proceso del
aprendizaje y las estrategias de enseñanzas en cada uno de ellos.
Sinopsis de la segunda subcategoría Latinoamericana y el Caribe
(Estilos de aprendizajes y estrategias de enseñanza)
consideraciones Valoración de los estilos de aprendizaje
*% de investigaciones de esta subcategoría
42.87
**Tipo de estudio Mixto (33.33%)
Teórico (66.66%)
**Nivel de escolaridad de la muestra
Universitario ( 100% )
**Test CHAEA (33.33)
Abordaje teórico (66.66%)
49
Además señala ser explicita y correspondiente con sugerencias de estilos y la
enseñanza, pero sus proposiciones anotadas, señalan indicaciones
metodológicas generales, sin apuntar en específico a estilo alguno. En lo que
nos identificamos es en la premonición de cambios significativos en la
educación superior en las próximas décadas en el contenido curricular y
metodológico.
2.4. COLOMBIA (CATEGORÍA NO. 3)
Nuestro país, muestra interés especial en la teoría de los E.A., siendo el único
en Latinoamérica que los reconoce formalmente en el decreto 1290 del 2009
del M.E.N. (Falco, 2011). Sin embargo, ante la existe variedad de
investigaciones, todas se ajustan a las dos primeras subcategorías españolas y
a las dos únicas existentes en Latinoamérica y el Caribe.
En agosto del 2005, se realizó el “primer congreso por una educación de
calidad en el Caribe Colombiano” donde la conferencia central titulada “Los
estilos de aprendizaje: enseñar en el siglo XXI” la presento Domingo J. y
Catalina M. Alonso.
2.4.1 Subcategoría No. 1 de Colombia
Corresponde a esta subcategoría las investigaciones, que valoran y
categorizan los estilos de aprendizajes, dentro de ellas citamos:
Correa (2006) en su estudio “Identificación de los estilos de aprendizaje en los
estudiantes de fisiología del ejercicio de la facultad de rehabilitación y
desarrollo humano” Aplica el CHAEA, determinando E.A. activo, seguido del
reflexivo en voluntarios femeninos. Los resultados coinciden con los obtenidos
por Highfield y Alonso (1988) puesto que el estilo activo es característico de
estudiantes de ciencias de la salud y sus especialidades de medicina,
bioquímica, enfermería.
Buchelli (2008) de la Universidad de la Salle, en su propuesta” Inteligencias
múltiples y estilos de aprendizajes en los estudiantes de primer semestre de
contaduría pública de la Universidad de la Salle”, Aplica el test Kolb (1989) a
50
estudiantes de primero en contaduría, y un test de inteligencia múltiple de
Arguelles y Nagles (2002), resultando estudiantes convergentes, o sea
analíticos, racionales, prácticos; propio de estudiantes de contaduría. Siendo
los estudiantes de jornada nocturna los más inteligentes emocionalmente.
Tabla 7. Primera subcategoría Colombiana
Tabla: 7. Visión parcial de la tercera categoría.*Esta consideración esta porcentuada con
respecto a la categoría. ** Estas consideraciones están porcentuada dentro de la misma
subcategoría.
Gravini (2008) muestra en su trabajo descriptivo mediante la aplicación del test
CHAEA “Estilos de aprendizaje de los estudiantes de primer semestre de los
programas de psicología e ingeniería industrial de la Universidad Simón Bolívar
en Barranquilla”, que en los estudiantes, predomina el estilo reflexivo,
independientemente de la carrera cursada, en contraste a Yépez y cols (2001),
quien encuentra un alto porcentaje de sensores extrovertidos, que podrían
equipararse al estilo activo de Honey y Mumford (1986) y que en este estudio
representa un 12.50% de los estudiantes. Además hay estilos puros en
ingenierías en un 89.29% y pocos combinados. En psicología predomina el
Sinopsis de la primera subcategoría Colombiana
(Valoración y categorización de estilos de aprendizajes)
consideraciones Valoración de los estilos de aprendizaje
*% de investigaciones de esta subcategoría
(60)
**Tipo de estudio Descriptivo (100%)
**Nivel de escolaridad de la muestra
Universitario ( 100% )
**Test CHAEA (66.66%)
Kolb,1989 ( 33.33% )
51
estilo reflexivo, aun por encima de los ingenieros en un 7.78%. También se
observa la predominancia de estilos puros 78.78%.
2.4.2 Subcategoría No. 2 de Colombia
En esta subcategoría correspondiente al uso de la bifuncionalidad de E.A.,
citamos:
Aguilar, y otros (2008) de la Universidad Industrial de Santander, con su
propuesta “Los estilos de aprendizaje de los estudiantes en los cursos de
física”, aplica el test CHAEA a estudiantes de primer y séptimo semestre, para
implementar estrategias didácticas acordes en ambientes virtuales. Lo notorio
en el estudio es la implementación de un metodología de Investigación Acción,
lo cual se constituye en una experiencia sui generis. En el curso de las
categorías y Subcategorías propuestas, existe diversidad de variables
asociadas a los E.A., pero enmarcados todos en metodologías distintas a la I.A.
que en sí mismo, se constituye, por el seguimiento del proceso para registrar
los cambios, en una opción interesante.
Los hallazgos muestran predomino el estilo reflexivo, para lo cual se proponen
actividades didácticas como la observación, reflexión sobre actividades,
realización seguimiento y control de portafolios de evidencias de aprendizajes.
Gravini, y otros (2009) en su propuesta “Estrategias de enseñanza en docentes
y estilos de aprendizaje en estudiantes del programa de psicología de la
universidad Simón Bolívar, de Barranquilla”, quien trabajo en el 2008 en la
primera subcategoría, deja en evidencia la evolución de sus trabajos, al
abordar la investigación con criterios de la segunda subcategoría.
Se emplea el test CHAEA para determinar los E.A. en estudiantes y un
cuestionario de estrategias didácticas elaborado por los investigadores para
determinar las pautas metodológicas desarrolladas por los docentes. En el
análisis del presente estudio, se halla un plan diagnostico comparativo entre los
estilos y las metodologías, y aquí el gran valor de este proyecto. De manera
audaz, cotejan los estilos con las estrategias, las que por novedoso del aporte,
52
traemos a continuación: Activo: Foro, Sociodrama, preguntas intercaladas,
proyectos. Reflexivos: Estudio de casos, Ensayos, Resúmenes. Pragmático:
Ilustraciones, Lluvias de ideas, Talleres. Teórico: Mapas conceptuales,
seminario, relatorías, resúmenes.
Tabla 8. Segunda subcategoría Colombiana
Tabla: 8. Visión parcial de la tercera categoría. *Esta consideración esta porcentuada
con respecto a la categoría. ** Estas consideraciones están porcentuada dentro de la misma
subcategoría.
Ahora bien, de acuerdo a la correspondencia planteada, y los resultados de la
investigación, donde se destaca el estilo teórico (30%), y en consideración de
las estrategias didácticas enseñadas, lo docentes afirman utilizar el resumen en
un (48%), pues, facilitan el aprendizaje de los estudiantes. Y se desfavorece el
estilo teórico, por su baja práctica las estrategias de los seminarios, los mapas
conceptuales y las relatorías, al igual que el 17% de estudiantes multimodales,
se benefician de cualquier estrategia implementada. Y el 12% de activos se
enfrentan a metodologías donde es poco frecuente el sociodrama (57%) Foro
(43%) y proyectos (0%). Todo lo anterior deja al descubierto la necesidad de
afinamiento entre las metodologías y los estilos de aprendizajes. En ese hilo
Sinopsis de la segunda subcategoría Colombiana
(Estilos de aprendizajes y estrategias de enseñanza)
consideraciones Valoración de los estilos de aprendizaje
*% de investigaciones de esta subcategoría
(40)
**Tipo de estudio Descriptivo (50%)
IAP (50%)
**Nivel de escolaridad de la muestra
Universitario ( 100% )
**Test CHAEA (100%)
53
conductor llevado por Gravini y colaboradores, es urgente y necesaria, la
continuidad de una IA para corrección de las deflexiones.
2.4.3. Subcategoría No. 3 de Colombia
En el marco de la tercera subcategoría perteneciente a los estudios realizados
en Colombia, aparece Gómez (En curso), con su propuesta: “Estilos de
Aprendizaje y Género en Estudiantes Universitarios y su Incidencia en la
Selección de Programas Académicos”. Manifiesta la necesidad de precisar
cómo se puede orientar la vocación profesional desde el E.A. del estudiante
que ingresan en la Universidad de Atlántico, máxime cuando esta ofrece al
estudiantado una segunda opción a la elegida en primera instancia.
Gómez se apoya en estudios exploratorios, de corte estadísticos que destacan
notables consecuencias académicas, en el marco de precariedades
metodológicas, tales como el rendimiento académico deplorable y deserción y
que esto último, en la Facultad de Ciencias de la Educación en la Universidad
del Atlántico se halla en un 37% para cohortes analizadas 2001-II al 2006-II ,
en los programas presenciales de Ciencias Sociales, Ciencias Naturales,
Idiomas Extranjeros, Lengua Castellana, Matemáticas y Educación Física,
Desatancándose Matemáticas con una deserción del 41.90%, Seguido del
programa de Educación Física, Recreación y Deporte con 41.87%. (Lemus,
2008, citado en Gómez, en curso).
Dentro de los hallazgos preliminares, se determinó que el 57.6% está
satisfecho con su carrera, mientras que un 17% no están satisfecho con su
programa.
Con esta investigación, surge una tercera subcategoría en Colombia. Por
encontrarse en curso, omito el establecimiento de una tercera subcategoría
como tal, y por ende, su no inclusión en la tabla Nº1 donde se muestra una
visión sinóptica del recorrido en el estado del arte. Sin embargo, es para
destacar el aporte que genera, en la utilidad de los E.A. al momento de realizar
una elección de un programa académico.
54
2.5 FUNDAMENTO TEÓRICO-CONCEPTUAL
Se hace pertinente responder en un contexto teórico y epistemológico la
pregunta de investigación a través de una red de conceptos, sin perder su
puntualidad como se muestra a continuación:
2.5.1 Estilos de aprendizaje
Se puede encontrar que los sujetos tienen diferencias en el aprendizaje debido
a dos posibilidades, una primera al considerar una serie de factores que
afectan al sujeto biológico como la cultura, la experiencia previa, la maduración
y el desarrollo, Cornett (1983). Sin embargo esto no explica el por qué
individuos sometidos a igualdad de estas condiciones, aprenden diferentes. Y
como segunda posibilidad, es considerar que los individuos aprenden de
manera distinta (Honey y Munford, 1986). Cuando el preceptor considera y
atiende las diferencias individuales al interior del aula, se facilita el aprendizaje.
Asumimos que el estudiante que aprende es inteligente. Feuerstein y Kozulin
(2002 citado en Vaca, 2008) consideran que a partir de la concepción de la
inteligencia como baja, media o alta, esta además puede ser modificada y
mejorada a través de un proceso de mediación. De tal manera que asumimos
como muy inteligente a los sujetos capaces de adaptarse a los cambios, pero
que es pertinente que en su mediación aprovechemos los E.A., o su mejor
disposición de aprender (Hunt, Butler, Noy y Rosser 1978, citado en Gil, 2007).
La noción de aprendizaje recibe desde los años setenta valiosos aportes
teóricos, contando entre ellos la teoría de los E.A. Comienza desde esa época
a plantearse la necesidad de intervenir educativamente al estudiantado desde
sus particularidades. De allí debe entenderse que la impertinente mediación en
el proceso educativo, trae en consecuencia, funciones cognitivas deficientes
(Feuerstein 1980, citado en Vaca, 2008).
El tema de los estilos de aprendizaje ha sido abordado por numerosos
investigadores, contribuyendo según Wakefield (1992) con dos aspectos
importantes: el diseño de instrumentos para la caracterización de docentes y
estudiantes, como primero, y como segundo, el poder establecer
55
correspondencia entre la enseñanza y el estilo particular del estudiante, lo que
hemos denominado bifuncionalidad de E.A.
Esa variedad de aportes desde diferentes ángulos, han favorecido la
construcción y desarrollo del cuerpo teórico del concepto, generando diversidad
de modelos. No obstante en la variedad de investigaciones y sus dinámicas, se
establece una sinergia confluyente en la elaboración y enriquecimiento de la
teoría de los estilos de aprendizaje, manifestando en común las
particularidades individuales de los sujetos, y que son expresadas al momento
de interiorizar el conocimiento en el proceso de educarse.
La particularidad o diferencia individual de cada sujeto se establecen como
piedra angular en la consolidación de la teoría de los estilos de aprendizajes, la
misma que cobra mayor auge en el ámbito tanto investigativo como académico
con el transitar del tiempo.
Precisar la definición del término es aventurarse en una variedad de propuestas
Gil (2007), Nevot (2007) y Gallego y Alonso (2005), que si bien se presentó
antes, todas confluyen en ser particularidades que se manifiestan en el acto de
educarse. Pero también es cierto que no es tarea fácil de aunarles como para
pretender exponer una sola definición (Witkin, 1985).
No obstante, frente a esta paradoja de la teoría de los estilos de aprendizajes,
se hace necesario que revisemos los diversos enunciados del constructo como
delimitante de la temática, como también el uso o aplicación práctica y su
utilidad. Dentro de la amplia diversidad de definiciones tenemos:
Willing (1987); Figueroa, Cataldi, y otros (2004), manifiestan que estilo de
aprendizaje es un concepto que se superpone al del estilo cognitivo. Es más
comprensible por incluir comportamiento de tipo cognitivo y afectivo al percibir,
interactuar y responder el aprendiz a su contexto de aprendizaje. Acentúan la
noción de estilos cognitivos al contexto de aprendizaje.
56
Hunt, Butler, Noy y Rosser (1978, citado en Gil, 2007), lo describen como “las
condiciones educativas bajo las que un discente está en la mejor situación para
aprender”. Schmenck (1983), ibíd. Los define como “predisposición por parte
de los estudiantes a adoptar una estrategia de aprendizaje particular con
independencia de las demandas específicas de la tarea en cuestión”. Smith
(1988), ibíd. “modos característicos por los que un individuo procesa la
información, siente y se comporta en las situaciones de aprendizaje”
Kolb (1976) “…Algunas capacidades de aprender que se destacan por encima
de otras como resultado del aparato hereditario, de las experiencias vitales
propias y de las exigencias del medio ambiente actual”. Kolb (1984 citado en
Gallego y Alonso, 2005), “nos presenta su modelo de aprendizaje por la
experiencia y afirma que los estilos de aprendizaje se desarrollan como
consecuencia de factores hereditarios, experiencias previas y exigencias del
ambiente actual”
Gonzales (1996 citado en Bustinza e tal, 2005), “tendencia, relativamente
estable, que muestran las personas a utilizar la misma estrategia en
situaciones de aprendizaje”
Duna, Dunn y Price (1979 citado en Gallego y Alonso, 2005) “es la manera por
la que (dieciocho primero y después veintiún) elementos diferentes que
proceden de cuatro estímulos básicos afectan a la habilidad de una persona
para absorber y retener información”
Gregorc (1979 ibíd.). “Comportamientos distintivos que sirven como indicadores
de como una persona aprende y se adapta a su ambiente”
Keefe (1982), “…los estilos de aprendizaje son los rasgos cognitivos, afectivos
y fisiológicos, que sirven como indicadores relativamente estables de como los
discentes perciben, interaccionan y responden a su ambiente de aprendizaje.”
57
No obstante, frente a una amplia variedad de modelos sobre estilos de
aprendizaje, es posible convergirles congruentemente desde las
características propuestas, que si bien se describen con terminologías
diferentes, es viable encriptarles como lo muestra el grafico a continuación:
Gráfico 1. Convergencia de Modelos de Estilos de Aprendizaje
VIVENCIAS (V) O EXPERIENCIAS SENSORIALES CONCRETAS
ADQUISICIÓN VIVENCIAL
Estilo Activo de Honey-Mumford y de Honey-Alonso
PROYECTOS (P) O
EJERCICIOS DE
APLICACIÓN
EXTRA CLASES:
CONSTRUCCIÓN
PRAGMÁTICA
Estilo Pragmático de
Honey-Mumford y de
Honey-Alonso
Estilo
Dinámico de
McCarthy y
Acomodador de
Kolb.
Estilo
Imaginativo de
McCarthy y
Divergente de
Kolb.
REFLEXIÓN (R) O
PROCSOS DE
PENSAMIENTO:
CONSTRUCCIÓN
CONCEPTUAL
Estilo Reflexivo de
Honey-Mumford y de
Honey-Alonso
Estilo del Sentido
Común de
McCarthy y
Convergente de
Kolb.
Estilo Analítico
de McCarthy y
Asimilador
de Kolb.
DOCUMENTACIÓN (D) O COMUNICACIÓN DE SABERES CODIFICADOS:ADQUISICIÓN
DOCUMENTAL
Estilo Teórico de Honey-Mumford y de Honey-Alonso
Fuente: Bustos (2011)
Es diversa la definición del concepto de estilos de aprendizaje. Su acepción
depende del aspecto considerado por los autores, algunos lo precisan según el
procesamiento de la información, otros, como es percibida esa información,
Nos empoderamos de la apreciación de Keefe (1982) y Alonso, Gallego y
Honey (1999), para efecto del presente estudio:
“Los estilos de aprendizaje son los rasgos cognitivos, afectivos y fisiológicos
que sirven como indicadores relativamente estables, de cómo los alumnos
perciben, interaccionan y responden a sus ambientes de aprendizaje”
Ahora bien, esta posición se nutre, al igual que la teoría de la modificabilidad,
en la corriente cognitiva del aprendizaje, (Ramírez, 2008), y acepta
58
propedéuticamente, una división cuadripartita del aprendizaje en línea de Kolb,
Juch, Honey y Munford. Gallego y Alonso (2005) como se describe en la tabla
contigua.
Tabla 9. División cuadripartita del aprendizaje
Tabla Etapas en el proceso cíclico de aprendizaje Año Autor Etapa 1 Etapa 2 Etapa 3 Etapa 4
1966 H. Turner retroalimentación,
evaluación integrar, mapa
posibilidades, decisión
Inversión autónoma
1969 Charlesworth atención desarrollo cognoscitivo expectativas sorpresa
1970 Inst. Pedagógico
de Holanda formación de imagen ordenación formas, conceptos hacer
1971 Kolb Observación reflexiva Conceptos abstractos experimentos
activos experiencias
1973 Euwe acepta como verdadero ordenar realizar planes ejecutar
1975 Ramsden prestar atención pretender compromiso implementar
1976 H. Augstein revisar propósito estrategia resultados
1976 Rowan comunicación pensar proyectar encuentro
1977 Argyris generalizar descubrir inventar producir
1977 Torbert efectos propósitos estrategias acciones
1977 Raming biológico psíquico sociológico psíquico
1978 Mangham observar interpretar ensayar actuar
1978 Pedler evaluación diagnóstico establecer objetivos acción
1978 Boydell información teoría consejo actividades
1978 Hague conciencia conceptos herramientas práctica
1980 Morris revisar el proceso interpretar planear proyectos logros activos
1980 Juch percibir (observar) pensar dirigirse a (planear) hacer
1982 Honey y Mumford
Activo reflexivo teórico pragmático
Fuente: Juch (1987) en Alonso y otros (1994:51), tomado de Domingo y Catalina (2005)
En esta conceptualización se discriminan rasgos cognitivos, afectivos y
fisiológicos, porque tienen que ver, en su orden, con la estructuración del
conocimiento que hacen los estudiantes de manera única, su contenido,
elementos y relaciones. La afectación motivacional que se ejerce desde el
exterior e interior del sujeto sobre el proceso de aprender, dentro de ellos la
motivación, la confianza, la actitud, la visión en la vida, las perspectivas etc. Y
con la herencia que es determinante en las peculiaridades del sujeto y sin lugar
a dudas en los ritmos individuales. No obstante, asumiendo un breve recorrido
histórico en el origen de lo anterior, Kolb (1984), propone explicar la manera
como aprendemos, asimilamos, solucionamos problemas y tomamos
decisiones.
Para Kolb, (ibíd.), el aprendizaje es un proceso, dialectico, adaptativo persona-
ambiente, y creativo; en sintonía con los postulados de Feuerstein (1993),
“podemos decir también que la modificabilidad estructural cognitiva es un
59
proceso que se gesta desde dentro, es autónomo y autocontrolado, en
oposición a otros cambios que afectan al individuo a lo largo de su vida, como
el crecimiento y la maduración” (Ramírez y Roa, 2008:267)
Kolb (1984) genera su concepción de aprendizaje experiencial, realizado en
cuatro momentos cíclicos:
Gráfico 2. Ciclo experiencial de Kolb
Thomson y Aveleyra (2008), de las dos dimensiones del aprendizaje, una
apunta a la forma de percepción de la información o experiencia y la otra al
procesamiento de ella. En su orden constituyen la dimensión abstracta-
concreta, y la dimensión activo-reflexiva.
La percepción puede hacerse a través de los sentidos, inmersos en la realidad
concreta, apoyado en la intuición y no en el análisis, o también se percibe a
través de representaciones simbólicas con interpretaciones conceptuales.
Frente
al primer hecho, estaríamos ante sujetos de experiencia concreta (E.C.),
mientras que los siguientes serán sujetos de conceptualización abstracta
(C.A.).
En la segunda dimensión del procesamiento de la información, hallamos
sujetos que se involucran actuando en la experimentación activa (E.A.),
mientras que otros son más dados a la observación reflexiva (O.R.).
60
Tabla 10. Características del estilo de aprendizaje según Kolb
Estilos de aprendizaje y sus características según Kolb
Experiencias nuevas a
plenitud.
Tendencia a líder.
Estilo de Aprendizaje
ACOMODADOR
Experiencia
Concreta
E.C.
Estilo de Aprendizaje
DIVERGENTE
Imaginativos
Experimentación
Activa
E.A.
Dimensión del
aprendizaje
Observación
Reflexiva
O.R.
Razonamiento
Hipotético-Deductivo
Estilo de Aprendizaje
CONVERGENTE
Conceptualización
Abstracta
C.A.
Estilo de aprendizaje
ASIMILADOR
Razonamiento
Inductivo.
Creador de
modelos.
Según Kolb (1984) son cuatro los estilos de aprendizaje:
Convergente: conceptualización abstracta, experimentación activa. Sujetos de
razonamiento hipotético-deductivo.
Divergente: Experiencia concreta, observación reflexiva. Sujetos imaginativos.
Asimilador: Conceptualización abstracta y observación reflexiva. Sujetos de
razonamiento inductivo, creadores de modelo teórico.
Acomodador: Experimentación activa y experiencia concreta. Sujetos que viven
a plenitud las experiencias nuevas. Presentan tendencias de liderazgo.
Posteriormente, en consideración de Honey y Munford (1986), partiendo del
ciclo experiencial del Kolb, sobre el aprendizaje, realizan trabajos investigativos
en el Reino Unido, en el que sujetos bajo las mismas condiciones unas
aprenden y otras no. Explicando que los estilos de aprendizaje generan
respuestas y comportamientos diferentes ante el aprendizaje.
Para Honey y Munford (1986) los estilos de aprendizaje son cuatro, que
responden de manera cíclica en un mismo sujeto: Activo, reflexivo, teórico y
pragmático.
Consideremos algunas características propias de cada estilo:
61
Activo:
Sujetos implicados de manera inmersa y directa sin prejuicios. Entusiastas y
experimentadores de nuevas experiencias. Entusiastas y tendencia a primero
actuar y luego pensar en las consecuencias de sus actos o comportamientos.
Presentan tendencia al liderazgo. Cambian con facilidad de tarea.
Se favorecen si:
Las clases se les realizan en un flujo dinámico, dándoles oportunidad de
involucrarse, de colaborar de competir, de expresarse.
Se desfavorecen si:
Se les presentan clases monótonas, pasivas, o impidiéndoles la libertad de
expresarse.
Reflexivo:
Sujetos analíticos, que reúnen datos y los sopesan, antes de llegar a una
conclusión. Presentan tendencia a demorarse en los ejercicios por el consumo
del tiempo en el análisis desde diversas aristas.
Se favorece si:
Se les concede tiempo en la realización de su tarea en el proceso de
aprendizaje. Cuando se les preguntan temáticas que exijan del análisis.
Se desfavorecen si:
Se les presiona por el tiempo en el cumplimiento de sus deberes, o no se les
concede el suficiente. Se les desmotiva cuando se le presentan temáticas con
argumentación endeble o falta de fundamentos sólidos.
Teórico:
Sujetos que son capaces de integrar las observaciones a teorías lógicas.
Colectan y registran metódicamente la información. Son analíticos y sintéticos.
Profundos de pensamiento. Huyen de lo ambiguo.
Se favorecen si:
Se les presentan los temas organizados. Se les permite trabajar con
esquemas, matices u otra estrategia de organización del conocimiento.
Se desfavorecen si:
62
Se les presentan los temas desconectados en su orden lógico. Están en
evidente desventaja al presentarles tópicos con un marco teórico-conceptual
escaso.
Pragmático:
Sujetos que gustan de la aplicación y práctica de los conocimientos adquiridos.
Les gusta experimentar. Les gusta resolver problemáticas reales de su entorno.
Permanecen interrogándose sobre el para que le sirve el aprender esto o
aquello.
Se les favorece si:
Se realizan prácticas donde repliquen el marco teórico aprendido. Se les
muestra la aplicabilidad de los conocimientos.
Se les desfavorece si:
Lo aprendido no es llevado a la práctica, o no tiene relación con sus
necesidades inmediatas, porque la teoría en este caso, le carece de utilidad.
Monereo y Castelló (2000) presentan que “En todo caso, la clave de toda
actuación estratégica es la toma consciente de decisiones, que permite,
como hemos visto, analizar y optimizar los propios procesos de aprendizaje y
pensamiento, y, en consecuencia, mejorar ese aprendizaje y los resultados y
producciones que de él se deriven.” De aquí la importancia del dominio
disciplinar y pedagógico de los docentes mediadores, lo que se estima en la
necesidad de asumir rol de estratega en el momento de desplegar el proceso
de enseñanza con la pertinencia de las particularidades de los sujetos que
aprenden. Dunn y Dunn (1999) los estilos de aprendizaje pueden ser utilizados
para diseñar estrategias de instrucción individualizadas o para seleccionar el
método de enseñanza más efectivo. Es necesario, como mediador, reconocer
que los dos postulados básicos de la modificabilidad estructural cognitiva: El
organismo humano es un sistema abierto y con un alto nivel de flexibilidad. La
modificabilidad cognitiva se explica a través de los procesos de la experiencia
del aprendizaje mediado (Ramírez y Roa 2008)
63
2.5.2. Modelos pedagógicos
Los modelos pedagógicos; implican el contenido de la enseñanza, el desarrollo
del niño y las características de la práctica docente (Blanco y Hurtado, 2009).
Un modelo pedagógico está constituido por dos dimensiones, una primera
dimensión instruccional, y una segunda dimensión regulativa, según (Díaz,
2005). Ambas se determinan mutuamente así como determinan un contexto
escolar de manera peculiar.
La dimensión instruccional se compone por tres sistemas de mensajes: el
currículo, la pedagogía y la evaluación. En esta dimensión el modelo
pedagógico es considerado todo el andamiaje pertinente y eficaz que
estructurado de manera lógica y particular, se encarga de organizar, transmitir
y evaluar el conocimiento en la escuela. Es aquí donde se determina el modo
de mediación educativa. La decisión es tan crucial que, si la mediación no es
pertinente en el proceso educativo, en consecuencia, se genera en el
estudiantado funciones cognitivas deficientes (Feuerstein, 1980 citado en
Vaca, 2008)
La dimensión regulativa, se compone a su vez del tipo de relación social y del
tipo de relación de control intrínseco.
Ahora bien, dentro de las dinámicas propias de un modelo pedagógico, no es
posible enmarcarlo para definición en rasgos estáticos. Es intencional el
intentar establecer rasgos y relaciones comunes que construyen el tipo de
relación social deseado. Esta descripción, no obedece a un tipo exclusivo de
institución, aunque cada institución tenga su aparente diferencia en las
manifestaciones propiamente dichas. Cada institución ejecutara, por ejemplo,
su sistema de control social, sin pensar en la distancia o acercamiento de su
acción frente a otras instituciones siendo movidas por el mismo modelo
pedagógico.
Luego el modelo pedagógico, permite referenciarle así como describirle, pero a
su vez, clarifica su objeto teórico.
64
En lo concerniente a Colombia, los modelo pedagógico, cuales quieran que
sean, están regulados por el discurso oficial, que son las disposiciones del
estado, a través de la Ley General de Educación de 1994, y sus decretos
reglamentarios, sin detrimento de la libertad que poseen las instituciones de
optar por tal o cual modelo. Sirve entonces de garante orientador desde
posiciones deseadas por el estado, el discurso oficial, al mediar en los modelos
pedagógicos adoptados.
Luego, ese discurso oficial, no coarta en forma cualquiera a institución alguna
en su modelo pedagógico, sino que antes por el contrario, lo legitimiza. Esa
legitimización es construida con la guianza del currículo oficial, de los objetivos,
de la organización escolar, de los tiempos, de las áreas obligatorias y optativas,
estándares, etc. Todo apuntando desde lo general a lo particular. Desde el
discurso oficial al modelo pedagógico optado institucionalmente. Es por ello
que el estado es reflejado en los sujetos y en el tejido social que la escuela
crea, razón por la cual el docente se convierte entonces en un agente político.
Los modelos son entonces paradigmas, maneras de ver y construir individuos,
sociedad y país.
“Los paradigmas son modelos que explican la realidad y dirigen las
investigaciones hacia los hechos y teorías predominantes en el ámbito
científico y tecnológico; la pedagogía, por ejemplo, ha transitado por
diversos paradigmas que le han permitido diseñar modelos de
enseñanza-aprendizaje” (Aragón y Jiménez, 2009).
Esto indica que efectivamente un modelo corresponde a la presunción de una
realidad, empírea, objetiva. La lectura del objeto de estudio puede variar,
originando cambios sustanciales logrando desembocar en nuevos modelos.
Los modelos pedagógicos, han cambiado en el tiempo, precisamente porque
las lecturas que se hacen de lo real, ha sencillamente cambiado. De aquí se
deduce que los modelos pedagógicos no son estables en el tiempo. Como
tampoco es exacto afirmar que uno es mejor que otro, solo que alguno o
algunos, no corresponden pertinentemente con los tiempos Hervás, R.,
Hernández, F., (2006). Y su variación es notoria por el hecho del proceso de
65
falsación científica, que ha permeado los esquemas de los modelos
pedagógicos a través de la historia de la educación universal.
Hablamos así de modelo tradicional y modelos mediacionales. Aunque
disentimos en lo tradicional porque se asume esta catalogación solo para el
conductismo y sus modalidades, cuando antes de fines del siglo XIX, ya se
ejercitaban practicas docentes. Con esa posición se detenta que el
tradicionalismo es el equivalente a conductismo, de lo cual clara, certera y
expresamente disentimos. No obstante, el modelo tradicional encajado como
heteroestructurante, ha dominado en la mayor parte de las instituciones
educativas a lo largo de la historia humana (De Zubiría,2006).
En términos amplios, el conjunto de concepciones pedagógicas consideran
como finalidad del proceso el desarrollo humano, su promoción, su crecimiento
como individuo y como sociedad. El asunto se intrinca al momento de intentar
establecer alcances sobre la definición de desarrollo humano. Según Coll
(1987), esa divergencia se vislumbra en la visión de autores que consideran el
desarrollo humano como proceso interno a la persona, otros como externo, e
incluso otros como producto de ese dialogo entre las estructuras internas y
externas de la persona.
Teniendo en cuenta el predominio interno o externo a la persona sobre el
concepto del desarrollo humano, Not (1989), plantea que los modelos
pedagógicos se agrupan en heteroestructurantes y autoestructurantes, que en
otras palabras corresponden a los modelos asociacionistas o conexionistas y a
los modelos mediacionales. En todo caso, el primer grupo denominado
heteroestructurante, o bien llámese asociacionista, está conformado,-desde
nuestro punto de vista- por la agregación de los modelos: tradicional y
conductista con sus matices. Caracterizados ambos por la presunción de la
responsabilidad y control del aprendizaje por parte del docente, en tanto que el
estudiante es receptor o depositario, que memorísticamente demuestra cuanto
a aprehendido. El segundo grupo, denominado autoestructurante o
mediacionales, está constituido por un conjunto de teorías o paradigmas
pedagógicos, donde lo esencial repercute sobre el estudiante, quien es dueño
66
de su propio aprendizaje, y el docente es un orientador o mediador del proceso,
en tanto que el estudiante se aproxima o construye su propio saber.
Un tercer agrupo o consideración es la educación dialógica, donde se reconoce
progresivamente en teoría y praxis el reconocimiento de las capacidades
cognitivas del estudiantado, y su permisión de cuestionamiento, discusión y
construcción de la información con sus pares en el marco de la interacción
comunicativa y la búsqueda colectiva de sentido y un verdadero dialogo
(Biesta, 1995; Burbules y Bruce, 2001; Fe y Alegría, 2003; Citado en Velasco y
De González, 2008).
No obstante, y reconociendo la enseñanza dialógica, nuestro trabajo está
centrado teóricamente en los dos primeros grupos denominados auto y
heteroestructurante, los mismos que recogen los modelos didácticos
analizados.
Los modelos auto y heteroestructurante, implican al individuo como gestor o
receptor de información, respectivamente, esto implica la necesidad de
considerar, a partir de allí, que si los cambios son gestados de forma autónoma
y con efectos globales, el individuo se transforma en un pensador
independiente y autónomo (Yuste, 1994 citado en Ramírez y Roa, 2008), o un
repetidor mecánico. Según el modelo que le implique afectación.
En cuanto al tradicionalismo y el conductismo, les consideramos como dos
posiciones absolutamente diferentes, puesto que el conductismo nace y se
nutre de una disciplina específica, la psicología, rama que ha vertido bastante
contenido para desenmarañar concepciones pedagógicas permitiendo entender
mejor la praxis enseñanza-aprendizaje, mientras que el tradicionalismo como
tal, ha sido una práctica educativa desde los inicios mismos del saber humano
más de tipo experimental que fundamentada y sistematizada†*, pero en todo
caso apoyada en modelos desde la filosofía, la teología, ( Servicios educativos
† Para el Dr. Lucio, (1989), Ciencia no es algo que se defina por categorías a priori. Se
identifica más con un proceso histórico donde el saber social se sistematiza y organiza, se
especializa, construyendo su objeto y metodología hasta ser canonizada como “saber
científico.” Se refiere en este sentido a la pedagogía y a la didáctica.
67
DEI, 2002:20), en la anunciación de un conjunto de tradiciones, la circulación
de hábitos mistéricos, la divulgación de diversidad de saberes y que en todo
caso obedece a una disposición que propia o ajena se constituye en
instrumento orientador de una práctica bien hoy en día le consideremos a
Través de muchas dudas su grado de validez. “El proceso educativo puede
desarrollarse de una manera artesanal, casi que intuitiva, como lo han
desarrollado todos los pueblos en el transcurso de su historia” (Lucio, 1989),
considerando un saber implícito, que de los pueblos constituye el acervo
cultural denominado “saber educar”, que en el transcurso de su praxis se
sistematiza originando la pedagogía. Dentro de la consideración del modelo
pedagógico tradicional, fueron pedagogos Platón, Jenofonte y Aristóteles, así
como personajes de la reforma: Comenio, Rousseau, Montaige y Pestalozzi,
porque pensaron de manera crítica sobre problemáticas discurridas en la
educación, con el interrogante del saber entre lo científico para los primeros y
el inicio de las ciencias para los segundos, dado que se hace pedagogía
cuando se reflexiona en torno a la educación de sus cómo, del por qué, sus
hacia donde (ibíd.).
Posteriormente nace el conductismo con sus máximos representantes durante
el siglo XIX, hablamos de las teorías propuestas por J.B. Watson, E.L.
Thorndike, y B.F. Skinner, como también de las experiencias de laboratorio
sobre aprendizaje en animales adelantadas por el fisiólogo Iván P. Pavlov.
En cuanto al conductismo, decíamos que proviene del campo de la psicología,
la que atendiendo su objeto de estudio, según Baray (2008), puede dividirse
en dos apartados, los que a su vez se dividen en tres cada uno. En la etapa
pre-científica, que coinciden con tres grandes orientaciones de la filosofía: La
aristotélica, la racionalista, el empirismo y el asociacionismo Inglés.
El segundo apartado, considerado científico, está consolidada en tres
paradigmas: el estructuralismo y el funcionalismo, el conductismo, y la
psicología cognitiva. Esto demuestra un alto grado de asociación entre la
psicología y la pedagogía.‡
‡ Según Nassif (1967), la pedagogía es hoy una disciplina autónoma como lo es la psicología,
68
Sin embargo son muchos los académicos e investigadores que fusionan el
tradicionalismo con el conductismo:
“Hasta bien entrado el siglo XX, el paradigma educativo seguía el
modelo tradicional de enseñanza aprendizaje; este modelo correspondía
a la teoría educativa conocida como el conductismo, en el cual el
aprendizaje de los alumnos se media por conductas observables”
(Aragón y Jiménez, 2009).
En todo caso, los modelos pedagógicos, como presupuesto de aplicación o no
sobre una realidad educativa, están por fuera del plano de las acciones,
enmarcados en cierta manera en el reflexionar desde las teorías que se
constituyen en fundamentos arquitectónicos de la concepción de educación.
Para efecto de la presente investigación, aunque teniendo en cuenta la claridad
realizada entre modelo tradicional y modelo conductista, cuando nos utilicemos
el término tradicionalismo, o tradicional, se hará para referirnos, sin discriminar
sobre el conductismo, a un tipo de prácticas conductuales o tradicionales, que
en su conjunto tienen observaciones que convergen, como para agruparles
dentro de las teorías heteroestructurantes.
Para tal efecto se presentan observaciones que en términos del presente autor
apoyado en Pozo (1999 citado en Martínez, 2008) son:
“a. El alumnado es considerado pasivo y receptor, con la mente en
blanco en la que pueden cincelarse los conocimientos que provienen del
libro de texto o de la mente del docente.
sin embargo la utilidad de esta última al campo pedagógico es indudable. El ser humano, es un ente psíquico espiritual, que puede llegar a ser sujeto de aprendizaje, de allí el supuesto de la interdisciplinariedad, pedagogía-psicología, sin perder cualquiera de las dos ciencias su independencia. Ahora bien, adentrándonos en el mundo educacional, requerida por este, la psicología se constituye en herramienta de la teoría y práctica para la ciencia educativa, quien estaría, en este caso, determinando los propósitos. Aunque puede ser que se ingrese al campo educativo, además, con una preeminencia exclusivamente psicológica. Sin embargo, y para nuestro caso, es la pedagogía la que define los sentidos en la incursión de la psicología o de otras disciplinas, sin perjuicio de la asistencia de la pedagogía a la Psicología cuando lo requiera. La pedagogía requiere comprender los múltiples factores educativos, inclusive el sicológico.
69
b. enseñar es la actividad por la cual el que enseña expone, verbal,
clara, ordenada y lógicamente los contenidos curriculares al que esta
carente de ellos y que deben ser memorizados tal como se exponen.
c. El cuerpo de conocimientos se estima cerrado y absoluto. Los
contenidos se consideran un reflejo exacto de la realidad y se
desarrollan por acumulación.
d. La intencionalidad del docente se hace evidente en el esfuerzo en
transmitir los conocimientos para que los comprendan. Requiere una
competencia profesional entendida como un conocimiento con
profundidad de la disciplina que imparte.
e. No existe compromiso mutuo entre el docente y discente, no ya sobre
los conocimientos que son relevantes para el segundo, sino sobre la
misma acción de enseñar, se enseña a pesar del alumno. Las únicas
exigencias que se le hace son que procure orden y acate disciplina.
f. Desde una visión pragmática y más cercana al aula este enfoque de
enseñanza se caracteriza por el marco teórico que viene descrito…”
2.5.3 Modelos Heteroestructurantes: Modelo Conductual y Tradicional
El enfoque conductual se enmarca en el modelo heteroestructurante. Nace en
los años 20 con Watson, extendiéndose hasta los 60/70 Sin lugar a dudas
desde su tiempo los enfoques conductuales sobre el aprendizaje se irguieron
como un avance significativo en la interpretación de la praxis educativa.
Permitió la formulación de leyes sobre el aprendizaje entre ellas la ley de la
disposición, del ejercicio o la repetición y la ley del efecto. Rojas, (2006). En
esta instancia, pasamos del modelo tradicional propiamente dicho, hacia el
modelo conductual, dentro del cual encontramos el conductismo clásico, el
operante y el instrumental.
Aunque hoy día se manifiestan más dentro de la práctica educativa al interior
de las aulas de clases, en teoría no son muchos los defensores del ejercicio
conductual. Según Reich, (1993 citado en De Zubiría, 2006), el 85% de las
escuelas norteamericanas son de tipo y enfoque tradicional. Ante lo cual
70
expresa su preocupación por el lento cambio de la escuela, frente a los
cambios ligeros en la economía y la sociedad actual.
Gimeno y Pérez, (1992 citado en Martínez, 2008), “La perspectiva tradicional
ha venido dominando y domina nuestros centros educativos”. Dentro de las
cualidades del enfoque conductual del aprendizaje, se numeran una serie de
características (Rojas, 2006, 70 ibíd.) bajo la etiqueta de positivas o negativas a
saber:
Aportes positivos:
1. Al centrar su atención en la conducta observable. Esta es verificable
y se puede contrastar con la realidad.
2. El hecho de que la conducta sea observable permite cierto grado de
cuantificación (se pueden establecer criterios de medida)
3. Los fenómenos conductuales son detectados por los sentidos, por lo
tanto en la planificación educativa los objetivos deben redactarse de
manera que puedan ser observados al finalizar el proceso.
4. En la planificación educativa, el análisis de tareas observables ayuda
a establecer jerarquías de aprendizajes como consecuencia lógica
que debe seguir el aprendiz para la captación de un conocimiento o
para el desarrollo de una destreza especifica.
5. La evaluación de los aprendizajes se centra en el resultado final
(evaluación sumativa). La evaluación formativa solo orienta hacia el
logro de la conducta esperada.
6. El concepto de memoria se transforma en el hábito el cual se
almacena y se recupera para su uso posterior.
Puntos débiles:
1. Es excesivamente reduccionista. Por ejemplo, se limita el aprendizaje
a impulsos orgánicos básicos.
2. La concepción mecanicista del organismo no explica el aprendizaje
que no va seguido de esfuerzo.
71
3. Considera al ser humano como un organismo vacío, es decir se
desconoce lo que ocurre dentro de él (caja negra), por lo tanto de lo
que no se observa no se puede decir nada.
4. No todas las conductas son aprendidas, hay conductas instintivas.
El modelo tradicional y conductual, recogidos en el anterior apartado en el
modelo heteroestructurante, ha sido y esta aun fuertemente arraigado en la
enseñanza de las ciencias naturales. En este enfoque, el conocimiento
científico es una verdad definitiva, saberes absolutos que se tiene que
transmitir desde las diferentes teorías científicas, en vez de considerársele
aproximaciones. Por tanto el docente es una fuente fidedigna e irrefutable de
información científica.
En una investigación de la Fundación Promigas (2007), en su introducción se
plantea la importancia del currículo de las ciencias naturales y educación
ambiental en aspectos teóricos y epistemológicos (cómo se enseña, cómo se
aprende y cómo se evalúa). Relevancia misma que surge en los Estados
Unidos de Norteamérica, y no precisamente por estímulo propio, sino ajeno.
Cuando en 1957, el “Sputnik” Satelizaba la tierra. El logro Ruso era evidente,
ante la mirada autocuestionadora de los E.E.U.U. y occidente. A partir de allí,
en estas regiones, se generan estudios curriculares de las ciencias
experimentales a partir de los años setenta, en intento de respuesta a la crisis y
el evidente atraso.
En este punto es incuestionable, el desfase de la enseñanza conductual con
los requerimientos del entorno, visibilizado en el espejo de la U.R.S.S. Se
debía actuar al respecto en el ámbito educativo. Surgieron críticas a las
prácticas educativas en el sentido de proporcionar descripciones cuantitativas
de la conducta “externa” desconociéndose el estado interior del individuo y por
supuesto, con ellos, el desconocimiento de los procesos mentales que podrían
facilitar o aun mejorar el aprendizaje.
72
Se vivía sobre el pre-supuesto de que el saber científico es solo para los
estudiantes “capaces” de aprender ciencias, el resto pertenece al grupo que
carecen de tal capacidad. Exclusión reflejada a nivel social.
Esa antigua forma de aprender entraba en su periodo de decadencia,
vislumbrado por la búsqueda de nuevas formas de aprender y por supuesto de
enseñar. Pero, sería injusto hablar de su relego sin confirmar que en su
momento aportó al proceso educativo. Ahora simplemente es una forma de
enseñanza descontextualizada, que se trabajó sobre el imaginario que los
estudiantes a través del tradicionalismo han logrado producir conocimiento
científico, cuando los científicos lo han construidos en procesos complejos.
2.5.4. Modelos Autoestructurantes: Constructivismo y por
Descubrimiento.
2.5.4.1 Constructivismo
No obstante, de las deficiencias del planteamiento conductista, se nutre el
nacimiento del constructivismo (aun, dentro de la corriente cognitiva§),
impactado por escuelas de europea de la Gestalt, Piaget, y Vygotsky.
En esa búsqueda de cambio desde nuevas formas de aprender y enseñar, se
permuta otro tipo de intervención mediada. Es decir, nos dimos cuenta que un
cambio educativo seria producto de otro tipo de intervención de acuerdo a la
exigencia de los tiempos.
§ El constructivismo presenta diversidad de enfoques, tal como el radical quien considera
que el elemento social es irrelevante y la elaboración es individual, el social, quien considera
una elaboración a partir del elemento social como condición necesaria y suficiente, el
cognitivo que considera al elemento social como coadyuvante pero no esencial y el
sociocultural que considera el elemento social como necesario pero no suficiente en la
elaboración. Per se la diversidad de enfoques, para efecto del presente estudio, al
constructivismo le caracterizamos como modelo autoestructurante, por su mayor grado de
relación con este, frente a un modelo heteroestructurante, como lo explica Serrano y Pons
(2011), “Finalmente (“quien construye”), el sujeto que construye el conocimiento es, para
cualquier tipo de constructivismo, un sujeto activo…”
73
Para Feuerstein, cuando la mediación es pertinente, el cambio (aprendizaje en
el sujeto) puede sobrepasar los niveles pronosticados para el individuo según
su desarrollo (Ramírez y Roa, 2008), y por supuesto que los individuos
desarrollados, potencian la sociedad
La sicología, quien ha realizado aportes sustanciales en materia educativa,
toma nuevamente la iniciativa. Es en Norteamérica, en los albores de los
setenta, donde la orientación gira de conductista a cognitiva. Los influjos
Alemanes de la Gestalt en sus consideración del aprendizaje como proceso
que organiza y reorganiza cognitivamente el campo perceptual. El sujeto, -para
este planteamiento- participa de la dinámica.
Pronto surgiría la teoría del procesamiento de la información, sustentada en la
metáfora del ordenador. Ingresándose de esta manera al estudio de los
proceso mentales, excluidos por el conductismo. (Carrascal Nohemí,
conversación en clases. “Teorías y enfoques del aprendizaje”, 2009).
Se aviva el interés por procesos sicológicos básicos tal como la atención, la
percepción, el lenguaje y la memoria.
Son diversos los aportes teóricos que nutren el constructivismo: Piaget
(epistemológicamente): El conocimiento como constructo y los niveles de
desarrollo cognitivo. Ausubel: El aprendizaje significativo. Vygotsky: Zona de
desarrollo próximo y el docente mediador.
Todo ello, conducente a finales de los 60 y comienzo de los 70, hacia el
surgimiento del aprendizaje por reestructuración, donde el alumno es
completamente activo, (Bara, 2008). El sujeto parte del saber previo para
elaborar su conocimiento, reconociéndose así procesos intrínsecos al ser.
El aprendizaje deja de ser mecanicista, reduccionista, externo. El estudiante
abandona el puesto de depositario para tomar el rol de agente activo en el
aprendizaje, donde “imbrica o teje” el saber antiguo con el nuevo. Cada sujeto
aprende de manera individual y particular, aun frente a un mismo proceso,
siempre de forma activa, por relación de conocimientos nuevos y los ya
poseídos (Coll, 1987, 1990, 1993).
74
Díaz-Barriga (2005citado en Díaz Barriga, 2009). “Sostiene que la historia del
pensamiento educativo del siglo xx se puede catalogar como una historia de
lucha contra la enseñanza libresca, y que toda reforma busca enfrentar esta
situación y promover otro tipo de aprendizaje”.
Aragón y Jiménez (2009).
“La organización para la Cooperación y el Desarrolla Económico (OCDE)
recomendó que el modelo educativo debía orientarse al alumno y al
aprendizaje (acorde con la teoría constructivista)…Así mismo, emitió una
serie de recomendaciones para las organizaciones educativas,
enfatizando que la educación debía promover el saber ser, saber
conocer, saber hacer y saber convivir, desarrollando una educación
integral personalizada.”
2.5.4.2 Por Descubrimiento
La existencia natural del hombre en el mundo físico pone de relieve
permanentes cuestionamientos que alimentan el espíritu de la ciencia. Ese
mundo físico ofrece un número infinito de posibilidades en la construcción de
conocimiento soportados en la formulación de leyes y principios por parte del
científico. El mundo ofrece eso, problemas que se deben resolver, bajo la
premisa de desarrollo humano. Los sujetos aprenden del entorno en forma
directa o mediada, es decir, que la experiencia que brinda el entorno a un
sujeto, es mediada por maestros, padres, pares etc.). En todo caso, las dos
experiencias no son excluyentes (Feuerstein, 1993 citado en Ramírez y Roa,
2008), y siempre se está abierto a los dos tipos de estimulaciones.
En el aprendizaje, consecuentemente, está implícito el concepto de desarrollo
humano. En el aprendizaje de las ciencias naturales, se solapa el
megacontexto natural anterior, para permitir que el educando desarrolle
destrezas y habilidades que son propias del carácter científico.
75
Si las ciencias tienen su propia epistemología recurrente desde el método
científico, el estudiante debe emular tal perfil, ajustándose en el proceso
educativo a semejante canon.
En sus argumentos, el aprendizaje por descubrimiento cuenta con
amparadores tales como Kilpatrick (1990), Porlan (1990) y Dewey (1985). Pero
también con detractores, que sustentan la tesis de la no posibilidad que los
estudiantes presenten el mismo nivel de pensamiento y abstracción del
científico y por ende, el impedimento de suceder en el trabajo propio de la
ciencia. La demanda exigente del trabajo científico, les ubica en niveles
cognitivos que contienen habilidades superiores del pensamiento, no pensando
frente a una situación en la superficialidad (detractor) sino en las leyes y
principios que conllevan.
En el desarrollo curricular se pretende impulsar al estudiantado hacia la
consecución de habilidades del pensamiento que pueden ser habilidades
básicas y habilidades superiores de pensamiento. Entre las habilidades básicas
de pensamiento encontramos: capacidad para identificar un problema y
suponer su solución; establecer diferencias, semejanzas, correspondencias,
agrupamientos y definiciones, relaciones, identificación causa efecto. Y de las
habilidades superiores, apoyadas en las habilidades básicas: habilidad para
resolver y analizar situaciones complejas (en el uso de relaciones,
transformaciones y secuencias), habilidad para tomar decisiones (basados en
clasificaciones y relaciones), habilidad para responder frente a situaciones con
el pensamiento crítico como herramienta, habilidades de fundamentación
creativa para la elaboración de productos novedosos, adecuados, pertinentes,
Toro (2002). El núcleo del problema radica en el bajo número de estudiantes
que lograrían el nivel superior de pensamiento requerido para la emulación del
trabajo científico.
Está planteado el reto para quien asuma la enseñanza por descubriendo. Y una
buena forma de enfrentarle es reconociendo las características y
potencialidades del alumnado, pero además la necesidad de intervenirle
eficazmente para lograrlo, tal como lo afirma Piaget (1978), …por su parte, el
desarrollo humano en términos cronológicos y cognitivos coaligados y
76
sucesivos. Pero además, con la existencia de factores intervinientes de los que
sería modelados: la maduración, la experiencia, el medio social y la auto-
regulación. Desarrollo y factores que en estudiantado se están gestando en sus
iniciaciones.
2.6 ENSEÑANZA DE LAS CIENCIAS NATURALES Y EDUCACIÓN
AMBIENTAL.
En la era de la información y del conocimiento, el poseer recursos naturales y
no saber cómo disponer de ellos, representa una ventaja inferior, frente a la
nación que le dé un valor agregado a tal recurso. De aquí la suma importancia
sobre la calidad en la enseñanza de las ciencias. El aprendizaje de las ciencias
naturales debe romper la rigidez esquemática del conocimiento acabado, cuya
apropiación sirve de manera inmediata y casi absoluta para la aprobación de
los periodos o año académicos.
Aunque el aprendizaje puede llegar a ser directo, incluso habitual, afectando la
cognición durante toda la vida, según Fernández y Ballesteros (1992, citado en
Ramírez y Roa, 2008) al producirse de manera mediada (Experiencia del
aprendizaje mediado, EAM) se requiere del agente mediador y de la selección
del estímulo más apropiado para concentrar la atención del sujeto, afectando el
desarrollo cognitivo y comportamental. La dimensión cognitiva y
comportamental mejoradas, por la mediación, serán susceptibles a mayor
capacidad de modificabilidad (Feuerstein y Rand, 1974).
Por tanto el aprendizaje mediado, en ciencias naturales, presenta mayor
alcance que el aprendizaje directo, como lo afirma García y Flores (1999), pues
en el diario vivir se encuentran múltiples aplicaciones de las ciencias naturales,
uno esta tan acostumbrado a ellas, que no reflexiona sobre su naturaleza y
principios. Esto ha conducido a la desidia del aprender ciencias.
Aún, dentro del aprendizaje mediado, se hallan diversos obstáculos a los que
se enfrentan los docentes en la enseñanza de las ciencias (Bonilla et al., 1994;
Calixto, 1996b, citado en: García y Flores, 1999):
77
1. La enseñanza de las ciencias naturales se ha convertido en una
acumulación de información dentro del aula, ya sea memorizando y
repitiendo, o copiando la información, sin ninguna relación con la vida
diaria.
2. El desconocimiento por parte de los docentes de los saberes de los
alumnos acerca de las ciencias naturales durante la preparación de las
clases.
3. La carencia de apoyos didácticos adecuados.
4. El predominio de la verbalización en las clases, por parte de los
docentes, que fomentan la pasividad y dependencia de los alumnos.
5. No se considera la posibilidad de que los alumnos adquieran
conocimientos a partir de la realidad en que se encuentran.
6. Los planes y programas no responden a las necesidades individuales
y sociales, o bien existe dificultad en el desarrolla de los nuevos planes y
programas de estudio debido a la falta de capacitación docente.
7. La enseñanza de las ciencias naturales no tiene incidencia sobre los
que los alumnos piensan ni sobre lo que hacen en su vida diaria.
No obstante, en Colombia se requiere desarrollar una cultura científica en el
ciudadano, y entenderle como factor económico y cultural de desarrollo, así
como entender también el papel intermediario que juega la enseñanza. Esta
formación se constituye en un elemento insoslayable de progreso nacional.
(Fundación Promigas, 2007).
La escuela es un espacio para que desde la enseñanza y práctica de las
ciencias naturales y educación ambiental, se realicen experiencias que
produzcan individuos capaces de interpretar y comprender fenómenos y
principios, así como realizar el transfer hacia lo cotidiano. Hogan y Corey
(2001), al conversan sobre el ambiente científico experimentado al interior del
aula de clases utilizan el términos de cultura compuesta para referirse a los
diferentes frentes o perfiles que con recurrencia de familiaridad intervienen en
78
la cátedra por parte de alumnos y docentes constituyendo la realidad
educativa; dentro de los constituyentes encontramos los ideales
pedagógicos, integrados por la creencia de aprender ciencia en la escuela,
interactuando con los fenómenos naturales, y la práctica profesional,
consistente en la realización del trabajo escolar con la rigurosidad que la
ciencia lo exige, tal como: el rigor en la recolección de los datos y su análisis,
conciencia de la influencia subjetiva en la objetividad, y necesidad de trabajo
colaborativo.
Dentro de esa cultura compuesta de aula encontramos, “…conocimientos
explícitos e implícitos: en el primer caso tenemos el conocimiento del maestro y
el conocimiento del estudiante y, en el segundo, el conocimiento científico
escolar” (Fundación Promigas, 2007)
Tabla 11. Construcción de la realidad educativa
2.6.1. Enseñanza de las ciencias desde un enfoque constructivista
El proceso sistémico y complejo del aprender, aplicado a las ciencias, es el
resultante de la mediación sobre el sujeto. Esta dinámica no procede de forma
natural, razón por la cual se puede afirmar que aprender las ciencias es asunto
de apropiación cultural. Vygotsky (1977) resalta la importancia mediadora del
R E A L I D A D E D U C A T I V A
PRACTICA CIENTIFICA
PR
AC
TIC
A
PED
AG
OG
ICA
Conocimiento explícito: Científico y pedagógico
Conocimiento explícito: Ideas previas y saberes nuevos. (Con el rigor propio de la ciencia.)
<<CULTURA COMPUESTA>> Resultante de la sumatoria imbricada de los saberes y prácticas al interior del aula.
DOCENTE
ESTUDIANTE
CONOCIMIENTO ESCOLAR
79
docente en el alcance de la cultura de la ciencia mediante el planteamiento de
la zona de desarrollo próximo. El desarrollo cognitivo diferencial de cada sujeto
es el resultante de la maduración orgánica, así como además el efecto
simultaneo y combinado del aprendizaje directo y mediado (Ramírez y Roa,
2008)
Luego, así mismo, como lo es para la enseñanza, lo es en el constructo de la
ciencia misma. La ciencia en una elaboración social. La comunidad científica
contribuye a romper la subjetividad en favor de la elaboración en colectivo de
la lectura e interpretación del mundo mediante la elaboración del conocimiento,
quien en todo caso, no está “acabado”, sino que son aproximaciones a la
realidad.
Las ciencias naturales (biología, química, física…) como tal, en el sistema
escolar, son asumidas por el currículo educativo, desde las ciencias
experimentales, con modificaciones pertinentes e inevitablemente necesarias,
para permitir su enseñabilidad, aprendizaje y evaluación.
Este currículo tiene doble propósito (Fundación Promigas, 2007), situar en
condiciones de ser objeto de enseñanza y enseñar la disciplina. Esto es,
preparar la disciplina para la enseñanza, como primero y como segundo,
asumir que las disciplinas se enseñan desde su propio marco epistemológico.
En este orden de ideas, la disciplina de las ciencias naturales puede enseñarse
desde la lógica de la disciplina, o desde la lógica del proceso didáctico,
bifurcándose ambas consideraciones, como se explica consecuentemente, sin
exclusión o detrimento de su inter-fecundidad.
La lógica de la disciplina: permite la enseñanza concebida exclusivamente
desde el desarrollo conceptual de la disciplina: a) enseñanza lógica de
conceptos y datos, en un marco teórico y práctico. b) La enseñanza tiene en
cuenta el contexto del descubrimiento y el contexto de justificación teórico
práctica de datos.
80
La lógica del proceso didáctico: es opuesta a la concepción anterior. Plantea
la elaboración de una teoría educativa de interface con el modelo pedagógico y
didáctico.
Aquí también encontramos dos alternativas: a) La enseñanza de las ciencias
fundamentada en la teoría educativa constructivista. b) La enseñanza de las
ciencias con enfoque positivista.
Tabla 12. Enseñanza de las ciencias
ENSEÑANZA DE LAS CIENCIAS NATURALES DESDE UNA PERSPECTIVA
EPISTEMOLÓGICA
Lógica de la disciplina Lógica del proceso didáctico
Presentación lógica de
conceptos y datos, en
un marco teórico-
practico
Presentación de
conceptos y datos
desde:
-Contexto histórico y
-contexto de
justificación.
Con explicaciones
teórico-práctica.
Constructivismo.
Interacción entre los
sujetos de la
enseñanza y el
aprendizaje.
Positivismo.
Estudiantes “mas”
pasivos frente al
conocimiento del
maestro.
Ejemplo de Enseñabilidad
LA MATERIA LA MATERIA LA MATERIA LA MATERIA
1.Propiedades 1.Concepcion histórica
de la materia
1.Conocimiento previo 1. Observación de
seres vivos e
inertes.
2.Clasificacion 2. Usos histórico de
materiales y desarrollo
social.
2. Explicación. (cambio
conceptual)
Articulación del
conocimiento previo
con el conocimiento
científico.
2. Listar
características
comunes.
3. métodos de
separación.
3.conceptualizacion 3.Taller para aclarar
conceptos
3. Deducción del
concepto materia.
4.Experimentacion 4.Experimentacion 4.Intercambio entre
conceptos de maestros
y estudiantes
4.Organizar
conceptos según
los alumnos
5.Evaluacion 5.Evaluacion 5.Diccionario 5.Evaluacion
81
Las prácticas educativas continúan en la lógica de la disciplina, según los
demuestran estudios realizados en Santiago de Cali en el 2002, Fundación
Promigas (2007), siendo poco utilizada las lógicas del proceso didáctico con
base en una teoría educativa constructivista.
2.6.2. Enseñanza de las ciencias desde un enfoque por descubrimiento.
Arca et al., (1990, citado en García y Flores, 1999) proponen que experimentar
para enseñar ciencias, no es lo mismo que la experimentación científica. Lo
segundo implica además de complejo (como el primero) un proceso extenso en
el tiempo, conducente a formular una ley. Cuando la experimentación es
didáctica, siempre tiene el carácter de verificación mediante el
redescubrimiento, la inducción o la comprobación.
En Colombia se viene haciendo seguimiento a nivel planetario de un número
importante de investigadores sobre la mejor forma de aprender y enseñar
ciencias, donde se deduce que la inclinación más caudalosa e imponente para
ello, es trabajar en el aula con los estudiantes, como lo hacen los científicos:
pensando científicamente, haciendo ciencia, y favoreciendo las actividades de
indagación (M.E.N., 2004).
Observados bajo lupa didáctica de aprendizaje por descubrimiento, los
científicos y los estudiantes, están sometidos a iguales tensiones, e inmersos
en similitudes ambientes que necesariamente requieren la misma clase de
actividad <<solucionar problemas>> para producir conocimiento objetivo, -
guardando la lógicas distancias- el mismo tipo de conocimiento producido por
las ciencias naturales.
El estudiante en el aula es como el científico que expande las fronteras del
conocimiento. Entendiendo cada uno la realidad bajo sus términos propios.
García y Flores (1999). Consideran que las actividades experimentales:
1. Posibilitan al alumno para obtener experiencias que le permitan desarrolla
el pensamiento científico.
2. Propician la adquisición de conocimientos teórico-metodológicos que
ayudan al mejoramiento de la enseñanza de las ciencias naturales.
82
3. Facilitan que el maestro pase de ser un transmisor de conocimientos a un
guía y un apoyo durante el desarrollo de la clase de ciencias naturales.
4. 4. Permite al profesor reflexionar sobre la forma en que el niño investiga y
adquiere conocimientos.
5. Sirven para que los alumnos verifiquen sus explicaciones y extraigan
conclusiones de sus pequeñas investigaciones, de tal manera que vayan
construyendo su propio aprendizaje.
6. Promueven en los alumnos la capacidad de discernimiento y
fundamentación.
7. Generan un sentido crítico en los educandos.
8. Crean el hábito de tratar de dar explicaciones a los hechos.
9. Despiertan la curiosidad y proporcionan mayor capacidad de observación.
10. Propician que los educandos cuestione su entorno natural y social.
Endara, (2002) dejan ver que “el ser humano aprende gran parte de lo que
sabe a través de la experiencia, esto es, <<haciendo>> aquella que le ayudara
a obtener datos y sacar conclusiones”. También proponen que “un trabajo
experimental en el aula optimiza las capacidades intelectuales, al mismo
tiempo que despierta la creatividad, la receptividad y la reflexión…”
2.7 MODELOS DIDÁCTICOS Y ESTILOS DE APRENDIZAJE
Los conceptos de enseñanza, y de aprendizaje, están tan íntimamente
relacionados, que la concepción que el docente considere del uno, influye en el
otro. Afectación evidente cuando por la mediación profesoral, se dispara un
cambio estructural cognitivo, en el discente, mejorando la estructura misma de
la inteligencia .y no solo algunos de sus componentes, conduciendo a
modificación estable y duradera a lo largo del tiempo y espacio (Ramírez y
Roa, 2008).
Una postura mental de enseñanza tradicional concibe al sujeto del aprendizaje
como objeto. Es una posición conceptual limitada y limitante, reduccionista,
83
simplista, donde las condiciones propias del sujeto que aprende, en la práctica
“no existen.”
La praxis docente en el aula (enseñanza), recoge las intencionalidades del
discurso oficial contenidas en el modelo pedagógico. El reto está en articular
didácticamente dichas intencionalidades y contenido por el docente hacia el
alumnado, pero en el alumnado que ciertamente no es homogéneo. Tal como
dice Ander (1996) la práctica educativa exige variedad de estrategias docentes
para potenciar a cada alumno según sus posibilidades.
Los estudiantes son individuos que tienen en común el ser diferentes. Estas
diferencias individuales plantean un problema importante para la acción
didáctica (Gallego y Alonso, 2005).
Aunque un modelo didáctico tradicionalista sea reduccionista en su concepción,
también es cierto que todo lo que propone no es totalmente falso como lo
confirma Álvarez, (1999), cuando asume que siendo un camino diferente en el
acto educativo, se llega a las mismas verdades, pero es superado por una
didáctica más activa y participativa. No destaca lo más trascendente, “El
alumno es el sujeto de su propio aprendizaje.”
Aragón y Jiménez (2009), “A Finales del siglo XX se hizo una amplia revisión
de la pertinencia de la educación en los albores del siglo XXI y se evidencio
que el modelo educativo tradicional había dejado de ser pertinente, que los
educandos no respondían a los nuevos requerimientos de la sociedad…”
Considerar un modelo didáctico más consecuente con el estudiante y su estilo
de aprender, es aceptar que el sujeto de aprendizaje no es un objeto, ni un
depositario de conocimiento, antes por el contrario, un ente vivo con
particularidades que le son propias y que pueden además ser distintos o
variantes en sus matices a las de sus semejantes. Las dificultades en el
aprendizaje no se relacionan frecuentemente con la dificultad del contenido en
sí, Es debido mayormente al tipo y al nivel de los procesos cognoscitivos
requeridos… (Keefe, 1988 citado en Cruz, 2001). “…una tarea puede resultar
muy sencilla para un individuo situado en la preferencia de un estilo de
84
aprendizaje y, la misma tarea, puede resultar difícil para otro individuo con otro
estilo de aprendizaje” (Gallego y Alonso, 2005).
Realizar prácticas educativas desconociendo las características propias de los
individuos en el proceso, rompe el esquema teórico de individualidad biológica,
psicológica y fisiológica. No se trata propiamente de hacer clases totalmente
individualizadas, sino de atender las individualidades. Se requiere que exista
coherencia entre estilos de aprendizaje de los estudiantes con los estilos de
enseñanza de los profesores, dado que el rendimiento académico se hará
mejor mientras exista mayor cercanía (Felder, 1990).
Lembo (1973), destaca que el fracaso de los docentes (nótese que no es:
fracaso de los alumnos), entre otras cosas, puede ser por la directriz en el aula,
fundamentada bajo la premisa de un proceso único para todos los estudiantes.
Cuando la realidad indica lo contrario, destacando que las cualidades de
interacción particular del alumno, a su vez, son el resultado del estilo de
aprendizaje singular que el aporta a una situación de aprendizaje
La desatención a las particularidades del sujeto que aprende pueden ser tan
catastróficas que llegándose a producir la fractura enseñanza aprendizaje,
como consecuencia de ello, inadaptaciones que afectan el rendimiento (Gil,
2007), o puede conducir a la falta de promoción donde el estudiante termina
por creerse incapacitado para el trabajo académico y empezara a ver la
escuela como un lugar inadecuado para adquirir habilidades útiles (Thomas, y
Knudsen, 1965 citado en: Lembo, 1973). Como también ocurre en la educación
terciaria (Lembo 1973), con porcentajes que puede decirse que son
alarmantes, por lo que alega sobre la tarea básica del profesor, consistente en
el ofrecimiento de condiciones de aprendizaje individualizadas, empezando
donde se encuentre el alumno por sus capacidades, actitudes, intereses y
estilos de aprendizaje. En otras palabras igualdad de oportunidad entendida
como lo que cada alumno necesita como condición particular de aprendizaje
para desarrollarse y no como condiciones didácticas iguales. De esta manera,
la teoría de los estilos de aprendizaje se constituye en la obligatoria interfaz de
la práctica docente y el aprendizaje de los estudiantes.
85
3. METODOLOGÍA
3.1. DISEÑO DE INVESTIGACIÓN
El presente estudio de naturaleza descriptiva-correlacional**, con interpretación
cuantitativa y cualitativamente de la información que se obtuvo, tiene la
finalidad de caracterizar el modelo didáctico que desde su estilo de
aprendizaje, género, edad y jornada de estudio, conciben los estudiantes de
media vocacional, a partir de la enseñanza de los docentes de ciencias
naturales de las instituciones oficiales del municipio de Arjona. Igualmente,
identificar el modelo didáctico que poseen los docentes de media vocacional de
las instituciones oficiales del municipio de Arjona para enseñar las ciencias
naturales y su relación con el tiempo de servicio, asignatura que imparte y
formación académica. Los resultados de la muestra per se corresponden a la
población en particular de donde se obtuvo, no descartamos el pensar en la
aplicación universal de los resultados, como insumo para otras investigaciones
y poblaciones, desde sus propios intereses, teniendo en cuenta las obvias
particularidades, siempre y cuando se tomen con reserva las inferencias de las
conclusiones.
3.2. ETAPAS DE LA INVESTIGACIÓN
Para desarrollar el proceso investigativo se consideran tres (3) etapas:
** En la investigación descriptiva, los hechos interactúan en tiempo presente con el investigador.
Los hechos o características de una población se describen de manera sistémica. De ella se
desprenden o participan de sus elementos otros tipos de investigaciones, tal como la
correlacional, donde se determina la concomitancia entre factores o variables, aunque la
existencia y la fuerza, medida en coeficientes, no indiquen razones de causalidad en la
covariación ICFES, (1999)
86
Primera Etapa:
Aplicación de prueba exploratoria: el proceso tuvo la finalidad de detectar y
corregir posibles deflexiones en los ítems de los instrumentos a aplicar. Para
ello se tomaron:
Tres (3) docentes: aplicándole el test CHAEA, y Cuestionario de Modelos
didácticos en ciencias naturales.
Veinte (20) estudiantes: aplicándoles el test CHAEA, el cuestionario de
modelos didácticos en ciencias naturales y el cuestionario de preguntas
abiertas para corroborar estilos de aprendizaje.
Como resultado del presente ejercicio, se detectaron y corrigieron fallas de
transcripción del instrumento CHAEA.
Además se tomó el tiempo relativo para la aplicación de los instrumentos de
investigación, estimado en cincuenta minutos (50 min) para docentes y setenta
minutos (70 min) para estudiantes.
En la aplicación de los instrumentos se les agradece de antemano a docentes y
estudiantes por colaborar con la propuesta de investigación, se les enfatizo en
la confidencialidad de la información, como también se les aclaro que los
resultados no obedecen a valoración alguna como parte de su evaluación
institucional para los primeros o para la evaluación de su año escolar para los
segundos; por tanto, no había respuestas buenas o malas, sino sencillamente
respuestas.
Motivado por la inquietud de los mismos estudiantes y docentes del grupo
piloto, después de aplicado los instrumentos, se les comenta por espacio de
diez minutos sobre su estilo de aprendizaje preferente y sus características.
Segunda Etapa:
Trabajo de campo: en esta etapa se visita prioritariamente las escuelas de la
zona rural, en procura de aplicar los instrumentos a estudiantes y docentes de
87
las instituciones de: Sincerín, Gambote, Puerto Badel y Rocha. Comunidades
azotadas por la ola invernal, lo que sumado a la ubicación en la cuenca del
canal del Dique, afecta traumáticamente el desarrollo de los periodos
académicos por la interrupción de clases.
Posteriormente se visitan las instituciones educativas ubicadas en la zona
urbana del municipio.
Colectada la información de docentes y estudiantes después de aplicado el test
CHAEA, y el cuestionario sobre Modelos Didácticos, se les informa sobre la
teoría de los Estilos de Aprendizaje y Se les explica las características
epistemológicas de los modelos didácticos tradicional, constructivismo y
descubrimiento.
Tercera Etapa:
La información colectada a partir de la aplicación de los instrumentos, se
organiza por zona: rural o urbana, y posteriormente sistematizada en el
programa estadístico SPSS 18.5 para la categorización de docentes y
estudiantes. Adicionalmente se realizara un análisis cualitativo en Atlas.ti.5.0
del cuestionario de estilos de aprendizaje a estudiantes para contrastar sus
E.A.
De lo anterior, se construyen tablas, cuadros y gráficos para organizar,
describir y analizar los datos obtenidos.
Como parte integral del proceso investigativo, se propone retroalimentar a la
población educativa socializando los hallazgos encontrados, citando a las
autoridades educativas del Municipio (Director de Calse Educativo, Presidente
del concejo), Rectores, coordinadores y estudiantes de la educación media
(Ver anexo Nº 18 y 19), adicionalmente se envía una síntesis a la Secretaria de
Educación de Bolívar, para colgarlo en un blog.
88
3.3. POBLACIÓN Y MUESTRA
El presente estudio se realiza con la participación de docentes y estudiantes de
diez (10) instituciones educativas de carácter oficial del Municipio de Arjona-
Bolívar, (Ver anexo Nº 11), distribuidas de la siguiente forma:
Zona Urbana: Institución Educativa Don Bosco, Institución Educativa Francisco
de Paula Santander, Institución Educativa Republica de Colombia, Institución
Educativa Catalina Herrera. Institución Educativa Domingo Tarra Guardo,
Institución Educativa Benjamín Herrera.
Zona Rural: Institución Educativa de Rocha, Institución Educativa de Puerto
Badel, Institución Educativa de Sincerín, Institución educativa de Gambote.
La población de estudiantes de educación media del municipio de Arjona-
Bolívar está constituida por 1555 individuos, de los cuales se toma una muestra
de 314 estudiantes, en razón de las ecuaciones de Krejcie y Morgan, (1970),
por ser una técnica estadísticamente confiable, demostrada en la aplicación a
múltiples estudios, quienes establecen una tabla de correspondencia entre
población y muestra. Se procede a dividir la muestra por la población para
obtener un factor. Este factor obtenido se multiplica por la población de cada
una de las instituciones oficiales a estudiar. El resultado es la muestra a tomar
para el estudio. La sumatoria de cada muestra institucional, corresponde a los
314 individuos de la muestra de estudio (Anexo Nº: 12).
Los estudiantes de las instituciones educativas que constituyen la muestra se
seleccionan aleatoriamente, con el fin de ofrecer la misma oportunidad a todos
los estudiantes que hacen parte de la población de las jornadas matinal y
vespertina.
El estudio no tiene en cuenta los estratos económicos, por ser una población
estudiantil económicamente homogénea para dicho factor, tanto en la zona
urbana como en la rural.
La muestra de profesores que participaron en el estudio la constituyeron
veintiocho (28) docentes de ciencias naturales y educación ambiental de media
vocacional de la zona rural y urbana del Municipio de Arjona-Bolívar.
89
3.4. TECNICAS E INSTRUMENTOS
Los instrumentos aplicados a estudiantes de educación media y docentes de
ciencias naturales y educación ambiental fueron tres. La información
recolectada a partir de los dos (2) primeros instrumentos se procesó con el
programa estadístico SPSS 18.5 y la información del tercer cuestionario se le
aplicó el Atlas ti 5.0
Los cuestionarios se numeran para objeto de presentación en el siguiente
orden:
Primer instrumento: El test CHAEA para determinar los estilos de aprendizaje
de estudiantes y docentes. Es un instrumento de ochenta reactivos
dicotómicos, donde se establecen cuatro (4) estilos de aprendizaje, veinte
pregunta corresponden a cada uno de ellos: Teórico, reflexivo, pragmático y
activo (Ver anexo Nº 7)
La presente investigación opta por el test CHAEA, por encontrarse validado. En
el barrido de investigaciones para el estado de la cuestión, en España se le
evidencio con el 62% de investigaciones sobre caracterización de los estilos de
aprendizajes, en un 57% sobre investigaciones de estilos de aprendizaje y
estrategias de enseñanza, y un 100% para investigaciones de estilos de
aprendizaje y perfil vocacional.
En Latinoamérica y el caribe el CHAEA se ha utilizado en un 50% para
caracterizar los estilos de aprendizaje y en un 33% para investigaciones de
estilos de aprendizaje y estrategias de enseñanza.
En Colombia con un 66% para caracterizar los estilos de aprendizaje y un
100% para investigaciones de estilos de aprendizaje y estrategias de
enseñanza. Todo ello indica la confiabilidad del instrumento.
Segundo instrumento: Cuestionario de Modelos didácticos para la enseñanza
de las ciencias naturales (Figueroa y Otros, 2005), consta de 51 reactivos tipo
escala Likert. Diecisiete preguntas (17) corresponden al modelo didáctico
tradicional, dieciocho (18) al modelo didáctico constructivista y dieciséis (16) al
modelo didáctico por descubrimiento. (Ver anexo Nº 4)
90
El cuestionario fue elegido deliberadamente por el investigador, debido a la
tendencia favorable que tienen los modelos didácticos tradicional y
constructivista, que más se discuten en el gremio docente del municipio de
Arjona-Bolívar y que afirman circunscribirse más exactamente en el
constructivismo. Razón por la cual, el instrumento le da fuerza a la
investigación al confrontar este modelo didáctico, frente al tradicional y por
descubrimiento.
Este instrumento ha sido validado y aplicado en investigación previa en la
Ciudad de Barranquilla, sobre los modelos didácticos empleados en las
Normales Superiores del Departamento del Atlántico (Blanco y Hurtado 2009).
Tercer instrumento: El cuestionario lo componen ocho (8) preguntas abiertas
elaboradas por el investigador, con base en la teoría de los estilos de
aprendizaje (Kolb, 1984) y (Honey y Alonso, 1994), para evidenciar las
concepciones de los individuos al momento de abordar la tarea. Estos datos se
procesan en el programa de Atlas ti 5.0 y es utilizada para contrastar
información.
El cuestionario presenta ocho (8) preguntas, dos (2) corresponden a cada estilo
de aprendizaje: teórico, reflexivo, pragmático y activo, cada una de ellas se
elabora con base en la teoría del Kolb (1984) y la homologa con la teoría de
Honey y Alonso (1994) por un propósito holístico (Ver anexo Nº 9)
91
4. PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS DE RESULTADOS
La información que se obtiene de los docentes y estudiantes de educación
media de las instituciones educativas oficiales de Arjona-Bolívar, producto de la
aplicación de los instrumentos de recolección, intentan caracterizar como los
estudiantes conciben desde sus estilos de aprendizajes, el modelo didáctico
que utilizan los docentes de ciencias naturales y educación ambiental en el
desarrollo de su práctica educativa. La presentación de los datos se realiza a
partir de tablas y gráficas. Para el análisis de los datos recabados se
emplearon estadísticas descriptivas, no paramétricas y paramétricas.
A la muestra de estudiantes que participan en el estudio, se les aplicó un
cuestionario de ocho (8) preguntas abiertas sobre los estilos de aprendizaje, a
fin de contrastar la información obtenida del test CHAEA (Ver Tabla No. 19 y
Anexo No. 9).
Los resultados se presentan de manera sistemática en el siguiente orden:
Caracterización de docentes y estudiantes: Locación de docentes por
género, Locación de estudiantes por género, Decreto de nombramiento
docente y Nivel académico de estudiantes.
Prueba de dependencia de docentes y estudiantes: Prueba de dependencia
CHAEA docentes, Prueba de dependencia CHAEA estudiantes, Prueba de
dependencia docente Modelo didáctico, Prueba de dependencia estudiante
Modelo didáctico
Correlaciones: Correlaciones Estilo de aprendizaje y modelo didáctico para
estudiantes, Correlaciones Estilo de aprendizaje y modelo didáctico para
docentes.
92
4.1 CARACTERIZACIÓN DE DOCENTES Y ESTUDIANTES
A continuación se presenta la caracterización de docentes y estudiantes de
ciencias naturales y educación ambiental en la educación media del Municipio
de Arjona-Bolívar:
Tabla 13. Localización Docente por Género Localización Cont. Celda sexo
Femenino Masculino No Reporta TOTAL
Zona Rural Frec. Obs. 3 6 0 9
% de Fila 33,33% 66,67% 0,00% 100,00%
Zona Urbana Frec. Obs. 5 13 1 19
% de Fila 26,32% 68,42% 5,26% 100,00%
TOTAL Frec. Obs. 8 19 1 28
% de Fila 28,57% 67,86% 0,00% 100,00%
La tabla contigua, muestra que el 28,57% (8) de los docentes de ciencias
naturales del Municipio de Arjona son del sexo femenino, mientras el 67,86%
(19) son de sexo masculino. Los resultados de la localización de los docentes
por sexo permiten establecer o precisar dos (2) alternativas: la primera que
pocas mujeres escogen para su formación profesional esta área disciplinar y la
segunda que a pesar de los esfuerzos por la reivindicación de los derechos
laborales de las mujeres, se hallan relegadas notoriamente en esta labor
académica, por lo tanto, la enseñanza de las ciencias en el municipio de
Arjona-Bolívar, la realizan en un mayor porcentaje docentes del género
masculino, resultados similares se muestran en Laredo-Cantabria (España), en
los docentes que enseñan en los niveles de educación secundaria obligatoria
(ESO) (Martínez 2004), donde el 51.8% corresponde al sexo masculino y el
45.6% al sexo femenino, y un residuo docente del 2,7% que no responde.
Por otro lado, cabe destacar que la Universidad del Atlántico, en el acaecer
histórico, ha facilitado los licenciados formados en el área de las ciencias
93
naturales al departamento de Bolívar. Según Gómez (2011), para el periodo del
2010-2, en el programa de las ciencias naturales de Universidad del Atlántico,
habían inscritos 58 mujeres frente a 39 varones.
También hallamos que el 33,33% de los profesores de la zona rural son
mujeres, y el 66,67% de los profesores son varones. En la zona urbana, las
mujeres tienen una ocupación del 26,32%, frente al 68,42 de los varones.
Prevaleciendo en ambas locaciones, la tendencia mencionada.
Tabla 14. Localización Estudiantil por Sexo Localización Cont. Celda Femenino masculino total
Zona Rural Frec. Obs. 23 29 52
% de Fila 44,23% 55,77% 100.00%
Zona Urbana Frec. Obs. 124 136 262
% de Fila 47,33% 51,91% 100.00%
TOTAL Frec. Obs. 147 165 314
% de Fila 46,82% 52,55% 100.00%
En la presente tabla, los resultados revelan que el 46,82% (147) de los
estudiantes de ciencias naturales que cursan educación media en el municipio
de Arjona-Bolívar, pertenecen al sexo femenino, mientras que el 52,55% (165)
son del sexo masculino. Sin embargo, pese a que el porcentaje de estudiantes,
es mayor para el sexo masculino en un 5,72%, no se presenta la brecha de
género que se aprecia en la estadística de la labor de sus docente (39,29%).
Es decir, que a nivel de secundaria, el estudio de las ciencias es obligatorio
para ambos sexos, sin embargo, a nivel de educación terciaria, la elección de
estudiar ciencias, es ampliamente mayor en hombres (Gómez, 2011).
94
Por otro lado, en la zona rural, el 44,23% de los estudiantes de ciencias
naturales que cursan educación media en el municipio de Arjona-Bolívar, son
mujeres y el 55,77% de los estudiantes son del sexo masculino. Mientras que
en la zona urbana, el 47,33% de los estudiantes son féminas y el 51,91% de
los estudiantes son varones. Bustinza, Duran y Quintasi (2006) encontraron en
su trabajo que la locación por género se dio de la siguiente manera: el 74,28%
de los participantes eran mujeres y se situaban en la zona rural y un 20% en la
zona urbana. Mientras que los hombres en un 100% se hallaban en la zona
rural, situación que puede obedecer al potencial de trabajo masculino en esta
zona rural.
Tabla 15. Decreto de Nombramiento (docentes) Localización Cont. Celda Decreto de Nombramiento
Decreto 2277 Decreto 1278 TOTAL
Zona Rural Frec. Obs. 4 5 9
% de Fila 44.44% 55.55% 100%
Zona Urbana Frec. Obs. 12 6 19
% de Fila 63.15% 31.57% 7.25%
TOTAL Frec. Obs. 16 11 28
% de Fila 57,14% 39,28% 100%
La tabla muestra en lo que respecta a los decretos de nombramientos de los
docentes que, el 57,14% (16) de los docentes de ciencias naturales del
Municipio de Arjona-Bolívar, poseen una formación profesional como
Licenciado, frente un 39,28% (11) de los docentes con perfiles profesionales
diferentes a la Licenciatura. Los docentes nombrados por el “nuevo” decreto
(1278), se encuentran concentrados en la zona rural, este comportamiento de
localización, obedece a la acomodación del reciente personal que ingresa a las
filas del magisterio por concurso docente. Según decreto 522 del Estatuto de
95
Profesionalización Docente, se fomenta el traslado de docentes en preferencia
de la antigüedad en el servicio, lo que favorece la movilidad de profesores del
decreto 2277 de una zona rural hacia una zona urbana.
En términos generales, el cuerpo docente de ciencias naturales del municipio
de Arjona-Bolívar, en su grueso, (57,14%), corresponde a un grupo de
docentes experimentados y se ubican preferentemente en la zona urbana. La
experiencia de los docentes permea su actividad académica en su diario
quehacer y en las estrategias que utilizada. (Byram y Fleming, 2001:9, Citado
En: Martínez, 2002).
La amplia experiencia de docentes en el proceso de enseñanza-aprendizaje,
puede considerarse como una fortaleza educativa en los procesos de
mediación de sus estudiantes, pero se requiere que esta redunde en el
aprendizaje y modifiquen cognitivamente los esquemas mentales del aprendiz
(Feuerstein, 1999, Citado En: Tzaban, 2003).
De igual manera, la práctica y experiencia docente permite conocer las
reacciones, seleccionar el estímulo, penetrar y modificar la estructura cognitiva
del estudiante, produciendo en el alumno conductas exploratorias adecuadas,
orientación espacial, buena percepción, procesamiento y elaboración adecuada
de la información recogida, y canales adecuados para expresar sus
conclusiones (Feuerstein, 1980).
96
Tabla 16. Nivel Académico (estudiantes)
Estudiante Cont. Celda Nivel Académico del Estudiante
10º 11º TOTAL
Zona Rural Frec. Obs. 23 29 52
% de Fila 44,23% 55,77% 100,00%
Zona Urbana Frec. Obs. 130 131 262
% de Fila 49,62% 50,00% 100,00%
No Reporta Frec. Obs. 1 2 3
% de Fila 33,33% 66,67% 100,00%
TOTAL Frec. Obs. 154 162 317
% de Fila 48,58% 51,10% 100,00%
La presente tabla exhibe la información que se obtiene sobre el nivel
académico de la muestra de estudiantes de las instituciones educativas del
municipio de Arjona-Bolívar, que participan en el estudio, el 48,58% (154) de
los estudiantes cursan décimo grado y el 51,10% (162) de los estudiantes
cursan undécimo grado de educación media. Del total de los estudiantes de la
zona rural, el 44.23% están en décimo grado, y el 55,77% en grado
undécimo. En la zona urbana, están distribuidos en 49,62% para el decimo
grado y 50% para el grado undécimo.
De acuerdo con los resultados, la muestra de estudiantes de las instituciones
educativas del municipio de Arjona-Bolívar que participa en el estudio, están en
mayor número en el grado undécimo (51.10%), que los estudiantes del grado
décimo (48.58%). Esta tendencia aparece a nivel rural y urbano, situación que
obedece a la toma aleatoria de la muestra de cada institución educativa,
indistintamente de la discriminación por sexo.
97
4.2. CARACTERIZACIÓN DE DOCENTES Y ESTUDIANTES EN LOS ESTILOS DE APRENDIZAJE. A continuación se presentan los resultados sobre los estilos de aprendizaje de
los docentes y estudiantes de educación media, de ciencias naturales y
educación ambiental del municipio de Arjona Bolívar de acuerdo con la
aplicación del test CHAEA
Tabla 17. Resultados CHAEA (docentes) Docente Cont. Celda Zona Rural Zona Urbana TOTAL
Activo-Pragmático Frec. Obs. 0 1 1
% de Fila 0,00% 100,00% 100,00%
Pragmático Frec. Obs. 2 2 4
% de Fila 50,00% 50,00% 100,00%
Reflexivo Frec. Obs. 5 9 14
% de Fila 35,71% 64,29% 100,00%
Reflexivo-Pragmático Frec. Obs. 0 1 1
% de Fila 0,00% 100,00% 100,00%
Reflexivo-Teórico Frec. Obs. 1 0 1
% de Fila 100,00% 0,00% 100,00%
Teórico Frec. Obs. 1 6 7
% de Fila 14,29% 85,71% 100,00%
TOTAL Frec. Obs. 9 19 28
% de Fila 32,14% 67,86% 100,00%
En esta tabla se muestran los resultados que se obtienen de la aplicación del
cuestionario CHAEA a los docentes de Ciencias naturales del municipio de
Arjona-Bolívar, los datos permiten describir que los docentes de la zona urbana
y rural poseen un estilo de aprendizaje reflexivo en su forma pura y combinada
en un 57.14%. El 50% (14), del grupo de educadores de Ciencias Naturales,
tienen una tendencia hacía el estilo de aprendizaje preferentemente Reflexivo,
distribuidos en un 35.71% (5) rurales y un 64.29% (9) urbanos. Según Honey y
98
Mumford (1986) manifiesta que los sujetos con este tipo de estilo de
aprendizaje, son individuos bastante recurrentes al análisis, presentan alta
capacidad para reunir datos y sopesarles, como también son dados en analizar
las situaciones problémica y sus posibles alternativas de soluciones.
Esta tendencia de los docentes hacía un estilo de aprendizaje reflexivo, puede
obedecer a un comportamiento universal, propio del ejercicio que exige la
planificación y mesura. Las preferencias de aprendizaje docentes se reflejan en
sus métodos de enseñanza (Entwistle, 1998, Citado En: Labatut, 2005).
También es cierto que el estilo de aprendizaje preferido por los docentes es
influyente y moldeante sobre los estilos de aprendizaje de los alumnos
(Martínez, 2004), por ello se ratifica la necesidad de regular la didáctica en
función del aprendiz y de su estilo de aprendizaje (Martínez, 2002).
Los hallazgos dan cuenta que un segundo grupo de docentes que poseen un
estilo de aprendizaje teórico puro en un 25% (7), distribuidos en un 14.29% (1)
en la zona rural y un 85.71% (6) en la zona urbana, lo que significa que
recurren al análisis y la síntesis, registran información metódicamente y son
capaces de convertir las observaciones en teorías lógicas (Honey y Mumford,
1986).Tienden a ser perfeccionistas, buscan la racionalidad y objetividad
(Martínez, 2002). Las teorías de los estilos de aprendizaje deben repercutir
seriamente en los estilos de enseñar (Gallego y Martínez, 2003).
99
La información que se obtiene permite establecer que el 14.29% (4) de los
docentes poseen un estilo de aprendizaje pragmático puro, distribuido en un
50% (2) en la zona rural y un 50.00% (2) en la zona urbana. Lo expuesto
admite que este grupo de docentes disfrutan de la práctica, a partir de los
constructos teorizados, los experimentos y se involucran en la solución de
problemáticas reales de su entorno (Honey y Mumford, 1986).
En cuanto al estilo pragmático su presencia en el grupo de docentes, puede
obedecer al carácter práctico que caracteriza el ejercicio de las ciencias
naturales y la educación ambiental, sumado a ello el flujo permanente de
necesidades que invitan a los docentes a vencer las necesidades propias de su
medio para la praxis educativa, tal como la falta de recursos didácticos y
materiales de laboratorio. Recordemos que, según Labatut (2005) la
enseñanza docente, además de ser permeada por su estilo de aprendizaje, lo
es por la disciplina, la naturaleza del contenido y en parte por los estilos
cognitivos.
Por otra parte, en la muestra se detallan tres (3) estilos bimodal Activo-
pragmático, reflexivo-pragmático y el reflexivo-teórico en un 3.57%. Cabe
destacar en los docentes de la municipalidad de Arjona-Bolívar, la ausencia del
estilo de aprendizaje Activo, en su estado puro. Martínez (2004), encontró que
al pasar de ser estudiante de la Escuela de Formación del Profesorado a
ejercer la docencia, parece que se aminoran características de los estilos
Activo y Pragmático y se incrementan las de los Estilos Reflexivos y Teóricos,
convirtiéndose quizá un poco menos creativo y funcional y más reflexivo e
100
hipotético. En todo caso, los resultados concuerdan con los de Martínez (2004),
donde prevalece el estilo reflexivo sobre el activo y el teórico sobre el
pragmático.
Tabla 18. Resultados CHAEA (Estudiantes) Estudiante Cont. Celda Zona Rural Zona
Urbana No Reporta
TOTAL
Activo Frec. Obs. 2 17 0 19
% de Fila 10,53% 89,47% 0,00% 100,00%
Activo-Pragmático Frec. Obs. 0 2 0 2
% de Fila 0,00% 100,00% 0,00% 100,00%
Activo-Reflexivo Frec. Obs. 0 4 0 4
% de Fila 0,00% 100,00% 0,00% 100,00%
Activo-Reflexivo-Pragmático
Frec. Obs. 0 2 0 2
% de Fila 0,00% 100,00% 0,00% 100,00%
Activo-Reflexivo-Teórico-Pragmático
Frec. Obs. 0 1 0 1
% de Fila 0,00% 100,00% 0,00% 100,00%
Pragmático Frec. Obs. 6 29 0 35
% de Fila 17,14% 82,86% 0,00% 100,00%
Reflexivo Frec. Obs. 30 109 1 140
% de Fila 21,43% 77,86% 0,71% 100,00%
Reflexivo-Pragmático Frec. Obs. 1 9 0 10
% de Fila 10,00% 90,00% 0,00% 100,00%
Reflexivo-Teórico Frec. Obs. 6 26 0 32
% de Fila 18,75% 81,25% 0,00% 100,00%
Reflexivo-Teórico-Pragmático
Frec. Obs. 1 5 0 6
% de Fila 16,67% 83,33% 0,00% 100,00%
Teórico Frec. Obs. 6 54 2 62
% de Fila 9,68% 87,10% 3,23% 100,00%
Teórico-Pragmático Frec. Obs. 0 4 0 4
% de Fila 0,00% 100,00% 0,00% 100,00%
TOTAL Frec. Obs. 52 262 3 317
% de Fila 16,40% 82,65% 0,95% 100,00%
La presente tabla , muestra los resultados que se obtienen de la aplicación del
cuestionario CHAEA a los estudiantes de Ciencias naturales del municipio de
Arjona-Bolívar, los datos permiten describir que los estudiantes de la zona
urbana y rural poseen un estilo de aprendizaje reflexivo en su forma pura y
combinada en un 59.29%. Para Honey y Mumford (1986) significa que
preferentemente, son sujetos que escuchan las diversas posiciones antes de
101
participar o dar su punto de vista al interior de la clase, tienden a consumir
tiempo en la realización de la tarea por entregarse al análisis.
Por ser el Estilo de Aprendizaje reflexivo el preferente en estudiantes, se
sugieren acciones didácticas acordes a él, tal como la presentación de videos
científicos y proporcionar el tiempo suficiente en la realización de la tarea
(Aragón y Jiménez, 2009); recoger información mediante la observación, dejar
tiempo para planificar y pensar, usar un discurso jerarquizado y cohesionado a
un ritmo fácil de seguir (Gallego y Luna, 2007).
En el grupo de estudiantes participantes en el estudio, existen un 44.16% (139)
del total, con un estilo de aprendizaje preferentemente reflexivo, distribuidos en
un 21,43% (30) de los centros rurales y un 77,86% (109) de las escuelas
urbanas; hallazgos similares en Martínez y Flórez (2008); Gallego y Nevot
(2007) y Aragón y Jiménez (2009) ; y contrarios en lo hallado en Tinta-Perú,
donde el reflexivo preferente se presenta en la zona rural (Bustinza, Duran y
Quintasi, 2005).
Los resultados muestran que existe un segundo grupo de estudiantes con un
estilo de aprendizaje teórico puro y combinado en un 20,82% (64), distribuidos
en un 19.56% (60) puro del total, de los cuales 9.68% (6) pertenecen a las
escuelas rurales y un 87.10% (54) a los centros educativos urbanos. Según
Honey y Mumford (1986) estos estudiantes están en capacidad de traducir
observaciones a teorías lógicas, son analíticos y sintéticos, profundos de
pensamiento y que rehúsan de lo ambiguo. Con el fin de optimizar el
102
aprendizaje en este grupo de estudiantes, se sugiere que se les facilite el uso
de estrategias de organización, también el desarrollar tareas estructuradas, se
les permita resumir las teorías e hipótesis (Gallego y Luna, 2007).
Por otro lado, el 11.04% (35) de los estudiantes participantes presentan un
estilo de aprendizaje pragmático puro, distribuido en un 17.14% (6) en la
escuelas de la zona rural y un 82.86% (29) en las instituciones educativas de la
zona urbana. Honey y Mumford (1986) manifiestan que las características de
este grupo de estudiantes es permanecer interrogándose sobre el para que le
sirve el aprender esto o aquello y se motivan siempre cuando le encuentren
aplicabilidad a la teoría. Estos estudiantes pragmáticos están en mejor
disposición de aprender cuando Se realizan prácticas donde repliquen el marco
teórico aprendido (Gallego y Luna, 2007). Destacamos que el estilo de
aprendizaje pragmático es encontrado más frecuentemente en los estudiantes
de las zonas urbanas, frente a los estudiantes de zonas rurales (Martínez,
2004).
El cuarto grupo de estudiantes con Estilos de Aprendizaje puro, es para los
Activos, en un 5.99%. Según Honey y Mumford (1986) este grupo de
estudiantes con estas características se implican en la tarea en forma directa y
sin perjuicios, emprendiendo labores de manera entusiasta, capaces de vivir
plenamente las nuevas experiencias, arriesgados y experimentadores.
Igualmente, son de mente abierta, piensan que hay que intentarlo todo por lo
menos una vez, cuando desciende la excitación por una novedad comienzan a
103
buscar otra, se involucran en los asuntos de los demás, centrando a su
alrededor todas las actividades (Alonso et al, 1994).
Los datos también registran una muestra detalla de ocho (8) estudiantes con
estilos entre bimodal y multimodal, el activo-pragmático, activo-reflexivo, activo-
reflexivo-pragmático, activo-reflexivo-teórico-pragmático y el reflexivo-
pragmático, reflexivo-teórico, reflexivo-teórico-pragmático y teórico-pragmático,
en un 19.23% (61) de todas las combinaciones, surgiendo la binaria mixtura
reflexivo-teórica como la más representativa con un 10.09% (32) del total de
combinaciones.
Aunque los estilos presenten tendencia estable Revilla (1998) Citado En:
Delgadillo y Guillen (2006) propone que la porcentualidad de los resultados es
bastante lógica y esperada para estudiantes, debido a la ya reconocida
influencia ejercida por los docentes, desde sus estilos, en el moldeamiento de
los estilos de sus estudiantes (Martínez, 2004), coincidiendo así la preferencia
de estilos reflexivo, en primer lugar, y teórico en segundo, tanto para docentes
como para estudiantes. Así como también la presencia de estilos activo y
pragmático en tercer y cuarto lugar conforme lo apuntan otros investigadores,
donde afirman su diminución en la medida en que el estudiantado asciende
escolarmente (Delgadillo y Guillen, 2006).
Para acrecentar en los estudiantes el Estilo de aprendizaje pragmático, se
requiere potenciar actividades experimentales, proyectos, ejemplos y
anécdotas; y por consiguiente contribuir en el trabajo experimental de las
104
ciencias naturales. Por otro lado, el Estilo de Aprendizaje Activo, quien se
reduce en la medida que el estudiante asciende en el nivel académico
(Delgadillo y Guillen 2006), pero que debe permanecer en el aprendizaje propio
de las ciencias por su misma dinámica, lo que se logra con la dirección de
debates, diálogos, presentaciones, dramatizaciones, tareas novedosas,
teniendo en cuenta que hay que ayudarles para resolver la dificultad que
presenta este tipo de estudiante al analizar e interpretar datos (Aragón y
Jiménez, 2009).
4.2.1 Constrastacion de estilos de aprendizaje en estudiantes. Para contrastar los estilos de aprendizaje de los estudiantes de las instituciones
educativas del municipio de Arjona-Bolívar, se utilizaron los resultados producto
de la aplicación del CHAEA, y un cuestionario de ocho (8) preguntas abiertas
(ver anexo Nº 9), donde cada dos (2) preguntas respondían a un estilo (Activo,
Reflexivo. Teórico y Pragmático).
Tabla 19. Contrastación de Estilos de Aprendizaje en estudiantes.
Resultado CHAEA *Resultado Cuestionario
(ocho preguntas)
Reflexivo 57.69%
Teórico 19.56%
Pragmático 11.04%
Activo 5.99%
Reflexivo 31,4%
Teórico 30%
Pragmático 18.6%
Activo 20%
*Ver anexo: Nº 8
105
Los datos que se presentan en la tabla contigua, permiten corroboran la
preferencia de los estudiantes de los colegios oficiales del municipio de Arjona-
Bolívar, por el estilo de aprendizaje reflexivo, seguido del teórico. Lo anterior
plantea la necesidad que los docentes atiendan a los estudiantes desde sus
preferencias para aprender. Gallego y Luna (2007) plantean para el Estilo
Aprendizaje reflexivo, que el docente incentive la precisión de la escritura,
recoger información mediante la observación, elaborar protocolos, buscar
alternativas, para el Estilo Aprendizaje, y al estudiante con predilección por el
estilo de aprendizaje Teórico, se le debe proporcionar el desarrollo de tareas
estructuradas, resumir, formular preguntas, entre otras. Es importante que se
les dé la oportunidad de indagar, así como a partir de modelos, teorías y
conceptos, se les proporcionen desafíos (Alonso y Gallego, 2001).
Aunque los resultados del test CHAEA, y los del cuestionario de preguntas
abiertas, muestran en primer lugar el estilo de aprendizaje reflexivo, existe una
discrepancia en los porcentajes, como ocurre de igual forma
para el estilo de aprendizaje teórico quien ocupa un segundo lugar; la distancia
entre los resultados de los mismos estilos, pueden entenderse, si pensamos en
la divergencia de los instrumentos, tal como puede entenderse la inversión de
los resultados para ambas pruebas en los estilos de aprendizaje `pragmático y
activo detallados a continuación.
En cuanto a los estudiantes que poseen preferencia por el estilo de aprendizaje
pragmático con el activo, se presenta una inversión de posición en su
contrastación con los resultados que se obtienen, a través del test CHAEA y el
106
cuestionario de preguntas abiertas. La alteración que se detalla, pude darse
producto de la divergencia de los instrumentos, apuntando a los ochenta
reactivos de respuesta dicotómica y cerrada en el test CHAEA, frente al
desarrollo del Cuestionario, donde existe una mayor libertad de expresión al
momento de dar respuesta al interrogante, lo que hace diferir entre uno y otro
instrumento, considerándoles como la tarea a realizar, lo que puede entenderse
a la luz de lo planteado por (Stember, 1999, Gardner, 2001 y Hervás y
Hernández, 2006), que el estilo de aprendizaje es mutable y definible como
tendencias globales que dependen de situaciones concretas, y de la
percepción de la exigencia de la tarea. Sin detrimento de que los estilos de
aprendizaje presenten tendencia más o menos estable (Revilla, 1998; Citado
En: Delgadillo y Guillen, 2006).
4.3. CARACTERIZACIÓN DE DOCENTES Y ESTUDIANTES POR MODELO
DIDÁCTICO
Es pertinente conversar sobre modelos didáctico cuando nos referimos a los
docentes, para precisar una enseñanza guiada de forma clara, estructurada y
con bases teórico-pedagógicas acentuadas del conocimiento (Monereo y
Castello, 1997); en tanto que conversamos de concepción de enseñanza a
partir de los modelos didácticos docentes, cuando nos referimos al
estudiantado, participes de la cultura compuesta, en la construcción de la
realidad educativa (Hogan y Corey, 2001).
107
Tabla 20. Resultados Modelos Didácticos (docentes) Docente Cont. Celda Zona Rural Zona Urbana TOTAL
Constructivista Frec. Obs. 8 17 25
% de Fila 32% 68% 100%
Descubrimiento Frec. Obs. 1 2 3
% de Fila 33,33% 66,67% 100%
TOTAL Frec. Obs. 9 19 28
% de Fila 32,14% 67,86% 100%
Los datos que se presentan, muestran la tendencia de los docentes de ciencias
naturales y educación ambiental de las instituciones oficiales del municipio de
Arjona-Bolívar, hacía el uso del modelo didáctico que aplican en el desarrollo
de su actividad académica, el 89.29% (25) de los educadores recurren al
modelo didáctico constructivista y el 10.71% (3) de los docentes al modelo
didáctico por descubrimiento.
El significado de lo expuesto, deja ver que los docentes, se identifican en los
supuestos epistemológicos que subyacen en el modelo didáctico constructivista
y, prefieren abordar la enseñanza de las ciencias partiendo del conocimiento
previo de cada estudiante y valorando las construcciones de la realidad como
producto de la asimilación individual (Piaget, 1948). Desde esta posición, los
docentes, valoran las capacidades de los estudiantes según sus
particularidades, las mismas que tienen en cuenta durante el acto educativo
(Coll, 1987, 1990, 1993).
Además, la información que se describe sobre los docentes de ciencia
naturales y educación ambiental del municipio de Arjona-Bolívar, deja ver que
el 10.71%, consideran enseñar a través de las acciones y dinámicas que
108
propone el modelo didáctico por descubrimiento. Generar procesos de
enseñanza mediante el uso de este modelo representa un reto, tanto por la
inexistencia o escasa existencia del material de apoyo en nuestro sistema
educativo, como por las exigencias sobre las habilidades superiores de
pensamiento en los estudiantes, quienes pocos logran el requerido nivel, de
acuerdo a teóricos detractores del modelo didáctico por descubrimiento (Toro,
2002). Los docentes con una tendencia hacía la didáctica por descubrimiento,
buscan incentivar y modificar la estructura cognitiva de los estudiantes desde
su propia experiencia, es decir, haciendo, obteniendo, y concluyendo, para
optimizar sus capacidades intelectuales (Endara, 2002).
Por otro lado, los resultados muestran en los docentes una clara preferencia
por los modelos didácticos autoestructurantes (constructivismo y
descubrimiento), que en todo caso obedecen a un papel esquemático y
epistemológicamente antagónico con respecto a los modelos didácticos
heteroestructurantes (Not, 1989).
En segundo lugar, es menester argumentar sobre el desfase que se establece
dentro de la tendencia de los docentes en los modelos didácticos
autoestructurantes. Donde, el modelo didáctico por descubrimiento se halla
relegado del constructivista, en la utópica consideración de pertinencia del
descubrimiento, solo para capacidades excepcionalmente provistas en mentes
brillantes escalafonadas en la elitista alcurnia científica; esto se ha constituido
en uno de los mayores obstáculos al que se enfrenta el modelo en cuestión
(Toro, 2002) y una amplia diversidad de obstáculos (Bonilla et al., 1994;
Calixto, 1996b; Citado En: García y Flores, 1999). No obstante, es necesario
109
vislumbrar el modelo didáctico por descubrimiento desde la mirada de Bruner
(1987), donde la intencionalidad del aprendizaje es inducir al estudiante a una
participación activa, a partir de acciones y situaciones ambientales, donde sea
capaz de proponer el desafío intelectual, como lo es el resolver problemas,
logrando transferir lo aprendido, aunque cada individuo lo realice a partir de la
selección, re-construcción, procesamiento y organización en particular, para
responder cada uno a su manera.
El conocimiento conceptual y la aplicación de los modelos didácticos
constructivista y por descubrimiento, son factibles desde una amplia gama de
posibilidades metodológicas (Bruner, Citado En: Zarza, 2009) propone que “los
profesores deberían variar sus estrategias metodológicas de acuerdo al estado
de evolución y desarrollo de los alumnos” y que en las posibilidades se ajusten
lo más cercano posible a los estilos de aprendizajes de los estudiantes, para
evitar el error de homogenizar. Ello contribuirá a la experiencia personal del
descubrimiento, y por lo tanto a un aprendizaje significativo (Martínez, 2008;
Reiff, 1992, Citado En: Cruz, 2001).
110
Tabla 21. Concepciones de los modelos didácticos de los estudiantes a partir de la enseñanza de los docentes. Estudiante Cont. Celda Zona Rural Zona Urbana No Reporta TOTAL
Constructivista Frec. Obs. 41 192 2 235
% de Fila 17,45% 81,70% 0,85% 100%
Constructivista-Descubrimiento
Frec. Obs. 0 5 0 5
% de Fila 0,00% 100% 0,00% 100%
Descubrimiento Frec. Obs. 3 16 1 20
% de Fila 15,00% 80% 5,00% 100,00%
Tradicional Frec. Obs. 8 44 0 52
% de Fila 15,38% 84,62% 0,00% 100%
Tradicional-Constructivista
Frec. Obs. 0 2 0 2
% de Fila 0,00% 100% 0,00% 100%
Tradicional-Constructivista-Descubrimiento
Frec. Obs. 0 2 0 2
% de Fila 0,00% 100% 0,00% 100%
Tradicional-Descubrimiento
Frec. Obs. 0 1 0 1
% de Fila 0,00% 100% 0,00% 100%
TOTAL Frec. Obs. 52 262 3 317
% de Fila 16,40% 82,65% 0,95% 100%
Los resultados revelan que los estudiantes de educación media de las
instituciones oficiales del municipio de Arjona-Bolívar, presentan diversas
miradas, al momento de concebir la Enseñanza de las Ciencias Naturales y
Educación Ambiental, a partir de la enseñanza de sus docentes. En ellos,
prevalece la tendencia hacía una concepción de enseñanza fundamentada en
el modelos didáctico constructivista (autoestructurante) en su estado puro,
seguido distante de la concepción de enseñanza desde el modelo didáctico
tradicional (Heteroestructurante), y en tercer lugar el modelo didáctico por
descubrimiento.
El 73.50% (233) de los estudiantes describe una preferencia hacía la
enseñanza de las Ciencias Naturales y Educación Ambiental, basada en el
modelo didáctico constructivista. Los estudiantes con este tipo de perfil, le
111
gusta participar en clases con sus propuestas de ideas previas, y tienen en
común el construir o elaborar a partir de la propia experiencia y percepciones,
les fascina interactuar con su entorno modificándose cognitivamente en esas
interacciones (Serrano y Pons, 2011).
Cabe anotar, que el 16.40% (52) de los estudiantes participantes asumen su
enseñanza fundamentada en los procesos de transmisión-recepción, es decir,
se ubican dentro del modelo didáctico tradicional. En estos estudiantes,
prevalece su pasividad frente a la elaboración de su conocimiento, tienden a
ser receptores y gustosos de escuchar al profesor en su exposición verbal,
clara, ordenada y lógicamente en sus contenidos curriculares, de quien piensan
que posee la verdad absoluta, y que el conocimiento es absoluto y reflejo
exacto de la realidad, que han aprendido cuando después de acumular logran
memorizar y repetir la información, y que el esfuerzo mayor recae sobre el
docente quien es responsable directo de su progreso cognitivo, donde la única
exigencias que contemplan son el acatamiento de órdenes y mantenimiento de
la disciplina (Pozo, 1999; Citado En: Martínez, 2008).
A la par con lo descrito, el 6.31% (19) de los estudiantes de las instituciones
oficiales del municipio de Arjona-Bolívar, demandan una enseñanza de las
Ciencias Naturales y la Educación Ambiental, fundamentada en la perspectiva
del modelo didáctico por descubrimiento. El significado de esta tendencia
estriba en que los estudiantes con esta preferencia, les guata involucrarse en la
tarea, les fascina aprender en forma directa o mediada siempre en contacto
112
con el mundo físico, verificando su elaboración mediante la inducción o
redescubrimiento (Arca et al., 1990, Citado En: García y Flores, 1999)
Del mismo modo, existen otras combinaciones de modelos didácticos con
porcentajes poco significativos, hacía la Enseñanza de las Ciencias Naturales y
Educación Ambiental, tales como: Constructivismo-descubrimiento donde los
estudiantes elaboran su propio conocimiento de manera activa (Bara, 2008),
inmersos en un ambiente de situaciones de aprendizaje problémico (García y
Flórez, 1999). Tradicional-constructivista donde el alumno después de recibir
la información, utiliza la memoria para almacenar y recuperar (Rojas, 2006), la
procesan de manera muy personal, para hacer sus propias elaboraciones (Coll,
1987, 1990, 1993).
Tradicional-constructivista-descubrimiento, cuya característica en su orden es
aquel donde el estudiantado reciben la información utilizando la memoria para
almacenar y recuperar (Rojas, 2006), a partir de allí, construyen su propia
elaboración (Coll, 1987, 1990, 1993), cuando se les facilita un ambiente que les
brinde una situación problémica, para lograr desarrollar el pensamiento
científico, donde verifiquen y expliquen los hechos (García y Flórez, 1999) y
Tradicional-descubrimiento donde los estudiantes les gusta escuchar y recibir
de su docente la información, utilizando la memoria para almacenar y recuperar
(Rojas, 2006), para luego tomar las habilidades superiores de pensamiento
crítico, como herramienta, para elaborar inmersos en situaciones problémica
(Toro, 2002). Estos son estudiantes con una concepción de enseñanza en
modelos didáctico más amplia en su mixtura.
113
En todo caso, el comportamiento de los resultados en la búsqueda de modelos
didácticos que satisfagan la forma como los estudiantes de las escuelas
oficiales del municipio de Arjona-Bolívar, desean que se les enseñen los
contenidos en las ciencias naturales y la educación ambiental, muestra similitud
con el de los docentes, guardando sus proporciones, es decir, que predominan
las visiones de los modelos didácticos Autoestructurantes. Lo que puede
entenderse a la luz de la teoría de la modificabilidad cognitiva (Feurerstein,
2002; Citado En: Noguez, 2002), quien erige al sujeto como ente
biopsicosocial, es decir, como un sistema abierto y moldeable según los
estímulos socio-histórico y cultural. Dicha adaptación en el aprendizaje
sobrepasa la subscripción de la adquisición de habilidades, llegando a
producirse transformaciones en la estructura intelectiva del individuo a través
de la mediación, la que puede ser profesoral o proveniente del contexto social
(Barello, Palmucci y Schuager, 2007). Es precisamente la mediación la que
posibilita el acto educativo, y el aprendizaje se considere un acto interno o
externo en el desarrollo humano (Coll, 1987), en la teoría de la modificabilidad
cognitiva estructural (MCE), la misma que posee una doble ontogenia: la
biológica y la sociocultural (Feurerstein, 2002; Citado En: Noguez, 2002)
4.4. PRUEBA DE DEPENDENCIA O VEROSIMILITUD DE DOCENTES Y
ESTUDIANTES PARA ESTILOS DE APRENDIZAJE Y MODELOS DIDÁCTICOS.
A continuación se determina la dependencia para docentes y estudiantes con
respecto a dos variables: Estilos de Aprendizaje y Modelos Didácticos, a partir
de la aplicación de un Chi cuadrado.
114
Tabla 22. Dependencia de los estudiantes con respecto a los estilos de aprendizaje (CHAEA)
Variable Locación Razón de verosimilitudes gl Sig. asintótica (bilateral)
Repitencia Zona Rural 4,47639769 6 0,61248975
Zona Urbana 8,03312396 11 0,71033359
No Reporta N/A N/A N/A
sexo Zona Rural 4,98976826 6 0,54512609
Zona Urbana 16,7203524 22 0,77860114
No Reporta 3,81908501 1 0,0506719
Grado Académico Zona Rural 8,36988276 6 0,21223752
Zona Urbana 19,7155076 22 0,60083014
No Reporta 1,04649629 1 0,30631541
La tabla contigua detalla la dependencia que se establece a partir de la
aplicación de un Chi cuadrado entre cada par de variables. En la columna
derecha de la tabla (sig. Asintótica) corresponde a un valor-p que prueba la
verosimilitud o dependencia estimada. Valores-p por debajo de 0.05 indican
dependencia significativamente diferente de cero, con un nivel de confianza del
95%. Los resultados describen la no dependencia de la repitencia, el sexo y el
grado académico, con respecto a la variable de procedencia o locación y los
estilos de aprendizaje de los estudiantes de las instituciones oficiales del
municipio de Arjona-Bolívar. Lo anterior contrasta con lo que manifiesta
Martínez (2004), donde revela que el estilo de aprendizaje es influenciado por
el sexo, y en el que las niñas son preferentemente más reflexivas que los
niños, además, los estudiantes urbanos son más pragmáticos que los rurales.
115
Tabla 23. Dependencia de los docentes con respecto a los estilos de aprendizaje (CHAEA)
Variable Locación Razón de verosimilitudes gl Sig. asintótica (bilateral)
Género Zona Rural 3,68064207 3 0,29807804
Zona Urbana 4,60345923 8 0,79899531
Postgrado Zona Rural 8,68466631 3 0,03379094
Zona Urbana 6,95925077 4 0,13805737
La anterior tabla puntualiza la dependencia que se establece a partir de la
aplicación estadística del Chi cuadrado entre cada par de variables. En la
columna derecha de la tabla (sig. Asintótica) corresponde a un valor-p que
prueba la verosimilitud o dependencia estimada. Valores-p por debajo de 0.05
indican dependencia significativamente diferente de cero, con un nivel de
confianza del 95%.
La tabla muestra la no dependencia del género y el nivel de formación
académica post-gradual, con respecto a las variables procedencia o locación y
estilos de aprendizaje, excepto en los docentes con postgrados de la zona
rural, donde existe una dependencia moderada. Similares resultados registra
Martínez (2004) en su estudio, donde concluye que la titulación, el sexo y los
años de experticia de los docentes, son variables que no influyen en sus estilos
de aprendizaje, pero prevalece el estilo de aprendizaje reflexivo sobre el activo,
y el teórico sobre el pragmático.
116
Tabla 24. Dependencia de los estudiantes con respecto a los modelos didácticos por locación
Variable Locación Razón de verosimilitudes gl Sig. asintótica (bilateral)
Repitente Zona Rural 0,48057905 2 0,78640014
Zona Urbana 10,5963897 6 0,1016806
No Reporta N/A N/A N/A
Género Zona Rural 0,84694285 2 0,65476989
Zona Urbana 11,8144724 12 0,46069241
No Reporta 3,81908501 1 0,0506719
Grado Académico Zona Rural 0,76256559 2 0,68298472
Zona Urbana 5,32633199 12 0,94618192
No Reporta 1,04649629 1 0,30631541
La tabla contigua muestra la dependencia que se establece a partir de la
aplicación del estadístico Chi cuadrado entre cada par de variables. En la
columna derecha de la tabla (sig. Asintótica) corresponde a un valor-p que
prueba la verosimilitud o dependencia estimada. Valores-p por debajo de 0.05
indican dependencia significativamente diferente de cero, con un nivel de
confianza del 95%.
En la tabla se observa la no dependencia de la repitencia, el género y el grado
académico, con respecto a las variables de locación y los modelos didácticos.
Tabla 25. Dependencia de los docentes con respecto a los modelos didácticos por locación
Variable Locación Razón de verosimilitudes gl Sig. asintótica (bilateral)
Género Zona Rural 2,45989272 1 0,11678676
Zona Urbana 1,62444022 2 0,44387153
Postgrado Zona Rural 2,45989272 1 0,11678676
Zona Urbana 1,30358188 1 0,25355999
117
La tabla presenta la dependencia que se establece a partir de la aplicación
del estadístico Chi cuadrado entre cada par de variables. En la columna
derecha de la tabla (sig. Asintótica) corresponde a un valor-p que prueba la
verosimilitud o dependencia estimada. Valores-p por debajo de 0.05 indican
dependencia significativamente diferente de cero, con un nivel de confianza del
95%.
La tabla da cuenta de la no dependencia del género y de la formación post-
gradual, con respecto a la variable locación y los modelos didácticos.
4.5. CORRELACIONES ENTRE LOS ESTILOS DE APRENDIZAJE Y LOS
MODELOS DIDÁCTICOS DE ESTUDIANTES Y DOCENTES.
A continuación se establecen en orden las correlaciones en estudiantes y
docentes, a partir de dos pares de variables, Estilos de Aprendizaje y Modelos
Didácticos en Ciencias Naturales y Educación ambiental.
Tabla 26. Correlaciones entre los estilos de aprendizaje y la preferencia de enseñanza por los estudiantes hacía un modelo didáctico (estudiantes).
Tradicional Ponderado
Constructivista Ponderado
Descubrimiento Ponderado
Activo 0,1068 0,0501 0,1426
0,0584 0,3746 0,0115
Reflexivo 0,1000 0,2122 0,1752
0,0763 0,0002 0,0019
Teórico -0,0110 0,1816 0,1998
0,8460 0,0013 0,0004
Pragmático 0,1071 0,1445 0,1085
0,0576 0,0104 0,0545
Valor superior = Correlación; Valor Inferior = Significancia
118
En la tabla, se definen las correlaciones por rango que se establecen a partir
del coeficiente de Spearman, entre cada par de variables. El rango del
coeficientes de correlación se determinar entre -1 y +1, y miden la fuerza de
asociatividad entre las variables. El segundo número en cada bloque de la tabla
es un valor-P que prueba la significancia estadística de las correlaciones
estimadas. Valores-P por debajo de 0,05 indican correlaciones
significativamente diferentes de cero, con un nivel de confianza del 95%. Los
siguientes pares de variables tienen valores-P por debajo de 0,05:
Activo y Descubrimiento Ponderado
Reflexivo y Constructivista Ponderado
Reflexivo y Descubrimiento Ponderado
Teórico y Constructivista Ponderado
Teórico y Descubrimiento Ponderado
Pragmático y Constructivista Ponderado
Los resultados señalan la existencia de correlación entre las preferencias de
enseñanza por los estudiantes hacía un modelo didáctico con relación a los
estilos de aprendizaje, las asociaciones que se establecen están dadas por los
modelos didácticos autoestructurantes y los estilos de aprendizaje puros:
activo, reflexivo, teórico y pragmático. No se evidencia correlación entre los
estilos de aprendizaje y las preferencias de enseñanza por los estudiantes
hacía el modelo didáctico tradicional. Esto invita a pensar en el moldeamiento
cognitivo del estudiante (Feurerstein, 2002) por la mediación profesoral o
social, con respecto a la preferencias de enseñanza por los estudiantes hacía
119
un modelo didáctico y sus Estilos de Aprendizaje. En ese sentido, todo apunta
a que tenemos estudiantes que deliberan sobre el acto educativo y desean
optar por la elaboración del conocimiento en ciencias desde el constructivismo
y el descubrimiento desde la diversidad de estilos al aprender, por tanto, es
preciso hablar del abandono mental del tradicionalismo por parte de los
estudiantes.
Al observando el significado de las correlaciones en estudiantes, en orden de
mayor a menor asociación entre estilos de aprendizaje y preferencias de
enseñanza por los estudiantes hacía un modelo didáctico citamos:
1. Reflexivo-constructivismo:
Esta asociación significativa expresa que este grupo de estudiantes reflexivos,
están condicionados al análisis profundo con el consumo de tiempo
suficientemente necesario (Gallego y Luna, 2007) para estar en mejor
disposición de construir su elaboración individual y particular, relacionando
conocimientos nuevos y los ya posee (Coll, 1987, 1990, 1993).
2. Teórico-por descubrimiento:
Son sujetos que abordan la tarea estructuradamente, poseen una visión
sinóptica capaces de resumir teorías e hipótesis, formulan y corroboran
conjeturas (Gallego y Luna, 2007), capaces de integrar las observaciones a
teorías lógicas y registrar metódicamente la información. Por otro lado, Toro,
120
(2011) expresan que esta asociación implica capacidades mentales acordes a
los requerimientos de los niveles superiores de pensamiento, necesario para la
puesta en práctica del modelo didáctico por descubrimiento.
3. Teórico-Constructivismo:
Son estudiantes profundos de pensamiento, se les favorece cuando los temas
se les presentan de forma organizada, y se les permite utilizar esquemas,
matices o estrategias de organización del conocimiento (Honey y Mumford,
1986) solo así, serán capaces de producir su elaborar su construcciones
individuales a partir de su propia experiencia en forma activa (Bara, 2008).
4. Reflexivo-por descubrimiento:
A los reflexivos les gusta considerar experiencias y observarlas desde
diferentes perspectivas. Reúnen datos, analizándolos con detenimiento antes
de llegar a alguna conclusión (Honey y Mumford, 1986). Por lo tanto, se les
propone buscar alternativas para reflexionar, interpretar, activar los
conocimientos previos, usar un discurso jerarquizado y cohesionado a un ritmo
fácil de seguir, utilizar ilustraciones y ejemplos (Gallego y Luna, 2007). Según
Arca et al., (1990); Citado En: García y Flores (1999) enseñar ciencia no es lo
mismo que la experimentación científica, pues, lo segundo implica, además de
complejo (como el primero) un proceso extenso en el tiempo, conducente a
formular una ley. Cuando la experimentación es didáctica, siempre tiene el
carácter de verificación mediante el redescubrimiento, la inducción o la
comprobación, con un consumo de profundo análisis y tiempo suficiente para
ello.
121
5. Pragmático-Constructivista:
Los sujetos pragmáticos descubren el aspecto positivo de las nuevas ideas y
aprovechan la primera oportunidad para experimentarlas, les gusta la
practicidad y si funciona es bueno (Gallego y Luna, 2007), ese estilo de
aprender es favorecido si se les muestra aplicabilidad de lo que ellos mismos
han logrado elaborar (Honey y Munford, 1986), por tanto, el aprendizaje
considerado como elaboración por reestructuración del alumnado activo (Bara,
2008), cobra vigor en este tipo de sujetos
6. Activo-Por descubrimiento:
Las personas que tienen predominancia en el estilo activo, se implican
plenamente y sin prejuicios en nuevas experiencias, son de mente abiertas, se
crecen ante los desafíos de las nuevas experiencias, piensan que por lo menos
una vez hay que intentarlo todo (Honey y Mumford, 1986). En la didáctica por
descubrimiento, el ser humano aprende de lo que sabe, gran parte de la
experiencia, es decir “haciendo” para obtener datos y sacar conclusiones, lo
que optimiza las capacidades intelectivas, despertando la creatividad,
receptividad y la reflexión (Endara, 2002)
Es menester en el docente, reconocer y atender al estudiante desde su
compleja visión dual de las ciencias (estilos de Aprendizaje y las preferencias
de enseñanza por los estudiantes hacía un modelo didáctico), para potenciar
sus capacidades, evitándose cismas en el proceso de enseñanza-aprendizaje,
tal como lo plantea (Keefe,1998; Citado En: Cruz, 2001), donde las dificultades
no están en los propios contenidos, sino al tipo y nivel de proceso cognoscitivo
requerido para un dominio de contenido curricular y metodológico.
122
Cuando se atienden didácticamente a los estudiantes desde sus estilos de
aprendizaje, se estarían conexionando armónicamente el acto de enseñar, con
el acto de aprender, lo que significa una intervención pertinente en la
experiencia del niño, favoreciendo su modificación cognitiva, e incrementando
sustancialmente la inteligencia, que no es fija, sino variable y mejorada, de
acuerdo a la calidad de la mediación (Feuerstein y Kozulin, 2002)
Tabla 27. Correlaciones entre los estilos de aprendizaje y los modelos didácticos de los docentes
Correlaciones TEÓRICO PRAGMÁTICO REFLEXIVO ACTIVO
Descubrimiento 0,0365 0,1005 0,0667 -0,0667
0,8536 0,6108 0,7361 0,7361
Constructivista -0,0365 -0,1005 -0,0667 0,0667
0,8536 0,6108 0,7361 0,7361
En esta tabla, se muestran las correlaciones por rango de Spearman, entre los
estilos de aprendizaje y los modelos didácticos de los docentes, para cada par
de variables. El rango de estos coeficientes de correlación se establece entre -
1 y +1, y miden la fuerza de la asociación entre las variables. El segundo
número en cada bloque de la tabla es un valor-P que prueba la significancia
estadística de las correlaciones estimadas. Valores-P por debajo de 0,05
indican correlaciones significativamente diferentes de cero, con un nivel de
confianza del 95%. Los anteriores pares de variables no tienen valores-P por
debajo de 0,05; por lo tanto no existe correlación alguna entre los estilos de
aprendizaje y los modelos didácticos en los docentes de ciencias naturales y
educación ambiental de educación media en el municipio de Arjona-Bolívar.
123
De la tabla anterior puede sustraerse que No existe correlación alguna entre los
estilos de aprendizaje y los modelos didácticos en docentes. Esto significa que
los docentes no tienen desde sus estilos de aprender un modo único de
enseñar, lo que en la práctica educativa se define como una praxis ecléctica. Al
asumirse que los docentes presentan una postura no definida por un modelo
didáctico único, induce a pensar en la utilización de una amplia variedad de
estrategias didácticas en el proceso de enseñanza, convirtiéndose esto en una
potencial fortaleza. Sin embargo, esa variedad de estrategias de enseñanza
docente, debe atender a la variedad de estilos de aprendizaje de los discentes,
aplicar en el aula una estrategia didáctica de forma inadecuada para ciertos
estilos de aprendizaje, suele ser un problema (Gravini, 2008). Cuando se
enseña en la forma que mejor va con el estilo particular del estudiante, las
notas son más altas (Dunn y Dunn, 1984).
Gravini (2009) propone una serie de actividades didácticas que se ajustan a los
estilos de aprendizaje de los estudiantes, de las que nos apropiamos y
recomendamos para optimizar resultados: Activo (Foro, Sociodrama, preguntas
intercaladas, proyectos), Reflexivos (Estudio de casos, Ensayos, Resúmenes),
Pragmático (Ilustraciones, Lluvias de ideas, Talleres), Teórico (Mapas
conceptuales, seminario, relatorías, resúmenes).
124
CONCLUSIÓN
Basados en el anterior análisis, esta investigación caracteriza la correlación de
los modelos didácticos y estilos de aprendizaje de los docentes y los contrasta
con la asociación entre los estilos de aprendizaje y la preferencias de
enseñanza por los estudiantes hacía un modelo didáctico en ciencias naturales
y educación ambiental, en las instituciones educativas oficiales del municipio de
Arjona-Bolívar, de acuerdo a los objetivos específicos planteados, así como
también la consecución del objetivo general propuesto, deduciéndose los
siguientes apartes en el orden de los análisis:
La enseñanza de las ciencias naturales y educación ambiental en el municipio
de Arjona-Bolívar, está básicamente a cargo de docentes de sexo masculino,
en un (57,14%), ubicados preferentemente en la zona urbana. Presentan
amplios años de experiencia lo que les hace posible utilizar un número variable
y rico de estrategias didácticas, pero que deben particularizarse en los
estudiantes de acuerdo a sus estilos de aprendizaje y no homogeneizar en
aula.
El estilo de aprendizaje que predomina en los docentes de ciencias naturales
del municipio de Arjona-Bolívar, es el reflexivo, por tanto, son analíticos, de vez
en cuando intentan considerar nuevas experiencias y observarles desde
diferentes aristas, pero siempre con cautela, disfrutan de la observación
cuando participan sus estudiantes y colegas.
125
El estilo de aprendizaje reflexivo, es el estilo que más emerge en estados
combinados. En orden cuantitativo de aparición, le siguen distante el estilo de
aprendizaje teórico, donde los docentes realizan su ejercicio de manera
metódica, crítica y estructurada. Por último se ubica el estilo de aprendizaje
pragmático, que caracteriza aquellos docentes con funciones experimentales y
seres eficaces y realistas.
El modelo didáctico de los docentes del municipio de Arjona-Bolívar, es en
teoría, preferente el constructivista, seguido distante del modelo didáctico por
descubrimiento. Los docentes se identifican con los modelos didácticos
autoestructurantes. Tienen una concepción de educación que sobredimensiona
el reduccionismo al que conllevan los modelos didácticos heteroestructurantes
o tradicional, que rezaga a simple depositario al educando. Por lo tanto, en su
praxis educativa, los docentes consideran que el estudiante es corresponsable
de su elaboración y por ende, de su desarrollo.
El estilo de aprendizaje y los modelos didácticos de los docentes, no depende
de forma alguna con las variables de género, formación académica post-
gradual o locación. Con excepción de los docentes de formación post-gradual
de la zona rural, donde la dependencia es moderada.
La población estudiantil de ciencias naturales y educación ambiental en la
educación media oficial del municipio de Arjona-Bolívar, es mayoritariamente
masculina en la locación urbana y rural. En cuanto al grado académico de la
muestra estudiantil participante del presente estudio, es levemente menor en
126
undécimo para la zona urbana con respecto a la zona rural. Y la población de
décimo grado es levemente mayor en la zona urbana con respecto a la rural.
Los estudiantes que cursan educación media en el municipio de Arjona-Bolívar,
tanto en la zona rural como urbana, se caracterizan por poseer un estilo de
aprendizaje preferente reflexivo, seguido distante del estilo de aprendizaje
teórico.
Los estudiantes de las escuelas oficiales del municipio de Arjona-Bolívar,
tienen preferencias de enseñanza por los modelos didácticos
autoestructurantes, tanto en la zona urbana como en la rural. Despunta el
modelo didáctico constructivista. Son sujetos que se involucran en la tarea y
desean elaborar sus conocimientos con una participación activa en el proceso.
En los estudiantes se determinaron seis (6) correlaciones en lo que respecta a
las variables de estilos de aprendizaje y preferencias de enseñanza hacía un
modelo didáctico. Los estilos de aprendizaje en su estado puro, tuvieron
correlación con modelos didácticos autoestructurantes. Las dos (2)
asociaciones con mayor correlación se encontraron en los estudiantes
reflexivos, que por su naturaleza analítica, conciben la enseñanza desde un
referente constructivista, y los estudiantes teóricos, cuyo carácter metódico,
esquemático y organizado, prefieren una enseñanza por descubrimiento.
En los docentes, no se determinó correlación entre sus estilos de aprendizaje y
los modelos didácticos. Son docente que utilizan desde su experticia, un
127
nutrido número de estrategias didácticas, que se enmarcan en uno u otro
modelo didáctico, pero que deben utilizarlas desde una enseñanza científica,
teniendo en cuenta las particularidades de los estudiantes para no
homogenizar al interior del aula.
En cuanto a las correlaciones registradas para estudiantes y docente en lo que
respecta a los estilos de aprendizaje y modelos didácticos., no se evidencia
convergencia entre ellas. Los resultados en lo referente a la correlación de los
modelos didácticos y estilos de aprendizaje, muestran docentes con tendencias
eclécticas en su praxis pedagógica, lo que puede resultar en un ejercicio
didáctico demasiado difuminado al interior del grupo de estudiantes, y sin
atención a la diversidad de estilos de aprendizaje.
En los resultados se presenta un desfase en la correlación (estilos-modelos)
docente-estudiantes, que puede ser causa de fractura en la dinámica misma
del proceso educativo, reflejado en la baja puntuación que en materia de
pruebas saber 11 se viene registrando en el área de las ciencias naturales y
educación ambiental en el municipio de Arjona-Bolívar, en los años
comprendidos entre 2007 y 2010. En tal caso, el hallazgo de esta discordancia
de correlación, aporta claridad en la comprensión de la crisis educativa en la
municipalidad de Arjona-Bolívar.
La incongruencia que se registra en las correlaciones de los estilos de
aprendizaje y los modelos didácticos en los actores de la praxis educativa,
puede ser indicador de un alto grado de reprobación, aprendizajes deficientes,
128
deserciones o desencanto temático. Por tanto, es necesario precisar que los
docentes deben comprometerse en trascender, desde su concepción teórica
hacia una praxis educativa fundamentada en modelos didácticos
contemporáneos, es decir, modelos autoestructurantes (constructivista y por
descubrimiento) atendiendo a su vez, la diversidad de estilos de aprendizaje
de sus estudiantes.
129
RECOMENDACIONES
Los resultados muestran una fractura causante de deflexiones, en lo que
respecta a las correlaciones realizadas entre docentes-estudiantes sobre los
modelos didácticos y los estilos de aprendizaje. Po lo anterior, es menester
señalar que se hace necesario:
Realizar investigaciones afines, para dilucidar por que se dan los bajos
resultados en las Pruebas Saber 11, si los estudiantes de educación media de
las instituciones oficiales del municipio de Arjona-Bolívar conciben la
enseñanza docente de las ciencias naturales y educación ambiental desde
modelos didácticos docentes autoestructurantes.
Impulsar propuestas investigativas de la misma naturaleza, en otras áreas
obligatorias a nivel de educación media, para elaborar un diagnóstico general y
pertinente de la educación oficial en el municipio de Arjona-Bolívar.
Tomar los resultados de la presente investigación, ofrecidos desde su
socialización en las instituciones participantes del estudio, como también en
otras, como apoyo en la reflexión de sus bases teóricas y epistemológicas para
la enseñanza de las ciencias naturales y educación ambiental.
130
Fomentar la construcción de espacios de re-visión y reflexión de las didácticas
y su pertinencia con el modelo pedagógico institucional y las recomendaciones
metodológicas y epistemológicas para las ciencias naturales de acuerdo al
(M.E.N., 2004).
Establecer a través de la Secretaria de Educación y Cultura del
Departamentalmente de Bolívar, programas de formación continua para la
cualificación profesoral en torno a los modelos didácticos y los estilos de
aprendizaje, como mecanismo pertinente para la adquisición instrumental que
permitan dar cuenta del decreto 1290 del 2009, con respecto a las
particularidades del estudiantado.
.
131
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