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FotonovelaFacultad de Filosofía y LetrasUniversidad Nacional Autónoma de México
Colegio de Pedagogía
Auxiliares de la comunicación 1Septiembre, 2009
“El amor, nunca caduca”
Referencia curricular
Asignatura: Sociedad y población
Nivel educativo: Tercer año de preparatoria
Tema a tratar: Sentimientos y emociones
A quién va dirigido: Jóvenes entre 16 y 19 años
Objetivo general: Exaltar y enfatizar, las virtudes y necesidades de los sentimientos y emociones, en la vida diaria y su interacción con otros individuos, para lograr una comunicación adecuada en la sociedad, donde se convive
Recurso didáctico: Fotonovela
Personajes
Conocimiento
emociones
Sentimientos
Conciencia
Previsión
Miedo
Amor
Riqueza
Vanidad
Tristeza
Tiempo
Sabiduría
Introducción
La mayoría de las ocasiones, no reparamos en pequeñeces, evitamos el inevitable sentir, las sinergias de las emociones que rodean a nuestra vida, a nuestro ser.
Las emociones y sentimientos juegan un papel indispensable en la interacción y conciencia del individuo, demuestran una serie de estados anímicos y perceptibles que dan plenitud y socialización.
La presente fotonovela, se basa en un cuento del escritor F. Bucay, adaptándolo por nuestra cuenta, pero sin perder su esencia, tratamos de que el lector visualice, la importancia de la sensibilización, del temple, e importancia que significan para los seres humanos.
En lo posible utilizamos un lenguaje acorde al público que nos interesa, para que se concienticen de la importancia, de los sentimientos y emociones, de una manera amena, divertida y comprensible
Sipnósis
Había una isla donde convivían las emociones y los
sentimientos, todos de manera grata, amena y aunque de ves
en cuando, surgían diferencias, la vida cotidiana, en lo general
se desarrollaba sin aspavientos . Cierto día el conocimiento
apresurado convoco a una reunión y expreso un acontecimiento
fatal, todas y cada una de las emociones y sentimientos, se
sorprendieron, reflexionaron y tomaron su decisión, veamos en
que termino . . . .
Había una vez, una isla donde habitaban y convivían sana, cordial y armoniosamente, todas las emociones y sentimientos de los humanos. . .
Todo trascurría normalmente, hasta que un día el Conocimiento, convocó a una reunión y dijo:
Tengo que darles una mala noticia, la isla se hunde!
Todas las emociones y sentimientosde la islas dijeron;
No puede ser! Si
nosotras vivimos aquí
desde siempre
Esto es inaudito! No puede ser!
El conocimiento replico . . .
la isla se hunde!
No puede ser quizás estés equivocada
En eso la Conciencia dijo. . .
El conocimiento nunca se equivoca!
Los sentimientos y emociones espetaron y comentaron. . .
Si dice que
se hunde,
es porque
se hunde!
Pero no puede ser!
¿Qué vamos a
hacer ahora?
Y la conciencia sentencio . . .
Construyan
un barco!
Dejen la
isla! El que
se quede
morirá!
Ante terrible situación las emociones preguntaron al conocimiento. . .
¿No podrás
ayudarnos?
La previsión y yo! Hemos construido un avión y en cuanto
termines de decirles esto, lo
abordaremos!
No!
Y así sucedió, abordaron su avión!
Esperen!
Soy el
miedo
me voy
con
ustedes!
Las demás emociones y sentimientos, se dedicaron construir barcos, veleros y botes, con el fin de salir de la isla, salvo el amor!
Apúrense! No hay
tiempo que perder!
Que trágico! Apurémonos!
Como podre dejar estas islas, sus
rocas, playas, árboles,
animalitos, plantas! No
puedo!
Así el Amor, se dedico pasear y nostalgiarse de cada elemento de la isla, con la esperanza que el proceso se revirtiera
¿Y si me voy más arriba?Tal ves se
detenga ,por un milagro, tal ves todo
fuese patrañas!
No que va! Esto sigue
hundiéndose!, no me
hagas esto después de todo l o que pasamos!
De pronto la isla casi quedaba hundida, el Amor se preocupo, pasaba por ahí la Riqueza y externó. . .
Riqueza, tú que tienes un barco tan grande, ¿no me llevarías hasta la isla vecina? Yo sufrí tanto la desaparición de esta isla que no pude fabricarme un bote...
Que va a ser de mi! Me
ahogaré! Ayudenm
e
- ¡Ay Amor!... estoy tan cargada de dinero, de joyas y de piedras preciosas, que no tengo lugar para ti, lo siento...
Y siguió su camino sin mirar atrás. El Amor siguió observando, y vio venir a la Vanidad en un barco hermoso, lleno de adornos y florecitas de todos los colores. ¡Llamaba muchísimo la atención! El Amor se estiró un poco y gritó:
¡Vanidad...Vanidad...llévame contigo!
m… me encantaría llevarte, pero... ¡Tienes un aspecto! ¡Estás tan desagradable! ¡tan sucio! y ¡tan desaliñado!, perdón pero creo que afearías mi barco…
y se fue. Así el Amor pidió ayuda a cada una de las embarcaciones. A la Constancia, a la Sensualidad, a los Celos, a la Indignación y hasta al Odio. Y cuando pensó que ya nadie más pasaría, vio acercarse un barco muy pequeño, el último, el de la Tristeza.
Tristeza, hermana
tú que me conoces tanto, tú no me abandonarás aquí, eres tan sensible como yo. ¿Me llevarás contigo?
Yo te llevaría, te lo aseguro, pero estoy taaaaan triste snif snif...que prefiero estar sola
Y el Amor, pobrecito, se dio cuenta de que por haberse quedado ligado a esas cosas que tanto amaba, él i la isla iban a hundirse en el mar hasta desaparecer. Entonces se sentó en el último pedacito que quedaba de su isla a esperar el final... De pronto el Amor escuchó que alguien chistaba
¿Me hablas a mi? ¡a ti! Ven conmigo, súbete a mi bote y rema conmigo, ¡yo te salvo!
El Amor le miró y quiso darle explicaciones:
Lo que pasó fue que yo me quedé por...
Entiendo… sube
El Amor subió al bote y juntos empezaron a remar para alejarse de la isla. No pasó mucho tiempo antes de ver como el último centímetro que quedaba a flote terminó de hundirse y la isla desaparecía para siempre.
Nunca volverá a existir una isla como esta
No! Nunca como esta
Cuando llegaron a la isla vecina, el Amor comprendió que seguía vivo. Se dio cuenta de que iba a seguir existiendo. Entonces, giró sobre sus pies para agradecerle al viejecito, pero este, sin decir una palabra, se había marchado tan misteriosamente como había aparecido. Entonces, el Amor, muy intrigado, fue en busca de la Sabiduría para preguntarle:
¿Cómo puede ser? Yo no lo conozco y él me salvó... Nadie comprendía que me hubiera quedado sin embarcación, pero él me ayudó, él me salvó y yo ni siquiera sé quien es...
Él es el único capaz de conseguir que el amor sobreviva cuando el dolor de una perdida le hace creer que es imposible seguir adelante. El único capaz de darle una nueva oportunidad al amor cuando parece extinguirse. El que te salvó, Amor, es el Tiempo.
Fin
Créditos
Laura
Ana Karen
Jimena
Karla Cecilia
Mariana
Paulina
Mayra
Erick
Referencia
Bucay F, “La isla de los sentimientos y emociones”, cuento corto