Post on 01-Jun-2018
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
1/112
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
/
)
)
)
)
)
: - ' ¡ ; ¡ ~ I & .
a
U
... _ E ~ . A
UNi v[ ; , { j ,
, ,[)
. :: E i P R f::; ,\ U A l
,:J SIGLO, VHNTlUNO
CARLOS
ALBERTO LOPRETEjy/
•
, I N ' ~ I ' l l f ) I ) ( J ( j ( j I C ) N / 1
1\
( ) I I l l ' l ~ t ' 1 1 1 1 '
. ~ ~ . - - - - - - - - _ : ~ ' ~ - ' - , . ,- ,
) I C ) I ' I ~ l l l l '
1 ~ 1 ' ( ~ ( » ) I ( J N I ( ~ l ' ( ~ I ( i N
0111 1.4
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
2/112
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
3/112
/
I r '
,
:
1
1
1
I
:
I
I
1
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
I
1
I
I
I
I
h
1
INTRODUCCIÓN L OR TORI MODERN
LA COMUNICACIÓN ORAL
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
4/112
í
f \
PLUS ULTRA
INTRODUCCiÓN
lA
OR TORI
MODERN
La
omunicación Oral
4ta edición aumentada
I
,
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
5/112
/
t
1
1
1
I
I
I.S.B.N. 950 - 21 - 0390 - 4
I
© 1992 by Editorial Plus tntra
1 Callao 575 - 1022 Buenos Aires
l·
Impreso en la Argentina - Printed n Argentina
1 Queda hecho el depósito que previene la ley 11.723
l
I
INTRODUCCIÓN
H i s t ó r i c a m ~ n t e primero existió
la
lengua y lue-
go
la
grp.mátiCa
justificada
como
una codijkación
ordenadora
del
fenómeno
lingüís Hco, con fines
normativos
y
didácticos.
n
forma análoga pri-
mero existieron los oradores y después la retóri-
ca concebida como sistematización transferible
de
las técnicas recursos expresivos empleados
por
aquéllos. ra natural que
así
acaeciera porque
la.
ciencia no sustituye
a la
naturaleza sino que
la
interpreta.
La
retórica entendida como metodología delfe-
nómeno oratorio. no como sustituto estaba ya
constituida entre los griegos y los romanos y go-
zaba
de
gran
prestigio
en el
mundo de
la
antigüe-
dad. que no conoció la prensa. la radiofonía la te-
levisión. y escasamente
el
libro y
la
escuela.
n
ese periodo de comunicación esencialmente oral
la
palabra
hablada estaba sometida con igual ri-
gor a exigencias estéticas y prácticas.
Con
la marcha de los siglos algunos tratadistas
y maestros. corifundiendo el mapa con el terreno.
hicieron de la retórica
unfin en sí
mismo y llega-
ron a mezclarla con la poética. la estética la pre-
ceptiva literaria cuando no con lafilosofía ideoló-
gica que abarcaba en
una
misma pretensión a la
lógica
la
metafísica y
la
retórica. Sobrevino
el
7
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
6/112
i :
desprestigio
de esta
disciplina, que el romanticis-
mo, con
su
carga de libertarismo y de individua
lismo, acabó de consumar.
n la
actualidad
la retórica ha renacido
como arte de la palabra hablada. Se la considera
una disciplina instrumental sinfin en sí misma,
o
más exactamente, como una técnica para encau-
zar en formas verbales el fenómeno profundo de
la
expresión
del
hombre.
n
este sentido,
se
la
ha
separado
con meritoria
prudencia
del ámbito es-
trictamente literario para combinarla con los do-
minios de la psicología,
la
sociología y las ciencias
de
la
educación y de
la
comunicación.
Este
enfoque
ha ampliado
y superado a
la
vieja
retórica. Ésta pretendía que el orador expresara,
con belleza,
sus
ideas y sentimientos, mientras
que el
moderno arte de la palabra busca que
el
individuo
se exprese , esto es, que consiga entre-
gar objetivamente, con palabras su subjetividad,
en
todas las circunstancias
de la
vida.
Tal planteo
comporta una
problemática
distinta
de
la
clásica grecolatina, por cuanto aspira, des-
de el punto de vis ta formativo general, a
facilitar
la realización
del
ser humano, que no es plena
mientras
se ahoga
en
la incomunicación expresi-
va y, desde el
punto
de
vista
particular
de
su ac-
tividad profesional
y
social, a otorgarle un instru-
mento
técnico valioso.
También el contenido de la oratoria se ha visto
enriquecido con nuevas especies impuestas por la
evolución social de nuestra época, que h conver-
tido
al
diálogo,
en
todas
sus formas
en
el vehícu-
lo insustituible para el acuerdo de voluntades, el
análisis de los problemas y la toma de decisiones.
l lado
del
clásico monólogo,
la
oratoria moderna
h t
instalado, con
igualdad
de títulos, a la delibe-
ración.
En un
mundo
que desborda las añejas-jormas
de comunicación humana, se comprende que los
8
\
1
nuevos planteas, métodos, formas y
fines
encuen-
tren una debidajustificación.
El arte
de
la palabra
oral, así concebido, se ha
constituido paulatinamente a través de los siglos
en
un patrimonio
cultural
sin dueños nifórmulas
mágicas. y la tipificación de los temas o capítulos
que lo componen se
ha
ido formando
por
acumu-
lación sucesiva de aportes. que en última instan
cia
reconducen a los maestros
de
Grecia
y
Roma.
El
presente trabqjo
intenta
ofrecer al lector
un
panorama estructurado
y
actualizado de la orato-
ria con su temática y metodología,
tanto
antigua
como moderna compuesto a partir de los
más
reputados tratadistas del género.
9
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
7/112
.
.J
)
)
I
;
)
1,1
)
1
1
I
J
I
1
ii
1
1
1
I ¡il
),
I
II
J
11
1
1
):
Ili
1
II
'
I , ~ i
1
)
1
II
)
¡
I
1
>
I ~ I
JI
I
¡I
11,
II
'
1
J
1
) i
I i
JI
1 1
Y.
I
I
1
)<
1,1
.)i
t i
Ji
[
)
i
:1
1.
FUND MENTOS DE L
ORATORIA
1
EL RTE E L P L BR
El hombre es el único ser viviente que habla y
la palabra
es
uno de los dones
más
extraordina-
rios que posee
pues
le permite manifestar
la
prodigiosa riqueza de su alma y establecer rela-
ción con sus semejantes.
El ejercicio efectivo de
la palabra se
apoya en
dos bases:
la naturaleza
y la educación.
Todas
las personas hablan, pero muy pocas
lo
hacen
con eficacia pues la facultad elocutiva requiere
como cualq uier otra facultad del hombre cultivo
y educación. Los
seres
elocuentes
por naturaleza
son la excepción del orden normal
humano.
La elocuencia ha sido definida de
las
más di-
versas formas tanto por los antiguos como por
los modernos. Para Cicerón el máximo
orador
romano es un movimiento continuo del alma y
Dionisia de Halicarnaso la ha definido como el
arte de hacerse creer. Podríanse agregar así mu -
chas otras definiciones pero en la aparente disi-
militud de todas ellas hay un fondo común de
coincidencia: la elocuencia es el testimonio ex-
terno de un alma profunda.
11
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
8/112
La
gramática y la retórica
La
gramática
tradicional se
ha
definido como
el arte de
hablar
y escribir correctamente .
Sin
embargo,
la
experiencia ha
demostrado
que el
conocimiento teórico de
las
formas de una len
gua-cualquiera
no es suficiente
para
dotar al in
dividuo de
una buena
capacidad expresiva. Por
ello. los
estudios
de
gramática se
han comple
mentado
desde
la
antigüedad
con otras
discipli
nas
más
pragmáticas. La corrección gramatical
es sólo un aspecto del arte de hablar.
En tiempos de los griegos y los romanos , exis
tía
una disciplina
llamada
retórica , que
trataba
particularmente del arte de hablar y escribir,
no
ya desde
un mero punto
de vista gramaticalista,
sino
desde
un
ángulo real y práctico. Numerosos
tratados
nos
han llegado de aquellos tiempos,
entre
los cuales sobresalen el de Aristóteles Arte
relórica),
y los de Cicerón
De
la
invención,
Del
orador, Bruto, El orador y
De
la perfección orato-
ria y Quintiliano Instituciones oratorias).
En los tiempos actuales, esos
tratados
han
co
brado
nueva
vigencia, pero
modernizados
y
adaptados a las necesidades del hombre con
temporáneo. Es
así
como han surgido tratados
especializados de 'elocuencia', 'arte de la palabra',
arte
del bien decir'. 'oratoria' y otras denomina
ciones que enseñan
a
las
personas a expresarse
con eficiencia. En esto,
las
universidades y los
tratadistas norteamericanos tienen la
primacía
de
la
originalidad
con sus cursos
de
speech,
professional speech,
public speaking,
modem
speech, eifective
speaking,
speech
arts,
discus-
sion, argumentation, persuasion, etcétera.
1
1 Sobre otras formas modernas de las artes
habladas
y métodos de
enseilanza. consultar AuCE EVELffi CRAlG, The
speech arts;
a
textbook
of
oral English
Nueva
York. The
Macmillan Company.
1937.
i
libro
El lenguqje oral: Fundamentos fonn s
y
técnicas (Bs. As., Plus Ultra.
1984).
trata
del mismo asunto.
12
En lo esencial,
estas
disciplinas son derivaciones
de la retórica clásica, complementadas con apor
tes
de
la
psicología,
la
sociología y
las
ciencias
de la comunicación, que han llegado a
penetrar
con notable profundidad en el fenómeno de la
creación literaria, en
la intimidad
anímica ~
orador,
así
como
también en la
del público o el /
participante
de
una
discu$ión.
Siempre se ha debatido sobre la p O S i b i l i d ~ d y
utilidad de
sistematizar
en cuerpos de ensenan
za
la
oratoria, pero en
la
actualidad parece pre
valecer
la
opinión de que
toda
persona puede
ser
elevada sobre
su rutina
expresiva
por
medio de
métodos, procedimientos y
maestros
adecuados.
El oficio hace al maestro, se ha dicho desde an
tiguo.
A L e t ó r i < ; l ~
e l
arte
del
bien decir_
Se
denomina
retórica
del
griego rhétor, ora
dor
al arte del
bien
decir,
de
embellecer
la
x j
presión
de los conceptos, de
dar
al
l e n ~ j
e
~ § :
c '
hablado
eficacia
bastante para d ~ ~ ~ i t a L
ersua r
conmover. srífeza eTIéxico
de
la
Aca emm spano a.
La retórica es,
pues,
un
conjunto
de preceptos
y
eglas
para bien hablar. Esta
definición
presu
pone, lógicamente,
la
posibilidad
de hacer
elo
cuente al hombre mediante la enseñanza de
ciertos principios. Acerca de
esta
posibilidad
se
ha
discutido y
aún
hoy se discute
si el
orador
nace o
se
hace. Si
nace, la
retórica
no
tiene juS-
tificación.
l -
De
ninguna
manera podría sostenerse que no
hay
hombres naturalmente elocuentes.
pues la
experiencia lo desmentiría. La genialidad y el ta
lento
no
reconocen
escuela. ya que
el hombre
superior lleva en sí el asiento de
toda
sabiduría y
13
)
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
9/112
conocimientos. Pero los preceptos de
la
retórica
no son una creación arbitraria de los hombres
sino
que han sido tomados de la realidad
m i s m ~
de la palabra humana, del verbo de los hombres
t a ~ e n t o s o s
Esto equivale a afirmar, pues, que
pnmero existieron los
grandes
oradores y la gran
oratoria, y luego surgió
la
retórica, como codiIi
cación de los mejores ejemplos de elocuencia.
Por
otra parte, si bien
es
cierto que los genios
lo
encuentran todo en sí mismos, no
lo
es
menos
q ~ e la mayor parte de los hombres no son genios
ru talentos y
necesitan
de la retórica para apren-
. d e ~ o perfeccionar
su
habitual decir y que, ade
mas,
hasta
los mismos genios de la oratoria han
llegado al dominio de la palabra por el estudio.
Dentro de
esta
línea de pensamiento debe inscri
birse la opinión de Baudelaire: Las retóricas y
las prosodias no son tiranías inventadas arbitra
riamente
sino
una colección de reglas reclama
das por la
organización
misma
del
ser
espiri
tual 2.
Por
supuesto
que no
hay
arte que pretenda
formar genios, ni tampoco lo pretendería la retó
rica. Pero se puede llegar a ser un discreto ora
dar
o conferenciante por medio de esta discipli
na. El grado de altura de
la
elocuencia a que lle
gue cada uno
dependerá
de las condiciones que
traiga de nacimiento. Pero todos pueden ascen
der por virtud de ella más alto de donde los dejó
la
n a t u r a l e ~ a
El espíritu se enriquece y perfec
ciona con este
o
cualquier
otro aprendizaje.
La
retórica tiene legítimos títulos
para
existir
en el mundo de la
cultura,
a condición de que
no
la
confun?a con un recetario de farmacopea,
c?n
una o ~ u l mágica capaz de dotar de ge
ruahdad a qUIen no
la
tiene, y siempre que se la
•• HOUGARDY, MAuRlCE. La
parole au
publico Essai sur la rhétorique et
1
eloquence
ruyourd hui
et dans le passé.
p. 21. Paris-Bruselas
Baude
1946. . .
14
interprete como
una·
transferencia util de expe
riencias ajenas
en
beneficio de
la
propia capaci
dad expresiva. Nunca será
sana
la disciplina que
intente
sobreponerse
y asfixiar al
espíritu
del
hombre o que intente trastrocar la
naturaleza
en
vez de encauzarla o conducirla. Ocurriría enton
ces lo denunciado por Pascal en su frase: La
elocuencia
se burla
de
la
elocuencia .
Cicerón, con haber escrito varios tratados re
tóricos, ha dejado
bien
clartllcada su opinión al
respecto, declarando que, a
su
entender, la retó
rica deriva de la
palabra
elocuente y no la elo
cuencia de la retórica.
3
•
Concebida así. la retórica o
arte
de la
palabra
responde al pensamiento del más
grande
precep
tista
de
la
antigüedad. el romano Quintiliano,
quien lo dejó definitivamente establecido
en
una
. frase inmortal: El orador se hace, el poeta nace .
Los ( mes de la elocuencia
Los fines específicos de
la
elocuencia han sido
también materia de debate desde los tiempos
antiguos. Historiar la diversidad de opiniones se
ria
caer
en una bizantina y fatigosa enumeración,
ya
que. en esencia, coinciden
casi todas
ellas. La
divergencia de opiniones tiene su origen en los
cambios de perspectivas de las distintas épocas,
países u oradores.
Para Cicerón, la elocuencia tiene por fines ins
truir, deleitar
y conmover. Aristóteles
señala:
alabar y vituperar, persuadir y disuadir,
acusar
defender.
San
Agustín, por lo que se refiere a
la
elocuencia religiosa, pide enseñar, conmover y
agradar, Fenelón, refiriéndose a
la
elocuencia
en
general. postula: probar, conmover
pintar
3 CICERÓN.
MARco
Tt)uo.
Del
orador. libro 111
cap. l.
146:
lntellego esse
non
eloquentiam
ex
artifICio sed art f icium
ex
eloquentia ,
15
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
10/112
. Y 9 ~ r p . a U e n Í ~ .
André Siegfried sost iene:
ha
_ l ª - R ª ' ~ conmover, para
persuadir
o para é n ? ~ : -
\ ñar. S e n c í l i é m r e n t e ; - S ~ l r á t a Q e c o n v e n c e r o
de
i,exponer
. > t ' " - - · · , _ · > · · _ · · · · · · _ = ' ~ ~ « w _ - - - - -
; ~ s ' - c o i l l c i d e n c i a s
son lógicas. pues todas tienen
fen
cuenta el repertorio posible de intenciones hu
; manas y la aparente diferenciación no es
más
que
. un desdoblamiento sutil de los conceptos.
La
tota-
lidad
del ámbito oratorio
queda
abarcada
adop
tando la clasificación que sigue. con todas las im
plicaciones que cada término encierra:
a ~ y ense }dr:. es decir.
transmitir
co-
nocim,ientosa-=-otraS
personas
o investigarlos y
adquirirlos en délioeraciones.
b)
s u a d i r ,
o
sea
convencer a
otras personas
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
11/112
/
:
)¡
.'
:
II :
)
)
H
)
j¡
)
,
)
I
)
ir:
)
I (
'¡ í
")
tados
positivoS sobre los oyentes. exponiendo
la
verdad
y el bien. La palabra es
un
don
gratuito
en el ser humano. y es lícito exigir a quienes se
sirven de ella,
para
comunicarse
con
el semejan
te, que
hagan un uso
acorde
con su alta
digni
dad
de origen
y
destino.
Elementos
de la elocuencia
La elocuencia. como cualquier arte, tiene sus
propios elementos que q , e . h ~ c o P : 9 C . , ~ L ~ t 9 d a perso
na que aspirare
a la
jerarquía o r a a o f : ~ N t r - s e
'viOÍan impunemente las experiencias CUlturales.
J ¿ L n r a t o . r . i a . . . . e S . . J d . l _ i l l ' i ~ _ en L g : l ~ ~
sx steE: ..tres
elemenlOs.-
cada
uno
de ellos tan importante
c'()"nÍólos otros. Tomemos la enseñanza del anti
guo
u i e n
en
su
célebre
Arte
retórica
expresaba:
" ~ L ~ ' J i : ? . ~ " ~ r s 2 ~ s t a
de
t r ~
t ~ S 5 1 r ~ ª ~ ~
a Q ~ ~ ~ L e m 1 i 1 1 L ~ u l d
y
el
auditorio
al
cual
se a s r a ~ H a y
que evitar
1 a " e i T o ñ e " a ~ c r e e n c i a Q e ( Í L i " e '
éCst':ijeto de este oficio
es
sólo el orador. Toda elocuencia es una comu
nicación
entre
orador
y
público
por
medio
de-
un
instrumento, la palabra hablada. ~ d ~
es J IL hecho sodal y
no individuql.
-Por esta
razón,
todo
estudio o crítica de la elo
cuencia debe hacerse analizando estos elemen
tos, y
es también por esta razón por
la
cual
todo
tratado
de retórica estudia separadamente al
orador, al discurso y al público.
~ l a ~ e l o c u e n c i a
I1ay
t a E t a ~ . , ª ~ __ 2 ~ ~ ~ g ~ - ª ._.:. . " " ' - ' . > . , ••_-i. " " ~ . , w I i l ' ~ _ ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ L ~ ~ . I . . . :w __
3 L E l O C l J I : J : J & ~ § . _ q j u q i c ; j g J ,
es
la que tiene
lugar en el ejerciciO del derecho.
~ } . ~ E l { ) c U e l l c i ª " . [ ~ I f . . g j Q ~ a .
denominada también
'sacra' o sagrada . E . s J ; ; L m J . ~ c J : r ~ t a sobre asuntos
de fe y
religión.··· ·····
'Ó. · . ' . '
) I 2 Q f Y ; , t } ) ~ l 9 : . . . E e ' { J ~ l J l Q l J . t a l ,
llamada también
augurar,
es fá
que
tiene
por
ámbito propio
las
múltiples ceremonias
humanas.
.
)
6
Elocuencia
artística,
cuyo objeto
es producir
p l a c e r - e s t e t 1 c o ' ~ ~ ~ ' " ' ~ ' ' ' ~ ' ' ~ ' " ' ' ' ' ' ' " ' ' ' ' '
....,,,---.,.
7
E l Q C ~ i 1 . i . t a J : ; .
que
tiene por objeto
ins
pirar la defensa
de
la
patria
y estimuI'ar
las
vir
tudes
patrióticas y el heroísmo en los soldados.
8 ElocuenCia deliberativa, es la que tiene
por
objeto -ercreoareodiscusioñ,
y
ocurre en las
• ¡¡
~ " " _ 7 . " . . p . ¡ ; ¡ " _ " , , , , " , " " " ' ' ' ' , I I 7 " , , , , , , , , ~ ~ , , , , , , · - , , , , , · c , , ~ · ~ : ' ' , , , 1 _ " . - ¡ . - , . . r ~ ~ • ' ' ' ' ' ' , , , : : _ ~
....
- : :
•.
19
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
12/112
I
I
el
I
I
Ji
asambleas, reuniones o ~ t s en.
que
suelen
f ~ ~ _ ~ i l l J § i J r 2 . t ~ ] f [ : R f t . r l l , , ~ ~ ~ " E S : 9 1 q E ~ . ~ d ~ _ t r
contrastar opini9nesL )
.
, " " ' C a a : a ~ u ñ o " d e e'stas tipos de elocuencia tiene
i
f sus leyes propias y sus fonnas típicas usuales. )
" ./
El ejercicio de
la oratoria no puede
desenten-
derse de la
verdad
y
la
moral.
En
los
últimos
tiempos se vienen realizando esfuerzos p e ? a g ~ ~ i -
cos
por poner fin al vicio llamado "prevancaclOn
lingüística" _que consiste en
e I , ~ l e ~ E _ l a
. ; p a l a . ? r ~
.12ara glen.1ir ocultar L Q e n s a m l e n t ~ . _ ~ tingUIS
ta Max Blackha denunciado categoncamente
esta práctica
malsana:
"
.
ª J : . ~ ~ l Ó ; d e . l l e n g ~ e
consiste
tanto en
Q,isimular el p e n s a m i e g ~ ,
GQillo
efifraúsmiÜrlo".
- - ~ - Y ~ J , , , , ~ r
' E n ~ I e n g i i a j e corriente se la d e ~ o m i n a ~ a m b i é n
"doble lenguaje". Sus manllestaclOnes mas gene-
ralizadas
son
el empleo de palabras sin sentido
(anemia semántica), ambigüedad en las afinnacio-
nes, palabras o frases
hechas
que ocultan un jui
cio (estereotipos), vocablos e l e g a I 1 ~ e _ ~ . q l l : ~ _ Q < ? u l t " , a n
ideas duras ( e u f e m i S i ñ o s } , ' ~ l r a s é s rituales engano-
SltstITsó"presimbólico del lenguaje), mentiras
s o ~ a
padas, hablas en clave, deCir indirecto, expreslO-
nes incOñiprens{5 €S Uergas exóticas}, lenguaje
meramente emocional (palabras coloreadas) y otros
dislates que
resultaría
muy
extenso detallar.
En
cierto país un organismo estat al tiene prohibida la
frase "crimen político" la cual debe ser reemplaza-
da por "privación ilegítima de la vida". En una
provincia extranjera se decretó prohibir el uso del
término "Dios" para evitar así en las escuelas las
controversias religiosas con
lo
cual quedó automá-
ticamente permitida la palabra "Diablo".
20
Aunque
resultaría
Utópico establecer
un
códi-
go de ética para quienes hablan en público, las
recomendaciones morales que se
han
fonnulado
estriban en lo siguiente:
«J
N Q
usar
@ ~ . 2 E e s persuasivas para con-
~ c k . . M . ~ ª ~ _ . i l l l L ~ t 2 r o b = < Í i l l i .
i l e J ' P ~ ~ ~
a n ~ ~ a r l ~ g ~ b ~ m e n t ~
(,>
-: \
~ J ; i o . . i u n d a m e n t a L J J D . a - Q P i D i ó . n
p r o ~ -
. . . . r r . i e r l d c L a . . , m : g u m ~ n l Q § ~ ~ . § l Y l 1 , @ _ c º r ~ : L < i ~ L 2 Q Q l . - . ~ l
f ~ t i s ~ _ t ; I ~ ~ ~ 2 9 ~ E " , Q t m ~ L . R a s t Q ~ ~ 2 . . ~ ~
~ J > . { Q . _ 9 . ~ V l t J i l L , ~ I . g g f t 5 ~ § g 1 e l t ~ J l , . l t m , ' Q Q § t º J ~ e , -
~ ª t P J J l : U , i ~ , q h , - 1 > . ~ § g n ª L Q j § , t t l ~ ~ g l J , ~ " h ~ ~ i l l : _
. d ~ i r ~ ~ L l Y ~ ~ , , , § . ~ . , J ? r ~ ~ y , g t ~ _ ~ ~ , , , ~ . ~ , ~ ~ t ?
, ~ ~ ~ ~
,
__
yl a ; . ~ " ' .
' ~ : ~ : : ~ ~ Q , S i m u l a r : , , a u t O r i d a t l . t í t u l o _ , n r.epres eJlta7 .. ,
ció:h que no se
tiene realmente para ganar
pres-
~ ~ § 1 Ú r g t ~ ; , , · ~ ~ J ¡ ; ¡ ' l O \ ~ ~ : ~ ' ~ : ~ e v - ,
No
dañar
a
n a d i ~ ; ~ . , _ , , , _ ~ ~
í6)
d.t¡,:,-, ,,, .,
21
)
)
)
)
)
)
)
:
)
) i
)
)
)
{
)
),
)
)
.
\
)
) .
)
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
13/112
~
: ; i
")1:
111
./ ~ ~ p ; J E & i f ~ l ü l ~ i ~ ~ ~ ~ - ; ~ -
• f) calIdad a la
segunda, pues
no pasa, ~ o r Icn::o":
)
~ : a e : u r r a u { a r o r t a c I r c ü ñ S r a r r c t m .
-
En átt1fno
l\ análisis, la
i i ñ P r o ~ ñ 1 O ~ s t e ,
Siem-,
• f ( l l I , ~ , J ? ~ : ~ ? l a E ~ J º . - 9 . l d ~ , § _ ~ , ~ ª J 2 e ~ e ,
improvisan
la
L
1)
l..estructu[.9- y las palabras,
no
las i d e a ~ .
( ;í)?1
I
í)
-
®14iscursº-
com ?:illctdo.
- En elocuencia, como
) en todo lo
nemas, la
bondad suele estar en
un
n /\ A plano intermedio. Es
rarísima
la improvisación
I
¡
J J
absoluta.
~ l _ q . i S C . 1 l . § Q . ~ § ~ l 2 i l ~ i p n
,
. _tí _
s a b i a d e D r ~ ~ 1 i ~ ~
• I nlll
j (1)''
t
01 :];: tw;ii es pIezas ora arias
n o . ~ i g l - R L Q , \ 1 § , ª . u ~ m á s ,
en
- e sentrcroa 11Smüfo.La improvisación . , . - ~ ~ ¡ ; ; ~ ~ ~
_ ___ _ .
~ ,---- '-»=---
~
ly ' l i - ,
), ""
¡LO
' I f t.í :i
~
f' ,V
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
14/112
2.
LA FORMACIÓN
DEL-º.RADOR
~ _ --------•
Esta
necesidad de
comunicar
el propio pensa
miento
es
inherente a la
naturaleza
del hombre ,
ha
dicho Hugo Foscolo.
Ésta
es
una
de las
ten
dencias
innatas
que
mueven
aí
ser humano.
To-
dos desean expresarse, porque la
palabra
es un
placer. Hay una alegría de la palabra, que la ex-
perimenta
en
su propio
ser
quien convence, per-
suade, conmueve o enseña. Pero este
profundo
y
sano
regocij o del
alma
sólo
es
patrimonio de
quienes dominan el instrumento expresivo.
¿Tienen
todos
los
seres humanos
el
don
de
ha
blar con
poder de conviccióri,
claridad
y elegan-
cia? Con esta ardua
pregunta se relaciona
el
don
oratorio, en que intervienen,
en
distinta propor-
ción y según los individuos, las condiciones
na
turales
y
las
condiciones adquiridas.
El orador debe reunir en sí,
para
el ministerio
de la palabra pública, cualidades físicas, intelec-
tuales y morales.
í
Cualidades
físicas
t;
\
En
el orden de las condiciones físicas hay un
ideal, pero muy pocos hombres puede decirse
que lo satisfacen. Como estos atributos no de-
penden del individuo ni
pueden
modificarse, vale
27
)
)
)
, :
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
15/112
:j
:1
1
11
]
1I
11
1
C2..,ualidades i n t e l c : : c t ~ ~
El ejercicio de la
palabra
requiere inteligencia,
sensibilidad, imaginación y memoria en
tanto
grado como
cualquier otra
actividad profesional.
Inteligencia En la relación verbal
no
sólo
t i e n e a e r e c ñ ( r s ~ e l talento excepcional o geniali
dad. Hay
también lugar para
la inteligencia me
dia
o el sentido común
puesto que
no
toda
ora
toria
es
científica o académica. Hay oratoria de
todos los
asuntos
y en todas las ocasiones. Por
otra parte, es
cierta
aquella afirmación de que
el sentido
común
es
la cosa
mejor
distribuida
del
mundo , como sostenía Descartes. Es muy
raro
que
a
un hombre
de mentalidad media le falte el
sentido común necesario como para enfrentar a
un auditorio. Lo
importante
es
contenerse
en las
ambiciones, no ceder al peligro de sobreestimar
se en
demasía
y saber impostar la pretensión de
su
conferencia en el cuadro de la humanidad y
de
la sinceridad. Además,
es
de
pensar
que ante
8
la
duda el conferenciante
sabrá
tomar el conse
jo
de los maestros y trabajar lo suficiente en el
estudio de su asunto.
Una cultura
general adquirida en
el aprendiza-
_$_:p.aciente a través de los años
es
una efectiva
garantía de sabiduría. Esto es innegable,
porque
da al hombre una visión total de la vida,
los
he-
chos
y
las personas capaz
de
interesar
a
cual-
quier auditorio. ~ s
es
posible, también
una
i n ~ ¡
. 9 I T E ~ ~ n Q ~ a s l Q l l ª L § . Q l n : ~ ~ 1 l : g ~ 1 ~ } : r l a deteITIlinaoa: / . W ( ~ ,
~ r l E l ~ ~ 5 } i ~ 2 " Y . , ~ . f L ~ n i ~ < p ~ a r ~ ~ ~ ~ ~ Y i t : a i . i l : ~ ~
;
§ ª Q ~ Q . _ 1 n ª , . , ~ , ? ~ r « ª i v Q j l ~ ~ , " 1 } ~ t l l L ~ ~ ~ ~ . : e n c i a
ó un
\
_ e ~ ~ t e . En
una palabra
o se
t i e h e p r é v m m ~ r r t e
lacultura necesaria para exponer un
asunto
ante
el auditorio , o
se
la adquiere
en
cada ocasión por
los maestros los libros o la investigación. Como
no
es
fácil improvisarse en hombre culto, convie
ne ir haciendo el propio equipo de conocimientos
paulatinamente
día a día,
para estar bien
dota
do
en
cualquier
momento.
sobre
todo
si
nuestro
modo discursivo ha de ser la improvisación. No
pensemos. con
esto,
que la
elocuencia
sea
un
arte selectivo, privilegio de gente ilustrada , dice
Joseph
Folliet
1
•
Aunque
la
competencia de
un orador
depende
en gran parte
de su
capacidad
y acervo intelec
tual conviene
sin
embargo prevenirse contra la
idea de que un discurso debe estar hecho sola
mente
sobre la
base de la inteligencia. Un exceso
~ ~ \ € ~ ~ ~ i f ~ ~ ~ ~ ~ ~
La inteligencia sirve para hacemos conocer con
claridad y
distinción
los problemas y asuntos;
desarrollarlos analíticamente;
captarlos en
sus
relaciones
con
los demás temas afines u opues-
1
FOLUET.
JOSEPH. Oratoria; introducción l arte de la palabra pública
p. 21.
Buenos
Aires. Ediciones del Atlántico. 1958.
9
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
16/112
, 1
11,1'
"'¡
tos;
coordinarlos y conciliarlos con el complejo
total de las
cosas
que
sabemos
e incorporarlos
como
sustancia viva a
nuestro
mundo
de
ideas,
opiniones
y
creencias y, sobre
todo,
no pensar
que la ciencia
cubre toda la
realidad.
Hay un
gi
gantesco mundo de
lo desconocido,
adonde no
ha
llegado la ciencia, y
éste es un sector de
la reali
dad
que también
debe
merecer nuestra medita
ción.
No
tomar las
cosas por las palabras,
pues
las
palabras son nada más que un signo conven
cional de las cosas mismas.
Es ineludible para
un
orador el cultivo de su
inteligencia. Éste puede hacer confonne a las re
glas, métodos y procedimientos expuestos por fi
lósofos
y
maestros. y
aunque
no existe.
en
ver
dad. método alguno infalible y cada
persona
puede crear el propio,
no
debe olvidarse tampoco
que
l
comercio con
las
personas cultivadas. la
observación. la lectura y el sentido
común
son
métodos también
de aprendizaje.
e n s i b i l i d ~
- La inteligencia sola no basta
para hacer
un
buen discurso. Es
una
condición
fundamental, por supuesto, pero
no
lo
es
todo.
Los oradores esencialmente intelectualistas co
rren el riesgo
de limitar
su público a
un
número
restringido de especialistas.
de
no
hacerse en
tender
por
los
grandes
auditorios o de
dejar
indi
ferentes a los oyentes. Salvo excepciones raras,
el
tono
exclusivamente intelectual de un discur
so
lo deshumaniza. lo
seca,
lo desvitaliza. Hace
falta otra condición más humana.
más
común.
,más
conm6\redora:
la
sensibilidad.
\
ej
La
sensibilidad es la capacidad
de
c o n m c r u e r ~ 1
\:. J n ~ l ~ . < ~ L ~ , : ~ J ? ~ c t _ ~ c _ ~ I o ?: la vida y _ ~ o s h - : ¿ ~ . · l i t ~ ~ ~ g ~ ~ ~ ~ ~ ~ ~ . § & i I ~ ~ ~ : :
p
f : D t ~ ~ b - : ~ a ; ~ ~ ~ ~ ~ : ~ : ~ ; o : i a ~ ~ ~ a ~ ~
que por el cerebro. Muchos
discursos
ejemplares
30
pierden
al
poco tiempo su vigencia y su
actuali
dad
por no
haber
sido
más que
un amontona
miento de razones, por haberles
faltado emoción.
"En la carrera de un orador. un alma
sensible
es
una
fuerza
considerable", recuerda Maurice
Hougardy2. La oratoria tiene
algunos
puntos de
<
contacto con el lirismo y la poesía. .Jf,
I
El secreto de la sensibilidad está
en
el amor
Oi
las cosas
y
a
las
personas.
Se
siente
emoción
por
:
,
aquello
que se ama, y este sentimiento afectivo ./fl l¡
es
el que
despierta
en
un alma las simpatías,
i
generosidad,
el patriotismo,
la
fe. la piedad,
la
clemencia. la
compasión. Quintiliano pedía
una
elocuencia
saturada de
sentimiento.
Horacio.
por
su parte,
exigía,
al
orador: "Si
quieres
que yo llo-
re, llora tú antes"3. .
El público reacciona inmediatamente, como
diapasón, a la
emoción
y sensibilidad del orador;
liLfibra
s e n ~ ~ ~ n : : l
tes
}a f 1ás.
~ i ~ ~
segura. e , l ~ . 9 r a l Q . r . ~ § l . U'ébeTenena
siempre
el
orador. a condición
de que
sea
verdadera,
since
ra y esté sometida a
la honestidad
de fines.
La sensibilidad quiere también
sus
límites. La
sensiblería
es el defecto paralelo
que
debe evitar
se,
pues
es ridículo, poco edificante y nada con
vincente.
El sentimiento es un ingrediente
más
del dis
curso y no
la
médula sustancial. Los oradores
excesivamente afectos a esta
tendencia
son des
cubiertos en
seguida
por el público, que los re
chaza a poco de conocerlos. pues el ansia de ide
as,
natural
al
espíritu del hombre,
queda
insa
tisfecho.
Un
exceso
de sensiblería
es
sospechoso
y poco
duradero
en vez de conmover, provoca ri
sas; en
vez
de
emocionar,
aburre
y
disgusta.
2 HOUGARDY. MAUruCE.
op
cit
p.
53.
3 HORACIO. Arte poética v 102-103: Si vis m flere doleundum
st
primum ipsi ttbL
31
.
.
í
:
.
1
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
17/112
/
,*'1'
.:1:
)
'Ii
.:
,
)
_1
)
t
)
J
)
H
)
H
ti)
)
11
)
:
H
)
11'
)
1" 1
¡
) ,:111
11 '
)
11
)
1)
11
)
1 .
I
' I ' ,
I
í:
;¡II
)
,
11
)
)
1:;
No existe regla
para
desarrollar o perleccionar
la
sensibilidad. Ella
se
origina
en
una compren
sión
especial de la vida, que
puede
explicarse,
comunicarse, pero esto no es suficiente: requiere
ser sentida. La sensibilidad debe ser
pura
sin
contaminación, sincera.
para
ser oratoria y mo
ral. El fingimiento y la mezcla con finalidades in
confesables llevan
en
sí su
propia
condena
y re
pudio. La conCiencia de
cada uno dirá cuándo
debe
apelar en su discurso
a
la
sensibilidad y
cuándo será moral su empleo.
Imaginación - La imaginación es
la
facultad,
\1
1
que permite
c O l l . ~ i r
las ideas d e ~ c ~ " . u n
nueYQ
\
¡1 I i i ¡ i f t Q . ~ V [ ~ ~ ¡ ¡ l l E . l i í i l l ] ' f g ª T Ó ~ a s
concre.-
1I ~ ~ t i ~ i ? M : t i ~ : § ) J e e s ~ · = ; : r ~ ~ Y ~
1¡ atractivo cuño. U 1 T r m r g i n a e i Ó r C ' 1 ) u e s , ~ D a f . i ~ . -
1\\,\ c u 1 t a d " a e ' ~ c ' r e a C i ó n
original y embellecimient
>l
é l e ' · é 1 i a ' ñ o ~ U e d e ' ' - ñ a ~ ~ ~ n i ñ g ú n
arte.
~ ' s ~ ~ c r e > ' ~ u c - ¡ i ' a ' s ~ v e c e s ' q ü é ~ g r a ñ C í e S ' ~
son,
demasiado conocidas y que ex
resadas en
forma
r .erden el encanto de
la
origina
1
ad y
la
novedad.- TócaTe
entonces
a
la5.i.l:J2acidad
la
ginativa del
orador
revestirlas de formas origina
les d e c i r I ~ ( f e - s c 6 n o c m a s ' · 1 i a s 1 : a ' ' ' e n -
~ f ~ i ~ ~ f c ~ g ~ ~ ~ ~ k ~ ~ : ~ ~ I ~ ~ p ~ f t ~ c : t ~ ~
r a s : ¡ F a - ñ c r e s " ~ r E a l f á c l o n e s de los
hombres
sobre
el destino,
las costumbres
la política, la vida, la
amistad
están encerradas
en
fórmulas envejeci
das
y
son bastante
conocidas, porque las ideas
sustanciales
y mayores de la
humanidad
no son
tantas ni tan desconocidas como pudiera creer
se. Si
ante
estos asuntos
el orador
no las
recrea,
no las rejuvenece, no las informa de nuevas pa
labras,
correrá el riesgo de
caer
en la vulgar re
petición de cosas ordinarias. Hay que recurrir a
nuevas fuentes, a nuevos motivos. y esto se lo
gra por medio de
la
imaginación; ella. a poco que
32
se la
estimule.
habrá
de proveernos de los
nue-
vos trajes. '
De la imaginación ha dicho
un autor
que colo
rea
los
acontecimientos con un tinte
mágico,
desarrolla un magnífico cortej o de sueños y
"transforma
lo
cotidiano
en
eterno,
lo
relativo
en
absoluto". El hombre debe
mostrar en
imágenes
~
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
18/112
r ~ o en c u a ~ i e r ITlQ..lJlentQ
el
manantial
de ide:
as
que puede necesitar paiaelatrornr-t11í15'tiéñ
C f i s e t r r s t J . " r s - e r T e s o t o - c r e t ~ C í f t t d u r . " ' d o n d e " ' s ~ s
tód'fá'n'1
as
O> riquezas que o f r e c e r ~
en
su momento.
Todo cabe
en
él:
frases, vocablos, citas, imáge
nes, ideas, pensamientos.
No
todos tienen
una
memoria feliz. Pero todos
pueden
perfeccionarla,
más
quizá que
la
inteli
gencia,
la
imaginación o
la
sensibilidad.
Hay varios tipos de memoria,
según
el órgano
en
que
ésta se
apoya. Hay
una
memoria intelectual.
que recoge
las
ideas y
las
palabras
en
general; y
hay
también
una
memoria visual,
una
auditiva,
una
motor, que retienen las formas y colores, los
sonidos, las acciones, respectivamente. El orador
bien dotado necesita de todas estas formas, pero
la
más importante. la que conviene estimular y
ejercitar,
es la
intelectual.
Cualidades morales
Un
orador es,
ante
todo,
un
hombre.
y
esto de
ser hombre es una gran
responsabilidad. Las
cualidades morales que
adornan
al orador tienen
decisiva importancia
en
su
carrera. Sucede como
expresa un antiguo adagio: se puede engañar
siempre a
una
persona. muchas veces a algunas,
pero siempre a todas, no. El orador con fallas
morales, pronto será descubierto por el público y
repudiado.
El orador, por la seducción que ejerce sobre el
público, debe
ser un
hombre de profunda mora
lidad. La oratoria es
una
de
las artes
que
más
exige
esta
condición,
precisamente
porque el
fundamento del poder de convicción radica en el
prestigio y
la
confianza. La antigüedad exigía que
el orador fuera
un
bonus
vir un
hombre hones-
4
to, y Aristóteles recordaba que el orador persua
de
por tres
medios:
la
razón. la probidad y la be
n ~ v o l e n c i a . El público
guarda
respeto y admira
Clon por la
virtud. y esto obedece a
una
razón
que
la
psicología colectiva aclara. El triunfo de la
inmoralidad o el demérito
es una
excepción pa
sajera en
la historia de
la
oratoria.
Fenel?n ha expresado
en una gran
frase es
te
reqUIsito
de la palabra
pública: El
hombre
digno
de ser escuchado es
aquel que no se sir
ve de
la palabra
sino
para
el pensamiento. y del
p e n s a ~ i e n t o
sino para
la verdad y la virtud .
QuinUhano.
por su parte. enumeró
las
cuatro
cualidades
principales
que
el
orador
debía po
seer: probidad. benevolencia. modestia.
pru-
dencia. .
Los antiguos tratados de retórica enumeran y
analizan
en
detalle
cada
una de las cualidades
morales y. al respecto.
son
severos en sus exi
gencias. Algunos tratados modernos también 10
hacen. Todo esto
puede
resumirse
en
una
sola
palabra: carácter. El orador deberá
ser
un carác
ter.
un
modelo
humano. si es que
pretende eri
girse en conductor
de sus
oyentes.
~ convenienci s o prec uciones or tori s
--------_.
_
____
----
En
el orden de
la
práctica profesional. convie
ne tomar nota de algunas actitudes directamen
te relacionadas con el ejercicio de la palabra o
cualidades
específicas. profesionales
d i r i a m ~ s
que no
excluyen.
por supuesto
el fondo alta
mente moral que conviene al orador,
en cuanto
ser humano
y social. A ellas
se
las, denomina
conveniencias o precauciones oratorias.
~ : : ~ ª . s : ~ n v ~ e n ~ p r o f ~ Q . ~ l e s
o e s p ~ . n c a s
s Q n ; . ~ ~ ~ o l e ñ C I a : - á u f o r i d a a : ·
.ªmbicion. . - - - - - - ~ ~ _
......
-
35
1
,
)
)
,
I
)
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
19/112
,
,,,
'
) 11
1
,,
.
I
)
I
) ' I ~ : ~
I ':11
)
:
i
,1,
)
, ,
, 1
:
11 1
\;
I
),
i
) i
I ,
)
•
I
)
I
) ,
)
I
)
I
)
I
)
I
)
J
)
1
)
J
Cada
una de
estas
cualidades tiene
su
opues
ta, que es el vicio concomitante. Bien entendido,
el ejercicio
de cualquiera
de estas
cualidades
presupone un
justo equilibrio que asegure
al
orador un comportamiento correcto, pero al mis
mo tiempo efectivo, en el ejercicio de su impor
tante [unción.
~
es
lo mismo que
la
compostura
o
fdrmalidad,
y s ~ 1 l T c a : - p o r
éonsigüIente, una ac
t i f ü C f C 1 ~ J 1 I T $ . . ª Q } I ~ [ [ f ~ a s · C i r . s . u n s ~ a n
~ a a s ~ ~ á ~ I ~ ~ 2 : § . . y ' , . ~ ª , J , 9 ~ L 9 y ' e n ~ ~ . _ § ~ , [ ~ ~ = a
1 W r l u a ¿ i ~ ~ e ~ . ( ) k l ' ~ ¿ r ~ d ~ 9 á ~ ó ~ ? ~ ~ ~ ; : ~ u ~ ~ ~ s ~ ~ : ~
poFerracIo"'serio, grave, responsable. Esto impli
ca
una selección de
las
ideas, los argumentos, las
frases,
para
no
caer
en la ligereza o la superficia
lidad. Tampoco
se
opone la seriedad a
la
clari
dad
y a
la
sencillez de
la
exposición, requisitos
que deberán considerarse
cuando la
mentalidad
mayoritaria del auditorio
no
esté
en
situación de
comprender.
Por
la
modestia, el orador evitará las
posturas
de petulancia,
o 111 llQ,
"pedantería, fatuidad.Es
tos son
vicios
que
el público ñ'(:)'U)lera
ni
perdo
~ y
q u ~ , , § e r m º a ~ § t Q . _ ~ g J º ~ g ~ § @ __
en
la
p r e s i ó n : ~ e i i ~ l a e s t i m a c i ó n , " d ~ _
...
t ~
~ e . . . : . ~ n
Jgualceio cuidará
el orador de nCLCa
er
. en la Jal
sa
modestia,
porque ésta
tampoco
es aceptada
por
"los oyentes y
por la
sociedad. La falsa mo
destia
es en esencia
una forma del orgullo y
la
vanidad.
Hay
que permanecer
simple, sincero,
mostrar las propias
condiciones y
la sabiduría
-
si
se
la t iene-,
pero con honradez espiritual.
Está
reñida con
esta
condición el falso patetis
mo,
la
simulación de pasiones y sentimientos, la
teatralidad
de los gestos.
La
benevolencia supone un
especial
senti
miento
hacia .el
público y su capacidad, o
hacia
nuestros
adversarios
en
el debate. Debe llevarse
36
con
particular
diplomacia
la
controversia y la
oposición de ideas,
para no herir ni
ofender y,
sobre todo,
para
tratar de comprender,
con
ge
nerosidad
y
altura,
aun
las
opiniones
más
ilógi
cas
de los demás. Se debe
superar
al adversario
si
es
necesario y justo, pero es prudente no ava
sallarlo ni aplastarlo.
En
todo momento, tenga
mos
presente que el opositor
nuestro
tiene dere
cho a sus propias ideas, y que
no
siempre una
idea errada procede de una mala fe. La benevo
lencia se manifiesta en comprensión y generosi
dad
para con la
ignorancia
aj
ena, tolerancia
para
los error es y flexibilidad espi ritual para adaptar
se
al tono
mental
del adversario u oyente.
~ a u t º r ~ d a d _ es
el sentido interno que cada
orador tiene de
su
mensaje y de sus conocimien
tos.
Es
una condición neces aria
para
dirigirse al
público.
~ l p ú b l i c ~ ,
en general,
e . § R ~ E - ª - " ~ ~ ~ R : e
~ 1 l ª - ~ ~ ~ ~ ~ . _ , ~ _ ~ l . l ~ _ ~ ~ d a ~ - , " l l g = ~ § ? , 2 . ~ ~ ~ i Ó ~
sus
~ J g U l e t u d e s ,
una
enseñanza
a
su
aescó'nocF--d
I D i e ñ t o ~ E ñ 1 O n c e s el orador deberá
tener la
sufi
fiente autoridad para atender, a satisfacción, es
tas req
· s . , ~ t o r i a s
en cuanto se
presente
la opor
tunida i se habla en nombre de un grupo o
de una sociación,
este
hombre deberá tener
presente
que a su autoridad personal, se suma
la autoridad del grupo que lo delegalt.La autori
dad supone un imperio sobre los d ~ á s
en
el
sentido
más cabal
del término, porque
la
verdad
tiene necesariamente
su
imperio
sobre la
igno
rancia.
La ambición no es lo mismo que el orgullo. El
concepto ambición tiene un sentido noble, y es
el de superación de la propia persona,
el
de as
cender siempre en la vida, hacia mej ores y más
altos destinos. Es lícita, así, la ambición en el
orador, lo mismo proyectada
en el orden perso
nal y
humano
que en el profesional. Distinta de
la ambición noble es la concupiscencia,
la
codi-
37
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
20/112
,
I
i l ~ 1
1
cía irrefrenable de posiciones o
de
glorias.
a
competencia limpia
es
legítima en el hombre, y
por
ella el
orador
tiene el derecho de lograr los
éxitos que su virtud. su mensaje o
sus
cualida
des le merecen.
El
miedo oratorio
. _ . _ _ . _ ~
~ m , ~ : ~ ~ ~ ~ l i ~ ~ " ; J l t ; :
gárita,produce'tráiísplracIoñ:--eYfgenafa
~ ' i ' ~ ' ¡ : - - ·t··.· · m· , ·s ·d'e l····cu·· m o · : l o s . , . b r . a z ' - - ~ s pler-
m en .
os o ~ . r . e , , ~ , I ' ~ ~ ~ ~ __
r i á s " ' ( r a b á l a ' ~ 1 1 1 ¡ c u í a c i ó n y la y ~ ~ que
es
p e ó i ~ " ' o b l i U ' 6 I I a " ' I a ' ~ e ñ ª : " ' E ñ " " i i n a
palabra, es
un
f e n ó m e n o p s i q m c ó ~ p a r a l i z a n t e . Para
comprender
y superar este fenómeno
tan
frecuente en la ca
rrera
oratoria. conviene estar advertido sobre al-
gunos puntos.
,
El miedo
es
un
fenómeno
común en
casi todos
los oradores, incluso en
los
más
famosos. Lo
mismo
sucede
con los artistas en el escenario.
Cicerón mismo consideraba muy feliz al orador
que no sintiera erizarse los cabellos ~ n t e la pre
sencia del público.
Juvenal
se refirio a la emo
ción
que
experimenta
quien habla
en público,
asemejándola a
la
de
quien
pone un pie
desnudo
sobre un reptil.
Pero si el miedo no
es
morboso y obsesivo,
desaparece a poco de comenzar a hablar. ~ s t i
des
Briand, el famoso parlamentario frances, re
éonocía
que Jamás pudo
abordar
un
público
sin
un verdadero
malestar
ftsico: boca seca, gargan
ta cerrada. manos muertas. Pero confesaba
que
este estado duraba más o
menos
el mismo tiem
po
que
el exordio. pues luego volvía a ser amo de
sí mismo. Tener miedo antes de hablar, perder
lo
cuando se
habla, es la
marca
del buen artis
ta , dice un experto.
38
Por
otra parte
el miedo no está en relación con
el
número
de oyentes y
con
la calidad del audito
rio. Algunos oradores
no temen
frente a
grandes
públicos. pero se atemorizan ante un grupo de
salón,
mientras
que otros
temen
al público grue
so de
las
asambleas
públicas, y en cambio
se
desempeñan
a
la
maravilla delante de auditorios
escogidos o académicos. Cada orador deberá dis
criminar con exactitud cuáles
son
los públicos
y
circunstancias
que 10 atemorizan, pues de esta
manera habrá avanzado un paso en la elimina
ción de ese temor.
En cierto sentido, la timidez
es un
signo posi
tivo en el
ser humano, pues
obedece. desde el
punto
de vista psicológico, a una especial sensi
bilidad del alma y,
muy
a menudo, a una inten
sa vida interior. Esta condición es preferible a la
inconsciente temeridad del ignorante pues, su -
perado el temor, quedará como fondo importante
para la oratoria el riquísimo caudal de
las
inten
sas
experiencias internas.
Hay que poner
toda
la voluntad y decisión po
sibles para evitar que el m i ~ d o natural
se
con
vierta en manía obsesiva. Esta implicaría una
falta de confianza en
la
propia personalidad y
una falla grave de
la voluntad.
En realidad,
cuando
un hombre siente que tiene algo impor
tante que
decir, que su mensaje
es
útil, verdade
ro y valioso, tiene motivos suficientes como para
anular el temor inicial y lanzar se en el campo de
la oratoria.
¿Existe algún remedio con tra el temor oratorio?
Si el miedo
es
el que naturalmente experimenta
todo orador o artista que se presenta ante el pú-
blico, lo hay. Pero en el caso de que este miedo
sea
terror
obsesivo, la solución
se
interna en el
dominio de la psicoterapia. En numerosísimos
tratados de oratoria, particularmente en los mo
dernos, se proponen métodos interesantes para
39
)
J ,
I
i
\
:
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
21/112
I
1
.
I
\ .
.
,.
I
.
I
I
I
I
I
t
)
1
superar las inhibiciones propias del orador inci
piente.
Se parte por
supuesto
de una investigación
psicológica del fenómeno del miedo, el que
en
definitiva
se
origina
en un
estado físico de ner
viosidad patológica, en un complejo de inferiori
dad -permanente o transitorio-
en una
sobre- .
estimación excesiva del propio yo
-que
lo
torna
sumamente celoso e intolerante con el mínimo
fracaso- en la falta de suficiente preparación o
en
la natural reacción que experimenta toda per
sona al
internarse
en una situación inhabitual.
El orador tiene miedo a olvidarse su discurso, a
equivocarse, a promover
un
espectáculo ridículo,
a transmitir un
mensaje
mediocre y deslucido, a
atemorizarse ante
el
püblico, a enfrentarse
con
eventos azarosos e imprevistos.
Del
análisis de
este
fenómeno, sus causas
manifestaciones y efectos, se derivan los conse
jos para
vencer el miedo oratorio. De los
nume
rosos métodos
propuestos son especialmente
recomendables el de Lew Sarett y William Tru
fant Foster, expuesto en su tratado asic princi-
ples 01
speech
4
y el de Donald
C. Bryant
y Karl
R. Wallace, desarrollado en el libro Fundamentals
oJ
public
speakinif·
Sintéticamente expuesto, el método de Sarett y
Foster
contiene sugestiones
para 1) controlar
los
signos
externos
de inestabilidad emocional; 2)
hacer un
buen
uso de
las
reacciones fisiológicas
naturales
en
el momento de hablar; 3) simplifi
car
la
situación
compleja
de
la
oratoria;
4)
tras
ladar la
atención
que el orador
se
presta a sí
mismo, hacia los demás y sus intereses.
43ARETI.
LEw y
FOSTER. Wn.uAI {
TRUFAI'IT. asic
principles 01
speech.
edición revisada.
ps. 52-76.
Boston.
Houghton.
Mifflin Company.
1946.
. 5 BRYAlvr. DONALD C. y WAllACE.
KAru.
L • Fundamentals 01
pub/.ic spe
aking ps. 60-84.
Nueva York-Londres. D. Appleton-Centu ry
Company
Ine
•
1947.
40
Esto debe b a c e : t s e . ~ a tr.allés
1 1 ~ 9 Í 2 l . f . e t t ~ a : Elija un
tema
de .su pro
pia experiencia. Elija un tema que provoque
en
usted
una actitud mental de apoyo. Elija un
tema
que
provoque
en
usted un espíritu de lu
cha.
2) ~ Pr,epare un esque
ma en
que
.lª s ide,as
t < ? ? g ~ _ 1 . ~ a ~ . L : ' o : ~ ~ ~ ~ .
Escriba completamente las tres o cuarro pnme-
ras
frases y memorícelas. Escriba c o m p l e t a ~ e n -
te y memorice las
últimas
frases. Memorice el
esquema
tan
a fondo
que
cuando usted cierre los
ojos pueda verlo
claramente en su
totalidad. Lle
ve
su
esquema
al
estrado y
si
es necesario, coló
quelo en el pupitre.
3)
C o n t r ; q ~ 4 L l g . J r i ~ s ; l J J J j k ( L . ~ C Q 1 ; P . J l C J J l : Rompa el
círculo vicioso de la tensión
muscular
el miedo
produce temblor y el sentirse tembloroso
aumenta
el miedo) mediante el relajamiento muscular.
l i l l ~ ~ e en su
s i ~ ~ ~ ~ ~ q ~ ~ l a r .
Relájese
en
el
e s t r a Q o : ~
una
actituQ comoaa en el estrado.
Realice algunos movimientos corporales que le ali
vien la tensión (tome un libro, acomode las fichas,
tome un diagrama, escriba algo en el encerado,
acomode
sus
libros de citas, etc.). R ~ ' § J 2 ~ ~ h o n d a -
m e n l ~ r
calmarJa
tensión. .
. . " " ' " ' ~ , , , . , .
o . ~ ~ M o ~ ; ' R " 1 ' \ . " " ' ; r " . ~ , " : r , ~ " - " : ; , .
4
l J , c s ~ ~ " J n e I i C f . . ~ e . § " " " " , d f
s o s ~ t :
Existen tres actitudes
mentales
P 2 : : ~ . _ , ~ 1 ? ~ o
Y§lrse
P s i c o 1 6 g f c a i i i e ñ l e : ~ a r T a a c f í f u a - ' a e '
ansia por
dis
tribuir
eager-to-shareJ:
Cuando tiene para entre
gar algo qqe entusiasme a
su
espíritu, el
orador
tiende a olvidarse de sí mismo;
b)
la
actitud
de
deseo de
combatir
will-to-flfJhtJ:
Si
el
orador
se
enfrenta al auditorio con decidido espíritu de
lucha tiene grandes probabilidades de' atraerlo;
el la actitud de hablar por una causa
speaking
Jor-a-cause): Cuando el orador habla fuertemen
te convencido de la
bondad
de
su
causa o princi-
pios, se
toma
naturalmente elocuente.
/ - - /
41
)
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
22/112
Sarett y Fuster agregan a este método otros
consejos para desarrollar el aplomo: pensar que
la anticipación a la turbación es peor que la tur-
bación misma: no
hablar
sobre las propiq.s apre
hensiones: no mezclarse con el público
antes
de
hablar, salvo raras excepciones: recordar que la
mayor parte de las catástrofes que tememos no
suceden
y, finalmente, no avegonzarse de la pro
pia
nerviosidad,
ya que ésta es
una
situación
normal
en
el
ser
humano.
Más importantes, aún son los métodos de com
pensación psicológica tendientes a suprimir o sus-
tituir. real o imaginariamente. los propios defectos.
La compensación psicológica es el esfuerzo cons
ciente efectuado por el orador en estado de infe
rioridad
para
balancear
un
rasgo o una circuns
tancia
indeseable
por
otra deseable. atraído
intencionadamente. Entre los métodos de com
pensación recomendados se
cuentan
estos:
l
Compensación por ataque directo
del
defecto:
El orador
hace
un
esfuerzo consciente
y
sosteni
do, enfrentando
su
minusvalía,
hasta
destruirla.
2 Compensación por desarrollo de otras virtu-
des: Si
un
defecto no puede vencerse directa
mente
el
orador desarrollará méritos
en otro
sentido: la nerviosidad física
puede
compensarse
con la
simpatía
la poca originalidad
con
una
evidente
buena
disposición de ánimo hacia el
público, y así otros muchísimos casos.
3 Compensación
por ayuda
a otros in fortuna-
dos: Este proceso de
ayuda
a quienes son más
infortunados, fortifica la moral del individuo. Un
orador puede tonificarse espiritualmente y reco
brar
la confianza en
sí
mismo. si entiende que
su
palabra
sirve al prójimo.
4 Compensación
por
hallazgo de un puesto de
autoridad Toda persona puede compensar su
sentimiento de inferioridad si
encuentra
en
la
vida social o en el trabajo un empleo o situación
42
en que
sean notorios
su superioridad
y cono
cimientos
con
respecto a los demás. Lo mismo
sucede con
el
orador
cuando encuentra el te
ma
en que puede desenvolverse con autoridad y
éxito.
5 Compensación por consagración a
una
cau§t l f
o
institución :
MuChOS
d
oradorels
d u ~ d e n 10d
grar
la t
superación dedicán ose a a elensa e una
causa
o institución. Esto permite
ganar poder
personal. social y profesional.
El método propuesto por Bryant y Wallace no
difiere sustancialmen te del anterior y se apoya
en
fundamentos psicológicos
más
o
menos
seme
jantes.
Comprende estas reglas:
l
Minimizar el riesgo: Recqnocer que hablar
en público
no
difiere mayormente de una con
versación en privado. Conocer
tanto
como sea
pOSible al público.
Comprender
en la
práctica
cómo los demás
soportan
las mismas experien
cias. Comenzar la preparación de un discurso lo
más
tempranamente
posible y prepararlo total
mente.
2 Enfrentar el riesgo: Disipar la idea de que el
peligro sólo
puede ser
combatido
mediante
el
aislamiento o la fuga. Reemplazar el miedo
por
otra
emoción (indignación.
humor
piedad. sim
patía, etc.). Evitar los movimientos de huida y
sustituirlos
por
otros de confianza y equilibrio.
Los
tratadistas rechazan
en general los esti
mulantes
artificiales, porque
con
ellos
se
arries
ga
más de lo
que se puede ganar y además
porque
su
empleo
es
una
manera
de eludir el
problema y
no
de resolverlo. En
lo
físico,
se
reco
mienda la
respiración abdominal que desconges-
tiona y tranquiliza.
En síntesis,
todas
las teorías y métodos acon
sejan, con mínimas diferencias entre sí,
D pre
f 3 e l 1 . ~ ~ , . s ~ ~ ~ n . ~ ·
el
tema
y conocer la
totalidad
de ,los
f a c t o r t ~
. --_.
, ~ , . < i : ~ . . , ~ ~ m ~ ' : r ~ , l>; = ~ ~ ~ ' o $ ~ ' ' ' . t f , , ~ , ~ . . I > I ~ ¡ ; ; ; ; ¡ : ;
43
)
I
)
)
)
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
23/112
"
I
' f ~ 1 I ¡il l l
)¡
I t l
j
¡Hi
"
j
)
):
): :
)
)
)
)
)
c o n c u r r e n t ~ ~ t ~ J _ ~ l º ~ l ~ t ~ ~ ~ de Qyentes. sus
f f i f é ~ s , ~ ~ i ~ p r < ? b a b I . ~ ~ , ~ l 3 , c j t g ~ etc? .
~ e n t r con
OecIslOn el riesgo, apoyado psico-
loglcamente
en una
favorable y firme
actitud
es-
piritual dispuesto
a
aceptar
como precio del
aprendizaje los fracasos y contratiempos even-
tuales,
hasta
llegar al dominio de
la actitud
ora-
toria.
·Por último,
son
auxiliares algunos trucos o es-
tratagemas
como
por
ejemplo, el de
mirar
fija-
mente
a
una
sola persona;
suponer
que
se habla
sin
público;
mirar
lo
menos
posible a la sala di-
rigiendo
la
vista
un
poco
por
encima
de ~ l l a
nunca a b ~ j o cerrar momentáneamente
los
oj
os:
como h ~ c l e n d o coincidir este gesto con
algún
pensamIento de nuestro discurso, y abrirlos sólo
~ u ~ n d o
h a y ~
pasado el temor. No
por
simple de-
Jara
de
ser
util el humorístico consejo de
Joseph
Folliet: En todos los casos, repít ase a
sí
mismo
que nadie queda
nunca
libre del
susto.
Conviene
tomar las cosas con
filosofía 6.
6 FOLUEr JOSEPH.
op
cit.
p.
28.
44
n
ELABORACIÓN DEL DISCURSO
3 L BÚSQUED PE IDE S
O INVENCION
El tema es el punto de
partida
de la
tarea
ora-
toria. Suele
hacerse
a menudo distinción entre el
tema
elegido libremente y el
tema
impuesto. Este
distingo se refiere nada más que a los orígenes
posibles de
un discurso
y de
ninguna
manera
señala una diferencia del t rabaj o intelectual en
sí,
pues
la
elaboración sigue
un
proceso
común.
El
tema
Lo
ideal es poder elegir
en
cada
oportunidad el
tema de la propia disertación, pero esto
no
siem-
pre es posible. El
buen
orador debe estar en am-
plia
d i s p O n i b i l i d a t F l Í l t e l e c 1 u a r Q e - S á l l s t a ~ r ~
q i i e l i i ñ i e m n ~ ' ' a l e f r o S : ' ' ' ' S i n ' ' ' e h i 6 a J g ' ' ' o ' ' ' c o n v t e h ~ ' ' ' t l t s -
. . , . , , ~ , , ~ , · . , , ~ . . , . . 1 t ' 7 - ' ; ' . I . ~ " . , . . ~ ~ · . ' ' ' ' ~ = ? . , , . -
tinguir esta alspoIDollidad de
la
charlatanería del
ignorante o el audaz, capaces de
aceptar
irrespon-
sablemente
cualquier
compromiso oratorio. El
sentido moral indicará a
cada
orador las fronteras
de sus compromisos, pues
no hay
elocuencia po-
sible fuera de
la
sabiduría y el conocimiento.
No
se trata,
en
muchos casos, de tener en el instante
mismo de contrae r el compromiso
la suma
de co-
nocimientos totales del tema, sino de estar poten-
cialmente
en
condición de adquirirlos con profun-
didad hasta el momento de la disertación.
45
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
24/112
Ciertos temas pueden ser afrontados por la ge
neralidad de los hombres. mientras que otros.
por su carácter técnico o científico: están reser
vados únicamente
para
los especialistas. Similar
reserva debe formularse con respecto a la
jerar-
quía del auditorio y
la
ocasión del discurso.
ya
que ellos condicionan también al orador. Salvo
en
el tipo de disertación científica o académica. y
otras pocas
especies. como
la
oratoria
sagrada
o
la forense. queda siempre abierta la posibilidad
de que un orador interese a
su
auditorio. porque
todo hombre es en
sí
mismo una permanente
instancia de atracción. Todo dependerá del men-
saje que tenga para transmitir. de la forma como
lo
transmita y de la circunstancia
en
que
lo
haga.
Contrariamente a la temeridad de algunas per
sonas.
están
otras inhibidas por falsos prejuiciOS
acerca del uso de la palabra. pensando que
para
hablar
en público
son
necesarios arrebatos pasio
narios. inspiración esotérica. exclusividad de algún
conocimiento. nivel intelectual óptimo. excelencia
insuperable
en
el dominio gramatical o literario y
muchos otros sofismos de perfil vulgar. Todo lo
que inhiba o limite la posibilidad expresiva de un
hombre debe desterrars e de la conciencia. ponien
do en
su
lugar una exacta y ecuánime valoración
de las propias condiciones e ideas.
La
frase del poeta romano Horacio. inserta en
su Arte
poélia
seguirá siendo la mejor recomen
dación para el orador y el artista: proponerse un
asunto
al
alcance de sus fuerzas y meditarlo lar
gamente. que a quien elige el tema que le convie
ne.
no
le faltará
ni la
abundancia
ni
la
claridad
ni el orden .
IlloMCIO.
rte poética. V. 38 41: Sumite materiam vestlis qui scribitis
aequam
/
viribus ..
Cuí leda potenter eri s
res
/ nec
facundia deseret
hunc nec
lucidus
ardo.
46
Etapas de la
elaboración
Una vez determinado el tema y compilado el
material. debe elaborarse el discurso.
Esta tarea
se
descompone en
tres pasos
distintos. que en
sustancia. son las mismas etapas
de
toda
labor
literaria: 1 invención; 2 composición; 3 elocu
ción. Esta división del trabaja literario y retórico
proviene de los antiguos griegos y
romanos
y
ha
conservado vigencia a través del tiempo.
La invención
es la búsqueda
y elección de los
pensamientos. La composición es el ordenamien
to y desarrollo de esos pensamientos. La elocu
ción es la expresión de esos pensamientos me-
diante las palabras. , .
Estas tres operaciones son sustancialmente
distintas
pero no
inseparables.
pues muchas
veces se encuentra el pensamiento y la expresión
simultáneamente. y otras nos ocurren los
pensa-
mientos ya ordenados. De todos modos. esta da-
sificación tiene
un
valor práctico inestimable. a
condición de que no se la interprete con exceso.
La mecánica de la creación estética
es
bastante
más complicada que cualquier simplificación di
dáctica.
La inspiración inicial
La invención
parte
siempre de una inspiración
inicial. Acerca de la inspiración se ha
escrito
mucho.
pero. en
última
instancia.
su naturaleza
permanece todavía
en
el dominio de lo misterio
so. lo incomprensible o lo inexplicable. Existen
excelentes y cautivantes definicione 5
sobre la
inspiración, pero ninguna
es
completa. En gene
ral.
es
primariamente una idea confusa que
se
nos
presenta
al espíritu en un momento deter
minado y se nos impone
con
una
especie de en-
47
,
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
25/112
)
)
)
)
tusiasmo que
nos
seduce y nos domina. Atisba-
mos presentimos que esta idea es fecunda, que
tiene encerrada en su seno una serie de deriva-
ciones y consecuencias valiosas, y
que
merece
ser aceptada
y analizada. Todo hombre
puede
confirmar
en su
experiencia cotidiana
casos
de
inspiración dentro de la actividad en
que
se
ocupa. La inspiración
no es
patrimonio exclusivo
de los oradores o de los escritores, sino que se
presenta en el arte, el comercio, la industria, la
conversación, y todo otro lugar donde hay crea-
ción
2
•
La idea inicial de
una
obra es siempre confu-
sa amorfa, y por consiguiente debe ser desple-
gada. Esto presupone un estudio del tema, infor-
mación y meditación. Es importante darse tiem-
po
para poder hacer estos trabajos: Por no haber
pensado
bastante
sobre su tema,
es por
lo que
un
autor
se ve embarazado para escribir , solía
decir
Buffon.
En
efecto,
las ideas no
siempre
aparecen en el momento en que las necesitamos.
Esto
significa que el asunto no está lo suficiente-
mente
maduro. Habrá que seguir meditando y
esperar
a que el tema se tome fecundo. La ma
durez se logra a veces sin que tengamos necesi-
dad de meditar directamente sobre el asunto. El
subconsciente tiene
una gran
importancia
en
la
invención, y
trabaja
por nuestra cuenta mientras
nosotros dormimos o estamos dedicados a otras
cosas.
Las facultades psíquicas trabajan
por
nosotros y.nos dan gratuitamente la solución de
muchos
de
nuestros
problemas que
en
la vigilia
nos preocupaban y no podíamos resolver. Se ad-
judica a un poeta ruso
esta
expresión: "Yo no sé
lo
que voy a cantar pero
mi
canción
está
madu
rando .
2
cr
HAYARAWA.
s
l..
Languaje
in
action; a
guide to
accurate thinking
reading and writing Nueva York. Harcourt.
Brace
and Company.
1948.
48
Aunque parezca extraño, esto es así, y puede
confirmarlo todo artista escritor u orador. La
inspiración es un fenómeno absolutamente mis
terioso.
No
existen,
en
verdad, reglas sobre ella,
ni podrían existir desde que no
están
conocidos
sus
detalles. Lo recomendable es
estimular
la
creación
por
medios indirectos, como ser la lec-
tura
de modelos,
la
observación, etcétera.
La búsqueda
de
pensamientos
Una vez delimitada la idea esencial del discur-
so, viene la tarea de buscar la materia·
que
acompañará
a este núcleo primero. lo desarrolla-
rá y le dará fuerza demostrativa yelegancia con-
ceptual. En esto los métodos difieren, según la
idiosincrasia del autor. Es natural entonces, que
cada uno elija el que más se adapte a su perso-
nalidad
3
•
Algunos
oradores
suelen escribir primero el
plan
desarrollado de su discurso y luego giran
alrededor de él, tratando de encontrar pensa
mientos que puedan incluirse dentro del esque-
ma así preparado. Trabajan de
esta
manera has
ta
que el
discurso queda
concluido. Otros,
en
cambio,
no
escriben
su
plan por extenso, sino
que trabajan al azar,
dando
vueltas en tomo al
asunto
principal, anotan por separado todos los
pensamientos que se les van presentando en la
meditación, sin orden y a medida que ocurren.
Al
final
buscan
un
plan
que
se adapte
a la serie
3 Para
un
estudio detallado del método de trabajo intelectual. pue
den consultarse: JE N GurITON. El trabajo intelectual; consejos a los que
escriben
Buenos Aires.
Ediciones
Criterio, 1955:
CHAVlGNY.
PAUL MARrE
V¡CfOR Organización del trabqjo intelectuaL Barcelona-Buenos Aires,
Labor 1932;
SERTILLA. \IGES, A.
D •
La vida
intelectual;
espúitu
condicio·
nes métodos
Buenos
Aires, Sinopsis. 1958: RAMÓN
y
CAJAL,
SAN 1AGO,
Tónicos de l
voluntad; reglas y constVos sobre investigación científICa
Buenos Aires, Espasa-Calpe Argentina. 1945.
49
)
8/9/2019 Introducción a La Oratoria Moderna - Loprete
26/112
f i l, . ,
;
I
,
.
de ideas encontradas, dándoles una motivación
y derivación lógicas. Cualquiera de los dos pro
cedimientos es bueno: todo depende de las pre
ferencias y modalidades psicológicas del orador.
A
primero de los procedimientos
se
le
puede
ad
judicar la ventaja de que permite conducir la re
flexión en orden y en forma sistemática, con lo
que
gana
la
unidad
del discurso,
mientras que
al
segundo
se
le otorga
la
excelencia de permitir al
espíritu desplegarse con mayor libertad.
No
hay
inconveniente alguno, por supuesto, en
que ambos métodos
se
apliquen
combinados.
Puede elaborarse previamente el plan, buscar las
ideas que se
adapten a su estructura, anotar
también las ideas que
ocurran
y
no
guarden es
tricta relación con ese esquema fijado, y reformar
finalmente el plan hasta ajustarlo al material ob
tenido. Si
bien
el
plan
facilita el ordenamiento del
trabajo, tampoco
debe concebírselo como una
norma rigida, inflexible, que
no
permita el agre
gado o
supresión
de ideas
en
el
transcurso
del
desarrollo. En definitiva. éste es el mejor de los
métodos y el que mejor responde a
la
dinámica
psíquica.
El testimonio histórico
prueba
que excelentes
oradores
han aplicado uno y otro métodos en la
invención y búsqueda de ideas. Nada
nos
obliga.
al comienzo del trabajo, a comprometemos con
un
plan
riguroso y severo, que a
lo
mejor
no
po
demos luego cumplir. Muchas
veces, a
punto
de
concluir el discurso descubrimos una idea supe-
rior
a la inicial. o
se han
producido aconteci
mientos que obligan a modificar nuestro primer
punto
de vista.
Insensato
sería
no tirar
al cesto
el plan primero y recomenzar la
tarea con
otra
perspectiva
que nos
garantice
un
mejor resulta
do.
En materia
espiritual.
la
libertad es una de
las condiciones del éxito y resulta triste conver
tirse en esclavo de
uno
mismo. La opinión de
50
Sertillanges merece cuidadosa atención en este
punto: Componer así.
por
medio de islotes que
se
fusionan para
formar
el
futuro
continente,
hacer
preceder el trabajo de organización por una
libre inspiración esporádica
o, si se
quiere, fijar
puntos para la curva
y multiplicarlos
para trazar
la línea de
un
golpe en el momento oportuno, es
librarse de
la
fatiga de
una
composición ob.liga
toria
y
de la
ansiedad que
provoca
la
página
blanca: es
asegurarse
el trabajo creador 4.
¿Cómo
encontrar ideas?
¿Dónde
buscarlas
para nuestro
discurso?
Ha llegado
uno
de los
momentos
más decisivos de
nuestro
trabajo. Las
fuentes de
ideas son muchas
y es saludable te
nerlas presentes para contar
con ellas en el ins-
tante
preciso. .
Los más famosos retóricos y preceptistas
se
han
preocupado intensamente de encontrar re
cursos y procedimientos que beneficien la labor
de creación intelectual. En general. el acto crea
dor
proviene siempre de
un
antecedente, y a ellos
conviene
acudir para nuestro
objeto. Las princi
pales fuentes de información son: 1 la
cultura
propia;
2 las
lecturas; 3 la observaCión; y 4) la
reflexión e imaginación.
La cultura
propia
- Cicerón ha dicho: El
fundamento de la elocuencia. como el de cual
quier
otra
cosa,
es la
sabiduría . Evidentemente,
toda comunicación espiritual
con
el prójimo pre
supone un
conocimiento previo.
personal,
del
mensaje
que
deseamos
transmitir.
En
el precep
to ciceroniano,
la
palabra
'sab iduría ' no Significa
un conocimiento radical y supremo de
las
cosas,
sino lo que en castellano entendemos por 'saber'
o buen sentido'. Si así no fuera. quedaríamos
excluidos del
uso
público de la palabra la
gran
4
SERIlUA. liGES. O. P . op
cit
p.
300.
51
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
J
)
)
)