Post on 22-Jul-2015
Cómo pulir el acero inoxidable
, empresa especializada en JN Aceros , te enseña a pulir productos de acero inoxidable
de la forma más adecuada los objetos de acero inoxidable que tienes en casa.
Cuando la mayoría de la gente escucha la palabra “acero inoxidable”, tienden a pensar
que el metal es resistente al óxido y a la corrosión. Aunque es más resistente que el acero
ordinario, el acero inoxidable no es a prueba de manchas. Sólo se mancha menos que el
viejo y simple acero regular. Por eso puedes notar que los objetos de acero inoxidable en
tu casa empiezan a lucir un poco dañados luego de un tiempo debido al uso, en especial
si está en contacto con una fuente de calor por un periodo prolongado de tiempo. Por
suerte, hay algunos métodos que puedes usar para limpiar y pulir el acero
inoxidable hasta lograr su brillo y lustre usual.
Pulir con agua
Algunas veces, todo lo que se necesita es un poco de agua caliente para eliminar la
opacidad de los objetos de acero inoxidable. Sólo toma un trapo, sumérjelo en agua
caliente y limpia el objeto. Luego, sécalo antes que el agua gotee y limpia el objeto con un
trapo limpio y seco. Una tela de gamuza funciona de manera excelente porque absorbe el
agua inmediatamente y puede usarse para pulir el acero al mismo tiempo.
Pulir con limpiavidrios
Si tienes en la cocina un objeto de acero inoxidable que no estás
utilizando, entonces un limpiavidrios con amoniaco funcionará de
manera brillante para pulirlo y limpiarlo. Este método facilita el
trabajo de eliminar manchas de agua antiguas y acumulación de
suciedad. Sin embargo, una que vez que acabes con la limpieza,
asegúrate de enjuagar el objeto con agua caliente y de secarlo
completamente para eliminar cualquier químico del lipiavidrios.
Pulir con vinagre
Si necesitas pulir objetos de acero inoxidable que usas en la cocina, entonces el
vinagre puede realizar el trabajo de forma efectiva. El vinagre blanco y el de sidra de
manzana funcionan de igual forma. Así, lo que sea que tengas en la vitrina funcionará.
Sólo humedece con vinagre un trapo limpio y empieza a limpiar tus cubiertos de acero
inoxidable u otros objetos. Esta misma técnica también puede realizarse con aceite de
oliva o agua carbonada.
Pulir con bicarbonato
En un tazón, mezcla bicarbonato con un poco de agua caliente hasta que hagas una
pasta. Usa una tela limpia para refregar la pasta sobre todo el objeto de acero inoxidable,
enjuagalo con agua caliente y sécalo con un trapo limpio. El beneficio de utilizar este
método es que no deja olor, como a veces sucede con el vinagre.
Pulir con limpiadores especiales
En los estantes del pasillo de limpieza de un supermercado verás ciertos productos
exclusivos para limpiar y pulir el acero inoxidable. Estos son más útiles si el objeto que
necesitas limpiar está totalmente opaco y rasguñado. Es importante saber que no todos
estos productos son seguros para usar en objetos que entren en contacto con la comida.
Aquellos que son seguros tendrán una etiqueta de indique que es inocuo para los
alimentos. Además, sólo debes usar estos limpiadores en un área bien ventilada y con
una máscara con filtro. Antes de aplicar el limpiador a todo el objeto, trata de usarla en
una mancha imperceptible para garantizar que no cause ninguna descoloración.
Consejos extras
Nunca utilices una substancia abrasiva para limpiar o pulir el acero inoxidable ya
que lo rasguñará con facilidad
Nunca uses escobillas para limpiar acero inoxidable
Para limpiar el exterior al tacto, sólo debes limpiar, pulir y secar los objetos de
acero con trapos muy suaves.
Evita utilizar limpiadores especiales para acero inoxidable que contengan cloro ya
que seguramente dañará el objeto. En su lugar, usa un limpiador que contenga
amoniaco.