Paisajes naturales

Post on 30-Jun-2015

2.489 views 1 download

Transcript of Paisajes naturales

Geografía – 2º de Bachillerato

La vegetación o flora es el conjunto de especies vegetales de un territorio. España es el país europeo con mayor diversidad vegetal, incluyendo más de 8.000 especies diferentes, de las cuales unas 1.500 son endemismos (especies exclusivas).

Por su tamaño y fisonomía, las formaciones vegetales se dividen en tres tipos básicos: el bosque, el matorral y el prado.

1.1. Factores físicos Son el clima, el suelo, el relieve y su

orientación, etc. Cuando la vegetación de una zona resulta exclusivamente de factores físicos se denomina clímax o potencial.

  1.2. Factores humanos Son influyentes mediante la degradación de

la vegetación existente o la introducción de especies interesantes por su valor económico. Cuando la vegetación de un lugar depende principalmente de la acción humana se denomina vegetación secundaria.

 

2.1. En el clima oceánico   Corresponde a la región floral

eurosiberiana y tiene como formaciones vegetales el bosque caducifolio, la landa y el prado.

a) El bosque caducifolio   Está constituido por árboles altos,

con tronco recto y liso y hojas grandes que caen en otoño. Posee pocas especies, que aparecen reunidas formando grandes masas. Las más características son el roble y el haya. En el sotobosque crecen helechos y musgos, en un ambiente sombrío.

El haya:Se adapta bien al frío, la humedad y los

suelos calizos.Tiene un crecimiento rápido y vive en

zonas altas.Su madera se utiliza para muebles y

utensilios.Su área principal está en la Cordillera

Cantábrica y el Pirineo navarro.

El roble:También se adapta bien al frío, pero exige

menos humedad que el haya y también se adapta a los suelos silíceos.

Tiene un crecimiento lento y vive en altitudes menores.

Su madera se utiliza para muebles, construcción y barcos.

Su área principal está en Galicia y la Cordillera Cantábrica, pero también en la zona centro – oeste de la Meseta.

El castaño es una formación vegetal secundaria con características similares a las del roble, que ha ido ganando terreno a éste gracias a la utilización de su fruto y de su madera.

A lo largo del tiempo han ido desapareciendo extensas áreas de bosque caducifolio y en la actualidad se han repoblado grandes extensiones con árboles de crecimiento rápido y aprovechamiento económico, como el pino y el eucalipto (para celulosa y pasta de papel). Los ecologistas han criticado esta medida por el empobrecimiento de los suelos y su facilidad para arder en caso de incendio.

b) La landa y los prados   La landa* es una densa vegetación

que puede ser de poca altura o alcanzar los cuatro metros. Sus especies características son el brezo, el tojo y la retama.

  Los prados ocupan grandes

extensiones y en ellos abunda la vegetación herbácea.

 

2.2. En el clima mediterráneo   Corresponde a la región floral

mediterránea y tiene como formaciones vegetales el bosque perennifolio y el matorral. Estas formaciones se han adaptado a la sequía estival mediante el desarrollo de sus raíces, sus hojas perennes (esclerófilas, duras y coriáceas) y sus sistemas para disminuir la transpiración: tamaño pequeño, formación de espinas y revestimientos protectores.

a) El bosque perennifolio   Está constituido por árboles de mediana

altura, con troncos no rectilíneos, de corteza gruesa y rugosa y hojas perennes. Posee un rico sotobosque ya que los árboles se encuentran alejados permitiendo la penetración de la luz.

La encina:Se adapta bien al calor y a la falta de

humedad.Crece en todo tipo de suelos aunque se

adapta peor a los calizos.Su crecimiento es lento.Su madera se utiliza para leña, utensilios y

comida para el ganado, mediante su fruto, la bellota.

Se extiende por toda la Península Ibérica, salvo Galicia, y especialmente en Extremadura, Castilla – La Mancha y Andalucía.

El alcornoque:También se adapta bien al calor y algo

más a la humedad y a los suelos silíceos.Tiene un crecimiento lento.Su madera se utiliza para barcos y corcho.Se extiende por el SO peninsular

(Extremadura, Huelva, Cádiz y Málaga) y parte de Cataluña.

El pino se adapta a cualquier temperatura, humedad y suelos. Tiene un crecimiento rápido y se utiliza para resinas y papel. Se extiende por toda la Península Ibérica.

b) El matorral   Es resultado de la degradación del

bosque por la acción humana:   La maquia* es una formación arbustiva

densa, de más de dos metros de altura, integrada por jara, brezo, lentisco y retama.

La garriga* está formada por arbustos y matorrales de poca altura, dejando espacio para las rocas. Se integra de tomillo, romero y espliego.

La estepa* se encuentra en la zona semiárida del SE peninsular y valle del Ebro, donde la sequía impide el crecimiento de los árboles. Está formada por hierbas bajas y arbustos espinosos.

2.3. El paisaje vegetal de ribera   A lo largo de los ríos el suelo se

impregna de humedad dejando espacio a un bosque de ribera compuesto de especies como el aliso (cuyas raíces necesitan contacto permanente con el agua), el sauce, el chopo y el álamo, que requieren humedad en los extremos inferiores de sus raíces. El fresno y el olmo requieren menos humedad.

2.4. El paisaje vegetal de montaña   El paisaje se dispone en pisos con

formaciones diferentes según la altura.

Se distinguen tres pisos: El piso subalpino (1.200 – 2.400 m.) compuesto

por coníferas, como el abeto y el pino. También puede aparecer el haya y un sotobosque de rododendro y arándano.

El piso alpino (2.400 – 3.000 m.) es dominio del prado, cubierto de nieve durante siete u ocho meses al año.

El piso nival (por encima de los 3.000 m.) tiene nieves perpetuas y la vegetación es inexistente. En zonas de mayor inclinación, la nieve desaparece durante cierto tiempo, dando lugar a la aparición de líquenes y musgos.

 

  Carecen del piso subalpino y se

pasa directamente del bosque característico del clima de su región al piso supraforestal formado por pequeños arbustos. En la zona atlántica está compuesto por brezo y en la mediterránea, por matorrales espinosos. Por encima del piso supraforestal se encuentran los prados.

  Comprende la región floral

macaronésica y su riqueza es extraordinaria, entre la que se encuentran endemismos (formaciones vegetales propias y exclusivas) y reliquias (formaciones vegetales de otras épocas geológicas que han logrado encontrar hoy su acomodo). Se dispone en cinco pisos:

Piso basal (hasta 300 – 500 metros de altitud): Zona árida con matorrales como el cardón y la tabaiba.

Piso intermedio (entre el piso basal y los 800 metros de altitud): Descenso térmico y aumento de la humedad que permite el crecimiento de la palmera, el drago y la sabina.

 

Piso termocanario (desde los 800 hasta los 1.200 metros de altitud): La vegetación se adapta a las nieblas causadas por el alisio, el mayor refrescamiento y la menor insolación. Se compone del bosque de laurisilva (con más de 20 especies diferentes) y el fayal – brezal, resultado de la degradación.

Piso canario (desde los 1.200 hasta los 2.200 metros de altitud): Dominado por el bosque de coníferas, especialmente el pino canario, adaptado a la aridez y al frío.

Piso supracanario (por encima de los 2.200 metros de altitud): Sólo está presente en las islas de Tenerife y La Palma. Se caracteriza por la desnudez y por una riqueza floral, como las violetas del Teide.

 En la sierra se escalona en altura:   Hasta los 1.200 metros de altitud se dan la encina y

el matorral, compuesto principalmente de tomillo, esparto y jara.

Entre los 1.200 y los 1.800 metros de altitud predominan los bosques de roble, fresno y sauce. Además se conservan algunos microclimas que dan lugar a especies como la sabina albar, el haya y el abedul. Entre los 1.700 y 1.800 metros se desarrollan pinares con sotobosque de retama.

Entre los 1.800 y los 2.100 metros de altitud se impone el matorral y por encima de esta altura sólo existen prados y matorrales de enebro.

En la depresión del Tajo la vegetación clímax es la encina. En la zona de degradación ha sido sustituida por cultivos y en la ribera aparecen olmos, álamos, sauces, fresnos y alisos.