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Pasos en el camino: Arte Rupestre en el corredor de la Sierra Madre Oriental (Noreste de México)
Stepping Stones: Rock Art in the Sierra Madre Oriental Corridor (Northeast Mexico)
Dr. William Breen Murray wbmurray1@yahoo.com
Departamento de Ciencias Sociales, Universidad de Monterrey
Ponencia presentada en el Congreso IFRAO/SIARB, La Paz, Bolivia 25-29 de
Julio de 2012
RESUMEN
Durante toda la prehistoria, el corredor noreste de México a través de la
Sierra Madre Oriental ha sido un enlace geográfico estratégico para el
contacto y la migración entre Norteamérica, Mesoamérica y puntos aún
más al sur. Se han identificado más de 600 sitios rupestres (tanto
petrograbados como pintura) en los estados de Nuevo León, Coahuila y
Tamaulipas, que proporcionan abundante testimonio de poblaciones en
movimiento dentro de un paisaje cambiante desde el periodo Paleoindio
hasta tiempos históricos. Dado que el arte rupestre es un sistema
metalingüístico de comunicación visual, muestra similitudes formales
en áreas muy extensas. Para acercarnos a su contexto y significado
cultural, se necesita una metodología comparativa que destaque las
similitudes entre los motivos y conjuntos iconográficos en vez de
enfatizar las particularidades de cada sitio y estilo. En este trabajo,
comparamos el arte rupestre del noreste mexicano con el de otros sitios
hacia el norte y el sur. Desde esta perspectiva más amplia, proponemos
que el arte rupestre marca un continuum en el espacio y el tiempo entre
la Gran Cuenca de Norteamérica y Mesoamérica, y probablemente sitios
aún más al sur.
ABSTRACT
Stepping Stones: Rock Art in the Sierra Madre Oriental Corridor
(Northeast Mexico) Throughout prehistory, the Northeast Mexican
corridor along the Sierra Madre Oriental has been a strategic
geographical link for contact and migration between North America,
Mesoamerica and the Isthmian connection to South America. Over 600
rock art sites (both petroglyphic and pictographic) in the states of Nuevo
León, Coahuila and Tamaulipas provide ample testimony of shifting
populations in a changing landscape from Paleoindian to colonial
times. Like other visual communication systems, rock art is
metalinguistic and can be broadly similar over wide areas. In order to
approach its social context and cultural meaning, a comparative
methodology focusing on iconographic similarities within motif clusters
is required rather than an emphasis on the differences between
individual sites or particular styles. In this paper, Northeast Mexican
rock art will be compared to that found at sites further north and
southward. From this perspective, it marks a series of stepping stones
in space and time between the North American Great Basin and
Mesoamerica, and probably sites even further to the south.
Los estudios del arte rupestre tratan de un sistema de comunicación visual cuyo
significado puede ser recuperado solamente en forma parcial y requiere un
acercamiento interdisciplinario que toma en cuenta no solamente las ciencias
naturales, sino también la historia, la etnografía, la geografía, la lingüística y aún
las formas tempranas de escritura y numeración. En los estudios rupestres,
mientras más amplia es nuestra visión interdisciplinaria, mejor podemos entender
lo que estamos viendo.
Rock art studies deal with a visual communication system whose meaning can be
recovered only in part and can be approached only through a broad
interdisciplinary perspective, taking in not only the natural sciences but also
history, ethnography, geography, iconography, linguistics and even early writing
and numerical systems. For rock art studies, the wider the interdisciplinary net,
the more we can understand what we are looking at.
Hay que reconocer que cualquier sistema de comunicación visual contrasta con
muchos otros tipos de evidencia arqueológica. Por ejemplo, son diseñados a
menudo para superar las barreras lingüísticas, permitiendo el intercambio de
información sin depender de la lengua hablada. Esto significa que mientras más
amplio y prolongado es su empleo, mayor utilidad adquieren. Estas
circunstancias favorecen su uso a largo plazo y la repetición de las mismas
imágenes en zonas geográficas muy amplias. Tal vez una analogía semiótica
moderna más apropiada sería las imágenes publicitarias de productos comerciales
con distribución global o bien los señalamientos pictográficos en los aeropuertos
modernos (ilustr.1) que son diseñados para el uso de una población multilingüe.
Visual communication systems are also different from other kinds of
archaeological evidence in several ways. For example, they are frequently
designed to overcome linguistic differences, permitting exchange of information
without recourse to spoken language. This means that the more widely they are
used and the longer they are shared, the more useful they become. These
circumstances favor long-term use over broad areas and frequent repetition of
the same image can be expected. Perhaps an appropriate modern semiotic
analogue would be the billboard images which identify global commercial
products or the pictographic signs in modern airports (illus.1) designed for a
multi-lingual user population.
IIustr.1 Señal de aeropuerto.
Illust. 1 Airport Sign
Durante la prehistoria, el aislamiento geográfico produjo justamente estas
condiciones de diversidad lingüística. De este hecho surge la posibilidad de que
una función del arte rupestre sea precisamente su habilidad de comunicar más
allá de las barreras lingüísticas. Ciertamente, muchos ejemplos del arte rupestre
son únicos e individuales, tanto en estilo como tema, pero la repetición indica
con claridad que no tienen la intención de expresar una individualidad ni
creatividad virtuosa. Muchos motivos tienen una distribución muy amplia en
forma semejante dentro del espacio y el tiempo, y algunos de ellos son
prácticamente ‘universales’, es decir, pueden encontrarse en sitios en todas partes
del mundo.
During much of prehistory, geographical isolation produced just such linguistic
diversity. This raises the possibility that one function of rock art may have been
precisely its ability to overcome these language barriers. Certainly, much rock
art is stylistically and thematically unique and individual, but repetition clearly
indicates that these motifs were not intended to express creative individuality or
virtuosity. Many motifs are widespread and broadly similar over space and time,
and some of them are practically ‘universal’, that is, they can be found at sites
all over the world.
Entre las más antiguas y difundidas aparecen los motivos geométricos abstractos
(ilustr.2), tales como figuras lineales y circulares, triángulos, rombos,
configuraciones de puntos y secuencias de rayas, entre otros. La explicación
entóptica atribuye la universalidad de estos motivos en términos de constantes
neuropsicológicos asociados con estados alterados de conciencia. En cambio,
nuestra hipótesis plantea que algunos de ellos pueden ser productos de una
tradición cultural aprendida con significados compartidos dentro de una amplia
zona durante largo tiempo. Examinaremos el arte rupestre del corredor noreste de
México como estudio de caso para determinar hacia dónde conduce este camino
(ilustr.3)
Among the earliest and most widespread of these universal motifs are (ilust.2)
abstract geometrical figures, such as linear and circular shapes, triangles and
rhomboids, dot configurations, and tally sequences. Entoptic explanations of
these motifs attribute their universality to neuropsychological constants
associated with altered states of consciousness. Our working hypothesis is that
some of them could be products of a learned cultural tradition whose shared
meanings were widely transmitted over a long time period. As a relevant test
case, we look at the rock art in the Northeast Mexican corridor to see where this
trail might lead. (illust.map3)
Ilustr. 3 Mapa del NE de México
Illust. 3 Map NE Mexico
El corredor noreste mexicano a lo largo de la Sierra Madre Oriental es
especialmente estratégico porque constituye un acceso natural hacia
Mesoamérica y el istmo centroamericano que conecta a los dos continentes.
También alberga una muestra muy grande de más de 600 sitios rupestres (tanto
pintura como petrograbado) en los tres estados mexicanos asociados con esta ruta
(Coahuila, Nuevo León y Tamaulípas). Estas manifestaciones rupestres no han
sido fechadas directamente, pero en los sitios donde se hallan, la primera
ocupación humana remonta por lo menos a 12,000 B.P. y se asocia con una
adaptación cazadora-recolectora que perduró en una forma u otra desde el inicio
hasta la época de contacto español.
The Northeast Mexican corridor along the Sierra Madre Oriental is especially
strategic because it lies astride the northern approach to Mesoamerica and the
Central American isthmus connecting the two continents. It also contains a large
sample of over 600 rock art sites - both painted and carved - in the three
Mexican states along this route (Coahuila, Nuevo León and Tamaulipas).
Although none of this rock art has been dated directly, earliest human
occupation at sites where it is found goes back to at least 12,000 B.P. and is tied
to a hunter-gatherer lifestyle which persisted in some form or other from earliest
times up to Spanish contact.
Más importante aún es el hecho de que los motivos predominantes del arte
rupestre norestense son un conjunto muy variado de formas geométricas
abstractas ‘universales’, alguna vez agrupadas por Robert Heizer dentro de lo que
él llamó la Tradición Abstracta de la Gran Cuenca. Algunos son únicos y propios
de un espacio y paisaje en particular (ilustr.4) y son comparables en estilo y
complejidad con el arte abstracto moderno, mientras que otros motivos como el
arco concéntrico (ilustr.5) parecen ser íconos estandarizados presentes en muchos
lugares. Nos enfocamos en estos últimos.
Most importantly, the predominant motifs in Northeast Mexican rock art – and
especially the early ones - are a varied assortment of ‘universal’ abstract
geometrical forms, once grouped by Robert Heizer as elements of what he called
the Great Basin Abstract tradition. Some are unique to a particular space and
landscape (illust.4) and fully comparable in style and complexity to modern
abstract art, while others - like the concentric arc motif (illust.5) - appear to be
standardized icons found at many sites. Our focus will be on this latter group.
Ilustr. 5 Arco concéntrico, km 72.5
Illust. 5 Concentric arc, Km. 72.5 (choice)
Ante la falta de analogías etnográficas, el mensaje o significado de estas
imágenes abstractas no es evidente. Algunos reciben etiquetas descriptivas
convencionales en base de sus características gráficas, tales como el ‘arcoiris’
para este conjunto de líneas concéntricas curvas, o el ‘sol’ (ilustr. 6) que
identifica círculos con rayas que se parecen a los rayos solares, o la ‘luna’ para
identificar formas que trazan una medialuna. Estas etiquetas pueden o no ser
acertadas dependiendo del caso, pero proporcionan una pista fundamental. Toda
la geometría abstracta deriva en última instancia de las formas de objetos
naturales, sean el círculo simple del sol o la luna llena, el complejo patrón de una
colmena, o el perfil irregular de un horizonte a distancia. Aprovechando esta
pista, podemos acercarnos desde otro ángulo al arte rupestre geométrico abstracto
y el significado de sus expresiones gráficas.
Lacking ethnographic analogies, the meaning or message of these abstract
images is not immediately evident. Some are given conventional descriptive
labels based on their graphic characteristics, such as “rainbow arcs” for these
curvilinear concentric lines, or “sun symbol” (illustr.6) to identify circles with
rays that look like sunbeams, or a “moon symbol” to identify crescent shapes.
These labels may or may not be accurate in every case, but they do provide a
fundamental clue. All abstract geometry derives ultimately from natural forms
and objects, whether they are the simple circle of the sun or the full moon, the
complex pattern of a honeycomb, or the irregular profile of a distant horizon.
Using this clue, we can begin to view abstract geometrical rock art and the
meaning of its graphic expressions from a different angle.
Ilustr. 6 Símbolo solar, La Mula, imagen 7 o Presa 2012 imagen 6984
Illust. 6 Sun symbol, La Mula image 7 or Presa 2012 image 6984
Una fuente natural de abstracción lo encontramos arriba en el cielo. De ello los
primeros humanos hubieran derivado sus primeras nociones de las dimensiones
del tiempo y el espacio. La distribución al azar de las estrellas requiere su
agrupamiento en configuraciones definidas. Aún cuando no sabemos el contexto
cultural, su presencia puede ser indicada en motivos de líneas interconectadas. En
el sitio de Boca de Potrerillos (Ilustr.7), la rotación de las estrellas polares puede
ser indicada por las líneas y círculos que emanan del círculo central de este
petrograbado único. Esta interpretación es reforzada por la orientación de todo el
sitio hacia las direcciones cardinales (ilustr.8) y la presencia de varios
petrograbados de círculos con cruz (ilustr.9), cuyo significado como marcador de
las direcciones cardinales es confirmado en la iconografía mesoamericana
posterior y la etnoastronomía de los grupos amerindios.
One natural source of abstraction lies above in the sky. From it early humans
would have derived their first notions of the dimensions of time and space. The
naturally random distribution of the stars requires their grouping in culturally
defined configurations. Whether we know their cultural meaning or not, their
presence may be indicated by linear petroglyphic motifs. At Boca de Potrerillos
(illust.7), the rotation of the circumpolar stars may be indicated by the spokes of
this unique line-and-circle configuration, an interpretation reinforced by the
cardinal orientation of the entire site context (illust.8) and the presence of
numerous cross-in-circle petroglyphs (illustr.9) at this site, whose cardinal
directional meaning is further confirmed in later Mesoamerican iconography
and North American ethnoastronomy.
Illust. 7 Boca, cima norte. Panel con motivo radiado(ICA)
Illust. 7 Boca North crest panel Spoke motif (ICA)
Illust. 9 Boca, petroglifo cruz en círculo (ICA)
Illust. 9 Boca cross-in-circle petroglyph (ICA)
Ya hemos mencionado el círculo como analogía solar y lunar. A veces esta
asociación visual puede ser confirmada por la observación directa (ilustr.10)
debido a su ubicación dentro del paisaje, como sucede en el caso del eje este-
oeste del calendario anual de horizonte visto desde la zona del promontorio de
Boca de Potrerillos. La transformación del círculo (ilustr. 11) en una secuencias
de puntos que registra un conteo de días puede remontar al Arcaico Medio,
representando tal vez una fase inicial de la numeración mesoamericana. En
contraste, entre los cazadores/recolectores fue usado para anotar los ciclos
sinódicos de la luna y (ilustr.12) el ciclo de siete meses (207 días) del período de
gestación de la hembra venado cola blanca.
We have already mentioned the circle as a commonplace analogue of the Sun
and the Moon. This visual association can sometimes be confirmed by direct
observation (ilustr.10) because of its placement within the landscape, as is the
case with east-west axis of the horizon calendar at Boca de Potrerillos as seen
from the promontory zone. The transformation of the circle into a system of dot
counting of days (illustr.11) may well date to the Middle Archaic period and
represent an early phase of Mesoamerican numeration. By contrast, among the
hunter gatherers it was apparently used to record lunar synodic cycles and
(illustr. 12) the seven month (207 day) gestation period of the female whitetail
deer.
Illust. 10 Boca. Alineación con el horizonte
Illust. 10 Boca Prom Horizon Alignment
Illust. 12 Boca. Secuencia de puntos. Conteo
Illust. 12 Boca Jar count
Lo que llamé originalmente la ‘Tradición Norestense de Conteo Petrograbado’
puede ser un desarrollo muy particular. Los puntos configurados y rayas
secuenciadas son motivos comunes en todas las Américas y su antigüedad gráfica
remonta al Paleolítico. No siempre manifiestan secuencias ordenadas o
numeración, pero estos rasgos pueden ser inferidos inmediatamente por el
contexto visual. Permiten el análisis numérico y la confirmación de una
numeración intencional a través de los patrones de secuencias repetidas aún
cuando no sabemos qué estaban contando, ni mucho menos por qué.
What I originally called the Northeast Mexican petroglyphic counting tradition
may be a unique development. Dots and tally marks are ubiquitous motifs
throughout the Americas and go back in time to the Paleolithic. They do not
always show ordered sequences or intentional numeration, but these features are
immediately inferable from the visual context alone and permit numerical
analysis and confirmation of numerical intent through repeated sequential
patterns even when we do not know what or why something was being counted.
El cielo no es la única fuente de abstracción. En el corredor norestense mexicano,
tal vez el elemento más vital es el agua. Debido a que la región se localiza en el
cinturón árido correspondiente a las latitudes de la Convergencia Intertropical del
Hemisferio Norte, las fuentes permanentes de agua superficial son muy escasas.
Todos los sitios rupestres son próximos a los ríos intermitentes del drenaje
interserrano (ilustr.13), manantiales, o lagunas de poca profundidad en las
cuencas interiores del Altiplano. Walter Taylor los identificó como ‘ataduras’
que vincularon cada grupo con una fuente de agua permanente aún en las
temporadas más secas del año. Según Paul Bahn, esta asociación del arte rupestre
con el agua parece ser un fenómeno global, tal vez un vínculo elemental que
abrió el planeta a la colonización humana. El agua determina tanto la naturaleza
de medio como la densidad de la población humana.
Nor is the sky the only universal source of abstract imagery. In the Northeast
Mexican corridor, perhaps the most vital natural element is water. Since the
region lies within the latitudinal dry belt associated with the Northern
Hemisphere Intertropical Convergence, permanent surface water sources are
very limited. All major rock art sites are adjacent to now-intermittent streams in
intermontane drainages (ilustr.13), natural springs, or shallow lagoons in the
interior basins of the Altiplano. Walter Taylor called these locations ‘tethers’
which tied each group to a permanent water source available even during the
driest season. This association of rock art with water also appears to be a
widespread phenomenon around the world (Bahn), perhaps an elemental natural
link which opened up the planet to human colonization. Water determined both
environmental conditions and the density of human populations.
Illust. 13 Boca. Panorámica
Illust. 13 Boca site pan
Esto plantea la pregunta: si el agua no tiene una forma fija e inherente, ¿cómo
puede ser representado en la gráfica rupestre? Se requiere algún tipo de imagen
abstracta definida exclusivamente por asociación cultural, una realidad percibida
por medio de convenciones sobre su aspecto bajo diferentes condiciones. Por
ejemplo, un diseñador gráfico moderno podría representar el agua como gotas
cayendo de una llave (ilustr.14), pero los pueblos pretéritos tal vez lo hubieran
observado como líneas rectas verticales cayendo sobre todo el paisaje. En Boca
de Potrerillos, Jon Olson combinó estas dos imágenes para identificar algunos
conjuntos de petrograbados como ‘rocas de lluvia’ (ilustr.15). Es cierto que el
sitio se ubica a sotavento de las serranías hacia el oriente, pero es poco probable
que la lluvia se visualiza como gotas y ya hemos visto que no todas las
configuraciones de puntos se orientan verticalmente o son ordenados al azar. La
explicación de Olson puede aplicarse en algunos ejemplos, pero no explica toda
la evidencia.
This poses the question: since water has no inherent shape or form, how might it
be represented graphically in rock art? Some kind of abstract image defined
exclusively by cultural association is required, a reality perceived by means of
understood conventions about its aspect in different states. For example, a
modern graphic designer might represent water as droplets from a faucet
(illust.14), but earlier peoples are more likely to have seen it as rain falling in
vertically straight lines. At Boca de Potrerillos, Nuevo León, Jon Olson
combined these two images to identify certain petroglyph panels (Illust 15) as
‘rain rocks’. This site does indeed lie in the rain shadow of the sierras to the east,
but we would rarely see falling rain visually as droplets and not all the dot
configurations at this site are oriented vertically or in random order. Although
Olson’s explanation seems plausible in some cases, it doesn’t fit all the evidence.
Ilustr. 14 Grifo que gotea (tomado de internet)
Illust. 14 Dripping Faucet (choose from internet)
Illust. 15 Figura 4 del libro de Boca de Potrerillos de Olson
Illust. 15 Olson, Boca de Potrerillos book Fig. 4
Aún así, una pintura abstracta compleja en Cerro de Chiquihuitillos (Nuevo
León) (ilustr.16) utiliza una de estas convenciones gráficas. Las líneas verticales
arqueadas representan la lluvia que cae del cielo desde una nube estilizada en
forma de óvalo. Su uso icónico es reforzado en este caso por la repetición, igual
que la analogía etnográfica y rituales de los amerindios del suroeste
norteamericano que lo identifica como una variante local del “ojo de lluvia” de
los indios Pueblo.
Even so, a complex painted abstract image at Cerro de Chiquihuitillos (Nuevo
León) (illustr 16) clearly uses one of these graphic conventions. Slightly curved
vertical lines represent rain falling from stylized oval clouds above. Its iconic use
as rain clouds is reinforced here by replication as well as ethnographic analogy
with Amerindian iconography and rituals from the U.S. Southwest which
supports its interpretation as a local variant of the Puebloan ‘rain eye’.
Ilustr. 16 Ojo de lluvia, Chiquihuitillos
Illust. 16 Rain Eye, Chiquihuitillos
El agua superficial esta también presente en la forma de lagunas, ojos de agua,
manantiales, y ríos, cada uno de los cuales sugiere una iconografía distinta. Las
líneas serpentinas pueden representar la fluidez del agua de río, sobre todo si
cabe con el paisaje natural aledaño (Ilustr. 17), como es el caso de Presa de La
Mula (Nuevo León). El entorno de este sitio ha sido fuertemente modificado
(ilustr. 18) en años recientes por la construcción de una represa que interrumpe el
flujo desde la ciénaga natural, pero el lado izquierdo de este panel (ilustr. 19)
parece representar el paisaje anterior que incorpora la imagen serpentina de
riachuelo visto desde arriba por el cazador.
Surface water is also present as lagoons or standing pools, or as flowing
streams, each of which suggests a different iconography. Serpentine lines could
represent the fluidity of a nearby stream course, especially if, as at Presa de La
Mula, Nuevo León, (illustr. 17) it fits into the natural surroundings. The site’s
landscape has been massively altered in recent years (ilustr.18) by an earth dam
which blocks the natural outflow from the adjoining wetland, but one side of this
panel (ilustr.19) appears to represent the hunter’s view of an earlier landscape
which includes the serpentine image of a flowing stream as seen from above.
Ilustr. 18 Presa de la Mula seca
Illust. 18 Presa de La Mula Outflow
Illust. 19 La Mula. Piedra de conteo
Illust. 19 La Mula Count Stone Pan
El agua también puede fluir directamente desde la manta acuífera en las paredes
de arroyos (ilustr.20). En el sitio de La Muralla en la Sierra Madre del sur de
Nuevo León, la pared colinda con un arroyo intermitente y el agua del subsuelo
filtra cada vez que llueve, reviviendo el color rojo de los petrograbados pintados
(ilustr.21) que son plasmados en la superficie rocosa. Un panel prominente tiene
líneas onduladas que simulan la gotera de agua que desciende desde las fracturas
y oquedades de la pared. En otra parte de la pared (ilustr.22), una línea serpentina
horizontal es acompañado por dos círculos concéntricos muy prominentes. Sus
detalles lo identifican como una serpiente de agua, un símbolo bien conocido en
la iconografía mesoamericana que corresponde precisamente con el entorno
aledaño.
Flowing water can also emanate from the groundwater table on exposed cliffs or
arroyo banks (illustr.20). At the La Muralla (The Wall) site in the Sierra Madre
of southern Nuevo León, the wall abuts an intermittent stream and seeps
groundwater after each rain, vividly coloring the petroglyphic motifs overpainted
in red (illustr.21). One prominent panel has undulating lines which simulate
water flow descending from porous cracks and holes in the rock wall. On another
part of the wall nearby (illustr. 22), an elaborate horizontally oriented serpentine
line is flanked by prominent concentric circles. Its details identify it as a water
serpent, a well known symbol in Mesoamerican iconography which fits the
immediate setting exactly.
Ilustr. 20 Sitio La Muralla
Illust. 20 La Muralla site pan
Ilustr. 22 La Muralla serpiente de agua
Illust. 22 La Muralla water serpent
El agua en reposo sugiere otra imagen, el reflejo de un mundo idéntico por
debajo de su superficie cuya separación se revela solamente por el movimiento.
Deja caer una piedra en el agua y se produce el patrón de círculos concéntricos.
Los círculos concéntricos en el panel de La Muralla podrían ser marcadores de
los charcos que quedaron después de las lluvias. En el sitio (ya desaparecido) de
San Bernabé (Nuevo León), un petrograbado en forma de espiral (ilustr.23)
colocada en medio de una cascada (seca ahora) representa un ícono intermedio
que incorpora tanto el flujo como el agua en reposo. Aún en superficies
verticales, como el caso del sitio de Chupaderos del Indio (ilustr.24), el círculo
concéntrico puede representar el agua adyacente al panel. Aunque el agua de este
manantial es entubado a una granja en el valle abajo actualmente, el petrograbado
da testimonio de su contexto anterior.
Standing water evinces a different image, the reflection in a still pool of an
identical world below whose separateness is revealed only by movement of its
surface. Drop a pebble in any still water and a concentric circular pattern is
produced. Concentric circles on the La Muralla panel could be markers of
standing pools which remained after the rains. A petroglyphic spiral (ilustr 23)
carved deeply on a horizontal surface in the middle of a now-dry cascade at the
former site of San Bernabé, Nuevo León represents an intermediate icon,
incorporating both stillness and flow. Even on vertical surfaces (illustr.24), as at
Chupaderos de los Indios (Nuevo León) concentric circles may represent water
adjacent to the panel. Although the water from the now-dry spring is currently
diverted down to a farm on the valley floor below, the petroglyphs offer testimony
of an earlier context when this spring was active.
Ilustr. 23 Espiral concéntrica, San Bernabé
Illust. 23 Concentric spiral, San Bernabe
Ilustr. 24 circulos concéntricos, Chupadores
Illust. 24 Concentric circle, Chupaderos
Evidentemente las figuras geométricas abstractas no son los únicos motivos
rupestres ‘universales’. Vienen inmediatamente a la mente las huellas de mano y
de pie y la figura humana esquematizada que tienen una antigüedad y difusión
global semejante. Su representación de la presencia humana es muy clara aún
cuando su significado o intención específica puede ser abordado solamente en
algunos casos. De la misma manera, las representaciones de animales y artefactos
son universales, aún cuando varían en sus detalles de acuerdo a la cultura y el
medioambiente. Reconocemos estas representaciones por sus rasgos gráficos
únicamente y hacemos ajustes para sus formas variables.
Abstract geometrical figures are obviously not the only ‘universal’ rock art
motifs. Handprints, footprints, and the ubiquitous schematic human figure come
immediately to mind and have a similar world-wide distribution and antiquity.
Their representation of human presence is clear even if their specific meaning
and intent can only be approached in a few cases. Likewise the representations of
animals and artifacts are universal, even when the specifics vary according to
culture and environment. We recognize all these ‘representations’ from their
graphic characteristics alone and readily make adjustments for their variability.
De manera semejante, nuestra excursión en el arte rupestre norestense nos
muestra que podemos abordar el significado de los motivos geométricos
abstractos, haciendo uso oportuno y juicioso del entorno natural y las analogías
etnográficas y arqueológicas. Primero, tenemos que conceder la capacidad para el
pensamiento abstracto aún a nuestros ancestros más primitivos. Ellos
descubrieron el espacio y el tiempo en su propio mundo y lo expresaron
culturalmente en muchas manifestaciones que ahora llamamos ‘arte rupestre’.
También descubrieron los elementos como el agua con sus propiedades muy
particulares que obedecen la ley de la gravedad, mucho antes que fuera precisada
en términos científicos. Una vez que estamos preparados para reconocer las
formas abstractas en la naturaleza, podemos empezar a reconocer sus
manifestaciones más tempranas y examinar las asociaciones en una escala
verdaderamente global entre los grafismos rupestres y sus contextos.
In a similar manner, our excursion in northeast Mexican rock art has shown that
the references implied in abstract rock art imagery can be approached using a
judicious combination of natural phenomena and ethnographic/archaeological
analogies. First, we must first be prepared to grant the capacity for abstract
thought to even our most remote ancestors. They discovered space and time in
their own world and expressed it culturally in many of the manifestations that we
call rock art. They also discovered elements like water with particular properties
which obeyed the law of gravity long before it was formulated scientifically.
Once we are prepared to see nature’s abstractions, it is possible to recognize
their earlier manifestations and test on a truly global scale the associations
between grapheme and context they generate.