01-La Cueva Del Tiempo

5/9/2018 01-La Cueva Del Tiempo - slidepdf.com

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ELIGE TU PROPIA AVENTURA



LA CUEVA

DEL TIEMPO



EDWARD PACKARD

ELIGE TU PROPIA AVENTURA-1

TITULOS PUBLICADOS

1. LA CUEVADEL TIEMPO Edward Packard

\ 2. LAS JOVAS PERDIDAS DE NABOOTI

R. A. Montgomery

3. TUCLAVE ESJONAS Edward Packard

LA CUEVA

DEL TIEMPO

4. EL ABOMINABLE HOMBRE DE LAS NIEVES

R. A. Montgomery

5. lQVlEN MATO AH. THROMBEY?

Edward Packard

6. OVNI 54·40 Edward Packard

7. EL GRAN RALLVE R. A. Montgomery

8. EIHEINO SUBTERRANEOEdward Packard

9. MAs ALLA DEL ESPACIO R. A. Montgomery

10. ELCASTILLO PROHIBIDO Edward Packard

11. 1NAUFRAGIO!Edward Packard

12. ELSECRETODE LAS plRAMlDES

Richard Brightfield

13. EVASION R. A. Montgomery

14. PERDIDO ENELAMAZONAS R. A. MontgomeryIlustraciones: PAUL GRANGER

TIMUNMAS



La idea original, el titulo y la supervision

de La Cueva del Tiemposon obra de Andrea Packard.

LA CUEVA DEL TIEMPO

Traducci6n autorizada de Jaobra:The cave of time

Editado en Jengua ingJesapar:BANTAM BOOKS INC. New York. 1979

© Edward Packard© lIustraciones: Bantam Books Inc.ISBN 0-553-20892-6

«CHOOSE YOUR OWN ADVENTURE»Es marca registradapar Bantam Books Inc.

© EDITORIAL TlMUN MAS. S. A. Barcelona. Espana. 1983Para la presente versi6n y edici6n en lengua castellanaPrimera edlclon: maTZO1983Segunda edlclon: junio 1983Tercera edicion: enero 1984Cuarta edlclon: septiembre 1984ISB.N. 84-7176-535-7'

Editorial Timun Mas. S. A. Castillejos, 294. 08025 - Barcelona

Impreso en Espana - Printed in SpainMEGRAF. S. A. Llobregat, 36. Ripollet (Barcelona)D.L.B. 27.560-1984



1

ADVERTENCIA

[No leas todo ellibro seguido, del principio alfin! En sus pagmas hallaras muchas y variadasaventuras. A medida que 1 0 vayas leyendo, teveras obligado a elegir. De tu decisi6n dependeque la aventura constituya un exito 0 un fra-

caso.TO.seras el responsable del resultado final. Te

corresponde a ti tomar las decisiones. Una vezque hayas elegido, sigue las instrucciones paraaveriguar que sucede a continuaci6n.Recuerda que no puedes volverte atras. Re-

capacita antes de decidirte por una opci6n. Tu'elecci6n puede conducirte al desastre 0... ja unmagnifico final!



2

Ya habias pas ado en anteriores ocasionespor el Canon de la Serpiente, cuando ibas en

bicicleta a visitar a tu tio Howard en el ranchoRed Creek, pero nunca te habias fijado en laentrada de la cueva. Parece como si un des-prendimiento de rocas la hubiese dejado aldescubierto recientemente.El sol de la tarde ilumina la entrada de la

cueva, pero su interior permanece en la masabsoluta oscuridad. Das unos pasos hacia den-tro para hacerte una idea de su tarnafio. Amedida que te vas acostumbrando a la oscuri-

3

dad, empiezas a vislumbrar una especie de tii-

nel iluminado debilmente por algun tipo dematerial fosforescente incrustado en las rocas.Las paredes del tunel tienen una forma suave,como si hubiesen sido modeladas por el cursodel agua. Cinco 0seis metros mas adelante, elninel describe una curva. Te preguntas a don-de conduce. Das unos pasos mas. Te ponenervioso estar solo en un lugar tan extra no.Das la vuelta y sales corriendo al exterior.A juzgar por la oscuridad que reina en el

exterior, esta a punta de desencadenarse unatormenta. De pronto, te das cuenta que el solya se ha puesto y que la iinlca iluminacionprocede de la palida luna llena. Quizas has de-bido quedarte dormido un parde horas. En-tonces recuerdas algo que todavia te resultamucho mas extrafio: la noche anterior, la lunaapenas estaba empezando su cuarto creciente.Empiezas a dudar del tiempo que has pasa-

do dentro de la cueva. No tienes hambre, ni teparece que hayas podido quedarte dormido.No sabes si intentar volver a casa guiado porla luz de la luna 0 si esperar a que amanezcapara no correr el riesgo de resbalar en el es-carpado sendero.

Si decides volver a casa, pasa a la pagina 4.

Si decides esperar, pasa a la pagina 5.



4

A medida que avanzas hacia el rancho, tie-

nes la sensacion de que el sendero no es elque tu recuerdas, aunque desde luego la luzde la luna puede darle un aspecto diferente.De pronto, te das cuenta que no estas cami-nando por un sendero, sino por algo que seasemeja al cauce seco de un rio. Vuelves co-rriendo a la entrada de la cueva. Miras a tu al-rededor y descubres que todo el paisaje hacambiado. Parece como si una lluvia torren-cial hubiese borrado todo el rastro del caminodurante el rato que has est ado dentro de lacueva, a pesar de que no logras ver un solocharco. Tiemblas; hace frio, mucho mas del

que corresponde a esta epoca del afio. Te po-nes la chaqueta que llevabas en la mochila,pero sigues sintiendo un frio terrible.Por fin, el paisaje empieza a aclararse. Por

el este asoma un poco de luz. Pronto saldra elsol. Echas un vistazo a tu reloj y descubres quese ha parado, a pesar de que solo hace unashoras que le has dado cuerda. Parece quenada funcione correctamente.Sabes que debes volver al rancho 1 0 antes

posible, pero de algun modo, sientes que laiinica forma de hacer que las cosas vuelvan aser como antes es retornar al interior de la

cueva.

Si sigues hacia el rancho,pasa a la pagina 8.

Si vuelves a entrar en la cueva,pasa a la pagina 10.

5

Esperas hasta la manana siguiente, pero a

edida que los rosados jirones del amanecer. uminan el cielo por el este, empieza a soplarviento helado y amenazador.

Si buscas refugio, pasa a la ptiqina 6.

Si decides soportar el viento para ver1 0 que hay a tu alrededor, pasa a la pagina 16.



6

Buscas refugio en un hueco entre las rocas

para protegerte de las terribles rafagas deviento y te recuestas en su fondo. De repente,la roca se desmorona y resbalas por una pen-diente fangosa hasta un estanque.Cuando logras levan tarte, calado hasta los

huesos, y llegar hasta la hierba que cubre laorilla, el sol brilla con todo su esplendor. Mirashacia las rocas que se elevan por detras del es-tanque, pero no logras descubrir por dondehas podido caer.Tratas de hacerte una idea de tu situaclon,

cuando de pronto aparece un caballo monta-do por un caballero con armadura, como los

de los libros de historia. La vision te resulta taninusitada que te dan ganas de echarte a reir.El caballero levanta su casco e irrumpe en so-noras carcajadas.- iMenudo sitio para tomar un barto!

~grita-. De todos modos, opino que ha validola pena, iHas quedado tan limpio como uncerdo!Esta a punto de caerse del caballo a causa

de las fuertes carcajadas.- Anda, sube y te llevare de vuelta al castillo

-dice-. Veremos que se puede hacer para querecuperes un aspecto humano.

Si aceptas volver a caballo al castillo,pasa a la ptiqina 22.

Si rechazas la invitacione intentas volver a la Cueva

del Tiempo, pasa a la pagina 114.



89

A medida que aclara el dia te das cuentaque no estas en el buen camino. EI canon pa-rece menos profundo y el cauce del rio estasembrado de cantos rodados que nunca ha-

bias visto. EI viento es helado a pesar de estar enpleno verano. Al subir a un terre no mas eleva-do descubres manchas de nieve. Desde un ris-co divisas una llanura arida con lagos heladosy, ~ 10 lejos, una cadena montafiosa con picoscubiertos por la nieve. Empiezas a pensar queno se trata simplemente de que te hayas per-dido; te has perdido en el tiempo y, por algunaaxtrafia razon, has sido transportado vanosmillones de afios atras a la Edad del Hielo.

Te diriges a una de las colinas que bordeanel canon, buscando un lugar para resguardar-te del viento y descubres la entrada de otracueva. Sientes la tentacion de penetrar en ellaaunque piensas que deberias seguir andandopara ver si de algun modo logras llegar a unsitio conocido.

Si entras en 1acueva,pasa a 1apcigina 17.

Si sigues andando,pasa a 1apcigina 18.



10

I

Entras en la extrana cueva Y te detieneshasta que logras acostumbr~rte ~ la tenue luzambarina que ilumina su mteno~. Gradual-mente empiezas a distinguir dos tuneles. Unode ell os el de la derecha, forma una curva ha-cia abaj'o. El otro sube en pendiente hacia la

izquierda. dSe te ocurre que el que desciende pue e

conducir al pasado y el que sube al futuro.

11

- iA la torre con ell -grita el rey.Dos caballeros se precipitan sobre ti, te sa-

can a rastras del aposento y te obligan con suslanzas a subir los cuarenta escalones de piedrade la torre hasta tu prisi6n: una diminuta habi-taci6n cilindrica con una pequefia ventana desdela cual se divisa el foso y los campos. El iinicomobiliario esta constituido por un lecho de paja.Te das cuenta que has retrocedido hasta la

epoca feudal, en la que el capricho del reyerala iinlca ley valida. No tienes ni la mas remotaidea de cuanto tiempo te tendran encerradoen la torre. 5610 tienes una posibilidad de es-

capar. El foso, a unos siete metros de tu venta-na, es bastante profundo y si logras saltar bas-tante lejos, podras caer en el agua sin sufrirningun dafio.

Si saltas, pasa a la ptiqina 12.

En caso contrario, pasa a la pagina 13.

1

Si tomas el tunel de la izquierda,pasa a la pagina 20.

Si tomas el tunel de la derecha,pasa a la pagina 61.

Si vuelves a salir de la cueva,pasa a la pagina 21.



12

Saltas 1 0 mas lejos posible, cayendo cada

vez mas deprisa, hasta zambullirte en el aguallegando hasta el fondo donde el blando fangoamortigua tu caida. Al cabo de unos segundossales a la superficie. Nadas hasta la orilla exte-rior del foso, ligeramente aturdido pero sindafio alguno, te encaramas hasta el borde ycorres a esconderte en el bosque.Caminas entre los arboles hasta que pierdes

de vista el castillo y, entonces, sales a campoabierto. Encuentras a un campesino y Ie pre-guntas d6nde puedes pasar la noche.- Sube a esa colina y veras el lago Ness

-dice-. Allf podras encontrar alqiin lugar para

guarecerte.Sigues sus indicaciones y te diriges hacia un

grupo de casas situadas cerca dellago. Empie-za a oscurecer y te alegras de encontrar a unpescador que te ofrece cobijo para la noche.Tanto el como su mujer son muy amablescontigo; te invitan a quedarte con ellos y ayu-darles en la pesca para ganar tu sustento.

. Si aceptas, pasa a lapcigina 66.

Si decides seguir viajando,pasa a lapcigina 78.

13

Decides esperar, pero pronto lamentas ha-

berlo hecho. Un guardian viene dos veces aldia a traerte la comida, que consiste unica-mente en pan moreno y agua. Al cabo deunos dias te sientes demasiado debil, inclusopara escapar si surgiera la oportunidad.Cuando estas a punto de perder las espe-

ranzas de volver a recobrar tu libertad, elguardian entra sonriendo en tu celda.:_EI rey ordena que te vayas -dice-. Te-

nemos un prisionero mucho mas importan-teoi l.Ino que ha insultado al caballo de su ma-jestad!

Irrumpe a carcajadas. No sabes si dice la

verdad, pero mantiene la puerta abierta sefia-lando hacia afuera. De nuevo en libertad, ba-jas la larga escalera de piedra hasta el patioprincipal. El puente levadizo esta bajado y noparece haber ningun impedimento para queabandones el castillo. .

Cerca de ti esta atado un esplendido alazanque probablemente pertenece a uno de los ca-

balleros del rey. Se te ocurre que podrfas reco-rrer una larga distancia con el antes de quenadie 1 0 echase en falta.

Si montas en el caballo y sales a galope,pasa a lapcigina 14.

Si pides refugio al rey,pasa a lapcigina 15.



En un instante, has cruzado el puente y teencuentras galopando por el campo sintien-dote mas listo que el rey 0 sus caballeros.Agitas la mana hacia unos pastores al pasar

por su lade y ellos te devuelven el saludo.Haces un descanso en la casa de un cabrero

muy am able que te obsequia con un magni'fi-co almuerzo.- No debes temer al rey -dice-. Es un tonto

que se pasa el dia sentado bebiendo vino. Suiinlca preocupacion consiste en saber a quiendebe encerrar en la torre. Hasta sus mismoscaballeros se rien de el y es mucho mas proba-ble que se caiga de su trono que tii de tu caba-llo. iDirrgete a la feliz Inglaterra, ya que alli teaguardan grandes acontecimientos! iBuen via-je y felices aventuras!Tus energias se han respuesto gracias a la

buena comida y tu caballo tarnbien esta dis-puesto para partir. Das las gracias efusiva-mente a tu anfitrion y te dispones a cabalgarhacia nuevas aventuras y una nueva vida, casiun millar de affos antes de haber nacido.

Fin

15

Logras acceder al rey y Ie das las graciaspor dejarte salir de la torre.- No tiene importancia -responde-. Haria-

moslo mismo por cualquier bribon, Nos hascaido bien y tu historia, aunque no tiene nin-gun sentido, nos ha hecho reir. Seguramentesin saberlo has prestado un servicio a tu rey.Gracias.- Hare que te den un caballo y algunas pie-

zas de oro -contimia diciendo-. Vete y hazfortuna. Pero te ordeno que vuelvas cad a afioa contarnos una aventura tan divertida, por 1 0

menos, como la que ya hemos oido de tus la-

bios.- Mi senor -dices.- Mi vasallo -responde el rey.Te alejas a caballo, con cierta inquietud,

pero decidido a sacar el mayor partido posiblede tu vida en el afio 982.

Fin



16

Trepas resueltamente por un risco rocoso.

EI fuerte viento levanta remolinos de nieve ychoca violentamente contra tu cuerpo. .EImundo parece haber cambiado para mal.

Si no encuentras pronto una casa 0una caba-na con gente que te ayude, no viviras mucho.Meditando sobre tu destino, tropiezas y te

caes, hundiendote en una grieta. Pierdes el co-nocimiento y, al volver en 5 1 , te encuentras enun lugar mas calido aunque todavia sigues ti -

ritando. Por la palida luz ambarina deducesque, de alqun modo, has ido a parar de nuevoa la Cueva del Tiempo. Hay un pasaje a tu de-recha y otro a la izquierda. lSera que unoconduce al futuro y otro al pasado?

Si entras en el pasaje de la izquierda,pasa a la pagina 24..

Si entras en el pasaje de la derecha, .pasa a la pdqina 25.

17

Al penetrar en la cueva percibes una luz os-

cilante y olor a humo. Caminas a 1 0 largo deun tortuoso pasadizo hasta llegar a una am-plia camara, EI humo procede de unas vasijasde barro.

Unos hombres bajos y robustos, con pelonegro, muy lacio y rasgos primitivos, estan

ocupados pintando sobre las paredes de lacueva. Visten con pieles de animales. Obser-vas que en un rincon hay varios lechos de.paja.

Te quedas paralizado por el miedo cuandolos habitantes de la cueva abandonan su tra-bajo para correr hacia ti con muestras deasombro. EI mas alto lleva en sus manes unalarga liana. Se adelanta como si tuviera inten-cion de agarrarte y atarte con ella. .

Si te quedas y tratas de entablar amistad. ,

pasa a la pagina 26.

Si tratas de escapar, pasa a la pagina 28.



18

Sigues adelante por un sen~ero que sube

una empinada cuesta. Puedes orr unos fuertessonidos que Began desde un barranco cerca-no; probablemente pertenecen a alqun animalde gran tarnafio. Trepas a un risco y contern-pias uno de los mayores marniferos terrestres

19

que haya existido jarnas: el mamut lanudo. Su

impresionante volumen resulta todavia mu-cho mayor debido a la espesa capa de peloque Ie cubre.Estes helado, cansado y desesperado. Des-

de el saliente rocoso en el que te encuentras,a poca distancia del mamut, podrias saltar so-bre su lomo, refugiarte en su calido pelo y de-jarte Bevar.

Si saltas sobre el mamut,pasa a la pagina 29.

Si sigues a pie,pasa a la pagina 30.



20

EI tunel de la izquierda forma una espiral,cruzandose con otros nineles. Tomas uno deellos y empiezas a subir una cuesta muy pro-nunciada. Al cabo de un rato, trepas por unagujero y sales a un desierto. EI calor es sofo-cante, desde luego superior a los cuarenta gra-dos, pero el sol esta a punto de poners7 ~pronto ampezara a refrescar. A 1 0 lejos se divi-sa una cadena de montafias que, a pesar de suaparente altura, no estan cubiertas de nieve.No tienes ni idea de si estas en el pasado, en elfuturo 0en el presente. En ese momento, des-cubres algo asombroso: la arena se funde ~n

un cristal amarillento. Al examinarla con masdetalle, notas una oleada de aire todavia mascaliente. De pronto, te das cuenta que el solno se pone, sino que sale. Es imposible que latemperatura a rnediodia pueda ser soportadapor ningtin ser vivo. A medida que el sol as-ciende, el calor se va haciendo abrasador. Laluz es cegadora. Quizas estas presenciando el

findel mundo.

Pasa a fa pagina 93.

21

Das la vuelta y sales de la cueva. A estas

horas, ya deberia estar amaneciendo. Sin em-bargo, no logras ver ni rastro de luz y tienesque buscar a tientas tu camino hasta la entra-da. Tanteas las paredes tratando de encontrara.lgunaabertura. Tus manos tocan algo hume-do, frio y duro: ihielo! La entrada esta total-mente cubierta y los bloques de hielo lleganhasta el interior de la cueva.Retrocedes, totalmente confuso y desalen ~

tado. Desearfas estar sofiando. Vuelves sobretus pasos intentando pensar con claridad. Sa-bes que la unica posibilidad de salir de la cue-

va es seguir uno de los pasadizos que tienesdelante.

Sisigues el de fa derecha,pasa a la pagina 33.

Si sigues el de fa izquierda,pasa a fa pagina 35.



·I·!

·I! ~I,

I ~· JI,i

I

j~i

i

22

EI alegre caballero te ayuda a subir a su ca-

ballo y emprende el galope campo a traveshaciendote sentir bastante incomodo. Despuesde recorrer un par de kilometres llegais a ungran castillo. EI caballo trot a alegremente cru-zando el puente levadizo hasta el establo.- iSalta! -dice elcaballero.Te deslizas por la parte trasera del animal y

el caballero te conduce hasta el aposento prin-cipal del castillo. Este esta abarrotado de sir-vientes,consejeros y caballeros. Poco despues

saludas con una reverencia al rey.Despues de oir tu relato, el rey con expre-

sion severa se dirige a sus sirvientes, conseje-ros y caballeros.- lAlguno de vosotros se ha creido este

cuento? -pregunta.Todos contestan:- No, majestad.- Por supuesto que no, majestad.- Ahora, dinos la verdad -grita el rey, diri-

giendose a ti.

23

Si afirmas que estds diciendo fa verdad,pasa a fa pagina 36.

Si tratas de inventar una historiamas oerosimil, pasa a fa pagina 37.



24

Sigues el pasaje de la tzquierda. Subes

por la pendiente hasta la superficie. Delan-te de ti se extiende una verde pradera hastaun riachuelo claro, de rapidas aguas y, alotro lado, laderas cubiertas de pinos que sepierden en la distancia hasta unos PICOS

blanqueados por la nieve. Podrias estar enWyoming en tu propia epoca. De todos mo-dos, la epoca a la que has llegado parece

bastante tranquila.Hay una manada de bufalos paciendo,

pero no logras distinguir ninguna casa, va-

lla 0 carretera, es decir, ningun signo depresencia humana. Pue;ie ~er que !e en-cuentres a cientos, quiza miles, de anos de

tu epoca. .Miras hacia arriba. Una de las hlnchadas

nubes que pueblan el cielo se mueve de unaforma muy extrafia. iEsta baja~do.! Con tuspropios ojos presencias el atemzeje d~ unanave espacial a s610 unos metros de dtstan-

cia.

25

J1,

Recorres bastante distancia por el pasaje de

la derecha con la esperanza de encontrar unninel que conduzca a tu epoca. Escoges unode los muchos pasadizos que cruzan y 10 si-gues. En lugar de subir hasta la superficie, en-tras en una estancia brillantemente iluminadaen el centro de la cual esta sentado un ancia-no con barba.- iBienvenido! -dice, como si estuviera es-

perandote.- Gracias -respondes-. lPuedes ayudarme

a regresar a mi epoca?- Ante todo, dime por que quieres volver a

tu tiempo, lNo te gustarra ir a otro cualquie-ra? -dice el anciano sonriendo.

Si Ie dices que deseas volvera tu epoca para estar con tu familiay tus amigos, pasa a lapagina 43.

. Si dices que no quieres correr

el riesgo de ir a parar a una mala epoca,pasa a lapagina 41.

Si Ie dices que te gustar{a conocerotra epoca, pero s610 si te garantiza

que podrtis volver a la tuya,pasa a lapagina 44.

Si Ie preguntas quien es,pasa a la pagina 45.

Si te escondes para no ser visto,pasa a la pagina 38.

Si te diriges a la nave espadal,pasa a la pagina 40.



26

Adoptas una actitud amistosa. El h,ombre

que sostiene la liana retrocede y sonn~. Losotros se dirigen a ti dando muestras de simpa-tia, pero no logras en tender 1 0 qu~ dice':1 nitampoco elIos pueden entenderte a ti. Te sien-tes un poco violento, pero contento de estar a

salvo y caliente.Algunos hombres vuelven a su pin.tura. D~-

cides intentar comunicarte por medic del di-bujo. Te dibujas a ti mismo comiendo y loshabitantes de la cueva se den, pero te traen unpedazo de carne casi cruda. No tiene muybuen sabor, pero estas tan hambriento que no

te importa.

27

Poco a poco entablas amistad y aprendes

unas cuantas palabras. Unos hombres van decaza y vuelven con carne. Otros hacen ropascon pieles de animales. Ayudas cocinando ylimpiando, haciendo todos los dias alglin dibu-[o en la pared. Los habitantes de la cueva sien-ten fascinacion por tus dibujos de barcos,aviones y coches, objetos que solo puedenapreciar como diseftos abstractos ya que nopueden comprender cual es su funcion.Un dia reciben la visita de otras gentes. Tuo los habias visto anteriormente,· pero tusamigos los reciben calurosamente y celebranuna gran fiesta en su honor. Al terminar la co-

rnida, la conversacion se acalora. Comprendes.ue estan hablando de alglin problema serio.?oco a poco se van quedando dormidos. Salese la cueva para ver si logras averiguar algo.~ tierra esta cubierta por una espesa capa de• ieve y el implacable viento helado levanta re-molinos.A la manana siguiente, la gente de la cueva

ampaqueta sus pertenencias y te recomiendaue hagas 1 0 mismo. Sin lugar a dudas, se pro-ponen emigrar a un clima mas calido. Proba-lemente deberfas ir con elIos, pero quieresvolver a tu casa y saber que la unica posibili-dad de lograrlo es encontrando el camino deelta a traves de la Cueva del Tiempo.

Si vas con la gente de la cueva,pasa a la pagina 46.

Si intentas volver a la Cuevadel Tiempo, pasa a la pdqina 47.



28

o ves ninguna posibilidad de futuro entre

estasgentes primitivas, por 1 0 que echas a co-rrer de vuelta hacia la Cueva del Tiempo.Afortunadamente no te persiguen y logras re-

hacer el camino.Estas de nuevo en la cueva, agotado y ham-

briento. La luz es incluso mas tenue que antesy te ves obligado a buscar a tientas el camino.Tropiezas y te caes de cabeza por un terra pienlastirnandote ligeramente. Al levan tar la vista,ves la luz del dia. Poco despues sales de lacueva a un terreno calido y humedo cercano aun bosque de frondosos arboles. Pasa volandoun pajaro. No sabes en que epoca estas, peroe! paisaje parece bastante agradable.

Pasa a la pagina 51.

Cuando caes sobre el, el mamut se sacudecomo un caballo que ahuyenta las moscas.Empieza a avanzar pesadamente por el valle,aparentemente sin notar quesigues abrazado

a su peludo lomo disfrutando del calor y delpaseo.Llega a un terreno elevado, mordisquea

una corteza y sigue adelante. Quiza te llevehasta algunos habitantes de las cuevas quepuedan darte comida y abrigo.De pronto, se para y vuelve la cabeza como

para oir mejor. Levantas la vista y descubresunas figuras humanas que se acercan desdedos lades distintos. Llevan lanzas y mazas. EImamut empieza a correr y tu te agarras fuer-temente. Los cazadores os persiguen dandoalaridos. No puedes ver hacia d6nde se dirigeel animal y temes que los cazadores traten dedespefiarlo por alqun barranco. Sin embargo,si ,altas en plena carrera podrias hacerte mu-cho dafio.

Si saltas, pasa a laptiqina 52.

Si sigues agarrado, pasa a fa pagina 53.



30

Cabalgar sobre un mamut podrfa ser muy

divertido si no estuvieses hambriendo, heladoy perdido. Adernas, ta donde te Ilevaria? Si-gues andando, desanimado y triste. Estas apunto de sentarte y ponerte a llorar cuandodescubres un agujero en el suelo. Te metespor el a gatas esperando encontrar refugio 0

un camino hacia la Cueva del Tiempo.Desembocas en un tunel cruzado por otros

de distintas direcciones. Ahora estas segura dehaber vuelto a la Cueva del Tiempo. Sientes elimpulso de seguir el primer tiinel que salga ala superficie, pero si quieres volver a tu epocatienes que avanzar considerablemente en eltiempo, por 1 0 que piensas que quiza seriaconveniente esperar y seguir otro tiinel.

Si escoges el primer uinel,pasa a la pagina 54.

Si sigues alguno de los otros ulneles,pasa a la pagina 92.

31

Entras en el primer tunel y sigues andando

hasta que empiezas a pensar que estas dandovueltas en circulo. tTendra esto alqiin signifi-cado? Quiza el tiempo este transcurriendo conmas lentitud. Estas al borde del agotamiento yempiezas a sentir mucho frio, Descubres unaabertura en el techo, a traves de la cual brillanlas estrellas. Sales a un mundo desierto y de-solado. EI frio es intenso. Aunque no haceviento, vas a quedarte helado en pocos minu-os. EI aire casi no tiene consistencia como su-cede en las cumbres de las montafias muyelevadas. Respiras con gran dificultad. Elevas .la vista hasta el cielo frio y nocturno, cuajado

de estrellas; entre ellas logras distinguir un dis-co del tamafio del sol que emite una palida luzroja como la de un fuego en extincion.

Fin



32

Despues de recorrer una considerable dis-

tancia por el pasadizo, entras en un amplio tii-nel que tiene tantas posibilidades de devolver-te a tu epoca como cualquier otro. Contimiasavanzando y notas que el suelo esta formadopor arena. Quiza llegues a una playa. Depronto el suelo resbala bajo tus pies y te desli-zas sobre la arena levantando una nube depolvo. No puedes parar, el terreno esdemasiado inclinado. No hay nada debajo y, alcabo de un instante, te sumerges en aguasprofundas. Vuelves nadando a la superficie ytratas de recobrar el aliento. Estas en una gru-ta sumergida, total mente cerrada excepto por

una pequefia abertura en el techo que dejaver el cielo azul. Vas nadando hasta una granroca que sobresale del agua.La arena es blanca y el agua total mente

transparente. Las rocas estan formadas porun material cristalino con delicadisimos tonosazulados. Por un momento, te dejas cautivarpor la belleza del paisaje, pero enseguida em - .piezas a pensar en como salir de alli, No existeninguna posibilidad de trepar hasta la abertu-ra del techo. Decides bucear con la esperanzade encontrar alqun pasaje submarino que teconduzca a la libertad. iLogras encontrarlo!Pero ... Gpodras llegar hasta el final sin quedar-

te sin aire?

Si intentas bucearpor e f pasaje submarino,

pasa a fa pagina 58.

Si decides esperar,pasa a fa pagina 64.

Tratas de avanzar en medio de la debil luz.

Delante de ti encuentras una escalera de cuer-da. Te agarras a ella y empiezas a subir. Depronto, oyes un temible crujido y la escaleraempieza a vibrar. Te paras, fuertementeagarrado, mientras el ruido se apaga. Siguessubiendo y, al cabo de un rato, notas el airefrio y cortante de la noche. A tu alrededor bri-llan gran cantidad de luces. Delante hay un. gran bloque de hielo. Notas una extrafia sacu-dida, como si la tierra se moviese. Al tocar elsuelo descubres que es de madera. Puedes verel mar mas alla de una barandilla. El cielo estacuajado de estrellas que brillan con fulgor inu-

sitado. Te das cuenta de que te encuentras enla cubierta de un barco de gran tamafio,Colgado cerca de ti hay un enorme salvavi-

das que en letras negras reza TITANIC. Sabesque solo ha existido un barco con ese nombre.En su primer y unico viaje choco con un gi-gantesco iceberg, hundiendose en el Atlanticoen menos de tres horas.Al avanzar por la cubierta del Titanic descu-

bres que por debajo de la linea de flotacion elagua entra a raudales en los compartimentosinteriores.

Continua enla pagina siguiente.

33



34

La gente no parece haberse enterado de 1 0

que esta sucediendo. El mar tiene el aspectode una balsa de aceite. En la cubierta inferior,la orquesta toea un vals. No muy lejos, algu-nos hombres vestidos de negro y mujeres conabrigos de pieles pasean por cubierta.- iNo entiendo por que el capitan ha para do

el barco! -dlce una de ellas-. Si llegamos conretraso a Nueva York, presentare mis quejas ala compafiia,

Si intentas encontrar al capitan paraadvertirle que el barco esui a punto

de hundirse, pasa a la pagina 68.

Si vuelves € I bajar por la escalerapara retornar a la Cueva del Tiempo,


Te introduces en el pasaje de la izquierda

dejando atras algun que otro tiinel, Ningunode ellos resulta especial mente atractivo. Deci-des seguir hasta el final del pasaje.Caminas durante horas y horas. Por fin, a 1 0

lejos, aparece una figura que va acercandc-se. Es una nina con pantalones vaqueros y jer-sey rojo que lleva una mochila en la espalda.Te dice que se llama Luisa y que se ha perdidomientras exploraba una cueva. Evidentemen-te, no sabe que esta en la Cueva del Tiempo.

Si tratas de ayudar a Luisa a buscarellugar por donde entr6 en la cueva,


Si Ie propones que vaya contigo por algunode los iuneles a fin de encontrar una salida,


35



36

- Ya se que suena raro, majestad -dices-.Pero no veo ninguna razon para atraermevuestra ira inventando una historia falsa.EI rey vuelve la vista hacia sus cortesanos.

Todos ostentan una expresion grave, como sihubieses cometido un delito imperdonable.

Pasa a la ptiqina 11.

- Lamento molestaros con mi presencia,

majestad -dices humildemente, tratando deinventar un buen cuento 1 0 mas deprisa posi-ble-. Lo cierto es que he sido duramente mal-tratadopor mi padrastro y acudo a ponermebajo vuestra sabia y justa proteccion.-lQuien es tu malvado padrastro? lDonde

vive? -pregunta el rey-. Si es tan malo, megustarfa poder contarlo entre mis caballeros-efiade riendo, coreado por todos los cortesa-nos.- Vive detras de esa colina -dices, sefialan-

do una elevacion cubierta de arboles- y se lla-rna Smith.

EIrey vuelve a refrse.- Entonces tu padrastro debe ser un pez

-dice- porq ue detras de esa colma esta ellagoNess.

Pasa a lapagina 11.

37



38

Piensas que debes haber llegado a un futu-

ro lejano. ('Se trata real mente de una nave es-pacial? Si es asi, quiza 1 0 mas conveniente se-ria retirarte a una distancia prudencial. Trepasrapidamente por la colina, pensando en comohas venido a parar a esta extrafia epoca.Encuentras un hueco entre las rocas y te

metes dentro. Entonces te dascuenta que es-tas en el fondo de la grieta en la que habiascaido en la Edad del Hlelo. Aunque quisiesesvolver a aquella horrible epoca, no tienesninguna posibilidad de hacerlo. Sigues andan-do y, al fin, sales a campo abierto al otro ladede la colina.

Desde donde estas puedes divisar una granextension de terreno rocoso y mas bien arido.Una gran muchedumbre se afana en la cons-truccion de un enorme muro. Por todas parteshay carretas tiradas por bueyes, cargadas congrandes bloques de piedra. EI muro tiene por1 0 menos seis metros de altura y se extiende a1 0 largo de todo el espacio que logras divisar.

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Ves muchas escaleras apoyadas contra el

muro con hombres y mujeres subidos en ell asque pasan las piedras hasta la parte superior.Esta vision es casi tan increible como la naveespacial, ya que al parecer estas presenciandola construccion de la Gran Muralla de China.

Si te diriges a los constructoresde la muralla, pasa a la pagina 82.

Si vuelves a la grieta,paso a la pagina 87.



40

- Entiendo perfecta mente que no quieras

visitar otras epocas -responde el anciano-, yaque todas son peligrosas y en cualquiera deelias te puedes encontrar con mala gente yverte envuelto en desagradables aventuras.- Demuestras una gran prudencia y, por 10

tanto, estoy dispuesto a ayudarte a volver a tupropia epoca que, como deberias saber, no esmejor ni peor que las otras.

41

Te acercas cautelosamente a la nave espa-

cial y descubres con gran sorpresa que se sos-iene a unos treinta centimetres del suelo sinningun apoyo visible.No tiene motores, tubosde escape, escotillas, tren de aterrizaje, ante-nas, ni ninguno de los aparatos que se suponeque debe llevar una nave espacial. Piensasque debe ser obra de una civilizaclon extrema-damente avanzada.Con la esperanza de que sus gentes hayan

desarrollado el sentimiento de amistad hacialos otros seres, te aproximas a la nave. En esemomento se abre una puerta, pero 10 unicoque logras ver de su interior es una fuerte luz

azulada. A traves de la abertura aparece unenorme cuba y unas pinzas mecanicas 10 de-positan en el suelo. La tapa del cuba se levan-ta, dejando a la vista una especie de lechodonde descansan las figuras dormidas de treshombres y tres mujeres vestidos con trozos depieles de animales. Te recuerdan a los dibujosque representan a los primeros habitantes dela tierra. Sientes el impulso de saltar a la naveespacial antes de que se cierre la puerta.

Fin

Si 1 0 hac es , p as a a la pag ina 115.

En c aso c on tra rio , p asa a la pagina 83.



42 43

- tPor que quieres volver con tu familia y

tus amigos? -pregunta el anciano.- Porque los echo mucho de menos y no

podria soportar no volver a verlos. Adernas,ellos tam bien deben sentirse tristes sin mi.- Piensas en los dernas, aparte de en ti mis-

mo -responde-. Esa es una buena razon paravolver a tu epoca. Toma el primer tunel de laderecha y encontraras la salida. Al parecer,has decidido vivir en una sola epoca, tno esasi?- Sf -respondes.- Entonces, vivela con el maximo provecho

-dice el anciano despidiendote con la mano.

Fin

_ _ _____Jo __



44

- iAh, eres muy astuto! -dice el anciano-.

No te conformas con una sola posibilidad.Bien, te llevare a otra epoca y, si no te gusta,me l1amas y te devolvere a la tuya, siempreque nos de tiempo. Toma el tunel de la dere-chaoSigues sus indicaciones y, a traves del tunel,

l1egasa la cal1ede una ciudad. Inmediatamen-te te das cuenta que esta en guerra. A tu alre-dedor estal1an las bombas y los cohetes. Lla-mas a gritos al anciano para que te hagavolver a la cueva, pero ya no dispones detiempo.

Fin

45

- Soy un filosofo -responde el anciano-, y

decidf escoger la eternidad para tener todo eltiempo del mundo para meditar.- GY estas contento con tu decision?

-preguntas.- No, porque la filosoffasin el tiempo no es

nada. Toma el tunel de la derecha y vuelve atu epoca. Haz de tu vida tu propia filosoffa.

Fin



46

Bien abrigado con tus toscas botas y abrigo

de pieles, sales poco despues de amanecer conlos demas, un andrajoso grupo formado poruna treintena de hombres, mujeres y chlqui-lIos. Afortunadamente no hay ningun nino pe-quefio ya que no Iograrfa sobrevivir al duroviaje. EI sol asoma timldamente entre las nu-bes, el viento es moderado y avanzais con ra-pidez en vuestra larga ruta hacia elsur.AI cabo de unos cuantos dias de viaje, casi

todos estan al borde del agotamiento. Los ca-zadores no han conseguido encontrar ninguna.presa. No es posible encender un fuego por lasnoches y la iintca forma de no quedarse hela-dos es dormir agrupados.Sin embargo, una semana despues notas

que el sol brilla con mas calor a mediodia yque la nieve ya no es tan espesa. Parece quedespues de todo loqrareis sobrevivir, aunquedebes abandonar toda esperanza de volver atu propia epoca.

Fin

47

Recoges tus escasas pertenencias, de las

cuales la mas apreciable es un cuchillo hechode un colmillo de mamut. Dices adios a tusamigos y te alejas andando con dificultad 50-

bre la nieve intentando rehacer el camino devuelta a la Cueva del Tiempo. Aunque el frioes muy intenso, el radiante sol aviva tus espe-ranzas.Tu estancia con los habitantes de la cueva

e ha fortalecido y tus toscos ropajes de pieleste protegen admirablemente del frio. Lograsencontrar el camino a 1 0 largo del canon y, alcabo de unas horas, alcanzas la entrada de la



48

cueva, ahora casi totalmente cubierta por la

nieve.Estas agotado por la larga caminata y te llo-

ran los ojos a causa del fuerte viento. Casi nopercibes la gran figura gris agazapada a pocadistancia de la entrada de la cueva hasta quellega a ti el aullido gutural del lobo. En esemismo instante, te enfrentas directamente asu fria y cruel mirada. Sabes que al menormovimiento se avalanzara sobre ti. Tienes quepensar que vas a hacer antes de cambiar depostura. Es probable que puedas llegar hastala cueva sin que te alcance; puede que tardeun poco en perseguirte y que te deje tiempopara escapar. Tambien podrias intentar cla-varle el cuchillo en la garganta cuando salte.

Si corres hacia la cueuc,pasa a la pcigina 49.

Si te dispones a luchar,pasa a la pcigina 50.

Lentamente desenvainas tu cuchillo y co-rres hacia la cueva. El lobo sale disparado de-rras de ti. Salta y desgarra tu abrigo de piel de050. Mientras trata de recuperar el equilibrio,entras en la cueva y te metes por el tunel de laizquierda. Ellobo te persigue. Miras por enci-rna del hombro y, tropiezas. En vez de caer alsuelo, notas que resbalas por una larga yem-pinada rampa. Arriba el lobo aiilla furioso.Aterrizas sobre un menton de tierra en el fon-do de un pozo, ligeramente conmocionadopero sin dafio, A tu izquierda hay un oscuropasadizo. Arrojas una piedra y, al cabo de 10

que te parece una eternidad, oyes un lejanochapoteo. Afortunadamente, hay otro pasadi-zo a la derecha que esta debilmente iluminadopor una luz fosforescente.

Pasa a la pa gin a 2 5.



50

Asiendo ellargo cuchillo de marfil, avanzas

lentamente, paso a paso, hacia ellobo que es-pera grufiendo aparentemente sorprendido

por tu audacia.Con un gran saIto el animal se lanza sobre

ti. Le atacas con el cuchillo, desviando el cuer-po para evitar sus temibles colmillos. Tus cu-chilladas dan en el aire, pero ellobo tampococonsigue otra cosa que desgarrar tu abrigo depieI de oso. Se detiene un instante para olerloy aprovechas para clavar tu cuchillo en 5U

cuello. EI lobo gira, te mira con odio y se des-ploma sobre el suelo con la columna vertebral

partida.

Ahora ya eres un autentico cazador de laEdad de Piedra. Oespojas al animal de su piely entras en la cueva.Sigues el tunel de la derecha pensando que

puede devolverte a tu epoca cuando, de re-pente, caes hundiendote mas y mas deprisa enun pozo que no parece tener fin.

Pasa a lapagina 81.

51

De pronto oyes unos gritos. Te escondes en

un matorral. Aparece un animal, seguido porvarios hombres con lanzas y hondas. Te figu-ras que debes encontrarte en alguna epocaanterior al desarrollo de la civilizacion. Siguesun sendero que te conduce hasta un claro yalli te tumbas en la hierba para descansar unrato. Al mirar hacia el cielo, descubres una lar-ga franjablanquecina. Te frotas los ojos yvuelves a mirar. iParece la estela de un aviona reaccion' Despuesde todo, puede que te en-cuentres en tu propia epoca.Cansado de vagar durante varios dias por la

jungla, llegas a un poblado situado a orillas de

un gran rio. Cerca hay un aeropuerto y, alcabo de algun tiempo, logras volar hacia tu ci-vilizacion y ver a tu familia, exactamente unmes despues de haber entrado por primeravez en la Cueva del Tiempo. Te alegras de es-tar de nuevo en casa, aunque te sorprende en-ontrar a todos mucho mas viejos. iEllos tam-ien se asombran de que no hayas cambiadoada en once afios!

Fin



52 53

Te dejas resbalar por el costado del animal

y caes sobre el helado terreno, permaneciendoalli magullado y dolorido mientras el mamutsigue su carrera. De pronto, desaparece de lavista despefiandose por la colina. Los cazado-res gritan de contento. Algunos se acercan a ti.Son bajos y musculosos, con mandibulas pro-minentes y brillantes ojos. EI pelo negro lesUega hasta los hom bros y van vestidos conpieles.Te sientes desamparado pensando en 1 0

que pueden hacer contigo. Sin embargo, ense-guida notas que no van a hacerte dafio. Teayudan y te llevan hasta su cueva, donde te

ofrecen caldo caliente. Tiene mal sabor perote hace sentir mucho mejor. Te das cuentaque los hombres de la cueva estan dispuestosa aceptarte porque, sin saberlo, has logradollevar a cabo el rito sagrado de su pueblo alcabalgar valientemente sobre un mamut.La vida de las gentes de la cueva es sencilla

y dura y, a menudo, echas de menos a tu fami-lia, a tus amigos y a tu epoca; sin embargo, tunueva vida es todo 1 0 emocionante y feliz quepudieras desear.

Te agarras firmemente a los mechones de

pelo esperando que el mamut disminuya lavelocidad para poder saltar sin sufrir ningundafio. De pronto, el animal se lanza hacia ade-lante emitiendo un terrible bramido. Te dascuenta que estas cayendo cada vez mas de-prisa y gritas desesperadamente.Miles de afios mas tarde, el eminente pa-

leontoloqo Dr. Carleton Frisbee, al descubrirtus huesos en la excavacion de Red Creek seasombra enormemente de tu parecido con unser del sigh xx.

Fin

Fin



54

Te metes por el primer tunel que encuen-

tras. A medida que avanzas, se va haciendocada vez mas pequefio, por 10 que te ves obli-gada a arrastrarte para seguir adelante. Conti-mias de este modo por 10 menos durante unahora, Por fin, tus esperanzas se ven realizadasya que percibes el fresco olor de un campo deheno recien cortado.Poco despues parpadeas ante la brillante

luz del sol que ilumina un hermoso valle ro-deado de suaves colinas. Cerca de un serpen-teante rio pacen una docena de vacas y, a 10lejos, se divisa una carretera de tierra. Por ellaavanza un caballo arrastrando un carro carga-

do de heno sobre el cual esta sentado un cam-pesino. Se dirigen hacia un gran granero rojosituado en la lejania. En la direcci6n opuesta,se puede oir el melanc6lico silbido de un tren.Te das la vuelta y descubres que no estas

muy lejos de la via del ferrocarril. EI tren apa-rece resoplando por la curva, lanzando unanegra humareda producida por el motor devapor alimentado con carb6n. Desde luego, yano estas en la Edad del Hielo pero tampocoexactamente en tu epoca.

Sigue en fa pcigina siguiente.

55

El tren empieza a reducir la marcha. Te

sonrfes al descubrir el motivo: en la via hayuna vaca que no parece dispuesta a moversepor nada del mundo. EI tren frena y de la cabi-na baja un hombre blandiendo amenazadora-mente una pala hacia la vaca, que espera aque este llegue casi a su lade para volversetranquilamente hacia el prado. En ese mo-mento, se te ocurre que podrias muy facil-mente subir al tren.

Si subes af tren,

pasa a fapcigina 94.

Si vas a fa granja,pasa a fapcigina 98.

Si vuefves al uine!con fa esperanza de encontrar

el camino hacia tu epoca,

pasa a fapcigina 101.



56

Mediante la computadora logras aprender

su idioma que te resulta bastante parecido altuyo. Pronto logras comunicarte con tus anfi-

triones.No demuestran ningun asombro cuando se

enteran de que has llegado a traves de la Cue-

va del Tiempo.- No eres el primero - dice el cabeza de fa-

milia -, aunque las visitas de gentes de otrasepocas solo tienen lugar muy de vez en cuan-do. Nos interesa mucho conocer la vida deotras epocas porque nosotros hemos logradouna especie de paraiso: nadie trabaja y elmundo esta en paz. Nuestra sociedad es per-

fecta. Por eso, las epocas primitivas como latuya nos llaman poderosamente la atencion.

Si te quedas en la "sociedad perfecta",pasa a la pagina 57.

Si intentas volver a la Cueva del Tiempo,pasa a la pagina 60.

57

Tus anfitriones te alojan en una hermosa

habitacion con grandes ventanales que dan aun parque., En una de las paredes hay unaagradable reproduccion de la costa de Califor-nia. Si aprietas un boton, se enrosca dejando ala vista una gran pantalla. Dispones de unacomputadora que te permite seleccionar cual-quier pelicula 0 programa entre mas de10.000 posibilidades. Incluso hay peliculas enlas que tii eres el protagonista principal y pue-des decidir el desarrollo de las aventuras. Si note gusta el curso de la accion puedes volver alpunto de partida y elegir otra opcion,La computadora tambien sirve para jugar y

proyectar paqinas de libros 0de revistas en lapantalla. Tu vida puede ser muy agradable in-cluso sin levantarte de la cama.De vez en cuando sales a explorar. Conoces

a otras gentes, pero no te interesan demasiadopor 1 0 que pasas la mayor parte del tiempodisfrutando de lasmejores peliculas de todoslos tiempos. Poco a poco te acostumbras a tunueva vida. Sin embargo, hay algo que tepreocupa; no se han hecho nuevas pelfculasdesde hace 300 ai'ios.

Fin

~;



58

Respiras profundamente, te sumerges y bu-

ceas por el tiinel. Puedes ver luz delante de ti.En poco tiempo logras salir a la superficie enuna hermosa cala. Entre las palmeras quebordean la playa de blanca arena hay variascabanas de paja. La suave y calida brisa te traearomas de jazrnin y el sonido de una extrafiamelodia de tambores. En el mar hay una floti-lla .de barquichuelas con velas multicoloresque.naveqan impulsadas pot el viento. Sus tri-pulantes se apoyan contra la botavara paramantener las velas hacia afuera.Andas hacia el poblado. AIgunas gentes de

pie I morena y rasgos agradables advierten tu

presencia. Unos se alejan corriendo, pero losdemas se acercan a ti saludandote con las ma-nos. Dos nifios vienen corriendo con guirnal-das de flores. Todos dicen "jAloha!" .. Poco despues te encuentras sentado anteun gran fuego donde se asan cancrejos, y secomen ricos pasteles. Nunca habian tenido vi-sitas y estan muy contentos de verte. Te dan labienvenida y los nifios te aceptan como her-mano. Poco a poco logras aprender su lengua.

59

La vida en este paraiso es deliciosa, pero to-davia piensas en la posibilidad de volver a laCueva del Tiempo. Tus nuevos amigos nopueden ayuc;:larte. Quiza, en el interior, hayaalguien que pueda hacerlo. Sin embargo, elviaje no es aconsejable. Los habitantes de laplaya te dicen que s610 encontraras junglas te-rribles y rios plagados de cocodrilos.

Si te quedas con tus nuevos amigos,pasa a fapagina 62.

Si uiaias hacia el interior, pasa a la pagina 63,



La sociedad perfecta del futuro es bastanteaburrida, 1 0 que te hace desear volver a tu

epoca cuanto antes. Despldiendote apresura-damente, vuelves corriendo al tunel, entras enel y tomas un ramal a la derecha con la espe-ranza de que te conduzca a tu epoca. Al pocotiempo, sales a la superficie terrible mente ner-vioso por saber que es 1 0 que te espera fuera.La oscuridad es absoluta y sopla un viento

gelido. Tomas asiento resueltamente, decididoa esperar a que amanezca para ver en quemundo estas. Mientras tanto, no encuentras elsistema de averiguar que hora es, ni consul-tando tu reloj ni observando las estrellas.A tu alrededor oyes unos fuertes chasqui-

dos. No logras descubrir su procedencia.Cuando la luz rosacea de la aurora empieza ailuminar el cielo por el este, te enfrentas conun extra no ser, cuyo tarnafio es parecido al deuna oveja pero con un aspecto total mente di-ferente.

Fin

61

Sigues el ninel hacia abajo durante una cor-

ta distancia. Resbalas, te golpeas la cabeza conalgun objeto y pierdes el conocimiento.Cuando vuelves en 5 1 , te encuentras cerca

de un pequefio lago rodeado de bosques. Elunico ser humane a la vista es un muchachode unos doce afios que esta pescando. Teacercas y entablas conversacion con el, con laesperanza de averiguar en que afio estas sinque Ie resultes extrafio.Afortunadamente, el muchacho resulta ser

muy amable. Dice que se llama Nick Tyler yque vive en la calle Birch. Ayuda a su padreen la fabricacion de jabones y vel as, segun ellos mejores de las colonias.

Si Ie dices que vienes del futuro,pasa a la pagina 104.

Si intentas idear una historia mas creiblepasa a la pagina 106:



62

Tus amigos comprenden que deseas volver

a tu epoca y para distraerte se ofrecen a ense-fiarte algo con 1 0 que nunca habrias podidosonar. Teniendo en cuenta que su civilizaciones muy primitiva, no logras imaginarte quepuede ser.Al dia siguiente te llevan a otra cala donde

las olas rompen contra el acantilado, levan-tando altas columnas de espuma. Unos jove-nes se deslizan en las crestas de las olas sobreunas pequefias planchas; se trata nada menosque de tablas de surf. En pocas horas, apren-des este excitante y divertido deporte.Con semejantes delicias pronto pierdes el

interes por volver a tu epoca. De vez en cuan-do te preguntas, aunque sin encontrar res-puesta, si este paraiso pertenecera al futuro 0

al pasado.

Fin

63

Dices adios a tus amigos y subes a la sierra

que bordea la jungla. Encuentras una sendaque, a traves de la densa veqetacion, penetraen la selva tropical. Las verdes copas de losarboles se pierden en la altura y solo ocasio-nalmente dejari pasar un rayo de sol hasta elesponjoso suelo sumido en la oscuridad. Si-gues andando y andando con la esperanza dellegar hasta las montafias donde podria haberotra entrada a la Cueva del Tiempo.Cuando cae la noche, preparas un tosco le-

cho utilizando como colchon el suave musgo ycomo manta un menton de helechos. A la ma-nana siguiente muy temprano, cuando los pa-jaros empiezan a cantar, te despierta el abrazode una boa constrictor que oprime tu cuello.

Fin



6 4

Es probable que la (mica forma de salir de

la cueva sea bucear a traves del pasaje sumer-gido, pero el riesgo es enorme. Exploras las ro-cas de la gruta, pensando en la posibilidad dellegar hasta el techo.De pronto alguien dice "iHola!". Te vuelves

sorprendido y descubres, acurrucada en unaesquina, a una mujer con brillantes ojos azulesy una misteriosa sonrisa. Esta sentada con laspiernas cruzadas en una roca de forma redon-deada que Ie proporciona un comedo asiento.Tiene una flauta en las manos y, mientras tula observas asombrado, empieza a tocar unaextrafia melodia de una dulzura y pureza ini-

gualables.

65

- iHola! - respondes -. LQuien eres? LSabes

como salir de aqui?- Sientate y descansa - dice -. Tienes todo

el tiempo del mundo.- LQue quieres decir? Estoy atrapado, he

caido desde la Cueva del Tiempo y quiero sa-lir cuanto antes.- Creerne si te digo que no hay forma de sa-

lir de aqui - dice la mujer -. Pero no te preo-cupes, es un lugar muy bello y puedes ser feliz.- Pero nos moriremos de hambre. LCuanto

tiempo llevas aqui?- Estoy aqui desde siempre y desde nun-

ca - responde -. Esta es la parte de la cueva

que no conduce ni al pasado ni al futuro. Aquiel tiempo no existe, por 1 0 que no sentirasnunca ni hambre ni cansancio. Aunque nopuedes salir, no estaras ninqun tiempo aqui,

Pas a a la pagina 102.



66

Aceptas su proposicion ya que no se te

ofrece nada mejor por el momento. No tardasmucho en empezar a disfrutar de las salidasen barca en medio de las nieblas matutinaspara tender las redes con los otros pescadores.Una tarde, mientras amarrais los botes en el

embarcadero, tu amigo Angus McPhee lanzaun penetrante grito sefialando al agua. De ellaemerge la enorme cabeza de un monstruoacuatico: el gran dragon dellago. A su alrede-dor flotan astillas de madera.- iEso era el bote de Sutherland! - grita An-

gus -. EI dragon ha vue Ito, al cabo de cienafios.

EI monstruo se aleja nadando, perdiendoseen la niebla.- tComo puede desaparecer durante cien

afios? - preguntas.- En alguna parte cerca de la punta Beatty

hay una cavern a don de el monstruo puedeocultarse todo el tiempo que quiera porque setrata de la Cueva del Tiempo - responde.iSi pudieras volver a la Cueva del Tiempo!

Pero las posibilidades son escasas y los riesgosenormes.

Si fo intentas,pasa a fa pagina 70.

En caso contrario,pasa a fa pagina 74.



68

2.Podnis cambiar la historia y salvar cientos

de vidas advirtiendo al capitan que el magnIfi-co Titanic esta destin ado a hundirse en el fon-do del Atlantico? Descubres unas escalerasque suben a la cubierta superior y trepas porellas a toda velocidad.Arriba esta parado un camarero.- iNo esta permitido subir aqui1- dice.Lo esq uivas y corres hacia la parte delante-

ra del barco. Subes otras escaleras, yendo aparar al lado de estribor del puente. Alli en-cuentras al capitan que observa con sus pris-maticos un barco que se divisa en el horizonte.- iCapitan! - gritas -. Puede que usted no 10

sepa, pero este barco va a hundirse en un parde horas.EI capitan se vuelve hacia ti y te mira con

gravedad.- Lo se - dice en voz baja -, pero vamos a

lanzar unos cohetes de socorro y ese barco, elCalifornian, nos prestara ayuda.- iNo 10 hara, capitan! - dices -. No creeran

que el Titanic este en peligro a pesar de los co-hetes. La unica esperanza es man dar una lan-cha con los hombres mas fuertes que remenrapidamente hacia el Californian, mientras se

lanzan cohetes a medida que se acercan.- Desde luego, es una idea audaz - res-ponde el capitan -, pero necesito a todosmis hombres para bajar las lanchas salvavidasy mantener el orden entre los pasajeros. Nopuedo creer que el Californian no acuda ennuestra ayuda cuando vea los cohetes.

69

- Ahora baja a la cubierta inferior. EI senor

Lightoller te buscara sitio en una de las lan-chas.EI capitan da la vue Ita y se aleja dando or-

denes a un oficial. Bajas tristemente las esca-leras y te pones en la cola para subir a los bo-tes.Dos horas despues, apretujado en la atibo-

rrada lancha y helado por la fria brisa, con-templas como el qrandioso Titanic desapareceen el mar con 1.500 personas a bordo y tus es-peranzas de volver a la Cueva del Tiempo.

,

I iI

Fin



70

Un dia que brilla el sol y el agua esta todo 1 0

caliente que es posible esperar, tomas un viejobarquichuelo y remas hasta la punta Beatty.Dejas el bote en la cal a rocosa que marca laentrada de la cueva. Te sumerges una y otravez, buceando a 1 0 largo del acantilado que sehunde en las profundidades hasta que en-cuentras la abertura. Te metes por ella y des-pues de nadar unos cuantos metros sales a lasuperficie de una enorme caverna, ocupadaen gran parte por un lago subterraneo,Alcanzas la orilla y empiezas a andar hacia

el interior de la cavern a que est a iluminadapor una misteriosa luz azulada. Tus esperan-

zas se ven realizadas al descubrir un tunel queseguramente conduce a la Cueva del Tiempo.Cerca de ti, sobre la arena, hay tres huevos delamana de una pelota de futbol. Coges uno deellos y sigues por el tiinel. Al cabo de un rato,el aire empieza a hacerse irrespirable. Te sien-tes mareado y caes inconsciente en el suelo sinsoltar el enorme huevo.

Sigue en la pc ig ina s igu ien te .

71

Te despierta una suave brisa que sopla en

tu direccion, Ligeramente aturdido te ponesen pie, coges el huevo y corres hacia el airefresco saliendo al exterior. iEstas de nuevo enel Caflon de la Serpiente! Todoesta como tu1 0 recordabas y, pocas horas despues, entrasen el rancho Red Creek donde tu tlo se sor-prende que estes de vue Ita tan pronto.Nadie te cree cuando cuentas 1 0 que ha su-

cedido; sin embargo, enmudecen de asombroante el enorme huevo.- Quiza lIeguemos a creer tu historia si este

huevo incuba un monstruo - dice tu tlo-. Pero mejor sera que 1 0 rompas para ver 1 0

que tienes dentro.

Si d ec id es a brir e l h ue vo ,pasa a la p cig in a 7 2.

Si 1 0 guardas en tu a rma rioco n la intencion de consu ltar

co n un cient{jico,pasa a la p cig in a 103 .



72

Delante de tus tios y de algunos obreros del

rancho golpeas cuidadosamente el huevo conun hacha, esperando que se abra, sin que serompa en pedazos.- iAlto, un momento! - dice tu tio Ho-

ward -. Me siento inclinado a pensar que dicesla verdad y creo que sera mejor que primero1 0 vea un cientifico de la universidad.Te alegra saber que tu tio piensa de este

modo, porque te asusta la responsabilidad deromper un huevo tan extrafio, matando posi-blemente a un raro monstruo antes de nacer.

Tu tio llama a un famoso profesor de pa-leontologla que consiente en venir el proximo

sabado. Pones el huevo en un cuenco grandeencima de la mesa del comedor.

Al dia siguiente es viernes y toda la familia

sale para ir al cine. Ala vuelta descubris que lacasa ha sido asaltada y que el huevo ha desa-parecido. Nadie, ni siquiera la policia, lograencontrar el huevo. Casi todos los que oyen tuhistoria son den pensando que es falsa. Perotu tio Howard, a pesar de ser un hombre es-ceptico, sabe que estas diciendo la verdad.

Fin

73

--__jJ..



74

Parece absurdo pensar que el monstruo del

lago Ness se esconda durante cien afios en .laCueva del Tiempo. Adernas, aunque asi fuese,probablemente no lograrfas buceiG a la sufi-ciente profundidad para encontrar la entrada.Por 1 0 tanto, te resignas a vivir de la pesca enellago.Tu nueva vida es soportable, pero no muy

interesante. Lo que mas te gusta es remar entu bote durante las mananas de niebla con-templando el palido sol rojizo que pugna porbrillar a traves de la bruma. Una manana,mientras estas pescando notas un terrible gol-pe debajo del bote. La popa se inclina .hacia

arriba y tu sales disparado por la proa yendo acaer en las fauces del monstruo.Ese mismo dia, tus amigos encuentran los

restos del naufragio. Por todo el pueblo lagente comenta que el monstruo ha vuelto.

Fin

75

__J..



76

Cuando le hablas del higubre mundo que

has encontrado al salir de la Cueva del Tiem-po, Luisa se alegra de que la ayudes a buscarla salida hacia su epoca.- Cuentarne algo de tu mundo. ~Es Ameri-

ca? ~En que afio vives? - preguntas mientras

caminais.- Estamos en el afio 2022, - responde.- ~Quieres decir que todavia se usan vaque-

ros en esa epoca? - dices asombrado.- Se han vuelto a poner de moda hace

poco - contesta riendose.- Deben haberse hecho muchos adelantos

desde mi epoca. Hablame de los mas intere-

santes.- Creo que 10mejor son los carriles para bi-

cicletas. Desde 1997 no han permitido que seconstruyan carreteras, 5610 carriles para bici-cletas, de modo que ahora tenemos tantos ki-l6metros de carriles como de carreteras para

coches.- ~O sea que se puede ir en bicicleta por

todo el pals? - preguntas.

77

- Por supuesto. Y no rodeado de autobuses,

camiones y conductores desaprensivos, sino atraves de los bosques y las llanuras, a 10largode los desiertos y de los 60S. A veces piensoque me gustarla pasar toda mi vida viajandode este modo. Hay muchos hostales para ci-clistas donde se puede dormir c6modamentepor muy poco dinero. Los gastos se sufraganmediante los impuestos sobre la gasolina.De pronto, notas que el suelo se hunde bajo

tus pies. Luisa y tii os caeis. Aterrizais en labase de un escarpado risco al borde de una ca-rretera. Te preguntas a que afio habreis llega-do. Entonces te fijasen un cartel que dice

"CADILLAC, el coche del afio todos los- "nos.- ~Que es un Cadillac? - pregunta Luisa.

Fin



78

Prefieres pasar el resto de tus dias buscando

una entrada a la Cueva del Tiempo que esta-blecerte tranquilamente en un pueblo de pes-cadores. As! que dices adios a tus amigos yemprendes la marcha campo a traviesa, cami-no de Londres. Tienes la intencion de buscarun barco que te lleve de vuelta a America,aunque sabes que todavfa no ha sido descu-bierta, porque de alqun modo tienes que vol-ver al canon de Red Creek y a la Cueva delTiempo.Al cabo de unas horas te encuentras en un

camino que bordea el bosque, cuando unoshombres fornidos salen a caballo de detras de

un grupo de arbbles.- iYa te tenemos! - grita uno de ellos -. Tu

eres el que se escape de la torre, Gverdad?Te obligan a subir a un caballo y te condu-

cen a toda velocidad hacia el castillo.- EI castigo por escapar de la torre es la

horca - afirma uno de los hombres.Pronto descubres que 1 0 que dice es verdad.

Fin

79

No quieres correr el riesgo de hundirte con

el Titanic, as! que vuelves a bajar la escala conla esperanza de volver a . la cueva. Con las pri-sas, sueltas la cuerda y te caes. Extiendes losbrazos, pero ya es demasiado tarde. Al llegaral suelo, te golpeas tan fuertemente que pier-des el conocimiento. Cuando despiertas, te en-cuentras en uno de los pasadizos de la cueva.

Si exploros el pasadizo,pasa a la ptiqtna 86.

Si decides volver a explorarla salida de la cueva,pasa a la pagina 88.



80

- Ya que no logras encontrar tu epoca, qui-

z a podamos volver a la mia - dices.Andais de vuelta un corto trecho hasta que

os encontrais con un tiinel mas ancho que losotros. Te paras y Luisa te mira interrogativa-mente.- Probemos con este - dices.Despues de andar casi una hora, ambos

somers con alegrla al ver luz. Al poco rato sailsdel tunel a un terreno arenoso de color rojizoque se extiende en forma de cuenco. EI aire esfresco y claro, como el de un dia de otofio. Teimaginas que puede tratarse del crater de unvolcan extinguido. De pronto, OISun fuerte es-

truendo detras de vosotros y tenets que esca-par corriendo de un desprendimiento de tierraque cierra el tunel de la Cueva del Tiempo.- LEn que afio estaremos? - pregunta Luisa

cuando lograis recuperaros.Por primera vez miras hacia el delo. EI sol

es cuatro veces mayor del tarnafio habitual,pero mucho menos brillante. Aunque esta casiendma de vuestras cabezas tiene un color rojooxide.

- No 1 0 se - respondes -, pero por 1 0 que heleido de astronomia, supongo que debe hacer

unos cuatro billones de afios que tuvo lugar elafio 2000.

Fin

81

Lentamente recuperas el sentido. Estas en

tu cama en el rancho Red Creek contemplan-do a tu tio Howard. A su lado esta un medicoamigosuyo.-Tuviste una mala caida trepando por esas

rocas del canon - dice tu tio Howard -. EIdoctor Parsons dice que no entiende como note has roto ningun hueso. Estabarnos muypreocupados pensando que te habias perdidoen una de esas cuevas.Te sientes un poco aturdido y muy debil, aSI

que te limitas a sonreir sin decir nada. De to-dos modos, seguro que nadie te creerla. Noobstante, afios despues escribes un libro acer-

ca de tus aventuras en la Cueva del Tiempo.

Fin



82

Te acercas a la muralla, caminando hacia

los trabajadores. Cuando se dan cuenta de tupresencia, piensan que eres un espia de algu-na tribu desconocida. Eres capturado por dosguardias que te obligan a sentarte en una pilade piedras mientras deciden que hacer conti-

go.Al cabo de un rato te sefialan una de las es-

caleras. Dos trabajadores te obligan a trasla-dar piedras. Te das cuenta que has sido con-denado a trabajar en la construccion de unamuralla de seis metros de altura, cuatro de an-cho y mas de 2.800 kilometres de largo. Cal-culas que haran falta mas de diez billones de

piedras. Te preguntas cuantas tendras queacarrear antes de poder escapar, si es que al-gun dia llegas a hacerlo.

Fin

83

Aunque te gustarfa enormemente ver el in-

terior de la nave, no tienes el mas minimo de-seo de ser lanzado al espacio. Te retiras a unadistancia prudencial y esperas a ver que suce-de. Poco despues, la puerta se cierra y , casi in-mediatamente, la nave se eleva en silencio. Enpocos minutos se pierde de vista. Te acercaspara observar mas detenidamente a los hom-bres de aspecto primitive dormidos sobre eljerqon. Empiezan a desperezarse, frotandose

los ojos como si se despertasen de un largosuefio.

Si te quedas y tratas de entablaramistad con las gentes primitivas,


Si vuelves a la colina intentando entrarde nuevo en la Cueva del Tiempo,

pasa a la pdqina 84. I

•



Los hombres prirnitivos miran a su alrede-

dor con curiosidad. No parecen notar tu pre-sencia. Se incorporan y echan a andar. Uno deellos bebe del arroyo. Emiten curiosos grufii-dos y chasquidos, aunque no parece que real-mente esten hablando entre ellos. EI mas altodel grupo coge un palo y empieza a buscar rai-ces por la orilla del rfo, Mordisquea todas lasque encuentra y, finalmente, sonriendo pasauna a los otros. Una de las mujeres aplaude.Todos empiezan a buscar palos. Un hombre tealcanza un trozo de raiz. La pruebas y encuen-tras que su sabor es parecido al de la zanaho-ria. Las mujeres te sonrfen. Te han aceptado

como miembro del grupo.A la manana siguiente, te despiertas sobre

el suave musgo de la Cavern a de la Serpiente,a unos cuantos metros de la entrada de laCueva, preguntandote si todo 10 sucedido esrealidad 0 forma parte de un suefio. De todosmodos, no sientes ningun deseo de volver aentraren la Cueva del Tiempo para com pro-barlo.

84

Subes corriendo la colina para alejarte de

los hombres primitives antes de que se des-pierten. Tienes que encontrar una entrada a laCueva del Tiempo. Buscas alguna aberturaentre las rocas. Pasan las horas y el crepiiscu-10avanza con rapidez. Cuando ya empiezas aperder las esperanzas, descubres la entrada auna cueva debajo de unos pefiascos. Te metesdentro a toda velocidad y s610 tienes un mo-mento de lucidez para comprobar que estasen la madriguera de un tigre de las nieves.

Fin

85

Fin

. ," "



Andas y andas con la esperanza de que el

pasadizo te conduzca a tu epoca. AI cabo deun buen rato, lIegas a un tiinel que desembocaen un aposento humedo y oscuro que pareceser el sotano de una casa. Hay mucha genteagrupada, sentada sobre mantas en la mascompleta oscuridad a excepcion de la vacilan-te luz de unas velas. Oyes el higubre aullido deunas sirenas. En el centro de la habitacion, 50-

bre una mesa, una anticuada radio emite unamezcla de rruisica clasica e interferencias. Lassirenas se apagan, el suelo tiembla y oyes unaexplosion cercana. Despues otra mas lejos y,por fin, una tan cerca que una pared y la mi-tad del techo se vienen abajo, forman do unmenton de escombros que bloquean la entra-da del tunel, Todos correis hacia el ladeopuesto, tosiendo y respirando con dificultad acausa del polvo que lIena la habitacion.Vas a empezar una nueva vida. Corre el

ana 1940 y estas en Londres.

Fin

87

No tienes ningiin deseo de entrometerte en

la construccion de la Gran Muralla de China,ni tam poco de ser trasladado a otro planetapor unos extrafios seres. Vuelves a la grietacon la esperanza de encontrar un tiinel que tedevuelva a tu epoca. Caminas por el fondo,hasta que descubres una abertura al otro ladede un saliente. Te metes por ella, suponiendoque vas a volver a la verde campifia, al arroyoya la nave espacial que acabas de abandonar.Sin embargo, la grieta va a dar al oceano.

Como en una pesadilla en la que todo cambiade repente y se convierte en algo diferente, lascolin as se han transformado en amenazantes

olas. Te encuentras sobre un risco que apenassobresale unos metros por encima del mar ba-rrido por el viento. No parece existir ningunaposibilidad de escapar, ya que pareces estarsobre el unico pedazo de tierra que emerge enel mundo cubierto por las aguas.

Fin



88

Rehaces el camino a 1 0 largo de la cueva

preguntandote si la entrada todavfa estarabloqueada por el hielo. Sin embargo, te da labienvenida una suave brisa que entra desde elexterior. EI sol brilla en la entrada y decidessalir afuera.Parpadeando a causa de la fuerte luz, te en-

cuentras en un mundo total mente distinto delque habias conocido. Est~s en la lade=<:de unacolina, contemplando kilometros y kilometresde verdes praderas sembradas de lagos. Cercahay un bosque de helechos gigantes mecidospor el viento. Todo parece inusitadamentetranquilo, a no ser por el debil retumbar de ~n

trueno lejano. De pronto, el ruid~ se hace ~asfuerte como si la tormenta estuviera acercan-·dose. Notas la vibraci6n en los helechos. Su-bes corriendo la colina en busca de alqun lu-gar para esconderte. El suelo se oscurece conuna sombra enorme. Por encima de tu cabeza,pasa volarido un ser mucho mayor que cual-quier pajaro conocido.

Sigue en lapagina siguiente.

89

Por fin comprendes que es 1 0 que te ha pa-sado. La cueva es una fisura del universo, unlugar fuera del espacio y del tiempo. Sus tune-les conducen a cualquier lugar y a cualquierepoca. Si vuelves a entrar corres el riesgo deacabar en algun sitio del cual sea imposible es-capar. Sin embargo, es tu iinica posibilidad devolver a tu epoca y a tu lugar.

St vuelves a la cueva,pasa a la pagina 90.

Si te quedas fuera,pasa a la pagina 91.



90

De vuelta a la cueva, te sientes confuso ydeprimido. Tus ojos no acaban de acostum-brarse a la debil luz. No consigues encontrarnmqun pasadizo que te conduzca a otra ~po-ca. Empiezas a sentirte sonoliento y termmaspor dormirte sobre el frio suelo de barro.Cuando te despiertas, la cueva sigue estan-

do a oscuras, pero la intensa luz que asomapor la abertura te indica que fuera brilla el sol.Sales y, con sorpresa y fel}cidad, desc~bresque te encuentras en el Canon de la Serplentey que todo, desde el sendero hasta , , ; 1 bos9ue-cillo de pinos, esta tal y como 1 0 habias dejado

antes de entrar en la cueva. Incluso el sol estaen la misma posicion, a punto de desaparecerdetras del canon. De alqim modo, has vuelto atu epoca 0, para ser mas exactos, al momentaen que caiste dormido en la.cueva. .Te frotas los ojos y emplezas a bajar por el

sendero que conduce al rancho Red Creekcon una increlble historia para contar que no

olvidaras jarnas.

Fin

91

Pensando que siempre estaras a tiempo devolver a la cueva, decides explorar el mundoque te rodea.Caminas a 10 largo del saliente rocoso que

domina las praderas y los lagos, fijandote en 1 0que te rodea para poder volver a la cueva.A estas alturas empiezas a estar hambrien-

to. Sabes que te encuentras en la epoca de losreptiles, hace por 10 menos 100 millones deafios, y que los mamiferos todavia no han he-cho su aparicion sobre Ia:tierra. No podras ca-zar un ciervo 0un conejo, pero puede que en-cuentres alqun pez en los lagos. Te preguntasa que sabran los huevos de dinosaurio.Sigues una amplia senda que cruza a traves

de los helechos gigantes. AI doblar el primerrecodo, te encuentras frente a frente con elhorrible Triceratops, un enorme monstruo gri-saceo casi oculto por sus cuernos y su escudo.Te observa con curiosidad desde sus apagadosojos pardos. Te das la vue Ita corriendo, cho-cando contra el tronco de un arbol que antesno estaba alli,La corteza tiene el tacto de la piel. Cuando

miras hacia arriba para hacerte una idea de sutarnafio, te encuentras con las fauces del Ty-

rannosaurus Rex.



92

Andas un buen trecho antes de cruzartecon otro tiinel. Este conduce directamente a lasuperficie. Te encuentras con un panoramasorprendente.EI mundo se ha transformado en un hermo-

so parque de suave hierba y grandes arboles.Aqui y alla hay grupos de edificios multicolo-res, rematados en cupula, unidos por rampas,terrazas y paseos cubiertos. Se te acercanunas personas, vestidas sencillamente conpantalones y camisas de color verde y zapatosmarrones. No logras entender su idioma, nitam poco ell os el tuyo. Se parecen mucho a lagente de tu epoca, pero son mas delgados ymusculosos y su aspecto es desusadamentesaludable. Tarnbien son bastante mas bajos.Te conducen dentro de uno de los edificlos

y te ensefian un equipo electronico que tienela apariencia de una computadora. Al ver unamaquina de escribir, te sientas y tecleas unmensaje.La computadora imprime una respuesta. Al

parecer, tiene acceso a algun banco de memo-ria donde figura tu idioma. Al poco rato averi-guas que estas en el afio 3742.

Pasa a fa pagina 56

93

Desciendes de nuevo por el tiinel con la es-peranza de poder volver a una epoca anterior.Recibes con agrado el aire frio y hiimedo quesube desde la cueva. Sientes curiosidad porsaber si siguiendo el primer tunel podrias con-templar el estado del mundo antes de ser con-sumido por el calor del sol en extincion 0si,por el contrario, descubrirfas que sucedio des-pues, Supones, sin embargo, que un tiinelmas lejano tendra mas posibilidades de devol-verte a tu epoca.

Si sigues el primer uinel,


Si sigues un tilnel mas lejano.

pasa a la pagina 32. '



94

Justo cuando el tren vuelve a reemprender

la marcha, subes los peldafios del vagon ante-rior al furqon de cola. Al abrir la puerta, te sor-prendes ante unos soldados con uniforme azulque llevan anticuados rifles. Avanzan hacia ti.Uno de ellos sale aver si te sigue alguien.- leomo sabias que este era el vaqon del

Presidente? - te pregunta otro soldado.- lQue Presidente? - respondes.Til mismo descubres la respuesta a tu pre-

gunta, ya que el hombre alto y con barba quese acerca por el pasillo s610 puede ser Abra-ham Lincoln.- Esta bien - dice el Presidente a sus solda-

dos -. Me apetece algo de compafiia. Puedesquedarte hasta que lleguemos a Gettysburg- dice, dirigiendose a ti -, aunque quiza debe-rias bajar en Parkersville donde conozco a al-gunas gentes que podrian ayudarte.

Si te q ueda s h asta G etty sb urg ,pasa a fa p cig in a 9 6.

Si bajas en Parkersville,pasa a fa p cig in a 100 .

95

'"



96

- Me gustarfa quedarme hasta Gettysburg

- dices.. - De acuerdo - contesta el presidente-.GPor que no vienes a sentarte junto a mi?Tengo que escribir un pequefio discurso quevoy a pronunciar am y, mientras 1 0 hago, pue-des meditar acerca de 1 0 que piensas hacerporq ue despues de todo no puedes pasarte I~vida viajando en tren.Asientes con la cabeza y te quedas tranqui-

1 0 observando como el Presidente escribeunas Ifneas en un sobre. Al cabo de un rato, le-vanta la vista y te mira directamente a los ojos.- Tienes un gran futuro - dice inesperada-

mente.- tComo 1 0 sabe? - preguntas.- Por tu rostro.- Solo por eso?- Asi es.Mientras hablais, dos hombres elegante-

mente vestidos se acercan desde el fondo delvaqon. Susurran unas palabras al oido delPresidente. Este te pide disculpas, estrecha tumane y orden a a uno de los soldados que seencarge de que alguien cuide de ti en Gettys-burg.

Sigue en 1 0 ptiqina siguiente.

97

Cuando el tren llega a Gettysburg, uno de

los soldados te presenta a una familia que teacoge carifiosamente y te invita a quedartecon ellos durante algun tiempo si accedes aayudarles en las tareas de la granja.Te resulta sorprendente vivir en una epoca

sin coches, radios, televisores tocadiscos nitelefonos, Resulta muy tranq~ila, por 1 0 ~e-nos cuando no hay guerra, pero afioras tu ho-gar. Piensas que el gran futuro pronosticadopor el Presidente debe estar en tu epoca y de-cides buscar alguna forma de volver a la Cue-va del Tiempo.

Fin

.1



98

Si subes al tren puedes perder la oportuni-

dad de volver a la Cueva del Tiempo. Es me-jor permanecer cerca del tiinel. Decides que,en cualquier caso, pensaras con mas claridaddespues de haber comido algo, asi que te acer-cas a la granja. .La mujer del granjero te ofrece un tazon de

caldo, pero no oye con mucha simpatia la his-toria que has inventado para explicar tu pre-sencia alli, Te das cuenta que no eres bienacogido, por 10 que te marchas a la ciudaddonde el posadero te permite pasar la nocheen una de sus habitaciones.A la manana siguiente logras que una dili-

gencia te l1eve a Filadelfia. Alli te acoge unafamilia de cuaqueros que te ayudan a encon-

99

trar trabajo como aprendiz de carpintero. EI

oficio no te gusta y pronto decides marchartea Nueva York, donde consigues empleo en unperiodico. Finalmente, acabas viajando a 10largo y ancho del mundo, disfrutando de unalarga y maravillosa vida que term ina precisa-mente unos cuantos afios antes de que hayasnacido.

Fin.



100

Parkersville esta solo a un par de kilorne-

tros. EI Presidente te estrecha la rnano y te de-sea suerte. Uno de los soldados se pone deacuerdo con el jefe de estacion para que uncarruaje te lIeve hasta la granja de sus amigos.En poco tiempo te conviertes en uno mas

de la familia. Son buenas personas y procuranque te sientas como en tu casa. Te enteras, unpoco sorprendido, de que tienen la intencionde vender su granja para trasladarse a Califor-nia. Lo que cuentan de la vida en el Oeste teresulta tan atractivo que decides ir con ellos.Nunca te arrepientes de haberlo hecho,

aunque a veces te gustaria volver de nuevo a

tu epoca.

Fin

101

Vuelves a bajar por el tunel. Pretendes me-terte por uno de los pasadizos laterales quepueda devolverte a tu epoca, pero estas de-masiado cansado para dar con la entrada.Avanzas por el tiinel, mitad resbalando mitadarrastrandote, y , despues de recorrer una lar-ga distancia, tropiezas y pierdes el equilibrio.Caes por el aire durante un buen rato, hastaque chocas con una masa de agua en la que tesumerges a mucha profundidad. El agua estacaliente, pero la bruma es tan espesa que ape-nas puedes respirar. Luchando por sobrevivir,te das cuenta que has debido retroceder variosbillones de afios hasta una epoca en la que el

oxigeno todavia no habia sido liberado en laatmosfera.

Fin



102

Te sientas, con la cabeza apoyada en lasmanos, incapaz de creer 1 0 que te depara el

destino. Vivir para siempre en un mundo sintiempo te parece peor que la muerte.- Bueno, a decir verdad, sf hay un modo de

salir de la cueva - dice finalmente la mujer,pero si 1 0 haces ya no podras vivir eternamen-te o

- No me importa - dices -. Ensefiame elcamino.- Muy bien - responde, moviendo la cabeza

con aire de incredulidad. Tienes que sumer-girte debajo del saliente rocoso sobre el queestoy sentada y bucear por el tunel que hay

debajo. De este modo lleqaras a tu epoca. Notengas miedo; son solo unos metros y podrashacerlo con facilidad.Miras por ultima vez a tu alrededor, Ie dices

adios y te sumerges. Al cabo de unos instan-tes, sales a la superficie de un estanque situa-do a poca distancia de la entrada de la Cuevadel Tiempo. Nadas hasta la orilla y corresafuera, estando a punto de chocar con tu tioHoward que ha venido a buscarte.- Uegas tarde ala cena - dice -. Temfamos

que te hubiese sucedido algo. Deberfas tenermejor sentido del tiempo.

Fin

103

Al dia siguiente llamas al departamento dezoologfa de la universidad mas cercana y te

pones en contacto con el doctor Henry Karn,especialista en grandes reptiles. EI doctor semuestra esceptico, pero accede a trasladarseinmediatamente al rancho Red Creek paraver el huevo.En el tiempo que tarda en llegar empiezas a

ponerte nervioso. ~Y si el huevo fuera de plas-tico? Tu preocupacion aumenta ante su as-pecto severo. Os saluda con brusquedad, soli-citando ver el huevo de inmediato.Cuando se 1 0 das, 1 0 observa atentamente

sin decir palabra, 1 0 mira al trasluz, 1 0 golpea

ligeramente y 1 0 raspa con una navaja. Des-pues 1 0 mantiene pegado a su ofdo durante unrato. Finalmente, sonrie y vuelve a colocar elhuevo en su sitio con mucho cuidado.- Es muy posible que se trate del huevo de

un Plesiosaurios, dinosaurio acuatico de la ul-tima etapa del periodo jurasico. No pareceprobable que pueda incubarse; de todos mo-dos, me gustarfa poder conservarlo en una in-cubadora de la Universidad por 1 0 men os du-rante un afio antes de abrirlo. Por supuesto,les mantendre al tanto de 1 0 que pueda suce-

der.

Han transcurrido ya varias semanas y cadavez que suena el telefono piensas si sera eldoctor Karn.

Fin



104

Cuando Ie cuentas que vienes del siglo xx atraves de la Cueva del Tiempo, Nick se sonrie,Entonces Ie hablas de la vida en tu epoca, delos coches, aviones, telefonos y televisores. Teescucha con mucha atencion, exhibiendo unagran sonrisa, como si fuese la historia mas di-vertida del mundo.- [Como me alegro de haberte encontrado!

- dice -. Siempre habra deseado saber comoseria la vida en el siglo xx.Trata de parecer serio, pero no consigue

evitar la risa porque piensa que se trata deuna broma.- En serio - dices (sabiendo que nunca va a

creerte) -, no ten go hogar. tSabes de alglinsitio donde pueda quedarme?

105

- Sequrarnente podras quedarte en mi casa.Somos tantos que uno mas no importa, perotendras que trabajar en la tienda como todosnosotros.Como practicamente no tienes otra posibili-

dad, aceptas su oferta agradecido por la comi-da y la cama que te ofrecen sus padres. Muyseriamente, Nick te informa que estas en elafio 1718 en Boston, la ciudad mas importan-te de la colonia inglesa de Massachussetts.Pronto formas parte de la familia. Son bue-

na gente y te tratan bien, pero tienes que tra-bajar muchas horas al dia cociendo jabon yvertiendolo en los moldes, atendiendo a los

clientes 0 haciendo recados para el padre deNick, a quien llamas tio Ted.Uno de los vecinos, el senor Nelson, es im-

presor. Acaba de volver de Inglaterra dondeha comprado una imprenta. EI negocio te in-teresa y piensas en trabajar con el comoaprendiz, pero si 1 0 haces tendras que firrnarun contrato que te obliga a trabajar lealmentepara el durante seis afios.

Si decides quedarte en casay seguir trabajando con ef tlOTed,

pasa a fa pagina 107.

Si decides contratartecomo aprendiz en fa imprenta

del senor Nelson,pasa a la pagina 109.



106

Tratas de inventar alguna historia que ex-plique por que te has escapado de casa, peroNick se da cuenta que no estas diciendo laverdad. Antes de que logres terminar, recogesus bartulos de pesca, te dice adios y se mar-chaoCuando desaparece de la vista, te pones a

andar por un camino y , al cabo de un par dekilometres, llegas a una poblacion. Te paras allado de una iglesia pensando que hacer, cuan-do se acerca un guardia que te pregunta dedonde vienes. Esta vez intentas explicar 1 0 quereal mente ha sucedido. Despues de oir algu-nas frases, el guardia te arresta por conducta

desordenada y te encierra en prision local.Algo mas tarde, entra un corpulento guar-

dia de mirada poco inteligente en tu celda atraerte tu racion de sopa y pan. Esta maravi-llado por tus extrafias ropas y por los rumoresque corren sobre tu persona. Despues de abrirla puerta, te alcanza la comida y te observacon curiosidad.- Dicen que estas de acuerdo con el diablo.

2.Escierto? - pregunta.

Si tratas de escapar,pasa a lapcigina 111.

Si Ie dices que eres inocente,pasa a lapcigina 113.

107

Aunque sin duda te gustarfa mas trabajaren la imprenta que en el negocio de jabones,quieres permanecer libre para poder aprove-char cualquier oportunidad que se te presen-teoEI trabajo con el tio Ted te resulta aburrido.

No podrias soportar pasarte la vida fabricando

velas y jabones. Dedicas la mayor parte de tutiempo libre a leer los libros que caen en tusmanos y tienes enormes deseos de viajar y vermundo.Al cabo de algun tiempo, te enrolas como

grumete en el bergantfn Nina. EI barco perte-nece a un rico mercader y se dirige a las Bar-bados, en las Antillas, con una carga de made-ra para seguir despues hasta Inglaterra.



108

Descubres que la vida en el mar es muchomas dura de 1 0 que habias pensado, sobretodo cuando te ves obligado a trepar por lajarcia en medio del temporal. Sin embargo,llegas a ser capitan de tu propio barco. En nin-guno de los lugares que recorres dejas de pre-guntar a la gente si han oido hablar de laCueva del Tiempo.

Fin

109

Decides trabajar con el senor Nelson y, en

poco tiempo, aprendes a manejar la imprenta.Sin embargo, no eres feliz. EI impresor se nie-ga a subirte el sueldo 0a permitir que entresen el negocio. No encuentras trabajo en Bos-ton, asi que decides trasladarte a Filadelfiadonde, al parecer, hay una gran demanda deimpresores.Afortunadamente, el senor Nelson accede a

liberarte del contrato de aprendizaje. Vendien-do casi todas tus pertenencias logras reunirsuficiente dinero para pagar un pasaje en unagoleta que bordea la costa. Tras un largo y de-sapacible viaje, el barco atraca un domingo

por la manana en el muelle comercial de Fila-.delfia.

Estas cansado y hambriento, y empleas elpoco dinero que te queda en comprar una ba-rra de pan. Movido por la curiosidad, sigues avarias personas bien vestidas que entran en ellugar de reunion de los cuaqueros. Todos sesientan pero, siguiendo la costumbre, perma-necen en silencio. Ellugar es tan apacible quete quedas dormido. Cuando despiertas, loscuaqueros te dan la bienvenida. Una familia teofrece alojamiento y, felizmente, logran en-contrar trabajo con uno de los dos impresores

de la ciudad. .

Sigue en fa ptiqina siguiente.



110

Te esfuerzas trabajando para perfeccionar-te como impresor. En poe os afios, con la ayu-da de algunos amigos, logras reunir dineropara establecerte por tu cuenta.Tu negocio prospera y consigues editar tu

propio perlodico. Empiezas a pensar que el si-glo XVIII es una buena epoca para vivir.

Fin

111

_ i : : : ' • • • •

: : » < . . . .

El guardia esta demasiado sorprendido y,quiza demasiado asustado, para impedirte lafuga. Corres por la calle tan deprisa comopuedes. Cuando paras para recobrar el alien-to, un carruaje conducido por un hombre del-gada y con barba se ace rca a ti.- Al parecer, estas en apuros - dice el hom-

bre -. lPuedo ayudarte?Demasiado cansado para inventar ninguna

historia, Ie cuentas todo 1 0 que te ha sucedido.

Vivamente impresionado por tu relato, te invi-ta a una taberna cercana donde tomas la pri-mera comida decente desde que has salido delrancho. Tu anfitrion apenas toea la comida.Esta muy palido y tose con frecuencia.

Sigue en fapcigina siguiente.



112

Cuando terminas tu historia, dice:- Es extrafio que nos hayamos encontra-

do. Padezco de tuberculosis y ningun medi-co de Boston puede curarme. Mi unica es-peranza es encontrar la forma de llegar alfuturo.

- Creo que a mi me sucede 1 0 mismo-respondes.

- Si nos ayudamos mutuamente, puedeque logremos volver a tu epoca que tam-bien sera la mia. '

Sellais el trato con un apreton de manosy', a la manana siguiente, ernprendeis labusqueda a la salida del sol.

Juntos loqrais volver al tiempo presente.Tu amigo se cura con ayuda de los medica-mentos modernos y se convierte en profe-sor de historia, famoso en todo el pais porsus asombrosos conocimientos sobre la Ame-rica colonial.

Fin

113

Al confesarle tu inocencia, el guardia frunce

el cefio y cierra de un portazo la celda.- iVete al diablo si quieres, pero no podras

arrastrarme contigo! - grita alejandose.Al dia siguiente compareces ante un severo

juez. Despues de oir los cargos presentadoscontra ti y tus explicaciones, mueve su cabezacon expresion de enfado. Mirando al fiscal,descarga un pufietazo sobre el banquillo.- La acusacion presentada contra este suje-

to es de conducta desordenada, sin embargose ha hablado de "ropas extrafias e historiasinventadas por el diablo". En el fondo, se Ie

esta acusando de brujerfa. iNo estoy dispuestoa consentir semejantes insensateces en estetribunal! Se absuelve al acusado.El juez no solo te pone en libertad, sino que

te ayuda a conseguir una casa y a disfrutar detu vida en el siglo XVIII.

Fin



114

En la risa del caballero hay un cierto toneque no te inspira confianza, por 1 0 que Ie daslas gracias amablemente diciendo que tienesasuntos que atender.

- Entonces, ociipate de ellos - responde elcaballero -, pero procura mantenerlos maslimpios que tu persona.Se aleja a todo galope. Te alegras enorme-

mente de haberfe librado de el.Ansioso por buscar la entrada a la Cueva

del Tiempo, subes por detras del acantiladoque desciende hasta el estanque. Despues deuna hora de biisqueda, encuentras un ninelque se adentra en la tierra.

Pasa a /a ptiqina 61

115

Al subir a bordo te encuentras con una ca-mara cerrada, cuyas paredes te recuerdan elinterior de una bafiera. Piensas que los seresque control an esta nave espacial pueden te-ner algun medio para dominar el tiempo. Qui-za la Cueva del Tiempo sea creacion suya.Ocupado con tus pensamientos, empiezas asentir suefio y te quedas dormido.Te despiertas a oscuras, preguntandote si

estaras viajando por el espacio en la extrafianave. Percibes una luz y echas a andar en esadireccion. Entonces te das cuenta que estesante la entrada de la cueva. Te apresuras a sa-

lir y, con gran alegria, descubres que estas enel Canon de la Serpiente donde nada ha cam-biado. Has vuelto a tu epoca.Pasa mucho tiempo antes de que tengas

deseos de volver a visitar esos parajes. Cuan-do 1 0 haces, descubres que la entrada de laCueva del Tiempo ha sido cubierta por undesprendimiento de rocas. Quiza haya sidomejor asi,

Fin

01-La Cueva Del Tiempo

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