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Extracto del Manual de Moral Fundamental, de Jorge A. Palma Los actos humanos

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  • Extracto del Manual de Moral Fundamental, de Jorge A. Palma

    Los actos humanos

  • Definicin de acto humano

    Son aquellos que proceden de la voluntad deliberada del hombre;

    es decir, los que realiza con conocimiento y voluntad.

    En ellos interviene primero el entendimiento (que conoce el objeto) y luego la voluntad (que lo busca o lo rechaza).

    En estos casos el hombre es dueo y responsable de sus actos.

    Slo en los actos humanos puede darse valoracin moral.

  • EL CATECISMO DE LA IGLESIA CATOLICA NOS

    DICE ACERCA DE LA MORALIDAD DEL ACTOS

    HUMANOS

    La libertad hace del hombre un sujeto moral. Cuando

    acta de manera deliberada, el hombre es, por as decirlo,

    el padre de sus actos. Los actos humanos, es decir,

    libremente realizados tras un juicio de conciencia, son

    calificables moralmente: son buenos o malos. (CEC 1749)

  • No son actos humanos

    Los actos meramente naturales: los que proceden de las potencias vegetativas y sensitivas, sobre las que el hombre no tiene control voluntario alguno, y son comunes a los animales. Por ej. la nutricin, circulacin de la sangre, respiracin.

    Los actos del hombre: los que proceden del hombre, pero falta advertencia (locos, nios sin uso de razn) o la voluntariedad (por coaccin fsica, p. ej.) o ambas (el que duerme, p. ej.)

  • Divisin de acto humano

    Por su relacin con la moralidad, el acto humano puede ser:

    1. Bueno o lcito, si est conforme con la ley moral.

    2. Malo o ilcito, si le es contrario.

    3. Indiferente, cuando ni le es contrario ni conforme.

  • Elementos del acto humano

    LA ADVERTENCIA

    Puede ser actual o virtual; plena o semiplena; distinta o genrica (o confusa).

    Reglas sobre la advertencia.

    La advertencia debe ser DOBLE: la advertencia del acto en s y de su moralidad.

    EL CONSENTIMIENTO

    Lleva al hombre a QUERER realizar ese acto previamente conocido, buscando con ello un fin.

    Puede ser perfecto o imperfecto si se realiza con pleno o semipleno consentimiento.

    Puede ser tambin directo o indirecto. Lo veremos...

  • Tipos de advertencia

    Hablaremos de conocimiento o advertencia actual y virtual, pleno o semipleno, distinto o genrico.

    1. Actual y virtual: Se llama actual a aquella advertencia sobre la accin y su moralidad presente en el momento que se realiza. Virtual, la que influye en el acto en virtud de un juicio anterior de la inteligencia, cuya eficacia perdura en el querer actual de la voluntad.

    2. Plena y semiplena: Se llama plena cuando la persona conoce con sustancial integridad lo que est haciendo y su valor moral; semiplena cuando falta esa integridad.

    Distinta y genrica o confusa: Distinta cuando distingue, percibiendo los detalles de modo claro...

  • Reglas sobre la advertencia

    I. Para que un acto pueda considerarse humano y, por tanto, moralmente responsable, es suficiente la advertencia virtual.

    II. Para que un acto sea bueno o malo basta la advertencia genrica de su carcter moral.

    La advertencia genrica es suficiente para la imputabilidad

    III. Para el pecado mortal se necesita siempre advertencia plena, aunque sea virtual y genrica.

    No es necesario QUERER ofender a Dios...

  • El consentimiento de la voluntad

    El consentimiento es la aquiescencia voluntaria de la persona en querer el bien -real o aparente- que la inteligencia le presenta.

    Divisiones del consentimiento: Perfecto: Cuando la voluntad se adhiere plenamente al

    bien, real o aparente, que le propone la razn.

    Imperfecto: Cuando la voluntad se adhiere de modo parcial por tener advertencia semiplena, o por que no acab de querer el acto.

    Voluntario directo: Cuando se quiere como objeto inmediato del propio acto: El robo en el ladrn.

    Voluntario indirecto: Lo veremos a continuacin

  • El acto voluntario indirecto: Aquello no es querido por s, sino por razn de otro bien

  • Reglas sobre el consentimiento:

    I. Los actos son morales en la medida que son voluntarios: Cuando hay alguna voluntariedad, hay tambin algn

    grado de moralidad y responsabilidad, ms o menos plena segn lo sea el consentimiento. Para el carcter moral de nuestros actos basta el consentimiento imperfecto; para el pecado mortal el consentimiento debe ser pleno (querer el acto, consentir).

  • Obstculos al acto humano

    Analizaremos factores que afectan a los actos humanos, ya impidiendo el debido conocimiento de la accin, ya la libre eleccin de la voluntad:

    causas que afectan la advertencia o el consentimiento, que afectan, como consecuencia, la moralidad del acto humano.

    Existe el deber de conocer la ley moral (a lo largo de toda la vida), para ir adecuando a ella nuestras acciones. El conocimiento de la moral profesional es una grave responsabilidad.

  • Obstculos por parte del conocimiento LA IGNORANCIA

    Nocin: Para la Teologa Moral es la falta de la debida ciencia moral. Ausencia de un conocimiento moral que se podra y debera tener.

    Divisin: Puede ser vencible o invencible. Vencible: la que se podra y debera superar, si se pusiera

    un esfuerzo razonable. Puede ser: Simplemente vencible: Si se puso un esfuerzo insuficiente e

    incompleto.

    Crasa o supina: Nace de un GRAVE DESCUIDO en aprender.

    Afectada: Cuando no se quiere hacer nada para superarla, con objeto de pecar con mayor libertad

    Invencible: Cuando no puede ser superada.

  • Principios morales sobre la ignorancia:

    1. La ignorancia invencible quita toda responsabilidad ante Dios, ya que es involuntaria y por tanto inculpable.

    2. La ignorancia vencible es siempre culpable, en mayor o menor grado segn la negligencia en averiguar la verdad. As, es mayor la responsabilidad de una mala accin realizada con ignorancia crasa, que con simplemente vencible.

    3. La ignorancia afectada, lejos de disminuir la responsabilidad, la aumenta, por la mayor malicia.

  • Obstculos por parte de la voluntad EL MIEDO:

    Es una vacilacin del nimo ante un mal presente o futuro que nos amenaza.

    En general, el miedo aunque sea grande- no destruye el acto voluntario, a menos que su intensidad haga perder el uso de razn.

    Si a pesar del miedo se realiza una accin buena, es mayor el valor moral de esa accin.

    A veces, sin embargo, el miedo puede excusar del cumplimiento de leyes positivas (puramente eclesisticas) si causan un grave incmodo.

  • LA VIOLENCIA: Es el impulso de un factor exterior que nos lleva a actuar en contra de nuestra voluntad.

    El factor exterior puede ser fsico (golpes, etc.) o moral (amenazas, etc.).

    La violencia absoluta fsica destruye la voluntariedad, con tal de que se resista para no consentir el mal.

    La violencia moral nunca destruye la voluntariedad.

    La violencia fsica relativa disminuye la voluntariedad en proporcin a la resistencia que se puso.

    LOS HBITOS: Son una firme y constante tendencia actuar de una determinada forma. Si son buenos son virtudes, si malos, vicios.

  • La moralidad del acto humano

    El acto humano no es una estructura simple.

    En el juicio sobre la bondad o maldad de un acto, debemos considerar:

    El objeto del acto en s mismo.

    Las circunstancias que lo rodean.

    La finalidad que el sujeto se propone con ese acto.

  • El objeto Constituye el dato fundamental: es la accin misma

    del sujeto, pero tomada bajo su consideracin moral.

    Ntese que el objeto no es el acto sin ms, sino que es el acto de acuerdo con su calificativo moral.

    Un mismo acto fsico puede tener objetos muy diversos. P. ej.: El acto de MATAR puede tener como objetos ASESINATO, DEFENSA PROPIA, ABORTO, PENA DE MUERTE. El acto de HABLAR: MENTIR, REZAR, INSULTAR, ADULAR, BENDECIR, DIFAMAR, JURAR, BLAFEMAR.

  • La moralidad de un acto depende principalmente del objeto: si el objeto es malo, el acto ser necesariamente malo; si el objeto es bueno, el acto ser bueno si lo son las circunstancias y la finalidad. P. ej.: Nunca es lcito blasfemar, perjurar, calumniar, etc.,

    por ms que las circunstancias o la finalidad sean muy buenas.

    Otro ej.: El pasear recibir la calificacin moral de la finalidad (para descansar y conservar la salud es distinto que observar los movimientos de un banco para robarlo), o de las circunstancias (cuando uno debera estar trabajando)

    En la prctica NO EXISTEN ACTOS INDIFERENTES, en estos casos su calificativo moral procede del fin o las circunstancias.

  • El objeto elegido es un bien hacia el cual tiende

    deliberadamente la voluntad. Es la materia de un acto

    humano. El objeto elegido especifica moralmente el

    acto del querer, segn que la razn lo reconozca y lo

    juzgue conforme o no conforme al bien verdadero.

    Las reglas objetivas de la moralidad enuncian el

    orden racional del bien y del mal, atestiguado por la

    conciencia. (CEC 1751)

  • Las circunstancias Son los diversos factores o modificaciones que

    afectan al acto humano.

    P. ej.: Quin, qu cosa, dnde, con qu, el modo cmo, cuando.

    La circunstancias pueden modificar las connotaciones morales al acto. Pueden, p. ej.: Aadir una connotacin moral al pecado, haciendo que

    en un solo acto se cometan dos o ms pecados especficamente distintos (robar un cliz).

    Cambiar la especie teolgica del pecado haciendo que un pecado pase de venial a mortal (la suma de lo robado)

    Atenuar o agravar sin cambiar su especie.

  • Las circunstancias, comprendidas en ellas las

    consecuencias, son los elementos secundarios de un acto

    moral. Contribuyen a agravar o a disminuir la bondad o la

    malicia moral de los actos humanos (por ejemplo, la

    cantidad de dinero robado). Pueden tambin atenuar o

    aumentar la responsabilidad del que obra (como actuar

    por miedo a la muerte). Las circunstancias no pueden de

    suyo modificar la calidad moral de los actos; no pueden

    hacer ni buena ni justa una accin que de suyo es mala.

    (CEC 1754)

  • La finalidad Es la intencin que tiene el hombre al realizar el

    acto, y puede coincidir o no con el objeto de la accin. Si el fin es bueno, agrega al acto bueno una nueva

    bondad (Or Misa en reparacin de los pecados)

    Si el fin es malo, vicia por completo la bondad de un acto (Ir a Misa a ver a una mujer con malos deseos)

    Cuando el acto es de suyo indiferente, el fin lo convierte en bueno o malo (Pasear frente a una casa para raptar al dueo)

    Si el fin es malo, agrega una nueva malicia a un acto de suyo malo (Robar para drogarse)

    El fin bueno no convierte en bueno una accin mala.

  • Frente al objeto, la intencin se sita del lado del sujeto que acta.

    La intencin, por estar ligada a la fuente voluntaria de la accin y

    por determinarla en razn del fin, es un elemento esencial en la

    calificacin moral de la accin. El fin es el trmino primero de la

    intencin y designa el objetivo buscado en la accin. La intencin es

    un movimiento de la voluntad hacia un fin; mira al trmino del

    obrar. Apunta al bien esperado de la accin emprendida. No se

    limita a la direccin de cada una de nuestras acciones tomadas

    aisladamente, sino que puede tambin ordenar varias acciones hacia

    un mismo objetivo; puede orientar toda la vida hacia el fin ltimo.

    Por ejemplo, un servicio que se hace a alguien tiene por fin ayudar

    al prjimo, pero puede estar inspirado al mismo tiempo por el amor

    de Dios como fin ltimo de todas nuestras acciones. Una misma

    accin puede, pues, estar inspirada por varias intenciones como

    hacer un servicio para obtener un favor o para satisfacer la vanidad.

    (CEC. 1752 - 1753)

  • Determinacin de la moralidad El principio bsico para juzgar la moralidad es el

    siguiente:

    Para que una accin sea buena, es necesario que lo sean sus tres elementos: objeto bueno, fin bueno y circunstancias buenas.

    Para que el acto sea malo, basta que los sea cualquiera de sus elementos.

    Bonum ex integra causa, malum ex quocumque defectu El bien nace de la rectitud total; el mal nace de un solo defecto S. Th., I-II, q. 18, a 4).

  • II. Los actos buenos y los actos malos

    El acto moralmente bueno supone a la vez la bondad del objeto, del fin

    y de las circunstancias. Una finalidad mala corrompe la accin, aunque

    su objeto sea de suyo bueno (como orar y ayunar para ser visto por los

    hombres).

    El objeto de la eleccin puede por s solo viciar el conjunto de todo el

    acto. Hay comportamientos concretos como la fornicacin que

    siempre es un error elegirlos, porque su eleccin comporta un

    desorden de la voluntad, es decir, un mal moral.

    Es, por tanto, errneo juzgar de la moralidad de los actos humanos

    considerando slo la intencin que los inspira o las circunstancias

    (ambiente, presin social, coaccin o necesidad de obrar, etc.) que son

    su marco. Hay actos que, por s y en s mismos, independientemente

    de las circunstancias y de las intenciones, son siempre gravemente

    ilcitos por razn de su objeto; por ejemplo, la blasfemia y el perjurio,

    el homicidio y el adulterio. No est permitido hacer el mal para

    obtener un bien. (1755 - 1756)

  • La libertad y el deber Uno de las notas propias de la persona es la

    LIBERTAD.

    El poder elegir no se explica sin la inteligencia, ya que actuar libremente implica una deliberacin, un cierto juicio, una valoracin. Y esto slo puede hacerlo la inteligencia. Los animales actan por instinto o por aprendizaje condicionado (sin libertad).

    La liberta humana est limitada por el deber o la exigencia de cumplir los mandamientos de Dios, y tambin por el deber o exigencia de no quebrantar los derechos del prjimo.