El Arte de los Bosques

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Editorial Hermanos scouts:

Después de haber disfrutado y compar-

tido el Capaz XIV, cuántas cosas hermosas llevamos y tra-jimos en nuestras mochilas. Fueron tantas que no entraba la bolsa de dormir y algunas eran un poco pesadas, pero sabemos que todo lo que llevamos de regreso nos servirán para siempre.

Compartimos responsabilidades, hici-

mos nuevos amigos, trabajamos en equipo y lo más impor-tante es que todo eso nos hizo un poco más felices. Sigamos transitando con alegría esta ruta que el Gran Jefe y la vida nos ha proporcionado.

Si aún no lo tenemos en claro, recor-

demos, para vivir plenamente el Movimiento Scout, prime-ro tengo que enamorarme de él, conocerlo cada día más y así y solo así, otros querrán pertenecer también a él, por sentirse contagiados de nuestro entusiasmo.

¡Buena caza!

Águila Responsable

(Juan Carlos)

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Heroes Argentinos Hoy: Martín Miguel de Güemes: (Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Mart%C3%ADn_Miguel_de_G%C3%BCemes) Martín Güemes nació el 8 de febrero de 1785, en la ciudad de Salta. Se crió en el seno de una familia adinerada. Su padre era un hombre ilustrado y cumplía funciones de tesorero real de la corona española. Logró que su hijo tuviera una buena educación con maestros particulares que le enseñaron los conocimientos filosóficos y científicos de su tiempo. Martín Güemes cursó sus estudios primarios en su ciudad natal, alternando la enseñanza formal con el aprendizaje de las labores campesinas en la finca donde vivía con su familia. A los 14 años se enroló en el Regimiento Fijo de Infantería, cuyo cuartel central estaba en Buenos Aires pero tenía un batallón en Salta a raiz de la rebelión de Túpac Amaru II desde 1781. En 1805 fue enviado con su regimiento a Buenos Aires, ya que el virrey Sobremonte temía un ataque inglés. Éste se produjo al año siguiente, iniciando las invasiones inglesas, participando Güemes en la Reconquista de Buenos Aires. Al año siguiente participó también de la Defensa de la ciudad y protagonizó una curiosa hazaña: al ver que un barco inglés había encallado por una bajante repentina del río, dirigió una carga de caballería y lo abordó. Fue una de las muy pocas veces en la historia que un buque de guerra fue capturado por una partida de caballería. Después de la Revolución de Mayo de 1810, fue puesto al mando de un escuadrón gaucho en la Quebrada de Humahuaca (provincia de Jujuy) y en los valles de Tarija y Lípez, impidiendo la comunicación entre los contrarrevolucionarios y los realistas del Alto Perú. En Suipacha, único triunfo de las armas patriotas en el intento de recuperar el valioso territorio altoperuano, la participación del capitán Güemes fue decisiva. Al poco tiempo, Güemes fue ascendido a teniente coronel y fue designado como jefe de las fuerzas de caballería de San Martín, quien le encomendó finalmente la defensa de las fronteras del norte contra los incesantes avances realistas y lo nombró General en Jefe del Ejército de Observación. Güemes y sus gauchos “infernales” (como se les llamaba por su bravura y por sus ponchos rojos) detuvieron varias invasiones contrarevolucionarias, aún contando con menos hombres y recursos que los ejércitos realistas. Su papel fue decisivo para asegurar el éxito de la gesta Sanmartiniana de liberación del Perú. Güemes fue también elegido Gobernador de Salta por voluntad popular, siendo uno de los primeros gobernadores de nuestra historia elegidos democráticamente. Su gestión fue excelente, preocupándose diariamente por el bienestar general del pueblo y por asegurar la causa revolucionaria. Para esto, impuso altos impuestos a las familias adineradas de la provincia (muchas de las cuales apoyaban secretamente a los realistas). Estas familias fomentaron una revuelta para deponer al gobernador Güemes y ocupar Salta por fuerzas realistas. Como resultado de esos enfentamientos, Güemes fue perseguido y herido de bala. Esta herida fue mortal y diez días después, el 17 de junio de 1821, el General Martín Miguel de Güemes muere a la edad de 36 años.

“No quiero favores en perjuicio de mi país; éste ha de ser libre a pesar del mundo entero”

Martín Miguel de Güemes

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El Rincón de Patrulla Hoy: Los Cargos de Patrulla El Sistema de Patrullas es el nombre con el que se denomina a la forma de trabajar en una Unidad Scout. El Sistema de Patrullas determina cuáles son las responsabilidades que deben cumplir todos los miembros de una Unidad (Dirigentes, Guías de Patrulla y patrulleros). Dentro de una Patrulla, no sólo el Guía tiene responsabilidades que cumplir. En una buena Patrulla todos los Scouts tienen al menos una tarea encomendada. Existe un Scout responsable de escribir el Libro de Oro, otro responsable de antener el cajón de Patrulla, otro responsable de cocinar, y así sucesivamente. Estas tareas se desempeñan mediante cargos. Cada Scout debe tener al menos un cargo y es conveniente que no tenga más de dos. Algunos de los cargos más comunes en una Patrulla son:

Cocinero: responsable de cocinar en los campamentos y mantener listo el equipo de cocina de la Patrulla.

Guardián de Leyendas: responsable de escribir el Libro de Oro. Leñero: responsable de seleccionar y preparar leña para el rincón de

Patrulla. Aguatero: responsable de proveer de agua a la Patrulla y mantener

siempre listos los bidones y cantimploras. Intendente: responsable de administrar el equipamiento y mantener el

cajón de Patrulla. Secretario: responsable de escribir el libro de actas y de mantener la

agenda de la Patrulla. Tesorero: responsable de administrar los ahorros de la Patrulla. Muchos otros

Es fácil observar que podemos dividir los cargos de una Patrulla en dos categorías:

Cargos permanentes: son aquellos que incluyen tareas cotidianas y que el Scout responsable debe llevar a cabo todas las semanas. Algunos ejemplos de estos cargos son: el guardián de leyendas, el secretario, el tesorero y el intendente.

Cargos de campamentos: son aquellos que sólo tienen sentido durante un campamento o excursión; por ejemplo: el cocinero, el aguatero, el leñero, etc.

Además de los mencionados, cada Patrulla puede crear diferentes cargos en función de sus necesidades y actividades.

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¿Quiénes deben desempeñar los cargos? Los cargos de Patrulla deben desempeñarlos los Scouts que tengan habilidad o vocación de llevarlos adelante. Sin embargo, es recomendable que los cargos sean de carácter rotativo, es decir que cada cierto tiempo el cargo cambie de Scout responsable. De esta forma, todos tienen la oportunidad de aprender a realizar diferentes tareas y viven distintas experiencias. ¿Qué cargo debe desempeñar el Guía de Patrulla? En una Patrulla numerosa es normal que el Guía no desempeñe ningún cargo en particular. Esto se debe a que tiene la responsabilidad de conducir a sus compañeros y, por lo tanto, debe apoyar y ayudar a todos los patrulleros en el desempeño de sus cargos. Por lo tanto, aun cuando el Guía no tenga asignado ningún rol, en realidad trabaja un poco en todos los cargos. En Patrullas más pequeñas sí suele ocurrir que el Guía tenga un cargo específico. ¿Quién asigna los cargos de Patrulla? Muy fácil: Todos ellos son asignados por el Consejo de Patrulla. De común acuerdo entre todos los integrantes, se elige quién desempeñará cada cargo y por cuánto tiempo. ¿Cuándo se deben cambiar los cargos de Patrulla? Esto es diferente en cada Patrulla. Es conveniente cambiar de cargos de Patrulla para que cada patrullero pueda ir aprendiendo un poco de cada función y pueda brindar a su patrulla un buen servicio, ayudando en aquellas tareas que le gustan y que hace bien. El mejor lugar para evaluar cuándo deben realizarse cambios en la distribución de cargos es la Reunión de Patrulla. En una buena Patrulla se charla regularmente sobre los cargos y cada scout puede pedir cambiar de cargo, cuando considera que ya está preparado para asumir nuevos desafíos. De esta manera en las reuniones de patrulla se observa y analiza el funcionamiento del Sistema de Patrullas, para que luego en una reunión de Consejo de Patrulla se decida democráticamente la nueva asignación de cargos de Patrulla.

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Orientación Nocturna Una de las constelaciones que nos ayudan a orientarnos en la noche es la Cruz del Sur, que es una “constelación circunpolar”. Esto significa que si bien se mueve a lo largo del año, siempre lo hace alrededor de un punto en el cielo llamado “polo sur celeste”.

Para encontrar el polo sur por medio de la Cruz del Sur, debemos ayudarnos con dos estrellas cercanas que pertenecen a la constelación llamada “Centauro”. Estas son dos estrellas muy brillantes conocidas como “Rigel Kentaurus” y “Age-na”. La técnica consiste en imagi-nar dos líneas: una marcada por el “lado largo” de la Cruz del Sur y otro por la “Media-triz” que marcan Agena y Rigel Kentaurus. Seguramen-te recuerdan de la escuela que la Mediatriz es una recta que cruza un segmento (en este caso el formado por Agena y Rigel Kentaurus) justo por la mitad y de ma-nera perpendicular (o sea a 90°). Si no se acuerdan estas cosas de la escuela… pónganse las pilas!!! La idea es que justo donde ambas líneas imaginarias se cruzan es el punto del cielo llamado “Polo Sur Celeste” y justo hacia abajo encontrarán el Polo Sur. Fuente: Manual de Adiestramiento Scout en Segunda Clase – Grupo Scout Almafuerte

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El Rincón de los Guías Hoy: El Mensaje de BP (Fuente: Para Ti, Guía de Patrulla) Cuando un día le preguntaron a B-P qué grado elegiría en el Escultismo si no fuera Jefe Scout Mundial, respondió:

“Si me permitieran elegir un puesto en el Movimiento Scout, elegiría el de Guía de Patrulla”.

Es decir que el Jefe estimaba que el papel más hermoso es el de Guía de Patrulla porque es sinónimo de dominio de sí y de abnegación. Si abrimos “Escultismo para Muchachos”, encontraremos un mensaje de B-P a los Guías de Patrulla:

“Deseo que ustedes Guías de Patrulla traten de FORMAR a todos en sus patru-llas, ocupándose de cada uno de los muchachos con miras a convertirlos en hom-bres de provecho. De nada sirve tener uno o dos muchachos magníficos si el resto no vale la pena. Hay que buscar que todos estén a la altura. Lo más importante para eso es el EJEMPLO que den ustedes a sus scouts; lo que hagan o digan, lo

dirán también sus Scouts. Muéstrenles que saben obedecer cualquier orden recibida sea de palabra o escrita,

y que las ejecutan en presencia o ausencia del Jefe. Demuéstrenles que pueden ganar insignias de especialidades y sus muchachos los seguirán con muy poco es-fuerzo. Recuerden siempre que deben estar A LA CABEZA del movimiento y

nunca se resignen sólo a empujar desde atrás” Otro Jefe Scout, Roland Philipps dijo sobre la misión del G.P.:

“No es una nodriza, ni un subteniente gritón, ni tampoco un domador de fieras, sino UN HERMANO MAYOR que conduce porque sabe; y a quien se le sigue

porque se le ama…” Retén bien este retrato del GP porque es el más bello que se puede hacer. Sí, hermano GP, tú debes ser un formador. Recuerda aquella anécdota de los tres obreros que trabajan en la construcción de una iglesia. Les preguntaron qué era lo que hacían. Uno dijo:”yo transporto piedras”, otro “yo me gano la vida” pero el tercero dijo “yo construyo una catedral que será la más bella del mundo”. Tú también construyes una catedral, y si alguien te pregunta qué haces no le respon-das; “divierto a mis scouts” sino dí “yo formo la Patrulla mejor del mundo, formo hombres, formo almas…”. Sí, hombres, almas. Eres tú a quien se ha confiado esa misión espléndida, y si estás convencido de su grandeza, te consagrarás a ella todo entero. Si relees el texto encontrarás palabras en mayúscula verás.

Tu FIN: FORMAR…EJEMPLO…A LA CABEZA….SER UN HERMANO MAYOR. En otras palabras diremos lo que debes ser: …el mejor scout de patrulla…el hermano mayor de tus scouts…su entrenador.

Y cuando seas eso, te será muy fácil ser el formador de tus scouts.

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Las Historias de BP Hoy: Relatos sobre Señales Los Scouts tienen que ser inteligentes para transmitir mensajes secretos de un lugar a otro, o para hacerse señales entre sí. Antes del sitio de Mafeking, del que ya os he hablado en la Primera Fogata, recibí un mensaje secreto de un amigo desconocido del Trans-vaal, en el que me daba noticias sobre los planes del enemigo, su número, sus caballos y sus armas. Estas noticias me llegaron en una carta pequeña enrollada dentro de una bola del tamaño de una píldora, colo-cada en el interior de un pequeño agujero hecho en un bastón corriente y fijada a él con cera. El bastón fue entregado a un nativo, con la orden escueta de ir a Mafeking y entregarme el obsequio. Como es natu-ral, cuando el negro nativo me entregó el bastón diciendo que me lo enviaba un hombre blanco, yo me imaginé que se trataba de algo especial y encontré pronto la carta escondida. Otra vez, recibí una carta secreta de otro amigo. Estaba escrita en lengua indos-tánica, pero con caracteres ingleses. Cualquier otro, al estudiarla, hubiera que-dado confundido acerca del lenguaje en que estaba escrita, pero para mí era tan clara como el día. Cuando enviábamos cartas desde Mafeking, durante el sitio, se las entregábamos a dos nativos que eran capaces de pasar inadvertidos entre los puestos de obser-vación de los Boers. Una vez, en la línea de centinelas de los Boers, fue sorpren-dido un nativo de los suyos y nadie se fijó en él. Llevaban los mensajes en la si-guiente forma: las cartas se escribían en papel delgado y una docena de ellas o más se doblaban y ponían dentro de una pequeña bola cubierta por papel de esta-ño, parecido al que se usa en los paquetes de té. El Scout nativo podía llevar varias de estas bolitas en la mano, o colgadas descuidadamente a un cordel alre-dedor del cuello. Si consideraba estar en peligro de ser capturado por el enemigo, se fijaba en los lugares de referencia que pudieran existir a su alrededor, dejando caer las bolitas sobre el suelo por donde podían confundirse con piedrecillas. Entonces caminaba descaradamente hacia el enemigo, quien en caso de registrar-lo no le encontraba nada. Los nativos de Australia, con frecuencia usaban el fuego para enviar mensajes. El mensajero se quedaba por allí durante uno o dos días, esperando que no hubie-ra moros en la costa y, entonces, regresaba al lugar de referencia donde había dejado tiradas las cartas. Mojoneras, jalones y lugares de referencia, debéis re-cordar qué quieren decir objetos tales como árboles, montículos, rocas u otros detalles que pueden servir a un Scout para recordar los lugares por donde ha pasado. Extractado de Scoutismo para Muchachos Capítulo 2 “En Campaña” - Fogata 7 “Señales y órdenes”