23 benedicto xvi
-
Upload
david-galarza-fernandez -
Category
Documents
-
view
99 -
download
0
Transcript of 23 benedicto xvi
BENEDICTO XVI
2005 Mayo 13
Benedicto XVI
inicia el proceso
de beatificación,
sin esperar los
cinco años
requeridos, tal y
como había
ocurrido con la
Madre Teresa.
19 de abril, 2005
electo Papa.
Benedicto XVI19 de Abril, 2005 -
Juan Pablo II le confió la delicada Sagrada Congregación de la Fe.
1983 Cardenal.
2006 Enero 25, Encíclica Deus Charitas est.
17 de septiembre - Benedicto "siente profundamente" la reacción de los musulmanes a sus palabras, que dice fueron malinterpretadas.
Benedicto XVI19 de Abril, 2005 -
El Congreso Judío Mundial celebró
su elección al pontificado.
Criticó las caricaturas de Mahoma.
Otro Papa viajero.
2008
15-21 de abril - Benedicto hace su primera visita
papal a Estados Unidos, donde se reúne con
víctimas de abusos sexuales por curas el 17 de
abril, habla en la sede de Naciones Unidos al
día siguiente y dice misa en la zona cero de
Nueva York el 20 de abril.
12-21 de julio - El Papa visita Australia en la
Jornada Mundial de la Juventud, donde también
se reúne con víctimas de abusos sexuales por
clérigos.
2009 24 de enero - El Papa
levanta ampollas al anular la
excomunión de cuatro
obispos ultraconservadores,
entre ellos uno que negó el
holocausto judío.
12 de marzo - Benedicto
escribe a los obispos de
todo el mundo explicando la
readmisión de los cuatro
obispos y admitiendo que
estuvo mal gestionada.
2009
Julio 7.- Publica la Tercera encíclica "Caritas in
veritate" (Caridad en la verdad).
Noviembre 20 .- El Vaticano aprueba una
Constitución Apostólica para acoger en la
Iglesia Católica a los anglicanos que lo
deseen.
2010 abril 2
El predicador personal del
Papa Benedicto XVI,
Raniero Cantalamessa,
compara las críticas que ha
recibido el líder del
catolicismo -por la forma
en que la Iglesia Católica
ha manejado el escándalo
de pederastia- con la
violencia colectiva sufrida
por los judíos.
2010 abril 2
.Días despúes, el
portavoz oficial de la
Santa Sede, Federico
Lombardi, dijo que
comparar las críticas
con el antisemitismo
"no es la línea del
Vaticano".
El Papa El Papa se comprometió a
tomar acciones para enfrentar el
escándalo.
Ecumenismo
• Durante este siglo hubo un gran esfuerzo por el ecumenismo, es decir, el movimiento que tiende a lograr la unidad de fe y de comunión entre las comunidades cristianas divididas, escándalo para el mundo actual. Grandes propulsores de este movimiento fueron Juan XXIII, Pablo VI y Juan Pablo II.
• Al Concilio Vaticano II asistieron observadores de las comunidades luterana, reformada, metodista, congregacionalista, cuáquera y de numerosas iglesias ortodoxas y orientales. Pablo VI se reunió con el Patriarca Atenágoras en 1963. Roma y Constantinopla se levantaron mutuamente las excomuniones mutuas, publicadas en 1054. En cada uno de sus viajes, Juan Pablo II acostumbra a orar en común con representantes de hermanos cristianos separados
• Benedicto XVI ha realizado numerosos gestos ecuménicos y firmado varias declaraciones con protestantes, monofisitas, erigido un rito especial para los anglicanos que quieren volver al catolicismo, etc…
2011
18 de agosto - El papa
Benedicto XVI
comienza una visita
de cuatro días a
España con motivo de
la vigesimosexta
edición de la Jornada
Mundial de la
Juventud.
EPÍLOGO
• No hay conclusión ni punto final en una historia de la Iglesia, como puede haberlo en una historia de las dinastías del antiguo Egipto o de la monarquía francesa. Lo que comenzó el año 30 después de Cristo, continúa todavía hoy. Hemos caminado al lado de una muchedumbre de cristianos. Hemos sido sensibles al entusiasmo de unos y a los compromisos de otros. Hemos vivido el drama de ciertas situaciones. La fidelidad al Evangelio de Jesús, obra del Espíritu de Pentecostés, permite a los cristianos de hoy asumir la tradición viva y transmitir la herencia recibida bajo unas formas renovadas en un mundo que cambia. Los cristianos de antaño se enfrentaron con las dificultades de su época; nos toca hoy a nosotros enfrentarnos con las nuestras y dar solución desde el amor y la verdad del Evangelio.
• El siglo XXI se nos ha abierto, desde el punto de vista mundial, con conflictos terroristas y bélicos en Afganistán, en Medio Oriente, y en otras partes de la tierra. Todavía nos espantan las escenas del 11 de septiembre de 2001, en Estados Unidos. Y la guerra en Irak.
También nos avasalla, desde el punto de vista político y social, el problema de la globalización, con sus luces y sombras. Desde el punto de vista moral, nos preocupa todo lo relacionado con el campo de la bioética: la clonación, la fecundación artificial y demás experimentos genéticos y manipulación de embriones...¿a dónde llegará el hombre con su ciencia? ¿Todo lo que se puede hacer, se debe hacer? No todo avance técnico significa de por sí avance ético y moral. Nos preocupa enormemente la dictadura del relativismo que niega que haya verdades absolutas.
• Desde el punto de vista espiritual y religioso nos asusta el pulular de sectas y los movimientos pseudorreligiosos, que nos ofrecen todo tipo de propuestas, como si fueran supermercados religiosos o restaurantes a la carta.
El siglo XXI y el tercer milenio de la era cristiana habrán de afrontar desafíos inéditos, cuyo alcance resulta imposible adivinar. La defensa de la vida humana, la resistencia frente a posibles aberraciones de la ingeniería genética, la lucha contra la corrupción en la vida pública y las clamorosas desigualdades existentes entre los hombres, el esfuerzo por extender el acceso a los bienes de la cultura y un razonable bienestar a todos los pueblos de la tierra, estos y otros muchos campos más serán frentes abiertos a la generosa acción de los cristianos en el mundo.
• La Iglesia ha luchado y luchará con denuedo en la defensa de la persona, imagen y semejanza de Dios. Esta misión a favor del hombre la Iglesia la ha venido cumpliendo desde los comienzos mismos del cristianismo. Es cierto que en tan dilatado espacio de tiempo ha habido miembros de la Iglesia que han cometido errores y tuvieron conductas públicas y privadas impropias del nombre de cristianos, y que esa incoherencia entre el Evangelio y su vida se dio incluso en jerarcas y pastores.
Tal fue el caso del impacto del régimen señorial de la Edad Media, investiduras y patronatos incluidos en las estructuras eclesiásticas; o de algunos modos con que la inquisición persiguió la herejía, cuando ésta era considerada el peor de los crímenes y se estimaba la unidad religiosa como el supremo bien de una comunidad política; o, todavía, el error del nepotismo, fruto de un desordenado extravío de los afectos familiares. Y los abusos en las indulgencias por parte de algunos miembros de la Iglesia.
• Pero sería obstinación sectaria cerrar los ojos ante la evidencia: es indudable que ninguna institución ha hecho tanto a lo largo de los siglos a favor de la persona humana y de su dignidad, ninguna ha aportado tantos beneficios a las sociedades terrenas, como la Iglesia de Cristo; y eso durante dos milenios y en todos los lugares de la tierra a donde llegó su presencia y su acción apostólica. Y no se olvide por otra parte que el fin primordial de la Iglesia no es mejorar la condición del hombre en el mundo, aunque esto también forme parte de su misión, sino abrirle el camino que ha de conducirle a la eterna bienaventuranza. Nadie como la Iglesia ha sembrado la paz, el bien y la belleza en el curso de la historia, ni está por tanto más cualificado que ella para asumir la defensa de la dignidad humana en el mundo del tercer milenio.
• Precisamente por eso, ningún poder de la tierra, sólo el Papa Juan Pablo II, ha tenido el valor de pedir perdón públicamente en la jornada de perdón del año del Gran Jubileo del 2000 por los pecados y errores de quienes encarnaron a la Iglesia en las distintas épocas de la historia. Así decía el Papa en la homilía del 12 de marzo: “El actual primer domingo de cuaresma me ha parecido la ocasión apropiada para que la Iglesia, reunida espiritualmente alrededor del sucesor de Pedro, implore el perdón divino por las culpas de todos los creyentes. Perdonamos y pedimos perdón”.
Algunos retos para la Iglesia del futuro.
Afrontar las postmodernidad con sus
desafíos y riquezas.
Los derechos humanos, los países y
continentes pobres en las garras del
neoliberalismo rampante.
Nunca las diferencias han sido tan grandes.
Algunos retos para la Iglesia del futuro.
Mantener viva la utopía del Evangelio.
Las democracias formales y las necesidades
fundamentales de las multitudes
desheredadas, las “aguafiestas”.
La lucha por los derechos y deberes de las
mayorías y la obsesión por la
autorrealización en la felicidad.
Algunos retos para la Iglesia del futuro.
¿Cómo hablar del espíritu fraterno y solidario
del Evangelio de Jesús a esta cultura
hedonista e individualista?
La Iglesia emplea un lenguaje envejecido en
la era de la comunicación, la cultura de la
imagen.
Algunos retos para la Iglesia del futuro.
Una nueva sensibilidad ante la naturaleza.
Un resugir religioso y explosivo de la
postmodernidad.
No hemos terminado de asimilar la
secularización y andamos ahora ante la New
Age y la crítica de las religiones monoteístas
como causantes de violencia.
Algunos retos para la Iglesia del futuro.
El futuro teológico y sociológico de la iglesia
está ligado al ecumenismo, y el diálogo con
otras religiones.
No por estrategia, sino por exigencia de la
propia revelación cristiana.
¿Cómo hacer virar una institución mundial?
El peso del gigantismo
en la era de la
fragmentación, del
pluralismo, lo
desechable.
¿Cómo ofrecer a la
postmodernidad
propuestas viables y
convincentes?
Un tensión permanente.
Jesús adoptó la
oralidad.
No escribió nada, no
construyó nada.
Creó una
comunidad.
La Iglesia guardó la
memoria de Jesús por
escrito y en toda su vida.
La Iglesia es institución y es
testigo de una visita de
Dios en su Hijo.
Él sigue llamando a la
puerta y siempre es el que
viene.