29062013 - Bandas Organizadas Madre de Dios

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  • 7/28/2019 29062013 - Bandas Organizadas Madre de Dios

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    A14. EL COMERCIO SBADO 29 DE JUNIO DEL 2013

    REGIONES

    PRONSTICO DEL TIEMPO (PARA MAANA) E NDICE DE RADIACIN SOLAR (PARA HOY)

    LIMA AREQUIPA

    15 18 MNIMO 7 21 MODERADO

    CUSCO

    -1 20 MODERADO

    MOQUEGUA

    9 27 MODERADO

    CAJAMARCA

    4 23 MODERADO

    ICA

    10 28 MODERADO

    PIURA

    17 29 MODERADO

    HUANCAYO

    -2 21 MODERADO

    TACNA

    11 21 BAJOFUENTE:SENAMHI

    MINERA ILEGAL EN MADRE DE DIOS

    Bandas organizadas se arman y acechana los habitantes de las zonas minerasLos asaltos a poblados y comunidades vinculados con la minera se han incrementado. Armas ilegales ingresan por la frontera con Bolivia.

    FOTOS:DANTEPIAGGIO

    LA VIOLENCIA DEL ORO. Mientras las investigaciones a los autores de asaltos en las zonas mineras se dilatan, la justicia persigue a los dirigentes indgenas de Tres Islas.

    Puerto Maldonado.La trocha quesale del kilmetro 24 de la Ca-rretera Interocenica hacia lascomunidades de San Jacinto yTres Islas, en Madre de Dios, noes un camino que los habitantesde este lugar quieran volver atransitar. El sbado 15 de junio,

    vspera del Da del Padre, en-tre las 11 a.m. y las 2 p.m., diezhombres armados con pistolas

    y AKM detuvieron todas las ca-mionetas que recorran esa ru-ta, las escondieron una tras otradetrs de los matorrales y asal-taron a ms de 50 comunerosde San Jacinto. Los tuvieron all,boca abajo, maniatados, duran-te casi tres horas. Jorge Payaba,presidente de la comunidad deTres Islas, recorre ahora conmiedo el lugar: Todito les hanrevisado, ellos saban que el s-bado sacan el oro de la comuni-dad para vender o pagar, dice.

    Las vctimas vivan en la co-munidad de San Jacinto, veci-

    na a Tres Islas y que tambin sededica a la extraccin minera.En el lugar, dentro del territoriode la comunidad, solo quedanahora varios metros cuadradosde pastos aplastados, prendasabandonadas por los asaltan-tes, una mochila casi nueva, lasmedias de un nio de no ms

    de 1 ao, pequeos plsticosnegros con los que se envuelveel oro y las cuerdas que usaronlos delincuentes para amarrarlas manos y piernas de sus vcti-mas. Ninguno de los comunerosha querido volver al lugar desdeentonces. Ahora nos acompaaun polica sin uniforme.

    Violencia sin control

    La fiebre por el oro ha derivadoen una alarmante e inusual vio-lencia en las zonas mineras deMadre de Dios. En los ltimosmeses la polica ha registradocuatro grandes asaltos de ban-das organizadas que usan ar-mas de guerra para asaltar a loscomercializadores de oro.

    Tambin en marzo de esteao 12 delincuentes armados

    con pistolas y fusiles intercepta-ron una camioneta que se diri-ga de Mazuco al Cusco y roba-ron 15 kilos de oro (valorizadosen dos millones y medio de so-les). Das despus, la policaidentific y detuvo a cuatro delos asaltantes: uno de ellos eraun polica en actividad: el sub-oficial Csar Delgado.

    Nunca antes se haban re-gistrado tantos asaltos de estetipo, tenemos miedo de lo quepueda pasar, por eso muchosquieren comprar sus propiasarmas, dice Payaba. Los ha-

    No solo los eventuales robospreocupan ahora a los ha-

    bitantes de Madre de Dios.Durante los ltimos meses sehan incrementado los asal-tos de bandas organizadasque usan pistolas y fusiles pa-ra despojar a sus vctimas deloro que transportan.

    NELLY LUNA AMANCIO

    [email protected]

    ACOSO JUDICIAL.Tres Islas est formada por los pueblos shipibo y EseEja. Jorge Payaba defiende su

    derecho a protegerse, pero extraamente la justicia en Madre de Dios no los dej y fueron denunciados.

    TESTIMONIO

    Queremosprotegernos yla justicia no

    nos deja

    JORGE PAYABAPresidente de la comunidad de Tres Islas

    Nuestros padres llega-ron hasta aqu entre ladcada de los 40 des-de otras comunida-

    des de Ucayali y Loreto. Habanescapado de la violencia delcaucho. Eran alrededor de 30familias. La llamaron Tres Islasporque en esa zona el cauce delro Madre de Dios forma trespequeas islas. Una vez asen-tados aqu peleamos duran-te aos el reconocimiento denuestra comunidad. Recin en1994 titularon nuestras tierras

    y definimos nuestros linderos.Fue en ese momento que nosdimos cuenta de que varias per-sonas haban realizado sus pe-titorios mineros. De los 105 pe-titorios mineros registrados enla comunidad solo 11 pertene-cen a la misma comunidad, elresto son de personas extraas.De esas 94 zonas de extraccinminera solo 4 cuentan con au-torizacin comunal. Nosotros

    no nos beneficiamos de lo queellos sacan. Por eso, para evitarque ingresen nuevos minerosa nuestro territorio instalamosese puesto de control. Quere-mos protegernos y no nos de-

    jan. Ha sido un largo procesojudicial. Solo el Tribunal Cons-titucional nos dio la razn, perohasta ahora la Corte Superiorno emite una nueva sentencia.Encima, nos han vuelto a de-nunciar por instalar otra reja.

    Ya presentamos una queja antela Corte Interamericana de De-rechos Humanos.

    las bandas de delincuentes es-tn estancadas en el MinisterioPblico, la justicia en Madre de

    Dios acta con inusitada celeri-dad para otros casos. En el 2011la Sala Superior Mixta y de Ape-laciones de la Corte Superior deJusticia de Madre de Dios orde-n el retiro inmediato de un cer-co de madera que la comunidadde Tres Islas haba instalado unao antes en el ingreso de su te-rritorio para protegerse.

    Esta es la historia. En el 2010,alertados por la invasin de mi-neros ilegales, la comunidadinstal un puesto de vigilanciaen uno de los ingresos a su terri-torio comunal, exactamente enel lugar donde el pasado 15 de

    junio ocurri el asalto. Quera-mos saber quines entraban anuestro territorio, explica Jua-na Payaba Cachique, hermanade Jorge, y entonces presidentade la comunidad.

    Sin embargo, dos empresasde transporte (Mineros S.A.C. yLos Pioneros S.R.L.) interpusie-ron una demanda contra los di-rigentes por atentar contra el li-bre trnsito. La segunda fiscalapenal corporativa de Tambopa-ta acept la demanda y denun-ci penalmente a los dirigentes.Despus, con inusitada celeri-dad, la Sala Superior Mixta yde Apelaciones de la Corte Su-perior de Justicia de Madre deDios ordena el retiro inmediatodel cerco de madera y la caseta.

    Angustiada por las denun-

    cias, Juana Payaba present unademanda de hbeas corpus anteel Tribunal Constitucional con-tra el fallo de la Corte Superiorde Justicia. Y en setiembre delao pasado, la sentencia del TCles dio la razn: orden a la salaemitir una nueva resolucin. ElPoder Judicial debera de haberordenado a los transportistasrestituir la tranquera y la casetade control que destruyeron, perohasta ahora no lo hace, se quejaPayaba. La justicia para la comu-nidad de Tres Islas es extraa-mente lenta. Y sorda.

    PRDIDAS

    3500.000soles es aproxidamente el valorde lo robado en oro y pertenenciasdurante los ltimos asaltos de lasbandas organizadas en Madre deDios. Los propietarios de las em-presas tambin estn armndose,muchas ilegalmente.

    MANUELCALLOQUISPE

    ARMADOS. En algunas intervenciones policiales se han encontra

    do a rmas de largo alcance y municiones.

    acentuado el trfico de armas.En los campamentos es usual

    ver a los mineros o a sus traba-jadores con pistolas sobre lascinturas. La polica local sealaque estas armas provendran dela frontera con Bolivia. Pero notiene ms informacin.

    Acoso judicial

    Mientras las investigacionescontra los mineros ilegales y

    La Constitucin

    precepta que lascomunidades nativaspueden disponer desu territorio. Al nohaberse permitidoejercer su derecho acontrolar el ingresode terceros, estecolegiado estima quela autonoma comunalha sido vulnerada.[Sentencia del TC 01126]

    CRIMEN ORGANIZADO

    Una de las bandascriminales responsable

    del robo de 15 kilos de oroestaba integrada por un

    polica en actividad.

    bitantes de Tres Islas y San Ja-cinto creen que detrs de estosgrandes robos podran estartambin otros malos policas. Aestos asaltos se suman dos regis-trados en la comunidad de Kot-simba y en La Pampa, la zona deminera ilegal ubicada dentrodel rea de amortiguamientodel Tambopata.

    Con la inseguridad y el cri-men organizado tambin se ha