30 Aniversario de La Normalización Democrática

2
30 aniversario de la normalización democrática. G. B. Mar del Plata, 30 de junio de 2015 El 19 de diciembre de 1971 se jug en el Estadio Monumental una de las semi!inales de #acional. $e en!rentaban nada menos %ue los cl&sicos ri'ales rosarinos, #e( osario -entral. En la mitad del segundo tiem o, el jugador de -entral /ldo Pedro P una brillante alomita %ue sor rendi al de!ensor + 'enci al ar%uero, concretando el artido %ue le ermiti la 'ictoria a -entral. Ese gol + sus circunstancias se icie %ue ara !estejarlo, todos los 19 de diciembre recrean el gol en la canc a de -entral !an&ticos de -entral an lle'ado a re roducirlo en otras canc as del mundo. En un rit re ite, le tiran la elota a un Po+ %ue ob'iamente est& cada 'e m&s 'iejo ara %ue alomita %ue lo lle' a la gloria. El !estejo anual de este e isodio a lle'ado a in los records Guinnes como el gol m&s celebrado de la istoria. 4 a mi me arece %ue a 'eces en la ni'ersidad estamos as , recreando goles del asa %ue cada 'e menos entienden. "irando centros %ue todos conocemos ara %ue jugadores m&s elados recordemos nuestras a a6as, la ma+or a reales, algunas agranda memoria o nuestro ego. -reo en cambio %ue lo %ue necesitamos es usar ese asado m tico ara darnos !uer a, re roducirlo. *bser'ar los ideales del asado, ero no necesariamente sus erramienta una istoria mu+ rica, ero si solamente nos %uedamos con los rituales nos %uitamos a mismos la osibilidad de crecer. entro de esa istoria, odemos tomar de la e!orma ni'ersitaria de 1918 los conce autonom a uni'ersitaria, cogobierno, e:tensin uni'ersitaria, concursos de o algunos %ue emos negado con nuestras acciones, como la eriodicidad de las c&tedras, 'estirnos con le'ita, no necesariamente creer %ue el gobierno tri artito asegura or e:celencia. Podr amos tomar de la ni'ersidad del ;0, destruida en la noc e de los Bastones <argo idea de una ni'ersidad #acional, emocr&tica, /utnoma + -ient !ica, + su conce to conocimiento como eslabn indis ensable de la inde endencia tecnolgica + como tal, d autonom a del a s, ero no estamos obligados a seguir el talante tecnocr&tico de su Podr amos tomar de la ni'ersidad de los =70 la discusin sobre las c&tedras nacional im ortancia en la construccin de un ensamiento ro io, %ue lle'e realmen oblacin %ue nos aga los sueldos + toda esta in!raestructura, ero no necesariamen co iar la 'iolencia de esa d>cada. e la eta a %ue me toc 'i'ir como estudiante, como residente de centro, odemos tomar la idea de artici acin colecti'a, de construccin democr&tic consenso, ero no es obligado intentar re roducir mecanismos de artici acin %ue es %ue +a no !uncionan bien, como las asambleas e incluso los rganos colegiados %ue muc terminan coo tados or intereses sectarios. <os rituales tiene adem&s un roblema asi como en la re roduccin del gol de Po+ sol los inc as de -entral, en la re roduccin de los rituales re!ormistas 'an ma+oritari e!ormistas, + en los rituales de los ?70, los setentistas. /mbos reconstru+en un as como suelen ser los mitos, son m&s est&ticos %ue liberadores. -reo en cambio %ue la tarea es, a artir de ese asado, 'er nuestra deuda endiente + ella. 1

description

A 30 años de la normalización que significó hacer concursos publicos por antecedentes y oposición para nombrar a los docentes, y formar luego con ese claustro de docentes regulares Consejos Académicos que, sumados a Graduados y Alumnos, eligieron a las Autoridades de la Facultad, uno de los protagonistas de ese momento, que en 1985 era Presidente del Centro de Estudiantes, habla en un acto convocado por el Rector de la Universidad Nacional de Mar del Plata

Transcript of 30 Aniversario de La Normalización Democrática

30 aniversario de la normalizacin democrtica

30 aniversario de la normalizacin democrtica.G. B. Mar del Plata, 30 de junio de 2015

El 19 de diciembre de 1971 se jug en el Estadio Monumental una de las semifinales del Torneo Nacional. Se enfrentaban nada menos que los clsicos rivales rosarinos, Newell's Old Boys y Rosario Central. En la mitad del segundo tiempo, el jugador de Central Aldo Pedro Poy se mand una brillante palomita que sorprendi al defensor y venci al arquero, concretando el nico gol del partido que le permiti la victoria a Central. Ese gol y sus circunstancias se hicieron mticos, y as es que para festejarlo, todos los 19 de diciembre recrean el gol en la cancha de Central, e incluso fanticos de Central han llevado a reproducirlo en otras canchas del mundo. En un ritual que se repite, le tiran la pelota a un Poy que obviamente est cada vez ms viejo para que haga de nuevo la palomita que lo llev a la gloria. El festejo anual de este episodio ha llevado a intentar incluirlo en los records Guinnes como el gol ms celebrado de la historia.

Y a mi me parece que a veces en la Universidad estamos as, recreando goles del pasado en un ritual que cada vez menos entienden. Tirando centros que todos conocemos para que jugadores cada vez ms pelados recordemos nuestras hazaas, la mayora reales, algunas agrandadas por nuestra memoria o nuestro ego.

Creo en cambio que lo que necesitamos es usar ese pasado mtico para darnos fuerza, pero no reproducirlo. Observar los ideales del pasado, pero no necesariamente sus herramientas. Tenemos una historia muy rica, pero si solamente nos quedamos con los rituales nos quitamos a nosotros mismos la posibilidad de crecer.

Dentro de esa historia, podemos tomar de la Reforma Universitaria de 1918 los conceptos centrales: autonoma universitaria, cogobierno, extensin universitaria, concursos de oposicin e incluso algunos que hemos negado con nuestras acciones, como la periodicidad de las ctedras, pero no vestirnos con levita, no necesariamente creer que el gobierno tripartito asegura por s solo la excelencia.Podramos tomar de la Universidad del 60, destruida en la noche de los Bastones Largos de 1966, la idea de una Universidad Nacional, Democrtica, Autnoma y Cientfica, y su concepto central del conocimiento como eslabn indispensable de la independencia tecnolgica y como tal, de toda autonoma del pas, pero no estamos obligados a seguir el talante tecnocrtico de sus propuestas.Podramos tomar de la Universidad de los 70 la discusin sobre las ctedras nacionales y su importancia en la construccin de un pensamiento propio, que lleve realmente mejoras a la poblacin que nos paga los sueldos y toda esta infraestructura, pero no necesariamente tenemos que copiar la violencia de esa dcada.De la etapa que me toc vivir como estudiante, como presidente de centro, como consejero, podemos tomar la idea de participacin colectiva, de construccin democrtica, de bsqueda del consenso, pero no es obligado intentar reproducir mecanismos de participacin que estamos viendo que ya no funcionan bien, como las asambleas e incluso los rganos colegiados que muchas veces terminan cooptados por intereses sectarios.

Los rituales tiene adems un problema: asi como en la reproduccin del gol de Poy solamente van los hinchas de Central, en la reproduccin de los rituales reformistas van mayoritariamente los Reformistas, y en los rituales de los `70, los setentistas. Ambos reconstruyen un pasado mtico, que como suelen ser los mitos, son ms estticos que liberadores.Creo en cambio que la tarea es, a partir de ese pasado, ver nuestra deuda pendiente y trabajar sobre ella.

Hablbamos hace 30 aos de una Universidad Nacional, Democrtica, Autnoma, Cientfica y abierta al Pueblo.Pienso que se avanz bastante en lo que refiere a Democrtica y Autnoma. Con sus ms y sus menos, la democracia interna funciona. Todos los gobiernos posteriores al 83 han mantenido la autonoma, en un caso de poltica de Estado no muy frecuente en Argentina.

Lo de Nacional dira que tiene un carcter ambiguo, ya que en estos tiempos de globalizacin hay que repensar el concepto en s, tal vez sea una de las tareas ms fuertes y necesarias a futuro. No ser necesario cambiar el trmino por Latinoamericana? En tiempos en que las fuerzas desenfrenadas del capitalismo avasallan los Estados-Naciones, tal vez debamos abandonar el concepto de nacional y recuperar el concepto internacionalista caro a los revolucionarios de principio de siglo XX , y tambin a las vanguardias artsticas, como la Bauhaus, de las cuales seguimos siendo herederos

En ciertos aspectos de lo cientfico indudablemente hay enormes avances, de los cuales algunos institutos de nuestra Universidad son brillantes representantes. El problema que veo es que corre el riesgo de transformarse en una elite despegada de la base, de la docencia cotidiana, que ha quedado bastante anquilosada por la llamada carrera docente. No puede haber ciencia sin superacin, sin confrontacin de teoras y sistemas y el sistema adoptado con la consigna de conquista gremial signific el estancamiento de camadas enteras de docentes. Tambin dejamos de apoyar a los docentes ms jvenes, que estn a diario al pie del can, trabajando en contacto directo con los alumnos, y que no poseen incentivos ni aumentos de dedicacin ni beneficios acadmicos a la hora de concursar.La insercin de la Universidad en su regin y en su economa es otra deuda pendiente de las que nos planteamos hace 30 aos. Hay avances muy interesantes: por un lado, los Centros de Extensin Barriales Universitarios en los barrios, todava no hemos logrado que la Universidad sea un factor dinamizador de la economa local, como lo es en muchos lugares del mundo

Lo de abierta al pueblo es posiblemente la mayor de las deudas. El ingreso irrestricto es una quimera nominal, no solamente porque entran solamente aquellos que pueden costearse sus estudios y que han terminado un secundario al cual no todos acceden, sino porque las altsimas tasas de desercin en los primeros aos hablan de que existen problemas que debemos atacar sin vacilar.

La dificultad en resolver este tema desde la Universidad me lleva un ltimo punto: no podremos cumplir el programa democrtico abierto con los concursos sino hacemos algo para cambiar la sociedad. Si bien en estos aos la sociedad argentina avanz en algunos factores que fueron adoptados por todos, como la bandera de los derechos humanos y el reconocimiento de las diferentes elecciones sexuales, en otros aspectos hemos tenido graves retrocesos, como por ejemplo en la intolerancia hacia el que piensa distinto o en el aumento de la inequidad social comenzada con la hiperinflacin de 1989 y nunca revocada, a pesar de los discursos. Mientras no resolvamos ese tema, externo a la Universidad, no podremos cumplir el programa poltico que se plantearon tal vez con desmesurado optimismo docentes, graduados y alumnos de todas las tendencias y partidos en 1983.

Este final parece pesimista, pero cambia el tono si recordamos una de las frases ms felices de aquel Manifiesto Liminar de la Reforma de 1918, inspiradora de gran parte de estos temas: los dolores que quedan son las libertades que faltan.

No estamos para una tonta alegra, ni para solazrnos con viejos rituales: estamos para un entusiasmo activo, que transforme esta deuda pendiente en esperanza y acciones concretas.

PAGE 2