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  • Decoracin corporal prehispnica

    La prctica del adorno corporal y las caractersticas ltimas que ste adopta a lo largo del tiempo y entre distintas culturas son producto de un entramado simblico c]ue atribuye significados al cuerpo mismo -en conjunto ya cada una de sus partes- y a los elementos con que se le viste y adorna. La fund n pri-maria del adorno del cuerpo es es-tablecer una suerte de identidad social, pues quien lleva un cierto tipo de prendas u ostenta alguna modificacin intencional de su apariencia lo hace a partir de pautas culturales compat-ridas con los miembros de su grupo. La prctica de adornar el cuerpo puede adquirir distintos signifi-cados en distintos nive-les y lo que para un grupo tiene un sentido para otro an cercano culturalmente puede adquirir otro.

    En nuestros tiempos, la pin-tura en ojos y boca es una prc-tica esencialmen te asociada a las mujeres, quienes no slo realzan su belleza de acuerdo al canon sino que se hacen parte de un gru-po determinado, el del gnero fe-menino. Hoy da existen hombres, en especial jvenes, que usan de pin-tarse ojos y boca, no con la idea de ser vistos como mujeres sino para identificarse como miembros de un grupo especfico dentro del conjun-to social, uno que comparte visiones

    12/ ARQUEOLOGA MEXICANA

    ENRIQUE VELA

    especficas sobre distintos aspectos como la msica, la moda, etc

    Que la manera de adornar el cuer-po implicaba la pertenencia o no a un grupo determinado, es decir que fun-cionaba corno sea de identidad, se ejemplifica en Gonzalo Guerrero, aquel nafrago espaol que tras convivir con los mayas de la baha de Chetumal, Quintana Roo, se integr plenamente a ellos y rechaz el ofre-cimiento de sus compatriotas de res-catarlo. Adems de su negativa a unir-

    se a los espaoles, lo que ms llam la atencin de stos fue que se

    haba "labrado" cara y cuerpo y portaba orejeras y narigue-ras. Esto no slo muestra que se identificaba con los ma-yas, sino que stos lo reco-nocan como noble, pues esta era una prctica reser-

    vada a la elite. En las crni-cas de la poca son frecuentes

    las menciones a las prcticas de adorno corporal que existan en-tre los habitantes de la regin; de hecho se trataba de una costum-bre que se encontraba no slo en-tre los pueblos mesoamericanos

    sino entre las sociedades nmadas del norte del pas, aunque cabe acla-

    rar que con modalidades distintas.

    Figurilla de Chupicuaro , Guanajuato, con el cuerpo pintado. Preclsico Tardo . MNA. Dere-cha: Vaso maya; los personajes llevan pintura corporal. Clsico Tardo. Procedencia desco-nocida. MCP. FOTOS MARCO ANTONIO PACHECO I RAlcES

  • DECORACiN CORPORAL PREHISPNICA / 13

  • Segn las fuentes, las mujeres pblicas se pintaban el cuerpo. Detalle del mural La gran Tenochtitlan vista desde el mercado de Tlatelolco, de Diego Rivera , 1945. Palacio Nacional. Derecha: Tecuepotzin, noble azteca elegantemente vestido y luciendo un bezote y orejeras. Cdice Ixtlilxchitl, f. 105r. DIGITALIZACIN RAlcES REPROGRAFA M A PACHECO I RAicES

    14 / ARQUEOLOGA MEXICANA

    El adorno corporal en el Mxico prehispnico inclua variantes que po-dan ser temporales o permanentes. Entre las primeras estn la pintura corporal, el vestido y la joyera sobre-puesta (como anillos, collares o dia-demas), y entre las segundas, la esca-rificacin, el tatuaje, la joyera que implicaba horadar la piel (orejeras, be-zotes o narigueras), la deformacin del crneo y el limado y la incrusta-cin dentarios. En esta edicin deAr-que%ga Mexicana incluimos slo aquellas prcticas que tenan la piel como soporte principal-en algn gra-do-, ya sea porque se le cubra con pigmentos o porque de plano se le henda u horadaba.

    El adorno corporal permanente o temporal posea dos sentidos bsi-cos: sealar una identidad social y su-mar una cual.idad determinada al cuerpo en ocasiones sealadas. Por ejemplo, en los rituales al llevar un adorno con un significado especfi-co, que poda ser lo mismo unas sim-ples rayas de colores que complica-dos diseos, aqul que lo portaba representaba temporalmente a un ser sobrenatural, como el caso de los mi-mixcoas entre los mexica, los borra-dos entre los caras, y los "jaguares" en Chiapas y Guerrero.

    Como ver el lector a lo largo de esta edicin, las distintas prcticas de adorno corporal tienen races bastan-te antiguas, y se encuentran lo mismo en el rea mesoamericana (los ejem-plos abarcan desde el Preclsico Tem-prano, 2500-1200 a.c., al Pos clsico Tardo, 1200-1521 d.C.) que entre las sociedades del resto del territorio meXIcano.

    Cabe sealar que el adorno del cuerpo no es privatiyo de grupos se-dentarios; el registro etnogrfico a ni-vel mundial y una considerable canti-dad de representaciones rupestres en Mxico dan cuenta de su uso entre grupos de caza dores-recolectores bajo las mismas premisas: sealar la

  • Los COLORES

    DE LOS QUE VENDEN COLORES, TOCHMITL y XCARA, ETCTERA

    El que vende las colores que ponen encima de un cesto grande es desta pro-piedad: que cada gnero de color pnelo en un cestillo encima del grande, y las colores que vende son de todo gnero: las colores secas y colores mo-lidas, la grana y amarillo claro, azul claro, la greda, el cisco de teas, cardeni-llo, la alumbre y el ungento amarillo llamado axi, y el chapuPlltli mezclado con este ungento amarillo, llmase tzictli, y el almagre. Vende tambin co-sas olorosas como son las especies aromticas que se llaman en la lengua tli-Ixchitl, mecaxchitl, hueinacaztli. Tambin vende casillas de medicina, como es la cola del animalejo llamado tlacllatzin, y muchas yerbas y races de di-versas especies. Allende de todo lo dicho, vende tambin el betn que es como pez, y el encienso blanco y agallas para hacer tinta, y la cebadilla y pa-nes de azul, y aceche, y marcaxita.

    Bernardino de Sahagn, Historia general de lar cosar de Nueva Espaa, lib. X, cap. XXI

    DE LAS COLORES, DE TODAS MANERAS DE COLORES

    Prrafo primero, trata de la grana y de otras colores finas

    A la color con que se pie h grana, que llaman lIocheztli, que quiere decir "san-gre de tunas", porque en cierto gnero de runas se cran unos gusanos que llaman cuchinillas, apegadas a las hojas; y aquellos gusanos tienen unos san-gre muy colorada. sta es la grana fina; esta grana es muy conocida en esta tierra y fuera della, y grandes tratos della llega hasta la China y hasta Turqua. Casi por todo el mundo es preciada y tenida en mucho.

    A la grana que ya est purificada y hecha en panecito llaman tlacudhllar Ila-palli, que quiere decir "grana recia o fina". Vndenla en los tinquez hecha panecillos para que la compre los timoreros dellochntit/ y los pintores.

    Hay otra manera de grana baxa o mezclada que llaman tlapalllCxtli, que quiere decir "grana cenicienta". Y es porque la mezclan o con greda o con harina. Tambin hay una grana falsa que tanbin se cra en las hojas de la tuna, que la llaman tlapa/llext/i o ixq/lin/ili/lhqui, que daan a las cunchiniIJas de la buena g[rJana,), secan las hojas de las tunas donde se ponen. Y tanbin sta la cogen para envolverla con la buena grana, para venderla, lo cual es gran engao.

    Al color amarillo fino lImanle xuchipa/li, que quiere decir "tintura de flo-res amarillas". Este color amarillo trenla y cras e en tierras calientes.

    A la color azul fina llaman ",atlalli, que quiere decir "azul". Este color se hace de flores azules. Color es muy preciada y muy aplacible de ver. Llma-se tambin cardenillo en la lengua espaola.

    Hay un color que es amarillo claro, al cual llaman zacatlaxealli, que quiere decir "pan de yerba", porque se amasa de unas yerbas amarillas que son muy delgadas. Vndese en los tinquez. Son como turtillas amarillas amasadas y delgadas. Usan destas turtillas para teir de amarillo o para hacer color ama-rilla para pintar.

    Hay una color colorada blanquecina que se llama dehiotlo achitell. No tie-ne compositin ni terivatin este nombre. Hcese en tierras calientes. Es flor que se moele. Vndese en los tinquez. Es medicinal para la salna, ponin-dolo encima de la saIna. Es de color de bermelln. Mzclanlo con ungen-to amarillo que se llama ax, para poner sobre la salna.

    16 / ARQUEOLOGA MEXICANA

    Prrafo segundo, de otro colorado, no tan fino como la grana, y de otras colores no finas

    Hay en esta tierra un rbol grande de muchas ramas y grueso tronco que se llama hllitzcudhuitl. Tiene la madera colorada. Deste madero, hedindolo, h-cenlo estillas y mjanlo, y remjanlo en agua, tie el agua, hcela colorada. y este colorado no es muy fino. Es como negrestino; pero revolvindola con piedra lumbre y con otros materiales colorados hcese muy colorado. y con este color tien las cueros colorados de venado, y para hacerle que sea tinta negra mzclanle aceche o tlal(yae, y con otros materiales negros que revuelven con el agua hcese muy negra, y tien ella los cueros de venado que son negros.

    Hay en esta tierra un fructo de un rbol que se cra en tierras calientes, el cual fructo no es de comer. Llmase este fructo nacazclotl. sase este fruc-to para con l y con aquella tierra que se llama tlal(yae o aceche, y con csga-ras de granadas, y con goma que se llaman mizquicopalli se hace muy buena tinta para escrebir.

    Hay en esta tierra una mara o arbusto a manera de mata que se hacen en las tierras calientes, que se llaman tzhuatl. Las hojas desta mata o ar-busto cucense juntamente con piedra lumbre y con Ilal(yae, y hcese una color colorado muy nno con que tien el tochmitl colorado. Hase de her-vir mucho, etctera.

    Hay una yerba en las tierras calientes que se llama xiuhqlllitl. Majan esta yerba y esprmenla el zumo, y chanlo en unos vasos. All se seca o se cuaja. Con este color air se tie lo azul oscuro l' resplandeciente. Es co-lor preciada.

    Hay color azul claro, de color del cielo, lo cual llaman texotli y xoxhuic. Es color muy usada en las ropas que se visten, como son las mamas de los hombres y huipiles de las mujeres. Hcese de las mismas flores que se hace el ",allall o o[sic, repetido] color fino.

    Hay una piedra amarilla que molida se hace de color amarillo, de que usan los pintores. Llmanla tecozhuitl.

    Hacen estos naturales tinta del humo de las teas, y es tinta bien nna. Llmanla tlilN cotl. Tienen para hacerlo unos vasos que llaman Ilileon/all en que se hacen, que son a manera e alquitaras. Vale para muchas tintas para escribir, y para medicinas que las mezclan con muchas cosas que sir-ven para medicinas.

    Hay aceche, que se llama tla/(yac, que aprovecha para muchas cosas, espe-cialmente para cosa de tinir y hacer tinta. Hcese en muchas partes, como es en Tepxic, etctera.

    Prrafo tercero, de ciertos materiales de que se hacen colores

    La piedra lumbre, cosa bien conocida, llmase tlalxcotl; quiere decir "tierra aceda o agra". Hay mucha con esta tierra. Vndense en los tinquez. Hay mucho trato con della, porque los tintoreros la usan mucho.

    Una piedra de que usan los pintores, que es algo parda, que tira a negro, es un color de que usan los que hace tecomates de barro. Es como margaxi-ta negra y molida. Pintan con ella los tecomates. Despus de cocido parece muy un negro y resplandeciente.

    Ha)' en esta tierra bermelln. sanla mucho como en Espaa. Llma-nlo tlhllitl.

    Hay greda. sanla mucho las mujeres para hilar. Vndense en los tin-quez. Llmase tza/l.

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  • pertenencia a un grupo, resaltar el es-tatus de algunos miembros del grupo y dotar de significado al cuerpo mis-mo en el ritual colectivo.

    Aunque el estudio de las modifica-ciones en la piel es bastante compli-cado para la arqueologa, pues con excepcin de la de los cuerpos modi-ficados es un elemento que se desin-tegra totalmente, existen algunas fuentes de informacin que permiten atisbos sobrela manera en que se prac-ticaban y la forma que tenian. Entre esas fuentes destacan tres: la informa-cin etnogrfica, la etnohistrica y la arqueolgica.

    La informacin etnogrfica resul-ta til sobre todo para determinar el contexto en que se da el adorno, su significado y los materiales utilizados. Est\.1dios recientes entre grupos como los coras y los huicholes indican que la pintura corporal que utilizan es si-milar a la que se observa en piezas ar-queolgicas procedentes del Occi-dente de Mxico.

    Lainformacin etnohistrica, con-formada por cdices, crnicas y reco-pUaciones de la poca colonial, es es-pecialmente valiosa para acercarse al tema. En esos documentos se encuen-tran referencias sobre las dis tin tas prcticas de adorno corporal y su sig-nificado, as como sobre a quines se les aplicaban y en qu ocasiones. En-tre los ejemplos podemos sealar la prctica del tatuaje entre algunos gru-pos del norte, como los pata de So-nora; se dice que las madres tatuaban a los recin nacidos alrededor de los prpados con puntos negros con el fin de embellecerlos, y con el paso del tiempo se iban haciendo tatuajes en el resto del cuerpo. Los guerreros pa-ta, as como los guachichiles de Zaca-tecas y Coahuila, llevaban en el rostro lineas onduladas. Fray Diego de Lan-da, en su Relacin de las cosas de Yucatn, hace una elocuente descripcin de los motivos que llevaban a los mayas a ta-tuarse y lo que esto implicaba:

    18 / ARQUEOLOGA MEXICANA

    Labrbanse los cuerpos, y cuanto ms, (por) tanto ms valientes y bravos se tenian, porque ellabrarse era gran tor-mento. y era de esta manera: los ofi-ciales de ello labraban la parte que que-ran con tinta y despus sajbanle delicadamente las pinturas y as, con la sangre y tinta, quedaban en el cuerpo las seales; y que se labraban poco a poco por el grande tormento que era, y tambin despus se (ponan) malos porque se les enconaban las labores y supurbanse y que con todo esto se mofaban de los que no se labraban.

    Estas fuentes etnohistricas tambin informan sobre un elemento central en la decoracin del cuerpo, ya sea efme-ra o permanente: los colores. Para los pueblos prehispnicos, como para toda sociedad en cualquier poca, los colores tenian cualidades y significados precisos y las tonalidades en que se pin-tabanlos distintos diseos contribuan a abundar o precisar su simbolismo.

    "Mama tolteca" encontrada en Comatln, Huajuapan de Len , Oaxaca. Fue estudada por Leopoldo Batres en 1889, quien report tatuajes en los brazos de la mama. Derecha: Hombre de la regin de Parral con tatuaje en el rostro. leo de 1711 atribuido a Manuel de Arellano. Museo de Amrca, Madrid. REPROGRAFIA. fLAN S lEBOREIRO R DIGITALIZACiN RAlcES

    La informacin arqueolgica se centra en el numeroso conjunto de re-presentaciones (en cermica, piedra, grabados, pintura mural) de seres hu-manos que llevan alguna clase de ador-no corporal. En ellas se observan las distintas variantes usadas en la poca prehispnica: pintura corporal, esca-rificacin, tatuaje, joyera permanen-te, y permiten determinar su antige-dad y su distribucin geogrfica.

    Aqu conviene aclarar que con la sola observacin de las representacio-nes resulta complicado determinar si el adorno que portan, con excepcin obvia de las narigueras, los bezotes y las orejeras corresponde a un tipo de-terminado. Si bien hay algunas situa-ciones en que esto es claro, como el caso de los cdices mixtecos en los que los personajes -como 8 Venado, Garra de Jaguar- aparecen en distin-tas situaciones con pintura corporal diferente, evidentemente se trata de decoracin temporal. Lo mismo pasa con los personajes pintados que se ven en las representaciones de fies tas mexicas - sabemos por las crnicas coloniales que se trataba de pintura temporal- o con los pintados en las vasijas mayas - se sabe que se pinta-ban el cuerpo para representar tem-poralmente un papel determinado.

    Sin embargo, las cosas en las repre-sentaciones en cermica o piedra no son tan claras. Para los fines de esta edicin, en la que las piezas del cat-logo han sido dispuestas de acuerdo a la tcnica para adornar el cuerpo, la divisin se hizo siguiendo criterios un tanto arbitrarios que conviene expli-car. Cuando la decoracin abarca grandes reas o consta de lineas an-chas y largas supusimos que, un poco en comparacin con las representa-ciones en cdices que sealamos li-neas arriba, se trataba de pintura cor-poral, aunque no se puede descartar que se trate de tatuajes. Respecto a lo incluido en este ltimo apartado, to-mamos en cuenta la opinin de otros

  • autores y el hecho de que se trata de motivos complejos y logrados con li-neas delgadas, en proporcin a los ejemplos de pintura corporal; aunque al igual que con los ejemplos del apar-tado previo, no puede descartarse que sean producto de pintura temporal hecha con sellos. Los ejemplos de es-carificacin fueron considerados como tales por presentar el abulta-miento de la piel caracterstico de esta tcnica, aunque no puede descartarse completamente que en algunos casos se trate de tatuajes.

    Lo ciertO es que en su conjunto, los ejemplos presentados en este catlo-go visual son la expresin de prcti-cas que se realizaron por siglos y que para la poca de la conquista haban

    alcanzado altos grados de sofistica-cin. Seguramente la elaboracin de tatuajes, escarificaciones, sellos y la propia pintura temporal estaban en manos de especialistas que habran re-cibido de sus antecesores, tal vez miembros de su familia, los saberes necesarios. Con la conquista esas prcticas desaparecieron, principal-mente las permanentes, pues no sin razn fueron vistas como expresiones del culto, de identificacin grupal y de reforzamiento del orden social, mbi-tos todos en los que los recin llega-dos se esforzaron en imponer su vi-sin de las cosas. Slo entre algunos grupos permaneci la costumbre de pintarse el cuerpo en determinadas ceremomas.

    Ahora en OtrO contextO, con otras tcnicas y con di timo materiales, el cuerpo se sigue adornando, aunque ahora la intencin e principalmente esttica. Pensemos por ejemplo en el ya mencionado maquillaje de las muje-res, una prctica universal hoy en da para embellecerlas an ms. Tras un lar-go periodo en que el tatuaje fue visto como prctica propia de delincuentes o des adaptados, ha cobrado auge en las ltimas dcadas y se practica entre los jvenes, y no tanto, de toda condicin social. Es una moda, no cabe duda, pero en el fondo tiene las mismas implica-ciones que tuvo para las sociedades an-tiguas: identificar a quien lo lleva como miembro de un grupo social y aadir significados al propio cuerpo.

    Mujeres con pintura en el rostro en el mercado de Tlatelolco segn Diego Rivera. Pintura mural en Palacio Nacional , 1945. Derecha: Padre e hija huicholes durante la ceremonia de hikuri neixa. Cohamiata, Mezquitic, Jalisco, 1973. OIGITAUZACION RAlcES. FOTO GUILLERMOAlDANAfRAJCES

    20 / ARQUEOLOGiA MEXICANA

  • PINTURA CORPORAL

    A diferencia de otras prcticas para el adorno utilizadas en la poca prehispnica, la de la pintura corporal se distingue por su carcter efmero y porque no estaba restringi-da a la elite, si bien su uso en ocasio-nes pblicas estaba regido por nor-mas claramente establecidas. Era adems una prctica que en cierto sentido escapaba al uso meramente ritual o de identificacin social -que tenan en esencia las otras clases de adorno del cuerpo-, pues tambin se utilizaba cotidianamente.

    Que la pintura corporal tena un significado enraizado en la cosmovi-sin se demuestra en el hecho de gue a los distintos dioses se les represen-taba con el cuerpo pintado con colo-res determinados, de acuerdo con su mbito de accin y sus atribuciones,

    mismos gue deban utilizar los sacer-dotes que participaban en su culto.

    En las ceremonias pblicas la pintu-ra corporal serva para identificar el pa-pel que tenan los participantes. As, aquellos individuos que seran sacrifica-dos eran, por ejemplo, pintados con di-seos y colores especficos, en tanto que los sacerdotes, a decir de los cronistas, "se embadurnaban" con colores apro-piados al rito que se celebraba. Algo si-milar ocurra con los guerreros que se dirigan a campaas militares, o que re-gresaban de ellas, quienes se pintaban el cuerpo de un color para pelear y de otro para recibir honores por sus triunfos.

    Pintarse de manera temporal para llevar a cabo rituales es la nica prc-tica de adorno corporal prehispnica que pervive, pues el tatuaje, la escari-ficacin y otras prcticas fueron pro-

    En las pinturas rupestres de la Sierra de San Fran-cisco, Baja California Sur, son comunes las re-presentaciones de seres humanos con el cuerpo pintado, como este ejemplo de Cueva La Pinta-da, seguramente porque aluden a participantes en algn rito. FOTO ANDR; CABROllER I RAlcES

    hibidas durante la conquista por sus fuertes connotaciones religiosas y su asociacin con el poder poltico, y ter-minaron por extinguirse. La pintura del cuerpo sobrevivi en la medida en que lo hicieron varios ritos -sobre todo aquellos relacionados con la fer-tilidad- en los que el hecho de que los participantes lleven ciertos colores y smbolos resulta indispensable. Cla-ros ejemplos de esta pervivencia se encuentran en grupos tnicos de dis-tintas regiones como el Gran Nayar, la Sierra Tarahumara y Tabasco.

    En la fiesta de la veintena de tlacaxipehualiztli, los individuos con el cuerpo pintado con rayas blancas y rojas y el rostro negro representaban a los mimix-coa. Primeros Memoriales, f. 250r.

    22/ ARQUEOLOGA MEXICANA

  • En este fragmento de pintura mural, los persona-jes con el cuerpo pintado de negro representan a sacerdotes de Xpe Ttec. Cultura Centro de Ve-racruz. Epiclsico. Las Higueras, Veracruz. MAX. FOTO CARLOS BLANCO I MICES

    Vaso del Clsico maya. El cuerpo pintado de negro del personaje indica

    que se trata de un guerrero. MCP. FOTO: MARCO ANTONIO PACHECO J RAleEs

    24/ ARQUEOLOGA MEXICANA

  • r' Los participantes en las fiestas de las veintenas lle-vaban atuendos y pinturas que iban de acuerdo con su papel en ellas. En esta imagen de la fiesta de leo-lleco, los sacerdotes tienen el cuerpo pintado de ne-gro y los sacrificados llevan franjas rojas y blancas. Primeros Memoriales, f. 252r. REPROGRAFtA MARCO ANTONIO PACHECO I RAlcES

    Durante las celebraciones de Semana Santa , los caras se pintan el cuerpo de negro para representar a los "borrados"-judos (xumuabikan) que persiguen al Sol. Mesa del Nayar, Nayarit, 1970.

    PINTURA CORPORAL ~S

  • Figura que representa a un hombre con pintura negra en el cuerpo. Preclsico.

    Apaxco, estado de Mxico. MAA. FOTO: MARCO ANTONIO PACHECQ I RAlcES

    26/ ARQUEOLOGA MEXICANA

    Figurilla femenina con el cuerpo pintado o tatuado. Cultura huasteca . Posclsico. Regin de Pnuco, Veracruz. MAX.

    FOTO RAFAEL DON1Z I RAtCES

  • La costumbre de pintar o tatuar el cuer-

    po con elaborados diseos, las ms de las veces geomtricos, era una prctica comn en la cultura de Chupcuaro. Fi-

    gurilla masculina. Preclsico Tardo.

    Chupcuaro, Guanajuato. MRA. FOTO MARCO ANTONIO PACHECO I RAlcES

    PINTURA CORPORAL / T

  • Mara Coca, huichola, esposa del gobernador. San Andrs Cohamiata , Mezquitic, Jalisco, 1970.

    Tigre Qaguar) participante en el poch: danza de carnaval en Tenosique, Tabasco. Las manchas caractersticas del jaguar se logran mediante la impresin de crculos con el pico de una botella untado de pintura negra.

    28/ ARQUEOLOGA MEXICANA

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    El poch. "Atgrado" de carnestolendas de Pa-lenque, elaborado por Jean-Frdric Waldeck en 1832.

    Recreacin de la Semana Santa cora. Sala Gran Nayar, MNA.

    Indgenas coras, xumuabikari o borrados duran-te la celebracin de la Semana Santa. Rosarito ,

    Nayarit, 1999.

  • ANA.

    Cora xumuabikari O borrado durante la celebra-cin de la Semana Santa. Rosarito, Nayaril. 1999.

    Tarahumara con pintura ceremonial para las celebraciones de Semana Santa . Norogachic, Chi-huahua, 1976.

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    LA PINTURA CORPORAL

    ~ Amihmitl , dios de la caza . Sacrificados en la fiesta de teotleco. Pintura mural en Las Higueras.

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    30/ ARQUEOLOGA MEXICANA

  • Pintura rupestre en La Pintada. Mimixcaa en la fiesta de tlacaxipehualiztli. Pach ' atigrada".

    PINTURA CORPORAL 31

  • Vasija efigie con decoracin corporal. Posclsico Tardo. Tanqun, San Luis Potos. MNA

    FOTO MARCO ANTONIO PACHECO I RAlcES

    32/ ARQUEOLOGiA MEXICANA

    Olla efigie. Representa a una mujer que lleva pintura o tatuaje sobre cuerpo y rostro. Cultura Casas Grandes. Mogolln Tardo (1300-1521 d.C.). Janos, Chihuahua . MNA. FOTO MARCO ANTONIO PACHECO J RAleEs

    Vasija efigie con decoracin corporal. Cultura huasteca. Posclsco Tardo. Vista Hermosa, Tamaulipas. MNA.

    FOTO MARCO ANTONIO PACHECO J RAlcES

  • Los huastecos se distinguan por adornar su cuerpo con elaborados diseos, como

    esta mujer que luce pintura o tatuaje en el cuerpo y el rostro. Posclsico Tardo. Vsta Hermosa, Tamaulipas. MNA. FOTO. MARCOANTONIQ PACHECO I RAlCES

    PINTURA CORPORAL / 33

  • PINTURA FACIAL

    E n esencia, la pintura facial pre-senta las mismas caractersticas que la corporal en cuanto a su carcter efmero y a que los colores y diseos utilizados tenian significados espec-ficos y deban utilizarse en ocasiones determinadas y por ciertos persona-jes. En este sentido, la divisin entre pintura caporal y facial que se presen-ta en esta edicin especial de Arqueo-loga Mexicana es ms que nada ilustra-tiva, aunque hay algunos puntos en relacin con el uso de pintura en el rostro que vale la pena sealar.

    En el caso de la pintura que cubra distintas partes del cuerpo, si no es que todo, sta constitua el medio principal para transmitir un significa-do; cuando la pintura se limitaba a cu-brir el rostro era un componente ms de un complejo simblico mayor en el que tambin confluan otros ele-mentos del atuendo: ropajes, tocados, orejeras, pendientes, etc. Esto es vli-do tanto para el adorno de gobernan-tes y sacerdotes como respecto a las representaciones de los dioses, como lo muestra la acuciosa relacin de los atributos y atavos de los dioses mexi-

    Figurilla que representa a un gobernante o sacer-dote tolteca . Lleva el rostro pintado con colores y diseos seguramente asociados a una ceremo-nia especfica. Posclsico. Ecatepec, estado de Mxico. MNA.

    34 / ARQUEOLOGiA MEXICANA

    cas recopilada por fray Bernardino de Sahagn, en la que cada deidad cuen-ta con una pintura facial de colores y diseos especficos.

    En la medida que los distintos co-lores tenian significados concretos, las caractersticas ltimas de la pintura fa-cial se encontraban determinadas por

    el evento en el que se participara. Un ejemplo de esta variedad de decoracio-nes se encuentra en las pginas del C-dice Nuftall, en el cual 8 Venado, Garra de Jaguar y otros seores mixtecos os-tentan diversas pinturas faciales de acuerdo a la actividad que realizan o la ceremonia en que partlClpan.

    Seores mixtecos participan en una ceremonia en el rumbo del norte; cada uno ostenta pintura facial. Cdice Vindobonensis, lm. 21.

  • Mujer con el rostro adornado con motivos en forma de cruz, alusivos a los rumbos del universo.

    Cultura Centro de Veracruz. Clsico. El Faisn , Veracruz. M>

  • Fragmento de incensario con la representacin del dios maya del comercio: Ek Chuah. Cultura maya.

    Posclsico Tardo. Mayapn, Yucatn. MPC. ILUSTRACiN MAGOA JUREZ ' RAleES

    36/ ARQUEOLOGA MEXICANA

  • LA PINTURA FACIAL DE LOS D IOSES MEXICAS

    Entre las culturas mesoamericanas cada dios posea atributos especficos en cuanto a su atuen-do y adorno. Uno de ellos era la pintura corporal, en no pocos casos slo facial. A cada deidad le corresponda una combinacin y disposicin de colores determinada. Estas no eran aleato-rias, pues se asociaban con el dominio de cada dios y con sus atribuciones; en la medida que los propios colores posean significados particulares, a los que adornaban a los dioses se les asignaban cualidades similares a las de la propia deidad. Una fuente de primer orden para acer-carse a la pintura asociada a cada deidad, en especial a las del panten mexica, lo constituyen dos obras producto de las indagaciones de fray Bernardino de Sahagn: el Cdice Florentino y los Primeros lvfcmoriales.

    ..

    Huitzilopochtli. Cdice Florentino, lib. 1, prlogo, f. 10r.

    Pynal. Cdice Florentino, lib. 1, prlogo, f. 10r.

    Tezcatlipoca. Primeros Memoriales, f. 261 r.

    Xiuhtecuhtli. CdIce Florentino , lib. 1, prlogo, f. 11v.

    Cihuacatl. Primeros Memoriales, f. 264r.

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    I i .$

    ~

    i Tlazoltotl. Cdice Florentino, lib. 1, prlogo, f. 11 r.

    Xipe-Ttec. Cdice Florentino, lib. 1, prlogo, f. 12r .

    Macuilxchitl. Primeros Memoriales, f. 265v.

    Chicomecatl. Cdice Florentino, lib. 1, prlogo, f. 10v.

    Yotl. Primeros Memoriales, f. 266r.

    PINTURA FACIAL 3-

  • Representacin de un cargador que lle-va el rostro pintado de negro. Cultura za-

    poteca. Posclsico. Yagul , Oaxaca. MCO. FOTO CARLOS BLANCO I RAleES

    Personaje de alto rango que, adems de narigue-ra , orejeras y un elaborado tocado, muestra el

    rostro pintado o tatuado. Cultura Tumbas de Tiro. Preclsico. Nayarit. MNA. FOTO IGNACIO GUEVARA I RAlcES

  • Representacin de Tezcatlipoca con la mitad del rostro pintada de negro, uno

    de sus rasgos caractersticos. Cultura mexica. Posclsico Tardo. Templo

    Mayor de Tenochtitlan. MTM. FOTO CARLOS BLANCO I RAleES

    PINTURA FACIAL 39

  • LA PINTURA FACIAL

    Detalle de la pintura mural del conjunto de Tepantitla en Teotihuacan. Se trata de un jugador de pelota con el rostro pintado con dos franjas.

    Detalle de una vasija que muestra a un guerrero maya con el rostro pintado de negro. Posclsico Temprano. Chichn Itz. Yucatn. MNA.

    40 I ARQUEOLOGIA MEXICANA

    Figurilla femenina. Preclsico Tardio. Chuplcuaro, Guanajuato. IARA.

    Vasija efigie con pintura o tatuaje en el rostro. Cultura Casas Grandes (1200-1300 d.C.). Paquim, Chihuahua. MCN.

    Rostro pintado del seor mixteco 5 guila, Cara de Piedra-Frente de Concha. Cdice Nultall, lado 1, lm 66.

  • ).MRA.

    randes

    ente de

    Figurilla femenina utilizada en ceremonias asociadas a la fertilidad. Epiclsico. Xochitcatl, Tlaxcala. MNA.

    Figurilla femenina con pintura facial. Epiclsico. Xochitcatl, Tlaxcala. MNA.

    '." ".

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    1 ~~""'"-'IJ"lj Pintura facial del seor mixteco 8 Venado, Garra de Jaguar. Cdice Nuttall, lado 1, lm. 75.

    Dignatario tolteca. Posclsico Temprano. Tula, Hidalgo. MNA.

    FOTO: MARCO ANTONIO PACHECO J RAleEs

    Msico que participaba en un ritual dedicado a Xochipilli. Cdi-ce Tudefa, f. 17r.

    Guerrero con pintura facial en un mural que se encontraba en Malinalco, estado de Mxico. Cultura mexica. Posclsico Tar-dio. MAT.

    PINTURA FACIAL .! I

  • LA PINTURA FACIAL

    I \

    ~

    42/ ARQUEOLOGA MEXICANA

    Mscara de Chuplcuaro.

    Gobernante o sacerdote tolteca.

    Huichola en la ceremonia del peyote.

  • Huicholes en la fiesta de hikuri neix8.

    Izquierda a derecha: los seores mixtecos 9 Agua , 8 Venado y 4 Jaguar

    PINTURA FACIAL -13

  • 44/ ARQUEOLOGA MEXICANA

    Vasija que representa una cabeza hu-mana con el rostro pntado o tatuado.

    Cultura huasteca. Posclsco Tar-do . San Lus Potos. MNA.

    FOTO MARCO ANTONIO PACHECO I RAleES

    Mscara con una profusa decoracin de quincunce, motivo asociado simblicamen-te con los rumbos del universo. Preclsico Tardo. Chupcuaro, Guanajuato. MRA. FOTO' MARCO ANTONIO PACHECO I RAleES

  • Personaje con el ros-

    tro pintado o tatuado. Cultura Tumbas de liro. Clsico Tempra-

    no. Colima. MNA. FOTO: M CARRtERl1 ARCHIVO INAM

  • SELLOS

    U n elemen to frecuente en los con-textos arqueolgicos mesoame-ricanos de prcticamente todos los periodos lo constituyen objetos de barro -aunque se han encontrado unos cuantos ejemplares en piedra-planos o cilindricos que llevan incisas figuras de diversa ndole. Se trata de los llamados sellos (objetos en los que la cara grabada es plana) y pintaderas (aquellos redondos en los que el gra-bado cubre toda la circuferencia). Ge-neralmente se ha asumido que eran utilizados para estampar los motivos que llevan grabados, y de hecho algu-nos ejemplares conservaban res tos de pigmentos, usualmente negro, blanco, rajo o amarillo.

    Si bien existe acuerdo so bre ese uso, sobre lo que no lo hay es sobre la su-perficie en que se estampaban, pues poda haberse hecho sobre corteza, tela, cermica o sobre la pieL La idea ms generalizada es que sellos y pin-taderas se utilizaban para adornar el cuerpo, supuesto basado ms en una deduccin lgica que en evidencia concreta, aunque esta ausencia de pruebas se justifica por el hecho de que su uso sobre la piel era efme-ra por necesidad.

    La fabricacin de sellos y pintade-ras es una prctica bastante antigua y

    46/ ARQUEOLOGIA MEXICANA

    difundida en Mesoamrica; se cono-cen ejemplares desde el Preclsico hasta el Posclsico en prcticamente todas las regiones. En ellos se graba-ban diseos de diversas clases que in-cluyen los geomtricos (todos con un significado particular, como el quin-cunce, que simbolizaba los rumbos del universo), as como animales (en-tre los ms comunes aves y serpien-tes), plantas, flores, rostros humanos, manos y pies.

    La abundancia de sellos y la varie-dad de contextos en que se han en-contrado indican que su utilizacin era comn y que a diferencia de otras prcticas de adorno corporal, como el tatuaje o el uso de narigueras y be-zotes, era permitido a una buena par-te de la poblacin. El adornar el cuer-po con sellos se haca seguramente en ocasiones determinadas, para ritos y fiestas en las que el propio cuerpo hu-mano era parte de la ceremonia, y las figuras que se ponan sobre l le da-ban significado y le conferan un rol particular. La amplia diversidad de di-seos que se encuentran en sellos y pintaderas indica que, adems de vin-cular el cuerpo pintado a L1na ceremo-nia especfica, tambin servan para sealar la pertenencia a un grupo de-terminado.

    Recreacin de Diego Rivera del proceso de ela-boracin de tintes y del uso de sellos y pintaderas para adornar el cuerpo. Pintores y tintoreros (Cul-tura Tarasca). Grisalla . 1942. Palacio Nacional. DIGITALIZACIN RAlcES

  • SELLOS / 47

  • 48/ ARQUEOLOGiA MEXICANA

    Sellos con forma de lagartija. La lagartija era uno de los das del calendario mexica. Es pos-

    ble que estos sellos se utilzaran en un rtual asociado a esa fecha . Cultura mexica . Posclsi-

    ca Tardo. Centro de Mxico. MNA. FOTOS MARCO ANTONIO PACHECO J RAlcES

  • Pintadera con la repre-sentacin de un rostro. Cultura Ro Verde. Cl-sico Tardo. Ro Verde, San Luis Potos. MNA. FOTO MARCO A. F'ACHECO RAleES

    SELLOS / 49

  • Los SELLOS

    Aves. Sello. Calakmul. Campeche. Cultura maya. Clsico Tardio. MCM IlUSTRACIN DIGITAL: SAMARA VElZQUEZ I RAleES

    Flor. Sello. Calakmul, Campeche. Cultura maya. Clsico Tardio. MCM ILUSTRACiN DIGITAL: SAMARA veLAzauEz I RAlcES

    SO/ ARQUEOLOGA MEXICANA

    Brotes de plantas. Calakmul. Campeche. Cultura maya. Clsico Tardio. MCM ILUSTRACiN DIGITAl; $AMARA VEwaUEZ I RAleES

    Serpiente emplumada. Pintadera. Nayarit. DIGITALIZACiN RAlcES. TOMADO DE MERINO CARRIN y GARclA COOK (COOReS,). 2006. P 101

  • Ave y glifos. Pintadera. San Andrs. Cultura olmeca. Preclsico Medio. DIGITALIZACiN RAlces BASADO EN MARV E o POHl V OTROS

    o:; oVo

    Perfil y signo olmecas, y flor. Pintadera. Tlatilco, estado de Mxico. Cultura Preclsico del Altiplano. Preclsico Medio. Corazn sangrante. Sello. Cultura teobhuacana. Clsico. FME. DIGITALIZACIN RAleES TOMADO DE URIARTE y GONZALEs LAUCK (COORDS ). 2008. P 617 IlUSTRACION DIGITAl.: SAMARA VELAzQUEZ I RAleES

    Glifos. Pintadera. Chiapa de Corzo, Chiapas. Cultura maya. Ave. Cultura teotihuacana. Clsico. FME. DIGITALIZACIN: RAlcES TOMADO DE URIARTE y GONZlES LAUCK (COORDS.), 2008, P. 617 ILUSTRACiN DIGITAL: SAMARA VELAzQUEZ

    SELLOS / 51

  • Los SELLOS

    ,

    Espirales. Sello. Tlatilco , estado de Mxico. Cultura Preclsico del Altiplano. Preclsico Medio. DIOITAUZACION RAleES TOMADO DE MERINO CAARION y GARclA COOK (COOROS.), 2005, P 570

    DiseMs simblicos. Pintadera. Tlatilco, estado de Mxico. Cultura Preclsico del Altiplano. Preclsico Medio. DIGITAUZACIN RAlcES TOMADO DE MERINO CARRION y GARclA COOK (COOROS.), 2005, P. 570

    Ave. Sello. Tlatilco, estado de Mxico. Crculos. Pintadera. Playa del Tesoro, Colima. Clsico. Cultura Preclsico del Altiplano. Preclsico Medio.

    DIGITAliZACiN RAleES TOMADO DE MERINO CARRtON y GARCIACOOK (COCROS.), 2007 , P 184 DIGITALIZACiN: RAlcES. TOMADO DE MERINO CARRIN Y GARCIA COOK (CCOROS.), 2005. F

    52 / ARQUEOLOGA MEXICANA

  • En los sellos se plasmaban una amplia variedad de motivos, la mayor de las veces simbli-cos, como en estos ejemplares -procedentes de Veracruz y correspondientes al Clsico Tar-dio y el Posclsico-, con representaciones del quincunce, flores , cnidos y seres fantsticos.

    FOTOS RAFAELDONIZ / RAlcES

    54/ ARQUEOLOGiA MEXICANA

  • Arriba y abajo: Sello con la representacin de una maripo-sa rodeada por un par de serpientes. Cultura Tumbas

    de Tiro. Clsico. La Campana , Colima. Centro re-gionallNAH, Colima.

    FOTOS CECILlALVAREZ I RAleES

    SELLOS ~

  • TATUAJES

    E l tatuaje, la tcnica por la cual se pinta la piel de manera perma-nente, es una prctica extendida por el mundo, incluido el Mxico prehisp-nico. Aunque resulta muy complicado discernir cual de la decoracin que se observa en las representaciones de personajes en cdices, cermica y pie-dra corresponde a pintura corporal o a tatuajes, no existe duda de que esta ltima era una de las prcticas utiliza-das en la poca prehispnica para el adorno del cuerpo. Aunque son bas-tante escasas, existen algunas eviden-cias que as lo indican; una de ellas una momia localizada en 1889 por Leopol-do Batres en Comatln, Huajuapan de

    Len, Oaxaca, que llevaba tatuados los brazos con grecas. Varios cronistas mencionan la prctica de adornarse el cuerpo permanentemente con diver-sas figuras. Fray Diego de Landa, en su Relacin de las cosas de Yucatn, dej una elocuente descripcin no slo de la manera en que se tatuaban sino del propsito que con ello tenan.

    Seala adems que los hombres j-venes no podan tatuarse mucho has-ta contraer matrimonio y que las mu-jeres lo hacan de la cintura para arriba, excepto los senos. Aunque llevar ta-tuaje era una muestra de valor y un sig-no de esta tus, tambin serva como castigo; si una persona de cierta posi-

    ci n social era encontrada culpable de robo se le tatuaban ambas mejillas con un diseo que sealaba su falta.

    Es posible que estas caractersticas respecto al tatuaje fueran similares a las de otras regiones, tanto en la tcni-ca utilizada como en lo concerniente a quienes podan portar este tipo de decoracin permanente (los miem-bros de la elite) y el propsito de lle-varla. El tatuaje permita a quien lo portaba proclamar su pertenencia a una clase social, resaltar sus logros e incluso reafirmar su papel en el culto, pues los tatuajes en algunos de los ejemplos ms claros de que se cono-cen se relacionan con los dioses.

    Un artista del Clsico maya que elabora un cdice, lleva tatuados o pintados glifos en el brazo y la pierna. El plato en que se encuentra esta escena proce-de de la regin de Nakb, Guatemala .

    56/ ARQUEOLOGiA MEXICANA

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    "el Ado-Posclsico conocida como Escultura huasteca del ' San Luis Potosi. Se trata de les

    cente'" procede de Tamuln , 'dos del uso de tatuajes ' . , mplos conocl uno de los mejores eje del J'oven se encuentra

    ' . a El cuerpo T en la poca prehispanlc . on motivos que aluden a la fertl 1_

    profusamente adornado ~n flores, mazorcas y aves. El per-dad agricola y que Incluy d orejeras y nariguera. MNA. sonaje llevaba adems gran ~~ 'RAICES DIBUJOSTOMAOOSDETREJO 2004 FOTOS MARCO ANTONIO PACHECO. CARLOS BlAN

    DIGITAlIZACION RAleES

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    TATUAJES ,,-

  • Guerrero con el rostro tatuado o pintado. La figurilla es del Clsico y procede de

    Teotihuacan, estado de Mxico. MNA. FOTO MARCQANTQNIO PACHECO I RAlcES

    Las crnicas de la poca de la conquista sealan que entre los huastecos la desnudez y el tatuar-se el cuerpo eran prcticas comunes. En este c-dice colonial se muestra a un huasteco con el

    cuerpo tatuado y que lleva en la nariz un adorno con plumas rojas . Cdice Florentino , lib. IX, f. SOv. REPROGRAF[A, MARCO ANTONIO PACHECO I RAlcES

  • Escultura de Xochipilli , dios de la vegetacin y la fertilidad agricola . Lleva el cuerpo deco-rado con tatuajes o pinturas que incluyen flores de distintas especies , en alusin a

    lo que significa su nombre : "el prncipe de las flores" . Cultura mexica. Poscl-sico Tardo. Tlalmanalco, estado de

    Mxico. MNA. FOTO: MARCO ANTONIO F'ACHECO f RAlees

    TATUAJES / 59

  • 60/ ARQUEOLOGiA MEXICANA

    Figurilla del Posclsico procedente del sitio El Chanal , Colima. El cuerpo de esta mujer se encuentra totalmente cubierto por tatuajes,

    aunque podria tratarse de pintura. MNA. FOTOS MARCO ANTONIO PACHECQ I RAleES

  • Escultura olmeca conocida como "Seor de las Limas". La poca de elaboracin de la pieza,

    en el Preclsico Medio, indica la antigedad del tatuaje en Mesoamrica . El personaje lleva tatuados sobre la cara motivos sim-blicos, y en los hombros y las rodillas, re-presentaciones de seres sobrenaturales.

    FOTO MARCO ANTONIO PACHECO I RAleES DIBUJOS TOMADOS DE

    JORAl EMON, 2008 DIGITALIZACiN RAlcES

    ~ ~ .... TATUAJES / 61

  • ESCARIFICACiN

    La escarificacin es producto de un proceso simple, menos labo-rioso que el del tatuaje, pero sin duda bastante doloroso. En la poca pre-hispnica para lograrla se hacan he-ridas o incisiones en la piel, siguiendo un diseo predeterminado, en las que se introduca tierra, carbn o piedras pequeas, de tal modo que la cicatriz resultante tuviera volumen y en con-junto formara un diseo claramente distinguible.

    Aunque parece haberse practicado entre las distintas culturas mesoame-ricanas, la mayora de los ejemplos en los que es clara la escarificacin pro-ceden del Occidente de Mxico, la Huasteca y el rea maya. Para esta l-tima, vale la pena mencionar la des-cripcin de esa prctica que en 1613 hizo Pedro Snchez de Aguilar en su Informe contra idoloru11l cultores delobis-pado de Yucatn, cuando seala que para demostrar su importancia los se-ores mayas se "sajaban" el cuerpo con lancetas de piedra, seguramente de obsidiana o pedernal, hasta que sangraban y en las heridas colocaban tierra negra o carbn. Cuando las he-ridas sanaban las cicatrices formaban diseos con forma de serpientes y guilas.

    Entre los mayas la escarificacin ms frecuente se haca sobre el ros-tro, con frecuencia en las mejillas y en la barbilla, aunque existe un ti-po tambin usual que consiste en es-carificaciones que van del entrecejo a la punta de la nariz. En el Occiden-te de Mxico son adems comunes las escarificaciones sobre brazos y hombros, en no pocos casos bastan-te abundantes.

    Aunque Snchez de Aguilar men-ciona que los diseos logrados por escarificacin tenan forma de ser-pientes o guilas, lo cierto es que la

    62/ ARQUEOLOGIA MEXICANA

    gran mayora de los que se conocen consisten en lneas rectas y crculos, sin que esto implique que carecan de simbolismo. Como el resto de las prcticas de adorno corporal, la esca-rificacin -al parecer una prctica re-servada para personajes del ms alto rango- indicaba que quien la luca te-na una cierta posicin social o que perteneca a un grupo determinado. Se sabe, por ejemplo, que los guerre-ros que regresaban victoriosos de una campaa militar gozaban del privile-gio de practicarse escarificaciones.

    Escultura en piedra, del Clsico Tardo, conocida como "el Rey". Procede de Kabah, Yucatn, y la decoracin que muestra en el rostro es uno de los ejemplos ms claros de escarificacin entre los mayas. Se distinguen claramente las protuberan-cias que resultan de la tcnica utilizada. MNA. FOTO JORGE P';REZ DE LARA I RAlcES

    Figurilla masculina. Cultura maya. Clsico Tardo. Xcambo, Yucatn. MPC

  • ESCARIFICACiN / 63

  • LAS ESCARIFICACIONES

    Figurilla que representa a una mujer de la nobleza. Muestra escarificacin en el entrecejo y en las comisuras, aunque las de estas ltimas podrlan ser tatuajes. Cultura maya. Clilsico Tardio. Xcamb, Yucatn. MPe,

    Guerrero maya que lleva en la frente decoracin por escarificacin, Clilsico Tardio, Jaina, Campeche, MNA,

    64 / ARQUEOLOGA MEXICANA

    Noble maya con un complicado diseo en la mejilla; la profundidad evidente en las lineas sugiere que se trata de escarificacin, Clsico Tardio, Jaina, Campeche, MNA,

    Personaje de la elite maya que lleva en la mejilla y en la frente decora-ciones producto de tatuaje o escarificacin, Clsico Tardio, Jaina, Cam-peche, ele,

    Rostro lascor cin, e

  • Indidad Clsico

    Rostro de una figurilla que representa a un enano de la corte maya. De las comisuras salen lneas paralelas, tal vez producidas por escarifica-cin. Clsico Tardio. Jaina. Campeche. MNA. Sacerdote maya con el rostro decorado por escarificacin o tatuaje. Clsico Tardlo. Jaina. Campeche. MNA.

    Rostro de hombre procedente del sito maya de Jaina, Cam-peche. Las bolas del entrecejo y la barba fueron logradas por escarificacin. Clsico Tardo. MNA.

    Mujer de la nobleza maya. La decoracin de su rostro tal vez es producto de escarificacin. Clsico Tardo. Jaina. Cam-peche. MNA.

    ESCARIFICACiN / 65

  • Detalle de la escultura conocida como "la Reina". Procede de la ciudad maya de Uxmal, Yucatn. En realidad representa a un personaje relaciona-do con el maz; las escarificaciones que lleva en la mejilla semejan los granos de esa planta. Cl-sico Terminal. MNA. FOTO JORGE Pt;REZ DE LARA I RAleES

    Rostro de la escultura llamada "el Adolescente", de Cumpich , Campeche. Muestra escarifi-

    caciones en el entrecejo y las mejillas.

    Cultura maya. Clsico Terminal. MNA. FOTO JORGE PEREZ DE lARA I RAleES

  • OREJERAS

    E l portar orejeras es uno de los rasgos distintivos de las elites del rea mesoamericana. Se trata de una prctica que se remonta al Preclsico Temprano y llega hasta el momento de la conquista. Para poder llevar ore-jeras era necesario perforar el lbulo de la oreja, tal como sucede con la preparacin actual para portar aretes, aunque debido a las dimensiones bas-tante mayores que alcanzaban esos ornamentos en la poca preruspnica el ensanchamiento del orificio debi ser progresIvo.

    Entre los mexicas, la horadacin de las orejas se haca durante la infan-cia y conllevaba un trasfondo ritual; segn fray Bernardino de Sahagn esto ocurra durante una de las dos fiestas movibles que se realizaban cada cuatro y ocho aos: "En la que se haca de cuatro en cuatro aos ho-radaban las orejas a Jos nios o nias

    y hacanlos las cerimonias de 'crezca para bien' " (Sahagn, 2000, p. 175). Era tan generalizado el uso de oreje-ras en Mesoamrica que no es aven-turado suponer que incluso este mar-co ritual y el significado ltimo de portarlas fueron similares en las dis-tintas pocas y regiones.

    A grandes rasgos pueden sealar-se dos tipos bsicos de orejeras: las que sencillamente se insertaban en el lbulo (si bien de ellas podan pender adornos) y las que estaban formadas por la orejera propiamente dicha atra-vesada por un tubo del que con fre-cuencia colgaban elaborados remates; las del gobernante palencano Pakal son un excelente ejemplo de estas l-timas. ormalmente, la parte de la orejera que se insertaba presenta una especie de canal en el que encaja ell-bulo, aunque existen algunas con for-ma de gancho.

    En cuanto a la decoracin, la que al final de cuentas les confera su sig-nificado ltimo, hay distintas varieda-des de orejeras: con una forma deter-minada (la ms usual era la de flor), decoradas con algn diseo o con re-mates en forma de animales (el ms comn, aves), entre otras.

    Las orejeras se fabricaban en di-versos materiales, como cermica, concha, hueso y obsidiana; las ms apreciadas, y seguramente reserva-das para la elite, eran las de piedra verde o jadeta, materiales de suyo con connotaciones simblicas, y en el Posclsico, el oro. o hay duda de que las distintas formas de las oreje-ras y la variedad de los diseos que muestran no slo tenan como obje-tivo adornar a quien las portaba, ser-van tambin para establecer la iden-tidad y para sealar un estatus determinado.

    Figurilla femenina de Nopiloa, Veracruz. Porta orejeras con la representacin de Tlloc y los colgantes simbolizan gotas de lluvia. Clsico Tardo. MAX.

    Personaje que lleva orejeras cuya forma se asocia con Quet-zalcatl. Cultura Centro de Veracruz. Clsico Tardo. Tierra Blanca, Veracruz. MAX.

    68 / ARQUEOLOGA MEXICANA

  • Representacin de un joven maya con orejeras discoidal es; usualmente este

    tipo de orejeras se elaboraban en ja-deita . Clsico. Tabasco. MCP.

    FOTO MARCO ANTONIO PACHECO I RAlcES

    OREJERAS / 69

  • LAs OREJERAS

    Adornos de concha para orejeras. Repre-sentan flores , una de las formas ms comunes en este tipo de adornos.

    Proceden del sitio del Clsico maya de Xcamb, Yucatn. MNA.

    FOTO JORGE P~E2 DE lARA l RAfeEs

    Adorno de jadeita para orejera con inscripcin glifica. Formaba parte del ajuar funerario de Pakal, famoso

    gobernante de Palenque Chiapas. Clsico Tardlo. MNA. FOTO MAA:CO ANTONIO PACHECO I AAlcES

    Orejera de concha, uno de los materiales preferidos por los huastecos. El ejemplar procede de Veracruz. Posclsico. MNA.

    FOTO MARCO ANTONIO PACHECO' RAlees

    70/ ARQUEOLOG IA MEXICANA

    Orejera con la representacin de un rostro hu-mano, tal vez una deidad. Cunura maya.

    Clsico. Jaina, Campeche. MNA. FOro JORGE P~REZ DE lARA / RAfces

    El uso de adornos para orejeras con diseos esgrafiados ya estaba presente desde el Preclsico Medio, como en esta pieza de jade Ita procedente

    del sitio olmeca de la Venta, Tabasco. MNA. FOTO' MARCOANTONJO PACHECO I RAlees

    Remate de orejera con flor de seis ptalos. Cultura maya. Clsico Tardlo. Palenque, Chiapas. MNA.

    FOTO_ JORGE PEREZ DE LARAJ RAfees

    RE de

  • Remates de orejeras en oro con la representacin de aves. Para el Posclsico Tardlo el uso de estos adornos de metal entre la elite era una prctica comn, y los mixtecos se encontra-

    ban entre los orfebres ms connotados. Procedencia desconocida. MMA. FOTO THE METROPOLITAN MUSEUM QF AAT

    Orejera de cermica tipo Zaquil Ne-gro. Cultura serrana. Clsico. Sierra Gorda, Quertaro. MNA. FOTO. MARCO ANTONIO PACHECQ I RAleEs

    Orejera de concha. Cultura serrana. Clsico. San Agustn.

    Sierra Gorda, Quertaro. MNA. FOTO MARCO ANTONIO PACHECO J RAleES

    Orejera de crstal de roca. Cultura mexica. Posclsco Tardo. Centro de Mxico. MNA.

    FOTO CARLOS BLANCO I RAfees

    Orejera de obsidiana con mosaicos de turquesa. Cultura tarasca. Posclsico Tardo. Michoacn. MRM.

    FOTO VICENTE GUIJOSA / RAfCES

    OREJERAS I ~ 1

  • LAs OREJERAS Vista lateral de Cabeza colosal 10 de San Lorenzo Tenochtitln. La gran orejera que lleva mues-tra queya desde la poca olmeca (Preclsico Medio) era un ador-no asociado con los gobernan-tes. Texistepec, Veracruz. MCL.

    El personaje representado en el Monumento 1 de San Martn Pa-japan porta orejeras de las que penden representaciones de cabezas con las caractersticas usuales de la cultura olmeca. Preclsico Medio. Veracruz. MAX.

    Vasija que representa a una dedad probablemente del nframundo. Protoclsico. Izapa, Chiapas. MNA.

    Cabeza maya de estuco. Lleva grandes orejeras en forma de quincunce. Cl-sico. Procedencia desconocida. MNA.

    72 / ARQUEOLOGIA MEXICANA

    Escultura de guerrero proceden-te del Templo Mayor de Tenochti-tlan. Muestra caracterlsticas pro-pias de la poca tolteca . Cultura mexica. Posclsico Tardo. MNA.

  • Representacin de un hombre que lleva orejeras con un motivo en cruz. Cultura tumbas de tiro. Clsico Temprano. Nayarit. MNA.

    Figurilla. Cultura maya. Clsico Tardo. Jaina, Campeche. MNA.

    Sacerdote del dios de la muerte. Cultura mexica. Posclsico Tardlo. Centro de la ciudad de Mxco. MNA.

    Figurilla con tocado y grandes orejeras. Cultura El Chanal. Posclsico. Colima. MMA.

    OREJERAS / 73

  • Orejera de concha. Procede del sitio maya de COb,

    Quintana Roo. Clsico. MAC. FOTO. MARCO ANTONIO PACHECO I RAleES

    Hacha olmeca con la representacin de un ros-tro humano que entre otros adornos lleva oreje-ras. Preclsico Medio. Simojovel, Chiapas. MNA.

    Mscara de Pakal. En esta restauracin se observan los dos elementos que confor-maban las orejeras: el tubo que se inser-tabaenellbuloyel adorno. Cultura maya. Clsico Tardio. Palenque, Chiapas. MNA. FOTO JORGE P~REZ DE LARA ! RAleEs

  • Orejeras procedentes del sitio olmeca de La Venta, Tabasco. Llevan incisas representa-ciones de rostros de perfil y la llamada voluta

    del aliento. Preclsico Medio. MNA. FOTOS BORIS DE SWAN I RAleES

    OREJERAS / 75

  • BEZOTES

    Para las sociedades prehispnicas llevar bezote era una seal de dignidad, una manera de hacer paten-te que se haban conseguido los m-ritos suficientes para portarlo. No es de extraar que fuera uno de los or-namentos distintivos de los gober-nantes, quienes incluso los usaban con caractersticas adecuadas a dis -tintas ocasiones. Ejemplo de ello son los bezotes de oro con forma de ca-beza de guila que llevaban como parte de su atuendo como guerreros; varios de los mejores ejemplos cono-cidos de bezores muestran esta for-ma. E n el rerrato de Nezahualcyotl vestido para la guerra que aparece en el Cdice Ix t/ix chit/, el famoso gober-nante texcocano luce uno de ellos. Vale la pena sealar que una de las provincias tributarias de la Triple Alianza entregaba peridicamente bas ta 40 "bezotes amarillos", segura-mente de oro. Se ha sugerido adems que las distintas formas de los bezo-tes que portaban los gobernantes tenan relacin con el discurso

  • BEZOTES / 77

  • Los BEZOTES

    78 / ARQUEOLOGA MEXICANA

    Personaje durante la celebracin de un ritual con motivo de la culminacin de una obra para llevar agua de Coyoacan a Tenochtitian. Lleva el rostro pintado y adornos como ore-jeras y bezote. Durn, Historia de las Indias de Nueva Espaa ... , cap. XLIX.

    Los bezotes se fabricaban en diversos materiales, tal vez en funcin de la ocasin en la que se utilizaran . Bezote de cristal de roca . Cultura tarasca. Posclsco Tardo . Mi-choacn. MNA.

    Bezote de obsdiana, oro y mosaico de turquesa. Cultura tarasca . Posclsico Tardo. Procedencia desconocida. MNA.

    FOTO: MARCO ANTONIO PACHECO I RAleEs

    Bezote de obsidiana roja. Cultura mexica. Posclsico Tardo. Texcoco, estado de Mxico. UACH. FOTO MARCO ANTONIO PACHECO / RAleES

    El uso de bezotes era uno de los elementos bsicos en el adorno de los gobernantes. En este retrato del tlatoanimexica Moctezuma Xocoyotzin se observa que lleva uno de oro. Cuadro atribuido aAntonio Rodrguez, finales del siglo XVII . Museo degli Argenti, Florencia .

    I Moch narigl paa.

  • Moctezuma IIhuicamina, durante su entronizacin, lleva orejeras, nariguera y un bezote. Durn, Historia de las Indias de Nueva Es-paa ... , cap. Xv.

    Para los pueblos del Posclsico Tardio, los mixtecos se encontraban entre los mejores artesanos y se valoraba su habilidad en la fabricacin

    de objetos de oro, como este bezote con forma de cabeza de ave. Procedencia desconocida. The Saint Louis Art Museum, San Luis. FOTO: THE SAINT lOUIS ART MUSEUM, SAN LUIS.

    Bezote de obsidiana negra. Cul-tura mexica. Posclsico Tardo. Texcoco, estado de Mxico. UACH.

    FOTO: MARCO ANTONIO PACHECO I RAleES

    El gobernante mexicaAxaycatl yotro dignatario llevan bezotes entre los elementos que denotan su alto estatus. Durn, Histo-ria de las Indias de Nueva Espaa ... , cap. XXIII.

    Guerreros mexicas de las rdenes militares tequihuaque y quchic; ambos llevan bezote como parte de su atavo. Du-rn, Historia de las Indias de Nueva Espaa ... , cap. LXXXIX.

    BEZOTES / 79

  • 80 / ARQUEOLOGi A MEXICANA

    Bezote de oro con forma de cabeza de ave. Cul-tura mixteca . Posclsico Tardo. Procedencia desconocida . Museum fr Vblkerkunde, Viena . FOTO MUSEUM FUR VOLKERKUNDE

    Nezahualcyotl, rey de Texcoco, ataviado como guerrero. Lleva un bezote con forma de cabeza de guila. Codice Ixtlilxchitl, f. 106r.

  • Entre los tributos recaudados por la Triple Alian-za haba bezotes. En la lista de tributos que de-ba entregar la provincia de Cuetlaxtla se consig-nan 40 bezotes amarillos, probablemente de oro. Matrcula de Tributos , lm. 27.

    BEZOTES / 81

  • NARIGUERAS

    Como algunas otras prcticas mesoamericanas relacionadas con la modificacin del cuerpo hu-mano con el fin de conferirle un sig-nificado especfico, la del uso de na-rigueras es una reservada a la elite. De hecho, por lo menos desde el Cl-sico en adelante, la perforacin en la nariz necesaria para colocarla se efec-tuaba en el marco de una ceremonia que tena como fin investir a un so-berano, el que en esa ocasin reciba insignias que en adelante simboliza-ran Sll condicin de gobernante, entre ellas la nariguera.

    Un buen ejemplo de esta relacin de la nariguera con el poder poltico se en-cuentra en la lmina 52 del Cdice N ttfta//, en la que se observa al famoso seor rnixteco 8 Venado, Garra de Ja-guar en la ceremonia de colocacin de la nariguera de turquesa, a la que signi-ficativamente tam bin se conoce como "ceremonia para el rango de temhtli (seor)"; esto sucede en un momento en que el personaje ha adquirido el su-ficiente poder para ser reconocido como fundador de un nuevo linaje. Si-glos despus, en la ceremonia de en-tronizacin de los gobernantes mexi-cas tambin se les perforaba la nariz con un punzn de hueso de jaguar, para colocarle una nariguera conocida como xiulyacmit!

    Haba por lo menos dos tipos b-sicos de nariguera: una tubular, tam-bin conocida como "de barra", que cruza la nariz por las perforaciones

    82/ ARQUEOLOGIA MEXICANA

    del sptum; las del otro tipo tenan distintas formas y contaban con unas especies de ganchillos que se fijaban a esas perforaciones, aunque tambin podran servir para sostenerse en la nariguera de barra. Este tipo de nari-gueras colgaban y cubran la boca.

    Aunque las narigueras tubulares posean una sola forma bsica segu-ramente adquiriran significados es-pecficos en funcin del material con que estaban elaboradas, e incluso en las representaciones en los cdices se observa que algunas estn pintadas de colores, obviamente con un sentido especfico. Entre el otro tipo de nari-gueras se encuentran las que tienen forma de mariposas estilizadas - co-mnmente relacionadas conXochipi-lli-Macuilxchitl-; la de greca escalo-nada rematada por rayos, asociada con el Sol; as como otras que semejan ser-pientes o crtalos. Algunos dioses te-nan entre sus atributos distintivos na-rigueras con formas determinadas, como la de media luna asociada a los dioses del pulque.

    Es obvio que las narigueras tenan ms connotaciones que la de indicar que quien la portaba era un persona-je del ms alto rango. Puede aventu-rarse que como las cuentas que pen-den de la nariz de ciertos personajes, simbolizaban tambin el aliento vital de quien la portaba; asimismo, algu-nas formas eran utilizadas por los se-ores como parte del ajuar utilizado en las guerras.

    Portar nariguera tenia un significado especial; la accin de perforar la aleta nasal constituia un rito (yacaxapotlaliztli) que implicaba que quien la re-cibia adquiria un estatus determinado. En esta imagen de un cdice mixteco se muestra la con-sagracin como gobernante de 8 Venado, Garra de Jaguar. Cdice Nuttall, lado 1, lm. 52. REPRQGRAFIA MARCOANTQNIO PACHECO I RAleES

  • .

    *** *' i

    NARIGUERAS / 83

  • LAS NARIGUERAS

    Hacha olmeca con la represen-tacin del dios del maiz. Pre-clsico. Arroyo Pesquero, Ve-racruz. MAX.

    Mujer con argollas en nariz y orejas. Cultura tumbas de tiro. Clsico. Nayarit. MNA.

    84 / ARQUEOLOGA MEXICAN A

    Detalle del relieve del llamado Vaso 9-Xi. El personaje porta la tlpica nariguera teotihuacana. Clsico. Fue encontrado en el Templo Mayor Com de Tenochtitlan. MTM. Tlax(

    El seor mixteco 4 Jaguar con nariguera de media luna. Cdice Nuttall, lado 1, lmina 75.

    Tepoztcatl , deidad mexica del pulque, lleva una nariguera con el smbolo lunar. Cdice Magliabechiano, f. 85r.

    Cere 8 Vel

    El gol Tecp

  • pica 3yor

    Jttall,

    ~on el

    Combatiente derrotado en el Mural de la Batalla. Epiclsico. Cacaxtla, Tlaxcala.

    Ceremonia de horadacin de la nariz, yacaxapotlaliztli, del rey mixteco 8 Venado, Garra de Jaguar. Cdice Bod/ay, lm. 9.

    El gobernante cholulteca Icxic6atl horada la nariz del jefe chichimeca Tecpatzin. Historia Tolteca-Chichimeca, f. 21 r.

    Guerrero con yelmo, orejeras y nariguera. Cultura tumbas de tiro. Clsico. Nayarit. .,NA

    Mixc6atl, dios de la cacera. Posclsico Tardo. Malinalco, es-tado de Mxico . .,SM.

    Cihuac6atl con nariguera en forma de serpiente. Cultura mexica. Posclsico Tardo. Ciudad de Mxico. MNA.

    NARIGUERAS / 85

  • Pectoral mixteco de oro. Representa al dios Xipe, quien lleva una narigue-ra con argolla. Procede de Monte AI-

    bn, Oaxaca. Posclsico. Meo. FOTO GERAROO GONZAlEl RUll RAleES

    86/ ARQUEOLOGiA MEXICANA

    Nariguera de piedra encon-trada en el Templo de Quet-zalcatl , Teotihuacan, estado de Mxico. Clsico. MST. FOTO ARCHIVO INAH

    ,

  • Nariguera de oro con forma de mariposa. Fue encontrada en el centro de la ciudad de Mxico.

    Cultura mexica. Posclsico Tardio. MNA. fOTO CARLOS BLANCO f RAfcES

    NARIGUERAS / 87

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