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7. EL HOMBRE COMO CONCIENCIA DIRECTA

7.1 INTEGRACIÓN Y CONCIENCIA

Es imposible que la presentación de un libro pueda seguir la evolución del trabajoen su desarrollo real y metodológico; la presentación es, en buena medida, lo yasistematizado y, por ello, lo estabilizado sincrónicamente; pero el desarrollo real esinteractivo y recurrente, en una espiral diacrónica. Las limitantes de la presentación exigenque se adelanten conclusiones con la finalidad de que el trabajo sistematizado se hagacomprensible. Por lo que, la introducción viene a ser ya el cristal que permite visualizar elamplio panorama. La búsqueda de una epistemología integral es un punto de llegada enrelación con las epistemologías restringidas, que en ella se trascienden; por ello, en un altogrado, todo este libro es una conclusión.

Consideramos que el presente trabajo no es sino los primeros esbozos de lo que enrealidad puede ser una epistemología integral. El tiempo, desde que se iniciaron lasprimeras reflexiones en torno al tema hasta la fecha (casi una década) nos ha parecido, enrealidad, breve; pues, consideramos que la cordura desaconseja la precipitación en el juzgary decidir en asuntos que revisten tanta importancia, de igual modo que el fanatizarse enposiciones estáticas de escasa madurez o de corta mira como son las perspectivas que secierran en un reduccionismo.

Este trabajo no pretende tratar de manera exhaustiva a ningún autor, sino sólo, conuna mayor o menor brevedad, exponer la perspectiva epistemológica de ellos, para hacernotoria su fundamentación así como sus límites de validez.

Una filosofía en la que predomina el corte racionalista define las distintasposiciones filosóficas por el tipo de conceptos o categorías que utilizan para abordar elobjeto de estudio. Sin duda que la observación es correcta, pero no explica el porquéutilizan diversos tipos de categorías. Nuestra opinión intenta fundamentar el hechomencionado en la diversa impostación epistemológica.

Nuestra interpretación se fundamenta en la impostación epistémica que sirve debase a cada uno de los autores y en ellas se apoya para integrar la coherencia interpretativa.Es probable que más de un autor haya salido fuera de este "marco teórico" en el sinnúmerode reflexiones filosóficas, que en diversas circunstancias y sobre una multiplicidad detemas haya realizado; pero nuestro trabajo pretende, precisamente, considerar la influenciay la coherencia debida a una impostación epistémica.

Este trabajo no es un estudio histórico que pretenda definir con precisión rigurosa lodicho por los autores considerados, tratando de atenerse al momento que vivió y a suscircunstancias de pensamiento, sino que tiene por objetivo realizar un análisisepistemológico en el que pretende ubicarse a cada uno en su propio ámbito epistémico, parajuzgar con coherencia de su fundamentación y validez, con la finalidad de seleccionar loselementos adecuados que hagan posible la constitución de una epistemología integral, quepermita superar los límites de las epistemologías reducidas.

En el eclecticismo se adoptan elementos de diversos sistemas de acuerdo con uncriterio de selección, si no existe este criterio recibe el nombre de "sincretismo". Eleclecticismo acumula una pluralidad de conocimientos en un "conglomerado", porque ahífaltan los principios de organización y los criterios de validez, que permitan estructurar elconjunto en una unidad integral. El eclecticismo a lo sumo esquematiza la serie de

entidades en una jerarquía, por medio de ciertas tablas estimativas; de ahí, que el conjuntode sus conocimientos sea, en suma, incoherente e inconsistente, por carecer de unafundamentación que le valide y una estructuración que le dé coherencia lógica. Eleclecticismo no es un sistema. La epistemología integral intenta superar estas deficiencias.

Hablarnos de epistemología en el sentido, no de conocimiento científico que fundasu validez en la coherencia y/o argumentación lógica, sino en la veracidad (grado de) que leotorga una determinada impostación facultativa, a la luz de la cual se percibe el hombre ensu ser. Ahí el ser es interpretado, el habla muestra la esencia humana. Lo cual en un nivelintegral es la realización del propio ser a la luz y bajo la dirección de una impostaciónfacultativa, que integra la visión en la trascendencia de la esencia humana en su capacidadtotal, en la plenitud de su esencia. La visión integral, que intentamos alcanzar, mira al seren su devenir, a la estructura sincrónica como un momento de la evolución diacrónica.

La epistemología estudia los principios fundamentales del conocer en su relacióncon los principios ónticos para deslindar ambos y juzgar de su validez. Se extiende a losmétodos de investigación científica, como procesos prácticos que encuentran sufundamentación en tales principios y que aplicados dentro de cierta área cognoscitivaadquieren la validez correspondiente. De ahí que pueda igualmente juzgar sobre la validezde la ciencia. Hans Reichenbach, en Experience and prediction, dice que la epistemología"trata de construir los procesos del pensar del modo como deberían ocurrir si hubieran deser dispuestos en un sistema consistente' (p.5), no los procesos reales que corresponden a lapsicología. Es una reconstrucción racional -lógica- de un modo de pensar. La epistemologíainvestiga el "contexto de justificación, la psicología por su parte el "contexto dedescubrimiento". La epistemología versa, para E. Nagel, sobre la construcción de losconceptos, la estructura de las explicaciones y, finalmente, sobre la validez de lasconclusiones.

He aquí otras definiciones que se han dado al respecto: Encyclopedia of philosophy(1967): "La epistemología, o teoría del conocimiento, es la rama de la filosofía que seocupa de la naturaleza y capacidad del conocimiento, de sus suposiciones y fundamentos ydel crédito que puede otorgársele". Encyclopedia Británica: "Epistemología es la rama dela filosofía que se ocupa de los problemas de la naturaleza, de los límites y validez delconocimiento y de la creencia". En la epistemología a, ciertamente se da un análisis crítico-valorativo de los fundamentos y desarrollo, así como de los métodos y conclusiones de unconocimiento en cuanto a su veracidad, validez y/o practicidad. Lalande considera que laepistemología es "esencialmente el estudio crítico de los principios, hipótesis y resultadosde las diversas ciencias".

7.2 LA EPISTEMOLOGÍA

No es una ciencia sino una metaciencia, tomada ésta en sentido general de modoque considere todo conocimiento, para juzgar de su fundamentación, límites y validez. Nodividimos en epistemología general y en epistemologías regionales, porque pretendemosiniciar el trabajo que posibilite una epistemología integral. Estamos convencidos de estaúltima afirmación, porque nuestros limites personales están muy lejos de abarcar lainterdisciplinariedad que el proyecto indicado exige; por lo que nuestra labor es sólo unensayo que de acuerdo con la concepción que aquí se presenta, tiene carácter existencialabierto a la pluridimensionalidad de los ámbitos cognoscitivo-actuantes que se han dado a

través de la historia. La perspectiva epistemológica no constituye al ser humano en sunúcleo existencial, sino indica el grado evolutivo de su estructura esencial; pero ésta indicala concretización temporal de aquélla, donde esencia y existencia se integran.

Cada hombre, dada su experiencia, sociedad, cultura y momento histórico,desarrolla una estructura intelectual que le permite comprender su mundo con unaperspectiva individual. Por lo que las perspectivas se multiplican indefinidamente, y untrabajo serio, que pretenda cientificidad en un cierto grado, no puede dirigirse a laindividualidad de las perspectivas sin perderse en lo inasible. Así, Ortega y Gasset,siguiendo a Leibniz, afirma en El espectador (tomo 1), que hay tantos universos cuantasperspectivas monadológicas y que "yuxtaponiendo las visiones parciales de todos selograría tejer la verdad omnímoda y absoluta". Tan absurdo es el supuesto que Ortega loubica en Dios, quien "ve todas las cosas a través de los hombres", pues, según estahipótesis, los hombres serían "los órganos visuales de la divinidad".1 Lo vemos y no locreemos, Ortega y Gasset se toman en serio la veracidad de todas y cada una de lasperspectivas individuales; lo cual es a todas luces inadmisible. Ciertamente la pretensión deOrtega y Gasset es inasible al conocimiento humano.

La opinión diametralmente opuesta a la de Ortega y Gasset es la de Hans Vaihinger,para quien toda perspectiva no es sino una ficción (reducción ficcionista). Con ellos, elrelativismo individualista cae definitivamente en el escepticismo. Punto al que arriba demodo semejante, el perspectivismo fenomenalista de F. Nietzsche; pues, al afirmar que"toda conciencia se halla unida a una corrupción, falseamiento, superficialización ygeneralización", negó al hombre la capacidad de conocer algo con objetividad; por lo que,esta facultad debe reducirse a la función de satisfacer las necesidades vitales manifiestas enlos instintos. La incapacidad radical y la multiplicidad de perspectivas llevan a estos autoresa la negación rotunda; pero, también la negación hay que probarla y, para ello, se necesitaconocimiento objetivo; lo cual supone lo contrario de lo que se quiere probar. Luego talaserto es injustificable.

Otro caso curioso de observar es el de Georg Simmel (1858-1918) que, habiendopartido de un relativismo subjetivista, llega a un absolutismo vitalista. Le pareció que cadaperspectiva individual era una verdad completa en sí misma, porque consideró que lodeterminante para el mundo era el tipo humano que lo veía; pero, por el lado inverso, elreduccionismo atomista se abre a una perspectiva amplia que unifica y da sentido al ser: lavida, fuente que engendra el universo y el espíritu; porque en su ímpetu trascendente creatoda la multiplicidad de las formas culturales. La ampliación ontológica genera la reducciónepistémica y a la inversa.

Las epistemologías radicales todo pretenden reducirlo en un simplismo igualmenteradical, al elemento al que conceden su primordialidad. Así los llamados "materialistas",todo pretenden reducirlo a "materia" y, por consiguiente el concepto de materia se amplía atodo lo reducido, lo cual es caer en el otro extremo del idealismo. A su vez, los llamados"idealistas", todo pretenden reducirlo a "idea", concepto que se amplía para comprendertambién la materia de sus opositores, pero, en conceptos tan amplios, ni la materia ni la ideaquedan precisados, perdiendo así su significación y su valor. La injustificación de talesgeneralizaciones pierde el intento filosófico en su vacuidad científica.

La "ciencia integrada" ha sido definida por Richmond como el conjunto de"enfoques en los que los conceptos y los principios de la ciencia son presentados de maneraque expresen la fundamental unidad del pensamiento científico, para evitar un énfasisprematuro e indebido en las distinciones entre los diversos campos científicos".2 Se

pretende una enseñanza integrada antes de integrar el conocimiento mismo bajo elpresupuesto, a nuestro parecer falso, de que ya existe una unidad fundamental delpensamiento científico.______________________________1 Ortega y Gasset, J., Obras, 1932, p. 788.2 Richmond, P. E., Nuevas tendencias en la enseñanza integrada de las ciencias, vol. 2, cap. 8, Unesco, 1975.

Desde nuestro punto de vista es necesario lograr al menos en esbozo esta unidad. De locontrario, la tendencia a una enseñanzaintegrada, de por si buena, puede naufragar por falta de fundamento coherente.

El juego de espejos a través del cual se procesa el conocimiento es frecuentementeuna ilusión en la que se han estrellado las aves pasajeras; el descubrimiento del trucoestriba en la integración del sistema, que parte de datos estructurales, evoluciona eninteracciones y culmina en principios y realizaciones. Pero la comprehensión, que supera lailusión se obtiene sólo en la síntesis integrativa del sistema total. Esta síntesis jamás se dade modo completo y acabado, porque no sólo se encuentra en la evolución de un continuodevenir, sino que lá síntesis es lograda por interacción con la percepción sensible, elanálisis, la experiencia, etc. El ser humano no posee la facultad de intuir de modo completoy total la realidad en la que vive. La "síntesis integral" es producto de un trabajo continuo yprogresivo. Le llamamos "integral" a esta síntesis porque supera el juego de espejos en elque caen los reduccionismos; integral hace referencia, a la vez, al proceso a través del cualavanza, es decir, un "proceso integrativo".

En el análisis la profundidad del estudio viene dada por la separación, mientras másprofunda más detallada, de los elementos constitutivos del ente; en tanto que, en la obrasintética la altura se encuentra en integrar al ser por sus relaciones fundamentales,visualizando esta unidad desde sus diversas perspectivas. Evidentemente la síntesis exigetener presentes los elementos en sus partículas. La síntesis avanza progresivamente y puedeterminar en una frase que resuma el todo en su integridad. Dicha frase representa el culmende la altura sintética y se apoya en todo aquello que la sustenta. En pocas palabras: elanálisis profundiza en la línea de la extensión, en tanto que la síntesis se eleva por lacomprehensión. Ambos trabajos se complementan; pero nos parece que ésta es la que dasentido a aquél.

Nuestra posición acepta la pluralidad de perspectivas en el sentido de que unadeterminada impostación de nuestras facultades en una ubicación histórico circunstancialpermite alcanzar una perspectiva del "ser en devenir"; el conjunto de las diversasimpostaciones fundamentales y un grupo seleccionado de las sobresalientes perspectivashumanas (que representen las etapas principales de la historia humana), harán posible laintegración progresiva del conocer y del hacer humano en su adecuación al ser.

La visión integral intenta ver la estructura en su evolución histórica para extender losincrónico en lo diacrónico. No es una dialéctica de perspectivas sino una integración decada una en sus límites: reduciendo las ampliaciones en la restricción de su perspectiva yampliando la visión para integrar su conjunto en la unidad. La epistemología integral noconsiste en un "perspectivismo", en el que se validan, por igual, todas la diversasperspectivas; sino en la confrontación de ellas para descubrir el aspecto válido de cada unade ellas, así como su falseación extrapoladora, y posibilitar una weltaanschauung integral.Cosmovisión que gira en torno a tres núcleos sintéticos: el empiriológico, el logológico, yculmina en la trascendencia de su unidad integral.

"Nivel epistémico" es el conjunto de estructuras integradas en torno a laprimordialidad coordinadora de una facultad teórico-práctica del ser humano. El proceso dedesarrollo epistémico es el paso de un nivel a otro a través de la transformación consecutivade estructuras a partir de las orgánico-sensibles hacia las teórico-intelectuales y, finalmente,hacia las práctico-realizativas del ser humano en cuanto tal. Las estructuras del nivelorgánico-sensible generan funciones inconscien-tes con determinación variable de acuerdocon la azarosa asociación fantasmática, las estructuras del nivel teórico-intelectual sonconscientes y están determinadas por la interacción asimilativo-adecuativa. Las práctico-realizativas son también, conscientes, pero se llevan a cabo de acuerdo con una relativalibertad a través de la interacción entre la persona y el medio cultural en que sedesenvuelve. Lo anterior permite a nuestra tesis superar el reduccionismo de la posiciónestructuralista.

La percepción intuitiva que la conciencia pueda lograr en perspectiva introspectivade los principios y estructuras fundamentales que posibilitan el conocimiento en susdiversos niveles no pertenece al sentido común y al uso ordinario de las facultades sino, porel contrario, envuelve gran dificultad. La obtención de un punto de visualización intuitivaha sido frecuentemente motivo para presentar la filosofía que desde esa perspectiva sealcanza. Las estructuraciones complejas son múltiples y han dado lugar a un sinnúmero defilosofías; pero los centros estructuradores de donde surgen los principios fundamentalesson reducidos y dan lugar, según nuestra opinión, a los niveles que en este trabajomanifestamos y tratamos de estudiar.

La interacción entre los niveles implica cierta interdependencia entre ellos eigualmente otro grado de independencia en la madurez de la integración de un sistemapropio capaz de funcionar, no con autonomía plena, sino con la posibilidad de tomar, por lomenos en algunos momentos, la prioridad y/o la predominancia en la estructura total.

Bertrand Russell, en Los problemas de la filosofía, dice: "A primera vista se podríaimaginar que el conocimiento puede ser definido como una creencia verdadera", pero,argumenta, "El conocimiento derivado es lo deducido de un modo válido de premisasconocidas intuitivamente". Ahora bien, "en el conocimiento intuitivo no es en modo algunofácil descubrir un criterio mediante el cual distinguir algunos conocimientos verdaderos yotros como falsos". Por consiguiente: "todo nuestro conocimiento de verdades está en algúngrado contaminado por la duda, y una teoría que ignorara este hecho sería evidentementefalsa". Russell envuelve la argumentación anterior en análisis de casos concretoscotidianos, todo ello para decir que el problema principal se encuentra en el punto departida. Si en el punto de partida se pretende resolver todo conocimiento, evidentemente nohay criterio de distinción, porque este criterio se da en una etapa posterior. Restringir elconocimiento a cualquiera de sus momentos es el error de los "reduccionismos".

El valor de un espíritu depende del nivel epistémico que pone en práctica en sudesarrollo existencial, tal nivel incluye tres grados de evolución: exclusivista, primordialistae integral. Este indica el grado superior dentro de un nivel.

La causa de la confusión dentro de la filosofía y epistemología moderna es ladesintegración de la personalidad y sus facultades: unas veces es el empecinamiento de laconciencia atenta o bien sólo a las sensaciones (sensismo), o bien sólo a la experienciasensible (empirismo); o sólo a la razón que abstrae esencias de datos sensibles(racionalismo esencialista), o bien que deduce de principios racionales y construye encontubernio con la imaginación (racionalismo imaginativo), o que se extasía en lacontemplación de lo concebido por la razón (fenomenología racionalista) o bien que

organiza y construye las esencias a partir de fenómenos empíricos y categorías racionales(idealismo trascendental), o definitivamente que objetiva-subjetivando y absolutizando elobjeto trascendental de la conciencia y que da existencia al objeto esencial de la razóntomándose así creador absoluto de sí y del mundo en que vive, que para no caer en unsubjetivismo individualista se extiende como razón universal (idealismo o racionalismoabsoluto); otras veces está atenta a las tendencias instintivas de su organismo para gozarintensamente el placer de vivir (vitalismo hedonista), o se extasía en la contemplación de laforma material y corporal (hedonismo estético), o se concentra en el querer ciego yabsolutista de la voluntad (voluntarismo); o se entrega al libre juego de los sentimientos enarmonía con la naturaleza corporal (romanticismo); o desplazando a la conciencia, la razónse abroga todo saber y la función directriz de la vida (estoicismo); en otras ocasiones laconciencia conserva sólo su mirada extrospectiva, olvidándose del ser y lo trascendente,queda su mirada cautiva en lo material y orgánico sea de tipo individual o social yendo a loútil y práctico; con lo que el saber permanece a nivel experimental y técnico (materialismo,individualismo, socialismo, utilitarismo, pragmatismo, etc.); o también negada la libertad,se hace perecer la voluntad y se pretende que son fuerzas inconscientes, humanas o no, lasque rigen los destinos del hombre (psicologismo, historicismo, biologismo, sociologismo,telurismo, etc.). Y, así, de múltiples maneras con exclusivismos, absolutismos yparcializaciones se desintegra lapersonalidad y las facultades del hombre tomándose así el saber, con mucha frecuencia,despótico e inhumano. En la intención de este trabajo se encuentra el despertar laconciencia a este problema e iniciar la búsqueda de una posible solución.

Enhorabuena pues, si es que logramos, aunque sea, vislumbrar el camino de unsaber más íntegro y más humano, al que damos el nombre de "saber integral". He aquí la"sabiduría", que culmina en el nivel trascendental, y a la que hemos invitado en lasprimeras palabras de esta obra (prólogo).

La reducción es el proceso cognoscitivo por el que el sujeto restringe, consciente oinconscientemente -dada su evolución-, su perspectiva epistemológica a una impostaciónfacultativa por la que dota a una de estas facultades de un predominio que invade los otrosámbitos (facultativos) otorgándoles su propia visualización. La reducción posee un dobleefecto: al reducirse visualiza con mayor precisión el propio ámbito al que se restringe; pero,al ampliarse a los ámbitos ajenos falsea el contenido de éstos al considerarlos bajo unaperspectiva que le es ajena. "Ley de la reducción: en la medida en que un reduccionismo serestringe en esa precisa medida se extrapola por el lado inverso".

Las reducciones extremas conducen a monismos, que son el fruto de laradicalización de un criterio individual que reduce la multiplicidad de factores a la unidaddel elemento preferido. El cual viene a constituir el prejuicio que falsea, al menos en parte,y distorsiona la perspectiva filosófica de los ámbitos que le son extraños, todoreduccionismo es falso porque el sistema de la forma estructural humana es integral. Cadaelemento penetra, en su interacción, el todo y la abstracción reduccionista falsea elelemento mismo como elemento de un todo. Las perspectivas de predominancia elementalson pasos de una evolución integral en la que ese elemento se torna el núcleo de laintegración total, penetrando de la acción global, por lo que el análisis que separa elelemento rompe el sistema y falsea el elemento.

Los reduccionismos son fatales y tienen consecuencias desintegradoras en elhombre; así, no es posible, con el existencialismo, considerar la existencia humana dejandototalmente al margen la ciencia humana de su reflexión; de igual manera que tampoco es

posible aferrarse, con el positivismo, a la ciencia empírica y olvidarse absolutamente de laexistencia en su propia realización, etc. Racionalmente lo inferior es reducido a lo superior,porque su función abstractiva posibilita que lo concreto sea reducido a lo abstracto y esto alo más abstracto. Empíricamente lo superior es reducido a lo inferior, porque su funciónintuitiva de lo concreto permite reducir lo abstracto a los datos empírico-sensibles que leoriginaron. Así, este movimiento reduce el tiempo al espacio, como el movimientoracionalista reduce el espacio al tiempo. Dichas reducciones hacen posible la integracióndel sistema de la propia perspectiva y alcanzar la correspondiente comprehensión, pero si seentiende la razón de la reducción, se comprenderá que ella no es la solución, sino lograr laperspectiva integral.

La división que permite clasificar los puntos de vista es diferente, según el criteriofundamental que las guía, como puede ser el tratado científico o filosófico de apoyo, cuyoaspecto da la perspectiva con la que se visualiza todo; así dice Werner Jaeger: "...tantoMelancton como los jesuitas edificaron su teología sobre la metafísica. Maquiavelo sacósus reglas de la política y los críticos y poetas franceses las suyas de la poética. Moralistas yjuristas se apoyaron en la ética y todos los filósofos hasta Kant y aún más acá en la lógica".3

Ubicar una epistemología permite comprenderla, porque da a conocer a partir de sunivel y primordialidad la perspectiva e integración del conocimiento. La inteligencia es unafacultad con tres funciones: la directa, como intuitivo comprehensiva; la reflexiva, comoabstracto-constructiva; y la proyectiva como activo-realizativa. Cada función posee suestructura y actividades propias que hace que les llamemos potencias. La desintegración ypreponderancia de alguna de ellas conduce, en combinación (y en algunos casos ensubordinación) con (a) la sensibilidad, a la diversidad de epistemes, que aquí pretendemosconsiderar bajo sus rasgos fundamentales.

La inteligencia en su realidad más profunda es de naturaleza intuitiva y esto esperfectamente captable en la naturaleza intuitiva de la comprehensión; sin embargo, lainteligencia se encuentra unida sustancialmente a un cuerpo material y esto determinaconcretamente los procesos cognoscitivos. Para hablar con propiedad de la inteligencia, esnecesario distinguir las tres potencias que integran tal facultad. La conciencia captaintuitivamente lo existencial y, al ser también intuitiva la sensibilidad externa, puede captarla existencia de la realidad con los datos que esta sensibilidad le proporciona.

La razón, por el contrario, necesita de la abstracción conceptual, para construir-reconstruir- la esencia, que al ser verificada en la realidad, permitirá se realice lacomprehensión intuitiva en la síntesis conciencial-posracional. En fin, la ciega voluntadnecesita los ojos tanto de la conciencia como de la razón para que en las vivencias seacaptado el perfeccionamiento, captable en la síntesis de la conciencia posvolitiva. Comopuede apreciarse, la inteligencia se manifiesta intuitiva en el momento cumbre de todoconocimiento.

El "criterio de verdad" que esbozamos en este trabajo pretende la aproximaciónprogresiva a la realidad a través del avance comprehensivo de la conciencia integral.Armand Petitjean, en Mise à Neuf presenta a la conciencia como "el primer principio nosolamente de nuestra reflexión sobre nosotros mismos y sobre el mundo, sino de nuestraexistencia en tanto que hombre". Las filosofías, añade, que "no parten del análisis del hechode la conciencia" se engañan, porque, "les falta su primer principio" y "sus perspectivasfundamentales no dejan de ser falsas". "La filosofía de la conciencia, al contrario, tiende aabarcar la totalidad de la condición humana, apelando a la más humilde de las cañaspensantes". La conciencia "no se explica por deducción, no llegamos a ella por inducción;

existe, se comprueba". Así, "el mono se hace hombre cuando sabe que existe ". "La conciencia nocrea el ser, como cree el idealista, ni se deduce de él, como afirma el materialista, lo revela a símismo, en tanto que existe". La conclusión que inferimos es: "El hombre es tal porque tieneconciencia de existir"; con lo cual coincidimos de modo admirable.

"Conocer", en sentido estricto, se identifica con "comprehender", como intuir en laevidencia conciencial el objeto conocido. Esto puede realizarse a siete niveles fundamentales, alos que nos referimos a continuación. Los tres primeros se reúnen por su naturaleza en uno solopara su armonía y trabajo integrado; a este "primer grupo integrado" de conocimientos ledaremos el nombre de "empiriología": como el estudio del conocimiento adquirido por laexperiencia de la sensibilidad (externa, interna y afectiva). El grupo empírico unido en trabajodinámico a la conciencia (4o. nivel) y la razón (5o. nivel) proporcionan el conocimientoteórico-racional y constituyen el "2o. grupo integrado" al que llamaremos "ciencia". Laconciencia como ya hemos expresado, desempeña un papel primordial en el conocimiento y estápresente ante todas las potencias y funciones pues le corresponde culminar todo actocognoscitivo; de ahí la amplitud y variedad de campos en los que se desarrolla la filosofíanombre que damos al tercer grupo. Son tres, pues, los campos del saber natural y nos referimos acada uno de ellos en el presente trabajo. La empiriología es materialmente-fenoménica yformalmente sensible; en tanto que la ciencia es materialmente experimental, fenoménica yformalmente racional; la filosofía es materialmente fenoménica, experimental y científica, yformalmente conciencial.

La fenomenología se aplica al análisis de los datos inmediatos del conocimiento y haceuna descripción de los elementos constitutivos de la conciencia. El análisis fenomenológicoexpresa la experiencia que tenemos de la propia conciencia en los diversos niveles a los que ellaestá presente con su visión intuitiva, existencial, sintetizadora y comprehensiva. Estos nivelesson:

a) sensible externo,b) sensible interno,c) afectivo,d) existenciario conciencial,e) esencial racional,f) volitivo realizativo yg) comprehensivo-integral.

Henri Ey considera que son cinco los ámbitos a los que se enfrenta el análisis del serconsciente: "El ser consciente se presenta en estos aspectos fenoménicos más característicos, yacomo experimentando experiencias vividas que afectan a su ser, ya como capaz de adaptarse a loreal, ya como teniendo el poder de una reflexión creadora, ya como un sistema personal, ya, enfin, como libre de determinarse por el conocimiento de sus propios fines".1 Estos mismos son losámbitos a los que nos referimos, a excepción de considerar la personalidad, no como un ámbitoespecifico, sino como la integración total de los otros cuatro.

Dos son los estados por los que ha pasado, de acuerdo con Maritain, la humanidad: el"mágico" y el "racional". "El estado mágico es un estado inferior, pero en manera algunadespreciable. Es el estado de la humanidad en su infancia, un estado fértil por el cual hemos

1 Ey, H., La conciencia, p. 19.

tenido que pasar y pienso que los antropólogos deberían reconocer que bajo este régimen lahumanidad se enriqueció con muchas verdades vitales, que eran conocidas por medio del sueño odel instinto adivinatorio, y por una participación real en lo conocido". Este estado está integrado ala vida de la imaginación.2

El conocimiento parte de un "núcleo estructural-facultativo", que inicia sus funciones alser estimulado por el medio ambiente; desde este momento la estructura-facultativa y elconocimiento adquirido se integran en una estructura -cognoscitivo- facultativa, que evolucionade los niveles inferiores a los superiores. Lo que se encuentra en niveles superiores, de algúnmodo se encuentra en su génesis a nivel inferior y rudimentario; así, por ejemplo:

1er. nivel: concepto2o. nivel: datos sensibles que sustentan el concepto3er. nivel: procesos y grabaciones orgánicas

Piaget, a través de sus estudios experimentales hechos en colaboración con otros autoresy con el Centro Internacional de Epistemología, muestra la persistencia de las operaciones aestructurarse de acuerdo con ciertas líneas y tendencias naturales:

"...pudimos constatar unos datos sistemáticos que demostraban la existencia de lasaptitudes en cuestión porque todos los alumnos de todas las edades y de un nivelintelectual medio o superior a la media manifestaron unas mismas iniciativas y una mismacomprensión".3

En tal persistencia operativa y estructuradora reconocemos nosotros la existencia de unnúcleo estructural facultativo y su desarrollo a través de la interacción con el medio ambiente.

Cuando un nivel se torna insatisfactorio, porque no responde adecuadamente a lo que seespera en determinada problemática, sobreviene la crisis de tal nivel con su esquema y/o sistema.Crisis en la que estos sistemas o esquemas se desestructuran o sirven de base para posibilitar elsurgimiento de un nuevo nivel en el que los elementos anteriores reaparecen renovados por otraperspectiva e integrados en otro tipo de estructura. Con ello aparece otra impostaciónepistemológica que propicia otros paradigmas adecuados a la nueva estructura (lógica o no) y quepermiten el avance del conocimiento.

Las etapas de la vida humana deberían caracterizarse por el desarrollo primordial de unanueva episteme que permitiera trascender la anterior; así, la infancia con los tres niveles de lasensibilidad y la creciente razón concreta; la adolescencia con la razón abstracta y elfortalecimiento de una voluntad basada en ideales firmes (no una voluptuosidad desenfrenada) yla edad adulta con el perfeccionamiento del nivel integral; pero la realidad muestra las grandesdeficiencias del desarrollo real de las personas y de las comunidades.

En la primera adolescencia se libera la razón para construir una vida abstracta que nologra concretizarse en la realidad y en la segunda adolescencia se independiza la voluntad quecobra una fuerza inusitada para realizar una vida, generalmente incoherente consigo misma, aligual que con el medio social, por su desintegración con ambos factores.

2 Maritain, J., Filosofía de la historia, p. 93.3 Piaget, J., A dónde va la educación, p. 93.

Nuestra comprehensión del desarrollo humano parte de su génesis para captarlo en surealidad, lo analiza para descubrir sus elementos y estructura funcional, lo sintetiza para captarsus niveles de unificación y lo integra para proyectar su realización integral.

El pensamiento en una episteme reducida hace referencia a un "horizonte fundamental"; siproviene de la necesidad básica e instintiva del organismo es el "horizonte pulsativo", si surge dela sensibilidad internase da el "horizonte emotivo"; si proviene de la razón se tiene el "horizonteteórico", si surge de los valores de la libre voluntad se posee un "horizonte motivacional". Un"horizonte integral" unifica en una coordinación sistemática los horizontes fundamentales para larealización integral del hombre.

La conciencia no es generada ni por el organismo ni por la sensibilidad; ella es elprincipio primero de la inteligibilidad humana, la conciencia es innata al hombre, no así suesencia que nace y se desarrolla con las estructuras del cuerpo, al que está unida sustancialmenteen un solo ser.

¿Qué constituye a la conciencia como tal, es decir como existencia? La autopresenciacomo evidencia comprehensiva de existir; su naturaleza es tan simple, que carece de todaestructura y, por ello, la esencia le es advenediza, aunque le sea integrada en la unidad de su ser.Aún la memoria le es integrada en la experiencia paulatina de su ser.

La razón es una potencia generada a la vez por la conciencia y por la sensibilidad. Larazón es un desdoblamiento o reproducción de la conciencia en cuanto inteligibilidad; pero,ligada en su desarrollo y funcionamiento a lo sensible y orgánico, de tal manera que si se carecede un sentido se carece del área correspondiente e igualmente si se carece de un lóbulo cerebral.

La conciencia genera a la razón a través de su experiencia intelectual como memoriaobjetivada. En el momento en que se invierte la mirada y la experiencia existencial escontemplada no desde el presente vivencial de la conciencia sino desde el presente-pasado de larazón que contempla mediata o cuando más inmediata-mediatamente (en el experimentoexistencial provocado y analizado por la razón), y de modo objetivo-esencial. En el momento enque por primera vez se invierte la mirada intelectual, surge el primer concepto ligado aún a laconcreticidad del objeto y/o acción real. Desde aquí se irá desarrollando la razón por lamultiplicación de conceptos y la estructuración de ellos por relaciones y categorías, dando conello lugar a la ciencia de la lógica.

La voluntad es generada a la vez por la conciencia existencial y la razón. La voluntad,como la conciencia y la razón es de naturaleza intelectual; pero, en su desarrollo está ligada a larazón y en su acción, al igual que la razón en su funcionamiento, está atada a lo sensible yorgánico. La conciencia y la razón generan la voluntad en el momento que se presentan ante laconciencia múltiples posibilidades de acción o realización vital y requieren ser analizadas por larazón, para que en una valoración conjunta (de conciencia-razón) generen la volición libre en laadhesión responsable al valor elegido; ésta es la libertad realizadora de la voluntad.

La independencia es la "totalización de sí" que niega lo otro para lograr la"sistematización de sí" y el "control de sí" que posibilite la reapertura al otro en un sistema que seintegra al mundo. Por ello, la independencia es una fase radical y necesaria que destruye paramadurar y posibilitar la reintegración trascendente. El otro le engendra y no podría ser sin el otro;pero requiere romper el cordón umbilical para madurar y capacitarse para engendrar al otro yconstituir el nosotros. Tal es la "ley de la evolución humana" que involucra la "independencia",como fase intermedia.

En todo pensamiento de facultades independizadas el orden creado es el impuesto a larealidad; así en el pensamiento mítico: "El orden de las fantasías o divinidades es el orden de sumundo", en la ciencia moderna: "El orden de la formalidad racional es el orden de la

objetividad"; finalmente, en el existencialismo voluntarista: "El orden de las voliciones es elorden de la vida". La desintegración es la causa del extravío; pero su experiencia ha sido útil en eldesarrollo histórico del conocimiento humano.

El conocimiento humano, no es un registro de procesos y ni siquiera de fenómenos, es lacomprehensión sintética de la vida humana, a través de la evolución de sus estructuras, enrelación con una realidad objetiva que trata de ser comprehendida con coherencia vital. Elconocimiento, dice Eugéne de Roberty en Nouveau Programme de Sociologie, "essimultáneamente una interiorización, una proyección en el interior del objeto pensado, y unaexteriorización, una proyección hacia fuera, una perpetua altruización del sujeto pensante".

La perspectiva conciencial extrospectiva es existencial y contempla con intencionalidadobjetiva; esta perspectiva corresponde a la conciencia primitiva. La perspectiva racionaloriginada por la conciencia extrospectiva es esencial y de intencionalidad objetiva; es la razónprimitiva. La perspectiva conciencial introspectiva es existencial y de intencionalidad subjetiva;tal actividad se complementa con la objetivación de la razón reflexiva, que considera de modoesencial los datos existenciales de la conciencia con intencionalidad de conocimiento subjetivo.La conciencia subjetiva exige la actividad de la reflexión racional para el logro de la concienciasecundaria y de la razón secundaria para integrarse con ella en la "síntesis posracional".

La perspectiva de la síntesis posracional naturalmente genera la perspectiva volitiva quemotiva la realización subjetiva. La perspectiva teórica se integra a la perspectiva práctica en la"síntesis integral"; esta síntesis da lugar a la conciencia, razón y voluntad terciarias. La voluntadprimaria se da en un movimiento natural que sigue a la razón primaria pretendiendo poseer en síel objeto dado a conocer por la razón. Esta genera una ética primordialmente empirista yutilitarista. La voluntad secundaria nace de la síntesis posracional y en ella domina la perspectivateórica dando lugar a una ética racionalista; finalmente, la síntesis integral posibilita una éticaintegral que toma en cuenta lo objetivo y lo subjetivo, lo teórico y lo práctico, lo personal y locomunitario.

La síntesis posracional integra lo existencial a lo esencial y lo objetivo a lo subjetivo:"conciencia secundaria". La síntesis posvolitiva integra lo teórico a lo práctico y lo subjetivo a loobjetivo: "conciencia terciaria". La síntesis integral integra lo teórico-práctico ysubjetivo-objetivo a lo personal-comunitario: "conciencia integral". Lo primitivo carece desíntesis: "conciencia primaria".

La tendencia epistémica de la razón, por la naturaleza de sus funciones, la llevaespontáneamente a las reducciones, en tanto que la visión sintético-comprehensiva de laconciencia, de modo inverso le conduce hacia la visión globalizadora del mundo en que elhombre se desenvuelve.

Para solucionar la contradicción entre el ser parmenideo y el devenir heracliteo,Aristóteles elaboró las nociones de acto y potencia, que se han hecho clásicas a través de lahistoria; pues de hecho casi toda interpretación del cambio, de un modo u otro, incluyenfundamentalmente tales nociones: "Potencia" es una realidad determinable, capaz de realizarsey/o llegar a ser otra cosa. "Acto" es una realidad determinada.

Explicar el devenir o transformación del ser por la dialéctica de la antítesis en la oposicióno negación del "no-ser", si se interpreta tal "no-ser" como privación absoluta carece de sentido laexplicación; si se interpreta como "cierta privación relativa" en el sentido de poseer la capacidadde desarrollo para llegar a realizar tal perfección o ser, entonces dicha interpretación coincide conla aristotélica.

Por lo que respecta al desarrollo o transformación del pensamiento, ya hemos intentadomostrar la dialéctica, que a nuestro juicio, se realiza en la evolución del conocer. Tratemos de

precisar ahora este tipo de "dialéctica cognoscitiva": Esta dialéctica no es idealista ni materialista;se realiza en el terreno gnoseológico y no ontológico. El método que nos ha permitido describirlaes un análisis realista e integral del mismo conocer.

Dicha dialéctica se realiza a tres niveles fundamentales: 1o. orgánico, 2o. sensible y 3o.intelectual. Es tricotómica en la acción generativa, pero múltiple en la acción funcional. No serealiza por pasos sino por dinámica continuada y variable.

1er. nivel. La dinámica es inconsciente, autómata y determinada. El organismo es unaestructura invariable (su evolución puede captarse sólo a través de siglos); cuyo punto de partidaes una función necesaria y determinada, que pulsa para satisfacer de elementos necesarios a lafunción. La estructura orgánica posee una función con tres direcciones:

1a. La "en sí" que es la función misma en su necesidad y determinación.2a. La que tiende "fuera de sí" para exigir los elementos necesarios a la función; semanifiesta por la pulsión.3a.La del retorno "para sí" en la satisfacción de la necesidad restableciendo el equilibriofuncional.Esta dialéctica corresponde a la acción generativa de las direcciones de la función

orgánica. La 1 a. dirección es la estructura fundamental en dinamismo interno, la 2a. es unaexplicitación de la 1a.; y la 3a. es la función sintética de ambas en cuanto dirección. En realidad,esta dialéctica no es otra cosa que el mecanismo de retroalimentación del organismo paracontinuar en su desarrollo y es de menor importancia comparada con el fundamento mismo dedicha estructura orgánica, que es la "forma corporal", consistente en un conjunto de pautasgravadas en ciertos esquemas de tipo electro-químico-magnético y que indican las líneas mismasde estructuración y desarrollo dinámico del organismo y su propagación.

"La estructura corporal" no es ente independiente en el hombre sino que trabaja integradaa los otros dos niveles y de ahí su interacción; así, por ejemplo, las gravaciones orgánicas generanpulsiones, instintos, etc., Evidentemente las interrelaciones son múltiples; pero, no es nuestraintención el descender aquí a detalles, sino seguir las líneas generales de la "dialécticagenerativa" del conocimiento.

Antes de continuar adelante es necesario hacer notar que la dialéctica cognoscitiva no espuramente generativa, pues sería una dialéctica creativa de lo superior, sino generativa deldespertar estructurador de la potencia latente. Antes de que una facultad despierte, existe ennaturaleza latente y su despertar se genera en la estructuración de su capacidad funcional.

Como puede apreciarse, en la base de esta noción de "dialéctica generativa" se encuentrala noción aristotélica de "potencia activa", pero en una dinámica dialéctica apropiada aldesarrollo cognoscitivo. La misma estructura orgánica genera (en el sentido indicado) la"potencia del conocimiento sensible", a través de la siguiente dialéctica: lo. El "ser en sí", laestructura orgánica correspondiente: ojos, oído, etc. 2o. El "ser fuera de sí": La estructuraorgánica reproduce de acuerdo con su estructura y función las características sensiblescorrespondientes a su objeto, así los ojos nos presentan las figuras, el movimiento, etc. 3o. Elretorno del "ser para sí" en la referencia que directa e inmediatamente hace la sensibilidad externaa los objetos reales. "La dialéctica de la sensibilidad externa" es inversa a "la dialéctica orgánica".Mientras ésta va del interior al exterior, aquélla viene del exterior hacia el interior.

Insistimos nuevamente en que la dialéctica es sólo el mecanismo en función y que para elconocimiento lo más importante es el contenido mismo de tal adquisición. La función de la

sensibilidad externa es dinámica de interiorización creciente, que genera "la sensibilidad interna"según la dialéctica siguiente:

1o. el conocimiento sensible "en sí", es decir, el conjunto de datos sensibles que lasensibilidad externa captó de la realidad.2o. El conocimiento sensible "fuera de sí" en la reproducción de la sensibilidad interna.3o. El conocimiento sensible "para sí" en la tendencia afectiva y satisfacción del apetitosensible.

En resumen, el conocimiento sensible es una potencia con tres funciones: la externa, lainterna y la afectiva. El organismo y el conocimiento sensible están integrados y funcionan en launidad de "la forma corporal" o estructura dinámica y organizativa del conjunto llamadosimplemente "cuerpo", en sentido pleno (leib).

En el hombre el cuerpo se encuentra integrado a la "inteligencia" o "forma espiritual", quepor su naturaleza diversa no es generada en su ser por la "forma corporal", pero sí le proporcionadatos en los que descubre los elementos apropiados para su funcionamiento y desarrollo. He aquíla dialéctica intelectual: 1 o. "El ser en si” es presentado directa e inmediatamente a la"conciencia intelectual" por la sensibilidad externa y mediata e indirectamente por la sensibilidadinterna. 2o. "El ser fuera de sí": la conciencia capta el ser real como "existente en sí". 3o. "El serpara sí". La conciencia refiere el ser existencial al ser real y concreto que está presente. Estareferencia es directa e inmediata por la acción intuitiva y evidente conciencial. Esta acción norequiere pasos, sino que es instantánea y sintética, (sólo al análisis racional le es dado presentarlaen dialéctica).

La memoria conciencial conserva la experiencia del ser captado -identificado con losdatos individuales que le caracterizan-.

1o. Este es "el ser en sí" que se presenta a la razón y que le genera en un desdoblamientode la acción conciencial.2o. "El ser fuera de sí". La razón en una reflexión analítica abstrae (de la experienciaconciencial) datos referentes al modo de ser o esencia y, forma el conceptocorrespondiente.3o. "El ser para sí" la conciencia en una visión sintética confronta el concepto racional ysu experiencia anterior, si capta concordancia sobreviene la "comprehensión" y el "juicioafirmativo" en el que atribuye el concepto como característica (esencial o no)correspondiente al ser u objeto real.

Esta es la dinámica que posibilita el conocimiento del ser real externo, pasemos a aquellaque permite el conocimiento del propio ser.

1o. "El ser en sí": La conciencia al ser despertada por el ser real en ese mismo instantecapta su propio ser como existente y al actuar progresivamente para llegar alconocimiento del ser real externo al mismo tiempo está presente ante su propio ser comoactuante y estos son los datos existenciales del propio ser que la conciencia presenta a larazón.2o. "El ser fuera de sí": La razón abstrae de estos datos las características (esenciales o no)del propio ser y forma los conceptos correspondientes.

3o. "El ser para sí": La conciencia realiza la confrontación correspondiente entre conceptoy experiencia existencial para que sobrevenga la "comprehensión del propio ser" y su"juicio afirmativo".

Conocido el propio ser, así como el objeto externo, nace la relación de ambos en lavolición que genera la voluntad en la siguiente dialéctica: 1 o. "El ser en sí": La concienciapresenta por una parte la experiencia existencial del propio yo; y, por otra parte, los datos teóricosde un objeto determinado (y en experiencias posteriores la teoría será complementada por laexperiencia vital tenida de dicho objeto). 2o. "El ser fuera de sí": La razón analiza y relaciona loselementos de ambos miembros: el subjetivo y el objetivo, aportando los pros y contras de dicharelación para la perfección del ser subjetivo. 3o. "El ser para sí": La conciencia en visión sintéticatrata de captar la conveniencia de dicho objeto (y/o acción) para la realización perfectiva delsujeto, si capta conveniencia sobreviene la "comprehensión" y el "juicio práctico", en el que seafirma la conveniencia de tal objeto y/o acción para la realización del sujeto. De aquí - surge la"verdad teórico-práctica" y vayamos, finalmente, a la "verdad existencial" vivida en la siguientedialéctica:

1o. "El ser en sí": el mismo "juicio práctico" genera la voluntad de decisión de poseer talobjeto y/o alcanzar tal objetivo de realización.2o."El ser fuera de sí": la voluntad mueve a la acción a las diversas potencias y funcionespara obtener el objeto y objetivo.3o. "El ser en sí y para sí" con la realización del sujeto por el objeto u objetivo y lacomprehensión valorativa de la conciencia.

Cuando la realización humana ha sido integral como la descrita (en líneas generales)anteriormente, en este último momento es posible el que la conciencia contemple en "visióncomprehensiva" la perfección integral de su ser (verdad existencial) y goce la belleza de sí.Evidentemente esta perfección integral sólo es posible en la integración de persona y comunidad,como se verá en la conclusión.

Resumiendo, podemos decir que en el hombre hay una facultad intelectual con trespotencias: la conciencia, la razón y la voluntad. Cada una de ellas posee múltiples funciones, perotiene tres direcciones fundamentales:

a) la "en sí",b) la "fuera de sí"c) la "para sí".

Para finalizar insistimos en que ésta es la dialéctica o proceso funcional y que mayorimportancia reviste el contenido mismo del conocimiento, donde realmente puede descubrirse laverdad (en sus diversos grados y niveles).

La epistemología es el estudio de los fundamentos, estructura y valor del conocimiento.La epistemología parte de la intuición fenomenológica de los primeros datos que se presentan a laconciencia para analizarlos a través de la razón y descubrir su estructura, lo que posibilitarájuzgar su valor teórico-práctico con base en su fundamentación y funciones, lo que permitirá almismo tiempo obtener conclusiones con relación a la validez y operatividad de sus leyes yprincipios.

La epistemología fenomenológica consiste en la descripción de los hechos que aparecenante la conciencia a través de los diversos niveles, como la constatación directa e inmediata de los

elementos y datos presentados. La epistemología crítica consiste en el análisis, estructuración yjuicio teórico que la razón puede emitir sobre la validez del conocimiento en sus diversos niveles.La epistemología existencial consiste en la valoración práctica que la voluntad puede emitir sobrela validez de un tipo de vida. La epistemología integral reúne en una síntesis comprehensiva lostres tipos específicos de epistemología en un sistema coherente y unificado, superando con estenuevo sistema total las epistemologías reducidas.

Una "dialéctica integracionista" parte de la naturaleza misma del ser humano en sucomplejidad radical y sigue su evolución en la que no hay antítesis o negación sino la creación deuna estructura superior que en modo alguno anula la anterior sino que se superpone y supone sufuncionamiento, en el ciclo inmediato superior de la espiral ascendente. Un nivel es reflejoevolucionado del nivel anterior que le engendró en su punto de partida; por lo que no le niegasino le perfecciona. El conjunto facultativo del que se parte es sorprendentemente el mismo y, sinembargo, su sistema abierto posibilita que cada uno lo desarrolle por caminos distintos en unaverdadera creación de su propia personalidad.

En torno al punto el Dr. Serrano nos plantea las siguientes reflexiones: "Me interesadestacar aquí cómo es posible, con respecto a una misma realidad, formular consideracionesdiversas, consideraciones que en algunos casos -raramente- constituyen en un mismo individuotensiones saludables ya en un sentido -Científico- ya en el otro -filosófico-. Refiriéndome a estoúltimo, se trata, y quizá sea esto lo más difícil para un científico, de una conversión de laconsideración intelectual que supone una conversión total de proyecto y de la racionalidad, yaque con la filosofía se trata de una racionalidad de otro tipo distinto de la racionalidad científica-actualmente dominada de hecho por el tipo de racionalidad matemática-. Se trata de un cambioconsciente de actitud que implica y requiere una actualidad muy especial de la libertad. En efecto,no se llega a ser filósofo sino libremente".4

La afinidad y contraste buscan en la comparación las características comunes a unaepisteme y los rasgos propios de cada personalidad, para intentar el descubrimiento de lasestructuras formales propias de un nivel epistémico en confrontación con la originalidad de lacreación personal.

Definir los rasgos generales de las estructuras epistémicas nos permitirá delinear elsistema esencial del conocimiento y, con ello, los elementos indispensables para la constituciónde una epistemología integral.

El trabajo filosófico de síntesis no puede quedar soslayado y sumergirse en elreduccionismo de un análisis cada vez más restringido. En este caso no es que "el desiertocrezca", sino que se pierde en el deslumbramiento del cintileo de una de sus diminutas arenas. Sinque neguemos la necesidad continua de la función analítica, insistimos en la necesidad de lavisión sintética y evaluadora a través del desarrollo de todos los estudios, de lo contrario se caeen un atomismo desintegrador que incapacita la comprehensión de la propia área y su valor.

En torno a la epistemología ha habido a través de la historia múltiples perspectivas peroson tres los ejes primordiales: a) conocimiento es la adecuación de la inteligencia (de lasubjetividad) al objeto real. b) El conocimiento es la asimilación del objeto conocido a lasestructuras cognitivas. c) El conocimiento es la dinámica interacción entre las estructurascognitivas y el objeto real a través de un proceso asimilativo-adecuativo, en el que laintencionalidad pretende un progresivo descubrimiento del objeto real mediante latransformación adecuada de las estructuras del sujeto.

4 7 Serrano Moreno, Jorge, Filosofía de la ciencia, Ed. CEE, Méx., 1980, p. 25.

La secuencia de las diversas epistemes no es gratuita ni azarosa, sino que una es evoluciónde la otra; o bien por desarrollo perfectivo, o bien por inversión de perspectiva, o bien portransposición de la primordialidad, etc., e incluso por algunos de estos elementos a la vez convariada importancia. A través del trabajo irá apareciendo dicha evolución en un esbozo queaunque primerizo y con múltiples deficiencias, pretende hacer inteligible la historia delpensamiento humano, línea en la cual los estudios han avanzado muy poco y este trabajopretende aportar algunos puntos en dicho avance. Si se lograra este intento nos consideraríamossatisfechos, dado que el estudio total nos parece por ahora una ilusión imposible; pero tal ilusióncon el avance integrativo se irá haciendo una realidad, que esperamos en un día no lejano, lahumanidad pueda para su beneficio, llegar a poseer. He aquí la razón del título "Hacia unaepistemología integral".

La integración de varios elementos en una organización superior bajo el régimen deprincipios evolucionados y, por tanto, nuevos, no es un eclecticismo sino un nuevo sistema enel que aquellos elementos son los factores de la nueva estructura. Así, una molécula de aguano es un sistema ecléctico sino realmente una nueva estructura integrada en una organizaciónsuperior por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno. De modo semejante, integramos, poroposición epistemológica, diversos sistemas, válidos, cada uno de ellos, en un ámbitocerrado; la integración les permite la superación de sus límites, sin incurrir en una falsaextrapolación. La unión organizativa de ellos en un sistema constituye la epistemologíaintegral.

Una investigación es científica, para Umberto Eco, cuando cumple con los siguientesrequisitos:

1. "Versa sobre un objeto reconocible y definido".2. "Dice cosas que todavía no han sido dichas o revisa con óptica diferente las cosas

que ya han sido dichas".3. "Es útil, porque da algo a la comunidad".4. "Suministra elementos para la verificación y la refutación de la hipótesis que

presenta".5

Nuestra investigación pretende iniciar un movimiento que supere la confusión ydispersión del pensamiento (punto 3), mediante la constitución de una "epistemologíaintegral" (punto 1 y 2), para lo cual contrasta las epistemes reducidas en sus límites yaciertos, así corno en sus aspectos de extrapolación falseadora (punto 4).

La conciencia en su núcleo fontal es de naturaleza intuitiva-comprehensiva y por suunión al cuerpo no se independiza en un conocimiento puramente intuitivo, por lo que nogenera una episteme propia de tinte exclusivista. La sensibilidad interna, en cambio, sedesdobla por la intervención abstractiva de la razón que da lugar al empirismo en la teoría,ligado al utilitarismo práctico; la segunda epísteme es la que de modo espontáneo sigue labelleza formal de la estructura sensible: la episteme estético-romántica. De igual manera, lasensibilidad externa se desdobla, la primera es la espontánea (donde el sujeto se proyecta por 5 Eco, U., Cómo se hace una tesis, Gedisa, pp. 48-52.

la conciencia primaria y crea por la asociación libre de su fantasía ensueños conscientes parainterpretar la realidad); es la episteme mágico-mítica; la contraparte se produce porintervención de la razón que quiere reducirse a la abstracción de los datos sensibles en unaviolencia tal que resulta impracticable: la episteme sensista, a la que por esta razón no lededicamos un espacio propio, aunque la consideramos en diversos lugares principalmente en elpunto dedicado en la parte final a la sensibilidad externa. La razón que parte de la sensibilidadpara obtener un contenido conceptual da lugar a la episteme llamada "intelectualista". La razónindependiente que parte de sí y se fundamenta en sus propias estructuras propicia la episteme"eidético-racionalista". Por otra parte, la conciencia atenta al trabajo racional nos proporciona lafenomenología racional; la voluntad independizada que busca la autorrealización genera el"voluntarismo"; la conciencia presente al movimiento del ser para la realización existencialpermite el "existencialismo" (tipo heideggeriano); distinguimos estas dos últimas epistemes enque en el "voluntarismo" la primordialidad se ubica en la voluntad, como potencia humana ocósmica que parte de sus propias estructuras y de su arbitraria decisión; en tanto que en elexistencialismo la primordialidad corresponde a la comprehensión de la conciencia que trata deadecuar la propia existencia al movimiento del ser, sea éste de tipo histórico, trascendente, etc.Esta es la episteme que se encuentra más cercana a nuestro punto de vista; de acuerdo con nuestratesis, la conciencia integra todas sus facultades y potencias para crear la esencia de su existencia,no determinada por el acaecer temporal e histórico, ni por la predeterminación divina, sino que seorienta por las condiciones y posibilidades de la circunstancia histórico-social para crear en síalgo nuevo y personal en concordancia con la "circunstancia", ahí se integran los elementossubjetivos y objetivos, personales y comunitarios en la creación de un espíritu nuevo y original:la episteme integral es primordialmente trascendente. La epistemología integral es culmen,trascendencia de las epistemologías restringidas y, en este sentido, una conclusión quepresentamos en esta obra.

7.4 INTUICIÓN Y CONCIENCIA

El intuicionismo sostiene que hay realidades, como la existencia, la historia, losvalores, etc., captables sólo de modo adecuado por la intuición; pero sobre la naturaleza detal intuición las posiciones se han diversificado grandemente.

Los diversos autores, que son aglutinados bajo el rubro de "vitalismo", concuerdanen otorgar la primordialidad a la vida; pero el acuerdo desaparece en el momento de definirlo que consideran es la vida. Así, para Bergson la vida es una corriente interna a la realidadque mantiene la duración e impulsa el cambio cualitativo de ella. Esta fuerza recibe elnombre de "ímpetu vital" élan vital, y se capta a través de intuición como un procesosimple en el que una acción se hace a partir de la acción que se deshace. Para Dilthey, encambio, la vida a la que hace referencia es de naturaleza histórica, etc. La fórmula vitalistainvierte la enunciada por la escolástica que decía operari sequitur esse (el obrar se sigue delser), los vitalistas dicen esse sequitur operari (el ser se sigue del actuar).

El contacto extrapolado de Bergson con el propio élan vital impregna la evoluciónde la naturaleza; en un intuitivismo exagerado de la propia conciencia y en un inmediatismode extrapolación universalizante. A continuación expondremos, brevemente, el intuitivismode Henri Bergson, con la finalidad de hacer ver las extrapolaciones y funestasconsecuencias a las que conduce el reduccionismo intuitivista, para presentar acontinuación el ensayo, que corresponde a nuestra opinión, por reducir la intuición a susjustos límites.

Bergson define la intuición como: "una especie de simpatía intelectual por la quenos transportamos en el interior de un objeto para coincidir con lo que tiene de único y, porconsiguiente, de inexpresable". La conciencia es, para H. Bergson, el puente tendido entreel pasado y el porvenir. La conciencia conserva y acumula, cual memoria, el pasado en elpresente; la conciencia tiende e invade el porvenir por su acción. El ser consciente esduración que se apoya en el pasado y se inclina al futuro. Materia y conciencia se explicanmutuamente: La conciencia, dice Bergson, "es acción que sin cesar se crea y se enriquece",en tanto que su inversión: la materia, "deshace y gasta".

El cuerpo, dice Bergson, es "un instrumento de la acción y sólo de la acción"9 laacción se encuentra en estado virtual en la percepción que nos ubica en el campo de losobjetos para poder actuar: "la acción virtual de las cosas sobre nuestro cuerpo y de nuestrocuerpo sobre las cosas es nuestra percepción misma". La percepción está "enteramenteorientada hacia la acción" y posee capacidad selectiva, como podemos constatarlo aún enlos animales. La percepción, de hecho, jamás se presenta de modo "puro". "La percepciónnunca es un simple contacto de la mente con el objeto presente. Está toda ella impregnadade imágenes mnémicas que la completan interpretándola".10 "La percepción pura" y "laacción virtual" dependen del cerebro, que desempeña la función de relacionar a la manerade una "central telefónica", pero que no es un "almacén" que conserve recuerdos; ya que la"memoria pura" depende de la "duración pura"; los recuerdos son únicamente filtrados porel cerebro, pero no son una función del cerebro.

______________________________9 Bergson, H., Matter and memory. p. 299.

10 Ib.,p.170.

La percepción en cambio, posee una "memoria-hábito" que es "un sistema cerradode movimientos automáticos que se suceden unos a otros en el mismo orden y ocupan elmismo tiempo",11 de este modo puede realizarse un baile o aprenderse una poesía. En estalínea se han fijado los instintos, como hábitos o "facultad de usar y construir instrumentosorganizados",12 es decir instrumentos que son el propio organismo. En este sentido, elinstinto está cerca de la vida y si pudiera reflexionar "nos daría la clave de las operacionesvitales".13 La percepción es el origen del instinto en cuanto fijación habitual; pero en cuantoha dado solución a problemas de acción, ha requerido de la intuición y del impulso del élanvital, que es el motor de la evolución. La vida instintiva -como la de los insectos: abejas,hormigas,...- y la vida intelectual del hombre tienen el mismo origen en la intuición; porconsiguiente, en el hombre la percepción requiere de la intuición, y a través de ella seconecta con la "duración" y con la "memoria pura"; por lo tanto la percepción concreta, deacuerdo con Bergson, es una síntesis de "percepción pura" y "memoria pura". Lapercepción siempre es presente y el recuerdo se remonta por la intuición a la "memoriapura", pero la percepción es enriquecida e interpretada por la "memoria pura". El cuerpoorienta el espíritu a la acción, pero el espíritu no es una función ni epifenómeno cerebral; lalesión cerebral inhibe la acción, pero no el espíritu. Bergson se expresa en un francodualismo de la realidad del cuerpo y del espíritu.

El hábito se estratifica en la especie a través del instinto y en la sociedad a través dela costumbre-legal, moral y religiosa- que es impuesta por la presión social: "Una granparte de nuestras vidas es vivida al nivel del yo superficial, nivel en el que, más que actuarnosotros mismos se actúa sobre nosotros, por ejemplo mediante la presión social. Y por esoes por lo que raramente somos libres".14 La imposición de la presión social en relación conhombres libres es llamada "obligación" por Bergson, ya que no se trata de una necesidad;pero ésta no es una violencia, pues "cada uno de nosotros pertenece a la sociedad tantocomo se pertenece a si mismo.15 Y tiene la tendencia a adaptarse a la presión social, pueslleva consigo su "ego social"; además, el sentido de la "obligación" es mantener lasolidaridad en la vida social. La obligación se da en la sociedad cerrada y es de origeninfraintelectual, pero cumple con una función social. La moral y la religión estáticas ycerradas proceden de la facultad mitificadora, donde la deidad protectora de la tribu o de laciudad da las normas de vida para evitar la muerte y la disolución de la sociedad. Estamentalidad mítica no se ha dado sólo entre los primitivos sino que continúa en nuestracivilización, como una reacción defensiva del instinto, contra los avances excesivos de lainteligencia disolvente, de la disciplina social.

La percepción permite captar la objetividad de los entes físicos de acuerdo conBergson, pues afirma que la imagen, que ella nos proporciona, es "una imagen que existeen sí misma".16 La "objetividad" y la "actividad virtual" son las dos características de lapercepción que desarrollan la inteligencia, pues ésta al igual que aquélla posee la.orientación práctica al servicio de la vida; el objetivar todo conocimiento, que lainteligencia realiza a través del análisis, cuyo objeto primordial es lo discontinuo, estable einmóvil es una "incapacidad natural para comprender la vida".17

______________________________11 Ib., p. XII.12 Bergson, H., Creative evolution, Ed. Londres y Nueva York, 1914, p. 75.13 lb., p. 18614 Bergson, H., Time and Free Will, Londres y Nueva York, 1910, p. 23115 Bergson, H., The two sources of morality and religion, Londres y Nueva York, 1935, p.6.16 Bergson, H., Matter and memory, p. 1.17 Bergson, H., Creative evolution, p. 174.

Ya que ésta es continuidad del cambio en una "movilidad pura" del devenir; y lainteligencia es incapaz de pensar la duración sin reducirla al concepto geométrico deltiempo, donde el espacio determina al concepto de tiempo, como si éste fuera una líneaindefinida de instantes exteriores unos a otros; ciertamente esto permite matematizar ymedir el tiempo; pero éste no es el tiempo real que corresponde a la "duración". Lainteligencia discursiva fracciona y estatiza el continuo fluir de la conciencia. No extrañe,pues, que el lenguaje, expresión del pensamiento discursivo, posea las mismascaracterísticas. Aún el concepto del propio yo se encuentra bajo estos moldesespacializantes de la sucesión estatificadora, en la que el "yo" es objetivado a la maneracomo se percibe el objeto físico externo. Desde esta perspectiva, la libertad es concebidacomo una oscilación entre decisiones, donde la psicología asociacionista da lugar aldeterminismo de corte mecanicista o finalista, pues la decisión es determinada por elmotivo. La inteligencia analítica atada a la percepción espacializante da universalidad a laética dependiente del instinto y de la sensibilidad y, por lo tanto, de origen infraintelectual;no es la razón la que origina, sólo clarifica, organiza y defiende. La hemos llamadoanteriormente: "moral cerrada" o "moral de la obligación". La vida, la duración y la libertadno son susceptibles de definición, porque la definición es objeto del análisis intelectual queconceptualiza, reduciendo a cosa espacial, y, por lo tanto, distorsionando su realidad; e"implica una confusión previa de la duración con ¡a extensión, de la sucesión con lasimultaneidad y de la cualidad con la cantidad".18

La inteligencia analítica reduce lo complejo a sus constitutivos simples, piensa através de la simbolización de los conceptos, se ocupa del mundo material y realiza laciencia positiva; de este modo es como la psicología empírica analiza los fenómenosmentales -en el ámbito material; pues la ciencia tiene por objeto la materia y un métodoapropiado a su fundamentación analítica. Inteligencia, análisis y ciencia tienen por finalidadla acción constructora de "instrumentos no organizados" y el control del medio ambiente,dando lugar al homo faber. Lo dicho sobre la inteligencia analítica nos permite entenderporqué la ciencia se inicia con la "ley de la inercia" La contraposición que Bergsonestablece entre "intuición" e "inteligencia", elimina a ésta en su validez para otorgar aaquélla el campo entero; con lo cual se obtiene la reducción de una y la amplificación de laotra, pero, a la vez, se ha llegado a la desintegración epistémica del ser humano.

Bergson afirma que la visión más profunda del hombre es la intuición, que procedede la conciencia y percibe la realidad, no por simbolizaciones, sino directa einmediatamente y le llama precisamente "conciencia inmediata"19 y considera que éstanecesita de la reflexión para alcanzar el contenido de su intuición en su significado másprofundo.20

El origen de todo conocimiento es la conciencia, que se ha desdoblado eninteligencia e intuición a través de la reflexión y a partir de la percepción sensible: "laintuición es instinto que ha llegado a hacerse desinteresado, consciente de sí, capaz dereflexionar sobre su objeto y de ampliarlo indefinidamente".21

Por consiguiente, para Bergson, la inteligencia antecede y ayuda a la información dela intuición, la reflexión libera al instinto del hábito fijado en la práctica, para quetrascienda la conciencia al nivel de la intuición. "Este desdoblamiento de la conciencia estápues, relacionado con la doble forma de lo real, y la teoría del conocimiento debe dependerde la metafisica".22

______________________________18 Bergson, H., Time and free will, pp. XIX-XX.19 Bergson, H., La pensée et le mouvant, 3ª. Ed., 1934, p. 35.20 lb., p. 10921 Bergson, H., Creative evolution, p. 186.22 lb., 188

Formada la intuición el intercambio es continuo con la inteligencia, pues ésta debe sercontrastada y corregida por la intuición y, a su vez, aquélla debe ser aplicada a la prácticapor ésta. Bergson opina que, así como la inteligencia tiene por objeto lo material y lapráctica, la intuición está orientada a la vida y a la realidad, que es continua, pues el tiempo"real" se capta en la experiencia interior y es "pura duración": "la continuidad del cambio esmovilidad pura".23 La duración pura es el cambio cualitativo integral en el que cadaelemento influye en el todo y el todo descansa sobre cada elemento. "La duración pura es laforma que adopta la sucesión de nuestros estados de conciencia cuando nuestro "ego" sedeja a sí mismo vivir, cuando se abstiene de hacer una separación entre su estado presente ylos que precedieron".24 La "duración pura" permite el registro de "todos los sucesos denuestra vida diaria"25 y, con ello, la creación de la "memoria pura" donde los recuerdos sonalmacenados en el inconsciente para impedir que invadan la conciencia e impidan la acción.He aquí la función del cerebro, en el que son filtrados los recuerdos; pero la memoria pura,en sí misma es espiritual y se genera en la duración pura conciencial.

La "memoria pura" de Bergson, no es otra cosa que la "experiencia conciencial" dela vida, con una intencionalidad en doble vértice: captar el devenir del mundo queevoluciona y captar el devenir de la propia persona que se crea a partir de su propiaevolución. Tal "memoria pura" es la captación integral de la vida en su proyección externa,en la que el presente conserva el pasado y se proyecta evolutivamente al futuro. Es laconciencia que gira en torno a sí con proyección externa a través de la percepción sensibley la propia acción. La memoria, como "síntesis del pasado y el presente con miras alfuturo", es el puente tendido entre el mundo y la personalidad, así como entre el cuerpo y elespíritu.

La experiencia conciencial obtiene la existencia de los objetos materiales por lavisión o contacto de la percepción externa y por la "intuición" si se refiere al espíritu, dondeprimordialmente capta la duración real como vida del yo, en "visión directa del espíritu porel espíritu".26 Bergson capta el espíritu." "yo" como "devenir", pero no capta el ser, en símismo, del propio yo: "Hay cambios, pero no hay, bajo el cambio, cosas que cambien: elcambio no necesita soporte alguno. Hay movimientos, pero no hay objeto inerte, invariable,que se mueva. El movimiento no implica un móvil".27 La realidad es, pues, reducida porBergson a devenir y es objeto de la intuición, que le capta en su duración real; la intuiciónes la que nos revela la naturaleza de la realidad; aunque Bergson reconoce que no se trataen este caso de una conciencia inmediata sino de una conciencia reflexiva, que intuyeposteriormente a la construcción científica.28 En el desarrollo de su filosofía Bergsonintentó ser fiel a la experiencia poseída de la realidad concreta; pues consideraba que, aexcepción de Herbert Spencer, las concepciones filosóficas "no estaban hechas a la medidade la realidad en que vivimos". Herbert Spencer influencia, así, a Bergson a tal grado quepareciera que el objetivo primordial de su filosofía fuera: explicar el devenir en suevolución. Bergson rechaza toda interpretación mecanicista de la evolución y le parece queel "azar" exige demasiada credulidad, aún la causalidad teológica es reducida a un tipo de

mecanicísmo. Bergson intuye la actividad creadora de su propia libertad y aplica talexperiencia al devenir en general, en la que la realidad aparece como un perpetuo devenir,fruto del ímpetu arrollador de la dinámica creatividad del élan vital.

______________________________23 Ib., 171.24 Bergson, H., Time and free willm, p. 99.25 Bergson, H., Matter and memory, p. 92.26 Bergson, H., La pensée et le mouvant, p. 35.27 Ib., p. 185.28 Ib., pp. 82-83.

Para superar la acusación de una grave extrapolación, Bergson atestigua que estamosinmersos en la vida que evoluciona, y que nuestra participación e intuición del élan vital, ensu impulso cósmico, nos capacita para explicar la evolución creadora del universo. Es asícomo la filosofía o metafísica bergsoniana se apoya en la intuición y, aunque reconoce lanecesidad de la reflexión analítica, insiste en la necesidad de la purificación de laconceptualización simbólica, mediante el retorno a la aprehensión intuitiva. Bergsonconsidera que si la intuición estuviera más a nuestro alcance la filosofía vendría a la unidad;pero que, dada su dificultad y brevedad, es necesaria la colaboración mutua de ciencia yfilosofía, aunque tenga diversos objetos y metodología. La intuición y la filosofía dan lugaral homo sapiens.

La "intuición" y la "duración pura" son, para Bergson, la esfera de la libertadcreativa, en la que el hombre deviene creando su propia personalidad, pues la libertad exigela "intuición" de la vida interior y la actuación del yo como "duración pura", en la que elacto libre brota de la personalidad entera en una indefinible "relación del yo concreto con elacto que este yo realiza".29

De acuerdo con Henri Bergson, alma y cuerpo están unidos en la "duración"; pues lamemoria conserva las fases de la materia para manifestarse utilizándolas en la acción; éstaes la razón primordial de la unión cuerpo-alma: la proyección manifestativa de la persona."El espíritu toma prestadas de la materia las percepciones, de las que saca su alimento, y selas devuelve a la materia en forma de movimiento sobre el que ha puesto la impronta de supropia libertad".30

La libertad es fruto natural de la personalidad: "somos libres cuando nuestros actosdimanan de toda nuestra personalidad, cuando la expresan, cuando tienen con ella aquelindefinible parecido que en ocasiones halla uno entre el artista y su obra".31 La vida delhombre construye así su personalidad en un progreso continuo, en el que el pasado perduraen el presente y se proyecta al futuro en la adquisición de nuevas etapas de madurez, a lamanera como una bola de nieve conserva sus capas anteriores que le permiten acrecentarseen el futuro. Es posible seguir la evolución de la vida, porque casi no hay ningunamanifestación de la vida que no contenga en un estado rudimentario, latente o virtual, lascaracterísticas esenciales de la mayoría de las demás manifestaciones. La diferencia está enlas proporciones".32 El pasado genera el presente y, éste, el futuro; pero el núcleo másprofundo que genera la personalidad es la actividad creadora del élan vital.

Tanto la ética como la religión abierta y dinámica proceden de la unión mística conDios; "las almas místicas son las que han arrastrado y continúan arrastrando tras sí a lassociedades civilizadas".33 La respuesta del hombre en este campo procede de la libertad yde la personalidad, que se abre al influjo de la vida divina. Dios se manifiesta aquí como"amor universal", que impulsa la vida de modo inmanente y cósmico, hacia el progreso denuevas formas de vida en movimiento ascendente y trascendente. En la práctica la ética yreligión "abierta y dinámica" vitalizan a la "cerrada y estática", en tanto que ésta degrada aaquélla en la "obligación".

______________________________29 Bergson, H., Time and free will, p. 219.30 Bergson, H., Matter and memory, Londres y Nueva York, 1911, p. 332.31 Bergson, H., Time and free wiIl, p. 172.32 Bergson, FI., Creatíve evolution, p. 112.33 Bergson, H., The two sources, p. 68.

El dualismo bergsoniano separa de modo radical el espíritu, incluso de susproductos: "descripción, historia y análisis me dejan aquí en lo relativo. Únicamente lacoincidencia con la persona misma que daría lo absoluto. En este sentido, y solamente eneste sentido, absoluto es sinónimo de perfección [....] Pero lo absoluto es perfecto en cuantoque es perfectamente lo que es".34 El conocimiento científico versa sobre la materia, tiempoespacializado, al que aplica el análisis, se expresa con símbolos y hace referencia a lorelativo y gira en torno a la cosa. El conocimiento metafísico versa sobre el espíritu,duración real, al que aplica la intuición, logra lo absoluto porque penetra en el interior de lacosa misma; pues la intuición filosófica avanza en sentido inverso al analista y sumovimiento científico.

La intuición es, para Bergson, "la simpatía por medio de la cual nos transportamosal interior de un objeto para coincidir con lo que tiene de único y por consiguiente deinexpresable".35 La primera intuición es la de "nuestro yo que dura".Bergson intuye el "yo", como "una sucesión de estados cada uno de los cuales anuncia elque sigue y contiene el que precede". Tal intuición contempla el devenir del sujetocontemplante, cuya síntesis se identifica con la memoria conciencial, por ello dice Bergson:"porque nuestro pasado nos persigue y se alimenta constantemente del presente que recogeen su ruta; y conciencia significa memoria".36 La "memoria" posibilita la objetivación,porque ella agrupa las percepciones como objetos, sobre los que puede actuar. He aquí lostres niveles, que el análisis presenta del yo: percepción, recuerdo y acción virtual; peroninguno de ellos, ni su suma, son el yo, fruto de la intuición.

La perspectiva analítica ha dividido la ciencia y la filosofía debido a la impostaciónque ésta forma, con razón dice al respecto Bergson: "Empiristas y racionalistas sonvíctimas aquí de la misma ilusión. Unos y otros toman las notaciones parciales por partesreales, confundiendo así el punto de vista del análisis y de la intuición, la ciencia y lametafisica".37

Bergson llama "verdadero empirismo" a la intuición que "ausculta el espíritu" y"siente palpitar el alma".38 Disentimos de Bergson en utilizar tal apelativo, porque dichaintuición, aunque no propiamente racional, es de naturaleza intelectual-conciencial y, porende, la sensibilidad empírica queda bastante de lado como factor de actuación primordial.

Un ejemplo más de la inversión de perspectivas lo constituye el "concepto" vistopor Aristóteles y Bergson. Para el primero el concepto permite unificar la multiplicidad delos entes reales y corresponde al alma hacerse intencionalmente la cosa, en tanto que para elsegundo los conceptos son "sombras" que dividen la unidad de la cosa. Nuestra posicióndistingue y sintetiza a la vez ambas posiciones en la perspectiva de la intuición posracional;porque si es cierto que el concepto divide en su perspectiva analítica, sin embargo se acercaprogresivamente a la cosa y culmina en el juicio de la síntesis posracional. La intuiciónprimera es global y total en el campo existencial, pero no define su esencia.

Los estudios de Bergson sobre la intuición son muy significativos, pero susmúltiples descubrimientos le han deslumbrado y le han conducido a la exageración de la

extrapolación; por otra parte su honestidad y sinceridad son patentes; lo que es manifiestocuando declaró en su testamento: "Mis reflexiones me han acercado cada vez más alcatolicismo en el que veo el coronamiento del judaísmo. Me hubiera convertido si nohubiera visto prepararse durante años la formidable ola de antisemitismo que va a arrollar almundo. He querido permanecer con los que mañana serán perseguidos".

______________________________34 Bergson, H., Obras escogidas, Madrid, Aguilar, 1863, Pensamiento y movimiento, p. 1186.35 Ib.1p. 1187.36 Ib.,p. 1189.37 Ib.,p. 1189.38 Ib.,p. 1201.

Bergson estudió la risa en su tesis doctoral y la consideró como la reacción humanaante el sorpresivo cambio de una acción esperada; en ella, dice, concurren inteligencia,sentimientos, impulsos y valores, es decir, es una acción integral. En nuestro trabajoinsistimos en este aspecto de la acción propiamente humana: la risa, el lenguaje, elpensamiento, la libertad, la comprehensión, el amor, etc. Integración que tiene, en nuestraopinión, como fundamento la capacidad integradora de la conciencia.

La concepción intuicionista pretende conocer la realidad concreta de los entes demodo directo e inmediato. Consideramos que, puesto que la conciencia intelectualiza lasensibilidad, ella puede captar la existencia de los entes a través de sus datos sensibles, conlo que capta el ser existencial de los entes en su manifestación fenoménica; pero no laesencia (que exige el trabajo racional), a no ser que la labor racional haya constituido yadicha esencia (en cierto grado de adecuación) y, entonces, la conciencia sintéticacomprehende a esos entes determinados con la inclusión de su propia esencia; pero, comoes obvio, se debe a una integración posterior.

Si el intuicionismo radical tuviera razón el conocimiento y su ciencia estaríanunificados; para ello, bastaría "intuir" pero, muy al contrario, las concepciones en torno alos entes proliferan, pues les precede una difícil labor y no es que los científicos einvestigadores no intenten "intuir". La existencia es diáfana, la esencia es opaca larealización ardua. Reducir las tres facetas de la realidad a la primera de ellas es en lo queconsiste el error del intuicionismo, donde la ilusión es creada por la operación de laconciencia por la que integra en su comprehensión toda la experiencia anterior.

Considerada, así, aunque de modo sumamente breve, la teoría bergsoniana, pasemosa presentar nuestra posición, que no es, en torno a este punto, sino las conclusiones quelógicamente se derivan de los capítulos, con vista a superar los reduccionismos por unaepistemología integral.

Herbert Read, en El arte y la evolución del hombre, considera que "la conciencia havenido al mundo con base en la memoria-imagen que los científicos llaman percepciónvisual, que es virtuamente clara e intensa y no está contaminada por ninguna asociaciónvisionaria". Para Read la conciencia consiste en la "habilidad para acumular imágenes yrepresentarlas a voluntad". La conciencia de Read se confunde con una imaginaciónconsciente. Es cierto, la imaginación es uno de los ámbitos de la conciencia; pero nosparece demasiado restringirla a este solo ámbito.

La calidad de la actividad conciencial elimina de por sí el "epifenomenismo delreflejo", cuya inconsciencia carece de relación con el acto consciente; al igual que lapasividad del reflejo está muy distante de la enérgica actividad conciencial, que constituyela cúspide del mundo conocido por el hombre. El "reflejo" reproductor ocupa un nivelinferior al conciencial, incluso la pura sensación dista mucho de ser un puro reflejo.

Una de las posiciones más radicales en relación con la conciencia es la de ElieRabier que, en Psychologie, niega la existencia de la conciencia, pues considera que seidentifica con la actividad psicológica de sentir, pensar, y querer, y atribuye la existencia dela conciencia a una abstracción a la que se le ha dado nombre. "Tener conciencia,argumenta, es siempre pensar, sentir o querer... si por casualidad su actividad se encuentrasuspendida... la conciencia misma está suspendida..." Parece que Rabier no consideró laperspectiva inversa; es posible sentir inconscientemente y entonces es totalmente otro elfenómeno psíquico, el alucinado puede expresar pensamientos y decisionesinconscientemente y, de igual modo, el fenómeno es totalmente otro. La autoconciencia noconsiste ni en sentir, pensar o querer. Nos parece que la integración del acto consciente enbuena medida confunde a Rabier.

Soslayar el conocimiento de la conciencia por la inaplicabilidad de las leyes físicasen ella es confundirse así mismo con una piedra sonora, incapaz de comprender elsignificado de sus sonidos, pues el ámbito de las leyes físicas difiere en buena medida delconciencial. Si la conciencia ha de contemplarse desde el punto de vista físico, creo que hade ser considerada como el centro de atracción organizativa de las fuerzas psíquicas. Enfrase M. Guyau, en Education et Heredité: "Sucede con el espíritu como con la materiasideral, que atrae en razón de su condensación como núcleo". Este autor llama a laconciencia "potencia dinamógena", si tal apelativo debe entenderse como estimulante capazde desencadenar enérgicas acciones de otros centros, no tenemos inconveniente enaceptarlo, no así si se le asignan funciones generativas de energía.

En suma, he aquí las posiciones fundamentales en torno a la conciencia:

1. Organicistas: la conciencia es reducida a la evolución del organismo.2. Empiristas: la conciencia es reducida a los procesos de la sensibilidad externa y/ointerna.3. Racionalistas o críticos: la conciencia es alienada en una representaciónconceptual considerada "forma a priori".4. Voluntaristas: la conciencia es reducida al ámbito de la conciencia proyectiva.5. Existencialistas: la conciencia es la manifestación extática del ser en el tiempo y en elmundo.6. Historicistas: la conciencia es el producto de la formación histórico-social.7. Integral: la conciencia es el núcleo de todos los niveles del ser humano y los integra en launidad de su ser.

La dificultad de abordar con alguna suficiencia y precisión estos temas de laconciencia y el conocimiento hace que Einstein diga: "¡Lo que es eternamenteincomprensible en el universo es su inteligibilidad misma!".39 Hartmann señala el misteriodel universo como una encarnación de lo inteligible en los seres materiales."

Thomas Reid dice, en Essais sur les facultés intellectuales del I'homme:"Ningún filósofo ha aventurado hipótesis para dar cuenta del hecho de la conciencia denuestros pensamientos y del conocimiento seguro de su existencia, que lo acompaña,... la

irresistible convicción que tiene de la realidad de esas operaciones no es el efecto delrazonamiento; es inmediata e intuitiva". "De la fuente de la conciencia fluye, en efecto,todo lo que sabemos de la constitución íntima y de las facultades del espíritu humano; ycomo ninguna especie de evidencia excede la de la conciencia, resulta de ello que ningunaparte del conocimiento tiene bases más sólidas". Las palabras de Reid son las de un espírituprofundo y bien cimentado.

En Leçon de Philosophie, Paulin Malapert expresa: "La palabra 'conciencia'-inventada, se dice, por los estoicos-, significa etimológicamente: un saber, unconocimiento, que es inseparable de él". Para ilustrarlo Malapert recurre al ejemplo deAristóteles: Non sentimus, nisi sentiamus nos sentire; non intelligimus, nisi intelligamusnos intelligere (No sentimos, si no sentimos que sentimos; no entendemos(inteligentemente), si no entendemos que entendemos). Conciencia viene del latín"conciencia" y ésta de "conscire", es decir, "con-saber", porque el conocimiento de sí,generalmente, acompaña a un conocimiento objetivo. Es ahí donde originariamente se captael "yo" como sujeto del acto cognosctivo, el sujeto es "consabido" en abierta distinción delobjeto conocido. Los estoicos designaron al sentido interior por "synedese", palabra deigual estructura que la de nuestra "conciencia". "Conciencia original" es la capacidadinnata, que posee el hombre de captar de modo directo e intuitivo algún hecho o fenómeno.

______________________________39 Einstein, A., Physik und Realiatät, p. 6.

El grado de atención indica el grado de conciencia, no así el grado de claridad quedepende de la presencia del objeto concienciado. Cuando éste no está presente, pero influyeen la acción concienciada se habla de "subconsciencia" y cuando definitivamente supresencia e influencia es nula, pero alguna vez tuvo alguna, se habla de "inconsciencia".Por otra parte, es cierto que el grado de atención posibilita una mayor presencia del objetoconcienciado y, consecuentemente, una mayor claridad.

La perspectiva que Henry Ey presenta de la conciencia no es genética sinopresentista, es decir, estudia la visión vivida en su presente -maduro-, dadas ciertasestructuras ya formadas y en funciones organizativas. "Ser consciente es vivir laparticularidad de su propia experiencia, transponiéndola en la universalidad de su saber".40

ô646666550ñade: "lo vivido es, pues, lo absoluto de la experiencia, tanto si ésta espercibida como si no lo es... de modo que, en definitiva, la percepción nos remite a uno delos atributos fundamentales de la conciencia, que es de darse lo vivido, de apoderarse de él,de presentárselo, en su estatuto de objetividad".41

La conciencia es, para Pierre Janet, una "síntesis activa por la que la multiplicidadfenoménica es reducida a la unidad del yo. Coincidimos con Pierre Janet en la importanciadel carácter sintético de la conciencia, pero no le damos la primordialidad exclusiva, desdenuestro punto de vista, es la autopresencia como autointuición existencial, incapaz en susimplicidad del desdoblamiento contemplativo, lo que impide toda duplicidad o pluralidad,por lo que sintetiza todo estado en la unidad de su ser. Esto es posibilitado por la capacidadcomprehensiva nacida de su intuición.

Autopresencia, comprehensión y síntesis: he aquí las tres características esencialesde la conciencia en este orden se generan, sin que exista precedencia porque son trescaracterísticas complicadas en el ser existencial de la conciencia. La autopresencia es el

origen por su autointuición existencial, pero tal intuición es comprehensiva y sintética a lavez. La comprehensión de sí, en su simplicidad, es la intuición sintética de sí; así como lasíntesis original del "yo conciencial" es la intuición comprehensiva de la propia existencia.

Dado que la conciencia vive sólo el presente puede reflejar estabilidad inmutable enlos conocimientos adquiridos y concebir todo ser como estable e inmutable. He aquí unerror posible por el que la "conciencia refleja" proyecta sobre el conocimiento algo propiodebido a la instantaneidad de su vivencia y lo proyecta infinitamente en el mismo instante.Pero la conciencia posee otras dos propiedades: la "intencionalidad" y la "comprehensiónsintética y existencial", por las que puede captar en instantes consecutivos el devenir de losentes y referir el cambio a las estructuras entitativas, así como comprehender de modosintético la evolución de sus existencias. De esta manera la sustancia estructural de losentes dejará de ser concebida como estable para entrar dentro de su evolución.

La conciencia no es una realidad estática e inmutable, sino porel contrario, estásujeta al devenir y evoluciona en un perpetuo fluir, en una sucesión de estados; perotambién es "duración", en la que se da una unidad continua y permanente que puededistinguirse en su identidad de los estados del devenir, el momento presente se encuentraunido al pasado en una historia continua en la que el devenir gira en torno a la identidadconciencial. Steenberghen concibe a la conciencia como devenir en un perpetuo fluir y almismo tiempo como duración permanente e idéntica.42

______________________________40 Ey,H.,La conciencia,p. II.41 Ib., PP. 23-24.42 Steenberghen, Fernand van, Epistemología, p. 102.

Esta aparente contradicción debe ser resuelta y aclarada, si es que queremos quenuestro pensamiento se rija por los principios de la claridad y distinción que son los de"identidad" y "no contradicción" para no caer en una dialéctica confusa y contradictoria. Ennuestra opinión esta aparente contradicción se resuelve distinguiendo la conciencia de laestructura a través de la cual comprehende, que está en continua evolución.

La conciencia permanece en la identidad de su ser, sigue siendo ella misma, a pesarde que a través del tiempo se desarrolla y sufre cambios la estructura, a través de la cualella comprehende; pero ella en la naturaleza de su ser es idéntica a ella misma. Presente aldevenir de la existencia o "duración" de su ser; ella misma parece inalterable en sunaturaleza. Conciencia y estructura integran un solo ser. Sin conciencia no habríacomprehensión y sin estructura la conciencia estaría vacía. Su identidad se capta en launitaria síntesis de su existencia que deviene en una diversidad múltiple de estadosvivenciales. Estados que posibilitan el desarrollo estructural.

La estructura a través de la cual comprehende la conciencia es todo el conjunto depotencias en las que la conciencia está presente directa e inmediatamente para que, a travésde ellas, capte su objeto y llegue a la comprehensión. A nivel sensible estas potencias sonsensibilidad externa e interna (que incluye afectividad y apetito sensible); a nivel inteligibleson la razón, la voluntad y la integración total en la "personalidad".

La conciencia se presenta a primera vista ante el análisis racional como unacomplejidad inagotable, a la manera del universo mismo, pero a medida que de una visiónsintética y global se va descendiendo y caracterizando, es posible descubrir diversos grupos

de elementos. En primer lugar aparece una dualidad real e inevitable en la que se distingueel "yo" del "no yo" es decir el "sujeto cognoscente" del "objeto conocido". Esta dualidad seencuentra en mi conciencia, pero no constituye a la conciencia en su esencia misma, pueses evidente que lo "no yo" no me constituye.

Ciertamente el "no yo" no me constituye; pero el "yo" está inmerso en ese mundo,que es el "no yo"; y el "yo" se presenta como fundamentalmente orientado hacia ese mundode objetos, que vienen a ser contenidos de mi conciencia. El mundo de objetos es externo ami yo, pero viene a ser, aunque de modo diferente, interno a mi yo; íntima y externamente"soy un yo en el mundo".

Los objetos externos al yo se imponen internamente al yo y no puedo impedirlo oimponerles mi yo, pues se resisten a ello; ante mi conciencia el mundo interno de objetosprocede del mundo externo, que poco a poco ha ido penetrando en mí a través de los datosque me presentan mis sentidos externos. El mundo interno de objetos es el conjunto deconocimientos que he adquirido sobre el mundo externo. El "yo" se conoce también a símismo y se capta como centro real de unidad y permanencia: "yo soy un ser consciente" yel origen más profundo de mi ser es mi conciencia que capta el mundo y se distingue de él,pero no puede separarse absolutamente de él y quedar mi "conciencia pura" sin un"contenido objetivo"; porque "soy conciencia de algo", "soy conciencia del ser", unaconciencia carente de todo contenido dejaría de ser conciencia y, a la inversa, un objetoconciencial sin conciencia que lo tenga presente dejaría de ser tal; pero, por otra parte, losobjetos reales no porque dejen de estar presentes a mi conciencia dejan de existir y el sujetocognoscente no porque cese de conocer cesa de existir. Sujeto real y objetos reales sonindependientes en su ser y mutuamente dependientes en el conocer; "soy una conciencia enel mundo". Tengo la experiencia conciencial de la permanencia de los objetos reales yevidentemente también de mi propio ser; esta permanencia no es estática e inmutable sinodinámica y en cambio, capto, así, "mi ser y el de los objetos como ser en devenir". Cadauno podríamos aducir el ejemplo de la experiencia existencial de nuestra propia vida o delas plantas, animales y personas que han convivido con nosotros y cuya permanencia endevenir hemos podido constar a través de los años. Natural o artificialmente hemos visto ypresenciado la permanencia cambiante de los entes entre los que ha transcurrido nuestravida. Somos conscientes de lo que ocurre a nuestro rededor y de lo que pasa en el interiorde nosotros mismos; por ello es evidente que nuestra conciencia tiene mirada introspectivay extrospectiva, pues hay ocasiones en las que por estar presente ante lo que sucede ennuestro interior nos pasa inadvertido lo que ocurre en nuestro rededor y viceversa, pero esposible que estemos (presentes) atentos a ambas cosas.

rebasando su capacidad natural, la conciencia va aflorando de forma cada vez más original,intelectual y libre. Las repetidas experiencias que la sensibilidad proporciona a laconciencia generan inicialmente la experiencia de ésta. En un principio las experienciassensibles aparecen y desaparecen cual mudos fantasmas en lejano horizonte antes de rayarel alba; ésta es la experiencia de múltiples colores-figuras-movimiento..., que la experienciasensible proporciona al neonato.

Las estructuras heredadas del organismo funcionan automáticamente por refle-jos,instintos, sentidos... proporcionando datos que aparecen y desaparecen...; pero hay unprimer dato que se detiene iniciando la formación de la primera "estructura", es la la.rendija que se abre al mundo y que posibilitará la formación de una 2a. estructura y, estasdos, de una 3a., etc. Para ir formando cada vez una estructura más compleja. "Para él, dice

Piaget, el mundo es esencialmente una realidad susceptible de ser chupada... yposteriormente habrá de convertirse en una realidad susceptible de ser mirada, escuchada,sacudida, etc."43

Estas primeras estructuras posibilitan al niño pequeño la asimilación del mundo(que le rodea) a través de percepciones sensibles y movimientos. De igual manera brotanreflejos afectivos como respuesta a estímulos externos como es el miedo ante ruidosbruscos, etc., formando estructuras como experiencia de la relación organismo-estímulosy/o satisfactores. Estas estructuras básicas (1er. nivel) continuarán funcionando toda la viday por fijación se extenderán a otros niveles (sobre todo el 2o). Esto ha dado lugar a teoríasconductistas, que si bien tienen parte de verdad al fundamentarse en las estructuras de esteprimer nivel, olvidan considerar las propias de otros niveles.

El intento de seguir la evolución estructural cognoscitiva se da con la finalidad decomprender su formación y poder llegar al conocimiento de su naturaleza y posibilidades.De las primeras estructuras simples se pasa poco a poco a estructuras más complejas, a estole llama Piaget "ciclo reflejo" y lo explica así "incorpora nuevos elementos y constituye conellos totalidades organizadas más amplias, merced a diferenciaciones progresivas".44

Paulatinamente se va integrando el 2o. nivel del conocimiento sensible a partir del 1er. nivel, en su automatismo orgánico. Hay imágenes y datos sensibles cada vez másamplios en número y extensión que se van conservando en la memoria e inician laestructuración de la sensibilidad interna; así, por ejemplo, el rostro y voz de la madre, lacasa y el propio cuerpo, etc. Pero aún su conocimiento se encuentra atado a la percepciónsensible de tal manera que no busca los objetos cuando salen fuera de su campo perceptual.

______________________________43 Piaget, J., Seis estudios de psicología, p. 21.44 Ib., p. 22.

De las estructuras complejas se pasa a la coordinación de ellas formando "esquemasde acción" en los que unos asignan un objetivo a la acción y otros sirven de medio; estosesquemas se coordinan de modo móvil y flexible.

En los primeros meses de vida la conciencia se encuentra perdida en un mundoconfuso; su visión es egocéntrica, no hay diferenciación entre el yo y el mundo, lasimpresiones no están ligadas ni a una conciencia ni a objetos externos. Entre el ler. y 2o.año el niño va logrando la diferenciación entre el yo y el mundo a través de cuatro procesosfundamentales: de la permanencia en la memoria de imágenes, datos y cuadros sensorialespasa a atribuir permanencia a los objetos externos, buscándolos cuando están ausentes a lapercepción, etc. El conocimiento sensorial se va desligando de la realidad objetiva a travésde la experiencia conciencial de ésta, pues anteriormente se encontraban confundidas. Laconciencia, con su continua presencia a los entes particulares que aparecen y desaparecenante la experiencia sensible, llega por cierta "intuición experiencial" a captar el "ser real yconcreto" en su permanencia existencial. Por contraposición, en experiencia simultáneacapta el "yo" como ser existente y consciente, polo interior de la realidad. Por primera vezla conciencia aflora con funciones propias; aunque la claridad está aún muy lejos, puesdomina el conocimiento asimilativo sobre el adecuativo; así, por ejemplo, pone vida,actividad y conciencia en objetos como una pelota, etc. Esto es debido a que la reflexión

racional (que analice y precise características y esencias) está aún ausente y que laconciencia dominada por su visión sintética superpone estructuras; sin embargo, lasestructuras y esquemas del 1 er. y 2o. nivel son ya suficientes como para darle base yposibilitarle el inicio de las funciones adecuadas a su propio objetivo. Las repetidasexperiencias proporcionadas por la sensibilidad externa y la conservación de ellas a travésde la sensibilidad interna posibilitan a la conciencia (presente desde un inicio ante ellas) porcierta "intuición experiencial" despertar a sus propias funciones y llegar a la intuición del"ser real y concreto", simultáneamente capta también su propio "ser existente y consciente".Esto nos hace ver con una claridad sorprendente que por más experiencias que repita lasensibilidad jamás llegará a captar el objeto como "ser existente en su unidad y distinción";pues la experiencia sensible se encuentra sumergida en un mundo fenomenal (aparece ydesaparece ante la sensibilidad externa) y fantástico (los datos imaginarios de lasensibilidad interna se asocia por experiencia, pero también se entremezclan y confunden)sin claridad y fundamento existencial.

La conciencia que emigra y se proyecta al mundo es "conciencia intramundana";porque ha salido fuera de sí y se encuentra entre y en el mundo; pero es, a la vez,"conciencia extramundana"; porque el mundo es ajeno a su ser, como, origen fontal deconciencia.

La conciencia se capta a sí misma de modo primario y primordial como existente(consciente de sí) y al mismo tiempo, pero de modo secundario y contextual se capta comoconocedora (de su existencia) y esto existencialmente y no en el aspecto esencial. Laexistencia de lo inmediatamente presente es, pues, el objeto primero de la conciencia. Alestar presente mi conciencia ante mi existencia capta su duración como dinámica ycambiante, pero ella en sí misma no cambia; aumenta o disminuye su lucidez, pero ella sepresenta (desde mi nacimiento) como ella misma; "ausente la conciencia, se ausenta todoconocimiento". La conciencia es, por lo tanto, la condición primera de toda posibilidad deconocer. La conciencia es el centro y punto de partida para conocer y para conocer queconozco.

La frase de Cicerón ilustra lo anterior: Ut oculus, sic animus se non videns aliacenit, y añade a continuación: Est quidem istud maximum animuna ipsum animo videre.Parece como si Cicerón se contradijera al afirmar y negar la posibilidad de que el alma seconozca, sin embargo la primera frase hace referencia al penetrar para distinguir (cernit),que nosotros referimos al conocimiento esencial del descubrimiento de lo que es lo otro; encambio la otra frase utiliza por analogía el ver (videre) del ojo, por el que algo está presenteaunque su naturaleza íntima nos sea desconocida.

Cuando el objeto (persona que llama la atención de la conciencia y en cuanto tal"sujeto", pero como polo externo del sujeto cognoscente es "objeto" de conocimiento)despierta la conciencia, percibiendo ésta el objeto, surge la ciencia en la conciencia y estomanifiesta claramente que "no hay ciencia sin conciencia, ni viceversa". Poner en duda demodo absoluto todo aquello que la conciencia nos presenta es relegarse a un escepticismo yagnosticismo definitivos, porque sólo hay conocimiento donde interviene ¡a conciencia, ynegarla es negar la validez de todo conocimiento. Esto, evidentemente, sólo tiene alcanceen el ámbito de lo existencial al modo de lo fenoménica y/o fenomenológicamentepresentado; por ello, será necesaria la labor de las otras potencias. La conciencia muestraser ¡a potencia original de todo conocimiento propiamente humano y con su presenciacomprehensiva muestra su trascendencia.

La conciencia poco atenta, carece de método y aislada de la razón evidentemente,no puede ser el fundamento para la elaboración filosófica; pero querer por ello eliminar laconciencia, es tanto como renunciar a todo saber, pues es ella la que nos proporciona tododato existencial y, por tanto, real, que nos permite atender un punto de partida en laelaboración de todo conocimiento con fundamento real; además de lo que al respecto sedice en otros lugares.

Para el conocimiento intelectual la realidad fundamental es evidentemente la mismaconciencia, donde se revela el sujeto cognoscente y el objeto conocido: soy yo consciente(sujeto) de mi existencia (objeto). El punto de partida de todo saber es, por consiguiente, elhecho primero y evidente de mi capacidad conciencial. La mejor definición de laconciencia la encontramos en la reflexión de la experiencia existencial de su propio actuar.Resulta imposible pretender explicar la naturaleza de la conciencia a partir de otra cosadiferente a la misma conciencia; ya que es el dato primero, fundamental, anterior al cual nohay otro más simple y básico en el conocer. Explicar lo simple por lo complejo y lo primeropor lo que de él se deriva implica un grave error de método.

La conciencia intelectual es propia del hombre y por su superioridad absorbe a laconciencia sensible, que es la única con la que cuentan los animales, por ello es difícil queel hombre sepa por experiencia personal los límites de la conciencia sensible y propiamenteanimal, puesto que nuestra sensibilidad está intelectualizada. Sólo por experimentos, yhasta cierto grado en los enfermos mentales que parcial o totalmente han perdido laconciencia, podemos llegar a bosquejar estos límites.

La conciencia intelectual es intuitiva y por lo tanto comprehensiva, esto le permitesintetizar e integrar al mismo tiempo el conocer y el ser de la persona humana, sólo ellaexplica la naturaleza espiritual del hombre. Si la conciencia intelectual no fuera intuitiva,no sería comprehensiva, no podría integrar, sintetizar y progresar; todo ello depende de lacapacidad intuitiva de la conciencia intelectual. Sólo la intuición comprehensiva es capaz -de explicar la naturaleza cognoscitiva del hombre, negada ella se cae al nivel de máquina yde procesamiento de datos.

La intuición conciencial surge a la luz de la comprehensión evidenciativa y permitecaptar algo más de lo comprendido anteriormente. El reciclaje en esta operación permite elprogreso de la intuición. La conciencia no tiene intuición de su propia esencia; pues notenemos experiencia conciencial de ello, y sólo la propia conciencia podría dárnoslo;además, la identidad de esencia y existencia nos tornaría absolutos y más bien tenemosconciencia de nuestra relatividad. Tampoco se da intuición de la esencia de otros seres: notenemos experiencia conciencial de ello y sólo la conciencia podría dárnoslo. Habríaacuerdo entre los hombres sobre la esencia de las cosas (al menos entre los estudiosos deeste punto); pero nos consta que más bien es lo contrario.

La conciencia no es el origen de las esencias y de todo ser pensado, sino el origende toda comprehensión en la que la conciencia traba contacto directo con el ser real y enuna superación constante va realizándose en el desarrollo de su apertura de miras, en laelevación de nivel y en la profundización de su capacidad comprehensiva.

El conocimiento conciencial se realiza a través de la experiencia inmediata por lapresencia original y directa ante el objeto conocido; es decir, que este conocimiento esintuitivo en sentido propiamente humano. El objeto al que se extiende la conciencia es elaspecto estrictamente existencial de las cosas. Referida mi conciencia al interior de mi ser,me capto en mi existir y actuar existencial como es el pensar, querer, sentir, etc. Pero a laconciencia se le escapa el aspecto esencial de los entes. Ni siquiera puedo captar mi propia

esencia por intuición conciencial; de lo contrario, todos tendríamos con certeza elconocimiento inmediato de nuestra esencia, lo cual es un hecho real que no se da, contra locual es inútil esgrimir argumentos. Para conocer la esencia de la conciencia, es necesario,como ya lo indicamos, reflexionar sobre la experiencia existencial del propio actuar de laconciencia misma.

La conciencia siendo intuitiva tiene contacto existencial y vivencial diversos nivelescon el propio ser y con el otro ser o persona. La razón al reflexionar esta experienciaconciencial explícita y afirma ser verídico el conocimiento adquirido. Lo cual es unaconfirmación reflexiva de la razón del acto experiencial de la conciencia.

El acto de la comprehensión es el acto cognoscitivo propiamente humano y querevela la superioridad intelectual del hombre sobre los otros seres que pueblan la tierra. Lacomprehensión es el acto por el cual el hombre en una mirada conciencial capta al ser en suser y lo integra en su acto cognoscitivo. Este acto se inicia en la intuición inmediataconciencial de la existencia, se continúa en la abstracción reflexiva racional de la esenciadel ser y se culmina, en su parte teórica o especulativa, con la contemplación de la"intuición posracional" en la que la conciencia abarca en una sola mirada al ser en suunidad esencial y existencial.

Pasos de la autoconciencia en su conciencia de ser:

1. Se es pero no se sabe que se es: "ser en si".2. El otro ser llama nuestro ser, que despierta descubriendo el otro ser: "ser fuera de sí".3. En el actuar del ser se descubre el actuar y el ser, como "ser actuante" que actúa para si:"ser para si".4. En la reflexión del ser actuante se descubre el "ser por sí".5. En la totalidad del "ser para sí" y "ser por sí" se descubre el "ser total en sí".6. En el "ser para el otro" integra el "ser otro" en el "ser en sí": "ser para nosotros".7. Finalmente la contemplación del "ser integral" descubre la "belleza de ser".

El primer paso es el punto de partida, ahí el "ser en si" del ser no es captable por sí.En el primitivo "ser fuera de sí", la conciencia tiene por facultad de apoyo a la sensibilidadexterna en el salir hacia y por el otro. En el tercer paso el primitivo "ser para sí" es laprimer autoconciencia en la intuición del propio ser en el retomo a sí, que le posibilita elreflejo de sí en el otro. "El ser por sí" es este reflejo en sí por la reflexión racional. En elquinto paso, el "ser total en sí" corresponde a la síntesis conciencial de "ser para sí" y el"ser por sí" e n la comprehensión posracional: "ser para nosotros" es la integración del otroen sí, es "ser otro en el ser en sí", la realización voluntaria integra el "ser total en sí" y el"ser otro". Finalmente en el último paso la conciencia integral de "ser en sí otro" vive labelleza y alegría de ser.

"La conciencia de sí" en sentido amplio se da a través de los siete niveles deconocimiento; en sentido estricto se encuentra en la autopresencia conciencial; y, en sentidoestrictísimo, sólo se realiza en plenitud humana en la síntesis de la intuición de la"conciencia integral".

El sujeto logra el conocimiento de su propio ser, fundamental y principalmente, através de la "comprehensión conciencial" realizada a través de los diversos niveles. Paraque dicho conocimiento sea integral es indispensable la cooperación de todas las potenciasy funciones. Tienen destacada importancia la colaboración de la razón y de la voluntad,

como condiciones sin las cuales no es posible tal conocimiento. La razón en actopropiamente "reflejo" analiza el ser humano en los actos del conocimiento directo de laconciencia; de este modo la razón disocia (el propio conocimiento del conciencial),explicitando el conocimiento distinto del yo, explicándolo en la abstracción de suscaracterísticas esenciales, conceptualizándolo en la universalidad y necesidad de su ser, etc.La voluntad, por su parte, aporta la experiencia vital que permite llegar al conocimiento dela "verdad existencial" referente al yo, como el conocimiento vivido y experimentado delpropio ser y de la propia personalidad.

La crítica realista que realiza la apología de la cosa, de acuerdo con Maritain, a laque llama verdaderamente crítica, es aquella que se fundamenta en los datos inmediatos dela intuición reflexiva. Es decir, que el "realismo crítico" mariteriano se apoya en laintuición que realiza la conciencia sobre la reflexión racional del acto del conocimiento. Sinduda que este tipo de conocimiento es una confirmación plena, pero no se apoya sobre losdatos inmediatos dados a la intuición conciencial por considerar que los datos inteligiblesse encuentran ahí solamente de modo implícito y potencial;45 esto es verdad si lo referimosa los datos esenciales, pero no si los referimos a los datos puramente existenciales, que sonlos que se nos muestran en la evidencia conciencial: "la realidad existencial del ser". Laesencia es el modo de ser, la existencia es el acto real de ser. Por lo tanto, propugnamos porun "realismo inmediato" en cuanto a la realidad existencial del ser, no así en cuanto a larealidad esencial del ser. La existencia se muestra inmediatamente a la intuiciónconciencial, la esencia es producto de racional abstracción.

"La existencia en acto de una cosa actualmente operante es abarcada por lasensación; la existencia al menos posible de una cosa posible es abarcada por elconocimiento intelectual".46 Al menos en este texto, es claro que Maritain pone laexistencia actual como objeto de la sensación; y la existencia posible como objeto de lainteligencia. Ciertamente el conocimiento de la existencia actual se encuentra implícita y enpotencia en la sensación, pero no de modo explícito en acto. La existencia posible encambio es propia de la razón y de las esencias concebidas por ella. La inteligenciaconcebida por Maritain es de naturaleza racional y la existencia así concebida es unaesencia y no una existencia.

La conciencia, al ser intuitiva, conoce su objeto propio en sí mismo; esto permite un"realismo inmediato conciencial". Así por ejemplo: la conciencia conoce la existencia delpropio sujeto cognoscente como sujeto, al estar presente ante sí mismo inmediatamente. Eneste caso ni siquiera es necesario que lo realice a través de su propia sensibilidad, nonecesita verse, tocarse... para tomar conciencia de su propia existencia.

______________________________45 Maritain, J., Los grados del saber, p. 156.46 lb.,p. 161.

De modo semejante cuando la conciencia intuye la existencia de otros seres materiales,aunque lo hace a través de la sensibilidad no se da a través delas imágenes sino por contacto directo; por lo cual bien puede hablarse de un "realismoinmediato existencial".

El conocimiento intuitivo de presencia directa e inmediata de la conciencia ante lopresenciado es el fundamento original y primero de un "realismo existencial"verdaderamente inmediato. La "intencionalidad" por la que la conciencia refiere loexistencialmente captado a un sujeto (objeto) es otro aspecto del fundamento experiencial,original y primero de un realismo existencial verdaderamente inmediato. La intencionalidades el fruto más maduro de la experiencia conciencial, que es el germen de lo quedesarrollado por la razón será el juicio confirmatorio de la verdad preñada en laintencionalidad conciencial. La intencionalidad conciencial es la brújula referencial, quediversifica los conocimientos existenciales y que dice referencia analógica y genética a laabstracción racional que diversifica los conocimientos por la conceptualización. Lamemoria racional tiene lugar en la reflexión analítica de los conceptos abstractoscorrespondientes. "La conciencia humana se nutre de lo real que se le impone y no de supropia actividad en cuanto tal. Lo real es la medida del conocimiento; la función del sujetoactivo es sólo la de revalorizar plenamente todo aquello que está implicado en el dato quese le ofrece".47

La evidencia intuitiva con la que la conciencia nos presenta la realidad existencial esilustrada por F. Gonseth con el siguiente ejemplo: "imaginad que, a punto de cruzar unacalle, advertís de pronto el inminente peligro de ser atropellado por un automóvil. Antes dereflexionar sobre las razones de vuestros actos, os habéis puesto a salvo ganando de nuevola acera. Se trata de una reacción absolutamente natural que no plantea problema alguno,vuestro gesto es una prueba de que no ponéis en duda la existencia de una correspondenciaentre las ideas y las cosas de este mundo".48

La intencionalidad existencial tiene su origen primigenio y fontal en la relacióninmediata de la conciencia corporeizada con el objeto de referencia cognoscitiva y por lotanto, el conocimiento adquirido tiene referencia intencional al objeto conocido. Loexpresado indica ya ambos pasos: el conciencial en la presencia sujeto-objeto y el racionalen la abstracción posesiva del conocimiento intencional del objeto. La intencionalidad tienesentido existencial; en tanto que las formalidades tienen sentido esencial y, porconsiguiente, se originan en la razón. La abstracción esencial conserva la "relaciónintencional" de su origen existencial y, por lo tanto, conciencial. Hablar de "estructuraintencional" es hacer referencia al modo de relación intencional, que en su origen esexistencial-conciencial y que permanece en la complejidad de las estructuras cognoscitivas,lo cual da lugar a las llamadas "estructuras intencionales.

El objeto primero y primordial de la conciencia es el "ser" sea éste el propio o elexterno. La conciencia misma lo experimenta directa e inmediatamente con evidenciasubjetiva y objetiva en una constatación directa de la realidad existencial. El ser es laprimera experiencia conciencial, es el dato primero y el más simple de todos, es la primeraevidencia fundamental; aunque es necesario precisar que esta experiencia se refiere al "serconcreto real"; por lo que afirmamos "esto es" y no la noción universalísima del ser, éstacarece de toda esencia e incluye en si de modo análogo todos los modos de ser; pero estanoción sólo se obtiene en la síntesis posracional. En cambio, la experiencia primera serefiere al "ser concreto real" que sí posee "esencia real y concreta".

______________________________47 Steenberghen, Fernand van, Epistemología, p. 275.48 Gonseth, F., Mathematiques et realité, p. 18.

Ahora bien, afirmar que, para que la conciencia tenga la posibilidad de captar "elser" en el "ser concreto real" a través de la primerísima experiencia fundamental esnecesario, que en sí misma la conciencia tenga "el a priori trascendental del ser" que laintegra como tal, etc., afirmar esto, es desconocer la génesis de la conciencia en su ordencorrecto e invertirlo partiendo de la conciencia ya formada. Para resolver este problema esnecesario seguir la génesis natural de la conciencia y constatar ahí la formación paulatina yprogresiva de las categorías universales y de la universalísima del ser, a través de unaabstracción cada vez más lenta y difícil a medida que se asciende en los grados deabstracción (igualmente de universalidad). Si se dijera que las categorías universales y/ouniversalísima del ser y/o del conocer son innatas y/o formas aprióricas y/o trascendentalesdel conocer mismo, entonces el niño podría conocer inmediatamente (en tanto suorganismo se lo permitiera ¿unos meses?) de modo científico y filosófico, lo cual chocaevidentemente contra la realidad de los hechos; y si se modificara la posición diciendo quedichas categorías, etc., afloran sólo al contacto con los objetos sensibles, fenómenos, etc.;nos preguntamos: ¿Qué necesidad de esperar a que aparezcan las categorías en la realidaddel ser, de los fenómenos, etc., para que aparezcan dichas formas aprióricas del conocer,categorías, etc.? ¿No será que ante la dificultad de conocer la naturaleza de las facultadesmismas del conocimiento, se invierte racionalmente el orden y se les atribuye comonaturaleza lo que ellas nos presentan como orden del ser y que en la inversión vengan a serel orden del conocer? En la realidad experimental y vivencial de la génesis de la concienciaes evidente que ésta se va capacitando para conocer a medida que sus facultades ypotencias se van desarrollando en el trabajo arduo y continuo de ir captando poco a pocolos diversos aspectos y/o formalidades del ser. Unos datos nos son entregados directa,inmediata y existencialmente en la realidad concreta del "ser", otros los obtenemos porreflexión indirecta y mediata, ésta es la abstracción realizada por la razón, y finalmenteotros los obtenemos por experiencia vivencial.

Que la categoría universalísima de "ser" sea una-innata-trascendental del conocer nopuede mostrarse a través de ninguna facultad; iniciando porque la conciencia no poseeevidencia alguna de ello. Fundamentarse en el hecho de que es la categoría más universaldel conocer, no prueba absolutamente nada, pues es evidente que se refiere al modouniversalísimo de ser y que éste no se captó directa sino abstractivamente. El ser (todarealidad) es captado por el conocimiento humano a siete niveles. A través del presenteestudio pretende mostrarse el conocimiento del ser a través de esos niveles.~

La intuición conciencial capta el ser (en sus aspectos): sensible, material y espacial através de la sensibilidad externa; b) integrado en su ser sensible material, temporal yrelacionado con nuestro ser sensible orgánico. a través de la sensibilidad interna; c) en suexistencia real por la conciencia a través de la sensibilidad externa e interna (tanto delpropio ser como del otro ser); d) en su esencia, a través de la reflexión racional; e) en subondad y perfección capaz de integramos existencial y vitalmente con él, a través de lavoluntad; f) en la belleza de su unidad y en la verdad de su ser total por la comprehensiónintegral de la conciencia.

La intuición conciencial capta el ser en la belleza de su unidad y en la verdad de suser íntegro y total, sólo cuando la conciencia contempla esta belleza y verdad en la unidadintegral de su ser con la del otro ser humano, que se realizan mutuamente de modoexistencial y vivencial.

La realidad está presente, pero no habla sin que se le escuche, pues su palabra seencarna en mí y se hace a mi medida, cuando crezco, ella crece; y cuando me "olvido", ellamuere, no porque deje de estar presente sino porque mi presencia se ha ausentado, y la suyasin la mía desaparece, porque ella se entrega sólo en el diálogo, que aúna las presencias enel conocimiento de sí, en el que ambas se funden para separarse sólo por abstracción,porque yo soy parte de esa realidad, y esa realidad eres "tu" y "nosotros".

Consideramos que la conciencia es la facultad primordial del hombre en cuanto tal,porque ella se fundamenta en su capacidad de comprehender -conciencia directa-, lo quepermite la autocomprehensión -conciencia refleja- y la heterocomprehensión-concienciaproyectiva y/o trascendental-, en el sentido de la capacidad que tiene el hombre deproyectar su ser hacia lo que no es para llegarlo a ser, en una trascendencia de sí a través dela comprehensión del otro en sí. Lo que nos permite afirmar que el "hombre es un sercomprehensivo".

El conocimiento se inicia con la presencialización del fenómeno, por la que se tratade penetrar, a través de la interacción vivencial con el fenómeno, en su naturalezaexistencial; evidentemente la penetración es integral: la conciencia para comprehender elfenómeno, digamos de amor a la esposa, recurre a la experiencia existencial del amor,evidentemente intervienen los diversos niveles con impulsos, deseos, imágenes, conceptos,hábitos, decisiones, etc. Querer comprender el fenómeno del conocimiento a partir de unsolo nivel implica una reducción que falsea la explicación, pero saber cuál es el factorpredominante en torno al cual se integran todos los factores, posibilita la comprehensiónexistencial.

"Presencia', en griego parousía, significa, para Platón, la participación de las ideaspresentes a las cosas. Heidegger llama a los entes: ontá, "los presentes". Nuestro punto devista coincide con la tesis de que el "ser", en sentido amplio, es el "presente" y, en sentidoestricto, el "autopresente", porque sólo éste es capaz de captar su ser. Los fenómenos son elsigno de la presencia, que adquieren su fenomenalidad inteligible por la autopresencia, sinella quedarían reducidos a haces de datos sensibles. El fenómeno es tal por lacomprehensión conciencial. La presencia objetiva es tal por la autopresencia. El sentidoamplio proviene del estricto.Presenciar un modo de experiencia subjetiva nos manifiesta la esencia subjetiva en primertérmino y en una determina funcionalidad operativa; pero por contrapartida abstractivapodemos conocer el objeto conocido en su estructura manifestada.

El "principio de autoidentificación" constituye a la conciencia, como tal; puespermite que sea autopresente de modo directo e inmediato con la evidencia intuitiva de suautocomprehensión sintética. La operación de la conciencia es, pues, una sola: laautopresencia que implica la síntesis autocomprehensiva. Esta operación la desempeña laconciencia en los diferentes niveles cognoscitivo-operacionales y da lugar a tres síntesis: a)La fenoménico-fenomenológica, que llamamos empiriológica, como experiencia integral.b) La existencial-esenciativa, que llamamos ontológico metafísica, como "ciencia integral".c) La existencial-esenciativo-realizativa, que llamamos "filosofía integral" comoconocimiento teórico-práctico del ser integral del hombre.

La "identidad" de un ente no es la permanencia inmutable, sino la continuidadevolutiva de la esencia del mismo ser existente. En tanto que la "identificación" es lacaptación progresiva de la esencia evolutiva del ser existente por el sujeto cognoscente.Esto en el terreno esencial, porque en el existencial es necesario considerar lo que acontinuación se expresa.

"El principio de identificación" se revela en su génesis de una naturaleza primitivapropiamente conciencial, cuyo desdoblamiento parte de la identidad positiva y se proyectaen la diferenciación negativa, dando lugar al "principio de no contradicción", cuya génesisrevela un punto de partida conciencial y una realización formal en acto de naturalezaracional. Esto nos manifiesta que el "principio de identidad" en su "identificación" sea elprimer principio cognoscitivo para quienes dan primordialidad a la intuición ycomprehensión conciencial, y que sea el "principio de no contradicción" para quienes danprimordialidad a la racionalidad.

El "ser propio" en contacto con el "ser del otro" permite conocer los "primerosprincipios del ser". La conciencia posee como "principio operativo" el "principio deidentificación", que al hacerse presente al "ser del otro" le "identifica" en su "ser".Esta experiencia existencial permite intuir el "ser" en su identidad, en tal intuición la razónabstrae el "principio de identidad del ser", que en cuanto concepto y juicio abstracto, pasa aser no sólo un "principio óntico" perteneciente al ser real, sino también un "principiológico" del pensar racional, que da lugar, en la coherencia de ambos, al "principioontológico". La adquisición de los principios, en su evolución-desarrollo-aplicación,posibilita el acrecentamiento de la madurez conciencial, que aumenta su capacidadpresenciativo-sintético-comprehensiva; lo mismo puede decir-se de las otras facultades enel desarrollo de sus propias funciones.

"Principio metafísico de causalidad": "Todo ente contingente tiene una causa", suafirmación se desarrolla en la línea existencial y deja la precisión esencial a la laborracional experimental, aun el saber si la causa actúa libre o determinadamente.

Ahora que captar el "ser", implica la capacidad o potencia de captarlo, es decir, seruna facultad abierta al ser, capaz de intuir el ser, pero no por una identidad absoluta con elpropio ser en la intuición comprehensiva de sí, sino por una presencia identificadora quepermita llegar a la comprehensión de sí, y, a través de ella, captar sintéticamente la propiaidentidad. El espíritu humano es "apertura al ser". Esto implica la naturaleza más profundadel espíritu humano como "principio de identificación" -y no de "identidad", que quedareservada al ser absoluto. El espíritu humano "es siendo", en el sentido de que "abriéndoseal ser se realiza e identifica". Ontológicamente, no cabe duda de que, desde el primerinstante, el espíritu humano "es" pero tampoco cabe duda, de que existencialmente este seres, en su apertura realizativa e identificadora, "siendo". El hombre es un ser que es siendo.

Es ilusorio en el conocimiento querer partir de cero, haciendo la tabula rasa; puescualquiera que éste sea, ciencia o filosofía, "no puede erradicar aquello que se conocepreviamente, para, a partir de allí, comenzar de nuevo, dejando entre paréntesis el caudalinmenso de experiencia y de comprensión que procede del conocimiento espontáneo yhabitual".49 Dice al respecto C. Cardona: "En cualquier momento en el que se pretendasituar el comienzo absoluto se llega tarde, ya se ha comenzado antes con un conocimientoverdadero, por confuso que pueda ser, y no simplemente con una especie de encontronazocon un hecho bruto ni con la neutra descripción fenomenológica de un momento de laconciencia".50

El fenomenismo pretende ver en los contenidos de la conciencia únicamente puros"fenómenos" como objetos desprovistos de toda propiedad ontológica. Esto además de quees una contradicción en los términos, es refutado inmediatamente por las primerasevidencias fundamentales de la conciencia; pues la conciencia nos produce directamente alconocimiento del ser y con ello al terreno de la ontología. El fenomenismo ve en el "sujeto"la "unidad del flujo fenomenal", una síntesis fenomenal de objetos fenomenales. Esta

posición se debe a los principios con lo que inicia falseando las evidencias primeras yfundamentales de la conciencia. Evidentemente esta visión filosófica queda superada poruna posición correcta de la conciencia en el punto de partida de su análisis.

El método fenomenológico mide la certeza de una experiencia y/o conocimiento conbase en la presencialización de la conciencia ante un fenómeno que puede ser visualizadode modo directo y/o inmediato, o también indirecta y/o mediatamente, así como en susefectos y/o consecuencias, para definir su naturaleza existencial y/o datos descriptibles.Fenómeno es lo que se muestra en sí mismo y, por ende, se distingue de la apariencia queparece ser y no es. La fenomenología existencial proporciona la visión del ser, manifestadaa través de los fenómenos que presenta la conciencia de modo directo e inmediato, comoautopresencia en el ser.

______________________________49 Serrano Moreno, Jorge, Filosofía de la ciencia, p. 268.50 Cardona, C., Metafísica de la opción intelectual, p. 122.

La autopresencia reflexiva y realizativa hacen que aquélla se extienda a los campos de laconstitución de las esencias y de las acciones; estableciendo, así, la fenomenología racionaly la fenomenología volitiva, que en comprehensión sintética dan lugar a la fenomenologíaintegral; la cual se apoya en la intuición autopresencial para comprehender progresivamentey en todos los niveles el aspecto existencial automanifestativa del ser.

El conocimiento, cualquiera que éste sea, no puede prescindir absolutamente del"sentido común", como el conocimiento normal y cotidiano del hombre, y deberánecesariamente recurrir al análisis abstractivo en el que reflexivamente separa loselementos para reconstruir sintéticamente, valiéndose de leyes y principios, en un nivelabstracto, primero, y posteriormente en una interrelación que busca cada vez mayoramplitud. La "fenomenología integral" busca la estructura que da unidad a la experiencia delos diversos niveles, de una manera especial toma en cuenta el análisis abstractivo que partede la realidad concreta; en modo alguno pretende ilusoriamente hacer la tabula rasa.

La fenomenología integral es la ciencia de todos los fenómenos concretosobservados a todos los niveles; por lo que resulta ser la "ciencia estricta de la existencia".Para Husserl, en última instancia, la fenomenología se reduce a una "ontología eidéticauniversal", lo cual nos muestra claramente los efectos de su reduccionismo epojético; y,aunque pretende abrirse paso al universo de la realidad a través de la intersubjetividad, sinembargo la última fuente de la experiencia trascendental es la intuición eidética, que por sunaturaleza está imposibilitada para entrar en contacto con la existencia real, en cuanto tal.

La fenomenología integral es el método por el que la conciencia está presente antelos niveles cognoscitivos (o integración alguna de ellos) con una atención esmeradatratando de captar todos sus elementos y datos para describirlos con detalle y precisión.Este es el primer paso de este método y el segundo consiste en el análisis que la razónpuede realizar sobre estos datos sin añadir elementos alcanzados por abstracción oinferencia alguna, por lo que tendrá que restringirse a identificar, caracterizar, distinguir,clasificar, dividir, esquematizar, etc. En el tercer paso la "experiencia existencial" aportarátodos los datos existenciales, que serán analizados de igual manera por la razón en el cuartopaso. Para que el análisis fenomenológico verdaderamente sea integral debe incluir elanálisis de los diversos niveles e integraciones cognoscitivas, incluyendo la

experimentación existencial en lo posible; pues la fenomenología integral tiene por objetivoprimordial la captación de todos los datos y elementos al alcance de las posibilidades comoprimera etapa del "método integral". A la fenomenología integral le sucede como 2o.estadio: La "ciencia integral" como el conocimiento de las estructuras, principios y leyesfuncionales de los diversos entes. Esta labor es realizada por la razón en los diversosámbitos del ser. 3er. Estadio: "la filosofía integral" tomando en cuenta el 1er y 2o. estadio,avanza hacia la integración de lo existencial -estructural- esencial con lo axiológico-vivencial-realizativo, la conciencia comprehensiva del sistema de valores que dan sentido ala vida permite la integración de facultades y conocimiento, así como de saber y actuar enel ser concreto de la existencia humana.

La crítica parte del análisis racional, en tanto que la fenomenología de laobservación presencial de la conciencia y su correspondiente síntesis comprehensiva. Eldescubrimiento de la identidad del "yo" y de la conciencia es una cuestión ubicada en elplano existencial y cuyo método es plenamente fenomenológico.

La conciencia capta el acto y/o objeto en visión sintética comprehensiva ytotalizadora, que presenta lo captado unido a la visión que le ha hecho posible; si la visiónse ha formado una perspectiva realista o no, influye en los límites de percepción; en todocaso, es evidente que el trabajo de deslindar lo objetivo de lo subjetivo es labor de la razóny que el fenómeno, en cuanto tal, incluye en sí; tanto la visión perceptora de la conciencia,como la datitud objetiva; por lo tanto, considerar que el fenómeno es un "dato puro yobjetivo" es un error fundamental. La conciencia proporciona la datitud, pero es confusa yrequiere el análisis racional.

La objetividad se inicia a nivel empírico por la identidad de los caracteres sensiblesadheridos a una extensión y duración continua; pero, en sentido estricto, la "objetividad" esuna captación intuitiva de la conciencia, que nos da a conocer el sentido de la realidadconcretizando el ser y su tipo de existencia; así sé que estoy presente ante mí, como sujetoque en todo conocimiento capta ciertos datos, me experimento como sujeto cognoscente.Estoy presente ante los actos que me permiten conocer.

La observación intuitiva capta de modo directo e inmediato el objeto de su acciónque, aunque tome por objeto de contemplación su propio ser, sin una representación odesdoblamiento alguno, implica la naturaleza humana que no posee simplicidad capaz deintuir de modo total su propia esencia, lo que exigiría la identificación absoluta de su ser,características que generalmente se han atribuido a la divinidad y el hecho de que elhombre se la abrogue involucra, desde nuestro punto de vista, una falsa adecuación de laestructura humana a la divina; pero, sobre todo, afirmamos que la completa historia de lahumanidad con su pluralidad y polifacética diversidad prueba de modo contundente la noexistencia de aquella identidad, pues de darse sería una.

Eliminar en el terreno epistemológico toda diferenciación entre el sujeto y el objetopara afirmar su total inexistencia es una extrapolación de exagerada intuición totalitaria,porque en el terreno del conocimiento es evidente que: no por encontrarse inmerso elhombre en el mundo, posee de entrada por cierto tipo de ósmosis u otro proceso semejanteel saber total y absoluto del universo que le rodea sino, muy por el contrario, sólo el lento yparcial progreso de la experiencia individual en interacción con ese mundo, ciertamenteimprescindible en aquel proceso, le va proporcionando el conocimiento de ese objeto que lepermite realizarse como sujeto; ambos factores son complementarios y se integraninevitablemente en el proceso epistémico: no sólo se da el teórico aprehender en el que elsujeto reproduce en sí la huella del ambiente sociocultural e histórico en el que se

desenvuelve, sino también, de igual modo, deja su impronta a través de sus acciones en esemismo mundo con el que interactúa.

La autoconciencia capta el propio ser como sujeto inmanente abierto a lotrascendente y por ello no es un "objeto-contenido" que pueda ser contemplado, laautoconciencia es simple y llanamente autopresencia, la autopresencia de ninguna maneraes vacía, porque posee la presencia de sí, como autopresencia, o conciencia de la propiaexistencia.

El ser de la conciencia es "ser-conciencia" como "autoconciencia" en una"autotransparencia entitativa" y en una "autovivencia de su ser"; pero no se contemplacomo objeto, porque está y existe en si, sin poseer identidad absoluta de su existencia consu esencia, aunque se impliquen mutuamente. La razón es conciencia refleja en cuanto a loconcienciado pero no en cuanto al concienciante, porque si la razón reflejara alconcienciante, adquiriría ella misma conciencia de sus procesos internos de abstracción,juicio, etc., lo cual no es así, pues no poseemos conciencia de ello.

El desarrollo propiamente humano es proporcionado a la conciencia por su"interacción" con otros seres humanos en su relación progresiva y gradual de yo-tú; talreacción es intersubjetiva y es diversa a la que puede darse con una cosa, pues esta espreponderantemente material y utilitaria, en tanto que aquélla es primordialmente espiritualy realizativa del ser existencial; por lo que si llamamos al conocimiento del otro "objeto" noes en el sentido de "cosificación" sino en el de poío opuesto a lo que constituye el sujetocognoscente y agente, es decir, como el fin y "objeto" de la trascendencia tantocognoscitiva como realizativa.

La herencia de la humanidad despierta y desarrolla el germen comprehensivo de laconciencia. Sin comunidad la conciencia se atrofia en una ceguera infuncional; pero sinindividuo la comunidad se torna vacía. Los elementos espirituales son la herencia delhombre. Hay elementos que una conciencia en su desarrollo normal puede captar y éstosson los que se manifiestan en la fenomenalidad del ser; pero hay otros que son el fruto de laardua labor del hombre en la reflexión y en la realización; éstos se transmiten por herenciay/o son adquiridos por el trabajo antes mencionado; y así en la intuición comprehensiva delos hombres se integra el bagaje intelectual. No hay intuición inmediata de esencias, sino"intuición integrativa"; o también "intuición abstractiva", pero ésta no es inmediata sinomediatizada por el discurso racional y le llamarnos "comprehensión posracional". porquetoma en cuenta los elementos aportados por la razón.

La conciencia es acto, cuya potencia deviene en su actuación misma y cuyaautopresencia es su identificación y éste el principio primordial del que parte toda suacción. Si la conciencia careciera de autopresencia intuitiva no sería capaz de captar el "seren cuanto ser" en el ser individual que le está presente, la captación del ser individual no esuna abstracción racional sino una intuición inmediata que se presenta ante la conciencia, delque es una abstracción el concepto racional. Cuando decimos "ser en cuanto ser" nosreferimos al ser en cuanto realidad existente. La conciencia es el punto de partida delconocimiento intelectual.

La comprehensión sintética de la conciencia que ubica toda la vida en el instantepresente hace decir al poeta: "Al brillar un relámpago nacemos, y aún brilla su fulgorcuando morimos" (Gustavo A. Bécquer).

El objeto primero de la conciencia es el "ser existente", el "ser real", y la concienciasiempre nos presenta "algo real"; labor de la razón reflexiva será precisar el modo de ser, lanaturaleza o esencia de lo presentado por la conciencia; lo "no real" o "inexistente" jamás

podrá ser objeto de la conciencia. La posición que contrapone ser y conciencia, estáprejuiciando a ésta de "no ser" y de "irrealidad"; pero, entonces. ¿Cómo es? ¿Cómo nosconsta por evidencia que tiene existencia? Es absurdo e imposible negarlo; pues en lanegación está (existencialmente) su refutación.

La apertura de la conciencia al ser, en su extensión trascendente, orienta elconocimiento hacia la realidad, en una intencionalidad naturalmente realista; y refuta en subase misma todo fenomenismo, sea este empírico o eidético. La conciencia tiene comoobjeto propio: "la comprehensión del ser"; y, por ello, es realista y trascendental. "Míconciencia humana toda entera es la que debe ser definida como capacidad de ser, poder decaptar el ser como tal, de reconocer el valor de existencia en cualquierdato deexperiencia".51

Es necesario distinguir el "ser" del "aparecer", éste es presentado como fenómenoque aparece ante la sensibilidad interna a través de reproducciones intermediarias; aquél, encambio, es captado en la cosa misma (objeto real o noumeno) por la conciencia que estáinmediata y existencialmente presente. La conciencia para captar el ser no crearepresentación alguna intermediaria. El ser es la razón del ente, el "ente" es la cosa en sumanifestación fenoménica, en tanto que el "ser" es la razón profunda que explica suexistencia y su esencia.

______________________________51 Steenberghern, Fernand van, Epistemología, p. 160

Tengo conciencia de mi propia existencia por estar presente ante mí mismo; por locual resulta evidente, como inmediatamente presente, mi existir. Intentar la negación yhasta la duda de esta evidencia fundamental resulta además de inútil, fantasiosa, absurda eimposible; pues el sólo intentarlo resulta ser su propia refutación en la negación de lanegación y en la duda de la duda. No es posible afirmar, dudar o negar, sin la afirmaciónexplícita existencial de "la conciencia existente".

La conciencia original es la de la autopresencia. Ella se proyecta en una dobledimensión: hacia el pasado en su esencialización y se capta en la reflexión racional; y haciael futuro en su apertura trascendente y se capta en la proyección volitiva. La facultadcomprehensiva es la verdad óntica del ser humano, corno tal. La autocomprehensión es laverdad ontológica y la autohetero comprehensión es la verdad trascendental. Laautopresencia existencial posibilitará la primera, la reflexión reconstructora de lasestructuras existenciales la segunda y la proyección realizativa de la existencia la tercera.La verdad hace referencia a la existencia en los tres niveles, pero encuentra su plenitud enla tercera; por ello, preferimos dar a ésta el calificativo de "verdad existencial".

La conciencia en cada una de las síntesis comprehensivas capta, en el momentosupremo, los diversos aspectos de la trascendentalidad del ser: a) En la síntesisposracional, la conciencia capta en la comprehensión realista, necesaria y universal del"juicio teórico": el ser en cuanto ser, en su trascendentalidad "existencial" bajo laperspectiva de la conciencia; en su trascendentalidad de "veracidad" bajo la perspectiva dela razón; y en su trascendentalidad de "unidad" en la fusión de ambas perspectivas en la

realidad. b) En la síntesis posvolitiva, la conciencia capta en la comprehensión realista,existencial y contemplativa del "juicio teórico-práctico-especulativo": el ser en cuanto ser,bajo la trascendentalidad de su "belleza". He aquí los trascendentales como experienciasintética del ser.

La conciencia posee "evidencia" como visión clara de la propia realidad: Comotransparente a sí misma, a la razón y a la voluntad; capaz de penetrar la experiencia sensibletanto interna como externa y, en general, puede estar presente a todo su ser, excepciónhecha de las funciones autómatas del organismo corpóreo.

La evidencia intelectual es la que permite la aprehensión de elementos, relaciones yestructuras no captables por la sensibilidad. Dicho acto requiere una intuición-en el sentidopropio del intus legere intelectual- de parte de la conciencia y una abstracción de parte de larazón para poseer tales datos por la reproducción conceptual. La evidencia, pues, es elpunto de partida de la labor estrictamente intelectual, por ella se capta en primer lugar laexistencia real del ser y por ella se inicia la captación de datos que permitirán elconocimiento de la esencia; ella capta también, inicialmente, los valores que llevarán a lapersona a la realizaciónde su ser. La receptividad de datos por parte de las facultadesintuitivas no debe confundir de ninguna manera con la pasividad de estas mismasfacultades, pues la aprehensión es grandemente activa.

La "verificación" debe ser adecuada a los diversos niveles del conocimiento. Lapretensión de limitar la verificación a la experiencia sensible cae en un reduccionismo detipo empirista; este criterio debe restringirse al nivel empírico del que es propio tal"verificación empírica" -por la comprobación de los datos que la experiencia de lossentidos proporciona-; en cambio, se utilizará la "verificación existencial" para captar lasmodalidades de existencia -real, imaginaria, conceptual, material y/o espiritual, virtual y/oactual- por la presencia evidenciativa de la conciencia a los niveles correspondientes. La"verificación funcional-estructural" vendrá a utilizarse para comprobar la naturaleza de lasesencias, que al no ser conocidas directa e inmediatamente por la intuición deberán por unaparte relacionarse con lo intuitivo y por otra con lo manifestivo funcional para ir reduciendo-en su sentido positivo- la parte íntima esencial del ser, que es ciega al ojo humanointelectual, pero que va siendo captada por lenta y paulatina abstracción- reconstructiva; heaquí la tarea de la razón. Al final, la "verificación axiológica o valorativa" comprobará elgrado perfectivo de los valores por la realización que logren éstos, tanto en las personascomo en la sociedad, en relación con la jerarquía de valores propiamente humanos en superspectiva trascendente. Aquí interviene la "inteligencia integral" como la unidad deconciencia, razón y voluntad.

El hombre está constituido de modo fundamental por su apertura trascendental al tú,es decir es un yo abierto a una relación con otro yo, en la que ambos encuentran susuperación. El "espacio existencial" es la estructuración, organización y relación con elmedio ambiente para posibilitar la realización del "ser" humano.

La "percepción" es la comprehensión que, sobre los datos presentados por lasensibilidad, opera la conciencia. La "comprehensión" se fundamenta en la experienciasintética y existencial de la conciencia. Esta experiencia es el horizonte en el que el objetoes comprehendido. La percepción otorga al sujeto la certeza existencial del objeto, bajo sureferencia intencional; pero no la veracidad esencial del objeto mismo. La percepción es elacto original del que se nutren la racionalidad y, a través de ella, la valoración.

La "memoria" no es una facultad o potencia distinta, sino que cada una de ellasposee capacidad de experiencia, que va formando hábito y recuerdo; de ahí se va generando

la memoria propia de cada una de nuestras facultades y potencias. De todas ellas la"memoria conciencial" es la más importante; pues de la extensión, claridad y precisiónsintética con la que conserve las experiencias existenciales depende la capacidadcomprehensiva, el desarrollo e integración de la personalidad.

Consideramos en relación con las "huellas mnémicas" en el sentido empirista deimpresiones, que sin duda, se tiene razón en el caso de todo tipo de imágenes sensibles,incluso sostenemos que su opinión es acertada, parcialmente, en el caso de los conceptoscomo imágenes simbólicas; pero no si éstos se consideran en su comprehensión decontenidos abstractos. Por el contrario, nuestra opinión rechaza totalmente la teoríamencionada si se refiere a la memoria sintética de la conciencia, que no acude a materialesacumulados sino a un desarrollo existencial-comprehensivo.

"Lo dado" es aquello que se capta de modo directo e inmediato por alguna intuiciónfacultativa. Lo dado se opone a lo inferido, asociado, sintetizado,... No hay datos puros,porque la capacidad intuitiva depende tanto de una estructura subjetiva como de unaexperiencia objetiva que interpretan-intuyen lo dado. La progresiva integración del sujeto almundo-sujeto-objeto imposibilita real y verdaderamente la desintegración total en la queexistan los puros. En sentido amplio toda función facultativa posee sus datos de referencia,pero en sentido estricto sólo la sensibilidad externa y la conciencia captan nuevos datos y aéstos se les llama con precisión: lo dado.

La "experiencia existencial" de la conciencia no posee el cúmulo de las vivenciascomo un almacén subterráneo, al que hay que acudir para sacar a la luz lo ahí guardado; eltipo de experiencia existencial de la conciencia es "sintético-comprehensivo" como elresultado final que permite comprehender con esa luz y perspectiva todo lo existencial ensus diversos niveles; así, por ejemplo, en unión con la razón:La "comprehensión esencial" en el "juicio posracional"; en unión con la voluntad: la"comprehensión esencial-volitiva" en el juicio práctico posvolitivo; y, finalmente, en launión integral: la "comprehensión integral" del "juicio integral existencial".

La experiencia conciencial conserva -en la comprehensión íntima de su ser- lasíntesis cognoscitiva de su propia vida en interacción con el mundo externo. La concienciaen su experiencia existencial posee la cualidad de la comprehensión sintética, pues deja delado los detalles y engloba totalmente los datos en síntesis unitaria bajo la visión de esehorizonte. Por ello, para recordar circunstancias concretas, la conciencia acude a lareflexión racional así como a la memoria de la percepción sensible que asocia imágenes poradecuación espacio-temporal.

La memoria conciencial es la que nos ofrece a cada uno de nosotros la "identidad denuestro yo" en la duración de nuestra vida y en las diversas actividades; es un dato deexperiencia íntima que se me presenta en clara evidencia y en síntesis inexplicada. Es unhecho existencial. Para una "epistemología existencial" la memoria de la conciencia esfundamental; pues es su duración e historia la que aporta la comprehensión para la reflexióny análisis racional; sin ella la reflexión y vida se tornan caóticas de inteligibilidad, paraapoyarse, finalmente, en el grado extremo, en los actos de la imaginación y dar a la vida untinte de fantasiosa, huidiza y carente de fundamento realista y existencial.

La intuición conciencial va extendiéndose conforme su capacidad comprehensiva seva desarrollando, en la medida que la estructura potencial va creciendo y su presencia se vaarraigando en los diversos niveles cognoscitivos; así, por ejemplo, a nivel posracional esposible lograr la intuición del universal propio de la especie al percibir el individuoconcreto -el hombre, por ejemplo, en Sócrates-; o, también, es posible la intuición, a nivel

posvolitivo, del valor que realiza la personalidad al percibir el acto concreto; de honestidad,por ejemplo, al recibir algo perdido de quien no se conocía ni se esperaba.

En resumen, la conciencia intuye en los diversos niveles; la estructuración potencialasí como su experiencia comprehensiva le permiten el desarrollo y extensión de ésta. En eller. nivel -sensibilidad externa- capta mejor las cualidades sensibles y su coordinación. Enel 2o. y 3er. nivel- sensibilidad interna- capta mejor la estructuración sensible y su belleza-este es el campo de la estética-. En el 4o. nivel-conciencial- se capta la existencia, como tal;aquí no se desarrollan estructuras, pues la naturaleza conciencial permanece intacta y lanaturaleza de la existencia es analizada y captada en el 5o. nivel -racional- donde sedescubre mejor la esencia de los seres. El 6o. nivel capta mejor los proyectos vitales y susvalores; así como, finalmente, en el 7o. nivel -integral- se logra mejor la visión global delser personal en su totalidad realizada y en su trascendencia futura.

La memoria se encuentra presente en todos los niveles como la fijación y/o historiade cada una de las potencias; pero al mismo tiempo es el eje sobre el que gira la unidad ensu integración sintética. La conciencia unifica la memoria en su percepción comprehensivaexistencial. El tiempo o duración vital es la experiencia existencial de la conciencia, que esunificada en el ser comprehensivo conciencial. De aquí surge la "apercepción" en su unidady aquí cobra unidad la multiplicidad variante del devenir.

Dado que el campo de la intuición original de la conciencia es muy reducido,requiere del análisis reductor de la razón para extender sus posibilidades intuitivas. Lainteracción de las funciones permite el progreso; así, la comprehensión conciencial exige lareducción de lo complejo a la simplicidad de lo intuible; la condición de posibilidad de laintuición es el análisis simplificador. Para superar la simplificación reductora esindispensable el progreso integrativo de la síntesis comprehensiva. La naturaleza misma delproceso cognoscitivo-existencial nos proporciona la posibilidad de aquella integración.

La conciencia posee una visión globalizadora que abarca la totalidad en un soloacto, ésta es la visión sintetizadora conciencial abierta al infinito, en su búsqueda de laconcreción existencial en una comprehensión totalitaria.

La conciencia es específicamente existencial, por ella capto que soy consciente deser (existir). La razón es específicamente reflexiva y esencial, por ella pienso que "soy unser consciente" (esencialmente considerado). Ambas visiones, la de la conciencia y la de larazón están muy cercanas. La visión de la conciencia es directa, inmediata y existencial, lade la razón es refleja, mediata y esencial. La primera tiene por objeto inmediato alconocimiento directo del ser en su existir y así capta el conocimiento (tanto el propio comoel de la razón, voluntad y sensibilidad): como "sujeto actuante". El "yo conozco" surge dela conciencia y se extiende con la razón al "yo pienso", con la voluntad al "yo quiero" y aúncon la sensibilidad y el organismo al "yo siento, veo, oigo, etc." o también al "yo como,digiero, camino, etc.". No cabe duda que la conciencia es el centro y punto de partida detodo conocimiento y la facultad que presenta la visión sintética del ser en su acciónexistencial. He aquí la primera síntesis, a la que damos el nombre de "síntesis existencial".Por ella se obtiene un conocimiento del "sujeto corno cognoscente" y del "objeto comoobjeto conocido" en un conocimiento directo e inmediato, cuya evidencia está patente antela visión comprehensiva conciencial, en la que no cabe duda alguna (ni siquiera metódica);pues ésta podrá surgir sólo posteriormente en el análisis reflexivo de la razón, que buscaconfirmar el conocimiento sometiendo a prueba los datos obtenidos. La conciencia es laúnica que aporta datos directos al conocimiento intelectual, proporcionando el material paraque la razón lo analice y trate de abstraer nuevos datos (datos abstraídos), que no son

inmediatos y concretos; sino abstractos y mediatos, por ello mientras más se alejen del datodirecto y la relación lógica que los une a los datos directos menos estrecha y fuerte sea,tanto más se corre el riesgo de equivocación y error; por lo que será necesario el "retorno ala conciencia", que haciendo uso de todas las potencias a su alcance, se lance a la búsquedade nuevos datos confirmatorios o falseatorios de la abstracción racional.

La razón carece de luz intuitiva para captar directamente los datos, pero posee tactoy manos que, como a ciegas, tratan de adivinar y construir ficticia e hipotéticamente,apoyándose en la fantasía, aquella estructura y funcionamiento esencial, que no es posiblever directamente; será necesaria la acción de la conciencia que, en una intuiciónposracional, capte en una síntesis confrontadora los datos reales con la abstracción y/oconstrucción racional para llegar a una conclusión (2a. síntesis), que puede ser deconcordancia o discordancia; si es capaz de intuir la relación emite el juicio afirmativo-teórico, si vislumbra la ruptura definitiva de relación se da el juicio negativo; pero surgirá laduda, desaliento y angustia, si la visión conciencial es borrosa o inexistente, en cuyo casono será posible emitir un juicio. A la segunda síntesis damos el nombre de "síntesisposracional".

La intuición o evidencia conciencial posracional es el culmen de la acción teóricacognoscitiva; es aquí donde se inicia la acción práctico-cognoscitiva, en la que de ningúnmodo estarán ausentes las potencias mencionadas, sino todo lo contrario serán ellas, las quecon la experiencia intelectual adquirida de su objeto, proseguirán su marcha en la búsquedade la "verdad"; pero ahora ayudadas por la acción de la voluntad con su experiencia vital.Pronunciado el juicio por la comprehensión conciencial posracional, surgen en la voluntadlas voliciones (valga la redundancia) correspondientes de posesión, evitación, etc., y sedespiertan en la sensibilidad las tendencias, así como en el organismo las pulsionespertinentes.

Antes de llegar a la práctica es necesario que entren en funciones nuevamenteconciencia y razón, que de acuerdo con los datos obtenidos juzguen sobre la conveniencia ono de llevar a cabo tal o cual acción relacionando dichos datos con la propia esencia y laexperiencia vital.

De la conveniencia para perfeccionar el propio ser: personal y social (aunsacrificando el individuo) surgirá el "juicio práctico" decisivo de acción. Este juiciopráctico surge de la conciencia en una "intuición posvolitiva" como consecuencia deconsiderar en una comprehensión intelectual (3a. síntesis de la inteligencia) la convenienciaperfectiva como concordancia entre los datos teóricos y la experiencia vital. A esta tercerasíntesis damos el nombre de "síntesis posvolitiva".

Tomada la decisión surge la acción y la experiencia vital correspondiente.Suponiendo que la acción haya perfeccionado positivamente el ser (personal y social),surge una 4a. síntesis intelectual que asume en una comprehensión integral la totalidad delser; y, en evidencia maravillosa, se presenta el goce y la alegría de ser en la belleza de vivir.He aquí la "síntesis integral".

La primera síntesis es original, pues en ella la comprehensión conciencial es directae inmediata, dicha síntesis se da entre la experiencia existencial de la conciencia y los datosfenoménicos y/o fenomenológicos presentes. En cambio la segunda síntesis es refleja,porque en ella la comprehensión de la conciencia está mediatizada por el complejo deconceptos que la razón ha aplicado al objeto en estudio y, por ello, es posracional. Lasíntesis se da, por tanto, entre el sistema conceptual, que pretende explicar la esencia delfenómeno y objeto y los datos de la primera síntesis. La tercera síntesis es proyectiva, en el

sentido de que sintetiza los datos existencial-esenciales a la experiencia valorativa paraorientar las acciones específicas y/o el mismo proyecto de vida. En la síntesis integral sesintetiza el proyecto realizado (en su parte correspondiente) a la existencia integrada en elser personal y comunitario.

La comprehensión conciencial parte de la visión global-sintética y desciende laescala integral hasta llegar a los elementos simples o átomos. La explicación racional, porel contrario, parte de los elementos simples para integrarlos en el sistema y obtener lacomprensión total. Ambos sistemas -conciencial y racional- se integran en lacomprehensión posracional y permiten una visión sintética unificadora, que posibilita eljuicio integral. He aquí los caminos inversos que se funden en la síntesis teórica superior.La "ciencia integral" sólo es posible en este nivel, los pasos anteriores son los escalones queconducen a esta síntesis.

La energía a través de la cual el espíritu crece y evoluciona puede ser unasublimación del dinamismo procedente del organismo, pero puede proceder también deentes trascendentes que en la relación intersubjetiva comunican parte de su energía vital.Las fuerzas del espíritu se concentran en la síntesis y cada vez más a medida que se avanzahacia la síntesis integral.

La contemplación racional es reductiva, porque se fundamenta en el análisisatomizante del instante-efimero. La intuición conciencial es integral, porque sintetiza en elpresente, el pasado y el futuro. La razón construye sistemas a partir de elementos,relaciones y funciones operacionales. La conciencia, en cambio, por ser intuitiva,comprehende todo en una visión que, en su desarrollo, se despliega -se "explica" -.

La "demostración" parte y se fundamenta en la "intuición". La intuición misma nose deja demostrar, jamás la lógica racional podrá mostrar lo que debe ser intuido.Demostrar lógicamente la existencia de mi ser, al modo racionalista, es una petición deprincipio, que exige la experiencia intuitiva de la propia existencia. El planteamientomismo inverso de cogito, ergo sum manifiesta la perspectiva racional, que infiere laexistencia, pero la inferencia exige la experiencia existencial. A este propósito viene bien lafrase heideggeriana: "la necesidad de la verdad no se deja demostrar, porque nunca el serahí podría someterse al régimen de la demostración".52

______________________________52 Heidegger, M.. Ser y tiempo, parágrafo 44.

Se puede hablar de "certeza y necesidad": a) en el terreno existencial a nivelconciencial de la captación directa e inmediata de una realidad; b) en el terreno esencial anivel de intuición conciencial posracional, en el que intervienen conciencia y razón, de losllamados "principios analíticos", en los que ciertamente hay un fundamento real de origenempírico y una abstracción-intuición de origen conciencial-racional, c) e igualmente, en elterreno de las estructuras naturales. La constitución de la esencia de los entes,fundamentada en los dos pasos anteriores y en su funcionalidad experimental, es abstractaen cuanto separada de las circunstancias reales, pero con fundamento real en cuanto hacereferencia intencional al ente en su intimidad esencial.

Una de las características primordiales de la filosofía es la orientación intencional ala comprehensión de la "totalidad" de cuanto existe, de la realidad considerada como "laverdad" del ser real. Tal comprehensión totalitaria evidentemente, desde nuestro punto devista, no es analítica-racional sino sintética-conciencial, donde la comprehensión intentaencontrar el sentido de la existencia en lo existente.

La conciencia está presente ante el acto de los sentidos y está cierta de aquello quelos sentidos le manifiestan. Así, si el bastón aparece doblado cuando se le sumerge en elagua, la conciencia está cierta de que así aparece ante la vista. Corresponderá al análisisracional detectar la naturaleza del hecho y descubrir la causa: en la refracción luminosa,etc., por la que el bastón aparece doblado. El análisis de la reflexión racional muestra elhecho de la apariencia, dada la naturaleza del fenómeno y del sentido. La razón viene aratificar con su juicio la certeza de la percepción conciencial. El fenómeno es el punto departida para el descubrimiento de la esencia.La conciencia nos presenta el objeto de la percepción sensible externa como existente-trascendente y de ninguna manera a través de representación alguna.

Si se niega objetividad al conocimiento que la conciencia obtiene por su presenciaante la acción cognoscitiva de la sensibilidad, en vano sería querer darle objetividad através de cualquier análisis racional, ya que éste puede lograr mayor precisión y ampliar elconocimiento en profundidad, pero de ninguna manera negarlo; pues en él fundamenta suobjetividad, porque ella es la fuente primordial de información real y, aunque debesometerse a análisis y a crítica, no puede negarse absolutamente.

Hay datos sensibles que percibo como externos a mi cuerpo y otros como inherentesa él, todos los datos se presentan en mí conciencia, pero provienen de algo que no es laconciencia misma, de algo exterior a la conciencia como tal. La conciencia se manifiestacomo irreductible a cualquier dato cognoscitivo; a excepción de una autopresencia-consciente-existencial. Desde este punto de vista la existencia es lo primero y ella genera laesencia y la realización. El movimiento conciencial no es local ni transitivo, sino inmanentey espiritual, donde la concentración unitaria genera en su núcleo su duplicación.

Los datos sensibles son poseídos por la sensibilidad interna de modo reproductivo,representativo e imaginativo; pero estos mismos datos son captados por la inteligencia deun modo abstracto y general, identificables en cualquier objeto donde se presenten. Así, elniño de 16 meses llama "gua gua" no solo a los perros, sino también a los toros, caballos,etc., porque tienen una figura semejante; llama "agua", a ésta en la lluvia, en la laguna y ala que esta en su mamila, sino también a otros líquidos, precisamente por esta característica.He aquí los conceptos empíricos en una edad tan temprana referidos a una solacaracterística: el sonido-símbolo va unido a una sola característica; pero pronto el niñocomenzará a hacer las primeras distinciones dentro de aquellos seres que tienen la primeracaracterística; así entre los líquidos por su sabor y color (leche, té...); el seguimiento

realizado en unión con mi esposa -a través de observaciones continuas y registros- deldesarrollo de nuestro hijo, permite constatar a nivel de hechos lo que anteriormente seseñala, evidentemente interviene en la explicación nuestra propia interpretación.

Quisiera señalar, antes de pasar adelante, que la distinción que notamos en nuestrohijo en el caso de los "gua gua", fue que siguió llamando así a los de tamaño semejante,como el cerdo, el borrego,... en cambio pasó a llamar "bu" al burro, al toro, al caballo,.. porésta y otras observaciones, consideramos que el concepto se va formando en el niño a unaedad muy temprana y que se inicia con la identificación de una característica que segeneraliza a todos los que la poseen y a continuación dentro de éstos se iniciarán lasdiferenciaciones con base en otras características; pues nos parece que la "distinción" sin lafundamentación de una "identificación" es vacua y por lo tanto, imposible. La mismadistinción exige la captación identificadora de nuevas características; que se vanrelacionando, asociando y/o coordinando; pasando de esta manera de conceptos empíricossimples a conceptos empíricos complejos y esquemas que les asocian, primeramente muysimples (de dos o tres elementos) y posteriormente, cada vez, más complejos.

De esta manera, de la simple aprehensión se pasa a la conceptualización, siendo laprimera netamente conciencial y, la segunda, la generación de la conciencia refleja, esdecir, de la razón, cuya formación se inicia desde muy temprana edad, pero cuya actividadfuncional se iniciará sólo alrededor de los siete años, con la formulación de juicios, cuyopredicado será de abstracción y naturaleza empírica, cuyo sujeto será de referencia neta ydirectamente de intencionalidad realista; así dice el niño: "Pirata es blanco", refiriéndose alperro de la casa (que tiene un manchón negro en el ojo, de ahí su nombre). La simpleaprehensión, la conceptualización y el juicio en su génesis natural, ciertamente son denaturaleza realista; y, por ello, no faltan científicos y/o filósofos artificialistas que los hanrepudiado, fundamentándose en conceptos construidos artificialmente. Estamos de acuerdocon ellos en que la superación de los conceptos empíricos exige una construcción racional,que permita los conceptos esenciales, así como los existencial-realizativos; pero de ningunamanera podernos estar de acuerdo con una construcción que no pretenda cada vez unamayor adecuación a la realidad, para buscar una realización trascendente del hombre. Porotra parte, sería un craso error sostener, en pretensiones infundadas un realismo crítico yabsoluto con base exclusiva en el realismo ingenuo de los niños.El concepto esencial exige, para su construcción, el análisis del objeto de conocimiento, enel que se captan sus elementos más importantes con sus relaciones estructurales paraabstraer sus leyes y principies; sea el ejemplo de un triángulo equilátero: consta de treslíneas rectas de igual longitud, cada una de ellas se une en sus extremos con las otras dos,circunscribiendo una superficie que tiene tres ángulos iguales de 60 grados, cuya suma esde 180 grados; la medida de su superficie se obtiene multiplicando la base por la alturasobre dos,..etc.

El concepto esencial debe conjuntar las características suficientes y necesarias paradeterminar una especie de seres en su naturaleza, dejando fuera aquellas característicaspropias de los individuos. El conjunto de características, en su origen y dinamismo, hacereferencia a una estructura dinámica y organizativa propia de la especie, y que lesconstituye en lo que son -causa formal-, por lo que tal concepto es específico y universal,en cuanto puede aplicarse a todos y cada uno de los individuos que pertenecen a dichaespecie. Evidentemente no todas las especies de seres son igualmente asequibles a lainteligencia humana para que su esencia sea captada y/o reconstruida, así el macro ymicrocosmos presentan dificultad muy grande por estar fuera del alcance de la experiencia

sensible; de ahí la invención del hombre, para extender sus capacidades hasta donde lanaturaleza no lo ha dotado, de técnicas e instrumentos que vienen a perfeccionar ytrascender su naturaleza.

Lo anterior nos muestra que los caminos de la imagen y el concepto son distintos,tanto en su origen y desarrollo como en su naturaleza misma; por mucho que las imágenesse esquematicen y dinamicen mecánicamente -o se simplifiquen empobreciendo suscaracterísticas-, jamás llegarán a ser conceptos, porque son dos líneas en diferenteevolución y con diversa naturaleza; por mucho que se perfeccionen los esquemasimaginativos del primate no logrará pensamiento; porque carece de conciencia intelectual ysu respectiva conceptualización, para lograr el juicio y la libertad realizativa.

"Mi conciencia no es jamás pura experiencia sin concepción o pensamiento, porquedesde que la experiencia es consciente, ya se traduce en conceptos; pero tampoco miconciencia es jamás 'pura concepción' o 'pensamiento puro', porque la idea se refiereesencialmente a la experiencia a la que expresa y significa; aislada de toda experiencia,pierde todo sentido para mi".53

Nada ganamos con abrir los espacios en millones de años; una imagen abierta alespacio y al tiempo sólo es una imagen difusa, sin que su naturaleza haya cambiado, laimagen se abre en la línea de la extensión, en tanto que el concepto se cierra en lacomprehensión; la experiencia sensible sólo da extensión y jamás será universal, aunquepor analogía empírica se extienda; sólo la conciencia en su comprehensión abarca en sucentro la universalidad de la naturaleza en su ser existencial. Es cierto que el desarrolloevolutivo de ambos -imagen y concepto- son paralelos y están interrelacionados; pero nohay que confundirlos en su ser.

El concepto es de naturaleza abstracta en un doble sentido: primero, no está sujeto alas condiciones concretas de espacio y tiempo y, en ese sentido, participa de la naturalezade la razón; segundo, en cuanto ha sido aprehendido en un dato real de experiencia y eneste sentido participa la objetividad real. Esta es una de las características primordiales delconcepto. De esta "abstracción conceptualizadora" de la razón, hay que distinguir la"abstracción analítica" de la razón que separa los elementos para someterlos a un estudioparticular; y, aún ésta hay que distinguirla de la "abstracción empírica" que es un simpleaislamiento de los elementos para su observación.

La intuición perceptiva primitiva por su punto de partida perceptual es egocéntricay, por su incapacidad de liberarse de la sensibilidad, cae en la ilusión de la apariencia que lalimitación estructural de la sensibilidad le manifiesta. "Egocentrismo" y "aparienciasensible" son las limitantes del conocimiento primitivo; así, el movimiento de los astrosgira en torno al hombre; será la revolución copernicana la que libere de tal ilusiónegocéntrica. De igual manera tiempo y espacio dependen de tiempo y espacio humanos;será la teoría de la relatividad einsteniana la que libere al hombre de tal ilusión, pero si éstees el caso de la percepción sensible, este no es el caso de la racionalidad.

Es posible que una idea y/o experiencia significativa se filtre de un nivel a otro, seapor influencia social o por un reflejo emanado de la experiencia inconsciente; y, al darse talfiltración la percepción obtiene un cambio interpretativo bajo la luz de un punto deobservación diferente. Los filtros proporcionan un nuevo lente al acto de observación; y, lapercepción conciencial cambia de perspectiva, lo que le da un nuevo ángulo deinterpretación: he aquí la óptica conciencial que, evidentemente, puede darse por influenciaconsciente de ideas o experiencias.

Cuando la violencia de una experiencia toma posesión, de modo casi exclusivo y/opredominante, de la conciencia de un individuo, éste visualiza toda realidad a la luz deaquella experiencia, el cerebro se ha cerrado y la conciencia se haya circunscrita poraquella vivencia. La realidad aparece así con otros tintes (todo rosa, negro, gris...) ajenos alos demás. En tal estado ese hombre aparece corno "loco" a la percepción normal de unasociedad. La presencia inminente de la muerte da el toque a la percepción de Vicent VanGogh. Los cuadros de este pintor son un testimonio de la perspectiva con la que visualizabael artista en aquellos días.

______________________________53 Steenberghen, Fernand van, Epistemología, p. 16.

La percepción sintético-comprehensiva de la conciencia posibilita el que lapluralidad entitativa del entorno cobre una unidad, que ciertamente no surge de laexperiencia, y que se percibe como "universo". Los conceptos racionales generan su"universalidad" primeramente por la síntesis comprehensiva y sólo posteriormente por elanálisis racional. Esto puede comprobarse en los niños que generalizan, aún a partir de unaprimera característica, sin que hayan analizado, para diferenciar por comparación y abstraerla característica común. La "identificación" generaliza antes de toda "diferenciación".

La conciencia como "apertura" es capacidad relacional, en cuyo acto intuye larelación existencial, que permanece en la memoria existencial como referencia intencionalde la existencia captada al ente relacionado. Pero, dada la limitación de la intuiciónrelacional, la razón construye hipotéticamente los sistemas de relaciones que la concienciano puede intuir; para ello se ayuda del "sentido común" con sus leyes de asociación y de lalibre asociación de la fantasía. Hipótesis que la misma conciencia trata de evidenciar. Lavoluntad relaciona la propia existencia con la del mundo circundante en la realizaciónrecíproca e interactiva de ambos. Conciencia, razón y voluntad llevan a cabo sus funcionesa través de la relación, por lo que es obvio que la inteligencia es bajo un aspecto:"capacidad relacional".

La conciencia es un "ser abierto al ser", sea propio o ajeno, y esto en sentido tantocognoscitivo como realizativo-integrativo. A ello llamamos la "trascendencia de laconciencia", es decir, la "conciencia trascendental". La apertura de la conciencia esintuición, es decir, presencia inmediata, sea a sí, o sea al otro, cuando se trata deconocimientos; y es acción-pasión cuando se trata de realización integrativa. Teoría ypráctica son las dos caras evolutivas de la conciencia. Subjetividad es tener conciencia "desí", objetividad es tener conciencia "del otro". Subjetividad y objetividad son términosexistenciales, cuya intencionalidad relacional dice referencia necesaria a la conciencia.Olvidarlo es perderse en la selva sin perspectiva de horizonte.

En la "conciencia de sí" hay mayor claridad en la actividad intelectual, por seroperaciones que pueden concientizarse en buena parte; en cambio, en la actividad sensitivala concientización es más difícil a medida que las funciones son más orgánicas y menospuede penetrar en ellas la conciencia.

El ser conciencial en su autopresencia posibilita la heteropresencia, laintrasubjetividad permite la intersubjetividad, la identificación posibilita la diferenciación.Del acto de identificación en su identidad misma no se da posible conceptualización,porque la duplicidad conceptualizadora destruye la identidad y por ello toda objetivación de

sí le destruye en su ser. La razón es la reflexión de sí-en sí, en la que la conciencia no seobjetiva sino posibilita el conocimiento -conceptualizador- de la propia subjetividad en susestructuras esenciales. La identidad existencial posibilita el cambio y la diferenciaciónesencial. La representación esencializante del concepto y la realización esencializadora-existencial encuentran su fundamento en la identidad existencial. La identidad no significacerrado en sí, sino abierto a sí en silo que permite la apertura en sí a lo otro. La madurez dela conciencia, en su independencia funcional, invierte los procesos cognoscitivo-realizativos. La "conciencia refleja de ser conciencia" no es una "intuición revelante", comoafirma Sartre, sino la "conciencia reflejante" del propio ser conciencial. Tal acto esconceptualizante, porque el reflejo constituye el concepto y pertenece primordialmente a larazón, aunque el origen que le genera provenga de la conciencia primigenia.

7.5 PASOS DE LA AUTOCONCIENCIA

El hecho de que la "autoconciencia" no capte su esencia y sí su existencia, muestra la noidentidad plena de ambos coprincipios en la constitución de nuestro ser y, por consiguiente,su no ser absoluto, sino necesariamente relativo en este "estar abierto al otro" en lo másprofundo de su naturaleza esencial y requerir de la reflexión del otro para retomar a sí yposibilitar el conocimiento esencial de su propio ser.

7.6 EL HOMBRE: SER “EN SÍ” Y SER “PARA SÍ”

EI hombre es un "ser en sí para sí". Es un "ser en sf", debido a que por su concienciaprimitiva está "en si , es decir, es autopresente; es un "ser para si , porque por su libertad seproyecta en la realización de su ser. Pero ni el "en si niel para sí" son absolutos niabsolutamente idénticos: a) El "en sí" no es absoluto, porque está en su existencia, pero sele escapa su esencia que sólo reconstructivamente abstrae, en una objetivación de sí, paraproyectarse "fuera de sí", "tomar distancia" y poder abstraer su esencia en una finitudlimitante de la existencia. b) El "para sí" en el "retomo a si para construir realizativa-integrativamente el "en sí" en un movimiento circular, lento y de poco alcance: no esabsoluto. c) El "en sí" y el "para sí" pertenecen al mismo ser, pero están a distancia paragirar en círculo (que en su progreso se toma "espiral"): ni la identidad es plena ni esabsoluta.

La conciencia es punto de partida humano, que se ubica en el presente. La razón esla realización desdoblada de la conciencia en el reflejo de sí que concretiza la existencia enla esencia, es la proyección de la conciencia al pasado y su horizonte pretérito. La voluntad,en cambio, es la síntesis de la conciencia directa y de la conciencia refleja en la concienciaproyectiva, es la proyección de ¡a conciencia al futuro en su correspondiente horizonte. Larazón concibe la esencialización y la voluntad la lleva a la práctica, ambas esencializan laexistencia conciencial para generar en la inmanencia de su ser: "La trascendenciaautorrealizadora".

La autopresencia conciencial es la aprehensión intelectual del propio ser: "en sí". Laautoconciencia genera la reflexión como abstracción conceptual del ser: "fuera de sí". La

autopresencia reflexiva genera "la intencionalidad trascendente" como el ser que seproyecta fuera de sí retomando a sí: "para sí". La conciencia es el principio de latrascendencia continua del hombre en la inmanencia de su identidad.

La autopresencia, por la que yo soy autoconsciente y en la que me capto comoexistente, implica una transparencia y translucidez cuya intencionalidad está referida al actoexistencial, pero no a la naturaleza esencial; por ello, no hay identidad epistemológicaporque es diverso el acto por el que me capto en mi existencia, del acto por el que medescubro parcial y paulatinamente en mi variante esencia. La no identidad epistemológicaimplica necesariamente la no identidad ontológica. La existencia humana es continua-inmediata-sintética, en tanto que su esencia es variante-mediata-acumulativa, en talcircunstancia es absurdo atreverse a afirmar que el ser humano es absoluto.

Las perspectivas reduccionistas, sean estas empiristas, racionalistas etc., fijan el"yo" dentro de su "campo reducido" y desde ahí enfocan su perspectiva visual, quegeneralmente no se restringe al propio campo sino invade todos los demás, percibiendo conlas características propias de la perspectiva adoptada. Esto hace que el "yo" seaconceptuado de modo tan diverso en los diferentes niveles perceptivos, sin embargo el "yoprimitivo", que es el origen y fuente de todos los otros "yo", es el "yo trascendental", que esel "sujeto conciencial" en su originalidad primigenia.

El "yo fundamental" es el "yo conciencial", que fundamenta "presencial-comprehensivamente" los diversos niveles cognoscitivos, dando así origen al "yo empírico"a nivel de experiencia sensible externa e interna, al "yo ideativo o reflexivo" a nivel delabor racional, al "yo volitivo" a nivel de decisión y realización existencial, todos ellos en launidad del ser apercibido por la comprehensión conciencial dan lugar al "yo integral" quees el "yo" en la totalidad unitaria de su ser tanto en su entidad como en sus funciones. Elempirismo busca reductivamente: el "yo empírico", la fenomenología racionalista: el "yoideativo", la fenomenología voluntarista: el "yo volitivo"; todos ellos desintegran tanto elconocimiento como el ser humano en su desarrollo. El "yo conciencial" como "yo original"y "yo fundamental", culmina su evolución y desarrollo como "yo integral". El "yotrascendental" es sintetizante y realizante de su ser sintetizado conciencial. El "yotrascendental" se da en su perpetua síntesis conciencial. El "yo trascendental" es aperturasintetizadora conciencial. La conciencia es absolutamente la interioridad coincidente con el"yo trascendental".

El "yo trascendental" es el "ser siendo" en la conciencia comprehensiva, no esdiverso de ella sino que la conciencia es la realización inmediata y entitativa del "yotrascendental". Ambos son dos aspectos de un mismo ser: el ontológico y elfenomenológico. En el aparecer se manifiesta el ser: no hay aparecer sin ser, como tampocoes conocido el ser sin el aparecer. Ser y aparecer son dos momentos perceptivos de lainteriorización del conocer; pues ónticamente se pierden en la unidad presencializada yactuante de su "ser siendo" o, en otras palabras, de su "ser en perpetuo devenir" o de su"existencia esencializándose en una constante transformación".

La "apertura" como "percepción comprehensiva" (intuición) es la esencia foí malsimple de la conciencia. La experiencia sintético-existencial posibilita la comprehensión deun nuevo evento, sin que por ello sea un presupuesto que determine la interpretación sinoun punto de partida que permite aproximarse al objeto, acercamiento que irá cerrándose enuna adecuación progresiva, en la que el mismo punto de partida se va modificando, paracorregir paulatinamente sus implicaciones erróneas.

El acto genial es elaborado por la comprehensión sintética de la conciencia, queposee en su memoria innumerables datos inconscientes y subconscientes, y quecomprehende en un acto sintético los factores coincidentes, conscientes o inconscientes, encuestión.

El espíritu, por su simplicidad esencial, es síntesis comprehensiva que le permitevivir en un eterno presente. Por otra parte, su reflejo racional le fracciona en los instantes desu vida para producir su historia, en tanto que el lente de su apertura trascendental leproyecta al infinito. Presencia, historia y proyecto son las tres facetas del ser humano.Ninguna de ellas le explica en su ser integral sino el conjunto de ellas, cada una carece desentido sin las otras dos. Si la perspectiva se reduce a una de ellas, el todo aparece desdeahí, porque es de naturaleza integral.

La comprehensión humana es totalizadora pero no total y absoluta. Solamente Dioses omnicomprehensivo de su propio ser, porque sólo en él se identifica su autopresenciacon su esencia. En el hombre la autopresencia es sólo actual-existencial.

El espíritu es el núcleo de la estructura humana, que coordina directamente laconcientización e intelectualización de dicha estructura en el nivel superior. Cuando laintegridad se desestructura en la parte orgánico sensible, la estructura se corrompe y fenece.La unión sustancial de cuerpo y espíritu implica en su estructura una interdependencia. Elespíritu intelectualiza el cuerpo, pero éste proporciona la "materia prima" de tal función.Sin la materia prima dada por la experiencia orgánico-sensible no hay acto intelectual: "laintelección es vacía" y, sin el espíritu es imposible la intelección: "la experiencia orgánicosensible es ciega".~

La conciencia es el núcleo del ser cuya esencia es la "posibilidad de ser", de "ser-siendo" e incluso, de "haber sido". Pues aunque la conciencia sólo vive en el presente, seproyecta a la vez al futuro y sobrevive del pasado. De acuerdo con esto, la existencia es el"acto de ser" y el ser es el constitutivo metafísico de la existencia. Ahora bien, la concienciaes la apertura del ser al devenir en el existir y, a su vez el existir humano es el acto dedevenir el ser. La "intuición" de la conciencia aprehende el ser en su existencia real,individual y concreta; en este sentido la conciencia posee la experiencia del "ser endevenir".

La conciencia vive en continua síntesis de su pasado; recordar es, para laconciencia, un reubicarse en la experiencia pasada por revivir en el presente la vivenciapretérita. En la memoria conciencial no hay conceptos abstractos, sino repeticiónintencional de la vivencia pasada, para lo cual acude, desde luego a la colaboración de lasdemás facultades, en función integral.

El espíritu vive siempre el presente; el pasado y el futuro son proyecciones haciahorizontes -por esencializar en el futuro y esencializado en el pasado-. La existencia essiempre presente, el ser conciencial es siempre presente; el devenir conciencializante es elque se sintetiza en el pasado y se proyecta al futuro. El devenir corporal, en cambio,conserva lo que es, pierde lo que ha dejado de ser y no posee lo que aún no ha obtenido;porque la materia se apelmaza pero no se sintetiza" ni se "proyecta". La concienciacorporeizada vivencia existencial izando la experiencia corpórea, el cuerpoconciencializado trasciende su finitud.

La conciencia por su capacidad autopresencial y heteropresencial tiene sentido deltiempo en relación existencial, captando con ello lo presente como presente y en referenciaa él: lo ausente, lo pasado y lo futuro, en una sucesión de orden y coordinación por laautopresencia sucesiva. No es que la conciencia se mueva en el tiempo, como en un mar

proceloso, que va del pasado al futuro; tal concepción surge de la imaginación y se proyectapoéticamente en un tiempo oceánico ilimitado. El "tiempo existencial" surge y se desarrollaa partir de la autopresencia conciencial.

La conciencia en sí misma, supera la sucesión temporal por vivir en una duraciónpermanente en la que el "yo consciente" sigue siendo él mismo, en la que el pasado vive enel presente y se proyecta al futuro en la síntesis comprehensiva de mi ser, que da lugar a laexperiencia unitaria de mi existencia; pero, a la vez, injertada por la actividad perceptiva,tengo experiencia de la sucesión temporal de mi propio devenir en la sucesión de miactividad. En esta experiencia se muestra de modo patente mi ser en devenir

El "ser" humano está sujeto al "devenir corpóreo", en tanto su presencialidaddiscurre entre pasado-futuro, para que su "ser" se reafirme en el "ser' y el tiempo seatrascendido por la "inmutabilidad". El tiempo pertenece a la naturaleza corpórea del serhumano, que integrada constituye un solo ser y una sola esencia con el ser humano; sin que,por ello, se den dos naturalezas una corpórea y otra espiritual, sino una naturaleza: la de un"espíritu encamado".

La conciencia humana, aunque es de naturaleza intelectual y espiritual, estáencamada en un cuerpo y unida a una estructura, que la condiciona en su naturaleza yfunción; por lo que la comprehensión conciencial está estrechamente ligada a la estructuracognoscitiva y presenta sus características. Así, por ejemplo, la conciencia capta laespacialidad y la temporalidad del propio ser; y, estas dos características le sirven de puntode referencia para la comprehensión de su "ser-en-el mundo" y del mundo mismo en el quese encuentra inmerso.

La naturaleza de la conciencia aflora en el continuo presente que muestra suidentidad. El tiempo le es inherente por su unión sustancial con un cuerpo orgánico que lecondiciona en su devenir temporal, en este sentido decimos que el hombre es un "sertemporal" a la manera como afirmamos que es un "espíritu encarnado". Pero noidentificamos el ser con el tiempo ni a la conciencia con la temporalidad, aunque laconciencia esté sustancialmente sujeta al tiempo en su estructura corporal. La conciencia esel principio medular del ser humano, que indica a la vez la inmanencia y la trascendencia,(óntica y temporal) de su ser.

El sentido existencial de la conciencia es apriórico en su punto de partida como"facultad de apertura trascendente", pero la orientación de tal trascendencia, aunque está ensituación, es libre. El presente humano no es eternidad, porque su apertura implicatrascendencia, donde el futuro implica la realización del pasado y donde la eternidadimplica la realización del tiempo. La presente existencia humana es temporal con horizontefuturo de eternidad. La orientación humana se da hacia el futuro, el hombre está proyectadoal futuro. La esencia de la existencia humana tiene su germen en el punto de partida y seproyecta libremente al futuro. Filosofar es aprehender el futuro en el presente ypresencializar el futuro en la futurización del presente.

"La intuición es el conocimiento directo e inmediato del objeto conocido en laevidencia comprehensiva de su ser". La intuición total del ser permitiría al hombre elconocimiento perfecto de dicho ser. Tal intuición ha sido negada al hombre por la opacidadde su visión encamada, se debe iniciar a intuir desde el elemento simple del nivel inferiorpara ir desarrollando su capacidad ligada al cuerpo y acrecentar su visión, que en dinámicatrascendente puede extenderse al infinito, pero su visión es tal que el lastre que arrastraapenas le permite, en momentos sublimes y efímeros, vislumbrar extática el "ser", sin

acertar a expresar la visión, porque el ojo arrobado queda deslumbrado y teme traicionar loque vio, por la inadecuación de los conceptos y del nivel de captación.

La intuición del ser aparece como obvia en el momento extático autopresencial,pues aparece en la simplicidad autocomprehensiva del instante en el que la síntesis hacedesaparecer la esencia del pasado y el proyecto del futuro. El presente nadea el pasado y elfuturo en su síntesis comprehensiva, ahí la complejidad se pierde en su simplicidad. Pero sise cambia la perspectiva sintética por la analítica, la tarea se torna tremendamente difícil ycomplicada, porque el juego de espejos, indispensable para detenerlo bajo el ente, lomultiplica hasta el infinito y la variedad perceptual oculta el ser.

La conciencia es integral y está constituida por el "yo existente", es decir, el sujetoque se capta como existente: autoconciencia. Si no fuera autoconciencia no seríaconciencia, pues sólo la autoconciencia es capaz tanto de percatarse de su identidadexistencial como de conocer al "otro", pues es la potencia autoconciencial la que capacitapara ambas cosas; y, de hecho, ambas cosas se dan a la vez, ya que la apertura concienciales capacidad relacional, que se encuentra a sí en su vinculación con el "otro", dado que ahíencuentra su realización como conciencia (que, insistimos, es capacidad relacional). Losaspectos metafísico, psicológico, epistemológico y ético de la conciencia no son sinoabstracciones de este hecho integral: "El espíritu es autoconciencia".

El hombre es el único ser sobre la tierra que, por su conciencia, está presente a símismo, que se posee cognoscitivamente e integra su ser comprehensiva y realizativamente.A ese principio del ser humano le llamamos "espíritu". La conciencia es el "único dasein"como "ser presente ante sí y ante el otro", sólo la conciencia posee el éxtasis de lacontemplación del ser. Este es el verdadero punto de partida para todo saber filosófico ycientífico. El ser se hace presente por la conciencia sensibilizada; sin ella el saber racionalse reduciría a un simple juego de símbolos carentes de significación real y, por lo mismo,de todo valor verdadero. El saber no debe refugiarse en la simbolización (lógica y/omatemática) sino que debe ir a la fuente, tanto en su origen como en su culminación: el"ser" y/o el "dasein".

Nuestra opinión concede la primordialidad a cada potencia o facultad en susfunciones propias referidas a su objeto propio, pero turna siempre la primordialidad a laconciencia cuando en todos los ámbitos desempeña la comprehensión sintética-integral."Todos los buenos autores concuerdan al menos en la imposibilidad de una psicología delespíritu. De ahí que critiquen con tanto esmero toda identificación de la conciencia con elconocimiento. Sólo difieren en la determinación de los factores que otorgan una naturalezaal espíritu".

La capacidad relacional de la conciencia proyecta su ser activo hacia algo en lo queencuentra su autorrealización. He aquí la intencionalidad en su fundamento, por lo que sepuede decir, sin caer en la reducción funcionalista, que "la conciencia es intencionalidad".Sólo la conciencia fontal es trascendental en su ser, por su apertura original al "ser encuanto tal". Razón y voluntad son, a la vez, trascendentes e inmanentes en relación con ella.Trascendentes porque la conciencia las contempla en un más allá de sí; e inmanentes,porque son parte de su ser; que, desdoblándose y proyectándose, se abren al exterior y secierran sobre sí en la unidad de su propio ser.

La "armonía personal" se realiza plenamente a nivel integral y depende de losarmónicos existenciales vibrados, sintética-comprehensiva-vivencialmente, por laconciencia.

En conclusión, este trabajo sustenta los siguientes puntos: sólo la conciencia escapaz de presenciar y sintetizar comprehensivamente la actividad de las diferentespotencias humanas; por consiguiente, a ella corresponde:

a) Autoconcienciar el propio ser por autopresencia existencial.b) Captar existencialmente las potencias en sus funciones.c) Guiar a la razón para descubrir las estructuras potenciales y comprehender sus esenciasen la síntesis posracional.d) Intuir por comprehensión evidencial los principios fundamentales, que rigen lanaturaleza operacional de las potencias.e) Realizar la síntesis comprehensiva de las diferentes potencias para la obtención tanto dela verdad "especulativa" e "integral" como de la integración operacional de las potencias enla realización trascendente de la personalidad y de la sociedad.

I. Lo que está directa e inmediatamente presente a la conciencia clara y atenta, tiene validezexistencial en cuanto al ser y, en este sentido, es objetiva en la modalidad presentada yprecisada fenomenológicamente.II. Lo que está presente a la conciencia clara y atenta como la manifestación empírico-fenoménica de un ser, tiene validez objetivo-subjetiva, en el sentido de síntesis asimilativo-acomodativa, que debe ser descrita con precisión, tanto en su totalidad como en susdetalles, tanto en sus elementos como en sus funciones presentes a la observación naturaly/o experimental, por una empiriología que elabore el punto de partida para el análisisabstractivo-reconstructivo racional.III.EI conocimiento esencial de los entes se obtiene fundamentalmente por el trabajo de larazón, que parte de la descripción empiriológica para realizar un análisis abstractivo-reconstructivo, que le permita descubrir progresivamente la esencia con el objetivo deadecuarse a la realidad, para elaborar una teoría explicativa de ella.IV.La comprehensión teórica del ser se realiza en la síntesis (posracional) de la afirmaciónexistencial-esencial del "juicio especulativo". Conciencia, razón y voluntad intervienen eneste trabajo para la elaboración de la "verdad integral".

La "inteligencia humana" es la capacidad de captar el propio ser existencial, abstraerla esencia de este ser y realizarlo en su proyección social.

"El número de conocimientos que bastan para producir la sabiduría es muypequeño; y son conocimientos muy simples, acompañados de una evidencia a la vez muyprofunda y muy dulce", dice Louis Lavelle en La conciencia de soi y añade: "El amorpropio... piensa muchas veces realizarse inventando razones sutiles para dudar de lasverdades mejor establecidas, pero el conocimiento es una comunión con lo real y no unaconfrontación del universo y del yo; el universo se mira en mi como yo me miro en él".