8940122 IconografIa Del Laocoonte

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 ISSN:  0214-6452 Apir,!,  p¿¡~  II,~to,  p r,  dr! Arte [999 9  92<)  Ic on ogra a  de l  Laocoonte  a  través  de  su s  fue nte s literarias y  poéticas HERBERT  GONZÁLEZ ZYMLA Universidad Complutense  de  Madrid La  ti-adición  literaria  griega  dice que  Laocoonte  era  sacerdote  del  templo  de Apolo Tímbrico  de Troya  durante las  guerras  que  enfrentaron  a los de Ilión contra los Aqueos. El  sacerdocio  en  Grecia  es  bastante  diferente  del  sacerdocio  oriental.  Para empezar  la religión  griega carece de  una casta sacerdotal jerarquizada  al  modo  en qu e  lo estaba,  por  ejemplo,  en Mesopotamia  o Egipto;  de  hecho,  cualquier  hombre libre y  ciudadano de la polis podía tratar  directamente con la divinidad sin necesidad de  ninguna  clase  de  intermediarios.  El  sentido  del  sacerdocio en  Grecia tiene  más que  ver con  el  culto  colectivo  y  con  el  culto de los  habitantes  de la  ciudad  que  no son ciudadanos,  los  cuales,  para  solicitar  los  favores  de la divinidad,  debían  recurrir a los  servicios de un  sacerdote,  que  estaba adscrito siempre a una  divinidad  y  a  un santuario concreto;  en  este  caso,  Laocoonte  está adscrito  al  santuario  de Apolo Tímbrico (Aito?~o Ttg<3pt~cm)  en el templo  q ue  tenía erigido en  Troya.  El  sacerdote es  la  máxima  autoridad  del  templo,  con una  serie  de  obligaciones diarias  de carác - ter ritual  perfectamente reglamentadas.  Debido  a l  carácter  básicamente democráti- co de  la  religión griega,  qu e no  perdió  hasta  época helenística,  nunca  existió  una carrera  sacerdotal.  Unicamente  se  exigía  a quien  ejerciese e l  sacerdocio ser varón  y cumplir  una  serie  de  requisitos,  entre  los que se  hallaba la  integridad tísica  (no se permitía ejercer  a  tullidos), cumplir  las  normativas  exigidas por el Dios  (virginidad, castidad, celibato, comidas concretas...)  que  variaban  en función  del  capricho  de  la Divinidad... El  sacerdocio tenía un  carácter electivo y  anual  con la  posibilidad  de  ser reno - vado en su  ejercicio y  era una  fuente  de  prestigio  social  y  personal. Podemos reconstruir e l  árbol  genealógico de  Laocoonte a través de  un  fragmento anónimo que  Althaus  recogc en  su libro,  fechable  en  e l  siglo  ¡ide nuestra  Ej-a. ¡  At<haus  1  {orst:  Laor   orín  sroff tui d  fruní   -  Bern, 1968,  p .  46. 9

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Apir,!, p~ II,~to, pr, dr! Arte [999 9 92..

Sabemos de la existencia de otros poemas con el mismo argumento de la Ilinpersis donde debera desarrollarse este mismo motivo. La Tabula lliaca afirma la existencia de un Saco de Troya de Estesicoro; hay otras fuentes que confirman la existencia de un tercer poema de poca arcaica, con el mismo argumento, obra de Sacadas de Argos. De ninguno de ellos ha llegado nada a nuestros das, excepcin hecha de los ttulos y autora. Homero, contemporneo estricto de Arktino de Mileto en la composicin de La Odisea, parece desconocer, u obviar, el mito del Laocoonte en su descripcin de la guerra de Troya. A peticin de Odiseo, despus de la celebracin de un banquete en el palacio del rey de los Feacios, el aedo Demodoco entona el canto de la cada de Troya v keT/31>8t sai t,rtQU con/mv ~t0OV ret. tete or~ rapccov ~ 8ouparoo, rv Eret ~rOi~oeV ate> AOv1>, 0V rr E~ acprottu btkov fl707E ict~

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soportaron, como si t en persona lo hubieras visto o se lo hubieras odo referir a alguno de ellos. Mas, ea! pasa a otro asunto y canta cmo estaba dispuesto el caballo de madera, construido por Epeo con la ayuda de Atenea, mquina engaosa que el divinal Odiseo llev a la acrpolis despus de llenarla con los guerreros que arruinaron a Troya. Si esto lo cuentas como se debe, yo dir a todos los hombres que una deidad benvola te concedi el divino canto. As habl, y el aedo movido por divinal impulso, enton un canto cuyo comienzo era que los Argivos diTonse a la mar en sus naves de muchos bancos, despus de haber incendiado el campamento, mientras algunos se hallaban con el celebrrimo Odiseo en e gora de los Teucros, ocultos por el cabal lo que ellos mismos Se llevaron arrastrando hasta la acrpolis.

IS Hornero: Honie,! Opera, edicin Thomas W. Alen. Londres. 1908, pp. 9-lO. Hornero: Odisea, Madrid, 1951. Traduccin y edicin de Antonio Lpez Hire, Rapsodia VIII, pp. 187-188.

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Ano/c.c ce I/i.,to,ia de! A ele i 999. 9: 9-26

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La icono grafa del Laocoonte...

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El caballo estaba en pie y los Teucros.sentados a su alrededor, decan muy confusas razones y vacilaban en la eleccin de uno de estos tres pareceres: hender el vado leflo con el cruel bronce, subirlo a una altura y despearlo, o dejar el gran simulacro como ofrenda propiciatoria a los l)ioscs: esta riltima resolucin deba prevalecer, porque era fatal que la ciudad se arruinase cuando tuviera dentro aquel enorme caballo de madera donde estaban los inris valientes argivos, que causaron a los teucros el estrago y la muerte. Cant cmo los aqueos, saliendo del caballo y dejando la hueca emboscada asolaron la ciudad: canta asimismo cmo, dispersos tinos por un lado y otros por otro, iban devastando la excelsa urbe, mientras que Odiseo. cual si fuese Ares, tomaba el camino de la casa de Deifobo, juntamente con cl deiforme Menelao. Y refiri cmo aqul haba osado sostener tn terrible combate, del cual alcanz victoria por el favor de la magnnima Atenea.

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Porce y Caribea, partiendo de la isla de Calidos (Tenedos), fueron a Troya y mataron a los hijos dc Laocoonte en el tenplo de Apolo limbrieo. Antenoro, hijo de Lancoonte, interpreta esto como una seal dc la lutura destruccin de lroya.

De la traduccin de este texto se desprende que las dos serpientes se llamaban Porce y Caribea, y que partiendo de la isla de Tnedos (Klidos), asesinan a los hijos de Laocoonte (nada se dice de que ataquen y maten al padre), en el templo del que Laocoonte era sacerdote de Apolo Timbrico. Se supone que antes de morir Antenoro. hijo del sacerdote predice la cada de Troya en manos de los griegos. Si tenemos en cuenta que Apolo siempre dota con el don oracular a sus sacerdotes, es lgico pensar que el primero en verse privado de tal don, por su impiedad, fue Laocoonte; muerto el padre, sus hijos heredan la capacidad de interpretar la voluntad de los Dioses a travs de los fenmenos de la naturaleza (no olvidemosque las circunstancias de la muerte de Laocoonte significan la prdida del favor de

una divinidad poliada). Limpios del miasma (mancha moral), que supone la falta de Laocoonte, Apolo se manifiesta a travs de los hijos de aqul, lo cual explica la clarividencia de Antenoro que predice la destruccin de Troya antes de morir. Por desgracia no tengo ningn argumento que explique el por qu Antifantes es aqu Antefloro.

Alihaus Hors: Op. ci!.. p. 128.

Ana/c.c de /lhte,,,a c!e/ Aetc[999,9:9-26

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Herber Gonzlez Zyrnla

La iconografa del Laocoonte...

La descripcin de Baquflides es muy valiosa al trasmitimos el nombre de las dos serpientes. A travs de la antologa palatina, que son una serie de comentarios a obras literanas de origen griego o latino, que se supone toda persona culta de la antigUedad deba conocer, se sabe que una de las tragedias escritas por Sfocles se titulaba Laocoonte y analizaba las repercusiones que su muerte tuvo para los troyanos. De esta obra nicanente conocemos su nombre y un breve comentario en la Antiquitates Romanae>.

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Sfocles el trgico (hacedor de tragedias), en su obra sobre Laocoonte, dice que Anquises, pensando que la ciudad poda ser destruida, hace que Eneas, su hijo, se lleve provisiones hacia el monte Ida; ante la mirada de Afrodita. habiendo obedecido a su padre porque piensan que la muerte de Laocoonte es una seal divina que significa la futura destruccin de la ciudad.

Del texto se desprende que Sfocles dedic una de sus 130 obras a la muerte de Laocoonte y a sus consecuencias, reseando con especial inlers la proteccin que AIrodita, madre de Eneas, ejerci sobre la ciudad 20 Poseemos una hermosa pintura, ejecutada al fresco, en el Museo Nacional de Npoles, dentro del ciclo de las Troyanae Pugnae (Fig. 3), donde est figurado el episodio del caballo de Troya y del Laocoonte quiz como una alegora de la astu2. cia y lamuy posible que el fresco est en relacin con la obra que acabamos de citar Es inventiva de los griegos escrita por Sfocles, ya qtie la concepcin de conjunto es enteramente escenogrfica; de hecho, quiz derive de la escenificacin de la tragedia, ya que la disposicin de los objetos recuerda bastante a la que tendra el atrezzo sobre un escenario. El punto de vista alto con que ha sido captada la perspectiva vendra a ser el que tendna un espectador si se situase en la media cvea o en la summa cvea. En lo que al estilo se refiere podemos decir que la gama cromtica que emplea es muy limitada (marrones, blancos, pardos, negros), y el modo de aplicar el color es expresionista, nervioso, con una pincelada suelta, muy diestra y efectista. Se capta el mismo momento en que, segn relata Homero, estn discutiendo qu hacer con el caballo: Introducirlo en la ciudad? Despearlo por el monte? QueAltliaus Hors: Op. eh., p. [28. ,uca, J, Mt: Ir,/roducein u lo.s agmenios .e>otYeqoo.e>. Madrid, (Iredos, [983. Olaguer Fe lid e Alonso. 1 ernando de: Les /UfltOie y cl muso/ee) fu anos. Madrid, 1 989. PP~ 3 1 32

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y lminas 67-68. 23Aej/e., de li.eiewia del Are

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jfer,e,t Gonzlez Zyrnla5 5

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