A Veces La Luna Se Llama Guidaí

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A Veces la Luna se Llama Guidaí Los charrúas conocían las fases de la Luna y su regularidad como las conocen todos los pueblos que observan el cielo. Las Lunas llenas sucesivas marcaban el año lunar, a razón de tres Lunas llenas por estación, pero al llegar a cada solsticio de invierno se aumentaba una Luna para la estación siguiente. Las cuatros estaciones, claro, no se designaban como primavera, verano, otoño e invierno sino por las actividades propias de cada temporada. Cada cierto período de años los ancianos advertían que los ciclos lunares se habían desfasado con relación al solsticio de invierno, y entonces se agregaba otra Luna más a la estación primaveral. Claro que a nadie se le ocurría que aquel cuerpo esférico fuera una diosa; eso sólo puede ser una invención de los imperios, no de los pueblos sabios. Pero la pradera por la noche está poblada de espíritus y el monte, por el día y por la noche, tiene muchos más. Esos espíritus deambulan con diferentes propósitos. La mayoría de ellos, memoria antigua de abuelos sabios, quiere protegernos, pero para eso cada espíritu debe fortalecerse, energetizarse. Y allí es donde a Luna juega su papel. Es en esos casos que la Luna se llama Guidaí, fuente energetizadora de los espíritus protectores.

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A Veces la Luna se Llama Guida

A Veces la Luna se Llama Guida

Los charras conocan las fases de la Luna y su regularidad como las conocen todos los pueblos que observan el cielo. Las Lunas llenas sucesivas marcaban el ao lunar, a razn de tres Lunas llenas por estacin, pero al llegar a cada solsticio de invierno se aumentaba una Luna para la estacin siguiente. Las cuatros estaciones, claro, no se designaban como primavera, verano, otoo e invierno sino por las actividades propias de cada temporada. Cada cierto perodo de aos los ancianos advertan que los ciclos lunares se haban desfasado con relacin al solsticio de invierno, y entonces se agregaba otra Luna ms a la estacin primaveral.

Claro que a nadie se le ocurra que aquel cuerpo esfrico fuera una diosa; eso slo puede ser una invencin de los imperios, no de los pueblos sabios.

Pero la pradera por la noche est poblada de espritus y el monte, por el da y por la noche, tiene muchos ms. Esos espritus deambulan con diferentes propsitos. La mayora de ellos, memoria antigua de abuelos sabios, quiere protegernos, pero para eso cada espritu debe fortalecerse, energetizarse. Y all es donde a Luna juega su papel. Es en esos casos que la Luna se llama Guida, fuente energetizadora de los espritus protectores.