Acción Libertaria, Nº 64. Mayo1943-Fla

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AFIRMAMOS LA VOLUNTAD DE LUCHA Y RESISTENCIA DEL PROLETARIADO CLESTIOMS QL'E ES Í O .V V K .V fR .V T E ULMSXH E N estos iiltirnos tiempos, .y eapecialmenti ion motivo de la celebración riel Dí'i ch las A mélicas, se han pronunciado numero sos discursos y se hi importantes por pal- ios Estados Unidos, con referencia a los pro- blemas de la reconstrucción postbélica y al destino de estos países en el porvenir inme- diato. Muchas promesas, grandes frases, pictóri- cas de optimismo e inspiradoras de esperan- zas, han podido recogerse a través de todas esas ina infesta c ion es. Pero todo en abstracto.. Todo condicionado a imponderables factores y circunstancias que emergerían de la postguerra y que ahora se desconocen o se omite, señalar. No obstante, sólo potemos atenernos a lo existente, a las fuerzas que hoy pugnan por el predominio en todos los órdenes, que es- tarán presentes i/, gravitarán ,m todos los ensayos o intentos’de reforv funi sitia resultados no pri- ial por gla » alafas andes potencias, m ìa la fraséalo- LARGO CABALLERO IE FEDERACION ANARCO-COMUNISTA ARGENTINA Jg im iV Á iiA l ASO VIII — Núm. 64 BUENOS AIRES, MAYO DE I94S Precio: II) centavos NI FATALISMO PESIMISTA. NI FATALISMO OPTIMISTA S EGUN noticias, confirmadas oficialmente por el ministerio de Relaciones de Méjico, Francisco Largo Caballero, el veterano dirigente obrero y ■so- cialista esptiñol. ex-presidenle del Consejo de Ml- _ nistros .de la República, ha nido.-dotonido- últkna- j mente por los nazis en Francia. Otras noticias pos- teriores, procedentes de Londres, afirmaban que el viejo militanle antifascista, había sido trasladado a Alemania, sufriendo la misma suerte que muchos otros exilados españoles en tipvra de Francia. Des- pués de.haber sido detenido repelidas Veces-y puesto bajo una vigilancia condicionada, habría caído --ti fin en manos de sus peores enemigos, después de los falengistas españoles. - Trágico destino el de ese recio luchador obrero. Nuestra divergencia doctrinarla con su concepción del socialismo no nos impide reconocer en él una de las figuras más nobles y gcnulnas del prolela- rir.do español, uno de esos pocos dirigentes que han pagado victoriosamente por las más duras pruebas morales y materiales, manteniendo integramente su dignidad, sus convicciones, su Insobornable entere- za. Desde su puesto de lucha en el Sindicato de Al- bañiles de le U.G.T.. en Madrid, hasta el de pre- sidente del Consejo de Ministros de la República, en plena guerra contra el fascismo mundial, Largo Caballero ha dado pruebas concluyentes de la re- ciedumbre de su carácter y de la sinceridad de sus propósitos, como, político y como militante antifas- cista, en violenta contradicción con la casi totalidad de los políticos republicanos y socialistas, que lo abandonaron ignominiosamente en los momentos más difíciles. Los errores que pudo haber cometido en su larga vida de militante errores de que na- die está exento quedan ampliamente compensados con esa demostración suprema de sinceridad y con- secuencia que le hizo afrontar persecuciones y ca- lumnias, antes que someterse a las imposiciones de quienes utilizaban a España y a su pueblo, como campo de elemento de experimentación, al servicio de los intereses de un partido y do una potencia extranjera. En efecto, ese hombre integro como po- cos. fue objeto de la difamación y, de la saña de los agentes stalinianos, por no haberse allanado a cumplir servilmente sus órdenes y haber reivindi- cado el derecho del pueblo ejpañol a disponer de su propio destino. Por eso, nuda más se negó al ga- binete presidido por Largo Caballero las armas ne- cesarias para la lucha y por eso se armó la combi- nación traidora que lo desplazó del gobierno y de toda intervención activa en los, acontecimientos. Los mismos que habían pretendido ganarlo pormedio de halagos, proclamándolo el "Lenin español" y "jefe del gobierno de la victoria", lo acusaron poco menos que de agente del enemigo, impidiéndole toda posibilidad de defensa. Largo Caballero hubo de sentir el amargo sabor de la derrota, mucho antes dé que ésta se consu- mara, pues vivió el proceso de desintegración moral y político del bloque antifascista español, con la dolorosa impotencia de quien ve venir los acontec.- mientos sin poder remediarlos! Pero permaneció en su pais hasta el último momenio y aceptó después todos los rigores del exilio. Radicado en un puchlo del Sur de Francia, no quiso alejarse de Europa, cuando la guerra, que había empezado en España, se fué extendiendo a todo el continente. N'i siquie- ra el derrumbe de Francia le hizo cambiar de deci- sión. Silencioso y estoico, afrontó todas las conse- cuencias de la derrota. Varias veces se le había de- tenido. igual que a nuestra compañera Federica Montseny. Erróneamente se había anunciado la en- trega de" ambos a Franco. Probablemente tubo tal intención en el gobierno de Víchy. pero la presión de países americanos, cuando esc gobierno conser- vaba aun una sombra de independencia, hizo que tal entrega no se consumara. Ahora, desgraciadamente, jV/fUOIIO han variado las cosas desde que la ^ cele!»radón del lo. de Mayo significaba una recia y combativa expresión de las reivindica- ciones del pioíetaríado, una vigorosa manifesta- ción «i* protesta contra las permanentes ini- quidades sociales, una ardiente afirmación de íe en los id. ules de libertad y justicia, que fue- ron siempre los motores más poderosos del pro- greso. Hoy, en los pocos países donde aun es x>o- sible. celebrar ese día, todo se reduce a feste- jos yul^a es, a frías ceremonias acompañadas de discurso? convencionales, en los que se des- naturaliza d ! modo más cínico el valor simbó- lico do la fei ¡¡a y de los acontecimientos que se conmemoran, consumándose una nueva aíren- la a la dignidad del proletariado, d<» sus lucha* dores de vanguardia, de sus mártires. Como que se lia>e participar en la “fiesta”, en las cs- remon'as y discursos alusivos, incluso a los ge- nninos representantes de I*» clase enemiga. Todo lo que no sea esa grosera mistificación, esa burla indigna, queda prohibido y sofocado. La libertad con cuentagotas de que disponemos >>ctuslmen*e, sólo sirve para que los oportunis- tas y lo* demagogos puedan confundir más el espíritu de la masa obrera, en cumplimiento de su sistemática labor derrotista. ■Sin ambargo, los trabajadores que íjo han perdido dci ti tío su conciencia de clase, rccWv- ;lan que ese es SU DIA, el día de los explotados y reipgadr-s do todos los tiempos. Que no co - rresponde la fraternización espectacular con los representan*es de la burguesía, ni el olvido «ie las profundas diferencias que separan a unos y qtrt-s. las que tarde o temprano tendrán que reshrür ai primer plano de los acontecimientos, en e| planteo de solución de fondo para los pro- blemas rocíales. Si no fuera por ese sentimiento, difuso y atenuado hoy que embarga a la tiran mayoría de los traoa.¡ndotes y que es —en suma— con- ciencia <V cíase, ningún valor tendí ía la cele- bración de esta fecha ni ninguna otra de las tan- las que podi iíin señalarse como recordatoria del m ar^ologíó proletario. Vemos que ,a despe- cho de los razonamientos fríos v de la deore- dón reinante, aun subsiste, viva o latente, la mis. tica proletario, el anhelo de lucha v liberación. Quienes no han abandonado la lucha, ni se en- tregaron a la mansa corriente del conformis- mo tienen ahí un incentivó y una tarea inme- diata a cumplir. El estímulo de comprobar que el espíritu de i e.vindicación y de rebeldía no se lia extinguido, a pesar de todas las negocia- ciones v de l.'s circunstancias adversas. La tarea de esclarecer la conciencia de las jóvenes ge- neraciones proletarias, de dar forma concreta y firme contextura a las aspiraciones difusas y a ln fe iugenua. Poique es íaisa de toda falsedad —mero re- curso de los que pretenden justificar su abando- no de. ,a lucha— Ir afirmación corriente de que ahora “no hay nada que hacer’. Que todo está mediatizado y corromnido y que sólo queda ’■1 adaptarse a este medio corrompido o colorar- se, al margen de toda actuación . ¡eal en 1 k lu- cha obrera. Nosotros creemos, por el contrario, que los /evolucionados v les militantes obreros cons- cientes, siempre lienen una gran labor a cum- plir y que las circunstancias actuales acrecien- tan 1 í. responsabilidad oue tal labor significa. Nunca nos hemos sometido al imperio de un fatalismo o¡ timista ni pesimista. Así como no creíamos en h.s virtudes de una revolución pro- videncial \ milagrosa que de un golpe iba a re- solver todos los problemas que afligen a la so- ciedad. tampoco reemos en el reinado inelec- table de la reacción y de las corrientes ideoló- gicas ne<r:itiv:>,g <,ne la acompañan. Siempre, y en t idas las circtinsiancias, cuanta conquista pudo lograrse ha dtím.'mdado infinidad de esfuerzos v a veces sacrificios cruentos. -Para conseguir las mejoras de mmp hoy disfrutan los trabaja- dores —allí dnr.-^e las mismas aun subsisten— lúe ou necesarias gigantescas luchas, cuyo cos- to en suf;imienfns yen víctimas no guardó ¡v- nni',i la inmi<rt:*ii‘M;i (!.• Ims inversión' »le e-iv.r «íes energía- para evitar que dichas conquistas, morales y materiales, sean n-sotepdas y negadas. Y sobre todo, para impe - dir que el espíritu colectivo que las hizo posi- ble, sra sofocado. Admitamos sin vacilar esta enseñanza que se der*va de. la realidad actual, así como de la consideración de! acontecimiento proletario que hoy se conmemora. No hay victorias ni derro- tas definitivas en la lucha social, se ha dicho, con inste, razón, y si ahora tenemos que sopor- lar las consecuencias de derrotas anteriores, ten ¡ramos 'a entereza y la capacidad de recupe- ración necesarias para rehacernos constante- mente v para preñarar desde hoy a pesar de iodo, la posibilidad de la revanclia. No seamos nosotros los primeros vencidos. O. como decía e¡ ¡rían Malatcs'a. NO TENGAMOS EL ESPI- RITA Dr. LOS VENCIDOS. Firmes en est0. convicción y en la seguridad de pH el espíritu de lucha y la conciencia de clase no han sido totalmente extinguidos en el proletariado, liemos de mantenernos en su van- guardia combativa, a fin de dar a ese espíritu las mayores protecciones de realización concre- ta, oponiendo, al mismo tiempo, una valla in- franqoeable a Jas corrientes reaccionarias y co- rruptoras que hoy amenazan arrasarlo todo. Es este e' único homenaje que nos corresponde rendii a 1¡ memoria de quienes han luchado y caico por !a causa de libertad «pie nos es común. s w \ n it \ h o ni: l .i iiii.v f '.v# i i in: M O H SiXV E bita n u .-.nci'l del gobi. .:a.l linciti de Buenos Aires, do M omif. .C óm o’ ¿Ignora '^aí“ T . mu“« " '’T e s ! ; - h i ó i n ...... U am ena ¡udo nuda menos ,,uc con pe,. cM f% ; Olx^d'ibu!i que Bm v ''tt.rr.l**1 ' ta. ia ■ et !•!lítente contra •1 orífWj ***• tablecido en fulo, el pais contra sus U)vs de ii-in.fi o .. nj.it e»W ■' ta- 1 5 £ ñí «o - í*do por el pueblo. Pe. daa.de que se respete el la pos ibilí- Hvfrugio ciu- ir:;:;:;;,'; :xivr»!icìoi;cti riel poder cei Politica dirigida, econo las brutales les. Nada puede escapar ^ Naturiti metile, ello ori de Buenos Aires tiene un El episodi o dependía la solución de ningún pro- k'cro queda soleadas, por los derechos tales qur nos ' han. sido más elemen- rr.ebatudos y eos se MAYO EN ESPAÑA 44/“\U E el pròxlm m::-o de nue I prl- la t' i que c ición diplomàtica podrá sal- Sobrevivirá el septuagenario luchador el poder de sus verdugos? Asi lo esperamos, pues hombres de su temple, a pesar de su ancianidad, pueden aun dar un ejemplo y señalar un, rumbo, en la recons- trucción de España y do Europa, después de |a de- nota del f»wi«mn L.\ M WIEESTUIOX HE EOS \AZ1S i MOELOS día que ellos denominan fiesta del trabajó. [i(gimas italianos y espartóles fa upa pran cantidad de seres con es ya “standardizado", macla de opa •io de la* i populares, se. prodigaii en forma de iinpn • í¡¡dad u estos exultados propagandistas di Hasta que las medida te el mismo pueblo... LA LIBERACION DE “ LOS LADRILLEROS DE SAN MARTIN” DEBE SER INA FINALIDAD INMEDIATA DEL PROLETARIADO ARGENTINO E los hombres caídos en la lucha por la causa proletaria, debe recordarse que desde hace nueve años, cinco trabajadoras se encuentran encerrados en la cár- cel, bajo una monstruosa condena a perpetuidad, con motivo de ab- surdos procesos qus les fraguó la policía de la provincia de Buenos Aires, en ese trágico período que siguió al golpe uriburista. cuaiido la consigna impartida desde arri- ba era la de destruir las organi- zaciones obreras de lucha y de ahuyentar a sus. militantes, va- liéndose de todos’ los medios del terrorismo policial. • Victimas de esa campaña de ex- terminio. cayeron los obreros la- drilleros Cecilio Con ti. Avelino Domínguez, Mario Montiglio, Se- bastián Zolll y Domingo Perroti, en ese proceso o serie de proce- sas, conocidos bajo la dsslgnación de "Los lalrilleros de San Mar- tin", en fl año 1933. Diversas huelgas parciales y generales sos- tuvo el gremio de ladrilleros, en una extensa zona próxima a la ca- oítal. La intransigencia y la pro- vocación patronal y policial die- ron lugar a hechos de sangre y a actos de sabotaje, cuyos autores resultaban, desconocidos. Esos he- chos dieron lugar a las acostum- bradas razzias policiales, en busca de militantes del gremio, y los nombrados compañeros cayeron en una de ellas, siendo destina- dos como victimas expiatorias del furor policial y de las consignas a que nos hemos referido, como pudieron haberlo sido otro gru- po de obreios militantes. Apelando a los métodos de tor- tura ya conocidos —los mismos que habían dado lugar a la con- dena de los presos de Bragado—, se les obligó a hacerse autores de una serie de hechos graves, lo que ' les valió la aplicación de la má- xima pena, confirmada por las tres instancias judiciales, igual co- mo sucediera con los compañeios encartados en dicho proceso, cuya liberación fué obtenida, hace diez meses, después de once años de Desde el punto de, vista social, ambos procesos tienen la misma significación, aunque las circuns- tancias en que se produjeron fue- ron distintas. En uno y otro caso, se trata de vicLlmas de la reac- ción. sacrificados con un fin re- presivo. de intimidación y supre- sión de las organizaciones obreras de lucha. En ambos se ha em- pleado la tortura más bestial, co- mo único medio de indagación y de prueba. Y con ese procedi- miento, debidamente adobado con simulacros legales, se han obteni- do ¡guales pronunciamientos abru- madores de la justicia. Pero esos trabajadores no pue- den q u e d a r abandonados a su suerte, que es la de entierro en vida. Es necesario que los Sindí- calos obreros, sin distinción de sectores ni de ideologías, se movi- licen para el reclamo solidario de la libertad de esos compañeros, cuyo delito fué el de lanzarse sin reservas a la lucha por la reivin- dicación de su gremio y de su clase.. La liberación de "Los ladrille- ros de San Martin" debe ser un objetivo inmediato del proletaria- do del pais, como expresión de solidaridad y como manifestación de. repudio contra la reacción que los ha condénado. r5xlmo 1o. de Mayo, i nuestra victoria"... En las proclamas de la F. A. I., de li C. N. T.. de las Juventudes Libertarias, en el dia histórico del año 1937, las organiza- ciones libertarias afirmaban su fe en el por- declslvos de Juiió de 1936" La langré da loa luchadoras caídos Ascaso y Durruti, entre cientos de héroes subrayaba las palabras gloriosas en las leyendas del proletariado re- volucionarlo: “Renunciamos a todo, menos a la victoria". Y en la tribuna aureolada por las banderas rojinegras, la voz de los cons- tructores de un nuevo mundo, denunciaba el El crimen de tos gobiernos democráticos, ciegos y sordos ante el drama que ensangren- taba la Península. El crimen de las organiza- ciones obreras de Francia, Inglaterra, Bélgi- ca. Estados Un,des, del mundo entero, que s; conformaban con una solidaridad traduci- os en bonos y discursos, mientras la “no ¡n- urvcr.clón’’ estaba asfixiando a los trabaja- El crimen y la traición de los políticos re- publicanos que hacian el juego al infame chantaje da Rusia y de sus agentes stalinia- nos, empeñados en destruir, en sabotear, en calumniar a los sindicatos confederales, que estaban dando el ejemplo en todos los terre- nos: peleando en los frentes, trabajando con pasión creadora en la retaguardia. Ya la contrarrevolución había avanzado a grandes pasos; ya los sindicatos habían sido despojados de gra.ides conquistas y derechos; ya la política .de'Negrin y de Prieto habían jalonado la marcha con desastres militares; ya las filas -de la C. N. T. y de la F. A. I. habían sido raleadas en el sacrificio heroico, dando el p;cho a las armas enemigas y. tam- bién, por las checas stallnianas. Ya había su- frido la revolución todos los desmanes, cuan- do el nuevo Primero de Mayo, en 1938, en- contraba a España acorralada por el bloqueo exterior y por las fuerzas crecientes de Hltler y Mussolini. Y en ese Primero de Mayo, con- memorado con sangre, poniendo más entu- siasmo en las fábricas y en los campos, tam- bién se alzó la voz de la ,F. A. t. y de la C. N. T., haciendo al mundo la advertencia sobre su complicidad con el gran crimen del Recordamos los dos históricos manifiestos del Comité Nacional de la Confederación y del Comité Peninsular de la F. A. I., dirigi- dos al proletariado Internacional... Rccardamos sus palabras d: fuego; "Lucha- mos por la libertad de España y por la II- btrtad del mundo. ¡Ayudadnos a vencer! ¡Ayudadlos a salvar a la humanidad, antes quo sea tarde!”... La tierra defendida fieramente siguió im- pregnándose de sangre proletaria. Los tan- ques fascistas siguieron aplastando a. los .ti- tanes, Las masas de aviación y de artillería continuaron su juego espantoso, arrasándolo todo. Y afuera, mezclando la cobardía con la vergüenza, mientras llovían las promesas de reparación, siguió su curso la “no Interven- ción”, hasta el fin. Ni los estertores de ago- nía de los combatientes, conmovieron a los gobernantes "amigos", ni despertaron a los Siempre quedará en la historia la adverten- cia del último Primero de Mayo de la Espa- ña en armas; "Nuestra derrota arrastrará al mundo a una guerra más cruenta que la de 1914 -'. “Nosotros cumplimos nuestro deber. Cumplid, vosotros, trabajadores del mundo, Cuando España retome ei camino de la li- bertad, volverán a flamear las banderas glo- riosas. Tenemos nuestras esperanzas puestas en las organizaciones, en los militantes imba- tibles, que hoy, en este nuevo Primero de Mayo, prosiguen la lucha en España, seguros de que el triunfo final será del pueblo, d« sus ideales de libertad. www.federacionlibertaria.org

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AFIRMAMOS LA VOLUNTAD DE LUCHA Y RESISTENCIA DEL PROLETARIADO

C L E S T I O M S QL'E E S Í O . V V K . V f R . V T E

U L M S X H

EN esto s iiltirnos tiem pos, .y eapecia lm enti io n m o tiv o de la celebración riel Dí'i ch

las A m é lica s, se h a n p ronunciado num ero sos d iscursos y se hi im p o rta n tes por pal­ios E stados Unidos, con re ferencia a los p ro ­b le m a s de la reconstrucción postbélica y al destino d e e sto s pa íses en e l p o rv en ir inm e­d iato.

M uchas p rom esas, grandes fra ses, p ic tó ri­cas d e op tim ism o e inspiradoras de e speran ­zas, han podido recogerse a tra v és de todas esas ina in fe sta c ion es.

P ero todo en abstrac to .. Todo condicionado a im ponderab les fa c to re s y c ircuns tancia s que em erger ían de la p ostguerra y q u e ahora se desconocen o se om ite , seña lar.

N o o b s ta n te , sólo p o te m o s a te n ern o s a lo e x is te n te , a las fu e r za s que hoy pugnan por e l predom inio en todos los órdenes, que e s ­ta rá n p re sen tes i/, g ra v ita rá n , m todos los ensayos o in te n to s ’de re fo rv

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resu ltados

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a ndes potencias, m ìa la fraséa lo-

LARGO CABALLERO IE

FEDERACION ANARCO-COMUNISTA ARGENTINA J g

i m i V Á i i A lA S O V III — N úm . 64 B U E N O S A IR E S , M AYO D E I94S P rec io : II) c en tav o s

NI FATALISMO PESIMISTA. NI FATALISMO OPTIMISTA

SEGUN noticias, confirmadas oficialmente por el ministerio de Relaciones de Méjico, Francisco

Largo Caballero, e l veterano dirigente obrero y ■so­cialista esptiñol. ex-presidenle del Consejo de Ml-

_ nistros .de la República, ha nido.-dotonido- últk n a - j mente por los nazis en Francia. O tra s noticias pos­teriores, procedentes de Londres, afirmaban que el viejo m ilitan le a n tifasc is ta , hab ía sido tras lad a d o a A lem ania, sufriendo la m ism a su e rte que m uchos o tro s ex ilados españoles en tipvra de F ra n c ia . D es­pués de.h a b er sido deten ido rep e lid as Veces-y puesto bajo una v igilancia condicionada, ha b ría caído --ti fin en m anos de su s peo res enem igos, después de los fa len g ista s españoles. -

T rág ico destino el de ese recio luchado r obrero . N u e s tra d ivergencia d oc trinarla con su concepción del socialism o no nos im pide reconocer en él una de las figu ras m ás nobles y gcnulnas del p ro lela- rir.do español, uno de esos pocos d irigen tes que han pagado vic toriosam ente po r la s m ás d u ras p ruebas m orales y m ateria le s , m anten iendo in teg ram en te su d ignidad, sus convicciones, su Insobornable en tere ­za. D esde su puesto de lucha en el S ind ica to de Al­bañiles de le U .G .T . . en M adrid, hasta el de p re ­s iden te del Consejo de M in istros de la R epública, en p lena g u e rra c o n tra el fascism o m undial, L argo C ab allero ha dado p ruebas concluyentes de la re­c iedum bre de su c a rá c te r y de la sinceridad de sus propósitos, como, político y como m ilitan te an tifas­c ista , en violenta contrad icción con la casi to ta lidad de los políticos republicanos y socialistas, que lo abandonaron ignom iniosam ente en los m om entos m ás difíciles. Los e rro re s que pudo h a b e r com etido en su la rg a vida de m ilitan te e rro re s de que n a ­d ie e stá exento quedan am p liam en te com pensados con esa dem ostrac ión suprem a de sinceridad y con­secuencia que le hizo a fro n ta r persecuciones y ca­lum nias, a n tes que som eterse a las im posiciones de qu ienes u tilizaban a E spaña y a su pueblo, como cam po de e lem ento d e experim entación , a l servicio de los in te reses de un pa rtido y do u n a potencia e x tra n je ra . E n efecto, ese hom bre in teg ro como po­cos. fue ob je to de la d ifam ación y, de la saña de los agen tes sta lin ianos, por no haberse a llanado a cum p lir se rv ilm en te sus ó rdenes y h a b er re iv ind i­cado el de recho del pueblo e jp añ o l a disponer de su propio destino. P o r eso, nuda m á s se negó a l ga­binete p residido po r L argo C aballero la s a rm a s ne­cesa rias pa ra la lucha y p o r eso se a rm ó la com bi­nación tra id o ra que lo desplazó del gobierno y de toda intervención a c tiv a en los, acontecim ientos. Los m ism os que hab ían p re tendido gan arlo p o r m e d io de halagos, proclam ándolo el "L enin español" y " je fe del gob ierno d e la v ic toria" , lo acusaron poco menos que de ag en te del enem igo, im pidiéndole toda posibilidad de defensa.

L argo C aballero hubo de se n tir el a m argo sabor de la d e rro ta , m ucho a n tes dé que é sta se consu­m a ra , pues vivió el proceso de desin tegración m oral y político del bloque an tifasc is ta español, con la dolorosa im potencia de qu ie n ve v e n ir los acontec.- m ien tos sin poder rem ediarlos! P e ro perm aneció en su pais h a s ta el últim o m om enio y acep tó después todos los r igo res del exilio. R adicado en un puchlo del S u r de F ra n c ia , no quiso a le ja rse de E uropa, cuando la g u e rra , que hab ía em pezado en E spaña, se fué extendiendo a todo el con tinen te. N'i siquie­ra el de rrum be d e F ra n c ia le hizo c am b ia r de deci­sión. S ilencioso y estoico, a fro n tó todas las conse­cuencias de la d e rro ta . V aria s veces se le hab ía de­tenido. igual que a n u estra com pañera Federica M ontseny. E rróneam en te se hab ía anunciado la en ­tr e g a de" am bos a F ranco . P robab lem en te tubo tal intención en el gobierno de Víchy. pe ro la presión de países am ericanos, cuando esc gobierno conser­vaba aun una som bra de independencia, hizo que tal e n trega no se consum ara . A hora, desgraciadam ente,

jV /fU O IIO h a n v a riad o la s co sa s desde q ue la ^ cele!»radón del lo . de M ayo s ig n if ic a b a u n a rec ia y co m b ativ a exp re sió n de la s re iv in d ica ­ciones del p io íe ta r ía d o , u n a v ig o ro sa m a n ife s ta ­ción «i* p ro te s ta c o n tra la s p e rm a n e n te s in i­q u id ad es sociales, u n a a rd ie n te a firm ac ió n de íe en lo s id . u les de l ib e r ta d y ju s tic ia , q u e fue­ro n siem p re lo s m o to re s m á s p o d e ro so s del p ro ­greso .

Hoy, en lo s pocos p a íse s donde a u n e s x>o- sible. c e le b ra r ese día, to d o se red u ce a fe s te ­jo s y u l^ a es, a f r ía s c e rem o n ia s a c o m p añ ad as de d iscurso? convenciona les , en lo s q ue se des­n a tu ra liz a d ! m odo m á s cínico el v a lo r s im bó­lico do la fe i ¡¡a y de los a c o n tec im ien to s q ue se con m em o ran , co n su m án d o se u n a n u ev a a ír e n ­la a la d ig n id ad del p ro le ta r ia d o , d<» su s lucha* d o re s de v a n g u a rd ia , de su s m á r t i re s . Como q ue se lia>e p a r t ic ip a r en la “ f ie s ta ” , en la s cs- re m o n 'a s y d isc u rso s a lu sivos, incluso a lo s ge- nn in o s r e p re s e n ta n te s de I*» c lase enem iga.

T odo lo q ue no sea esa g ro se ra m istificación , esa b u rla ind ig n a , queda p ro h ib id o y sofocado . La lib e r ta d con c u e n ta g o ta s de q ue d isponem os >>ctuslmen*e, só lo s irv e p a ra q ue los o p o rtu n is ­ta s y lo* dem ag o g o s pu ed an c o n fu n d ir m á s el e sp ír i tu de la m a sa o b re ra , en cu m plim ien to de su s is te m á tic a la b o r d e r ro tis ta .

■Sin am b a rg o , lo s tr a b a ja d o re s que íjo h an perd ido dci ti tío su conciencia de c lase , rccW v- ;lan q u e ese e s S U D IA , el d ía de lo s ex p lo tad o s y reipgadr-s do to d o s lo s tiem p o s. Q ue no co ­rre sp o n d e la f ra te rn iz a c ió n e sp e c ta c u la r con los rep re sen tan * es de la b u rg u es ía , n i el olvido «ie las p ro fu n d a s d ife re n c ia s q ue se p a ra n a unos y q trt-s. la s que ta rd e o te m p ra n o te n d rá n que r e s h r ü r ai p r im e r p lano de lo s aco n tec im ien tos, en e | p la n te o de so lución de fondo p a ra los p ro ­b lem as rocíales.

Si no fu e ra p o r ese s e n tim ien to , d ifu so y a te n u a d o hoy q ue em b a rg a a la tiran m ay o ría de los t r aoa .¡ndotes y q ue e s — e n su m a — con­ciencia <V c íase , n in g ú n v a lo r te n d í ía la cele­brac ió n de e s ta fech a ni n in g u n a o tra de la s ta n - la s que podi iíin s e ñ a la rse com o re c o rd a to r ia del m a r ^ o lo g íó p ro le ta r io . V em os q u e ,a de sp e ­cho de lo s ra z o n a m ie n to s frío s v de la deo re- dón re in a n te , a u n su b s is te , v iv a o la te n te , la m is . tic a p ro le ta r io , el an h e lo d e lu ch a v liberac ión . Q uienes no h a n ab an d o n ad o la lu ch a , ni se en ­t re g a ro n a la m a n sa c o r r ie n te del co n fo rm is­mo tien en a h í un in cen tiv ó y u n a ta r e a inm e­

d ia ta a cum plir . E l e s tím u lo de c o m p ro b a r que el e sp ír i tu de i e .v ind icac ión y de reb e ld ía no se lia ex tin g u id o , a p e sa r de to d a s la s n egoc ia ­ciones v de l. 's c irc u n s ta n c ia s a d v e rsa s . L a ta r e a de e s c la re c e r la conciencia de la s jó v e n e s ge­n e rac io n es p ro le ta r ia s , de d a r fo rm a c o n c re ta y firm e c o n te x tu ra a la s a sp irac io n es d ifu sa s y a ln fe iugenua .

P o iq u e e s ía i s a de to d a fa ls e d a d — m ero r e ­cu rso de lo s q u e p re ten d en ju s t i f ic a r su a b a n d o ­no de. ,a lu ch a— Ir a firm ac ió n c o rr ie n te de que a h o ra “ no h a y n a d a que h a c e r ’. Q ue to d o e s tá m ed ia tizado y co rro m n id o y q ue só lo queda ’■1 a d a p ta rs e a e s te m edio co rro m p id o o c o lo ra r­se, a l m a rg e n de to d a ac tu ac ió n . ¡ e a l en 1k lu ­c h a o b re ra .

N o so tro s c reem o s, po r el c o n tra r io , que los /e v o lu c io n a d o s v les m ilita n te s o b re ro s cons­c ien te s , s ie m p re lienen una g ra n la b o r a cum ­p lir y que la s c irc u n s ta n c ia s a c tu a le s a c rec ien ­ta n 1í. re sp o n sab ilid ad oue ta l lab o r sign ifica . N unca n o s hem os som etido a l im perio de un fa ta lism o o¡ t im is ta ni p esim ista . A sí com o no c re íam os en h .s v ir tu d e s de u n a revo luc ión p ro ­v idencial \ m ilag ro sa q ue de u n go lpe iba a r e ­so lv e r to d o s lo s p rob lem as que a flig en a la so ­c iedad . tam poco reem os en el re in ad o inelec-

tab le de la reacción y de las c o rr ie n te s ideoló­g ica s ne<r:itiv:>,g <,ne la a co m p añ an . S iem pre , y en t id a s la s c irc tin sian c ia s , c u an ta co n q u is ta pudo lo g ra rse h a dtím .'m dado in f in idad de esfu erzo s v a veces sacrific io s c ru en to s . -P ara consegu ir la s m e jo ra s de mmp h o y d is f ru ta n los t r a b a j a ­d o re s —allí dnr.-^e las m ism as a u n su b s is te n — lúe ou n ecesa ria s g ig a n te sc a s lu ch as, cuyo cos­to en su f;im ien fn s y e n v íc tim as no g u a rd ó ¡v-

n n i ', i la inmi<rt:*ii‘M;i (!.• Ims

i n v e r s ió n ' »le e -iv .r «íes en e rg ía - p a r a e v i ta r qued ichas conqu is tas , m o ra le s y m a te ria le s , sean n -so tepdas y n eg ad as. Y so b re to d o , p a ra im p e­d ir que el e sp íritu co lectivo que la s hizo posi­ble, sra sofocado.

A d m itam o s sin v a c ila r e s ta enseñanza que se der*va de. la rea lidad ac tu a l, a s í com o de la c onsiderac ión de! acon tec im ien to p ro le ta r io que hoy se conm em ora. N o h a y v ic to r ia s ni d e rro ­ta s d e f in itiv a s en la lu ch a social, se ha dicho, con inste, razón, y si a h o ra ten em o s que sopor- l a r las consecuencias de d e r ro ta s a n te rio re s , ten ¡ram os 'a en te reza y la cap ac id ad de recu p e­rac ión n ecesarias p a ra re h a c e rn o s c o n s ta n te ­m en te v p a ra p re ñ a ra r desde hoy a p e sa r de iodo, la posibilidad de la r e v anclia . N o seam os n o so tro s los p rim eros vencidos. O. com o decía e¡ ¡rían M a la tc s 'a . N O T E N G A M O S E L E S P I ­R IT A D r. LOS V EN CID O S.

F irm e s en est0. convicción y en la s e g u rid ad d e pH el esp íritu de lucha y la conciencia de c lase no h an sido to ta lm e n te ex tin g u id o s en el p ro le ta r ia d o , liemos de m a n te n e rn o s en su v a n ­g u a rd ia com bativa, a fin de d a r a ese e sp íritu las m a y o re s p ro tecc io n es de rea lizac ión con c re ­ta , oponiendo , al m ism o tiem po, u na valla in- fra n q o e a b le a Jas c o rr ie n te s re a c c io n a ria s y co­

r ru p to ra s q ue hoy am en azan a r r a s a r lo todo. E s e s te e ' único h o m en aje que nos co rresponde ren d ii a 1¡ m em oria de qu ienes han luchado y ca ico po r !a causa de l ib e r ta d «pie nos es com ún.

s w \ n i t \ h o n i : l . i

i i i i . v f ' . v # i i i n :

M O H S i X V

E

b ita n u .-.nci'l de l g o b i. .:a.l l in c iti de B uenos A ires , do M o m i f . .C ó m o ’ ¿ Ignora

' ^ a í “ T .

m u“« " ' ’T e s ! ; - h i ó i n...... Ua m en a ¡udo

nuda m enos ,,u c con p e ,.

c M f % ; Olx^d'ibu!i que B mv

' ' tt.rr.l**1'ta . ia ■ e t !•!líten te con tra •1 orífWj ***•tab lecido en fu lo , e l pais c o n tra sus

U ) v s de i i-in .fi o .. nj.it e»W ■' ta ­

1 5£ñ í «o -

í*do por e l pueblo. Pe.

d a a .d e q u e se resp ete ella pos i bilí-

Hvfrugio ciu-

i r : ; : ; : ; ; , ' ;

:xivr»!icìoi;cti riel poder cei P olitica d irigida, econo

las b ru ta les

les. N ada puede escapar

N a tu r iti m etile , e llo ori

de B uenos A ires tien e unEl episodi o

dependía la solución de n ingún pro- k'cro queda

so leadas, por los derechos ta le s q u r nos ' h a n . sido

m á s e lem en- rr.ebatudos y

e o s s eMAYO EN ESPAÑA4 4 /“ \ U E el pròxlm

m::-o de nueI prl-

la t' i que cición d ip lom àtica podrá sal-

• Sobrevivirá el sep tuagenario lu c h ad o r el poder de sus verdugos? Asi lo esperam os, pues hom bresde su tem ple, a pe sa r de su ancian idad , pueden aund a r un e jem plo y s e ñ a la r u n , rum bo, en la recons­trucción de E spaña y do E uropa, después de |a de­n o ta del f»wi«mn

L.\ M W I E E S T U I O X

H E EO S \ A Z 1 S

i M O E L O S

día que ellos denom inan fie s ta del trabajó.

[i(gim as ita lianos y espartóles fa upa p ra n can tidad de seres con es ya “standard izado", m a c l a de opa

•io de la* i

populares, se . prodigaii en fo rm a de iinpn• í¡¡dad u e stos e xu lta d o s propagand ista s di

• H asta que las m edida te e l m ism o p u e b lo . . .

LA LIBERACION DE “ LOS LADRILLEROS DE SAN MARTIN” DEBE SER IN A F IN A L ID A D INMEDIATA DEL PROLETARIADO ARGENTINOE los hombres caídos en la lucha por la causa p ro letaria, debe rec o rd a rse que desde hace nueve años, cinco traba jado ras se encuen tran encerrados en la c á r­cel, ba jo una m onstruosa condena a perpetu idad , con motivo de ab ­surdos p rocesos qus les fraguó la policía de la provincia de Buenos Aires, en ese trágico período que siguió al golpe uriburista. cuaiido la consigna im partida desde a rr i ­ba e ra la de destru ir las o rgan i­zaciones o b reras de lucha y de ah u y en ta r a sus. m ilitan tes , va­liéndose de todos’ los medios del te rro rism o policial. •

V ic tim as de esa cam paña de ex­term in io . cayeron los ob rero s la ­drille ro s Cecilio C o n t i . A velino D om ínguez, M ario Montiglio, Se­bastián Zolll y Domingo P e rro ti, en ese proceso o serie de proce­sas, conocidos bajo la dsslgnación de "Los la lr ille ro s de S an M ar­tin", en f l año 1933. D iversas hue lgas p a rc ia les y generales sos­tuvo el g rem io de ladrille ros, en una ex tensa zona próxima a la ca- o íta l. L a intransigencia y la pro­

vocación pa tro n a l y po licial die­ron lu g a r a hechos de sang re y a actos de sabo ta je , cuyos au to res resu ltab an , desconocidos. E sos he­chos dieron lu g a r a las acostum ­b rad a s razzias policiales, en busca de m ilitan tes del grem io, y los nom brados com pañeros cayeron en una de ellas , siendo destina ­dos como v ic tim as exp iatorias del fu ro r policial y de las consignas a que nos hem os referido, como pudieron haberlo sido o tro g ru ­po de ob re io s m ilita n tes .

A pelando a los m étodos de to r­tu ra y a conocidos —los m ism os que hab ían dado luga r a la con­d en a de los p resos de B ragado—, se les obligó a hace rse a u to re s de una serie de hechos graves, lo que

' les valió la aplicación de la m á­x im a pena, con firm ada por las tre s in stancias jud ic ia les , igual co­m o suced ie ra con los com pañeios en ca rtados en dicho proceso, cuya liberac ión fué ob ten ida, hace diez m eses, después de once años de

D esde el pun to de, v ista social, am bos procesos tienen la m ism a significación, aunque las c ircuns­tancias en que se p rodu jeron fue­

ro n d is tin ta s . E n uno y o tro caso, se t r a t a de vicLlmas de la reac ­ción. sacrificados con un fin re ­presivo. de in tim idación y sup re ­sión de la s organizaciones o b reras de lucha . En am bos se ha em ­pleado la to r tu ra m ás bestia l, co­m o único m edio de indagación y de p ru eb a . Y con ese procedi­m iento, deb idam en te adobado con s im u lac ro s legales, se han ob ten i­do ¡guales p ronunciam ientos a b ru ­m ad ores de la ju stic ia .

P e ro esos trab a ja d o re s no pue­den q u e d a r abandonados a su sue rte , que es la de e n tie rro en v ida . E s necesario que los S ind í­c a lo s ob reros, s in d istinción de sec to res n i de ideologías, se movi­licen p a ra el rec lam o so lidario de la libe rtad de esos com pañeros, cuyo delito fué el de lanzarse sin rese rv as a la lucha p o r la reivin­dicación de su g rem io y de su clase..

La liberación de "L os lad rille ­ro s de S a n M artin " debe se r un ob je tivo inm edia to del p ro le taria ­do del pais, como expresión de solidaridad y como m anifestación de. repudio contra la reacción que los ha condénado.

r5xlm o 1o. de Mayo, i nu estra v ic to r ia " . . .

En las p roclam as de la F . A. I., de l i C. N. T .. de las Ju ven tudes L ibe rta rias , en el dia histó rico del año 1937, las o rgan iza­c iones lib e rta ria s a firm aban su fe en el por-

declslvos de Juiió de 1936" La la n g ré da loaluchadoras caídos Ascaso y D urru ti, en tre c ien tos de héroes sub rayaba las p a lab rasg loriosas en las leyendas del p ro le tariad o re­volucionarlo : “ Renunciam os a todo, m enos a la v ic to ria" . Y en la tr ib u n a au reo lada por las banderas ro jineg ras, la voz de los cons­tru c to re s de un nuevo m undo, denunciaba el

El crim en de tos gobiernos dem ocráticos, ciegos y sordos an te el d ram a que e n sang ren ­taba la Pen ínsu la. El crim en de las o rg aniza­ciones o b reras de F rancia , In g la te rra , Bélgi­ca. E stados U n,des, del m undo en tero , que s ; conform aban con una so lidaridad trad u c i­o s en bonos y d iscursos, m ie n tras la “ no ¡n- u rv c r.c ló n ’’ e s tab a asfix iando a los trab a ja -

El crim en y la traición de los políticos re ­publicanos que hacian el juego al infam e chan ta je da Rusia y de sus agen tes s ta lin ia ­nos, em peñados en d e s tru ir, en sabo tea r, en ca lum n iar a los sind ica tos confederales, que e staban dando el e jem plo en todos los te r r e ­nos: peleando en los fren tes , t ra b a ja n d o con pasión creado ra en la re tag u ard ia .

Ya la contra rrevo lución hab ía avanzado a g randes pasos; ya los s ind ica tos hab ían sido despojados de gra .ides conquistas y derechos; y a la política .d e 'N eg r in y de P rie to habían ja lonado la m archa con d esastre s m ilita res; ya las f ila s -de la C. N. T . y de la F. A. I. hab ían sido ra le ad a s en el sacrificio heroico, dando el p ;cho a la s a rm a s enem igas y. ta m ­bién, por las checas s ta lln ianas. Ya había su­frido la revolución todos los desm anes, cu an ­do el nuevo Prim ero de Mayo, en 1938, en­con traba a E spaña a co rra lad a por el bloqueo ex te rio r y po r las fu erza s crec ien tes de H ltler y M ussolini. Y en ese P rim ero de Mayo, con­m em orado con sangre , poniendo m ás e n tu ­siasm o en las fáb ric as y en los cam pos, ta m ­bién se alzó la voz de la ,F. A. t. y de la C. N. T ., haciendo al m undo la advertencia sobre su com plicidad con el g ran crim en del

R ecordam os los dos histó ricos m anifiestos del Com ité N acional de la Confederación y del Com ité Pen in su lar de la F. A. I., d irig i­dos al p ro le tariado I n te rn a c io n a l...

Rccardam os su s p a lab ras d : fuego; "L ucha­mos por la libe rtad de E spaña y por la II- b tr ta d del mundo. ¡A yudadnos a vencer! ¡A y u d ad lo s a s a lv a r a la hum anidad , an tes quo sea ta rd e !” . . .

La t ie r ra defendida f ieram en te siguió im­pregnándose de sang re p ro le taria . Los ta n ­ques fasc is ta s siguieron ap lastando a . los .ti­tanes, L as m asas de aviación y de a r ti lle ría con tinuaron su juego espantoso, a rrasándo lo todo. Y a fue ra , m ezclando la cobard ía con la vergüenza , m ien tras llovían las p rom esas de reparación , siguió su curso la “ no In terven­ción” , hasta el fin . Ni los e s te r to res de ago­nía de los com batien tes, conm ovieron a los gobernan tes "am igos", ni desperta ron a los

Siem pre quedará en la h isto ria la a d v erten ­cia del últim o Prim ero de Mayo de la E spa­ña en a rm as; "N u e s tra d e rro ta a r r a s t r a rá al m undo a una g u e rra m ás c ruen ta que la de 19 14 -'. “ N osotros cum plim os nuestro deber. Cum plid, vosotros, t r a b a ja d o re s del mundo,

Cuando E spaña retom e ei cam ino de la li­be rtad , volverán a f lam ea r las banderas glo­riosas. T enem os n u estras esperanzas puestas en la s o rganizaciones, en los m ilitan tes im ba- tib les , que hoy, en este nuevo Prim ero de Mayo, prosiguen la lucha en E spaña, seguros de que el tr iu n fo fina l se rá del pueblo, d« sus ideales de libertad .

www.federacionlibertaria.org

Page 2: Acción Libertaria, Nº 64. Mayo1943-Fla

RASGOS BIOGRAFICOS rN o v am o s a d e sc r ib ir la t r a y e c to r ia de ese ho m b re

adm irab le , de sd e s u s p r im e ro s d ías , desde la te m p ra n a ed ad e n q u e a cu n ó su in fa n c ia y fo r jó su ado lescenc ia c u e l am b ien te p rinc ipesco de su s p ad re s , en lo s c írcu ­lo s de la a r is to c ra c ia , e n el p a lac io del z a r A le jan d ro . N o v am o s a d e sc r ib ir la s em ociones a tr a v é s del p aso p o r ta le s am b ien tes , de ese p rin c ip e q u e fu é m á s a r ­d ien te am igo del pueblo y q ue h a b r ía de i lu m in a r con s u gen io la s lu c h a s de lo s hum ildes, de los esc lavos, de los p ro le ta r io s del m undo e n te ro . E s a s em ociones re ­t r a t a n su te m p e ra m e n to ’rebe lde , su sen sib ilid ad e x q u i­s ita , su ap asio n ad o a m o r a la v e rd a d y a la ju s tic ia . E n ‘‘M em orias de u n rev o lu c io n a rio " , K ro p o tk in n o s con­duce p o r los cam in o s q ue lo llev a ro n a s e n t i r y a p en ­s a r e n d ía s m e jo re s p a ra el c a s tig a d o pueblo ru so , nos en señ a la h is to r ia de lo s p r im e ro s núc leos de rebeldes, nos c u e n ta su s a n d a n z a s de p ro p a g a n d is ta , de in v es ti­g ad o r, d e v ia je ro , de im p u lso r de la In te rn ac io n a l...

“H a h echo — dice B ra n d e s en el p ró logo— la v ida del a r i s tó c ra ta y del t r a b a ja d o r ; h a s ido p a je de c á ­m a ra del em p erad o r, y e s c r i to r sin re c u rs o s ; h a he­cho la v id a d e l e s tu d ia n te , del o ficia!, del h o m b re de ciencia, del e x p lo ra d o r en t i e r r a s desconoc idas, del a d ­m in is tra d o r y de l rev o lu c io n ario perseg u id o . E n la em i­g rac ió n h a ten id o q u e v iv ir a lg u n a s veces con p a n y té , com o u n cam p esin o ru so ; ha s ido o b je to d e esp iona je , y se h a v is to ex p u e s to a a te n ta d o s , com o un e m p era ­do r de su p a ís . A la educación li te r a r ia y c ien tífic a que se a d q u ie re en el g a b in e te de e s tu d io y en la U n iv e r­sid ad , a g reg ó , siendo m u y jo v en to d av ía , la q ue se ob­tie n e en el t a l le r y en el lab o ra to r io , a s í com o en p lena ca m p a ñ a ; e s tu d io de c ienc ias n a tu ra le s , a r te m ilita r , fo rtificac ió n , m a q u in a r ia y ap licac iones in d u s tr ia le s ; el c a rá c te r de su s co n oc im ien tos e s v e rd a d e ra m e n te u n i­v e rsa l.”

D e ja re m o s S tr á s la e ta p a a n te r io r a su p r im e r con­ta c to con la A soc iac ión In te rn a c io n a l de los T ra b a ja ­do res . e ta p a en la q ue realizó v ia je s c ien tífico s e in co r­po ró d escu b rim ien to s de im p o rta n c ia , reconoc idos p o r la S ociedad G eo g rá f ica ru sa , q ue lo co n s id e rab a uno de su s m iem bros m á s p ro m in en te s . L a s exp lo rac iones y los e s tu d io s en t i e r r a s d esconoc idas b r in d a b a n al s a ­b io d e le ites sin p a r . " L a cienc ia es u n a co sa ex ce len te — escrib ió— ; conocí su s goces y pude a p rec ia rlo s , ta l vez m ás q ue la m a y o ría de m is co leg as; ¿ p e ro q ué de­rech o te n ía yo a e s to s goces de un o rd en elevado , cu a n ­do to d o lo q ue m e ro d e a b a no e r a m á s que m ise ria y lu c h a p o r un t r i s te bocado de p an . c u an d o p o r poco q u e fu e se lo q u e yo g a s ta s e p a ra po d e r v iv ir en aquel m undu de a g ra d a b le s em ociones, h a b ía p o r necesidad de q u ita rs e de la boca m ism a de lo s q ue cu ltiv ab an el tr ig o y n o te n ía n su f ic ie n te p a n p a r a su s h ijo s ? ”

1 LA PRIMERA INTERNACIONAL |E n 1872. al c o m en zar la p r im a v era , ha ce K ropo ik in su p r i­

m e r v ia je «i Iü E u ropu occiden tal, d ir ig iéndose a Zurich, don­de e n tra a u n a de la s secciones de la A sociación In te rn a c io n a l de los T rab a jad o res , dedicándose d ia y noche a la le c tu ra de lib ros y colecciones do periódicos, ''rec ib iendo u n a im presión ta n p ro fu n d a que no h a y a n ad a que pueda b o rra r" . M ien tras m á s le ía dice en su s M em orias— m ás m e lia d a c arg o de que te n ia a n te m is o jos un m undo nuevo, desconocido p a ra m i. y to ta lm e n te tam b ién p a ra los fundado res de te o ría s so­c ia lis ta s , m undo que sólo podia conoce r v iviendo en la Aso­c iac ión de los T ra b a ja d o re s y e s tando en c o n s tan te c on tac to con olios, p o r cuya razón decid! h a ce r dicha c lase de vida un p a -.' de meses.

En G ineb ra , que e ra en to n ce s c en tro del m ovim ien to in te r ­naciona l, se rebe la c o n tra e l a u to ri ta r ism o de U tin , je fe del m ovim ien to que h a c ia la s reu n io n es h is tó ric as en el “T em ple Hnipiu>"., .-y busca, c o n tac to con la a g rupación "b ak u n in ian a " .

‘-T»r Tp_,) inB isefñBna 'é n tr e '» * re lo jero s d¿‘'las. m o n ta ñ as del J u ra , cohíA-iendo -así a la fam osa F e de ración del J u r a , c u y a ten d en ­c ia a n a rq u is ta iba a te n e r ta n ta in flu en cia e n el fu tu ro de la In te rn a c io n a l- F u é esa F e d e ra ció n la que inició la rebelión c o n tra e l c e n tra l is ta Consejo de L ondres, desde e l cu al M arx y E n g e ls p re te n d ía n im poner sus d irec tiv a s y a r r a s t r a r al m o­v im ien to ob rero a la acción e lec to ra l.

L'onoce a .lame!' G utiiaum e. el ce leb re h is to ria d o r de la In ­te rn a cio n al. con quien tra b a ja , E n N euehate l conoce a M alón, m iem bro del Consejo de la C om una de P a r ís , a u to r de "L a te rc e ra d e rro ta de l p ro le ta r iad o francés" , de cuyos labios co­noce la trág ica h is to ria de la Com una del 71. En S onvillie rs conoce a A dhem ar Schw itzguebei. L am en ta no poder conocer a B akunin , que e ra e l a lm a de aquel g ra n m ovim iento , y de quien d ic e : "L a colosal figu ra del revo lucionario , que lo hab ía dado lodo po r el tr iu n fo de la revolución, v iviendo só lo p a ra e lla y tom ando de su concepción el m odo m ás e levado y pu ro de a p re c ia r la vida, c on tinuaba in sp irándolos”.

E l f ru to de ese v ia je lo expone K ro p o tk in : "Volvi de él con ideas sociológicas c la ra s y p rec isas, que he conservado desde entonces, haciendo c u an to me lia sido posible p o r d e sa r ro l la r ­la s en form as cad a vez m ás de fin idas y concre ta s" .

1 LA LIBERACION DE RUSIA |R eg resa a R usia , llevando un con trabum lo precioso: litera-

nov im ien to de los jóvenes de am bos se- •j" y pagaban con su vida m u ch a s veces

a sistencia m édica, ayuda d e toda gé-

d u ra n le los em ites " puede decirse que e ra v iv ir a a lta presión: era e x p e r im e n ta r tosu exuberancia cte riita en que se. s ie n te a cada m o m en to e l com p leto la tir de lo ­

g a d K ru v c h in skit cupo seudónim o se h izo bien conocido en I n ­g la te rra n E sta d o s U nidos S te p m a k — de So fía P eró m k u ia . P ilé un m o u im ien t

>c o lu d o

c ircuios

por de sim pa i. despu

s e l ipor lodo e l puls. K ropo tk in

i. bujo e l nom bre de Borodin, f/icas d e la Sociedad neográ- m en la y acud ir a los barrio■»

..........- ........... .m es donde hacía propaganda‘utos” donde era e n tu s ia s ta de fensor de las

dedicaba

de libertad , ug itando a luí

PEDRO KROPOTKIN

ideas 'le la In ternaciona l. P a r tic u la rm e n te dedicaba su a te n ­ción a. los te jedores y operarios de las fábricus de algodón, que en San P etersburg» Irabu jaban d u ra n te e l inv ierno , vol-uuujanan a u ra n ie inv ierno , ira -

pueblo na ta l, para las fa e n a s del sun iones ue esos abreros-aam pesinos, u a la de s ofic ios, iba " B orodin" a c u m p lir la doble sa ­

g rada m isión: en señar la s prim eras le tra s y en señar las ideas e l día d e la insurrec-

Puso su corazón y su sabiduría al servicio del ideal libertario

A L G U N A S O P I N ' O N E S S O B R E LA P E R S O N A L I D A D DE K R O P O T K I N

que se ríe de los Juram entos y cerem onias con que los cons­p irado res se com prom eten en d ram a s y óperas. E ste hom bre es la sencillez mism a. En cuanto al ca rác te r , F'jede re­sis tir la com paración con c u a l­qu iera de los que han com ba­tido por la libe rtad en todos los pueblos del m undo; n ingu­no ha tenido m ás desin terés, ni am ado m ás la hum anidad", escribió de K ropotkin, JO R ­GE BRANDES.

"K ropotk in — escribe ST E P- NIAK, a u to r de la "R usia Sub­te rrá n e a ”— es un hom bre ex­trem adam en te sincero y libe­ral. Dice siem pre la verdad pura, sim ple, aln te n e r en ouen ta la jac tano la del que le es­cucha ni nada, lo que consti­tuye el rasgo m is notable y sim pático de su carác ter. Se

puede c re e r abso lu tam ente ca­da una de sus palabras".

De la p lum a de OSCAR W ILD E salieron e stas pa la­b ras que parecen un m onu­m ento : "A las vidas hum anas m ás perfec tas que tuve oca­sión de obse rva r, pertenecen la de V erlaine y la del principe de K ropotkin”.

RODOLFO ROCKER, en un estudio de la personalidad y la obra de K ropotkin refleja en rasgos precisos la figura del luchador: ‘‘E n tre los pen­sado res con tem poráneos que han fecundado esp iritualm ente el m ovim iento social desde la caída de la P rim era In tern a ­cional. Pedro K ropotkin fué uno de los pocos que abrieron novísim as perspectivas para una apreciación m ás profunda de la ideología socialista y del conocim iento social. Su filoso­fía del "apovo m utuo", que

| PRISION Y FUGA DE LA FORTALEZA |Los años d e 1873 y 1874 Tueron duros. L as detenciones e ran

cada d ia m ás num erosas. La te rr ib le "Sección T erc e ra" de la p o lic ía e x trem ab a la v ig ilancia, V ario s c en tro s im p o rta n te s f u e ro n copados. Al d ía sig u ien te de rea liz a rse u n a sesión de la S ociedad G eográfica en que fué propuesto , po r sus t r a b a ­jo.'. p a ra la presidencia de la sección de g e o g ra fía fisica, K ro - p r ':in es de tenido, d e la ta d o p o r un a g en te de la polic ía que se hab ía hecho p a sa r po r ob rero en uno de los círculos.

E l cap ítu lo r e fe ren te a su prisión en la fo rtaleza de P edro y Pablo , y a su cé leb re fuga, c onstituyen u n a de la s h is to ria s m á s e x tra o rd in a r ia s que se h a y an escrito . La som bra de los m á ''l ir c s e n te rrad o s vivos, de los to r tu rad o s , de los ¡lu stres p ris ione ros — D ostoievskl, C hem ichevsky . N iechaicv , K arak a - fe< v y m uchos o tro s—, y la del g ran B akunin . que d u ra n te ocho ar'i-.s estu v o encadenado , lejos de a p la s ta r lo , le hicieron a fro n ­ta i- ..nn c a lm a y e n te rez a la pe rspectiva de un en cie rro cuyo í i , no podía e n tre v e r s iq u iera . L a fuga, en su s p rep a ra tiv o s y ejr'-.icíón, pe rte n ec e a l g énero de la s a v e n tu ra s g loriosas en q u .' i hom bre pone a p rueba sus m ás a l ta s v irtudes. Los dos a ñ : ■ p risión p e rm itie ron a K ropo tk in e sc r ib ir una de sus TTtíV , ndes o b ras c ien tífica s : las M em orias sobre su s explo- r ; c:r..,¡'s en F in lan d ia y su te o ría sob re la hipó tesis g lacia l, dos volúm enes, uno de los rú a le s ed itó la Sociedad G eográfica, quedando e l o tro tru n co p o r su evasión.

constituye el germ en de su doctrina, y que fascina nues­tro pensam ien to con una fu e r­za ta n Irresistible, no es, pro­p iam ente. m ás que el con ten i­do esencial de toda la concep­ción socialista del m undo”. — “ E ra una na tu ra leza com bati­va por esencia, d is tan te de to ­do escepticism o; un hom bre que no se co nten taba con des­c u b r ir los rasgos de los m ales s á la l e s , sino que an te todo procuraba h a lla r m edios y ca­minos para sup rim irlo s y a b r ir a la hum anidad nuevas p e rs­pectivas de ascensión m ateria l y esp iritu a l”. “ El socialism o de K ropotkin es una especie de sín tesis en la que se encuen­tra n asociados el anhelo de li­be rtad personal y la a sp ira ­ción a la Igualdad social. El socialism o se rá libre o no se ­rá socialism o1’. "Al estab lecer ia relación en tre producción y

consum o sobre una base n a tu ­ra l, la producción fué pa ra él sólo un m edio pa ra un fin de­te rm inado . La misión de la p roducción consiste en s a tis fa ­c e r las necesidades hum anas; en esa misión cu lm ina su s ig ­nificación esencia!. En un o r­den racional de cosas, el e s tu ­dio de la s necesidades, por lo tan to , debe ocupar el p rim er puesto, y su s resu ltados h a ­b rían de se rv ir de fundam ento a la p roducción”. "K ropotk in nos m ostró, de la mano de se­ve ras investigaciones c ien tífi­cas, que no es en abso lu to n in­guna u topia h a b la r de la posi­bilidad de sem ejtn te estado de cosas; nos dió la p rueba de que con una organización ra ­cional de nuestra vida econó­mica, la producción puede au ­m e n ta r casi ilim itadam en te , y ¿as experiencias de los ú ltim os yelntlclnco artos le han dado razón en t o d o concepto”. "C uanto m ás *e le conocía, tan to m ás honda e ra la Im­presión que ae rec ibía de él. E n tre el a u to r de "E l apoyo m utuo" y K ropotkin, el hom ­bre, no hab la n inguna diver­gencia. Como pensaba y sen­tía . asi ha obrado en todas las fases de su la rga y rica exis­tencia. Conocerle equivalía a que re rle . Esa arm on ía In terio r de toda su existencia , que ir r a ­diaba tal oa lor, y su profunda hum anidad perm anecían Inmu­tab les y no de jaban su rg ir la m enor duda sobre la honesti­dad de sus propósitos. K ropot­kin e ra hom bre de una pieza".

1 KROPOTKIN. EN EL EXTRANJERO |Llega a Ing la terra , donde escribe en la revis ta c ientífica “ Na-

tu re ” . M archa pronto a Suiza, donde ac túa en la Federación del Ju ra , de la Asociación In ternacional de los T raba jado res , f i­los hom bres m ás no tables, casi todos am igos de Bakunin, como G ulllaum e, Reclús, Brouse, M alatesta, C aflero, L efrancais , P in­jando residencia en La Chaux de Fonds. Allí tr a b a ja ju n to a dy, Schw itzguebei, Jukow sky, Sokolov y o tros. K ropotkin usa el nom bre con que fugó de Rusia, Lévashov. In terv iene en nu ­m erosos m ítines, después de re p a rt ir vo lan tes por cafés y t a ­lleres. Viaja mucho, ayudando a la propaganda. P a rtic ipa en g randes m anifestaciones o b reras en B erna, donde hubo choques con la policía, en S a in t-lin ier , donde "todos Íbamos arm ados y dispuestos a de fender nuestra bandera hasta el últim o e x trem o” (la policía habla prohibido la bandera ro ja). E studia y des­arro lla las Ideas an arq u ista s a la luz de las nuevas experiencias.

En el otoño de 1877 pa rticipa en el congreso de la Federación del Ju ra y en el congreso socialista e in ternacional de G ante, donde ju n to con ocho an arq u ista s m ás d e sb a ra ta las m aniobras de los soclaldem ócratas que querían cen tra liza r el movim iento obrero europeo bajo su dirección. La policía descubre que tr a s el seudónim o Lévashov ac túa K ropotkin. Los am igos le obligan a sa lir del país, y se va a Londres, en cuyo Museo Británico estudia docum entos rela tivos a la Revolución F rancesa.

M archa en seguida a París, donde con Costa, Guesde y o tros, Inicia los prim eros ciroulos socialistas. "U na m edia docena nos reuníam os en un café y cuando en un m itin el aud ito rio llegaba a unas cien personas, nos considerábam os dichosos. N adie hu­b iera podido ca lc u la r entonces que dos años m ás ta rd e el mo­vim iento se h a llarla en todo su apogeo”, escribió él mismo. En la p rim era conm em oración de la Com una, en m a n o del_ 78, no, llegaban a veinte los p rom otores de Ia / aí(ltacíi5ñ ni a~ tJffSC.'gjiMj' los que la sostenían ab iertam en te . Dos años después, el pueblo de P a rís salía a la calle a rec ib ir a los com unalistas am nistia­dos que volvían del exilio. Poco an tes, burla a la policía que busca a Lévashov. Va a Suiza; llam ado por los com pañeros. En P a rís se relaciona oon el g ran novelista T urguénlev.

| FUNDACION DE ”LE REVOLTE"V ario s a te n ta d o s c o n tra e l em p erad o r de A lem an ia y con­

tr a los reyes de E sp añ a y de I ta l ia , d ie ron origen a una falsa acusación c o n tra la Federación del .lu ra y la In tern a cio n a l, a qu ienes se im p u tab a su e jecución . T odos los gobiernos eu ­ropeos h ic ieron cargos a l de S u iza , que inic ió la rep resión . F u é prohib ido a las tip o g ra fía s de l p a is la im presión del "A van t-G arde" , dirig ido p o r B rouse y de c u a lq u ie r ho ja s im i­la r. G uíllau tne y o tro s pe rd ie ron el trab a jo . B rouse fué ex­pu lsado de Suiza . K ropo tk in tien e que h a ce rse carg o de s a c a r el ó rgano de la F ederación . E s asi. com p en feb rero de 1879, ap a rec e el qu in c en a rio "Le R evo lté". co m an d o só lo con vein­ti t ré s francos... El éx ito es com pleto. M uchos años después "T em ps N ouveaux" su ced ía a l h is tó rico vocero e sc r ito por K ro p o tk in en G inebra . Le a y u d an D u m a rtc e ra y y H erzig. siendo este úlLimo quien funda después con B e r to n i e l fam oso "L e R éveil". K ropo tk in rec o rre toda la Su iza f rancesa en bus­ca de im p re n ta ,' p e ro la n e g a tiv a es unánim e. L a decisión h e ­roica fué la fundación d e la " Im p rim erie Ju rass ien n e " , que debu­tó con el periódico y un p a r de fo lletos. “ D uran te vein tisiete años — escrib ió d e sp u és— n uestro periódico h a seguido viviendo a l dia"...

F u é a lli donde se e d ita ro n los fo lle to s con ten iendo tra b a jo s que E líseo R eclús reu n ió ba jo el t itu lo de “P alabras de un re- •• beldé". P o r razones de sa lu d se e s tab lec e en C la rea s , donde e l g ra n geóg ra fo fra n cé s le ayuda fe rvo rosam en te , a si como su p ro p ia com pañera . E sc ribe _ su s m e jo res trab a jo s , en tre o tro s la fam osa llam ada "A los jóvenes", s in d e ja r de ded ica r p a r te de su tiem po a tra b a jo s c ientíficos.

E l a te n ta d o c o n tra A le jand ro I I . a com ienzos de 1881. da nacim ien to a la "L iga S a n ta " del h e rm a n o del zar. V lad im ir, que condena a m u e rte a los em ig rados po lilicos a qu ienes con­s id e ra com plicados. K ropo tk in es uno de los sen tenc iados, pero él se cu ida poco de e llo . S igue a c tivando , h a s ta que el Consejo F e d e ra l su izo lo expulsa, p o r ex igenc ia de R usia, después de r e g r e s a r de L ondres, donde ha b ía a sis tido a un congreso a n a r ­qu is ta .

D espués de un breve período en T honon, v ia ja a Londres, donde p e rm anece doce m eses, periodo en que todos su s e s fu e r­zos por d s p e r ta r u n a a g itac ión so c ia lis la fueron vanos. E n el o toño de 1882 reg resa a T honon, localidad saboyana , donde e n cu e n tra un núm ero so rp re n d en te de e sp ías n iso s y de agen ­tes franceses . K ropo tk in s igue ed itan d o "Le R evo lté" y e scri­b iendo a rtíc u lo s p a ra la E nciclopedia B r itá n ic a y el "Ñ ew cas- tle C hronic le".

| EL PROCESO DE LYON |Un in tenso m ovim ien to a n arqu ista • se desarro lla en F rancia ,

donde el periódico y los fo lle to s e jercen in fluenc ia crecien te. K ropo tk in hubla aprovechado tam bién e l v ia je a Londres pa ­ra dar. de puso, con ferencias en L yon , S a in t E tie n n e y o tros p untos. En Lyon , una cris is in te n sa ag ita a los obreros de las m inas y de las industr ia s de la seda, S e c om e ten v a rio s a te n ­tados. q u e se a tr ib u ye n a los anarqu ista s , se sen ta d e lo s cua ­les son deten idos. La prensa acusa a K ro p o tk in d e se r e l je fe e in c ita u la policiu co n tra él. K ro p o tk in p erm anece en Tho- iio», u pesar de todas las a dvertencia « y recibe tranqu ilo las ca r ta s escrita s por los esbirros polic ia les para com prom eterlo . A l din sig u ien te de lu m u er te de su cuñado , q u e le a fec ta p ro ­fu n d a m e n te . le prenden . S e inicia a si e l fam oso proceso, por e l “de lito " de se r m iem bro de la Asociación In tern a cio n a l d t T rabajadores. L o condenan a cinco años, sa liendo a los tres de e s ta r en la cárcel de C la irvaux , por la a m n istía decre tada por e l presiden te a ra íz de la agitaci&n popular en pro de la lib ertad de los anarquistas.

SE IMPRIMEN SUS OBRAS BASICAS 1V uelve a Londres, donde con tinúa su s e stud io s y publica en

el se m an a r io "L a R pvolte" la se rie de a rtíc u lo s que en 1892 se e d i ta r o n 'b a jo el t i tu lo de “L a conquista d e l pa n '’, la céle­b re o b ra de K roD otkin. E s tu d ia e l d e sa rro l lo de la in d u s tria .

Prosiguiendo con la serie de los pre­cursores y luchadores anarquistas, dedicamos esta página a Kropotkin. En esta primera parte, se reseñan los datos biográficos. En el próximo nú­mero nos ocuparemos de su ideario

y de sus obras.

de la a g ric u ltu ra , y la s a m p lia s posib ilidades q u e ofrecen los últim os adelan to s c ien tífico s y técnicos. L as rev is ta s "N ine- teen th C en tu ry” y "F o ru m " p ub lican los r e su l ta d o s de sus investigaciones, que am p liados con o tro s, se reú n e n en o tra obra tra sce n d en ta l, en 185)8, con e l t í tu lo de " C am pos. fábricas y ta lleres" . Ya e s tan d o preso en C la irvaux , com enzó a t r a b a ­ja r p a ra la q u e h a b ría de s e r su o b ra básica . E n L ondres co­mienza a r e fu ta r las te o ría s de llu x ley , en la r e v is ta a rr ib a c itada , en cap ítu lo s que. am p liados años después, h a b ría n de C onstituir ose m agnifico fru to que se ilnm a " E l apoyo m u tuo , un fa c to r de la evo lución" . En c o n fe rencias y pub licaciones se ocupa del d e sa rro llo y la esencia del E sta d o , tra b a jo s que in ­te g ra r ía n las ob ras " E l E s ta d o m oderno". "Justic ia y m ora li­dad". "La ciencia m oderna y e l anarqu ism o" , " E l papel h is tó ­rico del E stado". E sc ribe p a ra " F reedom " .

V ein ticinco años después de la a paric ión de "L a Gran R e ­volución". en que e stu d ia la revo luc ión fra n ce sa a tra v é s de una b r illa n te in te rp re tac ió n pub licaba los p rim e ro s ensayos y opiniones sob re ese acon tecim ien to .

H as ta el e sta llid o de la g u e rra de 1914, la a c tiv idad de K ro ­potkin, cuyo organ ism o se va resin tiendo se riam e n te , es m ú l­tiple. Su figu ra apostó lica subyuga a la s m u lt itu d e s que lo escuchan. S us a rtícu lo s y c on fe rencias se c u en ta n p o r c e n te ­nares. S us a p o rte s a l e sc la rec im ien to de la s ideas a n a rq u is ta s son s iem pre el re su l tad o de nuevas investigaciones, de re f le ­xiones a rra n c a d a s p o r su a m o r a la verdad . T odas las publi­caciones lib e r ta r ia s del m undo lo c u en ta n com o a l m ás ilu s tre de sus co labo rado res, S us o b ras se e d ita n en c as i todos los idiom as, ayudando é l m ism o con e n tu s ia sm o e n su traducción , corrección y am pliación .

R ock er c u e n ta la im presión im b o rrab le que d e ja ra u n a de sus con fe rencias en L ondres: so tr a ta b n de un m itin en el Hy- de P a rk , de p ro te s ta c o n tra el e span to so "p rog rom " de K isch- niev. "Su ro s tro e stab a pá lido a c au sa de la conm oción in te r­na, y la b a rb a g ris s& a g itab a te m b lo ro sa a l vien to . S us p r i­m eras p a la b ra s fueron pau sad a s , pe ro luego llegó la ind igna ­ción In te rn a a su exp resión m ás vigorosa . C ada p a la b ra e ra como un golpe de m aza, una te rr ib le acusación c o n tra los co­bardes c a u sa n te s de aquel b á rb a ro baño de s a n g re que hab ia m anchado el nom bre hum ano. E l v ie jo p a re c ía un p ro fe ta del tiem po pasado. S e n o ta b a en su voz un te m b lo r s in g u la r , como s i el do lo r d e los sacrific io s en R usia se e n c a m a r a en é l y lle ­gase a una exp resión so b re n a tu ra l.”

1 . GUERRA Y REVOLUCION RUSA 1K ro p o tk in fo rm ó p a r te del reduc ido g ru p o de a n a r ­

q u is ta s q u e se p ro n u n c ia ro n a l in ic ia rse la g u e r r a en fa v o r de lo s a liad o s. C onocidas son la s p o lém icas que sobre ese lam en tab le a su n to so s tu v ie ro n lo s m á s g ra n ­des lu ch ad o re s lib e r ta r io s . Q u ienes es tu v ie ro n en la po­sición c o n tra r ia , m an ten ien d o el rep u d io a la g u e r r a y a am bos b a n d o s , co m p ren d ie ro n q ue en K ro p o tk in , co-

lux hambre.1: que han construido y propagado el ideario anarquista, ninguno como Pedro K ropotkin se hizo cono­

cer y amar ron más intensidad. Su personalidad de sabio y de investigador, de revolucionario y de apóstol de un mundo libre y feliz, reunía las excelsas virtudes del hombre, cuya bondad infinita conmovía profundamente a cuantos le tra­taban y las dotes excepcionales del sabio ilustre, cuyos des­cubrimientos y trabajos de carácter científico, además de en­riquecer el acervo cultural de la humanidad. eran la fuente magnífica que le brindaban argumentos para defender la grandiosa empresa en que estuvo empeñado toda su vida: la liberación integral de la especie humana.

En K ropotkin no pueden separarse el sabio y el revolucio­nario, el hombre de ciencia y el propagandista, el apóstol de la verdad científica y de la verdad social. Toda su obra, toda su vida, se refundía en el sagrado propósito de transí orinar la sociedad autoritaria en una sociedad regida por el prin­cipio del apoyo mutuo, en que desaparecieran para siempre la explotación del hombre por el hombre y la opresión po­lítica. del listado, fin todas sus obras científicas vibra el acento del predicador que ama a la ¡tumanidad y ansia fer­vientemente su superación, f in cada una de sus obras doc­trinarias, en cada uno de sus escritos ideológicos, flota, sub­rayando los razonamientos y las conclusiones, el espíritu del hombre de ciencia, del servidor de la verdad, del observador profundo de la naturaleza, del conocedor de la vida, los sue­ños y ¡as esperanzas de sus congéneres. Sentim ientos y ra­zones científicas se apoyan mutuamente para dar a luz la brillante idea de la sociedad comunista anarquista, de la so­ciedad que debía romper las cadenas económicas, políticas v morales, dando libre impulso a las fuerzas creadoras que potencialmente existen en los individuos y en las colectivi­dades.

m o siem pre , o b ra b a la convicción a b so lu ta de e s ta r en el cam ino ju s to . "S i los f ra n c e se s o los in g leses — e s ­c r ib ía a L u is B e rto n i, e l 30 de n o v iem b re de 1914— h u ­b iesen invad ido y co n q u is tad o a B élgica, n u e s tro d eb e r h u b ie ra s id o o p o n e rn o s a ellos, com o n o s oponem os a h o ra a los a le m a n e s” . Y en u n a s lín e a s — “ n a d a m ás dolo roso p a ra m í q ue eB tar en d esacu e rd o con vos­o tro s ”— el a lm a p u ra del g r a n revo lu c io n a rio d e sb o r­d ab a en un lam en to sin q u e ja ...

E sc rib ió tam b ién a R ocker, q ue e s ta b a en un cam po d e c o n cen trac ió n : "A n te todo, lo q u e im p o r ta es 1a, convicción . N o se debe d e fe n d e r u n a c a u sa q ue no p ro ­cede de lo m á s hondo del co razó n . T am b ién e s ta t e r r i ­ble c a tá s tro fe te n d rá un fin . E n to n c e s h a b re m o s de c o n tin u a r lu ch an d o ju n to s p o r la g ra n c a u sa de la li­b e rac ión h u m an a , q ue e s la de to d o s n o so tro s .”

C u ando e s ta lla la revo luc ión ru sa , K ro p o tk in se en ­ciende de e n tu s ia sm o y decide v o lver a su t ie r r a n a ta l . N ad ie h a b rá su f r id o ta n to en p re sen c ia de lo s hechos q ue a r r a s t r a b a n a R u s ia t r a s la d ic ta d u ra b ru ta l del p a rtid o de L en in , com o el v ie jo lu c h a d o r a n a rq u is ta .N o de jó de d ec ir lo q ue se n tía , m ie n tra s le quedó u n • re s to de en e rg ía . V ió el inm enso pe lig ro q u e la n u ev a t i r a n ía bo lchevique re p re se n ta b a . E s ta b a g rav em en te en fe rm o , in u tiliz ad o p a ra la acción . P e ro su voz se a l­zaba, den u n cian d o c rím en es y peligros.

1 SUS ULTIMOS MENSAjES ~|Su c a r ta a L enin. e sc r ita en o c tu b re de 1920, es un a n a te ­

m a c o n tra los p roced im ien to s bo lcheviques. “ ¿C óm o puede u s­ted . V lad im iro Ilitoh , que p re te n d e s e r un apósto l de n uevas verdades, c o n s tru c to r de un nuevo E stado , cóm o puede u s te d a p o y ar p roced im ien to s ta n repulsivos: m étodos ta n in a ce p ta ­b le s?"

E l "L lam ado a los pueblos occiden ta les” —ju n io de 15)20— es u n a a d m irab le s ín tesis de a m o r a la rev o lu c ió n rea liz ad a p o r un pueblo ansio so d e lib e r tad y de repud io a las desv ia ­c iones d ic ta to ria le s que d e sv ir tu ab a n ese p ropósito . L a p lu m a del v ie jo m a e s tro co n serv a su c laridad , su fu erza d e convic­ción c a ra c te r ís t ic a , cuando escribe, cuando dice a los t r a b a ­ja d o re s de occiden te ;

" A n te to d o , lo s t r a b a ja d o re s del m u n d o civ ilizado y su s am igos de la s d em ás c la se s d eben o b lig a r a su s go­b ie rn o s a q ue a b a n d o n e n to ta lm e n te la idea de u n a in ­te rv en c ió n a rm a d a en lo s a s u n to s de R u s ia , s e a ella a b ie r ta o d is fra z a d a , m ili ta r o b a jo fo rm a de su b v en ­ciones a d ife re n te s pa íses. L o s m a le s in h e re n te s a la d ic ta d u ra de un p a r tid o se h a n a c re c e n ta d o 'p o r las cond iciones de g u e r r a en q u e ese p a r tid o se m a n tien e . E n R u sia , p o r d e sg ra c ia , e s ta te n ta t iv a ( l le g a r a la ig u a ld ad económ ica) se h a h echo b a jo la d ic ta d u ra fu e r te m e n te c e n tra liz a d a de u n p a r tid o , e l de los b o l­chev iques. E s ta m o s ap ren d ien d o en R u sia cóm o no de­be s e r im p u es to el com un ism o , ni s iq u ie ra a u n a pob la­ción c a n sa d a del an tig u o rég im en y q u e no opone n in ­g u n a re s is te n c ia a l e x p e r im e n to de los n u ev o s g o b e r­n a n te s ."

.4 los 7t¡ años, in te rru m p e una labor q u e ju zgaba la c u lm i­nación de su s estu d io s de toda la vida — “La é tic a "— y coi-re u R usia , e n ferm o , ansioso d e ver con su s ojos a l m undo nuevo en construcción , u upoi'tar .su e s fu er zo en la h is tó rica e m ­presa . Y debe escrib ir, a n te la revo lución a sfix iada p or la nueva■ d ic ta d u ra : “La inm ensa labor c o n s tru c tiva que e x ig e una revolución socia l, no puede se r rea lizada por un gobierno c en tra l, aun q u e tu v iera para gu ia rla a lg o m á s su s ta n c ia l que. a lgunos m a m u lle s soc ia lis ta s y a narqu ista s . N e ce s ita los co ­noc im ien to s . e l c erebro y la colaboración v o lu n ta r ia de « n a m u ltitu d de fu e rza s locales y e spec ia lizadas que son las ún icas capaces de encarar con é x ito la d iversidad de los prob lem as económ icos en sus a specto s locales . R echazar esa colabora- ción , co n fia r en e l gen io de los d ic tadores de partido , e qu iva le a d e s tru ir los núc leos independ ien tes , com a los sind ica to s g re ­m ia les — llam ados en R usia "u n io n es p ro fe sio n a les "— y la s o rganizaciones coopera tiva s locales , transfo rm ándo los en ór­g anos burocrá tico s d e l p artido , com o o curre a c tu a lm e n te . P e ­ro esta e s la m anera m á s segura de «o hacer la revo luc ión , de h a c er im posible s u realización . Y é s te es e l m o tiv o por e l cua l m e creo en el d eb er de poneros en giuirdia con tra la im ita ­c ión de e sto s proced im ien to s."

E l 8 líe feb rero de 1921 m u ere K ro p o tk in . A l m es sig u ien te iba a produc irse una de las m ás te rr ib le s traged ia s de la re ­vo lución ru sia : la rebelión y la represión de K ro n s ta d t. fxl m u er te ahorró a l gran luchador, e l do lor de se r te s tigo de aq u e l crim en d e la d ic tadura bo lchevique. U na localidad de la R usia de hoy llevu el nom bre de K ro p o tk in . P ero q u ienes levan ten en a lto la bandera de la nueva revo lución lib erta ria , lu rendirán el h o m en a je q u e m ertíce quien dió ta n to p or la causa de la libertad . E n to n c es será m á s valiosa q u e nunca la sen tenc ia que a n te e l desborde a u to r i ta r io e scribió K ro p o tk in : " E s ta m o s aprend iendo com o no debe hacerse una revolución".,.

IDEAS DEL PORVENIRE l a u to r de “ E l ap o y o m u tu o ” .

“ L a g ra n rev o lu c ió n ”, “ L a con­q u is ta del p a n " , “C am pos, fá b r i­cas y ta lle re s " , “L a C ieuc ia M o­d e rn a y el an a rq u ism o " , " P a la b ra s de un rebelde” , “ E t ic a " , “ L a Co­

m una de P a r ís ” , y de inco n tab le s e s tu d io s y t r a b a jo s c ien tíficos , doc­tr in a r io s y de p ro p a g a n d a ; e l s a ­b io y el ap ósto l, v iv irá e te rn a m e n ­te en e l recu e rd o de lo s pueblos.

Su p e rso n a lid ad p e rten ece a la se­rie de los m á s g ra n d e s h o m b res de to d o s lo s tiem p o s. S us id eas a lu m ­b ra rá n el c am ino de los c o n s tru c ­to r e s de la so c ied ad lil>erada de to d o s lo s y ugos.

www.federacionlibertaria.org

Page 3: Acción Libertaria, Nº 64. Mayo1943-Fla

EUROPAC O N T I N E N T E

D E S T R O Z A D O

Y S O M E T I D O

SI a lg ú n n o v e lis ta de lo s q u e g u s tan

d e sc r ib ir cu a d ro s del f u tu ro , h u ­b ie ra p re se n ta d o , añ o s a tr á s , la vi­s ió n de u n a E u ro p a se m e ja n te a la q u e n o s o frece la re a lid a d ac tu a l, p ro b a b le m e n te se le h u b ie ra acusado d e p o se e r u n a im ag in ac ió n so m b ría y d e a c e n tu a r la n o ta sen sac io n a l y m ac a b ra .

H u b o c ie r ta m e n te pred icc iones , . i a c e r ta d a s sobreR égim en d e l( que p<)dr¡l

i * . i i s e r u n a n ueva esclavitud n a gUerra m und ial, . . en lo r e fe re n teBido impuesto al efect0 d„ .

a millones de

i estadistas I a organi- ! zaeión del nuevo or- | den. Las masas popu-

es deben estar

LA HUMANIDADBAJO LA GUERRA TOTAL

Con lág rim as de san-gre están pagando lospueblos u pasividad

augo de lasfuerzasque han desatado lapresen te ca tástro fe .Esperemo s que estate rrib le lección n o

sea vana.

CONFIAMOS EN EL RESURGIMIENTO COLECTIVO DE LA DIGNIDAD HUMANA

t ru c tiv o de los u l t r a p o te n te s

seres hum anosla s co n secu en c ias h o rrip ila n te * de la g u e r r a q u ím ica y b ac te r io ló g ic a — q u e a ú n no se h a p u es to en p rá c tic a — so b re la su p re s ió n de to d a d ife ­ren c ia e n tr e c o m b a tie n te s y n o com ­b a tie n te s , en lo q ue se re f ie re a ao* p o r ta r los p e lig ro s y su frim ie n to s p rop ios de u n a c o n tie n d a de eBa oa- pecie. T odo eso h a sido c o n firm ad o y su p e rad o p o r la rea lid a d , con la ya se ñ a la d a excepción del em pleo de g a ­se s tó x icos y e lem en to s b ac te r io ló g i­cos, sin q ue nad ie p ueda a s e g u ra r q u e ta le s m edios no se ap liquen en un fu tu ro in m ed ia to . Se h a llegado a la cu lm inación del h o r ro r q ue s ign ifica el b o m b ard eo de p o p u lo sa s c iudades p o r c e n te n a re s de av iones g ig a n te s ­cos. s in q ue e s ta s acc iones p a se n de p rá c t ic a s “ r u t in a r ia s ” , q u e se cu m ­p len y se s o p o rta n con ig u a l n a tu r a ­lidad , a p a re n te m e n te a l m enos. S in d u d a q ue el e sp ír itu h u m an o sn ac o s­tu m b re a todo . Q uien sab e a c o s ta de qué d esequ ilib rio s p o s te r io re s !

P e ro , lo q ue n ad ie p rev ino ni im a­ginó. e n el gracjo a que se h a a lc a n ­z ad o a h o ra , es el e sp a n to so c u a d ro de esc lav itu d , de t e r ro r , de h u m illac ión y m ise r ia que c o n s titu y e la v id a de m i­llones de eu ro p eo s, h o m b res, m u je re s y n iños, so m e tid o s a l a b y ec to ré g i­m e n clé-Jn. ocu p ac ió n nazi.

A rra n c a d o s de su s h o g a re s , se p a ­ra d o s de ’ los suyos, v io len tam en te d esp o jad o s de lo s a t r ib u to s de la p e r ­so na lidad , esos s e re s h u m an o s háh sido red u c id o s a u n a condición de b es tia s o de esclavos, q ue se concen­t ra n en cam pos de to r tu r a y e x te rm i­n io o se tra s la d a n en m asa de un ex ­trem o a o tro del con tin en te , p a ra so ­m e te rlo s a ta r e a s a g o ta d o ra s , d e s ti­n a d a s a r e fo rz a r el poderío de íub o p re so re s y v e rd u g o s. T a l com o se an u n c ia ra el de sp lazam ien to de t r o ­p a s de g an ad o , se com un ica sen c illa ­m en te q ue ta n ta s decen as o ce n te n a ­r e s de m iles de o b re ro s f ran ceses , i ta lian o s , po lacos, checos, no ruegos, e tc ., h a n sido llevados a A lem an ia o a la p e r ife r ia del co n tin en te , p a ra c o n s tru ir fo r tif ic a c io n e s o t r a b a ja r en la s fá b r ic a s de a rm a m e n to s , b a jo e l rég im en del t r a b a jo forzado- O que m illones de ju d ío s h a n sido e x te rm 1- n ad o s p o r to d o s los m edios im ag in a ­b les. E so , s in c o n ta r los m illa re s de h o m b res y m u je re s que h a n sido y s i­g u en siendo fu silad o s, b a jo la ac u sa ­c ión de c o n sp ira r c o n tra el in v aso r o, S im plem ente, a ti tu lo de rep re sa lia .

D e u n golpe se h a n b o rra d o m uchos sig lo s de cu ltu ra , se h a n liqu idado las m á s v a lio sa s co n q u is ta s de la c iv ili­zación y de la soc iab ilidad h u m a n a . U n a b a rb a r ie to ta l , a g ra v a d a p o r c o n ta r con to d o s los re c u rso s de u na técn ica m o d ern ís im a, re in a so b re el co n tin en te q ue fu e ra el d ep o s ita rio del s a b e r y e l hu m an ism o de cen te ­n a re s de gen erac io n es. Y e s ta b a rb a ­rie té tr ic a y re f in a d a , se o frece como e jem plo y an tic ipo de lo q ue se ría el “ nuevo o rd en " q ue p re ten d e im p lan ­t a r el nazism o sobt'e el m undo.

N o d u d am o s q ue e s ta h o rrib le pe­sad illa q ue v iven hoy cen te n a re s le m illones de eu ropeos, s e r á d is ip ad a Con la d e r ro ta del naz ifa sc lsm o y ot de rru m b o de su rég im en de esc lav i­tud . P e ro los e s tra g o s m o ra le s y m a­te r ia le s c au sad o s p o r la g u e rra to ta ­lita r ia , no s e rá n elim inados de un golpe. L a b o r m ás á rd u a q ue la r e ­c o nstrucc ión de la s c iudades a r r a s a ­das, se rá la de re s ta b le c e r el equ ili­b rio en lo s e sp ír i tu s , la de e lim in a r *1 odio de ra z a s y de n aciones, la de b a ­r r e r con to d o v estig io de a u to r i ta r i s ­m o to ta li ta r io . L a re c o n s tru cc ió n m a­te r ia l d e b e rá i r co m binada p o r u na v e rd a d e ra su p e rac ió n de las n o rm as m o ra le s y sociales, com o único m odo de d es in to x ic a r e l am b ien te po lítico europeo y condición in d ispensab le pa­ra e v ita r q ue la c a tá s tro fe se rep ita , u na vez m ás.

E L panorama so­cial del mun­

do, las perspecti­vas del futuro in­mediato, así co­mo el curso de un período histórico de duración indefinida — a cuyos comienzos asistimos — están condicionados indefec­tiblemente por el desarrollo y las consecuencias de la presente guerra mundial. No hay rincón del planeta que pueda considerarse inmune a sus devastadores y trascendentales efectos. No hay partido, organiza­ción, seclor o tendencia política o social que no se vea sujeto a sus múltiples derivaciones. Es ésta una gue­rra total, no solo porque absorbe todos los recursos hu­manos y materiales del mundo, sino porque además está destinada a influir en la conformación espiritual y la estructura política de los pueblos, en un grado mayor y más decisivo que cualquier conflicto bélico del pasado.

Como militantes de vanguardia en la lucha por la libertad y el socialismo, conocemos las consecuen­cias regresivas y embrutecedoras de las guerras y la actual no puede ser una excepción. Pero también sa­bemos que la terminación de una guerra de vastas propoiciones, con las tremendas sacudidas que ella implica para el orden establecido, ofrece coyunturas favorables para la acción revolucionaria de los pue­bles. El porvenir de la humanidad, la posibilidad de superar definitivamente el ciclo de las matanzas inter­nacionales, o la alternativa de una tragedia peor que la actual, dependen de la capacidad de los mismos pueblos para aprovechar tales coyunturas, haciendo una verdadera revolución que elimine las causas pro­

fundas de la gue­rra, así como de t o d a lucha d € predominio y ri validad d e n t re de lo s diversos

grupos étnicos. Pero no somos mesiánicos ni fatalistas. No creemos en la salvación súbita y total, en virtud de un golpe de magia revolucionaria. Tampoco creemos que en la peor de las circunstancias, todo esté perdido y que sea imposible la lucha. Frente al h'eáho consu­mado de la guerra actual, hemos considerado inope­rante y absurdo entregarnos a lamentos pacifistas o a expresiones doctrinarias de repudio. Lo importante, pa­ra nosotros, es enfrentar la situación tal cual es, apres­tarnos para las luchas del futuro inmediato, impulsar decididamente la acción combativa de los pueblos en un sentido creador, hacia una paz perdurable, basa­da en la libertad y la justicia. Descontando de ante­mano todas las dificultades y todos les rigores de una lucha semejante, entendemos cumplir así con nuestro deber de revolucionarios y servir la causa de la ver­dadera civilización.

Al puntualizar algunos aspectos de la tragedia mundial que vivimos, en este número dedicado a la conmemoración de la fecha proletaria, queremos afir­mar nuestra fe en el resurgimiento colectivo de la dig­nidad humana, reforzada con el grandioso ejemplo de los pueblos oprimidos por el yugo totalitario que, a pesar de todo, combaten la sangrienta tiranía, afir-

■ mando su amor supremo a la libertad. En la amplia­ción sistemática de este esfuerzo, vemos nosotros eJ camino de la salvación.

ESPAÑANU E V A ME N T E SE P R E T E N D E SACRIF ICARLA

QU E e l ¡aitlilo español (HO e l e je m ­

p lo miiM honroso a lodos Ion / n u ­blos m o ta d o s o am enazados por

el fa sc ism o y e l nazism o , ha sido il.- cho a repetido en todo ios tonos. F u i sacrificado por una absurda, con fa b u ­lación de Oran B re ta ñ a y F ranc ia , cu­yos gobiernos gestaron ìa intan ila sin nom bre que fac ilitó él tr iu n fo a los alem anes, ita lianos y fra n q u ista s . La "tío in te rv en c ió n " tenia por fin -—sefli in B lu m y B u ld irin — d e ten e r la guerra. L os E stados de m ocráticos no vacilaren en tra ic ionar a la E sp u fw republicana , desconociéndole los derechos que su re­c onocim ien to hacía im perioso según las leyes in te rnac iona les , de l m ism a modo que traiciona ron a E tiop ia y a Checo­eslovaquia , a pesar d e los c o m prom iso « contra ídos para de fenderla s de la ug ie - slón. f ü d o se hacia pa l-à e v i ta r la gue ­r ra . M eses después dir la derro ta f or io ­ta del pueblo e spañol, la guerra {m i Una realidad, q u e habría de u rrasa i. ayudada poi lu tra ición de sus e s ta d is ­ta s y genéra les , con la orgulloso P'ran-

F ueron . pues, ra to n es de E sludo , esas fr ía s r a to n e s de a lia po lítica , las que d e term inaron la condena a m u tr ie df- E spaña . P esaran ellas m á s que la a m t- na ia de una v ic to r ia qué daría ul “e je" las e s tra té g ica s posiciones de ’a pen ínsu la Ibérica y de su s co lon ias. Tam bién ahora, a>i pleno desarro llo de la g u e ira . la* “razones de E s ta d o ” e n ­tran en juego , pasando p or encim a de todo. D e los p rincip ios y fina lidades que se d iré ii Inspiradoras de esta lucha. D< las p rom esas de liberación que se e n u n ­cian a cada paso para todos los pue ­blos de la Iierra , una ven derro tado el nazifascism o.

N o o tra rosa dejan e n tr e v e r los h e ­chos. que una n uera tra ición a ese pue ­blo que did sii sangre para se r Ubre. La politica de lo» E stados Unidos i/ de Ing la te rra con relación a l gobierno .It Franc,o. consis te en c o m p ra r su n e u tra ­lidad n cam bio, no solo de su reconoci­m ien to com o leg ítim o gobierno , sino del 7iids am p lio apoyo e.cónóniiCO-finnn- ciero. //ara "desarro lla r su econom ía hasta la era de la paz m u n d ia l" - c / decir de l em ba jador M r. Carlton Ha- y e s — y de la restauración c u ltu ra l, segihi expresión del p residen te R oose ­velt m ism o. P or o lio lado, se te jen las redes para un posib le re torno de lu m onarqu ía , aspiración s iem pre h íte n le en las esfera s de la a ristocracia b riltí­nica que rodea u Jorge V I . P ara el pueblo español no re ta rá n las c lá u su ­las de la "C arta riel A tlá n t ico ’’, ni las "cu a tro libertades" , n i e l derecho de "gobernarse a su m anera" , n i la " rec u ­peración de los a tr ib u to s de pueblo so­berano", que te p ro m e te a los pueblos sojuzgados, txi " a lia po lítica" de las naciones a liadas e stá tram ando una excepción. Una excepción doble m en Is ra e l día de la revancha inevitab le. In fam e, por tra ta rse rie E spaña. Un sa­crific io que no. puede ser to lerado pol­los pueblos, que no será perm itido poi e l pueblo e spañol, que es-pera u prepa- F re n te a las m aniobras contra la Es- fUCha libre, el m undo llen e e l deber Ke decir Su pa labra, desbara tando e l e n -

LA Invasión de las t r o ­

p a s n o r l eam ericonas en el A fr ic a fra n ce sa dió p rincip io a una se lle de acon tec im ien to s e sp ec tac u ­la re s . c o n t ra d ic to r io s y, sobre todo , e locuen tes en sum o g rado . D esde la con-

. versión de £>arlan, incondi­c ional de P e ta in , lia s la la ú ltim a conversión de 01- ráud , la s variáiVtes no han- cam b iado en lo esencia) la situac ión c re ad a al e n tre ­g a r los E sta d o s Unidos, con e l consen tim ien to britán ico , po r razones de a l ta e s tr a ­teg ia , e l A frica " lib e rad a" en m anos de los segundo­nes del gobierno fasc is ta de V ichy. L os m ism os que

AFRICADEL NORTEpersigu ieron a m u e r t e a los enem igos del "eje", los m ism os que e x p resaron su sim patía a H itle r y Mus&o-

mljsttw fcjiue a y ^ R - . ron á t ’ra m >■ c •> n ¡ r a pueblo español, los mismos, en sum a, que p e rten ecen a la m és c r u d a reacción f ran cesa , fo rm a n e l elenco que rodea a l genera l Gi- raud . A p e sa r de la de ro ­gación de las leyes d ic ta ­das po r el gobierno de Vi­

chy y do la s p rom esas de re s tau rac ió n r e p u blicana, hechas en A rgel, en los cam pos d e concen tración del n o r te a fr ic a n o siguen presos loa refug iados espa ­ñoles y c e n te n a re s de a n ti­f a sc is ta s que b u scaron ■— ¡con ta n trág ica s u e r te !— el a m p aro de la F ra n c ia d e m ocrática . C o rresponde­r á a l pueblo f rancés, euan- tfo TTegilb la l ib ra de la re ­construcción , después de la d e rro ta del "e je” , rea liz a r la im prescind ib le lim pieza, a n u lan d o a todos los e le ­m en tos que de uno u o tro m odo c o n tribuyeron a h u n ­d ir a su país, e n tre g á n ­dolo s in lu c h a a l nazlam o.

R U S I AUNA DICTADURA TRAS EL MITO DE LA REVOLUCION

L A T R AG EDIA D E L O S EXILAD OSMUCHO antes de e s ta l la r la gu e rra actual, la m orbosa púlítica racial originó

la m ás feroz de las persecuciones, el m ás despiadado exterm in io de milione!; dé s e r í s Humanos. Las d ic tadu ras de todo tipo arl-OJában fUcra de las f ro n teras a los que en el exilio forzoso buscaron la salvación de sus vidas, de su libertad , de «u d ignidad. M illares de luchadores conocieron la am arg u ra del incierto am bu lar a través de un m undo Hostil, afron tahdo la fUPIa de los gua rd ia s fron terizos y los costosos "visados" consulares. El dolor de quienes abandonaban todo pa ra escapar a la m uerte y al to rm en to , golpeó a las pu e rta s de los g randes y ricos países de E uropa y A m érica, de las libé rrim as colonias y dominios de las naciones dem o­c rá ticas, sin que nadie qu isiera rec ib ir a los perseguidos. Barcos llenos de refug ia­dos que huían del infierno nazi, tocaron los puertos — desde Buenos A ires a Nueva Y ork— sin que los gobernan tes te conm ovieran an te los cuadros Horrorosos de los desam parados, i El m ar recogió en su seno a los suic idas heroicos sin ban ­dera! Y buques ple tó rlcos de israe litas se hudieron en aguas asiáticas, después d t se r rechazados en la propia P alestina .donde orgulloso flam eaba el pabellón brltánloo. El éxodo español, el éxodo de los más gloriosos defensores de la li­be rtad de nuestro tiem po, destruyó el mito del hum anism o de Franola, al volcar en sus espantosos "cam pos" a m ás de medio millón de a n tifasc ista s, traicionados p r i­m ero, ve jados después. A ctualm ente , m ientras Se réünen "conferencias in ternacio­nales pro refug iados", la rea lidad sigue m ostrándonos la traged ia de los que Huye­ron del te r ro r to ta lità rio . Las "g randes dem ocracias” — y no hablem os de la de Rusia...— siguen su po lítica : se CONMUEVEN ante el dolor de los refugiados, pero SIG U EN CER RA ND O SUS PUERTAS, con im placable “so lidaridad"...

L A revo lución ru sa no fu é olirà dal pa llid o qne hoy e jerc e lu m as des-

pótica d ie tadura sobri’ e l pueblo que destronó a los za re s en li) 17. F ué el m agnifico f r u tu de las ansia s de liber- ta d qui! fug ro n acum u ldndose pii Iiis m usas, q u e in te n ta ra n tan ta* veces ttp la ila r al m o nstruoso s is tem a au to ­cratico. M illa res de inmirreccioues -un i- peslnas prologaron e l h is tórico esta- tlido. E l m artiro log io su b lim e de ’os revo lucionarios p reparò e l te n e n o pa ­ra e l gran dia de la liberación. L u g u e ­rra p recip itò Tu revu e lla del pueblo, que en una im prorisación gen ia! R i­p ian iti un s is tem a que podio iisegtirur e l tr iu n fo de su s irienles: los “soviet*" libre». El. sacrific io de las masut ob re­ras y cam pésinas ru sas responriia al tem a glorioso. “P an y L ibertari". Cir- c unstancia s que sup ieron aprovechar en su fa v o r los je fe s de l p a llid o boi- eliev¡que —con Len in v T r a lsk v ul tre n te torcieron e l ca rso de e se (or- m¡datile e sfaereo , i/ue sem brò esperan­no s 1/ encendió e l jtìb ilo e litre tndos los Irabajadores dpi m ando. La fanatica dootrhiu del poder. In triplica ciega de la conquista del poder para "h a ce r la revo lución" . la fa lsa fò rm u la ite la "dh-tadu.ru del p ro le!arlodo", laii-aron al parta lo de Lenin a la c am bre ile sus aspiraciones. L a riictaduru uhogó las m its g randiosas rebelianes liberlari-.is

pueblo t raicionado. Los cananeela udar. ad ì.

CHINAUN P U E B L O Q l!E S E DESANGRA EN C R U E N T A LUCHA

DE S D E hace seis qfios, el pacifico y m i­lenario pueblo chino se debate en u n í

cru en ta lucha, resistiendo la agresión del to ta lita rism o japonés. L ibrado a l sa c ru i- clo, con la com plicidad de las dem ocracias occidentales, al igual que el de E spaña, tuvo ese pueblo tenaz la fo rtu n a de con­ve rtirse en a liado de esa» m ism as poten­cias que en un principio lo abandonaron , negándole las a rm a s n ecesaria s pa ra 3o- lendorse y e xpu lsar a! Invasor, m ie n tras éste e n con traba toda d a s e de facilidades pa ra p roveerse de lo que le hic iera fa lta .

E s que China constituye de por sí uii con tinen te . Su vasio te rr ito r io y Su eno r­me cauda l hum ano, le lian perm itido m an­te n e r la resistencia , a pesar de h a b er perd ido g randes ex tensiones de U erra y una incontab le can tidad de hom bres . A un­que se desangra en una lucha in term inn- ble. tam bién desangra a l invasor y c ontri­buye e ficazm ente a lu de rro to de las p a ­tencias to ta lita ria s . Knperem os que en ton ­ces el pueblo chino llegue n se r rea lm en le * dueño de su inm enso pais y no sen nueva­m ente victim o de ios voraces im perialism os que lo han tenido como presa d ispu tada ¡J du ran te largos decenio», Im poniéndole “1 e stancam ien to ) el h am bre crónica.

I N D I AUNA RESISTENCIA TENAZ CONTRA LA OPRESION SECULAR

LA porfiada lucha de los pueblos de la in d ia p o r su liberación ha tontado tor-

inits precisas de reivindicación nacional, que soslaya m últip les p rob lem as de orden interno, que deben uer resuellos, pa ra que la lib e r tad y una arm ónica convivencia en tre esos pueblos sean norm as vigentes en la g ran pen ínsu la lndostán ica. Asi. por ejem plo, las diferencias de casta , que Gan- dhi com bate ta n valerosam ente , las r iv a ­lidades en tre hindúes y m usulm anes, e tc.

P e ro todo eso no Justifica de ningún modo la tozuda determ inación del im pe­rialism o británico, po r m a n len e r en la In ­dia un rég irten colonial, sostenido a costa de s a n g rien ta s rep resiones. E l pueblo h in­dú anhela se r lib re -Je la opresión ex tran - Jera, se r dueño de sus propios destinos, estab lecer el régim en político que m ás se avenga con su idiosincrasia y sus condi­ciones pecu lia res. Sólo leniendo lib e r ta s pa ra en sayar, equivocarse y rec tif ica r pro­cedimientos, podrá reso lver su* problem as in te rnos. P a ra conqulslnr esa libertad , lu­cha tenazm ente, m anteniendo una lena/, resistencia co n tra la opresión secu lar, que bajo p re tex to s tu te la re s solo persigue fine»; de dominio im peria lis ta .

cuyos glesoldados, clam aron a n te e l m undo por el respeto a los p rincip ios de la revo­lución: los so v its lib rem en te elegidos. Las tropas ro jas hicieron la guerra hasta el e x te rm in io a los cam pesinos de U crania, que encabezados por N é s ­tor Afa jn o , sa lvaron a l pa ís de las a rre ­m e tid a s d e Skoropa ilsky . D enikin y W rn n g el, y organizaron las com unas cam pesinus con adm irab le com prensión y capacidad cretidoru. L a lucha Ir roí en tre los sec to res del partido dom in a n ­te , cu lm in ó con el a fia n za m ien to de Sta lln .

El. E stado to ta lita rio , ba jo la direc i'ÍiJm de la burocracia bolchevique, .ir co n virtió en am o abso lu to . Los m étodos de represión, los s is tem a s de so ju tga - m ie n to de las m asas, la te rrib le policía encuadrada en la G uepeii, brindaron enseñanzas bien aprovechadas por el fa sc ism o y e l nazism o. La realidad es­fum aba hasta e l recuerdo de aqirella fam osa y c lásica defin ic ión de M arx v de L e n in : " E l E stado se déb il Hará g ra ­d u a lm e n te , desapareciendo al desapare­c er la d ife rencia de clases". E l m il o revo luc iona rio fu é aprovechado para engtifírir a l pueblo ru so y para reali­za r la po lítica de expansión de la T e r­rera In ternaciona l. S e quiso de slu m ­brar y ju s t ific a r todo con' los "p lanes qu in q u en a les" y la industria lización . V después de m il p iru e ta s en las consig­nas. el hero ísm o riel pueblo que lucha

ve 11 la propaganda sta lin ia n a para sus lin es con fu sion is ta s . P ero nada podrá d e s tru ir la verdad que s ie n te en su car­n e e se m ism o pueblo llam ado a liber­ta rse tam b ién del despo tism o bola/te vi-

AMERICADOS AMENAZAS:

O L I G A R Q U I A E

I M P E R I A L I S M O

NO o b s ta n te la in te n sa acción d es­a r ro lla d a en lo s p a ise s a m erica ­

nos p o r el " q u in taco lu m n ism o " y no o b s ta n te el apoyo q ue lo s g ru p o s oli­g á rq u ic o s y c a p ita lis ta s h a n p re s ta d o a la s em p re sa s de p en e trac ió n fa sc is­ta — incluso los q ue p o s te rio rm en te h a n d ec la rad o u n a so lem ne adhesión a la dem o crac ia— es lo c ie r to q ue el fa sc ism o y el nazism o, en cua lqu ie ra de su s v a r ied a - r , d e s eu ro p eas, * r opugnam os re s u lta n ex ó ti­cos en e s to s pai- u n a estructura

n in g u n a p a r te

han*" t *gd rVdo social l i b r e

™ X ,d o t i d e privilegiosfu e rz a cap a z de a p o d e ra rse p o r sí m ism o de la dirección del E s ta d o .

D ebem os re c o rd a r q ue el fascism o no se c a ra c te r iz a sólo p o r la e x is te n ­c ia de un p o d e r despó tico y su p er- c e n tra liz ad o , sino, ad em áB , p o r la ac ­tu a c ió n de un m ov im ien to , de u na p sicosis co lectiva, de u na disposición p o p u la r a f a n a tiz a rse p o r un d irig en ­te, p o r un je fe p rov idenc ia l, u n am o ab so lu to . Y sab em o s p e rfe c ta m e n te que los cau d ille jo s q ue en d iversos pa ises am erican o s h a n q u erido rem e­d a r la a c ti tu d de un "duce" o u n “fu h re r " , sólo h a n lo g rad o a lcan za r los e x tre m o s del rid icu lo .

¿ S ig n ifica e s to q ue e s ta m o s aq u í a cu b ie rto del p e lig ro to ta l i ta r io y que no debem os te m e r se rep ro d u zcan los m ales po líticos q ue su f re n los pueblos eu ropeos ?

De n in g ú n m odo. Si el fasc ism o ca ­rece e n e s to s p a íse s de am b ien te p o ­p u la r — p u es to q ue ellos no h a n su ­frid o las co n secu en c ias del desequlli- f r id o la s consecuenc ias del desequili- m und ia l— no d e ja de e je rc e r u n a m a rc a d a in flu en c ia en la s c a s ta s d i­r ig e n te s , la q ue se tra d u c e en un c re ­c ien te a u to r ita r is m o y u na p ro g re s i­v a elim inac ión de la s lib e r ta d e s po ­p u la re s . L a s o lig a rq u ía s a u tó c to n a s q u e h a n ap licado m é to d o s d ic ta to r ia les cad a vez q u e les fu é posib le y que d esp rec ian ta n p ro fu n d a m e n te a las c a p a s p o pu lare« y p ro le ta r ia s de A m érica com o p u eden d e sp re c ia r los d o m in ad o res naz is a la s ra z a s “ in fe ­r io re s " de E u ro p a , no t ien en n in g ú n in co n ven ien te en c o p ia r en p a r t e, a u n q u e de m odo v e rg o n z a n te , la té c ­n ica g u b e rn a m e n ta l del fasc ism o , h a ­ciendo de la su p re s ió n de las l ib e r ta ­d es púb lica s y d em ás co n q u is ta s po­p u la re s o tro s ta n to s “h ech o s co n su ­m a d o s” . Y tie n d e n a d a r san c ió n le­gal a to d o s su s ab u so s , c rean d o una n ueva n o rm a lid a d in s titu c io n a l que leg itim e la m á s d e sc a ra d a ex p lo ta ­c ión de los p ro d u c to re s .

V em os, p rec isam en te , cóm o, al am ­p a ro de la " s itu a c ió n de em erg en c ia " c reada p o r la g u e r ra , o b a jo la in ­vocación de la " so lid a r id ad co n tin en ­ta l" , se to m an d isposic iones q ue con ­so lid an la s itu ac ió n de h ech o de los reg ím en es d ic ta to r ia le s , t r a s la s im u ­lación de u n a d em o crac ia fo rm a l. Lo q u e s ig n ifica q ue la s m a s a s p o p u la ­r e s de la m a y o r p a r te de A m érica se v e rá n so m e tid a s a u n a o p resión m ayor, a g ra v a n d o incluso la m ise ria fisio lóg ica p o r d e sn u tr ic ió n q u e su ­f re n a c tu a lm e n te , en el p rec iso m o­m en to en q ue s e h a b la de a so c ia r la s a la g ig a n te sc a la b o r de l ib ra r al m undo de la t i r a n ía del h a m b re , del

te m o r y de la igno ran c ia .Y así com o d e n tro de cad a p a is los

g ru p o s o lig á rq u ico s no ren u n c ian a s u a fá n de predom in io , en el o rd e n in te rn a c io n a l no se ab an d o n an las a m e n a z a s im p e ria lis ta s la te n te s y que. aun en p len a g u e r ra , se d isp u ta n la s re sp e c tiv a s zo n as de in fluenc ia en d iv e rso s puntoB del c o n tin e n te , f i já n ­

dose desd e y a la func ión económ ica que h a n de l le n a r d e te rm in a d o s pa í­se s . A quí, u n a ex p lo tac ió n m in e ra pa­r a la ex p o rta c ió n ; a llá , u na r e la tiv a in d u s tr ia liz a c ió n ; m á s a llá , una eco­nom ía ag ríc o la g a n a d e ra . O lig arq u ía nac iona l e im p e ria lism o e x tr a n je ro se en tienden p e r fe c ta m e n te cu an d o se t r a t a de e sq u ilm a r a loa pueblos y r e p a r t i r s e su s despo jos.

E s ta s itu ac ió n , q ue c o rre sp o n d e a l p a n o ra m a a c tu a l de A m érica , no se so lu c io n a rá , ev id en tem en te , con p a la ­b ra s de b uena v o lu n ta d ni con v a g a s p ro m esas de ju s tic ia . Se req u ie re un p ro fu n d o cam bio e n la e s t ru c tu ra económ ica y so c ia l de e s to s países, q ue im p lique u n a su p re s ió n de p riv i­leg ios nac io n a le s y de c lase y un r a ­ciona l a p ro v ech am ien to de la s r iq u e ­zas del co n tin en te , p a ra p onerlo s a l se rv ic io de lo s p u eb los q u e las p ro ­ducen . Sólo de ese m odo p o d rá h a ­c e rse e fe c tiv a la so lid a rid ad co n tinen ­ta l y a s e n ta r la b u en a vecindad so b re b a se s só lidas .

www.federacionlibertaria.org

Page 4: Acción Libertaria, Nº 64. Mayo1943-Fla

Frente a a d v e r s i d a d : s u p e r a r e l d e r r o t i s m oN

U E ST R A condición de m ovim iento rom bal ivo, nos im po­n i’ una c la ra com prensión ile 1 is tundic iones r e a I.

cx ls te n les en cada luga r y en tudas Is.» c ircunstancias. P o r d liiciles ,ihi- .-.mii t--a< condiciones par:; el úesai rollo de ia co rrien te d e ¡deas que propugnam os y po r g randes que se.ni los obstácu los que se oponen al logro di nuestro s objetivo... consideram os de prim ord ia l im portancia ese conocimieni < de la rea lidad , £«• los escollos y ile los peligros, pa ra adop­t a r las táctica» que sean m ás eficaces. Sin cae r en un opor­tun ism o que d eg en era s iem pre en la c laudicación, sabem os a p re c ia r los aspectos negativos que en épocas determ inadas pa recen le v an ta r b a rre ra s in tran q u e a b les con tra las so lu ­ciones económ icas, polii ices y »■«•¡ales, (ine se basan en la li­b e rta d y en la ju sticia social.

N ad ie puede en g añ arse con respecto a las condiciones que e l m undo ofrece boy. después que lodos los Iac tores lian confluido p a ra .engend rar un estado de depresión colectiva d e Indiferencia y escepticism o. L o , continuos fracasos de bi­pa rtid o s > de los hom bres que p rom etieron e n c a ra r > resol­ver los p roblem a» ceonóm.eo-soi b le - desi'.- el poder. la prò-

LUCHA CONTRA LA REACCION:Previa Necesidad de la Acc ión Revo luc ior ia

D e s p e r t a rR

de fuerzas creadoras del pueblo

dica ......................ciam ien lo a la lucha d irec ta , d e la confianza en tos Robet- nante>, en los cand ida to“, , en las p rom esas e lec to ra l islas; el a um en to s istem á tico de la ingerencia del E stado en la " re ­gu lación" d e los derechos popu la res; la carencia de com­batí viciad > de conciencia de c lase en las g ran d e s o rg an i­zaciones o b re ras d irig idas po r el reí '.m ism o ; la represión estatiM a con tra la s tue rzas y m ilitan tes de tendencia revolu­c ionaria y l ib e r ta r ia ; la funesta po lítica «le confusionism o y liego molí i a de los p a rt U.o • sia lin iiinos; asi como m uchos fac­to res conexos a los señalado,', lian creado un e sp íritu de p a ­siv idad en las m asas popu la res que lavol’ece el avance > el predom inio de las corrien tes esl.ntis1.as; de las fuerzas reac ­cionarias.

Los pueblos han ido adap tándose, -¡ti lesisleivcia. a un p<- ligrn.'O sonie tiniienio. -lie jando a l ia s las clasicas^ conrepr; i-

la> Iunciones del E stado, todas las corrien tes políticas. de :t d e recha y d e 1a izquierda, fueron a rm a n d o a esc In stla ­m ento de dom inio, depositando en el sus m ás opuestas asp i­raciones, P o r un lado, el cap ita lism o. 1 i- c lases p iiv ilcg iad re . la s casta s o ligárqu icas, buscaron en "i Estado, n a tu ra l pro­te c to r de sus in tereses, la luida d e salvación, con tra los mo- vim ienlos sociales, c o n tra lus e lec tos de. las ci te n d e r sus cam pos de in fluencia im perialista . U ta l m odo el auge del estatism o, hasta . ' punto de con’ lo en un s e n o com petidor en las activ idades económi provocar la c ritica y la p ro tes ta «le la s llam adas "li vji-a*' t |u e reivindican fren le a la ingerencia abusic E stado , el de recho de in ic ia tiva del cap ita lism o privad ' o tra pa rte , ios pa rtidos llam ados socialistas, a quien

i doc trina, sus p rog ram as y i

T TUM OS in s is tid o con frecu en c ia so b re el d eb e r que eo rres- *■ po iide a lo s rev o luc ionario s. en el sen tido de a f ro n ta r las cond ic iones rea le s que o frece la lu ch a social, de acu e rd o a las c irc u n s ta n c ia s de tiem po , de lu g a r , de am b ien te psicológico, e tc ., sin e n c e r ra rse en d o g m as ríg id o s e in tang ib les , pero sin ceder tam poco a la s so lic itac iones de u n opo rtu n ism o seudo p ra c tic is ta , q ue e n rea lid ad equ iva le a la c laudicación , a la ad a p ta c ió n acom odatic ia .

H istó r¡em en te , e s un h echo e stab lec id o , que no to d o s los m o m en to s son fa v o ra b le s al d e sa rro llo de un m ovim iento r e ­volucionario , ni to d o s lo s pueblos son ig u a lm en te a p to s para p ro d u c ir u n p ro fu n d o cam bio en su s cond ic iones de existencia, a u n c u an d o la s c irc u n s ta n c ia s e x te r io re s sean p a ra ello favo­rab les . A m á s de un sig lo desp u és de la g ra n revolución f r a n ­cesa y de la s revo luc iones a m e ric a n a s de independencia, in sp i­ra d a s en los p r inc ip ios de aq ue lla , su b s is tía n en determ inados p a íse s de E u ro p a y de A m érica , fu e r te s re s to s de feudalism o, (pie aq u e lla s revo luc iones h ab ía n q u e rid o d e s tru ir . De igual m odo, ex is ten en to d a s p a r te s g ra n d e s núc leos hum anos cu­y a s ideas, cuyos h á b ito s y s e n tim ie n to s so n su stan c ia l m ente co n se rv ad o re s o rea c c io n a rio s — a p a r te de los in te re se s m a te ­r ia les q ue p u d ie ran d e te rm in a rlo s— y opuesto s , p o r tan to , k to d a te n ta t iv a de innovación o de tra n s fo rm a c ió n en las n o r ­m a s de convivencia .

E s ta com probac ión no inva lida de n ingún m odo la a sp ira ­ción, el im pu lso o el m ov im ien to revo luc ionario . Solo le im po­ne m éto d o s tá c tic o s , fo rm a s c o n c re ta s a d ecu ad as a los fines in m ed ia to s de la lucha , ob je tiv id ad y cohesión ideológica. P o r o t r a p a r te , si es v e rd ad q ue n in g u n a revolución h is tó r ica lia tr iu n fa d o to ta lm e n te , ap lican d o con in te g rid a d s u s postu lados, ii<» e s m enos c ie r to q ue to d o p ro g re so efec tivo en la sociedad, ta n to sea de o rd en po lítico, económ ico o cu ltu ra l, se ha debid i al im pulso te n a z y ab n eg ad o de los revo luc ionario s , de q u ie ­n es h an ten id o su fic ien te v a lo r \ f irm eza com o p a ra d ifu n d ir y a g i ta r ideas " im p o p u la re s” o “ in deseab les" y a f ro n ta r to d a s

la s co n secu en c ia s q u e ta l a c ti tu d p u d ie ra tra e r le s E o s rev o lu ­c io n a rio s h a n sido s iem p re aqu e llo s q ue se h a n s itu a d o en la v a n g u a rd ia de la h u m an id ad p a ra e s tim u la r su p ro g re so o q ue se h a n p la n ta d o f irm em en te p a ra re s is t i r la s a v a la n c h a s reac ­c io n a ria s q u e la hac ían d e s a n d a r el c am ino re c o rr id o y p e rd e r co n q u is ta s que la u to c o s ta ra lo g ra r . V encedores o vencidos, los rev o lu c io n a rio s q u e su p ie ro n p e rm a n e c e r ta le s , s iem p re han se rv id o al p ro g re so social, s iem p re h an co n tr ib u id o p o s itiv a ­m en te a l p a tr im o n io c u ltu ra l de la hu m an id ad .

P a r tie n d o de e s to s co n cep to s a f ro n ta m o s la lucha social en los a c tu a le s m om en tos. A firm a d o s en la e.\|»eriencia h is tó ­rica y en la p ro p ia ex p erien c ia q ue d im an a de los aco n tec i­m ien to s q ue a h o ra conm ueven al m undo, m a n ten em o s n u e s tra firm e oposición fre n te a la s in s titu c io n e s q u e c o n sa g ra n el p r i­vilegio económ ico y político v (pie p o r ta n to d iv iden a la h u ­m an idad en o p re so re s y op rim id o s. E l soc ia lism o lib e r ta r io — socialism o sin b u ro c ra c ia e s ta ta l— sig u e s ien d o n u e s tra b an ­dera v n u e s tra m e ta . A g ita m o s d a b a n d e ra y p e rseg u im o s esa m e ta a tr a v é s de to d a s la s co n tin g en c ia s de la lu ch a . P e ro sabem os q ue so lo pod rem o s t r iu n f a r o a c e rc a rn o s a l tr iu n fo , en la m ed ida q ue es<> itleal sea com p ren d id o y co m p a rtid o po r g ra n d e s núcleos h u m an o s, en la m edida en que se co n v ie r ta en re s o r te p a ra la acc ión de v a s ta s m a s a s p o p u la re s . Y sa b e ­m os tam b ién q ue a n te s de e m p re n d e r la m a rc h a h a c ia a d e lan ­to. a n te s de in ic ia r cu a lq u ie r acc ión t ra n s fo rm a d o ra , se rá ne­cesa rio v en ce r la s fu e rz a s re a c c io n a ria s d o m in an te s , d e sb ro z a r el c am ino h a c ia m a y o re s rea lizaciones.

P e ro eso. sin a b a n d o n a r n u e s tr a f in a lid ad social revo lu ­c io n a ria , c reem o s in d isp en sab le e s t im u la r en los a c tu a le s m o­m en to s to d a acción p o p u la r ,v o b re ra q ue lu ch e c o n tra la re ­acción , q ue re iv ind ique la lib e r ta d , q ue d efienda lea lm en tc las v ie ja s co n q u is ta s ju s t ic ie r a s y l ib e r ta r ia s , lo g ra d a s a co sía de c ru e n to s s ac r if ic io s po r a n te r io re s gen e rac io n es. E s es'.r. u n a acción v ita lm e n te n ecesa ria p a ra a b r i r el c am ino p a ra fu ­tu r a s y m ás v a s ta s rea lizaciones.

h a n de producir se cam inos <Hi,. ra m fo rm aránn ía <le i'i -1 aciones et Hie 1os pueblos del

m undo, lilla nielli la e s tru e tu ra -l.-rna de cad a pais. < ‘uns ta n tem en tc se

fo rm u lan plano?: n a ia ese (in. slendn los m ásim port:finies de cítos el P ii in Rr vendu*’, s in lc-sis del proci am : 1 laborista mH lès

l o c o m e m a í 'yin " 1" de la - b a rre ra s

ad u an e ra s oui- 1in s ta ht» 1raba iimi e l com ercioe x te rio r d e la>. i . ptiliiii 1» lat inoainc r ican as ,p rn t oi-l n ivel ries.ií•iroso

libaciones v el e s ta r icamii -mo in d u stria l

is sa tieni'il- m íe esl; 1 lieu ev idencia no r-ica na no es m ás que 1111,1 .-a lid a im puesta

po r la necesidad1 de co locar 1 1 eno rm e sa ldo queles mii 0 consecuenciariel a ";iK iin!am iento uu lii-ir ial pr educido p o r lag u e rra . P o r ot concesiones las

los misti ins rec tores del cap ita lism o li-1. ,1 — ing lés \ IV! t- .1111-1 «•min­— buscando la

p e rm ita ev ila r t•anibins ile m a-vi res 1irnpnrcmi •ial y pn litieo .

Si e:• lud íam os l is condici |lte ett l.-i post-g u e rra pueden d u r i>i- ¡1 11uta p a / d u ra d e ra —

IT los— a pal 1. ' d.'. *1011 òr en cùenUlos r r i •ore.'1'd e l 1 e mos 11'ilei p rese n taim a ri -alidad pi •rn im iciiie ; In m ism o ae-

conceden es r-nerlo. si p a ­

tu llan i los I

la legislación e s ta ta l, el con tro l v la '•nacionalización" a c a r ­go de las instituc iones oficiales. La táctica de la conquidi-i del poder politico, que degeneró en un e lcc loralism o incu­rab le en los g randes pa rí idos m arxista,s. m anejando coa igual lin lam inen a las c en tra les m a rx is ias poi ellos dirigidas, dió a la s al avance esto lte la , c reando el m iIu que condenó i los pueb los a las m ás sa n g rien ta s c a tá stro fes . E l m ito del

E s ta d o como c re ad o r de b ienestar y como g iiran tia d e 11- berdción. El m ito del E stado sa lvador, m ed ian te las leyes lla m a d as “o b re ra s" . E l trac aso de esa po litica fué una de la s c au sas ilei escepticism o di- los pueblos j uno de los m ás fecundos filones exp lo tados po r la dem agogia totdli-

Reeonacentos esa "psicosis '' colectiva -y la s condicione., a dversas c readas po r el auge riel estatism o. L ejo r de n - Lroceder an te ta le s obstáculos, a firm am os la necesidad •!.• resis tir lo s j dn oponerse f irm em ente an te sus de rivaciu ik s

REVOLUCION LATENTEe la n tn irn le . ,-n r i «spi n i u i/i•' It J.'.1 observa-d o n s ob je tivo s, la etni ricettili de tine .ve ¡tu­Ina cerrado un perai.ito h ist oriro, para u l ' i 'r

/n e ira — Iras del a r t iInibiti d e inic iarse tu iti e tapa nu e ra , u n o r-dea d is tin to . — m ejor 0 p e o r—- a l q u e habíaregido h a s ta cu tmi.ee

N o hace titila pro fesar de term inadasideas, n i a b rigar sue ilingcnesia so-n a l , liara in ilb u t n h i ronclusió ii de queunit conm oción tan 1extraorti m itriti conio la1 /n i com porta imra el m undo 1

trinniiiiht ren­la u ración d t l estuilo de cosas que regia an-

In to rn ie n te , por m urilo i/tu' e - tr e n in i sii m genio y sii cu più,n id i/ ir /u r .« ! '» , in* c*’a- disiati m iht consci'vudorcs.

N ecesuriaM tentv habrdii ile p ioduc ii .■<■■. dcspués ite t mi I , I m e min snellii uh i. coiidt- eiones favorah les a mi cam b io /i r o f u n t l n un ordunam ien lo in te ro cn lux re lue«m ix sociales, a u n a trans] orm a citili rcvolueioim - riti. L o reconoceu ho». impUci tin n e n te . Im m ìsM on gotte m a n Ics «jwk parti so stener guerra ne han r isto obligados n m iopi ite m. -

1 /r e n tc u tditltis desusadas,/iìlutiam o y que reconstrucción cu tics re¡orni as. P< • 1711e su fre n In g

icndo i se insili lililí •bins r¡m lo,

• Kj >r-1 lit iti « ■■•jornia*. E llo s m l u g n i, e sp i rau.

L u < ■ ■•hrei'Ui sc ha lla , por a si </e«-ii7n. . 1.• stililo la te n te . P im c ito »<■ q u ie n ilei • que sen un hecho lu ta i , necesaria inen te r o m p id o .1/ positivo en 111 acción real n a ­dara. P ueden so b reven ir cam bios a p a re n te ­m e n te favorab les , pero que ocu lten un re­su rg im ie n to ite las viepi.i fu e rza s opresivas. P uede producirse una revolución ap a ren teo una revolución cseam otem la , So fo sen i »im c<■ i i l a i l c r a p o s i t i v a ^ rt co lucion. y 'os

anhe las de libertan 1/ ju stic ia .

1 l»ul 11■es in sp ira ro n > n a lr/a ro u la derUl's ' 1 Ì

m undo;"^V íperaron . ! ’s i- tem a ' leuda! comí ■>-tic ron 1V es 1 ali ib liea . E lla s biciesib ic la hum anización ledi,-is -de l rég;imon de tralci, lo C uando luvit ron fe,cuando se n tía n u n a e. tusa com o cau sa prop ia.niiiEiut;< f lie r/.l to é e-. 1»ay. de dei m o r sil im pul-so Fn cam bio , cuantío las invadió el ■s.inimov la incom prensión. su rg ie ro n caud illo s quea proveí

No s<- t r a t a de for;m u la r p ro g ra m a s ir rea ii-ni asp irac iones de las

posib ilidades de nuesti a época. Rso se ria con-y c re a r lu is as 11 uviones. lo que i:quivale

a la de-m atrosia de los po litices di1 c o rto vuelo.Lo que es preciso, ind ispensab le, e s que el pue-lito te n c a conciencia de q u e cualqu ie r• tran s -

re. y a sea p o r ob ra dela co rra la d o cap ita lism ::i. y a sea p o r acción dela s m a sas. debe te n e r com o m o to r su s prop ias111er/. as: c reado ras .

RHISTENCSA 4 L CAPITALISMO Y AL EST A T ISM OS L 011 medio de los com plejos acontecim ientos que ac tua lm en te .1 >-

a rro lla n , pUi de lineéi s,, mu. al li mación defin itiva , que e sta pii la con­ciencia de todos los que asp iran a supera i las coiidieiufiPs de exi.sieneia después de e sta gue rra , e lla consiste en la Imposibilidad de 1 -s la m a r el cap ita lism o privado, que rail am argos trillos d iera a la hum anidad

Q ue " la s »usa* no pueden se r com o a n tes del es ta llido de ¡a g t ie n .r lo d ijeron desde los comienzos d«. la cris is actual los propios e stad ista- bu rgueses y los m ás lam osos pensador- ». e -e rilo res , econom istas tip los

Ei to ta l i ta r i s m o no s e r á v en c id o sólo en ios campos de batalla

A P O V O A TO E A CORRIENTE E)E LI B ER A C I O N

Plli'de dei ¡1 ins las tende: ■cadas hacia

• d ife re n c ia ro n

pai si En .m a tices ile las reioi-rtui»- p royec tadas y discu tidas .s0l n ¡¡1 nvon.-lrt postbélica, pero m uy pocos iu rnu ila run la solución en térm inos pi por la sencilla razón de que lus m ás audau:.- planes uubernam en iale

plan*"' n d * U"|' ,illsa: *iJ ,lu auSlljílitl»d de | cap ita lism o

canadienses del doc to r Marcli. " lan iliean \ in ''p iú í- tv s u ' l'rcm e ^ laj! d"-•iones lie preyuei 1,1 p e ro de ningún n.uüu una 1 ran -l.ir iiiacam Ñ quide p a ra s iem pre los vicios esenciales de l cap ita lism o ni sus leí

Pas le j'd

com u plevencióo vuu it» su~ eieenis, van ic o. haberse m ullip licado una ^iiUe.-ca .•yoluciún ^le la lecim .a e

las minoriti« económ icam ente domm

del cap ita lism o d a s e priv ile tnai repe llila «le las^ c de

,.«ui a tie- ............... .............I equ ilib rio social, aseguridad y de pa /. conservando el ocurridos en nu c sim -aglu, d,. lus m áquina c ap ita lis ta V

E> c ierli.1 que. eit sil desaiTOllo de producción lo im idable. aplicando tecnica en iodos ios te r r e i» - Es en rallies resu ltados. Pe ro lau e ie ilo trab a jo hum ano lité peí lecciiitiadu a l m áxim o, ijue la 111 la dcsoocupaciun. la g u e rra , lo a ro n los tencímenos ea'usft eional protiucción, destinada a ennquecpi a la hm yir-sia

dllcción". d esiru>endi> enorm es can tidades de productos 1 m asas hum anas m orían de ham bre , no cam b ia rá su na

d e producción in- inm oral por e l sólo hecho de ex-

I tie los p roducto res en beneficio de ules. e< un sistem a condenado p o r la

instila cías..' lm eresada , puede contj.ii un esiatlu de Iiieneslai coleclivu, ii> sistem a actual, después di los hechos •spanlosos d esastre s causados por la

la s conquistas de la ciencia \ de la n o que el m aqum ism o alcanzó adnii-

E sia tio la Iunción de

i d ic tadu ra wla I

, deslíe

ni m ilitan tes libe rtario s, constd ivunos que el p rln ie r d e b er en e sia 1 todos los que com prenden e l pe lig ro que p iiI ta ñ an la n - tau ia-

eap iia lism o privado \ el e statism o creciente , es luchar con tra •ilneua¿as, vn defensa de los derechos y de la libe rtad de los

T OS lib e r ta r io s liemos; s ido los p rim ero s en de­c la r a r al to ta li ta r ism o enem igo nú m ero uno

de la h u m an id ad y en p ro c la m a r la necesidad de su ra d ic a l ex te rm in io , .si se q u e ría e v ita r que aq u e lla fu e ra h u n d id a en un ab ism o de abyección y m a n te n e r ex p ed ito el cam ino p a ra un m ayor p e rfecc io n am ien to e n lo d o s los ó rdenes de c o n ­vivencia .

Lo hem os hecho m ucho a n te s de que los d ir i­g e n te s d em o crá tico s d e sc u b rie ra n el pelig ro to ­ta li ta r io ; a n te s q ue la g u e r ra o b ligara a m uchos je fe s de E s ta d o f i j a r c u n o o b je tiv o inm ed ia to la d e s tru cc ió n líe los go b ie rn o s to ta l i ta r io s ; ant.es q ue las in a u d ita s c ru e ld ad es c o m e tid as p o r los a g e n te s de e so s g o b ie rn o s — cru e ld ad es r e g is tra ­d a s a h o ra en los in fo rm e s ofic ia les, pe ro q u e fue­ron s ilen c iad as a n te s , cu ando la s su lr ia r i los opo­s ito re s in te rn o s y las m in o ría s ind e fen sas — des­p e r ta r a n el h o r ro r y la ind ignac ión de to d as las p e rso n as h o n esta s .

F u im o s lo s p rim ero s en d e n u n c ia r y a ta c a r el fasc ism o , el naz ism o y • lem as fo rm a s de abso ­lu tism o de E s ta d o , p o rque co m p ren d íam o s que se m e ja n te rég im en , q ue se b a sa en la anu lación to ta l de la p e rso n a lid ad h u m a n a y c o n sa g ra la d ic ta d u ra om ním oda de una c a s ta g o b e rn an te , so ­m etida a su vez a los d ic tad o s de un je fe ab so ­lu to . te n ia q ue l le v a r n ece sa r ia m e n te a la d e g ra ­dac ión in te rn a y a la ag re s ió n ex te r io r , con su s m ás n e fa s ta s co n secu en c ias , p u e s to que la v io len­cia y el cu lto ile la vio lencia c o n s titu y e n lo s r a s ­gos esen c ia le s de ta l rég im en .

T a n to m e jo r si a h o ra n o e s ta m o s so los cn la condenac ión dei la sc ism o y cn la lu ch a p o r su a p la s ta m ie n to . H oy su m an m illones los hom bres y m u je re s de to d o el m undo q u e — ¡a l f in !— com ­prenden q ue la h u m an id ad no tien e sa lvac ión si no a n iq u ila p a ra s iem p re al m o n s tru o to ta lita r io . Y no nos re fe rim o s a los q ue fueron m ovilizadas p a ra la lu ch a sa n g r ie n ta en v ir tu d de u na orden com pulsiva, s ino a los q ue conestente y v o lu n ta r ia ­m en te se h a n lan zad o a la im proba la b o r de h a ­cer al m undo h a b ita b le p a ra s e re s lib res , dignos Je l ca lifica tiv o hum ano-

Sin em b arg o , a u n sufesial.cn ilu&tones o equí­

vocos que pueden s e r fa ta le s , hac iendo en g ra n p a r te e s té r ile s los g ra n d e s sac r if ic io s q ue se re ­qu ieren p a ra a p la s ta r al to ta li ta r ism o . U no de ellos consiste en la c reen c ia de q ue se t r a t a so l de u n prob lem a m ilita r , de lo g ra r q ue la s nacio­nes d em o crá tica s acum ulen su f ic ie n te poderío en m o p a ra d e r r o ta r dec is iv am en te a los naz ifasc is- t a s en todos los cam pos de b a ta lla , d e sp u és de 'o cua l se n o s p re se n ta r ía una n ueva e ra d e paz. Je lib e r ta d e indefin ido p ro g re so .

T an fu n e s ta e s e s ta c reencia com o to d a s a q u e ­lla s que inducen a los h o m b res a c o n f ia r c ieg a ­m en te en los g o b e rn a n te s , en cu a lq u ie r c lase de d ir ig en te s p ro v inc ia les , ex im iéndose de la re sp o n ­sab ilidad y del e s fu e rzo p rec iso s p a ra e n c a ra r y re so lv e r d ire c ta m e n te s u s co m u n es p rob lem as. Y lo se r ia ta n to m á s en e s te caso, ten iendo en c u e n ­ta q ue la s ten d e n c ia s to ta l i ta r ia s , la p ropensión a l e s ta tism o , la c rec ien te e x p an s ió n de los po d e ­re s g u b e rn a m e n ta le s , v a n g a n a n d o te r re n o en las p ro p ia s dem o crac ia s o seu d o d em o crac ias , inclu­so aq ue llas que. no tien en e l p r e te x to clcl e s ta d o de g u e rra , p a ra lim ita r cad a vez m á s lib e r ta d e s popu lares.

E s to s ign ifica el pe lig ro d e q u e el to ta l i ta r is ­m o re su r ja , b a jo fo rm a s a p e n a s d is im u lad as, a p e s a r de la d e r ro ta m ili ta r de las p o ten c ia s que se h an co locado b a jo su b a n d e ra . P o d rá r e s u rg ir si no se co m p ren d e a tiem po q ue to d a s la s fo rm as de ab so lu tism o son m alas , q u e to d o d iscrec iona- lism o a u to r i ta r io e s m ol ta l p a ra la soc iedad y q u e e s p rec iso c o m b a tir los m éto d o s to ta li ta r io s , no so lo en su típ ica e x p re s ió n n az ifa sc is ta , sino tam b ién b a jo cu a lq u ie r o tra fó rm ula que a d o p ­te n . incluso s e a la del socialism o , del com unism o o de la " d em o crac ia fu e r te " .

E l to ta li ta r ism o no po d rá s e r vencido so lo c n los cam p o s de b a ta lla , s ino q ue d e b e rá se r lo p r in ­c ipa lm en te en la v ida civil, en la s ideas d ire c tr i­ces de la soc iedad , en la s fo rm a s p re c isa s de la- r>rganización social. Y esa g ra n ta re a c o rre sp o n ­derá , no a los m ilita re s ni a lo s po líticos, sino esenc ia lm en te a los p ro d u c to re s , a los té cn icos, a loa h o m b res de ciencia y de tra b a jo .

• bis ide

p la n tea la p ir a n a c o n tra r re s ta r a e tienes poi* la de fe n - 1 del .i. ideales j la d iun idad cedí r a n t ism o.

É s e s |e sen tido tunda a .-er libres. , 1 que pern ii' nos todos Ins q u e de a lgún en e s ta lu c h a toi al a la q cam riel con ju n to hum ano

à disi i n 'os írrádo - ' de ^ ín ic cada d o c trin a . Ni Ins " ,-t„ de la noche a la m a ñ an a 1 n a n o s a bd icam os • j. los pr cía de 11 lie:-Ira luclta. H ay e s tán luchando co itira el' bien dolor-m inada fina lidad

das p a ra h o s ti liz a r

nos. iiiKltses, 1 pueblos que del

E11 E uropa, en A sia, en A i ’ lu cha p a r el o lijetlvu Iiitoím e r rep a ro s a Ins sacrif ic io s • feci iv a s p a ra los pueb los que r l l ic a r a los a n t i lo ta lita i ios 1 1 ^superficie del pe lig ro sin i-i

u e s tra condición ile M u r ía n ! os. es desconocer el eno rm e 1 le i /a s sociales c s la n rea lizan ' 1 to ta li Lirism o.

i ■■ e;. .1.11 ¡o- i.,.|is| ruel I-

I i < I i l.a m und ia l c o n ila

www.federacionlibertaria.org

Page 5: Acción Libertaria, Nº 64. Mayo1943-Fla

NUESTRA SOLIDARIDAD CON QUIENES SE SACRIFICAN EN LA CRUENTA LUCHA CONTRA LA DICTADURA NAZI

EN la s p eo re s ép o cas q ue v iv ió la h u m an id ad , sa lie ­ro n a luz s u s m e jo re s re s e rv a s m o ra le s , lo s ind i­

v id u o s y g ru p o s m á s h ero ico s, p a ra lu c h a r c o n tra las t i r a n ía s , c o n tra la s in ju s tic ia s y c o n tra lo s c rím enes de los d o m in ad o re s . L a s m á s fe ro c e s fo rm a s de r e ­p re sió n , los m á s b ru ta le s to rm e n to s , lag p e n a s de m u e r te m á s te rr ib le s , no pu d ie ro n p a ra liz a r la acción d e lo s m á r t i re s de un ideal de l ib e r ta d ni a c a l la r las voces d e lo s enem igos de la abyección re in a n te . L a h is to r ia e s tá llen a de p á g in a s lum inosas , de n om bres g lo rio so s, de ep isod ios ép icos cum plidos p o r las m u lti­tu d e s an ó n im as, q u e e s tim u la ro n y re sa ro lla ro n los c o m b a te s c o n tra la e sc lav itu d , la m e n tira y el c ri­m e n social. E n m edio de lo s n eg ro s n u b a rro n e s de las m á s o b sc u ra s épocas de b a rb a r ie y de reacc ió n , n a ­c ie ro n del sen o del pueb lo lo s g e s to s e je m p la re s que s e ñ a la ro n el cam in o de la lib e rac ió n . C u ando p a rec ía p e s a r so b re el m undo la m á s t r e m e n d a c a rg a de od ios, de v io len c ias y de p re ju ic io s , u n a voz, p rim ero , y m u c h a s después, a lza ro n la b a n d e ra de la rebelión pro c lam an d o la v e rd a d y lan zán d o se a l f ra g o r de u na lu ch a desig u a l, ca s i s iem p re de su b lim es con to rn o s.

. L a h u m a n id a d sen ten c ió a l m á s h u m illan te o lvido a lo s do m in ad o res , a loa v e rd u g o s , a los tra id o re s , y g ra b ó en le t r a s de o ro los h ech o s y los n o m b res (Ic­io s a b a n d e ra d o s de la lib e r ta d . N in g u n a m istificac ió n de lo s h is to r ia d o re s o f ic ia les p udo b o r r a r el recu e rd o , la g r a t i tu d , el h o m e n a je p a ra lo s cam p eo n es de las ca u sa s del pueblo.

H oy , en la E u ro p a a to rm e n ta d a p o r la fu r ia del n a ­zism o, e n la s t i e r r a s im p re g n a d a s de s a n g re y de lá ­

g r im a s . en la s g ra n d e s c iu d ad es y en la s m á s ín fim as a ld eas donde flam ea t r iu n fa n te la b a n d e ra de los ase­s inos de la G e s ta p o ; en la v a s ta E u ro p a desp ed azad a p o r la g u e r r a to ta l , e sp a n ta d a a n te los sád icos, los inconceb ib les m éto d o s de persecu c ió n y ex te rm in io de la so ld ad esca b o r ra c h a de odio ra c ia l; donde ca­y e ro n p o r m illones la s v íc tim as, a se s in a d a s p o r los p e lo to n es o s e g a d a s p o r el h a c h a de H itle r , ase s in a ­d a s en m a sa con el plom o y el fuego , con el h a m b re y la p e s te ; en e sa E u ro p a donde se h an sa tis fe c h o los m á s b estia le s a p e tito s de los v io lado res , de lo s inqu i­s id o re s , de los m a ta r ife s de rehenes, q ue p ra c tic a n el “ nuevo o rd e n ” , la lu ch a h ero ica ad q u ie re re lieves con­m ovedores. C uando se p ien sa e n el t e r r o r pardo , cu ando se p iensa en los e sp ía s y v erd u g o s d e sp a r ra ­m a d o s p o r to d a s p a r te s y áv id o s de v ic tim as, cu an ­do se im ag in a el am b ien te s in ie s tro q ue dom ina en la E u ro p a m a r tir iz a d a , se p uede conceb ir la m ag n itu d del c o ra je y del s ac rific io q ue em p u ja n a la acción a lo s rebe ldes , a lo s sab o te a d o re s de 1a. m a q u in a r ia nazi, a los g u e rr ille ro s que se ju e g a n la vida, a los o b re ro s q ue en las fá b r ic a s t r a b a ja n "m al y poco", a los que se n iegan a m a rc h a r a A lem an ia a cum plir t r a b a jo s fo rzad o s, a loa q ue v o ltean a tiro» a los ofi­c ia les y so ldados in v aso res , a lo s que h acen v o la r a d in am itazo s los focos donde v iven y s e d iv ie rten ios nazis, b u rlá n d o se con nu ev o s a c to s hero icos de las m a ta n z a s de re h e n e s en m asa , ú ltim a ex p resió n de la m o rb o sid ad c rim in a l de la s b a n d a s del T e rc e r R eich...

E s a lu ch a g ig a n te sc a d e m u e s tra que a p e sa r de los t rá g ic o s e r ro re s q ue co m e tie ro n lo s pueblos so ju zg a ­

dos, a p e sa r de la s tra ic io n e s que los e n tre g a ro n a m an o s de los ve rd u g o s, a p e s a r de los g o b ie rn o s " t í ­t e r e s ' ' , com o el del sen il m a risc a l P e ta in , q ue p re te n ­d en se g u ir en g añ án d o lo s , la o p resión h ace g e rm in a r la s a n ta reb e ld ía , la lla m a que ilu m in a el cam ino de la liberac ión . E s a epo p ey a de lo s q u e e n c u a lq u ie r p a r te y en cu a lq u ie r fo rm a com b a ten c o n tra lo s op re ­so re s n a z ifa sc is ta s , f ru to de la s m e jo re s r e s e rv a s h u ­m a n a s , enciende n u e s tr a s e sp e ra n z a s e n u n a p ro n ta re p a ra c ió n . S i l a m áq u in a p e r fe c ta q u e H im m ele r y su s a g e n te s h a n m o n ta d o p a ra d e s tru ir el e s p ír i tu del h o m b re , s i la dem encia de los ch aca le s de la G estapo no pudo en m u d e c e r y m a n ia ta r a los pueb los después de c a s tig a r lo s con su s m á q u in a s de g u e r ra , E u ro p a r e s u rg irá . L o s p ueb los q ue n o se r in d en a n te sem e­ja n te te m p e s ta d de b a rb a r ie h a rá n re n a c e r so b re las cen izas y so b re la s ru in a s , de la s t i e r r a s a b o n ad as con c a rn e y s a n g re h u m a n a , el m undo de paz, el m u n ­do de ju s tic ia q ue n o d e ja r á n i el m en o r re s to de los ve rd u g o s.

Sean q u ienes se a n los q ue lu c h a n c o n tra los nazis y fa s c is ta s q ue so ju z g a n a l v ie jo c o n tin e n te ; sean cu a les fu e re n lo s m o tiv o s q ue in sp ira n su hero ísm o, noso troB n o s c o n sid e ram o s h e rm a n o s de to d o s ellas, de to d o s los h o m b re s y la s m u je re s q u e defienden , a co s ta de su p ro p ia v id a , lo s p rin c ip io s esenc ia les de la d ig n id ad h u m an a .

S abem os q ue en to d a s la s lu c h a s de e s a especie o cu p an el p r im e r p u e s to lo s tra b a ja d o re s . Sabem os q ue siem p re e s tá n en p r im e ra línea lo s m ili ta n te s de la lu ch a social, lo s a u té n tic o s rev o lu c io n a rio s , iden ­

tific a d o s co n los su fr im ie n to s , con la s reb e ld ía s , con la s a sp irac io n es de lo s p u eb lo s t iran izad o s . Sabem os q ue su s g es to s te m p la n el e sp ír itu de la¿ m u ltitu d e s ind e fen sas , la s p re p a ra n p a ra el d ía h is tó r ic o de la rec u p e ra c ió n de la lib e r ta d , las in c ita n a te n e r fe en el p o rv en ir, a p e sa r de la s te r r ib le s co n tin g en c ia s que h ace añ o s so p o rta n .

S abem os que la g u e r r a s u b te r r á n e a c o n tra los o p re so re s so cav a poco a poco su s b a lu a r te s m á s po­d e ro so s y s e r á d ec is iva en lo s d ía s inev itab le s e n que lo s que se c rey e ro n 'in v enc ib les" e jé rc ito s de H itle r rec ib an e l d igno ca s tig o p o r s u s c rím enes. A nhela­m os a rd ie n te m e n te q ue to d o ese he ro ísm o a ce le re en to d o lo posib le el fin de lo s h o rr ib le s su fr im ie n to s de lo s pueb los so ju zg ad o s . Y que lleg ad a q ue se a la h o ra de la re c o n s tru cc ió n , se a n los pueblos m ism os que d ie ra n t a n a lto e jem p lo de esto icism o , q u ienes e lijan el cam ino de la l ib e r ta d e im p o n g an el re sp e to de un derech o co n q u is tad o con ta n to s sacrific io s.

C uando la h u m an id ad pone a p ru e b a el e sp ír i tu de su s m e jo re s hom bres, cu ando el f ie ro v e rd u g o se d e se sp e ra a n te la o la c rec ien te de re b e ld ía y de ac­c iones hero ica s , n o so tro s sa lu d a m o s a lo s co m batien ­te s an ó n im o s q iic en c u a lq u ie r p a r te pelean p o r la lib e r ta d . E so s h é ro es no p e rten ecen a e s te o aquel sec to r. C o n s titu y e n la r ic a , la in a g o ta b le re s e rv a h u ­m a n a q ue p ro y e c ta luz con su e jem p lo en uno de los máB o b scu ro s m om en tos de la h is to ria .

Con la m á s p ro fu n d a em oción sa lu d a m o s com o a h e rm a n o s n u e s tro s a los t i ta n e s q ue a b re n cam ino a l g r a n d ia del re su rg im ien to .

2 JFNGUAJFS i lo s ü sados p o r. . . . . . . . . . MR. W ALLACE YD I S T I N T O S [ M R . J O H N S T O N

UN MOVIMIENTO JOV EN QUE M A N T I E N E EN A L T O LAS

H T A g ranlas revoluciones, desde la Iniciada por C ris to hace ya dos mil años,

h a s ta la ru sa de 1917. h a b la ro n p o r el hom bre del pueblo que regó con su san g re los cam pos de b a ta lla . Los pueblos, aunque a lien tas y a veces con exceso, buscaron s iem pre ei cam ino de la luz"

"E n o sle siglo no h a b rá nación a lguna que tenga la po testad divina de e x p lo ta r a o lí a» naciónos. L as naciones m ás a n tig u as y m ás Inerte s te n d rá n el priv ileg io de a y u d a r u las m ás jóvenes p a ra que inicien su industria lizac ión , pu ro s in el m eno r im perialism o económico o m ilita r" .

D e los op tim ista s y c ris tian o s d iscursos del v icepresiden te de los E s­ta d o s Unidos, M r. W allace . p ro n u n c ia d as en Chile, e x tra c ta m o s dos p á rra fo s que y a qu is ieran p a ra s i, en estos tiem pos de Incondicionalism o c lau d ic an te , n u e s tro s lide res so c ia l is ta s y s ta lin ian o s . W allace . que ha poco hab ló sob re la "dem ocracia c ris tian a " como única solución al pro­b lem a d e la reconstrucc ión de posguerra , no se m ide en los térm inos cuando ha b la a loa pueblos am ericanos. A los m ineros chilenos, le s pro­logó su m ensaje con un "com pañeros", que h a b rá h e d ió so n re ír a los m a g n a te s de la vecina república , que lo ag asa jaro n en tra je s de gala. P ro m e te una revolución, re iv ind ica p a ra la m asa del pueblo e l derecho d e "b u sca r la luz", con tinuando la g loriosa e ste la de las g randes revolu­ciones h is tó ricas . Y com o ro tu n d a p ro m esa de rep a ració n p a ra la A m é­r ic a encadenada a l im perio d e lá lib ra e s te r lin a ' y Sel dó lar, el vicepresi­den te anuncia la e ra de la so lidaridad s in im perialism os, d e la ayuda des­in te resa d a ile la s naciones g la n d es y fu e r te s a las m á s pequeñas y po­bres.

Si razones de c a rá c te r d oc trinario no d e m o stra ran la im posibilidad de un m undo cap lia lis ia que renuncie a " fren a r" , por Lodos los medios, a san g re y a fuego, con cárce les y destierros, esa "revo lución" que W a­lla ce describe como in in terrum p ida m arch a de los pueblos hacia la luz; si la experiencia no de m o strara la incom patib ilidad de un m undo cap ita ­l is ta con la supresión del dom inio im perialista , nos h a ría n d uoar do la e ficac ia d e los posLulados del e s tad is ta yanqui, los m ensajes y los "Idea­le s" enunciados, se m an a s a n te s de su e s tad a en Chile, p o r o tro em isa rio norteam ericano , r ep rese n ta n te de un poder m ás fu e r te que iodos los po­de res en su p a ís . N os referim os a M r. E r ic Johnston , d e c uyas decla ra ­c iones nos hem os ocupado en an terio res núm eros del periódico.

P a r a M r. Johnston , el prob lem a de la posguerra consiste en conser­v a r y a fia n za r el s istem a im peran te , a l que definió como a l m as perfec to ele los que la m en te hum ana pudo c rear jam ás , N osotros — dijó— apoya­m os la ac tua l política del E stado como una necesidad tr a n s ito r ia im pues­ta po r la g u e rra . P a ra a fia n za r e l sistem a, el C om ité in te ram ericano que rep rese n ta b a y la C ám ara d e Com ercio N orteam ericana , que preside, se p reocupaban desde y a en e stab lecer relaciones, p a ra s a b e r lo que po» d r ía c om pra r y vender su pais en la e tap a de la reconstrucción.

M ien tras el vicepresiden te W allace anuncia una revolución en la po­l ít ica y en la econom ía cap ita lis ta , y m ie n tras e l p residen te Roosevelt a firm a que e l E stado a seg u rará el " tra b a jo p a ra todos" y la s c u atro fa ­m osas libertades, M r. Johnston , vocero a u torizado del c ap ita lism o yan ­qui, re iv ind ica los sag rados derechos del s istem a a c tu a l p a ra sobrevivir, p a ra perfeccionar su m ecanism o d e in tercam bio com ercial, y opone a la p ro m etid a tu te la oficial d e lo s trab a ja d o re s e l derecho y e l "incen tivo" de la in ic ia tiva p rivada , de la m eno r ingerencia e s ta ta l en lo s p roblem as d e la econom ía nacional.

N oso tro s sallem os a qué a ten e rn o s . Sabem os que los m e jores deseos de cualqu ie r estad is ta , los m ás bellos p rog ram as y la s p rom esas m ás b rillan tes, ab stracción hecha dei contenido dem agógico que puedan ence­r a r , se e s tre lla rán co n tra la vo lun tad de las m inorías priv ileg iadas, que s e rá n d ueñas de la situ ac ió n m ie n tra s e l s is te m a su b sis ta . Q ue é sto suce ­d a o no, depende de lo que haga e l pueblo.

p s i c o s i sDE GUERRAE

L desequilibrio m oral de term inado en m illones de individuos por la a n terio r g u e rra m undia l, consecuencia d irec ta de in tensos su­

frim ien tos y de una prolongada tensión en los e sp íritus, ha dado lugar a g randes tra s to rn o s psíquicos y, según au to riza d as opiniones, lia pro­ducido no pocos elem entos pred ispuestos a explosiones de violencia y de histerism o colectivo que el fascism o — en g ran p a rte fru to de esa psicosis— ha aprovechado eficazm ente pa ra llevar adelan te sus aven ­tu ras de dominio.

No cabe duda que la gu e rra actual, co.i sur, 'te r rib le s bom bardeos sobre la población civil, las to r tu ra s y privaciones im puestas en toda E uropa ocupada por los nazis y la propia prolongación del conflicto — m ayor que el an terio r— . ha de roducir efectos no m enos funestos

He ahí uno de los g randes p roblem as que ha b rá de a fro n ta r la hum anidad en el periodo postbélico y que condicionará en gran parte las creaciones de d iverso orden. Su solución no se rá fác il ni ráp ida . H ab rá que d a r a esa gran m asa hum ana la posibilidad de readap ta rse a la vida norm al, de sa tisfacer dignam ente sus necesidades esenciales, de re to rn a r a un trab a jo equilib rado y productivo. SI en luga r de eso, se la som ete a una situación de m iseria, ham bre y desocupación, como ocurrió después de la gu e rra a n tsrlo r. es Indudable que la des­m oralización m ás absoluta ha rá presa en eso3 m illones ele hom bres y de m u je res y hab rá nuevam ente m a teria l human'» p a ra los m ás Ines­c rupulosos aven tu rero s y dem agogos. ,

p j1/ . aluvión de acontecí* ■*-' mu ñios producidos rii las últimas dos décadas sobre el escenario mundial ha obligado a rectificar Muchas teorías y ha des­mentido no pocas previ­siones que se consideraban casi infalibles, en materia política y social, Xingitna doctrina, ningún m o v i ­miento colectivo han sali­do indemnes en sus fo r ­mulaciones teóricas y sus inflados tácticos de ac­ción. al chocar con la du- fa y aleccionadora expe­riencia que la humanidad ha sufrido en este periodo de su historia. 1

'E l socialismo, en .vil am­plia acepción de corriente de ideas y sentimientos que persigue la realización de la justicia como base de las relaciones sociales, no podía dejar de sufrir. Por tanto, profundas y sustanciales modificaciones en su bagaje doctrinario, sus métodos y ti ícticas de Iu cha.

Pero, mientras los par­tidos mar.vistas, reform is­tas o sedicentes revolucio­narios. a fuerza de sucesi­vas desviaciones y adapta­ciones oportunistas, lian terminado por vaciar de todo contenido socialista su respectivo programa de partido. confundiéndose sencillamente con los que

VIEJAS IDEAS SOC IAL ISTASlevantan la desteñida ban­dera de una democracia llecad> tile, nosotros, los so­cialistas libertarios o anar­quistas, afirmamos hoy, a través de la formidable experiencia que sufrim os ¡unto con los pueblos de lodo el mundo, las ideas V las reivindicaciones fu n - da¡ncntalcs del socialismo, las que han promovido los más fecundos motim jcu- tos .{aciales de la historia de la humanidad y que, li­bres de deformaciones ait-

- Ton la n ú ~ ' ¥cpnrwU S V c t virus dictatorial, que han desnaturalizado su esencia justiciera, podrán consti­tuir. la base de una recons­trucción racional y justa.

.Yo lia fracasado el so­cialismo, como aspiración igualitaria de dignificación de las masas oprimidas, ni como fórm ula de organi­zación de la sociedad, sin privilegios parasitarios. Lo que ha fracasado es el re­formista/) q u e pretendía realizar las reivindicacio­nes de aquella doctrina por m e d i o de la legislación burguesa; ha fracasado también la organización estatal totalitaria que con­

vierte al socialismo cu una caricatura, al fundirlo en rígidos moldes autoritarios donde los productores ca­recen de toda libertad ilr determinación y donde la igualdad social es también un m ito; ha fracasado ese sistema cttarlelarío de so­cialismo de Estado, que constituye la peor carica­tura y la ulós lamentable desviación del verdadero socialismo.

E ste no puede ser rea-

roeratíca ni puede vivir si no es en un ambiente, de libertad y efectiva colabo­ración entre los pueblos y las colectividades. H oy. en medio del derrumbe de las viejas form as de convi­vencia _v ante el repudio merecido a todas las dic­taduras. las viejas ideas de socialismo, expresión de una secular aspiración popular hacia la justicia, vuelven a tener validez y serón eficaces para la ac­ción constructiva, a con­dición de ser complemen­tadas con los principios de libertad que dignifican a los hombres y dan ver-

dad a (as instituciones.Constituimos, eolito or­

ganización y movimiento, la continuidad histórica del socialismo libertario, cuyos p rilteiphs levanta­mos Iwy como bandera de lucha, sin preocupaciones sectarias ni vanas ilusio­nes de fácil triunfo, sino por el contrario, con la fir-

una lucha dura, encarni­zada. de Infinitas■ contin­gencias. fren te a un con­junto imponente de fuer­zas adversas, pero con la plena convicción de ha­llarnos cu la buena senda v de cumplir, como revo­lucionarios, con un inçlu-

- d ib ledeber histórico. ~A l proclamar la lucha

incesante por la libertad y el socialismo, levantamos en alto una bandera glo­riosa que otros han aban­donado. después de haber pretendido envilecerla al ponerla al servicio de sus apetencias do poder. A fo r ­tunadamente. existen en el seno de la masa popular fuerzas sanas, energías la­tentes. voluntades inconta­minadas. en las cuales con­fiamos para recuperar las conquistas sociales perdi­dos y reiniciar la marcha hacia el socialismo, por el elimino único de la liber­tad.

(Del fo lle to "T u O rgan izac ión C o m p añ ero ")

Establezcamos baluartes corales y materiales ¡le la ripiad humanap N los periodos m ás som fhios de la h isto ria , cuando las

co rrien tes lib e r ta r ia s y popularas su frían los efect'.w de una s a n g rien ta d e rro ta , viéndose som etidas a un eclipse forzoso en lo que re sp e c ta a cualqu ie r m anifestación pú­blica. no fa ltarori nunca los hom bres esforzados, las m i­no rías in sobornables e irreduc tib le s , que p roseguían la lu­cha. a firm a n d o p o rfiadam en te los va lo res de la lib e r tad y de la d ign idad hum ana.

F re n te a la tr is te pasividad de las m asas vencidas y al espectácu lo dep rim en te ofrecido po r los aduladores y pan iaguados del poder tr iun fan te , fueron esos g rupos m inoritarios, esas organ izaciones pequeñas, insign ifican t ?s, ferozm en te pe rseguidas y condenadas a una vida su b te ­r rá n ea , los au tén tico s b a lu a rte s de !a c ivilidad, ios núcleos c en tra les de la recuperación colec tiva hacia la libe rtad y la plena luz.

E n los p rec isos m om entos a c tu a les y en n uestro pais, no hem os llegado aún a ios ex trem o s de una d ic tadu ra to ­ta l. que elim ine francam en te de la vida pública a toda organización independíen le o a toda co rrien te inconfor- m is ta y opositora. L a represión se sigue m a nifestando en fo rm a vergonzante , jesu ítica , p au la tina . L a reg lam entac ión

de las lib e r tad e s públicas se hace de la l m odo que sig­n ifica p rác ticam en te su anulac ión . S e con tro lan todas las fo rm as de em isión del pensam iento , haciendo im posible !a difusión am plia d e ideas c o n tra r ia s a los cánones oficia­le s y som etiendo a castigo a quienes p re te n d an desconocer las a rb it ra r ia s lm poslcioi os oficiales. T odo oso, que cons­t itu y e n u e s tra norm alidad po lítica a c tu a l, equ ivale a u .ia m anifestación c a rac terís tica de p rsfasc ism o, ta l como la han vivido o tro s países som etidos después a un régim en francam en te to ta lita rio ,

P e ro lo m á s grave no e stá p rec isam ente ahí, sino en la escasa oposición y resistenc ia que halla la oügarqtóii-‘ reaccionaria p a ra consum ar sus p lanes libertic idas, lo cual la e stim ula a consum ar cada vez m ayores atropellos. Los pa rtid o s políticos, incluso los fo rm alm en te opositores, se

LA EN LA GUERRA Y EN LA PAZ

acom odan a la situación, acep tando el s istem a de los h e ­chos consum ados y conform ándose con d isp u ta r algunas m igajas del poder. L as organizaciones obreras, d esarticu ­ladas en su s en tidades m ás com bativas por una reacción s istem ática y som etidas e l resto a la in fluencia c a s tra d o ra del reform ism o co rporativ ísta . no cum plen en e ste m o­m ento —salvo r a r a s excepciones— con la m isión social que les corresponde, en la lucha por la liberac ión de las m asas explotadas. F re n te a los excesos del poder y a la anulación de las libe rtades que !es son esenciales, m an­tienen suicida pasiv idad e indiferencia. Lo mismo ocu rre con una can tidad de organism os populares, creados pa ra de fender de term inadas necesidades y reivindicaciones, que se rá n le tra m u e rta desde que se adm ite s in objeción la v i­gencia de im posiciones a rb itra ría s , que esos m ism os o r­ganism os deberían re sis tir , con todos los m edios a ¡>u alcance.

U rge reacc ionar decididam ente co n tra ese conform is­mo. esa pasividad, esa indiferencia . N o esperem os a que sea dem asiado ta rde , a que la reacción o ligárqu ica y fao- c istizanto se apodere a todos los reso rte s de acción obrera y popular, imponiendo a los núcleos independientes la vi« da de las catacum bas. H agam os que cuan to an tes, hoy mismo, la s organizaciones lib res de m ezquinos cálculos

de acomodo, la s o rganizaciones p ro le ta r ia s y populares, se a firm en en la denfensa te sene ra de laí- libe rtades esencia­les, se constituyan en b a lu a r te s y refug ios de la d ignidad hum ana. N ada podem os e sp e ra r de los partidos, cuyo ún i­co ob je to es d isfru tar, m ie n tra s sea posible, de p a rtícu ­la defensa de la lib e rtad , equ ivale a un ah o rro re encr- nes. Pe ro la Inopcrancia o el abandono de los dem ás no puede ju s tifica r nuestra prop ia dejación de la lucha. Re­cordem os que todo esfuerzo cum plido hoy. en el o rden ¡l.» la defensa de la libertad , equ ivale a un a h o rr ode e n e r­gías y sacrificios supe rio res que ha tee m o s de cum plir m a­ñana, si perm itim os que la s fuerzas reacc ionarla s se im­pongan to ta lita riam en te . Q ue e l e¡»mplo de los pueb los de . E uropa nos s irva de lección!

ASO M BRO SA S son la s c ifra s de p roducción a lca n za d as en lo i Balados Unidos y en In g la te rra , en C anadá, ert lodes los p a í­

ses en g u e rra con ol "e je”. L as c an tidades fabulosas de a rm am en ­to* de toda c lase y de los e lem entos accesorios m á s com plicados se su p e ra n m es a mes, estab lec iéndose nu e v es " reco rds" g rac ias a nuevos m étodos d e traba jo , a la creación d e nuevas industrias, a la Invención de m áquinas y h e rram ien tas . A la vez que se a um en ta c i rend im ien to cuan titativo , se consiguen valiosas econom ías en los costos de tran sp o rte , ta n v ita le s en una g u e rra de la s p ro ­porciones quo tiene la ac tua l. P a ra c ita r un so lo caso, recordem os la im portancia a signada a la desh ld ra tac lón de los p roductos, que a l conseguir una reducción no tab le de sU volum en, a h o rra eno r­m es tonelajes en- bodegas, tren e s y cam iones, asi como lim ita sus­tancia Im ente la m ano de ob ra . D e los gab inetes de investigación, m ontados po r cen tenares bajo e i con tro l de l E stado , d e los cen­tros de ensayo y de los In stitu to s especializados su rg en iniciativas. Innovaciones, p lanes de p roducción que se ap lican en g ra n escala si su s resu ltados experim en tales lo aconsejan . U n hechó no tab le h a sido e logiado p o r la p ren sa ing lesa y p o r los políticos de todo m a­tiz: son los prop ios ob rero s de la s fáb ricas , qu ienes a m enudo su­pe ran e l celo y la audac ia de lo s técnicos e investigadores, tr a y e n ­do a la s o í ld n a s oficiales ideas, sugerencias, inventos que sé llevan a la p rác tica con excelen tes resu ltados. T S "iñm ensa ináquina He"Ías in d u stria s de g u e rra , la s igualm ente v ita le s in d u stria s de abastec i­m ientos, funcionan a toda m a rc h a y con la m ás p u rféc ta se g u rid ad a obre s u in flu e n c ia decisiva en e l desen lace do la g u e rr a c o n tra H itle r . L a técnica e s e l "soldado núm ero uno" en la trem enda lu­cha que d esan g ra a la hum anidad .

N u e s t ra p re g u n ta la fo rm u lan c u an to s se p reocupan , con p u n ­to s de v is ta y ob je tivos a n tagón icos m u chas veces, a n te e l g ran

prob lem a de la posguerra : ¿Y después? ¿Q ué destino se d a rá a esas p o rten to sas c reac iones de la m ente h u m a n a? ¿ Q u é vuelco se d a rá a la s in d u stria s de g u e rra y a qué p rincip ios obedecerá la m arav illo sa técnica que tan to s m ilagros e stá rea lizando hoy?

L a re sp u e s ta es obvia. L a d ic ta l a e x peric ienc ia cum p lida en la e tap a m ás p ro g re sis ta de l cap ita lism o. La estam pa, s in que se p res­te a discusión, la la rg a tray e c to ria de la " m áqu ina en g u e rra con e l hom bre" , con la lla m a d a "m ald ición de la abundanc ia”, con la peor lla m a d a " superproducción". L a re sp u e sta es ta n c la ra que se ria suicida e leg ir lo y a experim en tado con ta n te rr ib le s re su lta ­dos. Ü siguen trab a ja n d o la m áquina y la he rram ien ta , la ciencia y la técnica p a ra el capitalism o, o se destina su uso a la sa tisfacción de las necesidades de los pueblos. O en riquecen a la s m ino ria s ca­p ita lis tas que d e ten ta n los m edios d e p roducción, o son u tilizados p o r la sociedad p a ra re sponder a la s dem andas del consumo.

S i subsis te el cap ita lism o, la técnica, la serie in te rm in a b le de m é tdos y s is tem a s de tr a b a jo que hoy m a ra v illa n a l m undo, d a rá n a luz los abom inab les engendros que tem en la s m asas desposeídas: desocupación, m iseria , h a m b re . S i subsis te el capita lism o, se re ­pe tirán los fenóm enos de cris is que desem bocan, ta rd e o tem prano , en la g u e rra .

L a cuestión e stá , p rec isam en te , en lib e r ta r a la técn ica de asa m ald ic ión . E n c o n v e r tir la en a lia d a del hom bre. E n m a n e ja r la p a ra a s e g u ra r e l b ie n es ta r de la s c o lec tiv idades p ro d u cto ra s . E n afianzaV la paz. p a ra que nunca d eb a em plearse, como ahora , p a ra cons­tr u i r enorm es, f a n tá s tic a s m á q u in as de d e strucc ión y de m u e rte .

P a ra lo g ra r ese ob je tivo h a y un solo m edio : la tran sfo rm ación de la sociedad. L a supresión del cap ita lism o. L a im plan tación de un s is tem a capaz de hace r de l tr a b a jo hum ano y de la m áqu ina ios m ás prec iosos in strum en tos de la felicidad un iversal.

EL M I T ODEL PODERL

A eficiencia que p a ra la g u e rra han dem ostrado los regím enes de fuerza , ha sido uno de los m otivos — y no el m enos podero ­

so— que les ha gran jeado la adhesión de m uchos que. s in te n e r coheren tes convicciones to ta lita r ia s , son sim ples ado rado res del poder, adm irado res de todos los que tr iu n fan . Y el hecho de que el tr iu n fo se vaya a lejando o stensib lem ente de las a rm a s nazifascis­tas, ha m otivado, sin duda, el renacim ien to en ta le s individuos de su fe dem ocrática .

Pero es ev iden te que la m ayoría de los dem ócratas rec lam an o ju stifican la concentración del poder en nom bre, po r ahora , de s ituaciones de em ergencia y. sobre todo, por las necesidades de la gu e rra . Pe ro tam bién hay m uchos que preconizan ese m étodo a u to ri­ta rio como no rm a pe rm anente.

N uevam ente se vigoriza el "m ito del poder” , con todas sus pelig rosas consecuencias. Se o lvida que los “ gobiernos fu e r te s" , o m ás c laram en te , las d ic tadu ras, si son eficaces pa ra la g u e rra , p a ra la violencia y la destrucción, no lo son de ningún m odo p a ra la creación pacifica, du rad e ra y constructiva , P o r o tra pa rte , un gobierno podrá o rdena r, p roh ib ir, ob ligar, reg la m e n tar, etc. acerca de d iversas ac tiv idades: incluso podrá im poner el trab a jo forzoso, como lo hacen los nazis en E uropa. Pe ro una efectiva obra de paz no podrá nunca su rg ir de ta le s m étodos. P a ra eso se requiere la In tervención de las a u tén ticas fuerzas productoras, de los qu» trab a ja n , e stud ian , investigan, c rean rea lm ente.

www.federacionlibertaria.org

Page 6: Acción Libertaria, Nº 64. Mayo1943-Fla

1°. DE MAYO U ¿SE ADMITIRAN* W FNT AmNFFRFNrTA

LOS ESFUERZOS• • ek# mM & 1 1 1 A EN LA CONFERENCIA

Y LA S GANANCIAS JJAJO EL SIGNO DE LA GUERRA UE LAS BERMUDAS

C A P IT A L IS T A S l a REACCION Y EL FASCISMO LOS EXILADOS?SE sabe que en E stados U nidos, la fo rta le za del

cap ita lism o privado, el gobierno, obligado p o r la s necesidades de la gue rra, lia creado una s e n e ce oficinas de control, que in te rv ienen con plenos po­de res en todas la s activ idades industria le s , como en la econom ía en general. E n principio, ta n to lo s t r a ­b a jad o res como los em presarios , e s tán su je to s a una severa reg lam entac ión y se supone que e ste rég i­m en, a p a r te de p e rm itir p oner todo el poder eco­nóm ico del pa ís a l servicio de la producción de gue­r ra , im pide que nad ie saque ¿e ese eno rm e esfuerzo, p rovecho pa rticu la r.

S in em bargo, la r ea lid a d no responde exactam en­te a esa idea. S i es c ierto que, d ia a dia, aum em a el poder del gob ierno y su intervención en la indus­tr ia , no lo es m enos que los agen tes de ta l in te rv en ­ción, sus consejeros y técnicos, pe rtenecen a l pe rso ­nal d irec tivo ce la s g randes em presas in d u stria le s y financieras, y o rgan izan la s cosas de ta l m odo que, sin d e ja r de cum plir los f ines bélicos del gobierno, m an tienen en todo lo posible la e s tru c tu ra de las em presas p rivadas y su posibilidad de ob ten er g a ­nancias, asi como la de rec u p era r el con tro l inm e­d ia tam en te después de la gue rra .

P o r o tra p a rte , e sas em presas han obten ido a ltas gananc ias d u ran te e l año 1941, cuando E sta d o s U n i­dos tra b a ja b a y a como "arsena l de la s dem ocracias'' y p rep a ra b a su propia e n tra d a en la g u e rra . L o d e ­m u e s tra el s igu ien te cuadro com parativo , obtenido con riatos de la O ficina de A dm inistración de P re ­cios (O ffice o i P rice A dm in is tra tion ) y publicado p o r el sem anario neoyorquino "T he C a li" . E l cuad io se refie re a las diez corporaciones m ás g randes del pa is y a las ganancias que e lla s han- obtenido, en el prom edio de los años 1936, en com paración con la-; de 1941, en la s igu ien te fo rm a:

Prom edio %1936-1939 1941 Au-

D ólarcs D ólares mentó

G eneral M otors .C urtiss W rlgh t .Betslehem Steel . 19,269.000 42.929.000 123 Douglas A lc ra ft . 1 .765 .000 18.177.000 930 Consolidated A¡-

c r a f t .................. 824.000 8 .754.000 962Glenn M artin . . 2 .084.000 5 .773.000 177 Boerlng A irplane

(pérd ida) . . . — 840.000 6.113.000 United A irc ra ft . 5 .161.000 21.721.000 32 ' New York Shlp-

building . . . 122.000 3.075.000 24¿0Lockheed A lrc ra ft 953.000 10.109.000 961

E stos beneficios se han obtenido después de la deducción de todos los im puestos. Como puede v er­se, la adhesión del g ran capita lism o a la causa de­m ocrá tica , no es del todo desin te resada . M enos ,'ia de se r desin teresado su ap o rte a la reconstrucción djel m undo después de la g u erra .

LA D IV IS ION

DE LA C. QL T.OTRO EXI T O LOGRARONLOS S T A LINIANOS

IN SPIR A D O S en su lem a «agrado —"conqu is tar o d e s tru ir"— los jesu ítas Je la política m oderna

que responden a las órdenes le S talin . han cum pli­rlo una hazaña m ás. que engrasa su largo h is to ria1 de m an iobras pa rtid ista s. Los cam peones de la uni­dad a todo trance, los fan á tb o s sostenedores de 'a fó rm u la de la "unión nacional" sin restricciones, los a liados de ú ltim a hora de ios "bandidos im perialis­tas" de L ondres y W ashington, han log rado un pro­pósito la rgo tiem po perseguido. Todos sus pasos tác­ticos. ¡odas su s com binaciones en el te rre n o sindi­cal, p a rtían de u n a e s tra teg ia óc conquista que juz­gaban iba a llenarles do g io ria a n te los am os Je M oscú y a p erm itirles m overse con c ierta agilidad en el cam po político argen tino . Se tra tab a de u m em presa difícil, dadas las forta lezas que habia que d e rr ib a r. Al fren te de la C.G.T. e stab a la cam arilla refo rm ista , a rra ig ad a en las bien nu trid as a rcas ti? Ja sindical "sería y responsable". Y esa cam arilla co n tab a con .el apoyo de las en tidades m ás ricas del pa ís: la Unión F e rro v ia r ia y La F ra te rn id ad . P e ’o

ia resolución estaba tomadii. D espués de en say a r en el casi o lvidado periodo de la política c lasista , an ti­im perialis ta y revolucionaria , m ed ian te las cuñas d e los "Com ités P ro U nidad C lasis ta" , enca jarse ¡.n e¡ m ovim iento obrero , la habilidad de los a lto s m an­dos del pa rtid o com unista dió a luz un m étodo más eficaz. La e n trad a a la C.G.T. con lodos los efecti­vo» disponibles, la creación de algunos ba luartes propios — tipo F.O .N.C. ag itando y especulando con la s reivindicaciones grem iales, e ra la nueva tá c ­tica . Y cuando consiguieron in f iltra rse en su seno, la nueva consigna fué da d a : habia que conqu ista r su dirección. P o n e r a i fren te a e lem entos sta lin íanos definidos, se ria con traproducente. E so im plicaría el re tiro de las centrales- ferrov iarias y o tra s o rg an iz a ­ciones que a p o rtab an sum aá im portan tes a la caja confederal. E llo lan za ría a la policía co n tra los nue­vos jefes de ia C.G.T. y d e rru m b a ría todos los sue­ños de hegem onía. E l procedim iento e ra otro, m uy u tilizado por los bolcheviques er. m últip les ocasiones en todo el mundo. E ra “ trab a ja r" a elem entos a je ­

nos a l partido , insospechados en cu an to a su "linea" política . E ra poner fren te a los D omenech y com pa­ñía , a o tro s " lideres” de m enor je ra rq u ía , am bicio­sos rJe nuevos cargos, do m ay o r poder. La "caza ' de los agentes de su e strateg ia , no fué difícil. El "nuevo hom bre" para al cargo suprem o es tab a ele­gido. E ra , ni m ás ni m enos, que un destacado po 'i- tico socialista, un diputado de la C asa del P u eb lj. P é rez Leirós y sus aliados, iban a ju g a r el papel que en E spaña — para c ita r un ejem plo— desem pe­

ña ro n L am oneda en el P a r tid o Socialista y Negrín en el poder.

F a lla ro n la s cartas , p o r obra y a r te de un voto, en i i elección del Com ité C en tral Coñfederal. '.á m aniobra de "copo legal" fracasó. Y de hecho, an te ia d isyuntiva de p e rd e r la dirección a trav é s de los socialistas plegador- a sus p lanes y dividir a la C.G. i , los sta iin ianos pusieron .n juego su lem a: "con- qul.-lar o d e s t r u i r '. La C. G. T. puede volver a "uní- f ear?;o si la Casa del Pueblo im pone reciíficacio- n.:. » sus lide res su b le v ad o s ... Pero la rea lid ad de h .' r s bien elocuente. Los rrcgo jw ros de la unida I

• ' m n i r

Es doloroso que un g rupo de políticos v le (riri- gentos profesionales jueguen con m illones Je tr a ­ba jadores o rganizados y les im pongan adhesiones a entidades fraccionarlas, del mismo modo que o s 'd i­plom áticos asignan p a trias a los pueblos. después de un arreg lo de fronteras. Lo cual es sólo una cons. - cucnelH riel s istem a c en tralis ta de organización y de la m qal educación sindical de esos trab a jad o re s aeus- U acbiados a a ca ta r lo que resuelvan su s dirigentes.

POR UNA ACCION RENOVADORA, EN DEFENSA

DE LA LIBERTAD Y LA J U S T I C I A S O C I A L

T _ JA N p asad o m a c h o s añ o s desde a q u e lla jo rn a d a de C hicago, cu an d o la re s u e lta lu c h a o b re ra p o r la co n q u is ta de la s ocho

h o ra s dió lu g a r a la tra g e d ia q u e h o y se re c u e rd a y reveló el e s­p ír itu ce rr il y eg o ís ta del g ra n cap ita lism o que, en p lena ex p an ­sión, p re ten d ió n e g a r b ru ta lm e n te a los t r a b a jad o res su s ju s ta s re iv ind icac iones. H an pasad o , so b re todo, m uchos acon tec im ien­to s , lu c h a s m á s v a s ta s y en conadas, in fin idad de tra g e d ia s o b re ­ra s m á s in te n sa s , q ue h ic ieron palid ece r aq u ella de m ayo de 1886, c o n v ertid a en u n sím bolo — d e sn a tu ra liz a d o hoy , com o ta n to s o tro s— del m artiro lo g io , la s re iv ind icaciones y la s e sp e ra n z a s de red en ció n del p ro le ta ria d o .

N o o b s ta n te , los tr a b a ja d o re s sig u en re m em o ran d o e sa fe ­ch a sim bólica, m a n tie n e n la te n te la fe q u e a n im a ra a los m á r t i­r e s p ro le ta r io s de to d o s los pa íses y e sp e ra n re in ic ia r su m arch a a scen d en te h a c ia su liberac ión d e fin itiv a . Sólo p o r ello tien e sig ­n ificado es ta conm em oración y p o r ello n o s a sociam os a la m is­m a los l ib e rta r io s , p ro c u ra n d o re iv in d ic a r su p rís tin o sen tid o de a firm a c ió n y de lucha.

P e ro no b a s ta r e c o rd a r la s lu c h a s del p asad o , ni g lo rif ic a r a los h o m b re s q u e lo d ieron to d o p o r la liberac ión de su c lase. E s n ecesa rio e n c a ra r la s e x ig en c ias del p re se n te y del fu tu ro inm e­d ia to , con el m ism o e sp ír itu com b a tiv o y rea lizad o r que an im a ra a los p re c u rso re s del m ovim ien to o b re ro y revo lucionario , pero con la visión p re c isa de los p ro b lem as a c tu a le s y el sen tid o de re s­p o n sab ilidad q ue re c la m a el m om ento q u e vivim os.

CONSECUENCIA DE UNA OPORTUNIDAD REVOLUCIONARIA DESAPROVECHADA

s cu a rta s partes de la hum anidad sea posib le aug u ra r e l d ía de su e aun deberán su fr ir lo s pueblos, previs ib le y pudo e v ita rse , s i las rificados— hub ieran actuado

D esde hace ?nás de tre s años, las I debaten en una gu erra to ta l , sin qi

frm ino fin a l , n i los horrores inéditos Sin em bargo, lodo cuan to sucede e

i de hoy — todos los pueblos itiem po. E n realidad, la g uerra ac tiu il fu é decid ida desde e l m om en to que el p ro letariado desaprovechó la oportunidad que le p re sen tó el fin dé­la an terio r conflagración, para desp lazar a l cap ita lism o de la dirección de los acon tec im ien tos, realizando su propia revolución. E l m om en to p ro ­picio fu é desaporvechado y e l régim en ta m balean te am enazado adem ás por las repercusiones de la revo luc ión rusa, de 1917, se reh izo an te las v a ­cilaciones del p ro le tariado y la desviación hacia la dictadura , de partido de aque lla revolución. E l fasc ism o , creación de la p lutocracia,, como in s tru ­m en to de con trarrevo luc ión p reven tiv a , tónló cuerpo en Ita lia en 1921, donde las condiciones eran m á s favorab les para una revolución socialista. L a capitu lación del p ro letariado ita liano, im p u esta por d irigen tes tim o­ratos. dió a las a la reacción, que poco después dió su golpe, insta lándose en e l poder. A p a r tir desde ese m o m en to e l fa sc ism o — subestim ado como peligro por todos los sectores, m enos por los revolucionarios anarquistas, que clam aban por s u ex te rm in io— se fu é extend iendo por toda Europa, con la complicidad del ca p ita lism o "dem ocrá tico” y de los gobiernos que lo representaban. La. burguesía in ternac iona l lo em pleó com o arm a de represión con tra e l p ro letariado, a f in de a le ja r para siem pre e l fa n ta sm a de la. revolución y re so lver con la v io lenc ia de los "gobiernos- fu e r te s’’ los problem as in so lub les den tro del régim en.

Pero e l fa sc ism o , siguiendo la lógica fé rrea d e la concentración del poder, no tardó en independizarse de sus pro tectores p lu tocrá ticos y en pla n ta rse fr e n te a e llo s en actitud, agresiva . Su dom inación absoluta de un pais fu e r te m e n te m ilita r is ta com o A lem ania , le confirió un form idable poder bélico. L a segunda gu erra m und ia l resu ltaba inevitab le y debía ser precipitada por e l E s ta d o to ta lita rio nazi, en su a fán de so m eter y absor­b er a la p lu tocracia ang lo-yanqui, im poniendo su sungrienla hegem onía sobre todo e l p laneta .

EL GESTO HEROICO DEL PUEBLO ESPAÑOL

que a d m itir el “ nu ev o o rd e n " de la e sc la v itu d to ta l que su fre n los p ueb los e u ro p eo s so ju zg ad o s . Y sólo los se re s q ue h a y a n per-

CONFIAMOS EN LOS PUEBLOS, NO EN LOS GOBIERNOSE l vehem en te deseo d e an iq u ila r el nazi fascismo, no puede ni debe im ­

p lic a r de n ingún m odo u n a adhesión incondicional a ios gob iernos del lla ­m ado bloque dem ocrático , ta l com o la p red ican los dem agogos sta lin la - tios. No olvidem os que a p e sa r de los g ran d es d iscu rsos en salzando la li­b e rta d y la dem ocrac ia , la m a y o r p a r te de esos g o b e rn a n tes rep resen ta n in te rese s p lu to c rá tic o s y que lu ch an sólo p o r im poner la superv ivenc ia del cap ita lism o , a m en azad o de s e r absorbido por el E s tad o to ta lita r io . Son los m ism os que h a n sosten ido a los reg ím enes d ic ta to ria le s de E uropa c en tra l y de los B a lcanes, los q u e h an fac ilitad o e l tr iu n fo de F ran co , a q u ie n ay u d an a m a n ten e rse en loda fo rm a, a l m ism o tiem po que apoyan a los e lem en tos fasc is tizan tes de) A frica del N o rte , donde a u n h ay m i­lla res de c o m b atien te s a n tifa sc is ta s en los cam pos de concen tración . S i­g uiendo e s ta m ism a lin ea de conducta , nada e x tra ñ a rá que p ro cu ren im ­p o ner en todas p a r te s gob ie rnos de fu erza , a fin de re p r im ir la s in su rrec ­ciones pop u la re s que h a b rá n de producirse después de la d e rro ta del fas-

P o r oso. n u e s tra esp eran za no e s tá en los gobiernos, s ino en los pue­blos. en los trab a ja d o re s y los com batien tes. A uguram os el resu rg im ien to de los que hoy g im en b a jo la b ru ta l op resión nazi, incluso d e l p ro le ta r iad o d e I ta l ia y de A lem an ia y su f ra te rn a l colaborac ión con e l res to del p ro ­le ta r ia d o europeo, p a ra la g r a n labor reco n stru c tiv a , que a seg u re la paz y un n ivel de v ida d igno a todos los se re s hum anos. Si no se p ro d u je ra ta l entendim iento , si no fu eran desplazados los p riv ilegios nacionales o de c lase , si todo se re d u je ra a u n a o rdenación fic tic ia y a un tra ta d o de paz que fu era un nuevo arm istic io , m uy poco h a b ría sign ificado e l tr iu n fo so­b re e l fascism o y la hu m a n id ad e s ta r ía abocada, en un p lazo m á s o menos b reve, a una nueva c a tá s tro fe g u e rre ra .

CONTRA LA REACCION F ASCISTIZANTE EN LA ARGENTINAA lejados de los escenarios de la g u e rra , no podem os exim irnos de la

lucha a fondo c o n tra la reacción to ta lita r ia , en cualqu ie ra de sus m ani­festaciones. E sta acción no se cum ple m ediante una adhesión espectacular y teórica a las N aciones U nidas, ni con tribuyendo a las sospechosas co­lectas o rganizadas por un partido demagógico. Se realiza reivindicando las libe rtades o b reras y populares, resistiendo el esta tism o que p ractica la oligarquía gobernan te, com batiendo en toda form a el fascism o nacio­nal y foráneo, in filtrado en casi todas las instituciones oficiales, donde grav ita en form a peligrosa para nuestra vida pública.

La cam arilla oligárquica que de ten ta el Poder en este pais. apenas oculta sus sim patías por el nazlfascism o, cuyos agen tes tienen aquí a m ­plio cam po de acción, a despecho de sim ulacros persecutorios. Pero no te n d rá inconveniente en som eterse al capita lism o inglés o yanqui si las c ircunstancias se lo Im pongan, sin que por eso abandone su reaccionaria política In terior, que se trad u ce en protección a los feuda les y te r r a te ­n ientes y m iseria para la inm ensa m ayoría de la población. Hemos de luchar, pues, con tra esa o ligarquía fasclstlzante. al m argen de su adhesión o no adhesión al bando dem ocrático.

LUCHA CONJUNTA DE FUERZAS OBRERAS Y POPULARES

i y proveí

Mucho a n tes que habían sido som etidos, p rédica de un reform i pueblo que m antuvo In

instin to re>tegro

desa ta ra , casi todos los pueblos europeos por la violencia, adorm ecidos o tros por la licida y to rpem en te egoísta. Sólo hubo un u esp íritu com bativo, su d ignidad a le r ta , su

Fué el pueblo español, que en Julio de 1936

Para esa necesaria acción de funsi i: e n com binaciones e lec tora les, ya sea b( com o fu e re . L a oligarquía lia m on tado ya la m áquina elec tora l y se dis­pone a im poner la ‘ con tin u id a d " del fra u d e y la v iolencia reaccionaria. La lucho ha d e lleva rse a o tro terren o y por o íro s m edios. Podrá hacerse e fec tiv a a tra vés de sólidos y fir m e s sind ica tos obreros, d e organizaciones cam pesinas, de asociaciones popu lares, e s tu d ia n tiles , e tcé tera , an im adas por mi m ism o esp íritu d e resistencia , valorando la lib e r tu d por encim a de todo y d ispuestas a la responsabilidad de im pu lsar, en el m om en to opor­tuno , las gra n d es tra nsform aciones socia les y económ icas que se requieren pura co n stru ir un m undo m ejo r , en colaboración con los dem ás pueblos decididos a fo r ja r — a l f in — s u propio deslino .

DIGNIFICACION DEL MOVIMIENTO OBREROmoví-elam la ( i de i

respondió a la tra id o ra agresión del fascism o lanzándose a la lucha las a rm as en la m ano y m anteniéndole en jaque d u ran te m ás de tre in ta m eses y sucum biendo bajo el peso de fuerzas enorm em ente superiores, enviadas descaradam en te por la potencias del Eje con la tá cita com pli­cidad de las D em ocracias. Fué la ú ltim a oportunidad que se ofreció a los pueblos de Europa de lib ra rse de la am enaza to ta lita r ia y ev itar la sangrien ta guerra m undial. E lla consistía en apoyar Incondicionalmente al pueblo español en su lucha desigual, sum in istrándo le las a rm a s nece­sa rias para d e rro ta r ai fascism o, con la seguridad de que su derro ta en suelo ibérico hubiera m inado p rofundam ente su prestig io en los propios países que lo soportaban , lo que hubiera significado la posibilidad de su derrum be. No se quiso co rre r el riesgo mínimo que esa ayuda significaba, se prefirió segu ir el cam ino ap aren te del m enor esfuerzo, concretado en la política cobarde de la "no in tervención”. Y los resultados aparecen en la traged ia que hoy vive el m undo entero .

EL NAZ1FASCISMO DEBE SER APLASTADOU n a vez d e s a ta d a la co n tie n d a — a n te la cual n u e s tr a o rg a ­

nización tom ó posición desde el p r im e r m o m en to — «sus re su lta d o s no pu ed en de n in g ú n m odo se rn o s in d ife ren tes . E l fasc ism o y el nazism o, en to d a s s u s fo rm a s y m an ifes tac io n es , deben s e r a p la s ­ta d o s y liqu idados. E s la m e n ta b le q ue a e se f in h a y a sido nece­sa r io acu d ir a los m edios u l tr a d e s tru c to re s de la g u e r ra to ta l, q ue ta n ta s v íc tim as in o cen tes p roduce y ta n to s p e lig ros e n tra ñ a p a ra e l fu tu ro . P e ro desd e q ue n o se p udo e v ita r la c a tá s tro fe , en la fo rm a q u e in d icam o s a n te r io rm e n te , e s a b su rd o y e s té r il q u e­ja r s e o d esco n o cer los im p e ra tiv o s de la rea lid ad . E l fasc ism o y to d o lo q ue él re p re s e n ta debe s e r a p la s ta d o y n in g ú n p recio se rá dem asiad o c a ro p a ra lo g ra r ese o b je tivo . D e lo c o n tra rio , h ab ría

L a m ay o r e ficacia c m iento ob rero p o ten te , só lid am en te a rticu la d o y libre de tu te la s e x tra ñ a s a su prop io d esarro llo . La im posición de consignas de p a rtid o en los sind ica tos y sobre todo la fu n esta in trom isión s ta lin ian a en la d irección de los mismos, h a desm oralizado y dividido a dicho m o­v im iento en n u es tro p a is y en todas p a rte s donde esa s in ies tra influencia ha prevalecido. Lo acontecido rec ien tem e n te en la C .G .T . es sólo un a s­p ecto de esa acción de le té rea , que no sólo consp ira c o n tra la independencia de los sindicatos, q u itándo les toda personería , sino que a r r a s t ra la d igni­dad de los trab a jad o re s , al llev ar la decisión de su s re iv indicaciones a los m ás definidos enem igos de la c lase producto ra ,

P a r tid a r io s de la un idad de acción y de la un idad o rg án ic a de los trab a jad o re s, creem os ind ispensable lib ra r p rev íam rn le al m ovim iento o brero de la tu te la po lítíca y la desviación co rp o ral ¡vista , a lin do que el m ism o pueda cu m p lir con su especifica función social y co n stitu ir una po tencia e fectiva, f re n te a los desm anes reacc ionarios.

A n te la dep resió n y el p a n o ra m a so m b río del m o m en to , a f i r ­m am os la necesidad v ita l de ro b u s te c e r los cu a d ro s o b re ro s y po­pu la res , de h a c e r re s u rg ir la fe de los t r a b a ja d o re s en el propio esfuerzo , de d e fe n d e r la lib e rta d p o r encim a de to d o y de d ispo­n ern o s a la acción ren o v a d o ra , p o r u na sociedad m ejo r, m e ta de los m á r tire s p ro le ta rio s de to d o s lo s tiem pos.

Contra el fascismo.Coutva la oligarquía.P o r la defensa de la libertad.P or un movimiento obrero vigoroso.P or un nuevo orden social sin privilegios.

FEDERACION ANARCP COMUNISTA ARGENTINAC O N SE JO N A C IO N A L B uenos A ires, 1 de M ayo de 1943

tnDt t IOS MILITIIIITES ESMIES EN EL EUA

instancias del periódico SO LI­DARIDAD O BRERA, que propi­

c iara desde sus colum nas la iniciati­va y con la participación de com pa­ñeros expresam en te destacados por la subdeiegación de la C. N. T. (Con­federación N acional del T raba jo ) de España en la A rgentina, se ha cons­titu ido en esta C apital una Comisión pro Fondo de Solidaridad, In teg ra ­da. adem ás de los m encionados, por com pañeros designados por el Grupo E d ito r de S O L I . D A D R I D A D OBRERA.

Como se desprende de las publica­ciones efectuadas en los dos últim os

'núm eros de dicho periódico, co rrobo­rados por lo expr ‘

refrendada poi ha form ado y de cuyo c producim os m ás abajo a m entos. el propósito que inspiradoi fuerzo para socor

cuiar inform ativ Comisión que :

Igunos frag-

luchador«riiciio para sutori-r a io:ì lu^npaoreiespañoles que tan digna y virilnjen

te resistieron el asedio fascista du­ran te meses y que hoy su fren en el exilio y el destie rro las c rueles pe­nurias del desam paro y el ham bre.

Nos parece un cncom iable Intento, d igno de toda ponderación, el que se persigue con esta cam paña destinada a sa lvar, o cuan to m enos a a tenuar, los su frim ien tos que padecen los hon­rosos com batientes españoles, con los cuales el p ro letariado de todos los países tienen el Ineludible com prom i­so de se r solidarlo. Y estam os se­guros de que a pesar de las adversas c ircunstancias que hoy padecen los trab a jad o re s , sab rán responder con decidida conciencia a este urgente llam ado de ayuda que lanza esta

'Com isión.

R efiriéndose a la situación de inu­sitada g ravedad que su fren los tr a ­b a jadores refugiados, dice la Circu­lar No. 1 expedida por la Comisión:

“ En algunos países de Centro América esa situación es singular­m ente penosa. En Cuba, por ejemplo,

las leyes del pais Impiden a los ex­tran jero s conseguir trab a jo . Ello sig­nifica una desesperante odisea para los hogares de los exilados, muchos de los cuales se ven en la hum illante necesidad de acud ir a la lim osna p a­ra no m orir literalm en te de ham bre. En Santo Domingo, donde los re­fugiados llegaron de tráns ito , sin po­der sa lir luego, el clim a insa lubre y las enferm edades que origina han si­do verdaderos to rm en tos para los obreros españoles, e n tre quienes las fiebres hicieron y continúan hacien­do estragos.

"C onsiderando los hechos reseñados el grupo que edita SOLIDADRIDAD OBRERA acordó realizar, con la celeridad que el asunto reclam a, una suscripción pública desde sus pági­nas, llam ando a la realidad a cuantos sepan va lorizar a conciencia a esa m agnifica reserva del p ro letariado Ibérico desparram ada en América y llam ada a g randes realizaciones para la liberación de E spaña. El dinero se rá periódicam ente en tregado por

la Comisión pro Fondo de So lidari­dad a la subdeiegación de la C. N. T. en la A rgentina, in teg rada por m ili­tan tes exilados de la cen tral españo-

m ente a la delegación en México."N u estra m ayor esperanza reside

en que el éxito de la cam paña tenga por base el apoyo que presten las organizaciones o b re ras y populares. Confiam os en que b a s ta rá p lan tear este problem a p a ra que su r ja la fir­me disposición de c on tribu ir a la sus­cripción so lidaria, que es un deber im perioso rea lizar y que debe ser un orgullo de cuan tos comprenden la significación de los destinatarios de esa solidaridad. E stam os seguros que lo expuesto se rá sufic iente . Por lo dem ás, estam os a v u estra disposi­ción para cualqu ie r aclaración que

"L as donaciones, que serán publi­cadas en detalle en SOLIDARIDAD O BRERA, deben rem itirse a nombre de Francisco Tavassl, B rasil 550, Buenos A ires”.

T A sociedad ac tu a l, el e x tra ñ o m undo enque vivim os, n o s o frece p a ra d o ja s de to ­

do c a rá c te r . A veces, e n c ie rra n u n a t r a g e ­dia q u e e sfu m a to d a posib ilidad de g a s ta r iro n ía s a su co sta . P o rq u e se c o n stru y e n con el do lo r de m illones de s e re s hum an o s, e x p u e s to s a los m á s esp a n to so s su fr im ie n ­to s . P o rq u e a fe c ta n la s u e r te de n iños y m u­je re s q ue v ieron m o r ir a los su y o s b a jo el cuchillo nazi. P o rq u e n o s h ab la n de la to r ­tu r a s in n o m b re de los m illones de hom bres en loquecidos q u e h u y e ro n de l in fiern o , p a ra b u sc a r a ire s de lib e rtad .

L a C on fe ren c ia de la s d e legaciones in ­g le sa y n o rte a m e ric a n a , re u n id a en un lu ­g a r p in to resco y aco g ed o r de la s B erm \ida3, p a r a t r a t a r el p ro b lem a de los re fu g iad o s , e s to d o un sa rc a sm o , re s u l ta u n a b u r la ev i­den te . c u an d o se re c u e rd a q ue los pa íses que p a tro c in a n ta l co n fe ren c ia h a n pu esto re s tr ic c io n e s de to d a c lase a la e n tra d a de los re fu g ia d o s q ue b u sca ro n d e se sp e ra d a ­m e n te asilo en su s t ie r r a s . S e a n u n c ia q ue una. de la s cu es tio n es t r a ta d a s se re f ie re a la acep tac ió n , a u n q u e se a de un m ínim o de re fu g iad o s is ra e lita s , p o r los d iv e rso s pa íses aliados. Y e s to b a s ta p a ra r e c o rd a r la rig i­dez con q u e los E s ta d o s U nidos y la G ra n B re ta ñ a a p lica ro n y ap lican su s leyes de in­m ig ració n . s in h a c e r excepciones con q u ie ­nes no tien en r in có n de la t ie r r a donde pi­sa r . a u n q u e enloquezcan y se s u ic id e n .. .

R eco rd am o s tam b ién la r e s p u e s ta que d ie ran al gob ierno fra n c é s , e so s E s ta d o s ta n h u m a n ita r io s , cu an d o les p re g u n ta ra c u á n ­to s re fu g iad o s españo les, de los 600.000 que e n tra ro n a F ra n c ia , e s ta b a n d isp u es to s a rec ib ir. R eco rd am o s la b ru ta l re s p u e s ta — a n in g u n o o a u n o s pocos— q ue dió p re te x to p a ra ja c ta r s e al go b iern o D a la d ie r del sa ­crific io de F ra n c ia , m ie n tra s m o rían .le h a m b re y de fie b re los h ero ico s españolea e n los “cam pos de co n c e n tra c ió n ” . . .

P re g u n ta m o s n o so tro s : ¿ P o r qué, ese m u n d o ta n am plio y h u m an o q ue d irig en las d o s g ra n d e s p o ten c ias c o n fe ren c ian tes , no a b re las p u e r ta s de p a r en p a r a la s v íc ti­m a s del to ta lita r is m o ?

E SPECTACULO DEPRIMENTE:

EL J U E G O DE LA POLITICA' OLIGARQUICA

EL panoram a político nacionaj. ya lia.ee ralo, de­sastroso por m uchos conceptos, lin i legado 6n los

a ctu a les m om entos a un período que puede consi­de ra rse de definición p a ra el fu tu ro ínm ediaío . A co ito tiem po de los comicios de renovación p resi­dencial, la fracción c onservadora d a m u es I ra s de te n e r tal seguridad de p e rp e tu arse en el poder, que cabe p reg u n ta rse si rea lm e n te existen posibilidades de lo con lra rio , como no sea p o r m edios ex tra legales.

Con la esp ec tacu la r renuncia del gob ern ad o r de la provincia de Buenos Aires, queda la c la ra evidencia d e que e l núcleo acau d illad o p o r el p residen te C as­tillo dom ina p or com pleto a l p a r t :do que |r> sostie­ne, a pe sar del peso de m uchas am biciones perso­nales. E l hecho de que se haya llegarlo a desdeñíir todos los form ulism os y "m ed ias p a lab ras" para la

can d id a to oficial a la fu tu ra presiden- so de la c a n d id a tu ra de P a tró n Cosías,

reve la que nu estro v irtu a l d ic tad o r no temo -i la oposición. H a elegido a un hom bre que. sin n ingu­na duda, se rá el fiel con tinuador de su política re ­accionaria .

A unque qu ie ra p resen ta rse a n te la opinión públi­ca como un derech is ta m oderado (h ay quien asegura que está vinculado y apoyado p o r c ap ita lis tas in­gleses) P a tró n C ostas es el exponente tipleo de !a c lase feudal a rg en tin a , y su program a de gobierno, a l igual que el de C astillo, no podrá cum plirse sir.o u tilizando los m élodos que venim os experim en tando : estado de sitio sem i-perm anen te , persecución de di­rigen tes ob rero s y políticos d e izquierda, supresión v ir tu a l de las lib e rtad es e lem en ta les de cualqu ie r dem ocracia sin m ayor evolución. La A rgen tina ofi­cial segu irá siendo la "p ied ra de escándalo" d e n tro del continente, p o r su encub ie rto apoyo a l to ta lita ­rism o; c rece rá el auge de la influencia h ispanista tan en boga, com o la form a m ás efectiva de p re s ta r ayuda al E je fascista , u tilizando el cam ino de M a­d rid p a ra lleg ar a B erlín, o fre ce r colaboración y exi­g ir lib e rtad e s como fu tu ra potencia su ram ericana, en caso del triun fo to ta lita r io .

E n tan to , cabe p reg u n ta rse : ¿D ónde está la opo­sic ión? ¿Q u é se ha hecho del in te n to de "unión de­m ocrá tica" o "unión nacional" tan zam arread o co­m o a rm a co n tra la reacción y el f ra u d e ? Los h e­chos m u estran que los partid o s de la oposición es­tá n en b a n ca rro ta . No tienen con tenido m oral, ni son capaces de sacr if ica r los apetito s m ezquinos del puesto público y "el acom odo" p arlam en tarlo . P re ­gonan la ine lud ib le necesidad de la unión p a ra la lucha com ún eon lra la reacción encaram ada al po­der. y no llegan a co n cre ta r n ad a por no ponerse de acuerdo acerca del cand ida to a so s ten e r en los comicios. D e e sta m anera , lo m ás probab le es que lleguem os a las elecciones con los pa rtid o s div id i­dos como d e costum bre, y con la m áquina del f ra u ­d e bien m ontada, no de jando lu g a r a dudas en cuan­to a l resu ltad o . E s que una unión de las izqu ierdas tien e fo rzosam ente que re s u l ta r estéril con fuerzas de la condición d e las a rg en tin a s ; seria, en todo caso, una unión de partid o s con fines e lectorales, s in contenido social ni a rraig o popular. Porque pueblo no c ree en la honestidad ni el v a lo r d e par­tidos que y a han dado dem asiadas p ruebas de su incapacidad.

T an ev iden te es la fa lta d e una efectiva oposición política, que p a ra hace r f ren te a la in te rvención del E s tad o en la econom ía nacional —contro l de la pro­ducción. el com ercio y las em presas p rivadas— ha su rg ido lo que varios ó rganos de la p rensa llam an “la nueva oposición", con jun to de c ap ita lis tas que se sien ten a fectados p o r el c recien te co rporativ ism o del gobierno nacional. P o r supuesto que e s ta s " fu e r­zas vivas", no o b s tan te su im portancia, nada tienen que v er con los derechos populares p isoteados, .ii si qu ie ra con la "norm alidad constitucional" perdida.

M ien tras no se lenga como objetivo fom en tar la in te rvenc ión del pueblo -—las o rganizaciones ob re ­r a s y popu la res en la so lución de los problem as que le aTectan d irec tam en te, se rá inútil pretendo* ¿,uc h a de ponerse coto a la reacción.

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