Surge en mí un propósito.

Lo veo con claridad.

Lo imagino.

Imagino como me siento con el propósito cumplido.

Imagino que me dicen mis vínculos cercanos con el propósito cumplido.

Me imagino que me dicen las personas menos conocidas.

Lo que me propongo es constructivo y adecuado a mi crecimiento.

En sintonía con mi desarrollo vital.

Un paso de crecimiento.

Su cumplimiento me trae alegría.

Se cumple fácilmente, con fluidez se manifiesta.

Los pasos en pos del propósito surgen de mí en forma espontánea y liviana.

Llego con facilidad a la meta que me propuse.

Puedo aprender y ganar experiencia con un paso suave y fluido.

Gano conocimiento con facilidad y alegría.

Como estoy en una actitud flexible puedo adaptarme a las nuevas situaciones que traen mi propósito cumplido.

Mantengo la vista puesta en el propósito y camino con confianza.

Sé que el propósito se acerca cada vez más aun cuando aparentemente se aleja.

Sé que lo importante es encontrar el propósito y caminar con alegría en pos de su realización.

Sé que ya puedo agradecer por el cumplimiento del propósito.