Albert Camus_ Los Orígenes de La Rebelión _ Revista Replicante

5
16/9/2015 Albert Camus: los orígenes de la rebelión | Revista Replicante chromeextension://iooicodkiihhpojmmeghjclgihfjdjhj/front/in_isolation/reformat.html 1/5 Albert Camus: los orígenes de la rebelión El Príncipe y el Monstruo Por Carlos Filiberto Cuéllar [1] el 10 mayo, 2011 Dos escritores, uno hermoso y el otro nada agraciado, ambos merecedores el Premio Nobel —aunque uno de ellos lo rechazó por razones políticas—, son confrontados por el autor de esta doble semblanza. Yo me rebelo, luego somos. —Albert Camus, El hombre rebelde La torre de Babel se construye no para alcanzar los cielos de la tierra, sino para bajar los cielos hasta la tierra. —Fedor Dostoievsky, Los hermanos Karamázov El hombre feo posee razones muy especiales para rebelarse. La abominación que causa su apariencia física a los otros le obliga a pasar la mayoría del tiempo recluido en su buhardilla y en sí mismo, urdiendo conspiradoras teorías y devorando cientos de libros proscritos, creados por seres igualmente marginales que él. Alejado de sus contrarios: los hombres a quienes por lo menos él califica como hermosos: sus opositores y antagonistas por naturaleza. Tiene pocos amigos, a veces ni uno solo, y si ha logrado convertirse en una figura conocida al final de su tortuosa existencia debido a un intelecto poderoso y una deslumbrante razón, los cuales pulió y desarrolló a lo largo de años, en compensación ante la ausencia de belleza física, emerge por fin como un ogro de entre las sombras de su húmedo cubil. Escupiendo a sus adversarios complicadas teorías sobre un mundo sin esquemas, sin reyes, gobernantes ni dioses. Volteando de cabeza el orden conocido de las ideas, de la razón y de las gentes. Intentando demostrar que la apariencia burda y contrahecha de sus facciones oculta tras de sí la belleza de alma de un príncipe encantado. El mismísimo Cuasimodo en la Catedral de París. Bestia quien por fin reclama su derecho de amor por Bella.

description

psico

Transcript of Albert Camus_ Los Orígenes de La Rebelión _ Revista Replicante

Page 1: Albert Camus_ Los Orígenes de La Rebelión _ Revista Replicante

16/9/2015 Albert Camus: los orígenes de la rebelión | Revista Replicante

chrome­extension://iooicodkiihhpojmmeghjclgihfjdjhj/front/in_isolation/reformat.html 1/5

Albert Camus: los orígenes de la rebelión

El Príncipe y el Monstruo

Por Carlos Filiberto Cuéllar[1] el 10 mayo, 2011

Dos escritores, uno hermoso y el otro nada agraciado, ambos merecedores elPremio Nobel —aunque uno de ellos lo rechazó por razones políticas—, sonconfrontados por el autor de esta doble semblanza.

Yo me rebelo, luego somos.—Albert Camus, El hombre rebelde

La torre de Babel se construye no para alcanzar los cielos de la tierra, sino parabajar los cielos hasta la tierra.—Fedor Dostoievsky, Los hermanos Karamázov

El hombre feo posee razones muy especiales para rebelarse. La abominación que causasu apariencia física a los otros le obliga a pasar la mayoría del tiempo recluido en subuhardilla y en sí mismo, urdiendo conspiradoras teorías y devorando cientos de librosproscritos, creados por seres igualmente marginales que él. Alejado de sus contrarios:los hombres a quienes por lo menos él califica como hermosos: sus opositores yantagonistas por naturaleza. Tiene pocos amigos, a veces ni uno solo, y si ha logradoconvertirse en una figura conocida al final de su tortuosa existencia debido a unintelecto poderoso y una deslumbrante razón, los cuales pulió y desarrolló a lo largode años, en compensación ante la ausencia de belleza física, emerge por fin como unogro de entre las sombras de su húmedo cubil. Escupiendo a sus adversarioscomplicadas teorías sobre un mundo sin esquemas, sin reyes, gobernantes ni dioses.Volteando de cabeza el orden conocido de las ideas, de la razón y de las gentes.Intentando demostrar que la apariencia burda y contrahecha de sus facciones ocultatras de sí la belleza de alma de un príncipe encantado. El mismísimo Cuasimodo en laCatedral de París. Bestia quien por fin reclama su derecho de amor por Bella.

Page 2: Albert Camus_ Los Orígenes de La Rebelión _ Revista Replicante

16/9/2015 Albert Camus: los orígenes de la rebelión | Revista Replicante

chrome­extension://iooicodkiihhpojmmeghjclgihfjdjhj/front/in_isolation/reformat.html 2/5

Camus y Sartre

Jean Paul Sartre tenía el ojo derecho extraviado, un profundísimo grado de miopía,verrugas en el rostro, como batracio o anfibio de la peor calaña. Mitad iguana y mitadzapo reptador. Amén de los pies planos y la cabeza enorme. Debido a sus ojos y susplantas el Ejército francés rechazó su solicitud en la II Guerra Mundial. Gracias a susdefectos físicos y su paso errático y amorfo no fue bien visto ni siquiera cuando seunió a la Resistencia francesa durante la ocupación nazi. Dicen que al igual que supersonaje Eróstrato, eyaculaba en sus pantalones tan sólo al mirar a una prostitutadesnuda. ¿En qué podría serles útil un hombre con tan numerosas malformaciones ydeficiencias físicas?

Este Cuasimodo escribiría decenas de tratados psicológicos y filosóficos, cuentos,novelas, artículos y obras de teatro que le ganaron la candidatura al Premio Nobel.

El hombre hermoso, por su parte, tiene razones muy diferentes para rebelarse. Gozódesde la infancia de la simpatía de los otros y cuando menos de su superficialamabilidad. El hombre hermoso desarrolla su alma y su intelecto no en reacción a lahostilidad externa del mundo, del modo como el hombre horrible e incluso elmonstruo construyen sus palacios y edificios teóricos, sino como un reflejo de símismo que él ve en las ideas magníficas, en las verdades intemporales de los sabios,en el arte y en los enigmáticos fenómenos de la naturaleza. Si algo quiere demostrar almundo es el hecho de que su genio y su pensamiento son tan grandes y bellos como sucuerpo y rostro. Y esto en el fondo también es una forma de rebelión.

Sartre acusaría a Albert Camus de que la suya era una rebelión exclusiva de lasideas, de las concepciones y de la estética. Una rebelión de la poesía, de lafilosofía y de la belleza. De ningún modo de la acción y de las clases sociales,como tanto se empeñara él en su Crítica de la razón dialéctica, pretendiendo

Page 3: Albert Camus_ Los Orígenes de La Rebelión _ Revista Replicante

16/9/2015 Albert Camus: los orígenes de la rebelión | Revista Replicante

chrome­extension://iooicodkiihhpojmmeghjclgihfjdjhj/front/in_isolation/reformat.html 3/5

unificar el marxismo y el existencialismo.

Ocasionalmente, el hombre hermoso y el monstruo llegan a coincidir en algún puntodel proceso de su rebelión: ambos se niegan a ser cosificados. Luchando por no quedarreducidos a un cliché o un estereotipo: el Príncipe y el Monstruo. Si ambos son genios,con mayor razón se encontrarán en alguna estación en el medio del camino. Laexistencia de estos dos seres es una demostración de que apariencia y esencia,fenómeno y nóumeno, no son de ningún modo lo mismo. Empero, no tardarán ensepararse de nueva cuenta y emprender rumbos distintos.

Sartre acusaría a Albert Camus de que la suya era una rebelión exclusiva de las ideas,de las concepciones y de la estética. Una rebelión de la poesía, de la filosofía y de labelleza. De ningún modo de la acción y de las clases sociales, como tanto se empeñaraél en su Crítica de la razón dialéctica, pretendiendo unificar el marxismo y elexistencialismo. Nunca más volverían a hablarse, aunque fueron amigos.

Sartre se negó a recibir el Premio Nobel por razones ideológicas, ignoramos siestéticas. Camus sí lo aceptó.

Camus fue un niño hermoso. De frente luminosa, cráneo bello y ojos deslumbrantes.Su madre, analfabeta y sorda, descendiente de inmigrantes franceses argelinos, loamaría más que a nada en la vida. Del mismo modo que sus compañeros de clase yprofesores del Liceo en Argel. Al perder a su padre desde muy niño, herido y torturadodurante la I Guerra Mundial, sería siempre bien acogido por sus maestros, quienes loacercarían a Nietzsche y a los griegos.

Su rebelión dirigió sus fuerzas hacia la búsqueda de la belleza, también de la crítica,desde el más alto grado de lo hermoso, de las palabras, las metáforas y las ideas.

La peste bubónica comienza en una de sus obras, precisamente La peste, con elaumento en la población de ratas. Las ratas mueren dejando sus cadáveres por milesen las calles. Las personas comienzan a enfermar también, contagiados por las pulgasde los roedores. La plaga acabará con más de la mitad de la población humana deaquella ciudad, amenazando con exterminarla en totalidad, inundando sus cuerpos debubas y tumoraciones que se hinchan hasta matarlos en medio de temperaturasaltísimas y dolores insoportables.

Cuando parece que todos los habitantes de aquella ciudad desaparecerán, la peste sedetiene por sí sola. Sin causa aparente ni razón alguna. Por mero fenómeno deecología de poblaciones. La enfermedad acaba exterminándose a sí misma, dejando asalvo a los sobrevivientes.

Page 4: Albert Camus_ Los Orígenes de La Rebelión _ Revista Replicante

16/9/2015 Albert Camus: los orígenes de la rebelión | Revista Replicante

chrome­extension://iooicodkiihhpojmmeghjclgihfjdjhj/front/in_isolation/reformat.html 4/5

Cuando parece que todos los habitantes de aquella ciudad desaparecerán, lapeste se detiene por sí sola. Sin causa aparente ni razón alguna. Por merofenómeno de ecología de poblaciones. La enfermedad acaba exterminándose así misma, dejando a salvo a los sobrevivientes.

Así se extingue también, según Camus, como la peste, la rebelión de los esclavos. Delos rebeldes con mente esclavizada, tal como describe en su libro El hombre rebelde. Elesclavo que se rebela acaba aniquilándose a sí mismo después de sembrar el terror y ladestrucción entre sus dueños e incluso entre sus coetáneos. Y si acaso raramente llegaa triunfar, termina convertido en un amo cien veces más cruel que su antiguo dueño.Esto explica el porqué del fracaso de tantas insurrecciones a lo largo de la historia.Una cosa es que el esclavo se harte de su opresor y desee e incluso logre asesinarlo,contagiando a sus iguales. Otra muy distinta es liberar su conciencia de las atadurasmentales. Al igual que las ratas y la peste, el esclavo rebelde estará condenado aaniquilarse a sí mismo y a esparcir su enfermedad.

Según Camus, el verdadero hombre rebelde nace en Occidente, en Grecia y Roma, conEspartaco, aplastando legiones romanas y Sócrates engullendo la cicuta. Con Aníbalcruzando los Alpes en compañía de sus elefantes y con Atila acosando al enviciadoImperio Romano. Con el esclavo o el ciudadano del imperio, que repentinamente sonconscientes de sus derechos, nada más por el simple hecho de existir. También con losbárbaros que desean apoderarse de Roma o Grecia y erigirse como sus emperadores.Albert Camus asegura que en el mundo occidental el hombre es crecientementeconsciente de sí mismo y el rebelde fractura sus cadenas porque considera que eltiempo de la esclavitud ha terminado y él tiene derecho a ser dueño de su propiotiempo.

¿Pero qué podría decirse del caso de Gautama Buda y de Jesús de Nazaret? En Orientela rebeldía se basa en la renuncia y la sencillez. Suele decirse que cuando un hombre escapaz de renunciar a todo, incluyendo lo material y lo espiritual, hasta los mismosdemonios se ponen a temblar de miedo. La de Oriente no es una renuncia del todoconsciente de sí misma ni sustentada en ninguna formulación verbal o teórica, comoel caso de los revolucionarios en Occidente. La de Buda era una rebelión de la renunciay el vacío absoluto, y la de Jesús otra sustentada en el amor por los hombres, inclusopor los enemigos.

A estos rebeldes Camus los denomina rebeldes metafísicos. No poseen mentalidad deesclavos ni desean cambiar ningún orden social. Aunque al final lo logren. Su rebeliónse dirige en pos de la Unidad del Mundo. Les hiere en lo más hondo la fragmentacióndel universo. La división cuerpo-mente del hombre los tortura. No buscan ningúnparaíso en otra vida, sino encontrar un cielo en este mundo.

Page 5: Albert Camus_ Los Orígenes de La Rebelión _ Revista Replicante

16/9/2015 Albert Camus: los orígenes de la rebelión | Revista Replicante

chrome­extension://iooicodkiihhpojmmeghjclgihfjdjhj/front/in_isolation/reformat.html 5/5

1. http://revistareplicante.com/colaboradores/carlos-filiberto-cuellar/

Consigue una cuenta gratuita de Evernote paraguardar este artículo y verlo más tarde desde

cualquier dispositivo.

Crear cuenta

Los profetas de Camus son Nietzsche y Dostoievsky, quienes no mataron a dios, sinoque se tropezaron con su cadáver. Al principio los seres humanos adoraban lospoderes de la naturaleza, a la montaña, como los judíos primitivos a los que guióMoisés. Luego fueron politeístas como los egipcios y finalmente monoteístas, al igualque los cristianos. ¿Pero tras la muerte de dios, se pregunta Camus, cuál es el pasoposterior de la humanidad que llenará semejante vacío histórico?

La respuesta que le proporcionarán Nietzsche y Dostoievsky tendrá que ver con elsurgimiento del nuevo hombre-dios, capaz de establecer su propia ley. Derrumbandoun orden antiguo y viciado para construir otro. Constructor de un cielo en esta tierra,o aniquilador total del mundo, genocida y ecocida.

A la ceremonia del Premio Nobel se dice que asistió una gran cantidad de mujeres paraadmirar al hermoso escritor, metido en su elegante traje. El escritor amante de losgatos, autor de El Extranjero y El hombre rebelde, era Albert Camus.

Links