ALCANCE Y NATURALEZA DEL ESTUDIO - Universidad Nacional de ... · A. INTRODUCCION y TERMINO S DE...

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PARTE PRIMERA ALCANCE Y NATURALEZA DEL ESTUDIO

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PARTE PRIMERA

ALCANCE Y NATURALEZADEL ESTUDIO

CAPITULOr

CONSIDERACIONES GENERALES

A. INTRODUCCION y TERMINO S DE REFERENCIALa naturaleza general del estudio

El objeto principal de este estudio es discutir la conveniencia y elempleo de los recursos productivos para alcanzar y mantener variastasas de desarrollo en la producción y el consumo de una poblaciónque crece considerablemente en un país determinado -Colombia- enla próxima generación.

Los recursos pueden ser naturales, hechos por el hombre o huma-nos. Su empleo se refiere no sólo a su consumo sino también a lamanera o eficiencia con que se utilicen. La palabra "empleo" compren-de, además, el impacto resultante sobre el medio ambiente a causa desu utilización. El incluir la palabra "mantener" implica que los costosde producción económicos y sociales para las cifras crecientes puedencompensarse y aún más, dados los adelantos tecnológicos. Esta supo-sición, claro está, tal vez tendrá que modificarse en ciertos casos yépocas. La frase "nivel de consumo", se utiliza en el sentido no sólodel promedio per cápita sino como nivel aplicable a la mayoria de lapoblación.

En general, los recursos económicos deben incluír todos los pro-ductivos. Sin embargo, se ha prestado en afios recientes gran atencióna los recursos naturales no renovables y especialmente a los costoscrecientes de la energia y a la facilidad o dificultad para una expor-tación adecuada, que pueda compensar las importaciones necesariaspara suplir las deficiencias domésticas. El crecimiento percápitapuede considerarse como el producto final de un complejo intercambiode recursos, tecnología 1 y población. Como no se puede cubrir profun-damente un campo tan vasto (ni forzar al lector a los limites de supaciencia), se decidió darle un tra tamien to especial a los recursos na-turales y a la energía, al impacto de la población sobre el desarrollo, ala "falta de divisas" y a la influencia de aquel sobre el medio ambientenatural o artificial y finalmente al manejo o empleo de los recursosen la producción.

1) En el sentido mAs amplio de la palabra.

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Es posible, como algunos escritores suponen, que los aftos setentamarcarán una división histórica entre un largo periodo de abundanciade energía, materias primas y quizás víveres, con precios relativamentebajos y un período posterior de combustibles más costosos y sustitutoscon precios aún mayores, a medida que aumente la escasez de uno trasotro de los recursos naturales, con la posible eventualidad de un in-cremento en los precios de los alimentos.

Por lo general esta posibilidad no se tuvo en cuenta en las discu-siones sobre el gran aumento en el consumo per cápita y el de lascifras de población en los últimos dos siglos. Una de las bases de laRevolución Industrial de la Gran Bretafta fue la abundancia de com-bustible barato, que contribuyó al desarrollo de exportaciones y alsostenimiento de una población grande en relación con los recursosdel pais y con los altos niveles de consumo. Lo mismo se podria decirdel d.esarrollo posterior del Japón y de algunos paises europeos. Sinembargo, el reciente aumento en los precios del petróleo ha significadouna amenaza al incremento continuo en los niveles de consumo enaquellos paises que adolecen de recursos básicos.

La irreversibilidad de algunos hechos es impresionante. El petró-leo una vez transformado en energía no se puede recuperar. Es s610aun costo considerable que se puede restaurar la fertilidad de las tierrasagricolas que se han vuelto salobres por irrigación defectuosa. Lo mis-mo se aplica a la tierra cubierta por concreto o asfalto. La pérdida dela cubierta vegetal puede conducir en pocos aftos a la desaparición delos nutrientes de la capa vegetal formada a través de miles de aftosoILa lista de recursos que se pueden agotar o daftar es muy larga. Porello algunos sostienen que es prudente tratar de anticiparse a los pro-blemas antes de que surjan. Si no se presentan, no se ocasionará nin-gún perjuicio, pero en caso contrario, se habrán tomado las medidasque asegurarán que la transición y los ajustes necesarios serán menostraumáticos. Sin duda alguna, la decisión de los gobiernos anterioresde los Paises Bajos de reservar gran parte de la tierra para cultivos debajo rendimiento da un costo alto, analizado en términos de pérdidasy ganancias. Pero si se habla en términos de la perspectiva históricadel bienestar del pueblo holandés, se puede defender lo acertado de taldecisión. El economista no está especialmente calificado para respon-der problemas tan difíciles, pero como existen, hay que tratar de resol-verlos.

Por lo general la respuesta a estos temores es destacar las posibi11-dades il1mitadas de la tecnologia. Como no nos podemos anticipar alos adelantos tecnológicos que ampl1en la habilidad para producirsustitutos, recuperar la materia prima utilizada, producir energia conmayor eficiencia y disminuir la contaminación, los temores sobre es-casez y agotamiento pueden resultar sin base. Por lo tanto, ¿por quéanticiparnos a los problemas o tomar una acción preventiva para difi-cultades que quizá no surjan?

En apoyo a esta opinión se sefíala que las predicciones sobre elJuicio Final se conocen de tiempo atrás y tienen, por lo general, pr~e-has infundadas. s Por ejemplo, hace más de 150afíos, Ricardo estaba

2) Tales casos están demostr,ados por Nicho1as Georgescu-Roegen en "La Ley deEntropía y el Proceso Económico". Harvard University Press. 1971. otro nombre dado ala Ley de Entropía es: La Segunda Ley de Termodlnimica. En general hay una transfor-mación constante y regular de energía de una forma libre a una latente y no utilizable.

s) Excepto en unos pocos paises. donde sólo recientemente el crecimiento de la pobla-ción igual6 el. ~o16gico.

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agobiadopor los mismos pensamientos alarmantes. Estaba preocupado,en términos modernos, por la carrera entre la entropia ("la decadentefert1l1dadde la tierra"), la tecnologia ("mejoramiento") y la pobla-ción (con cifras en función de aUmentos disponibles). En reaUdad lastasas de población han bajado drásticamente en muchos países y demanera significativa en otros. La tecnologia ha superado considerable-mente la entropía creciente. ¿Por qué no podemos continuar indefini-damente estas tendencias?

En respuesta a esta pregunta debe tenerse en cuenta la naturalezade la tecnología, que puede utilizar un recurso de manera más eficiente.Si es provechoso, podría descubrir los medios y los instrumentos pararecobrar y reutilizar una parte de la materia prima empleada y teneracceso a yacimientos de petróleo o de minerales menos ricos o máscostososde explotar y a tierras más difíciles de cultivar. Los adelant03tecnológicos pueden permitir una reducción continua en los costos oun aumento en la producción a través del empleo más eficiente (parael hombre) de la energía potencial o de los materiales que se puedenaprovechar. Sin embargo, 10que no pueden hacer es parar la transfor-mación regular e inexorable de la entropía baja a alta, como sucedecon las reservas de energía potencial que existen en el mundo. Concualquier aumento en la población y en el consumo, la energia latentese pierde definitivamente en forma de calor irradiado o en la conver-sión de materia a formas menos útiles o incluso más nocivas para elhombre. Por otra parte, la tecnología puede permitir, sin costo adicio-nal, el aprovechamiento y uso de la mayoría de la energia directa delsol convertida en forma útil a través del proceso de fotosíntesis de lasplantas.

Para la agricultura no parece existir el peUgrode que en términosglobales se "acabe la tierra", en la próxima generación. Más bien, losavances técnicos indispensables pueden sólo lograrse a un costo talque podría empeorar los términos de intercambio o conducir a un au-mento de los precios de los productos agrícolas en relación con otros.Por 10menos esto fue lo que ocurrió en el caso de algunos aUmentosde origen marino donde apareció una "curva de oferta de incUnaciónrevertida" (a mayor demanda, un precio más alto, mayor es la cogiendahasta que disminuye en términos físicos). Algunas clases de adelantostecnológicos pueden ser auto-destructores, como por ejemplo la cazade ballenas. Las langostas han desaparecido casi por completo de laaUmentación diaria. Siempre podemos recurrir a la piscicultura peropor medios más costosos que cosechar el regalo de la naturaleza. Ladesaparición temporal de la anchoa del Perú, por ejemplo, tuvo am-pUas repercusiones sobre el precio de la harina de pescado y sobre elcosto de la carne, cuya producción depende en parte de aquella comoaUmento suplementario.

Al mismo tiempo el aumento en los precios en aUmentos y mate-riales plantearon que se considerara la posible vulnerab1l1dad de losniveles de alto consumo.' Surgieron preguntas sobre los costos de in-dustriaUzación en términos de contaminación, congestión, tiempo yesfuerzos gastados en el transporte. Aún más fundamentales son laspreguntas relacionadas con el cambio en el estilo de vida y actitudescausadas y dependientes del desarrollo sin limites -la desunión y la

.) El cambio en los términos de intercambio, en la retrospectiva de 1976, aparececomo producido por m4s de una combinación temporal de circunstancias, pero el proble-ma surrtdo en el texto es alln legal.

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competencia que forman parte de la vida urbana diaria en los paisesdesarrollados-, aunque este es otro aspecto diferente del problema deldesarrollo.

Relación de los estudios de "Recursos para el Futuro"con el mismo tema

En el curso de este estudio se tratará más sobre estos asuntos.Sin embargo, los términos de referencia tratados en particular siguenmuy de cerca aquellos del original, realizado por la Commission onPopulatlon Growth en 1972 y los estudios pasados y presentes de Re-Bources for the Future, los 'cuales sirvieron de inspiración a éste. Enaquellos se dio énfasis a la población, los recursos naturales y laenergía en relación con el desarrollo y su impacto sobre el medioambiente por el empleo de los recursos. La conveniencia del desarrolloper se para todos los paises no se puso en duda.

No es posible hacer un resumen, en tan poco espacio, de los resul-tados e implicaciones del trabajo de 1972, que fue presentado en sietelibros voluminosos y escritos por un grupo de distinguidas autoridadesen muchas materias. Sin embargo, se puede arriesgar a expresar unaopinión, tal como se observa desde el punto de vista de un pals en des-arrollo. Resumiendo, los resultados podrlan caracterizarse por un relati-vo optimismo, particularmente con respecto a la suficiencia de losrecursos para el desarrollo frente a la población.

Segtm el estudio, la curva de aumento de población de los EstadosUnidos está disminuyendo, mientras que los recursos naturales todav1ason relativamente abundantes (aunque no tanto como antes ni tanricos). Si se distribuyeran más equitativamente, las cantidades actualesde producción y de consumo serian lo suficientemente grandes paraasegurar los gastos esenciales, las comodidades y la recreación a losresidentes actuales y futuros de los Estados Unidos. Para las gentesen la mayoría de los paises en desarrollo, los recursos producidos porel hombre -el capital- parecen enormes en ese pals en términos percápita. Los recursos humanos, considerados desde un punto de vistaestrictamente económico, son, además de otros y muy importantesaspectos, el fruto de aftas de educación primaria y secundaria universaly obligatoria y de dotaciones excepcionales insuperables en la ense-fianza más avanzada y especializada. Hay, naturalmente, inconvenien-tes y serios interrogantes en el futuro. Pero la situación general,pintada a grandes rasgos en comparación a la situación de los paisesen desarrollo, es relativamente optimista, por lo menos para la gene-ración futura. Las interrelaciones entre la población y los recursosparecen ofrecer para la tecnologla, si así se quiere, prospectos más omenos seguros hacia un nivel de vida alto para los futuros residentesde los Estados Unidos y el Canadá.

De nuevo debe recordarse que hay quienes sostienen que la pro-yección es demasiado optimista. Estos dan mayor énfasis al agota-miento actual y futuro de los recursos, por un lado, y a los costos depolución y contaminación, por otro, y a las terribles posibilidades delcrecimiento exponencial geométrico (o interés compuesto) en un pe-riodo tan corto como el de una generación, en un pais cuyos nivelesde consumo ya son muy altos. Todos los paises, ricos y pobres, tendránque vivir bajo la amenaza de una guerra nuclear. Finalmente, y quizásea de mayor importancia, estas criticas se:fíalan que la suposición fun-

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damental de estos estudios sobre si los Estados Unidos pueden conti-nuar utilizando los recursos minerales y energéticos del mundo acambio de viveres y manufacturas, tal vez no sea real (se entiendeque esta posibilidad está bajo examen en el estudio de 1976 de Re-sources for the Future).

Diferencias de énfasis con los estudios originales

Como consecuencia de la naturaleza algo diferente del problema yla limitación de recursos disponibles para este tratado, en comparacióncon el estudio original, se le dará menos énfasis a la posible escasezy creciente costo de los recursos naturales y a los aspectos ambientalesdel desarrollo y se hará mayor sobre las posib1lidades de disminuírlas brechas tecnológicas y de consumo o ut1lizar más eficazmente losrecursos productivos -naturales, artificiales y humanos-, aunque estoagrave temporalmente los problemas derivados del desarrollo. Ademásse dará mayor importancia al aumento de la población que ahora pa-rece justificado en los paises más desarrollados.

Por esto, al reconocer los problemas especiales de los países endesarrollo (los cuales se diferencian significativamente, en algunosaspectos, de aquellos de los países más avanzados) se decidió pres-tar mayor atención a la disminución del "efecto privativo", 5 dentro deuna nación y entre varias, lo cual a su vez, necesita un análisis másprofundo sobre el proceso de aumento de población, que se hizo evi-dente al tratar de los recursos suficientes para las naciones más ade-lantadas. El "desarrollo" está adquiriendo connotaciones cualitativasy cuantitativas. Se empieza a ver que no tiene tanto interés el ingresoper cápita (a pesar de ser importante) como la cualidad de ejercer uncontrol más consciente y ojalá más constructivo sobre el medio am-

.biente, con el fin de lograr el bienestar. Se argumentará que el de-sarrollo es una condición necesaria pero no suficiente para alcanzarlo.

No debe darse demasiada importancia a la probab1lidad de que latasa de nacimientos haya decaido en gran parte, como respuesta alaumento de los ingresos y a la educación. Para algunos paises presosen la trampa de un equilibrio bajo, se puede concebir que las tasasde desarrollo económico no sean lo suficientemente altas que lespermita el alza de los ingresos y de educación a un nivel que puedancontrarrestar el crecimiento de la población. Habría que escoger entremedidas muy drásticas, beneficencia masiva o la catástrofe. En otraspalabras, para algunos paises, la combinación de pobreza, aumento depoblación y una base de recursos naturales y energéticos decrecientespuede ser excesivo para superarlos mediante la tecnologia, emplean-do el vocablo en su acepción más amplia, para incluir la organizacióny la administración. Aun puede presentarse una carrera cuyo finales incierto. Por lo tanto, hay otro cambio en el énfasis de los estudios.

El problema de los recursos naturales y la energía tiene repercu-siones más profundas en los países en desarrollo que en los EstadosUnidos y en otras naciones más adelantadas. La preocupación no essólo de la suficiencia de los recursos para mantener el aumento en el

5) Esta frase se empleará a través del estudio, por ser más descriptiva y significativaque la frase usual "efecto de demostración". La revolución de las exportaciones crecientesse convierte sencillamente en una intensificación del efecto privativo, el cual lleva unaconnotación algo diferente. Las extensas implicaciones del primer sentido de deprivaci6n.desarrolladas por Veblen y Knight, son el tema de un ensayo de Lauch1in Currle."Wants. Needs, Wellbeing and Economic Growth", Journ81 of Economic Studies. mayo. 1975.

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consumo sugerido por la continuación de las tendencias recientes. Sila brecha en los niveles de consumo se cierra a tiempo, en la mayoriade países en desarrollo y si ocurre una disminución del efecto pri-vativo, al igual que de las tensiones que lo acompat'ian, puede ocurriruna de dos cosas: o se disminuye el crecimiento en los países desa-rrollados, con todo lo que esto implica para los objetivos y políticas.o la tasa de crecimiento per cápita debe acelerarse en los países endesarrollo y mantenerse a una tasa más alta, lo cual requiere un dife-rente conjunto de criterios para los recursos adecuados y para laspolíticas. Es decir, dos cosas aparecen como condiciones necesariaspero no suficientes para alcanzar un estado de bienestar: un aumentoen los niveles de consumo de las masas y una disminución en lasbrechas de consumo tanto dentro de los países como entre los mismos.Estas consecuencias deseables no resultarán de una tasa de crecimien-to uniforme con bases iniciales diferentes.

Seguramente este es el verdadero factor fundamental en las fra-ses y emotividad que surgen del Nuevo Orden Económico Internacio-nal, de las declaraciones del Grupo de los 77 y del empeoramiento delas relaciones (al tiempo de escribir esto) entre los países en desarrolloy los más desarrollados. El contraste doloroso entre el conspicuoconsumo de unos pocos y el sufrimiento y las condiciones de precariasubsistencia de muchos, no puede ignorarse, entre otros motivos, por-que está envenenando las relaciones políticas y sociales en los paisesy de unos a otros. Obviamente este tema es explotado por los políticosdemagogos. No obstante es de gran importancia que se haga el diag-nóstico correcto del problema y que los remedios que se adopten seanfactibles y efectivos para quitar o disminuír esta fuente de fricción.

Por consiguiente, se propone prestarle atención al tema de la tasade crecimiento más alta o más deseable; a la cuestión de si la basede recursos y la disponibilidad energética, sea doméstica o extranjera,impondrán restricciones sobre tales tasas y a las condiciones básicaspara alcanzarlas durante un período de tiempo significativo, lo cualconlleva alguna consideración de la política así como represionesfísicas. El criterio de la suficiencia de recursos puede, en otras pala-bras, disentir en énfasis entre los países menos desarrollados y losmás.

Hasta hace poco, la mayoría de los autores sobre el desarrollo su-ponía implícitamente que llegar a un "estado desarrollado" era cues-tión de tiempo y que las tendencias, sin hacer caso a las políticasespecificas y tasas de crecimiento, estaban en la dirección correcta.Se sabe que las tendencias pueden descontinuarse (de ello hay ejem-plos) y que de cualquier manera, "un estado de desarrollo" no es tantoun fin como un posible medio para lograrlo. En resumen, el problemaes infinitamente más complejo de lo que parecía hace unos afios;ahora los estudios del desarrollo deben reconocer tal complejidad.

La suficiencia de recursos y de energía necesarios para lograr porlo menos los niveles mínimos de bienestar varían de país a país y elempleo de términos tales como "Tercer Mundo" debe hacerse con pre-caución. El conjunto de los países en desarrollo se distorsiona cuandose incluyen, bajo el mismo título, algunos que han llegado casi aigualar los ingresos per cápita de los grupos más pudientes y otroscon una población total que sobrepasa los dos mil millones, que tienenun ingreso per cápita de 300dólares. Aunque al expresar la diferenciade ingresos en términos de dólares de Estados Unidos sin duda se

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exagera la diferencia de niveles de consumo; tales diferencias son tangrandes y consistentes con las tremendas diferencias presentadas porciertos indices, como el consumo per cápita de energ1a y de hierro,que no hay duda alguna sobre la gran extensión de la brecha. En tér-minos generales, son los paises más pobres los que están experimen-tando el aumento rápido de población y por lo tanto retardando elaumento del ingreso per cápita. En estos paises el problema es doble:resolver las necesidades y el incremento de deseos de la poblaciónexistente y suministrar niveles de consumo adicionales más altos parael aumento demográfico esperado. Finalmente debe destacarse queel éxito en lograr este doble objetivo puede requerir un nivel mun-dial de uso de materiales tan alto y una pérdida irreparable de ener-gia que pueda resultar realmente alarmante desde el punto de vistadel sostenimiento.

Algunas estadisticas ayudarán a dramatizar la situación.6 En 1960el consumo de energia promedio por persona en un pais rico ($ 1.280-$ 5.120 Producto Bruto Interno per cápita) fue de 18.5 veces mayorque en un pais pobre ($ 64 - $ 1.024), excluyendo a China. A pesar delaumento en el consumo de acero y energía en ambos grupos de paisesen la década siguiente, el mayor crecimiento de la población de losEstados pobres condujo en 1970 al subir la proporción de consumo deenergia, en términos per cápita, de las naciones ricas a 20.8 veces al delos paises pobres y en acero de 21.4 a 25.2 veces. Las diferencias sontremendas en términos absolutos. Como observa Brown, "parece queestamos confrontados con lo que resulta ser una situación imposible.'Las tendencias actuales en el consumo dentro de los paises o entreellos deben cambiar, lo mismo que la población en las naciones pobres.Sin embargo, cuáles serán las tendencias que cambiarán, en qué pai-ses, en qué cuantia y cómo, constituyen los problemas más dif1cilespara la próxima generación. Decir que la población no continuarácreciendo y que el consumo en los paises más desarrollados no man-tendrá la tasa de crecimiento de 1960 y principios de 1970, es confor-tante pero no suficiente. No podemos confiar con entera seguridadsólo en las fuerzas automáticas. Alguien debe afrontarlo para asegurarque tales posibilidades no se conviertan en realidades, que la pobla-ción en los paises más pobres no continúe aumentando y que la brechadel consumo per cápita no se amplie en términos absolutos.

Un sistema poco disimulado de beneficencia internacional, o seael otorgamiento de préstamos altamente subsidiados que equivale alo mismo, quizá contribuyeron durante un tiempo a cerrar la brecha,pero a duras penas dieron bases satisfactorias para proveer el "acceso"a las materias primas, la energia y la tecnologia. Una condición paratener acceso continuo sobre una base digna, seria el logro de uncontrol más eficaz sobre los ambientes politicos, sociales, demográfi-cos, físicos y económicos nacionales -lo cual nos trae de nuevo a laesencia del desarrollo.

6) Harrison Brown "PopuIation Growth and Aff1uence. The Fissionlng ot HumanSociety." C'altech Population Program Occasional Papers. 1973. (También en QuarterlyJournal of Economics. mayo. 1975, pp. 236-246 y en World Without Borders, RandomHouse. N. N. 1972.)

7) Caltech Paper, op. cit., p. 15.

La organización del estudio

De lo anterior se deducirá. que este estudio estará. relacionado COlL

la población, el d.esarrollo y los recursos y su interacción en COlOmolaen el próXImo cuarto de siglo. El tema es tan grande que plantea elserio problema de organizarlo. Es deseable segUir lo mas cerca pos.ü>lela organización y el énfasis del estudio original, pero al mlSmo tIernposubrayando los problemas peculiares de un determinado pais en de-sarrollo. La solución adoptada fue la de seguir el estudio origmal,haciendo una serie de proyecciones "probables" o basicas de creci-miento demográfico y económico y su interacción y luego analizar elimpacto de tales proyecciones sobre los requisItos de recursos y energiaen la agricultura y en el medio ambiente.

En este momento se pueden anticipar los resultados diciendo que,tal vez con excepción de los productos del petróleo, no es proaableque las restricciones físicas constituyan barreras Insuperables paraalcanzar las proyectadas tasas "básicas" de crecimiento per cápita. Sinembargo, las proyecciones o escenarios básicos mas factibles no sonsatisfactorios de verdad ni debilitan los potenciales de crecimiento delpaíS durante este periodo. Por consiguiente, se propone partir de losestudios originales en este punto y seguir las proyecciones básicasmediante la presentación de modelos de crecimiento más deseables.Esto se hará en la Parte Segunda del presente estudio. El análisisdetallado de las posibles restricciones de recursos puede cubrir, almismo tiempo y sin mucho trabajo adicional, tanto los modelos bá-sicos como los de crecimiento más deseables (Parte Tercera). Obvia-mente será más dificil para algunos modelos de crecimiento que paraotros, el sobreponerse a las restricciones de recursos a costos acepta-bles. Verdaderamente, en relación con el análisis de los sustitutos ylos medios de conservación, pueden surgir cambios radicales en laspautas de producción-consumo, las cuales parecen ser la alternativamás :factible.

Cómo lograr las tasas de crecimiento altas "básicas" o más "desea-bles" dentro de un limite de tiempo, es por lo tanto un tema muchomás dificil que la determinación de escenarios diferentes y los recur-sos que serán necesarios y su impacto sobre el medio ambiente. Envez de evadir estos temas dificil es y controvertibles, se decidió con-centrarlos en una sección diferente (Parte Cuarta), de tal manera quela parte menos discutible se pueda leer como un todo, independientede la solución O soluciones posibles. Esto no es totalmente práctico,puesto que una alta tasa de crecimiento no debe ser necesariamenteuniforme (dependiendo de las diferentes elasticidades ingreso de lademanda) de modo que una descomposición sectorial de la tasa decrecimiento no puede divorciarse de ciertas suposiciones o proyeccio-nes de tasas de crecimiento en sectores diferentes, lo cual quizá tengafuertes implicaciones politicas en ellos mismos. Se repite, sin embar-go, que la discusión de las politicas se aplazó para la Parte Cuarta,hasta donde fue posible hacerlo.

El estudio adopta una base convencional para sus proyeccionesque consiste en extrapolar las tendencias históricas actuales, contem-pladas en un pasado lo suficientemente adecuado para disminuir laposibilidad de que los desarrollos transitorios y recientes cobren de-masiada importancia, pero no tanta como para darle mucho peso a

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un ambiente que ya no existe. Se debe admitir que la decisión de unperíodo base se determinó en parte por la información disponible. F1.nalmente, los ajustes a las tasas de crecímiento sectoriales del pe-ríodo base se hicieron en consideración a las razones que Ber~anotadas posteriormente. Aquí se trata el tema sólo para explicar porqué las proyecciones están precedidas de un breve análisis histÓl'!COde las características del período base, para que el lector esté enmejor posición para estimar el razonamiento o la falta de él de unaproyección ampliamente sustentada en tendencias históricas, comotambién el esfuerzo excepcional que se necesitaría para lograr lastasas mucho más altas. Existen ciertas suposiciones implícitas en eluso de tendencias históricas, sobre la persistencia de rasgos distinti-vos del ambiente económico y social que caracterizaron el periodobase, inoperantes hoy, y que por otra parte pueden omitir o subestimara las emergentes. Por lo tanto no se puede evadir el juicio personal.

El análisis de proyecciones y bases está antecedido por una brevedIscusión sobre algunos problemas conceptuales relacionados conlos recursos.

Sin embargo, la discusión en este momento puede concluir CQlluna nota más tranquilizante por lo que concierne a la gran mayoríade los paises menos desarrollados. Los conocímientos técnicos diSpo-nibles para aumentar la capacidad productiva del trabajo son tan nu-merosos que los países en desarrollo tienen una reserva muy grandede conocimiento técnico aprovechable para disminuír las brechasmencionadas anteríormente. Además los recursos humanos están ge-neralmente muy mal aprovechados. Sí no fuera por el enorme y con-tinuo aumento de la población, en la gran mayoría, podrían encararel futuro con algo de confianza. Como se aprecia, el problema con-siste en utilizar la tecnología, los recursos humanos y los artificialesde la mejor manera posible y conservar y obtener del extranjerorecursos naturales y energía con el fin de dominar el problema de-mográfico y alcanzar la posibilidad de disminuir la brecha de consu-mo que existe putre los paises más o menos opulentos. Debe admitirse,sin embargo, que la formulación y adopción de políticas económicasy sociales apropiadas pueden crear más dificultades de las que seoriginan por el agotamiento de los recursos físicos.

B. ALGUNAS SUPOSICIONES BASICAS

En el análisis anterior se destacaron algunos problemas concep-tuales y otros se trataron muy brevemente. Estos se re ferian a larelación que existe entre el crecimiento y el desarrollo con el bienes-tar, de la cual indudablemente surgen preguntas sobre la naturale~ade estos vastos conceptos. Aun el vocablo "consumo", tan comúnmenteempleado, implica un número de problemas en relación con la natu-raleza y medida del mismo y su influencia en el bienestar. En unestudio de esta clase estaria fuera de lugar dedicarle mucho tiempoa estos problemas, por lo cual, sólo se sefiala que aquel es en el fondoun estado mental; que su relación con el consumo es cada vez más

8) La frase apropiada de Simón Patten.

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tenue a medida que se aleja de una economia de miseria,s por ser unestado mental afectado por gustos, costumbres, probabilidades, varie-dad de articulos y servicios todos cambiantes, es inmensurable concierta precisión a través del tiempo y entre los paises, como es igual-mente el signiticado de ciertos articulos "representativos" de dife-rentes épocas y lugares; la diferencia de distribución, oportunidad yposición crea una insatisfacción o un sentimiento de envidia, no im-porta cuanto se haya progresado desde una economia de miseria.

Para los propósitos de este estudio se partió de ciertas suposicio-nes que quizá los lectores consideren arbitrarias. La justificación paraello pudo ser el tratamiento común, asi como la exclusión de discu-siones a fondo sobre los términos en referencia. Esta decisión setomó con cierta renuencia, pero las alternativas eran las de darle .untratamiento superficial o la dedicación de mucho tiempo y espacioa temas que estaban fuera de los términos mencionados. Cinco auto-res en dos instituciones han escrito recientemente un libro de 300páginas con una bibliograf1a de 14 páginas 9 sobre el simple tema dela concordancia de una mejor distribución y desarrollo. Muchos es-critores han tratado de dar una definición signiticativa de una pala-bra que suena tan obvia como "desarrollo", pero generalmente handejado cabos sueltos en sus argumentos. El director de este estudioescribió un articulo 10 sobre los deseos y necesidades, que en si era elresumen de dos conferencias con material suficiente para un libro alconsiderar temas relacionados con la distinción entre los requeri-mientos fisicos y sociales del hombre, el efecto de envidia (que com-prende el "snobismo", el deseo de "querer aparentar" y el de emula-ción) y la relación de éstos con los incentivos económicos y con elsentimiento de bienestar.

Entonces para los propósitos del estudio se presume que eldesarrollo económico continuará de manera deseable, especialmentepara una tasa de crecimiento más rápida para los paises más pobresque la de aquellos más desarrollados; que en las economias mixtaspara ajustar una tasa alta de crecimiento con una mejor distribuciónse debe asegurar ésta, no tanto en la riqueza actual como en losbeneficios del desarrollo; que el consumo sobresaliente no sólo es undesperdicio y un incentivo innecesario sino que además empobrecela comunidad en términos de costos, de oportunidad y en bienestarsiquico; la diferencia en niveles de consumo en distintos paises (y susclases de ingresos) es una fuente de envidia, de fricción y un peligropara la futura paz y convivencia mundial; el "desarrollo" es más unacondición que 10 capacita para ejercer un control consciente sobre elmedio ambiente, que un estado medible cuantitativamente. Por elloes una condición necesaria al bienestar aunque no suficiente.

Las consideraciones de espacio y de tema hacen aqui imposibleuna defensa de estos conceptos. Sólo se mencionan para que el lectorconozca los términos y algunas de las suposiciones básicas en que sefundamenta el estudio.

10) Lauchlin Currie, "Wants, Needs, Wellbeing and Growth", op. cit."Bec1Jstribution w1th Growth", Ox:ford, 19'74.

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C. LOS RECURSOS Y LAS OUENTAS NAClONALESu

Asi como el pensamiento económico se ha condicionado a la con-tinuidad indefinida del desarrollo, asi también lo han sido loa eon-venios de la contab1l1dadeconómica.Aunque Adam Smith luchOcon\rala paradoja del agua sin valor y diamantes vallosos y todos los cursosiniciales lo mencionan, aceptamos sin dudas las convenciones de lacontabil1dad económica donde se dan por ciertas tales anomal1asaparentes.

Es sólo cuando el agua "escasea" o es "costosa" que tiene valor '1contribuye al ingreso nacional. Si esto se considera racionalmen~resulta absurdo. Sencillamente se hace una distinción elemental entrecontribución y atribución. Un buen clima, ni muy frio ni muy caliente,con lluvia abundante pero no excesiva, o aguas potables que no re-quieran tratamiento, puede contribuir grandemente al bienesta.r,que en las cuentas nacionales es atribuido a otros factores. En losEstados Unidos y el Canadá durante mucho tiempo se obtenian exce-lentes tierras para cultivo con sólo pedirlas o a precios virtualmenteirrisorios. Un terreno nivelado, con buena agua, en un clima bueno,no sólo reduce el costo de la producción de alimentos sino que tambiénproduce un gran ahorro en el transporte. En Colombia, las importa-ciones que llegan a Buenaventura, en la Costa Pacifica, para lograrsu destino final, Bogotá, deben escalar tres sistemas montafiosos, esdecir, unos 10.000metros en total. Tener tierra laborable a diferentesalturas cerca a la linea ecuatorial permite producir gran variedadde cultivos, obteniendo frecuentemente dos o tres cosechas al afto enla misma parcela.

La yuxtaposición de corrientes oceánicas cálidas y frias fuera delas costas del Perú ha determinado durante muchos afios una produc-ción enorme de anchoas, lo cual figura en las cuentas nacionalesdel país como ingresos individuales. El costo anual de la calefacciónen el Canadá y en la Unión Soviética es considerado como productoy como ingreso. En los climas cálidos ese producto es innecesario yel esfuerzo se puede emplear en otras actividades (tales como el en-friamiento del aire). La lista se podría extender casi indefinidamente.Lo único que se quiere destacar aqul, sin embargo, es que hay unsinnúmero de recursos (cuya deficiencia produce "limitaciones") queno aparecen directamente en las cuentas nacionales y a los cuales seles presta una atención superficial en los textos que tratan sobre eldesarrollo o que lo expllcan. En un libro clásico sobre las normas deéste, 12 pocas veces aparecen las palabras clima y topografía. Es, sinembargo, una de las anomalias de la "riqueza de las naciones", queregiones abundantemente dotadas por la naturaleza tengan con fre-cuencia un ingreso per cápita bajo, por lo general a causa de la exce-siva población. Quizás a un nivel más profundo, la existencia de unapoblación demasiado grande es a su vez un reflejo de una subsistenciapasada muy fácil, que se muestra a su turno en las característicasculturales nacionales. Las condiciones duras, especialmente en el pa-sado, con las cuales tuvieron que luchar los escandinavos. los finlan-

11) Esta secci6n trata algunos problemas conceptuales y puede ser omitida por loslectores q.ue q.uieran seguir directamente con varias proyecciones del desarrollo eco-n6Jaico 7 demogrifico.

12) Como en Chenery y Syrquln. "Patterns of Development, 1950-1970". Oxford Un!-veuity P1'ue. 19'rll.

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deses y los escoceses, indudablemente tuvieron mucha influencia enla formación de su carácter o cultura. Tales consideraciones, quepueden ser de la mayor importancia para la explicación del desarro- .110a un nivel más profundo, están más allá del marco de referencia 'del economista. '

Se puede sei'ialar, sin embargo, que la forma acostumbrada para'!medir las cuentas nacionales y el desarrollo puede llevar a impresio-' 'nes erróneas, lo cual influye en el trazado de las politicas. Así eladelanto constante de la tecnologia para localizar y extraer el petróleo,con un grado bastante alto de competencla, mantuvo por muchos añosel precio a un nivel "bajo", no excediendo mucho el costo de extrac-ción de la producción marginal. En las cuentas nacionales, el petróleose consideró no como una acumulación de riqueza o de capital smocomo un producto -consumo anual, igual que otros consumos co-rrientes-. El valor total del petróleo consumido en un aflo íue com-pensado por los gastos de extracción, transporte y refinación. El valor'del petróleo en si, antes de contraer estos gastos, era sólo una trae-,!;clón minima del producto nacional (excepto en algunos paises del,¡C;Medio Oriente). No sólo fue y sigue siendo una reserva, que se ha';:tratado como una cosecha o un flujo corriente, sino que fue una re-;',serva a la cual, en su estado natural, se le dio un valor muy bajO.'!En términos económicos, o de cuentas nacionales, era difícil argu-/ i

mentar que un recurso natural "valioso" se estaba malgastando, que( \los precíos bajos ocasionaban un mal uso y un modo de vida extrava-, \gante y que deberian tomarse medidas para ponerle un precio alto,.\estimular su conservación y prolongar su abastecimiento durante lnli jchas generaciones. A menos que se espere que los precios aumenter:considerablemente, no beneficia al propietario del petróleo subterráncLel renunciar al interés que se podría ganar sobre el valor actual ca· i

pitalizado y realizado. Además, siempre existe el peligro que el pro- l'

pietario de la tierra vecina extraiga el petróleo de ese campo, lo cualestimula la explotación de un campo petrolífero por los propietarios.actuales. )

Este es un, tema en el cual el análisis costo-ganancia basado en~:precios, tasas de interés, pautas de distribución y consumo, todos co-'"rrientes, da respuestas válidas únicamente bajo condiciones rigidasdefinidas. Si se cambian éstas o se introducen criterios diferentes.las respuestas ya no serán válidas.

Las mismas consideraciones se aplican en una escala global.Dados los términos de comercio internacional que prevalecieron portanto tiempo y de acuerdo con la teoría económica del intercambiosobre la base de ventaja comparativa, parecía tener sentido económi-co que los países mucho más desarrollados intercambiaran articu-los de capital y otros, por una porción sustancial de la herenciamundial de yacimientos de petróleo, a lo que en retrospectiva parecehaber sido un precio muy bajo y utilizarlo además en objetivos quepara las generaciones futuras no eran muy esenciales. Verdaderamentealgo de ello se aprovechó en lo que seguramente algunos calificarán,especialmente en los países menos desarrollados, como frivolidades,tales como largas giras de vacaciones y un estilo de vida que haceposible y necesita infinitos viajes diarios.

En 1974 Colombia tuvo que cambiar, al menos por un tiempo, deuna base de exportaciones de petróleo a una de importaciones. Las

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exportaciones hablan sido de combustible barato, afiadiendo poco a lariqueza productiva del pals, mientras las importaciones fueron y con-tinuarán siendo de petróleo caro. En el pasado, una utilización de lasreservas de petróleo a más largo plazo hubiera sido más prudentepara el interés nacional.

Sin embargo, para que el Estado tuviera una perspectiva a largoplazo, necesitarla adoptar una actitud ética, la cual sus ciudadanosaceptarlan con dificultad y especialmente si necesita un sacrificioactual de bienes en una sociedad condicionada al crecimiento. Posi-blemente una persona puede sacrificar algo para un nieto conocido,pero ¿lo hará para un descendiente desconocido? Ronald Mc Kean.ameno economista, destacó este punto en un libro reciente y admitióque aun estando ciento por ciento seguro de los hechos bajo conside-ración, no sabría si estaria preparado para sacrificar un cuarto de suingreso actual con el fin de evitar la extinción de la raza humanadentro de 1.000 afios.13 Pero si el hecho fuera dentro de 100 afias y s1el sacrificio fuera del 10% del ingreso, es claro que un problema muydifIcil sobre valores éticos surge de la observación de Mc Kean. Elmovimiento de conservación debe encontrar su apoyo en campos queno sean solamente económicos. Si la amenaza a la supervivencia na-cional es inminente, la gente puede llegar a alturas extraordinariasde altruIsmo y patriotismo. Esta capacidad no parece existIr si laamenaza va dirigida a la supervivencia del hombre como especie.Por lo menos todavla no lo es.

Las mismas observaciones se pueden aplicar en diferentes gradosa otros recursos tales como la tierra adyacente a las grandes ciuda-des apropiada para fines agrícolas o recreativos. Muy pocas veces sepuede resistir la presión económica de esos urbanizadores. Curiosa-mente se puede conseguir más ayuda para adquirir o dejar la tierra ensu estado natural que para una explotación agrícola, o desviar unagran porción de recursos y de tiempo en el transporte debido a.l modode vivir de la comunidad. No obstante, en países desarrollados se hansalvado grandes áreas, al menos por algún tiempo, y relativamenteen pocos afios se ha despertado gran interés por conservar el medioambiente.

Desde hace días se ha reconocido que las grandes ciudades setornarlan invivibles si se dejaran a merced del mercado sin restric-ciones. El recurso de la tierra urbana necesita el más cuidadoso estudioy la mayor atención para su utilización dentro del extenso marcoambiental creado por el hombre. En ningún sitio son tan dolorosa-mente evidentes las fuerzas básicas subyacentes de desarrollo uni-forme como en la utilización de la tierra urbana y la de los suburbios.La.s vastas pero no muy bien localizadas áreas daf\adas alrededor ydentro de las ciudades constituyen un em.pleo pobre de la, tterra comorecurso y un pésimo uso como capital. Los extensos suburbios que re-quieren nna inmensa red de servicios y el uso constante de uno o doscarros por familia para los menesteres más sencillos, representanun empleo de recursos naturales y hechos por el hombre cuvos costosestán totalmente fuera de proporción en relación con los beneficios.

13) Ronald Me Kean "The No Growth Society", Woburn Press, Lonc1on 1973,p. 220.Edited by Maneur Olson and Hans Landsberg.

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Es un modo de vivir creado por el efecto privativo H pero el cual unavez adoptado da pocas satisfacciones positivas y no se termina puessiempre habrá casas más grandes o mejor localizadas; por lo general,la gente tiende a comparar su posición con los que tienen más y nocon los que están en peor situación. Pocas formas de consumo sef1alanmás el efecto de envidia y resentimiento que el estilo de vida urbanadesarrollado en el último medio siglo. Con la tremenda expansiónurbana que enfrentarán los paises en desarrollo en el próximo quin-quenio, hay un peligro real de que la consiguiente utilización de vastosrecursos para lograrla no contribuirán al bienestar como se puedeesperar de tales magnitudes.

Se ha hecho énfasis en estos puntos por lo mismo que se lesignora en el manejo convencional de los recursos en las cuentas na-cionales. Algunas de las consecuencias del mal uso de los recursos sepueden ver o ponderar, pero las repercusiones más amplias con eluso prolongado y el "malestar" creado por el efecto privativo enciertos modos de vida no se pueden medir. Por esto, se debe tenerseguridad en la introspección y en la observación. Las normas o estilosde vida pueden tener un impacto sobre el bienestar que no se reflejatotalmente en la comparación de las magnitudes de consumo en tér-minos de un común denominador. Este es un aspecto del empleo delos recursos que ha recibido poca atención. Los vocablos "uso, empleo"se utilizan también en el sentido de manejo o administración y estánmucho más relacionados con la eficiencia de 10 que la gente cree. Untercer sentido en el empleo de la palabra "uso" está más relacionadocon la transformación de materiales o la liberación de energla, des-tacada anteriormente.

Es conveniente tener presente que las cuentas nacionales y lasafirmaciones habituales del crecimiento económico tienden a exagerarel nivel de consumo de los paises más ricos en relación con los máspobres y a desestimar en muchos casos el flujo actual de servicios.Enprimer lugar, aunque las cifras de depreciación sean al menos muyarbitrarias, los economistas prefieren utilizar cálculos globales másque de ingresos absolutos. AsI la tasa del flujo de los articulos listospara el consumo o las adiciones al capital no están ajustadas propia-mente por la salida o desuso de los depósitos existentes, por el agota-miento de los recursos no renovables (o renovables sólo a un costomuy alto) tales como el petróleo, minerales de alta calidad, capa ve-getal y sus componentes, bosques y por las distintas clases de daf10shechos al medio ambiente. Se contraen gastos muy grandes (que fi-guran también como "ingresos") debido a la fluctuación de la pobla-ción y al fracaso de que el disef10no esté ajustado adecuadamentea ella como en los casos de vivienda suburbana y de transporte.

Sólo recientemente se ha entendido mejor por qué los paises conniveles de ingresos más altos tienen generalmente precios más altosy su significado. Si ocurre un adelanto técnico importante E'nalgtl.ncampo y existe competencia y movilidad, los beneficios se dispersanno sólo en precios más bajos en ese campo particular sino tambiénen ingresos más altos, generalmente a través de toda la economia,aun en campos donde no se percibe ningún mejoramiento en la efi-

a) Envidia y la creencia de que ciertos modos y niveles de vida pueden ganar elrespeto de los contemporáneos o poder evadir un sentimiento de humillación o Impotencia.

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ciencia. Pero si lo hay, entonces los precios y el valor de la producciónde tales campos subirian. Como consecuencia de la movilidad un grupode servicios, incluyendo aquellos ejecutados por empleados públicos,se valoran más y la reducción de precios de las cuentas nacionalesno se ajustan adecuadamente a estos aumentos, dando como resultadouna tendencia inflacionaria. Por la misma razón, un pais con un in-greso per cápita en aumento tiene una fuente inherente de "creci-miento", la cual se ve distorsionada en la parte superior de la curva.Esto es, la tasa de crecimiento del producto real tiende a ser sobre-estimada.

Para las comparaciones entre los paises, se están haciendo esfuer-zos para ajustar el diferente poder adquisitivo del dinero en ellosy se espera que en un tiempo el nuevo "dólar" o unidad internacional,reemplazará al dólar norteamericano como la unidad usada en talescomparaciones. Sin embargo, donde el modelo de consumo difiere am-pliamente, la dificultad de concepto para hacer comparaciones conalguna precisión permanece sin resolver. El dólar internacional noeliminará la creciente sobre estimación del desarrollo al cual se hareferido.

Eso en cuanto a la sobreestimaciÓn. Por el lado de una subestima-ción, un pais con una reserva actual muy grande de vivienda aceptable,bienes de consumo durables, ciudadanos bien educados y con buenasalud, está en una posición para recibir un gran flujo anu'll de ser-vicios de tales reservas, con una tasa de crecimiento aparentementemás alta. Por lo general se subestiman las rentas importadas y no semiden muchos intangibles que dan un sentimiento de bienestar, porejemplo un bello paisaje. La educación puede agregarse al bienestar, detal forma que no ten~a valor económico y asl sucesivamente.

D. AJUSTE DE LOS PROBLEMAS NACIONALES Y GLOBALES

Como se deduce de la discusión anterior, los temas para debatirsobre recursos. desarrollo y bienestar son verdaderamente muy com-plejos. Afortunadamente la tarea de este estudio no es dar una solu-ción global, aunoue se espera que ella sea compatible con las solucionestotales. El propósito del presente estudio -bastante ambiciosl>-es más modesto: explorar con más detalle, de 10 que se ha hechohasta ahora, la suficiencia probable de los recursos naturales y la dis-ponibilidad energética bajo diferentes suposiciones, para encontrartanto las pautas de crecimiento probables como las deseables de unpaís en desarrollo -Colombia- en los próximos 25 afios o más.

Por consiguiente el interés en este estudio estará enfocsdo haciaColombia. sin ignorar lo oue está pasando en el mundo. Ciertamente,la solución no es oUP es,da pals adopte como meta una autosuficien-cia. sacrificando las ventajas del intercambio v la especiali\7,l\ciónin-ternacionl'l1. No obstante. mientras un número de paises poblados sevuelvan dependientes de la importación de recursos naturales yesperen !'l,seQ:urarsus rerl1lisitos de materias primas. minerales v ener-gla mediante la exportación de mano de obra barata o dI' su alta tec-nolo!!ll'l,.son m:\.<!vulnera,bles a los posibles agotamientos dé los recursosv l'llos aumentos en los MstoS. como tambiéñ a la competencia de otrosnl'lf~P!lpn ip-'l1aJdl'l,d~p condiciones. Como Quedó sobreentendido l'lnte-t\oT'mente. PS r.onceb'ble qu/'! un mayor grado de autosufi~iencia y

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desde luego de la habilidad para "pagar su propio pasaje" sea un pre-ludio necesario para la creación de una atmósfera internacional en lacual sea más factible el compartir recursos escasos.

Se recalcó anteriormente que este estudio está relacionado conla manera como se utilizan los recursos as! como también su abun-dancia, escasez y su tasa de agotamiento. La carencia de recursos })el' seno fue un problema grave en Colombia hasta hace muy poco. Esta fue,cas! exclusivamente, la manera ineficiente como los recursos y latecnologla existentes se utlllzaban, combinados con el rápido creci-miento en el número de población que habria de compartir el produc-to. Pero, paradójicamente, una de las razones para el "ineficiente" usode los recursos se debla precisamente a su abundancia. Es diflcl! jus-tificar el cultivo técnico de las naranjas cuando crecen silvestres.Cuando obreros no caUficados son muy abundantes y baratos, es di-fiel! justificar el empleo de equipos para reemplazarlos.

El uso ineficiente de los recursos y de la tecnologla es un as-pecto de lo que podria llamarse la Brecha de la Productividad -ladiferencia entre el producto total por trabajador, en los paises econó-micamente más desarrollados comparado con el producto en variosgrupos de paises en desarrollo- lo cual resulta a su vez de la Brechade la Tecnologla. El superar ésta es esencial para el desarrollo y esuno ne los problemas más diflciles en el campo de la economía. Latecnologla existe. Parte de ella está incorporada al capital existenteaunque subutlllzado. Del resto muy poco es secreto o no puede seralcanzado de una forma u otra. La demanda potencial para el pro-ducto final es en sus aspectos prácticos ilimitada. Mientra.s es posibleque el intercambio extranjero no sea suficiente para procurar todala tecnologla en forma de equipo que podrla usarse, en el caso deColombia la brecha del intercambio parece haber sido no tanto unllmite actual sino potencial.

Pocos paises. si hubiesen estado preparados para hacer el esfuer-zo apropiado. no habrían aumentado la importación o producción debienes de capital. incorporando tecnolo~famds avanzada a través desalarios elevados mediante el aumento de exportacione!'l o mediantela diversificación de existencias y nuevos intercambios de ganq.nclas.l1tllizando los recursos propios de manera intensiva. Sin embarl.1'o.Colombia ha sido uno de los paises con crecimiento de población máRaJto del mundo. con el resulta. do de una superabundancia de m,:¡:nod",obra no calificada, donde el baio salario ha impuesto indudablementeun obstáculo a la utilización de las técnicas avanzadas y al crecimientodel ingreso per cápita.

Los tres grandes grupos de variables que influyen en el crecimien-to son los recursos, su explotación y el número de personas oue com-parten el producto. Cómo lo comparten es el objetivo de la cuartavarIable-distribución. A su vez la interacción entre el crecimiento yla distribución y la relación de éstos con el bienestar son los tema~dI'! gran parte dI'! la literatura sobre desarrollo y del dIscurso eco-nómico en p.-eneraJ.AunQue el énfasis de este estudio se hará sobre elllSO y la, suficiencia de los recursos, la materia se tratará dentro d~lmarco de estos temas más amplios.

Todo esto está estrechamente relacionado con el estudio, pues silos pafses en desarrollo en general. y Colombi'l en particular, v"tn 3,sustituir la planificación con propósito determinado por una po1ftfca:

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de "laissez faire" o senc1llamente siguiendo los pasos de los paisesmás desarrollados, tendrán que planear una utilización diferente desus recursos, distintos estilos de vida y disminuir las diferencias entreellos. Las solas consecuencias para el disefio urbano son~muy ampliasy se tratarán en el momento oportuno. En general es muy posible quese indique un cambio profundo en el consumo de objetos metálicospara servicios (o para ciertos tipos de ferreteria) con amplias rami-ficaciones en la demanda, la naturaleza del trabajo y el disefio paravivir, o por lo menos que merezcan un estudio serio. Tales variacionespueden esperarse como una consecuencia de los cambios profundosy permanentes en los precios relativos de las economias mixtas; peroseria prudente adoptar medidas hoy anticipándose a las escasecesdel futuro y no esperar a que aparezcan repentinamente. Se prestaráalguna atención en este estudio primero a la explicación de la brechatecnológica como se apllca en Colombia (Capitulo II) y luego a lasmaneras de cerrarla, aunque el tema es demasiado grande para Quese trate en detalle.

Aparte de asegurar precios relativos muy altos para ciertos pro-ductos (principalmente materias primas), la esperanza más grandepara cerrar la brecha en los niveles de consumo entre los paises endesarrollo y los ya desarrollados se encuentra en la explotación de latecnologia moderna, por 10menos en la opinión de los autores de esteestudio, y en la disminución de la tasa de crecimiento de la población.Claro está que la explotación de la tecnologia incluye me.ioramientosen las instituciones y en su organización. Los gobiernos de los paisesen desarrollo, con notables excepciones, no han impulsado y apoyadola adopción y la utilización de la tecnologia como pudieran y no hanestado preparados para hacer los ajustes necesarios económicos ysociales para el mejor empleo de ésta, mientras resuelven los efectoscolaterales de su uso. Muchas veces han aparecido sin interés ohasta miedosos -una actitud Ludita moderna a nivel de gobiernosnacionales--. Por consiguiente, mientras el interés principal es el usoy abuso de los recursos, y la suficiencia de los recursos naturales yenergéticos, este interés no puede estar divorciado de las considera-ciones más amplias relacionadas con el aumento de la población, labrecha tecnológica, la brecha de los niveles de consumo, la distribu"'ción o las diferencias en los modos de vivir y finalmente. sobre el di-ficil pero importante tema del bienestar.

La escasez, obviamente, es un término relativo; hay escasez enrelación con otras cosas. Por 10 tanto, un recurso puede ser escasosólo en relación a la población y se puede volver aún más escaso porun aumento de ella. O puede ser escaso en relación a los niveles deconsumo o respecto a la tecnologia disponible para su explotación.Por ello este estudio tratará· constantemente de relativos y avanzaráo retrocederá con la acción entre las variables.

E. FACTORES LIMITANTES AL DESARROLLO

Anteriormente se trató del agotamiento o la creciente escasez deciertos recursos. Seria interesante preguntar cómo se presenta talescasez y las repercusiones que pondrá en movimiento en el mecanis-mo económico. Ayudarla a entender el proceso si identificamos "es-casez" con la frase "factores llmitantes", I3. cual se usa frecuentemente

en literatura económica para ind1car escasez. Así que, cuando losautores hablan de "los factores l1mitantes del intercambio", tienen enmente una "escasez" de intercambio extranjero, el cual al restringirlas importaciones se cree que limita la tasa de crecimiento de produc-ción o de consumo.

Hay un paralelo muy cercano entre el aumento de la escasez (o alzaen el costo) de un recurso nacional y uno obtenido del extranj ero através de las exportaciones o de préstamos. Este último lo coloca enuna posieión algo más vulnerable, pues las exportaciones pueden serbloqueadas o restringidas de un momento a otro. Pero esto es cuestiónde matices. En ambos casos los "términos de intercambio" pueden em-peorar y se reflejarán en el costo relativamente más alto del recurso.

Como la crisis de la energía surgió muy recientemente, todaviahay mucha incertidumbre en la elasticidad ingreso de la demandapara los productos del petróleo, tanto en los términos del precio comode los ingresos. Se presume generalmente que la manera de vivir, tan-to en los países más desarrollados, como en los menos, especialmenteen aquellos, está adaptada a una dependencia muy grande en el usode derivados del petróleo, que el precio y la demanda interna serámuy constante, es decir, que el gasto total de petróleo aumentará con-siderablemente con un alza en el precio. Para los países importadoresde petróleo esto podria representar menos divisas disponibles para laimportación de otras cosas -la familiar escasez de divisas- o, si sevenden más artículos a los productores de petróleo una proporciónmenor de los factores domésticos productivos serian destinados a laproducción de artlculos y servíclos de consumo doméstico. Si se hacenesfuerzos para sustituír el petróleo y otras Importaciones mediante eldesarrollo de otras fuentes domésticas de energía o la importación desustitutos, es probable que esto sólo se pueda hacer a un costo mál'lgrande.

Por lo general "costo más alto" significa la utilización de másmano de obra o de otros recursos para producir el mismo volumen dearticulos. Suponiendo que haya empleos estables, este cambio no tieneque resultar en un volumen más bajo de producción sino en una re-ducción de artículos y servicios para el consumo doméstico. Sin em-bargo, si el precio más alto o la limitación de importaciones lleva a suvez pol1ticas que conduzcan al desempleo o si resulta imposible au-mentar significativamente otras exportaciones, sufrirán la produccióntotal y las tasas de crecimiento. Generalizando, los términos empeo-rados de intercambio de las exportaciones de un país, indicativas deun desarrollo escaso (de cualquier fuente) de productos Importados,no tienen necesariamente un efecto dafilno sobre la tasa de crecimien-to, si se mantiene empleo total y adelantos tecnológicos y si no hayllmitación sobre la producción que surge de la escasez de materiasprimas o de equipo. 15 No obstante, si son grandes y momentáneos, seriamuy difícil escapar a un efecto adverso sobre el volumen de articulosy servicios d1sponlblespara el consumo doméstico, es decir, sobre elnivel de vida.

El desarrollo económico en los paises que no producen petróleo,después de haberse atrasado aproximadamente durante un afio luego

15) El argumento de este texto difiere mucho del que se tiene generalmente, quesencillamente supone que un precio mAsalto del petróleo Importado atrasa necesaria-mente la tasa de crecimiento.

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del aumento de precios, continuó, pero seguramente una gran pro-porción de recursos se dedicaron a la obtención de petróleo en detri-mento del consumo nacional, como se hubiera hecho en caso contrario.

Es de esperar que reacciones económicas similares sigan a las es-caseces domésticas o a la contaminación y a la polución. Se necesitanmás recursos para asegurar el mismo número de bienes (o sustitutos)y hay pocos para la producción de otras cosas. El recurrir a tierrasagricolas más distantes o más pobres o al aumento del uso de fertili-zantes y mecanización, redes de irrigación, a bosques naturales menosaccesibles o a la reforestación, a la piscicultura, a la prevención dela contaminación del aire y del agua, y a la disminución del ruido, to-dos requieren en primera instancia y seguramente en forma indefinida,la diversificación de más recursos de producción de bienes finales deconsumo y asi reducirlo, aunque algunas de estas actividades no apa-rezcan en las cuentas nacionales como una disminución en el des-arrollo.

Se podria pensar que este proceso seria de interés sólo para lospaises menos desarrollados. Pero esta perspectiva, aunque parezcarazonable, pasa por alto las consecuencias de estar condicionada aldesarrollo. Cuando las necesidades sociales y las actividades y esfuer-zos individuales para satisfacerlos se consideran dependientes deldesarrollo económico,basta una disminución en la tasa de crecimientopara ocasionar un gran desajuste y descontento. En los paises quetodavia no han superado sus necesidades f1sicasy que, además, debenencarar un crecimiento de población cada vez mayor, las prolongadasescaseces o los recursos cada vez más costosos, resultantes de unadisminución en la tasa de crecimiento o la disminución de los produc-tos para el consumo, pueden tener unas consecuencias muy graves. Deall1 la importancia del estudio de los recursos y de su empleo.

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