AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: GEO ALC 3

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AMÉRICA LATINAY EL CARIBE

PERSPECTIVAS DELMEDIO AMBIENTE:

GEO ALC 3

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El PNUMA promueve prácticasglobales ambientalmente amigables,

además de también promoverlas en suspropias actividades. Nuestra política de

distribución busca reducir la huellade carbono del PNUMA.

Publicado por el Programa de las Naciones Unidaspara el Medio Ambiente (PNUMA).

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Copyright © 2010, PNUMAISBN: 978-92-807-2956-6

Job Number: DEW/1077/PA

Para Mayor Información:

Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).Oficina Regional para América Latina y el Caribe.

División de Evaluación y Alerta Temprana.Avenida Morse, Edificio 103. Clayton, Ciudad del Saber - Corregimiento de Ancón.

Panama City, Panamá.Código Postal: 03590-0843Teléfono: (+507) 305-3100

Fax: (+507) 305-3105http://www.pnuma.org

Correo electrónico: [email protected]

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE:AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

GEO ALC 3

Producido por:PROGRAMA DE LAS NACIONES UNIDAS PARA EL MEDIO AMBIENTE (PNUMA)

en colaboración con:

Academia de Ciencias de Cuba, Observatorio Cubano deCiencia y Tecnología, Occyt. Cuba.

CaribInvest (West Indies) Limited.

Caribbean Fisheries Regional Mechanism, CFRM. Belice.

Centro de Contaminación y Química Atmosférica delInstituto de Meteorología, CECONT. Cuba.

Centro de Estudios Superiores Universitarios,CESU. Bolivia.

Centro de Investigación en Geografía y Geomática «Ing.Jorge L. Tamayo», CentroGEO. México.

Centro del Agua del Trópico Húmedo para América Latinay el Caribe, CATHALAC. Panamá.

Centro de Investigación Científica y de Educación Superiorde Ensenada, CICESE. México.

Centro de Investigaciones de la Economía Mundial,CIEM. Cuba.

Centro Internacional para el Desarrollo Sostenible,CIDES. Panamá.

Centro Latinoamericano de Ecología Social,CLAES. Uruguay.

Centro Molina para Energía y Medio Ambiente,MIT. Estados Unidos.

Centro Nacional de Áreas Protegidas, CNAP. SistemaNacional de Áreas Protegidas, Cuba.

Comisión Económica para América Latina y el Caribe,CEPAL. Chile.

Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de laBiodiversidad, CONABIO, México.

Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra laDesertificación, CNULD/CEPAL, Chile.

Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales,FLACSO, Guatemala.

Fórum Brasileiro de ONGs e Movimentos Sociais para oMeio Ambiente e o Desenvolvimento, FBOMS. Brasil.

Fundación Oswaldo Cruz, FIOCRUZ, Escuela Nacionalde Salud Pública, Brasil.

Gobierno Municipal de La Paz, Bolivia.

Inter-American Institute for Global Change, IAI. Brasil.

International Food Policy Research Institute,IFPRI. Estados Unidos.

International Institute for Sustainable Development,IISD. Canadá.

Instituto Amazónico de Investigaciones Científicas,SINCHI. Colombia.

Instituto de Hidrología, Meteorología y EstudiosAmbientales de Colombia, IDEAM. Colombia.

Instituto de Investigación de Recursos BiológicosAlexander Von Humboldt, IAvH. Colombia.

Instituto de Investigaciones Marinas y Costeras «José BenitoVives de Andréis», INVEMAR. Colombia.

Instituto Nacional de Ecología, INE. México.

Instituto Nacional de Investigaciones Económicas,INIE. Cuba.

Instituto Nacional de Estadística y Geografía,INEGI. México.

Instituto Nacional de Pesquisas Espaciais,INPE. Brasil.

Instituto de Políticas Ambientales,IPA. Costa Rica.

Nota: GEO es el acrónimo usado a lo largo del documento para Global Environment Outlook, proceso de evaluaciónambiental llevado a cabo por el PNUMA, y que se ha traducido como Perspectivas del Medio Ambiente Mundial.

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Instituto de Tecnología y Ciencias Aplicadas,InSTEC. Cuba.

Instituto Superior Politécnico José A. Echeverría, CUJAE.Comisión Nacional de la Infraestructura de Datos

Espaciales de la República de Cuba. Cuba.

Island Resources Foundation., IRF. Estados Unidos.

Kus Kura S.C. Costa Rica.

Organización de Estados Americanos, OEA.Departamento de Desarrollo Sostenible,

Secretaría General. Estados Unidos.

Organización Panamericana de la Salud, OrganizaciónMundial de la Salud, OPS/OMS. Panamá.

Smithsonian Tropical Research Institute,STRI. Panamá.

Unión Internacional para la Conservaciónde la Naturaleza, UICN.

Universidad Andrés Bello, Chile. Escuela de IngenieríaAmbiental, Ecología y Recursos Naturales. Chile.

Universidad Católica de Chile, Departamento deIngeniería Química y Bioprocesos, Chile.

Universidad de Alberta, Center for Earth ObservationScience, CEOS. Canadá.

Universidad del Salvador, Argentina.

Universidad de Buenos Aires,Facultad de Agronomía. Argentina.

Universidad de Chile.]Instituto de Asuntos Públicos. Chile.

Universidad Distrital de Colombia. Colombia.

Universidade Estadual Paulista, Departamento deBotânica, Laboratório de Fenologia. Brasil.

Universidad de Costa Rica. Costa Rica: Centro deInvestigación en Ciencias del Mar y Limnología, CIMAR;

Centro de Política Económica para el Desarrollo Sostenible,CINPE; Escuela de Estadística; Escuela de Ciencias

Ambientales, EDECA; Laboratorio de Química Biorgánica;y Observatorio del Desarrollo, OdD.

Universidad Javeriana, Colombia.

Universidad de La Habana, Cuba. Centro de EstudiosDemográficos; Facultad de Economía.

Universidad del Pacífico, Centro de Investigación de laUniversidad del Pacífico, CIUP. Perú.

Universidad de Puerto Rico. Puerto Rico.

Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM.México. Centro de Ciencias de la Atmósfera; Centro deInvestigaciones en Geografía Ambiental; Facultad de

Medicina; e Instituto de Geografía.

Universidad Nacional de Colombia,Departamento de Biología. Colombia.

Universidad Nacional, Costa Rica.

Universidad Nacional Mayor de San Marco. Perú.

Universidad del Salvador, Instituto deMedio Ambiente y Ecología, Argentina.

Universidade de São Paulo, Instituto de Astronomia,Geofísica e Ciências Atmosféricas, Brasil.

University of East Anglia. Reino Unido.

University of Guyana. Guyana.

University for Peace, Costa Rica.

University of West Indies, Trinidad y Tobago.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

RECONOCIMIENTOS

COORDINADORA:Graciela Metternicht, Coordinadora Regional, DivisiónEvaluación y Alerta Temprana, Programa de las Naciones Unidaspara el Medio Ambiente, Oficina Regional para América Latinay el Caribe, Panama.

EQUIPO PNUMA-ORPALC (Panamá):Margarita Astrálaga, Mara Angélica Murillo Correa, GracielaMetternicht, Silvia Giada, Johanna Granados, Kakuko Nagatani,Marco Pinzón, Andrea Brusco, Jan Kappen, Elisa Tonda, GabrielLabbate, Artie Dubrie, Mark Griffith, Henry Aguilar, ElizabethOsorio, Suzanne Howard, Ricardo Mellado, Alex Pires.

AUTORES COORDINADORES:Capítulo I: Nicolo Gligo (Chile), Camilo Lagos (Chile), yGuillermo Castro (Panamá); Capítulo II: Irene Pisanty (México)y Rafael Pompa (México); Capítulo III: Dolors Armenteras(Colombia), Asha Singh (Guyana); Capítulo IV: Ramón Pichs(Cuba) y John Agard (Trinidad y Tobago); Capítulo V: EugeniaWo Ching (Costa Rica) y Edgar Gutiérrez Espeleta (Costa Rica);Anexo Estadístico: Agustín Gómez Meléndez (Costa Rica) yHenry Aguilar (PNUMA).

AUTORES PRINCIPALES:Capítulo I: Camilo Lagos (Chile), Nicolo Gligo (Chile), GuillermoCastro (Panamá); Capítulo II: Tierra: Alejandra Larrazábal(México), Pedro Urquijo (México), Gerardo Bocco (México) yGraciela Metternicht (PNUMA). Bosques: Arturo SánchezAzofeifa (Canadá). Biodiversidad: Salvador Sánchez-Colón(México) y Rafael Pompa (México). Recursos Hídricos eHidrobiológicos: Juan Carlos Alonso González (Colombia),Angélica María Torres Bejarano (Colombia) y Katty AlexandraCamacho García (Colombia). Mares y Costas: Asha Singh(Guyana), Luis Calderón Aguilera (México) y Gillian Cambers(Puerto Rico). Calidad del aire: Luisa Molina (Estados Unidos)y Héctor Jonquera (Chile). Áreas Urbanas: Rosario Gómez(Perú), Irene Pisanty (México), Juan Carlos Alonso (Colombia),Angélica Torres (Colombia) y Johanna Granados (PNUMA).Capítulo III: Dolors Armenteras (Colombia), Asha Singh(Guyana), Mark Bynoe (Guyana), Mónica Morales (Guyana),Susan Singh-Renton (San Vicente y las Granadinas). CapítuloIV: Ramón Pichs (Cuba) y John Agard (Trinidad y Tobago).Capítulo V: Rolain Borel (Costa Rica), Amos Bien (Costa Rica),Julio Mata (Costa Rica), Orlando Rey (Cuba), Alonso Villalobos(Costa Rica), Hernán Blanco (Chile), Alfonso Alem (Bolivia).

AUTORES COLABORADORES:Capítulo I: Carlos de Miguel, CEPAL (Chile), Eduardo Gudynas(Uruguay), Carlos Murillo (Costa Rica), Eugenia Wo Ching (CostaRica), Genaro Uribe (Perú), Juan Sebastián Contreras Arias(Colombia). Capítulo II: Wilfrido Pott (Belice), Maria FátimaAndrade (Brasil), Osvaldo Cuesta Santos (Cuba), José AlbertoFabián Aguilar (El Salvador), Adrián Fernández Bremauntz(México), José Agustín García Reynoso (México), Jorge Herrera

Murillo (Costa Rica), Darío Hidalgo (Colombia), Aron Jazcilevich(México), Julia Martínez (México), María Victoria Toro Gómez(Colombia), Pablo Aldunate (Bolivia), Carlos Costa (Colombia),Adolfo Kindgard (Argentina), Juan Sebastián Contreras Arias(Colombia), Patricia Morellato (Brasil), Nélida Gómez (Panamá).Capítulo III: Jorge Cortés (Costa Rica), René López (Colombia),Rodrigo Martínez (CEPAL, Chile ) Nelly Rodríguez (Colombia),Guillermo Rudas (Colombia), Martha Vides (Colombia), Claudiade Windt (República Dominicana), Gabriel Eduardo Schutz(Brasil). Capítulo IV: Jackie Alder (PNUMA), Williams Cheung(Reino Unido), Barry Hughes, Diego Martino (PNUMA), IvettMiranda-Domínguez (Cuba), Siwa Msangi (Estados Unidos),Blanca Munster Infante (Cuba), Kakuko Nagatani (PNUMA),Francisco Brzovic Parilo (Chile), Eduardo Calvo-Buendía (Perú),Mariela C. Cánepa-Montalvo (Perú), Sonia Catasús (Cuba), EmilCherrigton (Panamá), Raúl Figueroa Díaz (México), José LuisGerhartz-Muro (Cuba), Gladys Cecilia Hernández-Pedraza(Cuba), Thelma Krugg (Brasil), Juan Llanes-Regueiro, GenovevaClara de Mahieu (Argentina), Laneydi Martínez-Alfonso (Cuba),Margarita Paras (México), Joel Bernardo Pérez-Fernández(Panamá), Marisabel Romaggi (Chile), Dale Rothman (Canadá),Mario Samper Kutschbach (Costa Rica), Reynaldo Senra-Hodelín(Cuba), José Solórzano (El Salvador), José Somoza Cabrera (Cuba),Avelino Suárez- Rodríguez (Cuba), Felipe Omar Tapia-Silva(México), Julio Torres-Martínez (Cuba), Gustavo Adolfo Yamada-Fukusaki (Perú). Capítulo V: Carlos Crespo (Bolivia), TatianaDelgado (Cuba), Haroldo Machado (Brasil), Bárbara Garea(Cuba), Stefan Gelcich (Chile), Bárbara Saavedra (Chile).

ESTRATEGIA DE DIFUSIÓN:Ana Rosa Moreno, Universidad Nacional Autónoma de México,UNAM. México; Bruce Potter, Island Resources Foundation,IRF. USA.; Alancay Morales Garro, Kus Kura S.C., Costa Rica;Anguie Bragado Mendoza, Misión Rescate: Planeta Tierra,México.; Silvia Giada, PNUMA ORPALC.

PANEL DE REVISIÓN TÉCNICA Y CIENTÍFICA:Mara Angélica Murillo Correa, PNUMA ORPALC. RevisoraPrincipal; Enrique Provencio, Consultor, México. RevisorPrincipal; Hernán Blanco, Consultor, Chile. Revisor Principal.Adrián Sánchez, Ministerio del Ambiente, MINAM, Perú:Capítulo II; Ana Rosa Moreno, Universidad Nacional Autónomade México, UNAM, México: Capítulo III; Arturo Flores M.,Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, SEMARNAT,México: Capítulo II; Bárbara Garea Moreda, Instituto deTecnología y Ciencias Aplicadas, Cuba: Capítulo III; Carlos deMiguel, Comisión Económica para América Latina y el Caribe,CEPAL: Capítulo I; César E. Rodríguez O., Secretaría de MedioAmbiente y Recursos Naturales, SEMARNAT, México: CapítuloII; Christopher Martius, Inter-American Institute for GlobalChange, IAI Brasil: Capítulos II y III; Cristina Montenegro,PNUMA, Brasil: Capítulo I; Diego Martino, PNUMA, Uruguay:Capítulos I y V; Elena Palacios, Fundación Ecológica Universal,Argentina: Capítulo I; Esther Neuhaus, Fórum Brasileiro de

EQUIPO DE PRODUCCIÓN DEL INFORME

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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ONGs e Movimentos Sociais para o Meio Ambiente e oDesenvolvimento, FBOMS, Brasil: Capítulo III; Gerardo RuizSuárez, Centro de Investigaciones de la Atmósfera, UniversidadNacional Autónoma de México, UNAM: Capítulo II, Calidad delAire; Graciela Metternicht, PNUMA ORPALC: Capítulos I, II,III y V; Ileana Monterroso, Facultad Latinoamericana deCiencias Sociales, FLACSO, Guatemala: Capítulo II; IrenePisanty, Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM,México: Capítulo III; Johanna Z. Granados, PNUMA ORPALC:Capítulo II; José Solórzano, University of Denver, EstadosUnidos: Capítulo IV; Kakuko Nagatani, PNUMA ORPALC:Capítulo IV; Klaus Mieth, Fundación Santa Fe de Bogotá:Capítulo III; Kristina Taboulchanas, Comisión Económica paraAmérica Latina y el Caribe, CEPAL, Chile: Anexo Estadístico.Luis Cifuentes, Pontificia Universidad Católica de Chile:Capítulo II, Calidad del Aire; Marc Sydnor, International Futures,Estados Unidos: Capítulo IV; Matías Halloway, ComisiónEconómica para América Latina y el Caribe CEPAL, Chile: AnexoEstadístico; Paulo Artaxo, Universidade de São Paulo, USP,Brasil: Capítulo II, Calidad del Aire; Raúl Figueroa, InstitutoNacional de Estadística INEGI, México: Capítulo IV; René Capote,Instituto de Ecología y Sistemática, Cuba: Capítulos II y III.Silvia Giada, PNUMA ORPALC: Capítulos II y V; Silvia Salerno,Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Argentina:Capítulo I; Verónica Mendoza, Ministerio del Ambiente,MINAM, Perú: Capítulo II.

TALLERES DE CONSULTA REGIONAL:2007 (septiembre)

Guillermo Castro Herrera (Panamá), Emil Cherrington (Panamá),Nélida Gómez (Panamá), Rodrigo Noriega (Panamá), Telsy Chanis(Panamá), Edgar Gutiérrez (Costa Rica), Rosario Gómez (Perú),Gladys Cecilia Hernández (Cuba), Camilo Lagos (Chile), MargaritaParás (México), Bárbara Garea (Cuba), Juan Carlos Alonso(Colombia), Diego Martino (Uruguay), Enrique Provencio(Consultor), John Agard (Trinidad y Tobago), Juan Dumas (Ecuador),Manuel Rodríguez (Colombia), Ana Rosa Moreno (México), OrlandoRey (Cuba), Michelle Anthony (Google Earth), Stefania Gallini(Colombia), Nelly Rodríguez (Colombia)m Héctor Alimonda (Brasil),Ricardo Sánchez Sosa (PNUMA), Peter Gilruth (PNUMA-DEAT),Kakuko Nagatani-Yoshida (PNUMA-DEAT), Silvia Giada (PNUMA-DEAT), Emilio Guzmán (PNUMA-DEAT), Elizabeth Osorio (PNUMA-DEAT), Maria F. Vinasco (PNUMA-DEAT).

2008 (mayo)John Agard (Trinidad y Tobago), Dolors Armenteras (Colombia),Guillermo Castro (Panamá), Nélida Gómez (Panamá), RosarioGómez (Perú), Edgar Gutiérrez (Costa Rica), Camilo Lagos (Chile),Laneydi Martínez (Cuba), Ana Rosa Moreno (México), RodrigoNoriega (Panamá), Irene Pisanty (México), Bruce Potter (USA),Enrique Provencio (México), Asha Singh (Guyana), Eugenia WoChing (Costa Rica), Silvia Giada (PNUMA-DEAT), Diego Martino(PNUMA), Graciela Metternicht (PNUMA – DEAT).

Fotografías de la Portada: Fundación Albatros Media, Ciudad del Saber, Panamá.A excepción de la fotografía del terremoto de Haití de M. Kokic. CICR.

Fotografías aportadas por Fundación Albatros Media, Ciudad del Saber, Panamá:Alejandro Balaguer, Alex Schmid, Avi Klapfer, y Alejandro Maimone.

A excepción de:Bienvenido Velasco. La Estrella de Panamá. Pág. 16, 52, 134, 139, 149, 150, 236 y 245.

Eric Quintero. ICRC. Pág. 189, 23, 247, 270.Johanna Z. Granados A. Pág. 152

M. Kokic. CICR. Pág. 156, 189, 217, 274, 292, 327.Roberto Burgos S. Pág. 44, 72, 79, 98, 114, 116, 118, 142, 159, 161, 192, 227, 299 y 309.

FOTOGRAFÍAS:

PRODUCCIÓN EDITORIAL:Roberto Burgos Sáenz, San José, Costa Rica

(Diagramación, gráficos, layout y adaptación de portada).

Diseño de portada: PNUMA-ORPALC, Panamá

Impreso en:

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Reconocimientos .................................................................................................................................................. 3

Prólogo del Director Ejecutivo del PNUMA ....................................................................................................... 13

Guía del lector ................................................................................................................................................... 14

CAPÍTULO I:MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE:PRESIONES PARA EL CAMBIO AMBIENTAL ................................................................................. 17

MENSAJES CLAVE .............................................................................................................................................. 181. INTRODUCCIÓN ................................................................................................................................. 202. LA COMPLEJIDAD AMBIENTAL DE LA MODALIDAD DE DESARROLLO PREVALECIENTE

EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE ...................................................................................................... 212.1 UNA MIRADA HISTÓRICA A LA COMPLEJIDAD AMBIENTAL DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE .................................... 222.2 MODALIDADES O ESTILOS DE DESARROLLO Y DEPENDENCIA DEL PATRIMONIO NATURAL ........................................ 232. 3 SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL DE LA MODALIDAD DE DESARROLLO PREVALECIENTE ................................................ 24

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES PARA EL CAMBIO AMBIENTAL .................................................. 273.1 DEMOGRAFÍA ...................................................................................................................................... 273.2 SITUACIÓN SOCIAL: POBREZA Y DESIGUALDAD ............................................................................................ 293.3 LA CRECIENTE GLOBALIZACIÓN ................................................................................................................ 323.4 CRECIMIENTO ECONÓMICO .................................................................................................................... 323.5 COMERCIO INTERNACIONAL ................................................................................................................... 333.6 CAMBIO CLIMÁTICO COMO FUERZA MOTRIZ DE LOS CAMBIOS AMBIENTALES EN LA REGIÓN .................................... 403.7 ENERGÍA ............................................................................................................................................ 443.8 CIENCIA, TECNOLOGÍA E INNOVACIÓN ...................................................................................................... 463.9 GOBERNABILIDAD ................................................................................................................................ 49

4. REFLEXIONES FINALES ......................................................................................................................... 555. REFERENCIAS........................................................................................................................................ 56

CAPÍTULO II:ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE EN ALC .................................................................................... 59

MENSAJES CLAVE .............................................................................................................................................. 601. INTRODUCCIÓN ........................................................................................................................................ 32

2. TIERRA .................................................................................................................................................. 632.1 AGRICULTURA Y GANADERÍA ................................................................................................................... 642.2 ACTIVIDADES EXTRACTIVAS ...................................................................................................................... 662.3 DEGRADACIÓN DE TIERRAS .................................................................................................................... 71

3. BOSQUES ............................................................................................................................................ 753.1 EXTENSIÓN Y TASAS DE COBERTURA ......................................................................................................... 753.2 CAMBIOS EN LA COBERTURA FORESTAL ....................................................................................................... 76

ÍNDICE

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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3.3 CONSERVACIÓN Y PROTECCIÓN DE BOSQUES .............................................................................................. 813.4 CAMBIO CLIMÁTICO Y RESPUESTA FORESTAL ................................................................................................ 883.5 BOSQUES Y SERVICIOS ECOSISTÉMICOS ....................................................................................................... 91

4. BIODIVERSIDAD .................................................................................................................................. 944.1 RIQUEZA DE ESPECIES ............................................................................................................................ 954.2 PÉRDIDA Y FRAGMENTACIÓN DE HÁBITAT ................................................................................................... 994.3 ESPECIES EN PELIGRO/EXTINTAS .............................................................................................................. 1014.4 RECURSOS GENÉTICOS ......................................................................................................................... 1034.5 PROTECCIÓN DE LA BIODIVERSIDAD ........................................................................................................ 1044.6 CAMBIO CLIMÁTICO Y BIODIVERSIDAD ..................................................................................................... 105

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS ................................................................................ 1065.1 DISPONIBILIDAD DE RECURSOS HÍDRICOS Y PRESERVACIÓN DE LOS ECOSISTEMAS ACUÁTICOS ................................ 1075.2 DEMANDA DE RECURSOS HÍDRICOS ........................................................................................................ 1125.3 APROVECHAMIENTO DE RECURSOS HIDROBIOLÓGICOS ................................................................................ 1175.4 CAMBIO CLIMÁTICO Y LA FUNCIÓN DEL POTENCIAL HÍDRICO DE ALC ............................................................ 119

6. MARES Y COSTAS ............................................................................................................................... 1216.1 ÁREAS MARINAS PROTEGIDAS EN ALC .................................................................................................... 1216.2 HUMEDALES ..................................................................................................................................... 1236.3 PRESIONES A LOS ECOSISTEMAS MARINO-COSTEROS. ................................................................................... 1246.4 AMENAZAS EN LOS ECOSISTEMAS MARINO COSTEROS .................................................................................. 128

7. CALIDAD DEL AIRE ............................................................................................................................ 1347.1 CALIDAD DE AIRE URBANO ................................................................................................................... 1357.2 CALIDAD DEL AIRE RURAL .................................................................................................................... 1427.3 IMPACTO EN LA SALUD HUMANA ............................................................................................................ 1457.4 CALIDAD DEL AIRE Y EL CAMBIO CLIMÁTICO .............................................................................................. 148

8. ÁREAS URBANAS ............................................................................................................................... 1498.1 URBANIZACIÓN EN ALC ..................................................................................................................... 1498.2 CONDICIONES DEL AMBIENTE URBANO .................................................................................................... 1528.3 RESPUESTAS INSTITUCIONALES Y PERSPECTIVAS ........................................................................................... 162

9. REFLEXIONES FINALES ....................................................................................................................... 16310. REFERENCIAS...................................................................................................................................... 165

CAPÍTULO III:RELACIONES ENTRE CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO EN ALC ........................ 183

MENSAJES CLAVE ............................................................................................................................................ 1841. INTRODUCCIÓN ............................................................................................................................... 186

1.1 ENFOQUE ECOSISTÉMICO ...................................................................................................................... 1861.2 ECOSISTEMAS: BIENES Y SERVICIOS .......................................................................................................... 1871.3 ECOSISTEMAS Y BIENESTAR HUMANO EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE ........................................................... 188

2. IDENTIFICACIÓN DE BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS BOSCOSOSY MARINO-COSTEROS EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE .............................................................. 1902.1 BIENES Y SERVICIOS DE LOS BOSQUES ...................................................................................................... 1912.2 BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS MARINOS Y COSTEROS .................................................................... 200

3. PRESIONES ......................................................................................................................................... 2044. CONSECUENCIAS DE LOS CAMBIOS AMBIENTALES Y SU RELACIÓN

CON EL BIENESTAR HUMANO ......................................................................................................... 207

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

4.1 DISPONIBILIDAD DE BIENES Y SERVICIOS ................................................................................................... 2884.2 IMPACTO DEL CAMBIO CLIMÁTICO EN LA DISPONIBILIDAD DE SERVICIOS ECOSISTÉMICOS ....................................... 2114.3 VULNERABILIDAD DE LAS POBLACIONES ANTE LOS IMPACTOS DE LOS CAMBIOS AMBIENTALES ................................ 214

5. REFLEXIONES FINALES ....................................................................................................................... 2206. REFERENCIAS...................................................................................................................................... 221

CAPÍTULO IV:ESCENARIOS .............................................................................................................................. 227

MENSAJES CLAVES .......................................................................................................................................... 2281. INTRODUCCIÓN Y ANTECEDENTES ................................................................................................ 2322. FUERZAS MOTRICES, INCERTIDUMBRES CLAVES E IDEAS BÁSICAS

QUE SUSTENTAN LAS HIPÓTESIS ..................................................................................................... 2352.1 FUERZAS MOTRICES. ............................................................................................................................ 2352.2 INCERTIDUMBRES CLAVES E IDEAS BÁSICAS QUE SUSTENTAN LAS HIPÓTESIS DE LOS ESCENARIOS ............................. 237

3. CUATRO FUTUROS ........................................................................................................................... 2413.1 SOSTENIBILIDAD RELEGADA (SR) ............................................................................................................ 2413.2 REFORMAS HACIA LA SOSTENIBILIDAD (RS) .............................................................................................. 2443.3 INSOSTENIBILIDAD Y ESCALADA DE CONFLICTOS (IEC)................................................................................. 2473.4 TRANSICIÓN HACIA LA SOSTENIBILIDAD (TS) ............................................................................................. 248

4. IMPLICACIONES DE LOS CUATRO FUTUROS .................................................................................. 2524.1 IMPLICACIONES SOCIOECONÓMICAS DE LOS ESCENARIOS .............................................................................. 2524.2 IMPLICACIONES AMBIENTALES ................................................................................................................. 259

5. CUATRO FUTUROS ALTERNATIVOS CON PUNTOS DE INFLEXIÓN .............................................. 2655.1 PRINCIPALES RESULTADOS ..................................................................................................................... 266

6. REFLEXIONES FINALES ....................................................................................................................... 2697. ANEXO TÉCNICO ............................................................................................................................... 2728. REFERENCIAS...................................................................................................................................... 274

CAPÍTULO V:POLÍTICAS Y OPCIONES PARA LA ACCIÓN ............................................................................... 277

MENSAJES CLAVES .......................................................................................................................................... 2781. INTRODUCCIÓN ............................................................................................................................... 2802. EL AMBIENTE EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS .................................................................................... 282

2.1 DE LA «LUCHA CONTRA LA POBREZA» AL «DERECHO A VIVIR BIEN» COMO PARADIGMAS DEL DESARROLLO ............. 2822.2 LA POLÍTICA AMBIENTAL: DEL ÉNFASIS SECTORIAL AL ÉNFASIS TRANSVERSAL ..................................................... 286

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN .................................................................................................. 2893.1 ENFOQUE Y ORDENAMIENTO TERRITORIAL ................................................................................................ 2893.2 GESTIÓN DE LA INVERSIÓN EN LA INFRAESTRUCTURA ESTRATÉGICA ................................................................. 3033.3 POLÍTICAS E INCENTIVOS FISCALES .......................................................................................................... 3153.4 FORTALECIMIENTO Y ADECUACIÓN DE LA NORMATIVA AMBIENTAL .................................................................. 3163.5 POLÍTICAS SOCIO-AMBIENTALES .............................................................................................................. 3173.6 HERRAMIENTAS DE MONITOREO PARA LA GESTIÓN AMBIENTAL ....................................................................... 321

4. OPORTUNIDADES Y BARRERAS PARA POLÍTICAS E INSTRUMENTOS EFECTIVOS ........................ 323

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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4.1 INCORPORACIÓN DE LOS PRINCIPIOS DEL DESARROLLO SOSTENIBLE EN POLÍTICAS Y PROGRAMAS ........................... 3234.2 CAMBIO CLIMÁTICO ............................................................................................................................ 3234.3 LA MIGRACIÓN Y EL CRECIMIENTO URBANO .............................................................................................. 3274.4 COMERCIO Y AMBIENTE ....................................................................................................................... 3284.5 CIENCIA Y TECNOLOGÍA ....................................................................................................................... 328

5. REFLEXIONES FINALES ....................................................................................................................... 3306. REFERENCIAS...................................................................................................................................... 331

ANEXO ESTADÍSTICO .................................................................................................................................... 335

América Latina y el Caribe ........................................................................................................................ 336Caribe ..................................................................................................................................................... 346Mesoamérica ............................................................................................................................................. 354Sudamérica ................................................................................................................................................ 360REFERENCIAS DE LAS VARIABLES DEL ANEXO ESTADÍSTICO................................................................ 367

LISTA DE ACRÓNIMOS .............................................................................................................. 371

ÍNDICE DE GRÁFICOS, CUADROS, RECUADROS Y MAPAS

1.1 América Latina y el Caribe: Distribución de lapoblación urbana y rural, 1970-2010.(En porcentaje relativo al total) ................................... 28

1.2 América Latina y el Caribe: Evolución de la pobreza yde la indigencia, 1980-2009.(En porcentaje y millones de personas). ..................... 31

1.3 América Latina y el Caribe: Participación en el valor delas exportaciones mundiales.(En porcentajes). ......................................................... 34

1.4 América Latina y el Caribe: Exportación de los 10productos principales, según participaciónporcentual, 2008. ....................................................... 35

1.5 América Latina y el Caribe: Ingresos netos de inversiónextranjera directa por subregión, 1992-2008. (En milesde millones de dólares). ............................................. 37

1.6 América Latina y el Caribe: Evolución deldestino sectorial de la inversión extranjeradirecta, 1999-2008. (En porcentajes). ........................ 38

1.7 América Latina y el Caribe: Frecuencia de eventoshidrometeorológicos, 1970-2007. .............................. 40

1.8 América Latina y el Caribe: Emisiones de CO2 percápita, 1990- 2006. Indicador oficial ODM 7.2.1(Toneladas métricas de CO2 per cápita y porcentajede variación). .............................................................. 42

1.9 América Latina y el Caribe: Oferta total de energía,2007. .......................................................................... 44

1.10 América Latina y el Caribe: Evolución del consumo deenergía eléctrica por subregiones, 1980-2005.(Consumo de Energía en PJ). ...................................... 45

1.11 América Latina y el Caribe: Consumo final deelectricidad, 2005-2007. (En GWh). .......................... 45

1.12 América Latina y el Caribe: Porcentaje de inversiónen investigación y desarrollo (I+D), 2006. ................. 46

2.1 Porcentajes mundiales de inversión en exploraciónminera, por región, 2005. .......................................... 67

2.2 Regulaciones ambientales sobre la explotaciónminera. ....................................................................... 69

2.3 América Latina y el Caribe: Áreas degradadas porpaís, como porcentaje del territorio nacional. ........... 72

2.4 América Latina y el Caribe: Intensidad en elconsumo de fertilizantes, 1961-2005.(En toneladas por cada mil hectáreas). ....................... 73

2.5 América Latina y el Caribe: Cambios en la coberturaforestal por subregiones, 2000-2005. (Miles deHectáreas y variación porcentual acumulada). .......... 77

2.6 América Latina y el Caribe: Plantaciones forestales,1990-2005. (En millones de Hectáreas). .................... 79

2.7 Número de hectáreas destinadas anualmente a laproducción forestal certificada por el FSC.(En Millones de Hectáreas). ....................................... 85

2.8 Los ocho países de América Latina y el Caribe conmayor diversidad de especies de mamíferos. ............. 96

GRÁFICOS

Page 11: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

9

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

2.9 Los nueve países de América Latina y el Caribe conmayor diversidad de especies de anfibios. ................. 97

2.10 América Latina y el Caribe: Promedio anual de lasprecipitaciones (Mm/Año). ....................................... 107

2.11 América Latina y el Caribe: Total de Recurso HídricoRenovable (TRWR, por su sigla en inglés) disponibleen un año (Km3/Año), y por persona por año(m3/Año) para países seleccionados. ........................ 108

2.12 América Latina y el Caribe: Número de áreas compar-tidas para cuencas transfronterizas por países. ........ 110

2.13 América Latina y el Caribe: Número de áreas compar-tidas para acuíferos transfronterizas por países. ....... 111

2. 14 América Latina y el Caribe: Consumo anual de aguapara el total de Habitantes, (Km3/Año). .................... 112

2.15 América Latina y el Caribe: Comportamientohistórico de la superficie irrigada utilizando losrecursos hídricos de la región el desarrollo de suagricultura. (En miles de hectáreas). ......................... 114

2.16 América Latina y el Caribe: Variación de la superficieirrigada, 1961 – 2005. (En miles de hectáreas). ....... 115

2.17 América Latina y el Caribe: Países que extraen conmayor intensidad el recurso hídrico para sus procesosindustriales. .............................................................. 116

2.18 América Latina y el Caribe: Variación de los volúmenesoficiales de producción pesquera proveniente de aguascontinentales. (En Toneladas Métricas). .................... 118

2.19 América Latina y el Caribe: Capturas registradasoficialmente para la pesca de aguas continentales enlos países con mayor producción pesquera. (Entoneladas/año). ......................................................... 118

2. 20 América Latina y el Caribe: Extensión de humedalesbajo la Convención Ramsar. (En hectáreas). ............ 123

2.21 América Latina y el Caribe: Capturas en ambas costas,de 2002 a 2006. (En toneladas). ............................... 125

2.22 América Latina y el Caribe: Capturas de peces en elOcéano Atlántico para los nueve primeros países.(En toneladas). .......................................................... 125

2.23 América Latina y el Caribe: Capturas de peces en elOcéano Pacífico para los nueve primeros países.(En toneladas). .......................................................... 126

2.24 América Latina y el Caribe: Producción total de laacuicultura. (En miles de toneladas). ........................ 126

2.25 América Latina y el Caribe: Producción anual de laacuicultura por país. (En toneladas). ........................ 127

2.26 América Latina y el Caribe: Tendencias en la calidaddel aire urbano, ciudades seleccionadas. ................ 137

2.27 Estimaciones de los aumentos en la mortalidad (Todaslas Causas, Todas las Edades) para un Incremento de10 (μg/m3) en la PM10 Ambiental. ............................. 146

2.28 América Latina y el Caribe: Evolución del porcentajede población urbana. ............................................... 149

2.29 América Latina y el Caribe: Proporción de lapoblación con acceso a agua potable y saneamientobásico en área rural y urbana por subregiones, 2004.(En porcentaje). ......................................................... 153

2.30 América Latina y el Caribe: Acceso a agua potable ysaneamiento básico, países por subregión. (Enporcentaje). ............................................................... 154

2.31 América Latina y el Caribe: Cobertura de agua potabley alcantarillado en ciudades seleccionadas. ............ 155

2.32 América Latina y el Caribe: Tratamiento de aguasresiduales en ciudades seleccionadas, (Datosdisponibles 2002-2008.) (En porcentaje). ................ 156

2.33 Áreas verdes por habitante en ciudades seleccionadas.(m2/hab). ................................................................... 157

2.34 Producción urbana de residuos sólidos en ciudadesseleccionadas. (En kg/hab/día). ................................ 158

3.1 América Latina y el Caribe: Extracción de productosforestales. (En millones de metros cúbicos). ............. 191

3.2 América Latina y el Caribe: Extracción de leña ymadera en rollo de uso industrial, 2005.(En millones de metros cúbicos). .............................. 191

3.3 América Latina y el Caribe: Bienes provistos por losbosques, total regional y por subregiones. ............... 193

3.4 América Latina y el Caribe: Reservas de carbono fores-tal, 2005. (En millones de Toneladas métricas). ...... 198

3.5 América Latina y el Caribe: Producto Interno Brutoper cápita por subregiones, 2008.(Precios constantes del mercado US$). .................... 208

3.6 América Latina y el Caribe: Casos de Malaria y FiebreAmarilla reportados, por subregiones, 2000-2007. .. 217

3.7 América Latina y el Caribe: Casos de cólera reportados,por subregiones, 2000. ............................................. 217

4.1 América Latina y el Caribe: Población total.(En millones de habitantes). ...................................... 252

4.2 América Latina y el Caribe: Población urbana.(En porcentaje de la población total). ...................... 253

4.3 América Latina y el Caribe: PIB per cápita.(En miles de dólares, 2000). ..................................... 253

4.4 América Latina y el Caribe: Gastos del gobierno ensalud y educación. (En porcentaje del PIB). ............. 254

4.5 América Latina y el Caribe: Población que viveen condiciones de pobreza (para 18 países).(En millones de personas). ........................................ 255

4.6 América Latina y el Caribe: Población que vive encondiciones de indigencia (para 18 países). (Enmillones de personas). .............................................. 255

Page 12: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

10

4.7 América Latina y el Caribe: Coeficiente de Gini.(Promedio ponderado para 18 países). ..................... 256

4.8 América Latina y el Caribe: Malnutrición infantil.(Porcentaje del total de niños). ................................. 256

4.9 América Latina y el Caribe: Gastos militares de losgobiernos. (En porcentaje del PIB). .......................... 257

4.10 América Latina y el Caribe: Remesas recibidas, 2000.(En miles de millones de dólares). ............................ 257

4.11 América Latina y el Caribe: Uso de energía primaria(En PJ). ...................................................................... 258

4.12 América Latina y el Caribe: Población viviendo bajostress hídrico. (En millones de habitantes). ............... 259

4.13 América Latina y el Caribe: Aguas residuales (tratadasy no tratadas). (En billones de metros cúbicos). ....... 260

4.14 América Latina y el Caribe: Causas de la declinaciónen la abundancia media de especies originales.(En porcentaje). ......................................................... 261

4.15 América Latina y el Caribe: Emisiones totales de CO2equivalente. (En PgC). .............................................. 262

4.16 América Latina y el Caribe: Emisiones antropogénicasde SOX equivalente. (En TgS). ................................... 262

4.17a Regiones marinas de la FAO. ................................... 263

4.17b América Latina y el Caribe: Cambios en el Índice deAgotamiento (IA) de las pesquerías (2000 – 2050) enáreas marinas de la FAO 31, 41, 77 y 87 y bajodiferentes escenarios. ............................................... 263

4.18 América Latina y el Caribe: emisiones de CO2,2000-2050. (En millones de toneladas). ................... 265

4.19 América Latina y el Caribe: Trayectoriasalternativas 2000 – 2050. Escenario inicial:Sostenibilidad Relegada (SR).(En millones de toneladas de CO2). .......................... 266

4.20 América Latina y el Caribe: Trayectorias alternativas2000 – 2050. Escenario inicial: Insostenibilidad yescalada de conflictos (IEC).(En millones de toneladas de CO2). .......................... 268

4.21 América Latina y el Caribe: Trayectorias alternativas2000 – 2050. Escenario inicial: Reformas haciala sostenibilidad (RS).(En millones de toneladas de CO2). .......................... 268

5.1 América Latina y el Caribe: Población urbanay rural con acceso a agua potable y saneamiento,1990-2005. (En porcentaje total de la población). .. 307

1.1 América Latina: Simulación del impacto del alza delprecio de los alimentos sobre la incidencia de lapobreza y la indigencia. 2007 y 2008. ...................... 31

1.2 América Latina: Canasta de exportaciones ydistribución geográfica en 2006.(Porcentajes del total de exportaciones). .................... 35

1.3 América Latina y el Caribe: Consumo de energía,2008. (En Millones de toneladas equivalentes depetróleo). .................................................................... 45

2.1 América Latina y el Caribe: Importancia económicarelativa de la agricultura. ............................................ 64

2.2 América Latina y el Caribe: Superficie agrícola porpaís, 2007. (En miles de hectáreas). ........................... 65

2.3 América Latina y el Caribe: Extensión y cambio en lasuperficie de bosques. (En miles de hectáreas yvariación porcentual acumulada). .............................. 78

2.4 Área total deforestada en Área Amazónica legalde Brasil, 2000-2009. (km2/año). ............................... 78

2.5 América Latina y el Caribe: Áreas protegidas,extensión total y porcentaje respecto al total global.(Millones de hectáreas). .............................................. 81

2.6 América Latina y el Caribe: Superficie forestal destina-da principalmente para fines de conservación. .......... 83

2.7 América Latina y el Caribe: Número de ecorregiones yporcentaje respecto al total global. ............................ 94

2.8 América Latina y el Caribe: Número de especiesconocidas y porcentaje respecto al total globalconocido. ................................................................... 95

2.9 América Latina y el Caribe: Las 33 ecorregiones conmayor riqueza de especies de plantas superiores. ..... 99

2.10 América Latina y el Caribe: Países dentro de los veintecon mayor número de especies de fauna y plantasamenazadas. ............................................................. 101

2.11 América Latina y el Caribe: Porcentaje deincremento en la superficie de área irrigada,1961-2005. (En miles de Hectáreas). ....................... 114

2.12 América Latina y el Caribe: Cambios en lasuperficie de humedales. .......................................... 124

2.13 América Latina y el Caribe: Concentracionesambientales anuales de PM10 para ciudadesseleccionadas. .......................................................... 137

2.14 América Latina y el Caribe: Número total de vehículosregistrados por país, 1990-2006. (En miles). ............ 139

2.15 Estudios epidemiológicos de los efectos en la salud dePM 2,5 en Sao Paulo, (1996-2005). ........................... 147

CUADROS

Page 13: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

2.16 América Latina y el Caribe: Población en principalesciudades de mayor tamaño, 2006. (En millones dehabitantes). ............................................................... 150

3.1 Definiciones de los tipos de bienes y serviciosrelacionados con los ecosistemas boscosos y costeros/marinos. .................................................................... 188

3.5 Ejemplos de bienes y servicios provistos por losManglares. ................................................................ 202

4.1 Antecedentes básicos para los escenariosGEO ALC -3. ............................................................. 233

4.2 Trayectorias regionales alternativas que introducenpuntos de inflexión en GEO ALC -3. ........................ 234

4.3 Ideas básicas que sustentan las hipótesis. ................ 238

4.4 Temas transversales en los escenarios regionales. .... 240

4.5 Trayectorias alternativas con puntos de inflexión. ... 266

5.1 Elementos alternativos a los enfoquesconvencionales de Desarrollo Rural. ....................... 292

5.2 Iniciativas relevantes sobre empleosverdes en la región. .................................................. 305

5.3 Programas prioritarios en CPS enAmérica Latina y el Caribe. ...................................... 318

RECUADROS

1.1 Orígenes de la crisis económica mundial. ................. 32

2.1 Desertificación en América Latina y el Caribey sus consecuencias. .................................................. 74

2.2 Problemas en la cuantificación de la extensiónboscosa en las Américas. ............................................ 80

2.3 Áreas protegidas y conflictos distributivos. ................ 83

2.4 Monitoreo forestal independiente. ............................. 88

2.5 Patrón fenológico del bosque Amazónico. ................ 89

2.6 Transición forestal. ...................................................... 93

2.7 Aprovechamiento de la diversidad biológica. .......... 103

2.8 Disponibilidad y uso del agua en la Cuencadel Canal de Panamá. .............................................. 109

2.9 Acuíferos transfronterizos. ........................................ 111

2.10 Consumo de agua dulce por sectores enAmérica Latina y el Caribe. ...................................... 113

2.11 Efectos potenciales sobre el continuo de una cuenca ysus recursos hidrobiológicos por el emprendimientohidroeléctrico del Río Madeira. ................................ 117

2.12 Peces ornamentales y especies invasoras enAmérica Latina y el Caribe ....................................... 119

2.13 Efectos de la erosión costera. ................................... 128

2.14 Riesgos de especies invasoras en la ReservaMarina de las Islas Galápagos. ................................. 130

2.15 Contaminación atmosférica en la ZonaMetropolitana del Valle de México. ......................... 136

2.16 Inventarios de emisiones y modeladode la calidad del aire. ............................................... 138

2.17 La experiencia de Sao Paulo con combustiblesalternativos. .............................................................. 140

2.18 Transmilenio: El Sistema de Tránsito Rápidode Buses (TRB) de Bogotá, Colombia. ...................... 141

2.19 Distribución de las fuentes de material particuladoen el ambiente. ......................................................... 145

2.20 Huella ecológica. ..................................................... 152

2.21 El manejo de residuos sólidos. ................................. 159

2.22 El cambio climático reduce disponibilidad de aguaen área urbanas de América Latina y el Caribe. ....... 160

3.1 Promoción del manejo forestal para los PFNM enALC: Caso de estudio en Boyacá, Colombia. ........... 194

3.2 Bosques y ecosistemas secos de Colombia:Caribe y Andes. ........................................................ 195

3.3 Servicios ambientales de bosques: Plantacionesforestales para sumideros de carbono. ..................... 199

3.4 Presiones de origen antrópico sobre los manglares deAmérica Latina y el Caribe. ...................................... 205

3.5 Consecuencias de los cambios ambientales en elacceso a los bienes y servicios provistos por losmanglares. ................................................................ 209

3.6 Consecuencias de la degradación de los arrecifesen el bienestar humano de las poblaciones dela región Caribe. ....................................................... 210

3.7 Los bosques amazónicos frente a los escenarios delcambio climático global. .......................................... 213

3.8 Enfermedades y deforestación en Paraguay. ............ 215

3.9 Impactos sobre la salud por cambios en losecosistemas forestales de la Amazonia. ................... 215

3.10 Dengue. .................................................................... 218

3.11 Aprendiendo a sobrellevarlo: Vulnerabilidady adaptación al cambio climático. ........................... 219

Page 14: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

12

4.1 Breve nota técnica sobre la construcción detrayectorias alternativas con puntos de inflexión ..... 267

4.2 Consecuencias globales de los cuatro futuros enAmérica Latina y el Caribe. ...................................... 271

5.1 El Nuevo Acuerdo Verde Global. ............................. 280

5.2 El reconocimiento de derechosterritoriales indígenas. .............................................. 284

5.3 El Ordenamiento Ecológico del Territorioen México (OET). ...................................................... 289

5.4 Ordenamiento Territorial en Costa Rica:Instrumentos legales y operativos. ............................ 290

5.5 El ordenamiento de Bogotá. ..................................... 291

5.6 El enfoque ecosistémico en el análisis de laCiénaga de Zapata, Cuba. ........................................ 294

5.7 Principios del enfoque ecosistémico aplicadoa los recursos hídricos. ............................................. 295

5.8 El Sistema de Contabilidad Ambiental y EconómicaIntegrada (SCAEI) en Latinoamérica. ........................ 295

5.9 Experiencias regionales en la valoraciónde servicios ambientales. ......................................... 296

5.10 La economía de los ecosistemasy la biodiversidad (TEEB). ......................................... 297

5.11 Los desafíos identificados en Barilocherespecto a las Áreas Protegidas (AP). ........................ 298

5.12 Bolivia desarrolló la primera experiencia mundialen captación de carbono. ......................................... 299

5.13 El peso del turismo para la economíalocal del Caribe. ....................................................... 301

5.14 Reciclaje en Brasil y producciónorgánica en México. ................................................. 304

5.15 Comisión Binacional para el Desarrollo yManejo de la Cuenca del Río Bermejo. ................... 306

5.16 Estrategia energética en Uruguay. ............................ 310

5.17 Acuerdo Marco Producción LimpiaSector Gran Minería. ................................................ 311

5.18 Las Zonas Costeras y Marinas de Centroamérica. .... 312

5.19 Ciencia y participación para la conservación y el usosustentable de los recursos marinos de Latinoamérica,ejemplos de la costa chilena. ................................... 314

5.20 Estudios de caso nacionales e instrumentosexaminados. ............................................................. 316

5.21 Algunas contribuciones de las TICs a lasostenibilidad ambiental en la región. ..................... 322

5.22 El programa UN-REDD para reducir ladeforestación y la degradación de bosques. ............ 325

5.23 Infraestructuras de datos espaciales enAmérica Latina y su potencial papel enel desarrollo sostenible. ............................................ 329

1.1 América Latina y el Caribe: Síntesis de los patrones decambio climático proyectados hasta 2010. ................ 41

1.2 Principales carreteras en la Amazonía. ...................... 51

2.1 Extensión y distribución de los bosquesen América Latina y el Caribe. ................................... 76

2.2 América Latina y el Caribe: Áreas Protegidas. ............ 82

2.3 Puntos de calor detectados por el Sistema de AlertaTemprana de la NASA durante la temporada de«Chaqueo», 2007. ...................................................... 87

2.4 Densidad de especies de mamíferos terrestresy de agua dulce y marinos en una retículade celdas hexagonales. ............................................... 96

MAPAS

2.5 Densidad de especies de anfibios en una retículade celdas hexagonales. ............................................... 97

2.6 América Latina y el Caribe: Riqueza estimada deespecies de plantas vasculares en las diferentesecorregiones. .............................................................. 98

2.7 América Latina y el Caribe:Hotspots de biodiversidad. ....................................... 100

2.8 Mapa de los 595 Sitios de extinción inminente. ...... 102

2.9 Distribución de las Áreas Marinas Protegidas (AMP)en ALC clasificadas de acuerdo con los niveles deprotección de actividades extractivas. ..................... 122

2.10 Vista del centro de Buenos Aires producto de lasquemas agrícolas en el delta del Río Paraná. ........... 144

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PRÓLOGO DEL DIRECTOR EJECUTIVO DEL PNUMA

El manejo sustentable de su rica, y económicamente importante diversidad natural esuno de los grandes desafíos que afronta América Latina y el Caribe. En mayor o menormedida, todas las regiones del mundo, particularmente los países en vías de desarrollo,enfrentan desafíos asociados al cambio climático, la pérdida de biodiversidad, eldeterioro ambiental, las emergencias causadas por los desastres naturales, la escasezde agua, y la urbanización acelerada.

Existe una necesidad urgente de incluir el tema de la sostenibilidad en las discusiones preparatorias para elencuentro de Rio+20 en Brasil para el 2012 bajo los temas de ‘economía verde’ y el ‘marco institucionalpara el desarrollo sostenible’.

El modelo de desarrollo impulsado históricamente en la región se ha basado en la provisión de alimentos,materias primas y recursos naturales. Este modelo ha generado crecimiento económico, pero también debilitóen diversos modos y en diferentes lugares los pilares ambientales y sociales del desarrollo sostenible.

En el plano nacional se ha avanzado en la elaboración de estrategias ambientales, la creación de organismosespecializados, el establecimiento de marcos institucionales y legales, y la ratificación de convencionesinternacionales.

Se destacan como ejemplos la reducción de la deforestación en la Amazonia Brasilera, lo que ha incluidotareas de monitoreo, e incremento en el número de áreas protegidas en América Latina. Existen ademásexperiencias nacionales promisorias en la generación de empleos verdes: reciclaje en Brasil, producciónagrícola orgánica e iluminación eficiente en México, agricultura a pequeña escala en Cuba, aforestación yreforestación en México, Cuba y Brazil, y esquemas de pagos por servicios ambientales en Bolivia, Colombia,Costa Rica y Nicaragua.

Sin embargo, el medio ambiente, y en particular los recursos naturales transfronterizos siguen sin recibir laprioridad que merecen, en momentos en que la humanidad confronta desafíos múltiples debido a la pobreza,el cambio climático, y la disminución de alimentos y recursos naturales.

Este tercer informe «Perspectivas del Medio Ambiente: América Latina y el Caribe – GEO ALC 3» quepresenta el PNUMA señala que ha llegado el momento de dejar de lado las políticas sectoriales, desarticuladasy de corto plazo y trabajar en la consolidación de políticas ambientales integrales y transversales quecentralicen la sostenibilidad ambiental.

El acceso a información precisa y de calidad sobre la situación del medio ambiente, hoy uno de los grandesdéficits de la región, es un pre-requisito para lograr un cambio transformacional. Inversiones en el manejoy restauración de los ecosistemas de la región y los servicios multi-millonarios que proporcionan tambiéndeben ser parte las decisiones en materia de políticas.

Lograr una región más próspera y desarrollada es una tarea de todos y todas.

Los gobiernos nacionales y locales, la ciudadanía, y las organizaciones nacionales, locales e internacionalesdebemos resolver de manera consensuada los numerosos retos ambientales que enfrenta la región y quedetalla este Informe, como así también las innumerables oportunidades para la región y sus habitantes.GEO LAC 3 es una de las contribuciones del PNUMA para promover mejoras al bienestar humano, yenmarcar un nuevo debate en torno al concepto de sostenibilidad en el contexto de un planeta de seis milmillones de habitantes que habrá superado los nueve mil millones en 2050.

Achim SteinerSubsecretario General de las Naciones Unidas y

Director Ejecutivo del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.

Page 16: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

14

GUÍA DEL LECTOR

Evaluar e informar sobre el estado del medio ambientees uno de los mandatos fundamentales del Programade las Naciones Unidas para el Medio Ambiente,PNUMA. El proceso de las Evaluaciones AmbientalesIntegrales GEO (Global Environment Outlook, oPerspectivas del Medio Ambiente Mundial) surgió deeste mandato del Consejo Administrativo en el año1995. Asimismo, el Foro de Ministros de MedioAmbiente de América Latina y el Caribe, a través de susdecisiones, ratifica el apoyo a la preparación de informesGEO en los ámbitos regionales, sub-regionales,nacionales y urbanos.

Por ello, el PNUMA ha desarrollado la metodología delas Evaluaciones Ambientales Integrales como unproceso consultivo, participativo y estructurado; con lafinalidad de producir informes actualizados,exhaustivos, científicamente creíbles, políticamentepertinentes y válidos, para respaldar la toma dedecisiones a todos los niveles.

El GEO ALC 3 es la tercera evaluación ambiental integralsobre el estado y perspectivas del medio ambiente enla región de América Latina y el Caribe. Es el resultadode un proceso de consultas estructurado y con una sólidabase científica que analiza de manera imparcial elestado del ambiente, los principales impactos, las fuerzasmotrices y presiones para el cambio ambiental, ypresenta las opciones de acción para los tomadores dedecisiones y demás actores regionales preocupados porel estado del medio ambiente. Las consultas y revisionesde carácter regional se llevaron a cabo en el período2007-2008, en un marco interdisciplinario y trans-sectorial lo que ayudó a la pertinencia, rigor científico,metodológico y técnico del informe final.

Esta evaluación ambiental integral examina, a través deun análisis basado en indicadores ambientales y socioeconómicos, temas críticos para la región como son lacantidad y calidad de agua dulce, la degradación marinocostera, la deforestación y fragmentación de hábitats,la degradación de la tierra, el crecimiento urbano noplanificado y la gestión de los desechos sólidos, laspesquerías y la vulnerabilidad de la región ante elcambio climático.

El GEO ALC 3 está estructurado en cinco capítulos yproporciona un resumen de las tendencias de desarrolloregional, de las transformaciones del medio ambiente yde los impactos de los cambios del mismo en el bienestar

humano en la región. A continuación se destacan lospuntos más importantes de cada capítulo:Capítulo I . Modalidades de desarrollopredominantes en América Latina y el Caribe.Presiones para el cambio ambiental: Examina elmodelo de desarrollo que prevalece actualmente en lospaíses de América Latina y el Caribe, e identifica lasprincipales fuerzas motrices y presiones que influencianel cambio ambiental que afecta a la región.

Capítulo II. Estado del Medio Ambiente: Describeel estado del medio ambiente en la regiónconcentrándose en el análisis de algunos de suscomponentes como tierra, bosques, biodiversidad,recursos hídricos e hidrobiológicos, mares y costas,calidad del aire y áreas urbanas.

Capítulo III. Relaciones entre Cambios Ambientalesy Bienestar Humano en ALC: Utilizando comoejemplo dos ecosistemas emblemáticos de la región,este capítulo presenta un análisis de la vulnerabilidadde los ecosistemas y los impactos de los cambiosambientales en el bienestar de los seres humanos.

Capítulo IV. Escenarios: Desarrolla diferentesescenarios futuros para la región en vista de desarrollospolíticos específicos.

Capítulo V. Políticas y Opciones para la Acción:Presenta elementos que permiten ampliar la discusiónsobre el marco de las políticas de desarrollo y abreposibilidades a la aplicación de experiencias concretaspara aumentar el bienestar y reducir la vulnerabilidadde la región.

El resultado es un informe del medio ambiente de laregión que con base científica, exhaustivo y actualizadose dirige a los Ministros del Ambiente de América Latinay el Caribe y sus asesores, científicos, organizacionesde la sociedad civil, especialmente, grupo indígenas,jóvenes, ONG ambientales y el sector empresarial y losapoya en la toma de decisiones concernientes al medioambiente.

MARCO CONCEPTUAL GEO

El GEO ALC 3 utiliza el enfoque metodológico deFuerzas motrices –Presión –Estado –Impacto –Respuestas, FMPEIR, que cubre y analiza lasinterrelaciones entre la sociedad humana y el medio

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ambiente haciendo énfasis en los servicios de losecosistemas y su relación con el bienestar humano.Las Fuerzas Motrices o fuerzas indirectas son definidascomo procesos fundamentales en la sociedad (queincluyen los cambios demográficos y los procesoseconómicos y sociales) y que causan Presiones másconcretas sobre el medio ambiente (como el cambioen el uso de la tierra, la extracción de recursos, lasemisiones de contaminantes y desechos, y lamodificación y el desplazamiento de organismos).

Estas presiones provocan cambios en el Estado delmedio ambiente que se suman a aquellos que sonconsecuencia de los procesos naturales. Los cambiosambientales incluyen el cambio climático, elagotamiento del ozono estratosférico, cambios en labiodiversidad y la contaminación o degradación delaire, el agua y los suelos. Dichos cambios se materializan

Nota para el lector: En el documento se usan de manera indistinta los nombres de Bolivia y EstadoPlurinacional de Bolivia, Venezuela y República Bolivariana de Venezuela, Saint Kitts y Nevis y SanCristóbal y Nevis, y no reflejan opiniones políticas del PNUMA o de los autores de este volumen.

en cambios en los servicios que el medio ambientebrinda a la humanidad, como la disponibilidad deaire y agua limpios, de alimentos y de protección de laradiación ultravioleta.

Como resultado de los cambios en los servicios y debidoa factores demográficos, sociales y materiales, segeneran Impactos que afectan el bienestar humano(la salud, los activos materiales, las buenas relacionessociales y la seguridad). Las Respuestas incluyenintentos formales e informales de adaptarse a loscambios en los servicios ambientales o bien reducir laspresiones sobre el medio ambiente.

La siguiente figura presenta el marco conceptual FMPEIRusado en el GEO 4 (Perspectivas del Medio AmbienteMundial) y que ha servido de base para el análisisrealizado en el GEO ALC 3.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

I. MODALIDADES DE DESARROLLO

PREDOMINANTES: PRESIONES PARA

EL CAMBIO AMBIENTAL

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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Modalidad de desarrollo. La ausencia deestrategias ambientales nacionales que, por unaparte, asuman y manejen el gran pasivo ambientaly, por otra, elaboren políticas sectoriales ytransversales para construir un tipo de desarrollointegral que mejore la calidad de vida, secorresponde con el creciente número de problemasambientales que no son abordados, ya sea porlagunas en las legislaciones o por falta de voluntady continuidad política para implementar sistemasde gestión y de fiscalización ambientalmenteadecuados. Aún así, el creciente interés y abordajedel tema ambiental en las agendas de los diferentessectores – gobiernos nacionales, locales,organizaciones civiles y empresariales,universidades y centros de investigación – que enmuchos casos se encuentran basados en el consensoy la cooperación, ofrecen una oportunidad paraenfrentar el deterioro ambiental y sentar las basespara avanzar hacia un modelo más sustentable dedesarrollo, que internalice y considere los beneficiosy costos de oportunidad de proteger y conservar losecosistemas y los servicios ambientales que éstosofrecen.

Aumento demográfico. En 40 años la poblaciónregional aumentó un 51%, especialmente en áreasurbanas. Este crecimiento, sumado a la falta deplanificación territorial y la creciente pobreza ydesigualdad, determinan la expansión deasentamientos informales en las urbes. La coberturade servicios de infraestructura básica no alcanza altotal de la población, existiendo importantesasimetrías entre y dentro de los países. La demandadel agua aumentó en un 76% en 15 años. Soncrecientes los niveles de contaminación y suincidencia en la salud. Unas 35 mil muertes seatribuyen a la contaminación del aire cada año. Laexistencia de nuevos patrones de consumo, sumadosal crecimiento económico han llevado a un aumentoen la producción de residuos sólidos por habitanteen los países de América Latina y el Caribe. Estosaspectos, determinan desafíos en materia de gestión,a fin de reducir la vulnerabilidad tanto social comoambiental de la región.

Pobreza y desigualdad. Los retos más importantesque enfrenta la región son la pobreza y ladesigualdad. Mientras se acrecienta la desigualdad,menor es la capacidad de reducir la pobreza. El 35%de la población (189 millones de personas) es pobre,en tanto que, el 14% se halla en situación deindigencia. Éstos carecen de servicios esenciales loque los hace vulnerables a los cambios ambientales.Cabe destacar que se observa una tendencia haciauna mejor distribución del ingreso en el período2007-2008.

Comercio. La región privilegia la inserción en elcomercio internacional mediante la exportación derecursos naturales y manufacturas con escaso o nulonivel de procesamiento. El 73% de las exportacionesson bienes primarios. El aumento en los últimos añosdel comercio entre la región y países asiáticos,principalmente China e India, potencia laagroindustria y la materia prima para la producciónde biocombustibles, lo que implica impactos porcambios en el uso del suelo, contaminación, usointensivo de los recursos hídricos, entre otros. Lainversión extranjera directa, que alcanzó un recorden 2008, tiene un rol importante en la explotaciónde recursos naturales para exportación y en laconfiguración de patrones productivos.

Vulnerabilidad frente al Cambio Climático. Sibien la contribución de la región a las emisionesmundiales de gases de efecto invernadero es solodel 11,8% (aunque en ascenso), es altamentevulnerable a los efectos del cambio climático, talescomo el aumento del nivel del mar, enfermedades,pérdida de especies, entre otros. La vulnerabilidadde la región no sólo está dada por el aumento de lafrecuencia y magnitud de eventos climáticos, sinopor la creciente y cada vez mayor exposición de losdiferentes sistemas (poblacional, agrícola, pesca,turismo) a dichas amenazas. Ante este panorama,las economías de la región se enfrentan a lanecesidad de contar con mayores recursosfinancieros y tecnológicos para adaptación ymitigación a los efectos del cambio climático.

MENSAJES CLAVE

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

Energía: En 35 años se cuadruplicó el promedio deconsumo de energía eléctrica (de 427 a 1688kilovatios hora por habitante). En este contexto, laproducción de energía enfrenta serios problemas quetienden a agudizarse. Hay países con marcadosdéficit que buscan intensificar sus recursos, muchasveces con alto grado de insostenibilidad ambiental,al considerar la gran dependencia de loshidrocarburos para producir energía. La región poseeun importante potencial para la generación deenergías renovables y la promoción de la eficienciaenergética. En un marco de mayor planificación ycon patrones de consumo energético más eficientes,se darían las condiciones para formar una plataformade apoyo al crecimiento económico sincomprometer la sostenibilidad.

Ciencia, Tecnología e Innovación: La inversiónen investigación y desarrollo (I+D) ha crecido,aunque es aún insuficiente en relación a lanecesidad. La estructura de los gastos en I+D delsector agrícola, financiado en su mayoría por elsector público, se concentra en tecnología y enmenor medida en explotación de la tierra y controly protección del medio ambiente.

Los países de América Latina y el Caribe hanprogresado también en el uso de las tecnologías dela información y comunicación (TICs) durante losúltimos años. El grado de avance varía dependiendodel acceso a las mismas, lo que muestra una brechadigital tanto entre los países de más y menosdesarrollo así como al interior de los mismos.

Gobernabilidad. La capacidad de gestión de lasinstituciones ambientales en la región se ve limitadano tanto por la carencia de leyes – en los últimosaños se ha producido una amplia legislación queabarca desde la política ambiental hasta su gestióne instrumentos o el manejo sostenible de losecosistemas, de la diversidad, de la vida silvestre,de los recursos forestales, o de los suelos y aguas -,sino por la debilidad política para hacerlas cumplir.

Además, y pese a los progresos en el establecimientode marcos institucionales y legales, el medioambiente sigue sin recibir la prioridad política ypresupuestaria que merece. Políticas implícitasbasadas en el corto plazo profundizan el deterioroambiental.

Sociedad Civil: Las organizaciones civiles tienenun papel muy relevante en la denuncia de losproblemas ambientales y también en su solución. Sibien las permanentes dificultades económicas de laregión reducen la posibilidad de participación demucha gente, las organizaciones ciudadanas hanjugado un papel preponderante en el terrenoambiental, junto a las instituciones de educaciónsuperior. Hoy, su voz es parte innegable eimprescindible en el terreno ambiental.

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El presente capítulo examina retrospectivamente losaspectos físicos, sociopolíticos y económicos que hanoperado como determinantes en el desarrollo de laregión y las consecuencias de los mismos sobre elbienestar humano.

Este recorrido se divide en dos secciones. La primeraaborda la complejidad ambiental de América Latina yel Caribe desde el siglo XVI, definida a partir de sumodelo de desarrollo basado en un patrón extractivode los recursos naturales, que se ha sostenido a lo largode nuestra historia con consecuencias socioambientales.Asimismo, presenta un análisis de las dificultadesexistentes para desarrollar, de manera integral, una seriede estrategias que permitan realizar cambiosestructurales hacia un modelo más sostenible dedesarrollo.

1. INTRODUCCIÓN

En la segunda sección, se desarrollan aspectos talescomo los cambios demográficos, la demanda dematerias primas y el comercio, la crecienteglobalización, el cambio climático, el desarrollotecnológico y aspectos sociopolíticos e institucionalesque constituyen fuerzas motrices que condicionan laspresiones para el cambio ambiental. La intención deeste apartado es brindar un punto de partida para elanálisis de los impactos ambientales prevalecientes enla región y las respuestas políticas.

El capítulo, en su totalidad, identifica aspectossustantivos para una reflexión sobre la forma dedesarrollo de la sociedad latinoamericana y caribeñapresentando, en varias ocasiones, un panorama querefleja tanto importantes retos como oportunidades paralos tomadores de decisión.

1. INTRODUCCIÓN

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

2. LA COMPLEJIDAD AMBIENTAL DE LA MODALIDAD DE DESARROLLOPREVALECIENTE EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

La modalidad de desarrollo prevaleciente en los paísesde América Latina y el Caribe a comienzos del sigloXXI expresa una compleja situación como resultado delos determinantes físicos y sociales que han incidido enel desarrollo histórico de la región. La diversidad de laoferta natural se evidencia en sus múltiples ecosistemas,biomas y componentes. Eso circunscribió a la región aun papel predominante de proveedora de recursosnaturales. Por lo mismo, la heterogeneidad de estosterritorios constituye una premisa ineludible en elanálisis de su problemática ambiental.

También son diversas las poblaciones de la región, conraíces muy anteriores a la conquista europea, queincluyen desde imperios agrícolas de distinto origen,conformación e historia - como los mayas, los aztecasy los incas – hasta pequeñas sociedades agrícolas yrecolectoras, habitantes de regiones litorales, insulares,de selvas, montañas y humedales. Con ellas, sometidas,aculturizadas y mestizas, fueron forjadas las actualesnaciones en un largo proceso del siglo XVI en adelante.

Muchas de las culturas, en especial las imperiales,sobrevivieron, se adaptaron y crecieron. Otrasdesaparecieron para siempre. Todo ello configuró unaamalgama de pueblos y entornos, con sus armonías ydesarmonías, cuya complejidad se corresponde con lade los ecosistemas que sostienen su existencia. EnAmérica Latina y el Caribe están presentes la mayoríade las zonas de vida existentes en el mundo. Estadiversidad abarca desde el gran ecosistema de la cuenca

del Amazonas, que pertenece predominantemente altrópico húmedo, hasta las características templado-fríasde la Patagonia, pasando por el Chaco, el páramo, laprepuna, la puna, el cerrado, al alto andino, el paraense,las yungas, el Pacífico, el venezolano, el Atlántico, lasGuayanas, el central mexicano, el desierto del Pacífico,el desierto mexicano, el centroamericano de altura, elcentroamericano del Caribe, el espinal, el montesudamericano, la pampa, el tropical de Centroamérica,la Guajira, el subantártico, hasta el gran ecosistemainsular del Caribe.

2. LA COMPLEJIDAD AMBIENTAL

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1 Al respecto, ver por ejemplo, David Lentz (2000).

2.1 UNA MIRADA HISTÓRICA A LACOMPLEJIDAD AMBIENTAL DE AMÉRICALATINA Y EL CARIBE

Los ecosistemas americanos han estado expuestos a lainfluencia humana desde al menos unos 14.000 años1.Aun así, la extraordinaria complejidad ecosistémica,social y cultural de la región contemporánea tiene suorigen más visible entre 1500 y 1550, cuando AméricaLatina y el Caribe se ve incorporada al proceso deformación del moderno sistema mundial comoproveedora de alimentos, materias primas y comoreserva de recursos.

Esa modalidad de inserción define, a su vez, unaestructura de larga duración que opera con tiempos ymodalidades distintos -en al menos cuatro sub regionesdiferentes, y en interacción entre los sistemas sociales ynaturales presentes en cada una de ellas. De este modo,entre los siglos XVI y XIX, y de acuerdo a la formafundamental de organización de dichas interacciones,se ven conformadas:

Una subregión afroamericana articulada a partir deltrabajo esclavo, asociado sobre todo -pero noexclusivamente- a actividades de plantación.

Una subregión indoamericana articulada a partir dedistintas modalidades de trabajo servil -desde laencomienda al peonaje-, destinado sobre todo a laproducción de alimentos y a la explotación minera.

Una subregión euroamericana articulada a partir delpoblamiento por inmigrantes europeos de ampliosespacios del Cono Sur, en los que a menudo

ocurrieron procesos de industrialización desde lasprimeras décadas del siglo XX.

Una subregión integrada por vastas áreas marginalesque escapan a la inserción directa en el mercadomundial durante un período más o menosprolongado -la Araucanía, la Patagonia, laAmazonía, el Darién, el litoral AtlánticoMesoamericano y el Noroeste de México-, en lasque tuvo lugar una amplia gama de actividades desubsistencia de impacto ambiental relativamentelimitado.

Una vez culminados los procesos de formación deEstados nacionales en la primera mitad del siglo XIX-que en el Caribe se extienden hasta mediados del XX-,la transición al siglo XX opera a partir de la formaciónde mercados de trabajo y de tierra constituidos medianteprocesos masivos de expropiación de territoriossometidos a formas no capitalistas de producción. Deesta manera, se crea el marco para la apertura de laregión a la inversión directa extranjera y la creación deeconomías de enclave en el marco del llamado EstadoLiberal Oligárquico. Los ciclos posteriores-convencionalmente designados como populista,desarrollista y neoliberai- marcarán el camino hacia elsiglo XXI entre las décadas de 1930 y 1990.

En el proceso, surgieron nuevos grupos sociales cadavez más vinculados a la economía de mercado; seexpandieron las fronteras de explotación de recursosnaturales apoyada por la mayor complejidadtecnológica, conllevando a una intensificación de susimpactos ambientales; se produjo un notable proceso

2. LA COMPLEJIDAD AMBIENTAL

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

2. LA COMPLEJIDAD AMBIENTAL

de des-ruralización y urbanización, y todas lassociedades de la región ingresaron en procesos detransición demográfica, mientras la huella ambiental deese conjunto de procesos se hizo cada vez más vasta ycompleja. En este marco, nuestra historia entró a unperíodo en el que los conflictos de origen ambiental-esto es, aquéllos que surgen del interés de grupossociales distintos en hacer usos excluyentes de losecosistemas que comparten- tienen un papel cada vezmás importante.

2.2 MODALIDADES O ESTILOS DEDESARROLLO Y DEPENDENCIA DELPATRIMONIO NATURAL

La modalidad de desarrollo -que prioriza principalmentepolíticas económicas sobre algunas variablesmacroeconómicas clásicas como crecimientoeconómico, equilibrios monetarios, tasa de inversión,inflación y exportaciones- constituye el factorfundamental que explica el escaso éxito de lasestrategias ambientales de los países de la región. Así,en estas políticas se busca estimular la tasa de inversión(nacional y extranjera2), en un marco de escasasexigencias ambientales y el mantenimiento o laprofundización de las desigualdades sociales.

La historia económica de la región, en efecto, es la deluso (y abuso en ciertas instancias) de sus recursosnaturales, desde las explotaciones mineras y deplantación de los siglos XVII y XVIII, a los modelosmonoexportadores del siglo XIX, los procesos deindustrialización de post-guerra, el periodo deprivatización y reformas estructurales de los 80‘s y 90‘s,como así también durante el actual períodocaracterizado por una rápida globalización de laseconomías.

Los resultados de esta modalidad de desarrollo han sidodiscontinuos y desiguales. La región ha conocidoperíodos de rápido crecimiento económicoacompañados con mayores niveles de bienestar en lapoblación, seguidos de otros de crecimiento limitado oincluso negativo con fuertes consecuencias sociales ypolíticas, a los que han sucedido procesos derecuperación económica con incremento de lasdesigualdades económicas y sociales. Todas estascombinaciones han compartido un factor común: altos

niveles de presión, deterioro progresivo y sostenido delmedio ambiente físico y pérdida de ecosistemas.

La heterogeneidad estructural característica del patrónproductivo de la región durante el último siglo y medioadquiere una especial importancia para el análisis delas consecuencias ambientales de la modalidad dedesarrollo imperante en América Latina y el Caribe3.Las economías regionales han tendido a organizarse entorno a un sector orientado al mercado externo, receptorde la inversión nacional y extranjera con lasconsiguientes presiones ambientales mencionadasanteriormente. Por otra, el resto de la economía, conbajos niveles de inversión y escasa tecnología, demandagran parte del empleo, pero con bajos niveles deproductividad y, por consiguiente, con bajos salarios,reproduciendo y acentuando a su vez la desigualdistribución del ingreso que caracteriza a la región.

2 Aun cuando se sabe que el grueso de la inversión extranjera directa (IED),aproximadamente un 70% de ésta, no va dirigida a la creación de nuevascapacidades productivas, sino a fusiones y adquisiciones de empresas. Dela escasa IED que sí va dirigida a sectores productivos, el grueso es ensectores intensivos en recursos naturales.

3 El concepto de «heterogeneidad estructural», término introducido en elestudio del subdesarrollo por la CEPAL hace ya cuatro décadas, se refiere ala articulación económica de formas de producción «avanzadas» o«modernas», con formas de producción «atrasadas». Segmentación querecientemente CEPAL ha conceptualizado nuevamente con la idea de«economía de tres velocidades»: una de gran empresa nacional ytransnacional, pública y privada, de empleo formal, con mayor capitalhumano y más cercano a la frontera tecnológica internacional; un nivelintermedio de empresas medianas y productividad menor; y un nivel depequeñas empresas y microempresas, de empleo informal, bajo nivel decapitalización y que, sin embargo, ha generado durante la década pasada7 de cada 10 nuevos empleos (CEPAL, 2004).

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

24 2. LA COMPLEJIDAD AMBIENTAL

2.3 SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL DE LAMODALIDAD DE DESARROLLO PREVALECIENTE

Entre 1950 y 1970, las economías de América Latina yel Caribe crecieron en forma sostenida, sin embargo, laproblemática ambiental estuvo prácticamente ausenteen las estrategias y las políticas nacionales, salvo lastradicionales preocupaciones sobre algunos recursosnaturales renovables como los suelos, los bosquesnativos y determinada fauna.

Esta situación empezó a dar muestras de cambio aprincipios de la década de 1970, a raíz de la Conferenciade las Naciones Unidas sobre Medio AmbienteHumano, realizada en Estocolmo en 1972. El temaambiental empezó a aparecer con mayor vigor yfrecuencia en las agendas nacionales, aunque siempresubordinado a la prioridad del crecimiento económico,y como reacción a demandas provenientes «desde fueray desde arriba» antes que «desde dentro y desde abajo»de nuestras sociedades. De este modo, en el momentoen que los sistemas económicos de los países de laregión se vieron afectados por el cambio en lacomposición del comercio internacional generado porla irrupción de novedosos paradigmas tecnológicos yla oferta casi ilimitada de créditos, la necesidad deencontrar medios de pago de la deuda externa regionalgeneró una inédita presión sobre los recursos naturalescon el objeto de ampliar las exportaciones y generarlas divisas necesarias.

A la luz de la mayor cultura ambiental, cabe afirmarque la década de 1980 - la llamada «década perdida» -tuvo dos efectos negativos principales para el ambiente:1) el cambio de la política de la banca acreedora,derivado de la vulnerabilidad de las economías de lospaíses de la región, impuso un extraordinario esfuerzode reajuste para pagar el servicio de la deuda, lo cualgeneró un flujo de recursos económicos hacia el exterior.Esto provocó recortes del gasto público que sumado ala expansión monetaria destinada a financiarlo, estimulóla inflación, que a fines de la década superó el 1.000por ciento - incrementando consecuentemente ladesocupación, la marginalidad y la pobreza; 2) En estecontexto, el sector ambiental, se vio afectado por severosrecortes de personal y presupuesto en el momento enque aumentaba, como nunca antes, la presión sobrelos recursos naturales, en especial los exportables.

Por su parte, los movimientos ciudadanos, si bien aligual que en la década anterior siguieron circunscritosa agrupaciones poco numerosas, empezaron a ganarlegitimidad ante la opinión pública, en la medida enque su actividad frente a las consecuencias ambientalesde la nueva política económica tendió a generar unaconciencia social más crítica ante estos temas.

Al propio tiempo, la región fue acentuando su rechazoa los regímenes autoritarios. Unos antes, otros después,se instalaron paulatinamente regímenes democráticosque mantuvieron sus modalidades de desarrollo,promoviendo la búsqueda de los equilibrios

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

2. LA COMPLEJIDAD AMBIENTAL

macroeconómicos, la libertad de los mercados, lareducción del papel del Estado, la desregulación, lareducción de las barreras proteccionistas, y la liberaciónde los regímenes de inversiones extranjeras4. De estemodo, para la década de 1990 la ampliación delmercado externo empezó a condicionar medidas decontrol ambiental para los intercambios comerciales,al tiempo que las preocupaciones ambientales de nivelplanetario fueron penetrando con fuerza en la región.

Ese giro en la cultura ambiental del sistemainternacional, sin embargo, no se tradujo tanto en laampliación de la base social de las organizacionesambientalistas de la región, como en la transnaciona-lización de muchas de ellas a través de vínculos dedependencia financiera y programática conOrganizaciones No Gubernamentales (ONGs) de paísesdesarrollados. Por su parte, todos los Estados de la regiónreforzaron su institucionalidad ambiental mediantenuevas leyes y organismos públicos, desde ministeriosambientales hasta comisiones transversales. De estemodo, se pasó de una política esencialmente reactiva apolíticas mixtas de prevención y control, y se instauraronsistemas de evaluación de impacto ambiental,organismos normativos e instituciones de control comosuperintendencias y entes fiscalizadores5.

Aun así, a las presiones derivadas de viejos procesosproductivos y de ocupación territorial se sumarontensiones ambientales emergentes determinando que elproceso de deterioro ambiental continuara su curso,principalmente a través de la expansión inadecuada dela frontera agropecuaria, en especial hacia el trópicohúmedo; el deterioro de los suelos por erosión,agotamiento y contaminación; y la pérdida de labiodiversidad asociada a la reducción de hábitats. Losconstantes esfuerzos para mejorar las ciudades chocaroncontra las presiones de sus altas tasas de expansión, lademanda creciente de insumos y energía y la mayorgeneración de residuos.

El modelo neoliberal generó un proceso altamenteconcentrador y de desnacionalización creciente. Elconflicto entre esa modalidad de desarrollo y lasdemandas regionales y globales en auge, relacionadascon la sostenibilidad ambiental y la equidad socialempezó a resultar cada vez más evidente a partir de laCumbre Mundial sobre Ambiente y Desarrollo realizadaen Río de Janeiro, Brasil, en 1992.

En este marco, la elaboración de estrategias ambientales,la creación de organismos especializados, lapromulgación de leyes, reglamentos y normas, y laratificación de convenios internacionales hanpropiciado importantes avances en materia ambiental.No obstante, la falta de apoyo a los países, para el accesoa recursos y tecnologías, y la dificultad de elaborarpolíticas ambientales transversales, persisten comoimportantes desafíos para contrarrestar de manera eficaza las fuerzas motrices del modelo económico de laregión, expresadas en problemas como la expansiónurbana, las presiones demográficas y la generalizaciónde patrones de producción basados en el despilfarro deenergía y materiales, entre otros.

Ya en el siglo XXI, América Latina y el Caribe ha venidoasumiendo que el modelo económico vigente generasimultáneamente crecimiento económico,desintegración social y degradación ambiental, con unamarcada tendencia a la mayor concentración del ingresoy un reparto menos equitativo de los frutos delcrecimiento. En este contexto, los movimientos socialesen demanda de mayor equidad y más ampliaparticipación ciudadana tienden a convertirse enmovimientos políticos de nuevo tipo, que expresandemandas mayoritarias por cambios estructurales quepermitan el desarrollo de sociedades más y mejorintegradas entre sí y con su entorno natural.

4 Es interesante notar que durante la década de los 80‘s y principios de los90‘s, los esfuerzos por introducir mayores regulaciones ambientaleschocaban con un modelo donde el Estado había perdido un rol protagónico,incluso su carácter fiscalizador estaba debilitado. La ortodoxia neoliberalhabía impuesto la idea de que los mercados podían autoregularse. Si bienantes no había una conciencia ambiental desarrollada, en este período lamayor conciencia alcanzada chocaba con la imposibilidad dematerializarla.

5 No obstante lo anterior, en términos políticos es posible plantear que unaparte significativa de lo logrado en términos institucionales ambientales enla región se debe a la necesidad del sector exportador de penetrar losmercados de los países desarrollados. La capacidad de influir delmovimiento ambiental en la región es muy escasa aún, y su debilidadpolítica así lo demuestra.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

26 2. LA COMPLEJIDAD AMBIENTAL

Aun así, esto no se ha traducido todavía en un cambiode los paradigmas económicos dominantes, aunque lacrisis generalizada a partir de 2008 desde EstadosUnidos introdujo un debate global que estácuestionando la autorregulación de los mercados comoel eje organizador de las economías. Precisamente apartir de la crisis de 2008 y de la publicación del estudioStern, los gobiernos de la región están fortaleciendo susacciones en materia de protección y conservación delmedio ambiente.

La ausencia de estrategias ambientales nacionales que,por una parte, asuman y manejen el gran pasivoambiental y, por otra, elaboren políticas sectoriales ytransversales para construir un tipo de desarrollo integralque mejore la calidad de vida, se corresponde con el

creciente número de problemas ambientales que no sonabordados, ya sea por lagunas en las legislaciones, opor falta de voluntad y continuidad política paraimplementar sistemas de gestión y de fiscalizaciónambientalmente adecuados. Aún así, el creciente interésy abordaje del tema ambiental en las agendas de losdiferentes sectores -gobiernos nacionales, locales,organizaciones civiles y empresariales, universidades ycentros de investigación- que en muchos casos seencuentran basados en el consenso y la cooperación,ofrecen una oportunidad para enfrentar el deterioroambiental y sentar las bases para avanzar hacia unmodelo más sustentable de desarrollo, que internalicey considere los beneficios y costos de oportunidad deproteger y conservar los ecosistemas y los serviciosambientales que éstos ofrecen.

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

Los cambios ambientales y sus efectos sobreel bienestar humano son provocados pordiversas fuerzas motrices y presiones. Fuerzasmotrices específicas tales como los cambiosdemográficos, la demanda de materias primasy el comercio, la creciente globalización, elcambio climático, el desarrollo tecnológico,así como aspectos sociopolíticos einstitucionales, dan lugar a presiones que asu vez influyen sobre el estado del medioambiente con repercusiones en el propiomedio, la sociedad y la economía.

La mayoría de las presiones actuales sobre losecosistemas de América Latina y el Caribe sonconsecuencia de, por ejemplo, los cambiosen las emisiones de gases de efectoinvernadero, conversiones en el uso de la tierray los patrones de explotación de recursos(PNUMA, 2007). Los análisis de lasinterrelaciones mostradas por el modelofuerzas motrices-presiones-estado-impactos-respuestas (FMPEIR) son la base sobre la quese articula la evaluación GEOALC.A continuación se discuten las principalesfuerzas motrices y presiones para el cambioambiental en América Latina y el Caribe.

3.1 DEMOGRAFÍA

Según datos recientes, en el período 1970 –2009, la población de América Latina y elCaribe ha aumentando en 295 millones depersonas (un 51%), alcanzando un total de581 millones de personas, lo que incrementala presión de espacio para asentamientoshumanos. Datos de CEPAL (2008a) estimanque a 2010, el 79% de la población deAmérica Latina y el Caribe (unos 470,5millones de personas) se concentrará en áreasurbanas, y solamente el 21% de la poblacióntotal vivirá en áreas rurales (Gráfico 1.1). Estosdatos muestran que sobre un período decuarenta años, la región ha triplicado supoblación urbana, lo que posiciona a AméricaLatina y el Caribe, según el Fondo dePoblación de las Naciones Unidas (UNFPA),como la región del mundo en desarrollo conla mayor proporción de este tipo de población.

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES PARA EL CAMBIO AMBIENTAL

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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Este crecimiento continuo de las ciudades, en especiallas medianas (de 1 a 5 millones de habitantes), agravalos problemas derivados de la expansión demográficade las urbes, en tanto que las megaciudades (más de 10millones de habitantes) muestran serios conflictos yriesgos ambientales. En algunas de éstas se acrecientanlos niveles de contaminación y los impactos a la salud,lo que demanda mayores esfuerzos para una gestiónadecuada del uso del suelo, agua, residuos sólidos, ytransporte (ver la sección sobre áreas urbanas delCapítulo II).

Otro de los problemas que se intensifican en lasciudades es la segregación socio espacial, evidenciadaa través de 117 millones (27 %) de personas que vivenen asentamientos precarios, aunque en general, las tasasregistran una tendencia a la disminución del crecimientode estos asentamientos (UN-Habitat, 2008).

A la pobreza y alta densidad, características de losasentamientos precarios, se suman problemas dehabitabilidad y de acceso así como ausencia de serviciospúblicos e infraestructura, como agua potable,saneamiento recolección de residuos y pavimento, loque pone a la población de estos asentamientos encondición de vulnerabilidad y riesgo ambiental.

El acceso a los servicios básicos, como el abastecimientode agua potable y servicios de saneamiento mejoradosalcanza al 92% y 78% de la población, respectivamente,en 2006 (Naciones Unidas, 2010). Cabe destacar queexisten importantes asimetrías entre los países, como

así también, al interior de cada uno de ellos. La coberturaen el caso de la electricidad, en la mayoría de los países,alcanza porcentajes superiores al 90% en todas lasciudades (CEPAL, 2007a).

La demanda de agua en América Latina y el Caribe seha incrementado en un 76% (150 a 264,5 Km3/año entre1990 y 2004) como resultado del crecimientodemográfico (en especial el urbano), la expansión de laactividad industrial y la elevada demanda para riego,factores que han incidido a la vez en la disminución dela calidad del recurso hídrico, causada por lacontaminación y el bajo porcentaje de tratamiento quereciben las aguas residuales generadas (entre el 10 y14%) (Biswas, 2006; PNUMA, 2007).

El promedio de consumo de agua por habitante por díavaría entre los 80 a 250 lit./hab./día, siendo que para elconjunto de América Latina y el Caribe se podríaaproximar a 150 lit./hab./día (SUDAM/OEA, 1998;IDEAM, s.f; The World’s Water, 2001; OMS – UNICEF,2007; INE, 2008). La demanda de agua es de32,1 km3/año para uso humano o doméstico, lo querepresenta el 12% del total utilizado por la región (verCapítulo II, sección de recursos hídricos).

Por otra parte, en América Latina y el Caribe, 35.000muertes se atribuyen a la contaminación del aire cadaaño, pero la cifra real es posible que sea más alta (CEPIS,2005) lo que constituye una preocupación en materiade salud pública.

Fuente: Elaborado por PNUMA con estadísticas obtenidas de la base de datos CEPALSTAT. Consulta a Octubre 2009.

GRÁFICO 1.1

América Latina y el Caribe: Distribución de la Población Urbana y Rural, 1970-2010(En porcentaje relativo al total)

100%

90%

70%

60%

50%

40%

30%

20%

10%

0%

Rural Caribe

Rural Mesoamérica

Rural Sudamérica

Urbana Caribe

Urbana Mesoamérica

Urbana Sudamérica

1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

Resultados de un informe del Centro Panamericano deIngeniería Sanitaria y Ciencias del Ambiente (CEPIS),del año 2005, dan cuenta de la asociación entremorbilidad y mortalidad con el deterioro de la calidaddel aire en los principales centros urbanos. Para Río deJaneiro (Brasil) se ha observado que un aumento de10 μg/m3 en la concentración de material particulado(PM10) conlleva un incremento de 1,84% en la admisiónhospitalaria por causas respiratorias. En ciudad deMéxico el mismo incremento en el correspondió a uncambio de 1,83% en la mortalidad diaria. Para Santiago(Chile) este cambio es del 0,75% y para Sao Paulo(Brasil) del 0,09% (ver Capítulo II, sección calidad delaire).

La existencia de nuevos patrones de consumo, sumadoal crecimiento económico ha llevado a un aumento enla producción de residuos sólidos por habitante en lospaíses de América Latina (GEO Mercosur, 2008). Porejemplo, para la región, la producción de residuossólidos por habitante se ha duplicado en los últimos 30años, pasando de 0,2 – 0,5 a 0,5 – 1,2 Kg por día, conun promedio regional de 0,92 Kg (ILAC, 2004).

3.2 SITUACIÓN SOCIAL: POBREZA YDESIGUALDAD

Los retos más importantes que enfrenta la región deAmérica Latina y el Caribe son la pobreza y ladesigualdad (PNUMA, 2007). Mientras se acrecienta ladesigualdad, menor es la capacidad para reducir lapobreza. Según estimaciones de CEPAL (2009c), lapobreza alcanza el 35.1% de la población esto es, 189millones de pobres. En tanto se observa que un 13,7%se encuentra en situación de indigencia (Gráfico 1.2).

Asimismo, los países de la región, expresan unapersistente desigualdad en la distribución de ingresos,registrándose un coeficiente de Gini de 0,5266 promediopara América Latina y el Caribe (CEPAL, 2009c). Cabedestacar que se observa una tendencia hacia una mejor

6 Valores cercanos a cero indican igualdad en la distribución de ingresos.Típicamente el índice varía entre 0,23 (países como Suecia) y 0,707(Namibia). Para ALC, CEPAL elabora este coeficiente para 18 países de laregión, sobre la base de tabulaciones especiales de las encuestas de hogaresde los respectivos países.

Page 32: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

30

distribución del ingreso. El índice de Gini, comparadocon las cifras en torno a 2002, se redujo en promedioen un 5% en el período 2007-2008. El indicadorpresentó caídas importantes en varios países, entre losque se destacan Venezuela (-18%), Argentina (-10%),Perú (-9%), Estado Plurinacional de Bolivia, Nicaragua,Panamá y Paraguay (-8% en todos ellos). Los únicospaíses que presentaron incrementos en la concentracióndel ingreso en este período son Colombia, Guatemalay la República Dominicana (CEPAL 2009b).

El crecimiento económico experimentado en la regiónen el período 2003-2007, que ha significado uncrecimiento del PIB por habitante de 3% promedioanual, el más alto desde la década de los setenta, hacontribuido a la reducción de la pobreza. Sin embargo,la irrupción de la crisis financiera internacional, marcóla interrupción de la fase de crecimiento regional

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

iniciada en 2003. Valores de 2008 dan cuenta de unadesaceleración en el proceso de reducción de la pobrezay, que en el caso de la indigencia se traduce en unareversión del comportamiento que se venía observandodesde 2002 (CEPAL, 2009b).

La disminución de la tasa de pobreza en 2008, de 1,1puntos porcentuales, es notablemente inferior a lareducción anual de la pobreza que se produjo entre2002 y 2007, equivalente a 2 puntos porcentuales poraño. Por su parte, la tasa de indigencia creció 0,3 puntosporcentuales, luego de haber venido disminuyendo aun ritmo de 1,4 puntos por año. El deterioro en materiade indigencia se originó principalmente en el alza delos precios de los alimentos, que implicó unencarecimiento acelerado de la canasta básica dealimentos (CEPAL, 2009b).

Page 33: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

31

I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

60

50

40

30

20

10

01980 1990 1997 1999 2002 2006 2007 2008 b/

Indigentes Pobres no indigentes

18,6

40,5

22,5

48,3

19,0

43,5

18,5

43,8

19,4

44,0

13,3

36,3

12,6

34,1

12,9

33,2

300

250

200

150

100

50

01980 1990 1997 1999 2002 2006 2007 2008 b/

Indigentes Pobres no indigentes

62

136

93

200

89

204

89

211

97

221

71

193

68

184

71

182

Fuente: Comisión Económica para América Latina y el Carible (CEPAL), sobre la base de tabulaciones especiales de las encuestas de hogares de los respectivos países.a/ Estimación correspondiente a 18 países de la región más Haití. Las cifras colocadas sobre las secciones superiores de las barras representan el porcentaje ynúmero total de personas pobres (indigentes más pobres no indigentes).b/ Proyecciones.

GRÁFICO 1.2

América Latina y el Caribe: Evolución de la pobreza y de la indigencia, 1980-2008a

(En porcentajes y millones de personas)

No obstante lo anterior, la expansión económicaexperimentada en los últimos años respondefundamentalmente al incremento de los preciosinternacionales de los recursos naturales, tambiénllamadas materias primas o commodities. Laintensificación en su explotación y exportación hagenerado buenos dividendos para muchas economíaslatinoamericanas, exportadoras netas de estoscommodities. Ello conlleva a un desafío para laseconomías de la región: la necesidad de cambiar elpatrón productivo por uno más sostenible en el largoplazo, de modo que estas mejoras sociales se consolidencomo mejoras permanentes en el largo plazo.

Los resultados económicos positivos obtenidos en losúltimos años son altamente vulnerables e inciden en elcomportamiento de los indicadores de pobreza eindigencia. Por un lado, se experimentan ciclos con unincremento sostenido de los precios de alimentos como

maíz, trigo, arroz y oleaginosas, entre otros, a partir deun aumento sostenido de la demanda mundial por estosbienes, lo que influye en los índices de precios alconsumidor de alimentos. Estos se aceleraron en lamayoría de las economías de la región, registrandodurante 2007 un crecimiento que osciló entre 6% y 20%anual en los distintos países. En 2007, los cerealesregistraron un aumento del 41%; los aceites vegetalesun 60%, y los productos lácteos un 83% y, entre marzode 2007 y marzo de 2008, el precio de venta del trigose disparó 130%.

Como se indica en estimaciones del Cuadro 1.1,incrementos de un 15% en los alimentos podrían llevara un crecimiento de la indigencia y la pobreza en 10millones de personas. Este panorama se complica aúnmás por los efectos de los precios de los combustiblesque impactan las tarifas del transporte y de variosservicios públicos.

Fuente: Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), sobre la base de tabulaciones especiales de las encuestas de hogares de losrespectivos países.a- Se asume que el alza del precio de los alimentos fue igual al incremento del IPC para el resto de los bienes a partir de diciembre de 2006.

América Latina: Simulación del impacto del alza del precio de los alimentos sobre la incidencia dela pobreza y la indigencia, 2007 y 2008

CUADRO 1.1

a

Porcentajes Millones de personasIncidencia Incidencia Diferencia Incidencia Incidencia Diferencia

efectiva simuladaa en puntos efectiva simuladaa en millonesporcentuales de personas

2007Indigencia 12,6 11,9 0,7 67,8 64,2 3,6Pobreza 34,1 33,4 0,7 183,9 180,0 3,9

2008 (proyección)Indigencia 12,9 10,9 2,0 70,8 59,6 11,2Pobreza 33,2 31,2 2,0 181,6 170,7 10,9

Page 34: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

32 3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

3.3 LA CRECIENTE GLOBALIZACIÓN

Desde la década del 80, las economías de la regiónestán orientadas a los mercados externos, en particulara los mercados de los países desarrollados y a las nuevaspotencias económicas de Asia, como China y la India.El comercio internacional se ha convertido en el motorde crecimiento de los países en desarrollo. Las mejorastecnológicas han reducido los tiempos de transporteentre países a niveles sin precedentes, mientras laapertura de los mercados financieros ha expandido laactividad especulativa de los mercados de capitales,incrementando la vulnerabilidad en su crecimiento y lainseguridad económica.

La modalidad de desarrollo que al presente predominaen la región se concentra en el crecimiento económicobasado en la explotación de recursos naturales y delpatrimonio natural; el incremento del producto comoobjetivo central; la producción orientada a los mercadosexternos; las demanda por inversión destinada a sectoresproductivos intensivos en recursos naturales como ejede la política macroeconómica. Con ello, las diferenciasentre los países de la región no se originan en modelosde desarrollo alternativos, sino por la función quecumplen en el mercado y el Estado, como agenteseconómicos reguladores, re-distribuidores y/oproductores, sin un cuestionamiento relevante a losfundamentos estructurales ni al papel de los recursosnaturales en el proceso económico.

La globalización se evidencia asimismo, en otrasdimensiones como la integración del conocimientomediante el intercambio de información, cultura ytecnología. También se reconoce que el medio ambientey la globalización están intrínsecamente ligados. Losrecursos alimentan el crecimiento económico y elcomercio. Las soluciones a crisis ambientales como elcambio climático exigen una acción coordinada y unamayor globalización de la gobernanza (PNUMA, 2007).

3.4 CRECIMIENTO ECONÓMICO

Entre 2005 y 2007 el crecimiento promedio anualmundial bordeó el 5% (FMI, 2008). Parte importantede este crecimiento correspondió a las economías deChina, India y Rusia con tasas de crecimiento del ordendel 11%, 9% y 8% respectivamente durante 2007. Seestima que las economías emergentes contribuirían enla actualidad con alrededor del 60% del crecimientomundial anual (CEPAL, 2007a).

No obstante lo anterior, el año 2008 rompe con latendencia favorable del ciclo económico con fuertesturbulencias económicas y financieras, y con altosimpactos en las economías de los países desarrollados(ver el Recuadro 1.1). A la cabeza de esta desaceleraciónse ubican las economías desarrolladas, las que porprimera vez desde la postguerra se contraerían en -0,3%aproximadamente.

“… Los orígenes de esta crisis que afecta a los principales mercados financieros mundiales se explica por: i) el estallido dela crisis de las hipotecas de alto riesgo, que partió en 2007 en los Estados Unidos produciendo una recesión en la economíade ese país y del mundo; ii) el debilitamiento del dólar durante el primer semestre del 2008 y la sostenida demanda de laseconomías emergentes, que elevaron abruptamente los precios del petróleo y de los alimentos y acentuaron los movimientosespeculativos y la volatilidad en estos mercados, con lo cual se acrecentó la preocupación por la inflación; iii) los coletazosde la crisis de las hipotecas de alto riesgo, ocasionaron sucesivas quiebras y reordenamientos en la industria financieraestadounidense y europea y a fines de septiembre del 2008 causaron el colapso de la banca de inversión de los EstadosUnidos, protagonista de las principales innovaciones financieras en la economía global, y plantearon una amenaza decrisis financiera internacional. Por último, los temores de recesión han provocado una baja del precio de las materiasprimas, en especial el petróleo y el cobre y otros productos de interés regional.

En suma, la crisis de las hipotecas de alto riesgo es un caso de burbuja inmobiliaria en los Estados Unidos que, al reventar,afectó a las instituciones financieras que tenían más cantidad de activos respaldados en el pago de esas hipotecas. Laspérdidas de tales operaciones elevaron la deuda y redujeron el capital de esas instituciones, limitando su capacidad deatender las necesidades crediticias de la economía. Ante esta situación, procedieron a vender activos, acentuando la caídade los precios de los activos y por ende sus propias dificultades de deuda y capital. Esa espiral descendente desató ladesconfianza entre los propios bancos, lo que produjo una contracción del crédito y propició las condiciones para laquiebra de gigantes financieros, comprometidos de manera imprudente con operaciones demasiado riesgosas y confinanciamientos a corto plazo. En tal momento, la intervención del Estado se transformó en un requisito indispensable pararestaurar la confianza y restablecer la normalidad de los flujos financieros”.

Fuente: CEPAL (2007a). “Panorama de la Inserción Internacional. América Latina y el Caribe. Tendencias 2008.” Santiago.

RECUADRO 1.1

Orígenes de la crisis económica mundial

Page 35: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

33

I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

América Latina y el Caribe continúan con laprofundización del proceso de apertura comercial yeconómica que inició a finales de los años ochenta.Hoy en día, las economías de la región están másabiertas que en la década de los noventa, especialmentelas pequeñas y medianas. De acuerdo a estimacionesde CEPAL, la región presentó una caída del PIB de 1,8%en 2009, tras seis años de crecimiento, habiendoregistrado una tasa del 5,8 % para 2007.Este crecimiento estuvo sustentado por la expansión dela demanda interna, que impulsó las importaciones,mientras que las exportaciones crecieron a un 5%, cifrainferior al crecimiento del PIB de la región, situaciónque se presenta por primera vez en seis años. Otro rasgoa destacar es la inflación del 6% que presenta la regiónen 2007, el menor valor desde 2002 (CEPAL, 2008b).

A diferencia de la década de los noventa, el crecimientoen las exportaciones de la región después de 2001responde más a un efecto de precios que de cantidades.El efecto de los precios prevaleció en los paísesexportadores de productos mineros y petróleo. Tambiénse destaca una mayor diversificación de lasexportaciones de las economías latinoamericanas,aunque éstas se sustentan fundamentalmente enmaterias primas básicas, y manufacturas basadas enrecursos naturales. Se pueden apuntar dos patrones deespecialización: América del Sur basado en recursosnaturales, y México, Centroamérica y el Caribe ensectores con uso intensivo en mano de obra.

3.5 COMERCIO INTERNACIONAL

El éxito comercial de América Latina se ha convertidoen un factor determinante para explicar las presionesactuales sobre los recursos naturales, en áreas que vandesde la minería e hidrocarburos, a la ampliación de lafrontera agropecuaria y la deforestación.

En tanto América Latina se ha especializado en exportarrecursos naturales, y éstos están concentrados en unospocos productos, se desemboca en una situación demucha dependencia de los mercados internacionales.Precisamente el superciclo de commodities explica eso,ya que los aumentos del precio internacional deminerales como el cobre o granos como la soja,desencadenan un aumento de la producción dentro dela región. Por lo tanto, esas dinámicas son muydependientes de la globalización actual.

A su vez, el desarrollo económico y tecnológico, y elcrecimiento demográfico estrechan cada vez más larelación entre comercio y ambiente. El desarrollotecnológico de las telecomunicaciones y el transportehan sentado las bases para una expansión del comercioque, por su base material, demanda cada vez más unuso intensivo de los recursos naturales, generando unaenorme presión sobre ellos. Si no existen los marcosnormativos e institucionales adecuados, el resultado esun comportamiento depredador por parte de los agenteseconómicos que buscan maximizar utilidades, con

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

Page 36: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

34

14%

12%

10%

8%

6%

4%

2%

0%85 86 87 88 89 90 91 92 93 94 95 96 97 98 99 00 01 02 03 04 05 06

Años

Total Bienes primarios Manufacturas

Fuente: Machinea, L. y O. Kacef. 2008. América Latina y el Caribe frente al nuevo escenario económico internacional. CEPAL, Santiago.

GRÁFICO 1.3

América Latina y el Caribe: Participación en el valor de las exportaciones mundiales (En porcentajes)

consecuencias devastadoras para los ecosistemas y, engeneral, para la sostenibilidad del ambiente.

De un vistazo a la economía mundial en estos tiempos,sobresalen tres retos que de alguna forma estáníntimamente ligados y que tienen una dimensióneconómica y ambiental inseparable, estos son: elcambio climático; la volatilidad en los precios delpetróleo y el crecimiento de su consumo; y la crisis agroalimentaria. Un desarrollo tecnológico y económicobasado en el petróleo ha llevado a niveles insosteniblesde contaminación con daños en la salud de la poblacióny consecuencias graves en los ecosistemas (ver la secciónatmósfera del Capítulo II y el Capítulo III de este informe).

3.5.1 EL PAPEL DE AMÉRICA LATINA Y ELCARIBE EN EL COMERCIO MUNDIAL

La región posee un papel modesto en el comerciomundial (el valor de sus exportaciones se ha mantenidoen el orden de 10 – 12% del valor total global),registrándose un pequeño repunte en los últimos años,pero éste se debe en particular al aumento del valor delas commodities (Gráfico 1.3).

Este papel en el comercio mundial explica una tensiónrelevante: por un lado el comercio internacional tieneefectos claves en el uso del territorio y la apropiaciónde los recursos naturales dentro de América Latina y elCaribe, pero por el otro, la región no dispone deinstrumentos o peso económico suficiente como paraincidir decididamente en ese comercio global. En efecto,

la determinación de los principales productos tranzadosse realiza en sitios y por actores que no se encuentranen la región (por ejemplo, la Bolsa de Granos deChicago).

3.5.2 NATURALEZA DE LAS EXPORTACIONES: LADEMANDA DE MATERIAS PRIMAS

La confluencia entre la actual dinámica de laglobalización y los estilos de desarrollo seguidos en elcontinente, hacen que los recursos naturales jueguenun papel clave en sostener las exportacioneslatinoamericanas. En efecto, la inserción internacionalde la región -especialmente en Sudamérica- estádeterminada por un patrón donde se observa que deltotal de exportaciones, más de la mitad son recursosnaturales. Estos representan productos de escaso o nuloprocesamiento, tales como minerales, hidrocarburos(notablemente gas natural y petróleo), productosagrícolas y ganaderos, forestales y pesqueros.

La composición de las exportaciones muestra queaproximadamente el 54% son materias primas. Pero lasdiferencias subregionales son importantes, ya queMéxico muestra un patrón de exportaciones fuertementevolcado a las manufacturas (en el orden del 74%). Así,si se excluye esa nación, en el resto de América Latinase observa que casi el 73% de las exportaciones sonbienes primarios basadas en recursos naturales. Enalgunos países, las exportaciones de productos primariossobrepasan el 95% del total exportado (Cuadro 1.2).

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

Page 37: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

35

I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

Otro aspecto a considerar es que la exportación dematerias primas tiene «embebidos» componentes deapropiación de agua y energía. Por ejemplo, estácreciendo la preocupación por el contenido de aguaen las plantas de soja, lo que no necesariamente retornaa los ambientes de cultivos. En el caso de China lasimportaciones de 2004 alcanzaron un total de 18millones de toneladas que consumieron 45 Km3 de agua(un volumen enorme que corresponde a 2/3 delconsumo de agua mundial) (PNUMA y CLAES, 2008).

Asimismo, se observa dependencia de unos pocosproductos. En efecto, los 10 principales productos deexportación de la mayoría de los países, resultan ser

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

bienes primarios mineros y agrícolas. En este sentido, anivel regional los principales productos exportados sonel petróleo crudo y sus derivados (Gráfico 1.4). Cabedestacar que entre las excepciones con una mayordiversificación se encuentran Brasil, El Salvador,Argentina, y México.

GRÁFICO 1.4

América Latina y el Caribe: Exportación de los10 productos principales , según participaciónporcentual. 2008

(1)

(1) Conforme a la Clasificación Uniforme para el Comercio Internacional(CUCI),Fuente: Elaborado por PNUMA sobre la base de CEPAL, Anuario Estadísticode América Latina y el Caribe, 2009d.

Cobre refinado (incluido elrefundido)

9%

Aparatos receptoresde televisión, con

o sin gramófono o radio8%

Mineral yconcentrados

de cobre7%

Aparatos eléctricospara telefonía

y telegrafíaalámbricas

7%

Soya (excepto la harinafinal y gruesa)

6%

Tortas y harinas de semillasoleaginosas y otros

residuos de aceite vegetal5%

Mineral de hierro y susconcentrados (excepto

piritas de hierro tostadas)6%

Petróleos crudos29%

Productos derivados delpetróleo

12%

Vehículos automotores, montadosy sin montar, para pasajeros (que no

sean autobuses ni vehículos parausos especiales)

11%

Fuente: Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) 2007a.“Panorama de la Inserción Internacional. América Latina y el Caribe.Tendencias 2008.” Santiago.

Composición de Distribución geográficalas exportaciones Países Economías

(% del total) desarrollados emergentesAmérica Latina (19)Bienes primarios 54,2 57,9 42,1Manufacturas 44,6 71,5 28,5Total 98,9 63,6 36,4América Latina sin México (18)Bienes primarios 72,9 51,1 48,9Manufacturas 25,7 35,8 64,2Total 98,6 46,5 53,5

América Latina: Canasta de exportacionesy distribución geográfica en 2006(Porcentajes del total de exportaciones)

CUADRO 1.2

Page 38: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

36 3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

El Caribe, por su parte, es un productor agrícola «caro»,debido al costo de la mano de obra, el pequeño tamañode las islas y lo difícil del terreno, lo cual hace que estasubregión sea poco competitiva en esta área (Laurent,2006). En una década, los países del Caribe orientalpasaron de basar su economía en productos y bienes(alrededor de un 66%, mayormente banano y azúcar),a ser una economía de servicios predominantemente(alrededor de un 80%). En Cuba y RepúblicaDominicana, los servicios relacionados con el turismoconstituyen la mayor parte de las exportaciones deservicios (Machinea, 2007).

El papel de estos productos primarios en la economíaglobal ha cambiado sustancialmente en los últimos años.El aumento fue mayor en las subregiones que exportanminerales o agroalimentos; en América del Sur eseincremento fue del orden del 52%.

En el caso de México, que es esencialmente unexportador manufacturero, el incremento fue del 21%,en tanto que América Central sólo aumentó un 14%.Estos cambios también están siendo afectados por elcreciente comercio sur-sur, ya que los paísessudamericanos encuentran nuevos destinos deexportación de recursos naturales hacia Asia, mientrasque las naciones centroamericanas (y en alguna medidaMéxico), han disminuido sus exportaciones haciaEstados Unidos y otras naciones industrializadas al serdesplazadas por productos asiáticos.

3.5.3 EL PAPEL DE ASIA EN EL COMERCIO DEAMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Un factor clave es el papel de China y de otros paísesdel sudeste de Asia como compradores de materias

primas desde América Latina, como por ejemplo cobreo soja. La demanda creciente de insumos por parte deeconomías emergentes como India y China ha tenidoun impacto notorio en las exportaciones de la región.En el año 2000, el comercio entre América Latina yChina alcanzaba los 13 mil millones de dólares; en 2007fue de 103 mil millones de dólares. Además, cerca del50% de la inversión extranjera directa de China sedestinó a la región latinoamericana y caribeña. Si bienel comercio latinoamericano con India sigue siendomodesto (3 mil millones de dólares en 2005), crece demanera consistente y su potencial es enorme.

El consumo asiático, y muy particularmente desdeChina, explica la persistente importancia comercial dela extracción de recursos naturales. En efecto, desde2001, las importaciones chinas de todos los productosprimarios han aumentado sustancialmente.La proporción de bienes importados desde AméricaLatina y el Caribe –en 2007– fue principalmente de soja(grano y aceite), seguido por el mineral cobre (bruto,concentrado), aleaciones de cobre, harina de pescado,cueros y pulpa de papel (SELA, 2009).

Esta situación tiene importantes consecuencias desdeel punto de vista ambiental ya que tiende a acentuar unestilo de desarrollo que ejerce una fuerte presión sobrelos recursos naturales. En efecto, el aumento de losprecios de las materias primas y las expectativas dedemandas sostenidas o incluso crecientes, hace que seacentúen o agraven las presiones para extraer másrecursos naturales.

Además, la demanda de los países asiáticos refuerza lasexportaciones de recursos cuya explotación generagraves impactos ambientales, como carbón,hidrocarburos, acero, cobre, cemento y otras materiasprimas energéticas. Esta demanda está produciendoimportantes cambios tanto en el caso de los energéticos,como en otros mercados tal como el agrícola paraproducir biocombustibles.

3.5.4 COMERCIO AGRÍCOLA

La agroindustria también ha tenido un fuerte repunteen la región, a partir del incremento en la demandaglobal y los precios internacionales tanto de losagroalimentos como de materias primas para laproducción de biocombustibles.

En la actualidad se estima que la región dispone de unos720 millones de hectáreas agrícolas (CEPAL, 2007b).La producción se está reconfigurando mediante unaexpansión de las oleaginosas, especialmente soja,

Page 39: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

37

I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

mientras que hay un estancamiento en algunos cereales,y reducción de productos tradicionales como el café yel cacao. Asimismo, la comercialización de carnes–vacuna, porcina, aves– también está en aumento, loque genera una demanda adicional de granos pararaciones animales.

El énfasis en las exportaciones agropecuarias encierravarios riesgos por los cambios de usos de suelo destinadopara la producción agrícola. América Latina y el Caribepresentan una de las mayores tasas de deforestación ypérdida de hábitat del mundo. Alrededor del 64% de lapérdida global de bosques ocurrida entre 2000 y 2005se llevó a cabo en esta región (FAO, 2007) (ver secciónde bosques del Capítulo II); Sudamérica sufrió lasmayores pérdidas netas, casi 43 mil km2/año (FAO,2007). Adicionalmente, se suman problemas como lacontaminación de suelos y aguas por uso deagroquímicos, la pérdida de calidad, procesos dedesertificación y el uso intensivo de recursos hídricospara alimentar sistemas de riego.

Al menos diez países: Argentina, Estado Plurinacionalde Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guatemala,Honduras, México, Paraguay y Perú producenagrocombustibles y cuatro países exportan a partir desus propios cultivos, siendo Brasil el mayor exportador.Hay ventas menores desde el Estado Plurinacional deBolivia y Guatemala y recientemente Argentina. Existenprogramas en marcha en casi todos los países y por lotanto la lista de productores se encuentra en continuoaumento (CLAES, 2007).

La expansión de este sector comprende una ampliagama de impactos ambientales y sociales. El usocreciente de cereales, azúcar, semillas oleaginosas yaceites vegetales para producir sustitutos de loscombustibles fósiles como etanol y biodiesel, porejemplo, conlleva a la expansión de la fronteraagropecuaria sobre áreas silvestres –que afecta labiodiversidad al reducir dichas áreas y fragmentar losecosistemas remanentes–, sea por la intensificaciónagrícola en tierras ocupadas por monocultivos de escala,con sus secuelas de contaminación por agroquímicos,alteraciones en el ciclo del agua o pérdida de la calidadde suelos.

Adicionalmente, la producción destinada aagrocombustibles generaría impactos sociales alincrementar de manera directa el precio de alimentosde uso básico –algunos de fuerte arraigo cultural, comoel maíz en Mesoamérica–, mientras lo hace de maneraindirecta en casos como el de los productos ganaderos,al incrementar los precios de los cereales.

3.5.5 LAS INVERSIONES EXTRANJERAS DIRECTAS

En lo que se refiere a la inversión extranjera directa (IED),ésta muestra una tendencia al alza, que se ha venidoregistrando desde 2003 y que alcanzó un nuevo récordhistórico en 2008, a pesar de la crisis financiera yeconómica mundial. La región recibió, excluidos loscentros financieros, 128.301 millones de dólares(Gráfico 1.5).

GRÁFICO 1.5

América Latina y el Caribe: Ingresos netos de inversión extranjera directa por subregión, 1992-2008(En miles de millones de dólares)

140

120

100

80

60

40

20

0

1992

1993

1994

1995

1996

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Sudamérica México y Cuenca del Caribe Total

Fuente: CEPAL): La inversión Extranjera Directo en América Latina y el Caribe, 2008b.a- No se incluyen los principales centros financieros

Comisión Económica para América Latina y el Caribe (

Page 40: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

38

GRÁFICO 1.6

América Latina y el Caribe: Evolución del destino sectorial de la inversión extranjera directa 1999-2003a

(En porcentajes)

100

80

60

40

20

01999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

Recursos naturales Manufactureras Servicios Otros

Fuente: Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) sobre la base de datos oficiales al 15 de mayo de 2009.a) Los datos del Estado Plurinacional de Bolivia representan flujos netos dado que se desconoce en qué sectore fueron lasdesinversiones registradas por al Banco Central

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

A diferencia de la expansión de la inversión extranjeradirecta de la década de los noventa, la actual no estávinculada a procesos de privatización, como sí lo fueen esa década. También sobresale la mayorparticipación de la región en los flujos mundiales deIED, en donde la región creció un 46%, en comparacióncon el incremento mundial del 36%. Más sobresalientecuando esta expansión se dio al tiempo que el mayorsocio comercial e inversionista de la región, EstadosUnidos, sufría una desaceleración de su economía desdefinales de 2006, sobresaltando el dinamismo de losmercados regionales, la diversificación de lasexportaciones, en especial el mercado asiático con una

alta demanda por recursos naturales (CEPAL, 2007a).El sector servicios es el principal receptor de IED en laregión, registrándose un aumento durante el periodo2007 –2008 en inversión en recursos naturales (Gráfico1.6).– El grueso de la inversión en recursos naturales seconcentra en los países de América del Sur; mientrasque la IED en busca de eficiencia para la exportaciónha ayudado a transformar la industria de algunos países,fundamentalmente la de México y la Cuenca del Caribe,mejorando la competitividad internacional de lasmanufacturas.

Si bien la IED en los países de América Latina y el Caribeha tenido un rol importante en la implementación deproyectos de explotación de recursos naturales paraexportación, con consecuencias ambientales, tambiéncontribuye a la transferencia de conocimiento ytecnología, lo que redunda en la capacitación derecursos humanos (CEPAL, 2009b). Esto cobra relevanciaen cuanto al destino sectorial de la IED en lacontribución de los esfuerzos nacionales hacia elestablecimiento de sistemas productivos menoscontaminantes.

La inversión extranjera directa ha desempeñado un rolfundamental en la configuración de los distintos perfilesexportadores. México atrae inversiones hacia sectorescon contenido tecnológico medio y alto, lo cualcontribuye a configurar un patrón exportador máslimpio. En otros casos, como los de Chile, Perú oVenezuela, el impacto de la IED ha contribuido aconsolidar un patrón exportador más contaminante.

Page 41: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

39

I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

3.5.6 COMERCIO Y NEGOCIACIONESAMBIENTALES

En lo referente al tema ambiental en las negociacionescomerciales, los Estados Unidos y la Unión Europea,los principales socios comerciales de la región,incorporan la temática en los acuerdos que firman,aunque de forma diferente. Entre aquellos que se oponena incluir el tema ambiental en los acuerdos comerciales,encontramos dos posiciones: los que opinan que elacuerdo no es suficientemente fuerte o amplio en laprotección, queriendo que el mismo se convierta en unmecanismo de cumplimiento de la normativa ambientalnacional; y los que ven en el tema una barrera noarancelaria, que por lo tanto no debería ser parte delacuerdo. Sin embargo, el incluir el tema ambiental enlos acuerdos comerciales es reconocer que hay unarelación estrecha entre ambos temas.

En el tema de acceso a mercados y ambiente, latendencia actual de los países desarrollados es elestablecimiento de normativa más estricta sobre el temaambiental y de salud; y lo que es más llamativo es quebuena parte de estos requisitos vienen del sector privadode estos países. De acuerdo a las reglas de laOrganización Mundial del Comercio (OMC), los paísesson soberanos para establecer los requisitos que deseena los productos que entran a sus mercados, siempre ycuando no discriminen. Y esto es lo que estásucediendo; si los países de la región desean exportar aesos mercados tienen que cumplir con los requisitosque se exigen. Un ejemplo de ello es EurepGAP, unprograma que establece una serie de requisitos sociales,

laborales y ambientales a los productos que soncomercializados por las cadenas de supermercados queforman parte de este programa. En consecuencia, losproductores y exportadores de la región han tenido queinvertir y adecuar sus procesos productivos y decomercialización a estos nuevos estándares.

Es frecuente encontrar como complemento a losacuerdos comerciales, programas de cooperaciónambiental enfocados a fortalecer las capacidadesinstitucionales ambientales de los países en desarrollo.Estos programas contemplan asistencia técnica,financiamiento e incentivos comerciales para una mejorgestión ambiental.

En el campo de la OMC se han dado algunos pasossustantivos, entre los que se deben mencionar: labúsqueda de una articulación entre las disciplinascomerciales con las obligaciones impuestas por losacuerdos ambientales multilaterales; se inicia unadiscusión sobre bienes y servicios ambientales; se buscadelimitar procedimientos transparentes para invocarmedidas ambientales como restricciones al comerciointernacional de manera que no constituyan barrerasencubiertas; y se desarrolla una fuerte discusión sobreel comercio agropecuario -lo que tiene relevantesimpactos en América Latina-. Diversos aspectos de estadiscusión están en marcha en la actualidad en el marcode la llamada Ronda de Doha de la OMC. Además, enel marco de la OMC, los países de Latinoamérica y elCaribe han desarrollado y profundizado diversosacuerdos de complementación o liberalizacióncomercial.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

40 3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

3.6 CAMBIO CLIMÁTICO COMO FUERZAMOTRIZ DE LOS CAMBIOS AMBIENTALES ENLA REGIÓN

Actualmente se reconoce que el cambio climático esun reto global de gran importancia, que tendrá impactossignificativos y duraderos en el bienestar y el desarrollohumano (IPCC, 2007a; PNUMA, 2007). Hay evidenciaconcluyente acerca de los impactos del cambioclimático, como el aumento de la temperatura promediode la Tierra en aproximadamente 0,74°°C durante el

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GRÁFICO 1.7

América Latina y el Caribe: Frecuencia de eventos hidrometeorológicos, 1970-2007

Fuente: Elaborado por PNUMA, con datos de CEPAL, 2009a.

siglo pasado. Son diversos los fenómenos que indicanel impacto que ha generado el calentamiento globalsobre la región, entre ellos están el incremento en laintensidad y frecuencia de huracanes en el Caribe, loscambios en los patrones de distribución e intensidadde precipitaciones, cambios en los niveles detemperaturas, aumento de sequías (Gráfico 1.7 y Mapa1.1), del nivel del mar en los países con costa en elAtlántico Sur, la reducción de los glaciares en laPatagonia y los Andes, y pérdidas en el manto de hielode la Antártica oeste (PNUMA, 2009, Magrin y otros,2007; PNUMA y SEMARNAT, 2006).

Reducción de glaciares: Cotopaxi, Ecuador : En los últimos 50 años, se ha evidenciado una reducción de los glaciares del Cotopaxi y el Antisana entre un35 y 40 por ciento (equivalente alrededor de 70 km2), en parte a causa del cambio climático. La amenaza de los lahares, el derretimiento de los glaciares y ladisminución de los recursos hídricos convierten la retracción del Glaciar Cotopaxi en un tema de importancia para Ecuador. Las imágenes del satélite Landsatmuestran la reducción del volumen del glaciar (manto blanco) en las laderas del volcán Cotopaxi, en el período 1986-2007. Fuente: PNUMA (2010) Atlas deNuestro Cambiante Ambiente: América Latina y el Caribe.

23 Marzo 1986 05 Febrero 2007

Page 43: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

41

I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

Confianza

Alta Media Baja

América Latina y el Caribe: Síntesis de los patrones de cambio climático proyectados hasta 2010a

MAPA 1.1

Derretimiento de glaciares

Aumento de la temperatura

Aumento de la precipitación

Reducción de la precipitación

Aumento de los extremos de precipitación

Aumento de las rachas de sequía

Disminución de las rachas de sequía

Más ondas de calor

Menos días con heladas

Mayor intensidad de los huracanes

Indicadores de cambio

N

Fuente: Adaptado por J.S. Contreras con datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Economía del Cambio Climático 2009a.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

42

La vulnerabilidad de la región no sólo está dada por elaumento de la frecuencia de eventos climáticos, sinopor la creciente y cada vez mayor exposición de losdiferentes sistemas (poblacional, agrícola, pesca,turismo) a dichas amenazas (Comunidad Andina, 2008).Solamente en el Caribe, más de 26 millones de personashan sido afectadas por desastres naturales entre 1950-2007, registrándose cerca de 22.000 víctimas fatales(PNUMA, 2008). En el plano económico, la CEPAL(2009a) indica que las pérdidas económicas acumuladaspor eventos hidrometeorológicos en América Latina yel Caribe alcanzaron un valor de 81 mil millones dedólares en el periodo 1970-2008.

Paradójicamente, la responsabilidad de la región frentea una de las principales causas del calentamiento globales mínima pues a pesar de su área y cantidad depoblación sólo da cuenta del 11,78%7 de las emisionesde gases de efecto invernadero (GEI). No obstante, elvolumen total de emisiones de CO2 en América Latinay el Caribe ha aumentado sostenidamente desde 1990.Aunque varíen mucho entre países (Gráfico 1.8), las

7 Las emisiones de GEI de ALC fueron 11,78% del total mundial en el año2000, incluyendo las provenientes del cambio del uso del suelo (CEPAL,2009a). La región emite relativamente poco y las emisiones por cambio deuso del suelo corresponden a un porcentaje relativamente alto de lasemisiones regionales de GEI (la participación de ALC en las emisionesglobales anuales de GEI en 2000 se estimó 5,4% omitiendo la fuente usodel suelo).

Promedio ALC 2006: 3.3 toneladas de CO per capita2

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1990 2006 Variación 1990-2006

GRÁFICO 1.8

América Latina y el Caribe: Emisiones de CO per cápita, 1990, 20062

Indicador oficial ODM 7.2.1 (Toneladas métricas de CO per cápita y porcentaje de variación)2

Fuente: Naciones Unidas, 2010. Elaborado por la con estadísticas obtenidas del sitio oficial ODMde la ONU en base a datos compilados por Carbon Dioxide Information Analysis Centre (CDIAC), e incluyen emisiones por la quema de combustibles fósiles y laproducción de cemento. En línea: http://mdgs.un.org/unsd/mdg/Default.aspx. Consulta a septiembre 2009.

Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL)

emisiones de CO2 por habitante entre 1990 y 2006 semantuvieron entre 2,5 y 3,5 toneladas métricas, esto esmuy por debajo de los niveles de los países desarrollados(CEPAL, 2009a).

Datos del Panel Intergubernamental de CambioClimático (IPCC por sus siglas en inglés) estiman parael futuro situaciones aún más preocupantes. En 2007proyectó que los niveles del mar podrían subir entre18cm y 59cm en este siglo, muchos investigadores ahoracreen que el incremento del nivel será incluso más alto–entre 0,8 y 1,5 metros– en parte, como resultado denuevas evaluaciones del potencial de fractura física delos mantos de hielo de Groenlandia y la Antártica(PNUMA, 2009).

El reciente informe sobre los avances en la sostenibilidadambiental del desarrollo en América Latina y el Caribe(Naciones Unidas, 2010) resalta las conclusiones delinforme Stern en cuanto a la necesidad de detener elaumento de la concentración de los gases de efectoinvernadero (GEI), para lograr una estabilización en elrango de 450 y 550 partes por millón (ppm) para finesde siglo, lo que se traduciría en un aumento global dela temperatura de entre 2° y 3°°C. Pasado este umbral,se estaría en márgenes de cambio para todos los sistemasdel planeta que ofrecerían reducidas o nulas alternativasde adaptación.

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

Page 45: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

43

I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

En este sentido se podría argumentar que la actual crisisfinanciera y económica ha tenido un efecto positivo enla reducción de GEI, aunque evidentemente transitorio.Recientes declaraciones de la Agencia Internacional dela Energía (AEI) (EFE, 2009) señalan una reducción deun 3% de dichas emisiones para 2009, el máspronunciado en los últimos 40 años, que conseguiráque el volumen de emisiones en 2020 sea un 5% másbajo de lo que la AIE calculó en 2008.

Magrin y otros (2007) señalan que el calentamientomedio proyectado para Latinoamérica para fin de siglovaría de acuerdo a los diferentes modelos climáticosdel IPCC de 1° a 4° °C, para escenarios que contemplanciertos niveles de mitigación de emisiones, y de 2° a6°°C para escenarios que no lo realizan.

Con un grado de confiabilidad alta, el informe del IPCCestima que bajo el cambio climático futuro existe elriesgo de que los ecosistemas experimenten una pérdidade entre un 20% al 30% de las especies estudiadas enriesgo de extinción y es muy probable que los aumentosen el nivel medio del mar, la variabilidad climática ylos extremos afecten las áreas costeras causandoimpactos adversos sobre áreas costeras bajas,incluyendo destrucción de manglares, los arrecifes decoral (especialmente Mesoamericanos y del Caribe), yafectación en la disponibilidad de agua potable en lacosta del Pacífico de Costa Rica, Ecuador y el estuariodel Río de la Plata, entre otros. Estos impactos se discutenen mayor detalle en los Capítulos II y III del presenteinforme.

Particularmente los Pequeños Estados Insulares enDesarrollo (PEID) del Caribe, son especialmentevulnerables a los efectos del cambio climático, comoel aumento del nivel del mar y los eventos climáticosextremos (IPCC, 2007).

La reacción frente a las consecuencias del cambioclimático se puede convertir subyacentemente en otrafuerza motriz. La presión de los países desarrollados yla concentración de recursos financieros casiexclusivamente en temas climáticos, está alejando losproblemas ambientales tradicionales de la región delfoco principal de las estrategias. Es obvio que ladisminución, frente al cambio climático, de la jerarquíade temas como la deforestación, la pérdida de labiodiversidad, el deterioro del suelo, podría incidirnegativamente en la sostenibilidad ambiental delterritorio latinoamericano y caribeño.

Pero por otra parte, usada inteligentemente, lapreocupación por el cambio climático puede convertirseen una fuerza motriz positiva que contribuya a disminuir

los grados de insostenibilidad ambiental existentes enla región. Ello puede producirse, y se estaríapresentando, en la medida que los recursos destinadosa moderar los efectos del cambio climático se enfoquende manera sistémica, involucrando dentro de lasestrategias de adaptación y mitigación los temas quecorresponden a los problemas ambientales antes citados.

Ejemplo de ello son los proyectos registrados ante elmecanismo para un desarrollo limpio, donde con unamayor participación de Brasil, México y Chile, la regióncuenta con 838 proyectos del Mecanismo de DesarrolloLimpio que representan el 17% del total mundial. Estosgenerarían un 13,5% del total de reducciones deemisiones esperadas para 2012 (UNEP-Risoe, 2010).

Si bien en su mayoría los proyectos se relacionan conreducciones en el sector agrícola (metano de residuosagroindustriales), energías renovables (biomasa) yrellenos sanitarios, se espera que se fortalezcanproyectos que aborden cuestiones relevantes para laregión como fuentes de energía eólica, eficiencia en eluso de combustibles fósiles, conservación de bosquesy suelos, la reforestación y reorganización del transportepúblico urbano.

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

Page 46: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

44

3.7 ENERGÍA

La región posee un importante potencial para lageneración de energías renovables. Con algunasvariaciones entre los países, existe una disponibilidadrelativamente amplia de fuentes hidroeléctricas,geotérmicas, eólicas, biomasa y otras (Gráfico 1.9) quepodrían, en un marco de mayor planificación y conpatrones de consumo energético más eficientes, formaruna plataforma de apoyo al crecimiento económico sincomprometer la sostenibilidad (Estado de la región,2008).

El petróleo continúa siendo la fuente más importantede oferta energética en la región (41,7%), seguido porel gas natural (26%), y la energía proveniente de fuentesrenovables (23%) (Gráfico 1.9). La explotación dehidrocarburos está muy relacionada con el deterioroambiental, al grado que inclusive los miembros de laAIE reconocen que las tendencias actuales en el manejode energía no son sostenibles y que se debe buscar unmejor balance entre la producción de energía y el medioambiente ya que actualmente este sector contribuyefuertemente al cambio climático (IEA, 2008; OmarFarouk, 2007).

Datos recientes muestran que entre el período 1970-2006, la región duplicó su población, cuadruplicandoa su vez el promedio de consumo de energía eléctrica(de 427 a 1.688 kilovatios hora por habitante) (CEPAL,

Petróleo41,7%

Gas natural26,3%

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Nuclear0,8% Leña no sostenible

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Otras no renovables1,0% Geotérmica

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Hidroenergía8,5%

Leña sostenible6,0%

Productos de caña6,6%

Otras renovables1,4%

Renovables23,1%

GRÁFICO 1.9

América Latina y el Caribe: Oferta de energía 2007

Fuente: Naciones Unidas, 2010. Elaborado por la con estadísticas obtenidas del Sistema de InformaciónEconómica Energética (SIEE), de la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE). En línea http://www.olade.org.ec/siee.html. Consulta a octubre 2009.

Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL)

2009c). Durante la última década, el mayor incrementoper cápita en el uso de energía se ha presentado en lospaíses o subregiones con mayor dinamismo económico,como México, el Cono Sur y el Caribe angloparlante.El Gráfico 1.10 muestra la evolución del consumo totalde energía eléctrica. Entre 1980 y 2005, las regionesdel Caribe, Mesoamérica y Sudamérica incrementaronsu consumo en un 165, 236 y 194% respectivamente,por lo que la región como un todo triplicó su consumoenergético durante ese período.

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

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1980 1985 1990 1995 2000 2005

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Caribe

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Sudamérica

Fuente: Elaborado por L. Molina con datos de la , 2007c.Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL)

GRÁFICO 1.10

América Latina y el Caribe: Evolución del consumo de energía eléctrica por subregiones 1980-2005(Consumo de Energía en PJ)

En el año 2008 los países de América Latina y el Caribeconsumieron 749,5 millones de toneladas equivalentesde petróleo, o un 6,6% del total mundial (BP, 2009). Eluso de recursos globales de la región correspondeprincipalmente al consumo de energía hidroeléctrica

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Fuente: Elaborado por con datos de OLADE, Sistema de Información EconómicaEnergética – SIEE. Consulta a Octubre 2009.

el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA)

GRÁFICO 1.11

América Latina y el Caribe: Consumo final de electricidad, 2005-2007 (En GWh)

(22,5% del total mundial), seguido por petróleo (9,2%),gas natural, carbón y energía nuclear (Cuadro 1.3).Brasil, México, Argentina y Venezuela registraron losmayores consumos de energía eléctrica (Gráfico 1.11).

Fuente: Elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) , con datos de British Petroleum “Statistical Review of WorldEnergy. www.bp.com/statisticalreview. Consulta a Octubre 2009.

América Latina y el Caribe: Consumo de energía, 2008(En Millones de toneladas equivalentes de petróleo)

CUADRO 1.3

Petróleo Gas Natural Carbón Nuclear Hidroeléctrica Total

Mundial 3.927,9 2.726,1 3.303,7 619,7 717,5 11.294,9ALyC 360,3 189,1 32,0 7,0 161,1 749,5ALC/Global 9,2% 6,9% 1,0% 1,1% 22,5% 6,6%

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

Page 48: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

46

Del total de la energía eléctrica producida en la región,el 53% proviene de plantas hidroeléctricas, con unacapacidad instalada de 147,3 MW, seguido por turbovapor (23%), y turbo gas (16%). Apenas el 2% de lacapacidad instalada en la región corresponde a energíanuclear, generada en Brasil, México y Argentina(OLADE, 2008). La capacidad instalada para generacióneléctrica continúa creciendo, así en el período 2005-2008, se registró un incremento del 7% (259,2 MW a277,9 MW), principalmente en energías hidroeléctricas(OLADE, 2008).

La producción de energía enfrenta conflictos yproblemas que tienden a agudizarse ante la demandacreciente. Hay países con marcados déficits que tiendena intensificar sus recursos, comprometiendo muchasveces la sostenibilidad ambiental. Los principalesfactores que determinan esta situación son entre otros,la alta dependencia de hidrocarburos importados, quecomo en el caso de Centroamérica representan el 45%del consumo energético total, y los bajos niveles deeficiencia en el consumo energético (Estado de laRegión, 2008).

Para mitigar los efectos negativos del consumo ygestionar la demanda energética creciente, la aplicaciónde programas nacionales y tecnologías para promoverla eficiencia energética constituyen una importanteherramienta. Si bien existe un gran potencial de estetipo de iniciativas registrándose logros significativos enMéxico y Brasil, por lo general en la región, se hanobtenido resultados acotados debido a problemasestructurales en cuanto al alcance de los programas,aplicación de nuevas tecnologías y mecanismosregulatorios.

En los últimos años se produjeron en la región avancesen el rubro de energías renovables, tanto en lo referentea normativa como a los proyectos implementados. Sólo5 países –Argentina, Brasil, Ecuador, Nicaragua y Perú–han decidido otorgar incentivos directos como primaso subsidios o precios fijos promocionales a las energíasrenovables (CEPAL, 2008b,c). No obstante laparticipación de este tipo de fuentes, la oferta total deenergía muestra una tendencia prácticamente plana.

3.8 CIENCIA, TECNOLOGÍA E INNOVACIÓN

El desarrollo de la capacidad e infraestructura paraciencia, tecnología e innovación son claves para elcrecimiento económico y avances en cuanto a laproductividad, competitividad internacional y eldesarrollo social y ambientalmente sostenible de lospaíses. América Latina y el Caribe, cuentan con varios

desafíos en torno a la materia, para los cuales esnecesario abordar una reflexión histórica sobre el papelde la ciencia, la tecnología y la innovación en lasostenibilidad ambiental, a fin de desarrollar estrategiascon foco en una relación más eficiente y sostenible enel aprovechamiento de los recursos naturales.

La inversión en investigación y desarrollo (I+D) en laregión ha crecido, aunque es aún insuficiente enrelación a la necesidad. Existen marcadas diferenciasentre los países de la región, y la brecha de ésta con elresto de las regiones es creciente. Para el año 2006 lainversión fue de alrededor de 18 mil millones de dólares,un 60% más que en 1997, constituyendo cerca del 2%de la inversión total de I+D en el mundo (Ricyt, 2008).En América Latina y el Caribe el país con un crecimientomás decidido fue Brasil que representa más de la mitadde la inversión latinoamericana y caribeña en I+D(Gráfico 1.12).

Según datos de 2006 de la Red Internacional de Cienciay Tecnología (Ricyt) el número de recursos humanosdedicados a la I+D en la región es de 235 milinvestigadores y tecnólogos. En general, se observan faltade formación de personal calificado. Los insuficientesrecursos en el sector investigación y desarrollo,determinan una escasa demanda de científicos ytécnicos, lo cual no permite fomentar la labor científica.

La distribución geográfica de los recursos humanos poneen evidencia la heterogeneidad de la región e indica

GRÁFICO 1.12

América Latina y el Caribe: Porcentaje de inversiónen investigación y desarrollo (I+D) 2006.

Argentina11,6%

Brasil61,6%

Chile3,9%

México13,1%

Resto ALC9,8%

Fuente: Red de Indicadores de Ciencia y Tecnología – Iberoamericanae Interamericana. El estado de la ciencia. 2008

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

Page 49: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

47

I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

una concentración en países con mayores recursos.Chile, Brasil, México y Argentina concentran el 90%de esta población altamente calificada, conparticipación del 61%, 50,4%, 21%, 14,9%,respectivamente. Algunos pequeños países, como Cuba,tienen un número alto de investigadores y tecnólogoscon relación a su población (Ricyt, 2008).

El insuficiente desarrollo en ciencia marginóhistóricamente la producción local de conocimientosdando paso a la entrada indiscriminada de conocimientotecnológico de origen externo. Esta circunstanciaacentuó la heterogeneidad estructural en la gestión delconocimiento, al concentrar su producción enuniversidades e instituciones públicas poco vinculadasal sector productivo, en contraste con lo que ocurre enel mundo desarrollado.

Aunque hubo un incremento en la inversión en I+D delas empresas en algunos países, por ejemplo, Brasil,México y Uruguay, en la región «un 83,6% de la gestióndel conocimiento se realiza en universidades ylaboratorios dependientes del gobierno», mientras enlos países de la OCDE «las universidades y lasdependencias estatales son responsables sólo por el31,7% de las actividades y el 68,3% restante se efectúaen el seno de empresas productivas»8.

La producción científica se duplicó entre 1997 y 2006en cuanto a número de publicaciones científicas. Elanálisis de la distribución por áreas del saber, revelanuna especialización relativa en las ciencias agrícolas.Existe una menor contribución del sector I+D aldesarrollo tecnológico y las innovaciones de aplicaciónindustrial, lo que se evidencia por el bajo número depatentes otorgadas en relación a países desarrollados.Ello se debe a una combinación de factores, entre ellosla menor eficiencia y la orientación a adaptar e importartecnología.

En particular, vinculado con la sostenibilidad ambiental,las estrategias de desarrollo tecnológico han privilegiadola introducción de tecnologías de punta como nuevasbiotecnologías y las nanotecnologías. Además de estas

prioridades tecnológicas, los organismos ambientalesde la mayoría de los países de la región también hanprivilegiado las tecnologías ligadas al tratamiento delos residuos urbanos, industriales y mineros, dejando aun lado tecnologías para otros sectores económicos.

En el decenio de los ochenta y los noventa, los procesosde transnacionalización, y posteriormente el procesode globalización, influyeron para que se cuestione muypoco el modelo de generación, adopción y difusióntecnológica, y en no pocas ocasiones, se plantee que lasostenibilidad ambiental del desarrollo sólo se lograríavía transferencia tecnológica. Fue tal la penetración deestos procesos en la región latinoamericana en esosdecenios que prácticamente no hubo debates sobre elmodelo de desarrollo tecnológico9.

La tendencia del desarrollo de las ciencias en la regiónestá signada por las demandas de conocimientocientífico generadas a partir del desarrollo tecnológico.De allí se deriva también la asignación de recursos parael desarrollo científico. En la gran mayoría de los paísesse hace ciencia siempre y cuando sea necesaria para laadopción o adaptación de una determinada tecnología.En tal sentido, ello conlleva irremediablemente a errorestanto en el uso de los recursos financieros como en lagestión ambiental.

Aún queda mucho camino para tener estrategiascientíficas nacionales de abordaje de la problemática

8 Prioridades en ciencia y tecnología en América Latina y el Caribe. Lima,Perú, Noviembre 2004, p. 4-8. www.rau.edu.ay/universidad/consultiva/rectorado/prioridades.doc

9 En ese marco general y vista en perspectiva, adquiere especial relevanciala iniciativa adoptada por la CEPAL a partir de 2000, a través de su Divisiónde Desarrollo Sostenible y Asentamientos Humanos, de abordar la temáticade la ciencia y la tecnología para la sostenibilidad ambiental para fomentary enriquecer el debate en los diversos países de la región. En este mismosentido, en 2006 la CEPAL divulgó el documento «Estilos de desarrollo ymedio ambiente en América Latina, un cuarto de siglo después», de NicoloGligo, que también resalta el tema en lo que hace al proceso de«modernización del campo».

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ambiental a partir del conocimiento científico delterritorio de cada país, del comportamiento de susecosistemas, incluyendo particularmente labiodiversidad. Asimismo, la ciencia y tecnología parael desarrollo latinoamericano se refieren a unconocimiento que debe ser generado endógenamenteporque su referente está íntimamente conectado conlas especificidades ecológicas de la región y no puedeser sustituido con un conocimiento que la región puedaobtener ya elaborado en otros países (CEPAL 2003).

Las estrategias ambientales de desarrollo tecnológicode algunos países, se centraron en la introducción detecnologías descontaminantes, principalmente en laindustria y en la minería. Pero poco se discute sobre lospaquetes tecnológicos que alteran la estructura naturalde los ecosistemas en pos del desarrollo agrícola, cuyocosto ambiental ha sido alto en la región.

La estructura de los gastos en I+D del sector agrícola,financiado en su mayoría por el sector público, observauna concentración en tecnología y en menor medidaen explotación de la tierra y control y protección delmedio ambiente. Sobre este último ítem la I+D se centraen aspectos tales como identificación y análisis defuentes contaminantes, dispersión en el ambiente,efectos en el hombre y las especies y el desarrollo deinstalaciones para medición de contaminación.

Se evidencia una clara importancia de los gastosrelacionados con control y protección del medioambiente en Ecuador, Cuba, México, Panamá yGuatemala. En Chile y Paraguay, en cambio, son losgastos relacionados con la explotación de la tierra losque compiten más directamente con la inversión entecnología agrícola (CEPAL, 2008).

Los principales desafíos de estrategias y políticascientíficas para la sostenibilidad ambiental de los paísesde América Latina y el Caribe, radican en nuevas y másprofundas investigaciones sobre el patrimonio natural,en términos del pleno conocimiento de los atributos ycomportamientos de los ecosistemas. Hay grandeslagunas de conocimiento científico que hay que rellenar.Paralelamente, es necesario investigar sobre modelosde desarrollo alternativos, que promuevan una nuevaforma de utilización de los recursos naturales quefavorezca una relación más armónica de la sociedadcon su entorno físico.

Otra necesidad radica en el desarrollo de mecanismospara estimular la investigación local, lo que permitiráimpulsar las regiones de cada país reconociendo laidentidad de cada localidad en función de suscondiciones específicas. La estrategia científica de largoalcance debe ser la base de la creación de un modelode generación, difusión y adopción tecnológica. Esosignifica estimular la investigación de los recursosnaturales locales e incorporar el conocimientotradicional de ciencias empíricas de las culturas propiasde la región.

En los últimos años, los países de América Latina y elCaribe han progresado en el uso de las tecnologías dela información y comunicación (TICs) en diversas áreas.El grado de avance varía en la región dependiendo delacceso a las mismas, lo que manifiesta una brecha digitalentre los países de más y menos desarrollo, como asítambién al interior de los mismos.

El acceso a estas herramientas favorece la administracióny gestión del medio ambiente debido a que permitenmejorar los procesos de generación, manejo, integracióne intercambio de la información, como base para apoyarel proceso de toma de decisiones en sus diferentesesferas.

En este sentido, las TICs ofrecen grandes posibilidadespara el conocimiento de los ecosistemas, recursosnaturales, seguimiento de cambios superficiales,ordenamiento ambiental del territorio, prevención ygestión del riesgo por desastres, planificación parainfraestructura de servicios.

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

Los desastres naturales acontecidos en la región en losúltimos años, han promovido la conformación deagencias que haciendo uso de Infraestructuras de datosespaciales (IDE) (ver Capítulo V, sección 4), einnovaciones en tecnologías de percepción remota,distribuyen datos a nivel regional, nacional y local conun claro enfoque a prevenir o mitigar el efecto de lanaturaleza, el hombre y los cambios globales. Sedestacan los países de Centroamérica a través delProyecto Centroamericano de Información Geográfica(PROCIG), del Programa para la Reducción de laVulnerabilidad y la Degradación Ambiental (PREVDA),y el proyecto de Evaluación Probabilista de Riesgos paraAmérica Central (CAPRA, por sus siglas en inglés); y losde la región andina a través del Proyecto de Prevenciónde Desastres en la Comunidad Andina (PREDECAN),entre otros. Iniciativas similares requieren mejorar elacceso a las TICs, como así también, contar conprofesionales y técnicos especializados.

Asimismo, en la medida que el sector público accedeal uso de TICs, mejora el suministro de información y elservicio, contribuyendo, en el caso del medio ambientea un aumento en la producción y al mejor acceso a lainformación pública ambiental, como así también,mayor participación de los ciudadanos en el control dela implementación de políticas públicas.

3.9 GOBERNABILIDAD

3.9.1 CAPACIDADES DEL ESTADO EN LASTENDENCIAS TERRITORIALES

En función del actual patrón de uso de los recursosnaturales, el Estado-nación se «desterritorializa» encuanto a sus limitaciones a regular el uso de su territorio,observándose un deterioro en la capacidad de imponerjusticia, controlar los impactos ambientales o manejarla extracción productiva en vastas zonas10.

Por otro lado, el Estado logra mantener y aplicar algunasregulaciones que en muchos casos están orientadas apermitir la extracción de los recursos naturales,particularmente de aquellos orientados a la exportación.Ejemplos de estas regulaciones son la normativa deprotección de la entrada de capitales, los derechos depropiedad intelectual, y los procedimientos globales

para la resolución de controversias. Estas regulacionesalrededor del flujo de capitales son parte de la nuevaglobalización, la cual se caracteriza también por elprotagonismo de las empresas transnacionales en losemprendimientos de extracción de recursos naturales,especialmente de minerales e hidrocarburos.

La desterritorialización termina generando un conjuntode nichos estrechamente relacionados con cadenasproductivas internacionales. Estos son «nodos»conectados por flujos de personas, materia, capital einformación, sostenidos en una red de «flujos» derecursos naturales y capital, en muchos casosconectados directamente a la globalización. Los casosmás claros son las inversiones extranjeras en sectoresextractivos, el emplazamiento de sus proyectos, y loscanales para exportar los productos que extraen. Bajolas condiciones de la globalización actual existenlimitaciones formales para profundizar la gestiónambiental en esas estructuras, ya que pueden serresistidas invocando obstáculos al libre comercio o allibre flujo de capitales. Pero además existen resistenciasinformales, en tanto los países (e incluso los municipios)pueden competir entre ellos reduciendo sus estándaressociales y ambientales, y entonces se genera unacompetencia ilegítima por el temor de perder posiblesinversiones.

10 Diversos estudios han alertado sobre el debilitamiento del Estado-naciónen la globalización actual (por ejemplo, el clásico de Ohmae, 1997; verademás Strange, 1995; Weiss, 1997 y Beck, 1998). Desde el punto de vistade las relaciones entre ambiente y desarrollo, el proceso es más complejoya que simultáneamente tiene lugar un debilitamiento junto alfortalecimiento de un cierto tipo de intervención estatal (Gudynas, 2005).

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

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Esta reflexión global sobre la presencia del Estado enlas tendencias territoriales en América Latina y el Caribe,presenta su expresión emblemática más relevante enlos diversos procesos de integración regional. Si bienalgunos son de larga data, todos ellos han sufridomodificaciones –e incluso relanzamientos– en losúltimos años. Para algunos autores, esta tendenciasignifica un «nuevo regionalismo».

Estos procesos se están desarrollando en un contextode considerable apertura comercial y liberalización delas reglas de comercio, conjuntamente con una seriede reformas de mercado que se realizan en distintossectores (aunque hay diferencias importantes entre lospaíses). Asimismo, todos los casos están ajustados a lasreglas y disciplinas de la Organización Mundial delComercio (OMC).

Los procesos de integración territorial se pueden ordenarentre dos extremos: acuerdos restringidos al librecomercio, y que por lo tanto contienen componentesde articulación productiva y discusión política másacotados, es el caso del Tratado de Libre Comercio deAmérica del Norte (TLCAN), y procesos de integraciónde amplio espectro que incluyen además de acuerdoscomerciales, convenios en temas sociales, culturales yambientales, como es el caso del MERCOSUR.

Todos estos procesos de una manera u otra abordan latemática ambiental. Se observan distintasinstitucionalidades para gestionar esos aspectos, que vandesde una comisión especializada en paralelo en elTLCAN, a grupos de negociación dentro de la propiaestructura del acuerdo en el caso del MERCOSUR. Sehan instalado consejos o comisiones ministeriales,donde se analizan los aspectos ambientales en los

procesos de integración. A modo de ejemplo, elMERCOSUR cuenta con un Acuerdo Marco en MedioAmbiente (aprobado en 2001), mientras que laComunidad Andina (CAN) elaboró una estrategiaregional de biodiversidad para los países del trópicoandino aprobada en 2002 (GTZ Fundeco IE, 2001).De igual forma, el Tratado de Libre Comercio entreRepública Dominicana, Centroamérica y EstadosUnidos (DR-CAFTA, por sus siglas en inglés) cuenta conun Acuerdo de Cooperación Ambiental.

Asimismo, se han establecido importantes proyectos aescala regional para crear una infraestructura detransporte de los recursos naturales de manera de llegara puertos de embarque que permitan su exportaciónhacia otros continentes. El caso más claro es la Iniciativaen Infraestructura Regional de Suramérica (IIRSA), queestablece esencialmente una serie de corredores detransporte que son transversales, asegurando unaconectividad desde las zonas sobre el Océano Atlánticocon las del Océano Pacífico, y una apertura de las áreascentrales del continente.

En efecto, algunas zonas que presentaban limitacionesen sus conexiones, tales como el centro-oesteAmazónico, y los llanos amazónicos sobre las laderasandinas en zonas de Perú y el Estado Plurinacional deBolivia en particular, comienzan a ser dotadas decarreteras y puentes. Si bien estas obras puedensolucionar problemas locales tales como el acceso acentros de salud o educación, o promover nuevasopciones económicas, también es cierto que «abren»nuevas zonas a la extracción intensiva de recursos. Porejemplo, la iniciativa IIRSA puede intensificar losfactores que ponen en riesgo la supervivencia de laAmazonía, entre éstos el cambio climático, la

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

Principales carreteras en la Amazonía

Fuente: Producción original de GEO Amazonía, con la colaboración técnica de UNEP/GRID - Sioux Falls y la Universidad de Buenos Aires, con datos de el EstadoPlurinacional de Bolivia: Conservación International e INE; Brasil: IBGE; Colombia: CIAT y DANE; Ecuador: INEC; Guyana: EPA; Perú: INEI; Suriname: OficinaGeneral de Estadística; y Venezuela: Instituto Nacional de Estadística.

MAPA 1.2

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

explotación maderera y la tala de bosques para el cultivode la tierra. Esto cobra relevancia si se considera que lared vial se multiplicó más de 9 veces, en casi 30 años(PNUMA-OTCA, 2009) (Mapa 1.2).

Por lo tanto, se observa la creciente llegada de actoressociales que generan nuevas actividades productivas,la mayor parte de ellas asociadas a sectoresexportadores. Estas no siempre cuentan con lainstitucionalidad ni con recursos para una adecuadagestión ambiental, como así tampoco, con mecanismosde participación ciudadana para un manejo adecuadode los riesgos o los impactos.

3.9.2 ASPECTOS POLÍTICOS INSTITUCIONALES

En las últimas tres décadas, muchos de los Estados de laregión (18 países en Latinoamérica y 14 en el Caribe)incorporaron previsiones ambientales en las reformas o

sanción de sus nuevas constituciones nacionales, quefavorecieron la sanción de leyes generales «marco» delas cuales derivaron luego, normas ambientales másespecíficas en casi todos los países de la región. Ecuador,en la búsqueda de generar cambios estructurales quebrinden un marco institucional más fuerte en el temaambiental, promovió una reforma constitucional cuyocontenido reconoce por primera vez en América Latinay el Caribe a la naturaleza como sujeto de derecho, asícomo los derechos de los recursos naturales a surestauración, poniéndolos en el centro de las decisionespolíticas y marcando la pauta en materia de legislaciónambiental (Gudynas, 2008).

Se dieron procesos de adecuación de la legislaciónadministrativa sectorial (como los reglamentos y lasnormas técnicas) y común, así como se modificó lalegislación penal (en especial en cuanto a lapenalización de los delitos contra el medio ambiente),civil (relativo, entre otros, al daño ambiental) y procesal

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(referido a diversos aspectos adjetivos, como latitularidad en la defensa del interés difuso ambiental, elcontrato de ajuste normativo ambiental, la inversión dela carga de la prueba ambiental, entre otros).

En general, en la región se produjo una legislación enla cual se desarrollaron diversos tópicos indispensablespara la construcción de la malla legal ambiental, talescomo la política ambiental y los instrumentos generalespara su aplicación e implementación; la planificaciónambiental, el ordenamiento del territorio, la evaluacióndel impacto ambiental y la gestión ambiental y susinstrumentos, los regímenes de emergencia ambiental,los instrumentos específicos para el manejo sosteniblede los ecosistemas, de la diversidad y seguridadbiológica, de la vida silvestre, de los recursos forestales,de los suelos, aguas y atmósfera, y de los ecosistemasmarinos. Por tanto, una de las limitaciones en cuanto ala capacidad de gestión de las instituciones ambientalesen la región, no se debe tanto a la carencia de leyes,sino a su debilidad política para hacerlas cumplir.

En la práctica, amplios sectores ciudadanos ven el medioambiente como una temática separada de lasupervivencia y la calidad de vida. Con ello, losproblemas ambientales sólo se tornan objeto de debatepolítico en situaciones puntuales, como aquéllas en quela contaminación del aire o del agua amenazan la saludhumana, lo cual a su vez contribuye a mantener abiertala brecha entre la política económica y la ambiental, ya reforzar el peso de las políticas ambientales implícitasen las políticas sectoriales11.

Esto es especialmente válido con relación a los sectoressilvoagropecuario, minero, industrial, energético,pesquero y urbano, que delinean sus políticas dedesarrollo –que suelen conllevar políticas ambientalesimplícitas de signo negativo–, entendiendo como taleslas que subordinan la prevención o la mitigación de losimpactos a la preservación de elevados parámetros deproductividad y ganancia.

11 Los resultados de la aplicación de las políticas ambientales no siempre hansido lo esperado. Aún cuando la mayoría de los países cuentan hoy conuna serie de instrumentos y regulaciones ambientales, no ha sido posibledetener y revertir el proceso de deterioro ambiental. Una de las causas deeste trade-off es lo que Nicolo Gligo (1995) diferenció en Políticasambientales explícitas e implícitas. Las políticas ambientales explícitas serefieren a los marcos legales, institucionales y a los instrumentos existentes.Es la respuesta de política frente al problema del medio ambiente. La mayoríade las veces, su eficacia es mínima ya que está sujeta a la mayor o menorvoluntad política de aplicarlas. Por otro lado, las políticas ambientalesimplícitas son aquéllas que resultan de la aplicación de otras políticas, lamayoría de las veces de carácter económico, y que son las que primanfinalmente (rentabilidad de corto plazo), y que además se caracterizan pormostrar como consecuencia un signo negativo en cuanto a su impactoambiental.

En este contexto, el desarrollo de las políticas públicasambientales ha resultado débil frente a la agenda de laglobalización económica, financiera, comercial ytecnológica. El medio ambiente sigue sin recibir laprioridad que merece, lo que se refleja en la ejecuciónpresupuestaria relacionada con la protección del medioambiente. El gasto público en ambiente respecto delPIB para el año 2005 representó un 0,3% del PIB enMéxico y un 0,06% en el Brasil. En cambio, en el casode Argentina, Belice, Chile, Colombia y el Uruguay, laparticipación fue sustancialmente menor y alcanzó entreun 0,01% y un 0,05% del PIB. A modo de referencia,en los países de la OCDE este representa entre el 1% yel 2% del PIB (Naciones Unidas, 2010).

La institucionalidad ambiental tiende, así, a expresaruna correlación de fuerzas e influencia entre las políticaseconómica y ambiental. Expresión de ello es latendencia a sectorizar la temática ambiental, aislándolaen instituciones con mandatos muy específicos, quegeneran políticas ambientales explícitas, confeccionannormas y establecen sistemas de evaluación. Por otraparte, la expresión espacial de la institucionalidadambiental en la región depende del tipo de organizaciónpolítica. Los Estados de régimen federal, por ejemplo,suelen tener instituciones regionales con ciertos gradosde autonomía y con un mayor poder que los países deEstado unitario.

Un aspecto positivo en política ambiental es el augereciente de las certificaciones, que muestran unatendencia creciente en la región desde 2001,alcanzando en 2008, 5470 empresas certificadas ISO14001 (CEPAL, 2009b) principalmente en el campoindustrial y minero. Asimismo, en cuanto a los aspectosrelativos a la implementación de producción más limpia,en la región, ha crecido el número de iniciativas einstituciones que impulsan la inclusión de este tipo de

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

tecnología. En este sentido, 12 países cuentan concentros nacionales para abordar la temática. Tambiénes relevante destacar el avance, en cuanto a la gestiónde residuos peligrosos e industriales. Merecen destacarseesfuerzos en la eliminación de productos químicos ydesechos peligrosos a partir del endoso por parte de 27países de la región de los convenios de Basilea,Rotterdam y Estocolmo y de la creación de 7 centrospara el fortalecimiento de la capacidad y transferenciade tecnología en estos temas.

3.9.3 LA APLICACIÓN Y CUMPLIMIENTO DE LANORMATIVA AMBIENTAL EN AMÉRICA LATINA Y ELCARIBE

La aplicación y el cumplimiento de las normasambientales supone una actitud activa por parte delEstado, en la que debe reafirmar severamente supresencia, impulsando el cumplimiento de las leyes yhaciendo eficaz el orden jurídico, basándose para elloen la legitimidad, efectividad y ejecución de las normassancionadas.

La región continúa presentando desafíos en la aplicacióny cumplimiento de la normatividad ambiental, lo queofrece oportunidades para:

i. Mejorar la distribución de competencias a nivelgubernamental. Por ejemplo, antes de la creacióndel Ministerio del Ambiente peruano, las funcionesambientales estaban distribuidas en diversasentidades públicas (CONAM, DIGESA, INRENA,SENAMHI), que frecuentemente terminaban porduplicar funciones, entorpeciéndose unas a otras ysin asumir sus responsabilidades en la espera quelas demás sí lo hicieran, todo lo cual volvíaineficiente el rol del Estado peruano en este ámbito.La creación del Ministerio del Ambiente en el Perúofrece una oportunidad para superar este defecto,al concentrarse todas las funciones en una solaentidad.

ii. Fortalecer y consolidar los mecanismos departicipación ciudadana. La participación ciudadanaes uno de los elementos cruciales para hacerfuncionar el aparato del sistema ambiental. Sinembargo, se advierte en muchos casos que laparticipación ciudadana no pasa de ser un merorequisito a cumplir por el actor económico (públicoo privado) antes del emprendimiento de unaactividad con impactos ambientales, generandoentre la población reacciones adversas que muchasveces generan conflictos sociales que llegan a

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

comprometer las bases de la sociedad. En esascondiciones, continúan entonces los desafíos paraque la participación sea un factor incidente en ellogro de normas ambientales eficientes y efectivas,que es en suma lo que debería esperarse comocorolario de dicho proceso.

iii. Mejorar la transparencia ambiental. Si bien muchospaíses de la región han sancionado las normas quepermiten el acceso a la información públicaambiental, siguen dándose situaciones en las queconseguir datos concretos es prácticamenteimposible, por el carácter de «secreto» con el quesuelen ser revestidos, obstruyendo así el legítimoejercicio de este derecho.

iv. Mayor consistencia de las políticas ambientales yeconómicas. Casi todos los organismos ambientalesde la región tienen entre sus principales funcionescontrolar diversos aspectos relacionados con lapreservación y promoción del medio ambiente. Sinembargo, cuando estas funciones se someten aprioridades económicas o cuando no se internalizanlos costos-beneficios ambientales en las decisioneseconómicas, se evidencian y agudizan una serie decontradicciones que actúan en contra de laconsistencia de las políticas de desarrollo. El casomás frecuente se presenta en la aplicación de lossistemas de «evaluación de impacto ambiental»: losestudios técnicos, generados o solicitados por losorganismos ambientales no son vinculantes frente alas decisiones sobre los proyectos de desarrollo, enlos que suelen prevalecer los criterios políticos-económicos antes que los ambientales, lo cual hacede por sí débiles a los sistemas de fiscalización,limitando la eficacia de muchas de las leyes,reglamentos y normas. Otro caso se aprecia en «losplanes de ordenamiento territorial» que no siempreson plenamente considerados –en los países que

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disponen de ellos– en el desarrollo deemprendimientos y proyectos de inversión,impidiendo una correcta gestión ambiental, debidonuevamente, a factores políticos y económicos.

v. Articular y consolidar la educación legal–ambiental.La falta de eficacia en la aplicación y cumplimientode la normatividad ambiental deviene, entre otros,del hecho que, en principio, ni las autoridades ni lasociedad tienen pleno conocimiento de ella,sucediendo que la aplicación de una determinadanorma a una situación particular no afecta–prácticamente– a quien es sancionado, ni menos ala sociedad por la intrascendencia de la aplicación.Así, la autoridad pierde una valiosa posibilidad dedemostrar el ejercicio de la política ambiental a lacomunidad, toda vez que las sanciones judiciales yadministrativas suelen no corresponder a la magnitudde la infracción cometida.

vi. Avances en la credibilidad institucional. La sociedadvincula el valor de las leyes con el de las institucionesllamadas a hacerlas cumplir. Si bien la legislaciónambiental en América Latina y el Caribe encuentrasu origen en el desarrollo legislativo de las últimas

décadas del siglo XX y, por tanto, su andamiaje legales más bien nuevo y las instituciones que lo aplicanse encuentran en periodo de consolidación, serequiere que el aparato estatal y la misma sociedadatiendan más efectivamente al cumplimiento de lasnormas ambientales, a fin de facilitar el cambio enel sistema.

vii. Avances en el conocimiento científico y de lasposibilidades tecnológicas. Una de las característicasimportantes en el proceso de formulación de lanormativa ambiental es contar con bases sólidas yveraces de conocimientos científicos respecto a larealidad que se pretende regular (estudios dediagnóstico y monitoreo de las condicionesambientales de base, como las características de losdistintos cuerpos receptores –aire, agua y suelos–,las sustancias utilizadas y su injerencia en la saludhumana y en los ecosistemas), lo cual se requierefortalecer en la región. Es necesario trabajar enestudios de diagnóstico, monitoreo y riesgo de lospaíses, que consideren la realidad regional, dadaslas peculiaridades de cada país (característicaspoblacionales, epidemiológicas, de los ecosistemas,desarrollo social, etc.).

Permanece como un desafío regional el acceso a lastecnologías para cumplir y hacer cumplir la normativaambiental, lo cual dificulta el cumplimiento de lasnormas que han sido sancionadas sin tener en cuentaesta realidad. Otros desafíos radican en elfortalecimiento continuo de las instituciones a cargo delcumplimiento de leyes y políticas ambientales, que enmuchas instancias no cuentan con los recursosnecesarios para su labor, y en todo caso, su perfil esmuy inferior al de otros ministerios o institucionessimilares (PNUMA, 2007).

Las organizaciones de la sociedad civil tienen un papelmuy relevante en la denuncia de los problemasambientales y también en su solución. Por ejemplo, laparticipación local en la gestión de los recursos naturalesha sido asociada con el establecimiento de sistemas degobernanza y arreglos institucionales que favorecen eluso sostenido de los recursos, al mismo tiempo queaseguran los medios de vida de poblaciones en zonasrurales (Pacheco y otros, 2009). Los estudios sobre lagestión y acción colectiva de los recursos forestales, porejemplo, se han enfocado en el papel de organizacionescomunitarias, campesinas e indígenas en los procesosde movilización social (Cronkleton y otros, 2008),generando evidencias sobre como la participación deestos grupos favorece la implementación de mecanismosde conservación en ecosistemas forestales (Chhatre yAgrawal, 2008).

3. FUERZAS MOTRICES Y PRESIONES

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I. MODALIDADES DE DESARROLLO PREDOMINANTES

Los problemas ambientales de la región han sidoabordados de diferentes maneras, y aunque hay muchostemas que demandan acciones urgentes, no se debensoslayar los avances logrados. Los países de esta regióncuentan con estructuras gubernamentales enfocadasespecíficamente a la atención de los problemasambientales. Han, además, creado sistemas de áreasnaturales protegidas y mecanismos de conservación insitu, así como instrumentos económicos parasalvaguardar su diversidad. La participación de AméricaLatina y el Caribe en organizaciones y esfuerzosinternacionales, como la Convención sobre laBiodiversidad, la Convención Ramsar, el Protocolo deMontreal, el Protocolo de Kioto y el Protocolo deCartagena, entre otros, es extremadamente importante.

Las organizaciones civiles tienen un papel muy relevanteen la denuncia de los problemas ambientales y tambiénen su solución. Si bien las permanentes dificultadeseconómicas de la región reducen la posibilidad departicipación de mucha gente, las organizacionesciudadanas han jugado un papel preponderante en el

4. REFLEXIONES

terreno ambiental, junto a las instituciones de educaciónsuperior. Hoy, su voz es parte innegable eimprescindible en el terreno ambiental.

América Latina y el Caribe enfrentan el reto de lograrun desarrollo económico más justo e igualitario sinmermar su capital natural, requieren transitarefectivamente hacia el desarrollo sustentable. No bastacon que a nivel internacional se reconozca que no haycontradicción entre un medio ambiente sano y eldesarrollo de bienes materiales, es necesario que lapreservación del capital natural y del capital social seexpresen claramente en las políticas públicas, tanto enlas orientadas explícita y específicamente a losproblemas ambientales como en las que abarcan otrosámbitos. Mientras las políticas ambientales no seantransversales, seguirán persistiendo lascontradicciones entre las políticasproductivas y comerciales, y lasambientales, con los altos costos socialesque esto ha demostrado tener a lo largo delos años.

4. REFLEXIONES FINALES

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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MENSAJES CLAVE

Las desigualdades sociales de América Latina y elCaribe se expresan en, y son causa del deterioroambiental que se extiende a lo largo de la región.

En ALC se encuentran 6 de los 17 paísesmegadiversos del mundo, en los que hay un grannúmero de endemismos. Esta imponente diversidadse está extinguiendo de la mano de la deforestacióny la destrucción de hábitats que albergan una grancantidad de especies en diferentes niveles de riesgo.

La diversidad específica y ecosistémica es muy alta,y también lo es la diversidad genética. En la regiónse encuentran varios centros de domesticación ydiversificación de especies (México, Perú, Colombia,Brasil), que han contribuido a la agro-biodiversidadregional y mundial de forma muy relevante. Lasprácticas agrícolas tradicionales aún usadas porgrupos campesinos e indígenas están históricamenteorientadas hacia la diversificación genética, adiferencia de las prácticas industrializadas. El usode organismos genéticamente modificados deberegularse con esta consideración como prioritaria,pues su uso indiscriminado conlleva el riesgo deque esta gran diversidad, que representa unreservorio de germoplasma de las especies másimportantes para la alimentación y la subsistenciahumanas, se pierda en aras de la homogeneizaciónde los genotipos empleados en su cultivo. Muchasde las prácticas agrícolas industrializadas estáncentradas en el uso de una baja diversidad genética,pero en particular el uso de los organismosgenéticamente modificados, que pueden fijarse enlos agro-ecosistemas e incluso en los ancestrossilvestres aún existentes, es una nueva amenaza queno debe minimizarse.

El cambio de uso de suelo en esta región es muyintenso y generalmente se da con poca o nulaplaneación. La fragmentación, alteración ydestrucción total de ecosistemas en aras de laagricultura, la ganadería y los asentamientoshumanos limitan ya a los servicios ambientalesfundamentales. Este proceso es constante y muchasveces dramático, pues tiene costos sociales elevadosque son particularmente altos para los sectores másmarginados y desprotegidos de las sociedades, cuyoacceso a recursos básicos, como por ejemplo elagua, se ve cada vez más limitado.

Aunque hay importantes variantes a nivel regionaly nacional, América Latina y El Caribe presentan,una marcada tendencia a la urbanización; el 79%de la población habita en ciudades. El desarrollourbano en la región es muy heterogéneo, pero lamayoría de las ciudades carecen de planificación yse expanden a expensas de ecosistemas naturalesque desaparecen por completo, causando así fuertesimpactos ambientales en zonas incluso muydistantes que abastecen a los centros urbanos deproductos básicos (alimento, energía, agua). EnAmérica Latina y El Caribe se encuentran cuatro delas seis megaciudades que hay en el continenteamericano (Ciudad de México, Buenos Aires, Ríode Janeiro y Sao Paulo), las cuales concentran el13% de la población urbana que habita en ciudadesde más de un millón de habitantes en la región. Sinembargo, las tasas más altas de crecimiento urbanoya no se concentran únicamente en lasmegaciudades; muchas ciudades intermedias tienenahora tasas de crecimiento más altas que lasciudades grandes, lo que ofrece la oportunidad dellevarlas a un crecimiento ordenado y sostenible.

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Los bosques tropicales (secos y húmedos) ytemplados de la región han sido utilizados desdehace miles de años, pero las tasas de deforestaciónde la región de los últimos 50 años están entre lasmás altas del mundo. La transformación de suelosforestales en ganaderos y agrícolas y, másrecientemente, en zonas destinadas a la producciónde biocombustibles, así como, en menor medida,la expansión urbana, han comprometido laintegridad ecológica de los ecosistemas forestales,han limitado su capacidad de proveer serviciosambientales, los han fragmentado drásticamente yen muchas ocasiones los han llevado a desaparecerpor completo.

Los mares y las costas de América Latina y el Caribeson fuente de muchas riquezas, pero se encuentranbajo el asedio de las actividades pesqueras, que através de la sobreexplotación han llevado a muchaspoblaciones a desaparecer; de las actividadesturísticas que, al desarrollarse sin consideracionesambientales, han destruido grandes extensiones deecosistemas costeros como manglares y dunas ylagunas costeras, además de verter aguas negras yresiduos sólidos directamente en el mar; y finalmentede las actividades petroleras, que son profundamentedisruptivas y muy contaminantes.

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1. INTRODUCCIÓN

La región de América Latina y el Caribe presenta unagran variedad de ambientes debido a la variaciónlatitudinal y altitudinal que abarca. Es posible encontrardesde el desierto más árido de América (Desierto deAtacama, en Chile) hasta la selva del Amazonas, unode los sitios más húmedos del mundo; también haceparte de la región un importante conjunto insularrodeado del Mar Caribe. Esta es una región rica endiversidad de ambientes, de ecosistemas, de especies yde culturas. Si en el pasado histórico fue escenario deldesarrollo de extraordinarias culturas, hoy lo es también

de una compleja realidad ambiental en la que confluyenmuchos aspectos socioeconómicos; las desigualdadessociales de América Latina y el Caribe se expresan yson parte del deterioro ambiental que se extiende a lolargo de la región.

Este capítulo presenta el estado del medio ambiente enla región, concentrándose en el análisis de siete de suscomponentes: Tierra, Bosques, Biodiversidad, RecursosHídricos e Hidrobiológicos, Mares y Costas, Calidad delAire y Áreas Urbanas.

1. INTRODUCCIÓN

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

632. TIERRA

2. TIERRA

El cambio en el uso de suelo es una constante a nivelmundial de la que América Latina y el Caribe no estáexenta. Los principales factores de este proceso, que seda a expensas de los ecosistemas naturales, son eldesarrollo agropecuario, las actividades extractivascomo la minería, la explotación de combustibles fósiles,las actividades forestales y el desarrollo urbano yturístico en las zonas costeras que se analizan en este yotros apartados de este capítulo. En el análisis es tambiénrelevante discutir la naturaleza de los derechos detenencia, esto es las instituciones y las relacionessociales que gobiernan el acceso a, y el uso de, losrecursos naturales y la tierra, como uno de los factoresmás influyentes en los cambios de uso de suelo. En elcaso de América Latina la distribución de los derechosde tenencia a nivel regional se encuentran divididosentre el Estado (33%), la propiedad colectiva a título degrupos indígenas y campesinos (33%), y los propietariosprivados (34%) según Sunderlain y otros (2008). Losprincipales ecosistemas boscosos de la región seconcentran en tierras bajo tenencia pública y colectivaen manos del Estado y grupos comunitarios campesinose indígenas. No obstante, la demanda de tierras para laagricultura, tanto de subsistencia como para laagroindustria, sigue en aumento. Esta demanda es uno

de los principales factores asociados con ladeforestación.

Los aspectos socioeconómicos de la globalizaciónproducen dos tendencias opuestas en el uso del territorioen Latinoamérica. La creciente demanda global dealimentos acelera la deforestación a favor de áreas parala agricultura moderna, mientras que el abandono detierras agrícolas marginales promueve la recuperaciónde ecosistemas en áreas de suelos pobres. La agriculturamoderna intensiva crea así nuevos espacios para laconservación, en una combinación única de amenazasy oportunidades (Grau y Aide, 2008).

La pérdida de cobertura vegetal asociada al cambio deuso de suelo afecta el intercambio de energía entre lasuperficie terrestre y la atmósfera, lo que tiene efectosmicroclimáticos y sobre la capacidad de retención decarbono. Además, conlleva pérdidas de biodiversidadde diferentes escalas, degradación del suelo, deterioro–e incluso pérdida– de los servicios ambientales, pérdidade resiliencia y un incremento en la vulnerabilidad delas sociedades ante disturbios naturales y eventosclimáticos extremos (Lambin y otros, 2003).

Crecimiento urbano en Manaus (Brasil): Manaus es la capital del estado de Amazonas. La zona libre que se creó en 1967, ha convertido a esta ciudad enun importante centro de industrialización, que pro-vocó un crecimiento de-mográfico y una expansión del área urbana de manera abrupta y desordenada.Actualmente la ciudad cuenta con una población estimada de 1.7 millones de habitantes. La trayec-toria de evolución de la urbanización en los últi-mos 20años ha sido el gran desafío para la pre-servación ambiental en Manaus. El avance desor-denado de la ciudad ha provocado pérdidas al medio ambiente sinprece-dentes y una serie de impactos como la deforestación, la destrucción de nacientes de agua, la amenaza de extinción de especies animales nativas y laerosión. Las imágenes del satélite Landsat muestran el patrón de crecimiento urbano ocurrido entre 1973-2007. El área urbana se muestra en un color celeste(1973), y violeta (2007). Otras áreas de color violeta al norte de la ciudad corresponden a áreas deforestadas. Fuente: PNUMA (2010) Atlas de NuestroCambiante Ambiente: América Latina y el Caribe.

17 Julio 1973 24 Agosto 2007

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2.1 AGRICULTURA Y GANADERÍA

Cerca del 30% del territorio de ALC es apto paraactividades agrícolas (PNUMA, 2007). Debido a lademanda de los mercados internacionales por productoscomo cereales y soja, y al incremento en la demandade estos mercados y de los nacionales por carne deganado vacuno y de aves; la superficie agropecuariatiende a aumentar. Además, las políticas sectorialestambién pueden convertirse en incentivos que favorecenlos cambios de uso de suelo. Por ejemplo, el alza anivel internacional de los precios de productos demateria prima como la soja, han favorecido políticaseconómicas a nivel de países de América Latina queincentivan la expansión de grandes monocultivos parasatisfacer las demandas externas de este producto; estoocurre en países como Argentina, Brasil, Paraguay yBolivia (Barbier, 2004).

Las actividades agrícolas se modifican al paso deltiempo, y actualmente algunos suelos agrícolas estánsiendo convertidos en urbanos en toda la región,incluyendo a los Pequeños Estados Insulares del Caribe.Aunado a esto, la preocupación por la suficienciaalimentaria ha llevado a algunos países del Caribe atransformar tierras marginales en agrícolas y,consecuentemente, a incrementar el uso de sustanciasagroquímicas (FAO, 2008). Los cambios en los mercadostambién tienen un fuerte impacto en las prácticasagrícolas (como lo denota por ejemplo el decrecimientoen el cultivo del plátano en los países del Caribe, queya no reciben trato preferencial por parte suscompradores tradicionales, como Gran Bretaña).

Sin embargo en la región, la contribución de laagricultura al conjunto de la economía (proporción delProducto Interno Bruto correspondiente a valor agregadoagropecuario) se estabilizó en torno al 6.3% en el año2005 (CEPAL, 2007a). A pesar de algunas dificultadescomerciales, la exportación agrícola es un renglónrelevante en la economía de la región; actualmente, elmayor mercado internacional es el de la soja en China,seguido por el de frutas, azúcar y flores para EstadosUnidos y por la venta de frutas y oleaginosas a la UniónEuropea (CEPAL, 2007a). El Cuadro 2.1 presenta laclasificación de los países de acuerdo a la importanciaeconómica de la agricultura y el medio rural.

Entre 2003 y 2005, la región de ALC presentó una tasade transformación creciente1 del 0,13% anual con unasuperficie agrícola total adicional de 23.204 km2 en eltotal de la región. Los datos regionales, empero, ocultanvariaciones a nivel nacional que son muy relevantes;por ejemplo el país con el mayor aumento en lasuperficie agropecuaria en este período fue Bolivia, con6.810 Km2 (FAO, 2008).

Los países que mayor extensión territorial dedican a estaactividad productiva en ALC son Brasil y Argentina, con26.360 y 12.935 km2 respectivamente, y ambos cuentancon procesos tecnológicamente avanzados utilizadosde forma intensiva, lo que se traduce en gradospreocupantes de degradación (Seixas y Ardila 2002,CEPAL, 2007a).

1 Calculada en base a la fórmula FAO, 1996.

2. TIERRA

1. Determinante en la 2. Importante, 3.Medianamente impor- 4. Menos importanteeconomía (entre 34,1 (entre 13,6 y 9,4% tante (entre 7,9 y 6,9% (entre 6,4 y 0,7%

y 17,2% del PIB) del PIB) del PIB) del PIB)Guyana Honduras Brasil CubaGuatemala Bolivia (Edo. Plurinacional de) Costa Rica ChileHaití Colombia Perú JamaicaParaguay Suriname Uruguay ArgentinaNicaragua Ecuador Panamá BarbadosBelice El Salvador San Vicente y las Granadinas MéxicoDominica Venezuela (Rep. Bolivariana de)

Santa LucíaGranadaAntigua y BarbudaSaint Kitts y NevisTrinidad y Tobago

Fuente: CEPAL, 2007a.

América Latina y el Caribe: Importancia económica relativa de la agriculturaCUADRO 2.1

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

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País Miles Ha País Miles HaArgentina 133.350 Haití 1.690Bahamas 14 Honduras 3.128Barbados 19 Jamaica 513Belice 152 México 106.800Bolivia (Estado Plurinacional de ) 36.828 Nicaragua 5.200Brasil 263.500 Panamá 2.230Chile 15.762 Paraguay 20.400Colombia 42.436 Perú 21.560Costa Rica 2.750 República Domincana 2.517Cuba 6.620 San Vicente y las Granadinas 14Dominica 23 Saint Kitts y Nevis 5Ecuador 7.412 Santa Lucía 11El Salvador 1.556 Suriname 83Granada 13 Trinidad y Tobago 54Guatemala 4.464 Uruguay 14.683Guyana 1.680 Venezuela (República Bolivariana de) 21.350

América Latina y el Caribe: Superficie agrícola por país, 2007 (En miles de hectáreas)CUADRO 2.2

Fuente: Elaborado por PNUMA, con datos de FAOSTAT, 2007, disponible en: http://faostat.fao.org/default.aspx, consultado en octubre 2009.

En México, de acuerdo con el Inventario ForestalNacional (Mas y otros, 2004), solo el 19% del territoriocontinental es apto para la agricultura y menos del 24%de dicha superficie tiene posibilidades de irrigación. Sinembargo, hasta 2005, este tipo de uso ocupaba cercade 1 millón de km2, es decir, aproximadamente el 55%del total del territorio de este país (FAO, 2008). El Cuadro2.2 muestra la superficie dedicada a la agricultura porpaís en América Latina y el Caribe a 2007, que totalizaun poco más de 7 millones de km2, representando el28% de la superficie total de la región.

Mundialmente, la producción agrícola (para alimentohumano o forraje) se ha triplicado desde 1961, lo queequivale a un crecimiento anual promedio de 2,3%,mucho más alto que el crecimiento poblacional mundial(1,7% anual) (FAO, 2007c,e). La expansión de laproducción agropecuaria impulsó la conversión detierras anteriormente cubiertas por diferentes tipos devegetación, sobre todo bosques, así como una mayorexplotación de recursos naturales como el suelo y elagua, con el consecuente agravamiento de los procesosde degradación de tierras (PNUMA, 2003a). Los paísesen los que el crecimiento de las actividades agrícolasrebasa la media regional son Belice, Bolivia, Brasil,Chile, Ecuador, Paraguay, República Dominicana, SaintKitts y Nevis y Uruguay (CEPAL, 2007a). La ganaderíacontribuye a la degradación de las superficies devegetación remanentes en las que el ganado pastorea:por ejemplo, en México se calcula que sólo el 27% dela superficie de vegetación natural está libre deganadería (SEMARNAT, 2008).

2. TIERRA

A partir del siglo XX, el trópico húmedo latinoamericanose ha visto muy afectado por las actividadesagropecuarias. El Amazonas es la zona tropical másafectada de la región, y el arco de deforestación rebasaya los límites brasileños y se extiende hacia el este delos Andes y hacia la República Bolivariana deVenezuela. Adicionalmente, y en fechas más recientes,las regiones del Chaco en Argentina y los bosquesatlánticos de Sudamérica, se han visto severamenteafectadas por la expansión de la frontera agropecuaria(Lambin y otros, 2003).

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El incremento en la superficie agrícola se acompaña deun cambio en el tipo de productos que se cultivan. Laproducción promedio per cápita de cultivos como yuca,papa, trigo y arroz está disminuyendo mientras seincrementa la producción de productos como aceites(soja, girasol y palma africana), maíz (en especial parauso industrial), frutas tropicales, hortalizas y en menorproporción, azúcar (Seixas y Ardila 2002, CEPAL 2007a).La producción de forraje animal también influye demanera importante en las prácticas agrícolas.

De esta forma, la región está transformando suagricultura para responder al nuevo modelo económicoque busca incrementar el comercio, pero al mismotiempo, acusa una debilidad creciente en cuanto a sucapacidad de producción de alimentos básicos, lo queha redundado en un significativo incremento de lasimportaciones agrícolas en estos rubros (FAO, 2007e).El cultivo de la soja es un caso emblemático de esteproceso, pues dada su importancia económica estáincrementándose a costa del cultivo de alimentos desustento y de áreas aún cubiertas por vegetación natural.Entre 1990 y 2005 la superficie dedicada al cultivo dela soja se incrementó en 22,3 millones de hectáreas, engran parte a expensas de bosques nativos.

El caso Argentino es paradigmático, dado que desde1995 la superficie dedicada a este cultivo se ha triplicado

(Binimelis y otros, 2009); el alza del valor de unatonelada de soja (que ha aumentado de 291,15 USDen 1997 a 418 USD en 20072) consolida el modelo dedesarrollo económico argentino como uno de losprincipales proveedores mundiales de productosderivados de la soja (el tercer productor mundial a nivelde la producción de harinas y el primero en laproducción de biodiesel). Sin embargo, este desarrolloeconómico se ha dado a partir de un proceso deagriculturización (el cual implica la conversión de zonashistóricamente dedicadas a la ganadería para laagricultura o la sustitución de otros cultivos pormonocultivos de soja) y pampeanización (conversiónde regiones pampeanas en áreas para la producción desoja) con consecuencias importantes como ladeforestación3 (Navarrete y otros, 2007).

Recientemente, y más que en cualquier otro período,la actividad agrícola está muy relacionada con laganadería. Se estima que actualmente el 40% de laproducción mundial de cereales se destina a laalimentación de ganado (Bekoff, 2003). Entre 1990 y2007, la existencia de ganado en la región aumentó de326 millones a 392,3 millones de cabezas, es decir, quese registró un aumento de 66,3 millones de cabezas,principalmente en Sudamérica y Centroamérica, conuna disminución de unas 800 mil cabezas en el Caribe(FAO, 2009c). Un análisis comparativo entre valoresde deforestación y el aumento de la ganadería revelaque en muchos países el aumento del número decabezas de ganado coincide con la disminución de lacobertura de bosques (p. ej. Bolivia, Brasil, Colombia,Ecuador, Guatemala, Nicaragua, Paraguay, Perú yVenezuela) (CEPAL, 2007a).

En países como Brasil, el uso de la tierra está cambiandode manera muy sustancial, asociado a la producciónde biocombustibles donde las plantaciones de soja ycaña de azúcar aumentaron para la producción debiodiesel y etanol. El tema de la conversión de áreasde cultivos agrícolas para alimentos a la producción debiocombustibles es controversial, por la vinculación dealgunos cultivos utilizados en su producción, al alza enel precio de los alimentos a nivel mundial.

2.2 ACTIVIDADES EXTRACTIVAS

Las actividades extractivas, tales como la obtención dehidrocarburos y minerales, provocan en muchos casosel hundimiento de suelos orgánicos, debido al

2 Datos tomados de : http://faostat.fao.org/site/570/DesktopDefault.aspx?PageID=570#ancor, fecha de consulta 10 marzo 2010

3 Datos de FAO (2005) disponibles en el portal de datos GEO indican unapérdida anual promedio de 0,6 por ciento de la superficie boscosa delpaís en el período 2000-2005.

2. TIERRA

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

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asentamiento de suelos, el que puede ser consecuenciade (i) la oxidación de turbas por el abatimiento del niveldel agua, o (ii) la extracción misma de gas o agua(Jiménez y otros, 2006).

En cuanto a la actividad forestal, los efectos de laextracción maderera conllevan una pérdida de labiodiversidad, así como de los servicios que proveenlos ecosistemas naturales, entre los que figuran lamanutención de los ciclos biogeoquímicos, laprotección y conservación del suelo y la captura de aguahacia los mantos freáticos; los cambios en las actividadesforestales también han llevado al fenómeno conocidocomo transición forestal (ver Recuadro 2.6).

2.2.1 MINERÍA

La minería ha sido, desde la época colonial, una de lasactividades más contaminantes e influyentes en elbienestar humano de poblaciones de la región. Supráctica influye no sólo en las reservas de los mineralesexplotados sino que impacta fuertemente otros recursosnaturales – agua, bosques, suelos – y genera grandescantidades de residuos contaminantes.

Este sector continúa siendo una fuente de atracción decapitales para la región; se estima que unos 10 billonesde USD son invertidos cada año, lo que la hace la regiónque atrae el mayor porcentaje de capitales en el mundo

América Latina23%

Estados Unidos8%

Pacífico / SE Asia4%

Canadá19%

África17%

Resto del mundo16%

Australia13%

Fuente: Pricewaterhouse Coopers, 2006. Mine: Let the good times roll.Review of global trends in the mining industry.

GRÁFICO 2.1

Porcentajes mundiales de inversión enexploración minera, por región (2005)

(Gráfico 2.1). De acuerdo con datos de Bebbington(2009) la inversión extranjera del sector minero en laregión se ha incrementado en un 400% desde el 2000;un caso paradigmático es Perú cuya inversión extranjerallegó a superar el 1000% en los últimos 10 años(Bebbington y Bury, 2009).

2. TIERRA

Extracción minera: El Cerrejón, Colombia: Cerrejón es una de las operaciones de minería de carbón de exportación a cielo abierto más grande del mundo,localizada en la península y departamento de La Guajira, al noreste de Colombia. El proyecto Cerrejón, iniciado en la década de los 80, ha realizado unaamplia variedad de estudios ambientales, monitoreado la calidad del aire y reciclado materiales para aminorar algunos de los efectos negativos que produce lamina, entre ellos: la generación de material particulado, gases y la intervención de cerca de 7800 ha de suelo. Las imágenes del satélite Landsat muestrancambios en la cobertura del suelo en el área de El Cerrejón, entre los años 1986 y 2007. Fuente: PNUMA (2010) Atlas de Nuestro Cambiante Ambiente:América Latina y el Caribe.

31 Julio 1986 11 Septiembre 2007

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Los factores que influyen en la actividad minera, apuntana una tendencia hacia la especialización en laextracción de recursos naturales no renovables endiversos países de ALC (Bebbington, 2009). La demandainternacional indica que la extracción de minerales seha aumentado cerca de un 56% en los últimos años,esto significa que éstos continúan siendo insumosimportantes para el sector industrial y las actividadeseconómicas en general. Si se considera el potencialminero, al cual se llega considerando las mejoresprácticas mineras y sin considerar las restricciones deuso de la tierra, los grandes inversores consideran a Perúcomo uno de los países más atractivos, seguido porChile, México, Brasil, Argentina, Bolivia, Venezuela yEcuador.

La actividad minera en ALC se ha dado en zonasconocidas por su tradición de extracción como Chile,Perú, México y Argentina. Los principales productosextraídos en estos países incluyen el cobre, el carbón,el níquel, el oro, la plata, así como materiales deconstrucción como la arena. En el Caribe, la actividadminera se centra en la extracción de bauxita (Jamaica)y, de manera generalizada de arena y materiales deconstrucción que se extraen de zonas montañosas yriberas de ríos.

El papel que esta actividad está jugando en laseconomías regionales se puede apreciar a partir del

aporte que el sector minero tiene en las economías; porejemplo, según Chaparro y Lardé, 2005, el aporte quela actividad minera tiene en Chile varía entre un 6 y un8%, cifra muy parecida a la de Perú (por arriba delpromedio regional del 4%). El sector minero en los paísescentroamericanos no supera el 3%, incrementándoseen países como Honduras y Guatemala que tienenproyectos de prospección a lo largo de la región. Uncaso interesante es el de Jamaica cuyo PIB minero se hacalculado entre un 10-25% (corresponde especialmentea la extracción de Bauxita) (Chaparro y Lardé, 2005).

En Colombia, por ejemplo, los proyectos mineros deexportación son los más grandes realizados a cieloabierto en el mundo. En 2007 se reportaron extensionessuperiores a las 70 mil hectáreas y volúmenes anualesde exportación de 29,8 millones de toneladas para sólouna de las zonas productoras de carbón: El Cerrejón.Colombia, como primer productor latinoamericano ycuarto exportador mundial de carbón, cuenta conreservas cercanas a 7.063 millones de toneladas, de lascuales el 84,5% se localizan en ecosistemas secos delCaribe (Guajira, Cesar y Córdoba) (UPME, 2005).

Por otro lado, la minería de pequeña escala es fuentede importantes focos de contaminación en diversasregiones de ALC. El uso de mercurio para extraerminerales y la erosión están afectando fuentes de aguacon consecuencias negativas para organismos acuáticosy para poblaciones que dependen de este recurso,principalmente en zonas selváticas y montañosas.

Estudios recientes estiman que entre 1975 y 2002, laexplotación de oro en la Amazonía brasileña produjoalrededor de 2000 toneladas de oro, lo cual dejó cercade 3000 toneladas de mercurio en el medio ambientede la región (Lacerda, 2003, citado en PNUMA 2009).Se estima que entre el 5 y 30% del mercurio utilizadopara extracción aurífera a baja escala en la cuenca delAmazonas es liberado en las aguas, y aproximadamenteel 55% se evapora en la atmósfera (Singh y otros, 2003;citado en PNUMA, 2009). Las consecuencias de estasprácticas mineras, sumadas al cambio en el uso de latierra y a los proyectos de represas hidroeléctricas en elAmazonas contribuyen conjuntamente a lacontaminación con mercurio en los sistemas acuáticos,en las poblaciones de peces y en las comunidadeshumanas que dependen de estos recursos pesqueros(Kherig y otros, 2008, Márques y otros, 2005).

Las regulaciones ambientales sobre la inversión mineravarían de país en país, sin embargo, en varios países dela región (Gráfico 2.2), estas regulaciones no son vistaspor la industria como un desestímulo a la inversión.

2. TIERRA

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

69

Australia OccidentalTerritorio del Norte (Australia)

Queensland (Australia)Mongolia

MéxicoManitoba (Canadá)

Quebec (Canadá)Australia Sur

Alberta (Canadá)BrasilChile

Nevada (EE.UU)Saskatchewan (Canadá)

Nueva Gales del Sur (Australia)Ontario (Canadá)

KazajistánBostwanaArgentina

ChileMali

BoliviaSudáfrica

Utah (EE.UU)Columbia Británica (Canadá)

IrlandaNuevo Brunswick (Canadá)

GhanaEspaña

Terranova / Labrador (Canadá)Arizona (EE.UU)

RusiaPapúa Nueva Guinea

TurquíaPerú

Wyoming (EE.UU)Alaska (EE.UU)

Victoria (Australia)Ecuador

Burkina FasoZambia

República Dem. del Congo*TasmaniaFinlandiaTanzania

VenezuelaIndia

SueciaTerritorio Nor-occidendal (Canadá)

Yukon (Canadá)Nueva Escocia (Canadá)

IndonesiaNuevo México (EE.UU)

Nunavut (Canadá)Filipinas

Dakota del Sur (EE.UU)Nueva Zelandia

Idaho (EE.UU)Colorado (EE.UU)

ZimbabweMinnesota (EE.UU)

Washington (EE.UU)Montana (EE.UU)

Wisconsin (EE.UU)California (EE.UU)

Fuerte desestímulohacia la inversión.

0% 10% 20% 30% 40% 50% 60% 70% 80% 90% 100%

No buscaría exploracióndebido a este factor.

GRÁFICO 2.2

Regulaciones ambientales sobre la explotación minera

Fuente: Fraser Institute Annual Survey of Mining Companies 2005/2006.Disponible en: http://www.fraserinstitute.org/commerce.web/product_files/MiningSurvey2005.pdf

2. TIERRA

Page 72: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

70

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Las regulaciones ambientales son necesarias debido ala variedad de graves consecuencias ambientales ysociales que la minería puede ocasionar. En algunoscasos puede involucrar un proceso de deforestaciónmasiva, con la consecuente pérdida de coberturavegetal, erosión del suelo y formación de terrenosinestables. Las alteraciones generan tambiénsedimentaciones en las corrientes de agua que llegan aalterar el funcionamiento natural de las cuencas. Estosefectos se multiplican aún más en la minería a cieloabierto –operación que requiere tajar la superficie paraextraer el mineral–, que en la minería subterránea(PNUMA, 2003a, Jiménez y otros 2006).

Además de los graves impactos a los ecosistemas queconlleva la actividad minera, esta industria sueleconsiderar la tenencia de la tierra y los sistemastradicionales de gobernanza local como un «obstáculo»para su desarrollo (Camimex 2008, Cortina y Zorrilla2009), lo cual genera inequidades y conlleva conflictossociales potenciales. De acuerdo con un reporte dediciembre de 2008, la Defensoría del Pueblo de Perúregistró un total de 93 conflictos socioambientales, el46% de los cuales estuvo relacionado con la actividadminera4. Asimismo, el incremento en los precios de losminerales desde 2007 ha influido en la apertura denuevos frentes de extracción. Tal es el caso deCentroamérica en donde el número de conflictos socio-

ambientales en torno a esta actividad ha aumentado;por ejemplo, de los 118 conflictos registrados en la basede datos del Observatorio de Conflictos Mineros enAmérica Latina5, que corresponden a 140 proyectosde exploración y/o explotación minera, se identificanal menos 150 comunidades indígenas y campesinasafectadas. De este total, los 21 eventos registrados enla región de Centroamérica y México corresponden aepisodios recientes que comienzan a finales de 1990 yse intensifican durante la década del 2000.

2.2.2 EXPLOTACIÓN DE HIDROCARBUROS

La extracción de petróleo tiene altos costos ambientalesque varían desde la transformación irreversible de losecosistemas terrestres y marinos donde se extrae elllamado oro negro, hasta los efectos severos de losderrames. Estos problemas se agravan cuando lascondiciones económicas en los países productores nopermiten el uso de tecnologías de punta que son menosriesgosas y tienen impactos menos severos.

América Latina y el Caribe cuenta con más del 10% delas reservas de petróleo mundial, alrededor del 14% dela producción y solamente un 8,3% del consumo global.En varios países de la región la economía es altamentedependiente de la explotación y comercialización dehidrocarburos fósiles; tal es el caso de Brasil, México yVenezuela; este último es uno de los más grandesproductores de petróleo en el hemisferio occidental, yen 2006 se clasificó como el sexto exportador neto depetróleo del mundo.

4 Defensoría del Pueblo 2008. En línea: http://www.defensoria.gob.pe/conflictos-sociales-reportes.php.

5 Información disponible en www.conflictosmineros.net

2. TIERRA

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

71

México y Venezuela son los principales exportadoresde petróleo de la región; el 63% de la producciónregional proviene de Sudamérica, el 34% deMesoamérica y solamente el 13% del Caribe (PNUMA20106). La región cuenta además con más del 4% delas reservas de gas natural, cerca del 6% de laproducción y un 6% del consumo en el mundo.Argentina y Bolivia son los principales exportadores degas natural en la región (IEA, 2008; Omar Farouk, 2007).En los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (PEID)del Caribe; Trinidad, el mayor productor de petróleo,tiene importantes yacimientos de gas que son explotadosactualmente; similarmente, Cuba está ampliando suproducción mar afuera y las áreas del Mar Caribe sonun prospecto prometedor de petróleo.

En 2007, Nicaragua condujo una ronda de licenciaspara bloques mar afuera en las cuencas del Caribe y elPacífico. Similarmente, la información geológica ysísmica actual de la Zona Económica Exclusiva7 (ZEE)de Jamaica ha sugerido el potencial para encontrarcantidades comerciales de petróleo y gas en las áreasde la Cuenca Walton y Pedro Bank en el Mar Caribe,las exploraciones que empezaron a inicios de 2008actualmente se llevan a cabo por varias compañías.También, Belice empezó a realizar investigaciones marafuera en 2006. En el caso de México, desde 2004 laempresa estatal petrolera (PEMEX) decidió incrementarlas exploraciones en aguas profundas y por su parte, enel 2007 Venezuela invirtió US$ 8.261 millones enexploraciones marinas8 siendo Brasil el único país enALC con la capacidad tecnológica propia para exploraren aguas profundas9 (Morales Gil, 2008).

Las actividades relacionadas con el petróleo muyprobablemente se intensificarán debido a los prospectosde yacimientos grandes y no explorados dehidrocarburos fósiles. Sin embargo, la regulación delsector petrolero y de gas se hace principalmente por lasjurisdicciones correspondientes y aunque no se han

6 Información disponible en www.geodatos.org

7 http://www.un.org/Depts/los/convention_agreements/texts/unclos/convemar_es.pdf

8 Información disponible en www.pdvsa.com

9 Información disponible en: www.petrobras.com

10 GLADA proporciona una nueva evaluación cuantitativa a nivel globalidentificando áreas degradadas a través del análisis de las tendencias dela producción primaria neta (NPP o producción de biomasa) sobre unperíodo de 23 años. La producción primaria neta se deduce a partir demediciones por satélite (MODIS, GIMMS NDVI) del índice de vegetacióndiferencial normalizado (NDVI, o índice verde), y se combina coninformación sobre la eficiencia en el uso del agua de lluvia. Se identificancomo áreas críticas las zonas con una tendencia descendente de laproducción primaria neta y un descenso también en la eficiencia del usodel agua de lluvia en el transcurso de los últimos 23 años, aislando losefectos simples de la sequía.

realizado muchos estudios sobre sus impactos, se sabepor otras áreas del mundo que estas actividades puedentener consecuencias ambientales si no son reguladasefectivamente. En la actualidad no existe una políticacomún para la región.

2.3 DEGRADACIÓN DE TIERRAS

Todos los países de ALC se ven afectados por uno omás procesos de degradación de sus suelos en al menosuna parte de su territorio: salinización, compactación,erosión hídrica o eólica, agotamiento o pérdidaavanzada de nutrientes, acumulación de sustanciastóxicas, todo lo cual se agudiza por fenómenosclimáticos extremos (CEPAL, 2007a). El proceso dedegradación de las tierras en zonas áridas, semiáridas ysubhúmedas es motivado por la erosión resultante dela deforestación y el pastoreo excesivo, lasobreexplotación del suelo, la falta de rotación de loscultivos o el monocultivo y las prácticas inadecuadasde riego intensivo.

De acuerdo con los datos provistos por el proyectoGLADA (Global Assessment of Land Degradation andImprovement) de las agencias GEF-UNEP-FAO10, el 14%de la superficie global afectada por procesos dedegradación se encuentra en ALC, y éstos procesosafectan a cerca de 150 millones de personas que habitanla región. El problema es más grave en Mesoamérica,donde afecta al 26% del territorio, mientras queSudamérica presenta un 14% de degradación (PNUMA,2007). Guatemala es el país que presenta la proporciónde tierras degradadas más alta respecto al total delterritorio nacional (51,3%), seguido por Uruguay(49,6%), Guyana (43,4%) y Haití (42,6%) (ver Gráfico2.3).

2. TIERRA

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72

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

0%

10%

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Fuente: Elaborado por PNUMA, con datos de Bai y otros, 2008. Período: 1981-2003.

GRÁFICO 2.3

América Latina y el Caribe: Áreas degradadas por país, como porcentaje del territorio nacional

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)

2.3.1 EROSIÓN DE SUELOS

Es posible identificar distintos grados de degradación yvulnerabilidad, que comprenden desde fenómenos dedesertificación en zonas de tierras bajas tropicales hastauna degradación severa en tierras secas de altiplanicie,a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar. El Caribese caracteriza por marcadas variaciones estacionales delas precipitaciones, y la mayor parte de los territoriossufren prolongadas sequías, seguidas por lluviastorrenciales que agravan la erosión de los suelos.Adicionalmente, el origen volcánico de algunas islasdel Caribe (Dominica, Santa Lucía, San Vicente y lasGranadinas), o coralino de otras (Antigua y Barbuda,Barbados, partes de Jamaica y República Dominicana)hacen que los suelos de las mismas sean muyvulnerables a la degradación de tierras por efecto de laerosión, especialmente en áreas de escasa coberturavegetal (CEPAL, 2007a).

Un caso extremo de degradación es el de la isla LaEspañola, compartida por República Dominicana y

Haití. Con una población de 19,6 millones de habitantesen 2008, la isla sufre un agudo proceso de degradaciónde suelos, y pérdida de la biodiversidad, sobre todo enel área afectada por una mayor presión poblacional quees la ocupada por Haití (se concentran 149 habitantespor km2 más que en República Dominicana) (CEPAL,2007a).

2.3.2 CONTAMINACIÓN

El uso intensivo de fertilizantes y plaguicidas contribuyea la degradación y contaminación de suelos, aire y agua,y está asociado a diversos problemas de contaminaciónambiental (del suelo, las aguas y los ecosistemas) y desalud humana. Este problema es especialmenteimportante en aquellas áreas donde se practica unaagricultura intensiva en el uso de este tipo de insumos(áreas de producción hortícola intensiva) (NacionesUnidas, 2010).

Si bien no existen estadísticas regionales que permitancuantificar el consumo de pesticidas en la región, sedispone de información sobre fertilizantes (Gráfico 2.4).Tomando como ejemplo Centroamérica, Costa Rica yGuatemala son los países que más utilizan estosquímicos y en ambos el consumo se incrementó en elperído 2003-2005. Si bien el consumo total de otrospaíses de América Latina es considerablemente mayorque en Centroamérica, la aplicación de fertilizantes porhectárea en Costa Rica y Guatemala es mas alta que ennaciones como México y Colombia, aunque menor alos niveles de Brasil y Chile, que distribuyen cerca de

2. TIERRA

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1961

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1965

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2001

2003

2005

Intensidad en el consumo de fertilizantes en América Latina y el Caribe(consumo de fertilizantes/superficie de la tierra agrícola)

1990: 11,4

2000: 17,4

2005: 20,430

25

20

15

10

0

Fuente: Elaborado por CEPAL con estadísticas obtenidas de CEPALSTAT-BADEIMA, en base a datos compilados por FAOSTAT, base de datos de la Organizaciónde las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). En línea: http://faostat.fao.org/default.aspx. Consulta a octubre de 2009.

GRÁFICO 2.4

América Latina y el Caribe: Intensidad en el consumo de fertilizantes 1961-2005(En toneladas por cada mil hectáreas)

1 a 1,6 toneladas métricas de fertilizante por hectáreasembrada (Estado de la Región, 2008).

Se estima que la agricultura intensiva es responsable deaproximadamente el 25% de las emisiones del dióxidode carbono del mundo, del 60% de las emisiones degas metano y del 80% de óxido nitroso, todos ellospoderosos gases del efecto invernadero. El óxido nitrosose genera por la acción de las bacterias desnitrificadoras,cuando la tierra es convertida en campos agrícolas.Cuando los bosques tropicales son transformados enpastizales, las emisiones de óxido nitroso aumentan eltriple. Los fertilizantes nitrogenados –como los utilizadosen las plantaciones forestales– son otra fuente importantede óxido nitroso (ISIS, 2004).

En cuanto a la intensidad de uso de herbicidas einsecticidas, dentro de los países para los que se cuentacon estadísticas, Belice, Costa Rica y RepúblicaDominicana, presentan la mayor intensidad de uso enambos plaguicidas para 2001. Además, Uruguay yNicaragua son altamente intensivos en insecticidas,mientras que Ecuador y Paraguay son altamente intensosen el uso de herbicidas (Naciones Unidas, 2010).

2.3.3 DESERTIFICACIÓN

Una manifestación extrema de la degradación de tierrases la desertificación, que en América Latina cubre unárea de más de 6 millones de km2 (lo que representaaproximadamente el 30% de la superficie total de laregión) e incluye zonas áridas, semiáridas y subhúmedas(FAO, 2008) (ver Recuadro 2.1).

2. TIERRA

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74

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

2. TIERRA

Desertificación en América Latina y el Caribe y sus consecuenciasRECUADRO 2.1

La Organización de las Naciones Unidas define ladesertificación como la degradación de tierras en laszonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas, originadaen factores como las actividades humanas y lasvariaciones climáticas.

Estas zonas abarcan más de un tercio de la superficieterrestre; hay tierras desérticas o áridas en la cuarta partedel territorio de ALC (unos 5,3 millones de km2)(PNUMA, 2003a) y son altamente sensibles al usoinadecuado del suelo, especialmente a lasobreexplotación. La tierra puede perder productividadcomo consecuencia del riego inadecuado, ladeforestación, el pastoreo excesivo, la pobreza y lainestabilidad política. La desertificación tiene una fuerterelación con la pérdida de la biodiversidad y contribuyeal cambio climático global a través de la pérdida delpotencial de captura de carbono y al incremento delalbedo* de la superficie (Adeel y otros, 2005)

El Tercer Reporte Regional de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD) concluyeque “los países de ALC están afectados en escala considerable por la degradación de las tierras, la desertificación, laerosión de las zonas costeras, la sequía y los desastres naturales. También siguen teniendo problemas ambientales y sociales,cuya solución requerirá enormes esfuerzos financieros, institucionales y técnicos. Esta situación pone de manifiesto quelos países de América Latina y el Caribe no son ni una región verde ni un paraíso natural, como muchas veces se afirma”(UNCCD, 2006).

Existe un vínculo perverso entre desertificación y pobreza, pues generalmente los suelos más frágiles y propensos a ladesertificación son ocupados por los grupos marginados, de modo que tienen pocas opciones económicas y ejercen granpresión sobre los escasos recursos con los que cuentan, que se degradan más rápidamente y de forma irreversible.Frecuentemente, esto impulsa la migración hacia otras partes igualmente pobres y vulnerables.

Se están realizando grandes esfuerzos en torno al problema de la desertificación, aunque muchas veces resultan insuficientesdebido a la complejidad del fenómeno (UNCCD, 2006).

(C) Alejandro Balaguer-Fundación Albatrosmedia-www.albatrosmedia.com

Fuente: PNUMA, 2003; Adeel y otros, 2005 y UNCCD, 2006.* Designa el poder que tiene un cuerpo para reflejar la radiación que recibe. El albedo alcanza 1 cuando toda la radiación se refleja, ó 0 cuando toda laradiación se absorbe. Tomado de: CAN, PNUMA & AECID. 2007. ¿El fin de las cumbres nevadas? Glaciares y cambio climático en la comunidad andina.Lima, Perú.

Países como Brasil y México tienen zonas de riesgo dedesertificación cada vez mayores. Aproximadamente10% de las regiones semiáridas del Brasil (98 mil km2)han sido muy seriamente afectadas, 82 mil km2 han sidoseriamente afectados y 394 mil km2 estánmoderadamente degradados (Brasil, 2000). Méxicoreporta una superficie de suelos con procesos dedegradación que asciende a 560 mil km2 (SEMARNAT2006). Por su parte, Bolivia reporta un 41% de suterritorio bajo riesgo de desertificación, casi el doblede la superficie que cubren las zonas áridas de este país(23%) (Bolivia, 2000). Otros países que presentanproblemas de desertificación son Chile (24% del totalde su territorio), Ecuador (21%), Puerto Rico (28%) yVenezuela (5%) (PNUMA, 2007).

Según un estudio llevado a cabo por el PNUD en 2004,el 16,9% del territorio colombiano muestra síntomas

de desertificación y un 15% adicional es vulnerable afuturo. El 78,9% de las zonas secas presentan algún nivelde desertificación derivado principalmente de procesosde erosión y salinización; cerca del 74% del país tieneproblemas de compactación de los suelos, siendovulnerables los valles interandinos y el Caribe. Del 48%de los suelos con procesos intensos de erosión, en zonassecas se encuentra el 50% de las categorías de procesoserosivos más severos (MAVDT, 2004).

Estudios realizados en 2003 en 11 países de AméricaLatina y el Caribe, estiman que las pérdidas derivadasde la desertificación (contando el impacto en losrecursos hídricos y el impacto por concepto de laspérdidas físicas de suelos) ascienden a 27.525 millonesde dólares (CEPAL, 2007a), siendo Argentina, Brasil yMéxico los países con mayores pérdidas.

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

753. BOSQUES

3. BOSQUES

3.1 EXTENSIÓN Y TASAS DE COBERTURA

La cobertura forestal de América Latina y el Caribe esde unos 9 millones de km2 abarcando cerca del 45%del área terrestre de la región (FAO, 2005). Desde 1990a 2005 el porcentaje de cobertura que representa laregión a nivel global ha disminuido del 24,1 al 23,2%(Naciones Unidas, 2010) siendo una de las dos regionesque registran las mayores pérdidas netas de bosque anivel mundial (UN- DESA, 2009). La tasa de pérdidaanual entre 2000 y 2005 fue del 0,50%, casi tres vecesmás que la tasa anual global (0,18%) (Naciones Unidas,2010) (ver Cuadro 2.3).

En el Mapa 2.1 se observa la extensión y distribucióngeográfica de los bosques de la región. Las selvasperennifolias (selva alta perennifolia, bosque tropicallluvioso) representan un 90% de la extensión total debosques de la región mientras que la cobertura debosques caducifolios abarca 10% de su extensión. Losfragmentos más grandes y continuos de las selvasperennifolias están localizados en la Cuenca Amazónica(6 millones de km2), mientras que los de los bosquescaducifolios están ubicados en Santa Cruz, una regióncerca de la frontera entre Bolivia y Brasil. Las medicionesprecisas de los distintos tipos de bosques en ALC siguensiendo muy necesarias; algunas de las dificultades paracontar con ellas se describen en el Recuadro 2.3.

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76

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

N

Bosque latifolio perennifolio o caducifolio(>5m) cerrado o abierto (>15%)

Bosque latifolio caducifolio (>5m)cerrado (>40%)

Región Boscosa /bosque latifolio caducifolio(>5m) abierto (15-40%)

Bosque Aciculifolio perennifolio(>5m) Cerrado (>40%)

Bosque aciculifolio caducifolio o perennifolio(>5m) abierto (15-40%)

Bosque combinado latifolio o aciculifoio,cerrado o abierto (>15%)

Bosque latifolio cerrado a abierto (>15%) regularmente anegado(de manera temporal o semipermanente), agua dulce o salobre

Bosque latifolio cerrado (>40%), permanentemente anegado,agua salina o salobre

Fuente: Elaborado por A. Kindgard con información del proyecto GlobCover Land Cover (v2.2), 2008. Globcover Land Cover fue elaborado con datos deENVISAT-MERIS con una resolución espacial de 300 m, utilizando el sistema de clasificacion de cobertura de la tierra de las Naciones Unidas (UNLand Cover Classification System – LCSS). Elaborado por la Agencia Espacial Europea (ESA) conjuntamente con JRC, EEA, FAO, UNEP, GOFC-GOLD,and IGBP. Disponible en: http://ionia1.esrin.esa.int/.

Extensión y distribución de los bosques en América Latina y el CaribeMAPA 2.1

3.2 CAMBIOS EN LA COBERTURA FORESTAL

La Convención sobre la Diversidad Biológica reportaque la conversión de bosques a tierras agrícolas y pastos,el excesivo pastoreo, la rotación de cultivos sin

descanso, el manejo no sostenible de los bosques, lasespecies invasoras, el desarrollo de infraestructura, laminería y la producción de hidrocarburos, los incendiosy la contaminación son las causas principales de lareducción de los bosques (SCBD, 2001). En la región,

3. BOSQUES

Page 79: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

77

la ganadería y la expansión agrícola son, y han sidohistóricamente, las principales amenazas a los bosquesen los países tropicales continentales, mientras que laexpansión de la infraestructura para la urbanización yel turismo son las mayores causas de deforestación enlas regiones insulares.

El cambio en la cobertura forestal acumulada por paísmuestra que aproximadamente el 60% de los países deAmérica Latina y el Caribe redujeron su extensiónforestal del 2000 al 2005. La pérdida regionalacumulada de áreas forestales en este período suma

GRÁFICO 2.5

América Latina y el Caribe: Cambios en la cobertura forestal por subregiones, 2000-2005.(Miles de hectáreas y variación porcentual acumulada)

500

0

-500

-1000

-1500

-2000

-2500

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1%

Mesoamérica Sudamérica

Fuente: Elaborado por PNUMA con datos de Naciones Unidas 2010, con estadísticas obtenidas de BADEIMA (CEPALSTAT) en base al cálculo relaizado con laSuperficie Nacional de Bosques (FRA 2005) y Superficie Terrestre Nacional (FAOSTAT). Consulta a mayo 2009.

3. BOSQUES

aproximadamente 24 millones de hectáreas,registrándose la mayor pérdida promedio anual enMesoamérica (cerca del 0,61% de su superficie boscosa)(véase Gráfico 2.5). La pérdida total equivale a casi el64% de la pérdida mundial acumulada en dicho periodo(Cuadro 2.3). En Sudamérica, donde se da laacumulación más grande de carbono en el bosquetropical lluvioso, se ha reportado la mayor pérdida netade bosques (alrededor de 4,3 millones de ha por año)en el período 2000-2005, causada principalmente porla expansión de la agrícola (PNUMA, 2007).

Cambios en el uso del suelo: deforestación en Santa Cruz, Bolivia: El departamento de Santa Cruz de la Sierra, en Bolivia, pertenece a la cuencaamazónica y posee gran parte de los bosques bolivianos de baja altitud. La transformación de los bosques de esta región inició hace unos 45 años y hasta losaños 80, la pequeña agricultura, la silvicultura no sustentable y la ganadería eran las principales actividades generadoras de la deforestación. En Bolivia elcultivo de soja se ha desarrollado casi exclusivamente en este departamento y, después de 1984, se convirtió en el principal factor de deforestación cuyo valoranual a pasado de 34.000 ha en el período de 1985-1990 a más de 200.000 ha en el período de 1993-2000. La imagen del satélite Landsat de 1975, muestrael departamento de Santa Cruz como un área de bosque continuo, comparado con la imagen del 2008, donde el bosque ha sido remplazado por un mosaicode las parcelas agrícolas. Fuente: PNUMA (2010) Atlas de Nuestro Cambiante Ambiente: América Latina y el Caribe.

17 Junio 1975 31 Agosto 2008

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78

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Subregión Área (miles ha) VariaciónAnual (1000 ha) Anual (%) Acumulada

1990 2000 2005 1990 2000 1990 2000 1990-2005-2000 -2005 -2000 -2005 (%)

El Caribe 5.018 5.375 5.645 36 54 0,71 1,00 12,50Mesoamérica 96.378 89.100 86.372 -728 -546 -0,76 -0,61 -10,38Sudamérica 882.727 844.733 823.477 -3.799 -4.251 -0,43 -0,50 -6,71ALC 984.123 939.208 915.494 -4.492 -4.743 -0,46 -0,50 -6,97Mundo 4.077.291 3.988.610 3.952.025 -8.868 -7.317 -0,22 -0,18 -3,07% ALC/mundo 0,241 0,235 0,232

América Latina y el Caribe: Extensión y cambio en la superficie de bosques(En miles de hectáreas y variación porcentual acumulada)

CUADRO 2.3

Fuente: NACIONES UNIDAS 2010. Elaborado por CEPAL con estadísticas obtenidas de BADEIMA (CEPALSTAT) en base a cálculo realizado con laSuperficie Nacional de Bosque (FRA 2005) y Superficie Terrestre Nacional (FAOSTAT). Consulta a mayo 2009.a) Las cifras pueden no coincidir con las de FAO debido a ajustes por cobertura de países (CEPAL no considera como parte de ALC: Anguila, Aruba, IslasVírgenes Británicas, Islas Caimán, Guadalupe, Martinica, Montserrat, Antillas Neerlandesas, Puerto Rico, Islas Turcas y Caicos, Islas Vírgenes EEUU, IslasMalvinas, Guyana Francesa, Islas Georgia del Sur) y por ajustes en denominadores de territorios nacionales.

3. BOSQUES

La mayoría de los países insulares han preservado orestaurado sus áreas forestales, probablemente debidoa su dependencia económica de las actividades deecoturismo y a la relativamente baja presión poblacionalque tienen. Adicionalmente, la introducción deplantaciones, que son consideradas por algunos paísesen el cálculo de las áreas cubiertas por bosques, podríacontribuir a este aumento en la cobertura forestal. Lasdiferencias en los métodos de medición y monitoreono deben ser subestimadas, ya que pueden creardiscrepancias en la información regional y pueden estarsub- o sobre- estimando los cambios a nivel nacional.En la región tropical continental, sin embargo, casi todoslos países muestran pérdidas; los países menos pobladoscomo Suriname, Guyana y Belice son la excepción eneste sentido.

Se estima que la deforestación de la región esresponsable de 48,3% de las emisiones globales totalesde CO2 debido a cambios de uso del suelo, casi la mitad

de las cuales se origina en Brasil, principalmente en lacuenca amazónica (PNUMA, 2007). El Cuadro 2.4muestra la superficie deforestada en el Área Amazónicalegal de Brasil. La Amazonia brasileña ha sidoidentificada por Lambin y otros (2003) como el arco dedeforestación tropical más grande del mundo, con tasaspromedio de deforestación de unos 17 mil km2/añodurante el período 1988 - 2000, más de 22 mil km2/añoentre 2001 y 2005 (alcanzando hasta 27,4 mil km2 en2004) disminuyendo a unos 12,5 mil km2/año para2006-2008, y a 7 mil km2/año estimados para 2009(Mahli y otros, 2008; INPE, 2009).

Recientemente, las plantaciones han estadoreemplazando a los bosques primarios y han sidotambién usadas en programas de restauración y comosumideros de carbono en los programas de mitigacióndel cambio climático (ver Capítulo III). La cobertura delas plantaciones ha aumentado en años recientes, comopuede verse en el Gráfico 2.6; para 2005, el 86% de las

Estado / Año 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009(d)Acre 547 419 883 1.078 728 592 398 184 254 211Amazonas 612 634 885 1.558 1.232 775 788 610 604 406Amapá 7 0 25 46 33 30 39 100 0Maranhão 1.065 958 1.014 993 755 922 651 613 1.272 980Mato Grosso 6.369 7.703 7.892 10.405 11.814 7.145 4.333 2.678 3.258 1.047Pará 6.671 5.237 7.324 6.996 8.521 5.731 5.505 5.425 5.606 3.687Rondônia 2.465 2.673 3.099 3.597 3.858 3.244 2.049 1.611 1.136 505Roraima 253 345 84 439 311 133 231 309 574 116Tocantins 244 189 212 156 158 271 124 63 107 56Total Legal 18.226 18.165 21.394 25.247 27.423 18.846 14.109 11.532 12.911 7.008Amazonía

(d) Tasa estimadaFuente: Datos reportados por INPE, Brasil (Instituto Nacional de Pesquisas Espaciais), 2008; disponibles en: http://www.obt.inpe.br/prodes/prodes_1988_2009.htm

Área total deforestada en el Área Amazónica legal de Brasil 2000-2009 (km2/año)CUADRO 2.4

Page 81: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

793. BOSQUES

Caribe Mesoamérica Sudamérica Total

1990 0,39 0,08 8,23 8,70

2000 0,39 1,27 10,57 12,23

2005 0,45 1,33 11,35 13,13

0

2

4

6

8

10

12

14

Fuente: Elaborado por PNUMA, con datos de FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación), 2005:Evaluación de los Recursos Forestales ERF 2005.

GRÁFICO 2.6

Plantaciones forestales en América Latina y el Caribe, 1990-2005(En millones de hectáreas)

plantaciones en América Latina y el Caribe estabalocalizado en América del Sur; el cuarenta por cientode la superficie total plantada estaba localizada en Brasil(5,38 millones de hectáreas), seguido por Chile (2,66millones de hectáreas), mientras que Argentina, México,Uruguay, Perú y Cuba sumaban conjuntamente 4,20millones de hectáreas.

Los eucaliptos (Eucalyptus sp.) y pinos (Pinus sp.) sonlos dos géneros más frecuentemente utilizados en lasplantaciones para producir madera y pulpa en paísescomo Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Uruguay yVenezuela (UAC y otros, 1999). La introducción deespecies exóticas como los eucaliptos representa riesgospara el medio ambiente y puede tener efectosindeseables tales como el desplazamiento de especiesnativas, efectos tóxicos o semi-tóxicos en los insectos,alto nivel de consumo de agua y la liberación desustancias alelopáticas.

La sustitución de bosques primarios con plantacionescomerciales tiene importantes efectos ecológicosindeseables (por ejemplo, pérdida de la diversidadgenética). Las plantaciones no representan unarecuperación del bosque primario y no deberían usarsecomo un sustituto para programas sólidos deconservación, aunque pueden contribuir a reducir laerosión de suelos y la recuperación de algunos serviciostales como la captura de agua. Aunque las plantacionesde árboles han mostrado gran potencial para almacenarcarbono (Olschewski y Benítez, 2005) y pueden

pensarse como reservas de biomasa (Achard y otros,2004); un estudio informa que el almacenamiento decarbono en plantaciones de una sola especie es enpromedio de 40 a 60% menor que el que se presentaen bosques naturales no perturbados (Mackey y otros,2008). Además, la creciente expansión yestablecimiento de plantaciones (algunas promovidasa raíz de iniciativas de mercado de carbono) puederesultar en conflictos sociales producto deldesplazamiento de tierras dedicadas a cultivos desubsistencia (Gerber y otros, 2009).

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80

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. BOSQUES

Para evaluar de manera exacta los cambios en la coberturaterrestre de los ambientes tropicales a costos razonables serequiere de tecnología de sistemas de percepción remota.Sin embargo, el problema inicial en la estimación exactade la cobertura boscosa se debe a las diferentesnomenclaturas utilizadas (Jung y otros, 2006). Aunque haynumerosas definiciones de qué es un bosque, no hayacuerdo en la comunidad científica y las partes interesadas(por ejemplo, poseedores de tierras, paneles guberna-mentales, ONG) en una definición consensuada que puedausarse en los estudios de sistemas de percepción remota anivel local, regional, nacional o continental. De hecho,muchas definiciones están sesgadas hacia los bosqueshúmedos maduros lluviosos o selvas altas perennifolias,no considerando los bosques secos deciduos o selvas bajascaducifolias y las etapas de sucesión de la vegetación.

Se han realizado intentos de consolidar definicionesestandarizadas durante los Acuerdos de Marrakesh(UNFCCC, 2001a). Basado en estos acuerdos el bosque sedefine como “la superficie mínima de tierras de entre 0,05y 1,0 hectáreas con una cubierta de copas (o una densidadde población equivalente) que excede del 10 al 30% ycon árboles que pueden alcanzar una altura mínima deentre 2 y 5 metros a su madurez”. Esta es también ladefinición adoptada por la Undécima Conferencia de lasPartes cuando se discutió la implementación de lasReducciones Certificadas de Emisiones (Conferencia de lasPartes, 2005). Además, aquellos rodales o comunidadesvegetales que temporalmente se encuentran por debajode los límites pero que se espera que crezcan o seconviertan en bosque, también se incluyen en la categoríade bosques (UNFCCC, 2001a). Sin embargo, la definiciónde “bosque” adoptada por cualquier país sigue siendoopcional dentro de los mencionados niveles mínimosdefinidos por los Acuerdos de Marrakesh.

El efecto de estas discrepancias en las definiciones es aúnmás evidente cuando se aplica a los mapas de bosquestropicales secos o selvas bajas caducifolias. Aunque losmétodos para usar sistemas de percepción remota quepermitan supervisar y detectar la deforestación tropical enlos trópicos húmedos se han desarrollado, probado eimplementado exitosamente proveyendo importanteinformación sobre la extensión de los bosques tropicalesperennifolios; los bosques tropicales secos o selvas bajascaducifolias(T-df) por otro lado, han recibido menosatención por lo que el desarrollo de los métodos depercepción remota para cuantificar su extensión no se haconsiderado en comparación con los bosques húmedos/lluviosos. Debido a que las imágenes libres de nubes seobtienen más fácilmente durante la estación seca cuandoun porcentaje alto de dosel de los árboles no tiene hojas,se han producido errores en los mapas que provienen delas imágenes de satélite y que muestran la extensión de losbosques tropicales secos de las imágenes de satélite debido

Fuente: Extraído y adaptado de Kalacska, M; Sánchez-Azofeifa, GA; Rivard, B.; Calvo-Alvarado, JC.; y Quesada M., 2008. Evaluación de línea base parapagos de servicios ambientales de imágenes de satélite: Un caso de estudio de Costa Rica y México. Journal of Environmental Management 88(2): 348-359.

Problemas en la cuantificación de la extensión boscosa en las AméricasRECUADRO 2.2

a que la firma espectral de biomasa de hojas verdes no esregistrada. Esta propiedad del dosel induce a la malainterpretación de las áreas boscosas en las imágenes dezonas con pastos o áreas con árboles dispersos.

Para evaluar la efectividad de los proyectos de mitigacióndel cambio climático, de conservación de la biodiversidado de proyectos de manejo de recursos los hídricos queinvolucran zonas boscosas, deben considerarse trespreguntas fundamentales: ¿cuál es la extensión inicial delos bosques?, ¿qué tipo de bosques hay (primario,secundario)? y ¿cuál es la tasa de cambio de la extensiónboscosa?. Las estimaciones para el pago por serviciosambientales, por ejemplo, dependen mucho de ladiferencia entre la línea base y los escenarios de mitigacióny de las tasas de deforestación antes y después de laimplementación de un proyecto, es decir, a mayordiferencia mayor es la estimación de la captura de carbonoy el valor de los servicios ambientales. Consecuentementees imperativo que se identifique la condición y la extensióninicial del bosque con la mejor precisión posible; unproblema que no es trivial dada la ausencia de métodosestándares que provean información exacta para losdistintos tipos de bosques.

Hasta que se resuelvan las cuestiones relativas a lanomenclatura y la estandarización de los tipos y clases debosques, aún para las preguntas más simples como “¿cuántobosque hay?” y “¿dónde está el bosque?”, las discrepanciasentre los distintos estudios y problemas con las estimacionesde los pagos por servicios ambientales persistirán. Estasdiscrepancias pueden terminar costando cientos demillones de dólares en pagos equivocados, proyectos noexitosos de mitigación de carbono o proyectos deconservación de biodiversidad localizados en el sitioequivocado. Eso también tendrá impactos significativos enla biodiversidad local y regional resultando en una pérdidairrevocable de la biodiversidad.

Para corregir estas discrepancias, se requiere de métodosmás rigurosos que den más importancia a la recolecciónde información de control en el campo. Además, unadefinición estándar de la clase “bosque” que considere laheterogeneidad de los bosques tropicales secos o selvasbajas caducifolias, podría reducir la incertidumbre asociadacon las actuales clasificaciones de cobertura terrestre.Algunos mapas a gran escala de cobertura terrestre globalson inherentemente poco realistas cuando se examinan decerca, a escala de los ecosistemas o países.

La región de ALC se beneficiaría tanto de un esfuerzoconjunto de monitoreo, a una escala adecuada, que permitauna mejor definición de los ecosistemas forestales comode un programa adecuado de monitoreo que permitarealizar mejores comparaciones y la provisión deinformación más exacta para la toma de decisiones.

Page 83: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

813. BOSQUES

3.3 CONSERVACIÓN Y PROTECCIÓN DEBOSQUES

Los bosques de ALC representan ecosistemas valiososque albergan a una importante biodiversidad de especies.Se han desarrollado diferentes estrategias para conservary proteger los ecosistemas forestales en América Latinay el Caribe, que incluyen, entre muchas otras, áreasprotegidas, certificación forestal y prácticas de usosostenible y programas de pago por servicios ambientales(ver secciones siguientes y el Capítulo V). Las áreasprotegidas se establecen según las legislaciones yregulaciones nacionales y locales, y enfrentan diferentesamenazas en los niveles local, nacional y regional.

3.3.1 ÁREAS PROTEGIDAS

El establecimiento de áreas protegidas es una de laspolíticas más importantes para la conservación de labiodiversidad en la región. Se estima que la extensióntotal de áreas protegidas (de diferentes categorías) en laregión aumentó de 303,3 millones de hectáreas en 1995,a más de 500 millones en 2007 (Cuadro 2.5).Actualmente, más del 20% del total del territorio de laregión se encuentra bajo protección (UNStats, 2009)(Mapa 2.2) aunque esto no implica que todos losecosistemas estén debidamente representados en lasáreas protegidas (Armenteras y otros, 2003; Urquiza,en prensa, 2009). Basta mencionar que del BosqueAtlántico, de cuya extensión original sólo resta el 7,5%,únicamente está protegido el 2,7% (Hillstrom y Collier-Hillstrom, 2003).

Como respuesta a un esfuerzo generalizado paraproteger áreas en un intento para reducir la pérdida deespecies y de ecosistemas naturales y sus serviciosambientales, la región ha mostrado un aumento generalen áreas forestales protegidas en tiempos recientes. Lasáreas boscosas designadas específicamente paraprotección han aumentado de aproximadamente 82,5millones en 1990 a 133,2 millones de hectáreas en2005, lo que representa un incremento de más del 60%(FAO, 2007c) (ver Mapa 2.2).

Año Millones de Hectáreas Porcentaje respecto

al total global

1995 303,3 17,5

2000 394,4 20,4

2007 500,3 23,2

América Latina y el Caribe: Áreas protegidas,extensión total y porcentaje respecto al totalglobal (Millones de hectáreas)

CUADRO 2.5

Fuente: UNEP- WCMC, 2008.

Page 84: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

82

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

América Latina y el Caribe: Áreas protegidasMAPA 2.2

N

Fuente: Elaborado por J.S. Contreras con datos de WCMC, 2008, disponibles en: GEO Data Portal http://geodata.grid.unep.ch, consultado en febrero de 2010.

Sin embargo, este patrón es heterogéneo, ya que la tasade aumento varía según los países, y algunas regionesmuestran incluso una tasa de crecimiento negativodebido a la tala ilegal, la expansión urbana, la invasiónde plagas y los efectos destructores de las especiesinvasoras aún dentro de las áreas protegidas. La mayorextensión de bosques destinados a la conservación dela biodiversidad en el mundo se ubica precisamente enSudamérica, en tanto que Centroamérica (junto conÁfrica Central) son las subregiones del mundo en que

un mayor porcentaje de la superficie forestal estádestinada principalmente a la conservación de labiodiversidad (Cuadro 2.6).

Existe un debate considerable sobre la efectividad delas áreas protegidas en bosques tropicales, que reflejala preocupación de que muchas de las reservas no soneficaces, por lo que resultan ser insuficientes paraproteger la biodiversidad dentro de sus límites contra lacreciente presión antropogénica representada algunas

3. BOSQUES

Page 85: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

83

Subregión Superficie (miles de ha) Variación anual (miles de ha)1990 2000 2005 1990-2000 2000-2005

Caribe 622 675 704 5 6Mesoamérica 12.386 13.085 12.863 70 -45Sudamérica 69.463 108.103 119.591 3.864 2.297Total de América Latinay el Caribe 82.471 121.863 133.158 3.939 2.258Total mundial 298.424 361.092 394.283 6.276 6.638

Fuente: FAO, 2007c.

América Latina y el Caribe: Superficie forestal destinada principalmentepara fines de conservación

CUADRO 2.6

veces por los incendios. Los bosques tropicales húmedosson considerados esencialmente inmunes a losincendios naturales, por lo que la frecuencia deincendios causados por actividades humanas en estetipo de reservas es un buen indicador del desempeño yefectividad de las áreas protegidas (ver SecciónIncendios Forestales en este capítulo).

Wright y otros (2007) realizaron un análisis donde seusó la detección satelital global de incendios provistapor MODIS (Moderate Resolution ImagingSpectroradiometer) para determinar si la condición deárea protegida influye en la ocurrencia de incendiospara todas las reservas de bosque tropical húmedo. Losresultados indican que la detección de incendios fuesignificativamente más baja dentro de las reservas queen los terrenos adyacentes, lo que sugiere que lasreservas de bosques tropicales sí reducen el impacto delas actividades humanas. Sin embargo, esta efectividad

global no es tal para todas las reservas en todos lospaíses; las reservas de bosques tropicales húmedosvarían ampliamente en su efectividad para reducir losincendios.

Además, cabe mencionar las presiones vinculadas a lasformas de gestión, y aquellas que tienen que ver conlos marcos de políticas (no sólo de conservación sinotambién políticas económicas, agrícolas y de comercioexterior) que intervienen en la efectividad de losesquemas de áreas protegidas. Por último se debenresaltar los desafíos de los esquemas de co-manejo queson novedosos en la región (por ejemplo los resguardosindígenas de Colombia, o las tierras indígenas en Brasil)que buscan de cierta manera responder a los conflictosque se dan a partir de traslapes entre territorios indígenasy áreas protegidas, y áreas de interés minero-petroleroy áreas de conservación (Recuadro 2.3).

3. BOSQUES

Un ejemplo de conflictos distributivos se aprecia en los casosdel traslape entre áreas bajo alguna categoría de proteccióny aquellos territorios reconocidos a pueblos indígenas a nivelregional, ya que en ALC existen varios países con legislaciónespecífica que reconocen derechos territoriales a pueblosindígenas (p.ej. Brasil, Ecuador, Colombia, Panamá yNicaragua). El caso de la cuenca amazónica (RAISG, 2009)ilustra cómo estos traslapes pueden generar conflictos entérminos de lo que implica conservar, los objetivos de lasactividades de conservación, los responsables de dichaconservación, y la distribución de los beneficios resultantes.Aunque la respuesta inicial a estas preguntas pareciera muysimple, la construcción de una respuesta colectiva es muchomás compleja.

De forma más específica, el caso de Yasuni ITT en Ecuadores quizá un ejemplo que engloba el grado de complejidadsobre cómo se materializan los diferentes intereses ydemandas sobre los recursos naturales y las áreas deconservación. Esta reserva ecuatoriana es un ejemplo de la

Áreas protegidas y conflictos distributivosRECUADRO 2.3

Fuente: Elaborado por I. Monterroso con datos de la Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada (RAISG)http://www.raisg.socioambiental.org (acceso a 2009) ; y Yasuní ITT (http://www.yasunit-itt.senplades.gov.ec).

existencia de traslapes entre una reserva natural, un territorioindígena y una zona de extracción petrolera. Esta iniciativaque se ha discutido durante los últimos años a nivel del Estado(para más información refiérase al Proyecto Yasuní-ITT)consiste en mantener el petróleo crudo bajo tierra, evitandoasí la emisión de CO2 a cambio de una compensación quela comunidad internacional aportaría al Estado Ecuatorianoen función de reconocer al menos un 50% de los ingresosque recibiría el país por la extracción del crudo. Pese a queel objetivo inicial pareciera beneficiar al pueblo ecuatorianoy la población global, la iniciativa se ha encontrado conintereses contrapuestos por lo que no se ha podido avanzaren su implementación.

Este es un ejemplo de cómo respuestas de mitigación al cambioclimático pueden articularse a otras propuestas deconservación en áreas protegidas, como las planteadas a partirde iniciativas Reducción de Emisiones Provocadas porDeforestación y Degradación (REDD) (ver Recuadro 5.10 enel Capítulo V).

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84

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. BOSQUES

Los países de América Latina y el Caribe con las reservasde mejor desempeño incluyen a Costa Rica, Jamaica yArgentina, mientras que los que tienen las reservas conmayores retos incluyen a Brasil, Venezuela, Guatemala,Paraguay y Suriname. El éxito en la administración yefectividad de las áreas naturales protegidas es altamentedependiente de cuán efectivas son las institucionesnacionales y locales. Como se demuestra en Wright yotros (2007), también es importante considerar que eldiseño e implementación de programas de manejo deáreas protegidas, al igual que su éxito, está determinadotambién por el desempeño de las estructuras degobernabilidad. El estudio de estos autores resalta quela inestabilidad política, la corrupción y la pobrezaparecen comprometer la efectividad de las reservas enAmérica Latina y el Caribe. Por ello la comunidadcientífica necesita mejorar su comprensión de las causasde la variación en la efectividad del manejo de lasreservas, de tal forma que se realicen acciones paramejorarla en las reservas de bosques tropicales. Otroestudio que analiza el establecimiento de dos áreasprotegidas en México y Guatemala (Manuel-Navarretey otros, 2006) recomienda incorporar los diferentesactores que intervienen a nivel local (comunidades,organizaciones no gubernamentales, oficinas estatalesde implementación), y a nivel nacional (gobiernos

centrales) en la gestión de áreas protegidas. Este estudioseñala la importancia de analizar la naturaleza de lasdinámicas locales de conflicto, así como los significadosy las creencias que las poblaciones locales tienen sobresu entorno a partir de los discursos existentes sobre laconservación.

Además, la efectividad de los sistemas de áreasprotegidas como mecanismos de conservación se vencuestionadas por nuevos procesos de cambio global.Por ejemplo, los cambios en la distribución espacial deuna especie amenazada sugieren la necesidad degenerar formas de gestión novedosas dentro de losespacios protegidos que respondan a procesos decambio climático (Hagerman y otros, 2010). Un esfuerzoreciente por analizar el funcionamiento y la efectividadde las reservas de la biósfera desde el enfoque generadopor la UNESCO es el proyecto Gobernanza de laBiodiversidad11 el cual busca profundizar en lasrespuestas a las tensiones generadas entre los objetivosde conservación y los objetivos de desarrollo humanointegrando en su análisis enfoques socio-ecológicos.

Por otro lado, las presiones socioeconómicas asociadascon la demanda de recursos evidencian diferentesintereses sobre el uso de suelo ya sea para finesproductivos, de subsistencia o para fines deconservación. En el largo plazo, es importante promoverla articulación entre los objetivos de políticas deconservación con los objetivos establecidos en laspolíticas económicas y/o agrícolas a nivel de las políticasnacionales. De otra manera, la diferencia entre lasdemandas y los intereses sobre los recursos naturalesgenerará conflictos distributivos en el acceso, uso ycontrol de los recursos (ver Recuadro 2.3). Se debetambién tomar en cuenta que el hecho de que unporcentaje del territorio esté bajo un esquema deprotección, o bajo alguna categoría de manejo noimplica que los esquemas de conservación sean máseficientes.

3.3.2. PRODUCCIÓN FORESTAL CERTIFICADA YMANEJO FORESTAL COMUNITARIO

Según datos del PNUMA y del Consejo deAdministración Forestal (Forest Stewardship Council,FSC,-PNUMA, 2008), el número de hectáreas destinadasa la producción forestal certificada en ALC, ha pasadode poco menos de cuatro millones a casi 10 millonesde 2002 a 2007, es decir, ha aumentado en promedioun poco más de un millón de hectáreas anuales (verGráfico 2.7).

11 http://www.biodiversitygovernance.de/publications.php?lang=en

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

853. BOSQUES

América Latina y el Caribe

10

9

8

7

6

5

4

32002 2003 2004 2005 2006 2007

Fuente: PNUMA/DEWA/GRID-EUROPA, GEO Data portal: Compilado de FSC (Forest Stewardship Council).

GRÁFICO 2.7

Número de hectáreas destinadas anualmente a la producción forestal certificada por el FSC(En millones de hectáreas)

Un beneficio colateral muy relevante de este tipo demanejo es la reducción de la pérdida de la poblaciónlocal a través de la emigración hacia áreas urbanas ohacia otros países. Sin embargo, la certificación nonecesariamente se traduce en un beneficio económicoque permita a los productores cuando menos compensarlos gastos que la propia certificación representa, pueslos mercados no reconocen que ésta es un valoragregado de gran importancia. Así, la maderalatinoamericana certificada compite en desigualdad decondiciones con los grandes volúmenes de madera nocertificada, frecuentemente de procedencia extranjera,que se vende masivamente a precios muy bajos. La faltade incentivos económicos y la poca respuesta de losconsumidores puede traducirse tanto en una pérdidade interés en la certificación como, en algunos casos,en un incentivo no sólo para las prácticas pocosustentables, sino incluso para actividades extractivasal margen de la ley (Urquiza, 2009).

La forestería comunitaria, entendida como una estrategiade desarrollo que parte de la gestión comunitaria de losrecursos naturales (en particular los recursos forestales)ha sido promovida como una estrategia viable que buscaconciliar el cumplimiento de objetivos de conservacióncon las prácticas locales y los medios de vida de laspoblaciones locales. Según este planteamiento, laacción colectiva favorece el cumplimiento de losobjetivos de conservación a largo plazo, estableciendo

reglas de uso, manejo y acceso, mecanismos de controly formas organizativas en torno a los recursos del bosque(ver por ejemplo Ostrom, 1990 y Chhatre y Agrawal,2008). Algunas de las experiencias más conocidas enmanejo comunitario de recursos forestales en la región

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. BOSQUES

se encuentran en México, en especial el manejo deejidos, y en Guatemala en los bosques comunales y enlas concesiones forestales comunitarias dentro de laReserva de la Biósfera Maya (Larson y otros, 2009).Otras experiencias a nivel regional en recursos forestalesno maderables, son las reservas extractivas de Brasil oel manejo de la castaña en Bolivia (Cronkleton, 2008).Estas experiencias dependen de iniciativas locales paraorganizar las actividades de aprovechamiento de estosrecursos.

El manejo comunitario debe cobrar mayor importanciaque la que ya tiene en el sector productivo forestal(PNUMA, 2003; Merino, 2006; Merino y Bray 2005).Los ejemplos exitosos de manejo forestal incluyen adecenas de casos de empresas comunitarias locales quehan alcanzado capacidad competitiva en el mercadode la madera (Antinori y Bray, 2005). Todos estos casosdejan como enseñanza la importancia que tiene laorganización social en las comunidades y en generallas relaciones de fuerza en el manejo del territorio.

3.3.3 MONITOREO E IMPACTO DE LOS INCENDIOSFORESTALES

Los incendios forestales consumen grandes extensionesde áreas boscosas, y su manejo y prevención soncomplejos debido a que no pueden separarse aquellosincendios de origen natural de los provocados pordiversas prácticas antrópicas (por ejemplo, sistemasproductivos que incorporan la quema como una formade eliminación de la cubierta vegetal o de fertilización).Además de esto, no existe un consenso entre lasmetodologías de monitoreo y evaluación utilizadas, nien la terminología a emplearse en los diversos reportesexistentes (FAO, 2007d).

Los incendios forestales han ido creciendo enimportancia a nivel mundial, y ALC no es unaexcepción. En 1998 sólo en Centroamérica se perdieronmás de 2,5 millones de hectáreas de bosque a causa delos incendios (en Nicaragua, Guatemala y Honduras900 mil, 650 mil y 575 mil hectáreas respectivamente),en México, 850 mil se quemaron y en el resto deLatinoamérica los incendios afectaron 5 millones dehectáreas (Cochrane, 2002). En 2004, utilizandoimágenes multitemporales del satélite MODIS sedetectaron 14.446 polígonos correspondientes a áreasquemadas en América Latina, abarcando un área de unpoco más de 15.300 hectáreas (Chuvieco y otros, 2008).Los países más afectados fueron Argentina, Brasil,Colombia, Bolivia y Venezuela. Las sabanas deColombia y Venezuela, el límite de bosques tropicalesentre Brasil y Bolivia y las provincias del centro y nortede Argentina fueron las regiones de mayores áreasquemadas. Entre los años 2000 y 2004, en ALC se hanperdido aproximadamente 3,3 millones de hectáreas acausa de los incendios (FAO, 2007c). México reporta984.909 hectáreas afectadas en zonas arboladas,arbustos y pastizales para el período 2000-2004(SEMARNAT 2009). Es difícil estimar el impacto regionaltotal debido a la falta de información, pues, por ejemplo,en la zona insular del Caribe no existen datoscuantitativos recientes. Aún así, es importantemencionar que los incendios se reportan mayormenteen ecosistemas de bosques tropicales secos y semisecos(Robbins, 2006).

En los últimos 31 años, las áreas protegidas de Argentina,Bolivia, Chile y Uruguay han sido las más afectadas porlos incendios, particularmente en los pastizales naturaleso en aquellos pastizales secundarios que son productode una alteración previa en la vegetación. Las sabanasy los matorrales cerrados de Brasil, Bolivia, Colombia yVenezuela, han sido afectados de forma menos severa,pero el 12% de las áreas quemadas corresponde abosques tropicales lluviosos de la cuenca amazónica(Manta Nolasco, 2006), uno de los ecosistemas másproductivos del planeta. En todos los casos, y auncuando no se cuente con un monitoreo adecuado nicon cifras exactas, la actividad humana ha sido señaladacomo la principal fuente de origen de dichos incendiosy como una causa directa de la magnitud de los dañosque alcanzan a provocar (Cochrane, 2002; FAO, 2007d;Manta Nolasco, 2006; Robbins, 2006).

Como resultado de diversos esfuerzos para prevenir ymanejar los incendios forestales, existen varias accionesde colaboración que se están llevando a cabo entrediversos países de toda la región. En México la detecciónde puntos de calor está a cargo de la Comisión Nacionalpara el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad,

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

873. BOSQUES

(CONABIO) y las prácticas de manejo y prevenciónestán a cargo principalmente de la Comisión NacionalForestal; Guatemala, El Salvador, Costa Rica y Hondurasoperan con el Programa de Detección de IncendiosForestales. En Sudamérica, el servicio meteorológiconacional de Argentina provee dos índices de incendiosque son diariamente actualizados; en Bolivia, dentrodel proyecto de manejo sustentable de bosques(BOLFOR) se ha establecido un sitio de red que proveedatos del sistema de alerta temprana para fuego (SATIF)

BoliviaBolivia

BrasilBrasil

Santa CruzSanta Cruz

AndesAndesParaguayParaguay

NN

200 Km200 Km

Fuente: http://earthobservatory.nasa.gov/Newsroom/NewImages/Images/Bolivia_AMO_2007268_lrg.jpg

Puntos de calor detectados por el sistema de alerta temprana de la NASAdurante la temporada de “chaqueo” 2007

MAPA 2.3

diariamente actualizados; en Brasil, PREVFOGO, através del Instituto Nacional de Meteorología (INMET),produce reportes de alerta temprana, mientras Pro Arcof Deforestation (PROARCO), a través del InstitutoNacional de Investigación Espacial (INPE) monitorea lospuntos de calor casi en tiempo real (Brasil, 2005a, b)(ver Mapa 2.3). También existen los proyectos deMonitoreo Forestal Independiente (MFI) (ver Recuadro2.4).

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88

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. BOSQUES

Los proyectos de Monitoreo Forestal Independiente (MFI) financiados por Global Witness se basan en una cooperaciónentre diferentes actores incluyendo gobiernos, sociedad civil y sector privado de los países productores de madera. Elprograma tiene como objetivo principal, analizar infracciones en casos de ilegalidad; abordando el tema de incendioscomo una de las principales amenazas. El uso de incendios para la conversión de bosques a cultivos agrícolas o actividadesganaderas ha sido ampliamente estudiado como una de las principales presiones asociadas con procesos de cambio deuso de suelo especialmente en el Africa Sub-sahariana y América Latina (Lauk y Erb, 2009).

Para enfrentar estas presiones el MFI ofrece una capacitación en técnicas de monitoreo forestal, que incluye monitoreo encontra de incendios y acompañamiento legal en procesos de seguimiento a casos judiciales, para asegurar que los beneficiosderivados del manejo forestal no se vean afectados por actividades ilegales o costos de transacción asociados con lavigilancia que los grupos locales deben ejercer para proteger sus derechos de exclusión frente a terceros. El programa tieneinfluencia a nivel global y en ALC se está implementando en Honduras, Nicaragua y Perú.

Monitoreo forestal independienteRECUADRO 2.4

Fuente: Elaborado por I. Monterroso con datos de Global Witness (http://www.globalwitness.org/pages/es/ifm.html) y Lauk y Erb, 2009.

3.4 CAMBIO CLIMÁTICO Y RESPUESTAFORESTAL

En años recientes la fenología, que es el estudio deeventos biológicos recurrentes y su relación con elclima, ha sido reconocida como una herramienta paradetectar el efecto del cambio climático en las plantas yanimales (Recuadro 2.5). A pesar de todas lascoincidencias en las conclusiones y de las extensasevidencias de cambios en el clima y sistemas biológicos

sustentados por el cuarto informe de evaluación delGrupo I y II del Panel Intergubernamental sobre elCambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), lasevidencias de estos cambios para las regiones tropicalesaún son muy débiles y no están totalmentedocumentadas. De hecho se han documentado máscasos asociados con el cambio climático y respuestasecológicas en Estados Unidos de Norteamérica que entoda la región de América Latina, donde el IPCC (2007b)solamente ha reportado cinco estudios asociados conalgún nivel de respuesta forestal al cambio climático.

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

893. BOSQUES

Los patrones fenológicos (es decir, el patrón de los procesosperiódicos tales como la producción o pérdida de hojas,floración y fructificación) de la vegetación de los bosquesamazónicos aún están por ser descubiertos. La pocainformación disponible hasta ahora muestra la presencia depatrones estacionales de floración y fructificación,concentrados en la época más seca del año. Si ocurriesencambios similares en la fenología reproductiva de las plantasen los trópicos, así como se describe para los ecosistemastemplados, puede haber mayores consecuencias derivadasdel cambio climático global para este sistema diverso.

Más del 80% de las plantas tropicales dependen de animalespara su polinización y dispersión de semillas y muchosanimales dependen de las plantas para el suministro dealimentos. Una interrupción en la sincronía de la cadena,debido a una floración o fructificación temprana (o tardía),puede conducir a la pérdida de muchas especies a travésde la eliminación de las interacciones planta-animales.

Los patrones fenológicos de la producción de hojas son aúnmenos comprendidos, a pesar de su importancia en todoslos procesos del bosque, desde la fotosíntesis hasta lareproducción. En los trópicos húmedos, se supone que elpatrón es menos estacional que en los ecosistemas áridos otemplados, y que los procesos como la producción de hojasocurren en todas las estaciones; pero la ausencia de seriesde datos históricos es la principal restricción para lacomprensión de la dinámica del bosque amazónico y lainfluencia del cambio climático sobre él.

Fuente: Elaborado por P. Mollerato.

Patrón fenológico del Bosque AmazónicoRECUADRO 2.5

La gran extensión y alta diversidad del bosque amazónicolimita el desarrollo de estudios extensos a nivel de campo.Sin embargo, la creación de una red de estacionesfenológicas asociadas a estaciones climáticas establecidasy a sistemas de monitoreo del carbono representaría un granpaso hacia la comprensión de los efectos del cambioclimático en los patrones reproductivos y del ciclo de vidade las hojas de los bosques tropicales. Un sistema similar seha usado en Europa por muchos años e implementado enáreas o países que no cuentan con herramientas de este tipo(acción COST 725 «Establecimiento de una plataformaeuropea de datos fenológicos para aplicacionesclimatológicas»: http://www.cost725.org), lo que haconducido a una forma eficiente de monitorear los cambiosclimáticos basado en la fenología.

La planeación de una red de monitoreo de la fenología paralos trópicos, o aun cuando se realice solamente para la regiónamazónica, es una tarea inmensa. Sin embargo, tal esfuerzopodría proveer mucho más que solamente los resultadosesperados del monitoreo. Los datos de la red de monitoreode la fenología permitirían hacer más confiables lasactividades de extracción debido a la existencia de uncalendario reproductivo para las especies clave de cadaecosistema. Las comparaciones cruzadas pueden mejorarnuestro conocimiento de la dinámica de los bosques y lasconsecuencias de la pérdida de polinizadores y dispersoresde semillas.

En un esfuerzo para mejorar la comprensión de lastendencias actuales del clima, se ha realizado unacantidad limitada de estudios regionales para AméricaLatina y el Caribe, que muestran patrones de cambiosen los eventos extremos que concuerdan con uncalentamiento generalizado y una tendencia positivaen la ocurrencia de lluvias intensas seguidas por díassecos (Magrin y otros, 2007). Sin embargo, la ausenciade registros a largo plazo de la temperatura diaria y laprecipitación en la mayoría de los países tropicales deSudamérica no permite tener una evidencia concluyentede las tendencias de los eventos extremos.

Las especies de plantas y animales tropicales puedenser muy sensibles a pequeñas variaciones del clima, yaque los sistemas biológicos responden lentamente a loscambios relativamente rápidos (Magrin y otros, 2007).Usando modelos climáticos del Centro Hadley de laOficina Meteorológica Británica, el Grupo II del IPCCresalta el trabajo de varios investigadores que apuntanhacia el potencial de extinción del 24% de las 138especies de árboles del centro de Brasil para 2050 con

un aumento proyectado de 2°C en la temperatura(Magrin y otros, 2007).

Los estudios sobre el ecosistema amazónico, resumidosen Betts y otros (2008), establecen que el calentamientoy el incremento de la sequía conducirán a un aumentoen la altitud de zonas específicas de temperatura y otrascondiciones meteorológicas clave, como el incrementoen el nivel de condensación, con la consecuentemigración de las especies (o ecosistemas completos)hacia remanentes más altos donde predominarán lascondiciones a las cuales están adaptados. En la mismaforma, Killeen y Solórzano (2008) llaman la atenciónsobre la vulnerabilidad al cambio climático de regionesmontañosas altamente biodiversas, como los Andes ylos escudos brasileño y guyanés, que podrían convertirseen refugios potenciales para especies de tierras bajasque no toleran el calentamiento. Más aún, Powel y otros(2006) han demostrado por primera vez una conexiónsignificativa entre el cambio climático, el microclima yla desaparición de la biodiversidad. Su estudio, basadoen series de temperatura a largo plazo para varios

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. BOSQUES

bosques de niebla en América Latina, indicó que loscambios significativos en el microclima estánpromoviendo la extinción de hasta el 67% de las 110especies de ranas arlequín.

Estos cambios pequeños en el microclima forestal,debido al cambio climático, pueden no ser notados enmuchos casos, pero representan una alerta tempranapara los bosques de América Latina ante los efectos delcambio climático.

Aunque los efectos de las emisiones crecientes de CO2,fijación de nitrógeno, contaminación del aire (porejemplo por aerosoles provenientes de la quema debiomasa) y cambio climático aún no son totalmentecomprendidos, las evidencias preliminares sugieren quepueden causar cambios significativos en la estructurade los ecosistemas forestales y en la composiciónespecífica, particularmente en la Amazonia (PNUMA,2009).

Los estudios recientes han demostrado que existe unproceso de migración y una cierta expansión de algunostipos de ecosistemas en la medida que responden a loscambios en las condiciones climáticas y bioquímicas(Silva y otros, 2008; citado en PNUMA, 2009). Porejemplo, hay nuevas evidencias del centro de Brasil querevelan una migración de los bosques de galería a lasregiones de sabanas vecinas (PNUMA, 2009). Parece

que los cambios climáticos pueden causar la migraciónde los ecosistemas y que los mecanismos subsecuentesde retroalimentación, incluyendo la acumulación denutrientes y la supresión de incendios, pueden empujaraún más el proceso de expansión (Silva y otros, 2008;citado en PNUMA, 2009). De la misma forma, Phillipsy otros (2002) encontraron un incremento en la densidady predominio de grandes lianas en las últimas dosdécadas del siglo XX a lo ancho de la Amazoniaoccidental y varios escenarios AOGMC (Atmospheric-Oceanic Global Circulations Models) indican unatendencia a la «sabanización» de la Amazonia oriental(Nobre y otros, 2005), y de los bosques tropicales delcentro y sur de México (Arriaga y Gómez, 2004). Loreportado por Phillips y otros (2002), fue luegoconfirmado en forma independiente por Wright yCalderón (2005) que documentaron un aumento similaren el predominio de lianas en la Isla de Barro Coloradoen Panamá. En un escenario de cambio climáticotendiente a climas moderadamente más calientes y secosprobado en los altiplanos de Chiapas, al sur de México,se mostró que algunas especies endémicas dedistribución restringida pueden potencialmenteextinguirse (Golicher y otros, 2008). Otros estudiossugieren que la vegetación semi-árida del noreste deBrasil podría ser reemplazada por vegetación árida(Nobre y otros, 2005), como también podría ocurrir enla mayor parte del centro y norte de México (CondeÁlvarez y Saldaña Zorrilla, 2007).

En los bosques tropicales deciduos (selvas bajascaducofilias) de México, Costa Rica, Venezuela y Brasil,la evidencia reciente apunta a cambios en laproductividad de los ecosistemas debido al cambioclimático (Sánchez Azofeifa y Quesada, 2009), y revelaque el bosque tropical deciduo, específicamente ellocalizado a lo largo de la costa del Pacífico de México(estado de Jalisco), puede representar un indicadorúnico de la respuesta al cambio climático de losecosistemas tropicales, y puede proveer una respuestafenológica que es más exacta y uniforme, y más fácil demodelar y predecir que las observaciones en bosqueslluviosos tropicales.

El marco de las nuevas negociaciones sobre el cambioclimático ha puesto a los bosques en el centro de laspropuestas de mitigación, a partir de iniciativas comoReducción de Emisiones Provocadas por Deforestacióny Degradación (REDD) (véase Recuadro 5.10, CapítuloV) cuyo objetivo principal es reducir las emisiones degases de efecto invernadero, especialmente de dióxidode carbono, provenientes de la deforestación ydegradación de los bosques. La posibilidad de convertira los bosques en sumideros de carbono que podríannegociarse a través de transacciones de mercado ha

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

913. BOSQUES

modificado irreversiblemente la percepción social sobrelas zonas boscosas, como áreas lejanas que generanpocos beneficios al desarrollo económico y social (RRI,2010). Estas discusiones han puesto de manifiesto unaserie de riesgos y oportunidades, vinculadas a losecosistemas forestales y los grupos que les habitan. Porejemplo, la posibilidad de fortalecer los derechos depoblaciones locales e indígenas que han habitadohistóricamente las áreas forestales y la necesidad deaclarar quién tiene el derecho sobre el carbono y comose deben constituir los procesos de toma de decisiónalrededor. Finalmente, es importante también reconocerque la inclusión de los bosques en los procesos denegociación de cambio climático supone unaoportunidad para avanzar en la gobernanza de losrecursos forestales a nivel mundial.

3. 5 BOSQUES Y SERVICIOS ECOSISTÉMICOS

El cambio antropogénico en el uso del suelo es uno delos procesos más importantes que impulsan el cambioambiental global. Aproximadamente el 50% del árealibre de hielo ha sido profundamente alterada poractividades humanas (Turner y otros, 2007). A lo largodel tiempo, el impacto conjunto de los cambioshumanos en el uso del suelo ha ejercido más y máspresión en los bienes y servicios ecosistémicos quesostienen la vida humana y mantienen la integridad delos ecosistemas (Daily y otros, 1997).

La comprensión de las causas del cambio en el uso delsuelo, y de forma relevante, de cómo podríamos

intervenir para reducir los impactos negativos que tieneen los servicios ecosistémicos, es una empresaimportante pero difícil. El cambio de uso del suelo esimpulsado por la interacción compleja y dinámica defactores estructurales (a gran escala) e inmediatos (apequeña escala) (Lambin y otros, 2003). A fin deentender completamente las causas de los patronesglobales de cambio de uso del suelo, necesitamoscomprender cómo las influencias a gran escala llevan adiferentes resultados en distintos sitios (Turner y otros,2007).

Un objetivo importante para la investigación del cambiode uso del suelo es identificar cómo los programasgubernamentales de conservación pueden intervenirpara aliviar los impactos negativos en los servicios delos ecosistemas. Los resultados de los programasnacionales de conservación pueden diferir de lugar alugar de la misma manera en que las influencias a granescala en el uso del suelo pueden conducir a diferentesresultados en lugares específicos. Consecuentemente,la investigación científica juega un papel importante alproveer a los encargados del manejo de áreas deconservación, de información sobre cómo factores depequeña escala tienen influencias sobre lo que se puedelograr con programas particulares de conservación enlugares específicos.

Un ejemplo del nexo entre la investigación y laevaluación de las políticas públicas es Costa Rica, dondese ha implementado un número importante deprogramas de conservación cuyo objetivo es modificarla forma en que la gente usa la tierra para reducir los

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. BOSQUES

impactos negativos en los servicios de los ecosistemas.Los dos programas con mayor influencia son el sistemanacional de áreas protegidas y el programa de pagospor servicios ambientales (o ecosistémicos), llamado PSA(Pagos por Servicios Ambientales).

El programa PSA comenzó en 1997 y complementa elsistema de áreas protegidas retribuyendoeconómicamente a los dueños de la tierra para protegerlos bosques o reforestar en tierras privadas adyacentes.La provincia de Guanacaste en el noroeste de CostaRica es un buen caso de estudio para la investigaciónde las causas estructurales e inmediatas del cambio deuso del suelo y los factores a pequeña escala queimpactan los resultados de los programas deconservación, especialmente aquellos asociados conpagos por servicios ambientales.

Tradicionalmente una región ganadera, Guanacaste hasufrido un significativo cambio social y económico enlos últimos veinte años con la rápida expansión delturismo y el comercio, acompañada de un acentuadodecrecimiento en la importancia de la agricultura y laganadería en la economía regional. Desde la décadade los años 30, la cobertura boscosa se fue perdiendoconstantemente a medida que los bosques se convertíanen zonas de pastoreo para alimentar al ganado. Estodejó a la región con una cobertura forestal natural casi

nula al inicio de los años 80 (Arroyo-Mora y otros, 2005).Desde entonces, sin embargo, la cobertura forestal seha ido incrementando a medida que se abandonaronlos pastizales permitiendo la recuperación natural delos bosques. Hoy en día, los bosques secundariosjóvenes cubren cerca del 47% del área terrestre de estazona (Sánchez-Azofeifa y otros, 2006). Este patrón depérdida y recuperación forestal parece ser un buenejemplo de transición forestal (Rudel y otros, 2005) (verRecuadro 2.6).

Sin embargo, esta es una imagen simplista del cambiode uso del suelo que ocurre en Guanacaste, Costa Rica.En escalas más pequeñas, hay patrones locales depérdida de bosques causados por el desarrolloresidencial y turístico, la expansión de grandes agro-negocios y la tala de madera, además del impacto delos incendios espontáneos. Este patrón de deforestacióna pequeña escala contribuyó a la pérdida de más de 8mil hectáreas de bosques entre 2000 y 2005. Algunasentrevistas con los dueños de las tierras revelan que losbosques secundarios jóvenes de Guanacaste sonvulnerables a las presiones de las nuevas oportunidadeseconómicas emergentes en la medida en que los dueñosde la tierra buscan nuevas maneras de sustentar suexistencia en una economía que cambia rápidamenteo, alternativamente, venden sus propiedades adesarrolladores extranjeros. Esta situación muestra cómolos factores locales específicos pueden tener impactosobre el desempeño de los programas de conservación.

El aumento de los precios de los terrenos en Guanacasteha hecho que la tierra sea un recurso económicoimportante nuevamente y, en este contexto, los pagosrealizados bajo esquemas de PSA son muy bajos comopara motivar a la gente a proteger los bosques hacia elfuturo. Por otro lado, los impactos económicos yculturales asociados con la modernización y laglobalización han incrementado los costos de la vida ycambiado las aspiraciones y los estilos de vida de losdueños tradicionales de las tierras. En años recientes,esto ha motivado a muchas familias a venderpropiedades a inversores extranjeros y a buscar nuevasoportunidades de empleo en el turismo y el comercio;es poco probable que los pagos realizados en el contextode PSA ofrezcan un gran incentivo a la nueva generaciónde dueños extranjeros que tienen aspiraciones diferentesde uso de la tierra a las de los propietarios originales.En otras palabras, en vez de ser llamados «bosques entransición» deberían considerarse «bosques en pausa»ya que su status puede cambiar de formaextremadamente rápida a medida que los cambios enlas condiciones socio-económicas puedan promovernuevamente su deforestación (Calvo Alvarado y otros,2009).

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

933. BOSQUES

Históricamente ha habido un intenso uso forestal en la región, además de desmontes de vegetación a fin de cambiar el usodel suelo por desarrollos urbanos y actividades agropecuarias y mineras, entre otras. Sin embargo, en algunas partes se hapresentado el fenómeno de transición forestal, definida como la reforestación –rebrote– natural de un bosque, después delabandono de tierras originalmente forestales que habían sido transformadas y que se puede llevar a cabo por dos razonesespecíficas que presentan diferentes variables (Rudel y otros, 2005):

·La primera es el abandono de las tierras laborables como consecuencia de la búsqueda por parte de loscampesinos de trabajos más redituables económicamente, o lo que Rudel y otros (2005) denominan como “lavía del desarrollo económico”. Esta tendencia se puede ver acrecentada por las decisiones políticas de decretaralgunas tierras como parques o áreas de reserva.

·La segunda se lleva a cabo en ciudades cuya capacidad para importar productos forestales es mínima. Debidoa esto, y a la deforestación que presentan, los campesinos y agricultores optan por desarrollar plantacionesforestales en vez de actividades agrícolas o ganaderas.

En países donde el agotamiento de las tierras, la pobreza y la ausencia de oportunidades económicas, además de lospatrones culturales emergentes están forzando a los campesinos a abandonar sus tierras y migrar hacia regiones o paísesmás ricos, la transición forestal se está llevando a cabo lentamente. Este es el caso de algunas regiones, como Michoacán,en México (Klooster, 2000), la Amazonia ecuatoriana y las tierras altas de Ecuador (Preston, 1990 en Rudel y otros, 2002).En Brasil no se espera una transición forestal porque las presiones de la población rural que carece de tierras y tiende aocupar rápidamente terrenos abandonados, impide el rebrote de los bosques (Rudel y otros, 2002).

Transición forestalRECUADRO 2.6

Fuente: Elaborado a partir de Rudel y otros, 2002, 2005. Klooster, 2000.

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94

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

4. BIODIVERSIDAD

4. BIODIVERSIDAD

El Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) de lasNaciones Unidas establece formalmente que porbiodiversidad «se entiende la variabilidad de organismosvivos de cualquier fuente, incluidos, entre otras cosas,los ecosistemas terrestres y marinos y otros ecosistemasacuáticos y los complejos ecológicos de los que formanparte; comprende la diversidad dentro de cada especie,entre las especies y de los ecosistemas» (CDB, 2001).Esta definición pone de relieve los múltiples aspectosdel concepto: incluye los varios niveles de expresión(ecosistemas, especies, poblaciones y genotipos), deescala geográfica (local, regional, continental, global)y temporales en los que debe considerarse labiodiversidad, así como las interacciones entre ellos.

La biodiversidad no se distribuye de manera aleatoriani uniforme a través de la superficie del planeta, sinoque tiende a concentrarse en ciertos lugares particulares(ecorregiones). Además, la mayor parte de las especiesterrestres tienen áreas de distribución relativamentepequeñas que frecuentemente coincidengeográficamente, dando lugar a zonas de alta riquezade especies y/o de alta riqueza de especies exclusivas

de una región (endémicas). La región de América Latinay el Caribe constituye quizá el más significativoreservorio de biodiversidad del planeta, puesto quealberga una inmensa variedad de ecosistemas, especiesy genotipos (Dinerstein y otros, 1995).

Las ecorregiones son grandes áreas de tierra o agua quecontienen un conjunto geográficamente distinto decomunidades naturales que comparten (a) una granmayoría de sus especies y dinámica ecológica, (b)condiciones ambientales similares, y (c) interactúanecológicamente en formas que son críticas para supersistencia a largo plazo. Con solo alrededor del 15%de la superficie terrestre del planeta, en América Latinay el Caribe se encuentra cerca del 20% de lasecorregiones reconocidas a nivel mundial (Cuadro 2.7).Asimismo, el Fondo Mundial para la Conservación dela Naturaleza (WWF por sus siglas en inglés) haidentificado las llamadas 200 Globales, un grupo de238 ecorregiones (terrestres, marinas y de agua dulce)consideradas como prioritarias para la conservación anivel global y que, en conjunto, representan ejemplossobresalientes de la biodiversidad de cada continente ycuenca oceánica (WWF, 2008). Además, 53 de las 238ecorregiones globalmente importantes, se localizan enALC.

No es de sorprender que, como ya se mencionara, seisde los países de la región (Brasil, Colombia, Ecuador,México, Perú y Venezuela) hayan sido incluidos entrelos 17 países megadiversos del mundo –un grupo denaciones que comprenden menos del 10% de lasuperficie terrestre del planeta pero abrigan a alrededordel 70% de las especies de mamíferos, aves, reptiles,anfibios, plantas e insectos y la mayoría de los bosquestropicales húmedos, arrecifes coralinos y otrosecosistemas prioritarios del mundo (Mittermeier y otros,1997)– (Cuadro 2.7). Se trata de una región plena deendemismos al grado de que, por ejemplo, el 50% dela vida vegetal del Caribe es única en el mundo(Mittermeier y otros, 2004). Es en donde se encuentra

Ecorregiones Total Planeta ALC % del total

global

Terrestres 867 184 21

Dulceacuícolas 426 94 22

Marinas 232 36 15,5

Fuente: Olson y otros, 2001; Spalding y otros, 2007; Abell y otros, 2008.

América Latina y el Caribe: Número de ecorre-giones y porcentaje respecto al total global

CUADRO 2.7

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

954. BIODIVERSIDAD

el área ecológicamente más diversa de todo el planeta:la vertiente este de los Andes, cuya riqueza se debe auna gran variedad de causas como su posicióngeográfica, el gradiente altitudinal, su compleja historiageológica y la gran diversidad de microhábitats (Vander Hammen, 2002; Young, 2007).

Los sitios silvestres (wildlands) más relevantes del planetaen términos de biodiversidad incluyen a grandesextensiones de esta región, como los Llanos deVenezuela, el Pantanal (Matto Grosso en Brasil y partesde Bolivia y Paraguay), que es el humedal más grandedel mundo, y los Bañados del Este (Uruguay), que sonimportantes hábitats de vertebrados terrestres endémicosa estas regiones (Mittermeier y otros, 1997, Hillstrom yCollier-Hillstrom, 2003).

4.1 RIQUEZA DE ESPECIES

Es difícil estimar la diversidad específica que abriga laregión; de hecho, aún está lejos de conocerse concerteza el número total de especies que habitan elplaneta y sus diferentes regiones (Dirzo y Raven, 2003).Para algunos grupos de organismos –típicamenteaquellos que son más conspicuos, populares oeconómicamente importantes– se cuenta con catálogosrazonablemente completos de las especies conocidas,pero no así para aquellos organismos a los que no seles reconoce valor económico, que son pequeños,difíciles de colectar o de poco interés popular. El Cuadro2.8 muestra el porcentaje de especies conocidaspresentes en América Latina y el Caribe.

La muy alta riqueza biológica de la región puedeapreciarse claramente al examinar los patronesgeográficos de la diversidad. El Mapa 2.4 muestra ladensidad de especies de mamíferos terrestres y marinos(número de especies diferentes registrado en celdashexagonales contiguas de 22.300 km2 cada una; IUCNy otros, 2008a). Algunas de las zonas del mundo con

mayor densidad de especies de mamíferos terrestres seencuentran en Centroamérica y en la parte tropical deSudamérica; una alta diversidad de mamíferos marinosse concentra en el Mar Caribe y en el Pacífico central ala altura de Centroamérica; y el Golfo de California estan rico en especies que ha sido denominado «El acuariodel mundo». Una reciente expedición, que incluyóvarias inmersiones en un pequeño submarino, arrojóentre otros resultados la identificación de entre 15 y 20nuevas especies marinas (Aburto-Oropeza y otros,2010), y en Sudamérica Eshcmeyer (2006) encontró 465nuevas especies de peces en cuerpos de agua dulce entan sólo cinco años de investigación. Brasil es el paísque alberga el mayor número de especies nativas demamíferos en la región (ver Gráfico 2.8) con 648,seguido por México con 523 (IUCN, 2008b).

América Latina y el Caribe: Número de especiesconocidas y porcentaje respecto al total globalconocido

CUADRO 2.8

Total especies Especies % del totalconocidas1 en América global

Latina yel Caribe

Aves 9.990 4.110 2 41%Mamíferos 5.847 1.791 1 30%Anfibios 6.347 3.148 3 50%Reptiles 8.734 3.060 1 35%Peces 30.700 9.597 5 31%Fuente: 1) IUCN, 2008b, 2) BirdLife International, 2003, 3) Frost, 2008,4) Uetz, 2008, 5) Froese y Pauly, 2008.

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96

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Fuente: IUCN 2008b.

MAPA 2.4

Densidad de especies de mamíferos terrestres y de agua dulce (en color café)y marinos (en azul) en un retícula de celdas hexagonales

Número total de especiesnativasNúmero de especiesnativas endémicasNúmero de especiesamenazadas (CR+EN+VU)Número de especiesendémicas amenazadas

Bra

sil

Méx

ico

Perú

Col

ombi

a

Arg

entin

a

Ecua

dor

Bol

ivia

Ven

ezue

la

700

600

500

400

300

200

100

0

Núm

ero

dees

peci

es

GRÁFICO 2.8

Los ocho países de América Latina y el Caribe con mayor diversidad de especies de mamíferos

Fuente: IUCN, 2008b.Nota: Se muestran el número total de especies nativas, el número de especies nativas endémicas, amenazadas y endémicas amenazadas. El número totalde especies nativas incluye a las especies extintas. CR = Críticamente en peligro; EN = En peligro; VU = Vulnerable

El Mapa 2.5 muestra la densidad de especies de anfibiosa nivel mundial (IUCN, 2008c). Las zonas del mundocon mayor densidad de especies de anfibios seencuentran al sur de Mesoamérica y en la parte tropicalde América del Sur. Brasil, con al menos 798 especies,es el país del mundo que alberga el mayor número deespecies de anfibios, seguido por Colombia. En elGráfico 2.9 se muestran los datos para los nueve países

con mayor riqueza de especies de anfibios en AméricaLatina y el Caribe.

El Mapa 2.6 muestra la riqueza estimada de especiesde plantas vasculares en las diferentes ecorregiones delALC; segunda región más diversa en el mundo para estegrupo de organismos (Kier y otros, 2005). De las 51ecorregiones con más de 5.000 especies de plantas

4. BIODIVERSIDAD

Page 99: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

97

Número de especies

Fuente: IUCN 2008c.

MAPA 2.5

Densidad de especies de anfibios en una retícula de celdas hexagonales

1-1011-2526-5051-8081-144

Número total de especiesnativasNúmero de especiesnativas endémicasNúmero de especiesamenazadas (CR+EN+VU)*Número de especiesendémicas amenazadas

900

800

700

600

500

400

300

200

100

0

Núm

ero

dees

peci

es

Bra

sil

Col

ombi

a

Ecua

dor

Perú

Méx

ico

Ven

ezue

la

Bol

ivia

Pana

Cos

taR

ica

Fuente: IUCN 2008c.Nota: Se muestra el número total de especies nativas, nativas endémicas, amenazadas y especies endémicas amenazadas.*EX= Extintas; CR = Críticamente en peligro; EN = En peligro; VU = Vulnerable.

GRÁFICO 2.9

Los nueve países de América Latina y el Caribe con mayor diversidad de especies de anfibios

12 http://www.eltiempo.com/verde/faunayflora/home/10-nuevas-especies-de- ranas - fue ron-descubie r ta s -en- la - se lva -co lombiana-de l -darien_4790946-1

13 ht tp : / /www.bbc.co .uk /mundo/c ienc ia_ tecnolog ia /2010/01/100119_1055_gale_lp.shtml

superiores, 33 se ubican en América Latina y el Caribe;nueve de estas ecorregiones localizadas enMesoamérica y Sudamérica abrigan, cada una, más de8.000 especies (Cuadro 2.7). A pesar del gran númerode especies conocidas, se sabe que hay muchas aúnpor conocer; en 2010 en las selvas del Dariéncolombiano se encontraron 10 nuevas especies de

ranas12 mientras en Ecuador encontraron 30 nuevasespecies13; entre ellas ranas y salamandras.

4. BIODIVERSIDAD

Page 100: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

98

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

El cuadro 2.9 muestra las 33 ecorregiones de AméricaLatina y el Caribe con mayor riqueza de especies deplantas superiores. Se muestra el nombre de cadaecorregión, el número operativo de especies y elintervalo estimado de la riqueza de especies. El intervaloestimado de la riqueza de especies de cada ecoregiónse derivó a partir de datos tanto publicados como nopublicados y de una variedad de información adicional,usando el más apropiado de cuatro diferentes métodosde estimación. El número operativo de especies es laestimación puntual considerada como más apropiadapara cada ecorregión y usada para otros análisis. Losdetalles metodológicos se describen en Kier (2005).

4. BIODIVERSIDAD

Page 101: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

99

Nombre de la Ecorregión No. operativo Intervalo estimado dede especies riqueza de especies

Bosques húmedos del Chocó-Darién 9.000 7.000-10.000Bosques costeros de Serra do Mar 9.000 6.000-11.000Bosques húmedos de Caqueta 9.000 7.000-11.000Bosques montanos de Talamanca 8.500 6.000-11.000Bosques húmedos del Suroeste del Amazonas 8.500 6.000-9.000Bosques húmedos del Atlántico del Istmo 8.000 5.000-11.000Bosques húmedos de Japura-Solimoes-Negro 8.000 5.000-10.000Bosques húmedos de las tierras altas de Guyana 8.000 6.500-9.000Bosque húmedos de Guiana 8.000 7.500-9.000Bosque húmedo de Solimoes-Japura 7.000 5.500-11.000Bosques húmedos del Napo 7.000 6.000-10.000Bosques húmedos del Pacífico del Istmo 6.500 5.000-8.000Bosques montanos del Noroeste Andino 6.500 5.500-7.000Reales bosques montanos de la Cordillera Oriental 6.500 5.500-8.000Bosques húmedos del Petén-Veracruz 6.500 5.000-8.000Yungas Peruanas 6.500 5.000-8.000Bosques húmedos de Negro-Branco 6.500 5.000-8.000Bosques húmedos de Uatuma-Trombetas 6.500 5.500-8.000Bosques interiores del Paraná-Paraiba 6.500 4.500-8.000Cerrado 6.500 6.500-8.000Bosques húmedos de Veracruz 6.000 4.500-7.000Yungas Bolivianas 6.000 5.000-8.000Bosques interiores de Bahia 6.000 5.000-7.500Bosques húmedos de Madeira-Tapajos 6.000 4.500-7.000Bosques montanos de la Cordillera Oriental 5.500 4.000-7.000Bosques montanos del Valle de Magdalena 5.500 4.000-7.000Bosques húmedos del occidente de Ecuador 5.300 4.500-7.000Bosques costeros de Bahia 5.000 4.000-6.000Bosques húmedos de Purus-Madeira 5.000 3.500-6.500Varzea de Purus 5.000 3.500-6.000Bosques húmedos de Jurua-Purus 5.000 4.000-6.500Bosques húmedos de Xingu-Tocantins-Araguaia 5.000 4.000-6.000Bosques húmedos de Tapajos-Xingu 5.000 4.000-6.000

América Latina y el Caribe: Las 33 ecorregiones con mayor riquezade especies de plantas superiores

CUADRO 2.9

Fuente: Kier y otros, 2005.

4.2. PÉRDIDA Y FRAGMENTACIÓN DEHÁBITAT

Diversos factores socio-ambientales intervienen en lapérdida y fragmentación del hábitat en América Latina yel Caribe, entre los que destacan la presión demográfica,la globalización del mercado, la contaminación, elcambio climático, la sobreexplotación, la invasión deespecies exóticas, los cambios en el uso del suelo, ladeforestación y los incendios forestales, así como laexistencia de políticas débiles y mal implementadas,además de deficiencias en el cumplimiento de las leyes(Laurance, 1991; Lambin y otros, 2003; Hillstrom yCollier Hillstrom, 2003; PNUMA, 2007).

La pérdida y fragmentación del hábitat causan diversosefectos negativos sobre el funcionamiento ecológico delos sistemas naturales, por ejemplo, la composición yla estructura vegetal de los fragmentos de bosquesconservados se ven modificadas entre otros factores porel efecto de borde, es decir, por aquellos cambios enlas condiciones ecológicas asociados a fronterasabruptas en la vegetación (Wiens y otros, 1985; Harris,1988; Murcia, 1995; Barillas-Gómez, 2007). Asimismo,como consecuencia de la fragmentación del hábitatexiste una importante pérdida de plantas dependientesde organismos polinizadores para su reproducción yde aquellas que requieren áreas extensas para susupervivencia (por ejemplo, grandes depredadores yherbívoros de gran tamaño) (Laurance, 2004; Laurance,

4. BIODIVERSIDAD

Page 102: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

100

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

2007). Asimismo, Phillips y otros (2009) encontraronque según los escenarios predichos para los próximosaños, la selva del Amazonas puede ser una importantefuente de emisión de carbono a la atmósfera debido ala pérdida de biomasa vegetal como consecuencia dela muerte de diversas especies por el cambio en lospatrones climáticos.

Nueve de los 34 sitios identificados como «hotspots»de biodiversidad (sitios caracterizados por un alto nivel

Bosques abiertosde Pino-Encino de

la Sierra MadreIslas del Caribe

Mesoamérica

Tumbes-Chocó

Magdalena Cerrado

AndesTropicales

Bosques Valdivianosde Lluvia Invernal

de Chile

Bosque Atlánticode Brasil

Kilómetros

0 250 500 1.000

N

1.500 2.000

América Latina y el Caribe: de biodiversidadHotspotsMAPA 2.7

Provincia florísticade California

Fuente: Elaborado por los autores con datos de Mittermeier y otros (2004).

de endemismo de plantas –al menos 1.500 especiesendémicas– y de pérdida de hábitat –al menos un 70%de su hábitat original)– por Mittermeier y otros (2004)se encuentran en América Latina y el Caribe, a saber:parte de la provincia florística de California, los Andestropicales, Mesoamérica, las islas del Caribe, los bosquesabiertos de pino-encino de la Sierra Madre, los bosquesvaldivianos y de lluvia invernal de Chile, Tumbes-Chocó-Magdalena y el Cerrado y el bosque atlánticode Brasil (Mapa 2.7).

4. BIODIVERSIDAD

Page 103: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

101

El Grupo II del Panel Intergubernamental sobre CambioClimático (IPCC, por sus siglas en inglés) menciona quela deforestación y la degradación de bosques por mediode incendios forestales, tala selectiva, caza, efectos deborde y fragmentación representan la mayortransformación y amenaza a la biodiversidad enSudamérica (Magrin y otros, 2007); sin embargo, engeneral la causa más importante de pérdida de hábitaten la región en los últimos años ha sido la impresionanteexpansión que ha experimentado la agriculturacomercial de gran escala para la exportación, porejemplo de soja, biocombustibles, ganado para carne,frutales, vegetales y flores cortadas (World Bank, 2007).Las amenazas a la biodiversidad en los ecosistemasmarinos y costeros se presentan en la sección Mares yCostas del presente capítulo.

4.3. ESPECIES EN PELIGRO/EXTINTAS

Desafortunadamente, un número importante deevaluaciones y estudios recientes demuestran o sugierenque la inmensa biodiversidad de América Latina y elCaribe se está perdiendo o se encuentra seriamenteamenazada por las actividades humanas, a todos losniveles y a través de prácticamente toda la región. Dehecho, de acuerdo con la Evaluación de los Ecosistemasdel Milenio (MA, por sus siglas en inglés) en 2005; anivel global la biodiversidad está disminuyendo a tasassin precedentes en la historia humana y esta región nose encuentra a salvo de este proceso.

Cinco países de los 20 con un mayor número de especiesde fauna amenazadas y siete de los 20 con mayornúmero de especies de plantas amenazadas seencuentran en América Latina y el Caribe (IUCN,2008a),(ver cuadro 2.10). Desafortunadamente, el riesgode extinción aumenta para aquellos organismos quepresentan altos niveles de especialización y cuyotamaño corporal es mayor, como en el caso de muchosmamíferos, y es particularmente serio para las especies

Fuente: IUCN, 2008a

Especies de Fauna AmenazadasMéxico 636Colombia 429Ecuador 369Brasil 356Perú 261

Especies de Plantas AmenazadasBrasil 382Perú 275México 231Colombia 223Jamaica 209Panamá 194Cuba 163

América Latina y el Caribe: Países dentro de los veinte con mayor númerode especies de fauna y plantas amenazadas

CUADRO 2.10

consideradas raras (Ceballos y otros, 1998); situaciónque se acentúa con la disminución y fragmentación desu hábitat. La relevancia de ese hecho resalta al recordarque son más las especies raras que las comunes.

4. BIODIVERSIDAD

Page 104: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

102

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

La región es una de las más ricas en diversidad forestal;diez países de la región albergan, cada uno, a más de1.000 diferentes especies arbóreas (FAO, 2009a). Sinembargo, la región se encuentra también entre las quetienen un mayor número de especies arbóreas en peligrode extinción, amenazadas o vulnerables (FAO, 2005).La caoba de hoja grande o caoba de Honduras(Swietenia macrophylla), por ejemplo, figura en elprimer lugar del apéndice II de la CITES y su comerciodebe ser controlado (FAO, 2007c).

Entre las especies amenazadas en la región, los anfibiosde América Latina y el Caribe están sufriendo los estragosdel hongo quítrido (Batrachochytrium dendrobatydis)que, al igual que en otras regiones del mundo, hacausado muertes masivas de ranas y sapos. Aún cuandoexiste mucha polémica al respecto, se ha identificadoque la presencia de este hongo está relacionada con ladesaparición de nueve especies de ranas del géneroAtelopus y ha sido detectado en siete especies deEcuador, diez de Costa Rica, diez de Panamá, tres dePuerto Rico y al menos tres de México (Lips, 1999; Rony Merino-Viteri, 2000, Rollins-Smith y otros; 2002, Lipsy otros, 2003, Puschendorf, 2003; Lips y otros, 2004).En Cuba también se han encendido las señales dealarma, al igual que en Colombia y Ecuador. Panamáno ha corrido con mejor suerte, al grado de que la ranadorada (Atelopus zeteki) está el borde de la extinciónen sus hábitats naturales y solo se cuenta con estrategias

de conservación ex situ como un último esfuerzo paraevitar su pérdida definitiva (Mendelson III y otros, 2006).Aparentemente, la expansión de este hongo que hallegado al punto de convertirse en una verdaderapandemia para los anfibios, está relacionada con elincremento de la temperatura a consecuencia delcalentamiento global (Punds y Coloma, 2008) y algunosautores mencionan que las altas tasas de extinción enla región de América Latina y el Caribe se deben enparte a los cambios en las condiciones macro ymicroclimáticas (Heyer y otros, 1988; Stewart, 1995;Laurance y otros, 1996; Pounds y otros, 1999; Young yotros, 2000). Por otro lado, Lips y otros (2005)encontraron que siendo el cambio climático global unode los tres principales factores que contribuyen a ladisminución de las poblaciones de anfibios en elmundo, ha afectado también de manera significativa ala región de América Latina y el Caribe.

Desafortunadamente, este tipo de situación se repite alo largo de toda la región en diversos grupos deorganismos. Ricketts y otros (2005) muestran 595 sitiosdistribuidos en diferentes partes del mundo en dondese presenta el mismo problema y mencionan queAmérica Latina y el Caribe se encuentra inmersa en elepisodio contemporáneo de extinción, que rebasa tantoa los límites de los sitios donde las especies amenazadasse distribuyen como al conjunto de especies mássensibles (Mapa 2.8).

Fuente: Elaborado por Ricketts y otros 2005.Nota: Los puntos amarillos son sitios que poseen áreas protegidas al menos parcialmente y los puntos rojos son sitiossin áreas protegidas de los que no se cuenta con información.

MAPA 2.8

Mapa de los 595 sitios de extinción inminente

4. BIODIVERSIDAD

Page 105: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

103

4.4 RECURSOS GENÉTICOS

La información acerca de la diversidad genética quealberga la región es extremadamente limitada; los datosmás relevantes al respecto provienen de diversosestudios de la diversidad de aloenzimas en diferentesgrupos y, sobre todo, de los análisis de la diversidadgenética de especies cultivadas (Dirzo y Raven, 2003).La gran mayoría de las plantas de cultivo que se utilizanactualmente en el mundo tienen sus centros dediversidad genética en zonas bien definidas: losneotrópicos, el Medio Oriente, el Mediterráneo y nortede África, África oriental, el sur y sureste de Asia y China.Asimismo, se ha estimado en más de 118 especies lasplantas económicamente importantes que fuerondomesticadas o manipuladas por los agricultoresprehispánicos (Hernández, 1993), y el 50% de lasespecies que se consumen como alimento en el mundotienen su origen en la región mesoamericana (verRecuadro 2.7) lo que la convierte en uno de losprincipales centros mundiales de domesticación deplantas.

Una amplia proporción de las especies que habitan laregión de América Latina y el Caribe son endémicas, es

decir, no pueden encontrarse en ninguna otra parte delmundo. De las casi 10.000 especies de aves conocidasen el mundo, más de 2.500 son endémicas (i.e., tienenáreas de distribución menores a 50 mil km2). BirdLifeInternational (2003) ha identificado 218 regiones delmundo que son relativamente ricas en especiesendémicas de aves y son denominadas Áreas de AvesEndémicas (EBAs, por sus siglas en inglés); 111 EBA,equivalentes al 51% del total, se ubican en AméricaLatina y el Caribe. Unas 694 (el 39%) de las 1.791especies de mamíferos y el 70% del total de especies(3.148) de anfibios de la región son endémicas a ésta(IUCN, 2008b, 2008c). Aunque no se cuenta con datosigualmente detallados y exactos para otros grupos deorganismos, se ha estimado que alrededor del 40% delas especies de plantas superiores y el 45% de lasespecies de reptiles son también endémicos a la región.

La diversidad genética ha jugado un papel importanteen el desarrollo cultural y social de la región a lo largodel tiempo. Prueba de ello es la gran cantidad deespecies de importancia alimenticia y económica quese originaron y diversificaron en esta región y que, enaños recientes, la han puesto en la mira de ambiciososprogramas biotecnológicos.

4. BIODIVERSIDAD

Se estima que actualmente la humanidad utiliza alrededor de 50 mil diferentes especies vegetales (Bates, 1985; Vietmeyer,1990; Heywood, 1993; Heywood y Dulloo, 2005). El aprovechamiento de la diversidad biológica en América Latina esrelativamente reciente, con aproximadamente 14 mil años de antigüedad (MacNeish, 1992), concentra una alta proporciónde la diversidad de recursos vegetales del mundo. Aunque no existe una cifra exacta del número de especies de plantasútiles de la región, tan sólo en México existen cerca de 7 mil (Casas y Parra, 2007) y unas 4.400 en Perú (Brack, 2003).

No obstante los miles de años de historia agrícola en la región, cerca del 90% de las especies de flora útil que aprovechanlas comunidades rurales de América Latina y el Caribe son silvestres o arvenses que se obtienen mediante recolección enáreas forestales, bosques secundarios y áreas perturbadas (Casas y otros, 2008). Por esta razón, el desarrollo de estrategiasde manejo forestal sustentable es de particular relevancia en la región.

Vavilov (1926) y Harlan (1992) identificaron a Mesoamérica y a la Región Andina de Perú, Bolivia y Ecuador como losprincipales centros de domesticación de plantas en América Latina. Hoy en día, unas 7 mil diferentes especies de plantasse someten a alguna forma de cultivo o manejo en el mundo (Heywood y Dulloo, 2005) y de éstas, 2 mil a 3 mil especiespresentan signos claros de domesticación. En México unas 700 especies nativas se encuentran bajo manejo silvícola,cultivo de baja intensidad y otras formas de manejo y unas 200 de ellas son claramente domesticadas (Caballero y otros,1998, Casas y otros, 2007, Casas y Parra, 2007). En Perú cerca de 1.700 especies son cultivadas o semi-cultivadas y 182son claramente domesticadas (Brack, 2003).

A nivel mundial, son sólo un centenar de especies (que incluyen al maíz, trigo, cebada, arroz, fríjoles, soja y algodón, entreotras) las que sostienen mayormente la producción agrícola; unas 20 de esas especies provienen de Mesoamérica y 25específicamente de la región andina de Perú. Además, esas pocas especies comprenden numerosas variantes resultantesde la selección artificial a la que han estado sujetas históricamente en distintos ambientes naturales y culturales. Más aún,junto a tales especies son igualmente importantes sus parientes silvestres (incluyendo tanto taxa de la misma especie comootras especies del mismo género) con los que pueden intercambiar genes de manera natural. Por ejemplo, en Mesoaméricase encuentran seis diferentes teocintles cercanamente emparentados con el maíz, mientras que en la región andina existen230 especies silvestres cercanamente emparentadas con las nueve especies domesticadas de papa. Identificar a los parientessilvestres de las especies manejadas y definir estrategias para su protección es prioritario para la conservación de losrecursos genéticos de la región.

El aprovechamiento de la diversidad biológicaRECUADRO 2.7

Continúa en la siguiente página...

Page 106: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

104

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

4. BIODIVERSIDAD

El principal mecanismo del proceso de domesticación es la selección artificial, mediante la cual se favorecen algunas delas variantes que naturalmente se presentan en las poblaciones de organismos manejados, en detrimento de otras variantescuyos rasgos no son favorables para los humanos que las manipulan. En los centros de origen de la agricultura se presentauna alta agrobiodiversidad como resultado de la larga experimentación que las culturas locales han hecho medianteprocesos de selección artificial y de la presencia de parientes silvestres que continuamente intercambian informacióngenética con los organismos sujetos a domesticación.

La preocupación por la pérdida de la agrobiodiversidad ha motivado el establecimiento de programas mundiales deconservación ex situ (por ejemplo, en jardines botánicos, colecciones de germoplasma, etc.), así como de iniciativasinstitucionales y ciudadanas para la conservación in situ que buscan preservar la diversidad en el mismo contexto en elque se encuentra y evoluciona. La conservación in situ de la agrobiodiversidad implica mantener en un contexto agrícolaa las especies y variantes que son utilizadas, mantenidas y seleccionadas por los agricultores pero, también, mantener losprocesos de interacción genética con los parientes silvestres y los procesos culturales que favorecen el uso diversificado delos recursos agrícolas. Por esta razón, las culturas campesinas que hacen uso de la agrobiodiversidad y promueven su

generación y mantenimiento, tienen un valor fundamental en laconservación in situ.

El manejo de ambientes y organismos generalmente conlleva unareducción drástica de la diversidad biológica. Sin embargo, entre lospueblos indígenas se han documentado importantes excepciones. Porejemplo, en los sistemas agroforestales tradicionales del Valle deTehuacán se mantiene un 60% del total de especies de plantasexistentes en los bosques de los que se derivan y un 93% de ladiversidad genética de algunas especies arbóreas dominantes (Moreno-Calles y Casas, 2008). El manejo humano también puede incidir en ladiversidad genética dentro de una sola especie. Por ejemplo, endiferentes especies de cactáceas columnares usadas por sus frutoscomestibles en el Valle de Tehuacán, las poblaciones cultivadas ensolares y sistemas agroforestales presentan tanta o más diversidadgenética que las poblaciones silvestres (Casas y otros, 2006, 2007;Blancas y otros, 2006; Parra y otros, 2008; Moreno-Calles y Casas,2008). Los altos niveles de variación que se observan en las poblacionesmanejadas son el resultado de los altos niveles de flujo génico entrelas poblaciones y del interés de la gente por mantener una gran cantidadde variantes con diferentes atributos especiales que les ofrecen ventajasdiferenciales, mediante la continua introducción y reemplazo demateriales vegetales en las poblaciones manipuladas (Casas y otros,2006, 2007). Los sistemas tradicionales de manejo agroforestal sonimportantes reservorios de biodiversidad que merecen atenciónespecial para la conservación.

RECUADRO 2.7

... viene de la página anterior.

Fuente: Elaborado por A. Casas.

Colecta de frutos deStenocereus pruinosusen el Valle deTehuacán (México).

(C) Leonor Solís

4. 5 PROTECCIÓN DE LA BIODIVERSIDAD

Una de las estrategias para la protección de labiodiversidad es la definición de Áreas Protegidas (versección Bosques de este Capítulo). Los procesos socialesinvolucrados en la creación de áreas de protecciónpueden ser muy complejos; en ellos, la tenencia de latierra, las instituciones y comunidades locales y lasestructuras de poder juegan un importante papel deacuerdo no sólo a las características de cada país, sinode cada región. En América Latina y el Caribe lapropiedad de la tierra destinada a áreas protegidas estáfrecuentemente en manos de comunidades originarias

y los decretos para el establecimiento de áreas naturalesdeben incluir prioritariamente a los derechos,necesidades e intereses de los habitantes de las mismas.

Yorio (2008) y Painter y otros (2008), muestran dosestudios de caso en Argentina (en la Patagonia) y enBolivia, respectivamente, en los que se destaca laimportancia de abordar los proyectos de conservacióny protección de la biodiversidad en términos de lagobernanza local de los ecosistemas, delreconocimiento de la influencia de los impactos del serhumano fuera de las áreas de conservación, así comodel desarrollo e implementación de estrategias que

Page 107: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1054. BIODIVERSIDAD

permitan establecer acciones de conservación más alláde las mismas. En este sentido cabe resaltar el efectoque la protección de áreas específicas puede tener enáreas adyacentes o incluso alejadas de las mismas. EnCosta Rica, por ejemplo, las comunidades de herbáceasy arbustos de los alrededores de la Estación Biológicade Las Cruces, así como aquéllas de los alrededores dePuerto Jiménez y la Palma, son en gran medidadependientes de la matriz de vegetación adyacente(Mayfield y Daily, 2005). Aunque existe pocainformación al respecto, es importante llamar la atenciónsobre los efectos adversos de la protección de áreasnaturales sobre otras zonas, en el sentido de que suestablecimiento no debe traducirse en una licenciaabierta para la destrucción o perturbaciónindiscriminadas de las zonas no protegidas.

4.6 CAMBIO CLIMÁTICO Y BIODIVERSIDAD

La relación entre la pérdida de biodiversidad y el cambioclimático puede analizarse a partir de impactos directose indirectos sobre los diferentes niveles de diversidadbiológica (Mooney y otros, 2009). Los impactos directosson aquellos generados por los cambios en lacomposición de la atmósfera asociados con elincremento de gases de efecto invernadero –elincremento de la temperatura del planeta y los cambiosen los regímenes de precipitación–. Un ejemplo de estosimpactos son los cambios en la distribución de especiespor la pérdida o fragmentación de nichos ecológicos loque en casos extremos puede conducir a la extinciónde especies. Los impactos indirectos están vinculadoscon los cambios en los procesos biológicos que alteranlas funciones ecosistémicas que producen bienes yservicios ambientales. Por ejemplo, los resultados de laEvaluación de Ecosistemas del Milenio (MA, 2005),señalan que las disrupciones generadas por lasactividades humanas, han reducido hasta un 60% laprovisión de servicios ecosistémicos. Este análisisevidencia que los impactos asociados con la acciónhumana se han intensificado durante los últimoscincuenta años.

Por ende la relación entre cambio climático y pérdidade biodiversidad es compleja y se puede entender comola existencia de un conjunto de presiones (asociadascon actividades humanas) que generan impactos (porej. aumento de temperatura) reduciendo la capacidadde adaptación, es decir la capacidad de un sistema deajustarse y/o resistir los impactos generados por cambiosen el clima (Omann y otros, 2009). Estudios recientes(Parmesan y Yohe, 2003; Root y otros, 2003; Menzel yotros 2006; Nemani y otros, 2003), señalan algunosimpactos concretos sobre la biodiversidad; entre éstos:

Cambios en la distribución y el comportamiento deespecies.Procesos de extinción de especies acelerados por lavulnerabilidad de los hábitats.Cambios en los patrones migratorios de las especiesdebido a la fragmentación de los ecosistemas y/opérdida de corredores migratorios.Simplificación de ecosistemas a partir de procesosde conversión a actividades agrícolas o deganadería.Reducción de la producción primera neta de losecosistemas.

Sumado a esto, los eventos extremos (por ejemplosequías e inundaciones) reducen la capacidad deresiliencia y por ende aumentan la vulnerabilidad delos ecosistemas frente a estos cambios.

Predicciones utilizando modelos sobre «nichosecológicos» (Thomas y otros, 2004) para analizarprocesos de extinción de especies evidencian que decontinuar las tendencias de aumento de temperatura(entre 2 y 5 grados centígrados) se podría llegar a perdercerca de un 15 – 37% de las especies existentes. Si bienes cierto que los supuestos que se toman en cuenta enel modelo no logran captar la complejidad de lasvariables que intervienen en los procesos biológicos,esta cifra es un indicador de los cambios irreversiblesque podríamos enfrentar en un futuro próximo. Porende, uno de los desafíos más importantes para lostomadores de decisión será cómo incorporar estosconocimientos en la definición de políticas deconservación de manera que puedan responder a losimpactos mencionados. Por ejemplo, un artículoreciente (Hagerman y otros, 2010) discute como losesquemas actuales de conservación de áreas protegidasdeben adaptarse a las nuevas condiciones.

Page 108: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

106

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

Los países de América Latina y el Caribe se enfrentan alreto de diseñar e implementar estrategias eficientes parael uso sostenible del agua, debido entre otros, a suamplia diversidad climática, al desarrollo económicodiferencial entre y dentro de sus países, a la grandesigualdad social, pero en especial a la insuficientegestión pública que dificulta la implementación de laspolíticas y estrategias con las que los ciudadanos seidentifiquen. Adicionalmente, los problemas desuministro y calidad del agua se profundizan por suservicio inadecuado e inequitativo (ver Sección ÁreasUrbanas en este Capítulo). Sin embargo se ha observadoque en estos casos, una apropiada administraciónayudaría a impedir una crisis por agua, incluso en lasregiones más secas (Biswas, 2007).

A pesar de las múltiples dificultades para implementarel enfoque de la sostenibilidad ambiental en el planeta(Brundtland, 1987); en la actualidad los países se hancomprometido a desarrollar bajo responsabilidadescompartidas la Gestión Integrada del Recurso Hídrico -GIRH (PNUMA, 2005; IIDS, 2006; UNESCO, 2006;Tortajada, 2007a; 2007b), definida como «un procesoque promueve el manejo y desarrollo coordinado del

agua, la tierra y los recursos relacionados, con el fin demaximizar el bienestar social y económico resultantede manera equitativa, sin comprometer la sostenibilidadde los ecosistemas vitales» (GWP, 2000a).

Como ejemplos de tales avances en la región de ALCcabe citar entre otros (Guerrero y otros, 2006):

Protección ambiental y desarrollo sostenible delsistema acuífero Guaraní (Brasil).Iniciativa del corredor de humedales del litoralfluvial (Argentina).Aplicación del enfoque ecosistémico en la cuencadel Lago Titicaca (Bolivia y Perú).Reducción de la pobreza a través del mejoramientodel manejo de recursos naturales en la cuenca delrío Pastaza (Ecuador y Perú).La formulación de un plan de manejo de loshumedales con enfoque ecosistémico en las Lagunasde Fúquene, Cucunubá y el Palacio de la cuencadel río Ubaté (Colombia).Manejo integrado de cuencas asociadas con launidad hidrográfica Barra de Santiago-El Imposible,Ahuachapán (El Salvador).

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

Page 109: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

107

5.1. DISPONIBILIDAD DE RECURSOSHÍDRICOS Y PRESERVACIÓN DE LOSECOSISTEMAS ACUÁTICOS

5.1.1. VARIACIÓN EN LAS PROVISIONES DE AGUAENTRE LOS PAÍSES DE ALC

Se estima que en ALC se encuentra el 31% de los 35millones de kilómetros cúbicos de los recursosdulceacuícolas de que dispone el planeta; de estosrecursos dependen estrechamente los ecosistemasacuáticos y terrestres, una amplia diversidad de especiesy los variados tipos de asentamientos humanos existentesen la región (Bucher y otros, 1997; Wambeke, 2007).Con el fin de cuantificar verazmente el agua con la quecuenta la humanidad, la FAO (2003) estimó el Total deRecursos Hídricos Renovables (TRWR, por su sigla eninglés) disponibles por habitante para las diferentesregiones del planeta. La estimación fue hechaconsiderando la cantidad de agua generada dentro deun país conocida como Recursos Hídricos RenovablesInternos (IRWR, por sus siglas en inglés) y la generadaen los países vecinos que, en cierta medida, tambiénpueda ser usada por el propio país (Recursos HídricosRenovables Externos - ERWR, por su sigla en inglés).

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América Latina y el Caribe: Promedio anual de las precipitaciones (mm/año)

Fuente: Adaptado de: FAO, 2002; UNEP y otros, 2002; PNUMA, 2003a; FAO-AQUASTAT, 2004.Nota: Caribe: Antigua y Barbuda, Barbados, Bahamas, Cuba, Dominica, Republica Dominicana, Granada, Haití, Jamaica, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía, SanVicente y las Granadinas y Trinidad y Tobago; Mesoamérica: Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Panamá; Sudamérica:Andes: Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela; Guyana: Guyana y Suriname; Brasil: Brasil; Sur del Continente: Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay.

Como los IRWR están compuestos por el flujo anual deaguas superficiales y subterráneas, y éstas a su vez senutren en gran medida de las precipitaciones, resultaimportante reconocer la distribución de estos nivelesde lluvias (mm/año) en cada subregión. La precipitaciónanual promedio para ALC se aproxima a 1.500milímetros, siendo los países andinos los que reciben elmayor volumen de lluvias (1.991 mm/año), y el sectorsur del continente el que registra los valores más bajos(770-850 mm/año); como caso especial, al excluir aMéxico de la región de Mesoamérica, los otros 6 paísesCentroamericanos alcanzan promedios próximos a los2.400 mm/año (Gráfico 2.10) (FAO, 2002; UNEP yotros, 2002; PNUMA, 2003a).

Gracias a los niveles de lluvia con que cuenta ALC, suTotal de Recursos Hídricos Renovables (17 mil km3/año)representa el 39% del TRWR del planeta (43.764 km3/año). Este primer valor es casi la mitad de lo reportadopor otros trabajos en los que se hacen extrapolacionesdirectas sin considerar los detalles de los volúmenesgenerados por escorrentía superficial, recarga deacuíferos por precipitación y filtración de ríos, volumenentrante de los países vecinos, flujo de ríos y volúmenesde lagos compartidos y evaporación, entre otros (FAO,2003; PNUMA, 2003a; FAO, 2007a).

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

Page 110: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

108

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

No obstante, las marcadas diferencias en la precipitaciónde las regiones geográficas y de los diferentes países enALC (Gráfico 2.10) se reflejan en la disponibilidad deagua dulce, donde las islas del Caribe poseen losmenores volúmenes (93 km3/año), mientras que lospaíses andinos (5.238 km3/año) y Brasil (8.825 km3/año)concentran los mayores (FAO, 2003). En los dos últimosámbitos geográficos se encuentra la cuenca hidrográficamás grande del planeta, donde el Amazonas descargacerca del 20% del agua dulce que llevan los ríos del

planeta al mar (12.000 a 16.000 km³/año) (Sioli, 1984;Goulding y otros, 2003; UNEP, 2004a; Alonso y otros,2009). Otro aporte significativo lo hace el lagonavegable de mayor extensión en América del Sur, elTiticaca, localizado en las altas montañas quecomparten Bolivia y Perú (3.810 m.s.n.m.), al que conun área de 8.448 km2 se le ha estimado un volumen deagua promedio de 932 km3 (Kessler y Manheim, 1996;UNEP, 1996; UNESCO-WWAP, 2006; PELT, 2010).

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GRÁFICO 2.11

América Latina y el Caribe: Total de recurso hídrico renovable (TRWR, por su sigla en inglés)disponible en un año (km /año) y por persona por año (m /año) para países seleccionados3 3

Fuente: Adaptado de: UNEP y otros, 2002; FAO, 2003; FAO-AQUASTAT, 2004.Nota: Caribe: Antigua y Barbuda, Barbados, Cuba, Dominica, República Dominicana, Granada, Haití, Jamaica, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucia, San Vicentey las Granadinas y Trinidad y Tobago; Mesoamérica: Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Panamá; América del Sur:Andes: Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela; Brasil: Brasil; Sur del Continente: Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay.Nota: No se consideran Guyana, Guyana Francesa y Suriname pues su oferta de agua por habitante es superior a 300.000 m /año.3

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

Page 111: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

109

En promedio, cada uno de los habitantes de AméricaLatina y el Caribe contaría con la posibilidad de utilizaranualmente mayor volumen de agua per cápita que elresto de las personas en el planeta, lo que se haceevidente al considerar el promedio mundial para el Totaldel Recurso Hídrico Renovable (TRWR) por habitante(7.231 m3/hab./año); quienes viven en los países deMesoamérica, Andes, Brasil y Sur del Continentetendrían de 2,6 a 6,7 veces más que la media mundial(Gráfico 2.11) (FAO, 2003; FAO, 2007a).

Un caso curioso de super-oferta de agua se presenta,para el sector denominado de Guyana, el cual agrupalos países de Surinam, Guyana Francesa y Guyana. Estosabarcan 2,1% del área en Sudamérica (468.240 km2) yse calcula que poseen el 3,74% del agua disponiblepara esta región; cuando se cruzan estos datos generalescon el número de habitantes que conforman los trespaíses (1.350.000 hab.), el TRWR alcanza 344.750 m3/hab/año (FAO, 2003), sugiriendo que muy seguramentelos gobiernos del sector de Guyana orientarán más susesfuerzos a ofrecer buenos servicios del suministro ycalidad del agua, que a preocuparse por sudisponibilidad.

En contraposición, las mayores limitaciones en ladispobibilidad de agua dulce son para los habitantesde las islas del Caribe, quienes en su conjunto cuentancon menos de la tercera parte de agua por habitante dela que cuenta el promedio mundial (TRWR=2.466 m3/hab./año) (Gráfico 2.11). El problema más agudo sepresenta en las islas de las Antillas Menores, puesdependen casi exclusivamente del agua de lluvia parael suministro de agua dulce debido a la ausencia deríos y a que la mayoría de los acuíferos presentaninfiltración salina cuando hay elevaciones pronunciadasdel nivel del mar. El caso más extremo es Barbados,con apenas 313 m3/hab./año, seguido de Saint Kitts y

La cuenca del Canal de Panamá (CCP) comprende 5.527,6 km2, equivalente al 6,5 por ciento del territorio de Panamá; allíse producen cerca de 5.000 millones de m3 de agua anualmente. Las operaciones del Canal utilizan 60 por ciento paraoperaciones de esclusaje, 34 por ciento para generación hidroeléctrica y el 6 por ciento restante para abastecer de aguapotable a más de la mitad de la población del país, así como a más de dos tercios del sector industrial y de servicios.

Dentro de la CCP la erosión y sedimentación, debido a la deforestación, han originado la pérdida de casi el 17% de lacapacidad de almacenamiento de agua dentro del canal, cuya calidad también se ha visto afectada por actividadesagroindustriales y desarrollo urbano; si a lo anterior se le suma la disminución de la cantidad de agua por posiblesfluctuaciones periódicas asociadas con el fenómeno de El Niño, y a una demanda creciente para las operaciones del canaly para uso de la población, el panorama para la CCP no resulta muy alentador. Por estos motivos el Gobierno y la Autoridaddel Canal de Panamá (ACP) vienen avanzando desde 1997 en la creación de un nuevo marco legal, el cual hacia el año2000 ya contaba con la participación del sector campesino y de las comunidades locales, generando el actual proceso deGIRH para la cuenca más importante del país.

Fuente: GWP-CA, 2006.

Disponibilidad y uso del agua en la cuenca del Canal de PanamáRECUADRO 2.8

Nevis (576 m3/hab./año) y Antigua y Barbuda (776 m3/hab./año) (UNEP, 1999; FAO-AQUASTAT, 2004; UNEP,2004b). El Recuadro 2.8 se refiere a la disponibilidad yuso del agua en la cuenca del Canal de Panamá.

Entre y dentro de los países de la región también existensituaciones críticas de escasez, principalmente en lasáreas más densamente pobladas como en el caso delValle Central en Chile, el sector de Cuyo al sur deArgentina, los sectores costeros del Perú y del sur deEcuador, los valles del Cauca y Magdalena en Colombia,el altiplano de Bolivia, el gran Chaco compartido porArgentina, Bolivia y Paraguay, el nordeste del Brasil, lacosta pacífica de América Central y, de manerapreocupante, una buena parte de México (FAO-AQUASTAT, 2004; UNEP, 2004c; UNEP, 2006).

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

5.1.2 AGUAS SUPERFICIALES Y ACUÍFEROSTRANSFRONTERIZOS PROVEEDORES DEL RECURSOHÍDRICO PARA ALC

A nivel mundial, existen alrededor de 263 cuencas conríos transfronterizos. Europa es el continente quepresenta el mayor número (73), seguido por la regiónde América Latina y el Caribe (61). Son precisamenteestos sistemas compartidos entre países los que ofrecenlos mayores volúmenes de agua dulce al continente,donde se destaca la Cuenca del Plata que involucra acinco países y la del Amazonas a ocho; en Sudamérica,Brasil es el país que posee más cuerpos de aguasuperficiales transfronterizos (17), seguido de Argentina(13), Chile (9) y Colombia (8) (Gráfico 2.12) (Wolf yotros, 1999; Pochat, 2007). En Mesoamérica seencuentra el caso excepcional de Guatemala quecomparte 8 cuencas con sus vecinos, mientras que enel Caribe, Haití y República Dominicana dividen lasaguas de los ríos Ariboneti y Pedernales (Gráfico 2.12)(Wolf y otros, 1999; Pochat, 2007).

Las otras fuentes de vital importancia para el balancehídrico de ALC son las provenientes de las aguassubterráneas, donde se totalizan 64 acuíferos(incluyendo los compartidos entre México y EstadosUnidos). Brasil comparte 26 acuíferos con sus vecinos,seguido de Argentina (15) y Paraguay que, aunque conun área 6,8 veces menor, también comparte 15 acuíferos(véanse Gráfico 2.13 y Recuadro 2.9) (UNESCO/PHI-OEA Proyecto ISARM, 2005).

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GRÁFICO 2.12

América Latina y el Caribe: Número de áreas compartidas para cuencas transfronterizas por países

Fuente: Adaptado de Wolf y otros, 1999; Pochat, 2007.

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1115. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

Bajo este panorama resulta evidente la prioridad deadministrar de manera conjunta las cuencas y acuíferostransfronterizos en ALC, para lo cual ya se han creadocomisiones y organizaciones que procuran larealización de gestiones, cooperación, manejo,asistencia técnica y desarrollo económico, entre otrasiniciativas (Jouravlev, 2001; Bakker, 2006). Sin embargo,se han generado grandes obstáculos a nivel político entre

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Fuente: Adaptado de UNESCO/PHI-OEA, Proyecto ISARM, 2005.

GRÁFICO 2.13

América Latina y el Caribe: Número de áreas compartidas para acuíferos transfronterizas por países

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aEn los últimos años el tema de los acuíferos ha cobrado importancia internacional (Cumbre Mundial sobre el DesarrolloSostenible, Johannesburgo, 2002; III Foro Mundial del Agua, Kioto, 2003), donde organizaciones como la Comisión deDerecho Internacional de la Organización de las Naciones Unidas (UNILC, por sus siglas en inglés), la UNESCO y la OEAestán revisando leyes existentes en materia de recursos naturales transfronterizos.

Reflejo de estas iniciativas son el proyecto Marco para la Gestión Sostenible de los Recursos Hídricos de la Cuenca delPlata, que involucra los gobiernos de Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay y busca establecer un marco de adaptaciónante los efectos de El Niño y prevenir la creciente contaminación producto de las cargas sedimentarias excesivas en elestuario del Río de la Plata. Adicionalmente se desarrolla un “caso de estudio UNESCO/OEA ISARM Américas sistemaacuífero Yrendá-Toba-Tarijeño - SAYTT” cuyo principal objetivo es garantizar una gestión sustentable de este sistema con laparticipación tanto de usuarios como de beneficiarios (OAS, 2004). Otro ejemplo de colaboración regional es el Proyectodel Sistema Acuífero Guaraní (SAG), que es el primer proyecto de las Américas dedicado a los acuíferos transfronterizos yuna de las primeras iniciativas del mundo en la que varios países están involucrados (Miletto y Kirchheim, 2004).

Asimismo, el PNUMA contribuye a la creación de capacidades para el diseño e implementación de marcos legales einstitucionales para los acuíferos transfronterizos, en el marco del “Programa Regional de Gobernanza Ambiental deZonas Costero Marinas” para países de América Latina.

Acuíferos transfronterizosRECUADRO 2.9

Fuente: OAS, 2004; Miletto y Kirchheim, 2004; PNUMA, 2009 http://www.pnuma.org/deramb/actividades/gobernanza/cd/index.html

los países que comparten las cuencas, que sumados ala fuerte tendencia de privatización de los recursoshídricos, no permiten un apropiado ordenamiento queimplique acciones conjuntas continuas tanto para elbienestar de los ecosistemas acuáticos como para elbeneficio sostenido de los pobladores que de ellosdependen (Yoffe y Ward, 1999; Wolf, 1998; Wolf yotros, 1999; Frers, 2003; Querol, 2003; Claude, 2005).

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

5.2 DEMANDA DE RECURSOS HÍDRICOS

Como se mencionó en el Capítulo I, la demanda deagua en América Latina y el Caribe se ha incrementado.Dependiendo de la fuente de información, el promediode consumo de agua por habitante por día se podríaaproximar a 150 lts./hab./día (SUDAM/OEA, 1998;IDEAM, s.f; The World’s Water , 2001; OMS – UNICEF,2007; INE, 2008); realizando una cuenta directa seobtiene una demanda de 32,1 km3/año para uso humanoo doméstico, lo que representa el 12% del total utilizadopor la región (Gráfico 2.14). Al confrontar este volumencon el Total de Recursos Hídricos Renovables (TRWR,por su sigla en inglés) disponibles en la región, quedaevidente que las islas del Caribe y Mesoamérica son losmás vulnerables, mientras que los países Andinos y Brasilcuentan con suficientes reservas (SUDAM/OEA, 1998;IDEAM, s.f.; OMS – UNICEF, 2007; UNEP y otros, 2002;FAO, 2003; PNUMA, 2003a; FAO-AQUASTAT, 2004;PNUMA, 2007).

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América Latina y el Caribe: Consumo anual de agua para el total de habitantes (km /año)3

Fuente: Adaptado de: SUDAM/OEA,1998; IDEAM, s.f.; The World's Water, 2001; UNEP y otros, 2002; FAO, 2003; FAO-AQUASTAT, 2004;OMS-UNICEF, 2007; INE, 2008.Nota: Se realiza un cálculo directo a partir del promedio de 150 litros/persona/día por del número de personas por país y los 365 días calendario, y su relación con elTotal de Recurso Hídrico Renovable (TRWR, por su sigla en inglés) disponible (km3/año) para el conjunto de países de la región América Latina y el Caribe (ALC):Caribe: Antigua y Barbuda, Barbados, Cuba, Dominica, República Dominicana, Grenada, Haití, Jamaica, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucia, San Vicente y lasGranadinas y Trinidad y Tobago; Mesoamérica: Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Panamá; Sudamérica: Andes: Bolivia,Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela; Guyana: Guyana, Guyana Francesa y Suriname; Brasil: Brasil; Sur del Continente: Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay.

5.2.1. USOS DEL AGUA Y DE LOS RECURSOSHIDROBIOLÓGICOS

Los anteriores valores muestran de manera general queel agua para uso doméstico no debería representarproblemas para ALC, sin embargo, los análisis globalesesconden situaciones críticas de algunas zonas, lo quedificulta cumplir con los Objetivos de Desarrollo delMilenio en cuanto a acceso sostenible al agua potabley a servicios de saneamiento básico se refiere. Se sabeque el agua con que se abastece a los habitantes desectores marginales de las grandes ciudades y enespecial de los sectores rurales más alejados de losgrandes centros urbanos, no es potable (Van Damme,2002; OPS/OMS, 2003; Gutiérrez y otros, 2004;Orozco, 2004; Nippon Koei Lac Co, 2005; USAID,2005; Ortiz, 2006; OMS/UNICEF, 2007; PNUMA, ANAy MMA, 2007; SISS, 2007; UNDP Paraguay, 2007).Como ejemplo de las diversas consecuencias de esta

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1135. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

Además del uso doméstico y para consumo humano,en ALC el mayor volumen del recurso hídrico sones utilizado por los procesos productivos agrícolas(y/o agropecuarios) (70-75%), mientras que elrestante se distribuye en las industrias (8-12%) y otrosprocesos como la producción de energía eléctrica yla minería (FAO, 2003; CEPAL, 2005; UNESCO-WWAP. 2006; GWP-CA, 2006; CEPAL, 2007).

Dependiendo de la región de ALC, la utilización delagua varía para cada sector; en el Caribe se gastamás para fines domésticos (31%) que en las otrasdos regiones, siendo que para Mesoamérica lossectores doméstico e industrial se mantienen entreel 20-22%.

En Sudamérica las actividades agropecuarias alcanzan 75% y el sector industrial es el que menos recursos hídricos utilizaen ALC con 8%.

Nota: Caribe: Antigua y Barbuda, Barbados, Cuba, Dominica, República Dominicana, Granada, Haití, Jamaica, St. Kitts y Nevis, Santa Lucía, San Vicentey Las Granadinas y Trinidad y Tobago; Mesoamérica: Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Panamá; Sudamérica:Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú, Venezuela, Guyana, Guyana Francesa, Surinam, Brasil, Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay.

Fuente: Adaptado de WRI, 2009.

Consumo de agua dulce por sectores en América Latina y el CaribeRECUADRO 2.10

situación se puede mencionar que el consumo per cápitaactual de agua embotellada en México es dos vecesmayor que en Estados Unidos (Biswas, 2007), aunquelas economías de ambos países son muy contrastantes.Situaciones similares ocurren con otros serviciosrelacionados con el agua doméstica, como el del

saneamiento básico (aguas residuales y la disposiciónde residuos), íntimamente ligado con los asentamientosurbanos y rurales. Esta temática se amplía en el en lasección de áreas urbanas de este capítulo. En elRecuadro 2.10 se analiza el consumo de agua dulcepor sectores en América Latina y el Caribe.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

5.2.2. AGUA PARA PROCESOS PRODUCTIVOS

a) Agricultura

Durante los últimos años se ha incrementadosustancialmente la superficie de las áreas irrigadas enla región (Cuadro 2.11, Gráficos 2.15 y 2.16), siendoMéxico el pais mesoamericano con los valores más altos

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Fuente: Adaptado de , 2003;, 2007.

Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) Comisión Económica para América Latinay el Caribe (CEPAL)

GRÁFICO 2.15

América Latina y el Caribe: Comportamiento histórico de la superficie irrigada utilizando los recursoshídricos de la región para el desarrollo de su agricultura (En miles de hectáreas)

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América Latina y el Caribe: Porcentaje deincremento en la superficie de área irrigada,1961-2005 (En miles de hectáreas)

CUADRO 2.11

Fuente: CEPAL, 2007a. GEO Brasil: Recursos Hídricos, 2007. Nota: Sedestacan los países con mayores incrementos.

de extracción de agua (13500 m3/ha/año) para sumantenimiento (FAO, 2002; CEPAL, 2007). Por estoresultaría conveniente que los países de ALCconsolidaran sus estadísticas referentes a las necesidadeshídricas para la agricultura e inclusive para la ganadería,en donde se podría estandarizar en la región alguno delos diferentes métodos para calcular la eficiencia deluso del agua, relacionando la productividad del cultivo(kg/ha) con la cantidad de agua utilizada (m3) (López-Urrea, 2003; De Souza, y otros, sin fecha).

De manera más simplificada, se contrastan los ejemplosde Brasil y Chile, en donde el primero a pesar de ser elpaís con la segunda superficie más irrigada de la región,representa apenas un 6,2% de su superficie cultivada,percibiéndose que se estaría utilizando más agua de lonecesario para obtener los actuales niveles deproducción (Vieira y Van Wambeke, 2002; GEO Brasil:Recursos Hídricos, 2007). Por su parte Chile, seencuentra entre los países de la región que realizaronconsiderables inversiones privadas para alcanzar unasuperficie irrigada del 82,7% respecto al área totalcultivada (GWP, 2000b; Vieira y Van Wambeke, 2002;CEPAL, 2005; UNESCO-WWAP. 2006).

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

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Fuente. Adaptado de FAO, 2003; CEPAL, 2007.

GRÁFICO 2.16

América Latina y el Caribe: Variación de la superficie irrigada, 1961 – 2005(En miles de hectáreas)

El principal impacto generado en ALC por la ampliaciónde las áreas de cultivo y su correspondiente extracciónde agua para mantenerla se refleja en la contaminaciónde las aguas subterráneas y superficiales. Por ejemplo,en Guatemala se han presentado casos decontaminación con mercurio y compuestosorganofosforados. En El Salvador, ríos, y arroyosaledaños a zonas agrícolas registran trazas de pesticidas(DDT), reportándose concentraciones de 3,15mg/l ensistemas como el río Grande de San Miguel, cifra quetriplica el límite letal para peces (CEPAL, 2005). En elsecano mediterráneo de Chile el 100% de las muestrasde los pozos destinados al consumo humano registrabancontaminación con nitratos y altos porcentajes debacterias coliformes fecales (78,3%) y de coliformestotales (88%) (Claret y otros, 2003).

b) Industria

Aunque el impacto del sector industrial sobre la futuradisponibilidad del agua en ALC no es tan representativocomo el generado por el sector agrícola, el vertimientode sus aguas residuales no tratadas sí resulta mucho másperjudicial. En Ecuador, la minería a cielo abierto afectadiversos sistemas lóticos (río Chico, Siete, Tenguel, Gala)que presentan contaminación por mercurio (49 vecespor encima de la norma), arsénico (19 veces por encimade la norma), cromo, vanadio, níquel y cadmio loscuales superan el valor límite respectivo, generandoserios problemas a las comunidades aledañas debidoal uso doméstico del agua14. En Colombia, el Río Bogotá,

por efectos de la producción de cemento y la curtiembrede pieles (entre otros), presenta concentracionessignificativas de metales como cadmio y arsénico; unode los problemas más acuciantes es el empleo de esterecurso para el riego de horticultivos, pues contaminatanto el suelo como las hortalizas que acumulan estosmetales en sus tejidos (González y Mejía, 1995). Lospaíses con mayor extracción de recursos hídricos parasus procesos industriales son Brasil (10,65 km3/año),Ecuador (7,18 km3/año), México (4,29 km3/año), Chile(3,16 km3/año), Argentina (2,76 km3/año) y Perú (2,03km3/año) (Gráfico 2.17) (UNESCO-WWAP, 2006).

14 (www.ecoportal.net/content/view/full/77902)

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

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Fuente: Adaptado de UNESCO-WWAP, 2006.

GRÁFICO 2.17

América Latina y el Caribe: Países que extraen con mayor intensidadel recurso hídrico para sus procesos industriales

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

c) Energía hidroeléctrica

Otro uso importante de los recursos hídricos es eldestinado a la generación de energía. América Latina yel Caribe cuenta con el 22% del potencial hidroeléctricodel mundo (ver Capítulo I), con un potencial regionalde 582.033 MW al año, del cual únicamente 139.688MW (aproximadamente 24%) están siendoaprovechados (OLADE, 2005). A manera de ejemplo,Centroamérica tiene una capacidad instalada de 8.348MW y una producción total neta de 31.369 GWh -

excluyendo a Belice-. Así, del total de energíaproducida, un 45,4% es de origen térmico. Se estimaque la producción de energía con base en recursoshídricos es de un 45,9 por ciento. Costa Rica es elprincipal productor de Centroamérica, pues genera el41,8% del total (CEPAL, 2004; GWP-CA, 2006).

En la región de América Latina y el Caribe, Brasil sedestaca por su plan de desarrollo energético, dondedentro de la matriz de energía eléctrica del país, laparticipación de la hidroelectricidad es bastantesignificativa. En la actualidad la generación de energíahidroeléctrica alcanza los 65.859 MW y se estima quebajo un escenario optimista de uso racional de agua yenergía, llegará a 113.828 MW en el 2020 (PNUMA,ANA y MMA, 2007).

Dimensionar tales potencialidades en conjunto con losotros países de la región permitiría aproximarse a lopropuesto por UNESCO-WWAP (2006), quienes indicanque un análisis simultáneo del uso del agua y de energíaa escala regional podría conducir a sustanciales ahorrosenergéticos y de racionalidad en la demanda hídrica.Por lo expuesto en el presente capítulo, también sepodría suponer que los enfoques de eficiencia energéticaen las decisiones sobre la política hídrica por país ypara la región, contribuirían en buena medida a lapreservación y mejor manejo de los ecosistemasacuáticos vinculados a estos proyectos hidroenergéticos,donde al final la biodiversidad de fauna y flora son losque resultan más impactados (ver Recuadro 2.11).

Page 119: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1175. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

Fuente: Goulding, y otros 2003; Filizola, 2003; Molina, 2006; Barthem y Goulding, 1997; 2007; Alonso y Pirker, 2005; Fabré yotros, 2005; Carvalho y Fabré, 2006.

El complejo hidroeléctrico proyectado por Brasil y Bolivia sobre el río Madeira, el mayor afluente del río Amazonas,considera 4 represas: Cachuela Esperanza, Guarajá Mirim, Jiraú y Santo Antonio. Como es de esperarse un proyecto de talmagnitud tiene fuertes aliados y detractores, unos empujados por fuerzas políticas y económicas y otros por los efectosambientales y socio-culturales. En este caso el principal conflicto radica en los efectos que puede causar la alta cargasedimentaria que lleva el río Madeira y sus afluentes, que aportan casi el 40% de sedimentos que recibe la gran cuencaAmazónica (600-900 millones de toneladas) (Goulding y otros, 2003; Filizola, 2003; Molina, 2006).

Un estudio de modelación hidrosedimentológica estimó procesos de erosión y sedimentación más amplios y pronunciadosque los estudios previos de factibilidad/viabilidad, lo que implicará una mayor elevación del lecho del río principal y susafluentes, con una consecuente mayor elevación del nivel de las aguas en estos sistemas (Molina, 2006). Por esto, aunquese reconoce la importancia que representa la construcción de las 4 plantas para el desarrollo de ambos países, queda claroque al no considerar dentro de los estudios previos la continuidad y conectividad de un ecosistema como es el caso detoda la cuenca de drenaje del río Madeira, no se podrán proyectar apropiadamente los impactos sobre el ecosistemacompleto y sus recursos naturales.

Tal es el caso del bagre Dorado (Brachyplatystoma rousseauxii), que es la segunda especie más pescada comercialmenteen la cuenca Amazónica, con capturas anuales que oscilan entre las 15 a 18 mil toneladas. Los estudios de genética ydinámica poblacional la señalan como la especie de pez de agua dulce que realiza las mayores migraciones en el mundo,pues recorre más de 3.500 km para completar su ciclo de vida (Alonso y Pirker, 2005; Batista y otros, 2005; Barthem yGoulding, 2007). Precisamente esta especie también migra por el río Madeira hasta sectores más altos que Santo Antonioen busca de ambientes propicios para la reproducción y desove, por lo que la construcción del complejo de hidroeléctricasproyectadas alteraría en gran medida sus rutas migratorias, afectando no solamente la actividad pesquera-comercial eneste sector fronterizo y creando inconvenientes socio-económicos para los pobladores locales, si no que alteraría tambiénla abundancia y oferta natural del Dorado en la totalidad de la cuenca Amazónica (Barthem y Goulding, 1997; 2007;Alonso y Pirker, 2005; Fabré y otros, 2005; Carvalho y Fabré, 2006).

Efectos potenciales sobre el continuo de una cuenca y sus recursos hidrobiológicospor emprendimientos hidroeléctricos

RECUADRO 2.11

5.3 APROVECHAMIENTO DE RECURSOSHIDROBIOLÓGICOS

Además de proveer agua, los ecosistemas acuáticos enALC proporcionan otros servicios ambientalesigualmente importantes como la posibilidad de la pesca(ver Sección Mares y Costas). Para ALC la pescacontinental es un renglón de gran importanciasocioeconómica, con una producción que en los últimosaños osciló entre las 800 a 900 mil toneladas anuales(Gráfico 2.18 y Recuadro 2.12) (COPESCAL, 2003, FAO,2007a, Valbo-Jorgensen, 2008). Esta pesca a nivelmundial representa aproximadamente el 6,0% de lascapturas continentales mundiales, donde el 45%corresponde a Brasil seguido de México (18%),Venezuela (9%), Perú (7%), Argentina (6%) y Colombia(5%) (Gráfico 2.20) (WRI, 2009; Valbo-Jorgensen y otros,2008). Aunque las cantidades reportadas por las islascaribeñas no permiten incluirlas dentro de los paísesmás comercializadores en la región, la suma de susdesembarques provenientes de aguas continentalesalcanza a promediar 34 mil toneladas al año.

Se observa en los registros oficiales que el crecimientoa nivel regional de la pesca continental es bajo, frente a

la creciente demanda de pescado proveniente de losecosistemas de agua dulce. Esto fue reportado por FAO(2009) al estimar que en los países con bajos ingresos ydéficit de alimentos, la contribución del pescado alaporte de la dieta en proteína animal se acerca al 18,5%.Inclusive es posible que sea muy superior a la indicadapor las estadísticas oficiales dada la posiblesubestimación de los volúmenes capturados porcarencia de datos completos y confiables relacionadoscon la pesca de pequeña escala y de autoconsumo, queen muchas ocasiones se convierte en la única proteínade bajo costo accesible para las comunidades rurales yribereñas más pobres (COPESCAL, 2003; FAO, 2007a;FAO, 2009; Valbo-Jorgensen, 2008). Esto implica unapérdida del valor real que pueden representar losecosistemas acuáticos de aguas continentales para lospaíses de ALC, por lo que su rol económico y social enla región no se logrará incluir de manera contundenteen los planes de manejo de recursos naturales y deordenamiento territorial. La ausencia de talreconocimiento y el poco respaldo institucional ypolítico, impide acceder a apoyos básicos para sudesarrollo. Sumada a la degradación de los ecosistemasacuáticos y a la mayor competitividad global, estasituación sugiere la imperiosa necesidad de unadecidida cooperación regional e internacional.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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Fuente: Adaptado de COPESCAL 2003, WRI, 20009; Valbo-Jorgensen y otros., 2008.

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América Latina y el Caribe: Capturas registradas oficialmente para la pesca de aguascontinentales en los países con mayor producción pesquera (En miles de toneladas/año)

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Fuente: Adaptado de COPESCAL, 2003; Valbo-Jorgensen y otros, 2008; WRI, 2009.

GRÁFICO 2.18

América Latina y el Caribe: Variación de los volúmenes oficiales de producciónpesquera proveniente de aguas continentales (En toneladas métricas)

Page 121: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1195. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

Peces ornamentales y especies invasoras en América Latina y el CaribeRECUADRO 2.12

Otro de los recursos naturales utilizado intensamente por algunos países de ALC son los peces con fines de ornamentación,provenientes de ecosistemas marinos y continentales, a los que ya se les reconoce un gran impacto social y económicolocal y regional (INCODER; TRAFFIC y WWF, 2006). Lo anterior es evidente en países como Perú, donde unas cien milpersonas se dedican a la captura de estos peces, exportando en promedio 9 millones de unidades vivas al año, mientrasque Brasil comercializa casi el doble de peces provenientes principalmente de territorio Amazónico.

Aunque el desarrollo de la pesca ornamental involucra en su mayoría especies de pequeño porte, actualmente ha resultadolucrativo trabajar alevinos y juveniles de especies utilizadas normalmente para consumo humano, como es el caso de lasrayas dulce acuícolas, los bagres (Siluriformes), la arawana (Osteoglosum bicirrhosum) y el paiche o pirarucu (Arapaimagigas), lo que ha ocasionado conflictos entre pescadores y comerciantes de estos dos tipos de pesquerías (consumo yornamental).

Por otro lado, el traslado ó la introducción accidental de algunas de estas especies foráneas (algunas provenientes inclusode otros continentes) en los ecosistemas está generando severos problemas ambientales ya que se convierten en invasoresagresivos y perjudiciales. Según un estudio realizado en Venezuela, más de 60 especies de peces exóticos se han introducidosin haberse evidenciado un impacto negativo salvo ciertas especies de consumo humano como las truchas, las tilapias yalgunas mojarras que son depredadoras y fuertes competidoras con las nativas; actualmente México enfrenta una severainvasión de Hypostomus plecostomus, un loricarido de origen amazónico y utilizado normalmente en acuarofilia comolimpia-vidrios que está minando los recursos pesqueros continentales y alterando los sistemas acuáticos de frontera afrontera.

Fuente: Chao y otros, 2001; Alonso y otros, 2009; Tello y Cánepa, 1991; FAO, 2000; Araújo y otros, 2004; Environmental News Service, 2005; Ortega yotros, 2006; Ojasti, 2001; Mendoza y otros, 2007.

5.4 CAMBIO CLIMÁTICO Y LA FUNCIÓN DELPOTENCIAL HÍDRICO DE ALC

El Cuarto Informe de Evaluación del PanelIntergubernamental sobre Cambio Climático resalta quepara 2020, y a causa del cambio climático, la cantidadde personas en ALC afectadas por el aumento del déficithídrico variará entre 12 y 81 millones, mientras quepara 2050 se estima que estas cifras aumentarán avalores de entre 79 y 178 millones de habitantes (Arnell,2004). Las estimaciones no consideran la población quepodría abandonar las áreas deficitarias en agua (Magriny otros, 2007).

En un informe preparado por el Banco Mundial seexpone la posibilidad de que el cambio climático yahaya afectado los patrones de circulación que llevanvapor de agua a los páramos así como también la posiblesabanización de la cuenca del Amazonas generada porla disminución extrema de las precipitaciones y elaumento de la temperatura. Este último efecto tambiénha generado una subida en el nivel del agua lo cualpodría ocasionar inundaciones costeras, saturación delos sistemas de saneamiento, o migraciones de lapoblación a zonas donde no exista la necesariainfraestructura de agua limpia y saneamiento (Fricas yMartz, 2007).

En varias zonas de Latinoamérica se podrían esperarseveras deficiencias de agua (el este de Centroamérica,

en las planicies, el valle de Montagua y las laderas delPacífico en Guatemala, este y oeste de El Salvador, elValle Central y la región del Pacífico de Costa Rica; enlas regiones intermontañosas del norte, centro y oestede Honduras y la península de Azuero en Panamá). Estasituación afectaría el suministro de agua y la generaciónhidroeléctrica (Ramírez y Brenes, 2001; ECLAC, 2002a).

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120

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

En el caso de México, algunos modelos advierten ligerosaumentos de la precipitación, mientras que otros hanproyectado disminuciones drásticas. No obstante, lamayoría de ellos prevén que en invierno se reduzcanlas precipitaciones hasta 15% en regiones del centrode México, y 5% en la zona del Golfo. También seprevén retrasos en el inicio de las lluvias, con unaprolongación de la temporada hacia los meses de otoño,para gran parte del país (Semarnat, INE, 2006c).

La pérdida de glaciares en América Latina es unaevidencia particularmente dramática del cambioclimático: la cordillera andina y la Patagonia enArgentina muestran evidencias del retiro glacial y unareducción en las zonas cubiertas por nieve (PNUMA,2007). El retroceso glaciar y la disminución de ladisponibilidad de agua es al presente una de las mayorespreocupaciones para los países Andinos, queconcentran el 95% de los glaciares tropicales del mundo(CAN y otros 2007). Los Países Andinos producen el10% del agua del planeta, que proviene principalmentede ecosistemas alto-andinos y glaciares (CAN, 2008).

La alteración de los caudales, evidentemente tendrá unefecto dramático en la región tanto para el acceso afuentes de agua, hidroenergía y agricultura, como parala conservación de los ecosistemas naturales en generaly en particular la Amazonía. Según el Ministerio deAgricultura, en Perú (poseedor del 70% de los glacialesmontañosos entre los trópicos terrestres), el área glacialde los Andes se ha reducido un 22% entre 1970 y 1997,y el área de glaciares menores hasta un 80% provocandodisminuciones del 12% en la disponibilidad de agua

dulce en la zona costera, donde se ubica el 60% de lapoblación. Una evidencia de ello es el MonteHuascarán, el cual ha perdido 12,8 km2 de hielo;también el tamaño de los glaciares andinos deYanamarey, Uruashraju y Broggi está disminuyendo. EnEcuador la superficie de hielo del volcán Cotopaxitambién se redujo en un 31% entre 1976 y 1997, y elglaciar de Antisan se retiró ocho veces más rápidodurante la década de 1990 que en otras décadas. EnColombia, el Cocuy (la masa glacial más grande delpaís) presenta un promedio de recesión glacial de 15metros por año, razón por la cual se estima que paraantes de 2030 su cubierta glacial habrá desaparecidopor completo (Simas, 2006). El glaciar de Chacaltayaen Bolivia, ubicado a una altura de 5.300 metros sobreel nivel del mar, terminó por derretirse en 2009, seisaños antes de lo que habían previsto los expertos.

La pérdida de glaciares en los Andes y la interferenciadel agua salada debido al aumento del nivel del marafectarán la disponibilidad de agua potable y tambiénpodrían afectar la producción agrícola y el turismo. Estoscambios pueden llevar a que antes de 2025 el 70% dela población viva en regiones con bajo abastecimientode agua (Simas, 2006) aún cuando su contribución alcambio climático sea nula o muy baja (BMI, 2007). Losestudios de vulnerabilidad predicen que los glaciarescontinuarán reduciéndose. La posible bonanza queexperimenten algunas cuencas glaciares en los próximosaños, por efecto de la deglaciación, así como lainminente escasez de agua, en épocas secas o de estiaje,después de llegar al punto de no retorno, requieren deacciones planificadas desde el presente (CAN, 2008).

5. RECURSOS HÍDRICOS E HIDROBIOLÓGICOS

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1216. MARES Y COSTAS

Las costas de América Latina y el Caribe han sidohabitadas desde tiempos precolombinos principalmentepor grupos indígenas de cazadores y colectores que sebeneficiaron de los abundantes recursos. De acuerdocon Jackson y otros (2008), la sobrepesca no es unfenómeno reciente si no que ha venido ocurriendo desdeépocas pre-históricas y se le atribuyen importantesextinciones ecológicas presumiblemente mayores quelas causadas por la contaminación, la degradación dehábitat o los fenómenos mundiales que ocurrennaturalmente inducidos por cambios de temperatura.Roberts (2007) presenta evidencias de sobrepescaocurridas en algunas regiones, sobre todo del AtlánticoNorte, que datan de hace siglos; salvo los casos dealgunos arrecifes coralinos del Caribe, la sobreexplotación pesquera está poco documentada en lascostas de ALC. Actualmente la escasez de recursos esel común denominador en las costas de América Latinay el CaribeLC.

La región de ALC tiene una de las tasas de crecimientopoblacional más altas del mundo; gran parte de lapoblación de la región está migrando hacia las grandesciudades (ver sección Áreas Urbanas, en este Capítulo)y hacia la zona costera en búsqueda de oportunidadeseconómicas y medios de subsistencia. En el escenariode mayor escasez de agua para la irrigación agrícola, lacreciente privatización de tierras y el cambio en el usodel suelo; la zona costera resulta más atractiva paragrupos de población que se desplazan de tierrasinteriores y que encuentran en la pesca una opcióneconómicamente lucrativa.

6. MARES Y COSTAS

La falta de conocimiento sobre la pesca sosteniblesumada a las crecientes demandas en los mercadosinternacionales ha propiciado el aumento excesivo dela pesca con la consecuente sobre explotación de losrecursos, la destrucción de hábitats críticos e incluso laextinción de algunas especies. La pérdida de manglaresa fin de establecer desarrollos turísticos y granjasacuícolas también afecta profundamente a toda la región(Halpern y otros, 2008).

6.1 ÁREAS MARINAS PROTEGIDAS EN ALC

Las Áreas Marinas Protegidas (AMP) surgen como uninstrumento para proteger y conservar los recursos ysus hábitats. Un AMP se define como un área intermarealo submareal, junto con las aguas que la bañan y la floray fauna asociadas, y sus rasgos históricos y culturales,que ha sido designada por la legislación para protegerparcial o totalmente el medio que alberga (IUCN, 1999).En ALC la creación de AMP es más bien reciente, pueses a partir de los 1990s que empiezan a cobrarimportancia como instrumento de manejo (WDPA,2008).

Se estima que las reservas marinas representan menosdel 0,1% de la Zona Económica Exclusiva (ZEE15) enlos países de ALC (PISCO, 2008). La mayor parte de las

15 http://www.un.org/Depts/los/convention_agreements/texts/unclos/convemar_es.pdf

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122

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

reservas creadas en la región son pequeñas ycomprenden menos de 7 km2 (Mapa 2.9). Sin embargo,muchas de ellas adolecen de la falta de administraciónefectiva, y una evaluación reciente de 255 reservasmarinas demuestra que solamente 12 son vigiladasperiódicamente para prevenir la pesca ilegal (PISCO,2008). En especial en los PEID (Pequeños EstadosInsulares en Desarrollo) del Caribe, solo una fracciónde las AMP designadas tiene alguna forma de plan demanejo (Singh y otros, 2008).

Guarderas (2007) describió el estado de las AMP y delas reservas no extractivas, examinando los cambios ensu cantidad, su nivel de protección, su tamaño y suconectividad, el grado al que se ajustan a las categoríasde manejo de la Unión Internacional para laConservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas eninglés) (1994) y la comparación del tamaño y nivel de

protección de estas AMP con respecto al país y a laprovincia biogeográfica. Adicionalmente, evaluó larepresentación de AMP en ALC en el contexto de lasiniciativas regionales y globales de conservación. Laautora encontró una muy desigual distribución de AMP,ya que están concentradas en unas regionesbiogeográficas y ausentes de otras (un ejemplo son lascostas del sur de los océanos Pacífico y Atlántico). Otroproblema es que en la región del Caribe predominanAMP de arrecifes coralinos, mientras que otros hábitatsimportantes carecen de protección. Asimismo, esnecesario destacar que aspectos fundamentales comola conectividad, el tamaño y la distancia entre reservas,aspectos fundamentales para la efectividad de lasmismas, no han sido adecuadamente considerados enel diseño de las AMP. El Mapa 2.9 muestra las AMPs enALC, su extensión y tipo de acuerdo con IUCN.

6. MARES Y COSTAS

Page 125: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1236. MARES Y COSTAS

6.2 HUMEDALES

En América Latina y el Caribe hay 227 sitios Ramsar16

designados, que cubren un total de 35,9 millones dehectáreas aproximadamente. México tiene la más altaproporción de esta distribución con un total de 89sitios17. Sin embargo, Perú tiene el área terrestre másgrande de sitios RAMSAR con cerca de 6,8 millones dehectáreas seguido muy de cerca por México, Bolivia yBrasil (Gráfico 2.20). En los territorios caribeños hay untotal de catorce sitios Ramsar de distintos tamaños.

Los humedales a nivel mundial incluyen áreas demanglares que están bajo amenaza al grado de quedesde 1980 alrededor del 20% los manglares hadesaparecido (Valiela y otros, 2001; FAO, 2006), conpérdidas significativas en ALC (Cuadro 2.12). En laregión, los humedales están entre los ecosistemascosteros más subvaluados. Un ejemplo de esto puedeverse en la ciudad de Belice, donde un sistema deestanques bordeado de mangles y las áreas de drenajede humedales con manglares han servido como unainstalación natural de tratamiento de aguas negras parala mayor parte del drenaje proveniente de la ciudad.Además, el dragado para una importante ampliación

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GRÁFICO 2.20

América Latina y el Caribe: Extensión de humedales bajo la convención RAMSAR(En millones de hectáreas)

Fuente: Elaborado por PNUMA con datos de http://www.ramsar.org/cda/ramsar/display/main/main.jsp?zn=ramsar&cp=1_4000_2__ .Consulta a septiembre 2008.

portuaria resultó en la destrucción de más manglares yde los servicios ambientales gratuitos que suministran(WWF, 2004). En Santa Lucía se ha estimado que másdel 50% de los manglares se han perdido con eldesarrollo del sector hotelero (Singh, 2005; Bushnell yotros, 2001). Colectivamente, la conversión de loshumedales en otros tipos de usos de suelo ha resultadoen la destrucción de estos ecosistemas conconsecuencias directas tanto en la pesca como en sucapacidad para proveer servicios ambientalesnecesarios.

16 Sitios designados por la Convención sobre Humedales de ImportanciaInternacional, conocida como Convención Ramsar.

17 http://Ramsar.wetlands.org/; revisado el 10 de junio de 2008.

Page 126: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

124

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

País/Área Estimado confiable 1980 1990 Cambio Anual 2000 Cambio Anual 2005 Cambio Anualmás reciente 1980-1990 1990-2000 2000 - 2005

Ha Ref. Año Ha Ha Ha % Ha Ha % Ha Ha %Brasil 1.012.376 1991 1.050.000 1.015.000 -3.500 -0,3 1.000.000 -1.500 -0,1 1.000.000 0 0

Colombia 371.250 1997 440.000 393.000 -4.700 -1,1 360.300 -3.270 -0,9 350.000 -2.060 -0,6

Ecuador 149.556 1999 203.000 163.000 -4.000 -2,2 150.200 -1.280 -0,8 150.500 60 n.s.

Perú 4.550 1995 8.300 5.800 -250 -3,5 4.500 -130 -2,5 4.500 0 0

Surinam 114.600 1998 115.000 114.800 -20 n.s. 114.600 -20 n.s. 114.400 -40 n.s.

Venezuela (Rep. 250.000 1986 260.000 244.500 -1.550 -0,6 231.000 -1.350 -0,6 223.500 -1.500 -0,7Bolivariana)

Costa Rica 41.840 2000 63.400 53.400 -1.000 -1,7 41.800 -1.160 -2,4 41.000 -160 -0,4

El Salvador 28.000 2004 46.700 35.300 -1.140 -2,8 28.500 -680 -2,1 28.000 -100 -0,3

Guatemala 17.727 1999 18.600 17.400 -120 -0,7 17.500 10 0,1 17.500 0 0

Honduras 78.668 2000 152.500 118.400 -3.410 -2,5 78.700 -3.970 -4 67.200 -2.300 -3,1

México 882.032 2002 1.124.000 985.600 -13.480 -1,3 885.000 -10.060 -1,1 820.000 -13.000 -1,5

Nicaragua 69.050 1998 103.400 79.300 -2.410 -2,6 65.000 -1.430 -2 65.000 0 0

Panamá 174.435 2000 250.000 190.000 -6.000 -2,7 174.400 -1.560 -0,8 170.000 -880 -0,5

Antigua 1.175 1991 1.570 1.200 -37 -2,6 850 -35 -3,4 700 -30 -3,8& Barbuda

Bahamas 141.957 1991 180.000 145.000 -3.500 -2,1 140.000 -500 -0,3 140.000 0 0

Barbados 4 2004 30 16 -1 -1.6 7 -1 -7,9 4 -1 -10,6

Belice 78.511 1990 78.500 78.500 0 0 76.500 -200 -0,3 76.000 -100 -0,1

Cuba 5.485 2003 537.400 541.400 400 0,1 445.500 410 0,1 547.500 400 0,1

Dominica 10 1991 12 10 n.s. -1,8 10 0 0 9 n.s. -2,1

Granada 225 1992 295 260 -4 -1,2 230 -3 -1,2 215 -3 -1,3

Guyana 80.432 1992 91.000 82.200 -880 -1 80.000 -220 -0,3 80.000 0 0

República 21.215 1998 34.400 25.800 -860 -2,8 19.400 -640 -2,8 16.800 -520 -2,8Dominicana

Haití 15.000 1988 17.800 15.000 -280 -1,7 14.300 -70 -0,5 13.700 -120 -0,8

Jamaica 9.731 1997 12.000 10.700 -130 -1,1 9.700 -100 -1 9.600 -20 -0,2

Saint Kitts 79 1991 85 80 -1 -0,6 75 -1 -0,6 70 -1 -1,4y Nevis

Santa Lucía 200 2002 200 200 0 0 200 0 0 200 0 0

San Vicente 51 1991 55 51 n.s. -0,7 50 n.s. -0,2 50 0 0y Granadinas

Trinidad 7.150 1991 7.500 7.170 -33 -0,4 7.000 -17 -0,2 7.000 0 0y Tobago

América Latina y el Caribe: Cambios en la superficie de humedalesCUADRO 2.12

Fuente: FAO, 2007f. The World’s Mangroves 1980 – 2005. A Thematic Study Prepared in the Framework of the Global Forest Resources Assessment, Rome

En la subregión del Caribe, se ha demostrado que a pesarde los intentos de proteger los manglares implantandoprogramas de administración en la zona costera, y delas declaraciones de Humedales de ImportanciaInternacional o sitios Ramsar, aún hay una pérdida netade manglares y lagunas costeras salinas). Se haidentificado una gama de impactos, siendo los siguienteslos más importantes, (Singh, 2005):

Rellenos de tierra y colocación de residuos sólidos.Pérdida de la vegetación, particularmente tala demadera sin regulación para producción de carbón.Recuperación de tierras para agricultura, incluyendoacuicultura.Alteración hidrológica, particularmente porcarreteras y esquemas de desvío de crecidas.Contaminación por efluentes de fábricas ydomésticos.Sedimentación excesiva debida a deficientesprácticas de uso de suelos en las áreas adyacentes.

6.3 PRESIONES A LOS ECOSISTEMASMARINO-COSTEROS

6.3.1 PESCA

Mundialmente se reconocen las pesquerías marinas deChile, Ecuador y Perú, que gracias al sistema de laCorriente de Humboldt, aportan cerca del 20% de lapesca de captura a nivel mundial (Agüero, 2007). En laregión, la pesca representa una proporción relativamentesignificativa del ingreso y un suplemento proteínico (verSección Recursos Hídricos e Hidrobiológicos). Laimportancia de este sector es evidente en las capturasdocumentadas (Gráficos 2.21, 2.22 y 2.23); Argentinaregistró la más alta captura de especies en el océanoAtlántico mientras que Perú tuvo la más alta capturapara el océano Pacífico a lo largo de un período decuatro años.

6. MARES Y COSTAS

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

125

Muchas de las especies son sobreexplotadas y muchaspesquerías mono y multi-específicas en la región ALCestán colapsando o se enfrentan a una inmensa presión(ver el Capítulo III para más información sobre laspresiones de las pesquerías). Entre las razones para estoscolapsos están la pesca excesiva, los métodosdestructivos de pesca y las presiones de contaminaciónantropogénica.

Fuente: Elaborado por PNUMA con datos del portal regional GEOLAC www.geodatos.org. Consulta a Octubre 2009.

0

2.000.000

4.000.000

6.000.000

8.000.000

10.000.000

12.000.000

14.000.000

16.000.000

18.000.000

2002 2003

Atlántico Pacífico

2004 2005 2006

GRÁFICO 2.21

América Latina y el Caribe: Capturas en ambas costas, de 2002 a 2006 (En toneladas)

0

200.000

400.000

600.000

800.000

1.000.000

1.200.000

Argentina Brasil Venezuela México Uruguay Guyana Cuba Suriname Panamá

GRÁFICO 2.22

América Latina y el Caribe: Capturas de peces en el Océano Atlántico paralos nueve primeros países (En Toneladas)

2002 2003 2004 2005 2006

Fuente: Elaborado por PNUMA con datos del portal regional GEOLAC www.geodatos.org. Consulta a Octubre 2009.

6. MARES Y COSTAS

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

0

2.000.000

4.000.000

6.000.000

8.000.000

10.000.000

12.000.000

Perú Chile México Ecuador Panamá Colombia El Salvador Costa Rica Nicaragua

2002 2003 2004 2005 2006Fuente: Elaborado por PNUMA con datos del portal regional GEOLAC www.geodatos.org. Consulta a octubre de 2009.

GRÁFICO 2.23

América Latina y el Caribe: Capturas de peces en el Océano Pacífico paralos nueve primeros países (En Toneladas)

6.3.2 ACUICULTURA

La acuicultura muestra un incremento en el crecimientoy pasó de aproximadamente 722 mil toneladas en 2002a 1.072 mil toneladas en 2006 (Gráfico 2.24) (FAO,2008). En vista de la creciente demanda de productosde la pesquería y la tendencia a la baja de laspoblaciones naturales de peces que denotan losinventarios, es muy probable que la acuicultura

0

200

400

600

800

1.000

1.200

2002 2003 2004 2005 2006

Fuente: FAO 2008. Disponible en www.fao.org/fishery/statistics/software/fishstat consulta Septiembre 25, 2008.

GRÁFICO 2.24

América Latina y el Caribe: Producción total de la acuicultura (En miles de toneladas)

continúe aumentando en la región en la próximadécada.

Para el periodo 2002-2006 la FAO reportó operacionesde acuicultura en 31 países de la región; Chile y Brasilen conjunto representan el 90% de la producciónregional. Chile produce 80% de los productos

6. MARES Y COSTAS

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

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cultivados, seguido de Brasil con el 10%, México conel 5% y Colombia con el 2% (Gráfico 2.25). Por sub-región, Sudamérica produce 85% de la acuicultura dela región por volumen y 84% por valor; Centroaméricarepresenta 10,1% del volumen y 14,3% del valor,mientras que el Caribe representa 5,6% del volumen y2% del valor (Rojas y Wadsworths, 2007).

Sin embargo, el incremento en las áreas cultivadas tantomarinas como terrestres, las tecnologías de producciónintensiva, la introducción de especies no nativas, el usocreciente de alimentos formulados así como laadministración de profilácticos para el control y manejode enfermedades y patógenos son inherentes al aumentoen la producción de la acuicultura. De acuerdo a FAO2007a, todas estas prácticas invariablemente puedencausar:

Aumento de nutrientes y enriquecimiento orgánicode las aguas receptoras, con el consecuente aumentoen los sedimentos anóxicos.Cambios en las comunidades bénticas y laeutrofización de lagos o zonas costeras.Fragmentación, y a veces re-estructuraciónpermanente, de los ambientes biológicos y/o sociales.Competencia por, y en algunos casos, reducción delos recursos (por ejemplo el agua).Efectos negativos por organismos cultivados queescapan de las granjas.

0

100.000

200.000

300.000

400.000

500.000

600.000

700.000

800.000

900.000

Chile Brasil México Colombia Perú Nicaragua Otros

2002 2003 2004 2005 2006

ChileBrasilMéxicoColombiaPerúNicaraguaOtros

80%

10%

5%2% 2% 1% 0%

Fuente: Elaborado por PNUMA con datos de FAO, 2008.Nota: El recuadro muestra el porcentaje de producción por país.

GRÁFICO 2.25

América Latina y el Caribe: Producción anual de la acuicultura por país (En toneladas)

Demandas crecientes de harina de pescado y aceite,que son los principales constituyentes de losalimentos de las especies carnívoras/omnívoras.

El 90% de los países de América Latina y el Cariberequieren desarrollar o fortalecer planes para eldesarrollo y manejo de la acuicultura, cuyo crecimientoha sido principalmente determinado por el sectorprivado y los requisitos de los mercados internacionales(Veilka y otros, 2006). Se necesita que los países de laregión implementen políticas y planes para el desarrollosostenible de este sector económico al igual que parala protección del ambiente.

6. MARES Y COSTAS

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

6.4 AMENAZAS EN LOS ECOSISTEMASMARINO COSTEROS

6.4.1 EROSIÓN DE PLAYAS

Ante la necesidad de captación de divisas, muchospaíses en Latinoamérica están promoviendo el turismonáutico. Esto implica la construcción de marinas, diquesy otras estructuras portuarias, muchas veces llevada acabo sin los estudios oceanográficos necesarios paraprevenir problemas de erosión de playas. Estofrecuentemente tiene consecuencias negativas tales

como aumento en la erosión (ver Recuadro 2.13). Elperfil de playa y el transporte de sedimento son factoresmuy importantes en el diseño de estructuras costeras,ya que son afectados por la altura y período de la ola,la pendiente y el propio material de la playa.

6.4.2 URBANIZACIÓN DE LA ZONA COSTERA

La urbanización en la zona costera (ver Sección ÁreasUrbanas en este Capítulo), principalmente para construircomplejos turísticos, es una constante en todos los paísesde ALC cuyas playas son atractivas para los turistas. En

6. MARES Y COSTAS

Línea costera1988

Línea costera1996

Línea costera2008

Playa Pinney1988-2008

0m 18m

La erosión de playas no es un suceso regular, aveces pueden pasar varios años solamente concambios estacionales, seguidos por unasignificativa erosión durante una tormentaparticular. La erosión en el Caribe insular seatribuye a factores antropogénicos tales como laextracción de arena, el desarrollo costero y lasdefensas marinas deficientemente planeadas yoleajes de invierno y huracanes; la elevación delnivel del mar también es otra causa.

Las tormentas tropicales y los huracanes parecenser factores dominantes que influencian la erosiónsin que las playas puedan regresar a los nivelesanteriores a estos fenómenos. La pérdida delhábitat físico genera serias implicaciones en laflora y fauna, especialmente si se tiene en cuentael incremento en el número y la intensidad deeventos relacionados con el cambio climáticodebido a factores antropogénicos.

La remoción de las dunas y su desaparicióntambién han sido ampliamente documentadas enlas islas del Caribe. Grandes dunas de arena negra,de 6m de altura, en San Vincente y las Granadinas,fueron explotadas en Diamond Bay en los 1980s,dejando un terreno costero plano carente devegetación y vulnerable a las crecidas. El retroceso de los acantilados y los cambios en las costas rocosas están menosdocumentados, aunque el aumento en la exposición de los primeros está asociado con la erosión de las playas, que estámuy expandida. Sin embargo, en países tales como Guyana y Suriname, las ‘playas’ sí sufren de erosión cíclica debido alas descargas del río Orinoco en Sur América.

Entre 1988 y 2008, la línea de marea se ha retirado hacia la tierra 18 m (59 pies) en la Playa Pinney en Nevis. Esta erosiónse debe a la combinación de:

(a) Elevación del nivel del mar.(b) Varios huracanes (Huracán Hugo, 1989, Huracán Luis, 1995, Huracán Lenny, 1999), y(c) Factores antropogénicos, incluyendo construcciones muy cercanas a las playas, estructuras de defensa marinas

deficientemente planeadas, explotación de la arena, dragado mar adentro y la remoción de vegetación costera.

El retroceso de la línea costera tiene impactos severos en la infraestructura costera existente, especialmente en propiedadesturísticas en las playas de las zonas costeras de la región de ALC.

Efectos de la erosion costeraRECUADRO 2.13

Fuente: Bruun, 1962; Cambers, 1998, 2005.

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

129

muchos casos, estas alteraciones tienen consecuenciasecológicas y sociales negativas, por ejemplo, Alcalá(2008) demostró cómo el desarrollo costero ha excluidoa los pescadores de su territorio y ha causado ladesaparición del sistema de ejidos (tierras de propiedadcomunal) del esquema de tenencia de la tierra. Losusuarios tradicionales de las costas se enfrentaron a queel acceso a las playas se restringía lo que condujo anuevos conflictos, como los que ya existen en los PEIDdel Caribe, orientados al turismo. La creciente tendenciade crear sitios de recreo «con todo incluido» haexacerbado este problema. En muchas islas, por ejemplolas Granadinas, los terrenos en playas de primera clasese venden a extranjeros. Como resultado de ello, elacceso a las playas se limita, con la consecuentedisminución del entretenimiento recreativo y culturalde la población local. La pérdida de tales serviciosdebido a la privatización de la propiedad puede generarserias consecuencias socio-económicas y conflictosentre los usuarios.

Los fuertes impactos de la urbanización de las costasde América del Sur condujeron a la Declaración deSanta Clara (2005) (suscrita en Santa Clara del Mar,Argentina). En ella, los pescadores artesanales, lasorganizaciones no gubernamentales, los científicos ylos grupos indígenas expresaron su preocupación sobrelas tendencias neoliberales globales dominantes en laregión y sus efectos. Más aún, atribuyeron estos efectosal desarrollo sin regulación y a la expansión de lasactividades económicas en la zona costera, que incluyenacuicultura intensiva, pesca industrial y turismo de lujo.La declaración asevera que como consecuencia de estasprácticas se degradan los ecosistemas costeros mientrasque los pescadores artesanales, comunidades costerasy grupos indígenas son desplazados de sus hogares.Además, la privatización ha resultado en que una granproporción de las propiedades está concentrada en muypocas manos por un pequeño porcentaje de lapoblación, exacerbando con ello la desigualdad social.Estos temas requieren de respuestas de política en todala región.

6.4.3 CONTAMINACIÓN

En América Latina el 86% de las aguas residuales llegasin tratar a ríos y océanos; en el Caribe la cifra aumentaal 80-90% (PNUMA, 2007). Estas aguas no solamenteson de origen urbano, sino también industrial; muchasindustrias cuenca arriba descargan sus aguas residualesen los ríos, que terminan acarreando todo tipo decontaminantes; desde metales pesados hasta exceso demateria orgánica. Esto constituye un claro ejemplo deexternalización, pues mientras el contaminador no paga

por el tratamiento de sus aguas, el costo recae en losusuarios aguas abajo, en los pescadores o en el sectorturístico.

La zona del Gran Caribe, a pesar de su importanciaecológica, económica y cultural, está expuesta a lacontaminación ambiental de diferentes fuentes. Loscontaminantes provienen de actividades humanas enla zona costera, la zona continental, y el cuerpo de agua.Gold Bouchot, G., 2003. Beltrán y otros, 2005; y Toledo,2005 identificaron algunas de las fuentes y formas decontaminación para esta zona:

Actividades relativas a explotación de hidrocarburosTransporte que causa pérdidas sistemáticas en losbarcos como los derrames opeativos para lavado detanques además de eventos críticos como derramesaccidentales de petróleo.Tuberías rotas, conductos y válvulas que permitenque el petróleo y el gas se escapen.Actividades de plataformas marinas.Descargas provenientes de actividades industrialestierra adentro con los residuos siendo transportadoshacia el mar por ríos; emisiones termoeléctircas yemisiones de complejos petroquímicos e industriales.

6. MARES Y COSTAS

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Metales pesados (mercurio, cromo, plomo y níquel porejemplo):

Actividades petroleras.Industria metalúrgica.Acarreo fluvial de sustancias agroquímicas talescomo pesticidas y herbicidas que también tienenefectos directos en una parte de la biota marina.Residuos de actividades industriales tierra adentrodescargados en ríos y transportados hacia el mar.Actividades industriales en zonas costeras.Residuos de plantas hidroeléctricas.Aguas servidas urbanas e industriales sin tratamiento.

Eutrofización: nutrientes y sedimentosNutrientes nitrogenados y fosfóricos y nutrientes dedescargas domésticas en zonas urbanas y regionesagrícolas.Descargas industriales (refinerías, fábricas de papel,industrias alimenticias e industria química).Descargas de la minería.Suelo (y nutrientes) acarreados como resultado dela deforestación.

Patógenos:Aguas de descarga servidas directamente a cuerpos.de agua, tanto continentales como marinos.Sustancias tóxicas persistentes.Restos de insecticidas domésticos en zonas costeras.Restos de pesticidas usados en zonas agrícolas.

Desperdicio generado por barcos:Aguas de lastre y sentina.Aguas servidas.

Otros:Antibióticos provenientes de actividades ganaderas.Antibióticos provenientes de acuicultura.

6.4.4 ESPECIES INVASORAS

El intenso tráfico marítimo proveniente de laglobalización inevitablemente implica el transporte deespecies de un lugar a otro, a miles de kilómetros dedistancia. En los años recientes, los esfuerzos en lasregulaciones se han concentrado en las aguas de lastrey sus sedimentos (ver Recuadro 2.14). Se estima quehasta 14 mil millones de toneladas de aguas de lastre setransfieren globalmente cada año, y que pueden estarpresentes, en un momento dado entre 7 mil y 10 milespecies u organismos marinos. Las especiesintroducidas tales como bivalvos (por ejemplo, losnotorios mejillones cebra Dreissena polymorpha, unade las principales especies exóticas que causanproblemas en los grandes lagos alrededor del mundosegún Hall y Mill, 2000); así como otros procesos deinvasión en ecosistemas acuáticos y terrestres puedentener efectos ecológicos adversos en los ecosistemas yconsecuentemente, en las actividades económicas comola pesca y en el bienestar humano incluyendo cambiosen las funciones que proveen servicios de paisaje yvalores culturales (Pejchar y Mooney, 2009).

En respuesta a la necesidad de reunir información sobreespecies invasoras, la Comisión Nacional para elConocimiento y Uso de la Biodiversidad de México(CONABIO, 2008), con la asistencia de expertos,

Riesgos de Especies Invasoras en la Reserva Marina de las Islas GalápagosRECUADRO 2.14

En la Reserva Marina de las Islas Galápagos, el Comité de Salud Agrícola y SICGAL (Sistema de Inspección y Cuarentenapara Galápagos) produjeron un plan para manejar las especies invasoras dentro de la Reserva Marina. El plan prioriza lapreparación de protocolos para los tres principales vectores:

Aguas de sentina. Es probablemente un riesgo mínimo ya que la mayor parte de los botes operan casi exclusivamentedentro de la Reserva y relativamente pocos la cruzan.

Aguas de lastre. Es también probablemente un riesgo mínimo ya que los cuatro botes de carga que cruzan laReserva entran llenos y regresan vacíos al continente. Consecuentemente, mientras están en las Galápagos estánrecogiendo más que descargando lastre.

Infestación por quistes. Este es probablemente el mayor riesgo, ya que los botes (yates de turismo y botes de carga)normalmente navegan entre el continente y el archipiélago, los yates pequeños con viajes anuales regulares y losbotes de carga mensualmente. Incluir al Archipiélago de las Galápagos en el itinerario de los cruceros internacionalespuede incrementar este riesgo.

Fuente: Fundación Charles Darwin y Parque Nacional Galápagos. Disponible en: http://www.hear.org/galapagos/invasoras/temas/manejo/marina/index.html,consultado en octubre de 2008.

6. MARES Y COSTAS

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

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implementó el Sistema de Especies Invasoras en México(SIEI). En el ambiente marino reporta tres especiesinvasoras de peces, 17 de crustáceos, 12 de moluscos,24 de otros invertebrados y 49 de algas. Esta cifracontrasta con sólo 22 especies reportadas para Méxicoen la Base de Datos Global de Especies Invasoras18, loque enfatiza la necesidad de dar seguimiento continuoy de contar con información científica mejorestructurada a nivel regional.

6.4.5 AMENAZAS A LOS ARRECIFES DE CORAL

Se estima que el 7% de los arrecifes coralinos del mundoestán localizados dentro del Gran Caribe (CARSEA,2007). En el Caribe hay más de mil especies de corales(Gjerde y Davidson, 1988; Edmunds y otros, 1990,Singh, 2005), incluyendo muchas especies de coralesduros y suaves (CARICOMP, 2002). El inventario decorales gorgónidos blandos es más amplio en el MarCaribe que en otras partes del mundo, y los máscomunes son los corales de orilla (UNEP/CEP, 2003). ElCaribe tiene el número más alto de géneros

regionalmente endémicos en el mundo (ICRAN, 2001)y según Groombridge y Jenkins (1996), hay nuevegéneros de corales endémicos en el Caribe. Los arrecifesde coral en la región se forman a menudo como tal,apenas aguas afuera y paralelos a la línea costera,aunque algunos estudios recientes han demostrado quehay también corales en mares profundos en la regiónde ALC.

Los seres humanos usan los arrecifes y sus productosampliamente como fuentes de alimentos, materiales deconstrucción y fármacos, y también para el acuarismo,entre otros usos. (ver Capítulo III). Adicionalmente,debido a su belleza y carácter único, los arrecifes sehan convertido en un atractivo importante de la industriaturística de ALC y forman parte de sus cimientoseconómicos.

Desafortunadamente, estos valiosos ecosistemas estánsiendo degradados rápidamente por actividadeshumanas como el desarrollo costero, la sedimentación,la sobrepesca y la contaminación marina.Aproximadamente un 36% de los arrecifes coralinosdel Caribe están dentro de los 2 km de la costa y estolos hace altamente susceptibles a las presionesprovenientes de las actividades costeras (Burke YMaidens, 2004).

18 Información disponible en: http://www.issg.org/database/, Consulta aoctubre de 2008.

6. MARES Y COSTAS

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Cambers y otros (2008) indican algunas de las presionesque afectan los sistemas de arrecifes coralinos:

Los arrecifes coralinos se desarrollan en aguas conbaja concentración de nutrientes. Se estima quemenos del 20% de las aguas residuales en la regióndel Caribe es tratada antes de entrar al océano (Burkey Maidens, 2004). Las aguas residuales no tratadasson una fuente importante de nutrientes que entrana las aguas costeras que en circunstancias normalesno tendrían nutrientes. Estos nutrientes favorecenel crecimiento de algas a expensas de los corales(Souter y Linden, 2000), ya que los arrecifescoralinos se desarrollan en aguas con bajaconcentración de nutrientes.La industria del turismo; un sector de importanciasignificativa en la economía regional, tambiénamenaza a los corales de una variedad de maneras.Los botes de buceo pueden dañar las estructuras delos arrecifes con sus anclas, los buzos causan dañofísico y el desarrollo y operación de grandesdesarrollos turísticos aumentan la contaminación yla cantidad de aguas servidas en las aguas costeras,como también lo hace la construcción deinfraestructura para el turismo (carreteras, marinas,aeropuertos).

La conversión de suelos a la agricultura incrementala erosión del suelo y el transporte de sedimentos alas aguas costeras, trayendo con ello pesticidas ynutrientes. Casi un cuarto de las tierras que drenanal Caribe son terrenos agrícolas (Burke y Maidens,2004). El aumento de los sedimentos causapresiones en los ecosistemas costeros de diversasformas, pues éstos disminuyen la filtración de luznecesaria para la fotosíntesis, y la cantidad desubstratos adecuados para corales juveniles, y encasos extremos pueden asfixiar completamente a loscorales. Normalmente, los sedimentos y nutrientesprovenientes de las tierras continentales llegaban almar ya filtrados por manglares y praderas marinas,sin embargo, la pérdida de estos importantesecosistemas y de los servicios que proporcionan seha generalizado en el Caribe (Jameson y otros,1995).Las fuentes de contaminación originadas en el mar,incluyendo descarga de aceites y derrames, aguasservidas, descarga de lastre y sentina, la disposiciónde los desechos de origen humano y de losdesperdicios de los barcos son una causa de granpreocupación en la región del Caribe (Burke yMaidens, 2004).La pesca también impacta los arrecifes coralinos.Los pescadores típicamente buscan a los peces másgrandes del arrecife ya que tienen un valor más altoen el mercado. La reducción en los peces grandesconduce a una reducción en el tamaño promediode las especies capturadas y puede causar que lospescadores recurran a especies de menor valor,eliminando aún más componentes de la redalimenticia del arrecife coralino (McManus y otros,2000). La remoción de algunas especies puedealterar significativamente la estructura del arrecife.Por ejemplo, los peces herbívoros son responsablesde controlar el crecimiento de algas en el arrecife ysi estos peces son removidos del sistema, las algaspueden desarrollarse y reducir la cobertura de coral(Bohnsack, 1993).Los huracanes causan daños extensos en los arrecifescoralinos, como se describió, por ejemplo, para elhuracán Mitch en América Central (Bahena y otros,2000). Los huracanes reducen la complejidad físicade los arrecifes coralinos y la abundancia de coralesvivos (Steneck, 1994). Estos efectos son mayoresen aguas poco profundas donde la acción de lasolas es más grande.

Consecuentemente, se considera que los arrecifescoralinos están en crisis y esto está bien documentadoy ha estimulado numerosas publicaciones sobre sufuturo (Hoegh-Guldberg, 1999) y su vulnerabilidad alcambio ambiental. Las causas de esta crisis no son sólo

6. MARES Y COSTAS

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

133

los factores de presión antes mencionados, si no unamezcla compleja, tanto de presiones impuestas por losseres humanos como de las relacionadas con el clima,e incluyen factores tales como el brote de enfermedadesque se sospecha, aunque no ha sido probado, tienenconexiones con estos dos tipos de presión. Casi dosterceras partes de los arrecifes coralinos del Caribe seencuentran amenazados por algún tipo de actividadantropogénica (desarrollo costero, arrastre desedimentos y contaminantes de la cuenca,contaminación marina y sobrepesca (Burke y Maidens,2004). En la cuenca del Caribe, la cobertura de loscorales se ha reducido hasta el 10% en las últimas tresdécadas (Gardner y otros, 2003).

Los cambios más profundos y generalizados de losarrecifes coralinos del Caribe en los últimos 30 añoshan sido atribuidos a enfermedades, sin embargo, lasrazones para esta súbita emergencia y rápida difusiónno se conocen bien (Buddemeire y Kleypas, 2004). Sehan identificado veintitrés enfermedades y síndromesque afectan a los corales en el Caribe y en la mayorparte de los casos el patógeno que las causa no seconoce (UNEP-WCMC, 2001). Dos brotes específicoshan alterado radicalmente la ecología de los arrecifescoralinos del Caribe. Una enfermedad causó la muertede más del 97% de los erizos Diadema antillarum (erizodiadema) (Lessios, 1988), algunas de cuyas poblacionescomenzaron a recuperarse (Miller y otros, 2003). Asímismo, la enfermedad de la banda blanca oblanqueamiento, ha causado la muerte de muchos delos corales cuernos de alce (Acropora palmata) y cuernosde ciervo (Acropora cervicornis) a lo ancho del Caribe.Estos fueron los corales dominantes en la formación delos arrecifes en el Caribe por decenas a centenas de

miles de años, pero desde 1972 el blanqueamiento, hacontribuido a la reducción de estas especies que hoyson candidatas a ingresar en la lista de las Especies enPeligro de Extinción (Aronson y Precht, 2001). Elblanqueamiento de los corales, se debe principalmenteal incremento en la temperatura del agua (ver CapítuloIII), y la reducción en su tasa de crecimiento debida a laacidificación del agua de mar, como consecuencia delincremento en la concentración de dióxido de carbono(CO2) en la atmósfera (Doney y otros, 2009)

La aparición de estas enfermedades de los coralestambién parece coincidir con las emisiones de polvoen África19 que pueden estar vinculadas con la crecientedesertificación en el norte de dicho continente. EnBarbados, los años de flujo acumulativo de polvo másaltos ocurrieron en 1983-1985-1987, y estos picoscoinciden con eventos de perturbaciones en los arrecifesa lo largo del Caribe (UNEP/GPA, 2006).

Respecto a los ecosistemas de manglar, éstos seencuentran altamente degradados como consecuenciade los desarrollos turísticos costeros, la sobre explotaciónpesquera, la tala, la camaronicultura, el arrastre denutrientes desde las partes altas de las cuencas debidoa la deforestación, la contaminación por productosprovenientes de las actividades agrícolas y pecuarias,así como de la industria y las ciudades (ver CapítuloIII).

6. MARES Y COSTAS

19 El polvo o arena puede viajar desde el Sahara y cruzar el Atlántico hastaalcanzar las américas, depositándose en el mar a lo largo del trayecto. Elpolvo puede afectar los corales a través de la fertilización directa dealgas bénticas por hierro y otros nutrientes que interactúan con amoníacoy nitritos, al igual que el agua del fondo submarino rica en nitratos, asícomo la difusión de esporas de bacterias, virus y hongos.

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134

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

7. CALIDAD DEL AIRE

7. CALIDAD DEL AIRE

Los problemas causados por la contaminaciónatmosférica se traslapan con problemas urbanos yambientales complejos cuya importancia es cada vezmayor en muchas áreas de América Latina y el Caribe,como la congestión y la movilidad del tránsito, loscambios en el uso del suelo, el clima regional, ladegradación de los ecosistemas, así como pérdida devisibilidad y la contaminación acústica que afectan lacalidad de vida y el bienestar de la población.

La contaminación atmosférica es un problema ambientalpersistente, que impone a la sociedad gastossignificativos para la salud y la economía. Uno de losretos ambientales más importantes en América Latina yel Caribe es abordar el problema de las ciudades enrápido crecimiento con mala calidad del aire; lasemisiones atmosféricas provenientes de las principalesáreas urbanas afectan tanto la calidad del aire como elclima, con un impacto que varía desde regional acontinental y global.

En la región, muchas ciudades enfrentan la crecientepérdida de calidad de aire por el funcionamientoinadecuado de fuentes móviles y fijas de emisiones.Dicha situación se explica por un conjunto de factoresque incluyen:

Las especificidades geográficas y meeorología delárea urbana,Las características demográficas,Los patrones de movilidad y el servicio de transporte,La calidad de combustible,El nivel de ingreso de la población,El grado de industrialización,La tasa de crecimiento económico.

Las grandes urbes, como Sao Paulo, Santiago, Ciudadde México y Buenos Aires, presentan serios problemasde contaminación atmosférica similares, causados porun rápido crecimiento demográfico, la expansión urbanadescontrolada, un crecimiento económico no sostenido,

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1357. CALIDAD DEL AIRE

el aumento en el consumo energético y un incrementoen el número de vehículos (Molina y Molina, 2004;Molina y otros, 2004).

La exposición a los contaminantes del aire se haasociado a un mayor riesgo de mortalidad y morbilidad,incluidas las enfermedades respiratorias ycardiovasculares, especialmente en los niños y adultosmayores (Evans y otros, 2002). Por ejemplo, el proyectoEmisiones, Megaciudades y Clima en América del Sur20

(SAEMC) que lleva a cabo el Instituto Interamericanopara la Investigación del Cambio Global (IAI) haencontrado que:

Los habitantes de Ciudad de México, Santiago,Buenos Aires y Bogotá tienen un alto riesgo deimpacto en la salud debido a los altos niveles decontaminación a los que están expuestos. Laspartículas suspendidas en el aire en estas ciudadesexceden los estándares de la Organización Mundialde la Salud por cerca del 90% mientras los nivelesde óxidos de nitrógeno exceden los estándares pormás del 73%.La manera como la contaminación y el climainteractúan al afectar la salud humana difiere porciudad y estación. Los habitantes de Buenos Aires yla Ciudad de México tienen un mayor riesgo demortalidad por enfermedades respiratorias durantela estación cálida, mientras que en Bogotá los niñosson los más afectados durante la temporada fría. Lamortalidad por enfermedad cardiovascular es másalta para personas mayores durante la temporadacálida en Bogotá.La edad y el sexo además de los niveles de ingresodeterminan la susceptibilidad de la población a losriesgos de enfermedades respiratorias ycardiovasculares; la población que habita en losdistritos pobres de Bogotá es más vulnerable; lasdiferencias se hacen más evidentes durante latemporada de frío.

7.1 CALIDAD DEL AIRE URBANO

En América Latina y el Caribe aproximadamente un 79%de la población vive en áreas urbanas (UNFPA 2008);en la Ciudad de México, aproximadamente 25 millonesde personas se ven afectadas por la contaminaciónatmosférica (ver Recuadro 2.15) (INE, 2004). Otros 85millones viven en diferentes áreas urbanas de ALC quetampoco cumplen con los lineamientos de la OMS olos estándares de calidad ambiental de sus países, tales

20 http://saemc.cmm.uchile.cl//index.php?option=com_docman&task=cat_view&gid=60&Itemid=46

como Arequipa, Bogotá, Fortaleza, Lima, Medellín,Santiago y San Salvador (OPS, 2005).

Los problemas de contaminación atmosférica en lasáreas urbanas difieren considerablemente y soninfluenciados por varios factores, como se hamencionado anteriormente; por ejemplo, los procesosde combustión vehicular son menos eficientes a mayoraltitud. Este es un factor significativo en los problemasde contaminación atmosférica de muchas ciudades deALC, incluidas Arequipa, Bogotá, Ciudad de México yQuito (ver el Gráfico 2.26). En la Ciudad de México yen Santiago, las inversiones térmicas causan episodiosfrecuentes por mala ventilación, atrapandocontaminantes, deteriorando la calidad del aire eincrementando la exposición de la población a ellos(Molina y Molina, 2002; Molina y Molina, 2004). Lascondiciones de dispersión también pueden serinsuficientes en algunos momentos en Bogotá, Quito ySao Paulo. Grandes cantidades de materia particuladarespirable (PM2,5 o partículas finas con un diámetroaerodinámico de 2,5m o menos) provenientes detormentas de polvo del norte de África se transportan ala región (Próspero, 2003) y afectan, por ejemplo, a losarrecifes coralinos en el Caribe (ver Sección Mares yCostas).

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136

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

7. CALIDAD DEL AIRE

La Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) yace en una cuenca elevada a 2240 m sobre el nivel del mar y estárodeada en tres costados por cordilleras montañosas. Durante el siglo XX, la población de la ZMVM ha crecido enormemente,conforme las áreas urbanizadas atraían a migrantes de otras partes del país y su industrialización estimulaba el crecimientoeconómico. Hoy día, los aproximadamente 20 millones de habitantes del área metropolitana, más de 40 mil industrias y 4millones de vehículos consumen más de 40 millones de litros de combustible al día y producen miles de toneladas decontaminantes. La elevada altitud y el clima moderado facilitan la producción de ozono durante todo el año y contribuyena la formación de materia particulada secundaria.

Durante la década pasada, el gobierno mexicano ha progresado significativamente en mejorar la calidad del aire. Selograron reducciones sustanciales de algunos contaminantes como el plomo, monóxido de carbono, y dióxido de azufre alimplementar programas de gestión de la calidad del aire así como de monitoreo y evaluación. A pesar de estas mejorasimportantes, los residentes de la ZMVM continúan exponiéndose a concentraciones insalubres de contaminantes aéreos,especialmente de las partículas gruesas (PM10) y ozono, los dos contaminantes más perjudiciales para la salud humana.Actualmente, se está desarrollando un pronóstico de la calidad del aire para anticipar episodios y hacer cumplir algunasmedidas a corto plazo para reducir la exposición poblacional a los contaminantes. Los resultados indican que el problemade la calidad del aire es regional; es decir, las emisiones de las ciudades vecinas también contribuyen a la calidad del airede la ZMVM.

La Campaña MCMA-2003 para caracterizar los contaminantes emitidos a la atmósfera de la ZMVM y la Campaña MILAGRO2006 para estudiar la salida de contaminantes de la Ciudad de México han producido grupos de datos muy completos paraactualizar y mejorar el inventario de emisiones, y comprender mejor los procesos químicos, de dispersión y transporte delos contaminantes emitidos a la atmósfera de la ZMVM y sus impactos regionales y globales.

Al igual que muchas áreas urbanas, el aire de la ZMVM a menudo contiene altos niveles de partículas muy finas (bajo unamicra de tamaño) en aerosol, así como una amplia variedad de contaminantes gaseosos tóxicos. La PM fina de la Ciudadde México por lo general está dominada por especies orgánicas (Salcedo y otros, 2006; Aiken y otros, 2009) y se haobservado que crece muy rápidamente durante las horas de luz, mucho más rápido de lo que pueden explicar los modelosatmosféricos actuales o experimentos de simulación en laboratorio con posibles gases. También se han llevado a caboanálisis de calidad del aire en otras ciudades como Mexicali, Querétaro, Chihuahua y Acapulco.

Contaminación atmosférica en la Zona Metropolitana del Valle de MéxicoRECUADRO 2.15

Fuente: Molina y otros, 2002; Molina y Molina, 2002; García-Reynoso y otros, 2006; García-Reynoso, y otros, 2009; Molina y otros, 2007; Molina y otros,2010; Volkamer y otros, 2006. Osornio y otros, 2007; Coronel, 2005; Cortés, 2005; Ortínez y otros, 2007.

El Cuadro 2.13 muestra los promedios anuales deconcentración ambiental de PM10 (las partículas gruesascon diámetro aerodinámico de 10 μg o menos) medidosen varias ciudades. Algunas ciudades como Ciudad deMéxico, Sao Paulo y Santiago tienen una larga historiade monitoreo de la calidad del aire, mientras que enotras existen solamente algunos pocos puntos de datosde concentración promedio anual (ver Recuadro 2.16).En algunas ciudades como Lima, las concentracionesambientales son muy altas.21 En otras ciudades de laregión, las concentraciones ambientales de PM10 sonmás bajas pero muchas todavía no cumplen con losestándares nacionales22 y los lineamientos de la OMS(OMS, 2007).

21 Sin embargo, los sitios de monitoreo podrían haberse colocado muy cercade la calle. Lima tiene una proporción más alta de buses y camiones queotras ciudades grandes de ALC (IVE, 2008).

22 En la mayoría de los países se ha decretado un estándar anual nacionalde calidad del aire ambiental de 50 μg/m3; la excepción es Colombia,que tiene un nivel establecido en 70 μg/m3 para 2006 y que será reducidoa 60 μg/m3 en 2009 y a 50 μg/m3 en 2011.

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1377. CALIDAD DEL AIRE

Ciudad Concentración anual ambiental promedio de PM10 (μg/m3)2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007

La Paz1 62 67 55 54Lima Norte (PM2,5)

2 61 49 53 65 75 97 55Ciudad de México3 71 60 62 66 56 56 50 46Quito (PM2,5)

4 56 57 29 33San José5 46 42 35 46San Salvador6 52 63 52 52Santiago7 77 72 71 74 68 66 71 69Sao Paulo8 52 49 51 48 41 40 40 44

América Latina y el Caribe: Concentraciones ambientales anualesde PM10 para ciudades seleccionadas

CUADRO 2.13

Fuentes:1, Red de Monitoreo de Calidad del Aire de Bolivia, http://www.redmonica.com/web/; 2, Dirección General de Salud Ambiental, www.digesa.sld.pe/;3, Sistema de Monitoreo Atmosférico de la Ciudad de México; http://www.sma.df.gob.mx/simat2/; 4, CORPAIRE, www.corpaire.org; 5, Estado de la Calidad delAire en Costa Rica, 2007; 6, FUSADES, Informes de Monitoreo de la Calidad del Aire del Área Metropolitana de San Salvador 2004-2007; 7, Comisión Nacionaldel Medio Ambiente, www.conama.cl/rm ; 8, CETESB, Relatorio do Qualidade do Ar 2006, http://www.cetesb.sp.gov.br/Ar/publicacoes.asp.

1988 1993 1998 2003

200

150

100

50

0

Prom

edio

anua

lPM

(g/

m)

103

Promedio anual PM10

1986 1996 2006

O(o

zono

)por

hora

(ppm

)3

0,24

0,20

0,16

0,12

0,08

0,04

0,00

Ozono/hora promedio máximo diario

*PM = Materia Particulada suspendida con diámetro aerodinámico de 10 g o menos10

GRÁFICO 2.26

América Latina y el Caribe: Tendencias en la calidad del aire urbanoCiudades Seleccionadas

Fuente: Elaborado por L. Molina, Nota: Las ciudades seleccionadas son Ciudad de México (diamante azul), Sao Paulo (círculo rojo), Santiago (triángulo verde),Quito (diamante café). En el diagrama de PM, también se muestran las siguientes ciudades: Lima (“*”), San José (triángulos), San Salvador (cuadrados) y La Paz(círculos). Para Quito y Lima está trazado el promedio anual de PM 2,5 en vez de PM 10 y los datos de ozono para Quito son valores promedio de 8 horas. Enel caso de Ciudad de México los valores mostrados corresponden a valores promedio para toda la ciudad. Las fuentes se citan en el cuadro 2.13.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

7. CALIDAD DEL AIRE

La simulación numérica de la calidad del aire en las zonasurbanas es una tarea compleja que requiere inventariosdetallados de emisiones para representar la variación espacialy temporal de las fuentes de emisión. Además, se requierencampos meteorológicos confiables del viento, temperatura,etc., para simular apropiadamente los procesos fotoquímicosy de transporte que llevan a la formación del ozono, losaerosoles secundarios y otros oxidantes en la atmósfera.

Los modelos numéricos pueden utilizarse para explicarepisodios pasados, para evaluar los efectos potenciales dediferentes estrategias para la reducción de emisiones o pararealizar pronósticos de la calidad del aire. Debido a la granpreocupación por los altos niveles de ozono y materiaparticulada, las actividades de modelado y las medicionesse han enfocado en los compuestos orgánicos volátiles (COV)específicos y las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx),así como la concentración de masa y composición bruta dePM10 o PM2,5.

Sin embargo, el inventario de emisiones no existe en muchasciudades de ALC. En aquellas donde se ha desarrollado uninventario, existe una incertidumbre significativa en lasestimaciones de emisiones, particularmente para las fuentesmóviles. Esto probablemente se debe a la falta de recursosinstitucionales, financieros y técnicos para obtener, evaluary validar los datos. Claramente, este es un obstáculoimportante para el modelado confiable de la calidad del aireen la región.

La ciencia de la contaminación atmosférica ha progresadode manera continua, gracias a las mejoras en la capacidadpara medir los contaminantes, precursores y productosintermedios reactivos. Esta información ha facilitado eldesarrollo de mejores modelos computacionales sobre lafotoquímica compleja que causa la formación del O3, otrosoxidantes y la PM secundaria. Por ejemplo, en la Ciudad deMéxico, tanto las mediciones como las simulaciones delmodelo de transporte químico sugieren que la producciónde O3 en la región fuente se limita a COV durante los períodosde actividad fotoquímica (Lei y otros, 2007 y Lei y otros,2008). La sensibilidad a la formación de ozono tieneimportantes implicaciones para las políticas de abatimientodel ozono.

En la Zona Metropolitana del Valle de México, aunquerecientemente se han reportado algunas mediciones decontaminantes provenientes de fuentes estacionarias (porejemplo, Mejía y otros, 2007) y fuentes de área (Velasco yotros, 2005a; Velasco y otros, 2005b), gran parte del esfuerzose ha concentrado en la emisión de vehículos motorizados.Las investigaciones van desde estudios en dinamómetro delos vehículos (por ejemplo, Jazcilevich y otros, 2007) a la

Inventarios de emisiones y modelado de la calidad del aireRECUADRO 2.16

* CARB. California Air Resources Board. http://www.arb.ca.gov/

detección remota (Schifter y otros, 2003) y el muestreo deemisiones individuales mediante laboratorios móviles(Zavala y otros, 2006 y Zavala y otros, 2009). La consistenciaen los cálculos de los inventarios de emisiones para la Ciudadde México fue evaluada por medio de diferentes técnicas,incluido el modelado inverso de la calidad del aire y por laaplicación de modelos de receptor (por ejemplo, Vega yotros, 2000 y Vega y otros, 1997).

En Sao Paulo, Martins y otros (2006) y Sánchez Ccoyllo yotros, (2007) han utilizado mediciones en túneles paraestimar los factores promedio de emisiones para vehículoslivianos y pesados. En general, las emisiones de partículasen los túneles de Sao Paulo son más altas que las que seencuentran en otras ciudades del mundo. El uso de este tipode técnica, combinado con mediciones ambientales, permitemejorar los inventarios de emisiones. Se ha reportado laaplicación de este concepto en Bogotá (Zarate y otros, 2007),Ciudad de México (Arriaga Colina y otros, 2004), Sao Paulo(Andrade y otros, 2004; Freitas y otros, 2005; Sánchez-Ccoyllo y otros, 2006a, 2006b, 2007) y Santiago, Chile(Schmitz, 2005), entre otros.

En la Región Metropolitana de Santiago, el pronóstico de lacalidad del aire se utiliza como herramienta paraimplementar estrategias de mitigación en tiempo real. Seutiliza un modelo estadístico desarrollado por Joe Cassmass(CARB*), que toma observaciones del día anterior y elpronóstico de características sinópticas a gran escala parapredecir las concentraciones de PM 10 para el día siguiente(Schmitz, 2007). El intendente de Santiago tiene la autoridadpara decretar restricciones al transporte vehicular (hasta un60% de la flota no catalítica y 40% de la flota catalítica) yde fuentes industriales si se pronostica que la calidad delaire llegará a niveles inaceptables. La Comisión Nacionaldel Medio Ambiente (CONAMA) de Chile, ha desarrolladoinventarios de emisiones que combinan las mediciones enel sitio con factores de emisión basados en la actividad. Esteinventario se ha utilizado en modelos estadísticos paradiagnosticar la calidad del aire para PM10, y PM2,5 (Jorqueray otros, 2002 a, b; Karamchandani y otros, 1991) y modelosnuméricos para el ozono (Schmitz, 2005). Solamente elúltimo se ha implementado para el pronóstico operativo dela calidad del aire. Los fracasos recientes en el pronósticoestadístico del PM10 (menos del 50% de éxito en predecirlos episodios más intensos el año 2007) ha llevado algobierno local a optar por el pronóstico numérico de lacalidad del aire (que liga las restricciones en emisiones almodelado) para el futuro, y al desarrollo de un modeloalternativo basado en redes neuronales (Pérez y Reyes,2006).

Fuente: Lei y otros, 2007, 2008; Mejía y otros, 2007, Velasco y otros, 2005a; 2005b; Jazcilevich y otros, 2007; Schifter y otros, 2003; Zavala y otros, 2006,2009; Martins y otros, 2006; Sánchez Ccoyllo y otros, 2006a, 2006b 2007; Zarate y otros, 2007; Arriaga Colina y otros, 2004; Andrade y otros, 2004; Freitas yotros, 2005; Schmitz, 2005, 2007; Jorquera y otros, 2002a, 2002b; Karamchandani y otros, 1991, Pérez y Reyes, 2006; CARB (California Air Resources Board.http://www.arb.ca.gov/), CONAMA (Comisión Nacional del Medio Ambiente – Chile).

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1397. CALIDAD DEL AIRE

En los países que actualmente no tienen una red demonitoreo ambiental, un paso inicial hacia lacuantificación de los impactos es obtener datos en unSistema de Información Geográfica (SIG) de fuentesindustriales de emisiones y actividad antropogénica yconstruir un mapa georeferenciado, clasificando lasciudades de más alto riesgo, como se ha hecho en Cuba(Wallo y Cuesta, 2006). Esto sugeriría dónde comenzarcon el monitoreo ambiental.

7.1.1TRANSPORTE

Las estimaciones basadas en los inventarios de emisionesindican que las fuentes móviles son responsables de lamayor parte de la contaminación atmosférica en lasáreas urbanas de la región (CAM, 2008; CETESB, 2007;IVE, 2008; CONAMA, 2008). Los vehículos de gasolina(nafta) viejos y los buses y camiones de diésel (ACPM,gasol) que utilizan tecnologías anticuadas ycombustibles de baja calidad constituyen una gran partede las flotillas de vehículos en muchos países de ALC.Además de la materia particulada, los vehículosautomotores también son fuentes importantes de CO,NOx y los COV.

El transporte ha crecido rápidamente en las últimasdécadas en ALC. Como se presenta en el Cuadro 2.14,entre 1990 y el 2005, el total de la flotilla vehicular enMéxico, Brasil y Chile creció en 211, 230 y 219%,respectivamente (CEPAL, 2007a). En 1994, el ÁreaMetropolitana de Santiago albergaba el 58% de todoslos vehículos automotores en Chile, mientras que enArgentina, un 51% de la flotilla nacional se encontraba

País 1990 1995 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006Belice 20 25 35 40 40 45 50 50 55Bolivia 0 0 390 410 420 440 490 540 600Brasil 18.300 26.600 29.500 31.900 34.300 36.700 39.200 42.000Chile 1.120 1.630 2.080 2.120 2.170 2.200 2.300 2.450 2.600Colombia 1.480 2.250 3.060 3.140 3.240 3.450El Salvador 540 570 610Guatemala 470 660 820 850 880 920 980 1.050 1.080Honduras 480 520 540 580 610 670México 10.200 12.000 17.200 18.300 20.000 21.000 20.900 21.500 21.800Panamá 190 260 320 310 320 340 350 350 370Paraguay 190 340 490 0 0 450 470 510 550Perú 610 860 1.160 1.210 1.340 1.460 1.510 1.610 1.680RepúblicaDominicana 300 1.990 2.120 2.320 2.330 2.120 2.240Venezuela 2.340 2.320 2.490 2.710 2.920 3.030 3.230 3.530

América Latina y el Caribe: Número total de vehículos registrados por país, 1990-2006 (En miles)CUADRO 2.14

Fuente: Base de datos ambientales de CEPAL, http://www.cepal.org/deype/statambiental (descargados en julio del 2008). Los números se han redondeadodebido a incertidumbres en la contabilidad del total de vehículos registrados. Los cuadros en blanco indican que no hay información disponible

en el Gran Buenos Aires. En Brasil, las tres áreasmetropolitanas más grandes - Sao Paulo, Río de Janeiro,y Belo Horizonte - colectivamente representaban un45% de la flotilla vehicular nacional. En El Salvador yCosta Rica, 43% y 75% de los vehículos,respectivamente, están en las ciudades capitales de SanSalvador y San José (Eurolatina, 2006).

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

7. CALIDAD DEL AIRE

Otros factores que influyen en las emisiones vehicularesen ALC son la edad de la flotilla, un mantenimientoinadecuado, la falta de tecnología para el control deemisiones y la calidad del combustible. En algunospaíses, la práctica de importar vehículos usadosineficientes influye en la edad de la flotilla. Por ejemplo,en un estudio realizado en 2003 en Lima, la edadpromedio de los automóviles de pasajeros fue 11 años,comparada con 6,5 años para Santiago (2002) y 7,4para Sao Paulo (2004) para la misma clase de vehículos(IVE, 2008). En el área metropolitana de San Salvador,los autobuses y los camiones constituyen solamente un10% de la flotilla pero contribuyen un 75% de lasemisiones de PM 10 para el transporte (Eurolatina, 2006).

El diésel (ACPM, gasol) se usa ampliamente en el sectorde transportes en ALC. El contenido de azufre en el diéseles crítico para determinar el nivel de partículas de susemisiones: cuanto más alto sea el contenido de azufre,más alta será la emisión de partículas (Clark y otros,2002; COPERT III, 2005). El contenido de azufre deldiésel en ALC varía de un país a otro: El Salvador 0,50%(NSO 75.04.05:97), Panamá 0,50-1,50%, Venezuela

0,50%, Bolivia 0,35%, Uruguay 0,25%, Brasil 0,20%,Argentina 0,15%, Colombia 0,10-0,40%, Chile 0,005-0,03%, Perú 0,035-0,50% y México 0,03-0,5%. Seestima que reducir el contenido de azufre de un 0,5% aun 0,035% disminuiría la emisión de PM10 de losvehículos de diésel en un 75% (COPERT III, 2005). Porlo tanto, es posible y sería beneficioso para la saludpública reducir significativamente las emisiones de PM10por medio de la introducción de combustibles máslimpios. Con los niveles actuales de azufre en el diéselen toda la región ALC, se espera que las fuentes deltransporte continúen siendo el contribuyente principalde partículas ambientales y contaminantes gaseosos alo largo de toda la región.

El Área Metropolitana de Sao Paulo (AMSP), conaproximadamente 19 millones de habitantes en 2006,unas 2000 instalaciones industriales importantes y másde 7 millones de vehículos accionados por diésel,gasolina y etanol, representaba el 17% de la economíabrasileña en el año 2000. Entre 1980 y 2006, lapoblación aumentó en un 65% mientras que el númerode vehículos se multiplicó por siete. El programaPROCONVE (Programa de Controle das EmissõesVeiculares), se implementó en 1986 y establecióestándares de emisiones para vehículos nuevos. Desdeentonces, la emisión de contaminantes se ha reducidosignificativamente y la calidad del aire ha mejorado (verRecuadro 2.17). Sin embargo, el rápido cambio en eluso del suelo ha promovido la modificación climáticalocal y regional, como cambios en los patrones de lluviay el aumento de eventos de fuertes precipitaciones. Lafase VI de PROCONVE estableció estándares másrestrictivos para todas las emisiones de vehículospesados de partículas menores que 10 μg (PM10). Debido

De acuerdo a la Companhia Ambiental do Estado de São Paulo (CETESB) (2007) en el Área Metropolitana de Sao Paulo(AMSP) se encuentran aproximadamente 7,2 millones de vehículos de pasajeros y comerciales, de los cuales 93,5% sonlivianos y 6,5% son vehículos diésel para carga pesada. De los vehículos livianos, aproximadamente un 76,3% quema unamezcla de 78-80% (v/v) de gasolina y 22% de etanol (mezcla conocida como gasohol), y un 17,2% usa etanol hidratado(95% etanol + 5% agua), (CETESB, 2007). La adición de etanol al combustible de vehículos automotores reduce el monóxidode carbono pero el aumento de las emisiones de aldehído ha inducido un problema único de esmog fotoquímico. Desdeel 2003, el número de vehículos que son flexibles en cuanto al combustible (flex-fuel en inglés), cuyos motores puedenfuncionar con diferentes proporciones de gasolina y alcohol, ha aumentado sustancialmente. Durante la primavera, losniveles de ozono rutinariamente exceden los 160 μg/m3 por hora del Estándar Brasileño Nacional Ambiental de Calidaddel Aire. La flotilla vehicular emite aproximadamente un 90% de los precursores del ozono en la atmósfera del AMSP(CETESB, 2007). De acuerdo con el inventario oficial estatal de emisiones de hidrocarburos provenientes de fuentes móviles,un 22% proviene de vehículos accionados por gasohol, un 15% de vehículos accionados por diésel, un 6% de vehículosaccionados por etanol y un 5% de motocicletas. Además, una contribución significativa a las emisiones de hidrocarburosproviene de emisiones por evaporación, que constituyen un 48% del total de emisiones de hidrocarburos a la atmósfera.Los hidrocarburos contribuyen a la formación de esmog fotoquímico y en general son atribuidas a las fuentes móviles. Enel caso específico de los óxidos de nitrógeno, el 78% proviene de vehículos accionados por diésel, 13% de vehículosaccionados por gasohol y 4% de vehículos accionados por etanol.

La experiencia de Sao Paulo con combustibles alternativosRECUADRO 2.17

Fuente: CETESB, 2007; elaborado por M. F. Andrade.

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1417. CALIDAD DEL AIRE

a que la materia particulada fina es el contaminantemás importante con respecto a los impactos en la salud,los procesos radiativos y la formación de nubes, seespera que esta fase del programa genere mayoresbeneficios.

En la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM),alrededor del 54% de la flotilla de gasolina (un total de4,03 millones) y un 43% de la flotilla de diésel (un totalde 165.000) tenían menos de 8 años en 2006 (CAM,2008). En 2007, las autoridades introdujeron unesquema de incentivos para promover vehículos máslimpios y más eficientes. Los nuevos vehículos se eximende la inspección y prueba de mantenimiento (que esobligatoria dos veces al año en la ciudad) durante 2, 4y 6 años, dependiendo de los niveles de emisiones y elkilometraje de cada unidad. Este programa (llamadoverificación vehicular) busca promover la introducciónrápida de vehículos que cumplen la normativa (TIER 2)así como vehículos de bajas emisiones.

Como se mencionó anteriormente, las emisiones portransporte son la causa principal de los problemas decalidad del aire en muchas de las grandes urbes y la

Vista del Sistema Transmilenio de Bogotá. Fuente: D. Hidalgo, 2007.

El sistema de TRB TransMilenio, que fue lanzado en diciembre de 2000, actualmente brinda un servicio de tránsito rápidoy confiable a 1,4 millones de pasajeros/día a una velocidad promedio de 29 km/hora. Los tiempos de viaje se han reducidoen un 32% para los usuarios del sistema y losaccidentes de tránsito mortales en el corredor enun 88%. Se ha estimado que los gases de efectoinvernadero se han reducido en aproximadamente134.000 toneladas/año (J. Grütter, 2007). Estainiciativa ha mejorado la calidad del aire cercana alos corredores del TRB. Por ejemplo, las medicionesrealizadas cerca de un sitio en la Avenida Caracasen 2000 y 2001 (antes y después de lanzar el TRB)mostraron reducciones de SO2, NOx, y PM 10 de un43%, 18% y 12%, respectivamente.

La infraestructura del sistema incluye 84 km decarriles exclusivos para buses en las avenidasprincipales, caminos para buses alimentadores,terminales, puntos de integración inmediata y 100estaciones cerradas, con prepago y abordaje al nivelde los buses. Las líneas de conexión tienen elservicio de 1.070 buses articulados, mientras quelas líneas alimentadoras integradas reciben elservicio de 410 buses convencionales (www.transmilenio.gov.co). Los servicios de bus y recolección del pago de las tarifasson realizados por operadores privados, entre otros los proveedores convencionales de transporte, obtenidos bajo contratosde concesión competitivos. Una nueva agencia pública (TRANSMILENIO S.A.) realiza la planificación, gestión y auditoríadel sistema global.

La implementación de TransMilenio, así como otras iniciativas de transporte sostenible, han logrado la reducción del usode los vehículos privados (a menos de un 15% de los viajes), el aumento del transporte no motorizado y una proporciónestable de los viajes para el sistema público de tránsito (tradicional más TransMilenio).

Transmilenio: El sistema de tránsito rápido de buses (TRB) de Bogotá, ColombiaRECUADRO 2.18

Fuentes: Elaborado por D. Hidalgo con datos de J. Grütter, 2007; www.transmilenio.gov.co.

tendencia en la región de ALC es que estas emisionesse conviertan en la mayor fuente de contaminantesatmosféricos. Sin embargo, sin control del tránsito omejoras en la infraestructura, la cantidad cada vez mayorde vehículos causará congestiones de tránsito queresultarán en mala calidad del aire y en un crecimientoeconómico obstaculizado. El reto es, por lo tanto,mejorar la calidad del aire a la vez que se asegura lamovilización de personas y carga. La primera ciudadde la región que ha introducido sistemas de busesrápidos, que circulan por vías exclusivas, ha sidoCuritiba en Brasil; de esta forma se reducen los tiemposde viaje y el desempeño ambiental del sistema públicode transporte mejora al operarse los buses con menorcongestión. La ciudad de Bogotá opera el exitosoPrograma TransMilenio (ver Recuadro 2.18). El sistemade tránsito rápido de buses (TRB) que entró enfuncionamiento bajo este programa ha reducido eltiempo de viaje y los costos operativos, y el número deaccidentes de tránsito. Más aún, se han logradoreducciones en las emisiones de contaminantesatmosféricos a consecuencia del reemplazo de unaflotilla de vehículos obsoleta, poniendo en prácticaoperaciones de tránsito de buses más eficientes.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Otras ciudades latinoamericanas han introducido unsistema similar de TRB o planean ampliar lainfraestructura existente. En el caso de la Ciudad deMéxico, un estudio reciente realizado por investigadoresen el INE/SEMARNAT demostró que la exposición delos pasajeros al monóxido de carbono, los hidrocarburosy las PM se redujo en aproximadamente un 50% cuandolos buses pequeños de 22 plazas fueron reemplazadospor buses modernos de diésel (Metrobús) que correnen un carril reducido o exclusivo (Wörnschimmel yotros, 2008). Este estudio confirmó los hallazgos deBogotá de que el TRB puede reducir simultáneamentelos contaminantes criterio, las emisiones de gases deefecto invernadero, el nivel de exposición de lospasajeros y el tiempo de viaje.

7.1.2 INDUSTRIA

Muchas actividades no relacionadas con el transportecontribuyen a la contaminación atmosférica en la regiónALC. Entre las más importantes están la generación deenergía eléctrica, la producción de bienes y serviciosen los establecimientos industriales y comerciales, lapreparación de alimentos, el tratamiento de las aguas,el uso de diversos productos de consumo en los hogaresy el manejo y distribución de combustibles.

Las plantas de generación de electricidad con carbón oaceite pesado son fuentes puntuales importantes departículas y dióxido de azufre hacia la atmósfera. Un

23 OLADE 2007, Datos disponibles en en http://www.olade.org.ec/

24 Este índice representa la razón del uso de leña al consumo de derivadosdel petróleo o hidrocarburos secundarios (keroseno, diésel, gas licuado)en los escenarios residenciales.

estudio realizado en México estimó que los impactosmonetarios y en la salud causados por las grandesplantas generadoras podrían ser sustanciales y afectar apoblaciones dentro de un radio de varios cientos dekilómetros desde la fuente (López y otros, 2005).

De acuerdo con las estadísticas de la OrganizaciónLatinoamericana de Energía23, el 19% de las emisionesde CO2 de la región fueron producidas por el sectorindustrial, mientras que de acuerdo a estos datos un15% del total de emisiones de carbono correspondíanal sector de generación de electricidad convirtiéndoseeste en el tercero en importancia después de lasemisiones generadas con el cambio de uso de suelo yel transporte.

7.2 CALIDAD DEL AIRE RURAL

A medida que avanza la urbanización, se ha reconocidoque la producción de oxidantes fotoquímicos seconvierte en un problema regional (NRC, 1991). Losoxidantes fotoquímicos y sus precursores, que provienende las ciudades más grandes, frecuentemente producenaltos niveles de ozono y otros oxidantes que puedenllegar hasta la ciudad grande más próxima, exponiendoa los suburbios, los bosques y las áreas agrícolasintermedias a altas concentraciones de oxidantes. Elmonitoreo de la calidad del aire en ALC se ha enfocadoen las áreas urbanas; hasta la fecha, por ejemplo, nohay una estación de monitoreo de calidad del aire enMéxico que pueda clasificarse como rural.

La quema de leña y de desechos de productos agrícolas,como de la caña de azúcar, está muy difundida en lospaíses mesoamericanos, en donde la extensión de laurbanización es menor y la pobreza es mayor. En lospaíses con un alto consumo de biomasa, ésta es unafuente común de combustible tanto en las áreas urbanascomo en las áreas rurales (CEPAL, 2003).

Las estimaciones del Indice de SostenibilidadResidencial (ISR)24 revelan grandes diferencias en laforma cómo las poblaciones logran satisfacer susnecesidades energéticas domésticas (CEPAL, 2003). Loshogares en Haití, Paraguay, Honduras, Guatemala,Nicaragua, El Salvador, Perú y Brasil dependen en granmedida de la leña para cocinar y calentar sus hogares yel ISR para estos países va de 75 a un 100%. Por otro

7. CALIDAD DEL AIRE

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

143

lado, el uso de la leña para fines de energía domésticaes más bajo en México, Costa Rica, Argentina yVenezuela, donde el ISR se sitúa por debajo del 25%.

7.2.1 MINERÍA

Las actividades mineras intensivas, como la extracciónde petróleo, son una fuente importante de emisionesde PM, SO2 y COV. Los impactos consecuentes en lacalidad del aire pueden variar desde local aregionalmente y el depósito de metales pesados causala degradación de ecosistemas (Carrizales y otros, 2006;De Gregori y otros, 2003; Gidgahen y otros, 2002;Ginocchio, 2000; Klumpp y otros, 2003; Moraes y otros,2002; Richter y otros, 2004).

Las actividades mineras son relevantes en Chile (elmayor productor de cobre en el mundo), Perú, Brasil yMéxico; este último país es el tercer productor mundialde plata, el quinto en plomo y el sexto en molibdeno yzinc25. En 2005, la producción anual fue de $4.900millones de dólares (1,6% del PIB). El impacto socialde la minería se extiende a 24 de los 32 estados, con unimpacto directo o indirecto en 83 millones de

25 http://cuentame.inegi.gob.mx/impresion/economia/mineria.asp

26 http://www.sonami.cl/exposiciones/expomin2006/sergio_almazan.pdf

mexicanos.26 Las emisiones producto de la minería y elacero en 2004 fueron de 6.317.000 Mg/año de CO2,13.952 Mg/año de NO2 y 212 Mg/año de tóxicos aéreos(benceno, metales pesados y otros).

7.2.2 AGRICULTURA

El monitoreo de la calidad del aire en América Latina yel Caribe se ha enfocado en las áreas urbanas y lasinvestigaciones acerca de los impactos se han dedicadoa temas de salud pública. Se sabe que la exposición alozono y los oxidantes fotoquímicos asociados daña lavegetación nativa y agrícola (Emberson y otros, 2003),pero se han realizado pocos estudios acerca de losimpactos de la contaminación atmosférica en lascosechas y los bosques. Una revisión de Fenn y otros(2002) documenta un daño significativo a los bosquesque rodean la cuenca atmosférica de la Ciudad deMéxico causado por la exposición a altos niveles deoxidantes fotoquímicos, principalmente el ozono.También hay estudios en México que demuestran losefectos de los contaminantes atmosféricos sobre laproducción agrícola. Por ejemplo, se ha demostradoque la susceptibilidad de las plantaciones de mango ahongos oportunistas se incrementa en aquellas áreaslocalizadas viento abajo de una planta termoeléctricay esto se asoció a la exposición a la lluvia ácida y lascenizas ricas en Níquel (Ni) y Vanadio (V), que afectanla piel de la fruta (CFE Report, 2003; Siebe y otros, 2003).

7. CALIDAD DEL AIRE

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

MAPA 2.10

Vista del centro de Buenos Aires producto de las quemas agrícolas en el delta del Río Paraná

Nota: Vista del centro de Buenos Aires a finales de abril del 2008 (izquierda). Las quemas agrícolas en el delta del río Paraná son la causa de la malavisibilidad (áreas blanquecinas en la imagen satelital NOAA-17).

Las emisiones provenientes del equipo de apoyo a lasactividades agrícolas son una fuente relevante. Este tipode maquinaria normalmente quema diésel o aceitepesado, tiende a ser vieja y en muchos casos, elmantenimiento de los motores es deficiente o malo. Enconsecuencia, es muy probable que las cantidades deemisiones estén subestimadas en los inventarios actualesde emisiones (Clark y otros, 2002).

El incremento en las exportaciones agrícolas deMesoamérica, Colombia, Chile y otros países en laregión ha causado un aumento en la utilización depesticidas, especialmente en Mesoamérica, con unconsumo per cápita de 1,3 kg, uno de los más altos delmundo (Chelala, 2004) (ver Sección Tierras de esteCapítulo). Esto impone un riesgo por envenenamientoagudo y crónico a la población potencialmenteexpuesta, particularmente en los niños. En la conferenciaRESSCAD XVI, en el año 2000, los Ministerios de Saludde Mesoamérica acordaron restringir el uso depesticidas, en particular los conocidos como «la docenasucia» (OPS, 2004). Sin embargo, solamente Costa Ricaha prohibido esos productos químicos en susimportaciones desde 2004. En El Salvador, se handecretado controles más estrictos sobre la venta depesticidas desde 2004 pero no existe una evaluaciónde qué tan efectiva ha sido la legislación (PLAGSALUD,2008).

7.2.3 INCENDIOS

La tala de los bosques y la quema de rastrojo es unapráctica común para convertir el bosque lluvioso ensuelos agrícolas y para su mantenimiento subsiguiente.Durante los incendios, las concentraciones de partículas

y de monóxido de carbono en el ambiente son altas y,sin excepción, exceden los estándares de calidad delaire (Reinhardt, 2001; Arbex, 2004). Las quemasrepresentan una fuente significativa de contaminaciónatmosférica, a pesar de que ocurren mayoritariamenteen áreas rurales en donde los problemas de calidad delaire a raíz del tránsito o la industria son menos probablesy la densidad de población es más baja. La duración delas quemas es breve, comparada con otras fuentesemisoras; sin embargo las poblaciones humanas queviven cerca están expuestas a altas concentraciones decontaminantes. Estos episodios tienden a convertirse enfuentes importantes de contaminación atmosférica (verMapa 2.10).

Otra práctica común es la quema de los desechos deproductos agrícolas en el campo, tales como la caña deazúcar o los tallos de granos después de la cosecha.Hasta 20 toneladas de caña de azúcar/hectárea sequeman cada año para facilitar la cosecha; las quemastambién tienen efectos significativos sobre lacomposición y acidez del agua de lluvia en grandesáreas del sureste de Brasil (Cançado y otros, 2006; Laray otros, 2005).

En la región Amazónica en el Brasil, un áreaespecialmente crítica (ver Sección Bosques de esteCapítulo), la quema de biomasa es consideradaresponsable del 75% de las emisiones de gases de efectoinvernadero a nivel nacional, de acuerdo a datosoficiales del Ministerio de Ciencia y Tecnología de Brasil(2009); la fuente principal es la quema de bosquetropical. En México, los estudios de campo realizadosen 2006 indican que la quema de biomasa –agrícola,forestal y de desechos– contribuyen a la contaminaciónurbana y regional en la ZMCM (Yokelson y otros, 2007;

7. CALIDAD DEL AIRE

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1457. CALIDAD DEL AIRE

Moffet y otros, 2008; Stone y otros, 2008; Querol y otros,2008). En El Salvador, la quema de biomasa contribuyecon aproximadamente 3,3 mil toneladas de PM10 y 925mil toneladas de CO2 (Eurolatina, 2006).

7.3 IMPACTO EN LA SALUD HUMANA

Los estudios epidemiológicos y toxicológicos hanmostrado una asociación entre el incremento de lacontaminación atmosférica y la mortalidad prematura.Se estima que unas 31.000 muertes anuales debidas aenfermedades cardiovasculares ocurren en la región acausa de la exposición a la contaminación atmosférica(Cohen y otros, 2004). Aunque no se han medidomuchos contaminantes en los estudios epidemiológicos,recientemente el material particulado (PM) ha recibidogran atención en los estudios observacionales yexperimentales, que aportan la evidencia máscontundente de que, en sí, la exposición al PM causaefectos adversos (Pope y Dockery, 2006) (ver elRecuadro 2.19). Entre 1994 y 2004 se llevó a cabo enAmérica Latina y el Caribe un meta-análisis de series

de tiempo, que se enfocó en material particulado (OPS,2005). Se estimó el incremento porcentual de lamortalidad diaria asociada a un aumento de 10 μg/m3

de PM 10 para algunas causas de mortalidad. El Gráfico2.27 muestra los resultados para la mortalidad por todaslas causas y todas las edades. El valor estimado paraeste efecto es similar a los obtenidos de meta-análisisrealizados a nivel mundial (Stieb, 2002) y también enEuropa (Katsouyanni, 2001).

Otros efectos de la contaminación atmosférica son lasexacerbaciones del asma y el aumento de lasenfermedades respiratorias y sus síntomas. Los asmáticosson más susceptibles al desarrollo de síntomasrespiratorios, incluidos los ataques, y requieren atenciónmédica durante los episodios de aumento de los nivelesde contaminación atmosférica. Las infeccionesrespiratorias y sus síntomas, tales como opresión delpecho, tos y resuellos, también ocurren asociados amayores niveles de contaminación atmosférica(American Lung Association, 2001; Mallol, 2004; Scheiy otros, 2004).

Las concentraciones ambientales de material particulado (PM10 y PM2,5) son el resultado de la dispersión de emisioneslocales, el transporte de contribuciones regionales y la generación de aerosoles secundarios, combinado con los procesosde remoción y el transporte atmosférico en condiciones turbulentas. Debido a esta complejidad, se han desarrolladoherramientas específicas para gestionar el diagnóstico e identificación de las fuentes relevantes en un área determinada,para ayudar a enfocar las reducciones de emisiones. Los modelos receptores son procedimientos matemáticos para identificary cuantificar las fuentes de contaminación atmosférica y sus efectos en un sitio (receptor), basándose principalmente en lasmediciones de las concentraciones en el sitio receptor y, por lo general, sin la necesidad de inventarios de emisiones ydatos meteorológicos (Willis, 2000).

En la región, varios estudios han caracterizado los aerosoles urbanos usando modelos de receptor. En São Paulo, CETESBpublicó un análisis de Balance de Masa Química para un área central de la ciudad y encontró que un 67% de las partículasfinas están relacionadas con las emisiones vehiculares (CETESB, 2002). Se han realizado otros estudios utilizando la estadísticamultivariable –análisis de factores, de conglomerados y de componentes principales– (Andrade y otros, 2004; Castaño yArtaxo, 2001), que confirman estos resultados de CETESB. Los resultados muestran una participación significativa de lasemisiones vehiculares en la masa de partículas finas, principalmente relacionada con la concentración de carbono negro.Con esas metodologías, fue posible determinar con mejor resolución la estructura elemental y la distribución por tamañosdel material particulado, como se presenta en los trabajos de Castanho y Artaxo (2001); Miranda y otros, (2002); Sánchez-Ccoyllo y Andrade (2002); y Miranda y Andrade (2005).

En la Ciudad de México, Vega y otros (1997) aplicaron el método de balance de masa química a la PM 2,5 ambiental yencontraron que las fuentes principales eran los vehículos viejos sin convertidores catalíticos, así como los vehículosdiésel de carga pesada; los primeros contribuyeron un 50% de PM 2,5 durante el día y el 38% durante la noche. En Chile,Kavouras y otros (2001) analizaron datos de cinco ciudades medianas, identificando fuentes de PM10 y PM2,5, como lasfundiciones de cobre, los vehículos automotores, el polvo de la calle, las quemas de leña, los sulfatos secundarios, el polvoaéreo y la sal marina. Hedberg y otros (2005) estimaron los impactos de las fundiciones de cobre en las concentracionesambientales de arsénico en el centro de Chile, para distinguir las contribuciones naturales y antropogénicas de PM10.Ambos estudios encontraron niveles ambientales de ~30-70 ng/m3 en áreas pobladas cercanas a las fundiciones de cobre,muy superiores al nivel ambiental mundial de fondo de 1-10 ng/m3 (OMS, 2000a).

Distribución de las fuentes de material particulado en el ambienteRECUADRO 2.19

Fuente: Willis, 2000; CETESB, 2002; Castanho y Artaxo, 2001; Miranda y otros, 2002; Sánchez-Ccoyllo y Andrade, 2002; Miranda y Andrade, 2005; Vega yotros, 1997; Kavouras y otros, 2001; Hedberg y otros, 2005; OMS, 2000.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3,0

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Fuente: OPS, 2005.

GRÁFICO 2.27

7. CALIDAD DEL AIRE

En Sao Paulo se han realizado muchos estudios conrespecto a los efectos de la contaminación atmosféricaen la salud de la población (ver Cuadro 2.15). Los nivelesmás altos de contaminación en Sao Paulo se hanasociado con algunos resultados en salud, como el bajopeso al nacer (Gouveia y otros, 2004); los ingresoshospitalarios (Braga y otros, 1999, 2001; Saldiva y otros,1994; Gouveia y Fletcher, 2000), las visitas a la sala deemergencia por eventos cardiovasculares isquémicos(Lin y otros, 2003) y la mortalidad prematura (Saldiva yotros, 1995; Botter y otros, 2002; Martins y otros, 2004).

Por lo general, la contaminación atmosférica secompone de los mismos contaminantes en toda la regiónALC. Las emisiones vehiculares son una fuenteomnipresente de exposición a PM, NOx, CO y los COV;el ozono generado a partir de los precursores NOx yCOV es una preocupación importante para la salud enla región. En forma consistente, se ha encontrado queviajar cada día para ir al trabajo es la actividad que máscontribuye a la exposición a la contaminaciónatmosférica para la mayoría de las personas que vivenen las grandes ciudades. Esto se ha documentado enuna serie de estudios de exposición personal, llevadosa cabo en la Ciudad de México (Fernández y Ashmore,1995; Gómez-Perales y otros, 2004; Shiohara y otros,2005).

Las diferencias entre países en cuanto a las fuentes decombustión y combustibles también pueden llevar adiferencias en la exposición y los riesgos para la salud.

Los hogares pueden utilizar una combinación decombustibles, tales como electricidad para alumbrar sushogares y leña para cocinar y calentarse en áreasurbanas y suburbanas. Sin embargo es común que lasestufas funcionen mal y que la ventilación y elaislamiento térmico sean inadecuados. Los estudiosrealizados en el área metropolitana de Santiago paraevaluar las concentraciones de partículas intramurosreportaron niveles promedio de exposición de103-173 μg/m3 durante períodos de 24 horas (Rojas yotros, 2001; Cáceres y otros, 2001). Los combustiblesde biomasa son más baratos que otros tipos decombustible y, por lo tanto, las poblaciones más pobrescontinúan favoreciendo su uso. Además de motivoseconómicos, también hay ciertas razones culturales parafavorecer el uso de la biomasa.

Los efectos de la contaminación atmosférica en la saludpueden verse influidos por varios factores demográficos,socioeconómicos y de la salud. Tanto las poblacionesmuy jóvenes como las de los adultos mayores hanmostrado ser sensibles a la exposición a lacontaminación atmosférica. Algunos estudios de seriesde tiempo sobre mortalidad (Castillejos, 2005; Loomisy otros, 1999) sugieren que las partículas suspendidaseran más tóxicas por unidad de masa para los bebés yadultos mayores en la Ciudad de México. Otro estudioen la Ciudad de México señaló la susceptibilidadgenética a la exposición al ozono en los niños asmáticos(Romieu y otros, 2004; 2006).

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1477. CALIDAD DEL AIRE

Cakmak y otros (2007) estudiaron la tasa de mortalidadestimada asociada a la contaminación atmosférica ensiete centros urbanos chilenos durante 1997-2003 yencontraron que la población anciana esparticularmente susceptible a la muerte prematura porcontaminación atmosférica. Las concentraciones quese consideran aceptables para la mayoría de lapoblación podrían no ser adecuadas para proteger lapoblación de edad avanzada. Sanhueza y otros (1998)estudiaron el impacto de la contaminación por partículassuspendidas finas atmosférica sobre la mortalidad diariaen Temuco, una ciudad en el sur de Chile que tienealtos niveles de contaminación atmosférica por PM fina.Encontraron que existía una asociación positivasignificativa y positiva entre las concentraciones de PM10y la mortalidad diaria causada por enfermedadesrespiratorias y cardiovasculares en las personas mayoresde 65 años.

Las personas con menos acceso a la educación enEuropa, Asia y Estados Unidos presentan un riesgo másalto de mortalidad asociado a la exposición diaria y alargo plazo a la contaminación atmosférica. Sin

Causa de mortalidad Aumento de la mortalidad (%) por un incrementode 10 [μg/m3] de la PM2,5 (IC del 95%)

Cardiovascular 1,12 (0,9-1,17)

Enfermedad pulmonar obstructiva crónica 1,15 (0,8-1,24)

Cáncer pulmonar (55 a 64 años de edad) 1,19 (0,9-1,35)

Fuentes: Saldiva y otros, 1994, 1995; Gouveia y otros, 2004, Gouveia y Fletcher, 2000; Martins y otros, 2004. La OMS ha estimado que el humo bajo techoproveniente de combustible sólido causa aproximadamente un tercio de todas las infecciones del tracto respiratorio inferior, un quinto de los casos deenfermedad pulmonar obstructiva crónica y aproximadamente el 1 por ciento de los cánceres de tráquea, bronquios y pulmones (OMS, 2002).

Estudios epidemiológicos de los efectos en la salud de PM2,5 en Sao Paulo (1996-2005)CUADRO 2.15

embargo, durante 1998-2002 se llevó a cabo un nuevoestudio para evaluar si el nivel educativo modificaba elriesgo de mortalidad asociado a la exposición a lacontaminación atmosférica por partículas (PM 10) en tresciudades de América Latina (Ciudad de México,Santiago y Sao Paulo); los resultados indican que laPM 10 tuvo efectos importantes a corto y mediano plazosobre la mortalidad en estas ciudades latinoamericanas,pero los efectos no variaron en forma consistente segúnel nivel educativo.

La evidencia que asocia la exposición a lacontaminación atmosférica a consecuencias adversaspara la salud continúa acumulándose. No obstante,fuera de los contaminantes criterio, muy pocos se hanestudiado o regulado. México está en las fases tempranasde atención a los compuestos tóxicos en el aire. En el2004 y 2006, se preparó un inventario de emisiones detóxicos en el aire para la ZMVM (SMA/GDF). Serealizaron estudios de medición de campo en 2003 y2006 en la Ciudad de México, que han proporcionadoinformación valiosa acerca de los contaminantes nocriterio (Molina y otros, 2007-2008).

Page 150: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

148

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

7. CALIDAD DEL AIRE

7.4 CALIDAD DEL AIRE Y EL CAMBIOCLIMÁTICO

Como se mencionó en el Capítulo I, la región, yparticularmente los Pequeños Estados Insulares enDesarrollo del Caribe son especialmente vulnerables alos efectos del cambio climático, como el aumento delnivel del mar y los eventos climáticos extremos (IPCC,2007). La calidad del aire es muy sensible al clima y,por consiguiente, el cambio climático podría tenerimportantes implicaciones sobre la calidad del aire. EnMéxico existe una preocupación en particular conrespecto a los efectos de los incendios forestalesrelacionados con sequías en la calidad del aire y si lafrecuencia de sequías severas podría aumentar por elcambio climático. El efecto de los incendios forestalessobre la calidad del aire urbano puede ser sustancial.Por ejemplo, en la primavera del 2005, el áreametropolitana de Guadalajara tuvo uno de los episodiosmás severos de calidad del aire en su historia, debido aun incendio en el vecino bosque La Primavera (INE-SEMARNAT, 2006b).

Se han llevado a cabo evaluaciones integradas queanalizan los beneficios compartidos de los esfuerzoscoordinados para la mitigación de la contaminaciónatmosférica y el cambio climático para diferentes partesdel mundo. Por ejemplo, un análisis de cuatromegaciudades (Ciudad de México, Ciudad de NuevaYork, Santiago y Sao Paulo) indicó que la mitigación de

los gases de efecto invernadero produciría grandesreducciones de las concentraciones de ozono y materiaparticulada, con mejoras sustanciales resultantes en lasalud pública (Cifuentes y otros, 2001). McKinley y otros(2005) encontraron que cinco medidas propuestas enla Ciudad de México que se estimaba reducirían laexposición anual a partículas en un 1% y el ozono diariomáximo en un 3%, también reducirían las emisionesde gases de efecto invernadero en un 2% para los dosperíodos considerados (2003-2010 y 2003-2020). Másaún, se ahorrarían aproximadamente 4400 Años de VidaAjustados por Calidad (QALY, por sus siglas en inglés)en ambos horizontes de tiempo. Otro estudio demostróque si el actual Plan de Gestión de la CalidadAtmosférica (PROAIRE 2002-2010) de la Ciudad deMéxico fuese implementado según fue planificado,produciría una reducción del 3,1% de las emisionesproyectadas de CO2 en 2010, además de las reduccionessustanciales de los contaminantes del aire a nivel local(West y otros, 2004).

En resumen, el cambio climático puede tener impactosimportantes sobre la calidad del aire y los contaminantesatmosféricos. Por lo tanto, es importante integrar metasde calidad del aire y de estabilización climática en eldiseño de las políticas ambientales, con el fin de lograrlos beneficios sinérgicos potenciales y asegurar que lasacciones llevadas a cabo para reducir las emisiones degases de efecto invernadero no causen consecuenciasinesperadas con respecto a la calidad del aire oviceversa.

Page 151: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1498. ÁREAS URBANAS

8. ÁREAS URBANAS

América Latina y el Caribe es una región con una largatradición urbana y sus ciudades tienen una historiacompleja, marcada muchas veces por su pasadoprecolombino, y acompañada por las grandesmodificaciones en la relación entre las sociedades y elambiente que se iniciaron con la conquista europea.Los rasgos históricos han marcado, sin duda, a lasciudades contemporáneas de esta región y haninfluenciado, entre otras cosas, al impacto que tienensobre el ambiente.

8.1 URBANIZACIÓN EN ALCLa tendencia a la urbanización creciente es unfenómeno mundial generalizado de grandesconsecuencias ambientales, sociales, económicas ypolíticas. Se calcula que en dos décadas el 60% de lapoblación mundial vivirá en asentamientos urbanos.Actualmente, el 79% de la población de América Latinay el Caribe vive en ciudades, lo que la hace la regióndel mundo en desarrollo con la mayor proporción depoblación urbana, pues África y Asia tienen el 39% y41% respectivamente (UNFPA, 2008). Se estima quela tasa de crecimiento anual promedio de la poblaciónurbana en América Latina y el Caribe será 1.46%, yque pasará de 394 millones de personas en el año 2000a 609 millones en 2030 (UN Habitat, 2007). En laregión, Sudamérica tiene la mayor urbanización (83%de la población es urbana), seguida de Mesoamérica(71%) y el Caribe (66%) (UNFPA, 2008) (Gráfico 2.28).

En el desarrollo urbano regional existen diferencias tantode escala como de forma, dadas las particularidadespolítico-institucionales, socio-demográficas, económi-cas y ambientales de cada país. Si bien hay unpredominio de población urbana, los patronesnacionales varían a lo largo de toda la región. Caberesaltar que el Caribe se diferencia de otrosconglomerados insulares por su tasa relativamente altade urbanización. Aún así, en esta subregión hay

48,8

%

67,6

% 77,8

%

64,7

%

61,5

% 68,6

% 80,2

%

75,9

%

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% 71,0

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10%

20%

30%

40%

50%

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80%

90%

Caribe Mesoamérica Sudamérica Total ALC

1997 2002 2007 2008

GRÁFICO 2.28

América Latina y el Caribe: Evolución del porcentaje de población urbana

Fuente: United Nations Population Fund (UNPFA), 2008.

Page 152: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

150

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

8. ÁREAS URBANAS

diferencias importantes, pues países como Antigua yBarbuda, Haití y Montserrat tienen menos del 40% depoblación urbana, mientras que las Bahamas,Guadalupe y Martinica presentan más del 80% deurbanización (UNDP, 2007). En los países coneconomías desarrolladas es común que el proceso deurbanización se sustente en el desarrollo de numerosasciudades medias, mientras que en los países endesarrollo ha sido más común el surgimiento de unfenómeno no conocido hasta el siglo XX: lasmegaciudades o megalópolis. Las megaciudades son

Fuente: Elaborado a partir de datos de United Nations Population Fund (UNFPA 2008), State of the World Population, 2007.* Datos no disponibles en esta categoría debido a que UNFPA, 2008 reporta datos para ciudades de más de un millón de habitantes.

Rango de tamaño

Megaciudades:Igual o más de 10 millones de habitantes

Grandes CiudadesEntre 5.000.000 a 9.999.999 habitantes

Ciudades intermediasEntre: 1.000.000 a 4.999.999 habitantes

Pequeñas CiudadesEntre 500 mil a 999 mil habitantes

Número de ciudades

(4) Sao Paulo (Br), Ciudad de México (Mx), Buenos Aires (Ar),Río de Janeiro (Br)

(4) Bogotá (Co), Lima (Pe), Santiago de Chile (Chi), Belo Horizonte (Br),

(48) Argentina 3, Bolivia 1, Brasil 19, Chile 1, Colombia 5, Costa Rica 1,Cuba 1, República Dominicana 1, Ecuador 1, El Salvador 1, Guatemala

1, Haití 1, México 9, Panamá 1, Paraguay 1, Perú 1, Uruguay 1,Venezuela 5.

Población

62,42

27,08

96,69

*

América Latina y el Caribe: Población en principales ciudades de mayor tamaño 2006(En millones de habitantes)

CUADRO 2.16

ciudades con más de 10 millones de habitantes en lasque se concentran recursos financieros, estructurasindustriales/comerciales, actividades políticas yadministrativas, facilidades educativas y personalcientífico (Fuchs, 1999). Además, 4% de la poblaciónmundial y 9% de la población urbana del mundo seconcentra en las megaciudades (UNFPA, 2008).También, 19 de las 21 megaciudades se concentran enlos países en vías de desarrollo y 4 de ellas se ubican enla región de América Latina y el Caribe: Ciudad deMéxico –una de las primeras cuatro del mundo y laprimera de la región– , Sao Paulo, Río de Janeiro yBuenos Aires. Además de las megaciudades seencuentran ciudades de diferentes dimensiones,catalogadas en grandes, intermedias y pequeñas(Cuadro 2.16).

El crecimiento de las ciudades intermedias confrecuencia se debe a la concentración de actividadesnuevas de importancia económica, como la maquila yel turismo, o a la influencia de ciudades vecinas demayor tamaño (UN Habitat, 2008). Actualmente másdel 60% de la población de ALC vive en ciudades conmenos de un millón de habitantes, algunas de las cualesresultan muy importantes por el rol articulador quecumplen en el tejido de relaciones entre ellas y otrosnúcleos externos (Ballet y Llop, 2004).

En la actualidad, con frecuencia ya no son lasmegaciudades las que presentan mayores tasas decrecimiento, si no las ciudades intermedias y sobre todolas pequeñas. Se observa una transición entre lossistemas monocéntricos, en los que una gran ciudad esla más importante, hacia los sistemas policéntricos, enlos que varias ciudades de menor tamaño tienenactividades sociales, económicas y políticasequivalentemente relevantes. De hecho, las ciudadescon poblaciones entre 100 y 500 mil habitantes en estaregión albergan a la mayor proporción urbana (39%)

Page 153: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1518. ÁREAS URBANAS

que cualquier otra región en desarrollo (18% Asia y 16%en África) y cerca de la mitad de los nuevos residentesurbanos habitan en estas ciudades (UN Habitat, 2008).Este fenómeno se observa, por ejemplo, en Brasil,México, y Venezuela (Bazant, 2001; Garza y RuizChiapetto, 2000; Garza, 2002, UN Habitat, 2008).Aunque la tendencia es a la disminución de ladominancia de las ciudades primarias, el proceso noes uniforme en toda la región. En algunas parte prevaleceaún una ciudad primaria que concentra la mayor partedel crecimiento, como sucede en Puerto Príncipe (Haití),Panamá (Panamá) y San José (Costa Rica), queconcentran el 50% de la población del país (UN Habitat,2008).

Una de las causas de crecimiento de las ciudades demenor tamaño es la generación acelerada de empleospor demandas del mercado, como en el caso de lasmaquiladoras, que generaron el crecimiento de ciudadesfronterizas como Reynosa, Matamoros, Nuevo Laredoy Ciudad Juárez en México. También crecen por ofrecerservicios vinculados a una ciudad grande cercana comosucede en Alajuela (vecina de San José, en Costa Rica)por su aeropuerto y en Sao Jose dos Pinhas (cerca deCuritiba) por su crecimiento industrial. Igualmente hacrecido San Bernardo por su cercanía con Santiago deChile, y Cabinas por su buena comunicación conMaracaibo.

Un motor determinante para el crecimiento de lasciudades en ALC es la inmigración desde zonas rurales,que se da por causas como el empobrecimiento extremopor el deterioro de los medios de subsistencia, la faltade seguridad, la búsqueda de empleos o de servicios(por ejemplo, de salud o educativos), entre otras(Mendoza 2003). Además, hay un alto porcentaje demigración entre ciudades, y cerca del 50% de lasemigraciones se inician y terminan en zonas urbanas(UN Habitat, 2008).

En ALC, como en otras regiones del mundo, se observaun proceso de urbanización de la pobreza (PNUMA,2005; UNFPA, 2007), dado que la mayoría de losinmigrantes rurales vive en condiciones de pobreza enlas ciudades hacia las que se desplazan buscandomejores condiciones de vida. Así, por ejemplo, 40% delos inmigrantes de origen rural en la ciudad de Méxicoy 30% en Sao Paulo viven en condiciones de pobreza(CONAPO, 2004; UN Habitat, 200827). Este patrón serepite en todas las grandes ciudades de la región(UNFPA, 2007), muchas de las cuales se encuentranentre las más inequitativas del mundo (UN Habitat,2008).

A pesar del descenso en las tasas de crecimiento de losasentamientos informales, en 2005 éstos albergaban enALC a más de 117 millones de habitantes lo querepresenta cerca del 27% de la población de la región(UN Habitat, 2008). América Latina y el Caribe es laúnica región en desarrollo en la que las desigualdadessociales son semejantes en las zonas urbanas y rurales,al grado de que en Chile y en México son prácticamenteidénticas. Las ciudades con mayor índice de desigualdadson Goiania, Brasilia, Belo Horizonte, Fortaleza, SaoPaulo (Brasil) y Bogotá (Colombia), mientras que las demenor desigualdad son Caracas (Venezuela),Montevideo (Uruguay) y Guadalajara (México) (UNHabitat 2008). La desigualdad es al mismo tiempo causay expresión de los problemas ambientales de lasciudades, y es sin duda una de las prioridades a atenderen todos los asentamientos urbanos de la región.

La población urbana localizada en zonas costerastambién representa un reto en el manejo del desarrollourbano y en la atenuación de los efectos del cambioclimático; según UN Habitat 2008, 33 millones y mediode habitantes viven en la zona de baja elevación costeray tres cuartas partes son población urbana; el 27% delas ciudades del mundo más vulnerables a la elevacióndel nivel del mar por causa del cambio climático seencuentran en la región (904 ciudades) (ver Sección 7Mares y Costas en este capítulo y el apartadoVulnerabilidad Urbana, Eventos Extremos y CambioClimático en esta sección). Cerca del 50% de lapoblación de la región vive a menos de 100km de lacosta (Portal GEO Datos) lo que pone en situación devulnerabilidad a casi 290 millones de personas.27 Información disponible en www.unhabitat.org/mdg/lac.summary.asp

Page 154: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

152

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Elaborado por I. Monterroso con datos Wackernagel and Rees, 1996, Wackernagel y otros, 2002, http://www.footprintnetwork.org

La huella ecológica es un indicador que se ha utilizado para medir la presión humana sobre los recursos del planeta,indicando la demanda que una persona, un país o una región tiene sobre los recursos a nivel global. Por ejemplo, segúnsus proponentes, la huella ecológica indica la cantidad de hectáreas de tierra (del total disponibles a nivel global) requeridaspara que una persona pueda satisfacer sus necesidades (dichas necesidades variarían de acuerdo al contexto socio-culturaly económico en el que la persona se encuentre). Según datos de Footprintnetwork para algunos países en América Latinay el Carible los resultados varían entre 2 y 3 hectáreas globales per cápita (para Colombia y Nicaragua respectivamente)mientras que una persona viviendo en Haití requerirá cerca de 0,6 hectáreas globales (cálculos realizados previo al terremoto2010); esto indica que para que una persona viviendo en Colombia y Nicaragua se requerirán una mayor cantidad dehectáreas. Como contraste, las demandas sobre los recursos naturales de una persona viviendo en Estados Unidos serámucho mayor al del conjunto de los anteriores, ya que sus demandas sobre los recursos requerirán más de 10 hectáreasglobales (el promedio global es de 3 hectáreas globales).

Huella EcológicaRECUADRO 2.20

8.2 CONDICIONES DEL AMBIENTE URBANO

En América Latina y el Caribe la situación ambientalgeneral de las ciudades es preocupante. Unamanifestación de los desequilibrios en elfuncionamiento del sistema urbano se expresa en lapersistencia de problemas ambientales, entre los quedestacan la ausencia de ordenamientos territoriales, elcambio no planificado del uso del suelo con laconsecuente pérdida de cobertura vegetal, debiodiversidad y de los servicios ambientales en general,así como la contaminación del aire, el agua y el suelo.

Proporcionar servicios a los habitantes de una ciudades siempre un reto para la gestión pública, pero estambién una oportunidad para hacerlo de una manerasustentable considerando que las personas que losrequieren se concentran en áreas específicas, lo quehace que la demanda esté también concentrada. Sinembargo, cuando las ciudades crecendesordenadamente como lo ha hecho la mayoría enALC, los problemas se incrementan y se potencian, enalgunos casos inclusive se pierden servicios con los queya se contaba, o se degrada la calidad de los mismos.

Uno de los efectos indeseables del crecimiento noplanificado es la extensión de los efectos ambientales

de las ciudades fuera de sus límites. Las necesidades deagua, alimentos, materiales de construcción y energíade una gran ciudad generalmente se satisfacen aexpensas de zonas ubicadas fuera de ellas, confrecuencia incluso muy distantes (100km o más en elcaso de Sao Paulo). Igualmente, los desechos de lasciudades frecuentemente impactan, directa oindirectamente, a las regiones vecinas. Así, los drenajescontaminan cuerpos de agua que atraviesan zonas nourbanas que se ven afectadas, los contaminantesatmosféricos se dispersan hacia zonas periurbanas yrurales vecinas y los desechos sólidos invaden áreas queno producen cantidades equiparables a las que eliminauna ciudad, además de que sus lixiviados se filtran hastalos mantos acuíferos contaminando el agua delsubsuelo. De esta forma, la huella ecológica de lasciudades es más grande de lo que parece si sólo seconsidera su extensión (ver Recuadro 2.20).Adicionalmente, como se mencionó anteriormente, lapresencia de una ciudad grande dispara el crecimientode ciudades que fungen como subsidiarias en muchossentidos al ubicarse en ellas, por ejemplo, aeropuertoso desarrollos inmobiliarios de precio accesible.

Entre los aspectos que el desarrollo urbano debe atenderdestacan los siguientes: residuos sólidos y salud;disponibilidad y calidad del agua; calidad del aire,transporte y salud; áreas verdes y biodiversidad urbana;y vulnerabilidad urbana al cambio climático y eventosextremos. Excepto calidad del aire y su relación contransporte y salud que fueron tratados en la secciónprecedente de este capítulo, los temas antesmencionados se tratan a continuación; los informes GEOCiudades de ciudades seleccionadas28 han servido comobase para la elaboración del siguiente análisis.

28 Ciudades que han sido analizadas con la metodología del PNUMA ypara las cuales se cuenta con un Informe GEO específico (PNUMA 2002a;2002b, 2003b; 2003c; 2003d; 2003e; 2003f; 2004b; 2006; 2005a;2005b; 2005c; 2004a; 2007a; 2007b; 2007c; 2008a; 2008b, 2008c;2008d)

8. ÁREAS URBANAS

Page 155: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

153

GRÁFICO 2.29

América Latina y el Caribe: Proporción de la población con acceso a agua potable y saneamientobásico en área rural y urbana por subregiones. 2004 (En porcentaje)

100

90

80

70

60

50

40

30

20

10

0Caribe Mesoamérica Sudamérica ALC

74,672,1

84,9

99,2

65,5

95,5

73,2

95,0

RURAL

ACCESO A AGUA POTABLE100

90

80

70

60

50

40

30

20

10

0Caribe Mesoamérica Sudamérica ALC

ACCESO A SANEAMIENTO

URBANO

57,3

69,3

50,3

89,1

46,5

84,6

49,1

84,8

Fuente: Elaborado por PNUMA con datos de GEO Data Portal http://geodata.grid.unep.ch, consultado en febrero de 2010. Datos de OMS 2006Nota: Porcentajes calculados para 46 economías.

8. ÁREAS URBANAS

8.2.1 DISPONIBILIDAD Y CALIDAD DE AGUA

Las ciudades con altas tasas de crecimiento enfrentanrestricciones para el abastecimiento de agua potablepara una población creciente, independientemente desi las fuentes de suministro son superficiales (ríos y lagos)o subterráneas (acuíferos).

Frecuentemente las ciudades en esta región hansobreexplotado sus recursos hídricos, al punto degenerar un desequilibrio entre la disponibilidad delrecurso y los requerimientos crecientes de agua potablede la población. Este patrón se puede traducir en que elagua se convierta, a gran escala, en un recurso norenovable a nivel regional (Carabias y Landa, 2005).Adicionalmente, diferentes países han enfrentadorepetidas crisis económicas y eventos naturalesextremos, como terremotos e inundaciones que afectana la infraestructura instalada, lo que ha limitado elmantenimiento de los servicios de suministro y la calidaddel líquido, como sucede en Managua y en La Habana,(Pérez Rodríguez, 2008) entre otras ciudades.

Acceso al Agua Potable y saneamiento

En ALC, la cobertura del servicio de agua potablemediante una conexión doméstica alcanza el 80%, peroaún existen alrededor de 50 millones de personas quecarecen del más mínimo acceso al agua potable. Lamayoría de los países de la región tienen acceso casiuniversal al agua potable y saneamiento (UN Habitat,2008); Guatemala, Haití, Nicaragua y Bolivia tienen lospromedios más bajos de acceso a saneamiento en la

región con menos del 50% (CEPALSTAT, 201029). A pesardel alto porcentaje con cobertura, existe una grandiferencia entre áreas urbanas y áreas rurales; el Gráfico2.29 muestra el acceso a agua potable en las zonasurbanas y se compara con las rurales (WSP, 2007) porsubregiones y el Gráfico 2.30, presenta la cobertura deagua potable y saneamiento por países en lassubregiones; en áreas rurales y urbanas.

Si la tendencia actual a incrementar el acceso al aguapotable continúa, para 2015 se pronostica que elnúmero de personas sin acceso a fuentes mejoradas deagua potable habrá disminuido a 25 millones (OMS/UNICEF, 2007).

29 http://websie.eclac.cl/sisgen/ConsultaIntegrada.asp

Page 156: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

154

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

0

10

20

30

40

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0102030405060708090

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Agua potable en ALCC

ARI

BEM

ESO

AM

ÉRIC

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DA

MÉR

ICA

Saneamiento en ALC

GRÁFICO 2.30

América Latina y el Caribe: Acceso a agua potable y saneamiento básico, países por subregión

Fuentes: GWP, 2008; INRH, 2005; IRC, 2008; JMP, 2006; Martínez-Frías y otros, 2003; Marín y Ramírez, 2005; OPS/OMS, 2003; OMS/UNICEF (2007); Orozco,2004; Ortiz, 2006; PNUMA/ANA/MMA, 2007; RAS-ES, 2001; Recalde, 2003; SISS, 2007; UNDP Paraguay, 2007; Unicef-Guatemala, s.f; Unicef-Jamaica, 2004;Uribe, 2007; USAID, 2005; Van Damme, 2002; Vega y otros, 2006; Velásquez y Serrano, 2004.

8. ÁREAS URBANAS

Page 157: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

155

La falta de acceso al agua potable tiene efectos en muydiferentes ámbitos que incluyen la salud y la economíade las familias. Dado que la población de bajos ingresostiene acceso limitado al agua potable, depende de lacompra de agua a camiones cisterna a precios superioresque los correspondientes a la tarifa del servicio regular.Además, esta agua por lo general es de dudosa calidady pone en riesgo la salud de la población (OMS, 2000a).Así, paradójicamente, quienes menos recursos tienenson quienes más deben gastar en agua.

El desarrollo de infraestructura para la provisión de losservicios de agua potable y saneamiento estádirectamente vinculado con la capacidad de inversiónde los gobiernos locales, regionales y nacionales, juntocon la política de tarifas y la capacidad de cobro realque se tenga. En algunos casos, las tarifas subsidiadasfavorecen un comportamiento de desperdicio delrecurso hídrico y limitan la disponibilidad de recursosfinancieros para inversión en infraestructura yampliación de la cobertura de los servicios. De otrolado, los ingresos limitados de la población y la reducidacapacidad de pago restringen las posibilidades demantenimiento y supervisión del funcionamiento de lared. Esta contradicción contribuye a dificultar el accesoequitativo al agua limpia y a los servicios de saneamientoy reciclaje que lo deben acompañar. En muchasocasiones el problema se agrava por una normatividadinsuficiente y una limitada capacidad para asegurar sucumplimiento.

La infraestructura para el abastecimiento de agua yalcantarillado ha mejorado en diversas ciudades de laregión. Así, en 9 de los 17 perfiles ambientales urbanos

producidos en la región (GEO Ciudades) y usados paraeste análisis se registra que más del 90% de la poblacióntiene acceso al agua potable (ver Gráfico 2.31). Sinembargo, el acceso a dichos servicios y su calidad sondiferenciados al interior de cada ciudad. En toda laregión, las zonas marginales enfrentan reiteradamenteproblemas críticos de saneamiento básico, falta deservicios de agua potable y aseo urbano, entre otros.

0% 10% 20% 30% 40% 50% 60% 70% 80% 90% 100%

Loja

Esmeralda

San Miguel de Tucumán

Arequipa

La Habana

Santo Domingo

Santiago

Lima

Buenos Aires

Sao Paulo

Ciudad de México

Cobertura de agua potable Cobertura de alcantarillado

Megaciudades

GrandesCiudades

CiudadesIntermedias

Pequeñasciudades

GRÁFICO 2.31

América Latina y el Caribe: Cobertura de agua potable y alcantarillado en ciudades seleccionadas

Fuente: Informes GEO Ciudades de Ciudad de México, Sao Paulo, Buenos Aires, Lima, Bogotá, Santiago, Río de Janeiro, Montevideo, Santo Domingo, Panamá,La Habana, San José de Costa Rica, Rosario, Arequipa, Chiclayo, Tucumán, Esmeralda y Loja.

8. ÁREAS URBANAS

Page 158: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

156

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Para que América Latina y el Caribe logre alcanzar lameta de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM),según el informe de OMS/UNICEF 2007, 10 millonesde personas deben obtener acceso al saneamiento cadaaño y si continúan las tendencias actuales hasta 2015,el número de personas sin acceso a un saneamientomejorado en la región disminuirá en 24 millones. Deigual forma, algunos países como Argentina, Chile,Ecuador, Guatemala, México, Paraguay, RepúblicaDominicana y Uruguay podrían alcanzar los ODM atiempo (JMP, 2006).

Más de 125 millones de personas en la región carecende acceso a instalaciones adecuadas de saneamiento(WSP, 2007); mientras los conglomerados urbanoscuentan con mejores servicios de saneamiento que laszonas rurales, la presión sobre los cuerpos de agua enlas ciudades aumenta, pues éstos se constituyen en loscuerpos receptores de los efluentes domésticos e

0% 10% 20% 30% 40% 50% 60% 70% 80% 90% 100%

Chiclayo

Arequipa

San José de Costa Rica

Santo Domingo

Lima

Buenos Aires

Sao Paulo

Ciudad de México

Tamaño de ciudades

Megaciudades

Grandes Ciudades

Ciudades Intermedias

Pequeñas Ciudades

GRÁFICO 2.32

América Latina y el Caribe: Tratamiento de aguas residuales en ciudades seleccionadas(Datos disponibles 2002-2008) (En porcentaje)

Fuente: Informes GEO Ciudades de Ciudad de México, Sao Paulo, Buenos Aires, Lima, Bogotá, Santiago, Río de Janeiro, Montevideo, Santo Domingo, Panamá,La Habana, San José de Costa Rica, Rosario, Arequipa, Chiclayo, Tucumán, Esmeralda y Loja.

industriales. En general, el tratamiento de aguasresiduales aún no es generalizado en la región, que tienecomo mediana apenas el 14% de aguas residualestratadas, indicador muy por debajo a otras regiones delmundo como Asia (35%) o Europa (66%) (OMS, 2000a).

Los cuerpos de agua reciben las aguas urbanasresiduales sin mayor tratamiento. Por ejemplo, la ciudadde Guayaquil (Ecuador) está ubicada en el estuario dedos ríos, los cuales son utilizados como vertederosurbanos e industriales, al igual que el Río de la Plata,que recibe residuos de Montevideo y Buenos Aires. Lasaguas negras de la Ciudad de México se vierten, a travésdel sistema de drenaje profundo, a cuerpos de agua quese encuentran fuera de la ciudad, donde generangrandes problemas ambientales y de salud. El bajovolumen de aguas residuales tratadas contrasta con loselevados volúmenes generados, pues diariamente sedescargan aproximadamente 30 millones de m3 de aguasresiduales domésticas a cuerpos de agua superficiales(Biswas, 2006). El porcentaje de aguas residualestratadas varía significativamente entre países y algunoscomo El Salvador (3%), Haití (5%), Colombia (8%),Guatemala (9%) y Honduras (11%) (WSP, 2007),presentan cifras preocupantemente bajas, mientras queciudades, como Santiago de Chile, trata más del 80%de las aguas residuales (Chile: Superintendencia deServicios Sanitarios, 2007). El Gráfico 2.32 presentainformación a este respecto consignada en los reportesGEO Ciudades. A nivel regional los datos sonheterogéneos y pueden dificultar una evaluación precisade los volúmenes tratados y de la calidad de lostratamientos.

8. ÁREAS URBANAS

Page 159: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

157

El manejo de las aguas residuales es un tema de agendaen varias ciudades de la región. En Santiago de Chile seha establecido el plan denominado Mapocho urbanolimpio, que tiene como objetivo descontaminar lasaguas del río Mapocho y convertir en 2012 a esta ciudaden la capital de América Latina que recicla la totalidadde aguas residuales. Para ello, se planea cerrar 21descargas de aguas residuales que llegan al cauce delrío Mapocho y construir un colector subterráneo de28 km, paralelo al río que desemboque en dos plantasde tratamiento. Con esto, además se recuperarán lasriberas como espacios públicos recreativos. (Chile:Superintendencia de Servicios Sanitarios, 2008).

8.2.2 ÁREAS VERDES Y BIODIVERSIDAD URBANA

La conservación de la biodiversidad en las zonasurbanas, semiurbanas y periurbanas es uno de losgrandes retos que enfrentan las ciudades. Al perderbiodiversidad, las ciudades pierden no sólo parte de sucapital natural, sino también de su riqueza cultural ydesparecen también muchos servicios ambientales(Pisanty y otros, 2009).

Las áreas verdes pueden ser superficies urbanasrecreativas o bien extensiones no urbanizadas convegetación primaria o secundaria. Por la falta decomprensión sobre los servicios que prestan, así como,por los costos asociados a su mantenimiento, las áreas

urbanas verdes en la región tienen diferentes grados deconservación.

La Organización Mundial de la Salud recomienda entre9 y 11 m2 de área verde/habitante, sin embargodeterminar el promedio real en cada ciudad es complejoporque los criterios para definir áreas verdes sonextremadamente variables y porque la distribución deéstas es característicamente irregular en las ciudadesya que la mayoría han crecido desordenadamente y enausencia de criterios ambientales previamenteestablecidos.

De acuerdo con el PNUMA (PNUMA 2008a, PNUMA2004, PNUMA 2003c, 2003e) Río de Janeiro, Bogotá,La Habana, Loja y la Ciudad de México superan elindicador de extensión de área verde por habitante dela OMS (Gráfico 2.33). Sin embargo, dada la irregulardistribución de las áreas verdes en las ciudades, estopuede ser una sobreestimación. Por ejemplo, en laCiudad de México hay grandes demarcaciones quecarecen completamente de áreas verdes, mientras queen otras éstas abundan pues son zonas no urbanizadascubiertas por vegetación primaria o secundaria queestán consideradas como suelo de conservación y quecuentan con alguna regulación para limitar suurbanización. En La Habana y en Sao Paulo loscinturones verdes periféricos pueden considerarse anivel urbano, pero no están integrados a la vidacotidiana de los habitantes de las zonas más céntricas,que carecen de áreas verdes fácilmente accesibles.

0 5 10 15 20 25 30 35

Loja

Esmeralda

San Miguel de Tucumán

Chiclayo

Arequipa

Rosario

San José de Costa Rica

La Habana

Santo Domingo

Río de Janeiro

Santiago

Bogotá

Lima

Buenos Aires

Sao Paulo

Ciudad de México

m / habitante2

GRÁFICO 2.33

Áreas verdes por habitante en ciudades seleccionadas (m /hab)2

Tamaño de ciudades

Megaciudades

Grandes Ciudades

Ciudades Intermedias

Pequeñas Ciudades

Fuente: Informes GEO Ciudades de Ciudad de México, Sao Paulo, Buenos Aires, Lima, Bogotá, Santiago, Río de Janeiro, Montevideo, Santo Domingo, Panamá,La Habana, San José de Costa Rica, Rosario, Arequipa, Chiclayo, Tucumán, Esmeralda y Loja.

Entre 9 y 11 m por habitante:Recomendación de la

Organización Mundial de la Salud

2

8. ÁREAS URBANAS

Page 160: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

158

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Algunas ciudades rebasan los rangos definidos por laOMS, por ejemplo, Curitiba en Brasil tiene, enpromedio, 52m2 de áreas verdes por habitante,distribuidos entre parques y bosques urbanos (queincluyen los llamados bosques nativos relevantes); estola ubica entre las ciudades con valores más altos en elmundo. También cuenta con una lista de 22 especiesarbóreas cuya tala está prohibida (Pereira y otros 2006,ECODICAS30). La participación de la población engeneral, ha sido una de las claves de este exitosoprograma de áreas verdes; las intensas campañas deeducación ambiental que se emprendieron antes de laimplementación de las políticas públicascorrespondientes son parte medular de este proceso,que permitió pasar de alrededor de 1 m2 de áreas verdespor habitante en 1970 para una población de un millónde habitantes, al valor actual para una poblacióncercana a los dos millones de habitantes.

En otros casos, las ciudades cuentan con programasespeciales para la conservación de áreas verdes en losque la participación de los vecinos, organizacionessociales y ONG es importante. Tal es el caso delprograma de Educación Ambiental para Parques y ÁreasVerdes en Panamá, la recuperación de áreas degradadasen Sao Paulo (Brasil); y PRU-GAM en San José de CostaRica. Además, también se ejecutan iniciativasmunicipales como los programas de arborizaciónurbana en Santo Domingo, y el Programa de ParquesUrbanos en Santiago de Chile, así como la protecciónya mencionada del suelo de conservación del sur de la

cuenca de México y las organizaciones alrededor deáreas específicas.

Las zonas vecinas a las ciudades, que conservan sucarácter rural o semi-rural y en las que incluso puedenquedar áreas cubiertas por la vegetación original,representan una oportunidad para la conservación dela biodiversidad, la recuperación de los serviciosambientales, la educación ambiental y la recreaciónsustentable. Para aprovecharlas es indispensable contarcon programas de ordenamiento ecológico y tambiéncon la necesaria voluntad política y ciudadana parasalvaguardarlas.

8.2.3 RESIDUOS SÓLIDOS

La generación de residuos sólidos ha crecido en lamayoría de las ciudades debido al crecimiento de lapoblación y a la expansión industrial y comercial (verCapítulo I). La generación de residuos sólidos porpersona por día varía según el tamaño de la ciudad ylos patrones dominantes de consumo (ver Gráfico 2.34).Por lo general las fuentes de desechos peligrosos seconcentran en las ciudades, frecuentemente alrededorde las áreas industriales y de las actividades relacionadascon la salud, y pueden incluir sustancias explosivas,corrosivas, infecciosas, tóxicas y oxidantes.

La disposición final y la eficacia del sistema derecolección de desechos sólidos es muy variable entreciudades (Recuadro 2.21). Asunción (Paraguay) y Quito(Ecuador) eran, en 2000, las únicas capitales que no

0,00 0,20 0,40 0,60 0,80 1,00 1,20 1,40 1,60

Ciu

dad

es

Kg /Habitante / día

Ciudad de MéxicoSao Paulo

Buenos AiresLima

BogotáSantiago

Río de JaneiroMontevideo

Santo DomingoPanamá

La HabanaSan José de Costa Rica

RosarioArequipaChiclayo

San Miguel de TucumánEsmeralda

Loja

GRÁFICO 2.34

Producción urbana de residuos sólidos en ciudades seleccionadas (En kg/hab/día)

Tamaño de ciudades

Megaciudades

Grandes Ciudades

Ciudades Intermedias

Pequeñas ciudades

Fuente: Informes GEO Ciudades de Ciudad de México, Sao Paulo, Buenos Aires, Lima, Bogotá, Santiago, Río de Janeiro, Montevideo, Santo Domingo, Panamá,La Habana, San José de Costa Rica, Rosario, Arequipa, Chiclayo, Tucumán, Esmeralda y Loja.

30 ECODICAS. blogspot.com/2004/07/curitiba_exemplo_de_gerenciamiento_de-html

8. ÁREAS URBANAS

Page 161: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

159

contaban con rellenos sanitarios. Actualmente todas lascapitales latinoamericanas cuentan con este tipo deinstalaciones31, aunque esto no garantiza que todos losdesechos se depositen en ellos, porque de maneraparalela se utilizan botaderos o vertederos improvisadosen sistemas naturales o en terrenos baldíos como lugaresde disposición final, lo que genera problemas de emisiónde gases, filtración de lixiviados, y desarrollo de vectoresde diversas enfermedades. Aunque el reciclaje es aúninsuficiente en la región, cabe destacar que se hanimplementado importantes programas impulsados porlos gobiernos locales y, en algunos casos, en alianzacon organizaciones civiles y privadas. (ver Recuadro2.21).

En el rubro de segregación domiciliaria existeniniciativas no gubernamentales dignas de ser tomadasen cuenta. En Perú, por ejemplo, el Consejo Nacionaldel Ambiente (actual Ministerio del Ambiente) impulsóel Programa Recicla en el marco del proyecto SENREM/USAID y logró trabajar exitosamente con más de 800colegios para promover el manejo segregado de losdesechos sólidos de los planteles; a partir de 2006 elprograma se transforma a Sistemas de GestiónAmbientales Escolares (SIGAE). Adicionalmente,diversas acciones promovidas por la iniciativa privadatienden al reciclaje con la participación de capitalprivado. Por ejemplo, la liderada por la organización

En Curitiba (Brasil) a través de una campaña en todos los medios de comunicación se estimuló a la población a realizarsegregación domiciliaria. Las familias empezaron a separar en sus viviendas los desechos orgánicos de los no orgánicos.En los barrios informales, sus comunidades fueron contratadas para recolectar los desechos, intercambiando el pesorecolectado de residuos por alimentos o vales para el transporte público, comida y leche (Pereira y otros 2006). Curitiba seconvirtió así en la primera ciudad de la región con separación domiciliaria de desechos (UN Habitat, 2005).

En Ecuador, Quito no cuenta con un programa de separación de basura, pero en Loja, con apoyo del Servicio Alemán parael Desarrollo (DED), se implementó a partir de 1998 un proyecto de manejo integral de desechos sólidos, en dondeparticipa el 80% de la población. La basura biodegradable, después de ser procesada en la planta de lombricultura, esvendida como fertilizante agrícola a los agricultores y ciudadanos o es utilizada para los parques y jardines del municipio.Para mejorar las condiciones de trabajo de los recicladores locales, en el relleno sanitario se construyó una planta dereciclaje con equipamiento moderno, para que la basura pueda ser separada, limpiada y vendida para reutilización oreciclaje. A partir de esta experiencia, la municipalidad de Loja, en colaboración con la Asociación de Municipalidadesde Ecuador (AME), creó un Centro de Capacitación Técnica para ofrecer asesoría en el manejo de desechos sólidos a otrasmunicipalidades ecuatorianas y de toda la región. Adicionalmente, en esta ciudad se recolecta la basura en el 91,9 % delos hogares. A pesar de estos importantes logros, en Loja sólo se recicla el 15% de los desechos no biodegradables y el13% de los biodegradables* (PNUMA 2008a, UN Habitat, 2005).

En Haití, el país más pobre de la región, con el 80% de la población debajo de la línea de pobreza, sólo es posiblerecolectar un tercio de los desechos domésticos. El resto se lanza a las quebradas, canales de drenaje, sitios baldíos o a lacalle y las plazas, con consecuencias ambientales y de salud pública muy indeseables.

En toda la región, muchos de los esfuerzos organizativos para lograr un manejo integral y adecuado de los residuos tienenresultados por debajo de lo esperado debido a problemas financieros.

El manejo de los residuos sólidosRECUADRO 2.21

Fuente: UN Habitat, 2005 * www.loja.gov.ec/loja/index.php?option=com_contentytask=viewyid=58yItemid=119ylimit=1ylimitstart=8.

no gubernamental FUNDADES y la empresa OwensIllinois en Perú que ha promovido exitosamente elreciclaje del vidrio con la finalidad de obtener recursospara financiar el desarrollo de capacidades en niñosdiscapacitados32.

31 (http://www.vidaparaquito.com/index.php?option=com_contentytask=viewyid=59yItemid=50).

32 http://www.fundades.org/doc/pardo.doc

8. ÁREAS URBANAS

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160

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

En ALC, las áreas urbanas están más expuestas a tener unamenor disponibilidad de agua en el futuro que en otras partesdel mundo. Ello responde a factores tanto internos comoexternos. Entre los primeros se incluyen la deforestación delas cuencas y los incentivos al sobreuso de agua por partede las diferentes actividades económicas (agricultura,minería, manufactura, generación de energía, entre otras),mientras que entre los externos se destaca el cambioclimático.El mismo tiene efectos significativos sobre losglaciares de la región que se están derritiendo, así como

El cambio climático reduce disponibilidad de agua en área urbanas de América Latina y el CaribeRECUADRO 2.22

sobre el patrón de lluvias. Los glaciares son una fuenteimportante de abastecimiento de agua para algunas ciudades.La ciudad de Quito (Ecuador) obtiene el 60% del agua queutiliza de los glaciares, y La Paz (Bolivia) el 30%. En elPerú, la superficie de glaciares perdida equivale a 7 milmillones de metros cúbicos de agua, cantidad que podríaabastecer Lima durante 10 años. Las estimaciones del BancoMundial, muestran que la pérdida de glaciares pone enpeligro el abastecimiento de agua de 30 millones de personasen la región.

Fuente: Vergara, 2007, De la Torre y otros, 2009.

Pese a los avances en el reciclaje organizado, en ALCaún subsiste el reciclaje informal, lo cual pone en riesgola salud de las personas involucradas, además de estar,frecuentemente, asociado a niveles serios de corrupción.

En general, en la mayoría de los países de la región sehan dado avances en el manejo de los desechos sólidos,cuando menos en la última década, tanto en el aspectonormativo como en el diseño e implementación deprogramas y proyectos que, sin embargo, aún sonlimitados y aislados inclusive al interior de cada país.Por ello, el manejo de los desechos sólidos continúasiendo un tema crítico en la región, principalmente enCentroamérica, que enfrenta restricciones financieras,así como una limitada visión integral del problema, talcomo lo evidencian los informes GEO Ciudadesanalizados. Gradualmente se ha ido reconociendo quepara un manejo eficiente de los desechos sólidos serequieren programas a largo plazo y procesossocioeconómicos locales efectivos que tomen en cuenta

las condiciones económicas y de salud de la población,así como el nivel educativo y la participacióncomunitaria (Zepeda, 2000).

8.2.4 VULNERABILIDAD URBANA, EVENTOSEXTREMOS Y CAMBIO CLIMÁTICO

América Latina y el Caribe es una región con crecientevulnerabilidad frente a eventos climáticos y naturalesextremos (por ejemplo, terremotos, tormentas tropicales,huracanes, inundaciones, entre otros) debido a factorescomo el patrón de crecimiento económico, la situaciónde pobreza de la población, la urbanizacióndesordenada, el desarrollo de asentamientos humanosprecarios, la infraestructura insuficiente y la ocupaciónde zonas de alto riesgo (Winchester, 2006).

Los huracanes golpean severamente a las islas caribeñas,y el escenario generado por el cambio climático espreocupante. En 2008, Cuba, Haití y otras islas fuerondevastadas por estos fenómenos hidrometereológicos.En 2005, el huracán Vilma fue el más severo registradoen la costa Atlántica y dañó el 98% de la infraestructurade la costa de la Península de Yucatán, registrándosepérdidas por 1,5 mil millones de dólares. El aumentoen el nivel del mar que se espera como consecuenciadel cambio climático pone sin duda en riesgo a lasciudades costeras de la región (De la Torre y otros, 2009)(ver Sección Mares y Costas de este Capítulo).

Si bien se han realizado inversiones en programas deprevención y desarrollo de sistemas de alerta temprana,los resultados aún son limitados debido a lasrestricciones que imponen los aspectos políticos,culturales, financieros y tecnológicos. En este sentido,la planificación urbana estratégica exige que seincorporen los aspectos de la vulnerabilidad urbana asícomo medidas de mitigación y adaptación en losinstrumentos de planificación y uso de la tierra (verRecuadro 2.22).

8. ÁREAS URBANAS

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II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

161

8.2.5 CAMBIO CLIMÁTICO Y MIGRACIONES CAMPO-CIUDAD

Históricamente los desplazamientos humanos han sidoparte de estrategias de sobrevivencia durante períodosde escasez o de cambio. Si bien el cambio climáticoen sí mismo no es causa directa de procesos migratorios,los efectos negativos asociados con la vulnerabilidadclimática exacerban los impactos sobre grupos ubicadosen zonas afectadas por sequías, inundaciones ytormentas. Por ejemplo, en el 2008, se registró eldesplazamiento de 20 millones de personas asociadascon eventos climáticos extremos y se calcula que losefectos del cambio climático asociados con el aumentode temperatura resultarán en 200 millones de migrantesambientales (OIM, 2009a).

De acuerdo con un informe reciente publicado por laOrganización Internacional de las Migraciones (2009a)la relación entre migración y cambio climático se puededar a partir de:

La intensificación de desastres naturales.La intensificación de períodos de sequías que afectanla producción agrícola y el acceso a agua.El aumento de los niveles del mar que convertirán alas zonas costeras en áreas inhabitables y quepodrían inclusive ocasionar la eventual pérdida deestados insulares (de acuerdo a este informe másdel 40% de la población mundial vive dentro de unrango de 150 km de las costas).El incremento de conflictos generados por lacompetencia en el acceso a recursos.

Investigaciones de campo conducidas por estaorganización internacional desde 1990 apuntan a quelos cambios en los patrones del clima o la vulnerabilidadclimática pueden influir en desplazamientos internos(OIM, 2009b). En América Latina, casos de estudiorealizados en México demuestran una relación directaentre los flujos migratorios rural-rural y rural a centrosurbanos durante períodos extremos de sequías y enzonas marcadas por procesos de desertificación (deacuerdo a Leighton, 2006 estas zonas representan dostercios del territorio nacional Mexicano). Las sequíasrecurrentes combinadas con prácticas de manejo desuelos inadecuadas contribuyen a la erosión lo cualreduce la capacidad de los hogares de generar ingresos.La migración interna (campo – ciudad; campo a otraszonas rurales) se convierten en una estrategia para poderobtener ingresos complementarios. Por ende, se hadeterminado que Oaxaca y Tamaulipas, dos Estados queenfrentan procesos acelerados de desertificación,concuerdan con regiones marcadas por intensificaciónde flujos migratorios) (Leighton, 1997). Un estudio

similar (Bilsborrow, 2004), conducido en Ecuadordetermina que la vulnerabilidad climática en este paísha influenciado procesos de migración interna delcampo a la ciudad, especialmente desde las zonas delaltiplano. Asímismo este estudio revela que procesosmigratorios hacia áreas fronterizas se han intensificadodurante períodos de sequías. De acuerdo a la OIM(2009b), debido a que la mayoría de las migracionesrelacionadas con vulnerabilidad climática se darán delcampo hacia ciudad, será un desafío para los centrosurbanos prepararse para recibir flujos masivos yespontáneos asignando recursos que permitan unainfraestructura, fuentes de trabajo y servicios básicosdisponibles para estos grupos.

8. ÁREAS URBANAS

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162

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

8.3 RESPUESTAS INSTITUCIONALES YPERSPECTIVAS

Las ciudades recogen y reflejan, en muchos sentidos,las contradicciones presentes en el desarrollo de cadapaís y de cada región. En ellas se reflejan sin ambagesel tipo de desarrollo, la dinámica poblacional y lascontradicciones sociales. Las aglomeraciones urbanasen América Latina y el Caribe cuentan, en muchos casos,con un desarrollo importante de las instituciones, marcosnormativos e instrumentos de gestión urbano-ambiental.Dicho desarrollo además ha estado inscrito, en lamayoría de las ciudades, en un proceso dedescentralización donde las autoridades locales hanobtenido competencias para ordenar y gestionar elfuncionamiento de las ciudades. Un tema pendiente,sin embargo, es el diseño de mecanismos para unmonitoreo y evaluación de las políticas, programas yproyectos, que contribuiría a darle continuidad a largoplazo a las políticas ambientales implementadas,además de permitir aprovechar de mejor manera lasexperiencias exitosas.

Durante los últimos años, muchas ciudades hanfortalecido o desarrollado instrumentos jurídico-normativos, económicos, tecnológicos, sistemas deinformación, entre otros. Sin embargo, un componente

aún largamente ausente en la gestión urbano-ambientales la evaluación y el monitoreo continuo de losresultados y los impactos. La región está realizandoesfuerzos para mejorar la calidad ambiental urbana; porejemplo, se invierten recursos en mejorar la informaciónambiental y desarrollo de capacidades técnicas; semejora la formulación de estrategias sobre la base de laparticipación de los actores locales y se desarrollanmecanismos para institucionalizar la planificación y lagestión urbano-ambiental (UN Habitat, 2006).

Muchas autoridades nacionales han expresado supreocupación por mejorar la planificación y la gestiónurbano-ambiental a partir de distintas decisiones. Porejemplo, en Brasil con la finalidad de mejorar lacoordinación interinstitucional se creó el Ministerio delas Ciudades, mientras que para promover la gestiónurbano-ambiental en Perú se diseñó e implementó unproceso de certificación ambiental local (GestiónAmbiental Sostenible - GALS) el cual fue una iniciativade Certificación de Municipalidades Sostenibles(CONAM y PNUMA 2006). En México, luego de variosaños con emisiones crecientes de contaminantes secomenzaron a utilizar instrumentos económicos, talescomo incentivos fiscales, a fin de impulsar la renovaciónde la planta vehicular. Este tipo de iniciativas, además,se consolidan a través de una Comisión AmbientalMetropolitana, en la que participan los gobiernos delos estados en los que se extiende la Ciudad de México.

Diversos informes ambientales destacan que el deteriorodel ambiente urbano es uno de los grandes retos queenfrenta la región (PNUMA, 2007). Para paliar estasituación se necesita responder a la provisión deviviendas y servicios a los grupos menos aventajados,teniendo en cuenta la creación de nuevos patrones deurbanización que eviten los asentamientos ilegales conlas consecuencias adversas que ello implica. Además,supone incorporar instrumentos de ordenamientoterritorial, con una perspectiva integral y multisectorial,evitando la fragmentación en el diseño de las políticasy medidas. Estos esfuerzos, así como los casos exitososde planificación y gestión, deben servir como base pararegular el crecimiento e impulsar una forma diferentede desarrollo urbano en las ciudades medias, en las quese concentra el crecimiento urbano actualmente. Losinmensos costos ambientales que ha tenido la tendenciapredominante a la urbanización y a la concentraciónde la población en las ciudades pueden auntransformarse en oportunidades para disminuir la huellaecológica del desarrollo urbano y para incrementar elbienestar humano si se incorporan las leccionesaprendidas a partir de los esquemas de crecimientodesordenado predominantes tanto a nivel local ynacional como regional.

8. ÁREAS URBANAS

Page 165: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

1639. REFLEXIONES

9. REFLEXIONES FINALES

La diversidad ambiental característica de América Latinay el Caribe ofrece una gran riqueza a la región y este esuno de sus rasgos fundamentales. La diversidadecosistémica y la específica son muy altas; basta recordarque en la región se encuentran 6 de los 17 paísesmegadiversos del mundo (Brasil, Colombia, Ecuador,México, Perú y Venezuela), y que en ellos hay un grannúmero de endemismos. Además, posee una riquezagenética que ha generado gran interés por labioprospección, lo que a su vez demanda estrictasmedidas de bioseguridad.

Dicha riqueza se ve amenazada, entre otros factores,por los cambios en el uso del suelo que se han dado, enmuchas ocasiones, de manera no regulada y sin criteriosambientales. Actualmente, muchas de las transforma-ciones obedecen; en gran medida a la demanda deproductos agropecuarios (incluyendo recientemente losbiocombustibles), a la explotación de hidrocarburos yal constante crecimiento urbano. Grandes extensionesde bosques tropicales (secos y húmedos) y templadoshan sido y están siendo transformados para dar respuestatanto a demandas internas como externas; en esteproceso el 64% de la deforestación total global entre2000 y 2005 ocurrió en la región.

Las altas tasas de deforestación de la región y laconsecuente reducción, fragmentación e inclusodesaparición de hábitats suponen una amenaza a la

biodiversidad. Cinco países de los veinte con mayornúmero de especies de fauna amenazadas y siete delos veinte con mayor número de especies de plantasamenazadas se encuentran en la región. Hay un grannúmero de especies en diferentes niveles de riesgo, tantoa nivel regional como nacional.

Como estrategia para la protección de la biodiversidadse han definido áreas protegidas naturales; actualmentemás del 20% del territorio de América Latina y el Caribese encuentra bajo protección y se estima que las reservasmarinas representan menos del 0,1% de la ZonaEconómica Exclusiva en los países de la región. Aún esnecesario avanzar, tanto a nivel regional como nacional,en la consolidación de este tipo de áreas. También serequiere avanzar más en la implementación de procesossostenibles de uso de los recursos naturales, recurriendoa instrumentos versátiles y novedosos que permitansalvaguardar el gran capital natural de América Latinay el Caribe.

Respecto a los ecosistemas marino-costeros; los maresy las costas de América Latina y el Caribe son fuente demuchas riquezas, entre las que se encuentra laalimentaria. Sin embargo, están bajo el asedio deactividades pesqueras, que a través de lasobreexplotación han llevado a muchas poblaciones deespecies al límite de su rendimiento económico eincluso a la extinción. Como suele suceder con

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164

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

frecuencia en esta región del mundo, el daño ecológicoafecta directamente a los pescadores artesanales, perolas riquezas derivadas de su actividad rara vez lesbenefician.

Muchas de las zonas costeras, gracias a sus cálidosclimas y gran belleza, son frecuentemente sitios deactividades turísticas. Aun cuando el turismo ha sidoidentificado como una «industria sin chimeneas», sucosto ambiental en muchas áreas de litoral es muy alto,pues generalmente se ha desarrollado sinconsideraciones ambientales. De esta forma, se handestruido grandes extensiones de manglares, dunas ylagunas costeras, además del impacto que generan loshoteles al verter aguas negras y residuos sólidosdirectamente en el mar. Desafortunadamente, losintereses económicos sobre estas zonas son muygrandes, y se benefician de la falta de transversalidadde los criterios ambientales que caracteriza a la región.Las consecuencias del turismo de gran escala se agravanpor las deficiencias legales y, sobre todo, por la dificultadque muchos países de esta región enfrentan para hacercumplir sus leyes.

La urbanización es un proceso heterogéneo entre lospaíses de la región, pero aún así, es ésta la región delmundo en desarrollo con mayor proporción depoblación urbana, y la única donde las desigualdadessociales son semejantes en las zonas urbanas y rurales.En América Latina y el Caribe se encuentran, ademásde cuatro de las seis megaciudades del continenteamericano, una en Mesoamérica (Ciudad de Méxicoen México) y tres en América del Sur (Río de Janeiro, ySao Paulo en Brasil y Buenos Aires en Argentina); ungran número de ciudades grandes e intermedias. Es en

las ciudades intermedias en donde tienden a presentarseactualmente las mayores tasas de crecimiento, adiferencia de lo que sucedió en las megaciudades desdemediados del siglo XX hasta sus últimos años. Laurbanización ofrece una concentración de servicios alos que la mayoría de las ciudades de menor tamaño y,desde luego, las zonas rurales, no tenían acceso en estaregión, como agua potable, saneamiento,electrificación, educación y salud; además de una ofertade empleos mucho mayor. El mayor crecimiento de lasciudades intermedias ha sido propiciado por la desigualdistribución de servicios y oportunidades y,simultáneamente, por las dificultades inherentes a lasgrandes ciudades. Esta situación representa una granoportunidad para dirigir el crecimiento urbano hacia lasostenibilidad y hacia una mayor equidad, sobre todocon base en las lecciones aprendidas del patrón dedesarrollo característico de las grandes urbeslatinoamericanas.

La contaminación de los suelos, el aire, el aguacontinental y de los mares es un problema creciente entoda la región. Las grandes urbes, y a veces incluso lasde tamaño intermedio, cuentan con atmósferasseveramente contaminadas que afectan de diferentesmaneras a la salud de los habitantes de las ciudades ytambién a la de los ecosistemas circundantes. Lo mismosucede con los cuerpos de agua, por los que loscontaminantes se dispersan a grandes distancias. De estaforma, las actividades agrícolas y pecuarias impactanincluso a las zonas marinas y costeras distantes. Lacreciente contaminación incrementa aun más lavulnerabilidad de la salud de los ecosistemas y de laspersonas. Las estrategias de manejo de residuos sólidos,de depósitos en cuerpos de agua y de partículas emitidasa la atmósfera son, sin duda, asignaturas pendientes paraAmérica Latina y el Caribe.

Un desafío que se presenta a todas las escalas enAmérica Latina y el Caribe es el acceso a datoshomogéneos, actualizados y comparables que permitantanto un análisis objetivo del medio ambiente como latoma de decisiones apoyada en la mejor informacióncientífica y técnica disponible. La producción deinformación y de conocimiento se enfrenta a muchasdificultades, entre las que las financieras no son unproblema menor, a lo largo de toda la región. Laevaluación del estado del medio ambiente a escalaregional, subregional, nacional y local se ve limitadapor esta situación e impacta a la toma de decisiones.Esta situación también facilita la implementación deestrategias no sostenibles de desarrollo que afectangravemente al capital natural de la región y al bienestarde sus pobladores.

9. REFLEXIONES

Page 167: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

II. ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE

16510. REFERENCIAS

10. REFERENCIAS

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Page 184: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

182

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Page 185: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

183

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

MENSAJES CLAVE

Los ecosistemas aportan servicios ambientales queademás de críticos son valiosos para las poblaciones,en lo local, nacional, regional y global; y se ubicanentre los mayores contribuyentes al bienestarhumano. Los ecosistemas están siendo modificadospor las actividades humanas, lo que a su vez tieneconsecuencias directas, indirectas, positivas ynegativas, sobre el bienestar humano en aspectos,como por ejemplom el acceso a vivienda, aguapotable, condiciones óptimas de salud,infraestructura o mitigación del efecto de desastresnaturales.

Es posible que no siempre pueda establecerse larelación causal entre los cambios ambientales y lasconsecuencias concomitantes, debido al pocoentendimiento de estos complejos vínculos. Noobstante, la comunidad internacional es cada vezmás consciente de la importancia de avanzar en lacomprensión de la relación hombre-ambiente y, enparticular, en la importancia de los bienes y serviciosambientales (BSA), definidos como los beneficiosque la gente obtiene del ambiente. Los BSA sólopueden preservarse de generación en generación sise salvaguarda la función «natural» de losecosistemas y para ello es fundamental la valoraciónde los bienes y servicios ambientales; encomparación con otras regiones en vía de desarrollo

en el mundo, cabe destacar que en América Latinay el Caribe se reporta una mayor cantidad deejemplos de esquemas de pago por bienes y serviciosambientales aunque este tipo de esquemas debentodavía ampliar su área de implementación en laregión.

Mientras que todos los estratos de la sociedaddependen de los bienes y servicios que provee elambiente, estos se tornan particularmenteimportantes para las poblaciones de menoresingresos y para aquellas que dependen directamentede los ecosistemas para su sustento económico. Paraestos grupos, el acceso a los recursos forestales,marinos y costeros constituye un soporte vital, eincluso puede dictaminar su supervivencia.Irónicamente, el amplio rango de bienes y serviciosproducidos por estos ecosistemas también los hacesusceptibles a la sobreexplotación por actividadesde origen antrópico lo que, a su vez, incrementa lavulnerabilidad de las poblaciones que dependen dedichos bienes y servicios (Windevoxhel, 1994, Creel,2003, UNEP-WCMC, 2006). La región debedesarrollar sistemas que preserven las actividadessostenibles por un lado, mientras que por otro ladodeben crearse más mecanismos de regulación de laexplotación industrial y a gran escala de estosservicios ecosistémicos.

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III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

185

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186

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

1.1 ENFOQUE ECOSISTÉMICO

Los seres humanos y sus acciones están intrínsecamenteasociados con el ambiente natural, y deberían ser vistoscomo una unidad. Sin embargo, en el pasado fueroncomúnmente considerados como entidades separadas.Pero dicha realidad está cambiando. Durante la décadapasada esta noción de una sola unidad ha ganadomayores audiencias y se ha vuelto cada vez másapreciada. Es así como en el año 2000, el Conveniosobre Diversidad Biológica llevó esta idea al nivelpolítico global al sugerir que el «enfoque ecosistémico»fuera empleado como una estrategia para el manejointegrado de la tierra, el agua y los recursos naturales,incluyendo a los seres humanos como un componenteintegral de todos los ecosistemas del mundo. Esteenfoque, basado en el ecosistema, aún está enperfeccionamiento, y hoy en día está siendo empleadomás ampliamente para ilustrar la interrelación existenteentre la gente y el ambiente, bien sea para obtenerbeneficios de él (ej., comida, refugio, combustibles,agua), o para demostrar la relación entre las acciones

humanas y sus impactos y consecuencias (manejo dedesechos y nutrientes en el agua).

En este Capítulo, los principios del enfoque eco-sistémico serán empleados para evaluar las relacionesy asociaciones entre los cambios ambientales y elbienestar humano en la región de América Latina y elCaribe, usando como ejemplos los ecosistemasboscosos, marinos y costeros. Si bien la región tieneotros ecosistemas igualmente importantes (tierras secas,sabanas, desiertos, pastizales, páramos), éstos han sidoseleccionados debido a su escala geográfica ydistribución, así como al considerable número de sereshumanos que dependen de los mismos para susupervivencia. Este Capítulo ofrece una introducción auna visión general de los impactos de la degradaciónde estos ecosistemas en América Latina y el Caribe,producto tanto de las actividades de origen humanocomo de los fenómenos naturales y de los efectos delcambio climático. Además, ofrece un panorama decómo el bienestar humano, junto con el acceso a losbienes y servicios de los ecosistemas, están siendocomprometidos y afectados.

1. INTRODUCCIÓN

1. INTRODUCCIÓN

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III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

1871. INTRODUCCIÓN

1.2 ECOSISTEMAS: BIENES Y SERVICIOS

Los bienes y servicios ecosistémicos son los beneficiosque las personas obtienen a partir de usos directos oindirectos de los mismos. La mayoría de los serviciosde los ecosistemas son el resultado de procesosnaturales, ecológicos y físicos, de largo plazo. Costanzay otros (1997) hacen hincapié en el término serviciosecosistémicos, y a partir de ese momento éste ha sidoun concepto ampliamente debatido.

De acuerdo con Millennium Ecosystem Assessment(2005a), entre los bienes y servicios ambientales seincluyen:

a) De provisión: Productos obtenidos de los ecosiste-mas, como el agua, los productos forestales made-rables o no maderables, o los recursos genéticos;

b) De regulación: Beneficios obtenidos de los procesos

ecológicos de regulación, como el clima, el alimentoo el control de enfermedades;

c) Culturales: Beneficios no materiales, como losvalores culturales, recreativos o espirituales;

d) De soporte: Servicios necesarios para la producciónde los servicios de las otras tres categorías, como laproducción primaria o el reciclaje de nutrientes.

La sucesiva aplicación que otros autores han hecho deltrabajo de Costanza sobre servicios ecosistémicos, haconllevado a una propuesta que incorpora una categoríaadicional, llamada «valor de opción de uso». Esta serefiere a los beneficios futuros desconocidos oespeculativos (Beaumont y otros, 2006, Martínez y otros,2007).

El Cuadro 3.1 muestra las definiciones generales y losejemplos de algunos bienes y servicios ambientales queproveen los ecosistemas boscosos y los costeros ymarinos.

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188

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

1.3 ECOSISTEMAS Y BIENESTAR HUMANO ENAMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Este informe adopta un enfoque de múltiplesdimensiones, similar al desarrollado en el GEO4 (UNEP,

1. INTRODUCCIÓN

Fuente: Modificado de Beaumont y otros, 2006.

CUADRO 3.1

Definiciones de los tipos de bienes y servicios relacionados con los ecosistemasboscosos y costeros/marinos

Ejemplos

Alimento (pescado o carne).Sales, minerales y aceites.

Materiales de construcción (arenas, rocas,limos, madera (incluida la estructural))Biocombustibles, leña.Productos forestales no maderables comomaterias primas (colorantes, tintes),artesanías o utensilios.

Regulación del clima.Microclima local (sombra, enfriamiento desuperficie, etc.)Fotosíntesis.

Regulación de inundaciones y enfermedades.

Regulación y reciclaje de desechos y mejorade la calidad del agua a través del filtrado yreciclaje del agua (mediante evapotrans-piración, etc.)

Destinos de vacaciones, cruceros y visitantescon estadía.Ecoturismo, observación de aves,observación de ballenas, caminatas.Cacería

Patrimonio cultural, sitios sagrados.

Recursos genéticos.Plantas medicinales.Farmacéuticos.

Polinizadores.

Ciclo del carbono, del nitrógeno, etc.

Reserva genética de la biodiversidad quetiene potenciales aplicaciones en biotec-nología y medicina.

Definición

Animales o plantas para consumo humano,obtenidos de los ecosistemas.

Productos animales o vegetales extraídos de losecosistemas con múltiples propósitos, pero nocon fines de consumo humano.

El balance y mantenimiento de la composiciónquímica de la atmósfera y los océanos, provistapor los organismos vivos de los ambientesboscosos y marinos.

La atenuación de las alteraciones por parte delas estructuras de origen biológico.

Remoción de contaminantes a través dealmacenamiento, entierro o reciclaje.

Estimulación del cuerpo y la mente humanamediante la interacción con organismos vivos ysu ambiente natural.

Beneficio de la biodiversidad que es de la mayorsignificancia o que alberga testimonios deidentidades culturales múltiples para unacomunidad.

Desarrollo cognitivo, incluyendo la educacióne investigación resultante de los organismosvivos.

Grado con el cual los ecosistemas puedenabsorber las alteraciones de origen natural ohumano, y continuar regenerándose sindegradarse o pasar inesperadamente a estadosalternativos.

Hábitat que es provisto por organismos vivos.

Almacenamiento, reciclaje y mantenimiento denutrientes por organismos vivos.

Uso futuro de los ecosistemas, desconocido.

Bien/Servicio

Alimento

Materiales

De gases y clima

Prevención dealteraciones

Biorrecuperación dedesechos

Recreación

Patrimonio eidentidad cultural

Beneficios cognitivos

Resiliencia yresistencia

Hábitats mediadospor lo biológico

Reciclaje denutrientes

Tipo

De provisión

De regulación

Culturales

De soporte

Valor de opciónde uso

2007a), para definir el bienestar humano. El informeGEO4 lo definió como el potencial que los individuos,las comunidades y las naciones tienen de tomar suspropias decisiones y maximizar las oportunidades paraalcanzar la seguridad y la buena salud, para lograr lasnecesidades materiales para una buena vida y unas

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III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

189

El nivel de importancia y la calidad de los diversosbienes y servicios que aportan estos ecosistemas varían,debido en parte a la influencia de factores de tipoespacial. Por ejemplo, los bosques secos de la regiónde América Latina y el Caribe primordialmente cumplenuna función de protección en la prevención deinundaciones, y atenuando la erosión del suelo en lastierras secas. Los manglares ribereños a lo largo de losríos Orinoco en Venezuela, Amazonas en Brasil yEssequibo en Guyana también juegan un rol en laprotección frente a inundaciones y fenómenos erosivos,funcionando a su vez como una trampa de sedimentos.De manera similar, las cuencas hidrográficas concobertura boscosa proveen servicios tales como elreciclaje de nutrientes y el mejoramiento de la calidaddel agua, entre otros (Ruitenbeek, 1992). Los arrecifesde coral y los pastos marinos distribuidos a lo largo deAmérica Latina y el Caribe desempeñan funcionessimilares a aquellas de orden cultural o de provisión(Singh, 2005). A continuación se presenta unadescripción general de los bienes y servicios que prestanlos ecosistemas boscoso y marino costero de AméricaLatina y el Caribe.

adecuadas relaciones sociales. Las personas y subienestar dependen del ambiente que provee el planetaTierra. Como tal, el bienestar es medido por la habilidadde los ecosistemas para suministrar a los humanosservicios que van desde necesidades básicas tales comocomida, energía, agua y cobijo, hasta aquellosrequerimientos igualmente importantes como laseguridad y la salud.

Sin embargo, durante los últimos 100 años los sereshumanos han alterado dramáticamente los ecosistemasdel planeta, principalmente para cumplir con lascrecientes demandas derivadas de una población enaumento, y de los cambios en los estilos de vida. Estasconsiderables demandas, las cuales incluyen acceso aalimento, agua fresca, madera, fibras y combustibles, hanprofundizado los impactos en la resiliencia de losecosistemas y, por ende, han conducido a la degradación.Millennium Ecosystem Assessment (2005a) estimó quecerca del 60% de los ecosistemas del mundo estándegradados o son utilizados en formas insostenibles. Laregión de América Latina y el Caribe no es la excepciónen esta tendencia global. Sin embargo, existen algunosejemplos e iniciativas exitosas de manejo sostenible delos recursos naturales, llevados a cabo por la sociedadcivil, comunidades indígenas y locales, sector privado,así como por gobiernos, indicando un grado de respuestainstitucional en la región.

Los ecosistemas boscosos y marinos y costeros deAmérica Latina y el Caribe aportan un variado espectrode bienes y servicios ambientales, incluyendo alimento,refugio, purificación del aire y el agua, defensa costera,diversidad genética, espiritual y cultural, entre otros.Progresivamente y durante considerables periodos detiempo, muchas comunidades y estados de la regiónhan derivado su sobrevivencia y sustento económicode estos bienes y servicios, si bien sólo hasta hace pocose ha comenzado a reconocer y apreciar su importancia,especialmente como una forma de subsistencia y unbien económico. Con respecto a esto, puede afirmarseque el bienestar humano está condicionado en granmedida por los ecosistemas y que, en consecuencia, esvital que éstos mantengan su capacidad de resistir lasintervenciones antrópicas y naturales, aunque estodepende en cierta medida de los niveles de exposición,la sensibilidad a los impactos y la capacidad oincapacidad de tolerar o adaptarse a los cambios. Losefectos del cambio climático, la deforestación, lapérdida de biodiversidad, el empeoramiento de lacalidad del aire, la contaminación del agua y el suelo,el uso inapropiado de la tierra, la desertificación y lasobreexplotación de peces son los principales factoresde cambio en los ecosistemas boscosos y costeros ymarinos.

1. INTRODUCCIÓN

Page 192: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

190

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

2. IDENTIFICACIÓN DE BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMASBOSCOSOS Y MARINO-COSTEROS EN AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

De acuerdo con FAO (2006), la región de América Latinay el Caribe posee el 23% del área total de bosques delplaneta, aportando cerca de 916 millones de hectáreasde las reservas globales. La mayor parte de estos bosquesestán localizados en Sudamérica (823 millones de ha).A pesar de esta considerable proporción, el área boscosareportada por FAO para el año 2005 en América Latinay el Caribe representa una pérdida acumulada desuperficie forestal en el período 2000-2005 deaproximadamente 24 millones de hectáreas (ver ademásla sección de bosques en el Capítulo II de este informe).Considerando los altos niveles de biodiversidad de losbosques, no es sorprendente que éstos esténconsiderados entre los mayores proveedores de bienesy servicios ambientales, no sólo para la región, sinotambién para el resto del mundo (Nasi y otros, 2002).

En América Latina y el Caribe la composición y los tiposde bosques varían, y si bien la región suele reconocersepor la considerable proporción de bosque húmedotropical, también se presentan vastas extensiones deotros tipos de bosque. Por ejemplo, una cuarta partedel territorio terrestre de la región está compuesta porecosistemas secos, incluyendo remanentes de bosquessecos tropicales, y una significativa proporción debosques templados y plantaciones forestales,distribuidos principalmente en México, Chile y

Argentina (UNEP, 2003; ver además la sección debosques en el Capítulo II de este informe).

En lo que respecta a ecosistemas marinos y costeros,América Latina y el Caribe posee tres grandes cuerposde agua de importancia para el bienestar humano de laregión, los océanos Atlántico y Pacífico y el Mar Caribe.De estas áreas, el Mar Caribe, de condición semi-cerrada, se caracteriza por ser un ecosistema cuyosservicios dependen en gran medida del funcionamientode cuatro formaciones costeras interdependientes einterrelacionadas: los pastos marinos, los manglares, losarrecifes de coral y las playas (UNEP, 2006, Singh, 2005).La abundancia relativa de estos ecosistemas, su gradode inter-conectividad y su nivel de vulnerabilidad sonmayores en el Mar Caribe, en comparación con los dosocéanos. Estos ecosistemas están ocupando uncreciente nicho en el mercado ecoturístico de la región,y aunque esta función aún está en desarrollo en AméricaLatina y el Caribe, su potencial es inmenso.

La siguiente sección presenta una descripción generalde los bienes y servicios de los bosques y los ecosistemasmarinos y costeros de América Latina y el Caribe,siguiendo para ello la clasificación adoptada porMillennium Ecosystem Assessment (2005a) yRanganathan y otros (2008).

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

Page 193: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

191

2.1 BIENES Y SERVICIOS DE LOS BOSQUES

La población de América Latina y el Caribe deriva unaserie de bienes y servicios de los bosques, los cualesvan desde bienes como madera, leña y/o plantasmedicinales, hasta servicios (algunos de importanciainternacional) como el control de la erosión, laregulación de las inundaciones y el clima, el reciclajede nutrientes, o servicios de tipo cultural como larecreación, los sitios patrimoniales o aquellos convalores culturales especiales.

La madera, usada con propósitos comerciales y nocomerciales, es uno de los principales bienes que seextraen de estos bosques. De acuerdo con FAO (2006),la extracción de productos forestales en América Latinay el Caribe para los años 2000 y 2005 alcanzóaproximadamente 450 millones de m3, por año (Gráfico3.1). En 2005, la producción forestal de madera en rollode uso industrial fue similar a la de leña, con unadiferencia de tan sólo 20 millones de m3 (Gráfico 3.2).Una subdivisión de la región de acuerdo con los ingresosderivados del bosque, para los datos disponibles paraeste mismo período, mostró que Sudamérica es hoy endía el principal proveedor de productos forestales de laregión (FAO 2006, Gráfico 3.3). Además, FAO (2006)estima que las extracciones de madera en 2005significaron más de 7 mil millones de dólaresestadounidenses para la subregión de Sudamérica, delos cuales la mayor proporción (74%) correspondió amadera en rollo de uso industrial. Se resaltan tambiénlos productos forestales no maderables (PFNM), loscuales representan un 3,3% de la extracción total, conuna ganancia estimada de 234 millones de dólaresestadounidenses por año. En la región del Caribe, Haití

registró la mayor tasa de extracción de productosforestales en la subregión, unos 2,5 millones de m3, lagran mayoría (89,2%) para leña. En la región deMesoamérica, Guatemala produjo cerca de 19 millonesde m3, con una alta proporción (93%) destinada a leña.En lo que respecta a extracción por país, Brasil seposiciona como el primer país, con una extracción deproductos forestales que en 2005 alcanzó 290 millonesde m3, de los cuales el 58% correspondió a madera enrollo de uso industrial, y con la cantidad restantedestinada para leña. La alta tasa de extracción de

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

2000

2005

0

50

100

150

200

250

300

350

400

450

500

Mesoamérica Sudamérica Total

50,5 390,8 447

Caribe

5,7

5,5 53,3 398,2 457

GRÁFICO 3.1

América Latina y el Caribe: Extracción de productos forestales (En millones de metros cúbicos)

Fuente: Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación (FAO), 2006.

4,3 41,2

173,3

1,2

12,1

224,8

Caribe Mesoamérica Sudamérica

Madera en rollo de uso industrial

(Total: 238 millones de m 3 )

América Latina y el Caribe: Extracción de leñay madera en rollo de uso industrial enpara el año 2005(En millones de metros cúbicos)

GRÁFICO 3.2

Leña

219 millones de m3)(Total:

Fuente: Organización de las Naciones Unidas para la Agriculturay Alimentación (FAO), 2006.

Page 194: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

192

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

productos forestales de Brasil se debe principalmente ala alta proporción de cobertura forestal de su territorio.En general, aunque la madera es el producto forestalmás importante en la región, como lo demuestran losdatos, la leña y los PFNM son de la mayor importanciapara el consumo local y el sustento económico.

En la región, la mayoría de los bienes derivados de losbosques han presentado un aumento en su produccióndesde los años 70s, con excepción de la leña y laproducción de carbón vegetal, los cuales muestran unatendencia decreciente (Gráfico 3.3). A pesar de queSudamérica tiene la mayor producción total forestal percápita, en el caso de la producción de leña y carbónvegetal, Mesoamérica se presenta como la subregióncon mayores niveles, con 551 m3, seguida deSudamérica, con 521 m3 y el Caribe, con 145 m3. Dentrode las subregiones, el mayor productor anual promedioper cápita en Mesoamérica es Honduras (1.315m3),Guyana en Sudamérica (1.179 m3) y Jamaica en elCaribe (218 m3).

El mayor incremento en la producción de paneles demadera, papel y cartón para América Latina y el Caribe

en el período 2000-2005 se da en la subregión Caribe,con un promedio de 31m3 per cápita. En términos deproducción a nivel país, Chile aporta 67 m3 per cápitaen Sudamérica, seguido por México, con 42 m3 enMesoamérica, y 14 m3 para República Dominicana enel Caribe. En promedio, la producción anual per cápitade paneles de madera para ALC es de 22 m3, y Chileproduce casi cinco veces más que el promedio total(108 m3), seguido por Guyana (78 m3) y Brasil (41m3).La producción más baja corresponde a Paraguay yArgentina, con promedios por país de 28 m3.

Por otra parte, los bosques son fundamentales para lavida de la población regional, especialmente lascomunidades locales. En particular, el uso de PFNMtiene implicancias sociales, culturales, económicas yambientales para numerosas comunidades rurales dela región (ver Delang, 2006; Ticktin y otros, 2007;Recuadro 3.1). Estos bosques deberían considerarsecomo parte de una estrategia de conservación que vayade la mano con el diseño y evaluación de prácticas demanejo, como de hecho se está implementando enalgunas comunidades (Tickin, 2004, y sección debosques del Capítulo II de este informe).

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III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

1932. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

ALC El Caribe Mesoamérica Sudamérica

0

50

100

150

200

250

300

350

400

450

Producción total de madera en rollo deuso industrital

Metros cúbicos per cápita, promedio anual

1971-75 1976-80 1981-85 1986-90 1991-95 1996-00 2001-05

0

5

10

15

20

25

30

35

Producción total de tableros de maderaMetros cúbicos per cápita, promedio anual

ALC El Caribe Mesoamérica Sudamérica

1971-75 1976-80 1981-85 1986-90 1991-95 1996-00 2001-05

0

5

10

15

20

25

30

35

Producción total de papel y cartónToneladas métricas per cápita, promedio anual

ALC El Caribe Mesoamérica Sudamérica

1971-75 1976-80 1981-85 1986-90 1991-95 1996-00 2001-051971-75 1976-80 1981-85 1986-90 1991-95 1996-00 2001-05

ALC El Caribe Mesoamérica Sudamérica

0

100

200

300

400

500

600

700

800

900

1.000

Producción total de madera en rolloMetros cúbicos per cápita, promedio anual

0

100

200

300

400

500

600

700

1971-75 1976-80 1981-85 1986-90 1991-95 1996-00 2001-05

Producción total de leña y carbón vegetalMetros cúbicos per cápita, promedio anual

ALC El Caribe Mesoamérica Sudamérica

800

1971-75 1976-80 1981-85 1986-90 1991-95 1996-00 2001-05

ALC El Caribe Mesoamérica Sudamérica

0

20

40

60

80

100

Producción total de madera aserradaMetros cúbicos per cápita, promedio anual

120

GRÁFICO 3.3

América Latina y el Caribe: Bienes provistos por los bosques, total regional y por subregiones.

Fuente: Base de datos estadísticos (FAOSTAT), de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación (FAO), 2008.

Page 196: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

194

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Por siglos, la población local de la región ha utilizadolos bienes derivados del bosque como parte de susmedicinas tradicionales, especialmente aquellascomunidades rurales e indígenas que viven cerca delos bosques. Aunque el uso de productos forestales paramedicina tradicional es relativamente significativo, lainformación sobre utilización y niveles de dependenciapara lucro económico no está disponible, comotampoco lo está la información regional sobre el usofarmacéutico del material genético proveniente de los

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

Fuente: Elaborado por R. López a partir de López, 2006; Mollinedo y otros, 2001.

El municipio de Ráquira, en Boyacá, es considerado la capital artesanal de Colombia y se caracteriza por sus trabajosdesarrollados en arcilla, así como por los diversos tejidos de sacos, canastos, hamacas, y alfarería en general; cuenta con13.300 habitantes de los cuales aproximadamente 1.250 son artesanos y el 75% de su economía se basa en este renglón.Del total de especies registradas para el municipio de Ráquira (287), se encontró que el 46% presenta uso actual o potencialy la actividad de la alfarería emplea 42 especies utilizadas como leña y 19 especies en la categoría de artesanal, dondesobresalen los bejucos Smilax floribunda y Smilax aff. tomentosa, y otras especies como Indigofera suffruticosa (índigo),empleada como tinte y Juncus effusus (esparto) utilizada en cestería. Estas especies constituyen un insumo prioritario pararealizar planes de manejo relacionados con los modelos de aprovechamiento y estudios de mercado que garanticen unbeneficio económico a los campesinos y artesanos de la región (López 2006).

Casos igualmente exitosos de comunidades locales que se han visto altamente beneficiadas (tanto en lo social como en loeconómico) por el uso de los bosques para la extracción de productos no maderables pueden encontrarse en otras áreas deAmérica Latina y el Caribe (la Reserva Maya en Guatemala, como lo reportan Mollinedo y otros 2001).

Promoción del manejo forestal para los PFNM en América Latina y el Caribe:Caso de estudio en Boyacá, Colombia

RECUADRO 3.1

bosques. Sin embargo, existen algunos ejemplos del usode ingredientes provenientes de plantas del bosque,como la quinina, que se extrae de la corteza de algunasespecies del género Cinchona (p. ej., C. officinalis) parasintetizar medicamentos para el control de la malaria(Chivian, 2003). Una preparación derivada de estemismo grupo de especies es utilizada desde hace tiempopor las comunidades indígenas de la región de laAmazonia para el tratamiento de fiebres.

Los bosques secos tropicales también proveen unaimportante serie de bienes y servicios (Recuadro 3.2) yconstituyen una reserva de recursos genéticos. Tambiénson áreas importantes para el desarrollo de actividadesproductivas sostenibles. Por ejemplo, los bosques secosalbergan recursos genéticos de parientes silvestres deespecies de plantas domesticadas, tales como Cucurbitaspp., Annona cherimolia, Carica microcarpa subsp.baccata y Grias peruviana, entre otras. Algunas especiestienen un valor comercial potencial, como es el casode Hylocereus polyrhizus, Bromelia pinguin, Malpighiapunicifolia y Opuntia dillenii. Plantas ornamentalescomo Bougainvillea peruviana y algunas especies deorquídeas también poseen alto valor económico.Además, en la región se registra la presencia denumerosas especies de madera dura tales como las delos géneros Tabebuia, Hura, Heliotropium, Capparis,Cordia, Phyllanthus o Prosopis, utilizadas en la industriamaderera. Otras especies son usadas como alimento,como es el caso de Malpighia emarginata, Macluratinctoria y Geoffroa spinosa (Aguirre y otros 2001; WorldWildlife Fund, 2001a y 2001b; Neill, 2000; ProyectoBosque Seco, 1999; INEFAN, 199; Josse, 1996). Estosecosistemas boscosos también registran la presencia deespecies con potencial en acuicultura, como es el casode Dormitador latifrons y Macrobrachium spp. (Neill,2000).

Page 197: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

195

Bosques y ecosistemas secos de Colombia: Caribe y AndesRECUADRO 3.2

Los bosques secos han experimentado históricamente altos niveles de conversión a tierras agrícolas y ganaderas, siendoconsiderados como uno de los ecosistemas más amenazados y menos conservados en el trópico (Grau y otros, 2008;Sánchez-Azofeifa y otros 2005, Vieira y Scariot 2005). Colombia no es ajena a este proceso, pues se estima que originalmenteexistían cerca de 80 mil km2 con una disminución para la década de 1950 de más de la mitad (Díaz, 2006) y una superficieactual entre el 1,5 y 2% de su área original. Pese a que los ecosistemas secos poseen una diversidad de especies inferiora la encontrada en otros ecosistemas, son refugios secos del Pleistoceno y, por tanto, han jugado un papel importante en laevolución de la biota sudamericana (Ojeda y otros 1998).

Pennington y otros (2000), diferencian para Colombia dos regiones secas: la planicie del Caribe, que se comparte conVenezuela, y los valles interandinos que van desde Venezuela hasta Perú, siendo la primera de ellas la que tiene figuras deconservación de orden nacional. Adicionalmente, existen algunos enclaves azonales ubicados en la región andina enalturas superiores a los 1.000 m.s.n.m., cuya importancia radica en ser bancos genéticos in situ y fuente de leguminosasforrajeras (Rodríguez y otros 2006).

Bienes y servicios ecosistémicos

Los ecosistemas secos presentan un valor más allá de los bienes directos que se pueden obtener de éstos; la regulaciónclimática, el control de inundaciones, el mantenimiento de la fertilidad del suelo, el control de polinización por parte deabejas nativas y la biorregulación son beneficios para los seres humanos que están siendo reconocidos en la actualidad(Maass y otros 2005). Se caracterizan por ser actuales centros de endemismo (Hernández y otros 1992), que en algunosgrupos biológicos como plantas puede ser superior al 20% (Josse, 1996). Las bellezas escénicas que exhiben estos paisajesse han constituido en un recurso valioso para el desarrollo del turismo ecológico; adicionalmente, algunas áreas, entreellas los parques nacionales presentes, son de importancia paleontológica, arqueológica y cultural.

Como proveedor de productos maderables y no maderables (leña, frutos, plantas medicinales y ornamentales, resinas,alcaloides, fibras), se encuentran especies con potencial forestal tales como Pachira quinata, Jacaranda copaia, Macluratinctoria, Anacardium excelsum, Ceiba pentandra, Bursera simarouba, y varias especies de los géneros Acacia y Tabebuiaque han sido usadas en procesos de forestación y con alto potencial de ser implementadas en restauración y secuestro de

Continúa en la siguiente página...

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

Page 198: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

196

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

Fuente: Elaborado por N. Rodríguez Eraso a partir de Grau y otros, 2008; Sánchez-Azofeifa y otros, 2005; Vieira y Scarios, 2005; Ojeda y otros, 1998;Rodríguez y otros, 2006; Vitoria de la Hoz, 1998; Gamarra, 2007; Maass, y otros, 2005; Hernández y otros, 1992; Josse, 1996; López y Cavelier, 1997; MADVT,2004; Bisigato y otros, 2005; Gamarra, 2007; UPME, 2005; Ulloa, 2007; Diaz, 2007; Quesada y otros, 2001; IAvH, 1997; IDEAM, 2004; Restrepo y otros, 2005.

RECUADRO 3.2

Viene de la página anterior...

carbono. A nivel de productos no maderables, se han identificado 98 especies de origen nativo en los remanentes de losvalles secos interandinos y 76 especies para los ecosistemas secos azonales (López y Cavelier, 2007) muchas de las cualesestán relacionadas con aspectos culturales y tradiciones ancestrales.

Muchos cultivos básicos para la seguridad alimentaria –trigo, cebada, algodón, tabaco, tomate, fríjol, calabaza- se originaronen zonas secas, constituyéndose una fuente para mejoramiento genético y resistencia a plagas y enfermedades (MADVT,2004).

Presiones

La ganadería extensiva ha sido identificada como uno de los principales factores que conducen a la desertificación a nivelmundial (Bisigato y otros 2005) y la mayor parte de los suelos de estos ecosistemas en Colombia se encuentran sobreutilizadospara tal fin, porque si bien 2,3 millones de hectáreas son adecuadas para ganadería, un total de 5,9 millones son dedicadasa esta actividad, albergando un total de 7.750.339 cabezas de ganado, que representa el 30% del hato ganadero del país(Gamarra 2007).

Las zonas secas en Colombia han sido subutilizadas para agricultura a excepción del valle del río Cauca donde sedesarrollan grandes ingenios azucareros y esto se relaciona con las limitaciones climáticas. Sólo la palma de aceite y elmaíz tradicional tienen rendimientos superiores en estos ecosistemas. Localmente, las comunidades indígenas que habitanestos ecosistemas (wayúu), tienen sistemas precolombinos de agricultura de subsistencia y pastoreo de cabras y en laszonas andinas la ocurrencia de fuegos inducidos causa degradación de tierras.

Las presiones económicas y sociales generan fuertes impactos sobre el ecosistema. Pese a la tecnología aplicada, el impactode las actividades mineras sobre el ambiente y las poblaciones aledañas es significativo por la contaminación del recursohídrico y la contaminación atmosférica, con consecuencias para la salud humana. El uso y la tenencia actual de la tierra(latifundista), la escasez de agua y la degradación del suelo, el aumento de fuertes procesos erosivos traen consecuenciassobre el calentamiento global, la desertificación y la pérdida de los servicios ambientales. Desde la perspectiva ambiental,el uso de flora y fauna, que hacen las comunidades locales desde tiempos prehispánicos, ha causando deterioro de laspoblaciones naturales, conllevando a una disminución selectiva de las poblaciones y desapariciones locales (Ulloa, 2007).

Impactos y su incidencia en la provisión de bienes y servicios ambientales

La pérdida de biodiversidad, debida, entre otros, a procesos de fragmentación que, junto con los tamaños reducidos deremanentes, alteran las interacciones entre la flora y la fauna, ocasionan la extinción biológica por efecto de cascada, conun impacto negativo en la actividad de los polinizadores, el éxito reproductivo de algunas especies y el mantenimiento depoblaciones que requieren de areales de distribuciones más amplios (Díaz, 2007, Quesada y otros 2001, IAvH, 1997).Asociado a la destrucción de los hábitats se encuentran los procesos de sabanización con gramíneas antropozoogenaspara la cría de ganado vacuno y caprino, con implicaciones fuertes para la conservación de la biodiversidad regional yaceleración de la aridización (Ulloa, 2007). Finalmente, las actividades de cacería y extracción ilegal de especies maderablesy no maderables han ocasionado reducción de poblaciones, llevándolas a diferentes categorías de amenazas.

El proceso de desertificación causa pérdida de biodiversidad, y tiene repercusión negativa en la calidad de vida (epidemias)y el desarrollo económico de las comunidades locales, aumentando sus niveles de pobreza y la escasez de agua y causandopérdidas de productividad por degradación del suelo. Asociado al fenómeno de desertificación, se ha detectado quehistóricamente las sequías en las zonas secas pueden relacionarse con el fenómeno cálido del pacífico (El Niño), impactandola producción agrícola (seguridad alimentaria) y ganadera y el abastecimiento de agua a ciudades y comunidades rurales,donde “los índices de escasez y vulnerabilidad del recursos hídrico muestran tendencias preocupantes actualmente, y nosostenibles en el abastecimiento de agua para los municipios” (IDEAM, 2004). Varias actividades humanas que generandeforestación, conversión de suelos, minería, entre otras, causan aumento de flujo de sedimentos y tasas de erosión en lascuencas hidrográficas ocasionando anomalías hidrológicas en la región con sus consecuencias para la población (Restrepoy otros 2005).

Page 199: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

197

Los bosques proveen servicios de regulación que sonvitales para el bienestar humano, en aspectos tales comola regulación de la temperatura, el establecimiento derefugio y hábitat para muchas especies, a la vez quejuegan un papel en la reflexión de la radiación solar, laregulación del aire y el agua, el control de la erosión,las enfermedades, plagas y amenazas naturales. Además,el bosque juega un papel en la regulación climáticaglobal y regional mediante la captura y elalmacenamiento de carbono.

El secuestro de carbono a través de sumideros como labiomasa, la hojarasca, las raíces e incluso la materiaorgánica de los suelos de los bosques, alcanza unaimportancia particular, especialmente si se lo ve comouna de las respuestas ante los efectos del cambioclimático, y como tal ha sido incluido en la modelaciónde escenarios que lleva a cabo el PanelIntergubernamental de Cambio Climático (IPCC, por sussiglas en inglés) (IPCC, 2007).

La mayoría de las funciones de regulación derivadas delos bosques dependen en gran medida de la biomasa.En 2006, FAO (2006) reportó que el stock de biomasadel planeta en bosques correspondía a 529,5gigatoneladas de carbono. De este total, los bosques deAmérica Latina y el Caribe albergan 170 gigatoneladas.Cuando esta cifra se pondera por la superficie, se deduceque América Latina y el Caribe almacena el 32% de lasexistencias de carbono en bosque del planeta, en unárea que sólo alcanza el 15% de la extensión terrestredel planeta. Realidades como esta demuestran laimportancia del recurso natural boscoso desde el puntode vista de las fuentes globales de carbono, no sólo paralos habitantes de la región, sino también para el planetaen general.

Los servicios ecosistémicos que proveen los bosquesde la región no pueden subestimarse. En 2006, se llevóa cabo en la ciudad de Valdivia, Chile, un CongresoInternacional sobre Servicios Ecosistémicos en elNeotrópico, el cual reunió a científicos de la región quetrabajan en esta materia. El principal servicioidentificado por los participantes fue la regulación delrecurso hídrico, específicamente las fuentes de agua delos bosques naturales. Por ejemplo, en Valdivia, seencontró que las cuencas con cobertura de especiesnativas tenían en el verano un índice de flujo decorriente (flujo rápido/precipitación) de entre 0,65 y0,80; en contraste, el bosque dominado por plantacionestenía un flujo de corriente de verano de 0,05-0,34 (Laray otros, 2006), es decir, el bosque ayuda a retener elagua en los suelos. En Chile existen evidencias de otrosservicios de regulación de importancia, tales como ladispersión de semillas que llevan a cabo las aves. Es

por ello que una reducción de la cobertura boscosa, lariqueza o la diversidad podría afectar negativamente ladispersión de semillas y la regeneración natural de losecosistemas (Reid y otros, 2006).

Un caso que aún causa controversias es el de lasplantaciones forestales y los servicios de regulación,específicamente como sumideros de carbono (Recuadro3.3). Árboles jóvenes de crecimiento rápido extraencarbono de la atmósfera a un ritmo mucho mayor(Birdsey, 1992). En consecuencia, cabría esperar que

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

Page 200: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

198

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

las plantaciones forestales sudamericanas, implemen-tadas mayormente con eucaliptos –una especie decrecimiento rápido– atenúen los efectos del cambioclimático mundial. Sin embargo, la mayor parte delcarbono almacenado en las plantaciones seránuevamente liberado a la atmósfera en el plazo de dieza veinte años, cuando esa madera sea utilizadaindustrialmente o aplicada a la generación de energía(Berndes y otros, 2003). Estudios sugieren que lacantidad de carbono almacenado en bosquesconsolidados (y despedida durante la conversión deluso de la tierra) es mucho mayor que la cantidadsecuestrada en cualquier proyecto de plantación (verla sección de bosques del Capítulo II). Para variosespecialistas, la ralentización de la deforestación es unaestrategia mucho más eficaz para hacer frente alcalentamiento global que la implementación de nuevasplantaciones (Schulze y otros, 2000; Fearnside, 1999,2000).

Los servicios culturales que proveen los bosquesincluyen una amplia variedad de servicios que vandesde espirituales o religiosos a recreacionales (ver elRecuadro 3.2, ejemplos de bosques secos), y los bosquesde América Latina y el Caribe no son la excepción. Losservicios culturales, especialmente el valor espiritual delos bosques, alcanzan una particular importancia paralas comunidades indígenas que habitan en estosecosistemas. Los bosques también poseen un valor

Carbón en madera muerta

Carbón en hojarasca

Carbón en biomasa subterránea

Carbón en suelo

Carbón en biomasa por encima del suelo

Caribe Mesoamérica Sudamérica Total

42 251 6.292 6.585

1 9 2.339 2.349

110 483 17.132 17.725

215 186 52.333 52.734

385 1.603 57.332 59.320

0

10.000

20.000

30.000

40.000

50.000

60.000

Tone

lada

sm

étri

cas

GRÁFICO 3.4

América Latina y el Caribe: Reservas de carbono forestal para el año 2005(En millones de toneladas métricas)

Fuente: Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación (FAO), 2006.

significativo para actividades de esparcimiento, y unvalor económico para el sector del turismo. Existe, enpaíses como Costa Rica, Belice, Guyana y Puerto Rico,un conjunto de actividades turísticas asociadas a losbosques; la gran mayoría de países de América Latina yel Caribe han reservado parte de sus territorios a laprotección y preservación de los bosques naturales (verla sección de bosques del Capítulo II de este informe).

Los bosques de la región también contribuyen albienestar humano mediante servicios de soporte queproveen en forma de productividad primaria, reciclajede agua y fotosíntesis. FAO (2006) sugiere que podríautilizarse la fotosíntesis como un indicador proxy paracuantificar los servicios de soporte de los bosques. Conbase en esto, cuando se los compara con el resto delplaneta, los países de América Latina y el Caribe ocupanlos más altos puestos en 3 de las 5 categorías dealmacenamiento de carbono, de acuerdo con los tiposde biomasa. ALC posee el 48% de la biomasa enhojarasca, el 34% de la biomasa subterránea, y el 31%de la biomasa por encima de la superficie, con respectoa los totales globales. Sudamérica registra los valoresmás altos para América Latina y el Caribe en todos lostipos de biomasa, debido a la alta proporción desuperficie con cobertura boscosa de esta subregión(Gráfico 3.4; para una visión de las plantacionesforestales de la región como sumideros de carbono, verel Recuadro 3.3).

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

Page 201: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

199

Servicios ambientales de bosques: Plantaciones forestales para sumideros de carbonoRECUADRO 3.3

Existen controversias en torno a la efectividad, eficacia y eficiencia de las plantaciones forestales a gran escala, comosumideros de carbono. De hecho, aún existe una gran incertidumbre en cuanto a los procedimientos para la medición delcarbono y sobre el sistema de otorgamiento de créditos. La pregunta de hasta qué punto los proyectos de plantacionesforestales a gran escala son, o pueden ser considerados como una respuesta, es difícil de responder (Van Vliet y otros2003). Por ejemplo, un ambicioso proyecto vinculado a empresas europeas del sector energético para la implementaciónde plantaciones de pino en los Páramos Andinos del Ecuador – una región de pasturas fundamental para el mantenimientodel ciclo hidrológico local, que alberga altos niveles de biodiversidad y es habitada por campesinos y pueblos originarios(World Rainforest Movement, 2003)- resultó inefectivo pues el balance entre el carbono absorbido y el emitido resultónegativo a los fines perseguidos, afectando la calidad de vida de las comunidades locales (Vidal-Oltra, 1997). Con todo,las incertidumbres científicas no impidieron – por vía del Principio de la Precaución – que se lleven a cabo experienciasde este tipo, con consecuencias que impactan de forma inter-generacional a los indígenas ecuatorianos.

Estudios en la región pampeana (Argentina) también demostraron que la implementación de plantaciones forestales parasumideros de carbono puede tener efectos fuertemente negativos sobre la fertilidad y la salinidad de suelo, afectandotambién el régimen hídrico y la calidad del agua. En esta región, se observó una asociación entre las plantacionesforestales a gran escala y la salinización de las aguas subterráneas de las napas menos profundas, que proporcionan aguapotable (Jackson y otros 2005).

Plantaciones forestales industriales, su auge y efectos sociales

A pesar de la enorme diversidad de árboles nativos sudamericanos, en casi todo el subcontinente, las plantacionesforestales a gran escala con fines industriales están siendo implantadas con especies exóticas de rápido crecimiento,siendo el eucalipto el árbol más plantado en la región, seguido por diferentes especies exóticas de pino.

Para el 2005, América Latina y el Caribe reporta un total de 13 millones de hectáreas de plantaciones forestales. EnSudamérica, Brasil es el líder de la producción de eucaliptos, árbol que representa el 75% de la superficie total plantadaen ese país. El estado de Espíritu Santo, en el sudeste del Brasil, merece especial atención tanto por presentar el mayorporcentaje de superficie plantada con eucalipto, como por la gran cantidad de información disponible en torno al impactoambiental de las plantaciones forestales a gran escala sobre comunidades de las etnias guaraní, tupiniquim y quilombolas(descendientes de esclavos africanos emancipados), las cuales sobreviven de la agricultura familiar.

Continúa en la siguiente página...

Por su parte, una especie exótica de pino (Pinus radiata) es el árbol más plantado en Chile, representando casi el 68% dela superficie ocupada con plantaciones forestales. A pesar de no ser la región más forestada del país, los impactos ambientalesasociados a la presión forestal se sienten con más intensidad en la IX Región de La Araucanía. En esta región habitanoriginariamente los indígenas mapuches, y en ella permanece cerca del 23% esta etnia.

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

Cuadro A: Plantaciones forestales en Brasil en hectáreas por Estado (2004)

Estado Eucalipto Pino Araucaria Acacias otros Total SuperficieEstadual

Amapá 57.072 26.313 - 2.659 665 86.709 0,62%Bahía 312 .877 5.406 - - - 318.283 0,56%Espíritu Santo 118.246 13 - - - 118.259 2,58%Marañón 2.134 - - - - 2.134 0,01%Mato Gross o del Sur 53.679 102 - - - 53.781 0,15%Minas Gerais 159.526 3.233 446 - 1.364 164.569 0,28%Pará 40.270 797 - - - 41.067 0,03%Paraná 46.482 203.280 6.396 - 179 256.336 1,28%Río de Janeiro 1.201 - - - - 1.201 0,02%Río Grande del Sur 49.571 8.824 577 4 42 59.019 0,21%Santa Catalina 6.697 100.073 164 - 13 106.947 1,12%San Pablo 329.667 35.263 78 - 469 365.488 1,47%Total 1.177.422 383.304 7.662 2.663 2.733 1.573.784 —Fuente: Bracelpa (2008).

Page 202: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

200

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

2.2 BIENES Y SERVICIOS DE LOSECOSISTEMAS MARINOS Y COSTEROS

A nivel regional, estos ecosistemas contribuyen albienestar humano a través de la provisión de diferentestipos de servicios incluyendo la pesca y el turismo. Enparticular, los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo(PEID) del Caribe dependen de los servicios ecosis-témicos para el turismo, la mayor fuente de ingresos desus economías.

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

La distribución del pasto marino en la región seencuentra estrechamente asociada a la distribuciónregional de arrecifes de coral (ver la sección sobre maresy costas del Capítulo II de este informe). Los serviciosde soporte proporcionados por los pastos marinos losconvierten en uno de los mayores contribuyentes a laproducción primaria de los océanos del mundo; ya quepor ejemplo, sustentan la producción secundaria deespecies de importancia económica como peces ycrustáceos (Erftemeijer y Middleburg, 1993, Jackson y

Fuente: Elaborado por G. Schultz

Uno de los argumentos más citados en favor de la implementación de plantaciones forestales a gran escala en Sudaméricase relaciona con la generación de puestos de trabajo para economías deprimidas. Sin embargo, la oferta de trabajo en unaplantación de eucalipto es mucho menor que en un monocultivo de café y que en la agricultura familiar tradicional.También son peores las condiciones de bienestar del trabajador rural.

RECUADRO 3.3

Viene de la página anterior...

Cuadro B: Plantaciones forestales en Chile en hectáreas por región (2004)

Fuente: INFOR (2005)

Región Atriplex Algarrobo Álamo Acacias Pino Nothofa- Eucalipto Pino Otras TotalOregon gus sp. Radiata

I 9 23 872 - - - - 288 - 665 24.825II 29 277 - 7 - - 2 - 725 1.040III 17 98 1 62 - - 1.259 1 1.158 2.595IV 58.253 995 12 6.501 - - 1.846 6 6.566 74.179V 194 7 7 576 - - 36.456 11.046 4.676 52.962RM - 5 1 - - - 10.881 993 2.524 14.404VI - - 1.600 51 - - 22.658 62.127 3.782 90.216VII - - 2.839 30 43 33 20.456 361.703 3.020 388.123VIII - - 901 575 275 167 183.329 606.240 345 791.831IX - - 129 212 6.616 372 127.454 249.910 5.252 389.946X - - 501 116 4.789 579 84.975 116.404 1.461 208.825XI - - 5 - 4.732 25 - - 34.782 39.544XII - - 13 - 5 - - - 140 158Total 58.501 25 254 6.008 8.130 16.459 1.176 489.603 1.408.430 65.086 2.078.647

Cuadro C: Aspectos relacionados al trabajo y el empleo en los monocultivosde eucalipto y de café y en la agricultura campesina tradicional

Monocultivode eucalipto

Muy baja (1 empleo / 28-37hectáreas)

Medio-Alto

Alto (Cultivo con aplicación deagrotóxicos)

Baja (Precisan comprar alimentospara la familia)

Monocultivode café

Alta (Hasta 1 empleo / ha.; en lazafra hasta 2 a 3 empleos / ha.)

Medio-Bajo (Riesgo mayor parajornaleros)

Medio-Alto (Normalmente cultivacon aplicación de agrotóxicos)

Baja (Precisan comprar alimentospara la familia)

Agricultura campesinatradicional

Alta (Hasta 1 empleo /1-2 ha.; enla zafra hasta 4 a 5 empleos / ha.)

Bajo

Bajo (No usa agrotóixicos; lospropios alimentos son saludables)

Alta (Produce sus alimentosbásicos; frijoles, arroz, maíz,

hortalizas, etc.)

Capacidad de generaciónde empleo

Riesgo de desempleo

Riesgos para la salud

Seguridad alimentaria

Fuente: Adaptado de Nadai y otros 2005.

Page 203: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

2012. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

otros, 2001a), y conjuntamente con las raíces y rizomasde los mangles, contribuyen a la estabilización desedimentos y de la reducción de la turbiedad y de laerosión costera (Costanza y otros, 1997).

La presencia de numerosas especies de invertebradosen el pasto marino ayuda en los procesos de formaciónde las playas, dado que estos organismos poseencaparazones calcáreos externos que al morir sedepositan como sedimentos marinos. Además, el pastomarino basa la producción de su alimento en el dióxidode carbono, transformándolo a una tasa de 1kg decarbono por metro cuadrado de pasto marino por año(1 kgC m-2 y-1). Una considerable porción de estaproducción ingresa a la cadena alimenticia más allá dela línea de costa, en forma de detritos (CARSEA, 2007).

El Cuadro 3.2 presenta un ejemplo de la variedad debienes y servicios que los manglares proveen en laregión. Por ejemplo, desempeñan un papel significanteen el ciclo de erosión y acumulación a lo largo de lascostas de Guyana, Suriname y la Guayana Francesa. Latotalidad de las costas de Guyana y la Guayana Francesase ven afectadas por el sistema de dispersión de cargaasociado con los sedimentos del río Amazonas, que seestima deposita cerca de mil millones de toneladas desedimentos al océano cada año (Augustinus, 1978;Pastakia, 1991; UNEP, 2007b; Royal Haskoning, 2007).En el caso de la Guayana Francesa, se estima que el10% de esta carga de sedimentos alcanza la costa comocarga suspendida (Rudant, 1994), y los manglares

ayudan en la captura de estos sedimentos. En el casode Guyana, esta carga de sedimentos, comúnmenteconocida como el «lodo arrojado» (sling mud), esatrapada por los sistemas radiculares de los manglares,reduciendo de forma significativa la energía de las olas,el «sobresalto» asociado a las mareas excepcionalmentealtas y la subsecuente inundación (Royal Haskoning,2007, IDS-SEES, 2008). Esta función resulta deimportancia crítica, especialmente ante un aumento enel nivel de los océanos, y en particular para un paíscomo Guyana, donde los productos derivados de lascostas equivalen al 60% del producto interno bruto (PIB)del país (Ministry of Finance, 2008). En la mayoría delos países, los manglares amortiguan el efecto que lascorrientes marinas, el viento y las olas tendrían sobrelas tierras aledañas a las zonas costeras, lo que esespecialmente importante durante tormentas yhuracanes.

Otros servicios de soporte se relacionan al reciclaje denutrientes y en el mantenimiento de los hábitats decrianza de numerosos organismos marinos, tantocomerciales como no comerciales (Mumby y otros2004). De acuerdo con FAO (2007), los bosques demanglar sostienen una floreciente industria pesquera enPanamá, la cual podría estar en peligro debido aprocesos de destrucción o degradación. Impactosnegativos de este tipo fueron observados en Jamaica,donde se presentó una reducción en la captura de pecesposterior a la reducción del área de manglares.

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202

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Los manglares también aportan una variedad de bienesy servicios de provisión. Es común que las comunidadesrurales costeras dependan de los manglares como fuentede alimento y de ingresos adicionales mediante laextracción de productos forestales no maderables talescomo plantas medicinales (noni, Morinda citrifolia), lascuales se encuentran con relativa abundancia en losbosques de manglar de el Caribe. Además, se capturanmoluscos, cangrejos y otros crustáceos para uso y

consumo locales y nacionales. En Ecuador, por ejemplo,cada mes se extraen de los bosques de mangle de 2 a2,5 millones de moluscos (Spalding y otros, 1997, Lugo,2002). En forma similar, la exportación de ostionesdepende principalmente de la presencia y la salud delas comunidades de manglar, mientras que en Venezuelaéstos sustentan la pesca comercial y de pequeña escala.En Guyana, las semillas del mangle, Avicenniagerminans, son usadas como alimento (Allan y otros,

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

Bien/Servicio

Combustible

Construcción

Pesca

Alimento

Productos para el hogar

Textiles, cuero

Otros productos

Biorrecuperación

Recreación

DefensaHábitats

Tipo

De provisión

De regulación

Culturales

De soporte

Fuente: Elaborado por A. Singh.

CUADRO 3.2

Ejemplos de bienes y servicios provistos por los manglaresEjemplos

LeñaCarbón vegetal

Madera para andamiosVigas, postes, pisos, paneles, etc.Pilotes de muellesTechos de paja, esteras

Postes para trampas para pecesRefugios para atraer pecesFlotadores para pescaVeneno para pecesTaninos para preservar redes y líneas

PecesCrustáceosMoluscosOtro tipo de faunaVegetales (propágulos, frutos y hojas)Dulces (propágulos)Condimentos (cortezas)MielBebidas fermentadas

Pegante para mueblesCerasUtensilios para el hogarInciensoPalillos

Pelajes, PielesFibras sintéticas (ej. Rayon)Tintes para telasTaninos para preservación del cuero

Peces, mariscos y raíces de manglar para el mercado de acuariosMedicinas de cortezas, hojas, frutos y semillasForraje para ganado y cabrasFertilizantesLimoPapelMateriales rústicos para artesaníasEnvolturas de cigarrillos

Reciclaje de nutrientes

Observación de aves

Barreras naturales ante tormentasHábitats de crianza para juveniles

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III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

203

2002), mientras que en Brasil, Colombia, Ecuador,Guyana, Perú y Venezuela los manglares son una fuenteimportante de madera y leña (Allan y otro,s 2002, UNEP-WCMC, 2007, FAO, 2007), mientras que la extracciónde taninos de la corteza del mangle (especialmente delRhizophora mangle) era antes una actividad corrienteen Brasil, Colombia, Ecuador y Guyana, para el curadoy secado de las redes de pesca, y durante muchos añoscontribuyó sustancialmente al abastecimiento de lasindustrias nacionales (FAO, 2007).

Los arrecifes de coral son los ambientes marinos másdiversos. Proveen recursos pesqueros, componentesbioquímicos para aplicaciones medicinales, áreasrecreativas con alto valor económico, oasis para laeducación ambiental, protección costera y serenosespacios para la contemplación (valor estético)(Birkeland, 1997; Jackson y otros, 2001b; Hoegh-Guldberg y otros, 2007; Knowlton y Jackson, 2008). Enforma indirecta, los arrecifes de coral proveen asiento auna inmensa cantidad de especies y ofrecen hábitat paraorganismos en estado larval, juvenil y adulto, los cualespueden migrar a otras regiones. El «valor de opción deuso» potencial de los arrecifes de coral es significativo.Un ejemplo lo constituyen aquellos organismos propiosde estos ambientes y que han sido identificados yexplotados con propósitos medicinales e industriales.Los corales blandos y las gorgonias producennaturalmente terpenoides que han sido evaluados porsus funciones antibacteriales, en tanto que las gorgoniascontienen notables cantidades de prostaglandinas,empleadas para ayudar en la inducción de la labor departo y para el control de la natalidad (Carté, 1996).

En el caso de los servicios de provisión, los arrecifes decoral proporcionan una fuente de proteína de altacalidad, a la cual pueden acceder las embarcacionespesqueras de pequeña escala y los pescadores desubsistencia mediante canoas y botes de remos. Algunasespecies de peces asociadas con los arrecifes de coral,tales como pargos, meros, langostas espinosas del Caribey caracolas reina, históricamente han mantenido elcomercio (incluido el internacional) de varios países dela región (FAO, 2007a; CRFM, 2005, 2006, 2007).

Los arrecifes de coral, particularmente aquellos que seextienden paralelos a la línea de costa a manera decordones o barreras, aportan una serie de servicios desoporte. Por ejemplo, prestan protección a las líneascosteras de tierra firme contra la erosión y los dañosproducidos por huracanes y tormentas. UNEP (2008)resalta que los arrecifes de coral protegen más del 20%de las líneas de costa del Caribe de la fuerza de lastormentas, los vientos y las olas.

Se estima que la contribución anual de los ecosistemasde los arrecifes de coral a la industria pesquera, elturismo y la protección de líneas de costa oscila entreUS$3.100 y US$4.600 millones (CARSEA, 2007). Entérminos generales, se sugiere que el Caribe es la regióndel mundo más dependiente del turismo desubmarinismo en arrecifes de coral para la generaciónde puestos de trabajo e ingresos (World Tourism andTravel Council, 2003). En Belice, un estudio que buscabaevaluar el impacto de los huracanes y los eventos deblanqueamiento de corales en la existencia de loshabitantes del país, demostró una complicada trama derelaciones debidas a la dependencia que la poblacióntiene del turismo (McField y otros, 2008). La crecienteindustria turística de Belice equivale al 23% del PIB delpaís (de acuerdo a datos de 2002), con un valor anualtotal de US$194 millones.

Los arrecifes de coral también capturan dióxido decarbono y liberan oxígeno, además de regenerarnutrientes (Birkeland, 1997; Hughes y otros, 2007;Mumby y otros, 2007a). Desde el punto de vistaecológico, los aportes en términos de servicios sonconsiderables para la vida en el planeta; su valoreconómico es significativo; y social y culturalmente soninvaluables para las comunidades locales.

2. BIENES Y SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS

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204

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. PRESIONES

América Latina y el Caribe es una región caracterizadapor países en vías de desarrollo. El crecimientoeconómico de estos países, junto con el crecimientoexponencial de su población, están sumando nuevaspresiones a las áreas menos desarrolladas y unincremento en la presión sobre las áreas con mayoresdesarrollos (Harrison y Pearce, 2000), especialmentesobre los ecosistemas boscosos y marino-costeros (verel Capítulo II de este informe). El alto crecimiento de lapoblación crea una mayor demanda de bienes, lo queincluye una creciente demanda por alimentos. Ademásde estas presiones de origen humano, existen otras,producto de eventos naturales en la región.

La degradación y disminución de los bosques estánasociadas a un sinnúmero de factores, siendo la pobrezala fuerza motriz identificada como la más significativa(Sunderlin y otros, 2005). FAO (2006) identifica elcrecimiento poblacional, la expansión agrícola, lacreciente demanda de productos forestales, la tala ilegal,el desarrollo industrial y el rápido crecimientoeconómico como algunos de los principales factores(de origen antrópico) que están ejerciendo presionessobre los bosques. Otros factores de origen antrópicoque influyen en la deforestación y degradación de losbosques son:

a) Las políticas inadecuadas de uso de la tierra, eldesarrollo urbano y de infraestructura no planificadoy el crecimiento poblacional que se le asocia,

b) El establecimiento de cultivos ilegales, laintroducción de especies exóticas, el comercio ilegalde especies, la explotación extensiva de fauna y florapara el comercio,

c) Las prácticas de ganadería intensiva, el uso intensivode fertilizantes, el uso inadecuado del recursohídrico, la creciente demanda por alimentos ybiocombustibles, la minería,

d) Los incendios no planeados.

Fenómenos como el cambio climático global tambiénestán asociados a la pérdida de bosques, no sólo entérminos de área, sino también en lo que a diversidad ycapacidad del bosque para proveer servicios y funcionesecosistémicas se refiere (ver el Recuadro 3.2). Algunosde estos aspectos también ejercen presiones sobre losecosistemas marinos y costeros (ver los Recuadros 3.2y 3.4 para ejemplos sobre bosques y manglares).

Las presiones sobre los arrecifes de coral y el pastomarino se relacionan con el turismo, el cual continúaexpandiéndose con velocidad en muchos de los paísesde la región. Las mareas rojas, la sedimentación, la

3. PRESIONES

Presiones sobre los manglares: Bahía de Parita, Panamá: En la Bahía de Parita, se encuentra en el extremo occidental del Golfo de Panamá, , los terrenosinundables están ocupados mayormente por manglares, albinas (zonas grisáceas en la imagen de 1979 - izquierda) y por vegetación baja inundable, de granimportancia por su función como criadero de especies de crustáceos y peces. Gran parte de los bosques costeros fueron destruidos para dedicarse a potreros,a la cría de camarones y a la extracción de sal marina. Estas últimas dos fueron las principales actividades económicas de la provincia de Coclé. Actualmente,ambas industrias han decaído debido a la fuerte competencia de los precios internacionales de la sal y al virus de la mancha blanca que afectó la industriacamaronera en Panamá en 1999. Estas actividades dejaron los suelos desprotegidos y expuestos a la erosión, salinización y desertificación. En la imagen delsatélite Landsat de 2006 - derecha, se observan las áreas utilizadas para el establecimiento de camaroneras y salinas (patrones geométricos de color azulado).Fuente: PNUMA (2010) Atlas de Nuestro Cambiante Ambiente: América Latina y el Caribe.

20 Enero 1979 14 Marzo 2006

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III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

2053. PRESIONES

sobreexplotación de los recursos asociados (especiesmarinas), la polución, la extracción del coral y lapresencia humana han sido identificadas como lasprincipales causas de degradación de los arrecifes decoral en la región (Pandolfi y otros, 2003; Wolanski yotros, 2003; Kleypas y otros 2006; Hoegh-Guldberg yotros, 2007; Hughes y otros, 2007; Cortés 2003; Gardnery otros 2003; Singh, 2005). Si bien no se dispone deinformación sobre la tasa de degradación para toda laregión de América Latina y el Caribe, existen numerososejemplos que ilustran la magnitud del impacto humano.Por ejemplo, estimaciones en Honduras sugieren queel 34% de los arrecifes de coral están amenazados porstress de origen antrópico, siendo las más dominantesla sobrepesca (30%), los desarrollos costeros (25%), lasedimentación resultado de actividades agrícolas (10%),y las actividades marinas (6%). La contaminación marinacomo la polución por hidrocarburos, también estáafectando manglares, arrecifes de coral y pastos marinos.Por ejemplo, en Panamá una considerable área de

manglares desapareció debido a la contaminacióncausada, en parte, por el alto tráfico marítimo del Canalde Panamá (Spalding y otros 1997, Lugo, 2002).

Además de las fuentes de presión de origen antrópico,eventos naturales como los huracanes y los efectos delcambio climático están imponiendo presiones en elcorto plazo sobre el funcionamiento, tanto de losbosques como de los ecosistemas marinos y costeros.Es probable que los desastres naturales derivados delcambio climático aumenten en frecuencia y/o intensidad,como lo sugieren estudios sobre intensidad de huracanesen la zona del Atlántico (Bender y otros, 2010), yestadísticas que muestran el incremento en frecuenciade los fenómenos hidrometeorológicos en AméricaLatina y el Caribe (ver el Capítulo I). Estos incluyen losincendios forestales, que aunque algunas veces soninducidos por el hombre, sus efectos suelen exacerbarsepor el aumento en las sequías y en la temperatura, porla erosión del suelo y los movimientos en masa.

Presiones de origen antrópico sobre los manglares de América Latina y el CaribeRECUADRO 3.4

Se estima que en los Pequeños Estados Insulares enDesarrollo (PEID) del Caribe más del 80% de la poblaciónhumana vive a no más de 10 Km de los manglares. Esto haconducido a la extracción de estos bosques, y suele sucederque donde aún permanecen, estos hábitats se han convertidoen los basureros de las poblaciones. En años recientes, lacomposición de la basura ha cambiado de una con mayorcomposición orgánica o biodegradable a otra con mayoresproporciones de plástico y espuma de poliestireno, lo quepone en peligro la existencia de las mismas plantas, ycompromete los servicios ecosistémicos que éstosecosistemas prestan para el bienestar humano.

Además, en países como Haití, Guyana, Suriname, RepúblicaDominicana y Jamaica, un porcentaje de la poblacióndepende de este recurso para leña, lo que conduce a queeste ecosistema sea objeto de otra forma de explotación, ladeforestación. En aquellas áreas donde la agricultura es aúnuna actividad predominante, como en Colombia, Ecuadory Guyana, los ecosistemas de manglar están siendodesplazados para establecer granjas, que incluyen ganadería(se tiene proyectado que esta presión va a hacerse mayorante la creciente población y el aumento en el precio de losalimentos), en tanto que la contaminación producida porlos fertilizantes y pesticidas asociados a la agricultura esconsiderada como una de las mayores amenazas (Pastakia1991, Lugo, 2002).

La acuicultura es otra de las actividades identificada entrelas mayores fuentes de destrucción, a medida que los cuerposde agua de los manglares son convertidos en estanques parala producción de camarones o langostinos (Stevenson, 1997).Por ejemplo, en Belice, grandes franjas de manglar fueronreemplazadas por acuicultura, aunque, debido a la

Fuente: Pastatia, 1994; Lugo, 2002.

competencia global, esta actividad económica una vezfloreciente ha dejado de ser factible (a pesar de los incentivosfiscales bastante liberales de Belice –Zona de Procesamientode Exportaciones). En otros sitios de la región, como en elcaso de las islas del Caribe, actualmente la acuicultura noes una industria mayor; sin embargo, ésta sí se estáexpandiendo en América Latina (véase además la secciónsobre acuicultura en el Capítulo II de este informe). Porejemplo, Guyana y Suriname están buscando expandir suindustria acuícola y han comenzado a hacer uso de algunasde sus áreas en manglar. Iniciativas de este tipo traerán comoresultado la exposición de estos manglares a una crecientepresión futura, y a una reducción en su extensión total. Pesea ello, a medida que los países de la región se embarquenen la acuicultura, estos deberían ponerse al corriente de lasposibles ganancias económicas en el corto plazo y de lasconsecuencias a largo plazo sobre los ecosistemas, comose hizo evidente en Belice.

Las actividades relacionadas con el turismo también generanimpacto sobre los manglares, en aquellos destinos conocidosy aquellos que están emergiendo en América Latina y elCaribe En países como México, Colombia, Barbados,Bahamas, Trinidad y Tobago y las Islas Caimán, una de lasamenazas para los manglares son los siempre crecientesdesarrollos de la industria del turismo, ya que la tierra esdespejada para construir más hoteles, spas y embarcaderos,aunque las mayores regulaciones ambientales deberíanreducir algunos de estos impactos. Sin embargo, en laactualidad existe un marco legal débil que contempla penasbajas que pocas veces se hacen cumplir, lo que se hatraducido en que estos desarrollos sigan progresando,prácticamente incólumes.

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206

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. PRESIONES

En el caso de los arrecifes de coral, estos suelen rompersecuando son expuestos a la acción de olas fuertesinducidas por tormentas y huracanes. Asimismo, escomún que durante estos fenómenos climáticosestacionales, en las áreas costeras y de interior sujetas ainundación, se incrementen los sedimentos y laescorrentía. La sedimentación excesiva puede asfixiaro enterrar los corales, y también puede reducir la luzdisponible para las algas simbióticas residentes, en tantoque grandes cantidades de agua dulce podrían reducirlos niveles de salinidad por debajo de aquellos quepermiten el crecimiento del coral. En el caso de losmanglares, las inundaciones asociadas con las tormentaspodrían depositar grandes cantidades de sedimentos enplazos muy cortos, los cuales tienen el potencial desepultar y destruir los manglares.

En lo que respecta a las islas y las áreas de tierras bajasde la región de América Latina y el Caribe, posiblementela mayor amenaza que enfrentan los ecosistemasmarinos en estos sectores es el aumento en el nivel delmar asociado con el cambio en los patrones climáticos.Proyecciones para la región del Caribe estiman que el

nivel del mar se elevará al menos 5 mm por año durantelos próximos 100 años, a causa del calentamiento globalinducido por los gases de efecto invernadero (GEI)(Nurse y Sem, 2001, IPCC, 2007). Este cambio en elnivel del mar traerá serias consecuencias para losrecursos costeros de los estados del Caribe, entre losque se cuentan los bosques de manglar, la estabilidadde las playas, los arrecifes de coral y los pastos marinos.

Al estar estos ecosistemas expuestos a eventos naturalestales como los huracanes, la capacidad de estos hábitatspara seguir cumpliendo sus funciones puede versecomprometida. Por ejemplo, en 1989 gran parte de losmanglares de las Islas Vírgenes Británicas sufrieron dañosdurante el paso del huracán Hugo. En 2004, losmanglares de las Islas Caimán y Granada fueronseveramente impactados por el huracán Iván, eventoque causó más de US$1.800 millones en daños, ademásde una destrucción significativa de la costa y de loscuerpos de agua de los manglares centrales de la GranCaimán, en las Islas Caimán, y en la playa Grand Anseen Granada (Government of Guyana 2005, FAO,2007b). En países como Guayana y Surinam, eldesplazamiento de masas de lodo y el ciclo de erosiónhan destruido considerables franjas de manglar a lo largode la línea de costa de ambos países (Howard, 2004).Es probable que esta situación se intensifique en lamedida que el nivel del mar ascienda a causa del cambioclimático; y a medida que mareas excepcionalmentealtas se vuelvan más frecuentes, es probable que losbancos de lodo se vean sometidos a olas más fuertes, loque conduciría a un aumento en la tasa de erosión y ala destrucción de los manglares.

Las presiones humanas, los eventos naturales y lasenfermedades juegan un papel significativo en ladegradación de los ecosistemas, lo que hace más difícilsu recuperación después de eventos naturales,reduciendo su resiliencia natural ante los efectos detormentas y otros eventos (Bellwood y otros, 2004;Guzmán y Cortés, 2007; Hughes y otros, 2007; Mumbyy otros, 2007a).

Es evidente que corales, manglares y pastos marinosson los elementos constitutivos básicos de losecosistemas marinos, que por lo general, estáninterconectados de formas intrincadas gracias a losdesplazamientos que los organismos asociados hacenen las diferentes etapas de sus ciclos vitales. Sinembargo, las presiones naturales y de origen antrópicoestán causando la degradación de estos elementosconstitutivos, imponiendo por lo tanto riesgos directosa la salud y estabilidad global de los ecosistemasafectados, así como a aquellos ecosistemas adyacentescon los que se dan intercambios de organismos vivos.

Page 209: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

2074. CONSECUENCIAS

Los humanos se han beneficiado de los numerososbienes y servicios que proveen los bosques, pastosmarinos, manglares y arrecifes de coral, obteniendo deellos ganancias económicas, espirituales y culturales.El uso que se ha hecho de ellos, asociado a fenómenosde ocurrencia natural tales como huracanes y los efectosdel cambio climático, han causado una serie deimpactos y, en muchos casos, han comprometido lacapacidad de estos hábitats para mantener la provisiónde estos servicios. Las presiones impuestas sobre estosecosistemas tienen consecuencias directas e indirectas,de corto y de largo plazo, sobre el bienestar humano,ya que tanto los ecosistemas boscosos como los marino-costeros de América Latina y el Caribe juegan un papelinvaluable, tanto para la región como para el planeta,como se mencionó en la sección Identificación deBienes y Servicios de los Ecosistemas de este Capítulo.Por lo tanto, es imperativo que estos ecosistemas esténen capacidad de desempeñar sus funcionespermanentemente, en vista de que una interrupciónpodría afectar negativamente la existencia humana,particularmente de aquellas poblaciones que dependendirectamente del acceso a los productos y servicios delos bosques y mares (Sunderlin y otros, 2005).

Sin embargo, como se menciona en el Capítulo II y enla sección precedente de este Capítulo, la degradación,destrucción o reducción de estos ecosistemas harepresentado efectos directos, indirectos y negativos enel modo de vida de las personas. Hasta cierto punto, enlos años precedentes se presentó una mejoría enAmérica Latina y el Caribe en términos de mejoras enlos ingresos, la nutrición o la salud, debidas en parte ala explotación de los recursos naturales. La explotacióneconómica de los recursos naturales a través de laagricultura, la pesquería o la silvicultura beneficia a laspersonas a través del desarrollo económico y elmejoramiento de la calidad de vida, el alivio a lapobreza y la seguridad alimentaria. Sin embargo, la tasade extracción de estos recursos ha aumentado,incrementando por lo tanto las presiones sobre losecosistemas, con una consecuente disminución de sucapacidad para proveer servicios, lo que finalmenteafecta y pone en riesgo el bienestar de las poblacioneshumanas de ALC.

Por ejemplo, las presiones sobre los ecosistemas dezonas secas pueden dar como resultado la reducciónde la cobertura de pastos, la reorganización de los

4. CONSECUENCIAS DE LOS CAMBIOS AMBIENTALES Y SURELACIÓN CON EL BIENESTAR HUMANO

Page 210: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

208

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ensamblajes de especies (lo que trae consigo la pérdidade especies nativas y la invasión de aquellas exóticas),la degradación y erosión de los suelos y la pérdida denutrientes. Eventualmente, estos cambios reducen laproductividad y accesibilidad a los bienes y serviciosque proveen estos ecosistemas, afectando el bienestarhumano (Brown y otros, 1997, Bisigato y otros, 2005).La desertificación también es uno de los procesos quetienen incidencia sobre la pérdida de biodiversidad, loque a su vez repercute en la calidad de vida y eldesarrollo económico de las comunidades locales. Enel largo plazo, esto podría iniciar o escalar fenómenoscomo la pobreza o la escasez de agua y alimentos. Demanera similar, la deforestación y los cambios en el usodel suelo también pueden incrementar las emisionesde carbono a la atmósfera. El IPCC (2007) estima quecerca del 20% de las emisiones globales de carbono sedeben al desplazamiento de vegetación, la que, en parte,se origina en la región (ver la sección de bosques en elCapítulo II). Este aumento en las emisiones de carbonoa la atmósfera puede tener implicaciones en la saludhumana.

4.1 DISPONIBILIDAD DE BIENES Y SERVICIOS

En la actualidad se presentan considerables diferenciasde ingresos entre los países de la región (Gráfico 3.5);(ver además el Capítulo I de este informe). La expansiónagrícola y forestal, como consecuencia del comercioexterior, ha tenido un impacto sobre las economías

4.919

3.479

5.810

4.707

ALC El Caribe Mesoamérica Sudamérica

Fuente: Elaborado por PNUMA con datos de CEPAL (Comisión Económica Para América Latina y el Caribe), 2009

-

1.000

2.000

3.000

4.000

5.000

6.000

GRÁFICO 3.5

América Latina y el Caribe: Producto Interno Bruto per cápita por Subregiones 2008(Precios constantes del mercado US$)

locales y sobre el ambiente, así como también sobre elacceso de las comunidades a los bienes y serviciosderivados de los ecosistemas locales. Como se mencionaen la sección Identificación de Bienes y Servicios delos Ecosistemas de este Capítulo, en la mayoría de lospaíses de la región el ingreso per cápita derivado de laexplotación forestal se ha incrementado, tanto en laforma de ingresos suplementarios domésticos como encuanto a la actividad económica. Por ejemplo, lasexportaciones de Perú de productos forestales se hanincrementado durante la última década, pasando deUS$16 millones en 1995 a US$168 millones en 2005.OEA (2007) proyecta que esta situación continúe,acentuando los cambios en la explotación del suelo, loque generará importantes impactos en su composición,el régimen hidrológico y la disponibilidad de alimento,afectando así el bienestar humano.

Si bien no son muy abundantes en los Pequeños EstadosInsulares en Desarrollo de El Caribe, los manglarescontribuyen de manera importante a la estabilidad socialy económica de ciertos sectores de la sociedad. Unestudio de la contribución económica de un manglaren el sur de la isla de Santa Lucía reveló ahorrosfinancieros en los órdenes local y nacional, debido a lacapacidad del manglar de sustentar la producción apequeña escala de carbón vegetal, reduciendo así ladependencia de la comunidad y de la nación del gaspropano importado para cocinar, el cual es mucho máscostoso (Hudson, 1997). En esta comunidad rural y enotros pequeños estados insulares cercanos, la

4. CONSECUENCIAS

Page 211: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

209

Consecuencias de los cambios ambientales en el accesoa los bienes y servicios provistos por los manglares

RECUADRO 3.5

La presencia de manglares (con una extensión estimada de 3.740.000 ha) está correlacionada con la ubicación de prósperaspesquerías comerciales (FAO, 2003). Dada la capacidad de los manglares para proveer alimento y refugio a un amplioespectro de organismos, incluyendo individuos juveniles de numerosas especies de peces comerciales y de invertebradosque al crecer migran a otros hábitats marinos, no es sorprendente que las disminuciones observadas en las áreas demanglar estén asociadas con las coincidentes mermas reportadas en la captura total de peces en el Caribe, así como conlos descensos en los organismos de interés para las pesqueras, los cuales están estrechamente relacionados con los manglares(Ellison y Farnsworth, 1996). Casi 680 especies de peces con esqueleto objeto de pesca comercial, incluyendo 69 tipos detiburones, dependen de humedales costeros como los manglares para ciertas etapas de su ciclo vital. Una hectárea demanglar en el Pacífico puede producir de 1.100 a 11.800 kilogramos de peces, camarones, cangrejos y moluscos. Por otrolado, la industria pesquera de manglar oscila entre US$900 y US$12.400 por hectárea (World Rainforest Movement,2002). La pesquería también es un importante proveedor de puestos de trabajo para el procesamiento y comercializacióndel pescado. Se estima que más de 200.000 personas en la región Caribe tienen empleo como pescadores, a tiempocompleto o parcial (Millennium Ecosystem Assesssment, 2005).

La introducción de Tilapia mossambica en los estuarios de los manglares de Puerto Rico ha desplazado a especies nativasde importancia comercial, lo que ha provocado un cambio a nivel ecosistémico en estas áreas. En los pequeños estadosinsulares del Caribe, los manglares son talados principalmente para hacer espacio para la infraestructura urbana y turística.La deforestación de manglares ha provocado la extinción local de al menos una especie en Barbados (FAO, 2007b), y seespera una pérdida de hábitat y alimento vital, no sólo para aquellos organismos que permanecen dentro de los manglarestoda su vida, sino también para una serie de especies marinas que utilizan el abrigado hábitat del manglar como un área decrianza, que aporta a sus descendientes alimento y protección frente a depredadores.

La población de la costa pacífica del sur de Colombia, como otras comunidades costeras pobres en las que se está dandola conversión del manglar, enfrenta la mayoría de los costos asociados con la disminución de los servicios ecosistémicos,incluyendo la mengua en los recursos forestales, la reducción en la protección de las líneas costeras frente a tormentas, labaja producción pesquera, y la degradación en la calidad del agua debida a la contaminación causada por la producciónde biocombustibles derivados de la palma aceitera. Se reporta que en la región, especies y grupos de especies de importanciacomercial han sido totalmente explotados o sufren sobrexplotación. Por ejemplo, la explotación de la Piangua (caracola),que es el mayor ingreso económico para las mujeres locales cabeza de familia, ha sido prohibida en algunas áreas, y enotras es sujeto de vedas durante varios meses al año.

Muchos bosques de manglar están bajo presión por la explotación excesiva, lo que conduce a una reducción en laresiliencia frente a un nivel del mar cambiante. La importancia del flujo de sedimentos en la determinación de la respuestade los manglares a mayores niveles del mar ha sido bien establecida en la literatura. Ellison y Stoddart (1991), Ellison(1993), y Parkinson y otros (1994) sugieren que si continúan las tasas de aumento del nivel del mar los manglares nopodrían seguir aumentando en área en aquellas islas (bajas o altas) donde el suministro de sedimentos es bajo. Snedaker yMeeder (1994) sugieren que los manglares de islas bajas podrían acomodarse a tasas mayores.

La resiliencia de los manglares frente a la elevación del nivel del mar también está condicionada por la composición y elestado de su masa, y por otros factores como el régimen de mareas y el aporte de sedimentos (Woodroffe, 1995, Ewel yotros, 1998, Farnsworth y Ellison, 1997). En algunos sitios costeros protegidos, la inundación de la tierra costera somerapuede incluso promover la expansión progresiva de los manglares a medida que aumente el nivel del mar (Richmond yotros, 1997), mientras el aumento en altura mantenga su ritmo.

Fuente: FAO, 2003; World Rainforest Movement, 2002; Millennium Ecosystem Asessment, 2005; FAO, 2007b; Pérez y otros, 1999; Alleng, 1998; Suman,1994; Ellison y Stoddart, 1991; Ellison, 1993; Parkinson, y otros, 1994; Snedaker y Meeder, 1994; Woodroffe, 1995; Ewel y otros, 1998; Farnsworth yEllison, 1997; Richmond y otros, 1997.

subsistencia suele depender de más de una actividadpara asegurar ingresos constantes y seguridadalimentaria. Hudson (1997) también anota lacontribución del manglar de Santa Lucía al pastoreo deganado, particularmente durante la época seca cuandolos pastos se aíslan y reducen. Este ejemplo demuestrala importancia de este ecosistema para la sociedad, elcual, en el caso de ser destruido o degradado, afectaría

el modo de vida de las personas que dependen de élpara su supervivencia (ver Recuadro 3.5).

En cuanto a los bosques, la deforestación reduce el gradode disponibilidad de bienes y servicios como leña,textiles y madera, particularmente para aquellascomunidades que dependen de este tipo de combustiblepara producir carbón vegetal, cocinar o calentarse.

4. CONSECUENCIAS

Page 212: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

210

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

En lo que respecta a ecosistemas marinos como losarrecifes de coral y los pastos marinos, las presionesque se han ejercido sobre ellos han exacerbado sudeclive, lo que a su vez afecta en forma severa elbienestar humano. Desde el punto de vista económico,los pastos marinos, manglares y arrecifes de coralmantienen tanto la pesquería comercial como larecreativa, las cuales proveen enormes beneficios a laeconomía de la región. El valor global combinadoestimado de los bienes y servicios de los ecosistemascosteros supera los US$ 12 billones anualmente(Costanza y otros, 1997). Empleando el Producto deServicios del Ecosistema (ESP, por sus siglas en inglés),

sugerido por Martínez y otros (2007) como un indicadorproxy, el valor total calculado de lo que proveen losecosistemas costeros de la región suma US$ 6,48millones por año. Sin embargo, la falta de informaciónconfiable dificulta la estimación completa de estosbienes y servicios, así que es muy probable que esténsubestimados. A pesar de su importancia, muchos deestos servicios no han sido preciados de manera explícitaen los mercados globales, lo que conduce a que losgobiernos, las organizaciones y las personas poseanpocos incentivos para conservarlos. La tasa dedegradación de aquellos componentes claveinterconectados del ecosistema marino (como los

4. CONSECUENCIAS

Consecuencias de la degradación de los arrecifes en el bienestarhumano de las poblaciones de la región del caribe

RECUADRO 3.6

Se predice que la degradación de los arrecifes de coral en el Caribe reducirá los niveles de producción pesquera en por lomenos el 45%, con una consiguiente pérdida en las rentas públicas estimada en más de US$140 millones por año (UNEP2008). Esta situación aumentará los niveles de pobreza en la región, así como su dependencia de abastecimiento importadode productos pesqueros frescos y procesados. Dada la creciente demanda por pescado, es poco probable que los paísesdel Caribe estén en capacidad de afrontar las altas cuentas que generaría la importación de estos productos.

En el caso de los arrecifes de coral de Jamaica, tanto las enfermedades como la sobrepesca, han contribuido a contundentesreducciones en las poblaciones de especies clave que se alimentan de algas, como el erizo diadema (Diadema antillarum)y los peces payaso (Scarus spp.), respectivamente (Mumby y otros, 2007b), por lo que muchos arrecifes de coral se veninvadidos por el exagerado crecimiento de las algas, lo que produce la caída trófica (Singh, 2005). La disminución en lacalidad de los arrecifes de coral en Jamaica ha venido acompañada de una estrepitosa caída de las rentas públicas derivadasde la pesca y del turismo de buceo. Un estudio reciente ha demostrado los niveles umbrales críticos para la dependenciade los arrecifes de coral del Caribe. Éste se basó en la extensión de corales y la intensidad de herbivoría de algas paralimitar el excesivo crecimiento y el cambio a un paisaje dominado por las algas (Mumby y otros, 2007b). Estos autores,afirman que si se hubieran tomado acciones de recuperación una década antes, cuando la cobertura de arrecifes de coralalcanzaba el 30%, la recuperación de los arrecifes hubiera requerido de un incremento de entre dos y tres veces en laintensidad de herbivoría de algas. Otras islas del Caribe que presenten disminuciones en las capturas de peces de arrecifespodrían sufrir en el largo plazo consecuencias similares, en disminución de recursos y de biodiversidad. En general, unamenor biodiversidad en el ecosistema del arrecife lo hace menos resiliente a la recuperación frente a otras presiones, seanestas naturales o de origen antrópico.

El deterioro de los arrecifes de coral tendrá como resultado una pérdida en la calidad de vida de los residentes locales.Tanto los recursos consumibles como el turismo disminuirán, y éstas son hoy las dos principales fuentes de ingresos paralas comunidades costeras. La erosión costera se hará más pronunciada en la medida en que las crestas protectoras dearrecife se degraden y no puedan reducir la energía de las olas entrantes. Los arrecifes de coral, fuente de huevos, larvas,juveniles y adultos para estos y otros ambientes, desaparecerán, y otros servicios ecológicos comenzarán a ceder yeventualmente dejarán de proveerse. Algunos de estos servicios son de la mayor importancia, como la acumulación dedióxido de carbono y el reciclaje de nutrientes (servicios de regulación), y la creación de la estructura en la que vivenmuchos otros organismos (servicio de soporte).

El turismo del Caribe depende en gran medida de la disponibilidad de playas de arenas blancas, de aguas azules y claras,y de la belleza y biodiversidad de sus arrecifes y demás ecosistemas. Sin embargo, los efectos combinados de la sobrepesca,del desarrollo excesivo de infraestructura costera, la sedimentación excesiva y el aumento en la cantidad de nutrientesestán impactando de manera negativa en la salud de una serie de ecosistemas, cuya interconexión ha hecho del Caribe unpopular destino turístico. A medida que las atracciones del Caribe disminuyan y desaparezcan, igual lo harán los turistas.En particular, habrá una disminución en los turistas que bucean, quienes gastan entre 60 y 80% más dinero durante susestancias en el Caribe que cualquier otro tipo de turista, lo que los hace responsables de cerca del 17% de las rentaspúblicas totales producto del turismo (UNEP 2008). Teniendo en cuenta esto, se estima que la pérdida prevista en la saludde los arrecifes reducirá las rentas públicas de la región obtenidas del turismo de buceo en cerca de US$ 300 millones poraño (UNEP, 2008).

Fuente: UNEP, 2008; Singh, 2005; Mumby y otros, 2007b

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III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

2114. CONSECUENCIAS

arrecifes de coral, el pasto marino y los manglares)eventualmente conducirá a menores producciones, setrate de alimentos, combustibles, refugio o de finesestéticos (ver el Recuadro 3.6).

Además, son evidentes las consecuencias de lareducción en los niveles de recursos de los ecosistemas,de la disminución de la biodiversidad y de los cambiosen los ecosistemas. En el caso de las grandes especiesde peces migratorias oceánicas pelágicas, la sobrepescaha conducido a marcadas disminuciones en estosrecursos, a lo largo y ancho de sus rangos de distribución.Aunque existen esfuerzos del orden internacional y sehan tomado medidas para el manejo de las bajaspoblaciones de peces del Atlántico tales como el atúnde aleta azul, y los marlines azul y blanco, estosesfuerzos han sido inadecuados, y se observan pocasseñales de recuperación (ICCAT, 2007). La reducciónen las cantidades de estos grandes depredadores tieneel potencial de conducir a un cambio enorme en losecosistemas marinos, el cual tendría consecuenciaspotencialmente dramáticas para la sobrevivencia deespecies que están por debajo en la cadena alimenticia.

4.2. IMPACTO DEL CAMBIO CLIMÁTICO ENLA DISPONIBILIDAD DE SERVICIOSECOSISTÉMICOS

Aparte de las actividades humanas, es probable queeventos asociados al cambio climático magnifiquen elempeoramiento de muchos aspectos de los ambientesboscosos, costeros y marinos que tienen relación directacon el bienestar humano.

El informe Stern (2007) estima, para 2025, un aumentodel 70% en la cantidad de personas que enfrentandificultades severas para acceder a agua potable. Para2020, cerca de cuatro millones de habitantes estaránen riesgo de no tener acceso a agua potable, en tantoque esa cantidad podría aumentar a 50 millones para2050 si la tendencia actual se presenta como elescenario usual. El derretimiento de los glaciaresAndinos a consecuencia del aumento de un gradocentígrado incrementaría los riesgos de inundacionesdurante la temporada de lluvias, y se reduciría ladisponibilidad de agua potable en la temporada seca,

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212

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

convirtiendo a ciudades como Quito, Lima y La Paz enlos blancos más directos, dada su localizacióngeográfica y las considerables poblaciones que albergan(ver además las secciones urbanas y de recursos hídricosdel Capítulo II).

La evaluación del impacto de la vulnerabilidad climáticaen los principales ríos de las Américas impone un retoúnico para la seguridad hídrica, si se tiene en cuentaque cerca del 70% de todos los ríos, lagos y otras fuentesde agua son de naturaleza trasnacional, al cruzarfronteras que van de 2 a 8 países (como en el caso delrío Amazonas). Son múltiples los ejemplos en AméricaLatina y el Caribe. Un estudio publicado en 2007 porUNESCO y OAS identificó más de 70 ríos principalesque atraviesan fronteras (UNESCOIHP/OAS, 2007). Lalista incluye el Sistema de Acuíferos Yrenda-Toba-Tarijeño (SAYTT), incluido en su totalidad en el Río deLa Plata, que comparten Argentina, Bolivia y Paraguay.En este sistema, el 75% de la precipitación se evaporadentro de la misma región, mientras que sólo el 25%alcanza los ríos de la cuenca; por lo tanto, cualquiercambio en el proceso de evaporación, causado porcambios en la temperatura, podría tener un impactosevero sobre la disponibilidad de agua, lo que podríainducir potenciales conflictos por los recursos hídricos(Vaughan y otros, 2007). También se encuentra elacuífero Guaraní, que comparten Argentina, Brasil,Paraguay y Uruguay, que está entre los más grandesacuíferos del planeta: los Grandes Lagos, el Artibonito(entre Haití y la República Dominicana) y otros (Vaughany otros, 2007).

La deforestación y el calentamiento global también estánafectando la biodiversidad. Un aumento en latemperatura global promedio de entre 1 y 2°C (porencima de los niveles preindustriales) podría conducira la desaparición de entre el 15 y el 40% de las especies,lo que a su vez afectaría a las poblaciones que dependende estas para sus necesidades alimenticias. Unadisminución en el balance promedio del agua en lastierras inundables tropicales podría poner en riesgo acerca de 1.900 especies de plantas, 263 peces, 85reptiles, 440 aves y 195 mamíferos que habitan en laregión (ANA/FMAM/PNUMA/OEA, 2005; Vaughan yotros 2007). Al ritmo actual, se predice que latemperatura sufrirá un aumento de 2 a 3°C en lospróximos 50 años. Bajo este escenario, la Amazonia,considerada como la región con el mayor depósito debiodiversidad del planeta, se afectaría inevitablemente(Recuadro 3.7), causando en el largo plazoconsecuencias en el bienestar humano a escala global,y afectando en el corto plazo a los habitantes de la regióny de la Amazonia. De acuerdo con Stern (2007), laAmazonia es el hogar de un millón de personas de 400grupos étnicos diferentes, quienes dependen del bosquecomo fuente de ingresos, necesidades medicinales y deotro tipo de recursos. A escala de país, el cambioclimático también se ha hecho evidente, y cuando selo asocia con las presiones que ejerce la población, elescenario es alarmante. Por ejemplo, se espera que losbosques tropicales del centro y sur de México y del nortede Brasil se transformen en praderas y tierras áridas.Además, para 2050, cerca del 50% de las tierrasagrícolas de estos países probablemente dejarán de seraptas, debido a la desertificación y la salinización quese presentaría en algunas áreas (Stern, 2007).

El cambio de temperatura también afectará laagricultura, dado que los cultivos dependen de patronesde temperatura y precipitación. En consecuencia,cualquier cambio en la temperatura tendrárepercusiones en estos patrones, poniendo en riesgo laviabilidad de especies que son esenciales para manteneruna producción agrícola sostenible. Se incluyen aquíespecies polinizadoras nativas de los cultivos ymicroorganismos del suelo que mantienen la fertilidady productividad. La polinización es esencial para lareproducción de muchas plantas silvestres y de cultivos,y se estima que a escala global tiene un valor económicoque oscila entre los US$ 30 y los US$ 60 mil millones(Stern, 2007).

Muchos de los efectos del cambio climático en laagricultura dependerán del grado de adaptación de losseres humanos ante estos cambios, tanto en el ordentecnológico como en sus estilos de vida.

4. CONSECUENCIAS

Page 215: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

2134. CONSECUENCIAS

Los bosques amazónicos frente a los escenarios del cambio climático globalRECUADRO 3.7

Los bosques amazónicos se consideran hoy como uno de los mayores sumideros de carbono en la región tropical delplaneta, pero esta situación podría cambiar dramáticamente si llegaran a confirmarse los escenarios de cambio climáticologrados a partir de modelos de circulación global.

En esencia, variaciones en la temperatura y en la cantidad y estacionalidad de la precipitación hacia un clima más cálidoy seco harían que el balance entre el carbono que fijan los bosques amazónicos a través de la fotosíntesis y aquel queliberan a través de procesos de respiración dejara de ser positivo, por lo cual esta enorme masa de ecosistema tropicalpasaría a ser fuente de emisión de carbono a la atmósfera.

Adicionalmente, en los siguientes cien años la Amazonia central podría pasar de ser un bosque húmedo tropical a unbosque seco estacional, o incluso a una sabana estacional, si el clima imperante fuera similar a aquel que se presenta en lafase seca del fenómeno de El Niño. Dado que las plantas no estarían en capacidad de adaptarse con rapidez a estoscambios, las especies propias de los bosques amazónicos desaparecerían, dando paso a comunidades resistentes a lasequía prolongada, como aquellas presentes en los Llanos de Colombia y Venezuela.

El impacto de este cambio tendría consecuencias enormes en el balance hidrológico de la cuenca del río Amazonas yaque la desaparición de los bosques reduciría la cantidad de agua lluvia de la cuenca entre un 10 y un 15%. También sepresentaría un aumento en las emisiones globales de carbono a la atmósfera. Pero tal vez el cambio más sensible y difícilde compensar sería la desaparición de la diversidad biológica de la región, considerada como una de las más altas delplaneta.

Sea cual fuere el panorama, dichos cambios deberían darse a un ritmo lo suficientemente lento como para permitir que lasespecies se adaptaran, situación que muy probablemente no suceda.

Fuente: Killen, 2007.

En lo que concierne a los arrecifes de coral, el fenómenode El Niño y el cambio climático han sido identificadoscomo los factores que contribuyen a su degradación anivel global, y ALC no es la excepción (Guzmán y otros,1990; Jackson y otros, 2001b; Pandolfi y otros, 2003;Wolanski y otros, 2003; Kleypas y otros, 2006; Hoegh-Guldberg y otros, 2007; Hughes y otros, 2007). Enregiones como el Pacífico tropical oriental, El Niño esuna de las mayores causas de muerte del coral (Glynn yotros, 2001; Cortés, 2003; Guzmán y Cortés, 2007). Esprobable que esta aumente a medida que el cambioclimático (mediante una mayor temperatura del agua yuna menor alcalinidad) cause un stress adicional sobrelos arrecifes de coral, hasta niveles tales que pongan enriesgo su existencia (Pelejero y otros, 2005; Kleypas yotros, 2006; Hoegh-Guldberg y otros, 2007).Temperaturas atípicas también pueden ser la causa defenómenos como el blanqueamiento de los corales, loscuales afectan los ecosistemas de América Latina y elCaribe. En los casos en los que los eventos deblanqueamiento no matan los corales, aquellos quesobreviven no recuperan por completo su estado previo,sufriendo una disminución en su capacidad decrecimiento, reproducción, producción de esqueletosde carbonato y reparación de tejidos dañados.

Algunos estudios sugieren que la disminución en ladiversidad marina, como en los arrecifes de coral,

resultará en un impacto potencialmente severo en lasociedad y la economía de las áreas en cuestión. Estosimpactos aumentarán debido a la reducción en laresiliencia, el declive en la salud de los ecosistemasmarinos y en la calidad del agua, la reducción de lapesca potencial, la pérdida de oportunidadesrecreativas, la reducción del empleo y/o la reducciónde la captura de carbono (Nellemann y otros, 2008).

Asimismo, los estudios también demuestran que losbosques de manglar en algunas islas caribeñasdesaparecerían como resultado de la elevación del niveldel mar. Por ejemplo, se proyecta que con un aumentode un metro en el nivel del mar en Cuba estarían enriesgo más de 300 ha de manglares, las cualesrepresentan cerca del 3% de los bosques del país (Pérezy otros, 1999). Bajo condiciones similares, Alleng (1998)proyecta el colapso total del humedal del manglar PortRoyal en Jamaica, el cual ha mostrado una bajacapacidad de migración durante los últimos 300 años.Suman (1994) prevé que el acelerado aumento del niveldel mar afectará negativamente a los manglares enPuerto Rico, donde el 62% ya ha sido eliminado poractividades humanas directas (ver el Capítulo IV de esteinforme). Se avizora que cambios en la disponibilidaddel flujo de sedimentos, asociados con cambios en latemperatura y la profundidad del agua derivados delaumento en el nivel del mar, impactarán de manera

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214

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

adversa la productividad y las funciones fisiológicas delos manglares. Los costos económicos que resultaríande la afectación de manglares que perderían sucapacidad de proteger las líneas de costa seríansustanciales.

El Reporte Especial sobre los Impactos Regionales delCambio Climático (Nurse y otros, 2001), IPCC (2007) yFAO (2007) han concluido que la alteración de losecosistemas para el desarrollo de infraestructurasturísticas en algunas islas del Caribe, han agravandoaún más los retos impuestos por el cambio climático.De manera consecuente, estos países están entre losmás vulnerables a nivel global, dada su limitadacapacidad de adaptación.

Algunas de las amenazas que experimentarían los paísesdel Caribe ante el cambio climático son:

Mayor intrusión del agua salada,Inundaciones,Degradación de suelos,Destrucción de cultivos agrícolas, hogares y formasde vida,Destrucción de infraestructura vital física y social,Contaminación del agua dulce,Malversación de recursos valiosos.

Estas vulnerabilidades se tornan más severas cuando seincluyen otros factores (por ejemplo, más del 90% de

4. CONSECUENCIAS

la población de los estados insulares vive en áreassusceptibles a la inundación).

4.3 VULNERABILIDAD DE LAS POBLACIONESANTE LOS IMPACTOS DE LOS CAMBIOSAMBIENTALES

4.3.1 SALUD Y ALTERACIONES DE LOS ECOSISTEMAS

La mayoría de los cambios en los ecosistemas hanocurrido para satisfacer el marcado crecimiento en lademanda de alimentos, agua, fibras, combustibles yelectricidad, entre otros. Y aunque debido a laexplotación del ambiente se reportan algunos beneficiospositivos (muchos en el caso de los ecosistemasboscosos y marino-costeros de América Latina y elCaribe), la degradación asociada a la sobreexplotaciónafecta el bienestar humano. Existe evidencia que ilustralos efectos significativamente dañinos, directos eindirectos, que han ocurrido (directos: inundaciones,carencia de agua, deslizamientos de tierra; indirectos:cambios en los patrones de plagas, desnutrición, escasezde medicinas tradicionales, salud mental yenfermedades intestinales). Por ejemplo, un quinto delas enfermedades reportadas en América Latina y elCaribe pueden atribuirse a cambios ambientales (Periagoy otros, 2007).

Page 217: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

2154. CONSECUENCIAS

Las actividades humanas dan como resultado laalteración en la estructura y función de los ecosistemasen aspectos tales como el incremento en las variacionesy extremos de la temperatura, la humedad y la coberturavegetal locales, e incluso en la alteración de los flujostróficos. En muchos casos se ve afectado el acceso a lasfuentes de alimento, mientras que en otros la actividadhumana ha inducido la reaparición de vectores deenfermedades que potencialmente podrían afectartambién a los humanos. Por ejemplo, el crecientecalentamiento global favorece la dispersión de lasenfermedades. Otros cambios ambientales tambiénafectan a las poblaciones naturales de los depredadoresde aquellas especies que, en muchos casos, ayudan otransmiten dichas enfermedades. Esto da como resultadoel aumento en las poblaciones de especies comozancudos, moscas, ratas o murciélagos. A su turno, laspoblaciones humanas que habitan cerca de dichas áreas,especialmente a bosques o zonas costeras donde

Enfermedades y deforestación en ParaguayRECUADRO 3.8

En Paraguay, en la Región Oriental del país –donde se concentra la mayor parte de la población, la producción y losservicios–, desde 1945 se ha talado cerca del 50% de los bosques, equivalente en superficie a 7.400.000 hectáreas. En elaño 2000 cerca del 5% de la superficie total de esa región quedaba cubierta por bosques. En este país se encontró larelación entre el incremento de la enfermedad denominada leishmaniasis y la deforestación, con la conversión de bosquesa la actividad agrícola y ganadera. El 85% de los casos de leishmaniasis ocurridos en los últimos años corresponde al áreageográfica ocupada por los departamentos de Canindeyú, Alto Paraná y San Pedro, donde su presencia e incremento serelaciona con el proceso de colonización de zonas de desarrollo agropecuario (Agüero y otros, 2006).

Fuente: Elaborado por R. Martínez, a partir de Agüero y otros, 2006.

Impactos sobre la salud por cambios en los ecosistemas forestales de la AmazoniaRECUADRO 3.9

En la Amazonia brasileña (Vasconcelos y otros, 2001) se encuentran virus y arbovirus patógenos para los humanos comoel dengue, fiebre amarilla, Mayaro y Oropouche, entre otros que ocurren naturalmente en la región. Hay evidencias deque la colonización, explotación minera, construcción de presas, y otras actividades que cambian el medio ambiente enla Amazonia afectan la epidemiología, la ecología, los ciclos vitales, y la distribución de este grupo de virus. (Vasconcelosy otros, 1992).

Por otro lado, en Perú, la Amazonia es una de las zonas con particular incidencia de malaria donde la pérdida de hábitaty la deforestación están causado una pérdida del conocimiento etnobotánico de la región y, más importante, de especiescon potencial antimalárico y biocida tradicionalmente utilizadas por las comunidades (Pérez, 2002).

La escasez de recursos en los ecosistemas forestales alrededor de los asentamientos de estas poblaciones afecta el bienestary la salud de las poblaciones, en parte, por la disminución en la calidad y cantidad de alimentos (hojas, cortezas, raíces,semillas, frutos, mieles, entre otros, así como aves y mamíferos) (Montenegro y Stephens, 2006). La destrucción de losecosistemas, la pérdida de hábitat y de especies generan un cambio en el patrón alimenticio de las poblaciones locales, nosólo en poblaciones indígenas, y pueden generar problemas en la salud incluso de desnutrición crónica. La pérdida deespecies de uso medicinal tradicional afecta la salud, y hace sin duda que las poblaciones sean cada vez más dependientesde la medicina occidental.

Fuente: Adaptado de PNUMA, 2008.

enfermedades emergentes y toxinas de las algas estánafectando la fauna, son más vulnerables y proclives aproblemas relacionados con la salud como la fiebreamarilla, la cual es transmitida por estos agentesvectores. Además de la fiebre amarilla, los cambios enlos ecosistemas boscosos debidos a la deforestaciónpueden, potencialmente, inducir la recurrencia de lasepidemias transmitidas por vectores, afectando suspatrones de distribución, como es el caso de laleishmaniasis y la malaria (véanse los Recuadro 3.8 y3.9). En el caso de la malaria, aún no se observa unareducción significativa en el número de casos enAmérica Latina y el Caribe (ver Gráfico 3.6), y algunospiensan que el cambio climático también puede agravarestas epidemias. Estas y otras enfermedades emergentesno sólo afectan la salud, sino que también tienen elpotencial de afectar el comercio, el turismo y los modosde vida (Epstein y otros, 2003).

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216

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

América Latina y el CaribeCaribe Mesoamérica Sudamérica

2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 20080

50

100

150

200

250

300

2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

Malaria Fiebre Amarilla

Fuente: Organización Panamericana de la Salud (OPS), 2008.

América Latina y el Caribe: Casos de Malaria y Fiebre Amarilla reportados, 2000-2007

(Total:

0

200.000

400.000

600.000

800.000

1.000.000

1.200.000

1.400.000

2000

GRÁFICO 3.6

4. CONSECUENCIAS

Uno de los asuntos de salud asociados con el agua sonlas enfermedades que se transmiten a través de estemedio, tales como el cólera, causado por el patógenoVibrio cholerae. Desde 2002 los países de AméricaLatina y el Caribe han sido testigos de un descenso enla cantidad de casos de cólera reportados para la región(Gráfico 3.7), lo cual muy probablemente es el resultadode la adecuada intervención en las políticas de salud

pública. Pese al progreso que se ha alcanzado, el 30%de la población rural de América Latina y el Caribe notiene acceso a servicios básicos de saneamiento, y elgrupo más vulnerable ante estas enfermedadescorresponde a las comunidades rurales, donde el aguano puede ser potabilizada de manera adecuada, o nose puede acceder a ella con facilidad. Además delacceso inadecuado, el cambio climático puedeincrementar la temperatura de los cuerpos de agua,haciéndolos por lo tanto propicios para las actividadesmicrobiales que favorecen la reproducción de la cepadel cólera. Además, un aumento en los nutrientes delagua puede promover la expansión del cólera. Elpatógeno Vibrio cholerae está asociado a la vida marina,y los brotes de cólera suelen estar asociados alflorecimiento de las algas costeras, y algunos serelacionan con la contaminación por nitrógeno (Colwelly Hug, 2001; Cottingham y otros, 2003).

No sólo la calidad del agua es importante, también loes la cantidad. Por ejemplo, se ha observado unacorrelación entre la reducción en los volúmenes del flujode agua y las sequías con una mayor incidencia de losriesgos relacionados con la malaria, el dengue(Recuadro 3.10) y el chagas, en estudios de campollevados a cabo por la Organización de EstadosAmericanos (OEA) en asociación con el Centro deInvestigación y Desarrollo Internacional de Canadá(IDRC, por sus siglas en inglés) y la OrganizaciónPanamericana de la Salud (PAHO, por sus siglas eninglés) (IDRC-PAHO-OAS, 2007).

Page 219: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

2174. CONSECUENCIAS

0

500

1.000

1.500

2.000

2.500

3.000

2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

Fuente: Organización Panamericana de la Salud, http://www.paho.org/spanish/ad/dpc/cd/cholera-1990-2008.pdf

GRÁFICO 3.7

América Latina y el Caribe: Casos de Cólera reportados, por subregiones. 2000

América Latina y el Caribe

Caribe

Mesoamérica

Sudamérica

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218

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Los incendios forestales también afectan la saludhumana. Las personas que viven cerca de los bosquesestán expuestas a efectos tales como la inhalación dehumo, que causa un aumento en las enfermedadesrespiratorias (ver la sección de calidad del aire en elCapítulo II). Por ejemplo, el número de pacientes

externos atendidos por enfermedades respiratorias enAlta Floresta, Brasil, aumentó veinte veces en el período1997-1998, durante el fenómeno de El Niño (CHGE,2005) en el que hubo un gran aumento en número deincendios forestales en la región.

4. CONSECUENCIAS

DengueRECUADRO 3.10

El dengue es actualmente la enfermedad vírica de transmisión vectorial más importante a nivel mundial. Después de lainterrupción con éxito de la transmisión del dengue en las Américas con la campaña de erradicación de Aedes aegyptihasta fines de los años sesenta, los esfuerzos de control del vector no fueron sostenibles en los años setenta, con laconsecuente reinfestación del mosquito, informándose brotes epidémicos cíclicos de dengue, cada 3 a 5 años. De 2001 al2007, más de 30 países de las Américas han notificado un total de 4.332.731 casos del dengue, incluyendo 106.037 casosdel dengue hemorrágico y un total de 1.299 defunciones en el mismo período (Tasa de Letalidad 1.2%). Los cuatroserotipos del dengue circulan en la región (DEN-1, 2, 3 y 4).

Entre los factores determinantes que influyen en la expansión de esta enfermedad se incluyen los profundos cambiosclimáticos que causan alteraciones en los ecosistemas y crean las condiciones ideales para el vector. Además, el crecimientodemográfico sin precedente, las megaciudades, la urbanización no planificada y la carencia de servicios básicos (aguapotable y de recogida de basura), facilitan la proliferación y persistencia de la enfermedad. La OPS/OMS propone laimplementación de la Estrategia de Gestión Integrada para la prevención y control del dengue, con enfoque interprogramáticoy multisectorial, incorporando componentes claves como comunicación social, vigilancia epidemiológica, servicio delaboratorio, atención al paciente, servicios entomológicos y cuidado del medio ambiente, para fortalecer los programasnacionales, con vistas a reducir la carga socioeconómica generada por las epidemias de dengue.

Fuente: Elaborado por la Organización Panamericana de la Salud con datos de Patz y otros, 2006; PNUMA, 2006; Tauil y otros, 2001.

1970s 1980s

DF y DHFCasos importadosAedes a. difusión

Presente

Evolución de la situación histórica de los casos de dengue en las Américas. 1980-2007

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III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

2194. CONSECUENCIAS

4.3.2 SALUD Y CAMBIO CLIMÁTICO

Las amenazas que el cambio climático impone sobre lasalud también se manifiestan a través de aspectos comoel clima extremo, el cual incluye tormentas, aumentosen la temperatura, sequías y otras catástrofes. Y cadavez es mayor la cantidad de personas que viven en áreasque son vulnerables a eventos extremos. Es ya unarealidad evidente que hay un incremento en lamortalidad humana en América Latina y el Caribe,debida a eventos naturales relacionados con el clima,como las tormentas y las inundaciones (ver Capítulo I).

Otra amenaza mayor derivada del cambio climático esel aumento sustancial en la cantidad de sequías anualesen América Latina y el Caribe, que ha pasado de una acuatro por año (ver Capítulo I). Este fenómeno tieneimplicaciones indirectas en la vulnerabilidad humana,ya que la pérdida de fertilidad del suelo aumenta lasusceptibilidad de los cultivos a plagas, y esto puedetener repercusiones en la producción y disponibilidadde alimentos, afectando, por lo tanto, a los sereshumanos y su bienestar. En la región se estánproduciendo pérdidas económicas debidas a los efectosdel cambio climático y las plagas de los cultivos. Porejemplo, la reducción o pérdida estimada en laproducción debida a la sequías y la enfermedad de lapudrición carbonosa de la raíz (charcoal rot) en el surde Brasil fue del 30% (CHGE, 2005), lo que causó unaumento en el precio de la soja, reduciendo así lacapacidad de ciertos sectores de la sociedad quedependen de este alimento básico para su nutrición. Lasequía da como resultado una reducción en laproducción del cultivo, lo que puede aumentar laincidencia de la desnutrición en aquellas poblacionesque dependen de los productos del bosque, aumentandoentonces la vulnerabilidad, como se hace evidente enla región del río Solimoes, en Brasil (Recuadro 3.11).

Asimismo, una elevación del nivel del mareventualmente afectaría los pequeños estados insulares

del Caribe, causando un aumento en la mortalidaddebida a la desnutrición y al calor intenso (Stern, 2007).Una mayor cantidad de sequías también podría conducira migraciones temporales de las comunidades rurales alos centros urbanos en búsqueda de empleo,diseminando con efectividad la malaria (Confalonieri,2003, en CHGE 2005). Además, también se volveríanpreocupantes los casos de migrantes no infectados quese trasladan a áreas con afectación por la enfermedad,y que al regresar a sus lugares de origen se convertiríanen un vector para la diseminación de la enfermedad.

Aprendiendo a sobrellevarlo: Vulnerabilidad y adaptación al cambio climáticoRECUADRO 3.11

Un ejemplo concreto donde la adaptación al Cambio Climático hubiera podido realizarse para disminuir el impacto sobreel bienestar de poblaciones indígenas, se dio en la región de Tres Fronteras (Brasil, Colombia y Perú), con los pobladosprincipales de Leticia y Tabatinga, localizada en la parte más occidental de la Cuenca del Amazonas. Es un área conhumedales estacionales y lagos, rica en recursos pesqueros, que sostienen a comunidades rurales e indígenas. En 2005-2006 la región fue severamente afectada por sequías excepcionales: el río Solimoes, un tributario principal del Amazonas,tuvo una reducción de nivel de 1,5 m, a consecuencia de un 70% de disminución en la lluvia (1/5 de los valores normales).La pérdida de recursos pesqueros fue enorme, y las comunidades indígenas dependientes de los servicios del ecosistemade humedales y lagunas fueron altamente impactadas. Las consecuencias devastadoras de estas excepcionales sequías enla salud, medio ambiente y economía del área de Tres Fronteras pudieron haber sido reducidas mediante la utilizaciónestratégica del agua subterránea, un recurso confiable y menos dependiente del clima.

Fuente: Vaughan y otros, 2007.

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220

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

El mantenimiento de las funciones ecosistémicas de losbosques y los ambientes marinos es crítico para elbienestar humano. Este capítulo ha mostrado lasinterrelaciones entre los bienes y servicios que éstosproveen y las presiones a las que se están siendosometidos, tanto por los humanos como por los eventosnaturales, así como las consecuencias que tienen sobreel bienestar humano. Es evidente que la civilizaciónestá interconectada con sus ecosistemas, se requiereentonces tomar medidas encaminadas a manejar estosrecursos de manera sostenible, para que la provisiónde bienes y servicios, que se deriva de ellos, no sólo semantenga en el presente, sino también para las futurasgeneraciones. Si bien América Latina y el Caribe estánhaciendo esfuerzos para responder a esta problemática,es evidente que las acciones se están implementando aun ritmo menor del que están ocurriendo los cambios.Por lo tanto, es vital que se tomen medidas para corregiresta inconsistencia. Es necesario hacer mucho másénfasis en la concientización, particularmente en ilustrara la comunidad, en general, y a quienes tomandecisiones, en particular, sobre la relación dedependencia de las poblaciones humanas y la cantidady calidad de los servicios ecosistémicos, tanto a escalalocal, como en la nacional, la regional, e incluso global.Es fundamental que los estudios científicos establezcanlas bases para la identificación y cuantificación de losservicios que proveen los ecosistemas a las regiones,un área que en la actualidad no ha sido suficientementeestudiada.

Sin duda, como se demuestra en este Capítulo, el usoinsostenible de los recursos en la región de AméricaLatina y el Caribe socava su desarrollo. Es entoncesimperativo que los tomadores de decisiones, laspoblaciones locales y los administradores de los recursostrabajen colectivamente para resolver los retos quepermitan mejorar el bienestar de las personas ypromover el desarrollo sostenible. Los objetivos debenencarar los patrones de uso y consumo, con el fin deevitar una reducción en la disponibilidad de aquellosbienes y servicios ecosistémicos esenciales. En lo querespecta a la minimización, tanto de las consecuenciassobre los seres humanos como de las presiones sobrelos ecosistemas, las políticas y las instituciones tienenque jugar un papel crítico en lo que respecta a accionesde mitigación y estrategias de adaptación, mediante elestablecimiento de metas nacionales acordes con losvalores sociales y culturales, y también con lasprioridades, dándole a la gente los elementos necesarios

para que ella misma pueda emprender acciones. Unejemplo de una intervención positiva de este tipo sedio en torno a los manglares de Belice, ya que en febrerode 2008 se impuso una moratoria temporal a laalteración de los bosques de mangle, en respuesta a losimpactos que la remoción y la alteración estabanteniendo sobre estos ecosistemas (Office of the DeputyPrime Minister, 2008).

La región también debe vencer las barreras que estánexacerbando el uso inadecuado de los ecosistemas yque están acelerando su degradación, con lasconsecuencias asociadas sobre el bienestar humano.Entre otros, se debe continuar con el fortalecimiento delas políticas intersectoriales para promover el usosostenible de los ecosistemas, incluyendo recursosfinancieros y capacitación para cuantificar los bienes yservicios ambientales provistos por estos ecosistemas.

Sin duda, la región de América Latina y el Caribe haprogresado y debe continuar ampliando elconocimiento y la implementación de herramientasapropiadas para la toma de decisiones. Es esencial quese siga apoyando la educación, formación yreconocimiento de la importancia para el ser humanodel funcionamiento, conservación y valor económicode los ecosistemas. En este sentido, se espera que losgobiernos regionales avancen en el uso delconocimiento y las prácticas tradicionales para el usode los recursos naturales, que aunque han aumentado,todavía se perciben como subestimados y subutilizados.

Relacionado con estos temas es relevante lacontinuación en los esfuerzos de desarrollo eimplementación de políticas formales e informales, yde incentivos económicos que apoyen la conservacióny el uso sostenible de los ecosistemas, y que considerenlos aspectos sociales y culturales de quienes habitanlos territorios. De la misma, se deben aumentar más lasoportunidades de las poblaciones locales paraincorporar nuevas tecnologías y usos del sueloalternativos y sostenibles, incluyendo actividades noagrícolas generadoras de ingresos que puedan atenuarlas presiones sobre el ambiente.

Finalmente, se debe continuar con los esfuerzos deconstrucción de capacidad y experiencia, tanto en elnivel individual como en el comunitario e institucional,para conservar y manejar de una manera sostenible losecosistemas de América Latina y el Caribe.

5. REFLEXIONES

5. REFLEXIONES FINALES

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III. CAMBIOS AMBIENTALES Y BIENESTAR HUMANO

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IV. ESCENARIOS

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IV. ESCENARIOS

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

MENSAJES CLAVE

El hilo conductor de este capítulo es lasostenibilidad, como objetivo estratégico, desdeuna perspectiva de análisis que incorpora laevolución del debate sobre el vínculo entremedio ambiente y desarrollo. América Latina yel Caribe, siendo una de las regiones con mayorgrado de avance socioeconómico relativo del áreaen desarrollo, se caracteriza, entre otras cosas, porel más alto grado de inequidad en la distribucióndel ingreso del mundo, y por la mayor deuda externaper cápita del área en desarrollo. En este contexto,el diseño de los escenarios toma en cuenta comopunto de partida el modelo de desarrollosocioeconómico de la región, sustentado en laexportación de recursos naturales y la atracción deinversiones extranjeras, a partir de la existencia deventajas comparativas en relación con una manode obra relativamente barata y de escasasrestricciones ambientales para la explotación dedichos recursos.

Cabe recordar, entre otros temas relevantes, que losbosques de esta región –en particular los ubicadosen la cuenca amazónica–, constituyen el mayorsumidero de carbono del planeta, y albergan unaproporción significativa de la diversidad biológicamundial, lo que pone de manifiesto la importanciade las políticas y acciones relacionadas con elcambio de uso de la tierra en la región. AméricaLatina y el Caribe también se distinguen por susrecursos de agua dulce y por su dotación minero-energética.

En este contexto, los escenarios exploran cuatrohipótesis fundamentales que agrupan las fuerzasmotrices determinantes señaladas, así como losincentivos de mercado, las opciones de políticay las preocupaciones relacionadas con laseguridad y el desarrollo sostenible. Mientras enel mundo real, en cualquier momento y en cualquierlugar, se intenta optimizar estas fuerzas motrices, aveces, las mismas se tornan mutuamente excluyentesocasionando conflictos en la consecución dediferentes objetivos.

En los escenarios presentados, se exploran lasincertidumbres asociadas con estos dilemas a partirde cuatro narrativas tituladas Sostenibilidadrelegada, Reformas hacia la sostenibilidad,Insostenibilidad y escalada de conflictos, yTransición hacia la sostenibilidad. Los escenariosen sí mismos no constituyen predicciones niproyecciones; son imágenes plausibles del futuro,definidas a partir de distintas combinaciones defuerzas motrices, donde los costos económicos,sociales y ambientales de cada una de lastrayectorias dependen, en gran medida, de laurgencia y el grado de integralidad con que seincorporen los objetivos de sostenibilidad y bienestarhumano en el proceso de toma de decisiones.

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IV. ESCENARIOS

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La inversión en sostenibilidad ambiental ysocial debe interpretarse como esencial para eldesarrollo económico. Para aquellos escenariosque asumen un incremento de las inversionesdestinadas a la salud, la educación, y a tecnologíasambientalmente sostenibles (eficientes en elconsumo energético y no contaminantes) –enparticular Transición hacia la sostenibilidad–, losresultados en relación al crecimiento económico ya la distribución equitativa de la riqueza generadason igualmente elevados y más justos que para losque no aplican este volumen de inversiones en esossectores. En el escenario Insostenibilidad y escaladade conflictos, resulta mucho más evidente lacreciente desigualdad y fragmentación social.

Confiar solamente en el mercado tomaráimprobable el logro de los Objetivos deDesarrollo del Milenio (ODM) y de las metasclaves relacionadas con el medio ambiente. Enel escenario Sostenibilidad relegada, el énfasis enlas fuerzas del mercado permite el logro de uncrecimiento económico rápido, pero también semanifiesta un incremento de las presiones sobre elmedio ambiente, y los avances en los temas socialesson mucho más lentos. Alternativamente, enReformas hacia la sostenibilidad y, sobre todo enTransición hacia la sostenibilidad, donde sepromueve un incremento de los niveles deinversiones en la salud, educación y elmedioambiente, así como de los volúmenes deasistencia para el desarrollo y se aplican nuevosenfoques en las políticas crediticias, el progreso enla consecución de las metas sociales resultasignificativamente más rápido, sin sacrificar eldesarrollo económico.

El acceso y el control de los recursosenergéticos se mantiene como fuente importantede conflictos para Sostenibilidad relegada y, enmayor magnitud, para Insostenibilidad y escaladade conflictos. Para estos dos escenarios resultalimitada la mejoría en la diversificación de lasfuentes energéticas (más allá de los combustiblesfósiles) y en la eficiencia energética. En contraste,tanto la diversificación de las fuentes energéticas(con una mayor participación de las fuentesrenovables) como la eficiencia energética y lacooperación regional energética se promuevenmoderadamente en Reformas hacia la sostenibilidady se refuerzan bajo el escenario de Transición haciala sostenibilidad.

La urbanización es también una fuerza motrizclave para América Latina y el Caribe .La distribución geográfica de la población ejerce yejercerá especial influencia en la intensa ocupaciónde la costa o de zonas cercanas al litoral, con unapersistente gravitación de zonas interiores deocupación histórica y una rápida expansión hacialos tradicionales espacios vacíos en el corazón dela región (cuencas del Amazonas y el Orinoco).

El proceso de urbanización se desarrolla condiferencias cualitativas en cada escenario.En Sostenibilidad relegada y en Insostenibilidad yescalada de conflictos se observa una expansióndescontrolada de la urbanización. En Reformas haciala sostenibilidad la urbanización es menos caótica.En Transición hacia la sostenibilidad se sigueurbanizando sobre todo en las ciudades de pequeñoy mediano tamaño, en un contexto que se basa enuna planificación a largo plazo con respecto aldesarrollo urbanístico.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Otra de las características notables del contextosocioeconómico latinoamericano es el aumentocontinuo en las presiones migratorias (dentro dela región y hacia los países desarrollados,especialmente, América del Norte). En Sostenibilidadrelegada, la creciente emigración se debe aldeterioro de las condiciones sociales de variosgrupos. En Insostenibilidad y escalada de conflictoslas presiones migratorias aumentanconsiderablemente en las áreas fronterizas, pero lalegislación sobre la migración se hace másrestrictiva. Las presiones migratorias disminuyen enReformas hacia la sostenibilidad y en Transiciónhacia la sostenibilidad. En esta última hipótesis, laemigración pasa a ser una cuestión de decisiónpersonal más que una necesidad.

En algunos casos las acciones que se llevan acabo, como parte de los esfuerzos para alcanzarlos Objetivos de Desarrollo del Milenio y otrasmetas medioambientales, tienen efectoscontraproducentes. Un ejemplo de esto último esel aumento de la producción de biocombustibles agran escala y con fines preferentemente comerciales,utilizando como pretexto la necesidad de avanzaren el cumplimiento de las metas relacionadas conla mitiguación del cambio climático. Este enfoquecompite con la seguridad alimentaria y la necesidadde proteger la biodiversidad, ya que entran acompetir ambas actividades por los recursos detierra y agua disponibles. El resultado final es unincremento de la deforestación y la reducción delas áreas cubiertas de bosques en Sostenibilidadrelegada, lo que provoca una mayor pérdida dehábitat y una mayor fragmentación. Las áreas deinterés forestal más importantes para las «elites» seconservan en Insostenibilidad y escalada deconflictos, pero fuera de estas áreas protegidas ladeforestación aumenta rápidamente. En Reformas

hacia la sostenibilidad se evidencia una reducciónmoderada de la deforestación y de la fragmentaciónde los hábitats, gracias a la mejora de las normativasreguladoras y a los mecanismos para elcumplimiento de las mismas. Por su parte, enTransición hacia la sostenibilidad se implementanmecanismos para rehabilitar ecosistemas forestalesafectados consiguiendo detener la pérdida y lafragmentación de estos hábitats clave.

En las cuatro hipótesis están presentes presionescada vez mayores sobre los recursos hídricoshacia el 2050, aunque es posible distinguirdiferencias entre las mismas. En Sostenibilidadrelegada y en Insostenibilidad y escalada deconflictos disminuye la calidad y la cantidad de lasaguas superficiales y subterráneas. Por su parte, enReformas hacia la sostenibilidad se consiguecontener el aumento de las extracciones de aguamediante inversiones en tecnologías de ahorro, conlo que se logra mejorar sustancialmente el uso deeste recurso en los sectores económicos. EnTransición hacia la sostenibilidad se realizanesfuerzos especiales para gestionar los conflictos enesta área, mejorar la eficiencia en el uso del agua ycambiar la conducta de las personas con relación asu uso.

Los tomadores de decisiones de la región debensistematizar la aplicación de un enfoqueintegrador en el análisis de los procesos globalesy regionales, para dar respuestas más adecuadasa los problemas socioeconómicos y ambientalesen el contexto de las agendas regionales ynacionales de desarrollo sostenible. De estaforma, la región estaría en mejores condicionespara enfrentar situaciones de crisis económicaglobal como la desatada en el 2007, y otrosdesafíos globales.

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IV. ESCENARIOS

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

¿Cómo pudiera cambiar la realidad económica, socio-política y ambiental de América Latina y el Caribe hasta2050? ¿Cuáles son las fuerzas motrices o factores clavede esos cambios? ¿Qué implicaciones tendrían lastransformaciones potenciales antes referidas para eldesarrollo sostenible de la región? Este capítulo aporta,en apretada síntesis, respuestas a las interrogantesanteriores, mediante la elaboración y análisis de variosescenarios posibles para América Latina y el Caribe.

El uso de los escenarios socioeconómicos yambientales, como herramienta clave para la toma dedecisiones adquiere particular relevancia en un contextoglobal y regional como el actual, signado por lacreciente incertidumbre en las esferas económica, socialy ambiental. Los factores de incertidumbre puedenresultar cruciales en la trayectoria de los diferentesescenarios (incertidumbres claves), en la medida enque estén referidos a temas básicos de la sostenibilidad.

En ocasiones, suele confundirse a los escenarios conlos pronósticos y las predicciones pero, de acuerdo conla metodología GEO, no son ni una cosa ni la otra. Setrata simplemente de imágenes alternativas acerca decómo pudiera evolucionar el futuro bajo diferentescombinaciones plausibles de factores clave o fuerzasmotrices , como la población, el crecimientoeconómico, el desarrollo tecnológico, las políticaseconómicas, la gestión ambiental, los acuerdoscomerciales, entre otras.

Bajo determinadas circunstancias, los efectosacumulados de los cambios que se producen en áreasbásicas del desarrollo sostenible, dentro de un escenarioespecífico, pueden propiciar un salto cualitativo o puntode inflexión en la trayectoria del escenario en cuestión,es decir, pueden provocar una transformación esencialdel escenario y dar paso a una trayectoria nueva quepudiera reforzar las tendencias anteriores o alejarse delas mismas.

Los escenarios deben ser elaborados con un grado dedetalle suficiente en la caracterización básica del objetode estudio a diferentes escalas de espacio y tiempo.Deben ser narraciones plausibles y coherentes, y reflejar–en el mayor grado posible– la integración de diversasdisciplinas de las ciencias naturales, sociales y otras.Constan de un componente cualitativo, donde losexpertos en diversas ramas del saber plasman susconocimientos acerca de las fuerzas motrices, suspotencialidades e interrelaciones; y un componentecuantitativo que se basa, en lo fundamental, en losresultados de modelos estadísticos, que consideran lossupuestos básicos definidos en el análisis cualitativocomo elemento rector.

Los escenarios son, por tanto, relatos contados conpalabras y números que pueden ayudar a los tomadoresde decisiones a orientar los acontecimientos porcaminos sostenibles y a evitar aquellos que puedanprovocar consecuencias adversas.

1. INTRODUCCIÓN Y ANTECEDENTES

1. INTRODUCCIÓN

Page 235: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

233

En materia ambiental, el uso adecuado de los escenariosfacilita a los tomadores de decisiones la adopción deacciones oportunas en cuanto a las estrategias demitigación y adaptación ante los desafíos ambientales,en tanto aportan visiones integradas acerca de losvínculos entre tales desafíos, sus implicaciones y lainercia de los sistemas ecológicos y socioeconómicos.

Este capítulo sobre escenarios socioeconómicos yambientales del informe GEOLAC 2003 da continuidada estudios anteriores sobre esta temática, coordinadospor la Oficina Regional del PNUMA para América Latinay el Caribe. Con este esfuerzo, se complementa yactualiza lo expuesto en el Capítulo 4 «Escenarios deldesarrollo regional» del Informe GEO América Latina yel Caribe. Perspectivas del Medio Ambiente 2003.

En la preparación de este capítulo, se ha contado, comopunto de partida, con toda la información procesada ycompilada desde 2004 por el Equipo Regional sobreEscenarios GEO, como parte de la contribución regionalal cuarto informe global GEO-4 (2007). Esta informaciónincluye, tanto análisis cualitativos, expresados en el textode las narrativas, como análisis cuantitativos (ver elCuadro 4.1).

En este capítulo se evalúan –como referencia general–las trayectorias regionales de los cuatro escenariosconstruidos a escala global entre 2000 y 2050, y que seresumen a continuación.

Sostenibilidad relegada (SR)

En este escenario, el crecimiento económico espriorizado por encima de objetivos sociales yambientales, por lo que las políticas y prácticas seorientan, fundamentalmente, hacia el desarrollo de losmercados. Los efectos de la desmaterialización de laeconomía, en cuanto a reducción del consumo dematerias primas por unidad de producto, son

compensados en gran medida por el aumento del nivelde actividad económica. Todo deviene mercancía,incluso los recursos naturales y bienes básicos como elagua, la diversidad biológica y la cultura. La degradaciónambiental se aumenta como resultado del incrementode las externalidades ambientales. Las personas sonconsideradas como objetos insertos en el proceso deintercambio comercial. Aumenta la inequidad y lacorrupción crece.

1. INTRODUCCIÓN

GEO3 Global 2003 GEO4 Global2007 GEO ALC 2003

Mercado Primero Mercado no regulado Mercado Primero Sostenibilidad relegada

Políticas Primero Reformas Políticas Primero Reformas hacia lasostenibilidad

Seguridad Primero Seguridad Primero Insostenibilidad yescalada de conflictos

Sostenibilidad Primero Grandes Transiciones Sostenibilidad Primero Transición haciala sostenibilidad

Fuente: Elaborado por los autores.

CUADRO 4.1

Antecedentes básicos para los escenarios GEO ALC -3

Page 236: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

234

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Reformas hacia la sostenibilidad (RS)

Se introducen nuevas políticas y regulaciones paramitigar parcialmente los impactos adversos de más dedos décadas de predominio de políticas que dabanpreferencia a la expansión de los mercados noregulados. Se combina un alto crecimiento económicocon la aplicación de políticas fiscales de cortekeynesiano para aliviar los problemas sociales yambientales más serios; aunque persisten tensiones ylímites para un avance significativo en esta direccióndebido al enfoque de mercado que aún predomina eneste escenario. Las capacidades científicas ytecnológicas de los países de la región se utilizan engran medida en áreas priorizadas y se experimenta unfortalecimiento institucional en esta esfera. Se registranprogresos en la protección ambiental, especialmente encuanto al control de la contaminación urbana, peropersisten problemas con el manejo de los recursosnaturales y, especialmente, con el ordenamientoterritorial.

Insostenibilidad y escalada de conflictos (IEC)

Es un contexto regional marcado por la fragmentaciónsocio-económica y política, con «islas de riqueza» enun «mar de pobreza», como expresión de una crecienteinequidad. Predomina el control y apropiación de losrecursos nacionales por las elites de poder y las grandescorporaciones. La violencia se exacerba y los conflictossocio-políticos se incrementan considerablemente, congrandes presiones migratorias en las áreas fronterizas.Como las condiciones de seguridad se deterioran, losmecanismos de control basados en la represiónproliferan. La degradación ambiental aumenta, aunquealgunos recursos naturales de interés de las elites sepreservan; y los problemas de salud se incrementan.

Transición hacia la sostenibilidad (TS)

Bajo un enfoque más integrado, se da una combinaciónde las dimensiones económicas, sociales y ambientalesdel desarrollo sostenible; con mayor énfasis en eldesarrollo humano. En el plano económico, los procesosde desmaterialización y la integración económica

TRAYECTORIAS Desde 2000 hasta 2025 Desde 2025 hasta 2050A Sostenibilidad relegada Reformas hacia la sostenibilidadB Sostenibilidad relegada Insostenibilidad y escalada de conflictosC Insostenibilidad y escalada de conflictos Transición hacia la sostenibilidadD Reformas hacia la sostenibilidad Transición hacia la sostenibilidad

Fuente: Elaborado por los autores.

CUADRO 4.2

Trayectorias regionales alternativas que introducen puntosde inflexión en GEO ALC -3

regional avanzan. Se reducen las presiones migratoriasy la satisfacción de las necesidades básicas aumenta,sin poner en peligro la preservación de los recursosnaturales. Se logra una estructura más balanceada parala toma de decisiones; se registran cambios significativosen los patrones de consumo y se avanzaconsiderablemente en la solución de problemasambientales prioritarios. Se progresa hacia una agendaambiental común para la región.

En adición a las cuatro trayectorias básicas resumidascon anterioridad, en este capítulo se exploran cuatrotrayectorias alternativas que introducen puntos deinflexión a mediados del período 2000-2050, comoexpresión del alto grado de incertidumbre implícito enel proceso de construcción de escenarios.

Estas cuatro trayectorias alternativas fueronseleccionadas, según el criterio de los expertos delequipo regional, como casos representativos –paraevaluar la sostenibilidad–, dentro del conjunto decombinaciones posibles (ver el Cuadro 4.2).

El vínculo fundamental de este capítulo con otrassecciones del informe regional se basa en el análisis delas prioridades ambientales de la región, definidas enlos capítulos iniciales, y en la evaluación perspectivade las mismas en el contexto de los distintos escenariosconsiderados. Así, el estudio de los escenariospresentados en este capítulo aporta leccionesimportantes para los tomadores de decisiones.

En correspondencia con el GEO-4, publicado en 2007,el hilo conductor de este capítulo es la sostenibilidadcomo objetivo estratégico. Esta perspectiva de análisistiene como antecedente la evolución del debate sobreel vínculo entre medio ambiente y desarrollo en losveinte años transcurridos desde la publicación delinforme Nuestro Futuro Común, de la Comisión deNaciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo(1987)1.

1 En este sentido también se destacan, como referencias básicas, importantesestudios e investigaciones regionales acerca de los retos del desarrollosostenible en América Latina y el Caribe. Ver, por ejemplo, PNUD, 1990;O. Sunkel y N. Gligo (Eds.). 1980

1. INTRODUCCIÓN

Page 237: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

235

2. FUERZAS MOTRICES, INCERTIDUMBRES CLAVES E IDEASBÁSICAS QUE SUSTENTAN LAS HIPÓTESIS

2. IDEAS BÁSICAS

2.1 FUERZAS MOTRICES

Las fuerzas motrices de los cambios socioeconómicos,políticos y ambientales para las próximas décadas en laregión son diversas y se relacionan entre sí de las másvariadas formas. El impacto de algunas de ellas vamucho más allá de las fronteras regionales y se dejasentir en otras regiones y países por la vía de losintercambios comerciales, financieros, culturales y otrosque se han reforzado considerablemente en el actualcontexto de globalización.

América Latina y el Caribe se caracterizan, entre otrascosas, por el más alto grado de inequidad en ladistribución del ingreso del mundo; y la mayor deudaexterna per cápita. Otros procesos socioeconómicosclave para la región son la urbanización, la migraciónhacia otras regiones y entre países del área, y losrenovados esfuerzos de integración entre países.

En el plano ambiental, cabe recordar, entre otros temasrelevantes, que los bosques de esta región –en particularlos ubicados en la cuenca amazónica–, constituyen elmayor sumidero de carbono del planeta, y albergan unaproporción significativa de la diversidad biológicamundial, lo que pone de manifiesto la importancia delas políticas y acciones relacionadas con el cambio deuso de la tierra en la región. América Latina y el Caribetambién se distinguen por sus abundantes recursos deagua dulce y por su dotación minero-energética.

Dada su ubicación geográfica y su condición denaciones en desarrollo, los países de la región enfrentansignificativos niveles de vulnerabilidad ante fenómenosnaturales extremos como los eventos climáticos y lossísmicos (erupciones volcánicas y terremotos). Deacuerdo con las evidencias científicas más recientes,algunos de esos retos y sus riesgos asociados tienden aexacerbarse en un futuro previsible con la ocurrenciade fenómenos como el cambio climático, causado enbuena medida por el impacto acumulativo de laactividad humana.

En la región persisten obstáculos, tales como laaplicación de políticas económicas con altos costossociales y ambientales, la falta de voluntad política paralograr un desarrollo sostenible, la urbanizacióndescontrolada, las limitaciones en las capacidadesinstitucionales, la emigración –sobre todo de fuerza detrabajo calificada–, y las restricciones tecnológicas yfinancieras, que también agravan la situaciónsocioeconómica y ambiental y reducen la capacidadde respuesta de los países en términos de adaptación ymitigación de los problemas ambientales globales.

La dinámica de las interrelaciones de estos temaseconómicos, políticos, sociales y ambientales enAmérica Latina y el Caribe confirma la necesidad deanalizar esta diversidad de factores como importantesfuerzas motrices a la hora de construir escenarios para2050.

Page 238: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

236

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

2. IDEAS BÁSICAS

2.1.1 DIMENSIÓN ECONÓMICA

En el plano económico se destacan, como fuerzasmotrices fundamentales:

La dinámica del crecimiento económico, la calidaddel mismo, y la contribución de los distintos sectoressocioeconómicos,Las tendencias comerciales y financieras, tales comola evolución de la deuda externa y las inversionesextranjeras directas,El progreso o retraso tecnológico, con referencia alos patrones de producción y consumopredominantes, los indicadores de innovación /competitividad, y la brecha tecnológica.La dinámica energética, referida a la presencia delas distintas fuentes (combustibles fósiles,biocombustibles, energía nuclear y otras) en elbalance energético regional, el avance o retrocesoen materia de eficiencia energética, así como elvínculo entre energía y desarrollo sostenible.

Las tendencias a la integración o a la fragmentacióneconómica regional están referidas a la evolución dedistintos procesos subregionales como el MercadoComún del Sur (MERCOSUR), la Comunidad Andinade Naciones (CAN), la Unión de NacionesSuramericanas (UNASUR), la Comunidad del Caribe(CARICOM), el Sistema de Integración Centroamericana(SICA) y la Alternativa Bolivariana para las Américas(ALBA), entre otras.

2.1.2 DIMENSIÓN SOCIO-POLÍTICA

En el plano social pueden mencionarse las siguientesfuerzas motrices:

El comportamiento de la población, es decir, ladinámica poblacional, el proceso de urbanizacióny los flujos de migraciones,La inequidad y la pobreza,Los retos en materia de seguridad alimentaria,La evolución del desarrollo humano, medido conla ayuda del índice de desarrollo humano y diversosindicadores sociales,Los desafíos culturales, entre ellos el impacto culturalde la globalización y los peligros y oportunidadespara las culturas autóctonas,El desarrollo institucional, la gobernabilidad, y otrosfactores como participación social, democracia ycorrupción.

2.1.3 DIMENSIÓN AMBIENTAL

En el plano ambiental, se toman como punto de partidalas prioridades ambientales de la región, definidas ensecciones anteriores de este Informe, con especialreferencia a temas clave como:

Cambio de uso del suelo,Vulnerabilidad ante el cambio climático,Desertificación y sequía,Pérdida de biodiversidad,Agotamiento y contaminación de fuentes de agua,Deforestación y erosión de suelos,Manejo de los residuos urbanos y peligrosos,Gastos de protección ambiental, entre otras.

Estas prioridades ambientales también constituyenfuerzas motrices de futuros cambios.

En cada uno de los tres planos de análisis (económico,social y ambiental) pueden identificarse fuerzas motricesendógenas y exógenas. Las endógenas son aquellas cuyocomportamiento se explica, en lo fundamental, a partirde factores regionales o locales (por ejemplo, iniciativasde integración surgidas en el marco regional), en tantoque las exógenas deben su desempeño, básicamente, afactores globales o externos a la región (por ejemplo, laevolución de los precios del petróleo en los mercadosinternacionales, la dinámica de los mercados externos,el cambio climático como reto global, etc.). No obstante,debe tenerse en cuenta que, como resultado de lasactuales tendencias globalizadoras, cada vez resulta másdifícil separar las fuerzas motrices endógenas de lasexógenas, ya que las mismas se presentan muchas vecesentremezcladas.

Page 239: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

2372. IDEAS BÁSICAS

Las realidades socioeconómicas de la región, suinserción dependiente en la economía mundial y, sobretodo, el hecho de que la dinámica de muchas fuerzasmotrices sea definida fuera de la región (exógenas), leimprimen un mayor componente de incertidumbre alas trayectorias de los escenarios regionales. Esto, a suvez, potencia la importancia de los escenarios para latoma de decisiones y revela la necesidad de accionesde respuesta, surgidas en los ámbitos regionales ylocales, que permitan mitigar o solucionar los problemasque afectan a las subregiones, países y comunidadesdel área.

Si bien existen similitudes en cuanto a los retossocioeconómicos y ambientales de muchos de los paísesde la región, no debe olvidarse que también existennotables diferencias entre las distintas subregiones ypaíses, e incluso grandes disparidades al interior de estosúltimos. Esta diversidad de retos, problemas y opcionesde respuesta no puede ser captado –en todos susdetalles– en un estudio como el que se propone en estecapítulo para el conjunto de la región; sin embargo,aquí se aportan instrumentos y herramientasmetodológicas básicas, que pudieran ser de utilidad parareplicar la experiencia de los escenarios en las escalassubregionales, nacionales, e incluso locales.

Si bien los tres planos de análisis mencionados conanterioridad (económico, socio-político y ambiental)serán analizados por separado a la hora de presentarlos escenarios, por razones didácticas, debe tenerse encuenta que existe un estrecho vínculo de causa – efectoentre los desarrollos en esos tres campos de actividad.Esa relación resulta muy compleja por su naturaleza nolineal y multifacética, donde corresponde, en últimainstancia, a las tendencias económicas el roldeterminante en esa ecuación de interrelaciones.

No obstante el papel determinante de las variables ypolíticas económicas, la evolución de las variablessociales y ambientales, puede –bajo determinadascondiciones y traspasados determinados umbrales–actuar como catalizadores u obstáculos para elcrecimiento económico, como pone de manifiesto elconjunto de escenarios que se ofrece en este capítulo.

2.2 INCERTIDUMBRES CLAVES E IDEASBÁSICAS QUE SUSTENTAN LAS HIPÓTESIS DELOS ESCENARIOS

Los supuestos básicos para los escenarios de la regiónfueron definidos tomando como referencia la basemetodológica del Informe GEO-4 (2007) e incorporando

el correspondiente ajuste, acorde con la realidadlatinoamericana y caribeña. En este análisis, semantienen, en sentido general, las cinco dimensionesbásicas utilizadas en el Informe GEO-4 (2007): 1) Marcoinstitucional y socio-político; 2) Tendenciaspoblacionales; 3) Economía y mercados, 4) Ciencia ytecnología y 5) Sistema de valores. Estas dimensiones,que sintetizan las fuerzas motrices de los escenarios,son examinadas a la luz de un conjunto deincertidumbres claves, para los cuatro escenarios básicos(ver el Cuadro 4.3).

Para una mejor comprensión del contenido y ladinámica de los escenarios regionales, en el Cuadro 4.4se realiza un resumen comparativo sintético delcomportamiento de un conjunto de temas transversalesen los cuatro escenarios básicos definidos para AméricaLatina y el Caribe. Los temas transversales seleccionadospara este análisis son clasificados como temaseconómicos, sociales o ambientales, según corresponda.

Page 240: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

238

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

¿Cuál es el nivel y lanaturaleza de las alianzasque se establecen entre losdistintos actores dentro delos países (gobiernos, sectorprivado y otrasorganizaciones de lasociedad civil)?

¿Cuál es el nivel y lanaturaleza de las alianzasentre países?

¿Cuál es el nivel y lanaturaleza de laparticipación pública en lagestión?

¿Cuál es la relación depoder entre el gobierno, elsector privado y la sociedadcivil?

¿Cuál es el nivel y ladistribución sectorial de lasinversiones del gobierno?

¿Cuál es el grado deintegración entre laspolíticas económicas,sociales y ambientales?

¿Cuál es la dinámica de lapoblación?

¿Cuál es la característicabásica de la urbanización?

¿Cuál es la tendenciafundamental de los flujosmi-gratorios hacia EE.UU. /Europa?

Supuestos básicosSostenibilidad relegada

(SR)Reformas hacia lasostenibilidad (RS)

Insostenibilidad yescalada de conflictos

(IEC)

Transición hacia lasostenibilidad (TS)

Incertidumbres claves

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Gran dinamismo de lasalianzas interempresariales ylos vínculos entre gobiernosy sector privado, sobre todoen las actividades deInvestigación y Desarrollo ycomerciales

Alto entre países que hanfirmado tratados de librecomercio.

Bajo, debido a la desre-gulación galopante.

Más privado.

Bajo, en relación con lasinversiones privadas.Aumentan los gastosmilitares.

Bajo.

Se desacelera el crecimientopoblacional y envejece lapoblación.Planificación familiarcondicionada por laspresiones económicas y elelevado costo de la vida.

Expansión descontroladasobre todo en los suburbiosde mega-ciudades.

Incremento de presionesmigratorias; con crecientesrestricciones a la entrada enpaíses de destino.

Alto, similar al escenario SR,pero con mayor presencia devínculos entre gobiernos,sociedad civil y sectorprivado en torno a metassociales y de calidadambiental.

Alto, a partir de un mayordinamismo de esquemastradicionales de integración.

Medio, sobre todo fijandociertas metas de calidadambiental y equidad.

Más presenciagubernamental que en SR.

Medio, con mayor énfasis enlos sectores de salud,educación, alivio a lapobreza y reducción de lacontaminación.

Medio. Mayor integración depolíticas vinculadas a ciertasmetas sociales yambientales.

Se desacelera el crecimientopoblacional y envejece lapoblación.Planificación familiarcondicionada por unacombinación de presioneseconómicas y políticasorientadas a este fin.

Crece, sobre todo enciudades medianas y enáreas suburbanas, perotiende a ser menos caótica.

Disminuyen las presionesmigratorias.

Bajo, en sentido general,aunque se refuerzan lasalianzas en las elites depoder (gobiernos, grandesempresas transnacionales yfuerzas militares / para-militares).

Muy bajo, debido al altogrado de fragmentaciónregional.

Mínimo, dado elpredominio del sectorprivado transnacional y grancapital nacional.

Más privado (sobre todotransnacional).

Mínimo, con mayor énfasisen los gastos militares.

Muy bajo. Políticas muydesarticuladas.

Crecen más las poblacionesvulnerables.Tiende a aumentar lamortalidad porenfermedades y epidemias.

Expansión con tendencia ala desaceleración.

Incremento sustancial de laspresiones migratorias, conmuy fuertes restricciones a laentrada en países de destino.

Alto, como reflejo de unamayor integración deesfuerzos entre los distintosactores en las esferaseconómicas, sociales yambientales.

Alto, a partir de nuevasmodalidades de integración,más equitativas y que vanmás allá de la esferaeconómico-comercial ydesarrollan la cooperaciónsocial y ambiental.

Alto, basado en laconcertación yparticipación.

Más equilibrado.

Alto, con mayor énfasis enla integración de lasinversiones económicas,sociales y ambientales.

Muy alto.

Se desacelera más elcrecimiento poblacional queen el resto de los escenarios.Planificación familiar enfunción del bienestar.

Continúa sobre todo enciudades medianas ypequeñas.

Reducción sustancial depresiones migratorias.

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... continúa en la página siguiente.

CUADRO 4.3

Ideas básicas que sustenta hipótesis

2. IDEAS BÁSICAS

Page 241: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

239

¿Cuál es el grado deapertura de los mercados?

¿Cómo se comporta laespecialización sectorialversus diversificación de laeconomía?

¿Cuál es la dinámica de laeconomía informal?

¿Cuáles son las prioridadesy el grado de intervencióndel gobierno en laeconomía?

¿Cuáles son los niveles,fuentes y prioridades de laInvestigación y Desarrollo?

¿Cuáles son las prioridadesde las tecnologíasenergéticas?

¿Cuáles son las tendenciasde la transferencia detecnologías?

¿Cómo se comporta larelación entre homoge-neización versus diversidadcultural?

¿Cómo se comporta larelación entreindividualismo ycolectividad / comunidad?

¿Cuáles son las prioridadescon respecto a las áreasprotegidas?

Supuestos básicosSostenibilidadrelegada (SR)

Reformas hacia lasostenibilidad (RS)

Insostenibilidad yescalada de conflictos

(IEC)

Transición hacia lasostenibilidad (TS)

Incertidumbresclaves

Dim

en-

sion

es

Alto grado de aperturacomercial unilateral en laregión, respecto a lospaíses desarrollados.

Predomina laespecialización en sectoresy nichos orientados a laexportación.

Creciente.

Baja intervención. Seprioriza la eficienciaeconómica.

Alto nivel, con elevadofinanciamiento privado yorientada a fineslucrativos.

Combustibles fósiles ybiocombustibles líquidos(con enfoque nosostenible).

Elevada entre lossegmentostransnacionalizados.Crecientes restricciones ensentido más amplio.

Predomina la homoge-neización cultural, enfunción del mercado.

Predomina elindividualismo.

Los intereses económicoslimitan la ampliación deestas áreas y no se garan-tiza el manejo sosteniblede las ya existentes.

Alto grado de aperturacomercial, conincorporación de algunoselementos de comercio justo.

Especialización sectorial,pero se promueven políticashacia una mayordiversificación económica.

Tiende a reducirse laeconomía informal en lamedida en que avancen lasreformas socio-ambientales.

Media. Se producenacciones de intervenciónselectivas.

Alto nivel, con mayor pre-sencia del financiamientogubernamental que en SR,lo que favorece lasinversiones con fines socio-ambientales.

Se introducen prácticas quepromueven la sostenibilidadenergética, aunque de formalimitada.

Elevada entre los segmentostransnacionalizados. Ciertasacciones que favorecen latransferencia en áreaspriorizadas.

Predomina la homoge-neización cultural, enfunción del mercado.Algunas políticas propicianla diversidad.

Aunque aún predomina elindividualismo, algunaspolíticas potencian losvalores comunitarios.

Se amplían las áreasprotegidas, pero aún no seasegura un manejosostenible.

Predomina el proteccionismocomercial y la fragmentacióneconómica.

Diversificación económicaderivada de la fragmentaciónsocioeconómica.

Crece sustancialmente.

Intervención mínima, dado elpredominio del sectorprivado transnacional.

Limitado y concentrado ensegmentos de interés para laselites de poder (ciertossectores de gobierno ytransnacionales), como laseguridad.

Combustibles fósiles ybiocombustibles líquidos (conenfoque no sostenible). Seprioriza el suministro a laselites de poder.

Restringida.

Diversidad, en función de lafragmentaciónsocioeconómica.

Predomina el individualismo;pero se potencia lacolectividad en algunascomunidades vulnerables.

Protección de ciertas áreas deinterés para las elites(bosques, recursos genéticos,playas, etc.)

Predominan los principiosdel comercio justo.

Diversificación económicaderivada de políticassocioeconómicas másequilibradas.

Notable reducción.

Media, pero más efectivaque en otros escenarios, encuanto a la integración delos objetivos económicos,con los sociales yambientales.

Alto, procedente de fuentesdiversas y una orientaciónsectorial más equilibrada.Desarrollo de produccionesmás limpias.

Predominan políticasorientadas a la sosteni-bilidad energética, quepropician la equidad y lacalidad ambiental.

Elevada.

Predomina la diversidadcultural.

Predominan los valores de lacomunidad.

Avances significativos en elmanejo sostenible de estasáreas.

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Fuente: Elaborado por los autores, tomando como referencia el contenido de la tabla 9.1, de: PNUMA, GEO-4 Perspectivas del Medio Ambiente Mundial.Medio Ambiente para el desarrollo, 2007, p. 403-404.

...viene de la página anterior.

Ideas básicas que sustenta hipótesis

2. IDEAS BÁSICAS

Page 242: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

240

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Temas transversales Sostenibilidad Reformas hacia Insostenibilidad Transición haciaRelegada la Sostenibilidad y Escalada de la Sostenibilidad

(SR) (RS) Conflictos (IEC) (TS)Dimensión Económica

Sostenibilidad energética - - + - - - ++ Integración regional - - + - - - ++ Deuda externa ++ ++ +++ +

Dimensión social Equidad - - + - - - ++ Pobreza ++ - +++ - - Seguridad alimentaria - - + - - - ++ Urbanización desregulada +++ - ++ - - - Presiones migratorias por razones ++ - +++ - - -

socioeconómicasDimensión ambiental (retos)

Degradación de la tierra ++ + +++ - Limitaciones en el acceso al agua ++ + +++ -

(cantidad y calidad) Vulnerabilidad ante el cambio climático +++ ++ +++ - - Pérdida de la diversidad biológica y +++ + ++ - -

fragmentación de los hábitat Degradación y contaminación de +++ + ++ -

los sistemas costeros Contaminación del aire ++ - +++ - - -

Fuente: Elaborado por los autores.Nota: +++: Aumento significativo; ++: Aumento medio; +: Pequeño aumento - - - :

Disminución significativa; - - : Disminución media; - : Pequeña disminución.

CUADRO 4.4

Temas transversales en los escenarios regionales

2. IDEAS BÁSICAS

Page 243: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

241

Cabe destacar que no siempre es posible contar contoda la información cuantitativa necesaria parafundamentar las consecuencias de las distintascombinaciones de fuerzas motrices que se sintetiza enlos escenarios. Por tal razón, se ha tratado decomplementar, en la medida de las posibilidades, lasestadísticas aportadas por los modelos empleados conanálisis y argumentos cualitativos. Aún así, estaevaluación de las implicaciones de los cuatro futurosplausibles dista mucho de ser un resultado acabado.

Debe tenerse en cuenta que las implicaciones de loscuatro escenarios básicos no se limitan al ámbitoregional, es decir, repercuten también en otras regionesy a escala global, debido al peso de la región en lasesferas económica, social y ambiental a nivel mundial.

3.1 SOSTENIBILIDAD RELEGADA (SR)

3.1.1 DIMENSIÓN ECONÓMICA

La privatización y la desregulación de los mercadoscontinúan como las fuerzas motrices principales de esteescenario. Los efectos de la desmaterialización de laeconomía, en cuanto a reducción del consumo dematerias primas por unidad de producto, soncompensados en gran medida por el aumento del nivelde actividad económica. En tendencia, el PIB per cápitacrece con dinamismo, pero persisten signos de fragilidad

3. CUATRO FUTUROS

y volatilidad, como telón de fondo. En efecto, la calidaddel crecimiento económico tiende a versecomprometida por el deterioro de las condicionessociales y ambientales.

La estructura económica de la región se mantiene sincambios drásticos en relación al año 2000, y continúacon su alta dependencia de los productos primarios ylas industrias especializadas en la extracción yexportación de recursos naturales (fundamentalmenteen Sudamérica), y de las maquilas o actividadesmanufactureras de ensamblajes (especialmente enMesoamérica y algunos países del Caribe).

El turismo continúa incrementándose en la regióndurante los primeros veinte años del período 2000-2050,principalmente en la cuenca del Caribe. Después de2020 este sector comienza sufrir el impacto acumuladodel deterioro de las condiciones ambientales.

Los flujos de remesas se incrementan de forma dinámica,sobrepasando eventualmente a la Ayuda Oficial alDesarrollo (AOD) y la inversión extranjera directa,sobretodo en Mesoamérica y algunos países del Caribe.

La deuda externa regional permanece elevada, y lospagos por concepto de amortizaciones e intereses de ladeuda, reducen aún más la disponibilidad de recursospara financiar políticas de desarrollo sostenible.Argentina, Brasil, y México contabilizan cerca de dostercios de la deuda total de la región. En el caso de

3. CUATRO FUTUROS

Page 244: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

242

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Mesoamérica y el Caribe, la deuda se eleva,adicionalmente, debido a los impactos del cambioclimático, tales como el incremento de la intensidad deeventos extremos, plagas, entre otros.

La desregulación, la especulación y la consecuentevolatilidad de los mercados financieros refuerzan lavulnerabilidad económica de la región. En estascondiciones resultan recurrentes episodios de crisiseconómicas cada vez más devastadoras, como lasocurridas en México (1995), Sudeste asiático (1997),Brasil (1999), Argentina (2001) y EE.UU (2008). Eventossimilares a la crisis financiera desatada en EE.UU. enseptiembre de 2008 –como resultado de la crecientedesregulación de las finanzas–, tienen un efecto decontagio sobre toda la economía mundial, y ponen demanifiesto una vez más las vulnerabilidades de AméricaLatina y el Caribe ante las crisis económicas originadasdentro y fuera de la región.

El avance de la liberalización comercial se materializaen diversos acuerdos y convenios comerciales, incluidostratados de libre comercio (TLC) con paísesdesarrollados. Esos tratados tienden a comprometer losesfuerzos de integración económica en los esquemastradicionales, que registran una marcada erosión.

La penetración de tecnología foránea se incrementa porla vía de las importaciones y las inversiones extranjerasdirectas, en tanto los países de América Latina y el Caribereducen su capacidad endógena para la investigacióny la innovación. La propiedad intelectual asociada arecursos genéticos y conocimientos tradicionales de lospueblos indígenas es incluida en la economía de

2 Los precios de los alimentos tienden a incrementarse, en la medida en queutilizan productos agrícolas (ej. cereales y otros alimentos) como materiasprimas para obtener biocombustibles a gran escala.

3 Entre otras consecuencias ambientales adversas, tiende a sobre-explotarselos recursos de agua dulce, se refuerza el deterioro de los suelos y seincrementan las pérdidas de la diversidad biológica.

mercado bajo condiciones que favorecen a lastransnacionales.

En el sector energético, la amenaza de agotamiento delas reservas de petróleo de mayor calidad y los elevadosprecios de los hidrocarburos, favorecen el fomento agran escala de los biocombustibles líquidos a partir dematerias primas como el maíz, caña de azúcar, palmaaceitera, soja, entre otras. La acelerada explotación deeste tipo de biocombustibles resulta funcional a losintereses de las corporaciones transnacionales, queintentan obtener este portador energético de formamasiva, incluso a costa de metas sociales (por ejemplo,la seguridad alimentaria2) y ambientales (por ejemplo,la salud de los ecosistemas3), lo que provoca, entre otrasconsecuencias, serias afectaciones para la agriculturade subsistencia.

La producción a escala industrial de biocombustiblesde segunda generación no registra avances sustancialesen la región, pero el auge de los mismos en los paísesindustrializados –sobre todo a partir de 2020– afecta alos exportadores de combustibles de primera generaciónen América Latina y el Caribe.

3.1.2 DIMENSIÓN SOCIO-POLÍTICA

La pobreza tiende a aumentar marcadamente hasta2030-2035, para luego reducirse moderadamente hastamediados de siglo, al calor de ciertas políticasasistencialistas aplicadas por varios gobiernos enrespuesta al agravamiento de los disturbios sociales. Ladesigualdad en la distribución de ingresos se incrementay la capacidad adquisitiva de la mayor parte de lapoblación regional se mantiene muy deprimida. Se alejala posibilidad de cumplir con los Objetivos de Desarrollodel Milenio.

La privatización de los servicios sociales se incrementasostenidamente hasta 2025. En la salud y la educación,el mercado introduce mecanismos innovadores,aunque, estos son menos accesibles para la poblaciónde menor ingreso. La seguridad social pública tiende adesaparecer y se privatiza. Tiende a erosionarse elrespeto a los derechos humanos y laborales. Lastecnologías de información y comunicacionesempleadas facilitan la injerencia y la violación de laprivacidad de los ciudadanos.

3. CUATRO FUTUROS

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IV. ESCENARIOS

243

El crecimiento de la población tiende a desacelerarsedebido a la reducción de la tasa de natalidad; y continúael envejecimiento poblacional. La planificación familiarestá condicionada por las presiones económicas y elelevado costo de la vida. La urbanización se expandede forma descontrolada, básicamente en los suburbiosy zonas conurbadas de las mega-ciudades.

Las presiones migratorias (dentro de la región y hacialos países desarrollados de Norteamérica y Europa) seincrementan debido al deterioro de las condicionessociales, con diferentes patrones subregionales. Lafrontera de Estados Unidos con México se convierte enun área cada vez más sensible, considerando lasrestricciones impuestas por la construcción del murofronterizo por Estados Unidos. Parte de las migracionesen Sudamérica se dan dentro de la misma subregión. ElMercado Común, en el caso de las islas del Caribe,favorece la movilidad de personas entre dichasnaciones.

La corrupción creciente, las debilidades institucionalesy la falta de recursos financieros son elementos queimpactan negativamente en la capacidad de losgobiernos para implementar políticas sostenibles. Lafalta de recursos financieros de los gobiernos, confrecuencia agravada por la incapacidad de uso eficientede los mismos y por la baja presión tributaria sobre lastransnacionales y otros grandes grupos económicos,continúa siendo una restricción importante en laimplementación de políticas sociales ymedioambientales.

3.1.3 DIMENSIÓN AMBIENTAL

Todo deviene mercancía, incluyendo recursos de diversanaturaleza como el agua, la diversidad biológica, lacultura, los servicios ambientales, entre otros. Ladegradación ambiental y las presiones sobre los recursosnaturales continúan creciendo como resultado delincremento de las externalidades ambientales.

La degradación del suelo continúa debido a la expansióndel área dedicada a cosechas (incluida la producción agran escala de materias primas agrícolas para obtenerbiocombustibles líquidos) y a pastos; lo que combinadocon otras múltiples presiones afecta la diversidadbiológica. La deforestación de los bosques, en particularlos nativos se incrementa, lo que provoca una mayorpérdida de biodiversidad y fragmentación de los hábitat.El aprovechamiento no sostenible e incontrolado delsuelo y la diversidad biológica ocasiona el deterioro,en muchos casos irreversible, de los bienes y serviciosque los mismos prestan al hombre.

Aumenta la contaminación química y crece lageneración de desechos por habitante, comoconsecuencia de la urbanización desordenada y laspolíticas orientadas al consumo. La contaminación delaire se incrementa, en sentido general, aunque muchosestándares y mecanismos de mercado tienden almantenimiento del control de emisiones en algunasáreas críticas como Ciudad de México, Santiago de Chiley Sao Paulo.

La degradación y contaminación de las costas seincrementa, a medida que continúa el proceso deurbanización de dichas áreas. También aumentan losimpactos del turismo sobre los sistemas ecológicos.Crece el deterioro ambiental en los ecosistemas marinosy cuencas hidrográficas.

La calidad y cantidad de aguas superficiales ysubterráneas disminuye, fenómeno que tiende aagravarse con la contaminación e intrusión marina,agudizada por el cambio climático, en tanto elcrecimiento económico lleva a una expansión de lademanda de agua y genera presiones crecientes sobrelos recursos hídricos, incluidos conflictos sociales yregionales.

La vulnerabilidad al cambio climático se incrementa,acompañada de una muy limitada capacidad derespuesta, particularmente en los pequeños paísesinsulares del Caribe y áreas de costas bajas de AméricaCentral y del Sur. Ciertos fenómenos extremos comolos huracanes tienden ser más intensos y devastadores.La previsión y percepción acerca de las influenciasclimáticas va cambiando en la medida en que el cambioclimático impacta la infraestructura, la seguridadalimentaria y al sector de los seguros.

3. CUATRO FUTUROS

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244

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3.2 REFORMAS HACIA LA SOSTENIBILIDAD(RS)

3.2.1 DIMENSIÓN ECONÓMICA

Desde comienzos del siglo XXI se introducen nuevaspolíticas y regulaciones para mitigar parcialmente losimpactos adversos de más de dos décadas depredominio de las políticas que daban preferencia a laexpansión de los mercados no regulados.

Los ingresos presupuestarios aumentan como resultadode un sistema de recaudación fiscal diferenciado y másefectivo; y la pequeña empresa resulta favorecida conapoyos financieros del gobierno. Se introducen políticasfiscales de corte keynesiano para aliviar los problemassociales y ambientales más serios; aunque persistentensiones y límites para un avance significativo en estadirección debido al enfoque de mercado que aúnpredomina en este escenario, y a los efectos adversosde la deuda externa en muchos de estos países.

La estructura económica regional cambia gradualmentehacia producciones de mayor valor agregado yactividades de servicios. El crecimiento económicoresulta dinámico y la implementación de políticasorientadas a una mayor sostenibilidad social y ambientaltiene un impacto positivo –aunque aún limitado– en lacalidad del crecimiento a más largo plazo, ya que sepropicia un mayor grado de educación y calificaciónde la fuerza de trabajo y se cumplen algunas metasambientales.

3. CUATRO FUTUROS

El turismo se incrementa considerablemente y, aunquesigue predominando el turismo de sol y playa, seimpulsan algunas modalidades turísticas menosagresivas para el medio ambiente, como el turismo desalud, el de eventos y el cultural, entre otras variantes.Persisten algunos conflictos entre el turismo y otrasactividades económicas, como la pesca. Los esfuerzospara regular el turismo caribeño se ven socavados acausa de sus costos, en un contexto de crecientecompetencia entre los estados insulares. También, eldesarrollo del turismo de crucero obstaculiza losesfuerzos reguladores.

Las tendencias financieras globales continúan afectandoel desarrollo económico, social y ambiental en la región.Se perfila un panorama mixto en relación con la deudaexterna, que sigue siendo un serio obstáculo para elcrecimiento económico, principalmente en los paísesmás pobres, en la medida en que los pagos por conceptodel servicio de la deuda (amortizaciones e intereses)limitan considerablemente el financiamiento de laspolíticas sociales y ambientales.

Se registra un mayor empleo de las capacidadescientíficas y tecnológicas en algunas áreas priorizadasy se experimenta un fortalecimiento de las institucionesen esta esfera. Los gobiernos comienzan a reconocer elpapel de las investigaciones aplicadas en la búsquedade nuevas fuentes de ingreso. Consecuentemente, lascapacidades de Investigación y Desarrollo seincrementan a nivel local y regional, así como latransferencia de tecnología dentro de las subregiones;aunque la equidad en cuanto al acceso a la tecnologíacontinúa siendo un importante desafío.

Hay más demanda de información científica por partede los tomadores de decisiones. Algunas institucionesregionales y nacionales fomentan la transferencia detecnología avanzada, y disminuye la fuga de cerebros.

La integración regional se revitaliza en los diversosacuerdos y organizaciones, tales como el MercadoComún del Sur (MERCOSUR), el Sistema de IntegraciónCentroamericana (SICA), la Comunidad Andina deNaciones (CAN), la Unión de Naciones Suramericanas(UNASUR), la Asociación de Estados del Caribe (AEC),la Comunidad del Caribe (CARICOM), la Organizacióndel Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA), y laAlternativa Bolivariana para las Américas (ALBA),incluyendo nuevos convenios entre los esquemasintegracionistas existentes o fuera de ellos.

Los altos precios de los recursos energéticos persisten,pero se impulsan iniciativas regionales de cooperación,conexión, e integración energéticas, que incluyen la

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IV. ESCENARIOS

2453. CUATRO FUTUROS

transferencia de tecnologías para fomentar el ahorro deenergía y promover las de fuentes renovables, con laactiva participación de algunos países productores dehidrocarburos de la región como Venezuela, Brasil,Ecuador, Trinidad y Tobago y Bolivia.

3.2.2 DIMENSIÓN SOCIO-POLÍTICA

Se observa una menor disparidad entre los países entérminos de desarrollo socioeconómico y nivel deingreso per cápita, comparado con los inicios del sigloXXI. Esto se debe a mejores políticas de distribución delingreso dentro de los países y al aumento de los gastossociales en la mayor parte de la región.

Avanza la aplicación de políticas encaminadas al logrode los Objetivos del Desarrollo del Milenio (ODM) enmateria de salud, educación y alivio de la pobreza.Mediante políticas de distribución del ingreso, lareducción de la pobreza se hace un objetivo alcanzable.Sin embargo, la disminución a la mitad del porcentajede personas que viven en pobreza extrema –consideradocomo uno de los principales ODM, con efectos sobrela dinámica de las metas restantes–, sólo se logra despuésde 2020.

La cobertura de seguridad social mejora, pero persistenbrechas sobre todo en el caso del sector informal. Ladiscriminación de la mujer se reduce, se tiende a lainclusión de los grupos étnicos y sociales marginados,y se avanza en cuanto al respeto a los derechoshumanos. La calidad de los servicios de agua ysaneamiento mejora, aunque continúa siendo unimportante reto.

El crecimiento poblacional se desacelera, lo que serelaciona al hecho de que la planificación familiar estácondicionada por una combinación de presioneseconómicas y políticas dirigidas a este fin. Se mantieneel proceso de urbanización, sobre todo en ciudadesmedianas y en áreas suburbanas, pero tiende a ser menoscaótico. Son introducidas algunas políticas paraenfrentar el progresivo envejecimiento poblacional, peropersisten algunos problemas, como la falta de unefectivo sistema de pensiones.

Como las tensiones sociales y económicas disminuyen,las presiones migratorias se reducen. Estecomportamiento se ve favorecido por la adopción demejores políticas ambientales y de redistribución delingreso. No obstante, persisten aquellos procesosmigratorios condicionados por la ocurrencia de eventosclimáticos extremos.

La capacidad institucional en la región se refuerza, loque se traduce en avances significativos en laimplementación de políticas públicas transparentes yun aumento significativo de la coordinación entregobiernos nacionales y gobiernos locales. Avanza unproceso de descentralización, en un marco de mayorintegración nacional y regional. Se potencia la creaciónde redes de organizaciones sociales.

Las estructuras administrativas se desarrollan bajo elprincipio de la eficacia en la implementación depolíticas públicas. Los gobiernos juegan un papel másactivo en la aplicación de políticas de desarrollo quesatisfacen las necesidades de las mayorías. Lademocracia es promovida mediante diversos canalesde participación a los distintos niveles, y disminuye lacorrupción.

La cultura es reconocida no sólo por sus valorescomerciales sino también por sus valores sociales. Lanoción de «identidad nacional» se refuerza mediantepolíticas sociales que consideran aspectos culturales yétnicos, y se potencian las culturas regionales.

3.2.3 DIMENSIÓN AMBIENTAL

Los gobiernos y las sociedades tienen mayor concienciade la urgencia de los problemas ambientales, y de lanecesidad de implementar políticas sociales y

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246

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. CUATRO FUTUROS

ambientales que sean efectivas y justas. La protecciónambiental es considerada como uno de los temasprioritarios por los gobiernos para sus programasorientados a mejorar la equidad, a partir delreconocimiento del vínculo con temas como el accesoa la energía, al agua potable y la calidad de vida. Seregistra un avance en la educación ambiental.

Aunque la sostenibilidad ambiental con una perspectivaintegradora es un objetivo, no constituye una prioridaden este contexto y, por tanto, los objetivos de la políticaambiental no están referidos a todo el ciclo de vida delos sistemas productivos con un enfoque holístico.Consecuentemente, las políticas concernientes a losproblemas ambientales aún consisten en accionesaisladas frente a ciertas externalidades, como reaccióna las presiones públicas, y no son resultado de unaplanificación estratégica integrada.

Los estándares ISO, regulaciones voluntarias y esquemasde certificación son utilizados en mayor grado, comoparte de los esfuerzos por cumplir ciertas metasinternacionales de calidad ambiental, y de esta formaasegurar un mejor acceso a los mercadosinternacionales.

Se incrementa la aplicación de instrumentoseconómicos y regulaciones para controlar lacontaminación y para el manejo de residuos sólidos,principalmente en aquellas áreas con bajos estándaresambientales. Consecuentemente, se registranreducciones significativas en la contaminación del airey de las aguas en áreas urbanas priorizadas; aunquepersisten los problemas en el manejo sostenible de losrecursos naturales.

Se logra una reducción moderada de la degradaciónde los suelos, la deforestación y la fragmentación delhábitat, debido a mejores regulaciones y la aplicaciónde mecanismos para hacerlas cumplir. Aún así, ladiversidad biológica continúa declinando,principalmente como resultado del cambio climático yde las continuas expansiones agrícola y ganadera.

Surgen iniciativas regionales de negociación para lasolución de conflictos relativos a las cuencashidrográficas compartidas, particularmente enSudamérica. El incremento de la calidad de vida de lapoblación es acompañado por una expansión sustancialde los servicios de agua suministrados al sectorresidencial y comercial.

La demanda de agua de los sectores agrícola e industrialtambién aumenta, debido a una expansión de laproducción, pero este aumento es compensado, en gran

medida, con inversiones en nuevas tecnologíasahorradoras de este recurso, lo que se traduce en unincremento significativo en la eficiencia en el uso delagua, principalmente en la agricultura.

A pesar de los grandes esfuerzos realizados para protegerlos ecosistemas acuáticos, gran cantidad de aguasresiduales no tratadas son descargadas en las aguassuperficiales, lo que provoca un deterioro de la calidaddel agua en muchas zonas.

El estímulo a las fuentes de energía renovable tiende areducir la vulnerabilidad de la región ante la volatilidadde los precios energéticos, al tiempo que disminuye lautilización de combustibles fósiles. El desarrollo de losbiocombustibles líquidos producidos a partir dealimentos y otras materias primas agrícolas es controladoen cierta medida, para reducir sus impactos sociales yambientales adversos, pero diversas organizaciones nogubernamentales y movimientos sociales mantienen unaposición de alerta ante esta opción energética.

Algunos gobiernos de la región, sobre todo en paísescon mayores potencialidades tecnológicas, estimulanla Investigación y Desarrollo en tecnologías avanzadaspara la utilización de bioenergía en sus diversas formas;pero la producción a escala industrial debiocombustibles de segunda generación no registra aúnavances significativos en la región.

Aumenta la concientización sobre los impactos delcambio climático y, por tanto, se registran mayoresesfuerzos de los gobiernos para incrementar lacapacidad de adaptación.

El desarrollo en áreas costeras continúa con finesturísticos y como resultado de nuevas urbanizaciones,lo que se traduce en una mayor degradación de lascostas y una creciente vulnerabilidad de poblacionesante los impactos del cambio climático, especialmenteen el Caribe y Mesoamérica. No obstante, algunasacciones son adoptadas para la protección de las zonascosteras, como la protección de manglares en zonasvulnerables; entre otras medidas que contribuyen a laadaptación al cambio climático.

Las tecnologías de adaptación al cambio climático enlas áreas de mayor prioridad son promovidas. En estesentido, se destacan las tecnologías de la informaciónpara monitoreo climático regional, nacional, y local;las energéticas; las empleadas para el manejo del aguay la agricultura alternativa; y las tecnologías deproducción más limpias. Además, son introducidasnuevas regulaciones en cuanto al uso de labiotecnología.

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IV. ESCENARIOS

2473. CUATRO FUTUROS

3.3 INSOSTENIBILIDAD Y ESCALADA DECONFLICTOS (IEC)

3.3.1 DIMENSIÓN ECONÓMICA

Es un contexto regional marcado por la fragmentaciónsocio-económica y política. El estilo de desarrollopredominante prioriza al mercado y exacerba losproblemas sociales y medioambientales. En estecontexto altamente polarizado, los gobiernos, las eliteslocales y las corporaciones ejercen el controlmonopólico del mercado y deciden los precios. Laproducción de materias primas permanece como elsector económico más importante en la región,especialmente en Sudamérica, y la deuda externa seincrementa aceleradamente con un impacto contractivoen las políticas fiscales.

La región experimenta una marcada pérdida dedinamismo en el PIB, en condiciones de gran fragilidad,volatilidad y crecientes disturbios sociopolíticos.También se registra un dramático incremento de laeconomía informal, especialmente en Mesoamérica yalgunos países andinos.

Las investigaciones básicas y aplicadas se debilitanconsiderablemente, con una concentración de lasmismas en áreas priorizadas para las elites. Lainvestigación científica se desarrolla al interior de lascorporaciones, y en algunos centros especializadosubicados en países ricos. Los conflictos relacionadoscon los derechos de propiedad intelectual aumentan.

En el sector energético, el uso intensivo de recursosfósiles y la tendencias al agotamiento de las reservas depetróleo de mayor calidad, así como las mayores

tensiones y crecientes conflictos por el control de lasreservas remanentes de hidrocarburos, favorece elfomento a gran escala de la producción debiocombustibles líquidos, en función de los interesesde las corporaciones transnacionales y las elites locales.

3.3.2 DIMENSIÓN SOCIO-POLÍTICA

La violencia se convierte en un fenómeno endémico,exacerbado y alimentado por una escalada de conflictosregionales, étnicos y religiosos, que se incrementaconsiderablemente. Las elites gubernamentales ycorporativas sienten que sus intereses se encuentranamenazados, por lo que establecen fuertes alianzas entreellas y con las fuerzas militares, con el objetivo depreservar sus privilegios. Como las condiciones deseguridad se deterioran, los mecanismos de controlbasados en la represión proliferan. Consecuentemente,las tecnologías militares y policiales son desarrolladasy perfeccionadas.

Se genera una gran fragmentación socioeconómica conla aparición de «islas de riqueza» en un «mar depobreza». La pobreza y la inequidad tienden aincrementarse sustancialmente y, consecuentemente, sediluye la posibilidad de avanzar en el cumplimiento delos Objetivos de Desarrollo del Milenio.

La población crece de forma dinámica hasta mediadosdel siglo XXI, sobre todo en las zonas más pobres, perose espera una drástica desaceleración del crecimientoe incluso la posibilidad de una reducción absoluta dela población en el período post 2050 ya que, entendencia, la mortalidad tiende a elevarse, comoresultado del acelerado deterioro de los indicadores desalud y la proliferación de epidemias.

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248

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Las presiones migratorias aumentan considerablementeen las áreas limítrofes como la frontera de EstadosUnidos con México. La legislación migratoria se vuelvemás restrictiva, sin embargo, las elites mantienen granmovilidad y promueven acuerdos para facilitar el flujode trabajadores cuando lo requieren.

Las instituciones se debilitan y existe una menorcapacidad de implementar políticas coherentes. Lospolíticos incrementan su participación en los negocios,y fenómenos como el nepotismo, la corrupción y elclientelismo se expanden.

Las elites favorecen una cultura de consumo crecientey tienden a concentrarse en asentamientos urbanosaislados y protegidos. Como la supervivencia se vuelvecrucial para sectores pobres de la población, se da unresurgimiento de creencias religiosas. La sociedadgenera subculturas, especialmente entre los excluidos,y los valores familiares y comunitarios se refuerzan alinterior de estos subgrupos. La movilidad social resultamuy limitada.

3.3.3 DIMENSIÓN AMBIENTAL

No hay preocupación por la sostenibilidad ambiental,debido a que no constituye una prioridad para las elites,y los sectores excluidos tienen otras preocupaciones másapremiantes, como aquellas relacionadas con lasupervivencia. El control y la apropiación de recursosnaturales son asegurados por las elites de poder y lasgrandes corporaciones, al tiempo que se incumplenbuena parte de los acuerdos internacionales en materiaambiental.

3. CUATRO FUTUROS

La degradación ambiental se agrava. Sin embargo,aquellos recursos naturales de interés para las elites ylas corporaciones transnacionales, como áreas forestalesclave en Sudamérica y Mesoamérica y los abundantesrecursos acuíferos del Cono Sur, son preservados. Fuerade las áreas protegidas, la deforestación aumenta, entanto la pérdida y fragmentación de hábitat y ladesaparición de especies se aceleran.

En estas condiciones la producción masiva debiocombustibles líquidos, en función de los interesesde grandes corporaciones transnacionales y las eliteslocales, provoca graves impactos sociales (por ejemplo,el agravamiento de la crisis alimentaria) ymedioambientales (por ejemplo, serias afectaciones ala salud de ecosistemas frágiles), a partir de fórmulas nosostenibles de producción y empleo de los mismos. Estafiebre de los biocombustibles líquidos incentiva el usode organismos genéticamente modificados y seintroducen especies de plantas invasoras de altaproductividad, que provocan serias afectaciones socio-ambientales.

Se registra un incremento de la frecuencia e intensidadde los eventos extremos y la degradación del suelo seintensifica en numerosas áreas. Aunque existen enclavescosteros preservados, en general, la degradación costerase incrementa, reduciendo notablemente los serviciosofrecidos por estos ecosistemas.

La contaminación de las aguas superficiales ysubterráneas empeora debido al incumplimiento de lasregulaciones nacionales. La precipitación en áreas áridasy semiáridas decrece, lo que unido al consumo crecientede agua, presiona sobre la disponibilidad de recursosacuíferos sobre todo en esas zonas. El número depersonas viviendo en cuencas hidrográficas con escasezsevera de agua y el volumen de las aguas residuales notratadas, que son descargadas en los ríos, aumentannotablemente.

3.4 TRANSICIÓN HACIA LA SOSTENIBILIDAD(TS)

3.4.1 DIMENSIÓN ECONÓMICA

La desmaterialización de la economía avanza y seregistra un mayor énfasis en el desarrollo socio-económico local. El PIB per cápita crece de formadinámica y sostenida, como resultado combinado delimpacto positivo de las inversiones sociales yambientales sobre el crecimiento económico, y ladesaceleración del crecimiento poblacional.

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IV. ESCENARIOS

2493. CUATRO FUTUROS

En el sector agrícola se da prioridad a la evaluación delpotencial de tierras y a la planificación del uso del sueloa nivel de ecosistemas. Se generaliza un enfoquesostenible de la agricultura. El desarrollo agrícola no esregido por las fuerzas del mercado, sino por un enfoquemás integrador que considera como prioridades laseguridad alimentaria y la reducción de lasexternalidades por diversas vías como el fomento de laagricultura orgánica y cosechas apropiadas. Este modelode desarrollo permite una coexistencia de la vida ruraly urbana. Las prioridades de desarrollo y las decisionesasociadas se basan en acciones planificadas.

Se desarrollan modalidades de turismo menos agresivascon el medio ambiente, particularmente en el Caribe. Elturismo global y local sigue creciendo, pero el mercadoturístico está más diversificado, y no se genera unaconcentración y sobrecarga de turistas en pocos destinoscomo ocurría a inicios del siglo XXI. La preferencia delos consumidores cambia hacia paquetes de una escalamás pequeña, y como resultado, la presión sobre áreascosteras debido al desarrollo del turismo se reduce.

El progreso hacia una mayor integraciónsocioeconómica alcanza particular vigor en áreas clavecomo el sector de la energía, sobre la base de nuevosesfuerzos regionales y subregionales, similares a lainiciativa de Petrocaribe, que incluyen proyectosconjuntos para fomentar las fuentes renovables.

En general, las inversiones para desarrollar las fuentesde energías alternativas y mejorar la eficiencia energéticason significativas, y los conflictos sociales provocadospor la elevación de precios de la energía disminuyen.

La producción de biocombustibles se rige por unenfoque precautorio y criterios éticos, que ponderanlos aspectos sociales y ambientales con la importanciaeconómica que esa actividad tiene para algunos paísescomo Brasil. Varios países del área promueven laInvestigación y Desarrollo en tecnologías avanzadaspara la utilización de bioenergía en sus diversas formas;pero la producción a escala industrial debiocombustibles de segunda generación resulta aúnlimitada en la región.

Hay un mejor aprovechamiento de los resultados de laciencia y la tecnología en áreas de prioridad, con unenfoque precautorio. Aún presionados por ciertosdesafíos socioeconómicos, los gobiernos priorizan lasinvestigaciones aplicadas, en busca de nuevas fuentesde ingresos.

Se potencia el papel de la ciencia para respaldar la tomade decisiones relacionadas con el desarrollo sostenible,

y se registran avances significativos en la adopción depolíticas basadas en el desarrollo científico. No obstante,la región continúa dependiendo, en buena medida, delapoyo y de las tecnologías del Norte.

Se promueve un tratamiento equitativo a la transferenciade tecnología. Se prioriza la innovación, segúnnecesidades locales y regionales, mediante el empleode tecnologías apropiadas; y son identificados nichosde desarrollo, con el respaldo de la investigacióncientífica. La cooperación horizontal, en materia deciencia y tecnología, se fortalece, y varios países jueganun papel clave en este proceso como son los casos deBrasil, México, y Venezuela.

Las áreas priorizadas en la Investigación y Desarrolloson la adaptación ante los impactos del cambioclimático (eventos extremos, elevación del nivel del mar,etc.) y la generación de tecnologías para la mitigación,acceso a la información, comunicación, nuevosmateriales, biotecnología, energía, agua, agriculturaalternativa, salud humana y ambiental, tecnologías máslimpias (producción más limpia, reducción decontaminación y de desechos, entre otros.) ynanotecnologías. También se estimula el desarrollo denuevas metodologías de planificación integrada,evaluación integrada de recursos naturales y ecosistemase investigación social.

No se favorece el incremento de los gastos militares, loque libera recursos adicionales para inversiones confines sociales y ambientales. En la medida en quemejoran las condiciones socioeconómicas en la mayoríade los países del área, la deuda externa se ubica enniveles manejables, es decir pasa a representar

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250

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

proporciones muy bajas con relación al PIB y a losingresos por exportación, lo que facilita elfinanciamiento de inversiones orientadas al desarrollosostenible.

3.4.2 DIMENSIÓN SOCIO-POLÍTICA

Se registra un mayor énfasis en el desarrollo humano.Se da un incremento en la satisfacción de lasnecesidades elementales, sin poner en peligro lapreservación de los recursos naturales. Se registra unavance notable en la aplicación de políticasencaminadas al logro de los Objetivos del Desarrollodel Milenio (ODM) en materia de salud, educación yalivio de la pobreza y promoción de la igualdad entrelos géneros.

La educación, planificación familiar, diseminación dela información, y los servicios de salud, entre otrasoportunidades, son reforzados en aquellos países deAmérica Latina y el Caribe que todavía manteníanelevadas tasas de crecimiento demográfico a comienzosdel siglo XXI, de modo que disminuye la brechasocioeconómica entre estos estados y el resto de laregión hacia 2050.

Se mantienen las diferencias geográficas en el nivel deproducción y las actividades comerciales, con losmenores niveles de ingreso per cápita ubicados enCentroamérica y la región andina. Sin embargo, se

ponen en práctica políticas de redistribución del ingresoy hay un aumento significativo de los gastos sociales.

La equidad en la distribución del ingreso alcanza el nivelmás alto en la historia, y un factor que contribuye a estatendencia es la aplicación de un sistema de recaudaciónfiscal diferenciado y más justo. Se logra una reducciónsignificativa del sector informal, y se aplicanmecanismos para garantizar equidad en la distribucióny el uso de la tierra.

La disminución de la pobreza es significativa, pero comopromedio regional, la reducción a la mitad delporcentaje de personas que viven en pobreza extremano se logra hasta 2018 aproximadamente; de maneraque no se cumple el primero de los ODM, lo que a suvez influye en el comportamiento y la dinámica de lasrestantes metas.

Existen mayores garantías para el respeto a los derechoshumanos, y las mujeres están cada vez más integradasa los procesos económicos, sociales y políticos.

El crecimiento demográfico se desacelera, laplanificación familiar se realiza en función del bienestarde las personas y se reducen las presiones migratorias.El tamaño medio de la familia se estabiliza en un nivelque tiende a contrarrestar el envejecimiento aceleradode la población. La migración es, más bien, una cuestiónde opción y no una necesidad. Los países reducen lasbarreras para que quien desee moverse, pueda hacerlode un país a otro dentro de la región.

La urbanización continúa, preferentemente, en ciudadesmedianas y pequeñas y las políticas urbanas sediversifican. Las ciudades se desarrollan tomando encuenta la planificación y una visión de largo plazo.

Se logra una estructura más balanceada para la tomade decisiones y los partidos políticos tienden a ser másrepresentativos de los intereses sociales, lo que favorecela democracia y revitaliza los canales de participaciónciudadana. La coordinación entre gobiernos nacionalesy locales se incrementa; además, las autoridades localestienen mayores prerrogativas y reciben recursos encorrespondencia con sus responsabilidades.

Tiene lugar una reestructuración y revitalización de lasorganizaciones regionales, tanto políticas, comoeconómicas y culturales. Se produce un incremento delacceso a información pública, así como de sutransparencia. Las organizaciones civiles tienencapacidad representativa en la vida política para laformulación de políticas ambientales.

3. CUATRO FUTUROS

Page 253: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

251

3.4.3 DIMENSIÓN AMBIENTAL

Se aprecian avances significativos en la solución deproblemas ambientales. Se alcanza un punto deequilibrio dinámico en el manejo de los recursosnaturales. Se aplican instrumentos económicos en laregión tendientes a garantizar el pago de serviciosambientales a nivel local (ejemplo, el agua), mientrasla comunidad internacional paga por serviciosambientales ofrecidos por la región que son de beneficioglobal. También aumenta el empleo de instrumentoseconómicos para controlar la contaminación y ladegradación ambiental. Los recursos locales sonadministrados por sus respectivas comunidades y seadoptan decisiones y regulaciones regionales para laprotección de servicios y bienes que aportan beneficiosglobales.

La dimensión de la sostenibilidad es adoptada,generalmente, para el diseño de las estrategias dedesarrollo. Los gobiernos adoptan políticas concretaspara impulsar la investigación aplicada, en busca de lasostenibilidad de sus modelos de desarrollo; y ponenen práctica sistemas de monitoreo y alerta temprana enmateria de conservación, preparación ante catástrofesnaturales y salud. Se registra un mayor flujo de recursospara el desarrollo sostenible. Se estimula el uso deecosistemas naturales, en lugar de tecnologíasdesarrolladas por el hombre (ej. fomento de bosquesen lugar de plantas de tratamiento de agua) como unapráctica sostenible, que supone un importante cambioen la mentalidad socio-económica.

Se observan cambios notables en los patrones deconsumo, los cuales se basan en valores culturales yson promovidos a través de campañas deconcientización.

Aunque persisten algunos conflictos relacionados conel control de recursos naturales estratégicos –como sonlos casos de los recursos hídricos, el petróleo y labiodiversidad en zonas fronterizas– los gobiernos tienencapacidad real para prevenirlos y manejarlos. Searticulan mecanismos eficaces para garantizar un accesojusto y equitativo a recursos compartidos.

Los esfuerzos especiales llevados a cabo para introducirla «educación relacionada con el recurso agua» en lasescuelas, desde edades tempranas, son exitosos ycondicionan un marcado cambio en los patrones deuso del aguapor parte de la población. Los gobiernoslocales y los grupos empresariales también lanzancampañas para estimular el ahorro de agua y desarrollantecnologías con este fin. Gracias al efecto combinado

de estos esfuerzos, se desacelera el crecimiento en elconsumo de agua, a pesar de la dinámica delcrecimiento económico y poblacional.

Se aplican mecanismos de recuperación, rehabilitacióny reconstrucción de los ecosistemas degradados,especialmente en países productores de minerales comoMéxico, Venezuela, y países andinos o áreas afectadaspor la deforestación en Mesoamérica y Sudamérica. Sesustituye progresivamente el uso de agroquímicos porsustancias orgánicas y se aplican controles más eficientesde plagas y de enfermedades, apoyados por el desarrollobiotecnológico.

Se registra una mejoría significativa en el manejo delsistema de áreas protegidas de la región, con lo que sereduce la pérdida y la fragmentación de hábitat clave yse garantiza, en gran medida, la integración y laconectividad de los corredores biológicos, tanto enecosistemas terrestres como marítimos y de agua dulce.Se desarrolla una red bien estructurada de bancosgenéticos a nivel regional, como parte de una red global.Consecuentemente, la pérdida de diversidad biológicase contrae, en sentido general; aunque algunas especiesaltamente vulnerables a fenómenos como el cambioclimático y al desarrollo agropecuario aún muestranafectaciones sensibles.

Se crean mecanismos para proteger la propiedadintelectual del conocimiento tradicional autóctono ypara regular el acceso a recursos genéticos de un modojusto y equitativo, con una destacada participación dealgunos países sudamericanos. Además, se reduceconsiderablemente la biopiratería, a partir de una ampliaaplicación de la Convención de Naciones Unidas sobreDiversidad Biológica (CDB).

Hay un mayor cumplimiento de las convenciones yprotocolos ambientales internacionales. Además, laAgenda Local 21 es puesta en práctica, tanto en loscompromisos como en el desarrollo de indicadores útilespara su cumplimiento, sobre todo a nivel de ciudades,con amplia participación de la sociedad civil.

Se elabora una Agenda 21 regional para la CumbreMundial de «Johannesburgo + 20» (2022), donde sehace referencia a las principales prioridades regionalescon relación a la equidad, el acceso a la energía y eldesarrollo sostenible. Este documento programáticoregional se basa en las prioridades discutidas por el Forode Ministros de Medio Ambiente de América Latina yel Caribe durante su XXIII Reunión en el noviembre de2021.

3. CUATRO FUTUROS

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252

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Las consecuencias que se derivan de los cuatroescenarios básicos abarcan tanto a las áreassocioeconómicas, como a la esfera ambiental; es decir,impactan las áreas fundamentales del desarrollosostenible durante la primera mitad del siglo XXI.

4.1 IMPLICACIONES SOCIOECONÓMICAS DELOS ESCENARIOS

En el plano socioeconómico, las implicaciones de loscuatro escenarios se ilustran con el análisis de ladinámica de un conjunto de indicadores básicos comola población y su crecimiento, el grado de urbanización,el PIB per cápita, los gastos del gobierno en áreasfundamentales del desarrollo humano, como educacióny salud; la inequidad y la pobreza; la malnutricióninfantil; los gastos militares; los flujos de remesas; lademanda de energía, y la población afectada por elestrés hídrico.

La población de América Latina y el Caribe creceen los cuatro escenarios presentados, aunque contendencia a desacelerarse. La mayor población hacia2050 se registra en el escenario de Insostenibilidady escalada de conflictos (IEC), donde se alcanza lacifra de 786 millones –un aumento del 42% conrespecto a 2005–, como consecuencia de una mayortasa de natalidad en los segmentos poblacionalesmás pobres.

4. IMPLICACIONES DE LOS CUATRO FUTUROS

La menor población hacia finales del períodoconsiderado se registra en el escenario de Transiciónhacia la Sostenibilidad (TS), es decir, un 7% menosque en IEC. Este comportamiento responde, en granmedida, al impacto sobre la tasa de natalidad de lasinversiones realizadas en educación ydiversificación de los roles de la mujer en la sociedad(ver el Gráfico 4.1).

En cuanto al grado de urbanización, cabe destacarque el crecimiento poblacional es acompañado deun incremento significativo de la población urbanaen todos los escenarios proyectados para AméricaLatina y el Caribe. Hacia 2050, la población urbanallega a representar alrededor del 78% de lapoblación total en los casos de los escenarios deSostenibilidad relegada (SR), Reformas hacia lasostenibilidad (RS) y Transición hacia lasostenibilidad (TS), aunque con diferenciascualitativas de este proceso en cada una de estastres trayectorias: proceso descontrolado en SR,menos caótico en RS y más equilibrado en TS. En elcaso de Insostenibilidad y escalada de conflictos(IEC) alcanza un 77%; con un agravamiento notoriode las condiciones socioeconómicas y ambientalesen las ciudades. (ver el Gráfico 4.2).

500

550

600

650

700

750

800

850

2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

SR RS IEC TS

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por Internacional Futures – IFs).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.1

América Latina y el Caribe: Población total (En millones de habitantes)

4. IMPLICACIONES

Page 255: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

253

71

72

73

74

75

76

77

78

79

2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

SR RS IEC TS

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por Internacional Futures – IFs).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.2

América Latina y el Caribe: Población urbana (En porcentaje de la población total)

Hacia 2050, el PIB per cápita se eleva en todos losescenarios, más que triplicándose en relación al2005, para los escenarios de Sostenibilidad relegada(SR), Reformas hacia la sostenibilidad (RS) yTransición hacia la sostenibilidad (TS). Mientras enSR esta tendencia expresa la prioridad que se asignaen ese contexto al crecimiento económico, que nodeja de ser frágil y volátil; en RS –y en mucho mayorgrado en TS– el crecimiento de este indicador reflejael impacto positivo de las inversiones sociales yambientales sobre la dinámica económica.

El escenario de Insostenibilidad y escalada deconflictos (IEC), muestra los menores niveles decrecimiento. En efecto, el dinamismo de la economíaen este escenario tiende a verse comprometido porel deterioro de los indicadores sociales yambientales, y ante la posibilidad de crecientesconflictos y disturbios sociales que suelen derivarsede esta situación (ver el Gráfico 4.3).

SR RS IEC TS

0

5

10

15

20

25

30

2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por Internacional Futures – IFs, expresados en dólares PPA de 2000).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.3

América Latina y el Caribe: PIB per cápita (En miles de dólares, 2000)

4. IMPLICACIONES

Page 256: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

254

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

El monto de gastos de gobierno en salud yeducación, como porcentaje del PIB en AméricaLatina y el Caribe, mantiene una evolución crecienteen los cuatros escenarios presentados, sin embargo,su dinámica difiere notablemente en cada uno deellos. El escenario de Transición hacia laSostenibilidad (TS), registra los mayores niveles degasto en salud y educación a finales del período

(10,4% del PIB en 2050), seguido del escenario deReformas hacia la sostenibilidad (RS) (10,3%). Losescenarios de Sostenibilidad relegada (SR) eInsostenibilidad y escalada de conflictos (IEC)muestran los niveles más bajos de este indicadorpara mediados del siglo XXI, con un 9,1% y un 9,7%del PIB respectivamente (ver el Gráfico 4.4).

Hacia 2050, la población regional que vive bajocondiciones de pobreza muestra los niveles máselevados en Insostenibilidad y Escalada de Conflictos(IEC) y en Sostenibilidad Relegada (SR). Elcrecimiento más rápido de la pobreza ocurre hasta2035 en IEC; mientras que en SR tiene lugar hasta2030 aunque con una dinámica inferior a la de IEC.A partir de 2030-2035 el número de pobres sereduce tanto en SR como IEC, aunque en el primercaso de forma más notable. Este comportamiento,hacia la parte final del período, es el resultado deciertas acciones –sobre todo de corte asistencialista–para mitigar la pobreza, emprendidas por variosgobiernos ante el agravamiento de los problemassociales y el potencial de nuevos conflictos a ellosasociados. Aún así, el número de pobres en IEC amediados de siglo supera en un 10% al nivel de2005.

En Reformas hacia la sostenibilidad (RS) y enTransición hacia la sostenibilidad (TS) este indicadormuestra tendencias declinantes, de manera que elnivel de pobreza registrado en 2050 muestra unacaída del 76% en RS y de 83% en TS, con relacióna 2005 (Gráfico 4.5).

7

7,5

8

8,5

9

9,5

10

10,5

11

2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

SR RS IEC TS

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por Internacional Futures – IFs).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.4

América Latina y el Caribe: Gastos del gobierno en salud y educación(En porcentaje del PIB)

4. IMPLICACIONES

Page 257: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

255

SR RS IEC TS

0

50

100

150

200

250

300

2005 2015 2025 2035 2045

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Datos generados por el Equipo Regional GEO-ALC a partir de los resultados de Internacional Futures– IFs).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.5

América Latina y el Caribe: Población que vive en condiciones de pobreza(Para 18 países) (En millones de personas)

La evolución de la cantidad de personas que vivenen condiciones de indigencia muestra trayectoriasmuy parecidas a las correspondientes al número depobres en el período 2005-2050 para los cuatroescenarios, con un mayor deterioro en Insostenilidady escalada de conflictos (IEC) –con un incrementodel 43% en 2050 con relación a 2005–, y unamejoría muy significativa en Transición a lasostenilidad (TS) con una contracción del 94% enese período (Gráfico 4.6).

La equidad, medida por el Coeficiente Gini, muestrauna mejoría en Transición a la sostenibilidad (TS),como resultado de las políticas orientadas a favorde una mejor distribución del ingreso; se mantienerelativamente estable en Reformas hacia lasostenibilidad (RS); y empeora en SostenibilidadRelegada (SR) y, de forma más notoria, enInsostenibilidad y escalada de conflictos (IEC) debidoa la creciente polarización social que caracteriza aeste escenario (Gráfico 4.7).

0

20

40

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100

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2005 2015 2025 2035 2045

SR RS IEC TSFuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Datos generados por el Equipo Regional GEO-ALC a partir de los resultados de Internacional Futures – IFs).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.6

América Latina y el Caribe: Población que vive en condiciones de indigencia(Para 18 países) (En millones de personas)

4. IMPLICACIONES

Page 258: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

256

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

SR RS IEC TS

0,40

0,45

0,50

0,55

0,60

0,65

0,70

2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Datos generados por el Equipo Regional GEO-ALC a partir de los resultados de Internacional Futures – IFs).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.7

América Latina y el Caribe: Coeficiente de GINI(Promedio ponderado para 18 países)

La malnutrición infantil hacia 2050 disminuyeaceleradamente en los escenarios de Transiciónhacia la sostenibilidad (TS) y de Reformas hacia lasostenibilidad (RS). En dichos escenarios, lamalnutrición infantil alcanza 4,9% y 5,2% del totalde niños de región, respectivamente, en 2050, frentea un 6,9% en 2005. En particular, el escenario deInsostenibilidad y escalada de conflictos (IEC),muestra la trayectoria más desfavorable en elcomportamiento de este indicador, que alcanza un7,6% al final del período examinado (Gráfico 4.8).

-

3

6

9

2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050SR RS IEC TS

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por IMPACT - International Model for Policy Analysis of Agricultural Commodities and Trade).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.8

América Latina y el Caribe: Malnutrición infantil(Porcentaje del total de niños)

4. IMPLICACIONES

Page 259: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

257

El monto de gastos militares de los gobiernos, comoporcentaje del PIB, se mantiene relativamenteestable en Reformas hacia la sostenilidad (RS) y enTransición a la sostenibilidad (TS), ya que en estosescenarios no se promueve este tipo de erogaciones.Sin embargo, este indicador crece en Sostenibilidadrelegada (SR), ya que se recurre a este instrumentocomo factor para contrarrestar la posibilidad derecesiones económicas. En Insostenibilidad yescalada de conflictos (IEC) el gasto militar se aceleraya que constituye una herramienta clave para elmantenimiento del poder de las elites, en esecontexto de fragmentación sociopolítica yeconómica (Gráfico 4.9).

Hacia 2050, el flujo de remesas de trabajadoreshacia la región latinoamericana y caribeña, estámarcado por un ascenso sostenido en los cuatroescenarios. En Sostenibilidad relegada (SR), elescenario de mayor recepción de estos flujos, esteindicador pasa de 30 mil millones en 2005 a 112mil millones de dólares a mediados de este siglo, esdecir, se incrementa casi 3,7 veces. El escenario deInsostenibilidad y escalada de conflictos (IEC), resultael de menor recepción de remesas al final delperíodo, aún así muestra un aumento de 2,7 veces(Gráfico 4.10).

SR RS IEC TS

1,2

1,3

1,4

1,5

1,6

1,7

1,8

1,9

2005 2015 2025 2035 2045

Porc

enta

jedel

PIB

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Datos generados por el Equipo Regional GEO-ALC a partir de los resultados de Internacional Futures– IFs).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.9

América Latina y el Caribe: Gastos militares de los gobiernos(En porcentaje del PIB)

0

20

40

60

80

100

120

2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

SR RS IEC TS

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Datos generados por el Equipo Regional GEO-ALC a partir de los resultados de Internacional Futures– IFs).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.10

América Latina y el Caribe: Remesas recibidas, 2000(En miles de millones de dólares)

4. IMPLICACIONES

Page 260: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

258

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

La demanda regional de energía primaria, comoindicador de sostenibilidad, experimentaimportantes transformaciones en los distintosescenarios hacia 2050. El mayor dinamismo de esteindicador se registra en Sostenibilidad relegada (SR),donde la demanda energética –después de casiduplicarse entre 2000 y 2025–, muestra un aumentoacumulado de cuatro veces para todo el período(2000-2050); y la proporción de los combustiblesfósiles en el balance energético crece de 78% en

0

20.000

40.000

60.000

80.000

100.000

120.000

2000 SR-2025 RS IEC TS SR-2050 RS IEC TS

Biocombustibletraditional

Solar/Eólica

Petróleo

Nuclear

Gas natural

Biocombustiblemoderno

Hidro

Carbón

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por IMAGE - Integrated Model to Assess the Global Environment).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.11

América Latina y el Caribe: Uso de energía primaria (En PJ)

2000 a 85% en 2025 y 86% para 2050. En el otroextremo se ubica el escenario de Transición haciala sostenibilidad (TS), que muestra el menorcrecimiento de la demanda de energía y unareducción de la porción que corresponde a loscombustibles fósiles de 78% en 2000 hasta 60% en2050 (Gráfico 4.11).

La cantidad de personas viviendo bajo estréshídrico se incrementa en todos los escenarios entre2005 y 2050, aunque con más vigor enInsostenibilidad y escalada de conflictos (IEC), y enSostenibilidad relegada (SR), con 78% y 54% deaumento, respectivamente.

En Reformas hacia la sostenibilidad (RS) la elevaciónde este indicador es de 43%, pero estas personasestán en mejores condiciones para enfrentar laescasez de agua debido a diversas políticas deintervención, tales como el establecimiento desistemas nacionales de alerta temprana para lassequías o eventos extremos; una coordinaciónnacional más efectiva para el desarrollo de la ofertade agua; entre otras acciones.

En Transición hacia la sostenibilidad (TS) esteindicador aumenta en un 23% entre 2005 y 2050,como expresión de que aún persisten presionessobre los recursos hídricos, muchas de las cuales seacumularon en períodos anteriores y no han podidoresolverse totalmente a pesar de los cambios en lospatrones de consumo llevados a cabo bajo esteescenario (Gráfico 4.12).

4. IMPLICACIONES

Page 261: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

2594. IMPLICACIONES

0

50

100

150

200

250

300

2000 2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

SR RS IEC TSFuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por WaterGap – Water Global Assessment and Prognosis).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.12

América Latina y el Caribe: Población viviendo bajo stress hídrico(En millones de habitantes)

4.2 IMPLICACIONES AMBIENTALES

En la esfera ambiental, se destaca el análisis comparativo–entre los cuatro escenarios básicos– de variosindicadores clave como la cantidad de aguas residualesy el grado de tratamiento de las mismas, la pérdida dediversidad biológica, las emisiones de gases de efectoinvernadero y otros gases que contaminan la atmósferacomo los óxidos de azufre, y el agotamiento de laspesquerías en la región.

La cantidad de aguas residuales generadas por lasactividades socioeconómicas y el grado detratamiento de las mismas revela notables diferenciasentre los escenarios. Hacia 2050, algo más del 50%de las aguas residuales para Sostenibilidad relegada(SR), Reformas hacia la sostenibilidad (RS) yTransición hacia la sostenibilidad (TS) no recibentratamiento, frente a un 70% registrado en 2000. EnSR el crecimiento económico es acompañado deuna expansión de la capacidad de las plantas detratamiento; pero al propio tiempo se registra unamplio incremento de las aguas residuales (en 3,1veces) debido a la expansión de la demanda de aguaen las municipalidades y la industria. La mayor partedel agua residual es descargada en los mares, enríos y otros cuerpos de agua, causando deterioro dela calidad del recurso y serias afectaciones a losecosistemas acuáticos.

En RS, si bien la cantidad de aguas residuales seexpandió en 2,2 veces en 2000-2050, la capacidadde tratamiento de aguas residuales se aumentó

sustancialmente con el propósito de proteger ladisponibilidad de agua, aunque esta tendencia solologró desacelerar el ritmo de las descargas de aguasresiduales no tratadas. El incremento de las aguasresiduales en TS (30%) es el menor entre los cuatroescenarios considerados, debido en gran medida alas acciones de conservación emprendidas, lo quese combina con la construcción masiva de plantasde tratamiento de aguas residuales. IEC muestra elescenario más sombrío ya que la cantidad de aguasresiduales registra su nivel récord en este escenario(crece en 3,3 veces en 2000-2050) y la proporciónde aguas no tratadas alcanza un 70% (Gráfico 4.13).

Page 262: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

260

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

0

20

40

60

80

100

120

140

160

180

2000 SR 2015 RS IEC TS SR 2050 RS IEC TS

No tratadas Tratadas

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por WaterGap - Water Global Assessment and Prognosis).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.13

América Latina y el Caribe: Aguas residuales (tratadas y no tratadas)(En billones de metros cúbicos)

4. IMPLICACIONES

La biodiversidad, medida con el indicador«abundancia media de especies originales» muestramayor deterioro en Sostenibilidad Relegada (SR),donde se registra una caída de un 15% hasta 2050y en Insostenibilidad y Escalada de Conflictos (IEC),con una disminución del 12% en igual período. Enambos casos, el factor que más incide es el impactode la construcción de infraestructura, que en SRexplica alrededor del 58% de la pérdida debiodiversidad y en el segundo caso explica cercadel 48%. Otros factores que influyen en losresultados de estos dos escenarios, aunque en menorescala, son las actividades del sector agropecuarioy los impactos del cambio climático.

Las menores declinaciones de la biodiversidad seregistran en Reformas hacia la sostenibilidad (RS) yen Transición hacia la Sostenibilidad (TS), conreducciones de 8% en RS y de casi 9% en TS. Enestos dos escenarios los factores que más incidenen la pérdida de especies son el sector agropecuario(que responde por el 53% del problema en ambosescenarios) y el cambio climático (causante del 41%de la desaparición de especies en TS y de 30% enRS) (Gráfico 4.14).

Page 263: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

2614. IMPLICACIONES

-30,0%

-25,0%

-20,0%

-15,0%

-10,0%

-5,0%

0,0%

5,0%

Hasta2000

SR-Hasta2030

RS IEC TS SR -Hasta2050

RS IEC TS

Sector Agropecuario Silvicultura Infraestructura Deposición de nitrogeno Cambio climático

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por GLOBIO).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.14

América Latina y el Caribe: Causas de la declinación en la abundancia media deespecies originales (En porcentaje)

La dinámica de las emisiones equivalentes decarbono para la región en el período 2000-2050pone de manifiesto la contribución de los distintosescenarios a la generación de gases de efectoinvernadero y por tanto al cambio climático global.Las dos trayectorias más dinámicas corresponden aSostenibilidad Relegada (SR) y Reformas hacia lasostenibilidad (RS), con incrementos de las emisionesen 60% y 40%, respectivamente. En ambos casos,el comportamiento de este indicador se debe, engran medida, al rápido crecimiento de la demandade energía y a una composición del balanceenergético donde predominan los combustiblesfósiles, lo que se combina con las emisionesderivadas del cambio en el uso de la tierra. Latrayectoria de RS muestra una caída de las emisioneshacia finales del período, como resultado decambios en la estructura del consumo energético afavor de combustibles no fósiles y ciertas mejorasen la eficiencia energética.

Las emisiones equivalentes de carbono enInsostenibilidad y escalada de conflictos (IEC)aumentan en un 30%, y este incremento no esmayor, debido a la fragmentación económica ysocial, que tiende a desacelerar el crecimiento dela economía y a limitar la satisfacción de lasnecesidades energéticas básicas de sectores

mayoritarios de la población. Por su parte, lasemisiones de Transición hacia la sostenibilidad (TS)muestran una tendencia declinante, es decir caenen un 30% entre 2000 y 2050, a pesar deldinamismo mostrado por el PIB, lo que revela losresultados de los cambios en los patrones deproducción y consumo de energía en este escenario,orientados al fomento de las fuentes energéticasrenovables y de la eficiencia energética (Gráfico4.15).

La tendencia de las emisiones antropogénicas deóxidos de azufre (SOx) aporta elementosadicionales acerca de la contaminación de laatmósfera en la región hasta 2050, ya que se tratade gases que, entre otras implicaciones negativas,afectan la salud humana y provocan la lluvia ácida.El mayor dinamismo en la generación de estasemisiones se registra en Sostenibilidad relegada (SR)e Insostenibilidad y escalada de conflictos (IEC), conincrementos de 60% y 70%, respectivamente en2000-2050; mientras que en Reformas hacia lasostenibilidad (RS), después de un crecimiento entre2000 y 2030, se inicia un curso declinante hasta2050 y Transición a la sostenibilidad (TS) muestrauna marcada tendencia a la reducción de estasemisiones, con un recorte acumulado del orden del50% hacia 2050 (Gráfico 4.16).

Page 264: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

262

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

0

0,5

1

1,5

2

2,5

3

2000 2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

SR RS IEC TSFuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por IMAGE).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.15

América Latina y el Caribe: Emisiones totales de CO equivalente2(En PgC)

0

2

4

6

8

10

12

2000 2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

SR RS IEC TSFuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por IMAGE).Notas: SR= Sostenibilidad Relegada; RS= Reformas hacia la Sostenibilidad; IEC= Insostenibilidad y Escalada de Conflictos; TS= Transición hacia la Sostenibilidad

GRÁFICO 4.16

América Latina y el Caribe: Emisiones antropogénicas de SOx equivalente(En TgS)

La comparación del Índice de Agotamiento (IA)de las pesquerías entre 2000 y 2050 para los cuatroescenarios revela cambios en las condiciones deconservación durante este período en las cuatroáreas de la FAO relevantes para América Latina y elCaribe. Las mayores reducciones del IA (mayoragotamiento) se registran en Sostenibilidad relegada(SR) y en Reformas hacia la sostenibilidad (RS) enlas dos áreas de la FAO ubicadas en la costa atlánticade la región (FAO 31 y FAO 41). En estas dos áreas,el grado de agotamiento resulta menor en elescenario de Transición a la sostenibilidad (TS).

En las dos áreas ubicadas en la costa del Pacífico(FAO 77 y FAO 87) el IA muestra un marcadodeterioro de las pesquerías, en un grado bastantesimilar para los cuatro escenarios. El incremento delagotamiento ocurrido en Transición a lasostenibilidad (TS) es un resultado, al menos en parte,de dos tendencias contrapuestas: de un lado, larecuperación de especies menos vulnerables y, deotro lado, una mayor pérdida de algunas especiesmás vulnerables (véanse los Gráficos 17a y 17b).

4. IMPLICACIONES

Page 265: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

263

Mar Ártico18

PacíficoNor Oriental

67

PacíficoSur Occidental

81

Pacífico Central Oriental77

AtlánticoNor Occidental

21

AtlánticoCentro Oriental

34

AtlánticoSur Occidental

41

AtlánticoSur Oriental

47

AtlánticoNor Oriental

27 Mediterráneoy Mar Negro

37

AtlánticoCentro Occidental

31

Pacífico SurOriental

87

Antártico (Pacífico Sur)88

Antártico (Atlántico Sur)48

Antártico (Océano Índico Sur)58

PacíficoS.O.81

Mar Ártico18

PacíficoNoroccidental

61

PacíficoCentro Occidental

71Océano ndicoOccidental

51

Í

Océano ndicoOriental

57

Í

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por EcOcean).

GRÁFICO 4.17a

Regiones marinas de la FAO

0-5

-10-15-20-25-30-35-40

2000 SR

SR

RS

RS

IEC

IEC

TS

TS

IA

FAO 31 - Atlántico Central Occidental

0-5

-10-15-20-25-30-35-40

2000

IA

FAO 41 - Atlántico Sur Occidental

0-5

-10-15-20-25-30-35-40

2000

IA

FAO 87 - Pacífico Sur Oriental

0-5

-10-15-20-25-30-35-40

2000

IA

FAO 77 - Pacífico Central Oriental

Fuente: Base de datos GEO4-PNUMA (Resultados generados por EcOcean).Nota: SR: Sostenibilidad relegada, RS: Reformas hacia la sostenibilidad, IEC: Insostenibilidad y escalada de conflictos, y TS: Tránsito hacia la sostenibilidad. Los cambiospositivos en el IA indican una reducción en el riesgo de agotamiento, mientras que los cambios negativos indican un incremento en el riesgo de agotamiento.

SR

SR

RS

RS

IEC

IEC

TS

TS

América Latina y el Caribe: Cambios en el índice de agotamiento (IA) de las pesquerías(2000 – 2050) en áreas marinas de la FAO 31, 41, 77 y 87 y bajo diferentes escenarios

GRÁFICO 4.17b

4. IMPLICACIONES

Page 266: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

264

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

En todos los escenarios y áreas, el incremento de lascapturas de las pesquerías involucra interacciones conla biodiversidad, como se aprecia en el Caribe (ver FAO31), donde el nivel trófico medio es probable quecontinúe declinando como ha ocurrido desde la décadade 19504.

No siempre es posible contar con toda la informacióncuantitativa necesaria para fundamentar lasconsecuencias de las distintas combinaciones de fuerzas 4 CARSEA, 2007.

motrices que se sintetiza en los escenarios. Por tal razón,se ha tratado de complementar, en la medida de lasposibilidades, las estadísticas aportadas por los modelosempleados con análisis y argumentos cualitativos. Aúnasí, esta evaluación de las implicaciones de los cuatrofuturos plausibles dista mucho de ser un resultadoacabado.

4. IMPLICACIONES

Page 267: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

2655. PUNTOS DE INFLEXIÓN

5. CUATRO FUTUROS ALTERNATIVOS CON PUNTOS DE INFLEXIÓN

Teniendo en cuenta que el período de análisis es de 50años (2000-2050), resulta plausible considerar que lastrayectorias de cada uno de los cuatro escenarios básicos(SR, RS, IEC y TS) pudieran desviarse en algún momentode ese período, como resultado de la acumulación deimpactos e interrelaciones que inciden en el procesode toma de decisiones a todos los niveles.

Por tanto, además de evaluar las trayectorias regionalesde los cuatro escenarios construidos a escala global entre2000 y 2050 (ver GEO-4), se exploran cuatro trayectoriasregionales alternativas que introducen puntos deinflexión a mediados del período considerado (2025),como expresión del alto grado de incertidumbreimplícito en este ejercicio de construcción de escenarios(Gráfico 4.18).

A partir de la sostenibilidad, como objetivo estratégico,en este ejercicio se construyen cuatro trayectorias

alternativas, que resultan plausibles y revelan que losbeneficios (o costos) económicos, sociales y ambientalesde cada una de ellas depende, en gran medida, de larapidez (o lentitud) y el grado de integralidad (ofragmentación) con que se incorporen los objetivos desostenibilidad y bienestar humano en el proceso de tomade decisiones, como se indica en el Cuadro 4.5.

Como cabe suponer, las cuatro trayectorias alternativasconstruidas no son las únicas combinaciones posibles.Apenas constituyen, a juicio de los expertos queparticiparon en este proceso, un conjunto representativode opciones que se alejan de las trayectorias más bienlineales de los cuatro escenarios básicos.

El momento en que se produce el punto de inflexióntambién pudiera variar para cada trayectoria alternativa;aunque en este caso se tomó el mismo año (2025) parasimplificar la ilustración (ver el Recuadro 4.1).

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2000 2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

SR RS IEC TS SR - RS SR - IEC IEC - TS RS - TS

Notas:Escenarios básicos:SR: Sostenibilidad relegadaRS: Reformas hacia la sostenibilidadIEC: Insostenibilidad y escalada de conflictos.TS: Transición hacia la sostenibilidad.

Fuente: Elaborado por los autores.

Trayectorias alternativas con puntos de inflexión:SR-RS: Sostenibilidad relegada – Reformas hacia la sostenibilidad.SR-IEC: Sostenibilidad relegada – Insostenibilidad y escalada de conflictos.IEC-TS: Insostenibilidad y escalada de conflictos – Transición hacia la sostenibilidadRS-TS: Reformas hacia la sostenibilidad - Transición hacia la sostenibilidad

GRÁFICO 4.18

América Latina y el Caribe: Emisiones de CO 2000-20502

(En millones de toneladas)

Page 268: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

266

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Sostenibilidad / Bienestar humano como objetivosdel proceso de toma de decisiones

En principio subestimados de forma significativa, luegoincorporados gradualmente.

En principio subestimados de forma significativa, luegoignorados.

Inicialmente ignorados, luego reconocidos como unaalternativa deseada. Trayectoria muy costosa hacia lasostenibilidad.

Al principio incorporados gradualmente, luegoconsiderados de forma más integrada, comotendencia.

Desde 2025 hasta 2050

Reformas hacia la sostenibilidad.

Insostenibilidad y escalada de conflictos.

Transición hacia la sostenibilidad.

Transición hacia la sostenibilidad.

Desde 2000 hasta 2025

A. Sostenibilidad relegada

B. Sostenibilidad relegada

C. Insostenibilidad yescalada de conflictos

D. Reformas hacia lasostenibilidad

Fuente: Elaboración propia.

CUADRO 4.5

Trayectorias alternativas con puntos de inflexión

5.1 PRINCIPALES RESULTADOS

La trayectoria A (tránsito de Sostenibilidad relegada aReformas hacia la sostenibilidad) registra un nivelmáximo de emisiones en 2045, y luego de ese añodesciende (ver Gráfico 4.18 y 4.20).

La trayectoria B (tránsito de Sostenibilidad relegada aInsostenibilidad y escalada de conflictos) es la únicatrayectoria alternativa en la que prácticamente no seinterrumpe el crecimiento de las emisiones de CO2 enel curso de los 50 años. Consecuentemente, estatrayectoria es la que muestra un mayor nivel de

emisiones regionales en 2050 entre las cuatrotrayectorias alternativas. Este resultado está encorrespondencia con lo expuesto en el Cuadro 4.5,donde se señala que en la trayectoria B el objetivo desostenibilidad se subestima inicialmente (hasta 2025) yluego se ignora (ver los gráficos 4.18 y 4.19).

La trayectoria C (paso de Insostenibilidad y escalada deconflictos a Transición hacia la sostenibilidad) muestrael menor nivel de emisiones en 2050 entre las cuatrotrayectorias alternativas; pero no debe olvidarse (comose indica en el Cuadro 4.5, que esta es una rutaextremadamente costosa para transitar hacia la

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2000 2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

SR A:SR-RS B: SR-IEC

Fuente: Elaborado por los autores.

GRÁFICO 4.19

América Latina y el Caribe: Trayectorias alternativas 2000 – 2050Escenario inicial: sostenibilidad relegada (SR) (En millones de toneladas de CO )2

5. PUNTOS DE INFLEXIÓN

Page 269: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

267

Breve nota técnica sobre la construcción de trayectorias alternativas con puntos de inflexiónRECUADRO 4.1

Estas cuatro trayectorias alternativas fueron seleccionadas,según el criterio de los expertos del Equipo regional, comocasos representativos –para evaluar la sostenibilidad–, dentrodel conjunto de combinaciones posibles.

Las trayectorias alternativas (con puntos de inflexión), quese presentan en el Cuadro 4.5, pueden construirse paradistintos indicadores. En este caso se utiliza, a manera deejemplo, el posible comportamiento de las emisiones de CO2,como uno de los indicadores que permite evaluar el gradode sostenibilidad ambiental.

La base de referencia estadística para la construcción de lastrayectorias alternativas son los datos que corresponden alos escenarios básicos, tomados del Informe del PNUMA:GEO4 Perspectivas del Medio Ambiente Mundial. Medioambiente para el desarrollo.

Esos datos fueron ajustados para cada nueva trayectoria,sobre la base de la dinámica esperada para las emisiones deCO2, según la inflexión que ocurre. Por ejemplo, en el casode la trayectoria A (Sostenibilidad relegada – Reformas haciala sostenibilidad) se toman los datos de las emisiones delescenario SR para el período 2000-2025 y luego, paracompletar la serie hasta 2050, se aplican las tasas decrecimiento del escenario RS para 2025-2050.

Las trayectorias con puntos de inflexión son comunes en losestudios de indicadores socioeconómicos y ambientales,sobre todo en aquellos casos en que ocurren cambiosmarcados en las tendencias de su evolución. A manera deejemplo, en este sentido, puede revisarse el comportamientode las emisiones de CO y SO2 en la Zona Metropolitana dela Ciudad de México, durante el período 1990-2007. Enambos casos, las mayores emisiones se registran en 1991 ya partir de ese año ocurre una caída sostenida hasta finalesdel período, como resultado de un conjunto de accionesorientadas al mejoramiento de la calidad del aire en esamega-ciudad mexicana. El comportamiento de estos dosindicadores muestra cierta similitud al de la trayectoria A(SR-RS) antes mencionada; aunque en estos casos se tratade ejemplos reales y correspondientes a indicadores aislados,mientras que la trayectoria A ha sido conformada a partir deuna combinación de dos escenarios para el período 2000-2050.

Otro ejemplo de punto de inflexión corresponde alcomportamiento del Índice Planeta Vivo Neotropical para1970-2005, aunque en este caso –a diferencia del ejemploanterior– el indicador de calidad ambiental considerado (ladiversidad biológica) lejos de mejorar, se deteriora en elperíodo analizado.

El Índice Planeta Vivo Neotropical, tomado del InformePlaneta Vivo 2008 a de World Wildlife Fund (WWF), muestralas tendencias de las especies terrestres y de agua dulce del

reino biogeográfico que corresponde al área de AméricaLatina y el Caribe. Este índice muestra una caída del 76%entre 1970 y 2005 b, para una muestra de 202 poblacionesde 144 especies neotropicales, lo que refleja en gran medidael impacto que han tenido las tendencias globalizadoras yla situación socioeconómica de la región sobre los recursosde la biodiversidad regional. Debe tenerse en cuenta que,como señala el informe de WWF, con la globalización, lapresión que se ejerce sobre el medio ambiente ha sidodesplazada hacia las zonas tropicales y otras regiones dondepredominan los países en desarrollo.

La trayectoria de este índice para 1970-2005 muestra unpunto de inflexión hacia finales del decenio de 1970 ycomienzos de 1980: luego de un crecimiento de labiodiversidad del 14% en 1970 y 1975, se inicia una etapadeclinante de estos recursos, primero gradual y luegoabrupta, en los 30 años siguientes, acumulando una caídadel 79% entre 1975 y 2005.

Estas etapas de crecimiento (1970-1975) y drástica reducción(1975-2005) de los recursos de la biodiversidad en AméricaLatina y el Caribe coinciden, en líneas generales, con elcomportamiento de las tendencias socioeconómicasregionales en esos períodos; de un crecimiento significativoa comienzos de la década de 1970, se pasa a la “décadaperdida para el crecimiento” y la crisis de la deuda externaen el decenio de 1980, para luego dar paso a un patrón decrecimiento económico volátil, fragmentado y altamentedependiente de las coyunturas económicas externas, que esel predominante desde la década de 1990 hasta nuestrosdías.

Indice Planeta Vivo para el Neotrópico, 1970-2005

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1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005

Fuente: Elaborado por los autores.

a- Ver WWF, Informe Planeta Vivo 2008. Edición en Español, coordinadapor WWF Colombia. Impreso en octubre 2008, Gland, Suiza. Nota Técnica:El Índice Planeta Vivo es un indicador global diseñado para realizar unseguimiento del estado de la biodiversidad mundial ya que registra lastendencias en el tiempo de un gran número de poblaciones de especies.Este índice se basa en las tendencias de casi 5000 poblaciones de 1686especies de mamíferos, aves, reptiles, anfibios y peces en todo el mundo.Los cambios en la población de cada especie se promedian y se presentanen relación con 1970, año al que se le asigna un valor de 1,0.

b- A escala global este índice muestra una disminución de casi 30% en eseperíodo.

5. PUNTOS DE INFLEXIÓN

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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2000 2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

IEC C: IEC-TS

Fuente: Elaborado por los autores.

GRÁFICO 4.20

América Latina y el Caribe: Trayectorias alternativas 2000 – 2050Escenario inicial: Insostenibilidad y Escalada de Conflictos (IEC) (En millones de toneladas de CO )2

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2000 2005 2010 2015 2020 2025 2030 2035 2040 2045 2050

RS D: RS-TS

Fuente: Elaborado por los autores.

GRÁFICO 4.21

América Latina y el Caribe: Trayectorias alternativas 2000 – 2050Escenario inicial: Reformas hacia la Sostenibilidad (RS) (En millones de toneladas de CO )2

sostenibilidad, debido a las crecientes asimetrías yconflictos que afectarían a los sectores mayoritarios dela población, durante la primera parte del período (hasta2025), en que predomina un escenario de granfragmentación socioeconómica (ver Gráficos 4.18 y4.20).

La trayectoria D (paso de Reformas hacia lasostenibilidad a Transición hacia la sostenibilidad) revela

los mejores resultados, en términos de reducción deemisiones (a partir de 2035), como respuesta a unenfoque en que el objetivo de sostenibilidad seincorpora inicialmente de forma gradual y luego demanera más abarcadora. El nivel de emisiones haciafinales del período para esta trayectoria supera, sinembargo, al monto que corresponde al escenario clásicode Transición hacia la sostenibilidad (véanse los gráficos4.18 y 4.21).

5. PUNTOS DE INFLEXIÓN

Page 271: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

269

Históricamente, la implementación de las políticas yprogramas económicos en América Latina y el Caribese ha traducido en presiones adicionales para lascondiciones sociales y los recursos naturales yambientales.

El análisis de los Cuatro Futuros posibles presentadosen este capítulo, acerca de la evolución socio-económica y ambiental para América Latina y el Caribepara el período 2000-2050, y el acercamiento a otrascuatro trayectorias alternativas con puntos de inflexión,apenas representa una primera aproximación a unconjunto de tendencias plausibles que se interrelacionana lo largo de estas cinco décadas para generar imágenesportadoras de diversas lecciones sobre la sostenibilidaden la región.

Ante todo, resalta la necesidad de acciones oportunasen la región en materia de desarrollo sostenible. Comorevelan las trayectorias que incorporan puntos deinflexión, los beneficios (o costos) económicos, socialesy ambientales derivados de cada una de las trayectoriasdescritas dependen, en gran medida, de la rapidez (olentitud) y el grado de integralidad (o fragmentación)con que se incorporen los objetivos de sostenibilidad ybienestar humano en el proceso de toma de decisiones.

6. REFLEXIONES FINALES

Los recursos financieros utilizados con fines sociales yambientales no deben concebirse como gastos onerososque restan vigor al crecimiento económico; todo locontrario, las inversiones con propósitos sociales yambientales suelen tener efectos positivos sobre lacalidad y solidez del crecimiento de la economía a largoplazo, como lo demuestra el escenario de Transiciónhacia la sostenibilidad. Así, por ejemplo, las inversionesde un país o región en materia de educación ycapacitación, tendrían un impacto positivo sobre ladinámica económica a largo plazo, en la medida enque contribuyan a crear capacidades para la generacióny asimilación de nuevos conocimientos, como factorclave de las principales transformaciones tecnológicasen marcha.

Las estrategias de respuesta ante los retos ambientalesnacionales, regionales y globales que afectan a la región,requieren la articulación de acciones de mitigación yadaptación ante tales problemas en un contextoorientado a la sostenibilidad, que combine los aspectoseconómicos, sociales y ambientales. Las políticas yprogramas que pretendan enfrentar los desafíosambientales de manera aislada y fragmentada estaríancondenados al fracaso o –en el mejor de los casos–tendrían resultados muy limitados, como se pone de

6. REFLEXIONES

Page 272: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

270

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

manifiesto en algunas de las acciones de corte ambientalemprendidas en el escenario de Sostenibilidad relegada.

Las tendencias socioeconómicas regionales para 2000-2050 definen, en gran medida, las fuerzas motrices ofactores clave para el desempeño ambiental de la regiónen ese período; pero las variables ambientales no debenser consideradas, únicamente, como elementos pasivosque sólo reciben el impacto de impulsores económicosy sociales ya que las mismas son a su vez agentes decambio y transformación para la realidad económica,social y ambiental.

Así, por ejemplo, en el escenario de Sostenibilidadrelegada, la ampliación de la frontera agrícola de formainsostenible, mediante el monocultivo, la introducciónde especies invasoras, u otras acciones de estanaturaleza, afecta seriamente la salud de esosecosistemas, y esta situación repercute a su vez demanera negativa en el desarrollo socioeconómico, alafectarse la base de recursos naturales sobre la cualdescansan las actividades agrícolas. Lo mismo sucedecon otras actividades socioeconómicas como el turismo,la pesca, y la extracción de minerales.

El desarrollo de los escenarios socioeconómicos yambientales revela a los tomadores de decisiones lanecesidad de considerar la inercia de los sistemasecológicos y socioeconómicos a la hora de diseñarestrategias de desarrollo sostenible. Aunque se incorporecon fuerza el componente de sostenibilidad ambientalen las fases más tempranas, como ocurre en Transición

a la sostenibilidad, los cambios favorables resultantesno ocurrirán de manera súbita; requerirán tiempo parala transición gradual a un nuevo estadio.

Dada la relevancia del estudio de escenarios en AméricaLatina y el Caribe, como región en desarrollo, debenfortalecerse las capacidades técnicas e institucionalespara el trabajo multidisciplinario en estas áreas, tantoen lo referido al componente cualitativo (elaboraciónde narrativas), como al componente cuantitativo(empleo de modelos como herramienta de análisis) y ala integración de ambos aspectos. También se requierefomentar a nivel regional la cultura del empleo de losescenarios en la toma de decisiones, lo que supone,ante todo, la familiarización con este instrumento, quecomo se ha expresado antes difiere de los pronósticos ylas proyecciones.

Este estudio regional, podría servir como punto departida para la elaboración de escenarios subregionales,nacionales y locales referidos a los aspectos prioritariosde esas zonas. En ningún caso, los escenarios regionalesdeben interpretarse como la suma mecánica de lastendencias correspondientes a las distintas subregioneso países.

El gran dinamismo de los cambios que ocurren en elmundo actual y la comprensión cada vez mayor de lasfuerzas motrices y los vínculos entre ellas aconsejanuna actualización constante de los escenarios utilizados,para que los mismos conserven su utilidad yoperatividad (ver el Recuadro 4.2).

6. REFLEXIONES

Page 273: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

271

Consecuencias globales de los cuatro futuros en América Latina y el CaribeRECUADRO 4.2

Los temas relativos a la pobreza y la inequidad resultanparticularmente relevantes en América Latina y el Caribe, quees la región del mundo con mayor desigualdad en ladistribución del ingreso. De acuerdo con datos del BancoMundial y de la CEPAL, el Coeficiente Gini para la regiónasciende a 0.5712, seguida por África subsahariana (0.4541)y Asia del Este y Pacífico (0.4314) a. La desigualdad y la pobrezaaumentan considerablemente en Sostenibilidad relegada (SR)y en Insostenibilidad y escalada de conflictos (IEC). Seaprecia cierta mejoría en Reformas hacia la sostenibilidad(RS) y hay una disminución notable en Transición hacia lasostenibilidad (TS).

América Latina y el Caribe cuenta con la tercera parte delendeudamiento total de los países en desarrollo y es la regiónque más recursos transfiere a los acreedores anualmente porconcepto de servicio de la deuda (unos 179 mil millonesdólares en 2007) b. Este problema sigue siendo un obstáculopara el desarrollo sostenible de la región en Sostenibilidadrelegada (SR) y Reformas hacia la sostenibilidad (RS), conun aumento importante en Insostenibilidad y escalada deconflictos (IEC) y una disminución a niveles manejables enTransición hacia la sostenibilidad (TS).

La diversidad biológica constituye un componente crucial delos recursos naturales de la región, con implicaciones no sólopara América Latina y el Caribe, sino también para el mundo.Se estima que sólo en la Amazonía se ubica el 50% de labiodiversidad mundial y seis países de región (Brasil, Colombia,Ecuador, México, Perú y Venezuela) son considerados comomegadiversos c. La deforestación aumenta de forma significativaen Sostenibilidad relegada (SR), lo que provoca una mayorpérdida de hábitat y una mayor fragmentación. Las áreas deinterés forestal más importantes para las “elites” se conservanen Insostenibilidad y escalada de conflictos (IEC), perofuera de estas áreas protegidas la deforestación aumentarápidamente. En Reformas hacia la sostenibilidad (RS) seevidencia una reducción moderada de la deforestación y dela fragmentación de los hábitats, gracias a la mejora de lasnormativas reguladoras y a los mecanismos para elcumplimiento de las mismas. Por su parte, en Transición haciala sostenibilidad (TS) se implementan mecanismos pararehabilitar ecosistemas forestales afectados consiguiendoreducir la pérdida y la fragmentación de estos hábitats clave.

Con casi 28.000 metros cúbicos / persona / año, ladisponibilidad de agua dulce por habitante en América Latinay el Caribe es mucho más elevada que la media mundial, perolos recursos hídricos están desigualmente distribuidos en laregión d. Están presentes presiones cada vez mayores sobre losrecursos hídricos en las cuatro hipótesis hacia el 2050, peroes posible distinguir diferencias cualitativas en las mismas. EnSostenibilidad relegada (SR) y en Insostenibilidad yescalada de conflictos (IEC) disminuye la calidad y lacantidad de las aguas superficiales y subterráneas. Por su parte,en Reformas hacia la sostenibilidad (RS) se consigue mejorarsustancialmente el uso de este recurso en los sectores

económicos mediante inversiones en tecnologías de ahorro.En Transición hacia la sostenibilidad (TS) se realizanesfuerzos especiales para gestionar los conflictos en esta área,mejorar la eficiencia en el uso del agua y cambiar la conductade las personas con relación a su uso.

La región cuenta con 10% de las reservas mundiales depetróleo, 4.6% de las de gas natural, 2% de las de carbón e yun gran potencial de energía renovable. El acceso y el controlde los recursos energéticos siguen siendo una fuente importantede conflicto en el escenario de Sostenibilidad relegada (SR),situación que se acentúa en Insostenibilidad y escalada deconflictos (IEC). En ambas hipótesis la mejora en ladiversificación de la energía, más allá de los combustiblesfósiles, y la eficiencia energética es muy limitada. En contraste,en Reformas hacia la sostenibilidad (RS) se promueve ladiversificación energética; con un mayor empleo de recursosrenovables, y un mayor énfasis en la eficiencia y la cooperaciónenergética regional en Transición hacia la sostenibilidad(TS).

América Latina y el Caribe es la región más urbanizada delmundo en desarrollo, con un 77.3% de urbanización frente auna media de 42.7% para el conjunto de los países endesarrollo en 2005 f. El proceso de urbanización se da en todaslas hipótesis, pero evidenciando diferencias importantes. EnSostenibilidad relegada (SR) y en Insostenibilidad yescalada de conflictos (IEC) se produce una expansióndescontrolada de la urbanización. En Reformas hacia lasostenibilidad (RS) la urbanización es menos caótica. EnTransición hacia la sostenibilidad (TS) se sigue urbanizandosobre todo en las ciudades de pequeño y mediano tamaño, enun contexto que se basa en una planificación a largo plazocon respecto al desarrollo urbanístico.

La migración es un fenómeno mundial, que se ha exacerbadoen el contexto de las actuales tendencias globalizadoras. Elnúmero de personas que emigran de la región aumentó desde21 millones en 2000 a casi 25 millones en 2005, lo querepresenta el 13% del total mundial g. En el escenario regionalde Sostenibilidad relegada (SR) se da un aumento continuode las presiones migratorias, tanto dentro de la región comohacia América del Norte y Europa, debido al deterioro de lascondiciones sociales de varios grupos. En Insostenibilidad yescalada de conflictos (IEC) las presiones migratoriasaumentan considerablemente en las áreas fronterizas, pero lalegislación sobre la migración se hace más restrictiva. Laspresiones migratorias disminuyen en Reformas hacia lasostenibilidad (RS) y en Transición hacia la sostenibilidad(TS). En esta última hipótesis, la emigración pasa a ser unacuestión de decisión personal más que una necesidad.

a- Machinea, José Luis y Martín Hopenhayn (2005).b- FMI, World Economic Outlook, abril 2008,c- PNUMA (2007).d- PNUMA (2007), op. cit, p. 241.e- BP. Statistical Review of World Energy, juniode 2008, pp. 6, 22 y 32.f- PNUD. Informe sobre desarrollo humano 2007-2008.g- CEPAL (2006).

Fuente: Elaborado por los autores.

6. REFLEXIONES

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272

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

7. ANEXO TÉCNICO

7. ANEXO TÉCNICO

El presente anexo aporta algunos detalles sobre eldesarrollo de los escenarios, tanto los aspectoscualitativos (narrativas), como los cuantitativos(resultados de los modelos). Más de dos docenas depersonas y organizaciones participaron en la redacciónde este capítulo a partir de cuatro escenariosintroducidos y desarrollados en GEO-3, GEO-4 y GEOALC 2003.

Proceso

El grupo de expertos para el capítulo de escenariosAmérica Latina y el Caribe, otros seis grupos regionalesy el equipo mundial de expertos en modelos sereunieron en Bangkok en septiembre de 2005 paraempezar a desarrollar los escenarios de GEO-4 con unaperspectiva de escalas múltiples. En el transcurso delsiguiente año y medio, el equipo América Latina y elCaribe se reunió por separado en Trinidad y Tobago,Perú y Cuba para continuar el desarrollo de losescenarios. A lo largo de 2008 se llevaron a cabo otrasreuniones en Panamá y Cuba para lograr una mayorintegración entre los resultados cuantitativos y lasnarrativas. El equipo regional América Latina y el Caribepreparó textos descriptivos para cada uno de los cuatroescenarios a partir de los fuerzas motrices y supuestosde los escenarios mundiales GEO-3 y los escenariosGEO ALC 2003. El grupo se dedicó a elaborardescripciones de los cuatro escenarios con unaperspectiva regional y tomando en cuenta las influenciasen otras regiones y en el planeta. De manera paralela,se empleó un conjunto de modelos avanzados, descritosa continuación, para obtener los cálculos cuantitativosdel futuro cambio ambiental y sus impactos en elbienestar humano. A fin de verificar la validez y laconsistencia de los escenarios, el equipo que elaborólas narrativas interactuó con los responsables de losmodelos para asegurarse de que los elementoscuantitativo y cualitativo de los escenarios secomplementaran y reforzaran entre sí.

Los modelos

Los modelos informatizados se encuentran publicadosen la literatura científica arbitrada y han demostrado suutilidad para la vinculación de los cambios en lasociedad con los cambios en el entorno natural. Losmodelos se unieron mediante enlaces flexibles, y losarchivos de salida de un modelo sirvieron como archivosde entrada de otros.

A continuación, se presentan las semblanzas de losmodelos:

International Futures (IFs) es un sistema integral demodelos mundiales a gran escala (Hughes y Hillebrand2006). IFs sirve como herramienta de pensamiento parael análisis de futuros de largo plazo por país, región ode alcance mundial de manera transversal entremúltiples problemáticas interrelacionadas. En el casode GEO ALC -3, IFs aportó las proyecciones detendencias poblacionales y PIB por habitante, así comoinformación sobre salud, educación y gasto militar.

Cabe destacar que IFs también aportó proyecciones (apartir de las narrativas) sobre pobreza e indigencia paralos 18 países de la región en los que CEPAL habíapublicado datos sobre las líneas de pobreza e indigenciaurbana y rural en el Panorama Social 2006. IF aplicaun supuesto estándar y generalmente aceptado acercade la distribución del ingreso en la escala nacional; elsupuesto se ajusta por país a fin de corresponderse conlos datos históricos de personas que viven con menosde uno y dos dólares diarios. Gracias a esta informacióny datos sobre los futuros valores del ingreso promedioper cápita y el coeficiente Gini de ingresos, IFs puedecalcular: 1) la porción de la población (y la poblacióntotal) que vive con menos de cualquier nivel de ingresosque especifique el usuario y, a la inversa, 2) el nivel deingresos por debajo del cual cae cualquier porcentajeespecífico de población que indique el usuario.

IMAGE (Integrated Model to Assess the GlobalEnvironment) es un modelo de evaluación integraldinámica del cambio mundial desarrollado por elInstituto Nacional para la Salud Pública y el MedioAmbiente (RIVM) de los Países Bajos (Bouwman et al.2006). IMAGE sirve para estudiar toda una gama deproblemas ambientales y de cambio mundial,particularmente en el ámbito del cambio en el uso dela tierra, la contaminación atmosférica y el cambioclimático. Los principales objetivos de IMAGE sonenriquecer el conocimiento científico y apoyar losprocesos de toma de decisiones mediante lacuantificación de la importancia relativa de los procesosy las interacciones fundamentales del sistema sociedad-biosfera-clima. En el caso de GEO ALC -3, IMAGE aportólos cálculos de uso de energía, emisiones de gases deefecto invernadero y cambios en la temperatura y lasprecipitaciones.

Page 275: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

IV. ESCENARIOS

273

IMPACT (International Model for Policy Analysis ofAgricultural Commodities and Trade) es unarepresentación de un mercado mundial agrícolacompetitivo que incluye 32 cultivos y ganado, comocereales, soya, raíces y tubérculos, carnes, leche, huevo,aceites, tortas oleaginosas y harinas, azúcar yedulcorantes, frutas y vegetales, y pescado. Se desarrollóa principios de la década de 1990 como respuesta a laspreocupaciones por la falta de visión y consenso entorno a las acciones necesarias para alimentar al mundoen el futuro, reducir la pobreza y proteger la base derecursos naturales. Para el caso de GEO ALC -3, IMPACTgeneró proyecciones por zona de cultivo, cifras deganado, producción, demanda de alimentos y otrosusos, precios, comercio y desnutrición infantil.

WaterGAP (Water – Global Assessment and Prognosis,Evaluación y Pronóstico Mundial del Agua) es unmodelo global desarrollado por el Centro deInvestigación de Sistemas Ambientales de la Universidadde Kassel que computa la disponibilidad y el uso delagua en una cuadrícula mundial de 0.5° (Alcamo y otros,2003; Döll y otros, 2003). El modelo tiene por objetivoservir de base para la evaluación de los recursos hídricosy los usos actuales del agua, y para obtener unaperspectiva integral de los impactos del cambioclimático y las fuerzas motrices socioeconómicas en elfuturo sector hídrico. En el caso de GEO ALC -3,WaterGAP aportó los cálculos de uso del agua (parariego y en los sectores doméstico, de manufactura yproducción eléctrica), disponibilidad del agua y estréshídrico.

EcoOcean es un nuevo modelo desarrollado por elCentro de Pesquería de la Universidad de la ColumbiaBritánica con el fin de explorar escenarios para losocéanos del mundo (Alder y otros, 2007). Está inspiradoen el conocido software para modelos ecológicosEcopath with Ecosim (EwE). El EwE tiene doscomponentes principales: Ecopath, una visión estáticade ecosistemas marinos con balance de masas, y Ecosim,un módulo de simulación dinámica para la investigaciónde políticas que se basa en un modelo Ecopath. Elmodelo EcoOcean se construyó con 43 gruposfuncionales comunes a los océanos mundiales, incluidaslas 19 zonas marinas estadísticas de la FAO. Los gruposse seleccionaron con consideración especial hacia lasespecies piscícolas explotadas, pero pretenden incluira todos los grupos importantes en los océanos. Losgrupos piscícolas se dividen por tamaños ycaracterísticas de alimentación y hábitat. La pesca es lafuerza motriz más importante para las simulaciones demodelos ecosistémicos. Hay cinco grandes categoríasde flotas pesqueras: demersales, flotas de aguas lejanas,red de cerco con jareta (atún), pesca de atún con

palangre y pelágica en pequeña escala. Esta clasificaciónsirve para distinguir las diferentes formas de pesca conbase en la información histórica. En el caso de GEOALC -3, EcoOcean aportó los cálculos del índice deagotamiento de pesquerías.

El modelo GLOBIO simula el impacto de múltiplespresiones sobre la biodiversidad (Alkemade et al. 2006).El modelo depende de estudios de campo querelacionan la magnitud de la presión con la magnituddel impacto en la biodiversidad. Esta base de datosincluye medidas separadas de abundancia media deespecies (MSA) y de riqueza de las especies (MSR) enespecies originales de ecosistemas, cada una en relacióncon diferentes grados de presión. Todas las entradas dela base de datos se derivan de estudios arbitrados, yasea sobre el cambio en el transcurso del tiempo en unasola parcela o sobre la respuesta en parcelas paralelassometidas a diferentes presiones. Es posible que unestudio individual haya reportado la riqueza de lasespecies, su abundancia media o ambos factores. Lasfilas se clasifican por tipo de presión, taxón bajo estudio,bioma y región. En el caso de GEO ALC -3, GLOBIOaportó los cálculos de cambios en abundancia mediade especies en ecosistemas terrestres.

7. ANEXO TÉCNICO

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8. REFERENCIAS

8. REFERENCIAS

Alder, J y Sylvie Guénette, Jordan Beblow, WilliamCheung y Villy Christensen 2007. Ecosystem-based Global Fishing Policy Scenarios.Fisheries Centre Research Reports 15(7), 1-89.

Alcamo, J., Döll, P., Henrichs, T., Kaspar, F.,Lehner, B., Rösch, T. & Siebert, S., 2003.Development and testing of the WaterGAP 2global model of water use and availability. EnHydrological Sciences 48 (3):317-337

Alkemade, R., Bakkenes, M., Bobbink, R., Miles,L., Nellemann, C., Simons, H. & Tekelenburg,T., 2006) GLOBIO 3: Framework for theassessment of global terrestrial biodiversity. InBouwman, A.F., Kram, T. & Klein Goldewijk,K. (editores) Integrated Modelling of GlobalEnvironmental Change. An Overview of IMAGE2.4. Agencia Neerlandesa de Evaluación Am-biental, Bilthoven.

Bouwman, A.F., Kram, T. & Klein Goldewijk, K.,2006. Integrated Modelling of GlobalEnvironmental Change: An Overview of Image2.4. Agencia Neerlandesa de Evaluación Am-biental, Bilthoven.

BP, 2008. Statistical Review of World Energy. Dis-ponible en: www.bp.com/statisticalreview.Consulta a Junio 2008.

CARSEA, (Caribbean Sea Ecosystem Assessment)2007. Caribbean Sea Ecosystem Assessment(CARSEA). A sub-global component of theMillennium Ecosystem Assessment (MA), J.Agard, A. Cropper, K. Garcia eds., CaribbeanMarine Studies, Special Edition, 2007. 104 pp.

CEPAL (Comisión Económica para América Lati-na y el Caribe), 2006. Migración internacio-nal, derechos humanos y desarrollo en Améri-ca Latina y el Caribe, Trigésimo primer perío-do de sesiones Montevideo, República Orien-tal del Uruguay 20 al 24 de mayo del 2006,p.14.

Döll, P., Kaspar, F. & Lehner, B., 2003. A globalhydrological model for deriving wateravailability indicators: model tuning andvalidation. En Journal of Hydrology 270 (1-2):105-134.

Hughes, B. & Hillebrand, E., 2006. Exploring andShaping International Futures. ParadigmPublishers, Boulder, Colorado, Estados Unidos.

PNUD (Programa de las Naciones Unidas para elDesarrollo), 1990). Nuestra Propia Agenda. Ed:Banco Interamericano de Desarrollo- PNUD.Bogotá. 103 p.

PNUD, 2008. Informe sobre desarrollo humano2007-2008, Mundi Prensa, México DF, p. 248

PNUMA (Programa de las Naciones Unidas parael Medio Ambiente), 2007. GEO-4 Perspecti-vas del medio ambiente mundial. Medio am-biente para el desarrollo, 2007, Capítulo 6, p.245

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WWF, 2008. Informe Planeta Vivo 2008. Ediciónen Español, coordinada por WWF Colombia.Impreso en octubre 2008, Gland, Suiza.

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IV. ESCENARIOS

2758. REFERENCIAS

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V. POLÍTICAS

V. POLÍTICAS Y OPCIONES

PARA LA ACCIÓN

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MENSAJES CLAVE

Se debe velar por la integración de las políticasambientales en las políticas de desarrollo. Apesar de los avances registrados en las últimasdécadas para considerar la dimensión ambiental enlas políticas de desarrollo y dotarse de la normativae institucionalidad que permitan plasmar en losplanes, programas y proyectos –impulsados por losgobiernos–, hasta ahora las políticas ambientales hanresultado insuficientes, para detener el deterioroambiental de la región. Esto se explica, en parte,porque las políticas ambientales no han logradocuestionar políticas económicas que se orientan ala exportación de materias primas, ejerciendoenorme presión sobre los recursos naturales ni, porotro lado, internalizar suficientemente los beneficiosde la conservación de los ecosistemas y los serviciosque éstos ofrecen; prevaleciendo el enfoque sectorialpor sobre la transversalización de los asuntosambientales en las políticas de desarrollo ysectoriales.

Los conflictos de implicaciones ambientales sehan multiplicado recientemente en la región. Poruna parte, el patrón de desarrollo prevalecientegenera efectos cuya magnitud rebasa a menudo lacapacidad regulatoria y administrativa de los estadospara hacerles frente; y por otro, nuevos derechosconsagrados en las legislaciones nacionales yestándares internacionales están tropezando con lasinercias institucionales de muchos gobiernoscausando situaciones que han llegado a generarviolencia y enfrentamientos con resultados trágicos.

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V. POLÍTICAS

1. INTRODUCCIÓN

· La sociedad civil juega un papelcrecientemente importante. Los cambios que hanexperimentado recientemente las economías y lossistemas políticos de los países de la región, hanreconfigurado los actores sociales y los intereses quela nueva situación exige conjugar de una maneramás equilibrada y justa. La sociedad civil se haorganizado en una serie de agrupaciones ymovimientos, tanto para intercambiar información,como para cuestionar las decisiones de lasautoridades con efectos ambientales desfavorables,hasta el punto de revertirlas. No obstante, los éxitosaislados o momentáneos no han logrado impactarverdaderamente sobre las políticas ambientales. Laciudadanía debe fortalecer su capacidad denegociación, mientras que las actividades públicasy privadas deberían utilizar en su planificaciónherramientas como la evaluación ambientalestratégica o integrada y la responsabilidad socio-ambiental empresarial, fomentando lainstitucionalización de mecanismos de participaciónde la sociedad civil en el diseño de las políticaspúblicas y la toma de decisiones.

El escenario de la crisis global determinaoportunidades y amenazas. En el escenario de lacrisis económica global desatada desde 2007 elmedio ambiente enfrenta tanto amenazas comooportunidades. La naturaleza y profundidad de lacrisis permiten desenmascarar sus causas eidentificar oportunidades para su reversión, entre lascuales destacan las asociadas a la necesidad deutilizar más eficientemente los recursos naturales,acelerar la transición energética hacia un patrónalternativo más sostenible y estimular la eficienciaambiental como factor de competitividadproductiva.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

1. INTRODUCCIÓN

Tal como destacan los capítulos anteriores de esteInforme, la situación que hoy enfrenta la región y elplaneta en su conjunto exige severos ajustes a laspolíticas que hasta ahora han prevalecido en relaciónal desarrollo, e incluso un golpe de timón en la maneraen que se ha encarado la política ambiental.

A la luz de la crisis desatada en el sistema financierointernacional y el inmediato efecto recesivo en que éstase tradujo para la economía planetaria, el PNUMA lanzó(marzo 2009) su «Nuevo Acuerdo Verde Global»(GGND, por sus siglas en inglés) en el marco de suiniciativa de «Economía Verde», llamando la atenciónsobre el hecho de evitar que los cuantiosos recursosque la comunidad internacional anunciaba estardispuesta a destinar a la mayor operación dereactivación económica de la historia, fueran a alimentaral mismo paradigma mercantilista ineficiente,insostenible e injusto que había originado la crisis;proponiendo a cambio un camino alternativo sintetizadoen tres objetivos amplios:

1) Contribuir significativamente a la reactivación de laeconomía mundial, a la conservación y creaciónde empleos, y a la protección de los gruposvulnerables,

2) Promover el crecimiento sostenible e incluyente yel logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio(ODM), especialmente el de acabar con la pobrezaextrema para el 2015, y

3) Reducir la dependencia del carbono y ladegradación de ecosistemas, que son riesgos claveen el camino hacia una economía mundialsostenible (PNUMA, 2009b).

Independientemente de la intensidad con que cada unode los países de la región haya sufrido los efectos de lacrisis global, es preciso hacer un recuento del caminoque se tiene avanzado y priorizar los desafíos quedeberán guiar el establecimiento de sus propias políticase instrumentos para asegurar la sostenibilidad de sudesarrollo a partir de este particular momento deoportunidad.

Entre los desafíos que tienen un alcance general y queserán desarrollados en los puntos siguientes, se proponefijar la atención en:

La integración y coherencia entre las políticassectoriales y la política ambiental, fortaleciendo lainversión en sostenibilidad ambiental y social bajoel enfoque de que estas iniciativas no pondrán enriesgo el crecimiento económico sino que, por elcontrario, lo garantizarán, lo impulsarán y lo haránsostenible.El crecimiento de la población y la urbanizaciónson una fuerza motriz relevante que impulsa elcambio en los ecosistemas y en el bienestar humano.Se hace fundamental que los gobiernos implementenefectivamente políticas e instrumentos de

1. INTRODUCCIÓN

RECUADRO 5.1

El Nuevo Acuerdo Verde Global

Fuente: Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), 2009b.

El Nuevo Acuerdo Verde Global del PNUMA propone queel destino de las inversiones a encarar en esta coyuntura deemergencia se agrupen en tres categorías: 1) Gasto enmedidas de incentivos enfocados durante 2009-2010,2) Cambios en las políticas internas, y 3) Cambios en laarquitectura de las políticas internacionales, reconociendoademás el hecho de que muchos países con menor gradode desarrollo no cuentan con recursos propios por lo quetendrán que depender de la ayuda y el apoyo extranjeros,tanto de tipo financiero como no financiero.

Entre los incentivos fiscales propuestos en la primeracategoría, se plantea darle prioridad a la inversión en eltransporte sostenible y la energía renovable y, en los paísesen desarrollo, darle prioridad a la inversión en medidas parala productividad agrícola, el manejo de los recursos de aguadulce y el saneamiento, ya que estos producen beneficiossociales demostrables y excepcionales.

En el ámbito de las reformas en las políticas nacionales sepropone reducir sustancialmente los subsidios perversos (porejemplo, los combustibles fósiles) y crear, más bien,incentivos positivos e impuestos adecuados que fomentenuna economía más verde; abordar también algunascuestiones comunes relativas al uso de la tierra, las políticasurbanas y el manejo integrado de los recursos de agua dulce.Las respuestas de políticas internas deben basarse en elmonitoreo efectivo y en la responsabilidad y debenincorporar los principios de la contabilidad ambiental.

Entre las modificaciones propuestas a la arquitectura de laspolíticas internacionales se plantea prestarle atención a lasáreas de comercio, asistencia, el perfeccionamiento delmercado global de carbono y la creación de mercadosglobales para los servicios ecosistémicos, y coordinaciónde tecnología y políticas.

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V. POLÍTICAS

ordenamiento territorial que cubran tanto losterritorios urbanos, donde hoy viven 8 de cada 10personas, como los rurales, que alberganprácticamente la totalidad de los sistemas de vidade la región y los recursos que hacen posible lareproducción social. Una significativa parte de lainversión deberá orientarse al desarrollo decondiciones locales que permitan estabilizar a lapoblación rural gozando de condiciones de vidadigna y oportunidades para su desarrollo yrealización.Es fundamental diversificar las fuentes energéticas(más allá de los combustibles fósiles), mejorar laeficiencia y potenciar la cooperación regionalenergética.Debe buscarse maneras de prevenir y mitigar efectosnegativos, potenciando las buenas prácticas quemaximicen el ahorro y uso sostenible del agua.Impulsar la modificación profunda de los patrones

de producción y consumo, revirtiendo la emulacióna los insostenibles paradigmas de los paísesdesarrollados, propiciando la valorización de lasformas de vida más austeras que aún perviven en laregión y las oportunidades de satisfacer lasnecesidades de la reproducción social con bienes yservicios ambientales, una gestión limpia ysostenible de sus recursos y el desarrollo de unacultura de la solidaridad intergeneracional fundadaen la ética del respeto a la naturaleza.

Este capítulo propone algunos elementos que permitanampliar la discusión sobre el marco de las políticas dedesarrollo y facilitar algunos instrumentos que pudieranresultar útiles a tiempo de explorar nuevos caminos,recuperando lecciones de experiencias concretas quealumbren dichos caminos e identifiquen oportunidadesque permitan potenciar la acción de los gobiernos dela región.

1. INTRODUCCIÓN

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

2. EL AMBIENTE EN LAS POLÍTICAS PÚBLICAS

El presente capítulo da cuenta de las tendencias quehan caracterizado dominantemente a las políticasambientales de la región y los desafíos que debenenfrentar para asegurar su contribución a un cambio deparadigma de desarrollo que favorezca el crecimientoeconómico, la conservación del patrimonio natural ycultural, el aprovechamiento sostenible de sus recursos,el cierre de la brecha de inequidad que hoy amenazala convivencia armónica y una relación más equilibraday proactiva con el resto de actores de la comunidadinternacional.

2.1 DE LA «LUCHA CONTRA LAPOBREZA» AL «DERECHO A VIVIR BIEN»COMO PARADIGMAS DEL DESARROLLO

Los procesos de ajuste estructural implementados en laregión a partir de la década de los 80 que, como sedesprende del análisis realizado en el capítulo I de esteInforme, llevaron al achicamiento de los estados y suparticipación en la economía, la reestructuración de lasrelaciones con el sistema financiero internacional,obligando a un descomunal flujo de recursos haciaafuera, con la consiguiente inflación y contracción delgasto público que afectó a la inversión en los sectoresestratégicos de la economía, el gasto social y las porentonces nacientes políticas ambientales. Ell ha dejado

como secuelas la desestructuración y desnacionalizaciónde las economías locales, la desintegración social, elincremento de la presión sobre la naturaleza y susrecursos, y una nueva distribución de roles quepropugna la entrega de los recursos naturales al capitaltransnacional, el manejo de la economía nacional a lossectores empresariales locales y deja a la mayoría de lapoblación sometida a políticas asistenciales ytransferencias directas de dudoso efecto estructural.

Hoy, la amenaza del cambio climático y susrepercusiones ya evidentes en distintas partes delplaneta, añaden un elemento adicional de impostergablepreocupación y nos obliga a repensar la transformaciónestructural de las economías regionales, ahora adaptadasa los fenómenos de calentamiento global. AméricaLatina y el Caribe enfrentan una tarea pendiente parasalir de la trampa del crecimiento empobrecedor ycortoplacista, y trascender la tradición extractivista yprimaria, pero ahora con un elemento más, el ambiental.Para muchos esto podría agravar la fórmula de salida,pero para otros podría significar, más bien, unaoportunidad única. Esta es la opción que propone elPNUMA en el GGND y en la Iniciativa de Pobreza yMedio Ambiente (IPyMA)1 desarrollada conjuntamenteentre el PNUMA y el PNUD.

Los índices de crecimiento que experimentaron algunasde las economías de la región y del mejoramiento deciertos índices sociales registrados a partir de los 90llevaron en algunos casos a reafirmar el camino yaelegido; sin embargo, en los primeros años del sigloque corre, diversos países han experimentado intensosmovimientos que han puesto en cuestión este patrónde acumulación.

En el primer caso, países como Chile, Colombia, Perú,Costa Rica, Panamá, México e incluso Brasil, más alládel balance que se pueda realizar de los impactossociales y ambientales de esta opción, han ratificado laorientación general del modelo exógeno mencionado,gracias a los procesos de modernización ycompetitividad que impulsaron particularmente en suseconomías agrícolas, consolidando el lugar que susproductos de exportación lograron en los mercadosinternacionales, pero sobre todo por el nivel que alcanzó

1 La Iniciativa de Pobreza y Medio Ambiente aplica una metodología defases para el trabajo de integrar la variable ambiental en la lucha contra lapobreza. Esta metodología ya se aplica en varios países, principalmente enÁfrica. Desde el 2008, se ha extendido este trabajo a la región de AméricaLatina y el Caribe. Para más información, ver www.unpei.org ywww.pobrezaambiente.org.

2. POLÍTICAS PÚBLICAS AMBIENTALES

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V. POLÍTICAS

en ellos su vinculación al capital transnacional asociadoa inversiones en sus sectores extractivos y al capitalfinanciero. Un componente esencial de la orientaciónde la economía en este grupo de países lo constituyenlos Tratados de Libre Comercio (TLC) suscritos con variaspotencias mundiales (como Estados Unidos, la UniónEuropea, China y Japón), que han privilegiado estemecanismo como marco de sus intercambioscomerciales con el resto del mundo.

En el segundo caso, a pesar de haber transitadoigualmente por los contradictorios caminos del ajusteestructural y haber alcanzado también variados índicesde crecimiento, estos países constataron que el modeloes incapaz de romper con el subsistenteempobrecimiento de la mayoría de su población (CEPAL2007). Esto los llevó al cuestionamiento de las premisasinsostenibles de la inmodificada estructura primario-exportadora que no les ha permitido superar el carácterde sus economías de enclave, ni un nivel razonable dediversificación productiva, ni el beneficio de latransferencia tecnológica, ni la creación de empleodigno, ni la agregación local de valor a su producción.

En varios de estos países, los sectores socialesemergentes protagonizaron intensas movilizaciones2

demandando la reversión de los contratos deprivatización de los servicios de agua y la recuperaciónde la soberanía sobre los recursos naturales, lareactivación productiva de sus economías y el impulsoprioritario al desarrollo de sus mercados internos,particularmente en lo relacionado con la producciónagrícola y la seguridad y soberanía alimentaria;incluyendo en ello una importante preocupación porel cuidado del ambiente. El reto de esas naciones, y deldebate naciente desde la perspectiva de cambioestructural, ha puesto sobre el tapete el desafío de llevaradelante una transición de «país pobre bajo en carbono»a «país rico bajo en carbono» en vez de «país pobrebajo en carbono» a «país rico alto en carbono» (Urioste,2008).

Esta impronta de cambios ha tenido como escenariosen varios países procesos de reformas constitucionalesde muy significativo calado, sobresaliendo el tratamientoque se hace en los nuevos textos constitucionales(notablemente en los casos ecuatoriano y boliviano) desu pluralidad natural y cultural como valores fundantes,con extensos capítulos dedicados a la visibilización,valorización y el reconocimiento de los derechos delos pueblos indígenas y los derechos ambientales en uncontexto que asume, por primera vez en la historia

postcolonial de América Latina, el desafío de construirestados cuya pluralidad jurídica, política y económicarefleje su diversidad natural y socio-cultural.

En efecto, en la Constitución ecuatoriana (2008) puedeleerse que «se reconoce el derecho de la población avivir en un ambiente sano y ecológicamente equilibrado,que garantice la sostenibilidad y el buen vivir, sumakkawsay». Por su parte, la Constitución boliviana (2009)recoge la pluralidad lingüística del país que dichaconstitución reconoce como plurinacional, y dice que«el estado asume y promueve como principios ético-morales de la sociedad plural: ama qhilla, ama llulla,ama suwa (no seas flojo, no seas mentiroso ni seasladrón), suma qamaña (vivir bien), ñandereko (vidaarmoniosa), teko kavi (vida buena), ivi maraei (tierrasin mal) y qhapaj ñan (camino o vida noble)»3. Lo queinteresa resaltar aquí –más allá del valor delreconocimiento de la diversidad natural y la pluralidadcultural como atributos de los países de la región– es lanueva inspiración integral que reclama el diseño de laspolíticas de desarrollo.

Otro aspecto fundamental que atraviesa el diseño delos nuevos modelos estatales es el de la crítica alcentralismo que ha caracterizado la toma de decisionesen unos países con realidades regionales cada vez másdiversas, haciendo que la idea de la descentralizaciónpolítica vaya de la mano de la definición de esquemasen los que se busca institucionalizar diversasmodalidades de participación de la ciudadanía en elproceso de desarrollo, desde la fase de planificaciónhasta la ejecución y evaluación de programas, planes yproyectos.

De esta experiencia, se deduce que el paradigma de«lucha contra la pobreza», en tanto componente delmodelo prevaleciente de desarrollo en la región, haentrado también en cuestión. Las políticas orientadas areducir los índices de pobreza en los países de la región,han mostrado consistentemente las limitaciones de esteenfoque al estar desvinculadas de aquellas otras quebuscan promover el crecimiento económico parasatisfacer los objetivos del desarrollo social y éstas, asu vez, han demostrado que su efecto estructural en elabatimiento de la pobreza no es una consecuenciaautomática del propio crecimiento si es que la políticaredistributiva del excedente generado no constituye unaparte orgánica y explícita del diseño general; y hanmantenido –por activa o por pasiva– la naturaleza dualde sus sociedades . Este aserto ha sido aún más dramáticoen aquellos países que han dejado descansar el gasto

2 Recuérdese las emblemáticas «Guerra del Agua» (De la Fuente, 2000) y«Guerra del Gas» (Tintaya, 2004) que vivió Bolivia en los primeros años dela última década.

3 Las expresiones en las lenguas Quechua, Aymara, Guaraní, Moxeño yChiquitano (lenguas indígenas mayoritarias) han sido tomadas textualmenteen la nueva Constitución boliviana.

2. POLÍTICAS PÚBLICAS AMBIENTALES

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

social en proporciones insostenibles de los recursos decooperación internacional.

De la desintegración y el dualismo social a lavalorización de la diversidad socio-cultural yla integración urbano-rural

En este punto nos detendremos brevemente en el análisisde los efectos que ha tenido en la reestructuracióneconómica el proceso migratorio (campo-ciudad) y elcambio demográfico que se ha operado en las últimasdécadas en la región. En general, podría convenirse enque la ausencia crónica de políticas de promoción deldesarrollo rural y el encandilamiento de los gobiernos,con la visión modernizadora de sus sociedades, hallevado equivocadamente a condenar las economíasagrario-campesinas, desconociendo la complejidad delmundo rural y sus potencialidades para aportar aldesarrollo sinérgico del conjunto de la economía ycondenando a la inviabilidad su posible y necesariatransformación competitiva; lo que ha derivadosistemáticamente en el vaciamiento del campo.

Los cambios resultantes se han traducido en una mayorproporción de población urbana acompañada por unanueva estructura de generación de empleo e ingresosexplicada básicamente por la informalización y lafeminización de la fuerza laboral, especialmente en lossectores de servicios y el mercado interno,transformación caracterizada como la emergencia dela economía popular urbana (Wanderley, 2003). Por otraparte, la estructura de la economía en este periodo reflejauna alta volatilidad de una base productiva que generaempleo pero no ingresos, intenta diversificarse pero queno logra insertarse de manera sólida en el mercadoglobal, no genera ahorro sano, inversión productiva nicrecimiento económico sostenible.

En este contexto, la emergencia de nuevos actoressociales –entre los que podemos visibilizar a los pueblosindígenas y las comunidades originarias, como sujetosde derechos recientemente incorporados en laeconomía jurídica de la mayoría de los países de laregión–, pone al descubierto la complejidad de lasrespuestas que requiere la nueva situación.

El tenor de las demandas de los indígenas aúnvinculados a la realidad predominantemente rural hacambiado significativamente, pasando de los pliegosreivindicativos de alcance social y económicovinculados a su condición de productores agrícolas aotros de carácter más político e integral que tienen quever más con su auto identificación como culturas ypueblos culturalmente diferenciados y su aspiración aejercer sus derechos individuales y colectivos enigualdad de condiciones con los demás sectores de lasociedad. Así, la lucha por el reconocimiento de susderechos territoriales (Ver Recuadro 5.2), el acceso asus tierras originarias y los recursos naturales quetradicionalmente han utilizado, sus formas de gestión,usos y costumbres, sus formas organizativas y deautoridad, sus conocimientos tradicionales4 y sussistemas de valores, han cobrado una actualidad y una

RECUADRO 5.2

El reconocimiento de derechos territoriales indígenas

Alrededor de un 53% de las tierras tituladas en Bolivia, luegode la aprobación de la ley de Reforma Agraria (INRA, 1996)corresponden a propiedades comunales y TierrasComunitarias de Origen (TCO) o territorios indígenas, consuperficies muy extensas pero en general, con baja densidaddemográfica. En este periodo se han titulado 149 TCO conuna superficie de 15,5 millones de hectáreas de los 108millones que tiene Bolivia como extensión total. Estaextensión es mayor a toda la superficie de Nicaragua, elpaís más grande de Centroamérica (cerca de 13 millones dehectáreas), en el que habitan aproximadamente 6 millonesde ciudadanos de los cuales 2 millones se encuentran en elcampo y 4 millones en las ciudades. En Colombia (que tieneuna superficie de 114 millones de hectáreas), existen 710

Resguardos Indígenas con una superficie global de 35millones de hectáreas de tierras amazónicas y de llanuras,donde viven alrededor de 940.000 personas pertenecientesa 86 pueblos indígenas. Son el 2,2% de la población totalde Colombia estimada en 43 millones de habitantes, de losque el 29% vive en áreas rurales, que en su mayoría sonconsiderados mestizos y campesinos. (www.acnur.org enbase a datos del DANE, 2005). A diferencia de lo que ocurreen Bolivia en el marco de la nueva Constitución, en estosResguardos, los pueblos indígenas de Colombia no gozandel derecho al uso y aprovechamiento exclusivo de losrecursos naturales renovables (Constitución Política deColombia, art. 330, párrafo).

Fuente: Chumacero, 2009

4 Por ejemplo, investigaciones arqueológicas recientes han puesto aldescubierto los espectaculares resultados de los sistemas de gestión de losrecursos hídricos en ecosistemas tan distintos como son el Lago Titikaka yla llanura de Moxos. En el primer caso, existe la evidencia de al menos40.000 has. de suka kollus o waru warus, camellones construidos en elperímetro ribereño del Lago por la cultura Tiwanaku (1500 aC – 1200 dC),donde se ha obtenido rendimientos de hasta 10 toneladas de papa por Ha.(PROSUKO, 2008). En el segundo, se trata de una extensa llanura de suelosarcillosos bañada por varios ríos de la cuenca amazónica en el departamentodel Beni (Bolivia), donde la cultura Moxos (1000 aC – 1400 dC) desarrollóun sistema hidráulico en base a canales, lomas, terraplenes, lagunas ycamellones que le permitió controlar las inundaciones y las sequías, asícomo mantener un gran sistema de piscicultura y agricultura en una cuencade más de 180 mil Km2 (Painter, 2009).

2. POLÍTICAS PÚBLICAS AMBIENTALES

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V. POLÍTICAS

visibilidad que no tienen antecedentes en la historiarepublicana del continente.

En el marco del análisis precedente, la nuevatransformación estructural en la mayoría de los paísesde la región enfrenta el desafío de la transición de unaeconomía agrícola de subsistencia hacia un modelo decompetitividad sistémica, basado en una nuevaconceptualización y relación entre lo urbano y lo rural,abierto a nuevas relaciones regionales con mercadosdinámicos, basados en la transformación de los recursosnaturales con agregación de valor tecnológico ysimbólico, trabajo digno y condiciones que reviertanlos actuales desequilibrios en el comercio internacional,para evitar seguir por el camino de experienciasrecientes de otros continentes –China, India o Vietnam–que volcaron sus economías agrícolas hacia el sectorindustrial, pero con estándares laborales y ambientalesmuy bajos.

Los pueblos indígenas, usualmente asociados con laruralidad y el universo agrario tradicional, son hoycrecientemente sujetos de la nueva realidad urbana,donde han trasladado muchas de sus formasorganizativas, costumbres y tradiciones, constituyendoen muchos casos un segmento muy significativo de lapoblación de ciudades intermedias, donde sus redessocioculturales juegan un papel destacado en laarticulación de las nuevas economías populares urbanasdescritas líneas arriba, cumpliendo –entre otrasfunciones– la de vincular la producción rural con losmercados urbanos, multiplicando y diversificando losservicios que –como el transporte y el comercio– hacenposible tal articulación.

Del consumismo desenfrenado y acrítico a unnuevo paradigma de producción y consumoaustero, suficiente y sostenible

Lo comentado en el punto precedente tiene comotrasfondo la sugerente idea de las múltiples culturas ymodos de vida que coexisten en las sociedadeslatinoamericanas y caribeñas de hoy, y cómo éstos estáncambiando sistemáticamente las modalidades deproducción y, sobre todo, de consumo de los sectoresmás influyentes y los países centrales.

Si bien es cierto que en muchos casos, las iniciativas dela sociedad están limitadas, inducidas o condicionadaspor las condiciones estructurales (por ejemplo, la matrizenergética) de cada país, no es menos evidente que esen el ámbito de la sociedad y los individuos donde seoperan una importante cantidad de decisiones quetienen que ver con la manera en que cada país termina

definiendo su huella ambiental. Estas decisiones estánen directa relación con los niveles de educación einformación a los que tiene acceso la población, perotambién con la ética y los niveles de conciencia quetienen más que ver con la manera de ser y hacer, devivir y pensar, que tiene una determinada colectividaden un momento dado de la historia, marcada por suadhesión a los valores heredados por su comunidad yfamilia de generaciones pasadas, los que comparte consus coetáneos y su capacidad de discriminarlos ytransformarlos críticamente.

Cabe resaltar la importancia que en esta materia tienenlos mecanismos de reproducción social en el marco dela evitable globalización/homogeneización cultural5 quecomo tendencia afecta al mundo de hoy. A este respecto,cabe destacar las tareas que en materia de políticaspúblicas les corresponde asumir a los estados, lasorganizaciones representativas de la sociedad, a lasfamilias y a los individuos a propósito de, al menos,dos ámbitos fundamentales: los medios decomunicación y la educación.

De la soledad al bloque regional en lasnegociaciones internacionales

Finalmente, entre los aspectos generales que rodean hoyla revisión crítica de las políticas de desarrollo y el papelque en ellas tienen los aspectos ambientales, no

2. POLÍTICAS PÚBLICAS AMBIENTALES

5 Ver Convención de UNESCO sobre la protección y la promoción de ladiversidad de las expresiones culturales. 2005

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

podemos dejar de mencionar el contexto internacionalglobal y el regional, y los cambios que se estánproduciendo en la interacción asimétrica y desigual,pero cada vez más interdependiente, de los países dela región y de ellos con el resto de la comunidadinternacional.

Por una parte, los hallazgos inapelables de la comunidadcientífica han contribuido a desvirtuar la incertidumbretras la que se amparaban hasta hace poco tiempoalgunos países para incumplir con las responsabilidadesque les asignaban los instrumentos internacionales conrelación a la reducción de sus emisiones de gases deefecto de invernadero, para prevenir el cambio climáticocomo un fenómeno indiscutiblemente antrópico; lo quenaturalmente pasa por tomar medidas de carácterprocesal que modifiquen sus paradigmas de produccióny consumo, las mismas que puedan ser evaluadas en elcorto, mediano y largo plazo. Sin embargo, a la luz delos resultados de la última Cumbre Mundial sobreCambio Climático (Copenhague, diciembre 2009), esevidente que se requiere de un mayor esfuerzo paralograr un acuerdo vinculante donde cada uno asumasus responsabilidades.

En otro orden de cosas, el fracaso de las negociacionesinternacionales en el seno de la Organización Mundialde Comercio (OMC), se ha debido a un tema que resumela resistencia del mundo desarrollado a abandonar suspolíticas de subvención a la producción agrícola enbeneficio, no sólo de la competitividad global de laseconomías agrícolas del mundo en desarrollo, sino delo que podría ser un equilibrio más justo y la aperturade insospechadas oportunidades para los países de laregión, en el ámbito del comercio mundial y en laatención de sus propias necesidades internas. A esterespecto, es importante resaltar las medidas adoptadas

en los primeros meses de 2010 por Brasil, imponiendoaltos gravámenes a los productos subsidiados de origenagrícola provenientes de los países desarrollados,medida que también se extiende a temas tan espinososcomo la industria farmacéutica y los derechos depropiedad intelectual6.

Además de este ejemplo, conviene analizar desde losresultados de la Cumbre de las Américas sobreDesarrollo Sostenible (Santa Cruz, Bolivia, 1996), o laevolución reciente de los acuerdos de integracióneconómica y política de la región, donde están desdelos bloques económicos regionales: Mercado Comúndel Sur (MERCOSUR), Comunidad Andina de Naciones(CAN), Alianza Bolivariana para los Pueblos de NuestraAmérica – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), Comunidad del Caribe (CARICOM), Sistema deIntegración Centroamericana (SIECA); hasta los recientesacuerdos políticos como el de la Unión de NacionesSudamericanas (UNASUR) o la Comunidad de EstadosLatinoamericanos y Caribeños, organismo deintegración regional recientemente creado (febrero2010) por los 32 países del Grupo de Río y el CARICOM,con el propósito de aunar en una sola voz los interesesde los países latinoamericanos y caribeños.

Aunque la efectividad de estos nuevos esquemas y sucapacidad para adoptar instrumentos eficaces –porejemplo, en materia de política ambiental regional– aúnestá por verse, es deseable que la voluntad política quelos impulsa pueda traducirse en la adopción de políticasy compromisos en todos los temas de la agendainternacional –incluidos la orientación del desarrollo,la política comercial y ambiental– y se nutra de losavances que los diversos acuerdos subregionales hannegociado con éxito y ya se encuentran aplicando,como los acuerdos ambientales del MERCOSUR y elCARICOM, entre otros.

2.2 LA POLÍTICA AMBIENTAL: DELÉNFASIS SECTORIAL AL ÉNFASISTRANSVERSAL

Desde que los países de la región empezaron a construiragendas ambientales hace más de veinte años, esinnegable el avance registrado en términos de establecerun marco normativo cada vez más amplio y complejo,políticas, planes, programas y proyectos derivadas dedicha normativa y una institucionalidad que asuma laresponsabilidad de llevar adelante las accionespropuestas en tales instrumentos. Estos avances han sido

6 Ver: Osava, 2010. IPS, http://www.ipsnoticias.net/nota.asp?idnews=94963

2. POLÍTICAS PÚBLICAS AMBIENTALES

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V. POLÍTICAS

2. POLÍTICAS PÚBLICAS AMBIENTALES

recogidos en múltiples Informes GEO nacionales ysubnacionales desarrollados a lo largo y ancho de laregión, dando cuenta de los logros pero también de lasdificultades, insuficiencias o incoherencias en laimbricación sinérgica de estos componentes quepodrían afectar la sostenibilidad de la gestión ambientalen cada caso.

Con relación al marco normativo, la piedra angularsobre la que se ha fundado todo el accionar ulteriorhan sido las leyes generales del medioambiente y susrespectivos reglamentos, a partir de los cuales se hadesarrollado legislación y normativa a diversos nivelesque regulan temas en un amplio espectro tales comolas normas de calidad ambiental y los procedimientosde evaluación ambiental aplicables a proyectos públicosy privados de los diversos sectores productivos (minería,hidrocarburos, industria) y servicios (energía, transporte).El establecimiento de políticas, estrategias e institucionesorientadas a la preservación del patrimonio natural ycultural (áreas protegidas, recursos genéticos,conocimiento tradicional), e incluso a aspectosinstrumentales de la política sectorial tales como losmecanismos de participación y consulta de los sectoressociales concernidos en las diversas esferas (Jacobs,2002), la educación y comunicación ambiental, lapolítica comercial o la política fiscal.

Sin embargo, a estas alturas y a pesar de las importantesdiferencias que marcan las diversas experienciasnacionales que hacen imposible establecergeneralizaciones a riesgo de cometer involuntariasinjusticias en el relevamiento de los éxitos o quedarsecortos en el señalamiento de las dificultades, se puedeafirmar que en la mayoría de los casos la políticaambiental ha quedado confinada como un aspectosectorial de las políticas públicas, sin haber logrado lanecesaria transversalización que la convierta en uncomponente obligado y permanente de las demáspolíticas e instrumentos sectoriales.

Como bien se establece en el capítulo I de este Informe,es evidente que en la competencia por los recursos y laimportancia relativa de las decisiones adoptadas porlos gobiernos, han solido primar los argumentos delrédito inmediato y los objetivos cortoplacistas deproyectos que no siempre han considerado y/oincorporado adecuadamente una visión desostenibilidad social y ambiental, haciendo muchasveces superflua o ineficaz la normativa ambiental yponiendo en evidencia la debilidad de las institucionesencargadas de su aplicación.

Teniendo en cuenta la existencia de países en los que apesar de la fortaleza de su sistema institucional la política

ambiental ha resultado insuficiente, sea por la falta devoluntad política de sus autoridades o bien por lacapacidad de influencia de sectores de interés que hanimpuesto sus designios por encima de la norma y losintereses de las mayorías sociales; o bien, la de paísescon institucionalidad relativamente débil pero que hanlogrado significativos avances en materia de políticaambiental, habiendo asegurado el compromiso de losdistintos sectores involucrados; hoy, el reto generalizadoparece ser el de lograr transversalización, manteniendoel carácter integral y holístico de la visión ambiental enlas políticas generales de desarrollo7. Como así tambiénen aquellas emergentes de la situación de crisis que estáobligando a la adopción de medidas urgentes paramitigar los efectos de la misma en las economías, eltejido social y la salud ambiental de la región, lo quedemanda una amplia y efectiva concertación con todoslos sectores de la sociedad.

Esta afirmación no debe ser, sin embargo, entendidacomo debilitadora de ninguno de los avances y muchomenos de la institucionalidad público-ambiental, cuyascapacidades deben ser fortalecidas tanto en términosde recursos humanos, logísticos y financieros para hacerefectiva la legislación nacional y los estatutos propiosde la administración pública. Por el contrario, el avancedeberá darse en la incorporación del tema en losdecisores de las políticas y estrategias de desarrollo encada país y en los responsables de su implementaciónen las diversas áreas sectoriales.

Pensando en los resultados deseables en el mediano ylargo plazo, un particular énfasis deberá darse desde

7 Cumbre de Desarrollo Sostenible, Plan de Acción, Johannesburgo 2002.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ahora a la formación de los recursos humanos quetendrán bajo su responsabilidad la acción gubernativaen el futuro próximo, así como a la información públicay las políticas comunicacionales orientadas a convertirlos objetivos de la política ambiental en «sentidocomún» de la ciudadanía en general, construyendo asíuna masa crítica interesada y una capacidad de controlsocial que deberá encontrar los espaciosinstitucionalizados de rendición de cuentas, donde setransparente la acción gubernamental, en los queplasmar su contribución corresponsable y su acciónvigilante, garantizando la sostenibilidad de lasdecisiones y acciones del desarrollo, impidiendo quese impongan minoritarios intereses espurios o que secomprometa ilegítimamente la fe del estado (OsorioVargas, 2006).

A fin de garantizar que este diseño vaya desde losproyectos locales hasta las grandes políticas y planesnacionales y, naturalmente, a los emprendimientostransfronterizos y regionales, la institucionalidadpropuesta deberá permitir la participación ciudadanaen todos los estadios de los proyectos de desarrollo yen todos los niveles de descentralización político-administrativa. Las acciones e iniciativas deberán contarcon objetivos específicos y estar acompañadas demecanismos de verificación de resultados. Asimismo,es importante aprovechar la institucionalidad yaexistente8 y sembrar el tema en las agendas de empresas,consejos empresariales, sindicatos, campesinos,vecinales, no gubernamentales, redes de la sociedadcivil, entre otros, así como en los ámbitos de diálogo yconcertación público-privado-social donde yaexistieren, tales como los Consejos de Desarrollo,Comités Interministeriales, Comités de Gestión.

En esa misma perspectiva, es deseable que los sectoresmás sensibles y responsables con el compromisoambiental evolucionen de una posición «ambientalista»hacia la consideración de la multidimensionalidad deldesarrollo y de las decisiones que lo hacen posible,rompiendo el estigma de la parcialidad –que a vecessobredimensiona los objetivos ambientales sin tomaren cuenta legítimas aspiraciones de uso yaprovechamiento sostenible de los recursos naturalesen acciones de desarrollo socioeconómico–,contribuyendo así a un cierto aislamiento de lacomunidad más comprometida. A tal efecto, el énfasis

en la conservación de los recursos y la calidad ambientaldeberá evolucionar hacia un enfoque ecosistémicoproactivo, buscando un mejor balance entre el QUÉhacer en el campo ambiental y el CÓMO hacer en todoslos demás campos de interés, particularmente en eleconómico y social.

En esa línea, el trabajo ambiental requiere forjar nuevasy más sólidas alianzas, no sólo entre quienes ya estánconvencidos y trabajan en el sector, superando visionescompetitivas y excluyentes, sino con los actores públicosy privados más amplios entre quienes se requiere untrabajo más esforzado para que se cumpla con la leypero también para que incorporen los costos y beneficiosde un enfoque integral en su vida cotidiana, y en lasdecisiones de política que involucran compromisosambientales. Para garantizar la integralidad de laspolíticas públicas resulta igualmente importanteconsiderar las prácticas innovadoras y los hallazgoscientíficos que ha desarrollado la sociedad universalen todos los ámbitos, por lo que el intercambio deexperiencias y el aprendizaje recíproco deberíanconstituir una práctica más y frecuente.

8 En cada país se han dado diversas formas de articulación de los distintosactores, de acuerdo a las características y condiciones particulares de cadauno de ellos. Así por ejemplo, se puede observar los casos de lasorganizaciones empresariales en Argentina (CEADS), Bolivia (CEDES),Colombia (CECODES), o los capítulos nacionales del Consejo MundialEmpresarial para el Desarrollo Sostenible (WBCSD, por sus siglas en inglés);o las redes de ONGs y otras expresiones de la sociedad civil que configuranuna extensa red de actores en la región.

2. POLÍTICAS PÚBLICAS AMBIENTALES

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V. POLÍTICAS

2. POLÍTICAS PÚBLICAS AMBIENTALES

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

RECUADRO 5.3

El Ordenamiento Ecológico del Territorio enMéxico (OET)

La experiencia mexicana en materia de OET tieneantecedentes institucionales que datan de la década de los80 y ha ido avanzando hasta abarcar una buena porcióndel territorio nacional.

A pesar de sus interesantes contribuciones, su puesta enpráctica como instrumento de política ha estadocondicionada por su desvinculación respecto de laplaneación urbana y del aprovechamiento de recursosestratégicos en determinadas zonas del territorio nacional.

Si bien la ley otorga a los municipios la facultad legal deordenar el territorio y el uso del suelo, la mayor parte delos OET han sido realizados por los gobiernos de los Estadosque no tienen competencia para ello.

Un fenómeno que ha enriquecido la práctica del OET sonlos ordenamientos realizados por las comunidadesindígenas en sus territorios, lo cual aunque no es ilegal,puede llegar a plantear problemas competenciales con losmunicipios a los que pertenecen, lo que plantea lanecesidad de pactar entre ambos niveles.

Debido a la ambigüedad del marco jurídico, muchos delos OET realizados por los gobiernos estatales intervienenindebidamente en materias de carácter federal.

A partir de la experiencia evaluada hasta el presente, serecomienda:

Promover la participación de las autoridadesmunicipales en la discusión y elaboración de los OETs,particularmente en los ordenamientos comunitarios,a fin de prevenir conflictos,Promover la discusión de los fundamentosmetodológicos del OET, con el fin de incorporar demanera explícita los procesos de urbanización y laregulación de zonas con recursos naturales estratégicosa la agenda del OET, yRevisar la metodología jurídica utilizada para laexpedición de los OETs, con el fin de mejorar sucalidad regulatoria.

Fuente: Azuela, 2006

En la presente sección, se desarrollan sugerenciasespecíficas basadas en casos concretos que ejemplificansu aplicación en los diversos aspectos propuestos,tratando de aportar elementos sustantivos ymetodológicos que permitan superar las carenciasobservadas y aprovechar las oportunidades que se abrenen el actual contexto que vive la región.

3.1 ENFOQUE Y ORDENAMIENTOTERRITORIAL

El territorio es un espacio socio-geográfico construidocultural e históricamente por la interacción entre losseres humanos –entre sí– y de éstos y la naturaleza, quecontiene múltiples dimensiones, tales como laambiental, económica, política, institucional, social ycultural. Por ello, el territorio viene asociado a unsentido de identidad y pertenencia, desde el cual losseres humanos son sujetos históricos en construcción.Las comunidades que lo conforman se sirven de su basede recursos naturales para establecer sus formas deproducción, consumo e intercambio, estrategiaseconómicas y modos de vida, que expresan prácticas,principios y valores, regulados por determinadossistemas de organización social y político-institucional.El territorio se organiza desde la trama de tejidos socialesque permite manejar la incertidumbre, solucionarproblemas comunes y lograr aspiraciones compartidas(Jara, 2009).

El ordenamiento territorial constituye un enfoque deplanificación que permite una mirada integral alconjunto de recursos y dimensiones de un proceso dedesarrollo. Incluye tres elementos que resultaninseparables: Territorio – Recursos – Participación detodos los actores relevantes. De esta manera, un procesode planificación de base territorial parte del acotamiento

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

de la base territorial (un municipio, una ciudad, unaprovincia, una comunidad, una cuenca, ó una eco-región), lo que permite su aplicación flexible a diversasescalas. La identificación de los recursos no comprendeúnicamente un inventario de ellos sino –y sobre todo–su disponibilidad, cuantía y vocación. En este caso, setrata de abarcar de la manera más amplia posible, todoslos posibles recursos susceptibles de ser aprovechadospara el desarrollo local: naturales (renovables y norenovables), fuentes de agua, uso actual, uso histórico,servicios existentes, relieve, paisaje, accesibilidad,historia, cultura, etc. Finalmente, con relación alcomponente social, se trata de identificar la manera enque la población ocupa y se relaciona con el territorio,su organización, sus formas de autoridad y gestión, losriesgos por uso inadecuado de los recursos existentes.

Sin embargo, lo que caracteriza específicamente a estametodología es el enfoque participativo de la misma.Esto supone aplicar un procedimiento de «abajo-hacia-arriba» (bottom-up) y revisar el rol de las institucionestradicionalmente encargadas de la planificación,bajando del escritorio de los funcionarios, desde el quese definían los objetivos, recolectaban y analizaban losdatos, y se elaboraba un Plan que, una vez aprobado,luego serían otros funcionarios de otras instituciones losencargados de implementarlo. Ahora, en la planificaciónse busca una mayor participación de los grupos deinterés que finalmente debe implementar y cumplir conel plan. La planificación está realizada por estos gruposde interés con el eventual apoyo técnico y metodológicode una institución planificadora cuyo rol, aunquetodavía tiene un papel técnico limitado, ahora esmeramente el de un facilitador del proceso (VanLeeuwen, 2000).

La planificación participativa se caracteriza por ser unproceso que (FAO, 1993):

Es de aprendizaje para todos los involucrados,Se basa en los problemas reales de la gente y/oinstituciones,Beneficia a todos los involucrados,Refuerza el poder y los roles de las organizacionesy comunidades locales,Establece relaciones de coordinación y cooperaciónentre diferentes (niveles de) actores,Proporciona información segura, oportuna ycomprensible.

Es importante que el proceso de planificación involucrea todos los actores que tengan algún papel significativoy relevante en cuanto al tema o la problemática en laregión bajo consideración para lograr una planificaciónconsensuada y basada en los problemas y necesidades

de los involucrados y futuros afectados. Sólo así se logra–desde el proceso de planificación– un compromiso delos diferentes grupos de interés en cuanto alcumplimiento con lo programado; pues son ellosmismos los que identifican, analizan y solucionan suspropios problemas.

En el uso de esta herramienta, son varios los países dela región que han institucionalizado modelos propiosde ordenamiento, intentando generar las basesmetodológicas para su aplicación en el conjunto delterritorio. Destacan entre ellos, los casos de México yCosta Rica reseñados en los Recuadros 5.3 y 5.4.

RECUADRO 5.4

Ordenamiento Territorial en Costa Rica:Instrumentos legales y operativos

En Costa Rica, se crea el Sistema Nacional para el DesarrolloSostenible (SINADES) en 1994, estableciendo las basesjurídicas y metodológicas para el ordenamiento territorial(OT) a nivel nacional.

La construcción de los escenarios del ordenamiento legalen Costa Rica se fundamenta en cinco elementos: 1)Ordenamiento político - administrativo, 2) Ordenamientogeográfico, 3) Ambiente y recursos naturales, 4) Aspectossocio – culturales, y 5) Aspectos económicos.

En la propuesta de escenarios de ordenamiento territorialhacia el 2025 se identifican oportunidades estratégicas parael desarrollo de Costa Rica. Se destacan las oportunidadesdel país en cuanto a:

1) Investigación, desarrollo y utilización de labiodiversidad,

2) Bosques tropicales y secuestro de carbono,3) Protección, manejo y utilización de los recursos

hídricos,4) Turismo ambiental,5) Protección, manejo y utilización de recursos marinos,6) Desarrollo y producción de alta tecnología y prestación

de servicios altamente especializado, y7) Producción industrial / agroindustrial limpia de alto

valor agregado.

Los principales grupos de problemas de la situación actualdel OT en Costa Rica se refieren a los intereses creados oactitudes, a la debilidad de la información existente, aldesorden institucional y al marco obsoleto de las leyes yreglamentaciones. Se identificó también que lasherramientas de planificación y de OT utilizadas en CostaRica no son bien desarrolladas o llegan a ser contradictorias.El énfasis actual en una interpretación unilateral de lapropiedad privada fue otro poderoso obstáculo identificado.

Fuente: Ministerio de la Presidencia y Planificación de la República deCosta Rica.

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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V. POLÍTICAS

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

RECUADRO 5.5

El ordenamiento de Bogotá

Un caso que se visualiza como exitoso en materia deordenamiento y gestión territorial a nivel local conorientación ambiental es la ciudad de Bogotá. Lasautoridades del Distrito Capital, en forma conjunta con laciudadanía y representantes intersectoriales, formularon elPlan de Gestión Ambiental 2001-2009, el cual sumado alestablecimiento de una Mesa de Planificación Regional haposibilitado efectuar una gestión del territorio que haconjugado las demandas de la población e incorporadoestándares ambientales en la gestión urbana (DAMA yPNUMA, 2003 y PNUD, 2008). De igual modo, la creaciónde un Sistema Ambiental del Distrito Capital, en donde sedetallan un conjunto de orientaciones, normas, actividades,recursos y competencias institucionales, así como de unSistema de Información Ambiental (SIA), ha permitido darseguimiento al Plan en su componente de ordenamiento,principalmente en cuanto al uso del suelo. Dichasiniciativas se han nutrido de un Fondo financierodenominado FOFIGA, el cual obtiene sus recursos del cobrode sanciones, multas, tasas redistributivas, tasascompensatorias, tasas de utilización de aguas,transferencias, entre otras.

Fuente: Departamento Administrativo del Medio Ambiente (DAMA) y Programade las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), 2003 y Programade las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), 2008.

El Ordenamiento Territorial Urbano

Dada la evolución que ha tenido el proceso de crecienteurbanización en la región, a menudo –particularmente,en las megaciudades y ciudades intermedias– los hechoshan ocurrido a mucha mayor velocidad que lasrespuestas y previsiones institucionales que, con suerte,han tenido un papel remedial ex post, cuando muchosde los problemas generados por la improvisación tienensoluciones mucho más costosas o, simplemente, notienen solución, y entonces el paso inmediato esinevitablemente el del conflicto.

A fin de prevenir esta situación recurrente, esconveniente aplicar el instrumento aquí esbozado, elmismo que permitirá prevenir las ocasionalesexternalidades y garantizar soluciones que se anticipena los problemas, teniendo como actores corresponsablesa todos los sectores involucrados.

La planificación territorial urbana da un sentido deintegralidad al tratamiento de los aspectos físicos,demográficos, sociales, económicos, ambientales, losservicios básicos, la vialidad, el paisaje urbano, la matrizcultural de los pobladores, entre otras variables.

El Recuadro 5.5 da cuenta de la interesante experienciadesarrollada en la capital colombiana en esta materia.

Desarrollo rural territorial y gestión delcapital natural y la biodiversidad

En el caso de los territorios rurales –que albergan laprácticamente la totalidad de la biodiversidad–, el rolde la planificación territorial debe ayudar a enfrentarno sólo el reto de buscar soluciones a los problemas apartir de los actores locales, sino también el de salvar labrecha de prejuicios, desvalorización y la subordinaciónque a menudo afecta a las políticas de desarrollo rural,en las altas esferas gubernamentales (urbanas) de lasque depende –entre otras cosas– la asignación de losrecursos. Estas políticas han partido de visionessimplistas que han concebido los procesos de desarrollocomo fenómenos lineales y unívocos: la humanidadavanza de lo atrasado a lo moderno, de lo rural a lourbano, de lo agrícola a lo industrial.

El Cuadro 5.1 muestra una comparación entre losenfoques tradicional y territorial aplicados al desarrollorural, planteando la superación de la visión sectorialistade la ruralidad, en el primer caso por una aproximaciónmás integral y holística como la descrita en laintroducción de esta sección. Así, mientras el primerose inscribe en la segregación de lo rural y se sitúa en unespacio reivindicativo, el segundo busca integrar laproblemática rural en sus múltiples interacciones conlos mundos y visiones que lo rodean y determinan, tantodesde dentro (cosmovisiones y prácticas culturaleshistóricamente definidas) como desde fuera (realidadesy actores urbanos), planteándose un desarrollo que seimbrique con los mercados y demandas a quienes sepropone responder, de manera de optimizar el momentoy el destino de sus inversiones, mientras la productividaddeja de ser un tema meramente tecnológico para

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Enfoque tradicional Enfoque territorial

Descentralización y Reforma del Estado Ordenamiento Territorial

Participación y compensación Cooperación e inclusión

Perspectiva ambiental Desarrollo Sostenible

Economía agrícola Economía Territorial

Tecnología para la productividad Innovación tecnológica y competitividad territorial

Sistemas pasivos de información Sistemas vivos de gestión del conocimiento

Capital físico Capital natural, capital humano, capital social

Urbano – rural Fluidez entre lo urbano y lo rural

Énfasis sectorial, focalización en productos Enfoque multisectorial, énfasis en cadenas y clusters productivos

Políticas orientadas por la oferta Políticas orientadas por la demanda

Fuente: Enfoque territorial del desarrollo rural, la propuesta del IICA, Barril (2009)

CUADRO 5.1

Elementos alternativos a los enfoques convencionales de Desarrollo Rural

convertirse en una variante con múltiples determinantesque hacen no sólo a los factores físico-productivos sinoa las dimensiones territoriales, históricas, culturales, deorganización social, a las capacidades y oportunidadesexistentes para convertir sus recursos en verdaderoscapitales.

Este reto incluye la necesidad de asumir la complejidadde la nueva ruralidad marcada por varias paradojas:

el hecho de ser las regiones rurales las queconcentran la mayor pobreza y desigualdad, hambree inseguridad alimentaria, al lado de ladiversificación productiva (la diversidadagroecológica comunitaria continúa siendo elprincipal banco de germoplasma9) y ciertamodernización aún en los sectores agrícolastradicionales;el intercambio desigual entre el campo y la ciudad,al lado de una migración (temporaria o permanente)que favorece una mayor integración de laproducción de bienes y servicios rurales con losmercados y centros urbanos próximos;la creciente cualificación de los recursos humanosvinculados al mundo rural al lado de la fuenteinmediata del conocimiento tradicional acumuladopor siglos y el patrimonio intangible de lascomunidades originarias;la dualidad del paradigma de desarrollo rural queabre la agricultura de exportación (commodities)integrada a la economía y los mercados mundialesal lado de la mayor presión sobre los recursosnaturales (particularmente los bosques) para laampliación de la frontera agrícola con cultivos

extensivos y nuevas zonas de colonización, con laconsiguiente pérdida de biodiversidad y eldebilitamiento de los ecosistemas, entre otrosfactores. Esta situación configura un mapa de nuevosy viejos actores igualmente complejo.

La reversión de esta situación exige partir de una visiónterritorial sistémica e inclusiva que: 1) Valorice lamultifuncionalidad de la agricultura y el mundo rural,2) Trascienda el enfoque sectorial, reconociendo elprotagonismo de la enorme diversidad de actores,3) Apunte a preservar la diversificación productiva, lainnovación institucional, la conservación de los recursosnaturales y la inclusión social; para lo que el punto departida obligado lo constituye la descentralización delsistema decisorio en favor de la «red de redes» queconfiguran las sociedades rurales, particularmente lascomunitarias (Barril, 2009). Por otro lado, es fácil colegirque la adopción del enfoque territorial en el tratamientode realidades rurales de diversas escalas permite aplicarcon mayor flexibilidad los preceptos del EnfoqueEcosistémico descrito a continuación.

9 Por ejemplo, el banco de germoplasma de PROIMPA (La Paz, Bolivia) cuentacon 3166 registros para la papa, tubérculos y raíces y 4315 registros dequinua y granos altoandinos. http://www.proinpa.org/

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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V. POLÍTICAS

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

3.1.1 EL ENFOQUE ECOSISTÉMICO

El enfoque ecosistémico, definido por el Convenio sobrela Diversidad Biológica (CDB), tiene las siguientescaracterísticas:

Es integrado: En la actualidad, se tiende a manejarlos ecosistemas para obtener un bien o serviciodominante, como por ejemplo pescado, madera oenergía eléctrica, sin reconocer plenamente lo quese está perdiendo simultáneamente. Es posibleentonces que se estén sacrificando bienes y serviciosmás valiosos que los que se obtienen. Por lo generalse trata de aquéllos a los cuales el mercado no lesha asignado un valor, como son la biodiversidad oel control de las inundaciones. Un enfoqueecosistémico considera todo el abanico posible debienes y servicios e intenta optimizar la mezcla debeneficios para un ecosistema dado y entre los variosecosistemas. Su propósito es hacer que lascontraprestaciones sean eficientes, transparentes ysostenibles.Redefine los límites que tradicionalmente hancaracterizado el manejo de los ecosistemas. Sereconoce que los ecosistemas funcionan comoentidades completas y requieren ser manejadoscomo tales y no por partes. Esto frecuentementeimplica trascender los límites jurisdiccionales, dadoque los ecosistemas traspasan las fronteras entreestados y países.Adopta una visión de largo plazo. Se respetanlos procesos de los ecosistemas y las escalastemporales asociadas.Incluye a la gente. Se integra la información socialy económica con la información ambiental acercade los ecosistemas. Así, se relacionan explícitamentelas necesidades humanas (el bienestar humano) conla capacidad de los ecosistemas para satisfacerlas.Mantiene el potencial productivo de lasunidades. Según este enfoque, el manejo no esacertado a menos que preserve o aumente lacapacidad de un ecosistema para producir losbeneficios deseados en el futuro.

El enfoque ecosistémico puede ser utilizado ensituaciones muy diversas de manejo de recursos. ElRecuadro 5.6 presenta el análisis de un humedal enCuba mediante el enfoque ecosistémico.

La implementación efectiva del enfoque ecosistémicodescansa en diversos instrumentos específicos. El pagopor servicios ecosistémicos es un ejemplo. La idea básicaes identificar un servicio ecosistémico (por ejemplo elmantenimiento de la calidad y cantidad del aguaproducida por una cuenca) y producir una transacción

entre quienes proveen el servicio (habitantes de laspartes altas de la cuenca) y quienes se benefician delservicio (poblados o industrias que utilizan el recursohídrico aguas abajo). La «Reducción de las Emisionespor Degradación y Deforestación», (REDD) –unainiciativa importante para abordar el cambio climático–se basa en la implementación de esquemas de pagopor servicios ecosistémicos (ver Recuadros 5.12 y 5.22).

Uno de los ámbitos de aplicación del enfoqueecosistémico más importantes es el de la gestión de losrecursos hídricos. A este efecto, se encuentran muydesarrolladas las metodologías de Gestión Integrada delos Recursos Hídricos (GIRH) y la del Manejo Integradode Cuencas (MIC), que constituyen instrumentos muypróximos a este enfoque, siendo la principal diferenciael hecho de que el enfoque ecosistémico no hacereferencia únicamente al recurso hídrico sino alconjunto de elementos presentes en el entorno territorial,social, económico, político y cultural, lo que garantizala observancia de un número superior de variables queabona a la mayor integralidad del análisis.

El PNUMA con la UICN llevaron adelante un estudiosobre la aplicación del enfoque ecosistémico a losrecursos hídricos en 8 casos de la región de AméricaLatina, estando sus principales conclusiones recogidasen los 12 principios descritos en el Recuadro 5.7.

El estudio de condiciones y tendencias de los bienes yservicios ecosistémicos (Capítulo II); de las relacionesentre servicios ecosistémicos, los factores de presión, yel bienestar humano (Capítulo III); y la generación deescenarios (Capítulo IV) son parte del abanico deinstrumentos necesarios para implementar el enfoqueecosistémico.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

RECUADRO 5.6

El enfoque ecosistémico en el análisis de la Ciénaga de Zapata, Cuba

La Ciénaga de Zapata, ubicada en la provincia de Matanzas, con una superficie de 4,500 km2 y una población de 9,084habitantes, constituye el mayor humedal de Cuba y uno de los mayores de América Latina y el Caribe. Es Reserva de laBiosfera y Sitio Ramsar. Las principales actividades económicas son la silvicultura, la apicultura, la pesca, la industrialocal y el turismo. Los servicios que brinda este ecosistema han sido modificados directa o indirectamente por la repercusiónsinérgica de tres presiones:

Alteración del régimen hídrico (carácter antrópico), como resultado de la construcción de grandes obras hidrotécnicaspara el represamiento, derivación de caudales y explotación de acuíferos, así como infraestructuras viales. La alteraciónde los patrones de circulación natural del agua, unido a la disminución de su calidad por salinización de acuíferos, ycontaminación por actividades humanas, trajo consigo modificaciones en las funciones del humedal que han incididode manera significativa sobre la biodiversidad, ocasionando pérdida y reducción de hábitat, fragmentación del ecosistemay disminución de especies. En consecuencia, se afectaron los servicios de regulación y de soporte relacionados con elciclo de los nutrientes y de aprovisionamiento al disminuir fuentes de alimentos y la calidad del agua.

Introducción de especies exóticas (carácter antrópico), debido fundamentalmente a la propagación de numerosasespecies exóticas y nativas, con comportamiento de invasoras, así como a la expansión del Claria sp.. Esta especie seencontraba controlada en los sitios de acuicultura en embalses construidos, y se ha propagado accidentalmente durantelas crecidas y derrames de las presas. Todo ello es considerado un problema ambiental crítico para la biodiversidad de laCiénaga y una limitante para el desarrollo de actividades especializadas como el ecoturismo y la pesca fluvial.

Variabilidad climática (carácter natural), especialmente resultado de las sequías alternadas con los huracanes. Estosúltimos provocan severos daños a la flora y la fauna y propician gran acumulación de material combustible que durantelos períodos de sequías favorecen incendios forestales de gran proporción. Como resultado, se deteriora aún más labiodiversidad, la calidad ambiental y la belleza paisajística del ecosistema y, en consecuencia, disminuyen las posibilidadesde recreación y turismo (servicios culturales).

Las afectaciones a los servicios ambientales y los impactos al bienestar humano han sido atenuados por las políticas yproyectos de desarrollo social dirigidos a la protección y manejo de recursos, la recreación y turismo, la educación

ambiental, la investigación científica ymonitoreo, el desarrollo social yactividades socioeconómicas sostenibles,la capacitación, entre otras.

La gestión eficiente del medio ambientey de los recursos naturales precisa deevaluaciones ambientales con unenfoque sistémico, que generenrespuestas integrales basadas en lasinterrelaciones entre las presiones, elestado y sus cambios y los impactos alos servicios del ecosistema y por tantoal bienestar humano, como el mostradopara la Ciénaga de Zapata.

Fuente: PNUMA, 2009d.

Análisis de las principales interrelaciones en la Ciénaga de Zapata.

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V. POLÍTICAS

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

RECUADRO 5.7

Principios del enfoque ecosistémico aplicado a los recursos hídricos

1. La elección de los objetivos de la gestión de los recursos de tierras, hídricos y vivos debe quedar en manos de lasociedad.

2. La gestión debe estar descentralizada al nivel apropiado más bajo.3. Los administradores de ecosistemas deben tener en cuenta los efectos (reales o potenciales) de sus actividades en los

ecosistemas adyacentes y en otros ecosistemas.4. Dados los posibles beneficios derivados de su gestión, es necesario comprender y gestionar los ecosistemas en un

contexto económico. Este tipo de programa de gestión debe ayudar a:a) Disminuir las distorsiones del mercado que repercuten negativamente en la diversidad biológica;b) Orientar los incentivos para promover la conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica;c) Procurar, en la medida de lo posible, incorporar los costos y los beneficios en el ecosistema de que se trate.

5. Con el fin de mantener los servicios ecosistémicos, la conservación de la estructura y la función de los ecosistemasdebe ser un objetivo prioritario.

6. Los ecosistemas se deben gestionar dentro de los límites de su funcionamiento.7. El enfoque ecosistémico debe aplicarse a las escalas espaciales y temporales apropiadas.8. Habida cuenta de las diversas escalas temporales y los efectos retardados que caracterizan a los procesos de los

ecosistemas, se deben establecer objetivos a largo plazo en la gestión de los mismos.9. Debe reconocerse que el cambio es inevitable.10. Se debe procurar el equilibrio apropiado entre la conservación y la utilización de la diversidad biológica, y su

integración.11. Deben tenerse en cuenta todas las formas de información pertinente, incluidos los conocimientos, las innovaciones

y las prácticas de las comunidades científicas, indígenas y locales.12. Deben intervenir todos los sectores de la sociedad y las disciplinas científicas pertinentes.

Fuente: UICN-PNUMA, 2006

RECUADRO 5.8

El Sistema de Contabilidad Ambiental y Econó-mica Integrada (SCAEI) en Latinoamérica

La implementación del SCAEI en Latinoamérica ha sidorevitalizada en años recientes. Varios países de la regiónhan comenzado a elaborar planes para implementarlos enlos próximos años, pero los avances en este sentido hansido desiguales. Para entender de mejor forma cuál es lasituación actual, se optó por categorizar a los países de laregión en cuatro grupos, y de allí derivar algunos hallazgosinteresantes según el nivel de implementación. El primergrupo lo conforman países que pueden considerarse conun nivel de avance relativamente alto: México, Colombiay Guatemala. El segundo grupo lo conforman los paísesque en algún momento desarrollaron ejercicios de cuentasambientales pero, por diversas razones, estos ejercicios nose concretaron en procesos continuos: Chile y Costa Rica.El tercer grupo: (República Dominicana, Panamá yNicaragua) se refiere al de países que tienen planes actualesun poco más formales y tienen cierto adelanto, pero conun avance incipiente. El cuarto grupo es el conjunto depaíses que no tienen ningún plan para elaborar las cuentas,han mostrado poco interés en desarrollarlas o tuvieronplanes pero nunca los concretaron.

Fuente: Instituto de Agricultura, Recursos Naturales y Ambiente (IARNA),2009.

3.1.2 PAGO POR SERVICIOS AMBIENTALES YEMPRENDIMIENTOS VERDES

Valoración económica de los recursos

El concepto «cuentas ambientales» surge frente a lanecesidad de revelar el aporte del subsistema ambientalen la conceptualización del desarrollo, así como en eldiseño y puesta en marcha de instrumentos para suconsecución. En jerga común, el concepto «cuentasambientales» es una plataforma de análisis que asociavalores monetarios a uno o varios elementos del capitalnatural para ajustar los indicadores macroeconómicosfundamentales e incidir en decisiones de políticas dedesarrollo. Dentro del espectro de las cuentasambientales, se ha reconocido que el Sistema deContabilidad Ambiental y Económica Integrada (SCAEI)es el modelo más adecuado para incorporar medicionesque reflejen los impactos reales de los procesoseconómicos en el ambiente y la verdadera contribucióndel patrimonio natural al desarrollo (IARNA, 2009). ElRecuadro 5.8 muestra el estado de situación en eldesarrollo de este instrumento en los países de la región.

Pagiola y otros (2005) analizaron los obstáculos yalcances que han tenido diversos programas de pagode servicios ambientales en Colombia, Costa Rica yNicaragua vinculados al proyecto de manejo deecosistemas silvo-pastoriles (Silvopastoril Ecosystem

Management Project) del Banco Mundial. Los resultadosexpuestos evidencian que estos programas posibilitanefectivamente cambios en el uso de la tierra, siempre ycuando, se definan inicialmente pagos competitivos en

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

términos de mercado y se mantengan monitoreosconstantes y sistemáticos del bienestar económico ysocial de los propietarios. Asimismo, se evidenció quela sostenibilidad financiera a mediano y largo plazo deestos proyectos debe concatenarse a fuentes locales derecursos, por ejemplo, al pago de cánones ambientaleso cánones por uso del recurso hídrico. De igual modo,la posibilidad de que estos programas alcancen susobjetivos depende en buen grado del nivel de

RECUADRO 5.9

Experiencias regionales en la valoración de servicios ambientales

Fuente: The Nature Conservancy (TNC), 2008, en «Informe Estado de la Región Centroamericana sobre Desarrollo Humano Sostenible»

Programa de Incentivos Forestales (Pinfor) de Guatemala. Es un instrumento económico cuyo objetivo es impulsar laproducción forestal sostenible en el país, mediante el estímulo a la inversión en las actividades de reforestación y manejode bosques naturales. Consiste en hacer pagos directos a los propietarios de tierras que realicen actividades de reforestacióno manejo de bosques naturales con fines de protección, mediante «certificados de inversión forestal». Hasta 2006 sehabían pagado alrededor de 81,6 millones de dólares, de los cuales más del 50% se invirtió en mano de obra local, esdecir, permitió generar empleo. El Programa ha logrado que se incorporen a la actividad forestal 53.700 hectáreas detierras desprovistas de bosques, a través de plantaciones y manejo de la regeneración natural. La mayoría de estas tierrasestaban dedicadas a cultivos como maíz o pastos. También se han integrado 130.000 hectáreas de bosques naturales aplanes de manejo sostenible (Revolorio, 2007).

El Fondo del Agua en Sierra de las Minas, Guatemala. Es una estrategia técnica y financiera impulsada por la FundaciónDefensores de la Naturaleza para conservar la Reserva de la Biosfera Sierra de las Minas y, a la vez, asegurar el abastecimientopermanente de agua dulce para los usuarios del complejo Motagua-Polochic, por medio de la conservación y el manejosostenible de sus cuencas. Si bien el Fondo surgió como un sistema de compensación por servicios ambientales (CSA), enél se contemplan diferentes servicios financieros que buscan aportar sostenibilidad y beneficios a corto, mediano y largoplazo, así como fortalecer la capacidad de los usuarios del recurso hídrico para que sus prácticas de uso y manejo del aguasean eficientes y sostenibles. Impulsa dos mecanismos básicos: un programa de créditos y un programa de pequeñasdonaciones. Ante la falta de una ley general de aguas, esta iniciativa ha sido bien recibida por las comunidades locales,los empresarios y la comunidad internacional.

Programa de Pago por Servicios Ambientales de Costa Rica. Es un reconocimiento financiero de parte del Estado, através del Fondo Nacional de Financiamiento Forestal (FONAFIFO), que tiene por objeto financiar los procesos dereforestación, forestación, viveros forestales, sistemas agroforestales, recuperación de áreas denudadas y los cambiostecnológicos en el aprovechamiento e industrialización de los recursos forestales. Se dirige principalmente a pequeños ymedianos productores, mediante créditos u otros mecanismos de fomento del manejo del bosque, intervenido o no(FONAFIFO, 2005). El Programa ha adoptado un esquema financiero novedoso, en el que se integran diversos actores.Entre 1997 y 2006 se suscribieron 6.062 contratos, equivalentes a 532.668 hectáreas bajo las modalidades de protecciónde bosque, manejo de bosque, reforestación, y establecimiento de plantaciones. En la modalidad de protección de bosquesse cubrió un total de 471.392 hectáreas entre 1997 y 2006, aunque con una ligera reducción en este último año.

Las tarifas de entrada en Costa Rica. Tras la afluencia de 1,65 millones de turistas extranjeros, en Costa Rica los ingresosprovenientes del turismo ascendieron a 1.600 millones de dólares en el año 2005, lo que representó un 7,4% del PIB.Cerca del 60% de los turistas internacionales manifiesta que ha visitado las áreas protegidas. De las 160 áreas silvestresprotegidas, se considera que 39 tienen potencial turístico y 32 reciben turismo actualmente (seis de ellas de forma intensiva).Las áreas protegidas públicas recibieron aproximadamente 800.000 visitantes en 2004 (53% extranjeros) y para el año2005 generaron ingresos por más de 5 millones de dólares, solo en derechos de admisión (SINAC, 2006).

Canon ambientalmente ajustado de aguas en Costa Rica. Es el reconocimiento del valor de un bien de dominiopúblico del Estado (el agua), que deberá ser pagado al Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE) por toda persona físicao jurídica, pública o privada, en forma trimestral y adelantada. Es un instrumento que no sólo genera ingresos, sino quepromueve el uso eficiente de los recursos hídricos. Antes de la aplicación del canon, el valor promedio referencial delagua era de 0,0007 colones por metro cúbico por año; con la nueva estructura, pasó en promedio a 2,42 colones pormetro cúbico en agua superficial y 2,76 colones por metro cúbico en agua subterránea. Los montos de cobro se establecenpor caudal asignado en concesión y diferenciados por uso. Además, en el caso de las aguas subterráneas, se reconoce lacomplejidad de su gestión y el valor en su calidad y seguridad, lo que se refleja en un cobro mayor.

legitimidad con que cuenten a nivel local y que seestablezca en sus diversas fases mecanismos depromoción en donde se demuestre a los actores localesla importancia de estos objetivos en términos del biencomunitario.

A continuación, el Recuadro 5.9 recoge algunasexperiencias de valoración económica de serviciosambientales en Guatemala y Costa Rica.

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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297

V. POLÍTICAS

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

El objetivo radica en internalizar los costos ambientalesa las actividades y sectores que tienen altos costos parael medio ambiente, a la vez que hacer más rentableslas actividades, sectores, y opciones tecnológicas conmenores impactos ambientales. Esto sucede, en buenamedida, por una revisión detallada de las distorsionesde precios y fallas de política, que incluyen lasmodalidades de concesión, algunos subsidios yexenciones tributarias.

Se requiere además, un esfuerzo inédito e importantepara avanzar hacia una economía «verde». Al respecto,en 2008 el PNUMA propuso la Iniciativa por unaEconomía Verde, que busca acelerar la transición haciauna economía ambientalmente sostenible. Tresdocumentos de propuesta son centrales en estainiciativa: 1) El informe de la Economía Verde, que buscademostrar que el «enverdecimiento» de los sectoresproductivos es positivo para el crecimiento económicoy los empleos, y que sirve en la lucha contra la pobreza,

2) El informe sobre Empleos Verdes que busca cuantificare incentivar los empleos decentes y verdes, y 3) Elinforme de evaluación sobre la Economía de losEcosistemas y la Biodiversidad (TEEB, por sus siglas eninglés), este último, reseñado en el Recuadro 5.10.

En el contexto de esta iniciativa, y con el fin de orientaruna respuesta inmediata a la crisis financiera yeconómica con acciones que aceleren la recuperacióneconómica y estimulen, a la vez, un crecimiento acordecon las necesidades de desarrollo de más largo plazo,un grupo de agencias internacionales relevantes lanzó,bajo el liderazgo del PNUMA, el GGND ya enunciadoen la introducción del presente capítulo.

De acuerdo con los análisis realizados, se estima quecinco sectores serán los que mayores rendimientoseconómicos, sustentabilidad ambiental y empleos –los«empleos verdes»– generen: 1) energías limpias ytecnologías limpias, incluyendo el reciclaje; 2) energía

RECUADRO 5.10

La economía de los ecosistemas y la biodiversidad (TEEB)

El TEEB, un estudio sobre la economía de los ecosistemas y la biodiversidad, fue lanzado por Alemania y la ComisiónEuropea en respuesta a una propuesta de los Ministros de Medio Ambiente del G8+5 para desarrollar un estudio sobre laeconomía de la pérdida de la biodiversidad. Durante 2010 se espera el lanzamiento de informes y recursos destinados aautoridades locales, empresas y ciudadanos.

El TEEB reconoce una crisis global de la biodiversidad. La pérdida de bosques, suelos, humedales y arrecifes de coral estáestrechamente ligada a su invisibilidad económica. Las oportunidades perdidas para invertir en el capital natural contribuyena la crisis de la biodiversidad. El informe destaca cuatro prioridades estratégicas urgentes:

Detener la deforestación y la degradación de los bosques.Proteger los arrecifes de coral tropical.Proteger y restaurar las pesquerías globales.Reconocer el profundo vínculo entre la degradación de los ecosistemas y la persistencia de la pobreza rural.

El TEEB hace énfasis en la necesidad de información para tomar decisiones. Al respecto el informe evidencia que elcapital natural no tiene sistemas dedicados de medición, seguimiento y reporte. La primera necesidad es mejorar y usarsistemáticamente indicadores con una base científica para medir los impactos y el progreso y alertar cualquier posiblecambio abrupto de los ecosistemas (o colapsos súbitos). Otra necesidad clave es extender las cuentas nacionales y otrossistemas de contabilidad para tomar en cuenta el valor de la naturaleza y hacer un seguimiento de cómo los valoresnaturales se deprecian o crecen en valor mediante inversiones apropiadas. Los nuevos enfoques para medicionesmacroeconómicas deben cubrir el valor de los servicios ecosistémicos, especialmente para aquellos que dependen másintensamente de éstos (el PIB de los pobres).

En cuanto a posibles soluciones e instrumentos para un mejor manejo del capital natural, el TEEB destaca la necesidad de:

Compensar los beneficios mediante pagos específicos y los mecanismos del mercado.Reformar los subsidios ambientalmente peligrosos.Abordar las pérdidas a través de regulación y precios.Agregar valor mediante áreas protegidas.Invertir en infraestructura ecológica.

En cuanto al camino que queda por delante, el TEEB hace un llamado a los responsables de diseñar e implementarpolíticas públicas, para que lideren este proceso de cambio y usen las oportunidades para forjar un nuevo consenso paraproteger la biodiversidad y los ecosistemas, así como los servicios que proveen.

Fuente: UNEP, 2009a.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

rural, incluyendo renovables; 3) agricultura sustentable,incluida la orgánica; 4) infraestructura ecosistémica;reducción de emisiones por deforestación y degradaciónambiental (REDD); y 5) ciudades sustentables,incluyendo la planeación, transporte y edificios verdes.

3.1.3 SISTEMAS NACIONALES DE ÁREASPROTEGIDAS Y CORREDORES BIOLÓGICOS

Gestión y manejo de áreas protegidas

El II Congreso Latinoamericano de Parques Nacionalesy otras Áreas Protegidas celebrado en Bariloche,Argentina en octubre de 200710, marcó un importantehito en la revisión del estado de situación en los Sistemasde Áreas Protegidas de la región y las perspectivas desu afianzamiento y consolidación en el corto plazo, así

RECUADRO 5.11

Los desafíos identificados en Bariloche respecto a las Áreas Protegidas (AP)

Fuente: II Congreso Latinoamericano de Parques Nacionales y otras Áreas Protegidas, 2007.

La declaración de los participantes en el Segundo Congreso Latinoamericano de Parques Nacionales y otras Áreas Protegidas,celebrado en Bariloche, Argentina, entre el 30 de septiembre y el 6 de octubre del 2007 indica que:

1. Aún es necesario trabajar en la clarificación y contextualización del concepto de «gobernanza» de áreas protegidas,2. Los procesos de gestión de APs no incorporan los principios de buena gobernanza (transparencia, equidad, rendición

de cuentas y mecanismos del manejo de conflictos) y se caracterizan por asimetrías de poder y desigualdad en accesoa la información,

3. No existe una clara articulación entre las metas de conservación de las APs y las responsabilidades y competencias degestión de las mismas, haciendo imposible medir la efectividad e impacto de las formas y mecanismos de gobernanza,

4. Los marcos jurídico-institucionales no se ajustan a los compromisos adquiridos por los diversos países en tratadosinternacionales y limitan la posibilidad de delegar y/o compartir competencias sobre las APs que permitan reconocermúltiples y diversas formas de gobernanza y compatibilizar intereses de conservación con los derechos de pueblosoriginarios,

5. La buena gobernanza requiere de mejor información integral sobre el contexto que permita mostrar los impactossocioeconómicos positivos y negativos de las AP,

6. Es necesario articular adecuadamente las múltiples competencias superpuestas en las áreas protegidas que causanconflictos interinstitucionales y vacíos de manejo y de rendición de cuentas,

7. Los procesos de participación multisectorial requieren ser consolidados y profundizados, superando los modelos deconsulta y avanzando hacia esquemas de mayor delegación de poder para «compartir» autoridad, a partir delreconocimiento y legitimación de todos los actores,

8. Es necesario ir más allá del simple reconocimiento de la diversidad cultural y proponer su revalorización,9. las capacidades de los actores relacionados con el manejo de las áreas protegidas aún son débiles, tanto en las

técnicas como en materia de construcción de consensos,10. La asignación presupuestaria que hoy en día se realiza para la gobernanza y la participación de la sociedad civil es

completamente insuficiente y el aporte de participación de actores locales, que dejan sus actividades productivas, nose valora adecuadamente,

11. Es necesaria una redefinición estratégica de los sistemas nacionales de áreas protegidas para que los Estados seancapaces de crear sinergias entre las áreas de patrimonio estatal y los territorios conservados por comunidades indígenas.

10 Memoria disponible en: http://cmsdata.iucn.org/downloads/memoria_bariloche.pdf

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

como los obstáculos y limitaciones que han pesado hastael presente. La estructura temática del más importanteforo regional sobre los esfuerzos públicos, privados ycomunitarios para la conservación in situ de la riquezanatural, estuvo fuertemente influenciada por lasorientaciones del V Congreso Mundial de Parques(Durban, 2003) y el protagonismo de los representantesde organizaciones y territorios indígenas, cuyasexperiencias han contribuido grandemente a reorientarla práctica de la conservación en la mayoría de los paísesde la región.

En el marco del Congreso, se celebró el Simposio deGobernanza en Áreas Protegidas, donde se reconocióun avance importante en el reconocimiento y laaplicación de diversas formas de gobernanza yparticipación ciudadana en la gestión de distintas áreasprotegidas y de territorios indígenas, reflejado tanto enacuerdos internacionales suscritos por países de AméricaLatina como en la legislación nacional y municipal. ElRecuadro 5.11 recoge los principales desafíosidentificados por el Congreso en relación con la gestiónde las áreas protegidas.

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V. POLÍTICAS

El Congreso constató un proceso de consolidación delos sistemas de áreas de conservación. A pesar de loaccidentado del proceso, en términos generales, sepuede evidenciar un crecimiento importante de lasuperficie de la región que se beneficia de alguna formade trabajo de conservación11, lo que resulta másimportante dada la representatividad mundial de losecosistemas de la región, y la creciente conciencia desus sociedades sobre el impacto global de lapreservación de su patrimonio natural, aunque hay queconvenir que todo este esfuerzo no ha logrado frenar latasa de pérdida anual de biodiversidad. El Congresovaloró también las experiencias de conservación a cargodel sector privado que han surgido en el curso de laúltima década y sus potencialidades en el futuro.

Dentro de los instrumentos de los que se ha valido lagestión de las áreas protegidas se encuentran: programasecoturísticos y de turismo sostenible, programas desistemas de pagos por servicios ambientales, programasorientados a la extracción selectiva del recurso (porejemplo de especies forestales que han alcanzado sumaduración y utilización de recursos del bosque nomaderables), servicios de captación y secuestro de CO2,esquemas de resguardo y cánones ambientales por uso(por ejemplo, en manejo y conservación de recursohídrico), entre muchos otros (Eguren, 2004).

Tal como se puede apreciar en el Recuadro 5.12, laregión ha sido pionera en el mundo en lainstrumentación del pago por servicios ambientales,como un instrumento económico para promover la

protección de la biodiversidad y la conservación de losecosistemas. Algunos ejemplos promisorios, pero quedemandan una evaluación crítica permanente, estánsiendo desarrollados en varios países de la región, talescomo Bolivia, México, Costa Rica y Colombia(Echavarría, 2002; Rosa y otros, 2003; CEPAL 2007;FAO, 2007a). En México se alcanzaron más de 500.000hectáreas destinadas a este mercado en el año 2005(CEPAL, 2007).

Por otra parte, como lo reconoció el Congreso deBariloche, la normativa sobre áreas protegidas, a pesarde haber avanzado sustancialmente, presenta todavíauna serie de desafíos significativos en temas tales comolas diversas modalidades de gestión, los esquemascomplementarios de beneficio económico y laincorporación del valor de la biodiversidad protegidaen las cuentas nacionales, entre otros.

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

11 Ver Cuadro 2.5 en el capítulo II de este Informe.

Fuente: La otra frontera, Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), 2008

RECUADRO 5.12

Bolivia desarrolló la primera experiencia mundial en captación de carbono

El Proyecto de Acción Climática en el Parque Noel Kempff Mercado (PAC-NKM) ubicado en Santa Cruz, Bolivia marcó unantes y un después en la historia de la valorización de los servicios ambientales, constituyéndose en la primera experiencianacional y mundial en establecer un mecanismo de mitigación del cambio climático –como la deforestación evitada– paragenerar beneficios por mantenimiento del bosque y evite su deforestación.

El área del proyecto alcanza las 1.582.322 hectáreas, con una riqueza y biodiversidad inmensas: existen cinco tipos deecosistemas, rica variedad de pastos, orquídeas y árboles que florecen el año entero. Está habitado por 139 especies demamíferos, 74 especies de reptiles, 62 especies de anfibios, 254 especies de peces y 620 especies de aves, posiblementeel número más alto en un área protegida.

En 1997, el Gobierno de Bolivia, tres compañías energéticas (American Electric Power Company, BP Amoco y PacifiCorp),The Nature Conservancy (TNC) y la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN) iniciaron la implementación de la iniciativacuantificando el carbono almacenado en el área del proyecto y las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) evitadas.

En 2005, la empresa certificadora internacional Société Genérale de Surveillance (SGS) evaluó y certificó el diseño y lareducción de emisiones del PAC-NKM en más de un millón de toneladas de dióxido de carbono, traducidas en créditoscomercializables que el Gobierno tiene el compromiso de hacerlos efectivos y repartirlos a las comunidades.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Corredores biológicos

Los países han avanzado en el diseño de corredoresbiológicos tanto terrestres como marinos a nivelnacional, así como en el diseño de corredoresbinacionales y regionales/supranacionales. Sin embargo,los informes disponibles indican muy poco con relacióna la eficacia y éxito en la gestión de dichos corredores.Por el contrario, se tiende a citar más bien una serie deobstáculos con que han tenido que lidiar las instanciascoordinadoras o gestoras (principalmente en el caso deCentroamérica y el Caribe). Entre estos obstáculos seindican las limitaciones en materia de legitimidad conque se han topado las instancias gestoras, así como otrasen cuanto a la capacidad de negociación eincorporación de actores sociales y políticos en laconsecución de los objetivos que cubren dichasiniciativas y acciones.

De igual modo, en al menos tres informes GEOnacionales se indica la falta de concatenación de laspolíticas nacionales y las binacionales con las iniciativasdesarrolladas por los gobiernos locales como un escollopara la gestión de los corredores biológicos y marinos(Brasil, Costa Rica, Guatemala, GEO Caribe). Hayelementos que hacen pensar en la existencia de undéficit de consulta previa y participación de la sociedadcivil en la gestión de los corredores, sumado a unaincapacidad de las organizaciones comunitarias, lasautoridades ambientales emplazadas en el territorio ylos gobiernos locales de fijar prioridades a la hora de

formular, implementar y dar seguimiento a las políticasambientales requeridas para que la infraestructura delcorredor sea exitosa.

En ese sentido, pareciera que el déficit en este ámbitose encuentra más del lado de la estrategia políticautilizada para hacer viable a largo plazo la subsistenciay sostenibilidad de los corredores biológicos. Parecehaber una suposición implícita de que las debilidadesy las flaquezas en la negociación entre actores sesaldarán de manera automática. Esto resultaparticularmente difícil en la ausencia de recursosfinancieros o flujos de la cooperación internacionalrequeridos para echar a andar dichas iniciativas.

3.1.4 TURISMO

El turismo sostenible puede ser considerado como unimportante instrumento de apoyo a la gestión ambiental.En los últimos años, un sinnúmero de nuevas categoríashan dado una nueva fisonomía a esta actividad,buscando atenuar y, en su caso, revertir, los efectosambientalmente perversos de esta «industria sinchimeneas». Así, el ecoturismo como actividadvinculada en su origen exclusivamente al turismo enáreas protegidas, el turismo de naturaleza, el turismocultural y variantes de estas categorías que se han venidodesarrollando en la perspectiva de promover un mayorbeneficio económico en las poblaciones locales que,habitualmente, son propietarias o viven en el entornode los atractivos turísticos, genéricamente denominadascomo turismo comunitario; han abierto nuevosderroteros para el desarrollo de este importantecomponente de las economías de la región.

El turismo en América Latina y El Caribe tiene tantasfacetas como posibilidades, ofreciendo múltiplesatractivos, por lo tanto su desarrollo ha sido muydesigual entre los diversos países, aunque se puedeafirmar que en general éste es un sector en constantecrecimiento y su aporte a las economías respectivas estambién creciente. Así, mientras en México representaalrededor del 10% de sus fuentes de divisas, en 16 delos países caribeños, el sector representa el mayorgenerador de divisas; en 11 de éstos, el turismo excedelos ingresos obtenidos por la sumatoria de todas lasmercancías exportadas. Hoy en día, casi 19 millonesde turistas visitan anualmente la región de la Asociaciónde Estados del Caribe (AEC) y gastan alrededor de $15mil millones. Esta participación en el mercado mundialdecayó en la década de los 80 y fue creciendo hastaencontrarse con los lamentables acontecimientos del11 de septiembre, ocurridos en los Estados Unidos deAmérica (Girvan, 2002).

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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301

V. POLÍTICAS

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

Uno de los principales retos que se presenta en el áreade turismo es asegurar su sustentabilidad. Los visitantescada día son más selectivos respecto a la calidad delproducto turístico. El camino hacia una sustentabilidadturística duradera, pasa por el desarrollo y elmantenimiento de estándares de excelencia,internacionalmente aceptados, en servicios, en calidadambiental, en la participación de la comunidad, respeto

a la integridad y diversidad culturales y en un turismomultidestino que aproveche la variedad cultural yatracciones naturales (Cox, 2010).

Sin embargo, así como es una fuente de promisoriosingresos, el turismo es también una actividad frágil,trátese de eventos como el comentado líneas arriba odel efecto que puede tener en ella la recesión en los

Fuente: http://www.odi.org.uk/resources/download/2194.pdf (consulta a Abril 2010)

RECUADRO 5.13

El peso del turismo para la economía local del Caribe

La Organización de Turismo del Caribe (OTC), en conjunto con la Alianza del Turismo contra la Pobreza (Pro Poor TurismPartnership y The Travel Foundation), elaboró una Guía de Buenas Prácticas cuyas principales propuestas se recogen acontinuación:

1: El turismo y la economía local, creando alianzasVentajas comerciales: El cliente busca unas vacaciones más interactivas y se garantiza la repetición.Optimización del producto: Mejora del producto por la diferenciación y la competencia no directa.Permiso para operar: Buenas relaciones con la comunidad y compromiso con la economía local.Reducción del riesgo: Se reducen los riesgos de salud y seguridad y se asegura la imagen pública.Moral del personal: Invertir localmente activa la contratación y la retención y mejora la atención.Desarrollo sostenible: La colaboración con las comunidades incrementa la conciencia y la capacidad depromoción y preservación del patrimonio local, dando sostenibilidad al producto turístico.

2: Incorporando a los productores locales en la cadena de suministro·Uso de mayor diversidad de productos que diferencian el entorno del hotel y promueven la marca.·La ampliación de la oferta de actividades locales incrementa la motivación y contribuye a extender lapermanencia.·Fomento de la reducción de gastos, si los bienes o servicios locales son más baratos.·Creación de redes de colaboración local.

3: Creando alianzas con los agricultores locales·La compra de productos locales proporciona alimentos frescos y reduce el costo de transporte.·Se pueden utilizar en la diversificación de productos: noches temáticas, turismo culinario, turismo de patrimonioagrícola y una amplia gama de consumos basados en hierbas, alimentos medicinales o procesados.·El turismo de salud y bienestar es un nicho de mercado fuertemente vinculado al agroturismo.

4: Contratando personal local·Reevaluar el proceso de contratación: disponibilidad laboral para gente local especializada y no cualificada,·Pagar un salario digno al personal ‘menos remunerado’ e incluir planes de salud y bienestar.·Garantizar la promoción del personal a través de la promoción en puestos más especializados y mejor pagados.·Invertir en capacitación en todos los niveles no sólo a nivel gerencial para graduados.·Desarrollar una política que fomenta la apertura y la eliminación del estigma del VIH.

5: Involucrando a la gente y al producto local en las visitas, los paquetes y las excursiones·Diversificar la oferta de excursiones y multiplicar las oportunidades de interacción con los visitantes.·Trasladar a la comunidad algunos servicios (guiaje, folletería, alimentación, transporte, interpretación).

6: Fomentando que los turistas consuman de la economía local·Las compras de productos locales aportan a la credibilidad, autenticidad y la calidad competitiva del destino.

7: Creando alianzas con las comunidades aledañas·Amplían las oportunidades, favorecen las economías de escala, crean un entorno de prosperidad y reducenimpactos negativos.

8: Gestionando el cambio interno para el desarrollo de alianzas locales.·Los cambios suelen generar resistencias, por lo que hay que anticiparse a ellas desde la fase de planificación,dándole al diseño la mayor flexibilidad posible y estar dispuestos a actuar a todos los niveles oportunamente.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

países desarrollados, hasta eventos naturales comoterremotos, huracanes o el permanente incremento enel nivel de los mares y océanos producto delcalentamiento global; todos ellos conllevan lapotencialidad de dramáticos impactos en la actividaddel sector, siendo éstos mayores en las economías quedependen más críticamente de él.

En este sentido, el Caribe es único entre otras regiones,por la diversidad de atracciones que ofrece: sol, mar yarena, selvas tropicales y ríos, cadenas montañosasespectaculares, volcanes semiactivos, la variedadarquitectónica arqueológica y colonial y un amplioespectro de músicas, danzas y carnavales. LaOrganización de Turismo del Caribe (OTC), hasistematizado la experiencia del desarrollo del sectoren la región y propuesto alternativas que –junto a otrasiniciativas12– le permitan reducir su vulnerabilidad. Enel Recuadro 5.13, se recogen algunas lecciones.

Por lo demás, el turismo puede tener impactos diversosen la gestión de muchas áreas protegidas y corredoresbiológicos. Moreno (2005) analizó en tres casos deestudio situados en la costa de Belice y las Islas de laBahía en Honduras las implicaciones y retos para quelas comunidades locales puedan obtener beneficioseconómicos derivados de las actividades ecoturísticasy de la conservación de los arrecifes coralinos. Lainvestigación de este autor determinó que, junto aldiseño de las políticas locales de conservación,planificación y gestión de prácticas ecoturísticas, se debepromover lo que el autor denomina «marked culturalshift», es decir, una serie de transformaciones en lacultura del mercado turístico que aliente prácticassostenibles como el procesamiento de desechos y lautilización de insumos, tales como productos orgánicosy biodegradables, que reduzcan el impacto en elentorno. De igual modo, Moreno llama la atención sobre

la necesidad de organizar a las comunidades mediantelíderes y empresarios locales que actúen comopromotores de prácticas ecoturísticas frente al turismotradicional. Asimismo, la generación de programas decrédito asequibles y asistencia técnica para elempresariado local resultan necesarios si se quierecontrarrestar los esquemas propios del turismotradicional, que están afectando los arrecifes de manerasignificativa.

3.1.5 ADECUACIÓN DE LA POLÍTICA DE TIERRAS YSANEAMIENTO DE LA PROPIEDAD IMPRODUCTIVA

Tal como se tiene señalado en los capítulos introductoriosde este informe, una de las principales amenazas queenfrenta la región tiene que ver con el crecimiento de latasa de deforestación que afecta particularmente aecosistemas boscosos a causa de la expansión de lafrontera agrícola. En muchos casos, los efectos de estecambio de uso son irreversibles con los consiguientesdaños al hábitat de un sinnúmero de especies.

El cambio climático y la desertificación, el agotamientode las tierras fértiles disponibles, el reconocimiento dederechos a los pueblos y comunidades indígenas, laapertura de nuevas áreas de colonización, la titulaciónarbitraria de tierras a favor de empresas o personas queno han sabido o no han podido hacerlas producir, laexpansión de cultivos destinados a la producción debiocombustibles u otros cultivos sustitutivos de laproducción alimentaria, favorecida muchas veces porincentivos perversos, la creciente demanda añadida deagua, y otros factores, configuran un escenario de crisisque los países de la región no pueden continuarprolongando sin prever las respuestas que permitanevitar el conflicto.

En el otro extremo, está la concentración especulativade extensas propiedades de tierra que no cumplen conninguna función económica ni social, y que –hoy porhoy– se encuentran amparadas en la ambigüedad odebilidad de las legislaciones agrarias, dificultando sureasignación para usos sostenibles.

Esta situación se da a pesar de la urbanización de lassociedades de la región y la pérdida de peso relativo dela agricultura en la mayoría de países, lo que demuestraque los efectos de estas tendencias aún no hanterminado de configurar un horizonte definitivo. Antesbien, en los países en los que aún existe agriculturatradicional, la población vinculada a ella suele dependercríticamente de su relación con la tierra, lo que explicalas dificultades que enfrentan las políticas demodernización y de ‘lucha contra la pobreza’, pues más

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

12 El Programa de Acción de Eficiencia Energética de Hoteles del Caribe(CHENACT por sus siglas en inglés) apunta a la implementación de prácticasde eficiencia energética (EE) y la micro-generación (MG) de energíasrenovables en el sector hotelero del Caribe, para lograr así la mejora de lacompetitividad de los hoteles pequeños, medianos y grandes a través deuna mejor utilización de la energía. El proyecto también permiteinterrelaciones entre eficiencia energética, reducción de las emisiones degases de efecto invernadero, micro-generación de energías renovables yla introducción de tecnologías amigables para el ozono.

El CHENACT se gestiona a través de los sectores privado y público. ElOrganismo de Ejecución para este Programa es la Organización Caribeñade Turismo (CTO por sus siglas en inglés), que llevará a cabo las actividadescontempladas en el Programa con el apoyo operativo y técnico de laAsociación Hotelera y de Turismo del Caribe y la Alianza Caribeña para elTurismo (CHTA / CAST por sus siglas en inglés). Las siguientesorganizaciones también están directamente involucradas en el proyecto:el Banco Interamericano de Desarrollo (BID); el Gobierno de Barbados(MFIE); el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA);la Deutsche Gesellschaft für Technische Zusammenarbeit (GTZ); el Centrode Desarrollo Empresarial (CDE); Barbados Light and Power (BL & P).

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303

V. POLÍTICAS

allá de los aspectos meramente económicos y de análisisde oportunidades, está la consideración de elementosculturales e identitarios que no se pueden soslayar; porlo que se puede afirmar que éste es un temaprofundamente estructural que no puede ser tratado conligereza ni voluntarismo, sino que exige los más ampliosconsensos para su modificación.

3.1.6 MANEJO FORESTAL CERTIFICADO YPARTICIPACIÓN COMUNITARIA

El manejo forestal certificado y la participacióncomunitaria es otro instrumento que ha demostrado unenorme potencial a la hora de conjugar la preservacióndel patrimonio natural con las oportunidadeseconómicas que ofrece su aprovechamiento sostenible.Como puede apreciarse en la información que se ofreceen el Capítulo II de este informe, a pesar de surelativamente corta historia, la producción forestalcertificada de bosques tropicales naturales ha crecidosostenidamente tanto en áreas fiscales, como enconcesiones privadas, territorios indígenas y tierrascomunitarias, como lo testifican múltiples ejemplos quevan desde las comunidades michoacanas (purépechas)en México, pasando por las experiencias post-conflictoarmado en el Petén guatemalteco, hasta los bosquessecos de la Chiquitanía en Bolivia, donde lascomunidades interesadas asumieron un compromiso delargo plazo con la sostenibilidad de su aprovechamientoforestal, a pesar de que –hasta el presente– todo elesfuerzo e inversión exigido en el proceso decertificación no se haya mostrado muy retributivo, nien materia de precios ni en materia de acceso amercados.

Si bien esta oportunidad ha estado básicamenteimpulsada por organismos no gubernamentales(particularmente el Fondo Mundial para la Naturaleza -(WWF, por sus siglas en inglés)) y consorcios (ForestStewardship Council - (FSC, por sus siglas en inglés)) depresencia global, ha sido también un ámbito significativopara la cooperación de algunos países desarrollados,cuyos esfuerzos han servido hasta ahora para conformarimportantes redes que ponen en contacto a los actoresque participan a lo largo de toda la cadena productiva:productores certificados (privados o comunitarios) y/omanejadores de bosque, empresas de transformaciónprimaria y/o secundaria, distribuidores, minoristas, etc.,con consumidores, distribuidores, minoristas y/o grandescompradores internacionales comprometidos con elincremento del uso responsable de los recursos yproductos forestales que han adoptado Políticas deCompra Responsable y son miembros de la Red GFTN(Global Forest Trade Network) (WWF, 2007).

A pesar del potencial que aún tiene por desarrollar estemecanismo, los resultados que puede exhibir son yaimportantes, no sólo por las superficies de bosque bajomanejo certificado, sino también por el volumen denegocios, la apertura y desarrollo de nuevos mercadosy, sobre todo, por la multiplicidad de actores queintervienen en él.

Asimismo, la estrategia de desarrollo que parte de lagestión comunitaria de los recursos naturales (discutidaen el Capítulo II, sección 3.3) presenta en la regiónmúltiples ejemplos de manejo forestal comunitario(MFC) que han sido certificados por organismosinternacionales competentes y reconocidos comoejemplos paradigmáticos en diversos forosinternacionales. En particular, son relevantes losejemplos de las empresas forestales comunitarias de SanJuan Nuevo Parangaricutiro (Michoacán) y otras de losestados de Oaxaca, Puebla y Quintana Roo en México;los de la Reserva de la Biosfera Maya en El Petén,Guatemala, el manejo tradicional de recursos forestalesde varios pueblos amazónicos en el Brasil, el Perú, yvarios casos asociados a los planes de Gestión TerritorialIndígena (GTI) de las Tierras Comunitarias de Origen(TCO) de la Amazonía boliviana, entre otros13. El MFCse ha desarrollado bajo dos presupuestos fundamentales:1) Asegurar o mejorar el bienestar de sus protagonistas:los pobladores en comunidades campesinas e indígenas.2) Contribuir a la conservación de los bosques paraasegurar a la sociedad en general, los servicios que estosproporcionan (Sabogal y otros, 2008).

3.2 GESTIÓN DE LA INVERSIÓN EN LAINFRAESTRUCTURA ESTRATÉGICA

La infraestructura es y continuará siendo el motor deldesarrollo. Las inversiones que ella exige, paraestablecer las bases de una economía sostenible, soncuantiosas y representan una de las principales fuentesde empleo con el consiguiente impacto social que lasacompaña, particularmente en contextos dereactivación económica. Sin embargo, consideracionesde carácter económico y visiones cortoplacistas hanllevado equivocadamente muchas veces a considerar«ahorros» en los presupuestos de las grandes obras quehan incidido en la sostenibilidad ambiental de lasmismas. Hoy, los efectos del cambio climático y lasrestricciones que origina en el acceso a elementos queen el pasado parecían eternamente disponibles (el casodel agua), o los eventos naturales (los fenómenos de El

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

13 Para ver detalles, consultar: http://www2.ine.gob.mx/publicaciones/libros/431/introd.html; http://www.guate.net/centromaya/logros.htm; http://www.promab.o rg / index .php?page=download&op=ca tegory&id=22&title=Experiencias-en-manejo-forestal-comunitario

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Niño y La Niña, ciclones, tsunamis, sequías, einundaciones) cuya frecuencia e intensidad se haincrementado dramáticamente, ha puesto en evidencialas trágicas consecuencias de la falta de previsión y lainsensatez de aquellos «ahorros».

Por otro lado, la ciencia y la tecnología han desarrolladoen las últimas décadas opciones que han revolucionadola manera de dar satisfacción a viejas y nuevas

demandas sociales, abriendo un extenso abanico deposibilidades y presupuestos que si bien complejizanla toma de decisiones, también multiplican lasoportunidades. El uso de materiales alivianados en laconstrucción, la sustitución de los conductores metálicospor la fibra óptica, los aditivos utilizados en la fraguarápida del cemento, la informática, la posibilidad deaprovechamiento de las energías alternativas desde elnivel doméstico al regional, y la conectividad satelital

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

RECUADRO 5.14

Reciclaje en Brasil y producción orgánica en México

Reciclaje en Brasil

El reciclaje puede realizar una contribución importante a lareducción de la huella ambiental de los sectores económicoscon gran concentración de energía y materiales. Las cifrassobre Brasil —líder mundial en el reciclaje de las latas dealuminio— indican que en 2006 se recogieron en el paísunos 10.300 millones de latas. El reciclaje permite a estepaís ahorrar 1.976 GWh/año de electricidad, que se habríannecesitado para producir aluminio nuevo, cantidadsuficiente para abastecer una ciudad de más de un millónde habitantes durante un año.

El reciclaje de las latas de aluminio ofrece empleo a casi170.000 personas en Brasil. Según una encuesta de 2005,este país tiene casi 2.400 compañías y cooperativas queparticipan en el reciclaje y el comercio de desechosmetálicos, y en la mayoría de los casos son empresaspequeñas o microempresas. En 2006 el país alcanzó unatasa de reciclaje del 94%, lo que representa un fuerteaumento con respecto al 46% de 1990. A efectoscomparativos, cabe señalar que en Japón la tasa es del 91%,en los países escandinavos del 88% y en el conjunto deEuropa occidental de aproximadamente el 58%.

Brasil tiene también altas tasas de reciclaje de otrosproductos. Según dos asociaciones sin fines de lucro —elServicio de apoyo a las pequeñas empresas y microempresasde Brasil (SEBRAE) y el Compromiso empresarial en favordel reciclaje (CEMPRE)—, en 2004 este país recicló el 96%de las latas de aluminio, el 49% de las latas de acero, el48% de los plásticos PET, el 46% de los envases de cristal,el 39% de los neumáticos y el 33% del papel.

SEBRAE y CEMPRE estiman que el sector del reciclaje daempleo a unas 500.000 personas en Brasil.

El país ha sido también pionero en la mejora de los empleosrelacionados con el reciclaje. Si bien éste es de gran valorpara la conservación de los recursos, puede implicar untrabajo sucio, desagradable y con riesgos para la salud, ymuchas veces está mal remunerado. En muchos países endesarrollo, el reciclaje es realizado por una red informal derecolectores de residuos, que recogen materiales reciclablespara obtener ingresos. Los esfuerzos por crear cooperativashan permitido elevar su remuneración y sus condiciones de

Fuente: PNUMA y otros, 2008; FAO, 2007b; Associação Brasileira do Alumínio, 2007; Brazzil Magazine, 2005.

trabajo en muchos países. En Brasil, el 90% del materialreciclable es recuperado por estos recolectores de basuras,que se han organizado en un movimiento cooperativonacional con 500 cooperativas y 60.000 recolectores. En2005, Belo Horizonte, una de las mayores ciudades deBrasil, inauguró la primera planta de reciclaje administradapor asociaciones de catadores de lixo (recolectores debasura) independientes. La planta trata de prescindir de lapresencia de intermediarios sin escrúpulos y conseguir unaumento de aproximadamente el 30% en los ingresos delos recolectores.

La producción orgánica en México

Mientras la demanda por productos orgánicos crece en lospaíses industriales, los métodos orgánicos agrícolas sontambién visibles en el mundo en desarrollo. En México,Coyote Rojo es una etiqueta bioregional orgánica quecomenzó a certificar a los productores en agosto 2007. Supropósito es salvaguardar y promover la biodiversidad,sostener prácticas tradicionales de cuidado e intercambiode semillas, proteger métodos de producción y comidastípicas, y conservar los recursos naturales y los mediossustentables de cosecha. De acuerdo a un estudio, elbioregionalismo de Coyote Rojo se centra en satisfacer lasnecesidades en las áreas locales, aprovechando las fuentesrenovables de energía, promoviendo y preservando laagricultura orgánica, y desarrollando los emprendimientoslocales basados en las habilidades, conocimientos ycapacidades locales. Dado que la calidad del productoresulta de todo el proceso de producción, la evaluación debeincluir la totalidad del proceso de modo de satisfacer lasespecificaciones de calidad.

El caso de la etiqueta Coyote Rojo tiene una directa relacióncon la discusión sobre empleos verdes. La etiqueta capitalizael valor de las numerosas variedades de maíz que sonespecíficas dentro de la bioregión, confrontando así lasdiversas amenazas al «ícono cultural mexicano». Laesperanza detrás de esta iniciativa es que las personas sevean menos forzadas a migrar, llevándose el preciosoconocimiento sobre cómo trabajar los cultivos, intensivosen mano de obra, conocidos como milpas. Lacomercialización de variedades locales puede a la vezsostener los modos de vida rural y contribuir a la diversidadagronómica.

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V. POLÍTICAS

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

CUADRO 5.2

Iniciativas relevantes sobre empleos verdes en la región

Iniciativa Países

Reciclaje Brasil

Biocombustibles Brasil y Colombia

Energía y transporte urbano México, Brasil y Colombia

Producción agrícola orgánica México

Agricultura a pequeña escala Brasil y Cuba

Reforestación México, Cuba, Brasil

Pago por los servicios ambientales Bolivia, Colombia, Costa Rica, Nicaragua

Iluminación eficiente México

Pulpa y papel Brasil y Colombia

Fuente: Elaborado con datos de PNUMA y otros 2008.

permiten configurar –y, de hecho, desarrollar, comoocurre ya en muchos «bolsones» de modernidad urbanaen la región– un mundo muy diferente al que soñabanlos planificadores pocas décadas atrás. Sin embargo,por una parte, la mayoría de la población de AméricaLatina y el Caribe se mantiene aún imposibilitada deacceder a buena parte de estos adelantos y, por otra, latransición de un estadio de usos tecnológicos a otro–de no mediar una planificación adecuada– puedegenerar pasivos ambientales que, antes que mejorar,podrían empeorar las condiciones del ambiente.

Por ello, la focalización en la prioridad, orientación ycalidad de la inversión en infraestructura es una tareaestratégica que exige una visión multidimensional enla que es tan importante el criterio de los científicos,técnicos y especialistas como la voz de los actoressociales que se verán afectados positiva o negativamentecon dichas obras.

3.2.1 INFRAESTRUCTURA VERDE PARA ELDESARROLLO ECONÓMICO Y SOCIAL

En los últimos años, se ha generalizado en los países dela región un patrón de desarrollo de infraestructura quetiene más que ver con diseños externos que con lasnecesidades reales de los países (como en los casos delPlan Puebla Panamá, (PPP), o la Iniciativa de Integraciónde la Infraestructura Regional Suramericana, (IIRSA) y,menos aún, con consideraciones de carácter ambiental(Ribera, 2008).

La carencia de vías férreas, puertos, aeropuertos yservicios públicos urbanos diseñados y establecidosacatando la legislación ambiental y con base en criteriospara aminorar el impacto puede conllevar –contrario alo que se piensa– una fuerte presión por el usoinadecuado de los recursos (Antúnez y Galilea, 2003;

Guimarães, 2003). Por ejemplo, la ausencia de víasférreas puede conducir a las presiones por laconstrucción de carreteras o autopistas; la ausencia deaeropuertos implica la construcción de caminos delastre; la ausencia de un servicio público de transporteeficiente conlleva la utilización cotidiana del automóvil,y por ende, un mayor consumo de hidrocarburos. Todosestos ejemplos hacen referencia a procesos, en los quesi bien pueden generarse empleos, éstos están lejos decorresponder a la definición de «empleos verdes» quenos ocupa. Este aspecto requiere de mayor estudio enla región y ha sido poco analizado en los informes GEOrevisados.

3.2.2 LOS EMPLEOS VERDES

El propósito de generar empleos verdes –aquellos quereducen el impacto ambiental de las empresas y lossectores económicos hasta alcanzar en definitiva nivelessostenibles– es parte de la iniciativa ya mencionada poruna Economía Verde que lidera PNUMA.

Los empleos verdes se encuentran en muchos sectoresde la economía, desde el suministro de energía hasta elreciclaje y desde la agricultura hasta la construcción yel transporte. Esos empleos ayudan a reducir el consumode energía, materias primas y agua mediante estrategiasde gran eficiencia, a reducir la huella de carbono en laeconomía y a reducir las emisiones de gases de efectoinvernadero, a disminuir o evitar por completo todaslas formas de residuos y de contaminación, y a protegery restablecer los ecosistemas y la biodiversidad. Losempleos verdes contribuyen en forma decisiva a reducirla huella ambiental de la actividad económica.

Existen experiencias promisorias en países de la región(Cuadro 5.2); dos de ellas son presentadas en elRecuadro 5.14.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3.2.3 GESTIÓN DEL AGUA

A continuación, se introducen varios ejemplos demecanismos que contribuyen a una gestión sostenibledel agua y los recursos hídricos, en consonancia con loya mencionado en el punto 3.1.1 en referencia alenfoque ecosistémico aplicado a los recursos hídricos:

Manejo integrado de cuencas

Las políticas de gestión y manejo de cuencas enla región han tenido un alcance bastantemodesto. Pareciera que el manejo de cuencasaún se encuentra orientado, en primer lugar, agarantizar el abastecimiento y aseguramiento deagua para actividades agrícolas; en segundolugar, a ampliar el abastecimiento de agua parael consumo humano en espacios o contextosgeográficos en que se ha vuelto crítico; y entercer lugar, a proyectos de desarrollo de energíahidroeléctrica.Un aspecto que pareciera prevalecer en la regiónes la existencia de un criterio de manejo decuencas por caso de excepción, lo cual implicala definición de cuencas específicas querequieren atención y mecanismos de evaluaciónambiental y aquellas cuencas que –por criteriosestratégicos de naturaleza económica– no sonacreedoras de atención alguna, ya sea porsituaciones de aparente irreparabilidad del dañoambiental (resultado de actividades productivassin supervisión) o por intereses particulares osectoriales sobre posibles usos o explotaciones

futuras del recurso. También hay pocaarticulación con las acciones, en el caso de quelas hubiera, orientadas a lidiar con lasconsecuencias de los vertidos industriales, peroparticularmente de fin de tubo (uso residencial),o con medidas tendientes a la preservación delrecurso, tales como la recarga de los acuíferos.El «boom» agroexportador y agroindustriallatinoamericano generó una nueva era dedemanda energética, la cual se vio parcialmentesatisfecha con la implementación de nuevosproyectos hidroeléctricos establecidos enregiones consideradas inaccesibles hastaentonces.Iniciativas orientadas a reducir la presión por loscombustibles fósiles y a proveer energía de bajocosto ha llevado al planteamiento y desarrollode represas hidroeléctricas en zonas colindantesa áreas protegidas, zonas de patrimonio históricoy de asentamientos de poblaciones autóctonas.Es una nueva presión por el uso de las cuencasy muy pocas de ellas han escapado al conflictoy al enfrentamiento entre los desarrolladoresprivados o estatales y las poblaciones locales,así como grupos ambientalistas, dado que laspropuestas e implementación de nuevas represashidroeléctricas han mantenido una tendenciaverticalista con déficit de participaciónmultisectorial.Asimismo, los desarrolladores, amparadosmuchas veces en las debilidades del marcojurídico, han optado por abusar del recurso dela consulta popular o comunitaria –muchas

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

RECUADRO 5.15

Comisión Binacional para el Desarrollo y Manejo de la Cuenca del Río Bermejo

Existen varios ejemplos de experiencias de manejotransfronterizo de cuencas. Uno de ellos es elestablecimiento de la comisión binacional para el desarrolloy manejo de la cuenca del río Bermejo localizado en Boliviay Argentina, que fluye a través de la región del Chaco haciael río Paraguay.

La iniciativa ha sido financiada por el Fondo para el MedioAmbiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés) y facilitadapor el PNUMA, con el fin de hacer un manejo armónico dela cuenca en cuestión, pero ante todo controlar ladegradación producto del uso del suelo y el fenómeno desedimentación transfronteriza.

El proceso participativo posibilitó incorporar objetivospropios de la conservación ambiental. Uno de los factoresque ha potenciado su legitimidad ha sido el involucramientode grupos de interés locales, incluyendo pequeños granjeros

Fuente: Uitto y Duda, 2002.

y agricultores, así como de Organizaciones NoGubernamentales de ambos países. Cabe señalar que lasacciones a implementar han sido discutidas y negociadaspreviamente por representantes de estos grupos de modoque los gestores del proyecto han podido determinar conantelación la resistencia a acciones de conservación y deuso específicas.

De igual modo, llama la atención la puesta en práctica deintervenciones piloto previas a las diversas fases deimplementación que ha tenido el proyecto. En términosprácticos, estas pruebas piloto han evitado el posibledesarrollo de acciones identificadas como conflictivas, hanprevisto acciones correctivas y han explorado el nivel decompromiso con una serie de principios de manejosostenible de la cuenca, consensuados en las fases inicialesdel proyecto.

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V. POLÍTICAS

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

veces, poco transparentes– y a sacralizar susresultados.Más recientemente se han empezado a emplearen la región instrumentos de EvaluaciónAmbiental Estratégica (EAE) para dirimir losconflictos socioambientales y valorar rutas parala implementación de megaproyectos deproducción hidroeléctrica que reduzcan losposibles embates sobre la estructura ycomposición de las cuencas hidrográficas.Se considera que la región adolece, en términosgenerales, de mecanismos que posibilitenconcatenar las políticas de manejo de cuencascon otras políticas estratégicas correspondientesde agua, atmósfera, y de tierras y desertificación.

Fuente: 2009a, sobre la base dePrograma conjunto de monitoreo de provisión de agua y saneamiento.

Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Organización Mundial de la Salud (OMS)/Fondo de NacionesUnidas para la Infancia (UNICEF),

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Población rural con acceso a agua potable(En porcentaje sobre el total de población)

GRÁFICO 5.1

Latin America and the Caribbean: Población urbana y rural con acceso a agua potable y saneamiento,1990 y 2004 (En porcentaje del total de población)

El Recuadro 5.15 presenta la experiencia de la ComisiónBinacional para el manejo integrado de la cuenca delrío Bermejo entre Bolivia y la Argentina. Otros ejemplosde institucionalidad para el manejo bi/multinacional decuencas, los constituyen la Autoridad BinacionalAutónoma del Lago Titicaca, la Comisión Trinacionaldel río Pilcomayo, el Tratado de CooperaciónAmazónica, entre otros.

Cobertura universal de agua potable ysaneamiento básico

En consonancia con el análisis realizado en el punto5.2.1 del Capítulo II, en los cuadros siguientes, sepresenta la evolución en la cobertura de servicios de

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

agua potable y saneamiento para los países de AméricaLatina y el Caribe en las áreas urbana y rural, así comolas proyecciones previstas al 2015, para cuando loscompromisos con los Objetivos de Desarrollo delMilenio se proponen reducir a la mitad la población sinacceso a dichos servicios.

La provisión de agua potable y saneamiento es uno delos servicios de mayor impacto en la salud de lapoblación y está vinculada al estudio de las fuentes parasatisfacer esta demanda en condiciones sostenibles. Enlos países cuyos indicadores se encuentran aún pordebajo de las expectativas, resulta fundamental tomaren cuenta que ésta puede ser una oportunidadexcepcional de creación de empleos verdes de altoimpacto, donde deberán conjugarse los esfuerzos delos sectores público, privado y social.

Un aspecto a considerar críticamente es el de lamaximización del rendimiento de los sistemas de gestióny mantenimiento de las redes de almacenamiento ydistribución de agua en áreas urbanas y rurales, dondela evidencia muestra que las pérdidas por deficienciasde dichas redes, pueden comprometer en algunos casos,más de la mitad del volumen de agua que circula porellas. Esta situación es particularmente crítica cuandose trata, además, de aguas tratadas que ya hanincorporado costos adicionales a los de los sistemas decaptación y la infraestructura de almacenamiento ydistribución. Sin embargo, la ineficiencia de los sistemasno se da únicamente en el aspecto físico; muchas vecesse trata de un problema organizativo y gerencial querequiere, una vez más, de soluciones participativas.

Un tema fundamental a ser tomado en cuenta y en elque la región muestra un rezago prácticamentegeneralizado es el del reuso de las aguas servidas. Aeste respecto, independientemente de los rendimientosde los sistemas de depuración existentes, la calidad delas aguas residuales puede ser óptima para suaprovechamiento en sistemas de riego de diversoscultivos de valor económico importante. Laconcatenación de los sistemas de saneamiento con laspolíticas de desarrollo rural puede tener un impactomúltiple, tanto en las economías comunitarias como enla salud ambiental, por la garantía de una disposiciónfinal segura de las aguas residuales de los consumidoresurbanos e industriales.

Redes de riego para la producción alimentaria

Este tema contempla, por un lado, la accesibilidad alrecurso y, por otro, el rendimiento de las instalacionesy tecnologías de riego. Teniendo en cuenta la reducciónglobal del agua disponible, es deseable maximizar lascondiciones de su aprovechamiento, lo que pasa poradoptar los sistemas que permitan economizarla yprevenir las gigantescas pérdidas que se producen porevaporación, filtración y otros fenómenos previsibles.

El otro asunto relacionado al análisis de la disponibilidaddel agua para riego tiene que ver con la competenciaque se da entre la producción de alimentos –críticatodavía para la seguridad alimentaria de varios paísesde la región– y la demanda del recurso para cultivosindustriales, sumado a la creciente producción deoleaginosas destinadas a la obtención de biocombustibles.Más allá de la opción ética subyacente, está laresponsabilidad de las autoridades en el establecimientode políticas que prioricen el bienestar humano y laautosuficiencia alimentaria mientras se movilizanrecursos de todo tipo para permitir que el empleo eneste sector sea cada vez más digno y competitivo.

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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V. POLÍTICAS

Métodos de cosecha agua con impactoambiental positivo

En los casos en que la disponibilidad de agua es máscrítica, deberían establecerse políticas de apoyo yfomento a la construcción de lagunas, abrevaderos yreservorios que permitan a la población preservar aguasque de otra manera se perderían irremediablemente.

Un caso de especial relevancia, en particular para lospaíses andinos, es el de la colecta del agua provenientedel deshielo de los glaciares de la cordillera, cuyaaceleración es ya irreversible. En este caso es precisotener en cuenta que muchas ciudades intermedias ygrandes dependen críticamente de este recurso parasatisfacer el consumo humano, mientras son contadaslas nuevas iniciativas para ampliar el aprovechamientode estos recursos a un ritmo mayor que el de sudesaparición.

3.2.4 LAS ENERGÍAS SUSTENTABLES

América Latina y el Caribe enfrenta aún importantesdesafíos en el desarrollo de energías renovables, pese aque sus recursos naturales le permitirían transformar sumatriz energética como ninguna región en el mundo.La falta de políticas públicas, que fomenten las energíaslimpias, de capacitación para el capital humano y lafalta de inversión en nuevas tecnologías son algunas delas principales barreras. La región enfrenta retos en variasáreas que componen las energías limpias: el uso de lasenergías renovables, la sustentabilidad de la producciónde biocombustibles, la eficiencia energética y elmercado de carbono:

En 2008, se invirtieron US$ 155 mil millones a nivelmundial para el desarrollo de las energías eléctricasrenovables –energía solar, geotérmica, eólica y laenergía hidráulica a pequeña escala–, que tiene unmenor impacto ambiental que las grandes represas.América Latina atrajo 12% de estas inversiones.América Latina produce el 40% de losbiocombustibles en el mundo. Sin embargo, eldebate respecto a los beneficios ambientales ysociales de la producción de biocombustibles (vis avis los combustibles fósiles) está lejos de ser zanjado;estudios recientes destacan la complejidad intrínsecaen el desarrollo de los mismos y apelan a enfoquesde ciclo de vida en su análisis (PNUMA, 2009c).En el mercado de carbono –un sistema de comercioen el que empresas, gobiernos y personas venden oadquieren derechos para la emisión y certificadosde reducción de dióxido de carbono– la

participación de América Latina y el Caribe en elmercado global ha estancado durante los años 2007-2009.

Brasil es uno de los países líderes en el desarrollo deenergía hidráulica a pequeña escala y de energía eólica.También es, a escala global, una referencia en el uso delos biocombustibles. Tras 35 años de experiencia conla producción del etanol de caña de azúcar, es el lídermundial en la exportación de este biocombustible ytambién es el que lo produce de forma energéticamentemás eficiente. Adicionalmente, es el país que tiene lamayor cantidad de proyectos relacionados con elmercado de carbono en América Latina y el Caribe(PNUMA, 2009c).

Chile, por otra parte, sentó el ejemplo para los paísesque son altamente dependientes de la energía delexterior. La vulnerabilidad energética de Chile quedóexpuesta en estos últimos años, cuando a los cortes enel suministro de gas natural desde Argentina se le sumóuna de las peores sequías en décadas y el alza en losprecios del petróleo en 2008. Para hacer frente a estasituación, el país incentivó la inversión en energíasrenovables no convencionales como la geotermia, laenergía eólica y la energía hidráulica a pequeña escala.También se contempla para el 2020 la posibilidad deque la energía nuclear sea una solución para el país.Pese a que los precios del petróleo bajaron, Chilemantiene un alto interés en diversificar su matrizenergética.

Un tema reciente que puede representar una inflexiónhistórica de impacto global y que tiene como epicentroa la región central de Sudamérica es el potencial que

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Falta desarrollo del mercado para empresas deservicios energéticos.

El Recuadro 5.16 presenta la Estrategia Energética delUruguay, con importantes lecciones sobre la transiciónde su matriz energética hacia recursos alternativos y demenor impacto ambiental.

En cuanto a la eficiencia energética del transporteurbano, la región ha conocido en los últimos añosexperiencias que han cambiado profundamente la vidade algunas de las mayores urbes, tales como Bogotá(Transmilenio), Ciudad de México (Metrobus), Santiago(Transantiago); lo que ha requerido de la conjunción defactores que involucran la voluntad política de lasautoridades, la cooperación del transporte tradicionalorganizado, el cambio de los patrones de consumo dela ciudadanía e, incluso, la comunidad internacionalque ha contribuido a comprar los bonos de carbonoque han resultado de ellas.

ofrece el litio para la generación de energía nocontaminante y segura. Efectivamente, los principalesyacimientos mundiales de este metal se encuentranubicados en el Salar de Uyuni (Bolivia) y otros en lameseta altiplánica interandina ubicados en el norte deChile y Argentina. Actualmente, el gobierno de Bolivianegocia la posibilidad de su industrialización in situ conpaíses interesados que han desarrollado la tecnologíapara procesar las salmueras y fabricar las baterías conlas que ya funcionan varios prototipos de alta eficiencia.

En cuanto a la eficiencia energética, un reciente estudiode la CEPAL revisa la situación de 26 países de la regióny, entre sus conclusiones, destaca que la mera existenciade una Ley de Eficiencia Energética no garantiza que selogren resultados satisfactorios en mejorar el uso de laenergía en la práctica. Esta situación se asocia a lasdificultades que tiene el Estado en controlar –y sancionarsi así lo establece la Ley– los comportamientos que seaparten de lo requerido obligatoriamente por ella.

Hay barreras económicas y razones histórico-culturales–por ejemplo, la limitada costumbre de pagar por losservicios mediante precios de mercado que reflejenconsumos reales– en las sociedades de América Latinay el Caribe que tienden al escaso cumplimiento de lanormativa de eficiencia energética, y una escasadotación de recurso humano (por razonespresupuestarias) que dificulta contar con un eficientesistema de control y fiscalización. Las leccionesaprendidas incluyen (CEPAL, OLADE y GTZ, 2009):

El potencial de ahorro de energía sigue siendo alto.En general, un 20-25% del consumo energéticopuede ser evitado con medidas simples y de rápidorepago,Se deben reforzar las instituciones que se tienen enoperación antes que crear nuevas,Se debe promover el desarrollo de capacidadesinstitucionales descentralizadas para el desarrollode programas de eficiencia energética,Se debe mejorar la articulación de inversiones yfinanciamientos privados con las oportunidades deahorro de energía,Como promedio, aún el 75% de los refrigeradoresinstalados tiene eficiencias del orden de la mitad delos que están entrando al mercado. Existe un elevadopotencial de ahorro en la sustitución,En cogeneración de energía térmica y eléctrica paraindustrias y grandes instalaciones del sector terciario,hay un gran potencial que no se ha aprovechadoaún porque la regulación no es favorable,Faltan estrategias de educación, sensibilización ypromoción (autoridades, sector educativo, empresasy usuarios),

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

RECUADRO 5.16

Estrategia energética en Uruguay

Fuente: PNUMA y CLAES, 2008.

En 2006 se propusieron los Lineamientos de la EstrategiaEnergética para Uruguay, con el fin de acelerar el procesode transición en el uso de fuentes energéticas y reducir ladependencia de la factura petrolera de este paíssudamericano. Si bien es cierto que los lineamientoscausaron controversia en un inicio, debido a que en unode sus ejes apostaba a impulsar la prospección dehidrocarburos en territorio nacional, han ganado apoyo alpromover la incorporación de fuentes alternativas deenergía en especial biocombustibles, generación de energíaeólica y uso de biomasa como fuente térmica para laindustria. El Informe GEO Uruguay 2008 resume algunasiniciativas locales en esta línea, que se han valorado comoexitosas:

a) Proyectos de generación eléctrica a partir de residuosforestales y de la industria arrocera (Velcemar, Galofery otros) con una capacidad de generación eléctricadel orden de 30 MW,

b) La planta de celulosa de Botnia, que además de generar100% de su consumo eléctrico y térmico, produce unexcedente de 32 MW que es volcado a la red eléctricanacional,

c) Proyectos de generación eléctrica a partir de energíaeólica (UTE, Agroland) con capacidad para generar15 MW,

d) Un proyecto con capacidad de generación eléctricade 1 MW (Las Rosas, Maldonado) a partir de biogásproducido en un relleno sanitario,

e) Varias mini-plantas de biodiesel a partir de granosoleaginosos y grasas animales, y

f) Una planta de etanol a partir de residuos de la industriade caña de azúcar.

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311

V. POLÍTICAS

3.2.5 GESTIÓN SOSTENIBLE DE LAS ACTIVIDADESEXTRACTIVAS

En este sector, los vaivenes que ha mostrado la actividadde la región tienen que ver principalmente en lasvariaciones que ha sufrido el mercado mundial de losminerales que produce la región, principalmente enfunción del boom industrialista de China e India, queha motivado una valorización sin precedentes de dichosminerales. En función de estos escenarios, países comoBolivia y Perú se han incrementado las inversionesextranjeras en la reactivación de sus economías minerasen proyectos de una magnitud equiparable a lo que fuela minería del estaño a inicios del siglo pasado.

A pesar de los avances que se han registrado en algunospaíses, en cuanto a la extracción selectiva de materiales,principalmente minería, con el establecimiento decriterios de seguridad ambiental y comunitaria para elotorgamiento de permisos de exploración y explotación,donde la realización de estudios de impacto ambientaly de estudios técnicos de viabilidad han contribuido amejorar el rechazo o la regulación de proyectos deextracción en zonas de alto riesgo e impacto para losasentamientos humanos (por ejemplo, en zonas de

Fuente: http://biblioteca.unmsm.edu.pe/redlieds/Recursos/archivos/MineriaDesarrolloSostenible/ProduccionLimpia/Acuerdo_Prod.pdf

RECUADRO 5.17

Acuerdo Marco Producción Limpia SectorGran Minería

Principios:Cooperación Gobierno-Industria.Gradualidad.Complementariedad con los instrumentos regulatoriosde gestión ambiental.Prevención de la contaminación.Responsabilidad del productor sobre sus residuos oemisiones.Utilización de las mejores tecnologías aplicables.Transparencia de los mercados de bienes y servicios.

Materias del Acuerdo:Potencial de generación de aguas ácidas.Cierre y abandono de faenas mineras.Uso eficiente de la energía.Uso eficiente del agua.Residuos líquidos industriales.Residuos sólidos.

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

recarga acuífera); diversos factores hacen pensar quelos mecanismos de supervisión y control de losproyectos autorizados con bastante antelación sonsensiblemente débiles, situación que, por lo general,sólo se percibe cuando, por ejemplo, se da lacontaminación de fuentes de recurso hídrico para elconsumo humano.

Asimismo, existe una debilidad institucional a la horade tratar de poner freno a proyectos previamenteautorizados pero que contribuyen de manera sustantivaal fenómeno de la desertificación, sobrepasandonotablemente los lineamientos con que se otorgaronsus licencias o permisos operativos en un inicio.También se visualiza una ausencia palpable de accionese iniciativas ambientales (tanto por parte de losgobiernos centrales como de los locales), dirigidas amitigar las consecuencias ambientales ysocioeconómicas de proyectos de extracción que hansido cerrados o clausurados debido a los niveles decontaminación o degradación ambiental alcanzados.Especial mención merece Mesoamérica en este tema.

Son pocos los ejemplos que se pueden mencionar sobrelos esfuerzos por diseñar una política minera que tengaen consideración los aspectos ambientales. Entre ellos,y a manera de ejemplo de los temas que dicha políticapodría contemplar, se puede mencionar el «AcuerdoMarco Producción Limpia-Sector Gran Minería»,suscrito en Chile por un amplio número de actorespúblicos y privados (Recuadro 5.17).

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

RECUADRO 5.18

Las Zonas Costeras y Marinas de Centroamérica

Las costas de Centroamérica mantienen el 21,6% de lapoblación de la región, produce al menos US$ 750 millonessólo por concepto de pesquerías que dan trabajo y sustentoa mas de 450.000 personas en la región. Centroaméricareúne el 8% de la superficie de los manglares del mundo yla segunda barrera de arrecifes de coral del planeta. Laregión cuenta con aproximadamente 110 áreas protegidascosteras que protegen una buena representación delpatrimonio natural. Estas condiciones especiales de la costade Centroamérica determinan que el turismo, una de lastres primeras actividades económicas para cuatro paísesde la región, se dé en al menos un 50% en zonas costeras.

Fuente: UICN Mesoamérica.

3.2.6 PROTECCIÓN Y MANEJO DE ZONASCOSTERAS

Las zonas costeras, entendidas como el espaciogeográfico en que se producen los principalesintercambios de materia y energía entre los ecosistemasmarinos y terrestres, representan un espacio aprivilegiado en materia de cooperación regional, comolo evidencian los espacios institucionales creados paraactuar en este ámbito, tales como la ComisiónPermanente del Pacífico Sur (CPPS) o la AlianzaCentroamericana para el Desarrollo Sostenible (ALIDES),entre otros.

El programa de Mares Regionales del PNUMA definióuna estrategia que contempla los siguientescomponentes (CPPS, 2002):

Promoción de convenios, directrices y medidasinternacionales y regionales para controlar lacontaminación del mar para proteger y ordenar losrecursos acuáticos,Evaluación de las fuentes y las tendencias en materiade contaminación marina y su impacto en la saludhumana y en los valores estéticos y reactivos de losecosistemas marinos,Coordinación de las medidas de ordenaciónambiental para la protección, desarrollo yexplotación de los recursos marinos y costeros, yApoyo a las medidas de educación y capacitacióntendientes a permitir la plena participación de lospaíses en desarrollo en la protección, promoción ydesarrollo de la administración de los recursosmarinos y costeros.

La CPPS ha desarrollado un extenso Plan de Acción ycreado mecanismos científicos que permiten a los paísesparticipantes (Panamá, Colombia, Ecuador, Perú y Chile)

un extenso accionar conjunto e interdisciplinario enmateria de previsión y mitigación de los efectos de losfenómenos oceánicos, meteorológicos, climáticos ehidrobiológicos.

Por su parte, en las zonas costeras de Centroamérica sehan identificado limitaciones para el Manejo Integralde Zonas Costeras (MIZC) debidas a vacíos deinformación, limitada capacidad técnica y financiera,así como un fuerte sectorialismo. Algunos proyectosrecientes tanto gubernamentales como apoyados porONGs, brindan nuevas experiencias y lecciones sobremanejo integral de zonas costeras en la región. Estasiniciativas han sido apoyadas por gran número deacuerdos políticos enmarcados en la ALIDES, a nivelministerial y presidencial que apoyan el MIZC, procesodinámico mediante el cual se toman decisiones para elempleo, el desarrollo y la protección de las áreas y losrecursos costeros con vistas a alcanzar metasestablecidas en cooperación con grupos de usuarios yautoridades nacionales, regionales y locales(Windevoxhel, Rodríguez y Lahmann, 2001).

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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313

V. POLÍTICAS

3.2.7 MANEJO DE LOS RECURSOS PESQUEROS

La generación de políticas públicas e iniciativas con elfin de administrar los recursos pesqueros en AméricaLatina y el Caribe tuvo su período más fructífero durantelos años 60. Muchas de estas iniciativas tenían porobjetivo hacer un uso «racional» de los recursospesqueros, no así garantizar la calidad y la conservacióndel recurso pesquero en sí mismo. Posteriormente, taly como se ve reflejado en, al menos siete informes GEO,la temática se retomó como resultado del surgimiento afinales de los años 80 de un reclamo desde la sociedadcivil organizada sobre los compromisos asumidos en elcontexto de diversos tratados multilaterales de ambienteque guardaban cierto nivel de proximidad con el tema(ver principalmente el caso centroamericano).

Los países que cuentan con una extensión y estructuracostera similar tienen que enfrentar obstáculos parecidosindependientemente de su desempeño ambiental. Porejemplo, hay pocas acciones e iniciativas que distinganentre las necesidades de la gestión de recursos pesquerosmarinos y los continentales. Además, hay escasísimosplanes de recuperación o rehabilitación del recurso ylas vedas funcionan parcialmente o no cumplenplenamente con sus objetivos.

Lo anterior ocurre en gran parte debido a la ausencia odebilidad de los mecanismos de control y supervisiónen puerto, a las limitaciones para la manutención deun registro actualizado (ya sea de carácter obligatorio o

voluntario) de los agentes privados que efectúanactividades de pesca industrial, registros e informaciónsobre pescadores artesanales, así como a la carenciade controles de las embarcaciones de banderainternacional en mar abierto. Sin embargo, el principalproblema continúa siendo la existencia de políticaspúblicas y acciones de política dirigidas a reducir lapesca ilegal carentes de contenido financiero,administrativo-logístico y los recursos humanos paraasegurar su cumplimiento.

Asimismo, el problema del manejo del recurso pesqueroen la región tiene una raíz social que afecta la dimensiónde la política pública. Reid y otros (2005) analizaron elimpacto de estrategias de reducción de la pobreza endiversas regiones costeras de América Latina. Sedeterminó que existen deficiencias en las políticassociales para atender a la población de pescadoresartesanales y que comparativamente, este sectorpoblacional accedía a recursos de la cooperación y delgasto público mucho menores que otros, como lostrabajadores informales en el sector urbano. Igualmentese concluyó que dichas estrategias se han focalizadoprincipalmente en subsanar situaciones de pobrezaextrema de los trabajadores del mar pero muy poco enemprender acciones que conlleven al mejoramiento delmanejo, procesamiento y distribución del recursopesquero, lo cual a la postre, traería consigo un aumentodel valor del producto en los mercados locales yregionales y, por consiguiente, una mayor calidad devida para estos trabajadores a mediano plazo.

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

RECUADRO 5.19

Ciencia y participación para la conservación y el uso sustentable de los recursos marinos deLatinoamérica, ejemplos de la costa chilena

En Chile, como en el resto de América Latina, las pesquerías y las zonas costeras son áreas diversas, complejas y dinámicas,donde se generan interacciones y retroalimentan en forma permanente elementos ecológicos y sociales. La gobernabilidadde estas zonas es una tarea compleja, en la que las soluciones para el uso de la biodiversidad no son simples, y en la quese deben integrar diferentes fuentes de conocimiento. Utilizando el ejemplo de la administración de la pesquería artesanalde recursos bentónicos y de la zonificación de la costa para permitir conservación y actividades de acuicultura, mostramosaquí el valor de la investigación científica, la participación efectiva de comunidades y la generación de un espacio para laintegración de miradas diversas al uso de la costa como un proceso virtuoso en que se da cabida al uso sustentable y laconservación como elementos complementarios. En este sentido, proponemos que las regulaciones o políticas destinadasal uso sustentable y conservación de zonas costeras, sean consideradas como instrumentos adaptativos que permitaninteractuar de manera explícita los sistemas sociales y ecológicos y que tengan metas explícitas y cuantificables tanto dedesempeño social como ambiental. Esto significa que requieren de constante evaluación, innovación y aprendizaje paraalcanzar su fin último: el bienestar humano en el largo plazo.

Con el fin de revertir la sobreexplotación de recursos y alcanzar pesquerías bentónicas artesanales sustentables, Chile creócomo parte de su Ley de Pesca y Acuicultura (1991), las Áreas de Manejo y Explotación de Recursos Bentónicos (AMERB).Esta herramienta, que se basó en investigación científica sobre el impacto del ser humano en ambientes marinos, permitea pescadores artesanales acceder a derechos de uso exclusivo sobre porciones de fondo marino con el fin de co-manejarlos recursos con el Estado. Hoy existen alrededor de 700 AMERB en Chile, gestionadas gracias al compromiso de lasasociaciones de pescadores artesanales. La política de AMERB ha sido considerada como exitosa en términos de larecuperación de las poblaciones pesqueras bentónicas, las que muestran abundancias y biomasas de recursos mayores endichas zonas en comparación con las de libre acceso aledañas. Estudios recientes han demostrado que la vigilancia de lasAMERB, por parte de los pescadores, se traduce en un cuidado integral del área, sustentando así mayores niveles dediversidad biológica que zonas de libre acceso aledañas. La participación de los pescadores artesanales en el manejodirecto de sus recursos además, ha favorecido las actitudes del sector frente a la sobreexplotación y la conservación,siendo hoy los pescadores artesanales en algunos lugares de Chile, fiscalizadores importantes en procesos de desarrollocostero local. A pesar de los avances generados por la política de AMERB, aún persisten problemas importantes como porejemplo los elevados costos de vigilancia en las áreas. Producto de lo anterior, para alcanzar un sistema exitoso, esnecesaria una constante evaluación, en la que se puedan sacar lecciones para adaptar la política de AMERB y afrontar losconstantes desafíos que se van generando. La participación activa de la pesca artesanal en la administración de los recursosdebe entenderse como un proceso dinámico y adaptativo.

Una de las industrias de mayor crecimiento en Chile es la salmonicultura, la cual se concentró en la región de los Lagos,llegando a representar la segunda fuente de divisas del país, luego del cobre. Este crecimiento sufrió un rápido e impactantecolapso, debido a la aparición de un virus que no sólo mermó la producción, sino que contaminó vastas zonas de la costay aguas interiores, inhabilitándolas para futuros emprendimientos salmoneros. Causas sindicadas como responsables deeste colapso incluyen la ausencia de regulación por parte del Estado, ausencia de normativas específicas, y la falta deintegración de variables ambientales tanto en la planificación como en la práctica de esta industria. Efectos de este colapsoincluyen pérdida significativa de fuentes de trabajo, pérdida de calidad ambiental de la costa, y urgencia de la industriapor colonizar nuevas áreas para continuar operando. La Ecoregión de Canales y Fiordos Australes, localizada en la PatagoniaChilena, es el destino natural de la desplazada industria salmonera. Comprende una vasta costa la cual alberga riquezabiológica de importancia local y global, que sustenta otras actividades antrópicas como pesquerías artesanales e industriales,junto a la industria del turismo. Con el objetivo de reducir el impacto potencial de la recién arribada industria salmonera,el Gobierno inició un proceso de macro-zonificación de la costa, la que espera definir usos preferentes y lograr acuerdossociales para su uso que permitan reducir conflictos ambientales y favorezcan el desarrollo de las industrias locales. Estaoportunidad fue utilizada por la comunidad científica y ONGs las que han liderado la puesta en valor de la informaciónbiológica existente, a través de la aplicación de herramientas de planificación de la conservación, definiendo y proponiendoun portafolio de 28 áreas que tienen valor para la conservación de la biodiversidad marina en la Patagonia.

Se espera que este instrumento permita: a) segregar la actividad acuícola de áreas importantes para la conservación; b)entregar una herramienta de planificación para la designación e implementación de áreas protegidas en la costa patagónicachilena. Constituye éste un modelo interesante que valora el conocimiento científico transformándolo en un instrumentoque permite articular actividades productivas y conservación, favoreciendo el uso sustentable no sólo de la industriasalmonera local, sino de otras como la pesca o el turismo. Incluso, producto de este proceso participativo, se definió unnuevo uso para la costa: el de conservación. Pasos siguientes en este proceso, incluyen la implementación efectiva de laspotenciales áreas protegidas, el fortalecimiento de las buenas prácticas en las industrias locales que dependen de la costa,el monitoreo permanente de la efectividad de cada una de estas prácticas, así como explicitar mecanismos para incorporarlecciones aprendidas.

Continúa en la página siguiente...

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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V. POLÍTICAS

3.3 POLÍTICAS E INCENTIVOS FISCALES

Los instrumentos económicos se enmarcan en laspolíticas ambientales como una herramienta que actúaen el compartimiento de los agentes económicos a travésde señales de mercado. Existe un amplio abanico deinstrumentos económicos de posible aplicación aobjetivos de política ambiental: tasas por contaminar,creación mercados de permisos transables, pago porservicios ambientales, entre otros. Se trata de esquemasque operan a nivel descentralizado y que aplican lalógica económica a la solución de los problemasambientales.

La región cuenta con relativamente poca experienciaen la utilización de estos instrumentos. Los principiosde protección ambiental siguen siendo visualizados porgran parte de los sectores productivos y por no pocosgubernamentales como una imposición externa y fuentede costos adicionales que frena el desarrollo. Esto generauna economía política en la cual los temas desostenibilidad ambiental ocupan todavía un papel

RECUADRO 5.19

Alcanzar la conservación de la biodiversidad y uso racional de las zonas costeras determinará en última instancia lasustentabilidad futura de la productividad marina, sea ésta en forma de extracción directa de recursos, indirectamente através del cultivo, u otorgando un servicio de soporte a actividades productivas en el mar. Los ejemplos anteriores muestranque el desarrollo de soluciones efectivas es posible, y que requiere de la articulación explícita de la investigación científicapara comprender los procesos que mantienen e impactan a los ecosistemas marinos; la incorporación y participaciónexplícita de diversos usuarios locales directos; los cuales articulados en políticas públicas y normativas ambientales factiblesde ser mejoradas con nueva información de manera permanente, pueden agregar sustentabilidad a las industrias costerasde nuestro continente.

Fuente: Elaborado por S. Gelcich y B. Saavedra.

... viene de la página anterior.

secundario. Sin embargo, existen aplicacionesincipientes de instrumentos económicos destacables,particularmente en países con mayor desarrolloinstitucional. Son comunes la aplicación de tarifas porservicios ambientales y contribuciones por gastospúblicos incurridos en servicios ambientales. En elRecuadro 5.20 se describen algunos casos relevantes.

A partir del análisis de la eficacia de los casos que seacaba de enumerar, y a la luz de las limitacionesidentificadas, se impone actuar en los siguientes tresfrentes:

a) Articulación de nuevos espacios de acción políticae institucional junto a las autoridades fiscales;

b) Adecuación del marco jurídico-institucional vigentepara facilitar la operatividad de los instrumentos degestión ambiental entre los distintos niveles degobierno y garantizar su coherencia con otraspolíticas sectoriales; y

c) Consolidar la generación de estadísticas einformación ambiental a nivel nacional y local.

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3.4 FORTALECIMIENTO Y ADECUACIÓN DELA NORMATIVA AMBIENTAL

En lo referente al ejercicio de la justicia, si bien en lamayoría de los países, el número de iniciativas yacciones hacia la justicia ambiental son muy reducidas,en algunos de ellos se han concretado algunas iniciativascon el fin de que las instancias competentes poseanniveles significativos de legitimidad y sus resolucionesse visualicen como vinculantes. Asimismo, aunquealgunas de las instancias judiciales y administrativascuentan con mecanismos orientados a asegurar elcumplimiento de las sentencias y resoluciones, ladefinición de iniciativas se encuentra asociada a losobstáculos y carencias con que tienen que lidiar lossistemas de administración de la justicia: carencia derecursos financieros y humanos para la gestión de

procesos, bajas tasas de denuncias planteadas que llegana juicio o proceso, escasa desconcentraciónadministrativa de los procesos, falta de ventanillas parala recepción de denuncias o emplazamiento deprocesos, discrepancias en torno a las interpretacionesefectuadas por las instancias judiciales, penales yadministrativas en relación con el bien ambiental atutelar, entre otras.

No obstante, en todos los casos, queda bastante caminopor recorrer para lograr agilizar los mecanismos yestablecer estrategias de largo plazo, dado que existensituaciones de degradación de ecosistemas en donde latasa de recuperación es de largo plazo o en donde entesprivados deberán asumir los costos financieros del dañoambiental derivado de actividades productivas que hanvulnerado la legislación ambiental nacional.

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

RECUADRO 5.20

Estudios de caso nacionales e instrumentos examinados

BrasilCompensación financiera por explotación de petróleo.Pagos por derecho de uso del agua.Tarifa de efluentes industriales.Impuesto de Circulación de Mercaderías y Servicios(ICMS) y sus criterios ambientales de transferencia amunicipios.Reconocimiento y premios por mejoras en eldesempeño ambiental de la industria (iniciativa no-gubernamental).

BarbadosSistema de depósito-reembolso para botellas deconsumo masivo.Tarifa ambiental sobre bienes durables importados .Tarifas diferenciadas por recolección de desechossólidos.Exoneración fiscal para calentadores de aguas solares.Incentivos fiscales para construcción de tanquesalmacenadores de agua de lluvia y equipo importadopara ahorrar agua en hoteles.

ChileSistema de compensaciones por emisiones departículas en la Región Metropolitana.Tarificación diferenciada de residuos sólidosdomiciliarios.Cuotas individuales transferibles de pesca.Ecoetiquetado para el ozono y agricultura orgánica.

ColombiaTasa retributiva por contaminación hídrica aplicada anivel de cuencas por las Corporaciones AutónomasRegionales (CAR).

Fuente: Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) / Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), 2003.

GuatemalaPermiso de uso de agua.Esquemas de certificación (agricultura orgánica yecoturismo).Incentivos (subsidios) a la reforestación.Financiamiento de proyectos de producción limpia atasas preferenciales.Fondo nacional para proyectos ambientales.Tarifas de cobro únicas por servicios municipales deagua y energía.Ornato y recolección de residuos sólidos.

JamaicaCargos a usuarios por volumen de agua extraída.

MéxicoArancel cero y depreciación acelerada para equipo decontrol y prevención de contaminación.Sobreprecio a gasolinas.Derechos por uso o aprovechamiento de bienespúblicos: flora, fauna, caza deportiva.Derechos de descarga de aguas residuales industriales.Sistemas de depósito, reembolso para baterías,neumáticos y lubricantes usados.Financiamiento concesional y subsidios a proyectos deplantación y manejo forestal en áreas forestalmentedevastadas.

VenezuelaSistemas de depósito-reembolso para botellas deconsumo masivo.Exoneración de impuestos corporativos por inversionesde control y prevención de contaminación.Impuesto a la deforestación.Sistema de tarifas de desechos industriales basadas envolumen generado en el área metropolitana de Caracas.

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V. POLÍTICAS

3.5 POLÍTICAS SOCIO-AMBIENTALES

3.5.1 EL CONSUMO Y LA PRODUCCIÓNSOSTENIBLE

El Proceso de Marrakech es una campaña de acciónglobal basada en la interacción de múltiples partesinteresadas para promover el consumo y la producciónsostenibles (CPS) y trabajar en la conformación de un«Marco Global de Acción sobre CPS», conocido comoel Marco de Programas a 10 años en respuesta alllamado del Plan de Implementación de Johannesburgo(PIJ), de la Cumbre Mundial de Desarrollo Sustentable(2002). El Programa de las Naciones Unidas para elMedio Ambiente (PNUMA) y el Departamento de lasNaciones Unidas para Asuntos Económicos y Sociales(UNDESA, por sus siglas en inglés) son los principalesorganismos de este proceso mundial, con unaparticipación activa de los gobiernos nacionales,organismos de desarrollo, sector privado, sociedad civily otros interesados. El Proceso de Marrakech opera através de mesas de dialogo internacional, regionales y

nacionales. En el contexto de América Latina y el Caribe,el Consejo Regional de Expertos de Gobierno enConsumo y Producción Sustentables es un órganotécnico creado por el Foro de Ministros de Ambientede América Latina y el Caribe –por medio de la Decisión12/2003– con el fin de identificar y proponermecanismos eficaces y eficientes para la puesta enpráctica de políticas, estrategias y programas integralesque promuevan y faciliten la adopción de patronessostenibles de consumo y producción en nuestrassociedades.

En la V Reunión del Consejo de Expertos en 2009, seaprobaron las prioridades regionales que se proponenincluir en el Marco de Programa a 10 años (10YFP, porsu sigla en ingles), resumidas en el Cuadro 5.3. Lasmismas han sido reflejadas en los documentospreparatorios para las reuniones de la Comisión deDesarrollo Sostenible 2010 - 2011, para las cuales unode los 5 temas discutidos será Consumo y ProducciónSostenible. Las prioridades regionales identificadas enel Cuadro 5.3 fueron presentadas para aprobación enel Foro de Ministros de 2010.

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3.5.2 CULTURA AMBIENTAL Y EDUCACIÓN PARAEL DESARROLLO SOSTENIBLE

La gran mayoría de las acciones desarrolladas en esteámbito –como lo establece la mayoría de los InformesGEO consultados– corresponde a transformaciones oadecuaciones parciales de los currículos de enseñanzaen educación primaria y secundaria con el objetivo deintroducir problemas ambientales considerados claves.Entre estas últimas se destacan elementos relacionadoscon el reciclaje y reutilización de residuos sólidos,valoración del entorno natural, utilización del recursohídrico, disposición y tratamiento de basura, y elimpacto de las actividades antropocéntricas en el

ambiente. Sin embargo, se han efectuado escasasevaluaciones sobre la incidencia y eficacia tanto de lasreformas curriculares como de los programas deeducación ambiental más especializados. De igualmodo, no hay iniciativas de seguimiento a largo plazo,por lo cual, dichos programas tienden a palidecer alfinalizar las administraciones que las han propuesto einiciado en su implementación.

De tal modo, el énfasis de la educación ambiental en laregión pareciera concentrarse en un grupo etarioespecífico, asumiéndose quizá de manera involuntaria,que la población adulta y adulta joven no requiereinsumos formativos en materia ambiental.

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

CUADRO 5.3

Programas prioritarios en CPS en América Latina y el Caribe

Programa

1. Políticas yestrategiasnacionales enconsumo yproducciónsustentables

2. Mejoramiento delsector productivode las pequeñas ymedianas empresas

3. Compras públicassustentables

4. Estilos de vidasustentables

5. Red de informacióny gestión delconocimiento

Políticas y medidas

Integrar y articular el tema de CPS en las políticas, programas y estrategias de desarrollo.·Fortalecer los procesos de información, educación y capacitación a la población en materiade CPS (revisar el lenguaje y los modos de transmitir los conceptos; ampliar la participaciónde otras organizaciones y actores de la sociedad civil; utilizar la Red Regional deInformación en CPS como instrumento para fortalecer la cooperación sur-sur).·Cuantificar costos y beneficios asociados con la implementación de CPS en las iniciativasnacionales y sub-regionales.·Fomentar la responsabilidad social empresaria, e incorporar conceptos de responsabilidadextendida del productor y análisis de ciclo de vida en las empresas productores de bienesde consumo masivo que generan mayores impactos ambientales y sociales.

Priorizar sectores a nivel subregional vinculados a los servicios ambientales o ecosistémicos.Crear o fortalecer los mecanismos e instrumentos económicos que apoyen la sostenibilidadde los sectores productivos, y mejoren su productividad y competitividad.·Definir indicadores específicos de CPS dentro del marco de la Iniciativa Latinoamericanay Caribeña para el Desarrollo Sostenible (ILAC).

Promover un liderazgo político de alto nivel que impulse las compras públicas sustentablesy que involucre e integre al organismo rector de las compras públicas nacionales.·Adoptar una estrategia de aplicación gradual para la incorporación de criterios ambientalesy sociales en los procesos de contratación de bienes y servicios prioritarios.·Asegurar la inclusión y la sostenibilidad de las Pymes en los programas SPP mediante elestablecimiento de medidas de política y los instrumentos específicos.·Establecer un mecanismo multisectorial que facilite la participación, evaluación yseguimiento de las compras públicas sustentables (involucrando a los ministerios deeconomía y finanzas).

Adecuar y aplicar políticas que fomenten la oferta de bienes y servicios sustentables aprecios accesibles para toda la sociedad.·Propiciar la firme inclusión de la educación para el consumo sustentable en la estructuracurricular educativa.·Realizar estudios y aplicar mecanismos sistemáticos de medición para identificar ycomprender los motivadores del consumo en la región.

Fortalecer la Red de información REDPYCS (Red de Producción y Consumo Sustentable)como herramienta referencial de calidad y prestigio para la distribución de información,vinculación entre distintos actores de la sociedad, y fortalecimiento de las capacidadesnecesarias para contribuir a la modificación de patrones de consumo y producción haciala sustentabilidad.

Fuente: Recomendación al Foro de Ministros de Medio Ambiente de América Latina y el Caribe de la V Reunión de Expertos en CPS, Colombia 2009.

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V. POLÍTICAS

En este contexto, y de acuerdo a diversas publicaciones,Cuba pareciera ser un baluarte en educación ambientalpara la región. Desde mediados de la década de los 90y en el marco de la Agenda 21 y el espíritu de Río 92,se desarrolló una Estrategia de Educación Ambiental, lacual se acompañó de un Plan de Acción condiferenciación territorial o geográfica. Tal y como seindica en el Informe Perspectivas del Medio AmbienteUrbano - GEO La Habana 2004, en esta ciudad seimplementó como parte de la Estrategia un ProgramaEspecial de Concientización Ambiental para la provinciay se estableció una Red de Formación Ambiental parala Capital. Detrás de estos programas se ha procuradomaterializar un enfoque integrador e intergeneracionalde educación ambiental. Por un lado, tanto los niñoscomo los jóvenes reciben contenidos de educaciónambiental en sus centros educativos por medio delcurrículo de ciencias, reforzados en sus respectivascomunidades mediante comités de formación ubicadosen las barriadas. De manera simultánea, el programade concientización y los mecanismos previstos de laRed han posibilitado abarcar a la población adultainvolucrándola, entre otros, en la celebración del DíaMundial del Medio Ambiente, el Día de la Capa deOzono y el Día Mundial del Agua (Delegación delMinisterio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente,2004).

3.5.3 PARTICIPACIÓN DEL SECTOR PRIVADO

Las acciones e iniciativas ambientales orientadas a gestararreglos o formas de interacción con el sector industrial,comercial y empresarial, a fin de reducir los niveles dedegradación ambiental identificadas en los informesGEO nacionales y subnacionales resultan factibles deser clasificadas en cuatro grandes categorías:1) adhesión a normas verdes y esquemas decertificación, 2) ecoeficiencia y co-procesamiento deresiduos sólidos, 3) acciones orientadas a laimplementación de tecnologías más limpias ytransformación de modos de producció, y 4) desarrollode esquemas de responsabilidad ambiental corporativa.

Asumiendo dicha clasificación, de acuerdo a lainformación proporcionada por los informes GEO, seobserva entre los países de mayor desarrollo relativo enla región, un cierto balance en las acciones situadas enlas cuatro categorías anteriormente citadas; mientras quelos demás países centran sus esfuerzos en esquemas decertificación industrial y forestal y en acciones orientadasa la reutilización de recursos (Mladinic y Ruz, 2005).

En el primer caso, los esfuerzos se concentran en eldesarrollo de sistemas mixtos para reducir ladegradación ambiental causada por las actividades

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

productivas y extractivas, aspecto que sale a relucircuando se analizan los procesos productivos y desustitución de tecnologías, en donde por lo general,colabora una contraparte privada y una institucional-pública o en donde se desarrollan mecanismoscompensatorios, por ejemplo en materia fiscal (ver elcaso colombiano) (Lerda y otros, 2003).

Por su parte, el segundo grupo de países apuesta todavíaa incorporar la participación de los agentes privados,particularmente el sector industrial, por medio deinstrumentos de mercado y sistemas de certificación queposibiliten incrementar el valor agregado del producto,por medio del uso de sellos verdes o sellos desostenibilidad productiva.

Especial mención requiere la temática del diseño ypuesta en práctica de esquemas de responsabilidadambiental corporativa en la región, los cualesrepresentan una forma novedosa de entender losacuerdos y formas de cooperación con los agentesprivados en relación con los objetivos de conservacióndel ambiente (Amit y otros, 2004). Los informes GEOsubnacionales, específicamente los GEO ciudades, dancuenta de diversos esfuerzos para incorporar los aportesde agentes privados en el contexto comunitario y enprocesos de cogestión con autoridades municipales oalcaldías, por ejemplo, en el ámbito de manejo de

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

residuos sólidos, reprocesamiento de vertidos,establecimiento y conservación de zonas arbóreas, entreotros, sin que la puesta en práctica de estos esquemashaya sido entendida como una licencia para contaminar,manteniendo los agentes privados la observación de lalegislación vigente.

En el caso de Brasil, los esquemas de responsabilidadempresarial se originaron en los años sesenta.Básicamente hasta los años noventa la responsabilidadsocial corporativa (RSC) se limitaba a actividadesorientadas a mitigar los problemas sociales queenfrentaba el país en materia de pobreza y barrios ensituación de vulnerabilidad social. Posteriormente losesquemas de RSC experimentaron un proceso detransformación incorporando las expectativas de laciudadanía y de grupos de interés de muy variada índole,incluidos aquellos que abogaban por la conservacióndel ambiente y la reducción de los niveles dedegradación ambiental producto de actividadesproductivas. Hoy día se consideran prioritarios temascomo educación, involucramiento comunitario yresponsabilidad ambiental.

En este contexto, iniciativas como el Centro EmpresarialBrasilero para el Desarrollo Sostenible – CEBEDS (filialbrasileña del Consejo Empresarial Mundial para elDesarrollo Sostenible, WBCSD por sus siglas en inglés),que congrega a cincuenta de las más grandes empresascon sede en Río, o el Instituto ETHOS deResponsabilidad Social, que reúne a más de 700empresas con sede en Sao Paulo, constituyen ejemplosde los esfuerzos desplegados por la comunidadempresarial para plasmar su compromiso con laspolíticas ambientales, habiéndose constituido esteúltimo en un centro para el desarrollo de estándaresambientales nacionales y en un centro dedocumentación de buenas prácticas (Correa y otros,2004). Por otra parte, están las acciones desplegadaspor los organismos gremiales del empresariadobrasileño, donde por ejemplo, la Federación de laIndustria del Estado de Sao Paulo –la más grande delpaís– tiene un papel relevante en la promoción de temasambientales, de producción más limpia y en eldesarrollo de legislación y políticas y de patrones decertificación ambiental. Finalmente, resulta relevantela experiencia del Índice de Sostenibilidad Empresarial–ISE de la Bolsa de valores de Sao Paulo, creado en2005 para reconocer a las empresas con un altocompromiso de sostenibilidad ambiental yresponsabilidad social, el mismo que se formula sobreuna triple línea de base internacional –ambiental, socialy económico-financiera–, a la que se ha añadido otrostres indicadores: gobernanza corporativa, característicasgenerales y naturaleza del producto.

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V. POLÍTICAS

14 Para un análisis más amplio, consultar http://www.infoiarna.org.gt/media/File/publicaciones/propias/doc_tecnicos/26_st.pdf

15 www.cepal.org/mdg16 www.geodatos.org

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

3.6 HERRAMIENTAS DE MONITOREO PARALA GESTIÓN AMBIENTAL

En la región, como se ha comentado, se evidencia unacarencia persistente de información y conocimientorelevante y actualizado. La situación ambiental (ver elcapítulo II) denota que es necesario fortalecer laconciencia y el conocimiento de la sociedad en general,y de los tomadores de decisiones en particular, sobrelos beneficios de los ecosistemas y los servicios que éstosofrecen, de la manera en que son afectados y de loseventuales costos conexos, sobre todo a largo plazo.Las necesidades de información son muy variadas; vandesde los datos básicos sobre los ecosistemas, los bienesy servicios que prestan, las presiones que ejercen lasactividades productivas, los indicadores del bienestarhumano, entre otros, hasta información y conocimientomás elaborado que permita alimentar modelospredictivos para construir escenarios y tendencias, yfundamentar y transparentar decisiones.

Fortalecimiento de los indicadoresambientales nacionales, Sistemas deInformación Ambiental (SIA) y Sistemas deContabilidad Ambiental y EconómicaIntegrada (SCAEI)

Las estadísticas ambientales básicas oficiales son uningrediente fundamental de los indicadores ambientalesy de sostenibilidad que integran los SIA.Complementariamente, se deben reforzar los esfuerzospara moverse con mayor velocidad a la adopción desistemas de cuentas ambientales y económicasintegradas (ej. SCAEI), que presentan sistémica einterrelacionadamente la contabilidad de activos y flujosdel medio ambiente con la economía del país encuestión (Naciones Unidas, 2010). A este respecto, yael Recuadro 5.8 proporciona una síntesis del desarrollode este instrumento en los diversos países delcontinente14.

Generación y actualización de informaciónestadística bajo estándares internacionales

Los avances en la generación de estadísticas debencumplir con criterios de calidad de datos, según losestándares estadísticos ambientales internacionales, asícomo propender continuamente al proceso dearmonización y de conciliación estadística. En estesentido, el PNUMA y la CEPAL han trabajado junto a

los países en la Agenda de Conciliación Estadística delos Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM)15, y enla coordinación y armonización de los indicadores deIniciativa Latinoamericana y Caribeña para el DesarrolloSostenible (ILAC)16 con los del séptimo ODM.

Fortalecimiento e implementación de lasTecnologías de la Información y laComunicación (TIC) para el medio ambiente

Las tecnologías de la información y la comunicaciónpueden tener un papel central en la gestión de losecosistemas. Las TICs son particularmente relevantes enel caso de ecosistemas muy extensos, ubicados en áreasde difícil accesibilidad, compartidos entre diferentespaíses, y que presentan diversas amenazas en susostenibilidad. El Amazonas es el ejemplo másemblemático al respecto. El Recuadro 5.21 ilustra lasmúltiples aplicaciones de las TICs a la sostenibilidadambiental en la región.

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

3. INSTRUMENTOS PARA LA ACCIÓN

Fuente: Naciones Unidas, 2010 y SEMARNAT .

RECUADRO 5.21

Algunas contribuciones de las TICs a la sostenibilidad ambiental en la región

Resulta difícil enumerar las múltiples aplicaciones de las TICs en las áreas de protección ambiental. Estas van desde elmonitoreo de barcos de pesca a través de imágenes de satélite para evitar la pesca ilegal, hasta el seguimiento de especiesindividuales en peligro de extinción a través de sistemas de posicionamiento satelital que permiten conocer suscomportamientos, rutas de migración y, como consecuencia, el diseño de medidas para su protección. En Chile, porejemplo, se están marcando pumas con collares dotados de GPS en el marco de un proyecto de apoyo a la conservacióndel huemul en el que se busca determinar el efecto que tiene el puma como predador de ésta y otras especies.

El Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil (INPE) trabaja con imágenes de alta resolución que abarcan losaproximadamente cinco millones de kilómetros cuadrados de la Amazonía brasileña, así como otras áreas de interésespecial como la llamada Mata Atlántica. El INPE tiene diversos programas de seguimiento de la deforestación en laAmazonía y ha desarrollado nuevas aplicaciones que permiten monitorear la deforestación en tiempo real, identificaráreas donde están comenzando procesos de degradación y detectar incendios.

En cuanto a la bioprospección – el proceso de búsqueda sistemática de sustancias bioactivas que permite el desarrollo denuevos productos comerciales a partir de la biodiversidad como fármacos, nutrientes, cosméticos, etc. –, el desarrollo desistemas de procesamiento de datos en combinación con otras tecnologías de punta permite realizar rápidamente millonesde ensayos para la identificación de compuestos activos, anticuerpos o genes y determinar así su uso potencial.

No menos relevante ha sido el desarrollo de los sistemas de información geográfica (SIGs), que permiten el almacenamientoy análisis de información georeferenciada y posibilitan manejar distintas variables ambientales y socio-económicas,facilitando el diseño e implementación de políticas y proyectos de inversión como aquellos destinados al cumplimiento demetas relacionadas con la cobertura de agua potable y saneamiento, al monitoreo de la calidad del aire, agua y suelo, alordenamiento ecológico del territorio. El Sistema Nacional de Información Ambiental y de Recursos Naturales (SNIARN)de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de México es un ejemplo de la integración de SIGs y otrosprogramas y procedimientos para recopilar, organizar y difundir la información acerca del ambiente y los recursos naturalesdel país.

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V. POLÍTICAS

4. OPORTUNIDADES Y PARA POLÍTICAS E INSTRUMENTOSEFECTIVOS

4.1 INCORPORACIÓN DE LOS PRINCIPIOSDEL DESARROLLO SOSTENIBLE EN POLÍTICASY PROGRAMAS

Existen desafíos significativos para la implementaciónde los mandatos institucionales y las nuevaslegislaciones, así como para la integración de losprincipios de desarrollo sostenible en los procesosdecisorios y las políticas sectoriales. Esto se da –comose establece en el capítulo I– a pesar de que AméricaLatina y el Caribe presentan un avance sustancial enlegislación ambiental y en el establecimiento deinstituciones con mandatos directamente relacionadosa la temática ambiental.

En la mayoría de los países de la región, en situacionesde conflicto entre distintos objetivos de políticas, tiendena prevalecer los objetivos sectoriales sobre los objetivosambientales. Los objetivos ambientales, promocionadospor instituciones de nueva o reciente creación, de menorimportancia y capacidad política, con recursos amenudo insuficientes comparados con la magnitud desus misiones, tienden a ser relegados en beneficio deobjetivos sectoriales de importancia políticaconsolidada, e impacto económico medible ycomprensible por la población. Muchas institucionesapenas empiezan a comprender e incorporar aspectosambientales y de desarrollo sostenible en sus procesosdecisorios. Siguen existiendo situaciones de deficienciasen la coordinación y coherencia de las decisiones ypolíticas dentro del aparato público donde, en beneficiode objetivos sectoriales, se incentiva la degradaciónambiental: por ejemplo, se ofrece crédito subsidiado ala ganadería en áreas susceptibles a la deforestación; seimpulsan proyectos de infraestructura evaluando einternalizando parcialmente sus costos ambientales ysociales, y no se consideran las alternativas tecnológicasde menor impacto negativo.

La efectiva incorporación de principios de desarrollosostenible a las políticas y programas es un proceso largoy complejo que debe tener en cuenta lasparticularidades de cada país y gobierno, y de cada tipode políticas. El informe sobre el séptimo Objetivo deDesarrollo del Milenio, publicado por Naciones Unidas,destaca algunas líneas de acción al respecto (NacionesUnidas, 2010):

Avanzar en la concientización de los tomadores dedecisión sobre la importancia económica y socialdel medio ambiente como parte del patrimonio delos países.Lograr mayores niveles de coordinación ycoherencia en la acción pública de modo degarantizar la sostenibilidad del desarrollo.Implementar las bases para un modelo de desarrolloque internalice los costos externos de la degradaciónambiental, así como los beneficios externos deactividades que no perjudiquen la integridad de losecosistemas.

4.2 CAMBIO CLIMÁTICO

El cambio climático es actualmente uno de los desafíosmás agudos – una fuerza motriz de cambio, tal como sereconoce en los capítulos I y IV– que enfrentan los paísesde la región en su camino hacia la sostenibilidad deldesarrollo. En el capítulo III (sección 5.2), se destacaque el cambio climático tiene y tendrá un efectosignificativo sobre los bienes y servicios ecosistémicos,así como sobre el bienestar humano, afectando lospatrones de producción y consumo. Resulta prioritarioque las políticas públicas (de desarrollo, ambientales ysectoriales), así como los instrumentos que se apliquen,consideren la adaptación a dichos cambios.

Los principales efectos esperados se asocian a unaumento en la frecuencia de eventos extremos, loscambios en la productividad de la agricultura, elaumento en el nivel del mar, el cambio en la incidenciade plagas y enfermedades y el estrés hídrico (CEPAL,2009b).

Los efectos sobre los sectores productivos – en laagricultura especialmente, pero también en el turismoy la pesca – repercutirán además en la capacidad degeneración de divisas en los países.

Por otra parte, todos los países latinoamericanos ycaribeños se ven afectados por uno o más procesos dedegradación en, al menos, parte de su territorio:degradación de los suelos, salinización, compactación,erosión, agotamiento o pérdida avanzada de nutrientes,o acumulación de sustancias tóxicas. Todos estosprocesos pueden verse agudizados por fenómenosclimáticos extremos.

4. OPORTUNIDADES

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

La falta de valorización económica de los serviciosecosistémicos (carentes de mercado y precios),especialmente aquellos afectados por el cambioclimático, conlleva a que la degradación de losecosistemas no se contabilice en el patrimonio nacionaly no aparezca como pérdida patrimonial. Esta situacióncontribuye a la lentitud –o inexistencia– de lasrespuestas. La noción de pérdida aparece más abajoen la cadena productiva, cuando aquello que sí tieneprecio resiente los efectos. Para entonces la reacciónpuede ser muy tardía.

Para América Latina y el Caribe es muy importante laadaptación al cambio climático, aunque sólorecientemente han comenzado los estudios paracuantificar los costos económicos de los impactosesperados del cambio climático (actualmente sedesarrollan estudios para México, Barbados, Bolivia,Centroamérica, Caribe y Sudamérica). La adaptacióntemprana debiera ser la actitud prudente y la quepermitiría distribuir mejor los costos en el tiempo.

Sin embargo, la adaptación puede aparecer comoinoportuna o innecesaria desde el punto de vistaeconómico. La búsqueda de un futuro más próspero,gracias al desarrollo tecnológico, generalmente juegaen contra de las decisiones de adaptación, por lo quefrente a plazos largos y cambios graduales, las respuestasno parecen urgentes hoy a los gobiernos que tienden aconsiderar– y no por efecto de la crisis –decisiones decorto plazo con altas tasas de descuento. Lograr elbalance adecuado entre costo, oportunidad,irreversibilidad, percepción y ajuste de los mecanismospara la toma de decisiones no será fácil.

De relevancia especial es la situación del Caribe yCentroamérica, que están enfrentando un futuro decreciente vulnerabilidad que implica retos para su propiasobrevivencia. Toda política en estas subregiones tieneen primer término que estar marcada por un sentido deurgencia, sobre la base de que el cambio climático esalgo que ya está ocurriendo y que actuar de maneratemprana y concertada es mucho más efectivo quepostergar las acciones. Las políticas climáticas debeninsertarse en las políticas y estrategias de desarrollo delos Estados de El Caribe y Centroamérica, incluidas laspolíticas para reducir la pobreza y garantizar laseguridad alimentaria, así como las políticas sectorialesen el desarrollo del turismo, la agricultura y la pesca,entre otras actividades. Más allá de las evaluaciones ymedidas estratégicas, existen numerosas prácticaspropias de la gestión integrada del riesgo, que aún noestán presentes con suficiente frecuencia y consistenciaen El Caribe y Centroamérica, y que deben serdesarrolladas en todos los niveles. Ello incluye medidas

diversas entre las que se encuentran la implementaciónde códigos de construcción, la restricción deconstrucciones en las áreas susceptibles de inundación,el desarrollo de defensas naturales (por ejempo, losmanglares), la diversificación del producto turístico, laaplicación de técnicas de conservación de agua, entreotras.

La adaptación oportuna permitirá un adecuado y gradualmanejo de los costos evitando el traspaso de costosdesde productores a consumidores, del sector privadoal público, y desde las generaciones presentes hacia lasfuturas.

La implementación del marco de políticas que elijanlos gobiernos de la región deberá ser complementadacon la acción y ayuda de los organismos internacionalesy donantes, lo que requiere del compromiso de lospaíses desarrollados con las actividades de adaptación.El financiamiento a nivel internacional, regional ynacional para la adaptación va en aumento, pero esmuy insuficiente para cubrir las necesidades estimadasde adaptación.

De la totalidad de los fondos comprometidos paraproyectos de cambio climático (incluso fondosprovenientes del GEF) se estima que, hasta fines del año2009, menos del 15% ó 560 millones de dólares fueronaplicados a la adaptación al nivel global y el 20% ó113 millones de dólares se destinaron a la adaptaciónen la región. Los fondos aplicados a la mitigación anivel global y en la región son entonces muy superioresy por ello se debe seguir impulsando la contribuciónde fondos a la adaptación, tanto nacionalmente comoal nivel regional y global. Si bien los proyectos dereducción de emisiones por deforestación y degradación(REDD) están más dirigidos a la mitigación, estosproyectos podrían brindar nuevas oportunidades apaíses latinoamericanos (ver Recuadro 5.22). Elprograma UN-REDD es uno de los muchos proyectosde la iniciativa REDD; otros son la alianza de carbonode los bosques (Forest Carbon Partnership Facility óFCPF) del Banco Mundial (Daviet y otros 2009, WorldBank 2009), la iniciativa de trabajos climáticos (ClimateWorks), que corresponden a emprendimientos apoyadospor cooperación multilateral. No obstante, existenproyectos que están siendo costeados por lacooperación bilateral, como el caso de los proyectosfinanciados por la Agencia de Desarrollo de laCooperación de Noruega (NORAD). Actualmentecontinúan las discusiones sobre el programa REDD, yotros como REDD+ (que incluye reforestación) yREDD++ que reconoce proyectos de agro-forestería,cambio de uso de la tierra o proyectos de manejosostenible de bosques dentro de los esquemas REDD

4. OPORTUNIDADES

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V. POLÍTICAS

(Parker y otros 2009). La discusión sobre REDD++,también conocido como REALU (Reducing Emissionsfrom All Land Uses) es quizá la que beneficiaría más alos países de América Latina.

La adaptación también conlleva algunas oportunidadespara seguir un desarrollo sostenible, como mejorinfraestructura, investigación y desarrollo de variedadesde cultivos, el desarrollo del pago por serviciosambientales, el mejor manejo de cuencas hidrológicas,entre otros.

Muchas de las medidas de adaptación son inherentes alas políticas de desarrollo. En este sentido, se recomiendael fortalecimiento del monitoreo y la generación deinformación pertinente para los sistemas de alertatemprana, y el fortalecimiento de los instrumentos parael uso ambientalmente adecuado del territorio.

Entre los mecanismos de adaptación que podrían sermás efectivos está la exigibilidad de seguros para laproducción y para la operación segura de lainfraestructura (puertos, carreteras, transportes,telecomunicaciones). Durante las diversasoportunidades de análisis con los países ofrecidas porel proceso de preparación de la Comisión de DesarrolloSostenible (CDS), la CEPAL, ha identificado algunaslíneas de potencial colaboración sur-sur que serían muyproductivas, como las que se señalan a continuación(CEPAL-PNUD 2007):

Elaborar un registro regional de las iniciativasemprendidas en los distintos países, para mejorarlas capacidades de prevención y respuesta a losdesastres naturales y en materia de adaptación ymitigación. Complementariamente desarrollar unsitio en la Web que ofrezca apoyo mediantedocumentos y estudios en español y portugués a lospaíses en los temas relacionados con las discusionespara el desarrollo y operación del régimen climático.Desarrollar los estudios específicos para evaluar losimpactos económicos del cambio climático en lasdiversas subregiones mediante el examen dediversos escenarios económicos para determinar lasnecesidades de adaptación y las oportunidades demitigación. Con el apoyo del gobierno del ReinoUnido se han iniciado estudios de este tipo en todala región. La profundización de estos estudiospermitiría además valorar las pérdidas en elpatrimonio natural por efecto del cambio climático,así sea parcialmente; estimar los costos deprevención de los desastres naturales y lavulnerabilidad fiscal de los países de la región. Laarmonización metodológica aumentaría lasposibilidades de comparación de los resultadospermitiendo contar con una imagen regional de estosproblemas.Realizar programas de apoyo al desarrollo depolíticas en materias como la eficiencia energéticaen industrias y edificaciones, incluida laconstrucción de vivienda social, la producciónlimpia, el uso de biocombustibles en la industria, lamejora normativa en sectores exportadorescompetitivos y en la internalización deexternalidades en la evaluación de los proyectos deinversión pública y privada.Fomentar y compartir las experiencias en el

RECUADRO 5.22

El programa UN-REDD para reducir ladeforestación y la degradación de bosques

El programa UN-REDD (Reducción de Emisiones porDeforestación y Degradación) implementadoconjuntamente por PNUMA, el PNUD y la FAO, tiene comoobjetivo el crear capacidades en países para suparticipación en un futuro mecanismo REDD. El programabusca crear las condiciones por las cuales el carbonoalmacenado en sistemas boscosos pueda tener un valoreconómico tanto para el país como para las poblacioneslocales que hacen uso de este recurso. De esta manera elprograma ayuda a establecer incentivos para laconservación y el manejo sustentable de bosques. Entérminos generales, los programas UN-REDD trabajan enalgunas de las siguientes áreas:

1) Definición de escenarios de deforestación en laausencia de un mecanismo REDD.

2) Establecimiento de un sistema de monitoreo yreporte de conservación de carbono en sistemasboscosos.

3) Definición de una estrategia de país que resulte enuna disminución de emisiones por deforestación ydegradación de bosques. Esto puede requerir ajustesen el marco legislativo y/o regulatorio.

4) Integrar acciones contra la deforestación ydegradación de bosques en planes nacionales ysectoriales.

5) Definición de un sistema de distribución debeneficios transparente y costo-efectivo.

6) Crear capacidad técnica local para laimplementación de programas REDD. Esto incluyediseminación de información sobre REDD.

La participación libre e informada de comunidades locales,incluyendo las indígenas, es de primordial importancia enUN-REDD. El programa cuenta con mecanismos internosde control que aseguran la participación de grupos quedependen de los bosques para su subsistencia y desarrollo.El programa UN-REDD trabaja al momento con 9 paísespiloto: Bolivia, Indonesia, Panamá, Papúa Nueva Guinea,Paraguay, República Democrática del Congo, Tanzania,Vietnam y Zambia.

Para más información, ver www.un-redd.org

4. OPORTUNIDADES

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

desarrollo de proyectos para el mercado de carbono,particularmente en el caso de los Programas deAcción, los Proyectos Agrupados y los proyectosREDD.Cooperar para adaptar las instituciones y lasfacilidades financieras nacionales a losrequerimientos específicos de los proyectos demitigación del cambio climático.Aumentar el número de organizaciones acreditadasregionales cuyos costos de operación y de gestiónsean menores a las extrarregionales y que conozcanlas características específicas de la región.Coordinar posturas para aumentar el peso relativode la región y para el acceso conjunto a los fondosinternacionales para la creación de capacidades yla transferencia de tecnologías.Acordar las adecuaciones que debieran hacerse alos mercados de carbono, incluyendo la tasaciónde operaciones para financiar la adaptación.Coordinar políticas de estímulo a inversiones demenor contenido de carbono.

La región tiene un amplio espacio para avanzar en ladefinición de una agenda propia en materia de cambioclimático apoyada tanto en la cooperación, en la cual,ambiente y desarrollo económicos se beneficienmutuamente.

Las negociaciones de la Convención Marco de NacionesUnidas sobre el Cambio Climático introducen variantesen el régimen de compromisos globales, que ademásde profundizar los compromisos de los países

desarrollados, podrán incluir compromisos por sectoresy con base en criterios de responsabilidad y capacidad(PIB per cápita y emisiones per cápita) de países endesarrollo. Futuras negociaciones podrían reclamarreducciones de emisiones en un número mayor depaíses en desarrollo para mantener la seguridadclimática y la estabilización de emisiones. Esto tendríarepercusiones sobre países de la región. En este probableescenario internacional, la región debe contar conmecanismos de medición de la línea de base que reflejenadecuadamente los progresos realizados.

Aunque no se hayan definido los mecanismos y lossectores específicos de uso, durante la reunión deCopenhague (Diciembre 2009), los países parte delAnexo 1 de la Convención Marco de Naciones Unidassobre el Cambio Climático decidieron iniciar lamovilización de fondos para el apoyo de acciones deadaptación y mitigación al cambio climático, y de lareducción de emisiones por deforestación y degradaciónde las naciones en vías de desarrollo por un valor deUSD $30 mil millones entre 2010 y 2012, llegando aUSD $100 mil millones por año a partir del 2020. Alrespecto, el FMI anunció (26 de Marzo, 2010) lacreación de un «Fondo Verde» que canalizaría losaportes de capital de los países industrializados en formade Derechos Especiales de Giro (DEG) y seríaadministrado de manera independiente para garantizarsu credibilidad.

Para la región es importante que los mecanismos depago por servicios ambientales reconozcan lacontribución de la conservación de bosques y delmanejo adecuado de suelos como contribución a laseguridad climática y al esfuerzo de mitigación deemisiones. Las reducciones de emisiones pordeforestación y degradación de bosques deben formarparte de los mecanismos de mercado del régimenclimático. Incluso frente a la posibilidad de un aumentode certificados de reducción de emisiones provenientesde menores cambios en el uso del suelo, debierapreverse un mayor esfuerzo de reducción en el mundodesarrollado que responda a esa mayor oferta, lo quetendría beneficios económicos (estabilidad en losprecios de las reducciones) y climáticos para el régimeninternacional.

La región tiene una presencia desigual en el contextointernacional y sus mecanismos de coordinacióndebieran mejorar para participar en la negociaciónglobal con una agenda regional propia, para tomariniciativas coordinadas de mejora económico-ambientaly para establecer prioridades concertadas en materiade acceso a los fondos de cooperación internacionalpara la adaptación y la mitigación.

4. OPORTUNIDADES

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327

V. POLÍTICAS

4.3 LA MIGRACIÓN Y EL CRECIMIENTO URBANO

Según el Programa de las Naciones Unidas para losAsentamientos Humanos (UN-Habitat), el mundo tienehoy 40 «mega regiones» urbanas, en las que vive 18 %de la población. Concentran además 66 por ciento dela actividad económica y 85 % de los avances científicosy tecnológicos, con los efectos ya descritos en el capítuloII, sección Áreas Urbanas.

El informe «El estado de las ciudades en AméricaLatina17» presentado al V Foro Urbano Mundial (Río deJaneiro, marzo 2010) recuerda que «las actividadeseconómicas basadas en lo urbano» representan más de50 % del producto bruto mundial, y más de 80 % delde los países más urbanizados de esta región.

Sus ciudades son concentradoras de riqueza, poder,comunicación, ciencia, tecnología y cultura. Perotambién de las formas más dramáticas de desigualdadsocial, subraya el estudio.

Un cuarto de los 471 millones de personas que vivenen ciudades latinoamericanas lo hacen en asentamientosprecarios, las «favelas» brasileñas, las «villas miserias»argentinas o los «barrios de tugurios», según algunasde las formas de nombrarlos en la región.

Esta situación demanda de los países de la región unsignificativo incremento en las inversiones para mejorarlos servicios básicos y las condiciones de vivienda asícomo para generar empleos, siendo estas mismasactividades altamente demandantes de empleo. Laefectivización de las soluciones, sin embargo, demandade la articulación de esfuerzos entre los gobiernoscentrales, provinciales, municipales, con la sociedadcivil y con el sector privado, pero sobre todo, de laparticipación de la propia población interesada.

Sin embargo, no todo son problemas en este escenario.La contraparte del fenómeno migratorio y las presionesque genera en los centros receptores es el desarrollo deuna extensa y compleja red social y económica quepermite el desarrollo de un sinnúmero de servicios enlos centros receptivos, a la vez que la dinamización delas economías en las comunidades expulsoras, no sóloa partir de la inversión en bienes públicos y colectivosfinanciados con las remesas que reportan los migrantessino a través de la mayor articulación entre los mercadosrural y urbano que, aunque normalmente se encuentrafuera del alcance de las regulaciones y normativasinstitucionales por estar inscrita en los circuitos«informales» de la economía, sin embargo, constituyeun terreno más que fértil para la creatividademprendedora de quienes tuvieron que abandonar suslugares de origen porque, justamente, no tenían nadaque perder.

4. OPORTUNIDADES

17 Ver en http://www.onuhabitat.org/

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328

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

4.4 COMERCIO Y AMBIENTE

Tal como se ha enunciado en el Capítulo I y en diversospuntos de este mismo Capítulo, el comerciointernacional sustenta, en buena parte, el crecimientode las economías de la región. Esta actividad es intensivaen el uso de los bienes y servicios prestados por losecosistemas. Históricamente, tanto gobiernos como elsector privado, consideraron el tema ambiental comouna amenaza: una posible pérdida de competitividad,por su impacto en los costos, y una barrera noarancelaria al libre comercio.

Actualmente, existe una apreciación más clara sobrelas oportunidades que se abren en la relación entrecomercio y ambiente. El cambio climático es un factorde cambio relevante en esta relación. Los mercados depaíses desarrollados están incorporando nuevascondiciones a las importaciones. Un ejemplo loconstituyen las prácticas incipientes de etiquetado enfunción de la huella de carbono. Adicionalmente,iniciativas globales como la Economía Verde (versección 1 de este capítulo), promovida por el Programade Naciones Unidas para el Medio Ambiente, apuntana un alineamiento de las prácticas productivas (incluidaslas comerciales) y la protección del medio ambiente ylos ecosistemas.

El liderazgo actual y creciente, en el comerciointernacional de países como China e India (por sobreEuropa y Norteamérica) podría contrarrestar lastendencias más exigentes y eventualmente relajar losrequerimientos ambientales.

Como sea, y tal como demuestra el Capítulo II, eldeterioro ambiental en América Latina y el Caribe sigueen aumento, a pesar de los esfuerzos de los gobiernos yla cooperación internacional. Revertir esta tendenciarequiere una mayor voluntad política, para asegurar unincremento en la asignación de recursos, y un mayorinvolucramiento del sector privado en la solución delos problemas ambientales.

Los gobiernos tienen la responsabilidad de crear losincentivos adecuados, así como los instrumentoseconómicos y voluntarios que posibiliten lascondiciones para una mejor gestión ambiental, y porotro lado, el sector privado debe consolidar una mejorgestión ambiental al interior de sus empresas paraasegurar los beneficios que ésta puede traer para sucompetitividad a nivel internacional. Todavía en muchosde los países de la región, la participación de estosactores es desigual o vista como antagónica; sinembargo, en la medida en que se fortalezca el diálogoentre estos actores sociales, las soluciones a los retos

del ambiente van a ser más sostenibles, más baratas ymás fáciles de implementar.

4.5 CIENCIA Y TECNOLOGÍA

En la gran mayoría de los países de la región se haceciencia cuando es necesaria para la adopción oadaptación de una determinada tecnología. Es decir,por lo general, el modelo de desarrollo científico seconstruye a partir de la demanda del desarrollotecnológico. En los países de la región, la pérdida de laimportancia relativa de la ciencia y los recursosasignados a ella frente al auge de la tecnología y susrecursos lleva irremediablemente a errores tanto en eluso de los recursos financieros como en la gestiónambiental.

Aún queda mucho camino por recorrer para tenerestrategias científicas nacionales – que se sustenten enel conocimiento científico del territorio y en elcomportamiento de sus ecosistemas – relevantes paraabordar los temas ambientales. Los principales desafíosde estrategias y políticas científicas para la sostenibilidadambiental de los países de América Latina y el Cariberadican en nuevas y más profundas investigacionessobre el patrimonio natural, en términos del plenoconocimiento de los atributos y comportamientos delos ecosistemas, para poder detectar qué nuevasposibilidades de desarrollo existen.

Paralelamente, es necesario investigar y educar sobrecomportamientos sociales alternativos, en función denuevas formas de uso de los recursos naturales quehagan más armónica la relación de la sociedad con suentorno físico. En particular, los desafíos ambientalesactuales –y sobre la sostenibilidad del desarrollo–determinan una agenda de investigación y capacitaciónque debería ser asumida si se quiere avanzar en estostemas. El desarrollo en mayor escala de energíasalternativas, o la implementación de centrales nuclearespara la generación eléctrica son solo algunos ejemplosde necesidades, que podrían contribuir a lasostenibilidad del desarrollo, que requieren esfuerzossignificativos y de largo aliento en términos deinvestigación, capacitación y desarrollo tecnológiconacional y regional.

Por otra parte, resulta fundamental potenciar lainvestigación local, lo que permitirá impulsar eldesarrollo local (subnacional) de cada país,reconociendo la identidad que le corresponde a cadalocalidad, en función de sus condiciones específicas.La estrategia científica de largo alcance debe ser la basede la creación de un modelo de generación, difusión y

4. OPORTUNIDADES

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V. POLÍTICAS

4. OPORTUNIDADES

adopción tecnológica. Eso significa estimular lainvestigación de los recursos naturales locales eincorporar el conocimiento vernáculo de cienciasempíricas de las culturas propias de la región.

Un desafío fundamental es el desarrollo regional deprogramas de investigación, sobre la base de laintegración académica e institucional. Los países de laregión no pueden darse el lujo de crear institucionescientíficas con escasos recursos, disgregadas, y sin teneruna adecuada integración, ya sea institucional o deredes. La única posibilidad de que se potencien los

recursos es que se investigue y concrete el uso y manejode ecosistemas compartidos, de recursos, culturas yproblemas fronterizos compartidos.

En materia tecnológica, se destacan las tecnologías dela información que deben sustentarse en infraestructurasde datos espaciales (las denominadas IDE, ver Recuadro5.23), e innovaciones en tecnologías de percepciónremota, especialmente para monitoreo climáticoregional, nacional, y local; las tecnologías energéticasy las empleadas para el manejo del agua y la agriculturaalternativa, y las tecnologías de producción más limpias.

RECUADRO 5.23

Infraestructuras de datos espaciales en América Latina y su potencialpapel en el desarrollo sostenible

Un tema específico altamente relacionado con los procesos de generación de conocimiento e información es el surgimientode las Infraestructuras de Datos Espaciales (IDEs) en la Región, en particular, en respuesta a determinados desastres naturalesque han tenido lugar en estos años. Ejemplo de ello, son el huracán Mitch que azotó Centroamérica en 1998 y quepotenció la creación de varios nodos (clearinghouse, agencias de distribución de datos espaciales) en países de Centroamérica(Proyecto Centroamericano de Información Geográfica, PROCIG). Otras experiencias más recientes, como los huracanescada vez más activos que tienen lugar en el Caribe, el terremoto de Perú en 2007 o la inundación de la Provincia de SantaFé en Argentina, han impulsado igualmente la creación de iniciativas de Infraestructuras de Datos Espaciales a nivelregional, nacional y local en América Latina y el Caribe con un claro enfoque de prevenir o mitigar el efecto de los eventosnaturales extremos, el hombre y los cambios globales.

El Índice de Alistamiento en IDEs mide el grado de preparación de un país para compartir su información geográfica a nivellocal, nacional, regional o global. Algunos países tienen un potencial importante para compartir información geográfica,en interés de prioridades nacionales y regionales y, en particular, en aras de apoyar procesos de toma de decisión para undesarrollo sostenible de la región, mientras que otros están trabajando por mejorar sus condiciones para ello.

Dicho potencial se expresa en un índicecompuesto que incluye factores organizativos(visión, liderazgo institucional, marco legal);informativos (disponibilidad de cartografía digitaly metadatos); tecnológicos (conectividad Web;infraestructura tecnológica, y capacidad ensoftware geoespacial libre o propietario); derecursos humanos (nivel educacional, cultura deIDE, liderazgo individual); de recursos financieros(fuentes gubernamentales, privadas o retorno dela inversión). La mayoría de los factores seobtienen mediante cuestionarios aplicados a lasautoridades de IDEs de los países evaluados;excepto los factores Conectividad Web,Infraestructura Tecnológica y Nivel Educacionalque son extraídos de una encuesta periódica deUNDESA para calcular un Índice de GobiernoElectrónico a nivel mundial. Se aplicó un modelode lógica difusa compensatoria para integrar losfactores debido a su naturaleza mayormentecualitativa. El Índice de Alistamiento en IDEs ofreceuna medida de la preparación de los países paradisponer de información geográfica oportuna paramodelar espacialmente el comportamiento delmedioambiente y su impacto.

Fuente: Adaptado de Delgado, T. y Delgado, M., 2008. PROCIG: http://www.procig.org/principal.htm

0,158

0,179

0,376

0,413

0,426

0,423

0,438

0,444

0,537

0,547

0,549

0,553

0,568

0,572

0,592

0,598

0,683

0,000 0,100 0,200 0,300 0,400 0,500 0,600 0,700

Grenada

Dominica

Trinidad &Tobago

Guyana

Barbados

Sta. Lucía

Ecuador

RepúblicaDominicana

Argentina

San Vicente

Cuba

Jamaica

Uruguay

Brasil

México

Chile

Colombia

Indice de Alistamiento en IDEs

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PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

5. REFLEXIONES FINALES

Para lograr una mayor sostenibilidad ambiental enAmérica Latina y el Caribe no alcanza con buscar uncrecimiento económico con preocupacionesambientales. La falta de armonía en las relacionessociedad-naturaleza es un reflejo de las interaccionessociales. La sustentabilidad ambiental es base yconsecuencia de una sociedad equitativa.

La expansión de las exportaciones continúa siendo laprincipal fuerza motriz de la degradación ambiental enla región. La dependencia del modelo de desarrolloexportador de materias primas y la carencia de modelosalternativos de desarrollo, han llevado al mantenimientode modelos científicos y tecnológicos que no incorporanla sostenibilidad ambiental.

El crecimiento poblacional y en el consumo, en unparticular contexto de persistente pobreza, indigenciay desigualdad, representan una fuerte presión sobre elambiente.

El principal reto de la región continúa siendo lareducción de la pobreza y la desigualdad. Esto hamantenido la dimensión ambiental en un segundo planopese al fuerte impacto de la degradación ambiental enla calidad de vida de los más vulnerables.

La solución de los retos de la región requiere de unnuevo pacto social. Es necesario lograr y mantener unbalance de fuerzas entre los distintos actores, mediantela participación equilibrada de los gobiernos, lasociedad civil y el sector privado. En este sentido, estosactores podrían beneficiarse de la desaceleracióneconómica global para reorientar sus planes de negociosy sus objetivos hacia un desarrollo sostenible, así comopara acelerar la transformación hacia una economíaverde y una prosperidad sostenible. En los sectores de

energía y transporte, para alcanzar una transición hacialos cambios radicales en los patrones de consumo yproducción que muchos expertos considerannecesarios, los esfuerzos de implementación debencomenzar ya mismo (PNUMA, 2010).

Pero sobre todo, será necesaria una posición mássolidaria para reducir la desigualdad y la pobreza, ygenerar un mejor reparto de los ingresos actualmenteprovenientes de la explotación de los recursos naturales,cimiento del presente crecimiento económico actual.Los cinco sectores18 en los que se concentra el NuevoAcuerdo Verde Global, podrían en conjunción con otrasmedidas socio-económicas, desempeñar un papelimportante en la revitalización de la economía regional,fortaleciendo empleos mientras se acelera la luchacontra el cambio climático, la degradación ambiental yla pobreza.

Los científicos advierten sobre la posibilidad cierta decruzar la «línea de no retorno» en términos de consumode los recursos del planeta. Esta advertencia hace quesea fundamental que todos los sectores de la sociedadcomprendan la importancia de este límite a fin deevaluar cuando retroceder para operar dentro de loslímites seguros. Hacerlo requerirá aprender del pasado,perfeccionar nuestras herramientas analíticas, desarrollarsoluciones sostenibles para los desafíos ambientales y,fundamentalmente, lograr un crecimiento económicomayor con un menor uso de recursos e impactosambientales (PNUMA, 2010).

5. REFLEXIONES

18 Los cinco sectores serán los que mayores rendimientos económicos,sustentabilidad ambiental y empleos – los “empleos verdes” – generen: energíaslimpias y tecnologías limpias, incluyendo el reciclaje; energía rural, incluyendorenovables; agricultura sustentable, incluida la orgánica; infraestructuraecosistémica (aguas dulces, bosques, suelos y arrecifes coralinos); reducciónde emisiones por deforestación y degradación ambiental (REDD); ciudadessustentables, incluyendo la planeación, transporte y edificios verdes.

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331

V. POLÍTICAS

6. REFERENCIAS

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6. REFERENCIAS

Page 335: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

333

V. POLÍTICAS

6. REFERENCIAS

Page 336: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

334

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Page 337: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

335

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO

Page 338: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

336

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Am

éric

a La

tina

y e

l C

arib

eNo

tasUn

idade

s19

9019

9519

9719

9819

9920

0020

0120

0220

0320

0420

0520

0620

0720

08TIE

RRA

Supe

rficie

Terre

stre

110

00 ha

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

2.027

.462,0

Tierra

s arab

les y

cultiv

os p

erman

entes

210

00 ha

150.0

44,0

160.6

67,0

161.4

10,0

162.0

75,5

162.6

69,6

162.6

60,7

164.1

56,9

164.0

19,0

164.4

06,0

166.7

55,0

166.9

12,0

167.1

23,6

168.1

31,0

Tierra

s arab

les d

e lab

ranza

310

00 ha

131.9

40,6

140.8

81,0

141.5

90,0

142.1

08,5

142.5

97,6

142.6

29,7

144.1

10,9

144.1

96,0

144.6

25,0

147.4

44,0

147.4

24,0

147.5

62,7

148.8

36,1

Tierra

s dest

inada

s a cu

ltivos

perm

anen

tes4

1000

ha18

.103,0

19.78

6,019

.816,0

19.96

7,020

.072,0

20.03

1,019

.687,3

19.23

4,119

.142,1

19.31

0,019

.487,0

19.56

0,919

.294,9

Tierra

s no

arable

s y n

o pe

rman

entes

510

00 ha

1.877

.418,0

1.866

.795,0

1.866

.052,0

1.865

.386,5

1.864

.792,4

1.864

.801,3

1.863

.305,1

1.863

.443,0

1.863

.056,0

1.860

.707,0

1.860

.550,0

1.860

.338,4

1.859

.331,0

Tierra

s de p

radera

s y p

astos

perm

anen

tes10

00 ha

540.7

98,0

551.9

83,0

553.4

60,0

554.4

58,0

555.3

31,3

555.0

36,5

549.9

66,8

549.9

77,0

549.2

36,5

550.2

26,5

550.5

41,8

549.9

72,8

550.1

30,0

Tierra

s arab

les y

cultiv

os p

erman

entes

por

habit

ante

6ha

/ 100

Hab

33,8

33,2

32,3

32,0

31,6

31,1

31,0

30,6

30,2

30,3

29,9

29,6

29,4

Supe

rficie

agrí

cola

710

00 ha

690.8

42,0

712.6

50,0

714.8

70,0

716.5

33,5

718.0

00,9

717.6

97,3

712.0

67,3

711.7

57,2

712.6

74,7

715.8

55,5

716.3

28,8

715.9

71,4

717.1

37,0

Irriga

ción

de la

supe

rficie

agríc

ola8

1000

ha16

.794,0

18.03

9,018

.282,0

18.43

1,018

.490,0

18.59

1,018

.611,0

2.016

,02.7

47,5

2.833

,26.1

76,4

6.362

,51.8

13,5

Cons

umo

de fe

rtiliza

ntes

9kt

12.70

6,015

.865,9

17.22

4,714

.768,5

15.33

6,821

.496,2

N

itroge

nado

s10

kt4.8

51,8

5.806

,85.8

74,5

5.418

,35.6

31,4

9.777

,6

Fos

fatad

os11

kt4.0

12,9

5.257

,95.8

59,9

4.750

,04.9

58,0

6.180

,1

Potá

sicos

12kt

3.841

,74.8

01,9

5.491

,34.6

00,8

4.748

,15.5

39,9

Cons

umo

de fe

rtiliza

ntes p

or he

ctárea

cultiv

ada

tn mé

tricas

/ ha

0,10,1

0,10,1

0,10,1

BOSQ

UES

Supe

rficie

forest

al, to

tal13

1000

ha99

2.822

,197

0.350

,096

1.361

,095

6.866

,595

2.372

,294

7.877

,694

3.134

,693

8.391

,293

3.648

,292

8.905

,092

4.162

,091

9.348

,891

4.605

,6

Plan

tacion

es14

1000

ha8.7

07,0

12.23

7,013

.138,0

B

osqu

e natu

ral15

1000

ha98

4.114

,093

5.639

,091

1.024

,0Pro

porci

ón d

e la s

uperf

icie c

ubier

ta po

r bos

ques

16%

48,5

46,8

46,5

46,3

46,1

45,8

45,6

45,3

45,1

Tasa

de va

riació

n an

ual d

e la s

uperf

icie f

oresta

l17

%-0,

5-0,

5Su

perfic

ie Fo

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Bajo

Plan

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Man

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F18

1000

ha36

.297,0

36.29

7,0(Ev

aluac

ión R

ecurs

os F

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les)

Propo

rción

de l

a sup

erfici

e fore

stal b

ajo p

lan ER

F19

%1,8

Produ

cción

de m

adera

en ro

llo20

1000

m3

356.5

10,4

396.8

39,5

396.9

36,1

399.2

10,1

418.3

85,5

424.9

89,1

412.6

92,5

420.9

97,6

449.9

96,7

446.2

68,8

463.8

03,4

447.5

70,5

462.1

12,2

P

roduc

ción d

e mad

era en

rollo

indu

strial

2110

00 m

312

1.229

,014

4.460

,414

0.951

,414

1.754

,415

6.028

,615

8.826

,614

5.513

,715

1.625

,317

8.614

,517

2.292

,818

6.944

,717

1.403

,618

2.914

,0Pro

ducc

ión d

e leñ

a y ca

rbón

2210

00 m

323

5.281

,425

2.379

,125

5.984

,725

7.455

,726

2.356

,926

6.162

,526

7.178

,826

9.372

,327

1.382

,328

9.976

,528

9.418

,628

7.791

,529

1.329

,6Pro

ducc

ión d

e tab

leros

de m

adera

2310

00 m

34.9

34,6

6.112

,27.9

15,2

7.407

,78.4

76,5

9.383

,29.9

40,2

10.61

5,012

.119,6

13.76

1,613

.726,2

14.83

7,415

.389,8

Produ

cción

de p

apel

y cart

ón24

1000

m3

10.82

8,512

.501,1

13.76

2,413

.624,2

13.83

7,414

.498,4

15.50

7,315

.771,9

16.60

1,217

.949,2

18.81

1,816

.513,7

16.63

6,4

BIOD

IVER

SIDAD

Área

s prot

egida

s, nú

mero

25No

.1.8

912.4

362.5

082.5

712.6

172.6

552.6

582.6

962.6

962.6

334.2

87Ár

eas p

roteg

idas,

área t

otal

2610

00 ha

146.9

99,9

192.3

70,2

208.1

33,7

211.8

02,0

212.0

91,2

215.7

36,1

216.4

51,5

216.5

23,0

216.5

23,0

215.8

81,1

Reser

va n

atural

estr

icta/Á

rea n

atural

silve

stre,

núme

ro27

No.

267

293

301

301

301

301

300

294

294

Reser

va n

atural

estric

ta/Ár

ea n

atural

silve

stre,

área t

otal

2810

00 ha

9.646

,710

.543,7

10.82

0,910

.820,9

10.82

0,910

.820,9

10.81

1,610

.811,6

10.81

1,69.3

86,3

Parqu

es na

ciona

les, n

úmero

29No

.47

956

456

357

057

357

457

556

656

6Pa

rques

nacio

nales

, área

tota

l30

1000

ha54

.148,4

66.66

4,167

.322,2

68.46

9,068

.558,4

68.55

8,468

.573,4

68.39

1,868

.391,8

Monu

mento

s natu

rales,

núm

ero31

No.

8713

312

712

812

912

913

013

013

0Mo

nume

ntos n

atural

es, ár

ea t

otal

3210

00 ha

3.596

,89.8

22,1

9.752

,89.7

34,2

9.735

,39.7

35,3

9.735

,89.7

35,8

9.735

,8Ár

ea d

e man

ejo d

e háb

itat/e

spec

ies, n

úmero

33No

.42

961

066

571

375

479

179

279

379

3Ár

ea d

e man

ejo d

e háb

itat/e

spec

ies, á

rea to

tal34

1000

ha12

.716,0

15.11

5,414

.957,2

15.14

9,715

.159,3

18.80

2,518

.811,9

18.76

3,018

.763,0

Paisa

je ter

restre

y ma

rino

proteg

ido, n

úmero

35No

.22

529

530

230

330

430

430

529

929

9Pa

isaje

terres

tre y

marin

o pro

tegido

, área

total

3610

00 ha

18.55

3,722

.037,5

22.50

5,222

.510,7

23.32

8,423

.328,4

23.32

9,022

.341,3

22.34

1,3Ár

ea p

roteg

ida co

n rec

ursos

man

ejado

s, nú

mero

37No

.40

654

355

355

955

955

955

955

755

7Ár

ea p

roteg

ida co

n rec

ursos

man

ejado

s, áre

a tota

l38

1000

ha50

.587,9

70.40

8,771

.535,9

72.21

8,272

.218,2

72.21

8,272

.218,2

72.19

7,472

.197,4

Núme

ro tot

al de

espe

cies a

mena

zada

s39

No.

4.373

4.543

5.910

8.157

8.543

9.204

Tasa

de va

riació

n an

ual d

el nú

mero

%1,9

30,1

38,0

2,33,8

total

de e

spec

ies a

mena

zada

sNú

mero

de e

spec

ies a

mena

zada

s, Ma

mífer

os40

No.

516

538

531

534

527

620

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, A

ves

41No

.66

266

967

182

079

279

6Nú

mero

de e

spec

ies am

enaz

adas,

Rep

tiles

42No

.28

128

228

229

838

338

0Nú

mero

de e

spec

ies am

enaz

adas,

Anfi

bios

43No

.35

311.2

541.2

801.3

46Nú

mero

de e

spec

ies am

enaz

adas,

Pec

es44

No.

148

167

660

920

1.040

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, M

olusco

s45

No.

5581

8181

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, In

verte

brado

s46

No.

155

102

101

120

511

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, P

lantas

47No

.2.5

952.6

994.4

094.4

404.4

30

Page 339: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

337

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

AGUA

DUL

CEPo

rcenta

je de

la p

oblac

ión co

n ac

ceso

al ag

ua p

otable

48%

82,8

86,1

89,2

88,3

91,0

Porce

ntaje

de la

pob

lación

con

acce

so49

%60

,465

,770

,0al

agua

pota

ble, r

ural

Porce

ntaje

de la

pob

lación

con

acce

so50

%92

,693

,995

,3al

agua

pota

ble, u

rbana

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so51

%67

,471

,775

,174

,177

,1a s

ervici

os d

e san

eami

ento

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so52

%35

,941

,346

,4a s

ervici

os d

e san

eami

ento,

rural

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so a

53%

80,7

82,8

84,7

servic

ios d

e san

eami

ento,

urba

naPro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a de a

gua d

ulce

54kt

481,4

605,8

634,8

639,0

681,2

722,5

742,2

802,1

831,3

881,6

879,9

903,7

Produ

cción

de p

esca d

e agu

a dulc

e, ca

ptura

55kt

432,1

507,5

461,0

452,4

455,0

471,5

476,5

496,0

513,6

544,4

530,1

542,2

Produ

cción

de p

esca d

e agu

a dulc

e, ac

uicult

ura56

kt49

,398

,417

3,818

6,622

6,225

1,026

5,730

6,131

7,733

7,234

9,836

1,6Pro

porci

ón d

el tot

al de

recu

rsos h

ídrico

s utili

zada

57%

2,52,1

5,0Ex

tracc

ión d

e agu

a, tot

al58

1.000

Km3

22.17

4,012

0.997

,026

5.030

,016

,626

,6Ex

tracc

ión d

e agu

a por

habit

ante

59m3 /

Hab

50,0

250,4

507,3

0,00,0

Extra

cción

de a

gua e

n ag

ricult

ura60

%86

,069

,770

,7Ex

tracc

ión d

e agu

a en

el sec

tor in

dustr

ial61

%6,9

11,5

10,4

Extra

cción

de a

gua e

n el

sector

dom

éstico

62%

7,118

,819

,1

ÁREA

S COS

TERA

S Y M

ARIN

ASPro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na63

kt15

.265,6

20.66

5,218

.483,0

11.72

0,717

.462,2

19.08

4,616

.213,7

17.36

0,213

.903,0

18.54

3,517

.848,1

15.63

3,4Pro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na, c

aptur

a64

kt15

.139,1

20.48

9,418

.221,0

11.47

9,617

.388,7

18.99

7,116

.141,7

17.27

0,913

.781,7

18.42

6,917

.657,8

15.41

6,6Pro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na, a

cuicu

ltura

65kt

126,5

175,7

262,0

241,2

73,5

87,5

72,0

89,3

121,3

116,6

190,3

216,8

Área

s mari

nas p

roteg

idas

6610

00 ha

27.73

5,833

.784,9

34.04

3,434

.182,6

34.65

3,736

.131,1

36.13

9,836

.230,1

36.23

0,136

.667,4

37.80

8,937

.808,9

Área

total

de m

angla

r67

1000

ha4.4

25,5

4.147

,64.0

45,6

ATMÓ

SFER

AEm

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

)68

kt30

3.861

,034

2.861

,037

0.355

,037

9.441

,038

1.667

,037

8.101

,038

3.080

,036

9.499

,037

2.919

,039

0.009

,0Em

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

) per

cápit

a69

tn / H

ab0,7

0,70,7

0,70,7

0,70,7

0,70,7

0,7Em

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

) por

70tn

/ Mill

US$

103,6

99,1

98,5

98,7

99,1

94,3

94,9

91,4

90,4

89,2

dólar

PPA

del P

IB20

00 PP

APo

r com

busti

bles f

ósile

s gase

osos

72kt

52.23

0,056

.364,0

65.41

6,072

.846,0

74.60

3,072

.456,0

76.19

4,078

.101,0

82.72

5,088

.889,0

Por c

ombu

stible

s fós

iles l

íquido

s73

kt21

1.138

,023

9.733

,025

1.354

,025

3.889

,025

4.854

,025

0.060

,025

4.917

,024

0.972

,023

8.583

,024

8.728

,0Po

r com

busti

bles f

ósile

s sóli

dos

74kt

22.57

9,027

.030,0

30.22

7,030

.644,0

30.41

3,030

.765,0

29.12

4,028

.271,0

30.05

9,030

.291,0

Emisi

ones

de p

artícu

las (p

ar)75

kt18

2,517

4,119

5,520

1,920

0,620

3,419

9,219

0,119

4,423

5,8Em

ision

es de

dióx

ido d

e azu

fre (S

O2)

76kt

4.169

,14.0

19,1

3.868

,34.0

84,4

4.260

,24.4

21,9

Emisi

ones

de ó

xidos

de n

itróge

no (N

Ox)

77kt

7.954

,87.9

22,8

8.439

,68.9

43,2

9.893

,110

.004,0

Emisi

ones

de h

idroc

arburo

s (HC

)78

kt2.1

01,1

1.123

,73.2

97,1

2.843

,71.4

61,3

1.440

,9Em

ision

es de

mon

óxido

de c

arbon

o (C

O)79

kt27

.160,4

23.44

0,325

.925,6

26.42

1,925

.303,8

29.47

2,5Em

ision

es de

meta

no, t

otal

80kt

92.11

5,986

9,992

8,683

.319,6

81.85

9,879

.776,4

201,9

Por e

nergí

a81

kt35

.525,4

392,4

410,8

43.49

9,542

.660,6

40.75

2,00,7

Por a

gricu

ltura

82kt

52.98

7,534

4,036

4,838

.976,4

38.50

0,138

.843,3

138,3

Por o

tras f

uente

s83

kt3.3

11,3

131,4

153,0

534,3

373,9

181,2

62,9

Cons

umo

de su

stanc

ias q

ue ag

otan

la84

tn PA

O33

.278,0

37.57

8,233

.228,8

30.36

6,731

.297,7

29.43

7,225

.726,3

17.84

6,117

.876,3

19.46

0,114

.290,9

11.58

2,67.2

17,8

capa

de o

zono

, tota

lCo

nsum

o de

susta

ncias

que

agota

n la

85tn

PAO

32.64

6,932

.847,9

28.15

4,824

.860,9

26.26

1,922

.389,4

18.96

3,312

.709,9

12.76

4,913

.551,4

8.611

,36.3

18,8

890,7

capa

de o

zono

, Clor

ofluo

rocarb

onos

CFC

sCo

nsum

o de

susta

ncias

que

agota

n la

capa

de o

zono

,86

tn PA

O42

9,61.0

34,6

1.172

,41.2

96,8

1.978

,63.2

10,2

2.568

,41.9

25,7

1.986

,92.9

43,0

2.777

,73.0

44,6

4.052

,4Hi

droclo

rofluo

rocarb

onos

HCF

CsCo

nsum

o de

susta

ncias

que

agota

n la

capa

de o

zono

,87

tn PA

O20

1,53.6

95,7

3.901

,64.2

09,0

3.057

,23.8

37,6

4.194

,63.2

10,5

3.124

,52.9

65,7

2.901

,92.2

19,2

2.274

,7Br

omuro

de m

etilo

ASEN

TAMI

ENTO

HUM

ANO

Dens

idad

de p

oblac

ión88

Hab/K

m21

,623

,524

,324

,725

,125

,425

,826

,126

,526

,827

,127

,527

,928

,2Po

blació

n urb

ana

8910

0031

1.165

,035

2.028

,039

4.378

,043

2.624

,0

Page 340: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

338

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Porce

ntaje

de la

pob

lación

que

vive

en la

s zon

as urb

anas

90%

70,2

72,8

75,5

77,6

Tasa

de cr

ecim

iento

anua

l de l

a pob

lación

urba

na91

%5,5

2,52,3

1,9Po

blació

n rur

al10

0013

2.389

,013

1.240

,012

8.086

,012

5.129

,0Po

rcenta

je de

la p

oblac

ión q

ue vi

ve en

las z

onas

rurale

s%

29,8

27,2

24,5

22,4

Tasa

de cr

ecim

iento

anua

l de l

a pob

lación

rural

%0,1

-0,2

-0,5

-0,5

Núme

ro de

ciud

ades

con m

ás de

750.0

00 ha

b. o m

ás.92

No.

6870

7070

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

con

93%

25,8

26,8

27,6

28,5

más d

e 750

mil h

ab. o

más.

Núme

ro de

ciud

ades

que t

ienen

entre

500

.000

94No

.44

5155

61y 1

milló

n de h

ab.

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

que t

ienen

95%

9,910

,510

,110

,6en

tre 50

0 mil y

1 mi

llón d

e hab

.Nú

mero

de ci

udad

es qu

e tien

en en

tre 1

96No

.34

3742

44y 5

millo

nes d

e hab

.Po

rcenta

je po

blació

n qu

e vive

en ci

udad

es qu

e tien

en97

%21

,821

,421

,821

,8en

tre 1

y 5 m

illone

s de h

ab.

Núme

ro de

ciud

ades

que t

ienen

entre

598

No.

22

34

y 10 m

illone

s de h

ab.

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

que t

ienen

99%

5,23,6

5,06,3

entre

5 y 1

0 millo

nes d

e hab

.Nú

mero

de ci

udad

es co

n 10 m

illone

s de h

ab. o

más.

100

No.

34

44

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

con

101

%13

,616

,015

,314

,8má

s de 1

0 millo

nes d

e hab

.Pro

porci

ón d

e la p

oblac

ión u

rbana

que

vive

en tu

gurio

s10

2%

35,6

31,2

Long

itud

de c

arrete

ras10

3Km

3.234

.783,0

3.234

.783,0

DESA

STRE

S Y

VULN

ERAB

ILIDA

DNú

mero

de e

vento

s Natu

rales

y tec

nológ

icos,

total

108

No.

7188

6482

8911

195

113

7910

810

774

106

7Inu

ndac

iones

109

No.

2222

2019

1937

2938

3326

2731

376

Torm

entas

, hura

cane

s, cic

lones

y torn

ados

110

No.

1127

920

179

2320

627

355

250

Terre

motos

111

No.

59

53

73

61

55

41

90

Desli

zami

entos

y a

valan

chas

112

No.

14

26

46

35

43

22

20

Temp

eratur

as ex

trema

s11

3No

.2

32

11

73

32

70

35

0Eru

pcion

es vo

lcánic

as11

4No

.1

23

34

21

41

02

61

1Se

quías

115

No.

21

35

16

55

15

41

11

Desas

tres t

ecno

lógico

s11

6No

.27

2020

2536

4125

3727

3533

2526

Pérdi

das e

conó

mica

s por

desas

tres n

atural

es11

7Mi

ll $21

.295,7

65.84

9,487

2,936

.924,8

6.815

,21.0

51,8

9.455

,451

.588,9

1.429

,29.0

89,7

23.78

7,736

7,57.7

24,1

545,0

extre

mos y

tecn

ológic

osInu

ndac

iones

118

Mill $

146,2

14,5

257,1

1.996

,73.6

16,8

331,3

1.070

,944

2,11.0

92,9

308,0

558,1

214,8

3.380

,054

5,0To

rmen

tas, h

uraca

nes,

ciclon

es y t

ornad

os11

9Mi

ll $90

,75.7

01,4

447,8

12.52

6,182

7,527

9,51.1

88,6

925,8

100,0

8.778

,611

.574,5

2,72.2

44,1

0,0Te

rremo

tos12

0Mi

ll $20

,522

,815

4,00,0

2.249

,00,0

2.148

,60,0

116,3

0,05,1

0,02.1

00,0

0,0De

sliza

mien

tos y

ava

lanch

as12

1Mi

ll $0,0

0,00,0

0,00,0

75,0

0,011

,00,0

0,00,0

0,00,0

0,0Te

mpera

turas

extre

mas

122

Mill $

2,310

,04,0

0,00,0

10,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

Erupc

iones

volcá

nicas

123

Mill $

0,00,7

8,00,0

0,00,0

11,0

0,00,0

0,00,0

150,0

0,00,0

Sequ

ías12

4Mi

ll $36

,010

0,02,0

402,0

122,0

356,0

36,4

210,0

120,0

3,11.6

50,0

0,00,0

0,0De

sastre

s tec

nológ

icos

125

Mill $

21.00

0,060

.000,0

0,022

.000,0

0,00,0

5.000

,050

.000,0

0,00,0

10.00

0,00,0

0,0Nú

mero

de p

erson

as afe

ctada

s por

desas

tes12

6No

.2.6

70.37

053

9.038

2.871

.686

15.53

0.553

2.893

.383

550.2

0810

.497.2

091.5

75.27

33.2

12.58

23.9

27.96

16.9

43.63

71.1

28.86

97.8

19.52

95

natur

ales y

tecn

ológic

osInu

ndac

iones

127

No.

169.4

1128

5.035

1.082

.621

369.3

001.3

82.22

948

6.707

621.7

3056

5.474

597.8

8259

2.115

756.3

8157

0.823

4.588

.530

Torm

entas

, hura

cane

s, cic

lones

y torn

ados

128

No.

3.500

223.5

0380

0.200

4.239

.723

265.0

0162

.570

6.037

.820

799.3

0010

.100

998.7

526.1

06.00

224

0.700

839.0

34Te

rremo

tos12

9No

.14

.299

053

.115

01.2

05.93

30

1.940

.528

017

8.603

253

27.64

516

.470

505.2

11De

sliza

mien

tos y

ava

lanch

as13

0No

.0

00

00

00

00

1.200

00

0Te

mpera

turas

extre

mas

131

No.

025

.000

00

00

00

1.839

.888

2.139

.467

00

884.5

72Eru

pcion

es vo

lcánic

as13

2No

.0

5.000

4.200

00

00

128.1

500

00

300.2

130

Sequ

ías13

3No

.2.4

83.16

00

931.2

0010

.920.0

0040

.000

01.8

96.59

682

.000

35.00

019

2.500

52.99

00

1.000

.000

Desas

tres t

ecno

lógico

s13

4No

.50

035

01.5

3022

093

153

534

955

1.109

3.674

619

663

2.182

5Pro

porci

ón d

e la p

oblac

ión en

situa

ción

de p

obrez

a%

47,0

54,2

51,2

46,0

43,9

39,8

41,2

45,9

41,1

41,6

38,8

33,7

Page 341: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

339

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Propo

rción

de l

a pob

lación

ocu

pada

con

ingres

os13

5%

12,8

8,19,8

8,48,1

5,9inf

eriore

s a $1

por d

ía seg

ún la

PPA

Coefi

ciente

de l

a brec

ha p

obrez

a13

6%

20,4

24,0

20,8

18,7

19,2

15,2

18,4

19,7

17,5

18,5

16,4

12,3

Tasa

de d

esemp

leo d

e jóv

enes

como

porc

entaj

e de

137

%6,1

7,08,3

9,19,6

6,88,7

8,59,4

9,06,3

la po

blació

n de

jóve

nes,

ambo

s sex

os

MEDI

O AM

BIENT

E Y SA

LUD

HUMA

NATa

sa bru

ta de

mort

alida

d inf

antil

138

* 100

0 Hab

45,2

36,8

30,4

24,3

Espera

nza d

e vida

feme

nina

139

Años

70,7

72,5

74,1

75,5

Espera

nza d

e vida

masc

ulina

140

Años

64,3

66,0

67,7

69,1

Ofert

a ca

lórica

141

Kcal/

día *

Hab

2.682

,72.7

80,3

2.806

,62.8

19,8

2.847

,62.8

45,0

2.853

,12.8

60,5

2.890

,12.9

60,5

2.775

,5Ca

sos r

eport

ados

de D

engu

e14

2No

.0

328.5

5641

0.233

729.4

2047

6.346

395.6

2463

6.617

1.000

.642

462.6

1626

8.598

429.2

1356

2.263

902.2

1687

2.603

Caso

s rep

ortad

os d

e Mala

ria14

4No

.0

00

1.287

.918

1.229

.495

1.146

.042

953.9

4289

7.777

942.8

7788

3.102

1.046

.955

916.4

650

Caso

s rep

ortad

os d

e Cóle

ra14

5No

.0

75.66

517

.919

57.29

49.6

742.6

9452

517

2528

50

00

TEND

ENCI

AS S

OCIO

ECON

ÓMIC

ASPo

blació

n tota

l a m

itad d

e año

146

1000

443.5

59,0

522.4

58,0

529.7

50,0

536.8

12,0

543.7

56,0

550.6

96,0

557.7

47,0

564.9

64,0

572.2

61,0

579.5

71,0

Tasa

de cr

ecim

iento

prome

dio an

ual d

e la p

oblac

ión14

7%

2,01,6

1,41,3

1,31,3

1,31,3

1,31,3

Tasa

de al

fabeti

zació

n de

adult

os, t

otal

148

%88

,079

,988

,092

,089

,789

,791

,489

,991

,6

Ho

mbres

149

%90

,474

,188

,792

,991

,492

,489

,492

,392

,4

Mu

jeres

150

%85

,885

,987

,491

,388

,290

,385

,988

,290

,9Esp

eranz

a de v

ida es

colar

151

años

13,1

13,2

13,4

13,4

13,2

13,0

13,1

13,2

13,3

12,9

Homb

res15

2añ

os12

,913

,013

,213

,212

,912

,812

,812

,912

,912

,8

Mu

jeres

153

años

13,3

13,4

13,6

13,6

13,4

13,3

13,4

13,6

13,7

13,2

Línea

s de t

eléfon

o fijo

154

* 100

Hab

11,2

15,7

17,9

19,2

20,5

22,3

23,3

19,6

19,3

20,5

20,7

18,6

18,7

Abon

ados

a tel

éfono

s celu

lares

155

* 100

Hab

0,10,9

2,74,3

8,012

,216

,119

,123

,532

,043

,458

,1Us

uario

s de i

nterne

t15

6* 1

00 H

ab0,1

0,61,2

2,03,9

5,78,3

9,911

,715

,214

,8Di

mens

ión d

el pa

rque a

utomo

torNo

.34

.385.0

42,0

45.97

4.728

,050

.320.7

97,0

55.38

8.686

,058

.243.2

17,0

57.44

4.963

,063

.334.0

86,0

68.19

6.900

,072

.253.0

56,0

77.05

1.262

,081

.211.1

11,0

96.14

9.429

,095

.830.4

57,0

104.5

16.13

2,0Us

o de

energ

ía po

r hab

itante

157

kt de

petr

óleo

1.036

,31.0

37,9

1.053

,21.0

37,8

1.078

,81.0

74,0

1.107

,41.1

28,2

1.153

,71.1

51,0

1.150

,61.1

36,6

1.132

,71.1

33,2

equiv

alente

Impo

rtacio

nes n

etas d

e ene

rgía (

% de

energ

ía de

uso

158

%-34

,0-38

,0-43

,6-41

,6-37

,7-40

,0-41

,2-39

,5-39

,8-40

,9de

ene

rgía

come

rcial)

Inten

sidad

energ

ética

del

produ

cto in

terno

brut

o15

91.0

00 b

arrile

s /2,2

2,22,2

2,22,2

2,12,1

2,22,0

2,12,1

2,12,0

2,0mi

llón

de d

ólares

cons

tantes

de P

IBOf

erta

energ

ética

reno

vable

160

kBEP

835.4

03,7

899.6

13,4

923.5

61,2

908.3

82,0

950.1

58,4

942.4

47,2

944.1

00,7

981.9

30,8

1.063

.437,9

1.094

.688,1

1.138

.868,9

1.173

.336,1

1.233

.675,7

1.298

.621,3

Ofert

a en

ergéti

ca n

o ren

ovab

lekB

EP2.5

04.62

7,92.8

66.22

8,73.2

99.80

4,53.4

23.72

5,23.5

00.29

3,83.4

94.86

4,33.4

48.93

8,63.4

98.76

3,03.6

09.38

7,13.7

20.15

4,73.9

06.79

6,83.9

94.11

9,84.1

16.83

8,04.2

30.20

9,0Po

rcenta

je de

energ

ía co

nsum

ida d

e fue

ntes r

enov

ables

161

%20

,316

,915

,614

,714

,414

,214

,114

,113

,813

,1co

n res

pecto

al to

tal d

e ene

rgía c

onsu

mida

Produ

cción

total

de e

nergí

a prim

aria p

or ha

bitan

te16

2TJ

/ Hab

61,4

64,7

68,1

71,5

69,8

70,4

69,9

69,3

69,2

73,3

72,9

76,4

Produ

cción

total

de e

nergí

a geo

térmi

ca16

3Tjo

ul84

.948,2

72.75

2,987

.275,8

96.52

2,397

.418,4

152.5

91,8

140.8

73,3

131.4

95,9

166.0

22,7

181.4

40,2

172.4

29,2

Produ

ción

total

de h

idroe

nergí

a16

4Tjo

ul2.1

42.56

0,82.1

78.08

9,62.2

54.09

0,72.1

17.61

2,02.2

25.92

1,82.4

00.12

4,22.5

33.85

3,52.7

47.91

3,02.7

95.91

6,02.8

57.46

3,9Pro

ducc

ión to

tal d

e ene

rgía p

or pro

ducto

s de c

aña

165

kbep

314.7

05,0

256.9

16,0

219.4

10,0

241.8

00,0

258.4

27,0

279.6

94,0

282.7

59,0

297.7

72,0

325.7

99,0

362.0

28,0

389.0

01,0

Produ

cción

total

de c

arbón

mine

ral16

6To

nelad

as55

,463

,568

,062

,867

,774

,982

,190

,295

,297

,7Mé

trica

sPro

ducc

ión to

tal d

e gas

natur

al16

7Mm

313

9.748

,018

0.304

,518

0.071

,917

8.433

,719

1.024

,420

2.691

,922

0.200

,924

4.042

,125

8.913

,625

7.729

,826

8.671

,0Pro

ducc

ión to

tal d

e leñ

a16

8kb

ep38

5.200

,039

5.368

,040

4.356

,041

6.833

,7Pro

ducc

ión to

tal d

e petr

óleo

169

1.000

barr

iles

2.980

.457,0

3.398

.729,0

3.488

.504,0

3.515

.996,0

3.490

.021,0

3.435

.399,0

3.602

.711,0

3.786

.846,0

3.768

.542,0

3.620

.458,0

3.601

.786,0

por d

íaPro

ducc

ión d

e ele

ctrici

dad

170

Gwh

609.4

73,0

769.8

32,0

865.0

43,0

891.6

79,0

914.0

01,0

962.2

43,0

951.9

66,0

978.8

41,0

1.021

.433,0

1.072

.211,0

1.117

.193,0

1.173

.990,0

1.223

.133,0

1.247

.569,0

Por f

uente

s de c

arbón

171

% de

l total

3,84,1

4,84,8

5,14,7

4,84,9

5,44,8

5,4Po

r fue

ntes d

e hidr

oene

rgía

172

% de

l total

63,4

63,8

61,9

60,9

60,1

60,0

56,5

57,1

56,4

56,2

57,2

Por f

uente

s de g

as17

3%

del to

tal9,7

10,6

10,9

11,9

12,6

13,7

15,8

17,1

18,5

19,5

18,5

Por f

uente

s nuc

leares

174

% de

l total

2,02,3

2,52,2

2,32,1

3,13,0

3,02,6

2,4Po

r fue

ntes d

e petr

óleo

175

% de

l total

18,9

17,1

17,8

18,1

17,7

17,4

17,5

15,6

13,8

14,1

13,6

Ingres

o Na

ciona

l Brut

o po

r hab

itante

(méto

do A

tlas)

176

$78

.680,0

105.9

10,0

119.6

00,0

121.4

80,0

122.9

20,0

128.2

00,0

127.6

70,0

113.6

70,0

93.44

0,010

3.350

,011

4.700

,010

4.400

,0

Page 342: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

340

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Notas

:

1In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es en

el p

erío

do d

e 199

0 al

2007

2No

se in

cluye

Ang

uila

por c

arec

er d

e inf

orma

ción

para

los a

ños d

e 199

0 al

2007

3Se

exclu

ye p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n An

guila

(199

0-20

07)

4Se

exclu

yen p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n los

sigu

ientes

paíse

s: An

guila

(199

0-20

07),

Antil

lasNe

erlan

desa

s (19

90-2

007)

, Aru

ba (1

990-

2007

), Isla

s Caim

án (1

990-

2007

), Mon

tserra

t (199

0-20

07) y

Turca

s y C

aicos

(199

0-20

07)

5Se

exclu

ye p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n A

ngui

la (1

990-

2007

)

6Se

exclu

yen p

or ca

recer

de in

forma

ción l

os si

guien

tes pa

íses:

Angu

ila (1

990-

2007

), Gua

dalup

e(1

990-

2007

), Isl

as C

aimán

(199

0-20

07),

Mar

tinica

(199

0-20

07) y

Guy

ana (

1990

-200

7)

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1990

-200

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1990

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0-20

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es (E

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0-20

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slas V

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990-

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990-

2007

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0-20

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2007

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, 200

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y 20

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990,

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), Isl

as C

aimán

(199

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y 20

05),

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enes

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990,

2000

y 20

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, 200

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), Tur

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0, 1

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0 y 2

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1990

, 199

5, 2

000

y 200

5), B

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1990

, 199

5, 2

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y 200

5), D

omin

ica (1

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y 20

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Gran

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, 200

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, Gua

dalu

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200

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es (E

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), Isl

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y 20

05), M

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05), P

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1995

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las N

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- 200

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s (19

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0-20

07),

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án(1

990

y 200

0-20

07),

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enes

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y 200

0-20

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Turca

s y C

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y 200

7)

17Se

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2008

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2000

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0 y 20

08),

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2008

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2008

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08),

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0 y

2008

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0 y

2008

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08),

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2000

y 20

08),

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2000

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08) y

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y 200

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, Sur

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0-20

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07),

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0-20

07),

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2007

), M

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2007

), Pu

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07),

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), Tri

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2007

), Bo

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0), B

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0), E

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or (2

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, Guy

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Fran

cesa

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0), G

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000)

, Par

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00),

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0), S

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21In

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Cuba

(199

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alupe

(199

0-20

07),

Haití

(199

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Jamaic

a (1

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2007

), M

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2007

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2007

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0-20

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1990

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7), H

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2007

), Jam

aica

(199

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07),

Mar

tinica

(199

0-20

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2007

), Re

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2007

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2007

), M

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990-

2007

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2007

), Mar

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0-20

07), R

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0-20

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0-20

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990-

2007

), Pa

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(199

0-20

07),

Arge

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a (19

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, Bol

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1990

-200

7), B

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0-20

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Chile

(199

0-20

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olom

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1990

-200

7), E

cuad

or (1

990-

2007

), Guy

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ranc

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1990

-200

7), G

uyan

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990-

2007

), Pa

ragu

ay (1

990-

2007

), Pe

rú (1

990-

2007

), Ur

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y (1

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2007

) y V

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(199

0-20

07)

25Se

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por

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Angu

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Aru

ba p

or c

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e in

form

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0 al

2004

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2003

), Gu

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2003

), Ho

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990-

2003

), M

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990-

2003

), Ni

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(199

0-20

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, Bra

sil (1

990-

2003

), Co

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2003

), Ec

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r (19

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995-

2003

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28Inc

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Islas

Caim

án (1

990-

2003

), Rep

úblic

a Dom

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995),

Trini

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y To

bago

(199

0-20

04),

Belic

e (1

990-

2004

), Co

sta R

ica (1

990-

2004

), Gu

atema

la(1

990-

2004

), Ho

ndur

as (1

990-

2004

), M

éxic

o (1

990-

2004

), Ni

cara

gua

(199

0-20

04),

Arge

ntin

a (19

90-2

004)

, Bra

sil (1

990-

2004

), Co

lomb

ia (1

990-

2004

), Ec

uado

r (19

90-2

004)

yGu

yana

Fra

nces

a (1

990-

2004

)

29,3

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0-20

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0-20

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Gran

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(199

0-20

03),

Jamaic

a (1

990-

2003

), M

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990-

2003

), Pu

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Rico

(199

0-20

03),

Repú

blic

a Do

min

ican

a (1

991-

2003

), Sa

nta

Lucí

a (1

990-

2003

), Sa

nVi

cent

e\Gr

anad

ina

(199

0-20

03),

Guya

na F

ranc

esa

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0-20

03) y

Uru

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(199

0-20

03)

31,3

2Se

exclu

yen p

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n los

paíse

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guila

(199

0-20

03), A

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990-

2003

), Ant

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0-20

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0-20

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2003

),Cu

ba (1

990-

2003

), Do

mini

ca (1

990-

2003

), Gr

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a (19

90-2

003)

, Gua

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pe (1

990-

2003

),Ha

ití (1

990-

2003

), Isl

as C

aimán

(199

0-20

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Mar

tinica

(199

0-20

03),

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2003

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Dom

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6-20

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0-20

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03), B

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03), G

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0-20

03), G

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a (19

90-

2003

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rinam

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90-2

003)

33,3

4Se

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yen p

or ca

rece

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nfor

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n los

sigu

ientes

paíse

s: An

guila

(199

6-20

03), A

ntigu

ay

Barb

uda

(199

6-20

03),

Antil

las N

eerla

ndes

as (1

996-

2003

), Ar

uba

(199

6-20

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Gran

ada

(199

6-20

03), H

aití (1

996-

2003

), Jam

aica (

1996

-200

3), R

epúb

lica D

omin

icana

(199

6-20

03),

San C

ristó

bal y

Nev

is (1

996-

2003

), El S

alvad

or (1

990-

1994

), Ecu

ador

(199

0-20

03), G

uyan

aFr

ance

sa (1

990-

2003

) y P

erú

(199

0-20

03)

35,3

6In

cluye

infor

mació

n para

los p

aíses

: Cub

a (19

90-2

001),

Gua

dalup

e (19

90-2

003),

Hait

í (199

0-20

03),

Jamaic

a (1

999-

2003

), M

artin

ica (1

990-

2003

), M

ontse

rrat (

1990

-200

3),

Repú

blica

Domi

nica

na (1

990-

1995

), Tri

nida

d y

Toba

go (1

990-

2003

), Be

lice

(199

6-20

03),

Guate

mala

(199

0-20

03),

Hond

uras

(199

4-20

04),

Méx

ico (1

990-

2003

), Pa

namá

(199

0-20

03),

Arge

ntin

a(1

990-

2003

), Br

asil

(199

0-20

03),

Colo

mbia

(199

0-20

03),

Ecua

dor (

1990

-200

3), G

uyan

aFr

ance

sa (1

990-

2003

), Pe

rú (1

990-

2003

), Ur

ugua

y (19

90-2

003)

y Ve

nezu

ela (1

990-

2003

)

37,3

8Se

inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

par

a lo

s sigu

ientes

país

es:

Cuba

(199

0-20

01),

Domi

nica (

1990

-200

3), G

ranad

a (19

90-2

003),

Jama

ica (1

999-

2003

), Mon

tserra

t (199

0-20

03),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

995)

, San

ta Lu

cía (1

990-

2003

), Tri

nida

d y

Toba

go (1

990-

2003

),Be

lice (

1990

-200

3), C

osta

Rica

(199

0-20

03), G

uatem

ala (1

990-

2003

), Méx

ico (1

990-

2003

),Ni

cara

gua (

1991

-200

3), P

anam

á (19

90-2

003)

, Arge

ntin

a (19

90-2

003)

, Bol

ivia (

1990

-200

3),

Bras

il (1

990-

2003

), Co

lom

bia

(199

0-20

03),

Ecua

dor (

1990

-200

3), P

erú

(199

0-20

03),

Surin

ame (

1990

-200

3) y

Ven

ezue

la (1

990-

2003

)

ANEXO ESTADÍSTICO: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Produ

cto In

terno

Brut

o, cre

cimien

to an

ual

177

%0,4

5,32,5

0,43,9

0,4-0,

42,2

5,94,7

5,55,5

A

gricu

ltura,

valor

agreg

ado

178

% de

l PIB

5,75,4

5,25,2

5,35,2

5,45,6

5,75,5

5,45,3

5,2

Ind

ustria

, valo

r agre

gado

179

% de

l PIB

28,5

27,5

28,2

28,0

27,5

27,4

26,9

26,5

26,5

26,8

26,6

26,6

26,3

S

ervici

os, v

alor a

grega

do18

0%

del P

IB60

,859

,959

,459

,760

,360

,460

,861

,561

,561

,361

,661

,762

,0Ex

porta

cione

s de b

ienes

y serv

icios

181

% de

l PIB

21,6

26,2

26,2

25,7

26,6

28,3

26,6

27,6

28,5

30,2

30,7

Impo

rtacio

nes d

e bien

es y s

ervici

os18

2%

del P

IB18

,726

,928

,529

,829

,029

,828

,725

,626

,328

,228

,4Re

lación

entre

el se

rvicio

de l

a deu

da ex

terna

183

% de

l PIB

6,06,7

8,26,5

7,48,7

7,07,1

8,47,7

6,2y e

l prod

ucto

nacio

nal b

ruto

Gasto

púb

lico

en ed

ucac

ión18

4%

del P

IB4,2

4,44,5

4,54,9

4,55,2

4,0Ga

sto en

inve

stiga

ción

y desa

rrollo

% de

l PIB

0,50,6

0,40,4

0,40,5

0,60,6

0,1Mé

dicos

187

No.

237.7

6134

1.271

354.5

6047

3.777

793.9

1333

3.274

441.5

0282

6.736

326.6

2648

6.164

961.2

1241

5.170

454.3

22

Page 343: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

341

ANEXO ESTADÍSTICO39

,40,

41,4

2,43

,44:

Inc

luye

la in

form

ació

n de

todo

s los

país

es p

ara

los a

ños:

2000

, 200

2-20

04,

2006

y 20

08

45In

cluye

la in

form

ació

n de

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 2

002,

200

4,20

06 y

2008

46,4

7In

cluye

la in

form

ació

n de

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 2

000,

200

2, 2

004,

200

6 y 2

008

48Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

los p

aíses

: Ant

illas

Nee

rland

esas

(199

0, 2

002

y 200

4),

Arub

a (19

90), C

uba (

1990

), Gra

nada

(199

0), G

uada

lupe

(199

0), Is

las C

aimán

(199

0, 20

02 y

2004

), Isla

s Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s ) (1

990,

2002

y 20

04), I

slas V

írgen

es B

ritán

icas (

1990

),Jam

aica (

1990

); Mart

inica

(199

0, 20

02 y

2004

), Pue

rto Ri

co (1

990,

2002

y 20

04), S

an Vi

cente

/Gr

anad

inas

(199

0, 2

002

y 200

4), T

urca

s y C

aicos

(199

0), B

elice

(200

3), C

osta

Rica

(200

3),

El Sa

lvado

r (20

03),

Guate

mala

(200

3 y 2

004)

, Hon

dura

s (20

03),

Méx

ico (2

003)

, Nica

ragu

a(2

003)

, Pan

amá (

2004

), Ar

gent

ina (

2002

) y G

uyan

a Fra

nces

a (19

90)

49Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

los p

aíses

: Ang

uila

(199

0 y

2004

), An

tigua

y B

arbu

da(1

990)

, Ant

illas

Nee

rland

esas

(199

0, 2

002

y 20

04),

Arub

a (1

990)

, Cub

a (1

990)

, Dom

inica

(199

0), G

rana

da (1

990)

, Gua

dalu

pe (1

990)

, Islas

Caim

án (1

990,

2002

y 20

04), I

slas V

írgen

es(Es

tados

Uni

dos )

(199

0, 2

002

y 20

04),

Islas

Vírg

enes

Brit

ánica

s (19

90),

Jamaic

a (1

990)

,M

artin

ica (1

990,

200

2 y

2004

), M

ontse

rrat (

1990

), Pu

erto

Rico

(199

0, 2

002

y 20

04),

San

Crist

óbal

y Nev

is (19

90), S

anta

Lucía

(199

0), Sa

n Vice

nte/G

ranad

inas (

1990

) y Tu

rcas y

Caic

os(1

990)

, Beli

ce (2

003)

, Cos

ta Ri

ca (2

003)

, El S

alvad

or (2

003)

, Gua

temala

(200

3 y

2004

),Ho

ndur

as (2

003),

Méx

ico (2

003),

Nica

ragua

(200

3), Pa

namá

(200

4),Ar

genti

na (2

002),

Guy

ana

Fran

cesa

(199

0), S

urin

ame (

1990

) y U

rugu

ay (1

990)

50In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Ang

uila

(200

2 y

2004

), An

tigua

y B

arbu

da (2

002

y20

04),

Arub

a (20

02 y

2004

), Ba

hama

s (19

90, 2

002 y

2004

), Ba

rbad

os (1

990,

2002

y 20

04),

Cuba

(200

2 y

2004

), Do

mini

ca (1

990,

200

2 y

2004

), Gr

anad

a (2

002

y 20

04),

Guad

alupe

(200

2 y

2004

), Ha

ití (1

990,

200

2 y

2004

), Isl

as V

írgen

es B

ritán

icas (

1990

, 200

2 y

2004

),Jam

aica (

1990

, 200

2 y 20

04), M

ontse

rrat (2

002 y

2004

), Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

990,

2002

y 20

04),

San

Crist

óbal

y Ne

vis (2

002

y 20

04),

Sant

a Lu

cía (2

002

y 20

04),

San

Vice

nte/

Gran

adin

as (2

002

y 200

4), T

rinid

ad y

Toba

go (1

990,

200

2 y 2

004)

y Tu

rcas y

Caic

os (2

002

y 20

04),

Belic

e (1

990,

200

2 y

2004

), Co

sta R

ica (1

990,

200

2 y

2004

), El

Salva

dor (

1990

,20

02 y

200

4), G

uatem

ala (1

990,

200

2 y

2004

), Ho

ndur

as (1

990,

200

2 y

2004

), M

éxico

(199

0, 2

002

y 200

4), N

icara

gua (

1990

, 200

2 y 2

004)

y Pa

namá

(199

0, 2

002

y 200

3)

51Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

los p

aíses

: Ang

uila

(199

0), A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

0),

Antill

as N

eerla

ndes

as (1

990,

2002

y 20

04), A

ruba

(199

0, 20

02 y

2004

), Cub

a (19

90), G

ranad

a(1

990)

, Gua

dalu

pe (1

990)

, Islas

Caim

án (1

990,

2002

y 20

04), I

slas V

írgen

es (E

stado

s Uni

dos

) (19

90, 2

002

y 20

04),

Islas

Vírg

enes

Brit

ánica

s (19

90),

Jamaic

a (1

990)

, Mar

tinica

(199

0,20

02 y

200

4), M

ontse

rrat (

1990

), Pu

erto

Rico

(199

0, 2

002

y 20

04),

San

Crist

óbal

y Ne

vis(1

990)

, San

ta Lu

cía (1

990)

, San

Vice

nte/G

rana

dina

s (19

90) y

Turca

s y C

aicos

(199

0), B

elice

(200

3), C

osta

Rica

(200

3), E

l Salv

ador

(200

3), G

uatem

ala (2

003

y 200

4), H

ondu

ras (

2003

),M

éxico

(200

3), N

icarag

ua (2

003),

Pana

má (2

004),

Arge

ntina

(200

2) y G

uyan

a Fran

cesa

(199

0)

52Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

los p

aíses

: ang

uila

(200

4), A

ntill

as N

eerla

ndes

as (2

002

y 200

4), A

ruba

(200

2 y 20

04), C

uba (

1990

), Gra

nada

(199

0), G

uada

lupe

(199

0), H

aití (1

990)

,Isl

as C

aimán

(199

0, 20

02 y

2004

), Isla

s Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s ) (1

990,

2002

y 20

04), I

slas

Vírge

nes B

ritán

icas (

1990

), Jam

aica (

1990

); Mart

inica

(199

0, 20

02 y

2004

), Mon

tserra

t (199

0),Pu

erto

Rico

(199

0, 2

002

y 20

04),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

990)

, San

ta Lu

cía (1

990)

, San

Vice

nte/G

rana

dina

s (19

90) y

Tur

cas y

Caic

os (1

990)

, Beli

ce (1

990)

, Cos

ta Ri

ca (1

990)

,Gu

atema

la (1

990 y

2004

), Hon

dura

s (19

90), M

éxico

(199

0), P

anam

á (19

90 y

2004

)Arge

ntin

a(2

002)

, Guy

ana F

ranc

esa (

1990

), Pe

rú (1

990)

y Su

rinam

e (19

90)

53Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión:

Ang

uila

(199

0), A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

0), A

ntill

asNe

erlan

desa

s (19

90, 2

002 y

2004

), Aru

ba (1

990,

2002

y 20

04), C

uba (

1990

), Gran

ada (

1990

),Gu

adalu

pe (1

990)

, Islas

Caim

án (1

990,

2002

y 20

04), I

slas V

írgen

es (E

stado

s Uni

dos )

(199

0,20

02 y

200

4), I

slas V

írgen

es B

ritán

icas (

1990

), Jam

aica

(199

0), M

artin

ica (1

990,

200

2 y

2004

), M

ontse

rrat (

1990

), Pu

erto

Rico

(199

0, 2

002

y 20

04),

San

Crist

óbal

y Ne

vis (1

990)

,Sa

nta

Lucía

(199

0), S

an V

icent

e/Gra

nadi

nas (

1990

) y T

urca

s y C

aicos

(199

0), G

uatem

ala(2

004)

, Pan

amá (

2004

), Ar

gent

ina (

2002

) y G

uyan

a Fra

nces

a (19

90)

54Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

Ang

uila

(199

0-20

06),

Antig

ua y

Barb

uda (

1990

-200

6),

Antil

las N

eerla

ndes

as (1

990-

2006

), Ar

uba

(199

0-20

06),

Baha

mas (

1993

-200

6), B

arba

dos

(199

0-20

06),

Domi

nica

(199

0-20

06),

Islas

Caim

án (1

990-

2006

), Isl

as V

írgen

es B

ritán

icas

(199

0-20

06), M

ontse

rrat (1

990-

2006

), San

Cris

tóba

l y N

evis

(199

0-20

06), S

anta

Lucía

(199

0,

1991

y 20

06),

Trini

dad y

Toba

go (2

004-

2006

) y Tu

rcas y

Caic

os (1

990-

2006

), Be

lice (

1992

-20

03),

Chile

(199

5-19

97 y

1999

-200

6) y

Guya

na Fr

ance

sa (1

992-

1996

)

55Se

exclu

ye po

r falt

a de i

nfor

mació

n: A

ngui

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990-

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ANEXO ESTADÍSTICO: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Page 344: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

342

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

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y 20

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2003

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2008

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2005

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0-20

07).

Nota:

par

a El C

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(199

0-20

07)

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2007

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2001

y 20

03-2

007)

, Bol

ivia (

1990

, 199

3, 19

94, 1

996,

1997

, 199

9-20

01, 2

003 y

2004

-200

7), B

rasil

(199

8, 20

00-2

004 y

2007

), Chi

le (1

990,

1991

, 199

3, 19

94,

2000

-200

8), C

olom

bia (

1991

, 199

3, 1

996,

199

8-20

00 y

2003

-200

7), E

cuad

or (1

992,

199

3,19

97, 2

000,

200

2, 2

006

y 20

08),

Guya

na F

ranc

esa

(199

5 y

1996

), Gu

yana

(199

6, 1

997,

2005

y 2

006)

, Par

agua

y (1

990,

199

2, 1

995-

1997

, 199

9, 2

000,

200

2 y

2005

-200

7), P

erú

(199

0-19

92, 1

996,

199

7, 2

001-

2008

), Su

rinam

e (1

990,

199

3, 1

996,

199

7, 2

004

y 20

06),

ANEXO ESTADÍSTICO: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Page 345: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

343

ANEXO ESTADÍSTICOUr

ugua

y (19

91-1

993,

1998

-200

2, 20

04 y

2007

) y Ve

nezu

ela (1

991-

1994

, 199

8, 20

03, 2

004

y 200

7)

127

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

paíse

s: Cu

ba (1

993)

, Hait

í (200

2-20

04 y

2007

), Jam

aica (

1991

,19

93, 2

002 y

2006

), Pu

erto

Rico

(199

2, 20

01 y

2003

), Re

públ

ica D

omin

icana

(199

3, 20

03,

2004

y 20

07), S

an V

icent

e/Gra

nadi

nas (

1992

), Beli

ce (1

995)

, Cos

ta Ri

ca (1

991,

1993

, 199

6,20

02 y

2007

), El

Salva

dor (

1992

), Gu

atema

la (1

995,

199

9 y 2

002)

, Hon

dura

s (19

90, 1

993,

1996

y 19

99),

Méx

ico (1

993,

1999

y 20

07),

Nica

ragu

a (19

90 y

1999

), Pa

namá

(199

1, 20

02y 2

004-

2006

), Arge

ntin

a (19

92, 1

997,

1998

, 200

0, 20

01, 2

003 y

2007

), Bol

ivia (

1997

, 200

1,20

03 y

2007

), Bra

sil (2

003 y

2007

), Chi

le (1

997,

2000

, 200

2 y 20

06), C

olom

bia (

1996

, 199

9y 2

004-

2007

), Ec

uado

r (19

92, 1

997,

2002

, 200

6 y 20

08),

Guya

na Fr

ance

sa (1

996)

, Guy

ana

(199

6, 2

005

y 20

06),

Para

guay

(199

0, 1

992,

199

5 y

1997

), Pe

rú (1

997

y 20

08),

Surin

ame

(199

3 y 2

006)

, Uru

guay

(199

2, 1

992,

199

7, 2

000-

2002

y 20

07)

128

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

paíse

s: An

guila

(199

9), A

ntigu

a y Ba

rbud

a (19

95, 1

999)

, Ant

illas

Neer

lande

sas (

1995

), Ba

hama

s (19

92, 2

004,

200

5 y 2

007)

, Bar

bado

s (20

02 y

2004

), Cu

ba(1

993,

1996

, 199

9, 20

01, 2

002,

2004

, 200

5 y 20

07), D

omin

icana

(199

5, 19

99, 2

001,

2007

),Gr

anad

a (1

999)

, Hait

í (19

94, 2

004

y 20

07),

Islas

Caim

án (2

002)

, Isla

s Vírg

enes

(Esta

dos

Unid

os) (

1995

), Jam

aica (

1996

, 200

2, 2

004,

200

5 y 2

007)

, Mar

tinica

(199

0, 1

993,

199

9 y

2007

), Pu

erto

Rico

(199

5, 1

996,

200

3 y 2

004)

, Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

996,

199

8, 2

003,

2004

y 2

007)

, San

Cris

tóba

l y N

evis

(199

5, 1

998

y 19

99),

Sant

a Lu

cía (1

994

y 19

99),

San

Vice

nte/G

rana

dina

s (19

99, 2

004

y 20

05),

Trini

dad

y To

bago

(200

4), B

elice

(199

8, 2

000,

2001

y 20

07),

costa

Rica

(199

6 y 19

98),

El Sa

lvado

r (19

98 y

2005

), Gu

atema

la (1

998,

2001

y 20

05),

Hond

uras

(199

8, 2

001

y 20

05),

Méx

ico (1

997,

200

2 y

2005

-200

7), N

icara

gua

(199

3, 1

998,

200

1 y

2007

), Pa

namá

(199

8), P

arag

uay

(200

2), S

urin

ame

(199

0 y

2004

) yUr

ugua

y (19

93 y

2002

)

129

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s pa

íses:

Barb

ados

(200

7), H

aití (

2004

), M

artin

ica (2

007)

,Re

públi

ca D

omini

ca (2

004),

Cos

ta Ri

ca (1

990),

El Sa

lvado

r (200

1 y 20

06), G

uatem

ala (1

991),

Méx

ico (2

003)

, Pan

amá (

1991

), Ch

ile (1

997,

200

5 y 2

007)

, Col

ombi

a (19

99),

Perú

(200

1 y

2007

) y Su

rinam

e (19

97)

130

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: S

anta

Lucía

(199

6), B

olivi

a (1

994)

, Chi

le (1

991)

ySu

rinam

e (20

04).

Nota:

no

hay d

atos p

ara M

esoa

méric

a

131

Inclu

ye la

info

rmac

ión

de lo

s sigu

ientes

país

es: A

rgent

ina

(199

5), P

erú

(200

3) y

Uru

guay

(200

4)

132

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: M

ontse

rrat (

1995

-199

7, 2

006)

, Gua

temala

(199

2),

Nica

ragu

a (19

92), A

rgent

ina (

1991

), Chi

le (1

991)

, Ecu

ador

(200

2 y 20

06) y

Surin

ame (

1997

)

133

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: C

uba (

1998

), Ha

ití (1

992

y 200

3), E

l Salv

ador

(200

1),

Guate

mala

(200

1), H

ondu

ras (

2001

, 200

2 y 20

04),

Nica

ragu

a (19

94, 1

997 y

2001

) , Bo

livia

(199

0, 19

94 y

2004

, Bra

sil (1

998,

2001

y 20

07),

Colo

mbia

(199

8), E

cuad

or (1

997)

, Guy

ana

(199

7), P

arag

uay (

1999

y 20

05) y

Per

ú (1

990

y 199

2)

134

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: A

ntill

as N

eerla

ndes

as (2

001)

, Bah

amas

(200

7), C

uba

(199

1, 19

94, 1

997,

1999

, 200

2, 20

03 y

2007

), Hait

í (199

6, 19

98, 2

003 y

2007

), Pue

rto R

ico(1

996

y 20

04),

Repú

blica

Dom

inica

na (2

002-

2005

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

998)

, Arge

ntin

a(1

992,

199

3, 1

995

y 20

04-2

006)

, Bol

ivia

(199

3, 1

996,

199

9, 2

000,

200

3, 2

004

y 20

06),

Bras

il (1

998,

200

0-20

04 y

200

7), C

hile

(199

3, 1

994,

199

9, 2

001,

200

4 y

2006

-200

8),

Colo

mbia

(199

1, 1

993,

199

4, 1

999,

200

0, 2

003,

200

5 y

2007

), Gu

yana

Fra

nces

a (1

995)

,Pa

ragu

ay (1

996,

2000

y 20

06), P

erú (

1996

, 199

7, 20

02, 2

003,

2005

y 20

06), U

rugu

ay (1

992

y 199

9) y

Vene

zuela

(199

1-19

94, 1

998,

200

3, 2

004

y 200

7)

135

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

paíse

s: Ha

ití (2

001)

, Jama

ica (1

990,

1993

, 199

6, 19

99, 2

000 y

2004

), Re

públ

ica D

omin

icana

(199

2, 1

996,

200

3 y 2

004)

, Cos

ta Ri

ca (1

990,

200

0, 2

001

y20

03), E

l Salv

ador

(200

0 y 20

02), G

uatem

ala (2

000 y

2002

), Hon

dura

s (19

90-2

003)

, Méx

ico(2

000,

200

2 y

2004

), Ni

cara

gua

(200

1), P

anam

á (2

000,

200

2 y

2003

), Ar

gent

ina

(200

1,20

03 y

2004

), Boli

via (2

002),

Bras

il (19

90, 2

001,

2003

y 20

04), C

hile (

2000

y 20

03), C

olomb

ia(2

003)

, Par

agua

y (1

990,

200

2 y

2003

), Pe

rú (1

990,

200

0, 2

002

y 20

03),

Urug

uay

(200

0 y

2003

) y V

enez

uela

(200

0 y 2

003)

136

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

paíse

s: Ha

ití (2

001)

, Jama

ica (1

990,

1993

, 199

6, 19

99, 2

000 y

2004

), Re

públ

ica D

omin

icana

(199

2, 1

996,

200

3 y 2

004)

, Trin

idad

y To

bago

(199

2), C

osta

Rica

(199

0, 2

000,

200

1 y

2003

), El

Salva

dor (

2000

y 2

002)

, Gua

temala

(200

0 y

2002

),Ho

ndur

as (1

990-

2003

), Méx

ico (2

000,

2002

y 20

04), N

icara

gua (

2001

), Pan

amá (

2000

, 200

2y 2

003)

, Arge

ntin

a (20

01, 2

003

y 200

4), B

olivi

a (20

02),

Bras

il (1

990,

200

1, 2

003

y 200

4),

Chile

(200

0 y

2003

), Co

lomb

ia (2

003)

, Par

agua

y (1

990,

200

2 y

2003

), Pe

rú (1

990,

200

0,20

02 y

2003

), Ur

ugua

y (20

00 y

2003

) y V

enez

uela

(200

0 y 2

003)

137

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

sigu

ientes

paíse

s: An

guila

(200

1), A

ntill

as N

eerla

ndes

as (2

000)

,Ba

rbad

os (1

990,

200

1 y

2003

), Ha

ití (1

990)

, Jam

aica

(199

0, 2

003

y 20

04),

Puer

to R

ico(1

990,

200

0, 2

002-

2005

), Re

públ

ica D

omin

icana

(200

0), T

rinid

ad y

Toba

go (1

990,

200

0 y

2002

), Co

sta R

ica (1

990,

200

0, 2

001

y 20

03-2

005)

, El S

alvad

or (

2002

-200

4), H

ondu

ras

(200

1-20

05),

Méx

ico (2

000-

2005

), Ni

cara

gua (

2000

, 200

1 y 2

003)

, Pan

amá (

2000

y 20

02-

2005

), Ar

gent

ina

(199

0, 2

000,

200

1 y

2003

-200

5), B

rasil

(199

0 y

2001

-200

4), C

olom

bia

(199

0 y

2004

), Ec

uado

r (19

90, 2

000-

2003

y 2

005)

, Par

agua

y (1

990

y 20

01),

Perú

(199

0,20

00, 2

001

y 200

3-20

05) y

Ven

ezue

la (2

000-

2003

)

138

Se ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n en

los a

ños 1

990,

200

0 y 2

005

a los

sigu

ientes

país

es:

Angu

ila, A

ntigu

a y B

arbu

da, D

omin

ica, G

uada

lupe

, Isla

s Caim

án, I

slas V

írgen

es B

ritán

icas,

Mar

tinica

, Mon

tserra

t, Sa

n Cr

istób

al y N

evis,

Turca

s y C

aicos

y Gu

yana

139

Se ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n en

los a

ños 1

990,

200

0 y 2

005

a los

sigu

ientes

país

es:

Angu

ila, A

ntigu

a y B

arba

da, D

omin

ica (1

990,

2000

y 20

05),

Guad

alupe

, Isla

s Caim

án, I

slas

Vírge

nes B

ritán

icas,

Mart

inica

, Mon

tserra

t, San

Cris

tóbal

y Nev

is, Tr

inida

d y To

bago

y Gu

yana

140

Se ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n en

los a

ños 1

990,

200

0 y 2

005

a los

sigu

ientes

país

es:

Angu

ila, A

ntigu

a y B

arba

da, D

omin

ica, G

uada

lupe

, Isla

s Caim

án, I

slas V

írgen

es B

ritán

icas,

Mar

tinica

, Mon

tserra

t, Sa

n Cr

istób

al y N

evis,

Trin

idad

y To

bago

y Gu

yana

141

Se ex

cluye

por f

alta d

e inf

orma

ción a

los s

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tes pa

íses:

Angu

ila (1

990,

2000

-200

3, 20

05y

2007

), Ar

uba

(199

0, 2

000-

2003

, 200

5 y

2007

), Gu

adalu

pe (1

990,

200

0-20

03, 2

005

y20

07), I

slas C

aimán

(199

0, 20

00-2

003,

2005

y 20

07), I

slas V

írgen

es (E

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2008

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08),

ANEXO ESTADÍSTICO: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Page 346: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

344

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Gran

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2005

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08),

Haití

(200

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008)

, Isla

s Caim

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002-

2008

), Isl

as V

írgen

es (E

stado

s Uni

dos)

(200

2, 2

005

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8), I

slas V

írgen

es B

ritán

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2000

, 200

1 y 20

03-2

008),

Jama

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008),

Mart

inica

(200

2-20

06), M

ontse

rrat (2

001-

2008

), Pue

rtoRi

co (2

005

y 20

08),

San

Crist

óbal

y Ne

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003,

200

5 y

2008

), Sa

nta

Lucía

(200

3-20

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Turca

s y C

aicos

(199

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000

y 20

01),

Guate

mala

(200

8), P

anam

á (2

008)

, Bol

ivia

(200

8),

Bras

il (2

008)

, Guy

ana F

ranc

esa (

2008

) y G

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a (20

02-2

008)

155

Se ex

cluye

por f

alta d

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os si

guien

tes pa

íses:

Angu

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004)

, Ant

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Bar

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2002

, 200

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4), B

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004)

, Bar

bado

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004)

, Cub

a (2

004)

, Dom

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(200

4), G

rana

da (2

004)

, Gua

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004)

, Hait

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Islas

Caim

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4), I

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írgen

es (E

stado

s Uni

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(200

4), I

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es B

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icas

(200

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, Jam

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ica (2

004)

, Mon

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Puer

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, San

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l y N

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(200

3, 20

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Sant

a Luc

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004)

, Tur

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Caic

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2001

, 200

4), B

elice

(199

0), C

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Rica

(199

0), E

l Salv

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(199

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990 y

2004

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as (1

990)

, Nica

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a (19

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2004

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2004

), Br

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(199

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2004

), Co

lomb

ia (1

990)

, Ecu

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(199

0), G

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a (1

990

y 20

04),

Guya

na F

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esa

(199

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004)

, Par

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y (1

990)

, Per

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990)

, Sur

inam

e (1

990)

, Uru

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(199

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(199

0)

156

Se ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n lo

s sigu

ientes

país

es: A

ngui

la (2

002

y 200

6), A

ntigu

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s Nee

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esas

(200

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06), A

ruba

(200

6), Ba

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s (20

06), B

arbad

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006)

, Dom

inica

(200

5 y

2006

), Gr

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2006

), Gu

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, Isla

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Vírg

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, Isla

s Vírg

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, Jam

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2006

), M

artin

ica (2

006)

, Mon

tserra

t (20

00-2

006)

, Pue

rto R

ico(2

006)

, San

Cris

tóba

l y N

evis

(200

3-20

06),

Sant

a Lu

cía (2

002,

200

5 y

2006

), Sa

n Vi

cent

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anad

inas (

2006

), Trin

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Toba

go (2

006),

Turca

s y C

aicos

(200

0-20

06), E

l Salv

ador

(200

6),Ho

ndur

as (2

006)

, Bra

sil (2

006)

, Guy

ana (

2006

), Guy

ana F

ranc

esa (

2006

), Sur

inam

e (20

06) y

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uay

(200

6)

157

Se e

xclu

ye p

or fa

lta d

e in

form

ació

n en

los a

ños 1

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200

0-20

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tes p

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, Ant

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y Ba

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Barb

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, Dom

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Caim

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Vice

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s, Tu

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Caic

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Belic

e, Gu

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, Guy

ana F

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esa y

Uru

guay

158

Se ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n en

los a

ños 1

990-

2004

a lo

s sigu

ientes

país

es: A

ngui

la,An

tigua

y B

arbu

da, A

ruba

, Bah

amas

, Bar

bado

s, Do

min

ica, G

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, Isla

sCa

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, Isla

s Vírg

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(Esta

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Mar

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Rico

, San

Cris

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l y N

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San

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cía, S

an V

icent

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nadi

nas,

Turca

s y C

aicos

,Be

lice,

Guya

na, G

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nces

a y Su

rinam

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159

Se ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n en

los a

ños 1

990-

2006

a lo

s sigu

ientes

país

es: A

ngui

la,An

tigua

y B

arbu

da, A

ruba

, Bah

amas

, Dom

inica

, Gua

dalu

pe, I

slas C

aimán

, Isla

s Vírg

enes

(Estad

os U

nido

s), Is

las V

írgen

es B

ritán

icas,

Mar

tinica

, Mon

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t, Pue

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ico, S

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y Nev

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ucía,

San

Vice

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rana

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s, Tu

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Caic

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y Gu

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160

Inclu

ye in

form

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n pa

ra lo

s país

es: E

l Salv

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(199

0-19

96) y

200

0, M

éxico

(199

6, 1

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1999

, 200

0 y

2002

), Pa

namá

(199

0-20

03),

Bras

il (1

990)

, Chi

le (1

990)

y C

olom

bia

(199

0).

Nota:

par

a El C

arib

e no

hay d

atos

161

Se ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n en

los a

ños 1

990-

2004

a lo

s sigu

ientes

país

es: A

ngui

la,An

tigua

y B

arbu

da, A

ruba

, Bah

amas

, Bar

bado

s, Do

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ica, G

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da, G

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lupe

, Isla

sCa

imán

, Isla

s Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s), Is

las V

írgen

es B

ritán

icas,

Mar

tinica

, Mon

tserra

t,Pu

erto

Rico

, San

Cris

tóba

l y N

evis,

San

ta Lu

cía, S

an V

icent

e/Gra

nadi

nas,

Turca

s y C

aicos

,Be

lice,

Guya

na, G

uyan

a Fra

nces

a y S

urin

ame

162

Se ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n en

los a

ños 1

990-

2006

a lo

s sigu

ientes

país

es: A

ngui

la,An

tigua

y B

arbu

da, A

ruba

, Bah

amas

, Dom

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dalu

pe, I

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, Isla

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(Estad

os U

nido

s), Is

las V

írgen

es B

ritán

icas,

Mar

tinica

, Mon

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t, Pue

rto R

ico, S

an C

ristó

bal

y Ne

vis, S

anta

Lucía

, San

Vice

nte/G

rana

dina

s, Tu

rcas

y C

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, Beli

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Guya

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ance

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163

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra e

l año

199

0 pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: E

l Salv

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Méx

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Nica

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a

164

Se e

xclu

ye p

or fa

lta d

e in

form

ació

n pa

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990

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s sigu

ientes

país

es: A

ngui

la, A

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a y

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uda,

Arub

a, Ba

hama

s, Ba

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os, D

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ica, G

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Vírge

nes (

Estad

os U

nido

s), Is

las V

írgen

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Mar

tinica

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t, Pue

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n Vice

nte/G

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dina

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, Tur

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Caic

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Belic

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yana

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165

Se ex

cluye

por f

alta d

e inf

orma

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os 19

90 y

2003

-200

5 a lo

s sigu

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paíse

s:An

guila

, Anti

gua y

Barb

uda,

Arub

a, Ba

hama

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os, D

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Caim

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, Mon

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t, Pue

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San

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y Ne

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anta

Lucía

, San

Vice

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rana

dina

s, Tri

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Toba

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icos,

Belic

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a Fra

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a, Su

rinam

e, Ur

ugua

y y V

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166

Inclu

ye in

form

ació

n pa

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s país

es: M

éxico

(199

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004-

2006

), Ar

gent

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1999

y 20

04-

2006

), Bra

sil (1

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2004

-200

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(199

9 y 20

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006)

, Col

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a (19

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2004

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Perú

(200

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06) y

Ven

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la (1

999

y 200

4-20

06).

Nota:

par

a El C

arib

e no

hay d

atos

167

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra l

os si

guien

tes p

aíses

: Bar

bado

s (19

95, 1

996

y 200

2-20

06),

Cuba

(199

5, 19

96 y

2002

-200

6), T

rinid

ad y

Toba

go (1

995,

1996

y 20

02-2

006)

, Gua

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(199

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Méx

ico (1

995,

199

6 y

2002

-200

6), A

rgent

ina

(199

5, 1

996

y 20

02-2

006)

, Bol

ivia

(199

5,19

96 y

200

2-20

06),

Bras

il (1

995,

199

6 y

2002

-200

6), C

hile

(199

5, 1

996

y 20

02-2

006)

,Co

lomb

ia (1

995,

1996

y 20

02-2

006)

, Ecu

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(199

5, 19

96 y

2002

-200

6), P

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1995

, 199

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002-

2006

) y V

enez

uela

(199

5, 1

996

y 200

2-20

06)

168

Se ex

cluye

por f

alta d

e inf

orma

ción p

ara l

os añ

os 19

90 y

2003

-200

5 a lo

s sigu

ientes

paíse

s:An

guila

, Anti

gua y

Barb

uda,

Arub

a, Ba

hama

s, Ba

rbad

os, D

omini

ca, G

uada

lupe,

Islas

Caim

án,

Islas

Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s), Is

las V

írgen

es B

ritán

icas,

Mar

tinica

, Mon

tserra

t, Pue

rto R

ico,

San

Crist

óbal

y Ne

vis, S

anta

Lucía

, San

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rana

dina

s, Tri

nida

d y

Toba

go, T

urca

s yCa

icos,

Belic

e y G

uyan

a Fra

nces

a

169

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

años

(199

5, 19

96 y

2002

-200

6) lo

s sigu

ientes

paíse

s: Ba

rbad

os,

Cuba

, Trin

idad

y To

bago

, Gua

temala

, Méx

ico, A

rgent

ina,

Boliv

ia, B

rasil

, Chi

le, C

olom

bia,

Ecua

dor,

Perú

, Sur

inam

e y V

enez

uela

170

Se ex

cluye

por f

alta d

e inf

orma

ción p

ara l

os añ

os 19

90 -2

005 a

los s

iguien

tes pa

íses:

Angu

ila,

Antig

ua y

Bar

buda

, Aru

ba, B

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as, B

arba

dos,

Dom

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, Gra

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, Gua

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Caim

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es (E

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s, M

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ica, M

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rrat,

Puer

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ico, S

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bal y

Nev

is, S

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Lucía

, San

Vice

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rana

dina

s, Tu

rcas y

Caic

os,

Belic

e y G

uyan

a, Gu

yana

Fran

cesa

y Su

rinam

e

171

Incl

uye

info

rmac

ión

para

los

sigui

ente

s pa

íses:

Repú

blic

a Do

min

ican

a (1

990-

2005

),Gu

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la (19

99-2

005)

y Hon

duras

(199

0-20

05), A

rgenti

na (1

990-

2005

), Bras

il (19

90-2

005),

Chile

(199

0-20

06),

Colo

mbia

(199

90-2

006)

y Pe

rú (2

000-

2005

)

172

Se ex

cluye

por f

alta d

e inf

orma

ción p

ara l

os añ

os 19

90-2

005 a

los s

iguien

tes pa

íses:

Angu

ila,

Antig

ua y

Bar

buda

, Aru

ba, B

aham

as, B

arba

dos,

Dom

inica

, Gra

nada

, Gua

dalu

pe, I

slas

Caim

án, I

slas V

írgen

es (E

stado

s Uni

dos),

Islas

Vírg

enes

Brit

ánica

s, M

artin

ica, M

ontse

rrat,

Puer

to R

ico, S

an C

ristó

bal y

Nev

is, Sa

nta L

ucía,

San V

icent

e/Gra

nadi

nas,

Trini

dad y

Toba

go,

Turca

s y C

aicos

, Beli

ce, G

uyan

a, Gu

yana

Fran

cesa

y Su

rinam

e

173

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: C

uba

(199

0-20

02),

Repú

blica

Dom

inica

na(2

003-

2006

), Méx

ico (1

990-

2005

), Arge

ntin

a (19

90-2

005)

, Bol

ivia (

1990

-200

5), B

rasil

(199

0y1

994-

2005

), Chi

le (1

990-

2005

), Col

ombi

a (19

90-2

005)

, Ecu

ador

(199

0-20

05), P

erú (

1990

-20

05),

Urug

uay (

1990

-200

5) y

Vene

zuela

(199

0-20

05)

174

Inclu

ye in

form

ació

n par

a Méx

ico (1

990-

2005

), Arge

ntin

a (19

90-2

005)

y Br

asil (

1990

-200

5).

Nota:

no

hay d

atos p

ara E

l Car

ibe

175

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

para

los s

iguien

tes p

aíses

: Ang

uila

(199

0-20

05),

Antig

ua y

Barb

uda

(199

0-20

05),

Arub

a (1

990-

2005

), Ba

hama

s (19

90-2

005)

, Bar

bado

s (19

90-2

005)

,Do

mini

ca (1

990-

2005

), Gra

nada

(199

0-20

05), G

uada

lupe

(199

0-20

05), I

slas C

aimán

(199

0-20

05),

Islas

Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s) (1

990-

2005

), Isl

as V

írgen

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ritán

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1990

-200

5),

Mar

tinica

(199

0-20

05),

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tserra

t (19

90-2

005)

, Pue

rto R

ico (1

990-

2005

), Sa

n Cr

istób

al y

Nevis

(199

0-20

05), S

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Lucía

(199

0-20

05), S

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icent

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nadi

nas (

1990

-200

5), T

rinid

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Toba

go (1

990-

1993

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998-

2005

), Tu

rcas y

Caic

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990-

2005

), Be

lice

(199

0-20

05),

Guya

na (1

990-

2005

), Gu

yana

Fra

nces

a (1

990-

2005

), Pa

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ay (2

000-

2005

) y S

urin

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(199

0-20

05)

176

Inclu

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form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

0-20

06),

Baha

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(199

0-20

02),

Barb

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(199

0-20

02),

Gran

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(199

0-20

05),

Haití

(199

0-20

06),

Jamaic

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990-

2006

), Pue

rto R

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990-

2001

), Rep

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990-

2006

), San

Cris

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2005

), San

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990-

2005

), San

Vice

nte/G

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inas (

1990

-200

5) y T

rinida

dy T

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90-2

006),

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(199

0-20

06), B

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(199

0-20

06), B

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1990

-200

6), C

hile

(199

0-20

06),

Colo

mbia

(199

0-20

06),

Ecua

dor (

1990

-200

6), G

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a (19

90-2

006)

, Par

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990-

2006

), Pe

rú (1

990-

2006

), Su

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90-2

006)

, Uru

guay

(199

0-20

06) y

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990-

2006

)

177

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

sigu

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paíse

s: An

tigua

y Ba

rbud

a (19

90-2

004)

, Aru

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990-

2003

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hama

s (19

90-2

002)

, Dom

inica

(199

0-20

04),

Gran

ada

(199

0-20

04),

Haití

(199

0-20

05), J

amaic

a (19

90-2

005)

, Pue

rto R

ico (1

990-

2001

), Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

990-

2005

),Sa

n Cris

tóba

l y N

evis

(199

0-20

04), S

anta

Lucía

(199

0-20

04), S

an V

icent

e/Gra

nadi

nas (

1990

-20

05),

Trini

dad

y Tob

ago

(199

0-20

05),

Arge

ntin

a (19

90-2

005)

, Bol

ivia (

1990

-200

5), C

hile

(199

0-20

05),

Colo

mbia

(199

0-20

05),

Ecua

dor (

1990

-200

5), G

uyan

a (19

90-2

005)

, Par

agua

y(1

990-

2005

), Pe

rú (1

990-

2005

), Su

rinam

e (19

90-2

005)

, Uru

guay

(199

0-20

05) y

Ven

ezue

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990-

2005

)

178

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

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país

es: A

ntigu

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Barb

uda

(199

1-20

06),

Baha

mas

(199

0-20

05),

Barb

ados

(199

0-20

06),

Cuba

(199

0-20

03),

Domi

nica

(199

0-20

06),

Gran

ada

(199

0-20

06), H

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000-

2006

), Jam

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1990

-200

6), R

epúb

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omin

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(199

0-20

06),

San C

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bal y

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990-

2006

), San

ta Lu

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990-

2006

), San

Vice

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dina

s (19

90-

2006

) y Tr

inid

ad y

Toba

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990-

2006

), Ar

gent

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1990

-200

6), B

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a (19

90-2

006)

, Bra

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990-

2006

), Ch

ile (1

990-

2006

), Co

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ia (1

990-

2006

), Ec

uado

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90-2

006)

, Guy

ana

Fran

cesa

(199

0-20

06),

Para

guay

(199

0-20

06),

Perú

(199

0-20

06),

Surin

ame

(199

0-20

06),

Urug

uay

(199

0-20

06) y

Ven

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990-

2006

)

179

Inclu

ye in

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ació

n pa

ra lo

s sigu

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país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

1-20

06),

Baha

mas

(199

0-20

05),

Barb

ados

(199

0-20

06),

Cuba

(199

0-20

03),

Domi

nica

(199

0-20

06),

Gran

ada

(199

0-20

06), H

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000-

2006

), Jam

aica (

1990

-200

6), R

epúb

lica D

omin

icana

(199

0-20

06),

San C

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bal y

Nev

is (1

990-

2006

), San

ta Lu

cía (1

990-

2006

), San

Vice

nte/G

rana

dina

s (19

90-

2006

) y Tr

inid

ad y

Toba

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990-

2006

), Ar

gent

ina (

1990

-200

6), B

olivi

a (19

90-2

006)

, Bra

sil(1

990-

2006

), Ch

ile (1

990-

2006

), Co

lomb

ia (1

990-

2006

), Ec

uado

r (19

90-2

006)

, Guy

ana

Fran

cesa

(199

0-20

06),

Para

guay

(199

0-20

06),

Perú

(199

0-20

06),

Surin

ame

(199

0-20

06),

Urug

uay

(199

0-20

06) y

Ven

ezue

la (1

990-

2006

)

180

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

1-20

06),

Baha

mas

(199

0-20

05),

Barb

ados

(199

0-20

06),

Cuba

(199

0-20

03),

Domi

nica

(199

0-20

06),

Gran

ada

(199

0-20

06), H

aití (2

000-

2006

), Jam

aica (

1990

-200

6), R

epúb

lica D

omin

icana

(199

0-20

06),

San C

ristó

bal y

Nev

is (1

990-

2006

), San

ta Lu

cía (1

990-

2006

), San

Vice

nte/G

rana

dina

s (19

90-

2006

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990-

2006

), Ar

gent

ina (

1990

-200

6), B

olivi

a (19

90-2

006)

, Bra

sil(1

990-

2006

), Ch

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990-

2006

), Co

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990-

2006

), Ec

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006)

, Guy

ana

Fran

cesa

(199

0-20

06),

Para

guay

(199

0-20

06),

Perú

(199

0-20

06),

Surin

ame

(199

0-20

06),

Urug

uay

(199

0-20

06) y

Ven

ezue

la (1

990-

2006

)

181

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

0-20

05),

Barb

ados

(199

0-20

05),

Cuba

(199

4-19

99),

Gran

ada (

1990

-200

5), H

aití (

2000

-200

5), J

amaic

a (19

90-

2005

), Re

públ

ica D

omin

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bal y

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990-

2005

), Sa

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(1990

-200

5), Sa

n Vice

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1990

-200

5), Tr

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0-20

05), A

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990-

2005

), Bo

livia

(199

0-20

05),

Bras

il (1

990-

2005

), Ch

ile (1

990-

2005

), Co

lomb

ia (1

990-

2005

), Ec

uado

r (19

90-2

005)

, Guy

ana

Fran

cesa

(199

0-20

05),

Para

guay

(199

0-20

05),

Perú

(199

0-20

05),

Surin

ame

(199

0-20

05),

Urug

uay

(199

0-20

05) y

Ven

ezue

la (1

990-

2005

)

182

Inclu

ye in

form

ació

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s año

s 199

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2005

los s

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tes p

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, Bah

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, Bar

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s, Cu

ba, G

rana

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aití,

Jamaic

a, Re

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cana

, San

Cris

tóba

l y N

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ía, Sa

n Vice

nte/G

rana

dina

s, Tri

nida

d y To

bago

,Ar

gent

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Boliv

ia, B

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, Chi

le, C

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bia,

Ecua

dor,

Guya

na F

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esa,

Para

guay

, Per

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rinam

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183

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s: An

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y Ba

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a (19

90-2

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, Aru

ba (1

991-

2002

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amas

(199

0-20

03), B

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990-

2005

), Dom

inica

(199

0-20

06), G

ranad

a (19

90-

2006

), Ha

ití (2

000-

2006

), Jam

aica

(199

0-20

06),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

990-

2006

), Sa

nCr

istób

al y

Nevis

(199

0-20

06),

Sant

a Lu

cía (1

990-

2006

), Sa

n Vi

cent

e/Gra

nadi

nas (

1990

-20

06),

Trini

dad

y To

bago

(199

0-20

06),

Arge

ntin

a (1

990-

2005

), Bo

livia

(199

0-20

05),

Bras

il(1

990-

2005

), Ch

ile (1

990-

2005

), Co

lomb

ia (1

990-

2005

), Ec

uado

r (19

90-2

005)

, Par

agua

y(1

990-

2005

), Pe

rú (1

990-

2005

), Ur

ugua

y (19

90-2

005)

y Ve

nezu

ela (1

990-

2005

)

ANEXO ESTADÍSTICO: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Page 347: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

345

ANEXO ESTADÍSTICO18

4In

cluye

info

rmac

ión

para

los s

iguien

tes p

aíses

: Ang

uila

(200

1 y

2003

-200

5), A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

9-20

02),

Arub

a (1

991-

2005

), Ba

hama

s (19

91-2

000)

, Bar

bado

s (19

91-2

005)

,Cu

ba (1

991-

2006

), Dom

inica

(199

9), G

rana

da (1

991-

2003

), Hait

í (199

1), Is

las C

aimán

(200

5y

2006

), Isl

as V

írgen

es B

ritán

icas (

2001

y 2

006)

, Jam

aica

(199

1 y

2000

-200

5), M

ontse

rrat

(199

9 y

2002

-200

4), R

epúb

lica

Domi

nica

na (1

990-

2003

y 2

006)

, San

Cris

tóba

l y N

evis

(199

1-20

05), S

anta

Lucía

(199

9-20

05), S

an V

icent

e/Gra

nadi

nas (

1991

, 199

9-20

05), T

rinid

ady

Toba

go (1

991,

199

9-20

05),

Belic

e (1

991

y 19

99-2

004)

, Cos

ta Ri

ca (1

991,

199

9-20

03 y

2006

), El

Salva

dor (

1991

, 199

9-20

03, 2

005

y 20

06),

Guate

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1), H

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1991

),M

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(199

1 y 1

999-

2003

), Ni

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gua (

1991

y 19

99-2

003)

, Pan

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1991

y 19

99-2

004)

,Ar

gent

ina (

1991

y 19

99-2

004)

, Bol

ivia (

1991

y 19

99-2

003)

, Bra

sil (1

999-

2002

y 20

04), C

hile

(199

1-20

00 y

200

2-20

06),

Colo

mbia

(199

1 y

1999

-200

1), E

cuad

or (1

991

y 19

99-2

001)

Guya

na F

ranc

esa

(199

1 y

1999

-200

6), P

arag

uay

(199

1 y

1999

-200

4), P

erú

(199

1, 1

999

y20

01-2

006)

, Uru

guay

(199

1 y 1

999-

2006

) y V

enez

uela

(199

1 y 2

006)

187

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

0), B

aham

as(1

990)

,Ba

rbad

os (1

990)

, Cub

a (1

990,

200

0 y

2002

), Gr

anad

a (1

990)

, Hait

í (19

90),

Islas

Caim

án(1

990)

, Islas

Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s) (1

990)

, Jama

ica (1

990,

2003

), Rep

úblic

a Dom

inica

na(1

990 y

2000

), Sa

n Cris

tóba

l (19

90 y

2000

), Sa

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(199

0), S

an V

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90 y

2000

),Tri

nida

d y To

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(199

0), B

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(199

0 y 20

00), C

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Rica

(199

0 y 20

00), E

l Salv

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(199

0,20

00, 2

002

y 20

06),

Guate

mala

(199

0), H

ondu

ras (

1990

y 2

000)

, Méx

ico (1

990

y 20

00-

2003

), Ni

cara

gua (

1990

), Pa

namá

(199

0 y 2

000)

, Arge

ntin

a (19

90),

Boliv

ia (1

990

y 200

1),

Bras

il (19

90 y

2000

), Chi

le (1

990 y

2003

), Col

ombi

a (19

90 y

2002

), Ecu

ador

(199

0 y 20

00),

Guya

na F

ranc

esa

(199

0 y

2000

), Pa

ragu

ay (1

990,

200

0 y

2002

), Pe

rú (1

990)

, Sur

inam

e(1

990

y 200

0), U

rugu

ay (1

990

y 200

2) y

Vene

zuela

(200

5)

ANEXO ESTADÍSTICO: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Page 348: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

346

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: CARIBE

Car

ibe

Notas

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

TIERR

ASu

perfi

cie Te

rrestr

e1

1000

ha22

.893,0

22.89

3,022

.893,0

22.89

3,022

.893,0

22.89

3,022

.893,0

22.89

3,022

.893,0

22.89

3,022

.893,0

22.89

3,022

.893,0

Tierra

s arab

les y

cultiv

os p

erman

entes

210

00 ha

6.920

,07.4

37,0

7.556

,07.5

62,5

7.538

,67.4

28,7

7.556

,97.5

58,0

7.568

,07.2

53,0

7.207

,07.1

69,0

7.099

,0Tie

rras a

rables

de l

abran

za3

1000

ha5.0

77,0

5.527

,05.6

47,0

5.657

,55.6

36,6

5.562

,75.7

21,9

5.746

,05.7

74,0

5.792

,05.7

54,0

5.716

,05.6

56,0

Tierra

s dest

inada

s a cu

ltivos

perm

anen

tes4

1000

ha1.8

43,0

1.910

,01.9

05,0

1.905

,01.9

02,0

1.866

,01.7

39,3

1.475

,11.4

66,1

1.460

,01.4

52,0

1.453

,01.4

43,0

Tierra

s no

arable

s y n

o pe

rman

entes

510

00 ha

15.97

3,015

.456,0

15.33

7,015

.330,5

15.35

4,415

.464,3

15.33

6,115

.335,0

15.32

5,015

.640,0

15.68

6,015

.724,0

15.79

4,0Tie

rras d

e prad

eras y

past

os p

erman

entes

1000

ha6.1

50,0

5.518

,05.3

17,0

5.281

,05.2

76,3

5.260

,54.5

21,8

4.515

,04.5

48,0

4.486

,04.6

20,0

4.648

,04.6

97,0

Tierra

s arab

les y

cultiv

os p

erman

entes

por

habit

ante

6ha

/ 100

Hab

20,6

20,8

20,7

20,5

20,2

19,7

19,8

19,6

19,5

18,5

18,2

17,9

17,6

Supe

rficie

agrí

cola

710

00 ha

13.07

0,012

.955,0

12.87

3,012

.843,5

12.81

4,912

.689,3

11.89

2,311

.873,2

11.85

1,211

.733,0

11.82

0,011

.810,0

11.79

0,0Irr

igació

n de

la su

perfic

ie ag

rícola

810

00 ha

1.269

,01.2

86,0

1.289

,01.2

95,0

1.301

,01.3

08,0

1.308

,017

,017

,07,0

7,30,0

24,3

Cons

umo

de fe

rtiliza

ntes

9kt

180,7

67,6

90,8

105,1

145,4

131,0

N

itroge

nado

s10

kt98

,928

,856

,442

,456

,557

,2

Fos

fatad

os11

kt25

,113

,114

,020

,628

,321

,1

Potá

sicos

12kt

57,1

26,4

21,5

42,6

61,3

54,2

Cons

umo

de fe

rtiliza

ntes p

or he

ctárea

cultiv

ada

tn mé

tricas

/ ha

0,00,0

0,00,0

0,00,0

BOSQ

UES

Supe

rficie

forest

al, to

tal13

1000

ha5.3

48,0

5.703

,05.9

73,0

6.080

,36.0

80,3

P

lantac

iones

1410

00 ha

393,0

393,0

449,0

B

osqu

e natu

ral15

1000

ha4.9

55,0

5.310

,05.5

24,0

Propo

rción

de l

a sup

erfici

e cub

ierta

por b

osqu

es16

%21

,624

,925

,225

,425

,625

,926

,126

,326

,6Ta

sa de

varia

ción

anua

l de l

a sup

erfici

e fore

stal

17%

0,60,9

Supe

rficie

Fores

tal B

ajo P

lanes

de M

anejo

ERF

1810

00 ha

1.161

,01.1

61,0

(Evalu

ación

Rec

ursos

Fore

stales

)Pro

porci

ón d

e la s

uperf

icie f

oresta

l bajo

plan

ERF

19%

5,1Pro

ducc

ión d

e mad

era en

rollo

2010

00 m

36.9

16,5

7.148

,67.3

27,3

7.190

,15.3

23,9

5.622

,95.4

93,2

6.565

,86.4

26,5

6.294

,56.3

76,7

6.502

,36.5

60,1

P

roduc

ción d

e mad

era en

rollo

indu

strial

2110

00 m

31.2

27,4

1.375

,11.3

33,3

1.198

,099

2,01.4

80,0

1.426

,01.4

17,0

1.420

,01.3

18,0

1.380

,01.3

82,0

1.385

,0Pro

ducc

ión d

e leñ

a y ca

rbón

2210

00 m

35.6

89,1

5.773

,55.9

94,0

5.992

,14.3

31,9

4.142

,94.0

67,2

5.148

,85.0

06,5

5.146

,45.1

11,2

5.246

,45.2

95,8

Produ

cción

de t

abler

os d

e mad

era23

1000

m3

149,0

149,0

149,0

149,0

149,0

149,0

149,0

149,0

149,0

149,0

149,0

149,0

149,0

Produ

cción

de p

apel

y cart

ón24

1000

m3

136,3

64,0

78,0

187,0

187,0

187,0

187,0

154,7

163,4

157,4

161,9

158,7

157,4

BIOD

IVER

SIDAD

Área

s prot

egida

s, nú

mero

25No

.45

553

048

649

149

349

349

353

153

152

0Ár

eas p

roteg

idas,

área t

otal

2610

00 ha

1.899

,42.8

05,7

921,4

925,5

1.117

,31.1

17,3

1.117

,31.1

88,8

1.188

,81.1

09,9

Reser

va n

atural

estr

icta/Á

rea n

atural

silve

stre,

núme

ro27

No.

1719

1717

1717

1711

11Re

serva

natu

ral es

tricta/

Área

natu

ral si

lvestr

e, áre

a tota

l28

1000

ha9,0

18,5

9,29,2

9,29,2

9,29,2

9,27,0

Parqu

es na

ciona

les, n

úmero

29No

.61

7057

5757

5757

4848

Parqu

es na

ciona

les, á

rea t

otal

3010

00 ha

1.119

,31.6

61,1

417,9

417,8

417,8

417,8

417,8

236,2

236,2

Monu

mento

s natu

rales,

núm

ero31

No.

1824

1819

1919

1919

19Mo

nume

ntos n

atural

es, ár

ea t

otal

3210

00 ha

14,2

17,2

1,51,6

1,61,6

1,61,6

1,6Ár

ea d

e man

ejo d

e háb

itat/e

spec

ies, n

úmero

33No

.19

322

121

621

922

022

022

022

122

1Ár

ea d

e man

ejo d

e háb

itat/e

spec

ies, á

rea to

tal34

1000

ha54

8,172

3,919

1,519

5,619

9,719

9,719

9,715

0,915

0,9Pa

isaje

terres

tre y

marin

o pro

tegido

, núm

ero35

No.

2135

2727

2828

2822

22Pa

isaje

terres

tre y

marin

o pro

tegido

, área

total

3610

00 ha

1.054

,11.2

25,8

1.158

,11.1

58,1

1.975

,71.9

75,7

1.975

,798

8,098

8,0Ár

ea p

roteg

ida co

n rec

ursos

man

ejado

s, nú

mero

37No

.14

716

315

415

515

515

515

515

315

3Ár

ea p

roteg

ida co

n rec

ursos

man

ejado

s, áre

a tota

l38

1000

ha13

0,814

6,813

0,813

0,813

0,813

0,813

0,811

0,011

0,0Nú

mero

total

de es

pecie

s ame

naza

das

39No

.85

186

21.1

541.3

481.4

471.6

97Ta

sa de

varia

ción

anua

l del

núme

ro tot

al%

0,633

,916

,83,6

8,3de

esp

ecies

ame

naza

das

Núme

ro de

esp

ecies

ame

naza

das,

Mamí

feros

40No

.48

4851

5161

83Nú

mero

de e

spec

ies am

enaz

adas,

Ave

s41

No.

100

100

102

130

9795

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, R

eptile

s42

No.

125

125

125

128

132

129

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, A

nfibio

s43

No.

1410

174

178

180

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, P

eces

44No

.9

1628

238

040

5Nú

mero

de e

spec

ies am

enaz

adas,

Molu

scos

45No

.3

33

3Nú

mero

de e

spec

ies am

enaz

adas,

Inve

rtebra

dos

46No

.18

1515

2223

3Nú

mero

de e

spec

ies am

enaz

adas,

Plan

tas47

No.

545

545

565

574

569

Page 349: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

347

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: CARIBE

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

AGUA

DUL

CEPo

rcenta

je de

la p

oblac

ión co

n ac

ceso

al ag

ua p

otable

48%

71,9

80,5

82,3

86,2

82,8

Porce

ntaje

de la

pob

lación

con

acce

so49

%60

,969

,073

,1al

agua

pota

ble, r

ural

Porce

ntaje

de la

pob

lación

con

acce

so50

%91

,190

,088

,9al

agua

pota

ble, u

rbana

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so51

%66

,969

,271

,669

,273

,5a s

ervici

os d

e san

eami

ento

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

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so52

%54

,856

,557

,1a s

ervici

os d

e san

eami

ento,

rural

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so53

%77

,979

,883

,3a s

ervici

os d

e san

eami

ento,

urba

naPro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a de a

gua d

ulce

54kt

27,9

37,6

48,1

47,0

48,2

39,0

33,6

37,6

33,3

37,1

28,2

30,8

Produ

cción

de p

esca d

e agu

a dulc

e, ca

ptura

55kt

17,2

11,8

9,67,2

6,03,9

3,94,9

4,95,2

3,94,0

Produ

cción

de p

esca d

e agu

a dulc

e, ac

uicult

ura56

kt10

,825

,838

,539

,942

,235

,129

,732

,828

,331

,924

,326

,8Pro

porci

ón d

el tot

al de

recu

rsos h

ídrico

s utili

zada

57%

1,23,7

5,7Ex

tracc

ión d

e agu

a, tot

al58

1.000

Km3

985,0

14.75

7,013

.370,0

16,6

26,6

Extra

cción

de a

gua p

or ha

bitan

te59

m3 / Ha

b29

,341

2,635

4,10,4

0,7Ex

tracc

ión d

e agu

a en

agric

ultura

60%

94,0

72,9

67,7

Extra

cción

de a

gua e

n el

sector

indu

strial

61%

0,61,2

9,4Ex

tracc

ión d

e agu

a en

el sec

tor d

omést

ico62

%5,4

25,8

23,0

ÁREA

S COS

TERA

S Y M

ARIN

ASPro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na63

kt23

8,814

4,816

1,016

6,715

6,517

7,719

8,116

7,714

5,613

4,710

5,711

0,3Pro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na, c

aptur

a64

kt23

7,414

3,215

8,916

6,615

6,317

7,119

7,316

6,514

4,913

3,910

4,510

9,1Pro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na, a

cuicu

ltura

65kt

1,31,6

2,10,2

0,20,6

0,81,2

0,80,9

1,21,2

Área

s mari

nas p

roteg

idas

6610

00 ha

4.081

,24.5

14,0

4.516

,14.5

16,1

4.704

,34.7

02,8

4.702

,84.7

36,1

4.736

,24.7

36,2

4.736

,24.7

36,2

Área

total

de m

angla

r67

1000

ha79

4,378

4,678

3,0

ATMÓ

SFER

AEm

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

)68

kt26

.570,0

29.94

1,030

.222,0

29.53

8,031

.653,0

32.73

1,034

.301,0

34.60

7,028

.435,0

28.53

4,0Em

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

) per

cápit

a69

tn / H

ab0,8

0,80,8

0,80,8

0,90,9

0,90,7

0,7Em

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

) por

70tn

/ Mill

US$

416,7

425,5

395,2

368,2

375,5

370,0

378,7

368,2

296,1

289,8

dólar

PPA

del P

IB20

00 PP

APo

r com

busti

bles f

ósile

s gase

osos

72kt

2.742

,03.5

58,0

3.800

,04.5

10,0

5.252

,05.4

67,0

5.964

,06.2

22,0

6.598

,06.9

34,0

Por c

ombu

stible

s fós

iles l

íquido

s73

kt22

.022,0

24.79

8,024

.716,0

23.73

4,025

.087,0

26.02

4,026

.983,0

26.91

4,020

.135,0

20.10

4,0Po

r com

busti

bles f

ósile

s sóli

dos

74kt

370,0

467,0

466,0

569,0

533,0

433,0

527,0

580,0

838,0

622,0

Emisi

ones

de p

artícu

las (p

ar)75

kt18

,021

,123

,223

,323

,623

,923

,422

,321

,720

,8Em

ision

es de

dióx

ido d

e azu

fre (S

O2)

76kt

433,7

380,5

561,0

570,3

520,9

594,9

Emisi

ones

de ó

xidos

de n

itróge

no (N

Ox)

77kt

475,4

492,0

509,3

507,5

529,4

532,8

Emisi

ones

de h

idroc

arburo

s (HC

)78

kt13

2,232

,629

,329

,128

,525

,6Em

ision

es de

mon

óxido

de c

arbon

o (C

O)79

kt95

4,370

3,099

8,01.0

94,2

841,1

1.055

,2Em

ision

es de

meta

no, t

otal

80kt

441,4

524,0

555,6

384,8

Por e

nergí

a81

kt10

,717

,616

,411

8,0Po

r agri

cultu

ra82

kt71

,812

5,814

0,116

1,7Po

r otra

s fue

ntes

83kt

67,3

71,2

73,8

105,2

Cons

umo

de su

stanc

ias q

ue ag

otan

la ca

pa84

tn PA

O1.7

89,0

1.841

,41.7

53,7

1.582

,11.9

05,9

1.629

,71.6

18,5

1.350

,81.1

07,0

1.117

,268

3,965

4,727

1,1de

ozo

no, t

otal

Cons

umo

de su

stanc

ias q

ue ag

otan

la ca

pa d

e85

tn PA

O1.7

82,4

1.670

,91.6

05,1

1.317

,11.7

03,7

1.366

,91.3

85,7

1.187

,799

3,798

2,954

4,446

4,414

1,3oz

ono,

Cloro

fluoro

carbo

nos C

FCs

Cons

umo

de su

stanc

ias q

ue ag

otan

la ca

pa d

e ozo

no,

86tn

PAO

6,644

,422

,638

,649

,560

,570

,662

,343

,482

,399

,115

6,012

3,1Hi

droclo

rofluo

rocarb

onos

HCF

CsCo

nsum

o de

susta

ncias

que

agota

n la

capa

de o

zono

,87

tn PA

O12

6,112

6,022

6,415

2,720

2,316

2,210

0,869

,952

,040

,434

,36,7

Brom

uro d

e meti

lo

ASEN

TAMI

ENTO

HUM

ANO

Dens

idad

de p

oblac

ión88

Hab/K

m14

3,115

2,415

5,915

7,615

9,316

0,916

2,616

4,216

5,816

7,316

8,917

0,417

1,917

3,4Po

blació

n urb

ana

891.0

00,0

18.11

0,020

.763,0

23.00

2,025

.040,0

Page 350: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

348

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: CARIBE

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Porce

ntaje

de la

pobla

ción q

ue vi

ve en

las z

onas

urban

as90

%53

,958

,160

,963

,2Ta

sa de

crec

imien

to an

ual d

e la p

oblac

ión u

rbana

91%

2,52,7

2,01,7

Pobla

ción

rural

1.000

,015

.465,0

15.00

2,014

.756,0

14.58

1,0Po

rcenta

je de

la p

oblac

ión q

ue vi

ve en

las z

onas

rurale

s%

46,1

41,9

39,1

36,8

Tasa

de cr

ecim

iento

anua

l de l

a pob

lación

rural

%0,1

-0,6

-0,3

-0,2

Núme

ro de

ciud

ades

con m

ás de

750.0

00 ha

b. o m

ás.92

No.

44

44

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

con

93%

22,1

23,4

24,6

25,7

más d

e 750

mil h

ab. o

más.

Núme

ro de

ciud

ades

que t

ienen

entre

500

.000

94No

.1

11

2y 1

milló

n de h

ab.

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

que t

ienen

95%

4,33,8

3,46,2

entre

500 m

il y 1

milló

n de h

ab.

Núme

ro de

ciud

ades

que t

ienen

entre

196

No.

44

44

y 5 m

illone

s de h

ab.

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

que t

ienen

97%

46,7

46,7

46,7

46,9

entre

1 y 5

millo

nes d

e hab

.Nú

mero

de ci

udad

es qu

e tien

en en

tre 5

98No

.y 1

0 millo

nes d

e hab

.Po

rcenta

je po

blació

n qu

e vive

en ci

udad

es qu

e tien

en99

%en

tre 5

y 10 m

illone

s de h

ab.

Núme

ro de

ciud

ades

con 1

0 millo

nes d

e hab

. o m

ás.10

0No

.Po

rcenta

je po

blació

n qu

e vive

en ci

udad

es co

n10

1%

más d

e 10 m

illone

s de h

ab.

Propo

rción

de l

a pob

lación

urba

na q

ue vi

ve en

tugu

rios

102

%27

,525

,0Lo

ngitu

d de

carr

eteras

103

Km14

2.327

,014

2.327

,0

DESA

STRE

S Y

VULN

ERAB

ILIDA

DNú

mero

de e

vento

s Natu

rales

y tec

nológ

icos,

total

108

No.

1623

1018

177

1418

1636

207

300

Inund

acion

es10

9No

.2

11

01

32

47

44

47

0To

rmen

tas, h

uraca

nes,

ciclon

es y t

ornad

os11

0No

.10

190

814

07

93

2314

216

0Te

rremo

tos11

1No

.0

01

00

00

01

20

03

0De

sliza

mien

tos y

ava

lanch

as11

2No

.0

00

00

00

00

10

00

0Te

mpera

turas

extre

mas

No.

00

00

00

00

00

00

00

Erupc

iones

volcá

nicas

114

No.

01

20

00

00

00

01

00

Sequ

íasNo

.0

00

10

11

00

20

00

0De

sastre

s tec

nológ

icos

116

No.

42

69

23

45

54

20

4Pé

rdida

s eco

nómi

cas p

or de

sastre

s natu

rales

117

Mill $

21.00

0,03.2

70,4

33,0

21.69

6,582

7,06,0

661,5

81,2

44,7

8.431

,72.1

85,0

0,01.6

22,7

0,0ex

tremo

s y te

cnoló

gicos

Inund

acion

es11

8Mi

ll $0,0

0,00,0

0,00,0

0,014

6,021

,544

,70,0

0,00,0

0,00,0

Torm

entas

, hura

cane

s, cic

lones

y torn

ados

119

Mill $

0,03.2

70,4

0,06.5

16,5

827,0

0,051

5,559

,70,0

8.428

,62.1

85,0

0,01.6

22,7

0,0Te

rremo

tos12

0Mi

ll $0,0

0,025

,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

Desli

zami

entos

y a

valan

chas

121

Mill $

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

Temp

eratur

as ex

trema

s12

2Mi

ll $0,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,0Eru

pcion

es vo

lcánic

as12

3Mi

ll $0,0

0,08,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,0Se

quías

124

Mill $

0,00,0

0,018

0,00,0

6,00,0

0,00,0

3,10,0

0,00,0

0,0De

sastre

s tec

nológ

icos

125

Mill $

21.00

0,00,0

0,015

.000,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,0Nú

mero

de p

erson

as afe

ctada

s por

desas

tres

126

No.

2.500

228.5

034.0

651.8

05.91

726

5.074

05.9

09.68

134

8.728

262.7

341.0

39.77

52.5

13.99

25.2

0058

2.527

0na

turale

s y te

cnoló

gicos

Inund

acion

es12

7No

.0

00

00

09.4

8063

.339

217.4

0841

.285

05.0

0091

.947

Torm

entas

, hura

cane

s, cic

lones

y torn

ados

128

No.

2.500

223.5

030

985.5

9526

5.001

05.9

00.18

728

5.270

10.10

099

8.192

2.513

.976

049

0.308

0Te

rremo

tos12

9No

.0

00

00

00

00

253

00

101

Desli

zami

entos

y a

valan

chas

130

No.

00

00

00

00

00

00

0Te

mpera

turas

extre

mas

131

No.

00

00

00

00

00

00

0Eru

pcion

es vo

lcánic

as13

2No

.0

5.000

4.000

00

00

00

00

200

0Se

quías

133

No.

00

082

0.000

00

00

35.00

00

00

0De

sastre

s tec

nológ

icos

134

No.

6532

273

1411

922

645

1617

1Pro

porci

ón d

e la p

oblac

ión en

situa

ción

de p

obrez

a%

46,9

44,9

54,4

47,5

44,5

Page 351: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

349

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: CARIBE

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Propo

rción

de l

a pob

lación

ocu

pada

con

ingres

os13

5%

2,02,0

53,9

2,02,6

inferi

ores a

$1 po

r día

según

la PP

ACo

eficie

nte d

e la b

recha

pob

reza

136

%22

,120

,527

,023

,021

,1Ta

sa de

dese

mpleo

de j

óven

es co

mo p

orcen

taje d

e13

7%

13,1

13,8

14,2

10,6

7,210

,513

,59,1

9,09,3

9,3la

pobla

ción

de jó

vene

s, am

bos s

exos

MEDI

O AM

BIENT

E Y SA

LUD

HUMA

NATa

sa bru

ta de

mort

alida

d inf

antil

138

* 100

0 Hab

45,0

37,9

31,9

26,3

Espera

nza d

e vida

feme

nina

139

Años

70,1

71,1

72,1

73,0

Espera

nza d

e vida

masc

ulina

140

Años

65,7

66,4

67,1

68,1

Ofert

a ca

lórica

141

Kcal/

día *

Hab

1.173

,52.1

89,5

2.305

,52.3

29,6

2.354

,72.4

08,8

2.423

,32.6

00,0

2.632

,02.7

74,1

2.180

,6Ca

sos r

eport

ados

de D

engu

e14

2No

.0

11.27

011

.432

25.76

68.4

909.2

6428

.308

16.86

114

.283

8.429

19.01

916

.860

32.21

111

.965

Caso

s rep

ortad

os d

e Mala

ria14

4No

.0

00

36.45

54.7

8518

.130

10.87

511

.133

11.36

613

.157

25.61

536

.264

0Ca

sos r

eport

ados

de C

ólera

145

No.

00

00

00

TEND

ENCI

AS S

OCIO

ECON

ÓMIC

ASPo

blació

n tota

l a m

itad d

e año

146

1000

33.57

8,037

.755,0

38.13

8,038

.514,0

38.88

7,039

.255,0

39.61

6,039

.978,0

40.33

0,040

.679,0

Tasa

de cr

ecim

iento

prome

dio an

ual d

e la p

oblac

ión14

7%

1,41,2

1,01,0

1,00,9

0,90,9

0,90,9

Tasa

de al

fabeti

zació

n de

adult

os, t

otal

148

%79

,997

,394

,197

,895

,3

Ho

mbres

149

%74

,197

,594

,097

,894

,5

Mu

jeres

150

%85

,997

,194

,297

,896

,0Esp

eranz

a de v

ida es

colar

151

años

12,4

12,4

12,6

12,8

12,9

13,0

13,3

13,4

13,7

13,5

Homb

res15

2añ

os12

,212

,212

,412

,512

,412

,612

,813

,012

,913

,0

Mu

jeres

153

años

12,6

12,6

12,8

13,0

13,3

13,5

13,8

13,9

14,6

14,0

Línea

s de t

eléfon

o fijo

154

* 100

Hab

22,7

30,2

33,2

35,5

38,0

41,8

43,6

32,2

29,6

31,0

29,4

25,0

22,0

Abon

ados

a tel

éfono

s celu

lares

155

* 100

Hab

0,62,5

3,83,9

6,26,5

9,914

,918

,624

,631

,860

,3Us

uario

s de i

nterne

t15

6* 1

00 H

ab0,1

0,50,7

1,42,9

4,06,3

7,810

,413

,27,5

Dime

nsión

del

parqu

e auto

motor

No.

00

093

6.083

1.090

.833

1.294

.998

1.436

.165

1.611

.023

1.680

.382

1.746

.756

1.900

.564

1.971

.011

2.121

.244

2.429

.562

Uso

de en

ergía

por h

abita

nte15

7kt

de p

etróle

o98

2,687

7,885

8,179

0,780

8,981

6,587

2,788

1,590

4,594

4,196

6,496

6,197

2,696

4,4eq

uivale

nteIm

porta

cione

s neta

s de e

nergí

a (%

de en

ergía

de15

8%

33,6

31,4

34,3

34,4

28,6

24,4

23,0

15,4

-3,8

-3,5

uso

de en

ergía

come

rcial)

Inten

sidad

energ

ética

del

produ

cto in

terno

brut

o15

91.0

00 b

arrile

s /1,9

2,12,1

2,22,1

2,12,2

2,22,0

2,12,2

2,22,2

2,1mi

llón

de d

ólares

cons

tantes

de P

IBOf

erta

energ

ética

reno

vable

160

kBEP

60.77

7,445

.555,7

47.08

4,043

.068,0

44.29

1,838

.899,4

37.87

0,138

.147,0

38.15

7,334

.276,3

35.54

7,331

.707,3

31.72

2,332

.902,6

Ofert

a en

ergéti

ca n

o ren

ovab

lekB

EP17

0.722

,616

1.383

,418

3.274

,518

9.905

,820

3.031

,621

4.244

,321

9.794

,924

2.351

,825

0.037

,922

7.978

,327

4.226

,229

4.282

,730

2.918

,028

1.743

,1Po

rcenta

je de

energ

ía co

nsum

ida d

e fue

ntes r

enov

ables

161

%15

,312

,512

,211

,111

,010

,710

,29,8

9,29,2

con

respe

cto al

total

de e

nergí

a con

sumi

daPro

ducc

ión to

tal d

e ene

rgía p

rimari

a por

habit

ante

162

TJ / H

ab0,0

0,00,0

0,00,0

0,0Pro

ducc

ión to

tal d

e ene

rgía g

eotér

mica

163

Tjoul

Produ

ción

total

de h

idroe

nergí

a16

4Tjo

ul5.1

42,2

9.527

,56.7

59,5

5.452

,07.2

01,5

9.216

,410

.553,2

12.09

7,210

.875,3

10.99

3,6Pro

ducc

ión to

tal d

e ene

rgía p

or pro

ducto

s de c

aña

165

kbep

23.03

6,023

.369,0

18.84

9,019

.389,0

19.64

2,019

.322,0

16.68

4,015

.398,0

12.73

7,08.3

82,0

9.140

,0Pro

ducc

ión to

tal d

e carb

ón m

ineral

166

Tone

ladas

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

Métri

cas

Produ

cción

total

de g

as na

tural

167

Mm3

7.826

,013

.746,9

16.13

7,017

.225,9

19.78

6,527

.558,0

29.13

2,534

.034,2

42.57

1,644

.036,0

43.45

5,0Pro

ducc

ión to

tal d

e leñ

a16

8kb

ep26

.875,0

21.40

0,018

.755,0

21.34

6,5Pro

ducc

ión to

tal d

e petr

óleo

169

1.000

barr

iles

59.41

1,063

.891,0

68.56

2,067

.812,0

78.43

9,083

.097,0

73.78

4,079

.057,0

78.13

8,067

.855,0

70.57

7,0po

r día

Produ

cción

de

electr

icida

d17

0Gw

h26

.145,0

29.57

6,034

.275,0

35.26

5,035

.425,0

37.10

5,039

.428,0

42.65

4,044

.526,0

44.65

7,044

.016,0

46.68

2,049

.493,0

50.10

9,0Po

r fue

ntes d

e carb

ón17

1%

del to

tal0,2

0,70,8

2,11,8

0,71,4

1,56,4

4,72,9

Por f

uente

s de h

idroe

nergí

a17

2%

del to

tal3,8

3,53,2

3,54,8

3,32,5

3,23,8

4,65,4

Por f

uente

s de g

as17

3%

del to

tal13

,614

,514

,514

,614

,614

,614

,213

,614

,414

,315

,9Po

r fue

ntes n

uclea

res17

4%

del to

tal0,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

Por f

uente

s de p

etróle

o17

5%

del to

tal77

,378

,878

,677

,276

,479

,079

,679

,473

,374

,574

,8Ing

reso

Nacio

nal B

ruto

por h

abita

nte (m

étodo

Atla

s)17

6$

47.15

0,055

.090,0

60.78

0,062

.080,0

65.92

0,069

.860,0

70.56

0,060

.930,0

40.08

0,044

.640,0

48.80

0,030

.450,0

Page 352: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

350

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: CARIBE

Notas

:

1In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es en

el p

erío

do d

e 199

0 al

2005

2No

se in

cluye

Ang

uila

por c

arec

er d

e inf

orma

ción

para

los a

ños d

e 199

0 al

2005

3Se

exclu

ye p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n An

guila

(199

0-20

05)

4Se

exclu

yen p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n los

sigu

ientes

paíse

s: An

guila

(199

0-20

05),

Antil

lasNe

erlan

desa

s (19

90-2

005)

, Aru

ba (1

990-

2005

), Isla

s Caim

án (1

990-

2005

), Mon

tserra

t (199

0-20

05) y

Turca

s y C

aicos

(199

0-20

05)

5Se

exclu

ye p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n A

ngui

la (1

990-

2005

)

6Se

exc

luye

n: A

ngui

la (1

990-

2005

), Gu

adalu

pe (1

990-

2005

), Isl

as C

aimán

(199

0-20

05) y

Mar

tinica

(199

0-20

05)

7No

se in

cluye

Ang

uila

por c

arec

er d

e inf

orma

ción

para

los a

ños d

e 199

0 al

2005

8Lo

s sigu

ientes

paíse

s se e

xclu

yen p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n: A

ngui

la (1

990-

2002

), Ant

igua

y Bar

buda

(199

0-20

02),

Antil

las N

eerla

ndes

as (1

990-

2002

), Ar

uba (

1990

-200

2), D

omin

ica(19

90-2

002),

Gran

ada (

1990

-200

2), Is

las C

aimán

(199

0-20

02), I

slas V

írgen

es (E

stado

s Unid

os)

(199

0-20

02), I

slas V

írgen

es B

ritán

icas (

1990

-200

2), M

ontse

rrat (1

990-

2002

), San

Cris

tóba

l yNe

vis (1

990-

2002

) y Tu

rcas y

Caic

os (1

990-

2002

)

9Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

Guya

na: (

2002

-200

5)

10In

cluye

info

rmac

ión d

e los

paíse

s: Ba

rbad

os (2

002-

2005

), Cub

a (20

02-2

005)

, Jama

ica (2

002-

2005

) y T

rinid

ad y

Toba

go (2

002-

2005

)

11Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

Guy

ana (

2002

-200

5)

12In

cluye

info

rmac

ión d

e los

paíse

s: Ba

rbad

os (2

002-

2005

), Cub

a (20

02-2

005)

, Jama

ica (2

002-

2005

) y T

rinid

ad y

Toba

go (2

002-

2005

)

13Se

exclu

yen p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n los

sigu

ientes

paíse

s: An

guila

(199

0-20

05),

Antil

lasNe

erlan

desa

s (19

90-2

005)

, Aru

ba (1

990-

2005

), Ba

rbad

os (1

990-

2005

), Isl

as C

aimán

(199

0-20

05),

Islas

Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s) (1

990-

2005

) y Tu

rcas y

Caic

os (1

990-

2005

)

14In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Bah

amas

(199

0, 2

000

y 20

05),

Cuba

(199

0, 2

000

y20

05),

Guad

alupe

(199

0, 2

000

y 200

5), H

aití (

1990

, 200

0 y 2

005)

, Jam

aica (

1990

, 200

0 y

2005

), M

artin

ica (1

990,

200

0 y 2

005)

y Tri

nida

d y T

obag

o (1

990,

200

0 y 2

005)

15In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Ant

igua

y Ba

rbud

a (1

995

y 20

05),

Baha

mas (

1990

,19

95 y

200

5), C

uba

(199

0, 1

995

y 20

05),

Domi

nica

(199

5), G

rana

da (1

995)

, Gua

dalu

pe(1

995,

200

0 y

2005

), Ha

ití (1

990,

199

5, 2

000

y 20

05),

Islas

Vírg

enes

Brit

ánica

s (19

95),

Jamaic

a (19

90, 1

995,

2000

y 20

05), M

artin

ica (1

990,

1995

, 200

0 y 20

05), M

ontse

rrat (1

995)

,Pu

erto

Rico

(199

0, 19

95 y

2000

), Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

990,

1995

y 20

00), S

an C

ristó

bal

y Nev

is (1

995 y

2000

), San

ta Lu

cía (1

995 y

2000

), San

ta Lu

cía (1

995 y

2000

), San

Vice

nte y

las G

rana

dina

s (19

95 y

2000

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990,

199

5, 2

000

y 200

5)

16Se

exclu

yen

por c

arec

er d

e inf

orma

ción

los s

iguien

tes p

aíses

: Ang

uila

(199

0, 1

995

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0),

Antil

las N

eerla

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990

y 199

5), A

ruba

, Bar

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s (19

90 y

1995

), Isl

as C

aimán

(199

0 y

1995

), Isla

s Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s) (1

990 y

1995

) y Tu

rcas y

Caic

os (1

990 ,

1995

y 20

00)

17Se

exclu

ye A

ruba

(200

0 y 2

005)

por

care

cer d

e inf

orma

ción

18In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Cub

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000

y 20

08),

Guad

alupe

(200

0 y

2008

), Ha

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000 y

2008

), Jam

aica (

2000

y 20

08),

Mar

tinica

(200

0 y 20

08),

Puer

to R

ico (2

000 y

2008

),Re

públ

ica D

omin

icana

(200

0 y 2

008)

y Tri

nida

d y T

obag

o (2

000

y 200

8)

19In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Cub

a (20

00),

Guad

alupe

(200

0), H

aití (

2000

), Jam

aica

(200

0), M

artin

ica (2

000)

, Pue

rto R

ico (2

000)

, Rep

úblic

a Do

mini

cana

(200

0) y

Trin

idad

yTo

bago

(200

0)

20In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Bah

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(199

0-20

06),

Cuba

(199

0-20

06),

Guad

alupe

(199

0-20

06),

Haití

(199

0-20

06),

Jamaic

a (1

990-

2006

), M

artin

ica (1

990-

2006

), Pu

erto

Rico

(199

0-20

06),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

990-

2006

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990-

2006

)

21In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Bah

amas

(199

0-20

06),

Cuba

(199

0-20

06),

Guad

alupe

(199

0-20

06),

Haití

(199

0-20

06),

Jamaic

a (1

990-

2006

), M

artin

ica (1

990-

2006

), Pu

erto

Rico

(199

0-20

06),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

990-

2006

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990-

2006

)

22Inc

luye i

nform

ación

para

los pa

íses:

Cuba

(199

0-20

06), G

uada

lupe (

1990

-200

6), H

aití (1

990-

2006

), Jam

aica

(199

0-20

06),

Mar

tinica

(199

0-20

06),

Puer

to R

ico (1

990-

2006

), Re

públ

icaDo

mini

cana

(199

0-20

06) y

Trin

idad

y To

bago

(199

0-20

06)

23In

cluye

info

rmac

ión

para

Cub

a (19

90-2

006)

24In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Bar

bado

s (20

05 y

200

6), C

uba

(199

0-20

06),

Jamaic

a(1

990-

2006

), M

artin

ica (1

990-

2006

) y R

epúb

lica D

omin

icana

(199

0-20

06)

25Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

Angu

ila y

Aru

ba p

or c

arec

er d

e in

form

ació

n pa

ra lo

sañ

os d

e 199

0 al

2004

26Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

Angu

ila y

Aru

ba p

or c

arec

er d

e in

form

ació

n pa

ra lo

sañ

os d

e 199

0 al

2004

27Inc

luye i

nform

ación

para

los pa

íses:

Islas

Caim

án (1

990-

2003

), Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

995)

y Trin

idad

y To

bago

(199

0-20

03)

28Inc

luye i

nform

ación

para

los pa

íses:

Islas

Caim

án (1

990-

2003

), Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

995)

y Trin

idad

y To

bago

(199

0-20

04)

29Se

exclu

yen p

or fa

lta de

infor

mació

n los

sigu

ientes

paíse

s: An

guila

(199

0-20

03), A

ruba

(199

0-20

03),

Gran

ada

(199

0-20

03),

Jamaic

a (1

990-

2003

), M

artin

ica (1

990-

2003

), Pu

erto

Rico

(199

0-20

03),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

991-

2003

), Sa

nta L

ucía

(199

0-20

03) y

San V

icent

e ylas

Gra

nadi

na (1

990-

2003

)

30Se

exclu

yen p

or fa

lta de

infor

mació

n los

sigu

ientes

paíse

s: An

guila

(199

0-20

03), A

ruba

(199

0-20

03),

Gran

ada

(199

0-20

03),

Jamaic

a (1

990-

2003

), M

artin

ica (1

990-

2003

), Pu

erto

Rico

(199

0-20

03),

Repú

blic

a Do

min

ican

a (1

991-

2003

), Sa

nta

Lucí

a (1

990-

2003

) y S

anVi

cent

e\Gr

anad

ina

(199

0-20

03)

31Se

exclu

yen p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n los

paíse

s: An

guila

(199

0-20

03), A

ntigu

a y B

arbu

da(1

990-

2003

), Ant

illas

Nee

rland

esas

(199

0-20

03), A

ruba

(199

0-20

03), B

aham

as (1

990-

2003

),Cu

ba (1

990-

2003

), Do

mini

ca (1

990-

2003

), Gr

anad

a (19

90-2

003)

, Gua

dalu

pe (1

990-

2003

),Ha

ití (1

990-

2003

), Isl

as C

aimán

(199

0-20

03),

Mar

tinica

(199

0-20

03),

Puer

to R

ico (1

990-

2003

), Re

públ

ica

Dom

inic

ana

(199

6-20

03),

San

Crist

óbal

y N

evis

(199

0-20

03),

San

Vice

nte\

Gran

adin

a (19

90-2

003)

y Tri

nida

d y T

obag

o (1

990-

1997

)

32Se

exclu

yen p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n los

paíse

s: An

guila

(199

0-20

03), A

ntigu

a y B

arbu

da(1

990-

2003

), Ant

illas

Nee

rland

esas

(199

0-20

03), A

ruba

(199

0-20

03), B

aham

as (1

990-

2003

),Cu

ba (1

990-

2003

), Do

mini

ca (1

990-

2003

), Gr

anad

a (19

90-2

003)

, Gua

dalu

pe (1

990-

2003

),Ha

ití (1

990-

2003

), Isl

as C

aimán

(199

0-20

03),

Mar

tinica

(199

0-20

03),

Puer

to R

ico (1

990-

2003

), Re

públ

ica

Dom

inic

ana

(199

6-20

03),

San

Crist

óbal

y N

evis

(199

0-20

03),

San

Vice

nte\

Gran

adin

a (19

90-2

003)

y Tri

nida

d y T

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o (1

990-

1997

)

33Se

exclu

yen p

or ca

rece

r de i

nfor

mació

n los

sigu

ientes

paíse

s: An

guila

(199

6-20

03), A

ntigu

ay

Barb

uda

(199

6-20

03),

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las N

eerla

ndes

as (1

996-

2003

), Ar

uba

(199

6-20

03),

Gran

ada

(199

6-20

03),

Haití

(199

6-20

03),

Jamaic

a (19

96-2

003)

, Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

996-

2003

)y S

an C

ristó

bal y

Nev

is (1

996-

2003

)

34Se

exclu

yen p

or ca

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nfor

mació

n los

sigu

ientes

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guila

(199

6-20

03), A

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Barb

uda

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6-20

03),

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las N

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ndes

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2003

), Ar

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6-20

03),

Gran

ada

(199

6-20

03),

Haití

(199

6-20

03),

Jamaic

a (19

96-2

003)

, Rep

úblic

a Dom

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na (1

996-

2003

)y S

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bal y

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996-

2003

)

35Inc

luye i

nform

ación

para

los pa

íses:

Cuba

(199

0-20

01), G

uada

lupe (

1990

-200

3), H

aití (1

990-

2003

), Jam

aica

(199

9-20

03),

Mar

tinica

(199

0-20

03),

Mon

tserra

t (19

90-2

003)

, Re

públ

icaDo

mini

cana

(199

0-19

95) y

Trin

idad

y To

bago

(199

0-20

03)

36Inc

luye i

nform

ación

para

los pa

íses:

Cuba

(199

0-20

01), G

uada

lupe (

1990

-200

3), H

aití (1

990-

2003

), Jam

aica

(199

9-20

03),

Mar

tinica

(199

0-20

03),

Mon

tserra

t (19

90-2

003)

, Re

públ

icaDo

mini

cana

(199

0-19

95) y

Trin

idad

y To

bago

(199

0-20

03)

37Se

inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

par

a lo

s sigu

ientes

país

es:

Cuba

(199

0-20

01),

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nica (

1990

-200

3), G

ranad

a (19

90-2

003),

Jama

ica (1

999-

2003

), Mon

tserra

t (199

0-20

03),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

995)

, San

ta Lu

cía (1

990-

2003

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990-

2003

).

38Se

inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

par

a lo

s sigu

ientes

país

es:

Cuba

(199

0-20

01),

Domi

nica (

1990

-200

3), G

ranad

a (19

90-2

003),

Jama

ica (1

999-

2003

), Mart

inica

(199

0-20

03),

Sant

a Luc

ía (1

990-

2003

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990-

2003

).

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Produ

cto In

terno

Brut

o, cre

cimien

to an

ual

177

%3,7

4,33,4

5,34,8

2,03,2

3,03,6

8,09,4

6,2

Agri

cultu

ra, va

lor ag

regad

o17

8%

del P

IB8,6

7,67,3

6,66,6

6,46,5

6,36,2

5,85,1

4,84,8

I

ndus

tria, v

alor a

grega

do17

9%

del P

IB29

,126

,427

,126

,627

,127

,326

,526

,627

,027

,026

,726

,926

,0

Serv

icios

, valo

r agre

gado

180

% de

l PIB

59,7

61,6

61,6

62,3

62,2

62,1

63,3

63,6

63,6

64,0

64,6

64,2

64,8

Expo

rtacio

nes d

e bien

es y s

ervici

os18

1%

del P

IB39

,059

,157

,259

,160

,462

,964

,538

,347

,347

,941

,4Im

porta

cione

s de b

ienes

y serv

icios

182

% de

l PIB

41,2

75,4

77,2

77,4

79,0

79,1

79,3

47,7

51,1

49,9

43,9

Relac

ión en

tre el

servi

cio d

e la d

euda

exter

na18

3%

del P

IB6,5

6,04,4

3,43,7

4,24,4

4,96,9

5,94,6

y el p

roduc

to na

ciona

l brut

oGa

sto p

úblic

o en

educ

ación

184

% de

l PIB

4,03,7

4,34,2

4,25,0

5,34,6

Gasto

en in

vesti

gació

n y d

esarro

llo%

del P

IB0,4

0,40,4

0,40,4

0,40,1

Médic

os18

7No

.45

.239

63.61

670

.897

78.74

173

.219

68.52

182

.271

82.10

882

.863

99.52

685

.910

86.43

910

3.895

Page 353: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

351

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: CARIBE

39, 4

0, 4

1, 4

2, 4

3, 4

4

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s año

s 200

0, 2

002-

2004

y 20

06

45In

cluye

info

rmac

ión

para

los a

ños 2

002,

200

4 y 2

006

46, 4

7In

cluye

info

rmac

ión

para

los a

ños 2

000,

200

2, 2

004

y 200

6

48Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

los p

aíses

: Ant

illas

Nee

rland

esas

(199

0, 2

002

y 200

4),

Arub

a (19

90), C

uba (

1990

), Gra

nada

(199

0), G

uada

lupe

(199

0), Is

las C

aimán

(199

0, 20

02 y

2004

), Isla

s Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s ) (1

990,

2002

y 20

04), I

slas V

írgen

es B

ritán

icas (

1990

),Jam

aica (

1990

); Mart

inica

(199

0, 20

02 y

2004

), Pue

rto Ri

co (1

990,

2002

y 20

04), S

an Vi

cente

/Gr

anad

inas

(199

0, 2

002

y 200

4) y

Turca

s y C

aicos

(199

0)

49In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses:

Angu

ila (2

002)

, Ant

igua y

Barb

uda (

2002

y 20

04), A

ruba

(200

2 y 20

04), B

aham

as (2

002 y

2004

), Bar

bado

s (19

90, 2

002 y

2004

), Cub

a (20

02 y

2004

),Do

mini

ca (2

002

y 20

04),

Gran

ada

(200

2 y

2004

), Gu

adalu

pe (2

002

y 20

04),

Haití

(199

0,20

02 y

200

4), I

slas V

írgen

es B

ritán

icas (

2002

y 2

004)

, Jam

aica

(200

2 y

2004

), M

ontse

rrat

(200

2 y 2

004)

, Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

990,

200

2 y 2

004)

, San

Cris

tóba

l y N

evis

(200

2 y

2004

), San

ta Lu

cía (2

002 y

2004

), San

ta Lu

cía (2

002 y

2004

), San

Vice

nte/G

rana

dina

s (20

02y 2

004)

, Trin

idad

y To

bago

(199

0, 2

002

y 200

4) y

Turca

s y C

aicos

(200

2 y 2

004)

50In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Ang

uila

(200

2 y

2004

), An

tigua

y B

arbu

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002

y20

04),

Antig

ua y

Bar

buda

(199

5 y

2005

), Ar

uba

(200

2 y

2004

), Ba

hama

s (19

90, 2

002

y20

04),

Barb

ados

(199

0, 20

02 y

2004

), Cu

ba (2

002 y

2004

), Do

mini

ca (1

990,

2002

y 20

04),

Gran

ada (

2002

y 20

04), G

uada

lupe

(200

2 y 20

04), H

aití (1

990,

2002

y 20

04), I

slas V

írgen

esBr

itáni

cas (

1990

, 200

2 y

2004

), Jam

aica

(199

0, 2

002

y 20

04),

Mon

tserra

t (20

02 y

200

4),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

990,

200

2 y

2004

), Sa

n Cr

istób

al y

Nevis

(200

2 y

2004

), Sa

nta

Lucía

(200

2 y

2004

), Sa

nta

Lucía

(200

2 y

2004

), Sa

n Vi

cent

e/Gra

nadi

nas (

2002

y 2

004)

,Tri

nida

d y T

obag

o (1

990,

200

2 y 2

004)

y Tu

rcas y

Caic

os (2

002

y 200

4)

51In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Ang

uila

(200

2 y

2004

), An

tigua

y B

arbu

da (2

002

y20

04),

Antig

ua y

Bar

buda

(200

2 y

2004

), Ar

uba

(200

2 y

2004

), Ba

hama

s (20

02 y

200

4),

Barb

ados

(199

0, 20

02 y

2004

), Cub

a (20

02 y

2004

), Dom

inica

(199

0, 20

02 y

2004

), Gra

nada

(200

2 y 20

04), G

uada

lupe

(200

2 y 20

04), H

aití (1

990,

2002

y 20

04), I

slas V

írgen

es Br

itáni

cas

(2002

y 20

04), J

amaic

a (19

90, 2

002 y

2004

), Mon

tserra

t (200

2 y 20

04), R

epúb

lica D

omini

cana

(199

0, 20

02 y

2004

), San

Cris

tóba

l y N

evis

(200

2 y 20

04), S

anta

Lucía

(200

2 y 20

04), S

anta

Lucía

(200

2 y 20

04), S

an V

icent

e/Gra

nadi

nas (

2002

y 20

04), T

rinid

ad y

Toba

go (1

990,

2002

y 200

4) y

Turca

s y C

aicos

(200

2 y 2

004)

52Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

los p

aíses

: ang

uila

(200

4), A

ntill

as N

eerla

ndes

as (2

002

y 200

4), A

ruba

(200

2 y 20

04), C

uba (

1990

), Gra

nada

(199

0), G

uada

lupe

(199

0), H

aití (1

990)

,Isl

as C

aimán

(199

0, 20

02 y

2004

), Isla

s Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s ) (1

990,

2002

y 20

04), I

slas

Vírge

nes B

ritán

icas (

1990

), Jam

aica (

1990

); Mart

inica

(199

0, 20

02 y

2004

), Mon

tserra

t (199

0),Pu

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Rico

(199

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y 20

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Repú

blica

Dom

inica

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, San

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, San

Vice

nte/G

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dina

s (19

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Turca

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(199

0)

53In

cluye

info

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ión

para

los p

aíses

: Ang

uila

(200

2 y

2004

), An

tigua

y B

arbu

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002

y20

04),

Antig

ua y

Bar

buda

(200

2 y

2004

), Ar

uba

(200

2 y

2004

), Ba

hama

s (19

90, 2

002

y20

04), B

arbad

os (1

990,

2002

y 20

04), C

uba (

2002

y 20

04), D

omini

ca (2

002 y

2004

), Gran

ada

(200

2 y 20

04), G

uada

lupe

(200

2 y 20

04), H

aití (1

990,

2002

y 20

04), I

slas V

írgen

es Br

itáni

cas

(200

2 y

2004

), Jam

aica

(200

2 y

2004

), M

ontse

rrat (

2002

y 2

004)

, Rep

úblic

a Do

mini

cana

(199

0, 20

02 y

2004

), San

Cris

tóba

l y N

evis

(200

2 y 20

04), S

anta

Lucía

(200

2 y 20

04), S

anta

Lucía

(200

2 y 20

04), T

rinid

ad y

Toba

go (1

990,

2002

y 20

04) y

Turca

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(200

2 y 20

04)

54In

cluye

info

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ión

para

los s

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aíses

: Ba

hama

s (19

90-1

992)

, Cub

a (1

990-

2006

),Do

mini

ca (1

992-

2004

), Gu

adalu

pe (1

990-

2006

), Ha

ití (1

990-

2006

), Isl

as V

írgen

es (E

stado

sUn

idos

)(200

6),

Jamaic

a (1

990-

2006

), M

artin

ica (1

990-

2006

), Pu

erto

Rico

(199

0-20

06),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

990-

2006

), San

ta Lu

cía (1

992-

2005

), San

Vice

nte/G

ranad

inas (

1996

-19

97) y

Trin

idad

y To

bago

(199

0-20

03)

55Inc

luye i

nform

ación

para

los si

guien

tes pa

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Cuba

(199

0-20

06), H

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990-

2006

), Jam

aica

(1990

-200

6), Re

públi

ca D

omini

cana

(199

0-20

06), M

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ca (2

003)

y San

Vice

nte/G

ranad

inas

(199

6 y 1

997)

56In

cluye

la si

guien

te in

form

ació

n: C

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(199

0-20

06),

Domi

nica

(199

2-20

04),

Guad

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(199

0-20

06, J

amai

ca (1

990-

2006

), M

artin

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(199

0-20

06),

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(199

0-20

06),

Repú

blica

Dom

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na (1

990-

2006

), Trin

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y To

bago

(199

0-20

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enes

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para

los s

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tes p

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: Ant

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(199

0), B

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2000

),Cu

ba (1

995 y

2000

), Dom

inica

(199

5 y 20

00), H

aití (1

990 y

2000

), Jam

aica (

1995

y 20

00) y

Trini

dad

y Tob

ago

(199

5 y 2

000)

58In

cluye

info

rmac

ión

para

los s

iguien

tes p

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: Bar

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s (20

00),

Cuba

(199

5 y 2

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, Hait

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990 y

2000

), Isla

s Vírg

enes

Britá

nica

s (19

95 y

2000

), Rep

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a Dom

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na (1

995 y

2000

),y T

rinid

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995

y 200

0)

59In

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info

rmac

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os si

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tes pa

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1990

), B

arba

dos (

2000

),Cu

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000)

, Hait

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90 y

2000

), Jam

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2000

), Re

públ

ica D

omin

icana

(200

0) y

Trini

dad

y Tob

ago

(200

0)

60In

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info

rmac

ión

para

los s

iguien

tes p

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: Ant

igua y

Bar

buda

(199

0), B

arba

dos (

2000

),Cu

ba (1

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y 20

00),

Haití

(199

0 y

2000

), Jam

aica

(199

5 y

2000

), Re

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ica D

omin

icana

(199

5 y 2

000)

y Tri

nida

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995

y 200

0)

61In

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ión

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los s

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(199

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arba

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2000

),Cu

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y 20

00),

Haití

(199

0 y

2000

), Jam

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(199

5 y

2000

), Re

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ica D

omin

icana

(199

5 y 2

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) y Tr

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ad y

Toba

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995

y 200

0)

62In

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ión

para

los s

iguien

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: Ant

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Bar

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(199

0), B

arba

dos (

2000

),Cu

ba (1

995

y 20

00),

Haití

(199

0 y

2000

), Jam

aica

(199

5 y

2000

), Re

públ

ica D

omin

icana

(199

5 y 2

000)

y Tri

nida

d y T

obag

o (1

995

y 200

0)

63, 6

4Se

inclu

yen

todo

s los

país

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ara e

l per

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de 1

990

al 20

06

65In

cluye

info

rmac

ión

para

los s

iguien

tes p

aíses

: Bah

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(199

0-20

06),

Cuba

(199

0-20

04),

Mar

tinica

(199

0-20

06), P

uerto

Rica

(199

6-20

06), R

epúb

lica D

omin

icana

(199

0-19

97, 2

000-

2006

) y Sa

n Cr

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al y N

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(199

0-11

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66In

form

ació

n só

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nive

l reg

iona

l

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info

rmac

ión

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los a

ños:

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, 200

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005

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los s

iguien

tes pa

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or ca

rece

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nfor

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n: A

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la (1

990-

2004

), Isla

s Vírg

enes

(Estad

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990-

2004

), Pu

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Rico

(199

0-20

04) y

Turca

s y C

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(199

0-20

04)

69Ex

cluye

los s

iguien

tes p

aíses

por

care

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e inf

orma

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uila

(199

0, 2

000-

2004

), Isl

asVí

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s (Es

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Uni

dos)

(199

0, 2

000-

2004

), Pu

erto

Rico

(199

0, 2

000-

2004

) y T

urca

s yCa

icos (

1990

, 200

0-20

04)

70In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os si

guien

tes pa

íses d

e 199

0 al 2

004:

Ant

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Barb

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Gran

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, Jam

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Repú

blica

Dom

inica

na, S

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icent

e Gr

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los s

iguien

tes pa

íses p

or fa

lta de

info

rmac

ión:

Ang

uila

(199

0-20

04) y

Turca

s y C

aicos

(199

0-20

04)

73Ex

cluye

los s

iguien

tes pa

íses p

or fa

lta de

info

rmac

ión:

Ang

uila

(199

0-20

04) y

Turca

s y C

aicos

(199

0-20

04)

74Ex

cluye

los s

iguien

tes p

aíses

por

falta

de i

nfor

mació

n: A

ngui

la (1

990-

2004

), Isl

as V

írgen

esBr

itáni

cas

y Tur

cas y

Caic

os (1

990-

2004

)

75In

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info

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ión

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iguien

tes p

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, Cub

a (1

990-

2004

),Gr

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a (1

990-

2004

), Ha

ití (1

990-

2004

), Jam

aica

(199

0-20

04),

Repú

blica

Dom

inica

na(1

990-

2004

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990-

2004

)

76In

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info

rmac

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para

los s

iguien

tes p

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de

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, 199

4, 1

998,

199

9, 2

003

- 200

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rbad

os, C

uba,

Domi

nica

, Gra

nada

, Hait

í, Jam

aica,

Repú

blica

Dom

inica

na y

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yTo

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77In

cluye

info

rmac

ión

para

los s

iguien

tes p

aíses

de

1993

, 199

4, 1

998,

199

9, 2

003

- 200

6:Ba

rbad

os, C

uba,

Domi

nica

, Gra

nada

, Hait

í, Jam

aica,

Repú

blica

Dom

inica

na y

Trin

idad

yTo

bago

78In

cluye

info

rmac

ión

para

los s

iguien

tes p

aíses

de

1993

, 199

4, 1

998,

199

9, 2

003

- 200

6:Ba

rbad

os, C

uba,

Domi

nica

, Gra

nada

, Hait

í, Jam

aica,

Repú

blica

Dom

inica

na y

Trin

idad

yTo

bago

79In

cluye

info

rmac

ión

para

los s

iguien

tes p

aíses

de

1993

, 199

4, 1

998,

199

9, 2

003

- 200

6:Ba

rbad

os, C

uba,

Domi

nica

, Gra

nada

, Hait

í, Jam

aica,

Repú

blica

Dom

inica

na y

Trin

idad

yTo

bago

80Inc

luye i

nform

ación

para

los pa

íses:

Cuba

(199

0, 19

94, 1

996,

1998

, 200

0 y 20

02) y

Repú

blica

Domi

nica

na (1

990,

199

4, 1

998

y 200

0)

81In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses:

Barb

ados

(200

2) y

Repú

blica

Dom

inica

na (1

998 y

2002

)

82, 8

3In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os si

guien

tes pa

íses:

Cuba

(200

2) y

Repú

blica

Dom

inica

na (1

990,

1994

, 199

8 y 2

000)

84, 8

5In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Cub

a (1

990-

2006

) y R

epúb

lica

Domi

nica

na (1

992-

2006

)

86In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Cub

a (1

998-

2006

) y R

epúb

lica

Domi

nica

na (1

994-

2006

)

87In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Cub

a (1

995-

2006

) y R

epúb

lica

Domi

nica

na (1

993-

2006

)

88Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

a lo

s sigu

ientes

país

es: A

ngui

la (1

990,

200

0 y

2005

),An

tigua

y Ba

rbud

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90, 2

000 y

2005

), Do

mini

ca (1

990,

2000

y 20

05), G

uada

lupe

(199

0,20

00 y

200

5), I

slas C

aimán

(199

0, 2

000

y 20

05),

Islas

Vírg

enes

Brit

ánica

s (19

90, 2

000

y20

05),

Mar

tinica

(199

0, 2

000

y 20

05),

Mon

tserra

t (19

90, 2

000

y 20

05),

San

Crist

óbal

yNe

vis (1

990,

200

0 y 2

005)

y Tu

rcas y

Caic

os (1

990,

200

0 y 2

005)

89Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

a los

sigu

ientes

país

es: G

uada

lupe

(199

0, 2

000-

2008

),Isl

as C

aimán

(199

0, 2

000-

2008

) y M

artin

ica (1

990,

200

0-20

08)

90In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses e

n los

años

1990

, 200

0 y 20

05: C

uba,

Haití

y Re

públ

icaDo

mini

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91In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Cub

a (1

990,

199

5, 2

000

y 20

05),

Haití

(199

0, 1

995,

2000

y 20

05) y

Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

990,

199

5, 2

000

y 200

5)

92In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Cub

a (1

990,

199

5, 2

000

y 20

05),

Haití

(199

0, 1

995,

2000

y 20

05), P

uerto

Rico

(199

0, 19

95, 2

000 y

2005

) y R

epúb

lica D

omin

icana

(199

0, 19

95,

2000

y 20

05)

93In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Cub

a (1

990,

199

5, 2

000

y 20

05),

Haití

(199

0, 1

995,

2000

y 20

05), P

uerto

Rico

(199

0, 19

95, 2

000 y

2005

) y R

epúb

lica D

omin

icana

(199

0, 19

95,

2000

y 20

05)

94In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses:

Haití

(199

0, 19

95, 2

000 y

2005

), Jam

aica (

1990

, 199

5,20

00 y

2005

), Pue

rto R

ico (1

990,

1995

, 200

0 y 20

05) y

Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

990,

1995

,20

00 y

2005

)

95In

form

ació

n só

lo a

nive

l reg

iona

l

96In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

en

los a

ños 1

990,

199

5, 2

000

y 20

05: C

uba,

Haití

,Pu

erto

Rico

y Re

públ

ica D

omin

icana

97In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

en

los a

ños 1

990,

199

5, 2

000

y 20

05: C

uba,

Haití

yRe

públ

ica D

omin

icana

98, 9

9, 1

00, 1

01

No

hay d

atos

Page 354: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

352

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: CARIBE

102

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

paíse

s: An

guila

(199

0, 20

01 y

2005

), Ant

igua y

Bar

buda

(199

0,20

01 y

2005

), Do

mini

ca (1

990

y 200

1), G

rana

da (1

990,

200

1 y 2

005)

, Hait

í (19

90, 2

001

y20

05), J

amaic

a (19

90, 2

001 y

2005

), Mar

tinica

(199

0, 20

01 y

2005

), Rep

úblic

a Dom

inica

na(1

990,

200

1 y

2005

), Sa

nta

Lucía

(199

0, 2

001

y 20

05) y

Trin

idad

y To

bago

(199

0, 2

001

y20

05)

103

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

paíse

s: An

tigua

y Ba

rbud

a (19

96, 1

998 y

2002

), Bah

amas

(199

0-20

00),

Barb

ados

(199

0-19

96, 1

998-

2004

), Cu

ba (1

990-

2000

), Gr

anad

a (1

994-

2000

), Ha

ití(19

90-2

000),

Jama

ica (1

990-

1996

, 199

8-20

00, 2

003-

2005

), Pue

rto Ri

co (2

000,

2001

y 20

04),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

990-

1996

, 199

9 y 20

00), S

an C

ristó

bal y

Nev

is (1

996-

1999

), San

taLu

cía (1

990-

1999

), Sa

nta L

ucía

(199

8-20

03),

San V

icent

e/Gra

nadi

na (1

998-

2003

) y Tr

inid

ady T

obag

o (1

990-

2000

)

108

Se e

xclu

ye p

or fa

lta d

e in

form

ació

n lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

0-20

07),

Arub

a (19

90-2

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2007

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0-20

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enes

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s (19

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0-20

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, San

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990-

2007

), Sa

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0-20

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0-20

07)

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2008

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ye in

form

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0-20

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), Sa

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form

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7), C

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995,

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9, 2

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200

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990,

199

9, 2

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y 20

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2004

), Ha

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992,

199

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es (E

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199

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2004

-200

7), M

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199

3, 1

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y 20

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128

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, Hait

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07),

Islas

Caim

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, Isla

s Vírg

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1995

), Jam

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1996

, 200

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, Mar

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(199

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199

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2007

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, Rep

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1992

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as (2

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2000

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2000

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form

ació

n par

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(199

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136

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form

ació

n par

a los

paíse

s: Ha

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001)

, Jama

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990,

1993

, 199

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), Re

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Mar

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(199

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05),

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t (19

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y 20

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form

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: Ang

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, 200

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, Dom

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(199

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2003

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142

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n par

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guila

(199

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), Cu

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, Dom

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(199

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Gran

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2007

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9, 20

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, Islas

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, Isla

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s (19

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,Jam

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Mar

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(199

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1995

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Puer

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), Re

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ica D

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San

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143

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146

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147

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154

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2002

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-200

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Page 355: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

353

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: CARIBE

155

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0-20

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156

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Inclu

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-200

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y 200

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06),

Trini

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2006

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166

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167

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n par

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ació

n par

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s: Ba

rbad

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995,

1996

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, Cub

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3-20

06),

y Tri

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995,

199

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2006

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170

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173

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2002

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go (1

990-

1993

y 19

98-2

005)

176

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

0-20

06),

Baha

mas

(1990

-200

2), Ba

rbad

os (1

990-

2002

), Gran

ada (

1990

-200

5), H

aití (1

990-

2006

), Jam

aica (

1990

-20

06),

Puer

to R

ico (1

990-

2001

), Re

públ

ica D

omin

icana

(199

0-20

06),

San C

ristó

bal y

Nev

is(1

990-

2005

), Sa

nta

Lucía

(199

0-20

05),

San

Vice

nte/G

rana

dina

s (19

90-2

005)

y T

rinid

ad y

Toba

go (1

990-

2006

)

177

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

sigu

ientes

paíse

s: An

tigua

y Ba

rbud

a (19

90-2

004)

, Aru

ba (1

990-

2003

), Ba

hama

s (19

90-2

002)

, Dom

inica

(199

0-20

04),

Gran

ada

(199

0-20

04),

Haití

(199

0-20

05), J

amaic

a (19

90-2

005)

, Pue

rto R

ico (1

990-

2001

), Rep

úblic

a Dom

inica

na (1

990-

2005

),Sa

n Cris

tóba

l y N

evis

(199

0-20

04), S

anta

Lucía

(199

0-20

04), S

an V

icent

e/Gra

nadi

nas (

1990

-

2005

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990-

2005

)

178

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

1-20

06),

Baha

mas

(199

0-20

05),

Barb

ados

(199

0-20

06),

Cuba

(199

0-20

03),

Domi

nica

(199

0-20

06),

Gran

ada

(199

0-20

06), H

aití (2

000-

2006

), Jam

aica (

1990

-200

6), R

epúb

lica D

omin

icana

(199

0-20

06),

San C

ristó

bal y

Nev

is (1

990-

2006

), San

ta Lu

cía (1

990-

2006

), San

Vice

nte/G

rana

dina

s (19

90-

2006

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990-

2006

)

179

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

1-20

06),

Baha

mas

(199

0-20

05),

Barb

ados

(199

0-20

06),

Cuba

(199

0-20

03),

Domi

nica

(199

0-20

06),

Gran

ada

(199

0-20

06), H

aití (2

000-

2006

), Jam

aica (

1990

-200

6), R

epúb

lica D

omin

icana

(199

0-20

06),

San C

ristó

bal y

Nev

is (1

990-

2006

), San

ta Lu

cía (1

990-

2006

), San

Vice

nte/G

rana

dina

s (19

90-

2006

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990-

2006

)

180

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

1-20

06),

Baha

mas

(199

0-20

05),

Barb

ados

(199

0-20

06),

Cuba

(199

0-20

03),

Domi

nica

(199

0-20

06),

Gran

ada

(199

0-20

06), H

aití (2

000-

2006

), Jam

aica (

1990

-200

6), R

epúb

lica D

omin

icana

(199

0-20

06),

San C

ristó

bal y

Nev

is (1

990-

2006

), San

ta Lu

cía (1

990-

2006

), San

Vice

nte/G

rana

dina

s (19

90-

2006

) y Tr

inid

ad y

Toba

go (1

990-

2006

)

181

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

0-20

05),

Barb

ados

(199

0-20

05),

Cuba

(199

4-19

99),

Gran

ada (

1990

-200

5), H

aití (

2000

-200

5), J

amaic

a (19

90-

2005

), Re

públ

ica D

omin

icana

(199

2-20

01),

San C

ristó

bal y

Nev

is (1

990-

2005

), Sa

nta L

ucía

(199

0-20

05),

San

Vice

nte/G

rana

dina

s (19

90-2

005)

y Tri

nida

d y T

obag

o (1

990-

2005

)

182

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra e

l per

íodo

de

1990

al 2

005

para

los p

aíses

: Ant

igua

y Ba

rbud

a,An

tillas

Nee

rland

esas

, Bah

amas

, Bar

bado

s, Cu

ba, G

rana

da, H

aití,

Jamaic

a, Re

públ

icaDo

mini

cana

, San

Cris

tóba

l y N

evis,

Sant

a Luc

ía, Sa

n Vice

nte/G

rana

dina

s y Tr

inid

ad y

Toba

go

183

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

sigu

ientes

paíse

s: An

tigua

y Ba

rbud

a (19

90-2

005)

, Aru

ba (1

991-

2002

), Bah

amas

(199

0-20

03), B

arbad

os (1

990-

2005

), Dom

inica

(199

0-20

06), G

ranad

a (19

90-

2006

), Ha

ití (2

000-

2006

), Jam

aica

(199

0-20

06),

Repú

blica

Dom

inica

na (1

990-

2006

), Sa

nCr

istób

al y

Nevis

(199

0-20

06),

Sant

a Lu

cía (1

990-

2006

), Sa

n Vi

cent

e/Gra

nadi

nas (

1990

-20

06) y

Trin

idad

y To

bago

(199

0-20

06)

187

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: A

ntigu

a y

Barb

uda

(199

0), B

aham

as(1

990)

,Ba

rbad

os (1

990)

, Cub

a (1

990,

200

0 y

2002

), Gr

anad

a (1

990)

, Hait

í (19

90),

Islas

Caim

án(1

990)

, Islas

Vírg

enes

(Esta

dos U

nido

s) (1

990)

, Jama

ica (1

990,

2003

), Rep

úblic

a Dom

inica

na(1

990

y 200

0), S

an C

ristó

bal (

1990

y 20

00),

Sant

a Luc

ía (1

990)

, San

Vice

nte (

1990

y 20

00)

y Trin

idad

y To

bago

(199

0)

Page 356: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

354

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: MESOAMÉRICA

Mes

oam

éric

aNo

tasUn

idade

s19

9019

9519

9719

9819

9920

0020

0120

0220

0320

0420

0520

0620

0720

08TIE

RRA

Supe

rficie

Terre

stre

110

00 ha

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

245.4

69,0

Tierra

s arab

les y

cultiv

os p

erman

entes

110

00 ha

33.45

1,035

.151,0

35.25

7,035

.461,0

35.63

5,035

.345,0

35.45

7,035

.496,0

35.58

1,035

.753,0

35.62

6,035

.087,0

35.24

2,0Tie

rras a

rables

de l

abran

za1

1000

ha29

.723,0

31.07

4,031

.004,0

31.20

9,031

.258,0

30.94

9,030

.991,0

31.02

1,031

.036,0

31.31

0,031

.105,0

30.53

5,030

.594,0

Tierra

s dest

inada

s a cu

ltivos

perm

anen

tes1

1000

ha3.7

28,0

4.077

,04.2

53,0

4.252

,04.3

77,0

4.396

,04.2

95,0

4.308

,04.3

34,0

4.443

,04.5

21,0

4.552

,04.6

48,0

Tierra

s no

arable

s y n

o pe

rman

entes

110

00 ha

212.0

18,0

210.3

18,0

210.2

12,0

210.0

08,0

209.8

34,0

210.1

24,0

210.0

12,0

209.9

73,0

209.8

88,0

209.7

16,0

209.8

43,0

210.3

82,0

210.2

27,0

Tierra

s de p

radera

s y p

astos

perm

anen

tes1

1000

ha88

.519,0

91.33

2,091

.500,0

91.54

2,091

.574,0

91.63

7,091

.328,0

91.45

5,091

.591,0

91.58

7,091

.408,0

91.03

1,091

.038,0

Tierra

s arab

les y

cultiv

os p

erman

entes

por

habit

ante

1ha

/ 100

Hab

29,7

28,3

27,4

27,0

26,7

26,1

25,8

25,5

25,3

25,1

24,8

24,1

23,8

Supe

rficie

agrí

cola

110

00 ha

121.9

70,0

126.4

83,0

126.7

57,0

127.0

03,0

127.2

09,0

126.9

82,0

126.6

44,0

126.8

34,0

127.6

55,0

127.3

40,0

127.0

34,0

126.1

18,0

126.2

80,0

Irriga

ción

de la

supe

rficie

agríc

ola1

1000

ha6.0

26,0

6.667

,06.7

39,0

6.746

,06.7

72,0

6.794

,06.8

14,0

0,02.0

58,5

2.109

,25.4

17,1

5.432

,532

,2Co

nsum

o de

fertil

izante

s2

kt1.8

94,5

2.165

,22.3

69,1

2.352

,52.2

42,2

2.307

,5

Nitro

gena

dos

2kt

1.094

,91.2

59,0

1.319

,51.3

32,0

1.282

,31.3

09,0

F

osfat

ados

2kt

528,4

609,6

645,7

638,7

573,3

564,3

P

otásic

os2

kt27

1,229

6,640

3,938

1,838

6,643

4,2Co

nsum

o de

fertil

izante

s por

hectá

rea cu

ltivad

atn

métric

as / h

a0,1

0,10,1

0,10,1

0,1

BOSQ

UES

Supe

rficie

forest

al, to

tal3

1000

ha96

.655,0

89.37

7,086

.649,0

85.48

7,885

.487,8

P

lantac

iones

410

00 ha

83,0

1.269

,01.3

32,0

B

osqu

e natu

ral5

1000

ha96

.572,0

88.10

8,085

.317,0

Propo

rción

de l

a sup

erfici

e cub

ierta

por b

osqu

es6

%39

,336

,436

,236

,035

,735

,535

,335

,034

,8Ta

sa de

varia

ción

anua

l de l

a sup

erfici

e fore

stal

7%

-0,8

-0,6

Supe

rficie

Fores

tal B

ajo P

lanes

de M

anejo

ERF

810

00 ha

9.361

,09.3

61,0

(Evalu

ación

Rec

ursos

Fore

stales

)Pro

porci

ón d

e la s

uperf

icie f

oresta

l bajo

plan

ERF

9%

3,8Pro

ducc

ión d

e mad

era en

rollo

1010

00 m

378

.504,3

82.52

0,085

.220,2

86.25

4,587

.503,6

88.03

2,387

.789,5

87.20

0,387

.259,6

87.99

6,388

.037,2

88.33

5,489

.437,2

P

roduc

ción d

e mad

era en

rollo

indu

strial

1010

00 m

310

.131,9

9.532

,610

.954,3

11.49

8,012

.127,6

12.03

3,611

.290,6

10.18

6,610

.087,6

10.25

4,69.7

10,6

9.620

,09.7

70,0

Produ

cción

de l

eña y

carbó

n10

1000

m3

68.37

2,472

.987,4

74.26

5,974

.756,5

75.37

6,075

.998,7

76.49

8,977

.013,7

77.17

2,077

.910,1

78.77

8,378

.905,4

79.84

1,8Pro

ducc

ión d

e tab

leros

de m

adera

1110

00 m

364

2,823

2,943

5,945

0,949

2,953

6,964

8,552

1,551

1,556

2,549

3,551

2,766

3,7Pro

ducc

ión d

e pap

el y c

artón

1210

00 m

32.9

51,4

3.232

,93.7

14,0

3.875

,03.9

86,0

4.067

,04.2

58,0

4.189

,04.3

51,0

4.891

,05.0

43,1

5.768

,05.7

96,0

BIOD

IVER

SIDAD

Área

s prot

egida

s, nú

mero

13No

.38

155

658

359

259

359

759

859

859

853

8Ár

eas p

roteg

idas,

área t

otal

1310

00 ha

12.34

8,720

.702,1

22.21

0,622

.924,3

22.92

6,826

.523,7

26.52

3,726

.523,7

26.52

3,725

.367,4

Reser

va n

atural

estr

icta/Á

rea n

atural

silve

stre,

núme

ro14

No.

5667

6969

6969

6969

69Re

serva

natu

ral es

tricta/

Área

natu

ral si

lvestr

e, áre

a tota

l15

1000

ha1.2

13,1

1.847

,21.8

76,3

1.876

,31.8

76,3

1.876

,31.8

76,3

1.876

,31.8

76,3

328,8

Parqu

es na

ciona

les, n

úmero

16No

.12

014

314

514

814

814

914

914

914

9Pa

rques

nacio

nales

, área

tota

l16

1000

ha3.0

96,9

4.054

,24.2

72,7

4.300

,64.3

00,6

4.300

,64.3

00,6

4.300

,64.3

00,6

Monu

mento

s natu

rales,

núm

ero17

No.

2135

3535

3636

3636

36Mo

nume

ntos n

atural

es, ár

ea t

otal

1810

00 ha

1.096

,01.1

34,4

1.080

,81.0

80,8

1.081

,91.0

81,9

1.081

,91.0

81,9

1.081

,9Ár

ea d

e man

ejo d

e háb

itat/e

spec

ies, n

úmero

19No

.10

318

318

818

918

919

219

219

219

2Ár

ea d

e man

ejo d

e háb

itat/e

spec

ies, á

rea to

tal20

1000

ha2.8

55,9

4.592

,14.7

38,3

4.739

,54.7

39,5

8.334

,78.3

34,7

8.334

,78.3

34,7

Paisa

je ter

restre

y ma

rino

proteg

ido, n

úmero

21No

.13

3649

5050

5051

5151

Paisa

je ter

restre

y ma

rino

proteg

ido, á

rea to

tal22

1000

ha31

5,71.3

53,3

1.876

,21.8

81,8

1.881

,81.8

81,8

1.882

,41.8

82,4

1.882

,4Ár

ea p

roteg

ida co

n rec

ursos

man

ejado

s, nú

mero

23No

.68

9297

101

101

101

101

101

101

Área

prot

egida

con

recurs

os m

aneja

dos,

área t

otal

2410

00 ha

5.266

,49.3

59,3

10.06

2,910

.745,1

10.74

5,110

.745,1

10.74

5,110

.745,1

10.74

5,1Nú

mero

total

de es

pecie

s ame

naza

das

25No

.1.1

831.2

541.4

101.9

092.0

532.2

25Ta

sa de

varia

ción

anua

l del

núme

ro tot

al26

%3,0

12,4

35,4

3,74,1

de e

spec

ies a

mena

zada

sNú

mero

de e

spec

ies a

mena

zada

s, Ma

mífer

os27

No.

130

132

132

132

130

162

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, A

ves

27No

.86

8687

125

129

129

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, R

eptile

s27

No.

6161

6173

154

154

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, A

nfibio

s27

No.

55

453

471

488

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, P

eces

27No

.99

107

204

246

281

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, M

olusco

s28

No.

89

99

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, In

verte

brado

s29

No.

6557

5759

161

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, P

lantas

29No

.73

879

885

685

584

1

Page 357: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

355

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: MESOAMÉRICA

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

AGUA

DUL

CEPo

rcenta

je de

la p

oblac

ión co

n ac

ceso

al ag

ua p

otable

30%

80,9

85,9

91,4

88,8

94,9

Porce

ntaje

de la

pob

lación

con

acce

so31

%64

,872

,679

,2al

agua

pota

ble, r

ural

Porce

ntaje

de la

pob

lación

con

acce

so32

%89

,593

,196

,6al

agua

pota

ble, u

rbana

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so33

%57

,166

,173

,473

,277

,3a s

ervici

os d

e san

eami

ento

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so34

%25

,235

,545

,6a s

ervici

os d

e san

eami

ento,

rural

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so35

%74

,781

,186

,4a s

ervici

os d

e san

eami

ento,

urba

naPro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a de a

gua d

ulce

36kt

135,0

140,9

145,6

130,2

127,9

145,7

135,8

132,5

160,1

171,9

188,6

186,3

Produ

cción

de p

esca d

e agu

a dulc

e, ca

ptura

37kt

120,2

130,1

120,9

108,9

101,7

117,8

100,9

92,3

106,6

113,0

108,9

107,9

Produ

cción

de p

esca d

e agu

a dulc

e, ac

uicult

ura38

kt14

,810

,924

,821

,326

,227

,934

,940

,253

,658

,979

,678

,3Pro

porci

ón d

el tot

al de

recu

rsos h

ídrico

s utili

zada

39%

2,94,8

13,0

Extra

cción

de a

gua,

total

401.0

00 K

m372

9,05.7

70,0

87.25

0,0Ex

tracc

ión d

e agu

a por

habit

ante

41m3 /

Hab

6,546

,564

3,2Ex

tracc

ión d

e agu

a en

agric

ultura

42%

46,1

80,2

75,8

Extra

cción

de a

gua e

n el

sector

indu

strial

43%

20,2

6,76,3

Extra

cción

de a

gua e

n el

sector

dom

éstico

44%

33,7

13,1

18,0

ÁREA

S COS

TERA

S Y M

ARIN

ASPro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na45

kt1.3

11,7

1.421

,71.5

61,1

1.314

,91.3

03,0

1.498

,61.6

25,5

1.683

,51.5

11,3

1.386

,11.4

81,4

1.488

,3Pro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na, c

aptur

a46

kt1.3

11,6

1.419

,41.5

57,6

1.310

,11.2

98,7

1.491

,11.6

17,4

1.674

,11.5

00,8

1.369

,41.3

81,7

1.365

,0Pro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na, a

cuicu

ltura

47kt

0,12,3

3,44,9

4,27,6

8,29,3

10,5

16,7

99,6

123,3

Área

s mari

nas p

roteg

idas

4810

00 ha

4.683

,28.0

11,5

8.253

,88.3

93,0

8.675

,910

.056,6

10.06

5,410

.122,3

10.12

2,310

.559,6

11.70

1,111

.701,1

Área

total

de m

angla

r49

1000

ha1.5

57,9

1.367

,41.2

84,7

ATMÓ

SFER

AEm

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

)50

kt11

8.053

,011

8.135

,012

3.997

,012

5.601

,012

3.195

,012

4.292

,012

8.121

,012

4.989

,012

9.770

,013

1.165

,0Em

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

) per

cápit

a51

tn / H

ab1,0

1,01,0

1,00,9

0,90,9

0,90,9

0,9Em

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

) por

52tn

/ Mill

US$

134,6

122,3

115,0

111,0

104,8

99,6

102,5

99,0

101,1

98,2

dólar

PPA

del P

IB20

00 PP

APo

r com

busti

bles f

ósile

s gase

osos

52kt

20.16

5,015

.878,0

18.04

5,019

.649,0

19.33

7,020

.937,0

21.55

1,023

.944,0

26.21

9,027

.302,0

Por c

ombu

stible

s fós

iles l

íquido

s52

kt90

.743,0

93.03

0,093

.241,0

92.72

6,090

.039,0

88.66

3,092

.994,0

87.67

0,089

.823,0

91.25

6,0Po

r com

busti

bles f

ósile

s sóli

dos

52kt

2.518

,04.3

17,0

5.115

,05.2

56,0

5.507

,05.8

96,0

5.621

,05.9

17,0

6.438

,05.8

83,0

Emisi

ones

de p

artícu

las (p

ar)52

kt61

,765

,275

,781

,178

,283

,482

,478

,478

,581

,0Em

ision

es de

dióx

ido d

e azu

fre (S

O2)

53kt

1.773

,21.7

38,4

1.607

,71.5

26,1

1.669

,01.6

44,1

Emisi

ones

de ó

xidos

de n

itróge

no (N

Ox)

54kt

2.261

,52.1

98,3

2.665

,82.8

54,1

3.338

,93.4

25,6

Emisi

ones

de h

idroc

arburo

s (HC

)54

kt20

5,219

6,42.2

79,0

1.806

,925

2,224

0,7Em

ision

es de

mon

óxido

de c

arbon

o (C

O)54

kt9.5

02,3

9.366

,69.8

31,8

10.88

8,311

.405,8

11.71

1,7Em

ision

es de

meta

no, t

otal

54kt

75.15

3,181

.092,0

80.59

8,279

.391,6

201,9

Por e

nergí

a55

kt34

.410,7

43.00

5,042

.605,6

40.63

4,00,7

Por a

gricu

ltura

55kt

40.56

7,237

.988,3

37.84

3,638

.681,6

138,3

Por o

tras f

uente

s55

kt17

5,198

,714

9,076

,062

,9Co

nsum

o de

susta

ncias

que

agota

n la

capa

de

56tn

PAO

12.86

5,68.7

73,4

8.315

,77.2

21,9

7.078

,38.1

50,4

7.092

,36.1

39,6

5.777

,47.2

80,0

5.374

,22.8

12,2

2.830

,4oz

ono,

total

Cons

umo

de su

stanc

ias q

ue ag

otan

la ca

pa d

e57

tn PA

O12

.733,1

6.267

,45.5

30,9

4.227

,74.0

04,4

3.934

,53.1

15,6

2.828

,42.8

02,9

3.824

,02.1

37,8

-138,6

-338,1

ozon

o, Cl

oroflu

oroca

rbono

s CFC

sCo

nsum

o de

susta

ncias

que

agota

n la

capa

de o

zono

,58

tn PA

O13

2,532

1,046

2,651

0,51.1

69,7

1.896

,21.2

10,0

833,6

775,0

1.370

,11.2

48,9

1.358

,91.4

96,8

Hidro

clorof

luoroc

arbon

os H

CFCs

Cons

umo

de su

stanc

ias q

ue ag

otan

la ca

pa d

e ozo

no,

59tn

PAO

2.185

,02.3

22,2

2.483

,71.9

04,2

2.319

,72.7

66,7

2.477

,62.1

99,5

2.085

,91.9

87,5

1.591

,91.6

71,7

Brom

uro d

e meti

lo

ASEN

TAMI

ENTO

HUM

ANO

Dens

idad

de p

oblac

ión60

Hab/K

m45

,349

,951

,852

,853

,754

,655

,356

,056

,657

,257

,958

,659

,460

,3Po

blació

n urb

ana

6110

0071

.946,0

81.82

2,092

.759,0

101.3

79,0

Page 358: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

356

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: MESOAMÉRICA

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Porce

ntaje

de la

pobla

ción q

ue vi

ve en

las z

onas

urban

as62

%63

,865

,968

,470

,4Ta

sa de

crec

imien

to an

ual d

e la p

oblac

ión u

rbana

63%

5,32,6

2,51,8

Pobla

ción

rural

6410

0040

.788,0

42.28

6,042

.882,0

42.52

9,0Po

rcenta

je de

la p

oblac

ión q

ue vi

ve en

las z

onas

rurale

s64

%36

,234

,131

,629

,6Ta

sa de

crec

imien

to an

ual d

e la p

oblac

ión ru

ral65

%0,8

0,70,3

-0,2

Núme

ro de

ciud

ades

con m

ás de

750.0

00 ha

b. o m

ás.66

No.

2223

2323

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

con

67%

31,8

32,8

33,4

33,9

más d

e 750

mil h

ab. o

más.

Núme

ro de

ciud

ades

que t

ienen

entre

500

.000

68No

.21

2322

26y 1

milló

n de h

ab.

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

que t

ienen

69%

20,6

20,5

16,5

18,6

entre

500 m

il y 1

milló

n de h

ab.

Núme

ro de

ciud

ades

que t

ienen

entre

170

No.

36

1111

y 5 m

illone

s de h

ab.

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

que t

ienen

70%

10,1

13,9

19,9

20,1

entre

1 y 5

millo

nes d

e hab

.Nú

mero

de ci

udad

es qu

e tien

en en

tre 5

71No

.0

00

0y 1

0 millo

nes d

e hab

.Po

rcenta

je po

blació

n qu

e vive

en ci

udad

es qu

e tien

en71

%en

tre 5

y 10 m

illone

s de h

ab.

Núme

ro de

ciud

ades

con 1

0 millo

nes d

e hab

. o m

ás.72

No.

11

11

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

con

más

73%

21,3

20,6

19,5

18,5

de 10

millo

nes d

e hab

.Pro

porci

ón d

e la p

oblac

ión u

rbana

que

vive

en tu

gurio

s74

%27

,823

,8Lo

ngitu

d de

carr

eteras

75Km

464.6

93,0

464.6

93,0

DESA

STRE

S Y

VULN

ERAB

ILIDA

DNú

mero

de e

vento

s Natu

rales

y tec

nológ

icos,

total

76No

.19

2416

2538

3726

3118

2136

2230

0Inu

ndac

iones

77No

.4

60

211

84

117

710

411

0To

rmen

tas, h

uraca

nes,

ciclon

es y t

ornad

os78

No.

17

411

16

116

22

163

90

Terre

motos

79No

.3

32

14

23

04

11

11

0De

sliza

mien

tos y

ava

lanch

as80

No.

00

12

01

01

21

22

10

Temp

eratur

as ex

trema

s81

No.

21

21

11

11

11

03

00

Erupc

iones

volcá

nicas

82No

.0

11

33

20

20

01

00

0Se

quías

83No

.0

12

20

33

20

20

00

0De

sastre

s tec

nológ

icos

84No

.9

54

318

144

82

76

98

Pérdi

das e

conó

mica

s por

desas

tres n

atural

es85

Mill $

258,7

47.56

4,345

3,86.8

05,3

848,4

380,8

2.543

,11.1

52,7

236,3

3,619

.421,5

10,7

3.701

,40,0

extre

mos y

tecn

ológic

osInu

ndac

iones

86Mi

ll $14

6,211

,50,0

602,7

456,8

1,30,0

101,6

20,0

3,632

,08,0

3.080

,00,0

Torm

entas

, hura

cane

s, cic

lones

y torn

ados

87Mi

ll $90

,72.4

31,0

447,8

6.009

,60,0

279,5

658,1

841,1

100,0

0,09.3

89,5

2,762

1,40,0

Terre

motos

88Mi

ll $19

,521

,10,0

0,039

1,60,0

1.848

,60,0

116,3

0,00,0

0,00,0

0,0De

sliza

mien

tos y

ava

lanch

as89

Mill $

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

Temp

eratur

as ex

trema

s90

Mill $

2,30,0

4,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

Erupc

iones

volcá

nicas

91Mi

ll $0,0

0,70,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,0Se

quías

92Mi

ll $0,0

100,0

2,019

3,00,0

100,0

36,4

210,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

Desas

tres t

ecno

lógico

s93

Mill $

0,045

.000,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

10.00

0,00,0

0,0Nú

mero

de p

erson

as afe

ctada

s por

desas

tres

94No

.16

8.710

10.03

51.0

90.20

03.2

54.12

81.2

32.21

962

.841

2.625

.279

805.7

4017

8.673

156.9

303.5

99.37

626

1.718

1.962

.351

0na

turale

s y te

cnoló

gicos

Inund

acion

es95

No.

154.4

1110

.035

00

1.232

.189

00

223.6

800

19.34

87.0

004.5

301.6

12.50

0To

rmen

tas, h

uraca

nes,

ciclon

es y t

ornad

os95

No.

00

800.2

003.2

54.12

80

62.57

013

7.633

500.0

300

03.5

92.02

624

0.700

348.7

26Te

rremo

tos96

No.

14.29

90

00

00

1.590

.550

017

8.603

00

16.47

00

Desli

zami

entos

y a

valan

chas

97No

.0

00

00

00

00

00

00

Temp

eratur

as ex

trema

s97

No.

00

00

00

00

00

00

0Eru

pcion

es vo

lcánic

as98

No.

00

00

00

00

00

00

0Se

quías

99No

.0

029

0.000

00

089

6.596

82.00

00

137.5

000

00

0De

sastre

s tec

nológ

icos

100

No.

3027

150

030

7082

350

181.1

25Pro

porci

ón d

e la p

oblac

ión en

situa

ción

de p

obrez

a10

1%

59,8

54,2

56,6

49,3

54,1

41,1

58,0

42,5

74,8

36,9

34,9

33,5

Page 359: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

357

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: MESOAMÉRICA

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Propo

rción

de l

a pob

lación

ocu

pada

con

ingres

os10

2%

25,3

6,926

,36,0

9,83,0

inferi

ores a

$1 po

r día

según

la PP

ACo

eficie

nte d

e la b

recha

pob

reza

103

%35

,024

,020

,225

,515

,829

,116

,644

,513

,710

,910

,5Ta

sa de

dese

mpleo

de j

óven

es co

mo p

orcen

taje d

e10

4%

4,65,6

3,93,7

2,62,8

2,52,9

3,33,7

3,5la

pobla

ción

de jó

vene

s, am

bos s

exos

MEDI

O AM

BIENT

E Y SA

LUD

HUMA

NATa

sa bru

ta de

mort

alida

d inf

antil

104

* 100

0 Hab

43,0

35,5

29,4

22,8

Espera

nza d

e vida

feme

nina

105

Años

71,7

73,5

75,2

76,6

Espera

nza d

e vida

masc

ulina

105

Años

65,6

67,9

70,1

71,3

Ofert

a ca

lórica

105

Kcal/

día *

Hab

2.929

,62.9

37,4

2.926

,02.9

42,4

2.972

,62.9

36,5

2.951

,82.9

43,8

2.959

,22.9

33,7

2.923

,3Ca

sos r

eport

ados

de D

engu

e10

6No

.0

103.8

7190

.310

70.31

721

5.701

59.32

832

.603

80.24

658

.541

58.72

610

2.950

85.90

313

1.603

157.5

97Ca

sos r

eport

ados

de M

alaria

106

No.

00

015

1.238

149.8

3812

4.850

78.92

669

.057

61.93

264

.672

74.12

853

.814

0Ca

sos r

eport

ados

de C

ólera

106

No.

040

.908

4.995

7.820

2.833

841

151

00

00

00

TEND

ENCI

AS S

OCIO

ECON

ÓMIC

ASPo

blació

n tota

l a m

itad d

e año

107

1000

112.7

35,0

135.6

40,0

137.4

75,0

139.1

05,0

140.6

41,0

142.2

02,0

143.9

09,0

145.7

94,0

147.7

79,0

149.8

12,0

Tasa

de cr

ecim

iento

prome

dio an

ual d

e la p

oblac

ión10

8%

2,01,8

1,31,2

1,11,1

1,21,3

1,41,4

Tasa

de al

fabeti

zació

n de

adult

os, t

otal

109

%87

,690

,778

,588

,185

,884

,887

,686

,9

Ho

mbres

110

%90

,392

,678

,490

,387

,385

,690

,388

,6

Mu

jeres

111

%85

,089

,078

,686

,184

,484

,185

,485

,2Esp

eranz

a de v

ida es

colar

112

años

11,7

11,9

12,0

12,0

12,3

12,5

12,6

12,2

12,3

12,1

Homb

res11

3añ

os11

,812

,012

,012

,112

,412

,412

,412

,112

,112

,8

Mu

jeres

114

años

11,6

11,9

12,0

12,0

12,3

12,7

12,8

12,3

12,5

12,0

Línea

s de t

eléfon

o fijo

115

* 100

Hab

5,27,6

9,09,6

10,6

11,1

11,1

11,3

12,1

13,3

14,0

14,7

17,4

Abon

ados

a tel

éfono

s celu

lares

116

* 100

Hab

0,10,6

1,53,0

6,912

,318

,421

,825

,432

,740

,350

,0Us

uario

s de i

nterne

t11

7* 1

00 H

ab0,1

0,61,1

1,74,2

6,29,2

10,4

11,7

14,4

9,8Di

mens

ión d

el pa

rque a

utomo

tor11

8No

.10

.531.4

2212

.255.8

4613

.620.1

0715

.126.2

1416

.054.1

3817

.396.6

9020

.157.2

6121

.880.8

4523

.042.9

4723

.611.4

2324

.940.0

8028

.034.9

7329

.551.3

6931

.354.9

08Us

o de

energ

ía po

r hab

itante

119

kt de

petr

óleo

1.236

,61.2

65,5

1.272

,91.2

48,3

1.266

,31.2

20,4

1.230

,81.2

53,0

1.287

,81.2

85,9

1.277

,21.2

80,4

1.291

,41.3

14,0

equiv

alente

Impo

rtacio

nes n

etas d

e ene

rgía (

% de

energ

ía de

120

%-46

,9-40

,5-45

,6-42

,3-37

,1-37

,9-38

,2-35

,5-38

,6-40

,3us

o de

energ

ía co

merci

al)Int

ensid

ad en

ergéti

ca d

el pro

ducto

inter

no b

ruto

121

1.000

barr

iles /

2,12,0

2,02,0

1,91,9

1,92,0

1,81,9

1,81,9

1,81,8

milló

n de

dóla

resco

nstan

tes d

e PIB

Ofert

a en

ergéti

ca re

nova

ble12

2kB

EP11

4.815

,312

3.837

,312

8.005

,812

8.244

,713

2.436

,813

6.413

,413

5.988

,213

4.256

,016

2.017

,217

4.341

,118

4.308

,319

1.407

,418

6.409

,521

2.513

,8Of

erta

energ

ética

no

renov

able

123

kBEP

822.4

79,2

907.8

33,8

1.047

.334,7

1.109

.207,7

1.132

.951,0

1.106

.975,3

1.103

.257,2

1.171

.592,0

1.218

.353,2

1.187

.391,5

1.232

.658,9

1.284

.773,3

1.343

.558,7

1.387

.867,3

Porce

ntaje

de en

ergía

cons

umida

de f

uente

s ren

ovab

les12

4%

35,1

26,8

25,6

23,1

22,1

22,6

21,6

22,0

22,0

21,9

con

respe

cto al

total

de e

nergí

a con

sumi

daPro

ducc

ión to

tal d

e ene

rgía p

rimari

a por

habit

ante

125

TJ / H

ab0,1

0,10,1

0,10,1

0,1Pro

ducc

ión to

tal d

e ene

rgía g

eotér

mica

126

Tjoul

84.94

8,272

.752,9

87.27

5,896

.522,3

97.41

8,415

2.591

,814

0.873

,313

1.495

,916

6.022

,718

1.440

,217

2.429

,2Pro

dució

n tot

al de

hidr

oene

rgía

127

Tjoul

310.1

40,6

188.9

76,8

198.8

48,1

169.9

17,8

155.5

39,9

272.0

50,6

328.6

61,9

353.5

03,2

381.8

55,0

352.5

94,9

Produ

cción

total

de e

nergí

a por

produ

ctos d

e cañ

a12

8kb

ep24

.510,0

26.87

7,026

.814,0

27.44

5,027

.408,0

26.84

8,027

.888,0

29.62

1,028

.862,0

29.81

0,029

.175,0

Produ

cción

total

de c

arbón

mine

ral12

9To

nelad

as10

,411

,411

,711

,06,6

9,610

,411

,112

,111

,1Mé

trica

sPro

ducc

ión to

tal d

e gas

natur

al13

0Mm

345

.709,0

61.19

5,949

.211,6

46.38

2,455

.014,0

57.74

1,462

.770,7

65.90

6,373

.476,5

78.98

5,085

.577,0

Produ

cción

total

de l

eña

131

kbep

91.16

6,098

.836,0

98.91

3,010

2.999

,8Pro

ducc

ión to

tal d

e petr

óleo

131

1.000

barr

iles

958.7

10,0

1.069

.207,0

1.109

.950,0

1.149

.063,0

1.168

.646,0

1.252

.044,0

1.245

.525,0

1.223

.400,0

1.194

.179,0

1.131

.883,0

1.065

.976,0

por d

íaPro

ducc

ión d

e ele

ctrici

dad

131

Gwh

138.5

34,0

177.1

78,0

203.4

04,0

204.6

82,0

205.3

57,0

220.2

05,0

225.2

41,0

231.4

26,0

236.0

46,0

242.8

92,0

254.2

85,0

262.5

59,0

271.9

84,0

276.0

36,0

Por f

uente

s de c

arbón

132

% de

l total

5,68,1

8,68,7

8,78,5

10,0

11,1

12,9

9,812

,6Po

r fue

ntes d

e hidr

oene

rgía

132

% de

l total

25,4

21,9

19,9

17,8

22,1

20,8

17,8

16,3

14,1

16,3

16,7

Por f

uente

s de g

as13

2%

del to

tal10

,413

,012

,814

,714

,817

,121

,028

,133

,033

,831

,4Po

r fue

ntes n

uclea

res13

3%

del to

tal2,1

4,85,1

4,54,7

3,63,7

4,04,2

3,64,0

Por f

uente

s de p

etróle

o13

4%

del to

tal51

,848

,049

,950

,345

,845

,943

,536

,730

,731

,530

,1Ing

reso

Nacio

nal B

ruto

por h

abita

nte (m

étodo

Atla

s)13

5$

12.47

0,016

.840,0

18.02

0,018

.740,0

19.53

0,021

.030,0

21.66

0,022

.460,0

23.84

0,025

.660,0

27.14

0,029

.020,0

Page 360: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

358

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: MESOAMÉRICA

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Produ

cto In

terno

Brut

o, cre

cimien

to an

ual

136

%-5,

36,4

5,03,7

6,00,1

1,01,6

4,03,3

4,93,5

A

gricu

ltura,

valor

agreg

ado

137

% de

l PIB

5,65,5

5,15,0

4,94,7

4,94,9

5,04,9

4,84,7

4,7

Ind

ustria

, valo

r agre

gado

138

% de

l PIB

32,0

30,7

32,5

32,8

32,7

32,4

31,4

31,2

30,9

30,8

30,6

30,6

30,1

S

ervici

os, v

alor a

grega

do13

9%

del P

IB59

,761

,259

,959

,759

,860

,261

,161

,762

,262

,663

,363

,764

,5Ex

porta

cione

s de b

ienes

y serv

icios

140

% de

l PIB

20,2

31,4

31,3

31,6

31,5

31,8

28,5

27,8

28,7

30,4

31,0

Impo

rtacio

nes d

e bien

es y s

ervici

os14

1%

del P

IB21

,729

,732

,034

,333

,734

,331

,430

,431

,233

,433

,6Re

lación

entre

el se

rvicio

de l

a deu

da ex

terna

142

% de

l PIB

4,69,1

10,3

6,97,2

9,77,5

6,76,5

7,35,9

y el p

roduc

to na

ciona

l brut

oGa

sto p

úblic

o en

educ

ación

143

% de

l PIB

4,44,8

5,15,2

5,75,4

5,53,5

Gasto

en in

vesti

gació

n y d

esarro

llo14

4%

del P

IB0,2

0,30,3

0,40,4

0,40,4

0,4Mé

dicos

145

No.

99.45

015

3.568

160.1

0116

4.325

178.1

3814

2.245

144.8

8614

6.529

149.1

6015

9.425

169.1

1516

8.262

169.6

15

Notas

:

1In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es en

el p

erío

do d

e 199

0 al

2007

2In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es en

el p

erío

do d

e 200

2 al

2007

3In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os 1

990,

200

0 y 2

005

al 20

07

4Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

Beli

ce (2

000

y 200

5)

5Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

Beli

ce (2

005)

6In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 1

990,

200

0 al

2007

7In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os 2

000

y 200

5

8In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os 2

000

y 200

8

9In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es (2

000)

10In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es en

el p

erío

do d

e 199

0 al

2007

11Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

los s

iguien

tes p

aíses

: Beli

ce (1

990-

2007

) y El

Salva

dor

(199

0-20

07)

12Se

exclu

ye po

r falt

a de i

nfor

mació

n: Be

lice (

1990

-200

7), H

ondu

ras (

1990

-199

4) y

Nica

ragu

a(1

990-

2007

)

13In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es (1

990-

2004

)

14Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

El Sa

lvado

r (1

990-

2003

) y P

anam

á (19

90-1

996)

15Se

exclu

ye po

r falta

de in

forma

ción l

os si

guien

tes pa

íses:

El Sa

lvado

r (199

0-20

04), G

uatem

ala(2

004)

, Hon

dura

s (19

90-2

004)

y Pa

namá

(199

0-20

04)

16In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es (1

990-

2003

)

17, 1

8Se

exclu

ye po

r falta

de in

forma

ción l

os si

guien

tes pa

íses:

Costa

Rica

(199

0-20

03) y

El Sa

lvado

r(1

990-

2003

)

19, 2

0Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

El Sa

lvado

r (1

990-

1994

)

21, 2

2Se

exclu

ye po

r falt

a de i

nfor

mació

n: Be

lice (

1990

-199

5), C

osta

Rica

(199

0-20

03), E

l Salv

ador

(199

0-20

03),

Hond

uras

(199

0-19

92) y

Nica

ragu

a (2

000-

2003

)

23, 2

4Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión:

El S

alvad

or (1

990-

2003

), Ho

ndur

as (1

990-

1992

) yNi

cara

gua

(199

0)

25In

cluye

la in

form

ació

n de

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 2

000,

200

2-20

04, 2

006,

200

8

26In

cluye

la in

form

ació

n de

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 2

002

al 20

04, 2

006,

2008

27In

cluye

la in

form

ació

n de

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 2

000,

200

2-20

04, 2

006

y 200

8

28In

cluye

la in

form

ació

n de

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 2

002,

200

4, 2

006

y 200

8

29In

cluye

la in

form

ació

n de

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 2

000,

2002

, 200

4, 2

006

y 200

8

30, 3

1, 32

In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses:

Belic

e (19

90, 2

002 y

2004

), Cos

ta Ri

ca (1

990,

2002

y 200

4), E

l Salv

ador

(199

0, 20

02 y

2004

), Gua

temala

(199

0, 20

02 y

2004

), Hon

dura

s (19

90,

2002

y 20

04), M

éxico

(199

0, 20

02 y

2004

), Nica

ragu

a (19

90, 2

002 y

2004

) y Pa

namá

(199

0,20

02 y

2003

)

33, 3

4, 35

In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses:

Belic

e (19

90, 2

002 y

2004

), Cos

ta Ri

ca (1

990,

2002

y 200

4), E

l Salv

ador

(199

0, 20

02 y

2004

), Gua

temala

(199

0 y 20

02), H

ondu

ras (

1990

, 200

2y

2004

), M

éxico

(199

0, 2

002

y 20

04),

Nica

ragu

a (1

990,

200

2 y

2004

) y P

anam

á (1

990,

2002

y 20

03)

36Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

Beli

ce (1

992-

2003

)

37Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

Beli

ce (1

991

y 199

5-20

06)

38Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

Beli

ce (1

990,

199

4 y 1

998-

2003

) y N

icara

gua (

2002

-20

04)

39In

cluye

la in

form

ació

n de

los s

iguien

tes p

aíses

: Beli

ce (1

995

y 20

00),

Costa

Rica

(199

5 y

2000

), El

Salva

dor (

1990

y 2

000)

, Gua

temala

(200

0), H

ondu

ras (

2000

), M

éxico

(200

0),

Nica

ragu

a (20

00) y

Pan

amá (

2000

)

40In

cluye

la in

form

ació

n de

los s

iguien

tes p

aíses

par

a lo

s año

s: Be

lice

(199

6 y

2000

), Co

staRi

ca (1

995 y

2000

), El S

alvad

or (1

990 y

2000

), Gua

temala

(200

0), H

ondu

ras (

2000

), Méx

ico(2

000)

, Nica

ragu

a (20

00) y

Pan

amá (

2000

)

41Ex

cluye

por

falta

de

info

rmac

ión

los s

iguien

tes p

aíses

: Beli

ce (1

990)

, Cos

ta Ri

ca (1

990)

,Gu

atema

la (1

990)

, Hon

dura

s (19

90),

Méx

ico (2

000)

, Nica

ragu

a (20

00) y

Pan

amá (

2000

)

42In

cluye

la in

form

ació

n de

los s

iguien

tes p

aíses

par

a lo

s año

s: Be

lice

(199

6 y

2000

), Co

staRi

ca (1

995 y

2000

), El S

alvad

or (1

990 y

2000

), Gua

temala

(200

0), H

ondu

ras (

2000

), Méx

ico(2

000)

, Nica

ragu

a (20

00) y

Pan

amá (

2000

)

43In

cluye

la in

form

ació

n de l

os si

guien

tes pa

íses p

ara l

os añ

os: B

elice

(200

0), C

osta

Rica

(199

5y

2000

), El

Salva

dor (

1990

y 2

000)

, Gua

temala

(200

0), H

ondu

ras (

2000

), M

éxico

(200

0),

Nica

ragu

a (20

00) y

Pan

amá (

2000

)

44In

cluye

la in

form

ació

n de

los s

iguien

tes p

aíses

par

a lo

s año

s: Be

lice

(199

6 y

2000

), Co

staRi

ca (1

995 y

2000

), El S

alvad

or (1

990 y

2000

), Gua

temala

(200

0), H

ondu

ras (

2000

), Méx

ico(2

000)

, Nica

ragu

a (20

00) y

Pan

amá (

2000

)

45, 4

6In

cluye

todo

s los

país

es p

ara e

l per

íodo

de 1

990

al 20

06

47In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Méx

ico (1

994

y 199

8-20

06) y

Nica

ragu

a 199

0-20

06)

48In

cluye

dato

s par

a el p

erío

do d

e 199

0 al

2006

49In

cluye

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 1

990,

200

0 y 2

005

50In

cluye

todo

s los

país

es p

ara e

l per

íodo

de 1

990

- 200

4

51In

cluye

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 1

990

y 200

0 - 2

004

52In

cluye

todo

s los

país

es p

ara e

l per

íodo

de 1

990

- 200

4

53Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a B

elice

(199

0-20

04)

54Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a B

elice

(199

5, 1

994,

199

8, 1

999

y 200

3-20

06)

55In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses:

Belic

e (19

94), C

osta

Rica

(199

0, 19

96, 2

000 y

2005

), El

Salva

dor (

1994

), Gu

atema

la (1

990)

, Méx

ico (1

990,

199

2, 1

994,

199

6, 1

998,

200

0 y 2

002)

y Pan

amá (

1994

)

56In

cluye

dato

s par

a el p

erío

do d

e 199

0 - 2

007

57In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses:

Belic

e (19

95-2

005)

, Cos

ta Ri

ca (1

991-

2006

), El S

alvad

or(1

999-

2003

), M

éxico

(199

0-20

06) y

Pan

amá (

1995

-200

6)

58In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Beli

ce (1

995-

2006

), Co

sta R

ica (1

991-

1997

y 1

999-

2006

), El

Salva

dor (

1999

-200

3), G

uatem

ala (1

990-

2006

), M

éxico

(199

0-20

06) y

Pan

amá

(199

5-20

06)

59In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Beli

ce (1

995-

2001

, 200

5 y

2006

), Co

sta R

ica (1

991,

1992

, 199

4 y 1

996-

2006

), M

éxico

(199

0-20

06) y

Pan

amá (

1995

-200

6)

60In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses:

Costa

Rica

(199

0, 19

91 y

1994

-200

6), G

uatem

ala (2

005

y 200

6), M

éxico

(199

1-20

06) y

Pan

amá (

1994

-200

6)

61In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 1

990

y 200

0-20

08

62Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a B

elice

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

63Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a B

elice

(199

0, 2

000

y 200

5)

64Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a B

elice

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

65Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a B

elice

(199

0, 2

000

y 200

5)

66Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a B

elice

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

67Ex

cluye

por

falta

de

info

rmac

ión

los s

iguien

tes p

aíses

: Beli

ce (1

990,

199

5, 2

000

y 20

05),

Costa

Rica

(200

0 y 2

005)

, El S

alvad

or (1

995

y 200

0) y

Pana

má (2

000

y 200

5)

Page 361: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

359

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: MESOAMÉRICA

68Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a B

elice

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

69In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os si

guien

tes pa

íses:

Costa

Rica

(200

0 y 20

05), E

l Salv

ador

(199

5,20

00 y

2005

), M

éxico

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

y Pa

namá

(200

0 y 2

005)

70In

cluye

dato

s pa

ra el

per

íodo

de 1

990-

1995

, 200

0, 2

005

71In

cluye

info

rmac

ión

para

Méx

ico (1

990,

199

5, 2

000

y 200

5)

72In

cluye

todo

s los

país

es p

ara 1

990

y 200

5

73In

cluye

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses:

Belic

e (19

95-2

005)

, Cos

ta Ri

ca (1

990-

2004

), El S

alvad

or(1

990-

2000

), Gu

atema

la (1

990-

2000

), Ho

ndur

as (1

990-

2000

), M

éxico

(199

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1990

-200

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ara l

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Belic

e (19

97-2

003)

, El S

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or (1

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2000

) y M

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(199

2-20

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76In

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ara l

os pa

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Belic

e (19

97-2

003)

, Gua

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1990

-200

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1990

-200

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990-

2007

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, Nica

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todo

s los

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85In

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s los

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2007

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, 199

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, 199

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, 199

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991,

199

3, 1

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200

2 y

2007

), El

Salva

dor (

1992

), Gu

atema

la (1

995,

199

9 y 2

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, Hon

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199

6 y

1999

), M

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(199

3, 1

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y 20

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a (1

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y 19

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ce (1

998,

200

0, 2

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y 200

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), El S

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or (1

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2005

), Gua

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8, 20

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2005

), Hon

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), M

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y 200

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a (19

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, Méx

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, Hon

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, 200

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, Méx

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), Ho

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2003

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0, 2

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, 200

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, Cos

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, El S

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2000

, 200

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, 200

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s los

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990,

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99In

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s los

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2008

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, El S

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or (2

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, Gua

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2), H

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2001

), M

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000,

200

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5), N

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990

y 200

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(199

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06),

Nica

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, Cos

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), Gu

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(199

0), N

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ye p

or fa

lta d

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orma

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alvad

or (2

006)

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or fa

lta d

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orma

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990

y 200

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ye p

or fa

lta d

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orma

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a Beli

ce (1

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2004

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or fa

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2006

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l Salv

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y Pa

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0-20

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a Beli

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990-

2004

)

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a Beli

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990

y 200

0-20

06)

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form

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s 199

0, 1

999-

2008

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país

es: E

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Méx

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form

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n pa

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995)

y M

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(199

5, 1

999-

2008

)

121

Exclu

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or fa

lta d

e inf

orma

ción

a Beli

ce (1

995

y 200

3-20

05)

122

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ye in

form

ació

n pa

ra: G

uatem

ala (1

995,

199

9-20

08) y

Méx

ico (1

995,

199

9-20

08)

123

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ye p

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a Beli

ce (1

990-

2008

)

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Inclu

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info

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para

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aíses

: Gua

temala

(199

0-20

05) y

Hon

dura

s (19

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125

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or fa

lta d

e inf

orma

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a Beli

ce (1

990-

2005

)

126,

127

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info

rmac

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: Méx

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990-

2005

)

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lta d

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a Beli

ce (1

990-

2005

)

129

Inclu

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dos l

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e 199

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130

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par

a el p

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e 199

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07

131

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par

a el p

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e 199

0-20

07

132

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par

a el p

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e 199

0-20

05

133

Inclu

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info

rmac

ión p

ara l

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Belic

e (19

91 y

1999

-200

4), C

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Rica

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1, 19

99-

2003

y 2

006)

, El S

alvad

or (1

991,

199

9-20

03, 2

005

y 20

06),

Guate

mala

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1), H

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(199

1), M

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(199

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, Nica

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1999

-200

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991 y

1999

-20

04)

134

Inclu

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info

rmac

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ara l

os pa

íses:

Belic

e (20

02),

Costa

Rica

(200

2), E

l Salv

ador

(200

2),

Guate

mala

(200

2), H

ondu

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2002

), M

éxico

(200

2), N

icara

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2002

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anam

á (20

02)

135

Inclu

ye la

info

rmac

ión p

ara l

os pa

íses:

Belic

e (20

02),

Costa

Rica

(200

3), E

l Salv

ador

(200

5),

Guate

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(200

5), H

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2006

), M

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(200

4), N

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2006

) y P

anam

á (20

04)

136

Inclu

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: Beli

ce (1

990

y 200

0), C

osta

Rica

(199

0 y 2

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, El

Salva

dor (

1990

, 200

0, 2

002

y 200

7), G

uatem

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990)

, Hon

dura

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90 y

2000

), M

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(199

0 y 2

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2003

), Ni

cara

gua (

1990

) y P

anam

á (19

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2000

)

137,

138

, 139

Inclu

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atos p

ara e

l per

íodo

de 1

990-

2007

140,

141

, 142

Inclu

ye d

atos p

ara e

l per

íodo

de 1

990-

2005

143

Inclu

ye d

atos p

ara e

l per

íodo

de 1

999-

2005

144

Inclu

ye d

atos p

ara e

l per

íodo

de 1

990-

2002

145

Inclu

ye d

atos p

ara e

l per

íodo

de 1

990-

2007

Page 362: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

360

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: SUDAMÉRICA

Suda

mér

ica

Notas

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

TIERR

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59.10

0,01.7

59.10

0,01.7

59.10

0,01.7

59.10

0,01.7

59.10

0,01.7

59.10

0,01.7

59.10

0,01.7

59.10

0,01.7

59.10

0,01.7

59.10

0,0Tie

rras a

rables

y cu

ltivos

perm

anen

tes2

1000

ha10

9.673

,011

8.079

,011

8.597

,011

9.052

,011

9.496

,011

9.887

,012

1.143

,012

0.965

,012

1.257

,012

3.749

,012

4.079

,012

4.867

,612

5.790

,0Tie

rras a

rables

de l

abran

za3

1000

ha97

.140,6

104.2

80,0

104.9

39,0

105.2

42,0

105.7

03,0

106.1

18,0

107.3

98,0

107.4

29,0

107.8

15,0

110.3

42,0

110.5

65,0

111.3

11,7

112.5

86,1

Tierra

s dest

inada

s a cu

ltivos

perm

anen

tes4

1000

ha12

.532,0

13.79

9,013

.658,0

13.81

0,013

.793,0

13.76

9,013

.653,0

13.45

1,013

.342,0

13.40

7,013

.514,0

13.55

5,913

.203,9

Tierra

s no

arable

s y n

o pe

rman

entes

510

00 ha

1.649

.427,0

1.641

.021,0

1.640

.503,0

1.640

.048,0

1.639

.604,0

1.639

.213,0

1.637

.957,0

1.638

.135,0

1.637

.843,0

1.635

.351,0

1.635

.021,0

1.634

.232,4

1.633

.310,0

Tierra

s de p

radera

s y p

astos

perm

anen

tes10

00 ha

446.1

29,0

455.1

33,0

456.6

43,0

457.6

35,0

458.4

81,0

458.1

39,0

454.1

17,0

454.0

07,0

453.0

97,5

454.1

53,5

454.5

13,8

454.2

93,8

454.3

95,0

Tierra

s arab

les y

cultiv

os p

erman

entes

por

habit

ante

6ha

/ 100

Hab

36,9

36,5

35,5

35,1

34,7

34,3

34,2

33,7

33,3

33,5

33,2

32,9

32,7

Supe

rficie

agrí

cola

710

00 ha

555.8

02,0

573.2

12,0

575.2

40,0

576.6

87,0

577.9

77,0

578.0

26,0

573.5

31,0

573.0

50,0

573.1

68,5

576.7

82,5

577.4

74,8

578.0

43,4

579.0

67,0

Irriga

ción

de la

supe

rficie

agríc

ola8

1000

ha9.4

99,0

10.08

6,010

.254,0

10.39

0,010

.417,0

10.48

9,010

.489,0

1.999

,067

2,071

7,075

2,093

0,01.7

57,0

Cons

umo

de fe

rtiliza

ntes

9kt

10.63

0,913

.633,1

14.76

4,812

.310,9

12.94

9,219

.057,6

N

itroge

nado

s10

kt3.6

58,0

4.519

,04.4

98,7

4.043

,94.2

92,6

8.411

,5

Fos

fatad

os11

kt3.4

59,4

4.635

,35.2

00,2

4.090

,74.3

56,4

5.594

,8

Potá

sicos

12kt

3.513

,54.4

78,9

5.065

,94.1

76,3

4.300

,15.0

51,4

Cons

umo

de fe

rtiliza

ntes p

or he

ctárea

cultiv

ada

tn mé

tricas

/ ha

0,10,1

0,10,1

0,10,2

BOSQ

UES

Supe

rficie

forest

al, to

tal13

1000

ha89

0.818

,087

1.806

,886

4.202

,386

0.400

,085

6.597

,885

2.795

,584

8.544

,484

4.293

,284

0.042

,183

5.790

,983

1.539

,882

7.288

,782

3.037

,5

Plan

tacion

es14

1000

ha8.2

31,0

10.57

5,011

.357,0

B

osqu

e natu

ral15

1000

ha88

2.587

,084

2.221

,082

0.183

,0Pro

porci

ón d

e la s

uperf

icie c

ubier

ta po

r bos

ques

16%

50,2

48,5

48,2

48,0

47,8

47,5

47,3

47,0

46,8

Tasa

de va

riació

n an

ual d

e la s

uperf

icie f

oresta

l17

%-0,

4-0,

5Su

perfic

ie Fo

restal

Bajo

Plan

es de

Man

ejo ER

F18

1000

ha25

.809,0

25.80

9,0(Ev

aluac

ión R

ecurs

os F

oresta

les)

Propo

rción

de l

a sup

erfici

e fore

stal b

ajo p

lan ER

F19

%Pro

ducc

ión d

e mad

era en

rollo

2010

00 m

327

1.089

,630

7.170

,930

4.388

,730

5.765

,632

5.558

,033

1.333

,931

9.409

,832

7.231

,635

6.310

,635

1.978

,036

9.389

,535

2.732

,936

6.114

,9

Prod

ucció

n de m

adera

en ro

llo in

dustr

ial21

1000

m3

109.8

69,7

133.5

52,7

128.6

63,8

129.0

58,4

142.9

09,0

145.3

13,0

132.7

97,1

140.0

21,7

167.1

06,9

160.7

20,2

175.8

54,1

160.4

01,6

171.7

59,0

Produ

cción

de l

eña y

carbó

n22

1000

m3

161.2

19,8

173.6

18,2

175.7

24,9

176.7

07,2

182.6

49,0

186.0

20,9

186.6

12,7

187.2

09,9

189.2

03,8

206.9

20,1

205.5

29,1

203.6

39,6

206.1

92,0

Produ

cción

de t

abler

os d

e mad

era23

1000

m3

4.142

,85.7

30,3

7.330

,36.8

07,8

7.834

,68.6

97,3

9.142

,79.9

44,5

11.45

9,113

.050,1

13.08

3,714

.175,7

14.57

7,1Pro

ducc

ión d

e pap

el y c

artón

2410

00 m

37.7

40,8

9.204

,29.9

70,4

9.562

,29.6

64,4

10.24

4,411

.062,3

11.42

8,212

.086,8

12.90

0,813

.606,8

10.58

7,010

.683,0

BIOD

IVER

SIDAD

Área

s prot

egida

s, nú

mero

25No

.1.0

551.3

501.4

391.4

881.5

311.5

651.5

671.5

671.5

671.5

75Ár

eas p

roteg

idas,

área t

otal

2610

00 ha

132.7

51,9

168.8

62,4

185.0

01,8

187.9

52,2

188.0

47,1

188.0

95,1

188.8

10,4

188.8

10,4

188.8

10,5

189.4

03,8

Reser

va n

atural

estr

icta/Á

rea n

atural

silve

stre,

núme

ro27

No.

194

207

215

215

215

215

214

214

214

Reser

va n

atural

estric

ta/Ár

ea n

atural

silve

stre,

área t

otal

2810

00 ha

8.424

,68.6

78,0

8.935

,58.9

35,5

8.935

,58.9

35,5

8.926

,28.9

26,2

8.926

,29.0

50,5

Parqu

es na

ciona

les, n

úmero

29No

.29

835

136

136

536

836

836

936

936

9Pa

rques

nacio

nales

, área

tota

l30

1000

ha49

.932,1

60.94

8,862

.631,6

63.75

0,663

.840,0

63.84

0,063

.855,0

63.85

5,063

.855,0

Monu

mento

s natu

rales,

núm

ero31

No.

4874

7474

7474

7575

75Mo

nume

ntos n

atural

es, ár

ea t

otal

3210

00 ha

2.486

,58.6

70,5

8.670

,58.6

51,8

8.651

,88.6

51,8

8.652

,38.6

52,3

8.652

,3Ár

ea d

e man

ejo d

e háb

itat/e

spec

ies, n

úmero

33No

.13

320

626

130

534

537

938

038

038

0Ár

ea d

e man

ejo d

e háb

itat/e

spec

ies, á

rea to

tal34

1000

ha9.3

11,9

9.799

,510

.027,4

10.21

4,610

.220,1

10.26

8,110

.277,4

10.27

7,410

.277,4

Paisa

je ter

restre

y ma

rino

proteg

ido, n

úmero

35No

.19

122

422

622

622

622

622

622

622

6Pa

isaje

terres

tre y

marin

o pro

tegido

, área

total

3610

00 ha

17.18

4,019

.458,4

19.47

0,919

.470,9

19.47

0,919

.470,9

19.47

0,919

.470,9

19.47

0,9Ár

ea p

roteg

ida co

n rec

ursos

man

ejado

s, nú

mero

37No

.19

128

830

230

330

330

330

330

330

3Ár

ea p

roteg

ida co

n rec

ursos

man

ejado

s, áre

a tota

l38

1000

ha45

.190,7

60.90

2,661

.342,2

61.34

2,261

.342,2

61.34

2,261

.342,2

61.34

2,261

.342,2

Núme

ro tot

al de

espe

cies a

mena

zada

s39

No.

2.339

2.427

3.346

4.900

5.043

5.282

Tasa

de va

riació

n an

ual d

el nú

mero

total

%1,9

37,9

46,4

1,42,3

de e

spec

ies a

mena

zada

sNú

mero

de e

spec

ies a

mena

zada

s, Ma

mífer

os40

No.

338

358

348

351

336

375

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, A

ves

41No

.47

648

348

256

556

657

2Nú

mero

de e

spec

ies am

enaz

adas,

Rep

tiles

42No

.95

9696

9797

97Nú

mero

de e

spec

ies am

enaz

adas,

Anfi

bios

43No

.16

1662

763

167

8Nú

mero

de e

spec

ies am

enaz

adas,

Pec

es44

No.

4044

174

294

354

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, M

olusco

s45

No.

4469

6969

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, In

verte

brado

s46

No.

7230

2939

117

Núme

ro d

e esp

ecies

amen

azad

as, P

lantas

47No

.1.3

121.3

562.9

883.0

113.0

20

Page 363: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

361

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: SUDAMÉRICA

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

AGUA

DUL

CEPo

rcenta

je de

la p

oblac

ión co

n ac

ceso

al ag

ua p

otable

48%

84,3

86,7

89,1

88,3

90,2

Porce

ntaje

de la

pob

lación

con

acce

so49

%58

,061

,163

,7al

agua

pota

ble, r

ural

Porce

ntaje

de la

pob

lación

con

acce

so50

%93

,894

,495

,3al

agua

pota

ble, u

rbana

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so51

%71

,674

,276

,075

,077

,4a s

ervici

os d

e san

eami

ento

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so52

%38

,241

,744

,7a s

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os d

e san

eami

ento,

rural

Propo

rción

de l

a pob

lación

con

acce

so53

%83

,083

,684

,3a s

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os d

e san

eami

ento,

urba

naPro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a de a

gua d

ulce

54kt

318,5

427,3

441,1

461,8

505,1

537,8

572,8

632,0

637,9

672,6

663,1

686,7

Produ

cción

de p

esca d

e agu

a dulc

e, ca

ptura

55kt

294,7

365,6

330,5

336,2

347,3

349,7

371,7

398,8

402,1

426,2

417,2

430,2

Produ

cción

de p

esca d

e agu

a dulc

e, ac

uicult

ura56

kt23

,861

,711

0,612

5,515

7,818

8,120

1,223

3,123

5,824

6,424

5,925

6,5Pro

porci

ón d

el tot

al de

recu

rsos h

ídrico

s utili

zada

57%

1,01,3

1,2Ex

tracc

ión d

e agu

a, tot

al58

1.000

Km3

20.46

0,010

0.470

,016

4.410

,0Ex

tracc

ión d

e agu

a por

habit

ante

59m3 /

Hab

68,8

310,7

471,0

Extra

cción

de a

gua e

n ag

ricult

ura60

%87

,168

,668

,2Ex

tracc

ión d

e agu

a en

el sec

tor in

dustr

ial61

%6,7

13,3

12,6

Extra

cción

de a

gua e

n el

sector

dom

éstico

62%

6,218

,119

,3

ÁREA

S COS

TERA

S Y M

ARIN

ASPro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na63

kt13

.612,9

18.93

5,716

.561,2

10.02

0,615

.793,6

17.25

1,814

.200,5

15.28

5,011

.967,4

16.72

8,915

.958,1

13.69

8,9Pro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na, c

aptur

a64

kt13

.487,7

18.76

3,916

.304,7

9.784

,515

.724,5

17.17

2,414

.137,4

15.20

6,211

.857,4

16.62

9,815

.868,6

13.60

6,6Pro

ducc

ión to

tal d

e pesc

a mari

na, a

cuicu

ltura

65kt

125,2

171,8

256,5

236,1

69,1

79,4

63,0

78,8

110,0

99,0

89,5

92,3

Área

s mari

nas p

roteg

idas

6610

00 ha

18.97

1,421

.259,4

21.27

3,421

.273,4

21.27

3,421

.371,6

21.37

1,621

.371,6

21.37

1,621

.371,6

21.37

1,621

.371,6

Área

total

de m

angla

r67

1000

ha2.0

73,3

1.995

,61.9

77,9

ATMÓ

SFER

AEm

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

)68

kt15

9.238

,019

4.785

,021

6.136

,022

4.302

,022

6.819

,022

1.078

,022

0.658

,020

9.903

,021

4.714

,023

0.310

,0Em

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

) per

cápit

a69

tn / H

ab0,5

0,60,6

0,70,7

0,60,6

0,60,6

0,6Em

ision

es de

dióx

ido d

e carb

ono

(CO2

) por

70tn

/ Mill

US$

80,0

80,4

82,9

85,3

87,5

82,7

81,9

78,1

78,2

78,4

dólar

PPA

del P

IB20

00 PP

APo

r com

busti

bles f

ósile

s gase

osos

72kt

29.32

3,036

.928,0

43.57

1,048

.687,0

50.01

4,046

.052,0

48.67

9,047

.935,0

49.90

8,054

.653,0

Por c

ombu

stible

s fós

iles l

íquido

s73

kt98

.373,0

121.9

05,0

133.3

97,0

137.4

29,0

139.7

28,0

135.3

73,0

134.9

40,0

126.3

88,0

128.6

25,0

137.3

68,0

Por c

ombu

stible

s fós

iles s

ólido

s74

kt19

.691,0

22.24

6,024

.646,0

24.81

9,024

.373,0

24.43

6,022

.976,0

21.77

4,022

.783,0

23.78

6,0Em

ision

es de

part

ículas

(par)

75kt

102,7

87,8

96,6

97,6

98,8

96,1

93,3

89,4

94,2

134,0

Emisi

ones

de d

ióxido

de a

zufre

(SO2

)76

kt1.9

62,2

1.900

,31.6

99,6

1.988

,02.0

70,3

2.182

,9Em

ision

es de

óxid

os d

e nitró

geno

(NOx

)77

kt5.2

18,0

5.232

,55.2

64,5

5.581

,76.0

24,8

6.045

,6Em

ision

es de

hidr

ocarb

uros (

HC)

78kt

1.763

,789

4,798

8,81.0

07,7

1.180

,61.1

74,6

Emisi

ones

de m

onóx

ido d

e carb

ono

(CO)

79kt

16.70

3,913

.370,7

15.09

5,814

.439,5

13.05

6,916

.705,7

Emisi

ones

de m

etano

, tota

l80

kt16

.521,4

869,9

928,6

1.703

,670

6,0Po

r ene

rgía

81kt

1.104

,039

2,441

0,847

6,938

,6Po

r agri

cultu

ra82

kt12

.348,5

344,0

364,8

862,3

516,4

Por o

tras f

uente

s83

kt3.0

68,9

131,4

153,0

364,4

151,1

Cons

umo

de su

stanc

ias q

ue ag

otan

la ca

pa d

e84

tn PA

O18

.623,4

26.96

3,423

.159,4

21.56

2,722

.313,5

19.65

7,117

.015,5

10.35

5,710

.991,9

11.06

2,98.2

32,8

8.115

,74.1

16,3

ozon

o, tot

alCo

nsum

o de

susta

ncias

que

agota

n la

capa

de

85tn

PAO

18.13

1,424

.909,6

21.01

8,819

.316,1

20.55

3,817

.088,0

14.46

2,08.6

93,8

8.968

,38.7

44,5

5.929

,15.9

93,0

1.087

,5oz

ono,

Cloro

fluoro

carbo

nos C

FCs

Cons

umo

de su

stanc

ias q

ue ag

otan

la ca

pa d

e ozo

no,

86tn

PAO

290,5

669,2

687,2

747,7

759,4

1.253

,51.2

87,8

1.029

,81.1

68,5

1.490

,61.4

29,7

1.529

,72.4

32,5

Hidro

clorof

luoroc

arbon

os H

CFCs

Cons

umo

de su

stanc

ias q

ue ag

otan

la ca

pa d

e ozo

no,

87tn

PAO

201,5

1.384

,61.4

53,4

1.498

,91.0

00,3

1.315

,61.2

65,7

632,1

855,1

827,8

874,0

593,0

596,3

Brom

uro d

e meti

lo

ASEN

TAMI

ENTO

HUM

ANO

Dens

idad

de p

oblac

ión88

Hab/K

m16

,718

,118

,719

,019

,319

,619

,920

,220

,420

,721

,021

,321

,621

,8Po

blació

n urb

ana

8910

0022

1.109

,024

9.443

,027

8.617

,030

6.205

,0

Page 364: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

362

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: SUDAMÉRICA

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Porce

ntaje

de la

pobla

ción q

ue vi

ve en

las z

onas

urban

as90

%74

,477

,179

,881

,8Ta

sa de

crec

imien

to an

ual d

e la p

oblac

ión u

rbana

91%

5,82,4

2,21,9

Pobla

ción

rural

1000

76.13

6,073

.952,0

70.44

8,068

.019,0

Porce

ntaje

de la

pob

lación

que

vive

en la

s zon

as rur

ales

%25

,622

,920

,218

,2Ta

sa de

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imien

to an

ual d

e la p

oblac

ión ru

ral%

-0,3

-0,6

-1,0

-0,7

Núme

ro de

ciud

ades

con m

ás de

750.0

00 ha

b. o m

ás.92

No.

4243

4343

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

con

93%

23,8

24,9

25,6

26,7

más d

e 750

mil h

ab. o

más.

Núme

ro de

ciud

ades

que t

ienen

entre

500

.000

94No

.22

2732

33y 1

milló

n de h

ab.

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

que t

ienen

95%

6,67,5

8,38,1

entre

500 m

il y 1

milló

n de h

ab.

Núme

ro de

ciud

ades

que t

ienen

entre

196

No.

2727

2729

y 5 m

illone

s de h

ab.

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

que

97%

24,2

22,4

20,9

20,8

tiene

n entr

e 1 y

5 millo

nes d

e hab

.Nú

mero

de ci

udad

es qu

e tien

en en

tre 5

98No

.2

23

4y 1

0 millo

nes d

e hab

.Po

rcenta

je po

blació

n qu

e vive

en ci

udad

es qu

e99

%7,2

5,07,0

8,9tie

nen e

ntre 5

y 10

millo

nes d

e hab

.Nú

mero

de ci

udad

es co

n 10 m

illone

s de h

ab. o

más.

100

No.

23

33

Porce

ntaje

pobla

ción

que v

ive en

ciud

ades

con

101

%11

,815

,514

,914

,4má

s de 1

0 millo

nes d

e hab

.Pro

porci

ón d

e la p

oblac

ión u

rbana

que

vive

en tu

gurio

s10

2%

38,8

34,2

Long

itud

de c

arrete

ras10

3Km

2.627

.763,0

2.627

.763,0

DESA

STRE

S Y

VULN

ERAB

ILIDA

DNú

mero

de e

vento

s Natu

rales

y tec

nológ

icos,

total

108

No.

3641

3839

3467

5564

4551

5145

467

Inund

acion

es10

9No

.16

1519

177

2623

2319

1513

2319

6To

rmen

tas, h

uraca

nes,

ciclon

es y t

ornad

os11

0No

.0

15

12

35

51

25

00

0Te

rremo

tos11

1No

.2

62

23

13

10

23

05

0De

sliza

mien

tos y

ava

lanch

as11

2No

.1

41

44

53

42

10

01

0Te

mpera

turas

extre

mas

113

No.

02

00

06

22

16

00

50

Erupc

iones

volcá

nicas

114

No.

10

00

10

12

10

15

11

Sequ

íasNo

.2

01

21

21

31

14

11

1De

sastre

s tec

nológ

icos

116

No.

1413

1013

1624

1724

2024

2516

14Pé

rdida

s eco

nómi

cas p

or de

sastre

s natu

rales

117

Mill $

37,0

15.01

4,738

6,18.4

23,0

5.139

,966

5,06.2

50,9

50.35

5,01.1

48,2

654,4

2.181

,235

6,82.4

00,0

545,0

extre

mos y

tecn

ológic

osInu

ndac

iones

118

Mill $

0,03,0

257,1

1.394

,03.1

60,0

330,0

924,9

319,0

1.028

,230

4,452

6,120

6,830

0,054

5,0To

rmen

tas, h

uraca

nes,

ciclon

es y t

ornad

os11

9Mi

ll $0,0

0,00,0

0,00,5

0,015

,025

,00,0

350,0

0,00,0

0,00,0

Terre

motos

120

Mill $

1,01,7

129,0

0,01.8

57,4

0,030

0,00,0

0,00,0

5,10,0

2.100

,00,0

Desli

zami

entos

y a

valan

chas

121

Mill $

0,00,0

0,00,0

0,075

,00,0

11,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

Temp

eratur

as ex

trema

s12

2Mi

ll $0,0

10,0

0,00,0

0,010

,00,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

0,0Eru

pcion

es vo

lcánic

as12

3Mi

ll $0,0

0,00,0

0,00,0

0,011

,00,0

0,00,0

0,015

0,00,0

0,0Se

quías

124

Mill $

36,0

0,00,0

29,0

122,0

250,0

0,00,0

120,0

0,01.6

50,0

0,00,0

0,0De

sastre

s tec

nológ

icos

125

Mill $

0,015

.000,0

0,07.0

00,0

0,00,0

5.000

,050

.000,0

0,00,0

0,00,0

0,00,0

Núme

ro de

pers

onas

afecta

das p

or de

sastre

s12

6No

.2.4

99.16

030

0.500

1.777

.421

10.47

0.508

1.396

.090

487.3

671.9

62.24

942

0.805

2.771

.175

2.731

.256

830.2

6986

1.951

5.274

.651

5na

turale

s y te

cnoló

gicos

Inund

acion

es12

7No

.15

.000

275.0

001.0

82.62

136

9.300

150.0

4048

6.707

612.2

5027

8.455

380.4

7453

1.482

749.3

8156

1.293

2.884

.083

Torm

entas

, hura

cane

s, cic

lones

y torn

ados

128

No.

1.000

00

00

00

14.00

00

560

00

0Te

rremo

tos12

9No

.0

053

.115

01.2

05.93

30

349.9

780

00

27.64

50

505.1

10De

sliza

mien

tos y

ava

lanch

as13

0No

.0

00

00

00

00

1.200

00

0Te

mpera

turas

extre

mas

131

No.

025

.000

00

00

00

1.839

.888

2.139

.467

00

884.5

72Eru

pcion

es vo

lcánic

as13

2No

.0

020

00

00

012

8.150

00

030

0.013

0Se

quías

133

No.

2.483

.160

064

1.200

10.10

0.000

40.00

00

1.000

.000

00

55.00

052

.990

01.0

00.00

0De

sastre

s tec

nológ

icos

134

No.

500

285

1.208

117

660

2120

055

0.813

3.547

253

645

886

5Pro

porci

ón d

e la p

oblac

ión en

situa

ción

de p

obrez

a%

46,4

50,3

21,7

43,3

30,7

40,3

51,6

40,1

43,1

40,0

33,4

Page 365: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

363

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: SUDAMÉRICA

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Propo

rción

de l

a pob

lación

ocu

pada

con

ingres

os13

5%

12,3

10,4

7,315

,68,2

7,4inf

eriore

s a $1

por d

ía seg

ún la

PPA

Coefi

ciente

de l

a brec

ha p

obrez

a13

6%

19,9

20,8

7,518

,87,0

17,7

22,7

6,326

,016

,312

,7Ta

sa de

dese

mpleo

de j

óven

es co

mo p

orcen

taje d

e13

7%

5,87,3

9,511

,012

,210

,111

,111

,412

,011

,19,5

la po

blació

n de

jóve

nes,

ambo

s sex

os

MEDI

O AM

BIENT

E Y SA

LUD

HUMA

NATa

sa bru

ta de

mort

alida

d inf

antil

138

* 100

0 Hab

46,1

37,2

30,7

24,6

Espera

nza d

e vida

feme

nina

139

Años

70,4

72,3

73,9

75,3

Espera

nza d

e vida

masc

ulina

140

Años

63,7

65,2

66,9

68,3

Ofert

a ca

lórica

141

Kcal/

día *

Hab

2.608

,02.7

78,1

2.809

,52.8

20,0

2.846

,82.8

51,4

2.856

,12.8

53,2

389.7

92,0

201.4

43,0

307.2

44,0

459.5

00,0

738.4

02,0

703.0

41,0

Caso

s rep

ortad

os d

e Den

gue

142

No.

021

3.415

308.4

9163

3.337

252.1

5532

7.032

575.7

0690

3.535

436.4

4316

7.774

299.3

0944

8.565

724.7

41Ca

sos r

eport

ados

de M

alaria

144

No.

00

01.1

00.22

51.0

74.87

21.0

03.06

286

4.141

817.5

8786

9.579

805.2

7394

7.212

826.3

870

Caso

s rep

ortad

os d

e Cóle

ra14

5No

.0

34.75

712

.924

49.47

46.8

411.8

5351

016

2528

50

00

TEND

ENCI

AS S

OCIO

ECON

ÓMIC

ASPo

blació

n tota

l a m

itad d

e año

146

1000

297.2

46,0

349.0

63,0

354.1

37,0

359.1

93,0

364.2

28,0

369.2

39,0

374.2

22,0

379.1

92,0

384.1

52,0

389.0

80,0

Tasa

de cr

ecim

iento

prome

dio an

ual d

e la p

oblac

ión14

7%

2,01,6

1,41,4

1,41,4

1,31,3

1,31,3

Tasa

de al

fabeti

zació

n de

adult

os, t

otal

148

%89

,386

,493

,995

,790

,490

,492

,192

,7

Ho

mbres

149

%90

,686

,294

,995

,892

,293

,293

,494

,2

Mu

jeres

150

%88

,086

,593

,095

,688

,787

,790

,991

,3Esp

eranz

a de v

ida es

colar

151

años

13,7

13,7

14,0

14,0

13,6

13,3

13,6

14,1

13,8

13,0

Homb

res15

2añ

os13

,413

,413

,713

,713

,213

,313

,313

,413

,612

,6

Mu

jeres

153

años

14,0

14,1

14,4

14,3

13,9

13,6

13,7

14,5

14,0

13,4

Línea

s de t

eléfon

o fijo

154

* 100

Hab

5,99,3

11,6

12,3

13,1

14,2

15,3

15,4

16,4

17,2

18,8

16,1

16,6

Abon

ados

a tel

éfono

s celu

lares

155

* 100

Hab

0,10,9

3,14,9

8,612

,815

,818

,623

,332

,645

,963

,8Us

uario

s de i

nterne

t15

6* 1

00 H

ab0,1

0,61,3

2,33,9

5,78,1

10,0

11,9

15,7

17,0

Dime

nsión

del

parqu

e auto

motor

No.

23.85

3.620

33.71

8.882

36.70

0.690

39.32

6.389

41.09

8.246

38.75

3.275

41.74

0.660

44.70

5.032

47.52

9.727

51.69

3.083

54.37

0.467

66.14

3.445

64.15

7.844

70.73

1.662

Uso

de en

ergía

por h

abita

nte15

7kt

de p

etróle

o96

6,596

9,599

1,498

5,01.0

37,0

1.046

,31.0

85,7

1.107

,11.1

28,9

1.121

,11.1

21,3

1.099

,21.0

88,3

1.081

,4eq

uivale

nteIm

porta

cione

s neta

s de e

nergí

a (%

de en

ergía

de15

8%

-35,5

-42,8

-49,5

-47,9

-44,1

-47,0

-48,7

-46,6

-43,8

-44,5

uso

de en

ergía

come

rcial)

Inten

sidad

energ

ética

del

produ

cto in

terno

brut

o15

910

00 b

arrile

s /2,4

2,42,3

2,32,4

2,32,3

2,32,2

2,22,2

2,12,0

2,0mi

llón

de d

ólares

cons

tantes

de P

IBOf

erta

energ

ética

reno

vable

160

kBEP

659.8

10,9

730.2

20,3

748.4

71,5

737.0

69,3

773.4

29,9

767.1

34,4

770.2

42,3

809.5

27,8

863.2

63,4

886.0

70,8

919.0

13,3

950.2

21,4

1.015

.543,9

1.053

.204,9

Ofert

a en

ergéti

ca n

o ren

ovab

lekB

EP1.5

11.42

6,21.7

97.01

1,62.0

69.19

5,32.1

24.61

1,72.1

64.31

1,22.1

73.64

4,82.1

25.88

6,52.0

84.81

9,22.1

40.99

6,02.3

04.78

4,92.3

99.91

1,72.4

15.06

3,92.4

70.36

1,32.5

60.59

8,6Po

rcenta

je de

energ

ía co

nsum

ida d

e fue

ntes r

enov

ables

161

%16

,014

,312

,412

,212

,211

,912

,312

,312

,210

,9co

n res

pecto

al to

tal d

e ene

rgía c

onsu

mida

Produ

cción

total

de e

nergí

a prim

aria p

or ha

bitan

te16

2TJ

/ Hab

0,10,1

0,10,1

0,10,1

Produ

cción

total

de e

nergí

a geo

térmi

ca16

3Tjo

ulPro

dució

n tot

al de

hidr

oene

rgía

164

Tjoul

1.827

.278,0

1.979

.585,4

2.048

.483,1

1.942

.242,3

2.063

.180,4

2.118

.857,2

2.194

.638,4

2.382

.312,6

2.403

.185,7

2.493

.875,4

Produ

cción

total

de e

nergí

a por

produ

ctos d

e cañ

a16

5kb

ep26

7.159

,020

6.670

,017

3.747

,019

4.966

,021

1.377

,023

3.524

,023

8.187

,025

2.753

,028

4.200

,032

3.836

,035

0.686

,0Pro

ducc

ión to

tal d

e carb

ón m

ineral

166

Tone

ladas

45,0

52,1

56,3

51,8

61,1

65,4

71,7

79,1

83,2

86,6

Métri

cas

Produ

cción

total

de g

as na

tural

167

Mm3

86.21

3,010

5.361

,711

4.723

,211

4.825

,511

6.224

,011

7.392

,512

8.297

,714

4.101

,514

2.865

,413

4.708

,813

9.639

,0Pro

ducc

ión to

tal d

e leñ

a16

8kb

ep26

7.159

,027

5.132

,028

6.688

,029

2.487

,5Pro

ducc

ión to

tal d

e petr

óleo

169

1000

barr

iles

1.962

.336,0

2.265

.630,0

2.309

.992,0

2.299

.121,0

2.242

.936,0

2.100

.259,0

2.283

.402,0

2.484

.390,0

2.496

.226,0

2.420

.719,0

2.465

.233,0

por d

íaPro

ducc

ión d

e ele

ctrici

dad

170

Gwh

444.7

94,0

563.0

78,0

627.3

64,0

651.7

32,0

673.2

19,0

704.9

33,0

687.2

97,0

704.7

61,0

740.8

61,0

784.6

62,0

818.8

92,0

864.7

49,0

901.6

56,0

921.4

24,0

Por f

uente

s de c

arbón

171

% de

l total

3,43,1

3,83,7

4,13,6

3,22,9

2,93,2

3,1Po

r fue

ntes d

e hidr

oene

rgía

172

% de

l total

78,8

80,2

78,7

77,6

75,3

75,9

73,0

74,3

73,7

72,1

73,4

Por f

uente

s de g

as17

3%

del to

tal9,3

9,610

,110

,911

,712

,514

,113

,513

,915

,114

,4Po

r fue

ntes n

uclea

res17

4%

del to

tal2,1

1,71,8

1,61,7

1,73,1

2,82,8

2,52,1

Por f

uente

s de p

etróle

o17

5%

del to

tal5,2

4,14,1

4,75,6

4,75,0

4,54,6

4,94,8

Ingres

o Na

ciona

l Brut

o po

r hab

itante

(méto

do A

tlas)

176

$19

.060,0

33.98

0,040

.800,0

40.66

0,037

.470,0

37.31

0,035

.450,0

30.28

0,029

.520,0

33.05

0,038

.760,0

44.93

0,0

Page 366: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

364

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

ANEXO ESTADÍSTICO: SUDAMÉRICA

Notas

:

1, 2

, 3, 4

, 5In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es en

el p

erío

do d

e 199

0 al

2005

6Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

Guya

na (1

990-

2005

)

7In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es en

el p

erío

do d

e 199

0 al

2005

8In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es en

el p

erío

do d

e 199

0 al

2002

9, 1

0, 11

, 12

Se ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n: G

uyan

a: (2

002-

2005

)

13In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es en

los a

ños 2

002

y 200

5

14Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

a los

país

es: G

uyan

a (20

00 y

2005

) y V

enez

uela

(200

0y 2

005)

15Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

a los

país

es: G

uyan

a (20

05) y

Ven

ezue

la (2

005)

16In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 1

990,

199

5, 2

000

y 200

5

17In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os 2

000

y 200

5

18Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

a lo

s país

es: A

rgent

ina

(200

0 y

2008

) y C

hile

(200

0 y

2008

)

19Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

a los

país

es: A

rgent

ina (

2000

) y C

hile

(200

0)

20, 2

1, 2

2 I

nclu

ye in

form

ació

n pa

ra to

dos l

os p

aíses

en el

per

íodo

de 1

990

al 20

06

23Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

los s

iguien

tes p

aíses

: Guy

ana

Fran

cesa

(199

0-19

93) y

Guya

na (1

990-

1992

)

24Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

los s

iguien

tes p

aíses

: Guy

ana

Fran

cesa

(199

0-20

06),

Guya

na (1

990-

2006

) y Su

rinam

e (19

90-2

006)

25In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es (1

990-

2004

)

26In

cluye

info

rmac

ión

para

todo

s los

país

es (1

990-

2004

)

27In

cluye

par

a los

país

es: A

rgent

ina (

1990

-200

3), B

rasil

(199

0-20

03),

Colo

mbia

(199

0-20

03),

Ecua

dor (

1990

-200

3) y

Guya

na Fr

ance

sa (1

995-

2003

)

28In

cluye

par

a los

país

es: A

rgent

ina (

1990

-200

4), B

rasil

(199

0-20

04),

Colo

mbia

(199

0-20

04),

Ecua

dor (

1990

-200

4) y

Guya

na Fr

ance

sa (1

995-

2004

)

29, 3

0Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

los s

iguien

tes p

aíses

: Guy

ana

Fran

cesa

(199

0-20

03) y

Urug

uay

(199

0-20

03)

31, 3

2Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

los s

iguien

tes p

aíses

: Bol

ivia

(199

0-20

03),

Guya

naFr

ance

sa (1

990-

2003

), Gu

yana

(199

0-20

03) y

Surin

ame (

1990

-200

3)

33, 3

4Se

exc

luye

n po

r falt

a de

info

rmac

ión

los s

iguien

tes p

aíses

: Ecu

ador

(199

0-20

03),

Guya

naFr

ance

sa (1

990-

2003

) y P

erú

(199

0-20

03)

35, 3

6Se

exclu

yen p

or fa

lta de

info

rmac

ión p

ara t

odo e

l per

íodo

los s

iguien

tes pa

íses:

Boliv

ia (1

990-

2003

), Ch

ile (1

990-

2003

), Gu

yana

(199

0-20

03),

Para

guay

(199

0-20

03) y

Sur

inam

e (1

990-

2003

)

37, 3

8Se

exclu

yen p

or fa

lta de

info

rmac

ión p

ara t

odo e

l per

íodo

los s

iguien

tes pa

íses:

Chile

(199

0-20

03), G

uyan

a (19

90-2

003),

Guy

ana F

rance

sa (1

990-

2003

), Para

guay

(199

0-20

03) y

Uru

guay

(199

0-20

03)

39, 4

0, 4

1, 4

2, 4

3, 4

4

Inclu

ye la

info

rmac

ión

de to

dos l

os p

aíses

par

a los

años

: 200

0, 2

002-

2004

y 200

6

45In

cluye

la in

form

ació

n de

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 2

002,

200

4 y 2

006

46, 4

7In

cluye

la in

form

ació

n de

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 2

000,

200

2, 2

004

y 200

6

48Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

Arge

ntin

a (20

02) y

Guy

ana F

ranc

esa (

1990

)

49Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

Arge

ntin

a (2

002)

, Guy

ana

Fran

cesa

(199

0), S

urin

ame

(199

0) y

Urug

uay (

1990

)

50Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

Guya

na Fr

ance

sa (1

990)

51Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

Arge

ntin

a (20

02) y

Guy

ana F

ranc

esa (

1990

)

52Se

exclu

ye po

r falt

a de i

nfor

mació

n: A

rgent

ina (

2002

), Guy

ana F

ranc

esa (

1990

), Per

ú (19

90)

y Sur

inam

e (19

90)

53Se

exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción:

Arge

ntin

a (20

02) y

Guy

ana F

ranc

esa (

1990

)

54Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión:

Chi

le (1

995-

1997

y 1

999-

2006

) y G

uyan

a Fr

ance

sa(1

992-

1996

)

55Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión:

Chi

le (1

995-

1997

y 1

999-

2006

) y G

uyan

a Fr

ance

sa(1

990-

2006

)) y G

uyan

a Fra

nces

a (19

92-1

996)

56Se

exc

luye

por

falta

de

info

rmac

ión

los s

iguien

tes p

aíses

: Arge

ntin

a (1

990

y 19

91),

Chile

(199

0-20

06), E

cuad

or (1

995 y

1996

), Guy

ana F

ranc

esa (

1992

-199

6) y

Surin

ame (

1990

-200

6)

57, 5

8In

cluye

la in

form

ació

n de l

os si

guien

tes pa

íses p

ara l

os añ

os: A

rgent

ina (

1995

y 20

00), B

olivi

a(2

000)

, Bra

sil (1

995 y

2000

), Chi

le (2

000)

, Col

ombi

a (20

00), E

cuad

or (2

000)

, Guy

ana (

2000

),Pa

ragu

ay (2

000)

, Per

ú (1

990

y 200

0), S

urin

ame (

2000

), Ur

ugua

y (20

00) y

Ven

ezue

la (2

000)

59Inc

luye l

a info

rmac

ión de

los s

iguien

tes pa

íses p

ara lo

s año

s: Ar

genti

na (2

000),

Boliv

ia (20

00),

Bras

il (2

000)

, Chi

le (2

000)

, Col

ombi

a (2

000)

, Ecu

ador

(200

0), G

uyan

a Fr

ance

sa (2

000)

,Pa

ragu

ay (2

000)

, Per

ú (2

000)

, Sur

inam

e (20

00),

Urug

uay (

2000

) y V

enez

uela

(200

0)

60, 6

1, 6

2

Inclu

ye la

info

rmac

ión

de lo

s sigu

ientes

país

es p

ara l

os añ

os: A

rgent

ina (

1995

y 20

00),

Boliv

ia (2

000)

, Bra

sil (1

995 y

2000

), Chi

le (2

000)

, Col

ombi

a (20

00), E

cuad

or (2

000)

, Guy

ana

(200

0), P

arag

uay (

2000

), Per

ú (19

90 y

2000

), Sur

inam

e (20

00), U

rugu

ay (2

000)

y Ve

nezu

ela(2

000)

63, 6

4In

cluye

todo

s los

país

es p

ara e

l per

íodo

de 1

990

al 20

06

65Inc

luye l

a info

rmac

ión de

los s

iguien

tes pa

íses p

ara lo

s año

s: Br

asil (

1990

-200

6), C

hile (

1990

-20

00), C

olomb

ia (19

90-2

006),

Ecua

dor 1

990-

(2002

), Guy

ana (

1990

-200

0), Pe

rú (2

000-

2006

)y

Vene

zuela

(199

1-20

01)

66In

form

ació

n só

lo a

nive

l reg

iona

l

67In

cluye

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 1

990,

200

0 y 2

005

68In

cluye

todo

s los

país

es p

ara e

l per

íodo

de 1

990

al 20

04

69In

cluye

todo

s los

país

es p

ara l

os añ

os: 1

990

y 200

0 al

2004

70Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a G

uyan

a (19

90-2

004)

72, 7

3, 7

4

Inclu

ye to

dos l

os p

aíses

par

a el p

erío

do d

e 199

0 al

2004

75Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a G

uyan

a Fra

nces

a (19

90-2

004)

76, 7

7, 7

8, 7

9: E

xclu

ye p

or fa

lta d

e in

form

ació

n a

Guya

na F

ranc

esa

(199

5, 1

994,

199

8, 1

999

y20

03-2

006)

80, 8

1, 8

2

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: B

olivi

a (19

90, 1

994,

199

8 y 2

000)

, Bra

sil (1

990

y19

94),

Chile

(199

0 -1

998)

, Col

ombi

a (19

90-1

994)

, Par

agua

y (19

90 y

1994

) y P

erú

(199

4)

83No

hay

dato

s

84, 8

5, 8

6

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: B

olivi

a (1

994-

2006

), Br

asil

(199

2-20

05),

Chile

(199

0 -2

005)

, Par

agua

y (19

95-2

003)

y Pe

rú (1

993-

1996

)

87In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Bol

ivia (

1994

-200

6), B

rasil

(199

2-20

05),

Chile

(199

0 -

2005

), Pa

ragu

ay (1

995-

1998

, 200

1 y 2

003)

y Pe

rú (1

993-

1996

)

88Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n a G

uyan

a Fra

nces

a (19

90 y

2000

-200

8)

89Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n lo

s sigu

ientes

país

es: G

uyan

a (19

90, 1

995,

200

0 y 2

005)

,Gu

yana

Fran

cesa

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

y Su

rinam

e (19

90, 1

995,

200

0 y 2

005)

Nota

Unida

des

1990

1995

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

Produ

cto In

terno

Brut

o, cre

cimien

to an

ual

177

%3,0

4,91,2

-1,6

2,80,4

-1,3

2,47,1

5,35,6

6,5

Agri

cultu

ra, va

lor ag

regad

o17

8%

del P

IB5,5

5,35,0

5,25,5

5,45,6

5,96,1

5,85,7

5,65,5

I

ndus

tria, v

alor a

grega

do17

9%

del P

IB26

,626

,126

,225

,824

,924

,824

,523

,924

,224

,824

,624

,624

,4

Serv

icios

, valo

r agre

gado

180

% de

l PIB

61,5

59,1

59,1

59,6

60,4

60,4

60,4

61,2

61,0

60,3

60,5

60,6

60,6

Expo

rtacio

nes d

e bien

es y s

ervici

os18

1%

del P

IB21

,917

,317

,715

,916

,919

,618

,626

,627

,028

,729

,7Im

porta

cione

s de b

ienes

y serv

icios

182

% de

l PIB

14,3

17,8

18,9

19,3

17,0

17,6

17,9

19,0

19,6

21,6

22,5

Relac

ión en

tre el

servi

cio d

e la d

euda

exter

na18

3%

del P

IB7,4

4,86,6

6,37,8

7,96,8

7,610

,48,2

6,5y e

l prod

ucto

nacio

nal b

ruto

Gasto

púb

lico

en ed

ucac

ión18

4%

del P

IB4,0

4,14,1

3,93,9

3,93,7

3,6Ga

sto en

inve

stiga

ción

y desa

rrollo

% de

l PIB

0,50,8

0,40,3

0,40,6

0,70,7

Médic

os18

7No

.93

.072

124.0

8712

3.562

230.7

1154

2.556

122.5

0821

4.345

598.0

9994

.603

227.2

1370

6.187

160.4

6918

0.812

Page 367: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

365

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: SUDAMÉRICA

90Ex

cluye

por f

alta d

e inf

orma

ción l

os si

guien

tes pa

íses:

Guya

na (1

990,

2000

y 20

05), G

uyan

aFr

ance

sa (1

990,

200

0 y 2

005)

y Su

rinam

e (19

90, 2

000

y 200

5)

91, 9

2Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n lo

s sigu

ientes

país

es: G

uyan

a (19

90, 1

995,

200

0 y 2

005)

,Gu

yana

Fran

cesa

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

y Su

rinam

e (19

90, 1

995,

200

0 y 2

005)

93Ex

cluye

por f

alta d

e inf

orma

ción l

os si

guien

tes pa

íses:

Guya

na (1

990,

2000

y 20

05), G

uyan

aFr

ance

sa (1

990,

200

0 y 2

005)

y Su

rinam

e (19

90, 2

000

y 200

5)

94Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n lo

s sigu

ientes

país

es: G

uyan

a (19

90, 1

995,

200

0 y 2

005)

,Gu

yana

Fran

cesa

(199

0, 19

95, 2

000 y

2005

), Sur

iname

(199

0, 19

95, 2

000 y

2005

) y U

rugu

ay(1

990,

199

5, 2

000

y 200

5)

95In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Arge

ntin

a (1

990,

199

5, 2

000

y 20

05),

Boliv

ia (1

990,

1995

, 200

0 y

2005

), Br

asil

(199

0, 1

995,

200

0 y

2005

), Ch

ile (1

990,

199

5, 2

000

y 20

05),

Colo

mbia

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

y Ve

nezu

ela (1

990,

199

5, 2

000

y 200

5)

96Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n lo

s sigu

ientes

país

es: G

uyan

a (19

90, 1

995,

200

0 y 2

005)

,Gu

yana

Fran

cesa

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

y Su

rinam

e (19

90, 1

995,

200

0 y 2

005)

97Ex

cluye

por

falta

de i

nfor

mació

n lo

s sigu

ientes

país

es: G

uyan

a (19

90, 1

995,

200

0 y 2

005)

,Gu

yana

Fran

cesa

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

, Per

ú (1

990,

199

5, 2

000

y 200

5) y

Surin

ame

(199

0, 1

995,

200

0 y 2

005)

98In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Arge

ntin

a (1

990,

199

5, 2

000

y 20

05),

Bras

il (1

990,

1995

, 200

0 y 20

05), C

hile

(199

0, 19

95, 2

000 y

2005

), Col

ombi

a (19

90, 1

995,

2000

y 20

05)

y Per

ú (1

990,

199

5, 2

000

y 200

5)

99In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Bra

sil (1

990

y 20

05),

Chile

(200

0 y

2005

) Col

ombi

a(1

995,

200

0 y 2

005)

y Pe

rú (1

990,

199

5, 2

000

y 200

5)

100,

101

I

nclu

ye in

form

ació

n pa

ra A

rgent

ina

(199

0, 1

995,

200

0 y

2005

) y B

rasil

(199

0, 1

995,

2000

y 20

05)

102

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

a Uru

guay

(199

0 y 2

005)

103

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: A

rgent

ina (

2000

y 20

03),

Boliv

ia (1

990-

1997

y 19

99-

2004

), Bra

sil (1

990-

2000

, 200

3 y 20

04), C

hile

(199

0-20

01), C

olom

bia (

1990

-200

5), E

cuad

or(19

90-2

004),

Guy

ana F

rance

sa (1

990-

2000

), Para

guay

(199

0-19

96, 1

999 y

2000

), Perú

(199

0-20

04),

Surin

ame (

1990

-199

6 y 1

999-

2003

), Ur

ugua

y (20

04) y

Ven

ezue

la (1

990-

2000

)

104

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra B

rasil

(200

0) y

Perú

(199

4-20

03)

105

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra B

rasil

(200

0), C

hile

(199

6 y 2

000-

2003

) y P

erú

(199

4-20

03)

106

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra B

rasil

(199

0, 1

992,

199

3, 1

995-

1999

y 2

001-

2003

) y P

arag

uay

(199

5, 1

998,

199

9 y 2

001-

2003

)

107

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra B

rasil

(199

2, 1

993,

199

5-19

99 y

200

1-20

03) y

Par

agua

y (1

995,

1998

, 199

9 y 2

001-

2003

)

108

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

Guya

na Fr

ance

sa (1

990-

2007

)

109

Inclu

ye to

dos l

os p

aíses

(199

0-20

07)

110

Exclu

ye po

r falta

de in

forma

ción l

os si

guien

tes pa

íses:

Ecua

dor (1

990-

2007

), Guy

ana F

rance

sa(1

990-

2007

) y G

uyan

a (19

90-2

007)

111

Exclu

ye po

r falta

de in

forma

ción l

os si

guien

tes pa

íses:

Guya

na Fr

ance

sa (1

990-

2007

), Guy

ana

(199

0-20

07),

Surin

ame

(199

0-20

07) y

Uru

guay

(199

0-20

07)

112

Exclu

ye p

or fa

lta d

e in

form

ació

n lo

s sigu

ientes

país

es: A

rgen

tina

(199

0-20

07),

Guya

naFr

ance

sa (1

990-

2007

), Par

agua

y (19

90-2

007)

, Sur

inam

e (19

90-2

007)

y Ur

ugua

y (19

90-2

007)

113

Incluy

e info

rmac

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1990

-199

5 y 19

97-2

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Boliv

ia, B

rasil

, Chi

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y

114

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nfor

mació

n los

sigu

ientes

paíse

s: Ar

gent

ina (

2004

), Bol

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1990

-200

8),

Bras

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04), C

hile

(200

0), C

olom

bia (

2004

), Ecu

ador

(200

4), G

uyan

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nces

a (19

90-2

008)

,Gu

yana

(199

0-20

08),

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guay

(199

0-20

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(200

4), S

urin

ame (

1990

-200

8), U

rugu

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990-

2008

), Ve

nezu

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990-

2008

)

116,

117

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luye

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nfor

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yana

Fran

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(199

0-20

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118,

119,

120

, 121

, 122

, 123

, 124

In

cluye

todo

s los

país

es (1

990-

2007

)

125

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

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Guya

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990-

2007

)

126

Inclu

ye in

form

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n pa

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s país

es: A

rgent

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1991

-199

3, 1

995,

199

7, 1

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200

0, 2

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y 20

03-2

007)

, Bol

ivia

(199

0, 1

993,

199

4, 1

996,

199

7, 1

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2001

, 200

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2004

-200

7),

Bras

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998,

200

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7), C

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(199

0, 1

991,

199

3, 1

994,

200

0-20

08),

Colo

mbia

(199

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996,

1998

-200

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03-2

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, Ecu

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(199

2, 19

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2000

, 200

2, 20

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2008

), Gu

yana

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y 19

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Guya

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996,

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005

y 20

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(199

0, 1

992,

199

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200

0, 2

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y 20

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007)

, Per

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1992

, 199

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2001

-200

8), S

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1990

, 199

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2004

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06), U

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1993

, 199

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(199

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998,

200

3, 2

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y 200

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127

Inclu

ye in

form

ació

n par

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paíse

s: Ar

gent

ina (

1992

, 199

7, 19

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000,

2001

, 200

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07),

Boliv

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1, 2

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y 200

7), B

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, Chi

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y 200

6),

Colo

mbia

(199

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04-2

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, Ecu

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2, 1

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200

2, 2

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y 20

08),

Guya

naFr

ance

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996)

, Guy

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1996

, 200

5 y 2

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, Par

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199

5 y 1

997)

, Per

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y 200

8), S

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ame (

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y 20

06),

Urug

uay (

1992

, 199

2, 1

997,

200

0-20

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2007

)

128

Inclu

ye in

form

ació

n pa

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s país

es: P

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ame

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2004

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993

y 200

2)

129

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

paíse

s: Ch

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997,

2005

y 20

07), C

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1999

), Per

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y Su

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97)

130

Inclu

ye in

form

ació

n pa

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s país

es: B

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Chile

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Surin

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2004

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131

Inclu

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(200

4)

132

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: A

rgent

ina (

1991

), Ch

ile (1

991)

, Ecu

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(200

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133

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ye in

form

ació

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paíse

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(199

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94 y

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y 20

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(199

8), E

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, Guy

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999

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1992

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134

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: A

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ina

(199

2, 1

993,

199

5 y

2004

-200

6), B

olivi

a(1

993,

1996

, 199

9, 20

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003,

2004

y 20

06), B

rasil

(199

8, 20

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2007

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993,

1994

, 199

9, 2

001,

200

4 y

2006

-200

8), C

olom

bia

(199

1, 1

993,

199

4, 1

999,

200

0, 2

003,

2005

y 20

07),

Guya

na Fr

ance

sa (1

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, Par

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y 200

6), P

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(199

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3,20

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2007

)

135

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: A

rgent

ina

(200

1, 2

003

y 20

04),

Boliv

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, Bra

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200

1, 2

003

y 200

4), C

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(200

0 y 2

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, Col

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a (20

03),

Para

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(199

0, 2

002

y20

03),

Perú

(199

0, 2

000,

200

2 y 2

003)

, Uru

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(200

0 y 2

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y Ve

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000

y 200

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136

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra lo

s país

es: A

rgent

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(200

1, 2

003

y 20

04),

Boliv

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, Bra

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200

1, 2

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y 200

4), C

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, Col

ombi

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Para

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(199

0, 2

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Perú

(199

0, 2

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200

2 y 2

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, Uru

guay

(200

0 y 2

003)

y Ve

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000

y 200

3)

137

Exclu

ye p

or fa

lta d

e in

form

ació

n lo

s sigu

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país

es: A

rgent

ina

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0), B

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y20

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, Bra

sil (2

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y 200

5), C

olom

bia (

2000

-200

3 y 2

005)

, Ecu

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4), G

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a(1

990

y 20

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, Guy

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Fran

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(199

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2000

-200

5), P

arag

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(199

0 y

2001

), Pe

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990,

200

0, 2

001

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005)

, Sur

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e (1

990)

, Uru

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(199

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000,

200

1, 2

003

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05) y

Ven

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000-

2004

)

138,

139

, 140

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

Guya

na (1

990,

200

0 y 2

005)

141

Exclu

ye p

or fa

lta d

e in

form

ació

n Gu

yana

(200

7) y

Guy

ana

Fran

cesa

(199

0, 2

000-

2003

y20

05)

142

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

los s

iguien

tes p

aíses

: Arge

ntin

a (19

95-1

997)

, Chi

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995-

2002

), Guy

ana (

1995

-199

7), Pa

ragua

y (19

95-1

997),

Surin

ame (

1999

) y U

rugu

ay (1

995-

2002

)

143

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

los s

iguien

tes p

aíses

: Arge

ntin

a (19

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, Chi

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990-

2007

), Ec

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007)

, Guy

ana

(199

0-20

07),

Guya

na F

ranc

esa

(199

0-11

97 y

199

9-20

07),

Para

guay

(199

0-20

07),

Surin

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(199

0-20

07),

Urug

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Ven

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1993

, 199

6, 1

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200

0, 2

001

y 200

7)

144

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

Chile

(199

8-20

06) y

Uru

guay

(199

8-20

06)

145

Incluy

e info

rmac

ión pa

ra los

paíse

s: Ar

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992-

2000

), Boli

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991-

1998

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il (19

91-

2001

, 200

4 y 20

05), C

hile (

1991

-199

4 y 19

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998),

Colo

mbia

(1991

-200

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04), G

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a(1

992

y 199

3), G

uyan

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a (19

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, Par

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y (19

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1996

), Pe

rú (1

991-

2002

),Su

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e (19

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Ven

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991-

1993

y 19

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000)

146

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

Guya

na Fr

ance

sa (1

990

y 200

0-20

08)

147

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

Guya

na Fr

ance

sa (1

990

y 200

0-20

08)

148,

149

, 150

Inclu

ye in

form

ació

n par

a los

paíse

s: Ar

gent

ina (

2001

), Bol

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2001

), Bra

sil (2

000 y

2004

), Ch

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, Col

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a (2

004

y 20

05),

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1990

y 2

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, Par

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y (2

004)

,Pe

rú (2

004

y 200

5), S

urin

ame (

2004

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uela

(199

0 y 2

001)

151

Incluy

e info

rmac

ión pa

ra los

paíse

s: Ar

genti

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999-

2005

), Boli

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999-

2003

), Bras

il (19

99-

2005

), Ch

ile (1

999,

200

0 y

2002

-200

5), C

olom

bia

(199

9-20

06),

Guya

na F

ranc

esa

(200

3-20

05),

Para

guay

(199

9-20

05),

Perú

(200

0-20

06),

Surin

ame (

2002

), Ur

ugua

y (19

99-2

006)

yVe

nezu

ela (2

000,

200

2-20

04 y

2006

)

152,

153

In

cluye

info

rmac

ión

para

los p

aíses

: Arge

ntin

a (19

99-2

005)

, Bol

ivia (

1999

-200

3), B

rasil

(199

9-20

05),

Chile

(199

9, 2

000

y 20

02-2

005)

, Col

ombi

a (1

999-

2006

), Gu

yana

Fra

nces

a(2

004

y 200

5), P

arag

uay (

1999

-200

5), P

erú

(200

0-20

06),

Surin

ame (

2002

), Ur

ugua

y (19

99-

2006

) y V

enez

uela

(200

0, 2

002-

2004

y 20

06)

154

Exclu

ye p

or fa

lta d

e in

form

ació

n: B

olivi

a (2

006)

, Bra

sil (2

006)

, Guy

ana

Fran

cesa

(200

6) y

Guya

na (2

002-

2006

)

155

Exclu

ye p

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e in

form

ació

n lo

s sigu

ientes

país

es: A

rgent

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(199

0), B

olivi

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1990

y 20

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Guy

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1990

y 20

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2006

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990)

, Per

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, Sur

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990)

, Uru

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0) y

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(199

0)

156

Exclu

ye p

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e in

form

ació

n pa

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l año

200

6 lo

s sigu

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país

es: B

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Guya

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157

Exclu

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form

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0 y 2

000-

2004

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rugu

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990

y 200

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04)

158

Exclu

ye p

or fa

lta d

e in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: G

uyan

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990-

2004

), Gu

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Fran

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(199

0-20

04) y

Sur

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e (1

990-

2004

)

159

Exclu

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or fa

lta d

e inf

orma

ción

para

los s

iguien

tes p

aíses

: Guy

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ranc

esa (

1990

-200

6)

160

Inclu

ye in

form

ació

n pa

ra el

año

1990

par

a los

país

es: B

rasil

, Chi

le y C

olom

bia

161

Exclu

ye p

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e in

form

ació

n pa

ra lo

s sigu

ientes

país

es: G

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a (1

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2004

), Gu

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Fran

cesa

(199

0-20

04) y

Sur

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990-

2004

)

162

Exclu

ye p

or fa

lta d

e inf

orma

ción

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Page 368: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

366

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

165

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ANEXO ESTADÍSTICO: SUDAMÉRICA

Page 369: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

367

ANEXO ESTADÍSTICO

ANEXO ESTADÍSTICO: REFERENCIAS

REFERENCIA DE LAS VARIABLES DEL ANEXO ESTADÍSTICO

Variables Fuente ReferenciasTIERRASuperficie Terrestre FAOSTAT FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y laTierras arables y cultivos permanentes FAOSTAT alimentación), 2008:FAOSTAT (http://faostat.fao.org Tierras arables de labranza FAOSTAT /DesktopModules/Admin/Logon.aspx?tabID=0, CONSULTADO EN Tierras destinadas a cultivos permanentes FAOSTAT DICIEMBRE 2009). Tierras no arables y no permanentes FAOSTATTierras arables y cultivos permanentes por habitante FAOSTATSuperficie agrícola FAOSTATIrrigación de la superficie agrícola FAOSTATConsumo de fertilizantes FAOSTAT Nitrogenados FAOSTAT Fosfatados FAOSTAT Potásicos FAOSTAT

BOSQUESSuperficie forestal, total FAO FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Plantaciones FAO Alimentación), 2001: Evaluación de los Recursos Forestales ERF Bosque natural FAO 2000: http://www.fao.org/forestry/fo/fra/index.jsp?lang_id=3Proporción de la superficie cubierta por bosques FAOTasa de variación anual de la superficie forestal FAOSuperficie Forestal Bajo Planes de Manejo ERF FAO(Evaluación Recursos Forestales)Proporción de la superficie forestal bajo plan ERF FAOProducción de madera en rollo FAOSTAT FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Producción de madera en rollo industrial FAOSTAT alimentación), 2008:FAOSTAT (http://faostat.fao.org/Producción de leña y carbón FAOSTAT DesktopModules/Admin/Logon.aspx?tabID=0, CONSULTADO ENProducción de tableros de madera FAOSTAT ABRIL 2008).Producción de papel y cartón FAOSTAT

FAOSTATBIODIVERSIDADÁreas protegidas, número WCMC-UNEP WCMC-UNEP ( Programa de las Naciones Unidas para el MedioÁreas protegidas, área total WCMC-UNEP Ambiente, Centro Mundial de Conservación y Monitoreo), 2008:Reserva natural estricta/Área natural silvestre, número WCMC-UNEP Programa de protección de áreas (http://www.unep-wcmc.org/Reserva natural estricta/Área natural silvestre, área total WCMC-UNEP wdpa/, consultado en abril del 2008)Parques nacionales, número WCMC-UNEPParques nacionales, área total WCMC-UNEPMonumentos naturales, número WCMC-UNEPMonumentos naturales, área total WCMC-UNEPÁrea de manejo de hábitat/especies, número WCMC-UNEPÁrea de manejo de hábitat/especies, área total WCMC-UNEPPaisaje terrestre y marino protegido, número WCMC-UNEPPaisaje terrestre y marino protegido, área total WCMC-UNEPÁrea protegida con recursos manejados, número WCMC-UNEPÁrea protegida con recursos manejados, área total WCMC-UNEPNúmero total de especies amenazadas IUCN IUNC (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza Número de especies amenazadas, Mamíferos IUCN y los Recursos Naturales), 2006: La Lista Roja de Especies Número de especies amenazadas, Aves IUCN Amenazadas. IUCN (http://www.iucnredlist.org/info/stats, consulta Número de especies amenazadas, Reptiles IUCN do en abril del 2008). Número de especies amenazadas, Anfibios IUCN Número de especies amenazadas, Peces IUCN Número de especies amenazadas, Moluscos IUCN Número de especies amenazadas, Invertebrados IUCN Número de especies amenazadas, Plantas IUCN

AGUA DULCEPorcentaje de la población con acceso al agua potable PAHO PAHO (La Organización Panamericana de la Salud ), 2008: (http://Porcentaje de la población con acceso PAHO www.paho.org/Spanish/SHA/coredata/tabulator/newTabulator.htm, al agua potable, rural consultado en abril 2008).Porcentaje de la población con acceso PAHO al agua potable, urbanaProporción de la población con acceso PAHO a servicios de saneamientoProporción de la población con acceso a PAHO servicios de saneamiento, rural

Page 370: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

368

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Variables Fuente Referencias

Proporción de la población con acceso a PAHO servicios de saneamiento, urbanaProducción total de pesca de agua dulce FAO FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y laProducción de pesca de agua dulce, captura FAO alimentación), 2008:FAOSTAT (http://faostat.fao.org/Producción de pesca de agua dulce, acuicultura FAO DesktopModules/Admin/Logon.aspx?tabID=0, CONSULTADO EN

ABRIL 2008).

Propoción del total de recursos hídricos utilizada UN Sitio web de las Naciones Unidas para los indicadores de losObjetivos de desarrollo del Milenio, 2008: http://mdgs.un.org/unsd/mdg/Home.aspx

Extracción de agua, total FAO FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y laExtracción de agua por habitante FAO Alimentación), 2008: AQUASTAT: http://faostat.fao.org/site/544/Extracción de agua en agricultura FAO default.aspxExtracción de agua en el sector industrial FAOExtracción de agua en el sector doméstico FAO

ÁREAS COSTERAS Y MARINASProducción total de pesca marina FAO FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y laProducción total de pesca marina, captura FAO Alimentación): The world’s mangroves 1980-2005, 2007: http://Producción total de pesca marina, acuicultura FAO www.fao.org/docrep/010/a1427e/a1427e00.htmÁreas marinas protegidas WCMC-UNEP WCMC-UNEP ( Programa de las Naciones Unidas para el Medio

Ambiente, Centro Mundial de Conservación y Monitoreo), 2008:Programa de protección de áreas (http://www.unep-wcmc.org/wdpa/, consultado en abril del 2008)

Área total de manglar CEPAL CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe ),2008: Anuario Estadístico 2007 (http://websie.eclac.cl/anuario_estadistico/anuario_2007/, consultado en abril 2008).

ATMÓSFERAEmisiones de dióxido de carbono (CO2) OLADE OLADE (Latin American Energy Organization ), 2008: Informes de

Estadísticas Energéticas (http://www.olade.org.ec/energiaCifras.html, consulted on april 2008).

Emisiones de dióxido de carbono (CO2) per cápita UN Base de datos de los Indicadores del Milenio, 2008: http://millenniumindicators.un.org/unsd/mdg/Data.aspx

Emisiones de dióxido de carbono (CO2) UN por dólar PPA del PIB Por combustibles fósiles gaseosos CDIAC Por combustibles fósiles líquidos CDIAC Por combustibles fósiles sólidos CDIACEmisiones de partículas (par) OLADE OLADE (Organización Latinoamericana de Energía ), 2008:Emisiones de dióxido de azufre (SO2) OLADE Informes de Estadísticas Energéticas (http://www.olade.org.ec/Emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx) OLADE energiaCifras.html, consultado en abril 2008).Emisiones de hidrocarburos (HC) OLADEEmisiones de monóxido de carbono (CO) OLADEEmisiones de metano, total CEPAL CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe ), Por energía CEPAL 2008: Anuario Estadístico 2007 (http://websie.eclac.cl/ Por agricultura CEPAL anuario_estadistico/anuario_2007/, consultado en abril 2008). Por otras fuentes CEPALConsumo de sustancias que agotan la capa de ozono, total CEPALConsumo de sustancias que agotan la capa de ozono, CEPAL Clorofluorocarbonos CFCsConsumo de sustancias que agotan la capa de ozono, CEPAL Hidroclorofluorocarbonos HCFCsConsumo de sustancias que agotan la capa de ozono, CEPAL Bromuro de metilo

ASENTAMIENTO HUMANODensidad de población CEPAL CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe ),Población urbana a mitad de año CEPAL 2008: Anuario Estadístico 2007 (http://websie.eclac.cl/

anuario_estadistico/anuario_2007/, consultado en abril 2008).

Porcentaje de la población que vive en las zonas urbanas CELADE OLADE (Organización Latinoamericana de Energía ), 2008:Tasa de crecimiento anual de la población urbana CELADE Observatorio Demográfico América Latina y el Caribe (http://

www.eclac.cl/celade/default.asp, consultado en abril del 2008).

Porcentaje población que vive en ciudades con UN Naciones Unidas, 2008: Perspectivas de la Urbanización Mundial: más de 750.000 hab. o más. http://esa.un.org/unup/p2k0data.aspPorcentaje población que vive en ciudades con UN más de 750 mil hab. o más.

ANEXO ESTADÍSTICO: REFERENCIAS

Page 371: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

369

ANEXO ESTADÍSTICO

Porcentaje población que vive en ciudades que UN tienen entre 500.000 y 1 millón de hab.Porcentaje población que vive en ciudades que UN tienen entre 500 mil y 1 millón de hab.Número de ciudades que tienen entre 1 UN y 5 millones de hab.Porcentaje población que vive en ciudades que UN tienen entre 1 y 5 millones de hab.Número de ciudades que tienen entre 5 UN y 10 millones de hab.Porcentaje población que vive en ciudades que UN tienen entre 5 y 10 millones de hab.Número de ciudades con 10 millones de hab. o más. UNPorcentaje población que vive en ciudades con UN más de 10 millones de hab.Proporción de la población urbana que vive en tugurios UN Sitio web de las Naciones Unidas para los indicadores de los

Objetivos de desarrollo del Milenio, 2008: http://mdgs.un.org/unsd/mdg/Home.aspx

Longitud de carreteras WB Banco Mundial, 2008: devdata query(http://devdata.worldbank.org/query/default.htm, consultado enabril 2008).

DESASTRES Y VULNERABILIDADNúmero de eventos Naturales y tecnológicos, total CRED CRED (Centro para la Investigación en desastes epidemiológicos),Inundaciones CRED 2008: EM-DAT (http://www.emdat.be/Database/terms.html,Tormentas, huracanes, ciclones y tornados CRED consultado en DICIEMBRE 2009).Terremotos CREDDeslizamientos y avalanchas CREDTemperaturas extremas CREDErupciones volcánicas CREDSequías CREDDesastres tecnológicos CREDPérdidas económicas por desastres naturales CRED extremos y tecnológicosInundaciones CREDTormentas, huracanes, ciclones y tornados CREDTerremotos CREDDeslizamientos y avalanchas CREDTemperaturas extremas CREDErupciones volcánicas CREDSequías CREDDesastres tecnológicos CREDNúmero de personas afectadas por desastes CRED naturales y tecnológicosInundaciones CREDTormentas, huracanes, ciclones y tornados CREDTerremotos CREDDeslizamientos y avalanchas CREDTemperaturas extremas CREDErupciones volcánicas CREDSequías CREDDesastres tecnológicos CRED

Proporción de la población ocupada con ingresos WB Banco Mundial, 2008: devdata query inferiores a $1 por día según la PPA (http://devdata.worldbank.org/query/default.htm, consultado enBrecha de pobreza a 1 dólar diario (PPA), coeficiente WB abril 2008).

Tasa de desempleo de jóvenes como porcentaje UN ODM (Indicadores de Objetivos de Desarrollo del Milenio), 2008: de la población de jóvenes, ambos sexos Datos a nivel del país. (http://millenniumindicators.un.org/unsd/

mdg/Data.aspx, consultado en abril 2008)

MEDIO AMBIENTE Y SALUD HUMANATasa bruta de mortalidad infantil CEPAL CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe ),Esperanza de vida femenina CEPAL 2008: Anuario Estadístico 2007 (http://websie.eclac.cl/Esperanza de vida masculina CEPAL anuario_estadistico/anuario_2007/, consultado en abril 2008).

Oferta calórica PAHO OPS (La Organización Panamericana de la Salud ), 2008: (http://Casos reportados de Dengue PAHO www.paho.org/Spanish/SHA/coredata/tabulator/newTabulator.htm,Casos reportados de Malaria PAHO consultado en abril 2008).Casos reportados de Cólera PAHO

ANEXO ESTADÍSTICO: REFERENCIAS

Page 372: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

370

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

TENDENCIAS SOCIOECONÓMICASPoblación total a mitad de año CEPAL CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe),Tasa de crecimiento promedio anual de la población CEPAL 2008: Anuario Estadístico 2007 (http://websie.eclac.cl/

anuario_estadistico/anuario_2007/, consultado en abril 2008).

Tasa de alfabetización de adultos, total UNESCO UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educa Hombres UNESCO ción, la Ciencia y la Cultura, 2008: Data Centre Mujeres UNESCO (www.uis.unesco.org, consultado en abril del 2008). (http://Esperanza de vida escolar UNESCO www.unesco.org/fileadmin/MULTIMEDIA/HQ/ED/GMR/pdf/ Hombres UNESCO gmr2010/gmr2010-annex-04-stat-intro.pdf) Mujeres UNESCO

Líneas de teléfono fijo UN Base de datos de los Indicadores del Milenio, 2008: http://Abonados a teléfonos celulares UN millenniumindicators.un.org/unsd/mdg/Data.aspxUsuarios de internet UN

Uso de energía por habitante WB Banco Mundial, 2008: devdata queryImportaciones netas de energía (% de energía WB (http://devdata.worldbank.org/query/default.htm, consultado en de uso de energía comercial) abril 2008).

Intensidad energética del producto interno bruto CEPAL CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe),Oferta energética renovable CEPAL 2009: Anuario Estadístico 2009 (http://websie.eclac.cl/

anuario_estadistico/anuario_2009/, consultado en marzo 2010).

Porcentaje de energía consumida de fuentes renovables WB Banco Mundial, 2008: devdata query con respecto al total de energía consumida (http://devdata.worldbank.org/query/default.htm, consultado en

abril 2008).

Producción total de energía primaria por habitante CEPAL CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe),2008: Anuario Estadístico 2007 (http://websie.eclac.cl/anuario_estadistico/anuario_2007/, consultado en abril 2008).

Producción total de energía geotérmica OLADE OLADE (Organización Latinoamericana de Energía), 2000: SIEEProdución total de hidroenergía OLADE (Sistema de Información Económica Energética): www.olade.org.ec/Producción total de energía por productos de caña OLADE SIEE/Oferta-Demanda/ODSeleccion.asp?Destino=ODProducción total de carbón mineral OLADEProducción total de gas natural OLADEProducción total de leña OLADEProducción total de petróleo OLADE

Producción de electricidad WB / OLADE Banco Mundial, 2008: devdata query Por fuentes de carbón WB (http://devdata.worldbank.org/query/default.htm, consultado en Por fuentes de hidroenergía WB abril 2008). (http://ddp-ext.worldbank.org/ext/DDPQQ/ Por fuentes de gas WB member.do?method=getMembers, consultado en 2010) (http:// Por fuentes nucleares WB www.olade.org/documentos2/InformeEnergetico2009/IEE-2009.pdf Por fuentes de petróleo WB - información de 1999 - 2008 - consultado marzo 2010)Ingreso Nacional Bruto por habitante (método Atlas) WB

Producto Interno Bruto, crecimiento anual CEPAL CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el Caribe ), Agricultura, valor agregado CEPAL 2008: Anuario Estadístico 2007 (http://websie.eclac.cl/ Industria, valor agregado CEPAL anuario_estadistico/anuario_2007/, consultado en abril 2008). Servicios, valor agregado CEPAL

Exportaciones de bienes y servicios WB Banco Mundial, 2008: devdata query (http://Importaciones de bienes y servicios WB devdata.worldbank.org/query/default.htm, consultado en abrilRelación entre el servicio de la deuda externa WB 2008). y el producto nacional bruto

Gasto público en educación como porcentaje del PIB UNESCO UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educa-ción, la Ciencia y la Cultura, 2008: Data Centre(www.uis.unesco.org, consultado en abril del 2008).

Médicos WB Banco Mundial, 2008: devdata query(http://devdata.worldbank.org/query/default.htm, consultado enabril 2008).

ANEXO ESTADÍSTICO: REFERENCIAS

Page 373: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

371

ANEXO ESTADÍSTICO

ACNUR ........... Alto Comisionado de las NacionesUnidas para los Refugiados

ACP ................. Autoridad del Canal de Panamá

ACPM .............. Aceite Combustible para Motor

AEC ................. Asociación de Estados del Caribe

AIE ................... Agencia Internacional de la Energía

ALBA ............... Alternativa Bolivariana para lasAméricas

ALBA-TCP ....... Alianza Bolivariana para los Pueblos deNuestra América – Tratado deComercio de los Pueblos

ALIDES ............ Alianza Centroamericana para elDesarrollo Sostenible

AME................. Asociación de Municipalidades deEcuador

AMERB ............ Áreas de Manejo y Explotación deRecursos Bentónicos (Chile)

AMP ................ Áreas Marinas Protegidas

ANA ................ Autoridad Nacional del Agua (Perú)

AOD ................ Ayuda Oficial al Desarrollo

BADEIMA ........ Base de Datos de Estadísticas eIndicadores de Medio Ambiente-CEPAL

BID .................. Banco Interamericano de Desarrollo

BMI .................. Banco Mundial

BOLFOR .......... Proyecto de Manejo Forestal Sostenible(Bolivia)

BP .................... British Petroleum

BSA.................. Bienes y Servicios Ambientales

CAN ................ Comunidad Andina de Naciones

CAR ................. Corporaciones Autónomas Regionales(Colombia)

CARICOM ....... Comunidad del Caribe

CBM ................ Corredor Biológico Mesoamericano

CCAD .............. Comisión Centroamericana deAmbiente y Desarrollo

LISTA DE ACRÓNIMOS

CCCCC ............ Centro de la Comunidad Caribeña parael Cambio Climático

CDB................. Convenio sobre la Diversidad Biológica

CDE ................. Centro de Desarrollo Empresarial

CEADS ............. Consejo Empresario Argentino para elDesarrollo Sostenible

CEBEDS ........... Consejo Empresarial Brasileño

CECODES ........ Consejo Empresarial Colombiano parael Desarrollo Sostenible

CEDES ............. Consejo Empresarial para el DesarrolloSostenible (Bolivia)

CEF .................. Comisión Federal de Electricidad(México)

CEMPRE .......... Compromiso Empresarial a favor delReciclaje

CEPAL .............. Comisión Económica para AméricaLatina y el Caribe

CEPREDENAC . Coordinación para la Prevención deDesastres Naturales en Centroamérica

CETESB ............ Companhia Ambiental do Estado deSão Paulo

CFRM .............. Caribbean Fisheries RegionalMechanism

CH4 .................. Metano

CHENACT ....... Programa de Acción de EficienciaEnergética de Hoteles del Caribe

CHTA / CAST ... Asociación Hotelera y de Turismo delCaribe y la Alianza Caribeña para elTurismo

CICESE ............. Centro de Investigación Científica y deEducación Superior

CIDES .............. Centro Internacional para el DesarrolloSostenible

CIMAR ............. Centro de Investigación en Ciencias delMar y Limnología

CINU ............... Comisión de Derecho Internacional dela Organización de las NacionesUnidas

LISTA DE ACRÓNIMOS

Page 374: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

372

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

CITES ............... Convención sobre el ComercioInternacional de Especies Amenazadasde Fauna y Flora Silvestres

CNULD ........... Convención de las Naciones Unidas deLucha contra la Desertificación

CO ................... Monóxido de carbono

CO2 ............................... Dióxido de Carbono

COLPOS .......... Colegio de Posgraduados (México)

CONABIO ....... Comisión Nacional para elConocimiento y Uso de laBiodiversidad (México)

CONAMA........ Comisión Nacional del MedioAmbiente (Chile)

CONAPO ........ Consejo Nacional de la Población(México)

COPERT III ....... Computer programme to calculateemissions from road transport

CORPAIRE ....... Corporación para el Mejoramiento delAire de Quito

COST 725........ Establecimiento de una plataformaeuropea de datos fenológicos paraaplicaciones climatológicas

COV ................ compuestos orgánicos volátiles

CPPS ................ Comisión Permanente del Pacífico Sur

CPS .................. Consumo y Producción Sustentables

CREAF ............. Centre de Recerca Ecològica yAplicacions Forestals

CSA ................. Compensación por ServiciosAmbientales

CYTED ............. Programa Iberoamericano de Ciencia yTecnología

DAMA ............. Secretaría Distrital de Ambiente(Colombia)

DANE .............. Departamento Nacional de Estadística(Colombia)

DDT ................ Pesticidas

DEAT ............... División de Evaluación y AlertaTemprana (PNUMA)

DED................. Servicio Alemán para el Desarrollo

DIGESA ........... Dirección General de Salud Ambiental(Perú)

EAE .................. Evaluación Ambiental Estratégica

EAI ................... Evaluación Ambiental Integral

EBA .................. Áreas de Aves Endémicas

EE .................... Eficiencia Energética

ERF .................. Evaluación de los Recursos Forestales

ERWR .............. Recursos Hídricos Renovables Externos

ETHOS ............ Instituto Ethos de Empresas yResponsabilidad Social

FAN ................. Fundación Amigos de la Naturaleza

FAO ................. Organización de las Naciones Unidaspara la Agricultura y la Alimentación

FMAM ............. Fondo para el Medio AmbienteMundial

FMI .................. Fondo Monetario Internacional

FMPEIR ............ Fuerzas Motrices - Presión - Estado -Impacto - Respuesta

FOFIGA ........... Fondo Financiero del Plan de GestiónAmbiental del Distrito Capital (Bogotá)

FONAFIFO ...... Fondo Nacional de FinanciamientoForestal (Costa Rica).

FUNDADES ..... Fundación para el Desarrollo Solidario(Perú)

FUSADES......... Fundación Salvadoreña para elDesarrollo Económico y Social (ElSalvador)

GEA ................. Grupo GEA EmprendimientosAmbientales (Perú)

GEF .................. Fondo Global Ambiental

GEI .................. Gases de efecto Invernadero

GEO ................ Perspectivas del Medio AmbienteMundial (Global Enviromnet Outlook)

GFTN............... Global Forest Trade Network (Red deComercio Forestal Global)

GGND ............. Nuevo Acuerdo Verde Global

GIRH ............... Gestión Integrada de Recursos Hídricos

GLOBIO .......... Global Methodology for MappingHuman Impacts on the Biosphere

GPS ................. Sistema de Posicionamiento Global

GTI .................. Gestión Territorial Indígena

GTZ ................. Deutsche Gesellschaft für TechnischeZusammenarbeit (Sociedad Alemanade Cooperación Técnica)

GWP................ Asociación Mundial para el Agua

LISTA DE ACRÓNIMOS

Page 375: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

373

ANEXO ESTADÍSTICO

IAvH ................ Instituto de Investigación de RecursosBiológicos Alexandre Von Humboldt(Colombia)

IDE .................. Infraestructuras de Datos Espaciales

IDEAM ............. Instituto de Hidrología, Meteorología yEstudios Ambientales (Colombia)

IDRC................ Centro de Investigación y DesarrolloInternacional de Canadá

IED .................. Inversión Extrajera Directa

IICA ................. Instituto Interamericano deCooperación para la Agricultura

IIRSA................ Iniciativa de Integración de laInfraestructura Regional Suramericana

ILAC ................ Iniciativa Latinoamericana y Caribeñapara el Desarrollo Sostenible

IMAGE ............. Integrated Model to Assess the GlobalEnvironment

IMPACT ........... International Model for Policy Analysisof Agricultural Commodities and Trade)

INCODER ........ Instituto Colombiano para el DesarrolloRural

INE .................. Instituto Nacional de Estadística

INMET ............. Instituto Nacional de Meteorología(Brasil)

INPE ................ Instituto Nacional de InvestigaciónEspacial (Brasil)

INRA................ Instituto Nacional de Reforma Agraria(Bolivia)

INRENA ........... Instituto Nacional de RecursosNaturales (Perú)

INVEMAR ........ Instituto de Investigaciones Marinas yCosteras «José Benito Vives de Andréis»

IPyMA.............. Iniciativa de Pobreza y MedioAmbiente

IRWR ............... Recursos Hídricos Renovables Internos

MADVT ........... Ministerio de Ambiente, Vivienda yDesarrollo Territorial (Colombia)

MERCOSUR .... Mercado Común del Sur

MFC................. Manejo Forestal Comunitario

MFIE ................ Min. of Finance, Investment,Telecommunications and Energy(Barbados)

MIC ................. Manejo Integrado de Cuencas

MIZC ............... Manejo Integral de Zonas Costeras

MMA ............... Ministério do Meio Ambiente (Brasil)

N2O ................. Óxido nitroso

NH3 ............................... Amoníaco

NORAD ........... Agencia de Desarrollo de laCooperación de Noruega

NOx ............................... Óxidos de Nitrógeno

O3 .................... Ozono

OCDE .............. Organización para la Cooperación y elDesarrollo Económicos

ODM ............... Objetivos de Desarrollo del Milenio

OEA ................. Organización de Estados Americanos

OET ................. Ordenamiento Ecológico del Territorio

OLADE ............ Organización Latinoamericana deEnergía

OMC ............... Organización Mundial del Comercio

OMS ................ Organización Mundial de la Salud

ONG ............... Organización No Gubernamental

OPS ................. Organización Panamericana de laSalud

OTC................. Organización de Turismo del Caribe

OTCA .............. Organización del Tratado deCooperación Amazónica

PACADIRH ...... Plan de Acción Centroamericano parael Desarrollo Integrado de los RecursosHídricos

PARCA ............. Plan Ambiental para la RegiónCentroamericana

Pb .................... Plomo

PEID ................ Pequeños Estados Insulares enDesarrollo

PEID ................ Pequeños Estados Insulares enDesarrollo

PEMEX ............. Petróleos Mexicanos

PFNM .............. Productos Forestales no Maderables

PHI .................. Programa Hidrológico Internacional(UNESCO)

PIB ................... Producto Interno Bruto

PICC ................ Panel Intergubernamental de CambioClimático

LISTA DE ACRÓNIMOS

Page 376: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

374

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

PIJ .................... Plan de Implementación deJohannesburgo

PINFOR ........... Programa de Incentivos Forestales(Guatemala)

PLAGSALUD ... Proyecto Aspectos Ocupacionales yAmbientales de la Exposición aPlaguicidas en el IstmoCentroamericano

PM ................... Materia particulada suspendida

PNUD.............. Programa de las Naciones Unidas parael Desarrollo

PNUMA ........... Programa de las Naciones Unidas parael Medio Ambiente

PPP .................. Plan Puebla Panamá

PREVDA .......... Programa de Reducción de laVulnerabilidad y la DegradaciónAmbiental

PREVFOGO ..... Sistema Nacional de Prevenção eCombate aos Incêndios Florestais(Brasil)

PROAIRE ......... Plan de Gestión de la CalidadAtmosférica (México)

PROCIG .......... Proyecto Centroamericano deInformación Geográfica

PROCONVE .... Programa de Controle das EmissõesVeiculares

PROSUKO ....... Programa de Suka Kollus

PRRD ............... Plan Regional de Reducción deDesastres (Centroamérica)

PRUGAM ........ Planificación Regional y Urbana de laGran Área Metropolitana del ValleCentral de Costa Rica

PSA .................. Pago por Servicios Ambientales

QALY ............... Años de Vida Ajustados por Calidad

REDD .............. Reducción de Emisiones porDeforestación y DegradaciónAmbiental

REDPYCS......... Red de Producción y ConsumoSustentable

REDU .............. Reducing Emissions from all Land Uses(reducción de emisiones por todo tipode uso del suelo)

RESCAD .......... Reunión del Sector Salud deCentroamérica y RepúblicaDominicana

RIVM ............... Instituto Nacional para la Salud Públicay el Medio Ambiente (RIVM)

SATIF ............... Sistema de Alerta Temprana deIncendios Forestales (Bolivia)

SAYTT .............. Sistema Acuífero Yrendá Toba Tarijeño

SCAEI............... Sistema de Contabilidad Ambiental yEconómica Integrada

SEBRAE ............ Servicio de Apoyo a las PequeñasEmpresas y microempresas de Brasil

SEMAPA .......... Servicio Municipal de Agua Potable deCochabamba

SEMARNAT ..... Secretaría del Medio Ambiente yRecursos Naturales (México)

SGS .................. Société Genérale de Surveillance

SIA ................... Sistemas de Información Ambiental

SICA ................ Sistema de IntegraciónCentroamericana

SICAP .............. Sistema Centroamericano de ÁreasProtegidas

SICGAL ............ Sistema de Inspección y Cuarentenapara las islas Galápagos

SIEE .................. Sistema de Información EconómicaEnergética

SIG .................. Sistemas de Información Geográfica

SINAC.............. Sistema Nacional de Áreas deConservación (Costa Rica)

SINCHI ............ Instituto Amazónico de InvestigacionesCientíficas (Colombia)

SMA/GDF ........ Secretaría del Medio Ambiente delGobierno del Distrito Federal (México)

SNIARN ........... Sistema Nacional de InformaciónAmbiental y de Recursos Naturales(México)

SO2 ................................ Dióxido de azufre

SOx ................................. Óxidos de azufre

TCA ................. Tratado de Cooperación Amazónica

TCO................. Tierras Comunitarias de Origen

TEEB ................ Economía de los Ecosistemas y laBiodiversidad

Tier II ............... Emission Standard

TLC .................. Tratado de Libre Comercio

TLCAN ............ Tratado de Libre Comercio de Américadel Norte

LISTA DE ACRÓNIMOS

Page 377: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

375

ANEXO ESTADÍSTICO

TNC ................. The Nature Conservancy

TRB .................. sistema de tránsito rápido de buses

TRWR .............. Total de Recursos Hídricos Renovables

UICN ............... Unión Internacional para laConservación de la Naturaleza,

UN DESA ........ Departamento de las Naciones Unidaspara Asuntos Económicos y Sociales

UN HABITAT ... Programa de las Naciones Unidas paralos Asentamientos Humanos

UNAM ............. Universidad Nacional Autónoma deMéxico

UNASUR ......... Unión de Naciones Suramericanas

UNESCO ......... Organización de las Naciones Unidaspara la Educación, la Ciencia y laCultura

UNFPA ............ Fondo de Población de las NacionesUnidas

UNICEF ........... Fondo de las Naciones Unidas para laInfancia

UPME .............. Unidad de Planeación MineroEnergética - Ministerio de Minas yEnergía (Colombia)

WaterGAP ....... Water – Global Assessment andPrognosis, Evaluación y PronósticoMundial del Agua)

WDPA ............. Base de Datos Mundiales de ÁreasProtegidas

WWAP............. Programa Mundial de Evaluación delos Recursos Hídricos (UNESCO)

WWF ............... Fondo Mundial para la Conservaciónde la Naturaleza

ZEE .................. Zona Económica Exclusiva

LISTA DE ACRÓNIMOS

Page 378: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

376

PERSPECTIVAS DEL MEDIO AMBIENTE: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

Page 379: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE
Page 380: AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

United Nations Environment ProgrammeP.O. Box 30552 Nairobi, Kenya

Tel: (254 2) 621234Fax: (254 2) 623927

E-mail: [email protected]://www.unep.org

www.unep.orgPrograma de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA)Oficina Regional para América Latina y el CaribeAvenida Morse, Edificio 103. Clayton, Ciudad del SaberPanama City, Panamá. Apdo. Postal: 03590-0843

Teléfono: (+507) 305-3100 / Fax: (+507) 305-3105http://www.pnuma.org Correo electrónico: [email protected]