AMOR DE TIZA

Anahi Ramirez Monter

Mosc, Rusia - Plaza roja.

Aproximadamente el medioda, una nia de cabellos dorados corre tras las palomas con los brazos extendidos y los ojos cerrados, una hermosa nia de 11 aos sintindose a volar mueve gilmente sus delgadas piernas mientras siente el aleteo de las aves. Se siente en una nube cuando de repente choca con alguien, lo cual la hace sacar su fuerte carcter por haberla interrumpido, abre los ojos y antes de ver de quin se trataba, inmediatamente dice.

-Oye! Fjate por donde caminas! Dijo muy molesta, pero al cerciorarse de quin se trataba se arrepinti de haberle hablado con tanta fuerza.

*Una nia de cabellos rojos, y ondulados, que al darles de frente el sol pareciera que esos caireles cobraran vida, sus ojos de color verde y unas grandes pestaas, su boca perfectamente marcada y la cara llena de pecas.

-Disclpame- Dijo tmidamente la pelirroja al encenderse un rojo vivaz en sus mejillas. -no mir por dnde iba, porque iba corriendo con los ojos cerrados perdname

-Ah, no te preocupes, yo tuve la culpa, porque iba haciendo exactamente lo mismo que t jajaja- Dijo la pequea rubia al bajar su enojo y soltar una tremenda carcajada que hizo revolotear las palomas.

* La pelirroja se ri discretamente con una mano sobre su boca, una risa que casi no se escuch.

-Hola, me llamo Yulia Volkova- Dijo la nia de cabellos dorados extendiendo su mano hacia la pelirroja muy segura de s misma.

* La pelirroja vio la mano de Yulia invitndola a saludar, pero no la tom tan rpidamente y se qued viendo aquella mano delgada con una exagerada timidez y con los brazos tras su espalda, hasta que esboz una blanca sonrisa que perfectamente la not Yulia y le dio la mano.

-Mucho gusto, me llamo Elena Katina- Dijo la joven pelirroja sin dejar de ver los grandes ojos azules de su nueva amiga.

* Se quedaron observndose un buen rato, sin soltarse de la mano ni dejar de sonrer, pero un grito las interrumpi de llenar sus ojos de brillo.

-Hija! Lenita! Ya vmonos mi amor.- Dijo una seora mayor con el cabello igual al de Lena, con una distancia de aproximadamente 3 metros de las chicas.

-Ya voy mam!- Contest Lena sin dejar de soltar la mano de Yulia, volte y dijo. Lo siento Yul, tengo que irme- Dijo Lena al soltar la mano de Yulia.

Yul?? pens la pequea rubia al soltar la mano de Lena, sacudi la cabeza al darse cuenta de lo que estaba pasando, no poda dejarla ir as nada ms, tartamude un poco y dijo rpidamente al ver que Lena se alejaba yendo hacia su madre.

-Eh Oye Lena!-

* Lena volte hacia la chica de ojos azules balanceando sus rizos y hacindolos chocar con su rostro.

-Si?- Pregunt entonces.

-Volver a verte? Dijo Yulia casi gritando, ya que Lena estaba un poco alejada de ella.

* Lena dibuj una sonrisa y respondi

-Eso espero Adis Yul!- Dijo despidindose y corriendo de nuevo hacia su madre.

-Est bien Lenita- Dijo Yulia para s misma recordando que la haba llamado Yul, as que ella decidi decirle Lenita.

Se llev la mano que haba sido tomada por Lena hasta su nariz y respir el dulce olor a perfume que le haba regalado la pelirroja a Yulia en ese momento. La pequea de cabellos dorados meti su mano en un bolsillo de su vestido y sac una gran barra de tiza, y en uno de los cuadrados de la plaza escribi: Yul y Lenita, dej la tiza en uno de los espacios hondos que haba entre cada tabique y as vio a Lena alejarse. Yulia anhel con toda su alma volver a verla, aunque no saba que para ello faltaba mucho

3 AOS DESPUS

Eran las 12:30 p.m. en un saln de 3 grado de secundaria, una joven de cabello corto y negro se encontraba con la cabeza tirada encima del pupitre y con su mano derecha se encontraba rayando con un plumn la silla del frente, solo escuchaba cmo el maestro balbuceaba acerca de fechas y revoluciones, pero no not que se acerc hasta ella y vio muy bien lo que estaba haciendo.

-Muy bien Seorita Volkova, parece que va a necesitar traer de nuevo una brocha y puntura para maana, porque quiero muy bien pintada la silla de su compaero, ahora si me hara el grandsimo favor de pasar a la direccin con esta hojita.- Dijo el maestro a Yulia entregndole el reporte.

* Yulia sigui con la cabeza en el pupitre sin prestar atencin a lo que dijo el maestro.

-Parece que no me escuch Volkova Retrese a la direccin por favor!- Grit el maestro perdiendo la paciencia con la joven de ojos azules.

* Yulia volte la cabeza llena de pereza y tom el reporte, le dirigi una mirada de burla al maestro y dijo:

-Tranquilo viejo! Si tanto te preocupa la silla por qu no la pintas t?- Dijo con una sonrisa y mascando chicle.

* Esto hizo que el saln completo dejara escapar una risillas, pero al profesor no le caus gracia alguna.

-SILENCIO TODO EL MUNDO!! O se pueden ir levantando para acompaar a Volkova a la direccin.

* Todos los alumnos se callaron y se irguieron para seguir anotando el tema de historia, mientras que Yulia fue hacia la salida, caminando lentamente y moviendo graciosamente las caderas.

-Volkova!!- Volvi a gritar el profesor.

* Yulia volte y tom la pose de una modelo: Con una pierna derecha y la otra doblada, con una mano en la cintura y sin dejar de mascar el chicle.

-Si?- Dijo en tono cremoso

-Tira el chicle pro favor- Dijo el profesor tratando de calmarse.

* Yulia se sac el chicle de la boca y lo esparci encima del libro de Historia del profesor, lo volte a ver y le gui el ojo, todos los alumnos hicieron seas de felicitacin a Yulia contenindose de rer a espaldas del maestro, Yulia le sonri a sus compaeros y al salir del aula dijo:

-Con permiso- Sali del marco de la puerta y volvi a asomar la cara -viejo- y se dirigi a la direccin mientras escuchaba renegar al profesor de tanta rabia, mientras todos los alumnos rean.

Yulia sera mala estudiante pero era la ms popular de la escuela secundara por su indomable rebelda. Adis Yulia! dijo un joven de preparatoria pero Yulia no le prest el mnimo caso, ella traa locos a todos los chicos, pero a la pelinegra no le importaban los hombres, desde haca tres aos que haba visto aquella chica de cabellos rojos, nunca tom gust por nadie excepto por ella. Lleg a la direccin, se sent en una silla y dio el reporte a su directora sin siquiera verla, mientras sacaba otro paquete de chicles.

-Volkova, Volkova Qu vamos a hacer contigo?- Pregunt un tanto preocupada una seora de unos 46 aos. -De nuevo maltratando las sillas?

-Direc usted sabe que si las pinto y hasta las dejo mejor, para qu se preocupa- Dijo Yulia de nuevo masticando chicle.

-Ese no es el punto Volkova el punto es que eres ociosa y es

-Cmo no voy a tener ocio si el profesor ese no hace ms que repetir lo mismo toda la clase?- La interrumpi Yulia un tanto molesta pero muy digna de ella misma.

-Eso es otra cosa el respeto hacia tus maestros, ya te lo he dicho muchas veces

-Est bien Direc ya voy a cambiar, no me regae por favor.- Dijo Yulia con una cara de splica casi imposible de no creer en esos ojos azules.

-Pues empieza ahora.- Dijo la directora extendiendo un pauelo hacia Yulia.

* La pelinegra puso el chicle encima del pauelo, pero la directora no retir la mano del rostro de Yulia.

-El otro Volkova- Dijo con una paciencia inagotable mientras Yulia pona cara de frustracin y pona el segundo chicle encima del pauelo. -y no olvides traer para maana tu pintura y la brocha de acuerdo?-

-OK teacher- Dijo Yulia y en ese momento son el timbre de salida.

* Yulia se dirigi a su aula y tom su mochila cuando sinti un codazo de alguien que le dijo:

-Estuvo buena la actuacin de hoy Yulia- Le dijo su amiga Martha.

* Una joven de cabello castao lacio, con ojos cafs y unos cuantos centmetros ms alta que Yulia.

-Ah no fue nada, la verdad que ya se lo tena merecido- Sentenci Yulia rindose y tomando su mochila para retirarse.

-Bueno Yulia nos veremos maana entonces.- Se despidi Martha dando vuelta en la esquina de la calle fuera de la escuela.

-Adis Martha- Contest la pelinegra.

AL DA SIGUIENTE

Yulia lleg a su clase con un cubo de pintura y una brocha dentro de una bolsa, se sent en su silla y pens: Al menos as podr salirme de la clase con la bruja cara de ardilla. Comenz la primera clase y la profesora ley un papel que estaba en una carpeta, dirigi una mirada hacia Yulia y le dijo:

-Seorita Volkova, tiene libre esta clase para salir a pintar la silla que ray, por suerte su compaero delantero no vino as que no habr necesidad de darle su silla, que muy bueno sera que usted ya no estuviera aqu molestando como todas las clases- Dijo la profesora, tena unos 38 aos y le sobresalan notablemente los dientes superiores, tena los ojos chiquitos parecidos a los de un ratn y una nariz aguilea pronunciada.

-Si claro- Dijo la pelinegra.

Sali del aula y cuando hubo dado la espalda a su profesora, hizo una sea a sus compaeros y todos voltearon a verla, ya que tena la atencin de todos sac los dientes superiores al mismo tiempo en que los haca bizcos, todos rieron el gesto imitativo de Yulia, cuando la profesora volte para ver qu estaba sucediendo, Yulia ya haba salido corriendo del aula, su problema eran los maestros, ella era una guerrera que deseaba exterminar completamente a esas personas, costara lo que costara.

Sali al patio y all estaba: la silla esperando a ser renovada:Otra ms pens Yulia al ver otra de sus sillas esperndola a que las dejara igual o mejor de lo que estaban, de la bolsa sac un blusn blanco y se lo puso para evitar mancharse, sac el cubo y la brocha y comenz a pintar. Al terminar se dirigi a la lonchera y pidi una pizza con una soda.

-Otra silla Yulia?- Pregunt la seora que atenda la lonchera.

-Si, ya ve, al menos no tengo que or a los maestros en la clase.- Dijo Yulia a la seora mientras le daba un trago a su soda.

-jajajaja Ay Yulia, Yulia- ri la seora

-Bueno, gracias Seora Liz, nos veremos luego, creo que la pintura ya se sec.- Dijo Yulia al terminar el pedazo de pizza y la soda.

-Adis Yulia, ya no te pelees tanto con los maestros

-Jajajaja no le prometo nada Adis!- Dijo riendo la pelinegra.

-jajaja Adis.

Yulia carg la silla hasta la entrada del saln, esper a que la profesora cara de ardilla saliera para entrar completa a la otra clase; son el timbre de cambio de materia, sali la profesora quien trat de decir algo a Yulia, pero sta no la escuch.

-S profesora, maana, maana- Dijo la menudita pelinegra para zafarse del comentario de la maestra.

* Entr al aula cargando la silla y not que haba una multitud alrededor de su pupitre, dej la silla recin pintada en el piso y se dirigi hacia el amontonamiento de alumnos.

-Hey! Qu pasa aqu?- Dijo en un tono de autoridad y todos voltearon a verla sin decir nada. -Hganse a un lado! Vamos, fuera de aqu!- Grit mientras aventaba a sus compaeros y otros simplemente se quitaban.

* Yulia era muy respetada, pobre de aquel que se le opona, no saba con quin se meta. Por fin lleg al fondo y cual fue su sorpresa al ver sentado en su silla un ngel cado del cielo.

-Tenemos compaera nueva Yulia- Dijo Martha a su amiga.

* sta no le prest atencin a lo que haba alrededor, solo se enfoc en aquella persona: Sus rizos, sus ojos, su boca, su rostro lleno de pecas

-Lena?- Alcanz a pronunciar Yulia con la boca entreabierta.

-Si te conozco?- Dijo la pelirroja arqueando una ceja tratando de recordar aquellos ojos azules. -Cmo supiste mi nombre?

-Acaso ya no te acuerdas de mi?- Pregunt Yulia al mismo tiempo que le extenda la mano.

* Lena se qued viendo la mano de Yulia con el ceo fruncido, entonces parpade rpidamente e hizo una cara de admiracin y volte a ver a Yulia al mismo tiempo en que se levantaba.

-Yul???!!!- Pregunt muy emocionada Lena.

* Yulia volte a un lado y en sus mejillas se not un ligero rubor pero no baj su mano.

-Yul jajajaja- Se escucharon varias risas de sus compaeros por la forma en que su nueva compaera haba llamado a la rebelde del saln, por eso fue que Yulia se ruboriz.

-CLLENSE IDIOTAS!! O se las vern conmigo en la salida.- Amenaz Yulia a sus compaeros, e inmediatamente se hizo silencio.

* Volte nuevamente hacia Lena y le sonri.

-Si soy yo YUL- Dijo la pelinegra marcando notablemente su nuevo apodo pero esta vez nadie se ri. -Bueno y ya no saludas a tus antiguos conocidos? Se te subi la fama o qu?- Brome Yulia sin bajar la mano esperando a ser saludada.

Lena ri de la misma forma que haca tres aos, con su mano en la boca muy discretamente, volte a ver a Yulia pero en vez de un simple saludo de mano se abalanz sobre ella para darle un caluroso abrazo. Yulia subi lentamente sus manos para abrazar a su amiga mientras respiraba aquel perfume que qued grabado en su alma y comenz a sentir mariposas en el estmago, lo que no haba notado es que se haba sonrojado.

-Miren!! Yulia parece un tomate!!- Dijo un compaero de la pelinegra y todos soltaron una tremenda carcajada al verificar que lo que acababa de decir el joven era cierto.

* Yulia se separ delicadamente de Lena y le dijo:

-No me tardo nada-

* Fue hacia su compaero y le dio un fuerte golpe que lo tir al piso, pero a pesar de eso todos se seguan riendo, pues el color de su cara no haba bajado nada.

-Vuelve a decir otra estupidez y te va peor engendro!!- Dijo a su compaero que se encontraba en el piso revolcndose, no del dolor, sino de la risa.

A pesar de que pareci haberle molestado aquel comentario a Yulia, en realidad se senta muy bien, porque solo podra ser una cosa: Quera a Lena, no, no, ms bien la amaba. Se dirigi de nuevo hacia la pelirroja que se encontraba riendo con la mano en la boca, lleg Yulia y entonces le pregunt:

-Qu le pas a tu cabello? Dijo acariciando el corto y negro cabello de Yulia

-Me lo te no te gusta?- Dijo con un puchero

-Mmmm si, te ves muy atractiva.

-Atractiva para ti?- Pregunt.

* Antes de que Lena contestara entr el maestro de historia, Lena se sent y Yulia se dirigi hacia delante para traer la silla que acababa de pintar, el profesor la miro y dijo.

-Me da alegra ver otra silla renovada, a ver si un da tienes tiempo de quitar esto.- Dijo el profesor mostrando su libro con el chicle que haba pegado el da de ayer, en otra ocasin Yulia se hubiera burlado pero sinti pena al ver que todos los alumnos se rean, menos Lena, tena que hacer algo.

-No se preocupe- Dijo en un tono amable mientras sacaba su libro de su mochila, y tomaba el libro del profesor, le entreg su libro al maestro y meti el libro del chicle a la mochila.

Yulia carg la silla hasta el lugar donde debera estar, y como su compaero haba faltado se sent en ella: Delante de Lena por supuesto. Todos se le quedaron viendo, incluso el profesor que miraba sorprendidamente como abra el libro y sacaba su cuaderno con su bolgrafo (nuevo, ya que casi nunca lo usaba), Yulia estaba muy concentrada escribiendo su nombre en la libreta, y not que hubo un silencio sepulcral, levant la mirada y vio que la observaban.

-Qu?- Dijo sonriendo

-Ests enferma Volkova?- Pregunt preocupado el profesor.

-S qu te pasa Yulia?- Pregunt Martha en voz baja, sentada a un lado de Lena (o antiguamente su lugar)

-Qu les pasa?- Dijo en voz alta Yulia levantndose de su asiento y poniendo sus manos en la cintura. Dejen de verme- Orden Yulia, pero solo unos pocos dejaron de verla. -Que dejen de verme he dicho!!- Grit y todos se dieron un respingo y dejaron de verla.

Volte hacia atrs y vio a Lena quin no dej de verla, pero a Yulia no le import, y le sonri, acto seguido por Lena; Martha observ de reojo con la cabeza hacia abajo como le sonrea a la nueva compaera y se llen rabia, eso ni siquiera se lo permita a ella, si Yulia deca que no la vieran Martha estaba incluida a pesar de ser su mejor amiga, tambin le obedeca en todo. Yulia se sent en su pupitre pero el profesor no dej de verla, la pelinegra estaba a punto de gritar: Ya va a dar la clase o se la va a pasar vindome todo el rato? Pero entonces se cercior que Lena estaba atrs de ella y dijo:

-Podemos continuar profesor

-Ah si, si, claro bueno, como se habrn dado cuenta tenemos una nueva alumna, se llama Elena Katina Sergeevna, quiero que la traten muy bien

-Nia pecosa- Balbuce Martha.

* Lena y Yulia la escucharon muy bien, solo que Lena simplemente se cubri sus pecosas mejillas con sus manos, pero Yulia muy molesta se levant de su asiento.

-Creo que alguien no lo escuch bien profesor.- Dijo dirigindose a Martha- La NIA continu remarcando- se llama Lena Katina, y no se preocupe profesor, de mi cuenta corre que TODOS la traten bien.- Termin de decir sin dejar de mirar de lado a Martha.

* Se sent y mir hacia atrs para ver a Lena, quien estaba sonrojada por las palabras de la pelinegra.

-Bueno, bueno, muchas gracias Volkova retomando el tema de ayer Si alguien prest atencin podran decirme algo sobre la revolucin rusa?

Yulia estaba por tomar su pose de siempre: la cabeza recostada sobre el pupitre, era lgico que a nadie le interesaran esas cosas, su sorpresa fue al notar que Lena levant la mano, haciendo que todos se le quedaran viendo, lo cual la puso un poco nerviosa. El profesor qued sorprendido.

-Dgame seorita Katina- Dijo con una sonrisa, era algo increble que alguien supiera historia.

* Yulia volte hacia atrs y apoy su cabeza sobre su mano sin dejar de ver a Lena, quien se puso algo ms nerviosa.

-Bueno eh yo yo le- Dijo tartamudeando, muy ruborizada.

-Vamos, vamos, no tenga miedo- Dijo el profesor animndola, entonces Lena se puso de pie con sus manos tras la espalda y al ver la sonrisa de Yulia tom valor y dijo:

-Bien, los acontecimientos de la revolucin rusa tuvieron lugar en la Rusia Imperial y culminaron en 1917 con la proclamacin de un Estado Sovitico, denominado desde 1922 Unin de Repblicas Socialistas Soviticas o mejor conocido como la URSS. El trmino Revolucin Rusa hace referencia a las dos revoluciones que triunfaron en 1917; la del 23 al 27 de febrero del calendario juliano, empleado entonces en Rusia, derroc a la monarqua autocrtica imperial que suele ser denominada la Revolucin de Febrero. La segunda, que se inici con una segunda insurreccin armada el 6 y 7 de Noviembre, fue organizada por el partido Bolchevique en contra del Gobierno Provisional instaurado tras la primera fase revolucionaria y oper una transformacin en las relaciones econmicas, polticas y sociales de la sociedad Rusa; se denomina Revolucin Bolchevique o Revolucin de Octubre. El 30 de Diciembre de 1922 se constituy oficialmente la Unin de Repblicas Socialistas Soviticas, en la que los territorios tnicos del antiguo Imperio Ruso se unieron a la Repblica Socialista Sovitica Federada de Rusia

Todos, incluyendo a Yulia y al profesor se quedaron con la boca abierta, nadie dijo nada hasta que Yulia comenz a aplaudir, y fue seguida por todos excepto por Martha, quien mir a Lena con cara de frustracin pero Lena no se dio cuenta, estaba muy contenta por los aplausos de sus compaeros, pero Yulia alcanz a leer perfectamente los labios de Martha: Nerd, balbuce de nuevo. Estaba sacando a Yulia de sus cabales, no la volvera a soportar si deca otra cosa de Lena, terminaron los aplausos y siguieron normalmente la clase, aunque de vez en cuando Yulia volteaba para dirigirle una sonrisa a Lena, al mismo tiempo en que a Martha le llenaba otro pozo de coraje.

Al terminar las clases Lena no haba dejado de ser aplaudida en todas las clases, a pesar de ser su primer da comprenda perfectamente todos los temas: Era una joven muy aplicada. Yulia comenz a meter sus tiles en la mochila, quien tambin mereca una felicitacin ya que en todas las clases haba estado participando y comportndose bien, vala la pena si iba a quedar bien con Lena. Yulia esper a que la pelirroja metiera la torre de libros que cargaba a su mochila, y cuando acab estaba por colocrsela sobre los hombros, pero Yulia no la dej y la carg rpidamente.

-Vmonos- Dijo con una sonrisa dando pase para que Lena caminara delante de ella.

* Pero Martha, quien la estaba esperando, al notar que ni siquiera se acord de ella se interpuso en el camino de Yulia y dijo en voz alta de tal forma que Lena alcanzara a escuchar.

-Yulia no habamos quedado en que me ibas a invitar una soda?

-Martha, por favor no empieces- Dijo entre dientes tratando de que Lena no escuchara.

* Lena escuch y volte con cara de incomprensin, pero Martha no tuvo con eso para que estuviera completo su teatrito, as que continu.

-Pero Yulia!! Que mochila tan grande llevas, un momento llevas dos, wow Yulia No crees que son muchas para ti sola?-

Martha se dirigi a la mochila de Lena (rosa con botones, la de Yulia era negra con graffiti de corrector lquido) arrebat la mochila de Lena sin que Yulia pudiera evitarlo y con desdn la ech a la tinta de la basura, Lena corri por su mochila con lgrimas en los ojos, la sacudi y dirigi una mirada a abulia.

-Yulia no me habas dicho que ibas a salir con ella, ser mejor que nos veamos maana- Dijo Lena con la voz entrecortada dirigindose a la salida.

* Yulia la detuvo e inmediatamente Martha se apresur a agregar.

-Ay, lo siento!! No cre que fuera tu mochila adems no crees que llevas la biblioteca all dentro? Deberas ponerle nombre a tus cosas, a ver Dnde est?- Dijo buscando algo encima de la mochila rosada. Uy no lo siento, pero no hay nada que diga Pecas Katina jajajaja- se burl la joven castaa.

-Hasta aqu llevaste Martha- Dijo Yulia azotando su mochila contra el piso.

* Se dirigi hacia Martha, quien no opuso resistencia alguna, estaba dispuesta a pelear con su mejor amiga, pero Lena se apresur a detener a Yulia.

-No, no, no, Yulia clmate- Dijo con lgrimas en los ojos y con la mirada de splica.

* Pudo detenerla ya que meda un poco ms que Yulia, la pelinegra no forceje, tuvo con haber visto la cara de Lena para calmarse.

-Djala, djala que se atreva a golpearme- Fanfarrone Martha con las manos en la cintura.

-Qu demonios te pasa Martha???- Pregunt Yulia llena de ira tomando la mano de Lena y echndola hacia atrs.

-Qu demonios te pasa a ti??? Comprende que la del problema no soy yo.- Dijo tomando su mochila con furia y saliendo rpidamente del aula.

* Yulia intent calmar su agitada respiracin y se dirigi a Lena, quien se encontraba llorando porque su mochila se haba llenado de desecho.

-Est bien Lena?- Pregunt Yulia, era obvio que ella no estaba bien as que Lena no respondi. Oye, disclpala, est loca como una cabra, no s que le pas- Brome pero Lena no ri. Vamos, no ests triste, mira: Me llevo tu mochila a mi casa y yo me encargo de lavarla

-No es eso- interrumpi la pelirroja

-Qu tienes entonces?- Pregunt Yulia

-Es que casi te peleas con tu mejor amiga por mi culpa.- Dijo llorando

-Ay, vamos no llores, pelearme no es algo sobrenatural.- Dijo Yulia extendiendo sus brazos para abrazarla, a lo que Lena correspondi rpidamente y se abraz a su cuello. -Acaso crees que esta bola de demonios me respetan porque ya amaneci? Te informo que no!- Dijo Yulia mientras Lena cambiaba de un sollozo a una leve carcajada.

La pelinegra senta como corran las lgrimas de Lena sobre su hombro, la pelirroja se separ de Yulia y le dedic una sonrisa, la pelinegra se puso nerviosa, comenz a temblar, no poda resistirse, acerc su cara lentamente y Lena cerr los ojos, estaba a punto de besarse cuando entr el conserje.

-Nias, ya es muy tarde, ser mejor que se retiren, los alumnos de la tarde no tardarn en llegar.

-Eh ah, si, si vaymonos Lena.- Dijo Yulia un poco asustada igual que su amiga.

* Salieron de la escuela y nadie habl por un rato, hasta que Yulia agreg.

-Lena eh no s si quieras hacer esto pero- Dijo un poco tmida

-Si?- Dijo Lena sonriendo y ponindose cara a cara con Yulia

-Podras darme tu telfono?

-Oh si, si claro- Dijo Lena alejndose de Yulia. Aqu tienes- le entreg el papel.

-Bueno, entonces nos vemos maana vale?-

-OK, te hablo en la tarde- Dijo la pelinegra dndose la vuelta, pero Lena la volte del brazo y le plant un beso en la mejilla.

-Adis Yul- Dijo sonriente mientras se alejaba

-Adis Lenita- Contest Yulia muy contenta mientras pona su mano en la mejilla que Lena acababa de besar.

* Yulia lleg a su casa y dej caer su mochila en uno de los sillones de la entrada.

-Ya llegu mam!!- Grit

* En ese momento baj una seora con el cabello sujetado en una mariposa.

-Qu bueno hija cmo te fue?- Pregunt abrazando a su hija

-Ah, muy bien, creo que de grande voy a ser Ilustradora de sillas- Dijo Yulia en tono de burla.

-Yulia ya deja de jugar con eso, a ver si te pones a trabajar mejor, no me agrada la idea de que me lleguen 16 reportes a la semana.- Dijo la Seora Larissa.

-No te preocupes mam de ahora en adelante solo te traer 13 de acuerdo?- Brome nuevamente, a lo que su madre respondi con un carioso jaln de cabello.

Yulia era una joven muy consentida, la queran mucho y ms que todo porque era hija nica, as que sus padres se conformaban con que pasara de ao.

-Tengo hambre ma- Dijo sobndose el estmago -No hay galletas o nieve de chocolate?

-Pero qu buena comida es esa verdad Yulia?- reproch Larissa mientras se diriga a la cocina -Hay caldo de verduras y espagueti quieres?- Ofreci

-A caso quieres envenenarme?- Dijo Yulia hacindose la graciosa como siempre. No comera eso ni aunque fuera lo ltimo de este planeta-

-Ja! Ya veramos si no.- Dijo sarcsticamente su madre

-Est bien- Accedi resignada Solo porque eres mi mam favorita.

-Pues cuntas tienes sonsa? Jajaja- Dijo riendo

-Mmmm hay muchas cosas que t no sabes de mi- Dijo Yulia en un tono misterioso mientras absorba la tira de espagueti.

-Bueno, pues yo las debera saber no crees? Soy tu madre

-OK, te voy a confiar algo pero promete que no se lo dirs a nadie

-Est bien hija, no se lo dir a nadie.- Dijo siguindole la corriente.

-Bueno, hoy entr una compaera nueva a mi grupo y-

* Yulia le cont absolutamente todo, desde aquel encuentro a sus 11 aos, hasta que estuvo a punto de pelearse con Martha porque haba maltratado a Lena.

-y bueno, al salir de la escuela me desped de palabra pero ella me dio un beso-

* La pelinegra termin de contar, definitivamente le tena mucha confianza a su madre y saba que no iba a reaccionar de modo alarmante ya que su abuela haba sido lesbiana.

-Bueno y que te parece?

-Eso es todo?- Dijo su madre, con su barbilla apoyada en ambas manos ya que le haba estado escuchar el relato con mucha atencin.

-S ma eso es todo

-Bueno hija, creo que esto es algo muy difcil para todos pero ests segura de quererla?

-Si madre, estoy completamente segura de que la quiero

-Pues Adelante!- Dijo Larissa con una sonrisa Ya sabes que siempre te apoyaremos en todo lo que te haga feliz, pero este es el punto: tu la quieres no? Ahora ella te quiere a ti?

* Yulia se qued pensando un momento y con una sonrisa respondi

-Si ma ella tambin me quiere, lo s- dijo contenta -lo puedo ver en sus ojos.

-Muy bien hija, me dara mucho gusto conocerla, a ver cundo la invitas para ver que tal est- Dijo sonriente.

-Est bien, pero cuando venga ni se te ocurra tocar el tema de acuerdo?- Dijo Yulia retirando el plato de espagueti y dirigindose a la escalera.

-Ya no vas a comer hija?- Dijo Larissa con cara de preocupacin

-Ya no ma, gracias- Respondi subiendo las escaleras.

-Est bien Yul- Dijo burlndose, lo que provoc que Yulia diera un resbaln en el escaln que estaba por pisar.

-No me digas as!!- Grit

-Est bien- Dijo su madre, y cuando Yulia haba llegado arriba dijo YUL-

-MAM!!!- Volvi a decir Yulia, entonces su madre ri.

* Yulia lleg a su cuarto, sac un papelito de su bolsillo y marc el telfono.

-Hola?- Contest una voz de mujer

-Si hola Lena?

-Hola Yul!

* Y as comenz una larga pltica que dur toda la tarde, as que Lena dijo.

-Lo siento Yulia, me tengo que ir a dormir, porque sino en la maana no me levanto y no me gusta llegar tarde a la escuela

-Te entiendo entonces nos veremos maana

-Buenas noches Yul- Se despidi Lena

-Buenas noches Lenita

-Nia te quiero.- Dijo Lena llena de ternura

-Y yo a ti y yo a ti- Contest Yulia muy emocionada.

Con esta simple llamada, naci una amistad muy estrecha con mucho cario, besos y abrazos... pero solo una amistad, Yulia y Lena eran las mejores amigas de toda la secundaria, pero Martha nunca se dio por vencida y cada que el tiempo le daba un oportunidad molestaba a Lena, pero como siempre Yulia la defenda...

4 MESES DESPUS

El saln de clases estaba careciendo de maestro, por lo que los estudiantes no desperdiciaban la oportunidad de hacer de las suyas... Lena se encontraba riendo fuertemente por algo que haba sido dicho graciosamente por la pelinegra.

-Jajajajajajajaja!!! Yulia por favor ya no digas nada, siento que se me va a salir el estomago jajajaja.-

Rea Lena mientras Martha desde 3 lugares atrs la miraba an con recelo, pero ya no le prestaban atencin, ninguna de las dos, Yulia se las haba arreglado para quedar en ese lugar: delante de Lena, haba compartido muchas cosas al estar en esa zona: mensajes escritos, copia de exmenes, criticas, chistes, etc.

-Esta bien... Lena tengo que ir al bao me permites?

-Claro aqu te espero.- dijo mientras Yulia se levantaba y le tocaba la nariz a lo que Lena sonri.

*Martha al ver que Yulia se alejaba corri y se sent en su lugar, dndole la espalda a Lena comenz a platicar con la compaera de al lado.

-Hola Bere- Salud Martha a la chica que se encontraba a un lado de ella.

-Ah, hola Martha Qu tal?

-Muy bien, oye habas odo hablar sobre las personas que se matan estudiando?- Dijo en voz alta para que Lena alcanzara a escuchar, saba que sin Yulia, Lena era incapaz de defenderse... o al menos eso crea.

-Si lo he escuchado- Dijo Bere. -Y eso que?

-Bueno, pues ese tipo de gente, es como corriente, unos totales NERDS que se la pasan toda su vida hundidos en los libros.-

* Bere no hizo comentario alguno, saba muy bien que se estaba refiriendo a Lena, entonces Martha volte hacia Lena y dio un actuado respingo y dijo:

-Ay!! Lo siento, no te vi, es muy raro que nunca te vea no crees? Lo que pasa es que eres muy insignificante es por eso que ni te noto.- Dijo Martha mirando a Lena con cara de desprecio.

* Esta vez Lena le haban hecho derramar la ltima gota de paciencia que tena y se haba acabado Martha desde hace 4 meses y muy molesta pero entrada en si dijo:

-Ahora escchame perra, voy a hacer algo que va en contra de mis principios

-Qu? Vas a ir a arrancarle las hojas a todos los libros de la biblioteca? Jajajajaja.- Se burl Martha.

-No- dijo sarcsticamente Lena -Pero lo que si voy a arrancar va a ser esa sonrisa y todos los cabellos que tienes encima de esa cabeza de mierda.-

Martha qued con cara de interrogacin pero antes de que pudiera reaccionar ya tena a Lena encima de ella jalndole los cabellos. Todos los alumnos se dieron cuenta pero ninguna las detuvo, todos haban sido testigos de lo mal que haba sido tratado Lena por parte de Martha y al ver que la pelirroja estaba ganando no atinaron mas que a gritar y hacer coro: Pelea, pelea, pelea, pelea!!! Gritaban muy emocionados y haciendo ronda a las dos mujeres tiradas en el piso, Lena estaba encima de Martha dndole de cachetadas, pero entonces Martha subi una mano y comenz a araar a Lena, la pelirroja llena de coraje le sujet ambas muecas con una mano, y con la mano que le qued libre comenz a golpear la cara de Martha fuertemente, en ese momento regres Yulia y al ver la ronda y escuchar el coro: Pelea, pelea adivin que era Lena y Martha las que estaban siendo espectadas por todo el saln, corri empujando a medio mundo la menudita pelinegra y al ver a Lena trat de separarla, pero no pudo, Martha estaba llorando pero Lena la segua golpeando muy fuerte.

Lena!!! Sultala Lena!!! YA BASTA!!!, Djala Lena!!! gritaba Yulia pero sin resultados, hasta que la cara amoratada de Martha no pudo ms y de su nariz brot un gran chorrete de sangre, entonces Lena se levant y Yulia la tomo de las manos, la pelirroja se alej no antes de propiciarle una fuerte patada a Martha. Yulia fue a sentar a Lena que estaba sangrando por las araadas de Martha y con el cabello totalmente enmaraado y desarreglado:

-Que pas Lena?!- Dijo muy preocupada Yulia tratando de aplacar el rebelde cabello de Lena

-Ella empez.- dijo con la voz entrecortada. -Yo le advert, no me pude aguantar y me le avent.- dijo Lena, pero sus ltimas palabras se convirti en un sollozo, puso ambas manos en su cara y comenz a llorar.

Martha estaba siendo atendida por sus compaeros aunque la mayora estaban de acuerdo que lo tenia bien merecido, tena tapada la nariz con un pauelo pero la hemorragia ya haba cesado, en ese momento volte hacia Lena quien estaba siendo abrazada por Yulia y le grit llena de furia.

-Pero esto no se queda as cara de fresa!!!!

-CUANDO QUIERAS ESTUPIDA!!! CUANDO QUIERAS Y VUELVO A PARTIRTE LA CARA!!!- Contest Lena a lo que Yulia no necesit defenderla ya que Martha se qued callada y se dirigi afuera seguramente ira a reportar a Lena en la direccin...

* Eso era lo que tema Lena, si decan algo seguro y la expulsaban

-Yulia tengo miedo.- deca Lena tomando las manos de la pelinegra. -Y si me expulsan?

-No te expulsarn Lena.- dijo Yulia muy segura apretando las manos sudorosas y temblorosas de Lena. -Ella empez todo el problema, y no solo yo estoy de testigo, seguro que todo el saln se dio cuenta de cmo te trataba.

-Peor me port como una total desquiciada, la hice sangrar, pobrecita yo no quera pegarle tan feo.- Se lamentaba Lena y agach su cabeza, mientras que alrededor todos los alumnos prestaban atencin a la imitacin que haca un compaero sobre la pelea.

-... Entonces Martha intent araarla, pero Lena la tom de las manos y la golpe...- Se escuchaba relatar.

* Nadie vea a las dos chicas entonces Yulia aprovech el momento: levant la cara cabizbaja de Lena y le dijo:

-Estoy muy orgullosa de ti, lo ves? Ya no dependes de mi, la pelea estuvo estupenda, si no la golpeabas tu, la golpeara yo un da de estos, Eres una bravucona Lena! Jajaja.- ri Yulia mirndola tiernamente.

-Lo aprend de ti.- dijo Lena acercando su cara a la de Yulia.

-Jaja, lo se.- ri Yulia mientras tomaba a Lena de la barbilla y ambas cerraban los ojos.

Estaban a 2 dos centmetros de unir sus labios, sintiendo la respiracin de cada una en su cara cuando escucharon que abrieron la puerta, entonces se separaron y todos los dems alumnos se sentaron en su lugar: era la directora, pero no vena sola sino con la chica de cabello castao quien de inmediato seal a Lena:

- Es ella directora!!- dijo Martha sollozando.- Ella fue la salvaje que me atac!!

-Seorita Katina, tendr que acompaarme a la direccin.- dijo la directora muy severamente tomando a Lena del brazo y levantndola.

-No le puede hacer nada!! Ella no tuvo la culpa!!- se opuso la pelinegra.

-Tranquila Volkova, solamente vamos a verificar que fue lo que pas.

-En ese caso yo la acompaar.- dijo Yulia levantndose de su lugar y yendo hacia ellas.

-No, el asunto es entre estas dos jvenes, no necesitamos tu ayuda, pero gracias de todos modos Volkova.- la detuvo la directora, Yulia no dijo nada ms y solamente le dio la mano a Lena en sea de apoyo.

Las tres mujeres salieron y Lena no le despeg su preocupada vista a Yulia y la pelinegra solo atin a sonrer, en cuanto se fueron Yulia se subi a una silla queriendo que todos le pusieran atencin y tratando de calmar a la borlotera que se haba armado en cuanto la directora haba salido, ya que todos la voltearon a ver Yulia dijo:

-Gracias, bien, ahora escchenme...- comenz a decir la pelinegra. -no podemos dejar que echen a un buen elemento de este maravilloso saln, ustedes han sido testigos de cmo Martha a tratado a Lena No es as?.- la mayora dijo que si. -Entonces Estamos del lado de Lena?

-Siiii!!!- Gritaron muchos alumnos.

-Qu saquen a Martha!!!

-Bien.- dio un suspiro de alivio y baj de la silla.

Mientras esperaba a que Lena regresara, pero en se momento lleg su maestro de Espaol y comenzaron a dar clases, no fue hasta el descanso cuando Yulia se propuso buscar a Lena y la encontr sentada en una sala de la direccin junto a Martha y ambas con la cabeza abajo, entr y Lena y Martha la vieron, la pelirroja sonri y sali a su encuentro hacia la puerta de la sala y le dio un fuerte abrazo.

-Qu pas Lena, que les van a hacer? - pregunt Yulia separndose de Lena rpidamente y diciendo muy preocupada.

-Bueno, como ya expliqu lo que realmente sucedi, nicamente me quedar a hacer aseo de saln este da.

-Ay que bueno, Lenita.- dijo Yulia con una sonrisa, pero se acord. -Oye... Y Martha?

-Ooopsss... a ella la expulsaron 3 das.- dijo Lena volteando hacia un lado. -No fue mi intencin haberle pegado, pero ella empez.- explic Lena

-Lo s Lena.- dijo Yulia con una sonrisa. -Yo te creo, no tienes que explicarme tanto,-

* La pelirroja se le qued viendo tiernamente a Yulia y viceversa.

-Bueno y...- dijo Yulia un poco apenada ya que miraba a Lena de una forma que probablemente las hormonas la traicionaran y mejor se volte a un lado para dejar de verla. -Vas a salir a descansar?- Agreg Yulia pero Lena le contest otra cosa:

-Mrame- Dijo Lena tomndola de la barbilla y poniendo la misma cara que hace unos momentos: llena de ternura -Me encanta que me mires-

-A mi tambin pero...- objet Yulia alejando un mechn rojo de la cara de Lena para as poder sus hermoso ojos verdes.

-Ssshhhh- dijo Lena poniendo su dedo ndice en los labios de Yulia. -No digas nada, tu silencio es romance para mis odos- Dijo Lena y acerc su cara a la de Yulia.

* La pelinegra se dio cuenta en el lugar donde estaban y con sutileza la alej a Lena de ella, la pelirroja comprendi lo que dio a entender Yulia y simplemente le sonri.

-Te espero a la salida, te ayudar con tu penitencia.- dijo Yulia

-Gracias Yul- sonri la pelirroja, entonces despus de un apretn con ambas manos a las de Yulia se dirigi de nuevo hacia la sala de direccin y antes de que entrara Yulia dijo:

-Si te molesta, vulvele a romper la nariz.- dijo Yulia a lo que Lena dej escapar un leve risilla.

A LA HORA DE SALIDA...

* El saln se encontraba solo, y entonces entr Lena acompaada por Yulia, ambas con escobas, coleadores, cubetas y roceadores.

-Bueno... empecemos.- dijo Lena y comenz a barrer.

Yulia roseaba y limpiaba las sillas de saln, comenzaron a hacer el aseo y de vez en cuando recordaban la pelea que se haba llevado acabo y rean, era un da nublado y conforme pas el tiempo comenz a lloviznar hasta que cay una fuerte tormenta.

-Demonios!! Lo que nos faltaba: una hermosa tormenta impidindonos regresar tranquilas casa.- dijo algo molesta la pelinegra.

-Tranquila Yulia... para eso se invent el paraguas No?- dijo positivamente Lena.

-Bueno si.- dijo Yulia con una sonrisa.

-Este saln es una asco Ve el coleador!- dijo Lena mostrando el percudido coleador a Yulia. -Esta negro como mi conciencia.- brome Lena y Yulia ri un poco por el comentario. -Voy a lavarlo.- dijo Lena.

-Ah si no hay problema, puedes ir a sumergirlo en uno de los charcos de afuera y queda: como el cristal jeje.

-Ay Yulia, Yulia, es en serio... ahora vuelvo.

-No te preocupes, no me ir sin ti.- dijo Yulia muy coqueta a lo que la pelirroja sonri un poco sonrojada y sali del saln y Yulia sigui limpiando.

Lena se dirigi hacia el lavadero, estaba lloviendo fuerte y se estaba mojando pero no le import simplemente se apresur a terminar de lavar el coleador y entonces por algn motivo dej escapar un fuerte grito de dolor que fue escuchado por Yulia e inmediatamente solt el roseador y el trapo y corri hacia donde se encontraba Lena, dio la vuelta al saln hasta donde se encontraba el lavadero y se dio cuenta de lo que estaba pasando: Martha estaba encima de Lena con una navaja llena de sangre y la pelirroja se encontraba llorando y con varias heridas en el brazo:

-Yulia!!!- grit desesperadamente la pelirroja al notar su presencia.

Martha volte a ver a la pelinegra y se dio cuenta que venia hacia ella as que levanto el brazo dispuesta a apualar a Lena pero Yulia se le avent haciendo que dejara libre a Lena quien rpidamente se levant y llev su mano a sus heridas. Yulia luchaba con Martha en el suelo tratando de quitarle el arma pero Martha al ver a Lena desprotegida se dirigi hacia ella con la navaja en alto. Yulia se levant rpidamente y la jal del cabello haciendo que se detuviera y que diera una brusca vuelta provocando que intencionalmente hiciera un rasguo con la navaja en la cara de Yulia, Lena se dirigi hacia la pelinegra llorando y abraz su empapado cuerpo, pero Yulia la jal de la mano y la puso tras de ella protegindola de Martha, pero la joven castaa se haba quedado paralizada al ver su arma y a sus dos compaeras lastimadas por su culpa.

-Por que haces esto Martha!!!- grit con la voz algo quebrada la menudita Yulia.- Que he hecho yo para que te comportes as!!?? Por qu Martha?

-Porque yo te amo Yulia!!!- dijo muy desesperada Martha haciendo que Yulia quedara en shock.

-Qu??- pregunt Yulia algo desconcertada.

-Te amo, te amo tanto que no pude soportar ver como mi relacin contigo se terminaba al aparecer esa hija de...

-Su nombre es Lena!! Por segunda vez...- La interrumpi Yulia abrazando a Lena detrs de ella quien miraba con los ojos rojos lo que estaba sucediendo.

-Lena...- continu Martha algo forzada. -Derrumb todas mis esperanzas contigo, no puedo creer que tan solo por haberla visto un da te haya puesto en la posicin de quererla ms que a m, tena que quitarla de alguna forma del camino, por que te amo Yulia...

-Y por que me amas tienes que matar a otra persona que yo quiero?!!- grit Yulia pero Martha no contest. -Esto aqu acaba Martha, pero si te vuelves a acercar a Lena te juro que...- pero no pudo continuar.

-Que est pasando aq? Madre ma!!- exclam la directora al ver a Yulia y a Lena con heridas sangrando.

* Se dirigi a las chicas y not sus heridas.

-Pero quien les hizo esto??- Dijo la directora.

* No hizo falta que las chicas contestaran ya que la directora pos su mirada sobre Martha y a sus pies estaba la navaja.

-Ya entiendo.- Dijo la directora mostrando una cara de enojo hacia Martha.

La ignor y volvi a ver a Lena quien era la que ms herida estaba, la lluvia caa con todo su espesor pero ya no sentan lo duro si no lo tupido, lo nico que quera Yulia era que a Lena no le estuvieran doliendo tanto sus heridas, no eran profundas pero si eran varias.

-Chicas lo siento pero la Seora Pamela cerr la enfermera, Volkova... cree que puedas llevar a Katina a su casa?

-Si no hay problema, pero creo que sera mejor llevarla a la ma, ya que la de ella es mucho ms lejos.

-De acuerdo, seorita Katina Puede caminar verdad?

-Si no se preocupe solo fueron unas cuantas heridas.- dijo Lena con una sonrisa a lo que Yulia le pareci un gran lumbral que poda borrar aquel da nublado y ella tambin sonri.

-Bueno, cudense.- dijo apretando las manos de las chicas y se volte hacia Martha. -Usted, sus padres y yo tenemos que hablar... acompeme a la direccin por favor.-

* Y as la directora y Martha se alejaron.

-Nos vamos?- pregunt Yulia a Lena ofrecindole la mano

-Vamos.- contest Lena y dio su mano a Yulia.

* Caminaron hacia la casa de Yulia aunque de vez en cuando Lena se quejaba de sus heridas

-Te duele mucho?- pregunt preocupada la pelinegra.

-No tanto.- dijo Lena con cara de dolor

-No te preocupes ya casi llegamos.- La anim Yulia Llegaron a casa de Yulia y subieron a su cuarto.

-No estn tus padres?- pregunt Lena subiendo las escaleras

-No fueron a visitar a un to enfermo y vuelven dentro de dos das

-Y te dejaron sola???- dijo Lena algo exaltada.

-Si.- dijo naturalmente Yulia.

-Que valiente eres.- dijo Lena llegando al cuarto

-No es tanto.- explic Yulia abriendo su puerta y dando el pase a Lena a lo que la pelirroja le dirigi una mirada coqueta por el gesto tan cordial.

-Que bonita habitacin tie...- intent decir Lena pero la interrumpi un estornudo.- perdn.- dijo Lena limpindose la boca con la manga de su empapada blusa.

-Uyyy, permteme, no te me vayas a resfriar.- dijo Yulia yendo hacia su cmoda mientras Lena se sentaba en la cama, Yulia le entreg una muda de ropa a la pelirroja:

-Gracias Yul.- dijo sonriendo pero un poco ronca Lena

-No hay de qu, mira aqu est el bao.- dijo Yulia sealando la puerta que se encontraba enfrente de ellas.

-Un bao? Y para qu?- pregunt Lena a lo que Yulia qued un poco desconcertada

-Pues... para que... te vistas...- dijo Yulia algo apenada

-Ah si claro.- dijo Lena dndose cuenta y levantndose de la cama para dirigirse al cuarto de bao.

Yulia se qued esperando y continuamente escuchaba como estornudaba as que baj a la cocina a prepararle un t cuando lo tuvo listo subi de nuevo a su habitacin, abri la puerta y vio a Lena observando una foto suya, en cuanto not su presencia se volte rpidamente y Yulia se dio cuenta que su nariz estaba completamente roja, se acerc a ella y le entreg la taza de t

-Gracias.- murmur la pelirroja y dio un sorbido de t.

* Permanecieron en silencio y Yulia solo observaba como Lena se beba el t, cuando se lo termin dijo:

-Gracias Yul, oye podras prestarme tu telfono? Necesito avisarle a mi mam que estoy aqu

-Si claro.- dijo Yulia pasndole el telfono inalmbrico.

-Hola mam?, si soy yo Lena... no, lo que pasa es que estaba lloviendo y vine a casa de Yulia... si estoy bien... No, solo estoy un poco mojada... si de acuerdo... te quiero... adis.- y Lena colg el telfono.

-Qu dijo?

-Que me quedara aqu hasta que pasara la tormenta

-Mmmm pues creo que aqu vas a pasar la noche jajaja.- brome Yulia sealando su ventana y notando que el cielo estaba completamente cerrado por nubes negras y caa una fuerte tormenta con viento.

-Pues... ni modo

-Cmo ests de tus heridas?

-Ya me siento mej... - pero Lena no pudo decir nada ya que sinti un ardor y se llev su mano hacia su brazo derecho.

-Estas bien?- pregunt Yulia preocupada pero Lena no contest tena los ojos cerrados del dolor y cuando retir su mano las dos vieron muestras de sangre.

-Dios!!- exclam Yulia y levant la manguilla de la blusa de Lena y vio la herida con sangre sin coagular. -Esprame Lena, no te muevas.- dijo la pelinegra levantndose de la cama y corriendo fuera de la habitacin.

Lena la esper pero no pudo contener las lgrimas ya que le dola mucho. Yulia regres con un botiqun de primeros auxilios, sac un trapo mojado y lav la herida de Lena, despus sac alcohol y le puso delicadamente en el brazo de Lena quien se quej un poco ya que le estaba ardiendo.

-No te preocupes es todo.- dijo Yulia poniendo una venda en las heridas de Lena.- Listo.- dijo Yulia quitando sus manos de la venda y recorrindose para recoger lo que haba utilizado en el botiqun.

-Wow... aparte de bonita y popular tambin eres una buena enfermera.- la aclam Lena viendo su vendaje.

-No exageres.- dijo Yulia sonriente y un poco intimidada.

-No, no exagero.- dijo Lena con voz muy sensual y acercndose a Yulia. -Es la verdad-

-Emmm... voy a dejar esto en su lugar.- reproch Yulia levantndose de la cama y saliendo de la habitacin.

Se haba sentido un poco acosada pero Lena no se molest y esper a Yulia en su habitacin. Yulia dej el botiqun en el cuarto de su mam y pens: Qu demonios estoy haciendo? No puedo rechazarla, yo la quiero y ella me quiere, es hora de decrselo y se dirigi a su cuarto cuando entr de nuevo encontr a Lena acostada en su cama entonces aprovech el momento, Lena la mir y le sonri, sonrisa que fue contestada por Yulia mientras se meta al cuarto y cerraba la puerta con seguro.

-Qu haces?- pregunt Lena sonriente

-No quiero que nadie nos interrumpa.- contest Yulia yendo hacia la cama.

-Jaja... pero, no hay nadie Yul

-No quiero que entre ni el aire.- dijo Yulia.

-Y porque tanto as?

-Ya vers.- dijo la pelinegra en tono misterioso.

Lena an se encontraba en la cama y Yulia se puso a un lado de ella, tom la mano de la pelirroja y la apret mientras Lena le acariciaba la cara a Yulia, se fueron acercando poco a poco solo escuchaban la fuerte tormenta y en un sonido muy lejano cada una los latidos del corazn de la otra, estaban muy cerca y a Lena le comenzaron a sudar las manos de los nervios y se fue alejando un poco de la cara de Yulia, la pelinegra lo not y antes de que se alejara ms tom a Lena por la espalada y la atrajo fuertemente hacia ella haciendo que sus labios se unieran, primero fue lento y despus fue tomando pasin, Lena abraz a Yulia y finalmente se decidi a introducir su lengua dentro de la boca de Yulia, temi un poco no ser respondida por la pelinegra pero entonces sinti tambin como jugaban sus lenguas dentro de la boca de la otra. Yulia se desvi y comenz besar sus mejillas y despus dio mordiscos a su cuello, mientras Lena respiraba fuertemente con la boca un poco abierta y los ojos cerrados, la pelinegra comenz a sentir una tremenda energa dentro de ella y comenz a moverse entonces sin pensarlo dos veces meti su mano dentro de la blusa de Lena, pero Lena se sinti un poco incomoda pero a la vez llena de placer, dud por un momento y dijo:

-Yulia?- dijo la pelirroja tratando de calmar su respiracin pero deseaba que Yulia siguiera besndola.

* La pelinegra se dio cuenta de su error y se separ de ella.

-Lo siento.- se disculp Yulia un poco ruborizada. -Perdn, perdn me deje llevar

-Es decir... tu quieres?...- pregunt Lena

-Bueno... yo, yo... Si t quieres yo...

-Yo quiero.- la interrumpi Lena. -Yo quiero.- volvi a repetir la pelirroja con una sonrisa que fue correspondida por Yulia...

Yulia arrull los cabellos de Lena y se acerc un poco para besarla, Lena la abraz y se dej caer en la cama con Yulia encima, la pelinegra desaboton la blusa de Lena mientras que la pelirroja rea un poco nerviosa, entonces Yulia subi y la bes de nuevo, las manos de Lena se dirigieron a las posaderas de Yulia bajando lentamente por su espalda hasta llegar a su destino, las acarici entonces Yulia le quit la blusa delicadamente:

-Auch! Cuidado todava me duele.- se quej la pelirroja al notar que roz demasiado con el vendaje de su herida.

-Ay lo siento mucho.- se disculp Yulia y arrastr sus labios sin despegarlos de la piel de Lena hasta su vendaje y lo bes.

Yulia le desabroch el sostn a Lena y bes suavemente los pechos de la pelirroja a quien cada momento que pasaba se excitaba ms, meti sus manos dentro de la falda de Yulia y le dio una pulgarada provocando que la pelinegra riera. Yulia baj sus manos rozando la piel de Lena y haciendo que se le erizara, le baj suavemente el pants de algodn que le acababa de prestar, acarici sus piernas an un poco hmedas mientras Lena meta su mano dentro de la playera de Yulia y ya tenindola ah la levant para sustraerla de ella, Yulia se dirigi hacia la boca de Lena y los traz con su mano entonces Lena sac sus manos debajo de ella y la abraz:

-Te amo Yulia.- dijo la pelirroja mirando fijamente los ojos azules de Yulia.

-Yo tambin Lena, me hipnotic desde la primera vez que te vi, pens que era algo parecido a la brujera o magia, pero me di cuenta que la nica magia que exista eran tus hermosos ojos adems de tu grandioso poder que tienes sobre m.- termin de decir Yulia y se recost encima del pecho de Lena.

* Lena acarici suavemente el cabello de Yulia y pidi:

-Me das un beso? - pregunt Lena y Yulia levant su cabeza y se acerc a su cara

-Los que quieras.- y la bes acariciando su cara.

Mientras la besaba, Yulia baj su mano por el abdomen de Lena hasta llegar a su ropa interior, Lena comenz a vibrar sin dejar de besar a Yulia. La pelinegra comenz con suaves roces hasta que meti sus dos dedos y comenz a dar frotaciones en crculos comenzaba a escuchar como gimoteaba la pelirroja del placer que se senta como miel dentro de sus labios:

-Te agrada?- pregunt Yulia con una sonrisa en sus labios.

-Si, no pares, no pares mmmfff.- dijo Lena gimiendo.

-De acuerdo.- dijo Yulia y la bes.

Con la mano que tena libre la entrelaz con la de su amante. Los dedos de Yulia se movan dinmicamente dentro de Lena quien no dejaba de clamar hasta que su fogosidad lleg al clmax y dio un tenue alarido mientras encorvaba su cuerpo y Yulia no desvaneca la sonrisa de su rostro por ver a su enamorada llena de felicidad, Lena se incorpor y qued cara a cara con Yulia y pronunci un sincero Gracias mientras la empujaba suavemente y la derrumbaba en la cama, abri sus piernas de manera que no quedara encima de ella y qued en posicin de gatas, baj un poco su cabeza y la bes mientras ambas se deshacan de la ropa que an traan puesta. Lena mordi apaciblemente las caderas de Yulia mientras esta rea y mimaba la cabeza de la pelirroja, Lena baj su lengua y la implant dentro de Yulia:

-Aaaammmffff.- gimote Yulia

-Crees que es paso difcil?- pregunt Lena sonriendo

-No lo s, si t lo dices.- contest Yulia Lena sigui jugueteando con su lengua mientras escuchaba placenteramente los gemidos de la pelinegra.

Lena termin y subi un poco agitada para recostarse a un lado de Yulia mientras la abrazaba tiernamente y Yulia con su mano quitaba el sudor de la frente de Lena se miraron y se volvieron a besar y as despus de estar un rato acaricindose y besndose se quedaron dormidas.

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Lena abri sus ojos regados de flojera y volte a un lado en donde encontr a Yulia recostada en su pecho con sus manos abrazadas al cuerpo de Lena quien mostr una sonrisa y le bes la nuca, se levant con cuidado y apoy a Yulia en una almohada evitando que despertara Que hermosa es pens Lena y se dirigi a recoger su ropa para vestirse mir al reloj y vio que eran las 7:00 p.m., termin de vestirse y en una libreta anot un recado para Yulia, sali sigilosamente de la habitacin y sali de la casa de Yulia para dirigirse a la suya. Yulia despert y sin abrir los ojos busc a tientas el cuerpo de su amada y al no toparse con nada abri rpidamente los ojos dando un respingo en la cama, volte para todos lados pero no haba seales de Lena, mir el reloj y se dio cuenta que eran las 7:45 p.m. perezosamente se rasc la cabeza y se dirigi al bao, al salir vio algo que no haba notado y fue hacia el, era su cuaderno y una pluma encima percibi inmediatamente la letra de Lena y ley: Mi amor: disclpame por no haberme despedido, pero no quise despertarte, me fui a mi casa es demasiado tarde y ojal que no me regaen, gracias por todo, la verdad me encant, nos vemos maana en la escuela... Te amo: Tu Lenita Yulia termin de leer el recado con una sonrisa y esper con ansias volverla a ver...

AL DA SIGUIENTE...

Yulia esperaba con desesperacin a Lena, estaba sentada en su pupitre y mirando continuamente el reloj entonces se abri la puerta y Yulia muy emocionada corri hacia ella entonces se dio cuenta que era Martha y par en seco, la joven le dirigi una mirada de coraje y se fue hacia su pupitre en ese momento dieron el timbre Martha sali dejando sola a Yulia quien se dio cuenta que Lena no llegara, recogi su bolsillo y se dirigi a la salida, iba cabizbaja y al abrir la puerta se encontr con una figurilla que por la expresin de su cara vena bastante fatigada:

-Lenita!!!- grit emocionada Yulia dndole un abrazo a la pelirroja.

-Hola Yul- dijo un poco asfixiada por el abrazo

-Qu paso? Cre que no vendras.- dijo Yulia poniendo un puchero, Lena volte para todos lados asegurndose de que no haba nadie y le plant un beso a su pelinegra y la acorral contra la pared, al terminar dijo:

-Claro que vendra, aunque nevara, no me imaginaba este da sin ti solo que tuve un pequeo retardo por el coche de mi pap.- dijo Lena con voz baja y tierna mientras Yulia le acariciaba la espalda.

-Bueno, vamos a acomodarnos no vaya a ser que no nos dejen entrar por no marchar.- coment Yulia.

-De acuerdo.- dijo Lena y tom la mano de Yulia para

erla comprender.

-Mmmmm... Y que me dars si me lo aprendo?- pregunt Yulia levantndose de la cama y mirndola coquetamente.

-Qu te parece?... Una nieve.- dijo Lena sonriente

-Solo eso???- dijo Yulia muy decepcionada

-Bueno y te dar algo ahora aunque no te lo aprendas.- dijo Lena y se incorpor para plantarle un beso y empujarla a la cama, Yulia la acarici y entonces la pelirroja comenz a hacerle cosquillas.

-Ay no no jajajajajaja, no Lena no jajajajajaja.- rea sofocadamente la pelinegra

-verdad que te aprenders la leccin?- amenaz Lena sin dejar de hacer cosquillas a Yulia

-Jajajajaja de acuerdo, de acuerdo Jajajajaja ya sultame.- suplic Yulia y Lena la dej entonces la pelinegra le dio un beso y comenzaron de nuevo a trabajar.

Al terminar salieron de la casa de Yulia y caminaron hacia la heladera como lo haba prometido Lena:

-No puedo creer que te hayas aprendido todo eso.- coment Lena muy sorprendida

-La verdad yo tampoco.- dijo Yulia an ms sorprendida que Lena.

-Pero ya tendrs tu recompensa-

-Un helado?- dijo Yulia sonriente

-No... es una sorpresa.- dijo Lena hacindose la misteriosa

-Qu es?- dijo curiosamente la pelinegra. -Por favor, por favor dime que es.-

-Si te lo digo ya no sera sorpresa-

-Si me lo dices me har la sorprendida-

-Vamos Simba.- dijo Lena recordando la frase de la pelcula de Disney

-De acuerdo no me lo digas, al fin y al cabo yo tambin te tengo una sorpresa.- minti Yulia

-De verdad?- dijo Lena ingenuamente

-Si, pero no te lo voy a decir.- dijo Yulia en tono de burla

-Muy bien no me lo digas, a mi no me gusta arruinar las sorpresas.- dijo Lena entrando a la heladera y dando el pase a Yulia mientras sta pensaba: Demonios

* Se sentaron y lleg un chico:

-De que quieren su nieve?- pregunt

-Yo la quiero de limn y naranja.- dijo Lena mientras el chico anotaba en su libreta

-Yo quiero una de vainilla con pedazos de chicle y de capuchino con caf baadas de chocolate con grageas, granola, pasas, cereal, miel y una galleta.- orden Yulia lo que caus que a Lena se le desorbitaran los ojos el muchacho hizo sea de afirmacin y se retir de la mesa, Yulia volte a ver a Lena y al ver la expresin de su cara pregunt:

-Qu pas?- dijo algo sonriente

-Nada, es solo que no pareces comer mucho.- dijo Lena contestando la risa.

-Vete acostumbrando chiquilla, ya que seas mi esposa no me voy a conformar con una rebanada de pizza.- coment Yulia estirndose de brazos.

-Jajajajaja.- ri Lena entonces Yulia not algo:

-Mi amor.- dijo apoyando su barbilla en la mesa y mirando fijamente a la boca de Lena a lo que la pelirroja volte sus ojos casi haciendo bizcos para ver que pasaba. -Qu le pas a tu risita tmida? Tengo como un mes que no te veo rer con tu mano en la boca.-

Lo que acababa de decirle a Lena no tena idea de la gran importancia que tena: Lena haba sido una chica muy reservada y por el simple hecho de cambiar su risa la hacan un poco ms excntrica. Lena permaneci en silencio y en ese momento lleg el chico con los helados de cada

racin.- tu eres un santo para m y por ti yo cambiara al mundo pero si tu no puedes ni cambiar tu risa por m, pues lo siento mucho.- termin de decir y se retir del lugar

-Yulia espera!!- se levant como puedo del asiento. -No quise decir eso!!- gritaba Lena corriendo tras la pelinegra entonces...

Lena alcanz a Yulia y la volte bruscamente del brazo, la pelinegra no opuso resistencia alguna y la vio con sus grandes ojos azules que ahora se encontraban llenos de lgrimas:

-Por favor Yulia, no te pongas as ni siquiera me dejaste terminar la frase.

-Ah s? Y que te falt decirme?- dijo Yulia en tono seco

-Pues...- se acerc a la cara de Yulia. -Que gracias a que se me quit un poco lo amargada o... lo santo.- Yulia ri. -He estado consiguiendo ms amigos y eso no se lo debo a nadie ms que a ti.- entonces fue hacia su cara y le dio un beso que la balance y casi se tumba hacia atrs pero Lena la tom de la espalda.

Yulia se sinti desalojada de su enojo y acarici los cabellos de Lena por atrs de su cuello sin darse cuenta de que mucha gente comenzaba a musitar palabras de repugnacin y desprecio incluso un nio que pas le pregunt a su mam:

-Porque se besan en la boca mami?- dijo el nio algo confundido

-Vmonos de aqu hijo, estas nias estn locas.

* Al escuchar esto las chicas se separaron aunque muy lentamente la verdad no les interesaba lo que la gente pensara de ellas, Lena sonri a Yulia y le acarici una mejilla con su mano.

-Te amo Lenita-

-Yo tambin Yul

* Y as siguieron caminando y platicando...

-Yul, tengo que regresar a mi casa-

-Muy bien nos vemos maana.- dijo Yulia y le dio un beso en la mejilla

Y ahora que tramas?-

-Por qu?- Dijo Yulia algo desconcertada

-Un beso en la mejilla?... no lo creo.- entonces tom a la pelinegra de la cabeza y le dio un tremendo beso.

-Jejeje OK.- dijo Yulia la terminar, arreglndose el cabello ya que se le haba alborotado un poco

-Adis chiquita, repasas de nuevo la leccin-

-Lo que t digas...- dijo Yulia y vio a Lena irse, se qued en el parque sola, entonces se dirigi a una tienda...

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AL DA SIGUIENTE...

Por fin lo que tanto haban ensayado era hora de darlo a presentar frente al grupo:

-Lena.- pronunci Yulia en voz baja

-Si?-

-Estoy muy nerviosa-

-Jajajajajajajaja, eso ni tu te la crees Yulia Volkova? Nerviosa?, vamos mi amor es solo una estpida exposicin.- entonces tom a Yulia de los hombros y le hizo el saludo del esquimal (frotando su nariz con la suya)

* Entonces entr la maestra y las chicas se separaron.

-Me da gusto de que ya estn listas muchachas.- pronunci la maestra al ver el material en el pizarrn. -Bueno pueden empezar

* La presentacin se llev a cabo, todo result bien ya que cada una dijo su parte perfectamente:

-Bueno y as concluimos que los magnetismos dentro del agua pueden resultar benficos para la vida del mar.- dijo por ultimo Lena y todos los alumnos aplaudieron, entonces dieron el timbre de salida

-Lo hicieron muy bien chicas, tienen un punto extra en su carnet.- dijo la maestra y sali del aula.

Yulia abraz a Lena por tanta felicidad que senta, jams le haban dado un punto extra y nunca se lo hubiera imaginado, los alumnos que estaban sentados volvieron a causar revuelo como siempre lo hacan cada cambio de clase

-Estuviste estupenda mi amor.- dijo Lena. -Felicidades-

-No lo hubiera hecho sin ti, pero ahora tengo que hacer algo ms-

Lena no comprendi pero dej que la pelinegra actuara: Yulia levant sus brazos movindolos frente al saln y todos voltearon a verla como era de costumbre, se hizo silencio y Yulia se precis la garganta:

-Ejjeem, bueno gracias por su atencin, ahora frente a todos ustedes, quiero decir algo.- dijo Yulia y de su bolsillo de la playera sac una caja, entonces se inclin frente a Lena quien estaba sonriendo demasiado nerviosa, Yulia abri la cajita y dijo:

-Lena... Quieres ser mi novia?-

Todos hicieron un sonido de admiracin e incluso unos pronunciaban Qu fue lo que dijo?!. Lena qued paralizada, saba que Yulia estaba loca pero esto era la peor locura que la haba visto realizar, su color se torn tan rojo como su cabello y no dejaba de mirar a Yulia y a la cajita en donde se encontraba un precioso anillo, con mucho esfuerzo dijo:

-Si Yulia, quiero ser tu novia.- al decir esto sus nervios bajaron junto con su color.

Nadie habl, la pelinegra se levant del piso y sac el anillo para ponerlo en el dedo de Lena, cuando hubo terminado la mir y se abraz a su cuello, an el saln se encontraba en completo silencio, Yulia lentamente cerr los ojos y le dio un tierno beso, al ver eso, la mayora de los alumnos las llenaron de silbidos y aplausos y algunos otros deca: Que asco!! Por qu hicieron eso? Martha inmediatamente sali del aula, pero las chicas seguan dando espectculo, Lena se separ y se quit los cabellos de la cara con una sonrisa interminable al igual que la de Yulia:

-Esta era la sorpresa??- pregunt Lena

-Si, es esta.- entonces Lena volvi a besarla pero esta vez si se le arroj duro y la encerr entre el pizarrn y sus brazos, pareciera que Yulia se la coma la pared pues la tena completamente asfixiada con aquel beso que los alumnos no dejaban de celebrar, entonces se abri la puerta:

-Qu tipo de exhibicin es este seoritas?!!!- dijo la directora muy molesta acompaada de Martha.

Lena se quit rpidamente de su posicin y su cara estaba a explotar de vergenza, pero Yulia estaba con una sonrisa que si su cara fuera ms grande probablemente saldra de ella, eso sin contar que se encontraba trabajando en tratar de calmar su respiracin

-Eso... eso fue...- trataba de decir Yulia pero era prcticamente imposible calmar sus exhalaciones y hablar con tremenda sonrisa en su cara, trag saliva y dijo: -Eso fue un beso direc no los conoca??.- brome Yulia como siempre

-Pero!!!... Que!... que manera de besar!... y sobre todo si son ... No puedo creerlo!!- deca la directora completamente espantada y Lena an ms por tanta franqueza dentro de la pelinegra

-Qu le pasa?? Acaso nunca haba visto como se besan las personas?-

-Claro que s Volkova, pero no en dos mujeres y con tanta confianza frente a tanta gente, Eso es un acto de inmoralidad!!- dijo seriamente preocupada la directora y Lena estaba a punto de explotar en llanto pero Yulia pudo prevenirlo al abrazarla y mostrarle una sonrisa, la pelirroja al ver tanta seguridad en su chica no se preocup.

-Tienen que acompaarme a la direccin seoritas-

-Claro, claro.- dijo Yulia y tomo a Lena de la mano.

-VAMONOS MI AMOR.- dijo remarcando fuertemente Yulia para que todos incluyendo a la chismosa de Martha quien ahora estaba que reventaba en rabia, alcanzaran a escuchar, mientras salan el grupo entero haca coro Vivan las novias, vivan las novias, vivan las novias!!

La directora iba caminando delante de las chicas, y Yulia iba abrazando a Lena quien por su cara saba que tena ganas de morirse, entonces la pelinegra le susurr al odo: Todo va a salir bien, solo sgueme la corriente y haz todo lo que yo te diga Lena hizo sea de afirmacin y como iba recostada en su hombro Yulia volte su cara hacia un lado y le dio un beso entonces la directora volte al escuchar ese ruido caracterstico que hacen las bocas cuando estn en contacto con otra:

-Por favor, y esto si se los suplico, eviten hacer eso delante de m.- dijo la directora muy indignada

-De acuerdo.- dijo Yulia y abraz a Lena para que la directora lo percibiera.

Entraron a la direccin y la directora pidi que se sentaran, Lena se sent en una silla y Yulia quien tena el propsito de causar escndalo en la directora se sent encima de las piernas de Lena, la pelirroja not su objetivo y la abraz de la cintura.

-Sera mejor que te sentaras en la otra silla Volkova.- dijo la seora un poco incomodada

-No se preocupe, aqu esta bien, no pesa tanto.- dijo por fin Lena, quien no haba hablado desde que haba visto a la directora

-Ay... como sea... como sea.- dijo la profesora resignada mientras les daba la espalda para tomar el telfono, lo que puso a Lena muy nerviosa pero Yulia la tom de la barbilla y sonrindole le dio un pequeo beso, la directora lo not pero esta vez no hizo nada:

-Su nmero de telfono Volkova

-24-38-97-033.- contest Yulia mientras la directora tecleaba el nmero, Lena nicamente vea en silencio sin separar las manos de la cintura de Yulia

-Hola... Seora Larissa?... si mire, soy la directora de la escuela de su hija... desgraciadamente si hizo, y mucho muy malo... si de acuerdo.- la directora pas el telfono a Yulia. -Quiere hablar con usted.- Yulia sonri

-Hola? Mam... si... es cdigo verde 64 de acuerdo... adis.- dio el telfono a la directora quien la mir con cara de interrogacin

-Bueno seora... si no se preocupe... de acuerdo la espero aqu en 20 minutos.- colg el telfono.- Su numero de telfono Katina.-

-Es el...

-Es el 24-76-49-033.- la interrumpi Yulia a lo que Lena se le qued viendo pero reaccion rpidamente

-Si ese es.- dijo Lena sin tartamudear, entonces la directora lo tecle y volvi a dar la espalda

-Oye ese no es mi numero...- susurr Lena a Yulia

-Cdigo verde 64.- contest Yulia entonces Lena comprendi que ese era su plan y que seguramente su madre la haba ayudado

-Eres toda una experta en esto.- dijo Lena sonriendo

-Jaja si no fuera por eso, yo ya no estara en esta escuela.- ri al par de Lena en voz baja ya que la directora se encontraba hablando: Muy bien seora Inessa la espero aqu en 20 minutos y colg el telfono

-Muy bien chicas, ya no tardan en llegar sus madres.- las chicas se pusieron cabizbajas que result como la mejor actuacin de su vida

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20 minutos despus lleg la madre de Yulia: Larissa a quien la directora reconoci perfectamente ya que no era raro que la madre de Yulia estuviera all cada que le hacan un llamado respecto a su hija, Yulia recibi a su madre y se sent en la silla, volte a un lado y vio a la joven pelirroja e inmediatamente se dio cuenta de quien se trataba por lo que la nuera y la suegra se sonrieron, minutos ms tarde lleg una seora que nicamente conocan Yulia y su madre, la pelinegra le hizo un ademn a Lena para que actuara como si ella fuera su madre entonces la pelirroja se levant y abraz a la persona desconocida:

-Hola mami.- dijo Lena abrazando a la supuesta Inessa y como la directora nunca haba visto a la madre de Lena ya que nunca hubo necesidad hasta ese da, la recibi sin sospechar nada.

-Hola hijita.- dijo la seora

-Bueno ya estamos todas reunidas, llevemos a cabo la pltica por la cual se ha hecho esta reunin, tomen asiento por favor.- dijo la directora

-Y ahora que hizo mi hija, profesora?- pregunt Larissa

-Bueno, esto es algo muy grave.- dijo la directora agachando la cabeza. -Su hija bes a esta chica delante de todo el grupo.-

* Ambas seoras quedaron en silencio incluso la supuesta madre de Lena.

-Ah... y que ms?- pregunt Inessa

-Bueno pues... yo... yo cre.- trat de decir con cara de incomprensin la directora al ver que no haba causado nada de escndalo en ambas madres.

Yulia volte a ver a Lena, quien haca un gran esfuerzo por no soltar una carcajada al ver la cara de la directora.

-Disclpeme profesora, no es por nada pero... tengo cosas ms importantes que hacer que venir a que usted me diga que mi hija ha besado a alguien.- dijo Larissa.

-Pero es que no se trata de cualquier alguien!! Es una mujer su compaera!!- dijo exaltada la pobre directora que estaba siendo victima de las cuatro mujeres que estaban frente a ella.

-No, no, no, no, se equivoca.- dijo Yulia deteniendo la mmica de su directora. -Esta mi mujer, es mi novia, no mi compaera.- abrazando a Lena quien estaba sonriendo

-MADRE MIA!!- dijo la profesora levantndose de su lugar y hacindose aire con la mano. -Quiere decir que ustedes estn de acuerdo en que sus hijas sean homosexuales??-

-Bueno, quiz homosexual es una palabra muy fuerte, yo solo quiero que mi hija sea feliz con quien ella quiera, respetando su libertad.- dijo Inessa

-Si, yo estoy totalmente de acuerdo con mi consuegra.- dijo Larissa con sentido del humor casi igual a su hija Yulia

-Seoras, disclpenme de verdad, no tena nada enterado al respecto, y si ustedes lo quieren as, no se puede hacer nada en contra de su ley, bueno creo que ya pueden retirarse, y de verdad dispnseme.- dijo la directora muy apenada por todo el teatrito que haba hecho y sus madres lo tenan enterado todo.

-Ah no se preocupe, somos humanos cualquiera puede equivocarse.- dijo sonriente Larissa. -espero volverla a ver pronto-

-No se preocupe, lo har y seguramente muy pronto.- dijo la directora saludando a Larissa y viendo a Yulia dando a entender que de verdad se veran muy pronto, tambin dio la mano a la supuesta madre de Lena y as salieron las cuatro mujeres de la direccin...

-Gracias por su ayuda Zulema, sin ella no podramos haber hecho esto.- agradeci Yulia a la seora abrazando a Lena.

-No hay porque chiquilla, ya sabes, cualquier cosa que se te ofrezca all estar yo en primera fila-

-Gracias seora, muchas gracias, seguro y me mora si no hubiera hecho esto.- agradeci Lena.

-Bueno ya nos tenemos que ir chicas, Lena, fue un gusto conocerte eres muy bonita te agradezco que aguantes a mi hija.- dijo Larissa a lo que Yulia puso una mala cara

-Jajaja no se preocupe, le aseguro que no es ningn martirio estar con su hija.- respondi Lena juntando su cabeza con la de Yulia

-Eh, eh, eh? ya ves? Ella no tiene porque aguantarme a mi madre.- dijo Yulia

-Que bueno Yulia, que bueno... ya nos vamos adis... Ah!! Y cualquier cosa, Lena: mi casa es tu casa y nunca dudes en ir a visitar a Yulia, solo hija avsame cuando vaya Lena y nunca estar all para molestarlas.- dijo la madre de Yulia tratando de fastidiarla

-MAAAMAAAAAAA!!!!- dijo Yulia avergonzada

-Jajaja, nos vemos luego.-dijo la seora retirndose

-Adis mam, adis no te detengas.- gritaba Yulia algo molesta por el comentario que haba hecho su mam

-Ya Yul, tranquila de cualquier forma... es cierto, cuando vaya a tu casa avsale...

-No te preocupes lo har.- entonces la bes ya que su madre y su amiga se haban ido

-Uy se me olvidaba.- dijo Lena separndose de Yulia.

-Tu sorpresa mi amor.- sac una bolsita de su calcetn y la comenz a desenvolver.

-Wow, la traas muy bien guardada no es as?

-Jeje es para que no se pierda.- sac una cadenita de la bolsa y se acerc a Yulia rodeando su cuello y poniendo la cadena, Yulia mir con mucha ternura su obsequio y abraz a Lena.

-Esto es... por haberme aprendido la leccin?

-No tontita, es porque te amo, oye hablando de eso... qu no ramos novias? O sea: estuve en una cama contigo y no ramos nada?

-No claro que no, solo quera que los dems se dieran cuenta, fue todo.- dijo la pelinegra poniendo cara de puchero.

-Ay chiquita no pongas esa cara, tu sabes... las hormonas puedo hacer algo que...

-Mmmmm...- Yulia puso cara de maliciosa. -Quieres decir que no puedo hacer esto?- jal a Lena de la corbata, sac la lengua y lami desde su barbilla, su boca hasta arriba de la nariz de Lena, se alej y dijo: -Grrrrrr...- ronrone como tigre.

-Atcame fiera

-T lo pediste Volkova.-

Lena corri hacia ella y puso una mano debajo de sus rodillas, la otra en su espalda y la carg en peso, fue hacia los baos con Yulia en brazos, lleg y con el pie cerr la puerta y Yulia se estir para ponerle seguro. Lena baj a su pelinegra, la abri de brazos hostigndola contra la pared y la comenz a besar desesperadamente sin soltarle las manos, se separ un poco y le sonri entonces la atrajo fuertemente hacia ella tomndola de la cintura:

-Ahora te voy a ensear algo muy importante.- dijo Lena mientras meta sus manos debajo de la falda de Yulia. -estas dos preciosuras son mas.- dijo sujetando las posaderas de Yulia

-Aaahhh... estamos hablando de propiedades, bien pues...- le desaboton la camisa y puso sus manos en los pechos de Lena. -Estos dos son mos.

-Bueno, pero esta boca es ma.- dijo Lena trazando los labios de Yulia con un dedo y abrazndola de la cintura

-Eres egosta.- dijo Yulia sonriente. -tienes dos bocas y yo no tengo ninguna...

-Mmmmm... es cierto, pero puedo compartirte la ma si no te molesta.- acerc su cabeza a la de Yulia mirando sus labios.

-Nunca rechazara esa oferta.- se abraz al cuello de Lena y la bes lentamente, Lena la volvi a cargar en peso sin dejar de besarla y la sent encima del tanque del bao:

-Y ahora que me va a hacer la seorita secuestradora?

-Emmmm.- pens por un momento. -Voy a besarte

-No lo har si no lo pides por favor.- advirti tiernamente Yulia con los brazos cruzados movindolos de un lado a otro y con una mirada muy sexy.

-Lo siento, pero las secuestradoras profesionales como yo no piden favores a sus victimas.

-Y no podras hacer una excepcin?- Yulia puso cara de puchero.

-Esta bien.- Lena se mont en el tanque encima de las piernas de Yulia y qued abierta con su chica en medio. -por favor...- pronunci Lena antes de comenzar a comrsela a besos.

Yulia pein con sus manos los rizos de la pelirroja dando masajes en su cabeza, mientras Lena la abrazaba, Yulia fue a su cuello mientras Lena se estiraba hacia atrs con los ojos cerrados y la boca entreabierta sintiendo los delicados labios de Yulia alrededor de su cuello, volvi a erguirse y al abrir los ojos le sonri a Yulia quien pos sus ojos celestes en Lena mientras le acariciaba el cabello:

-Tenemos que regresar a clases.- dijo Yulia sonriente

-No quiero ir a clases, solo quiero estar contigo

-Qu pas con tu espritu escolar?

-No lo s, lo nico que se, es que tu no sales viva de este bao.- se levant de la piernas de Yulia y se recorri hacia atrs dejando a Yulia libre.

-Levntate.- dijo Lena tomando a Yulia de las manos evitando que se cayera, la pelinegra qued encima del tanque del bao:

-Jajajaja Qu me vas a hacer?- ri Yulia

-No te vayas a resbalar.- dijo Lena mientras se montaba de nuevo en el tanque del bao con mucho cuidado sin soltar a Yulia de las manos.

* Qued sentada abierta de piernas con los pies de Yulia en medio, volte hacia arriba y vio debajo de la falda de su chica.

-Qu? Te gusta el panorama?- sonri Yulia al asomar su cabeza y ver a la pelirroja muy entretenida viendo debajo de su falda.

-Me encanta como para una postal.- correspondi la sonrisa de Yulia, entonces subi lentamente las manos por las piernas de Yulia:

-Jajajajaja me haces cosquillas Lena

-No te muevas, te puedes caer.- dijo Lena seriamente sin dejar de subir sus manos, lleg al resorte de su ropa interior y la jal suavemente hacia abajo para despojar a Yulia de ella, la pelinegra se encontraba riendo por las acciones de Lena quien en este momento haba quitado por completo la ropa interior a Yulia, volvi a ver debajo de la falda de Yulia y esta vez sonri:

-Lo s, lo s es lgico que te gusta ms as.- dijo Yulia al ver la sonrisa de la pelirroja

-Ahora sintate.- orden Lena jalando a Yulia de las manos hacia abajo, la pelinegra se sent y esta vez ella qued arriba de Lena.

* Yulia vio a su novia con una ternura interminable y delicadamente le quit la camisa:

-Estas lista?- pregunt Lena sonriendo, Yulia suspir y dijo:

-Estoy lista

Lena se recogi el cabello hacia un lado y lentamente se acerc a Yulia y la comenz a besar, una de sus manos se filtr debajo de la falda de Yulia, quien estaba encima de las piernas de Lena envolvindose a su cuello, la pelirroja puso dos dedos dentro de Yulia y empez a frotar, en cuanto hubo sentido esto, la pelinegra solt una fuerte exhalacin junto con un pequeo gemido lo que caus que Lena comenzara a frotar mas fuerte y a besarla tambin, Yulia se solt de los labios de Lena para abrazarla fuertemente y disfrutar aquella deleitable sensacin, se mova mientras suspiraba muy seguidamente y se acost en el hombro de Lena, sinti su espalda entonces le quit el sostn pero casi no poda moverse al sentir como se movan rpidamente los dedos de la pelirroja, como pudo irgui la cabeza y bes a Lena, despus bes su cuello y al ltimo sus pechos...

Momentos despus... La pelirroja se esforzaba por seguir rozando rpidamente pero sus fuerzas se estaban agotando, para su alivio la pelinegra se dej caer encima de Lena dando un fuerte gemido y desplomando sus manos dbilmente en sus hombros, la pelirroja sonri y se dio cuenta que su labor haba terminado, sac la mano debajo de Yulia y la abrazo dndole un pequeo beso en el cuello para despus acariciar su cabello, mientras Yulia aquietaba su respiracin:

-Cada vez eres ms difcil de complacer.- le susurr Lena al odo de la pelinegra, Yulia sonri y la mir a los ojos.

-Y tu cada vez eres ms resistente.- dijo Yulia quitndole algunas gotas de sudor de su frente y despus le dio un pequeo beso.

Yulia se levant encima del tanque para que Lena se bajara de l despus recogieron su ropa y se vistieron:

-Tu sal primero.- dijo Lena.- as no sospecharan nada

-Jajajaja.- ri Yulia. -Casi dos horas aqu metidas... T crees que no sospechan nada?

-Tienes razn.- se resign Lena. -Bueno salgamos, de todos modos no creo que haya alguien...

* Salieron y cual fue su sorpresa al encontrar a la mayora de sus compaeros de aula esperndolas en la entrada del bao...

-Perdn, perdn... Qu dijiste?- le pregunt Yulia a Lena quien tena los ojos desorbitados al ver el gran conjunto de gente que haba, todos gritando, silbando, dando porras...

-Salgamos de aqu.- dijo muy despacio Lena caminando hacia atrs al ver que los alumnos se les echaban encima.

-CORRE!!!- grit Lena jalando bruscamente a Yulia de la mano y corriendo en sentido contrario de sus compaeros.

Ambas iban riendo, y los alumnos iban detrs de ellas como una manada de leones tras una gacela, dieron 3 vueltas al plantel entero pero entonces Yulia se detuvo:

-YA FUE SUFICIENTE!!- grit la pelinegra poniendo la mano en alto. -Qu creen que somos? Delincuentes?!- todos empezaron a hablar al mismo tiempo hasta llegar a gritar. -CLLENSE!!- ordenaba Yulia, pero absolutamente nadie les hizo caso al contrario, comenzaron a gritar ms. -Qu demonios es lo que quieren?!!! ESTO?!!-

Volte a Lena toscamente del brazo y le dio un tremendo beso, se callaron por 2 segundos pero despus volvieron a gritar an ms que hace unos instantes, Lena se agach un poco y puso las manos debajo de las posaderas de Yulia y la levant, mientras sta se abrazaba a su tronco con las piernas sin dejar de besarse, todos comenzaron a gritar ms fuerte y a silbar, Lena baj a Yulia:

-Contentos???- pregunt Yulia

-SIII!!!!- gritaron todos al unsono

-Son unos maniacos!!!- grit Lena riendo

-SIII!!!- volvieron a responder los alumnos

-Bueno ya djennos ir, lrguense de aqu.- dijo Yulia y todos comenzaron a retirarse.

Quedaron solas y en ese momento escucharon el sonido de la campana... era la hora de salida, lo mejor de todo: era viernes.

-No puedo creerlo.- se lament Yulia. -Todo el da fuera de clases.- volte a ver a Lena quien no puso absolutamente nada de preocupacin en eso.

-Lo s, pero...- se acerc a Yulia. -Vali la pena no?

-Si... bueno vayamos por nuestras mochilas

* Se dirigieron al aula y despus salieron de la escuela

-Quieres un helado?- pregunt Yulia a Lena

-Si, me encantara y ms si lo tomo contigo.

-De acuerdo vamos.- tom a Lena de la mano

Llegaron pidieron sus helados y se dirigieron a las bancas que se encontraban en el centro del parque donde casi siempre estaba solo, pero la suerte no estaba de su lado y justo por ah pasaba Inessa, al ver a su hija con Yulia se detuvo un momento tras un arbusto...

-Gracias por todo lo que haces por mi Lena.- dijo Yulia tomando su nieve

-No...- le dio un beso. -Gracias a ti...

* Se miraron y despus se volvieron a besar apasionadamente al separarse Yulia expres:

-Quieres un poco ms de mermelada?-

-No te molestes Yulia yo...

-Ahora regreso.- dijo la terca pelinegra levantndose de su lugar y yendo hacia la nevera.

* Inessa despus de haber visto semejante show sinti como la invada la rabia e inmediatamente fue hacia Lena:

-Mama?? Qu haces aqq...? OUHC!!.- grit Lena al sentir como fuertemente la jalaba de la oreja al levantarla y provocando que su nieve se le cayera...

* Momento despus lleg Yulia con la mermelada en la mano buscando con una risa a Lena

-No te escondas Lena.- dijo la pequea Volkova pensando que quizs la pelirroja estuviera jugando, despus de no hallar nada se dirigi al lugar de donde haban estado sentadas y vio algo que no haba notado: el helado de Lena...

Yulia regres totalmente triste a su casa a dnde habr ido? Y si se fue por qu no se despidi?, algo no anda bien y si se la llev alguien? Algn maleante? Dios no puede ser que le haya pasado algo!! pensaba la pelinegra pero al pensar en esto ltimo hizo que comenzara a correr hacia su casa: entr, fue hacia su habitacin, descolg el telfono y marc a la casa de Lena, contest un hombre:

-Buenas tardes, residencia de los Katina Seergevna

-Residencia???

-Emm si buenas tardes yo...-

* En ese momento se escuch como el hombre que haba descolgado estallaba en carcajadas, a Yulia no le pareci gracioso que se riera mientras ella estaba hablando:

-Le sucede algo en que yo le pueda ayudar??- pregunt por el auricular la pequea Yulia algo molesta

-No disculpa.- dijo el seor tratando de calmar su risa. -Perdona pero es que aqu no es residencia, fue solo una broma... veo que de mal gusto para usted

-No, no como cree.- contest Yulia empezando a rer. -Perdone cre que me haba equivocado de numero, estoy buscando a Lena Se encuentra ella?

-Oh claro que si, yo soy su padre Sergey Cul es tu nombre?

-Yulia Volkova.- respondi la pelinegra comenzando a sentir algo fraternal por aquel hombre con tan buen sentido del humor Mi suegro pens Yulia.

-Si me permites Yulia voy a llamarle

-De acuerdo, lo espero

* Despus de unos gritos y confusiones de que cual telfono estaba descolgado y cual no, pudo contactar con Lena.

-Hola?- respondi la pelirroja con la voz quebrada

-Chiquita... Te oyes mal que te pas? Por qu te fuiste sin avisarme?

* Solamente se escuchaba como sollozaba Lena del otro lado de la lnea sin poder contestar

-Mi amor estas bien?

-Yulia necesito hablar contigo, pero no aqu no puedo porque...-

* En ese momento se escucharon los gritos de una mujer y la llamada se cort.

-Lena? Ests ah?- pregunt Yulia a la lnea muerta, colg el telfono y se dej caer en su cama sumamente preocupada pens en hablarle de nuevo pero consider prudente que no, los gritos de la mujer no podan ser ms los de su madre y eso preocup en gran parte a la pelinegra, se qued pensando hasta quedarse dormida...

-NO PUEDES HACERME ESTO MADRE!!- dijo Lena despus de que su madre le haba colgado el telfono.

La madre no respondi simplemente dej salir toda su rabia y le dio una tremenda bofetada a Lena haciendo que diera un grito y cayera en el suelo con la cara completamente volteada que ahora se encontraba cubierta por sus rojos cabellos, hubo silencio despus de tan estruendoso golpe, nicamente se escuchaban los jadeos de enojo que haca Inessa, Lena volte su cara con su mano en la mejilla, entonces la madre se dio cuenta de que tambin le haba golpeado parte de su ojo que se encontraba en gran parte rojo y haba comenzado a inflamrsele, dos lagrimas recorrieron la cara de Lena hasta llegar a su barbilla, en ese instante lleg Sergey.

-Qu pasa aqu? Se escuch un ruido tormentoso.- dijo el padre asustado.

-Pap!!- grit Lena levantndose y estallando en llanto.

* El padre abraz a la pelirroja y le levant la cara, entonces vio su enrojecido e inflamado ojo.

-Qu le hiciste Inessa?- Pregunt Sergey comenzando a molestarse al ver tan lastimada a su hija, abraz a la pelirroja quien no dejaba de llorar.

-La encontr besndose con otra chica.- dijo Inessa simplemente quien tambin haba comenzado a llorar.

* Sergey sinti que el mundo se le vena abajo, sin embargo no perdi la cabeza y despegando un poco los aferrados brazos de su hija la mir y le dijo:

-Hija... Eso es cierto?

-Si pap.- contest calmadamente Lena

-Ven...- le dijo y la dirigi a sentarse al silln, su madre iba detrs pero Sergey con una sea le indic que se retirara, la madre no muy convencida sali de la habitacin.

-Hija...- comenz a decir el padre mirndola a los ojos. -Se que dirs que no es cierto pero, la verdad creo que ests confundiendo las cosas...

-No padre, no las estoy conf...

-Sssshhhhh...- la int