ANÁLISIS DE FACTORES (Capítulo 2) Elaboración de … · La Parte 1 ofrece una guía sobre la...

14
Elaboración de una estrategia para implicar a las personas afectadas por las crisis en la respuesta humanitaria PRIMERA PARTE La participación es como un caleidoscopio: cambia de color y forma según quién lo utilice. Philip White, 1994. La Parte 1 ofrece una guía sobre la elaboración de una estrategia para la participación: Los conceptos básicos: Qué es la participación y sus beneficios (capítulo 1). Los factores que influirán en la forma en que participan las personas (capítulo 2). Establecer respeto mutuo (capítulo 3). Desarrollar y utilizar diferentes técnicas de comunicación, tanto informales como formales (capítulo 4). Hacer que las asociaciones funcionen (capítulo 5). Al final de la Parte 1 se invita al lector a revisar su estrategia para la participación (capítulo 6). MÉTODO Y HERRAMIENTAS PARTICIPATIVOS (Capítulos 3, 4, 5 y 11) PARTICIPACIÓN A LO LARGO DEL CICLO DE PROYECTO (Capítulos 7 hasta 10) CONTEXTO ¿QUÉ? ¿POR QUÉ? ¿QUIÉN? ¿CÓMO? DEFINICIÓN DE ESTRATEGIA DE PARTICIPACIÓN (Capítulo 1) ¿QUIEN ha participado? ¿CÓMO han participado las poblaciones afectadas? ¿Han sido estratégicamente cumplidos LOS OBJETIVOS de participación? EVALUACIÓN DE ESTRATEGIA DE PARTICIPACIÓN (Capítulo 6) ORGANIZACIÓN DE AYUDA POBLACIÓN AFECTADA IMPLEMENTACIÓN DE ESTRATEGIA DE PARTICIPACIÓN ANÁLISIS DE FACTORES (Capítulo 2)

Transcript of ANÁLISIS DE FACTORES (Capítulo 2) Elaboración de … · La Parte 1 ofrece una guía sobre la...

Elaboración de una

estrategia para implicar a las personas afectadas por las crisis

en la respuesta humanitaria

P R I M E R A P A R T E

La participación es como un caleidoscopio: cambia de color y forma según quién lo utilice.

Philip White, 1994.

La Parte 1 ofrece una guía sobre la elaboración de una estrategia para la participación:

• Los conceptos básicos: Qué es la participación y sus beneficios (capítulo 1).• Los factores que influirán en la forma en que participan las personas (capítulo 2). • Establecer respeto mutuo (capítulo 3).• Desarrollar y utilizar diferentes técnicas de comunicación, tanto informales como formales (capítulo 4).• Hacer que las asociaciones funcionen (capítulo 5).

Al final de la Parte 1 se invita al lector a revisar su estrategia para la participación (capítulo 6).

MÉTODO Y HERRAMIENTAS PARTICIPATIVOS

(Capítulos 3, 4, 5 y 11)

PARTICIPACIÓN A LO LARGO DEL CICLO DE PROYECTO (Capítulos 7 hasta 10)

CONTEXTO

¿QUÉ?

¿POR QUÉ?

¿QUIÉN?

¿CÓMO?

DEFINICIÓN DE ESTRATEGIA

DE PARTICIPACIÓN

(Capítulo 1)

¿QUIEN ha participado?

¿CÓMO han participado las poblaciones afectadas?

¿Han sido estratégicamente cumplidos LOS OBJETIVOS de participación?

EVALUACIÓN DE ESTRATEGIA

DE PARTICIPACIÓN(Capítulo 6)

ORGANIZACIÓN DE AYUDA

POBLACIÓN AFECTADA

IMPLEMENTACIÓN DE ESTRATEGIA DE PARTICIPACIÓN

ANÁLISIS DE FACTORES (Capítulo 2)

C a p í t u l o 1

El qué, el por qué, el quién y el cómo

de la participation

#1

Defin

icio

nes#1

Este manual analiza de qué manera las personas afectadas por las crisis pueden desempeñar un papel más importante en la acción humanitaria con el fin de opti-mizar su participación. Las situaciones

de ayuda humanitaria presentan dificultades particulares: la necesidad de respuestas rápidas; los riesgos de trabajar en situaciones inseguras y la posibilidad de manipulación en entornos altamente politizados. En estos contextos, a las personas les resulta a menudo difícil participar tan activa-mente como podrían hacerlo en otras situaciones, y es por esta razón por la que la definición de participación que aquí se utiliza es bastante amplia.

En este manual, por participación se entiende la implicación de las personas afectadas por las crisis en uno o más aspec-tos de un proyecto o programa de respuesta humanitaria: las valoraciones, el diseño, la implementación, el monitoreo o la evaluación. El grado de implicación variará en función de las circunstancias y siempre existirá un debate sobre lo que constituye participación “real” o “significativa”. No obstante, este manual adopta un enfoque muy pragmático cuando se habla de participación, animando al lector a implicar a las per-sonas afectadas por las crisis en las respuestas humanitarias en la mayor medida posible y a buscar constantemente nuevas oportunidades para aumentar el nivel de participación.

Es importante definir lo que no es participación: las activida-des que se realizan a cambio de un salario o pago “en especie” se consideran empleo en lugar de participación puesto que la población en sí no interviene en los procesos de toma de decisiones y es la organización humanitaria la que retiene el poder. Muchos proyectos implican a las personas en la ejecución de actividades operacionales a cambio de dinero, semillas, alimentos, etcétera (por ejemplo, dinero en efectivo

a cambio de programas de trabajo). Esto puede tener muchas ventajas: reducción de costos, aumento de los recursos dis-ponibles y promoción de la economía local. Sin embargo, esto no se considera “participación” a menos que la población en sí intervenga en los procesos de toma de decisiones y ejerza una influencia sobre las decisiones que le afectan.

Con el fin de garantizar que las personas afectadas por las crisis desempeñan un papel en la respuesta humanitaria, existen diversas herramientas para planificar y gestionar los programas humanitarios que los profesionales humanitarios pueden utilizar. En la Parte 2 se describen algunas de estas herramientas y en la Parte 4 se pueden encontrar referencias a recursos adicionales para la participación. Sin embargo, la participación es mucho más que un conjunto de herramien-tas. La participación es ante todo una actitud, un estado de ánimo, que considera a las personas afectadas por las cri-sis actores sociales con habilidades, energías, ideas y un conocimiento profundo de su propia situación. La respuesta humanitaria debería hacerse con las personas, en lugar de para las personas.

Las situaciones de crisis varían en función del tipo, la causa, la velocidad de inicio, la escala y el impacto. Estas situacio-nes de crisis tienen diferentes repercusiones dependiendo del contexto en que se producen, es decir, urbano o rural, país en vías de desarrollo o desarrollado, en tiempos de paz o durante conflicto, etc. Muchas situaciones son comple-jas y puede ocurrir que varias crisis afecten a las mismas poblaciones de manera simultánea o durante un período de tiempo, por ejemplo, un terremoto en un país donde existe un conflicto armado prolongado. En situaciones de emergencias prolongadas se puede llegar a prestar ayuda humanitaria en la misma región durante años, a veces durante décadas.

Así pues, la respuesta humanitaria se ha ampliado para incluir las intervenciones posteriores a la crisis y las actividades de prevención y mitigación tanto dentro de los sectores “tradicio-nales” (salud comunitaria, por ejemplo), como en los nuevos sectores (como programas de educación y psicosociales). Esto se ha traducido en un creciente énfasis en el vínculo entre ayuda y desarrollo y en la necesidad de aprovechar las capacidades locales para responder a crisis recurrentes.

I.1 ¿Qué es la participación?

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

24 25

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

Defin

icio

nes#1

ción Internacional de Responsabilidad Humanitaria [Humanitarian Accountability Partnership – International (HAP-I)], Syner-gie Qualité2, etc., destacan la importancia de la participación. Los compromisos y las aspiraciones de estas iniciativas y del Código de Conducta de la Cruz Roja, de la Media Luna Roja y de las ONG en materia de socorro en casos de Desastre, sólo se pueden conseguir si las organizaciones de acción humanitaria están dispuestas a escuchar y asumir los deseos e inquietudes de las personas afectadas por las crisis.

La participación tiene su propio valor inherente pero no es un objetivo en sí mismo; en las crisis humanitarias cumple un pro-pósito más amplio. Existen muchas posibles razones y causas para implicarse en procesos participativos con las poblaciones afectadas.

Objetivo n°1 Prolongar el impacto de la asistencia humanitariaLos proyectos de ayuda humanitaria aparecen y desapare-cen pero, a menudo, las personas tienen que enfrentarse a situaciones de crisis con el paso del tiempo, ya sea por-que se prolongan en el tiempo, porque son recurrentes o porque sus consecuencias perduran más allá de la crisis. Además, las organizaciones humanitarias internacionales, normalmente, funcionan separadamente de las institucio-nes y estructuras locales y, sin embargo, el fortalecimiento de la capacidad de estas organizaciones es crucial para prepararse para futuras crisis y para vincular ayuda y desarrollo.

La participación puede beneficiar en:

• Consolidar la capacidad de recuperación de la población mediante el apoyo a estrategias locales.

• Intensificar la capacidad local mediante la colaboración con los participantes locales.

• Reforzar la estructura social y así sentar las bases para futuros proyectos de desarrollo y acciones colectivas.

La participación proporciona la base para un diálogo con las personas afectadas por una crisis no sólo acerca de lo que se necesita sino también de cómo proporcionarlo de la mejor manera. Puede ayudar

a mejorar la efectividad de la respuesta humanitaria identifi-cando, por ejemplo, las necesidades prioritarias y garantizando

que se tienen en cuenta las capa-cidades locales. Puede reforzar la calidad de la asistencia mediante el fomento del intercambio de opiniones y reacciones entre las agencias de ayuda y las personas afectadas en todas las fases de la intervención.

Los métodos participativos tam-bién proporcionan una estructura para hacer frente a las recla-maciones en el caso de que las personas consideren que no se están satisfaciendo sus necesi-dades, se están satisfaciendo de manera incorrecta, o que se les está perjudicando al mismo tiempo que están recibiendo asistencia. La participación forma parte inte-gral de la responsabilidad asumida por una organización humanitaria hacia aquellas personas que se supone se van a beneficiar de sus operaciones.

Todas las iniciativas de calidad que existen para las organizaciones humanitarias, como el Proyecto Esfera, Quality Compas, la Asocia-

I.2 ¿Por qué poner en marcha un proceso

participativo?

I.3 ¿Cuáles son los objetivos de la participación?

Ejem

plos En Colombia, la participación se

considera tanto un deber como un derecho del ciudadano. La sociedad civil (como las organizaciones de base comunitaria, las organizaciones eclesiásticas y los comités desplazados internos) interviene de manera activa en la acción humanitaria, ya sea promoviendo y diseñando sus propias intervenciones o participando en las intervenciones de actores externos. Se sabe que algunas comunidades se han negado a aceptar asistencia de organizaciones internacionales de ayuda humanitaria en casos donde no se les había consultado.

Cuando los refugiados llegan por primera vez a los campamentos provisionales no se espera que participen en el suministro de ayuda, ya que el objetivo de las organizaciones de ayuda humanitaria en ese momento es tener los campamentos acondicionados con el fin de acoger a los refugiados que, a menudo, llegan traumatizados y exhaustos. Sin embargo, algunos refugiados que llegaron a Guinée Forestière propusieron ayudar a montar las tiendas de campaña. Tal y como explicaba un refugiado:

“Si alguien hace algo por ti, tú también tienes que hacer algo por ti mismo”

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

27262 Más informaciones: www.sphereproject.org, www.compasqualite.org, www.hapinternational.org, www.coordinationsud.org.

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

Defin

icio

nes#1

• Animar a las personas afectadas por las crisis a que participen de manera activa en los proyectos para su propio beneficio y de esta manera invitarles a que miren hacia el futuro y supe-ren sus traumas o sentimientos de impotencia.

• Empoderar a grupos e individuos marginalizados.

• Fomentar la sostenibilidad de proyectos mediante la legitima-ción de los mismos, por parte de actores locales y población.

Objetivo n°2 Hacer que el proyecto sea más relevanteLa participación de las personas afectadas por las crisis puede ser-vir para que las organizaciones de acción humanitaria entiendan mejor sus necesidades y prioridades y para que se eviten los prejuicios o las presunciones en los que sue-len incurrir las organizaciones e individuos externos. Además, la participación continua durante todo el proyecto supone la observación constante de reacciones sobre el proyecto y la realización de los ajustes necesarios para garantizar que el proyecto sigue siendo fiel a las necesidades reales de las per-sonas y que los métodos son los más apropiados para satisfacer dichas necesidades.

Las técnicas participativas pueden atraer a redes locales, aprovechar

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

28

y apoyar las capacidades locales, teniendo en cuenta la cultura local. Es esencial que los proyectos humanitarios eviten que se dupliquen o se debiliten las estrategias y capacidades a nivel local que sirven para hacer frente al impacto de una crisis.

Objetivo n°3 Evitar o reducir los impactos negativos de las respuestas humanitariasLos procesos participativos ofrecen oportunidades para que las personas afectadas por crisis planteen temas sobre pro-tección que puedan tratarse de manera colectiva, identificando y desarrollando “métodos para protegerse a sí mismas y hacer efectivos sus derechos de asistencia, reparación, recupera-ción, seguridad y compensación”3. La participación también sirve para establecer relaciones con las poblaciones afectadas quienes, a su vez, pueden garantizar el acceso a información importante sobre seguridad y mejorar la gestión de la seguri-dad para las organizaciones de acción humanitaria.

Normalmente, las personas afectadas por una crisis son las que mejor pueden hacer el análisis del impacto de una ope-ración de ayuda en su entorno. Su conocimiento del entorno ecológico, económico y sociocultural puede servirles para prever posibles impactos negativos que pueden pasar desa-percibidos para unos ojos extraños.

Objetivo n°4 Mejorar la efectividad del proyectoUno de los beneficios más evidentes de la participación es que puede servir para que un proyecto logre sus objetivos de forma más eficaz. La participación posibilita que un proyecto funcione con conocimientos, capacidades técnicas y recur-sos a nivel local para apoyar la ejecución y, en particular, para localizar y después gestionar mejor las restricciones características del contexto particular.

Asimismo, la implicación de las personas afectadas por las crisis puede servir para que las organizaciones de acción

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

29

Ejem

plos Las organizaciones implicadas en

un programa de reasentamiento en la Provincia de Huambo, Angola, llevaron a cabo extensas consultas con las personas que habían sido desplazadas. Estas organizaciones descubrieron que los criterios principales de las personas con respecto al reasentamiento incluían la posibilidad de vivir junto a miembros de su comunidad original en condiciones que se asemejaban a aquellas de sus aldeas natales y el acceso a la tierra de cultivo con el fin de producir alimentos. Estas personas estaban dispuestas a vivir en zonas que no eran del todo seguras con el fin de evitar vivir en los campamentos.

Las organizaciones de acción humanitaria ayudaron a estas personas desplazadas a negociar el acceso a las tierras de cultivo a fin de construir “aldeas provisionales”. Esta experiencia fue considerada un éxito si la comparamos con los campamentos más grandes ya que las “nuevas aldeas” no requerían una gestión externa, tenían menos problemas sociales y producían algunos alimentos propios.

C i ta

“El extraño ve lo que conoce” Proverbio africano

3 Slim, Hugo & Bonwick, Andrew; Protección: Una guía ALNAP para las agencias humanitarias, p. 53 (version anglaise).

Defin

icio

nes#1

humanitaria obtengan acceso a las comunidades. La delegación o participación en asociaciones con miembros de las poblaciones afectadas o estructuras asociadas puede ser una manera de obtener acceso a áreas o grupos que son inaccesibles para las organizacio-nes extranjeras. No obstante, la participación no significa enviar a los actores locales a zonas peli-grosas con el fin de proteger a los expatriados o al personal de una organización internacional.

Objetivo n°5 Ayudar a establecer una relación basada en el respeto y el entendimiento mutuosEl diálogo e intercambio de ideas son fundamentales en cualquier estrategia participativa para forta-

lecer la relación entre la organización de ayuda y la población. Para ello, es primordial que exista una buena comunicación, transparencia y que se tenga una actitud y comportamiento adecuados. Respetar las costumbres y las creencias tradi-cionales de una población es especialmente importante.

Objetivo n°6 Hacer que el proyecto responda efectivamente a necesidades cambiantesLa flexibilidad es esencial para asegurar que los proyectos se adaptan continuamente al contexto y a la población según las necesidades. Esto significa tener capacidad para revisar las prioridades a través del diálogo y estar abierto a todo tipo de comentarios y sugerencias a través de un seguimiento y una evaluación participativos.

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

30

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

31

Ejem

plos Cuando las autoridades guineanas

y el ACNUR se acercaron a la aldea de Lainé en Guinée Forestière para establecer un campamento para refugiados en la zona, se inició un proceso de consulta dentro de la aldea. Se delegó la toma de decisiones al consejo de la juventud ya que “ellos representan el futuro de la aldea”. Se firmó un acuerdo entre el ACNUR y el distrito de Lainé, en el que se establecieron las condiciones de los habitantes de la aldea. Antes de que llegaran los refugiados, los ancianos pidieron que se respetaran las tradiciones locales de modo que se hizo un sacrificio que las autoridades facilitaron. “Necesitábamos pedir a nuestros antepasados que nos protegieran, que mantuvieran el conflicto lejos de nuestra aldea, ya que íbamos a recibir a personas que estaban huyendo de la guerra.”

C i ta

“El campamento para refugiados de Lainé es un ejemplo de la rapidez con la que pueden cambiar las necesida-des y de cómo deben adaptarse los programas. Aquí, la primera oleada de refugiados llegó de comunida-des principalmente rurales y las prioridades de estos refugiados consistían en una educación básica, lec-tura y escritura. Cuando llegó una segunda oleada de refugiados al campamento, éstos tenían necesidades totalmente diferentes. Estos refugiados tenían ya cono-cimientos técnicos y sugirieron actividades tales como teñido anudado y elaboración de jabones, entre otras. ¡Algunos refugiados estaban acostumbrados a utilizar teléfonos y enviar correos electrónicos! A las muje-res de la ciudad les interesaba la moda y querían tener salones de peluquería y por lo tanto solicitaron un curso de formación en peluquería. La gente joven solicitaba clases de informática e ingeniería eléctrica. Cada curso de formación que ofrecemos responde a una petición de la comunidad, y por eso hemos tenido que cerrar algunos cursos y abrir otros.” Trabajador de ayuda humanitaria, Guinée Forestière.

Defin

icio

nes#1

Objetivo n°7 Aumentar los recursos disponibles para el proyectoMuchos proyectos (rehabilitación de la agricultura, recons-trucción de carreteras y de refugios, establecimiento y mantenimiento de campamentos para refugiados) requieren abundante mano de obra. Así pues, la contribución por parte de los miembros de la población de materiales, mano de obra, al igual que de conocimientos y experiencia profesional, es esen-cial para lograr que el proyecto tenga una mayor efectividad y cobertura. Aunque ya hemos establecido que el hecho de ofre-cer incentivos a cambio de trabajo (por ejemplo, el salario) no es de por sí “participación”, una vez que se utiliza un enfoque participativo, las personas afectadas por una crisis, a menudo, contribuirán con sus propios recursos y capacidades para com-plementar aquellos otros proporcionados por la agencia con el fin de lograr un objetivo pactado de mutuo acuerdo.

Una cosa es tener los recursos y conocimientos especializa-dos necesarios y otra muy distinta es tener la capacidad para gestionarlos adecuadamente. Compartir la responsabilidad de la gestión del proyecto con socios, comités u otras partes a nivel local puede ayudar a gestionar el proyecto, mejorar la transpa-rencia y desarrollar técnicas y conocimientos especializados.

Objetivo n°8 Mejorar la efectividad del proyectoLa efectividad y la rapidez son factores fundamentales de la cultura humanitaria, debido a las presiones asociadas con las situaciones de emergencia. A menudo, se mencionan estos términos como razones por las que la participación resulta imposible en situaciones de crisis. Sin embargo, se pueden uti-lizar también para mejorar la efectividad. Por ejemplo, se puede recabar información en un plazo corto de tiempo a través de métodos participativos de evaluación que, a menudo, propor-cionan una información más detallada y específica del contexto que otros estudios cuantitativos interminables. La calidad de la información recopilada a través de métodos participativos sirve para proponer proyectos específicos dentro del contexto y evitar soluciones que a la larga pueden resultar irrelevantes o impo-sibles de implementar. Las aportaciones de los actores locales y de los miembros de la población afectada pueden servir para reducir los costos del proyecto, mejorar la cobertura y hacer un uso más eficaz del tiempo.

Objetivo n°9 Ayudar a todas las personas a adquirir conocimientos prácticosLa participación es un intercambio: Una experiencia de aprendizaje para todas aquellas personas implicadas. En particular, las lecciones que aprendemos de las expe-riencias de otras personas, incluido lo que aprendemos de previos proyectos de ayuda, pueden servir para evitar que se repitan errores cometidos en el pasado. Un diálogo continuo durante todo el proyecto puede servir para aprender del proyecto, crear su memoria y evitar que se repitan en el futuro los errores cometidos en el pasado.

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

32

Aquellas personas que trabajan para organizaciones de acción humanitaria adquirirán nuevos conocimientos prácticos y obtendrán nuevas perspectivas sobre sus trabajos y las personas afectadas por las crisis tendrán la oportunidad de aprender acerca de cómo trabajan las organizaciones de acción humanitaria además de adquirir conocimientos prácticos muy concretos sobre la gestión e implementación del proyecto.

Objetivo n°10 Respetar los mandatos y principios de la organizaciónMuchas organizaciones consideran la participación uno de sus principios más importantes a la hora de estimar su tra-bajo en situaciones de crisis humanitarias, además de un requisito de los códigos de conducta o controles de la calidad de evaluación con los que se han comprometido. Además, la participación puede respaldar otros principios, tales como los principios humanitarios de independencia, neutralidad e imparcialidad. Las técnicas participativas pueden servir para identificar mejor las necesidades reales de diversos grupos de personas y, de ese modo, respaldar la imparcialidad de la organización. Si la participación se realiza con cuidado puede reducir el riesgo de que la ayuda se desvíe. Mantener buenas relaciones y contactos con un grupo variado de participantes locales puede servir para que éstos conozcan y entiendan mejor el contexto institucional y garantizar que comprenden los mandatos y principios y así reducir los riesgos que puede suponer para el proyecto el que los participantes tengan inte-reses divergentes.

Los objetivos potenciales de una estrategia para la participa-ción son numerosos. Puede que se quiera centrar en uno o más de los aspectos mencionados anteriormente o en todos ellos ya que se refuerzan mutuamente. Independientemente de lo que se decida, es importante que tanto el evaluador como el equipo tengan claros los motivos y objetivos a la hora de implicar a las personas afectadas por las crisis en las respuestas humanitarias.

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

33

Defin

icio

nes#1

La participación significa la implicación de las personas

afectadas por las crisis en uno o más aspectos del programa o proyecto de respuesta humanitaria. Sin embargo, no todas las personas afectadas por una crisis pueden participar. Todas las comunidades tienen estructuras y representantes; aún cuando una crisis humanitaria puede destruir o cambiar las estructuras previas a la crisis, rápidamente se establecerán nuevas estructuras y surgirán nuevos líderes. Las organiza-ciones de acción humanitaria tendrán que trabajar siempre con las estructuras existentes y gestionar las relaciones de poder dentro de las mismas. No obstante, si estas estructuras excluyen o marginan a determinadas personas, es necesario pensar más allá de las estructuras formales para garantizar que las personas más vulnerables puedan participar en la medida en que esto sea seguro y adecuado para ellas.

Al utilizar enfoques participativos es importante decidir quién participa: si las organizaciones de acción humanitaria sólo trabajan con líderes locales, algunos de los cuales pueden no ser necesariamente representantes legítimos de su circuns-cripción, existe el riesgo de que sencillamente no se llegue a las personas más marginalizadas y vulnerables, quienes, por la misma naturaleza de su marginalización, no se encuentran bien representadas por estos líderes.

Esto no significa que las organizaciones de acción humanitaria deberían, como rutina, evitar las estructuras locales, sino que se deberían buscar oportunidades para mejorar la capacidad de las estructuras locales al objeto de satisfacer las necesida-des de las personas más marginalizadas que a su vez son las personas que se ven más afectadas por situaciones de crisis y desastres.

A menudo, la utilización de enfoques participativos implicará la creación de un comité o grupo de proyecto y esto ofrece una oportunidad para atraer a una amplia gama de actores loca-les, incluidos aquellos individuos que no están normalmente representados en las estructuras locales como individuos de diferentes castas, clases sociales, grupos étnicos o raciales, per sonas discapacitadas, mujeres, ancianos, niños y jóvenes, etcétera.

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

34

La necesidad de lograr una participación amplia y repre-sentativa debe encontrar un equilibrio con la factibilidad de trabajar con un grupo amplio de personas, la necesidad de apoyar de forma continuada la participación de las perso-nas más marginalizadas y la necesidad de evitar un enfoque “tokenista”.

La colaboración con las personas afectadas puede suponer trabajar con una gran variedad de participantes. La partici-pación de las poblaciones afectadas puede ser tanto directa como indirecta.

I .4.1 Participación directa La participación directa significa que los miembros de la población afectada participan como individuos en las distintas fases de un programa de ayuda: por ejemplo, asistiendo a grupos de debate, suministrando mano de obra para la implementación del proyecto, votando o par-ticipando en la toma de decisiones, o proponiendo ideas para intervenciones. A menudo, será necesario ofrecer y facilitar oportunidades concretas para que las mujeres y los grupos socialmente marginalizados participen en los procesos de toma de decisiones y en la implementación del proyecto. Si las restricciones socioculturales prohíben que existan grupos de trabajo mixtos, o que las mujeres se expresen en las reuniones a las que asistan hombres, será necesario llegar a acuerdos especiales para garanti-zar que no sólo se escuchan las voces de los hombres.

I .4.2 Participación indirecta (o participación mediante representación) Las estructuras que representan a la población afectada o que se desarrollan dentro de la misma (como las organiza-ciones basadas en la comunidad y los comités de aldeas) participan en las intervenciones humanitarias de distin-tas maneras, por ejemplo, organizando foros de debate, encuestando a los habitantes de la aldea y seleccionando a los beneficiarios.

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

35

Defin

icio

nes#1

I.4 ¿Quién participa?

Con el fin de facilitar la participación de las poblaciones afectadas, ya sea directa o indirectamente, las organiza-ciones de ayuda humanitaria pueden colaborar en distintas asociaciones, entre ONG locales e internacionales, entre organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, entre organizaciones de desarrollo y de emergencia, etc. Las posibles combinaciones son numerosas. Sin embargo, para garantizar que dichas alianzas sean efectivas, es importante realizar un análisis de los participantes, prestando atención a la circunscripción, la afiliación y el modo de operación de las estructuras con las que se va a colaborar.

Con quién se colabora y cómo se hace dependerá de la situa-ción, teniendo en cuenta que los contextos humanitarios, a menudo, implican dinámicas políticas complejas, donde el riesgo de manipulación y desvío de la ayuda es alto, y donde la colaboración con determinados participantes (locales e internacionales) puede comprometer la imagen de impar-cialidad e independencia de un individuo u organización, así como la seguridad de la organización y de las personas a las que se pretende asistir. Por lo tanto, la identificación de quién es quién es un paso esencial en el análisis que dará forma al diseño y a la implementación de la estrategia para la partici-pación. El Capítulo 5 ofrece una orientación específica sobre asociaciones: Hacer que las Asociaciones Funcionen.

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

36

I.4.3 Trabajar con personas afectadas por las crisis Personas afectadas por las crisis son aquellas personas que han sido víctimas directas de un desastre natural o provocado por la acción de la actividad humana y aquellas otras que han sido víctimas indirectas, incluidas las poblaciones receptoras o “anfitrionas” de personas desplazadas. Las situaciones de crisis afectan de manera diferente a los distintos grupos e individuos en función de su género y de sus circunstancias socioeconómicas, medioambientales y culturales.

Trabajar con personas afectadas por las crisis puede signi-ficar que se tenga que interactuar con un grupo amplio de partes implicadas. El gráfico 2 muestra cómo los límites entre la “población afectada” y las “organizaciones de ayuda” no son inamovibles. Por ejemplo, el personal nacional representa la mayoría del personal de la agencia de ayuda humanitaria incluso en organizaciones internacionales de ayuda. Además, es probable que los miembros de las poblaciones afectadas pertenezcan a varios de los grupos identificados: que hayan sido afectados personalmente, y que pueden desempeñar un papel activo en organizaciones de base comunitaria o en Ins-tituciones Gubernamentales responsables de la entrega de ayuda.

I .4.4 Dinámica de PoderExisten muchas interpretaciones diferentes sobre el signifi-cado de participación, sin embargo, la dinámica de poder es un elemento fundamental en todas ellas. La mayor dificultad es llegar a las personas más marginalizadas, indefensas y pobres, y animarlas a que participen en las respuestas huma-nitarias.

La participación significa empoderar a algunas personas y, por lo tanto, siempre afectará a las relaciones de poder previas. Mientras que las relaciones de poder son, hasta cierto punto, inevitables y necesarias, la clave consiste en reconocer, entender y aceptar las mismas, y a continuación gestionar-las y moderarlas. Resulta fácil trabajar con una dinámica de

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

37

Pobl

acio

nes a

fectadas

Organizaciones internacionales de ayuda

Organizaciones Nacionales de ayuda

Comités locales

ONG

Instituciones

de gobierno

Individuos

y familias D

onan

tes

Orga

niza

cione

s

Inte

rnac

iona

les

Agencias

Multilatera

les

Organizaciones

de base comunitaria

(OBC)

No Guberna-mentales

Organizaciones

Internacionales

Gráfico 2 Tipología de actores

en procesos participativos

Defin

icio

nes#1

poder que beneficia y empodera a aquellas personas que son pobres, débiles y marginalizadas. Sin embargo, en la mayoría de los casos el simple hecho de que sean personas pobres y marginalizadas significa que la dinámica de poder no está trabajando a su favor y que, en algún momento, tendrá que ser cuestionada.

En situaciones de emergencia, los objetivos del proyecto raramente se centran en empoderar a la población afec-tada. Por definición, los programas de emergencia intentan dar respuesta a necesidades inmediatas de monitoreoa. En este contexto, la participación, normalmente, se limita a ser un medio para conseguir los objetivos de emergencia de un proyecto de una manera más eficaz y para proporcionar una mejor respuesta a las necesidades de las poblaciones afec-tadas, aunque esto signifique tratar con las estructuras de poder que crearon y perpetuaron la marginalización social en primer lugar.

La frase “participación del beneficiario” significa que la parti-cipación no es posible si no se han identificado previamente a los beneficiarios a los que va dirigida (normalmente utilizando un conjunto de criterios selectivos tales como “hogares pre-sididos por mujeres”, “niños menores de 5 años”, “hogares con una renta inferior a X por persona”, etc.). Sin embargo, la participación puede tener un impacto significativo al prin-cipio del proceso de evaluación e influir en esta “selección del beneficiario”.

La participación de una población afectada en los inicios de la fase de evaluación resulta esencial para garantizar la relevancia del proyecto. No obstante, el hecho de sólo consultar a los beneficiarios que ya han sido seleccionados puede ocasionar que un proyecto “deje fuera” a otros gru-pos afectados. A través de la participación de las personas afectadas en la definición de los criterios para la selección de beneficiarios, una organización puede mejorar sus meca-nismos de rendición de cuentas y transparencia, el respeto al conocimiento y las opiniones de las personas afectadas por la crisis. A su vez, esto ayudará a crear una relación más sólida que puede desarrollarse en etapas futuras de la respuesta humanitaria.

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

38

I.4.5 “Comunidades”Sabemos que las comunidades no son entes homogéneos ni armoniosos pero el uso del término comunidad, normalmente, denota una identidad o unos valores comunes. En realidad, las comunidades suelen dividirse en subgrupos siguiendo criterios económicos y de poder. La imagen que se tiene de ellas en su contexto local, o cómo se ven a sí mismas, se basa muchas veces en la historia que comparten, parte de la cual puede basarse en el sometimiento por parte de algunos grupos sobre otros. A menudo, los enfoques participativos se centran en la “participa-ción comunitaria”. Esto requiere que se entienda que:

• Identificar una comunidad específica para fines de participa-ción puede tener consecuencias políticas.

• Normalmente, un enfoque comunitario significa un enfoque colectivo y la participación no necesariamente significa tra-bajar con grupos.

• Un enfoque comunitario puede sugerir que los miembros de la comunidad tienen las mismas necesidades, metas y cultura, pero en situaciones de crisis, al igual que en condi-ciones normales, este puede que no sea necesariamente el caso.

• La existencia de una comunidad implica un mínimo nivel de estructura y de tejido social, y es lógico que para fomentar la participación se recurra a estas formas de organización social. Sin embargo, en situaciones de crisis, estas formas de organización pueden perderse, debilitarse, deformarse gravemente o sufrir cambios.

• Dentro de una comunidad, ciertas personas pueden identifi-carse como portavoces o representantes de dicha comunidad y afirmar que pueden hablar en nombre de la comunidad y representar sus intereses. A menudo, dichos representantes son hombres que pertenecen a una casta, clase, grupo étnico o lingüístico dominantes. Por consiguiente, puede que ten-gan un conocimiento limitado de las necesidades e intereses particulares de las personas más vulnerables o marginaliza-das, o de las habilidades y experiencias que estas personas pueden aportar a la implementación del proyecto.

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

39

Defin

icio

nes#1

• La participación sirve para entender los distintos programas de trabajo entre sectores de un grupo y para encontrar un consenso colectivo, aceptable para todos, sobre una res-puesta a los efectos de una crisis.

I .4.6 “Grupos minoritarios”Con frecuencia se utiliza este término para referirse a aquellas personas que tienen menos ”voz” en una sociedad, incluso a veces para referirse a indígenas, mujeres y niñas que pueden constituir de hecho una mayoría numérica. El punto principal es que las sociedades están compuestas por muchos y diferentes intereses y pueden “trocearse” de muchas maneras, tanto de acuerdo con las propias definicio-nes de las personas sobre sí mismas y sobre otras personas, como de acuerdo con categorías impuestas.

En el contexto de la participación y en su imple-mentación resulta esencial:

• Desagregar los datos según el género, la edad, el origen étnico, la casta, etc.

• Intentar garantizar que aquellas personas que están siendo consultadas o que están partici-pando en las acciones humanitarias no sean solamente las personas con liderazgo y de fácil accesibilidad.

• Encontrar maneras de descubrir y más tarde utilizar las clasificaciones que las propias per-sonas hacen de sí mismas.

• Tener apertura a todas las personas, no sólo a que ejercen liderazgo.

I .4.7 La importancia de las relaciones humanasLa participación trata, fundamentalmente, de esta-blecer una relación entre distintos individuos o

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

40

grupos como, por ejemplo, entre los actores humanitarios y una población afectada por una crisis. La participación establece el nivel de confianza que permite entendernos los unos a los otros y tener en cuenta las ideas, las necesi-dades y los planteamientos de la otra persona. Dentro de una población, la participación puede ser, además, un medio importante para reconstruir la estructura social que suele verse debilitada como consecuencia de la crisis.

Esta relación humana es un componente importante de la calidad de la participación y de la calidad de un proyecto en su conjunto. Para crear buenas relaciones, el elemento más importante (y a menudo infravalorado) es la conducta del personal de una organización de acción humanitaria y su conocimiento de la cultura, comportamiento y creen-cias específicos de la población con la que está tratando. En situaciones de emergencia, la participación requiere una inversión en la creación de relaciones y en el recono-cimiento y aceptación del poder. En muchas situaciones de emergencia, la clave para conseguir intervenciones exito-sas ha sido la relación de confianza previa entre los actores que participan en situaciones de emergencia y los actores y líderes locales.

La creación de un entendimiento mutuo supone recono-cer las formas existentes de organización y comunicación social y proporcionar información acerca de los actores humanitarios y de sus actividades. La participación requiere un proceso de “llegar a conocerse los unos a los otros” que puede llegar a perderse si existe una alta rotación de perso-nal o cuando el proyecto está en marcha y los participantes están centrados en actividades.

La participación es, sobre todo, una demostración de res-peto hacia los miembros de las poblaciones afectadas. Se trata de reconocer su derecho a opinar sobre temas que afectan a sus vidas y de mostrar el debido respeto hacia las capacidades, ideas y potenciales locales. Es funda-mental, si se desea respetar la dignidad de las personas que ya han sido víctimas de acontecimientos, a menudo, traumáticos.

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

41

Cons

ejos P

ráct

icos

y A

dver

tenc

ias Puede suceder

que deba repetirse el proceso de “conocerse los unos a los otros” durante el transcurso de un proyecto. El tiempo y los recursos deberían dedicarse a la creación de relaciones y, si la rotación de personal es alta, debe asegurarse de que no es un único miembro del personal el que mantiene lazos con los actores ya que la relación podría resentirse si dicha persona se marchara.

Defin

icio

nes#1

Tipo de participación Descripción

Participación pasiva

Se informa a la población afectada sobre lo que va a suceder o lo que ya ha sucedido. A pesar de ser un derecho fundamental de las personas afectadas, no siempre se respeta.

Participación a través del suministro de información

La población afectada proporciona información en respuesta a preguntas, pero no ejerce influencia alguna sobre el proceso, ya que los resultados de la encuesta no se comparten y no se comprueba su veracidad.

Participación mediante consulta

Se pregunta a la población afectada su opinión acerca de un asunto determinado, pero ésta no tiene poder sobre la toma de decisiones ni tampoco se le ofrecen garantías de que sus opiniones vayan a ser tenidas en cuenta.

Participación a través de incentivos materiales

La población afectada suministra algunos de los materiales y/o mano de obra necesarios para poner en funcionamiento una intervención a cambio de una retribución en efectivo o en especie que realiza la organización de ayuda humanitaria.

Participación a través del suministro de materiales, dinero en efectivo o mano de obra

La población afectada suministra algunos de los materiales, dinero en efectivo y/o mano de obra necesarios para una intervención. Esto incluye mecanismos de recuperación de costes.

Participación interactiva

La población afectada participa en el análisis de las necesidades y en la concepción del programa y tiene poder en la toma de decisiones.

Iniciativas locales

La población afectada toma la iniciativa y actúa independientemente de las organizaciones o instituciones externas. Aunque puede recurrir a organismos externos para que apoyen sus iniciativas, el proyecto está concebido y dirigido por la comunidad; es la organización de ayuda humanitaria la que participa en los proyectos de las personas.

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

42

Existen muchas y diversas opiniones sobre lo que es “participación”. Este manual reconoce que, en situaciones de ayuda humanitaria, a menudo el punto de partida para la participación es muy pobre, particularmente en situaciones de desastre de súbita aparición donde la prioridad es salvar vidas de una forma rápida y donde puede que no sea posible ni conveniente la utilización de algunos métodos participativos.

La participación significa cambiar la idea que tenemos de las personas afectadas por las crisis y en lugar de considerarlas “víctimas”, “beneficiarias”, o “destinatarias”, habría que consi-derarlas como dinámicos actores sociales con habilidades e ideas propias y capaces de desempeñar un papel activo en las decisiones que afectan a su seguridad y bienestar. Este cambio en la consideración de las personas es fundamental para aumentar la implicación de las personas afectadas por las crisis en la respuesta humanitaria.

La Tabla 1 describe una tipología de participación que refleja las distintas formas en que las organizaciones humanitarias interactúan con per-sonas afectadas por situaciones de crisis, desde simplemente infor-marles acerca de una respuesta humanitaria hasta ofrecerles apoyo para iniciativas locales.

Un análisis de la práctica actual muestra que estas diversas for-mas de participación se utilizan de manera diferente a lo largo de todas las fases de un proyecto. Aunque existen variaciones obvias entre las agencias y los contextos, surgen las siguientes pautas:

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

43

Tabla 1 Una tipología de

Participación (adaptada de Pretty, J 4.)

Ejem

plosEn los campamentos de

refugiados de Guinée Forestière se utilizan diferentes formas de

incentivos económicos tales como los “contratos de colaboración”, mediante los cuales se contrata

a refugiados o a personas de aldeas cercanas para tareas

específicas; Alimentos a cambio de Trabajo o Dinero en Efectivo a cambio de Trabajo por tareas

de limpieza o mejora de la tierra para programas de agricultura

o tareas relacionadas con los huertos y la plantación

de árboles para programas medioambientales; pagando a los

refugiados que realizan tareas en nombre de la comunidad

en general por ejemplo los que trabajan como vigilantes de

seguridad o son miembros de ciertos comités.

4“Sistemas alternativos de consulta para una agricultura sostenible”, en el Institute of Development Studies Bulltein, vol. 25, (Brighton: Institute of Development Studies, 1994), pp. 37–48.

Defin

icio

nes#1

I.5 Participación: ¿Cómo?

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

44

Este Manual utiliza los términos “implicación” y “participación” muy a menudo y sin que en apariencia existan diferencias entre ambos. La tipología de la participación (arriba) demues-tra que la participación no es algo estático sino algo dinámico y cambiante, el nivel de participación en respuestas humanita-rias de carácter urgente puede ser bastante bajo al principio, pero puede ir aumentando y mejorando con el tiempo. Es posible cambiar de un enfoque a otro durante el transcurso de una respuesta humanitaria. Algunas partes de la tipología detalladas anteriormente pueden describirse mejor diciendo “implicar” a las personas, otras en cambio se considerarían “participación”. No existe una división perceptible entre estos dos términos y cada individuo tendrá una opinión diferente sobre lo que es la “participación”. El objetivo de este Manual no es el de quedar atrapado en definiciones estrictas, sino ofrecer una orientación para lograr una mayor implicación y participación de la manera que se considere más adecuada y viable en cada contexto particular.

Los diferentes enfoques e ideas sobre el propósito de la par-ticipación determinan hasta qué punto será posible implicar a las personas en las respuestas humanitarias. Los enfoques se pueden clasificar en:

El Enfoque Instrumental ve la participación como un medio para conseguir los objetivos de un programa. Si se emplea de una manera apropiada en todas las fases del ciclo del proyecto y de tal modo que se respeten los ritmos y las capacidades de la población afectada, puede conducir al fortalecimiento de dichas capacidades, pero hacer esto no es un objetivo en sí.

Se debería tener cuidado de no pasar de un modo instrumental a una manipulación absoluta de los actores locales, que podría resultar en el debilitamiento de un proyecto y de las capaci-dades locales o en la aparición de problemas de seguridad para los trabajadores humanitarios. Asimismo es importante no confundir este enfoque con la responsabilidad local de un proyecto o programa.

El Enfoque Colaborador se basa en un intercambio donde ambos actores agrupan sus recursos con el fin de conseguir un objetivo común. La organización de ayuda aspira tanto a desarrollar la capacidad de las poblaciones afectadas como a

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

45

Defin

icio

nes#1

• Las consultas son muy habituales en la fase de evaluación, pero lo son menos en la fase de diseño. Las personas afec-tadas por las crisis raras veces participan en la toma de decisiones sobre el diseño del proyecto.

• La participación a través de incentivos materiales es uno de los métodos más comunes en la fase de implemen-tación, especialmente a través de programas de Dinero en Efectivo a cambio de Trabajo o Alimentos a cambio de Trabajo, o a través de la aplicación de acuerdos de subcontratación.

• La participación de las personas afectadas por las cri-sis en la fase de monitoreo y evaluación de programas es mucho menor. Aunque el monitoreo y la evaluación participativas tienen cada vez más importancia y las per-sonas son consultadas con mayor frecuencia, pocas veces reciben estas personas información sobre los resultados de la evaluación y sobre el uso que se va a hacer de sus aportaciones en etapas posteriores.

• Existen pocas pruebas del apoyo a iniciativas locales.

La experiencia demuestra que un enfoque participativo resulta más efectivo si se utiliza de modo consistente a lo largo de todo el proyecto. La Parte 2 ofrece una guía sobre la forma de implementar una estrategia para la participa-ción a lo largo de todo el ciclo de un proyecto, teniendo en cuenta las restricciones y oportunidades características de las situaciones de crisis y resaltando la necesidad de traba-jar con capacidades e iniciativas locales.

C i ta

“Nuestro mayor obstáculo es la falta de apoyo por parte de las ONG internacionales. No entendemos por qué no nos apoyan cuando estamos realizando actividades que complementan sus proyectos y algunas veces hasta hacemos su trabajo.”Representante de una asociación para refugiados (Guinée Forestière).

aprender de la misma. Esto presupone al menos una mínima estructura social dentro de la población afectada. La colabora-ción puede ser informal, por ejemplo, la delegación de ciertas tareas, o formalizada como asociaciones entre estructuras.

En el Enfoque de Apoyo, la organización de ayuda apoya a la población afectada a llevar a cabo sus iniciativas. Puede tratarse de un apoyo material, financiero o técnico a inicia-tivas ya existentes o de un fortalecimiento de la capacidad de la población para emprender nuevos proyectos. Es cru-cial que la organización de ayuda busque y reconozca la capacidad y potencial existentes a nivel local dentro de la población afectada.

Existen puentes entre estos tres enfoques. Pasar de la colabo-ración al apoyo de iniciativas locales es lógico y relevante. Sin embargo al pasar de un enfoque de apoyo a uno instrumen-tal se corre el riesgo de minar la confianza entre los socios y puede poner en peligro el futuro de la relación.

El desarrollo de una estrategia para la participación supone fundamentalmente responder a las tres preguntas siguientes:

• ¿Por qué intervenir en un proceso participativo? ¿Cuál es mi objetivo a la hora de hacerlo?

• ¿Con quién se trabajará?

• ¿Cómo se llevará a la práctica esta estrategia participativa?

Los elementos relacionados con el contexto, las personas afectadas y la organización de ayuda humanitaria forjarán las decisiones que se tomen. Estos factores serán presentados y tratados en el Capítulo 2.

Manual de la participación para los actores huManitarios Cómo mejorar la impliCaCión de las poblaCiones afeCtadas por las Crisis en la respuesta humanitaria

46

En Resumen: Capítulo 1 El qué, el por qué, el quién y el cómo de la participación

1 En situaciones humanitarias, la “participación” es un proceso que trata de involucrar a las personas afectadas por las crisis en la respuesta humanitaria de cualquier manera y en la medida que sea posible en cada contexto particular

2 La participación puede hacer que una respuesta huma-nitaria sea más efectiva y eficaz, más aplicable a las necesidades reales y que ayude a identificar la manera más adecuada de satisfacer esas necesidades.

3 Las personas afectadas por las crisis pueden participar directamente en las respuestas humanitarias así como par-ticipar a través de representantes, pero en cualquier caso se deberá tener especial cuidado con el fin de garantizar que las personas más vulnerables y marginalizadas social-mente participen.

4 Existen diferentes maneras de implicar a las personas en las respuestas humanitarias y se pueden utilizar distin-tos enfoques para mejorar la participación de una forma continuada a lo largo del ciclo de vida de un proyecto.

el qué, el por qué, el quién y el cóMo de la participación

47

Defin

icio

nes#1