Arquitectura Habitacional en Cuzco

ARQUITECTURA HABITACIONAL DEL CUZCO

CATEDRA:

ARQ. HAYDE CHIRINOS

ALUMNOS :

GUEVARA REQUE LUIS

SILVA YABE KEIKO


•La fundación española del Cusco, 1534•Sus calles no siguen el usual modelo hispanoamericano en forma de damero.•La solidez de las construcciones incaicas y la calidad petrea de los materiales permitieron al conquistador aprovechar lo esencial de su estructura•Si se observan las calles, las casas y los templos del Cusco, se encuentra constantemente esa soberbia y fecunda dualidad de lo hispano y de lo incaico

La mayor destrucción del Cusco en 1536 a raíz del levantamiento de Manco inca, en que el ejercito incaico sitió la ciudad e incendió sus edificios.

El procedimiento usual consistió en conservar las partes bajas de los muros fabricados de piedra, sobre los que originalmente se asentaban 103 muros de adobe y tejos de madera o ichu que formaban las partes altas de los edificios incaicos; estas partes altas fueron reemplazadas por otras y cubiertas por tejado a española creándose así la imagen arquitectónica del Cusco Colonial.


LA ARQUITECTURA

El urbanismo del virreynato fue la prolongación de la arquitectura europea en el nuevo mundo, experimentó determinados cambios por razones de índole social, económico y cultural, a los que se sumaron factores geográficos y climatológicos.en la arquitectura de la colonia se da a veces características en el planeamiento o distribución de los edificios, en la decoración y en la construcción que puedan considerarse como aportes específicamente peruano - indígenas:

En el planeamiento, este fenómeno se da en la arquitectura de la vivienda popular, sobre todo en la rural.En la decoración, tenemos los posibles influencias prehistóricas en las formas y estilos de la llamada “arquitectura mestiza”.En la construcción, el uso de materiales y procedimientos autóctonos constituiría una instancia de la influencia de lo prehíspánico.



TENDENCIAS ESTILISTICAS

Estas tendencias se manifestaron claramente en la decoración y especialmente en la forma y “solución de las portadas de los templos y casas.Al polo “europeo-hispano”, se acercaba la arquitectura más erudita y académica, que evidenciaba familiaridad con los modelos metropolitanos.Al polo “americano - provincial”, lo característico es la interpretación libre, no canónica, de los modelos europeos.La tendencia “mestiza” se dio en mayor o menor grado en la arquitectura de todas las provincias del virreinato, especialmente en la arquitectura rural y de los pueblos.

museo arzobispal

municipalidad


LOS TIPOS ARQUITECTONICOSLa casa a un lado, y del otro la iglesia y el convento (o monasterio), son los tipos arquitectónicos en la colonia, a los que se agregaron los cabildos, los hospitales y los edificios para colegios y establecimientos de enseñanza, además de las obras, muy poco numerosas, de arquitectura militar: murallas con sus portadas y fuertes o castillos; las de ingeniería civil, como los puentes y acueductos y las relacionadas con la producción, como los molinos, almacenes y albóndigas.


LA AMPLIACIÓN ESPAÑOLA DE LA CIUDAD INCAICALa ciudad incaica que conocieran los conquistadores tenia una estructura urbana continua pues poseía componentes básicos: el centro de poder y los barrios satélites.

El centro nobiliario fue construido o mejor dicho reconstruido por Pachacutec para crear una imagen de poder y riqueza propia de la expansión del Imperio por él emprendido, Sobre la vertiente se ubicaban los barrios contiguos al centro, es decir Tococachi y Rimacparnpa. Los barrios satélites se ubican en el otro lado valle, en la vertiente sudoeste del mismo. Estos barrios eran Cayancachi, Chaquillchaca, Quillipata y Carmenca.


EL PARTIDO ARQUITECTONICO DE LA CASA CUSQUENA

Hay una extraña similitud entre el partido de la Kancha incaica y la casa cuzqueña del periodo hispánico. La kancha era una pequeña manzana amurallada que reunía en su interior, en general, tres o cuatro edificaciones uniespaciales con una misma función. Ella era a la vez la unidad funcional básica de la arquitectura incaica, no solamente domestica sino palaciega y aun religiosa.


El sistema de kancha, área descubierta, presenta muchas semejanzas con el sistema de patios internos de la tradición ibérica. En ambos casos las habitaciones rectangulares están agrupadas en torno a un patio cuadrado en donde se desarrollan algunas funciones y desde donde se capta la luz. En los dos casos el acceso desde la calle se efectúa por una única puerta.Existe naturalmente diferencias. En la kancha las habitaciones son contiguas, formándose de este modo pequeños patios en los ángulos. A la vez en cada uno de estos edificios uniespacíales que formaban la kancha vivía en general una familia, como se puede aun verificar en pequeños pueblos de comunidades campesinas.

En otras escalas, las grandes kanchas ceremoniales se prestaban también a una conversión de funciones concurrentes como sucedió obviamente en el Coricancha (templo del sol), transformado en convento de Santo Domingo.


En el Cusco se conservan inclusive casas con zaguán en la esquina para impedir la visión del patio desde la calle como en las mas pura tradición árabe. Zaguanes de este tipo pueden ser observados en la Casa del Almirante y en casonas del barrio de Santa Ana.



En el Centro Histórico Las más antiguas galerías conocidas son de arquería de ladrillo de doble orden. En edificios tempranos como la Casa del Almirante y la de Garcilazo N0 256 las arquerías están ornadas con medallones de cerámica a la manera renacentista.El empleo del arco de sillares parece datar del siglo XVII y especialmente después del terremoto de 1650. En el mismo periodo aparecen las galerías adinteladas, aunque hay muchos que pueden ser anteriores. En todos los casos los apoyos son de sección circular.


TIPOLOGÍA HABITACIONAL

Si en la arquitectura religiosa y hospitalaria del virreynato primaron los modelos europeos, en la arquitectura de la casa, hubo una mayor incidencia de las tradiciones prehispánicas, que se manifestaron sobre todo en las viviendas de las clases populares


Las casa de los estratos más altos de la sociedad tuvieron un carácter predorninantemente hispánico en su forma y apariencia, y desde el punto de vista artístico, un parentesco bastante explicito con sus prototipos peninsulares.Esencialmente no fue una arquitectura decorada, sino porque en ella solieron combinarse las formas de planeamiento y métodos constructivos de origen prehispánico con elementos y procedimientos introducidos por los españoles


En el mismo Cusco, constituyen interesantes casos de mestizaje las portadas de transición de que están previstas algunas casa de familias prominentes: ejemplo, la del Marqués de Valleumbroso.


La vivienda campesinaligeros cambios respecto a las casas anteriores de la conquista.estuvieron constituidas por una habitación rectangular que servía para todas las funciones de la familia. En la sierra los muros eran usualmente de adobe, adobón o “pirca” (Vocablo que significa muro, pero que normalmente designa una pared de piedra sin labrar asentada en seco o con mortero de barro) y la casa se cubría con un techo a dos aguas de troncos de árbol y paja (ichu).


Casa-hacienda

Característico de estas casas de hacienda fue el uso de galerías o corredores exteriores de arquerías de albañilería o adintelados de madera.Los procedentes de estos corredores pueden buscarse en las “ramadas” prehispánicas, pero también en las galerías de las villas y casas campestres de Europa.La edificación más prominente del conjunto era con frecuencia la capilla o iglesia de la hacienda, sede de la doctrina que debía proveer el propietario.


Dentro de este tipo tenemos la siguientes división:

Callejón de cuartos:Era modesta y tenía el carácter de vivienda colectiva, era de las más humildes (trabajadores,pequeños artesanos).Estaba conformado por un pasaje sin techo o calle

angosta flanqueada por unidades de viviendas de una, dos o tres habitaciones, apareció desde los inicios del virreinato, y fue un tipo que se utilizo también en los tambos, posadas y asilos.


Casa pequeña

No tenía patio central El acceso de ésta era por una puerta ubicada en el

centro de la fachada, que en muchos casos carecía de ventanas, como en los callejones tenía un sólo piso.En algunas casas el acceso no era directo desde la calle sino a través de un patio del ancho del predium y separado de la calle por un muro en cuyo centro se colocaba la puerta, pero esto era característica de las casas de mayor tamaño, la vivienda de la gente más acomodada y de la aristocracia española y criolla.


Casas solariegas

Estaban constituidas por hileras de cuartos de una crujía que formaban los patios. La puerta de acceso desde

la calle al zaguán y primer patio se hacia normalmente de gran tamaño, porque al patio debían poder ingresar acémilas, jinetes, carruajes.Se dividian en tres zonas: exterior, central de interior.La zona exterior; estaba constituida por el zaguán, el primer patio y las habitaciones de ambos lados de estos, que en muchos casos se destinaban a la atención de los negocios de la familia o se alquilaban; con frecuencia a las habitaciones de la fachada de ventana a puerta para convertirlas en tiendas.


La zona central; era la más importante, recibía el nombre de principal, estaba constituida por uno o dos salones alargados y colocados transversalmente entre el primer patio y el segundo y conectadas entre sí por puertas anchas. Era esta la parte de casa donde se recibía los visitantes, y, por ello, la más elegantemente amoblada y decorada.


La zona interior; era el segundo patio, que se conectaba con el primero por media de un pasaje lateral, servia de centro de esta zona, era la más privada, aquí se encontraban los dormitorios, el comedor, y en el fondo la cocina, despensa, habitación de sirvientes y esclavos, corrales y caballerizas; podría agregarse a estos espacios un huerto o un jardín.En las casas de dos pisos, las escaleras eran normalmente de caja y accesibles por un vacío sin puerta desde un ángulo del patio.


Los esquemas de planta asimétrica se reflejaban en fachas libres y poca regulares (casa del almirante, Cusco). En todo caso fueron o no simétricos las fachadas, sus composiciones casi siempre se realizaban teniendo como acento principal el centro de interés al portón de ingreso al zaguán. El decoro exigía que estas grandes puertas se marcaran o adornaran con portadas que frecuentemente tuvieron también una función heráldica, colocándose sobre ellos, o a los costados, el o los escudos de armas de los dueños de la casa.


De manera general en Cusco se utilizo el balcón cerrado (pero con menos frecuencia), las ventanas angostas con rejas de madera o hierro y los pequeños balcones abiertos fueron los más comunes.


Lo más notable de los patios eran sus galerías o corredores, que fueron de tres tipos: de arquería, de la ladrillo o de piedra, adintelados, con vigas y columnas esbeltas de maderas provistas generalmente con capiteles de zapatas, y voladas también de madera.La decoración de orden arquitectónico se completaba en las casas con policromía y pintura mural.


El planeamiento y los materiales y métodos de construcción de las casas cambiaron poco en los tres siglos del virreinato, en cambio las formas de las portadas, balcones, galerías, puertas, rejas y decoración mural experimentaron transformaciones más marcadas por causa de la evolución del gusto y las influencias estilísticas de Europa y España.


LOS BALCONES

Muchos fueron los tipos de balcones que se hicieron en el Cuzco luego del terremoto de 1650, su ubicación estaba concentrada al rededor de las grandes plazas cuzqueñas.Se trataba de balcones abiertos, es decir formados por un piso de madera soportados por canes o mensulas con un antepecho de protección y recubiertos por la proyección del alero ensanchado (tejaroz), pero carecían de ventanas o celosías. Eran frecuentes los balcones esquineros con antepecho casetonado de tableros rebajados. También aparecen las balcones de cajón o tipo cerrado. Además de balcones en las fachadas se generalizaron los corredores en voladizo en el interior de los patios los que servían de pasadizo, estos balcones eran abiertos.


El balcón principal era el que comunicaba con el salón de honor y solía ocupar una posición central en la fachada. Ventanas rasgadas hasta el piso ocupaba posiciones laterales y servían para iluminar habitaciones secundarias a cuartos.

Entre la segunda mitad del siglo XVII y avanzado el siglo XVIII, se suelen encontrar barandas de dobles balaustrada (corredores de los patios, en ventanas rasgadas hasta el piso y en los balcones). Por influencia de las barandas se utilizan en los antepechos de los balcones sistemas mixtos, con una fila baja de casetones y otra superior o de balaustres. Posteriormente se adopta la doble balaustrada y la celosía con antepecho. A partir de la mitad del XVIII la doble balaustrada de las barandas es sustituido por balaustrada sencilla.


Los balcones de talla mas elaborada y detallista son en general del siglo XVIII. Es aquí cuando se multiplican las cuadrifolias sencillas y luego dobles.

En la primera tipología se incorporo el hierro a las barandas de balcón en un comienzo mezclada con balaustres de madera y después con toda la baranda de hierro forjado hasta llegar en un último paso a toda la estructura de hierro. En el mismo periodo, surgen balcones simples de una sola puerta recubierta por una especie de dosel ubicado baje el alero. Es posible que esta respuesta haya surgido como solución para incorporar balcones nuevos en edificios antiguos sin alterar la estructura de los techos y aleros preexistentes.

La segunda tipología de balcón del XIX retoma la temática de los cajones pero ahora en una escala más grande. En lugar de balaustradas y celosías se utilizan persianas europeas y al final del siglo el vidrio, a veces esmerilado. Estos balcones tienen en general sus cantos redondos y ornamentos neoclásicos cono liras, racimos de uvas y motivos zoomorfos.


AJIMEZ

Con la denominación impropia de ajimez se designa en el Cuzco la ventana esquinera formada por dos arcos o dinteles perpendiculares con una columna en el vértice. Esta palabra de origen árabe significa ventana. Ajimez también sería la ventana doble arcos gemelos y un fino parteluz que existe encima de la heráldica de la casa de ‘Los cuatro bustos” en la calle San Agustín, pero en Cusco se ha reservado la nominación para la soluciones de esquina.


Una ventana de esquina muy antigua es la del Monasterio de Nazarenas, construida sobre muros incaicos modificados en el siglo XVI. También de la misma época es el ajimez de Palacio del Almirante, que posee como parteluz una berma bifronte, masculina y femenina, con cabezas y cuerpos hacia adentro y afuera.


TECHOS, ARTESONADOS Y CIELORRASOS

Las casas del Cusco dejan a la vista la estructura de “par y nudillo” de sus techos. La parte interior de la cubierta esta constituida por una capa de encañado de carrizos, no oculta los palos ensamblados y revestidos de una delgada capa de arcilla con fibras vegetales.

En la planta baja el ambiente que recibe un tratamiento especial es el zaguán. Los techos y entrepisos son generalmente constituidos por una sucesión redonda empotrados en las paredes y que reciben a la vez el entablonado del piso superior. El tratamiento de madera estructural es similar en cuanto a su recubrimiento con fibra y arcilla que recibe la pintura.


En casos espaciales se encuentran soluciones de emparrillados de madera con vigas y largueros, sobre las cuales se extiende la tablazón.

En 1623 el notable entallador Bartolomé de Nápoles se dedico a construir en la casa episcopal. “un zaquizamí de madera de cedro.En el siglo XIX se introducirían en el Cusco los cielorrasos de tela. Estos mismos cielorrasos fueron objeto en algunos casos de pinturas mediante el sistema de papel calado.


LOS PATIOS Y LOS JARDINES

Los antiguos patios de los siglo XVI y XVII eran habitualmente empedrados y tenían en el centro un pozo de aljibe en donde se recogía el agua de lluvia. Estos empedrados formaban generalmente diseños geométricos algunos de ellos de origen morisco, como la famosa rosa mudéjar.En el siglo XVII fue frecuente cubrir los patios con losas de piedra y también se incorporaron los macetones con frondosa vegetación.

Una costumbre que impresionaba mucho a los viajeros era la forma de recortar los mirtos reproduciendo elementos arquitectónicos, animales y hasta personas, que en el día forman agradables vistas, por la diversa configuración saben dar a estos árboles, formas de pilastras, arcos, bosques y grupos a manera de macetas” narraba el Padre Blanco en 1836.


EL CONFORT Y LA HIGIENE EN LA CASA CUSQUEÑA Las viviendas de los españoles eran poco cómodas: oscuras, frías y mal ventiladas.


LA TÉCNICA DE LA PINTURA

La pintura tiene en la casa dos tipos de soportes, los muros de adobe y la techumbre de madera y caña. En cuanto a técnicas pictóricas encontramos dos tipos:Una al óleo, o temple graso con que se realizó el gran escudo heráldico. Su aglutinante se había perdido al ser absorbido por el muro y amenazaba pérdidas por acazuelamiento de la pintura, problema que pudo resolverse.La otra técnica empleada fue el temple ya que toda la casa se decoró con este procedimiento.


LOS COLORES DE LAS CASAS DEL CUSCO Aunque sin duda el blanqueado predominó en el tratamiento externo de la vivienda cuzqueña no faltó el color en abundancia como para producir efectos alegres y policromías que contrastaban con las texturas y la opacidad de los paramentos de piedra.

Estos colores estaban condicionados por la disponibilidad de tres pigmentos básicos; el rojo, el oro y el azul añil.El primero de ellos se extraía habitualmente de la cochinilla que habitaba en los tunales de los valles cercanos a Ayacucho, mientras que el azul añil o “azul de Panamá” se importaba de este país o de Guatemala.


El color azul era utilizado con preferencia en las carpinterías. A principios de este siglo James Bryce recuerda que el azul predominaba en las casas más antiguas de la Plaza San Francisco. Probablemente esta utilización del azul haya crecido en el siglo XIX desplazando el verde oscuro que antaño se prefería en puertas y ventanas.


LOS MATERIALES DE CONSTRUCCIÓN Y LA TECNOLOGIA EN EL CUSCO

El Cuzco recreó, el paso de la ciudad incaica a la española y se reutilizaron los elementos constructivos y edificios. El acta de instalación española en Cuzco señala entre los argumentos favorables la existencia de materiales como madera y piedra que se podían extraer de edificios abandonados y obsoletos.Después de 1535 con el incendio del Cuzco, se reutilizaron en abundancia los sillares incaicos.

La extracción se extendió a la fortaleza de Sacsayhuamán y ello llevó al cabildo del Cuzco a prohibir el 13 de enero de 1541 la utilización de dichas piedras. La experiencia de los incendios: y la búsqueda de recuperar su propia tecnología llevó al Cabildo a indicar que se cubran con tejas las casas “retirando los techos de paja”.


LA PIEDRA

La andesita y la traquita que utilizaban los incas se extraía de un área cercana a la ciudad, como costumbre Sacsayhuaman por razones de cercanía o abundancia fue el área de extracción preferida.Como también otros lugares de extracción fue el de las andenerías del Cerro de Piccho que fue saqueado de tal manera que no quedaron vestigios de las mismas.El crecimiento de la ciudad determinó búsqueda de nuevas y quizás la implementación de antiguas canteras. Luego del terremoto de 1560 la reconstrucción de la ciudad, exigió un volumen enorme de mampuestos.


Siempre hubo dificultades para obtener madera en forma abundante para abastecer las necesidades de construcción y combustible.Para la construcción, durante el periodo colonial, se utilizaron alisos, sauces y cedros traídos de los valles cercanos y posteriormente de la ceja de la selva fundamentalmente de Paucartambo y Marcapata. En el siglo XIX se comenzó a importar Pino, Oregón de Chile posibilitando así ampliar los vanos y voladizos.

LA MADERA


La madera de construcción se utilizaba predominantemente en la estructura de techo para soportar las cubiertas de teja.Junto a ellos, balcones, barandas, rejas, puertas y ventanas marcaban la importancia del material como uno de elementos esenciales dentro del campo de la arquitectura.Los maravillosos artesonados, mudéjares de laceria, señalan los valores de la “carpintería” y el alto nivel que alcanzaron los artesanos cuzqueños.


LADRILLOS Y TEJAS

La zona de producción ladrillera era la de San Sebastián.Fue esta una de las fuentes de recursos principales para los indígenas del pueblo.La utilización del ladrillo, se concentró sustancialmente en la ejecución de arcos y bóvedas. Sobre todo para las complejas curvaturas. La misma procedencia que los ladrillos tendrían las tejas cuzqueñas.

Se fabricaban mezclando la greda con pelos de animales (conejos, vizcachas o cerda de chanchos), de manera que al quemar las tejas, los pelos desaparece y las tejas resultan algo porosas, hasta un tiempo después en que esos canalillos se obstruyan por el crecimiento de un modo especial”.

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