Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por...

86
Artículos 7 Encuentro No. 94, 7 -41, 2013 * Estudios y Análisis Económicos de la Secretaría de Políticas Nacionales (SPPN). Managua, Nicaragua. Correo electrónico: [email protected] ** Departamento de Planificación Municipal del Instituto Nicaragüense de Fomento Municipal (INIFOM). Managua, Nicaragua. Correo electrónico: [email protected]; [email protected] ¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar? Aplicación en el sector salud de un modelo para la evaluación de políticas públicas en Nicaragua Octavio Martínez Baltodano * y María Haydée Fonseca Mairena ** Recibido: noviembre de 2012 / Aceptado: abril de 2013 El estudio presenta paso a paso la aplicación en el sector salud del modelo Cerda- Torche (2005), una metodología para la evaluación de políticas públicas a través de la valoración de los beneficios sociales derivados de la reducción en las tasas de mortalidad. Dicha metodología puede ser aplicada a cualquier sector para evaluar el impacto social de la ejecución de políticas, programas o proyectos y de esta forma reorientar eficazmente los recursos económicos del gobierno. El valor económico de la vida se determina a través de un modelo intertemporal en el que los agentes maximizan sus patrones de consumo y ocio sujetos a una restricción presupuestaria en la que se puede acumular activos a lo largo del ciclo de vida, en ausencia de mercados completos y enfrentando probabilidades exógenas de supervivencia. Este modelo se calibra con datos de la economía nicaragüense durante 2008 y simulaciones a través de modificaciones paramétricas que permiten determinar los beneficios sociales provocados por la reducción de las tasas de mortalidad de las primeras seis causas de muerte en Nicaragua en 2008. Palabras clave: políticas públicas / sector salud / beneficios sociales / reducción de las tasas de mortalidad

Transcript of Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por...

Page 1: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Artículos

7Encuentro No. 94, 7 -41, 2013

* Estudios y Análisis Económicos de la Secretaría de Políticas Nacionales (SPPN). Managua, Nicaragua. Correo electrónico: [email protected]

** Departamento de Planificación Municipal del Instituto Nicaragüense de Fomento Municipal (INIFOM). Managua, Nicaragua. Correo electrónico: [email protected]; [email protected]

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar? Aplicación en el sector salud de un modelo para la evaluación de políticas públicas en Nicaragua

Octavio Martínez Baltodano* y María Haydée Fonseca Mairena**

Recibido: noviembre de 2012 / Aceptado: abril de 2013

El estudio presenta paso a paso la aplicación en el sector salud del modelo Cerda-Torche (2005), una metodología para la evaluación de políticas públicas a través de la valoración de los beneficios sociales derivados de la reducción en las tasas de mortalidad. Dicha metodología puede ser aplicada a cualquier sector para evaluar el impacto social de la ejecución de políticas, programas o proyectos y de esta forma reorientar eficazmente los recursos económicos del gobierno. El valor económico de la vida se determina a través de un modelo intertemporal en el que los agentes maximizan sus patrones de consumo y ocio sujetos a una restricción presupuestaria en la que se puede acumular activos a lo largo del ciclo de vida, en ausencia de mercados completos y enfrentando probabilidades exógenas de supervivencia. Este modelo se calibra con datos de la economía nicaragüense durante 2008 y simulaciones a través de modificaciones paramétricas que permiten determinar los beneficios sociales provocados por la reducción de las tasas de mortalidad de las primeras seis causas de muerte en Nicaragua en 2008.

Palabras clave: políticas públicas / sector salud / beneficios sociales / reducción de las tasas de mortalidad

Page 2: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

8

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

1. Introducción

En países como Nicaragua un factor esencial para lograr un mayor desarrollo económico es el mejoramiento en las condiciones y niveles de vida, interviniendo con políticas, programas y proyectos en salud, educación, demografía, pobreza y desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre diferentes sectores y escoger la que maximice los retornos económicos-sociales obtenidos, es decir el bienestar social.

En el cuerpo del presente documento el lector encontrará una propuesta de instrumento económico para la evaluación de políticas, programas y proyectos. Hemos elegido el sector salud para la aplicación y explicación del modelo por ser uno de los sectores más sensibles para el impulso del desarrollo económico.

Con dicha aplicación en el sector salud, además de lograr la presentación y apropiación del modelo económico, la investigación revela resultados interesantes sobre el valor del ocio, las probabilidades de sobrevivencia/muerte, el valor económico de la vida por edad, nivel educativo y sexo y finalmente, el beneficio social de programas de salud que disminuyan la probabilidad de muerte.

El modelo económico propuesto es una aplicación para Nicaragua del modelo Cerda-Torche (2005), una metodología no tradicional para la evaluación de políticas públicas, a través de la valoración de los beneficios sociales derivados de la reducción en las tasas de mortalidad. El objetivo principal del estudio es que el lector se apropie de dicho modelo o al menos despierte su interés en el mismo y pueda, así como lo hemos hecho para el sector salud, implementarlo en otros sectores. De esta forma pretendemos contribuir al desarrollo del acervo de capital humano de nuestro país, datándoles de una herramienta importante para que estemos cada vez más capacitados para el aseguramiento del uso eficaz de los recursos utilizados en inversiones de interés público.

Hoy en día, la evaluación costo-efecto que utiliza como medida los años de vida ajustados por discapacidad (AVAD) se ha convertido en un método aceptado para evaluar políticas públicas en el sector salud. En dicho método se calculan los años de vida saludables perdidos provocados por alguna enfermedad específica y se establece cómo cambian estas condiciones luego de la implementación de la política evaluada. La diferencia entre los efectos de la enfermedad antes y después del proyecto o programa se comparan con los costes necesarios para la implementación del mismo y de esa manera se obtiene un indicador de coste-efecto. Sin embargo, bajo este método sólo es posible comparar alternativas dentro del sector salud y no entre sectores.

Sin embargo, Cerda y Torche (2005) desarrollaron un modelo para la evaluación de políticas públicas en países en vías de desarrollo a través de la valoración de los beneficios sociales derivados de la reducción en las tasas de mortalidad. En el presente documento aplicamos dicha metodología para la evaluación de políticas en el sector salud, esperando facilite su futura implementación en otros sectores y de esta forma contribuya a mejorar la toma de decisiones orientadas a obtener mayores beneficios sociales.

Page 3: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

9

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

En el estudio se muestra un modelo de optimización intertemporal con una función de utilidad que depende del consumo de bienes y servicios y del tiempo que se utiliza en ocio. El modelo incorpora un proceso de acumulación de activos y permite obtener la senda óptima de un consumidor que enfrenta probabilidades exógenas de supervivencia.

La metodología implementada es de corte transversal y enfoque retrospectivo, y está basada en análisis cuantitativo con datos de 2008.

El modelo se calibra con las características de ingreso y utilización del tiempo de los nicaragüenses en 2008. Utilizando la encuesta de empleo 2008, se identifican las condiciones de consumidores particulares diferenciados por características socioeconómicas. Las condiciones de supervivencia se calculan a partir de información suministrada por la oficina de estadísticas del MINSA-Central. Estas condiciones de supervivencia surgen de las tablas de mortalidad elaboradas en base a definiciones de cohortes análogos a las de los agentes considerados. Estas curvas son modificadas paramétricamente para hacer simulaciones de los efectos de políticas públicas en las condiciones de mortalidad que afectan a los individuos.

El resultado puede ser interpretado como el beneficio social de un proyecto o de un programa, ya que el carácter optimizante del modelo entrega una medida adecuada del impacto en el bienestar de la población por parte de dichas políticas.

2. Revisión de literatura

En 1982, Marin y Psacharopoulos, en su obra “The Reward for Risk in the Labor Market: Evidence from the United Kingdom and a Reconciliation with Other Studies”, estimaron la función de precios hedónicos para determinar el valor de la vida. En la función utilizada, el salario anual depende de: años de escolaridad; años de experiencia; el número de semanas trabajadas durante el año; el riesgo del puesto de trabajo; una variable sindical, aproximada por el porcentaje de trabajadores en el sector con convenio colectivo; y el atractivo del puesto de trabajo.

Para calcular la variable de riesgo, Marin y Psacharopoulos (1982) utilizaron dos vías: 1) Tasa de mortalidad general del grupo según edad y clase social a la que pertenecía la persona, comparada con la tasa de mortalidad de cada ocupación y 2) Comparar la tasa de mortalidad general debida a accidentes laborales con la de la ocupación específica. Finalmente, la variable que se incluyó al modelo fue la establecida mediante el segundo método. Los resultados del estudio mostraron que el valor de la vida era de 2,245,000 libras esterlinas de 1982 para los trabajadores no manuales y 686,000 para los trabajadores manuales.

Por su parte, Riera, Ripoll y Mateu (2007) utilizan también el método de precios hedónicos en “Estimación del valor estadístico de la vida en España: Una aplicación del Método de Salarios Hedónicos”. El estudio se realizó a partir de una amplia base de datos del mercado de trabajo español y de la construcción de índices de riesgo laboral que incorporan simultáneamente la ocupación y la rama de actividad para el período 1997-2000. Los principales resultados de la aplicación constatan una relación positiva entre el riesgo de accidentalidad y el salario percibido y sitúan el valor estadístico de la vida en España en el rango de 2 a 2,7 millones de euros, a precios del 2000.

Page 4: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

10

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Así mismo, Jones-Lee, Hammerton & Phillips (1985) aplicaron el método de valoración contingente. Para el levantamiento de la información utilizaron una encuesta con 37 preguntas, la cual aplicaron a 1,103 personas. Dichas preguntas se encuentran agrupadas en tres categorías:1. Características socioeconómicas de la familia2. Preguntas de percepción-consciencia3. Preguntas de valoración

Las preguntas de valoración están elaboradas para obtener las tasas marginales de sustitución entre riesgo y dinero. Las preguntas relativas a la valoración del riesgo iniciaban con formato abierto pero se cerraban en la medida en que el entrevistado no tuviera la capacidad de contestar.

Los resultados de este estudio mostraron que el valor de la vida rondaba alrededor de dos millones de libras esterlinas de 1985.

Por otra parte, en 2007, Martínez, Abellán y Pinto elaboraron el estudio titulado “El valor monetario de la vida estadística en España a través de las preferencias declaradas”. En dicho estudio se estima el valor monetario de una vida estadística en España a partir de preferencias declaradas por la población general, esto en el contexto de accidentes de tráfico. La metodología empleada es la de valoración contingente. En la encuesta realizada se intentaron comunicar correctamente los riesgos mediante el recurso de ayuda visual (mostrar imágenes con las consecuencias de accidentes de tráfico). Los valores obtenidos (no inferiores a 2,7 millones de euros corrientes) son similares a otras estimaciones efectuadas en Europa recientemente, si bien un aspecto de la consistencia de estos resultados (cuasi-proporcionalidad) sólo se verifica parcialmente.

Así mismo, en 1989 Viscusi y Moore aplicaron el método de valoración de la vida y las tasas de descuento. En dicho estudio, para el método indirecto (con información secundaria) utilizaron un proceso Markoviano para la elección de la tasa de riesgo de un trabajo durante toda su vida. Entre los principales resultados de la investigación se encuentra que la tasa de descuento utilizada implícitamente por una persona “normal” (con 12 años de educación formal) es de 3,2% en términos reales. Por otra parte, para una persona con ocho años de escolaridad la tasa es de 6,2% y finalmente los universitarios muestran tasas de descuento negativas de -3.3%.

Por otra parte, el método de valoración de la vida y las tasas de descuento con el método directo (con información primaria) fue implementado en 1992 por Cropper, Aydede y Portney. Para ello aplicaron una encuesta a un total de 3,200 personas. Los resultados muestran un grado de variación considerable en dependencia del horizonte temporal contemplado: desde 16,8% para un horizonte de cinco años hasta 3.8% para uno de 100. Es importante resaltar que, según el estudio, los encuestados muestran una clara preferencia por el presente.

Por su parte, Murphy y Topel (2006), en su estudio “The Value of Health and Longevity” calculan el valor social de: aumentar las tasas de longevidad de veinte países; el progreso contra un conjunto de enfermedades después de 1970; y el progreso potencial futuro contra las enfermedades. Los resultados muestran que las ganancias acumuladas en la esperanza de vida después de 1900 para un individuo norteamericano representativo fueron de más de $1.2 millones de dólares del 2000, mientras que después de 1970 las ganancias agregadas sumaron $3.2 billones

Page 5: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

11

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

por año del PIB. Además los beneficios potenciales de mejoras en la salud futura también son grandes. Por ejemplo, una reducción del 1% en la mortalidad por cáncer genera un valor de $500 mil millones de dólares. Para ello, el estudio se basa en el análisis de la esperanza de vida de Arthur (1981) y Rosen (1988), suponiendo que la disposición a pagar para la salud está determinada por la maximización de la utilidad de toda la vida.

Finalmente, Cerda y Torche (2005) en “El valor económico de reducir tasas de mortalidad: El caso de Chile”, presentan una metodología para valorar reducciones de tasas de mortalidad. Empleando el método de capital humano encontraron que los beneficios económicos sociales de erradicar cuatro enfermedades durante los años noventa para la economía chilena fueron: para la neumonía 2.89% del PIB; para el infarto 3.34% del PIB; para los accidentes vasculares encefálicos 1.48% del PIB; y para los tumores malignos al estómago 2.01% del PIB.

3. Marco teórico

3.1 Medición del valor económico de la vida

En un contexto de recursos económicos escasos, ¿cómo decidir si invertir en un programa de vacunación contra el neumococo – principal causante de la neumonía en niños y adultos mayores – o invertir en tecnología para un mejor tratamiento y prevención de la insuficiencia renal crónica? Ambos aumentan la esperanza de vida de las personas y la vida humana es invaluable. Para resolver esta disyuntiva – aunque según nuestros preceptos sociales la vida humana tiene un valor infinito – resulta necesario utilizar métodos económicos que ayuden a evaluar la pertinencia y eficacia de las políticas, programas y proyectos sociales, para la toma de decisiones. La metodología aquí implementada consiste en identificar qué causa mayores beneficios sociales, multiplicando el valor económico de los individuos por la probabilidad de salvar una vida adicional con la intervención pública. Para valorar económicamente los cambios en las tasas de mortalidad, existen al menos tres métodos que son presentados a continuación.

3.1.1 Salarios hedónicos

Se plantea la función de salarios hedónicos del tipo:

En donde el salario de un determinado puesto de trabajo h está en dependencia principalmente de los vectores de características de: capital humano Eh, riesgo Rh, sindicales Sh y medioambientales Xh. (Viscusi, 1993).

El cálculo del valor de la vida mediante este método se obtiene con la derivada parcial del W respecto al riesgo de muerte, calculando así la disposición marginal a pagar por aceptar un mayor riesgo de muerte. Esto formalmente se conoce como el “valor de una vida estadística”.

Sin embargo, dado un desfase temporal, con dicho método resulta estadísticamente imposible separar todas las influencias exógenas. Esto se debe a que

Page 6: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

12

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

el riesgo de muerte está en dependencia de cada ocupación profesional (Marin & Psacharopoulos, 1982), cuya información, en Nicaragua como en el resto de países con similares características de sub desarrollo, es restringida y poco fundamentada, ya que surge de acuerdos entre el sector privado y el gremio sindical (Cropper & Freeman, 1991). Así mismo, el método no segmenta por sexo ni grupo etario.

3.1.2 Método indirecto

En este método se infiere la tasa de descuento implícita utilizando la función de precios hedónicos como restricción en la optimización de cada individuo. Por tanto, cada persona debe decidir entre la probabilidad de muerte y el salario para aceptar dicho riesgo, maximizando sus beneficios (Viscusi & Moore, 1989).

3.1.3 Método directo

Con este método cada individuo debe elegir entre las probabilidades de muerte en el presente y en el futuro. La información es obtenida a través de encuestas dirigidas directamente al grupo de análisis.

Valoración contingente

Es un método directo que consiste en preguntar al grupo de análisis, el valor presente que le da a un cambio en su bienestar derivado de un cambio en sus probabilidades de morir.

Mientras, el método directo de tasas de descuento cuestiona sobre el valor presente de una determinada posibilidad de morir ahora y en el futuro (Jones-Lee et al., 1985).

Por razones obvias la principal limitante para la aplicación de todo método directo es la necesaria implementación de muchos recursos económicos, humanos y tiempo.

El método del capital humano

El método del capital humano se basa en la producción. Concretamente se relaciona con los niveles de producción neta de cada individuo y por ende los beneficios de la sociedad si ese individuo sigue viviendo. De esta forma se estima el valor restando la producción del individuo por el resto de su vida menos su consumo. Así:

Page 7: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

13

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

En donde:Q=Costo por la muerte del individuo a la edad n.Ptn=Probabilidad en el año n de que el individuo siga vivo en el año t.Wt=Salario en el año t.Ct=Consumo personal en el año t.δ = Tasa social de descuento

Sin embargo, este modelo presenta dos serias limitantes:1. Los resultados muestran con valor negativo a los niños y jubilados.2. Tiene problemas en la fundamentación teórica de la concepción económica de la sociedad.

Finalmente, Murphy y Topel (2006) plantean un modelo en donde se superan las limitantes del método del capital humano. No obstante, éste posee características que únicamente permiten su aplicación a países desarrollados.

4. Desarrollo del modelo

Primeramente se debe centrar la atención en analizar a un agente que con cierta probabilidad vive indefinidamente, y que en cada periodo de su vida debe decidir cuánto trabajar, consumir y acumular para periodos posteriores.

Cada individuo se coloca en un periodo determinado con una probabilidad exógena de sobrevivencia hacia el futuro. es la probabilidad de sobrevivencia desde el nacimiento hasta el año siguiente, es la probabilidad de sobrevivencia desde el año uno hasta el dos, y así sucesivamente. Por tanto, la probabilidad de sobrevivir hasta "t" para un individuo con "e" años de edad es:

A lo largo de su vida el agente obtiene utilidad por el consumo de bienes, ci, y el tiempo dedicado al ocio, li a través de la función de utilidad U (ci,li), que es una función estrictamente creciente y cóncava en consumo y ocio. Así mismo, el individuo descuenta su utilidad de acuerdo a un factor de descuento 0 < β < 1. De esta manera, un agente cuya edad es "e" , maximiza la siguiente función de utilidad.

Al comienzo de cada periodo cada individuo posee una dotación "L" de unidades de tiempo que se pueden consumir en ocio o se pueden ofrecer en el mercado de trabajo, en cuyo caso se obtiene un retorno wi por unidad de tiempo. Por otro lado, el individuo obtiene un retorno del mercado de capitales a una tasa "r" por el nivel de activos ai, depositados en el mercado al final del periodo pasado. Ambas fuentes de ingresos se pueden disponer en el periodo posterior para el consumo o se pueden acumular como activos en el futuro.

Page 8: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

14

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

En este ejercicio la única manera de trasferir recursos a futuro es a través de mercados de capitales. Es así que este modelo supone la imposibilidad de existencia de aseguramiento perfecto, contrario a trabajos previos para países desarrollados (Murphy & Topel, 1999). De igual manera, de acuerdo a la estructura del mercado de capitales, si una persona muere, sus activos pasan a ser propiedad del intermediario financiero. Adicionalmente, se supone que el intermediario financiero no paga premio por riesgo de mortalidad, como por ejemplo ocurriría si existieran seguros de vida, todo esto teniendo en cuenta que existe una baja cobertura de estos instrumentos en Nicaragua. Es así que este modelo toma en cuenta dicha realidad y se centra en un tipo de mercado de capital adecuado para el caso de países en vías de desarrollo.

Para maximizar la utilidad sujeta a la restricción presupuestaria se plantea el Lagrangiano:

Donde λi es el precio sombra de los recursos del periodo i. En este caso se busca elegir una senda óptima de consumo, ocio y activos. Para ello las condiciones de primer orden son:

La ecuación (4) iguala a la utilidad marginal esperada del consumo, en i con su costo marginal λi La ecuación (5) tiene una interpretación análoga para el ocio, mientras que la ecuación (6) es la condición de optimalidad para la acumulación de activos.

4.1 El valor económico de la vida

Para conocer los beneficios de realizar una política económica de capital humano enfocada en el sector salud, se debe determinar cuál es el valor económico de la vida de un agente. En este punto se busca calcular cuál es la disponibilidad a pagar (DAP) que permita aumentar marginalmente la probabilidad de sobrevivencia desde el periodo v hasta el t, donde t > v , esto es:

Page 9: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

15

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

1 Es importante notar que en la ecuación 7 aparecen todos los flujos futuros porque el cambio marginal de la probabilidad de sobrevivencia entre v y t aumenta todas las probabilidades de sobrevivencia posteriores a v.

2 Esto se debe a una simple condición de arbitraje que establece que la ganancia de capital de los activos (medida por su crecimiento en precios sombras) más la ganancia en rentabilidad de mantenimiento de los activo debe ser cero. Si esta condición no se cumpliera, los individuos preferirían mantener más activos, en el caso en que la ganancia de capital más la rentabilidad fuese positiva. Si fuese negativa, los individuos preferirían mantener menos activos.

3 Se está suponiendo que el efecto de la supervivencia sólo afecta el periodo de v a t y lo hace proporcionalmente. Es así que:

En este caso, esta expresión se calcula como incremento finito, de esta manera:

Donde es la supervivencia modificada por la erradicación de algunas enfermedades tipo j.

Por tanto, es apreciable que el aumento en la utilidad del agente al aumentar marginalmente la tasa de supervivencia entre v y t, tiene que ver con los flujos futuros de utilidad descontada con el factor de descuento β y ponderado de acuerdo a la posibilidad de supervivencia en cada periodo.1

La ecuación (7) está medida en niveles de utilidad y de ella se puede obtener inmediatamente el valor monetario al dividirse por el precio sombra en t, de tal manera que:

Dado que esta expresión cumple con la propiedad de homogeneidad de grado d en la función de utilidad, donde 0 < d < 1. Es decir:

de las condiciones de primer orden se obtiene:

En este caso las dos primeras ecuaciones (9) y (10) son iguales entre tasas marginales de sustitución y precios relativos entre consumo en los periodos ґ y t y entre ocio en el periodo ґ y el consumo en el periodo t respectivamente. Asimismo, la ecuación (11) indica que el precio sombra de los activos cae a la tasa de rendimiento del mercado.2

Sustituyendo (8) en (11) tomando en cuenta la condición de homogeneidad en grado d en la función de utilidad, es posible establecer el valor monetario de la vida como3:

Page 10: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

16

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Esta última ecuación (12) indica que el valor de aumentar marginalmente la probabilidad de sobrevivencia entre v y t depende de una serie de factores, dígase:

• En primer lugar, el valor presente de todo el patrón de gasto a realizarse desde el periodo t en adelante, descontado a la tasa de interés del mercado. Este patrón de gasto incluye tanto los gastos en bienes de consumo como el gasto realizado en ocio, esto es el gasto total del individuo. Es así que se incluye el “gasto total” desde t en adelante, porque un aumento en la probabilidad de supervivencia entre v y t influye directamente en las probabilidades de supervivencia posteriores y, por ello, también hace más probable los flujos de ingresos posteriores.

• En segundo lugar, este valor depende de la constante d , que refleja el grado de concavidad de la función de utilidad. De esta manera, mientras menor es d, mayor es el valor económico de la vida. La razón es que mientras más cóncava sea la función de utilidad, los individuos desean menores fluctuaciones en sus patrones de gasto y, por tanto, valoran más los periodos adicionales de vida cuyos valores de consumo son más parecidos a los anteriores.Finalmente, el valor depende del último factor de la ecuación Este es el

cambio en tasas de supervivencia debido a la implementación del programa de salud entre v y t . En el caso particular donde el efecto de la supervivencia sólo afecta el periodo de v a t y lo hace proporcionalmente, se calcula como incremento finito, es decir: El impacto de los cambios en la tasa de supervivencia entre v y t depende de aquellas tasas que no han cambiado, es decir, de las que están entre e y v y de t a ґ . De esta manera, cuanto mayor sea la importancia relativa de estas probabilidades de supervivencia que no varían (es decir, las relacionadas con periodos en los que no se ha aplicado el programa de salud), mayor es el valor económico del programa. Existe complementariedad entre las tasas de supervivencia. Esto es claro si se toma en cuenta que un programa de salud de poco sirve si solamente aumenta la probabilidad de supervivencia por unos pocos periodos, pero con posterioridad existe certidumbre de fallecimiento. En contraposición, cuando la probabilidad de supervivencia posterior al programa es más alta, implementar el programa permitirá disfrutar con bastante más certidumbre de los flujos futuros.

La ecuación (12) será utilizada a continuación para realizar distintos ejercicios concernientes a determinar el valor económico de la vida en el caso nicaragüense. Con este propósito, la próxima sección se dedica a describir la forma de calibrar el modelo, mientras que la siguiente muestra los resultados.

5. Aplicación del modelo

5.1 Calibración del modelo

Para poder calibrar el modelo con el objetivo de encontrar el valor económico de la vida, se siguieron una serie de pasos. El primer paso fue determinar el patrón de gasto de las personas a través de su vida , que en este modelo tiende a Una vez realizado este paso, el siguiente consistió en determinar la constante d y a que determinan la concavidad y el peso del ocio en la función de utilidad. Una vez cumplidos estos pasos, solamente restó el paso culminante, que

Page 11: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

17

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

consistió en encontrar una tasa de interés a la que se descuenten los flujos de gasto y la evolución de las probabilidades de supervivencia que determinan

En este paso se utilizaron las encuestas de empleo 2000, 2003, 2004, 2005, 2006, 2007 y 2008 (INIDE, 2009). El objetivo del uso de dichas encuestas fue evaluar ciertas condiciones del mercado laboral en los últimos años, teniendo en cuenta diferentes tramos de edades que permitirían diferenciar grupos etarios que son más o menos vulnerables a diferentes tipos de enfermedades. Luego se procedió a determinar específicamente el salario promedio por edad de la población nicaragüense dividida por sexo (perfil de ingreso por edad en un momento determinado en el tiempo) con el objetivo de estimar el gasto en ocio. Esto se hizo concretamente con la encuesta de 2008.

En el Cuadro 1 se muestra la evolución de las horas trabajadas para diferentes grupos de edades y divididas por sexo durante el periodo 2000-2008. En ella se aprecia una estabilidad en cuanto a las horas trabajadas desde el año 2000. Además, tanto los hombres como las mujeres en promedio trabajan las mismas horas en el primer estrato de edad, es decir de los 15 a los 19 años. Luego de eso se observa que los hombres trabajan de los 20 a los 24 años en promedio alrededor de 50 horas y luego de los 25 a los 49 años 51 horas, mientras que las mujeres desde los 20 hasta los 49 años trabajan 47 horas. Esto quiere decir que, en promedio, en la mayor parte de la vida laboral de los nicaragüenses los hombres trabajan cuatro horas semanales más que las mujeres, y esta diferencia alcanza las cinco horas en promedio en el periodo que empieza a partir de los 50 años y en el cual culmina la vida laboral.

Cuadro 1. Horas promedio trabajadas en Nicaragua por sexo y grupo de edad, 2000-2008

Horas HombresEdad 15-19 20-24 25-29 30-34 35-39 40-44 45-49 50-54 55-59 60-64 65 y más

2000 46 50 51 51 51 51 51 50 49 50 47

2003 42 48 50 49 51 50 50 50 48 46 44

2004 48 51 51 51 51 51 50 50 49 48 45

2005 46 50 51 52 52 51 51 50 49 46 46

2006 47 50 51 51 52 53 51 51 52 50 46

2007 47 49 50 52 51 50 49 51 50 46 46

2008 47 50 51 51 51 51 51 50 51 48 45

MujeresEdad 15-19 20-24 25-29 30-34 35-39 40-44 45-49 50-54 55-59 60-64 65 y más

2000 46 48 48 48 48 48 49 48 49 42 42

2003 40 45 47 45 45 46 45 46 41 42 40

2004 46 48 47 47 48 47 46 45 44 40 42

2005 47 48 48 47 48 48 48 46 44 43 40

2006 48 48 48 46 47 47 47 46 47 42 40

2007 45 47 46 46 48 48 46 44 45 42 38

2008 49 48 48 46 47 47 45 45 43 41 40

Fuente: Elaboración propia en base a Encuesta de Medición de Empleo (EME) 2000, 2003, 2004, 2005, 2006, 2007 y 2008 (INIDE, 2009).

Page 12: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

18

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

En el Cuadro 2 se observa la evolución del salario real en Nicaragua por estrato de edades y dividido por sexo en el periodo 2000-2008. El análisis de estos datos muestra que cuando tanto hombres como mujeres pasan del primer estrato de edad (15-19 años) al segundo (20-24 años) experimentan la mayor variación de sus ingresos a lo largo de su vida ya que el salario real aumenta en promedio para hombres y mujeres 56.38% y 52.81% respectivamente. A partir de ese momento se experimentan sucesivos pero desacelerados aumentos del salario real tanto para hombres como para mujeres, aunque para las mujeres estos aumentos del salario se detienen en el estrato que va de los 45 a los 49 años, donde el salario empieza a experimentar decrecimientos sucesivos empezando por una caída de 2.06% en dicho estrato seguido por caídas de 3.53%, 14.71%, 22.10% y 8.09% en los estratos siguientes. Por otro lado, para los hombres, a diferencia de las mujeres, la caída de los salarios reales se empieza a manifestar hasta el estrato que va de los 55 a los 59 años.

En lo que respecta a la diferencia de remuneración entre hombres y mujeres, en promedio a lo largo de la vida los hombres ganan un 45.13% más que las mujeres y estas diferencias salariales se manifiestan desde el primer estrato de edad (15-19 años), donde la diferencia es solamente de 16.52%. Esta brecha se ensancha a lo largo de los siguientes estratos de tal forma que de manera sucesiva se observa cada vez una mayor diferencia hasta llegar al estrato que va de los 60 a los 64 años, donde la diferencia llega a ser de un 80.65%. Finalmente, en el último estrato (mayores de 65 años) se observa que cae hasta 66.44%.

Page 13: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

19

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Cua

dro

2. S

alar

ios

cons

tant

es p

rom

edio

men

sual

en

córd

obas

de

1994

en

Nic

arag

ua, p

or s

exo

y gr

upo

de e

dad,

200

0-20

08

Sa

lari

os

Rea

les,

C

$ 19

94

H

ombr

es

Eda

d15

-19

20-2

425

-29

30-3

435

-39

40-4

445

-49

50-5

455

-59

60-6

465

y m

ás20

0050

074

910

0311

4412

7615

0614

2713

8314

5411

5110

5520

0342

965

493

110

0611

1812

2915

4218

3212

1011

7180

5

2004

333

593

800

948

1015

1265

1415

1229

1045

990

841

2005

457

709

903

1217

1232

1269

1422

1411

1124

853

872

2006

497

742

1025

1117

1243

1442

1416

1455

1290

1015

944

2007

506

799

956

1097

1205

1369

1470

1434

1310

1074

928

2008

521

825

1020

1256

1276

1353

1358

1484

1388

1283

936

M

ujer

es

Eda

d15

-19

20-2

425

-29

30-3

435

-39

40-4

445

-49

50-5

455

-59

60-6

465

y m

ás20

0038

157

878

081

888

895

096

682

770

761

446

120

0343

456

064

182

189

010

1684

183

965

055

761

820

0428

449

466

687

281

884

281

286

065

140

446

520

0537

360

479

082

492

591

197

110

1671

458

353

520

0644

261

382

989

494

695

595

497

984

961

258

420

0744

271

380

587

594

393

898

584

577

267

851

620

0842

769

188

489

394

210

3597

991

310

1372

465

5Fu

ente

: Ela

bora

ción

pro

pia

en b

ase

a la

s enc

uest

as d

e em

pleo

200

0, 2

003,

200

4, 2

005,

200

6, 2

007

y 20

08 (I

NID

E, 2

009)

.

Page 14: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

20

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

050

0010

000

1500

0

20 40 60 80 100años

Hombres_11_años_de_escolaridad Mujer_11_años_de_escolaridadHombres_16_años_de_escolaridad Mujer_16_años_de_escolaridad

Fuente: Elaboración propia

Curvas de Mincer

Como antes se mencionó, en este caso las estimaciones referentes al gasto en ocio se basan en la Encuesta de Medición de Empleo de 2008 (INIDE, 2009). Se pretende calcular el costo de oportunidad del ocio a través de estimaciones de ingreso laboral por medio de una estimación de tipo Mincer (1974). De esta manera también se podrá obtener una aproximación de salario por hora que permitirá estimar el valor del ocio.

La encuesta considerada fue realizada a individuos durante el año 2008. Es una encuesta que únicamente incluye preguntas del ámbito laboral. Esta base de datos proporciona la información necesaria para estimar las ecuaciones de tipo Mincer (1974), que utiliza como variable dependiente el ingreso (nominal) laboral de los trabajadores y como variables independientes, la edad, la edad al cuadrado, los años de educación y el sexo de las personas. Adicionalmente, es importante mencionar que esta ecuación fue estimada para personas mayores a 15 años, así también, es necesario recalcar que se incluyen dummies para los individuos entre 65 y 75 años, 70 y 75 años, 75 y 80 años y mayores a 80 años que interactúan con la variable “edad”. Así mismo, en esta ecuación se corrigió el sesgo de selección de la entrada a la fuerza de trabajo por el conocido método de dos etapas de Heckman (1979), y de esa manera se concluyó que en el año 2008 no existe evidencia de este problema en la estimación.

En la Ilustración 1 se muestra la estimación de la evolución de los ingresos laborales de hombres y mujeres de 11 y 16 años de escolaridad. En dicho gráfico se aprecia una clara diferencia en los ingresos laborales entre hombres y mujeres para un mismo nivel de educación. Así mismo se aprecia una clara diferencia de ingresos entre individuos del mismo sexo pero con diferentes niveles de educación.

Ilustración 1. Evolución estimada de ingresos laborales a través del ciclo de vida, C$ 2008

Una vez determinada la evolución de los ingresos mensuales laborales a través del ciclo de vida, se procede a estimar el valor del ocio de la siguiente manera: se asume que el número de horas trabajadas por semana es de 48, esta suposición es

Page 15: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

21

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

020

4060

8010

0to

tal h

oras

sem

reg

ular

0 .05 .1 .15Density

muy ajustada a la realidad nacional. Esto se puede apreciar a través de la Ilustración 2, que muestra la distribución de las horas trabajadas por semana por parte de los trabajadores nicaragüenses en 2008. En dicho gráfico se observa que la distribución tiene una media de 48 horas y una distribución estándar de solamente 15.76 horas. Esto es consecuencia de que poco más del 27% de los individuos reportaron trabajar 48 horas por semana.

Una vez establecido este supuesto, se procede a calcular el salario por hora a través del ciclo de vida, utilizando las estimaciones anteriores y dividiéndolas por 192 horas4. Con esta estimación del salario por hora se determina el gasto en ocio multiplicando salario por hora a través del ciclo de vida por 480 horas5.

Ilustración 2. Distribución de horas trabajadas por semana, 2008

El paso siguiente es calibrar las probabilidades de supervivencia y el parámetro dα. Con el propósito de calibrar el parámetro dα se sigue la siguiente estrategia: primeramente es necesario establecer que el valor económico de la vida estadística al nacer es el aumento en el nivel de ingresos inicial, da0, que compensa por el aumento en el riesgo de mortalidad en todos los periodos posteriores, dSt

e = dS, V t, tal que el nivel de utilidad esperada del individuo no cambie, dL0 = 0 . Es decir:

Dado que, entonces:

4 48 horas por semana por cuatro semanas al mes.5 7 días a la semana por cuatro semanas al mes, menos 192 horas trabajadas.

020

4060

8010

0to

tal h

oras

sem

reg

ular

0 .05 .1 .15Density

020

4060

8010

0to

tal h

oras

sem

reg

ular

0 .05 .1 .15Density

020

4060

8010

0to

tal h

oras

sem

reg

ular

0 .05 .1 .15Density

Page 16: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

22

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Introduciendo (9) en (11), (13) y suponiendo una tasa de interés constante a través del ciclo de vida. rx = r, vx, se obtiene en definitiva.

En el caso de Nicaragua existe cierta evidencia del valor de La Conferencia Interamericana de Seguridad Social (CISS, 2009) reporta que el valor de la vida estadística en Nicaragua en 2009 era de alrededor de 126,884 dólares de 2006 (2,229,351.88 córdobas de 2006). Es así que en este trabajo se asume ese valor para

Con esta información, así como con las anteriores estimaciones del valor del ocio y las tablas de mortalidad, se procede a calcular los parámetros .

5.2 Probabilidades de supervivencia

Las probabilidades de supervivencia se obtuvieron a partir de las tablas anuales de vida, las cuales están conformadas por la población total (PX), número de defunciones (DX), probabilidades de morir (qX), número de sobrevivientes en cohorte hipotético de 100,000 nacidos vivos (LX) y probabilidades de sobrevivir (SX). Todo esto es determinado para individuos de 0 a 100 años dividido por sexo.

Para la obtención de las probabilidades de supervivencia por edad de los individuos se obtuvo información de la población y defunciones por grupos de edad y divididas por sexo. Dicha información fue facilitada por la oficina de estadísticas del MINSA-Central y el INIDE. En esta información se describe la mortalidad por grupos de edades en intervalos de cinco años desde la fecha de nacimiento hasta los 100 años de edad.

En el modelo utilizado se requiere calcular el valor económico de la vida año a año, por lo que resulta necesario construir tablas anuales. Es para ello que se utilizó el método de construcción de tablas anuales de vida (anual life tables) del National Center for Health Statistics (1999). En este método se calculan interpolaciones anuales que se denominarán por PX y DX, donde PX es la población de edad X y DX es el número de defunciones para población con edad X. Los valores PX se obtienen por interpolación utilizando la formula de Beer:

En este caso, es la población de edad X+k (donde k=0,1,2,3,4), 5Px es la población total con edad entre X, y X+5 y son los coeficientes de interpolación de Beer que se muestran en el Cuadro 3. Para interpolar los valores de 0 a 5 años, de 5 a 95 años y de 95 a 100 años, se aplican las formulas:

020

4060

8010

0to

tal h

oras

sem

reg

ular

0 .05 .1 .15Density

La interpolación para todos los grupos de edades es similar con la excepción de que al utilizar el coeficiente de Beer para interpolar las edades de 5 a 9 y de 10 a

Page 17: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

23

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

14 años se utiliza un valor ficticio6 de 5D0. Este es un valor ficticio del número de defunciones en el intervalo de 0 a 4 años de edad. Esto es así ya que al realizar el ejercicio de la interpolación, los números obtenidos para las edades de 5 a 14 años son discontinuos en relación a los números obtenidos para las edades entre 0 y 4 años de edad.

Cuadro 3. Coeficiente de Beer para realizar interpolaciones

0 a 4 años 0 5 10 15 20

0 0.3333 -1.636 -0.01 0.0796 -0.0283

1 0.2595 -0.078 0.013 0.01 -0.0045

2 0.1924 0.0064 0.0184 -0.0256 0.0084

3 0.1329 0.0844 0.0054 -0.0356 0.0129

4 0.0819 0.1508 -0.0158 -0.0284 0.0115

5 a 9 años 0 5 10 15 20

5 0.0404 0.2 -0.0344 -0.0128 0.0068

6 0.0093 0.2268 -0.0402 0.0028 0.0013

7 -0.0108 0.2272 -0.0248 0.0112 -0.0028

8 -0.0198 0.1992 0.0178 0.0072 -0.0038

9 -0.0191 0.1468 0.0822 -0.0084 -0.0015

x a x+5 años x-10 x-5 X x+5 x+10

X -0.0117 0.0804 0.157 -0.0284 0.0027

x+1 -0.002 0.016 0.22 -0.04 0.006

x+2 0.005 -0.028 0.246 -0.028 0.005

x+3 0.006 -0.04 0.22 0.016 -0.002

x+4 0.0027 -0.0284 0.157 0.0804 -0.0177

95 a 99 años 80 85 90 95 100

95 -0.0015 -0.0084 0.0822 0.1468 -0.0191

96 -0.0038 0.0072 0.0172 0.1992 -0.0198

97 -0.0028 0.0112 -0.0248 0.2272 -0.0108

98 0.0013 0.0028 -0.0402 0.2268 0.0093

99 0.0068 -0.0128 -0.0344 0.2 0.0404

Una vez realizado este paso el siguiente es estimar primeramente la probabilidad de una persona de morir a los X años, qX, en el tramo de edad de X a X+1. Luego se debe determinar el número de sobreviviente de edad X de un cohorte de 100,000 nacidos vivos, que se denominará LX .

Se estima LX de la forma: LX = LX - 1 (1 - qX - 1) , donde L0 100,000. Pero antes se debe determinar qX Ésta se determinará de la forma:

6 Este valor ficticio se calcula: D*

0=2.4558V - 0.59332D

5 - 0.01965D

10 + 0.22004D

15 Donde V es la suma de las muertes ocurridas entre dos y cuatro años.

Page 18: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

24

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Sin embargo, se debe tener cuidado con las probabilidades de fallecer de los menores a un año. Esto se debe a que las defunciones de este grupo de edad corresponden a nacidos en el año 2008 y defunciones del año anterior. Es por ello que se utiliza un factor de separación, f, que indica la proporción de los nacidos el año anterior pero fallecidos este año. Es así que la probabilidad de fallecimiento para este grupo de edad se calcula:

Donde Bt y Bt-1 son el numero de nacidos en el año 2008 y el anterior, respectivamente. En este caso, de los datos de mortalidad de menores de un año reportados se calcula un f = 0.55. Es así que se tiene la información necesaria para determinar la probabilidad de fallecimiento, LX, y luego a partir de ésta la probabilidad de supervivencia, que se denomina por SX.

6. Determinación del beneficio económico social

El primer ejercicio a resolver es la cuantificación del valor económico de la vida. Primeramente se determinará la disponibilidad a pagar por aumentos de la probabilidad de supervivencia sin tomar en cuenta una política de salud en particular que afecte directamente a una enfermedad específica. Por lo tanto, en este primer ejercicio no se especificará la causa (enfermedad combatida) de la disminución en la tasa de mortalidad. Para ello se debe estimar la ecuación (14), asumiendo que v= t - 1, con motivo de tomar en cuenta las diferencias tanto en capital humano como la discriminación imperante en Nicaragua. Se debe realizar este ejercicio para distintos individuos, con diferentes niveles educativos (primaria completa, secundaria completa y universidad completa) y diferente sexo.

Los resultados indican que el valor económico de la vida alcanza su máximo aproximadamente a los 43 años (véase Ilustración 3). Pero es notorio que existe una diferencia sustancial entre los individuos del mismo sexo pero con diferentes grados de escolaridad, además de una diferencia aún más marcada entre individuos de diferente sexo a tal punto que un hombre con 11 años de escolaridad (secundaria completa) reporta casi el mismo valor que una mujer con 16 años de escolaridad (universidad completa), y los hombres con 6 años de escolaridad (primaria completa) reportan un valor mayor a las mujeres con 11 años de escolaridad (secundaria completa). Esto se debe a que las personas con menor escolaridad y las mujeres tienen un menor patrón de ingresos laborales a lo largo del ciclo de vida, y por consiguiente el costo de oportunidad de su ocio es menor.

Page 19: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

25

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

0.5

11.

52

2.5

MM

C$2

008

0 20 40 60 80 100Edad

H_6_Años_Escolaridad M_6_Años_EscolaridadH_11_Años_Escolaridad M_11_Años_EscolaridadH_16_Años_Escolaridad M_16_Años_Escolaridad

Ilustración 3. Valor de vida, Nicaragua MMC$2008

6.1 Valor económico de erradicar enfermedades especificas

En este punto se obtendrá el valor monetario que producirían programas de salud que incidan en las tasas de mortalidad de las enfermedades que más afectan a la población nicaragüense. Dichos programas pueden ser de carácter preventivo o curativo, de tal modo que las familias puedan obtener beneficios adicionales como resultado de la disminución en los costes de tratamiento. En 2008 fallecieron 10,476 hombres y 7,765 mujeres. Esto representa una tasa bruta de mortalidad de 4.8 por cada mil habitantes; de 5.4 para hombres y 4.2 para mujeres. El 30.48% de la totalidad de los fallecimientos se deben a cinco enfermedades y a accidentes de tránsito. Esta última causa de muerte se incluye por la gran importancia que tiene a nivel nacional, siendo la sexta causa de muerte más común. Por otro lado, las enfermedades a tratar son: infarto agudo de miocardio, insuficiencia renal crónica, accidente vascular encefálico agudo7, neumonía y enfermedades pulmonares obstructivas crónicas.

El Cuadro 3 muestra el desglose de estas causas de fallecimiento. En él se puede apreciar que las causas de muerte para hombres y mujeres difieren considerablemente en algunas enfermedades y en otras no. También se observa que la principal causa de muerte en ambos sexos es el infarto agudo de miocardio.

7 No se especifica si es hemorrágico o isquémico.

Page 20: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

26

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

05

1015

20P

orce

ntaj

e de

Mor

talid

ad T

otal

0 20 40 60 80 100Grupos_de_edades

Infarto agudo de miocardio Insuficiencia renal crónicaAcc. Vascular encefálico agudo NeumoníaEnfermedad pulmonar obstructiva crónica

Cuadro 3. Principales causas de fallecimiento, Nicaragua 2008, número de defunciones

Causas de fallecimiento Hombres MujeresInfarto agudo de miocardio 907 748Insuficiencia renal crónica 611 199

Acc. vascular encefálico agudo 336 330Neumonía 521 418

Enfermedad pulmonar obstructiva crónica 296 245Accidentes de tránsito 301 47

Fuente: Oficina de estadísticas del MINSA-Central.

La Ilustración 4 descompone las causas de muerte de acuerdo a grupos de edades. De este gráfico se puede desprender que todas las causas de muerte, con excepción de los accidentes de tránsito (excluido del gráfico porque afectan a individuos de modo aleatorio), son muy incidentes en los individuos mayores a 40 años. Sin embargo, sólo la neumonía es importante para individuos menores a 22 años.

A continuación se determinó el beneficio de programas de salud que erradiquen la mortalidad por las causas antes mencionadas8. Cuando se erradica cada una de las causas de fallecimiento y se mantienen constantes las demás, las probabilidades de supervivencia cambian. De este modo, el valor económico de la vida entre estos dos casos varía debido a estas probabilidades. Es por ello que para evaluar los beneficios del programa, se procedió a construir tablas anuales suponiendo que se erradica cada enfermedad, mientras las demás se mantienen contantes.

Dado que se determinó el valor de erradicar la mortalidad de cada una de las enfermedades, en términos de notación se denominó Sv

-j,t como la probabilidad de supervivencia entre v y t, una vez que se erradicó la enfermedad j. Los Cuadros 4 a 10 (ver en el Anexo) muestran este ejercicio para las causas de muerte en estudio.

8 De este modo también es posible determinar los beneficios sociales de programas que disminuyan la mortalidad de cualquier enfermedad en un monto determinado.

Ilustración 4. Causas específicas de muerte como porcentaje de la mortalidad total

Page 21: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

27

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Una vez efectuado este ejercicio, se construye el beneficio del programa o la disponibilidad a pagar, es así que se determinó:

Es decir, la disponibilidad a pagar por erradicar la enfermedad j es simplemente la diferencia entre la disponibilidad a pagar por aumentos de vida bajo dos regímenes diferentes de supervivencia (antes y después el programa de salud).

Las ganancias por erradicar cada una de estas causas de muerte para individuos con diferentes niveles educativos y sexo se muestran en las Ilustraciones 5 a 10. La Ilustración 5 muestra el caso de erradicar muertes por infarto agudo de miocardio. La disponibilidad a pagar aparece desde los 45 años y crece significativamente hasta que empieza a disminuir a los 91 años. La disponibilidad a pagar máxima por esta enfermedad es mucho mayor a las demás, esto se debe a que las tasas de mortalidad por esta enfermedad son mucho mayores a las demás.

Otro caso interesante es la neumonía, que muestra una gran disponibilidad a pagar al ser erradicada para individuos mayores a 80 años mientras que existe una pequeña disponibilidad a pagar por individuos menores a 20 años. Esto se debe a que la neumonía representa aproximadamente el diez por ciento de la mortalidad de individuos menores de 20 años. Es por ello que erradicarla en ese grupo de edad no reporta gran ganancia, ya que las tasas de mortalidad en este grupo son tan pequeñas que una caída adicional del diez por ciento tiene un efecto relativamente pequeño. Por otro lado, la neumonía representa aproximadamente el quince por ciento de la mortalidad en los individuos mayores a 80 años. Sin embargo, en este grupo hay una enorme disposición pagar debido a que existe una alta mortalidad año a año en su rango de edad. Se observa una situación similar para la insuficiencia renal crónica, accidente vascular encefálico agudo y enfermedad pulmonar obstructiva crónica.

En cuanto a los accidente de tránsito, se observa una baja disponibilidad máxima a pagar en relación a las demás causas de muerte. Esto se debe a que esta causa es la que menos afecta a la población en comparación con las demás.

6.2 Beneficio económico de erradicar enfermedades especificas como porcentaje del PIB

Hasta el momento se ha determinado cuál es el valor económico de la vida para agentes individuales que variaban de acuerdo a su edad, sexo y nivel educativo. En este punto se procede a describir el valor total para la sociedad de erradicar alguna de estas causas de muerte en Nicaragua. Es por ello que en esta sección se presenta cuánto es el valor agregado de erradicar dichas causas de muertes.

Los Cuadros 11 y 12 revelan los resultados. En ellos se observa el cálculo de los beneficios per cápita para hombres y mujeres y por edad, de erradicar las causas de fallecimiento. Así mismo se muestra el beneficio total de cada grupo de edad (que se obtiene multiplicando el monto de ganancia per cápita por el tamaño de la población con esas características). Posteriormente se reportan esos beneficios sociales totales como porcentaje del PIB.

05

1015

20P

orce

ntaj

e de

Mor

talid

ad T

otal

0 20 40 60 80 100Grupos_de_edades

Infarto agudo de miocardio Insuficiencia renal crónicaAcc. Vascular encefálico agudo NeumoníaEnfermedad pulmonar obstructiva crónica

Page 22: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

28

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Los beneficios obtenidos son significativamente grandes dado que, aunque las ganancias per cápita sean moderadas, el tamaño de la población beneficiada produce beneficios sociales considerables. Es por ello que se dice que se presenta un efecto “masa” que amplifica los impactos de los programas de salud. En resumen, se puede mencionar que la erradicación de los infartos agudos de miocardio generan un beneficio económico social de 10.62% del PIB; la erradicación de la insuficiencia renal crónica un 2.87%; la de los accidentes vasculares encefálicos agudos de 4.63%; la de la neumonía de 4.79%; la de las enfermedades pulmonares obstructivas crónicas de un 3.4%; y la de los accidentes de tránsito de 0.43%.

Es importante notar que estos resultados son mayores a los encontrados por Cerda y Torche (2005) para las enfermedades coincidentes en ambos estudios, ya que mientras para Chile la erradicación de la neumonía y los accidentes vasculares encefálicos agudos genera un beneficio social de alrededor de 2.89% y 1.48% del PIB respectivamente, en Nicaragua genera un 4.79% y 4.65% respectivamente. Esto se debe a que en Chile las tasas de mortalidad provocadas por estas enfermedades son mucho menores a las que dichas enfermedades generan en Nicaragua.

7. Conclusiones

El modelo de Cerda y Torche (2005), calibrado con información de la economía nicaragüense, es aplicable para la evaluación de políticas públicas en el sector salud. Esto fue demostrado con la evaluación de una política pública de erradicación de las seis principales causas de muertes en 2008 (infarto agudo de miocardio, insuficiencia renal crónica, accidentes vasculares encefálicos agudos, neumonía, enfermedad pulmonar obstructiva crónica y accidentes de tránsito).

Además, el modelo permitió realizar las primeras estimaciones del valor económico de la vida para Nicaragua. Para ello se siguió un enfoque teórico que muestra que este valor, a pesar de ser considerablemente alto, es muy inferior al encontrado en otros países como Chile (Cerda & Torche, 2005) y Estados Unidos (Murphy & Topel, 1999). Sin embargo, es importante aclarar que dicho valor cambia considerablemente a través del ciclo de vida, así como entre individuos con diferente sexo y niveles educativos.

Así mismo, con los resultados del ejercicio práctico de la determinación del beneficio económico social de una política pública de erradicación de enfermedades específicas, se concluyó que un programa de erradicación de los infartos agudos de miocardio generaría un mayor beneficio económico social.

Finalmente, estos beneficios generados por la aplicación de programas de salud se pueden comparar con beneficios sociales generados por inversiones en otros sectores – como educación, demografía, pobreza y desigualdad –, de tal manera que se inviertan los recursos en el sector en donde generen un mayor rendimiento social por unidad monetaria gastada, permitiendo elevar el bienestar y desarrollo económico de la población nicaragüense.

Page 23: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

29

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

8. Anexos

Cuadro 4. Tabla de vida anual

Page 24: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

30

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Cuadro 5. Tabla de vida erradicando infarto agudo de miocardio

Page 25: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

31

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Cuadro 6. Tabla de vida erradicando insuficiencia renal crónica

Page 26: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

32

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Cuadro 7. Tabla de vida erradicando accidente vascular encefálico agudo

Page 27: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

33

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Cuadro 8. Tabla de vida erradicando neumonía

Page 28: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

34

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Cuadro 9. Tabla de vida erradicando enfermedad pulmonar obstructiva crónica

Page 29: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

35

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Cuadro 10. Tabla de vida erradicando accidentes de tránsito

Page 30: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

36

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

010

2030

40M

illon

es C

$ 20

08

0 20 40 60 80 100Edad

H_6_años_escolaridad M_6_años_escolaridadH_11_años_escolaridad M_11_años_escolaridadH_16_años_escolaridad M_16_años_escolaridad

050

100

150

200

Mill

ones

C$

2008

0 20 40 60 80 100Edad

H_6_años_escolaridad M_6_años_escolaridadH_11_años_escolaridad M_11_años_escolaridadH_16_años_escolaridad M_16_años_escolaridad

Ilustración 5. Valor de eliminar muertes por infarto agudo de miocardio

Ilustración 6. Valor de eliminar muertes por insuficiencia renal crónica

Page 31: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

37

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

010

2030

4050

Mill

ones

C$

2008

0 20 40 60 80 100Edad

H_6_años_escolaridad M_6_años_escolaridadH_11_años_escolaridad M_11_años_escolaridadH_16_años_escolaridad M_16_años_escolaridad

020

4060

80M

illon

es C

$ 20

08

0 20 40 60 80 100Edad

H_6_años_escolaridad M_6_años_escolaridadH_11_años_escolaridad M_11_años_escolaridadH_16_años_escolaridad M_16_años_escolaridad

Ilustración 7. Valor de eliminar muertes por accidente vascular encefálico agudo

Ilustración 8. Valor de eliminar muertes por enfermedad pulmonar obstructiva crónica

Page 32: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

38

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

01

23

4M

illon

es C

$ 20

08

0 20 40 60 80 100Edad

H_6_años_escolaridad M_6_años_escolaridadH_11_años_escolaridad M_11_años_escolaridadH_16_años_escolaridad M_16_años_escolaridad

020

4060

80M

illon

es C

$ 20

08

0 20 40 60 80 100Edad

H_6_años_escolaridad M_6_años_escolaridadH_11_años_escolaridad M_11_años_escolaridadH_16_años_escolaridad M_16_años_escolaridad

Ilustración 9. Valor de eliminar muertes por enfermedad pulmonar obstructiva crónica

Ilustración 10. Valor de eliminar muertes por accidentes de tránsito

Page 33: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

39

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Cuadro 11. Valor económico de erradicar infarto agudo de miocardio, insuficiencia renal crónica y accidente vascular encefálico agudo. Miles de millones C$ 2008.

Page 34: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

40

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Cuadro 12. Valor económico de erradicar neumonía, enfermedad pulmonar obstructiva crónica y accidentes de tránsito. Miles de millones C$2008.

Page 35: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

41

Encuentro No. 94, 7-41, 2013

¿Cómo saber qué políticas públicas generan mayor bienestar?

Referencias bibliográficas

Arthur, W. (1981). The Economics of Risks to Life. A.E.R. (71), 54-64.Cerda, R. & Torche, A. (2005). El valor económico de reducir tasas de mortalidad: El caso

de Chile. Documento de trabajo No. 285, Santiago: Pontificia Universidad Católica de Chile, Departamento de Economía.

Conferencia Interamericana de Seguridad Social. [CISS]. (2009). Preferencias, Gasto en Salud y el Valor económico de la vida Estadística en América. CISS Working Paper No. 2009/01, 2009b. Inter-American Conference on Social Security. Recuperado el 20 de enero de 2011, de www.ciss.org.mx/pdf/es/estudios/CISS-WP-0901.pdf

Cropper, M. & Freeman, A. (1991). Environmental Health Effects, en Braden, J. B. & Kolstad, C. D. Contribution to Economic Analysis: Measuring the Demand for Environmental Quality. (pp. 117-140). Amsterdam: Elsevier Science Publications.

Cropper, M., Aydede, S. & Portney P. (1992). Rates of Time Preference for Saving Lives. American Economic Review, 82 (2), 469-473.

Heckman, J. (1979). Sample selection bias as a specification error. Econometrica, 47 (1), 153-161.

Instituto Nacional de Información de Desarrollo [INIDE]. (2009). Encuesta de Medición del Empleo-EME. Soporte en CD. Managua: Autor.

Jones-Lee, M., Hammerton, M. & Phillips, P. (1985). The Value of Safety: Results of a National Sample Survey. The Economic Journal, (95), 49-72.

Marin, A. & Psacharopoulos, G. (1982). The Reward for Risk in the Labor Market: Evidence from the United Kingdom and a Reconciliation with Other Studies. Journal of Economical Economy, 90 (4), 827-853.

Martínez, J., Abellán, J. & Pinto, J. (2007). El valor monetario de la vida estadística en España a través de las preferencias declaradas. Instituto de Estudios Fiscales, Hacienda Pública Española. Revista de Economía Pública,183 (4), 125-144.

Mincer, J. (1974). Schooling, Experience, and Earnings. New york: NBER Press.Murphy, K. & Topel, R. (1999). The economic value of medical research. Chicago:

University of Chicago Business School.Murphy, K. & Topel, R. (2006). The Value of Health and Longevity. Journal of

Political Economy, 114 (5), 871-904.National Center for Health Statistics. (1999). Method for Constructing Complete Annual

U.S. Life Tables. Recuperado el 07 de febrero de 2011, de http://www.cdc.gov/nchs/products/life_tables.htm

Riera, A., Ripoll, A. & Mateu, J. (2007). Estimación del valor estadístico de la vida en España: Una aplicación del método de salarios hedónicos. Instituto de Estudios Fiscales, Hacienda Pública Española. Revista de Economía Pública, 181 (4), 29-48.

Rosen, S. (1988). The Value of Changes in Life Expectancy. Journal of Risk and Uncertainty J. Rish and Uncertainly, 1(3), 285-304.

Viscusi, W. (1993). The Value of Risks to Life and Health. Journal of Economic Literature, 31 (4), 1912-1946.

Viscusi, W. & Moore, M. (1989). Rates of Time Preference and Valuation of the Duration of Life. Journal of Public Economics, (38), 297-31.

Page 36: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua42

Encuentro No. 94, 42-6 1, 2013

* Estudiante de Economía Aplicada en la Universidad Centroamericana. Rotonda Rubén Darío 150 mts. al oeste. Apartado 69, Managua, Nicaragua. Correo electrónico:[email protected]

** Departamento de Economía Aplicada de laUniversidad Centroamericana. Rotonda Rubén Darío 150 mts. al oeste. Apartado 69, Managua, Nicaragua. Correo electrónico: [email protected]

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

Francisco Mendoza Tijerino* y Álvaro Altamirano Montoya**

Recibido: junio de 2012 / Aceptado: febrero de 2013

En el presente artículo se analiza el subempleo utilizando información de la última Encuesta Continua de Hogares 2010, publicada por el Instituto Nacional de Información del Desarrollo (INIDE) de Nicaragua. Se busca identificar las industrias que presenten más problemas de subempleo, tomando en cuenta que los individuos que se encuentren subempleados son individuos que están inconformes e insatisfechos al momento de realizar las labores productivas. Se encuentra que, en relación a las demás industrias del país, la industria de la construcción es la que presenta mayores probabilidades de contar con empleados con deseos de trabajar más y no poder hacerlo.

Palabras clave: subempleo / industrias productivas / Nicaragua

1. Introducción

Según la Encuesta de Medición del Nivel de Vida (EMNV) para el año 2009, elaborada por el Instituto Nacional de Información del Desarrollo (INIDE, 2010), el 56 por ciento de los hogares encuestados ha indicado que el principal problema que percibe Nicaragua y que afecta la seguridad ciudadana es el desempleo. Cabe resaltar que la tasa de desempleo promedio oficial ha sido de 6.35 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) desde el año 2003 hasta el año 2009, una tasa de desempleo que se considera baja si se compara con las tasas de desempleo de otros países latinoamericanos.

Page 37: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

43

Encuentro No. 94, 42-61, 2013

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

Dada esta discrepancia en percepciones, se presenta una paradoja que puede ser aclarada si se analiza otro indicador que capture más a cabalidad la problemática que aprecia la ciudadanía. Este indicador es el subempleo, un concepto utilizado para caracterizar una situación en la que la fuerza de trabajo permanece inactiva o poco aprovechada –y también infra-remunerada–, ya sea por insuficiencia de capital u otros factores, pero que es imprescindible toda ella en determinados momentos del ciclo productivo (Ahijado, 1985).

La dificultad que plantea el subempleo radica en que se desperdicia potencial productivo de los trabajadores y esta situación ha envuelto a un gran segmento de la fuerza laboral nicaragüense en los últimos años. De igual forma, no tener una homogeneidad en dicho potencial de producción en las distintas industrias dificulta conocer el peso que puede tener el factor trabajo en los procesos productivos.

Esta contribución busca contribuir a llenar el vacío existente en el análisis sobre el subempleo en Nicaragua. Es escaza la literatura concerniente a la temática a pesar de ser una problemática de envergadura. El artículo persigue identificar cuáles son las industrias productivas de Nicaragua que tienen mayores probabilidades de presentar agentes económicos bajo subempleo. El subempleo se analiza como inconformidad en las industrias. Se habla de inconformidad ya que el empleado desea trabajar más horas de las que el mercado le permite.

La importancia de la distinción e identificación a nivel industrial es que puede plantear el inicio de acciones de política económica, es decir, sugerir hacia dónde se deben dirigir los esfuerzos de las políticas de empleo y, por ende, las bases o los criterios de dichas políticas.

La herramienta a utilizar fue la aplicación de un modelo econométrico con respuesta cualitativa, en donde el valor de 1 se asignó al agente económico que desea trabajar más horas y no puede y 0 al agente económico que no lo desea. Se encontró la probabilidad de estar subempleado dado que el agente económico pertenece a Xi

industria.

Las industrias a utilizar fueron estimadas a partir de la distinción establecida en el manual publicado en el Banco Central de Nicaragua (BCN) titulado “Sistema de Cuentas Nacionales de Nicaragua año 1994”, sin embargo no es una distinción definitiva para propósitos de estimación econométrica.

Este artículo se divide en seis secciones principales. En la sección 2 se indican los antecedentes del mercado laboral de Nicaragua; en la sección 3 se presenta la literatura referente a la temática; seguidamente, en la sección 4, los materiales y el método a utilizar; en la sección 5 se establece el marco empírico, en el cual, inicialmente se caracterizará críticamente el subempleo en el país a nivel macroeconómico y a nivel microeconómico para luego proceder a la estimación econométrica; posteriormente, en la sección 6 se incluirán las conclusiones al respecto.

2. Antecedentes

El entramado institucional, en el sentido de North (1990) – es decir, todas las reglas y convenciones sociales, formales e informales – es de gran importancia para analizar el mercado de factores de producción y, más específicamente, el subempleo en el mercado de trabajo nicaragüense.

Page 38: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua44

Encuentro No. 94, 42-6 1, 2013

Las primeras afectaciones o cambios en materia de legislación laboral, a raíz de los programas de ajuste estructural y del cambio hacia un modelo abierto, se dieron en 1994 al modificarse algunas de las competencias del Ministerio del Trabajo que minaron su capacidad de defender a los trabajadores. Estas competencias se referían a la autoridad que tenía el Ministerio del Trabajo para resolver reclamos de los trabajadores de hasta un máximo de 5,000 córdobas, relacionados con prestaciones laborales.

• En 1996 se reformó el Código del Trabajo con normativas de flexibilización laboral, entre las cuales se destacan, por importancia:

• La posibilidad de contratar a un trabajador mediante contratos de plazo determinado, sin mínimos ni máximos de tiempo.

• La facultad de suspender labores por falta de materia prima o por motivos económicos o técnicos.

• Se limita la indemnización por despido injustificado a un mes de salario por cada uno de los tres primeros años trabajados y a 20 días por los siguientes, con un tope máximo de cinco meses de salario.Gamboa (2007) considera que la mayor debilidad del entorno legislativo

laboral de Nicaragua surge de la poca aplicabilidad del Código del Trabajo. Dentro de las omisiones prácticas más importantes de la ley encontramos la aplicación correcta del salario mínimo, de la estabilidad laboral, de la salud ocupacional, de la seguridad social, entre otros.

Sumado a esto, el pobre conocimiento de los trabajadores sobre sus derechos laborales y los medios para defenderlos, es una limitante para el fortalecimiento de las condiciones del mercado laboral nicaragüense.

Esta falta de práctica se debe principalmente a la escasez de recursos y capacidades del Ministerio del Trabajo (MITRAB) para vigilar los derechos de los trabajadores a través de inspecciones rutinarias. No obstante, el MITRAB ha realizado esfuerzos desde 2005 para ampliar la cobertura en dicho aspecto.

3. Revisión de literatura

La literatura concerniente al subempleo laboral, a pesar de tener un enfoque de aplicación distinto al que se busca en el presente documento, resalta rasgos claves de los agentes económicos inmersos en tales situaciones. Las características que presenten los trabajadores a nivel general en una economía pueden servir de guía para lograr una caracterización más delimitada a nivel de industrias.

Bell y Blanchflower (2011) establecen un estudio del subempleo laboral en un momento de choques de demanda para la economía, comprendido en el Reino Unido. La investigación construye un nuevo análisis para diferentes edades de los agentes económicos, considerando un marco conceptual en el que los costos son los que previenen un correcto ajuste al equilibrio de manera rápida. El marco de referencia en el que se basa el estudio establece que, tras algún choque de demanda, las empresas ajustarán inicialmente la utilización del factor trabajo antes del stock de trabajo con el que cuenta. La premisa que sostiene el marco de referencia utilizado radica en que es más costoso para una firma despedir trabajadores y contratar nuevos

Page 39: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

45

Encuentro No. 94, 42-61, 2013

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

(conlleva costos de entrenamiento, despido, contrato), por lo que el ajuste conlleva a una búsqueda de mayores contratos parciales por parte de los empleadores, generando así empleados con deseos de trabajar más y con más ganas de ejercer su potencial.

Así mismo, el ajuste de una empresa con respecto al factor trabajo también se puede llevar a cabo tomando en cuenta el tiempo de laborar que tiene un individuo en dicha empresa. Si el empleado presenta mayor tiempo trabajando en la firma es de esperarse que la firma reduzca sus horas de trabajo en lugar de despedirlo, asumiendo siempre que en la economía hay un choque de demanda.

En el contexto nicaragüense, una aplicación de tal marco referencial sería inviable ya que descansa en el hecho de contar con trabajadores (al menos en su mayoría) formales, donde al momento del despido y el contrato existan suficientes trabas legales que impidan minimizar costos de ajuste. Tanto tener que pagar por prestaciones al despedir, como tener que entrenar a un nuevo empleado, se perfilan como obstáculos al ajuste.

Nicaragua cuenta con niveles de formalidad muy bajos en comparación a los niveles de informalidad que imperan en la economía, lo que invalida que los costos de despido y de contrato conlleven altos costos para las empresas. Durante el período 2003-2009 el empleo formal en la economía nicaragüense ha representado alrededor del 35% de la PEA ocupada.

Por otro lado, Bernal (2008), en su estudio sobre la informalidad laboral en Colombia, concibe al subempleo como una medida de satisfacción por parte del trabajador. De esto se infiere que querer trabajar más y no poder es evidencia de trabajadores no satisfechos. Trabajar en condiciones de inconformidad implica que no se logra potenciar la capacidad productiva del empleado.

La autora, en su estudio realiza una conexión muy clara entre el subempleo y la informalidad: los trabajadores que se encuentran laborando informalmente son más probables de reportar deseos de trabajar más horas de las que trabajan ordinariamente. Si se toma en cuenta que en Nicaragua 7 de cada 10 trabajadores son informales, es de esperarse que un gran segmento de la población presente pérdidas de satisfacción al trabajar.

La condición antes expuesta realza la preocupación pues, según el BCN, el conjunto de industrias agropecuarias es el que logra abarcar a la mayor parte de la fuerza laboral en Nicaragua. Es éste, precisamente, el grupo que presenta mayor informalidad debido a que la cobertura del sistema de seguridad social en las áreas rurales es muy inferior a la cobertura en el área urbana pues en el país no existe un régimen de seguridad social para los trabajadores del campo.

4. Materiales y método

4.1 Encuesta

Se hizo uso de la Encuesta Continua de Hogares del año 2010 (en adelante, ECH) proporcionada por el INIDE (2010) como instrumento base para la elaboración del artículo. La encuesta cuenta con 31,947 observaciones (promedio de los cuatro trimestres del año 2010) y fue realizada en todos los departamentos de Nicaragua.

Page 40: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua46

Encuentro No. 94, 42-6 1, 2013

Dicha encuesta cuenta, en promedio, con el 42.5 por ciento de su muestra recogida en áreas rurales, y el restante 56.5 por ciento en el área urbana.

Cabe señalar que la ECH cuenta con cuatro períodos, recogiéndose información en cada uno de los cuatro trimestres. La aplicación del método econométrico que se presentará posteriormente se realizó para los cuatro periodos que la encuesta permite diferenciar.

Con base en el instrumento se distingue entre los trabajadores de 15 industrias productivas del país: industrias agrícolas, industrias pecuarias, industrias de servicios personales y empresariales, industrias forestales, industrias pesqueras, industrias de explotación minera, industrias de electricidad y agua, industria comercial, hotelera y de restaurantes, industrias de transporte y comunicaciones, industrias de servicios de intermediación financiera, industria de la construcción e industrias de servicios públicos.

El criterio para agrupar las industrias se fundamenta en la definición presentada en el Sistema de Cuentas Nacionales de 1993, publicado por el Banco Central de Nicaragua, en el cual se indica que: “La industria se define como un conjunto de establecimientos dedicados a la misma actividad económica” (BCN, 1994, p. 13).

4.2 Metodología

Se utilizó un modelo econométrico con respuesta cualitativa (variable dicótoma). Los tres modelos de respuesta binaria más utilizados son el Modelo Lineal Probabilístico (MLP), el Modelo Probit y el Modelo Logit.

En el presente trabajo se utiliza el modelo Logit, en detrimento del uso del modelo lineal de probabilidad, ya que éste tiene ciertas limitaciones al presentar probabilidades que superan la unidad y el cero en los efectos parciales en alguna de las variables explicativas.

Para la estimación de los modelos Logit con respuesta cualitativa 1 o 0 se hace uso de la técnica de Máxima Verosimilitud y se asume que la probabilidad de ocurrencia de un evento viene dada por la función:

En el modelo Logit se supera la dificultad presentada en el MLP ya que mientras Z tiende a infinito, eZ tiende a 0 y p tiene un límite superior de 1.

Donde Z= α + δi Xj

Así mismo, mientras Z tiende a menos infinito, e-Z tiende a infinito y p tiene un límite inferior de cero.

En un caso específico, el modelo logístico quedará representado por la forma:

Page 41: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

47

Encuentro No. 94, 42-61, 2013

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

Donde δi representa los parámetros a estimar y Xj representa todas las variables explicativas a los resultados 1 y 0 que toma la variable dependiente “Y”

5. Marco empírico

5.1 Contexto macroeconómico

La economía de Nicaragua se clasifica como una economía pequeña y abierta. Pequeña porque contribuye con apenas el 5 por ciento a la producción total del istmo centroamericano. Abierta porque la suma de sus importaciones y exportaciones representa para el año 2011 más del 100 por ciento de su producción anual.

En este sentido, se tiene una actividad económica muy vulnerable a shocks económicos externos, principalmente – por el lado de la oferta – a alzas en el precio internacional del petróleo y – por el lado de la demanda – a recesiones que sufran nuestros principales socios comerciales. El ejemplo más reciente de esta vulnerabilidad fue la recesión de 2009, que se propagó en Nicaragua por las vías del crecimiento de la producción, el subempleo, el comercio exterior, los ingresos tributarios, las remesas familiares y la inversión extranjera directa. Nicaragua entró en recesión desde el segundo trimestre de 2009 y salió técnicamente de esa recesión durante el segundo trimestre de 2010.1

Desde otro enfoque, Nicaragua es también (aún) un país pobre y muy endeudado en términos de producción porque, según la EMNV 2009 (INIDE, 2009), el 42.5% de la población es pobre y porque el saldo de la deuda pública total (externa e interna) representó en 2011 el 72% del PIB de ese mismo año, aunque en la actualidad sólo se honra el 60% del saldo “contable” de la deuda porque el 40% aún se encuentra pendiente de reestructuración en el marco de la Iniciativa de Países Pobres Muy Endeudados (PPME) .

De acuerdo con datos del BCN (2012), en 2011 el 77.2% de las personas ocupadas laboraron en establecimientos que no poseían registros contables. Esto quiere decir que 2 millones 167 mil personas no cotizan seguridad social ni pagan impuestos sobre la renta. Por otro lado, la tasa de subempleo (asociada con la informalidad) fue del 49.1% de la PEA, es decir que 1 millón 470 mil personas no laboran la jornada legal de ocho horas diarias y, si las laboran, devengan un salario inferior al salario mínimo legal. En resumen, el 55.4% de la PEA tiene problemas de empleo, o sea que existe 1 millón 660 mil personas desempleadas en forma abierta y subempleadas. Todo esto ilustra cómo la “microeconomía” no está bien, a pesar de que Nicaragua sea “el mejor alumno” del Fondo Monetario Internacional en el ámbito macroeconómico.

Lo anterior indica que el mercado laboral de Nicaragua muestra una deficiencia estructural para la generación de empleo decente o de calidad – con un contrato de trabajo, con seguridad social, con afiliación a una organización sindical y con ingresos iguales o mayores que el salario mínimo legal – debido a su estructura productiva poco diversificada y a la persistencia de una base rural importante con baja productividad económica.

1 De acuerdo con la tasa de crecimiento promedio anual del PIB trimestral real.

Page 42: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua48

Encuentro No. 94, 42-6 1, 2013

Esta baja productividad se explica en gran parte con los niveles de escolaridad que presentan los nicaragüenses y con la escaza infraestructura tecnológica en los procesos productivos de las micro y pequeñas empresas. Para el año 2009, según la EMNV (INIDE, 2009), las personas tenían en promedio seis años de escolaridad. La diferencia entre áreas de residencia es marcada ya que los nicaragüenses que viven en áreas rurales tienen niveles de escolaridad significativamente menores a los que viven en áreas urbanas: cuatro años contra siete años respectivamente.

5.2 Contexto microeconómico

Dado que las diferentes actividades laborales de los agentes económicos se agruparon en industrias según la similitud del trabajo que se realiza, es necesario apreciar quiénes integran cada una de las industrias. De esta manera se puede dar una imagen más detallada de las características específicas de cada industria en términos de subempleo.

Cuadro 1. Actividades que integran cada una de las industrias productivas

Industria ActividadesAgrícola Agentes económicos que cultivan granos básicos, cereales y otros

tipos de cultivos.Pecuaria Agentes económicos que realizan actividades de cría de ganado

vacuno y cría de otros animales, así como agentes que elaboran productos en base a la cría de animales.

Servicios personales y empresariales

Agentes económicos inmersos en actividades de alquileres, edición, consultorías, procesamiento de información, impresiones, publicidad, lavandería, peluquería, limpia botas, enseñanza, entre otros.

Forestal Agentes económicos que realizan actividades de silvicultura, extracción de madera y más.

Pesquera Agentes económicos que realizan actividades de pesca y acuicultura.

Minera Agentes económicos que trabajan en extracción de minerales metálicos, extracción de piedra, arena y arcilla, entre otros minerales.

Manufacturera Agentes económicos que laboran en actividades de transformación o elaboración de productos diversos (leche, jabón, ropa, zapatos, pintura, productos farmacéuticos, vidrio, aceite, pan).

Comercio, hoteles y restaurantes

Agentes que se encuentran laborando en actividades de venta “al por menor” y venta “al por mayor” de productos variados y en actividades hoteleras.

Servicios financieros y conexos

Agentes económicos que laboran en actividades de intermediación financiera, en la autoridad monetaria, en actividades inmobiliarias y en otras actividades monetarias (compra y venta de moneda).

Page 43: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

49

Encuentro No. 94, 42-61, 2013

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

Transporte Agentes que trabajan en actividades de transporte de carga, transporte regular de pasajeros, transporte aéreo, etc.

Construcción Agentes que laboran en actividades de construcción de edificios/otros, en acondicionamiento de edificios y viviendas, y en terminación de edificios y viviendas.

Público Agentes económicos que laboran para el gobierno (médicos, conductores oficiales, personal de limpieza, farmacología, gerentes de empresas públicas, etc.)

Fuente: Con base en ECH (INIDE, 2010).

En el presente trabajo se entenderá como subempleo el deseo y disposición que tienen los agentes económicos (en cualquier industria) por trabajar más horas de las que laboraban al momento en que la encuesta fue aplicada. El hecho de que un individuo trabaje menos de 45 o más horas a la semana (8 horas de lunes a viernes más 5 horas sabatinas) y no desee laborar más tiempo no es considerado un subempleado, sino un inactivo puro.

Esta definición de subempleo que se utiliza no difiere sustancialmente de la definición propuesta por Ahijado (1985). Sin embargo, se considera más aplicable al contexto nicaragüense porque implica la imposibilidad del mercado de generar trabajo satisfactoriamente.

De esta manera, es oportuno conocer cuánto es el tiempo que dedican los agentes económicos a trabajar en la semana. Laborar menos de las 45 horas semanales no implica un problema per se. Cuando no existen deseos de trabajar más se asume que el individuo está satisfecho con su empleo, no obstante es evidente que no se está aprovechando a su totalidad la fuerza de trabajo. En definitiva, el factor productivo trabajo no es utilizado plenamente, significando así la renuncia a la producción de bienes y servicios que, de otra manera, pudieran haber sido producidos.

De los ocupados que no trabajan en organizaciones no gubernamentales y otras actividades no especificadas, se puede apreciar que es en el primer trimestre que los agentes económicos dedican más horas al trabajo (ver Cuadro 2). A pesar de esto no se logra alcanzar el tiempo completo que se debería trabajar a la semana y, de esta manera, se está perdiendo la oportunidad de producir más bienes y servicios.

Page 44: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua50

Encuentro No. 94, 42-6 1, 2013

0.0

2.0

4.0

6.0

8D

ensi

dad

0 50 100Horas trabajadas por semana - ocupación principal

Fuente: Elaboración de autores en base a ECH

Ilustración 1. Distribución de horas trabajadas a la semana para los primeros tres meses del año.Fuente: Elaboración de autores en base a ECH (INIDE, 2010)

El promedio utilizado puede alterar los resultados debido a que se está analizando una distribución de ingresos sesgada positivamente. En la primera fila del Cuadro 2 se toman en cuenta las observaciones que dedican más de 100 horas de trabajo a la semana. Esto tiende a alterar el promedio, sesgándolo hacia valores superiores, razón por la cual se quitan las observaciones más altas (con más de 70 horas semanales), obteniendo un promedio con un menor grado de sesgo.

En la Ilustración 1 se puede ver que, a pesar de la existencia de un gran número de personas que laboran alrededor de 45 horas a la semana para el primer trimestre del año, aún existe un gran segmento que labora muy por debajo de tales horas a la semana e incluso muy por encima de este valor, alcanzando hasta un máximo de 112 horas a la semana. Para los demás trimestres del año la distribución es muy similar a la presentada en la Ilustración 1.

Cuadro 2. Horas regularmente trabajadas a la semana

VariableENERO,

FEBRERO, MARZO

ABRIL, MAyO, JUNIO

JULIO, AGOSTO,

SEPTIEMBRE

OCTUBRE, NOVIEMBRE, DICIEMBRE

Horas promedio trabajadas regularmente a la semana

39 37 37 37

Page 45: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

51

Encuentro No. 94, 42-61, 2013

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

010

2030

4050

Pro

med

io d

e ho

ras

Agricu

ltura

Comerc

io

Constr

ucció

n

Financ

iero

Foresta

l

Manufa

ctura

Minas

Pecua

rioPes

ca

Público

Sevici

o

Transp

orte

Fuente: Elaboración de autores en base a ECH

Horas promedio trabajadas regularmente para agentes que laboran menos de 70 horas a la semana

36 35 34 35

Fuente: ECH (INIDE, 2010).

Sin embargo, esta imagen resulta aún muy superficial, por lo que se procedió a analizar el tiempo promedio (sin omisión de las observaciones que laboran más de 70 horas a la semana) dedicado al trabajo pero diferenciando por industrias productivas. Así se observó que la industria que presenta agentes económicos con mayor tiempo promedio de trabajo es la industria del transporte, seguida de los trabajadores en el sector público.

Esta característica del sector público como uno de los sectores que presenta un mayor número de personas trabajando en promedio más de 45 horas, puede comprenderse si se toma en cuenta que muchos de estos trabajadores pueden ser profesores, doctores, enfermeras, policías, soldados, bomberos, conserjes, etc., que laboran para entes gubernamentales.

En el caso de la industria del transporte puede significar el hecho de que las jornadas de transporte de carga pueden acumular largas horas, y es muy probable que los trabajadores inmersos en actividades de transporte sean trabajadores informales que sobrepasan las horas establecidas a la semana.

Ilustración 2. Horas promedio trabajadas por industria productivaFuente: Elaboración de autores en base a ECH (INIDE, 2010).

Page 46: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua52

Encuentro No. 94, 42-6 1, 2013

PIB Trimestral (Millones de C$ de 1994)1994: 1 - 2011:4

1994q1 1998q3 2003q1Tiempo

2007q3 2011q4

pibtrimestral_pibtrimestral_sm_1 PIB TrimestralFuente: Elaboración de autores en base a datos de ECH

4000

6000

8000

1000

012

000

Se puede observar que los agentes económicos involucrados en actividades agrícolas se encuentran dentro de una de las tres industrias con menos horas de trabajo a la semana en comparación a las demás. Los productores de granos básicos, hortalizas, legumbres y demás productos agroexportables trabajan en promedio 33.4 horas a la semana, y es en el primer trimestre donde los agricultores trabajan más horas (36 horas).

Esto puede ser explicado por el hecho de que Nicaragua es una economía eminentemente agropecuaria, con una marcada estacionalidad del desempeño productivo definida por el ciclo agrícola, en este caso, la cosecha de apante de granos básicos y la cosecha de primera de los principales productos agroexportables. Las actividades de agricultura, ganadería, silvicultura y pesca representan el 20% del PIB anual y generan alrededor del 31% del empleo (sin incluir el empleo generado en las actividades de comercio y de transporte que dependen de las actividades agropecuarias).

Ilustración 3. Estacionalidad del PIB real de NicaraguaFuente: Elaboración de autores en base a datos de ECH (INIDE, 2010).

Al ilustrar esta estacionalidad extrayendo los factores estacionales del PIB trimestral a precios de 1994 se observa que los trimestres de mayor desempeño productivo son el cuarto y el primero, en ese orden de importancia. A priori, habría que esperar que los problemas de subempleo sean más evidentes en el tramo comprendido entre el segundo y tercer trimestre del año.

Las industrias manufactureras, industrias de servicio e industrias de comercio, que aglomeran en conjunto un promedio de 52% de los trabajadores de la economía – según estimaciones propias en base a la ECH (INIDE, 2010) – no se perfilan como industrias con bajas horas de trabajo a la semana pero no son industrias donde se trabaje plenamente las horas disponibles para producir. En términos simples, un individuo que se encuentra en alguna de estas tres industrias trabaja un promedio

Page 47: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

53

Encuentro No. 94, 42-61, 2013

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

de siete horas y media al día de lunes a viernes, dejando el sábado libre y el domingo también.

En la teoría microeconómica se asume que las personas, al tener una dotación de tiempo a la semana, pueden decidir cuánto de éste se puede dedicar para trabajar o para hacer otro tipo de actividades comúnmente catalogadas como ocio.

Según Nicholson (2004), las horas de trabajo ofertadas son una función creciente de los salarios reales debido a que mayores salarios hacen que cada individuo en el mercado laboral trabaje más.

Consecuentemente, es oportuno apreciar los niveles de salarios que presenta cada industria. El salario, estimado como el ingreso proveniente de actividades laborales, se perfila como una de las variables que pueden influir en que un individuo se encuentre subempleado o no. Es de esperarse que si un agente económico cuenta con un nivel de salario alto no desee trabajar más horas, incluso si se trabaja menos de las 45 horas semanales.

Cuadro 3. Ingresos mensuales y coeficiente de Gini (promedios para los cuatro trimestres)

IndustriaSalarios (ingresos) promedio

Coeficiente de GiniC$ de 2010 US$ de 2010*

Agricultura 2,367 111 44.8Pecuario 2,974 139 42.3Servicio 5,984 280 54.0Forestal 3,535 166 48.0

Pesca 5,362 251 38.9Minas 6,967 326 56.0

Manufactura 5,622 263 48.2Comercio 4,025 188 52.8Transporte 6,671 312 50.3Financiero 12,515 586 39.5

Construcción 4,698 220 51.0Público 12,215 572 28.0

*De acuerdo con el tipo de cambio oficial promedio de C$ 23.55 x US$ 1 en 2010.Fuente: Elaboración de autores en base a ECH (INIDE, 2010).

El Cuadro 3 presenta una característica preocupante de la realidad económica de Nicaragua: si se parte del hecho de que las industrias agropecuarias son las industrias que sostienen la economía nacional en términos del empleo que aglomeran y en términos de la composición de los productos de exportación con los que contribuyen, se puede observar que son éstas las industrias que presentan los más bajos niveles de ingreso promedio (para la industria pecuaria se estima un ingreso promedio de C$ 2,974 y para la industria agrícola se estima un ingreso promedio de C$ 2,367 en 2010). Si se asume que los salarios se igualan a la productividad marginal, entonces queda en evidencia que las industrias agropecuarias no presentan altos niveles de productividad.

Page 48: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua54

Encuentro No. 94, 42-6 1, 2013

Estas características que presenta la economía nicaragüense se agudizan si se observa que ambas industrias, pecuaria y agrícola, son dos de los tres sectores que dedican menos tiempo a laborar. Dicho esto, se tienen industrias que no generan mucho valor agregado y se tienen industrias que laboran muy poco tiempo en relación con las demás industrias del país, dejando así un trecho de bienes y servicios que se pudieran producir de mejor manera y en mayores cantidades.

En el Cuadro 3 se constata que la industria financiera es la que presenta mayores niveles de ingreso. Los agentes económicos que trabajan en actividades relacionadas con intermediación financiera y demás actividades similares ganan en promedio 5.28 veces más que los agricultores. Esta desigualdad, que no sólo se da en dicha industria, también se demuestra con un coeficiente promedio de Gini de 46.12 para 12 de las industrias en todos los trimestres del año según estimaciones en base de la ECH 2010 (INIDE, 2010).

Los individuos que trabajan en tareas de transporte urbano colectivo, o proveyendo servicios de transporte privado o de carga, son los que trabajan más, pero no son los que tienen mayores niveles de ingreso salarial.

5.3 Estimación de modelo econométrico

5.3.1 Datos

Para la realización del modelo econométrico se procedió a limpiar la base de datos de la ECH (INIDE, 2010). Las actividades de los individuos que tienen similitud se agrupan en las industrias presentadas en el Cuadro 5 y se realizó el mismo procedimiento para cada trimestre que permite la ECH 2010. A continuación se presenta el número de observaciones promedio de los cuatro trimestres para cada una de las variables estimadas.

Cuadro 5. Datos a utilizar en el modelo econométrico

IndustriasObservaciones

promedio estimadas de los 4 trimestres

Peso promedio de los 4 trimestres (%)

Variable

Agricultura 4,395.8 32.5 DicótomaPecuario 477.8 3.5 DicótomaServicio 1,704.0 12.6 DicótomaForestal 68.0 0.5 Dicótoma

Pesca 85.0 0.6 DicótomaMinas 44.8 0.3 Dicótoma

Manufactura 1,714.8 12.7 DicótomaComercio 3,627.8 26.9 DicótomaTransporte 534.8 4.0 DicótomaFinanciero 136.5 1.0 Dicótoma

Construcción 565.0 4.2 Dicótoma

Page 49: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

55

Encuentro No. 94, 42-61, 2013

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

Público 140.5 1.0 Dicótoma

VariableObservaciones

promedio estimadas de los 4 trimestres

Promedio de los 4 trimestres

Variable

Ingresos 10,055.5 5,085.5 córdobas ContinuaEducación 17,200.3 5.92 años Continua

Variable dependiente

Subempleoy=1 Agente desea trabajar más horas| y=0 Agente no desea

trabajar más horas

Fuente: Estimación de autores en base a ECH (INIDE, 2010).

Las variables utilizadas para la estimación econométrica son las presentadas en el Cuadro 5, donde la mayoría son variables dicótomas (dummies) que toman el valor “1” si la observación se encuentra en la industria que indica el nombre de la variable y “0” si es lo contrario.

Adicionalmente se estimaron dos variables continuas: la variable Ingresos representa el valor del ingreso generado por actividades relacionadas al trabajo, y la variable llamada Educación representa los años de educación con los que cuentan los individuos.

Para la estimación de los años de educación – de acuerdo con la ECH 2010 – se establecieron los siguientes supuestos: Técnico básico - 8 años ya estudiados; Técnico medio - 9 años ya estudiados; Formación docente - 9 años ya estudiados; Técnico superior - 12 años ya estudiados; Universitario - 12 años ya estudiados; Maestría - 17 años ya estudiados; Doctorado - 19 años ya estudiados. Se asume que los años de escolaridad empiezan a contabilizarse desde el primer grado de primaria.

5.3.2 Estimación

Se estima un modelo Logit en donde se establece la siguiente forma funcional:

Donde

Donde es el parámetro a calcular para cada una de las variables independientes para i: 1, 2, 3,4…..n y es el valor de la constante y u un término de error.

La variable dependiente equivale a 1 si el agente económico desea trabajar más, está dispuesto y no puede (subempleado) o equivale a 0 si es lo contrario.

Page 50: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua56

Encuentro No. 94, 42-6 1, 2013

Cuadro 6. Estimaciones de los efectos marginales del modelo logístico

VariablePrimer

trimestreSegundo trimestre

Tercer trimestre

Cuarto trimestre

Efectos marginales - evaluados en las mediasAgricultura -0.076*** 0.027 0.03 0.029Error estándar 0.018 0.023 0.023 0.022Servicio 0.12*** 0.091*** 0.104*** 0.076***Error estándar 0.02162 0.022 0.021 0.021Manufactura 0.089*** 0.059*** 0.101*** 0.068***Error estándar 0.02179 0.022 0.021 0.021Comercio 0.05*** 0.041** 0.07*** 0.0728***Error estándar 0.01871 0.02 0.019 0.0194Construcción 0.082*** 0.16*** 0.137*** 0.154***Error estándar 0.02792 0.027 0.028 0.028Ln (ingresos) -0.12*** -0.18*** -0.17*** -0.14***Error estándar 0.005 0.006 0.006 0.005Educación 0.004*** 0.004*** 0.004*** 0.003***Error estándar 0.00118 0.001 0.0013 0.0013Pseudo Rˆ2 0.084 0.11 0.09 0.079Log Liklihood -5083.3257 -5069.5923 -5301.2017 -5547.1137LR chi2(7) 941.23 1332.79 1176.17 957.59Prob > chi2 0.000 0.000 0.000 0.000Observaciones 8984 8418 8531 8858Proporción de observaciones predichas correctamente

71.50% 68.21% 66.70% 65.70%

*Significativo al 90%

**Significativo al 95% ***Significativo al 99%

Fuente: Estimación de autores en base a ECH (INIDE, 2010).

Tomando en cuenta que la mayoría de las variables independientes son variables dicótomas, se debe de mantener un grupo base con el cual hacer una comparación (benchmark). El grupo base considerado para el modelo incluye las siguientes industrias: pública, forestal, minera, pecuaria, financiera, transporte. De esta manera, la interpretación de los efectos marginales se hace con relación al grupo base definido.

Junto a las estimaciones de los efectos marginales del modelo Logit se presenta la validación del mismo mediante la prueba Pearson.

Page 51: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

57

Encuentro No. 94, 42-61, 2013

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

Cuadro 7. Validación de modelo Logit. Prueba Pearson.

Fuente: Estimación de autores en base a datos de ECH (INIDE, 2010).

Una vez que se validó el modelo econométrico se procedió a interpretar los resultados. En primer lugar, es necesario señalar que la industria agrícola es estadísticamente diferente de cero únicamente en el primer trimestre del año. Para los siguientes trimestres del 2010 se pierde significancia a pesar de presentar el signo esperado. Sin embargo, el modelo econométrico en general mantiene su buen ajuste en todos los trimestres incluso al 99% de significancia.

Según los parámetros estimados, que representan los efectos marginales evaluados en las medias de las variables independientes, los individuos que se encuentran trabajando en actividades agrícolas tienen 7.6 puntos porcentuales de menores de probabilidades de desear trabajar más horas a la semana con respecto a trabajadores en otros sectores (grupo base). A su vez, el signo negativo de la industria agrícola, para el primer trimestre del 2010, es congruente con la estacionalidad del Índice Mensual de la Actividad Económica para esta actividad, que indica que en conjunto en los tres primeros meses del año, el desempeño productivo de esta actividad se encuentra por encima del desempeño promedio anual.

En este sentido, se puede asociar la pérdida de significancia estadística que presenta la industria agrícola en los siguientes tres trimestres del año con la marcada estacionalidad de su ciclo productivo.

En el primer trimestre del año un trabajador en la industria de servicios tiene 12 puntos porcentuales de mayores probabilidades de estar subempleado en relación con otros sectores representados en el grupo base. Para los demás trimestres, ésta probabilidad oscila en un rango de 7.6 a 10.4 puntos porcentuales.

Para la industria manufacturera, la mayor probabilidad de presentar trabajadores subempleados con respecto a otros sectores se encuentra en el tercer trimestre del año (10 puntos porcentuales de mayores probabilidades con respecto a los demás sectores).

Para la actividad comercial se presentan probabilidades positivas de estar subempleado muy similares a lo largo del año 2010. Éstas varían en un rango de 4.0 y 7.2 puntos porcentuales con respecto a las demás industrias, lo cual implica que las personas que laboran en actividades comerciales tienen más probabilidades de querer trabajar más y no poder en relación al grupo base.

Según los resultados obtenidos, la industria de la construcción es la industria con mayor probabilidad de generar puestos de trabajo en condiciones de subempleo. Esto es un indicador de insatisfacción en las labores de esta actividad. En promedio, los individuos que trabajan en actividades de construcción tienen 13 puntos porcentuales de mayores probabilidades de querer trabajar más – estar dispuesto a hacerlo y no poder – si se compara con las industrias del grupo base.

Enfocando el análisis a la primera de las variables continuas (Ln*Ingresos) se encuentra que los signos estimados concuerdan con los signos esperados porque a

Page 52: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua58

Encuentro No. 94, 42-6 1, 2013

mayores niveles de ingresos los trabajadores tienden a tener menos probabilidades de querer trabajar más horas. El coeficiente estimado indica que ante aumentos en el logaritmo natural de los salarios derivados de actividades económicas se tiene, en promedio, 15 puntos porcentuales de menores probabilidades de querer trabajar más horas a la semana para cualquier sector de la economía, es decir, sin hacer distinción entre industrias.

Por otro lado, el signo del coeficiente estimado para la variable educación indica que, con un año más de educación, la probabilidad de desear trabajar más horas a la semana aumenta en 0.4 puntos porcentuales. Este es un resultado muy interesante pues evidencia el bajo nivel de escolaridad en la economía. Así mismo, este signo y baja magnitud del parámetro de educación es el reflejo de la incapacidad que tiene el mercado de generar suficientes y adecuadas plazas de trabajo.

6. Conclusiones y recomendaciones

En el presente artículo se hizo uso de la Encuesta Continua de Hogares (INIDE, 2010) para analizar una temática no muy explotada a nivel de la literatura económica en Nicaragua, que es el subempleo a nivel de las industrias productivas del país.

Los resultados de las estimaciones indican que todas las industrias presentan trabajadores subempleados. La industria que presenta una mayor probabilidad de generar puestos de trabajo en condiciones de subempleo es la industria de la construcción, seguida por la industria de servicios y manufactura. Esta característica del mercado laboral nicaragüense implica la existencia de insatisfacción o inconformidad laboral.

Las industrias que presentan menores probabilidades de generar puestos de trabajo en condiciones de subempleo son las industrias agrícolas – aunque se pierde significancia estadística para los tres últimos trimestres del año de estudio – y las industrias comerciales. En ambas actividades se confirma, pues, el predominio del desempleo abierto sobre el subempleo.

Así mismo, se evidencia que individuos con mayores niveles salariales tienen menos probabilidades de desear trabajar más horas a la semana, independientemente de la industria productiva en la que se encuentren.

Los resultados obtenidos para la variable educación, si bien no presentan una magnitud muy alta, reflejan una problemática de la economía nacional en relación con los bajos niveles de escolaridad imperantes. El hecho de que a mayores niveles educativos se tengan mayores probabilidades de desear trabajar más también puede significar la incapacidad del mercado de generar puestos de trabajo adecuados a mayores niveles de calificación.

Finalmente se presentan algunas recomendaciones de políticas públicas dirigidas a combatir el subempleo:

• La formulación de políticas de empleo con la participación del gobierno, los sindicatos y los gremios de productores.

• La promoción de educación técnica media y superior para elevar la productividad laboral.

Page 53: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

59

Encuentro No. 94, 42-61, 2013

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

0.2

.4.6

.81

fxbe

ta

-4 -2 0 2xbeta

Fuente: Estimación de autores en base a ECH

FDLA para modelo econométrico de primer trimestreFUNCIÓN DE DISTRIBUCIÓN ACUMULATIVA (FDLA)

• El apoyo al desarrollo de las MyPIMES. • El fortalecimiento del Banco de Fomento “Produzcamos”, con el fin de

transferir crédito y tecnología a un bajo costo. • Legislar para la igualdad salarial de hombres y mujeres en el mismo puesto

de trabajo. • Reducir los trámites burocráticos para la creación de empresas.

7. Agradecimientos

Se agradecen las valiosas enseñanzas de Carlos Narváez Silva, profesor de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad Centroamericana (UCA)

8. Anexos

Se presentan las funciones de distribución acumulativas para los modelos estimados referentes a los trimestres i, ii, iii, y iv. Se presenta que los efectos marginales de las variables explicativas no son constantes. El efecto parcial es mayor cuando xbeta se iguala a cero y más pequeño a medida que xbeta tiende a menos infinito y a más infinito.

Page 54: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua60

Encuentro No. 94, 42-6 1, 2013

0.2

.4.6

.81

fxbe

ta

-4 -2 0 2 4xbeta

Fuente: Elaboración de autores en base a ECH

FDLA para modelo de cuarto trimestreFUNCIÓN DE DISTRIBUCIÓN ACUMULATIVA (FDLA)

0.2

.4.6

.81

fxbe

ta

-4 -2 0 2 4xbeta

Fuente: Elaboración de autores en base a ECH

FDLA para modelo econométrico de tercer trimestreFUNCIÓN DE DISTRIBUCIÓN ACUMULATIVA (FDLA)

0.2

.4.6

.81

fxbe

ta

-4 -2 0 2 4xbeta

Fuente: Estimación de autores en base ECH

FDLA para modelo econométrico de segundo trimestreFUNCIÓN DE DISTRIBUCIÓN ACUMULATIVA (FDLA)

Page 55: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

61

Encuentro No. 94, 42-61, 2013

Subempleo laboral en las industrias productivas de Nicaragua

Referencias bibliográficas

Ahijado, M. (1985). Diccionario de Teoría Económica. Madrid: Pirámide.Banco Central de Nicaragua. [BCN]. (1994). Sistema de Cuentas Nacionales de

Nicaragua. Año base 1994.Recuperado el 10 de mayo de 2012, de http://www.bcn.gob.ni/publicaciones/eventuales/metodologias/Metodologia_SCN_Nicaragua_base_1994.PDF

Banco Central de Nicaragua. (2011). Anuario de Estadísticas Mensuales. Recuperado el 20 de mayo de 2012, de http://www.bcn.gob.ni.

Bernal, R. (2008). The Informal Labor Market in Colombia: Identification and Characterization. Centro de Estudios de Desarrollo Económico: Facultad de Economía y CEDE . Recuperado el 12 de mayo de 2012, de http://www.undp.org.ni/

Gamboa, M. (2007). Flexibilización del mercado laboral en Nicaragua. Managua: Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.

Instituto Nacional de Información de Desarrollo [INIDE]. (2009). Encuesta de Medición del Nivel de Vida-EMNV. Recuperado el 10 de mayo de 2012, de http://www.inide.gob.ni/.

Instituto Nacional de Información de Desarrollo [INIDE]. (2010). Encuesta Continua de Hogares (ECH) Recuperado el 15 de mayo de 2012, de http://www.inide.gob.ni.

Bell, N. F. & Blanchflower, D. (2011). Youth Underemployment in the UK in the Great Recession. New Hampshire: Universidad de Dartmouth. Recuperado el 5 de mayo de 2012, de www.dartmouth.edu

Nicholson, W. (2004). Teoría Microeconómica Principios Básicos y Ampliaciones. Cincinnati: Thomson.

North, D. (1990). Institutional Change and Economic Performance. Cambridge: Cambridge University Press.

Page 56: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

62

Encuentro No. 94, 62-8 1, 2013

* Red de Microfinanzas CERISE y doctorando en Ciencias Políticas en la Universidad de París I Panthéon-Sorbonne. Correo electrónico: [email protected].

** Instituto de Desarrollo de Políticas y Administración (IOB), de la Universidad de Amberes, Bélgica. Correo electrónico: [email protected].

*** ONG investigativa IRAM y Universidad de Rennes-1. Correo electrónico: [email protected].

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

Florent Bédécarrats *, Johan Bastiaensen** y François Doligez**

Recibido: enero de 2013 / Aceptado: enero de 2013

La última década ha estado marcada por el resurgimiento de movimientos políticos izquierdistas en Latinoamérica. Sin embargo, la magnitud del alzamiento de estas “nuevas izquierdas” oculta a menudo la relación ambivalente entre estos movimientos y la sociedad, así como su lucha por encontrar alternativas al modelo de desarrollo prevaleciente. A lo largo del continente, el sector de las microfinanzas ha llenado el vacío dejado por los fallos de los bancos públicos, desarrollándose bajo una forma crecientemente comercial. Análisis de Nicaragua, Ecuador y Bolivia revelan que los nuevos gobiernos comparten su desconfianza hacia las IMF (instituciones de microfinanzas). Sin embargo, en la ausencia de alternativas viables para la provisión de servicios financieros, los gobiernos y las microfinanzas se ven obligados a coexistir. El medio en el cual lo hacen varía grandemente, dependiendo de políticas locales y factores institucionales. No obstante, algunas tendencias comunes pueden ser discernidas.

Palabras clave: microfinanzas / desarrollo / izquierda / movimientos sociales / economía política

Page 57: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

63

Encuentro No. 94, 62-81, 2013

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

1. Introducción1

El papel de las microfinanzas en el proceso de desarrollo es sujeto de debate. Luego de recibir reconocimiento mundial con el Año Internacional del Microcrédito de la ONU en 2005 y el Premio Nobel de la Paz a Muhammad yunus en 2006, las instituciones de microfinanzas (IMF) se encuentran actualmente enfrentadas con las nuevas izquierdas Latinoamericanas, justo donde su crecimiento ha sido más impresionante. Dichos gobiernos izquierdistas han adoptado diferentes posturas ante los actores microfinancieros y el paradigma que ha prevalecido en las últimas dos décadas.

El fenómeno requiere un análisis innovador desde una perspectiva de economía política para comprender esta redefinición disputada del papel de las microfinanzas en los países en donde las fuerzas políticas están recurriendo a un enfoque socialista. Aunque las microfinanzas están siendo cuestionadas en todas partes, en Brasil parece perfilarse un clima de aceptación y complementariedad (Abramovay, Magalhães & Schröder, 2008), a diferencia de la atmósfera de confrontación observada en Nicaragua (Padilla, 2008). La situación es mucho más ambigua en Bolivia (Bédécarrats & Marconi, 2009; Mosley, 2009), Ecuador (Rhyne, 2010), y El Salvador.

¿Estamos viendo en Latinoamérica la reintroducción del Estado en un sector que ha madurado bajo un modelo comercial privado? Luego de la “década perdida del desarrollo”, ¿nos estamos moviendo hacia una nueva relación entra la élite política y los ciudadanos, una que ofrezca mayor protección a los sectores vulnerables a cambio de su creciente dependencia hacia sus líderes? ¿Deberíamos calificar como populistas los intentos de estos gobiernos que, bajo pretexto de promover un acceso financiero ampliado y tasas de interés más bajas, buscan tomar el control de las IMF?

El discurso prevaleciente raramente va más allá de ortodoxias antagónicas que reivindican la superioridad del Estado o bien la del mercado. Por tanto, es hasta hace poco que algunos actores microfinancieros han comenzado a reconsiderar posibles vínculos con los programas públicos, especialmente en la agricultura y los sectores rurales2. En este artículo, comparamos la relación entre el sector de las microfinanzas y los gobiernos de izquierda en tres países latinoamericanos. Después de examinar las tendencias históricas que determinaron estos recientes cambios políticos, resumimos las confrontaciones entre las políticas públicas y las microfinanzas en Bolivia, Nicaragua y Ecuador. Luego proponemos un marco analítico para categorizar las dinámicas que se desarrollan en cada uno de estos países y las estrategias que los actores microfinancieros están utilizando para reposicionarse en este nuevo ambiente.

1 Este artículo se publicó originalmente en Critique Internationale, 2011, (52), 129-153, y fue aprobado para publicación en Third World Quaterly, 2012, 33(1), 12. La traducción del inglés al español fue realizada por Xochitl Membreño y Florent Bédécarrats. El presente análisis da inicio a una agenda de investigación-acción que involucra investigadores, actores micorfinancieros y autoridades públicas. Este trabajo es apoyado por CERISE, IOB, FOROLAC, VLIR, FNRS y eMFP.

2 Ver, en particular, el seminario internacional organizado por la red latinoamericana de microfinanzas rurales: Políticas públicas y marcos regulatorios para las microfinanzas, forolac-redcamif, llevado a cabo en Managua el 17 y 18 de marzo de 2009.

Page 58: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

64

Encuentro No. 94, 62-8 1, 2013

2. El acalorado debate sobre las finanzas del desarrollo

2.1 La izquierda latinoamericana: diversas realidades políticas

Luego de varias décadas de dictaduras represivas, y luego de gobiernos neoliberales cada vez más confrontados, coaliciones izquierdistas volvieron al poder en Venezuela (1999), Brasil (2002), Argentina (2003), Uruguay (2005), Honduras, Chile, Bolivia (2006) Ecuador, Nicaragua (2007), Paraguay (2008), El Salvador (2009) y Perú (2011). El espectacular ascenso de estas nuevas izquierdas bajo la forma de movimientos sociales, partidos políticos y gobiernos no puede ser ignorado por las instituciones financieras y de fomento al desarrollo (Calderón, 2008). De hecho, a pesar de su heterogeneidad, todos estos nuevos actores izquierdistas afirman representar una ruptura ideológica y simbólica del neoliberalismo. Retan deliberadamente los supuestos de ineficiencia estatal, el predominio de la iniciativa privada, y el mercado como modo más efectivo para organizar la sociedad y la economía (Arditi, 2008).

Algunos investigadores analizan esta dinámica política a través de una dicotomía que opone a la izquierda populista, autoritaria y centrada en el Estado a la izquierda social demócrata, más moderada y reformista (Castañeda, 2006). Aunque esta tipología es útil para distinguir los extremos del espectro político de izquierda, induce a una perspectiva simplista que impide entender las fuerzas en juego entre las bases y los mandatarios de organizaciones partidistas, y el proceso que lleva hacia la formulación de políticas (Cameron, 2009). Para entender las múltiples dimensiones en que se llevan a cabo estas interacciones, es importante tomar en cuenta los discursos de las nuevas izquierdas, así como sus intereses e instituciones (Hall & Taylor, 1996).

Los gobiernos izquierdistas en Latinoamérica afirman encarnar una ruptura con las políticas anteriores y para concretarlo, muchos han emprendido reformas constitucionales profundas. Sin embargo, su capacidad de traducir tales cambios en un modelo de desarrollo alternativo es algo cuestionable. Hasta el momento los gobiernos han promovido una distribución de ingresos más igualitaria, pero han priorizado el mantenimiento de los equilibrios macroeconómicos. En muchos casos, los cambios se han materializado a través de programas ampliados de asistencia social para beneficiar a los más pobres. Aunque estos mecanismos de redistribución crean enormes oportunidades en términos de salud y educación, están basados en modelos de producción existentes – particularmente ingresos fiscales del sector primario – y no están equilibrados con reformas económicas más estructurales (Moreno-Brid & Paunovic, 2008). Los cambios políticos recientes han hecho poco más que reforzar el trickle down ortodoxo, sin cuestionar el nuevo ‘consenso post Washington’ (Beasley-Murray, Cameron & Hersheberg, 2009).

Debemos tener cuidado de no idealizar las relaciones entre los gobiernos, partidos y movimientos sociales. Hay mucho que aprender de las transformaciones y rupturas de alianzas entre las bases de estas organizaciones y los ‘representantes profesionales’ que surgen con ellas (Beasley-Murray et al., 2009, p. 328). El ascenso de las izquierdas al poder en varios países coincide con la polarización de políticas y el agudizamiento de tensiones entre los que se encuentran en el poder y la oposición.

Page 59: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

65

Encuentro No. 94, 62-81, 2013

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

Estas crispaciones tienden a empujar a los nuevos gobiernos a movilizar todos los recursos disponibles para consolidar su ascenso popular, incentivando las estrategias clientelistas y la toma de control por el poder ejecutivo de autoridades judiciales.

2.2 ¿Campeones de la lucha contra la pobreza o usureros?

La historia económica de Latinoamérica está particularmente marcada por el derrumbe de bancos estatales y de programas de crédito gubernamentales. Las principales herramientas de las finanzas del desarrollo en los años 60 y 70, bancos y programas regidos por el Estado, fueron notables por ser altamente disfuncionales: procedimientos burocráticos e ineficientes, falta de control interno, personal poco calificado y en ocasiones corrupto, además de prioridades definidas en base a tácticas clientelistas (Trivelli & Venero, 2007). Estos fallos, absorbidos por las finanzas públicas, tuvieron un papel decisivo en las ‘crisis de deuda’ de muchos países en desarrollo en los años 80 y 90 (Long, 1989). La idea de que tales defectos son intrínsecos a los mecanismos de finanzas públicas se arraigó en las mentes de investigadores, políticos y profesionales del desarrollo (Adams, Graham & Von Pischke, 1984). La erradicación de los bancos de desarrollo se convirtió en una prioridad de las políticas de ajuste estructural, impuesta por las organizaciones financieras internacionales que se habían vuelto los principales prestamistas de los Estados en bancarrota.

Luego de estas reformas, sectores económicos enteros fueron dejados sin acceso al crédito o al ahorro, aunque estos servicios fueran esenciales para su funcionamiento y crecimiento. Organizaciones comunitarias y ONG (organizaciones no gubernamentales) intentaron remediar esta exclusión financiera por medio de iniciativas a menudo promovidas por antiguos administradores de programas de crédito público, de cooperativas que colapsaron, o por organizaciones religiosas internacionales. A pesar de su diversidad, estas organizaciones convergieron en su oposición a la intervención del Estado en las finanzas del desarrollo (Weber, 2002) y ayudaron a crear las bases de un sector privado de microfinanzas alineado con las políticas fiscales y monetarias de sus gobiernos. Por lo tanto, las IMF se desarrollaron como una forma alternativa de financiamiento, apropiada para el sector informal en rápido crecimiento, y se convirtieron en la solución privilegiada para la pobreza y el subempleo, siendo ideológicamente compatibles con el neoliberalismo (Morduch, 1999).

Con el fin de reducir la dependencia a los subsidios y atraer inversionistas privados, los donantes internacionales que apoyaron el sector pusieron énfasis en su sostenibilidad financiera, presionando a las IMF para que cubrieran sus costos, comercializaran operaciones y generaran excedentes, integróandose así al sistema financiero global (Helms, 2006). Como resultado, un número creciente de ONG de microfinanzas se han convertido en entidades comerciales y las cooperativas de crédito y ahorro han sido marginadas. A pesar de que las microfinanzas usualmente movilizan volúmenes poco significativos en términos macroeconómicos, afectan a una enorme cantidad de personas. El Cuadro 1 contiene indicadores clave para Bolivia, Nicaragua y Ecuador.

Page 60: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

66

Encuentro No. 94, 62-8 1, 2013

Cuadro 1. Datos clave sobre microfinanzas en Bolivia, Nicaragua y Ecuador

Bolivia Nicaragua EcuadorInclusión financiera (diciembre 2009)Número total de prestamistas activos (i) 1.122.507 686.701 1.968.856Prestamistas activos como % de la población total 19% 20% 23%

Prestamistas de microfinanzas activos 865.464 391.375 656.986Prestamistas de microfinanzas activos como % de población total 15% 11% 8%

Dimensión y evolución del sector (diciembre 2009)Cantidad de crédito fuera de las microfinanzas (millones de USD) (ii) 4.038 1.278 10.701

Cantidad de crédito microfinanciero (millones de USD) 1.854 472 1.281

Participación de las microfinanzas en el sector financiero nacional 31.5% 27.0% 10.7%

Tres principales instituciones microfinancieras del país

ProCredit, BancoSol,

FIE

Banex, ProCredit,

FDL

CrediFé, Banco

Solidario, ProCredit

Número de prestamistas de las tres principales IMF 356.279 148.219 263.132

Participación de las tres principales IMF en el sector microfinanciero (#prestamistas) 41% 38% 40%

Portafolio de las tres principales IMF (millones de USD) 1.038 299 693

Participación de las tres principales IMF en el sector microfinanciero (#volumen de préstamos)

56% 63% 54%

Crecimiento anual del portafolio del sector microfinanciero (2006 - 2009) 28% 7% 15%

Crecimiento anual del portafolio de las tres principales IMF (2006 - 2009) 32% 10% 12%

Tipos de interés y tasas de rendimiento (2008)Rendimiento promedio del portafolio del sector microfinanciero 23.22% 31.76% 22.47%

Rendimiento promedio de las tres principales IMF 19.64% 26.55% 17.68%

Rendimiento promedio en equidad del sector microfinanciero 9.06% 6.05% 5.65%

Rendimiento promedio en equidad de las tres principales IMF 12.99% 15.36% 19.04%

Fuentes: Datos obtenidos del “Microfinance Information eXchange” (www.mix.org).(i): ASOFIN (www.asofin-bo.org) (ii): Instituciones Nacionales Supervisoras de Bancos

Page 61: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

67

Encuentro No. 94, 62-81, 2013

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

Como estas cifras demuestran, las IMF ya juegan un importante papel en las economías de los países en cuestión y están creciendo rápidamente. Esta expansión no ha venido sin críticas. Debido a la estructura de costos de una actividad al por menor (Rosenberg González & Narain, 2009), ser una IMF económicamente viable implica cobrar tasas de interés significativamente más altas que las de los bancos tradicionales, como evidencian los rendimientos promedios de portafolio listados arriba3. Esta paradoja provoca debates acalorados sobre cuán justos son estos intereses y la capacidad de los pobres de cubrir tales costos, en especial cuando éstos conllevan a ganancias significativas para las IMF (Guérin, Lapenu & Doligez, 2009). Los partidarios de las microfinanzas señalan los precios prohibitivos de las otras opciones disponibles para los pobres, tales como prestamistas. Argumentando que la restricción principal es la oferta, advierten contra establecer techos sobre las tasas y recomiendan dejar que la competencia y las economías de escala induzcan rebajas. Sin embargo, esto último sólo parece ocurrir parcialmente, pues a pesar de que hayan bajado los tipos de interés en Ecuador, Bolivia y Nicaragua, la eficiencia creciente de las instituciones más grandes alimenta sobre todo sus altos niveles de rentabilidad (véase la parte inferior de la tabla).

Mientras muchos segmentos poblacionales, especialmente en zonas rurales, aún no tienen acceso a las microfinanzas, la excesiva concentración de las instituciones en zonas urbanas ha dado lugar a crisis de sobreendeudamiento regionales y nacionales, algunas veces exacerbadas por el desarrollo del crédito de consumo (Marconi & Mosley, 2006). En ciertos países, la saturación del mercado ha resultado en prácticas crediticias flojas e incluso imprudentes, deteriorando dramáticamente la calidad del portafolio.

3. Trayectorias nacionales

3.1 El futuro incierto de las microfinanzas en Bolivia

Bolivia, pionera del microcrédito, se ha convertido en un ejemplo emblemático para las microfinanzas comerciales. Los portafolios de IMF representan el 31.5 por ciento del sistema financiero del país en volumen y el sector sirve a la mayoría (el 70 por ciento) de los clientes (Bédécarrats & Marconi, 2009, p. 76). Después de una intensa fase de crecimiento en los años 90, durante los cuales llegaron a servir casi a un millón de clientes (sobre todo urbanos), el país fue sacudido por su primera crisis de sobreendeudamiento y de confrontaciones con ‘sindicatos de deudores’ entre 1999 y 2002. Esto empujó la naciente ‘industria de las microfinanzas’ a desarrollar mecanismos para un mejor manejo de la competencia, tal como oficinas de crédito y códigos de conducta para las instituciones. El episodio no perjudicó tanto – incluso consolidó su importancia en el sector – a dos organizaciones no lucrativas: CRECER y PROMUJER, ambas orientadas hacia mujeres y con reputación de tener las prácticas más socialmente orientadas en el sector (Marconi & Mosley, 2006).

3 El rendimiento promedio a nivel del continente es de 33.8% (Martínez Ramírez, 2009, p.18).

Page 62: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

68

Encuentro No. 94, 62-8 1, 2013

Evo Morales, líder del Movimiento al Socialismo (MAS), completó su primer mandato presidencial entre 2006 y 2009. Éste fue marcado por varias reformas importantes, incluyendo cambios a la constitución y la nacionalización de las industrias de hidrocarburos, pero también por una polarización de la política, manifiesta en el antagonismo entre el Poder Ejecutivo por un lado y los poderes Legislativo y Judicial por el otro, así como en las confrontaciones entre las poblaciones indígenas del Altiplano y las de zonas orientales del país. Con su victoria electoral aplastante en diciembre de 2009, el MAS ahora controla la mayor parte de las instituciones políticas, lo que ha eliminado los obstáculos de su período anterior. Sin embargo, las expectativas populares hacia sus mandatarios son aún más altas, por lo que ahora ya no pueden usar las trabas impuestas por la oposición como justificación de posibles incumplimientos. Además, las divisiones internas se hacen más visibles. El partido de Evo Morales está estructurado alrededor de dos componentes: uno está compuesto por militantes de movimientos izquierdistas históricos con experiencia en cargos públicos (en gobiernos nacionales o locales) y mantiene lazos cercanos con los dirigentes de las IMF. El otro, asociado a los grupos indígenas y movimientos populares, a menudo se encuentra en desacuerdo con el primero y tiene una postura mucho más ofensiva hacia el sector microfinanciero.

Esta izquierda algo dispar adopta una postura ambigua con respecto a las microfinanzas. Mientras que pinta a las IMF como ‘usureros’ durante las elecciones, con candidatos del MAS prometiendo préstamos con tasas de interés de un solo dígito, el partido sólo ha realizado tentativas tímidas y aisladas para convertir estas promesas en acciones reales. El marco regulatorio boliviano constituyó un modelo para las microfinanzas comerciales (Gómez, Tabares & Vogel, 2000) porque priorizaba los beneficios y la estabilidad, animando la estandarización de prácticas en detrimento de los objetivos del desarrollo (Bédécarrats y Marconi, 2009, pp. 79-82). Surgió un cambio en 2006 cuando Evo Morales nombró, como Comisionado de la muy ortodoxa Comisión Bancaria, a un antiguo funcionario de banca pública que estuvo entre los primeros promotores de las microfinanzas en el país. Producto de esta reorientación, en 2008 las ONG que hasta entonces no eran reguladas, fueron colocadas bajo la supervisión del Banco Central. Pese a un proceso prolongado de acreditación, esta disposición abrió para las ONG la posibilidad de movilizar ahorros. Pero esta ventana de oportunidad para construir un sector microfinanciero no lucrativo, con orientación social y hacia las áreas rurales no parece ser una prioridad del gobierno. De hecho, poco después de estos cambios, la Comisión Bancaria fue remplazada por una autoridad de supervisión controlada por el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas. La reforma afectó a todas las autoridades independientes del Poder Ejecutivo y fue acompañada por una gran rotación de personal. Al sustituir a especialistas financieros, considerados muy tecnócratas, con personas de menor experiencia, a menudo asignadas por afinidades partidarias, el cuerpo de supervisión perdió gran parte de su capacidad técnica de supervisar con eficacia un sector todavía vulnerable a la bancarrota o al fraude.

Además de la regulación, el gobierno ha impulsado políticas públicas de financiamiento. Con capital venezolano, creó el Banco de Desarrollo Productivo (BDP), controlado por el Estado para canalizar programas de transferencia de bonos sociales y refinanciar a instituciones microfinancieras, así como para proporcionar créditos

Page 63: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

69

Encuentro No. 94, 62-81, 2013

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

directamente a organizaciones de artesanos y campesinos. Sin embargo, el capital inicial no fue renovado. El BDP es supervisado por cuatro ministerios que compiten por su control y sus actividades siguen siendo limitadas a un pequeño fondo de préstamo para instituciones financieras existentes. Durante la campaña electoral de finales de 2009, el discurso del MAS enfatizó la necesidad de crear un mecanismo de finanzas del desarrollo genuinamente controlado por el Estado, a menudo mencionado junto con una posible regulación de los tipos de interés de las IMF. Sin embargo, estas declaraciones tienen todavía que dar lugar a medidas concretas.

Aunque las posturas siguen siendo a menudo matizadas, los profesionales del sector microfinanciero denuncian frecuentemente las amenazas que perciben por parte del gobierno de tomar el mando de sus instituciones. Cabe mencionar que, entre las IMF, solamente AGROCAPITAL ha visto su desarrollo refrenado y esto por razones muy específicas. Esta institución, iniciada por USAID, participó activamente en los programas de erradicación de la coca y principalmente por esto fue puesta en la mira de las autoridades. Otras IMF no han sido afectadas, pero la situación podría evolucionar. En efecto, la nueva Constitución explícitamente da una voz a los movimientos sociales, haciendo una obligación el involucrarlos siempre que se utilicen los fondos públicos y, por extensión, fondos de los organismos de desarrollo internacionales. Esto ha reforzado el activismo de ciertos grupos cercanos al MAS en lo referente al sector de las microfinanzas.

A la luz de estas amenazas, algunas IMF están fomentando alianzas con bancos privados, previendo un decreto que obligue a estos últimos a dirigir parte de sus portafolios al microcrédito, como en Venezuela. Para muchas IMF, integrarse al sector bancario parece ser la mejor protección contra veleidades políticas. Los bancos no sólo están exentos de obligaciones de incluir a los movimientos sociales, ellos pueden aplicar tipos de interés particularmente altos en tarjetas de crédito sin la preocupación de sanciones. Otras IMF, en especial ONG afiliadas a la red nacional de microfinanzas, están apostando a profundizar el diálogo con las nuevas autoridades. Buscan demostrar su utilidad social construyendo alianzas con organizaciones de agricultores, mientras enfatizan su complementariedad a las políticas públicas ofreciendo mediar los programas de transferencia de efectivo del gobierno.

3.2 Nicaragua: Crónica de una crisis anunciada

El Banco de Desarrollo de Nicaragua entró en declive desde principios de los 90, durante la transición política entre el gobierno Sandinista y el Liberal, para cerrarse formalmente en 1998. Una primera ola de bancos comerciales creados al mismo tiempo cayó en bancarrota rápidamente, a menudo debido a fraudes. En este contexto, las IMF florecieron de varias formas. Los bancos comerciales de microfinanzas, supervisados por la comisión bancaria y autorizados para recolectar ahorros del público, experimentaron un crecimiento del 42 por ciento anual entre 2004 y 2008 (Superintendencia de Bancos, 2010; ASOMIF, 2010), apoyados por inversionistas públicos y privados. Mientras tanto, las ONG crecieron un promedio de 24 por ciento anual – algo más lento que sus contrapartes comerciales – debido a trabas regulatorias que les impiden movilizar ahorros, así como a las

Page 64: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

70

Encuentro No. 94, 62-8 1, 2013

reticencias de los donantes públicos que, siguiendo las recomendaciones de instituciones multilaterales (Bastiaensen & Marchetti, 2007), decidieron no apoyar a organizaciones no lucrativas no reguladas, a menudo enfocadas en microfinanzas rurales. Sin embargo, el éxito de algunas ONG orientadas al mercado rural, tales como el Fondo de Desarrollo Local (FDL), Prestanic y Fundeser, generó un creciente interés entre los fondos de inversión social e incluso de fondos comerciales4. Existen también algunas cooperativas, pero éstas son significativamente más pequeñas. A finales de 2008 se estimó que los principales actores servían a más de medio millón de clientes, representando una porción significativa del – aproximadamente – un millón de pequeñas empresas en el país (Flaming, Duflos & Helms, 2005). Aunque esta sea una estimación, la saturación del mercado es evidente, con la mayoría de los casos de sobreendeudamientos encontrándose en zonas urbanas y entre los ganaderos.

Procredit y Banex, dos bancos microfinancieros regulados, fueron designados como los ‘campeones’ de las microfinanzas rentables y se involucraron en una estrategia de expansión y competencia agresiva. Esto fue posible e incluso necesario debido a grandes inyecciones de liquidez por parte de donantes públicos y, en un menor grado, de inversionistas privados. Al hacer eso, intentaron eliminar IMF no reguladas que carecían de recursos financieros comparables. Sin embargo, gracias a su calidad institucional y su cobertura rural, muchas de estas IMF resistieron y lograron asegurar financiamiento internacional para sostener el crecimiento de su cartera.

Esta acometida apresurada llevó a un relajamiento del control de riesgo, préstamos múltiples y sobreendeudamiento, creando así las condiciones para una genuina crisis del sector accionada por una recesión aguda que golpeó fuertemente a los comerciantes en el 2009. Esta espiral llevó a muchas IMF a acumular malos préstamos y a un endurecimiento en sus prácticas de recolección. Particularmente afectado por la crisis, Banex fue liquidado en 2010, mientras que Procredit tuvo que ser recapitalizado por su contraparte internacional. El último, intentando moverse hacia una clientela más confiable, aumentó su cantidad mínima de préstamo a $2500.

El partido Sandinista volvió al poder en Nicaragua en 2007, después de 18 años en la oposición. Su victoria no fue el resultado de más votos – registró el mismo 38 por ciento que había tenido por más de una década –, sino el fruto de una oposición dividida y de las maniobras políticas que permitieron que el candidato con más de 35 por ciento tomara la oficina sin una segunda vuelta electoral. Esto explica por qué la consolidación del apoyo popular se convirtió en la principal prioridad del nuevo gobierno. Éste buscó reforzar una relación clientelista por medio de programas sociales, incluyendo microcréditos subvencionados (financiados con fondos venezolanos) y redes económicas creadas alrededor de empresas privadas venezolano-nicaragüenses federadas bajo un consorcio llamado ALBA. Estas

4 Así, en 2008, las agencias multi y bilaterales representaron alrededor del 60%. Representaron el 30% de las fuentes de financiamiento para Procredit, el banco microfinanciero más grande del país y en gran medida orientado al sector urbano, mientras que correspondieron sólo al 13% y 14% para el fdl, el IMF no regulado más grande del país y principalmente rural. A la inversa, inversionistas sociales y comerciales representaban el 11% del fondeo de Procredit, pero el 50% para el fdl (Abarcar, citado por Roodman, 2010).

Page 65: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

71

Encuentro No. 94, 62-81, 2013

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

relaciones fueron forjadas a través de intermediarios locales, como las cooperativas, que desempeñaron un papel importante como agentes subsidiaros dispensando subsidios a sus bases a cambio de su lealtad partidista (Rocha, 2010).

Es en este contexto que un movimiento impulsado por empresarios cercanos al partido Sandinista surgió en el norte del país en 2008. En un principio se propuso condenar las prácticas – tales como la incautación de garantías y la pena de prisión por mora – utilizadas por IMF supervisadas, únicas instituciones que permiten este tipo de recurso legal en caso de incumplimiento. Tras las negociaciones iniciales y el acuerdo entre los representantes locales del movimiento, conocido como No Pago y las IMF, el presidente Ortega instó a su audiencia a rebelarse en contra de esos «usureros» durante un discurso público en Jalapa el 13 de julio de 2008:

yo les he dicho que hay que protestar, hay que reclamar; entiendo los reclamos, porque en un año y seis meses desmantelar todas las cadenas que nos impusieron los gobiernos al servicio de la oligarquía y el imperio no es fácil. Ellos nos fueron poniendo cadenas por todos lados. Han hecho bien en protestar en contra de los usureros, pero en vez de estar protestando en las carreteras protesten frente a las oficinas de los usureros y plántense frente a sus oficinas. Párense firmes, nosotros los apoyamos! (…) Amenazan con dejar de prestar, si el favor no lo están haciendo ellos, si lo que han hecho es un negocio para enriquecerse a costa de las necesidades de la gente después de que en 1990 desaparecieron los bancos que trabajaban con el pueblo (Vanegas, 2008).

Al siguiente día se desataron meses de violentos enfrentamientos entre los grupos de No Pago y el personal de las IMF, iniciando con el incendio de una ONG microfinanciera que no tenía nada que ver con los conflictos iniciales de reembolso, pero cuya cercanía con miembros de la oposición liberal era notoria.

Esta estrategia política se intensificó con la crisis de sobreendeudamiento de 2009. La situación fue explotada por las élites locales (a menudo entre los morosos con deudas más importantes) que eran los instigadores y coordinadores principales de los alborotos que al parecer maniobraban para reforzar sus redes clientelistas, asegurando a los grupos que sus deudas se cancelarían. El conflicto, algunas veces violento, continuó a lo largo de 2009 con el gobierno vacilando en sus posiciones hacia las microfinanzas, manteniendo en última instancia una política ambigua que reflejó las dinámicas locales de poder. Las demandas de la oposición cambiaron gradualmente de los problemas de pago hacia las tasas de interés. Bajo la presión del movimiento No Pago y con la ayuda de los políticos Sandinistas y no Sandinistas que representaban a los ganaderos del norte, un proyecto de ley fue introducido el 13 de abril de 2010 permitiendo que los morosos refinanciaran sus préstamos por cinco años a una tasa de 18 por ciento anual. A pesar del fervor que marcó la lucha por esta ley de moratoria, sólo una pequeña porción de los deudores del movimiento No Pago ha hecho uso de ella. Al parecer, la mayoría contó con condonaciones de deuda más significativas durante la campaña electoral de 2011. Sin embargo, la introducción de otro proyecto de ley para las microfinanzas, en junio de 2011, parece haber abierto una nueva era de relaciones más cooperativas entre el gobierno y el

Page 66: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

72

Encuentro No. 94, 62-8 1, 2013

sector de las microfinanzas, y el apoyo político para el movimiento No Pago parece haber disminuido5. Cómo se desarrollarán estas relaciones está todavía por verse.

En este contexto, igual que en Bolivia, la tendencia consiste en que las ONG veteranas preparen su transformación hacia estructuras comerciales para ser reguladas por la Comisión Bancaria y así liberarse de la intervención gubernamental. Sin embargo, es una tendencia que limita el alcance de objetivos sociales, particularmente en el desarrollo rural. Aún frente a las amenazas políticas al sector privado, paradójicamente, reforzar su orientación mercantil ofrece una mejor protección regulatoria que el sector sin fines de lucro.

3.3 Ecuador: cuestionamientos públicos que siguen siendo ‘manejables’ para el sector

El sector de las microfinanzas en Ecuador se compone de organizaciones grandes, bancos y cooperativas supervisados por el Banco Central, una gama de ONG no reguladas, y pequeñas cooperativas. Además, hay dos bancos públicos que lamentablemente están mal administrados, operan a pérdidas, a veces son manipulados para fines electorales y dependen de inyecciones frecuentes de capital. Son considerados entre los más disfuncionales de la región (Trivelli & Venero, 2007, pp. 88-102).

La izquierda ecuatoriana se unió alrededor de la coalición de Alianza País en 2006 para que Rafael Correa llegara al poder. Además de ser ex profesor de economía, tuvo una fugaz experiencia como Ministro de Finanzas antes de ser despedido bajo la presión de instituciones financieras internacionales, que se oponían a sus medidas. Poco después de tomar la oficina presidencial en enero de 2007, despidió al representante del Banco Mundial y puso en marcha un proceso de reformas constitucionales. En 2008 sentó las bases para importantes cambios en la política económica: mayor control de los recursos petrolíferos y énfasis en una economía basada en la solidaridad. Correa se rodeó de una élite poco representativa de los partidos gobernantes tradicionales: los ministros provenían de organizaciones no gubernamentales, empresas consultoras y, en menor grado, del mundo académico (Basabe-Serano, 2009).

A partir de su experiencia académica como profesor, el Presidente desarrolló un plan económico estructurado alrededor de tres áreas: público, privado-emprendedor y popular. Bajo este plan, la economía con base solidaria está en la unión de estas tres áreas e incluye la gestión participativa, los servicios sociales, la sociedad civil y las empresas de economía social.6 Diferente de la visión neoliberal “progresista” que buscaba incluir los empresarios individuales en el mercado principal, el enfoque de Correa, apoyado por la nueva Constitución, promueve su crecimiento en un ámbito económico que es un híbrido entre el capitalismo, el mutualismo y el Estado.

5 En el terreno, muchos deudores e IMF hoy en día tienden a negociar en forma bilateral y muy pragmática la reestructuración de la deuda a cambio de las propiedades (legalmente, pero no realmente) confiscadas, con el objetivo de dar vuelta a esta página tan pronto como sea posible.

6 El concepto de economía social se refiere aquí a las organizaciones que participan en actividades económicas definidas por un estatus de propiedad colectiva, tales como cooperativas, mutualidades, asociaciones o sindicatos.

Page 67: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

73

Encuentro No. 94, 62-81, 2013

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

Una nueva ley, decretada el 11 de mayo de 2011, busca priorizar el concepto de «financiamiento popular». Éste se fundamenta en un criterio de propiedad colectiva y suplanta la noción de microfinanzas, definida por el tipo de productos ofrecidos y el nivel de pobreza de sus usuarios. Esta ley no reconoce un estatus propio para las ONG microfinancieras, incitándolas a convertirse en entidades con fines de lucro o en cooperativas. Hasta ahora, la ley continúa siendo vaga sobre las implicaciones prácticas de sus principios y varias modalidades cruciales tendrán que ser definidas en las regulaciones para finales del 2011. Por otra parte, el gobierno ha disputado la asignación de subvenciones internacionales para el desarrollo y ha creado un instituto para coordinar las iniciativas de los donantes. Por ahora, las nuevas prioridades no son restrictivas, pero los esfuerzos del gobierno para recoger la información y asignar cada ONG a un ministerio manifiestan su intención de incluir el sector no gubernamental en su esquema institucional.

El gobierno ha realizado cambios al marco regulatorio. Desde su toma de posesión, Correa ha amenazado en varias ocasiones a los “burócratas de oro” y criticó la independencia de algunas instituciones frente a los representantes elegidos por el pueblo. Por lo tanto, además de medidas transversales para reducir las escalas salariales de los funcionarios públicos, el Banco Central ha sido objeto de seguimiento más cercano. Los tecnócratas han sido sustituidos por personas elegidas bajo criterios partidarios y con menor capacidad técnica y experiencia. El presidente también se ha opuesto a las instituciones multilaterales, a menudo más simbólicamente que operativamente, por ejemplo en posturas mediatizadas contra el Banco Mundial y el FMI en 2007 y 2008, y a través del apoyo al Banco del Sur, relacionado con el ALBA y que todavía sólo existe en papel.

El gobierno también ha establecido un fondo de segundo piso, dotado con $40 millones y administrado por el Ministerio de Desarrollo Social, para refinanciar a las IMF. Con el fin de asegurar la utilidad social de las instituciones apoyadas, las autoridades han desarrollado una metodología para evaluar su desempeño social que se basa en una herramienta de auditoría social ampliamente reconocida a nivel internacional (Zeller, Lapenu & Greeley, 2003). También tiene un programa de crédito directo llamado el ‘5, 5, 5’, que presta $5000 por 5 años a un 5 por ciento anual. Muchos observadores creen que el programa fue diseñado con propósitos electorales y denuncian su mala gestión. Algunos maliciosamente agregan el número ‘40’ al nombre, refiriéndose a la tasa de mora del programa.

En este contexto, la Red Financiera Rural, plataforma que aglomera la mayor parte de las IMF del país, ha emergido como un cuerpo de mediación ineludible. Ha organizado sesiones de capacitación en microfinanzas para los nuevos empleados del Banco Central. Pero más importante, a la luz de los informes mordaces del gobierno y las declaraciones sobre los límites de tasas de interés, es que han llevado negociaciones intensas con el gobierno para asegurar que los techos sean aplicados de forma gradual. Como resultado, la mayoría de IMF ha logrado cumplir formalmente. Incluso la portavoz de un movimiento internacional muy importante de las microfinanzas comerciales ha admitido que “esta política por lo menos tiene la virtud de proporcionar señales claras y de permitir un tiempo de ajuste” (Rhyne, 2010).

Page 68: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

74

Encuentro No. 94, 62-8 1, 2013

4. Una relación compleja y ambivalente

4.1 Conflictos impregnados por un antagonismo ideológico

En cada uno de los casos presentados arriba, el desacuerdo ocurrido entre las microfinancieras y los nuevos mandatarios públicos se deriva de un desafío al status quo sobre las prerrogativas del Estado y de la iniciativa privada. Las reformas neoliberales dieron la impresión de que el Estado se retiraba de sus funciones soberanas para dejar que el mercado organizara las actividades rentables y delegara la gestión de las poblaciones vulnerables a organizaciones autónomas sustentadas por la solidaridad privada o la ayuda internacional. Hoy, las microfinanzas y los movimientos socialistas tienen un campo en común, pero enfoques diferentes. Su misión prioritaria es la de mejorar las condiciones de vida de los pobres y excluidos, pero los primeros insisten en su especialización técnica y naturaleza apolítica, mientras que los últimos enfatizan la representación política y la justicia social.

A pesar de este propósito compartido y de su complementariedad potencial, los intentos de articular ambos sectores se enfrentan a diferencias profundas derivadas de su genealogía. Las microfinanzas han prosperado en el vacío dejado después de los ajustes estructurales, a menudo con el apoyo de las mismas instituciones internacionales contra las que los movimientos sociales de hoy están luchando (Rodríguez Carmona, 2008).

Los movimientos izquierdistas hacen reproches a las microfinancieras por una variedad de razones que juntas constituyen un argumento estructurado (Toro, 2009). En el centro está el debate sobre las tasas de interés, descritas como exorbitantes por los movimientos sociales que, por su ética, no admiten que la gente pobre pague proporcionalmente más que los ricos. Los proveedores de microfinanzas también son criticados por sus prácticas intransigentes de colección cuando se trata de recuperar préstamos de los clientes humildes, propensos a dificultades de pago. Tal firmeza contradice el discurso izquierdista, que destaca la responsabilidad colectiva sobre la individual cuando se trata de desigualdades (Bobbio, 1995). Una tercera queja contra las microfinanzas es que la oferta depende enteramente de la existencia de una demanda solvente. Los gobiernos izquierdistas desaprueban la renuencia de las microfinancieras para prestar durante crisis económicas y el efecto pro cíclico que induce tal aversión al riesgo. A nivel estructural, también critican las IMF por centrarse en zonas urbanas y en actividades de servicio y pequeño comercio, ignorando los sectores primarios o secundarios que figuran tan prominentemente en los planes de desarrollo de los movimientos socialistas.

Es útil analizar la historia de las relaciones de poder que fraguan las prácticas de deuda en América Latina. El ‘peonaje’, es decir la esclavitud por deuda, se encuentra en el corazón de los sistemas heredados de la época colonial (Chamoux, Dehouve & Gouy-Gilbert, 1993). De hecho, la creación de instituciones públicas de fomento, las organizaciones autónomas de ahorro y crédito o las finanzas comerciales deben entenderse a través del vínculo político que sostienen sus relaciones de deuda. Este prisma explica por qué las cooperativas financieras, que proliferaron a mediados del Siglo XX, se dirigieron principalmente a aquellos con menor subordinación económica: estos eran los primeros capaces de organizarse para

Page 69: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

75

Encuentro No. 94, 62-81, 2013

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

establecer mecanismos autónomos de intermediación financiera. También explica por qué tan tantos movimientos religiosos que tenían proyectos de sociedad – sean progresivos o conservadores, católicos o protestantes – crearon IMF para sustentar la transformación pretendida7. También se puede analizar la creación de los bancos públicos como una forma del Estado para sustituir el tradicional caciquismo por nuevas lealtades partidistas (Lehmann, 1990). Según esta perspectiva, aunque los clientes de IMF no continúen sujetos a las obligaciones de reciprocidad que marcaron la historia colonial o el actual clientelismo político, a cambio deben someterse a precios elevados y una disciplina estricta de reembolso, que en ocasiones se traduce en una verdadera dependencia al crédito. Inversamente, cuando el gobierno critica las microfinanzas y distribuye préstamos subvencionados en nombre de la autonomía económica de los pobres – fenómeno particularmente común durante períodos electorales –; la atribución de estas ayudas es a menudo discrecional e implica para los beneficiarios una fidelidad electoral hacia el partido oficial, recreando sistemas de alienación política.

Aunque la oposición ideológica de las izquierdas a las microfinanzas se base en una acusación sustancial del sector, estos movimientos tienen todavía que proponer una alternativa viable. En los tres casos presentados arriba, los programas de crédito público de alto nivel han dado lugar a resultados decepcionantes. Estos fallos, como los de programas comparables en Venezuela (Penfold Becarra, 2007) privan a los socialistas de los ejemplos necesarios para enfrentar la ortodoxia a la cual se oponen. No obstante, los contra-ejemplos existen en Brasil, Chile y Guatemala8, en donde los proveedores públicos y privados están trabajando juntos para desarrollar los verdaderos métodos híbridos que aseguren sostenibilidad financiera. Paradójicamente, estos ejemplos no han atraído mucha atención en el nivel regional y todavía no se han reproducido en Bolivia, Ecuador o Nicaragua.

4.2 Factores institucionales que afectan las microfinanzas

Más allá de ideologías, las realidades locales son influenciadas por factores institucionales e intereses particulares que afectan la manera en que los conflictos surgen y son resueltos, sea por medio de compromisos o de confrontaciones. Los mensajes claros, pareados con medidas coherentes, son esenciales para permitir la colaboración entre agentes públicos y privados. Este no ha sido el caso en Bolivia o Nicaragua, en donde los gobiernos han tomado posiciones inconsistentes y, en ocasiones, contradictorias, con discursos opuestos entre ministerios distintos o incluso entre diferentes niveles de una misma administración.

7 En Nicaragua, por ejemplo, el FDL fue creado por la Compañía de Jesús y Prestanic por el Consejo de Iglesias Protestantes. Compartamos, la mayor IMF mexicana, fue fundada y es todavía en gran parte controlada por los tradicionalistas Legionarios de Cristo (en Bolivia y Ecuador las IMF basadas en la fe son menos importantes). Las microfinanzas incluso se han mencionado, aunque en términos muy vagos, en una encíclica papal: Benedicto XVI. Carta Encíclica en Veritae del Sumo Pontífice sobre el desarrollo humano integral en la caridad y la verdad, Roma, Vaticano, 29 de junio de 2009. Cabe señalar, sin embargo, que de acuerdo con sus diferencias ideológicas y programáticas, las organizaciones basadas en la fe no necesariamente comparten las mismas posiciones políticas con respecto al papel de las microfinanzas.

8 El Banco do Nordeste de Brasil, el INDAP en Chile y el BANRURAL en Guatemala. Para Brasil véase Abramovay et al. (2008) y para los otros dos véase Trivelli y Venero (2007).

Page 70: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

76

Encuentro No. 94, 62-8 1, 2013

Los cuerpos de mediación son cruciales bajo estas circunstancias pues pueden ayudar a construir marcos de referencia comunes a instituciones políticas e IMF. Los comités técnicos de bancos centrales y los departamentos ministeriales desempeñaron un papel clave en Bolivia y Ecuador, traduciendo las intenciones políticas en medidas inteligibles y factibles. Sin embargo, la apropiación de estos órganos por parte del poder ejecutivo se ha traducido en una pérdida de la capacidad técnica, puesto que el personal menos experimentado es más influenciable por los políticos que encabezan sus ministerios de tutela, pero también por las instituciones que se supone deben supervisar. Es igualmente importante que los practicantes de las microfinanzas creen consenso alrededor de posiciones compartidas y se reúnan detrás de un portavoz común. En los tres países las redes nacionales de IMF9 han prosperado en un contexto marcado por tensiones políticas y han probado ser críticas para fomentar acuerdos que reconozcan el papel del sector a cambio de mayor transparencia en cuanto a su utilidad social. Han establecido sistemas de rendición de cuentas que han respondido a las preocupaciones locales y han visibilizado la contribución de las microfinanzas al bienestar público en un esfuerzo por mantener su autonomía.

Por otra parte, un análisis sociológico más detallado de las élites es útil para identificar las oportunidades de diálogo y para promover acercamientos. En muchos países, las ONG microfinancieras son lideradas por individuos inclinados hacia la izquierda que se incorporaron al sector asociativo cuando sus actividades de funcionario político o civil fueron amenazadas por la represión militar o ajustes estructurales. En Ecuador y Bolivia, varios encargados de IMF mantienen relaciones estrechas – e incluso amistades personales – con políticos prominentes de los partidos izquierdistas, lo que ha ayudado a generar acuerdos. En Nicaragua, la tensión entre las microfinanzas y el gobierno se debe mucho al hecho de que varios encargados de IMF son antiguos funcionarios del gobierno revolucionario de los años 80, ahora distanciados del nuevo gobierno de Daniel Ortega.

4.3 Perspectivas estratégicas bajo limitaciones

La tensión cada vez mayor entre las microfinanzas y los gobiernos socialistas afecta de forma distinta a las IMF dependiendo de sus características organizacionales y operativas. Como resultado han desarrollado estrategias diferenciadas que se representan en la tipología siguiente:

9 ASOMIF (www.asomif.org), fundada en 1992 en Nicaragua, RedFinanciera Rural (www.rfr.org.ec), fundada en 2000 en Ecuador, FINRURAL (www.finrural-bo.org) y Asofin (www.asofinbolivia .com), creados en 1993 y 1999 respectivamente, en Bolivia.

Page 71: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

77

Encuentro No. 94, 62-81, 2013

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

Cuadro 2. Segmentación de las IMF: polarización del sector y desaparición de las microfinanzas transformativas

Características institucionales y operativas

Perspectiva de gobiernos izquierdistas

Estrategia del sector

Microfinanzas minimalistas: Enfoque comercialmente agresivo, inversión extranjera privada

Segmento que es más criticado pero concretamente poco amenazado por los gobiernos

Consolidar la protección con derecho mercantil. Adoptar estándares mínimos de responsabilidad social.

Microfinanzas transformativas: Financieramente sostenibles, sin fines de lucro, ONG y cooperativas financieras, políticamente independientes y comprometidas con el cambio socioeconómico

Segmento más expuesto a la situación política: regulación existente muy desfavorable, controversia sobre sus relaciones con organizaciones de ayuda internacional para el desarrollo, criticadas por sus tasas de interés, los gobiernos niegan su autonomía y su capacidad de generar alternativas sociales o económicas

Luchan por el reconocimiento de su contribución al desarrollo pero son fuertemente incitadas a convertirse en ‘microfinanzas minimalistas’ o en ‘microfinanzas solidarias’.

Microfinanzas solidarias: Tasas de interés subvencionadas, crédito dirigido a sectores económicos o sociales específicos, viabilidad financiera no es una prioridad

Segmento apoyado por gobiernos socialistas, riesgo de prácticas clientelistas, y/o instrumentalización para los programas económicos del gobierno

Buscan incidir en las políticas gubernamentales para mayor reconocimiento y convergencia estratégica. Tentadas con renunciar a su autonomía para obtener fondos públicos.

Por años, el paradigma comercial priorizó la competencia como la mejor forma de mejorar la eficiencia del mercado microfinanciero. Hoy en día, los excesos y el crecimiento desenfrenado han dado lugar a crisis de sobreendeudamiento y en ocasiones a prácticas abusivas hacia los clientes. Ahora parecen ingenuos los esfuerzos previos de ciertos actores microfinancieros para evitar que el sector público regulara los aspectos sociales de su actividad o evaluara su contribución al desarrollo. Peor aún, incitaron el escepticismo de algunos gobiernos.

La visión minimalista de las microfinanzas, implicando en particular el abandono del acompañamiento mediante servicios no financieros – sean de salud, educación y desarrollo local – fue presentada por las instituciones multilaterales

Page 72: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

78

Encuentro No. 94, 62-8 1, 2013

como un dechado de buena práctica. Ahora esta visión es fuertemente disputada. Irónicamente, el segmento de las microfinanzas que es puramente financiero, y el más lucrativo, está mayormente protegido contra las intromisiones políticas. No depende del sector público para su refinanciamiento y por otra parte está protegido por un marco jurídico sólido que los gobiernos tienen cuidado de no tocar.

Ciertamente las instituciones que arriesgan más son las que se han opuesto al paradigma comercial. Persiguiendo operaciones profesionales y sostenibles, han mantenido un fuerte compromiso hacia las metas de desarrollo y cambio social. Estas organizaciones, casi aniquiladas por la corriente dominante de las microfinanzas y las medidas regulatorias de los bancos centrales que favorecen a las empresas privadas y bancos, se encuentran ahora atrapadas en medio de un sector cada vez más polarizado, dominado por dos enfoques competidores: uno llevado por lógicas meramente mercantiles y el otro sometido a las políticas públicas. Si fallan en demostrar su importancia, no tendrán ninguna opción más que retirarse a la esfera comercial o someterse al control de autoridades políticas.

5. Conclusión

La relación particularmente tensa entre el gobierno y las IMF en Nicaragua, así como las situaciones más ambivalentes en Ecuador y Bolivia, son evidencia de la naturaleza polifacética y verdaderamente ambigua de los dos sectores. Por una parte, las izquierdas latinoamericanas tienen como objetivo declarado fomentar un desarrollo más equitativo, pero también son motivadas por el deseo de ensanchar su base social y tejer relaciones clientelistas que favorezcan su permanencia en el poder. Por otro lado, las IMF emergieron en vísperas de los fallos de bancos estatales y se presentaron como la única opción económicamente viable para financiar el desarrollo local. Sin embargo, en muchos casos se han desviado de su misión, ampliando sus operaciones de manera eminentemente comercial.

Citando los débiles resultados de las microfinanzas en términos de transformación económica, los gobiernos inclinados al socialismo están intentando intervenir directamente en la provisión de los servicios de crédito a los pobres. Pero debido a que estas intervenciones públicas son, ante todo, instrumentos políticos y carecen de los recursos humanos para una gestión sostenible a gran escala, tienden a ser esporádicas. Se complementan a menudo con programas mediados por IMF existentes que reciben financiamiento de la administración a cambio de aceptar condicionamientos sobre los sectores a los cuales tienen que ser dirigidos. A la luz de esto, tendría sentido negociar y fijar un marco regulatorio para prevenir los abusos, junto con políticas públicas complementarias que mejoren el alcance y el impacto de las microfinanzas. En lugar de eso, el oportunismo político lamentablemente tiende a llevar a la competencia efímera, pero intensa, entre las IMF existentes y los programas públicos temporales, así como a pequeñas y a menudo contradictorias reformas legales que en gran parte concuerdan con la ortodoxia financiera de la era anterior.

Paradójicamente, en los países estudiados esto ha exacerbado la polarización de los dos extremos del espectro microfinanciero. Por una parte, las instituciones

Page 73: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

79

Encuentro No. 94, 62-81, 2013

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

más débiles tienden a atraer el apoyo gubernamental a cambio de entregar el control de sus operaciones, incluso si eso significa renunciar a la sostenibilidad financiera. Por otra parte, las instituciones más comerciales se protegen contra la amenaza de interferencia consolidando sus lazos con el sector privado. En resumen, parece que las instituciones bajo mayor amenaza son aquellas que, por medio de un enfoque que prioriza al desarrollo local, han logrado la viabilidad de forma autónoma.

Sin embargo, el debate sobre cómo redefinir los roles de los sectores público y privado en las finanzas de desarrollo implica entrelazar niveles locales e internacionales. Por tanto, es difícil saber cómo se desarrollará esta controversia. Un cambio en el posicionamiento de las grandes instituciones multilaterales, que hasta ahora defendieron la visión mercantil de las microfinanzas, o la aparición de un enfoque alternativo en países como Brasil, podría influir en las trayectorias nacionales que hemos analizado.

Referencias bibliográficas

Abramovay, R., Magalhães, R. & Schröder, M. (2008). Social Movements Beyond the Iron Cage: Weak Ties in Territorial Development. World Development, 36(12), 2906-2920.

Adams, D. W., Graham, D. H. & Von Pischke, J. D. (1984). Undermining Rural Development with Cheap Credit. Boulder: Westview Press.

Arditi, B. (2008). Arguments About the Left Turns in Latin America: A Post-Liberal Politics. Latin American Research Review, 43(3), 59-81.

Asociación Nicaragënse de Instituciones de Microfinanzas [ASOMIF]. (2010). Estadísticas. Recuperado el 12 de mayo de 2010, de www.asomif.org/index.php?option= com_content&view=article&id=28&Itemid=5.

Basabe-Serano, S. (2009). Ecuador: reforma constitucional, nuevos actores políticos y viejas prácticas partidistas. Revista de Ciencia Política, 29(2), 381-406.

Bastiaensen, J. & Marchetti, P. (2007). A Critical Review of CGAP-IADB Policies Inspired by the Fondo de Desarrollo Local, Nicaragua. Enterprise Development and Microfinance, 18 (2-3), 143-157.

Beasley-Murray, J., Cameron, M. A. & Hersheberg, E. (2009). Latin America’s Left Turns: An Introduction. Third World Quarterly, 30(2), 319-330.

Bédécarrats, F. & Marconi, R. (2009). L’influence de la régulation sur la capacité de la microfinance à contribuer au développement: le cas de la Bolivie. Tiers Monde, 197, 71-90.

Bobbio N. (1995). Derecha e izquierda: razones y significados de una distinción política, Madrid: Taurus.

Calderón, F. (2008). Una inflexión histórica. Cambio político y situación socioinstitucional en América Latina. Revista de la CEPAL, (96), 121-134.

Cameron, M. A. (2009). Latin America’s Left Turns: Beyond Good and Bad”, en Third World Quarterly, 30(2), 331-348.

Castañeda, J. G. (2006). Latin America’s Left Turn. Foreign Affairs, 85(3), 28-43.Chamoux, M. N., Dehouve, D. & Gouy-Gilbert, C. (1993). Prêter et emprunter.

Pratiques de crédit au Mexique, XVIe-XXe siècle. Paris: MSH.

Page 74: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

80

Encuentro No. 94, 62-8 1, 2013

Flaming, M., Duflos, E. & Helms, B. Country-Level Effectiveness and Accountability Review. Washington, DC: CGAP.

Gómez, A., Tabares, G. & Vogel, R. (2000). Regulation and Supervision of Microfinance Activities: The Bolivian Case Study. Washington: USAID-MBP.

Guérin, I., Lapenu, C. & Doligez, F. (2009). La microfinance est-elle socialement responsable ? Introduction. Tiers Monde, 197, 5-16.

Hall, P. & Taylor, R. (1996). Political Science and the Three New Institutionalisms. Political Studies, 44(5), 936-957.

Helms, B. (2006). Access for All – Building Inclusive Financial Systems. Washington DC: CGAP.

Lehmann, D. (1990). Democracy and Development in Latin America: Economics, Politics and Religion in the Post-war Period. Philadelphia: Temple University Press.

Long, M. F. (Dir.). (1989). World Development Report. Financial Systems and Developement. New york: World Bank.

Marconi, R. & Mosley, P. (2006). Bolivia during the global crisis 1998-2004: towards a macroeconomics of microfinance. Journal of International Development, (18), 237-261.

Martínez Ramírez, R. (2009). Latin America and Caribbean Microfinance Analysis and Benchmarking Report. Washington, DC: The Mix. Recuperado el 15 de enero de 2010, de http://www.themix.org/publications/mix-microfinance-world/2011/01/microfinance-market-report-latin-america-and-caribbean-2.

Morduch, J. (1999). The Microfinance Promise. Journal of economic literature, 37(4), 1569-1614.

Moreno-Brid, J. C. & Paunovic, I. (2008). What is New and What is Left of the Economic Policies of the New Left Governments in Latin America. International Journal of Political Economy, 37(3), 82-108.

Mosley, P. (2009). La ‘trampa política de la pobreza’: Bolivia 1999-2009. Cuadernos Económicos de ICE, (78), 57-98.

Padilla, P. (2008). Las microfinancieras somos políticamente muy atractivas. Envio, (317). Recuperado el 30 de mayo de 2010, de www.envio.org.ni.

Penfold-Becerra, M. (2007). Clientelism and Social Funds: Evidence from Chávez’s Misiones. Latin American Politics and Society, 49(4), 63-84.

Rhyne, E. (2010). Microfinance among the Populists. The Huffington Post, (11), 06.Rocha Gómez, J. L. (2010). Crisis institucional en Nicaragua: entre un Estado

privatizado y un Estado monarquizado. Nueva Sociedad, (228), 4-13.Rodríguez Carmona, A. (2008). El Proyectorado: Bolivia tras 20 años de ayuda externa.

La Paz: Oxfam.Roodman, D. (2010). Who Inflated the Microcredit Bubbles?. David Roodman’s

Microfinance Open Book Blog. Center for Global Development. Recuperado el 25 de abril de 2010, de http://blogs.cgdev.org/open_book/2010/03/who-inflated-the-bubbles.php.

Rosenberg, R., González, A. & Narain, S. (2009). The New Moneylenders: Are the Poor Being Exploited by High Microcredit Interest Rates? Washington DC: CGAP.

Superintendencia de Bancos. (2010). Compilado de datos. Recuperado el 12 de mayo de 2010, de www.superintendencia.Gob.ni/index.php?Temp cont=&id=10&Seccion=1.

Page 75: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

81

Encuentro No. 94, 62-81, 2013

¿Cooptación, cooperación o competencia? Microfinanzas y nuevas izquierdas en Bolivia, Ecuador y Nicaragua

Toro, G. (2009). La pobreza: un gran negocio-análisis crítico sobre Oeneges, Microfinancieras y Banca. La Paz: Mujeres creando.

Trivelli, C. & Venero, H. (2007). Banca de desarrollo para el agro: experiencias en curso en América Latina. Lima: IEP.

Vanegas, L. (2008, 13 de julio). En Jalapa Ortega azuza plantones: sugiere protestas “frente a oficinas de esos usureros”. El Nuevo Diario. Recuperado el 2 de mayo de 2010, de http://www.elnuevodiario.com.ni/nacionales/21296.

Weber, H. (2002). The Imposition of a Global Development Architecture: The Example of Microcredit. Review of International Studies, 28(3), 537-555.

Zeller, M., Lapenu, C. & Greeley, M. (2003). Measuring social performance of micro-finance institutions: A proposal. Washington DC: Argidius-CGAP.

Page 76: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii82

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

* Departamento de Biología, Facultad de Ciencias y Tecnología, Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua, León (UNAN-León). Frente a la Iglesia La Merced, León, Nicaragua. Tel. 23115013 ext. 1500. Correo electrónico: [email protected], [email protected]

** Laboratorio de Genética Molecular (GM), Departamento de Biología, Facultad de Ciencias y Tecnología, Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua, León (UNAN-León). Correo electrónico: [email protected]

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii

David A. Cerda-Granados* y Verónica Díaz**

Recibido: octubre de 2012 / Aceptado: marzo de 2013

Se optimizó un protocolo para la extracción de ADN genómico de Pinus tecunumanii basado en el método de extracción de Doyle y Doyle (1990). Se probaron los megagametofitos de las semillas de árboles de P. tecunumanii muestreados en cinco poblaciones naturales de Nicaragua. El método consta de maceración del tejido en tubos Eppendorf, una extracción con bromuro trimetil amonio de cetilo (CTAB) empleando altas concentraciones de sales, proteinasa K, extracciones sucesivas con cloroformo-alcohol isoamílico y un tratamiento con ARNasa A. El rendimiento fue aproximadamente 13 μg de ADN por 58.7 mg de tejido inicial fresco. El ADN genómico obtenido por este método fue apropiado para ser usado en reacciones RAPD (ADN polimórfico amplificado al azar).

Palabras clave: extracción de ADN / Pinus tecunumanii / RAPD / PCR

1. Introducción

Pinus tecunumanii Eguiluz & J. P. Perry (Pinaceae) es una especie de pino del grupo de pinos de cono cerrado, nativa de México y Centroamérica y a menudo usada en plantaciones forestales en el hemisferio sur (Leibing, van Zonneveld, Jarvis & Dvorak, 2009). Aproximadamente 10,000 ha de P. tecunumanii están siendo actualmente usadas en plantaciones forestales (Dvorak et al., 2000). Esta especie

Page 77: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

83

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii

es especialmente importante en tierras de altas elevaciones en Colombia y está ganando significancia en el norte de Mozambique como especie pura. En Sudáfrica se está usando en híbridos en combinación con P. patula debido a sus favorables propiedades de crecimiento y su resistencia al chancro del pino (Fusarium circinatum) de moderada a alta (Dvorak et al., 2000; Kanzler, Payn & Nel, 2012).

El rango actual conocido de P. tecunumanii se extiende desde una latitud de 17º02N en Chiapas, México hasta una latitud de 12º42N en el centro de Nicaragua (Dvorak, 2002; Dvorak et al., 2000). Esta especie puede ser agrupada en dos ecotipos basados en evaluaciones con marcadores moleculares (Dvorak, Potter, Hipkins & Hodge, 2009) y ligeras diferencias morfológicas y de adaptabilidad: un ecotipo de altas elevaciones (AE) encontrado desde aproximadamente 1500 a 2900 m de altitud y un ecotipo de bajas elevaciones (BE) que ocurre en altitudes de entre 450 y 1500 m (Dvorak, 1986). Nicaragua tiene seis poblaciones de BE que fueron colectadas por la Cooperativa Internacional para el Mejoramiento y Conservación de Árboles (CAMCORE) y una población de AE fue identificada pero no colectada (Dvorak et al., 2000). Las poblaciones nicaragüenses de BE son muy importantes tanto genética como económicamente, hecho que ha sido evidente en ensayos internacionales de procedencia, como los llevados a cabo por el Instituto Forestal de Oxford (OFI) en 1990 (Gibson, 1994) y por CAMCORE (Dvorak et al., 2000; Dvorak, Hodge & Romero, 2001; Hodge & Dvorak, 1999), donde las poblaciones nicaragüenses de yúcul, Las Camelias, San Rafael del Norte y Apante fueron sobresalientes en productividad y forma del fuste.

En los últimos años las poblaciones naturales de P. tecunumanii de Nicaragua han sido seriamente afectadas por actividades humanas extensivas, desastres naturales (huracán Mitch en 1998), incendios y plagas como Dendroctonus frontalis – gorgojo descortezador en 1998-2001 (Comisión Sectorial de Medio Ambiente, 2001). Como consecuencia, los tamaños de las poblaciones de esta especie han sido drásticamente reducidos y se considera que también su diversidad genética. Esto constituye una seria amenaza a su capacidad de adaptación a los cambios ambientales a mediano y largo plazo y, por lo tanto, al desarrollo de estos bosques. Por esta razón se necesitan estrategias correctas para el uso sostenible, conservación y reforestación. Para ello se requiere conocer las estructuras poblacionales y la diversidad genética de la especie en el país. Esto se logra llevando a cabo análisis moleculares con técnicas basadas en el ADN.

Las técnicas moleculares requieren el aislamiento de ADN genómico de pureza apropiada para la PCR (reacción en cadena de la polimerasa) y digestión enzimática (Katterman & Shattuck, 1983; Peterson, Boehm & Stack, 1997). El crecimiento del número de protocolos de extracción de ADN para especies de plantas específicas sugiere que la extracción de ADN no es siempre simple y los protocolos publicados no son necesariamente reproducibles para todas las especies (Porebski, Bailey & Baum, 1997). El problema a menudo encontrado durante la extracción de ADN es separar el ADN de los contaminantes que existen naturalmente en la célula de la planta, tales como polisacáridos y compuestos fenólicos (Pandey, Adams & Flournoy, 1996; Porebski et al., 1997). Estos compuestos en sus formas oxidadas se enlazan covalentemente a los ácidos nucleicos durante la extracción y los inutilizan para la mayoría de las aplicaciones en investigación (Katterman & Shattuck, 1983;

Page 78: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii84

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

Peterson et al., 1997). Los polisacáridos son visualmente evidentes en extracciones de ADN por su textura viscosa, como de goma, y hacen que el ADN sea no manejable en el pipeteo y no amplificable en el PCR debido a la inhibición de la Taq ADN polimerasa (Fang, Hammar & Grumet, 1992).

Como en muchas otras especies, Pinus tecunumanii contiene altos niveles de polisacáridos y fenoles (Stange, Prehn & Arce-Johnson, 1998). Una forma de evitar los problemas con polifenoles es congelar el tejido durante o antes de la homogenización (Katterman & Shattuck, 1983). Alternativamente, el PVP u otros antioxidantes pueden incluirse durante el procedimiento de extracción del ADN (Stange et al., 1998).

Furman, Grattaplagia, Dvorak & O’Malley (1997) extrajeron ADN de Pinus tecunumanii y otras especies de pino mediante el uso de un kit comercial. Muchos científicos usan kits comerciales por su facilidad y la buena calidad del ADN extraído, sin embargo, esos kits son costosos. En países en vías de desarrollo, como Nicaragua, trabajar con un protocolo de extracción permite disminuir costos pues se emplean pequeñas cantidades de químicos y pocos equipos. Además, se puede extraer un ADN de muy buena calidad, apropiada para la aplicación de varias técnicas. El presente trabajo surgió debido a que no existe un protocolo publicado que sea específico para la extracción de ADN genómico de P. tecunumanii. Es impulsado principalmente por la necesidad de estudiar la condición de las poblaciones naturales de esta especie a nivel genético-molecular.

Con el propósito de aislar ADN de buena calidad de P. tecunumanii, se probaron dos métodos de extracción de ADN: un protocolo descrito por Doyle y Doyle (1990), usado para un sinnúmero de especies vegetales como Pinus halepensis (Gómez, Alía & Bueno, 2001) y con algunas modificaciones para Manguifera indica (Saldaña & Salazar, 2007), Pinus canariensis (Vaxevanidou, González-Martínez, Climent & Gil, 2006), Chamaecyparis formosensis y C. taiwanensis (Hwang, Lin, Kuo, & Lin, 2001), Pinus pinaster (Ribeiro et al., 2002); y otro protocolo descrito por Möller, Bahnweg, Sandermann y Geiger (1992) igualmente usado para la extracción de muchas especies vegetales, como en Jatropha curcas (Williams, Ramos & Callejas, 2000) y con algunas modificaciones en Pachira quinata (Dolmus, García & Callejas, 2006) y Cedrela odorata (Tijerino López, 2009). El protocolo presentado aquí es una modificación del primero, a través del cual obtuvimos un ADN limpio que fue constantemente amplificable por la PCR usando la técnica RAPD (Williams, Kubelik, Livak, Rafalski & Tingey, 1990). Con un ADN de tan buena calidad es posible aplicar varias técnicas moleculares basadas en la PCR, tales como RAPD, microsatélites y SNPs para su uso en estudios a nivel genético. La evaluación de la diversidad genética y la historia evolutiva de la especie, la elaboración de mapas genéticos y la distinción de híbridos con la especie pura son algunas de las varias posibles aplicaciones de dichas técnicas.

Page 79: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

85

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii

2. Materiales y métodos

2.1 Material vegetal

Se recolectaron conos de individuos de Pinus tecunumanii correspondientes a cinco poblaciones del norte de Nicaragua: yúcul, Apante y Monte Carmelo, en Matagalpa; La Brellera, en Jinotega; y San Nicolás, en Estelí. Luego, en el Laboratorio de Genética Molecular de la UNAN-León, se aisló el megagametofito de las semillas (Ilustración 1) y se almacenaron a – 20ºC para la posterior extracción del ADN genómico.

2.2 Extracción de ADN

Se ensayaron dos protocolos de extracción de ADN en dos individuos por población. El primero, descrito por Doyle y Doyle (1990) y usado para la extracción en tejidos frescos; el segundo protocolo descrito por Möller et al. (1992). Se obtuvo ADN de una mejor calidad y mayor rendimiento con el primer protocolo. Así se eligió el método de Doyle y Doyle (1990) y se añadieron modificaciones (incluidas en el siguiente protocolo) para extraer ADN del total de muestras de P. tecunumanii apropiado para la técnica RAPD.

Ilustración 1. Semilla de Pinus tecunumanii: A) Representación de la estructura de la semilla de pino (modificado de Curtis y Barnes (2000) para P. tecunumanii). B) Foto de la parte externa de la semilla de pino. C) Foto de semilla de pino cortada longitudinalmente por la mitad donde se observa el megagametofito, tejido con el cual se hizo la extracción de ADN.

Page 80: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii86

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

2.3 Soluciones y reactivos

• Tampón de extracción: 2% CTAB, 100mM Tris-HCl (pH 8.0), 20 mM EDTA∙Na

2∙2H

2O, 1.4 M NaCl

2

• β-mercaptoetanol • 10 mg/ml proteinasa K • Cloroformo:AIA [24:1 (v/v)] • Tampón TE: 10 mM Tris-HCl (pH 7.4); 1 mM EDTA∙Na

2∙2H

2O

• Tampón de lavado: 76% etanol; 10mM acetato de amonio • 100% isopropanol • 10mg/ml ARNasa A • 7.5 M acetato de amonio • 100% etanol

2.4 Protocolo

1. Macerar 3-5 megagametofitos en 500 μl de tampón de extracción precalentado a 65°C. Al momento de la extracción adicionar 0.2% β mercaptoetanol y 50 μg de proteinasa K. Seguidamente incubar a 60°C por 30 min agitando ocasionalmente.

2. Agregar 1 volumen de cloroformo-AIA (24:1) y mezclar por inversión para formar una emulsión.

3. Centrifugar a 12000 rpm por 5 min a 4°C.4. Cuidadosamente trasferir la fase acuosa superior a un tubo nuevo.5. Repetir pasos 2, 3 y 4.6. A la fase acuosa ya transferida en un nuevo tubo, adicionar isopropanol

frío al 100% (2/3 volúmenes). Mezclar por inversión conservándolo a -20°C por 2 h.

7. Centrifugar a 12000 rpm por 5 min a 4ºC, descartar el isopropanol y lavar el sedimento con 2 ml de tampón de lavado (2 veces) ayudando a resuspender el sedimento con una micropipeta.

8. Centrifugar a 12000 rpm por 5 min a 4ºC después de cada lavado.9. Eliminar el sobrenadante y dejar secar el precipitado a temperatura

ambiente 15–20 min. 10. Resuspender los ácidos nucleicos en 500 μl de tampón TE. 11. Agregar 5 μl de ARNasa A (10μg/ml) e incubar a 37°C por 30 min.12. Adicionar 7.5 M acetato de amonio (pH 7.7) a una concentración

final de 2.5 M y 1 volumen de etanol puro frío. Mezclar muy bien por inversión para precipitar el ADN.

13. Centrifugar a 12000 rpm por 5 min a 4ºC, descartar el sobrenadante y dejar secar el ADN a temperatura ambiente unos 30 min, eliminando bien el alcohol.

14. Resuspender a 100 μl de tampón TE y conservar a -20ºC.

Page 81: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

87

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii

La calidad del ADN se observó mediante electroforesis en un gel de agarosa al 0.8%, visualizándose bajo luz UV y fotografiándose con una cámara digital. La concentración y pureza del ADN se determinó a través de un espectrofotómetro Perkin Elmer UV/Vis Lambda. Se midió la densidad óptica (DO) a 260 nm para cuantificar el ADN y se hicieron lecturas a 280 nm para obtener la razón DO

260:DO

280

como un indicador de pureza de ADN (Sambrook & Russell, 2001).

2.5 Amplificación RAPD

La amplificación de fragmentos RAPD fue llevada a cabo de acuerdo a Williams et al. (1990) con algunas modificaciones como reportan Guido y Díaz (2006). El cebador utilizado fue el OPN-09, reportado en el estudio de poblaciones naturales de Pinus oocarpa de Nicaragua de Díaz, Muiz y Ferrer (2001) por generar altos niveles de polimorfismo. La amplificación se llevó a cabo en un termociclador Amplitron® II Thermolyne programado con una desnaturalización inicial de 3 min a 92°C, seguido de 45 ciclos que comprenden: una desnaturalización de 30s a 92°C, hibridación de 2 min a 37ºC y una elongación de 1 min a 72°C. Luego, una extensión final de 8 min a 72°C.

3. Resultados y discusión

En el presente artículo se describe un eficiente protocolo para la extracción de ADN para Pinus tecunumanii basado en el método de extracción CTAB de Doyle y Doyle (1990) para tejidos frescos. Como se mencionó anteriormente, este protocolo es un protocolo destinado a la extracción de ADN de tejido fresco para plantas en general. Por lo que así como es, ha sido utilizado sin ningún problema en varias plantas, como por ejemplo Pinus pinaster (Ribeiro et al., 2002). Sin embargo, como todas las especies son diferentes y tienen diferente sustancias químicas y metabolitos, es necesario hacer modificaciones, como fue el caso con P. tecunumanii.

Las principales modificaciones que se realizaron incluyen la adición de proteinasa K al homogenizar el tampón de extracción con el tejido, una segunda extracción con Cloroformo:AIA, y una segunda lavada con tampón de lavado. Tales modificaciones hacen que el ADN quede libre de polisacáridos y proteínas, haciendo que el ADN sea de muy buena calidad y más fácil de diluir. Puede verse la calidad del ADN en la Ilustración 2A, donde se observan bandas bien definidas, con muy poco arrastre (el arrastre es un indicador de que el ADN se encuentra degradado). Además, se observa que el ADN obtenido es de alto peso molecular, incluso mayor que el de la primera banda del marcador de peso molecular (10000 pb).

Page 82: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii88

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

A . B.

Ilustración 2. Gel de agarosa (0.8%) mostrando ADN genómico de Pinus tecunumanii de poblaciones naturales de Nicaragua: A.) ADN extraído con el protocolo optimizado (en el carril 1, Marcador de peso molecular DirectLoad™ Wide Range DNA Marker Sigma®); B.) ADN extraído con el protocolo original de Doyle y Doyle (1990).

Al seguir las indicaciones del protocolo original de Doyle & Doyle (1990) nos encontramos que el ADN tenía una consistencia algo chiclosa y que era difícil de diluir. Además, al hacer el chequeo por electroforesis en gel de agarosa al 0.8 %, el ADN quedaba retenido en los pocillos (véase Ilustración 2B).

El ADN puro tiene una razón ADN/proteína (D260/DO

280) de 1.8 (Sambrook

& Russell, 2001). Si la razón es mucho menor a este número hay contaminación por proteínas. Si es mayor a 2.0 hay contaminación por ARN. De acuerdo al CIMMyT (2006), en vez de un número hay un rango de 1.8 – 2.0 en el que se cree que la absorción es causada por ácidos nucleicos, aquí se afirma que una relación inferior a 1.8 indica que pueden existir proteínas y/u otros elementos absorbentes de UV en la muestra. En ese caso, es conveniente volver a precipitar el ADN. Una relación superior a 2.0 indica que las muestras pueden estar contaminadas con cloroformo o fenol y se debe volver a efectuar la precipitación con etanol.

Al extraer ADN con el protocolo original se encontró que las muestras tenían contaminación por proteínas o polisacáridos (valores de la razón DO260

:DO280

fueron inferiores a 1.8) ya que presentaron valores medios de 1.5. Para disminuir la presencia de proteínas en las muestras se agregó proteinasa K al tampón de extracción. La proteinasa K es una poderosa enzima proteolítica con un amplio espectro de acción; es una proteasa molde que bloquea las enzimas degradantes en la lisis de la pared celular y desproteiniza al ADN de forma eficiente (Gross-Bellard, Oudet & Chambon, 1973). También se realizó una segunda extracción con cloroformo:AIA para asegurar la precipitación de las proteínas y la proteinasa K y así obtener los ácidos nucleicos al extraer la fase acuosa. La remoción de proteínas es un paso clave que a menudo es llevado a cabo por la extracción de la fase acuosa de los ácidos nucleicos con fenol y/o cloroformo (Sambrook & Russell, 2001).

Los polisacáridos son contaminantes comunes en el ADN extraído de tejidos vegetales (Demeke & Adams, 1992; Do & Adams, 1991). Los polisacáridos acídicos inhiben la amplificación del ADN, mientras que los denominados polisacáridos neutrales no son inhibitorios (Pandey et al., 1996; Demeke & Adams, 1992). Los polisacáridos son visualmente evidentes en extracciones de ADN por su textura viscosa como de goma y hacen al ADN no manejable en el pipeteo y no amplificable

Page 83: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

89

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii

en el PCR en caso de ser acídicos debido a la inhibición de la Taq ADN polimerasa (Fang et al., 1992). Las altas concentraciones de sales y la presencia de CTAB ayudan a la precipitación de los polisacáridos (Kim, Mauthe, Hausner & Klassen, 1990), basados en las diferencias de solubilidad con respecto a los ácidos nucleicos. Como este protocolo ya constaba de altas concentraciones de sales y presencia de CTAB para eliminar los polisacáridos, se dejó un tiempo congelado el tejido previo a la extracción de ADN.

Como algunas muestras tenían razones DO260:DO

280 mayores a 2.0 se agregó

una segunda lavada con el buffer de lavado para eliminar por completo los fenoles que podrían permanecer junto a los ácidos nucleicos.

Con este protocolo se obtuvo aproximadamente 13 μg de ADN por 58.7 mg de tejido. Esto representa suficiente cantidad de ADN para llevar a cabo alrededor de unas 650 reacciones típicas de la técnica RAPD. El protocolo que se presenta en este artículo es eficiente porque se produce ADN de buena calidad con pocas cantidades de tejido.

Para evaluar si el ADN extraído de Pinus tecunumanii es apropiado para usarse en análisis RAPD, se llevaron a cabo amplificaciones RAPD. Las bandas generadas resultaron ser bien definidas y reproducibles (véase Ilustración 3), lo que evidencia el grado de pureza de este ADN, apropiado para el análisis con dicha técnica. Por consiguiente, este ADN tiene la calidad para ser usado en otras técnicas basadas en la PCR como microsatélites y SNPs.

Ilustración 3. Gel de Agarosa al 2% mostrando productos de la técnica RAPD con el cebador OPN-09 en 12 individuos de Pinus tecunumanii. Carril PM, Marcador de peso molecular DirectLoad™ Wide Range DNA Marker Sigma®; Carriles 1-12, patrón de banda de 12 individuos de Pinus tecunumanii generado por el cebador OPN-09.

4. Agradecimientos

Este trabajo fue elaborado gracias al financiamiento del Programa de Pequeñas Ayudas para la Investigación de la Vice-Rectoría de Investigación y Postgrado de la UNAN-León con fondos ASDI/SAREC.

Page 84: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii90

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

Referencias bibliográficas

CIMMyT. (2006). Protocolos de laboratorio: Laboratorio de Genética Molecular Aplicada del CIMMYT. (3ª ed.). México, D.F: CIMMyT.

Comisión Sectorial de Medio Ambiente. (2001). Cartera de Perfiles de Proyectos sobre la base del Plan Estratégico para el Manejo del Gorgojo Descortezador (Dendroctonus frontalis, Zimm) y Rescate de la Madera de Pino en el Departamento de Nueva Segovia. Managua: Sistema Nacional de Prevención, Mitigación y Atención a Desastres de la República de Nicaragua.

Curtis, H. & Barnes, N. S. (2000). Biología. 6 ed. Buenos Aires: Editorial Médica Panamericana.

Demeke, T. & Adams, R. P. (1992). The effect of plant polysaccharides and buffer additives of PCR. BioTechniques, (12), 332-334.

Díaz, V., Muiz, L. M. & Ferrer, E. (2001). Random amplified polymorphic DNA and amplified fragment length polymorphism assessment of genetic variation in Nicaraguan populations of Pinus oocarpa. Mol Ecol, (10), 2593–2603.

Do, N. & Adams, R. P. (1991). A simple technique for removing plant polysaccharides contaminants from DNA. BioTechniques, (10), 163-166.

Dolmus, C., García, I. & Callejas, L. (2006). Evaluación de la variabilidad genética en un ensayo de progenies de Pachira quinata usando marcadores moleculares. Encuentro, (75), 79-88.

Doyle, J. & Doyle, J. (1990). Isolation of plant DNA from fresh tissue. Focus, 12(1), 13–15.

Dvorak, W. S. (1986). Provenance/progeny testing of Pinus tecunumanii. En: Proceedings of a joint meeting of IUFRO working parties on breeding theory, progeny testing, seed orchards. (pp. 299-309). Raleigh, North Carolina: North Carolina State University Cooperative Tree Improvement Program.

Dvorak, W. S. (2002). Pinus tecunumanii Eguiluz & J. P. Perry. En: Vozzo, J. A. (ed). Tropical Tree Seed Manual. (pp. 639-642). Washington, D.C.: USDA Forest Service.

Dvorak, W. S., Hodge, G. R., Gutiérrez, E. A., Osorio, L. F., Malan, F. S. & Stanger, T. K. (2000). Pinus tecunumanii. En: CAMCORE (ed.) Conservation & testing of tropical & subtropical forest tree species by the CAMCORE cooperative. (pp. 188-209). Raleigh, North Carolina: College of Natural Resources, NCSU.

Dvorak, W. S., Hodge, G. R. & Romero, J. L. (2001). Resultados de veinte años de investigación sobre el Pinus tecunumanii por la Cooperativa de CAMCORE. Recursos Genéticos Forestales, (29). Roma: FAO.

Dvorak, W. S., Potter, K. M., Hipkins, V. D. & Hodge, G. R. (2009). Genetic diversity and gene exchange in Pinus oocarpa, a Mesoamerican pine with resistance to the pitch canker fungus (Fusarium circinatum). Int J Plant Sci, 170(5), 609-626.

Fang, G., Hammar, S. & Grumet, R. (1992). A quick and inexpensive method for removing polysaccharides from plant genomic DNA. Biofeedback, 13(1), 52-54.

Furman, B. J., Grattaplagia, D., Dvorak, W. S. & O’Malley, M. (1997). Analysis of genetic relationships of Central American and Mexican pines using RAPD markers that distinguish species. Mol Ecol, (6), 321-331.

Page 85: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

91

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii

Gibson, G. L. (1994). Resultados de los Ensayos Internacionales de Procedencias. En: Centro de Mejoramiento Genético y Banco de Semillas Forestales (CMG&BSF) (Eds). Pinos de Nicaragua. (pp. 17-27). Managua: Hispamer.

Gómez, A., Alía, R. & Bueno, M. A. (2001). Genetic diversity of Pinus halepensis Mill. Populations detected by RAPD loci. Ann For Sci, (58), 869-875.

Gross-Bellard, M., Oudet, P. & Chambon, P. (1973). Isolation of High-Molecular-Weight DNA form Mammalian Cells. Eur J Biochem, (36), 32-38.

Guido, D. & Díaz, V. (2006). Estudio preliminar de la diversidad genética en procedencias de Sabal mexicana de Nicaragua aplicando marcadores moleculares. Encuentro, (75), 69-78.

Hodge, G. R., & Dvorak, W.S. (1999). Genetics parameters and provenance variation of Pinus tecunumanii in 78 international trials. For Genet, 6(3), 157-180.

Hwang, S-y., Lin, H-W., Kuo, y-S. & Lin, T-P. (2001). RAPD variation in relation to population differentiation of Chamaecyparis formosensis and Chamaecyparis taiwanensis. Bot Bull Acad Sinica, 42(3), 173-179.

Kanzler, A., Payn, K., & Nel, A. (2012). Performance of two Pinus patula hybrids in Southern Africa. South Forests, 74(1), 19-25.

Katterman, F. R. H. & Shattuck, V. I. (1983). An effective method of DNA isolation from the mature leaves of Gossypium species that contain large amounts of phenolic terpenoids and tannins. Prep Biochem, (13), 347–359.

Kim, W.K., Mauthe, W., Hausner, G. & Klassen, G.R. (1990). Isolation of high molecular weight DNA and double-stranded RNAs from fungi. Can J Bot, (68), 1898-1902.

Leibing, C., van Zonneveld, M., Jarvis, A. & Dvorak, W. (2009). Adaptation of tropical and subtropical pine plantation forestry to climate change: Realignment of Pinus patula and Pinus tecunumanii genotypes to 2020 planting site climates. Scand J Forest Res, (24), 483-493.

Möller, E. M., Bahnweg, G., Sandermann, H. & Geiger, H. H. (1992). A simple and efficient protocol for isolation of high molecular weight DNA from filamentous fungi, fruit, bodies, and infected plant tissues. Nucleic Acid Res, (20), 6115-6116.

Pandey, R. N., Adams, R. P. & Flournoy, L. E. (1996). Inhibition of random amplified polymorphic DNAs (RAPDs) by plant polysaccharides. Plant Mol Biol Rep, (14), 17-22.

Peterson, D. G., Boehm, K. S. & Stack, S. M. (1997). Isolation of milligram quantities of nuclear DNA from tomato (Lycopersicon esculentum), a plant containing high levels of polyphenolic compounds. Plant Mol Biol Rep, 15(2), 148-153.

Porebski, S., Bailey, L. G. & Baum, B. R. (1997). Modification of a CTAB DNA extraction protocol for plants containing high polysaccharide and polyphenol components. Plant Mol Biol Rep, 15(1), 8-15.

Ribeiro, M. M., Mariette, S., Vendramin, G. G., Szmidt, A. E., Plomion, C. & Kremer, A. (2002). Comparison of genetic diversity estimates within and among populations of maritime pine using chloroplast simple-sequence repeat and amplified fragment length polymorphism data Mol Ecol, (11), 869-877.

Saldaña, G. A. & Salazar, E. G. (2007). Aislamiento de ADN de calidad para la amplificación al azar de ADN polimórfico de mango. Agronomía Trop, 57(4), 281-286.

Page 86: Artículos - UCA · desigualdad. Sin embargo, los recursos que se pueden invertir son escasos. Por lo tanto, es necesario realizar evaluaciones de las diferentes alternativas entre

Optimización de un protocolo de extracción de ADN genómico para Pinus tecunumanii92

Encuentro No. 94, 82-92, 2013

Sambrook, J. & Russell, D. W. (2001). Molecular cloning: A Laboratory Manual. (3a ed.). Cold Spring Harbor, New york: Cold Spring Harbor Laboratory Press.

Stange, C., Prehn, D. & Arce-Johnson, P. (1998). Isolation of Pinus radiata Genomic DNA Suitable for RAPD Analysis. Plant Mol Biol Rep, (16), 1-8.

Tijerino López, A. V. (2009). Determinación de la variabilidad genética en cinco poblaciones naturales de Cedrela odorata L. utilizando la técnica RAPD. Tesis de Licenciatura. Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua-León, León, Nicaragua.

Vaxevanidou, Z., González-Martínez, S. C., Climent, J. & Gil, L. (2006). Tree populations bordering on extinction: A case study in the endemic Canary Island pine. Biol Conserv, (129), 451-460.

Williams, J. G. K., Kubelik, A. R., Livak, K. J., Rafalski, J. A. & Tingey, S.V. (1990). DNA polymorphisms amplified by arbitrary primers are useful as genetic markers. Nucleic Acid Res, 18(22), 6531-6535.

Williams, L. A., Ramos, E. & Callejas, L. (2000). Uso de marcadores RAPDs (Random Amplified Polymorphic DNA) para evaluar la variabilidad genética en 7 cultivos de Jatropha curcas L. Encuentro, (52), 20-29.