AMOR

¿Razón o Corazón?

Amor, una palabra tan corta, pero tan profundamente importante para nuestra vida.

El Amor es como los cimientos de un edificio, sin estos el edificio caería o no sería estable. Así es el amor, es la pieza fundamental de nuestra existencia, es la que nos permite diferenciarnos de los demás seres que habitan este planeta, o como ya dije antes es el soporte de nuestra vida, el que nos permite no desfallecer en momentos de crisis, sino mas bien seguir adelante, ¿O no

lo han sentido?

Una interpretación más universal del Amor nos diría:

“El amor es un concepto universal relativo a la afinidad entre seres, definido de diversas formas según las diferentes ideologías y puntos de vista Habitualmente, y fundamentalmente en Occidente, se interpreta como un sentimiento relacionado con el afecto y el apego, y resultante y productor de una serie

de emociones, experiencias y actitudes…”

Pero ahora bien, ¿Dónde se siente el amor?

En este caso hablamos del amor hacia el conyugue.

El amor, y me dirán mentiroso si no tengo la razón, comienza en la cabeza, cuando conocemos a esa persona y sentimos ese deseo inexplicable, de querer tenerla a nuestro lado.

Cuando ya se conoce bien a dicha contraparte, se generan en el estomago esas famosas mariposas, que nos indican que en verdad estamos interesados en la otra persona.

A esto le sucede esa sensación maravillosa de punzadas leves, pero dulces en nuestro corazón, que nos dan la señal de que es el momento para expresar nuestros sentimientos.

Con el transcurso del tiempo, y si el amor es puro y verdadero, se lograra ese equilibrio tan anhelado entre Razón y Corazón, ese el momento, en que todo nuestro cuerpo de los pies a la cabeza se siente seguro y con una sensación de felicidad absoluta; es el que todos soñamos tener algún día y el que no quisiéramos perder en ningún momento, ni por ningún motivo.

Recuerda que: “El amor es un alma que habita en dos cuerpos”