Bacata
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Edicin Especial
La Historia desde otros ojos
El transporte en Bogot
durante el siglo XIX
y donde estaban las
buenas costumbres ?
Transporte
Costumbres
un crimen
que no perdona
Personaje
VINTAJE COUTURE
Moda
una historia caliente !
GastronomaCrnicas Ancestrales
La Historia desde otros ojos
Arquitectura
-
Carta del Editor Creditos
Andrs David Tafur Manrique
Director de Bacat
Bacat, una miradaDiseo y redaccin
Laura Juliana Salcedo Ruiz
Investigacin y redaccin
Investigacin y redaccin
Investigacin y redaccin
Carolina Silva Echeverri
Daniel Mauricio Ruiz
Andrs Felipe Vega
a la Bogot del siglo XIX
Publicacin Universitaria
Bogot D,C - 2011
Nos complace entregar a nuestros lectores el primer
nmero de la revista universitaria Bacat, una
publicacin innovadora que explora y presenta de
manera amena la vida cotidiana de la ciudad capital
a lo largo de su historia.
El nombre Bacat invoca con respeto las races
indgenas y prehispnicas de esta urbe que naci del
sincretismo de las culturas aborigen y espaola.
Contamos con la participacin de distinguidos y
jvenes escritores afincados en Bogot que, en muy
corto tiempo, se han hecho un sitial en las letras
capitalinas.
Para este nmero, nuestros colaboradores nos han
preparado interesantes artculos sobre el siglo XIX
que retratan la Bogot de la poca desde variados
puntos de vista, cubriendo aspectos tales como la
gastronoma, las costumbres, el transporte, la
moda, los personajes
Constituyen en su conjunto una visin integral que
nos permite acercarnos a la cotidianeidad de una
ciudad que paulatina y tmidamente discurra de
una existencia parroquial a la modernidad. Aqu
podremos advertir que, en gran medida, durante
este siglo se constituyeron las bases de la Bogot de
nuestros das.
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Para la configuracin poltica del pas fue definitivo
este siglo:
Se desarroll la triste historia de la patria boba, en la
que hubo guerras fratricidas entre centralistas y
federalistas; se libraron las grandes y decisivas
batallas de la independencia, poca en las que
hombres y mujeres valientes entregaron sus vidas
en lucha por la libertad; se desintegr la Gran
Colombia, pues Venezuela y Ecuador se declararon
repblicas independientes, bajo el comando de los
generales Pez y Flores, respectivamente.
Despus continu un lapso que va hasta el final del
siglo, en permanentes guerras internas, las que en
cierta forma frenaron el desarrollo en todos los
campos. Bogot naturalmente fue el epicentro de
estas actividades polticas
En el campo social ,Bogot fue receptadora de la
influencia espaola, francesa, italiana e inglesa en
manifestaciones de comportamiento social,
gastronmico y cultural.
Se fueron definiendo las familias que iban a
gobernar a Colombia y ejercer el monopolio en el
control poltico hasta nuestros das
En el campo econmico siempre ha sealado el
derrotero en esta rea, por el marcado centralismo.
Ya en nuestros das otras ciudades han adquirido
cierta importancia como Medelln,Cali y
Barranquilla, desde el punto de vista del empuje
productivo y comercial
lvaro Rojas Duran
Abogado
La importancia de Bogot en el
Siglo XIX
Bogot es una ciudad atrasada.
Su infraestructura, sus esquemas de movilidad, sus
formas e nfulas de gran ciudad, se quedaron
congelados e inmviles hace 40 aos atrs.
Bogot podra jactarse de ser una ciudad
vanguardista hoy, si estuviramos en 1970, ms o
menos. As que lo ms fcil que podra decirse, es
que ha sido una capital lenteja, quedada y siempre a
la retaguardia.
A quin echarle la culpa? Fcil: a don Gonzalo
Jimnez de Quesada, y a los administradores de la
ciudad desde entonces, hasta llegar al siglo XIX,
que es el tema de este prrafo.
Nunca ha estado punteando, siempre colgada.
Pues no es cierto. Bogot pas a ser el zagun de la
corona espaola en las primeras dcadas del 19, a
convertirse en la capital del imperio criollo que
soaba Bolvar y algunos de sus amigos.
Algunas de las calles que nos demarcan hoy (la
sptima, por ejemplo), ya exista en el siglo
antepasado.
Las lneas de ferrocarril quedaron establecidas
finalizando la dcada del 80 en el mismo siglo; y
detalles como la nomenclatura nmerica que
propuso Napolen en Francia hacia principios de
siglo para reemplazar los nombres de calles y
avenidas-, se estableci en la capital antes del siglo
XX.
bamos bien, con impulso, con ganas, con
modernidad relativa, para ganarse esa reputacin de
posible capital regional.
Pero alguien en el siglo pasado decidi pisar el freno
y pararse en l, hasta dejarnos esta naciente
metrpoli convertida en una ciudad con
comodidades de segunda, actitud de tercera, y en
algunos sectores y zonas, mentalidad de provincia.
En algunos casos como los arriba mencionados,
fueron ms innovadores y modernos, los hijos,
sobrinos y nietos de los padres de la patria.
Los tataranietos son/somos los que detuvimos el
cambio y quienes nos hemos portado como los
emigos del avance y la evolucin.
Juan Esteban Osorio
Periodista
Cartas de los lectores
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Sumario
El transporte en Bogot
durante el siglo XIX
La historia desde otros
ojos
Un crimen que no
perdona
Vintage couture
y donde estaban las
buenas costumbres ?
Transporte
Arquitectura
Personaje
Moda
Costumbres
6
una HISTORIA caliente
Gastronoma26
entrevista a jaime Arturo
Duarte
Opinin28
Cronicas ancestrales
Opinin30
Social 32
juegos y caricatura
Entretenimiento33
Cine y Libros 34
12
16
20
22
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355
Transporte
Transporte
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La Santaf de Bogot del siglo XIX fue la
ciudad de notables en cabalgaduras,
peatones y carruajes. En sus calles se
escuchaban los cascos de mulas, burros y
caballos que adornaban con sus pelajes las
estrechas calles capitalinas. De vez en
cuando, los carruajes circulaban por las
empedradas vas de la ciudad produciendo
un traqueteo particular que inundaba los
alrededores de aquella naciente urbe.
Ya finalizando ese emblemtico siglo,
apareci el tranva de mulas, un smbolo
de modernidad que cambi la imagen de
Bogot y la asemejara vagamente a las
g r a n d e s c i u d a d e s d e l m u n d o
industrializado.
Estas son las reminiscencias del transporte
que ostent la vieja capital de aquel siglo.
La caminata era la mejor forma de
movilizarse en la Santaf de antao. La
ciudad era tan pequea, que ms pareca un
simple pueblo con ttulo de capital.
Segn dice Ricardo Montezuma en su libro
La ciudad del tranva, hasta mediados del
siglo XIX la ciudad se poda atravesar de
norte a sur en tan solo cuarenta minutos.
Por esta razn, los desplazamientos urbanos
se realizaban en su mayora a pie, sin la
necesidad de montar ningn tipo de bestias
para transportarse.
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La utilizacin del caballo estaba exclusivamente
reservada a la gente poderosa de la ciudad
Caminando, caminando y con las mulas avanzando
El siglo XIX fue una poca de frenticos cambios en nuestra ciudad, la cual pas de
la Santaf colonial a la Bogot republicana. Sin embargo, durante esta poca el
transporte se desarroll con notable pausa, desde el andar humano, pasando por
cabalgaduras y carruajes hasta llegar al tranva de mulas, el cual se impuso como
primer medio de transporte colectivo hasta los albores del siglo XX.
El transporte en Bogot
durante el siglo XIX
Por: Andrs David Tafur Manrique
Transporte
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Sin embargo, la cabalgadura era comn
para realizar viajes interurbanos, pues
evidentemente las distancias eran
mayores. Los bogotanos humildes, para
viajar a otras poblaciones aledaas, como
Chapinero o Fontibn, recorran aquellos
largos trayectos, montados en sus mulas y
burros.
No obstante, las gentes sencillas no podan
utilizar el caballo para realizar sus viajes.
Su utilizacin fue solamente reservada a la
gente adinerada que presuma sus
poderosos corceles al ser smbolos de
superioridad y privilegio.
Paulatinamente en las calles santafereas
comenzaron a aparecer carrozas, berlinas,
lands, victorias y cups. En efecto, unos
pocos carruajes existan en la capital desde
antes del siglo XIX, pero su utilizacin fue
siempre innecesaria, debido a las
pequeas dimensiones de la ciudad. De
hecho, hasta mediados del siglo XIX, fue
un medio de transporte segregacionista,
utilizado slo para transportar a las
personas ms poderosas de la ciudad.
En gran medida la limitada presencia de
vehculos de traccin animal se debi a
que durante mucho tiempo, su circulacin
fue difcil e incluso prohibida, pues las
ruedas de los carruajes daaban el
empedrado y los elementos de proteccin
del acueducto y del alcantarillado externo
que exista en aquella poca. Inclusive a
partir de 1844 se restringi formalmente la
entrada a la ciudad de esos vehculos, los
cuales deban estacionarse a las afueras de
la misma.
La entrada de vehculos de traccin
animal a la ciudad fue prohibida
formalmente en 1844 para evitar
el deterioro del empedrado
Transporte
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En gran medida la limitada presencia de
vehculos de traccin animal se debi a
que durante mucho tiempo, su circulacin
fue difcil e incluso prohibida, pues las
ruedas de los carruajes daaban el
empedrado y los elementos de proteccin
del acueducto y del alcantarillado externo
que exista en aquella poca. Inclusive a
partir de 1844 se restringi formalmente la
entrada a la ciudad de esos vehculos, los
cuales deban estacionarse a las afueras de
la misma. As, hasta finales del siglo XIX
Bogot fue una pequea ciudad atrasada
en la que no se escuchaba el traqueteo de
la modernidad, mientras que en otros
lugares del mundo se desarrollaban a paso
firme los medios de transporte colectivo.
Sin embargo, a partir de 1877 se permiti
la entrada de vehculos a la ciudad, cuando
fue cambiado el sistema de alcantarillado
y aguas externas por uno subterrneo.
Esto, sumado al crecimiento demogrfico
y urbanstico de Bogot, permiti que los
carruajes circularan libremente por la
capital, empezando a desarrollarse el
transporte urbano de personas. Nacera as
el sistema de transporte, conformado por
carrozas, berlinas, victorias, cups y
l a n d s q u e r e a l i z a b a n v i a j e s
principalmente interurbanos, al conectar a
Bogot con poblaciones vecinas tales como
Usaqun, Chapinero, Engativ, entre otras.
Para este fin se crearon empresas como la
compaa franco-inglesa de carrozas Alford
y Gilede y la compaa Wisner Soto. Por
ejemplo resean Valenzuela y Prgolis en su
libro Buses de Bogot, citando a Toms
Rueda Vargas, que el francs Jean Gilede y
el britnico Henry Alford, establecieron en
1876 una empresa de carruajes, con oficinas
en el atrio de la Catedral, bajo el nombre de
Compaa Franco-Inglesa de Carruajes de
Alford y Gilede, que dispona de coches
tirados por caballos, con capacidad para diez
pasajeros, denominados omnibuses y
cubran la ruta entre Bogot y el casero de
Chapinero.
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Mientras el precio del
transporte en carruaje
era de cuarenta centavos,
considerado muy
costoso para la poca,
el del tranva era de dos
centavos
Transporte
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Ese medio de transporte fue la gnesis del
sistema de transporte colectivo masivo en
Bogot. La lnea inicial conectaba la plaza
central con Chapinero, y pronto la
cobertura del servicio se ampliara. Los
vehculos, que circulaban sobre rieles de
madera recubiertos de metal, eran tirados
por mulas. Segn dice Gilberto Guzman
Celis en su libro Del Tranva al
Transmilenio, su costo era de dos
centavos, mientras que, como fue
mencionado anteriormente, el de los
carruajes era de cuarenta centavos.
Adems, tena una capacidad para veinte
pasajeros, que era mucho mayor a la de los
carruajes.
Sin embargo, la construccin del tranva
en realidad no tena como objetivo
solucionar los problemas de movilidad de
la ciudad, sino mejorar el aspecto de la
misma, al asemejarla a las grandes urbes
del mundo industrializado. Asimismo, en
principio, la demanda por este servicio fue
escasa, pues se construy en una ciudad
pequea con una baja densidad de
poblacin. En realidad, la capital en 1884
no necesitaba un tranva.
De otra parte, este medio de transporte atenda
principalmente las necesidades de las personas
acomodadas, pues les serva fundamentalmente para
llegar a sus fincas de recreo en Chapinero y dems
poblaciones cercanas a la capital. Por esta razn, no
ser hasta el inicio del siglo XX cuando el tranva de
mulas empezar a ser usado ampliamente por todos
los bogotanos, hasta llegar a condiciones de
sobrecupo.
Esto se debe, a que como lo seala Carlos Martnez,
en su libro Bogot, sinopsis sobre su evolucin
urbana, desde finales del siglo XIX y comienzos del
siglo XX la capital experiment un inslito
crecimiento en su poblacin alcanzando
aproximadamente los cien mil habitantes a finales del
siglo pasado.
Con este vehculo tirado por mulas finalizara el siglo
XIX, un siglo en el que los bogotanos no conocieron
ms que la caminata, la cabalgadura y la traccin
animal como medios de transporte en una ciudad que
creca a paso lento. Sin embargo, entrando el siglo
XX, comenzaron a llegar adelantos tecnolgicos,
particularmente el vapor y la electricidad, que
cambiaran de manera rotunda el desarrollo de la
ciudad y de su sistema de transporte, contribuyendo a
moldear la Bogot de nuestros das.
Transporte
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Arquitectu
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La Historia desde otros ojosPor Daniel Mauricio Ruiz Morales
En primer lugar, es necesario tener en
cuenta que el siglo XIX se encuentra muy
marcado por el neoclasicismo, pues ste
ejerce una importante influencia en las
distintas obras arquitectnicas de Santaf.
Entre stas, se distingue el Observatorio
Astronmico, la Plaza de Bolvar, el
Museo Nacional de Colombia y la Quinta
de Bolvar. De igual manera, destaca el
estilo enmarcado de las viviendas e
iglesias. Estas ltimas, debido a la
expropiacin de sus tierras, tuvieron un
final trgico.
Ahora, para ver ms all del concreto y los
ladrillos, Antonio Castaeda y Alberto
Escobar, en su libro La historia de frente:
Arquitectura de Bogot, ayudarn a
mostrar cada uno de los secretos que
guardan estas obras. As, iniciamos con el
observatorio astronmico. Este fue uno de
los primeros en ser edificados de manera
permanente en Amrica, ya que culmin su
construccin el 20 de agosto de 1803. Esta
ed i f i c ac in marca e l i n i c io de l
neoclasicismo, con su decorativo del
barroco tardo y su contacto directo con la
arquitectura clsica griega y romana.
Ms adelante, en 1819, inicia un periodo que
los historiadores de la arquitectura
Colombiana llaman Republicano. Fue
entonces cuando la Plaza Mayor sufri
importantes modificaciones, tales como su
cambio de nombre por el de Plaza de la
Constitucin. Tambin destaca su nueva
estructura de tradicin castellana
caracterizada por una gran aridez, ya que
esta plaza estuvo desprovista de plantas,
rboles y jardines.
As como muchas veces la gente est acostumbrada a apreciar la
historia a travs de los ojos de los libros y todo lo documentado,
aparece tambin aquello que nos cuentan los muros, algo
llamado la Arquitectura, donde la vida pasada es contada por
ladrillos que hablan por s mismos.
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1212
En 1846 la estatua de Simn Bolvar rein
en el centro. Por ende, el nombre de la
Plaza de la Constitucin volvi a
cambiarse definitivamente por el de Plaza
de Bolvar. Todo esto marc un punto de
cambio en el lugar, dado a que
se inician proyectos con la
demolicin de las sedes
coloniales de la real audiencia y
el palacio virreinal, para la
construccin del capitolio
nacional, el cual se convertira
en la obra arquitectnica ms
significativa de Santaf de
Bogot en el siglo XIX.
Estos proyectos siguieron el diseo de
Thomas Reed. Tambin se llegaron a
derribar la sede del Cabildo, el Despacho
de los Virreyes y el Palacio Virreinal, para
construirse una edificacin donde
funcionara la alcalda, la personera, la
tesorera y el archivo.
El Museo Nacional de Colombia es
tambin de vital importancia en la
arquitectura colombiana. Con la ayuda de
Thomas Reed en los planos, se logr
empezar su construccin en 1874 bajo la
direccin de Ramn Guerra. Hasta 1946,
esta edificacin fue creada para servir
como penitenciaria central. Por esto, el
edificio fue construido en forma de cruz,
pues esta ayudaba a que en el centro
existiera un puesto de observacin para
tener control de todos los pabellones. No
obstante, ya despus se adecu para ser la
sede del Museo Nacional.
Finalmente, sobresale la Quinta de
Bolvar. Esta fue adquirida en 1820 por el
vicepresidente de la Gran Colombia para
ser donada al Libertador, quien la
habitara por periodos breves, desde 1821
hasta 1830. Despus fue reestructurada,
recuperando su estilo neoclsico, el cual
se aprecia principalmente en su comedor y
el cuarto de estufa.
Arquitectu
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Por otra parte, tambin destacan las viviendas del
siglo XIX. Estas sufrieron un incremento en sus
habitantes urbanos hacia finales del siglo. Sin
embargo, gracias a la organizacin de las viviendas
en su interior, esto no afecto significativamente a
los barrios de la ciudad. As, segn el historiador
Germn Meja, existieron 5 formas bsicas de
vivienda, las cuales eran: la casa de una planta, la
casa de dos pisos, las tiendas de habitacin, los
ranchos o bohos y las quintas. Con respecto a su
diseo, hay que resaltar que se deja atrs la
sobriedad para ser reemplazada por decorativos
en yeso, portadas en piedra, pilastras, molduras
y l a e x i s t e n c i a d e u n t i c o .
Un buen ejemplo de una vivienda de la
poca es la casa que perteneci a Nemesio
Camacho, la cual se ubica en el costado
occidental de la carrera sexta, entre las
calles once y doce. sta muestra el
esplendor de la arquitectura republicana,
con un excelente trabajo de carpintera y
decoracin que la catalog como una de
las mejores obras realizadas en el siglo
XIX.
Por otro lado, la iglesia, con sus imponentes
obras arquitectnicas, apareci como una de
las fuerzas ms importantes en el pas.
Por esto, la Catedral Primada fue un cono
de la Bogot de antao. Su reparacin fue
retomada por el capuchino Fray Domingo
Petrs, tras haber sido dejada por Domingo
Esquiaqui en 1797. Con l, se logr un gran
progreso, pero slo hasta su muerte en
1811. Entonces, su ayudante Nicols len
reanud el trabajo inmediatamente y
realiz las dos torres y el imafronte.
De igual manera, es importante la iglesia de
Veracruz, contigua a la de San Francisco,
pues en sta se sepultaron los restos de
varios compatriotas fusilados en la
independencia. Para el Centenario, en
1910, este templo se declar pabelln
nacional. Otra iglesia es la de Nuestra
seora de las Aguas. Esta fue creada en
1642 y alberg a los dominicos hasta 1802,
cuando se convirti en hospital militar y
civil, debido a las diferentes epidemias
del siglo.
Entre las capillas resaltan la de Nuestra
Seora del Rosario, La Bordadita, la cual
se construy en 1653 con el
claustro del plantel del
Colegio Mayor del Rosario.
Esta edificacin posee,
en el alto de su puerta,
unas esculturas de
diferentes santos, las
c u a l e s f u e r o n
elaboradas por el
artista Antonio de
Pimentel.
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A pesar de todo este esplendor que el
patrimonio arquitectnico estaba
adquiriendo en el siglo XIX, a mediados
de este,
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la iglesia se vio terriblemente
afectada por el decreto del
presidente Toms Cipriano de
M o s q u e r a s o b r e l a
desamortizacin de bienes de
manos muertas.
Con ste, se expropiaron las tierras de la
iglesia para subastarlas pblicamente. De
esta manera, los claustros se convirtieron
en sedes de diferentes instituciones
estatales. Tan slo cinco claustros
lograron salvarse: el Claustro y la Iglesia
de las Aguas, el Claustro de la Universidad
del Rosario con la iglesia de La Bordadita,
la Iglesia y Claustro de la Candelaria, el
Claustro de la Iglesia de San Ignacio y el
Claustro de San Agustn. Otros, como la
Iglesia Museo de Santa Clara, el Palacio
de San Carlos y el Palacio Echeverry, no
se pudieron salvar del decreto. Por esto,
estos edificios fueron utilizados como
ministerio de las monjas Clarisas,
seminario de los jesuitas y convento de
Santa Clara respectivamente.
En definitiva, es evidente ver cmo una
edificacin puede contar muchas historias
y secretos que pocos conocen por su falta
de inters.
Es por ello que estn cordialmente
invitadas todas aquellas personas que
quieran a conocer lo que estas obras
arquitectnicas estn dispuestas a mostrar
sobre la historia de nuestras ms tiernas
pocas.
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Personaje
Personaje
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1616
Un crimen que no perdonaPor Carolina Silva Echeverri.
Si se quiere hablar de las leyendas ms
representativas de la Bogot del silgo XIX,
es necesario remontarse a 1816 cuando en
un pueblo boyacense conocido como
Guatoque naci el doctor Jos Raimundo
Russi; un personaje que con el paso del
tiempo y su traslado a la capital se iba
convertir en el Robbin Hood colombiano,
en el defensor y protector de aquellos
g rupos soc ia les que se sen t an
discriminados y fastidiados por la iglesia,
los aristcratas, terratenientes y militares.
Como consecuencia del amparo que le
brindaba a estas clases, el doctor Russi
comenz a ganarse diversos enemigos que
lo empezaron a catalogar como un abogado
revolucionario y el lder de un grupo
conocido como la Compaa de Russi.
Hacia 1850 con el incremento de la
inseguridad y delincuencia en la ciudad, las
miradas empezaron a irse hacia el ciudadano
que no slo defenda a los ms necesitados
sino tambin a ladrones y delincuentes: el
doctor Russi, quien era culpado de todo lo
que suceda en las noches de capitalinas. En
su libro Leyendas populares colombianas,
Javier Ocampo Lpez cuenta todos
clamaban por la justicia, y hasta se
realizaron manifestaciones de descontento.
Ante el Congreso se reclamaban medidas
expeditas para hacer frente a las pandillas de
ladrones, delincuentes, salteadores y
asesinos que se cobijaban con el manto
negro de la noche. Las voces pblicas
sealaban al doctor Russi como el jefe de las
cuadrillas y el responsable de la inseguridad
de Bogot.
Personaje
Personaje
Hay quienes dicen que despus de su fusilamiento el 18 de julio de 1851, su alma sigue rondando por las calles del centro capitalino y asustando a quienes a altas horas de la noche visitan el lugar donde fue acusado y asesinado por un crimen que no haba cometido.
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1717
Con todas las polmicas que se empezaron
a dar alrededor de este reconocido y a la
vez odiado abogado, las clases altas de la
sociedad no dejaban escapar ningn
comentario que se hiciera en torno a l, no
vean la hora de acusarlo y ejecutarlo. Fue
la noche del 24 de abril de 1851 que todos
los hechos llevaron a que los deseos de la
alta sociedad por fin se cumplieran: el
cadver del seor Manuel Ferro fue
encontrado en el barrio Egipto cerca a la
casa del doctor Russi. Un infortunio, un
hecho del destino, nadie sabe qu fue lo
que realmente sucedi; lo nico cierto es
que a los pocos meses, se estaban haciendo
todos los trmites para que el 18 de julio de
ese mismo ao el abogado fuera ejecutado
en la plaza central de Bogot.
Siempre aleg y aleg su inocencia pero nadie lo escuchFantasmas en la Candelaria por Stella
Monsalve Gaitn
A pesar de su defensa y de proclamarse
inocente ante los cargos por los que haba
sido acusado, los tribunales de justicia lo
declararon culpable y programaron su
condena. Millones de capitalinos
presenciaron su muerte, el Robbin Hood
colombiano iba a ser asesinado y nada ni
nadie poda salvarlo; muchos iban a
festejar este suceso, otros lo iban a maldecir
y la gran mayora lo iba a llorar. El
defensor de los pobres y la pesadilla de las
clases favorecidas iba a desaparecer! Tras
su ejecucin, su cadver fue llevado al
cementerio Central de Bogot donde se
supone permanece hasta la actualidad. Lo
que muchos dicen y murmuran es que
Russi pas de ser un simple abogado de
delincuentes, a ser un personaje de la
historia de la ciudad pues hay quienes
cuentan que lo han visto rondar por las
calles del centro de Bogot a altas horas de
la noche vistiendo un traje, una capa, y un
sombrero de copa.
Hoy en da, el doctor Russi es una simple
leyenda que nicamente se recuerda
cuando la poca de Halloween se aproxima
y el Tour de los Fantasmas vuelve a ser
atractivo para los capitalinos y turistas; es
aqu, cuando miles de personas visitan la
Stellita les adverta a sus clientes: Si ven venir a un ciudadano vestido elegantemente; de pantaln negro, camisa blanca, capa negra y sombrero de copa, con la cara ensangrentada, sin duda es el fantasma de Russi Un cazafantasmas que hizo historia por
Nelson F. Padilla.
Candelaria para recorrer los pasos de los
habitantes del pasado y recrear
a c o n t e c i m i e n t o s y s i t u a c i o n e s
inverosmiles que han cautivado a varios
historiadores y llevado a que la historia de
Bogot sea ms llamativa y atraiga varias
miradas.
Si usted desea conocer la casa de Russi,
est ubicada en la carrera 2da No. 10-43,
al frente de la Universidad de la Salle
Fantasmas en la Candelaria por Stella
Monsalve Gaitn
Personaje
Personaje
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Moda
Moda
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VintagePor Laura Juliana Salcedo Ruiz.
1919
Moda
Moda
CoutureLa moda en el siglo XIX se caracteriz por el culto al cuerpo, unas veces resaltndolo y en otras ocasiones ocultndolo. Las vestimentas de esta poca no slo explican la jerarquizacin de la sociedad, sino que tambin rememoran ciertos legados criollos, nativos, afroamericanos y mestizos que se haban colado en nuestra cultura durante tantos aos.
Todo e r a cue s t i n de
apariencias, de ser reconocido
ante la sociedad.
Las vestimentas eran la mejor forma de distinguir no slo la posicin social, sino que tambin
sugeran los oficios de cada bogotano. Slo bastaba mirar los atuendos y las insignias de los
prceres de la independencia para percatarse que en esta poca la moda era un smbolo de
respeto. No obstante, las prendas de vestir tambin fueron causa de discriminacin en la
sociedad bogotana de antao. Por ejemplo, los artesanos y campesinos fueron un gremio
segregado no slo por sus ideas sino tambin por sus ropajes, a estos se les llamaba orejones
los cuales acostumbraban a llevar debajo de su sombrero de jipa un pauelo donde dos de sus
puntas se asomaban por los lados, simulando dos grandes orejas de conejo.
Segn Benjamn Villegas Jimnez en su obra historia de
Bogot del siglo XIX Los aos iniciales del siglo XIX
trajeron consigo cambios radicales en la indumentaria de los
santafereos, que fueron mucho ms ostensibles despus de
la independencia, debido en buena parte al advenimiento de
gentes extranjeras que aportaron nuevos usos en este campo.
Fueron los peinados femeninos extravagantes, los pantalones
a la rodilla con medias de seda, los zapatos de pomposas
hebillas doradas y plateadas y los sombreros tricornios los
que se convirtieron en este
s i g l o e n m o d a m s
informal,con pantalones
largos, zapatos de charol y
altos sombreros de copa
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2020
Moda
Moda
Festn y fechasespeciales
En las fiestas y fechas especiales, los
jvenes vestan sus trajes de moda
franceses influenciados por la revolucin.
Estos estaban constituidos por pantalones
negros y zapatos con lazos de cinta. Para
las mujeres, trajes a la Mara Luisa largos y
estrechos, con talle alto y manga corta.
Cuando se montaba a caballo siempre se
vesta una gran ruana pastusa, un sombrero
de hule colorado o negro y un ltigo en la
mano derecha asegurado a la mueca con un
hiladillo.
En definitiva, se han mostrado algunos
ejemplos de cmo la moda colonial queda
atada a nuestra historia, pues no slo resalt
la separacin de clases sociales, sino que
tambin sirvi como contexto en un siglo
q u e i n t r o d u j o l o s c a m b i o s m s
representativos e influyentes de la historia
Colombiana.
As mismo en el libro de Historia de
Bogot del siglo XIX, Benjamn Villegas
Jimnez resalta que en cuanto a los
esclavos, estos usaban calzones, camisas y
ruanas listadas. Los indios vestan con
marcada preferencia de algodn ()
Andaban descalzos o de alpargatas.
Las muselinas de lana para los bailes, con
grandes zarcillos de oro, pauelos de
algodn en el pecho, zapatos de cordobn,
sombreros de jipijapa, capote de clamo de
colores subidos, grandes chaquetas
amplias de cerinza, chalecos muy largos,
pantaln de cerinas o de pao ordinario,
botines o zapatos de cuero de venado o de
soche eran algunas de las prendas ms
representativas para el hombre honrado y
noble de la poca. Para la gente humilde
los zapatos de Sogamoso, sin hormas y
ruanas guaqueas eran las ropas
habituales.
En el caso de las seoras, la enagua de
alepn era la prenda ms representativa.
Esta estaba compuesta por una tela negra
de lana, una mantilla de pao, sombrero de
huevo frito, acompaado con unos zapatos
de pao o de cordobn. Claro est, esto lo
utilizaban las seoras respetadas de la
sociedad porque, de lo contrario, una falda
de franela ordinaria, blusas y pauelos de
telas de algodn, alpargatas, manto de
pao y sombrero de paja era lo que tenan
que vestir las mujeres sencillas.
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Costumbres
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Y donde estaban las Por Daniel Mauricio Ruiz Morales
Costumbres
Costumbres
buenas costumbres ?
Cada domingo matutino donde muchas familias salen a hacer el acostumbrado mercado, pero no en los supermercados sino en las plazas, es claro apreciar como varios hbitos todava perviven en la historia. Aunque, otros han desaparecido por completo, como por ejemplo el papel que desempeaba la mujer del siglo XIX. De esta manera, es necesario entender como las buenas costumbres tomaron un papel de suma importancia, que en algunos casos todava se pueden observar.
Los buenos hbitos que se tenan en el
hogar marcaron un punto importante en la
historia, ya que la forma en la que eran
criados los nios y las nias demostraba
como sera su futuro. Pero antes, es
necesario hacer un recorrido de lo ms
grande a lo ms pequeo de la sociedad
santaferea. Por esto, el mercado fue
considerado uno de los espacios ms
extraordinarios de la ciudad, debido a la
cantidad de gente que acuda a l. Entre
este gento se distinguan personas de la
clase pudiente y de la trabajadora.
En esta perspectiva, Arturo Abella explica
en su libro El florero de Llorente cmo era
el famoso da de mercado en la Santaf del
siglo XIX:
Cinco de la maana. Viernes. Brisa fuerte y
helada. Por las callejas de acceso a Santaf,
van llegando los campesinos al mercado
tradicional de la Plaza Mayor descienden
por barrizales y rodaderos de la Pea,
Egipto, Beln, San Cristbal. Suben de la
sabana, atraviesan la calle Real, con sus
mulas y rangas, los que vienen de la
Calera y Usaqun. Descargan jaulas,
tercios de lea, carbn de palo, frutas,
canastillos de moras y esmeraldas,
recubiertos con helecho y hojas de monte
brillantes aun por el roci. Llevan los
jamelgos a pastar a los potreros vecinos, o
los amarran en las columnas y vigas de
viejas casonas y pulperas donde toman
caldo de gallina, chicha y guarapo desde el
amanecer.
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As, pasadas unas horas, empezaba a llegar
la gente de diferentes partes. Unos acudan
al mercado para buscar el alimento
semanal. Estas personas eran claramente
las damas de la alta sociedad, pues iban
acompaadas por una criada que se
encargaba de llevar los alimentos
comprados. Otros personajes, curiosos y
desocupados, iban al mercado para
establecerse en la catedral y cazar mujeres
preciosas. Finalmente, en la plaza se
distinguan a los vendedores que, segn
Abella expica en su libro El Florero de
Llorente, pertenecan a diferentes lugares
de la regin. Por esto, puede decirse que
este era un da en el que se reunan
personas de diferente origen y categora.
Costumbres
Otros personajes, curiosos y desocupados, iban al mercado para establecerse en la catedral y cazar mujeres preciosas.
Con respecto a los alimentos y objetos que
se ofrecan en el mercado, se encuentran
frutas y verduras, tales como las fresas, los
melocotones, los aguacates, el trigo, las
patatas, los pltanos, las cebadas, las
yucas, las zanahorias, etc. Tambin los
indgenas vendan sus productos. Entre
estos destacan sus telas, las cuales eran
muy codiciadas por las mujeres de la
ciudad. Adems, evidentemente se
vendan comidas tpicas, entre las que se
distinguen el chicharrn, las papas criollas,
la rellena y los ajiacos.
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Costumbres
Los varones eran educados en el colegio, mientras que las mujeres nunca se separaban de su madre, quien les enseaba la vida prctica y hacendosa del hogar.
Tras haberse visto la parte ms grande de la
sociedad, el mercado, se da paso a la ms
pequea, el hogar. All, se desarrollaba la
formacin de los nios y nias de la poca.
La educacin de los jvenes era diferente
segn su gnero. En su publicacin La
mujer santaferea del siglo XIX, Patricia
Londoo explica que los varones eran
educados en el colegio, mientras que las
mujeres nunca se separaban de su madre,
quien les enseaba la vida prctica y
hacendosa del hogar. En el mejor de los
casos, las chicas eran educadas por
religiosas, quienes les enseaban a leer, a
escribir y les mostraban la vida familiar y
los hbitos religiosos que deban seguir
para convertirse en buenas amas de casa.
Por esto, era en el hogar donde mandaba la
mujer, pues ella se encargaba de la
preparacin de los alimentos, el aseo, el
cuidado de los nios, etc. Londoo, en su
publicacin, describe as un da normal
para las santafereas del siglo XIX:
Las familias y amistades se reunan en las casas en veladas, durante las cuales se tomaba el chocolate, se jugaba a las cartas, se conversaba, despus de haber rezado el rosario.
Madrugan para ir al templo, conversan
en la puerta de la iglesia y van a casa a
"despachar" el almuerzo. Despus de la
siesta se dedican a ensearles a las nias
costura, bordado, cuidado de flores, canto,
a las lecturas religiosas o a realizar visitas.
Tambin salan de compras. Las tiendas se
abran de 9 de la maana a 12 del da y de 3
a 6 de la tarde. A esta hora todo el mundo se
iba a sus casas, las calles quedaban vacas.
No haba cafs o restaurantes, como en las
capitales de Europa. Las familias y
amistades se reunan en las casas en
veladas, durante las cuales se tomaba el
chocolate, se jugaba a las cartas, se
conversaba, despus de haber rezado el
rosario presidido por el padre de familia o,
en su ausencia que era bien comn, por
la madre.
Debido a esto, las actividades sociales,
polticas y culturales en la antigua ciudad
capitalina estaban muy bien definidas. No
obstante, con la globalizacin y los
diferentes movimientos feministas se
empez a dar un cambio trascendental en las
costumbres y derechos que tenan las
mujeres.
Finalmente, hay que tener en cuenta que
todos los buenos hbitos imperantes en el
siglo XIX fueron influenciados por las
costumbres espaolas que, con el paso del
tiempo, fueron adaptndose a la ciudad y al
contexto de vida social y poltico que se
estaba desarrollando. Sin embargo, en la
actualidad an perviven ciertos recuerdos
de aquellas usanzas de antao.
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Gastronomia
Gastronomia
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Una Historia Caliente !Por Carolina Silva Echeverri.
El distintivo nombre del embajador se
explica por su tradicional toque picante
brindado por un pimiento particular, el aj,
que gracias a sus propiedades dot de
sensaciones ardientes las bocas de los
bogotanos del siglo XIX.
Existen muchos platos relacionados con la
gastronoma de este siglo pero es aqu
donde tenemos unos que realmente son
representativos, tenemos el puchero
santafereo donde es representativo la
carne de cerdo y res en este plato, este es
producto de una gran mezcolanza , pero
realmente el que es ms representativo es el
ajiaco bogotano. Este es llamado por los
grandes chef de la cocina internacional
como el embajador de santa fe de bogot en
el mundo.
Dicho anteriormente el ajiaco, llamado as
por tener aj es el encargado de brindarle a
los bogotanos un poco de calor a la hora de
comerlo, ya que con sus propiedades genera
un ambiente mas ardiente para la meseta
cundiboyacense , un clima fro templado
por excelencia. El ajiaquito santafereo es
un plato servido una vez a la semana como
mnimo en las mesas de los bogotanos, por
lo general el domingo. El domingo
representa un da familiar y por ende es muy
bueno celebrar una reunin familiar con este
plato tan importante en la vida de los
santafereos. Aunque, no es slo servido en
los domingos, tenemos tambin que al ser
tan primordial para esta poca es tambin
utilizado para conmemorar algunas fechas
importantes como lo son el cumpleaos de
algn familiar, das festivos o incluso tan
importantes como lo son la navidad y ao
nuevo.
Gastronomia
He aqu la historia de dos personajes que han sido parte de las comilonas bogotanas desde los albores de la Repblica. En la cabecera tenemos al embajador capitalino, el Ajiaco, quien es acompaado por su distinguido compaero, el Chocolate Santafereo.
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Gastronomia
Gastronomia
La forma de obtener un buen ajiaco son
realmente la forma de cmo lo hacen , las
ollas de barro o vajilla importada (
depende del estrato ) , y los ingredientes
tales como varios tipos de papa , la
mazorca, el pollo y las guascas que son las
que vienen a remplazar al aj , para darle un
sabor ms rico. Este embajador es
predeterminadamente delicioso, al ser un
tipo de sopa que no es tan liquida como un
caldito , pero tampoco espesa como un
seco, genera en el paladar capitalino
adiccin y atraccin por este plato en
particular . Para acompaar este plato al
medio da , tomaban chicha; una bebida a
base de maz que les ayudaba a digerir
mejor la comida y algo fermentada
generaba las bebidas alcohlicas de la
poca.
Por otro lado tenemos otro personaje que
ha sido muy importante a lo largo de los
das de los bogotanos, el compaero del
ajiaco santafereo, siendo tomado como
mnimo dos veces al da, al alba y a la hora
vespertina. El chocolate, con su
caracterstico sabor fuerte y amargo, era
quien le proporcionaba a los habitantes
capitalinos una gran fuente de energa y
vitalidad para cumplir con las labores
diarias antes de ir a su primera labor diaria,
la misa. Este gran representante
gastronmico tambin represent para los
ciudadanos una divisin entre clases, el
chocolate era creado con azcar, manteca
de cacao y pasta de cacao, entonces, era
cuando las elites le agregaban maz a las
pastillas de chocolate para la servidumbre
y para ellos ms puro. Es entonces donde
este personaje primordial de los citadinos
se convierte en su acompaante dura las
maanas y las tardes y por ende un
ingrediente importante para los
santafereos
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OpininEntrevista hecha por: ANDRS VEGA
Opinion
Opinion
Otorgada por:
Jaime Arturo Duarte Quebedo
Coordinador de Gobierno
Pregrado FIGRI
Formacin AcadmicaMaestria/Magister
Universidad Externado de Colombia
Maestria En Educacin de 2000 - de
Carctersticas de la Comunidad
Acadmica.
Perfeccionamiento Comisin
Interamericana Derechos Humanos OEA
Pasantia de1998 - de 1998
Pregrado/Universitario.
Universidad Externado de Colombia
Finanzas y Relaciones Internacionales
de1994 - de 2000
1. Cul considera usted que fue el hecho
mas importante en el siglo XIX en bogot?
J.D : Como ciudad? Como ciudad, yo creo
que, lo ms importante es a finales del siglo
XIX cuando aparece el agua corriente por
medio del acueducto.
2. Cul es el personaje ms importante
segn usted en el siglo XIX en Bogot?
J.D : A nivel de ciudad , Thomas Reed que
es el que diseo el Capitolio Nacional, es
tambin el que hace el diseo de lo que es
actualmente el Museo Nacional, que antes
era una crcel.
3.- Qu influencia tuvo la iglesia catlica
en el siglo XIX en Bogot?
J.D :Bueno, arquitectnicamente y como
ciudad, la va a cambiar, por que va a hacer
que al crecer el numero de parroquias va a
crecer la ciudad y as mismo al entrar con un
aire, una idea nueva que es el neogtico, va
imponer digamos un cambio de modernidad
a nivel arquitectnico en toda la ciudad, que se
va a ver reflejado despus en lo que se llama el
Neoclsico.
4.Fue realmente la independencia un
movimiento de liberacin nacional o fue
realizado simplemente para beneficio de la
clase criolla?
J.D: Yo creo que sin duda es una alguna , pues
benefici ms a los que estaban arriba ,a la
clase criolla que a los que a la gente junta.
5.Porqu el grito de la independencia se
dio en Bogot y no en otro sitio de
Colombia?
J.D: Los gritos de independencia se dieron en
casi todos los sitios importantes de Colombia,
pero el mas trascendental o el de mayor
importancia es el de bogota , dado que bogota
es la capital del virreinato.
6.Cmo cambi la vida de los santafereos
despus del grito de independencia?
J.D: Despus del grito de independencia ,
digamos se vuelven mas como extrovertidos
los bogotano, y comienzan a tener conciencia
de , pues una conciencia mayor de lo que ellos
son y pueden llegar a hacer, entonces
comienza digamos un crecimiento econmico
tambin para la ciudad, cosa muy
importante dado que ya no van a tener miedo a
crecer , pues ese miedo estaba infundido
muchas veces en lo que pasaba a partir de los
cobros impuestos reales y por eso no haba una
buena tasa de productividad.
7.Cules son las secuelas que los espaoles
dejaron despus de la independencia?
J.D : Pues la mayor secuela es el
provincianismo que va a hacer que de cierta
manera hagamos que no pensemos ms all y
no tratemos de de de evitar esas
estructuras como las , por ejemplo el
centralismo , que no tratemos de , que no
hagamos esfuerzos como por ejemplo entrar
un poco en un cambio de la modernidad como
el que supone ya ser libres, entonces ese
cambio a la modernidad solo se va a dar hasta
que haya esa acumulacin de dinero que es
claramente en la primera postura econmica
que se da con el libre cambio en 1850.
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Cronica
s A
ncestrales
Cronica
s A
ncestrales
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CrnicasAncestralesPor: Carolina Silva y Laura Salcedo
Me contaron mis abuelos que hace
tiempo una ciudad muy parecida a la ma
estaba empezando a nacer, una ciudad que
con el paso del tiempo iba a permanecer, y
que su transformacin significara el
cambio total de la sociedad. Me decan que
si yo tuviera el poder de viajar al pasado, no
me iba a sentir desorientado ni en un
mundo irreconocible ante mis ojos. Para
ellos Bogot haba fracasado, pues sta no
haba dejado de ser esa ciudad donde los
vagos, mendigos y prostitutas inundaban
las calles, alimentando el espritu cristiano
de los ciudadanos de atributos que no iban
acorde con los valores profesados por la
iglesia. La promiscuidad, pereza, ambicin
y lujuria, fueron los principales
precursores de la sociedad que fue, y
persiste hoy en da. Desde su punto de
vista, aunque la ciudad haba crecido
significativamente en cuanto a territorio y
poblacin; sus grandes edif icios,
sofisticados teatros y amplias vas, no
representaban un desarrollo integral en
cuanto a mbitos estructurales y humanos.
Han pasado casi dos siglos, y Bogot sigue
viviendo con los mismos problemas que
tena durante 1800; mendigos, prostitucin,
pobreza e insalubridad son tan solo unos
cuantos que vale la pena citar. Actualmente,
se habla de Bogot con numerosas crticas
que lo nico que hacen es mostrarla como
una ciudad que carece de un gobierno no
solo que brinda a todos los ciudadanos
recursos bsicos para su subsistencia, sino
tambin que les da la capacidad de
desarrollarse libre e igualitariamente dentro
de la sociedad.
Doscientos aos ms tarde, y Bogot sigue siendo la misma que fue durante el siglo XIX. El mismo desorden, revueltas y falta de planeacin, son caractersticas que aunque desde finales del siglo XVIII empezaron a presentarse en la Bogot de esa poca, hoy en da son tan solo unas cuantas particularidades que identifican a la ciudad capitalina.
Cronica
s A
ncestrales
Cronica
s A
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La Bogot de hoy en da es reconocida
principalmente por sus defectos, hecho que
no ha cambiado mucho de la Bogot del
siglo XIX, la cual a pesar de ser pionera en
aspectos culturales como lo es el teatro,
eran ms dominantes sus vicios que sus
virtudes.
Yo asombrado no poda creer lo que estaba
escuchando; Bogot no haba mejorado ni
se haba desarrollado. Los problemas de
inseguridad, pnico e intranquilidad que yo
estaba viviendo por el aumento migratorio
que se estaba dando hacia la capital, era un
p r o b l e m a q u e d e s d e h a c e
aproximadamente dos siglos estaba
empezando a surgir. Cada vez era mayor la
cantidad de personas que salan de sus
pueblos y ciudades natales hacia la capital
en busca de nuevas y mejores
oportunidades de vida; lo que ellos no
esperaban era que al llegar, se iban a ver
obligados a instalarse en zonas marginales
donde la higiene y servicios bsicos eran
degradantes. Haban llegado a un lugar
que los estaba tratando peor que las zonas
de donde provenan! La insalubridad era el
tema que ms se escuchaba en las calles de
la ciudad durante el siglo XIX; el ejemplo
perfecto era el de la Plaza de Mercado, el
cual Benjamn Villegas Jimnez logr
describir claramente en su obra Historia de
Bogot siglo XIX,
las condiciones de desaseo en que se
realizaba el expendio de los vveres eran
aterradoras, y ms aun cuando,
concluidas las ventas, repulsivas
bandadas de chulos cernan sobre el lugar
para darse su festn de desperdicios e
inmundicias () la preocupacin por este
horrible foco de insalubridad en el pleno
corazn de la capital se tradujo en una
concesin que la Cmara Provisional
otorg en 1848 al seor Juan Manuel
Arrugla para construir una plaza de
mercado cubierta
Al igual que en todos los tiempos, la
imagen de la mujer caus polmica a nivel
social pues la prostitucin comenz a ser
reconocida a nivel regional. Zonas como
San Victorino, Santa Brbara y las Nieves
empezaron a ser reconocidas porque en sus
calles se vean mujeres que vendan su
cuerpo para as conseguir recursos para
vivir bien. Esta imagen fue distintiva y fue
la que hizo que varias zonas fueran
reconocidas a nivel nacional.
El siglo XIX no es muy distinto al siglo
XXI, los mismos problemas sociales de esa
poca son a los que yo me enfrento da a da.
Es difcil pensar que Bogot no ha
cambiado desde hace tantos aos, pero la
realidad nos muestra que todo sigue igual;
la capital de mis abuelos es la misma capital
en la que yo vivo, lo que ellos me cuentan lo
veo reflejado en lo que veo a diario en las
calles y en los noticieros.
La Bogot que ellos queran ver surgir no ha
existido nunca, el desarrollo no se ve ni en
las acciones ni en los hechos a los que
diariamente nos sometemos, como los
mismos protagonistas, o peor an, como
cmplices de una realidad social que a pesar
de los aos no ha progresado para bien.
Cronica
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Cronica
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Entretenim
iento
Entretenim
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Pasatiempos Caricaturas
Sopa de Letras: Paises y Regiones
SODOKU
Sopa de Letras: Paises de Amrica
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Social
Social
Imagen de la Plaza de Bolvar, en los actos religioso
Fernando VII
Antonio Nario
Pablo Morillo
Francisco de Miranda
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Cine Y
Libros
Cine Y
Libros
Cine Libros
Bolvar soy yo", revive la historia de
un actor que se obsesiona por sus varias
interpretaciones del hroe caraqueo
Simn Bolvar y termina por retomar su
inconclusa misin.
Nombre de la pelcula: Bolvar soy yo
Ao 2002
Gnero: Ficcin / comedia
Direccin: Jorge Al Triana
El estudio de caso de
Bogot durante ms de un
siglo (1884 - 2004) ha sido
el fundamento para la
creacin de una coleccin
de cuatro libros que
analizan el papel de la
m o v i l i d a d e n e l
crecimiento urbano de la
ciudad.
La ciudad del tranva
Autor: Ricardo Montezuma
Bogot
2008
L a f o t o g r a f a y l a
arquitectura en este libro
han ido de la mano y son
las imgenes detenidas las
que transportaran a todas
las generaciones a una
p o c a q u e p o c o s
recuerdan.
La historia de frente. Arquitectura
de Bogot.
Autor: Antonio Castaeda y
Alberto Escovar
Bogot
2010
La voz de Irene Vasco
n a r r a a l o s n i o s ,
apoyndose en imgenes e
hipertextos, los hechos
que sucedieron antes,
durante y despus de la
independencia
Nombre del libro: La independencia
de Colombia: as fue
Autor: Irene Vasco
2009
Basada en la exitosa novela de Jorge
Isaacs. Efran y Mara son dos
enamorados para quienes el amor es un
sentimiento puro y perfecto. El suyo sin
embargo est lleno de dificultades y a
pesar de ello, los dos siempre se guardan
en el corazn.
Nombre de la pelcula: Mara
Ao: 1972
Gnero: Drama/Romance
Direccin: Tito Davison
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