BASES PARA REDACTAR UN ENSAYO
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UNIVERSIDAD EARTH
GUÁCIMO, COSTA RICA APARTADO 4442-1000, San José, Costa Rica
CURSO 1511: INTRODUCCIÓN A LA COMUNICACIÓN
BASES PARA REDACTAR UN ENSAYO
Luis Hernán Rincón R., 2001 Ing. Agr., Ph. D., Profesor de Comunicación, EARTH
hrincó[email protected] Apartado 4442-1000, San José, Costa Rica
Teléfono: 713-0000 Fax: (506)713-0001
BASES PARA REDACTAR UN ENSAYO
Luis Hernán Rincón, 2001
INTRODUCCIÓN
La lectura de este tema le puede
ayudar a enfrentar problemas de
redacción. Más concretamente, uno de
los objetivos de estas bases es lograr
que la persona desarrolle su
pensamiento sobre un tema dado.
En este artículo encontrará usted
caminos que le ayudarán a convertir
una tarea, una pregunta o un tema en
ideas organizadas mediante la
escritura. Podrá seguir caminos
seguros para no “quedarse sin qué
decir”. Poder escribir clara y
ordenadamente se ha vuelto necesario
en la mayoría de los idiomas. Al final
encontrará un ejemplo real, escrito por
Carlos Granados.
DEFINICIÓN
Por ensayo entendemos un
artículo argumentativo o expositivo,
breve o extenso, en el que usted
expresa sus ideas, su punto de vista,
afectivo, o cognitivo, sobre algún tema
( Kirszner y Mandell1986; Lázaro
1991). Por ejemplo, si le pidieran, en
un examen o en su trabajo, que
escribiera sobre: ¿qué relación ve
usted entre la juventud y las actitudes
positivas hacia los bosques tropicales?
le estarían pidiendo que escriba un
ensayo, es decir, un artículo en que
usted exprese su opinión sobre ese
tema. Si le solicitan un artículo sobre
un tema técnico de su profesión,
puede responder escribiendo un
ensayo cognitivo.
En su caso, ¿le ha ocurrido que no
sabe cómo empezar a escribir algo?
¿Le persigue a veces la angustia de
no poder escribir su concepto sobre
temas que le encargan? ¿Duda de
cómo escribir un trabajo para un
curso, una excusa para el profesor,
una carta de solicitud, un artículo para
un periódico o una revista? ¿Siente
que se desorienta, como si fuera un
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turista sin mapa y sin guía? ¿Piensa
que debería tener unas guías para
orientarse? ¿Se pregunta con
angustia: qué escribo, qué digo?
Si usted tiene preguntas como
esas en la cabeza, para ayudarle le
sugiero lo siguiente: cada vez que
sea posible, escriba un ensayo. Un
ensayo que usted escriba, siguiendo la
guía que le doy a continuación, le sirve
de base para escribir otros artículos,
con formato o tratamiento distinto o
con otro estilo, sobre el mismo tema
pero con una idea principal diferente.
PREPARE SU TEMA O SUS TEMAS
Para escribir un ensayo, primero
piense en sus temas, en sus lectores
y en la acción o respuesta que usted
desea. La relación general que usted
plantee entre los temas es la idea
principal sobre la que usted va a
escribir. Por ejemplo: “el aprecio
juvenil por los recursos naturales”, es
una idea principal que relaciona dos
temas: aprecio juvenil y recursos
naturales. “Las actitudes positivas en
la familia tica”, es otra idea principal.
Trace planes en su mente, pensando
en sus lectores. Para planear la
redacción de un ensayo sobre una
principal dada, por ejemplo sobre “el
aprecio juvenil por los recursos
naturales”, usted puede empezar por
plantear mentalmente y de varias
maneras su punto de vista sobre esa
idea principal, partiendo de sus
sentimientos (lo afectivo), o con base
en sus conocimientos (lo cognitivo).
Así, usted plantea su tesis o idea
principal con un punto de vista.
Suponga que sus lectores son
jóvenes. Piense también en lo que
usted cree que ellos necesitan. Aclare,
vea, imagine en su propia mente lo
que usted desearía que hicieran sus
lectores acerca de ese tema como
fruto de leer su ensayo. Por ejemplo,
suponga que usted desea que
demuestren una actitud positiva hacia
los bosques.
MANEJE SUS IDEAS
Capture luego ideas de cómo
llevar esa tesis a sus lectores, de la
mejor manera. Capturar ideas es
anotarlas con una o dos palabras. Una
manera de llevar el mensaje es la
forma argumentativa, polemista. Por
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ejemplo, con la idea principal dada, y
para jóvenes rurales usted puede decir
su punto de vista con palabras
positivas: Los jóvenes rurales tienen
actitudes más positivas hacia los
bosques que los jóvenes urbanos.
Otra manera es plantearse, todavía
mentalmente, el mismo asunto con un
punto de vista diferente. Por ejemplo :
La juventud citadina tiene una actitud
positiva más clara hacia los bosques
tropicales que la rural. Un tercer
tratamiento es el expositivo, en el cual
usted plantea exponer información de
modo convincente, pero no polemista.
Por ejemplo, su punto de vista o tesis
podría decir: La juventud y los
bosques tropicales guardan el futuro
de la vida.
Una estrategia para interesar al
lector es titular atractivamente su
mensaje. Plantee un título principal,
activo, y téngalo a mano. Un título
principal es como el resumen máximo
de la idea principal. Empiece con un
título tentativo pero preciso. Le
quedará más fácil y acertado escribir
el título definitivo cuando haya
terminado de corregir su ensayo.
ORDENE SUS IDEAS
En su ensayo usted necesita
relacionar la idea principal, que es la
que se extiende por todo su ensayo,
con cada idea tópica, que se
concentra en cada párrafo, y con las
ideas de apoyo, que son las que
explican y respaldan a la idea tópica,
también en cada párrafo.
SU TESIS
Repitamos que su idea principal
para el ensayo sale de la relación
entre dos o más temas que usted
quiere o debe tratar. Su tesis es su
idea principal con su punto de vista.
Cualquiera que sea su tesis, púlala,
lábrela, mejórela mentalmente, hágala
original y fuerte, antes de sentarse a
escribir su ensayo. Escríbala en sus
pensamientos, con frases cortas,
como ejercicios de expresión mental o
de imaginación. Luego escríbala en
papel o en la computadora. Cámbiele
el énfasis, en fin, búsquele el mejor
lado. Cuando tenga su tesis clara,
podrá capturar ideas, es decir, lo que
va a decir en su ensayo.
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Planear la tesis es fácil con la
ayuda de la computadora. Mientras
que en el papel usted tiene
limitaciones para mover textos de un
lugar a otro de su página, en la
computadora puede borrar y mover sin
borronar ni empezar de nuevo.
LAS IDEAS TÓPICAS Y LAS IDEAS DE APOYO
Con la idea principal y su punto de
vista claros en su mente, usted tiene
su tesis clara. Pase a capturar un
amplio número de ideas relacionadas
con ella. Capture cada una de esas
ideas sin demorarse a juzgarlas.
Para capturar una idea, escriba una
o dos palabras, y siga velozmente
escribiendo una columna de palabras
o números que representen cada una
de las ideas que se le ocurran.
Capture también los datos o los
ejemplos que pasen por su mente y
que sirvan para demostrar o sustentar
eso que usted quiere decir en su
ensayo a sus lectores. Deje espacio
amplio entre las palabras de su lista
para insertar otras palabras, u otros
datos, especialmente ideas nuevas o
mejores, que sirvan de apoyo. Capture
más idas suponiendo lo que sus
lectores, sus críticos, sus jefes o sus
colegas desearían leer en su ensayo.
Varias de las ideas capturadas en su
lista de palabras serán sus ideas
tópicas. La idea tópica es definida
como un mensaje parcial que usted
expondrá en un párrafo. Decida cuáles
ideas serán materia de párrafos y
cuáles serán para apoyar la redacción
de esos párrafos. Entre las ideas
capturadas, habrá algunas que no
pertenecen a la idea principal y que
puede eliminar. Borre o tache y
agregue, ejemplos, datos, detalles. En
una lista, en columna, escrita en la
computadora resulta muy fácil
agregar, quitar y mover palabras, de
modo que una buena práctica es
grabar en la computadora la lista de
ideas que capture.
No olvide que sus ideas serán sobre
la relación entre los temas, y no sobre
uno solo de los temas. La relación es
lo más importante. (También es
importante salvar frecuentemente su
texto en el disquete o disco duro.)
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Tan pronto como complete la lista
de sus ideas capturadas, organícelas
y vaya escribiéndolas en frases u
oraciones breves. Para organizarlas,
marque a la izquierda, con una T
grande, cada palabra de la lista que
resuma una idea tópica. Deje las
demás palabras como posibles ideas
de apoyo. Las ideas de apoyo se
definen como los argumentos, los
datos o los ejemplos con que usted
demuestra, sustenta o explica la idea
tópica. Luego escriba un número 1 a
continuación de cada idea tópica (T)
que usted expondrá primero en su
ensayo; escriba el número 2 a
continuación de cada idea T que usted
colocará luego y, escriba el número 3
a continuación de cada idea T que
usted tratará al final. Así tendrá varias
T1 T2 y T3. Seleccione de esas Tes
las tres o cuatro más importantes, que
usted quiere o debe tratar en su
ensayo.
A continuación marque con A cada
una de las palabras que representan
las ideas de apoyo capturadas.
Capture y marque del mismo modo
más hechos, ejemplos, ideas y datos.
Luego asigne cada A a la idea tópica
que mejor la agrupe, pues de ese
modo usted empieza a formar sus
párrafos que, ya usted lo sabe, se
definen como la expresión de una idea
tópica con sus ideas de apoyo. Para
asignar las ideas de apoyo a las
respectivas ideas tópicas,
simplemente escríbales A1, etc., antes
de la palabra. Ejemplo: Deforestación.
AT1 Deforestación. (La idea A,
Deforestación, irá como idea de Apoyo
de T1 (Tópica 1).
EL ESQUEMA
Cuando tenga las ideas así
clasificadas, estúdielas y
compleméntelas para que escriba
luego el esquema. El esquema
equivale a una lista de palabras o
frases en el orden en que usted las
necesita para estructurar su ensayo.
El esquema es su puerta de
entrada a la consulta de otras fuentes
de información. Lo que usted quiere
decir está esquematizado. Las
consultas le darán datos e información
para que usted argumente y
demuestra cada idea tópica.
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Lea, consulte a personas, en
libros, revistas, bancos de datos,
páginas WWW, etc. Mediante fichas
bibliográficas tome datos
bibliográficos completos junto con la
información de las obras o fuentes que
consulte. Llene los vacíos que usted
sienta que haya en el esquema. Con
el resultado, organice un nuevo
esquema de su ensayo. Puede
imprimir su esquema y leerlo en papel,
o leerlo en la pantalla de la
computadora.
En el esquema, antes de ponerse
a redactar, ligue cada idea tópica con
la idea principal y con la tesis que las
aglutina. Para ello, logre que cada
idea tópica tenga relación con las
demás de su clase, y defienda,
aclare, compare, contraste, o
implique la idea principal. Recuerde
que la idea principal es la que da
unidad y coherencia al ensayo. De
este modo, usted da a su ensayo una
columna vertebral, una estructura de
principio a final. Con ese esquema sí
está usted en condiciones de empezar
a escribir la primera versión de su
ensayo.
PRIMERA VERSIÓN
Nunca empiece a escribir
oraciones o párrafos sin tener listo el
esquema. Escribir un ensayo sin tener
el esquema es como ir a sembrar sin
saber dónde están la parcela, las
semillas, las herramientas, el agua y
los ayudantes. Escribir sin haber
preparado el esquema es como
sentarse a almorzar sin tener los
cubiertos ni la comida listos.
De nuevo, antes de sentarse a
escribir párrafos de su ensayo.
explíquese a usted mismo su
esquema. Luego, empiece a escribir
una primera versión. Varios autores
hablan de preparar un borrador, pero
yo prefiero hablar de preparar una
primera versión completa, para
imprimirla y corregirla. Prepare esa
primera versión con base en el
esquema estructurado de ideas
tópicas y de apoyo. Esa es su nueva
meta.
¿Cómo empezar la primera
versión? La primera versión consiste
en escribir un poco de cada idea
tópica y de sus ideas de apoyo,
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siguiendo el esquema. Tome cada
idea tópica y escríbala en forma de
una oración gramatical. Luego
demuéstreles a sus lectores que en
esa oración usted dice algo sólido,
creíble. Para demostrar la idea tópica,
exprese en oraciones sencillas las
correspondientes ideas de apoyo
(AT1, AT2, etc.); esto es, escriba las
otras ideas, los datos, hechos y
ejemplos que sustenten la idea tópica.
Una vez relacionadas las ideas
dentro del párrafo, enlace o relacione
entre sí las ideas tópicas (con sus
ideas de apoyo) que usted coloque en
cada sección. Una sección consiste en
uno o varios párrafos sobre un mismo
aspecto de su ensayo.
Escriba como primera versión lo
más importante para cada sección de
su ensayo. Piense que las secciones
son: introducción (todas las T1),
cuerpo (todas las T2), y conclusión
(todas las T3). No se quede
meditando sólo en la introducción,
más bien trabaje en cada una de las
secciones de su ensayo, hasta que
éste tenga cuerpo completo, aunque
parezca pequeño y muestre
imperfecciones. Luego, mejore las
ideas tópicas de cada sección a
medida que avanza. Recuerde que
cada idea tópica con sus ideas de
apoyo es lo que se llama párrafo, y
que varios párrafos en un mismo
aspecto de la relación o tesis
constituyen una sección. Agregue o
modifique ideas de apoyo a medida
que escribe y revisa.
Salve o grabe la primera versión
en un disquete. Luego imprima esa
primera versión de su ensayo a uno y
medio espacios, para corregirla a
mano, es decir, para borrador.
CORRECCIÓN DE LA PRIMERA
VERSIÓN
Según la Real Academia Española de
la Lengua (1992), un borrador es “un
escrito de primera intención en que se
hacen o pueden hacerse adiciones,
supresiones o enmiendas”
Use el espacio que dejó entre
líneas, al imprimir su primera versión,
para escribir ahí lo que deba cambiar
o corregir. Incluya detalles, dé
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ejemplos, refuerce, compruebe.
Mueva palabras, frases y párrafos de
un sitio para otro donde comuniquen
mejor la idea. Elimine lo que no sea
esencial para su propósito
comunicativo al escribir. Y rescriba
con la meta de que el lector pueda
entender la tesis que usted quiere
exponer o decir.
Ese borrador con mejoras puede
tener el aspecto de una serie de ideas
atrapadas en palabras que sólo usted
entiende, o el de oraciones y frases
cordinadas en párrafos. Si le queda
más fácil, escriba sin preocuparse de
pequeños errores, pero corrija éstos
después. Yo cometo errores, como
cualquiera, pero de todos modos
corrijo varias veces antes de darme
por satisfecho. Esta satisfacción surge
cuando la tesis, es decir, la idea
principal con su punto de vista, fluye
desde el comienzo hasta el final,
representada por cada idea tópica y
demostrada por hechos y ejemplos.
LA SEGUNDA VERSION
Cuando usted haya terminado de
hacer mejoras en el borrador, estará
en condiciones de avanzar. Tendrá la
materia prima seleccionada (el fondo)
para empezar a escribir y rescribir
(darle forma), con gusto y seguridad,
la segunda versión de su ensayo.
Para ello, regrese a la primera
versión que tiene salvada en su
disquete, y con ayuda del borrador
empiece a mejorar esa primera
versión de su ensayo. En la segunda
versión usted redactará con mucho
más cuidado y le dará atención tanto a
las ideas (fondo) como a la redacción
(forma) en que usted las está
relacionando. Plantee en los primeros
párrafos su introducción con su tesis,
esto es, con su idea principal, más su
punto de vista o posición; luego, en el
cuerpo, reúna y ligue bien su
sustentación, su argumentación
verídica, su demostración, mediante
las ideas tópicas respaldadas con
hechos, ejemplos, o citas de
autoridades pertinentes; finalmente, en
la conclusión de su ensayo escriba su
deducción, argumento fuerte, síntesis,
o remate bien efectivo. Asegúrese que
no haya ideas tópicas no contradigan
su idea principal, y, al contrario, logre
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que la representen y refuercen.
Finalmente. incluya las referencias
bibliográficas, según las normas de la
entidad que recibirá su escrito.
LAS PARTES MÍNIMAS DE SU
ENSAYO
Su ensayo vale por las ideas
que contenga y el tratamiento que les
dé, pero no por la cantidad de
palabras que emplee. Puede ser breve
o extenso, por ejemplo de una página
o de 30, pero debe tener unidad de
ideas, y estar completo en su forma.
La extensión depende de su interés en
tratar el tema con amplitud, pero el
ensayo moderno tiende a ser breve, y
los lectores preferimos los ensayos
cortos, pues, como dijo Baltazar
Gracián: “Lo bueno, si breve, dos
veces bueno”.
Independientemente de su
extensión, el ensayo —y cualquier
escrito-- debe estar completo y
organizado. es decir, debe tener una
estructura que incluya como mínimo:
título, autor / año, introducción,
cuerpo, conclusión y, deseablemente,
referencias bibliográficas. Si decimos
que debe tener comienzo, desarrollo y
final, estamos afirmando lo mismo.
Veamos someramente esas partes.
1. TÍTULO. Un título es un resumen
por excelencia. Mientras menos
palabras se necesite para dar una
idea cabal del contenido, mejor es el
título. No tiene que ser una oración
gramatical, basta una frase o un
nombre. No se exceda de unas 10
palabras. Redacte al comienzo un
título provisional y, cuando termine de
escribir y de corregir, modifique el
título según sea necesario para
resumir su tesis, es decir, su idea
principal con su punto de vista.
2. AUTOR. Coloque su nombre propio
debajo del título del ensayo que usted
escriba. Separado del nombre por
una coma, escriba el año, dato que es
importante, pues usted sabe cuando
escribió su ensayo, pero el lector no lo
sabrá si usted no lo dice.
3. INTRODUCCIÓN. La introducción
es como la entrada. Reitero que
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plantee de entrada, en un párrafo, su
tesis, es decir, su idea principal con
su punto de vista, o lo que usted
quiere decir. Para el tema de ejemplo,
citado al comienzo, lo siguiente sirve
de guía para redactar una
introducción:
Pienso que la juventud citadina
tiene una actitud positiva más clara
hacia los bosques tropicales que la
rural. Así como la juventud guarda el
futuro de la humanidad, los bosques
tropicales guardan el futuro de la
juventud. Pero esa relación de futuro
está siendo cultivada con más cuidado
por las personas que habitan en las
ciudades que por las que habitan en
los campos. ¿No cree usted que la
gente de las ciudades ve con más
claridad que si se acaban los recursos
naturales en su ambiente, el mayor
impacto empezará a sentirse primero y
con más fuerza en la ciudad?
4. CUERPO. En el cuerno de su
ensayo plantee, como ya fue
explicado, mediante párrafos, sus
ideas tópicas y demuéstrelas.
Expóngalas con la ayuda de otras
ideas, de hechos o ejemplos de
apoyo. Redacte uno por uno los
puntos para refutar y escriba sus
refutaciones; o escriba el punto,
apoyándose en ejemplos o hechos de
apoyo.
En el ejemplo que estamos
tratando, usted podría desarrollar
ideas como las siguientes:
• Importancia de los bosques
tropicales.
• Cómo dependen de los bosques
tropicales las gentes de la ciudad
• Cómo conviven diariamente con
los bosques tropicales las gentes
de la región tropical húmeda.
• Explique que la madera es
esencial pero que también lo es el
bosque tropical.
• Demuestre con citas bibliográficas
cuántas hectáreas de bosque
tropical talan en su país cada año,
y qué se está haciendo para
remediar ese mal.
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• Analice el mercadeo de maderas:
si alguien vende árboles alguien
los compra. ¿ Quién está
plantando los remplazos?
• Describa algún ejemplo breve.
• Diga qué pasaría con el agua y la
vida cuando se tale el último árbol
de una cuenca.
• Demuestre que unos programas de
preservación de bosques tropicales
surgen de las ciudades y otros de
los campos.
5. CONCLUSIÓN. En la conclusión
usted redondea y cierra el ensayo e
incita a la acción. Redacte aquí sus
ideas tópicas de cierre, su deducción
lógica, que debe fluir de las otras dos
partes de su ensayo, tan naturalmente
como fluye el agua de su origen. Invite
a la acción deseada. Escriba su
conclusión inequívoca. Usted puede
desarrollar las sugerencias siguientes
para concluir el ejemplo:
• Deduzca de sus datos y ejemplos
que la juventud de las ciudades
conoce mejor los asuntos
profundos de los bosques
tropicales, mientras la gente del
campo conoce más sobre el uso de
la vegetación.
• Pero también plantee lo que deben
hacer las escuelas, los colegios,
las universidades, los
profesionales para que tanto la
juventud rural como la urbana
tengan actitudes positivas y
ecológicas en relación con los
bosques tropicales.
• Invite al lector a tomar partido por
los bosques tropicales y por la
juventud, para evitar los males y
lograr los heneficios que usted
expuso en el cuerpo de su ensayo.
6. REFERENCIAS BIBLIO-
GRÁFICAS. Su ensayo puede llevar
o no referencias bibliográficas. Eso
depende de la forma como usted lo
haya enfocado. De todos modos, las
obras de otras personas pueden
servirle de apoyo eficaz. Por eso
sugiero que incluya referencias
bibliográficas esenciales o útiles.
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Elabore la lista de referencias de los
principales autores consultados y
citados, cuyos trabajos sirven para
sustentar la exposición o la
argumentación que usted hace en el
ensayo. Presente la lista de las
referencias bibliográficas según las
normas que le indiquen. Para ello,
organícelas en orden alfabético de
apellido del autor principal.
Como ejemplo del modo de
redactar esta parte vea las referencias
listadas más adelante.
CONCLUSIÓN DE ESTAS BASES
En síntesis, su ensayo es la
expresión escrita, bien organizada, del
punto de vista suyo sobre la relación
entre temas. El ensayo puede ser
argumentativo, expositivo, cognitivo o
emotivo, y debe ser convincente.
Puede ser breve o extenso, pero debe
estar completo, esto es, debe tener
una estructura que incluya
introducción, cuerpo y conclusión.
Recuerde: cuando le pidan que
escriba su concepto sobre algo de su
interés, puede expresarlo mediante un
ensayo, en el que relacione un tema
con otro, y le quedará de primera si lo
hace con orden y método, siguiendo
estas guías u otras que usted estudie.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
DE ESTAS BASES
1. Real Academia Española de la
Lengua. 1992. Diccionario de la lengua española. 21ª ed. Madrid, Espasa. 1516 p.
2. Kirszner, L; Mandell, S. 1986. The
Holt Handbook. New York, Holt. 733 p.
3. Lázaro, F. 1991. Lengua
española. Madrid, Anaya. 324 p.
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GLOSARIO. Busque en el texto la explicación de los términos siguientes y compárela con definiciones de diccionarios técnicos. Borrador Ensayo Esquema Idea de apoyo Idea principal Idea tópica Primera versión Sección Segunda versión Tesis Tema
14
TALLER DE REDACCION PROF. LUIS HERNAN RINCON
EARTH - JULIO, 1999
PRACTICA SOBRE IDEAS TOPICAS PREPARADO POR: CARLOS E. GRANADOS MOLINA
TEMAS - Sociedad digitalizada - Acceso a la información IDEA PRINCIPAL Digitalización de la información y posibilidades de acceso. PUNTO DE VISTA DE LA IDEA PRINCIPAL Las posibilidades de accesar información por parte del ciudadano común, se ven incrementadas por las nuevas tecnologías digitales, acercando la información y el conocimiento a las grandes masas de la población mundial. IDEAS DEL PUNTO DE VISTA Sociedad digitalizada Digitalización de la información Acceso a la información Tecnología de la información Globalización Industria de la información Servicios de información digitalizados Uso de tecnología de información Transferencia de información y conocimiento Information literacy Ventajas de la digitalización Internet Dependencia vertical Teoría del goteo Tercer Mundo
Dificultades para el acceso a la información El papel del profesional en información Bibliotecas híbridas IDEAS TOPICAS T1 Globalización T2 Sociedad Digitalizada T3 Acceso a la información T4 El papel del profesional en información IDEAS DE APOYO PARA LAS IDEAS TOPICAS T1 Globalización T1.1. Globalización económica T1.2. Globalización cultural y social T1.3. ¿A quién beneficia la globalización? T2 Sociedad digitalizada T2.1. Digitalización de la información T2.2. Tecnología de la información T2.3. Uso de la tecnología de la información T2.4. Industria de la información T2.5. Servicios de información digitalizados T2.6. Ventajas de la digitalización T2.7. Bibliotecas híbridas T3 Acceso a la información T3.1. Transferencia de información y conocimiento T3.2. "Information literacy"
15
T3.3. Internet T3.4. Dependencia vertical T3.5. Teoría del goteo: su aplicación a la información T3.6. Tercer Mundo e información T3.7. Dificultades para el acceso a la información T4 El papel del profesional en información T4.1. ¿Un profesional globalizado? T4.2. Habilidades del nuevo profesiona l en información T4.3. Frente al cliente vs. frente al usuario T4.4. Salvando las dificultades: ¿qué puede hacer el profesional en información?
16
REFLEXIONES SOBRE LA SOCIEDAD DIGITALIZADA
Y EL ACCESO A LA INFORMACIÓN
Por: Carlos E. Granados Molina *
• Lic. en Bibliotecología y Ciencias de la Información. Biblioteca W.K. Kellogg, Hemeroteca - EARTH,
Guácimo, Limón, Costa Rica. Correo electrónico: [email protected]. Profesor de la Escuela de Historia, Sección de Archivística, Universidad de Costa Rica. Consultor en Servicios de Información. Dirección personal: Apdo. postal 326-7150, Turrialba, Cartago, Costa Rica.
• Este artículo fue publicado en el 2000 en la Revista AIBDA 21(1):10-27.
Resumen
El paso de la información
basada en soportes físicos (átomos) a
la información basada en medios
electrónicos (bits), presenta una serie
de retos, cuestionamientos y nuevos
planteamientos a los profesionales en
Bibliotecología y Ciencias de la
Información. Este artículo analiza
algunos de esos cuestionamientos,
centrando su atención en el dilema de
ofrecer servicios tradicionales basados
en átomos o servicios electrónicos
basados en bits, o bien utilizar una
inteligente mezcla de ambas
tecnologías. Analiza también los
efectos de la globalización y la
sociedad digitalizada sobre la
profesión bibliotecológica y el modo
crítico en que el especialista debe
abordar las transformaciones que esto
implica, manteniendo como fin último
la excelencia en el servicio al cliente
(el ser humano que requiere
información) y evitando falsas
posiciones tecnocráticas.
Abstract
The transition of the information
based on hardware (atoms) to the
information based on electronic means
(bits), arise a series of challenges,
17
subjects, and new expositions to the
professionals in Librarianship and
Information Sciences. This article
analyzes some of those subjects,
centering its attention in the dilemma
to offer traditional services based on
atoms or electronic services based on
bits, or to use an intelligent mixture of
both technologies. Also analyzes the
effects of the globalization and the
digital society on the library profession
and the critical way in which the
specialist must approach the
transformations that this implies,
maintaining like last aim the excellence
in the service to the client (the human
being that requires information) and
avoiding false technocratic positions.
Introducción
Vivir en la sociedad actual,
significa hacerlo en una época de
cambios que afectan todos los
aspectos de la vida de cualquier
individuo, incluidos usted y yo. No es
casualidad que los padecimientos
relacionados con la "rapidez del
cambio" - como el estrés y la
depresión laboral, entre otros -
constituyan frecuentes motivos de
consulta con un especialista. El
cambio es tan vertiginoso que muchas
veces nos resulta imposible, o muy
difícil, seguirle el paso, y esta situación
no nos hace sentirnos muy bien.
¿Qué motiva este cambio constante?
Se pueden mencionar varios
fenómenos que interactúan para
producir el estado de cosas reinante
en nuestra sociedad; en estas breves
reflexiones hablaré de la globalización
- económica y cultural -, de la
tecnología de la información y de la
comunicación (TIC), y de la sociedad
digitalizada e informatizada producto
de los dos factores mencionados, así
como de la forma en que estos
fenómenos nos afectan. Estos
factores - globalización y TIC - son
harto conocidos y escuchados hasta el
cansancio por todos nosotros, pero
obviamos ligarlos con nuestra vida
familiar y profesional, quizá como una
estrategia de auto-protección,
queriendo creer que esos fenómenos
no tienen que ver con nosotros.
Trataré de dejar claro que nada está
más alejado de la realidad.
Por lo tanto, para que el artículo
tenga algún sentido, es necesario
establecer una relación entre estos
fenómenos y nuestra vida familiar y
18
profesional: ¿cómo me afecta el
cambio? ¿Tiene la globalización un
efecto directo en la forma en que
realizo mi trabajo de todos los días?
¿Debo preocuparme por las
tendencias de la TIC en el futuro
inmediato? o, ¿puedo dejarle esas
preocupaciones a los informáticos y a
otros especialistas? Para algunos, las
respuestas a estas interrogantes son
claras; otros, en cambio, es probable
que sigan considerando que las
bibliotecas y las unidades de
información en general, y los
profesionales que las atienden,
pueden sobrevivir al margen de todas
estas transformaciones. Al final, nos
daremos cuenta que es una condición
de supervivencia profesional
prepararnos conscientemente para el
cambio.
Globalización Hace cerca de 30 años, el
filósofo canadiense Marshall McLuhan
pronosticó que los avances en
telecomunicaciones harían de nuestro
planeta una "aldea global". Esa "aldea
global" compartiría muchas de las
características de una verdadera
aldea: pequeñez relativa, facilidad de
comunicación, estrecha vecindad,
valores compartidos, etc. Hoy vivimos
el pronóstico de McLuhan y es común
escuchar constantemente el término
"globalización", aplicado para
cualquier aspecto de la actividad
humana.
El factor globalizante que mayor
impacto ha tenido en el ciudadano
común ha sido la apertura de
mercados. La apertura ha llevado
precisamente, a experimentar una
economía globalizada en la que la
competencia es el rasgo
preponderante y, por lo tanto, nos
impone a la competitividad como la
característica más importante de todo
profesional y de cada organización
que deba desarrollar sus actividades
en esta época.
Otro factor que caracteriza a la
época actual, y que también es
producto directo de la globalización es
el cambio constante. Pensadores
contemporáneos, como el futurólogo
Alvin Toffler y su esposa Heidi,
afirmaban hace más de 25 años en su
obra "El shock del futuro", que lo único
permanente es el cambio; es decir, de
19
lo único que podemos estar seguros
es que las cosas con las que nos
mantenemos en contacto cotidiano
(herramientas de trabajo,
conocimientos, circunstancias,
entretenimiento) cambian
constantemente.
La apertura de mercados ha
impuesto, además de la globalización
económica, una globalización cultural
y social que plantea graves amenazas
para los países en desarrollo. La
principal amenaza es la pérdida de su
identidad cultural e incluso la
desaparición de dialectos y lenguas
autóctonas a una tasa anual alarmante
(Davis, 1999).
Pero, ¿a quién beneficia
realmente el proceso globalizante de
la sociedad? Para algunos, la
globalización es conveniente; para
otros, es un mal necesario que
debemos, a lo sumo, saber administrar
de manera tal que nos permita seguir
existiendo en términos culturales y
sociales. Sin duda beneficia a los
países más poderosos de la Tierra, a
los que controlan la economía y los
mercados, pero principalmente a los
que han sabido controlar y manejar las
herramientas de información y
comunicación (Summers, 1997).
Éstas se han constituido en el medio
ideal de dominación económica, social
y cultural, por medio de la transmisión
de conocimiento e información que
tienden a suplantar a las condiciones
de vida de un país determinado.
La sociedad digitalizada
El uso de las modernas
tecnologías de información como
medio globalizante no sería posible, al
menos en la dimensión que muestran
hoy en día, sin el desarrollo del
proceso de digitalización presenciado
en los últimos 15 años, experimentado
en el paso de las tecnologías
analógicas a las tecnologías digitales
(Negroponte, 1995). La digitalización
no solamente significa un cambio en la
forma de almacenar información, sino
que también representa una verdadera
revolución en la transmisión del
conocimiento, en su gestión y en su
administración.
La tecnología de la información
no sólo está presente en la industria y
20
en los negocios. También ha invadido
el hogar - en la mayoría de los
artefactos de uso cotidiano - y la
academia. El chip o microprocesador,
considerado la mayor invención del
siglo XX (Isaacson, 1997) por su
impacto en todos los aspectos de la
vida en sociedad, está presente no
sólo en las microcomputadoras, sino
también en aparatos del hogar:
televisores, hornos de microondas,
juguetes, automóviles, y en una gran
variedad de novedosos instrumentos
de comunicación portátil. El uso
intensivo de esta tecnología, por
medio de los aparatos de
telecomunicación, los faxes, las
fotocopiadoras, y por supuesto las
microcomputadoras, ha dado origen a
una gigantesca industria que maneja
todos los años miles de millones de
dólares. No en balde los hombres
más ricos del planeta se dedican hoy
al negocio de la información; Bill
Gates constituye el mejor ejemplo de
esta transformación, en contraste con
lo que sucedía hace sólo 20 ó 25
años, donde los hombres más
poderosos se dedicaban al negocio de
la energía - petroleros - o al del
transporte - buques, con Onassis a la
cabeza -. Hoy el objetivo principal ya
no es transportar o comerciar átomos -
materias primas - sino bits - la unidad
mínima de la cadena de la información
(Negroponte, 1995).
Este cambio radical ha dado
paso, como elemento de la industria
de la información, al sector de
servicios, sector de la economía que
utiliza intensivamente la TIC, ya que
su principal elemento de negocio está
constituido por bits (información en
todas sus formas) y no por átomos.
En este sector se encuentran
organizaciones bancarias, de seguros,
de enseñanza y las que se dedican
específicamente al negocio de la
información, como las bibliotecas, los
centros de documentación y los
archivos. La digitalización ha otorgado
a todas estas organizaciones una gran
cantidad de ventajas, como por
ejemplo: mayor eficiencia y rapidez al
realizar transacciones, reducción de
costos, mayor maniobrabilidad de los
productos y servicios ofrecidos,
mayores posibilidades de innovación y
cambios que satisfagan las
necesidades del cliente, ahorro de
espacio y tiempo por medio de formas
21
más flexibles de organización, como el
teletrabajo.
Las bibliotecas y los servicios
de información constituyen uno de los
sectores más impactados - para bien o
para mal - con esta nueva tecnología.
La TIC constituye su herramienta
fundamental de trabajo y las
tendencias actuales las llevan a la
necesidad de crear nuevos servicios y
formas de acceso a la información.
Sin embargo, considerando que la TIC
todavía constituye un factor limitante,
por cuanto no toda la población tiene
acceso a ella, las bibliotecas operan
utilizando ambas formas de manejo de
la información: analógica - o manual,
incluyendo algunas formas primitivas
de telecomunicaciones - y digital - o
automatizada -. Se ha dado en llamar
a estas unidades de información como
"bibliotecas híbridas", ya que en ellas
co-existen ambas tecnologías -
procesos manuales y procesos
digitalizados -.
El acceso a la información
Surge una pregunta inquietante,
y cuya respuesta franca se impone
como necesidad para hablar
realmente de una sociedad
digitalizada y globalizada: ¿será la
digitalización la herramienta que
finalmente permita una verdadera
democratización del acceso a la
información, en el sentido de que la
totalidad de la población tenga acceso
real a la información y al conocimiento
que requiere para mejorar sus
condiciones de vida? La transferencia
de información y conocimiento entre
países desarrollados - Estados
Unidos, Canadá, la Comunidad
Europea, Australia, Japón y algunos
otros del Sudeste Asiático - y en vías
de desarrollo - América Latina, Africa,
Asia - ha constituido siempre un punto
de análisis en los más diversos foros a
nivel mundial. Es lógico pensar que
esta transferencia es dominada por los
países desarrollados, los cuales
transfieren, de forma muy sutil, sólo
aquello que asegure su preeminencia,
sin poner en riesgo su supremacía
cultural y económica sobre el resto del
planeta.
Entre los diversos factores que
favorecen esta situación, está el
denominado alfabetismo informático -
22
conocido en inglés como "information
literacy" -. El alfabetismo informático
determina la capacidad de un
individuo para interactuar
eficientemente con la TIC (Meyer,
1997) y es reconocido como un
elemento fundamental para lograr el
anhelado acceso real a la información
y al conocimiento (Rader, 1999). Los
niveles de alfabetismo informático en
los países en desarrollo son muy bajos
entre la población en general, lo que
constituye un factor limitante de suma
importancia para lograr este objetivo.
La red Internet parece constituirse en
un medio que facilitará este acceso
real, pero aún así presenta una
limitación importante, como lo es el
idioma, ya que según algunas
estadísticas más de 80 % de los sitios
de uso efectivo en la red están en
inglés, sin mencionar las posibilidades
reales que la mayoría de la población
tiene de accesar a la red mundial.
Todo esto ha provocado la
acentuación de una dependencia
vertical, en la que los países en
desarrollo dependen de la información
y del conocimiento que proviene de los
países desarrollados para gestar su
propio desarrollo. Muy ligada a la
dependencia vertical, aparece la teoría
del goteo - conocida en inglés como
"trickle down theory" -, originalmente
pensada para la situación económica,
pero aplicada desde hace algunos
años al campo de la información. La
teoría del goteo plantea la hipótesis de
un capitalismo generador de riqueza
para los países del Tercer Mundo,
admitiendo que la riqueza producida
sería acaparada por los pequeños
grupos que dominen las fuerzas del
mercado y de la economía. Sin
embargo, plantea también que en un
momento determinado, más tarde o
más temprano en el proceso de
generación de riqueza de una
sociedad capitalista, ésta llegaría a ser
tan abundante que inevitablemente
comenzaría a "gotear" hasta permear
a todas las masas de la estructura
social. Sin duda, en la práctica esto
no ha funcionado así. En el campo de
la información se han hecho
planteamientos similares, aduciendo
que la información y el conocimiento
producidos serán tantos que llegará el
momento en que "goteen" y logren
alcanzar a todas las masas sociales
por igual (Girard, 1996). La TIC ha
23
sido mencionada como la herramienta
ideal para lograr el "goteo de la
información".
Sin embargo, aún los más
fervientes defensores de la TIC
admiten que en la actualidad no
existen los suficientes medios digitales
para lograr tal "goteo informativo"
(Negroponte, 1995). Además, el
"World Telecommunication
Development Report" de la
International Telecommunication
Union - ITU (1998) muestra datos que
dejan claramente establecidas las
grandes debilidades que enfrentan la
mayoría de los países en desarrollo
para accesar a los más elementales
medios de información y
comunicación. La teledensidad - el
número de líneas telefónicas por cada
100 habitantes - está desigualmente
distribuida en el mundo; por ejemplo,
en 1996 la teledensidad en Cambodia
era de sólo 0.07, mientras que en
Mónaco era de 99. También en 1996,
solamente 25 países tenían una
teledensidad mayor a 50, mientras que
43 países en el mundo contaban con
una teledensidad de entre 0 y 1. El
acceso a una línea telefónica es más
difícil de lo que se puede imaginar;
también el informe de la ITU reporta
que para 1996 solamente 500 millones
de hogares en el mundo, contaban
con servicio telefónico (34 % de todos
los hogares del mundo); por otra parte,
cerca de 20 millones de hogares están
en lista de espera; 200 millones
podrían permitirse pagar un servicio
telefónico, pero no existen líneas
disponibles; y por último, cerca de 700
millones de hogares en el mundo no
pueden permitirse el "lujo" de pagar un
servicio telefónico, aunque existieran
líneas disponibles.
Conociendo estas situaciones,
resulta imposible pensar en un acceso
universal a la información y al
conocimiento mientras prevalezcan
este tipo de cosas. ¿Qué tan grave es
esto en realidad? Debemos entender
que la información y el conocimiento, y
el derecho a la comunicación, son
componentes críticos para el
crecimiento económico, representan el
motor de la "sociedad de la
información", además de ser
reconocido como un derecho humano
básico (ITU, 1998), Por tanto, si cerca
de 70 % de la población mundial no
24
tiene acceso a estas modernas
tecnologías, ni siquiera a la más
elemental de ellas, como lo es el
teléfono, estamos diciendo que ese
porcentaje de seres humanos se están
viendo privados de un derecho
humano básico, del derecho a mejorar
sus condiciones de vida y de participar
activamente en la "aldea global"
pronosticada por McLuhan.
La paradoja de la TIC y el "nuevo" papel del profesional en información: las lecciones de la digitalización para las bibliotecas
¿Cambia la TIC el papel del
profesional en información? Aunque
parezca contradictorio, en realidad la
TIC no modifica en nada nuestro
papel. La TIC es tan sólo una
herramienta de trabajo, que debemos
utilizar inteligentemente para cumplir a
cabalidad con nuestro papel en la
sociedad. Durante mucho tiempo,
desde que en la década de 1980 la
microcomputadora inició su ingreso a
las bibliotecas, hemos cometido el
error de creer que la TIC es un fin en
sí mismo: muchos proyectos de
información se concentraron en la
creación y llenado de bases de datos,
dando origen a importantes y
gigantescos recursos de información;
muchas bibliotecas automatizaron sus
procesos y algunos de sus servicios,
creando, en muchos casos, sistemas
poco amigables con el usuario y
propiciando entrabamientos en
muchos procesos que se suponía
podrían ser agilizados; conforme la
TIC se ha ido popularizando, a pesar
de las dificultades de acceso como las
ya señaladas en puntos anteriores, las
bibliotecas han visto en ella la solución
a muchos de sus problemas, creando
muchas veces una excesiva e
innecesaria dependencia tecnológica.
Paradójicamente, al incrementar
indiscriminadamente el uso de TIC en
nuestras unidades de información, nos
alejamos de la gran masa de usuarios
que aún no tienen acceso a ella o
cuyo nivel de alfabetismo informático
es tan bajo, que le resulta imposible
hacer uso eficiente de ella; en vez de
concebirla como la herramienta ideal
para llevar información y conocimiento
a las masas, la TIC se constituye,
algunas veces, en un impedimento al
logro de nuestra misión, simplemente
porque perdemos de vista al fin último
de nuestra profesión: el ser humano
como usuario de información.
25
Entonces, ¿debemos dejar de
usar TIC en nuestras unidades de
información? Por supuesto que no, y
en esto debo ser claro y enfático.
Todo profesional en bibliotecología
debe estar al tanto de los más
importantes avances en este campo;
ese conocimiento nos permitirá tener
una visión clara de las posibilidades
que se nos abren día con día. Sin
embargo, no debemos olvidar el gran
porcentaje de usuarios potenciales
que dejaremos sin acceso a la
información, a la comunicación y al
conocimiento al que tienen derecho, si
nos excedemos en crear una
dependencia tecnológica muchas
veces superflua e innecesaria. ¿Qué
hacer entonces? En definitiva, ¿cuál
debe ser nuestro rol y comportamiento
ante la TIC en las bibliotecas?
Nuestro papel sigue siendo el mismo
de siempre: ser intermediarios,
facilitadores o como se nos quiera
llamar, entre la información y el
usuario (Bonilla, 1998), Nuestro papel
no cambia, lo que cambia son las
herramientas de que disponemos para
hacerlo.
¿Constituye la TIC una
diferencia? Sin duda alguna, pero,
¿en qué consiste esa diferencia? La
diferencia estriba en entender que
tenemos a mano poderosas
herramientas con las que nunca antes
hemos contado. Por primera vez en la
milenaria historia de nuestra profesión,
podemos prescindir del soporte físico
para transportar información; hoy
podemos mover bits - la esencia de la
información - en vez de átomos - el
pesado y costoso papel -. Debemos
entender la TIC como una herramienta
fundamental para agilizar la
comunicación entre bibliotecas y
centros de documentación, para que el
flujo de la información sea más
constante y rápido, para intercambiar
ideas y conocimientos que
enriquezcan nuestro desenvolvimiento
profesional, y ofrecer servicios más
ágiles a quienes tengan acceso a ella.
Pero no debemos olvidar que fuera de
los muros de las afortunadas
bibliotecas que pueden conta r con
esta tecnología, existen millones de
personas que tienen derecho a recibir
también esa información y ese
conocimiento, y que por no tener
acceso a la TIC o porque su nivel de
26
alfabetismo informático es muy bajo o
inexistente, se verán privadas de ese
derecho si las bibliotecas dependen
totalmente de ella.
Estamos, pues, en una
encrucijada. ¿Invertimos todos
nuestros recursos en TIC? ¿Dejamos
de lado su utilización y nos
concentramos en la información en
papel? Ni una cosa ni otra es una
solución realista. Si nos excedemos
en lo primero - y son evidentes
algunas tendencias peligrosamente
exageradas en este sentido -,
privaremos del derecho a la
información y al conocimiento a
millones de personas, convirtiendo en
realidad a la TIC en un medio
discriminante de acceso a la
información; si hacemos lo segundo,
nos privaremos nosotros de tener
acceso a fuentes de información
digitalizadas en el mundo entero que
serán de suma utilidad para los
usuarios que sí tienen acceso a la TIC
- investigadores, científicos,
académicos - y del enriquecedor
intercambio con colegas de todo el
mundo. La solución está en utilizar
ambas posibilidades tecnológicas - la
TIC y el papel y otros soportes físicos
convencionales - de una forma
creativa.
Recientemente, algunos
autores han comenzado a profundizar
en el concepto de "bibliotecas
híbridas". En realidad las bibliotecas
híbridas no tienen nada de nuevo, si
consideramos que existen desde que
la TIC y el papel comenzaron a
coexistir en nuestras bibliotecas, hace
ya cerca de 20 años. Pinfield (1999)
define a la biblioteca híbrida como
aquella que no es exclusivamente
virtual ni exclusivamente tradicional
(con soportes físicos), sino aquella
biblioteca que se encuentra entre
ambos conceptos. Es una biblioteca
que ofrece en forma conjunta una
variedad de fuentes y servicios de
información impresos y electrónicos,
locales y remotos, en forma tal que
para el usuario resulte igualmente
eficiente el servicio, sin importar la
tecnología utilizada para ofrecerlo. Lo
novedoso de este concepto es la
integración de ambas tecnologías y el
surgimiento de nuevos servicios; no se
trata solamente de decir que contamos
en nuestras colecciones con recursos
electrónicos y recursos tradicionales.
27
El concepto plantea retos muy
interesantes, pero que en realidad no
implican un cambio en nuestro papel.
Entonces, ¿hay algo que
debamos cambiar? En una sociedad
regida por el cambio constante, resulta
inevitable que el profesional en
bibliotecología deba cambiar también.
Debemos capacitarnos para usar
creativamente la TIC, pero también
para lograr una integración efectiva
con las tecnologías tradicionales. Find
(1999) hace un análisis de los cambios
que debemos enfrentar con el
concepto de "biblioteca híbrida",
dejando intacto el papel del
bibliotecario como profesional de la
información. Los cambios se refieren
a la cultura organizacional de las
bibliotecas, al diseño y a los procesos
de trabajo, y a las competencias del
profesional que labora en ellas.
Enfrentar estos cambios en
nuestra formación y desempeño, es
una responsabilidad de cada individuo,
así como también de las Escuelas de
Bibliotecaología y Ciencias de la
Información, que deben trabajar
arduamente en la transformación total
de los programas de estudio. De esta
forma, nos aseguraremos el
cumplimiento de nuestro papel, tanto
con los usuarios que poseen acceso a
la TIC, como con los "nuevos
desposeídos" de la sociedad
digitalizada.
El gráfico siguiente sintetiza
todo lo expuesto en este documento,
aclarando mi posición respecto al uso
de TIC en las bibliotecas y al rol que
debe cumplir el profesional en
información ante sus usuarios, ya sea
que tengan o no acceso a ella.
28
MODELO DE ACCESO A LA INFORMACIÓN
UTILIZANDO TIC O MEDIOS CONVENCIONALES * Papel del profesional 101010 en información Es necesario transferir los bits a tecnologías convencionales, accesibles para los "nuevos 101010 desposeídos", sirviendo de puente entre la TIC y estos millones de seres humanos 101010
Transfiere � � � Millones de datos e personas sin información Transfiere acceso a la TIC datos e Transfiere información 101010 datos e información La TIC es un elemento fundamental, pero no el fin últim o de nuestro quehacer. Datos e información utilizados únicamente
por los grupos que tienen � � � acceso a la TIC Barrera que separa a los
que poseen acceso a la TIC (info-ricos) de los "nuevos desposeídos" de la era de la información (info-pobres).
101010
Nuestro fin último será siempre el ser humano � � � que requiere información, sin importar la forma en que la hagamos llegar. Posibilidad de accesar información sin la intervención de un profesional en información. Intervención directa del profesional en información para accesarla. 101010 Transferencia de datos e información por medios electrónicos (bits). � � � Transferencia de datos e información por medios convencionales (papel y otros).
* Elaborado por el autor, octubre 1999.
BITS La información en su esencia, viajando por cableado de cobre,
ondas aéreas o fibra óptica.
TIC Tecnología de la Información
y la Comunicación
Papel y otras tecnologías
convencionales
� � �
29
Conclusiones La TIC es un elemento
fundamental para llevar a cabo
nuestras funciones en la sociedad
digitalizada e informatizada de hoy.
Sin embargo, un riesgo que se corre y
una trampa en la que muchos
profesionales de la información caen,
es considerarla un fin en sí misma,
otorgándole capacidades que no
posee. Después de analizar los datos
presentados, nos damos cuenta del
peligro que implica concentrar una
carga excesiva de recursos y
esfuerzos en llenar con TIC nuestras
unidades de información. La realidad
de la mayoría de nuestros países hace
imposible que nuestras unidades de
información sean totalmente "virtuales"
o "digitales", sobre todo cuando ni
siquiera se maneja con claridad estos
conceptos o no sabemos a ciencia
cierta de qué estamos hablando
cuando nos referimos a ellos.
La búsqueda de un adecuado
equilibrio entre TIC y servicios
convencionales, se impone como una
obligación profesional, ya que es la
única forma de asegurar el acceso a la
información para millones de seres
humanos considerados los "nuevos
desposeídos" de la era de la
información. El concepto de
bibliotecas híbridas debe ser
estudiado y profundizado, con el
objeto de sistematizar adecuadamente
esa realidad a la que nos hemos
enfrentado desde hace muchos años,
y de la que no podremos escapar por
muchos más, mientras el papel siga
siendo un elemento fundamental para
la transferencia de información y
conviva con la TIC, o bien hasta que
ésta sea realmente accesible para
toda la población del planeta.
Prácticamente toda la
información que se produce en el
mundo en la actualidad, tiene su
origen en los bits, por cuanto el uso de
la TIC es común entre los grupos que
producen la inmensa mayoría de la
información. Estos bits son
generados, almacenados y
distribuidos por medios electrónicos -
TIC -, por lo que resultan accesibles
únicamente para aquellos que tienen
acceso a ella. El papel del profesional
en información - una definición amplia
en la que debemos considerar no sólo
a los bibliotecarios - es servir de
puente entre estos bits y los millones
30
de personas que no pueden accesar la
TIC, por los diversos motivos que ya
se han indicado a lo largo del
documento, salvando así esa barrera
que de otra forma se impone
insalvable.
Éste ha sido nuestro papel
desde que existe nuestra milenaria
ocupación, desde los tiempos de las
primeras bibliotecas y archivos de
Ebla. Sin embargo, no hay duda de
que el perfil del profesional debe
cambiar, en consecuencia con los
avances en TIC y con las nuevas y
diversas condiciones de nuestros
clientes y usuarios. Resulta
impostergable por parte de las
Escuelas de Bibliotecología, ejecutar
cambios radicales en sus programas
de estudio, pensando en producir
profesionales integrales, con
características propias del bibliotecario
de siempre, pero con habilidades que
le permitan hacer un uso creativo de la
TIC, otorgándole los elementos de
juicio necesarios para utilizarla
críticamente y dándole la dimensión
que realmente tiene dentro de las
unidades de información. Deben
producir profesionales que no teman el
uso de la TIC, pero tampoco que la
conciban como el fin último de
nuestros esfuerzos, arguyendo
equivocadamente que la
"digitalización" y la "virtualización" total
de nuestras colecciones son desde ya
la solución al problema del acceso.
Como he planteado aquí, este camino
sólo llevaría a marginar del derecho a
la información y a la comunicación a
millones de personas, lo que nos
impediría cumplir cabalmente con
nuestro papel ante la sociedad.
Agradecimiento
Al Dr. Luis Hernán Rincón, Ph.
D, miembro de Facultad de la
EARTH, por sus consejos y empeño
para que estas reflexiones vieran la
luz.
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