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BIOGRAFÍA

Correspondencia: Alfredo César Juárez-Albarrán. Avenida San Fer-nando N° 514-3. 28000, Colima, Col. México. Teléfono: (01 312) 3123431, Correo electrónico: acja@hotmail.com

Coordinador Capitulo de Historia y Filosofía, Sociedad Mexicana de Urología.

Biografía de Urólogos MexicanosDr. Carlos García Irigoyen. Biografía Corregida

Juárez-Albarrán Alfredo C.

•ACLARACIÓN DEL EDITOR:

En referencia a un artículo citado en Rev Mex Urol 2010;70(1):61-64 fue publicado un documento enviado por el mismo autor que contenía la información reca-bada de la entrevista realizada al Dr. Carlos García Iri-goyen. En dicho documento existían muchos datos erróneos, por lo que se decidió publicarse de nuevo la biografía corregida completa con los datos verídicos.

•PROFESOR DR. CARLOS GARCÍA IRIGOYEN

Carlos nació en Sahuayo Michoacán en la víspera de la navidad del año del señor de 1932 y precisamente en las primeras horas del 23 de diciembre, le recibieron sus fe-lices padres Don Ciro García Estrada, constructor de ca-minos y su madre Doña Ernestina Irigoyen, los que junto con la partera escucharon por vez primera su potente llanto, el que fue una especie de heraldo que hacia saber sobre el sano arribo a este mundo de quien más tarde se convertiría en uno de los iconos de la Urología Nacio-nal. Fueron cinco los hijos de la familia García Irigoyen y nuestro biografiado fue el segundo. Está casado con la distinguida señora Clara Luz Blanco Arteaga y tiene seis hijos, cinco mujeres y un varón, quienes les han dado nueve nietos (Imagen 1).

Su educación primaria la cursó en diferentes sitios de la republica dado el trabajo de su papá. Terminó esta etapa en la ciudad de Aguascalientes en donde cursó el primer y segundo grado de la escuela secundaria. La familia se regresó a la Ciudad de México en 1948 y

Imagen 1. Profesor Dr. Carlos García Irigoyen.

Carlos terminó en la Secundaria N°4 Moisés Sáenz el tercer año de esta etapa de su educación en donde fue-ron sus profesores, entre otros, el maestro Naranjo y el poeta Carlos Pellicer. La preparatoria la concluyó en la Escuela Nacional Preparatoria, en el antiguo Colegio de San Idelfonso convertida ahora en museo. De entre sus condiscípulos de esos ayeres recuerda a Enrique Ibarra quien a la sazón se haría médico con especialidad en Neurología; a Alberto Jarovinsky, quien estudió medi-cina y finalmente fue comerciante; a Antonio Sánchez Sánchez y a Arturo Moguel Contreras quien fue su com-pañero desde la Secundaria Moisés Sáenz y gran parte de su vida en la Escuela Médico Militar hasta su tempra-no fallecimiento.

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Ingresó a la Escuela Médico Militar en 1951 y se gra-duó el 27 de diciembre de 1956 como Mayor Médico Cirujano del Ejército Mexicano. Fueron sus amigos y compañeros de entonces -y aún de ahora- los doctores y Generales de División retirados Leobardo Ruiz Pérez, quién después sería Fisiatra; Roberto Cancino Serna, Endocrinólogo, Daniel Rolón Arias que fue Pediatra y con quienes convivió en la misma habitación los prime-ros cinco años de la carrera. Marcaron profunda huella en el sus profesores Don Jesús Kumate Rodríguez, quien impartía la materia Bioquímica, Don Héctor Romo Bo-lan profesor de Ginecología y Obstetricia, el Dr. Alger de León Moreno Cirujano General y Gastroenterólogo, el Dr. Gustavo Azcárraga González quien le iniciaría en la Urología, así como el Dr. Jesús Lozoya, Cirujano Pe-diatra y Don Carlos Guzmán profesor de Cardiología.

Durante el sexto año de la licenciatura fue ascendido a Capitán Primero Pasante de Medicina, de acuerdo con la ordenanza militar. Su tesis titulada Prótesis de tubo de polietileno e injerto de vena en uréter. Estudio Experimen-tal fue premiada con el segundo lugar en el Concurso de Cirugía Experimental durante la XII Asamblea Nacional de Cirujanos (1957) que se realizó en el Hospital Juárez. Inmediatamente después de concluir la carrera de Me-dicina ingresó al Hospital Central Militar de la ciudad

de México, donde realizó la residencia de medicina y cirugía general durante tres años (1957-1959).

Su deseo era ir al extranjero a cursar urología, pero diferentes circunstancias lo dificultaron. Obtuvo una beca patrocinada por la Sociedad Mexicana de Urología para formarse como urólogo en la antigua Unidad de Urología, Pabellón 5, del Hospital General de Méxi-co de la Secretaría de Salubridad y Asistencia en la ciudad de México. Terminó la residencia urológica el 31 de diciembre del año de 1961. Fueron sus preceptores el jefe del Servicio Dr. Don Aquilino Villanueva Arreola, el Dr. Jaime Woolrich Domínguez, el Dr. J. Jesús Álvarez Ierena y el Dr. Raúl López Engelking. Sus condiscípulos, compañeros de la residencia urológica fueron los doc-tores Mario Sopeña Aranda, Federico Ortiz Quezada, y Rafael Sandoval Parra. Allí convivió con los doctores Pedro Medina, Salvador Salinas, Moisés Lisker, David Jiménez Velasco, Ignacio Purpon, Juan Maldonado, Xa-vier Esparza, Edmundo Alpuche Morales y una pléyade de jóvenes urólogos que sería interminable mencionar (Imagen 2).

Nos comenta Carlos que además de los cursos for-males de especialidad en el pabellón cinco, se realiza-ban cursos anuales de actualización en Urología, los que duraban un mes e iban dirigidos a médicos que en la propia Ciudad de México o en provincia se dedica-ban a la atención de pacientes con patología urogenital sin haber cursado una especialidad o residencia. Des-pués de tres años se les expedía un diploma que acredita-ba su adiestramiento. Además de los médicos adscritos al servicio los residentes fungían como profesores.

Durante sus años de estudio continuó atendien-do sus obligaciones militares, como jefe de la Sección Sanitaria de la Escuela Militar de Clases de Transmisio-nes. A los 20 años de antigüedad en el Instituto Armado solicitó su retiro habiéndosele ascendido a Teniente Coronel. Nunca se le concedió la asignación al Servicio de Urología del Hospital Central Militar. Por este motivo continuó asistiendo a la unidad de Urología del Hospital General de México y recorrería el escalafón completo presentando exámenes de oposición para cada uno de ellos como Adscrito, Adjunto, Jefe de Unidad y Jefe de Servicio durante diez años, lo que le permitió, jun-to con su equipo, graduar a alrededor de un centenar de urólogos mexicanos y extranjeros, a muchos de los cuales les facilitó estadías o fellows en diferentes partes del mundo.

En 1965, cuando el doctor Don Alberto Amor Vi-llalpando, pediatra de gran prestigio y su profesor en pediatría, fue nombrado Director del Hospital Infantil Moctezuma dependiente de la Dirección General de los Servicios Médicos del Departamento del Distrito Fede-ral cuyo Director General era el Dr. Julián Garza Tijerina y época en la que se construyó un Hospital Infantil en

Imagen 2. La fotografía corresponde a los integrantes de la gene-ración 1960 de egresados del Servicio de Urología del Hospital General de México SSA, aparecen de izquierda a derecha Rafael Sandoval Parra, Carlos García Irigoyen, el Maestro Don Aquilino Villanueva, Federico Ortiz Quezada, Mario Sopeña Aranda y el Maestro Alberto Guevara Rojas.

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cada una de las 12 Delegaciones del D. F. con un prome-dio de 120 camas cada uno (en total aproximadamente 1440 camas) que además de funcionar como hospitales abiertos de pediatría, se les asignó una o dos especiali-dades, entre ellas Urología radicada en el mencionado Hospital el que después se convirtió en el sitio de refe-rencia de la Urología pediátrica de la capital de la repú-blica. Contó con 28 camas. Posteriormente se trasladó a los infantiles de Ixtapalapa, Tacubaya e Inguarán. Ahí se desempeñó también su inolvidable amigo y compa-ñero el Dr. José Sandoval Neyra, quien era egresado del servicio de Urología del Hospital Colonia de los Ferro-carriles Nacionales de México. Eran también adscritos los médicos Humberto García Grajeda y Jesús Aranalde Blanno. Siempre se tuvieron residentes en el servicio teniendo como requisito fundamental el que hubieran realizado previamente, la residencia de urología o cirugía pediátrica. Durante 21 años de labor se escribieron múl-tiples trabajos de urología pediátrica, se dictaron cursos teóricos prácticos de la especialidad, el Servicio fue vi-sitado por múltiples profesores extranjeros entre otros, Sami Arap, León Bernstein Hann, Hernán Carrión, Terry D. Allen y otros. Se tuvo mucha presencia en foros na-cionales y extranjeros. La experiencia quedo impresa en nuestra Revista Mexicana de Urología, en el Boletín del Hospital Infantil de México, en la Revista de la Socie-dad Médica del Hospital General de México, etc. La falta de continuidad de objetivos y cambios en las políticas de Salud en el D. F. y la normatividad en la enseñanza para los cursos de postgrado avalados por la UNAM y la disminución en la provisión de recursos, ocasiona-ron, progresivamente, la desaparición de casi todas las especialidades en estas unidades pediátricas. El sueño duró 23 años. Y así desapareció parte de la historia de la urología pediátrica de nuestro país.

Carlos ingresó a la Sociedad Mexicana de Urología en 1964, con el trabajo Pielonefritis en el lactante, que fue comentado por el Dr. J. Jesús Castañeda Villa con el Pre-sidente de la Sociedad, el Dr. Miguel Cervantes Olvera.

Durante muchos años, esto es, a partir de 1968, ha sido profesor de pregrado de Urología de la UNAM impartiendo su clase en las instalaciones del Hospital General. A partir de 1960 ha asistido o impartió nume-rosos cursos, entre ellos, el Curso para Graduados en Urología del Hospital General de la SSA, Urología Pe-diátrica, Didáctica en urología, Cursos teórico prácticos de Urología Pediátrica, Radioisótopos en urología, Pre-sente y futuro de la urología, Seminario de posgrado de la División de Urología de la Universidad de Texas en Dallas, Endourología, Ureteroscopia, Uso de intesti-no en urología, Infertilidad masculina, Láser-terapia en Urología, Electro vaporización de la próstata, Cirugía renal conservadora, Cirugía Plástica y Reconstructiva del aparato genito-urinario, etc. y recuerda entre sus-piros, aquellos cursos de RTU de la próstata con focos tipo grano de arroz, sin lente de enseñanza , sin micro-lentes, sin cámara, sin pantalla etc. Iniciados por el Dr. López Engelkin y terminados por Carlos hace algunos años en aquellos tiempos, aquellas cosas, el progreso de la tecnología pero, se enseñó la técnica.

Ha sido tutor en 18 tesis, como autor o coautor tie-ne 137 trabajos de investigación sobre diferentes tópi-cos de la urología y de diferentes aspectos históricos y culturales, los que han sido publicados en revistas mé-dicas, entre ellos 87 se pueden consultar en los archi-vos de la Revista Mexicana de Urología, Órgano Oficial de la Sociedad Mexicana, el resto han sido publicados en diferentes revistas como la del Hospital General de México, de Sanidad Militar de México, Anuario de la Unidad de Urología y Nefrología del Hospital General de la S.S.A. México, Libro de Urgencias Médico Quirúr-gicas de la Dirección General de los Servicios Médicos del DDF, Boletín del Hospital Infantil de México, Revista Mexicana de Pediatría, Cirugía y Cirujanos, Memorias del XLII Congreso Nacional de Urología, American Jour-nal of Clinical Oncology, Revista de Investigación Médi-ca, y el Journal of Brasil Urology entre otros.

Siempre ha disfrutado de la grata convivencia con sus alumnos, algunos de los que aparecen en la Imagen 3.

Imagen 3. Doctores: Mario Almanza, Rubén González Ramírez, Martín Luis Méndez, Jorge Flores Sierra, Carlos García Irigoyen, Lenin Moreno, Miguel A. Reyes, Hugo Iraeta Martí y Francisco Virgen.

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Como autor o coautor ha participado entre otros libros en: Urgencias Urológicas, Urgencias Médico Quirúrgicas en Urología, Conceptos actuales sobre las infecciones génito-urinarias, Infecciones urinarias ines-pecíficas, Traumatismos del aparato genitourinario, Lesiones genitourinarias, Capitulo de Urología en Medi-cina General Tomo IV, Cáncer de próstata en Oncología quirúrgica Volumen IV (Academia Mexicana de Cirugía), Principios Básicos de Cirugía, Capitulo Cistostomía, Mis imágenes 100 años, Cirugía Menor de Urgencia, e His-toria Viva de la Urología de México. A propósito en el mes de abril de 2010, publicó su libro sobre Hospital General de México. Historia de su Sociedad Médica y se encuentra muy avanzado el que versará sobre El dulce artesanal de México y otro sobre El café.

Don Carlos ha sido profesor de diferentes cursos o congresos tanto en México como en el extranjero y ha tenido numerosos cargos dentro de la UNAM los que van desde Profesor Titular del curso de posgrado en urología, Miembro del Consejo Técnico Consultivo de la Facultad de Medicina, Coordinador en el Hospital Ge-neral de México del Programa Radiofónico Voces de la salud de Radio Universidad.

En la Imagen 4 está con tres ex-residentes de uro-logía del Hospital General de México en la ciudad de México e hijos de los doctores urólogos Alfonso de Silva Nava de Villahermosa Tabasco y quien fue presidente de la SMU, el ahora Presidente de la misma: Alfonso de Silva Gutiérrez y con el Dr. Francisco Barrios hijo de nuestro amigo el urólogo Dr. Francisco Barrios. Apa-rece también junto a ellos el Dr. Miguel Maldonado.

El Dr. García Irigoyen firmó, entre otros, el Acta Constitutiva del Consejo Mexicano de Urología en 1968, actualmente Consejo Nacional Mexicano de Urología y desde entonces tiene actualizada la recertificación No.567 Vigencia 2009 y en él se ha desempeñado como vocal, miembro de jurado examinador, Vicepresidente y Presidente del mismo (1989 a 1991) y también tiene el Certificado de Pediatría el cual ya no es vigente.

Pertenece a la Sociedad Médica del Hospital Gene-ral de la que también fue presidente (1977 - 1978). Es Académico Emérito de la Academia Mexicana de Ci-rugía desde Junio 1996 de la cual fue Vicepresidente y Miembro Honorario de Academia Mexicana de Pedia-tría. En la Sociedad Mexicana de Urología fue vocal, vicepresidente y Presidente (1983 - 1985). Pertenece entre otras, a las siguientes Asociaciones: Mexicana de Profesores de Pediatría, Asociación Panamericana de Cirugía Pediátrica, Sociedad Peruana de Urología y Sociedad Peruana de Urología Pediátrica, así como a la Sociedad Mexicana de Pediatría, a la Société Internatio-nale D’urologie, Sociedad Mexicana de Cirugía Pediátri-ca (de la que fue vocal), Miembro Asociado Honorario de la Sociedad Venezolana de Urología, Society for Pe-diatric Urology USA, fue presidente de la Confedera-ción Americana de Urología (1994 - 1996), Sociedad Latino Americana de Urología Infantil de la que fue tesorero, es Miembro honorario de la Sociedad Ecuato-riana de Urología, perteneció a la Sociedad Mexicana de Estudios Oncológicos, miembro de la South Central Sec-tion y de la American Urological Association, Miembro de la Endourological Society, Latín American Advisory Board, y es Presidente del Cuerpo Colegiado de Consultores del Hospital General de México (2009). Es actual secreta-rio de la CONAMEGE (Consejo Normativo de Medicina General) cuyo coordinador es el Dr. Alberto Lifsfhitz

Ha recibido las siguientes distinciones: Condecora-ción al Mérito Docente por 30 y 40 años de antigüedad en la Facultad de Medicina de la UNAM y la Condeco-ración al “Mérito Docente” con grado de Comendador, concedido por Venezuela en el año de 1990.

Le gusta tocar el piano y dice “No toco el violín porque nunca he tenido alguno” (sic). Con el impresio-nante currículo que tiene Don Carlos, se pudiera creer que sería difícil acercarse a él, pero todo lo contrario, independientemente de su reconocida mente brillante, sabe ser humilde, tiene un carácter afable, la sonrisa a flor de labios, el chascarrillo en el momento oportuno y tiene además don de gentes, por ello es altamente estimado y admirado por sus profesores, condiscípu-los, con socios, amigos y alumnos. Quienes hemos disfrutado de su compañía y amistad en diferentes cir-cunstancias científicas o sociales nos sentimos halaga-dos con su charla, trato y deferencias.

Imagen 4. Doctores: Alfonso de Silva Gutiérrez, Miguel Maldonado Ávila, Carlos García Irigoyen, José Francisco Barrios Rodríguez.