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CAMINANDO HACIA EL CENTENARIO

Formación Permanente de los laicos CFM

2018-2020

CUADERNILLO N° 1

Itinerario formativo de los laicos – Roma, 2018

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AMBIENTACION:

Para este primer encuentro el coordinador/a preparará según su

creatividad la siguiente imagen, con un material resistente que debe

permanecer todo el año ya que se sugiere sea la ambientación central

de TODOS LOS ENCUENTROS, simbolizando el inicio del TRIENIO

de un caminar juntos hacia el CENTENARIO.


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DINAMICA: PUNTO DE PARTIDA

Mediante una ficha en la que hay unas sencillas preguntas

ayudamos a cada uno de los miembros a darse a conocer

mínimamente, las vinculaciones que tiene al grupo y a exponer

sus expectativas en este proceso formativo hacia el

CENTENARIO de las Hijas de la Misericordia! Luego cada uno

comparte sus respuestas.

Nombre _____________________________________

Una virtud que te identifica ________________________ Un defecto _____________________________ Escribe una frase de María Petković que más llegue al

corazón ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

¿Qué das a tu grupo? ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

¿Qué recibes de tu grupo? ____________________________________________________________________________________________________________________________________

¿Qué esperas de este proceso formativo de los laicos de la Congregación Hijas dela Misericordia? (CFM) ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________


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Una habilidad_______________________________________________________

Tu cita bíblica preferida___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Qué te divierte?__________________________________________________________________________________________________________________________

En una palabra quién es Jesús para ti?_______________________________________________________________

Qué admiras de María Petkovic?_____________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Qué esperas del animador/a?_______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Firma: ____________________


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ORACION INICIAL:

(Luego de la dinámica el coordinador/a invita a iniciar la jornada reflexiva con la oración propuesta)

Alabanzas e invocaciones al Eterno Padre.

(Beata María de Jesús Crucificado Petković)

G: Dios Eterno Padre nuestro, por tu inmensa gloria...

T: Te bendecimos y te alabamos.

G: Dios Eterno, Padre nuestro, de quien todo procede y a quien todo debe volver...


G: Dios Eterno, Padre nuestro, Creador Todopoderoso, que por el poder de tu Palabra hiciste todas las cosas, las visibles y las invisibles...


G: Dios Eterno, Padre nuestro, Dios Todopoderoso, que has creado a los santos ángeles para tu gloria y para que nos guíen a la vida eterna...


G: Dios Eterno, Padre nuestro, que nos amas infinitamente desde toda la eternidad...



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INTRODUCCION: ( El coordinador/a introduce el tema)

Iniciamos nuestra peregrinaciòn hacia el CENTENARIO, seguro estamos de que camina con nosotros la GRAN protagonista de este acontecimiento, María Petković. Nuestro primer encuentro de formación permanente se centra sobre el documento del Concilio Vaticano II, la Lumen Gentium, el capítulo IV que habla expresamente sobre los laicos. En un segundo momento, del texto congregacional, meditaremos: DE NUESTRO FIN PRINCIPAL Y DE LA DEVOCIÓN Y CONFIANZA EN EL PADRE CELESTIAL. Que este encuentro nos ayude a ser mejores seguidores de Jesús, porque seguir a Jesús nos da la Vida Eterna: Es esta la primera y más importante razón para seguirlo, porque tal como Él lo dijo, no existe otro medio para alcanzar la Salvación, (Juan 14:6)

DOCUMENTO ECLESIAL:


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Resumen del Capítulo IV del documento

TEXTO COMPLETO DEL CAPÍTULO IV - LOS LAICOS

30. Peculiaridad: El santo Concilio, una vez que ha declarado las funciones de la Jerarquía, vuelve gozoso su atención al estado de aquellos fieles cristianos que se llaman laicos.

QUÉ SE ENTIENDE POR LAICOS

31. Con el nombre de laicos se designan aquí todos los fieles cristianos, a excepción de los miembros del orden sagrado y los del estado religioso aprobado por la Iglesia. Es decir, los fieles que, en cuanto incorporados a Cristo por el bautismo, integrados al Pueblo de Dios y hechos partícipes, a su modo, de la función sacerdotal, profética y real de Cristo, ejercen en la Iglesia y en el

CAPITULO IV

•son los fieles cristianos que por estar

incorporados a Cristo por el bautismo, constituidos

en pueblo de Dios y hechos participes a su manera de la funcion

sacerdotal, profetica y real de Jesucristo

LOS LAICOS • Peculiaridad,

•Que se entiende por laicos

•Unidad en la diversidad ,

• El apostolado de los laicos,

•Consagracion del mundo,

• El tetsimonio de su vida,

• En la estructuras humnas,

•Relaciones con la jerarquia,

•Como el alma en el cuerpo

ESTA COMPUESTA POR:


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mundo la misión de todo el pueblo cristiano en la parte que a ellos corresponde.

El carácter secular es propio y peculiar de los laicos. Pues los miembros del orden sagrado, aun cuando alguna vez pueden ocuparse de los asuntos seculares incluso ejerciendo una profesión secular, están destinados principal y expresamente al sagrado ministerio por razón de su particular vocación. A los laicos corresponde, por propia vocación, tratar de obtener el reino de Dios gestionando los asuntos temporales y ordenándolos según Dios. Viven en el siglo, es decir, en todos y cada uno de los deberes y ocupaciones del mundo, y en las condiciones ordinarias de la vida familiar y social, con las que su existencia está como entretejida. Allí están llamados por Dios, para que, desempeñando su propia profesión guiados por el espíritu evangélico, contribuyan a la santificación del mundo como desde dentro, a modo de fermento. Y así hagan manifiesto a Cristo ante los demás, primordialmente mediante el testimonio de su vida, por la irradiación de la fe, la esperanza y la caridad. Por tanto, de manera singular, a ellos corresponde iluminar y ordenar las realidades temporales a las que están estrechamente vinculados, de tal modo que sin cesar se realicen y progresen conforme a Cristo y sean para la gloria del Creador y del Redentor.


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Si bien en la Iglesia no todos van por el mismo camino, sin embargo, todos están llamados a la santidad y han alcanzado idéntica fe por la justicia de Dios (cf. 2 P 1,1).

EL APOSTOLADO DE LOS LAICOS

32. Los laicos congregados en el Pueblo de Dios e integrados

en el único Cuerpo de Cristo bajo una sola Cabeza, cualesquiera que sean, están llamados, a ser miembros vivos, a contribuir con todas sus fuerzas, las recibidas por el beneficio del Creador y las otorgadas por la gracia del Redentor, al crecimiento de la Iglesia y a su continua santificación.

Ahora bien, el apostolado de los laicos es participación en la misma misión salvífica de la Iglesia, apostolado al que todos están destinados por el Señor mismo en virtud del bautismo y de la confirmación. Y los sacramentos, especialmente la sagrada Eucaristía, comunican y alimentan aquel amor hacia Dios y hacia los hombres que es el alma de todo apostolado. Los laicos están especialmente llamados a hacer presente y operante a la Iglesia en aquellos lugares y circunstancias en que sólo puede llegar a ser sal de la tierra a través de ellos. Así, todo laico, en virtud de los dones que le han sido otorgados, se convierte en testigo y simultáneamente en vivo instrumento de la misión de la misma Iglesia en la medida del don de Cristo (Ef 4,7).


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Así, pues, incumbe a todos los laicos la preclara empresa de colaborar para que el divino designio de salvación alcance más y más a todos los hombres de todos los tiempos y en todas las partes de la tierra. De consiguiente, ábraseles por doquier el camino para que, conforme a sus posibilidades y según las necesidades de los tiempos, también ellos participen celosamente en la obra salvífica de la Iglesia.

CONSAGRACIÓN DEL MUNDO

33. Dado que Cristo Jesús, supremo y eterno Sacerdote,

quiere continuar su testimonio y su servicio por medio de los laicos, los vivifica con su Espíritu y los impulsa sin cesar a toda obra buena y perfecta.

En esta tarea resalta el gran valor de aquel estado de vida santificado por un especial sacramento, a saber, la vida matrimonial y familiar. En ella el apostolado de los laicos halla una ocasión de ejercicio y una escuela preclara si la religión cristiana penetra toda la organización de la vida y la transforma más cada día.

Por consiguiente, los laicos, incluso cuando están ocupados en los cuidados temporales, pueden y deben desplegar una actividad muy valiosa en orden a la evangelización del mundo. Ya que si algunos de ellos, cuando faltan los sagrados ministros o cuando éstos se ven impedidos por un régimen de persecución, les suplen en ciertas funciones sagradas, según sus posibilidades, y si otros


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muchos agotan todas sus energías en la acción apostólica, es necesario, sin embargo, que todos contribuyan a la dilatación y al crecimiento del reino de Dios en el mundo. Por ello, dedíquense los laicos a un conocimiento más profundo de la verdad revelada y pidan a Dios con instancia el don de la sabiduría.

EN LAS ESTRUCTURAS HUMANAS

34. Cristo, habiéndose hecho obediente hasta la muerte y

habiendo sido por ello exaltado por el Padre (cf. Flp 2, 8-9), entró en la gloria de su reino. También por medio de los fieles laicos el Señor desea dilatar su reino: «reino de verdad y de vida, reino de santidad y de gracia, reino de justicia, de amor y de paz»

En las ocupaciones seculares deben ayudarse mutuamente a una vida más santa, de tal manera que el mundo se impregne del espíritu de Cristo y alcance su fin con mayor eficacia en la justicia, en la caridad y en la paz. En el cumplimiento de este deber universal corresponde a los laicos el lugar más destacado.


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CONCLUSIÓN

35. Cada laico debe ser ante el mundo un testigo de la

resurrección y de la vida del Señor Jesús y una señal del Dios vivo. Todos juntos y cada uno de por sí deben alimentar al mundo con frutos espirituales (cf. Ga 5, 22) y difundir en él el espíritu de que están animados aquellos pobres, mansos y pacíficos, a quienes el Señor en el Evangelio proclamó bienaventurados (cf. Mt 5, 3-9). En una palabra, «lo que el alma es en el cuerpo, esto han de ser los cristianos en el mundo»


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TEXTO CONGREGACIONAL

DE NUESTRO FIN PRINCIPAL Y DE LA DEVOCIÓN Y

CONFIANZA EN EL PADRE CELESTIAL Enseñanzas - Argentina, 1 - VI - 1945

Cuando deseo hablaros, de nuestro amabilísimo Padre Celestial,

mi corazón se conmueve por su amor hacia nosotros. Cada uno de nosotros tiene por fin principal y como primer deber el dar gloria y agradecimiento a Dios, nuestro Padre y Señor, amándole

con todo El corazón, haciendo resplandecer su amor entre nosotras y también en otras Almas. Por eso debéis, durante vuestra vida, ejercitaros en el amor y confianza al Padre y su Hijo Nuestro Señor, y en este espíritu, respirar, hablar y obrar para extensión de su reinado de amor por N. S. Jesucristo.

"Han de tener una particularísima devoción al Padre Celestial y a su Verbo Encarnado, Jesucristo, quien con El título de Rey ha de ser la peculiar insignia de la Congregación”.

"Siendo El fin primario y especial de la Congregación la gloria y el amor de Dios, su principal devoción debe también consistir en glorificar y alabar a Dios Padre y a su Santísimo Nombre con


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espíritu de amor, a imitación del Corazón de Jesús, quien nos enseñó a orar: "Padre Nuestro, que estás en los cielos, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad". Cada cosa en El mundo tiene un fin designado por Dios, para esto fue creada, para cumplir su deber y el fin ordenado por El.

Meditemos en cada flor, en cada planta, en cada animal, cómo cumplen con su fin designado por Dios. Y cuán triste es que nosotros, criaturas más perfectas, no cumplimos debidamente con nuestro fin.

Por eso, en esta meditación os hablo de cómo debéis cumplir vuestro fin principal en el servicio de nuestro Rey y Señor, y hacer el firme propósito de que en adelante pondréis todas vuestras fuerzas en hacer todo lo que podáis para cumplir mejor vuestro fin principal, amando y glorificando a nuestro amadísimo Padre Celestial por su hijo N. Señor Jesucristo.

Entre todas las cosas os recomiendo especialmente manteneros en la tranquilidad y paz de Nuestro Señor, pensando en vuestro Padre Celestial que todo permite y ve y os espera en el cielo. Pensad a menudo en el Padre Celestial y en estas dulces palabras: "Padre nuestro que estás en los cielos", repetid estas palabras y Elevad vuestra mente y corazón hacia El cielo, allí donde os espera El Padre y donde tenéis que ir por los méritos de


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Jesucristo, su único Hijo. Debéis decir: "Todo pasará, estos pocos minutos de mi vida pasarán y después iré a mi Padre Celestial que me espera, y ¿por qué debo inquietarme?".

Así, vivid en la paz, en la confianza, en el amor hacia vuestro Padre Celestial y nuestro amadísimo Señor Jesucristo. Cuando hiciéremos todo de nuestra parte no debemos inquietarnos por las cosas que no hemos hecho, porque entonces no terminaríamos nunca de inquietarnos.

No os turbéis ni por vuestras incapacidades y debilidades espirituales, como son las distracciones, impaciencias, sequedades, tristezas; no interrumpáis la paz y tranquilidad contagiando y entristeciendo a las demás con vuestro mal humor, sino cuando habéis hecho el acto de contrición y os habéis confesado, ya no debéis estar tristes sino tranquilos y no debéis estar más turbados, y de este modo, alabad y glorificad el Santísimo Nombre de Dios, como el mismo Jesús nos enseña en la excelente oración del Padre nuestro: "... santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino".

Trabajad para que sea conocido El amor del Padre y de su amadísimo Hijo, nuestro Señor y Rey Jesucristo. Rezad y preocupaos de que venga al mundo su reino. Por lo tanto, nuestra preocupación sea, santificar y glorificar el todopoderoso y dulce Nombre de nuestro Padre Celestial. Estos pensamientos, os Elevarán, y entonces estaréis alegres, trabajando por su amor.


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PREGUNTAS PARA EL COMPARTIR

¿Qué ideas de este capitulo son nuevas para mí? ¿Qué ideas de este capitulo son un recordatorio o repaso para mí? ____________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

¿Qué ideas de este capitulo me pueden ayudar a crecer como un discípulo de Jesús al profundizar mi relación con El? ___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

¿Cómo me puede ayudar la reflexion de este capitulo para mejorar mis habilidades, para llevar la luz de Cristo a mi familia, amigos, comunidad, ambiente laboral ect.? _________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________


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Nuestra primera y principal devoción es a nuestro Padre Celestial ¿A què te interpela esta afirmaciòn de Maria Petković? __________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

¿Què iniciativa propones para que se propague la devociòn al Padre Celestial?

_____________________________________________________________________________

_____________________________________________________________________________________________________________________________________________

_______


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ć

100°

Congregación Hijas de la

Misericordia de la T.O.R.

de San Francisco


19

Congregación Hijas de la Misericordia del T.O.R. de San Francisco

Via di Porta Maggiore, 38 - 00185 – Roma, Italia

Editado por el Gobierno General

Febrero, 2018


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ISIONEROS MISERICORDIOSOS

Argentina

Papa Francisco: No, los laicos no son “católicos de segunda clase”

M

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