Ser madre es un acto de amor; ser maestra es un acto de fe. Ser madre y maestra es el acto liberador de cambiar el mundo, de cambiar lo malo, lo perverso por algo bueno y redentor. Ser madre es amar infinitamente al hijo de su vientre; ser maestra es tener fe en la supremaca de la riqueza intelectual. Ser madre es amar al hijo, cuando todo el mundo deja de hacerlo; ser maestra es amar al nio sin pan, sin techo que es lacerado por el fro y el tiempo. Ser madre es confiar en el hijo cuando ya nadie otro le cree; ser maestra es entregarse implcitamente por la luz de la verdad, sin esperar ninguna retribucin. Ser madre es perdonar al hijo cuando todos le den la espalda y ningn otro entender nada; ser maestra, maestro, es ser un soador, creer, ms all de la frivolidad, consumismo y escepticismo. Ser madre es dar el amor y resistir todo tipo de prueba por el hijo cuando est en desgracia; ser maestra es ensear que la tica y la fidelidad a los ideales sublimes no han pasado de moda, y que enaltecen la especie humana. Ser maestra madre es ensear que el arte enriquece el espritu humano de un modo inviolable, que nada ni nadie podr quitarnos jams. Ser madre maestra es ensear que la tierra nos ha sido prestada, que maana debemos entregarla a nuestros hijos y a sus hijos de nuestros hijos y que el futuro debe prevalecer sobre lo inmediato. Ser madre maestra es creer que algn da, al final del camino, podemos entregar esa antorcha inmortal a un hijo, a un discpulo, o a otro soador. Esa es la misin ms difcil. No hay ningn otro amor terrenal ms grande que el de una Madre y de una Maestra.

Jimmy Calla Colana Poeta