Carpeta Pensamiento Latinoamericano y Boliviano

PEAMS- Componente de Especialización Pensamiento Latinoamericano y Boliviano (Documento de Trabajo)

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CARPETA DE TRABAJO

PENSAMIENTO LATINOAMERICANO

Y BOLIVIANO

(Documento de Trabajo)

Carpetas de Formación Continua

(FE-PLB)

Ámbito: Formación Especialidad Cuatrimestre: Segundo Especialidad: Cosmovisiones, Filosofía y Psicología

Bolivia – 2011


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MINISTERIO DE EDUCACIÓN

© De la presente edición: Colección: CARPETAS DE FORMACIÓN CONTINUA PENSAMIENTO LATINOAMERICANO Y BOLIVIANO CARPETA DE TRABAJO Coordinación Viceministerio de Educación Superior de Formación Profesional / Dirección General de Formación de Maestros / Equipo de Formación Docente Continua

Equipo de Redacción y Dirección Unidad Especializada de Formación Continua – UNEFCO Av. Víctor Paz Estensoro Nº 227 Tarija-Bolivia Telf.: 66-44416 Fax: 66-42805

www.minedu.gob.bo www.unefco.edu.bo

Cómo citar este documento: Ministerio de Educación (2010). Pensamiento Latinoamericano y boliviano. Carpeta de Trabajo. UNEFCO. Tarija: GRAFIKA W.L.H. Diseño & Impresión GRAFIKA W.L.H. Telf. /Fax: 2235231

La venta de este documento está prohibida. Denuncie al vendedor a la Dirección General de Formación de Maestros, Telf. 2440815 o a la Unidad Especializada de Formación Continua, [email protected].

Bolivia, septiembre 2011


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PRESENTACIÓN El Ministerio de Educación, en el marco de la Constitución Política del Estado, la Ley de la Educación 070 “Avelino Siñani - Elizardo Pérez” y el Sistema Plurinacional de Formación de Maestros, ha priorizado la implementación de acciones formativas para maestras/os normalistas del Nivel Secundario del Sistema Educativo Plurinacional, para mejorar la calidad de la educación en dicho nivel, que por mucho tiempo no se benefició con formación continua; en este sentido, el Programa de Especialización y Actualización de Maestros de Secundaria (PEAMS) ha sido estructurado con dos componentes: especialización y actualización.

La “especialización” es una formación intensiva que tiene como objetivo el de “Brindar formación especializada a maestras/os normalistas que habiendo sido formados para primaria o inicial ejercen como docentes en áreas del nivel de educación secundaria, mediante procesos de formación centrados en aspectos disciplinares y de didácticas específicas, tomando en cuenta las necesidades reales del Sistema Educativo Plurinacional así como las nuevas políticas sociales y educativas del país que prevén la universalización de la educación secundaria, con el fin de garantizar la solvencia profesional de estos maestros/as y la calidad de la educación de todos los estudiantes de este nivel”.

Este componente es de régimen especial y transitorio. Los/as docentes que accedan a los cursos de especialización recibirán una certificación para el ejercicio de las especialidades del nivel secundario, según una normativa especial indicada en la Resolución Ministerial Nº 121/2010. El programa es financiado por el Ministerio de Educación y ejecutado por la Unidad Especializada de Formación Continua (UNEFCO), bajo la modalidad semipresencial.

El PEAMS, tiene previsto el desarrollo de materiales de apoyo en una Colección denominada “Carpetas de Formación Continua”, la misma que contempla una “Carpeta de Trabajo” y un “Cuadernillo de Actividades” para cada uno de los 16 módulos de las 6 especialidades contempladas. Dicho material está organizado en unidades temáticas que siguen una secuencia sistemática para favorecer el proceso de aprendizaje de las/los participantes, cuyo contenido no sólo es un recurso para fortalecer conocimientos y orientaciones pedagógico-didácticas sino una forma de ampliar la conciencia sobre el mundo y la sociedad.

Sobre la base de estos Documentos de Trabajo (versiones en construcción colectiva), tutores/as del PEAMS podrán añadir y/o adecuar contenidos y estrategias formativas de acuerdo a cada contexto. Invitamos a tutores y participantes de todo el país a contribuir con observaciones y sugerencias para mejorar y enriquecer posteriores ediciones ([email protected]).

Fernando Carrión J. - Director General UNEFCO

“Compromiso social y vocación de servicio: Maestras/os

forjadores de la Revolución Educativa”


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ÍNDICE GENERAL

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PRESENTACIÓN ÍNDICE GENERAL DATOS GENERALES DE LA CARPETA Introducción Objetivos holístico de área/especialidad Objetivo holístico de la Carpeta UNIDAD 1: LOS PUEBLOS DEL ABYA YALA. REFERENTES PRECOLONIALES ........ 8 Objetivos de la unidad ....................................................................................................... 8 1.1. El Abya Yala. .............................................................................................................. 8 1.2. Organización política y social de los pueblos nativos .................................................. 8 1.3. Espiritualidad y sincretismo religioso en los pueblos indígena originarios ................. 10 1.4. Sistemas productivos tecnológicos ........................................................................... 10 1.5. Ubicación geográfica de las culturas del Abya Yala .................................................. 11 1.6. Pensamiento político de los pueblos del Abya Yala .................................................. 12 1.7. Pérdida de identidad cultural ..................................................................................... 12 1.8. Procesos de apropiación y autodeterminación cultural.............................................. 13 Resumen de la unidad ..................................................................................................... 13 Lecturas complementarias ............................................................................................... 14 UNIDAD 2: AMÉRICA LATINA, LA COLONIA Y LA FORMACIÓN DE LOS NUEVOS

ESTADOS Objetivos de la unidad ..................................................................................................... 17 2.1. Formas de administración territorial colonial. ............................................................ 17 2.2. Los virreinatos: Lima y Buenos Aires ........................................................................ 17 2.3. El rol de la iglesia en la colonia ................................................................................. 19 2.4. Categorización de lo social, económico, político y educativo .................................... 20 2.5 Sistema tributario en los estados coloniales. La Mita ................................................. 21 2.6 Resistencia indígena anticolonial ............................................................................... 22 2.7 Influencia política europea en la emancipación americana ....................................... 23 2.8 Revolución Francesa. Su influencia en la República ................................................. 24 2.9 Movimientos emancipadores criollos y mestizos ........................................................ 24 2.10 Revolución Industrial y su trascendencia socioeconómica ....................................... 25 2.11 Lucha del proletariado y origen del socialismo ......................................................... 26 2.12 Reolución Rusa y consolidación del movimiento obrero - campesino ...................... 27 2.13 Estados totalitarios y lucha por la hegemonía mundial ............................................. 28 2.14 Discriminación racial. Apartheid ............................................................................... 29 2.15 Nuevas orientaciones geopolíticas en Latinoamérica ............................................... 30 Resumen de la unidad ..................................................................................................... 30 Lecturas complementarias ............................................................................................... 30 UNIDAD 3: BOLIVIA. ESTRUCTURA SOCIOECONÓMICA EN LA REPÚBLICA.......... 36 Objetivos de la unidad ..................................................................................................... 36 3.1. Antecedente, intereses económico – políticos de la colonización ............................. 36 3.2. Evangelización. Reformas borbónicas y su incidencia en criollos e indígenas ......... 37 3.3. Movimientos libertarios y guerra contra el yugo español 1809 -1816 ........................ 38 3.4. Guerra de guerrillas, una forma de liberación .......................................................... 39


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3.5. Ejércitos libertadores y el establecimiento del estado neocolonial ............................ 40 3.6 Reformas de los gobiernos de Bolívar y Sucre ......................................................... 25 3.7 Del ciclo de la plata al ciclo del estaño ....................................................................... 41 3.8 Salitre y guerra .......................................................................................................... 42 3.9 Conservadores y rebeliones indígenas por tierras. Guerra federal ............................. 44 3.10 El proceso liberal y la nueva concepción del Estado ................................................ 46 Resumen de la unidad ..................................................................................................... 48 Lecturas Complementarias .............................................................................................. 49 UNIDAD 4: NUEVAS ESTRUCTURAS POLÍTICO – SOCIALES. CONDICIONES ECONÓMICAS Y LA CULTURA DEL DIÁLOGO Objetivos de la unidad ..................................................................................................... 51 4.1. Bolivia durante el primer conflicto mundial. Consecuencias socioeconómicas ......... 51 4.2. Sindicalismo campesino. La problemática de la tierra, el derecho a la organización . 54 4.3. La importancia de la minería y la razón de ser de Bolivia ......................................... 56 4.4. La democracia en Bolivia. El proceso socio – cultural y económico ......................... 58 4.5. Surgimiento de nuevas fuerzas políticas y la crisis del sistema de partidos .............. 59 4.6. Descolonización: lineamientos y perspectivas ......................................................... 61 4.7. El desarrollo humano una condición del vivir bien .................................................... 64 Resumen de la unidad ..................................................................................................... 65 Lecturas Complementarias .............................................................................................. 66 Bibliografía ..................................................................................................................... 70 Índice de figuras ............................................................................................................ 70


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DATOS GENERALES DE LA CARPETA

INTRODUCCIÓN

La historia del “Pensamiento Latinoamericano y Boliviano”, conlleva el remover las ideas y acciones de aquellas personas que forjaron la identidad del continente y del estado boliviano. Así en el presente cuaderno se busca graficar de la manera más puntual posible esas ideas y esas acciones, tomando en cuenta el contexto en que se desarrollaron y quiénes las propusieron. Definidas en 4 unidades, el cuaderno se trabajó desde aquello que puede considerarse como una propuesta ideológica pre - colonial, en ello se hizo énfasis en los pueblos e imperios de los cuales se tienen más datos, porque su organización resistió con mayor fortaleza el choque de culturas que se dio el año 1492. La primera unidad está dedicada al pensamiento emergente dentro de las culturas de Abya Yala, deteniéndose en el caso de los mayas e incas, desarrollando las características generales de ambas culturas. En la segunda unidad, el avance del trabajo desarrolla la transición entre los últimos tiempos del Abya Yala y el proceso colonial, luego se desarrollan los conceptos vertidos por los iniciadores de la servidumbre y encomienda colonialista, siendo la polémica generada en torno al ser originario aquello que se profundizan, anotando las teorías desarrolladas en torno a este debate. En la tercera unidad el cuaderno vuelca su interés únicamente en Bolivia y el surgimiento del estado – república, los primeros años de vida y su manto militar – caudillista, las ideas germinadas bajo ese contexto y cuáles o cuál el pensamiento más vigoroso. Finalmente la cuarta unidad traza un panorama general del pensamiento boliviano desde el proceso de la guerra del Chaco hasta la actualidad. Si bien es poco probable anotar todas las corrientes de pensamiento generados en el estado boliviano desde hace 80 años hasta hoy, se intenta un estado del arte del pensamiento boliviano. El trabajo se detiene –en la medida de las probabilidades de espacio- en aquellas corrientes ideológicas que más trascendencia tuvieron en el colectivo nacional. Como prevención metodológica, en cada unidad se tienen, al fin de las mismas, un resumen de la unidad, así como una lectura complementaria que hacen a la relación del actual cuaderno con el cuadernillo de actividades. La bibliografía está anotada también al final de cada unidad, así como el número de figuras utilizadas y la fuente de donde se las obtuvo.

OBJETIVO HOLÍSTICO DE ÁREA

Promovemos una formación de los educandos con pensamientos, valores y formas de conducta en función a la nueva visión de país a partir de los principios: descolonizador, comunitario, productivo, intra-intercultural y plurilingüe con capacidad crítica, científica y reflexiva, para asumir un compromiso social comunitario y productivo; en función a lo político, económico, social y cultural que vive nuestro país en la construcción de una nueva sociedad.

OBJETIVO HOLÍSTICO DE LA CARPETA Reflexionamos e interpretamos el Pensamiento Latinoamericano y Boliviano desde

nuestras raíces para comprender la realidad en la que vivimos, y los cambios político sociales y económicos que está pasando nuestro continente y particularmente nuestro país, en la que se visibiliza la mayor participación del cuarto poder del Estado (masas sociales) que a diferencia del pasado históricamente ultrajante, ahora tienen poder de decisión sobre todo aquello que nos afecte a la región y a los bolivianos y bolivianas.


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UNIDAD 1: LOS PUEBLOS DEL ABYA YALA: REFERENTES HISTÓRICOS PRECOLONIALES

OBJETIVOS DE LA UNIDAD

- Comprendemos e interpretamos los referentes históricos precoloniales de los pueblos

del Abya-Yala, para incorporarlos en nuestra memoria histórica, y rescatar las formas de vida de nuestros antepasados cuyo pensamiento buscaba el sano equilibrio entre la vida de las personas y la naturaleza.

- Visibilizamos las experiencias de formación colectiva – social generadas por las culturas previas al coloniaje, reforzando la “memoria larga” de nuestra sociedad continental, para con ellas encontrar un referente que nos facilite el retomar los aspectos identitarios continentales.

1.1 EL ABYAYALA El pueblo Kuna, ubicado en el actual Panamá, denomina desde tiempos precoloniales AbyaYala a nuestro continente. Según recuerda Constantino Lima las autoridades del pueblo le encomendaron que diera a conocer ese nombre y su significado y eso hizo desde entonces (Portugal, 2008). “Literalmente significaría tierra en plena madurez o tierra de sangre vital. Hoy en día, diferentes organizaciones, comunidades e instituciones indigenales y representantes de ellas de todo el continente prefieren su uso para referirse al territorio continental, en vez del término "América". El uso de este nombre es asumido como una posición ideológica por quienes lo usan, argumentando que el nombre "América", la expresión sería propia de los que colonizadores europeos y no de los pueblos originarios del continente” (Wikipedia, 2011). Una variedad enorme de pueblos habitaron el AbyaYala antes que los europeos llegasen, entre dichos pueblos bien merece anotarse los siguientes: apaches, sioux, aztecas, toltecas, mixtecas, zapotecas, mayas, chorotegas, caribes, taínos, caras cañaris, quechuas, aymaras, charcas, chimúes, mapuches, atacameños, araucanos, calchaquíes, diaguitas, tupi guaraníes, náhuatl y un gran número más de pueblos originarios, además -por supuesto- del propio pueblo Kunu.

1.2 ORGANIZACIÓN POLÍTICA Y SOCIAL DE LOS PUEBLOS En sus inicios los pueblos americanos se agruparon en torno a clanes, estos clanes tuvieron como Dios tutelar, o protector, un animal, una figura animal, una particularidad geográfica, tales denominaron los pueblos de Norteamérica a los Totem; el mundo andino a los tutelares geográficos se los denominó /a: Wacas.


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Fig. 2. Primera página del Popol Vuh, o Libro del Consejo. Pieza

magistral del conocimiento Maya.

Fig. 1. Niñas y niños de la escuela de Warisata replicando el trabajo de los Ayllus.

Si en un principio la creencia, la superstición, es la base de la unidad colectiva, luego sería la propiedad de la tierra, es decir, la fertilidad de la misma y su cultivo; con el pasar del tiempo en este factor se sostendría la constitución de las primeras organizaciones sociales en el AbyaYala. Un aspecto característico de estas primeras organizaciones sociales es que la propiedad de la tierra es colectiva (ejemplos claros son los callpullíes aztecas y ayllus andinos). A semejanza de la gens romana, los ayllus o los callpullíes condicionaban la división de la tierra en base a la cantidad de familias que integraban esta comunidad o célula social. De ahí que el concepto de comunidad, en su acepción de común – colectivo, haya prevalecido dentro de los pueblos americanos más reconocidos, más allá de los tres siglos de colonia española o dos siglos del sistema republicano. Sin embargo en determinados pueblos la organización social colectiva, no condecía con la verticalidad en su organización política. Pues la forma de administración política generalmente era vertical, la aristocracia o monarquía en que se debatían los ejes de poder político de los imperios más fuertes del continente indican ello. “La “comunidad” aymara puede concebirse como una formación política específica, es decir una totalidad estructural en el cual un conjunto de relaciones de poder se articulan de modo particular” (Thomson, 2002: 42). Esta afirmación puede aplicarse a todas aquellas comunidades que surgieron en el continente y lograron un nivel adecuado de desarrollo hasta la llegada de la colonia. Existe una explicación sobre las tendencias aristocráticas y democráticas de las organizaciones sociales; aquellas que se asentaron sobre zonas que proporcionaban riquezas de manera estable y que resultaban en sociedades mejor organizadas generaron tendencias monárquicas, aristocráticas, (actuales Perú, zona andina boliviana, México, Guatemala, Colombia, Ecuador, etc.) Ello provocó en consecuencia el establecimiento de los imperios teocráticos, absolutistas. Mientras que en aquellos espacios donde la “acumulación de riqueza”, no era el objetivo central, las condiciones políticas permitían una especie de deliberación intertribal


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Fig. 3. Estructura de un andén o terraza inca.

aquello que vino a denominarse tendencia democrática (sucedió esto en sur de Chile, este brasilero, Antillas, ríos de Canadá, EE.UU, etc.) (Sánchez, 1972:57).

1.3 ESPIRITUALIDAD Y SINCRETISMO RELIGIOSO EN LOS PUEBLOS INDÍGENA - ORIGINARIOS. Se debe considerar que el animismo, el totemismo, la zoolatría y la astrolatría fueron las primeras manifestaciones espirituales de los pueblos originarios. Algunos pueblos construyeron su origen utilizando mitos y leyendas, podemos adentrarnos en este acápite, cuando leemos el Popol Vuh de los mayas. Lo mismo sucede con la construcción mítica del origen incaico. El proceso en todos los casos es el mismo: se escucha una voz desde lo alto (el cielo, el sol, la luna, etc.) que ordena construir un imperio en la tierra. Otro aspecto vinculado a la religiosidad es el culto los muertos. De ahí la momificación y los rituales mortuorios característicos, por ejemplo en la zona andina, a través de los chullpares. De igual manera se dieron sacrificios humanos como parte de la ofrenda religiosa en unos casos y en otros como manifestación simbólica de poder. Éste tipo de procedimientos no fueron comunes a todos los pueblos. Sin embargo en todos los casos, existía un enlace espiritual – político que lograba encarnar en el líder terrenal, las virtudes de la deidad idolatrada. Este vínculo es característico para mantener una verticalidad política en la administración de la sociedad gobernada. Lo religioso hace al líder sagrado y ello refuerza la posición sobre los demás, casi en forma absoluta.

1.4 SISTEMAS PRODUCTIVOS Y TECNOLÓGICOS La producción principal de las personas que habitaban en América, fue siempre el maíz. Mas no era el único producto, también se cultivó: yuca, papa, porotos, maní, tomate, zapallo, quinua, chirimoya, palta, piña, papaya, chocolate, cacao, etc. De ahí que en aquellos lugares donde pudo constituir comunidad permanente, el ser humano de ese entonces aprendió el cultivo, se alimentó mejor y esto tuvo su


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Fig. 4 Signos: 1) Imperio azteca (verde fuerte: hasta principios del siglo XV 2)

Imperio maya (violeta claro) 3) Imperio Inca: fases sucesivas de su expansión

consecuencia en la construcción de obras gigantescas como Tiwanacu, Cuzco, Palenque o Teotihuacán. Es decir, el sistema productivo condicionaba la constitución social, luego se constituyeron los pueblos e imperios. La producción de alimentos de manera aterrazada, en desniveles a lo largo de cerros y colinas es un aporte tecnológico de incalculables ventajas. Además de la producción de la tierra, el originario del continente conoció el pescado, de agua dulce y salada, la carne de animales domesticados o salvajes como el pavo silvestre, la llama, etc. Carne fresca y en forma de charki (carne salada y secada al sol). Las distintas culturas aprendieron el cultivo de la tierra y la tecnología necesaria para reutilizarla una y otra vez, así el guano logró fertilizar de manera constante sus tierras. Para los vestidos utilizaron el algodón tejido, la lana delicada de la vicuña, llama, alpaca. Sus casas hechas de maderas sólidas, sus techos cubiertos de paja brava o palmera seca. El manejo del cobre y el estaño, el oro y la plata fue magnífico. La cerámica policroma, el uso de esmeraldas pulidas. La arquitectura tanto en Tenochtitlan (Mayas) o en Sacsahuaman (Incas) fue formidable. Su arquitectura sigue en pié más de seis siglos después. De igual manera la orientación utilizada en la navegación de ríos inmensos como mar adentro, provoca atención sobre el conocimiento establecido para realizar estas travesías. Finalmente la capacidad demostrada en el establecimiento del calendario solar, para las cosechas, la fijación matemática de los fenómenos astronómicos es abrumadora. Todo esto es parte de un nivel de conocimiento y acción que bien pueden denominarse: aportes tecnológicos originarios.

1.5 UBICACIÓN GEOGRÁFICA DE LAS CULTURAS O PUEBLOS MÁS RECONOCIDOS DEL ABYA YALA En la figura pueden apreciarse aquellos pueblos que constituyeron los referentes más fuertes a la llegada de la colonia entre ellos se aprecia el imperio de los Mayas, de los Aztecas y de los Incas. Además de los mencionados existía una cantidad inmensa de pueblos dispersos, tanto en los bosques tropicales como en la serranía. Destacan como primigenias las culturas ubicadas en el actual Perú, Chavin de Huantar y Nazca, y en la actual Bolivia: Tiwanacu.


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Fig. 5 Gráfica sobre la conquista española en América

1.6 PENSAMIENTO POLÍTICO E IDEOLÓGICO DE LOS PUEBLOS ORIGINARIOS DE ABYA YALA Tal vez la objeción más fuerte para aquellos que buscan ideas políticas en los pueblos del AbyaYala, tiene que ver con la inexistencia de “letra” (Litterae), a excepción del pueblo maya y su escritura calculiforme. Sin embargo de esto las formas de gobierno instaladas, el sistema de control de sociedades todo aquello que se trasladó de manera oral como institución en determinados cuerpos sociales, deja ver que sí existió idea, o ideas políticas, los hechos retransmitidos de generación en generación hasta la llegada de los cronistas, tiene mucha ideología que bien puede definirse como pensamiento político. De igual manera es por demás notorio, que bajo un sistema teocrático, absolutista, las ideas de gobierno giraban en torno a una persona y su voluntad. Autores de profunda ideología radical, indianistas como Fausto Reynaga, consideran que la ideología más importante de los pueblos precolombinos, fue el socialismo indio, regido bajo el imperativo: “Dé cada uno según su capacidad y a cada uno según su necesidad” (Reynaga, 1971: 160). En todo caso se privilegia un sistema de gobierno vinculado al régimen teocrático (incas o mayas) o una inexistencia de idea de gobierno que hace de la dispersión de los pueblos precoloniales, de sobrevivencia y su vida nómada una constante en el desarrollo de las mencionadas sociedades hasta el encuentro con la cultura española.

1.7 PÉRDIDA DE IDENTIDAD CULTURAL (ACULTURACIÓN) Si bien bajo la hegemonía de los imperios originarios, muchas culturas fueron subyugadas y perdieron sus identidades culturales asumiendo la identidad del imperio conquistador. Bajo el sistema colonial la pérdida de las características identitarias fue a tal extremo que han quedado unas cuantas costumbres, pues a los originarios se les arrebató con absoluta brutalidad la mayoría de sus costumbres y creencias, a título de idolatría. La prohibición de costumbres religiosas, la eliminación de registros culturales, como los Qhipus andinos, el haber eliminado a quienes podían haber dado a conocer los ritos y la interpretación de dichos registros (Quipucamayos). La imposición de normas de conducta y vestido por parte del poder colonial y otras acciones similares, hicieron que bajo el dominio colonial, exista una fuerte pérdida de la identidad cultural, al extremo que sólo las culturas que por su cantidad poblacional o más avanzado nivel de


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adaptación al poder imperial, pudieron guardar su cultura –por lo menos- esencia de ella.

1.8 PROCESOS DE APROPIACIÓN Y AUTODETERMINACIÓN CULTURAL

A partir de la creación del Instituto Indigenista Interamericano, el año de 1940 en México, se comienza a configurar la construcción intelectual del indígena americano, bajo una lógica de revisar la historia en ayuda de otras ramas académicas como la sociología, antropología, etc. A partir de esta primera experiencia, los movimientos de afirmación étnica surgen con fuerza a mediados de la década de los 60 del siglo anterior. Otra fuerza que impulsa el surgimiento de los movimientos étnicos es el accionar de los gobiernos nacionalistas que accionarían en el continente desde mediados de 1930 hasta 1970. Desde esa fecha hasta la suscripción del Convenio 169, sobre derechos para poblaciones indígenas, auspiciado por la Organización de Naciones Unidas el año de 1990, surgen una cantidad amplia de dirigentes e intelectuales indígenas que reafirmarían su identidad histórica y la sostendrían teórica y prácticamente en varios debates de alcance mundial. El año 1992 es nombrado como el año de los pueblos indígenas y la década de 1994 al 2004 como el decenio de los pueblos indígenas (Alvizuri, 2009:29). Todo este bagaje de acciones y propuestas logra en el caso de los pueblos americanos, retomar una identidad histórica y su complejo armado de peculiaridades étnicas como un motivo de orgullo y autodeterminación cultural.

RESUMEN DE LA UNIDAD La idea central en los pueblos precoloniales, fue la colectividad. Su organización social, puede que políticamente haya fomentado la verticalidad del monarca, en muchos casos sagrados; sin embargo en las estructuras de producción, en las formas de convivencia, se asentaba una gran condición democrática o, que puede entenderse como un sistema, colectivo. La producción del Abya Yala era suficiente para los pobladores contenidos, el uso de la tierra se justificada en la alimentación y no en la acumulación. La riqueza era desconocida en su acepción occidental, por lo mismo no existían clases sociales estratificadas en ese sentido y la producción si era acumulada, no era con los fines de garantizar riqueza, más por el contrario la finalidad era para garantizar estabilidad alimentaria. El debate sobre si los aborígenes del AbyaYala, eran seres racionales o animales desnuda el nivel de conocimiento de quienes llegaban, más que de quienes ya habitaban estas tierras.


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Consecuencia de la imposición colonial la identidad y los rasgos culturales propios fueron poco a poco diluyéndose en los más de 300 años de colonia.

LECTURAS COMPLEMENTARIAS

ANTES DE LLEGAR LA CRUZ

Rafael Piña Valdez (2011) En: http://www.primeraluz.org/index.php?option=com_content&view=article&id=630:antes-de-

llegar-la-cruz&catid=42:ensayo&Itemid=492 "Esta es la relación de cómo todo estaba en suspenso, todo en calma, en silencio; todo inmóvil, callado, y vacía la extensión del cielo... ; No había todavía un hombre, ni un animal, pájaros, peces, cangrejos, árboles, piedras, cuevas, barrancas, hierbas ni bosques: sólo el cielo existía. No se manifestaba la faz de la tierra. Sólo estaban el mar en calma y el cielo en toda su extensión. No había nada que estuviera en pie; sólo el agua en reposo, el mar apacible, solo y tranquilo. No había nada dotado de existencia. Solamente había inmovilidad y silencio en la oscuridad, en la noche. Sólo el Creador, el Formador, Tepeu, Gucumatz, los Progenitores, estaban en el agua rodeados de claridad...; De esta manera existía el cielo y también el Corazón del Cielo, que éste es el nombre de Dios...; Inicio del Popol Vuh" [1]. Cuando hablamos de la Historia de la Iglesia en las Américas corremos dos riesgos. Por un lado el riesgo de caer en el falso y malsano triunfalismo de pretender que la tradición religiosa y espiritual del continente inició con la llegada de los misioneros cristianos, ya hayan sido españoles, portugueses o ingleses. Por el otro, el de exaltar de tal modo el deísmo precolombino que se quiera pensar que el cristianismo no vino a traer nada nuevo sino la destrucción de las antiguas tradiciones y la imposición por la fuerza de una creencia extraña y ajena para los naturales de estas tierras. Aunado a esto, existe la dificultad para tratar estos temas de que en la América previa a la llegada de los europeos coexistían cientos de grupos de las más diversas tradiciones, lenguas, grados de avance científico-tecnológico y creencias religiosas. Sería muy irresponsable decir que las civilizaciones precolombinas de nuestro continente se representan únicamente por los aztecas del altiplano mexicano y por los incas del Perú. Cierto, éstas dos culturas fueron las que se encontraban en su apogeo a la llegada de los españoles, pero antes de ellas habían existido muchas otras que habían sentado las bases para el esplendor que maravilló a Cortés y a Pizarro. Cerca del 1200 a.C. surgió una de las primeras grandes civilizaciones en México, los Olmecas. Mientras los israelitas habían tenido su éxodo y su travesía por el desierto, y cuando luchaban por la conquista de la tierra de Canaan, en la costa meridional del Golfo de México se gestaban las bases para las futuras civilizaciones que habrían de reinar en la parte central del altiplano mexicano y en Centroamérica. Se dice que hacia el año 900 a.C. los olmecas alcanzaron su esplendor, del cual tenemos legado en las gigantescas esculturas representando cabezas humanas que todavía hoy podemos admirar en los sitios arqueológicos de los estados mexicanos de Tabasco y Veracruz. Así, mientras el pueblo hebreo veía el esplendor de la monarquía bajo los reinados de David y del sabio Salomón, en centro y Sudamérica apenas se sembraban las semillas de las futuras civilizaciones azteca, maya, chibcha e inca. Durante los siguientes 2300 años aparecieron poco a poco centros de civilización como el de los Chiripas, a orillas del Lago Titicaca en Bolivia; los


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Maya-quiché en Tikal, Guatemala; los Zapotecos en Monte Albán, México; los antiguos Mayas del Tajín y Palenque; los Cesteros en el sudoeste de Estados Unidos; en el Perú las grandes civilizaciones andinas de los Mochicas y los Nazcas, y en las tierras altas del sur la civilización de Tiahuanaco; en el valle central mexicano los Teotihuacanos y posteriormente los Toltecas; en la península de Yucatán, los Maya-Toltecas; más al sur del continente los Guaraníes; en los Estados Unidos un sinfín de culturas como los indios Pueblo, Seminoles, Sioux, Navajo, Apache y Mohicanos. Si consideramos que la llegada de Colón a América se dio a finales del siglo XV d.C., la aparición de las dos grandes culturas emblemáticas que encontraron, la azteca y la inca, se había dado relativamente poco tiempo atrás. Los aztecas habían fundado su capital, México-Tenochtitlán, apenas en 1325. El inca Pachacuti, consolidador del imperio incaico, había empezado a reinar en 1438. [2] En los extremos...; y más allá. En un principio mencionamos que existía el riesgo al hablar de la historia religiosa de las américas de llevar las cosas a los extremos. En las primeras crónicas de los conquistadores y misioneros muchas veces nos encontramos con uno de éstos rasgos. La impresión del encuentro entre dos mundos tan dispares y tan desconocidos entre sí provocaba toda serie de reacciones entre los personajes de ambos bandos, así lo describe José María Irabur:

"La Europa cristiana y las Indias son, pues, dos entidades que se encuentran en un drama grandioso, que se desenvuelve, sin una norma previa, a tientas, sin precedente alguno orientador. Ambas, dice Rubert de Ventós, citado por Pedro Voltes, eran «partes de un encuentro puro, cuyo carácter traumático rebasaba la voluntad misma de las partes, que no habían desarrollado anticuerpos físicos ni culturales que preparasen la amalgama. De ahí que ésta fuera necesariamente trágica» (Cinco siglos, 10). Quizá nunca en la historia se ha dado un encuentro profundo y estable entre pueblos de tan diversos modos de vida como el ocasionado por el descubrimiento hispánico de América. En el Norte los anglosajones se limitaron a ocupar las tierras que habían vaciado previamente por la expulsión o la eliminación de los indios. Pero en la América hispana se realizó algo infinitamente más complejo y difícil: la fusión de dos mundos inmensamente diversos en mentalidad, costumbres, religiosidad, hábitos familiares y laborales, económicos y políticos. Ni los europeos ni los indios estaban preparados para ello, y tampoco tenían modelo alguno de referencia. En este encuentro se inició un inmenso proceso de mestizaje biológico y cultural, que dio lugar a un Mundo Nuevo." [3].

Este choque cultural se magnificaba al presenciar rituales como los que describe Schlarman: "Ese mismo año de 1487, Ahuízotl, Emperador de los Aztecas...; iba a celebrar la dedicación del gran teocalli (casa de dios) o templo principal en la Gran Tenochtitlán. La solemnidad debía costar la vida a un crecido número de víctimas humanas que, en opinión de Torquemada, fueron 72,344; Ixtlilxóchitl las apreciaba en 80,000 y los códices Talleriano y Vaticano en sólo 20,000, cifra todavía horrorosa...; Los aposentos del templo, oscuros, horribles, hediondos, como un rastro de matanza, contenían ídolos repugnantes, y allí, vestidos de ropas negras y con las caras pintadas, sobre las que colgaba la cabellera llena de coágulos de sangre, los sacerdotes celebraban sus horrendos ritos rociando los ídolos con sangre humana y ofreciéndoles palpitantes corazones como a dioses entronizados en el templo...; " [4].


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El sacrificio humano existía, como existió en tantas otras culturas y tiempos, como parte del ritual religioso que vinieron a encontrar los conquistadores y misioneros entre algunos pueblos. Fray Bernardino de Sahagún describe como:

"tomábanlos dos por los pies y otros dos por las manos, y otro por la cabeza, y otro con un navajón de pedernal con un golpe se lo sumía por los pechos, y por aquella abertura metía la mano y le arrancaba el corazón, el cual luego le ofrecía al sol y a los otros dioses, señalando con él hacia las cuatro partes del mundo; hecho esto echaban el cuerpo por las gradas abajo, e iba rodando y dando golpes hasta llegar abajo; en llegando abajo tomábanle el que le había cautivado, y hecho pedazos le repartía para comerle cocido." [5].

La reflexión más común ante tales prácticas tan extrañas para los europeos, y tan antiguamente desarraigadas de las costumbres religiosas euroasiáticas del siglo XVI, era que los que así obraban lo hacían por influjo y dominación del demonio:

"era esta tierra un traslado del infierno; ver los moradores de ella de noche dar voces, unos llamando al demonio, otros borrachos, otros cantando y bailando; tañían atabales, bocina, cornetas y caracoles grandes, en especial en las fiestas de sus demonios. Las beoderas [borracheras] que hacían muy ordinarias, es increíble el vino que en ellas gastaban, y lo que cada uno en el cuerpo metía... Era cosa de grandísima lástima ver los hombres criados a la imagen de Dios vueltos peores que brutos animales; y lo que peor era, que no quedaban en aquel solo pecado, mas cometían otros muchos, y se herían y descalabraban unos a otros, y acontecía matarse, aunque fuesen muy amigos y muy propincuos parientes. "Así lo relata el franciscano Motolinía en una de sus crónicas. [6]

Sin embargo, no todos los pueblos obraban con tal crueldad de costumbres. La idea general de que todos los pueblos de la América precolombina tenían prácticas sanguinarias ha sido en gran parte difundida por aquellos que no quieren tener un apego a la historia y que aún hoy en pleno siglo XXI siguen sintiendo un desprecio por todo lo indígena, especialmente por los indígenas, y que buscan en tal explicación una burda justificación para sus actitudes racistas y anti-evangélicas. En este afán han creado una leyenda negra en la tradición oral para desacreditar a las culturas precolombinas, de la misma manera que se ha creado una leyenda negra acerca de la supuesta crueldad generalizada de los españoles hacia con los indígenas para atacar a la Iglesia. [7] De hecho, dentro del mismo pueblo azteca, existía una corriente de pensamiento que pugnaba por restaurar los antiguos valores espirituales de sus antecesores culturales y religiosos, los toltecas, de quienes recibieron el legado los pueblos mesoamericanos del culto a Quetzalcóatl, la serpiente emplumada, el líder moral-espiritual convertido-en sacerdote-convertido-en dios de los toltecas que no aceptaba más sacrificio que el de mariposas y serpientes; que promovía el celibato y la castidad; los ayunos y los largos periodos de oración. Los pueblos del valle central de México y hasta el sur en Guatemala, recibieron la influencia de este Quetzalcoátl, llamado Kukulcán por los mayas, y Gucumatz por los quichés:

"Eran cuidadosos de las cosas de dios, sólo un dios tenían, lo tenían por único dios, lo invocaban, le hacían súplicas, su nombre era Quetzalcóatl. El guardián de su dios, su sacerdote, su nombre también era Quetzalcóatl. Y eran tan respetuosos de las


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cosas de dios, que todo lo que les decía el sacerdote Quetzalcóatl lo cumplían, no lo deformaban. él les decía, les inculcaba: Ese dios único, nada exige, sino serpientes, sino mariposas, que vosotros debéis ofrecerle, que vosotros debéis sacrificarle." [8]

La evidencia histórica de un líder moral-espiritual que promovía altos valores de respeto por el hombre y la divinidad en el pueblo tolteca, y de cómo este hombre-dios influyó ampliamente en todos los pueblos del altiplano mexicano hasta Guatemala, ha llevado a los historiadores a desarrollar las más audaces e increíbles hipótesis acerca de la identidad de dicho personaje que aparece constantemente en los libros de historia como el hombre blanco y barbado que prometió regresar por el poniente para cobrar venganza, y que Moctezuma confundió con Cortés a su llegada a Veracruz. [9] La concepción cosmológica de los aztecas incluía la creencia que el mundo y la humanidad habían existido en un periodo de cinco soles subsecuentes, cada uno de los cuales había terminado con un cataclismo y la consiguiente destrucción de los imperfectos humanos de los primeros cuatro soles. Al momento del encuentro europeo americano, se encontraban viviendo el quinto sol, el cual requería de sacrificios humanos para mantener su paso. Sin embargo esta creencia, que promovía y fomentaba las "guerras floridas" para lograr prisioneros para los sacrificios, no fue el común denominador ni del resto de los pueblos americanos ni de los mismos antepasados de los aztecas como hemos visto. La concepción místico-guerrera que requería de sacrificios en cantidades descomunales fue introducida por una verdadera "reforma religiosa" instituida hábilmente por Tlacaélel, "el hombre que hizo grande a los aztecas", como dice Miguel León Portilla. [10] Y de estas diferencias entre las prácticas del culto religioso y la vida moral entre los diferentes pueblos nos da testimonio el soldado-cronista Cieza de León:

"Porque algunas personas dicen de los indios grandes males, comparándolos con las bestias, diciendo que sus costumbres y manera de vivir son más de brutos que de hombres, y que son tan malos que no solamente usan el pecado nefando, más que se comen unos a otros, y puesto que en esta mi historia yo haya escrito algo de esto y de algunas otras fealdades y abusos de ellos, quiero que se sepa que no es mi intención decir que esto se entienda por todos; antes es de saber que si en una provincia comen carne humana y sacrifican sangre de hombres, en otras muchas aborrecen este pecado. Y si, por el consiguiente, en otra el pecado de contra natura, en muchas lo tienen por gran fealdad y no lo acostumbran, antes lo aborrecen; y así son las costumbres de ellos: por manera que será cosa injusta condenarlos en general. Y aun de estos males que éstos hacían, parece que los descarga la falta que tenían de la lumbre de nuestra santa fe, por la cual ignoraban el mal que cometían, como otras muchas naciones." (Crónica cp. 117). [11]

En el extremo opuesto a aquellos que pretenden generalizar las prácticas sanguinarias y atribuirlas a todos los pueblos, se encuentran aquellos que quisieran convencer al mundo contemporáneo de que no ha habido mal más grande para los pueblos de las Américas que la llegada de los europeos, y que la fe cristiana fue impuesta más bien que abrazada fervientemente por unos seres humanos sedientos de conocer la verdad que nos hace libres (cf. Juan 8, 32) y ansiosos de no caminar más en la oscuridad, sino de tener la luz que da la vida (cf. Juan 8, 12). En este extremo se encuentran tanto algunos ateos como algunas personas que dicen creer en Dios. Algunos han ido más allá, y en su intento por desacreditar el auténtico mensaje evangélico traído a las tierras americanas con la verdadera autoridad


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apostólica que sólo la Iglesia Católica Romana tiene, han ido hasta el extremo ridículo de pretender que el mismo Señor Jesucristo, poco después de su resurrección, desarrolló un ministerio personal entre unos tales nefitas, supuestos habitantes de América (de los cuales no existe ninguna evidencia arqueológica ni histórica) haciendo así innecesario el mensaje de la salvación por la fe en Cristo Jesús traído por los primeros misioneros a nuestro continente en los siglos XV y XVI. [12] Para concluir es conveniente recalcar, que la afirmación que el apóstol Pablo hacía acerca de la universalidad del pecado, era tan válida para los judíos como para los griegos, para los aztecas e incas como para nosotros hoy en día, ya que todos pecaron (cf. Romanos 5, 12). Es decir, la necesidad de salvación es universal, independientemente de la geografía y de la época; independientemente de que tan terribles hayan sido nuestras antiguas prácticas y que tan erradas nuestras creencias. Podemos confiar en las Sagradas Escrituras donde nos dicen:

"Pero te compadeces de todos porque todo lo puedes y pasas por alto los pecados de los hombres para que se arrepientan. Amas a todos los seres y no aborreces nada de lo que hiciste; pues, si algo odiases, no lo habrías creado." (Sabiduría 11, 23-24)

Las antiguas civilizaciones americanas tuvieron, como todos los pueblos de la antigüedad, grandes rasgos de esplendor espiritual que la tradición católica ha llamado las semillas de la verdad, la Iglesia reconoce en todo hombre de todo tiempo "la presencia en él de un cierto germen divino", [13] y reconoce en las otras religiones "la búsqueda, entre sombras e imágenes, del Dios desconocido pero próximo ya que es él quien da a todos la vida, el aliento y todas las cosas y quiere que todos los hombres se salven. Así, la Iglesia aprecia todo lo bueno y verdadero que puede encontrarse en las diversas religiones como una preparación al Evangelio y como un don de aquel que ilumina a todos los hombres, para que al fin tengan la vida." [14] Como dijo San Clemente de Alejandría a finales del siglo II, "Dios nunca es débil. Como Su voluntad es Su obra, y esto es llamado el universo; así, también, Su deseo es la salvación de todos, y esto ha sido llamado la Iglesia".


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Fig. 6. 1) Imperio azteca 2) Imperio maya 3) Imperio Inca: fases sucesivas de su expansión.

UNIDAD 2: AMÉRICA LATINA, LA COLONIA Y LA FORMACIÓN DE LOS NUEVOS ESTADOS


- Profundizamos en el conocimiento de los procesos históricos que el mundo tuvo, generando diferentes ideologías que a su vez generaron nuevos escenarios dentro de las sociedades, en especial la latinoamericana.

- Comprendemos y visibilizamos las estructuras creadas dentro del desarrollo de las sociedades, así como sus precedentes ideológicos, su accionar, sus rasgos coyunturales y sus consecuencias.

2.1 FORMAS DE ADMINISTRACIÓN TERRITORIAL EN LA COLONIA

La estructura administrativa de la colonia tenía en el rey su poder máximo, tuvo en el consejo de Indias la delegación de poderes reales que atingían a lo legislativo, lo ejecutivo y lo judicial. Luego estaba la distribución territorial – política de la colonia, primero lo Virreynatos, luego las Capitanías, también las Audiencias, finalmente instaló sobre los mismos territorios anteriores las Intendencias como una manera de reorganizar la administración. Una característica de las Audiencias tenía que ver con aquellas que dependía directamente de un Virrey, las reales Audiencias vierreinales (México, Lima), las audiencias subordinadas (Quito, Charcas) y las pretoriales (en sus inicios Buenos Aires y Panamá) De igual manera una particularidad del régimen colonial tuvo que ver con los virreinatos de Lima y México, que en los hechos eran tomadas como reinos (Nueva Castilla y Nueva España) La extensión del territorio, la cantidad de riqueza acumulada y explotada, la diversidad de poblaciones, finalmente la lejanía con la metrópoli colonial, hizo que se consideraran reinos, eso sí, estrechamente subordinados al poder metropolitano de Madrid.

2.2 LOS VIRREINATOS: LIMA Y BUENOS AIRES Además del virreinato de México, los de Lima y Buenos Aires, fueron los más importantes de la colonia. En la capital limeña como en el caso de México, el boato y lo suntuoso quiso ser un reflejo de lo que sucedía en las cortes de Madrid. El caso de Buenos Aires, debido a su permanente contacto con los buques que llegaban de Europa, se privilegió más


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Fig. 7 Fundación de Buenos Aires (José María Carbonero.)

una clase comerciante, no exenta de los lujos que rodeaba a la mentalidad colonial, pero que tampoco llegaba a los extremos de las otras dos capitales de virreinato mencionadas. Lima y Buenos Aires tuvieron por inmediatos superiores al Real y Supremo Consejo de Indias y en el cenit del poder colonial al Rey. El virreinato de Lima, fue el primero en fundarse (1542) y se constituyó desde su inicio en el centro político – social más importante del continente sur. Su cercanía a la costa y a la vez ser centro político y administrativo de los emporios de riqueza en Potosí y en Oruro, la convertían en la sede más importante de cuantas tuvo la corona en suelo americano. Lima fue el centro más importante hasta la creación del Virreynato del Río de La Plata con su sede en Buenos Aires (1776). El virreinato de la Plata fue consecuencia de las reformas borbónicas, que viendo que el monopolio de comercio entre España y la colonia, no contenía la cantidad de contrabando de productos que ingresaban por otros puertos a la colonia, hizo que se pensase en disminuir el extenso territorio del vierreinato del Perú creando el virreinato de la Plata con la consiguiente habilitación del puerto de Buenos Aires para poder comerciar con los productos que llegaban de España. Una vez constituido el Virreinato del Río de La Plata, las vías para llevar los minerales desde las minas del Alto Perú en especial de Potosí, fueron dos: vía La Paz, hacía Lima y vía Tucumán, Córdova hacia Buenos Aires. De igual manera por esas dos vías ingresaban los productos traídos desde España y aquellos que el contrabando alimentaba desde otros países europeos. Una consecuencia de la colonia fue el fundar nuevas ciudades, sobre pueblos previamente habitados por indígenas, así desde 1510, se fundan las primeras ciudades en México. En 1536 se funda Lima; cuatro años más tarde se fundaría Charcas y Arequipa, luego La Paz. Potosí sería un fenómeno especial, pues por la premura española en explotar las riquezas, no tuvo tiempo de fundación sino hasta una fecha formal en 1846, 5 años después. Buenos Aires tuvo su primera fundación en 1536, Santiago fue fundada en 1541, Mendoza en 1548. En 1550 se funda la ciudad de Santiago del Estero. Todas las fundaciones de ciudades tuvieron como principal finalidad sostener la conquista española, ya que al fundar una ciudad el fundador tenía un título que le hacía –en la mayoría de las veces- la máxima autoridad jurídica,


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Fig. 8 Dibujo del Adoctrinamiento religioso.

política. Es decir significaba un tratamiento casi de señor feudal.

2.3 EL ROL DE LA IGLESIA CATÓLICA EN LA COLONIZACIÓN. La Iglesia y la corona actuaron en consuno para la empresa colonial. El rey ejercía la potestad de “Patronato”, es decir la decisión absoluta para las designaciones o nombramientos eclesiales en la colonia. El postulado principal para proteger a los indígenas del abusivo poder colonial fue patrocinado por el dominico Bartolomé de las Casas, quien pugnaba por una abolición de la servidumbre de los indígenas. La servidumbre y muerte de los naturales del continente tenía entre otros argumentos el –triste- debate sobre si los hombres del continente descubierto por europeos tenían alma o no. Si se respondía afirmativamente se les concedía un nivel de igualdad ante Dios, esto provocaría mínimamente incomodidad al colonizador. Mientras que si se rechazaba la idea, la servidumbre, la esclavitud tendría vía abierta. El debate fue suscitado por la publicación del libro sobre la Guerra Justa de Ginés de Sepúlveda y la respuesta consiguiente de Bartolomé de las Casas. Otro brazo eclesial que trabajó fuertemente a favor de la colonia fue el Tribunal del Santo Oficio de la Inquisición. Desde el momento mismo de la instalación de los poderes coloniales, la Inquisición estuvo presente y su poder se mantuvo hasta el año de 1813, ya muy avanzado el tiempo de la emancipación. La orden de los Dominicos estuvo a cargo de esta polémica institución. Entre las actividades desarrolladas por la Inquisición estaban las pesquisas sin previo aviso, las citaciones y aislamiento de sospechosos, a simple denuncia, las prácticas de tortura y vejámenes con la finalidad de obtener confesiones, aplicación de penas, que iban desde la simple amonestación hasta la muerte. La inquisición actuaba ante tres principales casos: herejía, pecados contra las buenas costumbres, lectura de libros prohibidos, bien puede entenderse que en cualquiera de ellas tres podían caerse por cualquier motivo, más si para ser motivo de sospecha, y seguro proceso, bastaba simple denuncia. Finalmente la iglesia consolidó dos de las instituciones más importantes del coloniaje: las misiones y las reducciones. En las primeras actuaron de manera fundamental franciscanos, dominicos y jesuitas. Mientras que en las reducciones, principalmente de indígenas, se destacaron, hasta su expulsión los jesuitas y en el último tramo del periodo colonial, los franciscanos.


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Fig. 9. Pirámide socio – económica de la colonia.

El poder eclesial sin embargo fue pocas veces contrastado por el poder real. Esto significó que en el continente los naturales tenían a su vez dos supremos mandos: el Rey y el Papa. Cualquiera de ellos se manifestaba por los brazos de sus funcionarios, que en ambos casos eran numerosos y en muchos casos absolutamente indolentes y abusivos con el poder delegado.

2.4 CATEGORIZACIÓN SOCIAL DESDE LO ECONÓMICO, SOCIAL, EDUCATIVO Y CULTURAL Si bien las Leyes de Indias, en sus tres “recopilaciones”, manifestaban derechos de altísima justicia para los originarios con respecto a los españoles, en los hechos esto jamás estuvo vigente. Por dar un ejemplo las Leyes de Indias consentían el matrimonio entre indígenas hombres con mujeres españolas, sin embargo en los hechos esta figura -más que romántica- era a las ideas y acciones del conquistador: repulsiva. La categoría social, impuesta por una verticalidad del conquistador sobre el conquistado, significa un desprecio y un domino absoluto del uno sobre el otro. Acá cabe recordar el concepto estamental del feudalismo para entender a categorización universal de la colonia: Nobleza (del conquistador español), Clero, (instrumento de control y sumisión, también español) y pueblo –o lo que es lo mismo indio- (sujeto colonizado no español), servidor de los dos anteriores. El centralismo del poder, instalado por Carlos V de Alemania o Carlos I, español, hizo que la relación sea extremadamente radical. El que fueran funcionarios públicos sólo los nacidos en España, una de las causas del movimiento emancipatorio, muestra la categorización impuesta a los nacidos a uno y otro extremo del atlántico. Los españoles no podían ocupar los cargos de peones ni mineros de socavón, esto debido a su condición de español.

Fig. 10. Llevando indígenas

para la Mita.


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Desde luego los criollos, los indígenas y los negros, en esa verticalidad social, no podrían jamás tener un mismo nivel social con aquellos. Las iglesias para españoles y para indios, las “repúblicas” o “pueblos de indios” y “repúblicas o “pueblos de españoles”, eran demarcadas por un accidente geográfico natural, río, el cerro, o uno construido por el hombre, un canal, una plaza. La prohibición de transitar por determinadas áreas de las ciudades, consolidaba este extremo. A tal punto llegaba esto que la práctica de la religiosidad o cultura de los naturales debe convertirse en clandestina para ser practicada, pues la imposición colonial busca eliminar todo aquello que no surja del “proceso civilizador” occidental, encarnado en lo español.

2.5 EL SISTEMA TRIBUTARIO EN LOS ESTADOS COLONIALES: LA MITA, SISTEMA DE ENCOMIENDAS Y TIERRAS COMUNITARIAS La Real Hacienda era una de las preocupaciones institucionales más importantes del monarca español, en tierras colonizadas, consistía en la institución que fiscalizaba todo el movimiento comercial entre España y las colonias. Esta institución velaba principalmente por el “quinto real” que era un impuesto directo para mantener los ingresos de la monarquía española. Los más importantes impuestos al denominado “tributo”, que era cobrado sobre la producción particular y sobre el que habitaba en tierras coloniales, eran:

- El “diezmo”, impuesto desde inicios de 1500, cobrado a favor de la iglesia

- El “quinto real”, tenía como finalidad salvaguardar los ingresos de la monarquía.

- El “almojarifazgo”, impuesto sobre todo lo vinculado al comercio y a las mercancías.

- Las “alcabalas”, impuesto sobre mercancías que se pagaban en los lugares de su expendio.

A estos impuestos se deben agregar aquellos que por exigencias de la corona, se hacían de forma coyuntural y los otros que estaban vinculados a casos específicos (venta de títulos nobiliarios, cobros a nuevos funcionarios, etc.). La mita, fue uno de los sistemas más sanguinarios de explotación que la colonia impuso, inicialmente a los indígenas y luego a esclavos traídos del África. En el caso de los indígenas, la mita era un impuesto que las comunidades se veían forzadas a cumplir, una cuota de brazos que debían explotar las minas para generar minerales para la colonia. En lo teórico, se debía cancelar monetariamente a quienes trabajaban en la mina, sin embargo esto –como muchas otras veces vimos- tampoco era cumplido, es decir todo fue obligación y dolor.


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La mita queda en la memoria colectiva como un método sanguinario, opresor e inhumano del español sobre el colonizado. La encomienda consistía en la repartición de tierras, con contenido de indígenas habitantes en las mismas, de ahí que hasta mediados del proceso colonial, existieron verdaderos feudos en el continente que podían en algunos casos competir con el poder del monarca español y por esta razón las encomiendas y la repartición de tierras comunitarias, fue, en épocas posteriores, casi al fin de la colonia, limitada. Los encomenderos, que en lo teórico debían cumplir labores de adoctrinamiento cristiano, es decir proteger bajo la palabra divina a los indígenas, fueron verdaderos verdugos de los indígenas, en verdad se convirtieron en los nuevos señores feudales del continente e hicieron de una institución, en lo teórico positiva una institución tan temida como la mita.

2.6 RESISTENCIA INDÍGENA ORIGINARIA ANTICOLONIAL Desde mediados del siglo XVI, se pueden anotar los movimientos de resistencia anticolonial por parte de los indígenas del Abya Yala. En realidad los primeros en levantarse contra el sistema oprobioso, fueron los esclavos del África traídos a las Antillas, fue el año de 1553; luego se levantan los indígenas de las minas de plata en Tepic (1598), en el actual México. La sublevación general indígena en Chile entre en 1552 y 1553. La sublevación de los aztecas en 1690, el levantamiento decenal de los Calchaquíes, en Tucumán, entre 1660 y 1670. Los levantamientos indígenas en el 1700 fueron los más impactantes, así los de lo Amarú en el Cuzco, los de Katari en el altiplano, hoy boliviano, de igual manera la rebelión de los “comuneros”, en el Paraguay y así una cantidad amplia de levantamientos indígenas. El levantamiento de los Katari, a fines del siglo XVIII, mostró el verdadero drama en que se desarrollaban los naturales. La exigencia para poder vivir según sus costumbres, vestir según sus posibilidades y consumir según su necesidad, no es más que una solicitud lo más lógica y natural posible, aspecto que sin embargo fue negado, produciéndose en consecuencia el levantamiento –tal vez el más sangriento, por su acción como su consecuencia, del período colonial-. También dentro de estos movimientos bien puede incluirse el de Alejo Calatayud, que en 1730, logra, aunque momentáneamente, varias de las aspiraciones que buscaron en diferente lugares las sublevaciones indígenas, es decir una igualdad de oportunidades del criollo, del indígena, del esclavo traído del África, en fin de todos los subordinados al poder

Fig. 11. Resistencia ante la colonia, sangrienta y en

total desventaja.


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colonial, logra –efímeramente- que exista una igualdad jurídica y política entre los colonizados y el colonizador.

2.7 LA INFLUENCIA POLÍTICA EUROPEA EN LA EMANCIPACIÓN AMERICANA Es indudable que el motivo principal, generado en Europa, para la emancipación en América, fue el imperio creado por Napoleón. La invasión de Napoleón a Portugal, vía España, y la consolidación de las tropas francesas en España, más la abdicación del rey Carlos IV a favor de Napoleón y la renuncia de los derechos de Fernando VII, también a favor de Napoleón, hizo que surgieran las Juntas Provinciales que exigían la adhesión de las colonias y la obediencia a las mismas. Esta última exigencia fue la piedra de toque para que las colonias ya avanzadas en sus ideales de independencia encontraran la oportunidad y la utilizaran en cumplimiento de sus aspiraciones. La acción napoleónica, sin embargo es precedida por el proceso denominado “lustración”. La idea central del proceso de la ilustración estaba vinculada a la razón del ser humano como centro del desarrollo de todos los derechos. Esto entendido en el caso de las colonias españolas, señalaba que áreas como la economía, debían dejar de pertenecer a una entidad burocrática que administre todo el proceso, como el Estado, o el reinado, a fin de cuentas esto significaba que la libertad de economía, cedería espacio a los demás derechos, políticos, sociales. Finalmente la ilustración en el fondo propugnaba la igualdad de los seres ante la norma y el quiebre del monopolio comercial del Estado, por la libre intervención del individuo. Algunos monarcas europeos previeron las consecuencias de estas ideas, si no las aplicaban, entonces se convirtieron en Monarcas Ilustrados (despotismo ilustrado), lograron realizar reformas en sus reinos, sin embargo en algunos casos el poder del reino estaba cada vez más concentrado en manos del rey y esto trajo como consecuencia las revoluciones. En el caso de América, la clase social que mejor asimiló las ideas de la ilustración, fue la criolla, pues muchas de esas ideas hacían a sus aspiraciones. La consecuencia, sin duda más importante de la ilustración, fue la independencia norteamericana y la revolución francesa, mismas que tuvieron –a su vez- consecuencias en el movimiento independentista de Latinoamérica.

Fig.12. Pintura. La Libertad guiando al pueblo.


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Espíritus imbuidos de la ilustración europea, como Victorian Villalva, Pino Manrique o Francisco de Viedma, estuvieron en cargos importantes dentro del andamiaje colonial, es seguro que previeron los sucesos, aunque al parecer sus esfuerzos no fueron suficientes.

2.8 LA REVOLUCIÓN FRANCESA; LA REPÚBLICA, EL PROCESO ENTRE CONSERVADORES Y REVOLUCIONARIOS

¿Cuál la incidencia de la revolución francesa en el proceso emancipador americano? Pocos datos concretos pueden encontrarse, a no ser aquellos que estuvieran vinculados a procesos de la Inquisición, generalmente procesos suscitados por la lectura de libros prohibidos. Así al parecer, fue México la región que más información recibió sobre la revolución francesa, algunas islas de las Antillas, por su pertenencia a Francia, recibieron bastante información de las ideas francesas. Santo Domingo, juntamente con Cuba, fueron las regiones que por la cercanía con las islas bajo dominio francés, estuvieron más afectadas por los hechos revolucionarios. La isla que más consecuencias generó por lo sucedido en Francia, fue Santo Domingo, pues por el movimiento de Toussaint Louverture, esclavo que alcanzó celebridad por la revolución de 1791 a 1798, logró consolidar en dicho territorio, la creación e independencia de Haití, como primer estado libre de poder colonial en el continente, a excepción de los Estados Unidos. Hechos, como la toma de la Bastilla, no tardaron mucho tiempo en ser conocidos, mediante pasquines y cartas en Buenos Aires, de ahí fue un tiempo para que se conozcan en Potosí, en Charcas, en La Paz, en Lima, etc. Los documentos más buscados por parte de las autoridades coloniales eran la “Declaración de los Derechos del Hombre” y la letra del “Himno de los Marselleses” (La Marsellesa). Estos dos documentos, junto a las obras de Voltaire o del “Viejo que vive en Ginebra”, Rousseau, fueron caldo de cultivo para desarrollar las ideas emancipadoras a la luz de los hechos en Francia. Es bastante conocido el trabajo que hizo Matías Terrazas, un célebre canónigo de Charcas, quien en su biblioteca disponía de varias de estas obras y por su calidad de jerarca religioso estaba exento de las sospechas de la Inquisición. Es seguro que en dichos textos leyeron los autores de la movilización del 25 de mayo de 1809, su intención.

2.9 MOVIMIENTOS EMANCIPADORES DE MESTIZOS Y CRIOLLOS Además del movimiento precursor de Alejo Calatayud, en Cochabamba, donde ya estaban sentadas las aspiraciones básicas de los criollos y mestizos, hasta los albores del siglo XIX, cuando producida la independencia en Haití, hecha la invasión napoleónica a la península ibérica, surgen en América diferentes liderazgos precursores de lo que vendría a ser la emancipación total del poder colonial.


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Entre estos precursores debemos mencionar a Francisco Miranda quien fue el infatigable luchador por la independencia, solicitando cooperación de ingleses, norteamericanos, rusos, siempre con la finalidad de alcanzar la independencia de la colonia. En dos intentos tuvo la posibilidad de combatir el poder colonial, sin embargo fueron intentos frustrados. Pese a ello nunca desanimó de su empresa y logró formar a las mentes que luego con mayores esfuerzos darían la libertad al continente. Juntamente a Miranda, es necesario mencionar al precursor Antonio Nariño quien fascinado por la lectura de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, fue uno de los propaladores más eficaces de la revolución francesa, tuvo la oportunidad de ver consagrada su aspiración, siendo vicepresidente de Colombia. Si bien Nariño, fue el propagandista fundamental de los Derechos del Hombre, otro precursor, Mariano Moreno, fue el impulsor mayor de las lecturas de Rousseau y su texto Contrato Social, traducido por él mismo. Todo esto unido a las aspiraciones políticas de los criollos, que ya se sentían suficientemente habilitados para ejercer los cargos más altos, como que sentían el dogal del monopolio español, para todo comercio, impidiendo desarrollar industria y comercio según sus necesidades, hizo que los movimiento emancipadores se apresurarán desde el 25 de mayo de 1809, cuando bajo la figura del silogismo altoperuano, explicado antes, se abriesen las puertas del enfrentamiento en una lucha de 16 años. De esta lucha surgiría como pensamiento latinoamericano único y central, la mancomunidad, la hermandad del continente, el pensamiento bolivariano, la confederación Perú – boliviana, serían muestras de ese actuar, hechos de esa idea, de esa intencionalidad.

2.10 REVOLUCIÓN INDUSTRIAL Y SU TRASCENDENCIA SOCIOECONÓMICA Y CULTURAL EN LA HISTÓRICA DE LA HUMANIDAD Hasta fines del silgo XVIII, la humanidad transitaba, ilustrada o no, bajo un régimen feudal o monárquico que significaba una limitante para la actividad libre del sujeto. La revolución industrial, que liga tecnología con mercantilismo y riqueza, logra quebrar los esquemas sociales de relación política. A raíz de la revolución industrial, la obtención –acumulación de riqueza- de dinero quiebra el esquema estamentario planteado por la monarquía y el feudalismo.

Fig. 13. La Revolución Industrial y una imagen

característica de explotación y condiciones de trabajo.

inhumanas


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A partir de ello el sistema democrático es impulsado y a la par de éste el sistema capitalista. Esto trae en consecuencia la competitividad, la masificación de las sociedades y-paradójicamente- el individualismo en las sociedades. La mecanización del agro, deja brazos parados en el campo que se trasladan a las fábricas de las ciudades y comienza la masificación de las urbes, la despersonalización del ser humano. Estas complejas consecuencias dividen a la sociedad entre riqueza y pobreza. Entre propietarios y proletarios Mientras quienes son propietarios de las fábricas, de las máquinas, generan cada vez más riqueza, quienes proporcionan su mano de obra o la materia prima para el trabajo de las máquinas se mantienen en su mismo nivel o por falta de energía o de materia prima caen en la pobreza. La revolución industrial, sin embargo de todo lo anterior, fue un factor que ayudó a quebrar el sistema colonial en América, pues la cantidad de productos elaborados por estados europeos, ajenos a España, necesitaban de mercados y como bajo el régimen colonial existía el monopolio de comerció entre la corona y las colonias, las puertas del contrabando fueron abiertas, quebrando el anterior monopolio y generando nueva riqueza, nuevos actores, por consiguiente reafirmando las aspiraciones de cambio, logrando a la vez hacer insostenible un sistema monopólico que hacía aguas, por la cantidad de comercio que se generaba en torno al mercado paralelo. Finalmente la revolución industrial trajo de manera paralela una nueva ideología: el socialismo.

2.11 LA LUCHA DEL PROLETARIADO Y EL ORIGEN DEL SOCIALISMO; CORRIENTES POLÍTICAS E IDEOLÓGICAS Y SU INFLUENCIA EN AMÉRICA LATINA Y EL PAÍS Desde 1860 se constituyen las organizaciones de trabajadores en Europa. El sustento ideológico para la unión de los trabajadores es el socialismo, planteado bajo un documento que transformaría las relaciones del mundo obrero: “El manifiesto comunista”. Entre las luchas del proletariado está la jornada laboral de 8 horas, salarios mínimos, limitación del trabajo de mujeres y niños, seguro social, el derecho a la huelga, finalmente el desarrollo

cooperativo de empresas.

Fig. 14. "Los proletarios no tienen nada que perder más

que sus cadenas”.


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En el caso latinoamericano, la emergencia proletaria era poco percibida, un rasgo implícito de la revolución industrial tenía que ver con la industrialización y en el caso latinoamericano, ésta apenas había comenzado. En el continente lo que se visibilizó desde el principio, fue que la riqueza generaba “desigualdad social”, y que esa misma riqueza tenía una característica: estaba siempre en poder de un grupo y pocas veces o jamás cambiaba de manos. Así en Latinoamérica surge una confluencia de dos clases, quienes poseían la riqueza –que casi siempre eran los mismos- oligarquía y quienes poseían la pobreza como monopolio: campesinos, obreros, incluso clases medias que buscaban por diferentes medios acabar con ese grupo oligárquico que mantenía la riqueza y el poder en sus manos. Un rasgo más de la oligarquía continental es que su poder llegaba desde la colonia. Aspecto que le hacía más irritable. En nuestro continente las primeras organizaciones de trabajadores se remontan a las primeras dos décadas del siglo XX, principalmente en el Perú y en la Argentina. Los teóricos de esta y otras acciones son varios, entre ellos debemos mencionar a: Henriquez Ureña, Montalvo, Vasconcellos, Ingenieros, Gonzales Prada, Martí, Mariátegui En el caso latinoamericano, un rasgo implícito de la ideología socialista fue su lucha contra el imperialismo y entendió, desde el principio, que el imperialismo, no tenía otro rostro más que aquel que había reemplazado al poder de la colonia.

2.12 LA REVOLUCIÓN RUSA, LA CONSOLIDACIÓN DEL MOVIMIENTO OBRERO CAMPESINO Y SU TRASCENDENCIA IDEOLÓGICA EN AMÉRICA LATINA Y BOLIVIA. Una consecuencia de la revolución rusa en Latinoamérica tuvo que ver con los movimientos de huelga general y la lucha contra el imperialismo. El imperialismo, que era una nueva manera de colonización, fue generado por necesidad de abastecer con materias primas la creciente industrialización europea, además existía la necesidad de expandir los límites geográficos de los estados europeos. Los estados europeos, producto de su consolidación como naciones, necesitaban espacios territoriales para proveerse de recursos naturales.

Fig. 15. Bolcheviques en las calles moscovitas

durante la revolución de 1917.


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A partir de la Tercera Internacional, la visión del socialismo quedó fracturada entre los radicales del pensamiento comunista y aquellos que buscaban una transición suave entre un nivel y otro del socialismo. En América latina, las ideas marxistas ingresaron principalmente por Buenos Aires, siendo sus consecuencias más notables aquellas que se producen en el Perú con el surgimiento de la ideología de Raúl Haya de la Torre y de José Carlos Mariátegui, que toman del socialismo aquello que pueden aplicar a la realidad de su país. En Bolivia Tristán Maroff y José Antonio Arze, manifiestan ideologías marxistas por las que son en diversas oportunidades extrañados del país. En verdad las ideas del marxismo en Latinoamérica fueron argumento teórico para otra lucha que estaba germinando: la lucha contra el imperialismo. Bajo el término “imperialismo” se entendía la extracción de materias primas a cargo de los Estados Unidos, en todo el continente. Su pago en forma desigual, con respecto a lo que explotaba y el sometimiento en que estaban sus gobiernos, con respecto al gobierno norteamericano. Imperialismo era todo aquello que sometía a un estado igual al que se tuvo en la colonia. Imperialismo era la extracción de las materias primas, en especial recursos naturales, dejando tras esa explotación cantidad de miseria y tierras muertas. De ahí que la manera más explícita de entender el socialismo en el continente tuvo que ver en la lucha contra el imperialismo. Bajo esta bandera se produce la revolución cubana que es comprendida como la mayor consecuencia de las ideas socialistas en el continente. En todos los casos el afianzamiento de las consecuencias de la revolución rusa estuvo vinculado al surgimiento de los nacionalismos europeos.

2.13 ESTADOS TOTALITARIOS Y LUCHA POR LA HEGEMONÍA MUNDIAL, SURGIMIENTO DEL NACIONALISMO EN AMÉRICA LATINA Y EL PAÍS La emergencia del nazismo y del fascismo en Europa, provocó que los estados latinoamericanos se sumen a uno u otro grupo de naciones del mundo que para mediados de siglo XX estaban enfrentadas. Alemania, Italia y Japón, representaban las naciones de gobiernos totalitarios y su intención era clara: avanzar su dominio sobre los demás estados del mundo; esa misma lucha hegemónica estaban iniciando aquellas naciones como Inglaterra y especialmente Estados Unidos.

Fig. 16. El Duce y el Führer,

máxima expresión del fascismo.

italiano


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En este contexto se produce la Segunda Guerra Mundial, que encuentra a Latinoamérica en medio de dos fuegos, pues algunos de los estados latinoamericanos estaban saliendo de una crisis (como el Paraguay y Bolivia), mientras que otros tomaban una posición de simpatía con los gobiernos nacionalistas europeos (la Argentina de Perón) y otros una complicidad directa con Estados Unidos e Inglaterra, cuyo poder imperial estaba cayendo. Ese nacionalismo europeo, sería repetido en Latinoamérica por caudillos que buscaban configurar en sus estados un sentido de identidad y nacionalidad, sin tomar en cuenta la variada integridad de pueblos y comunidades con sus propias culturas e identidades que hacen al continente. El caso boliviano, fue producido a partir de la revolución de 1952, cuando se estructura todo un sistema en torno al “campesino”, en torno a las culturas que habían sido dejado de lado o explotadas por la visión occidental que tenían quienes gobernaron el país.

2.14 LA DISCRIMINACIÓN RACIAL Y LA LUCHA CONTRA EL RACISMO EN LOS ESTADOS UNIDOS. EL APARTHEID EN SUDÁFRICA La “doctrina limpieza de sangre”, fue utilizada en España para acusar a quienes pretendían un cargo honorífico haciéndole pesar antecedentes sanguíneos de judíos o de moros. Este criterio, se profundizó entre los españoles y aquellos que llegados a América volvían a querer proseguir su vida en la metrópoli española. Sin embargo la situación fue más radical en la América colonizada y el criterio racista se mantuvo en Latinoamérica hasta épocas recientes –algunos autores sostienen que el racismo por el contrario está recobrando fuerza en la actualidad-. El racismo europeo estuvo profundamente teorizado, así cuando se manifestó de manera institucional –es decir bajo el dominio de un estado- su rigurosidad fue extrema. El nazismo de la segunda guerra mundial y su desprecio

racial a todo aquello “no alemán”, tuvo adhesiones en otras naciones europeas y –paradójicamente- en el país que representó la victoria sobre las ideas y acciones nazis: los Estados Unidos de Norteamérica. En los Estados Unidos, el racismo se manifestó en el desprecio y la discriminación a la minoría de origen afroamericano. La actividad del grupo racista Ku Klux Klan, se extendió desde antes de la primera guerra mundial hasta la actualidad.

Fig. 17. Sudáfrica 1989: “Esta playa es sólo para miembros de

raza blanca…”


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Si bien existieron manifestaciones contra el racismo en Estados Unidos, la lucha fue dolorosa y con pocos resultados, pues en la actualidad, cuando un presidente origen afroamericano está al frente de ese estado, en cuando se han reactivado más las corrientes de racismo, en especial en los estados del norte. Un caso particular fue el Sudáfrica. Desde 1948, en que asume el control del poder político del país, el Partido Nacional, conformado por descendientes de europeos. Se constituye la figura del apartheid, según la misma, existe una normativa para las personas “blancas” y otra normativa para las personas “no blancas”. En los hechos esta segregación creo ghetos para los “no blancos”. La carga de intencionalidad era contra los “no blancos”, fácil fue darse cuenta que por más normativa que existe la misma no limitaría la pesada carga discriminatoria en contra de la gran mayoría de Sudáfrica. Esa mayoría se reunió en torno al Congreso Nacional Sudafricano, entre cuyos dirigentes sobresalía Nelson Mandela, quien por causa de su lucha en contra del racismo tuvo que estar 27

años preso. A fines de la década del ochenta del siglo pasado Sudáfrica fue aislada por la comunidad internacional debido al racismo, en consecuencia se desmanteló toda la normativa del apartheid quedando abierta la posibilidad para que la población “no blanca” pueda participar en las elecciones de su gobierno por vez primera en su historia. Por vez primera un hombre originario de Sudáfrica, no blanco, Nelson Mandela, asumió la máxima instancia del poder de ese estado, culminando con ello uno de los procesos de racismo más fuertes en la historia de la humanidad.

2.15 NUEVAS ORIENTACIONES GEOPOLÍTICAS EN LATINOAMÉRICA Y EL MUNDO. NUEVOS ESCENARIOS, NUEVAS IDEOLOGÍAS Tuvieron que pasar bastantes años en Latinoamérica para establecer un nuevo orden continental, pues los gobiernos militares, el proceso neoliberal, fueron factores que iban contra el surgimiento de una nueva identidad latinoamericana. A mediados de la década del noventa, del siglo pasado, ya la estructura neoliberal y que privilegiaba una clase política, por encima de una sociedad, mostraba sus primeras fisuras.

Fig. 18. La cruz ardiente es uno de los símbolos del Ku Klux Klan. Ku Klux Klan (KKK) es el nombre que han adoptado varias organizaciones en los Estados Unidos de extrema derecha creadas en el siglo XIX, inmediatamente después de la Guerra de Secesión que promueven principalmente la xenofobia, así como la supremacía de la raza blanca, homofobia, el antisemitismo, racismo, anticomunismo, y el anticatolicismo. Con frecuencia, estas organizaciones han recurrido al terrorismo, la violencia y actos intimidatorios como la quema de cruces, para oprimir a sus víctimas.


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La caída del muro de Berlín había demostrado que no se podía sostener una ideología sin libertad. Estados Unidos logro vencer en la lucha titánica a las naciones soviéticas pero fue a un costo enorme que ya no estaría en condiciones de seguir manteniendo. Latinoamérica entonces reencuentra un rumbo que había quedado extravi ado casi 100 años atrás. La irrupción del movimiento popular en Venezuela, la caída de los gobierno neoliberales en la Argentina, con la consiguiente catástrofe, la asunción de un obrero a la presidencia del Brasil, la continuidad del socialismo chileno y finalmente la consolidación de un gobierno de izquierda representado en un indígena en Bolivia, significó un gran cambio en el continente latinoamericano. Este proceso quebró el multiculturalismo y dio paso a una interculturalidad, donde se revaloriza los conocimientos y la cultura de las comunidades originarias. Si el proceso neoliberal significó un proceso globalizador, hoy ese proceso está cuestionado, pues la globalización tuvo un fin económico, mientras que la interculturalidad busca una convivencia plena de iguales. A raíz de los cuestionamientos a la multiculturalidad europea, el crecimiento de las organizaciones que provocan segregación racial, las permanentes crisis económicas. Pareciera que los ojos del mundo se vuelcan a Latinoamérica pues mientras aquellos aspectos se desarrollan en el resto del mundo en el continente se aplican principios de igualdad, como nunca antes, se quiebran hegemonías y se establece un nuevo orden. Un orden que en el fondo al parecer se acerca más al ideal bolivariano de una sola patria.

RESUMEN DE LA UNIDAD Latinoamérica en varias etapas de su historia vio comprometida su existencia. La colonia a fuerza de trabajo y explotación casi acaba con todas las instituciones sociales de las comunidades preexistentes. El imperialismo tuvo las mismas características y buscó dejar páramos y eriales donde hubo riqueza en flora y fauna. La lucha del continente, en ambos casos fue contra un poder opresor externo, cuyas herramientas eran parte misma de su sociedad, de ahí que su lucha fue en los dos ámbitos, adentro y afuera. Los procesos mundiales de industrialización, masificación, ideologías, guerras mundiales, tuvieron su efecto en el continente, mas no fueron determinantes para el estado actual. América latina en la coyuntura presente deja de ser un continente de “esperanza” vieja retórica que nos mantuvo en niveles de subdesarrollo y se convierte en un referente económico, cultural, social y político del mundo.

Fig. 19. La interculturalidad una manera de conocernos

en el Otro.


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LA GEOPOLÍTICA DE AMÉRICA LATINA EN LOS INICIOS DEL SIGLO XXI: NUEVOS EJES Y ANTIGUOS LITIGIOS

Rodríguez U. Manuel Luis (2011). En: http://geopoliticaxxi.wordpress.com/2011/05/14/la-geopolitica-de-america-latina-en-los-inicios-del-siglo-xxi-nuevos-ejes-y-antiguos-litigios/ 14 de mayo. Prólogo La reflexión geopolítica acerca de América Latina en los primeros decenios del siglo xxi, no puede realizarse sin reconocer que la región latinoamericana avanza gradualmente hacia nuevos escenarios de interrelación en el orden global, hacia nuevos ejes geopolíticos y geoeconómicos, en un contexto de redistribución de las hegemonías tanto a escala global como en la región. La geopolítica latinoamericana contemporánea, aun no completamente desembarazada de los viejos fantasmas militaristas y germanizantes, se puede entender hoy como una herramienta conceptual estratégica para la toma de decisiones, lo que la obliga a ser a la vez, multidisciplinaria y prospectiva. Los problemas geopolíticos y los conjuntos de intereses que se entrecruzarán en el futuro previsible en el espacio latinoamericano, serán las problemáticas energéticas y medioambientales. La redistribución de las hegemonías en el escenario latinoamericano América Latina, encabezada por la potencia brasileña se encamina hacia un nuevo “contrato geopolítico y estratégico” con el resto del mundo, en un esquema planetario donde asistimos a la transición desde un orden global unipolar (antes dominado por la potencia imperial estadounidense) hacia un orden multipolar (donde emergen nuevas potencias mundiales como China, India, Europa y Brasil…). En este esquema regional, donde Brasil parece instalarse en el ejercicio de una hegemonía blanda (no invasiva ni territorial sino económica, política y tecnológica), las demás potencias subregionales (Venezuela, México, Perú, Chile, Argentina), corren con mayor o menor premura a tratar de instalarse en el nuevo orden planetario mediante distintas estrategias de integración e interdependencia. En el juego dinámico de la correlación de fuerzas y de hegemonías políticas y geopolíticas de la región sudamericana, observamos la formación de determinados ejes geopolíticos en torno a orientaciones de gobierno de distinta coloración ideológica. Así, existiría un eje geopolítico atlántico y progresista donde se articulan Venezuela, Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia y un eje del Pacífico conservador o neoliberal, donde se articulan Colombia, Perú y Chile. Pero, los ejes geopolíticos así descritos, no operan en el presente ni van a operar en el futuro en torno a la lógica de litigios territoriales (la mayoría de los cuales son diferendos heredados de guerras o conflictos del siglo xix), sino que se han articulado y se van a articular en el futuro previsible, en torno a problemáticas y a “conjuntos de intereses” asociados a las cuestiones energéticas y medioambientales.


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Al mismo tiempo, cabe observar que en materia de conflictos o diferendos territoriales o fronterizos pendientes en América del Sur, mientras éstos litigios aparecen completamente resueltos en la “vertiente atlántica” del subcontinente, en cambio en la “vertiente pacífica” continúan perviviendo entre Chile, Perú y Bolivia. Sin embargo, el nivel de intercambios y de integración económica existente entre estas tres naciones permite pronosticar que estos diferendos se mantendrán en el plano de la diplomacia bilateral e internacional y no se trasladarán al plano estratégico o militar. Estos ejes a escala regional se superponen además a las nuevas tendencias -actualmente en curso- de redistribución de las hegemonías a escala planetaria, donde la potencia estadounidense y Europa, como fuerzas articuladoras tradicionales de la geopolítica y la geoeconomía de Occidente, se enfrentan a la emergencia de nuevas potencias mundiales, como es el caso de la República Popular China e India, que en el mediano plazo apuntan a convertirse en potencias globales. Al tiempo que el nuevo orden global deja de ser exclusivamente “Estado céntrico”, la diversificación de actores internacionales, complejiza las arenas y abre nuevos escenarios de incertidumbre estratégica. Nuevos ejes geopolíticos en Americalatina. En este contexto global, podría afirmarse que la geopolítica del cono sur de América Latina (Chile, Argentina, Uruguay, Falklands/Malvinas) se juega entonces en tres ejes de ordenamiento: el acceso y presencia hacia el continente antártico y los espacios oceánicos australes; el acceso y control seguro de las fuentes energéticas y de recursos (agua, hidrocarburos, minerales, pesca). No obstante la persistencia de algunos escenarios de diferendo/conflicto de carácter fronterizo, la tendencia histórica que se manifiesta en América Latina en los recientes decenios, no es hacia los conflictos de raigambre territorial, sino hacia la construcción de esquemas de integración y modelos de relaciones multilaterales, en los cuales las problemáticas que pueden señalarse como los ejes articuladores de la nueva geopolítica sudamericana y latinoamericana, serían a lo menos los siguientes: a) el acceso y uso de las fuentes de recursos energéticos, en función de las necesidades provenientes del desarrollo de cada nación; b) el uso más o menos sustentable de los recursos naturales en función de criterios estratégicos y prospectivos, que aseguren el desarrollo de las generaciones futuras; c) la relación existente entre el modelo de desarrollo y el sistema democrático, en términos tales que el desarrollo (y el crecimiento que conlleva) se traduzca en condiciones socio-económicas y sociopolíticas democráticamente sustentables, disminuyendo las desigualdades sociales y territoriales; y d) el paso desde una economía basada en la explotación más o menos intensiva de recursos naturales, fuentes energéticas y materias primas no renovables (y por lo tanto tecnológicamente dependiente de economías más desarrolladas), hacia una economía basada en el conocimiento y en los servicios, en un contexto regional caracterizado por una tendencia profunda de transición a la modernidad y de cambio demográfico. Las nuevas problemáticas del desarrollo latinoamericano serán fundamentalmente geoeconómicas, es decir, producirán sucesivos choques y tensiones entre los espacios geográficos, territoriales y virtuales con las estrategias y despliegues corporativos, económicos, financieros y tecnológicos.


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UNIDAD 3: BOLIVIA, ESTRUCTURA SOCIOECONÓMICA EN LA REPÚBLICA


- Identificamos aquellos elementos sociales, políticos, económicos que hacen a la

constitución del estado boliviano y las ideas que más arraigo generaron en el transcurso del tiempo, denotando el aporte de los hombres y mujeres que participaron en el diseño y promoción de las mismas.

- Comprendemos los motivos que rodearon hechos históricos en la evolución de la sociedad boliviana, aclaramos estos pasajes a la luz de las ideas que se debatieron y pusieron en práctica.

3.1 ANTECEDENTES, INTERESES ECONÓMICOS Y POLÍTICOS DE LA COLONIZACIÓN ESPAÑOLA Al momento de producirse el choque de culturas en la colonia y más en el territorio hoy Bolivia, en el mundo existían dos sistemas políticos – económicos de gravitación enfrentados; por un lado el feudalismo, que mantenía su vigencia en España se encontraba y por otro el

capitalismo con su manifestación mercantilista, en el que se encontraban otras naciones europeas. De ahí que la principal motivación para la colonia española en las nuevas tierras tenía que ver con la extracción de recursos para mover la rueda del capitalismo que se asentaba en las otras naciones europeas (Inglaterra, Holanda, Alemania, etc.) La colonia española tiene la visión esta mentaría del feudalismo: nobleza, clero, pueblo llano. Esto determina características propias de cada clase o estamento y entre esas características está la propiedad de la tierra y sus vivientes para el servicio del propietario es decir una gran servidumbre. Mientras que los otros estados europeos adoptan la competitividad y la generación de riqueza como único límite que divide a las clases sociales. El capitalismo privilegia la producción masiva de productos acabados conllevando una movilización ascendente de las sociedades, quebrando con esto los clásicos estamentos del feudalismo.

Fig. 20. Pintura del Cerro Rico de Potosí-Bolivia


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En el caso de las organizaciones españolas asentadas en el actual territorio Bolivia, la figura feudal más radical fue la “encomienda”, sumándose a ella la “mita” como una prolongación de los servicios que se prestaban anteriormente a los reyes del incanato. Al igual que en el resto del continente hollado por el español, en la actual Bolivia, la colonia repitió sus instituciones de dolor, sean económicas, religiosas, jurídicas, políticas o culturales. La verticalidad del estamento social – religioso, es abrumadora. Las ciudades son fundadas principalmente como un interés económico, plata en Potosí, oro en La Paz, estaño y otros minerales en Oruro, luego vienen las ciudades que están fundadas para resguardo o para proveer a las anteriores, así Cochabamba, Santa Cruz, Tarija, etc. La ambición española, puso los pies de éstos en todos los lugares donde creían encontrar plata u oro. Luego donde creyó conveniente producir para abastecer a las primeras.

3.2 EVANGELIZACIÓN DE LOS PUEBLOS PLURICULTURALES DEL ALTO PERÚ. LAS REFORMAS BORBÓNICAS Y SU INCIDENCIA EN LOS INTERESES SOCIO-ECONÓMICOS Y POLÍTICOS DE LOS INDÍGENAS, CRIOLLOS Y MESTIZOS Si los militares, adelantados, conquistadores, fundadores, fueron el brazo armado de la colonia, la religiosidad representada en sacerdotes, frailes, monjas, obispos, arzobispos, vino a cumplir el rol de brazo espiritual. Sin embargo ¿en que se diferenciaban? En poco. Tanto militares como religiosos desplegaron bastante actividad a fin de subalternizar al indígena originario, en adoctrinar, en quebrar su espíritu de resistencia, en doblegar su voluntad e imponerle, nuevas costumbres, nuevos hábitos, nueva religión. Si bien bajo el pontificado de Alejandro VI y luego bajo el de Julio II, se prohibió la esclavitud en el nuevo continente descubierto por los europeos, el sistema no fue jamás dejado de utilizar bajo la colonia. Es más, bajo los postulados de Fray. Juan Ginés, la guerra contra los idólatras o no cristianos, justificaba en muchos casos la servidumbre del perdedor, que no podía ser otro sino el originario del nuevo continente. Esta manera de entender y aplicar esa realidad a nuestros antepasados tiene en Tomás de Aquino una justificación, casi religiosa: la teoría de lo “superior” y de lo “inferior”, lo divino – humano “superior” es consciente de su “superioridad” y manda, con derecho, al “inferior” quien es consciente de su obediencia al “superior”.

Fig. 21. “La boca del infierno”, visión indígena sobre la

explotación de los minerales en la colonia.


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Entonces entendemos, pero no brindamos razón, que quienes tenían la carga del desarrollo tecnológico, armas, conocimientos técnicos, etc., se considerasen “superiores” y adopten la figura de domino sobre los “inferiores”. De esta forma no es posible entender la colonia si n esta consideración de ser “superior”. España, los españoles, con propiedad y dominio sobre un ser “inferior”, la colonia o los indios americanos” dominados por un “ser superior”. Esta es una desigualdad inevitable de abordar y que justifica las relaciones existentes en el proceso colonial y durante gran parte de la república.

3.3 MOVIMIENTOS LIBERTARIOS EN EL ALTO PERÚ Y LA GUERRA CONTRA EL YUGO ESPAÑOL POR LA LIBERTAD E INDEPENDENCIA 1809 – 1816 El movimiento libertario originado en Chuquisaca el 25 de mayo de 1809, se sostiene legalmente en aquello que el historiador norteamericano Charles Arnade denomina el Silogismo Altoperuano: la idea básica de este silogismo señala que las colonias españolas en América tienen un contrato con el Rey de España, como el Rey de España está bajo arresto de Napoleón, en consecuencia las colonias no tienen contrato con nadie, pues nada señala que las colonias deban someterse a nadie que no sea el Rey, esto según se entiende de las Leyes de Indias. Legítimamente las colonias tienen sobradas motivaciones para emanciparse del sistema colonial. La discriminación, la imposición religiosa, social, económica, fueron factores que iban contra la colonia y que estaban suficientemente denotadas por los pueblos colonizados.

Fig. 23. Imagen que recuerda el movimiento libertario del

25 de mayo de 1809.

Fig. 22. Juan Ginés de Sepúlveda (Pozoblanco, Córdoba, 1490 – 1573) fue un humanista, filósofo, jurista e historiador español del siglo XVI, conocido por su defensa de la guerra justa contra los indios en oposición al padre Bartolomé de Las Casas.


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Todo esto estalló en una aspiración conjunta el 25 de mayo de 1809, ésta acción fue dirigida por criollos, Zudáñez, Monteagudo, Michel, doctores criollos que aprovecharon las desinteligencias entre la Audiencia y el Presidente de la mismas, para proclamar a título de fidelidad al rey, la libertad de estas colonias. La consecuencia inmediata del alzamiento en charcas se produjo en La Paz, donde manera abierta la Junta Tuitiva proclamó la independencia de la corona, aspecto que motivó al Virrey en Lima, mandar a José Manuel Goyeneche dominar la sublevación paceña y altoperuana en general. Luego de estos momentos iniciales, tuvo que pasar un año para que la acción tuviera continuidad esta vez desde la capital del virreinato de la plata un 25 de mayo de 1810. En Buenos Aires, se organiza una junta presidida por Cornelio Saavedra, que define desde el preciso momento de organizarse que la continuidad de su vida depende del aniquilamiento del virreinato del Perú, donde estaban concentradas la mayor cantidad de tropas españolas. Por este motivo es que se decide enviar “ejércitos auxiliares” al Alto Perú, donde estaban concentrados los monárquicos más radicales (Vicente Nieto en Charcas, Paula Sanz en Potosí y Goyeneche en La Paz) Sin embargo la acción de Buenos Aires –incluso antes de enviar sus ejércitos- tiene eco inmediato en el Alto Perú, así Tarija se adhiere a la acción el 18 de agosto de 1810, Cochabamba el 14 de septiembre, Santa Cruz diez días más tarde, luego Oruro, después Potosí. El 18 de noviembre de 1810 se produjo en las cercanías del río Suipacha, la primera de las batallas por la independencia Latinoamérica, en dicha batalla salen vencedoras las tropas criollas, en alianza con el primer ejército auxiliar argentino. A partir de ese hecho y durante 15 años después la lucha entre colonizado y colonizador no se detendría, en lo que hoy es Bolivia.

3.4 LA GUERRA DE GUERRILLAS UNA FORMA DE LIBERACIÓN DEL YUGO ESPAÑOL EN NUESTRO TERRITORIO Una de las características principales que tuvo la independencia boliviana fue la inexistencia formal de un ejército patriota, de una entidad institucional, y más por el contrario surgieron varias montoneras, unidades milicianas que hicieron las veces de guerrillas y establecieron, aquello que vino a denominarse “Las Republiquetas” Las republiquetas eran varias y se levantaron en todo el territorio altoperuano: Larecaja, bajo el mando de Idelfonso de las Muñecas, Cintis, bajo el mando de Camargo y Betanzos, Mizque y

Fig. 24. Los esposos Padilla – Azurduy, líderes

de las republiquetas.


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Vallegrande con Alvarez de Arenales, Tomina, Laguna y el Villar bajo mando de los esposos Padilla - Azurduy, Warnes en Santa Cruz, Lanza en la republiqueta de Ayopaya y una serie de caudillos alternos en la republiqueta de Tarija. La característica de éstas es que no tenían mayor subordinación, más por el contrario eran autónomas, su vinculación era coyuntural con Buenos Aires. Los límites de la republiqueta quedaban definidos por el área de acción de sus caudillos, es decir hasta donde llegaba la lucha de los líderes guerrilleros, llegaban los límites de la republiqueta. Por supuesto que éste era un parámetro subjetivo. Las republiquetas y sus guerrilleros eran sostén de los ejércitos auxiliadores argentinos, esa virtud, fue muchas veces negada por los mismos autores argentinos, a pesar de ello, es innegable que la presencia de estos guerrilleros fomentó la esperanza de independencia en la actual Bolivia. Esta acción –la guerrilla – republiqueta- tendría que generar en cada una de las regiones luego constituidas en Bolivia, una cantidad de matices idiosincráticos que se convertirían en el primer desafío para conformar estado, en tiempos del nacionalismo, y que luego desembocaría en la conformación del Estado Plurinacional.

3.5 EJÉRCITOS LIBERTADORES Y EL ESTABLECIMIENTO DEL ESTADO NEOCOLONIAL Además de los 4 ejércitos auxiliares argentinos, ingresaron en el Altoperú los ejércitos dirigidos por Bolívar y Sucre. Dichos ejércitos encontrarían tan sólo unidades desarticuladas de lo que fuera el ejército colonial, pues la acción de los criollos y sus guerrillas tuvo su efecto. El primero en pisar estas tierras fue el Mariscal Sucre, quien desde el primer momento se enfrentó a una duda bastante complicada: ¿este territorio y sus habitantes pertenecían al Perú, a la provincia del Río de La Plata o así mismas? Esta pregunta la haría a los representantes de cada una de las provincias que habían luchado durante el tiempo de la independencia. La convocatoria para esa Asamblea fue lanzada el 9 de febrero de 1825, la reunión se consolidó en Chuquisaca, el 6 de agosto y los representantes de las provincias que combatieron durante 16 años, respondieron que estas provincias no pertenecerían al Perú, tampoco al Río de la Plata, por lo mismo se constituían en república independiente. Luego de este acto, se consagraría la libertad, al momento en que Simón Bolívar entregaría la primera constitución política del nuevo estado. Acá surgía el estado – república, conformado por una masa inmensa de miembros que no serían reconocidos todavía y cuyo destino estaría en poder de una clase social, que detentó el poder incluso desde la época colonial. El ingreso de los ejércitos de Bolívar y Sucre, coincidió con el cierre de actuaciones del último bastión del ejército colonial, en la batalla de Tumusla. Desde esa última acción hasta


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que Bolivia se erigiese en república, un pensamiento dominaba en todos los actores que intervinieron en esas fechas: la independencia era total, no más dependencia de nadie. De ahí que cuando se preguntó a los representantes de las provincias participantes de la asamblea reunida en Sucre, si querían pertenecer a la Argentina o al Perú, a respuesta haya sido la misma, pertenecer a nosotros mismos.

3.6 REFORMAS BAJO LOS GOBIERNOS DE BOLÍVAR Y SUCRE Las primeras medidas hechas bajo la presidencia de Bolívar y Sucre, fue abolir el tributo indígenal y la prohibición de servicios personales que los indígenas debían prestar a los dueños de las tierras que trabajaban. Declararon la libertad de todas las personas y la prohibición de la esclavitud. Las reformas económicas, las de tributación, fueron las más complejas hechas bajo el gobierno de Sucre. También bajo el gobierno de Sucre, se dispuso la eliminación del sistema de cargo público, por subasta, es decir que se eliminaba la posibilidad económica y en su lugar se privilegiaba la virtud o la competencia. Esas acciones no fueron del agrado de las clases ilustradas del país, pues se les arrebataba el principal ingreso, impuesto indigenal, se entregaban las tierras a las comunidades originarias, sin recompensa alguna para quienes eran poseedores y se les exigía una condición novedosa para ser funcionario, el mérito, aspecto que de por sí era cuestionable para ellos que entendían la función pública como fruto de un entorno familiar o como compra. Finalmente el debate más fuerte tuvo que ver con la iglesia, pues se le confiscó bienes, incautó diezmos, exilió órdenes, ordenó a sus autoridades eclesiásticas, etc. Esa fue una de las reformas más extremas del gobierno boliviano en sus inicios republicanos. Por lo mismo es que, las mismas clases ilustradas que detentaban el poder desde la colonia, en connivencia con la iglesia, vieron afectadas otras más de sus –hasta entonces- exclusivas prerrogativas.

3.7 DEL CICLO DE LA PLATA AL ESTAÑO Posterior a estos dos gobiernos resalta la figura de Santa Cruz, quien logró, en poco tiempo, concretar un viejo anhelo, peruano, la unión de ese estado con Bolivia, en el hecho más concreto de todos los que pudo prever el pensamiento bolivariano. La confederación Perú – boliviana fue una efímera realización del sueño bolivariano. Su gobierno, atacado desde adentro y desde afuera, fue objeto de críticas por parte de la historia boliviana, sin embargo queda como un hecho de incontrastable magnitud política y filosófica. Y su ideología, aún remonta los siglos

Fig.25. Manuel I. Belzu, interpelador de la sociedad republicana en sus inicios.


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buscando nuevos líderes que repliquen su experiencia. Tras el gobierno crucista se consolida en su autonomía el estado boliviano, (gobierno de Ballivián). Se configura un nuevo Estado. Se comienza la explotación del guano y el salitre, se realiza un censo de población; se reorganiza la explotación de metales en Bolivia, en especial de la Plata, de las 10 mil minas dejadas en abandono, del período colonial se tenían hasta la llegada de Ballivián 150 en producción (según las estadísticas de José M. Dalence). Entre 1840 y 1899, que puede ser –en términos generales- el espacio en que se desarrollan los dos ejes económicos más importantes del estado boliviano que estudiamos, se suceden una cantidad apreciable de intelectuales que bosquejaron, cada uno desde su posición una postura de Bolivia, estado que buscaba construirse en torno a la figura republicana. De este grupo de intelectuales cabe resaltar, por su aporte al conocimiento del país José María Dalence quien fue el primero en hacer de las estadísticas una forma de ver a Bolivia. La superficialidad del pensamiento militar dominante en el inicio de la república, no puede entenderse sino como una aspiración de logro personal, nada colectivo, menos pensando en el Estado. Los pocos civiles que intervinieron quedaron atados a sus limitaciones, pues no pudieron contrarrestar el tamaño grotesco de las acciones de Melgarejo o Morales. El país generaba –a no ser de manera excepcional- grupos de intelectuales dedicados a la política en su coyuntura, sin prever aquellos factores que podían participar de la vida del país y que sin embargo estaban ajenos a la vida misma del estado. Todo el que podía escribir y difundir alguna idea, era considerado intelectual, si tenía el mérito de la constancia, podía llegar al parlamento ser reconocido como gran figura de la literatura o la historia. Sin embargo su capacidad era limitada si es comparada con lo que sucedía con los intelectuales de nuestros estados vecinos. Incluso si comparamos su accionar con lo que generaron los intelectuales bolivianos, tras el período del eje económico: plata – estaño, el accionar de los hombres bolivianos de mediados del siglo XIX, fue mínimo. Cabe destacar, como excepción, el pensamiento de Nataniel Aguirre, Emeterio Villamil de Rada, Isaac Tamayo y Agustín Aspiazu. Finalmente gracias al aporte de José A. Palacios, es que se llega a conocer las proporciones geográficas de Bolivia.

3.8 SALITRE Y ESTAÑO El último de los gobiernos militares del primer tiempo republicano y cuyas consecuencias son sentidas hasta la fecha, fue el de Hilarión Daza.

Fig. 26. Mapa de Bolivia, pocos años antes de comenzar a perder extensos territorios, Bolivia había conocido la

extensión de su territorio.


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Su gobierno tuvo el infortunio de cruzarse con una de las sequías más fuertes en el país. Esto trajo de manera pareja una de las situaciones más caóticas en la historia del país, la hambruna en el valle cochabambino, en Sucre y en Oruro, tocaba niveles nunca antes registrados. Sumado a ello Daza tuvo que enfrentar el movimiento federal de Andrés Ibáñez en Santa Cruz, esto atentaba –según la visión occidental y centralista del país- la unidad del estado boliviano. El movimiento de Andrés Ibáñez, respondía a una necesidad que desde el primer momento de fundar Bolivia, se mostró. Cada región, en un afán de desarrollo local, encontró una manera de alcanzar su ritmo, ajeno al ritmo de la capital del estado, y esto fue reforzado por la memoria larga de las republiquetas, entes autónomos de gestión. Así el movimiento de Ibañez, tuvo respaldo popular, incluso llegó a imprimir papel moneda, creó impuesto y esto no fue visto con agrado por el gobierno central que en su arremetida, no paró en debatir las ideas puestas en práctica en Santa Cruz. Pues el gobierno central sólo veía en ese movimiento una limitación a su poder político. Daza además de esta falta de criterio para con la política interna, no pudo prever los sucesos que acarrearían a la guerra del pacífico. La situación del país, la falta de previsión del gobierno, la irresponsable actitud asumida frente a los desafíos que planteaba el vecino chileno, fueron suficientes motivos para no poder desarrollar una respuesta adecuada en ninguno de los frentes, es así que el Salitre, que debía convertirse en un recurso que alivianase la falta de riqueza en el país, se convirtió en uno de los factores que hizo de Bolivia un dolor desesperado en tres años de guerra. Cabe recordar que previo a la guerra del Pacífico, Bolivia estaba plenamente asentada, para su producción económica en los andes, es decir de la extracción de metales, especialmente la plata, los valles eran productores agrícolas para mantener las minas, mientras que la comunicación con el oriente y el sur era excepcional y la carga comercial, más todavía. Producto de la sequía, que desde 1878 hasta 1880 azotó el país, momentos de poca o ninguna producción, momentos de hambre y miseria, la atención del poder central a estas apartadas regiones tuvo otro interés, el ver desde ahí la forma de abastecer a las zonas deprimidas del occidente, sin embargo para ese fin no existían caminos. En este contexto se sucedió la guerra del Pacífico. De este período republicano, poco grato queda por decir, pues la miseria y el dolor fueron frecuentes. La historia oficial dice que la culpa fue de los gobernantes, sin embargo las cargas mayores las llevó el pueblo en general, que además de ver humillada su bandera en el contexto externo, vio minadas sus fuerzas por los desastres naturales de esos años. Por lo explicado antes es difícil afirmar que haya existido una propuesta ideológica propia en esta coyuntura. Que algún intelectual se destaque, que alguna propuesta surja.


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Si algún aspecto positivo puede sindicarse al gobierno de Daza es haber comenzado las gestiones para la construcción del ferrocarril en Bolivia. La construcción de los ferrocarriles, significarían un gran avance para Bolivia, esto se daría a partir de la concepción del estado boliviano, como un centro de abastecimiento de materias primas.

3.9 CONSERVADORES. REBELIONES INDÍGENAS COMO CONSECUENCIA DE LA USURPACIÓN DE TIERRAS Y REVOLUCIÓN FEDERAL. A partir del gobierno de N. Campero y por un lapso de 20 años, la situación cambiaría en Bolivia, pues el establecimiento del sistema de votación, para elegir a la máxima autoridad del país, un concepto básico democrático, consolidaría una estabilidad social, económica necesaria para el país. Es cierto que dicha estabilidad fue a un alto costo pero según las circunstancias no se podía esperar más y en todos los casos, era preferible, a seguir como hasta entonces se estaba. Ese clima de estabilidad permitió el surgimiento de partidos políticos. Partido constitucionalistas que en el fondo vino a representar el statuo quo, del poder conservador. Frente a ellos el partido liberal que propugnaría varias acciones hasta lograr el movimiento federal en 1899, basado en la cuestión de la capitalía. En el orden político, la tensión fue permanente, sin embargo de ello, puede calificarse a dicho período (1884 -1899), como el de mayor estabilidad social en el siglo XIX. Una característica principal de los conservadores, fue querer a toda costa, zanjar el conflicto con Chile, para ello desde el primer momento buscaron alcanzar un acuerdo. Consecuentes con este fin, el gobierno de Gregorio Pacheco firmó el pacto de tregua con Chile, cediendo en los hechos la costa boliviana y una porción de territorio que nunca más se recuperaría. De igual manera y en un intento de compensar la pérdida de la costa pacífica, los gobiernos conservadores impulsaron el avance de conquistas sobre el río Paraguay, Campero lo hizo con el epónimo esfuerzo de Daniel Campos a travesando el chaco y consolidando un puerto sobre la cabecera de dicho río (Puerto Pacheco). Aniceto Arce, con una visión más pragmática, construyó el ferrocarril que une Oruro con las costas del Pacífico, pues las empresas que buscaban el río Paraguay habían demostrado ser insostenibles. Para ello Arce no dudó en lograr acuerdos con industriales chilenos.

Fig. 27. La Revolución Federal arrancó en La Paz, fue un

eufemismo para la toma del poder.


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Finalmente los dos últimos presidentes del proceso conservador Mariano Baptista y Severo Fernández cerraron los acuerdos finales con Chile, sobre la cesión de derechos en la costa y, ya por la caída del precio de la plata, ambos gobiernos se vieron en circunstancias difíciles de adelantar el progreso del país y fueron administraciones casi de rutina, sin mayores connotaciones. Un rasgo de este proceso político, fue que los gobiernos se apoyaban en un pequeña parte de la población del estado (quienes sabían leer, escribir, tener determinada renta, no mujeres, no indígenas) Esta pequeña oligarquía regía sobre el estado generando una discriminación expresa a la gran mayoría de bolivianos. Los conservadores veían a Bolivia como un espejismo europeo, buscaban implantar en medio del altiplano un paisaje de París y esto no podía rendir buenos frutos, pues la característica de la población, su situación económica, no era comparable a las aspiraciones europeas de la élite criolla. A partir de este principio europeizante de consolidar territorio, producción, riqueza se produjo un avasallante ingreso en los territorios del chaco, con la consiguiente violencia y desalojo de las comunidades originarias que allí habitaban. Este avanzar de los hacendados, encontró en la resistencia indígena enarbolada en Kuruyuki (1892) su más importante y última afrenta al proceso civilizador occidental. La batalla de Kuruyuki, en realidad fue una matanza de indígenas, fue una muestra del ímpetu occidental por “colonizar”, aquello que no era todavía suyo y en este caso las acciones de genocidio que se dio con dicha matanza, contó con el apoyo implícito del gobierno central, que actuó con indiferencia ante un hecho por demás sangriento y sin mayor sentido que el de avasallar tierras, generalmente para pasto de ganado, mientras los indígenas luchaban por defender su derecho a la vida. El hecho de Kuruyuki, mostró una realidad que los gobiernos que se sucedieron en el poder y la élite que dirigía este país, habían querido evitar, cuando menos habían tratado con indiferencia: Bolivia era un país por excelencia indígena, con una población predominantemente rural. Mientras que las élites del país, querían y –en veces lograban- vivir de espaldas a esta realidad. La acción del líder guaraní Tumpa, en Kuruyuki, precedía con casi 8 años otra acción, más organizada, más violenta y con mayores consecuencias: el levantamiento general de los pueblos aimaras, dirigidos por Pablo Zarate, el “Willka”. El levantamiento de Zarate, coincidió con uno de los episodios más sangrientos de la vida boliviana: la revolución federal.

Fig. 28. La matanza de Kuruyuki demostró la ninguna importancia que para el sistema republicano tenían

los indígenas.


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Los motivos de la rebelión de Zarate, no varían substancialmente con aquellos que generaron los primeros levantamientos indígenas, en época de colonia, o en tiempos de república. La coyuntura hizo que el movimiento indígena se vea sumido bajo el telón sangriento de la revolución federal, y en esa situación, la élite urbana paceña logró dominar el movimiento indígena proponiéndole una alianza, alianza que duró tan sólo el tiempo en que se obtuvo los objetivos de esa élite, tras ello los dirigentes de la revolución paceña, volvieron sus ojos para acabar con la rebelión indígena pues ese poder –como estaba- significa un permanente desafío para el nuevo orden constituido. Zarate, no tuvo más que supeditarse al poder de los nuevos dueños de la situación estatal, fue acusado por los crímenes de Mohoza (donde murieron soldados paceños liberales a manos de indígenas) y luego ajusticiado, lográndose con esto cortar la cabeza la movilización indígena más fuerte de las que tuvo Bolivia durante su etapa republicana.

3.10 EL PROCESO LIBERAL Y LA NUEVA CONCEPCIÓN DEL ESTADO El proceso liberal, tiene sus ideólogos actuando desde mucho antes que tomen el control del gobierno. Eliodoro Camacho, propuso las bases liberales ya desde tiempos de la guerra del Pacífico y desde entonces hasta la toma del poder, su accionar fue en torno al cambio del Estado, en sus estructuras económica – política, principalmente. Desde abril de 1899, la causa del partido liberal, es decir la toma del poder central, se concretiza con el derrocamiento –vía armas- del último gobierno conservador. La bandera de federalismo, utilizada por el partido liberal, en el fondo encubría un doble discurso, pues la intención escondía la toma del poder y ya que el partido liberal estaba asentado en la ciudad de La Paz, el consiguiente traslado de la sede de gobierno de Sucre a La Paz. La revolución federal, dejó de utilizar ese concepto, ni bien tomó el poder, pues el federalismo implicaba distribución de poder y el partido liberal, como el conservador antes y otros partidos después, jamás tendrían la intención de ceder poder, más por el contrario buscaban centralizarlo y en este caso en La Paz. Otra característica del gobierno liberal, desde un inicio, fue el apoyo a la extracción del estaño –por sus altos precios en el mercado- consolidando con ello una nueva estructura económica y cambiando el eje económico que antes estuvo entre Potosí y Sucre, por el de Oruro – La Paz.

Fig.29. Ismael Montes, la figura del liberalismo en Bolivia, bajo sus gobiernos se impulsaron fundamentales reformas

en el Estado boliviano.


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Los nuevos potentados mineros no optaron por la acción política directa, como fue una constante de los potentados de la plata y su vinculación estrecha con la clase y dirigencia política. Estos nuevos mineros crearon una clase intermedia para desarrollar sus actividades políticas, así su intervención fue indirecta pero igual de efectiva. Esta subclase intermediaria fue denominada como la “rosca” (Mesa G. Carlos; 1998, 492). El otro brazo productor, el agro, no modificó su relación con la sociedad y su estructura misma, pues se mantenía una estructura feudal en las haciendas y la producción seguía el ritmo de la época colonial, ninguna nueva tecnología. Así como los conservadores tuvieron 20 años de gobierno, los liberales gozaron del mismo tiempo, en el que bajo el ropaje democrático, se eligieron gobiernos del mismo partido. En cuanto a las relaciones internacionales, bajo el principio liberal del pragmatismo, se negociaron y cerraron todas las cuestiones pendientes de litigios con nuestros vecinos, así con Chile se hizo el tratado de 1904 y con el Brasil, el tratado sobre el Acre, lo mismo sucedió con el Perú. Ideológicamente estos 20 años dejaron figuras discutidas hasta la fecha, entre ellas Franz Tamayo, Alcides Arguedas, Enrique Finot; especialmente el pensamiento de Tamayo trascendió su tiempo, pues fue entre los primeros en mostrar al indígena boliviano, como la realidad más completa de nuestra vida republicana. Las ideas de Tamayo rescatan las costumbres, la vida y los sistemas de gobierno de los indígenas y considera que ellos son los más adecuados para la vida del país. Identifica en el indígena al ser que resguarda la energía nacional que sólo desde su aceptación y desarrollo, el estado superaría el nivel de subdesarrollo en que se encuentra. Por el contrario, su contemporáneo, Alcides Arguedas, considera que los indígenas son una carga para el desarrollo del país. Un lastre que debe ser eliminado pues nada bueno puede obtenerse de una “raza vencida”, a decir del propio Arguedas en su obra más trascendental: Pueblo Enfermo. Arguedas fue implacable al tiempo de encontrar errores en el pueblo boliviano, su historia de Bolivia es una serie de acciones de corrupción, dolor, traición y fracaso, y esa imagen se ha proyectado en todo el mundo, de ahí que en la conciencia del boliviano se constituya en un

estereotipo negativo, aspecto que se arrastra todavía.

El aliento del poder liberal ayudó a construir nuevas

Fig. 30. Adela Zamudio principal representante del pensamiento

liberal femenino boliviano.


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realidades, entre ellas, el movimiento feminista, que tuvo en Adela Zamudio su vehemente representante. El pensamiento de Zamudio denuncia la situación subalternizada de la mujer, por el sólo hecho de ser mujer.

Sus artículos, así como su poesía, trascienden su tiempo y es vista como la más fuerte intención de emancipar a la mujer de su dominio machista. También bajo el gobierno de los liberales es que se produce la primera organización obrera del país: la Unión Gráfica Nacional. Esta célula de obreros organizados tendría efectos sobre el desarrollo del partido socialista, fundado inicialmente en 1914. Luego vendría la creación de la Sociedad Mutualista Ferroviaria y la Federación Obrera, como avanzadas de las ideas socialistas y cuyo pliego principal estaría vinculado a los logros de otras agrupaciones obreras en el continente: 8 horas de trabajo, jubilación, descanso dominical, prohibición de trabajo de niños y mujeres embarazadas, etc. La iglesia católica fue otra área donde el liberalismo imprimió su huella, se introduce la educación laica, se crea la escuela nacional de maestros, se proscribe la educación religiosa, acciones como el matrimonio civil, por consiguiente el divorcio, la eliminación del fuero eclesial y la anulación de los presupuestos públicos destinados al pago de la jerarquía religiosa, hizo que la lucha entre la iglesia y el partido liberal, fuera abierta y cruda.

Finalmente, la creación de la escuela nacional de maestros, es uno de los aportes más significativos del proceso liberal, dicha institución, hasta la fecha mantiene su vigencia y con ello sigue generando consecuencias que fueran impensables de no haberse previsto esta acción a inicios del siglo XX.

RESUMEN DE LA UNIDAD Es innegable que bajo los gobiernos de Sucre, Santa Cruz, Belzú y el partido de los Liberales, Bolivia avanzó lo que en los otros gobiernos no pudo. Sucre, fue el arquitecto del Estado, más sólo su diseño no fue suficiente. La acción inmensa de Santa Cruz, al unir dos estados y consagrar en un tiempo el pensamiento bolivariano, fue el hecho más notorio de cuantos se pudo vivir al inicio de la república. Belzú nos mostró –algunos ven en esto más demagogia que sinceridad- que Bolivia no era sólo el centro urbano, que el campo y sus pobladores hacían a la fuerza más grande del país. Su aporte al estado está en incorporar, así sea momentáneamente -como hizo antes el crucismo- un sector inmenso de población que todavía lo reivindica como el autor de ese propósito, consolidado hoy. Finalmente el gobierno de los liberales desarrolla, o consolida, aquellos aspectos que hacían al conjunto de la sociedad y no tan sólo al partido. Es cierto que muchas de las medidas son populistas y tuvieron como finalidad hacer más amplia su legitimidad, pero aún con ello, el aporte de este gobierno a la construcción del estado, desde un enfoque político – filosófico es innegable.


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Sin duda fue el esfuerzo colectivo más importante hasta entonces hecho en la historia nacional, las instituciones creadas bajo el techo liberal, muchas, se mantienen y sus consecuencias aún se dejan sentir.

LECTURA COMPLEMENTARIA

PROCLAMA DE LA JUNTA TUITIVA “Compatriotas: Hasta aquí hemos tolerado una especie de destierro en el seno mismo de

nuestra patria; hemos visto con indiferencia por más de tres siglos sometida nuestra primitiva

libertad al despotismo y tiranía de un usurpador injusto que, degradándonos de la especie

humana, nos ha mirado como a esclavos; hemos guardando un silencio bastante parecido a

la estupidez que se nos atribuye por el inculto español, sufriendo con tranquilidad que el

mérito de los americanos haya sido siempre un presagio de humillación y ruina. Ya es

tiempo, pues, de sacudir yugo tan funesto a nuestra felicidad, como favorable al orgullo

nacional español. Ya es tiempo, en fin de levantar el estandarte de la libertad en estas

desgraciadas colonias, adquiridas sin el menor título y conservadas con la mayor injusticia y

tiranía. Valerosos habitantes de La Paz y de todo el Imperio del Perú, revelad vuestros

proyectos para la ejecución; aprovechaos de las circunstancias en que estamos; no miréis

con desdén la felicidad de nuestro suelo, ni perdáis jamás de vista la unión que debe reinar

en todos, para ser en adelante tan felices como desgraciados hasta el presente. En la ciudad

de Nuestra Señora de La Paz, a los 27 días del mes de julio de 1809”.


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UNIDAD 4: NUEVAS ESTRUCTURAS POLÍTICAS -SOCIALES Y CONDICIONES ECONÓMICAS Y LA CULTURA DEL DIÁLOGO


- Definimos las características contextuales que hicieron de Bolivia un estado en el que

los planteamientos “modernizantes” emanados de Europa, no lograron echar raíz de progreso colectivo. Elementos que hacen a la conformación del estado en su relación exterior y en su miramiento interno, son desglosados.

- Profundizamos en el conocimiento de las relaciones, estructuras e instituciones del estado boliviano en su andamiaje dentro de los últimos 50 años; encontramos en dicho conocimiento los argumentos que hicieron al desarrollo ideológico - histórico del estado.

4.1. BOLIVIA DURANTE EL PRIMER CONFLICTO BÉLICO MUNDIAL Y SUS CONSECUENCIAS SOCIOECONÓMICAS

Se denomina “Paz Armada” al clima y tiempo ocurrido en Europa entre fines del siglo XIX y el inicio de la primera guerra mundial (1914). La consolidación de los estados europeos, significó una consolidación de territorios y esto demandó establecer fronteras fijas; de ahí a la confrontación, no fue más que un paso. Una consecuencia de esta política en Europa, fue –por ejemplo- la completa colonización del África. En el caso boliviano la crisis mundial coincidió con una aguda sequía en los valles, por dos años, (1911 – 1912) esto significó una disminución de ingresos en el país, que de manera inmediata significó más pobreza. Sobre este panorama, el cacique de Pacajes Martín Velásquez se levanta en armas reivindicando territorio en la zona altiplánica, hecho que es ahogado en sangre por la represión estatal. En realidad el levantamiento indígena mostraba la consistencia del pedido indígena del país: tierras y autogobierno. Bolivia no interviene en el conflicto mundial aunque a partir de 1916 el gobierno de Ismael Montes (segundo periodo) rompe relaciones con Alemania y se alinea a Inglaterra y Estados Unidos.

Fig. 31. Los indígenas fueron brazo armado de varios

movimientos políticos previos a la Revolución Nacional.


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Un rasgo del segundo mandato de Montes es la centralización de la emisión monetaria en un solo ente financiero. Sin embargo el proceso liberal montista era ya insostenible y figuras como Tamayo, Pando y Salamanca crean el Partido Republicano que tomaría el poder, mediante revolución el año de 1920, siendo electo presidente una figura que pocos consideraban presidenciable en ese momento: Bautista Saavedra. El caudillismo encarnado en el pensamiento Saavedrista significó una reorganización de las fuerzas obreras del país que lograron como hito fundamental el inicio y consolidación de la primera huelga general indefinida, demostrando el poder del obrerismo nacional. Paralelo a ello Saavedra concede derechos a la niñez trabajadora, así como no interfiere en la organización del Partido Obrero Revolucionario, que sería uno de los canales por donde se manifestarían todas las energías del obrerismo nacional.

Estas acciones hicieron que el gobierno republicano construya un nuevo marco legal del obrero extendiendo su influencia incluso hasta la llega del Código del Trabajo, en el gobierno de Busch. Un aspecto negativo del gobierno republicano fue la masacre de Uncía, motivada por el levantamiento de los indígenas ante el pedido de siempre: tierras para los indígenas. Fue Saavedra un hombre de carácter fuerte, más sin embargo, no le alcanzó ni la energía ni el tiempo, pues apenas pudo terminar su gestión. Con el fin del saavedrismo, llegó el tiempo previo a la guerra del chaco, nuevos actores intervenían en el debate nacional, uno de esos nuevos actores fue Hernando Siles, quien evitó la guerra de una manera diplomática, no siendo suficientes sus esfuerzos pues tras el abandono que hizo de la presidencia y por una convocatoria a elecciones asumió la primera magistratura Daniel Salamanca, con quien se desarrollaría en todo su dramatismo la Guerra del Chaco. Como si de un sino trágico se tratase la guerra del chaco, encontró a Bolivia en una de sus situaciones financieras más difíciles. Similar situación acaeció cuando Bolivia afrontó las guerras del Pacífico del Acre. La depresión mundial del año 1929, hizo que el precio de los minerales se redujese a su mínimo histórico y por lo mismo la exportación quedo semiparalizada, con el consecuente despido de obreros mineros, que fueron a engrosar la situación de pobreza en las urbes bolivianas, en especial La Paz.

Fig. 32. Franz Tamayo, considerado el intelectual más

influyente de la primera mitad del siglo XX.


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Si alguna superioridad tuvo Bolivia en la contienda del chaco fue el haber podido en dos y hasta en tres oportunidades rehacer sus fuerzas gracias al vitalismo de su población, lo demás fue tristeza mezclada con un poco de heroísmo y mucha improvisación. ¿Qué nos deja la guerra del chaco?, por vez primera el boliviano del sur, norte, este y oeste pudo verse a la cara y reconocerse en la misma tragedia. Nunca mejor dicho que el chaco fue el crisol donde se construyó la nueva nacionalidad, esa nacionalidad que haría la revolución nacional o que viendo desde otra perspectiva, tuvo el valor y la fuerza para acabar con la cadena de gobiernos instalados por la voluntad de un grupo élite de la sociedad que tomaba al resto de manera despreciativa. Esa generación que salió de las trincheras de la guerra reconoció que para construir estado el derecho no podía ser ni pertenecer a unos cuantos, también debían participar éstos soldados que habían combatido y quienes –tal vez con mayor legitimidad- podía construir el nuevo estado. Fueron esos soldados los brazos de la nacionalización de las minas, de la reversión de las tierras a las comunidades de origen, fueron esos brazos quienes construyeron también la experiencia de Warisata, experiencia en la educación indígena sin parangón en la historia nacional, esta experiencia sembró algunos principios como que la libertad sólo viene como consecuencia de la educación; comprobaron los principios indígenas del autogobierno, la autogestión (un ayllu educativo), promoción de valores como solidaridad, reciprocidad, productividad, es decir que la escuela se auto sostenía La experiencia de Warisata sirvió para formar a nuevos profesores que trabajarían con indígenas en otras regiones del país, desde la zona andina a diferentes puntos del oriente, siempre fomentando el espíritu colectivo. Pero dicha experiencia terminaría pronto, pues el educar al indígena no era visto con buenos ojos para la clase dominante de la década de 1940, así que se utilizó todo pretexto hasta que por fin se terminó con el experimento de Warisata, que más allá de efímera vida, logró levantarse como un hito educativo del país.

Fig. 33. Reclutando el nuevo ejército boliviano para la Guerra

del Chaco.


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4.2. SINDICALISMO CAMPESINO: EN TORNO A LA PROBLEMÁTICA DE LA TIERRA, EL DERECHO A LA ORGANIZACIÓN, A LA EDUCACIÓN

La lucha campesina en Bolivia comienza a articularse en torno a la movilización de los pueblos indígenas, pues de esas movilizaciones el campo extrae sus argumentos y sus protomártires. Así reivindican como suyas las movilizaciones de Tupaj Amaru y Tupaj Katari, de Ignacio Muiba, Andrés Guayacho, Zarate Willka, Santos Marka. A partir de la experiencia de sindicalización campesina en Ucureña el año de 1936, bajo el gobierno del socialismo militar, el campo se agrupó en Sindicatos, estos a su vez integran una subcentral, ésta una central y de ella a la Federación Departamental, terminando esta cadena con la Confederación Sindical Única. Esta estructura engloba a más del 40% de la población boliviana en la actualidad. Según Rivera Cusicanqui “La pesadilla del asedio indio sigue, pues, incomodando el sueño del criollaje boliviano. Si éste –através de sus intelectuales, de sus partidos, de sus instituciones culturales- acepta el desafío que le plantean los movimientos indios, quizá para contribuir de mejor modo a la superación de los lastres ideológicos heredados del 52 y a la elaboración de un nuevo pensamiento político y un nuevo discurso histórico capaz de reconocer en el abigarramiento del país no ya una verdad angustiante, sino la manifestación positiva y enriquecedora de un milenario proceso humano de domesticación del espacio, jalonado por múltiples y complejos procesos de ruptura, resistencia y creatividad colectiva” (Rivera S. La Paz; 1986) La identificación del campesino con el indígena se sostiene en torno a la exigencia de siempre de aquel: tierra y territorio. Este aspecto haría a la vida misma del campesino instrumentalizando la sindicalización, para concretar la realización de sus demandas sectoriales de manera orgánica. El movimiento campesino, así como otras facetas del desarrollo boliviano, no fueran posibles de no haber intervenido dos actores centrales que facilitaron esos escenarios: David Toro y Germán Busch. Ambos militares salidos de las trincheras del chaco, posibilitaron el surgimiento y organización del movimiento campesino. Especialmente Busch logró avances en la materia constitucional, con la CPE de 1938, que se mantuvo, con pocas variantes hasta 1967, pero que en su espiritualidad social se mantiene hasta la fecha. Esa etapa histórica del estado, denominada “Socialismo Militar”, fue también un espacio donde las fuerzas civiles lograron conjuncionarse en torno a ideales que hacían de ellos partidos. Así José Antonio Arze crea el PIR, movimiento partidario de alta influencia hasta el

Fig. 34. Se declara Día del Campesino para reivindicar la acción de este sector excluido de las políticas estatales.


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momento de la revolución nacional; Oscar Únzaga de la Vega funda Falange Socialista, Tristán Maroff crea el Partido Obrero Revolucionario. Además el gabinete ministerial de Busch estaría integrado por varios dirigentes que con el andar del tiempo fundarían el MNR. Un efecto explícito del socialismo militar, está vinculado a la preocupación del indígena, del campesino. Este hecho hacía innegable su presencia en el ámbito político, aspecto que se concretó con la organización del primer congreso indigenal, bajo el gobierno de otro militar progresista, como fue Gualberto Villarroel. Este congreso fue el reconocimiento oficial que hizo el estado boliviano al sector indígena; fue el reconocimiento explícito a la lucha de los indígenas y campesinos. Desde la marcha del 1 de mayo, en que llegaron a La Paz, diferentes comunidades del interior del país, hasta el 13 de mayo en que comenzaron las sesiones, quienes participaron del evento fueron agredidos e insultados, por la clase conservadora que veía en esa organización un atentado contra sus intereses, pues la clase oligárquica, minera o terrateniente, sabía que estaban en umbrales de perder su poder sobre un inmenso grupo de personas y con ello perder poder sobre tierras y minas. Este congreso determinó la abolición del pongueaje, de cualquier tipo de mitanaje o de trabajo gratuito a favor del hacendado. Éstas acciones y otras similares crearon un ambiente adecuado para la revolución nacional, 6 años más tarde, además el continente estaba ya involucrado en la lucha por la reivindicación de la población indígena. Finalmente el gobierno militar – nacionalista de Gualberto Villarroel, facilitó la creación de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia, brazo enérgico de lucha contra los regímenes oligárquicos que ocuparían la presidencia boliviana después de Villarroel hasta la consumación de la revolución nacional. En 1946, en el congreso extraordinario de la Federación de trabajadores mineros, se propone el debate de la Tesis de Pulacayo. La importancia de este documento radica en que ya la exigencia del movimiento obrero, no es sólo por mayor seguridad social, no es para tener garantidas las 8 horas de trabajo o una jubilación, la importancia de la tesis radica en que el esfuerzo obrero no debe detenerse sino hasta la consecución del gobierno, la toma del poder, para ello exige que el movimiento obrero esté armado, exige la organicidad permanente y la dirección ejecutiva centralizada. Varios de estos puntos serían bases de la creación de la COB, de ahí que la importancia de la tesis de Pulacayo se haya prolongado varios decenios después de haber sido aprobada.

Fig. 35. Noticia que difunde el inicio del Congreso indígena de 1945.


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Al gobierno de Villarroel, le sucedió un período denominado “sexenio de la oligarquía”, una especie de último coletazo del poder oligárquico sobre el estado, pues las interpelaciones hechas a ese sistema, eran tantas que hacía imposible seguir sosteniéndose. En ese escenario irrumpe la revolución nacional, acción sobresaliente de la lucha de la sociedad por instalar un sistema donde la norma sea pareja para sus integrantes. La revolución del 52, derrumba el viejo sistema político y su consiguiente orden social – económico. Esto significaba abrir las puertas del estado boliviano a todos y todas quienes siendo partes del mismo no eran reconocidos/as. La trascendencia ideológica de la revolución nacionalista, propone hasta la fecha la revisión de nuestro cuerpo estatal desde la lógica de la inclusión y participación. A partir de entonces, es inimaginable –a menos que sea de manera coercitiva- la exclusión de los sectores mayoritarios de la sociedad en la toma de decisiones del estado.

4.3. LA IMPORTANCIA DE LA MINERÍA Y LA RAZÓN DE SER DE BOLIVIA El territorio boliviano, desde antes de constituirse en estado, estuvo vinculado profundamente a la producción minera, de ahí que su gran cantidad poblacional esté asentada en el área occidental del país. Según los primeros censos poblacionales, (Gob. de Santa Cruz, Ballivián y Belzú) casi el 70% de la población estaba asentada en el occidente del país. Esta situación no se modificó a lo largo de la primera mitad del siglo XX. La extracción de riqueza del oriente era poca, incluso tomando en cuenta la explotación de la goma a fines del siglo XIX e inicios del siglo XX. Esta vinculación telúrica consolidó una visión de nación altiplánica, cuando en realidad la cantidad de territorio altiplánico, es un cuarto de la extensión territorial total. Pero la gravedad poblacional, instalada en ese cuarto, graficó una identidad minera del estado boliviano.

Fig. 36. Obreros, campesinos, burgueses y policías, hicieron la revolución el año 1952.

Fig. 37. La extracción minera es el principal ingreso económico histórico del estado.


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La producción de hidrocarburos fue retomada con fuerza a partir de la década de los 60 del siglo XX, en plena dictadura militar. Bajo la dictadura más larga, Bánzer 1971 – 1978, se comenzó la exportación de hidrocarburos, como el gas. A partir de esa acción los minerales dejarían de ser la principal actividad económica y desde entonces los hidrocarburos ocuparían esa actividad. La revolución nacional, entre las acciones generadas, tuvo una preferencial: el desarrollar el oriente del país, construyendo carreteras y entregando tierras para colonizar. En esa lógica comenzaron a desplazarse del occidente al oriente, grandes cantidades de población que ocupaban cada vez más tierras. Los gobiernos militares (entre 1964 – 1982), hicieron lo mismo, sólo que a diferencia de entregar las tierras a grupos sociales mayoritarios, concentraron las mismas en poder de grupos elitistas que la final de dicho proceso terminaron poseyendo extensas propiedades, cuya legalidad se cuestionó permanentemente en tiempos de democracia. En este mismo lapso de tiempo, comenzaron a reestructurarse las diferentes identidades regionales, vinculadas a la cultura dominante originaria en cada departamento. Así la comunidad aimara hizo de la ciudad de La Paz y el Alto, sus dos centros irradiadores de su cosmovisión. Los quechuas, hicieron lo mismo desde Sucre y Cochabamba. Mientras que en otros departamentos, Santa Cruz, Tarija, al no existir una clara cultura dominante originaria se profundizó en la construcción identitaria de sus imaginarios urbano –rurales (lo chapaco – lo camba) Esto representó una nueva configuración de la sociedad boliviana, en una atomizada lógica de ver al estado y/o de integrarse a él. La profusión de ideas fue amplísima, las corrientes del pensamiento fueron vastas y la propuesta de temas en debate también muchas. Sobresale entre el grupo ideológico de la época René Zavaleta Mercado, quien entiende y explica la conformación boliviana a partir del concepto “sociedad abigarrada”, donde distintas formas de ver Bolivia, en mezcla con las distintas formas de producción hacen a la vida misma del estado.

4.4. LA DEMOCRACIA EN BOLIVIA, EL PROCESO SOCIOCULTURAL Y ECONÓMICO DESDE 1982 HASTA 1997 El proceso de dictaduras militares iniciado por el Gral. René Barrientos, respondía a la “Doctrina de seguridad” cuyo principal responsable era el gobierno estadounidense, los gobiernos bolivianos, a excepción de J. J. Tórres, fueron instrumentos en manos de este poder superior que disponía el rumbo económico y político del estado boliviano. El contexto mundial –guerra fría- fue el argumento que se expone cuando se pregunta sobre el porqué de lo sucedido en Bolivia en dichos años. Todas las figuras construidas en política, como el “pacto militar – campesino” o “alianza para el progreso”, fueron acciones que buscaban mantener en el poder un grupo cuya legitimidad y legalidad no podía -por otros medios- sostenerse.


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Dicho ciclo, a inicio de la década del 80, tuvo un súbito fin, debido a los excesos de quienes detentaban el poder de manera totalmente arbitraria. La opresión, la corrupción, la privación de libertad fue el fin de ese ciclo, entonces Bolivia ingresó en un escenario pocas veces antes acaecido: democracia y elecciones limpia para gobernantes. El primer gobierno de los tiempos democráticos modernos tuvo que sobrellevar la carga más pesada heredada de la cantidad de yerros cometidos en el proceso de las dictaduras militares. 17 años de gastos irregulares, de acciones sin control, cobraron una factura muy fuerte al estado. Las

movilizaciones sociales iban parejas al crecimiento del costo de la vida, llegando a niveles de hiperinflación que nunca antes se tuvo. Una coyuntura difícil de atravesar. Ahí existía poco tiempo para pensar el camino a tomarse, eran necesarias acciones para frenar tales desafíos.

4.5 SURGIMIENTO DE NUEVAS FUERZAS POLÍTICAS Y LA CRISIS DEL SISTEMA DE PARTIDOS DEL NEOLIBERALISMO La opción política generada en un escenario de crisis, estuvo vinculada a la reelección de Víctor Paz Estenssoro quien planteó las actuales reglas económicas. Fue una gestión que lidió con la pobreza y el dolor. Sin embargo sus medidas, de alto costo humano, sentaron las bases de una estabilidad nunca antes obtenida. En el aspecto cultural – ideológico, surge un colectivo envidiable que abordan varias temáticas desde la teoría, llegando en muchos casos a la práctica. Roberto Prudencio, Francovich, Almaraz Paz, Reynaga, Zavaleta, Silvia Rivera, Albó, Barnadas, La Serna, F. Calderón, Toranzo, H.C.F. Mancilla, etc. Son algunas de las personalidades que desarrollaron las ideas más avanzadas y que ayudaron a configurar la nueva relación sociedad – estado. Paralelo a ello, el estado boliviano construía, bajo el sesgo de democracia representativa, una nueva estructura vinculada al capital externo, de nuevo la figura colonizadora asomaba sobre el firmamento nacional. Así la industria minera se entregó a capitales privados, las pocas industrias nacionales quedaron desoladas y luego fueron vendidas a capitales, también privados.

Fig. 38. Paramilitares durante el golpe de Luís García Meza

Fig. 39. Dr. Paz Estenssoro figura central en la instalación del modelo neoliberal en Bolivia.


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Incluso los servicios básicos fueron privatizados. Toda esta acción fue realizada por un grupo que detentó el poder desde el momento mismo en que la democracia fue el sistema de vida estatal. Ante esa situación, comenzaron a articularse una serie de movimientos sociales que estaban dispersos o concentrados en otros temas. Los primeros grupos en articularse fueron aquellos desplazados por la instalación del nuevo sistema económico, es decir aquellos que se instalaron en la ciudad de el Alto, en la zona del Chapare, en el valle cochabambino. Una primera interpelación fuerte al proceso neoliberal, vino de parte los movimientos indígenas – campesinos, quienes se movilizaron por tierra y territorio el año de 1990 haciendo una manifestación pasiva de más de 800 kilómetros de recorrido. Luego estuvieron las interpelaciones generadas en torno a la guerra del agua en Cochabamba y a la represión de las movilizaciones campesinas en el altiplano. En ambos casos el estado neoliberal no quiso reconocer la emergencia de los movimientos sociales y más por el contrario luchó por minimizarlos. Similares actuaciones tuvieron los gobiernos en movilizaciones anteriores, mediados y fines del siglo XIX y mediados del siglo XX. Los anteriores síntomas no fueron tomados en cuenta hasta que el año 2003, en octubre en la ciudad de el Alto, se produce la derrota del proceso neoliberal. Para este momento había ya terminado de conformarse como primer partido de manifestación nacional el M.A.S, cuyos ideólogos vaticinaron la toma del poder en un plazo mayor, pero los acontecimientos se habían adelantado. La chispa que prendió el polvorín estuvo vinculada a la extracción de recursos hidrocarburíferos y su exportación por Chile (enemigo natural en el imaginario boliviano). Este intento fue suficiente para desencadenar una cantidad de movilizaciones, pacíficas unas y violentas las más, que paralizaron el país y lograron derrotar al gobierno de entonces, más su política neoliberal. Tras poco más de 20 años de vida neoliberal, el proceso culminó. En una lógica cíclica boliviana, el cierre de dicho ciclo costó varias vidas y duro enfrentamientos. La asunción a la presidencia de Evo Morales, rodeado de una parafernalia mítica – indigenal, hizo que desde el primer momento se entendiera a qué sector correspondía el gobierno que él representaría. La Bolivia que se resistió

al proceso que interrumpió el modelo neoliberal, se reorganizó en torno a dos centros urbanos de importancia Santa

Fig. 40. La asunción del presidente Evo Morales (2006) al mando supremo del Estado, que generó debate y

esperanza en la sociedad boliviana.


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Cruz y Tarija, mientras que el resto del país aceptó de manera formal la asunción del presidente indígena. Las fuerzas que se alistaban para un choque telúrico en el país estaban tensionadas de un lado, por el movimiento indígena campesino, mejor organizado, ya con el poder en las manos, con una idea clara de su lucha y una mejor identificación simultánea. Del otro lado estaban alineados los disconformes con el proceso histórico, quienes habían sido desplazados del poder central de gobierno y se instalaron en los nuevos órganos autónomos creados en cada departamento. Es decir su liderazgo era caudillista y centrado a esferas de acción geográficas perfectamente limitadas. El caso del presidente Evo excedía dichas esferas y su acción y proyección carismática era sostenida por un discurso ideológico claro y contundente: Bolivia existía negando a los indígenas, cuando fueron estos quienes dieron vida a la patria y quienes la mantuvieron. El año 2007 se eligen los asambleístas para redactar la nueva constitución y con ello las dos fuerzas volvieron a tensionarse, gráficamente puede observarse las dos fuerzas dividieron al país territorialmente en dos. Posteriormente de aprobarse, en medio un clima de inestabilidad, la nueva constitución surgen las movilizaciones para que dicha constitución no sea aprobada, paralelamente se consolidan los departamentos autónomos y en ella se refuerzan los poderes locales que luchan contra el poder central representado en el presidente. Esta lucha tendría contornos graves, como lo sucedido en el departamento de Pando, con una cantidad grande muertes pero resultó imponiendo su visión el gobierno central, sometiendo a los demás poderes locales, consolidando este resultado con la aprobación masiva a la nueva constitución, mediante referéndum nacional. La autonomía departamental, como producto de la lucha contra el centralismo nacional, se consolidó en 4 departamentos, mientras que la visión unitaria se mantuvo fuerte en los departamentos restantes, estos departamentos fueron el respaldo de las políticas hechas por el gobierno central. De ahí que mientras los departamentos autónomos y quienes dirigían los mismos, buscaban un mayor nivel de autonomía, que en los hechos se convertía cada vez más en una agresión a la integridad del estado, los otros departamentos estaban alertas al desarrollo de los hechos calificándolos directamente como “hechos separatistas”. Esta tensa situación tuvo que ser resuelta con la intervención masiva y fuerte del estado central, movilizando agentes de coerción que en el fondo intervinieron consolidando la posición del gobierno central.

4.6 LA DESCOLONIZACIÓN, LINEAMIENTOS Y PERSPECTIVAS Según el vicepresidente García Linera, la asunción al poder ejecutivo del estado de Evo Morales, abarca tres componentes básicos:

- La organización social

- Liderazgo indígena

- Descolonización del estado


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La organización social significa que es necesario reforzar las estructuras sociales, los movimientos sociales que hacen a la vida del nuevo estado para que éste a su vez garantice la estabilidad del “proceso de cambio”, denominativo que comprende varias otras significancias, por ejemplo inclusión, lucha contra la corrupción, igualdad, etc. Por este motivo la organización social convoca a mantener siempre en condición de alerta a las organizaciones sociales, pues en ellas está asegurado el “proceso de cambio”. Además esta organización social, da pié a otro argumento del actual pensamiento político nacional: la idea de lo colectivo, de lo común, aquello que reivindica, la aspiración del ser humano dentro de los parámetros del “retorno a lo indígena”, visión última del discurso actual de gobierno. El liderazgo indígena significa un acceso igualitario a las esferas del poder a todos y todas, indígenas, mujeres, sectores que fueron deprimidos por el estado republicano, son tomados en cuenta para que participen de manera activa en la conformación del nuevo estado y en la dirección del mismo. En esa lógica se construyó el discurso de lo plurinacional, es decir aquello que visibiliza a las “naciones indígenas” negadas por el estado republicano y por el poder colonial. A partir de este principio político Bolivia, se construye en su identidad bajo el paradigma de la interculturalidad, concepto que nos lleva a interactúa unos y otros bajo el modelo de tolerancia y respeto cultural. Este criterio de interculturalidad es avanzado, si es comparado con el multiculturalismo, pues la interacción quiebra el sólo respeto que promueve el multiculturalismo. Además en una sociedad como la boliviana, con diferentes culturas, niveles de conocimiento y visiones productivas, la interculturalidad es una herramienta que cohesiona a la sociedad. Finalmente cuando el vicepresidente se refiere a la descolonización, sólo puede ser entendida como igualdad de oportunidades. La descolonización no es sólo dejar lo material y externo, sino también equivale a recuperar lo propio más allá de lo material, generar ideas propias y contextualizadas. La descolonización se hizo bandera de las luchas indígenas, pues entienden que la carga del proceso civilizatorio, fue impuesta y negado su propio proceso civilizador, en esa lógica resaltan los extremos que buscan eliminar todo elemento vinculado a lo “occidental”, aunque la incidencia de estos grupos es menor y sólo coyuntural.

Fig. 41. La guerra del agua fue una de las más fuertes interpelaciones al Estado construido desde la década del

80.


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Bajo este techo ideológico el estado adopta los siguientes principios políticos:

- Unitario, porque valora las formas de vivir en comunidad

- Comunitario, porque valoriza las manifestaciones económicas, sociales colectivas, entendidas como manifestaciones de reciprocidad, complementariedad y equidad.

- Plurinacional, porque reconoce el pluralismo político, las distintas formas de democracia, liberal, democrática y comunitaria y respalda, respetando, la preexistencia de las naciones indígenas

- Pluralismo, en sus facetas económicas e institucionales.

Uno de los intelectuales vinculados al proceso de descolonización, desde un cargo oficial además, Idón Chivi, señala que la descolonización implica fundamental mente recuperar la afirmación identitaria de las naciones, libertándola –a la vez- de las “formas perversas” del capital. Chivi como viceministro de descolonización, planteó tres pasos para cumplir su objetivo: primero identificar las relaciones y estructuras de dominio; segundo, desestabilizarlas logrando que estas relaciones, instituciones o estructuras ingresen en crisis para finalmente (3er. paso) transformar esas antiguas relaciones en nuevos instrumentos de construcción de la nueva sociedad “justa y armoniosa”. Entre dichas instituciones están aquellas vinculadas a la vida misma del estado, de ahí que la descolonización como absoluto, es una acción poco probable de cumplir. Sin embargo –y por otro lado- sí se comenzó a institucionalizar de manera legal otras relaciones e instituciones como la medicina tradicional, usos y costumbres en elección de autoridades, etc., que grafican un accionar que descoloniza el monopolio de instituciones occidentales. Finalmente la descolonización fue interpretada por aquellos sectores que

hicieron frente al gobierno del proceso de cambio, como un artilugio que facilitaba la imposición hegemónica de una visión, forma y estilo de país a molde de las culturas andinas, en especial de la cultura aimara; este debate es permanentemente evitado, pues quienes primero intentaron plantearlo fueron

Fig. 43. Instalación de la Asamblea Constituyente.

Fig. 42: La alianza central: Evo – Campesinos - Indígenas


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tachados de racistas, argumento que invalida toda acción de crítica al gobierno de Evo Morales.

4.7 EL DESARROLLO HUMANO, UNA CONDICIÓN PARA EL VIVIR BIEN Otra nueva política de estado implementada en Bolivia, tuvo que ver con la adopción de un principio de vida para el Estado: El vivir bien. Una respuesta práctica al “vivir bien”, viene a ser el equilibrio entre hombre y naturaleza. El proceso civilizador europeo, nos enseñó que la forma de vida más acorde es aquella donde para uno desarrollarse debe acabar al otro, debe acabar a la naturaleza, explotarla hasta que se agote y luego encontrar otro recurso para explotar y agotado este, otro y así en una locura que devasta con el fin de la satisfacción inmediata y sin planificación ni compromiso para las otras generaciones u otras culturas. El vivir bien, es una respuesta abierta al capitalismo que para desarrollarse debe destruir. El vivir bien, busca desarrollar al ser humano, dentro de las normas de respeto para el otro ser humano y para la naturaleza. El capitalismo negó o socavó, para decir mejor, al ser humano y a la naturaleza y en esa lógica impuesta por más de 4 siglos, la forma de vida se ha convertido –paradójicamente- en el obstáculo para desarrollar más vida. El mundo es el que está ahora en riesgo, la lógica explotadora –del hombre y la naturaleza- logró que el sustento del ser humano se haya convertido en un desafío para el ser humano, pues el mundo agotó sus recursos y no son renovables. Sobre ello, los diversos sistemas de vida occidentales, han priorizado las diferencias sociales basadas en un parámetro de acumulación. En esa locura por tener más no existen reparos en destruir todo aquello que a la naturaleza le costó miles de años, de ahí que el vivir bien, responde a todos estos escenarios con el planteamiento del equilibrio hombre – naturaleza. Esta idea – acción boliviana, nacida desde la experiencia de los pueblos indígenas es la que trata de volcarse como nueva imagen del colectivo boliviano para el exterior, así dentro de la Comunidad Andina de Naciones (CAN), dentro del Mercado Común del SUR (MERCOSUR), la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), finalmente dentro de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), Bolivia lleva un planteamiento vinculado siempre a ello. Bolivia como estado organizó la Conferencia Mundial de pueblos sobre el cambio climático y derechos de la tierra, evento que perfiló el rostro mundial de Bolivia dentro de los estados que garantizan el equilibrio hombre – naturaleza. Ahora, todas estas acciones –paradójicamente- no encuentran tan buena predisposición adentro del estado afuera. Las acciones y discursos de equilibrio con el medio ambiente no tienen su respaldo ni convencimiento pleno en Bolivia. Las actividad extractiva de recursos naturales, costosa, dañina y que deja recursos sin valor agregado, hicieron que se debata el “doble discurso” en el que ingresaron los nuevos dirigentes del estado.


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Bolivia es, juntamente a Venezuela, Ecuador, Paraguay, Argentina, Uruguay y Brasil, integrante de aquello que vino a denominarse el socialismo del siglo XXI, se caracteriza a dicho movimiento ideológico como un sistema que privilegia el desarrollismo democrático, no imperialista ni capitalista, una economía de equivalencias, entendida como equilibrio entre las naciones, su producción y sus relaciones; la democracia participativa, incluyente en todos los sentidos y en todos los niveles y finalmente el respeto a las organizaciones comunales o de base, preexistentes a los estados mismos. Este es el último de los fenómenos político – ideológicos en el que el estado boliviano está aferrado, de él y su juicio final, sólo podrá ser fehaciente con el pasar del tiempo y cuando los actuales actores dejen el escenario nacional.

RESUMEN DE LA UNIDAD Bolivia es una voluntad de libertad, parafraseando a Simón Bolívar. Pese a todas las condiciones más adversas imaginables, Bolivia se levanta una y otra vez desafiante en su nuevo derrotero. Los embates más fuertes del mundo, las ideologías más dispares, los hechos más dolorosos, no pueden doblegar el espíritu del estado boliviano. Todo el proceso civilizador occidental, con su carga de destrucción e imposición, no logra vencer la fuerza telúrica del estado boliviano que resiste el embate y tras él se levanta nuevamente. El nacionalismo es una manera de reconocer a quienes estaban excluidos, pero a su vez el nacionalismo termina excluyendo a otros grupos, lo mismo sucedería con la llegada de la actual democracia, en su inicio abrió las puertas a la participación democrática y terminó manejando e destino del país desde un grupo que excluía a los demás. Este es el mismo desafío que se le plantea al gobierno del proceso de cambio, que como innovación ideológica es la más original y fuerte, se espera que no termine excluyendo grupos de la sociedad boliviana. Elementos como la interculturalidad, la recuperación de principios de vida de los pueblos preexistentes a la colonia y a la república, hacen que el escenario estatal quede remozado, aunque el examen final al proceso ideológico – político actual es potestad del tiempo.


La nueva territorialización de Bolivia y las llamadas "autonomías" José Álvarez

El artículo que transcribimos en su mayor parte a continuación, fue publicado en Liberación No. 47 de octubre del año 2004. Ahora lo actualizamos con motivo de la marcha indígena que, al margen de algunas peticiones subalternas, vuelve a plantear la cuestión no resuelta de las llamadas “autonomías”. Nuestra posición política respecto a la cuestión de las autonomías ha sido muy clara y se refiere a nuestro rechazo a la concepción misma de la autonomía departamental por ser un


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“postulado” de carácter divisionista y que estimula la división de la patria como “bandera” del separatismo y regionalista que tiene su base en la oligarquía cruceña. Ahora el proceso de cambio tiene que lidiar con las exigencias autonómicas de todos los sectores ocasionando problemas de muy difícil solución. La actual exigencia de los pueblos originarios de las tierras bajas por conseguir las autonomías indígenas, originarias y campesinas de igual jerarquía, desbordando los límites departamentales arbitrarios, constituye una prueba de la pertinencia de nuestras posiciones. En contra de esa aspiración legítima se plantea que la Constitución no autoriza ninguna modificación al mapa administrativo, empero como hemos sostenido siempre la actual territorialización no es constitucional. En consecuencia apoyamos la petición de los pueblos originarios de conseguir autonomías indígenas desbordando los límites departamentales, al margen de otras exigencias que son efectivamente impertinentes y también al margen de cualquier ingerencia de ONGs como USAID. Del modo más caprichoso se utiliza palabras que están muy lejos de constituir conceptos en una materia tan compleja pero al mismo tiempo más clara de la ciencia social, el problema nacionalitario. En este sentido tenemos la obligación, en primer lugar, de clarificar la cuestión para darle un sentido de seriedad política. Comenzaremos por los conceptos más simples y elevándonos poco a poco en aquellos más complicados. 1. ¿Qué es un Departamento? Acá la claridad es meridiana y en el ejemplo concreto tenemos los departamentos de La Paz, Santa Cruz, Cochabamba, Chuquisaca, etc. En otros países como Argentina, estas divisiones administrativas reciben el nombre de «provincias» y finalmente también en otros como Brasil, la denominación de «estados». Esta determinación tiene solamente carácter administrativo y proviene de la estructura colonial que en nuestras latitudes se confunden con la Audiencia de Charcas, el llamado Alto Perú que dispuso diversas territorializaciones siempre con carácter arbitrario y artificial. El resultado es que actualmente Bolivia tiene nueve departamentos que son precisamente eso y nada más que eso: Departamentos. Aclaramos que ninguna Constitución Política del Estado, dividió la república en nueve departamentos, por lo que no se puede hablar de “ley” alguna. 2. ¿Qué es una Región? Una región tiene, ante todo, el carácter geográfico y demográfico. Para dar un ejemplo inmediato tenemos la Región Andina que corresponde íntegramente sólo al Departamento de Oruro, pues La Paz por ejemplo contiene varias Regiones. Esta Región comprende además la región sud-occidental del departamento de Potosí y todo el sur paceño. La Región Chaqueña comprende las regiones orientales de Tarija y Chuquisaca y la zona sud de Santa Cruz concretamente la provincia Cordillera. La Región Amazónica es la más extensa y puede incluso ser subdividida en varias sub-regiones. Comprende todo el departamento de Pando y la provincia Vaca Diez del Beni. Una sub-región beniana de pampas ganaderas que ocupa casi todo el departamento. Todo el norte paceño es parte integrante de la región amazónica e igualmente el Chapare y Carrasco cochabambinos.


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Existe también una Región típicamente Valluna cuyo centro es Cochabamba y como periferia, los valles quebrados de Chuquisaca, Cinti y Tarija. Santa Cruz tiene igualmente varias sub-regiones. La llamada Chiquitanía está enclavada entre el Chaco y el norte beniano, finalmente la región guaraya es la más próxima a las llanuras benianas. En una palabra, la región es una determinación más que todo geográfica aunque incluye naturalmente aspectos económicos y demográficos. Una región no debe ni puede ser confundida con un departamento, pues está confusión ignorante o interesada es la causa de muchos de los equívocos de muchos analistas y es utilizada por la inexistente «nación camba» 3. ¿Qué es una Nación? El concepto de nación es el más complicado y el central para definir el carácter de nuestra ponencia política de reestructuración del actual Estado boliviano y la nueva territorialización que debe encarar la Asamblea Constituyente. Definimos la nación como una formación histórica indeterminada cuyas matrices son: a) la comunidad cultural cuyo núcleo es la lengua o el idioma, b) otra matriz objetiva de población y territorio y finalmente c) una matriz social, política y económica que tiene el derecho de asumir la Autodeterminación (un concepto que lo explicaremos con posterioridad). Desde este punto de vista tenemos claramente varias naciones en el seno del actual Estado boliviano: la nación aymará, la nación quechua, la nación guaraní, la besiró (llamada comúnmente chiquitana) y la moxeña, como las más importantes demográficamente y casi cincuenta nacionalidades más pequeñas como la guaraya, la movima, etc., etc. Son las naciones o las nacionalidades (la diferencia es simplemente de magnitud), las que tienen por su propia naturaleza la cualidad y la posibilidad de aspirar a la autodeterminación o alternativamente a la autonomía nacional-cultural. No pueden pues aspirar a la autodeterminación o autonomía los departamentos, lo cual es una aberración, ni siquiera las regiones por razones obvias. Nuestro actual Estado nacional boliviano contiene en su seno esta multitud de naciones y nacionalidades, empero en la forma y manera más injusta, todas ellas han estado y siguen estando al margen de toda intervención o participación en los asuntos políticos, económicos y culturales del país. En rigor nuestro actual Estado es uno Multinacional, empero se denomina únicamente nacional excluyendo explícitamente su propia condición intrínseca. ¿Qué significan las "autonomías" en el pensamiento de los extranjeros de extrema derecha de Santa Cruz que ocultan sus intenciones con algunos conceptos mal concebidos y mal entendidos? Buscan, en primer lugar, lograr el maligno propósito de descuartizar Bolivia, colonizarla y dividirla principalmente en dos partes: una occidental altiplánica y otra parte oriental o amazónica. En otro artículo pusimos ya en alerta a los pueblos bolivianos el peligro que se cierne en torno al problema del gas. Ahora se trata de una consecuencia de esta problemática. Se levanta el criterio dudoso de las llamadas "autonomías" de las diversas regiones del territorio boliviano. Se considera que cada Departamento es una Región, lo cual es absolutamente falso. La territorialización actual que deriva de la Colonia española, ha dividido nuestro territorio en departamentos cuyas fronteras son absolutamente arbitrarias.


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La actual territorialización, como decimos, es completamente arbitraria, divide, por ejemplo el territorio y la población quechua en cinco departamentos, divide el territorio y población aymará en tres departamentos; divide a los pueblos guaraníes en tres departamentos; divide la verdadera región amazónica y su población homogénea en varios departamentos. En una palabra, nadie se ha puesto a estudiar estas anomalías de carácter geográfico, demográfico, social y cultural. 4. ¿Qué es el Estado/Nacional La nación cuyo concepto hemos clarificado conceptualmente en el punto anterior es, como tenemos dicho, una formación histórica milenaria, por lo tanto, es siempre anterior, muy anterior a cualquier tipo de Estado u organización política de la comunidad o de la sociedad. En la modernidad capitalista las viejas formaciones históricas nacionales se han fundido con la forma más alta de organización política, los Estados. Así nacen los modernos Estados Nacionales que configuran el tipo de Nación y el tipo de Estado que corresponden al capitalismo. Todas las actuales formaciones sociales (como totalidades sociales) constituyen Estados Nacionales que pueden considerarse formalmente como la forma moderna y capitalista de la Nación y el Estado. En el caso boliviano, por ejemplo, la nación aymará, junto a otras naciones y nacionalidades, ha estado sometida centenariamente a la opresión de criollos y mestizos con el nombre incorrecto de «nación» boliviana. Entonces para evitar el carácter opresor que tiene todo Estado Nacional, se plantea el Estado Multinacional que es una unidad de lo diverso y que justamente por el reconocimiento esencial del carácter nacional de nuestras naciones, puede hacer posible un verdadero Estado Multinacional verdaderamente democrático. 5. ¿Qué es la Autodeterminación y a quiénes corresponde? Este concepto revolucionario fue sostenido en forma vigorosa por la teoría socialista que cuestiona la opresión nacional propia del sistema capitalista. La autodeterminación es un DERECHO, no una obligación, que tienen todas las naciones, nacionalidades y pueblos y que consiste en acceder, si así se lo decide, a la independencia total y hacer uso de su soberanía para determinar su futuro con total voluntad propia. La autodeterminación no es lo mismo que independencia ni es, necesariamente, una obligación, es simplemente su antecedente, porque igualmente a través de la autodeterminación una nación puede preferir unirse en amplios y grandes conglomerados estatales para formar, como nosotros quisiéramos, un gran "Estado Multinacional de Nueva Democracia". (Usamos indistintamente el concepto de pueblo y de nación ya que aquel tiene que ver con la población de las naciones. La población es parte de la matriz objetiva de la Nación, como tenemos explicado). 6. Conclusión A partir de ahora, debe iniciarse un debate serio en torno a estos problemas y no solamente una apresurada aprobación en la Asamblea Plurinacional. No puede existir una delimitación temporal para la aprobación de una ley tan importante. Todos los verdaderos revolucionarios, los auténticos patriotas que no quieren ver la polonización o balcanización imperialista del nuestro país, están obligados a respaldar vigorosamente la línea política nacionalitaria que plantea nuestro Partido que ha demostrado un conocimiento profundo de estas cuestiones.


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Esta vez no podemos equivocarnos: o planteamos el Estado Multinacional de Nueva Democracia o las diversidades reales y existentes y las inventadas, serán aprovechadas por la reacción fascista para descuartizar nuestro país en provecho del imperialismo y las transnacionales y sus intereses de saquear los recursos naturales.

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