Casa de Niños Expósitos

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Casa de Niños Expósitos En el año 1779 Juan José de Vértiz y Salcedo es Virrey en Buenos Aires. La ciudad contaba con cerca de 40.000 habitantes contando los pobladores de la campiña cercana. No había veredas ni alumbrado público, las calles eran de tierra, no existían escuelas ni hospitales en condiciones. Vértiz ilumina las calles, crea el Protomedicato (cuyas funciones comprendían la formación de profesionales, el control de epidemias y la atención de los hospitales). Crea el Hospital de Hombres (en Humberto Primo y Balcarce) y el Hospital de Mujeres (Esmeralda entre Rivadavia y Bartolomé Mitre) y en las actuales calles Perú y Alsina, en un edificio que había pertenecido a los desterrados Jesuitas y que estaba funcionando como Arsenal de guerra, funda el Hospital y Casa de Niños Expósitos por iniciativa del Síndico procurador Marcos José Riglos. Riglos había sido Juez de menores en 1766 y conocía la problemática frecuente de los niños abandonados, muchos de ellos muertos en medio de un total abandono. El 7 de agosto de 1779 se funda el Hospital y Casa de Niños Expósitos y el 9 de junio de 1780 ingresa la primera niña que había sido abandonada en la puerta. Es bautizada como Feliciana Manuela que fallece repentinamente a los pocos días. En 10 años la Casa recibió más de 2.000 niños. Su nombre original, el de Hospital y Casa de Niños Expósitos. se debía que albergaba a los niños abandonados, “expuestos”, en las calles o en los umbrales de las iglesias, los cuales eran comúnmente atacados por los perros. Contaba con un torno (1) de madera para recibirlos manteniendo el anonimato de las madres. Este armazón giratorio funcionó hasta 1891. Desde su fundación la Casa sufre penurias económicas, pese a que primero se le destinaron las rentas de locación de los inmuebles expropiados a los jesuitas y luego otros ingresos como las recaudaciones de una plaza de toros erigida por un grupo de notables de la época para este fin, un porcentaje de lo recaudado por un corral de comedias y la recaudación de una imprenta propia. Esta imprenta basada en la que habían dejado los Jesuitas en el Colegio Montserrat de Córdoba tuvo gran importancia ya que, manejada por los mismos niños, tuvo a su cargo la publicación entre otras cosas, de catecismos, almanaques, gacetas, impresos particulares, bandos oficiales y el Telégrafo Mercantil a partir de 1801. Pero nada de esto fue suficiente: mala organización y mala administración se suman hasta que el 21 de febrero de 1784 se dispone que la Hermandad de la Santa Caridad se hiciera cargo de su dirección y se dispone la venta del primitivo local y mudar la Casa a otro edificio, en Moreno y Balcarce, más discreto, para “alejar de miradas inoportunas” el torno en que se abandonaba a los niños. Éste era un edificio colonial de una planta que se hallaba ubicado detrás del Convento de San Francisco. En 1786 ya hay 150 niños que crecen en el Hospital y Casa de Niños Expósitos. Se imprime material de educación con consejos sobre la lactancia y crianza de los niños y se establece un Reglamento general de funcionamiento. Los ingresos que permitían su funcionamiento se originaban en el arrendamiento de las propiedades que habían pertenecido a los jesuitas y la utilización de la imprenta, que el Virrey mandó traer desde Córdoba, siendo ésta la primera imprenta de nuestra ciudad. En 1815 se designa como administrador a Saturnino Segurola, quien insiste en la importancia de contar con un profesional médico que asista a los expósitos

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Casa de Nios Expsitos

En el ao 1779 Juan Jos de Vrtiz y Salcedo es Virrey en Buenos Aires. La ciudad contaba con cerca de 40.000 habitantes contando los pobladores de la campia cercana. No haba veredas ni alumbrado pblico, las calles eran de tierra, no existan escuelas ni hospitales en condiciones. Vrtiz ilumina las calles, crea el Protomedicato (cuyas funciones comprendan la formacin de profesionales, el control de epidemias y la atencin de los hospitales). Crea el Hospital de Hombres (en Humberto Primo y Balcarce) y el Hospital de Mujeres (Esmeralda entre Rivadavia y Bartolom Mitre) y en las actuales calles Per y Alsina, en un edificio que haba pertenecido a los desterrados Jesuitas y que estaba funcionando como Arsenal de guerra, funda el Hospital y Casa de Nios Expsitos por iniciativa del Sndico procurador Marcos Jos Riglos. Riglos haba sido Juez de menores en 1766 y conoca la problemtica frecuente de los nios abandonados, muchos de ellos muertos en medio de un total abandono.

El 7 de agosto de 1779 se funda el Hospital y Casa de Nios Expsitos y el 9 de junio de 1780 ingresa la primera nia que haba sido abandonada en la puerta. Es bautizada como Feliciana Manuela que fallece repentinamente a los pocos das. En 10 aos la Casa recibi ms de 2.000 nios. Su nombre original, el de Hospital y Casa de Nios Expsitos. se deba que albergaba a los nios abandonados, expuestos, en las calles o en los umbrales de las iglesias, los cuales eran comnmente atacados por los perros. Contaba con un torno (1) de madera para recibirlos manteniendo el anonimato de las madres. Este armazn giratorio funcion hasta 1891.

Desde su fundacin la Casa sufre penurias econmicas, pese a que primero se le destinaron las rentas de locacin de los inmuebles expropiados a los jesuitas y luego otros ingresos como las recaudaciones de una plaza de toros erigida por un grupo de notables de la poca para este fin, un porcentaje de lo recaudado por un corral de comedias y la recaudacin de una imprenta propia. Esta imprenta basada en la que haban dejado los Jesuitas en el Colegio Montserrat de Crdoba tuvo gran importancia ya que, manejada por los mismos nios, tuvo a su cargo la publicacin entre otras cosas, de catecismos, almanaques, gacetas, impresos particulares, bandos oficiales y el Telgrafo Mercantil a partir de 1801.

Pero nada de esto fue suficiente: mala organizacin y mala administracin se suman hasta que el 21 de febrero de 1784 se dispone que la Hermandad de la Santa Caridad se hiciera cargo de su direccin y se dispone la venta del primitivo local y mudar la Casa a otro edificio, en Moreno y Balcarce, ms discreto, para alejar de miradas inoportunas el torno en que se abandonaba a los nios. ste era un edificio colonial de una planta que se hallaba ubicado detrs del Convento de San Francisco.

En 1786 ya hay 150 nios que crecen en el Hospital y Casa de Nios Expsitos. Se imprime material de educacin con consejos sobre la lactancia y crianza de los nios y se establece un Reglamento general de funcionamiento. Los ingresos que permitan su funcionamiento se originaban en el arrendamiento de las propiedades que haban pertenecido a los jesuitas y la utilizacin de la imprenta, que el Virrey mand traer desde Crdoba, siendo sta la primera imprenta de nuestra ciudad.

En 1815 se designa como administrador a Saturnino Segurola, quien insiste en la importancia de contar con un profesional mdico que asista a los expsitos y una botica que los provea de las medicinas necesarias. En 1817 se nombra mdico de la Casa al Dr. Juan Madera, que como practicante se haba destacado en el cuidado de los heridos durante las Invasiones Inglesas.

En 1818 Madera es reemplazado por Cosme Argerich, lo que origina un pleito entre ambos y con la institucin que dura ms de dos aos. En 1873 se traslada a la actual calle Montes de Oca, en un terreno ubicado en lo alto de la Barranca de Santa Luca siendo sus directores, a partir de ese perodo, los doctores Juan A. Argerich, Juan M. Bosch y Angel Centeno. Este ltimo obtiene en la Casa Cuna la primera radiografa peditrica en el pas.

Apenas comenzado el bloqueo francs de 1838, Juan Manuel de Rosas encara, enrgica y rpidamente, el problema de la falta casi absoluta de recursos. Reduce el nmero de los empleados y disminuye los sueldos. El presupuesto de la Universidad, fijado en ms de treinta y cinco mil pesos anuales, para 1838, baja a dos mil novecientos; el de la Inspeccin de Escuelas, de cuarenta mil cuatrocientos sesenta a dos mil trescientos. Economiza cuatrocientos mil en el de Gobierno. Suprime del presupuesto a la Casa de Expsitos y a los hospitales. Los nios no son abandonados en la calle sino distribuidos entre familias de buena situacin.

En esos 59 aos atendi 6.682 chicos. A fines del siglo XVIII y en la primera mitad del XIX, en Buenos Aires llegaron a ser abandonados dos nios por semana. Si se asigna a la poblacin existente en 1778 (24.205 habitantes) una tasa de natalidad del 40 por mil, se obtiene una incidencia de abandono del 5% sobre el total de nacidos vivos y del 2% sobre el total de la poblacin. Es de suponer que los ndices habrn sido ms altos en los sectores de negros y mulatos (7.268) e indios y mestizos (1.218) que agrupaban el 35% de los habitantes.

La trayectoria de la Casa de Expsitos en esas seis dcadas es una larga y montona sucesin de penurias. Ninguno de todos esos aos procura el menor respiro. La asfixia econmica y la situacin sanitaria de la poca, no dan tregua y hacen que los chicos que le son confiados mueran con aterradora frecuencia. El 40% de 1.200 expsitos sobrevivieron. Una cuarta parte de los asistidos se alojaban en la Casa y tres de cada cuatro eran confiados al cuidado de particulares, que los criaban sin otra retribucin que los servicios domsticos que los nios prestaban.

La segunda etapa cronolgica comienza en 1852, en que es reabierta, y llega hasta hoy.

En 1903 ingresa el recin graduado Pedro de Elizalde quien normaliz la recepcin de leche, organiz la Escuela de madres, vigil la salud de las dadoras de leche y organiz el servicio Mdico-Social. Elizalde cre la Escuela de Enfermeras profesionalizando la enfermera del Hospital y consigui que su ttulo fuera reconocido por la Facultad de Medicina.En 1905, en reconocimiento a su capacidad asistencial, la Casa pasa a llamarse oficialmente Hospital de Nios Expsitos, nombre que cambia en 1920 por el de Casa Cuna. Gracias a donaciones importantes se logra reedificarla casi por completo, se construyeron distintos pabellones (para sarampionosos, para diftricos etc.), se adquirieron terrenos adyacentes y en 1913 la Sociedad le da la esquina de las actuales Caseros y Tacuar. La Casa contaba entonces con 450 camas para expsitos.

Torno giratorio de madera para entregar nios de forma annima

Entre 1935 y 1946 es director del hospital el Dr. Pedro de Elizalde quien enriquece la actividad cientfica del mismo con la aparicin de la Revista Infancia y la instalacin de la Ctedra de Pediatra. En esa poca se inventa en Casa Cuna el sistema de identificacin de recin nacidos actualmente en vigencia.En 1961 se le impone el actual nombre de Hospital Dr. Pedro de Elizalde. En 1963, el Hospital pasa al mbito municipal y en 1967, se incorpora el Plan de Residencias Hospitalarias.

En diferentes ocasiones, por imperio de las tribulaciones econmicas y las errticas polticas sanitarias estuvo a punto de ser desactivado. Sin embargo el hospital persisti, consolidndose como una institucin mdica de reconocido prestigio asistencial, manteniendo su abnegada y silenciosa tarea al servicio de los pacientes ms carenciados.El Hospital General de Nios Dr. Pedro de Elizalde es el Hospital Peditrico ms antiguo del continente americano encerrando en su belleza arquitectnica el encanto de las tpicas construcciones de los palacios de la poca.

Referencia(1) El torno era el lugar donde las mujeres que abandonaban a sus hijos, los depositaban en forma discreta, lejos de miradas curiosas que pudieran identificarlas. Consista en una tabla de madera, en un hueco hecho ex profeso en la pared del paredn de la Casa de Expsitos. Cuando alguien depositaba sobre el plato inferior un beb, haca sonar la campanilla y un operador desde adentro giraba el dispositivo y el beb ingresaba a la casa, sin que quien lo dejara y quien lo reciba, pudieran mirarse. Un torno similar conserva todava la Santa Casa de Ejercicios Espirituales de la avenida Independencia 1190.

FuentesArana, A. M. La beneficencia de Buenos Aires

Echeverra, Emilse Casacuna: Su historia en la Historia.

Efemrides Patricios de Vuelta de Obligado

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Sosa, Dra, Beatriz Historia de la casa de Expsitos

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