Casillas Reales - Ajedrez Con Mijail Tal - Juan Sebastian Morgado
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Ajedrez con Mijail Tal
Juegan las blancas Mijail Tal- Pal Benko
Bled, 1959
Casillas Reales Ajedrez con Mijail Tal
GM (Tele-ajedrez) Juan Sebastián Morgado
Cuadernillo Nro. 8 Colección Aula Ajedrecística Cuadernillos didácticos para
enseñanza y aprendizaje del ajedrez
Alvarez Castillo Editor Colección Aula Ajedrecística Director de Colección: MF Fernando Pedró
Morgado, Juan Sebastián Casillas Reales: Ajedrez con Mijail Tal 1 Juan Sebastián Morgado: Buenos Aires: Alvarez Castillo Editor, 2009. 80 p.; 21 x 15 cm. (AulaAjedrecística/8 Fernando Pablo Pedró) ISBN 978-987-25188-1-3 l. Ajedrez. I. Pedró, Fernando Pablo, dir. II. Título CDD 794.1
Sitio en Internet: http:/ /www.alvarezcastillo.com.ar
Correo electrónico: editor@alvarezcastillo. com. ar
Arte de tapa y diseño de interior: Fernando Pedró metajedrez@yahoo. com.ar
Primera edición: julio de 2009, 2.000 ejemplares.
Este libro se terminó de imprimir en el mes de julio de 2009 en Cosmosprint, Eduardo Femández 155, Avellaneda, Pcia. de Buenos Aires, Argentina, con una tirada de 2.000 ejemplares
Hecho el depósito que marca la Ley 11.723 Impreso en Argentina - Printed in Argentina
Casillas Reales Ajedrez con Mijail Tal
GM (Tele-ajedrez) Juan Sebastián Morgado
El sistema algebraico permite transcribir partidas de ajedrez . Cada casilla recibe un nombre que se forma con la letra de la columna (vertical) y con el número de la fila (horizontal) . Las columnas se designan desde la «a» hasta la «lm partiendo del lado de las blancas y de izquierda a derecha. Y las filas se numeran del 1 al 8, comenzando también del lado de las blancas .
Para escribir una jugada se anota primero la inicial de la pieza que se movió (R=Rey; D=Dama; T=Torre; A= Alfil;
a h ct e g 11 C=Caballo) y luego la casilla de llegada. Si se mueve un peón, no se escribe la inicial. Así, l.e4 indica que el peón que está delante del rey mueve a la casilla «e4», y l...Cf6 muestra el movimiento del caballo negro a la casilla «f6». ·
Cuando dos piezas iguales pueden ir a una misma casilla, es necesario aclarar la casilla desde la que partió, para evitar confusiones. Esto se hace indicando la columna o la fila. Al producirse la coronación de un peón se indica el movimiento del mismo seguido del signo igual y la inicial de la pieza que se introduce al juego (ejemplo d8=D).
SIGNOS UTILIZADOS EN LA ANOTACIÓN ALGEBRAICA
0-0 Enroque Corto !? Jugada Interesante -+ Ventaja decisiva
0-0-0 Enroque Largo ?! Jugada Dudosa de las negras
X Captura = Igualdad 00 Posición compleja
+ Jaque. ;t Leve ventaja de las o Jugada única
Cap tura al paso blancas = Con compensa-a.p 00
++ o # Jaque mate + leve ventaja de las ción por el material
1-0 Las blancas ganan negras t Con iniciativa
0-1 Las negras ganan ± Ventaja de las ¿\ Con idea de
112 Tablas blancas <=> Fila
Buena Jugada :¡: Ventaja de las ? Con contra juego
!! Excelente Jugada negras X Punto débil
? Error +- Ventaja decisiva o Mejor es
?? Grave Error de las blancas N Novedad teórica
Prólogo por el GM (Tele-ajedrez) Roberto GabrieiAivarez
«Para poder descubrir nuevos mundos es necesario tener el coraje
de perder de vista la costa durante mucho tiempo.» Andre Gide (1859-1951)
Escritor francés,
Premio Nobel de Literatura en 1947.
Mijail Tal, campeón del mundo de ajedrez en 1961, a los 24 años de edad (por aquel entonces, el campeón más joven de la historia), maravilló con sus combinaciones y extraordinarios ataques a generaciones de ajedrecistas. ¿Cuál era el secreto de esos ataques? Para algunos, el juego de Tal se basaba en una formidable intuición, para . otros, sus sacrificios eran para complicar la lucha al extremo y amedrentar así a sus rivales . .. y no faltaban en aquella época quienes incrédulamente lo calificaban como un "bluff', «un gángster del tablero», aseverando que sus combinaciones eran erróneas. En esta obra, el maestro Juan Sebastián Morgado, va mucho más allá ... se aleja de la costa (como sugiere la frase que encabeza este prólogo) e intenta descubrir la verdad, o al menos, una aproximación a la misma, desde un punto de vista ciertamente original. Es así como se presenta a los lectores la «Teoría de las casillas reales», un complejo de casillas que rodean al rey enemigo y que son factibles de ser atacadas. Con rigurosos análisis, el autor nos brinda numerosos ejemplos de ataques cuyo éxito resulta «inexplicable» a los detractores del juego del «Mago de Riga» (así llamaban a Tal sus innumerables admiradores). El libro comienza haciendo conocer la historia sobre cómo surgió y se fue elaborando esta hipótesis, comenzado con el genial ajedrecista cordobés Osvaldo Bazán, continuando con las investigaciones de Sergio Wavrenchuk, y finalizando con el propio trabajo de Juan Sebastián Morgado. Tras formular la hipótesis y desarrollarla con selectos ejemplos, continúa en el segundo capítulo con la explicación de las jugadas directas e indirectas, para fmalizar con la «Teoría de las Casillas Reales, las aperturas, las piezas «reales» y sus casillas de paso». En resumen, un valioso aporte a la literatura ajedrecística moderna, un manual indispensable para el jugador de ataque y para todos los aficionados que quieran hallar una explicación a la complej idad (aparentemente) inexplicable del juego de combinación.
Palabras previas
por el GM (TeJe-ajedrez) RodolfoArgentino Redolfi
No por trillado, el tema .. tiempo vs materiar ha dejado de ser atractivo. Está contenido en las partidas de Morphy, Bronstein, Keres, Tal y otros grandes, cuyos estilos se prestan para manejar estos valores con llamativa soltura.
Juan Sebastián Morgado
¡Cuántas enseñanzas nos brindan esas partidas! Pero, ¡cuántas veces las reproducimos superficialmente, concentrando nuestra atención en el hermoso remate fmall Si acertamos con él, nos declaramos satisfechos y guardamos el tablero, orgullosos de haber hallado la misma solución que descubrió el jugador de cartel.
No advertimos -o no queremos advertir- que eso ha sido como tener la bola frente y cerca de la tronera. Algunos más, otros menos, en varios años de práctica todos hemos aprendido a ejecutar combinaciones directas y a resolver fmales artísticos y problemas de mate en dos, en tres, en cuatro jugadas. Si coincidimos en esto -pienso que sí- debemos inferir, por lógica, que la diferencia que nos separa de los famosos está oculta en otro lugar de la partida. Una íntima sensación de impotencia que reconocemos secretamente allá en el fondo del ego, pero cubrimos con mil y una capa de pretextos y pseudoargumentos, nos autopersuade de no intentar la búsqueda de ese lugar, a no tomar el toro por las astas. A priori, aceptamos el fracaso y renunciamos al esfuerzo. Así nos va: felices, siempre a nivel de superficie.
Reza el refrán: Lo que natura non da, Salamanca non presta·: Es cierto. ¡Pero no confundamos los tantos! Una cosa es la Salamanca consistente en las aperturas, finales y remates brillantes que exige un tipo de natura: buena memoria, y habilidad en los ejercicios prácticos -en ajedrez postal, ni la memoria hace falta; se la reemplaza con la bibliografía a la vista-. Otro cantar son las aguas que caen susurrando sus secretos. Aquella es efecto o consecuencia de ésta. Es la suma de resultados obtenidos por quienes sí tomaron el toro por las astas, y de cuyos esfuerzos nos aprovechamos. Adoptamos y aplicamos lo mejor de lo que ellos nos ofrecen, y en un santiamén, equilibramos las cargas. Empujamos el vehículo cuando ya arrancó.
La Salamanca madre, en cambio, nos reclama la promoción de la natura que hemos condenado al jaque perpetuo del letargo. ¡Sacudámosla! Convirtámosla en un aliento largo, aunque sea de galope corto, pero nuestro. Seamos protagonistas del esfuerzo. Dispongámonos a imponer nuestra transpiración, antes que la celada prestada. Sigamos las huellas del mendocino Pereyra1, que no se resigna a aceptar planteos o propuestas de los famosos, si no convencen a su espíritu crítico. ¡Y busca! O las de Morgado, siempre preocupado por encadenar los pies huidizos de la verdad en el enigma de las casillas reales ... ¡Y busca!
De los frutos más o menos dulzones cosechados a raíz de este método de razonamiento propio, dependen las satisfacciones auténticas. Digo frutos más o menos dulzones porque podría ocurrir que, habiendo triunfado en la aplicación práctica de una ley básica -esto es lo realmente valioso- el punto o medio punto se fuera de las manos por otras causas. 2
1 Manuel Pereyra Puebla, Campeón de Mendoza y Campeón Argentino de Ajedrez Postal, famoso por las increíbles jugadas que hallaba en sus partidas. 2 Artículo del talentoso Gran Maestro (Tele-ajedrez) cordobés Rodolfo Argentino Redolfi en la revista Ajedrez de Estilo n° 20, junio de 1984, pág. 432. Este texto introduce una nota titulada Conceptos, en la que Redolfi explica algunas de sus notables ideas ajedrecísticas, tales como piezas animadas, extremo de bloqueo absoluto, extremo de apertura absoluta,
energías de las piezas, y otros.
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Capítulo 1
Historia de una idea
A partir de la revista El Rey (antecesora de Ajedrez de Estilo)
n° 4, en 1980, se publicaron nueve capítulos y un apéndice en seis partes de lo que se llamó «Secretos de Miguel Tal». También se publicaron
tres notas actualizadas y corregidas en los números 534, 536 y 537 de
la revista Check!, de la Federación Canadiense de Ajedrez Postal, en
1999.
Desde el origen de la idea de las 'casillas reales' (de esto se
trata), ha corrido mucha agua bajo el puente. Allá por los años 60, las
'diabluras' de Tal recorrían el mundo, causando sensación. Se presen
taba algo diferente al frío estilo 'cientificista' de Botvinnik.
En Córdoba, Argentina, un pequeño grupo de ajedrecistas con
inquietudes se dedicó a la dificil tarea de procurar 'descifrar ' al menos
'algo' de tan particular estilo. La idea original de las 'casillas reales'
es del talentoso maestro cordobés Osvaldo Bazán, que brilló en esa
época, y tuvo la gran satisfacción, por ejemplo, de participar en el 'super
torneo' del Sesquicentenario de nuestra independencia (Buenos Aires
1960), venciendo entre otros a Uhlmann, Pachman y Wade, y entablando
con el mismísimo Bobby Fischer y los yugoslavos Gligoric e Ivkov entre
otros.
En tanto, en Buenos Aires, un fuerte ajedrecista de primera cate
goría que había participado en dos Campeonatos Metropolitanos Supe
riores, Sergio Wavrenchuk, también veía azorado las hazañas del
'mago de Riga'. Era un agudo observador, y también fue profesor en
varios Clubes (Boca Juniors y ADISYC, entre otros). Wavrenchuk y
Osvaldo Bazán no se conocían personalmente, pero cierta tarde de
1965, en el concurrido Salón Caissa de La valle y Maipú en Buenos
Aires (en el mismo lugar donde luego estuvo muchísimos años el Bar
'La Escalerita'), Wavrenchuk observó que en una de las mesas había
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Juan Sebastián Morgado
varios habitués analizando una partida de Tal. Entre ellos, estaba el
ajedrecista cordobés Claudio Domínguez, que hablaba de las 'casillas
reales'. Domínguez era, obviamente, amigo de Bazán.
«¿Cómo es eso de las casillas reales?», preguntó Wavren
chuk. Luego de algunas respuestas evasivas, Domínguez le explicó
brevemente la idea. Durante el viaje de regreso a su casa de Villa
Bosch (Buenos Aires), rondó por su mente la teoría que el estilo de Tal había inspirado.
Paradqjicamente, estas ideas no fueron desarrolladas ni continuadas por Bazán, como él mismo me explicó durante la Final del Campeo
nato Argentino de 1973 en Santa Fe, que ambos disputamos. «Me dedi
qué a estudiar a Petrosian, lamentablemente para mí», me contó.
En cambio, para Wavrenchuk fue la idea madre que impulsó su capaci
dad creativa y su notable poder de observación.
Fue una gran satisfacción estudiar con él durante bastante tiempo,
entre 1968 y 1973. Nos reuníamos los domingos por la tarde en mi casa
de Pardo 23 61, Bella Vista (Buenos Aires). De esa época, por fortuna,
pude recopilar muchas notas sueltas para darle forma a esos artículos,
y ahora -¡cuarenta años después!- a este libro. Solamente el Dr. Raúl
Castelli, en su desaparecida revista artesanal «l.P4R!!», en 1967, publicó una pequeña parte, que pasó totalmente desapercibida para la
afición (e incluso para mí) en aquel momento.
Reacciones positivas y negativas
Luego de la publicación en «El REY», recibí muchas felicitaciones,
y también duras críticas. En 1982, por ejemplo, estuvo en Buenos Aires
el GM letón Vladimir Bagirov. «Nada mejor que mostrarle el
trabajo», pensé.
Por la amable gestión del Profesor Jorge Berguier, obtuve
una entrevista en el Hotel Sarmiento, del Barrio de Congreso de la
Ciudad de Buenos Aires, donde se alojaba. Traductor mediante, le
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Casillas Reales
expliqué la idea, luego de lo cual, poco menos, ¡se encolerizó!. ¡Hacía
tiempo que no veía a alguien tan enojado! «Nadie sabe más de Tal que yo, que estuve cerca de él desde sus comienzos. Tal siempre ha basado sus éxitos en una intuición extraordinaria y nada más»,
fue su respuesta. No hubo ninguna posibilidad de diálogo posterior, y
me quedé con la impresión de que Bagirov tenía una personalidad muy
rígida, y que le resultaba dificil tolerar los más mínimos disensos. Al
menos, podemos decir que Bagirov minimizaba la capacidad de Tal de
producir ideas, al reducir todo a la simple intuición.
Más amable, fue, en cmnbio, el desacuerdo con el GM Bent Larsen, producido en la entrevista durante el Magistral Clarín de 1982
(publicado en la revista El Rey n° 17). «Eran sacrificios para compli
car más. Eran una locura total. Claro que jugando así él ocasionaba
mucho miedo a sus rivales, y explotaba muy bien esa circunstan-.
Cla».
Misha Tal en persona
Emocionante fue para mí conversar personalmente con Tal en
198 7, cuando vino a la Argentina para jugar el Magistral de Termas de
Río Hondo junto a Polugaievsky. Luego de explicarle en qué consistía
el trabajo, le entregué una copia en idioma ruso (disponía de ella gracias
a la traducción realizada por Jorge Dulik). Al día siguiente, Misha me
d�jo: ··Es un trabajo de investigación muy interesante··, agregando
con gracia: «Bueno, ¡parece que Ud. sabe más de mí que yo mismo,
pero más no puedo decirle porque sino mis rivales me van a tomar
el tiempo!». Cuando Tal vino nuevamente a nuestro país para participar
del Magistral Najdorf en 199 1, dio otra vez muestras de su fino sentido
del humor, preguntándome: «¿Ha seguido Ud. sacrificando piezas
en sus partidas postales? A mí ya casi no me dejan ... ».
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Juan Sebastián Morgado
Eduard Gufeld
Otro Gran Maestro destacado a quien pude mostrar este trabajo
fue Eduard Gufeld, durante la Olimpíada de Tesalónica, en 1988. «Maravilloso», dijo. «Ud sabe, yo también gusto de ese estilo, y he sa
crificado piezas en muchas partidas. Me resulta sorprendente su
idea de que Tal es un ajedrecista posicional y no táctico».
Es verdad; lo que siempre se afirma en este trabajo es que muchos
de los sacrificios de Tal son posicionales, porque no constituyen simples
combinaciones ganadoras, s ino que dan lugar a largas luchas, en las
que la ecuación "tiempo - material" es llevada a su máxima expresión.
La Prueba del tiempo
Por cierto que el ajedrez ha cambiado radicalmente en estos úl
timos cuarenta años. Pasamos rápidamente por la época de las Mephisto,
y hoy estamos en la era de los Fritz, los Junior, los Rybka, los super
procesadores. Todo lo que ofrecemos aquí sobre este tema ha sido
analizado con los modernos programas, y como toda prueba del tiempo,
hubo partidas que sobrevivieron, y otras que no. Por eso, el material
que sigue tiene muchas diferencias con el que se presentó hace cuarenta
años. Algunas partes han sido eliminadas, otras corregidas, y también
se ha agregado material nuevo, producido durante ese prolongado lapso.
Con los conocimientos derivados de este concepto he jugado
torneos por correspondencia muy importantes con resultados más que
aceptables, inclusive dos campeonatos mundiales y una veintena de
torneos de grandes maestros, logrando obtener el vice campeonato
mundial en 1984, y llegando al record de once normas de Gran Maestro.
La pequeña idea original se fue ampliando a un amplio espectro de
conceptos ajedrecísticos, algunos de los cuáles desarrollaremos aquí.
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Botvinnik,M . - Tal,M. [E69]
U.R.S.S., Cmnp eonato Mundial Moscú 1 9 60 (S exta Partida.)
l . c4 C f6 2 . C f3 g6 3 . g3 Ag7
4 .Ag2 0-0 5 .d4 d6 6 .Cc3 Cbd7 7 .0-0 e5 8 . e4 c6 9. h3 Db6 1 0 . d5
cxd5 ll. cxd5 C c5 1 2 . C e l Ad7
1 3 . C d3
S i 1 3 .Tb l a5 1 4 .Ac3 Dc7 1 5 . a4 Tfc8 1 6 .Rh2 h5 17 .f3 h4 1 8 . g4 Ch7+, estamos en Udovcic-Tringov, L eningrado 1 9 6 7 . 1 3 . . . Cxd3 1 4 .Dxd3 Tfc8
Trans cr ib imos a c ont inuac i ó n l o s c omentari o s de l propio Tal en su libro Práctica
del aje drez m agis tral: <<...las
11
negras, en parte por conside
raciones psicológicas, se deci
den por operaciones en el .flan
co dama, y solamente después
de haber adormecido los rece
los del adversario, efectuar la
ruptura f5. Reconozco que ya
Juan Sebastián Morgado
entonces barruntaba el sacrificío Cf4 (idea un tanto nebulosa). Ocupo la columna «e» con la Tf8 para mantener defendido el peón 'a ' y también para que las blancas pensasen que no me dispon ía a man io b rar en el
flanco rey». Vemos aquí sinteti-zados los tres conceptos : camino directo , camino indirecto y pres enc ia permanente del directo.
S i 1 4 . . . Ch5 ? ! 1 5 .Ae3 Dd8 1 6 . D e2 f5 1 7 . exf5 �; 1 4 .. . C e 8 1 5 .Ae3 D d8 1 6 .Tac l f5 1 7 . exf5 gxf5 1 8 . f4 con igualdad, según el propio Tal . 1 5 .Tb l
1 5 .De2 Ce8 1 6 .Ae3 Db4 con c ontraj uego . 1 5 . . . Ch5 1 6 .Ae3 D b4 17 .De2
Esta línea ha sido discutida por la teoría casi hasta hoy. Veamos : 1 7 .Tfc l f5 1 8 .Afl Cf6 1 9 . f3 Ch5 20 .Af2 Ah6 y las negras tienen buen juego, Wexler, B . -Rubinett i , .T . /Bu enos A ires 1 964; 1 7 .Dd l Tc4 1 8 .Rh2 Tac8 1 9 .Af3 Cf6 20 . a3 Da5= Pancz yk, K . - W oj tki e w i c z,A . / Czestochowa 1 992; 1 7 .a3 Db3 1 8 . D dl Dxd l 1 9 .T fxd 1 f5 2 0 . Rh2 f4 y las negras tienen buen j uego, To dorov, O . - Tkachiev, V./Cappelle la Grande 1 994 . 1 7 . . . Tc4
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S i 1 7 . . . f5 ? 1 8 . exf5 Axf5 1 9 . Tb c 1 A d7 2 0 . C e4 ! Ab 5 ? 2 1 . T xc 8 + Txc 8 2 2 . D g4+- , n1i entras qu e 1 7 . . . Tc 7 ! ? fue sugerida por Khalifman. 1 8 .Tfc l
1 8 . a3 D b 3 1 9 . D d 1 c on leve ventaj a, según Khalifman. 1 8 . . . Tac8
Con las últimas movidas las negras se dedican al flanco dama (columna abierta) y en la próxima j ugada ( 19 . . . f5 ) virarán hacia el otro flanco. Más adelante veremos claramente la justifi-. , cacwn . 1 9.Rh2
1 9 .Axa7 ? ! f5 ! (19 . . . b 6 2 0. D e 3 Td4 oo) 2 0 . exf5 A xf 5 2 l .Ta l b 6�; 1 9 . a3 D b 3 (19 . . . Da5 !?) 2 0 . D d l D xd l + 2 1 . Txd 1 c on i de a de Af l ! (Petrosian) . 1 9 . .. f5 20 . exf5 Axf5 2 1 .Tal '! !
2 1 . a3 Db3 22 . C e4 Tc2 ? (2 2 . . . Tc l =) 2 3 . Txc 2 Txc 2 24 . D d l Cf4 ! ? interesante , s egún Khalifman, y «con imprevisibles complicaciones», según Tal . S in emb argo , luego de 2 5 . gxf4 exf4 26 . Tc l Txb 2 2 7 . D xb 3 Txb 3 2 8.Axf4 l as blancas frenan todas las amenazas , y quedan con gran ventaj a . 2 1 . . . C f4
Casillas Reales
2 l . . . Cf6 ! ?oo 22 .gxf4 exf4 23 .Ad2
1
Ob s erv e e ste diagrama . Vea la ubicación de las siguientes piezas : Af4 , Ag7 (listo para p a s ar a A e 5 ) , Tc 4 , D b 4 , f4 . Pronto volveremos s obre e ste punto. El resto de la partida es muy interesante .
G o l db erg , s e gun do de Botvinnik, comentó en e l boletín del torneo que «ganaba 23 . a3 Db3 2 4 . Axa7 p ero Tal indica 24 . . . A e 5 2 5 .f3 [ 2 5 . Rg l b 6->, s egún Tal y 2 5 . Af3 , sugerida posteriormente por Konstantinopolsky se encuentra con 25 . . . b6 26.Dd l D xb2 2 7 . Ta2 Txc3 2 8 . Txb2 Txc l 2 9 .D d2 (ó 29. De2 Ac2 ooj 2 9 . . . Ac4 ! + que es una curiosa justificación táctica de la j ugada C f4] 25 . . . b6 2 6 . D d l D xb 2 2 7 .Ta2 Txc 3 2 8 . Txb2 Txc l 2 9 . D d2 Axb2 3 0 .
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Dxb2 Tb 1 3 1 .Dd4 Tc2 32 .Dxf4 Tbb2 33 .Dg3 Rf7 34 .Rg l Txg2+ 3 5 .Dxg2 Txg2+ 3 6 . Rxg2 b 5 y luego de Ac8 y Ab7 las negras ganan un peón , pero lo s alfiles de di st into c o l or pronos t i can unas posibles tablas . 23 . . . D xb 2 ?
Jugando p ara ganar, s in medir los riesgos . El propio Tal indicó luego de la parti da que había pensado en jugar 23 . . . Ae5 pero que desistió de el la por 24 . f3 Dxb2 2 5 . C d 1 D d4 2 6 . Txc4 Txc4 27 .Tc 1 Txc 1 28.Axc l Dxd5 29 .Af l c on p o s i c i ón aproximadamente igual . 2 4 .Tab l
24 . C d 1 ? D e5 + Tal 24 . . . f3 25 .Txb2 ?
B otvinnik n o encu entra el camino. Lo c orrecto era 2 5 . Axf3 Axb l 2 6 . Txbl D c 2 2 7 . Te 1 [varios días después d e la partida, Flohr encontró 27 .Ae4 ! Txe4 (27 . . . Ae5+ 2 8. Rg2 Txe4 29 . Cxe4 Dxb l 3 0. Cxd6 Axd6 3J. De6+ Rg7 32.Dd7+ Rg8 33. Dxc 8 + A.f 8 3 4 . De 6+ Rg7 3 5. Ac3 + Rh 6 3 6. d6+ -) 2 8 . C xe4 D xb l 2 9 . C xd6 Tf8 3 0 . D e 6+ Rh8 3 1 . Cf7+ Txf7 3 2 . D xf7+] 2 7 .. . Db2 2 8 . Tb l = Tal 25 . . . fxe2 26 .Tb3 Td4 !+ 27.Ael
2 7 . A e 3 Txc 3 2 8 . Tbxc 3 Td l -+ ; 2 7.Tb2 Txd2 2 8 . Txd2
Juan Sebastián Morgado
Ah 6-+ (Khal�fman indica la menos fuerte 28 . . . Axc3 29. Txe2
Ae5+ 30. Txe5 Txcl+)
27 . . . A e5+ 28.Rg1 Af4?! 28 . . . Txc3 29.Tbxc3 Tdl-+
29 .Cxc 2 Txc1 30 .Cxd4 Txcl +
3 1 .Afl A e4 3 2 . Cc 2 Ae5 3 3 . f4
Tal,M . - Brinck Cl aussen,B.
[C76) Hastings 1 9 63/64 l.e4 eS 2 . C f3 C c6 3.Ab5 a6 4 . A a4 d6 5.c3 A d 7 6 . d 4 g6
7 . 0-0
7 . d x e 5 C x e 5 (7 . . . dxe 5
8.Ag5!?) R . C xe 5 dxe 5 9 . A g5 Axa4 1 O . D xa4+ Dd7= Roz enthal, S . -Rauzer,V./URS S/1 9 3 5 7 . . . A g7 8 . dxe5
8 . Cb d2; 8 .Te1 !? 8 . . . dxe5
8 . . . Cxe5 9 . Cxe5 dxe5 10. f4 Axa4 ll.Dxa4+ b5oo Khalifn1an.
14
A f6 3 4 . T x b 7 A xd 5 3 5 .Tc7 Axa2 3 6 . Txa7 Ac4 3 7 . Ta8+
R f7 3 8 .Ta7+ Re6 3 9 .Ta3 d5
40 .Rf2 Ah4+ 4 1 .Rg 2 R d6 42 .
C g3 Axg 3 43 . Axc4 dxc4 4 4 .
Rxg3 Rd5 4 5 .Ta7 c 3 4 6 .Tc7
R d4 0-1
9 .Ag5 f6 '? !
Luego de 9 . . . Cf6 Gligoric le ganó una bon i ta p art i da a Sliwa, en el torneo de Moscú 1 956 . ; 9 . . . Af6 IO.Ae3 Cge7 11. Del 0-0 12 . Ah6 Ag7 1 3 . Axg7 Rxg7 14 . D e3;!; Zurakhov-Gufeld, URS S 195 9 . ; 9 . . . Cge7 1 0 . Cbd2 h6 l l .Ae3;t 1 O.Ae3 Ch6 l l . C bd2
l l .Ac5 Af8 l 2 .Axf8 Rxf8 13 .Dd5 D e7 14 .Td l AeRoo Lukasi ewicz,A . -Szmac inska, G . / Bydgoszcz 1 9 9 0 . 1 1 . . . e f7 1 2 . b 4 o- o 1 3 . A b 3
Casillas Reales
TeS'? !
Qui eren op oners e a l a molesta clavada del Ab3 , pero , c on la misma i dea , era mej or 1 3 . . . Dc8 1 4 . a4 Ae6 1 5 .Axe6 Txe6 16 .
D b3 D d7 1 7 .C c4 Te eS 1S . b 5 axb 5 1 9 . axb5 T x a 1 20 .Txa1
CcdS 2 1 .b6 cxb6?
Pierde el control sobre la casilla d5 , donde se ubicará un fuerte cabal l o blanc o . 2 1 . . . c 6 2 2 . Td 1 D e 6 2 3 .Ac 5 (2 3. Ca5 Dxb 3 24. Cxb 3 Ce6 25.Rflt) 23 .. . Af8 24 .Db4� 22 . Cxb6 D c6
Un p o c o meJor era 22 . . . D d3 2.LCd5 Af8 24 .h4 ! Rg7
25 .h5 ! Ac5
Por supuesto, era horrible 25 . . . gxh5 ya que la posición del rey negro queda completamente
15
despro t e gi da . Las s igui ent e s variantes, algunas d e las cuáles incluyen e l sacrifi c i o de dos peones , s on ilustrativas de las d ifi cu l tade s de las n e gras : 2 6 . C h4 C d6 2 7 . D d 1 ! C xe 4 2 8 . C f5 + R g 6 2 9 . Ta4 Rxf5 3 0 . Txe4 R e 6 3 1 . c4 c on gran at aque . Por ej empl o : 3 1 . . . f5 3 2 . Th4 f4 3 3 . Ab6 (33 .Axf4! ?) 33 . . . Rt7 34 .Axd8 Txd8 3 5 .Dxh5+ D g6 3 6 . D xe 5 Ad6 3 7 . Txf4+ Rg8 3 8 . Ce7+ Axe7 3 9 .Dxe7+-2 6 . A x c 5 D xc 5 2 7 . Ta4 Te 6
2 S . Tc4 D a7 2 9 . Tc 7 Ta6 3 0 .
D b4 gxh5? Último error [3 0 . . . Ta l +
3 l . Rh2 Da3 ] 3 1 .De7 D aS 3 2 .Ch4 1-0
Las e s c aramuzas en el flanco dama escondían el propósito de ataque sobre el Rey .
• Tal,M. - Stean,M. [D34]
Moscú , 1 9 75 . l .Cf3 C f6 2 . c4 e S 3 .C c 3 e6 4 .g3 d5 5 . cxd5 exd5 6 . d4 C c6
7 . A g2 A e 7 S . 0-0 0 -0 9 . A g 5
cxd4 1 0.C xd4 h6 1 1 .Ae3 TeS
1 2.Db3 Ca5 1 3 .Dc2 Ag4 14 .h3 Ad7 1 5 .Tadl TeS
1 5 . . . D c 8 1 6 . Rh 2 Cc6 1 7 .Cxd5 Cxd5 1 8 .Axd5 Axh3
Juan Sebastián Morgado
1 9 . C xc 6 bxc 6 2 0 . A xc 6 Axfl 2 1 .Txfl-+ Vukic,M .-Novoselski ,Z . /Kraguj evac 1 9 84 .
16 . C f5 Af8
Calculando que las blancas no pueden capturar en «d5)) p or Te S c on amenaza dobl e , pero . . . 1 6 . . . A e S 1 7 .Axd5 Cxd5 1 8 . Txd5 Axe3 1 9 . Cxe3 Dc 7oo 12-Yz De Boer,G .-Vladimirov,E ./ Ti lburg 1994; c ontra 1 6 . . . Ab4 e s fuerte 1 7 . Axd5 ! [ 1 7 . A d4? ! C c 6 1 8 . Axf6 D xf6 1 9 . e4 (19.
Txd5 Axf5f1) 1 9 . . . Axc3 20. Dxc3 D xc 3 2 l . b xc 3 A xf5 2 2 . e xf5 C e 7= Kovac i c , P. -Susnik , M . / Tomo Zupan 1 994 ; ó 1 7 . g4 Axc 3 1 8 . b x c 3 A xf5 1 9 . Dxf5 Cc4f± (19 . . . Txe3? 20.fxe3 Cc4
2l.Axd5 Dc7 22.D.f4± Schmidt, W. -Hernandez ,R. /Vrsac 1 977)] 1 7 . . . Cxd5 (17 . . . Te5? es s imi lar a la partida que estamos anali-
16
zando: 18.Cxh6+ gxh6 19.Dg6+
Rh8 20.Dxh6+ Rg8 2l.Dg6+ Rh8 22.Axj7+- Tratar,M .-Susnik,M/Vrhnika 1 995) 1 8 .Txd5 -+ 17.Axd5 ! TeS ?
Un error que permite un fulminante ataque sobre el rey, c omenzando por un sacrifi c io de pieza . Ante tan grande estructura de piezas reales , mejores chanc e s prácti cas pare c e brindar 1 7 . . . C c4 Por ej emplo : 1 8 .Axb7 Tb8 1 9 .Ac6 Txb2 20 . De 1 D c 8 2 l . A xd7 C xd7 2 2 . Axa7 C de5 23 . g4 Da8 24 .Ad4 Txe2 !f±
1 8.Cxh6+ ! gxh6 1 9.Dg6+ Rh8
2 0 . A x f7 Tc6 2 1 . T d 5 D e7
22 .Ad4 C c4 23.f4 Ag7 24.Axe5
Cxe5 25.Txe5 Df8 26.Ab3 Cg4
2 7 . D d 3 C xe 5 2 8 . fx e 5 D e S +
29.Rh2 Ae8 30 .e6 Td6 3 1.De4 1 -0
Casillas Reales
Mik adze,Z. - Tal,M.
G ori 1 96 8
En esta posición derivada de un Stonewall , Tal define rápidamente pasando su alfil a la diagonal real . 30 . .-.AdS ! 3 1 .Df2 Ac7 3 2 .Ag2 Dxg3+ 0-1
( •.... \
. ; . ' T al ,M - Benko,P [A43]
Torneo de Candidatos , Yugoslavia 19 5 9 l . e4 c5 2 .Cf3 g6 3 . d4 Ag7 4.d5
d6 5 . C c3 C f6 6.Ab 5 + C bd7 7 . a4 0-0 S .0-0 a6 [ 8 . . . C e 8 ] 9.Ae2 TbS l O.Te l C eS l l .Af4
C c7 1 2 .Afl
Tal no juega la rutinaria 1 2 .a5 , sino que permite a su adversario la actividad en el flanco dama, para «desviar» la atención
17
s obre la ruptura e S , verdadero obj etivo . 12 . . . b 5 1 3 . D d2 TeS 1 4 . h3
1 4 . e 5 b4 1 5 .exd6 exd6 (1 5 . . . bxc3 1 6. dxc 7 cxd2 17.
cxd8D Txd8 18.Txe7 Txb2 1 9. Cxd2t) 1 6 .Txe8+ Cxe8 1 7 . C d 1 D e7oo Rubinetti , J. -Browne,W. / Mar del Plata 1 97 1 1 4 . .. C f6 1 5 .Tadl Ad7'! !
1 5 . . . b4 1 6 . Cb 1 Ch5 = 1 6 . e5
Las blancas no juegan 1 6 . axb5 ya que piensan en sacrificar su peón «a». Al capturarlo , además , las negras alejarán una pieza de la defensa de su rey. 1 6 . . . b 4 17 . C e4
1 7 . exf6 b x c 3 1 8 . b xc 3 Axf6oo 1 7 . . . C xe4 1 S .Txe4 A xa4
Y ya tenemos cuatro piezas agrediendo la ciudadela del rey negro, en tanto el Aa4 y el Cc7 están alejados . 1 9.Ah6 AhS
1 9 . . . dxe5 20.Axg7 (20. Th4 Af6oo) 20 . . . Rxg7 2 1 .Th4 h5 22. Txh5 !±] 20.Tdel f6'!
Permite armar la jaula del rey negro , mediante el s encillo avance del peón «e» . Mej or era 20 . . . Ab5 2l.e6 fxe6 (Si 21 . . .f 5 se produce el mismo final que en la partida. 22.Axb5 axb5 23.
Juan Sebastián Morgado
Th4 Axb2 24.AJ8!+-) 22 .Axb5 axb 5 2 3 . dx e 6 A xb 2 2 4 . D f4 (24 . Cg5 Af6 (24 . . . d5 25. Tf4 Af6 26. Cj7±) 25 . Cf7 (25. Tf4 ? Tb 6 26. Cj7 Da8+) 25 ... Dc8 26 .Ag5 Ac3 27 .Df4 y tablas. ) 24 . . . Af6 25 . h4 d5 26 . TeSt
2 1 . c6 ! f5
2l . . . A b 5 22 . Th4 f5 2 3 . Af8! Cxd5 24 .Txh7 ! f4 25 .Th6 Txf8 26.Txg6+ Ag7 27 .Dxd5+-22.Th4
18
Las p i ezas real es e stán marcadas con un cuadrado. Las casil las marcadas con círculos indican la jaula del rey negro. 22 . . . Axb2
Obnubilado por la amplia ganancia de material, B enko no adv i e rt e el si gui ent e g o lp e morta l . D e t o do s mo d o s , s i 2 2 . . . Af6 2 3 . Cg5 (23.g4 Axh4 2 4. Cxh4 Tf8 2 5.gxf5 Tf6 2 6.fxg6
hxg6 2 7.Ad3 + -) 23 . . . D c 8 24 . g4 Db7 25 .Ag2+ 23 . A f8 ! ! T x f8 2 4.D h 6 T f7
2 5 . exf7+ Rxf7 26 .Dxh7+ Ag7
2 7 .T h 6 D g8 2 8 . D xg6+ R f8
2 9.Cg5 Dxd5 30.Th8+ 1 -0
A ·�
L a sigui ente part i da es tatnbién un buen ej emp l o de <(jugadas indirectas . » (Ver capítulo 2)
Tal,M.- Shamkovich,L . [C87 ]
Campeonato de la U.R.S . S . Kiev, 1 9 64 l . e4 e5 2 . C f3 C c6 3 . Ab5 a6 4 .Aa4 Cf6 5 .0-0 Ac7 6.Tel d6
7 .c3 0-0 8 .d4 exd4 9.cxd4 Ag4
10. C c3 C d7 IO . . . b 5 1 l . Ab 3 Ca5 1 2.
Ac2 c6 (12 . .. Te8 1 3.Ae3t S lavicek,M. -Vavrik, J. /Zl in 1999)
Casillas Reales
1 3 . h3 Ah5 14 .Af4± Jaeger,F. Oldernes,L . /N or 1 9 9 7 l l .Ae3 C b 6 1 2 . A b 3 Af6 1 3 . Dd3 Axf3 1 4 .gxf3 D d7
1 5 . Rg2 !
El obj etivo es evitar que la dama negra se c onvierta en real (Dh3 ) , y para eso se necesita Hevar el rey a h 1 en dos tiempos. 15 . . . C e7 1 6 .Tgl g6 1 7 .Rhl
y e l o bj e t ivo h a s i d o cumplido, ya que si las negras j u e gan D h 3 , s erá e xpulsada mediante Tg3 . 1 7 . . . d5 1 8 .Ag5 Axg5 1 9.Txg5 c6 2 0 .C e 2 Tad 8 2 1 .Tdl C a8
2 2 . D e3 C c7 2 3 . T d gl R h 8 24 .T5g3 C g8 2 5 .Ac2
(ver diagrama)
Pu e d e observarse qu e t odas las p i ezas b lancas s on reales , o pueden serlo . 25 . . . C e6 !
1 9
C ontrago lp ean do s obre d4 , y obligando a la defen sa . 26.Tdl
La torre se ha tenido que mover m omentán eamente en forma pen du l ar, p e ro nunca ab and o n a s u propó sit o de agredir desde g l . 26 . . . D e7 27 . a3 Td7 28 . b 4 C f6
2 9 . T h 3 Cg8 30 .Tgl d x c 4
3 1 .fxe4 Tfd8 3 2 .Td1 Rg7 33 .f4
C c7 ?
Juan Sebastián Morgado
La i gnoranc ia del c oncepto de «casillas real es» ocasiona serios errores de evaluación como é ste. Tiene el s erio inc\lnveniente de al ej ar el caballo defensor de su flanco rey. La defensa correcta era 3 3 . . . f5 !t Ahora, luego de: 3 4 . f5 !
e l ataque de las blancas es demoledor. 3 4 . . . f6 3 5. fxg6 h xg6 3 6 .T g l
C e6 37 .e5 Cf8 38 .Axg6 ! Cxg6 3 9. C f4 Dfi 40. e6 Te7 4 1 . exf7 Txe3 42 .fxg8D+ 1 -0
�'· -�
Morgado,J.-Kietsel ,M. [B84 ]
X Campeonato Mundial corr. , 19 8 2
l. e4 eS 2.C f3 d 6 3 . d4 c x d 4
4 .Cxd4 Cf6 5 . C c3 a6 6 .Ae3 e6 7 .Ae2 Dc7 8.f4 b5 9.Af3 Ab7
1 0. e5 dxe5 l l .Axb7 Dxb7
Kasparov y Nikitin indic an aquí qu e mere c e c ons idcrarse e l sacrificio de cal idad l l . . . exd4 1 2 .Axa8 dxe3 13 .Df3 ( 1 3 .Dd3 Ac5 (13 . . . Dxj4 14. 0-0-0 Ae7oo) 1 4. C e4 Cxe4 1 5 .Dxe4 0 - 0 1 6 . 0 -0-0 Cd700) 1 3 . .. Aa3 14. Cd l Axb2 1 5 . Cxb 2 D c 3 + 16 . Re2 Dxc2+ 1 7 .Rxe3 D xb2
2 0
1 8 . Thb1 Dc3+ 1 9 . Rf2 Dc5+oo 1 2. fxe5 Cfd7 1 3 .0-0 b4 ! ?N
En l a s e di c i ones primera y segunda de la Enciclopedia Yugosl ava Tomo B , s e indicaba e sta pos i c i ón como complej a . Luego de aparecer esta partida en el In forma dor Yugos l avo número 33 , incluída entre las 3 0 mej ores del período , y con una cali ficac i ón de 1 O punto s del j urad o Gran Ma e str,o Laszl o Szabó, Kasparov revisó la línea, y en la tercera edición de la obra mencionada, indica el sacrificio 1 1 . . . exd4 . Luego , Kasparov y Nikitin, dicen en su l ibro
. . De
fensa Siciliana . . , Editorial Fun
damentos , España 1987 , página 2 5 0 , que
.. esta jugada, que po
dría encaj ar en la categoría de las habitualmente calificadas de «natural es», va a dar lugar a un ejcn1p l o de anál is i s de l argo
Casillas Reales
alcance que pennitirá, sin embargo, un rápido desenlace . En probabl e que l as negras hayan replicado c on excesiva brusquedad, provocando así un recrudecimiento de la lucha, considerando, además, que tanto el desarrollo como la coordinación de las piezas tenían que inclinar la balanza en favor de las blancas
. ..
En la primera partida en la que se había planteado esta variante se j ugó 1 3 . . . C c 6 1 4 . Cxc 6 (1 4. Dh 5 Cdxe5 1 5. Cxc 6 Cxc 6 1 6. Ce4 t) 1 4 . . . D xc 6 1 5 . D h 5 g 6 1 6 . Dh4 A g 7 1 7 . Ah 6 A xh 6 1 8 . D xh6 b 4 oo G hin daUngureanu , Buc arest 1 9 7 8 ; Dudosa es 1 3 . . . Cxe5 ?! ya que luego de 14 .Dh5 [parece demasiado arriesgada 1 4 . Cxe6?!, ya que después de 1 4 . . . fxe 6 1 5 . Dh5+ Cg6 1 6 .Tae 1 Cd7 1 7 .Ag5 (1 7. A d4 e 5 1 8 . A xe 5 0-0-0--t Salazar Jacob-Georgiev, Innsbruck 19 77) 1 7 . . . Dc6 MoisiniB ondoc , B ucarest 1 9 6 5 , y las negras resisten el ataque blanco , manteniendo ventaj a 1naterial .] 1 4 . . . Cg6 1 5 . Dh3 (1 5. Tae 1 Cd7 1 6. Dh 3 Ae 7 1 7. Txf7 Rxf7 1 8. Dxe 6+ Rf8 1 9. Cd5 Cf6 20. Tf1 Td8oo Wittmann-Jakobsen, Olimpíada de Buenos A ires 1 9 7 8 .) 1 5 . . . Ae7 (15 . . . Ad6 1 6. Cxe6fxe6
2 1
1 7. Dxe6+ De 7 1 8. Dc8+ Dd8 1 9. Db 7t Djukic- B orisek, Portoroz 2005 .) 1 6 .Txf7± WatsonGutman, B ruselas 1 9 8 6 . 14.Dh5 ! ?
En el momento de jugarse esta partida, esta jugada era una novedad teórica. Me atraía mucho, ya que des de el punto de vista de las casillas reales ofrecía eno1mes posibilidades de desarrollo. Por cierto, en el transcurso del juego podrá verse la estrategia de las blancas de procurar presionar esas casillas, aún obsesivamente y a costa de mat er ia l . S i 1 4 . C a4 C c 6 [ 1 4 . . . Cxe5 ?! 1 5 .Dh5 Cbc6 (1 5 . . . Cg6 1 6. Dh 3 t) 1 6 . C xc 6 C xc 6 1 7 . CeS Axc 5 1 8 . A xc5t] 1 5 . D h 5 C dx e 5 1 6.C x e 6 g 6 1 7 . C ec 5 Db5oo; o bien, si 1 4 . Txt7 Rxf7 1 5 . D g4 C c 5 1 6 . Tfl + (1 6. Ca4 Cb d 7 1 7. Tfl + Rg8 1 8. Cxc 5 Cxc5 19. Cxe6 Dd7 20. Dj3 Cxe6 2l .Dxa8 h6oo; 1 6. Tf1+ Re8 1 7. Cxe 6 Dd7 18. Txj8 + Txf8 19. Cxg 7+ Rf7 20. C.f5 bxc 3 2 1 . Cd6+ Dxd6 22. exd6 cxb2 23. Df5+-) 1 6 . . . Re8 1 7 . Cxe6 D d7 1 8 . Txf8+ Txf8 1 9 . C xg7+ Rf7 2 0 . C f5 b xc 3 2 l . C d 6 + D xd 6 22 . exd6 cxb2 23 . D f5 += 1 4 . . . g6 1 5 .Dh3 bxc3
1 5 . . . A c 5 1 6 . Txf7 Rxf7 1 7 .Dxe6+ (1 7. Tfl +?! Re80 18 .
Juan Sebastián Morgado
Dxe6+ Rd8D 19. Cd5 a5 20.c4
Ta6f!-) 1 7 . . . Rg7 1 8 . Cf5 + gxf5 1 9 . Dh 6+= ; 1 5 .. . Cxe 5 1 6 . Txf7 Cxf7 17.Dxc6+ De7D 1 8 . C d5 (18.Dc8+ Dd8 19.De6+=) 1 8 . . . Dxe6 1 9 .Cxc6 Rd7 2 0 . Cxf8+ Txf8 2 l . Cb6+ Rc6 22 . Cxa8 Te8 2 3 . Te 1 C d7 24 . C c 7 Rxc 7 2 5 . A b 6 + C xb6 2 6 . Tx e 8 R d6 oo ; Kasparov y Nikit in indican como "p l au sible" 1 5 . . . C c 5 1 6 . C c e 2 C b d 7 [ 1 6 . . . Ag7 1 7 . a3t (N o es tan buena la sugerencia de Kasparov y Niki tin 17. C.f5?!
de b i d o a 17 ... gxf5 18.Axc5
Cd7+)] evaluación que parece correcta . Por ej emplo , s i 1 7 . Cf3 Ce4 1 8 . C ed4t 1 6 .Txf7 ! cxb2'? !
A cambio de la pieza las blancas han conseguido un fortís imo ataque , aún a pesar de que deben perder un tiempo en
2 2
bloquear la casilla b 1 con la torre atacada por el peón . (Kasparov y Nikitin) Si 1 6 .. . Rxf7?? 1 7 . Dxe6+ Rg7 1 8. C f5 + gxf5 1 9 . Ah6##; la mej or posibilidad defens iva p ara las negras e s 1 6 . . . D d5. Por ej emplo : 1 7 . Tafl (17.Cxe6? Rxj7 18. Tf1+ Rg8)
1 7 . . . Ac5D y ahora luego de la sencilla 1 8 .bxc3 , si por ej emplo 1 8 . . . C c 6 1 9.Cxe 6 A xe 3 + 2 0 . Rhl Ta7 2 1 . Cg7+ Rd8 22 .Dxe3 Dxe5 (22 . . . Ccxe5 23.c4!t) 2 3 . Df3�. Kasparov y Nikitin indican en esta variante 1 8 .Txh7?! Tf8 «y quizás las negras pudieran haberse defendido con "éxito")), pero en realidad ellas están algo mej or; y si directamente 18.Cxe6?! Axe3+ 19.Rh1 Dxe5 salvando las amenazas más importantes , y quedando con ventaj a material .) 1 7 . D xe 6 + Rd8 18.Tbl A c 5
1 9. D c4 TeS 1 9 . . . Axd4? 20.Dxd4 ! Cc6
2 1 . D d5 !± 20.Rhl!
20. e6? De4 ! 2 1 .Ag5+ Rc8 22 . exd7+ Cxd7 23 .Txd7 Rxd7 24. Dxc5 Te5 2 5 . Cb3 ! Re8 ! 26 . Dc3 ! Txg5 27 .Te l ! Txg2+ 28 . Rfl Te2 2 9 . Txe2 b i D+ 3 0 .Rf2 Dxe2+ 3 1 .Rxe2 Dh 1 32 .Dh8+= Y si 20 .Txh7?! Db4oo 20 . . . Txe5'!
Casillas Reales
Es la jugada c':'i dentc que previmo s amb o s , aunque c on diferente evaluación . Kl ets e l pensó que obtenía superioridad, ya que no previó la jugada 27, que s í había yo podido calcular, luego de muchas horas de anál isi s . Si 20 . . . Cxe5 ?? 2 l .Ag5++-; si 2 0 . . . A xd4 ?? 2 1 . Ag5 + mate en 9 . (Kasparov y N ikitin dan sólo 2l.Dxd4); la mej or alternativa era 20 . . . Ta7 aunque de todas maneras las blancas quedan con superioridad luego de 2l. e6 Db6 22 .Ag5+ Rc8 23 .Af4 Db4 2 4 . D xb4 A xb4 2 5 . Txb 2 A c 5 26.exd7+ Cxd7 27.Cf3+ con un peón neto de ventaj a. En camb i o , s i 2 1 . A g 5 + R c 8 2 2 . e 6 De4! 23 .cxd7+ Cxd7oo; Kasparov y Nikitin indican 2 l .Txh7 Txe 5 (aunque otorga a las blancas iniciativa, es mejor para las negras 21 ... Db4 22.Dxb4
2 3
Axb4 23.Txb2 Txe5 24.Aj2 Ac5 2 5. C.f3--+) 22 .Ag5 +±; otras defensas fal lan: 2 0 . . . C c 6? 2 l . e 6 (21. Txb2+-) 2 l . . . Cce5 22 . exd7 C xc 4 2 3 . dxe 8 D + Rxe 8 2 4 . Txb7+-; 2 0 . . . a5? 2 l . e6+ ; 20 . . . D b 4 ? 2 1 .D d5 Ta7 2 2 . C c 6+! Cxc 6 2 3 .Axc5 !+ 2 1 . C e6 + Txe6 2 2 . D xe6 Axe3
23 .Dxe3 D d5
Luego de extensos anál i s i s durante vari o s día s , me decidí por: 2 4 . Te7 !
Kasparov y Nikitin la califican c omo ··golp e impresc indible y exacto··, teniendo en cuenta l os inconvenientes de la linea alternativa . S e ven ía a las man o s 24 .Txh7, pero s i bien las blancas obtienen ventaj a, no era sencil lo evaluarla en este momento de la partida. Por ej emplo: 24 . . . Rc7 {en e l momento de j ugarse la
Juan Sebastián Morgado
partida , me pre ocupaba 24 . . . Dxa2 ya que luego de 25 .Th8+ [no había p o dido evaluar que era decisiva 2 5 . D e7+ Rc 8 2 6. De8+ Rb7 27 .De4+ (2 7. Txd7+ ? Cxd7 2 8. Dxd 7+ R b 6 29 . Dd4 + =) 27 . .. Rc8 28 .De 1 ! este es el golpe que escapó a mis análisis 28 . . . Dd5 29 .Dc3+ Cc6 30 .Th8+ Rb7 3 l . D xb2+ Db5 3 2 . Da 1 +-] 25 . . . Rc7 26 .Df4+ Rb7 27 .Db4+ (2 7. Dc 1 Cb 6 2 8. Txb2 p[7co) 2 7 . . . Rc 7 ! 2 8 . Txb2 (y la torre quedaba expuesta en h 8. Por es te m o tivo m e decidí fina lm e n te por 24 . Te 7) 28 . . . D a 1 +
2 9 . Tb 1 D xh8 3 0 . Db 7+ Rd6co } 25 . Th8 Cb6 2 6.Dg3 + Dd6 2 7 . Dxd6+ Rxd6 2 8 .Txb2 C c 6 2 9 . Txa8 Cxa8 3 0 .h4-+ y las blancas tienen iniciativa en el final con su T y peones libres, frente a l os dos C negros, no n1uy hábiles cuando hay peones libres alej ados. 24 . . . C f6
2 4 . . . D xa2 2 5.Te 8 + Rc 7 26 .Df4+ Rb7 27 .Db4+ Rc7 2 8 . Txb2 Dd5 29 .Df4++-; 2 4 . . . Rc7 2 5 . c4 (es curioso que casi 1 5 años después se haya llegado a esta misma posición. Las blanc as int entaron 2 5 . Df4 + ? ! y luego de 2 5 . . . Dd6 2 6. Dxd6 + Rxd6 2 7. Txh 7 Cc6 28. Txb2 Tc8 29 . Th 3 Ce e 5 3 0. Rg 1 Tc 6 las
2 4
negras pudieron resistir, ya que la presencia de su torre ayuda a c onso l idar l a defensa, L o c -Kersic , Eslovenia 1 9 9 7 .) 2 5 . . . Df5 (25 . . . Dc6? 26. Txb2 ±; 25 . . . Dxc4 ? ? 2 6. De 5 + + -) 26 . Dg3 + Rc 6 2 7 . Tee l ! « y l a ventaja de las blancas es evidente» (Kasparov-Nikitin) 27 . . . Cc5 (2 7 . . . Cb6 2 8. Te dl ±) 2 8 . Tf l D e4D 2 9 . Tf6+ C e 6 D 3 0 . Tx e 6 + D xe 6 3 1 . D f3 + R c 7 3 2 . D xa8 D xc4 3 3 . D a7 + R c 8 (3 3 . . . Rc 6 34 . De3 ±) 34 . Df2± 2 5 .Te5 D b7
2 5 . . . D xa2 2 6 . Db 6++- ; 2 5 .. . D d 6 2 6 . Te 6 D xh 2 + 2 7 . Rxh2 C g4+ 2 8 . Rg 1 C xe 3 2 9 . Txe 3 +-
26 .Tdl + ! C b d7 2 6 . . . C fd7 2 7 . Te 8 + Rc 7
2 8 . D f4+ Rb 6 2 9 . D d4 + Ra5 3 0 . Te 3 +-
2 7 . D c 5 !
Casillas Reales
E sta e s l a j u gada que Kletsel no pudo prever cuando e l j uego s e desarrollaba alrededor de la jugada 20 . 27 . . . D a7
2 7 . . . b l D 2 8 . D f8 + Rc 7 29 .Tc5+ ! Cxc5 3 0 .Dd6+; Luego de la partida, Kletsel todavía se enc ontrab a d e s ori enta d o , ya que pensó que todavía ganaba con 27 . . . Db8 que es refutada en forma sencilla mediante 2 8 .Te3 ! /j. De7, Tc3 , ganando imnedia-tament e ; 2 7 . . . Tc 8 2 8 . D f8 + y mate en 9 ; 27 . . . Tb8 28 .Df8+ y mate en 8 ; 2 7 . . . a5 2 8 . D f8+ y mate en 8 . 2 8 . D c6 !
2 8 . D c 6 D d4 2 9 . D xa8 + Rc7 3 0 . Tee 1 1 -0
• .
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Morgado,J. -Topalian,J. [B8 2 ] Buenos Aires . match Villa Crespo-El Peón, 1 967 l . e 4 eS 2 . C f3 e 6 3 . d 4 c x d 4
4 . C xd 4 a 6 5 . C c3 . D c7 6 . A d3
Cf6 7.0-0 C c6 8 .Cb3 d6 9.Ae3 Ae7 1 0.f4 bS 1 1 .a3 Ab7 1 2 .De2
1 2 .Df3 1 -0 en 40 Mohr-1ok,D. -Musil , V./Buesum 1 96 8 . 1 2 . . . 0-0 1 3 .g4 d S
1 3 . . . Cd7 1 4 . D g2 g 6 1 5 . Dh3 Af6 1 6 . Tf3 Tfe 8 1 7 . Tafl Ag7 1 8 . f5 exf5 1 9 . gxf5 C c e 5 2 0 . T3 f2 A c 8 2 l . C d5 D d8 2 2 . fxg6 fxg6 23 . Dg3 Tf8 24 .Ag5 C xd3 2 5 . A xd8 C xf2 2 6 . Txf2 Txd8 2 7 . D xd6 A b 7 2 8 . C c 7 Tac 8 2 9 . C e 6 Tc 6 3 0 . D e 7 1 - 0 H a d z i n i k o l a , E . - Av i n a l , A . / Mangalia 1 99 2 . 1 4 . exd5
1 4 . e 5 C d7 1 5 . g5 Tfd 8 1 6 . Tf3 Cf8 oo H eugst-Luft , cr 1 9 8 0 . 1 4 . . . C xd 5 1 5 . C xd 5 exdS 1 6 . C d4 Tfe8 1 7 .Df2 Af8
1 7 . . . b4 1 8 . C xc 6 D xc 6 1 9 . A d4 bxa3 2 0 .bxa3 Ac5 ! = 1 8 . c3 C aS 1 9 . Tae 1 C c 4 2 0 .
Dh4 g6 2 1 .Acl Ag7 '!
Esta jugada natural es e l origen de l o s probl emas . Lo mej or era ac eptar e l de safí o 2 1 . . . Cxa3 22 .Txe8 (22 . f5 Txe 1 (22 . . . Cc4 23jxg6 hxg6 24.Axg6
fxg6 25. Txf8+ Txj8 26. Te 7 Dxe 7
25
Juan Sebastián Morgado
2 7. Dxe 7± Puede verse en esta p osición la fuerza de la dupla D + C .) 2 3 . Txe l C c 4 24 . Ah 6 D d6co) 2 2 . . . Txe 8 2 3 . f5 C c 4 24 . A f4 D d8 2 5 . A g5 D c 7 2 6 .Tf3 ! ? (26.Af6/?; 26.fxg6/?) 2 2 . f5 ! ±
Ah ora e s ta ruptura s e potencia, debido a que se amenaza
.. tanto fxg6 c omo f6 ata
cando el alfil , según las variantes. 2 2 . . . C e 5
22 . . . D b 6 23 . Txe8+ Txe8 2 4 . f6 Af8 (24 . . . A h 8 2 5 . g5 ±) 2 5 . Tf3 ! ± ; 22 . . . Axd4+ 23 . cxd4 Txe l 24 . Txe l Db6 25 . Df2t 23 .Ab l C c6
23 . . . C d7 24 . C e6 ! (24.g5 Cc 5 2 5 . A e 3 Ce4 f!.) 24 . . . fxe 6 25 . fxg6 hxg6 26 .Axg6 Cf8 27 . A f7+ Dxf7 2 8 . Txf7 Rxf7 2 9 . Ah6 Axh60 3 0 . Dxh6 Ac6 3 1 . Dg5 Tec8 32 .Tfl + Re8 3 3 .Tf6+ (33 . h4±)
2 6
24 . C e6 ! L a p o derosa e s tructura
rea l c o nstrui da p ermit e est e g o l p e que d e fin e l a p arti da rápidamente . 2 4 . . . fxe6
24 . . . D e 7 25 . Ag5+-25 .fxg6 h6 26 .g5 Tf8 27 .gxh6
Txfl + 28 .Txfl Db6+ 2 9.Rg2
1 -0
Mijail Tal, el Mago de Riga Caricatura de Frank Stiefel
Capítulo 2
Jugadas Directas e Indirectas
Habíamos dicho que las piezas deben ubicarse en el tablero de manera que impresi onen directa o indirectamente las casi l las reale s .
Veamos la siguiente partida:
Benko,P.-Tal,M . [ A8 9]
Torne o de Candidatos , Yugoslavia, 1 9 5 9 l .Cf3 f5 2.g3 Cf6 3 .Ag2 g6 4 .c4
Ag7 5 . C c3 0-0 6 . 0-0 d6 7 . d4
Cc6 8 .d5 Ca5 8 . . . C e 5 9 . Cxe5 dxe5 1 0 .
e4 (J O. D b 3 h 6 l l . Tdl Rh 8 12.Ad2 g5 1 3.Ael h5 1 4. c5 h4oo Vukic-I l incic , C et inj e 1 9 9 2 .) 1 O . . . f4 1 l . gxf4 exf4 1 2 . e 5 Cg4 1 3 . e6 CeS 1 4 . Te 1 Cxc4 1 5 .Te4
2 7
C d6oo s egún Khalifman. 9.D d3
9 .Da4 ! ? c 5 1 0 . dxc6 bxc6 1 1 . C d4 c5 1 2 . A xa8 c xd4 1 3. Cb5 Ad7 14 .Ag2 a6co Schlosser -Tseitlin, Budapest 1 9 92 . 9 . . . c5 1 0 .Cg5 a6 l l .Tb l
l l . C e6 ! ? Axe6 1 2 . dxe6 Cc6 (1 2 . . . Dc8 1 3. Cd5!) 1 3 . e4 ! Khalifman l l . . . Tb8 1 2 .Ad2 D e8 13 .b3
Errónea s e gún Khal if-
Juan Sebastián Morgado
man, que propone 1 3 . e d 1 1 3 . . . b S 1 4 . a3
1 4 . Cxb5 ? ! axb5 1 5 .Axa5 Ta8 (15 . . . b4 1 6. a3 bxa3 1 7. Ta l Ce4 1 8. Cxe4 fxe4 1 9.Axe4 Axal 20. TxaJ oo) 1 6 . b4 bxc4 1 7 .Dxc4;J; 1 4 . . . C g4 ! 1 S . C f3
1 5 . f4 ! ? 1 S . . . bxc4 1 6.bxc4 Tb3 1 7 .Txb3
1 7 .a4 Tb4+
1 7 . . . C xb3 1 8 .Tb l C d4 1 8 . . . Cxd2 1 9 . Dxd2 D d8
2 0 . Ca4oo 1 9 . e3 ?
1 9 . Cxd4 cxd4 (19 . . . Ce5!?) 20 . C d 1 Ce5 2 l .Dc2 Ad7 22.Cb2 Dc8+ 1 9 . . . C xf3 + 2 0 . Ax f3 C e S 2 1 . D e 2 C xf3+ 22 .Dxf3 eS !
Poniendo a las blancas en una encrucij ada. 2 3 . D d l
Optan por dej ar a las negras c on un fuerte c entro. En c as o de 2 3 . dx e 6 lu e g o de 23 . . . Axe6 las negras están mej or por su activa parej a de alfiles . 2 3 . . . e4 24 .Da4 ? !
Un plan estratégico aparente . Obviamente, si las negras cambian las damas, el dominio blanco de la c olumna b se haría s ent i r. S i 2 4 . Tb 8 g 5 c on un fuert e ataque en c i ern e s . (24 . . . Dd8 25 .Db l =) ; l o mej or quizás fuese 24 . C e2
2 8
2 4 . . . D e7 2S.D c6 '!
Nuevamente , 2 5 . Ce2 era lo mej or. Por ej emplo : 2 5 . . . g5 26 .Tb8 Ab7 2 7 . Txf8+ Axf8=
Veamos esta posición para ilustrar una jugada indirecta. Benko jugó aquí muy confiadamente Dc6 amenazando Tb6 o Tb8. A simple vista, la posición es muy c omprometida para las negras , p ero veamos el pap el que juega el Ac8 . Luego de una primera ob s ervac i ón advertimos que se encuentra casi "dominado", imposibilitado de mover, y estorbado por sus propios peones, en especial el de f5 . Per o luego de un anál i s i s más profundo , podemos ver que el rey blanco no ti ene piezas que J o defiendan, tiene muy debilitadas sus casil las blancas (g2-f3 -h3 ), y sus pi ezas no ti enen fác i l traslado para su defensa
Casillas Reales
(en especial la Dc6) . En cambio , observemos cuán rápi damente las piezas negras pueden convertirse en reales : la Tf8 ya es real , la dama puede p enetrar por g4 , h5 o e 5 de acuerdo a l o s acontecimi entos , e l A c 8 puede acrecentar su poderío desde h3 , y el Ag7 puede incursi onar por e5 o d4 . Surge aquí entonces la brillante jugada indirecta : 2 5 . . . f4 ! !
que abre camino para el alfil . N o podemos decir que el A c 8 ha s ido j ugad o direc tamente, pues no ha s ido movido, pero sí podemos afirmar que su situación es directa. ¡En algunas o c a s i o n e s l a s p i ezas ac túan desde sus casillas iniciales ! 26.Tb8
Pierde enseguida, pero de todos modos las alternativas no salvaban el j uego. 26 .gxf4 Ah3 2 7 . D a4 g5 + ; 2 6 . C e 2 fxg3 2 7 . hxg3 D f7 28 . Cf4 (28.Ael g5-+) 28 . . . g5+ ; 2 6 . exf4 e3 ! -+ 26 . . . Ah3 27 .Txf8+
2 7 . Tb 7 fxe 3 ! 2 8 . A x e 3 Df6-+ 27 . . . Dxf8 28 . exf4
2 8 . gxf4 Db8 -+ 28 . . . Db8 2 9. C e2 D b l +
y las b lancas p erdi eron por tiempo . 0-1
2 9
Tal,M .-Golom b e k,H. [B 1 2 ]
Olimpíada de Munich, 1 9 5 8 l . e4 c 6 2 . d4 d 5 3 . e5 Af5 4 . c4
e 6 5 . C c3 dxc4 6 . A xc 4 C e 7
7 . Cge2 C d7 8 .0-0 C b 6 9 .Ab3 D d 7 1 0 . a 4 aS l l . C g3 Ag6 1 2 .A c 2
1 2 . A g 5 C f5 1 3 . C xf5 Axf5 1 4 . Tc l h6 1 5 .Ae3 Ae7= Schweinhagen,T.-Von Alvensleb en, W. , S cho epp enstedt 1 9 9 3 1 2 . . . A xc 2 1 3 . D xc 2 C e d 5
1 4 .C ce4 C b4 1 5 .D e2 C6d5 1 5 . . . D xd4 1 6 . A e 3 D d8
1 7 . D g4� 1 6 .f4 g6
1 7 .Ta3 !
Ya s e advierten aquí los elementos de una estructura real importante. Todas las piezas son o pueden ser reales fácilmente . 17 . . . Ae7 1 8 .Ad2 C c2 1 9 .Td3
Juan Sebastián Morgado
C db4 20.Axb4 C xb4 2 1 .Tddl
Ha sido bonita esta mani obra geométrica de l a torre , vía a3 -d3-d l . 2 1 . . . Td8 22 .Rhl h5
En esta parti da también puede verse el tema de la residencia del rey que s e verá en un capítulo po st erior. Las negras no se an tman a enrocar debido a la posibilidad de un rápido ataque blanco , potenciado por la lej anía del Cb4 . 22 . . . 0-0 2 3 . C f6 + A xf6 24 . e xf6 y l a s b l an c a s t i enen u n p e ón rea l muy fuerte en f6 . 2 3 . C f6+ ! Axf6 24 . exf6 Rf8 ?
Pre o c up adas p or l a amenaza f4- f5 , l a s n e gras colocan su rey en una situación comprometida . Un poco mej or era 24 . . . h4 aunque también las blancas quedan mej or luego de 2 5 . C e4 h3 2 6 . g4 Th4 2 7 . Tf3
30
D d5 28 . Cc3 D d6 2 9 . f5 t 25 ! C e4 h4 26 .C c5 D c8 2 7 . f5
Mediante esta ruptura Tal obtiene dominio absoluto sobre las casillas negras , y de ese modo su caballo adquiere de una manera indirecta una p otencia enorme . 27 . . . gxf5 28 .D e3 b 6 ?
La defensa c orr ec ta e s 2 8 . . . Th5 ! que protege las casillas reales imprescindibles g5 y g6, aunque era muy dificil de encontrar frente al tablero . Por ej emp l o : 2 9 . D h 3 b 6 3 0 . g4 (forzada es la línea 30. Tf4 pero só lo se l lega a tablas luego de 3 0 . . . bxc 5 3 1 . Txh 4 Txh 4 32 . Dxh 4 R e 8 3 3 . Dh 7 Txd4 34 . Dg8 + R d 7 3 5 . Dxf7+ Rd6 36.De 7+ Rd5 y parece que las b lanc a s ganan luego de 3 7. Txd4+ cxd4 38.j7 pero luego de 3 8 . . . D a 6! 39 . D d8 + R e S 40. Db8+ Re4 4 1 . h 3 Dfl + 42 .Rh2 e 5 43 . Dg8 d3 44 . Dg5 Df2 45.f8D d2 46.Dd6 Cd5 ,4 7.Dh5 Dfl 48. Dh 4 + Df4 + 49.Dxf4+ exf4 =) 3 0 . . . Th 6 3 l . g5 Th 5 3 2 . Tf4 (32 . Df3 Th 8 3 3 . Cd3 Txd4 34 . Ce 5 c 5 3 5 . g6 fxg6 3 6. Tg1 Th 7 3 7. Cxg6 + Rf7 3 8. Ce 7 D d 7 39 . Dg2 Rxf6 40 . Txd4 Dxd4 4 1 . Dg5 + Rf7 42 . Cc 8 Dd5 + =) 3 2 . . . bxc 5 3 3 . Txh4 Txh4 3 4 . D xh4 R e 8
Casillas Reales
3 5 . Dh 7 C d5 0 3 6 . D g 8 + R d 7 3 7 . D xf7+ R d 6 3 8 . dxc 5 + ReS 3 9 .Te 1 + Rd4 40 . g6 Tf8+± 2 9 . D g5 !
ganando un tiempo decisivo. 29 . . . Th7 30 .Tf4 bxc5 3 1 .Txh4
Txh4 3 2 .Dg7+ R e 8 3 3 . D g8+ Rd7 34 .Dxfi+ Rd6 35 .De7+
1 -0
M orgado,J. -Sanakoiev, G.
[B99] X Campeonato Mundial c orr. , 1 982 1 . e4 c 5 2 . C f3 d 6 3 . d4 cxd4
4 .Cxd4 Cf6 5 .Cc3 a6 6.Ag5 e6
7 . f4 A e 7 8 . D f3 D c7 9 . 0 -0-0 C b d7 10.Ae2 b5 1 1 .Axf6 Cxf6
1 2 . e5 Ab7 13 .Dg3 dxe5 14 .fxe5
C d7 1 5 .Af3
1 5 . Cxe6? fxe6 1 6 .Ah5+ g6 1 7 .Axg6+ hxg6 1 8 . D xg6+ Rd8 1 9 .Dxe6 Dc6 20 .Dg4 (20. Txd7+ Dxd7 2 l . Tdl Ag5+ 22. Rbl Ad2 +) 20 . . . Rc7+ Dahl ,K .Arnlind,E . /Suecia 1 962 . 15 . . . Axf3 1 6.gxf3 g6 1 7.f4 Db7
1 8 .The l ! ?N
1 8 . h4 0 - 0 - 0 1 9 . C f3 b4 2 0 . C e2 C c 5 oo Lars en ,B . -Portisch,L . /Mani1a 1 9 74 1 8 . . . 0-0-0 1 9. C e4
3 1
1 9 . Cb3 Rb8 20 .Td3 Cb6oo P r e e h t e 1 , H . - G i a n n o n i , F. 1 Prel . Copa del Mundo 8-9, corr, 1 9 9 0 . 1 9 . . . R b 8 2 0 . C b 3
2 0 . C g 5 A xg 5 2 1 . D xg5 Tc 8 2 2 . Rb 1 Cb6 2 3 . a3 t Halwick Jr,F. -Biedermann ,T./NA PZ M60 1 996 2 0 . . . C b 6 2 1 . C d6 ! ? Axd6 2 2 .
Txd6
Más fuerte que 22 . exd6 C d5 2 3 . f5 gxf5 2 4 . C c 5 D b 6 25 . d7+ Ra7t 22 . . . Txd6
22 . . . D c 7 2 3 . f5 gxf5 24 . Ca5 Tc8 2 5 . Cc6+t 23 . exd6 C d5 24 .f5 !
Mediante este sacrificio de peón las b lancas aumentan indirectamente la acción de su D g3 , en c ombinaci ón s on e l Cb3 y e l p e ón d6 . Las negras logran defender la posición con
Juan Sebastián Morgado
pre c i sas j ugadas defens ivas . 24 . Cc5 Dc6 25 .Da3 a5 ! 26. Cd3 Tc8 27 . c 3 b4+! 24 . . . gxf5 2 5 . C c5 D c6 26 . d7+ Ra7 27.Dh4 Db6 28 .b4
Las b lancas han j ugado para un « tema real de corona ción )) , tema que trataremos en el capítulo 4 . 2 8 . . . f4 !
Única para igualar. Ataca el peón b4 . Si 28 . . . a5 2 9 . D d4 Td8 3 0 .bxa5±; ó 28 . . . Dd6 29 . a3 D f4+ 3 0 . D xf4 C xf4 3 l . Td l Cd5 3 2 . Tg l ± 2 9.D h5
2 9 . Td l D d6 3 0 . Dg5 h6 3 l . Dg7 Td8 32 .Dxf7 DeS+! 2 9 . . . Td8 !
29 . . . Cxb4? 3 0 .a3 (30.Dxj7
Td8 3 1 . Te5 Cc6oo) 3 0 . . . Cc6 3 1 . Dxf7± 3 0 . a3 a5 3 1 . c3
3 1 . D xf7? axb4 3 2 . Cxe6 Df2+ 3 1 . . . C xc3 3 2 . D xf7 axb 4 3 3 .
axb 4 D d6 3 4 . D xe6 D xe 6 3 5 .
Txe6 f3 ! 3 6 . Rd2 f2 3 7 .Ta6+ Rb8 38 .Tf6 C a4 39.Txf2 Cxc5
4 0 . b xc 5 T x d 7 + 4 1 . R c3 R c7
42 .Rb4 Td3 !
4 2 . . . Td5 ? 4 3 . Rxb 5 Th5 44 .Tg2 Th6 45 .Tg7+ Rd8 46 .h4 Txh4 47 .Rb6 Th l 48 .Tg8+ Re7 4 9 . Th8 Rf6 (49 . . . Tb l + 50.Rc 7 Th l 5 1 . c 6 h5 52.Rb8 Tbl + 53.
3 2
Rc8 Thl 54. c 7 Rf6 55.Rd7±) 50 . c6 Tb l + 5 1 .Ra7 Rg6 52 . c7 Tc l 5 3 . c 8 D Txc 8 5 4 . Txc 8 Rg5 (54 . . . h 5 55 . Tc 5 + -) 5 5 . Tg 8 + Rh4 5 6 . Rb6+-43 .Tf7+
4 3 . Rxb 5 Tb 3 + 4 4 . Rc4 Th3 4 5 .Tf7+ Rc6= 43 . . . Td7 44 .Tf5
44 .Txd7+ Rxd7 45 .Rxb5 Rc7 46 .h4 h5 ! 47 .c6 Rc8 48 .Rc5 Rc 7 49 . Rd5 Rc 8 5 0 . Re5 Rc7 5 1 . Rf5 Rxc6 5 2 . Rg5 Rd7 5 3 . Rxh5 Re8 54 .Rg6 Rf8=
Podemos ver otro ej emplo instructivo en la s iguiente partida, jugada por dos fuertes tele-aj edrecistas .
Guzzardo,R.-Laurencena,A.
[C95] Final VI Camp. Argentino, corr. , 1 9 78 l . e4 e5 2 .Cf3 C c6 3 .Ab5 a6 4 .
Aa4 Cf6 5.0-0 Ae7 6.Tel b5 7 .
Ab3 d6 8 . c3 0-0 9.h3 Cb8 1 0.d4
C b d7 l l . C h4 C b 6 1 2 . C d2 c5 1 3 . dxc5 dxc5 1 4 .Cf5 c4 1 5.Ac2
Axf5 1 6. exf5 D c7 17 .g4 h6 1 8 .
h4 Cfd7 L a s n e gras intentaron
mej orar la línea 1 8 . . . Ch7 1 9 . Cf3 f6 2 0 . C d2 Tad8 2 1 . D f3 --t Fis-
Casillas Reales
cher, R . -B enko , P. /Nueva York 1 9 6 5 .
1 9. C e4 Axh4 20 .g5 !
Primera jugada indirecta. La D tiene ahora posibi l idades de atacar mediante Dg4 o Dh5 . 20 . . . Axg5 2 1 .Axg5 hxgS 22 .f6 !
Segunda jugada indirec ta , que posibilita e l acceso del Ac2 a casillas reales . 2 2 . . . D c6
22 . . . gxf6 23 .Dh5 Rg7 24 .
3 3
C d 6 Th 8 2 5 . D xf7 + R h 6 2 6 . Dg6#; 2 2 . . . Cxf6 23 . Cxf6+ gxf6 24 . Dh5 Tfd8 2 5 . Dh6+-; 22 . . . g6 23 . D g4 s egui do de D xg5 c on gran ataque . 23 .Dh5 C dS '?
La defensa c orrecta era 23 . . . g6 � � obturando la diagonal b l -h7 , y luego de 24 . Dh6 (24. Dxg5 Cd5 2 5. Tadl C 7xf6 26. Cxf6+ Dxf6+) 2 4 . . . C xf6 2 5 . C xg5 amenazan do Axg6 , l a s negras di sp onen de 2 5 . . . Cbd5 26 . Te4 (26. Txe5 Tae8 2 7.Axg6 fxg6 28. Dxg6+ Rh8=) 26 . . . Cf4 27 . Txf4 exf4 2 8 .Axg6 fxg6 2 9 . D xg6+ Rh8= 24 . fxg7 Rxg7
y ahora las blancas rematan el juego con el bon ito golpe 2 5 . C f6 ! ! T h 8 2 6 . D xg 5 + Rf8 27 . C h7 + ReS 28 .Txe5+ C xe5 29 .Dxe5+ D e6 30 .Dxh8+ Rd7 3 1 .Dg7 Rc6 32 .Tdl f6 33 .Dg2 Tg8 3 4 .Ag6 Tg7 3 5 . Rfl ReS 36 . C f8 D eS 37 .Te l 1 -0
Juan Sebastián Morgado
En la siguiente partida las negras permiti eron una jugada indire c ta qu e las l l evó a una pos ic ión muy pasiva :
M orgado,J.- Foguelm an,A .
[C O l ] Metropolititano p or Equip os , 1 9 73 l . e 4 e 6 2 . d4 d5 3 . C c3 A b 4
4 . exd5 exd5 5 .Ad3 C f6 6 .Af4
0 -0 6 . . . Cc6 ; 6 . . . c 5
7 . Cge2 C c6 7 . . . Ag4 ? ! 8 .f3 Ah5 9 .Dd2
Ag6 1 0 . 0 - 0 - 0 Cbd7 l l . g4 c 6 1 2 .h4 Axd3 1 3 .Dxd3 b 5 1 4 .h5 t Vor o t n i k o v, V. -N aumki n , I . / M oscú 1 9 9 5 8 . 0-0
8 .f3 Ae6 9 .Dd2 Te8 1 0 . 0-0 - 0 a6 l l . g4 b 5 1 2 . 114 A a 5 oo S anz ,N. -Zanol etty G arc ía ,D . / Fuengirola España 2005 8 . . . C h 5 ? !
8 . . . Te8 ! ? 9.Ae3 f5? !
(Ver diagram a)
Las dos últimas j ugadas constituyen un plan dudoso , ya que ahora las b lancas pueden incrementar la acc i ón de sus p i eza s m e di ant e una fuert e jugada indirecta: 1 0 . C g3 ! C xg3 l l . fxg3 !
y la Tfl tiene gran activi-
3 4
dad p or la c olumna ' f' s emiabierta . Además , la Dd 1 dispone de buenas casillas en f3 y h5 . l l . . . C e 7 1 2 . D f3 c6 1 3 . Ta e l
A d 7 1 4 .Ag5 Tf7 1 5 . R h l D f8
1 6 .g4 g6 1 7 . D e3 fxg4 '?
1 7 . . . Ad6 1 8 . T x f7 R x f7 1 9 . D e 5 C f5
2 0 . C x d 5 ! D d 6 2 1 . C x b 4 Te8
2 2 .A c4+ 1 -0
Gar ci a,H.-Wavrenchuk,S .
[B80 ] Villa B osch, 1 972 l . e4 eS 2 . C f3 e6 3 . d4 c x d 4
4 .Cxd4 a6 5 . C c3 D c7 6 .g3 d6
7.Ag2 Cf6 8.0-0 Ae7 9.h3 Ad7 1 O . a3 '! !
N o hay una razón obj etiva para aconsej ar esta jugada, qu e s e j u e ga gen eralment e cuando las n e gras amenazan
Casillas Reales
avanzar su peón b5-b4, o Ab4, p or ej emplo . L as alt ernativas teóricas han sido varias : 1 O . Rh 1 ; 1 0 . f4 ; 1 0 . g4 ; 1 0 . Ae3 10 . . . C c6 1 1 . C de2 Tc8
1 1 . . . 0 - 0 1 2 . b 3 Tac 8 1 3 .
Ab2 Tfd8 1 4 . D d2 (C on el rey negro ya enrocado, podría justificarse 1 4..f4 ) 1 4 . . . Ae8= Ravot, S. -Dimitrov,C . /Cannes 2007 . 1 2 .g4 ? !
L a s n e gra s n o fij aron todavía la residencia de su rey ( 0 -0 ) , de modo que el avance de los peones blancos es arriesgado . 1 2 .Ae3 ! ? 1 2 . . . h6 1 3 .f4 Db6+ 1 4 .Rh1
Las negras disponen ahora de un b onito golpe táctic o · ·rayos x··, que permite a l a Th8 adquirir indirectamente un papel preponderante en el ataque que sobreviene . 1 4 . . . g5 !
35
Amenaza s imp l emente h 5 , ah ora que las b lancas n o pueden j ugar g5 . 1 5 . f5 ?
La defensa c orrecta era 1 5 .Dd3 con el obj eto de j ugar A e 3 , y dar al rey b lanco una cas i l l a de e s c ap e por g l . D e todos modos las negras ti enen la iniciativa luego de 1 5 . . . gxf4 (1 5 . . . h 5 1 6. A e 3 ± ; 1 5 . . . Cxg4 ? 1 6. hxg4 h 5 1 7. D h 3 + -) 1 6 . Axf4 C eS 1 7 .Dg3 h5 Por ej emplo : 1 8 . g5 h4 1 9 . Dh2 Ch5 2 0 . A x e 5 dxe 5 2 1 . D xe 5 Th 7 t (2 l . . . Tg8!?) 1 5 . . . C xg4 ! 1 6 .hxg4
O bien 1 6 . fxe6 Axe6 1 7 . h xg4 (1 7. Cd5 Cf2 + 1 8 . Rh2 Axd5 1 9. Dxd5 Ce5 +) 1 7 . . . h 5 1 8 .Rh2 hxg4+ 1 9 . Rg3 d 5 20 . e5 f5 t 1 6 . . . h5 1 7 .Cgl
Ya no había buenas defensas . Si 1 7 . Rh2 hxg4+ 1 8 . Rg3 d5 ! + 1 7 . . . h xg4 + 1 8 . A h 3 e x f5 1 9 . exf5 C eS 2 0 . f6 A c6+ 2 1 .Rh2
C f3 + 2 2 . Rg3 A x f6 2 3 . C d 5
Axd5 24 .Dxd5 Ae5+ 25 .Rxg4
C h2 + 2 6 . R f5 C xf1 2 7 . A xg5
C e3+ 28.Axe3 Dxe3 0-1
A -�
Grandes rivales de Mijail Tal : l. Paul Keres, una de sus primeras partidas con un maestro de la élite� 2. Mij ail Botvinnik, con quien se enfrentó dos veces por el Campeonato del Mundo ; 3.Anatoly Ka rpov, Montreal 1 979; 4. Tigran .Petrosian, en Curazao 1 962; 5 . Tres futuros Campeones del Mundo (en 1 958) : Boris Spassky (sentado), Tal y Petrosian ; 6. Vassily Smyslov, Campeón Mundial 1 954, en el Candidatura 1 95 9
Capítulo 3
La Teoría de las Casillas Reales y las Aperturas.
Piezas reales. Casillas de Paso.
El signo actual de la teoría de las aperturas está marcado por la flexibilidad. H oy sabemos que aperturas que se c onsideraban ultra-posicionales , pueden ll evar a posic iones de ataque directo , o viceversa. Es posibl e seleccionar el repertorio propio de aperturas sobre la base de nuestra teoría, teniendo en cuenta las estructuras que se producen . Aunque todas las aperturas pueden considerarse, nos detendremos aquí especialmente en la Defensa Sici l iana y la D efensa India al Rey, que ofrecen muchos temas de casillas reales para ambos bandos . Algunas líneas de la Apertura Española otorgan a la s b lanc as bu enas p ersp e ct ivas , y ob l i gan a las n e gras a defenderse con mucho cuidado de las amenazas reales .
Tai,M .-Tolush,A . [B97]
Campeonato de la U.R. S . S . Leningrado , 1 9 5 6 l . e 4 eS 2 . C f3 d 6 3 . d 4 c x d 4
4 .Cxd4 Cf6 5. C c3 a6 6 .Ag5 e 6 7 .f4 Db6 8 .Dd2 Dxb2 9.Tb l
La teoría de las aperturas indica dos alternativas , la del
3 7
texto y 9 . Cb3 . Desde el punto de vista de nuestra teoría deben1os c onsiderar superi or 9 . .B:b 1 , ya que no al ej a el cabal lo que e s t á in1p r e s i onan do c as i l l a s sub-real e s . Por otra part e , s e controla l a casilla b4, para evitar un posible Ab4, que desarrolla
Juan Sebastián Morgado
el Af8 y permitiría al rey negro enrocar, saliendo de la zona de fuego . Además gana un tiempo al atacar la dama rival . 9 . . . D a3 1 0 . e5
Esta j ugada ti ene vari o s propósitos : coloca un peón atacante , que domina dos importantes casillas sub-reales , obliga al C f6 defensor a desplazarse y l e quita al Af8 la casilla d6. Las alternativas s erían 1 O . Axf6 y 1 O . f5 S in dudas , desde nuestro punto de vista tendrían tamb i én sus fun damento s . La pr i lnera de e l l a s ( 1 O . A xf6 ) elimina el principal defensor del rey negro , permite un po sibl e pasaj e del Afl por e2-h5 , donde sería muy poderoso, y posib i l i t a en un futuro f5 -fxe 6 , abri endo l a c o lumna « f» . En cuanto a 1 O . f5 , también cumple c on los princip ios de agres ión s obre e l rey negro . D e mo do que la elección de la jugada en este momento dependerá de los gustos y de las modas . 1 0 . . . dxe5 l l . fxe5 Cfd7
El ex Campeón Mundial de la FIDE Alexander KhalifInan indica l l . . . h6 1 2 .Af4 ! Cfd7 1 3 .Ac4t 1 2 . C e4
Nuevamente s e pres enta aquí una alternativa de 1nucho
3 8
val or 1 2 . A c4 Impr e s i ona l a s casi l las e6 y f7 , y mnenaza el enroque, luego del cual la Tfl tamb i én e s tar ía pre s i onando sobre f7 . En cuanto a l a del texto ( 1 2 . C e4 ) domina dos cas i l l as sub-reales importantes , y colabora para evitar el desarrol lo del Af8 negro , al quedar c ontroladas las casillas b4, c5 y d6 . En tanto , el Afl puede reservarse para ir a e2, o . . . a b5 ! 1 2 . . . Dxa2 ? !
El signo pertenece a Khal ifman . S i nosotro s co locamos pi ezas reales y nuestro adversari o s e entreti ene capturando peones y perdiendo ti empos con su dama, quiere decir que él no c o mprende b i en la p o s i c i ó n . B oleslavsky indica que e s errónea 1 2 . . . Cc6 debido a 1 3 . Cxc6 bxc6 1 4 . Tb3 Dxa2 1 5 .Dc3 pero ahora solamente indica 1 5 . . . Da4?
Casillas Reales
[E s mej or 1 5 . . . Tb 8 ! 1 6 . Dxc 6 ( 1 6 . Ac4 Txb 3 {1 6 . . . Dxb3 1 7. cxb 3 A b 4 1 8. Dxb 4 Txb 4 1 9 . Cd6+ Rf8 20. Cxc8 Tb8 21 . 0-0±} 1 7 . A xb 3 D a3 1 8 . A d2 A e 7oo) 1 6 . . . Da l + 1 7 .Rf2 D xe5 1 8 .Ad3 f6 1 9 .Thb l D d5 20 .Dxd5 exd5 2 l . Txb 8 C xb 8 2 2 . Txb 8 fxg5 2 3 . Txc 8 + Rd7 24 . Axa6 dxe4 2 5 . Re 3 t] 1 6 . Ac4 Cxe5 1 7 . 0 -0 Cxc4 1 8 . Cf6+ gxf6 1 9 . D xf6+Según Khalifman y la Enciclop e dia Yugos lava Tomo B 3 a . edición, páginas 5 3 0/ 1 , línea 1 1 1 1 2 , la jugada exacta es 1 2 . . . h6 ! pero ahora podría intentarse en esti lo romántic o 1 3 .Ab5 ! ? (1 3. Af4 ? ! Dxa2 1 4. Td1 +; 1 3 . A h 4 Uxa2 1 4 . Tb 3 D a 1 + 1 5 . Rf2 Da4 -+) 1 3 . . . hxg5 1 4 .Tb3 Dxa2 1 5 . Dc3 axb5 (1 5 . . . Cc6 1 6.Axc6 bxc 6 1 7. 0-0 t) 1 6 . D xc 8 + Re7 1 7 . 0 - 0 D a 7 1 8 . T d3 c on p o sición complej a, Vlasov- Shalnev, S okobanj a 1 9 8 9 , según la Enciclopedia Moderna de Aperturas (Kal inichenko ) , tomo I I , página 669/8 1 . No hay lugar en este libro para análisis concretos de e sta p o s i c i ón , ya que podrían ocupar muchas páginas , pero e s fác i l adv ert ir que , a cambio de dos peones, las blancas tienen un poderoso ataque, d01ninan do las cas i l l as real e s d8 , e8 , f8 , f7, f6 , e 6 , d6 .
3 9
1 3 .Tb3
Esta torre tiene un extraordinario panorama des de esta po s i c ión (Tf3 , g3 , h3 , etc ) , y además impide a la Da2 regresar vía d5 . Dec imos entonces que b3 es una casilla de paso , p or donde pasará la torre al flanco rey. 1 3 . . . D a l +
Le quita a las blancas el enroque , y en f2 el rey e stará baj o el peligro de un futuro Ac5 , pero pierde otro tiempo, ya que en a l la dama quedará baj o los rayos de la Th 1 , y deberá retirarse en breve . 1 4 .Rf2 Da4
Khal i fman indi c a 1 4 . . . h6 ! ? pero las blancas ti enen un ataque que c omp ensa la desventaj a material luego de 1 5 . A e 3 ( 1 5 . A e2 ? D xh l 1 6 . C xe6 hxg5 -+; 1 5 .Ah4? ! Da4 1 6 .Ab5 ? (1 6.Dc3 ? Cc 6+) 1 6 . . . axb5 1 7 . Cxb5 C a6+) 1 5 . . . D a4 1 6 . D c 3 Cc6 1 7 .Ae2 Da5 1 8 . Cxc6 Dxc3 1 9 . Txc 3 bxc 6 2 0 . C d 6+ (2 0 . A d4 ! ?) 2 0 . . . Axd6 2 1 . exd6�
Finalizada la excursión de caza menor la dama vuelve para la defensa, pero las blancas ya di sponen de un balance sumamente favorable entre sus atac ante s y l o s defens ore s . Las blancas cuentan c on D, T, dos
Juan Sebastián Morgado
C y dos A, además del peón eS . Y la Th 1 p odrá sal ir c on ganancia de tiempo mediante una j ugada indirecta que está siempre latente (Ab5) . Por su parte, las negras se defienden con la D a4 , C d7 y A f8 , s o l amente . Para agregar a la defensa el Cb8 y e l Ac8 n e c e s i tan t i emp o s . Ahora se le presentan a las blancas dos alternativas que responden a los principios de nuestra teoría. Tal elige una de ellas : 1 5 . A b 5 ? !
Y en este punto crítico Tal « ¡ s e exc edi ó en l o s l ímite s ! » . Por medio de una jugada in directa s e gana la casilla bS y logra la puesta en j uego de la Th 1 c on ganancia de ti empos , p ero l a s n e gras d i sp onen de defensas exitosas .
S enci l la y ganadora era
4 0
1 S . C xe 6 ! ! que amenaza C c 7 mate , y obl iga a l a s iguiente s ec u enc ia forzada : 1 S . . . fxe 6 1 6 . C d6+ A xd6 1 7 . D xd6 Tf8+ 1 8 . Rg 3 C f6 D 1 9 . e xf6 gxf6D 20 .Ae2 ! +- y las blancas· ganan en todas las variantes , como lo pueden comprobar los lectores que analicen detenidamente esta pos ici ón . 15 . . . axb5 1 6. Cxb5 f6 1 7 . exf6
1 7 . Ced6+ Axd6 1 8 . Cxd6+ Re7 1 9 . exf6+ gxf6+ 1 7 . . . gxf6 ?
¡ La defensa inc orrecta ! ¡ Claro que era muy dificil hallar frente al tablero la jugada exacta ! Ahora tenemos todas nuestras p iezas impresi onando casillas reales o sub-reales , o bien en c ondic iones potencial es de hacerlo , como la Tb3 . En el año 200 1 Kasparov halló la defensa exacta 1 7 . . . D xe4 ! y brindó extensos análisis en las ChessBase Magazine número 83/84 . Veamos un resumen de e l lo s : 1 8 . fxg7 AcS+ (1 8 . . . Df5 + ? 1 9. Tf3 Ac5+ 20.Rg3 De5+ 21 .Rh3 Tg8 22 . Te l + -) 1 9 . Rg3 D e S + [0 , como indica el propio Kasparov, la más fuerte 1 9 . . . Tg8 ! 20 .Te 1 { 2 0 . C c 7+ Rf7 2 l . Tf3 + Rxg7 2 2 . Te 1 A d 6 + 2 3 . Rf2 D xf3 + 24 . gxf3 A xc 7 2 S . D c 3 + Rf7 2 6 . D xc 7 TxgS 2 7 . D xc 8 Te S
Casillas Reales
2 8 . D xb 7 (2 8. D h 8 Txc2 + 29 . Rg3 Cf6 3 0. Tb l b6 3 1 . Txb 6 Cbd 7 32 . Dxa 8 Cxb 6+) 2 8 . . . Txc 2 + 2 9 . Rg 3 Taa2 3 0 . D e4 Tg2+ 3 l .Rf4 Cf8+ } 20 . . . Cf6 2 1 . Axf6 Txg7+ (2 l . . . Dg6+ 22.Ag5 Dxg 7 2 3 . Dd8 + Rf7 2 4 . Dc 7+ Rg6 2 5 . Dxc 5 h 6 +) 2 2 . A xg7 Dg6+ 23 .Rf3 Dxg7 24 .Df4 Ca6 25 . C d6+ Axd6 2 6 . D xd6 Df8+ «y las blancas tienen que olvidar su glorioso ataque y luchar para sobrevivir en un final poco placentero» (Kasparov) . 2 7 .Dxf8+ Rxf8 2 8 . Ta l Ad7 2 9 . Rf4 Ac6-+ ]
2 0 . Rh 3 D xg 7 2 l . C c 7 + Rf7 22 .Tfl + Rg8 23 .Ah6 -curiosamente , Khalifman indica e sta po s i c ión c omo ganadora para ¡ las blancas ! - 23 . . . Dg6 24 .Tg3 Ta3 2 5 . c 3 C c 6 2 6 . C d5 Ta4 ! ! 27 .Txg6+ [27 .Dd 1 Ad6 (2 7 . . . Tal 28. Dh 5 Dxg3 + 29. Rxg3 Txfl 30.Dg4+ Rj7 31 . Dg7+ Re8 32. Cc 7+ Rd8 33. Cxe 6+ Re8 34. Dxh8 + Af8 35. Cc 7+ Rd8 3 6. Af4±; 2 7 . . . Cce5 28. Cf4) 28 .Tg5 Cce5 2 9 . Cf6+ C xf6 3 0 .Txf6+] 2 7 . . . h xg6 2 8 . D g5 C de 5 2 9 . C f6 + Rf7 3 0 . C d7+ Re8 3 1 . Cxc5 Tc4 3 2 . Cd3 Ct7+
Otra alternativa era 1 7 . . . Cxf6 1 8 . Cxf6+ (18. Cbd6+ Axd6 19. Cxd6+ Re 7 + ListengartenTolush, Erevan 1 95 6) 1 8 . . . gxf6 1 9 . A xf6 A c 5 + 2 0 . Re 1 D e4 +
4 1
2 1 . Rd 1 t Ahora falta la Th l . En
tonces : 1 8 .Te l ! !
Es difícil opinar acerca de cuántas variantes vio Tal cuando jugó la del texto , pero bien podemos decir que esta es una jugada de neto c orte posicional , y en pleno de acuerdo a la teoría que estamos exponiendo aquí . 1 8 . . . Ta6
La mej or defensa, pero a estas alturas ya es insuficiente . S i 1 8 . . . fxg5 1 9 . C c7+ es c ontundente (Cherta y Puig indicaron que luego de 1 9.Dxg5 las negras pueden defenderse , pero en reali dad s ó l o p o drían prol o ngar su agon ía m e d iante 1 9 . . . Dxb 5) ; o b i en 1 8 . . . D a5 1 9 . Df4 ! fxg5 2 0 . C e d6+ A xd6
2 1 . Txe6+ Ae7 2 2 . Txe 7+ Rxe7 2 3 . Te 3 ++-; p e or aún es 1 8 . . .
Juan Sebastián Morgado
Ca6 1 9 . C ed6++-1 9 . A xf6 C xf6 2 0 . C xf6+ Rf7 2 1 .Tf3 ? !
Más fuerte era 2 1 . C e4 ! por ej emplo : 2 1 . . . C d7 2 2 . D g5 D xb 3 2 3 . cxb 3 +-2 1 . . . D h4+
2 1 . . . D xb 5 2 2 . C d5 ++- ; 2 1 . . . Ac 5 + 2 2 . Rg 3 h 6 2 3 . Te4 Da5 (23 . . . Dxb5 ? 24. Cd5+ Re8 25. Cc 7+ + -) 24 . Df4+-2 2 . Rfl e5
22 . . . D c4+ 2 3 .Rg 1 Ac5+ 24 . Rh l Dxb5 2 5 . C d5 ++-23 .D d5+ Ae6 24 . C d7+ Rg6 ?
Era res i s tente 24 . . . Re7 ! 2 5 . D c 5 + R e 8 ! 2 6 . D c 8 + (2 6. Cxf8?? Ac4+-+ ,· 26. Tx.f8+ Tx.f8+ 2 7. Dxf8 + Rxd7 28. Tdl + Rc6 29. Dxb8 oo) 2 6 . . . Re7 2 7 . D xb 8
A g 7 2 8 . D xb 7 D c 4 + 2 9 . Rg 1 D c 8 oo 2 5 . C xe 5 ++- R g 7 2 6 .Tg3 +
D xg3 2 6 . . . Rh 6 2 7 . C f7 + A xf7
2 8 . D d2+ Rh 5 2 9 . Te 5 + D g5 3 0 . D xg5 # 2 7 . D x b 7 + C d7 2 8 . h xg3 T b 6
2 9 . D c7 A c 5 3 0 . C x d 7 A c 4 + 3 1 .Tc 2 1 -0
.
• ( \ '
4 2
Sanguineti,R.-Bronstein,L.
[D 95 ] Zonal Sudamericano, Fortaleza 1 9 75 l . C f3 C f6 2 . c4 c 6 3 . C c 3 d 5 4 . e 3 g6 5 . d4 Ag7 6 . D b3 0-0
7.Ad2 e6 8 .Ad3 c5
8 . . . b6 9 . 0-0 Ab 7 1 0 . e4 c5 B ondarevsky, l . -Kere s , P. /Leningrado 1 9 3 9 9. cxd5 cxd4 1 0 . C xd4
1 O. exd4 exd5 1 1 . 0-0 Cc6 1 2 . Tfe 1 ± Fenogl io ,V. -M arini , L . /Buenos Aires 1 95 9 1 O . . . exd5 1 1 . 0-0 C c6 1 2 . C xc6 b xc6 1 3 . C a4
En esta pos ic ión ya podemos advertir que , en tanto las blancas han alej ado su caballo del c entro para aprovechar la d e b i l i dad de c 5 , l as n e gras cuentan c on su Cf6 l i sto para saltar a g4 , su dama espera la oportunidad para ir a h4, el Ac8 ya ataca c as i l l a s sub-real e s
Casil las Reales
de s de su p o s i c i ón , y e l Ag7 puede ir en e l futuro a e5 . E l enroque b lanc o n o ti ene defensores . 1 3 . . . Ae6 1 4 . D c2 ? !
Las b lanca s n o d e s e an debilitarse con 1 4 .h3 ya que si bien evita Cg4 , queda expuesto a un p o s ib l e A xh3 futuro ; l a j ugada defens iva c orrec ta e s 1 4 .Cc5 ya que acerca e l caballo al c entro , y de s e r nece sari o dispone de Cxe6 eliminando un atacante p otencialmente p el igroso . 14 . . . Cg4 1 5 .Ae2
Las blancas avizoran algún p eligro y traen este alfil a la defensa. Si 1 5 .h3 Ce5 1 6 .Ac3 (1 6.Ae2 Af5 -t) 1 6 . . . Dh4 y las amenazas sobre h3 ya s on de s ignificac ión . 1 5 . . . D h4 1 6 . h3
Las blancas qui eren mantener su parej a de alfi les , pero la defensa correcta era 1 6 .Axg4 eliminando un caballo peligroso . 1 6 . . . Dxg4 ( 1 6 . . . Axg4 1 7 .Dxc6 Tab8 1 8 . Tfc l (1 8.Dxd5 Tfd8oo) 1 8 . . . Ae5oo) 1 7 .f3 y el ataque de las negras queda c ontrolado . 1 6 . . . Af5 1 7 . D d 1 C e S 1 8 . A c3 Tfe8
Con la torre aquí e l sacrificio Axh3 se hace peligroso, ya que la Te8 podría pasar vía e6-h6 .
4 3
1 9.Rh2 h5
Este peón se convierte en sub-real , y apoya el j aque en g4 . O tra j ugada qu e hay qu e c ons i derar desde el p unto de vista de nuestra teoría es 1 9 . . . g5 pero las negras desi sten porque luego de 2 0 . C c 5 la s b l an c as controlan el pasaj e de la Te8 por e 6 . 20 .Tc l Tad8 2 1 . C c5
C on h e xágon o s h em o s indicado las p i ezas p otencialInente reales . Con cuadrados las piezas reales , y con círculos , las casillas reales atacadas . 2 1 . . . d4 ! !
Ya en un capítulo anterior habíamos dicho que si la posición no se abre por medios normales o naturales , podemos recurrir a l o s métodos vi ol entos . Este avance de peón es el inicio de una extraordinaria combina-
Juan Sebastián Morgado
ción, basada en la acumulación de piezas s obre casil las reales , y en la falta de suficientes defensore s . 2 2 .Axd4
Un p o c o mej or era 2 2 . exd4 aunque luego de 22 . . . Ah6 2 3 . Ta 1 Af4+ 24 . Rh 1 (24 . Rgl Axh3- +) 24 . . . Axh3 2 5 . g3 Dg5 las negras tienen mej or juego. 2 2 . . . C g4+ 2 3 . Rg l C xe3 ! ! 24 .
fxe 3 T x d 4 ! ! 2 5 . exd4 A x d 4 + 2 6 . R h l
Las negras realizaron una combinación notable , digna de fi gurar entre l a s n1ej o re s de todas las épocas , pero cuando ya pue den rematar el j u ego , cometen un error : 26 . . . Te3 ? �
G anaba inmediatamente el nuevo sacrificio 26 . . . Axh3 ! ! -+
2 7 .Tf3
Ahora las blancas aprovechan la ocasión para sumar la torre a la defensa. 2 7 . . . T X f3 2 8 . A X f3 A X h 3 2 9 .
g3 'l @
Ahora son las blancas las que desaprovechan la oportuni da d . G anaba 2 9 . D e 1 ! A f2 30 .De8+ Rg7 3 1 .De5+ Rg8 3 2 . Dh2+-2 9 . . . D xg3 30 .De2 ?
Otro error. Había que ju-
4 4
gar 3 0 . Tc2 Af2 3 1 .Txf2 Dxf2co 30 • . . D g5 ?
Ultimo error . M e diante 30 . . . Af2 ! -+ las negras nuevamente inclinaban la balanza a su favor. 3 1 . C b3 +-
Ahora la defensa de las blancas l ogra frenar todas las amenazas . 3 1 . . . A e 3 3 2 . Te l Af4 3 3 . T g l
D h4 3 4 . D e l D f6 35 .Ag2 A e6
36 . C c5 Ag4 37 .Tfl g5 38 . C d3 1 -0
D eb o dec i r qu e Lui s B rons t e in y O sval do B azán , amb o s c ordob e s e s y amigo s , c onversaron más d e una vez s obre e l t ema de las cas i l l as reales . . .
• Morillo Párraga,N.-Ortíz,V.
[C40] Me1norial B ehtins , c orr. l 9 69
(Ver diagram a en la página siguiente.)
1 3 . . . A d6 ! 1 4 .g3 O b i e n 1 4 . f4 e xf3 1 5 .
Txf3 Cxf3 + 1 6 .Axf3 Dxh2+-+
Casillas Reales
1 4 . . . D h3 1 5 .f3
Luego de una apertura romántica hemos llegado a una posición donde las negras han sacri ficado mucho material , pero están dadas las c ondic iones para un ataque sobre las casi llas reales . C on hexágonos tenemos marcadas las piezas potencialmente reales , con cuadrados las piezas reales , y con círculos las casillas reales y sub-reales atacadas . A
4 5
la Ta8 la c ons ideramos c omo una pieza potencialmente activa. Es fácil advertir la falta de piezas defensoras del rey blanco . 1 5 . . . C eg4 !
También es correcta 1 5 . . . exf3 aunque es menos contundent e . Po dría s e guir 1 6 . A xf3 Cfg4 1 7 .De2 Ac5+ 1 8 . d4 Axd4+ 1 9 .Rh l Cxh2 20 .Ag5+ Re8 2 1 . Ah5 + Rd7 2 2 . D g2 D xg2+ 23 . Rxg2 Cxfl -+ 1 6 .fxg4 Axg3 ! 1 7 .Tf2
S i 1 7 . hxg3 ? D xg3 + 1 8 . Rh l C xg4 1 9 . A xg4 A xg4 2 0 . D xg4 D xg4 2 1 . Tf8 + R e 7 22 .Txa8 D d l + 23 . Rh2 Dxc l -+ 1 7 . . . Axf2+ 1 8.Rxf2 Dxh2+ 1 9.
R e 3 D g 3 + 2 0 . R d 4 c 5 + ! 2 1 . Rxc5 C d7+ 22 .Rd4
Si 22 .Rxd5 De5+ 23 .Rc4 b5+ 24 .Rb3 Cc5+ 25 .Ra3 b4+ 26 . Rxb4 Ca6+ 2 7 .Axa6 Tb8+-+ 22 . . . De5+ '? ! Una imprec i s ión en el remate . G anaba ens e gui da 2 2 . . . D f2+ 23 . Rxd5 b5 ! 24 . Rxe4 Ab7+ y mate en 1 O j ugadas . 23 .Re3 d4+ 2 4 .Rf2 Dh2+ 25 .
Rfl C e5 26. C c3
(Ver diagram a en la página siguiente.)
26 . . . d3 26 . . . Cxg4 -+
Juan Sebastián Morgado
2 7 . exd3 A xg4 2 8 . A xg4 R e7 !
29. C d5+ Rd6 30. C e3 Tf8+
3 0 . . . Cxd3 es mate en 5 . 3 1 .Cf5+ Txf5+! 32 .Axf5 D h l +
33 .Re2 Df3+ 34 .Rel C xd3# Una combinación extra-
ordinaria .
( •.. · _ _ \
' . ·. ' Klein,J.-M areussi ,B. [B94] B uenos Aires , 1 9 63 l . e 4 e S 2 . C f3 d6 3 . d4 exd4
4 . C xd 4 C f6 5 . C e3 a6 6 . A g5
C b d7 7.Ae4 h6 8.Ah4 g6 9.De2
Ag7 1 0 .f4
Una j ugada l ó gi ca . Las b lancas s e preparan p ara una lucha de enro qu e s opuest o s . P rematuro e s e l s acr ifi c i o 1 O . Axf7 + R xf7 l l . D c4+ d 5 1 2 . exd5 C b 6 1 3 . D b 3 C fxd5 1 4 . 0 -0-0 g5 1 5 .Ag3 e6 1 6 . C e4
4 6
A d7 1 7 . h4 Rg8 1 8 . hxg5 hxg5 1 9 .Txh8+ Axh8 2 0 . D f3 Ag7 y las negras se defienden Giustolisi - Pachman, Dublin 1 9 57 . 1 0 . . . D a5
1 O . . . Dc7 1 1 . 0-0-0 0-0 1 2 . Cd5 Cxd5 1 3 . cxd5 Cf6 1 4 .f5 g5 1 5 .Af2 b 5 1 6 . Ab3 Ad7 1 7 . h4 g4oo Mun-Jaudran , .T./F. clubs eh corr 1 9 64 ; 1 O . . . Db6 ? ! 1 1 . 0 -0 -0 Dc7 1 2 . Cd5 Cxd5 1 3 . exd5 Cf6 1 4 . h 3 b 5 1 5 . A b 3 A b 7 1 6 . The 1 ---+ C ontini-Galli/corr 1 9 66 1 1 . 0 -0 -0 0 - 0 1 2 . g4 C e S 1 3 .Thgl
En esta posición tenemos sólo dos piezas reales (cuadrados) , pero muchas otras potencialmente reales (hexágonos) .
1 3 . . . b 5 '! ! N o muy feliz, ya que per
n1ite el ingreso de un peligroso c ab al l o a la z on a r ea l c on ganancia de ti empos . Merecía
Casillas Reales
c ons i de rac i ón 1 3 . . . e 6 procurando controlar el Ac4 . 1 4 . C c 6 ! D c 7 1 5 . C d 5 C x d 5
1 6 .Axd5 C a4 '? Aleja el cabal lo de la de
fensa del centro y el flanco rey. La mej or defensa era 1 6 . . . Ab7 1 7 . Cxe 7+ Rh700 donde las negras tienen un peón menos, pero han logrado crear una posic ión donde tienen tres piezas reales
(Dc7 , CeS y Ag7), y las blancas deben prestar atención a ellas . 1 7 . e 5 !
Esta j ugada e s , simultáneamente , una defensa real indirecta de la casil la b2 (obtura el Ag7) y un ataque a la casilla sub/real f6 . 1 7 . . . A b 7 1 8 . C xe 7 + R h8 1 9 .
Af6 !
1 9 . . . dxe5 20 .fxe5 Tae8
Tamp o c o s alvab a 2 0 . . . Axf6 2 l . exf6 D f4+ 22 .Dd2+
4 7
2 1 . D e3
Ah ora tenemo s atacada una casilla real más (h6) que en la pos ic ión anterior, y se produc e un remate s enci l l o p ero n1uy b onito . 2 1 . . . R h 7 2 2 . A xg7 R x g7 2 3 .
C f5+ ! gxf5 24 .gxf5+ Rh7 2 5 .
Dxh6+ ! Rxh6 26 .Td3
Una casi l la de paso de-ClSIVa 1 -0
• Bartís ,G.-Muhana,J. [C 95]
Campeonato de las Américas , corr. , 1 978 l . e4 e5 2 . C f3 C c6 3 . A b 5 a6
4 .Aa4 Cf6 5 .0-0 Ae7 6 .Tel b5 7 .Ab 3 d 6 8 . c3 0 -0 9 . h 3 C b 8
1 0 . d4 C b d7 l l . C b d 2 A b 7
1 2 .Ac2 Te8 1 3 .Cfl Af8 1 4.Cg3
Podríamos decir que d2 y fl han sido casillas de paso para que e l Cg3 s e c ol oque en una situación sub-real . 1 4 . . . g6 1 5 . a4 eS 1 6 . d5 C b 6
1 7 . D e 2 b x a4 1 8 .A x a4 C x a4
1 9.Txa4 D b 6
O b i en 1 9 . . . A c 8 2 0 . b 3 Te 7 2 l .Ag5 Ag7 22 . D e3 D f8 2 3 . D d3 h 6 24 . A d2 C h 7 2 5 . c4 Tb7 Y2-Yz Balashov,Y.-Smejkal , J./Leningrado 1 977 ; También se
Juan Sebastián Morgado
j ugó 1 9 . . . A g 7 qu e c on duj o a una lucha cerrada 20 . c4 Ac8 2 1 . Ad2 Te 7 2 2 . A a 5 D e 8 2 3 . Ta3 Tb7 24 .Tb 1 Tab8 25 .b3 Cd7 26 . C e l Cf8 2 7 . C d3 f5 2 8 . b4 f4 2 9 . C fl A f6 3 0 . Tb 2 C d 7 3 1 . Taa2 Y2- Y2 Quinteros ,M.-Segal , A . /Sao Paulo 1 977 2 0 .Ta3 Teb 8 '! !
Desde el punto de vista de nuestra teoría las dos últimas jugadas negras son dudosas, ya que alej an piezas defensoras del R g 8 . En e s t a s i tuac i ón l a s b l an c a s t i enen vari a s p i ezas p ot enc i almente r eal e s , y l a s amenazas que las negras pueden crear sobre la columna «b» no son sufic i entemente fuertes . 2 1 . b 3 Ac8 2 2 .Ad2 C e8 2 3 . c4
f5 '! !
¡ Otra j ugada di scutib l e ! En tanto las blancas evitaron las
4 8
amenazas negras sobre l a c oluinna «b» mediante los avances b3 y c4 , l a s negras abren e l juego sobre s u propio rey. Pese a que cuentan con la posibilidad de defen ders e · c o l o cando su s torres en l a segunda l ínea , l a jugada del texto es desaconsej able , ya que otorga a las blanc as i mp ortant e s c a s i l l a s p or d o n d e p a s ar su s p i ezas (p or ej emplo h5 ) . 2 4 . exf5 ! ± gxf5
Y ahora las blancas tienen a su disposición una casilla de paso importante : h5 , donde pueden ir el caballo o la dama. 2 5 . C g5 Ta7
Las negras confiaban en esta casilla de paso para l levar la torre al flanco rey, defendiéndose de las amenazas . 26 .f4 e4 27 .Ac3
Otra casilla de paso para colocar un tremendo alfil real . 27 . . . D d8
No s irv e 2 7 . . . Ag7 c on i dea de op oners e al A c 3 p or 2 8 . Dh 5 A xc 3 2 9 . D x e 8 + Rg7 3 0 . C e 6 + A x e 6 3 1 . C h 5 + Rh6 3 2 .Dxe6+ Rxh5 3 3 .Dxf5+ Rh6 3 4 . Dg5 # Esta variante da una i d e a de l a p e l i gro s i dad del ataque blanco . 28.Dh5 Cf6 2 9.Dh4 De7
Casillas Reales
C on h e xágon o s e s tán marcadas las piezas potencialmente reales . ¿Por qué también incluímos a la �a3 ? Aparentemente ella no puede participar en el ataque sobre el flanco rey, ya qu e deb e de di c ar se a defender b3 . S in embargo , luego de un anál i s i s más pro fun do , vemos que luego de 2 9 . . . C e 8 3 0 .Te3 Tab7 3 l . C e2± 3 0 .Txa6 ! !
La Ta3 era p ot enc ia lmente real en forma indirecta , ya que sirve para desviar uno de los defensores del Rg8 . Si las n e gras c apturan c on l a Ta 7 , entonces queda desprotegida la segunda línea ; si lo hacen c on el Ac8 , entonces queda indefenso el peón f5 . Un jugador de estil o ultra posici onal se conformaría con una ventaj a más mode sta, me diante 3 0 . Ch5 C xh5
4 9
3 1 . Dxh5 Ad7 3 2 . Te3 A e 8 3 3 . D e 2 --+ 3 0 . . . Txa6
N o sa l vaba 3 0 . . . A xa6 debido a 3 1 . Cxf5 D d8 (3 l . . . De8 3 2 . C xh 7 (32 . A xf6 ? Dg6 33 . Cxd6 Dxf6 34 . Cdx e 4 Dh 6oo) 3 2 . . . Txh7 3 3 .Dxf6+) 3 2 . Ce6+-3 1 .Axf6 D a7
S i 3 1 . . . D xf6 3 2 . D xh 7 # pues ya no está l a Ta7 . 3 2 .Te3 !
E sta t orre s e suma al ataque vía g3 . La casi l la e3 es otra casilla de paso. 32 . . . Ta3 3 3 . C e6 Df7 34 .Cxe4 !
B onita j ugada indirecta . El caballo captura un peón y a la vez l e cede su lugar a la torre . 34 . . . Tbxb3
D esesperación . Ya no hay defensa posible . 3 5 . C c3
3 5 . C4g5 +-3 5 . . . Txc3 3 6 . A xc3 Txc3 3 7 . Txc3 Axe6 3 8 .Tg3+ Rh8 3 9.
dxe6 Dxe6 40 .Dd8+- D f7 4 1 . D c8 h 6 4 2 . T d 3 Rg7 4 3 .T d 5
Rg6 44.Rh2 h 5 45.g4 fxg4 46. Tg5+ R h 7 47 .Df5+ D xf5 48 .
Txf5 Ah6 4 9 . h xg4 hxg4 5 0 .
Rg3 Rh8 5 1 .Rxg4 A f8 52.Rf3
1 -0 Una p art i da e xtra or
dinaria.
Juan Sebastián Morgado
Tal ,M . -Voorem aa,A . [B48 ] Tallinn , 1 9 7 1 l . e4 e S 2 . C f3 e 6 3 . d4 c x d 4
4 .Cxd4 C c6 S . C c3 D c7 6.A e3 a6 7.Ad3 Cf6 8.0-0 Ad6 9.Rhl hS 1 0 .f4
1 0 . C xc6 dxc6 (J O . . . bxc 6 l l .f4 Cg4 12 .Df3 Cxe3 1 3.Dxe3 e5 1 4. Ce2 Ab 7 1 5.Ac4 -+ NezhIn et d i n ov, R . -Ta i m a n o v, M . / Tbilisi 1 9 5 9) 1 1 . f4 Cg4 1 2 .Ad2 e5 1 3 . f5 b 5 1 4 . D e2 Ac5 1 5 . a4 Tb8 1 6 .Ag5oo Voronov-Pelts/ Leningrado 1 9 7 1 1 0 . . . C g4 l l .Df3
Era aparente la «natural>) 1 1 . A g 1 ? de b i d o a 1 1 . . . C x d4 1 2 .Axd4 Axf4+ l l . . . C xe 3 1 2 . D xe3 D b 6 1 3 . C ce2 eS ! '?
C ontra l a c l avada 1 3 . . . Ac 5 ! ? probablemente Tal hubiera contestado con 1 4 . c3 por ej emplo : 1 4 . . . Dxb2 1 5 . e5� (1 5. a3 Db6 1 6.f5 e5 1 7. Dg5 exd4 1 8. Dxg7 Tf8 1 9 . Tab l Da 7 20. e 5 t) ; 1 3 . . . Dxb2 1 4 . Cxc6 bxc6 1 5 . e 5 Ae7 1 6 . Tab 1 D xa2 1 7 . f5 t .
Con la del texto , las negras han obteni do aparentemente una buena posición, basada en la clavada sobre la De3 , p ero ti enen e l problema d e l a falta de protección de su rey, y l o s s erio s inconvenientes para
5 0
desarrollar el Ac8, que está muy entorpecido por el peón d7 . Tal hab í a p r ev i s to una e xc e l ente jugada de ataque : 1 4 . Dg3 !
U na casilla de paso inesperada para las negras . 1 4 . Cf5 Dxe3 1 5 . Cxe3 exf4 1 6 . C xf4 b5 1 7 . Tad l Ae5 oo 1 4 . . . exd4 ?
1 4 . . . exf4 ? 1 5 . D g5 ! (1 5 . Dxg 7? A e 5 +) 1 5 . . . Cxd4 (1 5 . . . Dxb2 1 6.Ac4 y la acmnulación de piezas blancas reales es muy p e l i gr o s a .) 1 6 . D xg7 Tf8 1 7 . D xd4 D xd4 1 8 . C xd4 y l a s b lancas pronto recup erarán e l p e ón c on v entaj a ; l a s negras obt i enen tab l a s l u e g o d e 1 4 . . . C x d4 ! 1 5 . fx e 5 A c 7 1 6 . D xg7 Tf8 1 7 . Txf7 (1 7.Ac4 ! ?) 1 7 . . . Txf7 1 8 . Dh 8 + Tf8 (1 8 . . . Re 7? 19. Cc3!) 1 9 .Dxh5+ Rd8= 1 S .Dxg7 Tf8 1 6 . eS Ae7 17 . fS
Casillas Reales
Ahora las blancas tienen todas sus piezas atacando casillas reales , o en condiciones de hacerlo a breve plazo. Los peones de e5 y f5 tienen una fuerza extraordinaria, ya que a la vez que atacan casi l las sub-reales , imp i den e l d e s arro l l o de las p1ezas negras . 1 7 . . . f6
Las alternativas tampoco salvan . Si las blancas continuaran con la glotonería 1 7 . . . Dxb2 1 8 . Cg3 Cb4 1 9 . Ce4 ! con ataque ganador (19. Cxh5 Cd5+) ; Y si 1 7 . . . D c 7 1 8 . Tae l h4 1 9 . C f4 y otra vez arribamos a una pos ic ión ideal ; 1 7 . . . D c 5 1 8 . Tae l (1 8 . .f6 ! ?) 1 8 . . . h4 1 9 . C f4 e s similar; 1 7 . . . Cb4 1 8 . Cf4+ 1 8 . C f4 ! Tf7
1 8 . . . C x e 5 1 9 . D xe 7 + R x e 7 2 0 . C d5 + R d 6 2 1 . C xb 6 Tb8 22 . a4± ; 1 8 . . . fxe5 1 9 . f6 !+-1 9 . exf6 !
A h o ra s e pr o duc e un · ·tema coronaci ón·· , que veremos c on amp l i tu d en el p róx imo capítulo . 1 9 . . . C e 5
Si 1 9 . . . Txg7 20 . fxg7 Rf7 2 1 . f6 A xf6 2 2 . C xh 5 C e 7 2 3 . Tae 1 O tra p o s ic ión i deal , c on t o das l a s p i e zas r eal e s ;
5 1
1 9 . . . A xf6 2 0 . D g 8 + Tf8 2 1 . Tae l + C e 5 2 2 . D g6+ Rd8 2 3 . Txe5 +-2 0 . A c 4 '?
Ahora las negras ti enen chances de defenderse . Ganaba fác i lmente 2 0 . D h 8 + A f8 2 1 . Tae 1 y se produce otra posición óptima de piezas reales . 2 0 . . . C xc 4 2 1 . D g8 + A f8 2 2 .
C xh 5 C d 6 2 3 .Tae 1 + Rd8 2 4 .
Te7 Db5 25.Tfe 1 Dd5?
El error final . La defensa correcta era 25 . . . DaS 26 . Ta 1 (Si 26. c3 Dxa2 defendiendo f7 2 7. Cg7 dxc3 28. Ce6+ dxe 6 29. Txj7 Cxj7 3 0. Dx.f8+ Rc 7 3 1 . Dxf7+ A d 7! 32 .fxe 6 Td8 3 3 . Dg 7 cxb2 00) 26 . . . Txe 7 ! (2 6 . . . Dd5 ? 2 7. Cf4 Dxf5 28. Txf7 Cxj7 29. Dxj7!+ -) 27 . fxe7+ Rxe7 28 .f6+ R d 8 2 9 . D xf8 + R c 7 3 0 . C g 7 D d5 � 2 6 . C f4 D xa2
Un p o c o m ej o r era 2 6 . . . DaS pero de todos modos las b l an c a s ganan l u e g o de 27 .b4 ! D xb4 28 . C d3 . 2 7 . C e6 + ! Dxe6
2 7 . . . dxe 6 2 8 . Txf7 C xf7 2 9 . D xf8 + Rc 7 3 0 . D xf7+ Rb 6 3 l . Dg8+-28 .fxe6 Txf6 29.Tfi 1 -0
Juan Sebastián Morgado
Szmetan,J.-Gareía González,G. [B89] Málaga, 1 976 l . e4 e S 2 . C f3 e 6 3 . d 4 exd4 4 . C xd4 C e6 5 . C e3 d6 6 . A e3 C f6 7 .Ae4 Ae7 8 .De2 a6 9 .0-0-0 D e 7 1 0 . A b 3 0-0 l l . g4 C xd4 1 2 .Txd4 b S 1 3 .gS C d7 1 4 .Tgl C eS
Hoy la teoría recomienda 1 4 . . . Td8 l S .DhS g6 1 6 .Dh6 Af8 1 7 . Dh4 CeS 1 8 . Tg3 D e7 1 9 . f4 Tb8 20 .fS hS 2 l .Tf3 b4oo Según Akopian en la ECO B, 3 a. edic i ón , p ágina 4 9 8 1 1 0 6 , a una p o s i c i ón c omp l ej a l l eva 14 . . . Ab7 1 5 . f4 CeS 1 6 . fS Tfc8 1 7 . Rb l Cxb3 1 8 . axb3 Af8 1 9 .Tg3 g6 2 0 . f6 A c 6 oo D e Fi rmianM . Gómez , Nueva York 1 9 8 9 . 1 5 . e5 g6
1 S . . . C xb 3 + 1 6 . axb 3 dS [ 1 6 . . . dxeS 1 7 .Th4 g6 1 8 .Df3 e4 ( 1 8 . . . Ab 7 1 9. Dh 3 h5 2 0. Txh5
gxh 5 2 1 . Dxh 5 Ac5 22 .Dh 6
Axe3 + 23.fxe3 Tfc8 24. Tg3 + H aug ,U . - M aru s i ak , L . IIE C G 2 0 0 6/Tel eches s 1 1 7) 1 9 . C xe4 Ab7 20 .Ad4 eS 2 l .Ac3oo Carlson, C .-Eisen,D./corr 1 98 9 ] 1 7 . Th4 (1 7.Dh5 ? D xe5 1 8. Th 4
Df5 + Sinkovic-Jovanovic/Tuc epi 1 9 9 6) 1 7 . . . g6 1 8 . f4 Ab 7 1 9 . Tg 3 (1 9 . A d4 A c 5 2 0. D e 3 A xd4 2 1 .Dxd4 t A nt o s zk i e wicz ,G ,-Hofmann/DDR 1 98 9)
5 2
1 9 . . . Rg7 2 0 . fS t C arr-Markland/corr. B PCF 1 98 S 1 6 .Th4 Ab7
A una lucha muy complicada conduj o 1 6 . . . b4 1 7 .Tg3 fS (1 7 . . . bxc3 1 8. Tgh 3 cxb2 + 1 9.
Rb 1 h5 2 0. Txh 5 + -) 1 8 . gxf6 C xb 3 + 1 9 . axb3 Axf6 2 0 . exf6 bxc 3 2 1 . AgS cxb2+ 2 2 . Rxb2 eS 23 . Tc3 -+ H eim, B . -Meinzer, D./B adenwei ler 1 9 8 S . 1 7 .Tg3 !
L a s b lancas ti enen su s pi ezas atacando casil las reales o en c ondi c i one s de hac erl o pronto. El dominio de la columna 'h ' ya no puede ser contrarrestado , y se advierte la falta de defensores del rey negro, espe- · c i almente un c abal l o . En las jugadas 1 6 y 17 las blancas han uti l izado dos casi l las de paso decisivas para colocar las torres reales .
Casillas Reales
1 7 . . . Rg7 1 7 . . . Cxb3+ 1 8 . axb3 dxe5
1 9 .Dg4 ! (19. Tgh3 Ag2 ooj 19 . . . h5 20 .Txh5 gxh5 2 l .Dxh5+-1 8.Ad4 dS?
Como dij imos antes, cuando una cantidad de nuestras piezas se encuentra atacando casillas reales , las combinaciones sur-gen en forma natural . Mej or era 1 8 . . . C xb 3 + 1 9 . ax b 3 d5 2 0 . f4 (20. Th6? Axg5+ 21 . Txg5 Rxh6+ Barnier,A .-Rotsaert ,J. /Provence 1 9 90) con clara ventaj a, análisis de J. Szmetan en la ECO B 3a . edición, y en In f. 2 1 /3 5 8 . S in embargo , las n e gras pue den s obrevivir luego de 2 0 . . . Ac5 2 1 . D e 3 (2 l . Tgh 3 Th 8 ooj 2 1 . . . Axd4 (2 l . . . Tac8 22.f5! Axd4 23 . f6+ ±) 2 2 . D xd4 Th 8 ± Shari f, M.-Mascarinas ,R . /Manila 1 977 1 9.AxdS ! ! AxdS 20. CxdS cxdS 2 1 . e6+ f6
5 3
2 l . . . Rg8 2 2 . Txh7 ! Axg5+ 23 . Txg5 Df4+ 24 .Ae3+ 22 .DhS ! C d3+ 23 .Rb l gxhS
2 3 . . . Th 8 2 4 . D h 6 + Rg8 2 5 . gxf6+-2 4 . gxf6 + R h 8 2 S . fxe7+ C e S 26 .exf8D+ Txf8 2 7 .TxhS Txf2
28 .Axf2 1 -0
··•· ·· . . · . · · .·· . . \
'· . - .� / / Szme tan,J.-Panno,O. [E63 ] Santos Lugares , 1 9 77 l . C f3 C f6 2 . c4 g6 3 . g3 Ag7 4 .Ag2 0-0 S .0-0 d6 6 .Cc3 C c6 7 .d4 a6 8 .b3 Tb8 9.Ab2 bS 1 0. cxb 5 axb S l l .Tcl b 4 1 2 . C b l
C a7 1 3 . C e 1 c 6 14 .C d3 DaS 1 4 . . . Aa6 ! ?
1 S .Cd2 Ae6 1 5 . . . C d5 1 6 . C c 4 D a6
1 7 . D c2 Ad7 1 8 . e4± WinklerHein/corr. DDR M 1 986 . 1 6 . C c4 DbS 1 7 . D d2 Tfc8 1 8 . Tc2 C d5 ? !
1 8 . . . Af5 ! ? 1 9. c4 C c3 20 .a3 eS 2 1 .dS Ad7
2 1 . . . Ag4 22 .Te l D d7 2 3 . axb4 c xb4 2 4 . Cxb4 Txb4 2 5 . Axc3 Txb3 26 .Axg7 Rxg7 2 7 . Tb2 y las negras tienen problemas debido a la mala ubicación del Ca7 . 22 .a4 Da6 23 . eS ! dxe5? !
Juan Sebastián Morgado
N o alcanza a equil ibrar 2 3 . . . Af5 ? ! 2 4 . Te l (2 4 . A x c 3 bxc3 25. Txc3 y ahora, para levan tar la con tra - es truc tura blanca que maniata el Ca l, las negras disponen del sacrificio de calidad 25 . . . Txb 3 2 6. Txb 3 Dxc4oo) 24 . . . dxe5 25 .Axc3 Axd3 2 6 . D xd3 bxc3 2 7 . Txc 3 e4 2 8 . Txe4 Axc3 29 .Dxc3 y aquí son las blancas las que sacrificaron la calidad exitosamente, ya que mantienen al Ca7 preso, y presionan sobre el peón e7 , además de dominar la gran diagonal . Por ej empl o : 2 9 . . . Te 8 (2 9 . . . Df6? 30.Dxf6 exf6 31 . Te 7+ -) 30 .Te3 Df6 3 1 . C e5 � ; l o mej or parece s er 2 3 . . . A xa4 ! ? aunque en l a partida viva e s muy difíci l de c onsiderar, por la clavada que s e pro duc e . 24 . Ta l C ab 5 2 5 . exd6 (25.Axc3 bxc3oo) 25 . . . exd6 2 6 . A xc 3 (S i 2 6. Df4 Cd4 2 7. Axc3 bxc3 2 8. Txa4 Db5 29 . T ca2 Dxb3 � las negras disponen de un tema real de c oronación muy p o dero s o , y l a pi eza de ventaj a apenas c ompensa; 2 6. bxa4? Cd4+) 2 6 . . . bxc3 27 .Df4 C d4oo
C on la del texto , las negras planean ganar la calidad luego de una variante más o menos forzada, pero en la evaluación final de la posición de
5 4
la jugada 28 , en tanto las blancas c onstruyen una p o dero sa posici ón real , las negras tienen varias de sus piezas aisladas en el flanco dama. 24 . C dxe5 Af5 2 5 .Tc c l Axe5 2 6 . C xe 5 C e2+ 2 7 . R h l C xc l
28.Txcl Dd6
2 9 . g4 ! +
El avanc e de este p e ón permite a las blancas contar con la terc era l ínea para pasar l a torre a l flanco rey. 29 . . . Ad7 30.Tel TeS 3 1 .Dh6 f6
3 2 .Te3 e6 3 3 . C xg6 exd5 3 4 .
Cf4 Txe3 35 .fxe3 Ac6 36. C h5 D f8 3 7 . C xf6+ Rf7 3 8 . D h 5 +
Re7 39.De5+ Rfi 40.Dc7+ Rg6 4 1 .Dxh7+ 1 -0
•
Casillas Reales
Seeehi Vigneau,E.
Subotieanee [E59] Dyckhoff, corr. 1 95 6 l . d4 Cf6 2 . e4 e6 3 . C e3 Ab4 4 .e 3 eS 5 .Ad3 0-0 6 .Cf3 d5 7 .0-0
C e6 8 . a3 Axe3 9 . b xe3 dxe4 1 0.Axe4 D e7 l l . a4 b6 1 2 .Aa3 eS 1 3 .De2 Ab7 1 4 .Ae2 e4 1 5 .
C d2 Tfd8 1 5 . . . C a5 1 6 . dxc 5 b xc 5
1 7 .c4 Tfe8 1 8 .Tfd l Tad8= Naj dorf, M . -Reshevsky, S . /Buen o s Aires 1 95 3 . 1 6 . dxe5 ? ! . . .
A cambio de un peón, las negras logran la casilla de paso e5 . 1 6 . . . C eS 1 7 . exb6 axb6 1 8 . h3 D e6
1 8 . . . C d3 ? 1 9 . Tfd l Ta5 2 0 . C xe4 Axe4 2 l .Axd3 Txd3 2 2 . Txd3 Tg5 2 3 . f3 A xf3 2 4 . A d6 D c 6 2 5 . A e 7 Txg2+ 26 .Dxg2 Axg2 2 7 . Td6+ 1 9.Ab5 De6 20.Tfd1 h5
20 . . . Ac6 ! ? 2 1 . C b3
2 1 . C f l Td3 ! 2 2 . A xd3 ? N o hay ningún apuro por capturar la t o rre . (2 2 . Cg3 ! ?) 22 . . . exd3 2 3 . Db2 D d5+ Fuderer,A .-Rabar,B . /Zagreb 1 954 . 2 1 . . . Cf3+? !
2 l . . . C d3 22 . Cd4 De5oo
2 2 .R h 1 '! !
5 5
S e exp one innecesariamente a l o s rayo s X del Ab7 , que e s potencialmente una pieza real . Era mej or 22 .Rfl ! t
22 . . . Td3 23 . C d4 DeS
24 .Axd3 '?
H asta aquí l a s b l ancas habían real izado una c orrecta defensa de sus propias casi llas reales, pero este es un error que trae c onsecuencias graves : e l Ab7 s e despi erta, pasando de una acción indirecta a una directa . Era buena 24 .Db2, y las blancas están bien . Si por ej empl o 24 . . . C e 5 p o dría seguir 2 5 . Tdc l � 24 . . . exd3 25 .Dxd3 C e 1 ! -+ 26 . C f5 C xd3 2 7 . C e7+ R h7 2 8 .
Cxe8 C xf2+ 2 9.Rg1 Cxd1 30. C d6 Cxe3 3 1 .Ael
3 l . Cxb7 Txa4-+ 3 1 . . . Td8 32 .Cxb7 Td1 + 33 .Rf2
C e2
Juan Sebastián Margado
3 3 . . . Cc4-+ 3 4 . Re2 Tgl 3 S .Tb l C dS 3 6 . Rd3 Ca3 37.Tb3 Tdl + 38.Ad2
C b l 39.Tb2 Cdxc3 40.aS bxaS 4 1 . C xaS C d S 4 2 . g3 C f6 4 3 . Re2 Txd2+ 44 .Txd2 Cxd2 4S.
Rxd2 C e4+ 46.Re3 C xg3 47. Rf4 h4 0-1
Kasparov,G.- Karpov,A. [C92] Campeonato Mundial , Partida 20 Lyon/Nueva York, 1 9 9 0 l .e4 eS 2.Cf3 C c6 3 .AbS a6 4 .
A a4 C f6 5 .0-0 Ae7 6 .Te l b 5
7.Ab3 d 6 8 .c3 0-0 9.h3 Ab7 10 .
d4 TeS l l . C b d2 Af8 1 2 .a4 h6
1 3 .Ac2 exd4 1 4 . cxd4 C b4 l S . Abl eS 1 6.d5 Cd7 17 .Ta3
Típica casilla de paso de esta línea. 1 7 . . . f5 1 8.Tae3 ! ? C f6 1 9. C h2
Libera una casilla de paso importante en forma indirecta : la torre puede ir a g3 . 1 9 . exf5 Txe3 2 0 . Txe3 Cbxd5oo 1 9 . . . Rh8
1 9 . . . fxe 4 ? ! 2 0 . Cxe4 Cbxd5 (2 0 . . . Cfxd5 2 1 . Tg3 t) 2 1 . C xf6+ C xf6 2 2 . Txe8 Cxe8 23 . D d3 C f6 24 .Dg6t 20 . b3
c on idea de Ab2 . S i 2 0 . e xf5 Txe 3 2 1 . Txe3 C b xd5
5 6
22 .Te 1 D d7 23 . Cdf3 Te8 � Fed o r o w i e z , J . - L o b o , R . 1 S a n Francisco 1 9 9 5 . 2 0 . . . b x a4 ! ?
20 . . . c4 2 1 .bxc4 bxc4 22. C xc 4 (22 . A b2 t) 22 . . . fxe4oo ; 2 0 . . . fxe4 ! ? 2 1 . C xe4 C fxd5 [2 1 . . . Cbxd5 ? 22 . Cxf6 Txe3 23 . Txe3 Cxf6 (23 . . . Cxe3 ? 24.Dd3) 24. Cg4± Harabor,M. -Klompus, G . /c orr . 1 9 9 1 ] 2 2 . Tg3 Te 6 ! ? (22 . . . Cjo 23 . Cxf6 Dxf6 24. Cg4 Txe l + 25.Dxel Dal 26.Ad2 �) 2 3 . D g4 (2 3 . Cxc 5 Txe l + 24 . Dxel dxc5 25.De4 Cf6 26.Dxb 7 Tb8 �) 23 . . . De7� 2 1 . bxa4 c4 ? !
2 1 . . . fxe4 2 2 . C xe4 Cfxd5 (22 . . . Axd5!? 23. Cxf6 Txe3 24. Txe 3 Dxf6 2 5 .A d2 Tb 8 � Iot ov,V. -Wern er, E . /c orr. Worl d Cup6-7 sf1 6 1 990) 23 .Tg3 (23. Cxd6 Cxe 3 24. Cf7+ Rg8 2 5. Cxd8 Cxdl 26. Txe8 Ac6+) 23 . . .
Casillas Reales
Te6 (2 3 . . . (.{6 2 4. Cxf6 Dxf6 2 5. Ad2 Txel + 26.Axel De6 2 7.Ac3 Ae4 28.Axe4 Dxe4 29.Dh5 Cd5 3 0. Dxh 6+ Dh 7 3 1 . Dg5 Cxc3 32. Txc3 Te8 33. C.f3 A e 7 34.Dd5 Dg6 35. Te3 Af6 36. Txe8+ Dxe8 3 7. Dxd6 Dxa4 38. Dxc5 Dal + 39.Rh2 a5�) 24 . Dg4 (24. Cxc5? Txe l + 25 . Dxe l dxc 5 2 6. De4 Cf6 2 7.Dxb 7 Tb8 28.D.f3 Ad6+) 24 . . . D e 7 c on chane e s aproximadamente iguales . Las negras han defendido el punto vital h6, y e sp e cu l an c on la Te l ind e fe n s a , amenazan do C f6 . Para liberar de la presión a su Te 1 , las blancas deberán jugar Cf3 y Rh2 . (24 . . . A c8!?) 22 .Ab 2 ! fxc4 ? !
2 2 . . . C d3 2 3 . A xd3 cxd3 2 4 . e xfS Txe 3 2 S . Tx e 3 C xdS 2 6 . Txd3 -* ; 2 2 . . . Tc 8 2 3 . D f3 ! [23 . Ac3 aS;!; (S ólo aparente es
23 . . . fxe 4 ? deb i d o a 2 4 . Axb4 Db6 25. Cxe4 Cxd5 26.Ac3 Cxe3 2 7. Txe3 d5 2 8. A d4 ±) Por ej e mp l o : 24 . D f3 C d3 ! E st a jugada de interferencia siempre es fundamental en la defensa de las negras . 2 S . Axd3 c xd3 2 6 . A xf6 D xf6 2 7 . exfS Txe3 2 8 . T xe 3 Te S 2 9 . Txd3 D e S c on p l ena c omp e n s ac i ón p or l o s p e o -n e s , un o d e l o s cua l e s c aerá a l a b r e v e dad] 2 3 . . . f4
5 7
[ 2 3 . . . fx e4 ? 2 4 . C x e4 C fx dS (24 . . . Cbxd5 ? 25. Cxf6 Txe3 26. Txe3 gxf6 2 7. Df5 ± Lustyk ,J. S zpak , N . /c orr . 1 9 9 7) 2 S . C gS C xe 3 2 6 . C f7 + Rg8 2 7 . C xh6+ ! +- ; 2 3 . . . D d7 24 . Axf6 gxf6 2S .Tc 1 fxe4 26 .Axe4 Txe4 2 7 . Cxe4 CxdS 2 8 . C xf6+] 2 4 . Dxf4 c3 2 S .Txc3 Txc3 26 .Axc3 CbxdS 2 7 . Axf6 C xf4 2 8 . Axd8 Txd8 29 . Chf3 -*
23 . C xc4 C fxd5 23 . . . CbxdS? 24 . Cxf6 Txe3
(24 . . . Cxe3 25.Dh5+-) 2S .Txe3 gxf6 2 6 . Dg4± ; 23 . . . A xdS ? 24 . Cxf6 Txe3 2S . Txe3 +-
24 .Tg3 ? ! 2 4 . C xd6 C xe 3 2 S . C f7+
Rg8 2 6 . C xd8 C xd 1 2 7 . Txe 8 Ac6-+; 24. DhS ! c3 (24 . . . Te5 2 5. Axe5 dxe5 26. Cg4 De8 2 7.Dxe8 Txe8 28. Tg3 -*; 24 . . . Cxe3 ? 25. Dxh 6 + + - Vaa s s en , J . -B e s s e l ing/ c or .r 1 9 9 1) 2S .Axc3 (2 5. Txc3 Te5oo) 2S . . . Cxc3 2 6 . Cxc3 Txe 3 2 7 . Txe 3 DgS 2 8 . D xgS hxgS 2 9 . Cf3 -* ; 24 .Tf3 24 . . . Tc6
24 . . . C d3 2 S . A xd3 c xd3 2 6 . DhS Te6 27 . Tg6 Txg6 2 8 . Dxg6 Dh4 2 9 . Cf3± 2 5 . C g4 ? !
o2S . Cf3 ! C d3 (25 . . . Cf4? ! 26. Cd4 Te5 2 7. Dg4 -*: 25 . . . De 7 2 6. Cfg5 ! ±) 2 6 . C e gS ! Txe 1 +
Juan Sebastián Margado
27 . Cxe 1 hxg5 28 . Cxd3 Rg8 29 . Aa2 Tc8 3 0 . Dg4 Dc7 3 1 . h4-+ 25 . . . D e8 '!
2 5 . . . C d3 ! 2 6 . A xd3 (2 6. Cxh 6 ? Txh 6 2 7. Cg5 D d 7+) 26 . . . cxd3 2 7 . Txd3 [2 7. Cxh 6? Txh6 28. Cg5 Dd7 29. Te6? Incre íb l emente , aquí Gutman y Treppner indican "ganando l as blancas" . Luego de 29 . . . C.f6! las n egras t i enen c l ara ventaj a . ,· 2 7. Rh2 De 7ooj 27 . . . D e 7 [27 . . . D e 8 2 8 . f3 Cf4 (28 . . . Cb 6? 29.
Tb3 d5 3 0. Dd4 Cxa4 3 1 . Txb 7
dxe 4 3 2 . Txg 7 Ac5 3 3. Tg5 +
Axd4+ 34.Axd4+ Rh 7 3 5. Tg7+ Rh8 36.Cf6 Rxg7 3 7. Cxe8+ Rf7
3 8 . Cc 7 Td6 3 9 . A e 5 Tad8
4 0 . A xd6 Txd6 4 l . Txe4 ±) 2 9 . Tde3 Dg6 3 0 . Ac 1 ( 3 0 . Tb 3 A c 6 3 1 . Ac l (3 l . D c l ! ?) 3 1 . . . Cxg2 (3 l .. . d5 ! ?) 3 2 . Rxg2 d5 3 3 . C cf2 A xa4 3 4 . Txe6 D x e 6 3 5 . A f4 A xb 3 3 6 . D xb 3 aS -+ ) 3 0 . . . Tae8 3 1 . C cf2 h 5 3 2 . Txe6 Cxe6 y l as n egras t i enen una pos ic i ón dinámica , con parej a de A en p osic ión abi erta . Por ell o , cuentan con mej ores chances . ] 2 8 .f3 Cf4 29 .Tde3 h5 3 0 . C gf2 d5 -+ ; o b i e n 2 5 . . . D d7 ! ? S chus s l cr 2 6 . C c f6 Txf6 2 7 . A xf6 C xf6 2 8 . C xf6 gxf6 2 9 . D d4+ 2 6 . C xh6 !
5 8
26 . . . c3
2 6 . . . Txh 6 2 7 . C x d6 ! ± Dh5 28 .Tg5 Dxd 1 29 . Cf7+ Rg8 3 0 . C xh 6 + Rh 8 3 1 . Txd l Te 8 3 2 . A g 6 Te 6 3 3 . C f7 + Rg8 3 4 . C e 5 Te 7 3 5 . C xc4 C f4 3 6 . Ab l C e 6 3 7 . Tg4 C d 5 3 8 . A a2 C b 4 3 9 . Ab 3 A d5 4 0 . A c 3 Tb 7 4 1 . A xb 4 Txb4 4 2 . Txd5 Txb 3 4 3 . f4 C c 7 44.Td8 Ce6 45 .Tc8 Cd4 46 .Ce5 Tb 7 4 7 . C g 6 1 - 0 Wey an d , F Neubauer, O/F corr 1 9 9 1 27 . Cf5 cxb 2 28 .Dg4 !+ N
Con idea de Cxg7
(Ver diagram a
e n l a página siguiente .)
28 . . . A c8 28 . . . Tc 8 2 9 . Rh2 Cc2 3 0 .
Dh4+ Th 6 3 1 . C xh 6 gxh 6 3 2 . A xc 2 +- ; 2 8 . . . D d 7 2 9 . D h 5 + Rg8 30 .Tg6 Txe4 3 1 .Txe4 Dc7
Casillas Reales
3 2 . Th6+-2 9 . D h 4 +
2 9 . Cxg7 ? Txe4 ! 2 9 . . . T h 6
29 . . . Rg8 3 0 . C g5 ? (3 0 . Ch 6 + Rh 8 3 1 . C.f7 + Rg8 3 2 . Dh 8 + Rxf7 3 3 . Cxd6 + ! + -) 3 0 . . . Txe l + 3 l . Rh 2 A xf5 3 2 . Axf5 Th l + ! 3 3 . Rxh l b i D+ 3 4 . Axb 1 D e 1 +-+ 3 0 . C x h 6 gxh6 3 1 .Rh2 !
3 l . C f6 D xe l + 3 2 . Rh 2 Ag7? (32 . . . De5!- +) 3 3 . D xh6+ A xh 6 3 4 . Tg8 # ; 3 l . C x d 6 ? Dxe 1 + 3 2 . Rh2 D e 6
3 1 . . . D e 5
3 l . . . Ta 7 3 2 . C f6 D f7 3 3 . Te8 Cxf6 3 4 . D xh6++-3 2 . Cg5 D f6 3 3 .Te8 !
C on i dea de 3 4 .C2J f7 +-33 . . . A f5 3 4 . D x h 6+ '? !
34 .Cf7+ ! Dxf7 3 5 .Dxh6+ Ah7 3 6 . Txa8 +-3 4 . . . D x h 6 3 5 . C f7 + R h 7 3 6 .
Axf5+ D g6 3 7 . A xg6+
37 .Txg6 ! Ce7 38 .Txe7 !+-3 7 . . . Rg7 3 8 .Txa8 A e7 3 9.Tb8
a5 4 0 . A e4+ Rxf7 4 1 .Axd5+
1 - 0
Mijail Tal, el Pirata Carica tura de Jovan Prokoplj evic
5 9
Bobby Fischer, rival y amigo: l. Olimpíada de Lcipzig, 1 960; 2.De pie, observando la partida de Fischer Campeonato del Mundo; 3.Bobby visita a Misha en el Hospital (Curazao 1 962 ); 4. La Habana 1 966: 5 . La Habana 1 966, analizando ante la mirada de Lev PolugaicvsJd; 6 . Candidatura l 95 9 :Fischer, Tal y Petrosian
Capítulo 4
Tema real de coronación
Las casillas reales se caracterizan s ie1npre por ser dinámicas : dependen del lugar donde están los reyes . Por eso , dentro de los temas a tratar dentro de la Teoría de las Casillas Reales, es sumamente in1portante el de la residencia de los monarcas . S in embargo, en el transcurso de la investigaci ón se van encontrando nuevos conceptos , nuevas i deas , nuevos desarrol los .
Durante una reunión de mnigos realizada el 1 1 de enero de 1 966 en el Sal ón Caissa de Lavalle y Maipú en Buenos Aires , con la pre s encia de Wavrenchuk, el c ordob é s D 01nínguez y vari o s aficionados , surgieron novedosas ideas que aportaron importantes conceptos a l a Teoría de las Casi l las Reales . Aparec ían grandes dudas cuando se analizaba la partida Tal vs Petrosian, Cmnpeonato S ovi étic o 1 9 5 7 , y s obrevenían las di scusi ones , ya que era fáci l advertir que Tal no intentaba colocar sus piezas sobre las casil las reales de Petro sian . ¿Estaba Tal contradiciendo sus propios principios? ¿Puede una casil la de coronación ser ocasionalmente considerada como una casilla real , aún siendo estática? En este capítulo tratamos de dar respuesta a estas preguntas .
Tal,M .-Petrosian, T. [ C 1 8 ]
Campeonato de la U.R. S . S . Moscú, 1 9 5 7 l . e4 e6 2 .d4 d S 3 . C c3 Ab4 4 .e5
C e7 5 . a3 Axc3+ 6 . b xc3 eS 7 . Dg4 CfS 8.Ad3 hS 9.D h3 cxd4
1 0 . C f3 1 0 . A xf5 ! ? e xf5 l l . D g3
g6 1 2 . cxd4 Thomas . 1 0 . . . C c6
1 O . . . D c 7 1 1 . Tb 1 C c 6 (l l . . . dxc3 12 .g4 Ce 7oo Khalif-
6 1
man) 1 2 .g4 Cfe7 1 3 . cxd4 Cxd4 1 4 . Cxd4 D c 3 + 1 5 . A d2 D xd4 1 6 . f4 Cg6 1 7 . c3 ! Dc5 1 8 . gxh5t Kons t ant i n o p o l sky- I v a s h i n / U. R . S . S . 1 9 5 2 ; 1 0 . . . dxc3 1 1 . g4 Ce7 1 2 . gxh5t S orokin-Gudin1 U.R . S . S . , 1 9 60 . l l .g4 Cfe7 1 2 .gxh5
1 2 . c xd4 1 2 . . . D c7
1 2 . . . dxc 3 ? ! l 3 . Dg4_, 1 3 . Af4
Juan Sebastián Morgado
Si 1 3 . cxd4? Cxd4+ C on 1 3 . A f4 las b lancas
han compl eta do su desarro l l o , Y las negras están leve1nente retra s a da s , p e ro p u e den j u gar Ad7 Y 0 - 0 - 0 rápidamente . Pero veamos el « de s arrol lo» de las blancas : su dama está radiada en h3 , Y baj o l os rayos X del Ac8 · '
su estructura de peones es real-ment e h orribl e , ya que p o s e e dos peones doblados «h» y «e» , u?, o avanzado en e5 baj 0 preSlon de las p i ezas negras , uno aislado en a3 Y uno retrasado en f2 . ¿Cuál es el secreto de seinej ante «violación a las reglas clás i c a s ? » . D eb em o s ent onc e s buscarle una explicación a este enig1na, Y en lo posible dentro de nuestra hipótes i s de trabaj o de las casi l las reale s . Esta primera aproximación parece ir en s enti do c ontrari o , ya que las
6 2
piezas blancas no se encuentran pres i onando cas i l las real es ni '
tampo c o t i enen p o s ib i l i dade s p otenciale s de hacerlo , y además el rey negro está suficientemente protegi do. Sigamos con la partida : 1 3 . . . C g6
1 3 . . . dxc3 ? ! 1 4 .Tg l � ; inte re sante era 1 3 . . . A d7 ! ? Por ej empl o : 1 4 . Tg l 0 - 0 - 0 ! ? (1 4 . . .
g6 1 5. h 6�) 1 5 . Txg7 Cxe5 ! ?oo 1 4 . Dg4
1 4 . A xg6 fxg6 1 5 . cxd4 Ad7� (1 5 . . . Txh5? ! 1 6.Dg4 Ce 7 1 7. Tc 1 Ad7 1 8. 0-0 � Nevio,J.Alvarenga,R . /VIII -CB I -SF -05 1 9 94) 1 4 . . . C xf4
Aunque era obj etivamente mej or, no era para el estilo de Petrosian la variante 1 4 . . . Cgxe5 ya qu e era muy táct i c a . Por ej emp l o : 1 5 . C xe 5 C x e 5 1 6 . D xg7 C f3 + (1 6 . . . Cxd3 + ? 1 7. cxd3 Dxc3 + 1 8. Re2 Dc2 + 1 9. Ad2 Txh5 20. Tac1 Da4 21 . Tc 7±; 1 6 . . . Txh 5 ? 1 7. R e 2 dxc 3 1 8. Thg 1 ! ± Kupp er, J . -Durao , J. / Muni ch 1 9 5 8) 1 7 . Rfl [ 1 7 . Re2 D x f 4 1 8 . D xh 8 + Re 7 1 9 . D g 7 A d7 ( 1 9 . . . e 5 2 0 . D g3 D xg3 2 1 . hxg3 Ag4 (2 1 . . . e4 22 . cxd4 Cxd4 + 2 3 . R e 3 Cf5 + 24 . Rf4 exd3 25 . cxd3 oo G iuri c za , G . -
Casillas Reales
Al varenga , R . /V I I - C B I -Final 1 9 9 2) 2 2 . Tab 1 dxc3 2 3 . Txb 7+ Rf6 24 . Rd 1 e4 2 5 . A e2 d4 2 6 . R e 1 + Pa lm o , P. -Kuutt i , L . / l l .TSM/ 1 Kirj e shakki 1 9 6 7 ) 2 0 . D g3 +-] 1 7 . . . D xf4 1 8 . D xh 8 + Re7 Khalifman diagnostica aquí «con contraj uego» , y luego de 1 9 . D g 7 e 5 ! ? l a p o s i c i ón e s complej a . 1 5 .Dxf4 dxc3
Petrosian considera que el peón «h» es débil y prefiere obtener una ventaj a muy clara en el flanco dama, pero ésto es sólo aparente .
Mej or era 1 5 . . . Txh5 aunque luego de 1 6 . cxd4 las blanC lS «arreglaron» sus peones , y ti enen sus p i ezas p otenc ia lmente reales : La Df4 pre si ona fl, el Cf3 puede saltar a g5 , el Ad3 mira g6, y las torres pueden actuar en las c o lumnas «b» o « g» , s e gún s e ub i qu e e l rey negro . A su vez , e l rey blanco t endrí a una c a s i l l a b astant e segura en e2 . Una continuación p o s ib l e p o drí a s e r 1 6 . . . C e 7 [ 1 6 . . . Ad7? 1 7 . Dg4� ; 1 6 . . . D e 7 ?
1 7 .Tg l D f8 1 8 . Cg5 � Anál i s i s de Ganzo ( 1 8. Re2 Ad7 1 9. Dg4 g6 20. Axg6 fxg6 2 I .Dxg6+ D.f7 22. Dg8+ Df8!=) ] 1 7 . Tb l Cf5 1 8 . Tg l Ad7 1 9 .D d2 g6i
6 3
1 6 . D g5
¿ S ign i fi ca e s to que Tal vu e lve a j ugar s obre cas i l l a s reales? No s irve 1 6 .Tg 1 ? f6 ! f=! 1 6 . . . D e 7
E l peón «g» no podía defenderse , p orque si 1 6 . . . Rf8 el rey negro fij aría residencia en una zona donde al tnenos cuatro pi ezas blancas serían reale s , y crearían amenazas inso lubl e s . Por ej empl o : 1 7 . Tg l Tg8 1 8 . h6+- ; S i 1 6 . . . Tg8 ? 1 7 .h6± 1 7 .Dxg7 Df8
Petros ian to davía c onsidera que el peón «h» es débil . P o dr í a habe rs e j ugado 1 7 . . . Txh5 1 8 . Tg l D f8 1 9 . D f6 Th 6
2 0 . Df4 Ad7 2 1 . Cg5 0 -0 -0 22 . Cxf7 Cxe5 2 3 . D xe5 D xf7 24 . D xc 3 + R b 8 H ugent ob l e r , P. Dambrauskas , V. /c orr. 1 9 9 9 , y ah ora luego de 2 5 . D e 5 + Ra8
Juan Se bastián Morgado
2 6 . Tb l b 6 2 7 . Tg7 las b lancas tienen piezas activas que compensan la debil idad de sus peo� nes . 1 8 . Dg5 D h6
S i 1 8 . . . A d 7 las b l ancas pueden jugar 1 9 .Tg l con posición similar a la de la partida. 1 9 .Tg l !
¡ Aquí surge la luz ! Tal admite que no puede agredir las c a s i l las r eal e s ya qu e el rey negro puede escapar a l flanco · dama, y entonces ¡ to m a como
real la casilla h8 ! A esta forma indirecta de ap l i c ac i ón de l a teoría de las casi l las real e s l a llamaremos Tema Real d e C o
ronación. En otras palabras, una
cas i l l a de c o r onaci ó n p u e d e
ocasionalmente ser considerada como una casil la real . Y, a
diferencia de las casillas reales
6 4
p r op iam ente dichas, s e trata de una casilla estática. Ahora p odemos ver c ómo adquieren significado las jugadas blancas . 1 9 . . . D xg5
No se puede 1 9 . . . Dxh5 ? 20 .Df6 ! Dh6 (20 . . . Th6 21 . Tg8+ R d 7 22 . Ag6! + - ; 2 0 . . . Ce 7 2 1 . Tg 7+ -) 2 l . Tg8++-2 0 . T xg5
Ahora se ve claro el peligro del peón «h» libre . 2 0 . . . A d7 '!
Un descuido que permite ganar la casil la subreal h6 por medi o s tácti co s . Era c orrecta 2 0 . . . Re7 2 l .Tb l ;J; y las chances de las blancas son un poco mej ores debido al peón h l ibre . 2 1 . R e 2 ?
Pierden l a oportunidad de aprovechar la falla de las negras . Muy fuerte era 2 l .h6 ! aprovechando que ahora no se puede c apturar el p e ón «h . » Por ej emp l o : 2 1 . . . 0 - 0 - 0 (2 l . . . Re 7 22. h 7±; 21 . . . Txh6? ? 22. Tg8+ + -) 22.h7± 2 1 . . . Re7
El inconveniente de 2 1 . . . 0-0-0 es que alej a el rey de la casilla h8, y permite 22 .Re3 con gran don1ini o de las ca s i l l a s negras . Por ej emplo : 2 2 . . . Th6 2 3 . Tag l Tdh 8 24 . Tg8+ Txg8
Casillas Reales
25 .Txg8+ Rc 7 2 6 .Tg5 -t 2 2 . R e 3 Taf8 2 3 . Tag l A e 8 24 . C d4
24 . . . fS ? !
Petrosian intenta defender la casilla de coronación cortando la acc ión del A blanco . La técnica correcta, que Tal aplica, consiste en dominar las casillas sub-reales (en este caso h6, h7, g6, g7, g8) y por supuesto la real h8 . Para lograr ese obj etivo , hay que cambiar las pi ezas defensoras .
La defensa real c orrecta era 24 . . . f6 ! buscando a la vez atacar el peón h5 y la cuña central e5 . Por ej emplo : 2 5 .Tg7+ ! ? Af7 (2 5 . . . Tf7? 2 6. exf6+ Rxf6 2 7. Tlg6+ Re 7 28. Txe6+ ±) 26 . C xc 6 + bxc 6 2 7 . Ag6 fxe 5 2 8 . Tg3 Thg8 [28 . . . Re8 29 .Tg5 Re7
6 5
(29 . . . e 4 ? 3 0. Rd4 + ; 2 9 . . . Axg6 30. hxg6 Tf6oo (30 . . . Txh2 ? 3 1 . Txa 7 Thxf2 3 2 . Txe 5 ±) ; 3 0 .
Txf7+ Txf7 3 l . A xf7 Rxf7 3 2 . Txe5oo] 29 .Th7 Th8 3 0 .Tg7= 2 5 . C xc6+ Axc6 ?
Un error defin i t iv o , ya que ahora las blancas tendrán el control absoluto del centro y el rey blanco dominará el escenar io . Era n e c e s ar i a 2 5 . . . b xc 6 26 .Ae2 c 5 2 7 . Tb l d4+ 2 8 . Rf4 Ac6 2 9 .h4t 26 .Rd4 !
las negras evitaron que el Ad3 se instalara en g6 , pero al costo de ceder el dominio de las casillas negras, y de quedar con su alfil malo. El final es claramente ganador para las blancas . 2 6 . . . f4
2 6 . . . A e 8 2 7 . A e2 Tf7 28 . T l g3 + 27 .Tg7+ Tfi 28 .Tg8 !
Aprovecha l o s recurs o s tácti c o s para c amb iar p i ezas defensoras de la casilla h8 . 28 . . . Txg8
No se p o dí a 2 8 . . . Txh 5 ? 2 9 . Ag6+-2 9 .Txg8 T f8 3 0 . T xf8 Rxf8
3 1 .h6 b6 32 .Rxc3 Rg8 33 .Ag6 aS 3 4 . R d 4 R f8 3 5 . c 3 Rg8 36 .h7+ Rg7 37 .Afi !
Una sutil eza para mej orar
Juan Sebastián Morgado
la posici ón del alfil . 37 . . . Ad7
S i 37 . . . Rxh7 3 8 . Axe6+-3 8 . Ag8 A c8 3 9. R d3 A d7 40 . Re2 Rh8 4 1 .Rf3 b5 42 .Rxf4 d4
43 . cxd4 b4 44 .axb4 a4 4 5 . d 5
a 3
O b i en 4 5 . . . exd5 4 6 . Axd5 +-4 6 . d xe6 a2 4 7 . e x d 7 a l D 4 8 . d8D Del + 49.Rf5 D b l + 50.Re6
Si 5 0 . Rf6 Dg6+ ! 50 . . . Dg6+ 51 .Rd7 1 -0
<.� - ) ' . . / Tal ,M.-Larsen,B. [B77 ]
Zurich , 1 9 5 9 l . e4 e S 2 . C f3 C c6 3 . d4 cxd4 4 . C x d4 g6 5 . C c3 A g7 6 . A e3
Cf6 7 .Ac4 0-0 8.Ab3 d6
Si 8 . . . Ca5 9 . e 5 C e 8 1 0 . Axf7++- Fischer,R . -Reshevsky, S ./Nueva York 1 9 5 8 9 . f3 e X d 4 1 o . A X d 4 A e 6 1 1 .
D d2 D aS 1 2 .0-0-0 b S 1 2 . . . Axb3 1 3 . c xb3 ! �
1 3 .Rb l b4 1 3 . . . Tfc8 1 4 . g4 Axb3 1 5 .
cxb3 b4 1 6 . Ce2 Tc6 1 7 . a4 Tac8 1 8 . Tc l C d 7 1 9 . Txc 6 Txc 6 2 0 . Axg7 Rxg7 2 1. Cd4 Tc5 22 .h4± Estrin, Y. -Lisitsin, G . /Len ingrado 1 9 5 5 . 1 4 . C dS
6 6
1 4 . C e2 ? ! Axb 3 1 5 . cxb 3 Tfd8+ 14 . . . AxdS
14 . . . Cxd5 1 5 .Axg7 Rxg7 1 6 . exd5 Ad7 1 7 . Tdc l � Suetin - K o rchn o i , C amp enato de l a U. R. S . S . 1 9 5 3 , 1 S . exd5
Ftacnik ha anal izado en pro fundi dad la alternativa 1 5 . Axd5 Cxd5 (una fam osa par tida siguió 15 . . . Tac8 1 6.Ab3 y se definió a favor de las blan cas luego de muchas complicaciones, Fischer, R . -Larsen , B. Interzonal Portoroz 1958) 1 6 . Axg7 (1 6.exd5 Dxd5 1 7. Dxb4oo) 1 6 . . . C c 3 + 1 7 . b xc 3 ( l 7. A xc 3 bxc 3 1 8.Dx c 3 Dxc 3 1 9 . bx c 3 T.fc8=) 1 7 . . . Tab8 ! 1 8 . cxb4 Dxb4+ 1 9 .Dxb4 Txb4+ 20 .Ab2 Tfb8= lS . . . D b S 1 6 .Thel aS
Lars en ha l o grado un fuetie ataque, y dispone de todas sus piezas reales o potencialmente reales . Basa su estrategia en el avance de las minorías , y ah ora amenaza a5 -a4 . Obs e rvemos ahora c ómo Tal n1ani obra para obtener un peón l ibre en el flanco dama, donde t i e n e mayor ía , a l a v e z que apli ca el concepto de Defensa
R eal , ob ligando al cambio de
las pi ezas m ás amenazadoras .
1 7 . D c 2 !
Casillas Reales
D eb ido a la doble amenaza, las negras deben aceptar el cambio de damas. 1 7 . . . D xe2 1 8 .Txe2 a4 1 9 .Ac4
Tfc8 20 .Ab5 Ta5
En c a s o de 2 0 . . . C xd5 Euw e indicó una bonita variante : 2 l . A xg7 Tc 5 ! 2 2 . c4 b xc 3 2 3 . Txd5 Txd5 2 4 . A c 6 Td2 (24 . . . c2+ 25 .Rc l) 25 .Axa8 Txe2 2 6 . A xc 3 Txg2 2 7 . A c 6 Txh 2 2 8 . Axa4 h5 2 9 . b4-+ 2 1 . A xf6 ! '?
Una concepción original . Busca pasar un peón y para eso «sacrifica» la parej a de alfiles y se acepta una posición con alfil de d i s t in to c o l o r. Si 2 1 . A c 6 Cxd5 22 .Axg7 Txc6+ 2 1 . . . A x f6 22 .Ac6 a3
Avan z an el p e ón « a » antes que las b lancas realicen la maniobra Te3 y a2-a3 , fijándolo en cas i l l a b lanca , donde e s
6 7
vulnerabl e . Si 2 2 . . . h5 23 .Te4 Tb8 24.
f4 Rf8 2 5 . Td3 Tb 6 2 6 . Tc4 a3 2 7 . Tb 3 Axb2 2 8 . Tbxb4 Txb4 2 9 . Txb4 e 5 + N i eph au s , W. Lehmann , H . /Nurembcrg 1 9 5 9 ; y s i 2 2 . . . Tb8 2 3 . g4 g5 24 . Te4 Ae5 2 5 .h4 h6 2 6 . Th 1 Rg7 2 7 . hxg5 hxg5 28 .Th5 f6= Vamosi , L . -Kulcsar, M . /Budap est 1 9 9 8 . 23 .b3 Rf8
Luego de 23 . . . Tc7 24 . c4 bxc3 2 5 . b4 Ta6 las negras l ograron b loquear el avance del p e ón «b» : 2 6 . b 5 Tb 6 2 7 . Rc 2 Rf8 2 8 . Te 4 Ta 7 2 9 . Tb 1 Ta 5 3 0 . f4 h 5 3 1 . g 3 Rg7 3 2 . h 3 t Pavlovic ,M .-Almeida Sacnz,A./ Andorra 1 9 99 .
Ahora parece que las negras han l ogrado esteri l izar la 1nayoría blanca , pero . . . 2 4 . c4 ! ?
Un p l an muy creat iv o ,
Juan Sebastián Morgado
que ti enta a las negras a ganar un peón, que quedará pasado y ap oyado en la s e xta l ínea . A ca 1nb i o , l a s b lancas crean e l peén «b» pasado, que aparentement� no es peligroso .
Obsérvese que las casillas sub-rea� e s b4-b 5 -b 6-b 7 representan e l punto crítico . Si las negras no advierten el pel igro , el peón ((b)) puede volverse una amenaza real . En tanto , las negras nunca lograrán dominar la cas i l la sub-real c2 , bl oqueada por el rey blanco. 2 4 . . . b xc3
Lars cn no ve p e l i gro y c ap tura e l p e ó n . M ej or era 24 . . . A c 3 2 5 . h4 e 5 = (25 . . . h 5 ? 2 6.g4 � ) ; o b i en directamente 24 . . . e S ! c on i dea de Ad8-b6 , c on igualdad aproximada . 2 5 . Rc2 Ag5 2 6 .g3 f5 27 .Rd3 Ad8= G arc í a , G . -Juliao, C . /Winnipeg, 1 9 74 . 2 5 . R c 2
E l peón c 3 negro quedará c ompl etamente bloqueado por el Rc2 , en tanto s e ha liberado el peón 'b ' 2 5 . . . Ta7 ? !
Primer s igno de descuido. Con esta jugada la toiTe dej a de proteger las cas i l las subreal es b 5 , b6 , b7 . Era mej or 25 . . . Tb8 26 .Te4 Ta6 27 .b4 Tab6 28 .Rb3t
6 8
2 6 . b 4 ! e6 ! '! Muy arri esgada . Khalif
man indica dos alternativas : a) el intento 26 . . . Tb8? ! con idea de frenar el peón desde b6 , no es seguro qu e tenga éxito , ya que luego de 2 7 . Te4 g5 28 .b5 Ae5 2 9 . g3 h5 3 0 . Tb 1 Tb6 3 l .Tbb4� ; b ) l o mej or e s 2 6 . . . e 5 devolviendo el peón , con idea de Ad8-b6, c ontrolando el peón b blanco. 27 . b 5 cxd 5 '!
El error defini tivo. Llega tarde 27 . . . Ad8? debido a 28 . dxe6±; s i 27 . . . R e 7 2 8 . dxe 6 fxe 6 2 9 . Tde 1 e 5 3 0 . R xc 3 R e 6 3 1 . Rb3 � ; la mej or defensa era 27 . . . Te7 ! y si 28 . dxe6 Txe6 29 .Txe6 fxc 6 3 0 . Tx d 6 T d 8 3 1 . Txd8+ A x d 8 3 2 . R xc 3 Ac 7 y e l peón de ventaj a n o parec e suficiente para ganar. 2 8 . b 6 !
Pos ib l ctnente , l a j ugada
Casillas Reales
intermedia que s e l e escap ó a Larsen . 2 8 . . . Te7
2 8 . . . Ta 6 ? 2 9 . Ab 7 ! +- ; 2 8 . . . Txc6 29 .bxa7 Ta6 3 0 .Txd5 Txa7 3 1 . Txd6+-2 9.Txe7 Rxe7
2 9 . . . A x e 7 3 0 . b 7 Tb 8 3 1 . Txd5 +-30 .Te l + Ae5
Única. 3 0 . . . R f8 3 l . b7 Tb8 32 .Te8++-; 3 0 . . . Rd8?? 3 1 .Te8# 3 1 . b 7 Tb8 32 . f4
P e s e a c ontar c on una pieza de ventaj a y un peón «b» en s éptima, las blancas todavía deben jugar con cuidado debido a la amenazante masa de peones centrale s . 32 . . . Rc6 33 .fxe5 dxe5 34.Tb l !
3 4 . Rxc 3 ? R d 6 ! 3 5 . A a4 Txb 7 -> 34 . . . Rd6
3 4 . . . d4 3 5 .Tb6 Rd6 traspone a la parti da . 35 .Tb6 d4
3 5 . . . R c 7 3 6 . Ta 6 d4 3 7 .Ae4 f5 3 8 .Ad5 d3+ 3 9 .Rxc3 d2 4 0 . Rxd2 T d 8 4 1 . Ta5 R b 6 42 . b8D+ Txb8 43 . Txa3 +-36 .Ta6 f5 37 .Ta8 R c7 38 .Ad 5 e 4 3 9 . T x a3 c 3 4 0 . R d 3 g 5 4 1 . Rxd4
C a en t o d o s l o s p e on e s negros . 4 1 . . . e2 4 2 .Txc3+ Rd6 43 .Te3 1 - 0
6 9
C ap ablanca,J. -Spielm ann,R . [D38 ] Nueva York, 1 92 7 l . d 4 d 5 2 . C f3 e 6 3 . c4 C d7 4 . C c3 Cgf6 5 .Ag5 Ab4 6 . cxd5 exd5 7 . D a4 Axc3+ 8 . b xc3 0-0
9. e3 c5 1 0 . Ad3 c4 l l .Ac2 l l .Ab 1 Db6 1 2 . 0 -0 C e4
1 3 . Dc2 Dg6 1 4 .Af4t P�jasunov, A . -Cheb o t arev, O . /Vo l g o grado 1 9 9 6 . l l . . . D e7 1 2 .0-0 a6 1 3 .Tfe l D e6
1 4 . C d 2 b5 1 5 .Da5 C e4 '? ! S op ortaba mej or la pre
s i ón de l a s b l ancas 1 5 . . . A b 7 1 6 .a4 Ac6t 1 6 . Cxe4 dxc4 1 7 . a4 Dd5 '!
Las n e gras prep aran l a j u gada d e c ons o l i daci ón Ab 7 , c o n b u e n a s p e rsp e c t i va s de contrajuego . Sin embargo, ahora las blan cas di spon en de un senci l lo tema real de coronación que l e s otorga ventaj a decis iva pronta1nentc . Había que resig-
Juan Sebastián Morgado
nars e a 1 7 . . . Tb 8 1 8 . Tcb 1 Tb 6 1 5 .Tfxdl A xc5
1 9 . A f4 ---t (1 9 . axb 5 axb5 2 0. Txb 5 ? Ta 6+; 1 9. h 3 ! ? Ab 7 20. Af4 ---t) 1 8 . ax b 5 ! D xg5 1 9 . A xe4 T b 8
2 0 . b x a6
Luego de esta breve secuen c i a , s e a dvi ert e qu e l a s b l ancas dominan l a s c a s i l l as reales de coronación a7 y a8 . 20 . . . T b 5
2 0 . . . D xa5 2 l . Txa5 Tb 3 22 . a7 C b 6 23 . Tc 1 Ad7 24 .a8D C xa8 2 5 . A xa8+-2 1 . D c 7 C b 6 2 2 . a7 A h 3 2 3 . Te b l T x b l + 2 4 . T x b l f5
25 .Af3 f4 26 . exf4 1 -0
•> . '
'
Pill s bury,H.- M arco,G. [D37 ]
Hastings , 1 8 9 5 l . d 4 d 5 2 . c 4 e 6 3 . C c3 C f6
4 . C f3 Ae7 5 .Af4 0-0 6.Tc l c6
7 . e3 b6 8 .Ad3 A b7 9.0-0 C b d7
1 0 . e4 ! '?
Una alt ernat iva interesante en este momento crítico de la apertura , donde hay muchas otras alternativas : 1 O .b3 ; 1 O .h3 ; 1 0 . cxd5 ; 1 0 . a3 ; 1 0 . D d2 1 0 . . . d xe4 l l . C xe 4 C xe 4 1 2 .
Axe4 Cf6 1 3 .A b l c5 1 4 . dxc5
D xd l
1 4 . . . A xc 5 1 5 . D e2;!;
7 0
Y a partir de este momento queda planteada la lucha de flancos , donde las blancas tienen un peón de ventaj a en el flanco al ej ado de l o s reyes . Nac e un te1na real de c oronaci ón n1uy níti do , y la manera de conducirlo es 1nuy didáctica. 1 6 . a3 Tfd8 '? !
Primer mini-error estratégic o . Más lógica era 1 6 . . . a5 procurando que la mayoría de peones blanca no se movil ic e . Luego de 1 7 . Cd4 a4 1 8 . Cb5 se pro duc e o t ro t ip o de lucha , donde la mayoría de peones ha s ido controlada , pero a cambio de ceder el c ontrol de casi l las central es imp ortantes ; s i 1 6 . . . A xf3 1 7 . gxf3 a 5 1 8 . Rfl y l a parej a b lanca d e alfi l e s c ompensa p lenamente el doblaj e de los peones del flanco rey.
Casillas Reales
1 7 .b4 Ae7 1 8 . C d4 C eS '? ! Un nuevo mini-error. Lo
c orre c t o p ara e v i tar qu e l as b l anca s p a s en un p e ón era 1 8 . . . Tac 8 1 9 . C b 5 Txd l + 2 0 . Txd 1 Txc4 2 l . A d 6 R f8 2 2 . Axe7+ Rxe7 2 3 . Cxa7 Aa6 24 . Ad3 Tc 7 2 5 . C c 6 + Txc 6 2 6 . Axa6 Tc 3 2 7 . Ta l C d5 2 8 . Rf l c on igual dad apro ximada , ya que l a dup la de p i e z a s negras torre y cabal lo es muy activa, y no e s posibl e para las blancas pasar un peón . 1 9 . A a2 a5 2 0 . c5 ! axb 4 2 1 . c6
A c8 2 2 . c7
To das las c a s i l l a s sub-· reales han s ido controladas y el peón l legó hasta c7 . Ahora viene la lucha por el control de la casil la real c8 . 2 2 . . . Td7 23 . C c6 Af6 24 . C xb4 Txd l +
7 1
Si 24 . . . Rf8 25 .Txd7 Axd7 26 .Ab l Tc8 2 7 . A e4 eS 28 . Ae3 Txc7 29 .Txc7 Cxc 7 3 0 . Axb6 y el peón «a» l ibre y alej ado representa una ventaj a clara . 2 5.Txdl Ab7
25 . . . g5 ? 2 6 . Td8 gxf4 2 7 . Txe8+ Rg7 28 .Ab 1 ! ± ; 25 . . . e 5 ? 2 6 . Td8+-26 .T d7
C omo e l obj e t i v o e s dominar l a c a s i l l a r ea l c 8 , también p o dí a comenzarse por 2 6 . A c4 ! y si 2 6 . . . Rf8 2 7 . Td7 traspone a la partida (o bien 27 . Aa6 ! Axa6 (2 7 . . . Txa6 28. Cxa6 Axa6 29 . Td8 Re 7 30. c8D Axc8 31. Txc8±) 28 . Cxa6 Tc8 2 9 .Ae3±)
26 . . . Rf8
2 6 . . . g5 2 7 . Ag3 (2 7. A e 3 A e 5 2 8.Axb 6 Tc 8 29 . Td8 Rg 7 3 0 . a 4 Cxc 7 3 l . Tx c 8 Axc 8 32 . Cd3 A d6 33 . a 5 t) 2 7 . . . Rf8 28 .h3 (28.Ac4 Txa3 29. Td8 Tc3 30.A{l e5 3 J . Cd5 Axd5 32. c8D Txc 8 33 . Txc 8 R e 7 34 . Tb 8 -t) 2 8 . . . b 5 { 28 . . . A e 7 2 9 . Ac4 Cf6 3 0 .Td3 ! La retirada exacta de l a torre , defendiendo e l peón a3 y quedando a salvo del ataque del c abal l o n e gro en l a vari ant e c l av e . C omparar c on * * [ 3 0 . Td4? C e 8 3 l .Ab5 Tc8 3 2 . Aa6 (32. Cc 6 * * 32 . . . Cxc 7 33 . Cxe 7 Cxb 5 34 . Cxc 8 Cxd4 7/!.) 3 2 . . .
Juan Sebastián Morgado
Axa6 3 3 . Cxa6 f6 3 4 . Td7 e 5 � * ] 3 0 . . . C e 8 (3 0 . . . Tc 8 3 1 . A b 5 Ce8 traspone a * * *) 3 l .Ab5 Tc8
* * * 3 2 . C c 6 ! (3 2 . A a 6 ? Axa 6 33. Cxa6f6 34. Td7 traspone a *) 3 2 . . . Txc 7 (32 . . . Cxc 7 * * 3 3 . Cxe 7 Cxb 5 3 4 . Cxc 8 + -) 3 3 . Axc7 Cxc7 34 . a4+ (34. Td7 !?) } 29 .Ab 1 Tc8 30 .Axh7 e5 3 l .Ad3 Txc 7 (3 l . . . Cxc 7 32 .Af5 ±) 3 2 . Axb5 Txd7 3 3 . Axd7± y las blan
cas tienen un peón neto de ventaj a.
27 .Ae4 Ae7 27 . . . Txa3 2 8 . Td8+-
2 S . h3 '! ! Mantenía la ventaj a 2 8 .
Ab5 ! Cf6 2 9 . Td 1 Tc 8 3 0 . Ac6 Axc6 3 1 . Cxc6 Cd5 3 2 . Ca7+ 2S . . . TeS
2 8 . . . Cf6? 2 9 . Td 1 +
2 9. A a6 ?
Echa a perder el buen trabaj o realizado hasta aquí . Luego
7 2
de 2 9 .Ab5 ! Cf6 3 0 .Td 1 Ce8 3 1 . Ad7 (3 l . A c 6? Axc 6 32 . Cxc 6 Cxc 7 = ; 3 l . Ag3 ±) 3 1 . . . Txc 7 32 .Axc7 Cxc7 3 3 .Aa4±, ya que l a cal i dad de v entaj a no e stá c ompensada . 29 . . . Axa6 30 .Cxa6 Cf6 3 1 .Td3 Cd5 32 .Ae3 ReS 'lí-'lí
• B ondarevs ky,I . -S myslov, V.
[E 51 ] Campeonato de la U.R. S . S . Moscú, 1 9 5 0 . l . d4 C f6 2 . e4 e6 3 . C e3 A b 4
4 . e3 d 5 5 .a3 Ae7 6 .Cf3
6 . c 5 c6 7 . f4 C e4 8 . C xe4
dxe4 9 . D c 2 f5 1 O . Ac4 Ca6� A l a t o r t s e v, V. - S m y s l o v, V. 1 Campeonato de la U.R. S . S . , 1 950 . 6 . . . 0-0 7.Ad3 b6 8.0-0 eS 9.De2
9 . c xd5 e xd5 1 0 . dxc 5 bxc5 l l . e4 ! dxe4 1 2 . Cxe4 Aa6=
9 . . . C e6 l O .Td l exd4 l l . exd4 A a6 1 2 . b 3 TeS 1 3 .T b l D c7
14 .Cb5 DbS
14 . . . Axb5 1 5 . cxb5± Xc6 1 5 .Ag5 h6 1 6 .Ah4
L1 Ag3 1 6 . . . C h 5 ! 1 7 .Axe7
1 7 .cxd5 Cf4 1 8 . De4 Cxd3
1 9 . dxc6 Axh4 20 .c7 (20.Dxd3=) 2 0 . . . Da8 (2 0 . . . Axf2 + ! ? +) 2 1 . Dxd3 Ae7+
Casillas Reales
1 7 . . . C xe7 1 8 . C e 5 C f6 1 9 . a4 C c6 20 .f4 C b 4 !
2 0 . . . Axb5 2 l . axb5 C xd4 22 . D f2 C f5 2 3 . g4 C d6 24 . g5 Cfe4 (24 . . . hxg5!?) 2 5 . Dg2-t 2 1 . f5 Cxd3 2 2 .Dxd3 exf5 23 . Dxf5 Ab7 24.Tb cl a6 2 5 . C c3 D d6
L1Db4 26 .a5 dxc4
26 . . . bxa5 ? 2 7 . c5 + 27 . bxc4
27 . Cxc4 Dc6 28 .Dh3 b5+ 27 . . . b5 2 8 . c5
Pero no 2 8 . c xb 5 ? axb 5 2 9 . C xb 5 D d5 3 0 . D fl Txc l 3 l . Txc l Aa6+
La lucha se c entrará de aquí en más entre dos obj etivos opuesto s . Las b lancas procurarán dominar las casillas subreales d5 y c6, para avanzar sus p e on e s c entral e s ; l a s n e gras
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tratarán de bloquearlas l o más férreamente posibl e y aprovechar su solitario peón b libre . 28 . . . D d8 2 9.Tal ? !
D efiende el peón «a» , pero es demasiado pasiva . Ahora el peón «b» cobra vida. Mej or era 29 . Ce2 y luego de 29 . . . Ad5 (gana un peón 29 . . . Dxa5? pero al alto costo de dejar de con tro Zar la c asilla sub rea l c 6. En tonces, las blancas podrían a v a nzar 3 0. c 6 A a 8 3 1 . Cg3 confinando al Aa8 y obteniendo ventaja en el centro y el .flanco rey, a l m ó dico pre c io de un p e ón . ) 3 0 . C g3 c on chan c e s aproximadamente iguales . 2 9 . . . b4 30. C e2 ?
Ahora ya e s tarde . E ste error hará que el peón «b» cobre gran importancia. Era necesaria 3 0 . Ca4 y si por ej emplo : 3 0 . . . Te8 (O bien 3 0 . . . Ae4 3l .D.f2oo) 3 l .Df2 con idea de Tab 1 , atacando el peón «b» y evitando que avanc e . En c amb i o , a la aparente 3 1 . Cb6 Tc7 32 .Tac l (o bien 32. Cbc4 Ce4 33 . d5 Axd5 34 . Cxf7 Txf7 3 5 . Dxd5 Dxd5 36. Txd5 Cc3 3 7. Td6 Tf4 -t) 32 . . . Cd5t) S i ahora 3 l . . . Ae4 entonc e s 3 2 . D b 2 y l a s n e gras n o llegan a jugar b4-b3 para coordinar su defensa con el Ae4.
Juan Sebastián Margado
3 0 . . . Ae4 !
Las negras se han asegurado l a casi l la subreal b3 , de modo qu e pue den insta lar la cuña apoyada por e l Ac2 . 3 1 .Dh3 Ac2 32 .Tfl b3
En tan t o las n e gras ya atnenazan b2 ganando la calidad, l os peones «d» y «e» blancos han perdido toda su potencia al quedar huérfanos del apoyo de sus piezas menores y las torres . Las negras se han adueñado completamente de la vital casilla d5 . 33 .Dc3 C d5
Era muy buena tambi én 3 3 . . . Te8 3 4 .D b 2 '?
La Db2 quedará reducida a una función menor, confinada al bloqueo de la casilla subreal de c or onac i ón b 2 , dej ando a
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merc e d d e l as negras e l otro s ector del tablero . Era mej or 3 4 . D f3 qu e o to rga chanc e s prácticas . Por ej emplo, si 3 4 . . . b2 3 5 . Ta e l Tb 8 (3 5 . . . b 1 D ? 3 6. Txb l Axb l 3 7. Txb l �) 3 6 . Cc6 Dg5 3 7 . Cxb8 (3 7. Dxd5 De3 + 38.Rh l b iD 39. Txb l Txb l 40. Txb l Axb l 4 l . Df3 Te8 42. Cgl y las blancas ofrecen resisten cia. Las negras tienen la calidad de ven taja, pero todavía deben con trolar de cerca a los peones libres blancos.) 3 7 . . . Txb 8 3 8 . D xf7+ Rh7 3 9 . Cf4 Cxf4 (39 . . . b iD 40. Ce6 Dg4 41 . Txbl Txbl 42 . Txb l Axb l 4 3 . h 3 ?) 4 0 . D xf4 D xf4 4 l . Txf4 b l D 42 . Txb l Txb l + 43 .Rf2 Ab3 y las negras deben j ugar ahora para c ontrolar las casil las subreal es de coronación d5 y c6 , obj etivo nada fác i l de l ograr. Veamos : 44 .Tf8 Tb2 + 4 5 . Rg3 A d5 4 6 . Td8 y aunque las blancas pierdan su peón g2, los peones «e» y «d» son poderosos , y equilibran la d e s v entaj a materi al . D esde d8 la torre domina la importante casilla subreal d5 . 34 . . . C e3 ! +
Ahora las negras podrán construir una posición de ataque sobre el rey blanco. 3 5 .Tfe l
Casillas Reales
3 5 . Tf3 ? C d l -+ 3 5 . . . Dd5 3 6 . C f3
3 6 . C f4 D e4 3 7 . g3 Tfd 8 3 8 . Rf2 (3 8. Cg4 Cc4- +) 3 8 . . . Dxd4 3 9 . D xd4 Txd4 4 0 . Rxe3 Te4+ 4 1 . Rd2 b2-+ 36 . . . Tfe8 3 7 .Tacl Tc6 3 8 . C c3 Df5 3 9. C d l Tce6 40. Cxe3 Txe3
4 1 .Txe3 Txe3 42 .Rf2
42 . c 6 D xa5 11 D c 3 ; 42 . Te l Txe l + 43 . Cxe l D e4+ 42 . . . D e4 43 .Te l Txe l 44 . C xe l
A d l -+ /145 . . . D e2 ! 46 . D e2 Ae2
47 . c6 b2 48 . c 7 Ag4 -+
4 5 . c6 4 5 . D d2 ? D e2+ 4 6 . D xe2
Axe2 ; 45 .h3 Df4+ 46 .Rg l (46. Cf3 Axf3 4 7.gxf3 Dh2 +) 46 . . . D e 3 + 4 7 . Rfl D e 2+ 4 8 . D xe 2 Axe2+ 4 9 . Rxe2 b2 -+] 45 . . . Dxc6 46 . C d3 D c4 47 .Re3
Ac2 48 . C e l
7 5
4 8 . C c 5 Db4 !1 D e l 4 9 . R e 2 D xa5 5 0 . C xb 3 Db 5 + - + 4 8 . . . A f5 4 9 . R d 2 D b 5 50 . R d l Ag4+ 5 1 .Rcl D c4+ 0-1
Gaprindashvili,N, -
Dzindzichashvili ,R, [B5 1 ]
Wijk Aan Zee, 1 9 79 l . e4 c5 2 . C f3 d6 3 .A b5+ C c6 4 . 0-0 Ad7 5 . c3 C f6 6 .Te l a6 7 .Axc6 Axc6 8 . d4 Axe4 9.Ag5
d5 1 0. C b d2 Ag6
La alternativa teóri ca es 1 0 . . . Axf3 l l . dxc5
Luego de esta jugada las blancas quedan con mayoría de peones en el flanco dama, e inician un «plan de casillas reales de coronación . » l l . . . e 6 1 2 . D a4 + D d7 1 3 . D d4
TeS Peor es 1 3 . . . Ae7 1 4 . Ce5
(1 4. b4 ? ! 0-0 1 5. Cc4 dxc4 1 6. Dxd7 Cxd 7 1 7. Axe 7 Tfe 8 1 8. Ad6 j6 19. Te3 e5 � Pedzich,D.M i ch a l s k i , 0 . / C z e s t o c h o w a 1 9 98) 1 4 . . . Db5 1 5 .b4 Ac2 (s i 1 5 . . . 0- 0 1 6. a4 � ; o b ien 1 5 . . . Da4 1 6. Cb3 �) 1 6 . a4 ! + Kizekin ,A . -Sitnikov,D . /Kolontaevo 1 9 9 7 ; 1 3 . . . C c4 1 4 . C xe4 dxe4
Juan Sebastián Morgado
1 5 . D xd7+ Rxd7 1 6 . C e5+ Re8 1 7 . b 4 A f5 1 8 . g4 f6 1 9 . gxf5 exf5 20 .Af4 g5 2 1 .Ag3 fxe5 Y2-Y2 Pedz i ch , D . -Kuczyn ski , R . / C ctni ewo 1 9 9 1 . 1 4 .b4 Ae7 1 5 . a4 0-0
1 6 . C c4 !
B u e n a man i obra p ara ob l i gar a una s imp l i fi cac i ón favorable . L a mayoría de peones está l ej os del rey negro, y por eso será más difíci l la defensa. También merecía consideración 1 6 . Ce5 De8 1 7 . c4 1 6 . . . dxc4 1 7 . D x d7 C xd7 1 8 .
Axe7 Tfe8 1 9.Ad6 b 6 ! ? Esta es una j ugada tenta
dora , ya que el peón c5 quedará doblado y aislado. Y como queda la c o lumna 'b ' ab i erta, las n e gra s p lan e an c e rrarl a c on A c 2 -A b 3 . E l pro b l c 1na qu e presenta este plan es que el Ab3
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qu edará exclu í do de l a lucha por e l centro, y no ayudará en la detenc i ón del p e ón c 5 . Lo ideal sería que estuviera situado en l a cas i l l a sub-real c 6 . La defensa más segura era quizás 1 9 . . . f6 evitando C e S y procuran do c omp ensar l a may oría blanca del flanco dama con el avance de los peones centrales . 2 0 . C e 5 !
C ambia l o s cabal l o s ya que son las mej ores piezas bloqueadoras . Si 20 .cxb6 Cxb6 2 1 . Ac5 C d5= 20 . . . C xe 5 2 1 .Txe5 b xc5 2 2 . bxc5 !
Ahora la estrategia de las blancas s erá buscar el dominio de la casilla subreal c6 . Obsérvese la importante función que cump l en los alfi l e s : c ontro lan las casillas b 1 y b8, evitando de
Casillas Reales
e s e mo d o que l a s t o rr e s l a s ocupen. ¿Cuál alfil cumple mej or su func i ó n ? E s o s e v erá pronto . Otra manera de desarrollar una estrategia de casilla real de coronación era mediante 2 2 . b 5 p ero l u e g o d e 2 2 . . . f6 2 3 . Txc 5 Txc 5 24 . Axc 5 axb 5 2 5 . axb5 A e4 las negras c ontrolan la casilla sub-real b 7 . 22 . . . A c2 ? !
Ahora e l a lfi l n o p o drá cump l i r l a s d o s fun c i o n e s : c ontrolar b 1 y obturar l a columna «d» desde d3 . En caso de 2 2 . . . f6 entonc e s 2 3 . Te 2 Tc 6 (23 . . . e5 24. a 5 Ted8 25 . Tb2 -*) 24 .Tb2 Ae4 2 5 . f3 Ad5 26 .Tab l con mej or juego, ya que si bien el Ad5 domina la casilla · subreal c 6 , l a c o lumna ' b ' e s tá contro lada en forma abs o luta por la blancas, que disponen de Tb6 ; la j ugada más res istente parece ser 22 . . . a 5 Por ej emplo : 23 .Ta2 f6 24 .Te l e 5 2 5 .Tb2 Ta8 2 6 . Tb 6 A c 2 2 7 . Ta l Rf7 2 8 . Tb7+ Rg6 2 9 . c 6 y las blancas conquistaron la casilla sub-real c6 , pero las negras l o compensan mediante el ataque permanente a l p e ón a4 ; 2 2 . . . A d3 ? ! 23 . f4 f6 24 .Tee l Rf7 2 5 . Ta2 a5 2 6 . Tb 2 -* 23 .Te2 A b 3
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2 3 . . . A d3 24 . Tb 2 a 5 2 5 . f4--+ ya que las blancas s e asegu
ran la ruta del rey vía f2, e3 , controlando además la columna «b.» 2 4 . f4 !
Abriéndole camino al rey blanco (Rf2-e3-d4 ) , en procura de dominar las casillas subreal es c6-c 7 . 24 . . . f6
In ter e sante era 2 4 . . . a 5 planteando una lucha cuerpo a cuerp o , ya que si bi en fij a e l p e ón a4 en cas i l la b lanc a, e l peón a S también e s vulnerable. En tanto el Ab3 está inmovilizado, también lo está la Ta l , en defen sa de su p e ón « a . » Por ej emplo : 25 .Rf2 f6 26 .Re3 Rf7 2 7 . Rd4 h5 procurando que las blancas no puedan efectuar el avanc e g4 y f5 , c on i d e a de dominar la casil la d5 . Si ahora di r ec tamente 2 8 . f5 e xf5 2 9 . Txe8 Rxe8 3 0 . Rd5 Rd7 (30 . . . h4!?) 3 1 .Te l Axa4 3 2 .Te7+ Rd8 3 3 . Txg7 Ac6+ 3 4 . Rxc4 a4 3 5 . Rb4 y pese a que aún las blancas tienen chances por su dupla de piezas más activa, el final que s obreviene es muy largo. 25 .Rf2 Rf7 26.Re3 eS '?
Un error muy instructivo . Parec e la defensa correcta, ya que intenta llegar con el rey a
Juan Sebastián Morgado
controlar la casi lla c6 . Sin embargo , luego de 2 6 . . . h5 27 .Rd4 a5 traspone a la l ínea anterior. 2 7 . f5 !
Imp i den e l p l an n e gro citado , y se aseguran la l l egada de l rey a d5 , c on tro lan d o la casil la sub-real c6 . 27 . . . g6 28 .Re4 !
Aprovechando la pasividad del A b 3 . La Te2 cumple efi c i entement e l a func i ón de c ontr o l ar que u n a p i e z a de menor valor, e l Ab3 , vuelva al centro . Claro que el plan de las blancas implica un sacrificio de ' p e on . 2 8 . . . gxf5+ 29 .Rd5 ! !
¡Una concepción brillante ! Gaprindashvil i prefirió dominar la casi l la sub-real vital c6, a cambio de un peón , calculando que el peón c7 será n1ás
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fuerte que l o s peones centrales negros , que pueden ser detenidos con el alfil . 2 9 . . . f4 3 0 . c6 Tg8 3 1 . c7
Ahora hay que dominar la casi l la real c8 . 3 1 . . . h5 3 2 . Rc6 Re6 33 .Ac5 !
Necesaria para defenderse del avance de los peones negro s . 3 3 . . . h 4 34 .Rb 7
Triunfo d e l a e strategia blanca. D ominan la casilla real de coronación b8 , controlan los p e ones negros c on e l Ac 5 , y sólo necesitan cambiar una torre para obtener ventaja decisiva. El resto es sencillo . 34 . . . h3 35 .gxh3 f3 36 .Td2 e4
3 7 . Te l f5 3 8 . T d 6 + R e S 3 9 .
Txa6 Ac2
Si 39 . . . f4 40 .Ad4++-40.Ad4+ Rd5 4 1 .Tf6 1 -0
Sumario
Prólogo /5
por el GM (Tete-aj edrez) Roberto Gabriei Aivarez
Palabras previas /5
por el GM (Tete-aj edrez) Rodolfo Argentino Redolfi
Capítulo 1
Historia de u na idea /7 Reacciones positivas y negativas /8 Misha Tal en persona /9 Eduard Gufeld / 1 O La Prueba del tiempo / 1 O
Capítulo 2
Jugadas Directas e In directas /27
Capítulo 3
La Teoría de las Casillas Reales y las Aperturas.
Piezas reales. Casillas de Paso /37
Capítulo 4
Tema real de coronación /6 1
Fe de erratas
Esta edición de 2000 ej emplares
se terminó de imprimir en Cosmosprint
Edmundo Fernandez 1 5 5 '
Avellaneda, Buenos Aires en j ul io de 2009
www.cosmo sprint . com . ar
Página 44, 1 8 columna, abajo. Donde dice: Ganaba 29.Del ! Af2 30.De8+ Rg7 3 l .De5+ Rg8 32.Dh2-+
Debe decir: Hacía tablas 29.Del ! Af2 30.De8+ Rh7! 3 l .Dxf7+ Rh8, etc.
Alvarez Castillo Editor
Buenos A i res , 2009 alvarezcastilloh@yahoo . c om.ar
Mijail Tal, campeón del mundo en 1961, maravilló con sus combinaciones y extraordinarios ataques a generaciones de ajedrecistas. ¿Cuál era el secreto de esos ataques? Para algunos, el juego de Tal se basaba en una formidable intuición, para otros, sus sacrificios eran para complicar la lucha al extremo y amedrentar así a sus rivales ... En esta obra, el maestro Juan Sebastián Morgado, intenta descubrir lá verdad, desde un punto de vista ciertamente original: la <<Teoría de las casillas reales», un complejo de casillas que rodean al rey enemígo y que son factibles de ser atacadas. Con rigurosos análisis, el autor nos brinda numerosos ejemplos de ataques cuyo éxíto resulta <<inexplicable» a los detractores del juego del <<Mago de Riga». Un valioso aporte a la literatura ajedrecística moderna y un manual indíspensable para el jugador de ataque y para todos los aficionados que quieran hallar una explicación a la complejidad (aparentemente) inexplicable del juego de combinación.
Juan Sebastián Morgado (1 947) es Gran Maestro en Tete-ajedrez, Maestro de la Federación Internacional de Ajedrez y Licenciado en Psicología. Obtuvo invicto el Vicecampeonato Mundial de Ajedrez por correspondencia en el X certamen
ecwnénico que se desarrolló entre 1978 y 1984, y desde entonces logró la cantidad record de once normas de Gran
Maestro en la especialidad. Su partida con Mikhail Kletsel -que figura ampliamente comentada en este trabajo- recorrió
el mundo, siendo seleccionada entre las 30 mejores del mundo por el Informador Yugoslavo 33, calificada con 10 puntos
por el GM Lazlo Szabo y comentada luego por Carry Kasparov. En el ajedrez "frente al tablero" fue finalista del
Campeonato Argentino 1973 y compartió el primer puesto del Abierto de Mar del Plata de 1983 con el M.l. Luis
Bronstein, entre otros logros.
Morgado ha sido el editor de la prestigiosa revista "Ajedrez de Estilo" y de una extensa serie de publicaciones sobre la
teoría del juego y sobre los éxitos deportivos de los grandes maestros actuales y posee la librería especializada más
importante de la Argentina.
1 - Iniciación alAjedrez Javier Cararnia
2 -Finales Prácticos (en pre11sa) MF Fernando Pedró
3- Motivos Tácticos Básicos Javier Caramia Prólogo: MI Alejo de Dovitiis
4 - Pensar la Apertura (Método racional para El estudio de las aperturas)
MI Alejo de Dovitiis Prólogo: MI Diego Valerga
5- Táctica con los Campeones (Aspirantes al Título Mundial,San Luis, 2005)
MF Marcelo Reides- N icol:ís Fiori Prólogo: GM Rubé11 Felgaer
6 - El Cambio de Piezas (Transformaciones en la estrategia de la partida)
MI Diego Valerga Prólogo: MI Enrique Scarella
7- Por los Laberintos del Ajedrez MF Gustavo Águila-MF Marcelo Reides Prólogo: GM Osear Panno
8- Casillas Reales. Ajedrez con Mijail Tal GM (Tele-ajedrez) Juan Sebastián Margado Prólogo: GM ([ele-ajedrez) RobertoAlvarez
ISBN 978-987-25188-1-3
9 789872 5 1 88 1 3