Civilizaciones antiguas; hititas, asirios, persas,...

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Civilizaciones antiguas; hititas, asirios, persas, babilonios Autores: Joaquín Nebot Monzonís Alicia Isabel Muñoz Andrés Ángeles Lozano Mª Isabel Pachés Angelina Pallarés Curso 2010-2011 Filosofía, Literatura y Música B Dinamización Socio-Cultural

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Civilizaciones antiguas; hititas, asirios, persas,

babilonios

Autores:

Joaquín Nebot Monzonís Alicia Isabel Muñoz Andrés Ángeles Lozano Mª Isabel Pachés Angelina Pallarés

Curso 2010-2011 Filosofía, Literatura y Música B

Dinamización Socio-Cultural

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ÍNDICE

LOS HITITAS ____________________________________ 3

EL IMPERIO BABILÓNICO _________________________ 7

CIVILIZACIÓN PERSA _____________________________ 13

BIBLIOGRAFÍA __________________________________ 15

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LOS HITITAS

INTRODUCCIÓN

Este trabajo presenta una breve investigación sobre los Reinos Hititas y sus respectivas

ciudades-estado. También se describe en el sus orígenes, su cultura, su escritura y

diversos apartados más que pueden servir de información. El material encontrado se

ha sacado enteramente de internet, usado diferentes páginas y artículos encontrados.

Nos hemos basado en la información hallada entre el Antiguo y Nuevo Reino Hitita,

para poder comprender mejor los distintos periodos de tiempo en que la cultura Hitita

presentó una hegemonía sobre la Mesopotamia y gran parte del Asia menor e intenta

echar luz a una cultura no muy conocida académica y arqueológicamente.

Podemos resumir este trabajo diciendo que los hititas fueron una cultura guerrera de

origen indoeuropeo que proliferó en lo que es la actual Turquía y parte de Siria.

Presentó dos periodos de reinado en el mundo antiguo y vivió su apogeo desde el siglo

XVIII hasta el siglo XII a.C., pasando por etapas de gran poder y de relativa decadencia.

Su desaparición se da a finales del siglo XII a.C. por parte de los denominados “Pueblos

del Mar”. Las preguntas que hoy en día se hacen los estudiosos del tema y que no se

encuentra respuesta lógica es: ¿Cómo desaparecieron tan misteriosamente habiendo

sido un pueblo que llegó a alcanzar un poder tan fuerte y tan similar al de los egipcios?

LOS HITITAS Y SUS ORÍGENES

Los Hititas fueron una población de origen indoeuropeo que se instaló en la región

central de la península de Anatolia entre los siglos XVIII y XII a.C. Aglutinando a

numerosas ciudades-estado de culturas muy distintas entre ellas, llegando a crear un

influyente Imperio, gracias a su superioridad militar y su gran habilidad diplomática. Se

constituyeron como una de las más importantes potencias en Oriente Medio, junto

con Babilonia y Egipto. Habitaron en Asia Menor y parte de Siria, formando un puente

entre Asia y Europa. Perfeccionaron el carro de combate y se les atribuye las primeras

utilizaciones del hierro en Oriente Medio como objeto de lujo.

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Los hititas impusieron su idioma, cultura y dominios sobre los habitantes originales de

las tierras que iban conquistando. Por esto, físicamente se les representa con aspectos

disímiles, lo que demuestra su mezcla étnica, con predominio mongol. Sus

predecesores directos en la actualidad son los turcos. La primera ciudad establecida

por los hititas fue Nesa, cerca de la actual Kayseri (Turquía).

Hacia el 1500 a.C. los hititas tomaron Babilonia demostrando así su inmenso poder

militar. Durante los 400 años siguientes Babilonia se desarrolló notablemente

estableciendo una importante red comercial en el Mediterráneo. Los reyes y príncipes

hititas adquirieron un poder similar al de los faraones de de Egipto.

Uno de los miembros más importantes del pueblo hitita fue el príncipe real

Subbiluliuma (que reinó hacia 1380-1346 a.C.). Después de derribar a su principal

enemigo, el reino de Mitanni, situado en el norte de Mesopotamia condujo a sus

ejércitos más allá de Siria. Allí gracias al debilitamiento del poder egipcio y uno de sus

principales enemigos, obtuvo grandes conquistas convirtiendo a su imperio en uno de

los de mayor poder.

El imperio de los hititas fue destruido por invasores conocidos como pueblos del mar,

que arrasaron Asia Menor y Siria a finales del siglo XII a.C.. La cultura hitita pervivió en

pequeños estados al este de Asia Menor hasta casi el 700 a.C. Sólo se tienen

conocimientos de la historia de este pueblo hasta el siglo XII a.C.

PRIMEROS DOCUMENTOS Y TRADUCCIONES

Actualmente se conoce bastante poco de este pueblo, tras su desaparición cayeron en

el más absoluto olvido hasta el S.XIX. Es sorprendente que lo que llegó a ser como uno

de los mayores Imperios de la Antigüedad haya pasado totalmente inadvertido

durante tantos siglos. Gracias a numerosas excavaciones se ha podido reconstruir su

historia y llegar a descifrar su escritura.

Las primeras fuentes importantes sobre los hititas proceden de documentos egipcios,

principalmente los de la XIX Dinastía y pasajes de la Biblia. Aunque dependiendo de

que documentos se lean, la misma historia cambia a favor de un pueblo o de otro.

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El descubrimiento de los archivos fue muy importante, porque permitió a los eruditos

descifrar la lengua hitita, además de revelar información tan desconocida hasta ahora

sobre su cultura, organización política, legislación, religión y literatura. Aunque muchos

de los archivos estaban escritos en acadio, idioma internacional de la época, los hititas

utilizaban para su escritura un sistema cuneiforme adoptado de los babilonios y un

sistema de jeroglíficos, sobretodo en el periodo del Imperio. La literatura de los hititas

estaba muy desarrollada, según muestran los documentos históricos y las narraciones.

ORGANIZACIÓN Y LEYES

El rey Hitita actuaba como sumo sacerdote, jefe militar y juez principal. Durante el

Antiguo Reino era asesorado por el Pankus, consejo asesor de nobles, que

posteriormente desapareció. El reino estaba administrado por gobernantes

provinciales que actuaban como ciudades-estado del reino.

Los éxitos más relevantes de esta civilización se encuentran en el campo de la

legislación y de la administración de justicia. Tuvieron un código de leyes que hace

referencia al derecho civil y penal. Por este código sabemos que existía en su sociedad

dos clases de hombres, los libres, que poseían patrimonio y los esclavos. Dentro de los

hombres libres se distinguían la nobleza guerrera (que mantenía el ejército real) y la

clase integrada por comerciantes, artesanos y guerreros combatientes. Los esclavos

mayoritariamente eran cautivos de guerra, contando con ciertos derechos y

protección. Los hititas rara vez recurrían a la pena de muerte o a la mutilación, muy

típico en otras civilizaciones de la época en Oriente Próximo.

La justicia se basaba fundamentalmente en el principio de restitución, en lugar de

retribución o venganza. La pena por robo, era la devolución del objeto robado y el

pago de una recompensa. Se fijaban remuneraciones que variaban por el mismo

trabajo, pagándose el doble el trabajo realizado por un hombre libre con respecto al

esclavo. La vida de un hombre libre asesinado, valía cuatro hombres, la de un esclavo

dos.

El matrimonio se celebraba por rapto o por compra, en este caso el marido debía

entregar en guarda a los padres de la novia una dote que le sería devuelta en caso de

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divorcio. El hermano del marido debía casarse con la mujer de este en caso de que ella

quedase viuda.

LA ECONOMÍA

La economía se basaba en la agricultura y ganadería. Los principales cultivos eran el

trigo y la cebada y los animales fundamentales eran las vacas y ovejas. Los hititas

también poseían una reserva importante de minerales como: el cobre, el plomo, la

plata y el hierro. Sus técnicas metalúrgicas eran avanzadas para su época.

RELIGIÓN, ARTE Y CULTURA

Los hititas veneraban a numerosas deidades locales, los más importantes eran el Dios

Tormenta o Dios del Tiempo y la Diosa del Sol. Tuvieron una multitud de dioses

imaginarios y poseyeron una divinidad femenina, la reina madre Arinna y un dios

guerrero, llamado Teshub. Nada caracterizó tanto las creencias religiosas de los hititas

como la tolerancia, de hecho, cuando los hititas conquistaban un pueblo extranjero

incorporaban los dioses de estos a los suyos, sumando así un gran número de

divinidades tanto propias como extranjeras.

El arte y la arquitectura aunque estuvieron influidos por todas las culturas coetáneas

del antiguo Oriente Próximo y especialmente por Babilonia, los hititas adoptaron un

estilo propio que hace distinto su arte. Los materiales para los edificios eran de piedra

y ladrillo utilizando también la madera. Los decoraban con relieves estilizados, tallados

en puertas, muros y entradas.

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EL IMPERIO BABILÓNICO

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Durante el primer milenio a. de J.C. al tiempo que Egipto perdía su categoría de

primera potencia que hasta entonces había tenido varios reinos semíticos cobraron

auge en el Asia Menor .En Babilonia se habían establecido los caldeos; Israel vivía días

de esplendor bajo sus dos grandes reyes, David y Salomón, aunque pronto sufriría un

debilitamiento a consecuencia de su fraccionamiento en dos: Israel y Juda; los fenicios

tenían el monopolio marítimo ,con una red de ciudades comerciales en las costas

mediterráneas. Frente a todos estos pueblos empezaba a nacer en la región superior

del Tigris un nuevo reino, Asiria, de población semita, fuerte y belicosa .Los principios

del reino fueron duros, debido a la continua avalancha de pueblos nómadas que

amenazaban su existencia.

Superada esta primera etapa, Asiria emprendió una política de conquista que llegó a su

apogeo con la dinastía sargónida. A mediados del siglo VII a. de J.C. los reyes asirios

Sargon II y Asurbanipal dominaban toda el Asia Menor y Egipto. Pero en el curso de

este siglo los pueblos dominados se alzaron en rebelión. En Egipto se instauro la

dinastía saita. En la zona baja del Tigris y Eufrates, el gobernador de Babilonia,

Nabopolasar, se alío con sus vecinos los medos para hacer la guerra a la opresora

Asiria y lograr así la liberación de la ciudad de Babilonia. Unidos ambos ejércitos, en

612 avanzaron sobre Nínive y la arrasaron por completo. De esta forma, el poder asirio

quedo aniquilado. Los medos ocuparon el norte de la tierra conquistada. Los

babilonios se quedaron con el oeste .Durante ochenta años, Babilonia fue la capital de

sus estados y tubo reyes propios .Este nuevo Imperio surgido de la victoria sobre los

asirios, recibe el nombre de Imperio neobabilónico.

Lo funda en 625 a.de J.C. Nabopolasar que fue su primer rey. Durante su reinado su

hijo Nabucodonosor se puso al frente del ejército y lanzo una expedición guerrera

contra Egipto, consiguiendo una notable victoria en Karkemish. De regreso de la

campaña, Nabucodonosor se entera de la muerte de su padre, acude a Babilonia y se

proclama rey sin grandes dificultades. Su reinado, que comenzó en 604, constituye el

apogeo de la dinastía neobabilónica. A poco de ascender al trono, emprende una

triunfante campaña guerrera contra Siria y Palestina, con lo que su poder personal se

extiende desde el valle del Eufrates a Egipto. Es sobradamente conocida, su campaña

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de Palestina. En 587 a de J.C. tomó la ciudad santa de Jerusalén, destruyendo el

templo de Salomón, y se llevó prisioneros a Babilonia buena parte de sus habitantes,

entre ellos al profeta Daniel, que ya había predicho en sus profecías el futuro destino

del pueblo de Israel.

No mucho después, llevó sus armas contra los fenicios, a los que tomo la ciudad de

Tiro, tras un asedio de trece años, dirigido por el propio Nabucodonosor.

Todas estas campañas victoriosas parecían indicar que Babilonia había ocupado el

lugar de los asirios, pero el coloso neobabilónico tenía los pies de barro, a juzgar por la

rapidez con que se derrumbó. En efecto, a la muerte de Nabucodonosor, ocurrida en

562 el reino se vio amenazado por peligrosas luchas interiores que hicieron tambalear

la seguridad del trono. Le sucedió su hijo, que a los dos años de reinado fue asesinado

por su cuñado Neriglisar. Al cabo de tres años, el nuevo rey fue, a su vez asesinado y

con el su hijo y sucesor de corta edad.

Entonces fue llamado al trono Nabónido, personaje importante ya en tiempos de

Nabucodonosor y miembro de una de las familias mas ilustres de Babilonia. El nuevo

rey, que empezó a reinar en 555 a. de J.C. defraudó completamente las esperanzas de

sus súbditos, pues, mas aficionado a las grandes construcciones que a la política, dejó

el gobierno en manos de su hijo Baltasar que fue nombrado corregente. Esta

costumbre de asociar en el gobierno al príncipe heredero se generalizó en adelante en

todo el Oriente. Debido a la conducta del rey, los babilónicos rivalizaron en lucha de

partidos y clases, lo cual debilitó la fuerza del estado.

Mientras tanto en 549 Ciro se había proclamado rey de los persas. Al principio no

molestó a los babilonios en sus posesiones asirias, pero llegado el momento atacó a

sus vecinos. Nabónido fue vencido en muy poco tiempo, debido más a la traición de

quienes veían en el rey persa al soñado libertador, que al propio genio militar de Ciro.

Tomada Babilonia, el reino fue incorporado al Imperio persa. Babilonia no volvió a ser

nunca más independiente, pero como más tarde sucedió con el Imperio griego,

desempeño el papel de maestra intelectual del pueblo que la conquistó por las armas.

A pesar de su incorporación al reino persa, Babilonia continuó siendo una importante

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capital. Cuando Alejandro Magno la conquistó se emociono a la vista de aquellos

monumentos, testigos de su pasado glorioso.

La época del imperio babilónico que acabo en 539 a. de J.C destaca más por la obra

pacificadora que llevo a cabo la dinastía que por las guerras, excepción hecha de

Nabucodonosor. Apoyados por una buena administración, los reyes babilónicos dieron

auge a la vida religiosa y aumentaron la prosperidad de la economía nacional. Todo

ello contribuyó a hacer del Imperio un Estado fuerte, capaz de producir magnificas

obras artísticas y literarias.

La ciudad de Babilonia.

Si alguna ciudad forma parte del imaginario colectivo de la Humanidad esta es, sin

duda Babilonia. Los ecos que la Biblia y los antiguos viajeros griegos hacen resonar en

sus oídos despiertan la curiosidad, imaginación e inventiva. Las excavaciones de

aquella ciudad, capital del Imperio babilónico, han permitido confirmar algunos y

rectificar otros de los puntos expuestos por los escritores griegos, en especial

Herodoto. Rodeada de barrios extremos y hermosos jardines, en los que crecía la

palmera datilera, el plano de Babilonia era paralelepipédico, con un perímetro de unos

16,5 Km. aproximadamente y con el lado oeste apoyado en el curso del Eufrates que

además le servia como defensa natural.

La ciudad estaba circundada por un doble muro, cada uno de ellos con nombre propio,

separados por algo más de 7 metros. El exterior tenia cerca de 4 metros de espesor, y

el interior 6,5.Un foso con agua protegía la muralla exterior. Dichos muros estaban

defendidos por torres, que las representaciones antiguas dan como almenadas .La

gran anchura del muro ofrecía en su parte superior una calzada para carros de

combate, los cuales incluso podrían cruzarse en el camino y transportar tropas en un

momento dado al lugar de mayor peligro.

Se comunicaba la ciudad con el exterior a través de siete puertas las cuales se

disponían en el centro de un bastión apoyado por torres que sobresalían del avance

normal de las murallas. Cada puerta tenia un nombre, que solía ser el de la divinidad a

la que se dedicada. De todas ellas, la de Ishtar es la que ha alcanzado mayor fama, en

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especial por la magnifica decoración de cerámica vidriada, en que se representan

ciento cincuenta dragones y toros, dispuestos en filas de rigurosa lateralidad.

En el interior de la ciudad, lo más sobresaliente eran los templos (cincuenta y tres

dedicados a los grandes dioses y cincuenta y cinco capillas a Marduk). Estas

edificaciones, como todas las importantes construidas sobre un terraplén, constaban

de un pequeño altar de ladrillo que precedía a la puerta, la cual daba paso a una sala

que a su vez se abría a un gran patio en el que generalmente había un pozo. Desde el

patio se pasaba a una cámara dispuesta antes del santuario que contenía la imagen de

la divinidad. Desde el patio se pasaba a numerosas cámaras en que se guardaban los

objetos del culto y los tesoros del Dios. También estaban allí las habitaciones de los

sacerdotes y de allí partía una escalera que llevaba a la terraza.

El más célebre de todos ellos era el de Marduk, pero también tenían gran importancia

el de Ishtar, el de Nin-Urta y el de Gula. El de Marduk, recibía el nombre de Esaglia.

Según los textos antiguos, el oro se había empleado con profusión. En su interior se

abrían numerosas capillas dedicadas a muchos dioses. Estaba separado del resto de la

ciudad por una muralla interior y constituía como un barrio al margen de la ciudad. Al

norte del templo se elevaba el zigurat (Etemenanki) de 90 metros de altura,

compuesto por siete pisos de área cada vez menor, a los que se iba ascendiendo por

rampas laterales. Se ha supuesto que este zigurat era la celebre torre de Babel

mencionada en la Biblia.

Sobre el papel de los zigurast se discute desde hace tiempo. En principio, todo parece

indicar que la edificación del último piso se dedicaba a investigaciones astronómicas, y

en este sentido se han encontrado textos que así lo avalan. Pero recientemente, con

motivo de los descubrimientos de otros zigurats y la lectura de las tablillas, se ha

vuelto a poner sobre el tapete la posibilidad que dichas construcciones tuvieran

además el papel o función de sepulcros de un dios. En el caso concreto del zigurat de

Babilonia, se trataría de un falso sepulcro, en el que se desarrollarían parte de las

representaciones sacras en honor de Marduk.

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En cuanto a los palacios, que con los templos dieron su fisonomía a Babilonia, las

excavaciones hallaron el de Nabucodonosor, quien lo hizo construir con el máximo de

precauciones defensivas, y a él solo se podía entrar desde la ciudad. Como los templos

estaban construidos sobre un terraplén y sus muros eran de gran grosor, las

habitaciones se abrían a patios interiores y uno de ellos daba al salón del trono, de

unos 50 metros de ancho por 15 de fondo; frente a la puerta de entrada había un

nicho, en el que se supone que se colocaba el trono real. Mientras que al exterior este

palacio no tenía más decoración que salientes en los que el sol jugaba con la sombra

que aquellos producían, en el interior abundaba la cerámica vidriada.

Como maravilla extraordinaria, que los antiguos incluyeron entre las siete del mundo

estaban los celebérrimos jardines colgantes. En las inmediaciones de la puerta de

Ishtar, las excavaciones han puesto al descubierto una serie de construcciones

abovedadas que, según parece desprenderse de los textos, sostenían la tierra que

mantenía los jardines. Allí sobre una tierra elevada a una altura superior a la del resto

de la ciudad, pero inferior a la de las murallas exteriores, el verde de la vegetación,

visto desde lejos, flotaba entre el color del ladrillo y el azul del cielo. Dejando aparte

las callejuelas y vericuetos que separaban las casas de adobes de la ciudad, las grandes

vías eran cuatro. Tras la puerta de Ishtar comenzaba la más importante de ellas, la vía

de las Procesiones, que atravesaba la ciudad hasta la puerta de Nin-Urta y llevaba al

templo de Marduk. Contaba con más de 20 metros de ancho y estaba bordeada, en

una distancia superior a los 200 metros, por un muro en que se reproducían, a cada

lado, sesenta leones sobre azul oscuro. Dos calles paralelas a esta llevaban al centro de

la ciudad y allí se unían a la del dios Marduk, perpendicular a ellas.

El zigurat de la famosa torre de los siete pisos simbolizaban los siete planetas; el

inferior, dedicado a Saturno, estaba cubierto de estuco negro. En lo alto estaba la

cámara del dios Marduk. Pero enfrente de Etemenanki estaba Esaglia, otro santuario

secreto, morada preferida del gran Dios lugar de revelación. En salmos penitenciales se

apellida a Marduk señor de Esaglia y protector de Babilonia, tu nombre es agradable,

por ti yo vivo, por ti estoy sano. Queda, Dios mío, a mi diestra y que la gran Diosa

Ishtar quede a mi siniestra.

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CIVILIZACIÓN PERSA

Los persas era un pueblo indoeuropeo, procedían de las montañas del S de Rusia y

ASIA Central. Los Medos que les acompañaron en la invasión de las mesetas situadas

entre el mar caspio y el golfo Pérsico. Hacia el siglo VII los medos sometieron a los

persas y fundaron el primer imperio iranio.

Darío II levanto a los persas y reunió a ambos pueblos bajo su cetro, conquisto Asia

Menor y las comunidades griegas de la costa del Egeo .Su hijo Cambises con la

conquista de Egipto consumo las victorias de la dinastía Aqueménida cuyo mayor

esplendor estuvo representado por Darío I (521---486), aunque su expansiones se vio

limitada por la hegemonía de Grecia.

Las conquistas de Alejandro Magno dieron fin al imperio persa, que fueron dominados

por los Selecidas y mas tarde por los Arsacidas El imperio Sasánida quiso restaurar el

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esplendor Aqueménida. Sus monarcas mantuvieron grades luchas con Roma

consiguiendo la independencia de los persas y no sucumbieron sino ante la invasión

Árabe en el S VIII, El dominio árabe, en que Persia fue gobernada desde Medina o

desde Bagdad por enviados de los califas mahometanos significo la islamización del

país.

Los persas tenían un complejo y avanzado sistema de administración de las provincias.

Estas se componían de tres funcionarios: un general, un secretario y el jefe de la

provincia. Cada uno desempeñaba un papel para que no hubiera corrupción en sus

colonias. Además un inspector real solía pasar cada determinado periodo de tiempo

para verificar que todo estuviera en orden dentro de la provincia y luego informar al

Rey.

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BIBLIOGRAFÍA

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- Conteneau, G. La vida cotidiana en Babilonia y Asiria. Barcelona. 1958.

- García Cordero, M. La Biblia y el legado del Antiguo Oriente. Madrid. 1977.

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- Utchenko, S.L. Estado y clases en las sociedades antiguas. Madrid .1982.

- Bottero, J. Religión en la Antigua Mesopotamia. Chicago. 2001.

- Paul Kriwaczek. Babilonia. Mesopotamia: la mitad de la historia humana. Ariel.

Barcelona. 2010.