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CARLOS GALDÓSy su vieja amiga: la FRUSTRACIÓN

TECHI QUIPUZCOA

De arquitecta arediseñadora de vidas

CLAUDIAPÁEZ

Floreció tras dosquiebras debastadoras

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índice DICIEMBRE

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laempresaria

laejecutiva

la emprendedora social

la empleada del mes

hombrebatalla

Claudia Páez:La diseñadora que cayó dosveces y regresó para triunfar

Ana Quiroz:La directora que revolucionósu escuela desde los baños

Teresa Quipuzcoa:De arquitecta a transformadorade cientos de vidas (y familias)

Víctor Chamorro:La seriedad puesta al serviciodel mundo del entretenimiento

mi lado B

aprendiendoa aprender

galdós

cadenaimproductiva

INÉS TEMPLE:“Cómo loconseguí”parte 2

Director: Antonio Orjeda / Editora de diseño: Vanessa Florián / Redactores: Jacqueline Fowks, Joaquín León, Ramiro Flores / Fotógrafas: Ximena Barreto, Lucero del Castillo / Diagramadora: Lisset Vera / Ilustrador: José Luis Carranza / Portada: Claudia Caffarena / Distribución: Ediciones Zeta S.R.L.www.mujeresbatalla.pe

© MB Mujeres Batalla. Marca registrada. Año 01 No 06. Fecha de publicación: 06-12-12. Revista mensual, editada y publicada por Antonio Orjeda E.I.R.L., calle Trípoli 242, dpto 702, Miraflores. Impresa en Aleph Impresiones S.R.L., jirón Risso 580, Lince. Hecho el Depósito Legal en la Biblioteca Nacional del Perú No 201207123.Antonio Orjeda E.I.R.L. investiga sobre la seriedad de sus anunciantes, pero no se responsabiliza por las ofertas relacionadas con los mismos. Prohibida su repro-ducción parcial o total.Impreso en Perú - Printed in Peru. Todos los derechos reservados - All rights reserved. © Copyright 2012.

columnasentrevistas

ELIANA OTTA:“Yo vivo porMagdalena, peroquiero a Susana!”

“Frustración”

Sonia López:La pieza clave de una

aerolínea en problemas MILI ARELLANO:“El regalodel feedback”

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enía la necesidad de entrevistar a Claudia Páez. La conocí el 2009, el recuerdo de su angustia tras haber

quebrado una empresa –su empresa– cuando se creía en la gloria, me venía acompañando desde hace varias semanas.

Empresaria textil, diseñadora deprendas para damas, sus marcas no solo se comercializan aquí, sino también en Ecuador, Colombia y CentroaméricaClaudia se rehizo después de, a los 34 años, haber visto desplomarse un negocio –su negocio– que creía ya consolidado. Antes de comenzar la entrevista, le confesé mis miedos, la angustia que siento, el cansancio que me genera darle con todo a esto para que de una buena vez esta revista termine de agarrar viada.

Me dijo que me entendía. Me obsequió una metáfora: “Es como subir una pendiente en bicicleta: no te queda más que seguir pedaleando, pues de lo contrario retrocederías lo avanzado”. Ella, que el año pasado facturó S/.19 millones, me explicó que aún se sigue sintiendo a bordo de una de estas máquinas. Nuestra conversación, días después, continuó vía e-mail…

“La metáfora del ciclista, te cuento que la he sentido y siento tantas veces; y no te voy a negar que muchas veces me ha provocado dejar de pedalear y mandar todo al diablo. ¿Sabes? Muchas veces se ve el panorama tan negro y el esfuerzo es tan grande, que sientes que no lo vas lograr; y no te sientes con fuerzas para seguir pedaleando. Ves tan lejos y tan difícil ‘esa cumbre’… Pero a veces, en esos momentos, aparece alguien con una buena noticia, o recibes el correo de un cliente que te felicita

porque la colección le encantó, o viene una vendedora a agradecerme porque gracias a nosotros su hijo ya está a punto de graduarse; y en ese preciso instante sientes que tienes toda la fuerza para seguir pedaleando. Te digo: No es un camino fácil, pero la gratificación –y no hablo solo de la económica- es grande. O sea, mi amigo, a seguir pedaleando, vuelve a leer y releer todos esos lindos comentarios que la gente te hace, vuelve a pensar en lo que te motivó a hacer este proyecto, vuelve a pensar en la cantidad de mujeres que te siguen, que te escuchan y que te admiran, y de allí sacaras las fuerzas para continuar”.

Claudia me pasó por encima con su bici, y yo estaba feliz. Ella tiene toda la razón, y entrevistar días después a Sonia López, no hizo más que reforzar la idea de que el camino podrá ser bravo, pero tenemos razones para seguir dando batalla, y no por terquedad, sino porque esta propuesta vale la pena. Claro, como valió la pena el enorme esfuerzo que desplegó la directora Ana Quiroz para hacer de un colegio nacional en Pamplona, un ejemplo que se viene replicando incluso en aulas estadounidenses.

Sí, pues, el vaso con agua está a la mitad, y como siempre va a depender de uno el cómo lo ve: medio lleno o… Bueno pues, la cima está ahí. ¡Vamos a seguir pedaleando!Nos vemos el próximoaño.

T

ANTONIO ORJEDAdirectorantonio@mujeresbatalla.pe

editorial

ESE VASO QUE ESTÁ A LA MITAD…

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lascartas

Estimado Antonio:Te manifiesto que me quedé conectada a tu trabajo desde

que por primera vez leí Ejecutivas en El Comercio, después con tu libro Mujeres Batalla y, ahora, contar con una revista mensual, me parece realmente fabuloso. Me quedo impresionada con cada historia que leo, me generan una gran energía, fortaleza y confianza. Te agradezco por darnos una información que vale oro. Como le he dicho a una amiga: esta revista es una bendición, porque va a despertar a nuevas mujeres batalla. Muchos éxitos.

Doris Lida Zuasnabar SotoMujer Guerrera

Señor director:Leer la columna de Inés Temple me ha hecho

admirarla todavía más (“Cómo lo conseguí”. Mujeres Batalla 5). No solo es una ejecutiva exitosa, sino que resulta que fue ella quien convenció a DBM de que debía abrir una filial en el Perú; y ello, pese a que nunca estuvo en los planes de esta empresa. ¡Increíble!. Gracias a ello, miles de peruanos –me incluyo– que pasamos por un proceso de despido durante la década del 90 pudimos vivir una experiencia menos traumática, se nos brindó un trato más humano y, muchos de nosotros, pudimos recolocarnos con cierta facilidad. Claro, la labor de esta empresa es magnífica, pero enterarme de que fue ella quien prácticamente los ganó por cansancio para que vengan al país, y que lo hizo porque no quería que más personas pasasen por lo que vivió su esposo, me parece, sinceramente, admirable.Definitivamente, el Perú necesita más personas con la sensibilidad y grandeza de esta dama. Saludos,

Gonzalo Adrianzén

Hola Antonio:La verdad, nunca había escuchado de ti, ya que

estuve viviendo por mucho tiempo en el extranjero, pero el jueves pasado (el 15 de noviembre) en el evento que organizó Owit sobre “Mujeres Extraordinarias”, tuve oportunidad de escuchar tu presentación y enterarme de tu libro y de tu revista. Quiero que sepas que he quedado fascinada. Me encantó, admiro el trabajo que realizas. La verdad, me ha motivado muchísimo, Mujeres Batalla ha aparecido en el momento preciso. Gracias en nombre de todas las mujeres que necesitamos saber que podemos llegar muy alto y que, por un mal momento en la vida, ¡esta no se acaba! Un abrazo.

Ana María Arapa

Antonio, como Blanca Flores Vargas (lectora sobre quien escribimos en

el editorial del cuarto número de Mujeres Batalla), ¡te había perdido la pista! Así que fue una alegría saber que existe esta revista y que podré seguir leyendo tus entrevistas. La publicación esta excelente, ¡me suscribo de todas maneras! Hasta la próxima.

María Isabel Cigüeñas

Mujeres Batalla: Me ha gustado mucho la historia de la señora Carmen Hanza,

dueña de Charlotte (Mujeres Batalla 5). Si bien habemos mujeres que elegimos dedicarnos a las labores de la casa, ella decidió ir más allá, algo que confieso siempre quise hacer, pero por distintas razones –básicamente por dedicarme a la crianza de mis hijos– lo fui

postergando. Sin embargo, me gusta leer historias como las de ella, porque son mujeres que se atrevieron, que como ella empezaron ofreciendo sus postres, desde abajo, y ahora tienen una gran empresa e incluso dan trabajo a su familia. Me encantó conocer su historia, esa señora es tan vital, que era como si me estuviera hablando a mí. Felicitaciones.

Amparo Gutiérrez

Estimado Antonio: Te he seguido en El Comercio, compré tu libro, pero de

ahí te perdí hasta que un día, en un quiosco, vi tu revista. ¡Me ha encantado! Mujeres Batalla me ha animado a seguir luchando para que mi empresa crezca, y sé que se puede. Una vez leí que: “Más vale apuntarle a la Luna y darle a un águila, que apuntarle a un águila y darle a una piedra”, así que en esas ando. He leído los dos últimos números, y ahora siento que tengo más fuerzas para continuar. Gracias por aparecer nuevamente, y que continúen los éxitos.

Rosa María Pineda

Saludos. He leído el caso de la señora Nelly Villegas, no puedo creer lo que le está

pasando (Nelly tiene un hogar que acoge a madres víctimas de violencia doméstica y sexual, recientemente ha perdido la mayor parte de sus instalaciones debido a que una asociación de vivienda aduce que estas le pertenecen). ¿Cómo puede ser que una persona que trabaja por el bien de la gente tenga que sentirse sola ante el abuso? ¿Dónde están las autoridades?

Martín Gómez

os comentarios e inquietudes que te generannuestros contenidos háznoslos llegar a

contacto@mujeresbatalla.pe.

Visita nuestra web: www.mujeresbatalla.pe

L

Antonio:Felicitaciones por el quinto número de Mujeres Batalla. Muchos de estos casos

–todos, en realidad– tendrían que llegar a la televisión, hacerse masivos para que todos los conozcan y se inspiren. Esta revista tendría que ser repartida en los colegios para que los chicos sepan que no todo es lo que pasan en la televisión. ¡Ya basta de tanto programa que no sirve para nada! Creo que ese tiene que ser tu siguiente paso.

Antonio Rodríguez

Existen realidades que el mundo no ha podido postergar y una de ellas es la referida al papel que tiene actualmente la mujer en

la sociedad. Esta revista trata de dar ese mensaje de valorización y trascendencia en una coyuntura que enfrenta dos posiciones muy marcadas: la de los hombres encaminados a fortalecer un mundo hecho para ellos y la de las feministas, que se plantean el derecho al trabajo como revancha. Claramente, la mujer viene caminando a paso firme, libre de ideologías y en forma silenciosa, mostrando sus logros, fortalezas y aciertos a todo nivel y, especialmente, haciéndose un espacio y un camino al andar, por lo que Mujeres Batalla, esta publicación pionera, pretende darle el valor de siempre, ayer y hoy.

Luis Avellaneda

Estoy suscrita a la revista, y quiero decirles que cada número me llena de mucha energía, conocer la historia de cada uno de

estos personajes me ilumina, me hace pensar que sí tenemos razones para sentir esperanza. Y qué bueno que hayan decidido incluir los casos de hombres, porque en este país no solo hay Mujeres Batalla. Hasta el momento, la última historia que han presentado, es la mejor (la de Álvaro Henzler, presidente ejecutivo de Enseña Perú). Qué importante que haya profesionales jóvenes que animen a los chicos que recién terminan sus carreras a que durante un tiempo sean profesores, lleven educación y formación a lugares pobres, donde sabe Dios si tendrán maestros que valen la pena.

Roxana Ortiz

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losnúmeros

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loslibros

CIA Perú 1985

ALEJANDRO NEYRAUna novela en la que el autor conjuga el contexto histórico peruano con el humor para narrar la travesía de un espía que arribaal país en un año clave (1985, cuando el Apra llegó al poder y Sendero Luminoso comenzó a operar de manera sistemática). Esta parodia, cuyo personaje principal es el agente y diplomático austriaco Malko Linge, busca divertir y, al mismo tiempo, reflexionar respecto a importantes acontecimientos que tuvieron lugar hace más de 20 años.

¿Puede ser la red tan adictiva como la cocaína? ¿Cómo se convierte la navegación digital en una patología? Las adicciones tecnológicas a n no generan un debate científico, por tal motivo no existen protocolos claros para combatirlas. En este sentido, los autores, expertos en psicología de las adicciones, explican la adicción a Internet –y a las redes sociales– y detallan la psicoterapia que aplican en la Universidad de Valencia para tratar dicha condición. Esta guía describe las características de esta adicción y los efectos que tiene sobre la estabilidad emocional de las personas.

Ganador del Premio Pulitzer, narra el devenir y el impacto que ha tenido este mal en la historia de la humanidad. Tiene por premisa que el cáncer no es solo un fenómeno médico. La publicación aborda tanto el ámbito científico como el humano. Presenta testimonios de optimismo,información sobre grandes descubrimientos y enormes fracasos en la búsqueda de una cura. Una detallada obra que combina la argumentación de un ensayo médico, la narración de un novelista y la precisión de un historiador.

Adicción a Internet

y redes sociales

MARIANO CHOLIZ Y CLARA MARCO

Pecados Capitales:

7 miradas para entender el éxito

y el fracaso en el Perú

ANTONIO ORJEDA, LUIS FELIPE GAMARRA, JULIO ESCALANTE Y VANESSA ANTÚNEZ

El emperador de

todos los males:

Una biografía del Cáncer

SIDDHARTHA MUKHERJEE

emprendimiento

literatura

salud

historia

Entrevistas a siete líderes de opinión. Rolando Arellano da lecciones sobre cómo vender calidad; Inés Temple revela cómo las personas le puedensacar el máximo de provecho a su profesión; David Fischman comenta por qué a los peruanos les cuesta ser líderes; Gustavo Rodríguez analiza los mitos y prejuicios que existen en torno a la identidad peruana; Hernando de Soto hace un diagnóstico de la informalidad; Juan Infante indaga sobre por qué a los peruanos les avergüenza hablar de dinero.

“Tuve queempezar

otra vez de cero”

FOTOGRAFÍAS LUCERO DEL CASTILLO

POR ANTONIO ORJEDA

CLAUDIA PÁEZgerenta general de Heltex

la empresaria

CREÍA HABER ALCANZADO LA CÚSPIDE.1998: A CAUSA DE EL NIÑO Y LA CRISIS ASIÁTICA, QUEBRÓ. ENDEUDADÍSIMA, ACEPTÓQUE MÁS BAJO NO PODÍA CAER. DECIDIÓ ENCARAR LA VIDA, SE REHIZO. HOY, SUS PRENDAS CONQUISTAN LA REGIÓN.

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No tenía 35 años y ya había quebradodos veces.Sí.

La segunda vez, habiendo llegado atener veinte puntos de venta…Eso sí fue… ¡grave! Esa caída sí fuedesde más arriba, porque la primerafue casi como un juego: había empezado bien una cosa, no funcionó;pero la segunda vez me ocurrió cuandoya tenía una empresa completamente constituida, con cerca de ochenta personas, veinte puntos de venta…

Se creía ya consolidada. Fruto de ello,tenía el carro que quería, la oficinaque quería…Yo decía: “Esto es lo que quería lograr,y ya lo tengo”.

¿Qué tan fuerte fue la cachetada quele dio la vida?Fue bien bravo, porque además setrató de algo que no veías venir, queno te dio tiempo a pensar: “Me puedepasar esto…”.

Quebró a consecuencia de la llamada‘crisis asiática’.Sí, el 98. Se juntaron la ‘crisis asiática’ (crisis financiera que se desató un año antes en Tailandia y se expandió por el mundo) y el fenómeno de El Niño.

Llegaba a su oficina y se podía pasar horas con la mente en blanco.Me sentaba y decía: “¡Qué hago!”…Pero mi mente estaba en blanco. Mejor dicho: ¡en negro!

Su proveedor de prendas no la abastecía y, sus compradores, dejaronde pagarle.Estaba en el medio. Era distribuidora,entonces no producía. Tenía que abastecerme de la fábrica que estaba en Arequipa para poder cumplir conlos encargos de mis clientes, y esosclientes me tenían que pagar. Perocuando todo comenzó a caer, la más afectada fue la parte más débil…

O sea, usted.Claro. El que tenía las telas, el quetenía la fábrica, era la parte fuerte.Yo, no.

Tenía ochenta empleados. Ochenta familias que dependían de usted.Eso fue lo más bravo: sentarte con cada uno de ellos, escucharlos… “Teentiendo perfectamente. Pero, ¿qué cosa hago?!”. Hablé con cada uno.Me decían: “Tengo una familia quemantener…”. No me quedaba más quedecirles: “Dime qué cosa quieres quete dé, y te doy; te doy ropa, te doytelas…”.

M AE ALCOTT, Vía Roma, CP Moda del Colección y Marina Murani, estas son las marcas con las que Claudia Páez viene penetrando Colombia, Ecuador y Centroamérica. La entrevistamos al final de un lunes, horas después de haber regresado de uno de los países donde sus prendas para damas vienen ganando cada vez más mercado. Heltex, la empresa textil que hoy gerencia, es un éxito. En ello, de hecho tiene mucho que ver el brutal aprendizaje que Claudia vivió cuando se vio en la ruina, a los 34 años, después de haber

experimentado el derrumbe de otro emprendimiento, el cual creía consolidado e invencible. En ese momento creyó que todo estaba perdido. Hoy le grita al mundo que para cada problema no hay una, sino varias soluciones. Eso sí, dar con ellas, es únicamente nuestra responsabilidad.

CLAUDIA TERESAPÁEZ LÓPEZ-GUERRA

ESTUDIOS Primaria en el Santísimo

Nombre de Jesús. Secundaria, en el San Marcos.

Hizo hasta el sétimo ciclo de Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Lima. Especialidad: Publicidad.

Especialización en Administración de Mercados y Ventas en la Universidad del Pacífico.

EDAD 49 años

CARGO Gerenta general de Heltex.

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Servicio. Rita Pisco es impulsadora de ventas de la marca Mae Alcott, lo mismo que Shyla García. Ellas hacen posible que cada clienta dé con la prenda adecuada.

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En su caso, tras su primera quiebra, que ocurrió a consecuencia de quecerró el antiguo Oechsle —su principal cliente—, le pagaron conmuñecas y licor.Sí (ríe)… Fue más o menos así: ponte que me debían diez mil dólares, y para cuando les tocó pagar a los proveedores, reetiquetaron toda latienda. Compraron cosas que no sabías de dónde habían salido. Oechsle era una tienda de ropa, yde pronto aparecieron montones deBarbies bamba, licores de marcas desconocidas… Te daban unarefrigeradora y te decían que costabadiez mil dólares cuando, en realidad, costaba mil. ¡Era absurdo! Reclamabas, y te decían: “Esos son mis nuevos precios”. Fue una estafa. “Si quieres cobrarte, llévate lo que tengo, a los precios que yo tengo”.

Años después, usted estaba en una disyuntiva similar con su gente.No. Definitivamente no fue similar, porque en ese entonces, lo que (losdueños de Oechsle) hicieron mal fueque nadie dio la cara. La empresa,

cuando ya estaba en graves problemas, fue vendida –esa fue unaventa bien rara–, y quien la compró,lo hizo en realidad para manejar lainminente quiebra.

Detalle clave: usted dio la cara, porque a la par que la suya, años después, a raíz de El Niño y la ‘crisis asiática’, muchas otras empresas delrubro textil también se vinieron abajo. Sus únicas opciones eran: dar la cara o recurrir al ‘perro muerto’.Esa fue la opción de la mayoría.Conozco a gente que ahora está bien,al frente de otras empresas, queentonces dijo: “Negocios son negocios:si a mí me va mal –¡piña!–, a ti también”. Yo no. A mí ni siquiera seme podía ocurrir salir a la calle ysentarme en un restaurante, sabiendo que le estaba debiendo a gente… Me sentía ¡tan mal!

Ese es un tema que tiene que vercon la formación.Definitivamente. Detalles como esehacen la diferencia entre una empresa con valores y las demás. Sin

embargo, las que abundan son las de ese tipo, las que te dicen: “¡Piña! ¿Por qué me voy a perjudicar solo yo?”. Conmigo también se portaron así… La gran diferencia está en cómoenfrentas las cosas, porque a todo elmundo le puede ir mal, pero hay quever qué actitud tomas: o te vas pordonde se va la mayoría o… A mí, la verdad, en ese momento me daba vergüenza salir a la calle, me daba vergüenza tomar vacaciones… ¡Cómopodría hacerlo cuando le estaba debiendo a tanta gente!

Hoy es una empresaria reconocida, exporta a varios países de Latinoamérica. ¿Cómo se reinventó?Tuve que empezar otra vez de cero…No sé si soy una empresaria reconocida, pero de lo que sí me siento orgullosa, es que, en ese momento, cuando pasó lo que pasó, yo me senté y enfrenté a la gente. Hablé, les expliqué. Me quedé endeudada por mucho tiempo… Hice mi lista de pagos. Por ejemplo, te podía decir: “Te voy a pagar en diez meses”. Pasaban esos diez meses, a

Socias y amigas. La familia de Viviane Heilbraun fundó Heltex 57 años atrás. Hoy presidenta del directorio, de ella Claudia Páez dice aprender cada día. “Tengo a la mejor maestra a mi lado , afirma.

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“Buscar CULPABLESes facilísimo, pero, ¿asumir uno

su RESPONSABILIDAD?”

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Manos a la obra.Los diseños de Claudia no serían realidad de no ser por Johnny Rivera, Cristhian Llanos y Elmer Árias, cortadores; la auditora de Calidad Janet Florez y Sara Moreano y Zenaida Aquino, jefa de Muestras y costurera, respectivamente.

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veces la gente ni se acordaba, y yo los llamaba: “Ven, tengo tu pago”; yprocedía a tachar a uno más de milista. Eso hizo la diferencia: yo teníaque actuar así, porque a mí me criaronasí. Porque yo podía haber dicho: “Noes mi culpa, se trató de una coyunturamundial…”. Buscar culpables es facilísimo, pero ¿asumir uno su responsabilidad? No hay muchagente dispuesta a eso… Lo hice, y unade las cosas que me daba confianza,era saber que tenía un talento. Bieno mal manejado, pero lo tenía.

Una vez que identificamos nuestro talento, hay que darle con todo; ycon mucha fe, ¿no es así?Tener fe, sí. A mí, lo que me ayudó a salir de esa oscuridad, fue sentarme a conversar con una persona que me

dijo: “Mira, tienes a toda esta genteque te mira, que está dependiendo deti. A cualquier persona le puede irmal, puede quebrar; lo importante esla decisión que tomes: puedes tomareste o este otro camino. Si no enfrentaslas cosas: no vas a salir de esto”.Tenía toda la razón. Una vez quecomencé a enfrentar –“me pasa esto,no te puedo pagar; dime cómo quieresque te pague, dame tal plazo”–, sentí que me iba quitado un enorme peso de encima. Y me dediqué a trabajar, atrabajar y a trabajar; y a lo que mássabía hacer: diseñar. Comencé a hacercolecciones para terceros. Pasé de tener una oficina propia, con local propio, con camionetas, con… a unaoficina de ni siquiera veinte metros cuadrados, a la que yo le decía ‘El closet’; y fueron conmigo cuatropersonas a las que les dije: “No puedo

pagar, pero si confías en mí, ven, piensohacer esto. Voy a empezar otra vezdesde cero”. De esas cuatro personas,dos siguen aún conmigo. Estuvieronsin cobrar dos meses, pero creían enlo que yo podía hacer.

Creyeron en su palabra porque ustedse lo había ganado.Después de todo esto que me hapasado, puedo decir que tu palabra es una de las cosas más importantes que uno tiene. ¡Más que tu talento! Porque yo me he encontrado con gente que no me pagó, y tú las ves,cómo esconden la cara. En cambio, yo puedo mirar a cualquier persona a los ojos y decir: “Mi palabra, vale;mi nombre, vale”. Uno tiene quecuidar su nombre. Eso es más importante que nada.

Si bien su familia no pasó por problemas económicos, desde niña su padre le enseñó que si quería tener algo más, usted misma se lo tenía que ganar. Fue por eso que dechica vendió limonada en la puertade su casa y, ya en el colegio, tambiénproductos de belleza.Mis padres me inculcaron valores queaún tengo, y se los agradezco. Me enseñaron que si tú quieres algo, tútienes que esforzarte para conseguirlo.Algo que ahora se está perdiendo.Ahora, antes de que el niño lo piense,el papá ya se lo está dando. Se estáperdiendo eso de que ansíes algo–tanto, tanto– que digas: “¡Voy a hacerhasta lo imposible por lograrlo!”.

El actual boom económico está matando muchas cosas positivas.Está matando –en los chicos– las

ganas de luchar por alcanzar algo.

Tras quebrar, ¿no pensó en que másfácil era buscarse una chamba y serdependiente?Busqué una chamba comodependiente, pero no quise amarrarmea un horario… En realidad, me buscaron, y en ese momento, eso ayudó a mi autoestima, porque ¿qué pasa cuando sientes que todo te sale mal? Tu autoestima está por lossuelos. ¡Eso es lo primero que tienes que tratar de levantar! A mí meofrecieron trabajo en una fábrica que entonces era una de las más importantes en tejidos de punto, con muy buen sueldo; eso hizo que sintiera: “¡Algo valgo!”… Pero no acepté trabajar a tiempo completo, porque yo necesitaba generar mucho

más para poder pagar mis deudas.

En esos momentos, ¿quién fue susoporte?Mi familia. Mi esposo… Me ponía enla posición de él, que todos los díastenía que escuchar solo malas noticias, malas noticias y malas noticias. Pero él me decía: “Lo vas a poder hacer, lo estás haciendo bien, acepta ese trabajo…”. Mi familia fueun soporte muy importante, y tambiénla gente que se quedó conmigo, quecreyó en mí. Mi autoestima estabaafectada, y yo necesitaba apoyo, queme dijeran: “Claudia, tú puedes, tútienes talento, tú lo vas a conseguir”.Y recuerdo que un día, cuando estaba trabajando en ‘El closet’ (su reducida oficina), recibí una llamada. Habían llegado unos compradores de Chile y les llevé mi muestrario de

19millones de soles que

Heltex facturóel 2011

12%crecimiento que tiene

previsto para este año

25milprendas

que en total confecciona cada mes

150total de personas

a las que da trabajo

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chompas, que era a lo que yo me dedicaba a parte de trabajar para la fábrica de tejidos de punto. Llevé siete modelos, le gustaron. Me dijo:“¿De esta me puedes hacer ocho mil?”.“Sí, claro”. Por dentro, yo decía: “¡Ochomil prendas!”. En una tarde, me hizo el pedido más grande que yo había recibido ¡en mi vida! Y yo ya no teníauna empresa consolidada, así quetuve que tercerizarlo todo… Para mí,eso significó que si podía hacer eso,podía hacer ¡más!

De haberse dejado vencer por eldesánimo, quizás no habría diseñadoesas chompas, y no habría llegado avivir esa experiencia.En trabajos como el mío, tienes que tener la cabeza más o menos limpia

para poder diseñar y vender… Si yono me hubiese recuperado, no habríapodido diseñar ¡nada! Ahí hubiera terminado todo. Lo que pasa, es queyo había caído tan abajo…

¿Que más no podía caer?Ya había llegado a lo más bajo encuestión de autoestima.

Se sabía derrotada.Ya había perdido. Ya no había más…Ni siquiera veía cuál podía ser lasolución. Pero ahora te digo: Siemprehay soluciones. ¡Siempre! Hay un dicho muy cierto: la noche es más oscura justo antes del amanecer.

Nada es gratuito, ¿no? Uno cosechalo que siembra.

¡Siempre! Yo aprendí que si cuidas tunombre, si das la cara, si tratas bien a la gente, después vas a recibir. Meha pasado: me he encontrado congente que me ha dicho: “Tú trabajasteconmigo, tú me dijiste esto, tú meayudaste, no me abandonaste comolo hicieron otros…”. Esto me lleva apensar que una persona exitosa no sehace de la noche a la mañana, estoimplica mucho sudor y esfuerzo…Por eso, tienes que cuidar tu nombre.

Hoy, una de sus marcas lleva lassiglas de su nombre.Sí.

¿Cómo se siente?Creo que me siento bien… Ya no digo:“Esto es a lo que aspiré”, sino “esto es

Equipo. Además de Shyla García y Rita Pisco en Ventas, Heltex destaca en el

mercado gracias a la labor de Roxane Arce, gerenta Administrativa; Gissella Torres,

jefa de Exportaciones-Importaciones; y Erika Torres, jefa de Compras.

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un camino, y esto que estoy pasando es parte del camino”. Si tengo que detenerme en cuál fue mi error de juventud, creo que fue la soberbia: “¡Ya llegué a lo que quería! ¡Soy lomáximo!”. Entonces no tenía sentidode la autocrítica. No pensaba: “¿Y si meva mal?”. ¡A mí no me podía ir mal!

Golpe enseña, si uno lo permite.Yo ahora tomo lo que me tocó vivir como el MBA más caro de toda mi vida. Ya, pues, el aprendizaje me costó caro, pero fue un aprendizaje.

¿Desde entonces no ha vuelto acometer errores?Los cometo todos los días.

¿Adónde están llegando ahora sus

prendas?Tengo puntos de ventas en Colombiay Ecuador, estoy abriendo mercados en Centroamérica. Mi meta es elmercado latinoamericano, con marcas propias.

¿Hoy agradece el golpe que recibió?Sí. Aunque fue demasiado fuerte (ríe)… Me enseñó muchísimo. Ya nome siento invencible, sino vulnerable,porque las cosas pueden ir bien o mal.

O sea, no hay que tenerle miedo aquebrar.No debemos tener miedo a que las cosas vayan mal. En un negocio no todo va a marchar siempre bien. Nole podría decir a alguien: “No tengasmiedo a quebrar”, sino: “Cuídate,

protégete, da los pasos con mayor seguridad”. Además, estamos en unpaís al que le está yendo bien, ahorita. Recién en los últimos añoshe comenzado a ver cierta estabilidad, pero yo vengo de habervivido y crecido en crisis: la época delos militares, del terrorismo… Soy deesa generación que no conoció unpaís estable. Esto recién se está viendo en los últimos años, pero yaaprendí que no puedo confiar en eso, porque las cosas son cíclicas. Sobretodo en países como el nuestro.Debemos protegernos: tener un salvavidas. Si te agarran desprevenido, los dañospueden ser más graves. Me pasó a mí, no medí la magnitud del daño sino hasta que ya estuve en el fondo.

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PORQUE TODA HISTORIA DE ÉXITO ENCIERRA TAMBIÉN TROPIEZOS, FRUSTRACIONES Y DESENGAÑOS, CLAUDIA NOS CONFIESA HECHOSQUE –A LA LARGA– LE SIRVIERON PARA CRECER

Los erroresque cometí

CREER QUE LO SABÍA TODO. La juventud e inmadurez me

hicieron sentir invencible. “A mí no me va a pasar nada”, creía. La experiencia me ha enseñado a ser más cauta, a analizar mejor las cosas, pedir consejos, reconocer que nunca vas a llegar a saberlo todo y que, todos los días, vas a aprender algo nuevo.

NO HABER HECHO NINGÚN ESTUDIO DE MERCADO NI ANÁLISIS

PREVIO ANTES DE ARMAR EL NEGOCIO. Fue como andar a ciegas, sin saber exactamente cómo eran mi mercado, los precios, los márgenes, la rentabilidad, etc.

NO HABER PREVISTO TODOS LOS RIESGOS. En el negocio de la

ropa hay que tener en cuenta factores como el

clima, las crisis –políticas y económicas– tanto nacionalescomo en el exterior. Otros riesgos posibles son el incumplimiento de los proveedores y de los clientes.

NO REACCIONAR CON RAPIDEZ. Cuando estuve en problemas,

tardé en tomar consciencia de que todo se estaba cayendo. Fue tal la sorpresa, que me quedé estática.De haber reaccionado más rápido, el daño quizás no habría sido tan grande. Sin embargo, aprendí que las caídas fortalecen y que, sobre todo, enseñan; que así las cosas se vean negrísimas, siempre hay una luz, un camino, una salida; y que a los verdaderos amigos los vas a conoceren esas circunstancias, y ello llevará a que la amistad se haga aún más fuerte.

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El buen nombre de Claudia Páez

Nuestro nombre, que si bien cual diamante en bruto puede dejar apreciar su valor antes de ser pulido, se hace aún más valioso en su cuidado mismo.

Para Claudia, el nombre es su intangible más importante y provechoso, y en ello radica la razón fundamental por la cual preserva tanto el suyo. Para ella, cuidar su nombre significa honrar su palabra.

Según el político inglés Benjamín Disraeli, las circunstancias están fuera del control del hombre, pero su conducta está siempre en su poder. En medio de la crisis económica y financiera de finales de la década de los noventa, que sumándose a los efectos del Fenómeno de El Niño en el país, afectó a nuestras economías emergentes, se descubre Claudia –al igual que muchos otros empresarios– sin capacidad para producir ni para dar respuesta a sus obligaciones de pago. Se descubre Claudia, y a diferencia de muchos otros, afrontó la realidad con hidalguía, dando la cara, diciendo hoy no puedo pagar pero lo haré luego. Y siempre cumplió.

Sin importar cuán difícil resulte dar cumplimiento a la palabra, Claudia Páez estableció compromisos por los cuales estaba dispuesta a postergar y a sacrificar satisfacciones propias, a arriesgar y a volver a empezar. No actuó orientada por el común denominador del entorno: buscar culpables y excusas para no cumplir. Esta forma de proceder es un ejemplo claro de autogobierno, condición sine qua non para gobernar a otros, conducir una familia, liderar una empresa.

La satisfacción inherente a la palabra cumplida confiere, además de la confianza ajena, la confianza en uno mismo y la convicción de valía personal. Factores claves todos ellos para impulsar con éxito un proyecto.

Desde una perspectiva psicológica, lo que Claudia nos enseña es que así como se debe transparencia a la comunicación con el otro, toda persona se debe consigo misma el sinceramiento total, pues es la única manera de tomar conciencia de las limitaciones y definir bases reales para el desarrollo consistente, para mejorar y para hacer valer las experiencias de aprendizaje. He quedado convencida de que Don Miguel de Cervantes Saavedra tuvo en su día la oportunidad de apreciar una experiencia similar a la de esta empresaria peruana para sentenciar: “Más vale el buen nombre que las muchas riquezas”.

IBETHANGULO

Directora académica de la Escuela de Posgrado de la Universidad Tecnológica del Perú

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mi lado B

Cómo lo conseguí

(parte 2)

INÉS TEMPLE (CEO de LHH - DBM)

opiniones

ueron miles de llamadas, faxes (en 1993 no había aúne-mail), cartas y visitas a

potenciales clientes. Fueron muchassalas de espera, reuniones ypresentaciones.

Fueron meses y meses hablán-doles a todos de lo mismo: las ventajas de apoyar a la gente a recolocarse, el derecho de tener un despido respetuoso y losbeneficios de apoyar a gente a tener empleo nuevo. Todos eranbeneficios en los que yo creía y creo firmemente, pero parala mayor parte de la gente conla que hablaba re-sultaban inauditos. Yo sabía lo que quería y tenía convicción en este negocio, pero empezarno fue nada fácil.

¿Quién iba a pagar para ayu-dar a recolocarse a quien pensaba despedir? ¡Erauna locura! Mis amigos mepreguntaban por qué dedicabatiempo y energía en tratar de convencer a las empresas de com-prar algo que no tenían ideaque existía –y por lo tanto nonecesitaban–, no les interesaba,¡ni querían pagar!

Así pasaron cuatro meses. Nada. Yo seguía pidiendo citas, visitando

a futuros clientes, y nada. Bueno,sí: las cuentas se iban acumulando mientras yo seguía tratando de sacar este sueño adelante… Hasta que visité una muy importante firma de consultores donde un señor de aspecto sabio, me dijo:“Qué interesante. Sé que mi firmaha trabajado en otros países conustedes, pero no sabía que su servicio se brindaba en el Perú. Justo ahora tenemos a cuatro jóve-

nes brillantes, pero que no tienen el perfil que queremos. Vamos a dejarlos ir y me gustaría que los ayuden a diseñar un plan de carrerapara su siguiente paso”.

Ese primer contrato pagó las cuentas atrasadas y también las de los dos siguientes meses, porquepermanecimos sin clientes untiempo más, hasta que el sétimo mes apareció otro; el siguiente,

dos más; y, el otro, ¡cuatro más! Así, contra todo pronóstico, acabamos el año en azul (aunque no me pudepagar un sueldo decente a mí misma sino hasta el segundo año).

No fue nada fácil, pero la fe en construir un negocio rentable y que a la vez ayudase a la gentehizo que al final lo lográramos. También la perseveracia y la negativa total a fracasar, pese a loque los demás pensaran; lo cual,por el contrario, me daba ánimo a seguir, mes a mes. Además fue clave eso que yo llamo “hambrede éxito”, que es ese fuego interno

que te sacade lacama por las ma-ñanas no solopoque tienes –sí o sí– que pagar las cuentas y elcolegio de tus hijos, sino porque sabes que no tienes más opción ¡que triunfar!

Y aquí estamos, en el Perú –conuna gran convicción, mucha pasióny el mejor equipo–, casi 20 añosdespués, en la que es la oficinamás grande de Hispanoaméricaen el rubro, y convertidos en el modelo a seguir para las oficinasde los otros 65 países dondela empresa opera. Esta es mi historia…

Te invito a construir la tuya.

“Porque sabes que no tienes más opción ¡que

TRIUNFAR!”

F

SONIA LÓPEZgerenta de Reservaciones de American Airlines

“Estoy lista paraenfrentar

al mundo desdedonde sea”

la ejecutiva

ES PIEZA CLAVE EN UNA AEROLÍNEA EN CRISIS Y LIDERA UN EQUIPO

DE 200 PERSONAS QUE ESTÁ DANDO BRILLANTES

RESULTADOS. NO SE RINDE, TAMPOCO LO HIZO CUANDO TRAS ENVIUDAR

TUVO QUE HACERSE CARGO DE SUS CUATRO

HIJOS (ELLOS LA ADMIRAN)

FOTOGRAFÍAS XIMENA BARRETO

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El 90 falleció el papá de sus hijos…Enrique.

Al dolor que ello implicaba se sumóel hecho de tener que asumir sola lamanutención de cuatro chicos enedad escolar.Ese fue un cambio tremendo en mivida. La muerte te cuestiona tantísimascosas… Yo tenía un año de separada de Enrique, y en ese momento dije: “¡No debiste haberte muerto! ¡Por qué mehas hecho esto! ¡Regresa para volver a amistarnos!”. Pero ya era muy tarde.Tenía un reto, y me comprometí ante éla que estos chicos iban a salir adelante,y creo que ellos están excediendo mipromesa, porque mis cuatro hijos sonmaravillosos.

Son cuatro tigres.Los cuatro son unos tigres.

Uno es director de un diario, los otros son ejecutivos de Repsol, 3M y Kimberly-Clark, nada menos.¡Sí! Me siento inmensamente orgullosa.Los chicos crecieron con mucha libertad para que pudieran elegir sus opciones, y creo que eso es lo que los ha hecho tan exitosos, porque les

permitió ver el mundo con los ojos abiertos, como ellos me lo hicieron saber en un certificado de excelencia que alguna vez me entregaron.

¿Cómo es eso?Me entregaron una foto de ellos, queera un ‘certificado de excelencia’ quedecía: “Por enseñarnos a soñar con losojos abiertos”.

¿A propósito de qué?Era mi cumpleaños. Cumplía 50. Supongo que no tendrían plata (ríe), y decidieron que esa era una bonita manera de hacerme feliz… Y lo lograron. Ahí está, en un lugar muy especial de la casa… Así crecieron ellos: con mucha libertad y con elsoporte de toda mi familia.

Había vuelto a la casa de sus padres.Estaba en la casa de ellos, no pensabaquedarme. Estaba en transición, perola vida me obligó a quedarme, quefue lo mejor que me pudo pasar,porque tuve a todo ese grupo desoporte. ¡Mi familia es de guerra!Son increíbles, y me ayudaron a sacar a estos muchachos adelante.Sobre todo, mi padre.

SONIA ÁUREALÓPEZ BORRAESTUDIOS

Colegio San Jorge de Miraflores. Tras hacer un año de Traducción

en la Ricardo Palma, dejó la universidad a los 18 años porque se casó y comenzó a trabajar.

EDAD 57 años.

CARGO Gerenta de Reservaciones

de American Airlines.

U OFICINA es realmente pequeña. De estar ubicada en otra área, podría ser mucho más amplia, pero Sonia López decidió ubicarse a un paso de su equipo, los doscientos

chicos y chicas que integran el call center de American Airlines que, desde Perú, brinda atención a sus usuarios de todo Sudamérica, México y el Caribe.

En noviembre del año pasado, esta aerolínea, un ícono de la industria del país de Mickey Mouse, se acogió a la Ley de Quiebra de EE.UU. Había acumulado una deuda de US$ 29.550 millones.

Desde entonces ha reducido personal, está simplificando su flota, haciendo más eficiente el manejo del combustible. Es una empresa aérea preocupada por no perder altura, y para ello, su personal abordo –sus ejecutivos y colaboradores– es fundamental.

Sonia López está al timón de la gerencia de Reservaciones, y no le teme a las tempestades. En realidad, ella tiene harta experiencia en ello.

>

S

Reservaciones. Desde Lima se atienden llamadas para toda la región, incluso

aquellas en portugués que son para Brasil. Mariella López y Aurora

La Vera son parte de las doscientas personas que integran este equipo.

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Su papá era dentista, tenía su consultorio frente a la Plaza MancoCápac y solía ocurrir que no lecobraba a sus pacientes.Mi papá era algo fantástico. Era de Samne, que está a una hora de Trujillo, y en algún momento su familia perdió todas sus tierras. Suspapás lo mandaron a estudiar a Trujillo y después a Lima, donde sehizo dentista; y yo recuerdo que de niña, para 28 de julio, hacíamos galletitas, íbamos a Samne y las repartíamos a la gente. Llegábamos, y nos esperaban con banda de música, eran tres días de retreta por el regreso de los ‘hijos pródigos’ –mi padre y su hermano– que llevaban ayuda humanitaria para lagente pobre. Hechos como ese nos

marcaron mucho a mí y a mis hermanos, y ese norte se nos quedó, porque hace veintiocho años, por ejemplo, aquí en American Airlines yo creé un grupo que se llama Logremos una Sonrisa; y hemos trabajado para brindar ayuda a una infinidad de institutos que trabajan con niños. Una de las últimas cosasque hicimos fue conseguir más de uncentenar de bicicletas usadas; las reparamos y las fuimos a donar aAcobamba para que los niños tenganen qué ir al colegio. Acciones comoesa son el resultado del ejemplo que te sembraron de niño, y que note abandonan más.

Bacán, pero eso es hoy. Volvamos alpasado: usted le promete a Enrique

sacar adelante a sus muchachos, pero era 1990: el Perú estaba encrisis. Igual, lo logró. ¿Qué tanbravo fue?Fue muy difícil. Muy difícil desde el mismo hecho de tener que decirle a tus hijos que su padre ha muerto. En algún momento, yo me decía: “¡Por qué no se invirtieron los roles!”. Además: yo, mujer; mis hijos, hombres. Iban a perder el modelo de hombre, de padre. Pero de repente te sale un valor oculto –que ni siquiera sabías que lo tenías– que te hace enfrentar la vida; y además tienes ese amor inmenso por estas criaturas que tú trajiste al mundo, a las que de ninguna manera vas a dejar abandonadas… Tienes muchas misiones que cumplir: tienes que

Atención. En el call center se trabaja en turnos rotativos las 24 horas del día, los siete días de la semana. Vemos a Sonia López junto a Sandra Ajito, Paola Pretto y Marinor Vega; lo mismo que con Rudy Aliaga y Mili Tabja, coodinadores de Información y Automatización y de Proyectos Internacionales, respectivamente.

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ser un ejemplo para ellos porque tienes que hacer de papá y de mamá, y sacarlos adelante; y además tienes que hacerles entender que el mundo no es un lugar de muerte y tristeza, que también puede ser maravilloso.

Ya había ocurrido, no quedaba másque tirar para adelante.Y no tenían que sentirse huérfanos ni víctimas ni incapaces.

Ese detalle es clave, porque tendemosa enfrascarnos en la parte negativa,en el dolor, y no salir de ahí.Y pensar que alguien se tiene quehacer cargo de ti, ¿no?

¡Así es!La vida es un viaje de soledad…

Incluso para ellos, porque, está bien,soy su mamá y estoy para aplaudirlos,para darles mi apoyo, pero yo no puedo vivir la vida por ellos ni lespuedo evitar el sufrimiento.

¿Pasó por su cabeza volverse a casar? ¿Encontrar un tipo con una buena situación económica?No. Sí, años después, hubo un intentoque lamentablemente no funcionó, porque así perdí a mi mejor amigo. Me casé con mi mejor amigo, pero sibien no funcionó, me ayudó mucho en mi proceso con los chicos. Él tampoco tenía plata, pero me ayudó porque se atrevió a hacer cosas queyo no hubiera podido, como ‘ruletear’las tarjetas de crédito, por ejemplo(ríe)… Siempre se lo agradeceré,

“De repente te sale un VALOR oculto –que ni siquiera sabías que lo

tenías– ¡que te hace ENFRENTAR la vida!”

porque eso les permitió a mis hijosacceder a una universidad como la UPC. Los cuatro estudiaron ahí, poreso yo siempre digo que por lo menosunas columnas de esa universidad, me pertenecen (ríe más)…

Otro detalle clave, porque les pudo haber dicho: Chicos, no hay plata, a postular a una universidad estatal.No tengo nada contra la universidad estatal, pero lamentablementesabemos que la educación en nuestro país es tan difícil, que una universidad nacional te puede permitir una carrera en más tiempo del debido, mientras que al otro lado podías estar cosechando frutos desde más temprano; y yo,como todo padre, quería lo mejor para mis hijos. Claro, todo iba adepender de cómo se fuese dando la vida, pero los chicos eran estupendos estudiantes –¡eranuna inspiración!– y yo tenía que hacer lo que sea para conseguir que ellos siguieran adelante.

Entró a la universidad en octavo puesto, pero al año tuvo que dejarlapor un tema económico, y se pusoa trabajar.Trabajé en paralelo a la universidad.Yo dejé el colegio en diciembre, y enenero ya estaba trabajando, en elaeropuerto, en lo que entonces eraBraniff.

¿En qué área?En el counter, aunque mi aspiración era volar. Yo quería ser hostess, pero cuando me tomaron el examen, me

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dijeron: te sobra peso, te falta talla y te falta edad. ¡Yo tenía 17 años! Y créeme que me hicieron un favor, porque quizás estando en vuelo no me habría quedado tanto tiempoen esta parte de la industria, que es tan rica, tan llena de matices.

Pertenece a una empresa que se haacogido a la Ley de Quiebra en EE.UU.,que está luchando por salir de lacrisis…Una empresa guerrera, sí; y ha sidouna experiencia maravillosa, porquehemos visto cómo a lo largo de estosaños nuestra empresa ha luchado tantísimo por salir adelante; y loestamos logrando. Este año ha sidoquizás el más difícil de toda mi carrera. Yo he hecho una carrera enaviación. Son 38 años, y en este último me he sentido honrada detrabajar en esta empresa, porque sibien se ha ido mucha gente valiosa–una pena por nosotros, pero eligieronotro rumbo–, estamos saliendo. Esteha sido un año de reestructuración. Todos estamos trabajando para quela compañía salga a flote, y esperamosque así sea.

Ha hecho carrera en algo para lo quenunca estudió.En la época en la que yo entro aaviación no había las carreras deaviación que hay ahora. Era algoempírico, y yo he ido desde lo manual –desde casi la Edad de Piedra de la aviación– hasta lo tecnológico. La sinergia que se hagenerado con el ingreso de gente joven a nuestras filas ha sido maravillosa, porque nos ha dado la oportunidad –a los mayores– de aprender de las nuevas generaciones todo lo que tenían para entregarnos; y a estas, a la vez, de aprender de nuestra experiencia. Hemos crecido juntos, dándole giros al departamento de Reservaciones: se creó el departamento de Automatización, se comenzaron aemitir boletos electrónicos, aparecióla página web… Diferentes situacionesque nos han obligado a crecer.

Si la empresa está en problemas yusted es una persona con tanto talento y experiencia, ¿no era más

Parte del equipo. De izquierda a derecha: Marinor Vega, Sandra Ajito, Paola Pretto, Patty Sugimaru, Erika Yamakawa, Mariella López, Mili Tabja, Ursula García, Josan Méndez, Tami Adaniya, Lucienne Castagnetto, Sonia López, Oscar Effio, Meche Morales, Marco Schenone, Giannina Bolognesi, John Azama, Rossana Arias, Rudy Aliaga y Karla Vega.

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“Todos ESTAMOS trabajando para

que la COMPAÑÍA salga a flote”

Vuelan alto. Diana Nakasone, coordinadora de Operaciones de Reservas, es el brazo derecho de SoniaLópez. También son claves: José LuisCastro, Tami Adaniya, Giannina Bolognesi, Erika Yamakawa, Meche Morales, Oscar Effio, Violeta Ayllón, Lucienne Castagnetto y Josan Méndez.

“Enamorarte de tu

TRABAJO significa que

también te ENAMORAS de la GENTE

con la quetrabajas”

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sencillo buscar otro empleo?¿Irme a otro rubro?

No, a otra aerolínea.De haber tenido otra oportunidad, tendría que haber sido dentro de este contexto laboral; y de ser así, no sé si lo habría considerado. Yo he estado enamorada de mi trabajo, ¡siempre! Desde que entré, desde el primer día; y enamorarte detu trabajo significa que también te enamoras de la gente con la que trabajas. Entonces, ¿dejar este grupo humano, en el que tantohe sembrado? Hubiera sido muydifícil… Quizás si se tratase de unproyecto personal –que lo tengo–,pero, ¿irme a otro lado? No. No lohabría hecho.

El proceso de reestructuración haimplicado despidos masivos. Ledebe haber tocado despedir gente. ¿Qué tan difícil es eso?Ha sido una experiencia muy enriquecedora. Trabajé las negociaciones de cada uno de elloscomo si fuesen para mí misma. Quizás ahí ha radicado la diferencia: tratar a cada ser humano con todo el respeto que se merece, portodos los años que le ha dado a laempresa… Quiero pensar que, alfinal, fue positivo para todos aquellosque ya no están con nosotros. ¡Fuemuy difícil! Y lo fue porque somosuna familia.

¿Teme que la echen?Para nada… Eso depende de tu filosofía de vida: yo pienso que las cosas te van a ocurrir cuando te tengan que ocurrir. Ni un día antes ni un día después. Entonces, estoy lista para irme, pero igual he estado lista hace diez años. O sea, si la empresa me hubiera dicho en algún momento: “Hasta aquí llegó”; yo hubiera estado inmensamente agradecida por lo que me han dado. No tengo ningún miedo, me siento muy capaz, muy agradecida de toda la preparación que me han dado. Creo que estoy lista para enfrentar al mundo desde donde sea que tenga que hacerlo.

Y esa filosofía de vida, consciente

o inconscientemente se la ha transmitido a sus hijos.Quizás más inconscientemente, porque no es que hayamos tenido grandes conversaciones al respecto.

La vida es tu mejor ejemplo. Cuando tú eres una persona trabajadora, trabajas, ¡no estás durmiendo lasiesta! El trabajo lo vives.

Eso es precisamente lo que me comentó uno de sus hijos: que las lecciones que ha aprendido de usted no le fueron transmitidas a través de palabras, sino de su ejemplo.Me da orgullo escucharte decireso… Me emociona. ¡Es que eso es lo que espero, en realidad! Espero que el día que me muera, me reconozcan como una persona que estuvo de servicio para todo el que vino a tocarle la puerta; que ha trabajado, y lo he hecho muy duro porque el trabajo es una formamuy linda de vivir. ¡Sea lo que seaque tú hagas! Trabajar es honrarla vida.

Interesante, porque la iglesia católicadice: “Ganarás el pan con el sudor detu frente”, confiriéndole al trabajola idea de pesar.¡No! Es una alegría, ¡una felicidad! Yo siempre digo: Tú no puedes abrir un paréntesis en tu vida y decir: ‘me voy a trabajar’; cierro paréntesis: ‘ya llegué de trabajar’. ¡No! Tu vida está transcurriendo mientras tú estás trabajando. El trabajo es parte de lo que te hace crecer, de lo que te hace ser una mejor persona. Mis hijos sabían que mamá estaba trabajando y que, el trabajo de ellos, era en ese momento estudiar.

Entonces, tenemos que hacerle un monumento a Susy Díaz por su: “Vive la vida y no dejes que la vidate viva”.(Ríe)… Es, simplemente, vive la vida. Vívela intensamente, con mucha libertad, con mucha armonía, procurando el bien, el servicio. La gente malentiende qué es el servicio. Uno está sirviendo todo el tiempo, el universo te está sirviendo a ti, tu cuerpo te está sirviendo… Si tú sirves a tu familia,y tu familia te sirve a ti, no te sientes utilizado, no sientes que alguien te esté viviendo, simplemente estás disfrutando lo que la vida te ha dado en este proceso maravilloso que es el vivir.

342millones de dólares

que registró en ventas el call center

durante el 2011

3.000boletos emitenen el call center

a diario

1.200llamadas que en

promedio responden cada 24 horas

1991año en que American Airlines llegó al Perú

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aprendiendo a aprender

n mis columnas pasadas he usado muchas veces la pa-labra feedback o retroalimen-

tación, refiriéndome a los mensajes que permiten aprender y desarro-llar el potencial de las personas.

En la mayoría de las organiza-ciones, sin embargo, no se practica con eficacia. Es más, a mayor cargo, menos feedback se recibe. El común de las personas está más dispuesto a decirle sí en casi todo al líder, perdiendo este el sentido de la realidad y la oportunidad de crecer.

El feedback es un regalo, recibirlo me ha permitido ensanchar mi vi-sión y darle luz a mis puntos ciegos. Por eso el reto es alen-tar a los demás a brindar este regalo. No hay feedback negativo ni positivo. Siem-pre es apren-dizaje. ¿Cuál es la fórmula que mejor funciona?

Días atrás, uno de mis clien-tes más jóvenes (30 años) y con altísimo potencial, Miguel Ángel, me contó con gran alegría: “Me han promovido a una jefatura, y de no manejar formalmente ningún equipo, he pasado a ha-cerme cargo de 350 personas”.

Tenía el reto de alinear su in-tención con el impacto que quería lograr al dar retroalimentación. Solía hablar mucho y ser franco

sin filtrar, sin detenerse en el cómo. Su reto era no hacer juicios, no interpretar, tampoco dejar pasar las ocasiones para dar feedback. Cuando le pregunté por el factor que ha impulsado su carrera de manera tan impactante, me res-pondió: “Pedir feedback constante sobre mi desempeño, tanto en mi trabajo en equipo como en

mi relación con mis colegas, jefes, clientes. Cuando me he encontrado con personas dispuestas a tomarse el tiempo, he aprendido mucho, porque mi naturaleza es de apren-dizaje constante”. Miguel Ángel me soltó una frase maravillosa: “No soy experto en nada, solo en apren-der rápidamente lo que no sé”.

“Mi actual jefe es una persona de aspecto intimidante –me contó-, a tal punto que las personas se quedan en el umbral de la puerta, inseguras de pasar o no. Fui a un

viaje de trabajo con él, y me inte-rrumpió constantemente durante una presentación, restándome liderazgo. Era importante que la audiencia confiara en mi capacidad, y él no me lo estaba permitiendo”.

Le pidió unos minutos para con-versar, y le dijo en tono sereno: “En la reunión me has interrumpido alrededor de cinco veces, eso me ha hecho sentir que no confías en mí. Además noté que el equipo estaba confundido respecto a mi rol. Te comento esto porque es posible que no te des cuenta, y me gustaría saber qué piensas sobre esto que

ha pasado”.¿Qué hizo

Miguel Ángel que fue efec-tivo? Le dio el contexto, el cuándo y el dónde; también el comporta-miento que

observó y, finalmente, el impacto en él y en el equipo. No usó adjetivos ni juzgó a su jefe. Es decir: intención e impacto, totalmente alineados.

Miguel Ángel me ha contado que su jefe ahora está delegando

mejor, mostrando confianza en su equipo y soltando el control…

Como ven, el feedback es un regalo maravilloso e invalora-ble. Es Navidad. ¿Qué tal pedirlo como regalo o brindarlo?

E

“No hay FEEDBACK negativo ni positivo.

Siempre es APRENDIZAJE”

El regalo del feedback

MILI ARELLANO (coach ejecutivo y trainer internacional)

opiniones

miliarellano@blossomlead.com

ANA QUIROZdirectora del José Antonio Encinas

la emprendedorasocial

HA REVOLUCIONADO EL COLEGIO AL QUE30 AÑOS ATRÁS LLEGÓ COMO PROFESORA. ENTONCES LADRONES Y FUMONES DEAMBULABAN POR AHÍ EN PLENA CLASE. HA VENCIDO LA VIOLENCIA CON AMOR, CON BAÑOS LIMPIOS HA DEVUELTO LA DIGNIDAD

“¡Todos queremos

que alguiennosabrace!”

FOTOGRAFÍAS XIMENA BARRETO

POR ANTONIO ORJEDA

ANA BERTHAQUIROZ BALLÓN ESTUDIOS

Empezó en el colegio 680, de mujeres Lo concluyó en la G.U.E. San Juan, ambos en San Juan de Miraflores.

Docente licenciada en Psicología y Geografía por la Universidad Enrique Guzmán y Valle, La Cantuta.

EDAD 57 años

CARGO Directora del colegio

José Antonio Encinas, coordinadora de la Red Educativa de la UGEL 01 y fellow de Ashoka.

Una más. La directora junto a Marcos Rodríguez,

Guillermo Palacios, Sophya Paz, Sady Lucana y Jean

Oblitas. Ana Quiroz alentó a sus chicos a que ellos

mismos eligiesen y diseñaran el uniforme escolar que

hoy los identifica.

N PAMPLONA ALTA existe un colegio admirable. Hasta él han llegado altos funcionarios de organismos inter-

nacionales para constatar si es cierto eso de que en una zona donde la violencia y la falta de recursos económicos cunden, es posible forjar ciudadanos de primer nivel. Cómo

será de cierto, que el modelo instaurado en el José Antonio Encinas es hoy replicado en cientos de escuelas de todo el

país. Ana Quiroz, directora y artífice de esta maravilla, solo sonríe, y no deja de afirmar que su secreto es el real amor

por sus chicos. El Sutep y demás lastres, no van con ella. Reclama, eso sí, un mejor sueldo para el maestro peruano, pues conoce a un sinnúmero de colegas que como ella luchan por –pese a todo– transformar vidas.

E¿Qué es lo peor de ser maestro en elPerú?No encontrar la oportunidad para desa-rrollarse en la escuela… Eso tiene quever con las relaciones interpersonalesde los maestros –llegar a un ambientehostil–, con el tiempo eso deteriora lasalud emocional: los lastima, losconfronta, los limita en sus hogares…Esa es la carga con la que muchas vecesviene a trabajar un maestro.

Usted tiene treinta años en elmagisterio. ¿Por qué continúa entonces?Hago cosas que alimentan mi espíritu. Por ejemplo, todas las mañanas –a las seis– salgo a correr. Así boto la mala onda y llego sana a mi escuela.

¿Cuánto corre?Le doy diez vueltas al estadio del IPD de San Juan de Miraflores. Cuando me quieren decir algo, saben que estoy ahí,y mientras corro me hablan…

Mismo Ollanta Humala.¡Sí! (ríe)… Eso me hace mucho bien;también comer sano.

Egresó el 81 y, un año después, llegó a este colegio nacional como maestra. ¿Cómo era entonces el Encinas?Cuando llego, el 31 de mayo de 1982, la escuela estaba rodeada de basura, había mucha indolencia: la escuela estaba sucia, pintarrajeada –con las pintas de esa época, de Sendero

Luminoso–, no había control de nada… No había una buena organización, sedesperdiciaban los recursos.

¿Tenía ya esta infraestructura?No. Era una construcción hecha por losmismos padres de familia, sin ninguna planificación: aulas por aquí, aulas porallá; tenía un cerco perimétrico, perolos ladrones y fumones lo pasabancuando querían. Todo eso afectaba latranquilidad de la escuela, los maestrosse asustaban al ver que ingresaba gentede malvivir.

Recién egresada, ¿no le daba miedovenir a enseñar?¡Por supuesto! Venía sudando frío, pero una vez que cruzaba la puerta principal, decía: “¡Ya estoy en mi escuela!”.

¿Cuántas veces le han robado?Nunca. Treinta años en esta escuela,y nadie me ha tocado.

¿Por qué?Cuando paso, la gente me dice cosasbonitas… “Directora, cómo está. ¿Tantarde se va a casa?”; y me observan,me cuidan, me dicen frases muyhalagadoras.

¿Cómo se ganó el respeto?Siempre he sido una buena maestra, he trabajado con mucha dedicación, y creo que mis alumnos han sido los mejores vendedores para que la gente sepa >

quiénes somos. Ellos hablan con sus familias, y las familias, losbarrios, se pasan la voz.

Siendo maestra, veía cómo muchosde sus alumnos se quedaban dormidos en plena clase, y no eraporque no quisieran atender: estaban desnutridos.Cuando llegamos acá, muchas cosas andaban mal con los niños: su salud estaba muy quebrada. El problema era la mala nutrición.

Usted y otras colegas queríanhacer algo al respecto, pero sudirector no las respaldaba.A la hora de recreo conversába-mos: “¿Qué vamos a hacer? ¡Miralo que está pasando!”. Los niñosse dormían, sus caritas tenían manchas blancas, igual que susuñitas, ¡por la desnutrición! Estaban llenos de parásitos, aveces los encontrabas en el patio:mientras jugaban yaces, se lessalían…

Por el anoSí, unas lombrices redondas. Esome impactó. Me enderezó la vida. “No puede ser –dije–, esto es demasiado”. Entonces, un grupodijimos: “Dejemos de hablar, ¡hayque hacer algo!”. Sacamos ollas

de nuestras casas, comida, y leshacíamos tallarines, papa a lahuancaína, quinua…

Eran los 80, para entonces el maestro ya estaba mal pagado.Siempre lo ha estado.

Si era así, ¿por qué lo hacían?Eso viene contigo: tu condición de servicio. Los que realmente somos maestros, tenemos dentroel querer servir a los demás.Con ese grupo de profesoras decidimos cocinar, y terminába-mos llenas de tizne (ríe) porquecocinábamos con leña y kerosene…Un día nos vio una amiga, nos tomó una foto y nos prometió: “Mis hijos estudian en Suiza, lesvoy a mandar estas fotos”.

¿Quién era ella?Una chica que trabajaba en unaONG, a la que le conmovió ver loque hacíamos por los chicos. En Suiza sus hijos organizaron unconcierto de violín y, lo recaudado,nos lo enviaron. Compramos una cocina, ollas, y así empezó a funcionar nuestro comedor.

¿Y el director?Decía que no era pertinente, quela escuela no era una casa.

“Los que realmente somos

MAESTROS, tenemos dentro

el querer SERVIR a los demás”

>

El 95 usted se presentó a concursopara tentar la plaza de directora, ocupó el quinto lugar.Sí, para entonces tenía dos años acargo de un programa especializadoen la Ciudad de los Niños, que es unalbergue para niños abandonados. Eso marcó mi vida, porque me enseñaron a trabajar en equipo, me

organizaron; me enseñaron a darle énfasis a trabajar con transparencia, con la verdad, a ser sana…

Eso la animó a postular.Claro, porque dije: “Con todo lo que he aprendido en la Ciudad de los Niños, yo puedo ser la directora (delEncinas) como he soñado, y puedo

transformar vidas”.

Por haber ocupado el quinto puesto,tenía opción a elegir el colegio enel cual trabajar.Cualquier colegio, pero yo sentía queesta era mi escuela, que yo debía volver. Había muchos niños abandonados, mucha desgracia,

>

mucha desorganización. “Si yoretorno –decía–, puedo hacer muchascosas buenas”.

Y empezó su revolución desde losbaños.Por ahí. Todos los procesos quese han dado en la escuela, hansido procesos educativos. Para transformar la vida de los niños,de las personas, tienes que educar.

Se trataba de baños que estaban colapsados: los orines, las heces,rebalsaban…Descuidados, sin mantenimiento. Se trataba de un espacio al quenadie le daba importancia porquetoda la atención estaba puesta enla cara: en la fachada del colegio, a la que incluso le habían puesto mayólicas… Pero, para mí, el lugarmás importante, y que implica respeto, son los baños. Se trata deun lugar donde el niño va a estar encontacto con su cuerpo. ¡Tenían queestar impecables! Y lo entendieron los padres, los trabajadores, y losniños también. Iniciamos sesiones para enseñar cómo usar el baño,dónde echar el papel…

Y los chicos se convirtieron en losmaestros de sus padres.Así es. Un niño que vive en limpiezay orden, regresa a casa y dice: “Mamá,así no”. Así sus casas están más limpias, más ordenadas…

Tres años después, la Organización Panamericana de la Salud (OPS)premió esta iniciativa.El 98, por buenas prácticas de salud… Si pudiera retroceder eltiempo. ¡No tengo fotos de esaépoca! Entonces no tenía cámarafotográfica…

Puedo imaginarlo, estudié en uncolegio nacional: para entrar albaño había que poner tablas sobreladrillos porque el piso era un marde orines.¡Así era acá! Y después, cuando seprodujo el gran cambio en la escuela,los baños lucían ¡tan impecables! Ytambién sus aulas, sus mesas… Pero todo como parte de un procesoeducativo. Por eso vino la OPS, y

Maestros. Ana junto a parte de su plana docente

y administrativa. De izquierda a derecha: Elizabeth Sarmiento (Matemáticas), Rosa

Huisa (Ciencia y Tecnología), Vilma Isidro

(Comunicación), Lucy Lévano (auxiliar de

Laboratorio), Oscar Taype (Matemáticas), Elsa Gama (secretaria) y la profesora

de primaria Rosa Figueroa.

Los motores del cambio. Maruja Gil y Máximo Rosas tienen a su cargo la limpieza de los baños del Encinas. El estado de estos refleja el respeto que se tienen quienes aquí pasan importantes horas de sus vidas. También vemos a la directora con la trabajadora social Hortencia Núñez, quien atiende los problemas más fuertes que afectan a los estudiantes y a los padres de familia.

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adonde iba, yo contaba lo que estábamos haciendo. La gente nocreía. Yo les decía: “Pueden ir”. Claro,como es Pamplona Alta, no creían.Hay mucho prejuicio respecto lapobreza.

Recuerdo su anécdota con un funcionario del Banco Mundial…¡Se apareció un día sin avisar! Al final: “Tu colegio es como un oasis”, me dijo; y viajé a Washington. Aquí,eso generó el trabajo de una comisión multisectorial conformada por el Ministerio de Educación, deSalud, las ONGs, la cual creó la estrategia de Escuelas Limpiasy Seguras. ¡Se convirtió en una política! Aquí vinieron los dos ministros, se firmó el convenio, y ahora rige en todo el país.

Y todo, gracias a la voluntad deuna directora que quería hacer lascosas bien.Sí. Los directores tenemos mucha responsabilidad, somos la cabeza, la razón del éxito o fracaso de unainstitución. También es muyimportante el trabajo comprometidode los profesores. Sin ellos, no hacesnada.

¿Cómo se puede ser comprometido teniendo un sueldo tan miserable?Tiene que ver con la sensibilidad de las personas. Nosotros hemos pasado por un proceso: primero, tienes que trabajar en la persona. Aquí hemos realizado muchos talleres sobre habilidades sociales,para desarrollarnos como personassaludables…

Disculpe que la corte, pero ¿cómo hacía para llevar adelante todo esto? Usted es viuda, sus dos hijosaún estaban estudiando y, claro,su sueldo era escaso.Cuando decidí ser maestra, sabía que iba a ganar poco. Primero tuve que reconocer cuáles son mis fortalezas, y dije: “Yo soy buena para motivar, para emprender cosas”. Tú me dices: “No, yo no sé nada”. Yo te volteo el pastel y te demuestro que eres excelente, y te hago trabajar ¡y ganas plata!Ese es mi trabajo: capacitar. Por

eso hago talleres de capacitación, brindo asesorías, realizo proyectos innovadores para terceros. Por ello percibo un dinero, que me servía para vivir bien, educar a mis hijos y dedicarme al 100% a mi escuela.

Encontró la manera…De sobrevivir en este oficio.

El típico caso del vaso con agua hasta la mitad, y que depende de cada uno cómo lo quiera ver:

medio lleno o medio vacío.Mucha gente dice: “Este sueldo miserable”. Yo digo que para mí ha sido una bendición trabajar en una escuela, porque me ha dado la oportunidad de hacer muchas cosas.

A tal punto, que su hija, a sabiendasde todas sus penurias económicas, ¡decidió ser maestra!Estudió en la Normal (en el InstitutoPedagógico Nacional Monterrico), y la formaron excelentemente bien.Se casó, se fue a EE.UU., allá hizo dosaños de universidad, y ya es maestrabilingüe certificada. Una excelentemaestra.

Hoy no solo es directora del Encinas, el Ministerio de Educación le ha dado la coordinación de la Red Educativa de la UGEL 01, que integra a más de cuatrocientos colegios de San Juan de Miraflores, Villa María del Triunfo, Villa El Salvador, Manchay, Pachacamac ylos balnearios del sur.Mi responsabilidad es compartir conmis colegas lo que he aprendido yresolver –en mesas de trabajo–todoslos problemas que ellos puedan tener. Emprender también nuevosretos, generar…

¿Es eso posible?¡Es posible! ¡Todo se puede hacer! Para todo hay tiempo… Gracias aesto, cuando los colegas nos visitan,ven y nos preguntan: “¿Cómo hashecho esto?”. “Lo hice así. Toma, ¡llévatelo!”.

Empezó en marzo, ¿desde entonces ya hay algún resultado?Hay mucha mejoría, porque todos hancomenzado a reordenarse, se estánapropiando de nuestra experiencia, yen muchos casos lo están haciendomejor que yo. ¡Eso es muy bueno!Estamos haciendo un trabajoen equipo, estamos eliminandolas rivalidades que a veces hay entre escuelas y, en unos días, vamos a realizar el intercambio deexperiencias exitosas.

Interesante, pues si hay dos gremios que han quedado mal parados ante la opinión pública –este año– son

“Mucha gente dice: ‘Este SUELDO miserable’. Para mí ha sido una BENDICIÓN trabajar en una ESCUELA, porque me ha dado la oportunidad de hacer MUCHAS cosas”

los de los maestros y los médicos, a raíz de sus huelgas prolongadas.Las huelgas tienen que ver con lasorganizaciones gremiales. Nosotrostenemos una a la que, desde que soy maestra, nunca le he conocido un trabajo serio con respecto a los maestros. Si estamos mal, es porque no estamos bien representados.

Su colegio paró.Nosotros hemos trabajado.

¿Así? ¿No los pintaron de amarillo?No. Los piquetes de huelga han venido, pero no le han faltado elrespeto a la escuela. No sé si nos llamarán amarillos. Mis maestros pararon dos días porque así lo decidieron, pero después se reintegraron… Nosotros desde hacetiempo ya hemos definido muchascosas. Por ejemplo: ¿quién es elcentro de nuestro trabajo? Nosotrossiempre hemos creído que los niñosmenos favorecidos deben tener lamejor educación. Ahora, los que han

parado –y han tenido abandonadosa los niños durante un mes– quierenrecuperar, ¿para qué? ¿Para no perderel sueldo que les van a descontar oporque realmente les interesan losniños? Lo que se perdió, ¡ya se perdió!

Sus padres de familia la debenadorar.Sí (ríe)… Ellos tienen espacios detrabajo acá en la escuela, y compartomucho con ellos. Hay mucha since-ridad. En las asambleas me dicen lo que creen, y no me amargo… Heaprendido a escuchar ¡Qué maravilla!

Es la clave, ¿no? Romper con la idea de que por ser la autoridad, usted es la única que tiene la razón.Escucho y aprendo. Les digo: “¿Si,no? Así podemos hacer…”. Es unacapacidad que no tenía desarrolladacuando comencé como directora.

Hay un detalle lindo, además: esque, pese a todo, no son pocos loscasos de maestros valiosos.

¡Oh, sí! Ahora que me dedico avisitar varias escuelas –porque estoy haciendo una supervisión de loprocesos pedagógicos de losmaestros de segundo grado–, meencontré con una maestra que tienedieciocho alumnos, ocho de loscuales con alguna discapacidad. Mepareció increíble cómo se matabatrabajando, con distintos materiales, luchando para que todos aprendan.

¿Dónde?En Tablada de Lurín. Le pregunté: “Seguro usted tiene a una persona de Educación Especial que la está acompañando”. “No, estoy sola”. “¡Y tantos niños discapacitados en su aula!”. Se supone que solo debería tener un niño con discapacidad, y ella con ocho. La vi trabajar con cada uno de manera especial, ¡esaes una maestra! Se lo dije a sus niños, y la aplaudieron fuerte. Losniños se dan cuenta… Hay muchaspersonas lindas en educación, comprometidas, con ganas de

“Tienes que TRABAJAR el ALMA de las PERSONAS”

“Cuando decidí ser MAESTRA, sabía que iba a

ganar POCO”trabajar; a las que si les dieran unpoquito más de ayuda, podrían avanzar más. Por eso es importante articular la escuela con la sociedadcivil. ¡Muy importante!

Está claro que necesitamos directores de escuela con talentoy con coraje.¡Con convicción! Porque lo que estáshaciendo es transformar la vida demás de 1,500 personas. Losdirectores tenemos que salir a buscarrecursos para la escuela, capacitaciónpara nuestros maestros… y lo hacemos usando el tiempo quedeberíamos pasar en las aulas, viendoqué se está haciendo, cómo se estáeducando.

Acá han venido profesores gringos de escuelas en zonas bravas paraconocer su experiencia y replicarlaen su país.Sí (ríe)… Nos dicen: “¿Cómo pueden enseñar matemáticas en medio de la violencia?”. Cuando llegaron,

pensaron que aquí se mataban a cuchilladas, pero se encontraron con unos angelitos. “¡Cómo has hecho!”. Educar. Educar con bastanteternura, con tino, dándoles nuestrotiempo; porque a la gente violentatú no le puedes ir con un chicote encima, acá tú tienes que trabajar el alma de las personas.

Lo que necesitan es amor.¡Nada más! Tan fácil, y no cuesta nada. Y con los padres, lo mismo. Lo que necesitas, es dar ternura. ¡Todos queremos que alguien nos abrace! Y que nos escuchen. Nada más… Si antes había tanta violencia en la escuela, era porque la formación antigua era: “Métele un varazo, y lopones en su sitio”. Y lo mismo pasaen el Primer Mundo. Ellos entran aenseñar matemáticas, y así llevensus cubitos, sus materiales, igual losvan a mandar al diablo. Entonces,me preguntaron: “¿Cómo haces quete entiendan?”. Primero, no puedesenseñar. Primero, tienes que formar

personas. Esa –para mí– es la primera tarea para el desarrollo sostenible de tu escuela.

Hay empresas que en realidad sonsocialmente responsables. En su búsqueda de recursos se debe habertopado con alguna.Sí, con Cemento Atocongo. Con ellos hemos trabajado nuestro programa de matemáticas, le han brindado capacitación a mis profesores, a losniños les han dado libros que hemoselaborado siguiendo una experienciaalemana. Con Integra también estamos trabajando una propuestade emprendimiento social yfinanciero, le están enseñando aahorrar a los niños.

¿Y experiencias negativas?Ah, gente que vino, dijo que juntos podíamos hacer cosas maravillosas, y desapareció. Pero ha sido poca. Casi nada. Para mí, representan cero. No le presto atención a lo negativo, solo a lo que me hacen bien.

Ejemplo.En el Encinas no hay policías escolares, pues desde chicos sus alumnos han aprendido a ser responsables de sus actos. Aquí se forja a valiosos ciudadanos.

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Galdós

unca, absolutamente nunca, pude tener un Matchbox. “Muy caro, hijito. Ten tu ca-

rrito chino y sé feliz”. “Mami, mami, quiero tomar mi leche con Milo”. “Lo siento, hijito, muy caro para no-sotros. Toma tu leche con cocoa a granel”. “Papá, papá, por 28 de julio quiero ir a Disney como todos mis amigos del colegio”. “Qué pena, miamor, no podemos. No me alcanza ni con cinco gratificaciones juntas.¿Qué te parece si nos vamos al centro vaca-cional Huampaní?”.

A los 18 pos-tulé a una de las más reconocidas universidades. Mi madre había ahorrado todasu vida para tan esperado momento. Quince años ahorrando para dejarle a su único hijo su único capital: Educación. Unos meses antes, decidió poner ese dine-rito en CLAE, y el buen señor Carlitos Manrique –a su vez– decidió estafar a medio país, incluida mi madre. Ingresé a la universidad, recogí mi boleta de matrícula y con las mismas salí para no volver a entrar (a menos que tuviera el dinero para pagarla).

La frustración es una vieja amiga que cada cierto tiempo me visita. Al principio, de niño, la odiaba.

No entendía por qué se la agarraba conmigo. Mis primeras reacciones eran berrinches, pataletas, llantos interminables. Ha pasado el tiempo y he aprendido a conocerla y valo-rarla. Ahora la espero siempre en el mejor momento, la tengo presente como una variable que puede cam-biarme siempre las reglas del juego. La frustración me tiene en alerta

constante. Esta ahí, y nunca se irá.Hay dos opciones frente a ella:

- Primera: llenarte de rabia, de-jadez e incluso desconfianza;- Segunda: llenarte de metas, tolerancia y mantenerte alerta, identificando toda nueva po-sibilidad de crecimiento.

Existen un sinnúmero de va-riables que escapan a nuestro control que frustran los resultados esperados. Un desastre natural, por ejemplo. Ante eso, solo queda armarse de valor para recons-

truir sin mirar atrás lo que se ha perdido, más bien soñando o vol-viendo a soñar con lo que vendrá. Es difícil. Pero es así. Ahí está. No podemos escapar de ella. Uno no la elige, es ella quien lo hace.

Por eso hay que ser valientes para aceptar que nuestras previ-siones no fueron las correctas y que nuestras expectativas estaban cimentadas en arena movediza. Ante ello, buscar un culpable,a quien echarle la pelota, es lo más fácil.

No seas iluso. No se trata de vivir desilu-sionado. Optar por la primera opción es un claro signo de inmadurez: no somos el centro del universo. Hay que en-contrar en lo adverso la

maravillosa posibilidad de volver a crear. El universo tiene su propio orden y mandato, hay que saberlo reconocer y escuchar. La negativa frente a algo no es un castigo, es a lo mejor un llamado al replantea-miento. Analiza todas tus variables, ponte en todos los escenarios, prevé lo no previsto, fluye frente a los designios del cosmos, adáptate a lo nuevo e inesperado. ¿Quién sabe? Detrás de todo ese dolor, puede estar el camino hacia tu objetivo.

¡Bienvenida frustración!

“Nunca, absolutamente nunca, pude tener un

Matchbox”

Frustración

N

opiniones

TIENE A 450 PERSONAS A SU CARGO Y ASEGURA CONOCER EL NOMBRE E HISTORIA DE CADA UNA DE ELLAS. LLEGÓ A NATURA DE CASUALIDAD, POR ESTE OFICIO HA DEJADO EN ELOLVIDO SU PROFESIÓN. HOY, ASEGURA, LO SUYO ES TRANSFORMAR REALIDADES

FOTOGRAFÍAS LUCERO DEL CASTILLO

la empleada del mes

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¿Qué hace trabajando en Naturasiendo usted de profesión arquitecta?Acá encontré el desarrollo de mivocación. Todos tenemos una misión,y quizás la mía sea capacitar personas.

Usted llegó aquí de casualidad.Sí. Yo trabajaba en Carvajal (transnacional colombiana que diseña, elabora y comercializa mobiliario para oficinas), una amigavino a Natura para ofrecer los muebles que hacíamos –yo entonces era diseñadora de muebles–, y seterminó quedando; y como tenía quearmar su equipo de consultoras, mepropuso serlo. Le dije que no, porqueyo no te vendo ¡nada! Pero igualvine, comencé a asistir a las reunionesde capacitación y me fue gustando.

Se trataba de algo muy distinto a loque hacía en su día a día.Totalmente. Yo trabajaba en arquitectura, que no tenía nada quever con esto. Comencé viéndolo comoun hobbie, pero de pronto mi hobbiese convirtió en mi trabajo; y el queera mi trabajo, pasó a ser mi hobbieporque esto te absorbe tanto, quehubiera quedado mal si me com-prometía a diseñarle algo a alguien.

¿Cuánto tiempo pasó desde queconoció Natura y dejó su empleoanterior?Lo que pasa, es que si bien estaba en Carvajal, yo había trabajado en Parsons, la constructora

estadounidense que aquíhizo el Marriott, pero como entonces su situacióneconómica había cambiado,decidió cerrar su oficina en Perú y, tras recibir mi liquidación y escribir un e-mail despidiéndome de miscontactos, una amiga que trabajabaen Carvajal me propuso reemplazar a una chica que iba a tomar sus licencias de pre y postnatal.

¿Le atraía ese trabajo?Era diferente, porque había la presiónde que llegaban las vendedoras y tetraían los requerimientos de susclientes y tú tenías que diseñarlos enla computadora, como loca, porquetodo lo necesitaban casi de inmediato.

Lo anterior sí era algo que le gustaba.Trabajaba en el área de Desarrollo de Negocios (en Parsons), nuestra misión era ganar licitaciones. Unavez que ganábamos los proyectos,otra área los desarrollaba.

O sea que tampoco estaba ejerciendoestrictamente su profesión.No, porque por mí pasaban los planos,pero no era yo quien los desarrollaba.

¿Era frustrante no dedicarse a ello para lo que se había preparado?Si bien no hacía diseños, me gustaba sentirme parte del staff.

Entonces, una vez que ingresó a

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TERESA DEL ROSARIOQUIPUZCOA OLGUÍNESTUDIOS

Colegio Nuestra Señora de la Consolación, en el Rímac.

Arquitecta de la Universidad Ricardo Palma.

EDAD “No te la voy a decir”.

CARGO Gerenta de Relaciones en Natura.

ECHI –porque para nadie en el mundo ella es Teresa–parece tener estudiado cada uno de sus movimientos. Se reconoce como modelo, y lo es para las casi quinientas consultoras –varones, incluidos– que tiene a su cargo en Lima Norte. Es su fuerza de ventas, y gracias a que cada año cumple sus objetivos, Natura la viene premiando consecutivamente desde hace un lustro.

Su tesis para recibirse como arquitecta fue sobre Arquitectura Deportiva. Hoy es parte del centenar de gerentes de Relaciones que la transnacional brasileña de cosméticos tiene en todo el país. “Venus”, así ha bautizado ella a su equipo. En Natura, asegura, todos conocen a Techi Quipuzcoa. ¿Quiere saber de ella? Aquí se la presentamos…

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Natura se terminó de alejar de suoficio.Si bien en Carvajal sí realicé diseños, una vez que eso se acabó, trabajé untiempo por mi cuenta. ¡Eso sí fuefrustrante! Porque yo soy de laspersonas a las que tú le establecesuna fecha, y yo cumplo. Me amanezco,no sé qué hago, pero presento mitrabajo a tiempo. Me contrataron pararealizar una serie de trabajos, perocuando iba a las empresas a cobrar:“No, no está el cheque. Ven la próximasemana”. Regresaba, conversaba congente a la que yo conocía, que habíansido mis contactos, y me decían: “Losdueños se han ido a Europa, ¡perono les digas que no te he pagado porque sino voy a quedar mal!”. Eramuy frustrante cumplir con tu trabajo y que no te paguen a tiempo.

Entonces pensé: “Si voy a estar así, rogando para que me paguen…”.

Algo que aquí lamentablemente esuna constante.Te esfuerzas, te presionan paraque entregues a tiempo, lo haces; y cuando quieres cobrar… Entonces, cuando apareció lo de Natura, dije: “Prefiero tener un sueldo fijo –saber que me van a pagar cada quincena– a seguir pasando por esto”.

Esa fue la razón que la llevó adecidirse.Sí, la necesidad económica.

Como muchas consultoras, ¿no? Porque muchas se dedicaban a otrooficio antes de haberse iniciado eneste rubro.

Claro. Es la magia del relacionamiento,de entrar en contacto con la gente,porque la persona que me contratótuvo que ver algo en mí, porque yono tenía experiencia en ventas… Algovio.

Su caso es especial, pues sintener experiencia en ventas pasó a ser supervisora y capacitadora devendedoras.Sí.

¿Cómo podía capacitar a alguien en algo que usted jamás había hecho?Es que indirectamente sí lo hice, porque a la vez yo me capacité, asistí a cursos, aprendí a conocer la marca, los productos. ¡Me comencé a apasionar! Porque te soy sincera: Yo no te puedo ofrecer algo que a >

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mí no me convence. O sea, si Naturano fuese buenísimo, yo no te podríadecir: “Échate esta crema y vas aquedar espectacular”. No, porque es-taría mintiendo. Lo que me ayudó, fueconocer los productos; y aprendí acómo aplicarlos, los tratamientos…

¿No sintió que estaba haciendoalgo ‘menor’?No lo veía así, si bien podía extrañar estar con mi entorno, aquí en Natura me desarrollé de otra manera.Por ejemplo, ahora estoy siguiendo un diplomado en Marketing y Relacionamiento en la UPC.

Además, hay un detalle clave: si bien un arquitecto diseña futuras

edificaciones, como capacitadora ahora usted está colaborando a quemuchas personas –sus consultoras–rediseñen sus vidas.Sí, les estoy cambiando la vida. Desdeel hecho de cómo se visten, cómo separan, porque cada una de ellas pasaa ser un modelo; y uno tiene el deberde observarlas, orientarlas, ser a lavez su ejemplo; porque hay chicasque incluso te comienzan a imitar:cómo hablas, cómo te peinas, cómote vistes.

Su sector es Lima Norte, la cuna delemprendimiento, en estos siete añosen esta empresa debe haber sidotestigo de transformaciones impactantes.

De grandes cambios en las señoras. Es bien complicado, porque a vecespartes desde el hecho de “no botes lacáscara del plátano al suelo”. Tienesque ser sutil, así van aprendiendo queel sitio donde están es importante,que debe permanecer limpio. Detallesque parecen mínimos, pero que sonmuy importantes, porque las educaspara que aprendan a amarse, porquesi ellas no se aman no van a poderamar a nadie. Así aprenden a valorarse, a ser independientes. Paraeso, deben empezar por alcanzar laindependencia económica, porquese trata de personas que hastaentonces dependían del sueldo delesposo. Ya no. Ahora ellas se hacencargo de una serie de gastos, se dan

“No solo formamos en cuestiones de VENTAS de productos, aquí nos PREOCUPAMOS porque ante todo APRENDAN aQUERERSE a ellas mismas”

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el gusto de comprarse un juego dedormitorio, de sala…

Cuénteme sobre el caso que más lehaya impactado.El de mi consultora número uno enventas: Marlit Melgarejo. Ella trabajaen una entidad del Estado, y por loque me contó, en cierta forma vivíasometida por su esposo. Tiene dos hijos mayores y una pequeñita, y trasponer en esto todo su esfuerzo, un día me dijo que Natura le había transformado la vida, porque ella hacambiado: hoy es más independiente.Porque a ella no la dejaban salirde su casa. Tenía que ir del trabajoa su casa. Ahora, no. Ahora ella decide, toma sus propias decisiones.

La primera vez que fue premiada, tuve que hablar con su esposo paraque le diera permiso, para que la deje asistir a la ceremonia de premiación. ¿Puedes creerlo?

Un hecho que debió ser realmente trascendente en la vida de unapersona como ella.Sí, y eso le pasa a muchas mujeres queno tienen voz ni voto en sus propias casas. Pero no solo les pasa a ellas,también a algunos hombres. Por esotrato de venderles la idea de que estees un negocio familiar, porque todoel ingreso que ellos logren es parala familia. Ahora muchas de ellastrabajan con sus esposos. Hoy es común que ellos las ayuden a vender.

Algunas han pasado de ser personas sometidas a cabezas de familia.Hoy incluyen a sus maridos en susemprendimientos; y más bien escucho los comentarios de ellos,como uno que recibí el sábado pasado, de un señor ya grande –deunos 60 años– que me aclaró queel 95% de las ventas de su familia, eran suyas. Uy, si tú fueses a misencuentros, verías a una grancantidad de hombres, ¡y de todas las edades!

Tiene 450 consultores, mujeres y hombres. ¿Qué siente al saber que está colaborando a transformarles sus vidas?Cuando los veo bien, yo me siento

Casa Natura. Espacio al que las consultoras

acuden y tienen acceso a cualquier producto a f in de identificarse plenamente

con cada uno de estos.

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contenta, porque siento que estoycolaborando en algo: en algo positivo, porque nosotros no solo los formamos en cuestiones de ventas de productos, aquí nos preocupamos porque ante todo aprendan a quererse ellos mismos. Los estimulamos para que estudien, se capaciten… Por ejemplo: “Chicas, el cigarro maltrata la piel, la envejece. Es malo fumar, porque lanicotina es lo más adictivo que hay”.O sea, no solo cosmética, ¡les dasalgo más! Además, ahora, de acuerdoa nuestra nueva estructura, yo tengoa mi cargo a cinco CNOs –ConsultorasNatura Orientadoras–, porque como seguimos creciendo y para nosotros todo tiene que ser personalizado, llega un momento en el que te pierdes y necesitas ayuda.

Dígame, teniendo a tantas personas

a su cargo, ¿quién la orienta a usted?¿Quién me guía?Tengo a mi gerente de Ventas. Y a esas cinco CNOs a micargo, las he divido por distritos:Los Olivos, San Martín de Porres, Ventanilla… Cada

una tiene bajosu responsabilidad a cien personas.

¿No extraña su oficio?¿De qué, de arquitecta?

Veo que ya lo olvidó.(Ríe)… Lo que pasa, es que esto megusta. Además, es económicamente rentable; y también hay unreconocimiento.

¿Qué tan importante es eso?El reconocimiento es importante encualquier caso. Te debe pasar a ti.¿Cómo te sientes cuando valoran turevista?

Muy bien.Y si haces algo, ¿y nadie te dice nada?¿Cómo te sientes?

¿Me está entrevistando?

(Ríe)… Te sientes mal, pues. Porque si haces algo, te esfuerzas, y pasa desapercibido, nadie se da cuenta… Por eso, hagas lo que hagas, el reconocimiento en valioso.

Usted entró acá de casualidad…Y me quedé.

Su objetivo es…Quedarme.

Lo tiene claro.La respuesta es sí.

¿Por qué?Porque Natura –la empresa–, y lo queyo aquí hago, me dan satisfacción personal; y porque además siento que estoy ayudando a otras personasa que se desarrollen.

De nuevo: de alguna manera estáejerciendo su oficio.Estoy siendo arquitecta de vidas, yano diseño casas ni espacios, sino los espacios internos de mis consultores. Lo que pasa, es que si tú estás bien internamente, estás bien contigo, lo vas a estar con el resto. Por eso, lo más valioso –primero– es valorarse; y eso tiene mucho que ver con la belleza, porque si eres lindo por dentro, lo vas a transmitir… Sí, pues, la arquitectura ahora la estoy desarrollando de otra manera.

Bien estar bien. Techi tiene por

misióon posicionar a cada una de sus 450

consultoras para que cumplan los objetivos de ventas de cada añno.

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MAGGIE RIVASPLATAgerente de Ventas de Natura

“Techi va a aspirar a una posición superior”

Con catorce años de experiencia en el medio, sabe cuándo tiene un talento

al frente, y sostiene que Techi Quipuzcoa tiene un potencial extraordinario

NTES DE NATURA, la vida de Maggie Rivasplata era realmente diferente. Secretaria de gerencia

de una serie de bancos, renunció cuando el Santander fue vendido. Trabajaba de ocho de la mañana a diez de la noche. “Quería ver si afuera llovía o hacía sol”. Decidió darle un giro a su vida, se presentó a esta empresa de cosméticos con pocas expectativas, le advirtió al gerente general que ella no sabía nada de ventas, le dieron a supervisar un equipo de cincuenta consultoras. Tres años después, Maggie lideraba una fuerza de ventas de seiscientas personas. Hoy gerenta de Ventas de Natura en el Cono Norte, tiene a su cargo a 28 gerentas de Relaciones -una de ellas es Techi Quipuzcoa- y, a través de estas, vela por los resultados de un ejército de 9.500 vendedoras por catálogo.

A

¿Qué se siente estar al frente de9.500 personas?¿Puedes creer que nunca lo habíavisualizado así? ¿Qué siento? ¡Megusta!

En sus 14 años en Natura debe haberafinado al máximo sus sentidos

para identificar a quienes tienen talento para este rubro.Totalmente. Pocas veces me heequivocado al contratar a una gerenta de Relaciones.

¿Qué es lo que de arranque le llamala atención?

La empatía, el relacionamiento…

Esa palabra, relacionamiento, se la he escuchado varias veces a Techi, ¿qué significa para ustedes?Nosotros tenemos una filosofía:Bien estar bien. ¿Qué significa? Quesi tú estás bien contigo mismo, >

La jefa y sus gerentas de Relaciones. De pie: Techi Quipuzcoa, Marcela Albaán, Katherine Campos, Jennifer Díiaz, Fabiola Maálaga y Marita Regalado. En cuclillas: Maggie Rivasplata y Catherine Rossel.

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puedes trasladar ese bienestar aterceros.

Busca como gerentas a personasque se sientan bien consigo mismas.Y que puedan proyectar, porquelo demás –lo teórico– se aprende.Pero, esa cualidad, ¡la tienen que tener! Autoestima, empatía, saber tratar a todas las personas por igual, ¡saber llegar a terceros!

¿Notó eso cuando vio por primeravez a Techi?Yo no la contraté. Tengo ocho mesesen esta gerencia (Lima Norte), cuandollegué, Techi ya estaba aquí… Ella es una gerenta excelente, tiene unos

números impecables.

¿Números?Todo lo que es ventas. Nosotros

trabajamos de acuerdo a objetivos, y ella siempre los cumple y supera.

Claro, Natura instauró un premio hace cinco años, y desde entonces ella lo ha ganado siempre.Sí. Ella tiene muchas condiciones, ypienso que va a aspirar a una posiciónsuperior. Techi es muy aspiracional, es muy incisiva, muy cuestionadora, le gusta saber, tenerlo todo bajocontrol. Es ¡súper perfeccionista!

¿Qué es lo más rico que le ha dadoeste trabajo?Conocer gente, y ¡cambiarle la vidaa las personas!

Esa noción es una constante en esterubro, ¿no es así?No sé si otras empresas lo considerarán, pero aquí, nosotros cambiamos vidas. Si bien ahora me relaciono básicamente con mis veintiocho gerentas, igual, desde mi posición ¡yo puedo cambiar vidas! Cuando era supervisora y tenía a mi cargo una fuerza de ventas de quinientas mujeres, sí viví algún momento crítico, porque cada una de ellas vende por catálogo. Es decir, no tienen ningún vínculo laboral con la empresa: son vendedoras que buscan obtener una ganancia adicional. O sea, no tienen el compromiso de vender, el compromiso ¡lo creas tú! Ahí

entra el tema del relacionamiento: lograr fidelizarlas. ¡Convertirlas! Conseguir que vendan para ti.

Ahora entiendo por qué las empresas de este rubro terminan pareciendo una especie de religiones.Sí, es verdad. Fidelizas de tal forma, que

se genera una relación mayor. La

consultora, preocupada, te dice: “No tengo pedidos”. Tú la miras, le dices: “Uy, este mes estamos bajas…”. “¡Espérate, te los consigo en dos horas!”. Eso no lo van a hacer porque sí. ¡Lo hacen por ti! Porque se ha establecido un vínculo.

Así como las iglesias prometen unavida mejor, ustedes brindan algosimilar.Efectivamente. ¡Te puedo contar casos! Siendo supervisora, una vez llegué a la casa de una consultora, y el marido la acababa de golpear. La mujer me recibió llorando; y la tuve que consolar, llevar a la clínica… Son casos que te van marcando.

Y no necesariamente ocurren en

zonas modestas, de escasos recursoseconómicos.Lo que te he contado pasó en Miraflores, se trataba de una chica de buena posición, segmento AB. Cosas como estas, ¡pasan! Y pasan mucho más de lo que uno cree… Tú te terminas convirtiendo un poco psicóloga, un poco amiga, jefa, líder.

Ese liderazgo, obviamente lo haencontrado en Techi.Ella es líder ¡total! Realiza, convocaa reuniones; normalmente yo voypara ver su nivel de convocatoria, y las reuniones que Techi hace, sonmultitudinarias. Se maneja muy bien,selecciona muy bien a sus vendedoras…

Es una Mujer Batalla.Batalla, sí. Todas las mujeres que aquí trabajan, lo son; yo he conocido a consultoras que vendiendo productos Natura le han pagado launiversidad a sus hijos.

Precisamente, Techi me comentó que ese hecho –la independencia económica– es el punto de partida para fortalecer a sus vendedoras,y les terminaba cambiando la vida.Yo he incorporado a señoras que, tras llenar su ficha de inscripción, me han dicho: “No puedo firmarla porque primero le tengo que consultar a mi esposo”. ¡Socorro! No tiene ningún poder de decisión. Llegaban así, y terminaban ganándose un dinero, y dejando de ser tan pero tan dependientes.

¿Qué se siente ser un factor claveen esa transformación?Tú no te das cuenta de lo que estás haciendo, sino con el tiempo… Yo hetenido casos que me han conmovido:señoras a las que volvía a encontrar después de años, que me han buscado para agradecerme, y yo sinsaber por qué, qué había hecho paramerecer eso… Y cuando te lo dicen,es muy gratificante.

Y todo gracias a unos cosméticos.Sí. Pero no son solo unos cosméticos,porque tú estás vendiendo todo elpaquete: un concepto: Bien estarbien.

“No solo estás VENDIENDO cosméticos, sino todo un PAQUETE: un CONCEPTO”

losgadgets

Samsung Chronos Series 7

laptop

auriculares

cámara de bolsillo

La nueva ultrabook de la fabricante sur coreana goza de características externas

bastante llamativas. Su diseño, que incluye una carcasa metálica, es elegante. Cuenta con pantalla antireflejo de 15,6 pulgadas, teclado retroilumninado y una importante

gama de conexiones (Ethernet, tres puertos USB, lectora de tarjetas 4 en 1, entre

otras). Además maneja una configuración bastante competitiva a través de un

procesador Intel Core i7 de 2,20 GHz; una tarjeta de video AMD Raedon HD 6750M

de 1GB, memoria RAM de 8GB, un disco duro de un 1 terabyte (1.000 gigas).

Sony Cybershot RX100

Interesante apuesta de la firma japonesa. Esta cámara de bolsillo, considerada por

los especialistas como una de las más eficientes en ese segmento, tiene buen

tamaño, pantalla TFT de 3 pulgadas, sensor de 1 pulgada (que le otorga mayor

calidad a las imágenes) y una resolución de 20 megapíxeles. Además de contar

con función manual, posee un anillo de control –desde donde el usuario

configura el dispositivo- muy práctico. Una opción bastante competitiva para

aficionados a la fotografía que no quieran cargar con una cámara profesional.

Auriculares Philips de diseño moderno y sencillo. La banda que va en la cabeza está hecha de plástico resistente y es de amplia versatilidad. Debido a que no tiene un cable tubular –el suyo es plano y de 1,2 metros-, es poco probable que este artefacto se vaya a enredar. También puede ser usado como teléfono móvil, ya que cuenta con un micrófono integrado que posibilita la recepción de llamadas. Otro de los elementos relevantes son sus almohadillas. De espuma suave, estas brindan una gran comodidad al usuario.

Shibuya CitiScape

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cadena improductiva

edio siglo después de con-cedido el derecho al voto femenino, se convoca

a una revocatoria contra nuestra primera alcaldesa. Varias “primeras cosas” han ocurrido respecto a ella: primera autoridad que llega al poder e investiga a su antecesor sin impor-tarle los riesgos que ello implique; primera en recibir el ansiado grado de inversión BBB por parte de la agencia calificadora Fitch Ratings; primera en abordar frontalmente el problema del transporte, en conse-guir el traslado de La Parada y tam-bién primera en concretar el cambio para nuestro río, no solo para des-congestionar el trá-fico en la zona, sino para reverdecerlo y posibilitar viviendas más seguras para quienes habitan en sus márgenes.

Villarán ha co-metido errores. Varios invisibles, que le han costado su propia visibi-lidad. Errores como no preocuparse por fortalecer la confluencia con sus aliados políticos, de quienes se distanció al lanzar un candidato presidencial con posibilidades nulas, debilitando así su partido y los frá-giles nexos con sus pares, perdiendo además su posible apoyo en las guerras sucias que se le vendrían. Otro error, fruto de una coherencia loable pero desconectada de la

realidad local, fue omitir su nombre en la publicidad municipal. En una sociedad acostumbrada al populismo y al personalismo, es anómalo y poco estratégico pretender que repenti-namente la gente vaya a asumir que las cosas no las hace “alguien” sino la municipalidad o que “las hacemos todos”. Arrinconada e impo-pular, la figura de nuestra alcaldesa es difusa para la mayoría, pero no se le conocen errores graves ni indi-cios de corrupción. Los revocadores

no han argumentado la ineficiencia alegada, y sus audios, fideos, galletas y caretas, bastan para deslegitimar su saboteador y costoso proceso.

Recordé hace unos días aquel viejo hit de Noséquién y los Nosé-cuántos que decía “Susana, subsana, subsana tus errores” y me pareció oportuno. La alcaldesa puede sub-sanar sus errores, su gestión merece una oportunidad para terminar estas primeras cosas que ha iniciado

contra viento, marea y presión me-diática; y con el tiempo que además tarda algo cuando se hace legal-mente, consensuando y sin coimear.

¿Estamos desacostumbrados a ese ritmo? Lo estamos, pues no es nuestro ritmo cotidiano. A diario aprovechamos la informalidad para ahorrar unas monedas o minutos. El sociólogo Pablo Vega Centeno dijo a propósito de La Parada: “Este crecimiento de Lima que llamamos informal, en realidad es fruto de una decisión política del Estado Peruano”. Es decir, por primera vez una autori-dad ha tomado decisiones políticas

para revertir las consecuencias del repliegue estatal frente a sus respon-sabilidades y del abandono de la po-blación a su suerte, en la ley de la selva del neoliberalismo impuesto en los 90. Pensemos en a quiénes no les

conviene que estos cambios se den. Por eso, la batalla no es contra

los informales (que casi seríamos todos), sino contra quienes lucran y crean mafias en esa informalidad, a costa de quienes la tienen como única opción de subsistencia.

La actual gestión puede subsa-nar sus errores y favorecer a que nosotros lo hagamos también. Nuestras autoridades nunca serán mejores que nosotros mismos.

“Nuestras AUTORIDADES nunca

serán mejores que NOSOTROS mismos”

Yo vivo por Magdalena, pero quiero a Susana!

ELIANA OTTA (artista)

opiniones

M

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hombre batalla

Revolución

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VÍCTOR CHAMORROgerente general de GIVA S.A.C.

FOTOGRAFÍAS XIMENA BARRETO

Revolucióndesde la

granjaA ÉL NO LE INTERESAN LAS ETIQUETAS, NINGÚN

TERCERO LE VA A CONFERIR EL TÍTULO DE EMPRESARIO SOCIALMENTE RESPONSABLE.

ESE GRADO SE LO GANA ANTE SU GENTE, DÍA A DÍA, EN EL GRUPO DE EMPRESAS QUE LIDERA

CON SU ESPOSA. JUNTOS, SON DINAMITA

POR JOAQUÍN LEÓN

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ADA MÁS EFECTIVO que educar a través deljuego: te subes a una especie de trencito,

viajas a través de un recorrido imaginario porel Parque Nacional del Manu con todos sus

animales y todos sus árboles, y llegas a unaparte en la que se prenden unos foquitos

naranjas que aluden, que representan cigarrosencendidos.

Coges entonces la pistola de agua instaladaen el pequeño vagón y disparas para apagarlos. En menos de cinco minutos

aprendiste a identificar algunas especies de fauna y flora y, como bonus track,entendiste que el cigarro hace daño a la naturaleza y a ti mismo. Te bajas

del trencito y te subes a otro juego: llevas puesta la Pulsera Mágica, así quetienes toda la tarde para divertirte y aprender.

Eso es La Granja Villa. En términos empresariales fríos,

se diría que pertenece al rubro del negocio del entretenimiento.

Víctor Chamorro, sin embargo, lo sabe decir con una calidez

frontal, honesta: “Es pura energía, pura luz, pura emoción. Es un

trabajo que te permite ver niños y familias felices, ¿entiendes? En

esto del entretenimiento tienes que enamorarte de lo que haces”. Y, claro, él

y Cecilia Chávez, su esposa, y sus hijos y sus trabajadores saben que los fines de

semana son los días más adrenalínicos, y que adiós a la playa y a los paseos y a los

almuerzos familiares. Aquí el compromiso crece los sábados y domingos. Aunque es

muy cierta -agrega Víctor- aquella máxima empresarial emprendedora que indica que a

veces no se goza, pero se disfruta.La historia de Víctor Chamorro, gerente

general de Giva S.A.C., es una historia de azares y especulaciones, de aciertos merecidos

y de desaciertos aleccionadores. Es, resume él,una larga aventura. Víctor y Cecilia operan la

Granja Villa Sur (en Chorrillos) y la Granja VillaNorte (en Comas), además del negocio de juegos

Moy Park, el Bowling de Larcomar y el hotel MaderaVerde en Tingo María, donde también manejan un

centro de rescate de especies animales en peligro.“Lo nuestro es trabajar, trabajar y trabajar. Somos

adictos a la chamba, pero tratamos de disfrutarlo”,dice con entusiasmo real.

Pero la adrenalina laboral no es siempre garantía de progreso. Víctor recuerda cuando, a mediados de los90 en un taller dictado por IPAE, uno de los expositores se paró frente a todos los asistentes y les dijo –sin haceruna sola mueca– que la mayoría de los presentes quemanejaban negocios quebrarían. Ese fue el verbo queempleó: quebrar. Y les explicó que el desorden no llevaa nada. Que la informalidad es fracaso puro. Que el empresario que no mejora, empeora. Así de crudo fue;así de estimulante, también. Y como muchas de las buenashistorias empresariales de este país, la de Víctor Chamorrocomenzó cuando el país atravesaba su peor momentoeconómico, cuando había que buscar la oportunidad enmedio de la crisis, cuando había que raspar la olla, perocon ingenio.

Hablaban por teléfono cada dos horas, pero no se conocían en persona. Eran apenas un par de voces lejanas comentando números. Víctor (en ese entonces ya era viudo y tenía un hijo) manejaba una casa de cambio en el jirón Ocoña, en el Centro de Lima. Hagamos unejercicio de memoria: el país estaba en rojo y el primer gobierno de Alan García intervenía el dólar para paliarla crisis, pero con resultados igual de negativos. El llamado ‘dólar Ocoña’ surgió entonces como una alternativa paralela, más que un mercado negro. Incluso los bancos y los empresarios que operaban dólares hacían tratos con las casas de cambio para evitar las intervenciones estatales (desastrosas, casi todas). Unade las primeras lecciones que aprendió Víctor en esa

N

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Aprender jugando. Esa es su consigna. En contacto con los animales, niños y grandes se humanizan.

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ías:

Cor

tesí

a Gr

anja

Vill

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etapa de su vida fue que

la palabra vale más que una

firma, y que honrar

compromisos es una ley.

Cecilia también operaba una casa

de cambio, pero enMiraflores; en ese

entonces ella eradivorciada y tenía

un hijo, pero además estaba de novia con

un joven que era el consentido de su familia:

guapo, adinerado y buena gente. Cecilia había

trabajado en un importante banco local, y por eso su

cartera de clientes manteníala casa de cambio en buen

funcionamiento. Ella, paraconocer el tipo de cambio

alternativo, solía llamar yconsultárselo a los cambistas de

Ocoña. Por azares del destino, elcambista con el que más trato

tuvo –por teléfono– fue Víctor.Hablaban –decíamos– cada dos

horas y siempre cotejaban cifras ynúmeros fríos. “No hicimos click, para

nada”, ríe ella. En uno de esosintercambios de información monetaria

tuvieron una discusión: ella quisocomprarle dólares, él aceptó; ella quiso

entonces pagarle en billetes chicos, él senegó. Cecilia, orgullosa como es, dejó de

hablarle: “Le pedía a mi asistente quellamara a Ocoña, yo no quería hablar más

con él”. Tiempo después se amistaron yVíctor la invitó a almorzar. Sentados en la

mesa de algún restaurante de Lima, hablaronde todo menos del tipo de cambio. Recién

pudieron conocerse.No fue sencillo para Víctor convertirse en la

pareja de Cecilia. Provenían de estratos socialesdistintos –ya sabemos cómo la cucufatería limeña

responde ante eso– pero además cada uno teníauna vida previa. En esa etapa de su vida Víctor

aprendió otra importante lección: si no perseveras, pierdes. Una tarde, el hermano de Cecilia lo convocó

para conversar de hombre a hombre. Comieron, tomaron unos tragos, y, cuatro horas después, ya eran

amigos. Víctor ya tenía ‘permiso’ para ser novio de Cecilia.Después de casarse en 1991, Víctor y Cecilia tomaron

dos decisiones importantes. La primera, abrir una casa

El equipo de la alegría. Víctor y Cecilia, su esposa, socia y cómplice, junto a (arriba, y desde la izquierda) Aron Grados (supervisor interino), Angélica Gonzáles (jefa de División Cumpleaños), Yessenia Negrete (jefa de División Colegios), Lourdes Salazar (jefa de División Empresas), Carlos Gómez (supervisor) y José Bazán (supervisor). Abajo: Norma Picón (supervisora), Yvonne Bustamante (jefa de Parque) y Catherine Canales (supervisora).

“Este trabajote PERMITE ver a niños y familias FELICES”

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de cambios grande, pero también jugando a especularcon la Bolsa de Valores; a veces ganaban cantidades obscenas de dinero, y luego de guardar lo necesario, sedaban sus gustos: buenos restaurantes, viajes. El negociodel azar, como la Maestra Vida de Rubén Blades, te da yte quita. La segunda decisión fue no tener hijos sinohasta después de tres años de casados: Cecilia pensabaque el amor duraba eso, tres años, y quería comprobarloy sacarle la vuelta a las estadísticas.

En 1994 dejaron el negocio de la especulación. Querían establecerse, no jugar más con montones de

dinero. La especulación es ganancia, es riesgo, es aventura,pero significa también estar pendiente del dinero todo el tiempo, y como dicen ellos: “El dinero, al final pierde su valor”. Compraron un hotel en Tingo María como para comenzar una nueva vida empresarial, pero de todos modos querían seguir buscando algo que los llenara, no de plata, sino de emociones. Adquirieron la franquicia de centros de entretenimiento Moy con la certeza de que sería un negocio siempre rentable (pues siempre habrá niños en los centros comerciales que quieran introducir una monedita en una máquina tipo Arcade y jugar unos

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El club del pueblo. Tanto La Granja

Villa como La Granja Norte cuentan con

piscinas con olas que funcionan con

tecnología made in Perú. Víctor y Yesenia

Negrete, Lourdes Salazar y Angélica Gonzáles, jefas de distintas áreas de

La Granja Villa.

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400empleados en total tiene

Giva en sus varias empresas

500 milvisitantes anuales que reciben

La Granja Villa y La Granja Norte

40 milmetros cuadrados tienesu local de Chorrillos

15especies de animales acogen en su refugio de Tingo María

18%crecimiento previsto en ventas

para este año

minutos). Pasaron unos años más, y recién en 2002 encontraron lo que querían: compraron La Granja Villa. El tiempo y el espacio habían hecho su trabajo: por fin podrían diseñar su negocio tal como ellos querían, no como lo ordenaba el mercado. Y lo lograron.

Aquí se trabaja con amor. “No tendría sentidohacer todo lo que hacemos si no fuera porquelo hacemos juntos”, comenta Cecilia. Y tambiénse trabaja con humor: “Yo hago la parte bonita,o sea cuidar a los animales y la operación del parque. Víctor se encarga de la fea, o sea la administración y las finanzas”. Es una pareja inteligente, una pareja hermosa.

La Granja Villa (que tiene un local en Chorrillos, y el 2009 inauguró otro en Comas) la sacan adelante cientos de trabajadores que, como ellos, optaron por este sacrificado trabajo. Una de ellos, Ivonne Bustamante, a sus 31 años ya es jefa del parque de Chorrillos. Ella más que nadie conoce el trabajo en este lugar, y conoce a sus dueños: Ivonne comenzó a trabajar con Víctor y Cecilia cuando apenas tenía 16 años; mientras ella trabajaba detrás de un mostrador, cientos de chicos y chicas de su misma edad pasaban por ahí, compraban algunas fichas y jugaban. Fue su primer trabajo: “Empecé como cajera en Moy. Era un puesto para que el que no se necesitaba tanta experiencia, pero sí había que demostrar confianza”, recuerda. A pulso,cuatro años después, se ganó el cargo de administradora del local.

Cierto día, Cecilia y Víctor le dieron a Ivonne una lección implacable.Le dijeron que hay dosformas de triunfar en el mundo de los negocios: trabajando en una buena empresa o abriendouna empresa propia. Animada por su rápido crecimiento, Ivonne se retiró de Moy y buscó

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“No tendríaSENTIDO

hacer lo que

HACEMOS si no fuera porque lo hacemos JUNTOS”

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suerte, aunque nunca dejó de mantenerse en contacto con sus primeros jefes. “Yo siempre tenía presente lo que aprendí con ellos. Víctor y Cecilia nunca mostraron ninguna superioridad, sino todo lo contrario: estaban ahí, a tu misma altura, a tu mismo nivel. Y, sobre todo, siempre los vi trabajando, ¡nunca salían de vacaciones!”.

Años después, Ivonne regresó. El buen trabajo llama. Ahora, cada vez que Víctor y Cecilia viajan a alguna feria de entretenimiento en el mundo, la llevan; así ha recorrido Estados Unidos, Argentina, México.

La obligación más importante de un empresario no es hacer dinero, sino hacer escuela: compartir el desarrollo. Eso lo entiende mejor que nadie Norma Picón. Ella es una joven de 27 años que vivía cerca de Tingo María cuando conoció a Víctor y Cecilia. Debido a su origen muy humilde, Norma tenía muchas dificultades para desarrollarse. Una mañana, hace diez años, una pareja de esposos que operaba un hotel en esa ciudad y otras empresas en Lima, conversó con el padre de la joveny le plantearon llevarla a Lima. Ellos se comprometíana costear los gastos de su educación y, además de darle un trabajo, le darían un hogar. “Yo les debo a ellos elhecho de haber podido demostrar lo que valgo”, resumeNorma, ahora supervisora en La Granja Villa. “Víctory Cecilia me enseñaron cómo es trabajar con pasión, cómo es ser responsable sin dejar de sentir gusto porlo que hago”.

Norma vive con ellos y trabaja con ellos, pero por el duro trabajo que llevan solo pueden verse y conversar con calma los domingos en la noche, alrededor de una mesa. Ella terminó sus estudios, colabora en los quehaceres de la casa, trabaja en la misma empresa. “Me enseñaron que hay que tener la camiseta bien puesta”. Con Norma no hubo especulación ni azar –explica Víctor–; él y Cecilia supieron intuir su enorme valor personal. Eso tambiénes responsabilidad empresarial.

Víctor tiene en La Granja Villa lo que siempre buscó: un lugar donde trabaja, pero también donde imprime su personalidad, su ética. Esta fue, incluso, su casa. Cuando compraron el local no tenían el dinero suficiente a la mano, y tuvieron que vender la casa en la que vivían.Él, Cecilia y sus hijos tuvieron que mudarse, literalmente, a una zona de La Granja Villa donde vivieron una temporada, hasta poder acomodarse. ¿Qué lleva a un hombre a sacrificar hasta su propia comodidad porun trabajo gratificante? ¿Cómo se hace para liderar un cambio de esta naturaleza? La respuesta para ambas preguntas es la misma y se resume en una sola palabra: voluntad. La misma voluntad con la que un día, ahogado por los números y por la imposibilidad de pagar los sueldos de sus trabajadores, Víctor vendió su camioneta y cumplió con sus obligaciones. No muchos empresarios lo harían, él ni siquiera lo dudó. Así se ganó el respeto.

Eso sí, todo el esfuerzo queda plenamente recompensando cada domingo en la tarde, cuando Víctor se detiene a mirar el rostro de los niños y sus padres que, exhaustos, se retiran de La Granja Villa con una emoción interna estampada en las sonrisas. A eso se llama equilibrio.

Alguna vez Víctor Chamorro fue calificado de “extremista”, de “rebelde”. Él perteneció, hace ya varios años, al movimiento llamado Vanguardia Revolucionaria; desde ahí acompañaba a una izquierda que quería el desarrollo y el cambio radical, aunque sin armas, como sí lo quería el Partido Comunista del Perú y su variable más sanguinaria, Sendero Luminoso. Víctor llegó a dictar clases en la tristemente célebre academia César Vallejo, y muchos de sus colegas, docentes como él, de un día para otro dejaron las aulas y se fueron al campo a entrenarse en el uso de armas y explosivos. Esos colegas suyos también querían el cambio, pero a la fuerza: “Casi todos murieron en enfrentamientos”, comenta Víctor con cierta impotencia.

Tiempo después quedó viudo. Días después, sin aún reponerse del dolor de lo que él llama “una tragedia”, se dijo a sí mismo que tenía que levantarse de alguna manera, y viajó a Venezuela para aplicar a una beca en Administración que había ganado. Estuvo allá alrededor de un año y medio. Regresó dispuesto a trabajar, pero se topó con un Estado quebrado. No pasó mucho tiempo antes de que encontrara una veta ideal: la casa de cambios del jirón Ocoña. Lo demás, ya es historia conocida…

Víctor sigue siendo un rebelde desde su rol de empresario socialmente responsable. Junto a Cecilia, su mujer y compañera, ha emprendido una campaña íntima y silenciosa, pero altamente efectiva: cambiar el rumbo del país desde la medida de sus posibilidades. Es decir, en base al trabajo, al respeto por sus trabajadores, al cumplimiento de sus obligaciones, al cariño por lo que hacen. Juntos viven ahora su propia vanguardia, su propia revolución.

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N EL PERÚ, LOS POLÍTICOS SON MAYORITARIAMENTE PERCIBIDOS COMO CORRUPTOS, tanto así que la expresión ‘otorongo no come otorongo’ sintetiza la idea. Nos aburrimoscada vez que sabemos de otro congresista que ha quebrado la ley, pues meses después la máxima sanción que recibe es una corta suspensión en el ejercicio. Sin embargo, la corrupción de empresas y entidades públicas -a la vez- no ha generado ningún término popular (como el ‘otoronguismo’) pese a que en tales casos las pérdidas son mayores en dinero y, las consecuencias de los actos ilegales, pueden ser el daño ambiental y la falta de recursos a futuro.

el informe

CORRUPCIÓN

de las empresas

con el Estado:¿Por qué importa

menos?ILUSTRACIÓN JOSÉ LUIS CARRANZA

POR JACQUELINE FOWKS

>

EEn la encuesta nacional 2012 sobre

corrupción (Ipsos-Apoyo/Proética) los ciudadanos estiman que de cada 100 empresarios, 65 son corruptos, y de cada 100 políticos, 76 también lo son. Si comparamos las cifras con las encuestas de años anteriores, vemos que se está acortando la distancia entre ambos.

Consultado para este informe el procurador público anticorrupción, Julio Arbizu, precisó que un 50% de los casos que procesa su

entidad son por peculado (uso indebido de un bien público para un funcionario o para un tercero) y un 15% por colusión, figura en la que una empresa que contrata el Estado pacta maliciosamente con el funcionario público, un hecho que defrauda y perjudica al Estado.

De 300 casos en giro en la Procuraduría Pública Especializada en Delitos de Corrupción (PPEDC), en más del 50% están implicados ministerios (31,2%) y municipalidades distritales (20,4%) y, claro, también un agente externo

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que suele ser una empresa, un privado. Las prácticas más frecuentes son irregularidades

en las evaluaciones técnicas y económicas de las propuestas presentadas en las licitaciones; irregularidades en la adjudicación de la buena proa empresas que no cumplían con los requisitos exigidos; y sobrevaloración de precios de un bien o servicio.

De acuerdo a la PPEDC, de esos 300 casos, en el 49% están implicados funcionarios públicos con un alto cargo –en su mayoría gerentes o miembros de los comités especiales para contrataciones y adquisiciones con el Estado–, compromete grandes montos económicos y han tenido impacto en los medios de comunicación.

Si bien aquí los medios no suelen indagar sobre corrupción empresarial, le preguntamos a la autorade una de estas investigaciones qué resultadoshubo tras su denuncia.

Julia María Urrunaga documentó –en abril– cómo empresas peruanas exportan madera que hacen pasar como si fuera extraída de una concesión legal, aunque trafican con certificados para talar en zonas donde está prohibido hacerlo o sobre las que no tienen una concesión otorgada. La investigación se llamó ‘La máquina lavadora. Cómo el fraude y la corrupción

en el sistema de concesiones está destruyendo el futuro de los bosques del Perú’, y fue una iniciativa de la Environmental Investigation Agency (EIA).

¿HUBO ALGUNA SANCIÓN A LA EMPRESA BOZOVICH O ALGUNA MODIFICACIÓN EN LOS PROCEDIMIENTOS PARA QUE NO SE SIGA REPITIENDO LA LAVADORA DE PERMISOS?JMU: No, ninguna sanción aún desde el gobierno o las autoridades del Perú. Bozovich ha dicho que incorporan medidas y controles para evitar que esto pase desde hace ya varios años, pero si con todas esas medidas aún mantienen porcentajes tan altos, ¿cómo habrán empezado? Publicaron un comunicado luego de nuestro informe y no se atrevieron a negar la veracidad de los datos. En reuniones privadas posteriores, su representante Erick Fischer se quejó sobre el tono del informe, pero reconoció la validez de la data.En paralelo, (la agencia EIA) presentamos un pedido de investigación al gobierno de EE.UU., a la Oficina de Comercio (USTR por sus siglas en inglés), con los resultados de nuestro análisis y gran cantidad de data adicional. Esto porque en el marco del TLC Perú-EE.UU., se incluyó un ‘Anexo sobre la Gobernabilidad del Sector Forestal’ por el cual ambos países se comprometen a tomar acciones para evitar la tala ilegal y la corrupción y aumentar la participación y la transparencia. Al final del anexo, se establece un mecanismo a seguir en caso de que haya indicios de que se comercialice madera de origen ilegal entre ambos países. Pocos días después de recibir nuestra data, USTR abrió un proceso de investigación, activó una comisión de trabajo interministerial, y sabemos que se han reunido con las autoridades peruanas, la industria, nosotros y otros miembros de la sociedad civil de ambos países. Ese proceso sigue en camino.

Nos han informado que el Gobierno de Perú les ha comunicado que han cancelado los derechos de la mayor parte de las concesiones identificadas en nuestro informe. Si bien es un paso en la dirección correcta, eso no soluciona el problema porque existen otras cientos de concesiones que pueden ser utilizadas para el mismo mecanismo de lavado. El problema es el sistema.

¿QUÉ OTRO RUBRO ES MUY VULNERABLE A LA CORRUPCIÓN ENTRE EMPRESAS/ESTADO EN CUANTO A MEDIOAMBIENTE EN EL PERÚ?Todo. Hemos visto la pesca, por ejemplo. En minería aún ni nos hemos metido (a investigar), pero vemos mucha corrupción y autoridades que miran para otro lado. Otro sector altamente peligroso para el ambiente y la destrucción forestal es el de los biocombustibles, por contradictorio que parezca. Los ‘venden’ como acciones responsables para reducir nuestro impacto sobre el planeta, pero las plantaciones de palma para producirlos se establecen sobre la deforestación de bosques primarios, lo que genera muchas más emisiones (además de corrupción e impactos sociales sobre

“Mientras tengamos un ESTADO fácilmente SOBORNABLE (…) vamos a seguir con el PROBLEMA adentro”Cecilia Blondet, directora ejecutiva de ProÉtica

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comunidades locales e indígenas) que loscombustibles fósiles en sí mismos.Una investigación de IDL-Reporteros realizada este año probó que empresas pesqueras peruanas formales declaraban volúmenes menores de pesca –y la autoridad correspondiente daba el visto bueno a ese peso falseado– con el fin de evadir pagos al Estado. El costo adicional de esa pesca negra es la depredación del mar. Tras la denuncia, no hubo por parte del ministerio de Pesquería respuestas efectivas para que la situación se modifique. Cuando la viceministra de Pesquería Patricia Majluf intentó reducir cuotas de merluza a contracorriente de lo que pretendía el gremio empresarial, fue defenestrada

Planteamos preguntas de este mismo rubro a Cecilia Blondet, directora ejecutiva de ProÉtica, el capítulo peruano de Transparencia Internacional.

¿HAY ALGÚN RUBRO DE LA ACTIVIDAD EMPRESARIAL EN EL QUE PROÉTICA HAYA DETECTADO MAYOR RIESGO O MÁS CASOS DE CORRUPCIÓN PROBADA?CB: La corrupción y el contubernio del sector privado y del Estado comienzan a ser motivo de investigación, eventualmente de sanción y, lo más importante, de preocupación, de sectores empresariales que por distintas razones no quieren ser mirados como agentes de la corrupción.

En el Perú, la corrupción existe, fundamentalmente, por la debilidad institucional del sector público. Esto tiene que ver con la generalizada mediocridad del funcionario público -mal entrenado, desmotivado, mal pagado, politizado-, con procesos farragosos que atentan contra la efectividad de la función, con mecanismos de control inapropiados o inexistentes ahí donde se presentan los mayores riesgos de corrupción y con un deficiente sistema de administración de justicia, difícil de reformar y modernizar.

DURANTE AÑOS VEMOS PASAR PLANES Y COMISIONES ANTICORRUPCIÓN Y, A LA VEZ, GRANDES CASOS DE CORRUPCIÓN EMPRESA-ESTADO QUE ESOS PLANES Y COMISIONES NO HAN PODIDO IMPEDIR. ¿CÓMO EXPLICAR ESTA SITUACIÓN?Mientras tengamos un Estado fácilmente sobornable, en el que sea más fácil pagar un soborno o una propina antes que hacer el trámite regular, y donde no haya sanciones efectivas ni para el funcionario ni para el empresario corruptor, vamos a seguir con el problema adentro, a pesar de los planes y las comisiones que hagamos. De ahí la importancia de seguir adelante con la reforma del Estado y con una acción fiscalizadora ciudadana que ayude a los funcionarios y empresarios probos a erradicar las prácticas de corrupción.Este año viajé a Jaén y Chiclayo para investigarqué ocurrió con el proyecto especial de irrigación Olmos, que lleva a cabo la empresa Odebrecht con el gobierno regional de Lambayeque. El concurso inicial tuvo visos de haber estado arreglado –durante la presidencia regional de Yehude Simon con la

conformidad de ProInversión– y los medios regionales lo denunciaron. Sin embargo, todo siguió igual y peor. El Estado hizo una gran inversión para obras de infraestructura y, como resultado final, las tierras han sido adjudicadas –vendidas–no a pequeños ni medianos productores de la región, como era la idea hace décadas, sino a los grupos empresariales Odebrecht y Gloria.

Durante un recorrido por Cajamarca en julio, fui pasajera en una camioneta 4x4 que hacía transporte informal en una ruta de poco más de cuatro horas. Un mediano empresario, dueño de maquinaria pesada, relataba en el camino cómo iba consiguiendo contratos de pequeñas obras públicas –una ampliación de una escuela, un puesto de salud– teniendo que considerar siempre un ‘diezmo’: un 10% para el hijo del alcalde que administraba por lo bajo las contrataciones, o también el 10% para algún miembro de los comités de contratación. Y explicaba que en todo el Perú es así.¿Cómo detenemos esta forma de operar?

“Un MEDIANO EMPRESARIO

relataba cómo CONSEGUÍA contratos de

pequeñas obras públicas

teniendo que CONSIDERAR

siempre un DIEZMO para

el hijo del alcalde”