CÓMO UNA PRÁCTICA DE Yoga puede ayudarte a sanar...Sin embargo, tanto para los dolores producidos...

Yoga puede ayudarte a sanar C Ó M O U N A P R ÁC T I C A D E

© Ana Milena Pavas / Ama Para Sanar

Desde que conocí el Yoga sentí como éste puede convertirse en una herramienta para las personas que desean sanar (ojo, diferente a curar), alguna situación a nivel físico, mental, o emocional.

Hoy te voy a hablar especí�camente acerca de por qué confío y creo tanto en la practica de yoga, tanto así que quise crear mi programa YOGA PARA SANAR enfocado en pacientes y sobrevivientes de cáncer.

Si tu estás recibiendo un tratamiento para el cáncer o que acabas de terminarlo, quiero darte este mensaje:

Tu cuerpo sigue ahí, a lo mejor ha cambiado, pero no te ha abandonado ni te ha fallado. Y déjame decirte

que, incluso en quienes no han tenido cáncer, el cuerpo cambia constantemente.


El Yoga te ayudará a que te des cuenta de esos cambios, observes qué hay de nuevo en él y que cosas puedes darle para que se sienta bien en esta nueva etapa.

Cada respiración y cada movimiento te permite CONECTAR y darle una nueva oportunidad de retomar su estado natural de bienestar.


Estas fueron palabras del médico y genetista francés Gerard Karsenty y Yoga signi�ca UNIÓN.

A través de una práctica de yoga logramos interconectar los sistemas del cuerpo (músculos, huesos, órganos) con la mente y el espíritu y abrirnos a la oportunidad de que la magia aparezca y comencemos a sentirnos mejor, mas fuertes, animados, motivados y en general, en un estado de bienestar.

“NINGÚN ÓRGANO ES UNA ISLA”


DESINTOXICACIÓN: Este es un proceso metabólico fundamental para todos, pero para quienes son sobrevivientes del cáncer cuyo sistema inmunológico esta más débil y están o estuvieron en tratamientos como la quimioterapia o radioterapia, es realmente vital. A diferencia del sistema circulatorio, el sistema linfático no posee un órgano en especial que funcione como motor que permita bombear a diario los 4 litros de linfa del cuerpo humano. Por eso, este sistema depende del movimiento físico y de la gravedad para mantener este �ujo y evitar así la acumulación de cualquier residuo o toxina. Practicar yoga aumenta el �ujo linfático a través de movimientos especí�cos que activan los músculos.

5 BENEFICIOS DEL YOGA PARA PACIENTES DE CÁNCER


El mayor colector de “residuos” linfáticos es el conducto torácico, que se encuentra en la parte central del cuerpo y el cual se activa a través de los movimientos y la respiración practicada en yoga (respiración diafragmática). La gravedad también permite la desintoxicación. Esta es activada a través de posturas semi o invertidas del yoga. Por todo esto, la desintoxicación es uno de los mas importantes beneficios del yoga.


CONTROL DEL DOLOR: La mayoría de los tipos de cáncer no generan mucho dolor a menos que estén en etapas muy avanzadas o con compromiso importante de órganos. Sin embargo, tanto para los dolores producidos por el cáncer como para los demás dolores, el yoga es una de mis herramientas favoritas para su control.

Se pueden establecer tanto secuencias de respiración como de posturas especiales para aceptar el dolor, gestionarlo, disminuirlo, y yo diría, incluso para reconciliarse con él. En particular, yo he aplicado muchos tipos de respiración y movimiento de yoga para recuperarme de dolores por cirugías, por ejemplo.


FORTALECIMIENTO DEL SISTEMA INMUNITARIO: Este sistema no comprende solo un órgano en particular, sino que tiene que ver con varios sistemas, órganos y partes del cuerpo y además con la interacción y unión entre ellos. Durante los tratamientos para el cáncer, el sistema inmunitario se debilita y así se interrumpe muchas veces la interacción o unión entre todos los sistemas aumentando el estrés del cuerpo y, por ende, su vulnerabilidad a infecciones y enfermedades. Así mismo, se reducen las células blancas que son quienes forman los leucocitos o los defensores naturales del cuerpo. Esta comprobado que el yoga refuerza tanto los leucocitos como los linfocitos a través del movimiento y la respiración.


FORTALECIMIENTO DEL CUERPO: Para nadie es un secreto que los tratamientos para el cáncer debilitan el cuerpo. Tanto la quimioterapia como la radioterapia atacan las células cancerígenas, pero también las células sanas de los diferentes sistemas, óseo, muscular, etc., y esto se traduce en personas que van a presentar casos de fatiga, debilidad e incluso, atro�a. Para permitir la recuperación y el fortalecimiento se pueden usar muchos métodos y tipos de ejercicios pero hay que considerar como punto importante la seguridad del paciente y es aquí donde recomiendo el yoga con sus movimientos suaves, coordinados, localizados y a la vez funcionales.


Además, puedes hacer uso de ayudas en las prácticas de yoga como soportes, bloques, correas, cojines, entre otros, que permiten a tu cuerpo adquirir progresivamente la fuerza, �exibilidad, resistencia que necesitas. Por otro lado, yoga es un ejercicio totalmente bondadoso con los huesos y las articulaciones. La práctica constante puede producir beneficios similares a otros ejercicios o deportes pero que producen mayor impacto, dolor o riesgo para estas partes del cuerpo.


GESTIÓN EMOCIONAL: Todo el proceso de cáncer está rodeado de un sinnúmero de emociones. Esta etapa es, como diría yo, ¡todo un tsunami emocional! Podría decir que, por ejemplo, el miedo, es una de las emociones mas presentes tanto en el momento del diagnóstico como en cuando se inicia un tratamiento, o cuando se perciben los primeros cambios físicos, o más aún, cuando se analizan los análisis de resultados de seguimiento o control.

Ese miedo unido también a la ansiedad que aparece la mayor parte del tiempo ante la falta de certeza muchas veces de futuro hace que la gestión emocional tome aún más importancia, para evitar un mayor impacto en el estado de ánimo, evitar depresión, afectación de la calidad de vida y hasta en el sueño y ciclos naturales de la persona.


Y es allí donde la relación que se puede alcanzar con la práctica del yoga toma un papel fundamental siendo el principal aliado del sistema nervioso. Incluso existen estudios que sugieren que el yoga puede ser más benéfico para este sistema que caminar. Las personas que practican yoga de forma habitual pueden apreciar mejoras en sus niveles de ansiedad y estrés y se habla de que el 90% de ellos mejoran su calidad de sueño signi�cativamente.

El yoga dirigido a pacientes de cáncer invita a practicar una serie de posiciones suaves, seguras y relajantes, a conectar de nuevo con la respiración, a hacer consciencia del momento presente, a recibir las emociones y gestionarlas y a darse un tiempo para si mismos y su proceso para amarse y sanarse.


Finalmente, mi mensaje principal es que te permitas encontrar un espacio especial solo para ti con el yoga o con alguna otra técnica, deporte o herramienta que te acerque a la autosanación.

Esa sanación concebida y pensada como un estado de bienestar que nace en ti, en tu interior, en tu encuentro contigo mismo. Ese espacio para recibirte, aceptarte, perdonarte, amarte, consentirte…

Encuentra ese espacio y reconcíliate con el silencio, allí donde solo escuchas tu respiración y sientes el movimiento de tu corazón. Así, como cuando te tomas el mejor café y observas el mejor atardecer.

EJEMPLO DE PRÁCTICA PARA DESINTOXICACIÓN


© 2019 Ana Pavas

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