Codex de Los Poderes Texto

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  • Coleccin Antonio Machado

  • Martn Rodrguez-Gaona

    Codex de los poderes y los encantos

    OLIFANTEEdiciones de Poesa

  • Edicin apoyada por el Excmo. Ayuntamiento de Soria y la Fundacin Antonio Machado

    Cualquier forma de reproduccin, distribucin, comunicacin pblica o transformacin de esta obra slo puede ser realizada con la autorizacin de sus titulares, salvo excep-cin prevista por la ley. Dirjase a CEDRO (Centro Espaol de Derechos Reprogrficos, www.cedro.org) si necesita fotocopiar o escanear algn fragmento de esta obra

    Obra: Martn Rodrguez-Gaona Introduccin: Manuel Rico Rego Solapa: Marif Santiago Bolaos Colofn: Manuel Nez Encabo Fotografa: Leslie SearlesEditado por cometaColeccin olifante

    I.S.B.N.: 978-84-92942-13-8Depsito Legal: Z. 495-11Laboratorio: Columna VillarroyaCubierta: Equipo MoncayoImpreso en Espaa porcometa, s.a. Carretera de Castelln, Km. 3,400. 50013 Zaragozaprinted in spain

    Olifante. Coleccin de Poesa, fundada y dirigida desde 1979por Trinidad Ruiz Marcelln

    Coleccin Antonio Machado

    Codex de los poderes y los encantos, de Martn Rodrguez-Gaona

    III Beca Internacional Antonio Machado 2010

    Esta obra ha sido publicada con una subvencin de la Direccin General del Libro, Archivos y Bibliotecas del Ministerio de Cultura, para su prstamo pblico en Bibliotecas Pblicas, de acuerdo con lo previsto en el artculo 37.2 de la Ley de Propiedad Intelectual

  • Foto: Leslie Searles

  • 9Introduccin

    UN LIBRO MOSAICO

    El peruano Martn Rodrguez-Gaona es poeta experimentado, mag-nfico traductor de poesa y gran conocedor de la lrica contempo-rnea en castellano de ambos lados del Atlntico. Los tres libros de poemas publicados hasta ahora, Efectos personales (1993), Pista de baile (1997) y Parque infantil (2005) transitan por un camino en el que la bsqueda de nuevas experiencias de lenguaje se com-bina con el mantenimiento de races estables y reconocibles en la tradicin. Esa circunstancia, y su condicin de traductor de poetas norteamericanos de vocacin renovadora como John Giorno y John Ashbery, tan distintos a la tradicin machadiana, aportaban no pocas dosis de extraeza ante su opcin por asumir los condicio-nantes de la beca de la Fundacin Antonio Machado. Se trataba de vivir a lo largo de seis meses en la ciudad de Soria, de respirar el aire y los ambientes, urbanos y rurales, que acompaaron la vida del poeta de Campos de Castilla y de trabajar en un proyecto potico que habra de concretarse en un libro en el que acabara por depurarse y proyectarse esa realidad.

    Martn Rodrguez-Gaona ha vivido esa experiencia, pero no la ha metabolizado de manera lineal. Su reflexin soriana le ha llevado por senderos alejados del costumbrismo, de una poesa legible como una supuesta epigona machadiana. Su libro, Codex de los poderes y de los encantos, establece un mundo de relaciones

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    entre Castilla y su historia vital, entre su presente y la percepcin de determinadas realidades culturales de la Amrica originaria, de la vieja Europa y de la Espaa cambiante que ha vivido desde que, a finales de los noventa del pasado siglo, se instal en ella: Vine a Madrid porque me dijeron que aqu sera feliz. De esto hace ya mucho, no sabra decir cunto, quiz ms de una dcada, afirma en uno de los fragmentos finales del libro. Rodrguez-Gaona ha construido un libro-poema integrado por ocho cantos y una larga recapitulacin en prosa potica que se desarrolla a travs de un recorrido imaginario que se inicia en el cementerio de Highgate, en Londres, donde est enterrado Karl Marx, y concluye en una Espaa en la que juegan un papel culturalmente significativo el Santander de los cursos de verano de la Magdalena, o la Sevilla de IbnArabi, o la Barcelona de las finanzas. En medio: La Habana, Cuzco, Manhattan, Tenochtitlan.

    Es un libro cosmopolita, complejo, que bebe de las vanguar-dias aunque mantenga un tono conversacional, directo, en la dic-cin, en la msica del verso; un libro en el que el culturalismo se entrevera con la reflexin existencial, con el ejercicio de memoria y con la bsqueda de la misteriosa protena que habita ms all de la experiencia de lo cotidiano hasta convertirse en encanto. Es como si en su estancia en Soria, Rodrguez-Gaona hubiera recapitulado sobre su vida, sobre el sentido de la literatura, espe-cialmente de la poesa, y hubiera meditado acerca del proceso vital que lleva del entusiasmo, de la empata con un sentido tras-cendente de la labor potica y de quienes la acompaan, hasta el escepticismo y la desconfianza hacia el medio, hacia la industria que posibilita que el poema llegue al lector. Una desconfianza que se hace extensiva a una sociedad que deja de lado los ideales y que convierte el consumismo en el nuevo y omnipresente dios contemporneo. Una sociedad de la que el poeta se siente un ser excluido, sin identidad: Posiblemente ste sea el origen, pero / hoy eres forastero, / hijo de ningn lugar.

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    Codex de los poderes y de los encantos tiene mucho de mosaico, de palimpsesto en el que conviven tiempos distintos, ciudades situadas en las antpodas, ambientes urbanos del presente y espa-cios rurales del pasado, realidades polticas (Tcticas para el apoyo de Fidel / en la Guerra del Golfo) y realidades ntimas, comenzando por el amor, afincadas en la ms personal memoria del poeta: Mi pasado es una lista de amigos / a los que aburr por ser muy noble, / chicas a las que espant por tmido / e intenso. Con ello, Martn Rodrguez-Gaona apuesta por una poesa de la contemporaneidad, totalizadora, en la que el lenguaje potico es el apoyo o la envoltura de una meditacin sostenida sobre el sentido de la existencia y, de manera muy especial, sobre las frustraciones, decepciones y desconfianzas inducidas en el sujeto potico por el poder en sus ms diversas formas y manifestaciones: desde el poder editorial al econmico o blico.

    En la Nota que cierra el libro, su autor glosa a dos cronistas de indias: el Inca Garcilaso de la Vega y Guzmn Poma de Ayala. Son dos personajes extraos que representan el mestizaje y la con-fluencia de mundos y referencias culturales. Garcilaso itiner de Cuzco a Espaa, acabando en Crdoba dedicado a escribir sobre la conquista de Amrica. Poma de Ayala, cronista de las sevicias y humillaciones vividas por los aborgenes a manos de los conquista-dores en las ltimas dcadas del siglo xVI, naci para la Historia en Dinamarca, en 1908, cuando fue descubierta su Nueva Cornica y Buen Gobierno. En el fondo, uno y otro cronista representan una aventura extraa que nace en la Amrica de las races para desem-bocar en una Espaa que nunca dej de conducirse con un cierto paternalismo. En esa aventura, en su esencia, podemos advertir la propia esencia de lo vivido por el sujeto lrico de Codex de los poderes y de los encantos: el inquietante poema, lleno de pasadizos a la meditacin y a la incertidumbre, que Rodrguez-Gaona ha escrito con el teln de fondo de la Soria del final de la primera dcada del siglo xxi.

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    Estamos ante un magnfico libro de mltiples significados. En l se confirma la solvencia de un poeta que mezcla con sabidura cultura, vida, memoria y emocin. Y una mirada crtica y escptica hacia el mundo y sus servidumbres. Sumergirse en su lectura es un placer y una aventura: la del encuentro con la reflexin y el descubrimiento de mundos imprevistos. Lo que no es poco en los tiempos que corren.

    Manuel Rico

  • Codex de los poderes y los encantos

  • De quien fue indiano, tormentoy confidente. Salud y felicidad.

  • Y a los que todava imaginaren que hay muchos mundosno hay para qu responderles, sino que estn en sus herticas

    imaginacioneshasta que en el infierno se desengaen de ellas.

    Gmez Surez de Figueroa, Garcilaso de la Vega

    Y as entr yo en el universo rotoa buscar la compaa visionaria del amor,

    su vozun mero instante en el viento,quin sabe dnde arrojado

    Hart Crane

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    I. LA DUEA Y LOS ALTOS OFICIOS

    Componan en verso las hazaas y proezasde sus Hctores y Aquiles.

    Y como el mundo da vueltas, tambinda vueltas la luz.

    Historias de batallas y supervivencia, registrosde muertes

    y nacimientos, amores perdidos. Invocacionesde caza y cosecha,

    aventuras increbles,la voz de antiguos cdices, aquella mujer

    se te va de la boca.Fbulas,rondas de espejos quebrando espejismos,predicciones recientes

    sobre el clima. Tenebrosos relatosque fascinan a los dbiles.

    Alguna cancin.

    Historias: el hilo que hilvana a las diferentes tribus.

    Y sobre los poemas que le mostr, tendrala amabilidad de entregrmelos? Y sin molestarse

    en comentarlos,pues fue la situacin humana y no la literariala que motiv mi llamada y posterior visita.

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    Por lo dems,cada da estoy ms consciente de que mi preocupacin

    real es ser mujerantes que poeta, y as me importa mucho menospublicar que tener una vida digna,

    mnimamente.

    El cementerio Highgate, 36 acres de extensin,

    fue inaugurado en 1839 y contiene la arquitecturafuneraria

    ms importante de la era victoriana.

    La primera esposa de Charles Dickens est all,y tambin la hermana de Dante

    Gabriel Rossetti,Christina, poeta de mritos propios.

    El ms clebre de todos los residentes de Highgatees Karl Marx (died 1883, aged 63),

    quien solicit una tumba modesta, acorde

    con sus ideales proletarios. Marx est enterradoal lado de su ama de llaves, Helene Demuth,

    a quien dej embarazada.

    Aunque slo admiti el asuntodesde su lecho de muerte a Eleonor, la hija

    de Marx, en 1895,Friedrich Engels

    asumi la paternidad.

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    Dic nobis, Ma ria, quid vidisti in via?

    Aos despus,al descubrir que su marido se haba casado

    con otra mujer,Eleonor se suicid. Sus cenizas descansanen Highgate, junto a las del ama de llaves.

    Cansada de buscar en los hombres aquelloque no soy,

    observo en mi interior para intentar hallarme.

    Mtines,revoluciones, golpes de estado,escndalos agitndose en ropas de bao:nnfulas que animaban una aburrida ciudad.

    Los ltimos exponentes de la burocracia ilustrada.

    En el Sayumi, bar-chifa-oficina del congreso,

    los amigos componan el mundo:Tcticas para el apoyo de Fidelen la Guerra del Golfo

    Preferible bombardear Miami y esperaruna muerte digna.

    Sin lugar para el humorlos modernizaron,los hicieron avergonzarsede sus sueos juveniles.

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    Terminaron buscando gestospara explicar que ellos no robaron,que ellos no mataron,que slo tomaban cervezay tenan familia,solitarios amantes de las frases bellasy de las sonrisas amigas.

    Mal nacional desde el tiempode los encomenderos.

    Entre guindas, maracuyas y legumbrespienso en Panchita,

    la empleada que cuidaba de m y de mi hermana.Ella nos haca bailar la danza de los Negritos de Hunuco,o nosotros la hacamos bailar a ella?Siempre terminaba lavndonos la caradespus de que nosotros se la habamos manchado,todo con nuestro fantstico

    Mango-jabn.

    Nunca ms he vuelto a escuchar esa msica,no s qu sentira si lo hago ahora.

    Thoughts of a dry brain in a dry season.

    Mi pasado es una lista de amigosa los que aburr por ser muy noble,chicas a las que espant por tmido

    e intenso,errores que me costaron una mujery cuatro cicatrices en el brazo.

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    En otro lugar la gente baila, el marrodea cuerpos elsticos

    en una sombra proyectada hacia la luz

    Detesto la suerte,creo en la voluntad y sin embargo

    no puedo rer.

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    II. SIETE CONTRA EL GRAN VENDAVAL

    Mirad este libro, padre, a ver qu os parece. Mirad que es fruta nueva del Per.

    En la oscuridad y el silencio de una antigua biblioteca,los ojos sobre el papel descifran trazosque atraviesan sus propios rostros:15 de mayo de no importa cundo, al fin

    se acaba.El vaco hmedo de manuscritos no clasificados.As era entonces y as es ahora:Sed, nubes de polvo, notas imprecisas.Un alto en el camino y otra misivadirigida a nadie.

    Qu puedo decirte que no habite en ti?Slo aspiro a vivir en tu reflejo. Tienes razn:Algunos son herencias, otros representan benvolos

    hermanos mayores.Todos poseen un significado distintomas sus pginas encierranlas historias que te gustan tanto.

    Ellos nos mostrarnel camino para llegar a casa.Y no es gratuito:

    hasta volver a despertar en tu ser,slo tengo este silencio para convocarte.Hasta el instante de volver a ti,acepta y protege estas palabras.

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    Una vez ms no, por favor, dominaaquel brillo extrao en la mirada. Dame

    agua fresca para mis pasosy no esta quema de navos.

    Bebe, dulce Xantipa,no pierdas tiempo

    en los problemas de la polis.

    Olvidando el sentido ltimode luces que desde torres se aproximan

    o partenPor el aire, en avin

    se va mi amormurmuras

    frases sin mayor sustanciay pides que despus de todo esa sonrisa

    traiga un gran final.

    A la escuelano voy ms. Nos queda una especie

    de vida protoplasmticaregulada por carretas de golosinas, colectivosy gente que corre apremiada; una indita formade cruzar la avenida. Ests muy bien,

    no te lo han dichopero lo sabes. Encuentras la nocheperfecta, sin estrellas.

    There will be no morethe old men with beautiful manners

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    Bravosjuegos de lenguaje: palmadas en la espalda,aplausos, risas. Entrechocar de vasos,interjecciones y lgrimas

    de puro gozo.

    La realidad les demand entoncesel vender balones de gas,el comprar carritos sangucheros,el ir a trabajar a la frontera(pero nada de esto hicieron).

    Medidos bajo una moral desigualdadpierden juicios corporativos

    dignamentepor no hacer bulla

    Se mueren sin sntomas,sin colas, en un par de semanas,de cncer a la prstata o de leucemialinftica crnica.

    Simples marcas en el pavimento,luz negra

    que a todos llama.

    Carlos Oliva Y derramar mi amorpor las esquinas 1963-1994

    Juan Vega La muerteen el hospital de caridad 1965-1996

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    Claudio Baschuk La desesperacin de Diosdentro de uno mismo 1962-1996

    Mira,ah llega

    el zambovendedor de tamales y su nmeroequilibrista

    Sentadosobre una silla clavada en lo alto

    de su frente,el pequeo de siete aos empieza

    a escupir poemas,a escupir

    poemas, a escupir poemas.

    Ansiamos belleza, Padre, y nosabidura.

    A Orl ans, le signe pour lequel jai

    En el Libro de los Por quFrancisco Pizarro es una estatua:

    Su caballo contra el viento,la furia de Carvajal, lanzas,ajusticiamientos, traiciones.En los museos encontramos

    una calavera con muchos huecos,sangre

    pesada, muy pesada, alguno

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    que otro comentarioa punto de iniciarse el viaje.

    No puedes correrle a loque eres, al menosno infinitamente.

    Si no tienes a quien hablarlemira: Recuerdas a Panchita?No, ya no har nuestra comida,

    se fue con Nelson, ahoratiene sus propios hijos, te mand estas medias

    de su puesto en el Mercado Central.

    Pap, de qu muri?, ser otro hroede la patria pero, se de qu muri?

    Tena que tragar bichospara estudiarlos en su cuerpo?

    Cmo pudo rescatarlossi eran enemigos? Nunca hallaron

    su cadver?Ni un galn de los que luca

    cuando perdi la vida?

    La muerte reduce, la muerteelimina:Su beso

    el resaltador de textoque aguarda

    tras esa oficina.

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    III. EL VIAJE DE LOS MITIMAES

    Cuando la catlica fe, desterrada de Inglaterra y del septentrin, se va de un polo a otro

    a residir con los antpodas.

    Dispuesto el objetivo a capturar un gesto alegre,la msica se pierde en lo profundo del mar.Hace calor y no es necesariamente el respetoa la vida animal lo que ha guiado mi patrn

    alimenticio.Cmo se supone que he de hablar de aquelloque no se descubri?

    Seres y objetos estn en movimiento, mezclndosey cambiando,

    apareciendo y desapareciendo, plegndose,despegando. Las frases se funden, viajan

    y se pierden unas en otras.El amor es un intercambio de lenguas.Quin busca quedarse inmvilsi puede alcanzar los lmites, tocar el horizonte,su barco ebrio, explorar las lneas de la costa?

    1987, verano, hemisferio norte:Ests en el jardn de tufamilia-inglesa-de-clase-obrera,es un da soleado y te sientes

    deportiva.

    La cabellera al vientoy los ojos clavados en el vaco.

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    El atuendo escogido es una combinacinde celeste y rosado,

    pero las extremidades son fuertes,hechas para saltar vallasy dejar huellas.

    Una nube te transportaa un punto sin retorno:Piensas en el futuro.

    LAS FIESTAS EN BATH

    LAS NOCHES EN PARS

    LA LLUVIA EN AMSTERDAM

    All donde al fin no importe tu belleza,la feroz necesidad de amar.

    Qu poco tengo para contar, Piesviajeros,

    o que alguien quiera orhoy en da

    Ese aromaimposible de nombrar:

    espero pronto te abandoney amanezcas varada como un trapo sucio.

    Mis pasos hallar en la arenao sobre una piedra?

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    Desde 1967Manny no regresa al Per.Sus historias recurrentesempiezan con una chica de Chaclacayoque conoci en Nueva York.

    Le gustaba tirara la Carmencita,

    era ms putaque una gallina,

    paisano.

    En mis manos pone las llaves deun mundo

    que nos han pedido vivirnuevamente.

    Los libros de textodibujan barbas en la Baha de Cochinos,Woodstock en las estrofas de alguna cancin

    psicotrpica,Mayo del 68, sus gendarmesy adoquines

    Los males endmicos del Tercer Mundo.

    Cuando pasa algo,en Lima dicen: Ya est, ya

    se ha jodido.Dime tsi no es as. Has vistoa algn peruanoreconocer: Fui yo, he sido yo,

    hermanito.

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    Muchas encomiendas quedaran intilesy mucha tierra despoblada y todo beneficio

    perecera sin ningn remedio.

    Lo mejor que puede hacer un padreal nacer su hijo

    es morir.

    Soy cosmopolita,ciudadano del mundo.

    Imagnatequ es estar en lugaresen los que toda la ropa es para gente

    de tu talla, donde terminas

    por hacer tuya la lengua,adems

    Esta temporadaMediterrneo aydame

    la lista en los peridicoses interminable: Pinochet,

    Fujimori, Chvez.Cooperacin Internacionalinaugura una escuela tcnicaen las minas de Bolivia.

    Hablamos tanto de prdiday lo curioso del caso

    es que ignoramos nombrartodo lo que no se escribe

    con esas letras,para qu mentir?

  • 33

    La realidadsiempre fue as.

    Siento que la vida me falta, que quise hacer msde lo que la razn

    o las buenas formas han permitido.

    Ostensible y memorable pieza de alquilerfrente a la confianza de las nuevas generaciones:Cursos de verano en el Palacio de la Magdalena(Otorgado por voluntad popular a Alfonso xIII

    en 1911).

    El mar tiene un azul postal y sobre llos rayos de sol se cortan en miles

    de cristalesuna herida infinita?

    Ayer escuch a un nativo en mal ingls:Its easy to win in the Third World,pero yo busco amor, el mismodel chico de la cabellera larga y cuidadaque abraza, dulcemente, los hombros

    dorados de quien deja sin pensar

    la niez.

    Contra los peascos, las olas chocany su constante caricia

    algn da ser un paisajede alegra y destruccin.

  • 34

    Posible mente ste sea el origen, pero hoy eres forastero,

    hijo de ningn lugar.

  • 35

    IV. ILUSTRE EN SANGRE, PERITO EN LETRAS, VALIENTE EN ARMAS

    Y si salen con victoria los dan por valientes y si mueren en ella los tienen por locos.

    Sonaron palabras de nuevo nacimientopero el nombre del juego es nunca llamar

    a las cosas por su nombre.Erigirse como el punto ms alto desde

    una esplndida torre de lodo,hasta que los ineptos veanlo que t y yo somos.

    Bayly no cree en nada,ni en la estrechez de corazn,ni en la fatalidad de ser un maldito

    sudaca:toda su vida dedicadaa no bailar con los que sobran.

    Fruta, la exportacin mayor y el orgullode Chile

    desaparecieron los desaparecidosy llegan as a nuestras costassupermercados y estafadores, agencias de banca

    y prostitutas.

  • 36

    Jugoso contratolleva uno de los libros de Bayly al cine(Drogas, sexo ligero, algn

    apellido ostentoso)despus de recibir, en Espaa, el premio

    de novela Herralde.

    Los Prisioneros, ya olvidados, preferiranque le otorgaran

    algo que tuviese que ver con ellos.Quiz el PlanETA.

    Sigue, sigue adelante, y no regreses,

    fiel a tu vueltaalrededor de las sbanas.

    Sobre la mesa de noche, una lmparainsomne y libros a medio leer(Nada es lo suficientemente bueno,

    ni siquiera yo mismo).En los cajonesnfimos pedazos de papelllenos de apuntes

    en rpidos coloresacerca de imposibles temas,el nmero que en sus manos pone

    la suerte

    Sin grandes nfasisy sin erratas, aqu

    llegamos todos.

  • 37

    Con un mensaje al mvil,amigos y noticias envueltos

    en frases de escarnioalcanzan a saludarlo: Tiempos

    de mentira,muerte y desesperacin.

    Aquellos que busquen la gloriadescubrirn sus nombresentre horrores y estircol.

  • 38

    V. xIMENA FRENTE A UN ESPEJO ROTO

    Siendo la principal intencin de aquellos reyes que en esta casa no entrasen hombres, ni en la del sol

    mujeres.

    Yo siento el vrtigo de los nmeros,cada vez ante las velas,

    los cumpleaos.En la mirada, hace apenas un instante,

    la eternidad de nuestras vidas,mas todo acaba:

    la luna ilumina el firmamento,vuelvo a dormir sola.

    La sala impecable, los ltimos artefactoselctricos, siempre esta existencia digna,

    orgullosa y ridculacon mis propiedades.

    Si hubiese sido de otra forma.

    Rumores, fantasas y envenenadoschismes.

    Mis amorosas y obedientes hijas.

    Poco en realidad me convence,pero todava anhelo a ese hombre fuerte,

    rotundo, nico.Si el precio pagado no hubiese sido

    tan altoy a quien yo quiero

    me quisiera.

  • 39

    Es como cuando a alguien le amputanun brazo o una pierna,y sabiendo qu le falta

    el dolor lo despierta por la nochejusto ah,

    donde no hay nada.

    Al fin lo escribo, aunqueme d vergenza

    decirlo:Puede Dios perder al mundo

    pero a mno me fallar.

  • 40

    VI. HOY VIERNES QUE PROSO ESTOS VERSOS

    Con las luces de su gracia os preserv de lasombra y borrn del pecado de Adn.

    Llegan de un aire tan delicado, llevan tan delicada luz.Ciudad que surge tras recovecos y lujos nocturnosentre el sopor de la exaltacin alcohlica

    y los sueos: Barescon las puertas cerradas. Dnde se fueron todos, dnde

    qued el ruido, la armona?Ms bien el universo enteroen un sitio sin pesares, ni estables perspectivas.Al cntico dormirs. Medianoche: yo vendr.Vestida de rojo, esa antigua nia traza su leyenda, confirma

    lo que no pudo sery se pierde en las aguas porque es imposiblerenunciar al trabajo. Intento guardar el pequeo libroque llevo a todos lados, pero lo ha visto.Sonrisita de rigor.

    Hace mucho que esperas?Como dos siglos.

    Palabras indistintas ilustrando banalidadesque debieron ser interesantes hace un par de aos.(Por qu me llam? En realidad los otros son como parecen

    y yo no parezco lo que soy?)Est feliz porque he sido audaz, tocandosus zapatos varoniles con la punta de mis dedos.

    Son muy bonitas.A m me gustan ms tus botasLas tuyas brillan.

  • 41

    Un grupo de amigos la reconoce y se le acerca,hablan todos al mismo tiempo. Despusya no me habla: est entusiasmada con su compaa.Voy al bao, dudo si al de damas, porque es ms limpioy est cerca. Regreso. Por supuesto,

    an estn all.

    En este bar, lo que sobra es Poesa.

    Gracias Seor por entregar a este pequeo siervola espada de tu lengua en sus manos.

    Has escogido al ms dbil, al ms indigno,pero yo sabr proceder sin piedadfrente a quienes asumen tu santo nombrey usurpan las claves en vano.

    Gracias Seor por entregar la espadade tu lengua en mis manos.

    Alonso Martnez, Lavapis, Malasaa:calles fras, excesivamente iluminadas,la espontnea energa de una historiaque empieza. Sus padres, los domingos,decan que algo en ella haba cambiado

    l quiso creer que para siempre,sonrea satisfecho. De pronto, parecen perdidas

    tantas promesas.

    Gracias Seor porque la lengua hace de nosotrostu cuerpo y por siempre escribiremos protegiendoun sacro dominio imperial sobre el Tiempo.

    Esta y todas las vidas: Gracias Seor.

  • 42

    En el malestar de un rincncon dos hipotecas, cuentas de luz y facturas

    de un club exclusivo,saben que las cartas hace muchohan sido echadas. Y la cada

    fue gravemas sobrevivieron, se recuperaron,

    estaba escrito, dicen,siempre fue as, reflexionan.

    Toda injusticiao exabrupto adolescente

    fue olvidado cuando llegaquel bondadoso amigo

    y corrigi el rumbo,asegur el rescate.

    Tan a tiempoese que antes slo mereci desprecio,

    hoy es imagen de triunfoy tambin la salvacin.

    S que mi Redentor, que est en los Cielos,pese a mi miedo y mi recelo siempre me acompaa.Voy de aqu para all, veo Su rostro casi en todas partes,me siento cansado y aturdido. La gente me diceque conserve la fe, ruego a Dios

    que me muestre el camino,pero cada da estoy ms fatigado.S que mi Redentor, que est en los Cielos,pese a mi miedo y mi recelo siempre me acompaa.l est a mi lado.

  • 43

    Conduciendo por La Castellana,Luis Igareda admira el brillo de impacientes

    y fugaces semforosen las primeras horas de la madrugada.

    Un rumor de olaslo alcanza,

    el estruendo de clidasy hmedas noches

    en La Habana

    Habitaciones amplias, modernasy confortables,

    cuidadosas piscinas,ambiente cordial

    y el mejor servicio al cliente.Hasta el 7 de septiembre: 755 euros.

    Esta semanafue igual que la anterior.Hubo que ir a Barcelona,cenar con los del departamentofinanciero, resolver el inventario

    y recibir al delegadopara la prxima ampliacinde la sucursal en Las Palmas.

    Te estoy tratando bien, mi Papi?

    En quince das decidirn los trasladosy una n ueva gerencia. Luis gira

    en Capitn Haya.Entra en el Bar de Copas y se acercaa una inquietante rumana.

  • 44

    VII. SOBRE LOS DILOGOS DE AMOR

    Porque habiendo de tener hijos no eran razn que fueran mezclados de sangre divina

    y humana.

    Tampoco he pedido la luna, un ser humanono puede abrazar la luna.

    Mas s creo reconocer el cantode las hijas de la luna, de sa

    la del nombre ms antiguo.

    Entre las cuatro paredes de la bella casa iluminada,un contundente homenaje a las alturas perdidas

    de una torre.Escucha la meloda que despierta

    en los murmullos. Toma y recibe,inflmate, perece.

    Pulcra Nimpha, frater tuus, Cumac usta, torallayquim,

    Urnam tuam nunc infringit, Puyuy quita paquir cayan,

    Sed tu Nimpha. Comri

    usta.

    Escribimos oracionesde las que no nos sentimos sujetos activos.La accin del verboya no corresponde. El cmo, el dnde

    y el cundoson circunstancias despreciables

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    Sbito espacio abiertopara la maldad.

    Pronto me di cuenta de que lo que creuna guirnalda

    de ninfasera en realidad un discontinuomovimiento de sombras.

    Mi soy yo, yo soy t, tu qu soy, qu eres t,qu s yo,

    no s t, un no s qu que, oye,oye

    Escucha la meloda que despiertaen los murmullos.

    Nosotro s en la Sevilla de ibn Arabi y el-Ghazal,

    de pronto en los patios de Tenochtitlny despus en Manhattancerca de un tnel del metro.

    Lugares compartidos, paredesdonde la voz se parta en dos.

    No me oyes o no me quieres responder? Qu pasa?

    No te vayas as tan deprisa, escuchaun poco. Dnde vas tan decidida, que no oyes,

    ni ves lo ms cercano?

  • 46

    Algunas veces se necesitan las cosas que menos valen.

    No debe valer poco lo que hace a tus ojos ver y a tus odos or.

    Vaya chorrada! No vale en maquella parte ms que otra, ni yo la estimo

    ms de lo que es justo.Lo que sucede tampoco tiene

    tanta importancia,esas cosas ya no son causa (como crees)

    de mi exaltacin.

    Pues di la razn de tus preocupaciones.

    Mi mente fatigada por negocios mundanos.

    Crecimos buscando pretextos para llegar a un concierto,pelear una guerra y ser abatidos:

    Lo que ms queremos hoy es un trabajo.

    Y concluir por aceptar que s,efectivamente, existe gente

    inferior, vedados para erguirsems all de donde los llevenunas prendaso sus puos, ensimismados en

    el extremo poderde encarar la vida

    sin brillo, sin curiosidad,alegremente empeando sus rostros

  • 47

    por unas cuantas imgenesfalsas, todos los das,con horas extras, y el viento soplar

    en la ventanay un huracn nefandodestruir a sus hijos.

    Unas cuantas palabras de consensosobre construcciones que caen como frutos maduros,

    y la condena es poca,y la angustia

    Qu mecanismos estars empleandopara empezar a olvidarme, qu sbito esfuerzoejerce tu voluntad para demostrar que eres librey que no temes,o que al menos es cierta

    la furia que sientescuando piensas en mal ver a otra joven parejapaseando por los parques con bolsas,biberones y juguetes.

    Desaparecido el hombre, la vozse convirti en luz.

    Eres t aquella divinidaddel Arpa y la Poesa? Por qu quieres

    que me porte como una santay me llamas Cecilia? Eres un tomuy raro, joder, as que

    djame en paz.

  • 48

    Este empecinado y ciego recorridopor bares y plazas

    buscando colores, guiado por BeatrizHastings,por el olor violeta de aquel lecho,

    todas sus noches.

    No hay milagro posible, nadie quien escuche.

    Buenos das, Babel: ruegos, lgrimas, confianzaen la voz del sentimiento y la verdad,

    indiferencia, y qutame la mano de encima,pero, por favor, no me rechaces,no me persigas, djame pasar, djame pasar,

    tranquilzate, lo eststerminando de estropear, olvdate por favor,no me toques,gilipollas.

    Lo contrario de la vida no es la muerte,lo contrario de la vida es la nada.

    La historia de mi reino, toda,y mi reino

    por toda la Historia

    En cualquier rincn del coloreado mapamundiel tema es, en verdad, la luz:

    algo que ningn cambio de clima o distanciaalcanzar a borrar.

  • 49

    Los altivos, irnicos rojos, amarillos rebeldesel penetrante caballete teido de azul

    que se arrinconabajo un profundo cielo malva, frente a la vista,vencido por la forma y la carne

    de las cosas mismas.

    En la luz de las superficiesse encierra la eternidad.

    El fracasoes un hombre partido en dos,

    y una mujer desnudarepresenta el universo. Veo una seora mayor

    que te preocupay aparece tambin el Demonio: estos dos esqueletos

    son sus llamados.

    Pronto realizars un viaje.

    Un hilo muy tensollega a transmitir el sonido de largas distancias.

    Que la pasin, en su grandeza,permanezca

    y se transformeen ternura, s, pero tambincelos,

    belleza forjada,convivencia, hijos.

    Afinas tu garganta. Y como el corazn da vueltas,tambin da vueltas la luz.

  • 50

    VIII. CODA

    En mis hermosos jardines bien floridos,con los gentiles y sus hierbas,cuenta por cuenta,voy andando, jugando, floreciendo,voy llamando

    los poderes y los encantos,Huaca Prieta, Huaca del Sol, y Huaca de la Luna,con la hierba del hombre,con la hierba del len,con la hierba de la coqueta,voy cantando

    Que mi buen remedio viene ya.

    Cuatrocientos aos de la muerte de quien domin al mundo:Hispaniarum et Indiarum Rex. Y unas cuantas palabras

    frente a tus sentidosde impasible metal precioso.

    En las sombras se dan la manovencedores y vencidos,

    y hasta el ocano, corts cmplice,duerme a pierna suelta acariciado

    por el viento

    Cojeando,de la nube hemos descendido.

  • 51

    Dominar todas las extensiones conocidas del planeta,para qu? Slo busco un cuerpo

    proporcional al mo: Algo

    que me invite a descansar.

    Quiero el Poderpara prescindir hasta de esto

    y as quiza la muerte dominar.

  • Finis desolatrix veritae

  • 55

    Cuando me incorpor tuve la sensacin de haber sido arrastrado por una corriente elctrica. No puedo recordar cmo, cundo o con exactitud dnde me enter de que, al fin, todo estaba decidido. El sol, inmvil y apagado, no alimenta rincn alguno del planeta. Todo lo que surgiera por el raro soplo del germen, los edificios, los rboles, los hombres, las aguas, el ruido del mar, todo parece con-cluido. Lejos de ser una sorpresa, la noticia confirmada represent para m cierta liberacin. Siempre vi cosas y gente donde otros apenas vieron nada. Estoy cansado, cansado de tener la razn.

    Vine a Madrid porque me dijeron que aqu sera feliz. De esto hace ya mucho, no sabra decir cundo, quiz ms de una dcada.

    La tormenta ha alcanzado el continente. Ninguna pestilencia o plaga ha sido antes tan mortal, tan terrible. Las cosas sucedieron como la cada de una casa de naipes, sin solucin de continui-dad. Lo que en otro lugar tard quince das, aqu se destruy en quince aos. Sin embargo, en este ltimo ataque, el avance y la culminacin de la enfermedad fueron cuestiones de media hora. Nadie sabe quin ofrece estos juegos, quin va a la cabeza de esta procesin, aunque todos tiremos de su carro triunfal.

    No estoy seguro de si hubo algo que se hubiese podido hacer al respecto (por qu persevera, entonces, este sentimiento intil?). Los signos eran claros y los augurios los peores. Pude leer lo que engendraba el aire en las fuentes, en el movimiento de las copas de los rboles, en el fulgor de las entraas de los peces. Intent transmitir lo que mis sentidos, a su pesar, aceptaban. Me llen de datos y expuse alternativas en verbenas, corralas y bailes tan diversos como numerosos. Fui lo ms exacto que permitan mis trazos, lo ms reiterativo en mis colores. Ped un nuevo inicio y fe en la actividad comn: pint un breve instante de amistad. Pero

  • 56

    fue intil, cierto furor los espant, mis asociaciones no se com-prendieron; me convert en un hombre invisible. Pronto aquellos que cre cercanos me abandonaron, varios no tardaron en favore-cerse de mi condicin. Confundieron la urgencia con soberbia. De todas las traiciones, una fue la ms inesperada. Su cuerpo prometa absoluto y su mente perplejidad, pero debo aceptarlo: tampoco ella tena valor.

    Entonces tuve un trabajo y lo que cualquiera cree tener dere-cho a soar. Pero no me cuelgo mritos, simplemente cumpl con lo acordado. A pesar de mi origen, con esfuerzo y honestidad, lo haba conseguido. Animado por tales logros, intent cierta pro-yeccin comn. Me top con ellos, los que finalmente me haran descubrir mis propias limitaciones. Pensaba que compartamos algo, ideales elevados, el aprecio por palabras y modos que llega-ban desde lejos, la sensatez de proteger el presente, el intercambio de una conversacin aguda me siento tan ridculo al verme con una botella de vino para celebrar un fin de semana con aquellos que demostraron ser una horda de chacales. Pronto, a travs de la intimidacin y el control a distintos niveles, sin delegar nunca funciones y con falsas promesas, tomaron represalias. Su actitud fue la usual hacia quienes mostraban temor o rehusbamos reco-nocernos como inferiores: me hirieron con los medios de su crculo amplio y estrecho.

    Los relmpagos anunciaron la llegada a mi casa de cuatro caballeros: un abogado, un banquero, un psiquiatra y un polica. Fueron implacables. No represent mayor esfuerzo para ellos demostrarme que mi vida era miserable. Una vez que lo hicieron se entretuvieron un rato largo. Nadie me defendi. Numerosos tes-tigos, bienintencionados, decidieron que abstenerse era el modo de conservar su integridad. Recuerdo que sus versiones fluctuaban de un es su problema a un esas agresiones nunca existieron. Incluso

  • 57

    fueron prdigos con el cinismo, lo indeterminado y las teoras inte-lectualmente prodigiosas. La realidad adelgaz con el lenguaje.

    Los dividendos para el da de hoy son hmeros, fmures, tibias y crneos; hombres que buscaban retratarse con gente influyente, mujeres que simplemente queran ser madres y morir. Una nmina de huesos: por una deuda perpetua sepultados, encadenados a inversiones imaginarias.

    Pese a mi apariencia poco conspicua, es hora de decirlo: yo soy el cordero del abismo. Fueron noches enteras en bares umbros, a los que llegaba siguiendo ecos, susurros, silencios; confusos cantos de misticismo mundano. Algunos me recordarn como un mons-truo por mi voracidad, pero en todo ese tiempo, una gran poca, estuve malherido. Mis ojos antiguos me jugaron malas pasadas, con excesiva familiaridad transform una fbrica de placer en una mezquita. Me hice experto en geografas extraas, tneles sordos, feroces intercambios de lenguas. En cierto modo este fue un buen entrenamiento, comprob que era factible tanto la duplicidad de la piel como su reversibilidad, y que mi cuerpo an tena peso y temperatura. Acept que era imposible ser y practiqu lo inconfe-sable. Pero an senta mucha ternura en medio de la sordidez.

    El tiempo se desintegra, la luz se oscurece, los nios ya no juegan en los parques. Ms pronto que nunca, un ro incesante de sangre hirviente y los contornos de la realidad definidos con un brochazo grueso, en contrastes insalvables de oro, ocre y negro. Recordar alguien, cuando ya muchos estemos obligados a huir, aquellas lejanas ilusiones primeras o tendrn mejor suerte mis msicos, mis payasos tristes, mis muecas monstruosas? Busco olvidarlos, tomar discretamente mi lugar en esta procesin. Al fin yacen inertes, para m tambin, los viejos anhelos, la alegra, los sueos, el optimismo de cuando la fiebre de esta fiera era apenas

  • 58

    un ser protoplasmtico. Repitamos juntos, una vez ms, la nmina de huesos: simulacros periodsticos y zares del ladrillo, editores millonarios y asignacin de terrenos sin clasificar, aventuras trans-nacionales, chauvinismo, premios acordados, licitaciones dudosas, agentes literarios, concejales corruptos, escritorzuelos del popu-lismo meditico, representantes y ciudadanos semianalfabetos, fotografas en ferias veraniegas con hroes deportivos y bailari-nas nuestro fin de siglo, su demagogia y clientelismo; las ruinas de lo ideolgico y la especulacin de lo simblico, artfices de la transicin poltica.

  • 59

    Nota al Codex de los poderes y los encantos

  • Guamn Poma de Ayala, Nueva Cornica y Buen Gobierno, 1615.

  • 61

    La historia es conocida: Garcilaso de la Vega, el Inca, y Guamn Poma de Ayala, dos cronistas de indias, son ampliamente consi-derados entre los padres fundadores de las literaturas americanas. Sin embargo, es difcil imaginar un destino ms aciago para quie-nes hayan decidido expresar su visin del mundo a travs de las palabras.

    El Inca Garcilaso (1539-1616) fue un mestizo cusqueo, de sangre noble por ambos troncos familiares, que se convirti en un destacado intelectual renacentista, siendo el mejor traductor de su poca de Los dilogos de amor de Len Hebreo. Llegado a Espaa, quiso probar fortuna en el esplendor de la corte del siglo xVI, en una extraa peripecia en pos de su herencia paterna, la cual le fue negada. Vivi oscuramente en Crdoba donde, resignado, se dedic a componer los libros que lo haran clebre La Florida (1605) y Los Comentarios Reales (1609). En la paz de una existencia modesta, Garcilaso logr recuperar su identidad y enmendar, con minuciosidad y excelente prosa, muchos de los errores que come-tan otros cronistas sin el privilegio de su formacin entre dos mundos al emprender narraciones sobre la conquista de Amrica y la historia del Tahuantinsuyo.

    Sorprendente, casi inverosmil, y profundamente emblemtico es el caso de Felipe Guamn Poma de Ayala (1534-1615?), quien nace para la historia en Dinamarca en 1908, cuando se descubre, en la coleccin de la Biblioteca Real de Copenhague, el manuscrito nmero 2.232, perteneciente a su Nueva Cornica y Buen Gobierno (redactada entre 1584 y 1615). El texto de 1.200 pginas y 450 dibujos, estuvo extraviado durante ms de tres siglos: Guamn Poma lo haba concebido como un informe real elaborado a lo largo de cuatro dca-das, en las cuales recorri pacientemente los territorios conquistados, para describir los abusos a los que eran sometidos los aborgenes, ya nuevos cristianos. Cumpliendo con un encargo de su padre, el espaol Martn de Ayala, que haba anunciado la empresa en 1587, Guamn Poma envi su alucinada narracin al rey Felipe III.

  • 62

    En el Tahuantinsuyo, los Incas, al anexar a los pueblos some-tidos, creaban una nueva clase social, los llamados mitimaes, individuos indeseables por su potencial desestabilizador, conde-nados al exilio, a las arduas fronteras del Imperio. Nunca pudieron imaginar que tambin ellos seran vctimas, y que no podran gozar del consuelo de sus seres amados. En nuestros das, los parale-los parecen obvios, aunque no sea sencillo precisar qu intereses esconden los conflictos ms ntimos, qu centro o periferia es per-manente. Quiz puedan ser tiles estas palabras de Guamn Poma, no por lejanas menos actuales: Lo que escrib es difcil de leer, pero, no dicen lo suficiente los cuadros que he dibujado?

  • NOTA BIOBIBLIOGRFICA

    Martn Rodrguez-Gaona (Lima, 1969), poeta, traductor y ensayista, ha vivido en Per, Estados Unidos y Espaa, y ha publicado los libros de poemas Efectos personales (Ediciones de Los Lunes, 1993), Pista de baile (El Santo Oficio, 1997) y Parque infantil (Pre-Textos, 2005) y el ensayo Mejorando lo presente. Poesa espaola ltima. Posmodernidad, humanismo y redes (Caballo de Troya, 2010). Ha obtenido becas de creacin de la Fundacin Antonio Machado en Soria (2010) y de la Residencia de Estudiantes (1999-2001), institucin en la que tambin des-empe el cargo de coordinador del rea literaria hasta 2005.

    Su obra como traductor de poesa estadounidense contempornea incluye versiones como La sabidura de las brujas de John Giorno (DVD, 2008) y Pirogra-fa: Poemas 1957-1985 (Visor, 2003), una seleccin de los primeros diez libros de John Ashbery. Como editor ha publicado libros para el Fondo de Cultura Econ-mica de Mxico (La antologa Honor de los vencidos de Luis Antonio de Villena) y la Residencia de Estudiantes de Madrid (La serie de audiolibros Poesa en la Residencia: La voz de Jaime Gil de Biedma, Jos ngel Valente, Olga Orozco, Gonzalo Rojas, etc.).

    La obra de Martn Rodrguez-Gaona es recogida en Festivas formas. Poesa peruana contempornea de Eduardo Espina (Medelln, Universidad de Antio-qua, 2009) y Los relojes se han roto: Antologa de poesa peruana de los noventa (Guadalajara, Mxico: Ediciones Arlequn, 2005) y ha sido analizada en el estu-dio En la comarca oscura. Lima en la poesa peruana 1950-2000 (Fondo Editorial de la Universidad de Lima, 2006).

    En relacin a las artes, ha participado en proyectos del MUSAC de Len, el MEDIALAB de Madrid y la galera Fcares, as como conferencias sobre arte peruano contemporneo en el Palacio de la Audiencia de Soria y la Universidad Sorbonne de Pars.

  • El jurado compuesto por los siguientes miembros de la Comisin Nacio-nal para la Conmemoracin del Centenario de la Llegada de Antonio Machado a Soria:

    Carlos Martnez Mnguez. Alcalde de la ciudad de Soria, que acta como Presidente del Jurado.

    Marif Santiago Bolaos. Directora de Cultura de Presidencia del Gobierno (en representacin de Mara Teresa Fernndez de la Vega, Vicepresidenta Primera del Gobierno y Presidenta de la Comisin Nacional).

    Manuel Nez Encabo. Presidente de la Fundacin Antonio Machado, que acta como Secretario.

    Antonio Amors. Direccin General de Potica e Industrias Culturales (Ministerio de Cultura).

    Javier Serena. Direccin General del Libro, Archivos y Bibliotecas (Ministerio de Cultura).

    Manuel Glvez. Direccin General de Evaluacin y Cooperacin Territo-rial (Ministerio de Educacin).

    Rufino Snchez. Director de Cultura del Instituto Cervantes.

    Concha lvaro. Directora de Relaciones Institucionales de la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales.

    Amalia Iglesias Serna. Ex-Presidenta de la Comisin Ejecutiva Nacional Antonio Machado.

    Decidi otorgar la III Beca Internacional Antonio Machado al escritor Martn Rodrguez-Gaona.

  • COLOFN

    Poder saborear este nuevo libro de creacin potica se debe a Antonio Machado y a Soria, como fruto de las semillas machadianas que se sem-braron en Soria con motivo del centenario de la llegada del poeta a la ciudad del Alto Llano Numantino. Aprovechando el impulso dado por la Comisin Nacional Conmemorativa, creada por el Gobierno de Espaa, la Fundacin Antonio Machado con el patrocinio del Ministerio de Cul-tura ha puesto en marcha la iniciativa, indita en el panorama cultural y literario espaol, de propiciar nuevas creaciones poticas, poniendo a los jvenes escritores en contacto con la fuente del manantial inagotable de la sublime poesa machadiana, con la dotacin de una beca que posibilita la estancia en Soria durante varios meses de poetas de todas las partes del mundo.

    En esta tercera edicin, el escritor y poeta peruano Martn Rodr-guez Gaona, continuando el camino iniciado por los poetas venidos de la India y de Irak, ha escrito desde la Soria machadiana una obra que refleja un estilo literario y una personalidad original, donde late potica-mente el pulso de la compleja sensibilidad humana con ecos actuales y universales.

    Manuel Nez EncaboPresidente de la Fundacin Antonio Machado

  • NDICE

    Introduccin ................................................................................................. 9

    I. La duea y los altos oficios ....................................................................... 19

    II. Siete contra el gran vendaval .................................................................. 24

    III. El viaje de los mitimaes ......................................................................... 29

    IV. Ilustre en sangre, perito en letras, valiente en armas ............................. 35

    V. ximena frente a un espejo roto ................................................................ 38

    VI. Hoy viernes que proso estos versos ........................................................ 40

    VII. Sobre los dilogos de amor ................................................................... 44

    VIII. Coda .................................................................................................... 50

    Finis desolatrix veritae ................................................................................ 43

    Nota al Codex de los poderes y los encantos .................................................. 59

    Nota biobibliogrfica .................................................................................... 63

    Jurado .......................................................................................................... 65

    Colofn ......................................................................................................... 67

  • En esta edicin se emple papel registro ahuesado en tamao 65 x 90 de 125 gr. m2 y cartulina Freelife Merida de 280 gr. m2. Se utiliz el tipo Bodoni en los cuerpos 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13, 18 y 24. Color Pantone 2715 U y 2735 U.

  • Codex de los poderes y los encantos

    Martn Rodrguez-GaonaOlifante. Ediciones de PoesaColeccin Antonio Machado

    Este volumen se imprimien los Talleres Editoriales Cometa de Zaragoza,cuidando el proceso tcnico Alberto Lisbona,

    y fue encuadernado por Aragonesa de Encuadernaciones.El libro qued terminado el da 23 de abril de 2011.

  • LIBROS PUBLICADOS EN ESTA EDITORIAL

    COLECCIN OLIFANTE

    luis cernuda, Cartas a Eugnio de Andradejorge manrique, Coplas de amor y de muerteluis antonio de villena, Un paganismo nuevo*ngel crespo, El aire es de los dioses*rosendo tello ana, Meditaciones de medianoche*francis viel-griffin, La partenzangel guinda, Vida vida*dino campana, Cantos rficosngel petisme, Cosmtica y terrorpoesa italiana de hoy (1974-1984), La narracin del desengaojacobo fijman, Poemasantnio osrio, Antologa potica*carlos vitale, Nocin de realidad*joven poesa aragonesa (1987), Los placeres permitidospoesa mozambicana del siglo xx, Poesa en accinleopoldo alas, Los palcospietro civitareale, Alegoras de la memoriamarina pino, Dejemos que Venecia se hundajorge de sena, Sobre esta playajulio antonio gmez, El corazn desbordado (Epistolario)miguel anxo fernn-vello, La raz posedaldo ivo, La moneda perdidamanuel vilas, El rumor de las llamascecco angiolieri, Cancionerow.b. yeats, La torre y el unicorniongel guinda, Claustro*rafael inglada, Vidas ajenasjean-pierre colombi, Lecciones y alegorasjos viale moutinho, Un caballo en la nieblacharles cros, 40 poemasjuan abeleira, Umbral del centinela y La piel iluminada

  • luis fernndez ordez, Pjaros de inviernoverglio alberto vieira, Piedra de trancemagdalena lasala, Ser leve y parecer que no te amo*jos luis rodrguez garca, En la noche ms transparenteclara jans, Ver el fuegomiguel labordeta, Abisal cncergabriel sopea, La Noche del Becerrongel guinda, Conocimiento del medio*manuel estevan, El que cuenta las slabasngel escobar, Cuando sal de La Habananancy morejn, Botella al marxulio lpez valcrcel, El volumen de la ausenciafernando sanmartn, Los ojos del domadorrobert burns, Caledonia y otros poemasosas stutman, Los fragmentos personalessergio algora, Paulus e Ireneteresa agustn, La tela que tiemblamariano esquillor, Arco lricoildefonso-manuel gil, Por no decir adisjos manuel gutirrez, El color del airejoaqun snchez valls, Preludio y fadojess jimnez domnguez, Diario de la anemia Fermentacionesigo garca ureta, Direccin de la derrotateixeira de pascoaes, Seora de la nocheandr pieyre de mandiargues, Gris perlajos agostinho baptista, Ahora y en la hora de nuestra muerteandrs unger, Visionesdavid rox, Como quien pide permiso para la soberbialex susanna, Intil Poesangel guinda, Toda la luz del mundoflorbela espanca, Las espinas de la rosaantnio ramos rosa, Acordesalfredo saldaa, Palabras que hablan de la muerte del pensamientojos manuel caplo, Y si no existieses?xos mara lvarez cccamo, Habitacin del marpablo neruda, Canto corporalngel guinda, Toda la luz del mundo (Edicin plurilinge)

  • cervantes, Poesamanu cncer, Poesa completaelena pallars, Ella guarda secretosantnio osrio, El lugar del amorana cristina cesar, Forma sin normabeln reyes, Atrvete a olvidarmemanuel vilas, Los chicos estn bien. Poesa ltimajos luis alegre cuds, Poemasenrique villagrasa, Lnea de luzricardo dez pellejero, El cielo del sol mecidongel guinda, Claro interiorvv.aa., 20 Poetas Aragoneses Expuestosbegoa abad, La medida de mi madremanuel m. forega, Ademenosngel sobreviela, Romangel guinda, Toda la luz del mundo (Edicin europea)octavio gmez milin, Nada mejor para esta nochebeatriz gimeno, La luz que ms me llamamarga clark, Amniosnuria ruiz de viaspre, El pez msticocasimiro de brito, En la va del maestrojos antonio conde, El ngulo y la llagajohn keats, Antologa potica (Odas, Sonetos, Otros Poemas, La Vspera de Santa Ins)vv.aa., Avanti (Poetas espaoles de entresiglos XX-XXI)dolan mor, El idiota entre las hierbasdavid aceituno, Sylvia & Tedmiguel ngel ortiz albero, Troupejri talvet, Del sueo, de la nieve (Antologa 2001-2010)jos antonio labordeta, Mar de amor. Cancionesngela serna, Pasos. El sueo de la piedravv.aa., Yin: Poetas aragonesas, 1960-2010antn castro, El paseo en bicicleta

  • SERIE MAIOR

    vicente pascual, Las 100 vistas del Monte Interior

    papeles de trasmoz

    ngel guinda, El Mundo del Poeta. El Poeta en el Mundojos luis de la vega. ouka leele, I Premio Poesa de Miedoantonio machado, Cancionero de amor y de muertemiguel ngel curiel. ngel gracia, II Premio Poesa de Miedovicente pascual, a la Vida, a la Muerte y a mi Bienamada. Cancioncillas y cancionejasalfredo saldaa, Hay alguien ahgustavo adolfo bcquer, Carta tercera. Desde mi celdagustavo adolfo bcquer, Un paseo por su poca. Cuestionariozhivka baltadzhieva. germain droogenbroodt. ana muoz. agustn porras. manuel

    vilas, VII Festival Internacional de Poesa Moncayoluigi marez. arantza semprn, III Premio Poesa de Miedoricardo fernndez moyano, Poetas suicidas: sensibilidad o supervivencia.brenda ascoz, casimiro de brito, gonzalo escarpa, cesc fortuny i fabr, dolan mor,

    marian ramntol, VIII Festival Internacional de Poesa Moncayomanuel martnez forega, Memoria y recuerdo en el poema Espacio de Juan Ramn

    Jimnezagustn porras, La mosca becquerianangel guinda, Poemas para los demsmanuel m. forega, jos javier alfaro calvo, miguel ngel marn uriol, dolan mor,

    marian ramntol serratosa, IV Premio Poesa de Miedoantn castro, Vivir del airejos antonio labordeta, Hundiendo en las palabras las huellas de los labiosmohsen emadi, david mayor, emilio pedro gmez, jos luis martnez mallada, V Premio

    Internacional Poesa de Miedo, 2010ngel guinda, EspectralFERNANDO SARRA, Babel en las manosMIGUEL NGEL YUSTA, Cancionero de coplas aragonesas

    COLECCIN VERUELA

    octavio gmez milin, Lugares comunesvicente pascual, De la nada nada viene. Todo cabe en el vacogustavo adolfo bcquer, Nuevas rimasjulio espinosa guerra, sintaxis asfalto

  • COLECCIN ANTONIO MACHADO

    subhro bandopadhyay, La ciudad leopardoabdul hadi sadoun, Siempre todavamartn rodrguez-gaona, Codex de los poderes y los encantos

    * Agotados