Elaborado por:

Antonia SerranoYeisa RodríguezZiomara GarcíaDeysi Arias

Junio, 2008.

En el presente material se esbozan un conjunto de ideas sistemáticas referida a los saberes y sentires, lo estético y lo ético en el proceso enseñanza – aprendizaje.

Gracias a la información obtenida en las lecturas correspondiente a la Unidad I de la Asignatura Visión Emergente de la Educación en el ámbito Sociopolítico Contemporáneo, los aspectos señalados se refieren a: La Pedagogía del Sentimiento, Las Teorías Pedagógicas: el Aprendizaje, Desaprendizaje y Reaprendizaje y La Teoría del Sentimiento : Gramática de la Vida y del Sentimientos y a nuestra experiencia en el ámbito educativos, presentamos el análisis colectivo de estos aspectos, con los que intentaremos dar respuesta a la siguiente interrogante: ¿Cómo se constituye un sujeto Pedagógico?: ¿Cómo se constituye un sujeto Pedagógico?.considerado tema controversial en los últimos tiempos dentro del ámbito de la educación.

¿Cómo se constituye hoy el sujeto pedagógico?

A lo largo de la Historia de la Educación en Venezuela, han existido innumerables intentos de diseño Educativos relacionados con el momento histórico. Es por ello que en los modelos pedagógicos modernos se puede reconocer fácilmente la influencia de las teorías de aprendizajes provenientes de paradigmas conductistas.

Luego la incidencia de los desarrollos piagetianos en aquellas prácticas llamadas constructivistas, y más recientemente la fuerte demanda y apropiación desde lo educativo de la perspectiva sociohistórica del desarrollo originada en Vigostky por los años ’30.

Desde esta orientación, se ha revalorizado el papel de la educación y del aprendizaje en la optimización del desarrollo psicológico, ya que permite reconocer las prácticas pedagógicas institucionales como un lugar de privilegio, para la “acción mediada”, concepto nuclear en la teoría vigostkyana, que implica necesariamente el de “procesos ínter psicológicos” y particularmente el de “intersubjetividad”, puesto que ambos explican el nexo inherente entre el escenario cultural, histórico e institucional y las funciones psicológicas superiores del sujeto (percepción, pensamiento, lenguaje, conceptos, etc.).

Sin embargo, actualmente el maestro desarrolla una práctica docente, que como sostiene Elena Achilli, excede la práctica pedagógica es decir lo que le es específico de su rol. Esta práctica, como expresa la autora, no puede dejar de considerarse “… si se intenta conocer la realidad objetiva vivida por el maestro…”, por cuanto diluye y desdibuja el sujeto pedagógico, con la posible consecuencia de un alejamiento del trabajo reflexivo y crítico sobre la propia práctica y sobre los avatares del proceso de construcción del conocimiento que dicha práctica requiere y promueve.

Por su parte, Puiggròs (1990) señala que el sujeto pedagógico se constituye en una relación, en la que participan el educador, el educando, el habitus y los conocimientos que se transmiten, ubicados en un momento y un tiempo histórico determinado.

ASPECTOS DE LAPEDAGOGÍA TRADICIONAL

Concepción del papel del maestroEjecutor de directivas preestablecidas.Limitación de la individualidad y creatividad

Concepción de la enseñanza Absolutizaciòn del aspecto externo Estandarización Métodos directivos y autoritarios

Concepción del papel del alumnoSujeto pasivo, reproductor del conocimiento.Poca iniciativa, inseguridad, escaso interés personal.No implicado en el proceso.

La pedagogía como disciplina que investiga, orienta y cualifica el desarrollo de la formación humana, y la valora como sustrato discursivo y crítico de la educación que permite juzgar la calidad, pertinencia y validez de su misión formativa. En este sentido, la institución educativa valora el saber que posee el docente en torno a la disciplina y su estructura epistemológica, y se reconoce la necesidad de articularlo con el saber pedagógico, de manera que se constituya una unidad de comprensión, comunicación, construcción, argumentación y proyección entre el sujeto, su objeto de conocimiento y los contextos en que se circunscribe. Para ello, se reflexiona sobre los conceptos y estrategias pedagógicas, los procesos de enseñanza y de aprendizaje, del pensamiento, de los valores y el desarrollo de las capacidades.

                 

ASPECTOS DE LA PEDAGOGÍA HUMANISTA

Concepción de la Enseñanza Énfasis en los componentes personales. Flexibilidad. Métodos no directivos, dinámicos y participativos.

Concepción del papel del maestro Papel activo, creador, investigador y experimentador. Estímulo a la individualidad Flexible, espontáneo, orientador.

Concepción del papel del alumnoSujeto activo, constructor del conocimiento. Creatividad, reflexión, intereses cognoscitivos propios. Implicación y compromiso.

El modelo pedagógico refiere a componentes tales como: fundamentación epistemológica: objetos de conocimiento y proceso de conocimiento; teoría de aprendizaje: el sujeto que aprende y cómo aprende, el papel del estudiante, el papel del docente, la relación docente-estudiante; la didáctica y lo metodológico: el camino y los medios; los procesos comunicacionales: la función de las tecnologías de comunicación e información y las relaciones de poder, la vinculación dialéctica teoría-práctica y la evaluación de la enseñanza y de los aprendizajes, así como las condiciones y recursos para su implementación.

La pedagogía de los afectos busca encontrar el equilibrio entre cabeza y corazón, ya que es fundamental para una vida plena.

Nuestros estudiantes muchas veces no saben identificar sus sentimientos, porque hay sensaciones que pasan por ellos sin disfrutarlas y a veces incluso, se sienten vacíos porque no saben enfrentar lo que les ocurre.

Es por ello que se hace cada vez más urgente una pedagogía basada en los afectos, en la cual enseñemos a crecer desde los sentimiento, una formación integral centrada en la afectividad y en la forma como se derivan de ella algunas implicaciones educativas para la constitución del sujeto en la posmodernidad.

De esta forma, se asume, como presupuesto, que la afectividad, y no la razón, es el núcleo de constitución del sujeto. Esta postura requiere prever una pedagogía de los afectos, consciente de la condicionabilidad de las emociones, capaz de construir proyectos para desarrollar sentimientos perdurables, propiciar la enseñanza dialogante y asumir el discernimiento como estilo de vida.

Cuando se habla de la Pedagogía del Sentimiento es importante destacar que ella se relaciona con la imaginación y la intuición, mediada por el lenguaje. Que esa imaginación es una actividad mental productora de imágenes que permiten captar el sentido.

En la medida en que la pedagogía del sentimiento es utilizada como eje fundamental del hecho educativo, en esa misma medida se logrará aprovechar lo valioso de la imaginación.

A las puertas del Siglo XXI, los educadores estamos obligado a innovar y generar cambios en nuestro quehacer pedagógico, asi como también a contribuir para que la teoría pedagógica se convierta en una caja de herramienta llena de ideas innovadora, que promuevan una nueva concepción del sujeto pedagógico que hoy día se esta formando.

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CríticoCrítico

El Profesor Ugas plantea que en los últimos tiempos el acto pedagógico se ha convertido simplemente en pasar contenido programático y una de las razones que se pudieran señalar son las exigencias propias del sistema educativo, relacionadas a los contenidos, las asignaciones y los tiempos previstos, impidiendo o limitando al docente a plantearse nuevas formas de trabajo, repitiendo esquemas que pocas veces lo invitan a pensar en el sujeto que requiere del conocimiento, del individuo que se esta formando.

Por su parte, Cooper nos dice que ”los sentimientos son las respuestas sucesivas a situaciones en que nos vemos comprometidos y de las que no podemos zafarnos. También llamamos sentimiento a las emociones que experimentamos con independencia de la situación objetiva que las crea. En este caso, lo único real no es lo que está ocurriendo, sino lo que me pasa”.

Existe un elevado número de personas relacionadas a la acción educativa que no tiene clara la importancia de su papel y muchas veces inclinan sus intereses personales en la remuneración económica recibida, en el status que esta actividad les puede generar o en la experiencia que pudieran obtener, es allí donde radica la importancia de un educador, pedagogo o andragogo capaz de pensar, oír y sentir las necesidades de sus educandos, buscando con ello impulsar su creatividad, su potencial y sus mejores características, basadas en la pedagogía del sentimiento.

Después de haberles presentado y desarrollado este contenido, podemos mencionar algunas de las conclusiones a las que como grupo hemos llegado:

Todo el que es parte del Sujeto Pedagógico en la actualidad debe, ante todo, tener la disposición para enseñar, lo que quiere decir, que debe sentir inclinación vocacional, respeto y compromiso por la actividad que realiza.Al ser un profesional con vocación de servicio, se garantiza que su trabajo es realizado con amor.El educador y la educadora deben cambiar su actitud (pasiva o desinteresada) hacia una que le permita realizar su trabajo con calidad, para que la enseñanza obtenga mejores resultados.La nueva visión del educador del Siglo XXI, esta sostenida en el sentimiento pedagógico.El educador y la educadora deben aprovechar las diferentes herramientas que hoy están disponibles y al alcance de todos para motivar y estimular la creatividad.