¿Concilio contra Liturgia o Liturgia contra Concilio?

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Luego del Concilio Vaticano II, sale el Concepto de Tradición católica, totalmente deteriorado. ¿Cuál es la razón para que se dio este suceso? Nos detenemos en uno de las causas de este proceso de innovación contra una enseñanza milenaria, e intentamos hacerlo de un modo simple y llano.

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  • Concilio contra Liturgia, o

    Liturgia contra Concilio?

    por Santiago Grasso

    Concilio contra Liturgia 1

  • Si el Vaticano II se hubiera aplicado en la reformadel Novus Ordo Miss, este mamotreto litrgico deBugnini no existira.

    Concilio contra Liturgia 2

  • Lo que hoy se encuentra en crisis, es el concepto deTradicin y por consiguiente es la Tradicin misma la que hasido herida dentro del mundo catlico, luego de finalizar elVaticano II.

    CONCEPTO DE TRADICIN. El Catecismo deSan Po X, define a la Tradicin, en su nmero 890, de estemodo:

    Tradicin es la palabra de Dios noescrita, sino comunicada de viva voz porJesucristo y por los Apstoles, transmitida sinalteracin de siglo en siglo por medio de laIglesia hasta nosotros.

    LA ESCRITURA NO ES PALABRACOMUNICADA. La diferencia entre escritura y palabracomunicada, es decir, no necesariamente escrita, es notoria, yas lo fue siempre. Estamos muy acostumbrados a ver laspublicidades protestantes donde una persona o varias leen unvoluminoso libro, al que ellos llaman Biblia. Sin duda paraellos a la Fe se llega por la lectura, algo que ese voluminosolibro, al que ellos llaman Biblia, desmiente a cada paso.

    A LA FE LUEGO DE ESCUCHAR, NO DELEER. La Fe no se da luego de la lectura, sino luego de orla palabra oral:

    Pero cmo invocarn a aquel en quienno han credo? Cmo creern en aquel a quienno han odo? Cmo oirn sin que se lespredique? (Rom. 10,14)

    Tambin nosotros hemos recibido labuena nueva, lo mismo que ellos. Pero la palabraque oyeron no les aprovech, pues no secompenetraron con la fe de los que laescucharon. (Hebr. 4,2)

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  • Ms an, hasta se hace una tipologa de lo quesucede al or la palabra divina, en el Evangelio de San Mateo(Cfr. cap.13).

    Por ello en el Catecismo de San Po X se enseaba:

    Este fue cabalmente el modo establecidopor Dios para la perpetua tradicin de lareligin: la sucesiva y continua comunicacin delos hombres entre s, de modo que la verdadenseada por los mayores se transmitiese enigual forma a los descendientes; lo cual debidurar aun despus que en el decurso del tiempomovi l Espritu Santo diversos escritores aponer en libros compuestos bajo su inspiracinuna parte de la ley divina. 1

    Y si a la Fe se llega por or la Palabra divina, esto nosdice con toda claridad, que la Fe es una llama, un fuego, esefuego que como dicen nuestros mensajes, es:

    ...la Luz que todos deben llevar. Noquema!, no lastima!, nada! Miren: estransparente y se ve. As es Dios, y Dios losama..., los ama, los quiere y los necesita. Es laLuz que no daa, no ampolla. 2

    INCOHERENCIAS PROTESTANTES. Es elprotestantismo, un cmulo de incoherencias, esta, la fe quebrota en la lectura, es una de ellas. Si no se hubiese inventadola imprenta, el protestantismo iconoclasta no existira. Perotodava pueden aducir que dicha palabra oral, se contiene,sola y exclusivamente en el voluminoso libro, al que ellosllaman Biblia. Notemos, que el libro, o los libros, pues sonmuchos, no son otra cosa que medios o instrumentos, como loson hoy las grabaciones y los vdeos, algo de lo que no caen encuenta. Recuerdo que en mi adolescencia, vea escritos portodas partes un letrero hecho a mano, con instrumentos muyrudimentarios, que deca:

    1 Catcismo San Po X: BREVE HISTORIA DE LA RELIGIN. PRINCIPIOS Y NOCIONES FUNDAMENTALES Punto 5.

    2 Mensaje 77 del 12 de marzo de 2006.

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  • 'Leala' la Biblia.

    Como se ve, no era una persona muy dotada decultura quien escriba esto, si bien era un buen protestante yse afan en su vida por esta publicidad, pues lgico, la fe entrapor la lectura, no por la predicacin.

    En otra ocasin, conoc otro que haba escrito sobreel dintel de una puerta:

    'Iglecia evangelica.'

    Cmo pueden transmitir el contenido de la fe, sipara ellos la lectura lo es todo y no aprendieron letras? No esla primera vez que me detienen por la calle, un grupo de ellosy me preguntan si leo la Biblia, a lo que respondoescuetamente:

    S, y qu?

    Y se van muy orondos, pues con la lectura, a la cortao a la larga piensan que la fe debe entrar en m.

    LAS CUATRO PATAS DE LA TRADICIN. Sin lugar a dudas, que la Sagrada Escritura contiene parte dela enseanza de Jesucristo, pero no es lo nico. La Tradicincomo la mesa de la cocina, posee cuatro patas parasustentarse y sustentar todo lo que se coloque sobre ella demanera firme y segura. Cules son? Lo dir el Catecismo deSan Po X en su nmero 891. He aqu las cuatro columnas dela Tradicin:

    Las enseanzas de la Tradicin secontienen principalmente en los decretos de losConcilios, en los escritos de los Santos Padres, enlos documentos de la Santa Sede y en laspalabras y usos de la sagrada Liturgia.

    1. La Sagrada Escritura: Analizando la primeracolumna, la Sagrada Escritura, el catecismo mencionado haceuna sntesis histrica de su origen:

    Estos libros escritos con la inspiracinde Dios, se llaman Sagrada Escritura, LibrosSantos o la Sagrada Biblia. Llmanse libros delAntiguo Testamento los que se escribieron antes

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  • de la venida de Jesucristo, y los que seescribieron despus, se llaman del NuevoTestamento. 3

    2. La Segunda columna de la Tradicin: Peroacontece que esta interpretacin de la Sagrada Escritura nopuede estar sometida a personas con escasa o nula culturainterpretativa en el mbito de las letras, o a la subjetividadreinante de la modernidad, por ello escriba este catecismo:

    Esta Tradicin divina, junto con laSagrada Escritura, es decir, toda la palabra deDios escrita y transmitida de viva voz, fueconfiada por nuestro Seor Jesucristo a unDepositario pblico, perpetuo, infalible, esto es, ala santa Iglesia Catlica y Apostlica; la cual,fundada puntualmente en aquella divinaTradicin, apoyada en la autoridad que Dios leha dado v reforzada con la prometida asistenciay direccin del Espritu Santo, define qu libroscontienen la divina revelacin, interpreta lasescrituras, fija el sentido en las dudas que acercade las mismas sobrevienen, decide en las cosasque miran a la fe y a las costumbres, y juzga consentencias inapelables sobre cuantas cuestionesrespecto de estos puntos de suprema importanciapuedan de cualquier modo extraviar lainteligencia y el corazn de los fieles creyentes. 4

    Esta es la razn de la segunda columna de laTradicin:

    Las enseanzas de la Tradicin secontienen principalmente en los decretos de losConcilios, ..., en los documentos de la SantaSede.5

    3. Los escritos de los Santos Padres: En unaocasin se le pregunt a un ortodoxo, qu sucedera siapareciese un libro de la misma antigedad que los

    3 Ibdem.4 Ibdem, punto 8.5 Catecismo de San Po X, Nmero 891.

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  • Evangelios y los contradijera, a lo que respondi, que paraeso existan las enseanzas de los Santos Padres, en sntesis,all se refleja otra columna de la Tradicin:

    Las enseanzas de la Tradicin secontienen principalmente..., en los escritos de losSantos Padres, 6

    4. La Liturgia, como la cuarta columna: Porltimo, la Tradicin se refleja en su oracin oficial tradicional:

    Las enseanzas de la Tradicin secontienen principalmente ...en las palabras yusos de la sagrada Liturgia.

    TODOS POSEEN UNA TRADICIN. Como yahemos afirmado en otro artculo, quien afirma no tenertradicin, es un necio o un mentiroso. Para los judos, laTradicin no es la Biblia Hebrea, porque mientras la Cbaladesarrolla su mstica, el Talmud explaya su Tradicin. Paralos iconoclastas protestantes, Tradicin tampoco es la Biblia,sino lo que se ensea sobre ella desde la era de la Reforma deMartn Lutero. Este es el ro donde van a beber todos losreformadores. Ninguno puede decir que carece de Tradicin,pues entonces carece de enseanza y si carece de enseanzason religiones de ficcin.

    CONCEPTO DE PROCESIN. Qu es unaprocesin? Esta pregunta no la puede hacer un cristiano, queconoce que el Espritu Santo procede del Padre por su Hijo.Como la Procesin del Espritu Santo, la Tradicin procede dela Revelacin, como asimismo de la Fe, que es su hipstasisbsica en el alma de quien cree. Esto es importante pues hoy,se da que las procesiones son las que generan la doctrina, ennombre de las buenas intenciones, como ser, la de sermisericordioso o el de emanar olor a oveja.

    EL ESTALLIDO DEL CONFICTO. No existanproblemas sobre la Tradicin hasta el sorpresivo Vaticano II,concilio al que muchos se preguntaban en 1959, cual era suobjetivo, pues no se llegaba a entender, y me incluyo en ellos,el motivo de gigantesco movimiento. Este llamado Concilio,

    6 Ibdem.

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  • hizo estallar el concepto tradicional de Tradicin.

    CUANDO UNA PATA SERRUCHA LA OTRA. Este Concilio, que se defini como un aggiornamentopastoral ante el mundo moderno, produjo en su primerdocumento bsico: la Constitutio Sacrosanctum Concilium, lacual mostraba como una pata de la mesa de la Tradicin,arrojaba acusaciones y dudas contra la cuarta pata de la mesa.En otras palabras, el Vaticano II fue el fiscal inquisidor de lasenseanzas de la Tradicin que se contenan ...en laspalabras y usos de la sagrada Liturgia. He aqu lasacusaciones que se desprenden de su redaccin:

    1. No muta ni vara, y as no se adapta altiempo:

    Porque la Liturgia consta de una parteque es inmutable por ser la institucin divina, yde otras partes sujetas a cambio, que en eldecurso del tiempo pueden y aun deben variar,si es que en ellas se han introducido elementosque no responden bien a la naturaleza ntima dela misma Liturgia o han llegado a ser menosapropiados. 7

    2. Posee ritos hermticos o encriptados, queno llegan a transmitir su significado:

    En consecuencia, simplificase los ritos,conservando con cuidado la sustancia... 8

    3. Posee cosas intiles o repetidas:

    ...suprmanse (omittantur) aquellascosas menos tiles que, con el correr del tiempo,se han duplicado o aadido...9

    4. Se han quitado cosas que deberan estarpresentes:

    ...restablzcanse (restituantur), encambio, de acuerdo con la primitiva norma de

    7 Constitutio Sacrosactum Concilium, Art. 21.8 Ibdem. Art. 50.9 Ibdem. Art 50.

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  • los Santos Padres, algunas cosas que handesaparecido con el tiempo, segn se estimeconveniente o necesario. 10

    CONSECUENCIAS INEVITABLES. Laconsecuencias de este dictamen conciliar, aparentementeinocente, fueron gravsimas. Enumeremos algunas de ellas:

    1. Desprestigio y sospecha: Esto hizo, que lacuarta columna de la Tradicin, saliera del Vaticano IItotalmente desprestigiada con un manto de sospechaimborrable.

    2. Reaccin lgica contra el Concilio: Se estabafrente al panorama, donde una pata de la mesa tradicionalbuscaba mutar, variar, adaptar, quitar y restablecer ritos (ycon el trmino incluyo gestos y oraciones). En lenguajeprofano, se era testigo como la segunda pata serruchaba lacuarta. Esto acarre una gigantesca confusin, que persistean hoy. La sorpresa aument de rango cuando se vieron quelos nuevos ritos haban sido consensuados con losprotestantes. Muchos adoptaron la actitud de cuestionar elConcilio en masa, pues esto era inadmisible, y lo hicieronaduciendo que era un Concilio pastoral, lo cual no implicabaacatamiento alguno. Por consiguiente luego de observar, quelos ritos se acomodaban al pensamiento protestante, segener en ciertos grupos un fuerte rechazo global contra todolo que fuese Vaticano II.

    3. Acelerada Reforma oficial: La reforma pedidapor el Concilio, se hizo en forma acelerada y bajo ungigantesco manto de sospecha, sobre quien fuera su artfice:Mons. A. Bugnini. Su acusacin de masn lo llev a dejar elVaticano para observar el proceso iran, acusacin que nuncapudo ser desmentida y se hace cada da ms grande. Esevidente que la reforma litrgica se hizo en forma acelerada,sin los estudios pertinentes a cada caso, cosa que peda elConcilio y si dichos estudios existen, es hora que los haganpblicos para que podamos analizarlos. Cosa esta imposible,pues todo fue a capricho de un solo hombre que manipulhbilmente una comisin. Por ello esta norma del Concilio

    10 Ibdem. Art. 50.

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  • nunca se cumpli:

    Para conservar la sana tradicin yabrir, con todo, el camino a un progresolegtimo, debe preceder siempre una concienzudainvestigacin teolgica, histrica y pastoral,acerca de cada una de las partes que se han derevisar. 11

    4. El cuentapropismo o do it yourself: Estaaceleracin reformista, realizada entre gallos y medianoche,sin ningn estudio previo, movi a la libre iniciativaindividual para hacer cambios a capricho, como dice un curade mi parroquia:

    Yo siempre hago pequeos cambios en la misa...

    QUIEN ACUSA A QUIN? Como se puedepercibir, esta guerra entre las patas de la mesa, donde unaserrucha la otra, trajo aparejado un debilitamiento de laTradicin misma, pues el Concilio cuestionaba la Liturgia ysi la Liturgia cuestionase el Concilio? Cosa que realmentesucedi y la cara visible de esta tendencia fue Mons. MarcelLefebvre, quien tom un serrucho para quitar el Vaticano IIde sus filas.

    IMPOSICIN CONTRA VIENTO Y MAREA. Saliendo del Vaticano II, la Liturgia, que es la cuarta pata dela Tradicin, como obsoleta y acartonada; se deba proceder acambiarla con apuro y a sangre y fuego, cosa que realmentesucedi. Si alguno cuestiona esta imposicin donde se les caecon todo el peso del poder personal, a quienes cuestionan lareforma litrgica, observen de modo imparcial como sepersigue sin cuartel a los Franciscanos de la InmaculadaConcepcin, extorsionndolos para que practiquen aunquesea de mala gana el Novus Ordo. No es esto operar a sangrey fuego?, o acaso lo debemos llamar una forma especial demisericordia? As, del modo que se persigue a los estosfranciscanos, persiguieron siempre, como lo dice el Mensaje103 de Nuestra Seora:

    Ustedes estn acostumbrados a

    11 Ibdem. Art. 23.

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  • destruir...

    A REPENSAR TODO. Lgicamente el VaticanoII acusando a la Liturgia en uso, dej mal parados a lostelogos, a la enseanza milenaria de la Iglesia y sobretodo alCatecismo de San Po X. Fue la primera destruccin. Cmosalir del paso? Pues se haca evidente que el Concepto deTradicin dado por dicho catecismo, no era tal. El Concilioplanteaba una contradiccin aguda y desgastante, dentro deuna iglesia tranquila, que haba sabido solucionar susproblemas acarreados por el modernismo.

    LAS SOLUCIONES. En este panorama, sedeban buscar soluciones que aclararan este enredo.Benedicto XVI, siendo consciente del metalenguaje delConcilio, propuso una solucin: La Hermenutica del Concilioen la continuidad tradicional, a pesar de ser l un nostlgicoenamorado de los gloriosos das de su funcionamiento. Almenos dej una puerta abierta a las argumentaciones.

    LA SOLUCIN DEL NEOCATECISMO. Perosucede que mientras se argumenta y se discute, al catlico sele debe dar una enseanza, y aqu qu se hace? Porconsiguiente haba que buscar urgentemente una solucinante un edificio tradicional en crisis, y esta se dio buscandocambiar el concepto de Tradicin, es lo que har el actualcatecismo neomoderno, donde se debe distinguir entreTradicin y tradiciones, y luego distinguir las distintastradiciones entre s. Es la opinin neomoderna que deja enpie esta tesis:

    Es preciso distinguir de ella lastradiciones teolgicas, disciplinares, litrgicaso devocionales nacidas en el transcurso deltiempo en las Iglesias locales. Estas constituyenformas particulares en las que la gran Tradicinrecibe expresiones adaptadas a los diversoslugares y a las diversas pocas. Slo a la luz de lagran Tradicin aquellas pueden ser mantenidas,modificadas o tambin abandonadas bajo lagua del Magisterio de la Iglesia. 12

    12 Nmero 83.

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  • QU ES LA GRAN TRADICIN? Llama laatencin esta redaccin que afirme que slo a la luz de lagran Tradicin aquellas pueden ser mantenidas, modificadaso tambin abandonadas, es decir que se crea dentro de laTradicin misma, otra Tradicin que es su hipstasis, la cuales original y simple, como una base inmutable, siendo todo elresto una adaptacin a los tiempos.

    LA TRADICIN MUTABLE. He aqu la salidaque propusieron para salvar las dos patas de la mesa, peropreguntmonos qu es esta Gran Tradicin sino la doctrinainmutable del Padre transmitida por Jesucristo? Por lo tanto,no existe una Gran Tradicin inmutable que alberga lastradiciones mutables, sino que siguiendo este razonamiento,existe una Doctrina inmutable que alberga la Tradicin que esmutable, he aqu el error.

    CUANDO LA SOLUCIN VIENE DE PLATNY DESCARTES. Como ya vimos no es la Tradicin unahipstasis, sino una procesin de la doctrina inmutable delPadre transmitida por Jesucristo, por lo tanto el error en lostrminos del neocatecismo llevan a consecuenciasdesastrosas. Realizar una distincin de un ente abstractotomado como la Tradicin o la gran Tradicin como tambinse afirma, y las tradiciones como costumbres concretassurgidas por la adaptacin al tiempo, nos muestra dos formasde pensar, una basada en el idealismo platnico, y la otra enel modernismo cartesiano:

    Y PARA VARIAR..., OTRA VEZ PLATN. Sinlugar a dudas, estamos ante una explicacin platnica: laGran Tradicin desde el hiperuranio se refleja en lastradiciones que son sus simples sombras, segn la moda, lapoca y la geografa. Esto nos trae en bandeja un peligro: eldualismo entre Doctrina y Tradicin. Mientras esto se escribeen el nuevo catecismo neomoderno, muchos llegan a afirmarque las tradiciones no son la Tradicin. Es decir, que mientraseste catecismo dice que las tradiciones son como sombras queresponden a una Tradicin o Doctrina general, otros afirmandirectamente que estas tradiciones como sombras, no son ens mismas la Tradicin, aunque podran reflejarla en algnmomento y lugar, pues por ello mutan.

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  • SEGUIMOS VARIANDO..., AHORA CONDESCARTES. Indudablemente existen formastradicionales, pero estas distintas tradiciones poseen unanica hipstasis que las genera y la encontramos en sudoctrina, a la cual permanecen unidas en substancia. Ladiferencia entre Tradicin y tradiciones como vemos no esalgo tan claro y distinto, como tal vez lo afirme el enamoradode Descartes que redact este artculo del neocatecismo.

    CONSECUENCIAS DE ESTA ENSEANZA. Con esta distincin desafortunada del catecismo neomoderno,tenemos un camino abierto, hacia dnde? Pues hacia esto:

    1. Camino abierto a la mutacin permanente. Con esta afirmacin los neomodernistas, abren va libre a lamutacin permanente y constante que se observa hoy. Conesta teora se justifican todos los cambios llevados adelante eneste ltimo medio siglo de rotunda y fuerte influencianeomoderna.

    2. Camino abierto al relativismo. Estaconcepcin neomodernista, trae aparejado el relativismotradicionalista, pues si hoy es as y maana es distinta ypasado se abandona, son las tradiciones relativas al supuestolugar y tiempo. Un gran dao se acarrea con esta concepcin yes que si las tradiciones dentro de la Tradicin concebidacomo idea platnica, son relativas, por consiguiente nunca sepondr suficiente empeo en mantenerlas y pueden pedirseque se modifiquen a capricho de los particulares. Esto haceque yo pueda opinar que el Novus Ordo del Gran ArquitectoBugnini, ya es vetusto, hartante, profano e infantil, (todasverdades que gozan de profunda certeza), y por ende no seadapta a la circunstancia espacio-temporal pues quedsuperado en el tiempo, por lo tanto me niegue a seguirlo. Estogenera un caos a corto plazo, por lo cual el catecismo se apuraa decir: bajo la gua del Magisterio de la Iglesia se deben hacerlos cambios; pero si dicho magisterio, de facto sedescentraliza, y se tie con sus acciones de un manto desospecha, caemos en la virtual anarqua que vivimos hoy.

    3. Camino hacia la inculturacindesesperada. Otro agravante lo constituye el aporte

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  • neomodernista a la as llamada inculturacin como unaadaptacin a la moda. Toda inculturacin que no se empleepara la predicacin, es altamente peligrosa y si se emplea enla liturgia, es altamente profana. Si fuera de la predicacin, ala estructura tradicional, se le incorpora una inculturacin enconcreto, se ha profanado la Liturgia.

    4. Una jerarqua indolente y confusa. Se diceque la jerarqua eclesistica es la responsable de mantener laTradicin con su equilibrio en la adaptacin, pero luego dever la total indolencia en las profanaciones realizadas alcomulgar con la mano, luego de ver perplejos algunoscambios efectuados, luego de ver los conflictos por la formadestemplada con que se llevaron a cabo, luego de ver todo unaccionar de cincuenta aos, comenzamos a creer que toda laaccin de la jerarqua est sometida bajo la lupa de lasospecha cuando nos hacemos esta pregunta: Son acasocapaces de actuar con sensatez y equilibrio? Como se puedever, dicha duda y sospecha en algunos casos nace de ladoctrina, pero mayoritariamente nace de una accindesencajada de la realidad.

    LA SALIDA. Con esto se deja ver, que la solucindel neocatecismo, no es tal, y nuevamente preguntamos,cmo salimos de esto? Antes de responder, se debe tener encuenta estos puntos bsicos:

    1. No existe una guerra entre las patas de lamesa. Las columnas de la Tradicin, no pueden atacarsemutuamente. No se puede desde un Concilio dar a entendertamaas acusaciones sobre la Liturgia, ni la Liturgia otorgaderecho a fiscalizar los Concilios. Si cuestionamos el VaticanoII, lo hacemos desde esta perspectiva, no desde la Liturgia.

    2. El metalenguaje del Concilio provoc todoslos equvocos. Para esta afirmacin me baso en mitrabajo sobre la Hermenutica del Vaticano II. Alldemuestro, que el Concilio dej latentes dos pensamientostotalmente distintos, es su metalenguaje: mutar paraadaptarse al tiempo y al espacio por un lado, y mantenerse enla Tradicin de siempre por otro. La Sacrosactum Conciliumse parece a la lengua de ciertos ofidios, se bifurca en dos

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  • puntas; esto hizo que el Concilio quede a media agua, y losmodernistas pidan otro Concilio para rebatir la parteTradicionalista; por mi parte yo tambin, como ellos pido noun Concilio, sino una definicin patente contra esa segundabifurcacin del lenguaje modernista.

    3. El Concilio, fue un Consilio sui generis:Esto sucede, porque no se defini por ninguna lnea, pues sino se hubiese dado este metalenguaje, el Concilio tal como loconocemos, hubiera fracasado.

    Esto hace que el Vaticano II sea relativizado, talcomo se relativiz la Liturgia. Nadie puede imponer elVaticano II, como si se tratara de un super dogma, y si lo es,qu se espera para cambiar el Credo, como cambiaron elPadrenuestro? Este Concilio no puede ser ignorado, y tal vezensee una gran verdad: lo que nunca se debe hacer.

    4. En el Novus Ordo, no se siguieron loslineamientos del Concilio: Si el Vaticano II se hubieraaplicado en la reforma del Novus Ordo, este mamotretolitrgico que tanto orgullo les da a ciertos obispos ypresbteros modernos, no existira. Tan solo preguntemos:Dnde dice el Vaticano II que los ritos deban consensuarsecon los protestantes? En qu lugar de la SacrosanctumConcilium se habla de inculturar? Y volvamos una vez ms aesta pregunta: Dnde estn los estudios previos para todo elcmulo de reformas impuestas a sangre y fuego? Comovemos, el Novus Ordo no responde al Concilio Vaticano II,sino a la mente de Bugnini.

    Ms an, muchas reformas se hicieron luego deBugnini, y no tienen en cuenta lo que el Vaticano II dispuso,por ejemplo, este artculo 7 de la Sacrosanctum Concilium nose cumple en la actualidad, y nos dice:

    Para realizar una obra tan grande,Cristo est siempre presente en su Iglesia, sobretodo en la accin litrgica. Est presente en elsacrificio de la Misa, sea en la persona delministro, "ofrecindose ahora por ministerio delos sacerdotes el mismo que entonces se ofrecien la cruz", sea sobre todo bajo las especies

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  • eucarsticas. Est presente con su fuerza en losSacramentos, de modo que, cuando alguienbautiza, es Cristo quien bautiza. Est presente ensu palabra, pues cuando se lee en la Iglesia laSagrada Escritura, es El quien habla...

    Ahora bien, qu tengo que hacer para ver en unalectora a Jesucristo? Cmo puede ser que Jesucristo seainterpretado, reemplazado, o ejecutado por una mujer?Cuando una ministra da la comunin, tambin es Jesucristoque da la comunin? Jerarcas y liturgos, ustedes saben, yosoy un ignorante, perdonen, pero el sentido comn dice queustedes transformaron la Liturgia en un inculturado teatroantropolgico, y en el reparto de los papeles masculinos,pusieron mujeres. Dnde se avala esto en el ConcilioVaticano II?

    CONCLUSIN. Por consiguiente, como sigo 'enbloque' al Vaticano II, no tengo otro recurso que rechazar elNovus Ordo y las reformas posteriores, porque se apartan dela Sacrosactum Concilium. Qu otro recurso queda sinovolver a la misa tridentina?

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