construcción TEÒRICA

108
CONSIDERACIONES PRELIMINARES: DE LA CERTEZA A LA CONJETURA Los métodos científicos Cuando se intenta una reflexión sobre la utilización de métodos científicos en antropología, el primer problema lo plantean los diversos usos del termino «ciencia». Rudner (1980: 24) hace notar que este termino, y otros tan dispares como «cosecha», «educaci6n», «voto», etc., presentan una ambigüedad especial, la ambigüedad proceso/producto. Todos son términos que se utilizan con referenda a cierta actividad o proceso, y también al resultado o producto de este proceso. En el caso de la ciencia, las actividades son el trabajo de los científicos o de las instituciones científicas, experimentar, observar, leer, investigar, proyectar, etc., y el resultado es lo que constituye nuestro conocimiento científico: un corpus de enunciados que pretenden descubrir un aspecto u otro del universo. Si aceptamos estas precisiones de Rudner, el problema inicial se concreta. De lo que se trata es de delimitar de forma especifica el proceso científico diferenciándolo de otros procesos que conducen también a conceptualizaciones del universo. El modo en que Wallace (1980: 15 ss.) aborda esta cuestión puede servirnos de punto de partida. Wallace escribe que, además de cualquier otro significado que

description

lectura

Transcript of construcción TEÒRICA

CONSIDERACIONES PRELIMINARES:DE LA CERTEZA A LA CONJETURA

Los mtodos cientficosCuando se intenta una reflexin sobre la utilizacin de mtodos cientficos en antropologa, el primer problema lo plantean los diversos usos del termino ciencia. Rudner (1980: 24) hace notar que este termino, y otros tan dispares como cosecha, educaci6n, voto, etc., presentan una ambigedad especial, la ambigedad proceso/producto. Todos son trminos que se utilizan con referenda a cierta actividad o proceso, y tambin al resultado o producto de este proceso. En el caso de la ciencia, las actividades son el trabajo de los cientficos o de las instituciones cientficas, experimentar, observar, leer, investigar, proyectar, etc., y el resultado es lo que constituye nuestro conocimiento cientfico: un corpus de enunciados que pretenden descubrir un aspecto u otro del universo.Si aceptamos estas precisiones de Rudner, el problema inicial se concreta. De lo que se trata es de delimitar de forma especifica el proceso cientfico diferencindolo de otros procesos que conducen tambin a conceptualizaciones del universo. El modo en que Wallace (1980: 15 ss.) aborda esta cuestin puede servirnos de punto de partida.Wallace escribe que, adems de cualquier otro significado que se le confiera, la ciencia es un modo de generar enunciados sobre el mundo y de contrastar su verdad. El metodo cientifico de generar y contrastar resultados lo contrapone a otros tres metodos, a los que denomina autoritario, mistico y l O, no O - no H. Guillermo de Occam impuso a las teorias un requisito de otra indole, el de simplicidad. Descartes, tambien Mill, llegaron a pedir la exclusion de todas las hipotesis alternativas posibles.Sin embargo, despues de Descartes, la historia de la logica, entendida como teoria de los canales de verdad, fue esencial-mente una historia de critica y perfeccionamiento de los canales deductivos y de la destruction de canales inductivos, lo que supuso la ruptura del circuito. Perdida la confianza en la conexion con los hechos como punto de partida, quedaron tres vias abiertas: el escepticismo, la busqueda de primeros principios que continuo durante siglos en todas las ramas del conocimiento humano, e.g. en mecanica, en etica (Spinoza, Kant), en economia (L. von Mises), en filosofia politica (Hobbes) (Lakatos, 19816: 129), y el desarrollo de una logica, formal al quedar desprovista de inyecciones de verdad y que iba a servir de instrumento no ya a la demostracion, sino a la confirmacin y a la refutacin, basadas en un contacto a posteriori de la teoria con los hechos.El resultado fue una disociacion, no pre vista ni en el circuito de induction-deduction de Aristoteles, ni en el circuito deductivo de analisis-sfntesis de Pappus, ni en el complejo circuito de Descartes, aunque la exposition axiomatico-deduc-tiva la adelantara: la disociacion entre el descubrimiento y la justificacion de teorias. Herschel, en A Preliminary Discourse on the Study of Natural Philosophy (1830), la introdujo for-malmente. El cientifico va de los hechos a las leyes de la natu-raleza (sean estas correlaciones de propiedades o secuencias de acontecimientos) y de las leyes a las teorias, aplicando unas veces metodos inductivos, otras arriesgando hipotesis. Pero el procedimiento utilizado para llegar a una teoria es irre-levante para su aceptabilidad; esta depende de que sus conse-cuencias deductivas sean confirmadas por la observation (Lo-see, 1979: 123 ss.).Los problemas del contexto de la validation (por usar una expresion generalizada mas tarde por Reichenbach y a la que con frecuencia se recurre en los enfoques no inductivistas de la teoria antropol6gica) iban a ocupar a la filosofia de la ciencia durante mas de un siglo. Seria necesario esperar a la epistemologia actual, para que por multiples caminos (Piaget y Hanson, Lakatos y Shapere, Kuhn y Sneed) se volviera al analisis de todo el proceso, recomponiendo la brecha del cir-cuito de actividad cientifica que atestiguara Herschel en una nueva busqueda de las pautas de racionalidad que expliquen los exitos empiricos de la ciencia.Desde esta perspectiva historica se pueden revisar algunos de los capitulos recientes de la critica antropologica. A par-tir de los afios sesenta, se hizo comun la denuncia del induc-tivismo, especialmente del inductivismo de la Antropologia Social britanica. Pero en estas criticas, que se plantean como criticas metodologicas, se confunde el metodo cientifico con una mala practica cientifica. No se defendio nunca, en la ciencia natural moderna, un metodo inductivo estricto. A la confianza en un conocimiento que fuera de lo particular a lo general, se afiadio la exigencia de corroboracion adicional para las explicaciones generales. De ahi el enfasis en la expe-rimentaci6n y el avance real del conocimiento.La antropologia por su parte, cuando fue inductivista, combino la defensa de un metodo de induccion-deducci6n-contrastacion adicional con una practica cientifica deficiente, que se detuvo en principios prima facie generales, sin encon-trar casi nunca la ocasion o los creditos o el interes suficiente para poner a prueba esos principios, oscurecido el interes de la puesta a prueba por la urgencia de recoger information so-bre pueblos y culturas que estaban desapareciendo y trans-formdndose, aplazado ese interes por la vana esperanza de que las descripciones fueran de toda la cultura, lo que haria posible, mas tarde, la contrastacion. De ahi los escasos logrds teoricos de la antropologia. Me detendre en este punto en el capitulo segundo.

ConjeturasResulta til recurrir a la tabla de verdad de la implicacin logica para sintetizar algunos de los problemas que pueden interesarnos en relacin con la validacin de conjeturas. En el contexto de la validaci6n nos encontramos con una situacin de la forma:

Teora> Hechos observables

y son los hechos que pueden deducirse de la teoria, que la teoria puede explicar o predecir, los que permiten juzgar su adecuaci6n o inadecuaci6n. (Puesto que las relaciones logicas no se establecen entre hechos, sino entre enunciados, en la tabla T y 0 no son teorias y hechos, sino enunciados que representan teorias y hechos.) Tabla de verdad de la implicacin lgica T O T 0111100011001

A) El problema que se plante Herschel era el de llegar a la aceptabilidad de T a partir de O, esto es, el de la justificacin de una teoria propuesta por medio de la observacin. No atribuia el mismo peso a todas las observaciones que confirmaran la teoria, sino que consideraba mas significativos: 1) la extensi6n de una ley a casos extremos; 2) los resultados confirmatorios inesperados; 3) los experimentos cruciales. Por experimento crucial se entendia un experimento que lleva a la observaci6n de un hecho O que permite elegir entre dos teorias Ti y T2 porque Ti O y T2 no O, de manera que O refuta a T2 y confirma a T1.Pero qu significa confirma? Como la tabla indica, si T 0 a partir de la verdad de O no podemos afirmar la verdad de T. Si lo hiciramos, cometeramos el error al que los 16gicos llaman falacia de afirmar el consecuente, porque si O es verdadero, T puede ser verdadero o falso. Para poder afirmar una teoria o una hip6tesis a partir de una observacin tendramos que conocer todas las hiptesis de las que O pudiera deducirse. Entonces, si se pudieran refutar todas, menos una, estableceriamos la verdad de esta ultima. Era el m6todo de division de Galileo y Descartes. Pero Galileo y Descartes confiaban en la induccion para estar seguros de que habian enumerado todas las hipotesis posibles (Laka-tos, 19816: 127). Sin apoyarse en evidencias obtenidas por induccion, los experimentos cruciales pierden valor, sirven para refutar teorias pero no prueban nada. Fue Duhem, en The Aim and Structure of Phisical Theory (1909), quien com-pleto la critica a los experimentos cruciales y defendio como mtodo cientifico el falsacionismo, cuyo principio es que las teorias no pueden ser verificadas sino solo refutadas, falsadas. La unica inferencia logica que puede hacerse sobre una teoria a partir de las observaciones es el modus tollens de Grosse-teste, si T - O, no O -> no T.Terminaba asi el intento de caracterizar el conocimiento cientifico por su caracter de verdadero, a pesar de que la iden-tificaci6n entre ciencia y verdad sigue siendo parte de nuestra cultura folk. Sin duda fue Popper el que defendio con mas vigor el metodo critico como diferenciador del proceso cientifico.E1 hombre de ciencia escribe Popper, ya sea teorico o experimental, propone enunciados o sistemas de enunciados, y los contrasta paso a paso. En particular, en el campo de las ciencias empiricas, construye hipotesis, o sistemas de hipotesis, y los contrasta con la experiencia por medio de observaciones y experimentos (1967: 27).Para Popper, el nucleo de la actitud cientifica es la actitud critica, que consiste en enfrentar las hipotesis a experimentos especialmente diseiiados para ponerlas a prueba, que no pueden verificarlas pero si refutarlas. Las teorias deben ser cohe-rentes, no tautologicas y tales que supongan un avance en el conocimiento. Una teoria de estas caracteristicas, cuando se somete a prueba, queda refutada o provisionalmente verifica-da. No hay simetria entre verificaci6n y refutacion. La refuta-ci6n es, para Popper, definitiva, mientras que una teoria que haya sido verificada en alguna de sus predicciones puede ser derrocada posteriormente por observaciones relativas a esta u otras de sus consecuencias. Por consiguiente, el conocimiento siempre es provisional: La ciencia nunca persigue la ilusoria meta de que sus respuestas sean defmitivas, ni siquiera probables; antes bien, su avance se encamina hacia una finalidad infinita y sin embargo alcanzable: la de descubrir incesantemente problemas nuevos, mas generales y mas profundos, y sujetar nuestras respuestas (siempre provisionales) a contrastaciones constantemente renovadas y cada vez mas ri-gurosas (1967: 262).B) Pero el propio Duhem no detuvo sus dudas sobre el mtodo cientifico en la critica al valor confirmatorio de los experimentos cruciales. Planted otra cuestion, todavia hoy vi-gente, que es la del valor restringido de la refutacion, vincu-lado a su analisis de las teorias cientificas. La estructura que Duhem les atribuia se aproxima a lo que hoy se llama conception standard, concepcion enunciativa o concepcion heredada (del positivismo). Las teorias son un conjunto de enunciados que representan axiomas (entendidos ya no como primeros principios, sino como supuestos hipoteticos) que cumplen dos condiciones. La primera es que constituyen un sistema, es decir: a) que esten exentos de contradiction (tanto cada uno de ellos como entre si) de manera que no pueda deducirse del sistema un enunciado arbitrario cualquiera, b) que sean independientes, esto es que ningun axioma se pueda deducir de los axiomas restantes.La segunda, que sean a la vez suficientes para deducir lodos los enunciados pertenecientes a la teoria y necesarios para este fin. (Mas tarde se precisaria que los enunciados de observation no se deducen de los axiomas directamente, sino por medio de reglas de correspondencia que conectan los axiomas con predicciones sobre los hechos.)Lo que implica este analisis es que si T esta constituida por un sistema de axiomas, de la falsedad de O no se deduce In falsedad de T, sino la de uno o varios de los axiomas que MHistituyen T, y para evitar la refutacion puede ser suficiente inodificar alguna o algunas de las hipotesis. De hecho, Duhem pens aba que este era el procedimiento cientifico normal y que una teoria no se desecha porque este refutada, sino porque se ha hecho barroca y extravagante bajo el peso de las hiptesis que se le van aadiendo para adecuarla a los hechos. Este criterio de Duhem retoma la exigencia de simplicidad de Occam.De lo que Duhem no dudo fue del caracter inmediato de los enunciados de observation. Por eso, y porque le atribuye una excesiva disposition a mantener teorias refutadas, Laka-tos denomina al falsacionismo de Duhem falsacionismo (con-vencionalista) dogmdtico, frente al metodo de Popper, tam-bien falsacionista, consciente de la necesidad de establecer convenios o decisiones metodologicas pero no para salvar teorias, sino para evitar las hipotesis ad hoc, y consciente tam-bien de la necesidad de acuerdos metodol6gicos para dotar de contenido empirico a los enunciados singulares (afirmaciones acerca de hechos unieos), al que Lakatos adjetiva de falsacionismo metodologico ingenuo. (Lakatos, 1981b y 1983.)En efecto, Popper anade a su caracterizacion del metodo cientifico como metodo de puesta a prueba de hipotesis, una serie de reglas metodologicas que propone a titulo de conventions . La de tipo mas elevado dice que las demas reglas del metodo cientifico han de ser tales que no protejan a ningun resultado de la falsaci6n (1967: 53), y las mas importantes son las que intentan evitar el mantenimiento de teorias refutadas mediante la introducci6n de hipotesis ad hoc, propo-niendo que solo se acepten hipotesis auxiliares cuya introduction no disminuya el grado de falsabilidad o contrastabilidad del sistema, sino que, por el contrario, la aumenten, para lo que es necesario que den lugar a nuevas implicaciones contras-tadoras (o.c: 79).Lakatos, cuando intente enfrentarse a los problemas de comparacion de teorias y de mantenimiento de teorias refutadas que Popper no resuelve, distinguira su propio metodo como falsacionismo metodologico sofisticado. Como veremos mas adelante, la historia de la ciencia parece apoyar mas a Duhem que a Popper y mas a Lakatos que a Duhem.C) Volvamos ahora a la tabla de verdad de la implicacin lgica. Sabemos que si T>0 y O es verdadera, T puede ser verdadera o falsa, y que esta incertidumbre ni siquiera la resuelven los experimentos cruciales. Pero la inseguridad respecto a la verdad de T, se mantiene si lo que sabemos es que T O1, 02, 03,... On, y que O1, 02, 03,... On, son verdaderos?En otras palabras, todo lo que sabemos de una teora es, como deca Duhem, que no esta (o esta) refutada, o si muchas de las predicciones de la teoria resultan verdaderas puede hablarse de algn grado cuantificable de confirmacin y, en consecuencia, de teoras mejor confirmadas que otras? Estas preguntas, que parecen trasladar al contexto de la validacin principios de evaluacin inductivos, constituyen el punto de partida de un ambicioso programa de investigacin meta-te6rica, que hoy sigue en marcha, y en el que Carnap ha trabajado durante muchos aos.Carnap ha tratado de construir una medida de probabilidad de una teora a partir de la evidencia que la confirma. Para a ello ha revisado la historia de las teorias de la probabilidad, en cuyo desarrollo piensa que se detectan dos tipos fundamentalmente diferentes de probabilidad, a los que denomina probabilidad estadistica y probabilidad logica, respectivamente.La probabilidad logica fue definida primero para un conjunto finito de acontecimientos, e interpretada como la razn entre el numero de casos favorables y el numero de casos posibles (Laplace). Mas tarde se definio la probabilidad logica como el limite de la frecuencia relativa de los casos favorables en una serie indefinida de acontecimientos (van Mises y Reichenbach).En 1921, John Maynard Keynes, en Treatise of Probability, propuso una interpretacin logica de la probabilidad distinta de la frecuencial. Para Keynes, la probabilidad era una relacin lgica entre dos enunciados, de la que pensaba que s1o en casos especiales como el de los dados podria convertirse en un valor numerico. Esta fue la linea de trabajo que Carnap considero correcta. En su opinion, a partir de elementos de juicio disponibles se podria atribuir un valor a la probabilidad logica de una hipotesis. Lo que pretendi fue construir una logica inductiva para cubrir el continuo que va desde la implicacin logica (probabilidad 1) a la negacin logica (probabilidad 0). Un sistema tal que para todo par de oraciones, una de las cuales afirme los elementos de juicio e y la otra enuncie una hip6tesis h, podemos asignar un numero que exprese la probabilidad logica de h respecto a e.Desde este intento, Carnap recupera parte de la teoria clasica, porque supone que Laplace y otros como el aludian muchas veces a la probabilidad ldgica, aunque lo hicieran de forma confusa al no tener in mente la distineidn entre la probabilidad logica y la probabilidad frecuencial.Conviene aclarar, antes de seguir adelante, dos cuestio-nes. La primera que Carnap no pretendia sustituir la probabilidad frecuencial por la probabilidad logica. La probabilidad frecuencial caracteriza una situacion objetiva, la situacion de un estado fisico, bioldgico o social. La probabilidad logica, o inductiva, como tambien se la llama, trata de caracterizar la aceptabilidad de las proposiciones cientificas. Se ha llegado a hablar incluso de una tercera forma de probabilidad, la probabilidad subjetiva, que mediria la disposicion de una persona a apostar por un acontecimiento incierto en funcion de un conjunto racional de expectativas y valores.La segunda aclaracion es que la probabilidad inductiva o logica no hace una referenda especial a las teorias probabi-listicas, es decir, no se trata de ver si las teorias probabilfsticas son mas o menos probables, sino si son mas o menos probables todas las teorias cientificas. Como Popper insistiria (o.c: 239) y Blalock no cesa de subrayar (por ejemplo en 1966: 106 s.), las teorias probabilfsticas, para que puedan ser puestas a prueba, exigen decisiones metodologicas explicitas sobre el margen de desviacion que estamos dispuestos a ad-mitir sin dar la teoria por falsada, pero una vez que estas decisiones se explicitan, se enfrentan igual que las teorias no probabilfsticas a la contrastacion, a la corroboration y, si es posible establecerlo, al grado de probabilidad.No ha sido posible establecer la probabilidad logica de una proposition universal. Si h es una hipotesis de alcance universal ye un cuerpo finito de evidencia, la probabilidad de h con respecto a e es siempre 0. Es el mismo problema de la verification: ninguna evidencia finita puede hacer verda-dera ni probable una ley universal.En este momento, son muchas las investigaciones en curso sobre logica inductiva. El tema sigue siendo importante porque un criterio de probabilidad numerico permitiria elegir racionalmente entre teorias. Hintikka (citado por Suppe, 1977: 629 s.) ha intentado resolver el problema hablando no de individuos, sino de clases de individuos. De este modo, una ley universal no hace afirmaciones sobre un numero in-finito de objetos sino sobre un numero finito de clases de objetos. Esto haria P (h, e) = 0, pero hace depender a la probabilidad logica de supuestos metafisicos acerca de como el mundo se divide en clases. Estos y otros desarrollos de la logica inductiva nos alejan del propsito inicial de Carnap de justificar el conocimiento cierto y nos acercan a la tendencia actual de estudiar la racionalidad del proceso cientifico, en este caso de hip6tesis propuestas para dominios determinados.Carnap adopto otra posicion, admitir que ningun cientifico piensa que una teoria tiene validez universal y que lo unico que esta diciendo cuando afirma que una teoria esta bien fundada, o es fiable, es que apostaria a que la instancia siguiente de la teoria se ajusta a ello. Pero con esto habla-mos de confianza en teorias abrumadoramente verificadas, no de probabilidad.Nos enfrentamos asi a uno de los aspectos de la concepcin positivista de la ciencia que ha resultado mas endeble, y que ha generado muchas reflexiones recientes sobre los me-todos cientificos: la comparacion de teorias y los criterios de substitution de una teoria por otra. Popper propuso, en su Logica del descubrimiento cientifico, dos criterios de election entre dos teorias, uno empfrico, los experimentos cruciales, y otro metodoldgico, en terminos de grado de falsabilidad.Pensaba Popper que si Hi y H2 son dos hipotesis rivales relacionadas con el mismo tema y que han superado todas las pruebas a que han sido sometidas hasta un momento de-terminado, es posible decidir entre ellas si se encuentra una contrastacion con respecto a la cual Hi y Hz predigan resul-tados que estan en conflicto.Pero sabemos, desde Duhem, que no se debe sobreesti-mar el papel decisorio de los experimentos cruciales. Respecto a la hipotesis que refutan, porque si, como es frecuente, forma parte de una teoria mas amplia, la contrastacion s61o indica que es falso alguno de los supuestos en que se apoya la teoria. Respecto a la hipotesis que corroboran, porque nin-gun experimento la puede establecer de modo concluyente. Lo que hace un experimento es mostrar ambiguedades de una teoria, apoyar a otra, determinar la labor teorica y experimental subsiguiente.El segundo metodo para comprobar teorias propuesto por Popper no consiste en recurrir a la experiencia, como en el caso de los experimentos cruciales, sino en utilizar un crite-rio metodoldgico, el mayor grado de falsabilidad. Una teoria es mejor que otra si es mas falsable. Mas tarde sustituyo la falsabilidad por otra caracteristica relacionada, el grado de corroborabilidad. Una teoria seria mas corroborable cuanto mayor fuera su contenido empirico, la clase de sus posibles falsadores. Entendida asi la corroborabilidad, una teoria mas corroborable tiene una probabilidad logica menor (Popper, 1967: 120 ss.).El uso que hace Popper en este contexto del termino corroborabilidad es deliberadamente polemico. Se trataba de enfatizar una vez mas la asimetria entre refutation y confir-maci6n. Si se subrayan las confirmaciones, a mas confirmation mas corroboracion y mas expectativas de que la teoria resul-te adecuada. Si el enfasis se pone en las refutaciones, una teoria es mejor si se la puede someter a mas pruebas y las re-siste, y de ahi que la corroborabilidad vaya unida a la falsabilidad y varie de forma opuesta a la probabilidad.La metrica de la corroborabilidad de Popper no ha tenido mas exito que la metrica de la probabilidad de Carnap. (La-katos ha hecho notar que si corroborabiliad y probabilidad son medidas opuestas y la probabilidad es siempre 0, la corroborabilidad seria siempre 1). Solo queda espacio para un uso de corroboracion cuasi-inductivo y proximo a la confirmacion. Asi lo hace Popper cuando afirma: S61o se puede superar una teoria que este bien corroborada por otra de ni-vel de universalidad mas alto, esto es, que sea mas contras-table, y que, ademas, contenga la teoria antigua y bien corroborada (o, al menos, una buena aproximacion de ella) (Popper, 1967: 257 ss.).Mas recientemente, Popper (1963, 1972, 1976) ha propuesto otro -criterio metrico para comparatr teorias, la verosimilitud, que tampoco ha resistido la critica. Para comparar la verosimilitud de dos teorias hay que comparar sus conteni-dos de verdad (CT), con junto de consecuencias verdaderas y sus contenidos de falsedad (CF), conjunto de consecuencias falsas. Asi, por definicidn, una teoria seria mas verosimil que otra si su contenido de verdad es mayor y su contenido de falsedad es menor o igual, o bien si su contenido de verdad es mayor o igual y su contenido de falsedad menor.Pero en 1974, Tichy, Harris y Miller han demostrado que tanto con la primera formulation como con la segunda, una teoria solo es mas verosimil que otra si su contenido de falsedad es 1, es decir, si es verdadera (Quintanilla, 1982: 474).Niiniluoto (1980) ha propuesto una medida alternativa de la verosimilitud de teorias en la misma linea de la alternativa que ha desarrollado Hintika a la probabilidad logica de Carnap. Se trata de una medida para comparar teorias formuladas en el mismo lenguaje y que presupone: a) que desde el punto de vista de nuestro acceso cognoscitivo al mundo, este esta dividido en campos de investigacion exclu-yentes; b) que aunque no podamos suponer que existe un sistema conceptual o lenguaje privilegiado, para la description del mundo en su totalidad, si podemos suponerlo para cada campo de investigaci6n.De lo que se trata es de dar un contenido preciso a la notion de progreso cientffico, que seria la suma de los pro-gresos relativos en cada area de investigacion. Quintanilla (1984), a quien estoy siguiendo en este punto, piensa que el problema es que Niiniluoto: pierde de vista uno de los ras-gos mas decisivos del desarrollo cientifico: el de que este se produce en muchas ocasiones a traves de cambios con-ceptuales que suponen una remodelacion de las areas de investigacion o una invasion de unas areas de investigacion por otras (Quintanilla, 1984: 481).Si los primeros intentos de establecer los grados de probabilidad o corroboracion de una teoria estuvieron vincula-dos al proposito de establecer un criterio firme que permi-tiera separar la ciencia de la metafisica, lo que subyace a buena parte de los desarrollos mas recientes sobre probabi-lidad o verosimilitud de las teorias es el intento de mantener una concepci6n acumulativa del progreso cientifico, decisiva-mente puesta en cuestion por la teoria de Kuhn sobre las revolutions cientificas. Voy a detenerme en la obra de Kuhn, y en las consecuencias que ha tenido para la teoria de la ciencia. De la interpretacion de Kuhn hoy no se mantiene el dramatismo que introdujera con un concepto de revolucion cientifica que suponia que dentro de las tradiciones cientificas se producian de cuando en cuando rupturas y brechas insalvables. Pero si se mantiene la conciencia de que en ocasiones o siempre, segun la interpretacion que se haga de teoria teorias alternativas explican el mundo o una parte del mundo con lenguajes distintos, y aunque no intraduci-bles son diffcilmente conmensurables.Sociologia y metodologia de la ciencia

Cuando, en 1962, Kuhn publico La estructura de las re-voluciones cientificas, resultado de su detallado estudio de la revolution copernicana, las concepciones acumulativas del progreso cientifico sufrieron un rudo golpe. Nada seria mas ingenuo o menos kuhniano que pensar que la explication de Kuhn sobre las revoluciones en el conocimiento surgio su-bitamente de su cabeza, o que estudio por easualidad la revolucion copernicana. Pensandolo en sus terminos, cuando se propone un nuevo paradigma y, como en este caso, cuaja, es porque se habian acumulado anomalias en el antiguo. No quiero llevar mas lejos el ejemplo de Kuhn, pero aqui y alii se desarrollaban alternativas criticas al positivismo y al ra-cionalismo critico de Popper, directas unas, implicitas las otras, porque dirigian a las teorias cientificas una vision mas comprehensiva.Entre las cuestiones que esperaban respuesta habia una que, segun Toulmin, se remontaba a veinte aos atras, al re-lativismo conceptual de An Essay on Methaphysics, de Collingwood. Collingwood, impresionado por la analogia entre los sistemas conceptuales de distintas culturas y los presupuestos basicos que soportan las teorias cientificas, se habia preguntado en que ocasiones, y a traves de que procesos, un conjunto de conceptos fundamentales o de presuposiciones absolutas cambia y es substituido por otras. Durante el de-cenio de 1950, recuerda Toulmin: Esta cuestion fue reto-mada y ampliamente discutida por historiadores y sociologos tanto como por filosofos. N.R. Hanson la abordo en terminos explicitamente filosoficos en su libro Patrones del des-cubrimiento (1958); fue el tema de mis conferencias Mahlon Powell, de 1960, en la universidad de Indiana, publicadas bajo el titulo Foresight and Understanding (1961), y esta im-plicita en muchos trabajos recientes sobre sociologia de la ciencia, por ejemplo, en la obra de Thomas Merton, Bernard Barber y Joseph Bar-David (Toulmin, 1977: 109 s.).Pero, sin duda, fue la respuesta de Kuhn la que obtuvo mas eco. En la interpretacion de Kuhn (cf. 1971a), el pro-ceso cientifico se desarrolla a traves de un periodo prepara-digmatico, con escuelas y teorias cientificas en competencia hasta que se impone un paradigma que proporciona mode-los de problemas y soluciones a una comunidad cientifica (o.c: 13); sigue un periodo de ciencia normal en el que no se buscan fenomenos nuevos y nuevas teorias, sino que se trabaja solo en los problemas que el paradigma permite re-solver y durante el cual las anomalias se abren paso trabajo-samente hasta que se instaura un periodo de investigacion no ordinaria, en el que proliferan las articulaciones en con-flicto y que solo se cierra cuando se produce una revolucion cientifica, episodio de desarrollo no acumulativo en el que un antiguo paradigma es reemplazado, completamente o en parte, por otro (o.c: 149).Esta secuencia se oponia directamente a lo que para Popper con&tituia el rasgo distintivo del proceso cientifico: la cri-tica de conjeturas y el abandono de teorias refutadas. La experiencia de falsacion no seria una caracteristica de la ciencia normal sino solo de los periodos extraordinarios. La dis-tincion entre ciencia normal y ciencia extraordinaria fue el objeto de una polemica que enfrento a Kuhn y a Popper, y en la que Lakatos, Toulmin y Feyerabend tuvieron una par-ticipaci6n destacada (cf. Lakatos y Musgrave, 1975). En elcaracter del cambio cientifico, y particularmente en el recha-zo o mantenimiento de las teorias refutadas, se centro el debate sobre las caracteristicas del proceso cientifico.Ciertamente, Popper nunca ha pretendido que su meto-dologia constituyese una generalization inductiva de lo que hacen los cientificos (1975: 151), pero si, como Kuhn ha re-saltado, las refutaciones, las experiencias anomalas, no hacen que se abandonen las teorias, tendria poco sentido hablar del rechazo de las hipotesis falsadas como criterio distintivo de la actividad cientifica. Tanto Toulmin como Lakatos hicieron un esfuerzo por dar cuenta de una manera sistematica del cambio de teorias e incluso del cambio de metodologias. Fe-yerabend adopto una postura mas relativista, que le Uevaria a defender que las condiciones optimas para el desarrollo del conocimiento cientifico se dan con la libre utilization de to-dos los metodos y que lo mejor para el desarrollo del conocimiento es que compitan libremente todas las formas de conocimiento. Centremonos en Toulmin y Lakatos en este pun-to, para terminar, con una reflexion sobre Feyerabend, estas consideraciones preliminares.Toulmin establece un paralelismo entre las orientaciones uniformista y catastrofista de la paleontologia del siglo xix y los enfoques de Popper y Kuhn sobre un desarrollo progresi-vo o con rupturas del proceso cientifico. Propone que una teoria del cambio cientifico tome como modelo a teorias evo-lucionistas que hayan conseguido establecer mecanismos de variacion y perpetuacion. Con esta guia, la pregunta unica de como se producen las revoluciones en la ciencia deberia de ser reformulada por dos conjuntos distintos de preguntas relativas a los factores que determinan el numero y la natu-raleza de las variantes teoricas que se proponen a considera-ci6n en una ciencia en un momento determinado y a los factores y consideraciones que determinan cuales son las variables intelectuales que logran aceptacion.Esta teoria de la ciencia nueva, cuyo desafo avanza Toulmin (1979 [1969]) y que despues desarrolla hasta convertirlo en el programa de trabajo de su Introduction de 1977 (1972), sobre el que volvere al hablar del desarrollo de los conceptos antropol6gicos, tiene como ejes basicos la idea de que la ciencia no es un sistema 16gico sino una empresa racional, y la necesidad de ver el cambio cientifico como un problema de variacion y perpetuacion selectiva de entidades teoricas. Una teoria de la ciencia de estas caracteristicas implica que la investigation filosofica ha de dirigirse tanto a parte de lo que los empiristas logicos descartan como contexto del descubri-miento como a mucho de lo que Thomas Kuhn ha dejado para la sociologia de la ciencia, y analizar el peso relativo de los factores externos que presumiblemente tendran mas que ver con la variacion y de los factores internos de la ciencia, probablemente mas vinculados a los procesos de selection.Lakatos desarrolla el que denomina falsacionismo sofisticado como nueva propuesta de criterio de demarcation, in-tentando resolver las inadecuaciones del falsacionismo tal como fue propuesto por Duhem y desarrollado por Popper. Piensa que dos son las caracteristicas comunes al falsacionismo dogmatico y al falsacionismo metpdologico ingenuo: 1) que una contrastacion es un enfrentamiento entre teoria y experimentation; 2) que el unico resultado interesante de la confrontation es la falsacion concluyente. Los unicos verda-deros descubrimientos son las refutaciones cientificas.Pero la historia de la ciencia (lease, en buena parte, Kuhn), sugiere: 1.) que las contrastaciones son, como mini-mo, enfrentamientos trilaterales entre una teoria, otra teoria rival y el experimento; 2.) que algunos de los experimentos mas interesantes resultan, a primera vista, de la confirmation mas que de la refutation (1975a: 228).Ante esta situation piensa Lakatos que: a) o la logica de la investigation (que entiende como conjunto de reglas, po-siblemente no bien articuladas y desde luego, no mecanicas [19756: 135]) desaparece y solo se pueden dar explicaciones psicosociales del cambio de paradigmas (Kuhn, Polanyi); b) o se formula una nueva version sofisticada del falsacionismo metodologico, que trate de substituir a las versiones ingenuas del falsacionismo, de una nueva fundamentacion racional a la falsacion y ponga a salvo la metodologia y la idea de pro-greso cientifico (sofisticacion ya implicita en las condiciones que Popper ponia al cambio de hipotesis auxiliares para que no fueran ad hoc).La propuesta de Lakatos anade al falsacionismo una dimension historica, ya que sostiene que no hay refutacion de una teoria si no se dispone de una teoria nueva. Una teoria Ti es aceptable o cientifica si tiene mas contenido empi-rico corroborado que su predecesora T\ y solo se puede con-siderar refutada si se ha propuesto otra teoria Tt con mas contenido empirico, es decir: que prediga nuevos hechos, que explique todos los aciertos previos de Ti o en otros ter-minos todo su contenido empirico no refutado, y cuyo contenido excedente esta, en parte, corroborado (of. Lakatos, 1975# y Lakatos 19756, o Lakatos 1983, edition mas accesi-ble de estos articulos).Si la primera condition de aceptabilidad de una teoria cientifica que propone Lakatos se puede comprobar inmedia-tamente, por medio de un analisis logico a priori, la segunda solo se puede comprobar empiricamente, y hacerlo exige un tiempo indefinido. Como Feyerabend seiialo inmediatamente, esta indefinicion temporal constituye un defecto insalvable para cualquier pretension normativa en la metodologia de Lakatos, pero vale la pena detenerse en ella por su valor heu-ristieo.Lo que interesa a Lakatos no es una teoria, sino una serie de teorias T\, Ti, Ti... en la que cada una resulta de afiadir clausulas auxiliares o de reinterpretar semanticamente la anterior, para dar acomodo a alguna anomalia, siempre que cada teoria tenga al menos tanto contenido comb el contenido no refutado de su predecesora. Una serie de teorias es teoricamente progresiva si cada nueva teoria tiene algun ex-ceso de contenido empirico respecto a su predecesora, esto es, si se predice algun hecho nuevo o inesperado hasta en-tonces, y una serie de teorias es ademas empiricamente progresiva si una parte de este contenido empirico excedente esta corroborado, esto es, si cada nueva teoria conduce al des-cubrimiento efectivo de algun hecho nuevo. Estas series de teorias suelen estar ligadas por una notable continuidad, lo que hizo hablar a Lakatos de programas de investigation.Una buena parte del trabajo de Lakatos ha consistido en haga posibie el desarrollo de programas de investigation progresivos. Ya he comentado que Lakatos empezo por estudiar la logica del descubrimiento matematico que centra en la mejora de las conjeturas a traves de la prueba. Las anomalias no impulsarian solo a rechazar las teorias, sino tambien a generar teorias nuevas. De modo que existe una unidad intrinseca entre logica del descubrimiento y logica de la validacion, porque las conjeturas initiates se mejoran para dar cuenta de las anomalias (1978: 167, nota 1; 1981c?: 277). Despues desarrollo esta idea de que no se avanza rechazan-do conjeturas, sino mejorandolas, hasta formular las reglas heuristicas para el desarrollo progresivo de los programas de investigacion.Lakatos sostiene que todo programa de investigacion cientifica se puede caracterizar por su nucleo. La heuristica nega-tiva consiste en hacer ese nucleo irrefutable por decision me-todologica, rodeandolo de un cinturon protector de hipotesis auxiliares. La heuristica positiva en avanzar buscando verifi-caciones, mejorando los metodos experimentales, modificando los conceptos, y respetando siempre la regla de que los cam-bios de teoria han de ser teorica y empiricamente progresivos.En el capitulo segundo recurrire a la heuristica positiva de Lakatos, para discutir los cambios de conceptos de An-tropologia, pero ahora quiero senalar que hay un punto central en la metodologia de Lakatos y del que no da cuenta satisfactoriamente. Se trata de la naturaleza de ese nucleo duro de los programas de investigacion que la heuristica ne-gativa preserva de la falsacion. De el solo dice: E1 nucleo real de un programa de investigacion no surge ya completa-mente armado como Atenea de la cabeza de Zeus, sino que se desarrolla lentamente, mediante un largo proceso prelimi-nar de ensayo y error. En este articulo no se trata de este proceso (Lakatos, 1975c: 246, nota 163).Asi, lateralmente presentado, resulta tan vago como los paradigmas de Kuhn, al tiempo que se plantea otra coincidencia: la puesta a prueba de hipotesis de Popper aqui el largo proceso de ensayo y error solo se considera fundamental para lo que en Kuhn seria un periodo de ciencia ex-traordinaria y en Lakatos el inicio de un nuevo programa de investigation. Como veremos mas adelante, la conception es-tructuralista de las teorias de Suppes y Sneed ha arrojado luz sobre la naturaleza de esa forma de quehacer cientifico no inmediatamente racional que Kuhn describe bajo los conceptos de paradigma y periodo de ciencia normal, y Lakatos de heuristica negativa de un programa de investigaeion.Constatemos por el momento que el enfasis en la conti-nuidad de los programas de investigaeion de Lakatos tiene alguna reminiscencia de la ciencia normal de Kuhn (Lakatos, 1975a: 244), pero que Lakatos piensa que la ciencia normal de Kuhn no seria mas que un programa de investigaeion que ha logrado el monopolio y que la regla metodologica debe de ser, por el contrario, que proliferen los programas de investigaeion, porque para eliminar un programa de investigaeion la unica razon metodologicamente consistente es que exista un programa de investigaeion rival que explique los exitos previos del primero y tenga un poder heuristico adi-cional.En efecto, Lakatos ha utilizado un criterio unico para comparar teorias dentro de un programa de investigaeion, programas de investigaeion rivales e incluso metodologias de la ciencia alternativas: el criterio de cambio progresivo, de contenido excedente corroborado.Ya hice referenda a la critica de Feyerabend, que de una manera convincente considera los criterios de aceptabilidad y refutabilidad de Lakatos insuficientes tanto para comparar teorias como para evaluar la sucesion de programas de investigaeion.Hay una exigencia inicial de racionalidad, la de progreso teorico, que reclama que se predigan hechos nuevos, que haya un contenido empirico excedente. Pero hay otra exigencia, la de progreso empirico o corroboration adicional, para la que Lakatos habla de racionalidad no instantanea, que convierte al criterio del falsacionismo sofisticado en una regla aplicable solo a la evaluation de un periodo historico ce-rrado. Si se formula una teoria con mas contenido empiricoque otra no debemos impacientarnos, parte de este contenido puede llegar a ser corroborado en el futuro. La critica de Feyerabend fue inmediata e incisiva: puesto que no estipula el tiempo que debe concederse a los programas de investigaeion para que se muestren empirieamente progresivos, como criterio de evaluacion es vacio, y si lo estipulara se apresura a anadir seria otra forma de falsacionismo ingenuo (Feyerabend, 1975: 366).Pero no es este el unico problema. i Que ocurre con los programas de investigaeion que se solapan solo parcialmente? i Con que criterio los comparamos? Y lo que es mas grave, pese a Lakatos hay programas de investigaeion que se aban-donan sin que los sustituya otro mejor, como se sostenian, pese a Popper, teorias falsadas.Por ultimo, cuando el criterio de cambio progresivo se utiliza como metacriterio para evaluar cambios de metodo-logia, solo puede emplearse destruyendo la idea de la meto-dologfa como norma para la evaluacion de teorias. Lakatos propone considerar progresivos a los cambios de metodolo-gia si la nueva es capaz de dar cuenta racionalmente de mas evaluaciones basicas de la elite cientifica (Lakatos, 19756: 479, 485), es decir, si considera cientificas a un mayor nu-mero de teorias consideradas valiosas por los cientificos. Esto significa que el metacriterio de Lakatos necesita recurrir a una suerte de base empirica que son los juicios de los cientificos, no necesariamente dependientes de las propuestas nor-mativas de los filosofos.Las posturas de Lakatos y Kuhn tal vez no han estado muy alejadas nunca (Kuhn, 1975a, asi lo sostuvo), pero en cualquier caso se han ido aproximando a medida que Kuhn (19716, 19756, 1979) modifica las tesis de 1971a, al hacer mas precisa la notion de paradigma y dejar de insistir en que la acepiacion de un nuevo paradigma es un fenomeno proximo a la conversion para atribuir mas peso a los compromises y a las decisiones de los cientificos.No conozco ninguna propuesta de demarcation formal de la ciencia posterior a la de Lakatos. Si algun principio me-tafilosofico tiene en este momento audiencia debe parecerse al principio de la relevancia de las distinciones graduales de Moulines, al que hice referenda en la Introduction. Pero las reglas de la metodologia de los programas de investigation de Lakatos pueden ser utiles para el desarrollo de programas progresivos, porque lo que incorporan es una idea sencilla y valiosa: que vale la pena tratar de corroborar una teoria teo-ricamente progresiva que prediga mis hechos que una teoria previa que sirve de referenda porque si resulta em-piricamente progresiva se producira un avance en nuestro conocimientb.A modo de conclusin provisionalPor razones distintas a las que hacian pedir a Lakatos la proliferaci6n de teorias y programas de investigation, recha-za Feyerabend (1974, 1975, 1981) la idea de que pueda ha-blarse de periodos normales en la historia de la ciencia. Su opinion es que Kuhn en oposicion a Popper ha descu-bierto la funcion de la tenacidad, de la resistencia frente a las anomalias, pero que se equivoca al hablar de periodos de tenacidad frente a momentos de proliferation que prece-derian a las revoluciones cientificas.Feyerabend sostiene que el principio de tenacidad y el principio de proliferation son caracteristicos de todo el pro-ceso cientifico (1975: 361) y que es conveniente que asi sea, porque es la utilization de todos los metodos proliferation de teorias, contrainduccion, hipotesis ad hoc lo que permi-te el desarrollo del conocimiento.Lo que subyace a la propuesta de proliferation de Feyerabend a diferencia de lo que ocurria con Lakatos, es la consciencia de que la cuestion mas dificil que se ha suscita-do con la discusion sobre los cambios cientificos es el proble-ma general de la comparacion de entidades teoricas, sean es-tas teorias en el sentido traditional, paradigmas (en el uso de Kuhn) o los programas de investigation de Lakatos. Porque si una entidad teorica no es solo una explication de un fenomeno sino una forma de ver el mundo, mas que de teorias rivales tendriamos que hablar de distintas Weltanschauung no necesariamente comparables.Este problema podria no ser grave si, como no ha deja-do de sostener Popper y trasladandolo a programas de investigation sostuvo Lakatos, una teoria explica siempre al me-nos lo que explicaba la precedente: E1 progreso de la ciencia, pese a ser revolucionario mas que meramente acumu-lativo, es en cierto sentido siempre conservador: una nueva teoria, por revolucionaria que sea, siempre debe ser capaz de explicar plenamente el exito de su predecesora. En todos aquellos casos en los que su predecesora era aplicable, la nueva teoria debe producir resultados por lo menos tan buenos como los de la anterior y, de ser posible, aun mejores. Asi pues, en estos casos la teoria precedente debe aparecer como una buena aproximacion a la nueva teoria; mientras que ha-bra, sin duda alguna, otros casos en los que la teoria recien-te producira resultados diferentes y mejores que la antigua (Popper, 1983: 125).El hecho es que la historia de la ciencia refuta a Popper tambien en este punto. En terminos de Bunge, una intuition falsa de Popper, que nunca se menciona, es la idea hegeliana de Aufhebung, la idea de que el proceso historico del conocimiento se desarrolla en forma concentrica. Primero se tiene una teoria (7\); despues otra que la encierra, la engloba y la niega (Aufhebung). Se llama negation dialectica, y asi suce-sivamente. Piensa Bunge que un modelo mas realista del proceso de la ciencia seria pensar en T\ como el ciierpo de conocimientos. T2, mas tarde, como recubrimiento partial, con muchas cosas que quedan fuera y se desechan. El diagra-ma II recogerfa la idea de Bunge (1982: 490) frente al diagra-ma I que recogerfa la de Popper.

Es ante una situacion de este tipo en la que una teoria T2 deja indeterminadas una parte de las consecueneias de T1, ante la que popperianos como Watkins recurren a la logica inductiva como unica esperanza: Tener que renunciar o abandonar la comparaci6n de contenidos de teorias rivales seria un golpe para la eoncepcion popperiana del progreso cientifico. Esta eoncepcion ha sufrido ya un golpe bastante severo con el descubrimiento (Miller, 1974, y Tichy, 1974) de los graves defectos que hay en las definiciones de Popper de la verosimilitud. Espero que los esfuerzos que estn haciendo actualmente Miller, Tichy, Niiniluoto, Tuomela, Wilpien, Oddie y otros, por no mencionar a Popper mismo, para reparar el dao producido, tengan xito. [...] Sin la po-sibilidad de la comparacion de contenidos entre teorias logi-camente incompatibles esta Filosofia de la Ciencia seria un desastre total (Watkins, 1982: 366).Vale la pena contraponer al diagrama de Bunge el de Watkins, absolutamente significativo en su disarmonia gra-fica, que parece simbolizar la forma en que Watkins vivio esta revolution cultural de la filosofia de los sesenta.

BungeWatkins

Por supuesto, la dificultad de comparar T2 y T1 se agrava si T2 y T1 estn formuladas en lenguajes teoricos distintos. Es posible que no dispongamos de un criterio logico que nos permita elegir entre Ti y Ti, esto es lo que ponia de manifesto Quintanilla en el trabajo sobre verosimilitud de teorias al que he hecho referenda.Si la reconstruction de Toulmin es adecuada, de cuantos intentaron responder a la pregunta que nos legara Colling-Wood, Feyerabend ha sido el relativista mas genuino. Si las teorias rivales son inconmensurables, piensa Feyerabend que no hay ninguna razon para seguir sosteniendo que el desarro-llo cientifico es racional, y al igual que el conocimiento cientifico solo puede desarrollarse por medio de la confrontacion y la coexistencia de distintas teorias, el conocimiento solo puede desarrollarse por medio de la confrontacion y la coexistencia de distintas formas de pensamiento. En este pun-to su propuesta metodologica que proliferen todos los metodos y su ideologia anarquista se hacen indisociables. Piensa que en presencia de cada disciplina no debemos renunciar a preguntarnos si su existencia es o no ventajosa para nosotros, si contribuye a aumentar o no la felicidad y la li-bertad de los seres humanos individuates, si el hecho de que tengamos que vivir con ella, estudiarla, entenderla, es un beneficio o hay en ella tendencia a corromper nuestro en-tendimiento y disminuir nuestro placer (1975: 359). Le parece que la felicidad o el completo desarrollo del ser huma-no individual es el valor mas alto posible. Y es este valor basico el que excluye la utilization de los valores institucio-nales para condenar o incluso eliminar a aquellos que pre-fieren organizar sus vidas de diferente forma, para educar a los nifios de tal modo que les haga perder sus multiples ta-lentos y les haga estar limitados a un estrecho campo de pensamiento, de action y de emotion. Sera el tema central de Feyerabend, 1982: La ciencia en una sociedad libre.Me ocupare del relativismo metateorico en el capitulo tercero, como fenomeno vinculado a otras formas de relativismo cultural. No sin razones fueron los fllosofos de la ciencia, entre quienes se interesaban por la antropologia des-de fuera, los que han prestado mas atencion, en los ultimos cambianies arios, a la Antropologia Cultural. Sin analizar ahora el valor heuristico de las propuestas de Feyerabend, su anarquismo metodologico y hedonista nos estimula en la construccion de una cultura mas polimorfa, mas tolerante, mas dinamica. Pero aunque las formas mas extremas de relativismo cultural parecen sumamente respetuosas, en rela-cion con los indfgenas de cada cultura resultan ser extrema-damente tiranicas. Una cierta disposicion a la comparacin y a la experimentation puede servirnos para confrontar nues-tra cultura con otras culturas, para imaginar la cultura que nos gustaria tener, para ensayar transformaciones que que-ramos impulsar. Porque las palabras van delante de los he-chos y pueden ser hipotesis, las palabras.Creo que puede ser este el momento de inieiar el camino, de ver como puede ensefiarnos la Historia de la Filosofia de la Ciencia a comprender errores que se han cometido a lo largo de la Historia de la Antropologia, de discutir en que momento la Antropologia Cognitiva y la Filosoffe de la Ciencia se entrelazan, de preguntarnos si el trabajo de los ultimos aiios sobre la racionalidad del proceso cientifico puede ayu-darnos a evaluar los desarrollos en curso en antropologia, a orientar la investigation antropologica.Pero quiero terminar estas primeras paginas con una in-congruente profesion de fe popperiana, que en nada turba la existencia de teorias cientificas inconmensurables, ni la constatacidn de que los procedimientos cientificos son mas complejos de lo que la demarcation de la ciencia de Popper podia hacernos esperar. Pienso que cualquiera que sea nues-tra vision del mundo, cualquiera que sea la orientation teo-rica a la que nos adscribamos, las teorias que propongamos deben de ser tales que se puedan poner a prueba, si quieren ser cientificas. Fe popperiana incongruente porque pienso, con Feyerabend, que tambien deberiamos de preguntarnos si la ciencia contribuye o no a aumentar nuestra felicidad y nues-tra libertad.La respuesta sera, seguramente, metafisica. Pero Popper, Feyerabend y Russell y la logica inductiva actual estan lle-nos de presupuestos metafisicos. Popper siempre ha sido ex-plicito respecto al caracter conventional de los criterios de demarcation, y su criterio metodologico debia de ser consi-derado como una propuesta para un acuerdo o convention. En cuanto a si tal convention es apropiada o no lo es, las opiniones pueden diferir; mas solo es posible una discusion razonable de estas cuestiones entre partes que tienen cierta finalidad comun a la vista. Por supuesto que la election de tal finalidad tiene que ser, en ultima instancia, objeto de una decision que vaya mas all de toda argumentation rational* (Popper, 1967: 37).Si el falsacionismo ha quedado refutado es porque el estudio detenido del cambio de las teorias cientificas ha des-velado un proceso de mas complejidad y porque se conoce mejor el papel de la experiencia en la formation del conoci-miento a traves de la investigation sobre procesos de apren-dizaje. Y estas lineas de investigation revelan el interes que se sigue otorgando al conocimiento cientifico. Por los anti-bioticos, pese al terror nuclear; por las mujeres del Tercer Mundo, y algunas de los instersticios marginales del primero, que no quieren tener siete hijos para que sobrevivan dos. Tambien por los aviones. Por la posibilidad a mitad de camino entre Popper y Feyerabend de cerrar el balcon del estudio donde escribo, y despues de quince minutos de auto-pista, atravesar la ciudad, otra vez autopista, media hora para los controles del aeropuerto, agudizada la sensibilidad por el trabajo intelectual, aterrizar al cabo de dos horas junto al Atlantico, extrafia fascination del mar.Si la metodologia popperiana me sigue pareciendo valio-sa es por su enfasis en las propuestas, en los acuerdos, en la provisionalidad y en la puesta a prueba de los conocimien-tos. Por eso he querido rendir homenaje a Popper con el titulo de este primer capitulo, porque, aceptado el reto mas profun-do del falsacionismo y dispuesta a vivir con conjeturas, pienso con Lakatos que convertir nuestras conjeturas en conjeturas criticables, y criticarlas, corregirlas y mejorarlas, es el tema central de la nueva epistemologia.

RELATIVISMO Y COMPARACIONParadigmasHe terminado el capitulo primero hablando del impacto que, sobre los intentos de establecer un criterio de demarcation que separe la ciencia del pensamiento no cientifico, tuvo la teorizacion de Kuhn sobre la estructura de los cambios cientificos y la contraposicion entre el tipo de actividad que se desarrolla durante los periodos de ciencia normal y el que caracteriza a la ciencia extraordinaria. De acuerdo con el enfoque inicial de Kuhn la ciencia normal esta determinada por la aceptacidn de un paradigma, una realization cientffi-ca reconocida por todos que, durante su perfodo de vigencia, proporciona modelos de problemas y soluciones a una comu-nidad cientifica. Un paradigma se impone porque tiene mas 6xito que sus competidores en resolver problemas que los cientificos.rsienten como agudos, pero no los resuelve todos, y la ciencia normal es precisamente el esfuerzo por resolver los problemas pendientes, por realizar la promesa que el paradigma representa. Las anomalias no hacen que se rechace el paradigma, se abren paso trabajosamente, y cuando se crea la conciencia de que el viejo paradigma ya no sirve para satisfacer los ideales explicativos, se inicia un periodo de ciencia extraordinaria, con debates sobre metodos, problemas y normas de soluciones aceptables, que termina con una revolution cientifica en la que el viejo paradigma es reemplazado por otro, completamente o en parte (Kuhn, 1971a [1962]: 13, 52, 87, 149).En su critica a la distincion entre periodos normales y extraordinarios en la ciencia, Toulmin piensa que es necesa-rio separar los dos conceptos basicos de Kuhn, el de perio-do de ciencia revolucionaria, para el que ya hemos visto que encuentra poca justification, y el de paradigma, que tiene una larga tradition dentro de la filosofia de la ciencia.Fue Lichtenberg, profesor de fisica en Gotinga, quien in-trodujo el concepto de paradigma a mediados del si-glo xviii, con la idea de que se podia analizar la red de ex-plicaciones de la fisica suponiendola construida en torno a ciertos patrones fundamentales de explication o paradeigma-ta. Segun Lichtenberg, los fenomenos desconcertantes se ex-plicarian relacionandolos con alguna forma de procesos que estamos dispuestos a aceptar como obvia. En aquella epoca se pusieron los cimientos del analisis gramatical moderno y el termino se us6 de forma semej ante en lingiiistica para de-signar las formas que Servian de modelo para la conjugation de los verbos y la declination de los sustantivos.Eclipsada durante el auge de las filosofias kantiana y he-geliana, la idea de paradigma, como toda la obra de Lichtenberg, renacio en Alemania a finales del siglo xix, influ-yendo en las teorias de la perception de Mach. Wittgenstein recogio el termino paradigma y lo utilizo de acuerdo con su uso original en filosofia de la ciencia y tambien como clave para comprender el modo en que los modelos o estereotipos filosoficos moldean nuestro pensamiento hacia direcciones pre-determinadas, no siempre correctas. Asi entro en el debate filo-sofico de Gran Bretafia y EE.UU., y asi fue utilizado por Watson, discipulo de Wittgenstein, en su libro On Understanding Physics de 1938, por Hanson (1958 [citado 1977]) y por Toulmin (1977: 116 y s.). Este ultimo, tras declararse bien familiarizado con la notion, aade que en modo alguno el uso de paradigmas implicaba cambios abruptos, discontinues o revolucionarios, y que se pueden dar razones de los cambios de paradigma.En 1962, el concepto de paradigma tenia en Kuhn multiples significaciones. No solo era un modelo de problemas y soluciones, sino que se trataba de un modelo unico, unani-memente aceptado por los cientificos una vez que se impo-nia a las escuelas o subescuelas preparadigmaticas que com-petian en el initio de una disciplina o, en el caso de una ciencia ya madura, una vez que un nuevo paradigma se imponia al antiguo despuSs de una revolution. Ademas, con la adqui-sicion de un paradigma el cientifico adquiria teoria, metodos e incluso normas de comportamiento, valores cientificos y so-ciales.Los paradigmas tambien tendrian un papel basico en el aprendizaje de una ciencia, proceso que, segun Kuhn, no consiste en adquirir un conjunto explicito de reglas sino en aprender a reconocer los problemas que tienen un aire de familia con los modelos paradigmaticos. Extrapolaba asi la respuesta que, en un contexto diferente, habia dado Wittgenstein a una vieja cuestion, la relativa a que debemos co-nocer con el fin de aplicar terminos como sillas, hojas o juego de manera inequivoca y sin provocar discusiones. Ante este problema, la respuesta mas comun era que debemos conocer un conjunto de atributos que definen el objeto. Wittgenstein, por el contrario, sostuvo que, dado el modo en que utilizamos el lenguaje y el tipo de mundo al que se apli-ca, no es preciso que haya tal conjunto de caracteristicas que determinen inequivocamente un objeto. En palabras de Kuhn, que suscribe el analisis de Wittgenstein: Aunque un examen de algunos de los atributos compartidos por cierto mimero de juegos, sillas u hojas a menudo nos ayuda a aprender como emplear el termino correspondiente, no existe un conjunto de caracteristicas que sea aplicable simultaneamente a todos los miembros de la clase y solo a ellos. En cambio, ante una activicfad que no haya sido observada previamente, apli-camos el termino "juego" con una serie de actividades que hemos aprendido a llamar previamente con ese nombre (Kuhn, 1971a: 82 s.).Sin embargo, el propio Kuhn insiste en nota a pie de pa-gina en una aclaracion que ya hacia en el text'o. Wittgens-icin discutio los mecanismos que llevan a denominar a un objeto silla en contextos cotidianos, no en el mareo de la actividad cientifiea, y no especificd si los mismos procedi-mientos de denomination se utilizan en otras situaciones, en otros mundos. Por consiguiente, no se pueden atribuir a Wittgenstein, aunque se inspiren en el, las ideas de Kuhn sobre la adquisicion de conocimientos cientificos como un proceso de familiarization con paradigmas a traves de la education y de la exposition a la literatura cientifiea, con fre-cuencia sin conocer del todo o sin necesitar conocer que ca-racteristicas les han dado a estos modelos su status de paradigmas de la comunidad (o.c: 84).Esta forma de conceptualizar la adquisicion de los paradigmas cientificos ha sido utilizada para identificar a la cien-cia con todos los demas productos culturales cognitivos. Como antropologa, tengo serias dudas de que un proceso acritico de enculturacidn sea la unica forma de aprendizaje de la cultura. Levi-Strauss tiene unas hermosas y bien conocidas paginas sobre los modelos indigenas conscientes, comunmen-te llamados normas y cuya funcion no consiste en expo-ner los resortes de las creencias y los usos, sino en perpe-tuarlos. La distincion entre modelos conscientes e incons-cientes es de Boas, que ya en 1911 advirtio que el analisis estructural es mas diffcil si la sociedad dispone de un mo-delo consciente para interpretar los hechos o justificarlos. Levi-Strauss, que cita a Boas, se muestra parcialmente de acuerdo con el, pero atribuye un interes especial a los modelos conscientes, en ocasiones porque son adecuados, o, al menos, ofrecen un camino de acceso a la estructura, otras, porque aun cuando sean tendenciosos o inexactos, la tenden-cia y el tipo de errores que encierran forman parte de los hechos que se deben estudiar y tal vez se encuentran entre los mas significativos (Levi-Strauss, 1977: 253 s.). Es un to-pico en antropologia que los nativos tienen a veces considerables dificultades para hacer entender a los etnografos sus complejos modelos. En Levi-Strauss (1969) hay algunos ejem-plos relatives a reglas que rigen los intercambios matrimo-niales. En Nadel (1970: 40, nota 1) se recoge la experiencia del autor con un adivino nupe que intento ensenarle el arte adivinatorio eba con un conjunto de objetos y despues recurrio a otro conjunto, porque se dio cuenta de que el prime-ro le resultaba demasiado diffcil. Que estos modelos indigenas son, a menudo, criticos, es la tesis de Radin (1957) en Primitive Man as Philosopher. Si algo distinto pueden tener los modelos conscientes de los antropologos es el ser inten-cionadamente contrastables.Como profesora, estoy en absoluto desacuerdo con la idea de que el proceso de formation de los estudiantes consiste en ensenarles a identificar paradigmas. En varias ocasiones he enseiiado matematicas a ninbs y jovenes de mi familia, y se reconocer a los malos estudiantes: son los que ante un problema no se preguntan en que consiste y de que bagaje disponen para resolverlo, sino de que es (de interes com-puesto, de variaciones?). A riesgo de cierto platonismo creo que si se ensena asi a los estudiantes, no deberia ensenarseles.A partir de Kuhn (\971a), no es dificil entender las conclusions a las que llega Feyerabend. Si los paradigmas son Weltanschauung, formas globales de ver el mundo, las teo-rias cientificas son incomparables. Pero Kuhn se ha resistido a aceptar las consecuencias de su enfoque de la historia de la ciencia. Ante la presion de criticas como las de Master-nam (1975), y de inferencias como las de Feyerabend, ha tra-tado, en 19756 y sobre todo en 19716, de precisar su postu-ra y de concretar la noci6n de paradigma.En 19756 deja de hablar de ciencia normal y paradig-ma unico para hablar de los paradigmas de comunidades particulares de cientificos. La nocion de periodo pre-paradig-matico desaparcce al tiempo que paradigma adquiere un sen-tido mas acotado. Los paradigmas pasan a ser ejemplares, soluciones-tipo a familias de problemas. Tambien piensa que se puede dar cuenta del cambio de teorias porque se va-lora en ellas la exactitud, el alcance, la simplicidad, la posi-bilidad de dar frutos; esto es nuevo en el pensamiento de Kuhn, que con anterioridad no habia atribuido razones 16-gicas a los cambios de paradigmas.En 19716 contintia este proceso. Introduce un nuevo con-cepto, el de matriz disciplinar, para designar todo lo que tiene en comun una comunidad de cientificos. La matriz disciplinar incluye: las generalizaciones simbolicas (leyes o definiciones); las partes metafisicas del paradigma (que proporcio-nan analogias y modelos); los valores cientificos y sociales, que van desde el consenso sobre aplicaciones licitas de una disciplina a los niveles de error aceptables; los ejemplares, modelos de resolution de problemas.Se mantienen sus ideas sobre las teorias y su aprendizaje: las teorias son generalizaciones que no se conectan con los datos a traves de reglas de correspondencia sino mediante ejemplares; una teoria se propone siempre junto con aplicaciones a cierto rango concreto de fenomenos naturales, sin ellas ni siquiera podria esperar ser aceptada. Despues de su aceptacion, esas mismas aplicaciones u otras acompaiian a la teoria en los libros de texto donde aprenderan su profesion los futuros cientificos.En 1979 los tres articulos son de 1969 pero los estoy citando por su fecha de publication en castellano propone incluso dejar de hablar de paradigmas y substituir definitivar mente tan controvertido termino por matriz disciplinar y ejemplares. Respecto a los ejemplares dice que no pueden compararse entre si, aunque puede compararse su capacidad de resolver problemas y de representar el mundo.Es en este punto donde los planteamientos de Kuhn y de Toulmin se aproximan. Toulmin situa la paradoja central de la teoria de las revoluciones cientificas en el hecho de que implique inevitablemente la mutua incomprension entre defensors de paradigmas diferentes, porque un nuevo paradigma supone una ruptura total. Pero en toda ciencia, dice, hay conceptos y principios de dos generos muy diferentes: Por una parte, estan los principios "teoricos" basicos de la ciencia, como el principio de gravitation universal de Newton o los principios geneticos de segregation y recombination de Mendel. Por otra, estan los principios "disciplinarios" por ejemplo, que todas las funciones fisiologicas deben ser expli-cadas en terminos quimicos que defienden los objetivos intelectuales basicos de una ciencia y le dan una unidad y una continuidad reconocibles (1977: 133).Y la paradoja de las revoluciones cientificas presenta un aspecto diferente si se define un paradigma cientifico en terminos solamente de los principios teoricos aceptados o si se refiere a un conjunto de principios te6ricos y disciplinarios tornados conjuntamente como una sola totalidad. Si limitamos nuestra atenci6n a los principios te6ricos, los cambios de paradigma no llevan inevitablemente a la incomprension entre cientificos, y es posible pensar en la introducci6n de nuevos conceptos en una ciencia sin ninguna discontinuidad radical. Asi, los conceptos teoricos de la fisica relativista de Einstein quiza sean incompatibles con los de las teorias clasicas de Newton, en este primer sentido; sin embargo los defensores de las dos posiciones compartian suficientes fines disciplinarios para poder discutir, con un vocabulario inteligible por ambas partes, cual de las dos teorias realizaba una mejor tarea explicativa para la fisica teorica (Toulmin, 1977: 135 s.).Merece la pena revisar aqui el uso del termino paradigma en antropologia. Se ha utilizado en ocasiones de acuer-do con el primer Kuhn, y asi se ha dicho, por ejemplo, que la antropologia cultural estaba en una situacion pre-paradig-matica. Con mas frecuencia se utiliza paradigma en el sentido de Wittgenstein, pero aplicado a ejemplos-tipo de enti-dades muy diversas: un modelo heuristico, una suerte de problemas de dominio, un tema que recoge el enfrentamien-to entre dos orientaciones; asi se dice que la analogia orga-nicista fue paradigmdtica para la antropologia social britani-ca, que el rechazo de la integracion escolar de los ninos de las minorfas marginadas es un paradigma de racismo, o que la discusion sobre la estabilidad matrimonial es paradigmati-ca en el enfrentamiento entre teoria de la filiacion y teoria de hi alianza. Por razones que veremos inmediatamente, hay un tipo de paradigma con una relevancia analitica particular: los ejemplares, o paradigmas en el segundo uso, mas especifico, de Kuhn, que constituyen las aplicaciones paradigmaticas de una teoria. Pero dada la larga y controvertida historia del Idrmino, quizas sea mas util aceptar un uso amplio de paradigma y hablar de modelos heuristicos paradigmaticos, valores metodologicos paradigmaticos y, en su caso, aplicaciones paradigmaticas de una teoria. Asi, el sistema solar, la multi-pi icaci6n de numeros enteros y el potlacht son aplicaciones paradigmaticas de la mecanica clasica de Newton, la teoria de grupos y lo que por el momento entrecomillare como teoria de la alianza. Dejo de lado otro uso de paradigma, como uno de los metodos de clasificacion (junto con indice, llave, taxonomia y tipologia) (Conklin, 1964a: 39-40) que nos apartaria de la estructura de las teorias cientificas.A la hora de hablar de teorias cientificas, nos encontra-mos en este momento con una proliferacion terminologica notable: teoria en el sentido restringido, ejemplares, genera-lizaciones simbolicas, valores y componentes metafisicos de una matriz disciplinar, principios teoricos y principios disci-plinarios, programas de investigacion... Los esfuerzos que se han hecho en los anos setenta por devolver al proceso centifico una racionalidad que parecia perdida apuntan a dos realidades discernibles tras esta proliferacion de terminos. En primer lugar, como tratare de mostrar a continuacion, la conception estructural de las teorias se centra en dos tipos de entidades, los elementos y las redes teoricas, en cuya definition quedarian incorporadas las generalizaciones simbolicas y los ejemplares de Kuhn, los principios teoricos de Toulmin y el nucleo de los programas de investigacion de Lakatos, y que habria que identificar con una gran teoria, como la mecanica clasica o la teoria de la relatividad, cuyas aplica-ciones especiales serian las teorias en sentido restringido, por ejemplo, la teoria de la gravitation universal. En segundo lugar, exigen analisis aparte los componentes metafisicos y los valores de una matriz disciplinar de Kuhn, o los principios disciplinares de Toulmin. Los discutire en el epigrafe titulado principios meta-teoricos. Dejo para entonces la elucidation de los conceptos emparentados con los que estamos discutien-do mas influyentes en antropologia, el concepto de orientation te6rica de Kaplan y Manners, y el concepto de estra-tegia de investigaci6n de Harris.

Estructura, dinamica y comparacion de las teorias cientificasLas teorias como estructurasLos filosofos de la ciencia positivistas han analizado de distintos modos la estructura de las teorias cientificas. Lo que sus analisis tuvieron en comun fue el considerar a las teorias formulaciones lingiii&ticas, sistemas de enunciados. La con-ceptualizacion linguistica se fue modificando en el intento de establecer la correspondencia entre los terminos teoricos y los terminos observacionales que debian de describir los datos empiricos capaces de poner a prueba las teorias.1) La concepcion linguistica enunciativa tradicional es-tuvo representada en su version ultima por la aproximacion de Carnap. Carnap consideraba que las teorias eran sistemas de axiomas, expresados en un lenguaje formal integrado por terminos logicos y terminos te6ricos. Su prop6sito era cons-truir un lenguaje formal observacional de modo que los terminos teoricos recibieran una interpretacion empirica por medio de reglas de correspondencia que los conectaran con terminos observacionales. Estos debian garantizar el conte-nido empirico de una teoria, y en consecuencia su verifica-bilidad, probabilidad o refutabilidad.Los terminos teoricos terminaron por revelarse irreducti-bles a terminos observacionales. Es cierto que algunos terminos teoricos se pueden reducir a una conjuncion de enunciados empiricos que constituyen su definition explicita, pero otros solo pueden traducirse por medio de definiciones operacionales que indican que se aplica un predicado P si realizando determinadas operaciones se observan determinados resultados, y otros aun solo pueden introducirse por defini-cidn postulacional en el interior de una teoria, por medio de un tipo de sentencia que se conoce como oraci6n de Ram-dcy (que la aplico a los electrones dentro de la fisica sub-atmica). La formula general de Ramsey es esta: Hay ciertos sucesos observables que es posible describir mediante ciertas funciones matemticas dentro del armaz6n de cierto sistema conceptual* (Carnap, 1969: 329). En estos casos, los terminos teoricos no pueden separarse del armaz6n conceptual del que forman parte.2) Por esta razon Nagel, que tarabien pensaba que el armazon de una teoria era un sistema o calculo axiomatico, considero que los axiomas debian de ir acompaiiados no solo de reglas de correspondencia que atribuyeran contenido em-pirico a sus terminos teoricos sino tambien de un modelo, un conjunto concreto de fenomenos que verificaran los axiomas de la teoria y de este modo precisaran su contenido em-pirico. Las teorias asi definidas estarian formadas por: a) un calculo abstracto el sistema de axiomas que constituye el esqueleto logico del sistema explicativo y que define im-plicitamente las nociones basicas del sistema; b) un conjunto de reglas de correspondencia que asignan un contenido explicito al calculo abstracto, relacionandolo con los materials concretos de la observation; c) una interpretation o modelo del calculo abstracto, que suministra carne al esqueleto, por asi decir, en terminos de materiales conceptuales o intui-bles mas o menos familiares (Nagel, 1978: 84-107). En con-secuencia:

Carnap = < T, C > con T = principios teoricos (axiomas) C = reglas de correspondenciaNagel = con C = calculo axiomtico abstracto R = reglas de correspondencia C = modelo

La filosofia de la ciencia actual ha terminado por aban-donar la distincion entre teorico y observacional, aceptando que tanto nuestras observaeiones como los terminos con los que hablamos de ellas estan cargados de experiencia, de pre-concepciones, de teoria.Pensemos, por ejemplo, en la tesis de Marwick (1965) sobre los conflictos que se producen entre los primos para-lelos matrilaterales cewa por la sucesion a la jefatura del li-naje como causa de las acusaciones de brujeria. La expre-sion primos paralelos matrilaterales incorpora, entre su carga te6rica, las relaciones que puso de manifiesto Tylor en 1889 entre la clasificacion de los primos y la exogamia, y el inalisis de Audry Richards (1983 [1950]) sobre la vincula-ci6n entre principio de filiation, forma de matrimonio y resi-dencia a la hora de desentranar las relaciones de proximidad y tensin dentro del puzzle matrilineal africano. Y esto no es todo. El estudio de Evans-Pritchard sobre los azande habia ensefiado a ver en el sentido de Hanson, en este caso a ver que los conflictos sociales podian expresarse en terminos de acusaciones de brujeria. No nos llevan estos hechos a una recurrencia infinita. Si lo que tratamos es de formular o discutir una hipotesis sobre las acusaciones de brujeria entre los cewa, a Tylor, Evans-Pritchard y Richards los damos por supuestos. Pero no con-viene decir que se ha llegado a ella observando a los cewa. Algo de esto trato de resolver Popper al hablar del cardcter convencional, metodologico, de los enunciados singula res, pero no todo. Iba a ser necesaria una larga labor criti-ca antes de que Hempel (19796: 110) distinguiese entre con-ceptos teoricos y preteoricos (disponibles con anterioridad), o Stegmiiller, siguiendo a Sneed, entre los conceptos Meoricos, que se definen implicitamente en el interior de una teoria t Indeterminada, y los conceptos que no estan determinados por ella, lo que en modo alguno significa carentes de teoria (Stegmuller, 1981: 27 s.).3) Mas recientes son las caracterizaciones informales como la del propio Hempel, para quien una teoria esta for-mada por principios teoricos y principios puente, que vincu-lan de diversas formas a los principios teoricos con principios pre-tericos, o la de Rudner, para quien una teoria esta for-mada por"un conjunto de enunciados sistematicamente re-lacionados que incluyen alguna generalizacion del tipo de una ley y que pueden contrastarse empiricamente (1980: 30).La constatacion de que algunos terminos teoricos solo po-liun ser interpretados mediante definiciones operacionales, y dc que otros s61o podian ser parcialmente interpretados por iu capacidad de dar cuenta de fenomenos empiricos que nos ion familiares, planted serias dudas sobre la forma en que las teorias cientificas representan la realidad. En relation con la primera cuestion Nagel (1978: 118-149) agrupa en tres tipos las posturas que se han mantenido en el debate, todavia abierto, sobre el estatuto cognoscitivo de las teorias cientificas:a) Realismo. Las teorias son verdaderas o falsas aun cuando solo podamos establecer su probabilidad. Cuando una teoria encuentra apoyo adecuado en los elementos de juicio empiricos, a los objetos que la teoria postula de una manera ostensible (por ejemplo los atomos en la teoria atomica) se les debe atribuir realidad fisica.b) Descriptivismo. Una teoria es una description resu-mida y eliptica de relaciones de dependencia entre sucesos y prdpiedades observables. Esta position se vinculaba a la po-sibilidad de traducir los terminos teoricos a enunciados feno-menalistas o a lenguajes fisicalistas, y al proposito de atribuir a las teorias valores de verdad o falsedad.c)Instrumentalismo. Las teorias deben de ser entendidas como instrumentos logicos para organizar nuestra experiencia, poner orden en las leyes experimentales y conducir las investigaciones, y no como enunciados acerca de los cuales se puedan plantear con utilidad problemas de verdad o de falsedad. Lo que debemos plantearnos es si son o no tcnicas efectivas para representar o inferir fenomenos experimentales.La interpretaci6n descriptivista de las teorias ha dejado de tener sentido tras el fracaso del intento de traducir los terminos teoricos a terminos observacionales. En cuanto a la concepcion realista, ya he comentado las dificultades para verificar, establecer la probabilidad e incluso refutar una teoria. En cuanto al instrumentalismo, resulta insatisfactorio si no se especifica de que tipo de instrumento logico estamos hablando. Por otra parte, pocas veces las teorias cientificas son realistas, casi siempre se trata de aproximaciones a la realidad de varios tipos: idealizaciones, abstractions, simpli-ficaciones. Tambien pueden ser ficciones. Pero lo mas comun es que distintas partes de la teoria tengan un estatuto dife-rente (Suppe, 1977: 708).Pero volvamos a la concepcion heredada de las teorias.En su interior se plantearon problemas que no pudieron resolverse. Recordemos algunos de ellos: No se llegaron a establecer de manera precisa crite-rios de sencillez o probabilidad logica. Cuando se abrio paso la idea de que no habia terminos observacionales carentes de teoria, se puso en duda la po-libilidad de recurrir a una base empirica objetiva para la corroboration o, en su caso, la refutation de teorias. La carga teorica de los terminos observacionales, el inndicionamiento teorico de la perception y de la selection It datos, tambien planteo problemas para la comparacion de teorias. El hecho, que ya habia senalado Duhem, de que teoras refutadas pudieran mantenerse por la introduccion o la modification de hipotesis ad hoc, puso en cuestion la racio-fliilidad del conocimiento cientifico. La constatacion de que el corpus de conocimientos en nn momento determinado no necesariamente incluia todo el corpus de conocimientos anterior, el crecimiento no hegeliano del conocimiento, por utilizar la expresion de Bunge, arroj6 dudas sobre el caracter progresivo del desarrollo cientfico. En particular hizo crisis la idea de que el progreso cientfico por excelencia era la reduction de teorias, la substitucion de una teoria por otra que la incluyera entre sus aplicaciones.De ahi las criticas de Kuhn a la idea de un crecimiento lgico y acumulativo de la ciencia, los intentos de Lakatos de tnodificar la metodologia de Popper y el programa de Toulmin, encaminado a explicar racionalmente la evolution de los conceptos. Esta acumulacion de problemas explica el interes de la concepcion alternativa de las teorias que Suppes (1962, 1967) propuso y que se conoce como concepcion estructuralista de las teoras. Para Suppes, una teoria es una estructura matemtica que puede atribuirse a conjuntos de fen6menos o individuos, que se predica de conjuntos de fenomenos. Entendiendo por estructura las relaciones entre los elementos de un conjunto y las propiedades de estas relaciones, formular una teora es atribuir a un conjunto una estructura determinada. Un ejemplo tornado de la teorfa matematica de con-juntos nos ayudara a precisar estas nociones. Se dice que un conjunto es un grupo si entre sus elementos se ha defini-do una operacion interna que tenga la propiedad asociativa, en relation con la cual exista un elemento neutro y que sea tal que cada elemento tenga respecto a ella un elemento si-metrico. Asi definida la estructura de grupo, se puede decir del conjunto de los mimeros enteros con la operacion de la adicion que es un grupo. De un modo analogo, se puede de-finir la estructura que debe tener un sistema de particulas fisicas para que cumpla la teorfa de Newton, es decir, para que sea una mecanica clasica de particulas. Y del sistema solar, que se ajusta a la teoria de Newton, puede afirmarse: E1 sistema solar es una mecanica clasica de particulas.En 1971, Sneed desarrollo la concepcion estructuralista de Suppes, aplicandola al analisis de la estructura matematica de las teorfas fisicas. Ejemplo que podrfamos denominar paradigmatico es precisamente el analisis de la mecanica clasica de particulas en el que han trabajado Sneed y sus cola-boradores (cf. Moulines, 1983). Poco despues de la publication de la obra de Sneed, en 1973 Stegmiiller puso de relieve que si al analisis de Sneed se le anadian ciertos conceptos pragmaticos, hacia posible la justification partial de las filo-sofias de la ciencia de Kuhn y de Lakatos. Estos conceptos pragmaticos son conceptos kuhnianos o de inspiration kuh-niana, comunidad cientiflca, desarrollo de la ciencia en un tiempo t, poseer una teoria. Es para tratar de ilumi-nar los procesos de desarrollo y cambio de las teorfas para lo que nos interesa introducir esta concepcion.Veamos, pues, aunque sea someramente, el desarrollo que hizo Sneed de la concepcion estructuralista de las teorfas d Suppe y las posibilidades de explicar la dinamica de las teo rfas desde un enfoque estructural, objeto en los ultimos afioi de un dialogo en el que han participado, entre otros, Steg^ miiller (1974, 1981); Sneed (1976); Kuhn (1977), y Moulin^ (1983). He preferido recoger la description formal de la concepcion de Sneed en un anexo porque el recurso al lengunjo de la teoria de conjuntos podrfa dificultar la lectura de este capitulo. Remito a el para las referencias bibliograficas con-cretas. Hare aqui una presentation mas informal.La primera cuestion importante que se debe subrayar es que Sneed no habla de magnitudes fisicas teoricas, sino t-teoricas, expresando asi que obtienen sus valores dentro de la teoria a la que pertenecen, p. e. la fuerza de atraccion de la gravedad solo puede medirse presuponiendo la teoria de la gravitacion universal de Newton. De manera mas general no opone terminos teoricos a terminos observacionales, porque piensa que cuando se califica a un termino como teo-rico no se hace porque pertenezca a un tipo de lenguaje sino porque esta definido implicitamente en una teoria. Las teorfas intentan dar cuenta de hechos observables suponien-do, conjeturando, que los fenomenos tienen ciertas propiedades y que se dan entre ellos ciertas relaciones. Estas propiedades y estas relaciones que se proponen para dar cuenta de los hechos que observamos son los terminos y leyes teoricos. Volvamos los ojos a las formulaciones mejor conocidas de la mecanica clasica para que nos sirvan de ejemplo. Hasta bien entrado el siglo xv los astrnomos pensaban que la tierra estaba fija en el centro del universo y que el sol, la luna y los planetas giraban en torno a ella. Copernico aclar el verdadero movimiento de los astros; Kepler descubri las leyes que los rigen: 1) cada planeta describe una elipse, en uno de cuyos focos se halla el sol; 2) el area que barre en un periodo de tiempo t el radio vector que une al planetea con el sol es proporcional a t; 3) los cuadrados de Ios periodos de revolucion son proporcionales a los cubos de los ejes mayores de las orbitas.Se trataba de leyes empiricas sobre las orbitas de los planetas, de las que no se pudo dar explicacion dentro de los sistemas teoricos preexistentes. Este hecho, unido a la tosquedad con que daban cuenta de la orbita de la luna alredrdor de la tierra, a la imposibilidad de hallar leyes adecuadas para las orbitas de los cometas y a la falta de explicacin satisfactoria para el fenomeno de las mareas, provoco una situacin de crisis en la astronomia de finales del siglo xvn (Moulines, 1983: 253) que no se resolvera hasta Newton. Newton explico las leyes de Kepler mediante la ley de la gravitation universal: dos cuerpos de masas m y m se atraen con una fuerza F directamente proporcional al producto de sus masas e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia que los separa. O en otros terminos, las leyes de Kepler se explican si suponemos que existe una fuerza de atraccion entre los cuerpos. F es un termino teorico en la ley de la gravitacidn universal, que constituye un caso particular de la teoria mecanica clasica de las particulas, cuyo principio basico es que sobre una partfcula en movimiento esta actuando una fuerza que es igual a la masa de la particula por su aceleracidn, esto es, f = m X a.Si pensamos en una teoria como una estructura S, hay una serie de objetos M que son los modelos de S y que cons-tituyen la extension del predicado S, donde M es un S si tiene la estructura S. Si un fenmeno aparece en distintos modelos, sus propiedades deben de tener en todos el mismo valor, p. e. en la teoria de Newton, la Tierra debe de tener la misma masa si se considera el sistema solar o el sistema Tierra-Luna. Estas condiciones reciben en el enfoque de Sneed una denominacidn precisa: condiciones de ligadura (de los modelos). Los modelos y las condiciones de ligadura constituyen el niucleo de la teoria. Su base empirica, o do-minio de aplicaciones A, son las porciones de la realidad que se conceptualizan como compatibles con el nucleo, es decir, que se piensan como posibles aplicaciortes de la teoria y estan constituidas por clases de conjuntos: pendulos, con-juntos de numeros, sistemas planetarios, etc.Pero no basta el dominio de aplicaciones, o marco em-pirico, para identificar el componente empirico de las teorias. En cada momenta parte de estas aplicaciones son aplicaciones realmente propuestas. Algunas de las aplicaciones pro-puestas pueden cambiar con el tiempo, pero por otra parte, las aplicaciones paradigmdticas, se proponen junto a la formu-lacion inicial de la teoria y continuian siendo parte de la teoria durante toda su historia.Stegmuller llama IcA al conjunto de aplicaciones realmente propuestas, que seran aplicaciones mas o menos se-guras o firmes de la teoria, y representa a la teoria por , siendo K el nucleo e I las aplicaciones propuestas.I es la aserci6n empirica global de la teoria: se supone que de los sistemas incluidos en I da cuenta el nucleo K (1974: 529 s.). Moulines habla de las aplicaciones propuestas por una comunidad cientifica CC en un tiempo t determinado, y caracteriza a la teoria por . Ambos estan de acuerdo en la existencia y la permanencia de un subconjunto paradigmatico de aplicaciones propuestas. En el caso de la mecanica clasica el sistema solar, distintos subsistemas, como el formado por la Tierra y la Luna o Jupiter y sus lunas, varios cometas, los movimientos del pendulo, los cuerpos en caida libre en las cercanias de la tierra y las ma-reas.Una ley especial tiene la misma forma. Un nucleo, especializacion del nucleo de la teoria, y unas aplicaciones propuestas, que forman parte de las aplicaciones propuestas para la teoria. De ahi que tanto teoria como leyes especiales se subsuman bajo la expresion elementos teoricos. La teoria ea el punto de partida, el elemento basico de una red de elementos teoricos que son especializaciones del nucleo, leyes especiales validas para alguna de las aplicaciones de la teoria. Lo que si han de cumplir todas las aplicaciones son las leyes bsicas.Desarrollar una teoria consiste asi en proponer nuevas aplicaciones, en formular leyes especiales. El nucleo y las aplicaciones paradigmaticas son intocables; son las leyes es-peciales, las nuevas aserciones empiricas lo que se pone a prucba. De acuerdo con una metafora zoologica de Moulines, una teoria es como un pulpo: La cabeza del pulpo seria el nucleo, el fondo del mar, del que el nucleo adquiere su alimento, seria el campo de aplicaciones, y los tentaculos representarian las leyes especiales. Para el pulpo (la teoria) slo es vital e imprescindible la cabeza (el nucleo) y una cierta porcion segura del ambiente donde vive (las aplicaciones paradigmaticas). En cambio, al pulpo (a la teoria) se le pueden cortar algunos tentaculos (leyes especiales) sin que deje de existir como pulpo (como teoria). Incluso a veces se pueden regenerar nuevos tentaculos (construir nuevas leyes especiales) (1983: 86).Si una nueva aplicacidn propuesta se mantiene, si otra asercion empirica resulta corroborada, se incluye en la red de elementos teoricos , , ... Si queda refutada se corta un brazo al pulpo; no pasa nada, aunque por supuesto, que una teoria resulte fructifera, que cum-pla la promesa que entraaba, depende de la capacidad de generar redes teoricas progresivas, de las que formen parte un numero creciente de aplicaciones firmes.Dinamica y comparacion de las teoriasVeamos ahora como la concepcion estructural de las teorias muestra su capacidad de dar cuenta de los cambios teoricos. Hemos abandonado la insatisfactoria terminologia de las hipotesis ad ho