CONTAMINACION EN SANTA MARTA

En cuanto a la afectación de la calidad del aire con partículas de mayor tamaño ,comúnmente identificadas como polvo, los lugares más contaminados de Colombia son: Cazucá en Bogotá; Soacha, Sibatè y Zipaquirá en Cundinamarca, Autopista sur en Bogotá, el noroccidente de Medellín e Itaguí y las zonas de influencia del carbón como El Cerrejón, Santa Marta y La Jagua de Ibirico

Desde el punto ambiental, no cabe duda que el transporte del carbón en el área de Santa Marta, en la forma que se ha venido haciendo, produce serios impactos en la salud humana y en ecosistemas tan frágiles como el marino. Algunos de esos impactos son los siguientes:

* Derrames de residuos de carbón y esparcimiento de polvillo durante el tránsito de las tractomulas en su recorrido desde las minas al puerto de Santa Marta. El polvillo está afectando la calidad del aire y la salud y atenta contra el ecosistema.* Daño de la infraestructura urbana, ruido y problemas de tránsito, que se incrementa por el paso de vehículos semejantes que cargan otros productos de exportación.* Residuos de mineral de diferentes tamaños, que terminan depositados en el agua, la vegetación acuática y los ecosistemas bénticos, por el transporte del carbón desde la barcaza a las bodegas de los buques fondeados.* Fracturas, aplastamiento y otros efectos sobre ecosistemas, corales y organismos del fondo marino producidos por los accidentes de las barcazas. En los últimos años más de 1.600 toneladas de carbón han sido derramadas tras el hundimiento de barcazas, con los correspondientes efectos nefastos sobre el medio ambiente.Por ejemplo, el 90% de los corales sufrieron blanqueamiento o quebramiento luego del hundimiento de la barcaza 'Liliana'.* Turbulencias en el fondo marino por los remolcadores que mueven las barcazas y que generan la remoción de sedimentos. 

Todos estos efectos producen, desde el punto de vista antrópico, menoscabo de la calidad de vida de los pobladores, afectación de su salud, alteración del corredor turístico, congestión vial, contaminación del aire, riesgos de accidentalidad.

Y, en cuanto al medio ambiente y los recursos naturales, extinción de la fauna local y de la vegetación y contaminación de los suelos. Ello significa deterioro de la calidad ambiental del área afectada y desvalorización de terrenos y de la infraestructura de servicios turísticos.

En la ciudad de Santa Marta se presentan casos graves de contaminación, muchos de ellos son visibles a la crítica de los ciudadanos pero aun así los entes administrativos no se hacen cargo de ellos...Los casos más deplorables

son los que hallamos en las playas de la ciudad donde los turistas y propios de la ciudad ven con tristeza como estos sitios poco a poco sus blancas arenas cambian con el pasar de los meses a un color gris por la contaminación de los buques carboníferos y el mismo puerto ubicado a pocos metros de las bahías turísticas.

También en las mismas playas surgen acontecimientos en los que la biología marina se ve afectada por estos casos de contaminación en los cuales muchos de estos casos pasan sin multa a ninguna persona ni organización...La ciudad está embargada en contaminación vemos a simple vista que en las calles son escasas las canecas para la basura, de igual forma todas las vertientes de aguas residuales y aguas de lluvias son vilmente dirigidas a las playas sin por lo menos ocultar este maltrato a la naturaleza y a los bañistas. Entonces ahí es donde nos preguntamos:

Con el fin de realizar un análisis del nivel de contaminación microbiológica y de las principales fuentes de contaminación en la Bahía de Santa Marta (BSM), se colectaron muestras de agua para medir las concentraciones de coliformes totales y fecales en 11 estaciones y dos niveles de profundidad (1 y 20 m). Para la época de mayores precipitaciones se encontraron altos valores de coliformes totales y fecales, en los dos niveles de profundidad; presentándose una condición similar para la época seca. Con base a una escala conceptual se obtuvo que la BSM presenta un grado de contaminación medio para actividades de contacto primario (natación y buceo), sin embargo, existen varias fuentes de contaminación (emisario submarino, río, puerto marítimo, entre otras) que están generando un alto impacto sobre este ecosistema. Los

altos valores de contaminación que se registran en la BSM se encuentran asociados a la proximidad que tiene está a las zonas urbanas.

Aunque Santa Marta es una ciudad pequeña, es fácil encontrarnos con emisiones contaminantes por parte de los automotores que transitan en el Distrito. Centenares de carros, motos y mulas son las que afectan a la ciudad con el humo y parece ser una problemática de nunca acabar.

Básicamente las afectaciones radican por la falta de mantenimiento de los automotores que sólo bastaría con darle un mantenimiento adecuado y mejor uso, reduciendo así el impacto negativo sobre el medio ambiente.

Si bien la contaminación del aire consiste en una elevada concentración de gases y partículas que flotan en el ambiente y reducen la calidad del aire. El aire puede estar contaminado en la ciudad y en el campo. Por lo que dicha contaminación puede causar trastornos como ardor en los ojos y en la nariz, irritación, picazón de la garganta y problemas respiratorios.

La contaminación del aire también provoca daños en el medio ambiente, y ha afectado la flora arbórea, la fauna y los lagos.

La polución también ha reducido el espesor de la capa de ozono. Además, produce el deterioro de edificios, monumentos, estatuas y otras estructuras.

Los principales contaminantes del aire son el monóxido de carbono, que es producido por la combustión de la gasolina en vehículos automotores. Los sulfuros y óxido de nitrógeno, el cual es uno de los más provenientes de la combustión del carbón, del petróleo y otros combustibles.

El humo, que sin duda alguna es producido por la combustión incompleta de materiales de desechos, basura y del consumo de cigarrillos, logra gran parte de dicha contaminación. El compuesto de plomo el cual es proveniente de la gasolina; del proceso de reciclaje de plomo y de su utilización en la fabricación de baterías y en la industria telefónica.

A lo largo de los últimos años hemos venido denunciando las graves condiciones de contaminación de nuestras playas y los posibles orígenes de ellas.

Mientras unos denunciábamos tales circunstancias a efectos de que las autoridades dispusieran responsablemente de las medidas necesarias para mitigar los terribles efectos de las continuas y progresivas contaminaciones; lamentablemente esas mismas autoridades escalonaban una política de silencio y abandono de nuestro principal activo turístico: las playas.

Sólo hasta ahora cuando el gerente de la Sociedad Portuaria, Mauricio Suárez, atinó a llamar la atención en relación con los niveles de contaminación de la Bahía se encendieron las alarmas. Alarmas que fueron rápidamente apagadas por la locomotora del tape tape y no precisamente porque se hayan adoptado mecanismos de mitigación, control y prevención de la contaminación sino porque ocultar, pareciera ser, es la única política pública ambiental y turística de la ciudad.

Las denuncias del gerente Suárez no fueron ni improvisadas ni exageradas, en manera alguna. Éstas, que por lo investigado, coinciden con los resultados publicados por la Red de Vigilancia para la Conservación y Protección de las Aguas Marinas y Costeras de Colombia (Redcam) en su publicación Diagnóstico y Evaluación de la Calidad Ambiental Marina en el Caribe y Pacífico Colombiano 2009 deben activar todas las instancias de prevención y control, no sólo por la estabilidad ecológica del sistema sino por la salubridad de los turistas que incautos han terminado nadando en un verdadero mar bacteriano y peligroso para su salud.

Para probar lo expuesto con anterioridad, transcribo de forma textual, y sin alteración ni comentario alguno, un resumen de los resultados citados en lo que atañe a la contaminación en Santa Marta

En la parte que inicia con el distrito de Santa Marta, existen sitios donde la influencia de las actividades humanas, afectan esas condiciones; entre los sitios con influencia sobre las condiciones de las aguas se encuentran el emisario submarino, el río Manzanares y el Muelle de Cabotaje del Puerto de Santa Marta.Los indicadores sanitarios para estas aguas han demostrado aptitud para la realización de actividades de contacto primario y secundario, sin

embargo, los indicadores mostraron que puede haber presencia de bacterias patógenas que representan un riesgo para estas actividades, sobre todo durante los períodos de lluvias. Se deben vigilar los ríos y escorrentías, que son la entrada de bacterias de origen fecal a la zona costera. Los residuos de hidrocarburos (HDD) reflejan un riesgo bajo de contaminación, pero es notable que el río Manzanares se constituye en una fuente de este contaminante.

Los 18 kilómetros del Manzanares son un gran basureroCascarones de neveras y estufas; colchones, perros y gatos muertos;

muebles viejos y llantas, asoman como trofeos indeseables en el río

Manzanares, el contaminado afluente que atraviesa esta capital de

oriente a occidente.

Dueño de una historia cargada de lágrimas y sufrimientos por su

sequía y, paradójicamente, por su protagonismo en las inundaciones

invernales, el fin de semana este otrora caudaloso Río fue objeto de

una jornada interinstitucional de limpieza manual.

Liderado por el coordinador del Comité local para la atención y

prevención de desastres, Clopad, Armando Piñeres, un grupo de

instituciones se dieron cita en el Manzanares para limpiarlo y hacer

menos riesgoso su caudal cuando crece en época de invierno.

Voluntarios de la Defensa Civil, Dadma, Policía Ambiental, Interaseo,

Espa, Sena y de la comunidad, unieron sus fuerzas para lograr este

objetivo, lo cual quedó solo en buenas intenciones porque la realidad

es que una limpieza integral necesita de maquinarias.

Para los participantes en la altruista tarea quedó claro que, aunque

hay voluntad de las entidades, es poca la conciencia o cultura

ciudadana que existe. “La falta de pertenencia con el Río ha hecho

que los moradores de la ribera lo conviertan en un basurero”, dijo

Carlos Martínez, residente en del sector de Manzanares.

Todos coinciden en que la manera cómo los ribereños arrojan al

cauce toneladas de elementos inservibles va en detrimento de la

estética del paisaje y, al mismo tiempo, de la salud de quienes viven

en su entorno.

NO FUE SUFICIENTE. La jornada de limpieza manual se hizo entre el

puente del Mayor y la carrera 19, trayecto en el que se encontró de

todo. Los troncos que están en el lecho y la cantidad de plástico y

residuos contaminantes, fueron pruebas superadas por los activistas

de la jornada pero no fue suficiente.

Samuel López, presidente de la junta de acción comunal de

Manzanares, dice que las jornadas de limpieza, lastimosamente, van

desde el puente del Mayor hasta el oriente, mas no hacia la

desembocadura donde —al decir del dirigente— está la mayor parte

de problema.

Lo cierto es que en el sector comprendido por los barrios Malvinas,

Villa U y Pamplonita, debido a la contaminación del río Manzanares,

en el momento se presenta un alto índice de enfermedades entre

niños y adultos. Además de que cuentan con necesidades básicas

insatisfechas como es el alcantarillado y por eso deben utilizar pozas

sépticas en sus patios.