7/24/2019 Contra El Temor

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CONTRA EL TEMOR: invertir ahora

Por ALAN GARCA

Como lo explico en un libro reciente (Contra el temor econmico), jams la humanidad hatenido, en proporcina sus problemas, tanta capacidad cientfica y productiva ni un mercado

tan grande e interactivo o tal velocidad en la informacin y la toma de decisiones. Vivimos unnuevo captulo de la economa y la sociedad gracias a las tecnologas de la informacin, que esla energa que mueve ahora al mundo. Desde esta perspectiva, considero el futuro mediato dela economa y la sociedad global con entusiasmo. Hace cien aos, el mundo tena 1.500millones de habitantes y dudaba de su capacidad productiva para supervivir; hoy somos 7.000millones, casi 5 veces ms, y cada uno consume, produce y ejerce ms derechos, habindosereducido la proporcin de la pobreza.

Sostengo, adems, que, ante la informacin, ciencia y el mercado interactivo, los problemasque sufre el mundo actualmente son mnimos comparados con los que sufri en 1929 o1973. Los problemas financieros o el dficit econmico que soportan muchos pases sonconsecuencia del grave error que cometieron consumiendo muy por encima de su nivelproductivo e hipotecando as el futuro de sus hijos y nietos. Fue un estado de bienestar para

ellos y un estado de malestar para sus descendientes.

Pero aun con esos problemas que tienen solucin, el conjunto econmico mundial continuarcreciendo. Ya lo hizo en el ao 2011 a pesar de los vaticinios equivocados y crecer en el2012. Adems, segn mis clculos, en el segundo semestre del 2013 se iniciar unaetapa de vigorosa expansin.Recordemos las magnitudes. El volumen total de lo producidopor todos los pases y seres humanos en el 2010 super los 60 billones de dlares(60000.000000.000), en el 2011 creci un 2,3% ms y muy posiblemente alcanzar ese nivelen este ao 2012.

En dos palabras, el total producido se mantiene y crece, a diferencia de la gran crisis del ao1929 en que disminuyeron 40% la produccin y el empleo. Claro que no todos los pases ysectores aumentarn su produccin en el mismo nivel, pues Grecia, Italia, Espaa, etc.,

debern pagar su anterior exceso de consumo. Pero, adems, crecer la competencia entre lospases y se desplazar el crecimiento de unos hacia otros. Sostengo por ello que el Per ylos pases del Pacfico sudamericano, como Chile y Colombia, sern los msbeneficiados por la actual situacin, si atraen la inversin con velocidad para continuarcreciendo, disminuyendo la pobreza y creando empleo a mayor nivel que el resto del mundo. Yde su lado, quienes inviertan ahora ganarn mucho ms que los que esperen al 2013.

Adems, para el conjunto mundial, los problemas que parecen graves se compensan yequilibran entre s, lo que permitir mantener y aumentar la suma del producto mundial. Porejemplo, la reduccin del crecimiento chino no se ha producido, y aun si ocurriera, ellopermitira que otros pases ocupen los mercados que China deje de lado. Adems, si seprodujera una sobrevaluacin del dlar, podramos exportar mucho ms aEstados Unidos y si,por el contrario, ocurriera una devaluacin del dlar, ellos podran exportar ms, comprando

para ello nuestros minerales y materias primas. La economa es circular y veloz. Finalmente, lacapacidad de respuesta del Banco Central Europeo y la accin ya en marcha de los paseseuropeos y de Estados Unidos, para corregir los errores y desfinanciamientos, desmienten elanuncio catastrofista de una gran crisis inevitable.

En esta situacin, sostengo que el Per tiene la oportunidad de crecer hasta el 7% en este2012; siempre y cuando mantenga sus polticas de comercio mundial, de reduccin dearanceles, de construccin de infraestructura que aumenta la inclusin, da trabajo y mejora laproduccin social. Requerimos, adems, un programa de emergencia para la inversin de laempresa privada nacional y extranjera con velocidad y sin obstculos en las muchas reas quepermita generar empleo, disminuir la pobreza, mejorar la capacidad tecnolgica, reducir ladeuda nacional y aumentar el nivel de nuestras reservas.

Pero esa inversin no debe reducirse al aspecto minero sino incluir tambin el transporte y usodel gas, la construccin privada en carreteras y medios de comunicacin, el aumento de la

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inversin industrial, aprovechando los tratados de libre comercio, el procesamiento con valoragregado de la pesca, el desarrollo de la agroexportacin que puede generar cientos de milesde empleos en los prximos cuatro aos y medio, etc.

Para mantenerse como un ejemplo mundial, el Estado nacional y descentralizado debeaumentar la velocidad de sus decisiones. Tenemos seis meses para hacerlo. El mundo no

esperar que los funcionarios y polticos hagan su aprendizaje o discutan largamente ni que losjueces acepten, uno tras otro, procedimientos dilatorios. Se requiere conceder ms facilidadesen las licitaciones para que el capital que no se invierta en Europa o en Asia, ni se deposita enlos bancos por su baja rentabilidad, venga ya al Per, un pas con metas de inversin ysostenibilidad de largo plazo.

Esto implica que, si las condiciones que se exigan en otro momento de expansin mundialeran equivalentes a cien, en este perodo de temor, en el que hay que atraer el capital y latecnologa internacional, esas condiciones deben acelerarse o reducirse en beneficio delempleo y el desarrollo. Un paso decisivo sera reducir los impuestos a la reinversin de lasganancias en el interior del pas, profundizar la reduccin de los aranceles y reducir algo msdel IGV. No hay razn para negarse a ello, porque hoy (2012) el Estado recibe exactamente eldoble de ingresos que en el ao 2005.

Es el momento de convocar a los grandes capitales que, a su vez, son los que compran ala pequea y mediana empresa nacional generando trabajo.No olvidemos que por cada solque invierte el Estado, el sector privado invierte cuatro. Debemos mejorar ya las condicionespara la construccin del gasoducto surandino, ofreciendo ms ventajas al capital a cambio dedesarrollar esa enorme infraestructura que revolucionar todo el sur. Adems, aprobar ahorauna ley con todas las fuerzas polticas para declarar de necesidad y urgencia nacionalesla ejecucin deproyectos como Conga,Toromocho, Las Bambas, Ta Mara y otros degran envergadura. Esperar sin tomar esa decisin significar dejar pasar los capitales queculminaran invirtindose en otros pases, mientras nosotros nos estancamos.

Con un crecimiento de 4% o menos, ya no reduciremos la pobreza. Estamos en guerracontra el desempleo y contra otras economas, y en una guerra, se consulta, se analiza, pero

se decide en un plazo muy breve para actuar antes que los otros. Por ello, debemos impulsar lamayor cantidad de obras en el menor tiempo posible y con ms inversin privada. Obras deagroexportacin, iniciando cuanto antes Majes, Olmos y otras de gran dimensin, adems delas obras que las ciudades requieren como los tneles de evitamiento que permitan al trnsitopesado evitar la ciudad, ms carreteras de peaje, el tnel centroandino, que permite evitar laaltura de Ticlio, la construccin de las centrales hidroelctricas del Maran. Conmueve que,sin mayor estudio, se haya dejado de lado el aprovechamiento de las aguas de ese ro, cuyouso hidroelctrico no afectara ningn rea agrcola por ser uno de los ros ms encajonadospor la cordillera. Con esas obras, movilizaremos la produccin de materiales de construccin, lametalmecnica, el transporte y, adems, obtendremos ms impuestos.

Y con esos ingresos se podr hacer ms obras pblicas, continuar con la electrificacin de lospueblos, los proyectos de agua potable para todos los barrios y localidades; por ejemplo, cien

pasos a desnivel en Lima y otras ciudades que aliviaran la congestin actual. Seguir laconstruccin del metro de Lima en dos lneas ms con capital privado y repetirlo en otrasciudades como Arequipa, Trujillo o Chiclayo, mejorando la calidad de vida y evitando lacontaminacin.

Debemos aprovechar que lo que llaman crisis es, en realidad, el desplazamiento de capitalesque huyen de los pases desordenados y problemticos que gastaron el dinero en subsidiospara ricos y menos ricos, aumentando el consumo sin pensar en producir. Atraer esosmillones de millones de dlares nos permitir en los prximos 4 aos y medio reducir lapobreza desde el 28% actual a menos del 20%, generar otros tres millones de puestos detrabajo y mejorar la inclusin de la nica manera real y sostenible que existe: con empleo,infraestructura elctrica, agua potable, carreteras y con mayor nivel de educacin y salud.

Aprovechemos la enorme oportunidad que el Per tiene hoy, afirmando las libertades yla democracia representativa y descentralizada con la que cuenta. Hagmoslo sin temor,

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sabiendo que el beneficio ser para los ms humildes. As pues, ni el aprendizaje, ni el temor,ni la corrupcin del funcionario deben detener al Per. Quienes gobiernan y ejecutan, quienesinvierten desde el sector privado tienen en sus manos la decisin. Los dems, y entre ellosquien esto escribe, tenemos que apoyar activamente y sin trastiendas de mezquindad. La GranTransformacin es posible y necesaria, es la que crea empleo, reduce la pobreza, desarrollalos recursos con inteligencia, reconcilia a los ciudadanos y afirma al Per como el pas piloto

del continente. Alea jacta est!

25 enero 2012