Cosmovisión bíblica frente al paganismo moderno* … · su creencia en que el rito es...

Cosmovisión bíblica frente al paganismo moderno* (Segunda de dos partes)

Dr. Mervin Breneman Profesor de Antiguo Testamento

Seminario Teológico Bautista de Buenos Aires

La cosmovisión pagana antigua comparte con el humanismo racionalista, el pos-modernismo y la Nueva Era una especie de pensamiento panteista. Como resultado, los conceptos de la naturaleza y del ser humano en estos movimientos difieren significativamente de los conceptos bíblicos. Frente a estas diferencias, los cristianos son llamados a cuidar la naturaleza de manera responsable, conocer a Dios por medio de Jesucristo, ser protagonistas en la historia y proclamar la Palabra de Dios.

The world view of the ancient pagans shares with rationalistic humanism, postmodernism, and the New Era a pantheistic influence. As a result, the concepts of nature and man in these movements differ significantly from the biblical view. In the light of these differences, Christians are called to be responsible stewards of nature, know God through Jesus Christ, play an active role in history, and proclaim the Word of God.

LA VISION BIBLICA DE LA CREACIÓN-NATURALEZA

Es significativo que la Biblia empieza con el tema de la creación. Algunos teólogos han dicho que para Israel el tema del éxodo era primero y más importante y la reflexión sobre la creación vino más tarde. Fue el teólogo del Antiguo Testamento, Von Rad, quien promulgó esa idea, pero él mismo, más tarde, reconoció la importancia también de la doctrina de la creación.

Puede ser que el primer impacto para los israelitas fue el éxodo y los eventos redentores de toda aquella experiencia. Pero, el hecho es que el Pentateuco, la Torah, primero presenta la creación. Nuestra convicción en cuanto a lo que se llama "la naturaleza" es de suma importancia para toda nuestra fe y nuestras doctrinas. La fe de Israel en esta área constituyó una

*Este artículo forma parte de las conferencias bíblicas del SETECA, impartidas por el Dr. Breneman entre el 5 y el 8 de agosto de 1997.

8 KAIROS N°21 /Julio-Diciembre 1997

de las diferencias fundamentales entre su cosmovisión y la de los otros pueblos antiguos; hoy día también, constituye una parte clave de la diferencia entre una perspectiva cristiana y las otras perspectivas en boga en la sociedad que nos rodea.

La naturaleza en la cosmovisión pagana antigua

Si, como vimos antes en la cosmovisión pagana, todo lo que hay. dioses, seres humanos, animales, plantas, tierra y aun los astros, son parte denn organismo o un aparato universal, entonces lo que uno cree en cuanto a su relación con la naturaleza o con los animales o con todo el universo es muy diferente de lo que enseña la Biblia.

En tal cosmovisión, uno está sujeto a esas fuerzas innatas en el universo, y por lo tanto, debe tomar en serio la influencia que tendrán sobre él el sol, la luna y las estrellas. Debe tener cuidado cómo trata a los animales, pues cualquier animal, o aun cualquier árbol o roca, puede representar a este dios-universo, o por lo menos, a uno de los dioses que también son parte de este organismo universal.

En las mitologías de los varios pueblos podemos ver sus creencias en cuanto a la naturaleza. De hecho, la deificación de las fuerzas cósmicas y naturales proveyó un terreno fértil para el desarrollo de la mitología. En aquellas mitologías, a menudo la creación o principio del mundo "naturar9

depende de luchas entre los dioses y también de la procreación sexual entre dioses y diosas.

También notamos que en esas mitologías había una estrecha relación entre la naturaleza y el hombre, o, mejor dicho, hubo confusión entre hombres, dioses y naturaleza. No existían límites fijos. Los hombres rindieron culto ya a la naturaleza, ya a los dioses que representaban las fuerzas de la naturaleza.

Los que han trabajado sobre la mitología explican que era o es una forma diferente de pensar. La mitología no pretende relatar algo netamente histórico sino quiere presentar una visión de la realidad. En un sentido, sirve como abrigo del pensamiento abstracto. Es un intento de poner orden en el caos de la experiencia.

Pero también la mitología va más allá del pensamiento especulativo, pues quiere actualizar las fuerzas innatas del cosmos. Dice Frankfort:

Mito es una forma de poesía que trasciende la poesía en que proclama una verdad; una forma de razonar que trasciende el raciocinio en que quiere activar la verdad que proclama; una forma de acción, de comportamiento ritual que no encuentra su cumplimiento en el hecho pero tiene que

Cosmovisión bíblica frente al paganismo moderno 9

proclamar y elaborar una forma poética de la verdad.1

La mitología era más que poesía, porque en los ritos religiosos la gente rezaba las mitologías para asegurar los ciclos productivos de la naturaleza. La mitología era cosmogónica y teogónica porque de la unión misteriosa de los elementos masculinos y femeninos se producía la totalidad de la existencia: dioses, mundo, hombres.2.

El poema enuma elish, usado en el festival del año nuevo en Babilonia desde ca. 2000 a. C. hasta el tiempo de Alejandro Magno (330 a.C), es~el ejemplo más conocido. Aunque trataba de la vida de los dioses, de sus peleas, etc., tenía importancia para los hombres porque establecía la armonía con el orden cósmico y con la naturaleza y reactualizaba la

„ fertilidad de la tierra, los animales y los humanos. La gente creía que este rito de recitar la enuma elish tenía tal poder en y por sí mismo. "La marca característica del culto pagano no es su pluralidad de seres adorados, sino su creencia en que el rito es automático e intrínsecamente eficiente".3

Se nota nuevamente cómo en el culto pagano se destacaba la importancia concedida a la unidad de todas las cosas. El culto era un sistema de ritos cuya potencia derivaba de la esfera que está sobre los dioses.

Pone en acción fuerzas mágicas inherentes a ciertas sustancias (la carne de sacrificios, sangre, agua, aceite, fuego, incienso, etc.), a ciertas actividades (gesticulaciones, bailes, procesiones, cantos, dramas, oraciones, etc.) y a ciertas formas (números, figuras, seríes de acción, cuadros, símbolos).4

Los que conocen algo de las formas de espiritismo hoy día reconocerán que también hoy se usan ritos y cosas rituales de manera similar. No sé hasta qué punto se debe a una cosmovisión semejante, y hasta qué punto las fuerzas malignas, los demonios, se aprovechan de este pensamiento. De hecho, la combinación de estos tipos de ritos con la Nueva Era y con formas de ocultismo indicaría que ésta es la cosmovisión que más conviene al diablo y que puede usar para generar un sincretismo sutil que está engañando a gran parte de la sociedad.

La visión bíblica de la naturaleza

"En el principio Dios creó.. ." La narración de la creación en Génesis 1 es altamente anti-mitológica. En la Biblia el universo ni es divino ni es meramente materia en moción; es creado y es contingente en el Creador. Dios existe aparte de la Creación, no es parte de la naturaleza; la


naturaleza depende de él, está sujeto a él, obedece a él. Cuando enseñamos Génesis 1, debemos ver principalmente las grandes

doctrinas que está enseñando. Sobre todo, enseña que Dios creó todo y que toda la creación está sujeta a Dios. Dios es señor absoluto sobre todo el universo. No es parte de la creación ni está limitado a su creación, pero es Señor de ella. ^

Por supuesto, cuando enseñamos estos primeros capítulos de Génesis surge todo tipo de pregunta. Y creo que debemos tomar en serio las preguntas. Hemos de considerar la relación de estos pasajes con lo que dice la ciencia hoy. Entre los mismos creyentes cristianos, entre los mismos evangélicos, existen varias teorías. Creo que está bien tener una teoría y explicarla, pero recuerden que no sabemos suficiente para ser muy dogmáticos sobre si Dios hizo todo en seis días literales, si los seis días son épocas largas, si hubo una catástrofe, o varias, entre Génesis 1:1 y 1:2, si Dios pudo usar alguna forma de evolución para crear al hombre. Pero, tengan cuidado, no hagan que la veracidad de la Biblia dependa de su interpretación particular del asunto.

De una cosa estoy seguro: entre lo que dice la Biblia y los datos de la ciencia nunca habrá conflicto. Donde puede haber mucha discusión es entre las interpretaciones de la Biblia y las teorías que los científicos construyen sobre los datos.

Ahora, cuando enseñen Génesis no tienen que esquivar estos problemas, pero sí, deben dejar bien claro que a pesar de cualquier teoría sobre el asunto, lo que el autor de Génesis quiere enseñar es claro: Dios creó todo el universo y todo lo que hay en él, la creación es buena, Dios es señor sobre todo y toda la creación está sujeta a él.

Estas enseñanzas básicas conllevaban otras enseñanzas que tienen que ver con el ser humano. Creemos que Dios preparó la tierra especialmente para los seres humanos. Pero también el mundo natural, por ser creación de Dios, lleva una intrínseca dignidad y orden anterior a su utilidad para la raza humana. Así hemos de cuidarla y no dañarla.

Esta responsabilidad se nota más en lo que Dios dijo. En Génesis 1.28, dice, 'Ύ los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra." Nótese que Dios nos dio la orden de sojuzgar la tierra. Creo que esto implica la investigación y el uso de elementos de la naturaleza para el bien del hombre. Pero implica también responsabilidad de cuidarla. Cuando el Pentateuco da instrucciones sobre ataques a pueblos enemigos, requiere que los israelitas no destruyan los árboles frutales.


Lo mismo es cierto del dominio sobre los animales. Dios dio al hombre dominio sobre los animales, pero esto implica también cuidarlos. Aunque no estemos de acuerdo con la motivación de muchos que enfatizan la ecología hoy, debemos también tomar conciencia de la urgencia de esta tarea.

La enseñanza de la Creación a través de la Biblia también conlleva implicaciones éticas. El hombre no debe cometer homicidio porque todo ser humano está creado en la imagen de Dios. Eclesiastés advierte que todos deben recordar su Creador, que implica someterse a él y obedecerle. Cuando Jesús enseñó sobre la confianza en Dios, usó como ejemplos el cuidado de Dios por las aves y por las flores. Dios no quiere el divorcio porque va contra su intención en la creación. Romanos enseña que la creación enseña lo que es moralmente correcto.

La visión del humanismo racionalista

Algunos ecologistas echan al cristianismo la culpa por la destrucción y polución catastrófica de la naturaleza en nuestro tiempo. En el fondo, no tienen razón, porque la Biblia nos manda a ser mayordomos, no dueños, de la creación. Pero tienen un dato que pueden usar. Es que fue el cristianismo que desmitologizó la naturaleza.

En el paganismo antiguo todos los elementos de la naturaleza eran sagrados. Uno no debía hacer daño a ellos porque eran parte de dios o de alguna manera representaba a un dios. Así la gente tenía miedo de ciertas rocas o árboles o animales donde creían que algún dios o espíritu maligno moraba. La influencia judeocristiana iba eliminando aquella visión. Ya no es necesario temer estos elementos, pues Dios hizo todo y todo está sujeto a Dios. Donde influyó el mensaje bíblico, iba cayendo la vieja visión del mundo. Entonces los seres humanos fueron liberados de su opresión por todas esas supersticiones y temores.

Pero, la Biblia enseña la responsabilidad de los seres humanos como mayordomos de la creación. Debe ver en ella la gloria de Dios y debe ejercer su mayordomía de acuerdo a los designios de Dios. Sin embargo, aunque el hombre occidental ya fue liberado de sus supersticiones mitológicas de la vieja cosmovisión, no quiso seguir sujeto a la revelación de Dios. Empezó a elevarse como el que puede decidir cuál es el bien y cuál es el mal. Ya no se sentía preso de esos elementos de la naturaleza, pero tampoco se sujetaba a las normas de Dios. Entonces su interpretación de la vocación humana cambió de la mayordomía de lo que Dios creó a la manipulación tecnológica de un ambiente recalcitrante.5


Muchos creen que la ciencia moderna solamente pudo surgir donde había caído la vieja cosmovisión de la naturaleza mitologizada. Por eso, los adelantos tecnológicos han sucedido en el occidente. ¡Cuánto bien podría hacer la tecnología si toda fuera usada bajo el señorío de Dios y para el bien de la humanidad! Pero la combinación de estar libre de la mitología, pero ser preso de la codicia y la avaricia, y del consumismo exagerado, y con la tecnología para dominar muchos elementos de la naturaleza, el hombre moderno está destruyendo la creación de Dios a pasos gigantescos. Uno se alarma cuando ve las cifras de lo que está pasando en todo el mundo hoy.

La reacción en el pos-modernismo

El mundo occidental ha dejado la cosmovisión bíblica-cristiana. Los intelectuales de moda la consideran anticuada. Todas las décadas del humanismo racionalista han construido prejuicios muy grandes contra el mensaje bíblico o la creencia en una revelación bíblica autoritativa. En su lugar la mente humana y la ciencia tenían todas las respuestas. El hombre ya tiene madurez; no hace falta Dios.

Pero toda esta perspectiva del modernismo ha dejado un gran vacío en la gente. También muchos han visto los aspectos negativos de este llamado "progreso" moderno. Esto, junto con el anhelo por algo que satisfaga el corazón y no sólo la mente, y las influencias de la generación de protesta de los años sesenta, con la influencia de ideas orientales en grupos como los Beatles, ha causado una reacción contra el puro racionalismo del modernismo. La gente quiere algo más allá de lo material, algo trascendente.

Sin embargo, puesto que no es intelectualmente ni políticamente aceptable volver al cristianismo evangélico, buscan lo trascendental en las religiones orientales o formas de espiritismo y ocultismo. Lo que está influyendo en muchos hoy día es la Nueva Era en sus muchas formas. Puesto que es realmente un sincretismo toma muchas formas e incluye tanto ideas de la Biblia como del panteísmo oriental y del ocultismo. Puesto que acepta a todo y trata de combinar todas las ideas religiosas de muchas partes, se hace muy popular. Ustedes recordarán que en la Iglesia Primitiva, la razón por qué sufrieron y murieron los cristianos era que Jesucristo tenía que ser el Señor exclusivo de su vida. Si hubieran aceptado adorar al Cesar y a otros dioses juntamente con Cristo, no hubieran tenido que sufrir. Pero tampoco hubieran sido cristianos verdaderos. Algo del mismo dilema está confrontando a muchos cristianos


hoy.

La visión de la naturaleza en la Nueva Era

Uno puede incluir una gama amplia en lo que es Nueva Era; de nuevo leo algunas frases de algunos de sus exponentes: "Creemos que toda la naturaleza es una manifestación Sagrada del Gran Espíritu, donde todas las cosas buscan equilibrio y están interconectadas".6

Creemos que podemos ver nuestro Dios y Diosa en todas las cosas. El Gran Espíritu se manifiesta a nosotros como el principio femenino de éxtasis, fertilidad y creación: La Dama (o Diosa) de la Naturaleza y de la Tierra; y el principio masculino de procreación: El Señor (o el Dios) del Sol y de la Caza (que son solamente algunos de sus aspectos).7

Esta es la misma visión de la naturaleza que tenían los paganos antiguos. Por supuesto es más refinada, e incluye algunos conceptos de la filosofía moderna y del cristianismo, pero básicamente es la cosmovisión pagana antigua.

No choca tanto con la mente moderna occidental porque mucha de la filosofía desde Spinoza y especialmente desde Hegel contiene una fuerte veta de panteísmo. Las creencias que están de moda sobre la evolución concuerdan bastante con esta visión, pues se cree que de ima materia primitiva se generó todo de la energía que existía y existe en la misma materia. Groothuis lo resume así: "Creemos que toda la naturaleza es una manifestación Sagrada del Gran Espíritu, donde todas las cosas buscan equilibrio y están interconectadas".8 Después cita a otro exponente de ellos que habla sobre la ecología:

Creemos que todas las cosas vivientes y no-vivientes son parte del Gran Espíritu; los animales, humanos, bosques, montañas, lagos, campos, rocas y el suelo. Creemos que todas las criaturas vivientes son hijos del Dios y de la Diosa y, como ellos, nosotros tenemos una existencia tanto espiritual como física.9

La persona puede encontrar y experimentar este "Uno" por medio de un proceso de auto descubrimiento, sea meditación, yoga o alguna otra disciplina espiritual. De modo que algunos usan un lenguaje muy similar a . los conocidos místicos cristianos.

Mencioné antes donde C. S. Lewis decía que el panteísmo es la tendencia natural y permanente de la mente humana. Todavía hay muchas


áreas que explorar. El uso de ocultismo en la Nueva Era, ¿a qué se debe? Los poderes manifiestos en el espiritismo, ¿son los mismos o similares a los dioses antiguos? ¿Eran demonios? La Biblia dice que cuando sacrificaron a sus ídolos sacrificaban a demonios. Si es así. entonces, el diablo mismo promueve una cosmovisión como la Nueva Era y utiliza sus varias formas para engañar y para aprisionar a gran parte de la humanidad hoy, tanto en el occidente con el espiritismo y la Nueva Era como en el oriente con las religiones tradicionales panteístas. Tenemos que re-aprender cómo presentar el evangelio de Cristo a un mundo pos-moderno y tenemos que re-aprender a resistir al diablo y todas sus artimañas y huestes.

Los énfasis bíblicos

Es evidente la gran importancia que tiene lo que creemos en cuanto a la creación y la naturaleza. Debemos mantener bien firmes los énfasis bíblicos en este asunto. Todo el universo y todo lo que llamamos naturaleza fue creado por Dios. Así depende de Dios para su existencia y está sujeto a Dios.

Como dice la Biblia, "Los cielos cuentan la gloria de Dios". Casi todas las culturas del mundo los ven así, la tierra, los cielos, el sol y la luna les hacen pensar en un creador o en dioses. Solamente en el mundo occidental la filosofía naturalista ha hecho que muchos no vean indicación de un creador en la naturaleza. Sin embargo, aun los astrónomos, astrofísicos y físicos más avanzados hoy día están volviendo a pensar que lo que están viendo en el universo señala hacia una mente diseñadora.

Un área de exploración que se está ampliando y está causando estos cambios en la mente de algunos científicos es la astrofísica. Hugh Ross dice que la teoría del "Big Bang" fue resistida por muchos científicos precisamente porque aceptarla implica aceptar un principio para el universo. No debemos atar nuestra interpretación de Génesis a ninguna teoría científica, pero lo que la astronomía está mostrando hoy día de nuevo indica que los cielos cuentan la gloria de Dios.

Se puede usar algunos de estos descubrimientos para argumentar que nuestra vida en la tierra sería imposible sin un ajuste exacto de muchos factores. Hace años, Morris mostró en su libro, El hombre no está solo, que muchos detalles de nuestro ambiente, la cantidad de oxígeno y el equilibrio entre los elementos de nuestra tierra tienen que ser exactamente correctos para que la tierra sostenga vida; y que tal combinación de elementos no sería posible al azar. Hace falta un creador inteligente.

Ahora, un astrofísico como Hugh Ross puede mostrar los datos nuevos


que la astronomía está descubriendo para mostrar que nuestro universo no podría existir si algunos de los parámetros variaran sólo un poco. Señala veinticinco diferentes características que están "precisamente fijadas". Si fueran diferentes por sólo un poquito, no podrían existir los astros, y mucho menos un planeta con vida. A estas veinticinco características agrega treinta y ocho más de nuestra galaxia y sistema solar que tienen que quedar dentro de límites muy estrechos para que exista cualquier forma de vida.10 Dice Ross,

Lo que los astrónomos y físicos están descubriendo en estas nuevas calibraciones es que el Ser que trajo a existencia el universo no sólo es personal, creativo, poderoso e inteligente a un grado no imaginable, sino que también está al tanto de y sensible a las necesidades de la humanidad.11

Todo lo que hemos visto conlleva muchas implicaciones para el cristiano que quiere tomar en serio su relación con Dios, con sus prójimos y con el mundo que Dios ha creado. La Biblia enfatiza la responsabilidad nuestra por la creación de Dios. Si somos mayordomos de la creación, somos responsables por su cuidado. No podemos justificar ninguna política ni ningún sistema que vaya destruyendo los recursos naturales.

Hemos de ver que Dios usa la naturaleza, o creación, para cumplir su plan. Esta verdad tiene implicaciones grandes que necesitan más exploración. ¿Cómo podemos incorporar más elementos de la naturaleza en el planeamiento de nuestras ciudades? La población del mundo es cada vez más urbana. ¿Cómo podemos usar la naturaleza o mantener una perspectiva sana hacia la naturaleza que no la adore pero que magnifique a Dios? Dios usa su creación para cumplir su plan; a menudo ocurren "milagros" que Dios causa para un propósito explícito.

Otro desafio grande es que los cristianos en todas las ciencias estén conscientes de cómo las presuposiciones naturalistas afectan a los científicos y eruditos que promulgan las teorías que están de moda. No vamos a rechazar todas las conclusiones de los físicos o biólogos o psicólogos o antropólogos o sociólogos. Pero debemos ser críticos y ver qué diferencia hará si uno empieza con presupuestos más de acuerdo con la cosmovisión bíblica.

El naturalismo, las filosofías naturalistas, han influido mucho en toda nuestra cultura y en todas las ciencias. Primero, debemos tratar de ver cuáles son las premisas con que tal erudito o científico empezó. Después debemos ver cómo nuestra conclusión cambiará si empezamos con la premisa que Dios creó todo. Aun en campos de teología y crítica bíblica nos toca hacer lo mismo, pues muchos eruditos en estos campos dan por


sentado las premisas naturalistas que están en boga; y éstas influyen en sus decisiones sobre cada detalle de su trabajo.

Finalmente, nos da paz, nos da confianza, saber que no estamos en un universo al azar. Dios nos creó, y Dios creó toda la tierra, todo el universo. Además dice que Dios está consciente de cada detalle y puede usar cualquier parte de su creación para suplir nuestras necesidades y cumplir sus planes.

LA VISION BIBLICA DEL SER HUMANO

Cuando hablamos de la visión bíblica del hombre, realmente estamos entrando en el área de teología llamada "antropología bíblica". Como todos los temas teológicos las conclusiones dependerán en gran manera de las presuposiciones con que el teólogo empieza y la metodología teológica que usa.

Creo que en general los teólogos evangélicos de estirpe conservadora seguirán una metodología bastante uniforme. Un ejemplo que puedo mencionar es Millard Erickson; en el tercer capítulo del primer tomo de su teología explica el método teológico que propone usar.12 1) La colección del material bíblico; 2) La unificación del material bíblico, es decir tenemos que intentar hacer un cuadro coherente de los variados énfasis que encontramos a través de la Biblia; 3) Análisis del significado del material bíblico; 4) Un examen de cómo fue tratada la doctrina en la historia de la iglesia; 5) La identificación de la esencia de la doctrina, es decir, distinguir entre la verdad permanente y las formas culturales de su expresión; 6) Iluminación de fuentes extra bíblicas; 7) La expresión contemporánea de la doctrina, es decir, contextualizar la doctrina; 8) Su relación con un tema interpretativo central en la teología; en el caso de Erickson es la magnificencia de Dios; 9) La estratificación de los tópicos o temas, es decir, la relación entre las varias doctrinas.

Lo que quiero destacar aquí es cuánto énfasis un teólogo como Erickson pone en el primer paso, la colección del material bíblico, y dentro de este énfasis la importancia que da a las presuposiciones que uno usa aun para entender el material bíblico. Realmente lo que está explicando es que la cosmovisión determina cómo se entienden los pasajes bíblicos. Menciona Erickson que aun los diccionarios y gramáticas reflejan la perspectiva, las presuposiciones de los eruditos que los escribieron.

Es necesario estar consciente de los presupuestos detrás de las herramientas que se usan, así como de las presuposiciones involucradas en


el método que se usa. Por ejemplo, dice,

Puesto que la Biblia relata milagro, una metodología que básicamente asume que todo se puede explicar sin recurrir a conceptos o causas sobrenaturales dará como resultado una interpretación en desacuerdo con lo que la Biblia misma declara.13

Lo mismo se puede decir con respeto al proceso en que la Biblia fue producida.

Se menciona también que puede darse un extremo opuesto, que uno tenga una visión tan sobrenaturalista de la Biblia que no pueda usar formas normales de análisis literario e histórico. Lo importante es ser abierto a todas las posibilidades; no acercarse al texto con presupuestos que cierran las posibilidades que el mismo texto propone. Como sigue diciendo Erickson, si adoptamos "acriticamente" la metodología de otro, sin preguntarnos si es consistente con el material bíblico o con nuestra propia perspectiva, sin darnos cuenta, estaremos adoptando ciertas conclusiones desde el principio.

Todo esto es crucial especialmente en la doctrina del hombre. Alguien ha dicho que ya que el cristianismo y la ciencia moderna han desmitologi-zado la naturaleza, donde se da rienda suelta a cualquier ideología e idolatría es en las ciencias humanas.

Quizá aquí debemos preguntar, ¿Pero, cómo puedo tener una cosmovisión de acuerdo con la Biblia? ¿Cómo sé que mi cosmovisión es bíblica? Allí creo que también debemos ser algo flexibles. Todos nuestros trasfondos influyen y lo que nos han enseñado desde niños nos ha influido. Así, los detalles de la cosmovisión aun de los creyentes que aceptamos lo sobrenatural y la autoridad de la Biblia pueden variar. Creo que podemos hablar legítimamente de un círculo hermenéutico; pero no quedamos con un relativismo completo.

Si aceptamos la autoridad de la Biblia y estamos abiertos a la enseñanza del Espíritu Santo, con cada vuelta del círculo hermenéutico podemos ir corrigiéndonos. A veces diferimos en cómo interpretar algún pasaje bíblico o alguna doctrina. Si no tenemos el ancla de la autoridad de las Escrituras, no hay mucha esperanza de ponernos de acuerdo. Pero si nos sometemos a la autoridad de la Biblia, hay esperanza; y si estamos abiertos a la enseñanza de Dios, él se encarga de ir corrigiéndonos.

Lo importante es tener bien asentada nuestra convicción sobre la autoridad bíblica, estar conscientes de las presuposiciones y diferentes perspectivas de los que escriben y enseñan sobre la doctrina del hombre, conocer bien las Escrituras y estar abiertos a la dirección del Espíritu


Santo.

La visión pagana antigua del hombre

En el paganismo antiguo el ser humano es sólo uno de los elementos del universo; tiene el mismo origen y el mismo destino que la totalidad de la existencia. Como vimos antes, fue nublaba la distinción entre dioses, humanos y animales. Por un lado, se creía en seres, como Gilgamés, que eran parte dios y parte hombre; por otro lado, las masas de seres humanos no tenían más valor que los animales.

Su visión del hombre también determinaba la sociedad. Todas las civilizaciones antiguas tenían un concepto de la totalidad. Esto se expresaba en el estado ontocrático, donde el rey era dios o directamente representaba a los dioses. La función del rey era mantener la armonía entre la sociedad y la naturaleza. El monte sagrado, la pirámide y el zigurat simbolizaban este concepto óntico.

Asimismo, si el hombre es sólo una parte del aparato u organismo total del universo, está completamente a la merced de las fuerzas innatas en el universo. Esta es la base de la astrologia y la magia.

La visión del hombre en Génesis era revolucionaría

De nuevo vemos lo revolucionario que es la visión del ser humano en Génesis y a través de la Biblia. El hombre es una creación especial; tiene semejanza con los animales, pero es una creación especial. Dice Génesis que Dios lo hizo en su imagen y en su semejanza.

El hombre está creado en la imagen de Dios y esto tiene profundas implicaciones en la ética y en el campo social. Como creación especial de Dios tiene responsabilidades para con Dios. Dios hace demandas éticas. Aunque uno puede hablar de la ley natural, la ética bíblica es una ética revelada; que Dios reveló y manifiesta cuál es la voluntad de Dios y para el bien del hombre.

La visión bíblica del hombre tiene repercusiones profundas en la sociedad. La familia no es sólo un invento social, humano, que puede cambiarse cuando la sociedad quiera; fue instituida por Dios. Asimismo tiene repercusiones políticas. La trascendencia de Jehová y el pacto significan en Israel despojar a la realeza de la función primordial que le atribuían los pueblos paganos. En Israel el rey no era Dios ni mensajero de Dios, aunque sí era escogido por Dios. El rey se dirigía a los profetas para recibir los mensajes de Dios. El rey no promulgó leyes. Él sólo las


enseñaba, las cumplía y velaba por que se aplicaran. Con el trasfondo pagano en un país como Egipto era inconcebible un

levantamiento contra el rey-dios, pero en Israel siempre hubo un énfasis en la justicia social, y cuando Roboam decidió aumentar la injusticia en el Reino del Norte, hubo tal levantamiento contra el rey. A propósito de esto, Wright señala que nunca ha habido movimientos fuertes de reforma social, excepto en lugares con influencia judeocristiana.

La visión humanista del hombre

A través de la influencia judeocristiana las ideas bíblicas del valor de cada persona y la importancia de la justicia social han hecho impacto en toda la cultura occidental y ahora en todo el mundo. Pero, como vimos en el caso de la perspectiva hacia la naturaleza, algunos de los elementos de la perspectiva bíblica se desconectan de otros, dejando que los primeros vuelen locos.

En el mundo moderno, dentro del racionalismo occidental, ha habido dos extremos opuestos que también se encuentran juntos. Por un lado, se considera al hombre como un dios. Ya Dios, con mayúscula, no hace falta; ya el hombre tiene madurez y puede hacer todo. Por otro lado, el hombre es un animal descendido de los monos. Es un animal más desarrollado, pero sigue siendo un animal. Por lo tanto, un Hitler o un Stalin puede matar a millones de seres humanos, pues, de todos modos, son animales. Lo que importa es la sociedad perfecta a que apuntamos. Si algunos millones de hombres estorban este objetivo de la sociedad, es mejor eliminarlos. Nótese cuan opuesta es esta visión de la perspectiva bíblica, donde cada ser humano es importante porque está creado a la imagen de Dios.

Pero no sólo en el mundo secular se ha debilitado la visión bíblica del hombre. En parte del cristianismo también se ha diluido la perspectiva bíblica. Erickson muestra la diferencia entre un evangelicalismo conservador y lo que era la teología llamada liberal.

Erickson va explicando las presuposiciones del liberalismo clásico. Dice que, en gran medida, la diferencia entre un liberalismo clásico y el evangelicalismo conservador es ima de cosmovisión. El conservador da por sentado lo sobrenatural, pero el liberal pone más énfasis en la inmanencia de Dios. No ve tanto la existencia de Dios fuera del mundo e interviniendo en él, sino está inmanente en los procesos de la naturaleza. El conservador habla de milagros, el liberal dice que Dios actúa en todo.

Asimismo, la diferencia entre Dios y el hombre se reduce en el libera-

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lismo. La doctrina tradicional ortodoxa ve que Dios creó al hombre a su imagen, pero el hombre es completamente distinto de Dios. El hombre cayó y es pecador. El liberalismo, por otro lado, cree que la naturaleza humana contiene a dios. Hay una chispa de lo divino dentro del hombre. No cree que la naturaleza original del hombre haya sido corrompida, más bien la naturaleza humana es intrínsecamente buena y puede desarrollarse más. "Lo que hace falta no es alguna transformación radical de afuera. Más bien la potencial divinidad del hombre tiene que ser desarrollada o la presencia divina adentro amplificada".14 El hombre no necesita una conversión sino una inspiración o visión de lo que puede ser. La acción divina sucede mayormente por medio de grupos de acción social.

También la visión de la persona de Cristo es diferente en el liberalismo. Siempre la visión ortodoxa es que Jesucristo tiene dos naturalezas, divina y humana, de modo que, en esencia, es diferente de los demás hombres. Pero en el liberalismo Jesús no es diferente en esencia sino en grado. Era el hombre con más conciencia de Dios; el hombre que más plenamente descubrió a Dios, o el hombre en que Dios más completamente moró. Cuando acusaron a un teólogo escocés de negar la divinidad de Cristo, él respondió, "Cómo pueden acusarme de eso, yo nunca negué la divinidad de ningún hombre, y menos de Jesús".15

Ustedes verán que la visión del hombre en mucha teología occidental no dista tanto de la que encontramos hoy en la Nueva Era. Ha habido una tendencia inmanentista o hacia el panteísmo en la filosofía y teología occidental desde los tiempos de Spinoza y, especialmente, desde Hegel.

El humanismo occidental empezó con una apreciación bastante cristiana de la humanidad, pero cada vez más enfocó su atención en la gloria de los humanos, excluyendo la gloria de Dios. Su cosmovisión iba cambiando de un teísmo a ateísmo. La razón humana y la innovación científica llegaron a ser la autoridad final para la vida y el pensamiento. Pero esto también perdió su fuerza, pues el ser humano busca algo más, de modo que la veta panteista en el pensamiento occidental ha preparado el camino para las formas de la Nueva Era que están invadiendo toda nuestra cultura.16

La visión del hombre en la Nueva Era

Veamos de nuevo algunas cosas que dicen representantes de la Nueva Era. Helen Schuman dice que "El hombre es un fragmento del Hijo único de Dios. El hijo de Dios en cierto momento se durmió y soñó en hacerse creador como Dios...".17 Se anula la distinción entre Jesucristo y el resto


de la humanidad, y por supuesto, también entre los seres humanos y el resto de la creación. Se habla mucho de la espiritualidad que a veces atrae a los cristianos; pero es una espiritualidad con base panteista, como en esta cita de CYMRY: "Creemos que todas las criaturas vivientes son hijos del Dios y de la Diosa y, como ellos, nosotros tenemos una existencia tanto espiritual como física".18

La Nueva Era no reconoce la existencia del pecado:

El mal es un simple accidente, que nada tiene que ver con la libertad humana. Lo más que llega a conceder es que el mal es una equivocación, el resultado de una ignorancia, de una inconsciencia o de una conciencia imperfecta.19

Entonces no pueden ver a Dios como un salvador o liberador. Aunque los escritos de la Nueva Era usan lenguaje cristiano y aun

bíblico, aunque hablan de amor y de unirnos todos para una nueva era de paz, no conocen al Príncipe de Paz. Su motivación es humana y egocéntrica. Su visión del hombre y del universo es esencialmente la misma cosmovisión del mundo pagano antiguo. De modo que los énfasis bíblicos son tan necesarios ahora como en el tiempo de Moisés, de Isaías o de Jesús.

Los énfasis bíblicos sobre el hombre

¿Cuál es la visión del ser humano que la Biblia presenta? La antropología bíblica es muy rica y amplia. Cuando compara al hombre con la grandeza y la gloria de Dios, el salmista dice, "¿Qué es el hombre para que tengas de él memoria?" Pero cuando sigue reflexionando también dice que "lo coronaste de gloria y de honra".

Creo que podríamos resumir la perspectiva bíblica del hombre en tres temas grandes: 1) Es una creación de Dios hecha a la imagen de Dios; 2) se alienó de Dios por desobediencia; 3) Dios le provee un plan de redención con el propósito de hacerlo un nuevo hombre en Cristo. Toda la Biblia, después de Génesis 3, se ocupa de desarrollar este plan.

Los teólogos discuten qué incluye la imagen de Dios en el hombre. Algunos enfatizan el aspecto estructural, que es la personalidad y naturaleza espiritual del hombre. Otros hacen hincapié en el aspecto relacional: su capacidad de relacionarse con Dios, con otros seres humanos y con toda la creación de Dios. Creo que podemos decir que la imagen de Dios en el hombre incluye todo esto. La habilidad de razonar, de pensar en forma abstracta, de comunicar con Dios ciertamente son elementos importantes de esa imagen.


Quiero destacar uno de estos elementos: el lenguaje, el habla, la capacidad de comunicarse con Dios. Recuerden el ejemplo del psicólogo que crió un chimpancé con su propio hijo. Él notó la gran diferencia cuando su hijo empezó a hablar. Lo colocó en otro mundo, otra esfera. Con razón la Biblia pone tanto énfasis en el habla, en la palabra. Dios se revela a través de la palabra. Llama a profetas y los usa para presentar su voluntad al pueblo. Toda la Biblia es un libro profético.

Asimismo, nuestra habla es importante. Lo que usted dice a su esposa en la mañana puede alegrar su día o arruinarlo. Somos responsables por cada palabra que sale de nuestra boca. Dirigimos otros a la salvación por medio de la palabra. Dios toma en serio nuestras palabras de oración.

El hombre no es dios; está sujeto al Dios del universo. Pero tiene una posición gloriosa como un ser hecho a la imagen de Dios, como representante de Dios y como mayordomo por Dios. Sin embargo, por su propio egoísmo el hombre cayó, se alienó de Dios. Y este hecho marca el rumbo del resto de su historia. Lo demás de la Biblia presenta el plan de Dios para restaurar al hombre. Realmente no podemos explicar el mal en el mundo sin tomar en cuenta Génesis 3. El racionalismo humanístico, el liberalismo y la Nueva Era, todos niegan esta pecaminosidad del hombre.

Para la Nueva Era, el problema de la humanidad no es el pecado sino la ignorancia. Según su óptica, hemos olvidado que somos imo con Dios y que tenemos infinito potencial en nuestras manos si permitimos que fluya. ¿Cómo debemos hacerlo? Algunos en la Nueva Era hablan de una "cristo-conciencia". Debemos desarrollar esta conciencia de qué somos y lo hacemos por medio de cosas como la meditación trascendental, yoga, música que altera la conciencia, misticismo religioso. "El camino a la divinidad no está en el hemisferio izquierdo de la lógica sino en el hemisferio derecho del conocimiento intuitivo y creatividad".20

Pero, ¿tiene la respuesta este camino de salvación? Muchos hablan de paz y de ayuda con las prácticas mencionadas. ¿Pero qué récord tiene aquella cosmovisión? Lo que ha sucedido en India y países dominados por esta perspectiva no muestra muy buenos resultados. La creencia en la reencarnación y evolución no trae verdadero amor y unidad sino un sentido elitista que divide la gente en castas. Puesto que Karma determina la casta o posición que uno tiene en la vida, si uno trata de ayudar a los que sufren está interfiriendo con su Karma, su proceso de purificación.

Si todo es parte del uno, entonces no hay diferencia entre la crueldad y no-crueldad. Carlos Manson dijo que "Si todo es Uno, entonces nada es malo". Él era más consecuente que muchos, pues cometió unos homicidios terribles. Dice Tong que el relativismo agregado a la teoría de


reencarnación reduce el valor de la vida humana porque reduce toda la vida humana al nivel más bajo. En India los infantes humanos no tienen más valor que las ratas.21

Vimos que aunque hubo muchos dioses en el mundo antiguo, su cosmovisión subyacente era básicamente panteista. Hoy la Nueva Era también está abierta a conexiones con poderes o espíritus. De modo que hay una nueva apertura al ocultismo y espiritismo. Algunos líderes hablan de sus "espíritus guías". Recuerdan que Hitler quiso inaugurar una Nueva Era; él también fue guiado por voces del otro lado.

Algunos líderes influyentes están hablando de un "concepto de limpieza". Los que no son "iluminados" son "células cancerosas". John Randolph Price de 'World Instant Cooperation" fue informado por su guía espiritual que la "naturaleza pronto va a entrar en un ciclo de limpieza..." Entonces estos individuos (los dos mil millones de seres humanos que no tienen "el anillo de protección" con su ritmo vibratorio más bajo) serán eliminados en las próximas dos décadas.22 Tratar de perfeccionar al ser humano sin hacerlo según el plan redentor de Dios tendrá sus consecuencias muy funestas.

¡Qué diferente es la respuesta bíblica! El hombre es pecador; por sí sólo no tiene esperanza. Pero, "de tal manera amó Dios al mundo..." Cuando el hombre se humilla delante de Dios, se arrepiente y acepta a Cristo Jesús como Salvador y Señor, se le abre un nuevo camino. Vuelve a relacionarse con Dios. Viene a ser un nuevo hombre en Cristo. Cristo mora en él y así experimenta el amor de Dios derramado en su corazón. ¡Este es el camino para cambiar a los seres humanos! ¡Este es el camino para cambiar la historia!

El hombre y la perspectiva bíblica de la historia

Todo lo que hemos visto sobre el hombre tiene que ver también con la perspectiva de la historia que tenemos. En el último siglo se han escrito muchos libros sobre la filosofía de la historia. El hombre ya reconoce que es un ser histórico; que sus decisiones afectan la historia. Han surgido muchas filosofías de la historia. El marxismo básicamente es una filosofía de la historia. Según el marxismo, la naturaleza contiene una fuerza innata que dirige la historia hacia una sociedad perfecta. Todos los esquemas basados en un racionalismo naturalista también creen que el hombre actual es una etapa en la evolución y, como tal, seguirá evolucionando.

La Biblia enseña ima perspectiva de la historia. Mucho del problema que encontramos con varios enfoques hacia la historia bíblica es resultado

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de tratar de forzar sobre la Biblia una filosofìa de la historia que es antagónica a la misma perspectiva bíblica.

La Biblia muestra que Dios es dueño de la historia; no es el hombre. El hombre es mayordomo de la historia, pero no el dueño. También, según la Biblia, Dios dirige la historia hacia una meta. No somos fatalistas, el ser humano tiene mucha libertad; pero no puede sacar la historia fuera de ciertos marcos que Dios ha puesto.

En la perspectiva bíblica de la historia, Dios puede intervenir en la historia. Alguien que no cree en un Dios personal que interviene en la marcha de la historia, no puede aceptar los sucesos milagrosos en la Biblia; o, por lo menos, tiene que buscar alguna otra explicación. Muchos eruditos de la Biblia ni creen en la posibilidad de profecía predictiva.

Aunque Dios dirige la historia hacia una meta, la Biblia hace claro que no somos robots; no enseña el fatalismo, pues, Dios deja responsabilidades al ser humano. Nuestras decisiones sí afectan la historia. Veo la historia como un diálogo entre Dios y el hombre. Alguien ha dicho que la historia es como una tela o tejido y nuestras decisiones también son hilos que Dios va tejiendo e incluyendo en el tejido.

Hace años hice un estudio sobre la perspectiva bíblica de la historia. En un escrito mencioné varios postulados básicos que componen esta perspectiva. Muchos ya los hemos visto en estas conferencias. Aquí quiero mencionar los últimos tres que encontré. "La Biblia no enseña que todo lo que sucede refleje la voluntad de Dios". Dios es dueño de la historia, pero él no causa todo lo que sucede, pues permite que el ser humano desobedezca. Existen poderes malignos en el mundo. Los hombres pueden optar por seguirlos y así la historia sufre las consecuencias.

Otro postulado, mi penúltimo, es, "La naturaleza de la acción de Dios en algún momento dado está condicionada por la respuesta del hombre". Es secuencia lógica de lo que dijimos de las decisiones del hombre. En el Antiguo Testamento, a veces Dios decía que iba a castigar un hombre o un pueblo; pero si el hombre o pueblo se arrepentía, Dios los perdonaba. No seáis engañados, lo que el hombre siembre, cosecha. Esto se aplica a individuos, familias y naciones. El futuro de la historia de Guatemala depende de las decisiones que su gente hace ahora.

El último postulado que puse en ese escrito sobre la perspectiva bíblica es, "La proclamación de la Palabra de Dios es el poder efectivo en la historia". Lo vemos en la Biblia y lo vemos en la historia de los veinte siglos después de Cristo. Dios usa la proclamación de su palabra para cambiar el rumbo de las vidas y de la historia.


Tres desafíos

De todo lo que hemos visto sobre la visión bíblica del ser humano y de la historia, quiero destacar tres desafios:

1) La respuesta a toda la necesidad del hombre y al desafio de la Nueva Era es conocer a Dios por medio de Jesucristo. La visión bíblica proclama que Dios hizo al hombre con el propósito de compartir su amor con él. Dios quiere que lo conozcamos a él personalmente. Dice Isaías 43:10 (lo dijo a Israel, pero tiene que ver con todos a quienes Dios ha llamado): "Vosotros sois mis testigos, dice Jehová, mi siervo que yo escogí, para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy". ¡Qué privilegio es conocer con una relación personal al Dios grandioso, todopoderoso que creó todo el universo! Y ¡Qué privilegio es poder ser instrumentos de Dios para que otros lo conozcan! Es el llamado de toda la iglesia, de todos los cristianos. Dios nos ha hecho parte de su reino, su gran plan para todo el mundo.

La Biblia deja bien claro que Dios mora en el creyente. Sabemos que cuando recibimos a Cristo, él viene a morar con nosotros (Ap. 3:20). En el Nuevo Testamento es claro que el Espíritu Santo mora en cada creyente (Rom 8:9). Dios quiere que su presencia se manifieste en nuestras vidas todos los días, por los frutos del Espíritu, por la victoria sobre el pecado y por el poder de Dios en ministrar a otros. A menudo no se manifiesta su presencia porque no permanecemos en comunión con Dios, entristecemos el Espíritu de Dios o no creemos que pueda ministrar con poder a través de nosotros.

En nuestro tiempo, cuando hay tanta desilusión con el racionalismo y también con un cristianismo seco, medio muerto, cuando la gente busca algo que tenga significado, el desafio más grande para nosotros es vivir para Cristo en el poder del Espíritu Santo.

2) El segundo desafio tiene que ver con nuestra parte en el tejido de la historia, es decir, que lo que nosotros hacemos afecta la historia. ¿Cree usted que su oración afecta la historia? ¿Cree que su oración realmente puede cambiar la historia? Estoy cada vez más convencido que Dios usa la oración intercesora para hacer su obra. Cuando me sugirieron que no podemos torcer el brazo de Dios me hicieron ver que a veces nuestra enseñanza sobre la predestinación nos hace caer en una forma de fatalismo. No podemos torcer el brazo de Dios; pero hay una verdad más profunda, es que Dios quiere hacer cosas, pero muchas veces no las hace hasta que sus hijos las pidan.


¿Entienden las implicaciones de esto? Si usted ora por su vecino, puede cambiar el rumbo de su vida. Si ora por su pastor, su ministerio tendrá más fruto. Leyendo, un día, en Números 14:20, me impactó lo que Dios dijo a Moisés. Dios dijo que iba a destruir al pueblo; pero Moisés empezó a argumentar con Dios y le pidió misericordia. Pidió que perdonara al pueblo. En el verso 20, Dios dijo a Moisés: "Yo lo he perdonado conforme a tu dicho". Dios toma en serio nuestras palabras de oración. Lo mismo vemos en Ezequiel 22:30; puesto que Dios no pudo encontrar a nadie para estar en la brecha e interceder por el pueblo, tuvo que enviar su juicio. Su oración puede cambiar el rumbo de la historia.

3) El tercer desafío es el último postulado que mencioné: La proclamación de la Palabra de Dios es el poder efectivo en la historia. Los profetas del Antiguo Testamento tuvieron mucha influencia sobre el pueblo, y sus escritos después tuvieron más influencia. En el Nuevo Testamento sigue el énfasis en la proclamación. Es la tarea de la Iglesia proclamar el mensaje de Cristo por la predicación y por su vida. Si las personas cambian, también la historia tiene que ser cambiada. Si los discípulos de Cristo proclaman y viven el evangelio, la justicia de Dios, los valores bíblicos y el estilo de vida que les pertenece, también serán influyentes en el cambio de las estructuras sociales.

Es tiempo que los cristianos tomemos conciencia de la visión histórica que presenta la Biblia. No debemos dejar a los estados y a los ejércitos la influencia sobre la historia que pertenece a la Iglesia por medio de su vida y la proclamación de Cristo. Es tiempo de que tomemos en serio nuestra responsabilidad de cambiar la historia, de hacer historia. El evangelio de Cristo proclamado y vivido en el poder de Dios influye en la historia, cambia la historia, hace la historia; es el arma que usa el Señor de la historia para moverla hacia la meta, el Reino de Dios.


Notas

Ήβητΐ Frankfort y otros, The Intellectual Adventure of Ancient Man (Chicago: University of Chicago Press, 1946), pág. 8.

2Th. VanLeeuwen, Christianity and World History, pág. 63.

3Yehezkel Kaufmann, The Religion of Israel from its Beginnings to the Babylonian Exile (Chicago: University of Chicago Press, 1960), pág. 53.

%id.

5Jürgen Moltmann, God in Creation.

6CYMRY página de CYMRY en Internet, enero, 1997.

7Ibid.

8Douglas R. Groothuis, Unmasking the New Age (Mervarsity Press, 1986), pág. 40.

9Ibid.

10Hugh Ross, Creation and Time (Colorado Springs: Navpress, 1994), pág. 132.

nÄiÄ,peg. 133.

12Millard J. Erickson, Christian Theology (Grand Rapids: Baker, 1983), págs. 59-80.

nIbid., pág. 67.

14 Ibid., pàg. 305.

l5Ibid., pág. 306

16Douglas R. Groothuis, Unmasking the New Age (Downer's Grove: Intervarsity Press, 1986), pág. 40.

17F. Martínez Diez, La Nueva Era y la fe cristiana (San Pablo, 1995), pág. 104.

18CYMRY, página de CYMRY en Internet, enero, 1997.

19Groothuis, Unmasking the New Age, pág. 120.

20Gordie Tong, "The New Age World View", Internet, febrero, 1997.

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"Ibid.

22 Ibid.

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