Dios le promete a Eva una descendencia múltiple y que de ella saldría el salvador del género humano, María es la mujer de donde nacería Jesús. Ella fue llenada de privilegios y dones para poder albergar al hijo de Dios.

La Inmaculada Concepción

Se dice que la concepción de Jesús fue inmaculada, porque fue por obra y gracia del Espíritu Santo tras recibir el anuncio del Ángel Gabriel. Siendo el seno de María colmada de gracia divina. María desde el comienzo de los tiempos fue destinada a ser madre de Dios.

En la tradición oriental describe a María como “Panagia” es decir que fue plasmada del poder del Espíritu Santo, sin mancha de pecado e inmune a él.

Hágase en mí según tu palabra

María con esta afirmación demuestra su humildad y acepta la voluntad de Dios de ser madre de Dios cumpliendo con esto la promesa de Dios de que nacería de un vientre pulcro y libre de mancha el salvador del mundo. María con este acto da inicio a un nuevo tiempo de esperanza con el nacimiento de Jesús.