LAS INCREÍBLES AVENTURAS DE LUIS SILVA DE BALBOA Engañó a La Segunda. A El Mercurio. A Fernando Paulsen. A The Wall Street Journal, el más influyente periódico de negocios del mundo. Luis Eduardo Silva de Balboa podría ser millonario o un gran procer. Dueño de una imaginación sin límites, De Balboa ha figurado como comprador de la revista George de John Kennedy Jr.; abogado del narcotraficante Alberto Botero; testigo del plan para matar a Colosio en Mexico. Todo minuciosamente falso.

Por Pablo Vergara

1995, un domingo cualquiera. En la cordillera del Cóndor, la frágil frontera entre Perú y Ecuador, se libra una guerra. Sobre los dos países existe un embargo de venta de armas. Chile, parte del Grupo de Río, es garante para dirimir el conflicto.

Alguien llama a El Mercurio. Es de noche. Desde el otro lado de la línea, un desconocido de acento extranjero –latino- dice que quiere mandar un cable pero que el sistema está malo. La noticia es importante porque hay un chileno metido en la Guerra del Cóndor. Al final, manda un fax.

El documento trae una bomba: una empresa de capitales chilenos está violando la prohibición de venta de armas. El nombre de Luis Eduardo Silva de Balboa está en el fax. El Mercurio publica la noticia. Al día siguiente, Silva de Balboa, en la Cancillería, desmiente al decano. Gol. Pelota centrada, cabeceada y adentro. Silva ha engañado una vez más al decano. Creó una noticia y después la desmintió. Perfecto.

Nadie entiende por qué lo hace. Pero en los últimos diez años el talquino de 54 años ha llenado la prensa de aventuras, cuál de todas más rocambolesca. Su vida es un misterio. O una gran suma de mentiras. Empresario, economista, periodista, amigo de duques, descendiente de nobles, cónsul, estafador, timador profesional. Silva de Balboa nutre las páginas de negocios y política, y acumula fojas en expedientes por fraudes menores.

E irrumpe en la prensa. Luis Eduardo Silva de Balboa, el burlador de los periodistas, reparte sus dardos por todo el espectro.

Y casi nunca falla.Un raro haciendo rarezas.

EL MERCURIO Y FRA FRAEn los noventa, Silva tuvo como cliente preferente a los

periodistas de la casa de Edwards. Blanco predilecto. Sabía cómo funcionaba el diario y cómo colarse. Según él, la inquina con el diario viene de los 80, cuando en Canadá se peleó con el mismo Agustín Edwards durante una improbable reunión de la SIP por la represión en Chile.

El hecho sí público y evidente es que Silva ha trapeado con el decano.

El 18 de septiembre de 1996, el día del funeral del economista Felipe Herrera, Silva llamó a El Mercurio. Era sábado. Habló con el editor a cargo. Le “recordó” que él había sido gerente en la empresa. Se rieron hablando de viejos tiempos. Más tarde, le dijo que había hablado en el funeral de Herrera como presidente de la asociación de ex becarios del BID y que quería reforzar sus palabras, agregar algunas reflexiones. El editor lo pasó con el joven periodista que había cubierto el funeral. El resultado fue otro punto para Silva: apareció encabezando la nota, recordando a Herrera. Al día siguiente lo desmintieron. Pero en el obituario venía otra gracia: Silva pagó un anuncio en homenaje a Herrera. Lo firmaba él. Gol de taquito.

El Mercurio no fue el único cliente de Silva en esos años. La lista es larga.

Por sus manos también pasaron empresarios. A Francisco Javier Errázuriz lo asesoró durante el juicio de desafuero que se le siguió hace algunos años. Luego, continuó en sus oficinas tratando de impulsar la Fundación Errázuriz. La oferta incluía cambiarle la cara al polémico empresario/senador. Según personas que conocieron la relación, Silva habría llegado a ofrecerle a Fra Fra una fiesta con su amigo George Bush.

Silva duró sólo un mes al lado de Fra Fra. Se fue luego de una dura pelea. Desde su partida, en la casa matriz de Inverraz existen guardias. Para que no entre.

No es el único encuentro con políticos. Según sus versiones, durante los últimos años se ha relacionado con Sadam Hussein, Vladimiro Montesinos, Carlos Salinas de Gortari, John Kennedy Jr., agentes de la CIA, Ricardo Lagos y un largo etcétera. Ahora incluso dice haber sido conviviente de una de las hijas de Robert MacNamara,

el ex secretario de Estado norteamericano. La mayoría de los encuentros y relaciones son inchequeables. En la entrevista que dio a The Clinic, se refirió a su relación con Patricio Aylwin, Salvador Allende y Jaime Guzmán.

En los tribunales, donde ha desfilado silenciosamente en los últimos años, Silva no ha proporcionado mayores luces. En mayo de 1997, reconoció en una causa por cheques que se le sigue por no tener el título de abogado, pero dijo poseer una licenciatura en derecho en el extranjero, y no haber completado los trámites de revalidación. Tres años antes, en una carta a Benito Mauriz, director de la Corporación de Asistencia Judicial, Silva ahondó en sus estudios: “Mis antecedentes académicos se originan en Francia de cuya Universidad de París soy licenciado en Deecho 1972. Mi tesis versó acerca de “la libertad de expresión y derechos individuales en la historia constitucional francesa”. En 1973 en el mismo centro de estudios cumplo con los requisitos para agregar mi Licenciatura en Filosofía. En 1986 cumplo con la revalidación de mis estudios de derecho en España obteniendo mi Licenciatura de Derecho. En 1988, y de acuerdo con los convenios existentes entre España y México cumplo en la escuela libre de derecho con los requisitos para obtener mi cédula profesional como licenciado de derecho en México. Durante los años 1989 al 93 soy titular de la cátedra de Derecho Romano-Derecho Internacional Público y Filosofía del Derecho en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey. La cátedra de Derecho Internacional Público se desarrollo dentro de la Facultad de Economía y Administración. Debo indicar que fuera de las prácticas impuestas por los requisitos antes descritos, nunca he litigado en tribunal alguno y mi vida profesional ha estado más vinculada a la empresa privada y el uso de mi Maestría en Economía obtenida en 1975 London School of Economics (Foreign Program)”

Así de claro.

El Barón de Munchaüssen. Silva siempre lo logra. Enreda las verdades, cuela certezas a

medias. La hace. Para la entrevista que aparece en esta edición debimos hacer un chat: Silva dijo estar en Aspen, Colorado, en una cabaña en las montañas que describió con lujo de detalles. Luego, que se pasaba a su rancho en Santa Teresa, en Nuevo México, vecino al de Ted Turner. Y que más tarde se iba a Kay Biscaine, en Florida.

Todo, mientras mantiene una condena por confirmar en la Corte Suprema.

Si es verdad, no lo sabemos. O Silva estaba muy cerca de nosotros o muy lejos. Pero está.

Le han comparado con Zelig, el personaje que siempre se cuela por los dramas de la historia. La verdad es que Silva supera con creces al alter ego de Woody Allen: porque Silva no está.

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Luis Eduardo Silva de Balboa:"AL MERCURIO, CADA VEZ QUE HE QUERIDO, LO HE

COCINADO"

Dijo que estaba en Aspen, Colorado. Que le gustaría hacer una entrevista a su regreso a Chile. Por chat, accedió a contar su historia, y aprovechó de lanzar más luces sobre su pasado. En el camino empezó a soltarse. Acá, lo más parecido a una confesión que haya hecho alguna vez. Versión resumida, claro.

Por P.V.

La conversación se caía a ratos o se quedaba estancada. Luis Eduardo Silva de Balboa mueve bien sus piezas cuando está conversando con alguien. Espera un rato y lanza andanadas de referencias difíciles de chequear y, la mayoría, del Maule. Cruza nombres, mueve fechas. En esta conversación se acercó demasiado a la sinceridad. No completamente: la leyenda, mal que mal, tiene que seguir parada.

-Luis Eduardo, ¿por qué te sigue la polémica? Digo, hay gente que te considera un timador, un mitómano. Otros te miran como un espécimen raro. ¿Quién es Silva de Balboa?

Yo pienso que han existido situaciones que conducen a una abierta confusión a este respecto

-Luis Eduardo, ¿por qué le pasan todas estas cosas a Ud.?Porque yo doy razones para que pasen.-¿Cuáles? ¿No encuentra raro todo esto? ¿No se siente raro

a veces?

Raro, es una expresión muy ambigua. Lo que a veces siento es una sensación de haber nacido en un siglo equivocado, pero nunca raro. Sé que es más fácil ser parte del rebaño.

-¿Pero no se siente a veces un raro? ¿No le parece? Uno mira las notas de los diarios y cada una de sus acciones no sólo es polémica. Se la desmienten. ¿En qué siglo cabe un personaje como Ud?

Los cobardes tienen esos temores. Los desmentidos son ignorancia más que desmentidos. Hay un gran desconocimiento real y profundo de los hechos. Y a nadie le interesa profundizar nada, ni siquiera entender.

-A veces -la mayor parte de las veces, en su caso- los desmentidos hablan de hechos.

Son los hechos los controvertidos, nada y nadie más que eso.-Hechos que le atañen a Ud. ¿por qué hace todo esto? Por

ejemplo, esto mismo. Está su versión de todo. Incluso de su viaje actual.

Hay cosas que tienen motivaciones y otras no la tienen, son el resultado de las circunstancias, de tareas concretas.

-Me dicen, por ejemplo, que Ud no tiene modo de estar en California ni en Florida ni en ninguna otra parte ahora que no sea en Chile. Y que se separó de su mujer. ¿Es eso verdad?

Falso, yo no estoy separado de mi mujer. Yo salgo de viaje cuando lo deseo, lo que si hago es solicitar permiso de viaje.

-¿A quién? Ud está a punto de ser condenado por las querellas que se le tramitan.

Debo solicitar permiso al tribunal.-¿Y está fuera de Chile hoy?Creo entonces que debemos esperar que sea condenado, ya

que no he sido condenado y mientras no lo sea, ¿me vas a condenar tú?

LA CONFESION-Por cierto. ¿Pero en qué siglo le hubiera gustado nacer?En uno menos manejado por los mercachifles, menos mercantil,

donde reine menos en mi país el medio pelaje, y haya un debate de ideas.

-¿Y qué personaje le gustaría ser?A mi me gusta ser yo mismo, no emulo a nadie.

-¿Y no encuentra raro este personaje? Con tantas historias, tantas intervenciones en la prensa. ¿Ud sabía que le llaman el terror de los estudiantes en práctica en los medios? Por los llamados telefónicos. (Silencio, larga inactividad de Silva al otro lado) ¿Está ahí?

A un buen periodista jamás se le sorprende.-Yo estaba en El Mercurio cuando fue el funeral de Felipe

Herrera. Fue una maniobra brillante. Casi una obra de arte, diría.Yo te puedo enviar una fotografia, no una mil, con Felipe

Herrera, tuve una gran relación con él. Tengo una foto dedicada por él a mí. Se lo puedes preguntar a su hijo que está en Sudáfrica. A El Mercurio siempre, cada vez que he querido, lo he cocinado en su propia salsa, y a Edwards Y en Vancouver los dejé en el más soberano ridículo frente a un auditorio de 1.000 dueños de diarios de toda América. ¿Es eso menor ?

-No. Por eso hablo de una buena maniobra. Llamar un fin de semana sabiendo cómo funcionan los diarios. Pedir hablar con el periodista que fue al entierro y "reforzar" las palabras que dijo en el cementerio. Salió en el lead. Presidente de ex alumnos becados por el BID. Se lo digo porque al día siguiente hubo desmentidos. Y más recientemente, el asunto de Montealegre. El Mercurio tuvo que desmentirse. Se lo digo para que hablemos del arte del engaño.

Sin duda que sé más que ellos cómo funciona un diario, pero más que eso sé cómo funciona la mente de los mediocres. Pero, ojo, yo si soy ex becario de BID y te lo puedo probar.

-Pero usted sabe cómo meter una noticia falsa pero verosímil en los medios. Y aparecer. Por ejemplo, el tráfico de armas a Ecuador. Otra vez, notable.

No creo que sea el arte del engaño, es el arte de la política y la inteligencia. Los servicios de inteligencia lo hacen normalmente. La manipulación de la información es el mayor poder de un gran pais.

-¿Por qué lo hace? Le estoy proponiendo una conversación tranquila sobre el engaño.

Hay veces que tengo el agrado de hacer cosas contra quienes se creen invulnerables, otras veces son actos de estrategia y conllevan mensajes no dirigidos a la mayoría. Pero todo tiene un sentido y una razón.

-¿Cuál?Un mensaje, teledirigido.

-¿A quién y para qué?Tendríamos que ver, en el caso de las armas con Ecuador tuvo

un gran éxito, se distrajo la atención y se logró interponer un pie en los asuntos de armas de Pinochet. Nuestra intervención hizo revisar algunos pasos que hoy son útiles para otras investigaciones.

-¿Nuestra? ¿Quiénes?No siempre podré decir quién es "nosotros" o "ellos". Y no estoy

jugando.-Vale. Por ejemplo, en su opinión de experto: ¿qué le faltó a

la Gemita Bueno?Inteligencia a ella y a sus acólitos. Yo habría hecho un plan

absolutamente exitoso y tendría en las cuerdas y de rodillas a mi objetivo.

-¿Cómo? El asunto estuvo muy bien montado. Mire cómo quedó la UDI.

Son gente muy burda.-¿Cómo hacer que una mentira sea verosímil?Bueno, se generó algo, pero no se lograron los objetivos finales.

La UDI viene mal hace mucho rato, a tal punto que sus dirigentes están peor que yo. Ellos deben recurrir al más allá y conectarse con ultratumba. Yo nunca he llegado a eso.

-Claro. Pero ¿cómo se hace una mentira verosímil? ¡¿Cómo se mete bien en los medios?

Hay que conocer el medio, las personas y las circunstancias. El elemento más vulnerable de un medio es la angustia de un periodista mediocre que desea impactar, a sus patrones, a sus colegas y a sus lectores. La vanidad es un gran fantasma.

-Cierto. ¿Y cuál ha sido la mejor de las suyas? ¿La Mona Lisa de Luis Eduardo Silva de Balboa?

Entonces hay que sumarse a la corriente y aumentar el caudal con habilidad, de tal forma que quien va nadando no se da cuenta que lo lleva una ola que lo superó y así él dirá lo que yo quiero que diga.

-¿Pero cuál es la mejor? La perfecta.La que involucra la vanidad e inseguridad endógena del

periodista. Es el caso de Fernando Paulsen.-¿Esa fue la mejor?Fue la mejor y lo dejó ad eternum, herido.Yo diría que la de Colosio y hasta la del Palacio en

Inglaterra. Aunque a esa le faltaba un elemento más aterrizado

para que fuera cierta. Pero La Segunda mira rápido y está apurada siempre.

Después se lo comió la rabia y así, presa de sus emociones, se transformó en un títere. La Segunda no solamente mira rápido, mira mal. No me olvido cuando una periodista de La Segunda nos visitó en Pto.Montt, yo estaba con Douglas Tompkins y su abogado de la época y un amigo mío Fernando Dougnac. Esa periodista me dio sincera lástima, tanta, que evité que pusiera lo que yo le había hecho escribir.

-Y lo de Montesinos. Todo el mundo lo andaba buscando y era indesmentible para quien lo encontrara.

Yo había estado en Lima por el tema el Fra Frá y sabía todo lo que estaba pasando. Yo viví en Caracas y supe que él iba para allá. Yo ya tenía un perfil de inteligencia de Montesinos y sabía que tenía ascendencia y familia en Venezuela. Lo que digo en la entrevista es trascendental con respecto a lo que después pasó con Montesinos. La has leído?

-Pero creo que lo de revista George fue insuperable. ¡¡ Al Wall Street Journal!!

¡No creas en dioses y te irá mejor !-¿Pero cómo fue? Eso no pasa todos los días.Para las masas y no tan masas, la prensa es un elemento

legitimador especialmente para el publico anglosajón, entonces si queríamos realmente tener parte en la posibilidad de tomar la publicación, la sola forma de intervenir era a través de la prensa y desde lejos. Esto alteraría los precios y se abren ofertas públicas. El medio más idóneo en esto es el WSJournal. Lo usamos como una palanca para...

-Pero cómo lo hiciste. ¿Llamaste? ¿Hiciste que te llamaran? ¿Filtraste la noticia?

...abrir una puerta y funcionó perfectamente. No tenemos quejas y somos amigos, lo somos porque ellos desearon asegurarse que no les volviera a suceder. Estoy con ellos en cada reunión de la SIP

-Eres como un hacker de la prensa.No, yo tengo un amigo periodista jubilado en New York, un

hombre de gran habilidad y experiencia, se llama Thomas Bennet, y él coordinó conmigo y el WSJ nos llamó, nosotros simplemente supimos dónde y cómo dejar caer el rumor creíble.

-¿Dónde lo dejaste caer?A través de una corredora de bolsa íntimamente ligada al

WSJournal. Mira te cuento, siendo yo dueño del diario La Región de

Talca, hice desaparecer a un Intendente de la Concertación con un rumor válido bien administrado. Le evité un fiasco al gobierno y al propio intendente. Hoy los hombres de prensa, con todo respeto, son muy egreídos y eso los pierde.

-Hablemos del castillo en Gloucester. ¿Qué tenía de bueno y qué de malo esa noticia falsa? A mi siempre me ha parecido como una obra menor.

Esa no fue falsa.-Era La Segunda, era rápida. Fue desmentida. Al menos

están tus blancos habituales.Allí se trató de una familias mexicana muy rica que ante la caída

del peso mexicano decide sacar dinero de México. Yo sirvo de canal para esa muy legítima operación. Al broker inglés se le advierte que la operación era enteramente confidencial. Parece que una empleada de su oficina filtró la información y fue pagada para ello. No por la importancia del comprador, sino la del vendedor. Cuando sale...

-En La Segunda dicen que la filtraste tú.A la prensa internacional a través de ANSA y de AF, estos

medios primero lanzaron la noticia a los computadores, y lógicamente el broker la negó, tenía que hacerlo.

-Yo me acuerdo que para la cosa de las armas también usaste a una agencia internacional. ¿Era un fax, no?

Esa noticia nunca la publicó La Segunda, tienes un error: fue El Mercurio, y la periodista que la procesó se llama Ximena.

-Tienes razón.La noticias nunca llegan por fax-Eso es verdad. Pero la cosa de las armas sí llegó por fax. Si

tuvieras que decirle a un estudiante de Periodismo cómo no caer en tus manos, ¿qué le dirías?

Me extraña que haya llegado por fax, ya que esa noticia se barajó a través de un contacto con agencia EFE en Caracas. Ahora a una joven periodista, como mi hija Beatriz, le diría que sus emociones son sus enemigas, que se aprenden técnicas, sistemas, manejo de la redacción, pero que jamás se aprende a ser periodista. Ser periodista es la combinación de olfato y criterio, y eso no lo entrega ninguna universidad del mundo, ninguna escuela, y todos esos profesores estrellas, son meros repetidores de otros. Estar alerta es una condición periodística esencial.

-¿Y ante una noticia falsa? ¿Cómo se la distingue?No hay noticias falsas, hay noticias mal tratadas, mal manejadas.

-¿No te sientes raro, dedicado a esto?Yo en lo absoluto me dedico a esto. Mi vida cotidiana en nada

tiene que ver con eso. Yo estoy escribiendo un libro sobre algunos de estos hechos y ya tengo una editora Española y otra mexicana muy interesada.

-Oye, Luis Eduardo. Estaba pensando en la cosa de Talca y el rumor y la vanidad. La fiesta del 14 de julio que diste como cónsul jugó con eso, ¿no? La crema de la ciudad en tu residencia. Un baile de máscaras. Otra performance.

Bueno, lo primero que tengas muy claro es que efectivamente fui Cónsul Honorario de Francia y lo he sido tambien en México.

-¿Y la fiesta?Pero más allá de eso, el caso de dicha fiesta da en sí y por sí

para un libro y una película.-¡Hubo gente que se fue a arrendar frac a Concepción!No te imaginas lo que hice sobre todo con el militar intendente

cuya foto te mandé, lo puse de estricta gala y puse a todo el regimiento a desfilar. Yo pronuncié un discurso en castellano y otro en francés. La invitación la mandé a imprimir en Paris y se adjuntaba una tarjetita chica que te ordenaba cómo de debías ir vestido tú y tu mujer, cómo debías saludar. Traje Champagne Dom Perignon y mi querido amigo el Obispo González Cruchaga asistió con tenida de liturgia que sólo los Obispos usan en el Vaticano, etc.

-Dicen que al día siguiente fuiste a abrir cuentas corrientes en todos los bancos. Claro, nadie te las negó. Después de esa fiesta, la ciudad era tuya.

Yo ya hacía mucho rato que tenía cuenta. Lo triste es que a los que no invité quedaron como enemigos míos para toda la vida. Hubo anécdotas absolutamente increíbles. Tengo mil fotos de todos los asistentes, no te miento.

-La vanidad es arma poderosa.Mira, por 2000 años la humanidad ha sido conducida como

borregos por dos fuerzas motrices, el miedo y la vanidad.-¿Y la entrevista a Lagos? ¿Nunca te la desmintieron?Déjame preguntarte a estas alturas, ¿creías que se produciría un

diálogo conmigo como este ?-La verdad, no. Pero lo agradezco.Jamás me desmintieron la entrevista de Lagos. ¿Sabes por qué?

Porque contraté al fotógrafo de El Mercurio que tomó las fotos.-¿Dónde tomaste las fotos?

(Pablo) Orozco (asesor de prensa presidencial), me dijo después que Lagos había quedado muy impresionado. Tú sabes que yo fui quien lo metió en el lío del aborto terapeutico.

-En eso estaba pensando. ¿Y? ¿Cómo lo hiciste?-Los malos periodistas iban y le decían, Señor Lagos qué piensa

Ud. sobre el aborto. Señor Lagos qué piensa sobre tal o cual cosa, etc.-¿Y tú qué hiciste?Yo no hago ni hice eso. Le dije, Señor Lagos, me va a permitir

hablar de algo hipotético y no me diga que Ud. no se refiere a cosas hipotéticas, porque hoy su gobierno es hipotético y Ud. me está hablando de él.

-Hipotético al cuadrado. Vale.Si una hija suya viene a hablar con Ud. y como padre le dice que

ha quedado embarazada y busca su ayuda ya que declara que no está preparada para ser madre en lo absoluto, qué le diría Usted. Y más grave aún, si le dijera que fue violada por su novio.

LA PRIMERA VEZ-Claro. ¿Y ahora? ¿Qué va a pasar? Contaste lo que no

habías contado nunca. ¿Vas a desmentir esta entrevista después? Digo, hay que mantener la leyenda, ¿no?

No, te equivocas, esta es una materia que había tratado con un periodista español de origen peruano, cuyo padre fue rector de la Universidad de San Marcos y hace años fue publicado en el diario Vanguardia de Barcelona. La mejor de las leyendas es la verdad, no lo dudes.

- Pero la verdad se te cruza en la vida. Digo, la cruzas.La historia del hombre es la busqueda de la verdad, tú crees que

ya la encontró?-No. ¿Y en tu caso? ¿Cuántas no verdades has contado?

¿Cuándo empezó todo? Se me olvidaba preguntarte esoLa verdad por "objetiva" que sea, vale decir fundada en

verificables hechos, es aún discutible. Por raro que te parezca yo soy menos mentiroso que todos los que me acusan de ser mentiroso. Usan otra palabra, que la toman prestada de una cultura que no tienen: mitómano.

-¿Cuándo partiste en esto?Lo menos que yo soy es mitómano, ya que nunca, nunca he

perdido conciencia de lo que es y no es, son los demás los que sufren esa condición.

-¿Cuál fue la primera vez? Cuéntame. Recordemos.Yo creo que yo era estudiante en el Mackay de Viña y hubo una

conferencia del Pacífico en el Hotel O’ Higgins llena de dignatarios extranjeros y yo hice una apuesta en el Colegio que yo pasaría a esa conferencia y hablaría en ella como delegado. Nadie me creyó. Llama a Droppelmann y pregúntale si gané o no la apuesta.

-¿Y hablaste? ¿Qué dijiste?Yo estaba en el último año ya era todo un muchacho y hablé de

la participación de la juventud en los movimientos políticos y particularmente en la integración mundial, creo que por vez primera en Chile se escuchó la palabra globalización en 1966.

-Notable. La primera fue una apuesta. ¿Después cómo siguió esto?

No hubo ni hay un itinerario, las cosas se van dando, se dan solas. Es como el dinero, quienes suspiran por el él y lo buscan, jamás lo tienen.

-Seguiste. Esa era una universidad. ¿Cuándo saltaste a la prensa, a la política?

Mi padre decía que los únicos que hacen negocios con plata, son los pobres. Los caballeros lo hacen con su firma y su palabra, su imaginación.

-Vamos, ¿el primer salto a la prensa cuál fue? ¿Debe haber sido en los 80, no?

Fue en Costa Rica, con un amigo mío que hicimos que un diario local anunciara una situación personal del Canciller de la época que se llamaba Gonzalo Facio.

-Pienso en que el asunto es una suma de oportunidad más ingenio y todo con la prisa de la prensa. Por ejemplo, cuando dijiste haber perdido US$ 70 millones en el lunes negro. Los medios, mal que mal, siempre buscan un chileno entre las víctimas de todo.

Lo de los 70 millones no es inexacto por difícil que te sea digerirlo.

-Cuéntame.Yo nunca he sido víctima de nada ni de nadie, tal vez de mi

mismo.-Una pregunta. Tus causas judiciales son pequeñísimas.

Diez mil dólares, un arriendo, autos. ¿Vale la pena tanto despliegue? Pienso en otros que se llevan 100 millones de una pasada. ¿No es por lucro, no?

Para mí el afán de lucro, es un afán enteramente subalterno, primitivo propio de los débiles.

-¿Es humor? Porque puede entenderse al fin como una obra completa de un humorista. Un humorista raro, pero humorista

Soy gran amigo del humor, del buen humor, ¿tú no?-Mucho. Creo que el humor no es el humor de todo. Este

humor no es de todo. Es tuyo.Entonces, colócalo en el mundo de la magia y el humorismo,

pónlo en el mundo de lo que pasa cuando nos tomamos la vida tan en serio, y somos tan afectados por nuestras propias estupideces. Shakespeare dijo: How fool you human be.

-Vale. Creo que te debo un café.No sólo un café, pero fue grato hablar contigo. Te visitaré muy

pronto y podemos vernos en un buen lugar.-Mira, pongámoslo así: yo estoy en Santo Domingo con

Mosqueto. ¿A cuántas cuadras estamos ahora? Digamos, te dejas caer mañana y te tomo una foto para la portada. Y un café, claro. Acá, con la gente del Clinic.

Estamos tan cerca o lejos como deseemos estar. Hay que definir las cercanías y las distancias. Tu última aseveración no quiero que me decepcione. Te veré apenas esté en Santiago, si te parece.

Una vida de desmentidos-1994: Silva de Balboa asegura ser testigo de una conversación

en la que, en presencia de Carlos Hank González, se habrían sentados las bases para un complot que terminaría con el asesinato de Luis Donaldo Colosio Murrieta, candidato del PRI a la presidencia mexicana. Según Balboa debió huir de México el 2 de marzo de ese año con pasaporte falso rumbo a Miami.

-Mayo de 1992: notas periodísticas publicadas en Chile refirieren que Ross Perot, político estadounidense, nombró a Silva de Balboa como su asesor en temas latinoamericanos. Aquella información nunca pudo ser ratificada.

- 19 de Julio de 1996: Silva de Balboa asegura ser el abogado de Alberto Botero, diplomático colombiano encarcelado en Chile por tráfico de cocaína. Es desmentido por un hijo de Botero en el programa Medianoche, de TVN.

-18 de septiembre de 1996: Silva de Balboa aparece en El Mercurio despidiendo los restos de Felipe Herrera como ex becario del BID. Es desmentido.

- Tribunal Calificador de Elecciones, Tricel, lo retira de la campaña a senador por la Unión de Centro Centro por no acreditar estudios de enseñanza media.

-Silva de Blboa asegura haber negociado personalmente con Saddam Hussein la instalación de una planta francesa para la construcción de armas láser en Irak, antes de la guerra de Kuwait.

-Julio de 1999: filtra la noticia de que es representante de un grupo de empresarios canadienses interesados en comprar la revista George, del fallecido John Kennedy Jr. La información aparece en The Wall Street Journal. Al día siguiente, Reuters lo desmiente: “Luis Silva de Balboa es un desconocido para la comunidad financiera de Canadá”. The Globe And Mail consigue hablar con alguien que se identifica como el padre de Silva y que ratifica la historia de su hijo. Sin embargo, Silva padre murió hace años.

-Sorprende al mundo con una exclusiva latinoamericana: una entrevista exclusiva, para Revista Epoca de México con el hombre más buscado del Perú: Vladimiro Montesinos.

-Silva de Balboa asegura haber tenido un patrimonio personal de 70 millones de dólares durante el “lunes negro” de la Bolsa de Nueva York, en 1987.

-19 de Julio de 1999: Para la revista mexicana Epoca, de Balboa entrevista al entonces candidato Ricardo Lagos, donde éste se habría inclinado a favor del aborto terapéutico. La entrevista de Silva, hasta ahora, no ha sido desmentida.

RECUADROFernando Paulsen, la víctima vengadora: “Es un mitómano que

busca figurar” Fernando Paulsen era conductor de Medianoche cuando ocurrió

el caso Autoclave: la operación del OS7 de Carabineros que incautó 500 kilos de cocaína que llegaron al puerto de San Antonio en ollas gigantes para uso clínico. Alberto Botero, el ex secretario de Colombia en Chile fue detenido. Un día apareció en La Epoca Luis Eduardo Silva de Balboa entrevistado como abogado de los Botero en Chile. El equipo de Paulsen contactó al supuesto representante y lo llevó a Medianoche.

Antes que empezara el programa, un hijo de Botero se contactó con el programa, para desmentir que Silva fuera su representante. La voz de Botero hijo apareció en el estudio y comenzó a dialogar con Silva, que reclamaba haber sido contactado desde Colombia.

En cuanto Silva salió del canal, Paulsen comenzó a investigar las andanzas del “abogado”. Al día siguiente, realizó un reportaje en que detalló por vez primera las aventuras de Silva. Fue el primero en llamarlo el Zelig chileno.

-El vive de hacer creer lo que no es. A veces sin afán de plata. Sólo para hacerse notar. Es un mitómano con intención que busca figurar –reflexiona Paulsen hoy.

En el programa, esa noche, también estaba Jaime Ravinet, entonces alcalde de Santiago. En la antesala, recuerda Paulsen, Silva se presentó como representante de una empresa europea de armadores y le ofreció maquinaria para la comuna.

Paulsen en su nota de denuncia investigó todo: dónde había y dónde no había estudiado Silva. Presentó documentos. Lo hundió. Desde entonces, Silva de Balboa lo odia. Para él, Paulsen es asunto personal.

-Cuando estuve preso por lo de Jordán, me fue a ver a Capuchinos. Debe haber sido de las primeras visitas que tuve. No lo podía echar y se quedó con toda la gente que me fue a ver –cuenta Paulsen.

Al despedirse, Silva le dejó una carta en la que decía que ahora pasaría por lo que él había pasado: la cárcel.

-Yo he sido el único comunicador que después de haber sido engatusado por él lo investigó y denunció públicamente. En La Segunda ha aparecido 2 ó 3 veces y no lo han investigado nunca –dice Paulsen.

Paulsen, ex periodista de tiempos duros, no puede asegurar si Silva fue o no reportero de la revista Cauce como él dice:

-Capaz que haya sido escrito alguna vez. Es fascinante.