Cuaderno de Políticas de Salud, nº 10, enero 2012

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    anlisis, reflexin y debate

    Observatorio de Polticas de Salud

    cuadernodePOLTICAS DE SALUD

    Fundacin 1 de Mayo | Centro Sindical de Estudios. C/ Arenal, 11. 28013 Madrid.Tel.: 913640601. Fax: 913640838 |

    www.1mayo.ccoo.es | [email protected]

    Cuaderno de Polticas de Salud. ISSN: 1989-6050

    Coordinador | Eddy DOrleans

    Consejo Editorial | Marciano Snchez Bayle, Alberto del Pozo, Carmen Mancheo,

    Elvira S. Llopis, Antonio Cabrera, Jos A. Serrano, Joan Canals, Merche Boix,

    Javier Gonzlez Medel, Manuel Martn Garca, Araceli Ortz.

    10ENERO 2012

    A MODO DE EDITORIALMalas perspectivas para la sanidadMARCIANO SNCHEZ BAYLE

    Reflexiones sobre el Estado social y la crisisMARCO MARCHIONI

    20 aos defendiendo la sanidad pblicaen GaliciaHIXINIO BEIRAS CAL

    CITAS BIBLIOGRFICASLUIS PALOMO

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    El nuevo gobierno del PP como era previsible acaba de estre-narse con un conjunto de recortes que las CCAA trasladarn ensu mayora y de manera previsible a los servicios pblicos, en-tre ellos a la Sanidad.

    Aunque todava no tenemos toda la informacin para saber loque va a pasar esta bastante claro que se van a intentar im-poner fuertes recortes sobre todas las parcelas del Estado deBienestar, sin embargo merece la pena hacer dos considera-ciones, la primera tiene que ver con cuales son los objetivos l-timos de la poltica neoconservadora o neoliberal en cuanto a

    la sanidad y la segunda con que escenarios son previsibles parasu desarrollo.

    La primera cuestin esta bastante clara. Desde la poca de That-cher y Reagan la ideologa neoliberal ha partido de la base deque es necesario adelgazar el Estado y hacer que sean las per-sonas las que individualmente asuman los riesgos de su vida,tambin de su salud. Consecuentemente se propugn el des-mantelamiento de los sistemas de bienestar y la puesta en fun-cionamiento de un modelo de sociedad donde el mercadoasume la totalidad de la provisin de bienes y servicios y, lgi-

    camente, el acceso a los mismos esta mediatizado por la ca-pacidad econmica de cada persona. La idea de que el mercadoes el mecanismo mas eficiente de asignacin de recursos en to-dos los ordenes de la sociedad se ha hecho cada vez mas he-gemnica y predominante, y para ello se ha producido un ata-que sistemtico a los principales enemigos de este modeloterico: los sistemas de proteccin social por burocrticos e in-eficientes, las redes y organizaciones de solidaridad y de mo-dulacin de los ataques del capitalismo salvaje (los sindicatosy otras organizaciones sociales) y los sistemas de organizacinsocial y poltica capaces de poner trabas a la voracidad insa-

    ciable de los mercados (los sistemas de organizacin poltica,las administraciones publicas, y los polticos identificados concorrupcin, como si el mundo empresarial no fuera el origen y

    la principal fuente de corrupcin e ineficiencia en nuestra so-ciedad).

    En cualquier caso hay que ser conscientes de que en Sanidad esteproceso se ha producido con una gran flexibilidad y capacidad deadaptarse al terreno concreto, las circunstancias de cada pas, loque hizo que mientras que en los pases con sistemas sanitariospblicos se hiciera hincapi en la ruptura de la integralidad de losmismos introduciendo mercados internos, desregulacin y em-presarizacin de los centros sanitarios, en los sistemas mas libe-ralizados se fomentaran copagos, subvenciones al sector privado,

    disminucin de las coberturas pblicas, etc.En Espaa los objetivos son bien conocidos y se pueden con-cretar en desregular los servicios sanitario pblicos favore-ciendo pseudomercados y/o mercados internos, incentivar lapresencia del sector privado dentro del Sistema Nacional de Sa-lud (concesiones administrativas, PFI, etc) aunque sea a costesexorbitantes, recortes de los presupuestos pblicos para dete-riorar la Sanidad Pblica (conscientes de que uno de los prin-cipales obstculos a la poltica privatizadora es el convenci-miento generalizado de la poblacin y de los profesionales que

    la calidad de la atencin sanitaria es significativamente mejoren el sistema pblico, no tiene precio la imagen de EsperanzaAguirre acudiendo a un hospital pblico cuando crea que te-nia un grave problema de salud ), establecimiento de copagos,favorecer el aseguramiento privado (CiU no para de sealarcomo uno de sus objetivos la desgravacin fiscal de las plizasde seguros privados) y en fin segmentar la asistencia sanitariacon un sector privado que atienda a las clases altas y media-alta y el establecimiento de una nueva beneficencia para los sec-tores de asalariados con menor poder adquisitivo (recurdeseque mas del 60% de los asalariados cobra menos de 1000 eu-

    ros/mes), parados y pensionistas.

    Hay una especial insistencia en establecer el copago que a pri-mera vista no se entiende bien porque hay muchsima eviden-

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    A MODO DE EDITORIAL

    Malas perspectivas para la sanidadMARCIANO SNCHEZ BAYLEDirector del Observatorio de Polticas de Salud, Presidente de la International Association of Health Policy yPortavoz de la Federacin de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pblica

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    cia que no contiene el gasto, que es incapaz en discriminar lademanda apropiada de la inapropiada y que tiene efectos muy

    negativos sobre las personas mas enfermas y con menos re-cursos. Siendo as Porqu hay tanto inters en ponerlo en mar-cha? Hay al menos tres motivos evidentes: primero se quieremercantilizar la atencin sanitaria y acabar con su carcter so-lidario y redistributivo para convertirla en un producto mas deconsumo, en una mercanca, y ya se sabe que el acceso a lasmercancas esta ligado a la capacidad econmica de cada uno,y a la capacidad de pago directo y no a las necesidades de sa-lud; segundo, porque establecer sistemas de pago en el accesoa las prestaciones sanitarias favorece a los seguros sanitariospor dos vas, porque comparativamente se vuelven mas bara-

    tos y porque se pueden articular seguros privados que cubranestos copagos, y tercero porque el ruido sobre el copago creauna cortina de humo sobre los despilfarros del gasto sanitario,es decir sobre el elevado gasto farmacutico y la sobreutiliza-cin tecnolgica que son los problemas reales de nuestro sis-tema sanitario.

    Qu escenarios son previsibles?. Bsicamente dos aunque es ob-vio que al final puede concretarse una combinacin de ambos.

    Estara el que podra denominarse va rpida de transformacindel sistema sanitario, que abordara el cambio de la Ley Gene-

    ral de Sanidad para arbitrar un sistema dual de seguros/bene-ficencia y/o el establecimiento de copagos generalizados (far-macutico, consultas, hospitalizacin, etc.). Es, seguramente, loque quieren algunos sectores del PP, los mas neoliberales (Es-peranza Aguirre, FAES, etc) y obviamente la actual mayora par-lamentaria se lo permite a nivel legal. El principal problema,desde la ptica del PP, es que podria promover una amplia con-testacin social y unira a la mayora de las fuerzas a su iz-quierda, con evidentes repercusiones en las elecciones anda-luzas. De todas maneras no puede descartarse porque el PSOE

    parece estar noqueado, con poca capacidad de respuesta, y laofensiva meditica para favorecer y encubrir este tipo de ac-tuaciones esta siendo muy potente.

    La otra opcin, la va lenta consistira en actuaciones en las di-ferentes comunidades autnomas de naturaleza distinta, peroconvergentes y complementarias (privatizaciones, recortes, ex-ternalizaciones, copagos menores en temas secundarios, etc).Paralelamente, se avanzara en la promocin del asegura-miento privado con fuertes desgravaciones fiscales a quienescontraten estos seguros. Esto permitira sacar a una parte im-portante de la clase media (es adems el sector ms importanteeconmicamente e influyente polticamente) y dejara un sis-tema pblico dbil y descapitalizado para los sectores socialesms dbiles de la clase trabajadora, resucitando el concepto de

    beneficencia (ya lo dijo Olof Palme un servicio para pobres sersiempre un pobre servicio). Esta opcin planteara como prin-

    cipal limitacin, desde la ptica del PP, el que tardara mastiempo en cambiar la situacin y que esta sujeta a muchas masincertidumbres. Las ventajas desde ese mismo punto de vistaes que pasa ms desapercibida y que puede presentar diferenteintensidad segn comunidades autnomas y por lo tanto pro-vocar respuestas diversas e incoordinadas. Puede ser la estra-tegia ms factible y de hecho es la que ya est en marcha enmuchas comunidades autnomas donde los recortes estnavanzando de manera clara (Galicia, Madrid, Castilla La Man-cha, Baleares, Valencia, Catalua, etc)

    No es nada improbable que acabe producindose una combi-nacin de ambas estrategias, adems con intensidad variabledependiendo de los territorios concretos, del predominio de lasfamilias que hay dentro del PP, y de la respuesta social que en-cuentren estas medidas, tambin debe tenerse en cuenta quese esta produciendo una agresin importante sobre los profe-sionales sanitarios (aumento de horas, disminucin de salarios,cancelacin de contratos, etc ) que aumenta las probabilidadesde una respuesta desde el propio sector que siempre es im-portante para favorecer la movilizacin social.

    Conviene hacer un recordatorio de los aspectos clave que tiene

    pendientes la Sanidad Pblica en Espaa y que son funda-mentales para garantizar una Sanidad Pblica de calidad, uni-versal y gratuita en el momento del uso.

    1. FINANCIACION SUFICIENTE Y FINALISTA

    El mantenimiento de la Sanidad Pblica precisa de recursos su-ficientes para asegurar la atencin de calidad a los problemasde salud de la poblacin. El gasto sanitario pblico en Espaaes bajo, en comparacin con los pases de nuestro nivel so-

    cioeconmico (menor que el promedio de la UE15, UE27 yOCDE) y crece moderadamente (aproximadamente la mitad en% anual que la media de la OCDE) y mas el gasto privado queel pblico. Por lo tanto no se justifican las visiones alarmistassobre la sostenibilidad del sistema sanitario pblico.

    Un problema a tener en cuenta es el actual modelo de finan-ciacin de las CCAA que permite a estas decidir la cuanta quededican a Sanidad sin garantizar ninguna cantidad mnima, deesta manera se ha producido una gran disparidad en la finan-ciacin sanitaria pblica segn comunidad autnoma (hasta

    500

    por habitante y ao de diferencia en los presupuestosde las CCAA para 2012). Por ello hay que plantear un incre-mento de la financiacin de la Sanidad Pblica y poner en mar-cha una financiacin finalista, controlada por el Ministerio de

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    Sanidad y el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Sa-lud (CISNS) que asegure unos presupuestos sanitarios sufi-

    cientes.

    2. GARANTIZAR LA ACCESIBILIDAD A LA ATENCIONSANITARIA A TODOS LOS CIUDADANOS EN TODOEL TERRITORIO

    La crisis econmica ha favorecido la actitud de algunas CCAAque pretenden ahorrar negando y/o dificultando la atencin sa-nitaria a las personas que teniendo derecho a ella estn do-miciliadas en CCAA distintas. Este hecho es notoriamente ile-gal, ya que la Ley de Cohesin y Calidad del SNS (2003) seala

    que uno de los derechos de los ciudadanos es recibir, por partedel servicio de salud de la comunidad autnoma en la que seencuentre desplazado, la asistencia sanitaria del catalogo deprestaciones del Sistema Nacional de Salud que pudiera re-querir, en las mismas condiciones e idnticas garantas que losciudadanos residentes en esa comunidad autnoma, lo quetambin es ratificado por el RD sobre catalogo de prestacionesdel SNS (2006).

    Por lo tanto es obvio que los problemas de desatencin son ile-gales y que una de las tareas del nuevo gobierno y del Minis-

    terio de Sanidad es evitar que se produzcan, mediante la ac-tuacin inmediata de la Alta Inspeccin del Ministerio deSanidad y si es preciso arbitrando las medidas econmicas y/ode otro tipo que garanticen el derecho del acceso a la atencinsanitaria en todo el territorio espaol.

    3. MANTENER LA GRATUIDAD EN EL MOMENTO DELUSO

    Como ya se ha sealado no existe en nuestro pas un problema

    real de exceso de gasto sanitario pblico, sino mas bien lo con-trario, tampoco existe una sobreutilizacin del sistema sanita-rio (la tasa de consultas/habitante y ao esta por encima de lamedia de la UE, mientras que las estancias hospitalarias/habi-tante/ao son las menores de toda la UE), y por otro lado tantolos medicamentos como las pruebas diagnsticas, los ingresoshospitalarios son indicaciones de los profesionales sanitarios,y la mayora de las consultas tambin lo son. Por otro lado loscopagos / tasas o tickets moderadores no han demostrado nin-gn efecto sobre la contencin de la demanda inapropiada ysi sobre la equidad y la accesibilidad, adems de tener eleva-

    dos costes de transaccin y efectos indeseados. Por todo elloes imprescindible el mantener la gratuidad en el momento deluso de las prestaciones asistenciales y adems el garantizar que

    no se van a producir tasas en algunas CCAA rompiendo el prin-cipio de cohesin y equidad del SNS.

    4. ESTABLECER MECANISMOS EFICACES DECOORDINACION EN EL CONJUNTO DEL SNS

    La experiencia demuestra que no existe un funcionamiento co-ordinado del SNS, empezando por la falta de funcionalidad delCISNS. Aunque se planteo una mejora de su funcionamiento enla Ley de Cohesin la prctica ha demostrado la insuficienciade las medidas adoptadas. Es necesario establecer mecanismoseficaces, tanto para la toma de decisiones por el CISNS comopara garantizar que se estas son operativas. Tambin es preciso

    desarrollar el Plan Integrado de Salud, pendiente desde laaprobacin de la Ley General de Sanidad, en 1986, para esta-blecer objetivos comunes de salud en todo el SNS.

    5. GARANTIZAR LA TRANSPARENCIA DEL SISTEMANACIONAL DE SALUD

    Para poder evaluar el funcionamiento del SNS se precisan de sis-temas de informacin compartidos por todas las CCAA y queestn disponibles para el conjunto de la poblacin que es

    quien lo sufraga con sus impuestos. Es imprescindible quedesde el Ministerio se realice un compromiso con la transpa-rencia informativa de los datos fundamentales del funciona-miento del sistema sanitario pblico.

    6. MEJORAR LA EFICIENCIA DEL SISTEMA NACIONALDE SALUD

    El SNS tiene aspectos de ineficiencia que son bien conocidos yque deben de abordarse de manera inmediata para mejorar susituacin financiera y reforzar su sostenibilidad, habra quehacer referencia a los tres mas importantes:

    Gasto farmacutico: El gasto farmacutico en Espaa es muyelevado, muy superior al de los pases de la UE y OCDE, aunquese han realizado avances al respecto, estos se han centrado enla prescripcin extrahospitalaria, especialmente en AtencinPrimaria, mientras el gasto hospitalario continua aumentandode una manera descontrolada. Hay que realizar un poltica masactiva de contencin del gasto sin alterar la calida de la pres-cripcin, con especial atencin al control de las medidas de mar-keting de las empresas farmacuticas y las actividades de for-

    macin e investigacin esponsorizadas por la industria. Si seconsigue situar al gasto farmacutico en Espaa en el prome-dio de la OCDE se ahorraran 5.000 millones anuales

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    Sobreutilizacin tecnolgica: existe un exceso de utilizacininapropiada de los recursos tecnolgicos en Espaa (alrededor

    de un 30% del gasto se realiza en actuaciones inapropiadas),un mejor control de la utilizacin de la tecnologa conseguiraahorros muy notables superiores a los 30.000 millones anuales, para ello hay que avanzar en la utilizacin de la me-dicina basada en la evidencia y en la creacin de una agenciade evaluacin de la tecnologa que en la lnea del NICE brit-nico evalu sus indicaciones

    Es necesaria la puesta en funcionamiento de una agencia p-blica de compras que utilice las ventajas de la economa de es-cala para las compras de tecnologa y consumibles del SNS, pro-bablemente podra producirse un ahorro en torno al 20-30%de su coste actual.

    7. PARALIZAR LOS PROCESOS DE PRIVATIZACIONES

    Los procesos privatizadores puestos en marcha en algunas CCAAhan supuesto notables incrementos de los costes de la atencinsanitaria y en la construccin de las infraestructuras (entre 7-8 ve-ces de sobrecoste), adems de empeorar la calidad de las pres-taciones y deteriorar la red sanitaria pblica que ha sufrido un de-trimento presupuestario para poder sufragar estas privatizaciones.

    Acabar con el proceso de privatizaciones es una medida funda-mental para mejorar la eficiencia y la calidad del SNS

    8. POTENCIAR LA ATENCION PRIMARIA DE SALUD

    La Atencin Primaria de Salud es la clave de la accesibilidad yla eficiencia de nuestro sistema sanitario, pero pese a ello estasufriendo un proceso progresivo de postergacin, tanto presu-puestaria como de recursos de personal y de perdida de pro-tagonismo en la atencin sanitaria. Hay que recuperar las pro-

    puestas de la estrategia AP21 para que vuelva a ser el ejefundamental del SNS

    9. DESARROLLAR INSTRUMENTOS EFICACES DEPARTICIPACION

    No pueden avanzarse en la mejora de eficiencia, eficacia y ca-lidad del sistema sanitario pblico sin contar con la activa par-ticipacin de profesionales, organizaciones sociales y ciudada-nos. Hay que desarrollar los instrumentos concretos para queesta participacin pueda hacerse efectiva.

    Todas estas cuestiones son las que parecen prioritarias. Tareasque estn enfocadas a asegurar una Sanidad Pblica de cali-dad como pilar bsico de los sistemas de proteccin social.

    Para conseguirlo y desde la perspectiva de quienes defendemosel sistema sanitario pblico quedan cuatro ejes de trabajo en

    los que hay que avanzar, sin descuidar ninguno de ellos porqueson complementarios. Uno es el cientficotcnico, que tieneque ver con el seguimiento y evaluacin de las privatizacionesy la poltica neoliberal, desvelando las debilidades que presentaen el marco terico y analizando sus repercusiones sobre la sa-lud y sobre el funcionamiento de los servicios sanitarios; el se-gundo es el profesional, que debe de analizar las consecuen-cias sobre los profesionales de la poltica privatizadora, tantoen cuanto a sus condiciones de trabajo como sobre la propiapractica profesional y la calidad de la misma; el tercero es el so-

    cial, potenciando una amplia alianza de todos los sectores po-lticos y sociales que se enfrentan a la privatizacin, y el cuartoy no menos importante, es el internacional, porque los proble-mas y las soluciones no se circunscriben a Espaa y hay que dar-les respuesta desde un marco mas amplio que permita avan-zar en alternativas globales a lo que es una estrategia globalde desmantelamiento de los servicios sanitarios pblicos.

    Se trata de una tarea dificultosa y llena de problemas, pero quepuede y debe de afrontarse con flexibilidad y tenacidad, au-nando los esfuerzos de todos los agentes, porque es muy im-portante lo que esta en juego, un sistema sanitario pblico uni-versal y de calidad. u

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    En un momento tan complejo y difcil por la crisis econmicay por la presin que sufrimos por parte de los llamados mer-cados, conviene intentar realizar una reflexin seria y crtica

    del porqu hemos llegado a esta situacin. Naturalmente estareflexin tendra que ser la ms amplia y completa posible;cosa que se escapa de mi posibilidad y de un espacio escritocomo el que ofrece esta revista.

    A pesar de estas limitaciones objetivas, creo que, desde dife-rentes mbitos y desde diferentes visiones, podemos darnuestra aportacin, conscientes de que va a ser limitada. Eneste sentido creo que, en el folln de la crisis, podramosolvidarnos o darles menor importancia- a algunos elementosque considero importantes y que, sin un orden de prioridad y

    de manera muy sinttica, me permito aportar.Desde hace muchos aos, algunos de nosotros estbamosdenunciando situaciones patolgicas que requeran serafrontadas y, de alguna manera, modificadas profundamente.Slo hemos recibido silencios administrativos. Nos referimosconcretamente al uso patrimonialista de los recursos del Esta-do Social y a la gestin asistencialista y sectorial por parte delas diferentes administraciones (lamento decir que con pocasdiferencias entre diferentes fuerzas polticas se han podidorefrendar en este tema).

    Los partidos han estado usando las diferentes parcelas delEstado Social como cuerpos separados, rompiendo no solo lasnecesarias sinergias y multiplicando los costes, sino favorecien-do una tremenda parcelizacin y fragmentacin de la accinsocial. Adems de no poder as afrontar las necesidades socia-les de manera ms global, ms colectiva y ms social, han idocontribuyendo a la divisin social de las organizaciones ciuda-danas y del Tercer Sector (que tampoco ha hecho mucho,dependiendo del mecanismo perverso de las subvenciones,para modificar esta praxis administrativa). La multiplicacin delgasto -sin, ni siquiera hablar de la corrupcin inevitable en esteesquema- y, por ende, del dficit, se ha hecho insostenible. Parabotn de muestra, el caso de la Ley de Dependencia. Ademsya no tenemos un Estado Social ya que, ms all de las pala-

    bras, lo que tenemos ahora es un Estado asistencial. ste harenunciado de hecho ms all de las declaraciones- a que lasprestaciones sociales sean un elemento que permita a todo el

    mundo volver a recuperar una situacin personal y social dignay en paridad de condiciones con todos los dems. Este principioabsolutamente fundamental se ha ido perdiendo en la nebulo-sa de la gestin burocrtica y partidista de las diferentes admi-nistraciones. Pero, en la euforia de la sociedad del plenoempleo, preconizada hace poco ms de tres aos por el enton-ces Presidente del Gobierno, todo era posible, incluso su insos-tenibilidad. Naturalmente ahora hay que recortar... y, con elrecorte, posiblemente ir eliminando parcelas y mbitos del sis-tema pblico de seguridad social.

    Algo similar ha pasado en otra de las conquistas de las luchasdemocrticas del final del Franquismo: el Estado autonmico.La autonoma ha representado un avance democrtico enor-me, no slo respecto al franquismo, sino a la misma concep-cin del poder en un sistema democrtico, dando lugar a unaprofunda descentralizacin del poder decisional, al nacimien-to de gobiernos ms directamente relacionados con la reali-dad regional y local- y a la posibilidad de articular un siste-ma integrado de competencias que pudiera atender, demanera ms adecuada, a las diferentes realidades sociales yterritoriales.

    Pero todo esto se ha perdido en gran medida en la niebla delpatrimonialismo con el que los partidos polticos han pensa-do ser legitimados en su gestin y, lo que tena que haber sidoun elemento de avance y de integracin racional de recursosy competencias institucionales, se ha convertido en un apara-to costossimo, administrado de manera fragmentada y sinuna visin global y compartida. Siempre que mal utilizamosuna conquista, al final hay alguien que quiere eliminarla o, porlo menos, reducirla. Hablar ahora de eliminar las diputaciones,por ejemplo, representa la manera de evitar discutir a fondo

    el porqu se ha llegado a esta situacin y plantear alternati-vas que no eliminen el sentido profundo de la existencia delEstado autonmico.

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    Reflexiones sobre el Estado socialy la crisisMarco MarchioniTrabajador e Investigador Social | [email protected]

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    Naturalmente, ambos temas hasta ahora tratados, nos llevan,directa y/o indirectamente, a uno de los nudos centrales de la

    situacin social y poltica del pas: el funcionamiento de nues-tro sistema democrtico y el papel de los partidos. Creo quehay que empezar afirmando y pregonando que los partidospolticos son instrumentos fundamentales del sistema demo-crtico; pero que la manera de funcionar y de gestionar lapoltica (es decir lo ms fundamental de la vida de las socie-dades, ya que afronta todas las cuestiones de la vida colecti-va) est siendo ms negativa que positiva y que, por lo tanto,son necesarios cambios estructurales y fundamentales en sufuncionamiento y en su manera de relacionarse con la ciuda-dana.

    Naturalmente s que existen diferencias entre los partidos yque generalizar siempre es peligroso y des-educativo, peropienso que la Izquierda tiene en esto las responsabilidadesms grandes, ya que ha construido su existencia -y su posibi-lidad de tener un papel en sociedades dominadas por el sis-tema productivo capitalista- gracias a su capacidad de rela-cionarse con las clases trabajadoras en particular y con lasociedad en general; siendo, por lo tanto, la nica fuerza quereivindicaba y luchaba por y para los intereses comunes ygenerales. Su fuerza estaba justamente en esta relacin. Rela-

    cin que han ido perdiendo junto a la defensa de los intere-ses generales- paulatinamente a favor de una gestin buro-crtica, endogmica y meditica de la poltica Parodiandocada vez ms a la forma de hacer poltica por parte de lasorganizaciones de la derecha. Hasta tal punto se ha dado estammesis que mucha gente no encuentra elementos distintivosentre derecha e izquierda1.

    Uno de los elementos centrales sobre el que se ha podidoconstruir un Estado que podramos definir como social, hasido el factor trabajo y este es, justamente, el elemento en el

    que se han evidenciado los cambios ms estructurales produ-cidos por la revolucin planetaria que el capital ha realizado,y que nos ha cogido en gran medida impreparados y sin haberpodido adecuar nuestros instrumentos de lucha y de defensa.

    En la poca anterior a la globalizacin y financiarizacin delcapital, el trabajo ha constituido -durante dcadas y hasta laconsecucin de un Estado social digno y funcionante-, un ele-mento de unin y unidad entre las clases trabajadoras para

    las finalidades generales (el bien comn). En la poca actualel trabajo est representando un elemento de desunin, cuan-

    do no directamente una actualizacin de la guerra entre lospobres preconizada por Marx y Engels hace ms de 150 aos.El trabajo es hoy un bien escaso y en gran medida precario. Ladesindustrializacin y la desregulacin de las relaciones labo-rales son las armas del capitalismo globalizado y nuestros ins-trumentos sindicales funcionan aun slo para unos sectoresproductivos o unos mbitos a los que la globalizacin no hallegado (con el peligro aadido, de que estos sectores o mbi-tos estn siendo vistos como privilegiados por los dems tra-bajadores y trabajadoras).

    Sin embargo, nunca he sentido tan actual el llamamientoproletarios de todo el mundo unos, aunque est claro quehabra que comprender qu significa en este nuevo contextocreado por el capital. No es verdad, como muchos dicen yrepiten, que la gente ahora se ha vuelto individualista. Lo ques es cierto es que la realidad existente parece inducir a bus-car salidas y soluciones individuales. No es lo mismo decir unacosa o que la otra. Personalmente considero que el gran fra-caso de la Izquierda oficial es haber abandonado el terrenode los intereses generales y haber entrado en la lgica del par-ticularismo (sea localista, gremialista o nacionalista), que

    siempre ha designado a las fuerza de definimos como Dere-cha.

    Con la finalidad del crecimiento ininterrumpido que se vioacompaado por un creciente y anrquico flujo inmigratorio-la precarizacin, junto al fomento inevitable del autonomis-mo, se ha instalado en las relaciones laborales y con ella lafragmentacin de las clases trabajadoras que, en una situa-cin de paro, llega en algunas situaciones a rozar el racismoy la xenofobia.

    Pero lo que interesa aqu sealar es que tenemos que repen-

    sar el sindicato y su manera de volver a ser un instrumento deorganizacin y de luchas de las clases trabajadoras, en uncontexto socio-poltico y un marco laboral profundamentemodificados. Uno de los elementos de este cambio tiene queser la vuelta del sindicato al territorio, ya que la fbrica ya noes el centro y el motor de la organizacin y de las luchas obre-ras. Pero este no es tema para ser tratado ahora2.

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    1 En este sentido muy significativo el slogan del PSOE para las ltimas elecciones polticas: pelea por lo que quieres. Se usa la palabra pelea en vezde lucha y se pelea slo por lo que cada uno quiere; el horizonte colectivo, desaparecido...

    1 Me gustara que, para entender todo esto, pudieran ver la pelcula I compagni de uno de los maestros del neo-realismo italiano, Mario Monicelli.La pelcula narra las primeras luchas y organizaciones obreras en la Italia del norte a finales del siglo XIX.

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    Con esta somera aportacin slo se quiere subrayar que larealidad que estamos viviendo en el marco de la crisis no

    puede ser afrontada desde una perspectiva de avance y dejusticia social evitando, por ejemplo, que los costes repercutancomo casi siempre en los de siempre- de manera sectorial oparcial. La crisis es global y como tal hay que afrontarla. Loselementos que hemos intentado aportar identifican el terrenodel que tenemos que partir tanto para realizar un anlisis ade-cuado y actual de la realidad, como para ir construyendo una

    alternativa a esos factores que aparecen como dominantes.

    En mi modesta opinin este terreno es de la reconstruccin de

    la poltica por ende de los partidos y de los sindicatos- y delas relaciones con la ciudadana que tienen que ser bidirec-cionales y mucho ms dialctica de lo que han sido en elreciente pasado. La participacin es la clave del futuro, lasmasas ha sido la clave del pasado. La ciudadana es la deahora. u

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    Quizs debido a la posicin perifrica de Galicia para losmedios de comunicacin nacionales, se suele desconocer quealgunas de las polticas de privatizacin que a caballo de la

    crisis se aplican en las distintas comunidades autnomas, hansido ensayadas en esta Comunidad Autnoma por algunos desus impulsores actuales hace casi 20 aos. Se suele descono-cer tambin que estas tempranas iniciativas desencadenaronuna precoz oposicin y que todo lo relativo a las complejas ydiversificadas polticas de privatizacin de la sanidad publicaque tan novedosas suenan para los sorprendidos ciudadanosde otras CCAA, son hace tiempo relativamente familiares parala ciudadana gallega que ha protagonizado, liderada por lasPlataformas para la Defensa de la Sanidad Pblica(PDSP), las

    manifestaciones en defensa de la sanidad publica mas nume-rosas que Europa recuerda.

    Es por ello que Galicia tiene el inters de ser un pequeolaboratorio donde se han ensayado diversas iniciativas priva-tizadoras de la Sanidad Pblica y es a la vez por ello un campodonde la ciudadana, los profesionales sanitarios, los sindica-tos y tambin los partidos polticos progresistas, se hanfogueado en su defensa. Debido a estos antecedentes, laXunta de Galicia presenta quizs uno de los catlogos mascompletos y coherentes de las polticas de socavamiento, frag-mentacin y privatizacin de la sanidad publica en nuestropas, ocupando con frecuencia en dura competencia con laGeneralitat catalana, los ahora grandes titulares de losmedios de comunicacin.

    LA SANIDAD GALLEGA HOY:

    Un reciente informe de la FADSP(Federacin de Asociacionespara la Defensa de la Sanidad Pblica) acerca de la situacinSanitaria de las CCAA coloca a Galicia en los ltimos puestos,el 14 de los 171. Segn este informe Galicia carece de un nivel

    de recursos econmicos, materiales y humanos suficientes

    para atender las necesidades reales de la poblacin y sugasto sanitario es de 1266 euros por habitante al ao, pordebajo de la media estatal de 1271, ocupando el dcimo

    lugar. En lo referente a camas hospitalarias, aparatos de TAC,Tarjeta Sanitaria Individual (TSI) por mdico y por enfermerade AP, y mortalidad infantil, est en un rango medio/bueno,pero existe un gran dficit de camas para enfermos crnicos.

    El elevado gasto farmacutico fue de 333 euros por habitan-te en 2009, el ms elevado de todas las CCAA, que presenta-ron una media de 271. Ello se relaciona con la escasa pres-cripcin de genricos - la ms baja de todas las CCAA con un4,17% frente a 8,3 - y coloca a Galicia en el lugar 16 de 17CCAA lo que parece haber movido a la Consellera a adoptar

    algunas tmidas medidas para corregirla.La valoracin global del funcionamiento del sistema sanitariopor la ciudadana gallega en los diversos apartados es de lasms bajas del Estado. La situacin de las listas de espera ensus diversas variables ocupa el 15 lugar. La poltica de reduc-cin de actividad en los hospitales pblicos por la tarde y laparalizacin del Plan de Mellora de la Atencin Primaria,estn disparando las listas de espera en hospitales y la apari-cin de las mismas en este nivel asistencial.

    Pese a todo, la poblacin gallega apuesta por la Sanidad

    Pblica pues prefiere ser atendida por los servicios sanitariospblicos en una proporcin mayor que la media con 64,47%frente a 58,4% y ocupa el tercer lugar. Los datos que explicanla realidad sanitaria gallega son coherentes y a la vez pro-ducto de la historia de las ltimas dcadas; se trata de unacrnica subfinanciacin al igual que en otras CCAA, aquagravada por el envejecimiento poblacional y su dispersin enmultitud de pequeos ncleos rurales que alejan y encarecenla cobertura asistencial.

    A esta situacin se enfrent el gobierno bipartito PSOE-BNG

    2005/2009 con una poltica de incremento econmico entre

    cuadernodePOLTICAS DE SALUD ENERO 2012 | 9

    20 aos defendiendo la sanidad pblicaen GaliciaHixinio Beiras CalMdico, socio de la Asociacin Gallega para la Defensa de la Sanidad Pblica

    1 Los Servicios Sanitarios de las CCAA. Informe 2011 (VIII Informe) , Septiembre 2011

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    otros destinos, para el diseo de nuevos hospitales y el refuer-zo de la AP, el citado Plan de Mellora de la A Pque inyectaba

    recursos financieros para el aumento de profesionales, recur-sos tecnolgicos y una fuerte apuesta por la introduccin delas TICs con el fin de reducir tambin la carga burocrtica.

    LOS PRIMEROS PASOS EN LA FRAGMENTACIN,PRIVATIZACIN Y EN LA CREACIN DE UNAOPOSICIN:

    A mediados de los aos 90, el entonces consejero de Sanidadde la Xunta de Galicia y mas tarde ministro de Sanidad en elgobierno de Aznar, Romay Becara, impuls al frente de un

    equipo de jvenes polticos entre los que destacaba ya Alber-to Nez Feijo en la direccin del Servicio Galego de Sade(SERGAS), una batera de iniciativas novedosas como fueronla creacin de las denominadas fundaciones hospitalarias2

    u hospitales de gestin privada en alguna comarcas que care-can de centros hospitalarios comarcales, y tambin la crea-cin de Empresas Pblicas como el Instituto de Medicina Tc-nicamas conocido como MEDTEC, al que se le encargaron lasactividades de hemodinmica, ciruga cardiaca, radioterapiaoncolgica y otras actividades asistenciales de alto valor tec-

    nolgico ubicadas en el Hospital do Meixoeiro en la ciudad deVigo.

    Estas iniciativas fueron percibidas prontamente por los colec-tivos profesionales y por los sindicatos sanitarios como lapunta de lanza de una solapada privatizacin a caballo de laintroduccin de un espacio para la actividad del mercadosanitario. Entre otros aspectos perversos se introduca la frag-mentacin de la actividad asistencial, y se sustraa todo elproceso de gestin al SERGAS, as como la seleccin de per-sonal, las compras de tecnologa y del caro material fungibleque esas actividades requeran y prontamente fueron denun-ciados en los informes del Consello de Contas de Galicia, quedetectaba el ocultamiento a los mecanismos administrativosde control.

    Estas medidas que la administracin solo justific con vague-dades y wishful thinking o confusin de los deseos con larealidad, fueron el motor de un prolongado proceso de orga-nizacin de la oposicin que se articul alrededor de lanaciente Plataforma la para la Defensa de la Sanidad Publica

    de Vigo(PDSPV). Con la perspectiva histrica que proporcio-nan los ms de quince aos transcurridos desde entonces, la

    PDSP de Vigo constituye uno de los mas exitosos hallazgospara articular entonces, y ms an ahora en este momento deagresin a los servicios pblicos que el neoliberalismo bajosus diversas formas, -y cada vez menores disfraces mediti-cos- protagoniza con el pretexto de la crisis.

    La PDSPV integr con un funcionamiento democrtico alre-dedor del principio del mximo comn denominadoro mxi-mo nivel de acuerdo posible compartido por todas las organi-zaciones integrantes, a los sindicatos sanitarios, a los partidospolticos, a la Asociacin Galega para a Defensa da SanidadePblica AGDSP-FADSP, y de manera muy sealada al potentey organizado movimiento ciudadano de la ciudad y de lacomarca de la ra viguesa3. Se afan la PDSPV en el procesode conocer primero, analizar, y en una segunda fase, elaborarestrategias de comunicacin y de movilizacin teniendo a laciudadana como objetivo. Su mayor xito consisti en enten-der en esa tan lejana fecha los entresijos de estas polticascomplejas que los medios nos presentan ahora ya sin camu-flaje. Por entonces las experiencias privatizadoras no habansalido prcticamente del Reino Unido iniciadas en el periodoThatcher, y los primeros estudios publicados fueron de una

    enorme ayuda. En justo retorno, los expertos del R. Unidoobservaron con inters la respuesta articulada en Vigo4, algonovedoso que ellos lamentaron no tener en su pas.

    Tales anlisis eran para muchas de las personas consideradasexpertas objeto de desdn en un momento en que los deno-minados nuevos mtodos de gestin eran vendidos comouna panacea. Pero contaban por el contrario con el aprecio departe de crecientes sectores de la ciudadana del sur de Gali-cia. Conceptos tan complejos y de uso restringido como lapropia privatizacin sanitaria, las externalizaciones, la selec-

    cin adversa de riesgos, el mercado sanitario frente a derechoasistencial, los modelos de SNS, por citar algunos, empezarona ser familiares a lo largo de los aos. Y abrindose camino laimportante idea de que la sanidad pblica era y es un vulne-rable objeto de deseo, que debe ser defendido principalmen-te por quienes la financian y utilizan.

    La informacin, el conocimiento, la preocupacin por enten-der estas polticas sirvieron en los aos noventa de cimientoa la accin que se acompa de manera sorprendente inclu-

    cuadernodePOLTICAS DE SALUD ENERO 2012 | 10

    2 John Lister, pag 38 http://www.ofl.ca/uploads/convention/UKSTUDY.pdf3 Sanchez Bayle M, Beiras Cal H. J Public Health Policy. 2001;22(2):139-52. The peoples campaign against health care counter-reforms in Spain.4 Allyson Pollock. NHS Plc: The Privatisation of Our Health Care, pag. 210

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    so para sus propios impulsores, de crecientes y en ocasionesexitosas experiencias de movilizacin.

    UN PASO ADELANTE

    Las constantes y crecientes acciones cvicas y de los trabaja-dores de la sanidad pblica en contra de las polticas que lasFundaciones Sanitarias y MEDTEC representaban, supusieronla inclusin de su desmantelamiento en los programas delPartido Socialista de Galicia/PSOE y del Bloque NacionalistaGalego BNG, los dos partidos que ganaron las elecciones de2005, y fueron casi necesarios los cuatro aos de una legisla-tura para desmontar su enmaraado entramado jurdico y

    financiero. Igualmente la antigua reclamacin formulada porla PDSPV de un nuevo gran hospital para la demogrfica-mente pujante rea de Vigo, de referencia para todo el sur deGalicia, encontr acomodo en los programas del gobiernobipartito.

    http://www.lavozdegalicia.es/hemerote-ca/2001/02/24/439157.shtml

    Justo es decir que su diseo se vio torpedeado por los secto-res que en el seno del propio PS de Galicia eran mas bien pro-clives a las medidas pro mercado sanitario, tanto desde el lici-to punto de vista ideolgico como desde el de posibles inte-reses econmicos particulares. Estas posiciones mas pro mer-cado en el PS de G, en el grupo parlamentario y en el seno dela Consellera y del propio gobierno de la Xunta por un lado,y algunos sectores mas socialdemcratas y pro sanidad pbli-ca aunque quizs insuficientemente mayoritarios, por otro, seenredaron con un debate no explcito que demor lo suficien-te alguna de la iniciativas gubernamentales como sta tandecisiva de la construccin del NH de Vigo.

    http://www.farodevigo.es/opinion/2787/hospital-

    pfibr/94375.html

    Todo ello practicando el gobierno bipartito una poltica sani-taria justo es decirlo, mas progresista que la comn en lasCCAA donde el PSOE gobernaba, en un momento inicial en elque el debate publico/privado en el mbito sanitario no apa-reca para el PSOE tan claro como parece comenzar a tenerloen el presente. Debido a todo ello la nueva Xunta del PartidoPopular se encontr en la primavera de 2009 con la jugosaoportunidad de licitar su construccin bajo la contestada fr-mula de Colaboracin Publico/Privada o PFI.

    http://www.fadsp.org/pdf/PFI.pdf

    Una modalidad que se prev afecte tambin al nuevo hospi-tal de Pontevedra y a los futuros Centros de Salud que pue-

    dan construirse. Ambos asuntos han jugado un enorme papelcomo ms abajo se detalla en las movilizaciones del sur de

    Galicia y en la extensin de las PDSP al resto de la C. Aut-noma. Un gran paso en este camino ha sido la natural cons-titucin de un nivel de coordinacin autonmico de la cre-ciente cantidad de Plataformas que aparecieron a lo largo delos aos con la constitucin de lo que en aras de su facilidady adecuacin meditica, se ha llamado SOS SANIDADEPBLICA.

    UN PASO ATRS AL INTRODUCIR EL MERCADO EN LASANIDAD PBLICA GALLEGA:

    Desde el triunfo electoral del Partido Popular, la Xunta deGalicia viene desarrollando una estrategia dirigida a estran-gular econmicamente, deteriorar, debilitar fragmentando,abrir ms la puerta al mercado descapitalizando y en definiti-va a privatizar el sistema sanitario pblico. Son multitud lasdiferentes iniciativas, con muy distintas caractersticas perjudi-ciales de muy diversa intensidad y de actuacin a diferentesniveles pero que conforman una pinza que acosa a la SanidadPblica.

    UNA PERVERSA POLITICA DE COMUNICACION

    Es de destacar que todas las medidas del nuevo gobierno dela Xunta han ido acompaadas de una constante transver-sal que modula todas las polticas que cuentan con oposi-cin o al menos prevencin por parte de la opinin publica: laperseverante poltica de confusin en los medios, con decla-raciones irregulares que funcionan como globos sonda yque son inmediatamente desmentidas cuando se levanta laprevisible polvareda meditica. Tambin la tan fcil distorsin,la demora, medias verdades en la presentacin de los datostcnicos de difcil comprensin, especialmente los econmicoso los relativos a la listas de espera. A titulo de ejemplo, esteprrafo extrado de la prensa:

    La gerente del Servicio Galego de Sade, Roco Mosquera,resalt la semana pasada, en la presentacin de ese estudiosemestral, que la actividad quirrgica aument en un 22%en jornada ordinaria, con 3.482 intervenciones ms que en elmismo periodo de 2010. Y precis que el rendimiento, del75,6%, se sita por encima del estndar, que es del 75%.Mosquera no explic el proceso que hace posible que aumen-

    te el rendimiento quirrgico suprimiendo las peonadas. Losrepresentantes de los trabajadores de estos hospitales sostie-nen que la gerente del Sergas ofreci un dato impreciso.

    cuadernodePOLTICAS DE SALUD ENERO 2012 | 11

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    http://www.elpais.com/articulo/Galicia/Sergas/reduce/peon-adas/deriva/operaciones/privada/elpepuespgal/20110729elp-

    gal_6/TesSe trata de una vieja manera cada vez mas familiar para laopinin pblica de intentar introducir disfrazado todo lo queesta puede considerar negativo; unos mtodos que ya eranhabituales durante los gobiernos de la poca de ManuelFraga. Los Defensores de la Sanidad Pblica (DSP) estabanfamiliarizados con esa tctica cuyas fases son inicialmenteignorar sus argumentos, tratarlos paternalmente luego comoequivocados o carentes de informacin cuando se abrencamino en los medios, y cuando stos son evidentes e incon-testables, intentar descalificarlos atribuyndoles interesespolticos y partidistas. Tambin es destacable y sorprendenteel hecho de la habitual carencia de argumentacin slida ysustentada por datos y no por el ya citado wishful thinking.La evidencia y los datos siempre estn del lado de los DSP.

    LOS RECORTES ECONMICOS SANITARIOS

    Una de las ms universalmente comunes polticas de privati-zacin es el recorte en la financiacin5 y la Consellera deSanidade, fiel a la norma, ha reducido, por primera vez en su

    historia el presupuesto destinado a sanidad para el ao 2010,alegando falta de recursos como consecuencia de la crisiseconmica.

    Este recorte se ha traducido ese ao en la paralizacin delPlan de Mellora de APque tena previsto crear 450 plazas enAP en el 2009 y la no renovacin de ms de 100 contratos demdicos de hospital. Tambin la paralizacin de la actividadde los hospitales por la tarde y el Plan de Reduccin de las Lis-tas de Esperacomo ms abajo se detalla.

    En la centrifugacin del conflicto y de la consiguiente apari-cin de nuevas PDSP comarcales desempearon un importan-

    te papel la paralizacin de las obras de ampliacin del Hospi-tal de la comarca del Salns en la ra de Arousa y el cierre delaboratorios y la desaparicin de su rea sanitaria. Tambin ladesaparicin de la de Monforte y la paralizacin del equipa-miento de su hospital entre otros muchos asuntos.

    http://www.youtube.com/watch?v=9c5VQpay9W0

    Y en un mbito menos local, la rescisin de los acuerdosalcanzados con los sindicatos en las Mesas Sectoriales quecontemplaban mejoras salariales, el desarrollo de la carreraprofesional, la aplicacin de horarios por la tarde para elimi-

    nar las peonadaso lo referido a la dedicacin exclusiva.

    LA REDUCCION DE LA AUTOCONCERTACIN Y ELINCREMENTO DE LA EXTERNALIZACIN:

    La reduccin de los gastos salariales y de ellos los mas fcilesde suprimir, fueron los primeros recortes. De tal forma la auto-concertacin o peonadasse suprimieron prontamente con lasafirmaciones no exentas de demagogia para los DSP y para elcolectivo profesional al afirmar que su suspensin se deba aque se pagaba por la tarde lo que no se realizaba por lamaana.

    http://www.abc.es/20090828/galicia-galicia/puede-pagar-tarde-hace-20090828.html

    http://www.elcorreogallego.es/index.php?idMenu=5&idNoti-cia=611177

    http://www.elpais.com/articulo/Galicia/Sergas/reduce/peon-adas/deriva/operaciones/privada/elpepiautgal/20110729elp-gal_6/Tes

    El anulado programa de Autoconcerta-cin PERLE (Programa Especial deReduccin de Lista de Espera) significa-ba solo en el rea de Vigo como ejem-plo, realizar 6.000 intervenciones qui-rrgicas al ao que en ningn caso lasentidades privadas podan asumir. Estodio lugar a que en el periodo de dosaos las listas de espera se duplicasen,pasando en la actualidad de 19.000 lospacientes en L.E. con demoras superio-

    cuadernodePOLTICAS DE SALUD ENERO 2012 | 12

    5 Milton Terris, The neoliberal triad of Anti-Health reforms: Government Budget Cutting, deregulation, and privatazation)

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    res a los 5 aos. La ausencia de transparencia de la Adminis-tracin es evidente, al negar cualquier cifra del Registro o

    lista total- y dar solo las cifras de la Lista de Espera Estructu-ral (pendiente hasta los 180 das) oculta el grueso en la listade espera no estructural. El mal resultado y la demora lleva-ron a la Consellera de Sanidade a introducir nuevamentepara ciertos servicios la autoconcertacin.

    http://www.laopinioncoruna.es/sociedad/2010/04/17/sanidade-recupera-peonadas-bajar-lista-espera-pagara/376157.html

    Todo lo relativo a las listas de espera sufre grandes anomal-as que los DSP califican como maquillaje, lo que les anim a

    presentar una demanda ante el valedor del pueblo.http://www.radioobradoiro.com/portada/ro/denuncian-decre-to-permite-maquillar-listas-espera/idEdicion-2011-05-05/idNoticia-665884/

    LO PRIMERO, DESARBOLAR LA ATENCION PRIMARIA :

    La movilizacin unitaria de los profesionales y organizacionesde la A.P, y la poltica del gobierno bipartito, estuvo dirigida aconseguir los recursos, cambios organizativos y funcionales

    que permitieran dotar a la AP de la capacidad resolutiva y lacalidad asistencial necesaria para ser el eje del sistema, algoque frecuentemente se proclama pero raramente se hace.Resultado de ello fue el ya citado Plan de Mellora de AP, ela-borado y consensuado por las organizaciones de AP en lneacon la Estrategia AP21.

    http://www.sergas.es/gal/DocumentacionTecnica/docs/Aten-cionPrimaria/PlanMellora/PropTransAPGal.pdf

    http://diariodeunmedicodeguardia.blogspot.com/2011/10/atencion-primaria-en-galicia-en-outono.html

    Con la llegada de la actual Consejera de Sanidad la situacinexperiment un cambio sustancial: se introdujo un recorte enel presupuesto de AP (21,7% en los dos ltimos aos) muylejos del 2,3% de reduccin en la Atencin Hospitalaria. Elloparaliz la aplicacin del Plan de Melloraa pesar de que que-daban por crear 193 plazas de mdicos de familia, 40 depediatra o 915 de todas las categoras profesionales; se dejde invertir el 60% de lo presupuestado o se mantuvieron laslimitaciones en el acceso a los recursos diagnsticos.

    En las nuevas gerencias nicas desaparece la AP que queda-

    r sometida a los gerentes de los hospitales de rea. Estosupone que la AP quedar sin posibilidad para gestionarse

    autnomamente, conseguir recursos, o para controlar los pro-cesos asistenciales. Con esta medida la administracin sanita-ria gallega abandona el objetivo de que la AP sea algn da eleje del sistema sanitario.

    Tambin es reseable que dos planes estrella del gobiernobipartito, el Plan de Salud Mentaly el Plan de Atencin a laSalud de la Mujer, han sido ambos dejados de lado, discrimi-nando a juicio de la AGDSP an ms a estos colectivos.

    CONSUMO DE MEDICAMENTOS Y TECNOLOGA ENGALICIA:

    Galicia es la CCAA con mayor gasto en medicamentos, con332,26 euros en gasto farmacutico pblico por habitante.Solamente de tener un gasto similar a la CCAA con menorconsumo (Baleares, 198 euros/habitante) el ahorro anualsera de 374 millones de euros, lo que cuesta un gran hospi-tal. Paralelamente el consumo ms bajo de envases de gen-ricos se encuentra en Galicia (9,79%), frente a Andaluca(29,86%), la de mayor consumo. Segn un informe reciente

    de Farmaindustriatodas las CCAA han sido capaces de recor-tar el gasto farmacutico pblico, a excepcin de Murcia yGalicia, la que a pesar de tanto ajetreo, aunque a un ritmoinferior a ejercicios anteriores, sigue incrementando su gastofarmacutico.

    En general, en lo referido a la Alta Tecnologa, toda Espaaaumenta un 49,53% en nmero de estudios por habitante enAlta Tecnologa Diagnstica (ATD) desde 1999 hasta 2004,pero se puede comprobar como la comunidad Gallega es lacomunidad que ms ha crecido en el nmero de pruebasentre 1999 y el 2004, con un 181,5% de crecimiento, mien-tras que Navarra y Baleares son las que han sufrido una dis-minucin de pruebas, un -2,53% y un -0,60% respectiva-mente. Hay que tener en cuenta que Galicia tiene el gastoms alto de Espaa, que a su vez tiene un gasto en tecnolo-ga sanitaria muy por encima de la media de los pases euro-peos (en el ao 2005 fue de 5,5 mM de euros en Espaa, el8,2% del gasto total en salud del pas, siendo la media de lospases europeos de 6,3%) 6

    Un reciente estudio de instituto Healthcare Improvement titu-lado The triple Aim (triple objetivo) considera que para el

    cuadernodePOLTICAS DE SALUD ENERO 2012 | 13

    6 Libro blanco Lpez i Casasnovas. Gestin Sanitaria. Jano.es 23 de junio de 2011

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    incremento de la mejora de la salud de la poblacin debereplantearse la prctica mdica y cada vez ms autores consi-

    deran que no es el envejecimiento de la poblacin sino que esel uso y abuso de las tecnologas, uno de los factores princi-pales en el crecimiento del gasto sanitario presente y futuro.

    Y en sentido contrario, segn el informe Europa 2020 rea-lizado en 2010 por Euromed (Asociacin Europea de Tecnolo-ga Mdica) es primordial incrementar la competitividad ensectores que han mostrado un crecimiento sostenido, como elde los dispositivos mdicos, para que Europa salga fortalecidade la crisis, ya que adems este sector tiene la ventaja de decontar con un ciclo de vida promedio de solo 18 meses antesque se presente una mejora del producto disponible, lo quederiva en un mayor dinamismo y crecimiento para la indus-tria. Este sector es el segundo en el mundo, despus del deEEUU 7

    LA PRIVATIZACIN DE LA ALTA TECNOLOGIA:

    Por si lo que antecede no fuera suficiente, el Partido Popularha aprobado el pasado 27 de septiembre una Proposicin Node Ley para implantar un modelo de gestin que permitarenovar la alta tecnologa de los centros hospitalarios a la que

    denomina frmula del dilogo competitivo, para la adqui-sicin de equipos tecnolgicos y su mantenimiento.

    http://www.farodevigo.es/galicia/2011/09/28/sergas-usara-modelo-publico-privado-renovar-equipos-hospitales-200-mil-lones/583803.html

    Esta Ley supone una nueva vuelta tuerca en la extensin de lacolaboracin pblico-privada, en este caso aplicada a la reno-vacin de los equipos de alta tecnologa como TAC, resonan-cias magnticas, radiografas digitales o mamografas en loscentros hospitalarios pblicos, que comenzar por el equipa-

    miento del Nuevo Hospital de Vigo y de tres centros de altaresolucin (CAR) proyectados para Galicia con un coste deunos 200 millones de euros.

    Segn este sistema ya no sern los tcnicos del Sergas los quedefinan mediante concurso, qu aparatos necesitan los hospi-tales pblicos, sino las propias empresas que participarndirectamente en la elaboracin del contrato, establecern lascaractersticas de los aparatos que ellas mismas proporciona-rn a la Administracin pblica y que financiarn y gestiona-rn. Se eliminan de tal forma los mecanismos de la funcin

    pblica que obligan a que los concursos de adjudicacin ycompra de equipamiento, se atengan a los principios de

    transparencia, eficiencia y libre concurrencia. No es difcilque cedindoles los servicios tecnolgicos, las empresas queya son arte y parte, tendrn mayor poder de decisin en lascompras y sus costes, que de acuerdo a la experiencia euro-pea y espaola, multiplican varias veces los costes reales.

    ..Y TODA LA LOGSTICA DE COMPRAS YDISTRIBUCIN

    Estos pequeos empujones hacia el mercado pasan uno a unodesapercibidos, pero vistos en conjunto conforman una peli-

    grosa estrategia que va entregando sucesivas parcelas depoder a las empresas. As se pretende adjudicar a una empre-sa privada el Servicio Logstico Integral del SERGAS, la gestindel almacenaje, la distribucin del aprovisionamiento, la ges-tin operativa, construccin de la plataforma y almacenes delos centros sanitarios; compra y gestin de farmacia, materialquirrgico, laboratorio, implantes, prtesis, ortopedia, lence-ra y otros materiales como limpieza, oficina, etc. En una pala-bra, que se cede a la iniciativa privada la gestin de la Cen-tral nica de Comprasde material y equipamiento de los cen-

    tros sanitarios.La medida pondr en manos privadas un servicio estratgicopara la Sanidad Pblica como es la gestin de las compras delSERGAS: Esto proporcionar una informacin privilegiada alas empresas adjudicatarias para hacer negocio con dineropblico, favorecer irregularidades y abusos, y les otorga lacapacidad de bloquear el funcionamiento de los serviciossanitarios ya en peligro por la privatizacin de la gestin delos servicios de informtica.

    http://www.farodevigo.es/galicia/2011/04/18/xunta-preve-

    privatizar-suministro-material-sanitario-hospitales-ambulato-rios/536928.html

    Resulta peculiar que se pretendan destinar ms de 98 millo-nes de euros en contratar una empresa privada para realizaruna actividad que se podra realizar perfectamente con lospropios medios sin coste adicional alguno. Hay que recordarque, alegando la falta de dinero por la crisis econmica, elSERGAS ha reducido este ao su presupuesto en 100 millo-nes y paralizado el Plan de Mellora de Atencin Primariaquecostaba nicamente 62 millones

    cuadernodePOLTICAS DE SALUD ENERO 2012 | 14

    7 El Hospital. Abril 2010

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    EL CIERRE DE LOS SERVICIOS DE RADIOLOGA DE LOSHOSPITALES COMARCALES

    La Consellera de Sanidade ha optado por crear tres manco-munidades radiolgicas en otras tantas comarcas gallegassuprimiendo guardias de radiologa por la tarde y concen-trndolas en un solo hospital, lo que supone dejar sin radio-loga de urgencia a estos centros.

    http://www.lavozdegalicia.es/gali-cia/2010/05/05/0003_8463183.htm

    La ausencia de especialista implica que los estudios ecogrficossean enviados al hospital de referencia y los opositores estimanque esta medida tendr importantes consecuencias para la cali-

    dad y la seguridad los servicios de urgencias. Ello adems harimposible realizar ecografas que son pruebas muy necesariasen la atencin urgente, lo que tendr importantes consecuen-cias al alejar estas tcnicas de los pacientes. Los opositores,usuarios y profesionales, estiman que cerrar los servicios deradiologa de estos hospitales por las tardes supone un primerpaso en la estrategia de privatizarlos, como ha ocurrido en lasComunidades de Madrid, Valencia o La Rioja, donde gobiernael Partido Popular, en las que los nuevos hospitales carecen deradilogos y su actividad est siendo sustituida, en muchos

    casos, por servicios privados externos.

    RECORTES A LA LEY DE DEPENDENCIA/ATENCIONSOCIOSANITARIA8

    En contra de lo que dicen los sectores que desean introducirrecortes en los servicios sociales por su elevado coste en dine-ro y personal, el sector pblico en nuestro pas est poco des-arrollado y nuestro Estado del Bienestar es aun dbil: El gastosocial representa el 30,6% del PIB frente al 24,7% de los pa-

    ses de la Unin Europea desarrollada (UE-15), mientras que elporcentaje de la poblacin que trabaja en los servicios pbli-cos del Estado del Bienestar es el 9% frente al 15% de la UE-15%, lo que nos coloca a la cola de la Europa desarrollada.La Ley de Dependencia tiene una financiacin incierta porquenaci sin que tuviera asegurada una fuente de financiacin ycorre a cargo del Estado Central, las CCAA y los usuarios. LaXunta redujo el presupuesto para la Dependencia al 30%(debera ser el 50%) y paraliz el desarrollo de las mismas,

    poniendo en riesgo el futuro de la propia Ley. Adems esteao la Xunta recort las subvenciones que concedan al servi-

    cio de ayuda en el hogar que prestan los ayuntamientos(cerca del 80%), lo que hace imposible mantener la ayuda adomicilio a los dependientes dado que estos no tienen ingre-sos para sufragar el servicio.

    En Galicia existen 292 mil personas con discapacidadesmayores de 6 aos, de los que reciben ayuda a la dependen-cia el 36,6% del total. La mayor tasa de discapacidad delEstado se da en Galicia (112,9 por mil habitantes), seguida deExtremadura (109,9). Las polticas de recortes de gasto de laXunta de Galicia estn dejando sin atencin a un importantenmero de personas discapacitadas que tienen derecho a lamisma y que se eternizan en listas de espera. Galicia ocupa eltercer lugar en personas discapacitadas en lista de espera (el40% de los beneficiarios potenciales), consecuencia de laparalizacin del desarrollo de la Ley de Dependencia por losrecortes presupuestarios introducidos por la Xunta.

    La apuesta por la atencin a cargo de los familiares condicio-na que esta sea de baja calidad y la soporten como ha suce-dido siempre, las mujeres de la familia. El perfil del cuidadorprincipal es una mujer, de entre 45 y 64 aos y las personasque prestan cuidados tienen dificultades para desempear las

    tareas y se ven afectadas en su salud y vida personal. Pagar aun familiar es mucho mas barato que la atencin a cargo deun servicio profesional cualificado con los recursos tcnicosadecuados (520 euros al mes frente a 1.800): en los ServiciosResidenciales las CCAA aportan el 52% del coste de la pres-tacin, la administracin Central el 18% y el beneficiario el30%. Esta frmula, que permite a la Consellera reducir aunms los ms gastos, hace que se pierda una importante opor-tunidad de general empleo de calidad para los jvenes. Unaltima razn por la que la Xunta pretende que la atencin a

    la dependencia corra a cargo de familiares es que al fidelizar-los polticamente, reproduce una vez ms el viejo caciquismogallego.

    EL GRAN TEMA: LA CONSTRUCCION DE HOSPITALESVIA PFI:

    Mas all de las ultimas iniciativas que han saltado escandalo-samente a los medios de comunicacin, como son las inten-

    cuadernodePOLTICAS DE SALUD ENERO 2012 | 15

    8 Encuesta sobre Discapacidades, Deficiencias y Estado de Salud (INE), Observatorio Discapacidad M d Sanidad; Eurostat; Encuesta de Discapacidad,Autonoma personal y situaciones de Dependencia. (INE); Memoria Econmica de la Ley de Dependencia; Vicente Navarro revista digital SISTEMA;Memoria econmica pata la Financiacin del Sistema del Sistema para la Autonoma y Atencin a la dependencia; Instituto Nacional de Estadstica:Panorama de la Discapacidad en Espaa; Informe implantacin del Sistema de Dependencia por Comunidades Autnomas CCOO

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    ciones de introducir el copago en los servicios de hostelera alos pacientes ingresados y la retirada de la tarjeta sanitaria a

    desempleados y dificultrselo a los inmigrantes y retornadosde reciente empadronamiento, uno de los principales y masmovilizadores conflictos de estos aos ha sido el comienzo dela construccin del Nuevo Hospital de Vigo por la va de la PFIy la intencin de hacerlo tambin con el de Pontevedra y losCentros de Salud.

    Nada mas hacerse cargo el Partido Popular del gobiernogallego, pone fin a los acuerdos del Gobierno bipartito deFebrero de 2009 para que la financiacin y construccin delos nuevos hospitales de Vigo y Pontevedra corriera a cargo dela Sociedad Pblica de Inversiones(SPI). Y a continuacin laConsellera asigna su financiacin, construccin y gestin par-cial a consorcios privados para que los exploten durante 20aos siguiendo el conocido modelo PFI vigente en Madrid yValencia.

    http://www.lavozdegalicia.es/vigo/2010/02/01/0003_8265785.htm

    http://www.elpais.com/articulo/Galicia/nuevo/hospital/Vigo/costara/450/millones/modelo/PP/elpepuespgal/20100531elp-gal_2/Tes

    La PFI o iniciativa de financiacin privada, argumenta laPDSPV, multiplica los costes de los centros, reduce los recur-sos disponibles, empeora la calidad constructiva y del equipa-miento y genera un enorme endeudamiento pblico, como haquedado constatado en numerosas evaluaciones indepen-dientes, entre ellas la de la Organizacin Mundial de laSalud.

    http://www.europapress.es/galicia/noticia-sos-sanidade-pub-lica-asegura-financiacion-publico-privada-hospital-vigo-oscu-rantista-mas-costosa-20110803194016.html

    Para entender la importancia de este asunto debe tenerse encuenta que este nuevo hospital haba sido una tempranademanda de la PDSPV formulada a travs de un informe porella realizado para evaluar los recursos sanitarios en el reade Vigo en 2000 (informe REVISAN 2000). Una demanda queencontr acomodo en los programas electorales con los quePSG y BNG se presentaron a las elecciones de 2005.

    http://www.lavozdegalicia.es/hemerote-ca/2001/02/24/439157.shtml

    El gobierno bipartito dio impulso al proceso del Plan Estrat-gico y del Plan Funcional, con el diseo arquitectnico pacta-do servicio a servicio y finalmente, tras la eleccin del mejorproyecto constructivo, el proceso qued listo para la l icitacin

    justo antes de las elecciones que dieron la victoria al PP.

    Hoy puede considerarse desde el punto de vista de los DSP

    que el bipartito cometi el error de no apurar todo el procesoy proceder a la licitacin antes del cambio de gobierno.

    http://www.outrovigo.com/pdf/Plataforma.pdf

    La prevista financiacin de 300 millones en Vigo (que segnlos propios clculos de la Xunta ascendern a 957 millones)pueden alcanzar los 2000 millones al finalizar los 20 aos dela concesin. Adems de la forma de financiacin, el NuevoHospital de Vigo, entre otras prdidas relevantes como elmdulo de investigacin y docencia, contar con menoscamas, pasando de las 1400 previstas por el bipartito a unas

    900, como a pesar de las negativas de la Xunta se demostren la pgina Web de GERENS HILL, la empresa titular de laconcesin para la supervisin de la obra. Resulta demostrati-vo de esa antes citada poltica de comunicacin que tras sal-tar la noticia a los medios, desaparezca de la citada pginatoda referencia al proyecto. La referencia eliminada deca:

    Hill International seleccionada para gestionar la construccindel nuevo Hospital de Vigo en Espaa(http://www.geren-shill.com/proyectos_detalle.php?id=167&lan=)

    Marlton, Nueva Jersey y Vigo-Galicia, Espaa, 31 de enero2011 (GLOBE NEWSWIRE) - Hill International (NYSE: HIL),lder mundial en la gestin de riesgo de la construccin, anun-ci hoy que su filial con sede en Madrid Gerens Hill Interna-tional ha sido adjudicado un contrato por el Consorcio NovoHospital de Vigo, SA para prestar asistencia tcnica y serviciosde vigilancia durante la construccin del nuevo Hospital deVigo en Vigo, Galicia, Espaa. El contrato de dos aos tieneun valor estimado de la colina de aproximadamente 2,7millones ($ 3,7 millones).

    El Hospital de Vigo, que se ubicar en Vigo, Galicia, Espaa,

    tiene un costo estimado de construccin de aproximadamen-te315 millones ($ 432 millones).

    El nuevo hospital dar servicio a una poblacin de unas600.000 personas y tendr capacidad para 900 camas, 35quirfanos, 160 consultas mdicas externas y 62 salas deanlisis de imgenes. Adems de proporcionar servicios parael nuevo Hospital de Vigo, Gerens Hill se prestan serviciospara el desarrollo de los documentos de diseo tcnico, el edi-ficio en forma de salida, mantenimiento, conservacin y fun-cionamiento general de las instalaciones del edificio, as como

    la financiacin del desarrollo del proyecto los costos.

    http://misaludnoesunnegocio.net/actualidad.php?p=7545&more=1&c=1&tb=1&pb=1

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    No es banal a propsito de Gerens Hill internacionalrecordarque en el Consejo de Administracin de Concessia est su

    Consejero Director, que interviene en el grupo constructor detres de los nuevos hospitales PFI de Madrid y es accionista delas cajas de ahorros citadas a continuacin, cuyos directorestambin forman parte del consejo de administracin de Con-cessia, que forma parte de la UTE seleccionada para la finan-ciacin del Nuevo Hospital de Vigo (NHV).

    Caja Badajoz y Caja Crculo, cajas de ahorros de la IglesiaCatlica (en unin con Caja Inmaculada, forman la Caja 3

    Banco de Sabadell (fusionada con otras entidades catalanasen el grupo UNNIM) y Caja de Ahorros del Mediterrneo

    CAMInvernostra de Sa Nostra(caja de ahorros de Baleares), formaparte del grupo BMNe Ibercaja

    Bankiagrupo de cajas de ahorros (Caja Madrid, Bancaja, Cajade Canarias, Caja Rioja. Caixa Laietana, Caja de vila, y CajaSegovia) que comenz a operar en enero de 2011 con la ase-sora de Price Waterhouse Coopersy cuyo director es RodrigoRato.

    Resulta para algunos evidente que toda esta reduccin del NHde Vigo se debe al deseo de que el hospital privado POVISAconserve la atencin de unas 140 mil personas del rea queel actual concierto singularle garantiza y que un gran hospi-tal de 1400 camas pondra en peligro. En Pontevedra el cam-bio consiste en renunciar a la gran ampliacin del hospital deMontecelo que el gobierno bipartito haba preparado, apla-zndose por tiempo indefinido el inicio de la obra que debe-ra haberse iniciado el 2009; se reducen las camas previstas yse mantendr el fraccionamiento de los recursos en varioscentros separados por kilmetros de distancia. Todo estdiseado para renunciar al actual hospital y a su gran amplia-

    cin y demorar todo el proceso con el lejano y virtual proyec-to de un hospital de nueva construccin financiado va PFI. Yello se debe a que esta modalidad aplicada a una ampliacinde un hospital pblico ya existente, excesivamente compleja.

    La financiacin 99 millones de euros previstos para Ponteve-dra pueden tambin alcanzar los 2000 millones, al recurrir ala financiacin privada.

    El proceso de Vigo inicialmente y el de Pontevedra poco des-pus, estimularon las campaas de ambas plataformas quelograron reunir miles de personas en Vigo,

    http://blogs.lavozdegalicia.es/videoblog/2010/03/25/%C2%ABa-privatizacion-da-sanidade-perxudica-seriamente-a-

    saude%C2%BB/Y en Pontevedra tambin en una de las mayores manifesta-ciones que la ciudad recuerda con miles de manifestantes, conla participacin de los alcaldes de las capitales de rea y delos de multitud de ayuntamientos provinciales que se sintie-ron concernidos9. No es extrao que los DSP consideren quese tratan como avanzbamos, de las mayores manifestacionesque la Unin Europea recuerda en defensa del SSP y en con-tra de su privatizacin.

    http://www.elpais.com/fotografia/Galicia/Manifestacion/pri-

    vatizacion/hospital/Vigo/elpdiaaut/20100326elpgal_1/Ies/http://www.elpais.com/articulo/Galicia/Decenas/miles/per-sonas/rechazan/capital/privado/financie/hospital/Vigo/elpepi-autgal/20100326elpgal_1/Tes

    http://www.lavozdegalicia.es/vigo/2010/03/25/00031269550411180120426.htm

    http://www.farodevigo.es/gran-vigo/2010/03/25/50000-per-sonas-piden-hospital-publico-vigo/423653.html

    http://www.outrovigo.com/pdf/Diptico.pdf

    Se pretende a criterio de los DSP aplicar un modelo parafinanciar y construir los nuevos centros que multiplica porsiete sus costes en una situacin de crisis econmica que seutiliza para justificar importantes recortes del gasto sanitarioque estn repercutiendo sobre los pacientes que soportanmayores listas de espera) y sobre los sanitarios que han per-dido puestos de trabajo, incentivos e ingresos. Los nicosbeneficiarios de esta poltica estiman, son las empresas pri-vadas (constructoras, aseguradora y bancos) que levantarn ygestionaran los nuevos centros con dinero pblico.

    http://m.publico.es/410891

    Alrededor del complejo y tcnico asunto de la PFI que las Pla-taformas explicaron recurriendo a todas las modalidades posi-bles, gir en estos dos aos el ncleo de la oposicin a la pol-tica sanitaria del gobierno Popular.

    http://www.elcorreogallego.es/index.php?idMenu=5&idNoti-cia=613653

    http://canarias_islas.satse.es/comunicacion/noticias/el-tsjg-admite-a-tramite-el-recurso-de-la-pdsp-contra-la-resolucion-

    del-sergas-que-deja-en-manos-privadas-el-hospital-de-vigo

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    9 http://privatizationhealthobservatory.eu/manifestos/more-forty-thousand-protesters-against-private-management-santiag

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    Resulta sorprendente para los propios DSP en primer lugar,que un asunto tan complicado se haya ido aclarando para la

    opinin pblica y tambin para las direcciones de los partidosde la oposicin y las propias bases sindicales de sectores nosanitarios, y que con el concurso de una progresiva atencinpor parte de los medios, haya generado un inesperadoambiente de oposicin, colocando los recortes y la privatiza-cin de la sanidad publica en la agenda de la ciudadanagallega.

    http://fadsp.org/pdf/Nota%20para%20FADSP%20acer-ca%20concesion%20V%20Distinguidos.doc?codi-go=3693&cod_primaria=1171&cod_secundaria=1171

    Parece claro para la PDSP de Galicia, que la Xunta pretendeadems de beneficiar al los sectores privados afines al Parti-do Popular, iniciar el desmantelamiento del sistema sanitariopblico: este partido ya est utilizando en Valencia y enMadrid el mensaje de que para evitar la quiebra econmicadel sistema (por los sobrecostes de la financiacin privada) lanica alternativa sera reducir actividad asistencial, despedirpersonal, reducir sus sueldos, introducir el copago y acabarcon la universalidad asistencial introduciendo seguros com-plementarios para determinadas prestaciones.

    LOS INTERESES QUE HAY DETRS DE LASPROPUESTAS PRIVATIZADORAS DE LA SANIDAD

    A lo largo de los ltimos aos en modelo de PFI, o la llamadaPPP o colaboracin- participacin publico/privada se ha con-vertido en un conocido mtodo de financiacin para abordarla construccin de todo tipo de infraestructuras que ha salta-do del exclusivo campo de los expertos a la opinin pblica.Esta ve claro en gran medida, que se trata de que los gobier-nos puedan dotarse de infraestructuras en el corto plazo de

    un legislatura para poder inaugurarlas y rentabilizarlas electo-ralmente, sin la penosa contrapartida de su pago que setransmite ilcitamente a las generaciones futuras10, algo quetodo el mundo sabe es una trampa contable para obviar loslimites del Tratado de Maastricht, y ms ahora que la crisis hadestapado el endeudamiento autonmico.

    Adems de lo que antecede, son numerosos los escritos en laliteratura internacional que desaconsejan el mtodo de PFI,especialmente y ms all de sus perversidades econmicas,por la complejidad e hipotecas que supone su aplicacin al

    campo de las infraestructuras sanitarias, especialmente a laconstruccin de los grandes hospitales pblicos. Pero tambin

    son bien conocidas las experiencias en nuestro pas en la CAde Madrid y en la de Valencia por colocar a su sistema sani-tario al borde de la bancarrota.

    Resulta esclarecedora la investigacin de la Dra. ML Loresacerca de los intereses econmicos que estn detrs de la PFIen el caso del Nuevo Hospital de Vigo y que claramente danla razn a los DSP, quienes argumentan que detrs de toda lachchara seudo econmica acerca de las bondades de la PFI,lo que hay es el deseo de las grandes empresas de hacer unbuen negocio con los fondos pblicos destinados a la sani-dad, a la vez que se descapitaliza y debilita al SSP con la com-plicidad de las administraciones sanitarias, comprometiendosu futura sostenibilidad.

    http://www.nuevatribuna.es/opinion/luisa-lores/2011-12-09/los-intereses-que-hay-detras-de-las-propuestas-privati-zadoras-de-la-sanidad/2011120913314400637.html

    Afirma en su escrito: Las entidades que forman RiberaSalud, La CAM (Caja de Ahorros del Mediterrneo) y Banca-ja, integradas en Concessia Cartera, forman parte de la UTEseleccionada para la financiacin del Nuevo Hospital de Vigo

    (NHV) gracias a la intervencin de la consultora PwC que reci-bi de la Xunta de Galicia 220.000 euros por la asesora deesta adjudicacin, realizada en diciembre de 2010[2]. Sinembargo, y a pesar del maquillaje de sus cuentas, la insolven-cia de la CAM no era un secreto en esas fechas.

    Y prosigue: El Presidente del Banco de Espaa, FernndezOrdez, que defini a la CAM como lo peor de lo peor de lascajas de ahorros haba filtrado, ya en abril de 2009 una listade 7 cajas que deban ser reestructuradas, entre las que seencuentra la CAM.

    Se hace entre otras muchas las siguientes preguntas y llega avarias conclusiones finales: ... Cmo se pretende financiarel Nuevo Hospital de Vigo mediante una entidad como laCAM que ha sido adquirida por un banco cataln (que tienecuestionada su solvencia, por 1 euro)?

    Cmo pudo la Xunta de Galicia adjudicar el contrato parafinanciar y construir el Nuevo Hospital de Vigo a una entidadcomo la CAM que estaba considerada por el Banco de Espa-a como la peor de todas esas entidades y en situacin dequiebra tcnica?

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    10 http://www.elpais.com/articulo/opinion/coalicion/vivos/elpepiopi/20080628elpepiopi_4/Tes

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    Como puede este gobierno introducir recortes en la atencinsanitaria gallega mientras cede a la iniciativa privada la cons-

    truccin del Nuevo Hospital de Vigo por una coste 1.000millones de euros superior al de financiacin pblica?

    Como puede hablar el Partido Popular de sacrificios de losciudadanos y de privatizar una sanidad que no nos podemospermitir mientras una parte de sus militantes se beneficia delas mismas?...

    Y concluye: La Sanidad pblica no puede ser utilizada paracompensar la merma del negocio de constructoras o de enti-dades financieras afectadas por la burbuja inmobiliaria. No esfcil explicar porque el gobierno gallego en plena crisis eco-

    nmica anula el proyecto previo del NHV financiado por el SPIy paga a la consultora PwC 200.000 euros por un nuevo pro-yecto que entrega el hospital a unas entidades financieras pri-vadas insolventes y con un incremento de su coste en ms de1.000 millones de euros, decisin por lo dems contradictoriacon el discurso de la Consellera de Sanidade, de que la faltade recursos econmicos la obligan a introducir severos recor-tes en los servicios sanitarios pblicos de la Comunidad Aut-noma que ponen en peligro el acceso universal y equitativo ala salud de los ciudadanos.

    No es descabellado que en lnea con este informe, los DSPafirmen que La adjudicacin de la financiacin, construcciny gestin del Nuevo Hospital de Vigo (NHV) se ha realizado aun grupo de Cajas de Ahorro que carecen de capacidad eco-nmica para afrontarla. Esta situacin era conocida por laXunta a pesar de los cual sigui adelante con la licitacin dela obra recurriendo a la colaboracin privada. Las Cajas deAhorro adjudicatarias estn recibiendo fondos pblicos paracapitalizarse y evitar la quiebra. Resulta paradjico einaceptable que estas entidades reciban dinero pblico queposteriormente prestarn a la Xunta de Galicia (concesin

    Nuevo Hospital de Vigo por la frmula PFI) con unas ganan-cias garantizadas del 8% y que multiplicar por siete el costefinal del centro, hipotecando durante aos a la sanidad galle-ga. Esta decisin supone un derroche escandaloso y undespilfarro de fondos pblicos en momentos de crisis, a cuyoamparo el gobierno gallego ha despedido personal, elimina-do recursos, desmantelado reas sanitarias o reducido suel-dos del personal sanitario.

    Dada las serias dudas surgidas, referidas a la capacidad definanciacin del proyecto por parte de las empresas adjudica-

    tarias y los elevados costes de una operacin en momentos decrisis y que ha conducido a que la Xunta introduzca serios derecortes al proyecto de Nuevo Hospital de Vigo que le privande sus carcter estratgico para el rea sanitaria, parece ms

    que razonable exigir que la Xunta se haga cargo de la finan-ciacin rescatando la Concesin y adjudicando la financiacin

    de la misma a la Sociedad Pblica de Inversiones.No parece que estas alarmantes ideas sean una especulacinde los DSP puesto que el propio Consello -o Tribunal- deCuentas de Galiciaemite en su informe opiniones coinciden-tes.

    El diario El Pasen su edicin para Galicia inclua la noticia el30 de julio de 2011: El Consello de Contas critica el abusode la contratacin pblico-privada; el rgano fiscalizador aler-ta de la insostenibilidad de los pagos aplazados - Se tras-ladan las inversiones presentes a las prximas generaciones,

    advierte. genera incertidumbre en cuanto a la sostenibili-dad futura de las finanzas, restringe el margen de maniobrade prximos gobiernos y traslada la carga de las inversionespresentes a generaciones futuras tambin dedica variosprrafos del mismo a la Concesin de Obra del Nuevo Hospi-tal de Vigo por parte de la Consellera de Sanidade.

    Las principales conclusiones, que coinciden con todo lo publi-cado y expresado en los dos ltimos aos por la PlataformaSOS Sanidade Pblica as como con los trminos de la denun-cia presentada por la misma al Valedor do Pobo, son:

    Los modelos de colaboracin pblico privada nacen almargen de los presupuestos pblicos limitando su transpa-rencia ante la opinin pblica y el control parlamentario deestos modelos.

    Aunque la deuda generada por la concesin de obra pbli-ca no se consolide en las cuentas de la Administracin, ladeuda que generan es real, afecta seriamente a la sustentabi-lidad de las finanzas pblicas y, por lo tanto del gasto pbli-co social (sanidad, educacin, servicios sociales), traslada uncoste superior a los impuestos que pagaremos en el futuro e

    hipoteca la capacidad de accin de los futuros gobiernos. Los estudios de viabilidad son insuficientes porque elGobierno Gallego sustituye el Estudio de Viabilidad (que tieneque demostrar que la Colaboracin Pblico Privada es mseficiente que el modelo de financiacin pblico tradicional)por una simple informacin econmico-financiera.

    El Consello de Contas critica que todos los estudios, inclui-da la seleccin del contratista, han sido realizados por empre-sas externas privadas.

    No es nada extrao que tras este demoledor informe, la PDSPde Galicia/SOS Sanidade Pblicamanifieste que este informedel Consello de Contas, avala todo lo dicho y por ella publi-cado respecto del proceso privatizador de la concesin de

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    obras como modelo para la construccin y gestin de hospi-tales y centros de salud del SERGAS, con un coste que multi-

    plica al modelo de financiacin pblica convencional y queadems oculta informacin a la ciudadana y exige a la Con-sellera de Sanidade que haga caso del informe del Consellode Contasy revise su poltica privatizadora con respecto de lasinfraestructuras asistenciales del SERGAS.

    Ya la guinda es que exija a la Conselleira de Sanidade quepresente sus excusas a la Plataforma por haber puesto enduda su credibilidad, acusndola de engaar y de alarmar alos gallegos, cuando quien muestra falta de transparencia esla propia Consellera, como pone de manifiesto el informe delConsello de Contas.

    EL COPAGO POR EL DENOMINADO USOIRRESPONSABLE

    Uno de los asuntos que mas eco meditico ha tenido ha sidoel Decreto 209/2011, del 27 de octubre, por el que se esta-blecen las tarifas de los servicios sanitarios prestados en loscentros dependientes del SERGAS y en las fundaciones pbli-cas sanitarias. Se acompaa de una disposicin adicionalnica que establece un procedimiento para repercutir sobre

    los usuarios los gastos que ocasionen como consecuencia deluso irresponsable de las prestaciones asistenciales del Sis-tema Pblico de Salud de Galicia.

    Obviamente esta medida desencaden la oposicin de losdefensores de la Sanidad Pblica que lo interpretaron comoun paso ms en la estrategia solapada de introducir el copa-goen la sanidad pblica en paralelo al copago por el accesoa la tarjeta sanitaria (TIS), que ahora se traslada a algo mstranscendental como es el pago por asistencia sanitaria.Absolutamente demaggico es el recurso al concepto de uso

    irresponsable de los recursos cuya amplitud y ambigedad lohacen a su juicio imposible de determinar.

    El Decreto no establece tampoco los criterios acerca de quinvalorar tal irresponsabilidad en el uso. Recuerdan los DSP laconocida dificultad para introducir estos conceptos en laatencin sanitaria a la vista de la existente para reducir la noresponsable -o carente de criterios cientficos- prescripcinde estudios y pruebas que solicitan los especialistas.

    LOS ENREDOS CON LA TARJETA SANITARIA

    El pasado 21/10/2011 la edicin gallega de EL PAISdestaca-ba que El Sergas cobrar 10 euros por la renovacin de latarjeta sanitaria; El Consello Econmico e Social achaca la

    tasa a un error y pide suprimirla; Es el precio que tendrla emisin de un nuevo cartoncillo plstico a partir del 1 de

    enero del 2012 si el usuario la pierde o se despista con lacaducidad y no la renueva en plazo. El proyecto de ley deacompaamiento a los presupuestos del ao prximo queayer aprob el Consello de la Xunta incorpora esta tasa apli-cable a todos los beneficiarios del Servizo Galego de Sade.

    Ello se produca debido a la publicacin el pasado 5 de sep-tiembre de una orden por la que se actualiza el procedi-miento para el reconocimiento del derecho a la asistenciasanitaria por parte de las personas sin recursos econmicossuficientes y de aquellas que se encuentran en situacin dedesempleo. Se trata de un nuevo asunto con varias aristas,que promovi un gran escndalo meditico cuyos ecos aunresuenan en el momento de escribir estas lneas.

    http://www.farodevigo.es/galicia/2011/11/25/feijoo-desacon-seja-cobrar-consultas-propone-cambios-acceso-farma-cos/600607.html

    http://www.elpais.com/articulo/Galicia/Feijoo/defiende/pague/farmacos/tasas/universitarias/elpepuespgal/20111125elp-gal_2/Tes

    http://www.elpais.com/articulo/Galicia/Farjas/culpa/Gobier-

    no/central/bloqueo/tarjetas/sanitarias/elpepuesp-gal/20111125elpgal_3/Tes

    El protocolo de aplicacin deja a las personas sin recursos quesolicitan la tarjeta sanitaria sin el derecho a tener un mdi-co asignado, a poder ser citados y a disponer de la prestacinfarmacutica. Solo se les reconoce el derecho a la asistenciade urgencia y de emergencia, excepto en el caso de los meno-res y de las mujeres embarazadas, que los mantienen. Ademsde esto, en el protocolo se indica que las personas sin recur-sos que solicitan la tarjeta sanitaria sern clasificadas como

    privados y se les har firmar un compromiso de pago de laasistencia realizada.

    El mismo protocolo establece trabas en el acceso a la tarjetaSanitaria para los extranjeros. A partir del 1 de enero de 2012,el Sergas exigir una antigedad mnima en el padrn de 183das para poder solicitar a Tarjeta Sanitaria, indispensablepara garantizar la Asistencia Sanitaria. Esta condicin previapara acceder a la Tarjeta Sanitaria va a limitar su acceso a laAtencin Primaria y a los centros de salud.

    Sin embargo, la Ley Orgnica sobre Derechos y Libertades de

    los Extranjeros en Espaaestablece en su artculo 12:

    Los extranjeros que se encuentren en Espaa, inscritos en elpadrn del municipio en el que tengan su domicilio habitual,

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    tienen derecho a la asistencia sanitaria en las mismas condi-ciones que los espaoles

    Nada se dice de incluir un perodo mnimo de empadrona-miento como ahora hace el Servicio Gallego de Salud. LaXunta de Galicia vulnera el principio de Universalidad recono-cido en la Ley 8/2008 de Salud de Galicia:

    Articulo 4.-Titulares del derecho a la proteccin de la saludy a la atencin sanitaria.

    1. El derecho a la proteccin de la salud y a la atencin sani-taria con cargo a fondos pblicos en el mbito de la Comu-nidad Autnoma de Galicia y de cobertura universal se garan-tiza a todas las personas que residan en los ayuntamientos de

    esta comunidad autnoma.

    Fcil era, en medio de esta polvareda meditica, que la Aso-ciacin para la Defensa de La Sanidad Pblicadel rea Sani-taria de Santiago presentara su denuncia ante el Valedor delPueblo para que estudiase la posible incompatibilidad delartculo 3.A.4 y que se promueva en su caso recurso deinconstitucionalidad ante el Tribunal Constitucional contra elmismo, a la vez que se le peda que solicitase de la Conselle-ra de Sanidade de la Xunta de Galicia su paralizacin. Seapoyaba en una larga lista de argumentaciones jurdicas.

    Pocos das mas tarde el gobierno comenz una disimuladamarcha atrs. Una nueva escena de vodevil gubernamentalentre nubes de niebla artificial.

    COPAGO POR SERVICIOS DE HOSTELERIAHOSPITALARIA

    Esta ha sido otra reciente medida del gobierno gallego, queanunciada por boca de su presidente - que cada vez msejerce a la vez como responsable de la poltica sanitaria- ha

    desencadenado una nueva polvareda meditica .Titularescomo los El Correo Gallego: Rechazo unnime a un posiblepago de servicios no sanitarios; La Plataforma en Defensa daSanidade Pblica valora la reflexin de Feijo como unpaso ms hacia el copago y la pri